Download Rodrigo Balam Libro Centroamericano de Los Muertos...
LIBRO
CEN TROA ME RICANO
D E L OS OS
M U ER E R TO TO S
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Libro centroamericano de los muertos B ALAM R ODR IGO
Premio Bellas Artes de Poesfa Aguascalientes 2018
POESf POE Sf A
FO ND O
DE
C U L T UR A
ECONO MIC A
Prim era edicion, Primera 20 2018 18 Primcra reimpresion, 20 2020 20 [Primera cdicion en libro electronico, 2018] Balam Rodrigo Libro centroamericano de los muertos / Balam Rodrigo. — Mexico : 2018 142 p p . : fo fots ts .; 23 X 15 cm —(Colec. Poesia)
FCE, ICA, INBAL,
ISBN 978-60 978-607-16-5669-8 7-16-5669-8 ( f c e ) ISBN 978 - 607- 9444 - 43-3 ( i c a ) ISBN 978 - 607 - 605 - 534-2 ( i n b a l ) 1. Poesia mexicana 2. Literatura mexicana I. Ser. II. t. LC PQ7298
Dewe De wey y M861 B 1251
Distribution mund ial
Esta obra literaria se realizo con el apoyo del Fondo Nacional para la Cultura y las Artcs a traves del Sistema Nacional de Creadores de Arte, 2014-2016. D. R. © 2018, Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura Av. Pasco de la Reforma y Cam po M an ane, e, s. n. Colonia Polanco Chapultepec Alcaldi'a Miguel Hidalgo; 11560 Ciudad de Mexico D. R. © 201 2018, Instituto Cul Cultural tural Aguascalicntes ( i c
a )
Venustiano Venus tiano Carra Carranza, nza, 101; 2 20000 0000 Aguascalientes, Ags.
D. R. © 2018, Fondo de Cultura Economica Carretera Picacho-Ajusco, 227; 14738 Ciudad de Mexico www.fondodeculturaeconomica.com Comentarios:
[email protected] Tel.: 55-5227-4672 Diseno de la coleccion: Leon Munoz Santini Disefio Dis efio de portada: Laura Esponda Aguilar Fotog Fot ograff raffa: a: © Moyses Zuniga Sa Santiago. ntiago. 20 de Julio Julio de 2014. A Arriag rriaga, a, Chia Chiapas. pas. Un hombre recib recibee un unaa bolsa dc comida a bordo del tren de carga q ue mil miles es de migra migrantc ntcss centro centroamericano americanoss y centroamericanas emplcan p ara cr cruz uzar ar Mexico Mexico con rumbo a Estados Unidos. Se prohfbe la reproduccion total o parcial de esta obra, sea cual fuerc el medio, sin la anuencia por escrito del titular de los derechos. ISBN 978-607-16-5669-8 (fce, rustico) IS ISB BN 978-607-944 978- 607-9444-43-3 4-43-3 (ica, rustico) ISBN 978-607-605-534-2 (inbal rustico) ISBN 978-607-16-5720-6 (electronico-epub) ISBN 978-607-16-6242-2 (electronico-mobi)
Impreso en Mexico •
Printed in Mexico Mexico
El jurado del Premio Bellas Artes de Poesi'a Aguascalientes 2018, compuesto por Mariana Bernardez, Jorge Fernandez Granados y Oscar Oliva, decidio otorgar por unanimidad el premio al trabajo titulado Libro cen el pse pseudo udo-centro troam ameri erica cano no de lo loss muert uertos os,, firmado con el nimo Zapaluta, por hallar en esta obra alias cualidades poeticas que alcanzan tal intensidad en su lenguaje que abre diversos registros literarios; estos atributos permiten ahondar en la comprension de la condicion condic ion humana hum ana y dar testimonio de una eexp xperi erien encia cia vita vitall que refleja el presente.
Balam Rodrigo (Villa de Comaltitlan, Soconusco, Chiapas-1974) es exfutbolista, biologo y diplomado en teologia pastoral. Autor de
veinticinco libros de poesi'a, los mas recientes: Log Logom omaqu aquia ia (2012), Braille Bra ille para sord sordos os (2013), El or orga gano no inextir inextirpable pable del su suerio (2015), El corazon es una jaula de reldmpa reldmpago goss (2015), De Desme smemo moria ria del rey rey sonambulo (2013), Iceberg negro negro (2015), Ba Bard rdo. o. Pe Pequ quen ena a anto antolo logl gla a
(2016), Sobras reunidas (antologla de poeslas & pensamientos inuti- les) (2016), Silbar de mirlospara mirlospa ra la hermusa hermusa (2016), Colibrije (2017) y M Mara arabun bunta ta (2017). Entre los galardones que su obra ha merecido se encuentran el Premio Nacional de Poesi'a Efrai'n Huerta 2011, Certamen Internacional de Literatura Sor Juana Ines de la Cruz 2012, Premio Internacional de Poesi'a Jaime Sabines 2014, Premio Nacio Na cional nal de Poesia Jose Emilio Pach Pacheco eco 201 2016 y Premio Nacional de Poesi'a Amado Nervo 2017. Algunos de sus poemas han sido traducidos al frances, ingles, polaco, portugues y zapoteco, apareciendo en diversas antologi'as, revistas y diarios de Alemania, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Espana, Estados Unidos, Francia, Guatemala, Honduras, Mexico, Peru, Polonia, Portugal, Puerto Rico y Republica Dominicana. Es miembro del Sistema Nacio Na cional nal Creado Cre adores res de Arte.
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SUMARIO
Not.i del del .tutor Libro ccn ccntroa troamcr mcrican icano o dc llo os m muc ucrto rtos. s. Rrc rcvi visim sima a rclad rcladon on de la dcstruidon de los migrantcs dc Ccntroamerica, colcgida porr el au po auto tor, r, dc la o ord rdcn cn dc lo loss esc scri rild ldd dorc rcss dc pocsta sta, afw dc MMXIY
i;
Sermon del migrantc (bajo itna ccih.d
to De la provind provinda a e rc rcin ino od dcc Gu Guati atima mala la 23 Albu Al bum m famili familiar ar cccn cntr troa oam mcr cric ican ano o (t) 43 De la prov provinda inda de Cuzc Cuzcatd atdn neV Vil illa la dc Sa Sant nt Salva Salvado dor r 47 Albu Al bum m famili familiar ar cccn cntr troa oam mcr cric ican ano o (.' (.' ) (>3 De la pro provin vinda da e iissla lass de ti tier erra ra firme dc Ho Hondu nduras ras tn) Albu Al bum m fam familiar iliar cccn cntr troa oam mcr cric ican ano o ( ;) S7 De l rc Del rcin ino o e pr prov ovinc incias ias dc N Nic icar arag agua ua yi (./) 101 Albu Al bum m famil familiar iar cc ccnt ntro roam amcr cric ican ano o (./ Del rcin rcino e comarc rca as d dee M Meeji jieeo 107 Albu Al bum m famil familiar iar ccn ccntr troa oam mcr cric ican ano o (5 (5) 127
/ Po Post stJprologo y posfacio 135 [Fue escrita la presente obra y palimpsesto en la nitty noble e m u y leal ciudad de Jo Jove vel/C l/Ciu iuda dad d Real/San Cri Cristo stoba ball de lla as Casas indice gener general al 1 yj
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A Victo Victorr Manuel Pere Perezz Garda, Garda, mi padr padre: e: hermano, amigo, amigo, benefactor y defensor defensor de dentos de migrante migrantess centroamericanos A Gabr Gabriel iela a Hernandez Gar Garda, da, mi m i mad madre re:: costurera de las heridas del mundo, siempre con amor A Aldo Ald o Adrian, Adria n, Canek, Ixchel Itzd, Exa Exa Zamnd, Zamnd, Cisteil isteil Xinum, Xinum , Jerjes Jer jesJo Jonas nas y Gabr Gabriel iela a Quitze, mis berma bermanos nos A todos lo loss centr centroam oameri erica canos nos que fueron y son parte de de mi familia, familia, y a todos todos lo loss migran migrantes tes d dee Cent Centro roam amer eric ica: a: para ustede ustedess mi lengua lengua y mi cora corazd zdn n trashu trashuma mante nte A Itzel Itzel,, Yari Yari y Vic icto torr Kaleb aleb,, con agape
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N O T A D E L A U T O R
En cl prcsente libro, tanto el subti'tulo y el epigrafe inicial, como los subtftulos y los epi'grafes dc todas las secciones corresponden a fragmentos de la obra Brevi Brevisima sima rel relati ation on de la la destmition de lla as IInd ndias ias,, colegida por el obispo don fray Bartolome dc las Casas o Casaus, de la orden orden de Santo Domingo, an ano o i ; JJ2 2. Sin embargo, realice intervenciones, actualizaciones, incorporaciones y reapropiaciones en dichos epi'grafes a manera de paiimpsesto, las cuales se encuentran en cursivas. Sin embargo, he rcspetado la sintaxis, la ortografia y la gramatica particulares del texto de don fray Bartolome d dee las las C Cas asas as..
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LIBRO CENTROAMERICANO DE LOS MUERTOS B revi Bre visi sim m a re relat lation ion de la destruiti destruition on de los m migr igrante antess de Centr Centroamerica, oamerica, colegid cole gida a p o r el a aut utor, or, de la ord orden en de los escribidores de poesta, ano de m m x i v
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ARGUMENTO DEL PRESENTE POEMARIO Y PAL IMP SEST O PIEL
Todas las cosas que han acaecido en M Mex exic ico, o, co cont ntra ra lo loss mi migra grante ntess centroamericanos en trdnsito hacia los Estados Unidos [...] entre estas son las matanzas y estragos de gentes inocentes [...] que en este pais se han perpetrado, y que todas las otras no de menor espanto. Las unas y las otras refiriendo a diversas personas que no las sabfan, por lo que qu e f u i rogado e impormnado que de estas postreras pusiese algunas con brevedad por escripto. Asi Asi,, muy mu y a pesar pesar mio, mio, y con to toda da la indignat indig natio ion n y la rabia rabia mios, mios, tes testifico tifico que [...] muchos insensibles hombres que la cobdlcia y ambicion ha hecho degenerar del ser hombres, y sus facinorosas obras trai'do en reprobado sentido, que no contentos con las traiciones y maldades que han cometido, des poblan pob lando do con exquisitas exquisitas espe especie ciess de crueldad a aquellas gentes, los centroamericanos de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicara gua, y aun de otros muchospaises mas [...] para tornarlas a cometer y otras peores (si peores pudiesen ser), acorde presentar esta suma
poetica, de lo que cerca de esto escribi, para Vd. Sr. Lector. Y esta es poetica, la razon del siguiente epitome, o brevfsima relacion literaria. Fin del argumento
SERM6N d e l m i g r a n t e (BAJO UNA CEIBA)
Declaro: Que mi amor a Centroamerica muere conmigo. Fr
a n c is c o
Y Dios tambien estaba en exilio, migrando sin termino;
M o
razan
Bestia y no habia sufrido crucifixion viajaba montado en La Bestia crucifixion sino mutilacion de piernas, brazos, mudo y cenizo todo £l mientras cai'a en cruz desde lo alto de los cielos, arrojado por los malandros desde las negras nubes del tren, desde gondolas y vagones laberinticos, sin fin fin;; y vi claro como sus costillas eran atravesadas porr la lanza circular de los coyotes, po coyotes, por po r la culata culata de lo los po poli licci'a i'as, porr la bayoneta de los milita po militares res,, por po r la lengu lenguaa en extorsio extorsion n de los narcos, y era su sufrimiento tan grande
como el de todos los migrantes juntos, es decir, el dolor de cualquiera; antes, mientras estaba fil en Centroamerica, esa pequena Belen hundida en la esquina rota del mundo, nos deci'a en su sermon del domingo, mientras bautizaba a los desterrados, a los expatriados, a los sin tierra, a los pobres, en las aguas del agonizante rfo Lempa: “El que quiera seguirme a Estados Estados Unidos, que deje a su familia y abandone las maras, la violencia, el hambre, la miseria, que olvide a los infames caciques y oligarcas oligarcas de Centroamerica, Centroameri ca, y sigame sigame”; ”; y aun mientras cafa, antes aun de las mutilaciones, antes de que lo llevaran al forense hecho pedazos para ser enterra ent errado do en una fosa fosa comun como a cualqu cualquier ier otro centroamericano, como a los cientos de migrantes que cada ano mueren asesinados en Mexico, mientras cafa con los brazos y las piernas en forma de cruz, antes de llegar al suelo, a las vias, antes de cortar Su came las cuadrigas de acero y los caballos de oxido de La Be Besti tia a, antes de que Su bendita sangre tiriera las varias coronas de espinas que ruedan sobre los rieles clavados con huesos
a la espalda espalda del Im perio mex mexica ica,, el Senor reco recordo rdo en v visiones isiones a su disci'pulo Francisco Morazan y le dio un beso en la mejilla, y tom to m o un pun punado ado de ttierra ierra centroameri centroamericana cana y ungio con ell llaa su corazo cor azon n y su lleng engua, ua, y recordo que M Mora orazan zan le pregu pre gunto nto una v veez, mientras yaci'an bajo la sombra de una ceiba,
aquella en la que habfa hecho el milagro de multiplicar el aguardiente y las tortillas: tortillas: “Maestro, ^que debemos h hacer acer ssii nos detienen y nos deporta de portan?”, n?”, a lo que E Ell respondio: “D eben migrar sete setenta nta veces vec es siete, siete, y si ello elloss les piden pid en los dolare dolaress y los vuelven vuel ven a deportar, denies todo, la capa, la mochila, la botella de agua, los zapatos, y sacudan el polvo de sus pies pies,, y vuelvan a mig migrar rar nuevame nuevamente nte de Centroamerica Centro america y de Mexico, Mexico, sin voltear volte ar a ver ve r mas nunca, atr atras. as...” ..”
DE LA PROVINCIA E REINO DE GUATIMALA
Digo vcrdad que dc lo que todos estos genocidas hicieron en mal, y senaladamente dc los quefueron asesinos de los migrantes originarios del rein reino o de Guatimala, Guatima la, porq p orque ue [...] [.. .] podri'a podri'a expre expresar sar e colleg collegir ir tantas tantas maldades, tantos estragos, tantas muertcs, tantas despoblaciones, tantas y tan fieras injusticias que espantasen los siglos presentes y venideros e hinchese dellas un gran libro. Porque esta masacre excedio a todos los pasados y presentes, asi en la cantidad e numero de consin intio tio el Estad Estado o mexic mexican ano, o, como las abominaciones que hizo y cons de las gentes que destruyo e tierras que hizo desiertas, porque todas fueron infinitas. F r a y B a r t o l o m e d e L a s C a s a s
HABLA OTTO RENE CASTILLO
Vamonos patria a migrar, yo te acompano.
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1 4 ° 4 0 * 3 s . 5 ” n 9 2 ° o 8’ 50. 4”w — (s u c h i a t e , c h i a p a s )
Estc es cl origen de la reciente historia de un lugar llamado Mexico. Aquf migraremos, estableceremos la muerte antigua y la muerte nueva, el origen del horror, el origen del holocausto, el origen de todo lo acontecido a los pueblos de Centroamerica, naciones de la gente que migra. Vine a este Vine este lugar lugar porque porq ue me dijeron que aca murio mu rio mi padre en su camino hacia Estados Unidos, sin llega llegarr a ver los dolares ni los granos de arena are na en el desierto. desierto . Baje de los Cuchumatanes, desde los bosques de azule azuless hojas de la nacion Quiche Qu iche,, desde la casa en donde habitan la niebla y los quetzales hasta lle lleg gar, ar, cerca cerca de Ayutla, a la orilla del n o Suchiate. Abandone el olor a cuerpos quemados de mi aldea, la peste militar con sus ladridos de “tierra arrasada” mordiendo hueso y calcanar con metrallas y napalm,
su huracan de violaciones y navajas que aniquilaba a los hombres de mafz con perros amaestrados p po o r un u n gobie go bierno rno que qu e alum alu m bra el camino cam ino de sus genocid gen ocidas as con antorchas de sangre y leyes de mierda.
Hui del del penetrante penetrante olor a odio y podredu mb mbre; re; caminee descalzo camin descalzo hasta hasta el el otro otr o lado del infram infra m undo und o para pa ra cur c urarm armee los huesos hue sos y el hambre ham bre.. Nun N unca ca llegue. llegue.
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Dos machetazos me dieron en el cuerpo pa ra quit para qu itar arm m e la plata pla ta y las mazorcas m azorcas del morral: el primero dcrramo mis ultimas palabras en quiche; el segundo me dejo completamente seco, p por orqu qucc a mi cora co razo zon n lo habi'an habi'an quema qu emado do los kaibile kaibiless jun ju n to a los cue c uerp rpos os de mi familia. Dicen algunos que en la ribera de este no se aparece un fantasma, pero yo se que soy, que he sido y sere, el unigenito de los muertos, guardian guard ian de mi prop p ropia ia sombra, som bra, negro negro relampago relampago de de mi mi pueblo, pueblo, bult bu lto o ahog ah ogad ado o en esta poz p ozaa en dond do ndee inicia Xibalba. Dos fichas de cerveza
Gallo pusieron
en mis ojos:
todos los dfas veo cruzar por estas aguas a los barqueros de la muerte, a los comerciantes del dolor que llevan en sus canoas de tablas y camaras de llanta las almas de los migrantes enfiladas puntualmente hacia el tzompantli llamado Mexico.
Dicen polleros polle ros y coyotes c oyotes que ven mi fantasma fantasma en la ribera, ribera, p po o r eso se sant sa ntig igua uan n y rezan rez an al cruza cru zarr las las aguas rotas de este espejo seco en el que escriben su nombre con el filo esteril de las hachas votivas. Todos los dfas veo pasar a las hileras de muertos, a los que migran sin llegar a Estados Unidos: parva par vada dass de cuer cu erpo poss en pena, pen a, tristes triste s figuras humanas, b bar arro ro en entr tree los insom ins omnes nes dedos ded os de Dios. D ios.
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Yo, primogenito de los migrantes muertos, los recibo rec ibo con un u n racimo de filoso filososs machetes en lugar de brazos, iluminado iluminado po p o r la car caraa oculta de esta luna leprosa: bi enve bien veni nido doss al cemen cem enter terio io mas gran g rande de de Ce Cent ntro roam amer eric ica, a, fosa comun comu n donde do nde se pudre pud re el el cada cadaver ver del mun mundo. do.
Bienvenidos al abierto culo del infierno.
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H A B L A B A L A M k ’ i T Z E ’
( P O P O L W U j)
(Solo migras y narcos habra bajo los bejucos?
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I 4 ° 5 3 ' 3 7 - ° " N 5 > 2 °i ° i 4 ''4 4 9 --o o " w — (t a p a c h u l a , c h i a p a s )
Pcrseguidos por el genocida Efrafn Rios Montt mis padres huyeron de Guatemala el aiio de 1982
y se rcfugiaron en un pedazo de selva en Chiapas, Mexico. Lejos de las montanas del Quiche, nacf ixil en tierras mexicanas. Volvimos despues de la firma de los acuerdos de paz, pero pe ro nadie firmo firm o un acue ac uerdo rdo para pa ra te term rm in inar ar con co n el hambre ham bre.. N o tcmam tcm amos os maiz ni para p ara sembrar. semb rar. Cuando me llego la luna decidf bajar de las montanas a Tapachula y trabajar de cocinera en una casa.
Prometian buena paga, pero mis primas me cngaiiaron al llegar y me vendieron como un bulto a la duena de un prosti'bulo en la frontera. Me haci'an abrir las piernas y cerrar, casi siempre, la boca; basta decir que todos me golpeaban. Hasta quc hui con Daniel, taxista de Tapachula, bo rracho rra cho y dro d roga gadic dicto, to, p er ero o me m ato a patad pa tadas as nomas saber de mi embarazo. Tiro mi cucrpo al no, al putrido Coatan, donde antes lanzo tambicn al nino. En terrada en est Enterrada estaa tumba del del Panteo P anteon n Jardfn, sin nombre, estoy perdida, acompanada po r los varios vario s rost ro stro ross difusos difu sos de ot otra rass gentes. gente s. 32
Q uie uiero ro decides que ni ttodo odo el pe peso so d dee la tierra me asfixia tanto como el peso de uno solo de los cuerpos jadeantes y sucios que en vid vidaa sop soportab ortaba. a.
Se que mi madre me busca en caravanas, llevando en el pecho una foto mi'a, esa en la que aparezco vestida en dfa de fiesta. Mi ti'a la acompana, cargando un abanico con tres imagenes mas. Pero mis primas estan malditas, porque siguen vivas, abiertas y pa partid rtidas as p por or el sudo sudorr y los ere erectos ctos m mach achete etess de ccarn arnee de los choferes y estibadores del mercado San Juan. Ojala que mi madre vuelva a San Gaspar Chajul y se quede dormida bajo la incandescencia de nuestro sol de mai'z, recien nacido de la muerte, como yo.
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EL RIO SUCHIATE NACE EN EL VOLCAN TACANA EN LA SIERRA MADRE C E N T R O A M E R I C A N A — L U G AR A R D E T R A N S I T O Y T R A F 1 C O I L E GA GA L DE IN DOC UM E NT AD OS — ; DURANT E SU SU T RAYE CT O S E CONVI E RT E EN UNA FRONTERA NATURAL ENTRE MEXICO Y GUATEMALA, Y RE CO RRE 8 I KIL OME T ROS P ARA ARA DE S E MBOCAR E N E L OCE ANO P ACIF ICO. DIVIDE L OS P OBL ADOS DE T E CUN UMAN, GUAT E MAL A, Y CIUDAD HIDAL GO, ME XICO
Subf al volcan Tacana, desde Tapachula, casi a la medianoche. I La manan mananaa y la tarde an anterio teriorr habia colectado plantas para el listado florist floristico ico de mi ssitio itio de estu estudio dio:: filogenetica y evolucion floral de Gimnera mexicana —plan — planta ta de enorm e normes es hojas ccono onocid cidaa ccom om o “ca “capa pa de p o b r e ”—. Estacione la camioneta en la aldea de Talquian, a un lado de la cancha de basquet. b asquet. Era tarde tarde para para dar darle le su botella de licor a m mii guia, do don n Urb Urbano, ano, indigena mam que, seguramente ebrio, dormfa bajo el grosor del techo de pasto de su casa. Hacia un frio todavia soportable y de las canadas llegaban los ladridos lastimeros de los perros, el machete machete oscuro del viento sob sobre re los h helechos, elechos, las copas de los arboles y su ejercito negro. Conocia los ccaminos aminos de dell Taca Tacana na con tacto tac to de cieg ciego. o. El cielo mostraba la claridad de un silencio atado, y solo el eco de mi corazon golpeando el pecho, asi como el ligero tropiezo de mis pasos, hacian ruido.
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Llegue hasta el magm'fico bosque de bambu, unico en su tipo en todo Mexico; el viento desato sus nudos entre los troncos, quc chocaban y taiii'an su cascara verde. La musica del Tacana y mis botas tocando alfombras de hojas languidas; acaso caminaba en el aire. Me detuve un inomento a beber el cielo, rasgado en zigzag po porr la delgad delgadisima isima punta de lo loss bam bambu bues es en su su inuti inutill in inten tento to p por or borra borrarr la lass eestr strel ellas las.. Encendi un m o m e n t o el g p s : casi la u n a de la manana. Volvi al camino, pero me detuve, bajabaa la ladera una proces bajab procesion ion de som sombras. bras. ■ Treinta hombres, quiza mas, todos habl hablando ando bajo, exce excepto pto alg algun unos os.. Eran migrantes guatemaltecos, ninos, mujeres y hombres. Abandone el sendero lentamente, pero per o aarra rranqu nquee algunas piedr piedras as con mi paso paso.. Los hombres se detuvieron: el que hablaba —sin — sin dud dudaa el ccoy oyot ote— e— alumbro ha hacia cia eell o orig rigen en de dell ru ruido ido.. Sin hablar, tiro un balazo al vacio, luego otro. Salgan de ahi, cabrones, grito nervioso.
Corn hacia el bosque de bambu, despenandome entre zanjas y arboles. Algunos ninos lloraban. jCallense jCallen se hip h ip s de la chingad chingada! a! el relampago y el zumbido de una bala mas. 35
Me interne intern e entre en tre las las marimbas del bambu hasta has ta que qu e ya n o pud p udee ver las las lu luces. ces. Es pere sentado; tema los testfcul Espere testfculos os en la garganta, el corazon coraz on sin sangr sangree y un sudor de hielo hielo aranandome la espalda. Temblaba, asff que me puse la as la cazador cazadoraa y me quede q uede dorm ido, enroscado enrosc ado como serpiente serpiente entre la lass hojas. hojas. Desperte, no se en que que mom ento, sobresaltado. Aba ndonee mi escondite Abandon escondite y volvi al sendero: un tajo debil y violeta era la amenaza del amanecer sobre el ci ciel elo, o, raya ndo la corpu lencia de l volcan T ajumulco.
Au n estaba Aun estaba entumido. Escuche voces, voces, clara cla rass risas risas rebotar reb otar y bajar los barrancos desde arriba. Sent Se ntff un olor olo r a copal de liquidambar: liquidamb ar: un punado pu nado de indi indi'ge 'gena nass mam fumaba fum aba su tabaco tab aco de hojas enrolladas y perfumaba el bosque de alquitranes. Vernan Verna n desde la aldea Tacana, Tacana, Guatem Gua temala, ala, y bajaban bajaban hacia hacia Union Un ion Juarez, Mexico, Mexico, paraa merc par m ercar ar panes pane s y flores. —“B — “Bueno uenoss dias canche: ^compras sbecas}” Trafan su carga envuelta en gigantes hojas de “capa de pobre”, lo que me parecio una senal de que estaba vivo y debfa continuar mis colectas para el herbario. No N o s desp de spedi edim m os y me que q uede de rum ru m ia iand nd o sbecas sob sobre re una piedra. piedra. Nec N eces esit itab abaa con c on urgenc urg encia ia un u n ta tarr rro o de cafe,
asf que comence a subir sub ir hacia hacia el campam cam pamento. ento. 36
Ojala estuviera intacto. Mire de nuevo hacia atras; los mam se disolvian entre Ios arboles. Supe de inmediato cuantos de ellos fumaban: ardian los tizones rojos en sus bocas y sus grandes algodones de liumo se fundian con el azul de la niebla.
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2 7 ° 5 4 ’ 1 4 -4
” n 99 9 9 °°5 53 3’’4 4 4-- 9 9”” w — ( s a b i n a s , c o a h u i l a )
“ La indi'gen indi'genaa guatemalteca guatemalteca Maria Mari a ‘‘N N ’, de 19 anos, murio en el rfo Bravo, del lado mexicano, y perdio la lucha por alcanzar un mejor future Mexico solto sobre mf todos sus perros de presa, su virgen de las amputaciones, su violacion masiva y patriarcal, sus ninos clandestinos eyaculando ashxia sobre las vfas; y en el altar de la gonorrea, orando con gravedad de santos, la jaurfa jaurfa de de los los asesino asesinoss del viento; y noso no sotra trass exhaustas, clandestinas y fugitivas del fuego nuevo, hincadas ante el aullido metalico de La Bestia, trepanados trepanad os nuestros craneos po p o r machetes, machetes, porr balas po balas que nos n os redimen redim en de d e la inanicio inan icion, n, y los barbaros con el corazon mas rabioso y amaestrado que un lebrel ejecutor: ejecutor: he aaquf quf a los homicid h omicidas, as, a los profanadores, a los prevaricadores, sin redencion alguna, hinchados de alcohol en lupanares de humo, acariciando a sus bestias, babeantes, hienas al amparo de un amo demencial, oteando las vfas del tren, filosas como las hojas de acero de una tijera gigantesca
que yace en guardia, a la espera de una cafda para recor re cortar tar nuest nue stros ros cuerp cue rpos os con co n la torp to rpez ezaa in inoc ocen ente te de un ange angell parvulo que tiene entre sus m manos anos un monigote de pan, un sexo de papel, y juega y cercena dulcemente alas y cabezas, ungiendo los pedazos con aceitoso pasmo, deleitandose deleita ndose en su risa risa imbeci imbecil, l, en el trep trepida idante nte aullar de las gondolas y la maquina totemica que los arrastra
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sobre el cuerpo inerte de este pai's alargado, enteco, dejando a su paso lenguas y manos carcomidas por el sol; no obstante, es el sol de los desposefdos, sol de los desterrados, sol sin luz que muere en este ri'o, el no Bravo: abismo, entrada, y por portico tico del hor horror. ror.
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E M I G R A E L Q U E T Z A L H A C I A LA L A B I O SF SF E R A D E L V O L C A N T A AC CA AN NA
Union Unio n Juarez, Chiapas.— La Comision Nacio Na ciona nall de Areas NatnNatn- rales Protegidas detecto que en la biosfera de la reserva del volcdn Tacana se ha registrado un incremento considerable de quetzales, por ello los los trabajos trabajos de preservacion preservac ion se ban ba n refo re forz rzad ado o con las brigad brigadas as de de comuneros.
[...] sail de aquellas azules montanas como del pelaje ensombrecido de un negro y gemelo jagua jaguar. r. Tiempo de hojas revueltas entre la niebla, yesca molida por azares, nomada lienzo de alas de carbon para tejer teje r arterias. A hora ho ra que qu e esc e scrib ribo o estos esto s grito gr itoss con sangre de quetzales digo que no gemi'a la muerte asf de hondo desde los aiios
del presidente Ubico: tierra y carne arrasadas. del arrasadas. Munones cortado c ortadoss como com o la milpa seca seca.. Cosecha de lanientos en el amanecer. Soy el ultimo indigena mam: rastrojo de sflabas de miel sobre la lengua [...] E l q u e tz El tza a l esta emigr em igran ando do a nues nu estro tro territ ter ritor orio, io, prin pr incip cipal alm m ente en te en las laderas del coloso y comunidades serranas de Cacahoatan y Union Juarez. Jua rez. E l encargado encargado de la biosfera d el volcdn volcd n Tacan Tacana a ex explic lico que el quetza que tza l es es un ave av e exotica exotica en peligro de extincion, por po r lo lo que de manera coordinada se ban realizado trabajos para su conserva- cion y proteccion, ast como mecanismos para evitar la caceria de estas especies.
[...] alumbro alu mbro mi camino camino hacia hacia Mexico con una un a tea de sangre bajo un u n cielo enz e nzop opil ilot otad ado o que qu e pic p ico o tea te a mi lengu len guaa y los brillantes ojos de mi cabeza cercenada [...]
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“Este hallazgo es uno de los mas importantes dentro de los trabajos de monitoreo mon itoreo y preser p reservation vation de est esta a ave endem endemica ica de Mexi Mexico co y Gua temala, de la cual sc calcula solo quedan unos mil ejemplares ” abundo tin ornitologo.
[...] tirados a un lado en los caminos de extravi'o, mordidos por alambradas, dcstrozados por manos muertas, atropellados por trenes que gritan en medio del vaci'o como pajaros despedazados por mandibulas de oxido, lo que antes fueron pantalones, zapatos, blusas, tela, son ropas e hilachos sin cucrpo, rastrojo, rccientes formas sin carne, piezas hormadas por la muerte extendiendo su cordon umbilical de suciedad y trapos desde el rio Suchiate hasta el no Bravo [...]
Opino que el motivo por el cual esta espetie ha emigrado a territorio de la biosfera del Tacand, pttdiera consistir en que cuenta con un bos- que en buen estado de conservation y presenta cadenas alimentitias muy espetificas, que facilita su vida silvestre.
[...] como el rastro de sangre que deja el animal herido porr los tajos del machete, po machete, as asi las las hue huella llas, s, lo loss musc muscul ulos os,, los munones regados a los lados de las vi'as del tren Bestia con su parvada de guadanas: porr las que pasa La Bestia po rieles, escaleras de acero cosidas al dorso de Mexico, columna colum na vertebr v ertebral al de un pai'i'ss completamente completamente desmem desmembrado brado [...]
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CENTROAMERICANO (1)
PRIMERA FOTOGRAPfA DE MI PADRE, MIS HERMANOS Y YO CON MIGRANTES DE CENTROAMilRICA
Mi padre pad re es eell hom hombre bre de la eextrema xtrema izquie izquierda, rda, arriba. arriba. Se asoma entre el sombrero de Nicolas (hondureno) y mi hermana Cisteil. Nicolas era afable, trabajador, el filo de su sonrisa partia la dureza o los modos fieros de cualquiera. Arriba tambien, cargando a mi hermana Exa, justo en el medio, Orlando (hondureno); evangelico, tranqu tra nquilo ilo,, con esa paz de la lass res reses es que van aall m matade atadero. ro. Se qued quedo o en casa mayor ttiempo iempo que los ddem emas. as. Del lado derecho, Carlos (hondureno): de su cabeza nace aquel torci to rcido do arbol arbol.de .de nnance ance y su codo toca la eexa xacta cta mi mitad tad de la calle Central (por la que bajaba mi padre cuando llegaba por las noches, ebrio de risa, luego de d e con convers versar ar con los muchacho muchachoss en el parqu parque), e), tenia la voz y las maneras de un hombre negro teiiido teiiid o de piel mestiza; era sin duda el mas aleg alegre re de los migrant migrantes es y favorito de mi hermano Canek (e (ess el nifio mas sonr sonriente; iente; aun hhoy oy conserva el hacha limpia li mpia ddee su boca) a quien carg cargaba aba siempre que podia. En tre Orl Entre Orlan ando do y el brazo dere derecho cho de C Carl arlos os (que se recarga en su hombro izquierdo y le hace cuernos) un terc tercer er hon hondur dureno eno;; deje su nombre entre lo loss sig signo noss de aquel ano y du dudo do que mi miss hermanos lo recue recuerden rden;; era callado como una sombra, quiza por es eso o se nos luyo su nombre. Delante de el, mi hermano Aldo saludaa co salud conn llaa rama de su mano extendida, en ggesto esto aama mable ble,, a mi mad m adre re (ella tom tomo o la foto). Abajo y en ccuc uclill lillas as,, 45
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casi en el medio, a los pies del difuso manojo de caras, dos guatemaltecos: las letras de su nombre son pajaros de olvido olvido.. Llega Llegaron ron de despu spues es que Nicolas, Carl Carlos os y O rla rlando ndo,, pero per om march archaron aron junto juntos, s, excepto el ult ultim imo, o, qu quee ssub ubio io al tr trcn cn un mes despu despues: es: m mii padre le regalo un vicjo ssom ombre brero ro y un morr morral, al, y an ante tess de parti partirr aall norte lo adiestro para emular a un campesin campesino o costeno. Libro todas las ccaseta asetass migr migratorias atorias,, coyotes y polleros. Luego de varios meses, sorteando mile iless de kilometros de o odio, dio, nos escribio una carta desde Canada, a donde llego para escribir su futuro futu ro en pagina paginass de inv invierno. ierno. Yo aparezco en cuclillas, en el extremo izquierdo de la foto; desde entonces llevaba la mania del tic que todavia todavia cconservo: onservo: suje sujetarme tarme el mdice de la m mano ano derec derecha ha haciendo una pin pinza za con la zur zurda; da; voy descalzo, al igual que mis hermanos. Ninguno Nin guno de noso nosotros tros viv vivee ya en el puebl pueblo, o, todos migramos, buscando librarnos de las garras del dios de la miseria y su violencia. Si pudieramos entrar en la foto treinta anos atras y dar vuelta sobre la calle a mano derecha, encontrariamos a mi padre en el anden —seria —ser ia impos imposible ible confundi confundirlo: rlo: nifio colo colocho, cho, descal des calzo zo y curtido p por or el sol— vend vendiendo iendo palo palomita mitass de maiz, cargando las maletas de los agentes viajeros, saltando las manchas de diesel quemado sobre los durmientes de madera, asido a un vagon en direccion a la memoria, ese debil murmullo que se rompe con el aullido de un tren que atraviesa por el pafs de la niebla.
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DE LA PROVINCIA DE CUZCATAN E VILLA DE SANT SALVADOR
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De infinitas obras horribles que en este reino hicieron estos infelices y malaventur malaventurados ados tiranos e ssus us sicarios (por (porque que eran su suss capitane capitaness no menos infelices e insensibles [...] con los demas que les ayudaban) fue una harto notable: que arremetian contra las gentes de la provincia de Cuzcatan, donde agora o cerca de alii es la villa de Sant Salvador [...] jO h, ccuanto jOh, uantoss hue huerfanos rfanos hicieron, cuanto robaron d dee ssus us hijo hijos, s, ccuan uan-tos pr priva ivaro ron n de sus mujere mujeres, s, cuantas mu mujeres jeres dejaron sin m marido aridos, s, de cuantos adulterios y estupros e violencias fueron causa! [Cuantos privaron priv aron de su libertad, cuan cuantas tas an angu gustia stiass e ccal alam amid idad ades es pa padec decier ieron on muchas gentes por ellos\ [Cuantas lagrim lagrimas as hicieron derram derramar, ar, cuan tos sospiros, cuantos gemidos, cuantas soledades en esta vida e de cuantos damnacion eterna en la otra causaron, no solo de migrantes salvadorenos, qu quee fu fuero eron n infi infinitos, nitos, pero de los iinf nfeli elice cess migrantes de otras naciones centroamericanas de cuyo consorcio se favorecieron en tan grandes insultos, gravfsimos pecados e abominaciones tan execrables! F r a y B a r t o l o m e d e L a s C a s a s
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i 6 ° 0 7 ' i 2 . i " n 9 3 ° 4 8 ' i i . 7 ' ' w — (t o n a l a , c h i a p a s )
Tengo 11 anos, ahora y para sicmpre. N a d en el el Barrio FcndeS FcndeSal al de S Soy oyapa apango ngo,, cerca de San Salvador, pero a mi nadie, nunca, me salvo. Mi padre padr e fue asesinado asesinado por po r pandilleros pandilleros de la Mara Salvatrucha, le quitaron una soda y una cora; no tenia mas, ganaba tres dolares al dia en el el vertedero. vertedero. Yo le ayudaba jalando el carro y a veces encontrabamos comida en las bolsas de desechos que llegaban llegaban de Metrocentro y regresabamos contentos a la casa. H u i de Soyapango con Pablo, de quince anos anos,,
mi amigo de la calle. Quer ia ser futbolista como yo y jugar Queria jugar en la Selecta, iriamos a la m l s a probar suerte, porr eso intentamos po in tentamos llegar llegar a E Estados stados Unidos, donde hay mas dolares que pandillas. En un local de tortas mexicanas, en Coatepeque, Guatemala, mire en la tele un barbaro documental sobre el Magico Gonzalez: jugando jug ando para el mejor Cadiz de la la histori historiaa le metio dos goles al Barcelona el ano en que nacio mi padre: 1984; llore de la emocion. 51
D os df dfas as hasta llegar a llaa fronter fronteraa co con n Mexico Mexico;; atravesamos el rio y subimos al tren La adelante de Tecun, en Ciudad Hidalgo.
Bes Bestia tia
Antes de Arriaga me quede dormido y todavi'a sigo cayendo. Llevare para siempre, como el Magico, un 11 tatuado en la espalda; quiza por el numero de bolsas en que guardaron, todo partido, mi cuerpo; tal vez porque trafa puesta la camisa de la Selecta con la misma cifra o porque la muerte lleva el 11 infinito de las vfas del tren grabado en el vientre. Antes de caer, Pablo me conto este sueno: Vei'a yo a Roque Dalton levantarse de entre los vivos y venir de nuevo al mundo de los muertos. A su diestra, el el Ma Magic gico oG Gonza onzalez lez driblaba a la muerte mu erte
y le hacfa la “culebrita macheteada” pateando patea ndo cabe cabezas zas dec decapitadas apitadas de pandilleros cuscatlecos, haciendole tremendo cano entre las piernas. El estadio Flor Blanca estaba lleno, habfa un velorio inmenso donde la muchedumbre muchedum bre ve velab labaa a todos los migran migrantes tes m muertos. uertos. Se que Dios juega futbol alia en el cielo. Pero aun no quiero estar en ssu u equipo. Me quedare esperando en la banca hasta que me llamen, sonriendo, mi amigo Pablo y el Magico Gonzalez paraa juga par jugarr con ello ellos. s.
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Era del corazon de Santa Ana, El Salvador, Felix. Fue el prim primer er salvadoreno que cono conocf cf y del que guardo su imagen astillada en espejos. Vivio algun tiempo en nuestra casa de alquiler, erguida con humo a orillas de la Ciudad de Mexico, en una colonia sucia y torcida como una maqueta escolar rofda por las polillas —humanas— y con ese aire de proyecto sin terminar, bordeada bord eada hasta el dia de hoy por la tinta ne negra gra
de un canal que atraviesa el aire con el filo de su hedor a mierda h'quida. Era la populo po pulosa sa y pandillera Nueva A Atzac tzacoalco oalco a finales de los anos setenta. A Felix lo recuerdo alto, bianco, de bigote oscuro. Ayu dabaa a mi pad Ayudab padre re a vend vender er sus ccaj ajas as de m meta etall en los comercios, en las fabricas; gastaban la lengua negra de sus unicos zapatos en aquellas aq uellas cal calles les trazadas p por or el polvo y el aasfal sfalto to en el oriente indomito de la urbe. Era tacafio, quiza mas que Ebenezer Scrooge, pero per on no o ttan an flaco como es esee vie viejo jo aang nglic licano ano so sofia fiado do por Dick Dickens ens y que conocf en las ilustra ilustracione cioness de los Clasico Clasicoss Juveniles de la Editorial Posada Posada,, antes de que a mi padre le alcanzara la plata paraa com par comprarm prarmee libros. 53
Felix habi'a sufrido la guerra civil en El Salvador y ahora que tenia pesos en los dos bolsillos del pantalon procurab proc urabaa gastar solo un punado. pu nado. Comi'a tacos de platano y un plato de frijoles al di'a, lo que hacfa rabiar a su mujer, tambien salvadorena y mas flaca que la racion de Felix. Un di'a lo asaltaron y los ladrones le devolvieron la miseria en un solo pago: lleva lle vaba ba consigo consigo todos los los ahorros aho rros de su corta c orta vida vid a en Mexico. Pero no aprendio, maldij maldijo o y gritaba
que este pais al que habi a llegado era mas feo que Santa Ana e incluso mas pobre. Creo que tern'a razon. Sin embargo, Sin embargo, mi padre padr e lo llevo a Plaza Plaz a Satelite, un burdo anillo de oro labrado en medio del mierdero citadino. Al caminar caminar entre los los fastuosos aparadores, aparado res, Felix Feli x se se hinco a llorar llorar,, dijo que no podia po dia creer el contraste que vei'an sus ojos. “Sera peor en Estados Unidos, asff que vete acostumbrando: as acostumbra ndo: alia los ricos y los pobres lloran en dolares”, le dijo mi padre. Al regreso, Felix lle llevo vo a su mujer a un restaurant restau rante, e, pidier pid ieron on u n bistec y ahorr ah orraro aron n lo suficiente su ficiente para pa ra viajar a Estados Estado s Unido U nidos. s. Eso E so recu r ecuerd erdo. o.
Eran los anos setenta, cuando todavfa les deci'an mojados a todos los migrantes, incluso a los centroamcricanos. No sc que sera dc Felix, Felix, de su su mujer mujer;; es es posi posibl blee que los dos hayan cruzado al otro lado sin contratiempos. Es posible tambien que sus hijos scan gringos y ya no coman tacos de platano, ni punados dc frijolcs negros.
Sin embargo, cada vez que estoy en una plaza comercial llena de aparadores y vitrinas me siento ajeno y sufro las mismas nauseas que Felix: me dan ganas de vomitar sobre los cristales limpios, transpar trans parent entes, es, donde do nde se exhibc exhibc la miseria iseria del mund mundo. o.
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8° o 7, 34- i ” n 94° 29’o i . 4” w
— (co atza co alco s, v erac ruz)
Quise Qu ise ser cantante de corridos,
pero pe ro ya no canto, migro sin descanso. Solo se que no soy mudo. Lejos de Centroamerica, me quede sin voz. Me atraparon en Coatzacoalcos los zetas, los de la letra ultima, la que no es ni el alfa ni la omega, sino aquella con la que se escribe en Mexico, con mayusculas, el nombre de la ira. Cuando me vine de m Cuando mii ti tierra erra El Salva Salvador dor / con la intention de llegar a Estados Unidos / sabia sab ia que neces necesitaria itaria mas que valo va lorr / sabi sa bia a que a lo mejor quedaba quedab a en eell camino [...].
El cantante, aquel que soy, que era, ahora muerde silencio, silencio, punos pun os de llanto, tierra tie rra negra, sangre coagulada coagulada por po r estrel estrellas las.. El cantante se ha quedado sin lengua, sin cabeza. Lo unico u nico que no me decapitaron decapitaron fueron fue ron las las palabras, palabras, aunque tambien las desangraron. Y aunque no es mudo, el cantante cantan te se ha quedado queda do sin voz. 56
t En Guatema Gua temala la y Me Mexico xico ccua uand ndo o crn crncce / dos veces me salve me hicieran prisionero / el mismo idioma idio ma y el color color reflexio reflexionen nen / como esposible que me llamen extranjero [...].
Me quede aquf, en este suelo, lejos del rfo Lempa.
Me quede sin vos vos,, mi amada Centroameri Centroamerica. ca.
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CARLOS
Recorrfamos el camino a La Finquita saltando el cadaver largo de las vtas del tren. Era el tiempo de secas, cuando los arboles de guanacastle ergui'an la sombra corpulenta que aplastaba nuestros pasos y las huellas del ganado en las veredas hacia ha cia el el potrero potr ero de Tomason. Habia en el el aire aire un encendido olor olo r a agua podri po drida da y las las hojas hojas en la ribera del n o Vadoancho semejaban esqueletos de peces cambricos tendidos en la playa con su piel de clorofila y escamas color sepia que se descarnaban en los meandros junto jun to a los los fermentados fermentado s higos de los grandes grand es amates, delicia vegetal para el mordisco del sol. Exmilitar, salvadoreno, Carlos sembraba postes de madera en las lindes de nuestro terreno; ’ tenia los los ojos inyectados por po r hond ho ndas as raices raices rojas. Recargado en Recargado en un arbol de mandarina ma ndarina china, fumaba un grueso tocon de mariguana y parecfa un marino vietnamita quemando la tea de sargazos que brillaba en el erizo negro de su boca. “No “N o le diga digan n a su padre, ustedes nunca fumen fu men esto es to”. ”. Levantaba el peso de los troncos cubiertos de diesel que hacfan las veces de horcones y los hundfa en las axilas del suelo; luego las las rellenabamos rellenabamos de tierra tie rra y piedras; pied ras; al terminar, terminar, clavabamos clavabamos las las grampas y el alambre alam bre de puas pu as en la cara externa de aquellos mastiles: 58 .
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pcntagrama de espinos espinosos os ca cabl bles es d donde onde llaas n nota otass v viv ivaas y emplumadas de los pajaros sc posarfan por las tardes para cscribir, cn cn su alg algaara rab bi'a i'a,, mus musica ica de gua uan nac acas astle tles. s. Carlos fuc el primero en decirnos el nombre de aquella cancion que pulsaba con necedad en la consola: Hotel Calif Califor orni nia, a, dijo. No N o se po porr que, pero no le cr crcf cfm mos os.. Cuando estaba en casa, casi no hablaba o muy poco. Se quedaba en algun rincon del patio, haciendo fantasmas de tabaco, pensando. Antes de marcharse le dejo a mi padre unas gafas negras, corao de luto. Fueron las primeras que use para veneer al sol del Soconusco. Meses despues, Carlos regreso a la casa, ya en tiempo de agua, vestido de vaquero, con los ojos mas pcquenos, mas rojos y mas llenos de rafees que antes. Trabajaba de guarura con uno de los mafiosos del pueblo. Entro a la casa callado, ausente, para tomar cafe; olfa a sudor, a velorio, a humo de mariguana. “{Como les va en el colegio, muchachos?” Bien, Carlos, bien. Hubieramos querido que siguiera trabajando para mi padre, pero el sargazo de la yerba y una m mejor ejor pla plata ta lo llamaban llama ban co con n una un a voz mas poderosa y profu profunda, nda, inc inclu luso so,, que sus tribulaciones o el hambre. Sabfamos que rumiaba la tristeza de sus erfmenes de guerra, que fum fumaba aba verde para aletargar eell odio y el dolor de dell coraz corazon. on. Nunc Nu ncaa volvimos a verl verlo; o; no supim supimos os ssii lo as ases esin inar aron on o lo mato el tren, como el querfa, o si pudo, finalmente, hospedarse en el Hotel California, bajo un cardumen de aguilas gringas volando en cfrculos sobre su cabeza. 59
Dicen algunos que lo mataron los narcos; otros otr os,, que sigue preso en la car carce cel. l. Ojala Carlos haya montado en el tren de la tarde y descendido a la lass puertas puertas de su hotel pa ra luego enrollar para enrol lar en sabanas de papel cebolla su largo hachon de mariguana, y asi, en hondas bocanadas de niebla, fumar fum ar a nuestra salud salud hasta hasta desatar los los nudos nud os del odio, odio , del hambre, y ese agudo alambre de puas que le ahorcaba ahorcaba la fruta podrida pod rida del corazon. corazo n.
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i 7 ° 2 6 ’4 8 . o ” n 9 i ° 2 j ’4 0 . 7 ” w — ( t e n o s i q u e , t a b a s c o )
A mi me gustaba partir verga a cualquier hijuepueta que no los tuviera bien puestos. puestos . Mi nombre no mbre comenzo a sonar desde desde que llo o eesc scrib ribii con sang sangre re en las paredes de la carcel carcel de Cojutepeque en El El Salva Salvado dor. r. 14 anos cabales y 20 muertos, todos tripeados con chimba y con machete. Tres puntos sobre la mejilla. A 1salir franco, me contrataron Los Perrones del Oriente porque le pase verga a dos culos surenos que, segun ellos, les parian madre. Musica de banda mexicana, narcocorrido y dos li'neas diarias —rieles de coc a— me protegi'an coca— protegi'an (y vos tambien, Malve Malverde) rde).. Cua Cuando ndo mataron mataron a Chep Ch epee Luna, Luna , mi je jefe, fe, me llamaron para trabajar en Teno Tenosiqu sique, e, Tabasco, donde me sume a los de la letra. Sabian que mis paisanos y otros polios centroamericanos pasaban en el monte por caminos de desvfo. Alii cumplf los 20 y sume a mi cuenta no se cuantos cuerpos mas. Veia a los hombres torcerse de dolor, a las mujeres pedir que ya y a no n o la lass montar mo ntara; a; despues de destazarlos, jugaba jugaba a completa completarr los cuerpos. Siempre me equivocaba con las piezas: cabeza negra en tron tr onco co bianco. Me daba risa, igual igual que cuando era cipote en en la vida vida loca y me llenaba de cinto mi madre cuando algo le faltaba. Siempre dormi como bendito; fue mi talon de Aquiles. A veces me sonaba con cerveza Pilsener, ceviche y una hamaca en las playas de La Libertad Libe rtad;; su arena ar ena negra lamiendome los pies pies,, pupusas de de arroz con su loroco, pescado frito. Deje mi chimba sobre un tronco y otro zeta envidioso por mujeres, culero, me pego con ella un tiro. Quiza dos para dejarme un par de huecos mas donde tern'a los ojos, ahi donde el sol siembra sus huevos de mosca, su mara de zompopos, su mordida. En Mexico todas las fosas son comunes, y sin contar la mfa, llene docenas. Seguro estare mejor aqui que alia en Cojutepeque y sus barrotes de mierda. Si Dios o mi madre
me hubier hub ieran an vist visto o asf, asf, tambien me habrfa habrfan n pegado pegado un tiro. Qui Quiza za dos. U n o para pa ra mis lunas luna s de sangre sangre,, otro otr o para la pus del del so sol. l. Mira Mira que nunca tuve nombre, no, ninguno. Vos podes llamarme hijueputa. Lo se. Vergon. 61
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CENTROAMERICANO (2)
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(DONDE HA QUEDADO NUESTRA LENGUA?
I. Una honda tristeza me golpea en estos dias. ^Que sentido tiene todo lo que hago y escrlbo? No N o se inmutan inmu tan los ast astros. ros. Rie Rie Dios, Dios, nos nos su sueiia eiia.. Solo la respira Solo re spiracion cion noctur noc turna na de mi mujer y mis mis hijo hijoss me dice que estoy vivo. Cierro los ojos a ratos y mi cuerpo cae en el vertigo de la sangre sin sueno. Reconstruir los rostros de la infancia, los de aquellos migrantes centroamericanos que vivieron, comieron y sonaron entre los horcones de mi casa.
Sus cuerpos y nombres se han vuelto niebla, dibujados con cal en la memoria, como los difusos garabatos que tajo en este libro.
2. El tren de la memoria se descarrila, de golpe, en mis manos. Manos con las que mis hermanos y yo —monedas de carne aplastadas por el ticmpo— pomamos las las cabezas cabezas de de niquel niquel de de los los hero heroes es de llaa patria patria sobre rieles para que las aplastara el tren hasta lograr macabras muecas, dolorosos y deformes rictus, risas torcidas, desvanecidas, migrantes hacia el rumbo sin norte de los suenos.
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3-
Busco los rastros de la infancia como quien busca una pepita de oro en la basura: llego al pueblo, camino por la calle Central, doblo en su esquina solar y alii, sin almendros, al frente de este incendio sin fuego, se yergue mi antigua casa en el centro del mundo. Apenas me ace acerco rco,, busco mis huella huellas, s, pero no enc e ncue uent ntro ro ninguna ninguna.. Camino hacia el anden y luego hacia el puente del ferrocarril: solo rescoldos aplastados por La Bes Bestia tia del tiempo sobre los duros y filosos rieles de la existencia. (Migre (M igre por po r la vida y sail decapitado decapit ado
porr su imparable po imparable y despiadado despiadad o tren.) tr en.)
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Al escribir me me asaltan asaltan dudas violentas y rabio rabiosas: sas: ladran y resuellan resuellan como perras fren f rente te al mar. mar. Musica de tumbas. Ecos. El filoso machete del silencio lo taja todo. Soledad, su mar oscuro de principio a fin.
Brevedad y nausea en la garganta, vertigo en la medula de los huesos. Me quiebro de polvo y de vacio. Yazgo a merced de mis escombros, escombros, de mis ruinas, r uinas, fragmentos de azar con los que levanto estas paginas en medio de la nada como un castillo de ego, fortalezaa de naipes fortalez naipes ajados ajados por la lass manos de Dios, po p o r su voz vo z de relampago sin eco. eco. 66
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Micntras escribo, me quema la garganta y los ojos el rostro de mi padre, la antorcha amarilla de su hi'gado que alumbra la claridad de mi dolor. Las manos fuertes de mi padre, pajaros ardiendo entre los arboles, su mirada de arcangel dcgollado, dulce y siniestra, y sus ojos, que siempre me visitan en los buses, bu ses, escri escriben ben su mirada con letr letras as de ssang angre re en estas lineas. (Debo desollar y tender, con estacas de sal en este libro, el pcllejo de mi corazon hacia los cuatro rumbos del dolor.)
6 . .
Aplastados Aplas tados co contr ntraa el asfal asfalto to de llaa noc noche, he, somos luna perforada contra la negra tela del cielo en este oct o ctub ubre re viejo viejo,, desconsola desconsolado, do, v vac acio io,, ancestral mcmoria del hombre que solloza frente a la hoguera. ^Que tren —quiza el de Dios—nos desfigura como a las monedas deformes, sucias, tintineantes y aplastadas contra el cielo, cafdas desde los bolsillos rotos de la infancia?
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Entre los rieles de este libro yace mi lengua: descuartizada.
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DE LA PROVINCIA E ISLAS DE TIERRA FIRME DE HONDURAS
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Desde a pocos dias mataron a muchisimos migmntes [...] y dcspues suscedieron otros muchos tiranos crudclisimos de distintos cdrtelcs que con matanzas e crucldadcs espantosas y con hacer esclavos e vcndcrlos a los tratantes de seres humanos, a los pederastas, a los va- rones de la droga [...] e con la tiranica servidumbre ordinaria, desde novecientos tos.. .... ? y hasta el dia de hoy ano de dos mil e el ano de m il y novecien catorce [...] asolaron a aquellas gentes migrantes de las provincias e reino de Honduras. F r a y B a
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r t o l o m e d e La s C a s a s
25 ° 4 6 ' 2 7 - 3 ' ' n i o 3 ° i 5 ' 4 3 . 2 " w
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( f r a n c i s c o i . m a d e r o ,
coahuila)
Los cielos masacraron a la luz, que esta deshilachada y en colgajos —fosiles estrellas decapitadas— desmembrada a ras de cielo. Asi nosotros, desperdigados en el desierto, la ropa salpicada entre arbustos y espinales, flores de informes corolas, destenidas. Los elementos descarnan lo que queda; en balde y lejanas, las plegarias. Nos N os secuestraron secuestr aron en la estac estacion ion de bus buses es de Torreon, Coahuila, a plena luz del dia, racimos de jovenes sicarios, barbaros de AK - 4 7 con la violencia maquillada por po r la blancura blancura del polvo, polvo, humanos carniceros con filo de rutina en la sangre. A golpes y tablazos, a los hombres; con palos y dolor, a las mujeres; nos arrancaron numeros y dientes para llamar a nuestra gente, gente, extorsiona extorsionarlos rlos a miles de kilometros, mas alia de nuestra ruina. Pasto seco, sol sin aire, zopilotes en cfrculo resguardan resgua rdan nuestras cabeza cabezas. s. Abandonados Abandonados y encogidos en la incandescencia del fri'o, morimos de dolor, de sed, a veces de hambre; y seguimos con las manos juntas, encintados de pies y quijadas, la lengua enroscada como vfbora seca. Arriba, la luz descuartizada y su cadaver, tumulos de estrellas en rotacion. En las montanas de Santa Rosa de Copan, Honduras, tierra mi'a, florecen las orqui'deas. En esta zanja crecen enjambres de moscas sobre mi carne azul. El cielo, para siempre, es negro.
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ALONSO
E ntro nt ro a la casa casa con la procesion humeda, cansada, cansada, de fieles hondurenos. A 1invitarlos a la mesa para tomar cafe con pan, uno de ellos dijo que le gustaba asi, amargo, y se bebio la taza rapido, con dos tortillas recien alzadas del fogon; el azucar se nos habfa terminado una tarde antes, de esas que huelen a hornos craquelados porr las po las brasas de un fuego hecho con lena musical de arboles arboles de cedro y de marimbo. Era el tiempo del tropico mas rojo, del corazon quemado. Volvf del tendejon de La Muda con la bolsa de azucar; al verla, aquel muchacho dijo: “bueno, me gusta un poco”. Y echo cuatro grandes cucharadas a la taza cuando volvimos a servirle cafe, lo que desato el huracan de la risa entre todos. El aguacero en carcajadas de aquella media docena de hombres apago los ruidos de la lluvia. Alonso decidio quedarse a trabajar en la bananera del pueblo, entre matas de guineos de seda, manzano y platano roatan, cargando po p o r diez horas la lass pen pencas cas verdes verdes y llenas llenas de etileno etilen o que embarcaban en bolsas de plastico hacia Estados Unidos. (jQ uien ui en fuera un racimo de guineo guineo para llegar al al otro lado sin mas mas papele papeless que un periodico, periodico, con el corazon coraz on verde v erde y dormido, dorm ido, cadaver dentro de cuatro tablas en una caja de madera?) 74
Alonso ahorraba la miseria de su paga y esperaba por las tardes, a la orilla del campo de futbol, el paso de los trencs y el zumbido como de avispas atrapadas dentro de un frasco de vidrio que haccn los ricles al chirriar cuando la locomotora guillotina en scco el airc humedo y el andamiaje de accro. Una tarde, al llcgar de la escuela primaria, mi hermano Aldo y yo nos cntcramos que Alonso habia encontrado a Canck, entonces de seis afios, caminando hacia el Norte, lejos de la casa, por la orilla de la carretera. “Ya no quiero ir a la escuela, me voy a trabajar a Estados Unidos, como ustedes”, le confeso al hondureno con firmeza. Alonso dio aviso a mi madre, que alcanzo muy pronto al “migrante” que yaci'a sentado bajo unos arboles de mango, cansado del fuego redondo de la tarde y su aire espeso y caliente, en esa hora infernal en la que todo el pueblo dice: “hasta suena el sol”. Mi hermano nunca perdono a Alonso por haberlo delatado, puess al enterarse pue entera rse mi padre, enderezo enderezo con con una vara el caracter curvo de aquel muchacho necio que amenazaba con torcerse como un arbol de mangle dentro de su pecho. A la misma hora, en el parque, bajo una tromba de plumas y el griterio de los nifios, lloraban los pajaros. Semanas despu Semanas de spucs cs visitamos vis itamos la bananera bananera donde Alonso Alonso trabaja trabajaba ba y nos dio de comer tantos guineos que nos hartamos de una vez p o r todas toda s para esta y cualqui cualquier er otra vid vidaa. Masticabamos ruidosamente la carne color hueso de los guineos y el agua de rio nos desataba los pastosos nudos del pescuezo; refamos y apedreabamos la sombra de los peces que saltaban, con siluetas gordas y plateadas, buscando salvarse entre las rai'ces de bronce de los amates.
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Alonso y los muchachos partieron una tarde cuando el sol pardeaba, cazan ca zando do al tre tren n de carga para colgarse aall ramaje dc los ficrro ficrros. s. Mi madre les hizo algunos tacos que llevaban en bolsas amarradas a la cintura. Nos despedimos de sus rostros mas alia del tumulo del anden, entre el olor de los tamarindos y sus vainas podridas, hasta que todos se subieron a los vagones y se hundieron, para pa ra siempre, en la marana de tra trapos pos de la noche. En el pueblo aiin prenden los homos con lena de mangos y marimbos paraa cocer eell pan de lllu par luvi via; a; aun madura el etileno la lass pen pencas cas de gu guine ineo o en las las bana bananeras neras;; aun chirrfan los trenes pr profun ofundos dos gritos de oxido al pasar sobre los ri riele eles, s, tajando cuerpos dorm dormidos idos y cansado cansados. s. Alin suben la sombra los muchachos en racimos y la cuelgan en gondolas cariadas hasta perderse con el bramar de los silbatos. Aun.
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ij°}
6 ' o 7 . i " n 9 9 ° 3 4 ' 3 3 . 6 "w — (nuevo l a r e d o , t a ma u l i p a s )
A mi me agarraron los narcos en Nuevo Laredo, Tamaulipas. N o tenia dolares, me los No los hab habian ian arr arranca ancado do llo os po poli lici cias as de Rey eyno nosa sa como quien corta por la fuerza los frutos verdes de un arbol. Me registraron del culo a la garganta, y si la mierda y todos los cerotes mfos hubiesen valido su peso en oro, me habri'an secuestrado por mas dias y puesto a cagar durante duran te siglos siglos..
i Cudl C udl es el telefo telefono no de tu tuspari sparientes entes al ot otro ro lla ado, grandisimo cabron? $ Cudnto nospueden darpor ti, pendejo? No N o co cono noci'a ci'a a nadie en Estado Estadoss Un Unidos idos.. Mi ultimo lazo de sangre en esta tierra fue cortado a pedradas en Nanchital, Oaxaca; llore durante meses la muerte de mi medio hermano, aquel de mi dolor entero.
Mira,, cab Mira cabron ron,, se serd rdss b bur urro ro,, y si entre ntrega gass la carga del otro otro la lado do q que ueda dass libre. Cui Cuidado dado co con n es esca capa parte rte,, puess rog pue rogar ards ds qne la muerte te h hag aga a eell am amor or muy rred edo o. Me encintaron al cuerpo varios paquetes de droga, los encadenaron a mi pecho cerrandolos con un candado grande, nuevo.
La Have la tenia un muchacho de McAllen, Texas, al otro lado, un burrero que me csperaba con mas ansias que la muerte. 77
Me abandonaron al pie de unas lomas llenas de arena, de viento, antes de cruzar el rib. N om as me libre Nom li bre de su vista, quise arrancarm arr ancarmee las cadenas, los paquetes, y me doble el brazo derecho hasta quebrarlo. Grite con todas mis fuerzas; aun me zumb zu mbaa el oi'do oi'do aquf, aquf, bajo la tierra. Luego jale la cadena, pero se me atasco en el cuello. Vale decir que yo solito me asfixie, aunque de cualquier forma lo habrfan hecho hecho los burreros. Quiero decirles que no estoy en el parafso, sino en un pozo olvidado a orillas del rfo Bravo. Como una medalla al valor, aun cuelga en mi pecho el candado nuevo, brillante,, como el que guarda brillante guard a las puertas puer tas de San San Pedr Pe dro o —Sula— Sul a— en el el cielo.
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“ l e v a n t a ” c o m a n d o a o c h o m i g r a n t e s : UN c o m a n d o " l e v a n t6 " a o c h o m ig r a n t e s c e n t ro a m e r ic a n o s , TRES HOMBRES Y CINCO MUJERES, CUANDO REZABAN EN UN TEMPLO DE LA RANCHERfA BUENAVISTA DEL MUNICIPIO DE MACUSPANA, A 8 o k i l 6 m e t r o s a l S UR UR DE DE V I LL LL AH AH ER ER MO MO SA S A , T AB A S C O , C O N F I R M 6 LA POLICIA LOCAL
Lev anta Levan tarr (privation ilega ilegall de la liberta libertad): d): solemos usar en el lengua je noticioso noti cioso “levanta lev antar” r” y palabras deri derivada vadass para referirnos referirnos al delito
de privar priv ar a una person per sonaa de la libertad ilegalm ilegalment ente: e: “Levanta “Levantan n a hom bre, regresa heri he rido do”” [El Nor N orte te,, noviembre 11, 2013] o “Graban levanton” [AM, octubre 18, 2013]. “Levantar” a alguien significaba, en ciertos contextos, “recogerlo”, “pasar por el”. En su acepcion hoy generalizada mediaticamente, tal vez dicha expresion provenga del argot delincuencial o policial que la acuno para disimular la retencion, secuestro o detencion ilegal o arbitraria de personas (con frecuencia seguida de secuestro, tortura, asesinato o desaparicion). “Levantar”, tambien se refiere a una detencion arbitraria, es decir, cometida por p or un u n servidor o funcionario publi publico. co. (Oration del migrante)
No N o quiero qu iero levantarme, padre. N o me levantes, madre.
Prefie ro ca Prefiero caer, er, prefiero caer caer,, en los filosos y amorosos brazos de La Best Bestia ia.. Na diee quiere Nadi q uiere ser levantado, mad madre. re. Nadi Na diee quiere q uiere ser levantado, padre. Me levantabas para ir al colegio, padre. Me levantabas para par a ir i r a jugar jugar,, madre. madre. 79
Me levantaba del sueno la caricia de tus manos, madre, me levantaban de la mesa tus palabras, padre pa dre,, y yo levan levantaba taba la cara haci haciaa el so sol. l. Una vez levantados fbamos a la milpa, ibamos ibam os al bosqu bosque, e, a los yer yerbajes bajes del tie tiempo. mpo. Per o aaquf Pero quf en Tenos Tenosique, ique, padre, otros me han levantado, madre. C on hum humilla illacione ciones, s, con torturas, con violaciones, con masacre. Me han levantado mas temprano y mas tarde que usted, madre, y para siempre, Padre. No N o quiero ya que me levan levanten. ten. N uncaa levantarme, Nunc levantarme, que nadie mas me levante. Las sabanas que cubren mi rostro no son blancas, estan tenidas de sangre. Llevense mi cuerpo en andas, hasta Honduras.
Llevense Lleve nse mis mis lagrima lagrimas, s, mi cue cuerpo, rpo, a lomo de ataud ataud.. Llevense mis huesos negros y entierrenlos en Tegns. No N o quiero que vuelva vuelvan n a levantarme, padre. N o quiero que regresen a levantarme, madre.
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No N o qu quicro icro ser levantado. D Diga iganle nless que no no es esto toy y. Nunc Nu ncaa me leva levantes ntes,, padre. Nunca Nu nca me leva levantes ntes,, madre adre..
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I D EN TI F I C A N R ES TO S D E 8 MIGRANTES HONDURENOS ASESINADOS EN MEXICO
Era el tiempo de las decapitaciones, de los bosques de renglones en bianco, del aire oscurecido oscurecido po porr parvad parvadas as de mudos pajaros. pajaros. La sangre habia perdido su color po p o r la anem anemia ia de dell miedo, pero per o la llu lluvia via era era m mas as roja que la vergiienza y ametralla ametrallaba ba sin piedad piedad al corazo corazon, n, esee casquillo sin polvo es polvora, ra, si'laba de carne percutida por el panico. La luna estaba muerta, roja gota pisoteada pisoteada ccont ontra ra el cielo
po r la por lass botas de lo loss barbaros que habian derramado sus vi'sceras de luz entre los rieles.
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2o°3o' 2 1. 2 " n 9 9 0 5 2 ' o 3 . 6 ' ' w — ( s a n j u a n d e l Rf Rf o , q u e r e t a r o )
Era oscura como la tierra, mas alta y mas bella que todos los arbolcs de Honduras. Mi vecina y yo migramos a Mexico entre sombras. Atravesamos este pais ardiente como vacas que pasan por los cuchillos del horror segando labios, tajando hincando los cereales del dolor en todo lenguas, lo que tocan; subimos a las gondolas del tren mascando los alcoholes del hambre y de la sed, ocultas por las gasas del miedo que todo lo oscurecen; luego el deseo de no volver, de no mirar ya nunca, atras. Sufrimos los tormentos de los hombres, su crueldad florida, su repetida guerra que apuiiala nuestra luz, la herida. Asi, violadas, aniquilan la flor de nuestra risa.
N o queda ma No mass que segu seguir ir llaas rreg egla lass del del torm tormento ento,, pagar kilometros kilometro s de rie riele less con jiro jirones nes d dee ccue uerp rpo. o. Y nos acostumbramos a la vfbora de los cigarros en la piel, al punetazo de los barbaros en la quijada, al veneno seminal eyaculado entre las piernas por los debiles del amor, precoces a la la hora de mat matar ar,, impote impotentes ntes q que ue H Ho oran por la las n no och ches es y no descansan ni suenan. Esclavas de la usura, abandonamos desde siempre nuestros cuerpos a la infamia, y apenas ninas, acostumbramos la carne a la musica yugular de la violencia paterna, a las heridas maternas, a la explotacion hermanal, y aqui, en nuestro exodo por Mexico, nos secuestra un huracan de suicidas para apaciguar su sed en no nosotra sotras, s, pa para ra m merc ercar ar co con n nu nuestro estro sexo, y sin lastima mutilar nuestros pechos mordidos y asi los pechos de sus madres para luego vendernos y olvidarnos en jaulas de pequeiios dioses proxenetas que se beben la sangre de un trago y sorben la medula, y erigen llamas en su altar de rabia en el que adoran l'dolos de llanto, de muerte, de poder. Amanecf con la luna reseca, como un ala que agoniza entre pinzones muertos. Solo me queda el recuerdo de Atlantida, 83
mi casa, casa, pedazo peda zo de mar en la la garganta garganta del Caribe, azuc azucar ar de Dios besan bes ando dome me cabellos en la arena; arena; pero per o tambien tamb ien alia alia deambula deam bulan n los fantasmas violentos de mi padre; el, sumido en el alcohol, vendio a su hijas a la prole de los desinhibidos. Pajaros ahogados en el lodo, asf mis asesinos con ardor en el ori'n y con testfculos mordidos por la brama, su sed de destruirlo todo con el filo de un machete que siega los miembros de los angeles, las manos y la yugular de Dios, y, ay, ay, la mia, mia, cetrina y olvidada entre la much mu ched edum umbr bree d dee las pleg plegari arias, as, rogand rog ando o en cada estacion estacion la misericordia de d e la migra, de la poli policfa cfa,, del narco y la mara, la compasion de los companeros de camino quienes ofrecfa ofrecfan n mi sangre sangre para ofrendar ofre ndarla la a la lujuria de los otros y salvar salvarse se;; le less rogue que ya no nos violaran, que qu e no n o sem sembrar braran an mas su asco asco ni ni la mierda de su su ser en nuestro nues tross vientres. Esteril Esteri l esta tierra tierra
que me sepulta, esteril esteril este pa pai's y su s u cruel crue l fardo far do de hom ho m bres br es que vio viola la,, mancilla y descuartiza a las hijas inocentes de Centroamerica y las las ex exhibe hibe sin pudo pu dorr en sus vitrinas vitrinas aquf en los prosu'bulo prosu 'buloss de Sa San Juan del Rio, Rio, Quere Q ueretaro taro,, para que q ue sus hijos, proxe p roxenetas netas tambien, compren la la carne carne del del dolor dol or y nos masacren en los mismos m ismos lechos donde los arrullan los paternales y erectos falos que violan sin descanso a sus propias madres.
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ESTIMAN QUE 80 % DE MUJERES MIGRANTES CENTROAMERICANAS SON VIOLADAS EN MEXICO AL INTENTAR CRUZAR A ESTADOS UNIDOS
Sorgo maduro, baldfos herbazales como el pellejo de cien perros sarnosos po r el que cam por caminas inas desnud desnuda, a, descalza como la ira, y tus pechos apuntan apuntando do
I
como un doble fusil hacia los astros, perdidos migrantes en eell yerto y espeso pelaje de la noche. Gotas, goteras. Goteras de sangre. El animal herido busca siempre la marana del monte, asf como la codicia del varon busca la yerb yerbaa tierna del p pubis ubis een n llaa va valv lvaa nu nubi bil. l. Y la herida, si, la abierta herida goteando. Aquf las animalas somos nosotras, nos cazan y nos persiguen olisqueando el verde almizcle de nuestra carne vendida por miserables dolares. Gotas, goteras, charcos de sangre negra, espejos en los que se refleja Centroamerica. Mi cuerpo amoratado gotea munones, brazos, piernas, tajo tajos. s.
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(La mue muerte rte recuesta su cabe cabeza za y la tuya sobr so bree constelaciones de yerba y de ma mafz fz.. Y el mundo llora, gira sobre tu cuerpo sin hallar consuelo. Y gira, descalzo.)
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Al b u m f a m i l i a r
CENTROAMERICANO (3)
i. M igrantes “aba “abarrota rrotan” n” La Bestia
He visto a los angeles caer y desplumarse sobre sob re rieles quem quemados ados po porr hile hileras ras ddee sa sang ngre re..
2. Desperte cuando el tren ya me estaba destrozando
Acecha el silencio en el monte como una jauria de relampagos. Este es el dia del tabano y la lengua pes pesaa igual que uunn sig siglo lo.. H e visto los ojos de la noche noche picoteand picote andoo la sangre y su pa parv rvad ada. a. El mar, lejano, se agita y revuelve en toda su rabia azul. !
Avanzo con remos de sal entre una y otra front frontera. era.I
I |
Cabalgo sobre u n cetaceo de hierro y re reco corro rro una distancia solo medid medidaa por p or el sueno de d e los pajaro pajaros. s.
I
La lu luna na es el tr tron onco co de mi cuello amp amputado utado:: yazgo en el charco de mi sangre, redondo espejo del cielo. 89
1
j . “M exic ex ico o es un p a is de p e s a d il illa la ”, di dice cen n m ig igra ran n tc tcss de Centroamerica mutilados por La Bestia
Sepan que en el lugar del corazon llevo la lcngua, po p o r eso ha hablo blo con latidos, con golpes de aire, con el tam tam de los ladridos del tarnbor: habito el costillar de una serpiente desecada por la luz del desierto, su esqueleto alargado, alargado, infinito, cascab cas cabel el vibora rematada p or una maquinal cabeza, ciclopea, ferrea, ojo de luz que alumbra estos senderos de tiniebla y arena.
4. Coatzacoalcos, capital del secuestro de migrantes
La reverb reverberacion eracion y el rum rumor or de las v voces oces de los migra migrantes ntes sobre La Bestia Bestia devoran los varios kilometres de rieles y bautizan con su miedo las lrneas perfectas de las vi'as. Duefios de la charla y el insomnio, dormitan los viajeros, mientras el manto de la noche cuelga sobre los vagones. Dardos de voz se se hunden en la nada y empana empanan n de su sueno eno los ojos apenas abiertos, los miembros entumidos. Alguien grita con acidos ladridos de huracan: ) I Ah A h i vienen los los narc narcos os!!
Y el silenci silencio o crec crece, e, cre crece ce con ate aterra rradora dora inmensid inmensidad. ad. La Bestia Bestia se detiene, exhala su ultimo aliento, se queda sin aire, muere entre los arboles.
(Adelante nos esperan lo loss barbaros.) 90
DEL REINO E PROVINCIAS DE NICARAGUA
u
A estas gentes de Nicaragua [...] hicieronles estos tiranos de Mexico, con sus tiranos companeros [...] tantos danos, tantas matanzas, tantas crueldades, tantos captiverios e sinjusticias, que no podria lengua humana decirlo [...] no dejaban hombre, ni mujer, ni viejo, ni niiio a vida, por muy liviana cosa [...] E cuando aigunos cansaban y se des peaban de las las grandes carg cargas as y enferm enfermab aban an de ha hamb mbre re e trab trabajo ajo y flaqueza, por no desensartarlos de las cadenas les cortaban por la collera la cabeza e cai'a la cabeza a un cabo y el cuerpo a otro. Vease que sentirian los otros. E asi, cuando se ordenaban semejantes masa- cres cr es y atrocidade atrocidades, s, como teni'an experiencia los migmntes de N Nicara icara gua que ninguno volvi'a, cuando salfan iban llorando e suspirando para ra lle lleg gar a Es Esta tad dos Unid ido os, [...]: “y, aunque trabajabamos mucho pa en fin volvfamonos a cabo de algun tiempo a nuestras casas e a nuestras mujeres e hijos; pero agora vamos sin esperanza de nunca jamas volver ni verlos ni de tener mas vida”. F r a y B a r t o l o m e d e L a s C a s a s
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Jt
' 4° 5 4 ' i 8 .8 " n
9 2 ° 2 i 114. i " w — ( h u e h u e t a n , c h i a p a s )
Sc hunde el sol en el azul agua del Archipielago de Solentiname, en el Gran Lago de Nicaragua. Pcro aqui donde estoy, deamb ambula ula una y otra vez sobre mi mi cuerpo cuerpo tendido tendido,, La Bestia Bestia de estirado como la piel de un lobo que se alarga hasta volvcrse una marana de tendones e hilos destenidos. A mi lado se yergue, colosal, una ceiba, vegetal ciudad para los pajaros, gigante de clorofila que anda sobre la tierra con pies de savia, mole corpulenta y dcspeinada que habla con voz de hojarasca, como los muertos, como yo, esperando en cada estacion de lluvias, en e n cada cad a estacion esta cion de tren t ren,, ser habitacion de de ba band ndad adas as de pajaros como las hordas silbantes, desperdigadas, de migrantes, de paisanos mios, de madres y padres mios, hijos de mi raiz que buscan otras ramas, otros nidos, para trinar lejos, muy lejos de aqui. Extrano las flores de los lirios, el evangelio terrestre de los muelles en comunion con las barcas. Pasa el tren afilando esfericos machetes. Estiro los huesos hacia el rizoma de la mucrte. Arbo Ar boll sin s in ramas, a mi cuerpo cuerp o le han talado hasta hasta la la sombra sombra..
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A T A Q U E A T R E N E N M E X IC IC O H I E R E A M I G R A N T E S D E N I C A R A G U A
Una bandada de angeles sube al tren del suicidio: cruza Mexico para llegar a Estados Unidos.
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LAS PA PATR TRONA ONAS, S, I 7 AN ANOS OS DE AYU AYUDA DA CONCRE CONCRETA TA A LO LOS S MI GR AN TE S. P O R LOS ESFUERZOS QUE IMPLICA OFRECE OFRECER R U UN N TACO Y AGUA, Dl'A A DIA DESDE 1995, SIN RECIBIR UN PESO, A LOS MIGRANTES QUE VIAJAN EN EL TREN CONOCIDO COMO LA BESTIA, EL GRUPO DE MUJERES VERACRUZANAS RECIBE PREMIO DE DERECHOS HUMANOS
Para L La as Patronas, quc ticnen mas giicvos que cualquicr gallo
Tormenta en La Patrona, Amatlan, Veracruz. Es una noche no che encendida con lampara lamparass de petrole petroleo; o; la luz se ha ido —la del sol, la de los cables—. Rifle con furia la lluvia contra el techo, agua en laminas vencidas po p o r el tableteo tablet eo de las metr metrall allas as.. Cafe de tortillas quemadas, negras hasta el carbon, coladas con un trapo de manta.
N o hay mas que tortillas para saci No saciar ar el ham hambr bre, e, frijoles hervidos con lefia. El fuego ilumina rostros, calienta sombras. Tirit Tir itan an los migrantes migrant es con tazas tazas en la la mano, ano, pequefias hogueras de agua agua,, ve velas las de de azuc azucar ar para el camino. Hablan poco, llevan los ojos a la tierra, a sus grietas, gr ietas, y la ceniza esca escarch rchaa los pies con su nieve de maderas calcinadas.
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Trepida el tren la tierra con sus pasos; bram br amaa pro profu fund ndo, o, hace morir los los restos del sol. Dos nicas abren las pupilas como salvajes gatos: “manana subiremos a La Bestia Bestia,, manana”. Sin embargo, se levantan.
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FALLECE EN HOSPITAL MUTILADO POR
L A
B E ST IA
Oteando hacia el norte, aqui, tirado en jirones, recien reci en parido de La Bestia Bestia,, me llega un olor a hibiscos, un olor a bisbiseantcs flores, las que mi abuela cortaba en Matagalpa, Nicaragua.
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I 9 ° 3 S ' 2 9 - 9 " N
99°09'01-1 " w
—
( t u l t i t l a n ,
e s t a d o
d e
M e x ic o )
En v vida ida me llame W Walte alter. r. Y heme aq aquf, uf, con mis huesos blanqu blanqueando eando el basurero municipal de Tultitlan, Estado de Mexico. Cruce medio Mexico y su odio entero montado en La Bestia, y a veces a pie, sin respiro, para seguir mi sueno: escapar de la cuota seri serial al de las pandillas y com pra prarr con dola dolares res algunos trastos y una estufa para mi madre. Jamas llegue, truncaron mi destino. Ahora no tengo descanso
ni sepulcro. Solo espero espero el d dfa fa de la resurreccion par paraa levantarme, a la luz de la luna nica nicaragi ragiiense, iense, y te tener ner u una na m muert uertee mejo mejor. r. Serfa feliz si mi madre hiciera nacatamales y nezqitizara el ma mafz fz en ssu u fogon. P Pero ero se que no llora p o r eell hum humo. o. Alla en Mana Managua gua otr otro o estara con mi mujer; u uno no mas le tatuara mis hijos. N o mu muy y lejos de aquf, mis asesin asesinos os ca calzan lzan mis za zapat patos, os, visten mis ropas; policfass municipales co policfa con n mas Sana Sana y mas rab rabia ia q que ue la de las p pand andillas illas.. Arriba, las las maquina maquinass trit tritur uran an lo p poco oco que que queda da de mis hueso huesoss y un chucho mas mastica tica sin desc descanso anso mis ultimo ultimoss tendones. Deje un bre breve ve recuerdo en el albergue del pad padre re Alexander: “aquf estuvo W Walt alter er,, originario de M Managua, anagua, Nicaragua, Nicar agua, C.A .” Y aquf sigo sigo..
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CENTROAMERICANO (4)
A
j. A la larm rm a p o r masacre de oc ocho ho polici policias as de Sa Salc lcaj aja, a, Guatemala, atribuidas a narcos del cartel mexicano de Sinaloa o Los Zetas
Mi lengua es una Have para abrir el laberinto gris del corazon, sus recovecos de sangre. Mis ojos son dos gotas de espejo, mi corazon es Lun Luna a de Xelaju Xelaju,, alta luna h'quida. Y en mi boca una parvada de pajaros ciegos canta una cancion de cuna, una cancion de niebla mientras calla el mar y sus jinetes de sal suenan que no hay fronteras. (Hui de la masacre de Salcaja. Se que no soy gente buena, pero tambien tambie n sueno que no hay fronte fronteras ras.. Aqui todo es sol, humo de holocaustos de muerte, y el camino es agua de espejos cnterrados dondc es necesario caminar hacia atras, llevar la espalda a cuestas y ser enterrado boca abajo para sentir todo tod o el el p peso eso del del cie cielo lo y de la tierra, en los brazos, en las manos.)
2. Acusa Ac usan n al gobierno mexi mexicano cano de facilitar ata ataque quess a migrantes
El odio es una rama alta quebrada por el viento, una espalda besada por los labios del dolor.
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j . Asaltan Asa ltan y dan macheta mac hetazos zos a m igra ig rant ntcc
Hay un pais de sal debajo de mi rostro, un rostro que yace con los ojos abiertos para pa ra m mira irarr de dentro ntro d del el ccora orazon zon de las hojas y las piedras. jComo, si si est estoy oy he hech cho op ped edaz azos, os, sere resucitado?
4. La Mara Salvatrucba intenta retomar control en ruta migrante de Chiapas, Mexico
Recuerdo que el sol —sucio—en el cielo pupu pusa sa de Los Planes de Renderos, era una pu en Panchimalco, aplastada contra el asfalto:
agonizante sobre las calles de San Salvador. Asi mis brazos o relampagos heridos no son otra cosa que ramitas de loroco recien mordidas por las ruedas del tren, aqui en Ixtepec, Oaxaca. Y el cielo solo, vaci'o como un espejo que jamas reflejara mi rostro.
}. El “coman com anda dant ntee” suele ser un zeta viejo o un cobra viejo. Esta diferencia estriba en el origen militar, para elprim elp rimero ero,, y ci civi vil, l, p a ra e l s e g u n d o . O c u p a e l sitio del conductor. conductor. El lugar del copil copiloto oto corresponde a un zeta nuevo 0 un cobra nuevo o un exkaibil, soldado desertor de las fuerzas especiales guatemaltecas
Oh,, Sa Oh San n Crist Cristobal obal Totonica Totonicapan, pan, 104
mi ctcrno Valle de la Felicidad, mi hcrmosa Pucrta de Occidcntc, mi barrio de San Salvador. Oh, barrio de Chigonon, sos corno una mujer ehapina, de desear, como si fuescs la misma Jerusalem bailando en medio de la jun juncia cia de tus pino pinos, s, olorosa, virgcn. Oh, Valle de la Felicidad. Oh, Chichoy, alta por tus viudas de gucrra unidas para trabajar el ciclo y la tierra, sus cucrpos humeantes soportando el tableteo del sol y olvidando cl pasado. Se quedaron viudas, arando y sembrando la tierra que los militarcs arrasaban. Oh, Valle de la Felicidad, micntras los hombres combati'an, mientras los hombres morian. Oh, mientras los militarcs aplastaban cucrpos y violaban ninas en Chupol, cn su destacamento limpio y perfumado con litros de cloro, como todos los galpones de los gcnocidas. Oh, Nucva Guatemala de la Asuncion, aqui vamos tus hijos migrando juntos, tu hermoso hijo de milicias, tu cxkaibil y yo, muriendo murie ndo juntos; yo, hijo de Chi Chichoy choy,, y aquel que me asesina, el, hijo militar de la gran aldea de Chupol, nacido de violacion violacion::
tuve que esperar veinte afios para que la misma sangre genocida me alcanzara en tierras mexicas.
Oh, Guatemala de los Kaibiles: debes saber que he cumplido con creces, mi destino.
6. M Masa asacr cree en San Fernando, Ta Tama maulip ulipas: as: p o r ne negar garse se a ser sicarios los fusilaron
Hemos cai'do fauces de La Bes Bbestias, esti tia a solo para caerdesde en las laslas g garras arras de peores esas que asesinan y cercenan amparadas por la ley de las matanzas: y hoy, como todos los dias, amanece nublado en el cielo de los migrantes.
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DEL REINO E COMARCAS DE MfijICO
A
Con csto quiero acabar hasta que vengan nuevas dc mas egregias en maldad (si mas que cstas pucdcn ser) cosas, o hasta quc volvamos alia a verlas de nuevo, como cincuenta anos o mas ha que los veemos por los ojos sin cesar, cesar, pro p rotes testan tando do cn Dios y en mi mi conscienc consciencia ia quc, quc, segu se gun n creo y tengo ten go p o r cierto, cierto , que tantas son las las maldic maldicion iones es,, danos, danos, destruiciones, despoblaciones, cstragos, muertes y muy grandes crueldades hor h orrib rible less y especies feisimas feisimas dellas, dellas, violencias violencias,, injusticia injusticias, s, y robos y matanzas que en aquellas gentes que migran y transitan por estas tierras se han hecho (y aun se hacen hoy en todas aquellas partes de Mexico), que en todas cuantas cosas he dicho y cuanto lo he encarescido, no he dicho ni encarescido, en calidad ni en cantidad, de diez mil partes (de lo que se ha hecho y se hace hoy) una. F
r a y
B
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habla
f r a y b a r t o l o m e DE LAS CASAS
i. Mexico es un pais de pesadilla “Particularmcnte, no podra bastar lcngua ni noticia e industria humana a rcferir los hechos espantables que en distintas partes, e jun tos en un tiempo en unas, e varios en varias, por aquellos hucstes publicos y capitales capitales enemigos enemigos del del linaje linaje humano humano,, se han han hec hecho ho den den-tro de aquel dicho circuito, e aun algunos hcchos segun las circunstancias e calidades que los agravian, en verdad que cumplidamente apenas con mucha diligencia e tiempo y escriptura no se pueda ex plic pl icar ar.. Pero alguna cosa cosa de algun algunas as partes dire con con protes protestacio tacion ne
jura mento juramen to de que no pienso que explic explicare are una de mil parte partes. s. [...] Fuc una cosa esta que a todos aquellos reinos y gentes puso en pasmo y angustia y luto, e hincho de amargura y dolor, y de aqui a que se acabe el mundo, o ellos del todo se acaben, no dejaran de lamentar y cantar en sus areitos y bailes, como en romances (que aca decimos), aquella calamidad e perdida de la sucesion de toda su nobleza, de que se preciaban de tantos arios atras”.
2. C omo om o M exico ex ico no hay h ay dos: dos: $ Q ue cosec cosecha ha un pais que siembra cuerpos? El corazon es un animal en exilio cuya patria es el amor. El migrante es un angel sin patria cuyo pais es el dolor. El exilio es una patri p atriaa sin corazon cuyo nombre es Mexico.
111 111
Mexico es un animal con rabia que migra, sin amor.
j j.. El Zur Zu r de Vera VeracruZ, cruZ, tri tridn dngu gulo lo de laz la z B e r m u d a z para loz migrantez
Zolo VeracruZ eZ bello. Zolo VeracruZ eZ micdo. Zolo VeracruZ eZ violazion.
Zolo VeracruZ eZ zccueztro. Zolo VeracruZ eZ cxtorzion. Zolo VeracruZ eZ dezaparizion. Zolo VeracruZ eZ narco. Zolo Mexico eZ mazacrc bello.
4. Migrantes en Mexico: los muertos de nadie
En este inhumano mar humano no alcanzarfan ni todas las estrellas ni los granos de arena del desierto para pa ra con contar tar la muche muchedu dumb mbre re de los los mu muertos, ertos, los desaparecidos, los violados, los torturados, los vejados, los prostituidos, los aniquilados, los desmembrados, loss m lo masa asacra crado dos, s, lo loss hijos hijos de Centroamerica Centroamerica de deam ambu bula land ndo o entre las llamas de un abismo llamado Mexico.
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j .
M e x i c o e s u n a t u m b a c l a n d e s t i n a
“Dcspucs dc las tiranias grandisimas y abominables que estos hicieron en el pais dc Mejico y en muchas dc sus ciudades y tierra mucha (que por aqucllos alredcdores e interiores tierras de Baja California, Chiapas, Coahuila, Estado de Mexico, Guanajuato, Guerrero, Mi- choacdn, Nuevo Leon, Oaxaca, Queretaro, Quintana Roo, San Luis Potosi, Sonora Sonora,, Taba Tabasco, sco, Tamaulipas y Vera Veracruz, cruz, entr entree lla as pcores, donde fueron muertas infinitas genres sobre todo las que son masa-
cradass y secuestrada crada secuestradass al in inte tent ntar ar sub subir ir o bajar del ttren ren apo apodad dado o La Bestia Be stia), ), paso adclante esta su tiranica pestilencia y fue a cundir e inficionar y asolar a la provincia de San Fernando, Tam Tamaulipas, aulipas, po por r ejemplo, que era una cosa admirable la multitud de los migrantes que secuestran y los estragos y matanzas que allf hicieron y hac acen en con todos ellos”.
LOS ZETAS BUSCAN CIERTO PERF1L PARA SUS RECLUTAMIENTOS. POR EJEMPLO, QUE LAS PERSONAS HAYAN TENIDO CIERTO
ENTRENAMIENTO MILITAR, COMO LOS KAIBILES DE GUATEMALA; RECLUTAN TAMB1EN A QUIENES FUERON POLIC1AS, A LOS QUE SE VEN FUERTES, A LOS QUE PUEDEN INSPIRAR CONFIANZA CON LOS OTROS MIGRANTES
a) Kaibil: tigre/soldado de elite para matar guerrilleros;
militar que arrasa poblaciones indcfensas.1 b) Lema Kaibil
Si avanzo, si'gueme; si me detengo, aprcmiame; si retrocedo, matame. c) Lema del Mig Migra ra / Pol olic icia ia / Mar Mara a / Narco / M ilit ilita a r
Si migra, cazalo; si migra, secuestralo; si migra, matalo.
1 Vo Voses ses de Guate Guatemala mala (Carlos Lopez, Editorial Praxis, Mexico, 2005). 2005). 114
HABLAN LOS XAHIL
a)
Violencia dc banda bandass y en el sen seno o fam fa m iliar, iliar , detrds de
exodo de ninos:
unicef
11. Nosotros, pues, fuimos entonces, nosotros los Consejeros, cuan-
do nos fue ordcnado ir, por nuestras madres, nuestros padres. “Id, oh hijas mi'as, oh hijos mi'os; vuestras Mansioncs, vuestros clancs han partido. Tu no seguiras siempre asf, tu, el hijo mozo; en verdad, grandes seran tu destino y tu sosten”.2
b)
Ca Carav ravan ana a de ma madres dres centroamericanas en btts bttscca de
sus hijos desparecidos en trdnsito por Mexico: Notimex
Este camino es una lengua acida que nos lame las llagas, el agua yugular que atraviesa, como una lenta brasa, los ojos y el cuerpo. El pastor de la iglesia nos explico: scgun La Palabra, entre las aguas de los rios Tigris y Eufrates estaba el Jardi'n de Dios, esa hermosa lasca esa lasca del del corazo co razon n divino, tierra de abundancia infinita en la que moraban Adan y Eva: la perfecta perfec ta creacion del Senor llamada llamada Eden. Y entre las lenguas de fuego del no Bravo y el no Suchiate, estee enorme est enorm e jardfn de muerte para los ninos ninos difuntos de Centroamerica, fertil camposanto llamado Mexico:
2 Anale Analess de los Xa X a h il (traduccion y notas de Georges Raynaud, Miguel Angel Asturias y J. M. Gonz alez dc M endoza , u n a m , 1943). 115
lejos de Dios y cerca, muy cerca, de polleros,
poli po liccfas fas, m mig igra ras, s, narc narcos os,, coyo coyotes tes,, proxenetas, proxenetas, pede pe dera rast stas as,, tr traf afic ican ante tes, s, asalta asaltantes ntes... ...
c) Un rumor en Centroamerica dispara la m igr igrac acion ion de menores hacia Estados Unidos: El Pats
Los clanes importantes, los primogenitos [aunque scan ninos], aquellos cuyos consejeros ocupan por derecho hereditario de clan, las mas altas funciones, son los que guian las migraciones.3
3 Anales de los los X ah ahil il (traduccion y notas de Georges Raynaud, Miguel Angel Asturias y J. M. Gonzalez de Mendoza, u n a m , 1943). 116
SALVE PATRIA QUERIDA, DULCE GUATEMALA, SALVE; DEL1CIA, SURTIDORA DE VIDA, MANANTIAL DE LA MIA [...] YA PAKECEME VISLUMBRAR TUS SELVATICAS MONTANAS Y TUS VERDES CAMPOS I'N DON DE INACABABLE PRIMAVERA ( RU S T / CA T I O MEXI ME XI CA NA , RAI'AEL l a n d I v a r )
a) Entrevista del autor de este libro a un indigena mam, habitante de los bosques de la Reserva de la Biosfcra Volcdn Tacand (Mexico, agosto de 2003):
^Es usted originario de Guatemala o de Mexico? —Soy — Soy del Tacan Tacana. a. b) Primeras palabras del reclamo a gritos de una indigena mam a Ernesto Zedillo Ponce de Leon, expresidente de Mexico, demandando apoyo del gobierno (ano de 1994) en la comunidad Pavencul, volcdn Tacand:
—jSenor — jSenor presidente presid ente municipal de Guatemala... Guatem ala...!! c) Recuperacion del conocimiento tradicional de la etnia mam de Chiapas sobre plagas de cultivos como base par p ara a la m ej ejo o ra de su ca cali lida dad d de vi vida da.. Ce Cent ntro ro Ib er ero o a m e r ic ica a n o de la B io iod d iv ivee rs rsid ida ad ( c i b i o ) ; Universidad de Alicante, Espana; Colegio de la Frontera Sur, Mexico; Dr. Eduardo Galante Pino, responsable:
“Los indfgenas mames en sus primeros tiempos en Mexico se presentaban en bajas densidades, sin embargo, incrementaron paulatinamente su poblacion a principios del siglo pasado debido a la 117
erupcion del volcan Tacana, que ocasiono una fuerte migracion proveniente de Guatemala. Los mames mexicanos perdieron gran parte de su culturn debido a la lass migra migracio cione ness y disp disposic osicion iones es de autorid autoridades ades locales, qu quic icncs ncs obligaron a los mames mexicanos a cambiar su vestimenta, a fin de distinguirles de los mames guatemaltecos. El atraso historico de las comunidades indigenas en Chiapas incluye a los campesinos de la etnia mam. Este atraso ha sido selcctivo y manifiesto en al menos tres aspectos que han sufrido y aun continuan sufriendo, en alguna medida, diversas comunidades indigenas de Chiapas...”
RKI.EVAN A 7 DELEGADOS ESTATALES DEL INM TRAS ACUSACIONES FOR PLAGIO
1. OA O A X A C A , Oax.,j Oa x.,julio ulio 6 (EL UNIV UNIVERSA ERSAL).L).- “Los del Instit Institute ute de
Migra Mig racio cion n nos ba bajar jaron on del auto autobus bus en el qu quee IIb bamos y ense seg guid ida a hi hici ciee- ron ro nu una na llamad ll amada a po porr tel telefono efono a Los Z Zeta etas, s, dijero dijeron: n: ‘‘bey bey g giiey iiey,, ya tenemos la mercanc merc ancia ia’” ’”. As Astt em empie pieza za el relate de “Sara”, u una na migrante nicaranicara- giiense que qu e f u e vlct vl ctiima de secues secuestro tro en Ta Tama maulipa ulipass y que na narro rro su od odisea isea a la alta comisionada de Derecbos Humanos de las Naciones Unidas.
a) i. Jur Jura: a: polici licia, a, agente, maton, delator, judicial, po soplon, delato r, juda judas, s, polizonte, detective, migra, investigador, uniformado, autoridad, tira. Hijo de las 70 mil carretadas de putas que todavia no deja en paz lo
que queda del pais.4 ii. Ex/militar: aliado y colaborador de los carteles mexicanos del nar co. Coadyuva con eficacia en el secuestro, extorsion, desaparicion forzada, tortura, violacion, desmembramiento, trasiego de droga, de-
capitacion, etc., y otros trabajos ordenados por la clase politica de este pais para obtener millones de dolares y mantenerse en el poder mediante tacticas tacticas de te terro rrorr contra otros y contra ssu u propio pu pueb eblo. lo. iii. Ex/kaibil: excelente milico de elite que participa, en general, en labores de barbarie, eliminando enemigos de otros carteles, asesinando opositores politicos (al interior de los grupos del mismo cri men organizado, en su mayorfa conocidos politicos), y en particular, cometiendo actos de genocidio contra la poblacion indefensa del
pa pai's i's, pri princi ncipalm palmente ente con contra tra los migr migrante antess centro centroameri americanos canos,, muchos de ellos paisanos suyos (guatemaltecos, salvadorenos, hondurenos, nicaragiienses).5 *Version libre y palimpsestica del vocablo registrado en Voses de Guatemala (Carlos
Lopez, Editorial Praxis, Mexico, 2005). ' Idem Idem.. 119
2. “[...] esta depuration ocurre luego de las denuntias pennies inter- pues pu estas tas en contr tra a de agen agente tess migra migrato torio rioss senala senalados dos como presuntos responsables en el secuestro de migrantes, inclttidos extranjeros que segun su testimonio fueron fue ron "vendi vendidos dos ” a grupos delictivos por cstos representantes del INM.” b) iv. Migra: agente del Instituto Nacional de Migracion ( in inm m) cooptado por el crimen organizado que trabaja en forma proactiva, cooperativa y participativa cumpliendo diversos objetivos, entre otros, plagio masivo de migrantes centroamericanos para venderlos a grupos delictivos, abuso de autoridad, violacion de los derechos y libertades fundamentales, estupro de nifias y ninos migrantes, desa paric pa ricio ion n for forzad zadaa de cie ciento ntoss de personas personas,, encubr encubrimiento imiento de crimina-
les, falsos operativos en caminos de extravi'o y carreteras, trata de person pers onas as,, enriq enriquec uecim imien iento to iih h'cit 'cito o y otras ex excele celente ntess funcion funciones es de genocidio multitasking caracterfsticas de estos servidores publicos al servicio del gobierno de Mexico.
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HABLAN LOS QUE MIGRAN POR MEXICO
I. Arriba el temblor del cielo. Abajo tiemblan los corazones, los rostros, castanean los dientes y los muiiones en el frio, rechinan la hileras de dientes, roto ro toss como com o estrellas cariadas en la boca boca del cie cielo lo.. Arde la luna luna como tea inmovil, inmovil, muerta, muerta, y La Bestia se alarga, hacha de lenguas gemelas que va partiendo la tierra tierra y los cuerpos que yacen a los pies de Dios. Alguien enciende un cigarro y arden tambien, tambien, p po o r un u n m omen om ento, to, los rostros. ro stros. Los cigarrillos son tabanos de luz hiriendo el aire. O rion rio n agoniza agoniz a en el techo del cie cielo lo,, va sin espada, lleva un machete. El ci'clope de acero repta por la espalda
de una patria pa tria muerta. La corpulencia de La Bestia Bestia contrasta con la anorexia de las sombras: arboles esqueleticos tiemblan contra la niebla, al igual igual que qu e noso n osotros, tros, harapos de came came inmersos inme rsos en la coagulacion de la noche. noche. 12 121 1
Alguien que grita contra el frio, reza:
^Centroamerica, ^Centroam erica, Centroamerica, Centroamerica, por que que me me has aban abando dona nado do??
z.
Me lleno las pupilas y las manos con flores y cabezas recien cortadas. Luna carnivora en traje de muerte, roja ereccion de un cielo yerto, duro sobre nuestras cabezas, zarzas de fuego negro, dolientes. Esfericas guillotinas giran alrededor del corazon: a los lados del camino cadaveres recien nacidos, tatuados de oxido y acero por la esta estam mpid pida de de los los cab cabal allo loss redondos que cabalgan sobre rafles. Sobre los cadaveres
las sefiales del fin del mundo, los signos del abandono de Dios: angeles con alas de mosca hincan sus dientes desbocados, hambrientos, sobre la carne, pastando pasta ndo la larva rvas y lu lunas podrid podridas as bajo ba jo los los picota picotazos zos del del so sol que relincha y calcina el corazon, ese perro dormido bajo los arboles y la musica sorda de las cigarras, aquf, justo bajo el tamborileo del huracan, y yo inmovil, aullando lluvia negra. 122
r
silbando serpientes de agua sobrc mi sabana dc arena y piedras.
3-
Aqui yazgo, subtcrranco, languido, durmiendo cn las gondolas como los bulbos de una flor carnivora que suefia suefia con abrirse abr irse a la primera caric caricia ia de la nicbla para crcccr c rcccr frente al abismo. abismo. Escucho el silbo funeral del rren, su estrepito de vertebralcs maquinas: parvadas de angeles con alas alas de lluvia lluvia vuelan hacia la nada, hacia el none. Y de de pron pr onto to el zumbid zum bido, o, la ira de los los tabanos tabanos formando nubes, enjambres de rostros borrosos, exangiies, perros que lamen la sangre seca de los inoccntes y escriben el destino de su abominacion (los genocidas no saben escribir con tinta).
Balan los rebanos de migrantes y se duermen, frfos hasta el acero, ebrios de hollm. Sobre sus ojos o jos apagados, sobre sus cabez cabezas, as, giran estrellas de d e diese diesel. l.
4-
Pero nunca pague el “impuesto de guerra” de las pandillas y eso me costo la muerte: y ofrecieron mis vfsceras al estrepito de las estaciones, a la molicie de la luz
que nombra huesos con voz calcarea y enciende en el pecho su trapo de fosforo que restalla restalla hondo como el el trueno. true no. N o olv No olvid ides es alumb alumbrar rar tus ojos ojos con antorchas de sangre: sere delicia de los que aduermen, de los que lavan el cuerpo de los suicidas. La sed es la estacion mas cruel, tanto como el libro y las paginas de odio que escribimos aquf. Espesa, marchita, la sombra de los arboles es iman para los pajaros. La espiga de los cadaveres esta madura y los enemigos del amor trillan los corazones con su hoz
de hombres rabiosos, asesinos en horda, rojos y violentos hasta la medula. Y en un abrir y cerrar de alas se dara la resurreccion de los desaparecidos, se erguira sobre la furia y la venganza la legion de los migrantes. Los elitros de los insectos volveran a tajar el aire, Bestia tia y el rumor ensordecedor de La Bes sera solo un eco mudo, y dejara de reptar en direccion de la sangre.
Dias y di'as crucificados en los maderos que sostienen los rieles por los que viaj viajaa el dolor del del mundo. mundo. 124
y los huesos del migrante, dispersos todos, se reuniran alrededor de su cuerpo sin cuerpo, floreciendo hasta erguirse en la carne del dfa, hcrmosamente hcrmosa mente altos, azules azules.. Todos rcgrcsaran del viajc hacia si, y en sus ojos, casamatas roi'das por insectos, creccra nuevamente la flor de la lluvia. Y el el mar ma r no tendra ten dra descans descanso, o, ni sitio dondc ponerse. Agotados, seguiremos aquf, esperando esper ando el dfa de la vergiicnza, el dfa de la resurreccio resu rreccion n y la venganz venganza: a: con la lengua y los huesos en eterna rotacion.
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EL MIGRANTE
Y cuando desperto, la migra todavi'a estaba alb'.
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Al
bu m
f
a mil ia r
CENTROAMERICANO (5)
SEGUNDA FOTOGRAFfA DE MI PADRE, MIS HERMANOS Y YO CON MIGRANTE S DE CENTRO AMER AMERICA ICA
Azotabamos un canto rodado sobre el otro,
y el estruendo de chispas dc lao voz br brot otaba aba del osculo espontane espo ntaneo de las lacaliza s rocas rocas que aturdfan bajo el agua peces y mojarras que salfan flotando a la superficie sin aletear, anestesiados buzos bajo escafandras de escamas color plata; emergf emergfan an hipnotizados hipnoti zados po r el puiietazo puiietazo de las aguas aguas y los relampagos de piedra, y se entregaban, dociles dociles ninos dormidos, do rmidos, en nuestras manos.
Era nuestra pesca un sueno del neolftico neolftico,, memoria de ancestros Cromanon y su corazon vegetal, sin mas herramientas que la fuerza de una roca latiendo entre las manos; parvulos que encendi'amos hogueras de agua en los meandros de los rfos, junta ju ntand ndo o sardinas y su moneda m oneda dulce para mata m atarr el hambre hamb re y comp c omprar rar con monedas de sol los peces que chisporroteaban en el aceite del sarten de mi madre para comerlos fritos en manteca, unaa vez vu un vueltos eltos a casa casa,, cansados, llenos los ojos ojos de suenos y hojarasca: Paso de Lima y Zapaluta, rfos que se unen en una Y mayuscula esperando la eterna conjuncion de mis cenizas. Rfo Despoblado: hay dos difuntos en la foto. El primero es Ervin Igua Iguanita. nita. Jugo futbol futb ol en el Comalchis, Comalchis, nuestro equipo de la infancia; habil y de sobra arisco, reptiliano, reptilia no, mejor mejo r porte po rtero ro al atajar atajar las las penurias penurias del del mundo. mundo.
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Era oscuro como la gr gras asaa que untaba en los zzap apat atos os que boleaba, di'a tras dia, lavando pies de polvo en las bancas de cemento del parque. Guardaba todas las herramientas del oficio en su pequena caja de bolero. Fue asesinado
cobardemente cuando rayaba quince anos por Mar Martin tin Cocbero, homicida con filo de cuchillo hundido en la tetilla izquierda de Ervin, clavandolo para siempre al madcro de la agoni'a. Cocbero se enojo porque Igi Igiian ianita ita cambio la incesa incesante nte y repetida cancion cancion en la rocola roc ola de d e la cantin can tina, a, lo que a Martin no le gusto. Sin embargo la cancion de Ig Igua uani nita ta siguio rebotando por siglos de un minuto en la palapa de Tomboy, y termino termino justo cuando Ervin bole bo leab abaa el el piso piso de de la la cantin cantinaa con su su sang sangre re.. El otro difunto de la foto es mi padre, aunque esta erguido en el tiempo justo detras de la camara. Nunca Nun ca supe supe por que, que, pero pero desde desde muy joven fue fue amigo de varios centroamericanos, a quienes trato y ayudo con la fuerza de un hermano mayor. Cuando conocio a mi madre, el 1“ de julio de 1972 en la Ciudad de Mexico, iba platicando en un vagon del metro con un amigo —por ma mas se senas costa costarric rricense ense— — y el el tono alegre alegre y centroamericano de los dos llamo la atencion de mi madre y su amiga. Los cuatro cruzaron palabras en la estacion Pino Suarez y acordaron salir juntos el fin de semana siguiente. El tico y la amiga de mi madre solo se vieron una vez mas, pero mi mi padre padre y mi mi madr madree tuvieron tuvieron una cita cita de 36 36 anos hasta que mi padre murio (aproximadamente 300 centroamericanos despues, ya que docenas de ellos, entranables hermanos y amigos, compartieron el cafe y las tortillas en la mesa mesa de cedro de nues nu estra tra casa casa en Chiapas, entre 1981 y 1987).
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Cierto, en la casa del pueblo vivieron varios
ccntroamer icanos; Isaa ccntroamericanos; Isaac, c, salvad salvadorefio orefio:: nos ensefio ensefio a fabricar pequefio pequefioss som sombre breros ros dc aluminio con la boquilla maleable del tubo dc la la pas pasta ta dentifri dentifrica; ca; pintaba lo loss diminu diminutos tos som sombrer breros os con maestrfa y algunos de cllos estan perdidos en las cajas y gavetas dc la familia cntre papclcs amarillos con olor a ccdro; Dina y Rubi, jovcnes hondurefias, que siempre nos deci'an “bafiate, oles a puro coco rancio”; las dos cocinaban un cxquisito pan dc guineo; mi madre las llevo en tren —un suplicio ferroviario de dos dias y m med edio io— — a la Ciu Ciudad dad de Mexi Mexico co donde estuvieron en casa de mi tio Manuel hasta has ta que cru cruzaro zaron n la frontera para cocinar en Estados Unid U nidos os sus marav maravilla illass de coco y guin guineo; eo; Donald, chapi'n, mitomano, con mas mafias que ganas de partir al otro lado; nos ensefio sus dotes de piromamaco una noche de diciembre en la que vimos b bro rota tarr fuego azul de sus manos, manos, alimentadas con altas llamas de alcohol; decta extrafiar el diario pudin que su madre le dejaba como postre en la mesa y lloraba co como mo nifi nifio op por or la lass noc noches; hes; San Martin de Porres —asf lo bautizo mi padre— adolescente negro de San Pedro Sula, contaba con 14 afios y quiza mas de veinte de pasar trabajos y hambres; comedido como com o ningu ninguna na otra p persona ersona que haya cono conocido, cido, guardaba en el cuerpo un infinito miedo a los agentes de la migra; una tarde, mientras tomaba el fresco sentado en la banqueta de la casa, algun maldoso del pueblo le grito ;ahf viene la migra! y San Martin de Porres se metio corriendo debajo de la cama de mis padres, con co n los ojos y el cora corazon zon llenos de espanto, de incontenible ho horro rrorr (ahora lo entie entiendo ndo,, ahoraa lo entie ahor entiendo: ndo: tenia razon) razon);; jamas jamas olvida olvidare re a Jo Jose, se, salvadorefio, exmilitar: nos ensefio acrobacias tiburones
y ejercicios marciales, como los famosos 31
(primero planchas planchas con el el pecho a tierra, luego un impulso con los brazos hacia atras, y finalmente, un fuerte aplauso con las palmas en la espalda) asf como tecnicas de sobrevivencia en el monte. mont e. Durant Dur antee el sueno lo remord remordi'an i'an terribles pesadillas y casi no dormia; nos confeso que habi'a matado, por equivocatio equivocation, n, a vario varioss ninos ninos de la la guerrilla guerrilla,, de ahi su errancia por Guatemala y Mexico. Se quedo en el pueblo muchos anos y formo un grupo de scouts con otros ninos, incluidos nosotros (y lavar asi, sin duda, sus pecados de guerra); al explorar el monte o la orilla de los rfos, nos hacia cantar en voz aha aquella cancion: “alia tu saldras chiva chivita, alia tu saldras de ese lugar...”; para pa ra la las fie fiest staas de fi fin n de de ano ano haci haciaa pinat pinatas as hechas con grandes ollas de barro y cubiertas con infinidad de sabanas de periodico y colochos de papel china; luego les poni'a una marana de alambres y cemento encima; eran irrompibles las pinatas, todos los ninos pasabamos dos o tres rondas golpeando las timbas de colores hasta casi quebrar nuestras manos, asf como como dos o tres lenos; lenos; Jose refa, refa, le saltaba salta ba po p o r la bo boca ca el corazon inmenso, luego tomaba un fuste durfsimo y de un solo golpe rompia las pinatas llenas de dulces, frutas frut as y mem memori oria, a, de harina que enmascaraba enmascaraba nuestros nues tros rostr ro stros os y borraba, quiza, los rostros de aqucllos ninos ametrallados por su man mano. o. Olvido Olvido rostros y nombres nombres de muchos centroamericanos mas; algunos son fantasmas o apariciones en mi cabeza, llena de raices, ramas y hojarasca de los rfos de mi pueblo, tupida con la marana y la sombra de los amates, cubierta con el agua espesa y transparente que bautizaba nuestros cuerpos, pero que no moja mojaba ba los los pelos pelos de alambre alambre de de 6 scar, aquel mulato hondureno que refa con toda la blanca marimba de sus dientes y hablaba silencio.
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El eco de las voces de aquellos centroamericanos dc mi infancia retumba en las paredes de estas paginas, cn las cartas quc enviaron desde Estados Unidos y Canada, prometicndo el regalo de su visita, agradecicndo la bcndicion de nuestra amistad. ^Quienes de cllos dcscansaran en fosas comuncs, quienes de cllos habran muerto atravcsados porr la sed y el hambre po ham bre cn el camino, en el d desierto, esierto, quienes habran sido asesinados por coyotes, enganados por infames polleros, polici'as o migras, quienes habran sido mutilados por cl tren? Una parvada de lenguas migratorias me susurra al oi'do:
Como la sombra de los arboles que buscan su tronco en el ardor de la madera donde incineran labios y manos, hay sombras que deambulan por los restos del camino buscando buscand o sus miem miembros, bros, el rastr rastro o de su suss cuerpos o al menos su ropa destenida que se pudre en pozos, en el fondo de abismos y barrancos, nomadas fantasmas o apariciones que buscan su ombligo, la Have dc su casa, hasta hundirse en la niebla como los pajaros que vuelan sin parvada una tarde de sol negro entre las nubes: el humo de los trenes asciende por el cielo, bosque bosq ue de sfl sflab abas as cuyas hojas alcanzan llaa muerte y el otono; La Bestia respira honda y profundamente mientras su ojo de ci'clope otea en lfnea recta afilando las paralelas guillotinas que tajan el cuello del destino. Vuelvo a la fo foto to anter anterior: ior: arriba, de izquierd izquierdaa a derec derecha ha,, O rland rla nd o,R o, R af afae ael?, l?, u un n mancor mancorna nado do Ni Nicol colas as y Car Carlo loss (ho ndure (hond urenos nos los cuatro cuatro). ). Abajo, de la man mano o diestra a la zurda zurda,, Igua uanit nita a guindando cuernos a mi hermano Aldo; Ervin Ig 133
yo aparezco justo debajo de la barbilla de Nicolas, abrazando a mi hermano Canek, que lleva los brazos cruzados en el el pecho como como un arcange arcangell difu di funto. nto. No N o exis existe ten n ya ni la la poza Sil ilb ba ni los los otros espejo espejoss de agua del pueblo, como tampoco los remansos y peces del no Despoblado. Hace unos aiios se los llevo la tormenta Stan; a todos los migraines se los llevo el tren —una tarde de sol decapitado— Bestia ia.. aiios antes de que fuese llamado La Best Pero las aguas de los rios siguen su rumbo hacia el mar, cruzan esteros y meandros en los que descansan cuerpos hinchados, troncos incompletos de cadaveres, reses perdidas y migrantes, hijos clandestinos de paises sin pajaros que viajan con los suenos enjaulados y son arrojados a las fosas comunes, y mueren sin nombre, sin eco, como una paletada mas de una tierra que sella su destino y hace callar esa palabra de amor que nadie mas podra pod ra esc escrib ribir ir ni pronunciar en sus labi labios os..