Siempre Seras

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Siempre serás

Siempre serás

Una pareja como otra cualquiera esperaba en el pasillo de un bufete de abogados, un gran pasillo donde algunas personas caminaban con prisas queriendo terminar su trabajo ya que la hora de la comida se acercaba. Una decoración de lo más moderna y actual, desprendía el más absoluto de los fríos f ríos para aquellas personas que iban por aquel motivo tan duro en ocasiones. Se miraban de reojo, sin querer notar un evidente nerviosismo, habían llegado a un punto en el que no había marcha atrás, ningún remedio que usaran fue capa de evitar esa única solución a sus ojos. !a secretaria les anunciaba que podían pasar hasta el despacho del Sr. Santana. "ras un peque#o encontronao por no pararse a pensar quien entraría primero, con su correspondiente mirada de rencor, entraban hasta ese despacho para realiar lo que querían llevar a cabo Luis: $ola chicas... M: $ola !uis... %contestaba % contestaba una &aca más que distante' Luis: (ueno... veo que no hay manera )no* E: +e donde no hay no se puede sacar... %la otra persona en cuestión regalaba el

mismo

tono de indiferencia que su acompa#ante' Luis: ues nada... ya os redactr edact- la demanda de divorcio tal y como me pedisteis... solo ten-is que firmarla... E: uanto antes acabemos mejor... %&aca la miraba desde su asiento preguntándose si hacían en realidad lo correcto'... toma... Luis: (ueno... &aca... %decía dos copias para que las firmase'... &aca... M: Sí... %salía de aquellos últimos pensamientos'... d-jame el boli... %marcaba a  bolígrafo su firma dando dando un leve suspiro suspiro que fue escuchado escuchado por las demás personas personas allí' Luis: ues ya está... lo har- llegar a los jugados... y en cuanto tenga la respuesta os aviso M: or mí con que mandes la sentencia por correo me basta... Luis: omo quieras... E: / mi no hace falta ni que me la mandes... !a pediatra se levantaba marchándose de allí, cual animal acorralado, necesitando el aire para llenar sus pulmones, un aire frió que encontró en la invernal temperatura que cubría las calles de &adrid. &iró de nuevo a la puerta pero no la veía salir, respiró hondo a la ve que observaba aquella aliana aun en su mano, con su dedo pulgar la hio dar una vuelta y mirando al cielo apenas unos segundos, puso rumbo hacia su moto Luis: 0o entiendo como hab-is llegado a esto 1sther... 1sther... E: 0i yo misma lo comprendo Luis: ero... )lo hab-is hablado*... no s-... joder... es que... me da rabia de verdad E: 0o había nada que hacer !uis... a nadie le duele más que a mí Luis: reo que ella podrá decir lo mismo... y es lo que no me entra en la cabea... E: /hí estás equivocado... Luis: 1sther...  1sther... si la hubieras mirado... te hubieras dado cuenta de que estaba dudando E: &e tengo que ir... entro en una hora al hospital...

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Siempre serás

Luis: (ueno... si necesitas algo... no s-, E: 3racias

lo que sea... sabes que puedes contar conmigo

1nvuelta en un abrigo largo de pa#o gris, con las manos hundidas hasta el fondo de sus  bolsillos caminaba caminaba mientras miraba aquel aquel asfalto que nada nada tenía que envidiar envidiar a su coraón en aquel momento, frió, inerte, sin nada que le haga poder estremecerse. $abía decidió ir dando un paseo, sabía que &aca estaría en casa recogiendo sus cosas tal y como había dicho, verla salir por aquella puerta era algo que no podía hacer, verla salir de su vida de aquella manera tan clara, era algo que sabía que su mente no podría asimilar. +e camino camino al hospital vio que tenía tiempo de sobra y al levantar la vista de su reloj de pulsera vio un peque#o jardín donde varios ni#os jugaban con un peque#o  balón de cuero. cuero. 4ue hasta el banco banco más cercano, cercano, y sin sacar sacar las manos de donde  permanecían calientes, calientes, se dedicí dedicí a observar el cielo, cielo, casi recostada recostada en -l podía distinguir  distinguir  todos los sonidos que la rodeaban, r odeaban, y miles de recuerdos en situaciones parecidas a esa,  pero con ella, llegaban llegaban hasta su mente borrando cualquier cualquier cosa que que no fuera ella  E: Mi

madre me ha dicho que le gusta el color de la pared del despacho  M: Claro... lo elegí yo  E: Jjajaja sí... a veces pienso que te quiere más a ti elegir... ..  M: Es que mi suegra sabe elegir.  Estaban sentadas en el césped del jardín jardín de enrente de casa! les encantaba encantaba permanecer  allí mirando todos esos ni"os del barrio jugar después de haber salido del colegio.  Esther recostada se dejaba abra#ar abra#ar por Maca mientras esta jugaba con los dedos de su mano  E: Estoy

deseando que tengamos un ni"o  M: Sí... yo también...  E: $Seremos buenas madres Maca%  M: &as mejores...

on paso algo más decidido llegaba hasta urgencias, cruaba el par5ing mirando hacia donde &aca solía dejar la moto, pero en aquel momento no estaba. "raspasó "raspasó la puerta dirigi-ndose hasta admisión, donde una "eresa "eresa impaciente por verla cruar el umbral la miraba fijamente E: $ola "eresa... "eresa... %cogía la carpeta para firmar' T: )ómo ha ido* E: )ómo ha ido que* T: &ujer... E: 6a está hecho... solo falta la sentencia... %dejaba el bolígrafo de mala gana y

se

marchaba de allí sin tan siquiera despedirse' &aca montaban algunas cajas plegadas que tenían en la cochera, fue hasta el que era su despacho, y comenó a meter todos sus objetos personales, libros, cds, carpetas... la  primera estantería ya ya estaba completamente completamente vacía. +ecidió +ecidió desmontar el ordenador ordenador de sobre mesa, tenía el portátil, pero ese ordenador tenía varias cosas en -l, y para que dejarlo, si sabía que 1sther ni lo tocaba. Una ve despejada la mesa del despacho, continúo con la última de las lejas, algunos recuerdos de viajes pasados la decoraban,

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Siempre serás

Luis: (ueno... si necesitas algo... no s-, E: 3racias

lo que sea... sabes que puedes contar conmigo

1nvuelta en un abrigo largo de pa#o gris, con las manos hundidas hasta el fondo de sus  bolsillos caminaba caminaba mientras miraba aquel aquel asfalto que nada nada tenía que envidiar envidiar a su coraón en aquel momento, frió, inerte, sin nada que le haga poder estremecerse. $abía decidió ir dando un paseo, sabía que &aca estaría en casa recogiendo sus cosas tal y como había dicho, verla salir por aquella puerta era algo que no podía hacer, verla salir de su vida de aquella manera tan clara, era algo que sabía que su mente no podría asimilar. +e camino camino al hospital vio que tenía tiempo de sobra y al levantar la vista de su reloj de pulsera vio un peque#o jardín donde varios ni#os jugaban con un peque#o  balón de cuero. cuero. 4ue hasta el banco banco más cercano, cercano, y sin sacar sacar las manos de donde  permanecían calientes, calientes, se dedicí dedicí a observar el cielo, cielo, casi recostada recostada en -l podía distinguir  distinguir  todos los sonidos que la rodeaban, r odeaban, y miles de recuerdos en situaciones parecidas a esa,  pero con ella, llegaban llegaban hasta su mente borrando cualquier cualquier cosa que que no fuera ella  E: Mi

madre me ha dicho que le gusta el color de la pared del despacho  M: Claro... lo elegí yo  E: Jjajaja sí... a veces pienso que te quiere más a ti elegir... ..  M: Es que mi suegra sabe elegir.  Estaban sentadas en el césped del jardín jardín de enrente de casa! les encantaba encantaba permanecer  allí mirando todos esos ni"os del barrio jugar después de haber salido del colegio.  Esther recostada se dejaba abra#ar abra#ar por Maca mientras esta jugaba con los dedos de su mano  E: Estoy

deseando que tengamos un ni"o  M: Sí... yo también...  E: $Seremos buenas madres Maca%  M: &as mejores...

on paso algo más decidido llegaba hasta urgencias, cruaba el par5ing mirando hacia donde &aca solía dejar la moto, pero en aquel momento no estaba. "raspasó "raspasó la puerta dirigi-ndose hasta admisión, donde una "eresa "eresa impaciente por verla cruar el umbral la miraba fijamente E: $ola "eresa... "eresa... %cogía la carpeta para firmar' T: )ómo ha ido* E: )ómo ha ido que* T: &ujer... E: 6a está hecho... solo falta la sentencia... %dejaba el bolígrafo de mala gana y

se

marchaba de allí sin tan siquiera despedirse' &aca montaban algunas cajas plegadas que tenían en la cochera, fue hasta el que era su despacho, y comenó a meter todos sus objetos personales, libros, cds, carpetas... la  primera estantería ya ya estaba completamente completamente vacía. +ecidió +ecidió desmontar el ordenador ordenador de sobre mesa, tenía el portátil, pero ese ordenador tenía varias cosas en -l, y para que dejarlo, si sabía que 1sther ni lo tocaba. Una ve despejada la mesa del despacho, continúo con la última de las lejas, algunos recuerdos de viajes pasados la decoraban,

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Siempre serás

una foto de 1sther, y otra de ambas en una peque#a embarcación en las aguas cristalinas de las islas &aldivas. &iró la foto sin darse cuenta del tiempo que pasaba, podía  perderse de nuevo nuevo en aquellos aquellos recuerdos  'amos mos  E: 'a

a darnos un ba"o Maca... (se levantaba mientras tiraba de ella)  M: *ue no Esther... que preiero relajarme un poquito aquí   E: Maca... por avor...  M: +á"ate t, cari"o  E: -ero es que... yo no solo me quiero ba"ar...  M: Eh... bueno que... (se levantaba rotándose las manos)... vamos a ver la temperatura del agua... (se tiraba de cabe#a sumergiendo su cuerpo hasta varios metros alejándose de la embarcacin)  E: Jajaja eres un caso /eh0...(le gritaba aun desde uera)  M: /1odavía estás ahí0

Sonrió sin poderlo evitar, los mejores recuerdos de su vida, sin duda los tenía junto a su mujer, esa a que poco tiempo más podría seguir llamando de esa manera, pero que para si misma no dejaría de nombrar nunca. &etió en la caja la foto en la que 1sther sonreía a la cámara sosteniendo un cachorro de lobo salvaje que un amigo suyo había ayudado a nacer en una reserva de &adrid +esde la puerta, con la última caja en sus manos, miraba hacia el interior sin poder contener unas lágrimas que asomaban desde hacía unos segundos, se reprochaba tanto no poder haber hecho algo más para poder salvar su relación, salvar su vida, pues 1sther  era su vida, y eso no lo cambiaría un simple papel donde un jue que ni si quiera las conocía, afirmase que habían dejado de ser matrimonio C: )ómo estás*... %ru entraba a la sala de enfermeras y veía a 1sther sentada en el

 banco cabibaja' cabibaja' E: &al ru... esta ma#ana firmamos la demanda de divorcio C: !o siento... %frotaba su espalda mientras esta dejaba caer su cuerpo a un lado apoyándose apoyándose en su amiga'... quiás fuera lo mejor  E: 6o solo s- que la he perdido... +os días despu-s, la pediatra llegaba a su puesto de trabajo tras haber tenido dos días libres, dos días en los que se dedico e8clusivamente a llorar, a desahogarse, a intentar  buscar las fueras fueras para sobrellevar sobrellevar aquello con la más más absoluta dignidad dignidad M: (uenos días "eresa T: $ola hija... tienes varios ni#os esperando M: +ame die minutos y me mandas al primero a cortinas )vale* T: ómo quieras... %la pediatra comenaba a caminar cuando esta la volvía a

llamar'...

9&aca: M: +ime T: )ómo estás* M: (ien gracias... %le regalaba una sonrisa que quemaba su rostro todo el tiempo que  permaneció con con ella'

A

Siempre serás

1ntró en su despacho y se colocó la bata para despu-s colgar el fonendo en su cuello, hasta aquel artilugio hacía que la recordase, un día sin ningún motivo, 1sther se lo regaló, era de colores varios, y le había dicho que en cuanto lo vio, sabía que lo habían hecho pensando en ella. ugabas al fútbol* M: laro... %mientras limpiaba la herida en la pierna del chaval se limitaba a hacer todo

lo que siempre había hecho con una sonrisa esta ve sí, sincera' Chico: !as ni#as no saben jugar al fútbol M: 9/nda: )6 eso por que* Chico: >ajaja por que sois unos patos Su piel se erió, cerró los ojos enfadada con ella misma, )or qu- tenía que pasarle eso* )or qu- no, simplemente poder seguir con su vida*  M: 'enga

Esther...  E: Maca que no... que no me subo yo a un trasto de esos...  M: 2ís... /qué mujer más miedica tengo por dios0  E: /2ye0 ... que bastante que aprendí a patinar  patinar... (la rodeaba por la cintura)  M: Sí es verdad... mi pato ya sabe patinar...  E: 2dio que me llames eso  M: 1e lo digo con todo el amor del mundo... (se acercaba y le daba un beso en la nari#)... mi pato  E: /Maca0  M: Jajajajaja Chico: )"e pasa algo* M: 1h... %volvía a mirar al

ni#o'... no... nada... voy a llamar para que te ponga un punto

en esa herida Chico: )&e va a doler* M: 0ada... %cogía el tel-fono'... "eresa... "eresa... mándame una enfermera al dos por favor  Chico: )+e verdad que no me va a doler* M: +e verdad... %se sentaba en la silla para rellenar el informe del chico' $hasta cuando &ientras escribía se rega#aba a si misma, ? joder Maca... es que... $hasta respires respires te tienes tie nes que acordar de ella%... esto es una mierda... una autentica mierda...@

la puerta se abría a lo que ella creía sería la enfermera M: +ale un punto en la herida de E: /hora mismo

la rodilla... %hablaba sin levantar la vista del papel'

Solo aquel timbre de vo la hio temblar, definitivamente aquello iba a ser la mayor tortura de su vida, no pudo ni tan siquiera mirarla, la escuchaba hablar hablar con el peque#o, y sus ojos temblaban mirando el papel, escuchando su vo Chico: 0o me ha dolido

C

Siempre serás

E: laro que no... estás echo un campeón Chico: &ira &aca... ya verás cuando lo vean en el colegio M: laro... %le revolvía el pelo sin mirar a 1sther'... venga... vamos a ver a tu madre

Salió de allí ante la mirada de una 1sther que había hecho lo posible por actuar con naturalidad, pero en su interior un combate entre sentimientos y reproches, jugaban una  partida, que por aquel entonces, no las dejaba actuar de otra manera $oras despu-s =ilches llamaba a todos al gabinete, tenía que repasar un dossier que el ministerio de sanidad había mandado al hospital referente a los casos contagiosos, medidas de urgencia y m-todos comunes que el hospital llevaba a cabo. &aca había llegado junto a !aura y se sentaba en un lado de la mesa, poco a poco sus compa#eros iban llegando, =ilches cruó la puerta con cara de pocos amigos y repartió una carpeta a cada uno V: / ver... esto me gusta tan poco como a vosotros, pero hay que le-rselo y hacer un

informe por sección, así que, ru hará el de cirugía, /ime el del servicio de urgencias, &aca el... %la puerta se abría dando paso a 1sther'... vaya... por fin E: erdón, perdón... me han entretenido V: ues gracias por hacerme un hueco en tu agenda... por donde iba... &aca el de  pediatría... y tú 1sther... el de la unidad de enfermeras 1sther se había colocado en el único sitio libre que quedaba, frente a la pediatra, esta hacía garabatos en un folio que había encima de su carpeta, veía como poco a poco aquello iba formando algo que no llegaba a leer. 1staba acostumbrada a verla así,  parecía que su mano volaba sola sin que ella se diera cuenta. uando fue a leer sin  poderlo evitar, se quedó algo sorprendida, distinguía su nombre a la perfección V: 1sther... )estás aquí* B de nuevo te tienen

entretenida...

=ilches llevó su vista donde la enfermera y comprobó el por que de su distracción, la  pediatra aló la mirada escuchando aquella conversación y vio a 1sther quitar su mirada de ella rápidamente, dándose por descubierta en algo que estaba haciendo sin pensar. &iró a su alrededor y todos miraban la escena haciendo que se sintiera avergonada, hio una bola con el dicho papel y lo tiró a la basura, centrándose esta ve sí, en lo que tenía que leer  V: omo veo

que estáis en cualquier sitio menos aquí, os pod-is marchar, pero ma#ana quiero ese informe en mi despacho antes de que empec-is la ronda &aca se levantaba de allí rápidamente mientras 1sther en aquella silla intentaba apaciguar aquella sensación tan conocida por ella !os días pasaban de la misma manera, &aca mostraba su mejor sonrisa mientras trabaja, haciendo que ella misma intentara cre-rsela, hablando y compartiendo con sus compa#eros los mayores momentos posibles, pero luego, al llegar a aquel nuevo piso al que aun no había hecho por que pareciese un hogar, dejaba escapar toda esa rabia contenida en un día, en el que había tenido que trabajar con 1sther, o simplemente, verla cruar algún pasillo enfrascada en algún informe

E

Siempre serás

Sentada en una mesa al fondo de la cafetería, repasaba el diagnostico de un ni#o que había llegado horas antes, estaba plenamente concentrada, y era algo que en su subconsciente agradecía. &ientras leía uno de los síntomas escuchó una risa atravesar la  puerta, aló la mirada lentamente sin mover apenas unos centímetros su cabea, ahí estaba ella, con esa sonrisa que tanto le gustaba, pero que ahora se le clavaba en el coraón irremediablemente, entraba con !aura y pedía al cielo que no la vieran L: =amos con ella E: &ejor me voy !aura... L: +e eso nada... nos vamos a esa mesa a tomarnos un caf- con nuestra compa#era E: !aura... L: 1sther, no seáis ni#as, trabajáis en el mismo hospital, podíais intentar llevaros bien

como compa#eras E: ero... L: 0i peros ni nada, vamos... %cogi-ndola del brao tiraba de ella hasta llegar a la mesa'... )interrumpimos* M: ara nada... me marcho enseguida... !e hablo sin levantar la vista del papel y 1sther hio un gesto a !aura mostrando su desagrado por aquella situación, pero con un leve empujón, esta la hio sentar frente a la  pediatra que seguía inmersa en su mundo L: )on que estás* M: &e lo pasó =ilches hace un rato... creo

que el diagnostico que le han dado no es el

correcto L: / ver... %se inclinaba a su lado para leer'... uuffff... está complicado M: 6a... llevo una hora con -l y no saco nada L: 0o tardarás en hacerlo... %miró a 1sther que tenía la mirada clavada en la pediatra sin darse cuenta'... 1sther... E: )Sí* L: )Du- haces esta noche* E: $e quedado con mi madre cuando salga de aquí... L: =aya... )y tú &aca* M: Si llegar a un sitio que todavía no considero mi casa a sentarme en el sofá a mirar la  pared se le puede llamar hacer algo... sí... tengo cosas que hacer  E: "e dije que me podía ir yo !a vo de 1sther salió de la nada con una nueva contestación, la pediatra sabía que se daría por aludida, pero fue un comentario nacido de toda esa frustración por no poder encontrar la calma desde que firmara aquel papel M: 6 yo te dije que me iba yo E: ues entonces ahora no vengas de mártir...

!a pediatra cerró los ojos conteniendo una nueva contestación, respiró hondo para tranquiliarse. oder... no debí hacerlo... perdona M: =anesa... de vedad... Vanesa:  )Se ha enfadado mucho* M: 0o me ha dejado hablar... Vanesa:  )"e puedo hacer una pregunta* M: laro Vanesa:  Si tanto os quer-is... )or qu- os martiriáis* !a enfermera salía con el abrigo deseando llegar a su casa, miraba al suelo mientras no  podía dejar de recordar ese beso, sabía que =anesa iba detrás de &aca, pero lo que le dolía era que esta hubiese aceptado, estaba claro que el amor ya solamente e8istía por su  parte, y nunca imaginó el dolor que eso le ocasionaba. !legó hasta las puertas de urgencias y se sorprendió al ver a la persona que hablaba con "eresa T: &írala... ahí esta Chico: $ola 1sther...

Siempre serás

;J

E: )Du- haces tu aquí* Chico: /yer me qued- preocupado... tus amigas te raptaron literalmente E: erdona... )>os- te llamabas verdad* José: Sí... espero que no te moleste que haya venido... en realidad pasaba por aquí y creí

recordar que me dijiste que trabajabas en este hospital... E: "ranquilo... José: )Sales ya* E: Sí... ahora mismo me iba... M: "eresa... %la vo de la pediatra sonaba tras ella' &aca había ido directa hasta la mujer sin pararse a mirar a las dos personas que se encontraban unos cuantos pasos por delante, cuando quiso darse cuenta de la silueta que  permanecía de espaldas a ella, no hio falta ni pensar, sabía que se trataba de la enfermera, vio una esperana para hablar con ella, pero al ver quien estaba frente a ella, un dolor de estomago la invadió por completo T: &aca... )estás bien*... %preguntaba "eresa al ver que no le hacía caso' M: "e invito a un caf-... T: ues... %miró a &aca un segundo'... sí... me vendrá bien... %ambos salían de allí

siendo observados por la pediatra' T: "ranquila... no ha venido con esa intención &aca M: )6 tú como lo sabes* T: or que estuve hablando con -l !a pediatra se fue de allí bastante enfadada, no sabía si eso lo hacía por que estaba despechada por lo que había visto, o en realidad le interesaba aquel hombre 1sther y aquel chico habían ido a la cafetería que había frente al central, 1sther no quería permanecer demasiado tiempo con -l y poder llegar cuanto antes a casa José: )1stás casada*... %miraba la aliana en su dedo' E: 1n realidad no... me divorci- prácticamente ayer... José: =aya... lo siento... E: 0o más que yo... %sonreía con pena mientras movía el anillo en su dedo' José: )"odavía estas enamorada de -l* E: Sí... pero no es -l... es ella... José: /h... E: 1ra la chica que había en el mostrador cuando nos íbamos José: 1s guapa E: reciosa... pero... preferiría no hablar de esto si no te importa... José: 0o, no, claro que no

1sther entraba a urgencias con un rostro que evidenciaba su estado, el brillo que siempre desprendía, esa sonrisa que regalaba sin motivo alguno, esa felicidad que embargaba a cualquiera que se cruaba en su camino, todo eso ya no estaba. asó por admisión para firmar sin tan siquiera saludar a "eresa, la sensibilidad que tenía aquel día hacía imposible incluso a veces, poder hablar 

Siempre serás

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3racias a algo, no se preguntaba el que, urgencias ese día parecía desierto, y lo agradeció con toda su alma, se fue hasta farmacia para entretenerse haciendo inventario y distraer su mente sin que nadie pululara por alrededor  M: (uenos días "eresa... T: $ola &aca... oye... M: +ime T: )1sther y tú hab-is vuelto a discutir* M: 0o... )or qu-* T: 0unca la había visto como hoy &aca... ni si quiera me ha dicho una palabra... ha

entrado a firmado, y según me ha dicho una enfermera se encerró en farmacia y no ha salido desde que llegó M: =oy a verla... Se marchaba de allí lentamente, pensando en como hablar con ella sin que se sintiese vigilada, sabía que ya de por sí, cuando estaban bien, tenía que ser ella en un primer momento la que admitiese que estaba mal, y ahora, estando en esa situación sería aun  peor. !legó hasta la habitación y llamando tímidamente abrió la puerta M: $ola E: $ola... %le contestaba de espaldas' M: )ómo estás* E: 1so que más da M: / mí si me da E: ues según vi ayer no debería M: 1sther... no me vengas con esas que quise e8plicártelo E: 0o hay nada que e8plicar por que no tienes por que M: "ienes raón, al igual que tú tampoco... E:... %la enfermera se giró perpleja por aquel comentario'... )6 eso qu- quiere decir* M: /yer saliste muy bien acompa#ada de aquí E: ... %sonrió enfadada'... )"e escudas en eso*... pues es muy triste... M: Nsea... )qu- tú si puedes estar celosa pero yo no* E: )elosa* )6o celosa* M: Sí... %se cruaba de braos'... tú celosa... E: Due equivocada estás... %se giraba de nuevo dándole la espalda' M: Sabes que no es así... %se acercó hasta ella para hablarle al oído'... pero yo lo

admito... no me gustó nada verte con ese tipo E: ara ti haces... M: 1sther... %el volumen de su vo había bajado considerablemente haciendo que la enfermera se estremeciese'... dame una oportunidad para arreglarlo E: Sabes que eso es lo que siempre decimos... y nunca pasa M: or favor... %con las manos en su cintura la hio girar teni-ndola frente a ella'... te necesito... y tú a mí tambi-n... 4ue recorriendo la distancia hasta ella despacio, disfrutando de la sensación de tenerla tan cerca, de respirar el olor de su perfume, de aquellas manos en su cuerpo, de esos ojos que le decían tantas cosas como antes, pero que no terminaban de aceptar  E: 6o no te necesito &aca

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Siempre serás

!a enfermera se separaba de ella marchándose de allí. Sabía que esas palabras no eran ciertas, pero prácticamente las escupió sin pensar como tabla de salvación para lo que segundos despu-s se avecinaba. Salió de allí para recoger sus cosas, definitivamente ese día no podría dar más de si, fue hasta el despacho de ru y esta ya que el día estaba en aquellas condiciones la dejó marchar  ru y !aura estaban en la cafetería, comentando el tema que las llevaba de cabea demasiado tiempo C: "enías que haber visto como se fue 1sther  L: &aca me lo contó... yo no s- como aguantan de verdad C: !o han pasado muy mal, en cierto modo comprendo a 1sther... tiene miedo de volver 

a sufrir esas peleas L: ero eso siempre se puede solucionar ru... pero estando como están, solo consiguen destroarse más... 1n aquel momento la enfermera cruaba la puerta y las miraba, segundos despu-s iba hacia la barra para servirse un caf- marchándose hacia una mesa distinta de la que se encontraban sus compa#eras L: )!e decimos algo* C: +-jala... si no quiere venir por algo será L: Si pues cuando vea quien viene hacia aquí... %&aca y =anesa entraban yendo hacia su

mesa' M: $ola chicas C: $ola M: )0os podemos sentar* C: laro !a casualidad quiso que la pediatra se sentara de espaldas a 1sther que había seguido con la mirada aquel recorrido que habían hecho ambas C: &aca... M: +ime C:... %se acercó para hablarle flojo'... no mires ahora... pero 1sther está sentada al lado

de la puerta, y os ha visto entrar  M: )1stá sola* C: Sí +isimuladamente &aca miraba por encima de su hombro y veía a la enfermera mirar la servilleta que rompía entre sus manos, suspiró mientras cerraba los ojos triste. omenó a frotarse la cara sin saber que hacer  Vanesa:  )Du- te M: 0ada

ocurre*... %la residente preguntaba preocupada'

!aura le hacía una se#a para que mirase detrás de ellas, cosa que esta hio, encontrándose con la imagen de 1sther en la otra punta sentada sola

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Siempre serás

Vanesa:  =e con ella M: )ara que =anesa* )ara que me eche* Vanesa:  )"e has rendido*... %el busca de ru sonó rompiendo la conversación' C: erdonar chicas me tengo que ir  L: &e voy contigo... %!aura se levantaba con ella' C: !uego nos vemos M: $asta luego Vanesa:  &aca... ahora mismo está mirando hacia aquí... y no creo que le d- mucho

gusto vernos aquí juntas... M: 6a se lo e8pliqu-... y me dejo las cosas muy claras... Vanesa:  ues dudo de que ella las tenga claras... me está matando con la mirada M: )Du- crees que debo hacer* Vanesa:  )Duieres ver como de verdad está celosa* M: =anesa... no quiero empeorar las cosas Vanesa:  0o har- nada del otro mundo... %miró a 1sther y se acercó al oído de la  pediatra'... ahora mismo no me quita ojo de encima... %miró de nuevo y vio como se levantaba dando un golpe con el vaso'... se acaba de ir enfadada... %la pediatra la vio marcharse'... si eso no son celos... que venga dios y me lo diga M: ero sigue sin querer poner de su parte Vanesa:  /corrálala M: )Du- la acorrale* Vanesa:  Sí... en algún lugar donde no pueda evitarte... y le hablas claro... )or qu- tú lo tienes claro no* M: 0unca ha sido al contrario Vanesa:  ues tienes la oportunidad en tu mano !levaba buscándola un buen rato por todo el hospital, pero no daba con ella, había tenido más de un caso por los que tuvo que detener su búsqueda, pero tenía que verla, dar con ella, decirle que todo aquello era de locos 1sther caminaba cabibaja por los pasillos, acaba de terminar en una operación con =ilches y necesitaba descansar. on las manos en los bolsillos del pijama le quedaba cruar un pasillo para llegar hasta la sala de enfermeras cuando chocó con alguien Vanesa:  !o siento 1sther  E: Solo podías ser tú Vanesa:  )erdona* E: Due pasa... )Du- no tienes bastante con joderme la vida

que ahora tambi-n disfrutas

chocando conmigo* Vanesa:  1sther... de verdad que no s-... E: =anesa... vale ya... vale ya de jugar... Vanesa:  &ira... los problemas que tú tengas con &aca no son asunto mío... pero no nos metas a todo el mundo en el mismo saco E: 1l problema es ese... que tú ya intentas meterte en el saco (astante enfadada siguió con su camino e8presando algún que otro calificativo para la residente que no hacían otra cosa, que engrandecer aquel mal humor que creciera en ella desde que se cruaran

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Siempre serás

M: =anesa Vanesa:  +ime M: )$as visto a 1sther* Vanesa:  or desgracia sí M: )Du- ha pasado* Vanesa:  &e tropec- con ella por accidente y la tomó conmigo M: )+ónde está* Vanesa:  Gba hacia la sala de enfermeras... ha el favor de hablar con ella

por que yo no

tengo por que soportar sus vejaciones !a pediatra caminó velo hasta donde su compa#era le había dicho, tocó la puerta pero no obtuvo respuesta, entró con calma esperando encontrarla pero en el primer vistao no lo consiguió, afinó su oído y escuchó como parecía que hubiera alguien en el ba#o. 4ue hasta allí y justo cuando pensaba llamar a la puerta esta se abría, con una mano la volvió a introducir dentro y cerró tras ella E: )Se puede saber que haces* M: "enemos que hablar  E: ues yo ahora no quiero M: ues yo sí... y lo haremos E: &aca d-jame en pa M: 0o quiero 1sther, no quiero dejarte en pa... es que no E: 0o me apetece discutir contigo M: &írame... 91sther mírame:... E: 99Due:: M: +ime que no quieres estar conmigo

lo comprendes

Sus miradas se cruaban, 1sther respiraba con dificultad, un enfado, acompa#ado de los nervios de tenerla tan cerca le hacían imposible pensar. &aca esperaba una respuesta y no se marcharía de allí sin ella E: )Du- pasa que tu residente ya no quiere nada contigo* M: +-jate las jilipolleces... sabes que no tengo ni quiero tener nada con ella E: ues no me lo creo

!a enfermera quiso esquivarla para salir de allí, pero &aca siendo más rápido la rodeo con sus braos y se lanó a sus labios, 1sther en un primer momento hacía por separarla de ella, pero viendo que la pediatra tenía más fuera, dejó la resistencia a un lado. Su  boca se abría con furia, sentía la lengua de &aca en ella, buscando la suya, y sabía que era lo que ella tambi-n quería. !a cogió por las solapas de su bata obligándola a  profundiar más. 1l contorno de los labios de ambas enrojecían por segundos, la sangre llegaba a ellas ardiendo, necesitando aquel calor mutuo que se regalaban. &aca dejó aquellos labios para atacar su cuello, sin poder evitar colar ambas manos por debajo de la camiseta de su pijama M: 0o te das cuenta que yo solo me muero por ti... solo por ti 1sther... E: !a besaste... %su vo salía en un aliento necesitado' M: 0o... me besó ella

;C

Siempre serás

1n un giro más que controlado la pediatra se sentó obligándola a hacerlo sobre ella, levantó su uniforme comenando a besar su pecho con fervor, haciendo que 1sther tuviera que morderse el labio para no gritar  Enfermera: )1sther*... %la vo de una enfermera rompía aquel momento' M: >oder  E: 96a salgo:... %la enfermera se levantaba haciendo que &aca comenara a sentir

frustración' Enfermera: +ávila te está buscando E: =oy... %mientras se colocaba bien la ropa miró a &aca quien no podía dejar de

observarla, y sin mediar una palabra salió de allí' M: 1sto es una mierda... 9una gran mierda:... %ya sola dejaba salir todo aquel enfado acumulado' &aca llevaba más de una hora frente a la puerta de la que aun sentía su casa, había visto a 1sther entrar despu-s de su turno, pero no se atrevía a dar el paso, sabía que si hacía aquello, podrían pasar dos cosas, que la perdiese completamente, o consiguiera traspasar  ese miedo que la enfermera tenía de barrera. aminaba despacio hasta la casa, sacó su  juego de llaves y entró en ella. Sin hacer mucho ruido buscaba algún sonido que le condujese hasta donde 1sther estuviese, cual fue su sorpresa al escuchar el ruido de la ducha, sonrió sin poderlo evitar, y bendijo su suerte &ientras iba en aquella dirección iba desabotonando su camisa, llegó hasta la habitación y dejando la ropa sobre la cama, terminó de desnudarse, para segundos despu-s entrar en silencio al cuarto de ba#o. 0ada más abrir la puerta, la oleada de calor que inundaba el lugar salió a recibirla, cerró la puerta tras de si, viendo el cuerpo de 1sther tras los cristales de la mampara, tenía las manos apoyadas en la pared mientras el agua caía sobre su cuello amino despacio, y entró rodeando aquel cristal para colocarse a su espalda, la enfermera aun no se había percatado de nada hasta que la rodeo con sus braos haci-ndola moverse en un segundo M: Ssshhh... soy yo... %colocaba el rostro E: &aca... M: Sí mi amor...

en su cuello'

1sther cerró los ojos al notar los labios de la pediatra recorrer su cuello, colocó las manos encima de donde las suyas descansaban, y &aca recibió aquello como una aprobación, así que siguió devorando aquella piel mientras con sus manos acariciaba el estómago de la enfermera M: "e echo de menos 1sther...

!a hio girarse con las manos en su cadera, y se quedó observándola, 1sther miraba sus ojos sin decir una palabra, y ella no podía hacer otra cosa que mirarla con amor, le colocaba un mechón de pelo que tenía suelo por el agua M: +-jame hacerte el amor...

Siempre serás

;E

Salió como un pensamiento en vo alta de los labios de la pediatra, pero para nada se arrepentía de haberlo dicho. Se humedeció los labios mientras se acercaba a ella, 1sther seguía sin decir nada, así que siguió con su camino. +ejó un tímido beso en sus labios mientras se pegaba más ella. oco a poco, aquel beso iba dejando a un lado la timide, dando paso al deseo y a la pasión. !os braos de la pediatra hacía rato qua habían rodeado aquel cuerpo frente a ella, haciendo que fuera imposible, que ni aquella agua  pasara entre ellas  0otó las manos de 1sther recorrer su espalda y dejó de besarla para respirar, momento en el que 1sther, dejándose llevar por el coraón, decidió atacar su pecho, besaba aquel lugar con nostalgia, haciendo por impregnar sus labios de aquel sabor que no podía ni quería olvidar  M: /ahhh... 1sther...

1scuchar su nombre entre aquella e8citación no hacía otra cosa si no hacerla perder más la raón. Se separó de ella un segundo contemplándola, la pediatra tragó saliva con miedo de que se estuviera arrepintiendo, pero cuando sintió que entrelaaba sus manos sonrió tímidamente 1sther la llevaba de la mano hacia la habitación, iban dejando un rastro de agua hasta la cama, pero realmente aquello no era de importancia en aquel momento !a enfermera se acostaba sin dejar de mirarla, invitándola a hacer lo mismo. &aca dudaba de que todo aquello fuera un sue#o, pero con decisión fue hasta ella, colocándose encima, mientras la miraba desde aquella posición, notando como las  peque#as gotas de agua pasaban de su cuerpo al de 1sther  M: "e quiero tanto... E: $ame el amor &aca...

(esaba su cuello de nuevo, pero esta ve con desesperación, sintió su pecho estallar por aquellas cuatro palabras, no decidía que lugar deseba más, movía sus labios impasibles  por aquel cuerpo tan querido y deseado +ecidió bajar por su pecho, escuchaba la respiración de su mujer y sentía cuanto había echado de menos oír aquel placer. 4ue bajando hasta su ombligo y antes de seguir descendiendo aló la mirada encontrándose con una impaciencia que le encantaba ver en ella. 4ue bajando con sus besos sin dejar de mirarla, ninguna quería dejar de hacerlo, sentían la e8citación del momento y 1sther intentaba aguantar aquella mirada, pero cuando sintió la calide de sus besos en aquel recóndito lugar, no pudo soportarlo más, y mientras emitía un suspiro que perdía aquel mismo nombre por el volumen que contenía, cerró los ojos reclinando su cabea &aca estaba disfrutando en aquella parte de su cuerpo, y se resistía a abandonarla, notaba como las caderas de la enfermera habían perdido cualquier resquicio de calma y se movían ansiosas, pero ella no podía dejar de besarla, la escuchaba gritar, la sentía morir en aquella cama, y era lo que quería

Siempre serás

;F

Unos instantes más tarde, decidió dejar aquella tortura, sabedora de que el cuerpo de 1sther, resistiría poco tiempo más. uando la enfermera dejó de sentirla se sentó en la cama haciendo un esfuero, y &aca viendo sus intenciones se sentó sobre ella, haciendo que la humedad que las dos sentían en aquel momento, fuera mostrada en aquel contacto M: +ime que no es un sue#o 1sther...

 0o dijo nada, se lanó a sus labios mientras que con sus manos la apretaba a su cuerpo a la ve que comenaban a contonear sus caderas a la ve, haciendo que de nuevo aquel calor las inundasen M: /aahhhh... 1sther... mírame...

"omaba su cara entre sus manos mientras ambas jadeaban e intentaban respirar, 1sther sabía que a &aca le encantaba mirarla en aquel momento, sabía que esos segundos, eran de las dos, único y e8clusivamente de ellas, y disfrutaba mirándola en aquel estado M: &i ni#a... te quiero

+e nuevo comenaban a besarse, y 1sther sintiendo que llegaba el momento, abraaba sus caderas con fueras, haciendo presión para las dos, aquel beso se convirtió en respiraciones, gemidos, suspiros, imposibles de aplacar, pero que no podían romper aquel momento M: /aahhhh... ahora mi amor... ahora... E: Sí... mmmmm... ya, ya, ya... M: "e quiero... te quiero...

1sther cerraba los ojos con fuera mientras notaba su cuerpo convulsionarse, sentía la respiración de &aca en su cuello, y sabía que aquel momento le dejaba claro que no  podía vivir sin ella, necesitaba su vitalidad para vivir  $oras despu-s &aca sentía un peso en su brao, abrió los ojos y vio a 1sther aferrada a ella, no puedo evitar que una sonrisa invadiera su rostro, la rodeo con ambos braos y sintió que ahora era cuando faltaba el siguiente paso para que su plan funcionase. (esó su frente, y se levantó con cuidado evitando despertarla Se vistió en silencio mientras escuchaba algún sonido proveniente de aquel cuerpo sobre la cama. 6a vestida, se apro8imó a ella arrodillándose a escasos centímetros de ella M: iensa 1sther... necesito que tengas las cosas claras...

(eso su frente y con paso decidido, pero sintiendo que los pies le pesaban se marchaba de allí rogando al cielo, que todo saliese bien, y deseando volver a encontrarse con ella $abían pasado dos días, y no había visto a 1sther ninguno de ellos, no había querido  preguntar pero ya comenaba a ponerse más que nerviosa. 4ue al despacho de ru  bastante impaciente y llamando a la puerta sin dejar que contestara entraba

Siempre serás

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C: uedes pasar tranquila M: erdona ru... )sabes por que 1sther lleva sin venir ya tres días* C: &e llamó dici-ndome que se encontraba mal... M: )Du- le ocurre* C: 0o lo s-... aunque dudo que su mal estado sea físico M: 1stuve en casa hace dos días... el pró8imo paso lo tenía que dar ella... pero veo que

no se decide C: +e verdad que no os entiendo... y dudo mucho que ni vosotras mismas lo hagáis M: 0o s- que hacer... %hundía la cara en sus manos' !a pediatra había llamado a 1ncarna, había quedado con ella en una cafetería del centro, y ya esperaba junto a su madre, nerviosa a que esta llegara, había pedido una tila para apaciguar su cuerpo, y mirando por el cristal esperaba a verla aparecer  M: $ola... En: )Du- pasa hija*... )por que tanta prisa* M: 0ecesito tu ayuda 1ncarna

/l día siguiente &aca llegaba al hospital y se dirigía hasta la cafetería buscando a !aura, la encontró sentada en una mesa junto a "eresa, que ya conocía su plan por 1ncarna. !e comunicó que era lo que tenía que hacer, esta más que impresionada deseaba que llegase el sábado. 1l viernes antes de marcharse iba hasta el despacho de ru M: )!e has llamado* C: Sí... estará allí a la hora que me has dicho M: )rees que funcionará* C: 1spero que sí, &aca... de verdad espero que sí

1sther estaba en la cama, en el lado donde dormía la pediatra, abraada a su almohada, mirando la foto que aun reposaba en su mesilla, las dos sentadas en el jardín en >ere, abraadas, sonrientes, felices, pensando en que el resto de sus vidas sería maravillosa,  por el simple echo de vivirla juntas Unas lágrimas caían por sus ojos cuando se limpiaba las anteriores, sabía que todo aquello era una locura, si llevaban un par de meses así, y ella cada ve se sentía más muerta sin ella, no podía imaginar como sería vivir así el resto de su vida. ensaba en la  posibilidad de hablar con ella, intentar dialogar para arreglar las cosas, olvidar todo lo que se habían dicho, empear de nuevo, pero tenía miedo, miedo a fracasar otra ve y no lograr reponerse.