Utilidades de La Embriaguez

 

UTILIDADES DE LA EMBRIAGUEZ La embriaguez es útil para:

Perder el tiempo, el dinero y la vergüenza. -Sócrates Acabar con el hogar, la sociedad y la patria. -Eudermann Que los hijos pierdan el respeto a los padres y el respeto a sí mismos.  – Carducet  – Carducet Tener desaliento en el trabajo. -  Anónimo Trastornar el cuerpo, pervertir los nobles sentimientos y destruir las facultades mentales -  Francisco I Hacer papeles ridículos y cometer toda clase de vulgaridades. - Bismark Pedir fiado una copa de ron cuando no se tiene valor de pedir pan para que coman sus hijos. -  Carlos V Para suicidarse. -Napoleón. El borracho camina hacia la cárcel, el manicomio m anicomio o el suicidio. -Texto Uruguayo NI los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los robadores, heredarán el reino de Dios. - I Cor. 6:10 COMPAÑÍA DEL TRIUNFO CRISTIANO 909 Bluntzet St. Corpus Chirsti, Tex. 78403, E.U.A.

LA COPA

Yo siembro las penas, las Amarguras, el Dolor y la desesperació desesperación n por todas partes arrastrando a los insondables abismos de la desgracia al hom hombre, bre, a la fam familia ilia y a la sociedad. El bebedor que me sostiene con su mano trémula no puede esperar de mí sino un hogar desdichado, una salud quebrantada y un sepulcro prematuro. Yo degrado al hombre racional; lo privo de su salud, entenebrezco sus facultades y apago en su corazón los más sagrados afectos hasta convertirlo en bruto. Los numerosísimos jóvenes que me beben pierden por completo ssu u delicadez y se hacen despereciables a los ojos de la sociedad. Yo quebranto el corazón de la esposa, lo lleno de acíbar vertiendo en él los sufrimientos más horribles pongo sobre la frente de los inocente hi jos, la marca marca infamante d dee la vergüenza. Yo me encargo de llenar a más no poder los manicomios, sanatoríos, asilos, lazaretos y las cárceles. Soy su instrumento vil de la muerte y perdición. Produzco todas las enfermedades y no curo ninguna. Soy la peste, la desolación y la muerte eterna. ¡Apartaos de mí como os apartarías de vuestro más formidable e implacable Enemigo. No me bebáis. Copiado