Socialización y endoculturación
Short Description
Download Socialización y endoculturación...
Description
La socialización y la endoculturación. Texto de Toni Cuadrado 1
LA SOCIALIZACIÓN. El ser humano es social por excelencia. Ya desde su nacimiento necesita la ayuda de otros para poder sobrevivir, por tanto no es posible plantearse el desarrollo de la humanidad sin la existencia del grupo y de la sociedad. Los grupos humanos se organizan en sociedades y cada sociedad posee, entre otras cosas, un conjunto de valores, unas pautas de conducta, un lenguaje y una cultura que le son propios. De esta forma cada comunidad, pueblo, raza o grupo humano posee unas características que le otorgan una unidad interna y única. Cada nuevo individuo que se integra en ese grupo social experimenta un proceso de incorporación a esa determinada sociedad de forma involuntaria e inconsciente, mediante la relación con otras personas personas y por su interacción con con el medio. Algunos autores, forma metafórica, se han referido a este contexto de impregnación de la sociedad en todos sus individuos como “útero social”. Son diversas las disciplinas interesadas por el estudio de la socialización: a) La antropología: estudia el contenido contenido de la socialización socialización en el marco marco de una cultura determinada. b) La psicología: estudia los procesos, estructuras y funciones sociales desde la perspectiva del individuo. c) La sociología: estudia la socialización atendiendo a los agentes e instituciones que intervienen en el proceso. d) La pedagogía: estudia la socialización con el fin de mejorar y optimizar el proceso. El concepto de socialización comienza a generalizarse en los años 30 del siglo pasado, según John W. M. Whiting (Trilla, 1987:79) a partir del artículo titulado “Socialization” escrito por Irvin L. Child. Este proceso se entiende como la adaptación del individuo al medio social en el que se desarrolla, por el simple hecho de su participación en la comunidad.
1
Cuadrado, T. (2008). Educación Informal: la enseñanza que no se ve. Madrid. Ed. Narcea. Pág. 24-32
La socialización, junto a la personalización, forma parte integrante del proceso de aprendizaje humano. Se identifican así dos variables importantes, una relativa al propio individuo y otra relativa relativa al medio social. El aprendizaje puede atribuirse así a capacidades del propio sujeto, por ejemplo la capacidad de imitación de los niños –aprendizaje vicario- y a la influencia del entorno, como puede ser a través de su grupo de iguales. Paciano Fermoso2 entiende así el aprendizaje, como desarrollo personal y social. Distingue así los dos procesos paralelos: socialización y personalización. La socialización para el autor es “el desenvolvimiento de los aspectos sociales, los de relación con los demás, la convivencia en la comunidad propia, la asimilación de pautas de conducta y los valores compartidos por los miembros del grupo, que constituyen la faceta psicosocial de la persona, sin la cual el propio proceso de personalización sería irrealizable”. El segundo proceso, la personalización, es para Fermoso “el conjunto de mecanismos psicológicos que desarrollan la conciencia de sí mismo, el yo –o sí mismo o self- que simboliza toda la variedad de dimensiones individuales hasta alcanzar la plenitud adulta y la autorrealización como sujeto”. Este proceso de integración del individuo a la sociedad tiene mayor importancia durante la infancia y la juventud, ya que es el momento de la formación de la personalidad, lo que nos lleva a pensar que no es lo mismo la socialización de un niño en su medio natural que la socialización de un inmigrante ya adulto en una sociedad y cultura que le son ajenas. A este proceso de inmersión social que se produce desde el nacimiento se le denomina socialización primaria y tiene gran influencia sobre la vida posterior del individuo. Para Del Val3, la socialización no es simplemente una influencia del entorno sino una consecuencia de la interacción del individuo con el medio: “desde el nacimiento, e incluso antes, el niño está sometido a la influencia de la sociedad en que vive. Mediante esa presión social, sufriéndola y reaccionando ante ella, es decir, interaccionando con el medio, va a llegar a constituirse en un miembro de la sociedad, adquiriendo las pautas de conducta que son características de ella. Va a aprender a comportarse como los adultos de esa sociedad. Va a aprender su lenguaje y el conjunto de la cultura”. (DEL VAL, 1994:16). El autor describe la socialización como algo inevitable que ocurre como por ósmosis: “va a aprender a andar, la forma de vestirse, los usos sociales, el comportamiento con los objetos, las normas morales, los valores, lo que es bello y lo que es desagradable, a interpretar las reacciones de los otros y a 2
Fermoso, P. (1981) Teoría de la Educación. México. Editorial Trillas. Del Val, J. (1994) Crecer y pensar. La construcción del conocimiento en la escuela. Col. Papeles de Pedagogía. Madrid. Ed. Paidós.
3
contestar adecuadamente a ellas, las comidas apetecibles, la forma de dormir o incluso cómo realizar sus necesidades fisiológicas más primarias”. (DEL VAL, 1994:16). En este proceso, como señalan estos autores, intervienen diversos agentes con los que entra en contacto el ser humano desde su nacimiento, desde los más próximos como son los padres y hermanos, el grupo de iguales, la televisión, los videojuegos, Internet, hasta otros más alejados e indirectos como son maestros, instituciones, vecinos, etc.
Esquema de los agentes socializadores
El proceso de socialización tiene lugar, por tanto, en un grupo determinado, dentro de una sociedad que posee una cultura, un lugar y un momento histórico determinado. Ahora bien, no debemos olvidar, que la globalización está modificando significativamente las sociedades y las culturas a través de los influjos que se producen mediante los medios de comunicación y las tecnologías. Por otra parte, además de la socialización primaria, en la que se aprenden los usos sociales, normas morales, valores, etc., distinguimos la denominada socialización secundaria propuesta por Berger y Luckmann 4, que se produce a partir de la adolescencia y tiene que ver con los roles adquiridos en espacios sociales como el ámbito laboral, político, social, etc., en los que el joven va formando su personalidad y su propia identidad. Junto a la socialización primaria y secundaria, algunos autores como Abraham Paín5, se refieren a los procesos de resocialización de adultos para describir los aprendizajes que se producen durante toda la vida y que están en
4
Berger, P. y Luckmann, T. (1968). La construcción social de la realidad . Buenos Aires: Amorrortu. 5 Paín, A. Educación Informal. El potencial educativo de las situaciones cotidianas. 1992 Buenos Aires. Nueva Visión.
constante transformación por las nuevas experiencias que se producen diariamente. Y argumenta así el autor que “el proceso de socialización fue considerado como único y localizado en las primeras etapas de la vida individual. Pero las transformaciones científicas, técnicas, económicas y sociales que el mundo contemporáneo vive cuestionan esta primera socialización, pues resulta demasiado rígida para facilitar la adaptación a los cambios que los adultos deben enfrentar durante su vida activa (movilidad profesional y geográfica, cambios de comportamiento individuales y colectivos).” (Paín,1992:12). Esta posibilidad de reeducación de adultos ha sido aprovechada de forma muy efectiva por los agentes educativos informales (publicistas, fabricantes de videojuegos, productores de cine y televisión...) para introducir nuevos hábitos como son, por ejemplo, el uso de aparatos tecnológicos como el teléfono móvil en lugares públicos, antes restringido a lugares privados (a través de los anuncios y teleseries) o la iniciación al consumo de sustancias perjudiciales (a través del cine, la publicidad y la televisión).
Esquema de tecnologías que intervienen en la socialización mediada
Para Paín (1992:21) la socialización adulta se distingue de la infantil desde tres puntos de vista: “el contenido aprendido, el contexto en el cual el aprendizaje ocurre y las respuestas del socializado”. Y matiza el autor “desde el punto de vista del contenido es más realista. Comprende la síntesis de lo que se ha aprendido previamente y el desarrollo de maneras de reconciliar normas contradictorias. Desde el punto de vista del contexto, una gran parte de la socialización ocurre después que el socializado ha asumido la totalidad del rol. Desde el punto de vista de la respuesta, al poseer expectativas más claramente definidas, que resisten a los cambios provocados por el nuevo contexto”.
Vemos así que en la socialización es importante conocer y evaluar la influencia del entorno y sus características. Todos los padres y madres saben que el entorno es determinante para el desarrollo de sus hijos: el que van a encontrar en su propio domicilio, el barrio, la escuela, los amigos, los medios de comunicación y demás influencias que podríamos situar en círculos concéntricos. Por otra parte, también hay que tener en cuenta los aspectos individuales del niño y su estadio evolutivo que también interactuarán con las influencias externas en su socialización. Aunque la influencia de la socialización es determinante, no debemos olvidar los aspectos diferenciadores del individuo, de manera que ante un mismo estímulo, no todos los individuos van a reaccionar de la misma forma. Junto a la personalización y a la socialización debemos prestar atención a otros fenómenos de aprendizaje que son también consecuencia de la vida en común. Se trata de la normalización y la endoculturación: a) La normalización es el proceso de creación de las normas que regulan la conducta, la percepción, el pensamiento y deseos de las personas en situaciones concretas. Las normas sociales son un conjunto de reglas de conducta que deben seguir las personas en una situación social que implican también las expectativas sobre el comportamiento de los demás. Como afirma Sherif6. “la base psicológica de las normas sociales establecidas, tales como estereotipos, modas convenciones costumbres y valores, reside en la formación de marcos comunes de referencia, como producto del contacto de individuos. Una vez que tales marcos de referencia quedan establecidos e incorporados al individuo pasan a ser importantes factores en la determinación o modificación de sus relaciones”. b) La endoculturación es el proceso de aprendizaje acerca de la cultura en la cual el individuo ha vivido. Dedicaremos mayor atención a este proceso en el apartado siguiente.
LA ENDOCULTURACIÓN. La endoculturación, o enculturación, consiste según Trilla, (1987:86) “en la interiorización o aprendizaje por el individuo de la cultura de su grupo”. Afirma el autor que “el individuo, desde que nace, va haciéndose con elementos de la cultura presente en el medio en que se desarrolla”. Las personas al vivir en sociedad comparten y desarrollan creencias, valores, conocimientos y sentimientos comunes que que forman el marco cultural. Los más 6
Sherif, M. (1936) La formación de las normas sociales: el paradigma experimental en H. Proshansky y B. Seidenberg (1965). Estudios básicos de Psicología Social. Madrid. Ed. Tecnos.
jóvenes aprenden las claves de su cultura, construida por sus antepasados, y las interiorizan haciéndolas suya. Si la socialización es el proceso de inmersión y aprendizaje de los individuos en la sociedad adulta, la endoculturación es la adquisición de la cultura como propia. La endoculturación, es el proceso de apropiación de la cultura en la que nacemos, pero también el proceso mediante el cual los adultos hacen suyas otras culturas en las que se integran. La escuela es la principal agencia transmisora de la cultura, pero no la única. Los medios de comunicación, las industrias culturales e Internet facilitan una nueva forma de acceso al conocimiento de forma independiente y autónoma. Se concibe ésta como la transmisión de conocimientos valores y actitudes de unos individuos a otros de manera que se tiende a la perpetuación de las diferentes culturas. Además, también es un proceso que relaciona de una forma prevista o imprevista, a dos o más seres humanos y los pone en comunicación, en situación de intercambio y de modificaciones recíprocas. Este amplio marco educativo es un proceso que se observa en todas las edades y todas las circunstancias de la vida humana, tanto de forma directa como mediada tecnológicamente. La endoculturación está relacionada con el denominado “aprendizaje vicario” mediante el cual, los niños toman como modelo todo su mundo referencial. Es el aprendizaje realizado por imitación. Esta influencia puede ser consciente e intencionada, cuando por ejemplo, adultos cercanos como padres o profesores realizan actividades con intención educativa –recoger la mesa, cepillarse los dientes- o bien no consciente ni intencionada como por ejemplo fumar o cruzar con el semáforo en rojo. Si prestamos atención a la evolución de los procesos de endoculturación en los últimos años, veremos cómo el proceso natural de construcción colectiva de cada cultura se ha visto alterado por la creación industrial de productos culturales, así como por la globalización que va penetrando en cada rincón de la tierra implantando un modelo de pensamiento único y hegemónico.
Esquema de productos culturales
Podríamos decir que el proceso de socialización y endoculturación se modificó con la aparición de los medios de comunicación de masas que entraron en la escena educativa como un nuevo y potente agente socializador y más recientemente, con las nuevas tecnologías que aportan un nuevo modelo de comunicación interactiva que da lugar a nuevas formas de relación humana. Esta tecnología, desarrollada durante la segunda mitad del siglo XX, ha transformado las formas de aprendizaje y de socialización tradicionales, apareciendo nuevas relaciones mediadas tecnológicamente y sobre todo, nuevas formas de aprendizaje y socialización promovidos por los grupos de poder en la nueva sociedad globalizada del siglo XXI. Uslar, citado por Bisbal7, M. nos describe el papel de los medios en la creación de una nueva cultura mediática: “la radio, la televisión, el cine, las tiras cómicas expresan de manera más constante y eficaz formas y temas, y lo que es acaso más grave, lenguaje, que no representa ninguna aproximación a una cultura real y avanzada, sino la divulgación casi mecánica de los productos de una subcultura creada por influencias poderosas nacionales y extranjeras, y que terminan, finalmente, por constituir una verdadera subversión de valores”. Destacaba así Bisbal como la cultura masiva de los medios se ha convertido en cultura hegemónica al imponerse en la mayoría de la gente, tal como hoy en día se está haciendo mediante la convergencia tecnológica: televisión interactiva, Internet, móviles, PDA, videojuegos, cine digital, radio a la carta, etc. Autores como Schiller ya denunciaron en la década de los sesenta la función de los medios como agentes de manipulación al servicio de los que dirigen el sistema:
7
Bisbal, M. “Más allá de las industrias culturales o la fascinación por lo mass mediático” en Aparici, R. y Marí, V. M. (2003). Cultura Popular, Industrias Culturales y Ciberespacio Madrid. UNED. (p. 204).
“un mito capital domina el mundo de la fantasía manufacturada: la idea de el entretenimiento y la recreación están libres de juicios de valor, no tienen puntos de vista y existen al margen, por así decir, del proceso social. Un aparato extraordinariamente versátil destinado a manipular la conciencia, que utiliza todas las formas conocidas de la cultura popular –libros de historietas, dibujos animados, películas, espectáculos de televisión y radio, acontecimientos deportivos, deportivos, diarios y revistas- saca cabal provecho de esta idea totalmente falsa”. (SCHILLER, 1987:103-104)
View more...
Comments