Presion de Los Padres en La Iniciacion Deportiva
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Presion de Los Padres en La Iniciacion Deportiva...
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“Presión de los padres y del entorno en la iniciación deportiva”
Lic. Diego Scaraffia Año 2014
RESUMEN
La iniciación deportiva es quizás el momento más importante e interesante para generar en el niño hábitos saludables adecuados y conocimientos correctos hacia la práctica deportiva. El presente estudio analiza la actitud, el seguimiento y el conocimiento de los padres del Deporte escolar y en qué medida esto influye en la iniciación deportiva de sus hijos. Los resultados destacan que la mayor parte de los padres orientan el deporte de sus hijos hacia cuestiones saludables de ocio y tiempo libre. Los padres están satisfechos por la oferta de actividades deportivas y por la formación de los monitores, sin embargo el nivel de satisfacción se reduce en relación con las i nstalaciones deportivas. Por último, es de destacar que los padres presentan cierto desconocimiento de qué supone el deporte para la salud, así los padres tienen una idea del deporte ausente de riesgos y que el entrenamiento deportivo en edades precoces es sinónimo de salud. Palabras clave: deporte, niños, padres, especialización.
INTRODUCCION
Parece y hasta suena extraño hablar de “presión” en la iniciación deportiva de cualquier chico/a en cualquiera que sea su disciplina, ya que por la edad y el momento del que estamos hablando uno piensa que deberían existir solamente sensaciones placenteras y divertidas en estos niños. Así es, estamos hablando de chicos de 6 a 12 años aproximadamente, donde el común denominador en el que todos pensamos cuando imaginamos un chico jugando a la pelota, al tenis o nadando seria que este niño la está pasando bien y que sobre todo le gusta la actividad que está realizando. Desde pequeños crecemos jugando, el mundo lúdico en nosotros tiene principal relevancia en el desarrollo de nuestras vidas, apr endemos jugando, conocemos el universo extraño que nos proponen los adultos desde el juego, nuestros primeros amigos del barrio o el club los hicimos a través de algún juego o deporte, menos mal que existió la mancha, el alto ahí, las figuritas y muchísimos juegos más que nos adentraron en un mundo tan propio como el de la niñez. Aquellos “pibes” que iban al club del barrio o al más cercano a practicar un deporte lo hacían con un solo motivo, divertirse. Pero ese es su objetivo, único y soñado, ir a jugar con sus amigos en el entrenamiento o en la placita de la esquina se transformaba en la tarde perfecta para cualquier chico gustoso del deporte. El “problema” aparece cuando los adultos inyectan sus fantasías, frustraciones, miedos o proyectos en estos chicos, y comienzan a presionarlos pidiéndoles resultados o que hagan cosas que quizás todavía no están preparados o maduros para entre gar. Padres, entrenadores, profes de educación física en la escuela, o simplemente el vecino o tío del niño, muchas veces funcionan como demandantes excesivos del chico. Quizás porque ven en el que tiene habilidades distintas, por su contextura física, o simplemente porque creen que si o si tienen que realizar determinado deporte cumpliendo con resultados o desempeño. Como deportista desde los 6 años cuando empecé a jugar básquet me ha tocado ver compañeros salir de la cancha porque sus padres los gritaban u otros padres l os insultaban, entrenadores totalmente desquiciados por un resultado, publico festejando la derrota de los contrarios a sus hijos de tan solo 9 años como su hubieran ganado un mundial, madres retirando del colegio antes a sus hijos porque ese día juegan, y un sinfín de factores que nos lleva a pensar este tema como una problemática que tiene trasfondo en el cómo somos como individuos sociales. Hoy en día cada vez es más temprana la salida de los chicos de sus clubes de origen, a los 9 o 10 años ya hay chicos que son “vendidos” a otros clubes más grandes, esto pasa mucho en el futbol, pero se está acrecentando también en otros deportes populares como el básquet por ejemplo, donde hoy ven a chicos de 12 o 13 años y son fichados para clubes
de liga, los desarrollan hasta los 16 más o menos y allí los incorporan en los equipos de ligas junior. Es decir que estamos hablando de un chico de aproximadamente a los 18 años ya tiene 4 o 5 años de entrenamientos con proyección de una carrera profesional. Y ni hablar de deportes individuales como tenis, golf, gimnasia artística, donde de tempranísima edad la competencia y la perfección van de la mano. Muchas veces estos niños no soportan tanta presión, tanto de sus padres, entrenadores o del entorno, y abandonan el deporte a temprana edad. Es tal el nivel de exigencia que estos chicos perdieron el don del jugar, la diversión se cambio por los resultados y en los niveles más extremos de aquellos deportistas en proceso de ser profesionales ya poco se disfruta del juego, más bien se entrena y se compite para “ser un campeón”. Es por esto que he pensado abordar este trabajo desde una pregunta o hipótesis que tiene que ver con el niño deportista, con lo que lo caracteriza a él o ella, nuestra pregunta nos plantea si la influencia de las presiones de padres y entorno dificultan lo placentero de lo lúdico, la diversión que este chico siente o sentía al jugar, es por eso que trabajaremos con la siguiente hipótesis:
¿Cómo incide la pr esión de los padr es y del entor no en el disfr ute del deportista en el periodo de in ici ación?
MARCO TEORICO
Concepto de iniciación deportiva El proceso de la iniciación deportiva comienza paralelamente a la iniciación escolar, es decir entre los 6 a los 12 años aproximadamente. Cuando hacemos referencia a este concepto nos adentramos en el primer encuentro que tiene un niño con la actividad deportiva que realiza y el aprendizaje de la misma con un acompañamiento pedagógico con un profesor, entrenador o preparador físico, aquí la enseñanza abraza al niño en todo sentido ya que deberá aprender movimientos especiales, normas y reglas especificas, compartirá el proceso de aprendizaje de diferentes destrezas acompañado de sus entrenadores y compañeros, ya que en esta etapa de acercamiento generalmente se trabaja en grupos. Es preciso y fundamental que el niño pueda experimentar el placer del juego, ya que en esta etapa lo lúdico tiene principal papel en la vida de ellos, representa su manera de conocer el mundo y de expresarse, entonces es necesario que esta iniciación deportiva este conjugada entre aprendizaje y juego, para que la experiencia total sea placentera y positiva, ya que podría determinar en la elección de años posteriores en seguir tal deporte o en el abandono del mismo si existieran otros factores que así lo determinara. Lera Navarro con dice en relación a la iniciación deportiva que “d esde un pun to de vista gené rico, representa un proceso cr onol ógico en el tr anscur so del cual un suj eto toma contacto con nu evas experi enci as regladas sobre una acti vidad f ísica-deportiva. Tr adici onal mente, se conoce con el nombre de ini ciaci ón deporti va el per íodo en el que el n iñ o empi eza a apr ender de forma específica l a pr ácti ca de un o o var ios depor tes (B lázquez, 1986: 35). T ambi é n se enti ende por iniciación deportiva el pr oceso que permi te al indi vidu o tener un a operati vidad básica sobre algun a de las modalidades de la actividad deporti va en l a situ ación real de la competición ” (S. Bañuelos, 1984: 173)”. El concepto de iniciación deportiva NO hace referencia al primer momento en que el niño realiza un deporte, sino más bien tiene que ver con el proceso pedagógico enmarcado en el ámbito del inicio de un deporte. Hernández Moreno nos dice que “la iniciación deportiva es el proceso de enseñanza - aprendizaje segui do por u n i ndi viduo, para la adqui sici ón del conocim iento y la capacidad de ejecución practica de un deporte, desde que se toma contacto con el mismo hasta que se es capaz de jugarlo con adecuación a su estructura funcional”. (Hernández Moreno y Alt. 2000:12). Podríamos agregar que el deporte en las primeras edades debe entenderse como una actividad más que va a ayudar a la formación del niño y del adolescente. En lo pedagógico del deporte en estas edades no debe ir en contra de un proceso de enseñanza-aprendizaje correcto donde todos los jugadores vayan mejorando en la medida de sus posibilidades.
Desde este punto de vista es necesario tener en cuenta que en la práctica deportiva, ciertos puntos como ser, los valores positivos que puede aportar el deporte, y su contribución a una educación más integral del niño o adolescente. Características básicas del deporte educativo Para poder utilizar el deporte como un contenido más en l a formación motriz del niño, se debe cumplir una serie de características que le harán ser un buen instrumento educativo. Contreras (1989) estudia el deporte educativo y la aplicación de la iniciación deportiva estableciendo que el deporte no es educativo por sí mismo, sino que será la metodología que utilicemos en su enseñanza, las condiciones en las que se desarrolle, lo que hará que nos pueda servir como medio de formación. Será el profesor/entrenador el que liberará al deporte de sus características no educativas como el elitismo, la falta de coeducación, la excesiva importancia del resultado o la especialización temprana para que pueda ser utilizado como un contenido educativo Díaz Suárez (1995) añade que el deporte bien utilizado nunca se podrá poner en duda como medio educativo, de recreación o esparcimiento y para acrecentar o mantener la salud. Gutiérrez (1998) añade que el deporte será educativo o no en función de cómo el educador oriente esa actividad y cómo organice las experiencias motrices, cognitivas y afectivas que caracterizan cada actividad deportiva. En definitiva, los profesores o entrenadores tendrán la principal responsabilidad de que la práctica deportiva se desarrolle de forma más educativa. Para ello, el M.E.C. (1989) propone los siguientes principios:
Tendrá un carácter más abierto, dirigido a todos aquellos que quieran participar, evitando las discriminaciones por razón de nivel, sexo, u otras. Tendrá unos objetivos más globales, no solo motrices. De esta forma contribuiremos a entender el deporte como parte d e la educación de forma mucho más global. Tendrá unos planteamientos que superen la excesiva importancia que se le suele dar a los resultados, buscando otros aspectos importantes que el deporte puede ofrecer y que van a ser más útiles y educativos en la formación de nuestro alumnado.
Análisis de los elementos básicos que intervienen en la enseñanza del deporte Aunque son muchos los posibles elementos que pueden influir a la hora de enseñar el deporte durante la etapa escolar, nosotros hemos seleccionado cuatro que nos parecen interesantes, fáciles de entender y de aplicar: el tipo de deporte que practicamos; la relación de este deporte con los mecanismos de percepción, decisión y ejecución; la importancia que va a tener la técnica y la táctica en función de la relación anterior; y, por último, la forma de enseñar que se plantea en función de los tres elementos enumerados.
Tipos de deporte
En general se suele plantear una metodología similar en la docencia del deporte en edades de iniciación, pero en realidad deberíamos analizar el tipo de práctica que desarrollamos con objeto de adecuar nuestra actuación a la especificidad de esta. Hernández Moreno (1994) realiza una clasificación sobre el deporte atendiendo a la presencia o no de compañeros y adversarios y que nos sirve para realizar posteriormente este análisis. Deportes psicomotrices o individuales. Serán todos aquellos deportes en los que participamos individualmente sin la presencia de compañeros ni adversarios (salto de longitud, lanzamiento de jabalina). Deportes de oposición. Serán todos aquellos deportes individuales en los que nos enfrentamos a otro oponente. Abarcaría a todos aquellos deportes denominados tradicionalmente de adversario (tenis o bádminton individual, deportes de lucha). Deportes de cooperación. Serán todos aquellos deportes en los que participamos dos o más compañeros sin la presencia de adversarios (patinaje por parejas, gimnasia rítmica por equipos). Deportes de cooperación-oposición. Serán todos aquellos deportes en los que un equipo de dos o más jugadores se enfrenta a otro de similares características. Incluimos aquí todos los deportes colectivos. Hernández Moreno (1994) distingue tres grandes grupos dentro de estos deportes. Primero estarían aquellos deportes de cooperación-oposición que se realizan en espacios separados y con participación alternativa de los intervinientes (voleibol o tenis dobles). En segundo lugar estarían aquellos que se realizan en espacio común pero con participación alternativa (frontón por parejas). Por último estarían aquellos que se desarrollan en espacios comunes y con participación simultánea (baloncesto, fútbol o balonmano).
Objetivo de la iniciación deportiva
El objetivo de la iniciación deportiva, refiriéndonos a este en un club o institución deportiva, deberá ser generar el aprendizaje especifico de la disciplina deportiva que el niño este realizando, adentrarlo en el mundo particular de ese deporte y generar conocimiento de las habilidades necesarias para practicarlo, no solo conocer sino mas bien “conocer para hacer”, es decir fomentar nuevas conductas que tengan que ver con las esperadas por la conducta deportiva especial de esa elección.
Marcelo Roffé en su libro “Mi hijo el campeón” nos dice “que el deporte es una grandísima oportunidad de desarrollo y maduración, no solo física sino también mental y emocional”. Según el autor, los beneficios del deporte en la infancia son:
Desarrollo de las destrezas y aprendizaje de las habilidades. Desarrollo de la personalidad a través de la motivación para la competencia. Fortalecimiento de la autoestima en el respeto y la aceptación de sí mismo, de sus fortalezas y debilidades. Desarrollo de habilidades sociales. Aprendizaje de su rol dentro de un equipo y reconocimiento del otro (compañero o rival). Aprender a aceptar un reglamento que es el mismo para todos y que conlleva aceptar posibilidades y límites. Desarrollo de los procesos de percepción, evaluación, decisión y acción.
Es sumamente importante dejar en claro que sea el deporte o la actividad que se realice, esta etapa es sumamente especial en cada individuo, ya que representa el adentramiento en un mundo particular que es diferente a cualquier otra actividad, marca un camino diferente en cada persona de acuerdo con sus habilidades y destrezas así como también con sus dificultades y limitaciones, y posiblemente en esta etapa el sujeto si ha sido capaz de experimentar aprendizaje y placer pueda sostener la elección de tal deporte, ya que poder vivenciar una actividad con gusto y satisfacción por lograr determinados movimientos u objetivos hace que posiblemente se mantenga en el tiempo, crear constancia, compromiso y hasta quizás el paso a la siguiente etapa en el deporte, etapa de desarrollo deportivo, sea mucho más fácil. La transición de una etapa hacia la otra si ha tenido buenas experiencias seguramente sea más natural en el proceso.
LA INICIACION DEPORTIVA Y LAS PRESIONES DE LOS PADRES La iniciación deportiva y las presiones de los padres en este siglo es compleja, hay diferentes factores para analizar el niño o adolescentes, los padres la cultura y la sociedad donde se desarrolla el deporte, en principio no debemos olvidar que más allá del entrenamiento mental en el deporte hay un sujeto de lo inconsciente que tiene un deseo desconocido para él , su personalidad y carácter, por otro lado los padres que también tienen su deseo inconsciente o a veces conciente pero es lo que desean y lo niegan, es decir, vuelcan su propio deseo en el niño o joven deportista, su deseo incumplido, frustrado y ven en sus hijos su propia realización guiándolos inconscientemente por su propio narcisismo secundario, de ahí es donde en un principio nacen las presiones sobres sus hijos ya que ven en ellos el logro de sus propias metas y el cumplimiento de estas en sus propios hijos es su propia realización, es una variable compleja y estructural de ambos sujetos, donde el joven deportista también presenta su yo ideal y su ideal del yo, lo cual se mueve en una constante lucha interna entre el deseo suyo y de sus padres. Asimismo, los padres influyen notablemente tanto de manera inconciente o conciente sobre su hijo palabras más palabras menos dice el Lic. Roffe en su libro sobre iniciación
deportiva y padres “no hay manual para ser padres alguien tiene ese saber certero de que lo que hace uno está bien o está mal, no hay libro que nos enseñe nosotros si sabemos la función del padre limites, donaciones, etc, por eso sigo pensando que deberían existir ESCUELA PARA PADRES no para enseñar a como ser padres si para advertir ciertas cuestiones que los padres piensan que es para su bien y en realidad es para su mal, hoy más importante todavía, donde el consumismo nos arrasa con la postmodernidad, también deberíamos incluir esto en la iniciación deportiva y en nuestros apuntes cuando estamos “asesorando a padres”, difícil tarea , pero hay leyes que no varían a través de los siglos me refiero a leyes de lo inconsciente, en la iniciación deportiva si tomamos la primera etapa 5 6 año en adelante hasta el comienzo de la pubertad el niño comienza su periodo de latencia, el tiempo para empezar a aprender sublimando su sexualidad al aprendizaje seria para nosotros una etapa muy fértil para afianzar reglas, valores y conocimientos dirigidos hacia el juego ya que un niño a esa edad primero se tiene que divertir, ver y sentir el juego y el deporte como placentero y después como una competencia donde hay que ganar si bien todos los niños quieren ganar no le gusta perder lo cual también hay que trasmitirles que en la vida se pierde y se gana y que a veces nos toca perder y a veces ganar y de la perdida se obtiene una ganancia que en el momento no se ve. A través del juego y el deporte se afianzan en el niño valores, creencias, reglas, limites, solidaridad, respeto, compartir con el otro, además cada hijo es individual y único no es lo mismo un hijo que es hijo único, a un niño que tiene 6 hermanos fueron historias diferentes.
Porque les gusta practicar deporte?
Si realizamos esta pregunta a alguien con frecuencia nos contestará porque es divertido. Y es una respuesta que debe ser suficiente. Sin embargo, si nos preguntamos por qué es divertido, la respuesta puede ser más complicada, depende de cada práctica deportiva, ya que cada una tiene sus propias peculiaridades y aspectos divertidos. También deberíamos atender a aspectos de Geografía, política e Historia. Por ejemplo, para nosotros no es muy divertido ver un partido de cricket por la televisión, de hecho, podemos desconocer las reglas de este juego o el objetivo del mismo. Es más, incluso podemos desconocer los aspectos divertidos de este deporte. En cambio, en la India, es el deporte mayoritario. Los partidos son muy seguidos por la población, lo que hace que en este país sea un acontecimiento divertido de contemplar y practicar. La razón del éxit o del cricket en este país viene de la época del Colonialismo, ya que fue conquistada por el Imperio Británico, el cual le trasladó los conocimientos sobre criquet. En la India todo el mundo sueña con representar a su país en su selección nacional de criquet, ya que se compone de los mejores jugadores del mundo
PADRES Y DEPORTE El tema es cuando en esta primera etapa aparecen factores que dificulten el normal desarrollo y hacen que el niño comience con algunos “problemas” relacionados en su actividad deportiva. El punto central de este trabajo tiene que ver con un factor influyente y determinante en este proceso deportivo, los padres y el entorno. Cuando hablamos de los padres negativos para el deporte, hacemos referencia a esos padres que presionan por demás a sus hijos en el deporte, le exigen cosas que quizás todavía no están preparados para realizar, y ponen sus deseos y frustraciones por encima del niño, dificultando el sano desarrollo del proceso de iniciación deportiva y competencia. El papel de los padres es sumamente significativo para cualquier chico, ya que los primeros son todo para los hijos, un niño varón ve a su papá como su ídolo como un súper héroe, la palabra y la imagen de “ese” padre es realmente importante, entonces este chico hará todo para satisfacer y agradar a aquel hombre. El inconveniente aparece cuando este padre no puede ponerse en otro lugar que no sea el de la exigencia y castigo, en el deporte el niño para poder disfrutar necesita del acompañamiento de su papa o mama, pero no que se pongan ellos al lado de el a realizar un actividad o le estén gritando desde la tribuna todo lo que tiene que hacer. Los padres deben pasar a participar como extras de una película, en donde el protagonista es el niño y su equipo o deporte. Los padres deben dejar de lado sus logros o frustraciones y acompañar a su hijo de forma tal que él pueda descubrir y lograr sus propias conquistas o derrotas. Papa y mama deben pasar a segundo plano, no tomar partido o protagonismo en el desarrollo de la actividad que su hijo realice. Los niños que realizan deporte y los disfrutan se los puede ver realmente lo satisfecho que están, sus caras desbordadas por una sonrisa infinita y sus cuerpos despatarrados corriendo por todos lados de felicidad son el mejor reflejo de lo saludable que es el deporte a cualquier edad, primordialmente en esta etapa a los niños el deporte le brinda muchas cosas fundamentales para el resto de la vida, y no solo en lo deportivo. Pero la contracara de estos niños son aquellos que no pueden disfrutar lo que están haciendo por consecuencia de factores que intervienen y dificultan su desempeño y satisfacción. A veces hay padres que sin darse cuenta de un momento a otro están colgados en el costado de la cancha gritando a sus hijos de manera cruel, o quizás no solo a sus hijos sino también a sus compañeritos, al entrenador, al árbitro y hasta a los chicos del equipo adversario. Recuerdo una situación particular y personal, donde en mi equipo de basquetboll teníamos un compañero que era excelente jugador, con un físico privilegiado y unas condiciones espectaculares para este deporte, era un chico más bien tímido, muy buen compañero y gran deportista. En los entrenamientos la rompía prácticamente era
imposible marcarlo y hacerle juego. En los partidos era infalible, jugaba como los mejores, pero con la particularidad que en los partidos que iba su padre a verlo prácticamente no jugaba. Se la pasaba todo el partido mirándolo a su papá, hacia alguna jugada, tiro o movimiento y automáticamente su vista se dirigía a su padre, que con algún gesto “aceptaba” o “rechazaba” eso que su hijo había realizado. Sumándole que este padre desde que empezaba el partido hasta que terminaba se la pasaba gritando y dándole directivas a su hijo. En algunas oportunidades lo vi a este compañero con lagrimas en los ojos y a punto de explotar en llanto por la situación que vivía, incomoda y frustrante para él. Incluso manifestaba que a veces le daba vergüenza que vaya su padre a verlo. Estos padres con esas características pueden ser tan influyentes en sus hijos que pueden derivar en el abandono deportivo de estos. En algunos casos es tanta la presión, la frustración y la impotencia que experimentan los chicos que no pueden manejar las emociones y por desgracia dejan el deporte. Según el Lic. David Llopiz, en su artículo “El papel de los padres en la iniciación deportiva”, estas son algunas de las funciones importantes que deberían cumplir los padres en relación al deporte y sus hijos: 1) Favorecer la participación deportiva de los niños y niñas. Los padres deben favorecer la participación de sus hijos en actividades físicas y deportivas además de las propias del curriculum educativo. En este sentido es importante que como padres conozcan la oferta de su localidad y que les animen a participar, siendo el propio ejemplo de los padres la mejor estrategia para favorecer la participación deportiva de los hijos. 2) Ayudar a sus hijos e hijas a que decidan cómo practicar deporte. Los padres son, en la mayoría de los casos, quienes mejor conocen a sus hijos. Por ello deben asesorarlos en la elección del deporte y el grado de implicación. Esta elección se debe basar en las preferencias de los hijos, siendo el papel de los padres el de ayuda a la hora de analizar las ventajas e inconvenientes de las diferentes opciones. 3) Ayudar en la elección del deporte a partir de dos principios básicos: cada niño es importante, cada niño es básico. En este sentido es importante que los padres ayuden a la elección del deporte de sus hijos teniendo presente características del niño como su condición física, su autoestima o su confianza. 4) Mostrar interés por las actividades deportivas de los hijos. La comunicación con los hijos, sean deportistas o no, es uno de los pilares básicos de la educación. Saber escuchar y estar disponible cuando los hijos necesita n algún consejo es uno de aspectos cruciales para poder ayudar a un hijo deportista. En su vida deportiva va a tener momentos en los que sentirse escuchado y apoyado por sus padres facilitará la aceptación de los resultados. 5) Asegurarse que los niños practican deporte de una manera saludable. 6) Ayudar en las tareas logísticas del club o escuela deportiva. La participación de los niños exige importantes esfuerzos organizativos. Por ello es fundamental la implicación de los padres en las tareas de apoyo a los clubes, encargándose de temas económicos, logísticos o de relación con otras entidades.
Es importante que los padres se involucren de manera positiva con la actividad de sus hijos, fomentando la salud y las buenas prácticas, posibilit ando que el chico pueda compartir con ellos sus actividades, que se sienta apoyado y acompañado, no solo en el respeto por su deporte, sino también en el acompañamiento cuando practica y cuando juega. Un chico que ve que el disfruta y que sus padres di sfrutan con el experimenta una sensación placentera del juego y el deporte, aumenta su confianza y seguramente esto enriquezca el proceso de crecimiento en su deporte y establezca una relación sana entre deportista-deporte. Siguiendo al autor antes mencionado, citando a Smoll, podemos ver distintos tipos de padres en relación a sus comportamientos en las competencias de sus hijos:
Padres entrenadores de banda: Son aquellos que entiende o creen entender el deporte que practica su hijo, por lo que realizan frecuentes sugerencias a los deportistas, que pueden contradecir al entrenador y generar desorganización en la estructura interna. Padres excesivamente críticos: Son aquellos que nunca están satisfechos con la actuación de su hijo. Suelen reprenderlos y regañarlos, enfocando la práctica deportiva como algo más suyo que del propio hijo. Suelen tener expectativas y objetivos poco realistas respecto a la progresión deportiva de sus hijos. Padres vociferantes: Suelen colocarse de forma próxima a los jugadores y actúan gritando e insultando a jugadores, árbitros e incluso a los jugadores de su propio equipo. En definitiva son aquellos que no logran contenerse en la grada y continuamente manifiestan sus pensamientos en voz alta, gritando y dirigiéndose a cualquier persona del campo. Padres sobreprotectores: Hacen referencia a aquellos que presentan una exagerada preocupación por los riesgos que comporta el deporte que practican sus hijos. Padres desinteresados: Fundamentalmente se caracterizan por no reconocer el valor que el deporte tiene en la educación de los más jóvenes. Se caracterizan por no acompañar ni asistir a los entrenamientos y competiciones de sus hijos. En definitiva, no se preocupan por el desarrollo de la actividad deportiva.
Marcelo Roffé, en su libro “Futbol de Presión” habla de tres tipos de padres: 1. Padres indiferentes: aquellos que no saben nada de sus hijos, no se preocupan por nada ni les preguntan por nada. 2. Padres equilibrados: son aquellos que se meten lo justo y necesario. Son padres que se preocupan en sus hijos y confían en ellos, así como también confían en los entrenadores. Disfrutan verlos jugar, no exigen ni presionan, más bien acompañan y comparten.
3. Padres sobreprotectores: pesados, invasivos, presionan a sus hijos. Están encima de sus entrenadores, del equipo, no confían en ellos, presionan como queriendo ayudar pero terminan metiéndose de mas y mal. Roffé propone un modelo para armar padres, en relación a algunas de est as características que hemos mencionado. Tratando de fomentar nuevas prácticas para aquellos padres que se involucran de forma disfuncional con sus hijos y el deporte. Este modelo se compone por el padre que:
Ayuda
Acompaña
Esta en las buenas y malas
Equilibra
Se apasiona sin presionar
Sabe recibir
Da
Reconoce a su hijo como alguien que siente y piensa por si mismo
Aconseja
Ama
Creo que trabajar para lograr que la mayor parte de los padres puedan transformarse en este modelo seria uno de los objetivos primordiales de los psicólogos del deporte. Ya que este modelo propone una relación saludable, positiva y posibilitadora del deportista, mejorando y aclarando el camino que recorrerá en su disciplina. Como hemos visto el papel de los padres es fundamental, ya sea de manera positiva o negativa, fomentando confianza y disfrute en el deporte o presionando y frustrando al chico. El propósito del club, entrenadores, y padres en la etapa de la iniciación deportiva debería estar dirigido en la enseñanza, desarrollo y crecimiento de las habilidades sociales, físicas, emocionales y psicológicas que se ponen en juego en el deporte. Tratando de no solo formar buenos jugadores o deportistas, sino también buenas personas. ENTORNO Y DEPORTE El diccionario define a entorno como “un conjunto de circunstancias, físicas y morales que rodean a una persona o cosa e influye en su desarrollo”. Dentro del entorno deportivo existen muchísimas áreas de influencia que demarcan el desenlace de un club, un equipo, un deportista y la historia y realidad que se viven en ello. Solo para nombrar algunas de ellas, dentro de las más importantes, encontraremos que el entorno de un deportista está rodeado por:
Entorno social
Entorno afectivo
Entorno institucional
Entorno económico
Entorno competitivo
Entorno profesional
Solo por nombrar las más importantes, observamos que el deportista se encuentra inmerso dentro de un entorno distinto a los demás, ni mejor ni peor, solamente diferente por la actividad que realiza. Existiendo diferencias significativas entre el deporte profesional y el amateur, ya que son realidades muy diferentes y se ponen en juego variables muy distintas, principalmente el entorno económico, competitivo y profesional es otro. En el deporte de iniciación creemos que es sumamente importante que el deportista este contenido y sostenido por su familia, lo cual es necesario para que el niño pueda realizar una actividad deportiva de manera sana y segura. Este entorno familiar deberá estar acompañado por el institucional, de manera que pueda un chico desenvolverse libre y sanamente en un club o institución deportiva, desarrollándose en cualquier deporte con las condiciones favorables para el seguimiento del proceso y que año tras año dentro del deporte encuentre posibilidades acordes a sus objetivos. El entorno social es muy importante en relación a que dependerá mucho de las condiciones que rodeen al deportista y de acuerdo a las posibilidades que tenga de hacer un determinado deporte. Lo social tiene que ver con el barrio, el club como institución social y deportiva, con el lugar y las personas, y con las facilidades o dificultades que se encuentran en el deportista ante determinadas condiciones. Hoy en día el entorno profesional dentro de los clubes esta cada vez más desarrollado, ya que hay mas seguimiento y trabajo con profesionales de las áreas que contemplan el deporte. Esto ha mejorado y enriquecido el deporte, ya que es muy común que en las instituciones deportivas existan médicos, kinesiólogos, psicólogos, nutricionistas, y demás personas especializadas en post de sumar y mejorar tanto el rendimiento como la salud del deportista. Esto a la vez que optimiza el deporte lo complejiza, ya que existen áreas de especialización en cada una de estas ramas profesionales de la salud, es decir que hoy en día no alcanza con una profesión, sino mas bien el profesional involucrado en deporte deberá estar especializado en ello. Así ocurre en los deportes, existe cada vez más un perfeccionamiento del mi smo que lleva a entrenadores, preparadores físicos y dirigentes a prepararse, formarse y seguir especializándose, sino quedan en el tiempo y desactualiz ados. Este mismo entorno, el del avance de las especializ aciones y tecnologías, lo toca de lleno al deportista. Se le exige más y se le pide excelencia. Antes alcanzaba con entrenar e ir al gimnasio, luego se le incluyo la preparación física incorporando un preparador físico al cuerpo técnico, luego se le exigió al deportista un alimentación acorde entonces se incorporaron las nutricionistas, posteriormente se acepto el trabajo de los psicólogos deportivos porque mejoran el rendimiento y son necesarios para el mejor desempeño de todos los involucrados, y hoy en día se han incorporado tecnologías que hacen mejor al deportista. Desde enchufarlos en maquinas, sacar promedios, velocidades y rendimientos
óptimos en condiciones extremas, hasta estudiar e investigar sus emociones, estrés, mi edo y un sinfín de variables que siguen mejorando y complejizando la i ndustria del deporte. Lo antes mencionado lo podemos pensar en los deportistas profesionales, ya que uno cree que a ese nivel es lógico que estén tan especializados. Pero no necesariamente es así . Hay deportistas de 13 o 15 años que acuden de manera individual al psicólogo, tienen su nutricionista y personal trainer, y quizás son deportistas amateurs aun. Cuando estamos en presencia de un entorno que demanda cada vez más y mejor, que la exigencia es la excelencia, que se busca la victoria si o si, donde está más valorado el logro de campeonatos que el mejorar el rendimiento si estar obsesionado por el resultado, pareciera ser imposible pensar que esta realidad no tocara a los niños que están en la etapa de iniciación deportiva. A ellos también de alguna forma a medida que van creciendo y se acercan a la segunda etapa del deporte se les comienza a exigir. Mientras más grandes van siendo se les exige mucho más en la competencia y rendimiento. Entonces aparecen las pruebas en clubes grandes, los torneos nacionales individuales según el deporte o de equipo, los viajes, el aumento de auto-exigencia desde chicos para mejorar su rendimiento acrecentado a veces por sus padres, entrenadores, dirigentes o club. Ya que una promesa deportiva para un club se transforma en un valor económico a futuro, una inversión a la rgo plazo que tendrá rédito en el haber institucional. Surgen los representantes, ofreciéndoles a los chicos y sus familias el s ueño del pibe, vivir del deporte, los mediadores entre clubes y entrenadores, los que fichan deportistas y los introducen en alguna institución, en fin aparecen personajes diferentes en la vida de un chico de quizás 12 años que antes disfrutaba del jugar y que ahora con sus grandes condiciones debe decidir si se muda de provincia o de club para transformarse en un destacado deportista. A veces esto puede salir muy bien, y con la contención indicada y una buena elección puede surgir un gran deportista y gran persona. Pero no siempre esta tan cuidado y acertado el panorama cuando se apuran las cosas. Cuando se le pide a un chico de 11 años que firme un contrato, que toda su familia se mude con él a determinado país o lugar, que entrene tantísimas horas o que se auto-gestione como si fuese un adulto, no siempre traerá resultados sanos ni positivos. Muchas veces las presiones del entorno, por querer “mejorar” u ofrecer un sueño, terminan siendo contraproducentes y deficientes en las simples practicas de un juego o deporte. Entonces aparece la realidad que la persona, en este caso un niño, termina inmerso en una vorágine destructiva, en donde la única posibilidad de escape es justamente eso, escapar y abandonar el deporte. La iniciación deportiva y las presiones de los padres en este siglo es compleja, hay diferentes factores para analizar el niño o adolescentes, los padres la cultura y la sociedad donde se desarrolla el deporte, en principio no debemos olvidar que más allá del
entrenamiento mental en el deporte hay un sujeto de lo inconsciente que tiene un deseo desconocido para él , su personalidad , carácter , por otro lado los padres que también tienen su deseo inconsciente o a veces conciente pero es lo que desean y lo niegan, es decir vuelcan su propio deseo en el niño o joven deportista, su deseo incumplido, frustrado y ven en sus hijos su propia realización guiándolos inconscientemente por su propio narcisito secundario de ahí es donde en un principio nacen las presiones sobres sus hijos ya que ven en ellos el logro de sus propias metas y el cumplimiento de estas en sus propios hijos es su propia realización, es una variable compleja y estructural.
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