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HISTORIA DE LAS PARAFILIAS HISTORIA
La historia de la parafilia es tan antigua como la del hombre y, tal vez, constituya uno de los que más curiosidad e interés haya despertado, en todas las épocas de la humanidad. Desde Adán y Eva, se ha estado restringiendo el que suele ser sin límites al comportamiento sexual de los humanos. Según cada cultura o cada religión, así se permitían o se castigaban las costumbres sexuales de una época dada. Por ejemplo, las relaciones sexuales con animales (zoofilias), son prácticas realizadas en personas del campo y no eran consideradas como algo malo; en cambio, en personas que viven en las ciudades, esta actividad puede considerarse como una enfermedad mental. Han surgido otras parafilias o se han ido trasformando, debido a los cambios que hay en las sociedades; así encontramos que cuando apareció el teléfono surgió una nueva parafilia cuando realizan llamadas obscenas (escatología telefónica), lo mismo sucede con la computadora y otros medios. LA BIBLIA
Las “relaciones sexuales prohibidas” son mencionadas en las Epístolas de San Pablo en cuatro oportunidades: Corintios 6:9 y 6:19, Timoteo 1:10 y Hebreos 13:4.
Ya en el Viejo Testamento, en el Levítico, en el Capítulo 18:22, se hace mención a la homosexualidad, a la zoofilia en el 18:23 y al incesto en el 18:6. En el Deuteronomio se hace referencia al travestismo masculino y femenino en 22:5.
San Pablo en las Epístolas, retoma el tema de la homosexualidad en Romanos 1:24, Corintios 6:10 y Timoteo 1:10 y sobre los afeminados en Corintios 6: 9.
Yavé habla de actos sexuales “infames, “abominables”, “maldades”, “actos pecaminosos”, “costumbres horribles”. Es decir, las parafilias y variantes sexuales no son problemas nuevos para el ser humano.
GRECIA y ROMA El estudio racional y sistemático del comportamiento sexual humano data de los griegos antiguos. Médicos como Hipócrates y los filósofos Platón y Aristóteles, los cuales pueden ser considerados como los antepasados legítimos de la investigación sexual. Estos hicieron observaciones extensas y ofrecieron las primeras teorías elaboradas con respecto a las respuestas y disfunciones sexuales, la reproducción y la anticoncepción, el aborto, la legislación de la sexualidad y la ética sexual. En la Roma Imperial, médicos griegos como Sorano y Galeno avanzaron y sistematizaron el conocimiento sexual antiguo. El trabajo de estos, alternado con el de eruditos islámicos posteriores, dedicó una atención especial a las cuestiones sexuales.
Onanismo Dr Samuel Tissot (1760)
SIGLOS XVI A XVIII
Los manuscritos griegos y romanos reeditados, se convirtieron en textos de lectura en las escuelas médicas recién establecidas y estimularon el renacimiento de la investigación anatómica en los siglos XVI al XVIII.
En el siglo XVIII con la influencia de la “perversión”, paso a ser patrimonio del campo médico, privativo al sujeto. En este siglo tuvieron lugar varias obras que permitieron avanzar en esta temática; como el libro escrito por el médico Samuel Tissot, “Onanismo” (1760). Tissot se convierte en el divulgador más influyente de los peligros allegados a la masturbación y durante los siguientes 150 años, el miedo a la “locura masturbatoria”, sigue siendo un factor dominante en la prevención de la enfermedad y en la educación sexual del adolescente. El Marqués de Sade, encarcelado en la Bastilla por acusaciones morales, escribe secretamente las extrañas, indignantes y blasfémicas fantasías de la masturbación (“The 120 Days of Sodom”). Todo esto inició una discusión vigorosa y crecientemente secularizada sobre la ética sexual y produjo los primeros programas públicos y privados sobre educación, nuevas clasificaciones y documentaciones sobre el comportamiento sexual.
SIGLO XIX Las nuevas preocupaciones en cuanto a la sobrepoblación, la psicopatía sexual y la degeneración, dieron lugar al concepto de “sexualidad”. Estos condujeron a esfuerzos para obtener un conocimiento intelectual más firme sobre un tema, que parecía crecer rápidamente y hacerse cada vez más complejo. Los avances en la ciencia fueron los siguientes:
En 1822 el filósofo y bibliotecario alemán Friedrich Karl Forberg, publica su Manual Clásico de Doctrina Erótica, una colección de textos griegos y romanos antiguos que refieren a una gran variedad de comportamientos sexuales.
Entre 1826-27 en Berlín, Wilhelm von Humboldt, proporciona una clasificación neutral del comportamiento sexual humano, según sus cuatro objetos posibles: 1. uno mismo, 2. el otro sexo, 3. el mismo sexo y 4. animal.
Heinrich Kaan
En 1843, el médico ruso Heinrich Kaan, en su libro Psicopatías Sexuales, plantea una clasificación de enfermedades mentales sexuales. Se comienzan a utilizar términos como “desviación”, “aberración” y “perversión”.
En 1857 el médico francés B. A. Morel, avanza en el concepto de la “degeneración física y mental" que, entre otras cosas, explica la “impertinencia sexual".
En 1869 el escritor austriaco-húngaro Karoly Maria Kertbeny (originariamente Benkert), acuñe la expresión “homosexualidad”, significando más o menos lo mismo que el término de Ulrich “uranismo”. Los “uranios” ahora son llamados “homosexuales”. El también se exige una reforma de la ley.
En 1870 el psiquiatra de Berlín Carl Westphal, publica la primera historia clínica médica de la atracción erótica del mismo sexo, en su revista Archivo de Psiquiatría y Enfermedades Nerviosas.
A fines del siglo XIX Krafft-Ebing, integró las perversiones al dominio de la psiquiatría, en su obra Psicopatías Sexuales (1886). Su mérito reside en haberle dado a este estudio, el carácter de materia respetable, porque ningún médico se atrevía a tomar a la sexualidad como objeto de estudio. En su obra se refiere mayormente a cuatro categorías de desviación: Fetichismo, Homosexualidad, Sadismo y Masoquismo. Aunque también hace referencia a Travestismo y Transexualismo, Satiriasis y Ninfomanía, Exhibicionismo y Voyeurismo, Zoofilia, Cleptomanía (excitación o satisfacción sexual producida por el robo) y Lolitaismo (preferencia sexual de la persona adulta por jóvenes adolescentes).
Richard von KrafftEbing (1840-1902)
Richard von Krafft-Ebing (1840-1902). Psiquiatra alemán nació en 1840 en Mannheim, Alemania. Es uno de los primeros investigadores de la sexualidad y se considera el iniciador de la clasificación y sistematización de las variantes prohibidas del deseo sexual. Registró varias desviaciones sexuales en el libro Psychopathia Sexualis, en el que acuñó el término sadismo, fetichismo y masoquismo. Equiparaba masturbación y homosexualidad a sadismo o masoquismo, al considerarlas también como perversiones. Si bien en la actualidad se sabe que algunos de los datos de este autor son pseudocientíficos; sin embargo, se le deben reconocer tres hallazgos:
Primera aportación: en la parte de las parafilias, sinónimo de desviaciones sexuales como: sadismo, fetichismo y masoquismo, que son verdaderas patologías psiquiátricas y que están comprobadas.
Segunda aportación: es haber establecido la necesidad de una clasificación clínica de la sexualidad.
Tercera aportación: sus hipótesis mixtas para comprender la homosexualidad.
Murió en 1901 en Graz, ciudad austríaca, capital del estado de Estiria.
Iwan Bloch
(1872-1922)
Iwan Bloch (1872-1922). También conocido cono Ivan Bloch, fue un dermatólogo berlinés. Bloch fue un hombre de enorme erudición, que hablaba varios idiomas y poseía una biblioteca personal de 40.000 volúmenes, dedujo de sus lecturas que muchos comportamientos sexuales supuestamente patológicos y degenerados habían existido siempre en muchas partes del globo. Él comenzó a ver las “psicopatías sexuales”, como manifestaciones inherentes y universales de la condición humana y finalmente, en los primeros años del siglo XX, atacó la noción de “degeneración sexual” en un estudio fructífero. Bloch planteó la idea de un esfuerzo científico especial dedicado a la comprensión del sexo y fue quien acuñó el nuevo término: “Sexología”, que se refiere al estudio teórico del sexo. En este sentido, Iwan Bloch puede ser considerado legítimamente como el “padre de la Sexología”. Sus muchos estudios socio-culturales sobre Sexología, le hicieron ganar una reputación internacional como historiador de Medicina. También descubrió el manuscrito del M. de Sade "120 days of Sodom" (Los 120 días de Sodoma), que había sido dado por perdido.
Desafortunadamente, poco después de esto la Sexología hizo frente a su segunda amenaza exterior con la subida del nazismo y esta vez resultó fatal. En unos pocos años, todas las revistas sexológicas cesaron su publicación, los grandes libros pioneros fueron quemados, los institutos sexológicos cerrados, los congresos cancelados, los sexólogos acallados, arrestados o conducidos al exilio. Así, cualquier discusión teórica adicional llegó a un trágico final. En 1907 publica su estudio La Vida Sexual de Nuestro Tiempo, en donde exige el establecimiento de la Sexología como empresa científica en su propio derecho, combinando los métodos y la visión de las ciencias naturales culturales. Consideraba que hasta ese momento, no existía ningún tratado completo de la vida sexual, pero pensaba que el tiempo era suficientemente maduro para intentar seleccionar el volumen enorme
de material disponible y presentar el resultado, desde un punto de vista centralizado, que era el de los sexólogos y pronto llegó a ser compartido por otros. En 1912 Bloch comienza la publicación de su Manual de la Completa Sexología en Monografías. El primer volumen Prostitución, Vol. I es escrito por él mismo; la segunda Homosexualidad en hombres y mujeres (1914), escrito por Hirschfeld; un tercer volumen de Bloch, Prostitución, Vol. II. Este volumen se publica póstumo, por la muerte prematura de Bloch en 1922 (50 años), y termina enteramente el proyecto ambicioso.
Magnus Hirschfeld (1868-1935)
Magnus Hirschfeld (1868-1935). Nació en 1868 en Kolberg, cuidad actualmente polaca, en el seno de una familia de clase media. Fue un famoso médico, sexólogo judío alemán. Fue el fundador del movimiento de liberación homosexual del Instituto de Sexología de Berlín, en 1919. Fue defensor de los derechos de los homosexuales, desarrollando la teoría del tercer sexo, intermedio entre varón y mujer. Sostenía que la homosexualidad no podía ser considerada como una enfermedad, sino que formaba parte de lo que denominaba “escalones intermedios entre el hombre completo y la mujer completa”. Por ello, una de sus actividades más importantes, fue precisamente el trabajo de investigación por la vía de las encuestas. Estaba convencido de que así podría llegar a comprender el carácter natural de la homosexualidad, con lo que, de este modo, se pondría fin al proceso de su criminalización. Hirschfeld no se planteaba curar la homosexualidad, sino ayudar a los homosexuales a aceptarse y vivir en una sociedad hostil.
En su trabajo como encuestador se le puede considerar también como un pionero y un precursor, anticipándose en muchos años al de Kinsey, y de Masters y Johnson. De este modo encuestó a 3.000 estudiantes berlineses, en 1903, y a 5.721 trabajadores, en 1904, sobre su orientación sexual. Hirschfeld, que en 1931 había iniciado una gira mundial, regresó en el momento en que los nazis se disponían a tomar el poder, de ahí que primero se refugió en Suiza y posteriormente en París. Desde allí siguió las últimas actividades del Comité, reducidas a una serie de comunicados
dispersos elaborados por Kurt Hiller, hasta este fue detenido y enviado a un campo de concentración.
Triángulo rosa como distintivo de los encausados de mantener relaciones sexuales en los campos de concentración
Además, las contradicciones internas en el partido nazi se solucionaron, en 1934, con la eliminación física de los líderes más importantes de las SA, incluido el homosexual E. Rhöm, que fue jefe de las tropas de asalto. En 1935, los nazis ampliaron los aspectos recogidos en el artículo 175, que comprendía besos, caricias e incluso fantasías sexuales. En 1936 se creó la Oficina del Reich, para la lucha contra el aborto y la homosexualidad y en 1941, el “Decreto del Führer” para el mantenimiento de la pureza en las SS y la policía. En esta se establecía la aplicación de la pena de muerte para todos los encausados de mantener relaciones sexuales en los campos de concentración y estaban marcados con el Triángulo Rosa como distintivo. Mientras esto ocurría en el interior de Alemania, Hirschfeld se trasladó a Niza, donde conoció la resolución del gobierno hitleriano, que le calificaba como indigno del pueblo alemán, al tiempo que le retiraban la nacionalidad. Fue un 14 de mayo de 1935 cuando decidió suicidarse, justo el día que cumplía 67 años.
Henry Havelock(1859-1939)
Henry Havelock Ellis (1859-1939). Nació en Croydon, Surrey, el 2 de febrero de 1859. Estudió medicina en el St. Thomas Hospital, entre 1881 y 1889, aunque no llegó a ejercer de forma regular. Médico y psicólogo sexual británico. Hizo estudios serios sobre la conducta sexual y el análisis de los sueños, como factores importantes de la psicología, ciencia a la que aportó obras interesantes. En noviembre de 1891, a la edad de 32, y todavía virgen, se casó con Edith Lees. Desde el principio, su matrimonio fue poco convencional, ya que Edith era abiertamente lesbiana. Su "matrimonio liberal" fue el tema principal en la autobiografía de Ellis, My Life, en el que a sus amigos les parecía gracioso, que se considerase un experto en el sexo, teniendo en cuenta el hecho de que sufría impotencia. Esto fue así hasta los 60 años, cuando con la ayuda de un amante dedicado, finalmente logró curar el problema, y siguió siendo sexualmente activo hasta los 72 años. Aunque sus obras fueron al principio ridiculizadas, en poco tiempo la mayoría de los psicólogos convinieron en su importancia. Avaló con sus libros y sus estudios basados en la observación y afirmaciones sobre sexualidad escandalosas para su época como las siguientes: La homosexualidad no era una enfermedad, ni una inmoralidad o un crimen. Afirmación que defendió en Sexual Inversion, el primer libro médico en inglés que abordó la homosexualidad basándose en ochenta casos. Fue suprimida en Inglaterra, porque se declaraba a favor de la tolerancia, pero finalmente obtuvo un amplio seguimiento en Inglaterra y los EE.UU. Éste forma parte de su obra fundamental, los 7 volúmenes de Studies in the Psychology of Sex. Otro libros publicados son, entre otros: The Sexual Impulse in Women (1903), The Soul of Spain (1908), obra que en la edición de 1937 contiene un añadido sobre la guerra civil, The World of Dreams (1911), Little Essays of Love and Virtue (1922). La masturbación no es mala y que es frecuente tanto en hombres como en mujeres. La falta de apetito sexual en las mujeres "decentes" era un mito. No debería haber leyes en contra de los anticonceptivos. Concedió importancia a los conceptos “autoerotismo” y “narcisismo”. Abogó por la educación sexual en los primeros años escolares, lo que supuso un escándalo en su época. Fue partidario de la eugenesia, el arte y la ciencia de la mejora de la raza humana. No condenó los programas de esterilización llevados a cabo por Hitler. Perteneció a la llamada comunidad de la Nueva Vida, en 1883, para debatir sobre socialismo.
Segismundo Schlomo Freud (1958-1939)
Segismundo Schlomo Freud (1958-1939). Nació el 8 de mayo de 1859, en Freiberg, Moravia (en la actualidad Príbor, en la República Checa). En 1938, tras la anexión de Austria por parte de la Alemania nazi, Freud, que era judío, escapó con su familia a Inglaterra (sus obras habían sido quemadas en Berlín, en 1933). Al cruzar la frontera alemana se le exigió que firmara una declaración donde se aseguraba que había sido tratado con respeto por el régimen nazi (a pesar de haber sufrido arresto domiciliario) Más conocido como Sigmund Freud, fue un médico, neurólogo y librepensador austríaco, y creador del psicoanálisis. En 1905 publica los Tres Ensayos sobre la Teoría Sexual, con un análisis de la homosexualidad y otras “aberraciones sexuales”, precisamente porque consideraba que su existencia transformaba las opiniones convencionales respecto de lo que constituía el sexo. Las usaba “como un arma con la cual poner en duda las definiciones tradicionales de la sexualidad”. De este modo, se mostraba una visión moderna de una variedad sexual infinita. Aunque a su vez este entusiasmo clasificador poseía un lado negativo: el de reforzar “lo normal”; a pesar de que habían pocos análisis de la heterosexualidad como tal.
Famoso sofá de Freud
Freud sugiere que las perversiones no eran una exclusiva propiedad de minorías enfermas, sino propiedad común de todos. En la perversidad y en la bisexualidad universal polimorfa de la
infancia, Freud pudo encontrar raíces de lo que muchos sociólogos denominarían “nuestra desviación común”. Las tres fases principales de este proceso son: 1. fase oral, 2. fase anal, 3. fase fálica. También hay una “fase latente”, en la cual el impulso sexual está inactivo hasta que se reanima durante la pubertad. Freud plantea a la sexualidad infantil como uno de los principales hallazgos del psicoanálisis. Según él, la vida sexual se inicia con manifestaciones claras muy temprano, después del nacimiento. Distingue los conceptos “sexual” y “genital”, el primero, que es el concepto más amplio e incluye muchas actividades que no tienen nada que ver con los genitales. La vida sexual abarca la función de obtener placer de zonas del cuerpo (zonas erógenas) y una función que posteriormente es puesta al servicio de la reproducción. Freud al comienzo de su carrera pensaba que los seres humanos nacen asexuados, pero luego descubre la sexualidad infantil, y a partir de ahí se dedica mayormente a ver el impacto que tiene ésta en la vida adulta. Freud iba llegando gradualmente a la conclusión de que el sexo es la causa de dolencias que no parecen a primera vista como sexuales.
DESPUÉS DE LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL Después de la derrota de Hitler y del final de la Segunda Guerra Mundial, los europeos tardaron muchos años en restablecer la investigación sexológicas. Especialmente los sexólogos alemanes, que se enfrentaron a enormes obstáculos, ya que la entera base anterior de su trabajo había sido destruida. Con el tiempo hubo nuevamente algunos escritores teóricos, pero mostraron poco conocimiento de su gran tradición perdida. Cuando el primer sexólogo alemán de la posguerra Hans Giese, publicó un nuevo Diccionario de Sexología, 1952, éste ni siquiera contuvo un artículo Sexología que habría insinuado un cierto esfuerzo teórico o desafiado el establecimiento académico existente. La Sexología todavía no se atrevió nuevamente a definirse; en realidad, la timidez del esfuerzo fragmentario llegó a ser penosamente obvia en la primera oración del prefacio de la obra La investigación estadounidense produjo un cambio de escenario desde Europa a América, fundamentalmente Estados Unidos, donde Kinsey y Masters y Johnson, tomaron la dirección del desarrollo de la Sexología en todo el mundo, pero las universidades establecidas han hecho menos que sus contrapartes europeas, para promoverlo dentro de sus propias paredes. En 1951 Clellan S. Ford y Frank A. Beach, publican su estudio Modelos del Comportamiento
Sexual. Los autores comparan a casi 200 sociedades humanas con respecto a su comportamiento sexual. El libro revoluciona el absolutismo moral occidental tradicional en materias sexuales.
Parafilias
En Los Ángeles, en 1951, se funda la primera organización homosexual americana para la liberación, la “Sociedad de Mattachine”. Pronto se desarrollan secciones locales en otras partes de los EE.UU. Algunos de sus miembros, comienzan a publicar la primera revista de los derechos gay americanos “UNO”. En 1953 el médico Harry Benjamín, un amigo de Hirschfeld, quien, en 1913, se había trasladado de Berlín a Nueva York, introduce el término “transexuales”, distinguiéndolos por primera vez de los travestis. En 1955 el médico y psicólogo americano John Money introduce la distinción entre el “sexo” y el “género”. Esto contribuye a una discusión nueva y más sofisticada de las diferencias entre hombres y mujeres. La distinción gana reciente importancia en sexología y también en los estudios sobre las mujeres. En San Francisco, en 1955, Del Martin, Phyllis Lyon y otras mujeres, fundan la primera organización lesbiana para la emancipación Las Hijas de Bilitis. Su revista La Escalera se convierte en uno de los vehículos más influyentes para su causa en los EE.UU y en 1977, se realiza la película Bilitis, de David Hamilton. En 1957 el ginecólogo de Nueva York, Hans Lehfeldt, quien se había escapado de los nazis en Berlín, funda junto con otros la Sociedad del Estudio Científico de Sexualidad. En 1960 el sociólogo americano Ira Reiss, en su libro Estándares Sexuales Premaritales en América, rechaza la noción de un impulso biológico sexual y en lugar de ello insiste en “herencia social” humana. El también predice la “revolución sexual”, que llega poco después en los EE.UU. En 1964 en Nueva York, se funda el Consejo de Información y Educación de Sexualidad de los EE.UU. (SIECUS), por la Dra. Mary Steichen Calderone y otros. Esta organización se dedica a la educación sexual para gente de todas las edades y ambientes.
Parafilias (Bondage)
En 1968 la erudita británica Maria McIntosh, investiga El Papel Homosexual, llegando a la conclusión de que la homosexualidad, no es una condición biológica o psicológica definida. Tales ideas, conducen finalmente a una disputa entre los “esencialistas” (principalmente los científicos naturales), que continúan creyendo en una cierta homosexualidad esencial; y los “constructivistas” (principalmente los científicos sociales), que no comparten más esta creencia. En 1971 el psiquiatra americano Richard Green funda la Academia Internacional de la Investigación Sexual. La Academia publica la revista Archivos del Comportamiento Sexual. En 1973 los investigadores sociológicos americanos John Gagnon y William Simon, publican su libro Conducta Sexual: Las Fuentes Sociales de la Sexualidad Humana. Ellos describen el comportamiento sexual, como un comportamiento “escrito”, es decir, como un modelo de conducta que sigue cierta “escritura”. Tales escrituras proporcionan modelos, muestras o definiciones de qué es o no es sexual en una situación particular, cómo interpretarla y cómo ocuparse de ella. Este mismo año, la Asociación Psiquiátrica Americana, anula la diagnostico “homosexualidad” de su Manual Diagnóstico y Estadístico. Así, la designación de la enfermedad desaparece de millones de hombres y mujeres. Desde ese momento, los “homosexuales” están sanos otra vez, y que ha sido “la curación en masa más grande y más fácil de la historia médica”. En 1974 la Organización Mundial de la Salud (OMS), convoca en Ginebra a una reunión de sexólogos y de expertos en salud pública. Como resultado, se publica al año siguiente un informe: Educación y Tratamiento en Sexualidad Humana: El entrenamiento de los Profesionales de Salud. El informe recomienda, entre otras cosas, que la sexología debe convertirse en una disciplina autónoma en educación y entrenamiento de los profesionales de la salud.
William H. Masters y Virginia Johnson
ERA CONTENPORÁNEA Según Haeberle en las últimas décadas la atención científica ha cambiado otra vez a los estudios médicos y fisiológicos. Principalmente por el impacto producido por otros dos libros iniciadores, Respuesta Sexual Humana (1966) e Insuficiencia Sexual Humana (1970), escritos por William H. Masters y Virginia Johnson. En respuesta sexual humana plantean los procesos fisiológicos durante la actividad sexual; sugieren un modelo de cuatro fases de la respuesta sexual: excitación, meseta, orgasmo y resolución. Las investigaciones se han centrado en tratar las disfunciones sexuales del individuo o de las parejas. Como resultado, las dimensiones sociales e históricas del sexo se han descuidado en gran parte. En 1974, Helen Singer Kaplan publica su libro La Nueva Terapia Sexual, en el que profundiza y avanza sobre las terapias descritas por Masters y Johnson, ideando terapias breves y de alta efectividad para los trastornos sexuales.
Shere Hite
Shere Hite, originó una gran polémica con sus dos estudios sobre sexología y sexualidad humana. En el primero, Informe Hite sobre la Sexualidad Femenina (1976), recopila las respuestas de 3.019 mujeres a un cuestionario. El segundo, Informe Hite sobre la Sexualidad Masculina (1981), recoge las respuestas de 7.239 hombres a un cuestionario. Otra de sus obras es el libro Sexo y negocios.
Con el primer Informe Hite se escandalizó a la sociedad americana, al reflejar que por ejemplo, las mujeres también eran infieles (un 70% de las encuestadas), que las relaciones amorosas entre mujeres funcionaban mejor que entre heterosexuales y que el entendimiento entre hombres-mujeres era muy difícil. En 1980 Michael Storms, psicólogo de la Universidad de Kansas. Realizó un estudio sobre sexualidad y fantasías eróticas. Su investigación parece señalar algunos problemas conceptuales con la Escala de Kinsey. Así, en la mentalidad pública, la Sexología está hoy a menudo asociada con “terapia sexual”, una empresa no médica, paramédica o en cierto modo médica. Esta noción es incorrecta, tanto sobre la sexología en general, como sobre la terapia sexual en particular. Estas ya no están basadas en un modelo médico, sino más bien en varios modelos aprendidos del comportamiento humano. El estudio del sexo es, sobre todo, un estudio de ideas. Por esto, la sexología es principalmente la exanimación crítica de ideologías. Afortunadamente, hay algunas fuerzas antagonistas que intentan rectificar el actual desequilibrio sexológico y que aspiran a reconectar la sexología, con su tradición larga y perdida. Una conexión importante y significativa al pasado ha sido reconvocado en los últimos años.
CONCEPTO DE PARAFILIAS Es una recurrente e intensa aparición de fantasías sexuales o conductas que engloban a objetos o animales, niños o adultos que no dan su consentimiento o de producir dolor y sufrimiento a las parejas o a sí mismo. O sea que la imaginación o los actos inusuales o extravagantes son necesarios, reiterados y a veces excluyentes, para conseguir la excitación sexual. También son llamadas desviaciones o variaciones y hoy se trata de evitar la palabra perversiones A las parafilias, desviaciones sexuales o perversiones se definen como un patrón de conductas sexuales en la que la fuente predominante de placer sexual no es a través de la cópula heterosexual. Esta es una definición que se aceptó hasta hace algunos años, pero como la homosexualidad se le definió como una preferencia sexual en lugar de una parafilia, dejo de estar vigente. Actualmente las parafilias se entienden como las conductas sexuales, eróticas que no son comprendidas por la mayoría de las personas. Así encontramos que hay parafilias que castiga la Sociedad como delitos y existen otras parafilias que aunque no son aceptadas tampoco se les considera un delito. Desde el punto de vista de la Psiquiatría y del Psicoanálisis las parafilias son consideradas "perversiones". Tomando como referencia la primera definición encontramos que existen algunas parafilias que se pueden encontrar dentro de la sexualidad normal si
se les practica esporádicamente o como juego amatorio que precede a la copula normal. Las parafilias son un deseo incontrolable, impulsivo y compulsivo de realizar el acto o de fantasearlo. De hecho los individuos que la practican pueden parecer exteriormente tan normales como cualquier otra persona. Se llama "parafilia" a lo que en la ley se denomina "perversiones". Algunos psicoanalistas y psiquiatras aún la denominan así. En Sexología se evita estigmatizar imponiendo sobre tópicos tan controvertidos como la sexualidad humana un etiquetaje discriminatorio. "Parafilia" proviene del griego "para" = junto a; "filein" = amar. La etimología alude a un amor paralelo a la forma convencional. En efecto: el sexo convencional es heterosexual, coital, con finalidad declarada procreativa y en general con el hombre en posición del misionero (encima de la mujer). Es de imaginar que una actividad constreñida así no se corresponde con la intimidad sexual de las parejas actuales, según lo demostró, ya en 1948, el pionero sexólogo americano Alfred Kinsey en su encuesta a miles de norteamericanos. Formas de estimulaciones diversas, y no sólo en el fore-play (o inicio de la relación sexual), sino como finalidad en sí misma, representan un porcentaje nada desdeñable de la conducta sexual de la población que nos consulta. El DSM-IV las caracteriza por consistir en impulsos sexuales intensos y recurrentes, fantasías o comportamientos que implican objetos, actividades o situaciones poco habituales. Suelen crear alteraciones desfavorables en la vida familiar, laboral y social del individuo por su carácter de compulsivas. John Money, estudioso neozelandés del tema de las parafilias en nuestro siglo, consigna cerca de cuarenta. Las más difundidas por los medios, a raíz de que pueden suponer ofensas sexuales son: la paidofilia, el exhibicionismo, el frotteurismo, el sadismo sexual, el voyeurismo, el fetichismo. Las parafilias incluyen algunas de estas posibilidades: - Objetos humanos; - Infligir sufrimiento o humillación a sí mismo o a la pareja; - Involucrar a prepúberes o personas que se resisten a la propuesta sexual.
Estas fantasías o estímulos específicos son requisito indispensable para que el individuo parafílico logre excitarse y llegue al orgasmo. A veces, con su pareja, emplea su imaginería erótica para poder funcionar sexualmente. En ocasiones, logra la complicidad de su acompañante quien, por ejemplo, juega a trasvestirse o trasvestirlo para que pueda desarrollarse la actividad sexual habitual. En vivo o en diferido, las imágenes parafílicas acompañan al individuo, quien puede tener un mayor o menor control de su conducta sexual, según las características de su yo fuerte o débil. En tal caso, su parafilia será: - leve, ocasionalmente expresada; - moderada, implica mayor manifestación conductal; - severa, si lo lleva a niveles de compulsión. Esta compulsión a veces implica que el individuo parafílico comete actos delictivos, cuando su parafilia es asocial. Así, el exhibicionista mostrará sus genitales a la gente por sorpresa; el necrofílico violará cadáveres. El paidofílico espiará, toqueteará o abusará de los niños o les hablará sobre la sexualidad en términos inconvenientes para su edad. O les pedirá que le muestren los genitales. El sádico sexual producirá deliberadamente dolor a su víctima y en ello residirá su placer. Estas conductas lo suelen llevar a la cárcel y a condenas que no modifican su próxima crisis parafílica. Cuando hay un claro descontrol de la conducta, muchos individuos presentan un malestar anticipatorio que algunos autores comparan con los prodromos de las epilepsias temporales. La persona afectada teme su salida parafílica porque cree no manejarla. En el trabajo interdisciplinario, la medicación con un antiandrógeno, en caso de parafilias asociales, permite, junto con las terapias sexuales, tranquilizar al victimario que suele sentirse víctima de su propia compulsión. Esta despersonalización ocasional es referida por algunos consultantes que aluden a su conducta compulsiva con frases como la siguiente: "No soy yo quien va a espiar a los baños. Son mis pies los que me llevan". Para que una conducta sea considerada parafílica debe haber tenido sus antecedentes tempranos en la biografía del sujeto.
La niñez y la pubertad, en las historias sexuales levantadas a sus protagonistas, revelan tempranos estímulos visuales, auditivos o táctiles que por razones variadas adquirieron un particular significado para cada individuo. Las explicaciones de por qué predominan las parafilias en los varones y es escasa su aparición en las mujeres, tienen que ver con la teoría del predominio de la erotización visual en el hombre a diferencia de la erotización táctil en la mujer, atribuible a la posición prenatal en el período de determinación del dimorfismo sexual cerebral. Implica predisposiciones que la vida postnatal desarrollará en el período crucial de los 18 meses. Allí natura y nurtura enlazarán, con el comienzo de la adquisición del lenguaje y la construcción del esquema corporal, las sensaciones que componen un universo imaginario erótico: los mapas del amor o "Lovemaps", como lo denomina el creador de este concepto, John Money. En el mapa del amor figura la imagen del amado, sus características arquetípicas, la escena sexual excitante imprescindible para despertar el deseo, encender la excitación y culminar con el orgasmo. El mapa del amor está en la mente y en el cerebro. De allí que tras su formación entre los 5 y los 8 años de edad del individuo, sea resistente al cambio. Es como un idioma nativo que persistirá a lo largo de la vida, cualquiera sea la pareja que nos acompañe. Su vandalización a temprana edad, es decir, la interferencia en los juegos sexuales infantiles con los que se lleva a la acción el mapa del amor, origina las parafilias. Por desplazamiento, distorsiones u omisiones de las conductas sexuales deseadas, una acción erótica se transforma en una desviación sexual. La vandalización causante de la parafilia se produce por: - Abuso sexual infantil; - Prohibición cruel y reiterada de las manifestaciones sexuales de los niños (juegos de ensayo eroto-sexual, curiosidad infantil en torno de temas sexuales). La clínica de las parafilias reúne técnicas diversas. Las terapias sexuales incluyen información a los pacientes sobre los conocimientos actuales sobre el tema de consulta, medicación cuando el grado de ansiedad no les permite la relación terapéutica, un fuerte vínculo con los terapeutas quienes deben manejar técnicas diversas: dramatizaciones, Gestalt, genogramas familiares, entrevistas de otros significativos (parientes, amigos) dispuestos a
ayudarlo. Y, sobre todo, los profesionales de la salud deberían carecer, en la mayor medida posible, de un criterio de valoración discriminatorio sobre la persona que los consulta. Comprender las parafilias presupone develar por qué somos los humanos tan variables en nuestras gratificaciones sexuales, cómo adquirimos y seleccionamos el estímulo que nos procura placer y qué proceso validó que uno (o unos pocos) prevalecieran por sobre los demás. Si ese estímulo sexual no es convencional, si se impone en automático, si provoca malestar al individuo y es de larga data, hablamos de parafilias.
CARACTERISTICAS Características comunes de las parafilias Todas las parafilias poseen unas características comunes que las identifican: Son de carácter sexual Son inusuales y con ello quiere decir que se salen de la norma, o los convencionalismos sociales de la región en la que se encuentre la persona. Se realizan de forma impulsiva Poseen un componente ansioso Son repetitivas, la persona busca poder volver a realizarlas siempre que tenga ocasión de forma casi exagerada o compulsiva en algunos casos. Son estereotipadas, las parafilias se realizan de una cierta manera y con un orden casi ritualizado con cierto temor ansioso por que salga tal como está previsto. Puede tratarse de una parafilia exclusiva o combinada con otras parafilias. Es importante remarcar el componente adictivo, por las conductas de querer más y esa búsqueda ansiosa de obtenerlo, y por otro lado el carácter obsesivo, tanto por la impulsividad, como la repetición o la conducta ritualizada y estereotipada
del acto. Estas características conjuntamente con la ansiedad expresada durante la parafilia hacen que sea una práctica especialmente resistente al medio, consiguiendo que la parafilia pueda mantenerse durante prácticamente toda la vida de la persona, si no busca ayuda.
Dependen psicológicamente del objeto del deseo
Son incapaces de sentir placer sexual a menos que el objeto este presente de alguna forma
Puede ocurrir en episodios ocasionales
Debe durar por lo menos seis meses
Si no satisfacen sus deseos o fantasías se obsesionan con ellas experimentando malestar personal
Características personales y sociales del sujeto Generalmente esta conducta comienza en la adolescencia, con prevalencia entre los 20 y 30 años de edad; en la mayoría de los casos, esta conducta es de carácter compulsivo. La personalidad del exhibicionista es de ser un sujeto tímido, retraído y dependiente, con dificultad en habilidades sociales y heterosexuales. Esta conducta puede darse en hombres mayores, solitarios, sin pareja o abandonados por éstas, generalmente debidos a problemas de impotencia. Se da casi exclusivamente en hombres3. El exhibicionista masculino es tímido, taciturno, sumiso, carece de agresividad normal y posee sentimientos de incapacidad o inseguridad. Por lo general son inmaduros, y probablemente criados en familias con actitudes puritanas y reglas rígidas sobre el sexo, con madre poderosa y absorbente. En su mayoría el exhibicionista está casado, pero sus relaciones sexuales son defectuosas, creando dudas y temores de su masculinidad, juzgándose débil sexual2. Es común que un exhibicionista, aunque sea sorprendido por la justicia, reincida una y otra vez en su conducta1.
CAUSAS DE LAS PARAFILIAS No se han establecido causas demostradas de parafilias, pero "es indudable, dice Karpman (30), que ellas derivan de la atmósfera familiar y social enferma en que se desarrolla el niño". El mal manejo por parte de los padres de la ingenua curiosidad sexual infantil y de los juegos sexuales de los mismos, tratados con represión enfermiza, evasiones, racionalizaciones y prohibiciones estrictas, cierra el camino a un desarrollo sexual normal, e inclina al niño a manifestaciones parafílicas. La ignorancia que preserva la inocencia es una falacia perniciosa que ha traído muchos males a la humanidad, entre ellos, las parafilias. Enfrentar la sexualidad con inteligencia, amplitud, apertura y naturalidad, previene las parafilias. Un hecho interesante es que los parafílicos provienen de familias en que no se han dado otros casos de sexualidad parafílica. Es decir, no se hereda. Tampoco se aprende por imitación, sino por proscripciones y represiones irracionales que cierran caminos normales y abren otros vicariantes, anómalos, inhabituales, extravagantes, elegidos entre el rico y variado repertorio de nuestro capital originario infantil. Si es verdad lo que afirmaba Freud que el niño es "un polimorfo perverso", allí está la cantera de la parafilia. "Todos somos como Jekyll" -dice Kolosimo (31)- "pues en cada hombre bien formado por la educación, convive esa flor y nata de los pícaros que es el hombre de los instintos primarios". Las parafilias nacen en la infancia y la primera adolescencia, edad en que los "deseos secretos" son inevitables, aunque podrían dejar de serlo si educáramos por el diálogo y el conocimiento de estas posibilidades. No existe ninguna teoría que explique todos los casos de parafilia, o todas las parafilias en su conjunto. Pero las teorías existentes son válidas para determinados casos. Recorramos algunas de esas teorías que poseen mayor predicamento en el campo clínico. 1. Experiencias accidentales. Tiefer (51) señala que las experiencias accidentales vividas por el niño y el adolescente pueden ser definitivas en la psicogénesis de las parafilias. "Por ejemplo" -dice- "un bebé puede excitarse sexualmente al ser tocado en los genitales durante el cambio de pañales, y tal acontecimiento puede coincidir con la mirada de una mujer de largos cabellos plateados. En su adolescencia, el muchacho se masturba y fantasea con cabellos plateados, dotándolos de muchas asociaciones eróticas. La combinación habitual del pensamiento de los cabellos y la excitación se vuelve tan fuerte, que la persona puede llegar a dudar de su capacidad de desempeñarse sin ella". Esta experiencia o instancia de excitación, con ser única, puede ser suficiente. Pero en otros casos debe ocurrir constantemente
para provocar la fijación. "Es muy probable" -dicen Money y Ehrhardt (37)"que estos años tempranos sean de fundamental importancia para sentar las bases de los precedentes de todas las parafilias, si bien aún no es posible definir de modo más explícito el efecto a largo plazo de las experiencias eróticas sobre la función psicosexual y erótica definitiva." 2. Las experiencias infantiles repetidas. Tales como ser vestidos con ropas del otro sexo por sus padres que esperaban tener un hijo del sexo contrario, o por las niñeras; el mirar los genitales de los adultos o las actividades sexuales o de excreción, así como la ridiculización de sus genitales por pequeños o feos, o de sus capacidades eróticas, se reviven en la adultez joven con formaciones parafílicas sorprendentemente elocuentes. Las humillaciones o castigos físicos de los padres a los hijos, trocadas en agresiones sádicas, o masoquistas, así como la urolagnia o erotización de la micción, o la clismafilia o erotización del enema, o incluso el travestismo, son formaciones que compensan su vergüenza o humillación anterior. La parafilia permite conquistar y superar la ansiedad vivida en la infancia. Pero como dicen Money y Ehrhardt (37) "niños en los que la experiencia sexual ha sido impuesta por un compañero de juegos de más edad o por un adulto, pueden no manifestar forzosamente efectos deletéreos a largo plazo, en especial si las consecuencias de la experiencia son sensatamente manejadas por los adultos". Concluyen que "parece lícito afirmar que los fundamentos de la normalidad o anomalía sexual como las parafilias parciales o completas, se establecen mucho antes de la pubertad hormonal. Esta última sólo establece el grado de despertar con respecto a una imagen que ya está previamente determinada por tener cierto grado de potencia evocadora". Money (38) resume afirmando que las parafilias obedecen a un polideterminismo secuencial multivariado. 3. Las fantasías sexuales de la masturbación adolescente. Suelen tener una gran importancia en la aparición de las parafilias, cuando esas fantasías poseen un contenido que las favorece, como las de exhibicionismo o voyeurismo, de travestismo. Los contenidos sexuales sádicos y masoquistas son bastante frecuentes como temática de todas las fantasías experimentadas por las personas. La rigidez, la limitación estrecha de la fantasía en un espectro de respuestas e imágenes poco convencionales, suele ser una constante del futuro parafílico. 4. La búsqueda adulta de experiencias nuevas. El individuo sometido a una intensa represión sexual en la niñez y juventud, ya en la adultez, puede buscar aventuras sexuales, vivir experiencias variadas que salen de las fronteras permitidas, como un acto de libertad o de liberación. Se puede experimentar con la bisexualidad, el uso de artefactos, el cambio de parejas y todo ello puede no traer consecuencias en su vida sexual. Pero la práctica del sexo en grupo, de mirar el coito de otros, o exhibirse ante personas conocidas primero, y luego desconocidas, prácticas sadomasoquistas y otras, pueden
poner de manifiesto la existencia de una disposición a las parafilias, que de otra forma no se hubieran manifestado. Además, pueden llegar a tener un carácter adictivo: una vez traspasada la barrera, de cometida la trasgresión con el placer consiguiente, queda insaciado. Dice Michel Foucault que el perverso (parafílico) no se sacia nunca y esta insaciabilidad también es erotizada. Estas eclosiones tardías de las parafilias se caracterizan por la necesidad que tienen de codificar su actividad, y se conocen casos en que se redactan contratos que los unen a sus compañeros sexuales. "La trasgresión franquea una y otra vez una línea que luego se disuelve inmediatamente en el olvido, retrocediendo así de nuevo hasta el horizonte inalcanzable. Pero para aquellos cuyo interés en el sexo es `pura curiosidad´-dice Tiefer (51)- y no proviene de ningún conflicto psicológico, la experimentación en última instancia se vuelve auto-limitante". 5. Otras causas. Money (38) ha recopilado una serie de observaciones comunicadas por neurólogos que hallaban una relación entre la epilepsia del lóbulo temporal y algunas parafilias, como el fetichismo y el travestismo compulsivos, que mejoraron con tratamiento antiepiléptico o con electroconvulsoterapia. Se trataba siempre de pacientes varones, y se acompañaba de una sexualidad grosera y desinhibida. Sus conductas equivalen a fugas epilépticas o estados crepusculares incoercibles. Como hay casos que mejoran con litio o antidepresivos o reguladores del humor, también se ha planteado la posibilidad de que las parafilias estén vinculadas con ciclos maníaco-depresivos heredados. Y los casos de hiperandrogenismo en que la testosterona esté muy elevada, también se mencionaron como posibles causas de parafilias, que mejoran con el tratamiento con antiandrógenos. Los mecanismos según las escuelas. En suma, el psicoanálisis señala el origen de las parafilias en una experiencia traumática única o repetida por fijación en el Complejo de Edipo y sirven para negar la posibilidad de la castración. La teoría de la conducta las considera el producto de un aprendizaje incorrecto, a través del mecanismo del "modelado" o "imprinting" de los etólogos, por experiencias sexuales del periodo de diferenciación sexual y de la pubertad. Desde una perspectiva sistémica, la definición de Isabel Boschi (9) dice: "Parafilia egosintónica es una construcción particular centrada en las conductas sexuales, organizada en forma de estructuras autísticas, por las que la comunicación con el mundo externo parece interferido por tenaces mecanismos de mantenimiento de un mundo cerrado." Money (38) señala que en la Universidad de Pensylvania se planteó la hipótesis del "aprendizaje por oposición" para los parafílicos, en que de la aversión inicial a los actos parafílicos, se pasa progresivamente a una metamorfosis y se tornan adictos a esas prácticas. Y es probable que la liberación de opiáceos fisiológicos en el encéfalo, como las endorfinas, sea responsable de este cambio.
MARCO LEGAL La mayoría de las de estas desviaciones son llevadas aCabo por varones, no quedando exentas las mujeres pero en mucho menor número, también se dice que hasta el 78 % delos casos hay alteraciones neuropsiquátricas en diferentesgrados., Las parafí lias siempre han existido desde que setiene historia, pero han surgido otras o s ea han idotrasformando debido a los cambios que hay en las sociedades, así encontramos que cuando apareció el teléfono surgió la escatología telefónica, que es el realizar llamadas obscenas, lo mismo sucede con la computadora y otros medios.Por otra parte las relaciones sexuales con animales sonprácticas realiza das como un inicio de la vida sexual enpersonas del campo, y no son consideradas como algo malo,en cambio en personas que viven en las ciudades, estaactividad puede considerarse como una enfermedad mental. Se han tipificado 138 parafílias, y cada vez hay más. Qué puede llevar a una persona a una parafília? Deben de estar tres factores inconscientes en el momento de llevarlas a cabo el acto parafilico:
I VOLUNTAD DE PODER : La voluntad de poder es en donde el individuo debe de demostrarse a sí mismo que tiene mayor poder o superioridad sobre su víctima. II RIESGO: El riesgo de llevar a cabo el acto parafílico, genera en el individuo una excitación sexual en cada evento y además él se pone a prueba y trata de demostrar que escapas. III DESQUITE: El parafílico presenta este sentimiento de revancha como una reparación del daño que sufrió durante su infancia y se acompaña hostilidad, resentimiento. El estado legal de las parafílias varía ampliamente de cultura en cultura y de país en país. Por ejemplo en Inglaterra y algunas ciudades de los Estados Unidos a la homosexualidad no se le considera un delito cuando esta se practica entre adultos que consientan a ello, en otros sitios aunque no
Esaceptada ampliamente es tolerada.La paidofília, necrofilia, frouterismo y el e xhibicionismo yotras parafílias son consideradas como delitos menores y en ocasiones como faltas administrativas por la ley.
Otras parafílias no son penadas mientras no afecten aterceras personas, siemp re y cuando la pareja este deacuerdo (Ej.; fetichismo, urofília y otras más) PAIDOFILIA-DEFINICION Paidofília.- (pedofília).- Esta parafília es el deseo o gusto por tener relaciones sexuales con menores de edad (niños o niñas).Los paidofílicos son personas que pueden tener familia ,abusando también de ella, lo que es más común es que se aun homosexual. Este tipo de personas no tiene la capacidad para cortejar o relacionarse con mujeres por ser sumamente inseguros, la impotencia parcial es usual .Las relaciones paidofilicas pueden ser desde tocamientos hasta la penetración vaginal o anal, en algunas ocasiones asesinan a sus víctimas para evitar el ser descubiertos. Esta parafília se caracteriza más que por la excitación sexual, por el uso y abuso del poder. Búsqueda del placer sexual, por medio de las relaciones sexuales con niños. El DSM- IV, indica que para la calificación de pedofília como trastorno sexual es necesario que la conducta se prolongue durante un periodo de al menos seis meses, incluyendo fantasías, impulsos o comportamientos sexuales con niños prepúberes o un poco más mayores, por lo general de trece años o menos .Puede darse de diferentes formas: con relación a laorientación, puede ser de tipo heterosexual, homosexual oambas; con relación a objeto, éste puede ser exclusivamentepedofílicos o no.Las conductas de la pedofilia van del simple exhibicionismohasta la penetración. El adulto suele ganarse la confianza y el cariño del niño y, por lo general, es alguien conocido ofamiliar .Se distinguen dos variantes en la pedofilia: la sentimental homo erótica y la agresiva heterosexual. Los sentimentales homo eróticos tienen poco o ningún interés por las mujeres ,toda su capacidad sexual se concentra en los niños, concretándose bajo la forma de caricias que le provocan el orgasmo. Los agresivos heterosexuales intentan satisfacer sus impulsos con niñas, con métodos que van desde la seducción a la violencia, terminando (muy pocas veces) en homicidio sádico-criminal. PRECEPTO PENAL Tomándose en cuenta que impúberes son los niños en que aun no se han manifestado los fenómenos característicos del desarrollo y de la posibilidad fisiológica de la función sexual excretora (menores de doce años),
y que la temprana edad impide a los niños resistir psíquicamente pretensiones lubricas esta desviación puede constituir delito de corrupción a que se refiere el articulo 201 del Código Penal.NECROFILA- DEFINICION Necrofilia.- Esta parafilia se define como la obtención delplacer sexual con cadáveres, generalmente por medio de lacópula con o sin mutilación subsiguiente.Es una desviación rara. Esta parafilia es castigada por la ley.Los necrofílicos profanan tumbas, entran al servicio forense obien asesinan a sus víctimas para posteriormente violarlas,cuando esto sucede se constituye como una forma extremade sadismo, siendo el objeto sexual un fetiche.Si el cadáver es violado directamente eso implica que untrastorno muy profundo de la personalidad, por regla unapsicosis. Aunque el necrofílico presenta escaso interés en lasmujeres vivas, algunos pueden realizar el coito si la mujerpermanece totalmente quieta, como si estuviera muerta. PRCEPTO PENAL La necromania o necrofilia es aquella perturbación del finsexual consiste en la atracción lubrica por los cadáveres. Elnecrofilo realiza conducta delictiva en forma de comisión de delitos de profanación de cadáveres ( art.281 del CódigoPenal ). Puede transformarse en homicida para , después,desahogar su aberración
TRANVESTISMO Travestismo.-Esta parafília se caracteriza por obtener placer oexcitación sexual vistiendo ropas del sexo opuesto (hay quediferenciarla de la transexualidad).El orgasmo se presenta generalmente por medio delfrotamiento (masturbación) con las prendas. Algunostransvestis tienen rasgos fetichistas, homosexuales omasoquistas PRECEPTO PENAL La legislación mexicana no contempla como delito la practicade estas tendencias sin embargo nótese que el actohomosexual realizado por fuerza o intimidación integra delitode violación. Y que cualquier acto escandaloso por supublicidad encuadra en la tipicidad del delito de exhibicionesdescrito en el articulo 200 reformado del Código Penal.También se puede presentar el caso de robo por esta practica
EXHIBICIONISMO-DEFINICION Exhibicionismo.- (violadores a distancia) El exhibicionismo esuna parafilia común que se describe como una exposicióndeliberada y compulsiva de los genitales en público, siemprepor un varón como medio para alcanzar la satisfacción sexual.Las mujeres por lo general obtienen más placer al exhibirotras partes de su cuerpo. En esta parafilia la satisfacciónsexual se alcanza por medio de la masturbación posterior a laexhibición. Al sujeto exhibicionista, lo que le excita es lareacción de la víctima que puede ser de sorpresa, asombro omiedo.La teoría psicoanalítica sostiene que el exhibicionismo esutilizado como la negación de la ansiedad de castración. Elhombre busca tranquilizarse con la reacción de la audienciafemenina (a menudo niñas) de que él si tiene un pene y deque le temen debido a él. Cuando el exhibicionismo sepresenta en la preadolescencia (es común) no es unaperversión.Los exhibicionistas son por lo general son hombres conpersonalidad inadecuada y tendencia sádicas ysadomasoquistas. Ellos por lo general tienden a regresar allugar de los hechos y por tanto son aprehendidos y castigadospor la ley Parafilia caracterizada por la obtención de excitación sexualmediante la exposición de los genitales a los demás enlugares públicos, sin que el sujeto actuante pretenda realizardespués una actividad sexual. El exhibicionismo, desviaciónque ocurre de forma casi exclusiva en hombres, sprobablemente la más común de las desviaciones sexuales. PRCEPTO PENAL Es la perturbación sexual por la que el sujeto se place con laexposición publica de sus partes pudendas. Como lasacciones impúdicas las efectúan en publico, son reiterantesautores del delito de ultrajes a la moral publica o las buenascostumbres previsto en el segundo apartado del articulo 200reformado del Código Penal, al que publique por cualquier medio ,ejecute o haga ejecutar por otro exhibicionesobscenas. MASOQUISMO-DEFINICION Masoquismo.- Es la parafilia que se complementa con la delsadismo en donde la persona tiene gran placer sexual al seragredida físicamente, además de ser sometida por su agresor.Para Freud los masoquistas tienen fantasías destructivas quevuelven contra sí mismos.Es un tipo de variación sexual en la que el individuoexperimenta excitación o placer sexual al ser sometido a
experiencias de humillación, violencia o sufrimiento, tantofísico como psicológico, durante la relación de pareja. Paraque el masoquismo sea considerado como un problema debeimplicar la participación real en actividades masoquistas y nosimplemente fantasías masoquistas de ser golpeado, violado ohumillado, que suelen facilitar la excitación sexual de algunaspersonas.Se analiza en conjunto con el sadismo que es un tipo devariación o parafilia sexual caracterizada por la necesidad deinfringir dolor, humillación o sufrimiento, tanto físico comopsicológico otra persona para excitarse sexualmente uobtener el placer sexual. Esta parafilia suele darseprincipalmente en adultos y con mayor frecuencia en hombresque en mujeres. A pesar de que esta variación sexual esescasa, la aparición de fantasías sádicas tiene una frecuenciaalta. Las actividades más frecuentes son los mordiscos,golpes, bofetadas, puñetazos, pellizcos y los arañazos. Conmenor frecuencia aparecen los castigos, latigazos, el atado olas palizas PRCEPTO PENAL Es aquella fijación irregular del fin sexual por la que el sujetoque la padece encuentra posibilidad de apetencia erótica oposibilidad de la plena satisfacción sexual a través de losactos de crueldad de índole moral o material realizados en su propio cuerpo .Las lesiones o muerte que el sujeto a si mismose causa, no constituyen delito o a lo menos en el DerechoPenal común. Nótese no obstante que como el consentimientodel ofendido no extingue la acción penal, salvo en los delitosde querella necesaria, el sujeto que se presta a lesionar almasoquista para proporcionarle placer es culpable del delitoque resulte. SADISMO-DEFINICION Sadismo.-: En esta parafilia la persona tiene gran placersexual y excitación al agredir, someter, sobajar a su pareja PRECEPTO PENAL El sadismo es una desviación del fin sexual en que el sujetoencuentra posibilidad de plena satisfacción a través los actosde crueldad morales o materiales que realiza o hace realizaren la persona de otro. Los casos de sadismo constituyen en lalegislación mexicana delitos de homicidio o lesionescometidos con calificativa de obrar por motivos depravados. Tres son los elementos en que los sadistas pueden conectarel instinto erótico con sus complejos de crueldad: a) antes delacto sexual, como modo preparatorio frecuente en individuosque presentan síntomas de semiimpotencia; b )después deejecutado el coito, en que no se a encontrado plena
satisfacción y c) en los casos de plena impotencia para elcoito en que la tortura resume el apetito y satisfacción sexual.Las manifestaciones frecuentes de su conducta antijurídicaserán para el sadista la tortura moral, las amenazas,injurias ;y para el inclinado a la violencia física los golpes,privación violenta de la libertad, lesiones mas o menos gravesy aun homicidio. VOUYERISMO-DEFINICION Voyeurismo o escoptofilia.- Esta parafilia de gusto recurrentey que ocasiona preocupación, consiste en obtener placersexual observando los órganos sexuales y las actividadessexuales de otros, por lo general de mujeres. Losvouyeuristas se masturban mientras observa el evento.No le gusta ir a playas nudistas donde es permitido ver elcuerpo desnudo, le excita lo prohibido de la acción. En eladolescente el voyeurismo es normal como parte de labúsqueda de excitación sexual.En el adulto los caracteres voyeuristas pueden ser normalescomo en el juego sexual antes de la copula y la excitaciónocasionada al ver fotografías o películas pornográficas con supareja. El desviado por otra parte obtiene satisfacción al cometer el acto en forma compulsiva e iterativa a los demás,a menudo con gran riesgo.Trastorno psicosexual consistente en que la excitación y elplacer sexual se obtiene por observación secreta de objetos osituaciones sexuales. La satisfacción se alcanza mediante laperversión visual activa sin buscar la relación sexual con lapersona observada. Se intenta mantener el anonimato cuandomira a las mujeres desnudas o poco vestidas obteniendo así (con o sin masturbación) gratificación sexual. Se trata de unaanomalía del comportamiento que forma parte de lasparafílias. Como conducta sexualmente desviada, evocarespuestas relativamente débiles. El DSM-IV indica que esnecesario que las compulsiones sexuales y las fantasías deexcitación voyeuristas se produzcan de manera repetitiva pormás de seis meses. PRECEPTO PENAL La conducta de estos viciosos es indiferente para el DerechoPenal pues con su autoerotismo no pude lesionar ni poner, al menos directamente los intereses legítimos de los demás,la solución del problema corresponde a la conciencia o moralindividuales, o a la clínica de patología sexual no a loscódigos FETICHISMO-DEFINICION Fetichismo.- A esta parafilia se le define como la obtención delplacer o excitación sexual a partir de objetos inanimados, porejemplo zapatos o ropa íntima o con partes del cuerpo (pelo).El orgasmo puede ser espontáneo al ponerse en contacto conel fetiche o por la masturbación o la cópula en presencia delfetiche.El fetichismo es una exageración de la evaluación acentuadanormal de ciertas prendas asociadas con el objeto amado.
Laatención excesiva a ciertas partes del cuerpo femenino(mamas, nalgas piernas) se le conoce como parcialismo.La fetichista femenina en ocasiones se enfrasca encleptomanía compulsiva que puede tener significados sexualesinconscientes.Parafilia que se caracteriza por manifestar una ansiedadrelacionada con el deseo sexual y que implica la necesidad devestirse con ropa característica del sexo opuesto. Suele sermás frecuente en varones heterosexuales. Puede darse juntocon disforia con respecto al propio sexo, enmarcada en untrastorno de la identidad sexual. no obstante, lo másfrecuente es que el travestido no desee cambiar de sexo, sinosimplemente experimentar el rol femenino ocasionalmente
PRECEPTO PENAL Fijación irregular libidinosa por la que el sujeto que la padeceencuentra apetencia o satisfacción eróticas en objetosinanimados o impresiones sensoriales en los que a desplazadosu codicia sexual-, no interesa al Derecho Penal salvo casosverdaderamente especiales en que el fetichista se convierteen autor de raterías de objetos para el representativo. FROTEURISMO-DEFINICION Froteurismo.- (frotamiento): A esta parafilia se le describecomo el gusto y excitación caracterizado por frotar el penecontra las nalgas o bien el cuerpo de una mujer.Esta parafilia es frecuente en lugares muy concurridos comopuede ser el metro, los cines los estadios deportivos, etc. Esteacto suele pasar desapercibido para la víctima. Los frotistassólo son pervertidos si éste es el único modo de que obtengael orgasmo.Es la obtención de placer exclusivo a través del frotamientode los órganos genitales contra el cuerpo de una personadesconocida y sin su consentimiento, a veces utiliza lasmanos y acaricia a su víctima, se realiza en lugares públicos yconcurridos. Esta conducta no es preludio de actividad sexual;en su mayoría, la masturbación acompaña al recuerdo de talsituación. El froteurismo suele ser pasajero con prevalencia entre los 15y 20 años de edad. PRECEPTO PENAL
Al igual que en el caso de el voyeurismo es indiferente para elDerecho Penal y que siempre y cuando este no llegue acausar daños o a lastimar los bienes protegidos de terceros,es decir que este no pueda causar un problema social o aunmás un problema criminológico como consecuencia de supractica. HIPOXIFILIA -DEFINICION Hipoxifilia o asfixiofilia.- Esta parafilia consiste en la excitaciónque le provoca a la persona el asfixiarse al momento dealcanzar el orgasmo. Se han dado casos en los que losparafilicos no dimensionan la gravedad del acto y llegan aconsumar la asfixia. PRECEPTO PENAL Si bien, no esta directamente previsto en el código comodelito ,podemos considerarlo como dentro de aquellosllamados delitos de comisión por motivos depravados; puespodría darse el caso que en su practica se pueda cometer unhomicidio o lesiones ya sean simples o graves , poniendo laspenas que a cada uno le corresponden
GERONTOFOLIA Gerontofília.-Se define a la gerontofilia como la obtención delplacer sexual con una persona de mayor edad de cualquiersexo.La gerontofilia es difícil de detectar ya que es común que unamujer joven se case con un anciano por amor o un joven conuna anciana por amor, o en ambos casos por razoneseconómicas conscientes. Pero si el individuo joven lo hace deforma compulsiva y exclusivamente prefiere una sucesión decompañeras o compañeros ancianos o mayores que él,constituye una perversión. PRECEPTO PENAL Si el acto es realizado en contra de la voluntad de la personao por medio de la violencia constituirá el delito de violación , y será aun mas atenuado por el hecho de tener una ciertaventaja o alevosía sobre el sujeto pasivo.
CONCLUCION
En términos de generalidad es necesario advertir respecto dela conducta delincuencial de los perturbados sexuales que,sus anormalidades con frecuencia son síntomas de estadosmentales enajenativos.Recomendable resulta en los procesos su examen por peritospsiquiatras. Cuando se demuestre que la acción lasciva hasido realizada por un enajenado mental, la sanción aplicableserá, a titulo preventivo y de tratamiento, reclusión portiempo indefinido hasta la sanidad del sujeto, en manicomioscriminales o establecimientos especiales
Trastornos sexuales Si bien algunos trastornos como los de identidad sexual pueden ser de interés criminológico, nos ocupamos de los que dan lugar a conductas universal o mayoritariamente reputadas como delitos sexuales, esto es, de algunas parafilias; así como las siguientes:
1) la pedofilia;
2) el exhibicionismo;
3) el masoquismo sexual;
4) El sadismo sexual, y
5) El voyeurismo.
Se debe hacer notar que los estudios no codifican como categoría diagnóstica dentro de los trastornos psicosexuales a la violación violenta o forzada o violación propia ni al abuso de incapacidad psicofísica de disenso o resistencia. Sólo a título ilustrativo trataremos sumaria y finalmente la homosexualidad, el transexualismo, el travestismo, el fetichismo, el voyeurismo y algunas otras parafilias como las atípicas. CLASIFICACIÓN. Los trastornos psicosexuales son clasificados por los estudios así:
1) trastornos de la identidad sexual (el transexualismo)
2) Parafilias (fetichismo, travestismo, zoofilia, pedofilia, exhibicionismo, voyeurismo, masoquismo sexual, sadismo sexual y parafilias atípicas);
3) Disfunciones psicosexuales (eyaculación precoz);
4) Otros trastornos psicosexuales ( homosexualidad egodistónica).
Hay otros estudios efectuados con posterioridad que otorgan la siguientes clasificación:
1) las parafilias (exhibicionismo; fetichismo; frotteurismo; pedofilia; masoquismo sexual; sadismo sexual; fetichismo transvestista; voyeurismo y parafilias no especificadas;
2) Las disfunciones sexuales (eyaculación precos).
Las trastornos de la identidad sexual fueron agrupados por los estudios dentro de los trastornos de inicio en la infancia, la niñez o la adolescencia (por ejemplo el transexualismo) De igual forma, los nuevos estudios volvieron a incluir los trastornos de identidad sexual, junto con las parafilias, dentro del grupo de los trastornos sexuales (trastornos sexuales y de identidad) PARAFILIAS: Ciertos trastornos agrupados como parafilias, según se ha indicado, se consideran criminalmente significativos. Antes de su examen se señala aquí que se considera parafilias a las desviaciones o aberraciones del comportamiento sexual normal; la desviación se refiere al objeto de atracción (desviación=para; atracción= filia; se lee: parafilia; o bien: desviación en la atracción sexual). Algunos autores de orientación psicoanalítica ubican las desviaciones sexuales dentro del grupo de las neurosis parafílicas. Detrás de las parafilias manifiestas existe una neurosis totalmente madura. Pero mientras el neurótico reprime la tendencia sexual prohibida y la exterioriza bajo la forma de trastornos psicosomáticos o de otra conducta socialmente inocua (como por ejemplo, ansiedad y depresión), el neurótico parafílico exterioriza conductas sexualmente desviadas, aunque controlables hasta el extremo de mantenerse dentro de la esfera legal. No estamos de acuerdo con Karpman: no toda parafilia es criminalmente irrelevante; es posible que algunas conductas propias de las parafilias no constituyan delitos en ciertas legislaciones, sin que importe a éstas si el autor actúa o no dentro de un patrón de comportamiento, y también lo es que ciertas modalidades conductuales, como por ejemplo, las meras fantasías paidofílicas, no son criminales en ningún caso, pero ciertas parafilias en modalidades tales como el acceso y abuso carnal de niños están muy lejos de constituir conductas indiferentes a las legislaciones criminales. Por lo demás, se identifica al parafílico que lleva a cabo actos criminales con el psicópata sexual. Pero no se puede tildar a todos los parafílicos, como posibles psicópatas, o bien, psicópatas en potencia. Solo se podrá tildar como tal
cuando ocurra la acción o cuando se presente el comportamiento. Además los caracteres de la personalidad psicopática o sociopática, como por ejemplo la baja tolerancia a la frustración, la ausencia de culpa, la baja de sentimientos hacia los otros, la racionalización de la culpa, etc., lo que no siempre tiene lugar ni siquiera en los parafílicos criminales. Por otro lado, el término parafilia ha venido a sustituir al de desviación sexual, utilizado por la Asociación Americana de Psiquiatría en sus trabajos científicos.PEDOFILIA Constituye un patrón de conducta de fantasías o de relaciones intergenitales (coito) o contra natura (pederásticas o de immisio penis in anum) o bien de acciones sexuales sobre niños de edad prepuberal. Tal categoría se extiende, no sólo al acto sino también a la fantasía de establecer relaciones sexuales con niños de edad prepuberal como medio prevalerte o excluyente para la obtención de excitación sexual. No se deben diagnosticar como paidofílicos las fantasías o actos aislados con niños como resultado de otros trastornos psíquicos, como por ejemplo, retraso mental, intoxicación alcohólica, etc. Los individuos que se sienten atraídos por las niñas las prefieren entre los ocho y los diez años; aquellos que tienen su impulso dirigido a los niños los prefieren de mayor edad. Se considera que la atracción hacia las niñas es dos veces más frecuente que la referida a los niños. Pueden presentarse hipótesis de adolescentes en los que no existe gran diferecia de edad entre el pedofílico y el niño. En tal caso deberán estudiarse las situaciones en particular; la historia del adolescente, su eventual inmadurez, la madurez del menor y otros datos clínicamente útiles al diagnóstico. La edad del autor o paciente se sitúa a partir de los dieciséis años y debe ser por lo menos cinco años mayor que el niño. En Alemana se contempla como figura independiente de los delitos sexuales el abuso de niños; en la Argentina por ejemplo y otros países, como por ejemplo, España, Chile, México, Uruguay, etc. La pedofilia es un subtipo o derivado del tipo primario que es la violación: Se califica que es una violación presunta. Pero aquí en Guatemala se califica de violación agravada. Por lo que no se le observa como figura delictiva autónoma, que sería lo más correcto. Algunas legislaciones, como la de Argentina, incluyen las acciones abusivas de un adulto contra un niño como sub-categorías de violación y cuando sucede, se le calificará de acceso carnal (que en sí es una violación presunta), y como hipótesis de abuso deshonestos, cuando importan otras acciones sexuales. En Guatemala con la última reforma al código penal, se califica la conducta como Violación. Las normas criminales de países de Latinoamérica, erróneamente separan como tipos diversos los supuestos de acceso de los de acciones no copulares y
no discrimina, además entre los actos aislados de abuso de niños y las parafilias paidofílicas; Ello hace que resulte caótico todo intento serio de clasificación y tratamiento penitenciarios, como todaplanificación de terapéutica comunitaria o institucional. Pero la reforma última al Código Penal en Guatemala, ya engloba la conducta como violación y como Agresión sexual. Pues incluye en ambas, el comportamiento delictivo del adulto hacia un menor de edad. En otras materias, la legislación es ajena a los conocimientos globales de la conducta humana. La ley criminal de los estados se limitan a la protección individual contra resultados o hechos aislados dañosos y punibles y no a considerar la peligrosidad social de los sujetos, diagnosticable con atención a las personas y a las conductas persistentes y significativas. EXHIBICIONISMO El exhibicionismo, en tanto conducta parafílica, consiste en la exposición compulsiva de los genitales en público, ello como medio repetitivo de conseguir excitación y gratificación sexuales, sin intento de actividad sexual posterior. El rasgo esencial de esta categoría parafílica lo constituye la existencia de un patrón repetitivo de tal perversión sexual. Exhibicionismo no parafílico. Cuando con la exposición repetida el sujeto no experimenta excitación o placer sexual, la conducta no debe diagnosticarse como exhibicionismo. Se considera que estos pacientes pueden hallar ayuda terapéutica conductista y también psicoanalítica. Esta desviación se presenta, generalmente, en los hombres (en su mayoría desde la preadolescencia) y rara vez en las mujeres. La teoría psicoanalítica atribuye la parafilia a un complejo de castración masculino que se tiende a calmar compulsivamente. Se dice que la mayoría de las madres de los exhibicionistas muestran grandes semejanzas, como el narcisismo y la incapacidad de adaptarse a su propia femineidad: suelen tener apariencia y modales masculinos e identificarse de manera total con sus hijos; de allí que la exhibición represente para éstos una tentativa inconsciente de romper tal identificación. Crítica Penal
Los códigos penales no califican claramente el exhibicionismo como conducta parafílica. Más bien hablan de cualquier acto independiente de obscenidad pública. Como consecuencia no puede resultar política criminal científica alguna a partir de las simples condenas penales por exhibiciones obscenas; ello, ya que las normas y sentencias sólo miran la prueba jurídica del hecho aislado, sin atender ni a la personalidad del sujeto ni al carácter persistente y compulsivo del acto ni al propósito de auto-excitación, el dolo, intención o finalidad consiste en querer exhibir lo obsceno o en aceptar la consecuencia como eventual (dolo eventual). A los penalistas y sus códigos penales, finalmente, no les interesa clasificar de manera diferenciada la exposición compulsiva y persistente de los genitales, por un lado, y los actos obscenos aislados y ofensivos al pudor público, por el otro. Les basta que la exhibición sea obscena. La criminología, el derecho penal y las ciencias de la conducta continúan también aquí divorciados.Las reformas a la legislación penal en Guatemala, ha llevado a considerar la conducta como delictiva únicamente si en la actuación llegan a involucrarse a menores de edad, de lo contrario, la conducta no es calificada de ilícita. Es decir, solo la participación en la acción de menores de edad, es punible y perseguible oficiosamente por el Estado. MASOQUISMO SEXUAL: El masoquismo sexual de un sujeto consiste en la reducción o satisfacción lúbrica de los impulsos de aquel carácter mediante su humillación y el sufrimiento; ello, como medio preferido o patrón excluyente de esa conducta sexual. El diagnóstico se propone en cualquiera de las siguientes condiciones: 1) Durante un período de por lo menos seis meses, intensas necesidades sexuales recurrentes y fantasías sexualmente excitantes que implican el hecho real (no simulado) de ser humillado, atado, golpeado o de sufrir de cualquier otra manera; 2) El individuo ha actuado de acuerdo con estas necesidades o se encuentra marcadamente perturbado por ellas. Crítica político-criminal El masoquista cuyo estado peligroso es inequívoco, requiriendo tratamiento, no es generalmente objeto de medida terapéutica alguna; ello, aun en los casos en que ha tenido lugar su detección. Por ejemplo, el sadismo o lesiones por placer sexual detectados policialmente. Existen supuestos en los cuales estos parafílicos son identificados como víctimas, en ciertos procesos por diversas ofensas sexuales concurrentes, por ejemplo el sadismo y violación, sadismo y
estupro. Otros casos son de lesión sexual consentida: en éstos puede o no existir la intención final de consumar el acceso carnal o de realizar acciones sexuales diversas del tipo de la agresión sádica en sí, por ejemplo, atar a la victima partícipe y someterla a ciertos sufrimientos o dolores como medio de alcanzar sádicamente el orgasmo.Los códigos penales no atienden al carácter propio de esta parafilia y tampoco se procura en ellos o en las leyes especiales su clasificación; ello obsta a toda posibilidad de tratamiento y rehabilitación del trastorno que origina la criminalidad. De tal manera tampoco se logra la prevención secundaria ni, consecuentemente, la prevención terciaria. SADISMO El sadismo consiste en el impulso tendiente a infligir sufrimiento físico o psicológico a otra persona del mismo o diferente sexo, con el propósito de alcanzar la excitación sexual. Según los estudios, la sintomatología esencia de este trastorno consiste en intensas necesidades sexuales recurrentes y fantasías sexualmente excitantes de por lo menos seis meses de duración, que implican actos (reales, no simulados) en los que el sufrimiento físico o psicológico (incluyendo la humillación de la víctima, es sexualmente excitante. Por lo general, el trastorno es de tipo crónico en su forma extrema. El sadismo puede practicarse tanto sobre quienes consienten como contra la voluntad de la víctima. Los actos de sadismo pueden aumentar su intensidad con el tiempo y llegar desde las lesiones y torturas hasta la muerte (asesinato por lubricidad) y necrofilia subsiguiente. A juicio de tratadistas, el diagnóstico médico legal debe diferenciar entre los asaltantes, violadores (delincuentes agresivos) y los parafílicos sádicos.Si bien el sufrimiento de la víctima aumenta el placer sexual en la violación forzada, no todo violador es un sádico, y a la inversa. Existen diversos grados de sadismo, y aun fuera de la parafilia sádica, cuyas pautas de diagnóstico efectuado. El sadismo larvado o frustrado se manifiesta en fantasías o en los sueños sin pasar a la acción; asimismo, en quienes sienten placer humillando y torturando psíquicamente a su mujer. Con respecto al sadismo inconsciente se encuentra como ejemplo, los de quien expresa placer en molestar y agraviar; y en los supuestos de multitudes, en el placer del linchamiento. Asimismo, constituyen otros ejemplos, la atracción perversa o intensa y con goce psíquico por las ejecuciones judiciales, la corrida de toros, el propio boxeo y los funerales, etc. Ciertas circunstancias, como las bélicas, como por ejemplo las guerras civiles, las matanzas y persecuciones políticas, dan oportunidad para que aflore el sadismo de ciertos individuos, aunque no se trate del sadismo sexual propiamente dicho. Suele reclutarse entre las víctimas del sadismo a las prostitutas y a los niños. El crimen y la agresión sádica no sexuales deben distinguirse del crimen y la agresión por lubricidad; en el último concurren imprescindiblemente la voluptuosidad y la agresión como reductores del
impulso parafílico. Cuando el trastorno es grave y cuando se halla asociado con el trastorno antisocial de la personalidad y con rasgos de la personalidad sádica, este tipo de individuos puede lesionar gravemente o matar a sus víctimas. Sadismo y violación. Según estudios, la violación o cualquier otro tipo de ataque sexual, (refiriéndose a la violación o su comportamiento agravado), puede ser cometido por la gente que padece este trastorno. En tales casos, el sufrimiento infligido a la víctima excede en mucho al necesario para obtener el consentimiento forzado o superar la resistencia, y las reacciones de dolor son excitantes. Sin embargo, en muchos casos de violación el violador no se encuentra motivado por la idea de infligir sufrimiento y hasta puede perder deseos sexuales al observar el dolor de la víctima. Estudios efectuados por violadores indican que menos del 10% de ellos presentan sadismo sexual. Algunos violadores parecen excitarse sexualmente por el hecho de formar a un apersona que no consiente a una relación sexual y son capaces de mantener la excitación sexual incluso cuando se dan cuenta del sufrimiento de la víctima. Sin embargo, y a diferencia del individuo sádico sexual, tales sujetos no encuentran el sufrimiento de la víctima como algo sexualmente excitante. Los actos sádicos también se presentan en ausencia de excitación sexual en una gran variedad de crímenes, en la tortura utilizada para interrogar prisioneros, en cultos rituales, y en individuos que presentan rasgos de personalidad sádica. Crítica política criminal Más allá de la fuerza propia de la violación o del abuso deshonesto, como por ejemplo el atentado violento al pudor, el sadismo sexual se diferencia porque no constituye un simple medio o vía instrumental del vencimiento de la resistencia de la víctima, sino la propia meta final y reductora de la necesidad perversa. En estos casos, los códigos penales no atienden al carácter propio de esta parafilia y no se procura ni en ellos ni en leyes especiales clasificación alguna; tampoco en las sentencias judiciales, lo que obsta a toda posibilidad de tratamiento y rehabilitación del trastorno como tal. De tal manera, no se logra la prevención secundaria ni, consecuentemente, la prevención terciaria de la parafilia sádico-sexual. HOMOSEXUALIDAD Se define como conducta homosexual u homo-erotismo la atracción, exclusiva o predominante, hacia personas del mismo sexo, con o sin relación física. El vocablo incluye el lesbianismo y la sodomía y excluye la pedofilia homosexual. La homosexualidad se ha conservado como un tipo de desviación sexual. En 1973, el Comité de Expertos de la Asociación americana de Psiquiatría eliminó
la homosexualidad como trastorno mental, sustituyéndola por la categoría de los trastornos en la orientación sexual. Esta categoría aparece recientemente, destinada a aprehender a aquellos homosexuales perturbados por, en conflicto con, o con deseo de cambiar su orientación sexual. En los estudios si bien se excluye la homosexualidad del grupo de las parafilias, se incluye la llamada homosexualidad agodistónica dentro del grupo de otros trastornos psicosexuales. LA CATEGORÍA DE HOMOSEXUALIDAD EGODISTÓNICA Ésta puede tener interés en el tratamiento diferencial de los casos aprehendidos por algunos códigos como homosexualidad. El rasgo esencial es el deseo de adquirir o aumentar la excitación heterosexual de tal forma que puedan iniciarse o mantenerse relaciones heterosexuales y, al mismo tiempo, una pauta mantenida de excitación homosexual, clara, que el individuo manifiesta explícitamente como no querida y que es causa persistente de malestar. CAUSAS DE LA HOMOSEXUALIDAD. Se han dado múltiples teorías sobre la etiología homosexual. Teorías prefreudianas. Estas teorías giraban en torno de: 1) la existencia de una bisexualidad universal; 2) la predisposición de base congénita o hereditaria. Teorías genéticas. Para algunos investigadores, la homosexualidad constituye una enfermedad, trastorno o defecto de inequívoco determinismo genético. Teorías freudianas. Freíd partió de la teoría bisexual de su tiempo, pero le daba un carácter decisivo a las experiencias psícosociales e infantiles. Describió a los homosexuales como personas que habían tenido una intensa adhesión erótica con sus madres durante la infancia. Karpman explica cómo el varón tiende a sustituir e identificarse con el padre al tiempo que la niña lo hace con su madre, intentando la aproximación al sexo contrario. La represión o disciplina rígida –agrega- puede llevar a un desplazamiento de objeto. Así, el período prepúber es esencialmente homosexual, pero al llegar a la pubertad el individuo se inclina al sexo opuesto.
Para Karpman, los factores genéticos no influyen en la elección del objeto sexual . Prevención Los autores insisten en los beneficios de una eficaz prevención:
1) por detección precoz;
2) por vía de la educación pública.
Profilaxis escolar: La detección escolar, como en otros trastornos, y la intervención de los propios padres en clínicas de tránsito en las escuelas, se consideran de gran utilidad. Terapia: Se dan preferencia a la terapia psicoanalítica tanto individual como grupal. Pero los métodos de reforzamiento positivo y aversivo y el modelamiento de conducta behaviorista se destaca en los últimos tiempos; particularmente, el condicionamiento aversivo a los actos homosexuales. Delincuencia homosexual: Entre los delitos más conocidos de los homosexuales independientemente de aquellos países donde se pena la sodomía en sí, se encuentran:
1) la pedofilia homosexual;
2) la prostitución homosexual;
3) La drogadicción;
4) El alcoholismo;
5) Los hurtos y delitos menores para sostener su pareja; Además, la vagancia, etc.
La experiencia indica que el homosexual muestra un notable aprendizaje de evitación condenatoria respecto de los hurtos y otros delitos y suele valerse de esa condición para co-implicar a las incautas víctimas a las que no pocas veces hemos visto en difícil trance procesal, generalmente cuando se trata de personas casadas enredadas de algún modo por aquéllos. De allí que deban agregarse casos de amenazas. Crítica político criminal.
Como bien recuerda Cukierman, citando a Karpman, el tratamiento en prisión de un homosexual es semejante al de un alcohólico crónico en una taberna. Dado que desde muy temprana edad son víctimas propiciatorias de la paidofilia homosexual, ejerciendo la prostitución o sirviendo a la lascivia de ancianos perversos, su detección y tratamientos comunitarios es primordial; pero la discriminación punitiva no debe implicar su eliminación del catálogo criminógeno (en códigos o en leyes penales especiales). Debe sometérselos a tratamiento comunitario y no carcelario; aunque sí, y muy excepcionalmente, a la terapia institucional no penitenciaria, esto es, en institutos adecuados. TRANSEXUALISMO. Los estudios no agrupan al transexualismo dentro de las parafilias, sino como trastorno de la identidad sexual. En una revisión histórica de estudios se aprecia que, el transexualismo constituye una categoría de desviación sexual juntamente con la homosexualidad, el travestismo, el exhibicionismo, etc.; por el contrario, los trastornos de la identificad psicosexual excluyen aquí la homosexualidad, el transexualismo dentro de los trastornos de inicio en la infancia, la niñez o la adolescencia, como uno de los trastornos de la identidad sexual. Se conceptúa como transexualismo el deseo o necesidad compulsiva de transformarse en el sexo opuesto, sea por medios químicos o quirúrgicos. El diagnóstico sólo se efectúa cuando el trastorno ha persistido no menos de dos años y no ha sido ocasionado por otro trastorno mental como la esquizofrenia y no se halla asociado a alguna anormalidad intersexual física o genética. Conforme los estudios, los rasgos esenciales de este trastorno consisten en un malestar persistente y un sentimiento de inadecuación con respecto al propio sexo anatómico en una persona que ya ha alcanzado la pubertad. Además, existe una preocupación de por lo menos dos años de duración sobre cómo deshacerse de las características sexuales primarias y secundarias del propio sexo y adquirir las de otro. Por esta razón no debería hacerse el diagnóstico si la alteración se limita básicamente a períodos breves de stress. Los sujetos etiquetables como transexuales deben tener una constitución inequívoca, sea masculina o femenina. De acuerdo con el nuevo Manual de diagnóstico y estadística de las enfermedades mentales, el transexualismo se subdivide con atención a la historia anterior del sujeto:
1) Asexual;
2) Homosexual;
3) Heterosexual;
4) Inespecificazo.
Transexualismo y travestismo El transexualismo se asocia con el travestismo, ya que el sujeto, molesto, es incapaz de vivir su propio sexo y siente un deseo irresistible de pertenecer al opuesto; tiende al travestismo y a adoptar también las actitudes, los juegos y la conducta en general del sexo contrario. Tanto el travestid como el transexual tienen impulsos de usar ropas del otro sexo, pero sólo el transexual quiere liberarse de sus genitales. Transexualismo y homosexualidad El transexual, salvo en su curso o historia inicial, no tienen inclinación homosexual, sino que desea pertenecer al sexo contrario. Por ejemplo, el hombre desea actuar y vestirse como mujer y ser aceptado como tal. De allí que los transexuales se resistan enérgicamente a que se los señale, etiquete o diagnostique como homosexuales. Se considera que el transexualismo de mujer a hombre presenta una historia más pura en punto al registro de anteriores episodios o fantasías homosexuales; no es tan terminante la cuestión en relación con la historia inicial del transexual masculino. Factores psícosociales y familiares predisponentes. Se considera de interés el estudio de las posibles causas familiares, reproducibles, de la femineidad infantil del hombre y de la masculinidad de la mujer. Travestismo y homosexualidad afeminada. El homosexual, aunque adopte actitudes del otro sexo, no quiere perder sus propios genitales; ello lo diferencia del transexual. El diagnóstico no puede alterarse por el hecho de sumarse el travestismo. Transexualismo y hermafroditismo. Las estructuras sexuales anormales descartan el diagnóstico de transexualismo. No obstante, existe cierta proporción de personas con enfermedades o más bien anormalidades físicas, no codificables por los estudios; el trastorno físico es ajeno a los grupos y categorías diagnósticas de los trastornos mentales, con manifestaciones primariamente conductuales o psicológicas. Como ya hemos visto, nos ocupamos aquí de los últimos. No obstante, la desviación físico-sexual, consecuencia de un desequilibrio cromosómico, gonadal u hormonal, produce hermafroditismo, con unos genitales externos ambiguos. En estos casos puede estar indicada la intervención química o
quirúrgica para hacer que el sexo anatómico y el sexo en el que se lo ha educado concuerden tanto como sea posible. Travestismo. El travestismo o fetichismo travestiste, constituye una categoría diagnóstica agrupada dentro de las parafilias y consiste en el hecho de vestirse con ropas del sexo opuesto de manera repetida y persistente. En 1910 Hirschfeld consideró al travestismo como: Una Psicopatía sexualis; la realidad es que constituye una categoría de las parafilias, se le puede incluir dentro de la personalidad sociopática. Algunos autores logran la excitación sexual y la reducción del impulso perverso al vestir y simular el sexo opuesto. No es común que estos sujetos tengan experiencias heterosexuales. En algunos parafílicos el travestismo constituye una medida dirigida a estimular la masturbación; en otros, la excitación sexual, y en otros, el coito homosexual. Pero el travestismo puede suceder a las instancias anteriores o a algunas de ellas, quedando como una satisfacción en sí (o meta reductora) y como una forma compulsiva para reducir la ansiedad. Conforme los estudios al respecto de éste tema, la sintomatología esencial de este trastorno es la presencia de intensas necesidades recurrentes y fantasías sexualmente excitantes durante un período de duración, que implican vestirse con ropas del sexo contrario. Relación con otras perversiones. El travestismo puede asociarse a la homosexualidad, al fetichismo y al transexualismo. Debe efectuarse cuidadosamente el diagnóstico diferencial con algunas otras desviaciones: por ejemplo, el transexual además de querer liberarse de sus genitales gusta vivir como persona del sexo opuesto y, en consecuencia, travestirse. Sin embargo, el travestid se considera de su propio sexo y no desea liberarse de él; el transexual travestid gusta travestirse, pero, además tiene una identidad contraria a su sexo anatómico del que desea desprenderse. El homosexual masculino suele travestirse ocasionalmente para atraer a su pareja pero no logra con ello ni excitación sexual, ni calma una ansiedad, ni actúa compulsiva ni repetitivamente como patrón parafílico de conducta. Cuando el travestismo evoluciona hacia la transexualidad y se dan los caracteres de la última, éste debe ser el diagnóstico. Fetichismo El fetichista es aquel que logra la excitación sexual sustituyendo el objeto humano deseado por otros materiales como zapatos, corsé, etc. También se caracteriza el trastorno por el uso de los objetos no vivos (fetiches) como método preferido o exclusivo para obtener la excitación sexual. Los fetiches no se limitan a ropas y pueden consistir en toda clase de objetos simbólicos. El diagnóstico no corresponde cuando el uso ocasional de ropas u otros objetos,
aunque produzcan excitación, forme parte de un patrón travestiste de conducta. Fetichismo y delito. Suele asociarse al fetichismo con las tendencias y prácticas de índole cleptomaníaca. La cleptomanía puede constituir en las mujeres fetichistas una fuente de excitación sexual. Voyeurismo. El voyeurismo o escopofilia es el deseo y práctica patológicos, persistentes o excluyentes de hallar excitación o gratificación sexual mirando actos eróticos de desnudez o los genitales a quienes ignoran ser vistos. La satisfacción sólo se alcanza cuando el sujeto no es visto o piensa que no lo es. La escopofilia se diferencia de la observación pornográfica, filmada o viva, en que el placer del voyeurista se asocia siempre al hecho de no ser visto; en la filmación y en los actos pornográficos en vivo, en cambio, los actores obviamente saben que su representación será vista y ése es su objeto; allí el voyeurista no encuentra placer.
¿Se trata de un trastorno frecuente? ¿Quiénes las padecen? En la mayoría de las culturas, las conductas parafílicas entran en conflicto con los valores de la sociedad y a menudo pueden conllevar problemas legales, por lo que su identificación, diagnóstico y tratamiento son difíciles. Además, no todas las culturas han definido un mismo comportamiento como normal o anormal. En una misma cultura han ido variando los criterios de normalidad sobre la conducta sexual dependiendo de factores sociales, culturales, y religiosos; ejemplo de ello es la homosexualidad, que hasta hace unos años se consideraba un trastorno mental. La parafilia es un trastorno prácticamente masculino, a excepción del masoquismo sexual que también puede darse en mujeres (pero el riesgo de que lo padezca una mujer es veinte veces menor). Se ha postulado que esta diferencia por géneros se debe a un mayor impulso sexual del varón por la elevada concentración de testosterona. Aparece entre los 13-26 años, siendo más frecuente antes de los 18 años (en el 50% de los casos se manifiesta antes de los 18 años). En el caso de la pedofilia su aparición puede ser más tardía. En general, las parafilias son frecuentes en personas que tienen algún tipo de conexión con el mercado comercial de la pornografía y todo lo relacionado con ella. ¿Existen diferentes tipos? Las parafilias se diferencian y clasifican en función de las características del interés sexual que presenta la persona. Se dividen en: exhibicionismo, fetichismo, frotteurismo, pedofilia, masoquismo sexual, sadismo sexual, voyeurismo, fetichismo travestido y parafilia no especificada. En una próxima sección describiremos cada una de ellas. Algunas de estas conductas como subgrupo (por ejemplo, la pedofilia) implican una trasgresión de la libertad de otra persona y son consideradas como actos delictivos. ¿Cuáles son sus manifestaciones clínicas? Las personas que no comparten sus intereses parafílicos con su pareja recurren a servicios de prostitutas o, a veces, pueden obligar a la pareja a realizarlas en contra de su voluntad. En algunas ocasiones las personas que padecen este trastorno pueden escoger una profesión o afición que les permita estar en contacto con el estímulo, como, por
ejemplo, vender zapatos o lencería de mujer en el caso del fetichismo. Con frecuencia usan material gráfico, como la fotografía o las películas en las que el protagonismo se lo lleva el estímulo sexual parafílico. A nivel psicológico, las personas afectadas de este trastorno pueden no presentar malestar por dicho comportamiento en sí mismo, sino que los problemas sobrevienen por el rechazo social y los conflictos legales que estas conductas pueden generar. En cambio, otras personas que lo padecen pueden experimentar sentimientos de culpa, vergüenza y depresión y, como consecuencia, no desarrollar una actividad sexual y afectiva adecuada. En el ámbito clínico, los pacientes que más consultan son los pedófilos, seguidos de los exhibicionistas y los voyeurs, a menudo a causa de la presión social. ¿Cuáles pueden ser sus causas? En el siglo XIX, el comportamiento parafílico se consideraba un pecado. A medida que la psiquiatría fue progresando en sus conocimientos sobre la enfermedad mental, se plantearon las conductas parafílicas como consecuencia de algún trastorno orgánico (como la sífilis). Fue a principios del siglo XX cuando Freud se refirió a dichas conductas como conflictos del inconsciente expresados de forma inadecuada, y es a finales de ese mismo siglo cuando la ciencia se ha planteado la existencia de factores psicológicos implicados, durante el periodo de aprendizaje y de establecimiento de la conducta sexual. Se desconoce por qué algunas personas padecen parafilias, pero se cree que el inicio de esas pautas de conducta se establece en la infancia. El placer sexual se empezaría a asociar con conductas parafílicas desde la infancia; esta asociación haría incrementar la utilización por parte del niño de imágenes parafílicas para obtener placer y la asociación se haría más fuerte, sin que ésta fuera inhibida. Dado que la sociedad criminaliza dichas conductas, quien lo padeciera acabaría aprendiendo que este tipo de comportamientos deben hacerse en secreto, y esta prohibición aumentaría la excitación y, por tanto, se reforzaría la asociación. Progresivamente, el paciente sólo obtendría placer sexual mediante estímulos sexuales inadecuados, siendo incapaz de experimentar una sexualidad normal. Otro mecanismo causal descrito en la literatura es el caso de personas que han recibido abusos sexuales. El abuso en la infancia puede predisponer a una persona a aceptar la continuidad del abuso durante la edad adulta, convirtiéndose más tarde en abusador. A veces, la persona usa esta forma de actividad sexual como una manera de agredir a otras, como un mecanismo de control que no tendría con un igual. Su necesidad puede ser no tanto sexual como de control, de olvidar sentimientos de inadaptación social o la de expresar su frustración o coraje, convirtiendo la sexualidad en un instrumento.
La parafilia no es contagiosa, no se adquiere por el hecho de exponerse a contenidos de libros, revistas, películas o por estar en contacto con personas parafílicas. La persona que no se excita mediante una conducta parafílica puede sentir aburrimiento, repugnancia o cualquier otra emoción ante el estímulo en cuestión. ¿Cómo se realiza el diagnóstico? Lo más importante es realizar una historia psiquiátrica y médica completa. A veces, se usan métodos psicofisiológicos para medir la respuesta a estímulos parafílicos (a través del volumen peniano) pero su validez diagnóstica es cuestionable. El objetivo se centra en identificar el interés sexual parafílico, para poder modificarlo. La dificultad reside en que a menudo hay resistencia por parte de la persona a contar su problema; ya sea por las repercusiones legales que pueda conllevar o por los sentimientos de vergüenza que su conducta le genera. Para facilitar la entrevista, se recomienda explicar las posibilidades terapéuticas del trastorno, así como evitar hacer un juicio de valor sobre la conducta parafílica, pues si el paciente detecta reacciones emocionales negativas por parte del terapeuta será muy difícil establecer una alianza terapéutica. El objetivo del terapeuta debe ser ayudar al paciente a comprender sus trastornos sexuales, para poder modificarlos y evitar daños a terceros
http://es.scribd.com/doc/54228689/PARAFILIAS más: http://www.monografias.com/trabajos26/parafilias/parafilias.shtml? news#ixzz32tEM8yx4 http://www.sexovida.com/clinica/parafilias3.htm http://psicologo-especialistabarcelona.com/terapia_sexual_parafilias_y_filias.html http://www.fertilab.net/ginecopedia/sexualidad/parafilias/historia_de_las_parafili as_1 http://www.ojocientifico.com/3566/parafilia-mucho-mas-que-sexo
: http://www.monografias.com/trabajos101/responsabilidad-penalimputabilidad-y-trastorno-mental/responsabilidad-penal-imputabilidad-ytrastorno-mental2.shtml#ixzz32vplTLot
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