quieren saber porque les cuento cuentos yamanas

August 22, 2017 | Author: Silvia Villanueva Mendez | Category: Birds, Nature
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Descripción: libro...

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¿QUIEREN SABER ÞOR QUÉ LES CUENTO CUENTOS YÁMANAS?

SAÚL SCHKOLNIK

A todos los niños y adultos que sienten que el juego es algo importante en sus vidas

ÍNDICE Primer cuento BREVE HISTORIA DE AYAPUJ

9

Segundo cuento IÉTEJ, EL CORMORÁN EGOÍSTA

19

Tercer cuento BATALLA DE HOMBRES CONTRA MUJERES íi','jeduró seis días

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Cuarto cuento LA TRANSFORMACIÓN DE QUIJINTECA en sólo cinco semanas

35

Quinto cuento INOCENTES INDESEABLES eran los dospájaros carpinteros

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Sexto cuento ABRAZO MORTAL de dos mocetones

Apéndice 1: DESCRIPCIONES DE ANIMALES Apéndice 11:ALGO SOBRE LOS YÁMANAS

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Primer cuento

BREVE HISTORIA DE AYAPUJ 'uñados En el sur de Chile, el medio ambiente presenta características muy favorables para las nutrias marinas o chungungos,que si no ahora, en tiempos en que el pueblo yámana habitaba allí, vivían y se multiplicaban, pero... Según cuentan los ancianos yámanas, en la isla Yécusin los chungungos correteaban rápidos con sus largas patas cazando pequeños animalitos. Rara vez entraban al agua, ya que esas patas que tanto les servían en tierra, eran un estorbo para nadar. También ahí vivía una nutria llamada Ayapuj. 9

Pero, ;pobre!, sus patas no eran largas.

Las tenía tan cortas que al correr casi arrastraba su vientre por el suelo, pero en el agua... Ahí era diferente, Ayapuj era más veloz que las otras nutrias, por eso pasaba la mayor parte de su tiempo en el mar. Es por eso que Ayapuj no era feliz. Sus siete hermanos se habían casado y, siguiendo la costumbre de los yámanas, se habían marchado a vivir con las familias de sus esposas. Y sus ocho hermanas casadas habían traído a sus maridos, los cuñados de Ayapuj. Sólo él no se había casado.

Ayapuj se convirtió en un ser solitario, pues se molestaba con las continuas bromas que le hacían. Entonces decidió marcharse para vivir solo.

Sus hermanas, que lo querían, trataron de disuadirlo, pero todo fue en vano. Ayapuj abandonó su hogar. Un islote cercano fue su nueva morada. No obstante, sus cuñados lo siguieron molestando. Aún con dificultad, nadaban hasta su isla y se burlaban de sus patas cortas. Cuando éste intentaba alcanzarlos, volvían a tierra y huían.

Ahí, Ayapuj no podía competir con ellos.

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"Sólomientras más cortas tenga las patas, mejor se encontrará en su nuevo ambiente, el mar.

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Pero entonces, Wapsa, la ballena, pasó un día junto al islote y eso le dio a Ayapuj una idea. Sobre un montículo encendió una fogata como las que se hacían para señalar que una ballena había varado. Era la forma de invitar a todos al festín. Impresionado por el imponente espectáculo, permaneció allí arriba entretenido, admirándolo. Sin embargo, su deseo de venganza hizo que el hechizo se rompiera y Ayapuj continuó preparando su trampa. Trepó hasta su pequeña ukurj, su choza hecha de ramas y hojas, y allí despejó bien los alrededoresde piedras y arena, dejando sólo la tierra gredosa, la que mojó bastante de modo que la subida, que era escarpada, quedara resbaladiza. Al poco rato los ocho cuñados divisaron el fuego y decidieron enviar al menor de ellos para ver qué sucedía.

Miró por todos lados el cuñado en el islote, pero no vio ninguna ballena. Estaba por retirarse cuando Ayapuj lo invitó: —Unasabrosa centolla tengo para ti —ledijo—.¿Por qué no vienes a mi choza a comerla?

Y no tuvo que repetir la invitación. El cuñado, que era muy goloso, al oír que le tenían una ushtacalush(como llamaban los yámanas a la centolla), sin dudarlo ni por un instante corrió cerro arriba hacia la ukurj de Ayapuj. Pero como a mitad de camino comenzó a resbalar y, al no poder encontrar una piedra en la cual sujetarse, se precipitó al barranco, muriendo al golpearse contra las rocas filudas. El vengativo chungungo recogió el cadáver, lo colocó en su choza e hizo de nuevo la señal con humo. MARIA 15

fuera a ellos de otro que cuñados Resolvieron los restantes la isla a averiguar qué pasaba. comer una —Olvidemosnuestras desavenenciasy ven a ushtacalush que tengo para ti —loinvitó Ayapuj. Muy apurado, él trató de subir a la choza, resbaló y cayó, muriendo al golpearse en las rocas. Uno a uno fueron llegando los cuñados y a todos los invitó Ayapuj a comer centolla. Y uno a uno fueron muriendo al caer por el acantilado. Rápidamente, entonces, Ayapuj escondía el cuerpo y arreglaba su trampa. El mayor de los cuñados, al ver que ninguno de los otros regresaba, comenzó a sospechar.

—Qué misterio será éste? —sepreguntó. Urgido por las dudas, se dirigió a la isla y, al no ver ninguna ballena varada, sus sospechas se confirmaron.

Entonces apareció Ayapuj y lo invitó a subir a su ukurj. —Tengouna ushtacalush especialmente para ti —ledijo. El cuñado estuvo a punto de subir corriendo, pues le encantaban las centollas, pero recordando que debía ser precavido, contestÓ: —iFantåstico!,pero, ¿por qué mejor no bajas tú? Mira que yo estoy muy, muy cansado. —Anda,no seas flojo —leinsistió Ayapuj—,descansa un rato y luego subes. Te esperaré aquí en la choza.

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por unas trepó islote al vuelta La nutria, entonces, dando sino que, puerta, la por entró no piedrashasta la choza, pero penetró por atrás. afuera, esperaba lo Ayapuj aprovechando que muertos y, cunados los a vio cuando límites tuvo no Su ira ansiando vengarse,salió del ukurj y se precipitó sobre el culpable, empujándolohacia el mar. Pero no pudo evitar el resbalar también. Ambos cayeron al precipicio...

Y entonces, sólo la pericia de Ayapuj lo salvó de la muerte, pues vio como su cuñado moría al estrellarse en las rocas. Mientras tanto, él, acostumbrado a lanzarse de cabeza al mar, una vez más logró hacerlo, sumergiéndose en el agua helada del canal.

Y desdeentonceslos chungungos o nutrias marinas viven en el agua, porque sus cortas patas les permiten estar mejor en el mar y, además,ningún animal terrestre puede burlarse de ellos. 18

Segundo cuento

IÉTEJ, EL CORMORÁN EGOÍSTA en tres rncses Ningún yámana levantaba aún su ukurj, esa choza construida con ramas y pieles en Uala, una de las innumerables islas del sur de Chile en las que ellos habitaban. Ninguno navegaba todavía en su frágil anan, esa canoa hecha de corteza de árboles que utilizaban estos indígenas, por el canal Onashaga; aún nadie encendía el pouchaki (como se llama entre los yámanas al fuego para las fogatas) cuando ya allí vivía IÉtej, un cormorán-de-las-rocas.

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cormoraneslos de además son, zona aquella Oriundos de y otros. Pero los de-las-rocas, los de-patas-rojas, los imperiales cormoranes-delos duda, ninguna sin son, destacan se que más patas-rojas. Pues ahí estaban todos, y también IÉtej, un cormorán muy egoísta. Para las otras aves adaptadas al lugar, sólo el nido que usaban era suyo y nada más. Entre el pueblo de cormoranes, lo que se acostumbraba era que todas las otras cosas les fueran comunes. Pero, ¿qué pasaba con IÉtej? Cuando pescaba, permanecía oculto al resto, esperaba, y sólo al cabo de un buen rato comía sin convidarle a nadie. —IÉtej,¿por qué no me das un poquito? —lepedían otros.

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—¿Estotan delicioso?No, no. Todo para mí —respondíael cormorán y se comía todo lo pescado, aunque quedara tieso de tanto comer.

Resulta que un año hubo una sequía espantosa. Pasabany pasaban los días y no llovía. Muy pronto, todas las pozas de agua dulce se agotaron. Todos sufrían debido a la sed. Desafiante y satisfecho, sin embargo, IÉtej se paseaba muy contento.

Pero Huashénim, un inteligente cormorán de-patas-rojas, pensaba que algo extraño sucedía con IÉtej. Hay un límite para todo, se decía. La alegría de IÉtej le resultaba demasiado sospechosa.

Sin duda, era necesario averiguar a qué se debía tal misterio.

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"El cormorán de patas rojas es más hermoso que otras avesadaptadas al ambiente del sur."

23

Le preguntó a un primo suyo:

ande tan IÉtej que de hecho el —¿Aqué atribuyes tú contento? estaba preguntando Aunque en verdad, sin embargo, no le sino que reflexionaba en voz alta. —Sí...bueno... ¿quizás esté enamorado)

—Piensoque no es así. IEtej es tan egoísta que sólo se podría enamorar de su sombra. Así no tendría que compartir nada con nadie. No, no, algo está ocultando este IÉtej... —iYasé! —exclamóentonces su pariente—,IÉtej debe de haber encontrado agua!... —Esposible que tengas razón, primo.

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Rápidamente, Huashénim organizó a varios cormoranes-depatas-rojas para vigilar al egoísta IÉtej. No lo perdían de vista ni por un momento. Así fue como, antes de que finalizara el día, pudieron ver como IÉtej, pasando delante del escondite de Huashénim, se dirigía hacia un roquerío solitario en lo alto del risco. No fue fácil seguirlo. Los cormoranes encabezados por Huashénim lo pudieron hacer sólo tomando muchas precauciones para que éste no los descubriera.

Zigzagueaba IÉtej lentamente, y a cada paso, muy desconfiado, miraba hacia todos lados. Al fin se detuvo. Al parecer había llegado al lugar secreto. Volvió a observar cuidadosamente a su alrededor. 25

No vio nada.

estaban muy bien seguían lo que Todoslos cormoranes escondidos.

se inclinó y bebió pequeños IÉtej entonces, vez, otra Unay

sorbos de agua con gran regocijo.

Porquelo que él había mantenido en secreto era una poza de aguadulce que había descubierto entre las rocas... PeroentoncesIÉtej cometió un error. Estaba tan satisfechode sí mismo, que se descuidó.

Uninstantefue suficientepara que Huashénim y los suyos

se abalanzaran sobre el pobre IÉtej.

Estabantan indignadosque lo empujaron sin miramientos haciaabajoy luego se pusieron a beber ansiosamente. Luego

Huashénim invitó a los cormoranes a beber y así todos pudieron sobrevivir a aquella espantosa sequía.

Desde entonces IÉtej y todos los cormoranes-de-las-rocas viven en las rocas bajas de los barrancos marinos y caminan volviendo siempre la cabeza con temor, pensando que alguien los está siguiendo y van gritando: —E'...E'... E'... —altoy fuerte, ya que desde aquella vez quedaron con sus gargantas húmedas. Son los cormoranes-de-patas-rojas como Huashénim los que ahora viven en las rocas altas. Y como pasaron tanto tiempo con la garganta seca por la sed, su grito es bajo y ronco: —Aeg...Aeg... Aeg...

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Tercer cuento

BATALLADE HOMBRES CONTRA MUJERES En un comienzo existía el matriarcado. Las mujeres habían

impuesto su dominio. Congregábanse, para lograrlo, en una choza grande, a la que no tenían acceso los hombres, y fingían que un espíritu llamado Tánuhua aparecía. Entonces hacían retumbar la tierra y gritaban fingiendo desesperación. Cada vez que los hombres escuchaban aquello, más se convencían de la existencia de aquel feroz espíritu y, por supuesto, estaban dispuestos a hacer y a darle lo que les pidiera. Las mujeres, entonces, se disfrazaban con pintura y máscaras, asustando aún más a los pobres hombres. 29

Sin embargo,éstos,un día, descubrieron el engaño y fue tal su ira que, precipitándose sobre los supuestos demonios, les arrancaron sus máscaraspudiendo así reconocer a sus mujeres. Armados de troncos, los hombres comenzaron a pegarles. Siendo los hombres más fornidos, ellas se vieron obligadas a huir para salvarse.

Impulsadapor el temor a los golpes, una joven llamada Oklhalb saltó desesperada a una cascada, transformándose en un pato.

Así pudo alejarsey desde entonces vive escondiendo su brillante plumaje en lugares solitarios. Se había enojado tanto un joven que no sólo golpeó a su mujer sino que la mató. Pero esto no gustó a los dioses, que muy 30

molestoslo convirtieron en un korikeek,en un ibis fueguino, dejándole una herida señalada en su cuello para recordarle su cruel acto.

También una anciana, en extremo gorda, y sus dos hijas, no menos gordas que la madre, corrieron aleteando desesperadas hacia la playa. Enfrentando a sus perseguidores con gran valor, la madre los detuvo. —iSalvaos!—gritóa sus hijas—.No os asustéis. La multitud que nos persigue es grande porque nuestro engaño los enfureció.

Cada uno viene armado con un garrote o un palo, pero nosotras somos más rápidas —agregó.Y fue así, mediante el asombro que causó entre los hombres, como las dos hermanas y su anciana madre pudieron alcanzar el mar. 31

"—iSalvaos!—demandó con un grito a sus hijas—.No os

asustéis de esta multitud grande, nos salvaremos mediante

unapronta huida."

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Una vez allí, se transformaron en alacush, que son los hermosos y råpidos patos-a-vapor que vemos nadando en las aguas de los canales del sur de Chile.

No obstante, siendo como eran las mujeres, tan gorditas, no pudieron volar. Obstinadas, huyeron nadando rápidamente. Tras sí dejaron una estela de agua.

Restablecido su dominio, los hombres ya no las siguieron persiguiendo.

Es posible, aún hoy, ver las manchas que los golpes les dejaron, en el pato alacush. Sólo que ya casi nadie recuerda cómo aparecieron estas marcas.

Cuarto cuento

LA TRANSFORMACIÓN DE QUIJINTECA en solo Indiscutiblemente, Quijinteca era un buen yámana. Vivía con Tutu, su mujer, y cumplía con los mandamientos de su dios Watauinehua. No había día en que, antes de ir a pescar en su anan, su canoa, no le ayudara a su mujer llevándole leña y agua hasta la cabaña, para que ella no se cansara. Generalmente, sin embargo, Tutu no respondía al cariño y a los cuidados de su esposo. Siempre decía que estaba cansada. 35

No le gustaba trabajar.

Perono vivíansolos. Con ellos vivía Alucush, el hermano menor de Quijinteca que era soltero. Igual de flojo que Tutu era Alucush. Se sentaba junto a la mujer en la arena y ambos se miraban y reían. Oíalos Quijintecay, molesto, les decía:

—Ustedes son un par de ociosos.¿Cuándo dejarán de flojear y harán algo útil?

O no lo escuchaban,o no le hacían caso, pero ni siquiera intentaban levantarse.

"Holgazanes',pensaba Quijinteca. Indignado, un día llamó a su mujer y le dijo: 36

—Deboadvertirte, mujer, que me parece muy mal que no hagasnada y te lo pases sentada junto a mi hermano Alucush. Si continúas haciéndolo, me convertiré en un ave de rapiña y los mataré a los dos. A pesar de la advertencia, Tutu no le hizo caso, entonces Quijinteca tomÓ su shusháhuaia, el gran arpón que usan los pescadores yámanas, y se internó en la selva.

Llegado allí, eligió un árbol alto y construyó su vivienda entre sus gruesas ramas. Todos los días salía de su choza-nido y observaba cuidadosamente a los pájaros.

Gritaba como ellos imitando su canto. O movía sus brazos como si fueran alas. Después de cinco semanas fue a ver a su esposa y a su

hermano. 37

¿Atin no tc has visita? tu qué se debe transformado

Alucush, preguntÓ —le cn pájaro?

burlándose.

teca. Nada contCStÓQuijin

decirteque con tanto tiempo que pasas mirando —Quisiera

aves,ya aleteasun poco, igual que ellas —serió Tutu—. Te quisiera ofrecercualquiermateria/ que te interese para que mejores tus alas Pídemelo.Esto es lo menos que puedo hacer por ti —agregó con

sorna—, pues no nos importa que te esfuerces. Cuantos menos años lo hagas,mejorpara ti. Más adelante nos podrás ofrecer algunas

clases de vuelo.

Imperturbable, Quijintecano respondió. Miró al interior de la chozay pudo darsecuenta

porque todo estaba sucio

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de que su mujer seguía igual de floja,

y desordenado.

—¿Jamáshaces nada? Intenta, Tutu, arreglar la casa para que yo pueda volver.

Odiosa, Tutu se puso a reír: —Túvuelve cuando sepas volar —ledijo.

El yámana, furioso, volvió a su choza-nido y llamó a Watauinehua, el todopoderoso.

—DiosHitapúan —lollamó, pronunciando el nombre con que los yámanas invocaban a su dios—,Hitapúan, padre mío, quiero tener las alas fuertes de un ave de rapiña para elevarme por el aire; dame las garras filudas que tienen para agarrar sus presas; que mi boca se transforme en un pico poderoso para luchar contra mis enemigos. Hitapúan, conviérteme en un vari... El dios lo oyó y, accediendo a su deseo, lo transformó en un poderoso pájaro vari.

"Lo que importa es que Quijinteca, en poco tiempo, menos de cinco semanas, se transformó en un vari.

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Lentamente Quijinteca, el vari, comenzó a graznar mientras se elevaba volando en círculos, impulsado por sus grandes alas como tantas veces había visto hacerlo a las otras aves. Alucush y Tutu, enterados de esta transformación, fueron a verlo con la intención de burlarse de él.

Mas como no lo encontraran en su choza del árbol, comenzaron a gritar en dirección a la copa de los demás árboles: —iAlfin te has transformado en vari! iTe felicito! —Nomolestarás a nadie más con tus sermones! —ledecían.

—iConfórmatecon empollar huevos! Harto de escucharlos, Quijinteca, el vari, salió de su nido y describió amplios círculos alrededor de la pareja. Estos, viéndolo

volar, comenzaron a asustarse, entonces el gran ave se precipitó sobre ellos. Indefensos y aterrorizados, se ocultaron para que el vari no pudiera encontrarlos, muy arrepentidos por lo que habían

hecho, porque en verdad no eran tan malos. Tanto, que Watauinehua, que es bondadoso, viendo que estaban realmente arrepentidos, les salvó la vida convirtiendo a la mala esposa en un chercán y al mal hermano en un pato. Aun así, hasta hoy el terror invade el corazón de Alucush, el pato y de Tutu, el chercán, cada vez que ven a Quijinteca, el vari, volar sobre ellos.

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Quinto cuento

INOCENTES INDESEABLES ¿Es que acaso quisieran saber a qué se debe que Lana, el pájaro carpintero negro, tenga un moño rojo en su cabeza? Se los diré:

Lana vivía desde su nacimiento en el nido junto a sus padres y a su hermana.

Cuando ambos hermanos fueron un poco mayoresy pudieron volar sin ayuda, buscaron un buen esconditeen el bosquey desde allí emprendían correrías por toda la selva.

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de hacer... iAy!No hubo diablura que no dejaran Pero cuando alguien intentaba descubrirlos, volaban hasta su lugar secretoy luego, como dos inocentes pájaros carpinteros, volvían al nido con sus padres. —Imprudentes,nada bueno les espera a ustedes —les

aseguraban los yámanas que vivían por allí—,están transgrediendo

los mandamientos de Watauinehua. Todos les aconsejaban:

—Loque están haciendo está muy mal. —Acabaránpor recibir un castigo por eso... —lesdecían.

Los dos pájaros, sin embargo, siguieron haciendo de las suyas.Hasta que un día, las maldadesque hicieron fueron tan grandes que su padre los llamó y les dijo: 46

—¿Quierensaber por qué los he llamado? Por los graves relatOSque he oído de ustedes. Quisiera creer que sus intenciones eran sólo divertirse, pero la forma en que lo han hecho, más que divertida, ha sido dañina para los que habitamos estas tierras. Los castigaré—ytodos pensaron: "Si tal dice su padre es porque se enojó mucho con ellos."

A nosotros nada nos pasará —lerespondió Lana. —•UÐ. Esto colmó la paciencia de su padre y, como tenía tanta rabia, tomó un canastillo de imi y pintó, con esa tierra roja, las cabezasde Lana y de su hermana.

47

"Se dice que Lana, el p

portaba bastante mal antepasados.

48

"Se dice que Lana, el pájaro carpintero, se portaba bastante mal en las tierras de sus antepasados.

49

ya no quiero que seas mi hijo, eres demasiado —¿Sabes?, perverso —ledijo y agregó: —Usufructuastede mi bondad, pero eso ya se acabó. Ahora, como castigo por cometer tantas maldades, de aquí en adelante quedarás con la cabeza roja y así todos podrán reconocerte en el acto. Así no podrás seguir haciendo de las tuyas. —iSalinmediatamente de mi nido y no vuelvas nunca más! Temerosos por lo que había dicho y hecho su padre, Lana y su hermana huyeron al bosque para esconderse, pero estaban tan confundidos que no atinaron a ubicar su antiguo refugio. Obligado por el temor, es posible ver desde entonces a Lana, el pájaro carpintero negro de cabeza roja, golpear y golpear

los árboles tratando de encontrar un lugar donde ocultarse. 50

Sextocuento

ABRAZO MORTAL liée clos mocetones Muchachón buscapleitos, sin amigos, no hablaba con nadie, ése era Kwaweishen: sólo sabía pelear.

Usaba su fuerza para luchar, según él, por orden de los dioses.

Caminaba un día por la playa cuando, de pronto, se encontró con otro joven matón, Kiayeshk, que también vivía en esa isla. Hombres fornidos, se miraron midiendo sus fuerzas. Uno de ellosestaba de más, debía abandonar la isla. Se observaron cuidadosamentehasta que... de repente y sin aviso previo, se 51

que ésta sería una sabían lucha. Ambos feroz una en de las reglas impuestas trenzaron ninguna respetarían no que mortal, lucha

con temeridad v coraje. Xtngun

por los dioses.

vencer.

Se

y mujeres a hombres de grupo reunió, de inmediato, un

a tal desafío. frente aterrados alrededor, su encarnizada. La lucha se hizo cada vez más Golpes y embates.

Temblabaentera la tierra con cada caída; cada embestida podría haber arrancado de raíz un árbol.

Rudosy terriblesluchadores.No se dejaban sorprender. Giraban uno en torno al otro. Era un dramático juego de ataque y defensa.

52

Ambos dcbian

galade

Casi logró derribarlo Kwaw llegó a tener a su contrincante delgado como un ibis fueguin•

Increlt)le fue el esfuerzo librarse de aquel fatal abrazo por los cabellos le dio tal ti siempre. N'lientrastanto, co

cuello. Advirtió aquella lucha

debía permitirse.

Ambos debían hacer gala de toda su destreza.Actuaban con temeridad y coraje. Ninguno estaba dispuesto a dejarse vencer.

Casi logró derribarlo Kwaweishen,que en algún momento, llegóa tener a su contrincante tan apretado que casi lo deja delgado como un ibis fueguino. Increíble fue el esfuerzo que Kiayeshk tuvo que hacer para librarsede aquel fatal abrazo. Entonces, agarrando a Kwaweishen por los cabellos le dio tal tirón que se lo dejó erizado para siempre.Mientras tanto, con su otra mano, comenzó a apretarle el cuello.

Advirtió aquella lucha el dios Watauinehua y decidió que no debía permitirse.

"Dijo dios:

—Seve que la lucha esferoz, y así, ustedes no contribuyena mantener la paz.

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Sabido era que él no aceptaba que los hombres se relacionaran en forma tan cruel, como si fueran bestias. A los luchadores se dirigió y detuvo la pelea:

—Ustedesno deben continuar su lucha, pues con ella contribuyen a que se desobedezcanlos mandamientos que yo tengo la obligación de mantener. Reconozcan su falta diciendo "Yo he sentido aquí la presencia de Aquel que me ve" —dijoy luego, dirigiéndose a Kwaweishen, le ordenó:—iLevántate y vuela! —mientras lo convertía en buitre. Sin comprender muy bien lo que estaba sucediendo, Kwaweishen lanzó su grito de guerra, iKashaai!,justo en el momento en que se estaba transformando. Todos los buitres, desde entonces, son conocidos por ese nombre, Kashaai, que también es como suena su graznido. 56

Además, estas aves llevan hasta hoy una cresta en recuerdo delmechÓnde pelos levantados, y una marca blanca en el cuello dejadapor el apretón de Kiayeshk. De más estaría señalar que éste no salió mejor parado. Watauinehualo convirtió en un cormorán y, debido al fortísimo abrazode su contrincante, que le dejó el espinazo tieso, debe caminardesde entonces tan erecto como esa ave.

4,

57

APÉNDICE 1 DESCRIPCIONES DE ANIMALES

59

1. CHUNGUNGO El chungungo o nutria marina habitó las zonas litorales, pero en la actualidad CUesta encontrarlo de Chiloé al norte. El arma que posee son sus caninos, ya que las garraslas

utiliza sólo para trepar o cavar la tierra, y al igual que en los cánidos, éstas no son retráctiles.

El chungungo, menor que el huillín, alcanzauna longitud que nunca sobrepasa el metro. En el agua, mientras nada, sólo asoma su cabeza.

Se alimenta de peces, moluscos y crustáceos. Tiene las patas cortas y la cola gruesa.

Olvidando su hermosura, muchos hoy lo cazan por lo valioso de su piel. Una de las características notables de este

bello animal es que da a luz, en cualquier época, una o dos crías solamente.

2. CORMORÁN Existen seis especies de cormoranes que nadan y pescan, viven, en las aguas de Chile.

El cormorán se alimenta de peces, su pico

ganchudo le permite atraparlos. Un plumaje poco impermeable lo obliga a salir a la costa

periódicamente para secarse. Tampoco pueden dormir en el mar como otras aves más adaptadas al agua. El cormorán de patas rojas es la más pequeña y la más llamativa de todas las especies. 62

1 ALACUSI 3. más el Chile, de patos De entre casi todos los , vapor a pato el duda, interesante es, sin que a/acush.Debe su nombre al hecho de produce una gran estela tras de sí al nadar

rápido junto a las lanchas en los canales.

Importante alimento de los yámanas, que

mediante un palo grande con un lazo amarrado en su extremo, lo cazaban, después de atraerlo

repitiendo el grito del macho o forzando a gritar a otro macho capturado con anterioridad. 64

4. VARI Deslizándosesilenciosamentea baja altura, el vari vuela sobre pantanos y lagunas.

Las otras aves de rapiña no pueden nadar, pero

muy poco importa esto al vari, que pasa menos tiempo en el aire que en el agua. Cuando no vuela se esconde entre juncos y cañaverales.

66

5. CARPINTERO Después de abrir un agujero en el tronco de

un árbol, el pájaro carpintero introduce en el orificio su larga lengua provista de prominencias ganchudas con las que el pájaro se apodera de los insectos

con los que se alimenta.

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Incluso su nido es fabricado por esta ave de

manerasemejante mediante su pico. Otra antigua leyenda de los yámanas nos dice:—Ensus tierras se encuentra una hermosa ensenada'del pájaro carpintero' llamada

Lanushwaia.Hoy la conocemos como Cambáceres.

69

6. BUITRE grupos sobre en noche la Ave que pasa ñires, ulmos u otros árboles. Ocupado en buscar la carroña de la cual se alimenta, el buitre y otras aves de la familia de las vultúridas

contribuyena mantener la limpieza. Él no ve, él huele su comida aunque esté muy lejos.

70

APÉNDICE 11 ALGO SOBRE LOS YÁMANAS

71

ALGO SOBRE LOS YÁMANAS Importadestacar, al hablar sobre estos

canoeros,que ellos son parte de los hombresque habitaron los mares e

islasaustralesmucho antes que ningúnotro. Sobre estas gentespodemos decir:

Elyámanafue un notable marino, loscanalesdel sur fueron su patria. 73

eran Los hombres, de escasa estatura, eran increíblemente fuertes. Sus mujeres bajas, gruesas, de miembros pequeños, y resguardaban su cuerpo con un delantal otra prenda, ambas cortas, que colgaban de los hombros para protegerse contra el helado viento de aquella región; los hombres juntaban leña y hongos

o cuidaban el fuego o reparaban las canoas; su lanza —habíatres tipos—servía para

chungungos y cazarzorros,guanacos, aves;con su arpón pescaban peces mayores,cazaban lobos de mar;

buscaragua,juntarla en grandes conchas, ir de pesca,cocinar, remar eran ocupacionesde la mujer; además,

sabíannadar mejor que los hombres.

Alregresara tierra después de una

buenajornada de trabajo, el hombre

abandonabala canoa y permanecía en tierra 75

junto a la pesca. La mujer, en la canoa,

orillaba la costa buscando un lugar

en que no hubiera playa, para esconder la embarcación entre algas, dejándola fuera del alcance de la vista; una vez asegurada su canoa, ella volvía nadando a tierra con gran pericia y se arrimaba al fuego ondulante y cálido para secarse.

Aunqueanimistas, los yámanas

y adoraban a Watauinehua, que respetaban regíatoda su vida. Los jóvenes eran

iniciadosen el rito de la pubertad; buscabansus orígenes recurriendo

a hermososy elaborados mitos. Lasceremoniaso bailes,

algomuy frecuente, se realizaban todasen chozas pintadas por el

Interiorde rojo, negro y blanco;

el alimento se preparaba

rápidamente en otras chozas reacondicionadas para la ocasión.

Ahí llegaron los blancos, y mal comprendiendo su nombre, los llamaron laganes o Yaganes, pero su verdadero nombre era YÁMANAS, es decir: gente.

78

TRICAHUE ROJO

A partir de 9 - 10 años

En ¿Quieren saber por qué les cuento CUENTOS YÁMANAS?, el autor reúne

seis relatos tradicionales de este grupo étnico patagónico ya extinguido

—pueblo nÓmadey canoero que habitó desde el Estrecho de Magallaneshasta el Cabo de Hornos—, en los cuales conocemosparte de sus creenciasy costumbres, y su conciencia religiosa que reconoce la €xistenciade un ser supremo llamado Watauinehua. Dedicados a la cacería de lobos marinos y especiesterrestres, además de la recolección de vegetalesy moluscos, en estos cuentos el pequeño lector aprenderá acerca de su modo de subsistenciay su relación con los animales del entorno.

Saúl Schkolnik (1929) es un escritor ampliamenteconocidoen el mundo de la narrativa infantil y juvenil chilena. Sus obras, de gran delicadeza y finura, amenas,

animadaspor una concienciaecolÓgicay el sentido ético, han hecho un gran .

aporte a nuestra literatura y al rescate de las tradiciones étnicas para su difusión do de la escuela.

Editorial Don Bosco

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