Saitta-El Luthier en El Aula.Guia de Fabricacion-2.pdf
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El luihÍER EN El AtU quÍA de fAbrícACÍÓN 2
CARMElo SAÍTTA
RICORDI
ÍNDICE NOTA ACLARATORIA Como ya hemos dicho, no todos los instrumentos explicados en esta segunda guia son de fácil construcción; algunos requieren de ciertas herramientas o tecnologías que no están ai alcance del trabajo en la escuela. Somos conscientes de esto. Pero entendemos que este problema es muy fácil de resolver en la medida que uno tenga que hacer una cantidad de estos instrumentos que se proponga un trabajo continuado, que tenga más de un grupo de trabajo o que piense con cierta proyección. f Supongamos que alguien decide construir determinados instrumentos durante 5 años, con 5 grupos diferentes. En ese caso, es muy fácil prever que ciertas partes, que requieran una tecnología muy particular o una maquinaria que no tenemos, podamos encargarlas a un taller. Se hará prefabncar alguna parte del instrumento como: los tensores de los tambores y panderos, o las sonajas, o las piezas que requieren matrices o moldes. Se pueden mandar a curvar los triángulos o las espirales del "resorte en espiral"; el resto lo pueden fabricar perfectamente los alumnos quienes seguramente, encontrarán otras soluciones a cada uno de estos problemas. ' ' También hay que considerar la posibilidad de sustituir ia fabricación de algunas piezas por otras ya existentes que podamos adaptar. Es probable que consigamos en plaza algunas de las cosas que proponemos aquí, si no tenemos aros de 280 mm, a lo mejor conseguimos aros metálicos de una medida aproximada; o tornillos; o piezas prefabricadas. Una recorrida por una ferreten'a nos permitirá encontrar esas posibilidades de reemplazo. Pensemos, además, que algunos instrumentos se podrán hacer en los últimos años de la escuela primaria y en los primeros de la secundaria. Ni qué hablar de la posibilidad de fabricar estos instrumentos en las escuelas industriales; debería ser posible establecer cierto convenio para que una escuela comercial o bachillerato pueda trabajar en un taller de escuela industrial o buscar algún sistema alternativo que permita la prefabricación y luego el montaje en la propia escuela. Por supuesto, hablar de fabricar algo implica tener herramientas y un banco mfnimo de trabajo; no se puede pretender hacer instrumentos sin tener una infraestructura discreta o un pequeño taller, pero encarar este tipo de tarea permitirá a las escuelas contar con instrumentos que de otra manera les seria difícil adquirir.
CALABAZAS 1. Maracas 2. Cabaza
Pag. 5 6 10
MADERAS 3. Bloque de madera 4. Tricaballaca 5. Castañuelas
13 14 17 20
METALES 6. Kalimba 7. Resorte en espiral 8. Sonajas
23 24 28 30 32 34 37 40
9. Castañuelas de metal 10. Agogó 11. Cencerro 12. Triángulo
PARCHES 13. Tambor de abanico 14. Pandero con tensores 15. Bombo 16. Tambor 17. Tom Tom 18. Tambor de cuerda 19. Cuica
43 44 46 48 50 53 56 59
BAQUETAS
61
Queremos subrayar, por último, que las mismas condiciones que se piden en estas gui'as, son las que nosotros nos impusimos para construir todos los instrumentos que en ellas se explican.'
ISBN 950-22-0302-X - Edición completa ISBN 950-22-0309-7 - (Guía de fabricación II) © Copyright 1990 by RICORDI AMERICANA S.A.E.C. Tte. Gral. Juan D. Perón 1558 - Buenos Aires Todos los derechos están reservados - AJÍ rights reserved Queda hecho el depósito que establece la Ley 11.723
Procedimiento
1 - Maracas Nombres Cuando un instrumento tiene una difusión tan amplia, como es el caso de las maracas, suele recibir diferentes nombres de un lugar a otro; a modo de ejemplo citamos algunos: Maracas Ayacaztli - azteca Nbaracá - indios guaram'es Chinchín - Guatemala Nasisi - Panamá Alfandoque - Colombia Guazá - Colombia Carángano - Colombia Bapó - indios boraros (Brasil) Maracá - Brasil Icumaí - Venezuela Maruga- Cuba Chas-Chas - Cuba Huanda - indios araucanos (Chile) Etc. Origen y antecedentes Estos instrumentos, por estar construidos con calabazas, han tenido una gran difusión. Desde épocas remotas los encontramos ligados a la música y a los ritos mágicos de los pueblos primitivos. En la actualidad son de uso casi obligado en la mayorfade las danzas y kv> ritmos latinoamericanos.
Debemos seleccionar, dentro de lo posible, dos calabazas muy semejantes. Practicaremos un agujero en cada una de ellas y limpiaremos su interior con algún raspador o cuchillo. Para realizar la perforación marcaremos el diámetro, que deberá ser de 25 mm aproximadamente, y con la agujereadora realizaremos un agujero sobre el borde y en la parte interior de la marca; por éste vamos a introducir el serrucho de punta que nos permitirá realizar el corte correspondiente. A través de este agujero vamos a "cargar" el instrumento y a pasar la pieza que soportará el mango (dib. 1). El soporte del mango será una chapa de 1 mm ó 1,5 mm de espesor de no más de 20 mm de ancho por unos 35 mm de largo. Una vez cortada esta chapa (con una cizalla, tijera de hojalatero o arco de sierra) marcaremos el centro y realizaremos una perforación de 5,75 mm de diámetro; luego curvaremos con una morsa los extremos para que la pieza, gracias a esa forma, pueda asentarse sobre las paredes internas de la calabaza, alrededor de la perforación. Por el agujero de la chapa debemos pasar un tornillo de acero de 3/16" de diámetro, de 1 1 /2 " ó 2" de largo, rosca Whitworth de cabeza hexagonal o redonda. Una vez pasado el tornillo lo tomamos por el extremo e, inclinándola, pasamos la chapa a través del agujero de la calabaza. Por último, roscamos el tornillo al mango, al que previamente habremos efectuado la rosca hembra correspondiente (dib. 2). Otra alternativa sería aquella que permitiera que el tornillo, y por lo tanto la chapa interna, pudiesen sujetarse con independencia del mango. En ese caso, bastará con preparar una arandela de chapa de metal —cuyo diámetro deberá ser, por lo menos, 4 mm más grande que el agujero de la calabaza— a la que practicaremos un agujero central para pasar el tornillo. Esta arandela se ajustará a la maraca con una tuerca. De esta manera se podrá sacar el mango con independencia del sistema de fijación. Se puede sustituir el tornillo por un tornillo "Parker" o un tornillo para madera s¡ tenemos la posibilidad de soldarlo a la chapa (dib. 3). Otra variante sería montar el mango con una varilla roscada que lo atraviese de extremo a extremo. En ese caso, podremos fijarlo a la chapa soldándolo o con una tuerca y, una vez armado, lo sujetaremos a la calabaza con otra tuerca por el extremo opuesto (dib. 4).
Consideraciones generales Para su fabricación, además de calabazas pueden usarse: cuernos de antílope, cuero, cestas de mimbre, madera, metal, y últimamente materiales plásticos.
En cuanto a los elementos que pondremos en el interior, la variedad puede ir desde bolillas de rodamiento de acero de 2 mm de diámetro —del tipo usado en bicicletería— hasta granos de maíz o arroz.
Pertenece a un grupo de instrumentos cuyo sonido se produce al ser percutido el resonador (cuerpo) por pequeños objetos que están en su interior (semillas). En este caso, al sacudir las maracas, las partículas de su interior entran en movimiento, entrechocándose y golpeando a su vez el cuerpo del instrumento (percusión indirecta).
En la fabricación de este instrumento podría utilizarse el moldeo de resinas poliéster con fibra de vidrio en reemplazo de las calabazas (ver libro "Materiales y Tecnologías").
Al secarse las calabazas, se secan y desprenden las semillas que están en su interior, pero para obtener una mejor o diferente sonoridad, algunos aborígenes les practican un pequeño orificio para vaciar la pulpa y las semillas secas y las "cargan" con piedritas u otros elementos. En la América Precolombina solía hacerse esto con semillas de capacho o güira. Materiales 2 Calabazas esféricas, de aproximadamente 80 mm a 120 mm de diámetro 2 Mangos de madera Varilla de acero SAE 1010 roscada, 3/16" W de 400 mm de largo o 2 tornillos de acero de 3 / 1 6 " W y de 1 >/2 " ó 2" de largo 2 0 6 Tuercas de acero 3/16" W 2 Arandelas de acero planas de 3/16" W de diámetro Bolillas de acero (bicicletería) Chapa de acero SAE 1010 de 1 mm ó 1,5 mm de espesor, 20 mm de ancho y 35 mm de largo
Unas maracas de fabricación más simple pueden obtenerse a partir de dos flotantes de PVC para tanques o depósitos de alimentación de sanitarios, con rosca de 1/4" W, y dos mangos de madera, de los usados para limas o escofinas, a los que se les practicará una rosca hembra de 1 /4" W. Luego, con dos espárragos o dos varillas roscadas de 30 mm de largo (1/4" W) se unen los mangos a los flotantes, "cargados" previamente con municiones de acero para bicicletas.
Herramientas Regla o cinta métrica Punto de marcar Compás de punta seca Serrucho de punta Arco de sierra Agujereadora Brocas de 3,75 mm y 5,75 mm
Dibujo 2 (d) Dibujo 2 (e)
Macho para rosca W3/16" .
Tijera de hojalatero {o cizalla)
,,
•
Dibujo 3 (a) 5.75 mm
Dibujo 1 (bj
Dibujo 2 (c)
Dibujo 2 (b)
Dibujo 3 (b)
Dibujo 4
2 - Cabaza
Herramientas Regla o cinta métrica
Nombres Cabaza. Cabaca. Afoxe. Afuche. Etc.
.
Compás de punta seca
Origen y antecedentes Pertenece a la misma familia que el chekeré. Se emplea mucho en el Brasil como consecuencia de la transculturación producida por el asentamiento de esclavos africanos. Consideraciones generales Es una "cascara" de coco a la que, además de haberle fijado un mango o asa, se le practican una serie de hendiduras en sentido longitudinal. Está cubierta por una malla de alambre con cuentas que se mueve alrededor del cuerpo del instrumento en forma transversal a las hendiduras, en cuyos bordes "chocan" las cuentas produciendo e! sonido.
Arco de sierra o serrucho de costilla Agujeread ora Brocas de 3,15 mm y 5 mm Dibujo 1
Macho para rosca W 3/16"
En la actualidad también se hacen cabazas de metal. Consisten en un cilindro "corrugado" de metal, fijado entre dos maderas, sobre el que se "frotan" las cuentas del mismo material.
Pinza de punta Materiales
Dibujo 2
Coco (vaciado y seco)
Lima triangular
6 mm ó más
Mango de madera Tornillo de acero 3/16" por 11/2 ", cabeza redonda Detalle dibujo 2 (a)
Chapa de acero SAE 1010|(N2 18) de 20 mm por 50 mm de espesor Alambre de acero inoxidable o de acero galvanizado de 0,5 mm de diámetro Cuentas
Dibujo 3 Detalle dibujo 2 (b)
Procedimiento Una vez que el coco esté vaci'o y seco haremos el agujero para colocar el mango, siguiendo el mismo procedimiento explicado para las maracas. Tal vez la variante que aquí' se imponga, por la dureza del material, sea hacer una cantidad de perforaciones conjuntas por el lado interno de la marca, para facilitar el corte con e! serrucho de punta, y luego terminar, de ser/iecesario, con una escofina (dib. 1). Con un lápiz, efectuaremos marcas equidistantes sobre el coco; luego, sujetándolo—ya sea con una morsa o con la ayuda de otra persona— comenzaremos a realizar las hendiduras con el serrucho de costilla, siguiendo las marcas. Hay que trabajar despacio y procurando no ir muy adentro en el corte {debemos tener en cuenta el espesor fino del coco). Éste corte lo ensancharemos con la lima triangular (dib. 2). Cuando ya estén practicadas todas las hendiduras, montaremos el mango de madera y nos dispondremos a armar la malla metálica con las cuentas. Debemos preparar una cantidad de alambres {entre 14 y 20 según el tamaño del coco) a los que haremos una pequeña argollita en la punta. Pasaremos por ellos las cuentas necesarias, cortaremos y, con la pinza de punta, haremos en el otro extremo otra argollita como para pasar un alambre (dib. 3). Todas estas tiras debemos enhebrarlas en cada extremo, usando otros dos alambres e intercalando una cuenta entre cada hilera. Envolvemos el coco con la malla y unimos los dos alambres que enhebraron al resto, por sus extremos. La malla se completa intercalando las hileras transversales; debemos separar de manera equidistante las hileras de cuentas longitudinales, introduciendo las cuentas correspondientes antes de unirlas (dib. 4). Dibujo 4 (a)
10
Dibujo 4 (b)
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MADERAS
3 - Bloque de madera
Herramientas Regla o cinta métrica
Nombres Bloque de madera. Caja china. Bloque de madera ranurado. Wood-Block.
Formón (o escoplo)
Origen y antecedentes En la antigua China, además del Chu y del Yü, instrumentos de madera de sacudido y raspado respectivamente, existi'an otros dos que sonaban al ser percutidos: el Mu-yü y el Pang-tzu. El Mu-yü era un instrumento de hendidura con forma de pez que teni'a un largo de hasta 8 pies (aproximadamente 2,40 m). Con su sonido invocaban a las divinidades y a la lluvia. Estaba conectado a los ritos de muerte y resurrección, pudiendo significar, en otros casos, riqueza y abundancia. En el funeral de una persona de alto rango, el cortejo tocaba este instrumento en forma lenta y todos a un mismo tiempo. Este instrumento, construido en una sola pieza de madera de alcanfor, es usado por el sacerdote en el templo para marcar ciertos intervalos durante el servicio destinado a Confucio. Entre nosotros se denomina Temple Block.
Cepillo de carpintero Dibujo 1
Agujereadora Brocas de 5 mm y 8 mm
l!
U
O
1
U
Papel de lija N251 y 00
Dibujo 2 {corte lateral)
El otro instrumento, el que nos ocupa, es un pequeño tambor de hendidura, oblongo, conocido como Tak o Pang-tzu y era usado por los guardias nocturnos en su ronda. Este Wood Block o bloque de madera ranurado, es usado en la orquesta china, principalmente en la orquesta de ópera, en combinación con un tambor grande llamado ganggu. Este instrumento, que ha pasado a formar parte de las orquestas occidentales (igual que el Temple Block) y cuyo nombre de origen es Kuantun-pa, es el que comúnmente llamamos "bloque chino" o "caja china". Consideraciones generales Es un bloque de madera con una ranura o hendidura cerca de uno de los bordes, que tiene por objeto dejar una lámina de madera delgada como superficie para percutir. Existen de varios tamaños. Una variable es el piccolo Wood Block cuya forma es trapezoidal con la ranura pasante y también en varios tamaños.
Dibujo 2 (frente) Otro menor A
Materiales Trozo de madera de cedro de 190 mm de largo por 80 mm de ancho y 40 mm de alto
Otro mayor
170 mm 190 rrím
210 mm
B
70 mm
80 mm
90 mm
C
40 mm
40 mm
40 mm
110 mm 140 mm
150 mm
D
Procedimiento En primer lugar, debemos trazar sobre el trozo de madera el lugar de la hendidura y luego marcar los fugares donde agujerearemos con un punto de marcar o con un clavo. Para efectuar los agujeros deberemos tener en cuenta la profundidad de éstos (dib. 1). Terminada esta operación, valiéndonos del escoplo desbastaremos la madera que queda entre agujero y agujero; deberemos ayudarnos con el formón para mantener el paralelismo entre las dos caras de la hendidura. Será necesario proceder con cuidado para no romper o astillar la lámina de madera que será el cuerpo vibrante del instrumento.
MODELO
E
60 mm
70 mm
80 mm
F
9 mm
9 mm
9 mm
G
34 mm
34 mm
34 mm
H
10,5 mm 10,5 mm
10,5 mm
Dibujo 4 (a)
Dibujo 2 (planta)
Procederemos, entonces, a cepillar la superficie de la madera para darle cierta curvatura (dib. 2); redondearemos los vértices y lijaremos (el lijado es un procedimiento sencillo si se tiene un conocimiento mi'nimo de la madera). Por último —esto es opcional— sobre la cara inferior podrfamos hacer cuatro agujeros (como marca un detalle del dib. 3) para colocar regatones de goma que mantendn'an suspendido al bloque; esto evitan'a que las vibraciones fuesen amortiguadas por el lugar de apoyo al ser percutido el instrumento. Variando las medidas de la tabla podremos construir bloques de madera de diferentes tamaños (dib. 4).
Detalle dibujo 3 5 mm 9 mm
II 5 mm 20 mm
Dibujo 3 Dibujo 4 (b)
14
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4 - Tricaballaca Nombres
Tricaballaca. Tric-ballac. Origen y antecedentes La tricaballaca, sinónimo de trica-valacca, instrumento napolitano usado en el Renacimiento, tiene como antecedente al sonajero utilizado en las iglesias romanas durante la Semana Santa, cuando no estaba permitido el uso de las campanas en las ceremonias. Consideraciones generales Consiste en tres mazas de madera cuyos mangos están montados o tomados por dos tablillas transversales. El mango central está fijo y los otros se desplazan sobre un eje (tarugo) de madera, entrechocando con el mazo central. El efecto acústico es similar al del tic-trac español que dio origen a la matraca. El efecto sonoro es el de apoyaturas breves, por cuanto es muy difi'cil que los mazos extremos golpeen al mismo tiempo el mazo central. Materiales
Trozo de tirantillo de madera dura (lapacho, quebracho, etc.) de 45 mm por 58 mm y 200 mm de largo Listón de la misma madera de 40 mm por 20 mm y 950 mm de largo Listón de la misma madera de 10 mm por 40 mm y 450 mm de largo
Procedimiento El primer paso consiste en cortar el tirantillo (dib. 1), luego se controla la escuadra y se pule con papel de lija para que estos tres trozos de madera, que serán las mazas, coincidan perfectamente con sus medidas. Marcamos luego, en el centro (según indica el detalle), el agujero para el listón que va a hacer de mango de las mazas y que permitirá montar el bloque de madera al bastidor. Una vez hecha la perforación de los tres bloques de madera, cuidando que no pase al otro lado, prepararemos los listones, cortándolos un poco más largo de lo necesario y redondeando el extremo que va a ser encastrado en la maza como si ésta fuese una espiga. Clavamos a continuación esa espiga y luego marcamos el largo. Cortamos, redondeamos el extremo y marcamos el agujero por el cual vamos a pasar el tarugo de madera (dib. 2). Para tarugar las mazas, procederemos de la siguiente manera: una vez encastrado el listón que oficia de mango, agujerearemos el lateral, de manera tal que el agujero atraviese parte de la maza, toda la madera del listón que soporta y oficia de mango y parte del otro lado. Prepararemos los tarugos con una taruguera (más adelante indicamos cómo se hace una en forma "casera"); tarugamos, terminamos de cortar el tarugo, pulimos y controlamos que la maza no pueda salirse (dib. 3). En el extremo opuesto —la parte inferior de la tricaballaca— procederemos del mismo modo (tengamos en cuenta que los laterales de la parte inferior, cuyas medidas son 160 mm x 40 mm x 10 mm van a estar montados de manera fija a la maza central, y por lo tanto a su mango). El montaje se hace también con tarugo y con cola (en todo caso, para más seguridad, podemos poner dos tarugos atravesados); luego, rebajaremos un poco los extremos de las otras mazas para que estos mangos tengan juego dentro de las paralelas en las que van a oscilar (dib. 4). Una vez terminado este juego procederemos al marcado de los agujeros de la parte inferior y a efectuar las perforaciones. Presentamos las dos mazas que corresponden a los extremos, introducimos dentro del bastidor (cuidando que apoyen toda su superficie) y, una vez garantizado que todo está bien, agujereamos y tarugamos la parte inferior como hicimos en la superior (sin ocuparnos del otro lado). Cuando el tarugo esté bien afirmado cortamos ambos extremos y pulimos como hacemos siempre (dib. 5).
17
El diámetro de la broca deberá tener una relación con la taruguera. Debemos recordar que como las mazas de los costados van a girar, los diámetros de los agujeros por donde pasa el tarugo tendrán que ser por lo menos medio mili'metro más grandes para que giren sin roces. Para hacer una taruguera muy elemental utilizaremos una planchuela de 1 1 /2" y de 1/4" de espesor por 150 mm ó 200 mm de largo y le efectuaremos una sucesión de agujeros cuyos diámetros deberán variar de mih'metro en mih'metro. Para hacer un tarugo cortamos un listón de madera de una medida aproximada, con un cepillo redondeamos las aristas y lo pasamos a través de los agujeros, empezando por el más grande hasta llegar a la medida deseada. Esta taruguera es muy simple, y aunque su utilidad es limitada, nos permitirá hacer los tarugos necesarios para este instrumento (dib. 6).
9,75 mm. E
Herramientas Regla o cinta métrica
^
' o i
O
E
I .115 mm.
Escuadra
.160mm.
Formón (o escoplo)
Dibujo 4 (b)
Cepillo de carpintero
-
n
v j
-58 mm.
Arco de sierra o serrucho de costilla
Detalle dibujo 1
Dibujo 1
Marcar
/ Dibujo 4 (a}
Agujereadora Brocas de 9,75 mm y 10,5 mm Redondear
Escofina Papel de lija N£ o y 00 _.
o Dibujo 5 {a} (corte)
o
o
Dibujo 5 (b)
>
9, 75 mm JO ó 10,5 mm
Calibre
•o .
Dibujo 2 (a)
10 mm
20 mm Dibujo 2 (b)
•
Dibujo 3 (a)
18
Dibujo 3 (b)
OOOOO Dibujo 6
19
5 - Castañuelas
.55 mm ,47 mm.
Nombres Castañuelas. Palillos. Tu-Ti (Santo Domingo).
Herramientas Regla o cinta métrica
18 mm Dibujo 1 (b) (corte)
Gubia (mediana)
Origen y antecedentes Su origen es desconocido. Algunos autores lo establecen en Egipto, aproximadamente 4000 años A.C., como derivado de unos chocadores curvos de piedra. Otros dicen que es uno de los instrumentos más antiguos de la India, seguramente imitando a los antiguos platillos de dedos. Sea como fuere, las que nosotros conocemos son las introducidas por los moros en España.
Arco de sierra o serrucho de costilla
Dibujo 1 (c) (corte
Agujereadora (opcional)
Consideraciones generales 15 mm
Además de las castañuelas de mano, se usan en la actualidad otros dos tipos: las de "mango" y las de "máquina".
Broca de 1,5 mm Escofina
Las de "mango" —que son las que vamos a construir— consisten en un par de castañuelas de mano a las que se les agrega una tercer tablilla sobre la que golpean, y que, a su vez, hace de mango del conjunto. Estas castañuelas permiten realizar un "trémolo" con facilidad.
Papel de lija N23 O y 00
Las de "máquina" sólo tienen dos tablillas, sujetas con una banda elástica sobre un bloque de madera. En el bloque hay dos concavidades donde las tablillas golpean alternativamente. Este tipo es más indicado para una lectura rrímica. Se suelen construir en madera de ébano, palo rosa, etc. Materiales Listón de guatambú cepillado, de 55 mm por 13 mm y 400 mm de largo, para las tablillas Listón de guatambú de 55 mm por 10 mm y 290 mm de largo, para el mango Procedimiento Sobre el listón que corresponde a las tablillas se traza la forma de éstas, para lo que aconsejamos usar unas castañuelas existentes; también se puede partir de dos cucharas grandes de madera de guatambú. Dibujado el perfil, procederemos a realizar la concavidad interior con la gubia. Cortaremos con el serrucho de costilla siguiendo el contorno y luego, con la escofina, arrimaremos a la h'nea de lápiz. Hecho esto, redondearemos las tablillas en su parte superior y las puliremos. Por último, cortaremos el sobrante que nos servi'a de asa (dib. 1). Marcaremos luego el listón correspondiente a! mango y, esta vez, haremos las concavidades en sus dos caras. El procedimiento se repite tal como hicimos con las tablillas, (dib. 2).
li
Dibujo 1 (a)
J-r-\o 2
Dibujo 3
Es necesario que las tablillas tengan una cierta curvatura y que la parte posterior tenga una inclinación para que puedan abrirse. Luego, en una de ellas, debemos marcar y después realizar dos agujeros; con esta pieza marcaremos los agujeros de la otra y del mango. Una vez hechos los agujeros, atamos todo el conjunto con un hilo elástico de cierta resistencia. Si no dispusiéramos de agujereadora, podrfamos hacer los agujeros calentando "al rojo" un clavo fino sin cabeza; sujetándolo con una pinza, y presionando sobre cada marca con paciencia, obtendn'amos un buen resultado, (dib. 3). Una castañuela rudimentaria se puede obtener tomando una alfar]ía de 5 mm de espesor por 40 mm ó 50 mm de ancho. Se cortan dos trozos: de 80 mm de largo uno y de 250 mm el otro. Sobre este último se marcan 80 mm, y en los 170 mm restantes se reduce el ancho para que pueda servir de asa. Luego se marcan los agujeros para atar las tablillas al asa (dib. 4).
1
E E o •o
1
.80 mm
J70mm
.80 mm
|
80 mm.
. 250 mm.
Es aconsejable confeccionar dos castañuelas de mango, porque generalmente se las usa de a pares,
.410 mm. Dibujo 4
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'
METALES
1 • -
6 - Kalimba Nombres Kalimba. Sanza. Mbira. Man'mbula. Piano de pulgares. Etc. Origen y antecedentes Es uno de los instrumentos más típicos de África y su empleo se extiende a todo el continente. No es conocido en otros lugares, salvo en aquellos pai'ses americanos donde fue introducido por esclavos africanos. Las variantes que presentan estos instrumentos dan origen a distintos nombres. Estas diferencias se presentan en el tamaño y tipo de resonador y también en el tamaño y cantidad de "lengüetas". Consideraciones generales Está formado por una plancha de madera —que puede o no formar parte de un resonador— sobre la que se fijan una serie de lengüetas de metal de distinto tamaño. Estas están sujetas por uno de sus extremos y los opuestos quedan libres para ser pulsados con los pulgares de ambas manos. La cantidad de lengüetas puede variar: desde cinco hasta más de quince; los diferentes largos determinan distintas afinaciones que pueden modificarse fácilmente, permitiendo cambiar la relación interválica entre las lengüetas. Usando más de un instrumento simultáneamente puede ampliarse el repertorio de posibilidades. Materiales Trozo de madera de cedro de 22,5 mm por 50 mm y 120 mm de largo Tabla de 7 mm de espesor de 140 mm por 190 mm de largo Tabla de 4 mm de espesor de 140 mm por 190 mm de largo Alfarjfa de 5 mm de espesor de 23 mm de alto por 550 mm de largo Alfarjfa de 7 mm de espesor de 23 mm de alto por 110 mm de largo Fleje de acero SAE 1070 de 1 mm de espesor por 4 mm de ancho y 650 mm de largo Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 1/8" de diámetro por 500 mm de largo Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 5/16" de diámetro por 30 mm de largo
Cola vinflica
en este sentido es recomendable ajustar el canto de los laterales una vez que la pieza ha sido encolada y previo al armado de la tapa. Debemos esperar que la cola seque, antes de proceder al ajuste definitivo, al "pálido y al lijado del resonador. Sobre esta caja marcaremos y realizaremos las perforaciones que permitirán colocar los tensores de las láminas. En la contratapa, o parte posterior, ampliaremos estos agujeros con una broca de 8 mm y a una profundidad de 10 mm, para impedir que la cabeza o la tuerca de estos tensores sobresalga de la caja. Terminaremos el trabajo de la madera, construyendo dos pequeños listones sobre los que se apoyarán las láminas, en un caso directamente y en otro sobre una varilla de metal que les servirá de "nodo". Por supuesto, podremos dar un acabado a la madera, después de pulirla, encerándola o barnizándola con barniz diluido (dib. 3). El segundo paso es el armado de las partes metálicas. Cortamos las varillas de sección redonda, tomando como medida el largo de la madera que sirve de asiento para una de ellas, la otra es la que va a atravesar las láminas para su tensado; cortamos las láminas o lengüetas de acero que serán los cuerpos vibrantes del instrumento, teniendo en cuenta que deben ser de acero SAE 1070 por lo que deberemos conseguir un fleje de ese material de 1 mm ó 1,5 mm de grosor por 3 mm ó 4 mm de ancho. Los largos de las varillas son variables, dependiendo de la cantidad de flejes que se utilicen; en nuestro.caso hemos usado cinco. La más larga irá en el centro y las otras irán en forma decreciente hacia los bordes. Las cortaremos con largos relativos porque, de todos modos, estas varillas pueden correrse para lograr la afinación deseada (no nos ocuparemos del problema de la afinación por el momento). Una vez cortadas las varillas, deberemos pulir los cantos con una lima plana o un esmeril; es importante redondear el extremo que va a ser pulsado. Luego, sacamos la rebaba y procederemos al "templado" y al "revenido"; estos procedimientos ya han sido explicados en el capi'tulo correspondiente a tecnologías. (Ver libro "Materiales y Tecnologías"). Sólo nos queda preparar los tres tornillos que van a oficiar de tensores. Para tal fin, primero debemos curvar la punta y luego hacer una rosca. Para evitar este trabajo podemos partir directamente de una varilla roscada: calentamos un extremo "al rojo" y lo curvamos para que presione (dib. 4). Para ajustar el tornillo debemos conseguir una tuerca especial, cilindrica. La podremos hacer con una varilla cilindrica de 5/16" de diámetro a la que efectuaremos una perforación de 2,5 mm y, con un macho de 1/8" W, realizaremos una rosca. Luego, deberíamos efectuarle, sobre uno de los lados, una hendidura que permitiría calzar el destornillador. Es importante evitar que tuerca o tornillo sobresalgan de la caja (dib. 5). De no contar con la posibilidad de doblar los extremos de los tensores, para prensar las láminas podremos usar, en lugar de una varilla redonda, un perfil plano (planchuela) que agujerearemos para que pueda pasar un tornillo; en ese caso usaremos un tornillo standard para el tensado (dib. 6). Por último montamos las láminas, manteniendo la distancia indicada entre el eje del tensor, el soporte de madera sobre el que se apoyan los extremos posteriores de las lengüetas y el soporte que oficia de nodo (dib. 7). * ' Antes de usar el instrumento podríamos, eventualmente, corregir afinaciones corriendo cada lámina hacia adelante o hacia atrás.
Procedimiento El primer paso para construir este instrumento será armar el resonador. Comenzamos preparando un taco y los laterales; éstos, una vez ajustadas sus medidas, los podremos encolar, ya sea haciendo una ensambladura dentada o en forma directa (a tope), realizando previamente un buen ajuste. En este último caso, es conveniente reforzar con pequeños clavos sin cabeza de modo tal que, una vez seca la cola, sea posible introducirlos un poco más en la madera para disimularlos; los pequeños agujeros se masillarán para que no se noten después del lustre. También se pueden rellenar con una mezcla de cola y asern'n de la misma madera (dib. 1). Prepararemos luego la tapa y la contratapa, haciendo las perforaciones y arrimando las medidas (dib. 2) y las encolaremos, pudiendo valemos de una prensa para que el encolado sea perfecto. Debemos cuidar que la cola no manche la madera y que las superficies tengan un excelente contacto; 24
25
100 mm,
Herramientas
.JlOmm
Regla o cinta métrica
e
E o
4 mm
\.27
Escuadra
1
^5 mm
,108 mm.
I I
Cepillo de madera r
f UJWQ¡
Arco de sierra o serrucho de costilla
Dibujo 1 (a)
I
ÍU ^V
I
.
4>}/8"(3,17mm)
1
8 mm
7 mm
Dibujo 3 (a)
Dibujo 3 (b)
Agujereadora
Brocas de 2,5 mm, 4 mm, 8 mm y 12 mm Macho para rosca W 1/8"
Detalle dibujo 1 (b) (ensambladura dentada) Dibujo 1 (b)
'
2 Prensas
Rosca Wde 1/8"
Destornillador Escofina
Rosca Wde 1/8"
Tela esmeril *^
Detalle dibujo 1 (b) (ensambladura directa)
Soldadora de acetileno (autógena) E
e
QO
1
Dibujo 5 (-5//6-H (7,93 mm)
-.
Dibujo 4
. 6 / mm.
Dibujo 6
-O
•
12 mm
"1
4 mm
Dibujo 2 (a)
Dibujo 7 Dibujo 2 (b)
27
7 - Resorte en espiral Nombres Resorte en espiral. Resorte. Campana de reloj. Campana de reloj antiguo. Etc. Origen y antecedentes El origen de este instrumento es un resorte de acero que formaba parte de los viejos relojes de péndulo. Por medio de un mecanismo de leva se disparaba un martillo que golpeaba el resorte, produciendo las campanadas que anunciaban la hora. Su empleo en la música es muy reciente. Se debe, básicamente, a la revalorización que de los instrumentos de percusión ha hecho Occidente. Los compositores jóvenes lo usan cada vez más, buscando suplir las sonoridades de los grandes instrumentos de metal con que cuenta Oriente. Consideraciones generales
Debemos construir un soporte, es decir, una pieza de metal que permitirá fijar el resorte a la caja y a la vez transmitirle sus vibraciones. Esta pieza (dib. 2} requiere una soldadura autógena o eléctrica. Realizaremos, luego, una perforación en la que clavaremos el extremo recto de la espiral (punta externa), sujetándola con una "morsa" para poder "clavarla" en el soporte. Este agujero estará en la saliente o parte superior del soporte, que puede ser una varilla redonda, hexagonal, o también cuadrada; en la parte inferior le efectuaremos una rosca hembra de 3/16" y le pondremos un tornillo para su montaje. Montaremos la espiral en la caja, cuidando de poner arandelas en ambos lados de la tapa para que la presión que hay que ejercer sobre el tornillo no rompa la madera y se reparta en una superficie mayor. Sólo nos queda —si hemos optado por dividir el resonador— unir ambas partes, atornillándoles, en uno de los lados menores, una o dos bisagras pequeñas que permitan la apertura de la caja. En el extremo opuesto deberemos colocar una pequeña manija o realizar una hendidura que permita introducir un dedo para abrirla. Pulimos, barnizamos y queda terminado el instrumento (dib. 3).
Es un resorte de acero en forma de espiral, su extremo exterior está clavado en el extremo de una varilla de metal que transmite las vibraciones a una tabla o caja de resonancia a la cual está fijada, con un tornillo, por el extremo opuesto.
Herramientas Regla o cinta métrica
Se pueden construir resortes de diferentes tamaños y se puede fijar más de uno a una misma caja de resonancia.
Escuadra Materiales Listón de cedro de 85 mm rpor 8 mm yr 900 mm de largo o
Cepillo de madera
Trozo de terciado de cedro de 4 mm de espesor de 600 mm de largo por 200 mm de ancho
Arco de sierra o serrucho de costilla
Detalle dibujo 1
Varilla de acero trefilada SAE 1010, de 3/8" de diámetro y 160 mm de largo
Agujereadora
Varilla de acero trefilada SAE 1070, de 2 mm de diámetro y 800 mm de largo
Brocas de 1,75 mm, 3,75 mm y 5,75 mm
Tornillo de acero de 3/16" por 1/2", cabeza hexagonal 2 Arandelas de acero planas de 3/16"
Macho para rosca W3/16"
Cola sintética
Prensa Llave francesa o fija de la medida correspondiente
Procedimiento Como en el caso de la Kalimba, el primer paso en la construcción de este instrumento es hacer el resonador: armamos primero los laterales, espigamos, encolamos, eventualmente clavamos y, una vez ajustados sus bordes, encolamos la tapa, si optamos por esta alternativa, o la tapa y la contratapa, si optamos por ésta otra. Esta segunda alternativa —la de usar tapa y contratapa— impone realizar perforaciones en la tapa para permitir la salida del aire. Otra posibilidad es partir la caja en dos (conviene hacer este corte después de encolar y ajustar la caja como si fuera de una sola pieza), podremos, asi', abrirla y cerrarla y modificar, de esa manera, el timbre del instrumento (dib. 1). Para terminar el resonador, sólo nos falta hacer una perforación de 5,75 mm por donde sujetaremos el resorte.
Escofina Lima plana Tela esmeril Soldadora de acetileno (autógena)
Iniciaremos, ahora, la construcción de las partes metálicas. Primero construiremos el resorte propiamente dicho, también de acero SAE 1070 de 1,5 mm a 3 mm de sección. Debemos calentar el acero hasta ponerlo rojo, de esta manera podremos darle la forma en espiral que necesitamos. Este trabajo no es muy sencillo y, por lo tanto, la ayuda de un tallerisía que posea una soldadura autógena o una fragua (taller mecánico, etc.) puede ser necesaria. Realizado el resorte en espiral, debemos "templarlo" y "revenirlo" como hicimos con las láminas de la Kalimba, siguiendo el procedimiento explicado en el capítulo sobre tecnologfas{Ver libro "Materiales y Tecnologías"). Dibujo 3
29
28
'
8 - Sonajas
Herramientas Regla o cinta métrica
Nombres Sonajas. Sistro (sistrum = cosa que se bate). Etc.
Serrucho de punta
Origen y antecedentes
Arco de sierra o serrucho de costilla
Es un instrumento característico del antiguo Egipto (Tierra del Nilo). La evidencia más temprana es un "sacudidor de tiburón" de los pescadores malayos.
1
Agujereadora
Era usado por los sumerios y babilonios. Teni'a forma de "U" con anillos en barras transversales y es asi'como está representado en un sello que dista de 2500 años A.C.
Brocas de 1 mm, 2 mm y 10 mm
Fue usado durante la Edad Media. En la orquesta moderna reemplaza, en muchos casos, a la pandereta.
Pinza (o alicate)
Dibujo 1 (a)
Consideraciones generales
Martillo
Consistía en un delgado marco de metal a través del cual pasaban barras que sujetaban a las sonajas; poseía una manija para sostenerlo y sacudirlo.
Escofina
En la actualidad estas sonajas están insertadas en un aro, bastidor o tabla, de madera.
Papel de lija N^ O y 00 Dibujo 1 (b)
Materiales 12 Discos de chapa de latón de 0,6 mm de espesor y 38 mm de diámetro Alambre de acero inoxidable 304 de 1 mm de diámetro por 200 mm de largo .38
Listón de cedro de 40 mm de ancho por 10 mm de espesor y 400 mm de largo
Dibujo 1 ( c )
Procedimiento Para hacer los discos de metal —que son los que van a entrechocarse— necesitaremos un pequeño molde, en lo posible de acero; de no ser asi', podn'amos utilizar otro material duro (aluminio, madera dura, etc.). Esta matriz, que consta de dos piezas (macho y hembra) y que deberemos mandar a tornear en algún taller, nos permitirá dar forma a las sonajas. Para construirlas, cortaremos discos, a partir de una lámina de latón de menos de 1 mm de espesor, y los pondremos entre las dos piezas del molde para prensarlos; de no contar con una prensa, golpearemos con un martillo o maza. Podn'amos, eventualmente, dar una terminación a las sonajas mandándolas a niquelar, no sólo por una cuestión estética, sino para evitar que se oxiden. Esta es la parte más delicada del trabajo y la clave es tener una buena matriz (dib. 1).
Dibujo 2
Encararemos, ahora, la construcción del bastidor que podrá tener distintas formas. Podrá ser, simplemente, una tabla de madera en la que clavaremos, sobre una de sus caras, varios pares de sonajas (dib. 2). Otra posibilidad es tomar una tabla de madera en la que efectuaremos perforaciones para luego, con un serrucho de punta, completar el cavado hasta formar ranuras que terminaremos con una escofina y lijaremos (dib. 3). Luego, por el canto de la madera, realizaremos perforaciones que pasarán por el centro de las ranuras; por allí' introduciremos alambres que, atravesando las ranuras, serán los ejes en los que se insertarán los pares de sonajas (dib. 4). Este último criterio es el mismo que emplean'amos si, en lugar de una tabla, usáramos un aro de madera similar a los indicados para la fabricación del pandero. Este tipo de aro es el que habitualmente existe en los comercios con el nombre de sonajas. Si al mismo le agregáramos tensores (como los indicados para el pandero con tensores), podn'amos fabricar, poniéndole un parche, una pandereta.
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230 mm 1—_____
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. 75 mm*
, 75 mm* 3SS mm^_ Dibujo 3
j
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.40 mm—| 1 1
Dibujo 4
30
31
Nombres
Herramientas Regla o cinta métrica
Castañuelas de metal. Pot-pot. Etc.
Punto de marcar
Origen y antecedentes
Agujereadora
9 - Castañuelas de metal
Podrfamos decir que estas castañuelas de metal derivan directamente de los platillos de dedos de la India. Es más, se conocen piezas de museo donde el par de platillos está tomado por el centro a los extremos de una pinza de alambre la que, por su flexibilidad, permite el entrechoque. Sin embargo, dos aspectos nos hacen dudar, llevándonos a suponer que esta semejanza es más una coincidencia que una consecuencia: 1. los platillos están tomados por el borde y no por el centro lo que hace que la vibración sea inmediatamente amortiguada; 2. la idea de que la pinza es un sistema de palanca universal de tercer género.
Broca de 2 mm Tijera de hojalatero Martillo Lima plana
Por eso, no debemos desechar el antecedente, muy difundido, del "instrumento" que se improvisa tomando dos cucharas por el extremo del mango entre los dedos mayor, mdice y pulgar (a modo de pinzas), haciendo que se entrechoquen por la parte convexa cuando el conjunto es golpeado en la palma de la otra mano.
Tela esmeril
70 mm ,50 mm, . 70 mm.
Consideraciones generales
Dibujo 1
Consiste en dos discos de chapa de acero a los que se le han efectuado en el centro sendos "casquetes". Están tomados del borde por un fleje del mismo material que, por su flexibilidad, permite que entrechoquen. Materiales 2 Discos de chapa de acero SAE 1010(N^16 ó 18) de 70 mm de diámetro Fleje del mismo material de 10 mm de ancho por 200 mm de largo Roblones de 2 mm de diámetro de cobre o acero Procedimiento Estas castañuelas son de fácil construcción. Usaremos una chapa de acero SAE 1010, NS 16 ó 18; también necesitaremos un molde o matriz (macho - hembra), como el que usamos para las sonajas (dib. 1). Cortamos dos circunferencias de 70 mm de diámetro y las moldeamos como hicimos con las sonajas; limamos los bordes y, para dar terminación podremos niquelar o dar una mano de pintura (algún tipo de antióxído al cromato de zinc). Sólo nos queda hacer un fleje en forma de pinza (dib. 2) que fijaremos a las piezas moldeadas —realizando previamente las correspondientes perforaciones— mediante dos roblones que podrán ser de cobre, hierro o acero (dib. 3). Presionando este fleje podremos entrechocar el par de castañuelas.
¡r
0¿-
.?20mm Dibujo 3
32
3.3
10 - Agogó Nombres Agogó. Ga-gan. Etc.
Para curvar es aconsejable calentar la chapa e ¡r moldeándola sobre un caño u otro cilindro (dib. 3). A medida que vamos juntando los bordes de.la chapa, conviene ir "punteando" (puntos de soldadura) hasta completar toda la unión. Luego, curvamos la varilla por el centro, con un diámetro de 70 mm (dib. 4) y, por último, soldamos y damos terminación (dib. 5).
Origen y antecedentes Se ha comprobado, en distintos pueblos de África, la existencia de campanas de distintos tipos y materiales. Eran usadas en rituales litúrgicos o en ceremonias mágicas por congoleños, yorubas, ewes, angoleños, etc.
Herramientas Regla o cinta métrica
La palabra agogó, en yoruba, significa "reloj que señala el tiempo de la música".
Punta de trazar
Consideraciones generales Existe una gran variedad de estas campanas, podrfamos agruparlas en:
Compás de punta seca
• Afrocubanas: son unas campanas de mango hechas de varias formas, algunas cónicas y terminadas en punta como un mango. • Afrobrasileñas: tienen forma de tulipán y están hechas de acero o latón remachado. Otras están compuestas por un par de componentes cónicos, sin badajo, unidos por un brazo del mismo material y son percutidas por una varilla de metal o madera. Actualmente son muy empleadas en los "candombles" afrobrasileños. Suelen estar afinadas a una distancia aproximada de cuarta aumentada.
Arco de sierra Tijera de hojalatero (o cizalla) 70 mm
1
j
50 mm.
Pinza
Dibujo 1
Martillo Tela esmeril
Materiales Trozo de chapa de acero SAE 1045 (N* 18)
Soldadora de acetileno (autógena)
Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 1/4" de diámetro y 250 mm de largo Procedimiento
Puesto que este instrumento está formado por dos conos rectos de diferente tamaño, es necesario que los definamos, antes de trazar su desarrollo en la chapa de acero. También podemos efectuar el trazado en una cartulina, que luego nos servirá de plantilla. En ambos casos procederemos de la manera siguiente: dado que lo que necesitamos es determinar el sector circular —desarrollo del cono— debemos conocer el radio y el largo del arco para cada uno de los conos. El radio será igual al largo de la pared del cono, midiendo desde el extremo de la base hasta el vértice; el largo del arco debe ser igual al pen'metro de la circunferencia de la base del cono. Dibujaremos primero un triángulo isósceles —proyección del cono en el plano— donde el largo de la base del triángulo va a corresponder al diámetro de la base del cono y su altura —eje perpendicular a la base— será igual a la altura del cono (dib. 1). Las medidas que nosotros hemos empleado son: 50 mm de base por 120 mm de lado para el cono pequeño; 70 mm de base por 150 mm de lado para el grande.
Dibujo 2 65 mm.
Una vez dibujados ambos triángulos podremos trazar el sector circular correspondiente. El radio de la circunferencia medirá igual que el lado mayor del triángulo, para cada tamaño. El largo del arco de circunferencia será igual al largo del perímetro de la circunferencia de la base de los conos (diámetro 50 mm y 70 mm) que obtendremos con la fórmula del perímetro de la circunferencia: TT x D, donde n — 3,1416 (en nuestro caso bastan dos decimales) y "D" es igual a los diámetros ya mencionados. Para el cono mayor sen'a 3,14 x 70 — 219,80 mm y para el cono menor 3,14 x 50 = 157 mm. Para transportar estos largos sobre las dos circunferencias (radio 120 mm y 150 mm) podremos usar una cinta flexible. Otra alternativa es trazar el sector circular (dib, 2) y establecer un ángulo de 84° para el cono mayor y un ángulo de 75° para el menor. Ya marcados los dos sectores circulares, los cortaremos y luego curvaremos hasta formar los conos.
Detalle del dibujo 5 Dibujo 5
35
11 - Cencerro Nombres Cencerro. Campana. Campana de vaca. Etc. Origen y antecedentes Este instrumento tiene un origen común con otros tales como: agogó, campanas de badajo, etc. En su forma primitiva, estas "campanas" se construi'an con cascaras de algún fruto de corteza dura; posteriormente se construyeron con trozos de árbol ahuecados. Con la aparición del cobre y del hierro, estos instrumentos adquirieron su material y formas actuales. Consideraciones generales Podemos encontrar algunas diferencias en este grupo de instrumentos: algunos pueden ser fundidos y otros forjados y soldados; pueden tener o no badajo; otras diferencias pueden presentarse en la forma y medidas de la boca (abertura). Comparando los dos tipos de cencerros cuyo uso está más generalizado, vemos que el "latino" o "afrolatino" tiene boca rectangular, y de todas las secciones del instrumento, las de su boca son las mayores; en el "alpino", en cambio, la boca es elíptica y con una medida menor que la del diámetro mayor del instrumento. Materiales Chapa de acero SAE 1010 ó 1045, de 1,5 mm a 2 mm de espesor Varilla de acero trefilada SAE 1010, de 5/8" de diámetro y 20 mm de largo Tornillo de acero de 1/4" por 1/2" con cabeza hexagonal 2 Perfiles ángulos de acero de 1" por 200 mm ó 300 mm de largo
Procedimiento Construir un cencerro puede resultar, en cierto modo, más fácil que construir un agogó; el moldea-, do de la chapa es más sencillo. La mayor dificultad es que deberemos agregarle un buje que permitirá suspenderlo de un soporte. El cencerro es una pirámide truncada de base rectangular; sus caras, por lo tanto, son trapecios: dos de ellos grandes y dos más pequeños. Lo construiremos armando y uniendo dos mitades iguales. Sobre un cartón o papel que nos servirá de plantilla —o directamente sobre la chapa— trazaremos un trapecio de 120 mm de base mayor y 80 mm de base menor, con una altura de 150 mm. Luego, dibujaremos el trapecio menor que, por supuesto, tendrá la misma altura que el anterior, su base mayor medirá 60 mm y la menor 30 mm. Doblaremos y cortaremos la plantilla correspondiente al trapecio menor por la mitad, tomando como eje la altura del trapecio; colocaremos cada una de estas partes a ambos lados del trapecio mayor o transportaremos dichas medidas para completar el marcado de la chapa, cuidando que los ángulos rectos queden ubicados como indica el dibujo 1. Del mismo modo debemos marcar la otra mitad del cencerro. Después de cortar la chapa, procederemos a plegar, con la ayuda de dos perfiles ángulo, comenzando por la parte que corresponde al fondo del cencerro (dib. 2). Es importante que la h'nea trazada coincida con la "h'nea" del vértice de los perfiles. Debemos apretar la chapa entre los ángulos, con una morsa o con dos prensas y luego para doblar la chapa (pestañar) apoyaremos sobre ésta un tro-
zo de madera y golpearemos sobre él con un martillo; de esta manera evitaremos deformar la chapa. Ya plegada puede mejorarse el "doblez", martillando directamente la chapa sobre el ángulo. Cuando ya estén dobladas todas las partes, presentaremos las mitades y, una vez "punteadas", podremos soldar (dib. 3). Prepararemos ahora el buje. Para evitar el torneado partiremos de una varilla de 5/8" de diámetro por 20 mm de largo, que agujerearemos en sentido longitudinal. En la superficie plana quedará formada una corona circular, este agujero permitirá el paso de una varilla de 5/16" de diámetro (9 mm). En general es conveniente comenzar a agujerear con una broca fina (4 mm ó 5 mm) para luego ¡r pasando a otras de diámetro mayor, de modo que no se desbasten más de 5 ó 6 mm en cada pasada. Marcaremos ahora, con un punto de marcar, en la mitad del largo del cilindro para agujerear el buje y hacerle una rosca de 1/4" W; allí' roscaremos un tornillo que presionará sobre la varilla del soporte, evitando que el cencerro se deslice (dib. 4). Conviene soldar con bronce esta pieza al cencerro, debido a las diferencias de espesor. Para terminar debemos pulir y, eventualmente, mandar a cromar.(dib. 5). D,bujo2
Es posible experimentar con otras medidas para tener un juego con varias "alturas". Nosotros hemos construido una octava cromática y nos ocuparemos de ello en otra oportunidad, en caso de abordar la construcción por escalas temperadas de éste u otros instrumentos. Herramientas Regla o cinta métrica
.80 mm. f 30 mm^
Punta de trazar Punto de marcar Escuadra
Dibujo 3
•
Arco de sierra Dibujo 1 (b)
Agujereadora
exterior 5/8" (15,87 mm)
Brocas de 5 mm y 9 mm .
Macho para rosca W 1/4"
!20mm. Dibujo 1 (a)
.60 mm.
Tijera de hojalatero (o cizalla)
_ '
Morsa o dos prensas Martillo
'
Dibujo 1 (c)
Dibujo 4
Tela esmeril Soldadora de acetileno (autógena)
38
Rosca W de 1/4"
Dibujo 5
39
12 - Triángulo
Herramientas Regla o cinta métrica
Nombre Triángulo.
Arco de sierra
Origen y antecedentes Fue introducido en el siglo XV por ios cruzados que lo trajeron de los pai'ses árabes.
Tenaza (o grinfa)
Es considerado el primer instrumento de percusión de metal que se agrega a la orquesta moderna (Hamburgo 1710); su incorporación definitiva data del siglo pasado.
Lima plana Tela esmeril
Consideraciones generales Consiste en una varilla de acero, doblada en forma de triángulo equilátero {antiguamente solfa tener forma trapezoidal, similar al estribo medieval). En el pasado se le "enhebraban" de 3 a 5 anillos de metal en la sección horizontal para enfatizar cierta cualidad acústica.
Soldadora de acetileno (autógena)
Materiales Varilla de acero trefilada SAE 1070 de 3/8" de diámetro por 550 mm de largo Procedimiento Aunque este instrumento es de apariencia simple su construcción no es tan sencilla. Su sonoridad va a depender de la calidad del acero y de su "templado" y "revenido". El triángulo que hemos fabricado nosotros está hecho con una varilla de acero SAE 1070 de 3/8" de diámetro. Para construirlo necesitaremos una plantilla o molde que consistirá en una chapa de metal en la que fijaremos tres pernos o tres varillas, ya sea roscándolos o soldándolos. Esta plantilla nos permitirá doblar la varilla de acero hasta darle la forma del triángulo. El diámetro de los tres pernos debe ser de 1/2" que es el que corresponde al diámetro interior de la curva del ángulo del triángulo. Es preferible optar por roscar las piezas en la plantilla y no soldarlas porque, al ser movibles, cambiando la posición de los pernos podremos construir triángulos de distintas medidas (6", 8" y 10" que son las más usuales). Para completar este molde es necesario que fijemos un perfil ángulo sobre uno de los lados del triángulo, separada de los pernos a una distancia equivalente a un espesor de varilla; para esto usaremos una prensa de hierro, o la soldaremos en el caso de un molde fijo, lo que servirá para soportar un extremo de la varilla mientras la doblamos (dib. 1).
Dibujo 1
l/2"(12f70mm)
Perfil^ de J"x3/}6
Detalle dibujo 1 (perno) .Rosca Wde 3/8"
Detalle dibujo 1 (montaje de pernos)
Grinfa (opcional)
Para construir el triángulo comenzaremos por calentar "ai rojo" la varilla en el lugar correspondiente al curvado; luego presentamos el extremo de la varilla entre la planchuela y dos pernos y procedemos a doblar (dib. 2). Hecho esto, marcamos sobre la varilla el próximo lugar a calentar; calentamos y, desplazándonos sobre el molde 120°, procedemos a realizar la segunda curva. Sólo resta recortar la varilla sobrante y pulir (díb. 3).
Grinfa o tenaza
Para el calentamiento de la varilla del triángulo es conveniente usar un soplete de acetileno, puesto que nos permite calentar solamente la sección que debemos curvar. Para el templado, en cambio, es conveniente el uso de una fragua, ya que ésta permite un calentamiento uniforme de la pieza. No obstante, es posible arreglarse con una de estas dos herramientas, teniendo en cuenta las particularidades de cada etapa. Ya tenemos el instrumento en su forma, pero para lograr una buena sonoridad, además de la calidad del acero es importante cuidar los procesos de templado y revenido que son determinantes de su cualidad acústica. Estos procedimientos ya han sido explicados en el capftulo correspondiente a tecnologfas (ver libro "Materiales y Tecnologfas"); sin embargo, es conveniente que experimentemos con las distintas variables hasta obtener un prototipo con las características adecuadas. Por último, podemos mandarlo a cromar o niquelar para evitar la oxidación, pero debemos tener en cuenta que esto puede producir modificaciones sonoras. Dibujo 2
Dibujo 3
40 41
-
PARCHES .
-
Herramientas Regla o cinta métrica
13 - Tambor de abanico Nombres Tambor de abanico. Bastidor. Kabuki Drum. Uchiwa Daiko (uchiwa = abanico). Bastidor de mano.
Lezna
Origen y antecedentes
Aguja de coser gruesa
Este tambor de marco, originario del Japón, es similar al usado por los hechiceros de algunas tribus de indios norteamericanos. El tambor de marco de "Lapps" se usa en Japón para acompañar la voz de los cantantes itinerantes callejeros.
Arco de sierra
Consideraciones generales
Escofina
El parche va cosido a un aro de metal de 8" ó 10" de diámetro que está unido a un mango. Se asemeja a un abanico circular o a una paleta de tenis.
Lima plana Papel de lija N^O y 00
Materiales
Soldadora de acetileno (autógena)
Parche de cuero de cabra u oveja de 350 mm de diámetro Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 5/16" de diámetro por 1000 mm de largo
Dibujo 1
Trozo de madera de 100 mm de ancho por 200 mm de largo y 30 mm de espesor Hilo encerado (chanchero) Procedimiento Para armar el bastidor tomaremos una varilla metálica de sección circular (5/16" de espesor es tal vez una buena medida puesto que 3/8" es bastante grueso y por lo tanto pesado). Esta varilla debemos tornearla, alrededor de un molde del diámetro deseado, que en este caso es de 250 mm, hasta formar un aro. En el lugar de unión del aro soldaremos una sección de la misma varilla a la que, en el otro extremo, le formaremos una punta —forjando o esmerilando— (dib. 1) para poder clavarla en un mango de madera (dib. 2). Para colocar el parche deberemos consultar el capftulo "Distintas maneras de montar un parche", (ver libro "Materiales y Tecnologfas") donde se explica cómo coserlo a un arillo (dih 3^
Dibujo 2
44
45
14 - Pandero con tensores Nombre Pandero con tensores. Origen y antecedentes Un pandero de fabricación más simple ya fue descripto en laGufa Na 1. El que ahora nos ocupa se diferencia de aquél por el uso de los tensores; por lo tanto, todo lo expuesto en dicha gui'a en cuanto a origen y antecedentes, vale también para éste. Consideraciones generales A las consideraciones generales expuestas en la otra guía clebemos agregar dos aspectos distintivos fundamentales:
tamos el juego sobre al aro de madera para determinar la cota del perforado; obtenida esta medida, procedemos a marcar el resto de los agujeros de manera equidistante (la cantidad dependerá deí diámetro) y realizamos las correspondientes perforaciones. Montaremos las torres en el bastidor, colocando la arandela correspondiente a cada tornillo (dib. 2). Debemos ahora ocuparnos del montaje del parche, fijándolo al aro (este procedimiento ya ha sido explicado en el capítulo "Diferentes maneras de montar un parche": ver libro "Materiales y Tecnologías"), para luego presentarlo, junto con el arillo, sobre el bastidor, colocando los tensores (dih 3). En el caso de encarar la fabricación de una pandereta, y con independencia del tipo de fijación de parche que empleemos, previamente deberán realizarse sobre el bastidor las perforaciones correspondientes al alojamiento de las sonajas para su posterior colocación (ver fabricación de las Sonajas).
1. Los tensores permiten modificar la tensión del parche cuando ésta se modifica como consecuencia de la variación de la temperatura y la humedad.
Herramientas Regla o cinta métrica
mm , 1
S
"I ír\\ "
2. Pese al poco uso que el pandero tiene actualmente, su inclusión en'nuestra gui'a se debe a que, con el agregado de unas sonajas montadas en el aro, podemos construir una pandereta, ésta si'de uso muy extendido y de la que, por lo tanto, ya no daremos detalles de construcción.
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Varilla $.1/81
V
^ 4 m/n_,
Arco de sierra
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Agujereadora Rosca W de 1/8"-^^
Materiales Bastidor de 250 mm de diámetro (o un listón de madera de 48 mm de ancho por 9 mm de espesor y 850 mm de largo o cantidad de laminado de madera correspondiente)
Arandela de 1 /8" X.
Parche de cuero de cabra de 350 mm de diámetro
6/nm_( n 0
A MHUUUUUH
Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 3/8" de diámetro por 150 mm de largo
*
Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 1/8" por 2200 mm de largo
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Brocas de 2,5 mm y 3,75 mm
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Tornillo l/8»x 1¡2"J
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Terraja para rosca W de 1/8"
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3}&"(9. 52 mm)
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Dibujo 2 (b)
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16 - Tambor Nombres Tambor. Tambor militar. Caja rulante. Caja clara. Redoblante. Etc. Origen y antecedentes El origen del tambor se remonta al pen'odo neolítico, es decir, a la segunda Edad de Piedra. Consistfa, básicamente, en un trozo de árbol, ahuecado por la propia acción del tiempo, que era golpeado con huesos humanos o ramas. Los toques de tambor han ejercido sobre los distintos grupos humanos del continente africano un poder esotérico, sobrenatural. A través de distintas formas, la música se mancomuna estrechamente con las ceremonias y los ritos de carácter litúrgico y mágico. En algunas regiones, sus voces constituían el medio de comunicación entre las criaturas humanas y los "Orishas" o divinidades secundarias. En la música europea, la inclusión de algunos instrumentos de percusión de origen asiático se real período período comprendido comprendido entre entre lósanos lósanos l1100 montai al luuyy 1300. Se debió a las cruzadas la aparición de los timbales en las bandas militares. En el siglo XVIII, con la moda de la música turca, se incorporaron varios instrumentos a las bandas de los ejércitos europeos: el bombo, los tambores o redobles, los platillos, el triángulo, etc.. Las primeras en adoptar esta modalidad, en 1740, fueron las bandas de Austria, Hungría, Rusia, Francia y, algo después, las de Inglaterra.
Parece haber sido Gluck el primer compositor que empleó la 'caja clara" en su obra "Ifigenia en Táuride"(1779). Consideraciones generales El vocablo "tambor" ha adquirido, con el uso, carácter genérico; se lo emplea como sinónimo de "membranófono" y, en ese sentido, cualquier instrumento de parche es considerado un tambor. Sin embargo, y con un sentido más restringido, podemos llamar tambor a aquel instrumento que en la actualidad presenta las siguientes características: el alto no excede en medida al diámetro; tiene dos parches montados sobre arillos; éstos están tensados con aros; tiene tensores o correhuelas de cuero y presillas; tiene bordonas. Aunque estas características (a excepción de las bordonas) se ajustan a la descripción del bombo de orquesta, son privativas del tambor militar, más allá de algunas variables históricas o de que el "casco" esté construido en madera o metal. En este sentido, "tambor" es sinónimo de "tambor militar", que es el que se emplea en las bandas militares, especialmente en las llamadas de guerra (en oposición a las bandas sinfónicas). La banda de guerra está constituida por clarines (sin cilindros) y por una considerable cantidad de tambores que, para formar la "batería", se completan con un redoblante, un par de platillos de entrechoque y un bombo o "gran cassa", como se lo suele llamar. Nos queda todavía por diferenciar el tambor militar del redoblante (también llamado tambor). Esta diferenciación es clara si pensamos que el tambor militar tiene, como medidas generalizadas, 14" de diámetro por 15" de altura, mientras que el redoblante tiene 14" de diámetro, pero solamente 6 1 /2" de altura en un caso y 5" en otro. Existe en la actualidad un llamado "pequeño redoblante", cuyas medidas standard son: 13" de diámetro por 3" de alto. También los podemos diferenciar por la función que les corresponde en la música militar: los tambores realizan el ritmo característico para marcar el paso; el redoblante tiene como función "ornamentar" el ritmo básico de los tambores con esquemas rítmicos complejos que, a modo de variaciones, se le van superponiendo. Si nos hemos extendido en estas consideraciones, es porque entre nosotros existe cierta confusión con respecto a la nomenclatura de estos instrumentos. Y esta confusión suele ser mayor cuando relacionamos los de origen estrictamente europeo con instrumentos similares de origen étnico y con instrumentos que reúnen características de unos y de otros.
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En nuestro país, el "chato", que se emplea en las bandas de sikuris o de anatas y el redoble o redoblante (tambor militar) que se emplea en las comparsas de carnaval y ceremonias religiosas del noroeste argentino, son viejos instrumentos de banda o derivados de aquellos. En tanto, la caja y el bombo son instrumentos criollos, emparentados con los tambores de dos parches de las culturas chiriguano-chané que, a su vez, son similares a TomToms, de largo mayor que el diámetro, sin bordonas y sin aros, usados por los indios norteamericanos. Materiales Casco de madera de 14" de diámetro y 13" de altura 2 Listones de guatambú (u otra madera) de 50 mm de altura por 8 mm ó 10 mm de espesor y 1200 mm de largo 2 Listones de guatambú de 10 mm por 10 mm y 1200 mm de largo 6 Metros de soga de algodón de 5 mm ó 6 mm de diámetro 2 Parches (finos), de 450 mm de diámetro 6 Trozos de cuero fino de 100 mm por 50 mm Procedimiento El tambor militar al cual nos vamos a referir tiene caja y aro de madera, parches montados en arillos de sección cuadrada y tensados por soguines y bordona fija (existen tambores militares con aros de metal, tensores y bordonas movibles). A diferencia del bombo, que suele tener medidas diferentes que dependen del tronco que el artesano elige para su fabricación, el tambor militar tiene una medida standard: 14" de diámetro por 15" de altura (en algunos casos puede medir entre 13" ó 16"). Es necesario considerar que el parche para este instrumento debe ser particularmente fino (como el que podríamos usar en un pandero), puesto que hay que "pestañar", es decir, montar en un arillo de sección cuadrada. Montamos el parche en el arillo, como ya hemos explicado en el capítulo correspondiente, sin olvidarnos de efectuar en uno de los arillos dos rebajes diametralmente opuestos, los que permitirán que pasen los tensores de las bordonas. Para la fabricación del "casco" valen las consideraciones ya hechas para instrumentos similares, pudiendo reforzarse los bordes con una pestaña interior. Preparamos los aros de madera y, una vez encolados y pulidos, llevamos a cabo las perforaciones por donde habrán de pasar los soguines. Hechas las presillas de cuero (dib. 1) procedemos al montaje de los parches (dib. 2). Como ya hemos dicho, los parches, que ya están montados sobre el arillo, se presentan sobre el "casco" (a veces es necesario volver a mojar el parche para un mejor ajuste) para luego presionar con los aros atándolos de manera provisoria y presionando hasta que calcen sobre el borde. Hecho esto procedemos a colocar los soguines, intercalando las presillas correspondientes. Por último tensamos el soguín para dar una tensión uniforme a los parches (dib. 3). No olvidemos que, antes del tensado definitivo, debemos pasar por los rebajes efectuados en el arillo del parche inferior, los tensores de las bordonas. Estas merecen una consideración aparte. En realidad, consisten en una cantidad (entre 12 y 36) de finísimos resortes de acero, soldados en los extremos a planchuelas cuyo diseño permite el tensado y que se pueden comprar en las casas en que se vende este tipo de instrumentos. Originalmente, estas bordonas estaban construidas con tientos de cuero; por lo tanto, sería fácil realizarlas con tanza de nylon de aproximadamente 0,80 mm de espesor que, en forma de "zig-zag", fueran enhebrándose en las perforaciones de dos soportes —también de plástico— que permitieran mantenerlas tensadas (dib. 3).
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La sonoridad de este instrumento lleva ¡mplicita la colocación de estas bordonas (elemento modificador), las que sólo se suprimen por expresa indicación del compositor. Si lo deseamos, podemos recubrir el casco, antes de su armado, con un revestimiento de celuloide ("nacarado").
17 - Totn Tom Nombre Tom Tom. Origen y antecedentes
WOmm.
Herramientas Regla o cinta métrica
Aunque encontramos con este nombre un tambor de bambú provisto de mango y originario de Nueva Guinea, nos referimos aquí' a un tambor -o a toda una familia muy difundida- cuyas caracteristicas principales son: casco entero, cilindrico o con forma de tonel, con dos parches (o también con uno), sin bordonas y, en general, con una altura mayor que el diámetro.
Lezna
De la China antigua proviene toda una familia de "tom toms" con cascos de madera maciza, de forma cilindrica por dentro y tonel por fuera. Los parches, tomados por doble o triple hilera de tachas, eran objeto de una cuidadosa pintura ornamental de gran valor milico-simbólico.
Aguja de coser gruesa
60 mm —
Trinchete (cortante)
Dibujo 1 (a)
Cepillo para madera
Dibujo 1 (b)
Arco de sierra o serrucho de costilla
Dibujo 2
En América se han encontrado instrumentos de estas caracten'sticas, de la época precolombina, desde los bosques y planicies del norte y centro de los Estados Unidos (cuyos parches también fueron objeto de ornamentaciones pictóricas) hasta los Anguá Guasú de los indios chirihuanos-chané del noreste de nuestro pais.
Agujereadora
Sin embargo, nos inclinamos a considerar como antecedentes directos de los actuales "tom toms", a aquellos tambores empleados para la danza por los indios chippewas, menominces, iowas, etc. de norteamérica, puesto que una transformación de éstos ha configurado a los actuales, de gran difusión debido a que forman parte de la bateria de los grupos o conjuntos de jazz.
Broca de 10 mm
Consideraciones generales
Prensa
En su origen, estos instrumentos estaban construidos a partir de un tronco ahuecado, y los parches, sobre sus extremos, se tensaban por medio de tientos hechos de la misma piel.
Escofina Papel de lija N« 1 y 00
En la actualidad, las medidas se han normalizado, debido a que tanto los parches como los aros de metal se construyen de 18", 16", 14" y 13" de diámetro; los cascos pueden ser de madera terciada, acnlico, etc., y sus parches son tensados por tensores metálicos. Materiales Tubo de PVC de 12" de diámetro, 6 mm de espesor y 360 mm de largo Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 1/4" de diámetro y de 1800 mm de largo Planchuela de acero SAE 1010 de 1/8" y 1/2" por 1200 mm de largo Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 1/2" de diámetro por 200 mm de largo
Dibujo 3
6 Tuercas de acero (altas) rosca W de 1/4"
Detalle dibujo 3
6 Tornillos de acero de 3/16" por 1/2" rosca W, cabeza redonda 6 Arandelas de acero planas de 3/16" Parche de 420 mm a 450 mm de diámetro ir,
Procedimiento . 340 mm.
Dibujo 4 Detalle dibujo 4
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Este instrumento requiere para su fabricación, tecnología ya utilizada en otros instrumentos. Para construir el "casco", procederemos como ya hicimos en el caso de la caja, teniendo en cuenta, por supuesto, las diferentes dimensiones. Nosotros hemos realizado un tom tom con un resonador muy práctico que es el que sugerimos. Fue realizado a partir de un tubo de PVC (también podria ser de acnlico), de los existentes en plaza, de 12" de diámetro por 360 mm de altura.
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También hemos explicado, para el pandero, la forma de construir los tensores y las torres necesarios para montar uno o dos parches por el sistema de aro y arillo; sistema que también usaremos para este instrumento, por supuesto en número y tamaño diferentes. Nosotros hemos usado 6 tensores puesto que nuestro tom tom es de un solo parche y, como ya dijimos, de 12" de diámetro (dib. 1). Antes del armado fabricaremos el aro y el arillo y, como sabemos, habrá que considerar que el diámetro interior de ambos deberá ser 4 mm ó 5 mm más grande que el diámetro mayor del casco. Ahora sí, procederemos al armado del instrumento: armamos las torres de los tensores en el casco; colocamos el parche en el arillo; presentamos el parche y el aro sobre el casco y, por último, armamos los tensores y tensamos (dib. 2). Sería interesante construir juegos de por lo menos dos tom tom de diferentes tamaños (existe un juego de 8 tom tom de orquesta, de un solo parche cuyas medidas van de 6" hasta 18"). Sería fácil hacer un juego de cuatro, soportados de a pares, considerando las medidas 12"-10" para uno y 8"-6" para el otro; podríamos suspenderlos por medio de un soporte simple (dib. 3). También, como en el caso del tambor, es posible recubrir la superficie exterior del casco con un revestimiento de celuloide (d¡b. 4). Herramientas Regla o cinta métrica
Dibujo 3 (a) Detalle dibujo 3 (a) (soporte)
Escuadra Arco de sierra Agujereadora Brocas de 3,75 mm y 5,25 mm Macho para rosca W d e 3/16" Terraja para rosca W d e 3/16"
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Dibujo 3 (b)
Llave francesa (chica) o fija de la medida correspondiente Destornillador Martillo Detalle dibujo 3 (b) (soporte)
'"
Escofina Lima plana Dibujo 4
Tela esmeril Soldadora de acetileno (autógena) Dibujo 2
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18 - Tambor de cuerda Nombres Tambor de cuerda. Tambor a fricción. Rugido de león. Furruco (Venezuela). Juco (América central). Etc.. Origen y antecedentes Pertenece a un grupo de membranófonos que entran en vibración por fricción. Lo peculiar de estos instrumentos es el tipo de sonoridad que producen (sonido estacionario), que permite integrarlos a la voz y a instrumentos de cuerda o viento. Los más antiguos son los de origen africano, y los hay de distinto tipo: algunos, se frotan con una pieza de cuero; en otros, el sonido se produce frotando una cuerda que atraviesa la membrana (tambor de cuerda); hay casos en que la que se frota es una vara que puede estar atada al cuero (cuica) o puede deslizarse a través de un orificio (pu-ti-pú). Este último sistema es el que caracteriza al tambor de fricción europeo, que consiste en un cubo de madera o arcilla, cerrado en un extremo con una membrana o parche agujereado en el centro; en este agujero se inserta una vara que, al ser movida hacia arriba y hacia abajo o al hacerla girar con ambas manos, produce sonido. El tambor de cuerda, del que nos ocupamos en este caso, es conocido en Europa central y occidental, en América del norte y del sur, en la India y Japón y, por supuesto, en el continente africano de donde, presumiblemente, es originario. Las primeras descripciones datan del siglo XVII y aún hoy son usados por cantores de villancicos en Bohemia. Consideraciones generales Consiste en un casco de madera, con forma de cono truncado y con un parche en la boca menor. El parche tiene un orificio en el centro por donde pasa una soga de cáñamo anudada en un extremo para impedir que pase a través de éste. Con una mano se toma el extremo no anudado para tensar la soga y con la otra se sujeta un trozo de cuero o género con el que se frota la cuerda, previamente resinada, en toda su longitud. El sonido característico de este instrumento es similar al rugido del león.
Procedimiento Para la fabricación del tambor de cuerda podemos emplear dos criterios: el primero sen'a usar cascos cilmdricos, de cuya fabricación ya nos hemos ocupado; el segundo es construir un casco cónico, a "gajos", siguiendo el procedimiento caracten'stico de los toneles o cubas. En ambos casos el parche se sujetará por medio de tensores y por el sistema de montaje por aro y arillo (ver tensores en "Pandero con tensores" o "Tom Tom"). Para construir un "casco" siguiendo la segunda alternativa debemos comenzar por definir el tamaño de este "tronco de pirámide" (dib. 1). Una vez determinado el tamaño debemos definir qué cantidad de tablas vamos a usar; para tal fin debemos partir de dos circunferencias (mayor y menor) y dividirlas en 16 sectores iguales (dib. 2). Trazamos rectas (cuerdas) entre los radiantes y habremos obtenido la medida mayor y menor de cada extremo de la tabla (base mayor y base menor del trapecio). Sólo nos falta tomar, con una escuadra metálica variable, el ángulo entre el radio y la cuerda (dib. 3) para "cantear" con un cepillo de madera de manera uniforme. Una vez determinado el largo de cada tabla (largo del lado del trapecio), trazamos, cortamos y cepillamos para su ajuste. Encolamos entre si' las tablas con una cola sintética, ayudándonos con un fleje de metal en cada extremo, a modo de abrazadera, para prensar. Una vez encolado, pulimos, ajustamos los bordes y reforzamos el lado opuesto al parche con un aro construido con una planchuela de metal de 1/8" por 1/2". Procedemos al montaje de los tensores y al armado del parche como ya hemos explicado para el pandero y el tom tom (dib. 4). Con una varilla de metal calentada "al rojo" agujerearemos el centro del parche; por este agujero pasaremos la soga que servirá para frotar. En el extremo no pasante de la soga podremos agregar una arandela de madera o plástico (dib. 5). Por último, podemos fijar el resonador a una tabla por medio de tres o cuatro planchuelas metálicas. Esta tabla, que apoyaremos en el piso para sujetarla con los pies, facilitará la ejecución del instrumento (dib. 6).
Materiales 16 Tablas de cedro de 60 mm de ancho por 15 mm de espesor y 290 mm de largo Planchuela de acero SAE 1010 de 1/8" por 1/2" y 1700 mm de largo 8 Tornillos para madera ( Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 3/16" por 1200 mm de largo 6 Tuercas de acero (altas) rosca W de 3/16" 6 Tornillos de acero rosca W de 3/16" por 1/2", con cabeza .
6 Arandelas de acero planas de 3/16" Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 3/8" de diámetro y 200 mm de largo Parche de 300 mm de diámetro Soga de 5 mm ó 6 mm de diámetro y 700 mm de largo Cola sintética para madera Planchuela de acero SAE 1010 de 1/8" por 1/2" y 400 mm de largo
56
57
.214 mm.
Herramientas
19-Cuica
Regla o cinta métrica
Nombres
Escuadra (de ángulo variable)
.300 mm. Dibujo 1
Dibujo 2
Cuica. Puita. Puica. Etc. Origen y antecedentes
Cepillo para madera
Aunque su origen, como ya hemos dicho, puede ser africano, la cuica es hoy considerado un instrumento brasileño dado el profuso empleo que se hace de él en la música folklórica de ese pai's.
Arco de sierra o serrucho de costilla
Características generales
Agujereadora
Consiste —igual que el tambor de cuerda— en un casco cónico con una sola membrana, pero a diferencia de aquél, el parche va montado en la sección mayor y en su centro se ata una vara que debe frotarse con un trozo de tela húmeda.
Brocas de 3,75 mm y 5,75 mm Macho para rosca W3/16" Terraja para rosca W3/16"
Es común encontrar cuicas con el resonador de metal (chapa cih'ndrica}. Su tamaño van'a entre 5" y 12" de diámetro. Materiales 12 Tablas de cedro de 50 mm de ancho por 12 mm de espesor y 230 mm de largo Planchuela de acero SAE 1010 de 1/8" por 1/2" y 1300 mm de largo
Llave francesa (chica) o fija de la medida correspondiente
Planchuela deJ/8"x ]/2'r
Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 3/16" y 1000 mm de largo 6 Tuercas de acero (aitas) rosca W de 3/16" •
Martillo
6 Tornillos de acero, rosca W de 3/16" por 1/2", cabeza redonda
Papel de lija N«1 y 00
6 Arandelas de acero planas de 3/16"
Soldadora de acetileno (autógena)
Varilla de acero trefilada SAE 1010 de 3/8" de diámetro y 200 mm de largo Parche de 280 mm de diámetro
Dibujo 4 {a)
Varilla de madera de 6 mm de diámetro y 200 mm de largo Detalle dibujo 4 (a)
Cola sintética para madera Procedimiento Usaremos el mismo tipo de resonador que hemos indicado para el tambor de cuerda, pero en este caso, por ser más pequeño, bastarán 12 secciones ("gajos") (díb. 1). En cuanto a los demás aspectos, la cuica difiere del tambor de cuerda en que tiene el parche montado en la "boca" de mayor tamaño del resonador, y para frotar, en lugar de una cuerda atravesando el parche, lleva una varilla de madera atada en ef centro del mismo y por el lado interno del instrumento. Esta varilla deberá tener, en el extremo que será atado, una parte saliente o protuberancia que impedirá que se desprenda del parche al ser frotada; este engrasamiento podrá hacerse con algún cemento sintético. También podremos resolver este problema con una hendidura circular en el extremo de la varilla. Esta debe ser atada en el centro del parche estando éste mojado y antes de su armado en el resonador (dib. 2). En cuanto a la preparación y el armado de las partes de este instrumento vale todo lo indicado para el tambor de cuerda (dib. 3). Dibujo 4 (b)
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Dibujo 6
59
Recomendamos intentar la fabricación de este tipo de resonador porque es muy usado en otros instrumentos, de los cuales no nos hemos ocupado, tales como: bongóes, tumbadoras, ektar, etc., para cuya fabricación tendríamos que considerar las demás variables. Herramientas
154 mm
Regla o cinta métrica Escuadra (de ángulo variable) Cepillo para madera Arco de sierra o serrucho de costilla Agujereadora
Dibujo 1 (b)
Brocas de 3,75 mm y 5,75 mm Macho para rosca W de 3/16"
__/90mm__ Dibujo 1 (a)
Terraja para rosca W de 3/16" Llave francesa (chica) o fija de la medida correspondiente Largo 200 mm 06 mm Dibujo 2 (a)
Martillo Papel de lija N°^1 y 00
Dibujo 2 (b)
Dibujo 3 (a)
60
Dibujo 3 (b)
Soldadora de acetileno (autógena)
BAQUETAS
Baquetas Nombres Baquetas. Palillos de percusión. Varas de percusión. Etc. Origen y antecedentes Su origen son las varillas o bastones, hechos con ramas de árboles o arbustos, huesos, etc.
Aprovechando el centrado del taco de madera en la agujereadora, cambiamos la broca por una de 6,25 mm y comenzamos a perforar. Una vez perforados 5 mm ó 6 mm levantaremos la palanca de la agujereadora procurando que la bolilla quede "enganchada" en la broca y de esta manera por el modo de girar, nos daremos cuenta si está centrada o no (dib. 1). Hecha esta perforación, que no debe ser pasante, procederemos a "clavar" uno de los extremos de las varillas que habremos ajustado, previamente, a la medida del agujero, y luego adherimos (en el caso de las bolillas de ebonita será necesario roscar el extremo de la varilla con la terraja correspondiente) (d¡b. 2).
Consideraciones generales Son percutores de madera, metal o plástico que presentan en el extremo que percute un engrosamiento, confeccionado con lana, cuero, caucho, etc..
De este modo tendremos tres diferentes pares de baquetas. De querer ampliar la variedad podemos avanzar un paso más: revestir con lana las baquetas que ya hemos fabricado.
En la actualidad, a dichas varillas se le insertan bolillas de goma, madera o algún material plástico (baquelita, ebonita, nylon, etc.) las que además pueden ser recubiertas por lana o lana y fieltro.
Digamos, en términos generales, que las baquetas más usuales son: sin recubrimiento (goma, madera o plástico) para xilófono; con revestimiento de lana (de diferentes durezas) para el vibráfonocon recubrimiento de fieltro (sobre la lana) para timbales.
Materiales
Bolillas de goma sintética de 22 mm de diámetro Bolillas de madera de 23 mm de diámetro
Para e! recubrimiento con lana o hilo grueso de algodón comenzamos haciendo un nudo sobre la varilla v dib. 3) para luego ir "envolviendo" la bolilla con una vuelta circular, pasando por el centro; mientras, vamos girando la baqueta para permitir un recubrimiento uniforme. Cuando alcanzamos el diámetro deseado, atamos sobre la varilla, como hicimos al principio. Completamos la tarea cosiendo con el mismo material por lo menos sobre dos pen'metros para impedir que se corra la lana y pueda descoserse el recubrimiento (díb. 4).
Bolillas de ebonita de 25 mm de diámetro Varillas de madera de sección circular de 1/4" de diámetro y 1000 mm de largo Lana, algodón, fieltro de 2 mm ó 3 mm de espesor Hilo de coser
Obtendremos el tercer tipo de baquetas recubriendo con fieltro una ya cubierta previamente con lana. Para tal fin, cortaremos un disco de fieltro de un diámetro aproximado y lo presentaremos para establecer su diámetro definitivo; éste deberá ser siempre menor que el que corresponde, puesto que el fieltro se va estirando a medida que se coloca. Cuando tengamos el fieltro cortado, sufilaremos el borde de manera uniforme. Por este sufilado pasaremos internamente un hilo resistente que nos permitirá ceñir el paño alrededor de la varilla, una vez que éste haya cubierto la bolilla (dib. 5).
Cola sintética Por supuesto, esta variedad de baquetas, sumada a otras, nos permitirá obtener cualidades acústicas muy diferentes, debido no sólo al tipo de recubrimiento sino también al tamaño, espesor y al tipo de dureza de! núcleo. Procedimiento El primer paso será construir baquetas sin ningún tipo de recubrimiento, es decir, que estén constituidas por las varillas y las bolillas correspondientes, sean éstas de goma, madera o ebonita. La fabricación es sencilla puesto que en comercios (madereras) se venden varillas de madera de 1000 mm de largo por 1/4" de diámetro, y también las bolillas de madera. Las bolillas de goma pueden adquirirse en los negocios que vendan arti'culos de ese material, y las de ebonita en establecimientos que se ocupen de la venta de máquinas y herramientas, ya que se usan para dar terminación a las palancas de las máquinas (agujereadoras, fresadoras, tornos, etc.). Cada varilla debe cortarse en 3 partes iguales de 333 mm cada una, lo que nos va a permitir tener baquetas cuyo largo total será de 340 mm. Dicha magnitud está muy cerca de los 350 mm que constituyen la medida más generalizada. Seccionadas las varillas nos queda la tarea de agujerear las bolillas {las de goma y de madera puesto que las de ebonita no sólo están agujereadas sino también roscadas). Debemos tener en cuenta que lo más delicado es centrar la perforación. Para lograrlo nos valdremos de un molde muy sencillo, consistente en un trozo de madera que sujetaremos en la morsa de una agujereadora de banco y perforaremos con una fresa cónica; de esta manera nos quedará formado un "asiento" en "V", un cono invertido donde se va a apoyar la bolilla para su perforado.
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Herramientas Regla o cinta métrica
w
Agujas de coser fina y gruesa
A O
Arco de sierra o serrucho de costilla Agujereadora Broca de 6,25 mm Tijera
Dibujo ] {b)
Dibujo 1 (a)
Dibujo 2
Fresa cónica de 25 mm de diámetro Papel de lija NS O
Dibujo 3 (a)
Dibujo 3 (b)
Dibujo 5 (d) Dibujo 5 (a) Dibujo 5 (b}
Dibujo 5 (c)
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¿ Es posible que los alumnos fabriquen sus propios instrumentos musicales en la escuela ?, ¿ Sería esta tarea importante para la educación musical?. Estas preguntas nos las plantea Carmelo Saitta, compositor, docente y un especialista en instrumentos de percusión a quien diversas circunstancias, propias de su profesión, obligaron a encarar la construcción de este tipo de instrumentos. Su experiencia docente lo llevó a reflexionar sobre la posibilidad de acercar esta actividad a las escuelas y esta obra es su respuesta. El Luthier en el Aula nos propone la construcción de 41 instrumentos de percusión. Para cada uno se dan, paso a paso, las explicaciones necesarias que permitirán concretarlo, y, en muchos casos, se han simplificado las tecnologías para hacerlas más accesibles a las tareas escolares. Pero el autor nos recuerda que un instrumento no es sólo un objeto que se ve, sino un objeto que suena, lo que hace imprescindible el conocimiento de los materiales y sus tecnologías para obtener una adecuada respuesta sonora. Por lo tanto, en la obra se encaran estos aspectos como etapa previa a la construcción misma. Los instrumentos de percusión -que se caracterizan por su heterogeneidad y multiplicidad sonora- son comunes a todas las culturas. En general, su uso no ha estado ligado a una determinada metodología, y su ejecución, en principio, facilita los procesos de expresión espontánea. Estas características hacen que cada vez sea mayor su importancia en el marco del desarrollo actual de la música y sus técnicas de enseñanza. La construcción de estos instrumentos -que coincide con la actual concepción del taller en las escuelascontribuirá, sin duda, al desarrollo de las habilidades individuales por medio de la asociación luthier-instrumentista, y ayudará, también, al desarrollo de la sensibilidad acústica y de las habilidades motrices. Como resultado final quedarán los instrumentos, que acrecentarán las posibilidades sonoras para la enseñanza de la música y permitirán resolver el problema de la falta de medios que generalmente aqueja a nuestras escuelas.
RA 13471 Industria Argentina Printed in Argentina
Este libro se terminó de imprimir en tos talleres gráficos M.A. BERMEJO 11 de Septiembre 539 - Haedo - Buenos Aires el 5 de octubre de 1990
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