Rafael Moneo - Inquietud Teórica - Rossi

 

Comencemos entonces deteniéndonos en los orígenes de su carrera. Una carrera que está también, coo tantas veces ocurre, arcada por las reacones y por las afinidades electvas Así hay que hacer constar que, al epezar su carrera, Ross está próxmo a Ganugo Polesello con quen firma aguno de sus primeros proyectos Con el riesgo que siempre implican estas sipl siplificaciones ificaciones,, hay en estos pr pri ieros proyectos rossanos una auténtca obsesión análsisles y lo que se traduce en e empl emp leo de formas primarias, simpepor simp s y el eelementa emental Seobjetivo, trataría de una objetvidad no muy lejana a aquélla que encontramos encontramos en la arqutectura de los construct constructvistas rusos Proyectos coo el Centro Direccional de Turín val valdrían para confirmar o dcho Un cierto cambio aparece  proyectos como el Polígono de San Rocco en Monza o la Escuela en San Sabba en rieste, donde tal vez se haga sentir la presencia de un arqutecto tan próximo a Ross en aquellos años coo Giorgo Grass La ávida búsqueda de formas arqutectóncas que hagan aparecer Giorg los rasgos característicos de un tipo con más fuerza se persigue ansiosamente en estos proyectos que cabe entender coo lustraciones del bro L'architettura della

1-2 Viviendas popular (proyct]. Cappo, 1961

1-2 El proyecto para unas vivie ! �    - métricos al uso, cabe percibir en él un pulares en aleio de 1961 no cierto deseo de establecer una conexión 1

. apog eo de tras Rossla-manfiest ensuellibro, respeto admiración de sus coetá neos-Else produce, publica publ caci ción ónode con yellaproyecto del Cementerio de Módena, concurs que ganó en 191 y que no se construrá hasta uy entrados os ochenta Quizá el proyecto más próximo a la deología contenida en el Cementerio de Módena sea el de las Viviendas del Gal/aratese en Mlán Y aún e atrevería a decir que éstas representan ejor lo que era e pensamiento de Rossi en aquellos años que el cementero. No hay que olvdar que éste se construyó con 15 años de retraso con respecto a la fecha del proyecto En 1976 Aldo Rossi viaja a América Un viaje que se convierte en auténtca caída en el camino de Damasco ya que, en cierto modo, fue el viaje a Aérica el que o descabagó de su afán y lollevó arpensar que tan solo era posibe trabajar con las imágenes Segucientfico Segu remos este tnera rar io a lo largo del comentario de su obra

'ª

ntic icipa ipa o que será Ado Rossi S e trata  un proyecto de v v vendas popul populares coo tantos otros que hubésemos podido encontrar en la práctica pro sional italiana, incuso es e spaño pañolla, de quellos años U ?líno -con todo o que elo sgnicaba en la erga urbanís tica de os años sesenta- recibe unos bloques de vvenda en los que cabe advertir una cierta contundencia _a agrupación de los cuatro cuerpos cons tructivos da lugar a un ep ep sodo urbano que va un poco más alá de a era gra mática de bl b loques o de simpl simplee juego de volene eness con el que otros arquitectos hubieran resuelto en aquellos años un obema arquitectónico coo éste. A prob pesar de que se trata de un proyecto que está lleno de compromisos volu

entre la ciudad antgua y este nuevo ragmento de cudd lo que nos habla del propósito que el arqutecto tiene de dotar a a ciudad oderna de todos aquellllos aque os caracteres y atributos que pertenecen a la ciudad antigua Caleppo es real realmente un 3-4 Pero Cal proyecto tibio si se o copara con este  otro de año 1962 presentado, en cola boración con Gianugo Pol Poles eseelo al con curso para el Cenro Direccional de Turín bajo el lema ocomotiva 2. El proyecto de Rossi y Po Pollese eselllloo es un proyecto rad cal Un proyecto en e que la devoción que ambos sienten por sociedades con ideales sodaros y comuntarios se tra duce en rotundas y definitivas foras de arquitectura Sería fácl tomar una

 

8 ?-8 La actohistorideapresenci hará pronto, Cabíaodecde raqueplazael vacno está o e embargo a y la arqusn dbujadoEl espaci yecto tectura enfideguratunParma provosla proyecta talqdiuexperi betuecturse  noenciósena esespaci físsitcoiacacinatersti Ysedeajsahíenaecintequeala nocuallYasearqu r apresi enpregnanci a pcomo adezaaRoss deedelelcomenzará PPementos otta a reconocer otta i n gü a unaelementa exporacesóSin endeelespaco radcunona onateatro es. Enene Parma año 1964UnRossi pro reduzca tpone con  i g uras proyecto encon enedifelicioquede anueva pesarpldeantatratarse degunue trado con un cubonosvachaboa mos nos vemos no consi ahora frente a un pri s ma que conver malente se aentileeaersendedecomoo queteatrotradicaiolanalnailtmente iana Y tido en tejado y en inesperado habtá prpridescubri erelioamciaarariópesar inasasmnytiemrotundas dea entre quede oseslaquepoarqu utiiesugi lidros ztanectura erenformas unaylaels vaci adeldesde ngulmimundo arslmotrasa queseaqu habercontempl hatectóni converti procediacrodtodo oqueenal atalculesteoatriyadonuevo nto y de aqu t ectóni RosRossssmanosconverti ofreced DeDoeenahoatejadoen ade ofrece adede laante ante e fomas másentresmelpcelsinydropuas: Jpra conra� Jaconra� pri posi c i ó n y el s ma s un elecmento convi en la sustanci del espaco en en el mundoserá iconográfi o rossicanóni ano co / el queeserterecrea e arquiatecto ?-

Teatro Pagnii  l lz d  ilo [proyco], arma 1964

Teatro Paganini

Monu-

mento de Cuneo

1

plaza

de la P/tta

 

9-12 Lo que acabamos de ver al hablar de a plaza de la Pilotta se consolda en e proyecto de 1965 para la plaza del Ayuntamento de Segate, donde Ross da un paso adeante en a búsqueda de os pncpos teórcos que le han de levar a la con onsstrucc trucciión de la cudad. Ross se nspra en la arqutectua de la l a lustraci lustrac ión Y elo por obvas raones Razones, entre otras, que cabe cafcar caf car como de afnidad deo lógca Ross pensa que el fnal del s XVIII fue un momento en el que la humandad se beró de muchos rastros atávcos y que, en aquel perodo de tan encomable pasón deológca, los arqutectos fueon capaces de entever, con más mpi mpiea quá que en nngún oto momento de la hstoa, aquello que la arquitectura ea Y así, así , cuando Boullée habla de cómo debe ser e espaco de una bbl Bou bbl oteca y nos dce que en ella debe estar representado representado todo el conocento, toda la sabduría que los lbros ence rran -la bboteca como paradgma de conocmento de los humanos, la plaza del Ayuntamento de Segrate, la plaa de esta modesta barriada proletara mianesa, debe dar raón de lo que es el espaco públco, debe ser el paadgma de la vda en común La plaza de Segrate, pues, como una de aquelas ágoras gegas dibujadas por los arqutectos de a ustrac ón De ahí que el pavmento quede sembrado con tambores de columnas, como s fuesen testigos de una vda socal dfclmente con qustada. El apogo se poduce en la fuente en la que e cilndo, que se nos presenta como una versón contemporánea de a columna traana, está coronado por e psma trangular que conocmos en la P/tta. l espaco púbco no es tanto a ocasón de cellebrar vs ce vsua uamente la vda en común como la oportundad de cear una escena que haga posble la reflexón, que pe p ermita medtar Arqutectura, pues como escenaro del pensamento Y esto nos levaa a estabecer contactosente a oba de Ros Ross s y las experencas de al a lgunos art artstas con ceptuales que son sus coetáneos Como en elos, hay aquí durea. Naturalmente hay provocación No e mporta puede que a contraro, que lo vea con buenos ojosque ojos que aquelo que para él ea cuas sagrado, que la columna co lumna que se regocjaba en su condcón de fresca fuente, cobre una nueva dimensón dime nsón con e uso tan dveso que el públ púb lco hace de ella al utarla como soporte para pegar carteles Cuando Ross publ publca la plaza de Segrate con a coumna manclada mancl ada po los car carte telles, él no se lamenta no piensa que con aquel uso ha quedado degradada. Todo o contraro Ha sdo capa de sugerir aquel gesto y de servr de marco para a extrañea del nño que pasea en su bc icleta que deberá acostumbrarse a vvr, desde sus prmeros años, en este mundo de fantasmas fant asmas Y a arqutectura arqutect ura no hace otra cosa sno coaborar a cear tales fantasmas estos nue vos monumentos Para Ross Segate era, en aquelos años, un monumento

/{,

0

. -  -   r  

�  -     . .   

' ;W

1

13 sta aqutectua dra, cas bsacta, que hemos vsto pogres

se producen en los espacos abietos y cerrados, etc Mecanismos coo a

mente conso da darrse se transorma a meda edaddos en de lo años conso sesenta, algo menos adusto, más pómo a los modelos en que parece nsprarse, en un proyecto coo el Polígono de San Rcco en Mona, de 966 Ross trabaa n este poyecto con Gorgo Grass, y t ve quepa suger que a su presen cia se debe el cambo que se adverte n l Haya o no que contar con Grass

segegacón la repetcón, desp la amento, se utlan al servci servceliodespl de una delberada ind ind v dua duallacón de espa cos que deben dar lugar a la varedad y dversidad buscadas ntendemos que hay todo un absmo entre el proyecto de San occo y la plaza de Segate

expica lo certo es que San occoelesproyecto, muy dveso a aque lla coleccón de fguras geométri geométr icas obre e pavmento que daban lugar a a plaza de Segate Un baro coo San occo tene también que ver cn el sentmento de los espacios comunes que confguan os dstntos patios, con el contraste ente las dversas escalas, con as cambiantes sensacones que

Escuela en San Sabba en

par

4  esprtu de San occo está presente tambén en el proyecto de la Treste 69, s ben en este proyecto son968 más evdentes las alusones a la arqutectura hstórca. a escuela es, antes que cual quer ota cosa, un espaco públ públco que, como ocurría en los primeros babuceos de la arqutectua mediteránea como en los paacos de los reyes en Creta, comena con el es establec tablecmento de una pataforma desde la que, en este

 

caso, se domina la ciudad. Y se deleita más tarde en pensa cómo los niños lle gan a ella p pocesiona ocesionalm lmen entte a través de una serie de pórticos y en im i mag agnar cómo al alcanzan las aulas y los espacos

seccón del Ayuntamiento 16-17 La secc de Scandicc, un proyecto de 968,

abiertos lo enque losla que comenarán entender vida social significa.a

que, al enestablecimiento opinón de Rossi redu cido de queda una secuen cia Tal condicó condicón n secuencial le permitiá consdera que su trabajo no es muy dis tinto a aquel que lleva a cabo quien nos cuenta una isoia Un ayuntami ayuntam iento no es, al fin y al cabo, sino este patio que pemte una entrada digna -aquella que pe coresponde a un espaco pbl pb lco co  en el que nos encontramos en diversas

San Sabba nos muestra que el análiss

de la arquitectura histórica que Ross ha llevado a cabo en L'architettura dea citt ha sido útil Que cabe hacer uso de aquellos mecanismos que en la ciudad se detectaon Que es cierto que los pincpos con los que se constuye pinc permanecen Ross es consciente del valor quelaa tenido su de análisis paa descifrar constucción la ciudad y trata de volcar 1a · ·experienca experienca adquiri adquirida, mediante la contemplaci ón y el examen, en sus proyectos

nos muestra cómo se construye Si se conocen cuáles son los elementos de la arqquitec ar tectt ura, construir es algo simpl simplee

áreas reunón y para el desarollo de las para funciones adminstrativas Toda esta sere de pieas enebradas en su movimiento por un corredor culminan en una cámaa en la que los po lílíticos ticos celebran las reuniones y d dscu scusi siones ones de carácte más pblco Dirase que toda

14

quela secuencia de espacos no tenía otro obeto que poner de manfiesto la esencia de esta cámara como el espa cio públco por antonomasa que domna vsualmente el conunto Esto es para Ross, un ayuntamiento La a a ui uittect ectuura ene para él aquella transpaencia que nos la convierte en evdente adena de lementos a los que da senti o el uso al que van destinados y que poco dfiere e aque prme encuentro con el oden impcto en lo arqutectónco que los nos expeimentan cuando juegan con sus tacos de madera Constru es tan solo aquello ntende cómo se manpu pullan los ele mentos Y de lo que se trat a es de tene l corae de aceptar la realdad de la arqutectua sin temor a idetif idetif car carlla con aquellas mágees en las que se aprendó a dstinguir las dfeencas que nos pe p em mten hablar de tipos diver sos As de fácl A pesar del respeto que Ross tiene por la ar arqu utectu tecturr a tradicio nal próxima, nada más lejano que el ayuntamiento beaux-artiano. de Scandicci a un pati 1819 Rossi, que no tiene en aque llos aos encagos de enve envegadu gadua, se encuena con proyectos como éste de 96970 para una escuela en Bron Y, conscente de que la arqutectua es algo ndependente del tiempo y del lugar, no sentirá escrúpulo alguno en cambiar de

 

escala la fuente de Segrate. La arqutectura que las fotografas de la escuela de Broni nos ofrecen nos hablan de una escenogafa cuel, provocadoramente ajena a todo aquello que tiene que ver con el sentdo de confot o con la compacenca en a percepcón del espacio. Es como s Rossi pretendese habare al niño, desde los prmeros momentos de su existenca de la dueza de la vda nsttuconal La verdad es a meo haydetuviésemos que engaña aapensar, nño a popósto de aquello será la vida que leescuela espeaYSinonos por un momento en que qué es o que se pretende que sea una escuela en un país nódco en lo l o que es una escuela escandnava o s advrtésemos la peocupacón de los arqutectos de aquelos paí ses por orentar ben una ventana o po escoger un pavmento de madea cálido no podamos por menos de ve la dferenca que meda entre ta acttud y la de Ross Pero la arqutectua no puede engaña confundendo al nño respecto respec to a lo que es una insttución Hay en Rossi Ros si esta voluntad de se honesto aún a costa de ser cue La vda va a ser eso, va a se un patio de lágimas Y no otra cosa es el pato de a escuela de Broni: la fuente no recoge otra cosa sno dolor y msera 20-24

Y oto tanto ocure con una obra como la de Gallaratese en M/1969M/1969-  73) Rossi que bscaba una manpulacón pseudocentfca o "centfca, ente comllas de la arqutectua se encuentra con que la práctca de a pofesión en un terreno como e de la vvenda en un barro proletaro acaba materalzándose en una aquitectura que leva a que confundamos las las casas con los cuarteles El coaje coaj e de Ross está una vez más en asum la dureza con ue la  arqutectur afro_ afronta n_ ta IQ IQ  progamas, en no fal�ea a rC de ah que la vulgaridad de la fábrca en la que tan solo cuestones relacionadas con a repetcón y la escala cuentan trate de equlbase con un espaco en el que pedomna lo escenográfco, e  pórtco en e quenos unotenan está esperando ver aparecer una figura como a de Vitt,espacios a a que tanto acostumbrados las peculas de Antonon osonca desnudos que Ross proyecta parecen estar a a espea de aque sngula momento que os escatará a convertrlos en maco de una stuacón inesperada inesperada Entonces e espa co se lumnará y adqurá una condcón condcón exclusva y únca, ta y como lo concbó la mente del arqutecto Ese omento justfcaa la soddez de lo cotdano Tal vez en e caso de Ga/aaese, as vsitas de os peegrnos a quenes atrae, desde hace tantos años, han dado lugar a que este momento se haya vsto mutplicado

 

UI

conte mpla retrospectivament retrospectivamente, 2 5 -31 Cuando la carrera de un arquitecto se contem cen proyectos -a veces tan solo un proyectoen e que se condensan todos 1 Inereses y sentim sentimentos entos.. Si consderamos la carea de Rossi tal edificio es  uda e Cementerio de Sa Cataldo en Módena (9?84) San ataldo permitió u coetáneos ver la estatua de un arquitecto como Rossi Exigiendo as bases del concurso amplar un cementero Rossi no entenderá  royecto como resu esulltado de apicar un mecanismo de agregac agregac ón. E Cementerio  Módena es un edicio en sí mismo competo que se resiste a surr una una nter ción que lo amplíe Rossi popone duplicarlo Y lo hará de una manera realmente omplleja Lo duplica ayudándose ayudán dose de toda una sere de construcciones inter 1utl y comp dias situadas sobre un eje que permte esta virtual elexión especul especu lar Pero lo lica astutamente sin que a simetra se haga presente Rossi no ve el Cemente-'  de Mdena como resultado de este mecansmo de dupli dupl icación sino bien a con ro obiga a una lectura unitaria del todo. Y ta ectura lleva a que nos presente un  rma rma visua. Uno entra en tra por el ambiguo doble acceso a cceso y se encuentra con una casa spojada de todos aquellos elementos que una vez a hiceon habtable Un cubo cubo  n techo deso desoado un cubo que nos hace pensar en aquela experienca primera  imaria de Rossi en Cuneo. Pero a casa no oculta el camino Se trata de un camino que avanza enre espacios intersticiales que nos hablan de la nintud de la eter nidad de la pérdida de valor de tiempo que implica la muerte. Esta presenca d · l muerte nos leva al punto en el que cul culmina el drama el cono descabezado que tan obsesivamente nos persgue como si de un antasma constante se tratase en a obra de Rossi ¿Es el interior de a Mole Antonelliana de Turín a memoria que se apoderó para siempre de a mente de Ross ¿O es el impacto que le produjo un día el encontarse en e interior interio r de una de aquellas chimeneas chimeneas nd nduustrales que engendran en nosotros la irres irr esiistib tiblle sensación de vérti vértigo ¿O son estas mágenes inelectual refleo de aquellos hornos cerámicos que nos haban de a muerte como indefecib lemente a a cremación Lo cierto es que esta de un fenómeno lgado indefecibl arquitectura cuenta con un dbujarse en el azu del celo lema con el que Rossi se_ ; presentó al concurso El edicio tiene una dueza espe speuznante uznante.. El proyecto do la vuelta al mundo susctando admiración por un lado y levantando críticas por otro Cuando se construyó constru yó a mediados de los ochenta 5 años después Rossi fue aún capaz de manipular la vulgardad de los mecanismos constructivos emp empleándoos más pro vocadoramente todavía de lo ue sus dbuos insinuaban. insinuaban. Y a casa para los muertos

 

u único patrmonio, aquelo que interesa transmitir y egar a los demás Auella ralidad lukácsiana que tan ansiosamente perseguía es inaprensible De ahí que u meta ahora sea material materializa za sus sentmientos, poponer "otra real realidad, aquella ue resuta de construir sus buos Todo aque dealista mecanismo planteado n Larchitttura della citt que llevaba del tpo a a orma urbana y a terrtorio de los usos a la construcción y que había dado como resul resultado obras tales como e Gallaratse o a casa de Borgo Ticino, desaparec desaparece e Tan soo a iconograía queda. fj ibuo se va a convertr en esa real realdad otra de la que hemos habado, que poco ine que ver con la ciudad que estaba en el origen de sus reexiones El dibu] la!! icta cua va a se esa nueva realidad que, en último término se conunde con la rqu rquite itectu cturra: a inales de los años setenta Rossi es peectamente consciente de sta nuevas nueva situacón Rossi que haba disemnado disemnado su buena nueva en Europa y que tena impo ntes grupos de seguidores en su propo país -a a vez que en Suiza, Aemania y España princpalmente, cmienza a tener también adeptos en América, y en lgunas escu escuelas sus principos se converten en normas En escuelas como a de Miam se enseña a construr la ciudad según Rossi, legando a man if iestos xcesos Paradójicamente o tal vez al ver en los demás el esgo que mpcaba l pretendida generalización Rossi se da cuenta de que es más dueño de sus \ nsttrum umenta entallizac izaciión del conocimiento, ta como a princi ¡ sentimientos que de la ns po de su caera recl reclamaba Oue es más capaz de construir lo que siente que de sttablecer toda aquea serie de esabones que de un modo jerárqu s j erárquiico evaban del tipo al monumento anto es as que Rossi com comenza en Amérca a trabaar trabaar en un nuevo ibo A Scintc Autobiography, en el que caramente se da el salto del que estamos habando y que lleva del conocimiento al sentimento  e primer Rossi tataba sobre todo de ser objetivo, e Ross que vuelve de América está convencdo de que sólo puede dar razón de sí msmo, de que tan solo el sujeto cuenta He transcrito agunos párraos de A Scintic Autobiography que son en extremo elocuentes En su transparencia van a maniesta con caid caidad ad lo que Rossi piensa ice Rossi 1

1

39-40 Dureza que se encuentra también en los concusos paa el CentroAdministrativo Rgional en Trieste, de 1974, y para la Residncia d Estudiants en Chieti

de 1976 a los que valdría extende los comentarios del párrao anterior.

En el año 1976 Ado Ross viaja a América, sendo el lnstitu Jor Archictur and Urban Studies quien eclamó su presencia y quien generosamente lo acogió Rossi

era ya un arquitecto conocido, a que as gentes del mundo de la arquitectura espe raban con interés Prepara a traduccón de su lbro L'architettura della citt, hace exposicones de sus dibujos da conferencias en las escuelas  El viae a Amérca va a supone un cambio sustancial, tanto en la obra de Rossi como en a pecepcón que de ela se tiene Améica le hace ver que su arquitectura son ante todo, sus dibujos, que es con ellos como mejor tans tansmt mtee sus sentmientos y ue son éstos

"Alrededor de 1960 escribí Larchitttura dlla citt, un ibro afortunado. En aquellos das no haba cu mplido todavía trenta años  quera escrbir un libro defintivo: e pareca que todo, u na vez clarificado, poda ser definido Creía que los tratados de Renaciento debían convertirse en áquinas (aparatos) que

 

podan traducrse en objetos. Desprecaba los recuerdos (-observen ustedes que es todo lo contrario de o que está psando h-)6 y, a la vez, aca uso de ms mpresones urbanas Buscaba, tras los sentmentos, eyes nmóves de una tipoogía sn tempo Vea los patos, las galerías, los eementos de una morfología urbana, dstrbudos en a cudad con la pureza de a mneraogía Leía lbros sobre geografa urbana, topografía e stora, como un general que desea conocer todos os posbles campos de batala, las corderas, corderas, os puertos de paso, los bosques Recorra a pe las cudades europeas para conocer sus plantas y cla sfcarlas de acuerdo con crteros tpológcos Como un amante al que sostene su propo egoísmo, a menudo gnoraba los sentmentos secretos que aquelas cudades despertaban en m Me bastaba bas taba conocer el sstema que las gobernaba Ouizá quera smpemente lberarme de la cudad (Rossi es consciente de esta flagrante contradiccón sentimental-) En readad estaba descubrendo m propa arqutectura (curioso salto de lo general a lo especíco y propio. Porque, ¿cuál es su propia arquitectura?) Una confusón de patos, casas suburbanas, teja dos, gasómetros, era el resultado de la prmera exporacón de una Mán que me parecía fantástca El mundo burgués de las vllas en el lago, os corredores de las escuelas, la ggantescas cocnas de las casas de campo, eran memoras de un pasaje manzonano que se desntegraba en a cudad Pero este nsstr en las cosas me revelaba un nuevo t" 7 espués de ctar a ee, e escrtor aercano aercano en un prrafo en e ue aba de faros, de cabos, de barcos, tcétera oss dce: "Podría preguntarme a m msmo qué sgnfca "lo real en arqutectura ¿Acaso un eco, por ejempo, de orden dmensona, funconal, eststco o tecnológco? Sería capaz de escrbr un tratado basado en tal tpo de ecos Sn embargo, en su lugar, penso en un certo faro, penso en un recuerdo recuerdo,, en un verano ¿Cómo establecer la dmensón de estas cosas, y en realdad, qué dmensón te nen?8 (-ara Rossi los recuerdos las memoas  son lo que cuenta) Mercados, catedrales, edfcos públcos, despegan ante nuestros ojos una compleja stora de la cudad y de os ombres os tenderetes tendere tes de un mercado y los confesonaros y capas de las catedrales muestran esta reacón entre o ndvdual y o unversal que puede trasadarse a la que exste entre exteror e nteror en la arqutectura os mercados an despertado despertad o sempre una especal fascnacón en mí tan soo en parte relaconada con la arqutectura, especalmente especalmente los de Franca, arcelona y

mbn el de Rato en Veneca Estos son los ejemplos que recuerdo a cantdad d mentos expuestos nunca me a dejado de mpresonar: carne, fruta, pescado vrduras, aparecen una y otra vez cudadosamente ordenados ordena dos Y, entre todos ellos, l pcado es, en certo modo, e e  más sorprendente, con esas formas y presencas n varopntas que aún sguen resultado fantástca en nuestro mundo Ouzá t arqutectura de la calle y de las cosas de la gente y de la comda, de flujo de 1 vda, a quedado defnda para sempre en la Vuara de Paermo [ ] ]

6 Los comenaris en cursiva on

de Rfel Moneo OSSI, A.A Scen·  Autobiogrphy. Oppostons Book publao 7

p The Gm ounton f Advnced Sues n the Fe At [ Cago llnos] y e lnue Achetre and Un Sude ( Ne York J por e MI Pe ambdge Mss., 981 pág 5 Ls tas seleods han do du da del ogna por Rfel Moneo  Ibídem pág 24

En cualquer caso, cuando penso en mercados sempre me ene a la mnte la analogía con los teatros , en partcular, partcular, con os teatros del s XV con la lcón entre os pacos, como ugares asados, y el espaco tota de teatro teatro9

 dem pág 2 0 bdem pág 2

El proyecto defnd en el tempo y en el lugar lugar   º qui i  arrqu a a que a el qu a, en el oca, voc equv sió ón equ  pa asi  una p  mí  í  una ara a m tab ba par sen nta pre ese  re epr o r teatro E teatr y as  as   did di d  me  m e o n n -c c ción ció ruc ru c nst ns t  co  c o r, l la a gar, el uga u o,  o,   ond de f   f ond ón  de  tellón ibe e te osib  el p  pos era el ra  era ctu ura ct 1  mter m teriiale ales s c  co onc ncrreto etoss- de un sen enttim imie ient nto o a  a m  me enud udo o inap inaprren ens sibl ible e." "'

S tuvese oy que ablar de arqutectura, dra que se trata más de un rlual que de un proceso creatvo Y lo dgo poque conozco ben a amargura y el consueo que acompañan al rto os rtuaes nos proporconan e consuelo de a contnudad, de a repetcón obgándonos a un oblcuo olvdo porque, a no poder voluconar, onar, cuaquer cambo sgnfcaría s gnfcaría su destruccón ón2 [] así que, creo aber sdo uno un o de los peores aumnos de Potécnco de Mán. S ben, cuando oy penso en las crtcas que se me acan, as veo como los mejores elogos que e recbdo nunca El profesor Sabbon, Sabbon, por quen sentía un especal apreco, me anmaba a que dejase de estudar arqutectura, dcéndome que ms dbujos parecían los de aquelos abañles o constructores ruraes que señaaban dónde abía que abrr una ventana tr  ando ando una pedra Esta obsera cón, que aca rer a ms amgos, a m me enaba de satsfaccón Y oy trato de recuperar aquea felcdad en el dbujar que vena confundda con nexperenca y torpeza, (elicidad como genua torpeza) y que después sempre a carac terzado m trabajo En otros térmnos, no consegua comprender y aún aora me resulta dfícl acerloe acerloe  sgnfcado de a eoucón en el tempo Como s el

 bdem pág 33  bdem pág 37

.

 

E sta falta de evoucón tiempo fuese una materia que obsevo desde fuera. Esta evoucó n ha ido la causa de agunas de mis desventuras, pero me pertenece y me hace feliz"13 Y obe Lo: os había hecho este gan descubimiento aqutectónco identificase con el objeto a través de Sn la obevacón y lasin descipcón [-/en descripción paraceativa, Rossi es impotantísima-). hacer cambios, concesones, fin, in paión como con una cieta ensacón de estar congelado en el tempo  ..] a gélida decripción de os haca eferencia a os gandes tatadita de Renacimiento, a las categoras de Abeti, a as carta de Dueo, menta que el desarroo del ofico, sus habidade manuales, sus técnca, técnca, desapareceon poque no eran tan valiosas como para er tanmitidas o traducida. 14 _ - Para se signficativa, [páafo de crucial impotancia) la aquitectua  debe ser ovdada. O esta preente tan solo como una imagen efeenca efeenca que se  confunde con os recuerdo. 15

caa en otuga e recean a o ta a gica que encean aquea tcn ca de contuccn paa tcn mp  mp  cta cta en e o o ape de a ipa tc nca cept ceptb e, po ota pate, de

13 Ibídem, pg. 39

 bídm, pág. 44 5 d g. 4 6 Ibíd pg SO

, "'

.

41 Casas en Mira, nort de Potugal

4 2 Convento de las e/ayas Santiago de Compostea No ay epeentacn má caa de o qe e  a vda de una con condad dad moná tca oetda a a tana de a epet epetcn

1

dichoesque lospotente lugareque son fuerte gentes,teóico que a escenaSiempre fia en unhe teatro más qu e lamás acción Eteque e ellas princpio no de mi arqutctura, sino de a aqutectura mima. En defnitiva, es una posibi idad de vivir Compao esta dea con el teatro la pesona son como os actores; cuando a uces se encenden comienzan a invoucarno en un epiodio que nos e ajeno y que seguá siéndolo sempe. as luces de candieas, la múca, no son difeentes a una tormenta de verano, a una convesacón o a un rostro. Pero, a menudo, el teatro etá cerado  las ciudades, c omo teatros enomes, vacías También es emoconante penar que cada uno tiene su pequeño pape pape en tmo término, ni el actor mediocre, ni a actriz sublme subl me serán capaces de altear e cuo 16

de os acontecmentos ea en Ro a concenca de a  toa, de na toa coo c oo ucedee de gente y aco o de na aqutecta a cyo acevo no gutaa contb Lo comentao que a a contnuacn toman coo bae a mágene con a que Ro Ro  a tado u bo, A Scientic utobiogaphy, y que on na caa mueta de aquea arqutecta con a que e copace

autae a a topogaa y de ncui aqueo accdente que de epente dan vveza a una ecena conoc conocda, u tancaente cot tanca cotdana

41 Casas en Mira note de Potugal:

ta caa de otuga no aban en pe uga, de a gente que a ocupan Que batante n eco con contu un ueo qe e antenga a avo de a edad de teeno y que todava an ido capace e eaa a potanca que tene a pueta a dtng tnga con aqueo bl bloque de ogn que no aban de una ceta o eta Lo contctoe de eta

y a ega que eta acada acad a de convento de a e eaya. Lo eto qe medan ente a ventana y e pavento de a paza aban de a petendda dtanca ente quene vven en a ecn con ventua y aqueo que no abandonaon e mundo y   guen d dutando de todo aqueo que oece na cudad coo antiago de Compostela

 

49-50 Faro de New England y San Carlone en Arna:

Hay momentos en los que la arqui tectua se confunde literal literal men mentte con aqueo a lo l o que llamamos fguras. As el Jar de New England, tan eno de eso nancias lit liteearas, tan presto a desatar nuestra fantasía, o e · se se San Carone que parece encana a fantasma que tan tas veces hemos visto en sueños, que tantas veces hemos ntentado supri mir y que para nuestra desesperación vemos hecho ealidad al convertilo en paradgma de a arb arbitrar itraredad intrnseca a cua cuaqu quiier constucción Todo puede construiise. Los antiguos  eva constru evanntaron el Coloso de Alejandrí y los emgrantes a Estatua de la Lbetad. Y, siendo as la lógica de a constucción no es capaz de hace desaparece para siempe los fantasmas que nos acompañarán en nuestras vdas, como ocurre ocur re cuando se trata de honra a San Calos Boromeo

f I orden en el espacio manifiesto en  espegue de la constucción nos l de ese ámbito común en e que  uar de trabao, os utensilos y las sonas constituyen un todo continuo  •Jno por completo a la especalizac especalizacón ón   sfera de lo privado, de a relación ma queda sugeda por a escalera,