Libro Antropologia, Carol Ember
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Descripción: Libro de texto para la antropología general...
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10' Edición
Antropología ■
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PEARSON Prentice HaU
CarDi R. [mber Melvin Ember Peter Peregrine
Antropología 10.® Edición
Antropología 10.« Edición CAROL R. EMBER Directora de Human Relations Area Files
MELVIN EMBER Human Relations Area Files
PETER N. PEREGRINE Universidad Lawrence de Wisconsin
l�aducción SANTIAGO MONTERO Profesor Titular de Historia Antigua Universidad Complutense
y JOAQUÍN SÁNCHEZ BAIDES Ingeniero Informático
Revisión técnica FRANCISCO GINER ABATI Catedrático de Antropología Universidad de Salamanca
PEARSON
Prentice Hall Madrid ■ México � Santafé de Bogotá ■ Buenos Aires ■ Caracas ■ Lima Montevideo ■ San Juan ■ San José ■ Santiago ■ Sáo Paulo ' White Piains
_y�-Daítog
de caíabgac ioti "biib liogrAfica
C�Tol IL fimlKr; EVldvln EintKr;feter N. I�regríne Antropología l(L*edkióii ÍEARSON EDUCAaÓN, SA, Madrid, 2004 BBN: fi4-2ÜÍ-J743-S Materia; AutropoJogla 572 195 X 250
Páginas: 752
Todos los derechos reservados� Queda prohibida, salvo excepción prevista en la 1�, cualquier fonua de reproducción� distribución, coiuimicación pública y transfonuación de esta obra sin contar con autorización de los titulares de propiedad intelectual. La íi£&acción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (ariy. 2 70 y Código Femíj. DERECHOS RESERVADOS €3 2004 respecto a la priniera edición en español por: E�RSON EDUCACIÓN, S.A. Ribera del Loira, 2S 28042 Madrid (España) CAftQL R. EMBER; MELVIM EMBER; PETER N. PEREGRINE Antropología 10.'edici6iL [SBN: 84-205-3745� Depósito Legal: M* PRENTICE HALL es un scllg editorial de PEARSON EDUCACIÓN IVaduci�o de: ANTHRQPOLOGY 1 0 ™ E Dn i ON
Copyright © 2002 by Prentice-�Hall, inc. Upper Saddle River, New Jersey 07455 ISBN: 0-15�91936.9 Equipo editorial: Editor: Juan Luis Posadas Técnico editorial: Elena Bazaco Equipo de producción: Director: José Antonio Clares Técnico: José Ajitonio Hernán Diseño de cubierta: equipo de diseño de PEARSON EDUCACIÓN, SA. Composición: JOSUR TEíATAMIENTO DE TEXTOS, S.L. Impreso por: ¡MPRESO EN ESPAÑA - PRINTED HM SPAJN Es�te libro basido impreso con papel y tiíitas- ecológicos-
atiparte i
i n t ro d u c c i ó n
Capítulo 1
¿Qué es la Antropología?
Capítulo 2
Cómo descubrimos el pasado
1 17
/ A p a r t e ii e v o l u c i ó n humana: b i o l ó g i c a y cultural Capítulos
Genética y EVOLuaóN
37
Capítulo 4
Los primates vivos
59
Capítulos
Evol uqón de los primates. Desde l os primeros primates a los homínidos.
83
Capítulo 6
Los primeros homínidos
101
Capítulo 7
Los orígenes de la cultura y la apar i oón del género Homo
121
�PARTE III HUMANOS MODERNOS Capítulo 8
La aparición del Homo SAPiSfís
147
Capítulo 9
El mundo del Paleolítico Superior
167
Capítulo 10
Origen de la producqón de alimentos y de la vida sedentaria
185
Capítulo 11
Origen de las ciudades y de los estados
213
Capítulo 12
Variabilidad humana y a d a p t aq ó n
233
PARTE IV VARIABILIDAD CULTURAL CAPíTtio 13
El concepto de cultora
257
Capítulo 14
Teoría y EviDENaA en la a nt r o pol o gí a cultural
275
Capítulo 15
ComunicaoOn y lenguaje
295
Capítulo 16
Obtención de alimentos
321
Capítulo 17
Sistemas económicos
341
Capítulo 18
EsruATiPiCAaóN s o o a l ; clase, e t n i o d a d y r a os mo
369
V
VI
Tabla de C o n t e n i d o s
Capitulo 19
Sexo, género y cultura
391
Capítulo 20
Matrimonio v familia
413
Capitulo 21
Residenoa conyugal v parentesco
437
Capitulo 22
AsoaAaoNES v grupos de ikterés
462
Capitulo 23
Vida política: orden y desorden soqal
481
Capítulo 24
Psicología y cultura
506
Capítulo 25
Religión y magia
531
Capítulo 26
Lasar l es
551
Capítulo 27
Cambio culti�al
569
PARTE V
UTILIDADES DE LA ANTROPOLOGÍA
Capítulo 28
Antr opol ogí a aplicada y practica
593
Capítulo 29
Antr opol ogí a médica
608
Capítulo 30
Problemas s o o a l es globales
627
Glosario
643
Bibliografía
655
Indice Analítico
703
Los primates vivos„ 59
Apartados
ix
Capítulo 4
PREFAaO
XI
Rasgos generales de los primates 60 Clasificación de los primates 65 Los diferentes primates.....65 Variables adaptativas de los primates 74 Rasgos humanos distintivos 76 Sumario 79 Glosario de términos $0 Cuestiones críticas 80 Ejerácios de Internet 80 Lecturas sugeridas 81
Los AUTORES
XVIII
PARTE I INTRODUCCIÓN Capitulo 1
¿Qué es la Antropología?
1
2 El ámbito de la Antropología Aproximación holística».,..... 3 3 Curiosidad antropológica . 3 Campos de la Antropología 9 Antropología aplicada 11 La relevancia de la Antropología . Sumario 14 Glosario de términos 14 Cuestiones críticas 15 Ejercicios de Internet 15 Lecturas sugeridas 15
Capitulo 2
Cómo descubrimos EL PASADO ....
Capítulo 5 Evo luq ón de los primates. Desde lo s primeros primates a l o s homínidos ....
17
La evidencia dd pasado . El hallazgo de la evidencia El análisis de la evidencia La datación de la evidencia El resultado de la investigación arqueológica. Sumario 35 Glosario de términos 35 Giestiones críticas 35 Ejercicios de Internet 35 Lecturas sugeridas 36
1S 20 23 29 34
Capítulo 6
Genética y EVOLuaóN „„„„„
La evolución de la Evolución„„„„ Los principios de la selección natural
.
Fuentes de variabilidad El origen de las especies Selección natural de los rasgos de comporta¬ miento Sumario 55 Glosario de términos 56 Cuestiones críticas 56 Ejercicios de Internet 56 Lecturas sugeridas 56
Los primeros homínidos..... 101
La evolución de la locomoción bípeda 102 Ardipithecus: ¿el primer póngido bípedo? 106 Aiistralopithecus: el primer homínido definido 107 Un modelo de la evolución humana.....118 Sumario 118 Glosario de términos 119 Cuestiones críticas 119 Ejercicios de Internet 119 Lecturas sugeridas 119
PARTE II EVOLUCIÓN HUMANA: BIOLÓGICA Y CULTURAL Capitulo 3
83
La aparición de los primates &4 La aparición de los anthropoidea. 91 Artthropoidea del Mioceno: pón�doSi homínidos y otros primates 93 La divergencia de los homínidos de los otros Hominoidea 98 Sumario 99 Glosario de términos 99 Cuestiones críticas 100 Ejercicios de Internet 100 Lecturas sugeridas 100
Capítulo 7 Los orígenes de la cultura Y LA APARiaÓN DEL GÉNERO Homo 121
37 38 40
Herramientas de los prim eros homínidos 123 Estilos de vida de los primeros homínidos,, 123 Tendencias en la evolución de los homínidos 129 Primeros fósiles del género 131 Homoerectus....... 134 Culturas del Paleolítico Inferior 139 Sumario 143 Glosario de términos 143 Cuestiones críticas 143 Ejercicios de Internet 143 Lecturas sugeridas 144
48 53 53
vil
VIH
Contenido E3
Capítulo 12
Jü'PARTE III HUMANOS MODERNOS
YADAPTAaÓN
149 155 159 163
transición del fíomc? emtus al ífomp sapietts Gulturas del Paleolítico Medio El surgimiento del hombre moderno ¿Qué le ocurrió a los íwflrtdírísfeíí ¿«íflíjríc? 164 Ghsariü de términos 164 Cuestiones crfticcfs 164 Ejercicios de Internet 164 Lecturcts sugeridas 165
El mündo d el P aleolític o Superior.167
Raza y Elíuturo de la variabilidad humana Sumario 253 Glosario de términos 253 Cuestiones críticas 253 Ejercicios de Internet 253 Lecturas sugeridas 254
247 253
PARTE IV VARIABILIDAD CULTURAL
La última era glacial 168 fl Paleolítico Superior en Europa 170 las culturas del Paleolítico Superior en África y Asia 176 Los primeros humanos y sus culturas en el Nuevo Iviindo 176 H final del Paleolítico Superior ............. ........ 182 Sumario 1S3 Glosario de términos 184 Cuestiones críticas 1S4 Ejercicios de Internet 1$4 Lecturas sugeridas 1S4
Capítulo 13
Capítulo 10
Capítulo 14
Oiugek de la pRODUcaóK DE ALIMENTOS V DE LA VIDA sedentaria
233
Procesos en la variabilidad humana....... 234
Cap ítu los ApariciókdelHomo147
Capitulo 9
Variabilidad humana
El concepto de cultura.... 257
Definición de las características de la cultura 258 Actitudes que dificultan el estudio de las culturas». 260 Relativismo cultural 262 Descripción de una cultura „„„„„„„„„„„„„„„„„„„ 264 268 Algunos supuestos sobre la cultura SMffíííríí) 272 Glosario de términos 272 Cuestiones críticas 272 Ejercicios de Internet 272 Lecturas sugeridas 273 \�riabLlidad física de las poblacioneshumanas......236
Teoría y e v id e no a en la Antropología CULTURAL.... 275
Desarrollos preagrícolas 187 La domesticación de plantas y animales 193 se desarrolló la de alimentos? 203 ¿Por qué producción Consecuencias del aumento de la producción de alimentos 205 ¿M/fltínc? 210 Glosario de términos 210 Cuestiones críticas 210 Ejercicios de Internet 210 Lecturas sugeridas 211
Orientaciones teóricas„„„„„„„,„„„„„„„„„.,„.„„„„. 276 280 Explicación 283 Porqué no se pueden probar las teorías Haboradón de..... 284 Evidencia: comprobación de las explicaciones 284 288 Tipos de investigación en Antropología cultural Sumario 293 Glosario de términos 293 Cuestiones críticas 293 Ejercicios de Internet 293 Lecturas sugeridas 294
Capítulo 11
Capítulo 15
OmcEN de las qudades VDE l o s Estados
185
213
Deducciones arqueológicas sobre la civilización,,,» 215 Qudades y Estados al sur de Iraq 216 Qudades y Estados en Mesoamérica 217 221 Teorías sobre el origen del Estado Consecuencias de la formación del Estado226 El declive y la caída de los Estados 228 Sumario 230 Glosario de términos 230 Qiestiones críticas 230 Ejercicios de Internet 230 Lecturas sugeridas 231
Comunicaqón Y LENGUAJE .......................... 295
Comunicación Los orígenes del lenguaje lingüística descriptiva lingüística histórica El proceso de divergencia lingüística Etnografía del lenguaje 313 Sumario 318 Glosario de términos 318 Cuestiones críticas 3J S Ejercícípí de Internet 31$ Lecturas sugeridas 319
296 299 301 306 309
Ja- Contenido CAPfTm.O 16
OflTENaÓN DE ALIMENTOS... 321
Recolección di alimentos Producción de alimentos Restricciones medioambientales en la obtención de alimentos Origen� difusión e intensificación de la producción de alimentos SHf«£iríí? 337 Ghsarío de términos 33S Cuestíortes críticcis 335 £ym:íVíí?í de Internet 339 Lecturas sugeridas 339
322 325
Capitulo 17
341
Sistemas económicos.
La disposición de los recursos La conversión de los recursos La distribución de bienes y servicios Sumario 365 Glosario de términos 366 Qiestiones críticas 366 Ejercidos de Internet 366 Lecturas sugeridas 366
Capitulo 18
EsTRATiFiCAaóN soqau CLASE, ETNiaUAD YRAasMO
334 336
Capítulo 21
342 346 354
369
Variaciones en el grado de desigualdad social Sociedades igualitarias Sociedades de rango Sociedades de dase Racismo y desigualdad Etnicidad y desigualdad La aparición de la estratificación Sumario 3S7 Ghsario de términos 3SS Cuestiones críticas 388 Ejercicios de Internet 388 Lecturas sugeridas 3S8
370 371 372 374 379 384 386
Capítulo 19
391
Sexo, c�ero v cultura
Matrimonio y familia........ 413
Matrimonio ¿Por qué es universal el matrimonio? ¿Cómo casarnos?
414 416 418
421 428
Residenqa conyugal Y parentesco ...................... 437
Modelos de residencia conyugal 438 Explicaciones sobre variaciones de residencia 459 La estructura del parentesco 442 Parentesco bilateral 446 Filiación unilineal 446 Sistemas de filiación ambilineal 455 Terminología del parentesco 455 Sumario 459 Glosario de términos 460 Cuestiones críticas 461 Ejercicios de Internet 461 Lecturas sugeridas 461
Capítulo 22
AsoaAaoNES y grupos DE INTERÉS 463
Asociaciones no voluntarias 464 Asociaciones voluntarias 471 Cómo explicar la variabilidad en las asociaciones»�» 478 Sumario 479 Glosario de térmiiws 479 Cuestiones críticas 479 Ejercicios de Internet 4W Lecturas sugeridas 480
Capítulo 23
Físico y fisiología 392 Roles de género„,,»„,„.....393 Contribuciones relativas a la subsistencia 396 398 Lidera�o político y guerra El estatus relativo de las mujeres 402 Diferencias de personalidad 404 Sexualidad 407 Sumario 410 Ghsario de términos 410 Cuestiones críticas 411 Ejercicios de Internet 411 Lecturas sugeridas 411
Capítulo 20
Restricciones en el matrimonio: el tabú universal del incesto ...... ¿Con quién deberíamos casarnos? 426 ¿Cuántas veces puede casarse uno? .... La Emilia 431 Sumario 435 Glosario de términos 435 Cuestiones críticas 435 Ejercicios de Internet 436 Lecturas sugeridas 436
ix
Vida política; orden Y DESORDEN SOaAL.............. 481
Variabilidad en los tipos de organización política,,, 482 \�riabilidad en el proceso político 491 Resolución de conflictos 495 Sumario 503 Glosario de términos 504 Cuestiones críticas 504 Ejerdcios de Interr�t 504 Lecturas sugeridas 504
Capítulo 24
Psicología y cultur a .......
507
La universalidad del desarrollo psicológico 508 \�riabilidad transcultural en las características psi¬ 511 cológicas,,,,,,™,,,,,,,,,,,,,...... Explicaciones psicológicas de la variabilidad cul¬ tural 526 Sumario 52S Glosario de términos 529 Cuestiones críticas 529 Ejercicios de Internet 529 Lecturas sugeridas 529
.....
X
Contenido E3
C a pit u lo 25
R elig ió n y magia
\�iaciones en las creencias religicwaa Wiaciones en las prácticas religiosas Religión y adaptación Sumario 54S Glosario de términos 549 Cuestiones críticas 549 Ejercidos de Internet 549 Lecturas sugeridas 549
531 534 539 544
Ética de la Antropología aplicada».,»»».,,»»...,.,»..» 598 Evaluación de los efectos del cambio planificado ». 599 Dificultades en el inicio del cambio planeado 601 Administración de recursos culturales»,»»,,»,.».....604 Antropología forense 605 Sumario 606 Glosario de términos 607 Cuestiones críticas 607 Ejercicios de Internet 607 Lecturas sugeridas 607
C a pít u lo 26 Las a r t e s 551 C a p ít u lo 29 A n t ro p o l o g í a médica 609 Decoración corporal y adornos 552 Comprensión cultural de la salud y la enferme¬ la en dad 610 de variabilidad las artes 554 Explicación Tratamiento de la enfermedad 613 líevisión del arte en otras culturas 565 Cambio artístico y contacto cultural»»,,,,,»,,,,,,,,,,,.. 566 Influencias políticas y económicas en la salud,,.»». 617 Condiciones sanitarias y enfermedades 618 Sumario 567 Glosario de términos 568 Cuestiones críticas 56$ Ejercicios de Internet 56S ÍHffiflrííJ 625 Glosario de términos 625 Cuestiones críticas 625 Ejercicios de Internet 625 Lecturas sugeridas 568 universalidad de la religión».,».»,...... ..........Lecturas sugeridas 626 C a532 pít u lo 27 Cambio cultural 569 Cómo y por qué cambian las culturas 570 C a p ít u lo 30 Problemas sooales Cambio cultural y adaptación 577 OjObales 627 579 Tipos de cambio cultural en el mundo moderno,» Desastres naturales y hambrunas 628 587 Etnogénesis: surgimiento de nuevas culturas Viviendas inadecuadas y los «sin techo» 631 Diversidad cultural en el futuro 590 Violencia femÜiar y abusos ..... 633 Sumario 590 Glosario de términos 591 Delincuencia 635 Cuestiones críticas 591 Ejercicios de Internet 592 Guerra,»»»,»»»»,»»»»»»,»»»»»»,»,,»»»»,».,»»,,»,». 637 Lecturas sugeridas 592 Haciendo un mundo mejor 641 Sumario 641 Cuestiones críticas 641 Ejercicios de Internet 641 Lecturas sugeridas 642 PARTE V UTILIDADES DE lA
ANTROPOLOGÍA C a pít u lo 28
A n t r o p o l o g í a p r á ct i c a y APLICADA
Motivos para la Antropología aplicada y práctica.,, Historia y tipos de aplicación
G l o s a r i o 643 593 594 595
B ib lio g ra f ía 655 Índice A n a l í t i c o 703
Apartados
Temas de actu alid ad ¿Hay tendencias unillneales en la evoluciÓD cultural? ¿Es la evolución lenta y sostenida o rápida y repentina? ¿Debemos temer a la Ingeniería Genética? Nuevos Australopithecus sorprendentes Análisis de ciados ¿Cómo sabemos lo que es una herramienta? Cerebro y sangre Evidencia del ADN y la teoría «extra-africana» del origen del hombre moderno Vías alternativas de entrada en el Nuevo Mundo Diferencias en los niveles de puntuación en tests de inteligencia: ¿Qué signiñcan? Derechos humanos y relativismo cultural Ciencia y Humanismo Trabajo de campo: ¿cómo podemos saber que algo es cierto? El efecto de la obtención de alimentos sobre el medio ambiente ¿Conduce la propiedad comunal al desastre económico? ¿Está incrementándose la desigualdad entre los países? Familias monoparentales: ¿porqué su incremento reciente? ¿Se enseñan valores en el colegio? Una llamada a la religión puede ser el deseo de un mundo mejor Calentamiento global» contaminación atmosférica y nuestra dependencia del petróleo Conflictos étnicos: ¿odios antiguos o no?
Nuevas perspectivas s o b r e el género ¿Hay tendencias unilineales en la evolución cultural? ¿Es la evolución lenta y sostenida o rápida y repentina? Una investigadoras Elizabeth M. Brumfiel Mjjeres en los túmulos arcaicos de conchas La mujer en el arte del Paleolítico Superior Efectos del Imperialismo sobre el estatus de la mujer ¿Promueve el idioma inglés conceptos sexistas? Del hombre cazador a la mujer recolectora ¿Por qué algunas sociedades permiten a las mujeres participar en los combates? Éxito electoral femenino en la Costa Noroeste Variación en la residencia y el parentesco: ¿qué diferencias presentan las mujeres? ¿Las asociaciones separadas de mujeres aumentan el estatus y el poder de la mujer? Los nuevos tribunales permiten a las mujeres presentar demandas en Papúa Nueva Guinea ¿Tienen las mujeres una moralidad diferente? XI
XII
Apartados
13
F r o n t e r a s de la investigación Un investigador; Terence E. Hays Una investigadora; Katharine Milton Matt Cartmill reexamina su propia teoría sobre d origen de los primates ¿Qué le ocurrió al Ggantopitheats� Tratando de encajar los nuevos descubrimientos de los Austrahpiáíevus robustus más antiguos Homo erectas: ¿ Um o más especies? Crecimiento y desarrollo del Neandertal ¿Se domesticaron perros (y gatos) a sí mismos? Somos lo que comemos: análisis químico de huesos y dientes Impeiialismo» colonialismo y Estado Factores que afectan a la fecundidad La evaluación de teorías alternativas La relación esposo-esposa; variabilidad en amor� intimidad y celos ¿Está relacionada la neolocalidad con la rebelión juvenil? ¿Por qué aparecen las bandas callejeras y por qué son tan violentas? Democracia y desarrollo económico; ¿Cómo y por qué están relacionados? La utilidad de la religión; tabtíes entre los pescadores de Nueva Inglaterra Política y arte ¿Muestran las máscaras emociones universales? Cambio cultural y persistencia en la China comunista
Antropolog ía aplicada Programas de desarrollo para conocer la contribución de las mujeres a la agricultura Primates en peligro ¿Por qué no se hacen sedentarios los beduinos? ¿Pueden evitar las lenguas su extinción? Impacto del sistema mundial� La deforestación del Amazonas Disparidades en la muerte; Los afroamericanos comparados con los euroamericanos Obesidad» hipertensión y diabetes; ¿son consecuencias de la modernización? Antropología de la empresa Devolviendo los árboles a Haití Explorando porqué no funcionó un proyecto apÜcado Desórdenes alimentarios» Biología y construcción cultural de la belleza
Esta edición es mieva en varios aspectos» Hemos am¬ pliado la cobertura de la Antropología biológica (física) y de la Arqueología: presentamos ahora 11 capítulos en lu¬ gar de los 6 anteriores dedicados a estos temas. Hay un capítulo nuevo que trata exclusivamente de los hallazgos arqueológicos y paleoantropológicos> y otros capítulos independientes sobre los australophitecinos y el Paleolí¬ tico Superior. También hemos ampliado las páginas dedi¬ cadas a la Antropología aplicada� para reflejar el hecho de que uno de cada dos antropólogos actualmente está de¬ sarrollando su empleo fuera del mundo académicP} tra¬ bajando en problemas prácticos. De esta forma» en la presente edición apjarecen tres capítulos agrupados bajo el epígrafe «Utilidades de la Antropología». El primero es una introducción a la Antropología aplicada y práctica e induye nuevas secciones sobre gestión de recursos cultu¬ rales y Antropología forense. El segundo es un capítulo nuevo dedicado a la Antropología médica; por último» se incluye un capítulo sobre los problemas sociales globales y su posible resolución basada no sólo en la investigación antropológica sino también en la realizada por otras dencias sociales. Once apartados contemplan la Antro¬ pología práctica y aplicada» y se aporta material nuevo sobre etnicidad y racismo» con secciones inéditas sobre etnicidad y desigualdad� racismo y desigualdad» etn©gé¬ nesis (surgimiento de nuevas culturas y grupos étnicos)i mientras que otros apartados tratan de los conflictos ét¬ nicos y las disparidades entre afroamericanos y euroamericanos ante la muerte. En la redacdón del Übro hemos tratado de ir más allá de las meras descripdones» como viene siendo habitual. Estamos interesados no sólo en qué son los seres huma¬ nos» sino también en por qué actúan de la forma que lo hacen, en todos los aspectos. Cuando han surgido expli¬ caciones alternativas» hemos intentado trasladar la nece¬ sidad de evaluadas» tanto biológicamente como sobre la base de la evidencia útiL Por medio de este libro hemos querido comunicar que ninguna idea, incluyendo las ex¬ puestas en los textos» debería aceptarse como universal» y que las cosas podrían haber sido de otra forma.
Parte 1. Capítulo 1
rístico de la Antropología en general y de cada uno de sus campos en particular. Destacamos la forma en que las subespecialidades de la Antropología se relacionan con otras disdplinas como la Biología» la Psicología y la So¬ ciología» y se concede una especial atención al aumento de la importancia de la Antropología aplicada. Hay tres textos» que aparecen en sendos recuadros» dedicados cada uno de ellos a un antropólogo y a su trabajo res¬ pectivo.
Capitulo 2
¿Cómo descubrimos el pasado?
El Capítulo 2 estudia superficialmente las investiga¬ ciones arqueológicas y paleoantropológicas. Anahzamos los tipos de evidencias arqueológicas y paleoantropológicas utilizadas para reconstruir el pasado» los métodos que utihzan ambas disdplinas para recoger dichas evidencias y su interpretadórv También describimos las diferentes técnicas que utiliza una y otra disciplina para determinar la edad de los materiales arqueológicos y los fosiles. Se induyen dos textos en recuadro' en uno se examinan las pruebas que apoyan las tendencias unilineales de la evoludón cultural y en el otro se considera el punto de vista de los arqueólogos ante el género,
Parte II. Evolución humana: biológica y cultural Capítulos
GfísiÉTicAVEVOLuaóN
M Capítulo 3 trata la teoría evolutiva y cómo se aphca a todas las formas de vida» induyen do a los humanos. Continua con una revisión extensa de la genética y de los procesos evolutivos» induida la selección natural y su sig¬ nificado. También expone la sdección natural y su in¬ fluencia en d comportamiento» así como las diferencias entre la evoludón cultural y la biológica. Consideramos las cuestiones éticas relacionadas con las posibilidades de la ingeniería genética. El primer texto destacado examina las evidencias que sugieren que la evolución pudo pro¬ ducirse bruscamente en lugar de lenta y constantemente, El segundo se cuestiona si la ingeniería genética debería asustarnos o no.
Introducción ¿Qcé es l a Antropología?
Capítulo 4
El Capitulo 1 presenta la Antropología a los estudian¬ tes, Exponemos lo que creemos que es especial y caracte¬
Los piomates vivos
El Capítulo 4 describe la vida de los primates no huma¬ nos y sus adaptaciones variablesj con d fin de comprender XIII
XIV
Prefacio
�
la evolución de Iw primates en general y de los humanos � particular. Después de definir los distintos tipos de primate3} comentamos la posible explicación de las dife¬ rencias entre los primates en corpulencia» volumen cerebral> tamaño del grupo social y sexualidad femenina. Termina este capítulo con unos comentarios sobre las ca¬ racterísticas distintivas de los humanos en comparación con las de los primates- El primero de los textos en re¬ cuadro trata sobre cómo y por qué los primates están en peligro y cómo tenemos que protegerlos. El segundo nos narra cómo es el trabajo de un primatólogo.
Capítulo 5 EvoLuaóK de l o s primates; DESDE LOS PRIMEROS PRIMATES A LOS HOMINIDOS H. Capítulo 5 empieza con la aparición de los prime¬ ros primates y termina con lo que sabemos o sospecha¬ mos sobre los póngidos del Mioceno» uno de los cuales (conocido o desconocido) fiae el ancestro de los homíni¬ dos bípedos. Concedemos importancia a la evolución de los primates al comentar los cambios ambientales que podría haber causado la selección natural en fevor de nuevos caracteres. Para destacar la íorma en la que se ge¬ neran y revisan las teorías» el texto del primer recuadro nos explica cómo reexaminan los paleoantropólogos su propia teoría sobre el origen de los primates. El segundo describe un póngido gigantesco que vivió al mismo tiempo que los primeros humanos y cuál fue la causa de su extinción.
Capítulo 6
Los primeros homínidos
Q Capítulo 6 describe la evolución de la locomoción bípeda» la característica más distintiva del grupo que in¬ cluye a nuestro propio género y a aquellos ancestros nuestros más directos» los australopithecinos. Analiza¬ mos los diferentes tipos y su evolución. Los dos primeros textos destacados cuentan cómo se hallaron los primeros aistralopithecinos y el papel que desempeñan en la ac¬ tual comprensión de la evolución humana. El tercero trata de las técnicas del análisis de diados� utilizadas ex¬ tensamente por los paleoantropóbgos para establecer las relaciones evolutivas.
C ap ít u lo? Los orígenes de la cultura VLA APARiaÓN DEL GÉNERO ÍÍOMO El Capitulo 7 examina las primeras evidencias claras de comportamiento cultural-herramientas de piedra- y otros datos que indicarían que los primeros homínidos comenzaron a desarrollar cultura hace unos 2i5 miñones de años. Analizamos qué es la cultura y su evolución. Es¬ tudiamos a los homínidos -los primeros miembros de
nuestro genero Hotno-v que son presumiblemente los responsables de los signos más tempranos de un com¬ portamiento cultural� y al Homa erectus� el primero de ellos que dejo Áftica y el primero en mostrar una con¬ ducta cultural compleja. El primer texto del recuadro exphca cómo los arqueólogos y paleoantropólogos distinguen las herramientas de piedra de las piedras co¬ munes- El segundo examina la evolución del cerebro y los cambios físicos que permitieron que éste aumentara de tamaño en los primeros humanos- Y el tercero co¬ menta las investigaciones acerca de la posibilidad de que el Homo erectas se escindiera en dos especies.
Parte III. Humanos modernos Capítulo 8
La aparioón d e l Homo S A P i m s
El Capítulo 8 examina la transición del Homo erectas al Homo sapiens y la aparición de los modernos huma¬ nos. Manteniendo nuestra orientación global» examina¬ mos las evidencias fósiles y arqueológicas de diferentes zonas del mundo» no sólo de Europa y del Próximo Oriente, Damos una consideración especial a los neandertales y su relación con los humanos modernos. El pri¬ mer texto remarcado analiza los modelos de crecimiento y desarrollo de los neandertales para evaluar cuánto du¬ raba su infencia. El segundo describe las pruebas del ADN mitocondrial en relación con la teoría «Fuera de África»» sobre el origen de los humanos modernos.
Capítulo 9 Superior
El mundo de l P a leo lít ic o
El Capítulo 9 considera la cultura de los humanos modernos en el periodo anterior al desarrollo agrícola» hace entre 40.000 y 10.000 años. Se estudian sus herra¬ mientas» sus economías y su arte» el primero desarro¬ llado por los seres humanos. También tratamos la colonización cultural de Norte y Suramérica y el im¬ pacto de los humanos sobre el nuevo entorno ambiental que encontraron. En el primer recuadro se describe la forma en la que se representa a las mujeres en el arte del Paleohtico Superior» y en el segundo se examinan las po¬ sibles rutas utilizadas por los humanos para penetrar en América,
Capítulo 10 Origen de la produoqón DE ALIMENTOS Y DEL SEDEKTARISMO El Capítulo 10 trata de la aparición de la recolección de amplio espectro y del sedentarismo» y también de la domesticación de animales y plantas en diferentes partes
Prefacio
del mundo.Nos plarteamoSjprindpalinente>las posibles causas y consecuencias de estos adelantos en Mesoamérica y en el Próximo Oriente� aunque también nos referi¬ mos a Asia» Áfricaj Norte y Surarnérica y Europa. De los textos destacados incluidos en este capitulo el primero de ellos trata de la domesticación de perros y gatos y el se¬ gundo describe cómo investigan los científicos las dietas antiguas a partir del análisis de dientes y huesos.
Capítulo 11 Origen de las ciudades YDE LOS ESTADOS El Capítulo 11 está dedicado a estudiar la aparición de la civilización en diferentes partes del mundo y las teo¬ rías que se han elaborado para explicar el desarrollo de los sistemas políticos del tipo estado- Nos centramos en la evolución de las ciudades-estado en Mesoamérica y en el Próximo Oriente» aunque tratamos también la apari¬ ción de las ciudades-estado en Suramérica� sur de Asia» China y Africa. Vemos cómo los estados influyen en la gente que vive en ellos» a la vez que examinamos su me¬ dio ambiente. Concluimos comentando el declive y des¬ integración de los estados. En este caso se induyen dos artículos� uno contempla las relaciones entre imperia¬ lismo» colonialismo y el otro se refiere a las consecuen¬ cias del ant�o imperialismo sobre la situación de la mujer.
Capitulo 12
Variabilidad humana Y ADAPTAaÓN
fl Capítulo 12 expone la evolución humana hasta la actualidad» tanto en el aspecto biológico como en el cul¬ tural. Trata de las variaciones físicas de las poblaciones humanas vivas y describe cómo los bioantropólogos es¬ tudian y explican esas variaciones. Examinamos el im¬ portante papel desempeñado por el medio físico y el cultural en las variaciones físicas humanas. En una sec¬ ción dedicada a raza y racismo debatimos por qué los an¬ tropólogos opinan que el concepto «raza»» apÜcado a los seres humanos» no es científicamente útil. Hablamos so¬ bre los mitos relacionados con el racismo y cómo el con¬ cepto «raza» es» fundamentalmente� una categoría social en los humanos. El primer texto trata de los fectores bio¬ lógicos que afectan a la capacidad reproductora y el se¬ gundo revisa las diferencias en los porcentajes de inteligencia y su significado.
Parte IV.
Variabilidad cultural
En la mayoría de capítulos de esta parte intentamos conocer el nivel de variabilidad cultural y para ello se
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proporcionan ejemplos etnográficos procedentes de todo el mundo. Siempre que podemos» damos las posi¬ bles explicaciones de por qué las sociedades son simila¬ res o diferentes en algunos aspectos de sus culturas» pero» cuando los antropólogos no tienen explicación para la variaciónj también lo decimos. No obstante si tenemos alguna idea de las condiciones que puedan estar relacio¬ nadas con algún tipo de variación� aunque no conozca¬ mos la causa» también lo exponemos. Si queremos que los estudiantes lleguen más aUá de los conocimientos ac¬ tuales» tenemos que contarles tanto lo que sabemos como lo que no sabemos.
Capítulo 13
El odncepto de cultura
Este capítulo introduce la idea de cultura. Antes de tratar más explícitamente este concepto y una serie de afirmaciones relacionadas con él» intentaremos definir nuestra sensación de lo que es la cultura. Una sección de¬ dicada al relativismo cultural sitúa el concepto en su contexto histórico y expone las teorías más recientes so¬ bre el tema. Tratamos el hecho de que en todas las socie¬ dades varían las conductas individuales» así como que esa variación pueda ser el comienzo de nuevos modelos de conducta. El primer comentario de los textos destacados se pregunta si los países occidentales son etnocéntricos y cuáles son sus ideas sobre los derechos humanos» inclu¬ yendo este debate dentro del punto de vista de la Antro¬ pología en relación con el relativismo cultural. El segundo expone la visión de un antropólogo sobre la re¬ sistencia de los beduinos al sedentarismo.
Capítulo 14
Teoría v EViDENaA en la Antropología cu lt u r a l
Este capítulo está especialmente dedicado a las corrien¬ tes teóricas más popubres en Antropología cultural. Tra¬ tamos de explicar loque quieren decir�así como los tipos de evidencias que son necesarias para evaluar una teoría. Terminamos con una serie de comentarios sobre los es¬ tudios más importantes dentro de la Antropología cultu¬ ral: EtnografiaiEtnohistoriaj y comparaciones regionales y transculturales de ámbito mundial. El primer artículo de los destacados en recuadro explica las distintas pers¬ pectivas de científicos y humanistas para abordar estos problemas- Estos dos enfoques no tienen por qué ser in¬ compatibles, El segundo es un estudio sobre los abelam de Nueva Guinea que ilustra acerca de cómo las diferen¬ tes orientaciones teóricas sugieren diferentes respuestas. El tercero tiene dos fines: uno es aumentar la sensibilidad hacia las experiencias de campo» y el otro usarla contro¬ versia Mead-Freeman para analizar cómo podemos sa¬ ber que un etnógrafr> está en lo cierto.
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Prefacio �
Capitulo 15
CoMUNiCAaóN v lenguaje
Comenzamos estudiando la comunicación en los se¬ res humanos y en otn>s animales. Después hacemos unas consideraciones sobre la comunicación humana no verbalj tratamos de los orígenes del ler�aje y cómo la ad¬ quisición de las lenguas criollas y del lenguaje en el niño pueden ayudarnos a entenderlos orígenes del lenguaje, A continuación analizamos la lingüistica descriptiva y los procesos de divergencia lingüística. Después estudiamos las interrelaciones existentes entre el lenguaje y otros as¬ pectos culturales� para terminar con la etnografía de la lengua� en la que se induirian las diferencias en el habla según estatus� género y etnicidad. El primer recuadro trata el problema de la extinción de idiomas y cómo es¬ tán actuando algunos antropólogos en relación con ello. fiara estimular a los pensadores sobre el posible impacto del lenguaje sobre los conceptos> nos preguntamos� en el segundo recuadro» si es cierto que el idioma inglés pro¬ mueve el pensamiento sexista» según refieren recientes investigaciones sobre el tema.
Capitulo 16
OsTENaóN de aumentos
Este capítulo analiza cómo las sociedades difieren en la forma de obtener alimentos» cómo han evolucionado en el tiempo y cómo esta variación parece afectar a otros aspectos de la diversidad culturalj incluyendo sistemas económicos» estratificación social y vida política. Inclui¬ mos un debate sobre el «forrajeo de mercado»» que pone de manifiesto que la mayoría de la gente en una moderna economía de mercado no se dedica a la producción de alimentos. El texto del primer recuadro trata del cambio de «hombre cazador» a «mujer recolectora» y plantea la certeza o no de esta perspectiva. A pesar de que se suele creer que la industrialización se caracteriza por causar un efecto negativo sobre el medio ambiente» nuestro se¬ gundo texto se ocupa de los efectos negativos de la irri¬ gación durante las épocas preindustriales de esta técnica» de la cria de animales y del exceso de caza.
Capítulo 17
Sistemas ecxinómicos
Tratamos en este capítulo de las diferentes formas de sociedad según la obtención de sus recursos (qué es «propiedad» y qué puede significar)» la apropiación o transformación de los recuisos» y la distribución y quizá el intercambio de artículos y servicios. Consideramos los efectos de los sistemas políticos (incluyendo el colonia¬ lismo) sobre la propiedad de la tierra y su uso» y dis¬ tinguimos las diferencias existentes entre regalo e intercambio de bienes. También plantea por qué los ni¬ ños de ciertas culturas trabajan más que los de otras. El
primer recuadro contiene un artículo que analiza si la propiedad comunal conduce al desastre económico. Des¬ pués de comentar la comercialización� el segundo recua¬ dro ilustra el impacto del sistema mundial sobre las economías locales» con especial referencia a la deforesta¬ ción del Amazonas.
Capítulo 18 EsraATíPiCAaóN social; clase> ETNOCENTRISMO V RAQSMO Este capitulo» muy revisado� trata del racismo y las desigualdades» incluyendo comentarios sobre el con¬ cepto de «raza» y por qué no debe utilizarse científica¬ mente en relación con los humanos. También hay secciones dedicadas a etnicidad y desigualdad. En uno de los recuadros se comparan los índices de mortalidad de los afroamericanos con los de los euroamericanos. En el otro apartado se habla de la estratificación social en el ámbito global: ¿cómo la diferencia entre países ricos y pobres se va ampliando a escala mundial y cómo se puede mejorar esta tendencia? En general» tratamos las variaciones en la estratificación social y cómo llegan a producirse las distintas formas de desigualdad en este as¬ pecto.
Capítulo 19
Sexo> gékeko y cu ltur a
En la primera parte de este capítulo tratamos cómo y por qué varían transculturalmente las diferencias entre ambos sexos. En la segunda parte vemos las variaciones existentes en actitudes y prácticas sexuales. Explicamos por qué los conceptos de género no siempre incluyen a los dos. Destacamos la forma en la que contribuyen las mujeres al trabajo» y como conclusión» b aportación de ambos géneros al trabajo que depende de nuestro con¬ cepto de «trabajo». El texto del primer recuadro examina las investigaciones transculturales realizadas sobre el he¬ cho de que algunas sociedades permitan a las mujeres participar en las guerras. El segundo describe las causas por las que las mujeres han incrementado su participa¬ ción política en ciertas comunidades Salish de la costa oeste del estado de Washington y de la Columbia Britᬠnica» cuando estas comunidades han elegido sus propios consejos.
Capítulo 20
Matrimonio y familia
Después de debatir varias teorías sobre la universali¬ dad del matrimonio» pasamos a tratar las variaciones en cuanto a cómo son los casamientos» las restricciones ma¬ trimoniales» o con quién pueden casarse los individuos y cuántas veces. Terminamos con unos comentarios so¬ bre la diversidad de formas femiliares. Para presentarlos
Jf Prefacio tópicos existentes en la relación marido-mujer� que están emp>ezando a estudiarse� en el primer recuadro conside¬ ramos las variaciones que se dan en cuanto a amor, inti¬ midad y relaciones sexuales. En el siguiente se trata la organización �miliar desde la perspectiva del incre¬ mento de las &milias de un solo cónyuge en algunos paí¬ ses como el nuestro.
Capítulo 21 Y PARENTESCO
Residenoa ookvugal
Además de explicar la variación que existe en la resi¬ dencia conyugal� la estructura y la terminología del pa¬ rentesco, este capítulo destaca que la comprensión del tipo de residencia femUiar es muy importante para el en¬ tendimiento de la vida social. En uno de los artículos se expone la posible relación entre neolocalidad y rebeldía juvenil, y el segundo trata de cómo afecta el cambio de residencia y parentesco a la vida de las mujeres,
Capítulo 22 DE INTERÉS
AsoaAaoNES y grupos
Debatimos la importancia que tienen las diferentes asociación� en muchas partes del mundo� en particular la creciente importancia de las asociaciones voluntarias. La sección dedicada a las asociaciones de crédito rotato¬ rio explica cómo trabajan para proporcionar pequeñas cantidades individuales de dinero� lo importante que son para las mujeres y cómo alcanzan mayor importan¬ cia aún cuando se trasladan a lugares nuevos. El texto del primer recuadro plantea la cuestión de si las asociacio¬ nes de mujeres separadas aumentan d estatus y el poder de éstas. El segundo describe cómo se desarrollan las pandillas callejeras de adobscentes y por qué son tan violentas,
Capítulo 23 Vida polItíca; orden Y desorden soqal Estudiamos cómo las sociedades han variado en sus niveles de organización política� cómo llega la gente al liderazgo y el grado de participación en el proceso polí¬ tico» así como los métodos pacíficos y violentos para resolver conflictos. Analizamos cómo la colonización ha transformado los sistemas legales y la forma de tomar decisiones» cómo pueden resolverse pacíficamente los conflictos y cómo la investigación transcultural pone en duda la idea de que las guerras en el mundo no occiden¬ tal se hacen sobre las mujeres. El artículo del primer re¬ cuadro trata de la relación internacional y transcultural con el desarrollo económico y la democracia� El segundo habla de la influencia que han tenido los recientes tribu¬
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nales locales entre los Abelam de Nueva Guinea para que las mujeres puedan denunciar las agresiones sexuales que padecen.
Capítulo 24
Psicx)logía y cultura
Este capítulo trata de algunos temas universales del desarrollo psicológico» de algunas diferencias psicológi¬ cas entre las sociedades y sus efectos» de cómo concibe la gente de sociedades distintas las diferencias de perso¬ nalidad (por ejemplo» el concepto del yo) y de cómo el conocimiento de los procesos psicológicos puede ayu¬ darnos a entender la diversidad cultural. Describimos las recientes investigaciones que muestran que, incluso el concepto del amor� tan misterioso y culturalmente tan variable» puede ser similar en culturas distintas. También comentamos algunas investigaciones que muestran que la esquizofrenia en las diversas culturas parece tener los mismos patrones identificativos en cuanto a movimien¬ tos oculares. En las lecturas destacadas� el primer artículo compara cómo niños de distintos países en edad prees¬ colar pueden aprender valores en el colegio» tanto cons¬ ciente como inconscientemente. El segundo se refiere al diferente sentido de sí mismas que poseen las mujeres frente al de los hombres, y que implica, por tanto, que tengan también un sentido de la moralidad diferente.
Capítulo 25
Religión y magia
Después de argumentar por qué la religión puede ser culturalmente universal, estudiamos las variaciones en cuanto a las creencias y prácticas religiosas con una serie de ejemplos. Hablamos de los movimientos revitalizadores y de cómo los humanos tienden a antropomorfizar los acontecimientos impredecibles. El primer texto des¬ tacado investiga los tabúes» o «ritos de evitación» de los pescadores de Nueva Inglaterra y cómo pueden hacer disminuir la ansiedad. El segundo habla de la aparición de nuevos cultos o religiones a partir de sectas o cultos minoritarios,
Capítulo 26
Las artes
Después de intentar definir el arte» vemos la variabili¬ dad existente en relación con las artes visuales» la música y el foldore» y examinamos algunas de estas variaciones. En relación con la evolución del arte en el tiempo» habla¬ mos del felso concepto de que el arte de los pueblos «más sencillos» sea atemporal» y del cambio experimentado tras el contacto con los occidentales. Comentamos la pre¬ sencia del etnocentris mo en los estudios sobre arte en una sección sobre el punto de vista de los museos occidenta¬ les y los críticos de arte respecto a las obras procedentes
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Prefacio 1 3
de culturas menos complejas, Uno de los artículos trata sobre la variación del arte en función de los sistemas po¬ líticos» en tanto que el otro analiza el simbolismo univer¬ sal en el artCi revisando las investigaciones sobre las emociones que suscitan las máscaras.
mentales y emocionales» la enfermedad popular cono¬ cida como susto» la depresión y la desnutrición. El pri¬ mer articulo trata de un proyecto médico aplicado que no dio resultado; y el segundo aborda los trastornos ahmentarios y la construcción cultural de la «belleza».
Capitulo 27
Capítulo 30
Cambios culturales
Una vez considerados los últimos avances sobre cam¬ bio cultural -descubrimiento e innovación-� exponemos lo que sabemos acerca de las condiciones bajo las cuales las personas aceptan las innovaciones. Estudiamos el coste y beneficio de las mismas� las presiones externas e internas para el cambio cultural» y las probabilidades de la diversidad cultural en el futuro. Uno de los artículos reseñados analiza los cambios culturales producidos en la China comunista: lo que ha cambiado a causa de la in¬ tervención gubernamental y lo que ha persistido a pesar de ella. El otro trata de las consecuencias biológicas que puede acarrear el cambio cultural� para lo cual se tienen en cuenta la obesidad» la hipertensión y la diabetes» como consecuencia de la modernización,
Parte V. Utilidades de la Antropología Capítulo 2S V practica
Antropología aplicada
Este capítulo describe los tipos de trabajos no acadé¬ micos» asi como la historia y los tipos de antropología aphcada en Estados Unidos» las cuestiones éticas que pue¬ den surgir al tratar de mejorarlas condiciones de vida de las personas» las dificultades para evaluar los posibles be¬ neficios de un programa y la implantación de cambios en los programas. Sugerimos los distintos roles de participa¬ ción de la Antropología aphcada a la hora de planificar cambios como una opción mejor que la asesoría en pro¬ gramas ya establecidos. Los dos artículos incluidos mues¬ tran cómo pueden ayudarlos antropólogos en programas de refbrestación y en el ámbito de los negocios,
Capítulo 29
Antropología médica
Este capítulo está dedicado a la comprensión cultural de la salud y la enfermedad» al tratamiento de la enfer¬ medad (particularmente desde un punto de vista biocultural» más que biomédico)i a las influencias políticas y económicas sobre la salud» y a la contribución de los mé¬ dicos antropólogos al estudio de las distintas condiciones sanitarias y de las enfermedades. Entre estas condicio¬ nes y enfermedades se encuentran el sida» los trastornos
Problemas sociales globales
En este capítulo estudiamos cómo las investigaciones pueden apuntar posibles soluciones a diferentes proble¬ mas globales» como desastres naturales»hambrunas»gente «sin techo»» delincuencia» violencia &miliar y guerra. En los textos destacados hay dos artículos nuevos� uno dedi¬ cado al calentamiento global y nuestra dependencia del petróleo» y otro al análisis de la posibihdad de evitar o no los conflictos étnicos,
Cuestiones fwr resolver Artículos destacados de cada capítulo Temas de actualidad. Estos artículos tratan tópicos sobre los que pueden haber oído hablar los estudiantes en las noticias (por ejemplo» el incremento de femilias con un solo cónyuge» las diferencias entre países ricos y pobres» la ingeniería genética» los nuevos halla��os fósi¬ les» la posibilidad de que los conflictos étnicos reflejen antiguos rencores subyacentes) y otros temas que pue¬ dan ser frecuentemente objeto de debate en la profesión (por ejemploj ciencia frente a humanismo» relación entre derechos humanos y cultura). [Tonteras de la investigación. Estos artículos están dedicados al trabajo de los investigadores en sus distin¬ tos campos de actividad en relación con nuevas investi¬ gaciones (análisis químicos de huesos y dientes)» o a las diferencias en cuanto a ciertos estudios (amor» intimi¬ dad» sexualidad o si existen una o más especies de Hpme erectas). Nuevas perspectivas sobre d género. Esta serie trata sobre género y sexo» ambos desde el punto de vista de la Antropología y de la vida cotidiana (por ejemplo» el sexismo en el lenguaje» la representación de la mujer en el arte del Paleolítico Superior» las asociaciones de mujeres separadas y el estatus y poder de las mujeres» los efectos del imperialismo en el estatus femenino» las diferencias de género en cuanto a la moralidad), Antropología aplicada. En estos artículos vemos algu¬ nas de las formas que tienen los antropólogos de aplicar sus conocimientos a problemas prácticos (por ejemplo» la defbrestadón en el Amazonas; los primates en peligro;
Prefacio la preveníión de la extinción de lenguas; la obesidad» la hipertensión y la diabetes).
Amenidad Hemos tratado de describirlos hallazgos obtenidos en las investigaciones� sobre todo si eran complicadas» de forma que puedan ser entendidas por los estudiantes. Para ello hemos intentado reducir la terminología técnica� utilizando únicamente aquellos vocablos íonoddos por los alumnos para que disfiruten con los adelantos de la Antropología y estimularlos a hacer otros cursos avan¬ zados de esta ciencia. Pensamos que es muy importante la amenidad» no sólo porque puede fecilitar al lector la comprensión de lo escrito» sino también porque puede hacer la Antropología más entretenida* Cuando se intro¬ ducen nuevos términos» b que ocurre algunas veces» los hemos impreso en negrita» definiéndolos a continuación.
Glosario de términos Al final de cada capítulo hacemos una lista de los nue¬ vos términos que se han introducido a lo largo del mismo. Estos términos corresponden a los que se han impreso en negrita y definido posteriormente» No repe¬ timos la definición al final del capitulo para que los estu¬ diantes se evalúen a sí mismos y comprueben si conocen las definiciones elaboradas anteriormente» tanto en el Glosario como al final del capítulo,
Cuestiones críticas Al final de cada capítulo presentamos tres o cuatro cuestiones para propiciar la reflexión sobre las implica¬ ciones del capítulo. Las cuestiones no buscan la repeti¬ ción de lo que está en el texto» sino que pretendemos que los estudiantes imaginen las respuestas yendo más allá de lo que se explica en el texto.
EjERaaos de internet Estos ejercicios se han incorporado a cada capítulo para que los estudiantes consulten en la Red los recursos existentes sobre temas concretos. Se anima a los estu¬ diantes a visitar las direcciones fecilitadas de Internet (URlj) con el fin de que amplíen más sus conocimientos sobre los cambios que se están produciendo en el campo de la Antropología.
Sumarios y lecturas sugeridas Además de todo lo tratado en cada capítulo» hay un sumario detallado al final del mismo para ayudar a los estudiantes a revisar los principales conceptos y hallaz¬
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gos comentados. Las lecturas sugeridas proporcionan re¬ ferencias más generales o más extensas sobre los temas tratados en cada capítulo.
Glosario completo a l final del t e x t o Los términos más importantes utilizados en cada ca¬ pítulo se han agrupado (sin definición) al final del mismo» para que los estudiantes puedan autoevaluar lo que han aprendido. Al final del texto se han agrupado es¬ tos términos con sus definiciones con el fin de fedlitar una referencia a los alumnos.
Bibliograpía a l final de l libro Todas las referencias citadas a lo largo del libro se re¬ cogen ordenadas al final.
Suplementos Todas las páginas suplementarias se han preparado cuidadosamente para ampliar y aclarar los temas trata¬ dos en el texto. Wrfí. En relación con el texto» los estudiantes sacar pueden grandes ventajas de los sitios de la Ped para aumentar sus conocimientos antropológicos a través de la página Librosite. Este recurso compara el contenido del texto con los materiales del mismo tipo existentes en In¬ ternet. Las características del Website incluyen objetivos del capítulo» preguntas sobre el estudio y conexiones con material de interés» así como información sobre otros lu¬ gares de la Red que pueden reforzar y ampliar el contenido de cada capítulo Dirección: www.librosite.net/einber QD-JtOM infemcíim Anejo a cada ejemplar del libro se proporciona una copia de este CD-ROM que pone al alcance de los estudiantes una excelente experiencia de aprendizaje. En él se ofiecen simulaciones interactivas y ejercicios» un completo adas de mapas y referencias a los recursos que pueden ayudara ilustrar los conceptos des¬ critos en el libro.
Agradecimientos Agradecemos la ayuda prestada a las siguientes perso¬ nas de Prentice Hall: a Nancy Roberts» editora de Cien¬ cias Sociales; Sharon Chambliss, director editorial; loan Stone por seguir el manuscrito durante el proceso de producción; y a Sheila Norman por la investigación foto¬ gráfica.
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Prefacio
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No podríamos dar cabida a todas sugírendas que se nos han hecho� pero al menos» queremos expresar nuestro agradecimiento a las siguientes personas porsuí aportaciones en relación con lo que hemos incluido en el nuevo capitulo sobre Antropología médica: Carole Browner; WUliam Dresslerj Alan Goodmanj W. Penn Handwerkerj Leslie Sue Lieberman� Shiiley Lindenbaum� Margaret Lock y Arthur Rubela T�bién hay que agradecer la revisión del resto de ca¬ pítulos y los oportunos comentarios hechos a ellos a: Marie Boutté» University of Nevadai Reno. L Randolph Daniel Jhj East Carolina University. Meini Dengj Edmonds Community CoUege. Jeffrey R, Hanson� University of Texas-Adington. S, Homes Hoguej Mississippi State University, Lucy layne KamaUy Northeastern Illinois Univeisity, Tlmothy J, KloberdanZj North Dakota State University. Michael C. Robbins» University of Missouri.
Gracias a todos los citados y a los no citados» que nos han ayudado, C a w í R, Ember, Melvin Ember y PeterN, Peregrine
Nota d é editor de la verdión castdlaua Quiero expresare! �radecimiento especial de la edito¬ rial Pearson Educación� S�. por la labor intensa del equipo de traducción y� sobre todo» del revisor técnico» prot Dr, Francisco Giner Abati» de la Universidad de Sala¬ manca quien» desde su experiencia y profiondo conoci¬ miento antropológico> ha hecho posible esta excelente traducción de la dásica obra de Ember� Ember y Peregrine. T�bién deseo agradecer la labor de loaquín Sánchez BaideSj cotraductor, y de luán Sobrino» corrector de pruebas» quienes han ido más allá de lo que estaban obli¬ gados» aportando también un cariño especial a esta tra¬ ducción.
Carol R. Ember comenzó} como quimicO} en el Antioch College. Empezó a hacer cursos sobre Ciencias Sodales porque era un requisito obligatorio» pero pronto descubrió que estaba intrigada por ellos. Existían mu¬ chísimas preguntas sin respuesta» y llegó a sentirse muy exdtada ante la posibilidad de investigar más exhaustiva¬ mente en este campo- Dedicó un año al estudio de la So¬ ciología en Cornell antes de ir a Harvard donde continuó con la Antropología� inicialmente con John y Beatrice Whiting. Para su doctorado trabajó con los Luo de Kenia donde pudo observar que a muchos chicos se les asignaban «trabajos de chica»» tales como cuidar bebés» labores del hogar� etc.» porque sus madres (que trabajaban princi¬ palmente en la agricultura) no tenían hijas suficientes para que les ayudaran. Fue entonces cuando decidió es¬ tudiar los posibles efectos de las labores asignadas sobre la conducta social de los chicos. Realizando observa¬ ciones sistemáticas sobre sus conductas> comparó a chicos que no tenían trabajos de ese tipo con los que hacían trabajos de chica y comprobó que estos últimos tenían una actitud intermedia en muchas de las conduc¬ tas sociales. Después llevó a cabo investigaciones transculturales sobre las variaciones en matrimonio» femilia» grupos de filiación, guerra y paz, principalmente en co¬ laboración con Melvin Ember, con el que se casó en 1970. Todos estos estudios transculturales sirvieron para comprobar teorías basadas en datos procedentes de muestras de sociedades de todo el mundo. Desde 1970 hasta 1996 enseñó en el Hunter CoUege de la Universidad de la ciudad de Nueva York. También fue presidenta de la Sociedad de Investigaciones Transculturales y una de las directoras de los Summer ínstitutes en Investigación Antropológica Comparada» creados por
la Fundación Nacional de la Ciencia. Actualmente es di¬ rectora ejecutiva de Human Relations Area Files» Inc.» una organización sin ánimo de lucro» de la Universidad de�e, Después de graduarse en el Columbia College� Melvin Ember acudió a la Universidad de �e para obtener su doctorado. Su mentor en esta universidad fue George Peter Murdock» un antropólogo muy importante en la pro¬ moción de investigaciones transcultu rales que elaboró una base de datosi muy completa sobre las culturas del mundo» para comprobar sobre el terreno las hipótesis de las investigaciones transculturales. Esta base de datos se conoce como Human Relations Area Files (HRAF) porque fue originalmente patrocinada por el Instituto de Relaciones Humanas de la Universidad de �e- Se incre¬ mentó con revisiones anuales y actualmente se distribuye en formato electrónico. Dicha base de datos induye más de 370 culturas del pasado y del presente» procedentes de todo el mundo, Melvin Ember trabajó para su tesis en la Samoa Americana» donde practicó una comparación entre tres aldeas para estudiarlos efectos de la comercialización so¬ bre la vida política. También hizo investigaciones sobre grupos de filiación y los cambios que experimentan con el incremento de la compraventa. Sus estudios transcul¬ turales estuvieron enfocados originalmente a la variabi¬ lidad de la residencia matrimonial y en los grupos de filiación. También efectuó estudios transculturales sobre las relaciones existentes entre el desarrollo económico y político» el origen y extensión del tabú del incesto» las causas de la poliginia» y cómo los equivalentes arqueo¬ lógicos de los usos sociales actuales pueden ayudarnos a sacar condusiones sobre el pasado. XXI
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Sobre l o s autores
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Peter N, Peregrine aícedió a la Antropología después de graduarse en Ir�és- Se dio cuenta de que el enfoque cien¬ tífico de la Antropología social para comprender a los seres humanos suponía una aproximación humanística más eficaz que lo que había aprendido como profesor de Ir�és. Para su graduación realizó un estudio histórico etnográfico sobre la relación existente entre los misioneros jesuítas y los nativos americanos que le sirvió para darse cuenta de que necesitaba estudiar arqueología para enten¬ der la interacción oiltural experimentada por los nativos americanos antes de su contacto con los jesuítas. Mientras trabajaba en su doctorado� en la Universi¬ dad de Purdue> Peter Peregrine estuvo investigando las culturas prehistóricas del Misisipí del este de Estados Unidos� llegando a la conclusión de que era común la in¬ teracción entre sus grupos y que las culturas de los na¬ tivos americanos habían sido muy imaginativas durante siglos. El contacto entre los jesuítas y estos nativos fue
dmplemente uno de los muchos intercambios culturales que tuvieron. También encontró que se habían realizado relativamente pocas investigaciones en relación con las interacciones de los nativos americanos y decidió que era conveniente hacer investigaciones comparadas para poder resolver las cuestiones existentes sobre el tema. En 1990 participó en el Sutntner íustítute itj Comparative AnthwpQhgkai Researdi� donde encontró a Carol K. Emb erya Melvin Emben Peter Peregrine enseñó en el Juniata CoUege� es profe¬ sor asociado y miembro del departamento de Antropo¬ logía en la Universidad Lawrence en Appletorij Wisconsin. Trabaja como investigador asociado para la Colección Arqueológica de los HRAF y es coeditor adjunto de la £«dclopedia de Prehistoria. Continúa trabajando en investi¬ gaciones arqueológicas y recientemente ha celebrado su primera década como docente de Antropología y Arqueobgía de alumnos de pregrado.
¿Qué es la Antropología? INDICE DEL CAPÍTULO
El ámbito de la Antropología Aproximación holística Curiosidad antropológica Campos de la Antropología Antropología aplicada La relevancia de la Antropología
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Capítulo 1
¿Qué es la Antropología?
Antropología� por definición� es una disci¬ plina de infinita curiosidad acerca de los seres Lahumanos. La palabra Antropología procede del griego anthropos que significa «hombre� humano» y hgos, «estudio». Los antropólogos buscan respuestas para una enorme variedad de preguntas sobre los seres humanos� Están interesados en descubrir cuándo� dónde y por qué aparecieron los seres humanos sobre la Tierra� cómo y por qué han cambiado desde entonces� y cómo y por qué las poblaciones humanas ac¬ tuales varían en ciertos rasgos físicos. Los antropólogos también están interesados en saber cómo y por qué las poblaciones humanas en el pasado y en el presente han cambiado en sus costumbres y prácticas. La Antropolo¬ gía también tiene su lado práctico; así� la Antropología práctica y aplicada pone los métodos antropológicos� la información y los resultados obtenidos al servicio de la resolución de problemas prácticos, Pero definir la Antropología como el estudio de los se¬ res humanos no es completo� ya que tal definición su¬ pondría adaptar a ella una larga lista de disciplinas tales como la Sociología� Psicología� Ciencias políticas�Economía� Historia� Biología humana� y quizá hasta las disci¬ plinas humanísticas de Filosofía y Literatura. No es preciso decir que los expertos en estas disciplinas rela¬ cionadas con los seres humanos no estarían muy conten¬ tos si consideráramos su trabajo como una rama secundaria de la Antropología. Después de todo� dichas disciplinas existían mucho antes que la Antropología» y cada una de ellas tiene aspectos particulares y distintivos, Por lo tanto» hay que analizar qué es lo característico de la Antropología� buscar una razón para explicar por qué se ha desarrollado como una disciplina autónoma y por qué ha coi�eguido una identidad propia en los últimos den años.
El ámbito de la Antropología Los antropólogos� generalmente» están considerados como unos individuos que viajan a rincones poco cono¬ cidos del mundo para estudiar a gentes exóticas o exca¬ var en lo profundo de la tierra con el fín de descubrir fósiles o herramientas y cerámica de individuos que vi¬ vieron hace mucho tiempo- Estas visiones> aunque clara¬ mente estereotipadas» indican cómo la antropología se diferencia de otras disciplinas relacionadas con los seres humanos. La Antropología es amplia en perspectivas� tanto geográficas como históricas» y está relacionada ex¬ plícita y directamente con todo tipo de gentes de todo el mundo» y no sólo con las que están situadas más próxi¬ mamente o en un área limitada. También está interesada
en los pueblos de todos los períodos históricos» empe¬ zando por los primeros antepasados de los seres huma¬ nos que vivieron hace unos pocos millones de años» trazando el desarrollo de los seres humanos desde en¬ tonces hasta el presente. Cualquier parte del mundo que haya tenido alguna vez población humana es de interés para los antropólogos, Pero los antropólogos no siempre han sido globales y comprensivos en sus conclusiones como lo son en la ac¬ tualidad, Tradidonalmente estaban dedicados a estudiar culturas diferentes a las de Occidente� dejando el estudio de estas civilizaciones y sus referencias históricas» lo mismo que el de otras sociedades más complejas» a otras disciplinas. Sin embargo» en los últimos años> esta divi¬ sión de trabajo entre las disciplinas ha comenzado a desaparecer� y ahora los antropólogos trabajan tanto en sus propias sociedades como en otras tan complejas como las suyas, ¿Qué es lo que induce al antropólogo a esci?ger el su¬ jeto de su estudio? En parte está motivado por la creen¬ cia de que toda generalización sobre los seres humanos y la explicación de alguna de las características de la Biolo¬ gía o de la cultura humana� se podría aplicar a muchas épocas y lugares de la existencia humana. Si una genera¬ lización o exphcación no es ampliamente apÜcable» esta¬ mos obligados a desechada. La actitud escéptica» en ausencia de una evidencia persuasiva» es nuestra mejor protección contra la aceptación de ideas inválidas sobre los seres humanos. Por ejemplo» cuando los educadores americanos des¬ cubrieron en los años sesenta que los escolares afroame¬ ricanos raramente bebían leche» supusieron que la causa era la felta de dinero o de educación, Pero la evidencia demostró a los antropólogos una explicación bien dife¬ rente, Los antropólogos habían descubierto años antes que en muchas partes del mundo donde se cuidaban ani¬ males en período de lactancia» la gente no solía beber le¬ che fresca y» en vez de ello» la criaban antes de bebería o la convertían en queso. El porqué hacían eso no estaba claro» pero es sabido que muchas personas carecen de una enzima» la lactasa» que es necesaria para descomponer la lactosa» un azúcar de la leche. Cuando esas personas be¬ ben leche de forma regular, ésta interfiere con la diges¬ tión, En estos casos» no sólo no se digiere la lactosa de la leche» sino otros nutrientes; en muchos casos beber leche puede causan en estas personas» dolores de estómago» diarrea y náuseas. Ciertos estudios demostraron que la intolerancia a la leche se encuentra en muchas partes del mundo» siendo una situación comtin entre adultos de Asia» sur de Europa» árabes y judíos» África occidental» los inuit (esquimales), indios del norte y sur de América y entre los afroamericanos. Como los antropólogos están
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informados sobre la vida humana de una enorme varie¬ dad de asentamientos históricos y geográficosj son í:apaces de corregir creencias equivocadas sobre los diferentes grupos humanos.
Aproximación holística Además de la visión general e histórica de la Antropología» otra perspectiva de la disciplina es la aproximación holística Q estudio de las múltiples fecetas de los seres hu¬ manos» Los antropólogos no sólo estudian todas las va¬ riedades de individuos sino también muchos aspectos de la experiencia humana. Porejemploj cuando un antropó¬ logo describe un grupo de personas� debe comentar tam¬ bién la historia del área en donde esas peisonas viven, su medio ambiente físico�la organización de la vida &mihar� las características generales de su lenguaje� los patrones de asentamiento del grupo� el sistema político y económico» la rehgión y las formas artísticas y de vestir, En el pasado� los antropólogos individuales trataron de ser más generales y de cubrir muchos aspectos. Hoy, lo mismo que en otras disciplinas» se ha acumulado tanta iaformación que los antropólogos tienden a especiali¬ zarse en un área localizada. Así» un antropólogo puede investigar las características físicas de alguno de nuestros ancestros prehistóricos, otro puede investigar los efectos biológicos sobre el medio ambiente de detenninada pol:Jación humana a lo largo el tiempo; e induso otro» puede concentrarse en las costumbres de determinado grupo particular de personas. Sin embargo» a pesar de esta especialización, la discipUna de la Antropología mantiene su orientación general (holística) en sus muy diferentes especialidades y, tomándolas en con�nto» des¬ cribe muchos aspectos de la existencia humana» tanto del pasado como del presente,
Curiosidad antropológica Hasta ahora hemos descrito la Antropología como una entidad amplia de miras» geográfica e históricamente» y más holística en su enfoque que otras disciplinas que ata¬ ñen a los seres humanos. Pero» de nuevo» esta afirmación implica que la Antropología incluye todo lo relacionado con las ciencias humanas. Entonces ¿en qué se diferencia realmente la Antropología de las otras disciphnas? Suge¬ rimos que la diferencia de la Antropología radica» princi¬ palmente» en el tipo de curiosidad que despierta. Los antropólogos están relacionados con muchos ti¬ pos de preguntas: ¿dónde» cuándo y qué personas fueron las que empezaron a vivir en ciudades? ¿Por qué unas
personas tienen el color de la piel más oscuro que otras? ¿Porqué unos idiomas tienen más términos para la pala¬ bra color que otros? ¿Porqué las mujeres tienen más po¬ der pohtico en unas sociedades que en otras? ¿Qué hace que las poblaciones difieran en su aceptación del control de la nataÜdad? Aunque estas cuestiones muestren as¬ pectos muy diferentes de la existencia humana» tienen» al menos» una cosa en común: todas tratan de mract�rísticas típicas (costumbres» tradiciones) de poblaciones par¬ ticulares. La característica típica de un pueblo puede ser su piel relativamente oscura o su lengua con muchos tér¬ minos para el color» o la participación de la mujer en la política» o la aceptación del control de la natalidad. Todo lo relacionado con las características típicas de poblacio¬ nes es» quizá» el rasgo más característico de la Antropolo¬ gía. Por ejemplo» mientras los economistas escogen un sistema monetario para conocer cómo funciona» los an¬ tropólogos se preguntan porqué sólo algunas sociedades usaron dinero en los últimos siglos. Resumiendo» los an¬ tropólogos tienen curiosidad por conocer las caracterís¬ ticas típicas de las poblaciones humanas» el cómo y el porqué tales poblaciones y sus características han va¬ riado a lo largo de la historia.
Campos de la Antropología Los antropólogos centran sus trabajos sobre diferen¬ tes características típicas de las sociedades. Otros se cen¬ tran preferentemente en las mractejisticas físicas o biológicas de las poblaciones humanas; otros se interesan principalmente en lo que denominamos características culturales. De aquí que surjan dos amplias clasificaciones de acuerdo con el sujeto estudiado en Antropología: An¬ tropología biológica o Bioaotropologia (fisica) y Antro¬ pología cultural, la Bioantropología es uno de los campos más extensos de la Antropología. La Antropolo¬ gía cultural se divide en tres grandes subapartados: Ar¬ queología» Lingüística y Etnología, Etnología es el estudio de culturas recientes; actualmente se denomina también Antropología cultural y Antropología Social (wéfjyí Figura 1,1), Además de estos cuatro campos» existe un quinto que es la Antropología práctica o aplicada.
CD-ROM Ejercicio 1-1
Bíoaísítropología
La Bioantropología se enfrenta a las respuestas de dos preguntas diferentes. La primera incluye cuestiones relativas
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Capítulo 1
¿Qué es la Antropología?
Pasado recísnts
ypiQSsnlB
□ AntropologÉa ciitivaJ n AfitiDpolo0� tiqlú0ca.
Rgura 1.1 Las subdivisiones dtí ia antropoiogfa Las cuatro mayores subdisáplims de ia antropohgia se o cul¬ pueden dosificar de acuerdo aJ sujeto tratado se trate (pasado remoto� tural) y de ooi�dp a/ período de (ie pasado rédente y presen�), en cada una de Uí cwaíro pología jwíííííscípJímw. a la aparición de los seres humanos y su pcjsteriqr evolu¬ ción (este enfoque se denomina Paleontología humana o Meoantropologia). La segunda se pregunta sobre cómo y cuándo variaron biológicamente las poblaciones hu¬ manas contemporáneas (este enfoque se denomina va¬ riabilidad humana), Para reconstruir la evoludónj los paleoantropólogos (paleontólogos humanos) investigan en cada uno de sus estudios los restos enterrados o las impresiones dejadas (conocidos como fósiles)� tanto de los seres humanos� como de los prehumanos y otros animales relacionados con ellos. Los paleontólogos que trabajaban en Áfiica oriental, por ejemplo, han excavado fósiles de seres de as¬ pecto humano que vivieron hace más de tres millones de anos. Estos hallazgos han apuntado las fechas aproxima¬ das en las que nuestros predecesores empezaron a caminar sobre sus dos piernas, cuándo desarrollaron las manos fle¬ xibles y cuándo aumentó el tamaño de su cerebro. Para describir las relaciones evolucionistas, los paleoantropólogos se valen, además de los descubrimientos fósiles, de la información geológica que describe las evo¬ luciones climáticas, medioambientales y de las poblacio¬ nes vegetales y animales. Sobre todo, al reconstruir el
pasado de los seres humanos, los paleontólogos están muy interesados en la conducta y la evolución de los ma¬ míferos más relacionados con nosotros: los y los Anthropoidea que, al igual que nosotros, son miembros del orden de los primales, Los antropólogos, psicólogos y biólogos especializados en el estudio de los primates se denominan primatólogois. Las especies de primates se estudian tanto en la vida salvaje como en el laboratorio, Los chimpancés, especialmente, son objeto de estudio ya que poseen un estrecho parecido con los seres humanos, tanto en su conducta como en su apariencia biológica, tienen además grupos sanguíneos similares y padecen muchas de nuestras enfermedades. Actualmente sabe¬ mos que el chimpancé comparte con nosotros el 99 por ciento de sus genes, A partir de estudios sobre primates, los bioantropólogos tratan de descubrir las características que son distin¬ tivas de los seres humanos y opuestas a aquellas que agüen siendo comunes con la herencia genética de los primates. Con esta información podrán conocer cuáles fueron nuestros antepasados prehistóricos. Los datos ob¬ tenidos a partir de los estudios sobre primates se compa¬ ran con los hallazgos fósiles, es decir, la evidencia encontrada en las excavaciones de los estratos del suelo es similar a las observaciones científicas efectuadas sobre nuestros parientes próximos. Resumiendo, con los ha¬ llazgos efectuados por los bioantropólogos junto a las in¬ formaciones procedentes de estudios de diferentes áreas, se elaboran las teorías que tratan de explicarse compa¬ rando un tipo de evidencias con otras. De esta forma, la Paleontología humana asocia una serie de disciplinas, ta¬ les como la Geología, la Paleontología general de verte¬ brados (particularmente de primates), la Anatomía comparada y el estudio comparado del comportamiento de los primates. El segundo enfoque de la Bioantropología, el estudio de la evolución humana, investiga cómo y por qué difiere la población contemporánea humana en sus característi¬ cas biológicas o físicas- Todas las personas pertenecen a una única especie, Homo sapiens sapimsy aunque hay muchas variaciones entre los distintos grupos de pobla¬ ción, Los investigadores de la variabilidad humana se ha¬ cen preguntas tales como: ¿por qué unas personas son más altas que otras?, ¿cómo se adaptó físicamente la po¬ blación humana a sus condiciones ambientales?, ¿están algunas poblaciones como los inuit mejor preparadas que otras para soportar el fHo!, ¿ofrece la pigmentación más oscura de la piel mayor resistencia a la insolación tropical? Para comprender mejor las variaciones biológicas ob¬ servables entre las poblaciones humanas contemporᬠneas, los bioantropólogos usan los principios, conceptos
Ca p í t ul o I
¿Qué es la Antropología?
Nadine Peacock una bioantropóloga� e$tudia la reproducción y la $alud entre loe pigmeos Efe-lturi del Zairey técnicas díj al raenos� otras tres disciplinas: Genética humana (el estudio de lew caracteres humanos que son heredables)� Biología de poblaciones (el estudio de los efectos ambientales sobre el ser humano� sus interaccio¬ nes y características de las poblaciones) y Epidemiología (el estudio de cómo y por qué afectan las enfermedades a diferentes poblaciones de diversas ft>rma5). No obstante� las investigaciones efectuadas sobre las variaciones se superponen a las investigaciones realizadas en otros campos. Los antropobiólogos� sin embargo� están estre¬ chamente relacionados en lo referente a las poblaciones humanas y su variabilidad biológica. Antropología cultural
La antropología cultural se interesa en cómo varían las poblaciones o sociedades en sus características cultu¬ rales. Pero ¿qué es «cultura»? Puesto que el concepto de cultura es fundamental para la antropología cultural» le dedicaremos todo un capitula Para un antropólogo� el término cultura se refiere a las formas habituales de pen¬ samiento y actuación de una determinada población o sociedad. La cultura de un grupo social incluye muchas cosas diferentes: su lei�a» creencias religiosas» preferen¬ cias alimentarias» música» hábitos de trabajo» roles de género> educación de los hijos, construcción de casas y otras muchas formas de actuación e ideas que poseen de forma habitual en ese grupo de población. Existen tres ramas principales de la Antropología cultural» que son la Arqueología (el estudio de culturas pasadas» sobre todo a
partir de los restos materiales que han quedado de ellas)» Lingüística autropológica (el estudio antropológico de las lenguas) y Etnología (estudio de las culturas existen¬ tes o recientes). Nos referiremos a cada una de ellas. ARQUEOLOGÍA. Los arqueólogos no sólo recons¬ truyen la vida cotidiana y las costumbres de las gentes que vivieron en el pasado sino que también estudian los cambios culturales y ofrecen posibles explicaciones sobre esos cambios. Esta disciplina es parecida a la de los his¬ toriadores» pero la Arqueología va mucho más lejos en el tiempo. Los historiadores tratan solamente de las socie¬ dades que han dejado restos escritos> lo que les hace con¬ templar sólo un pasado de» aproximadamente» los últimos 5.000 años de la historia de la humanidad, Pero las sociedades humanas han existido desde hace» al menos> un millón de años» de los que sólo una pequeña pro¬ porción de años» 5.000» han dejado restos escritos. Para estudiar estas sociedades que dejaron restos escritos es¬ tán los historiadores. Al feltarles restos escritos que estu¬ dian los arqueólogos tienen que tratar de reconstruir la historia del resto de las culturas» algunas de las cuales pueden ser tan grandes como la cultura maya» muestras de la cual son los grandes templos descubiertos en Chichén Itzá (en Yucatán» México). Pero con mayor frecuen¬ cia los restos con los que se encuentran son pedazos de cerámica rota» herramientas de piedra y montones de desperdicios. Muchos de los arqueólogos trabajan sobre la tVdiistoria» el tiempo anterior a los restos escritos. Pero existe
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Capítulo 1
¿Qué es la Antropología?
una especialidad dentro de la Arqueología que es la Arquwlogia histórica o Historia Antigua� que estudia los restira hallados de pueblos recientes que, además, dejaron datos escritos, Esta especialidadj como su nombre indica� utiliza los métodos de arqueólogos e historiadores para estudiar las sociedades recientes� ya sea aplicando la in¬ formación histórica o la arqueológica. Para tratar de comprender el cómo 7 el porqué de los cambios de la vida a través del tiempo en las diferentes partes del mundo, los arqueólogos recogen los materiales procedentes de los lugares de ocupación humana, Gene¬ ralmente estos sitios han de desenterrarse previamente. Basándose en los restos que se han excavado o recogido de cualquier otra forma, se plantean varias cuestiones: ¿dóndej cuándo y por qué emergieron por primera vez las herramientas con caractensticas típicamente huma¬ nas?, ¿dónde, cuándo y porqué se utilizó por primera vez la agriculturaíi ¿dónde, cuándo y por qué cierto número de personas comenzó a vivir en ciudades? Para completarlos datos necesarios, de acuerdo con la respuesta a esas y a otras preguntas, los arqueólogos re¬ curren a técnicas y hallazgos confirmados por otras dis¬ ciplinas, como los conocimientos antropológicos, tanto de recientes como de pasadas culturas. Por ejemplo, para saber dónde excavar para encontrar evidencias de herra¬ mientas primitivas, los arqueólogos estudian la geología de la zona que les dirá en qué lugares con ocupación hu¬ mana primitiva probablemente encuentren restos, según la erosión o las elevaciones del terreno, cerca de la super¬ ficie, Para conocer dónde surgió la agricultura por pri¬ mera vez, los arqueólogos datan los materiales excavados por medio de técnicas desarrolladas por los químicos, Y para tratar de comprender en qué lugar emergieron las primeras ciudades, los arqueólogos utilizan la informa¬ ción proporcionada por historiadores, geógrafos y otros especialistas, obteniendo datos sobre cómo ciudades re¬ cientes y contemporáneas están relacionadas económica y políticamente con sus propios restos de culturas ante¬ riores, Si podemos descubrir qué es lo que tienen en co¬ mún las ciudades recientes y contemporáneas, podremos especular sobre la forma en que se desarrollaron las pri¬ meras ciudades. Así utilizan los arqueólogos la informa¬ ción del presente y del pasado reciente para tratar de comprender el pasado lejano. ANTROPOLOGÍA LINGÜÍSTICA, l a Antropología lingüística es otra de las ramas de la Antropología cultu¬ ral. La lirtgiiísticat o estudio de las lenguas, es una disci¬ plina más antigua que la propia Antropología, aunque los primeros lingüistas se concentraban en el estudio de las lenguas que han dejado testimonios escritos desde hace mucho tiempo (como el inglés, del que hay referen¬
cias escritas de hace casi milanos). Los antropólogos lin¬ güistas comenzaron a dedicarse al estudio de lenguas que no habían comenzado a escribirse todavía, lo que signi¬ fica que estos antropólogos no podían consultar ni un diccionario ni una gramática que les ayudase a comprenderuna lengua. En su lugar, tenían que elaborar primero un diccionario o gramática como herramienta para aprenderla- De esta forma estarían en disposición de es¬ tudiar b estructura e historia de esa lengua. Igual que los bioantropólogos, los lingüistas estudian los cambios que se han producido a lo largo del tiempo, lo mismo que las variaciones contemporáneas. Algunos antropólogos lingüistas estudian la aparición del len¬ guaje y también la divergencia de lenguas a lo largo de miles de años. El estudio del cambio de las lenguas a lo largo del tiempo se denomina Lingüistica histórica. Los antropólogos lii�istas también se interesan por la forma en que difieren las l e r d a s contemporáneas y, es¬ pecialmente, en su construcción. Este enfoque de la Üng�ística se llama generalmente lingüística estructural o de�riptiva- El estudio de cómo se utiliza el ler�aje en el contexto social se llama Sociolingüistica. En contraste con los paleoantropólogos y arqueólogos, que tienen evidencias físicas para ayudaries a reconstruir los cambios en el tiempo, los Ürigüistas históricos sólo uti¬ lizan las lenguas,y generalmente sin textos escritos (recor¬ demos que la escritura apareció hace solamente unos 5,000 años y la mayoría de las lenguas todavía no la conodan), Pero un idioma no escrito se ha de escuchar para poder ser estudiado y, por tanto, no es fecil hacer estos es¬ tudios si quier\es lo hablaron han muerto en su totalidad. Los lingüistas también están interesados en reconstruir la historia de los idiomas antiguos no escritos, comparándo¬ los con los idiomas recientes. Basándose en estas compa¬ raciones, establecen los tipos de cambios que puedan haber ocurrido en el pasado y en el presente. La Lingüís¬ tica histórica se plantea cuestiones como las siguientes: ¿pueden proceder dos o más idiomas contemporáneos de una lengua ancestral común? Si están rdacionados, ¿cuándo comenzaron a difererKiarse entre si? Contrariamente a la Lingüística histórica, la descrip¬ tiva (o estructural) está relacionada con los descubri¬ mientos y principios que determinan la forma en la que los sonidos y las palabras se unen para hablan Por ejem¬ plo, una descripción estructural de un idioma en parti¬ cular ha de contarnos cómo pueden ser intercambiables los sonidos de í y ir en una palabra sin producir diferen¬ cias en su signifi cado. En la Samoa am ericana, u no pu ede decir TwíwíÍíí o íIííI:«íÍcí, nombre de la mayor de las islas, y todo el mundo, quizá con la excepción de los antropó¬ logos recién llegados, entendería que se está mencio¬ nando la misma isla,
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¿ Qué es la Antropología?
Nuevas perspectivas sobre el género Una investigaMra: Elizabeth M. Brumfiel Una profesora de Antropología en el Albion College> Elizabeth Brujnfieli después de su gradua¬ ción, se interesó por el origen de las desigualdades sociales. Los arqueó¬ logos sabían desde hacía algún tiempo que la diferencia sustancial de riqueza entre las :&niilias había aparecido hace relativamente poco tiempo (arqueológicamente hablando)� esto es, hace solamente unos 6.000 años. Los indicadores arqueológicos de desigualdad están muy daros: enterramientos con ar¬ tículos de valor para algunas fami¬ lias y grandes diferencias entre viviendas y otras posesiones. Pero por qué se había producido dicha transformación ya no era algo tan claro. Cuando Brumñel se graduó en la Universidad de Michigan� dijo que no aceptaba la explicación, que entonces era la habitual, de que la desigualdad proporcionaba benefi¬ cios a la sociedad (por ejemplo, los estándares de vida de la mayoría de la gente facilitaban que los líderes fueran más ricos). Por tanto, una vez doctorada, investigó en el cen¬ tro de México para comprobar la explicación del «(beneficio» en un área que había sido independiente políticamente en sus orígenes y que luego formó parte del imperio az¬ teca. Estudió los restos materiales encontrados en superficie de la zona y la documentación escrita por europeos y aztecas de la no¬ bleza. Sus hallazgos contradijeron la explicación del beneficio de la desigualdad social ya que encontró que existían pocas mejoras en la ca¬
lidad de vida de la población local, después de que el imperio azteca los absorbiera� Otra parte importante de sus in¬ vestigaciones fue la comprensión de la vida de las mujeres. ¿De qué £>rma les había afectado la expan¿ón del imperio azteca? ¿Habían cambiado en algo sus ocupaciones? ¿Cómo estaban reflejadas las muje¬ res en el arte? En fa capital azteca de Tenochtitlán, con el crecimiento del imperiosas imágenes de milita¬ rismo y masculinidad se fueron in¬ crementando de forma importante y las esculturas mostraban a las mujeres en posiciones de subordi¬ nación (por ejemplo� arrodilladas). Pero en el área de trabajo de Brumfiel, las imágenes de las mujeres no habían experimentado ninguna va¬ riación. Por ejemplo, la mayoría de las esculturas de mujeres, después de la conquista de los aztecas, se¬ guían apareciendo de pie, no de ro¬ dillas. Como muchos antropólogos, Brumñel se preguntó cómo podría contribuir a la comunidad en la que había efectuado sus trabajos, Para ello, decidió efectuar una ex¬ posición que explicara la forma de vivir de sus antepasados durante 1.200 años. La muestra describía a las gentes de Xaltocán que había es¬ tudiado. Posteriormente, continuó estu¬ diando el origen de las desigualda¬ des y la situación de las mujeres, Está bastante satisfecha porque ha contribuido a que algunos com¬ prendan que «ha demostrado lo
ElizabeOi B m m f i e l
equivocado de aqueUa teoría y se¬ guirá dedicando toda su vida de arqueóloga investigadora a encontrar sus propias respuestas». M. Bmiufiel, 4 las actitudes ha¬ da el que habla otro idioma o dialectPi y la forma en que la gente habla de manera distinta según los diferentes contextos» Por ejemplo» en inglés» no nos dirigimos de la misma forma a dos personas de diferente contexto. «He» Sandy»» puede ser la forma acostumbrada en la que al¬ guien saluda a un amigo» pero estaría mal llamar a un doctor por su nombre; en vez de esto se acostumbra a sa¬ ludar diciendo» «Buenos días»Dr.Brown».Tales variacio¬ nes en la lengua» que están determinadas por el estatus social de las personas a las que uno se dirige» también son estudiadas por los sodolingüistas,
CD-ROM EjerciciD III-1
ETNOLOGÍA. La Etnología estudia cómo y por qué los pueblos de hoy día y del pasado reciente difieren en sus maneras habituales de pensar y de actuar. La Etnobgia -llamada actualmente antropohgía svcial o cultu¬ ral- está relacionada con patrones de pensamiento y de conducta� tales como las costumbres matrimoniales» organización �miliar» sistemas políticos y económicos» religión» foldore» música» etc.» y con la forma en que es¬ tos patrones difieren en las sociedades contemporáneas. Los etnólogos también estudian las dinámicas cultura¬ les» esto es» la forma en la que varias culturas se desarro¬ llan y cambian, Adicionalmente están interesados en las relaciones existentes entre creencias y prácticas dentro de la misma cultura. De esta forma» el campo de la Et¬ nología es en gran medida el mismo de la Arqueología, Pero los etnólogos generalmente utilizan datos recogi¬ dos por medio de observaciones y de entrevistas con poUaciones vivas. Los arqueólogos» por el contrario» trabajan con los restos firagmentarios de pasadas cultu¬ ras sobre la base de que solamente pueden hacer deduc¬ ciones sobre temas relacionados con poblaciones prehistóricas. Hay un tipo de etnólogos» el etnógrafo» que general¬ mente dedica un tiempo» alrededor de un año» viviendo» hablando y observando a las personas que estudia. Esta especialidad proporciona datos sufidentes para poder efectuar descripdones detalladas (Etnografia) de mu¬ chos de los aspectos de las costumbres y formas de pen¬ sar de esos grupos. Los etnógrafos no sólo tratan de describir los patrones generales de su forma de vivir» sino que también tienen respuestas para preguntas del tipo de: ¿cómo son las conductas económicas y políticas de
las gentes que han descritoí� ¿de qué forma se han adap¬ tado estas personas a las condidones ambientales?» ¿existe alguna reladón entre las creencias sobre temas so¬ brenaturales y las creencias o prácticas reladonadas con el mundo natural? En otras palabras» los etnógrafos estudian las formas de vida de un grupo particular de personas y sugieren explicaciones sobre algunas de las observadones realizadas. Como muchas culturas han experimentado cambios en el pasado reciente» es preciso que otro grupo de etnó¬ logos» los djiohistoriadores» aporten sus estudios sobre la forma en que un grupo particular de gente ha cam¬ biado en el tiempo. Este tipo de etnólogos estudia docu¬ mentos escritos (aunque no hayan sido redactados por antropólogos). Pueden dedicar muchos años a estudiar documentos» como la contabUidad de una misión» des¬ cripciones de exploradores o comerciantes» documentos gubernamentales» etc.» para tratar de establecer los cam¬ bios culturales que se hayan producido, A diferencia de los etnógrafos» que basan sus estudios principalmente en sus propias observaciones» los etnohistoriadores realizan sus estudios basándose en las observaciones de otros, A menudo» tienen que juntar datos dispersos dándoles uni¬ dad» induso con datos aparentemente contradictorios, Como vemos» la investigación de los etnohistoriadores es muy semejante a la que efectúan los historiadores» ex¬ cepto por el hecho de que los etnohistoriadores tratan de reconstruir la historia de unas gentes que no han dejado documentos escritos de ellos mismos. Los etnohistoria¬ dores tratan de reconstruir la historia reciente de un pue¬ blo» y pueden apuntar la causa de algunos cambios que han tenido lugar en su forma de vida, Con los datos recogidos y analizados por etnógrafos y etnohistoriadores» se efectúa el trabajo de un tercer tipo de etnólogos» los investigadores transcultiirales. Este tipo de estudiosos está interesado en descubrir la forma en que ciertas características culturales se pueden encon¬ trar en unas sodedades pero no en otras. Por ejemplo» por qué algunas sociedades tienen estratificadón social (clases y castas) en tanto que otras poseen sistemas más igualitarios» por qué algunas religiones tienen un ser su¬ perior o dios supremo» o por qué algunas sodedades tie¬ nen Emilias muy amplias y numerosas. Para obtener respuestas a sus preguntas» los investigadores transculturales usan datos procedentes de muestras de otras cultu¬ ras para tratar de llegara condusiones generales sobre la variabilidad cultural. Los arqueólogos pueden encontrar muy útiles estos datos para efectuar deducciones sobre el pasado» especialmente si encuentran indicadores mate¬ riales de la variabilidad cultural. Como los etnólogos pueden estar interesados en mu¬ chos aspectos de las costumbres -desde la conducta
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biológica haíta la conducta política e induío el arte� la música y la religión- la etnología coincide también con otras muchas disciplinas que tratan sobre aspectos parti¬ culares de la vida humana» como la Sociología» Psicolo¬ gía» Economía» Qencia Política» Arte» Música y Religiones Comparadas. Pero el rasgo distintivo de la Antropología es su interés en la forma en que todos estos aspectos de la existencia humana varían de una sociedad a otra en to¬ dos los períodos históricos y en todas las partes del mundo.
Antropología aplicada Todos los conocimientos» piara ser útiles» tienen que verterse al exterior. En las ciencias físicas y biológicas se entiende perfectamente el gran esfuerzo realizado para que los descubrimientos tecnológicos» como el ajuste del ADN» el acoplamiento de las naves espaciales en el espa¬ cio exterior y el desarrollo de los minúsculos microchips de los computadores» se haya realizado basándose en una enorme cantidad de investigaciones básicas que han per¬ mitido descubrir las leyes de la naturaleza en los campos de la Física y la Biología* Si no hubiéramos comprendido los principios fundamentales no hubiera sido posible ninguno de los halla��os tecnológicos de los que estamos tan orgullosos» Los investigadores» a menudo» se dejan llevar simplemente por la curiosidad» sin imaginar los lí¬ mites a los que les pueden llevar sus descubrimientos; esta investigación elemental se denomina inves�gación básica. mismo ocurre también en las Ciencias Socia¬ les. Si un investigador descubre que las sociedades que practican deportes combativos tienden a tener más guerras» puede estimulara otros para que investiguen las relaciones entre un tipo de agresión u otro. El conoci¬ miento adquirido puede llevar a comprender las formas por las que se puedan corregir verdaderos problemas so¬ ciales como la violencia �miliar y la guerra. Mientras que los investigadores básicos pueden ayu¬ dar a resolver problemas prácticos» la investigación apli¬ cada es más explícita en sus fines prácticos. Actualmente» alrededor de la mitad de los antropólogos se dedica a la Antropología aplicada o práctica. Esta disciplina es explícita en lo que se refiere a los métodos para obtener utilidad del conocimiento antropológico. Los antropólo¬ gos prácticos pueden estar especializados en cualquiera de las subespeciahdades de la antropología. En contraste con los investigadores básicos» que suelen estar emplea¬ dos en colegios» universidades y museos» los antropólo¬ gos prácticos lo están fuera de la docencia» incluyendo a las agencias gubernamentales» agencias privadas interna¬ cionales para el desarrollo» firmas consultoras comercia¬
les privadas» organizaciones púbÜcas sanitarias» colegios médicos» oficinas jurídicas» agencias para el desarrollo comunitario y fundaciones caritativas. Los bioantropólogos pueden ser consultados para dar un informe forense peñcial en un juicio» o pueden traba¬ jar en salud pública o diseñar trajes y equipamientos adecuados para la anatomía humana, Los arqueólogos pueden estar relacionados con el cuidado y la exhibición de artefectos para los museos o contratados para descu¬ brir y preservar yacimientos que puedan dañarse con las construcciones de edificios o excavaciones. Los lingüistas pueden trabajar en programas de entrenamiento de edu¬ cación bilingüe o en trabajos para mejorarlas formas de comunicación. Los etnólogos pueden trabajar en una amplia variedad de proyectos que pueden ser campañas de desarrollo de comunidades»planificación urbana» cui¬ dados sanitarios» asesoramiento agrícola para organizadones de entrenamiento y asesoramiento sobre el impacto causado por los cambios de programas sobre la vida de las personas. Posteriormente» en la sección dedi¬ cada a los «usos de la Antropología»» comentaremos de forma más amplia todas estas cuestiones. ESPECÍALÍZACtóN Conforme crecen las disciplinas tienden a tener más y más especialidades: esto es prácticamente inevitable porque» con la acumuladón de conodmientos» los mé¬ todos se hacen mucho más avanzados aunque existe un límite en el que cada persona puede detenerse razona¬ blemente, De esta forma» sumándose a las divisiones generales» los antropólogos tienden a identificarse con una especialidad. Es común entre ellos tener una espe¬ cialidad geográfica» como el Nuevo Mundo o el Viejo Mundo» otan reducida como el suroeste de EE UU.Ylos que estudian el pasado (arqueólogos o paleoantropólogos) pueden especializarse a su vez en diferentes épocas. Los etnólogos frecuentemente se centran en materias más específicas de una o dos áreas culturales- Precisa¬ mente la mayoría de los capítulos de este libro se refie¬ ren ampliamente a esas especialidades; por eso los etnólogos se autodefinen» por ejemplo» como antwpóhgo economístat antropólogo político o antwpóhgo psicó¬ logo. En otros casos se definen a sí mismos por la orientación teórica» tal es el caso del ecólogo cultural» que dirige sus investigadones a estudiar las relaciones entre la cultura y el medio físico y social, Sin embargo» todas estas especialidades no son exclusivas redprocamente. De manera que un ecólogo cultural» por ejem¬ plo» puede estar interesado en los efectos del medio ambiente sóbrela conducta económica» o en la conducta política» o en la forma en que la gente cría a sus hijos.
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¿Qué es la Antropología? 13
Fronteras de i-a investigación Uh l»vestt9iider. Teretue E. Hays A menudo libros» artículos in¬ forman de investigaciones, de forma sencilla: aquí está el pro¬ blema y aquí está la respuesta para ese tipo de cosas, Pero muchos in¬ vestigadores saben» por experiencia» que el conocimiento no siempre viene de íbima sencilla. Reciente¬ mente» un profesor del Colegio Rhode Island» Terence E- Hays» ha publicado un trabajo de campo tras permanecer un tiempo entre los Ndumba» en la provincia oriental de las tierras altas de Papua Nueva Guinea, Comenzó por estudiar si los diferentes grupos de personas (por ejemplo» mujeres y hombres) poseían diferentes conocimientos sobre las plantas y si también las clasiñcaban de forma diferente (el interés por k clasificación de plan¬ tas y animales» íínobíoío�» está es¬ trechamente relacionado con la investigación lingüística). En el curso de su primer trabajo de campo en 1972» presenció una cere¬ monia de iniciación para chicos de diez a doce años» un dramático rito de transición que incluía además del trauma físico de hacerles san¬ grar por la nariz» el trauma social de unos ííataques» protagonizados por las mujeres» y el aislamiento en el bosque. La ceremonia estaba llena de simbolismo acerca de por qué los sexos necesitan evitarse mutua¬ mente, Y» mientras él recogía mitos e historias sobre la recolección de plantas para sus investigaciones etnobiológicas» reunió temas inéditos de historias que trataban del pehgro que tenían los hombres por juntarse con las mujeres.
La curiosidad de Hays por estas ceremonias y mitos fue en aumento, ¿Hasta qué punto eran importantes los mitos para perpetuar los temas culturales? ¿Otras sociedades» en las que también había casas separadas para hombres y mujeres» tenían his¬ torias similares? ¿Están todas estas historias relacionadasgeneralmente con los ritos de iniciación y con la segregación de los sexos? Responder a estas preguntas requería ciertas comparaciones» por lo que reurüó una serie de mitos y leyendas popu¬ lares de colegas que trabajaban con otras sociedades de las tierras altas de Nueva Guinea� En el curso de la recopilación de este material com¬ parativo» se dio cuenta de que no había conseguido toda la informa¬ ción etnológica que necesitaba por lo que volvió al trabajo de campo para conseguirla. Como observa
Terence E Hays.
Hays : «Como etnógrafo estoy con¬ tinuamente enfrentado con la pre¬ gunta: ¿cuánto de lo que sabes es cierto? Pero incluso aunque pudiera llegar a la convicción de que algo era verdad con los Ndumba» la se¬ gunda pregunta sería: ¿cuánto de lo que sabes es verdad en general?» ¿qué es lo que no puedes saber sin establecer comparación es?» Fuffti T�rmce E. Hóys, ecFrotü Ethae�ráphéT to G>mpáiativi$t ¿nd en Caxol R. Embec, Melvio Ember y Pttei N. eds,, Fronders jn ptjhgy (Upper Sñddle Riv�r, KJ; PrentiCÍ MI, L993). Prentice Hdl/Simoii & Schu$ter Custotü Publisbing.
Capítulo 1
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Antropología Aplicada Pngramas de desarrolla para comcer la contríBucién de las mujeres a la agricultura Guando Anita Spring efectuó su primertiabajo decampo en lósanos setenta en Zambia» no estaba parti¬ cularmente interesada en la agricul¬ tura. Pero más tarde su interés se volcó enlaAntropología médica. En¬ focó su trabajo hacia las costumbres sobre prácticas curativasi concreta¬ mente las que implicaban a mujeres y niños. Se sorprendió cuando a fi¬ nales del año� vino a verla una dele¬ gación de mujeres para decirle que ellas no comprendían lo que sig¬ nificaba ser una mujer. Cuando le dijeron; 4í R. by K Taylor, de Chronometric Dating in Archjeohgy by R. E, Taylor and J. Aitken» eds, Copyright © 1997 by Plenura PuUi�b�r�. R�produddo con permiso de Plcmim PubUsbers.
ganismo y» por lo tanto» cuál es su edad» es preciso con¬ tar d número de radiadones beta por minuto» por gramo de materia. El carbono-14 moderno emite alrede¬ dor de 15 radiaciones beta por minuto» por gramo de materia» pero d carbono-14 con 5370 años emite sola¬ mente la mitad de radiadones (vida media d d ��C) por minuto y por gramo. Si una muestra de un organismo emite 7»5 radiadones por minuto y gramo» lo que su¬ pone la mitad de radiación de la que emite d carbono-14 moderno» d organismo debe de tener 5370 años de an¬ tigüedad. Como d método d d no es seguro para muestras de más de 50.000 años» en algunas muestras se utiliza un acderador de partículas que permite a los in¬ vestigadores detectar la cantidad actual de este isótopo radiactivo» en vez de medir su emisión radiactiva; este método propordona una forma de datar los especíme¬ nes que tienen más de 80.000 años. La fiabÜidad de la datación por radiocarbono se com¬ probó en muestras de papiros dd Mar Muerto y en algunas
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muMtras de madera procedentes de ima tumba egipcia» cuyas edades eran cQntxidas gradas al registro histórico, Los resultados obtenidos con el carbono-L4 coincidieron muy bien con la información histórica» DATACIÓN POR TERMOLUMINISCENCIA. Cuan¬ do se calientan� muchos minerales emiten luz (termoltuninisveuáa)� induso antes de llegar a ponerse al rojo. Esta luz se produce al desprenderse» por la acción del calor, los electrones «exteriores» atrapados en la estructura crista¬ lina. La datación por termoliiminiscencia se basa en el principio de que si un objeto se calienta a alta tempera¬ tura» lo mismo que se cuece la arcilla con el calor para fa¬ bricar un recipiente» desprenderá todos los electrones atrapados previamente. Con el tiempo» el objeto conti¬ nuará atrapando electrones procedentes de los elementos radiactivos (potasio» torio, uranio) próximos a éL La can¬ tidad de termoluminiscencia emitida cuando se calienta el objeto durante el test permite a los investigadores calcular su edad» siempre y cuando se conozca el tipo de radiación a la que se ha expuesto dicho objeta existente en sus proñmidades (por ejemplo» el suelo subyacente en donde se ha encontrado un recipiente de arcilla), La datación por termoluminiscencia se aplica a mues¬ tras antiguas de alferería» ladrillos» baldosas y terracota» así como a otros objetos sometidos a altas temperaturas durante su elaboración. También es aplicable a pederna¬ les requemados» piedras de hogares» lava» objetos recu¬ biertos de lava» meteoritos y cráteres de meteoritos, DATACIÓN POR RESONANCIA DEL ESPÍN DEL ELECTRÓN. La datación por resonancia d d del dectrón es una técnica que» lo mismo que la datación por
termoluminiscencia» mide los electrones atrapados proce¬ dentes de los materiales radiactivos periféricos, Pero en este caso es diferente» pues se basa en que los materiales que se van a datar están expuestos a diferentes campos magnéticos, obteniéndose un espectro de las microondas absorbidas por la muestra- Dado que no es preciso calen¬ tar la muestra en esta prueba» la resonancia del espin del electrón es especialmente útil en muestras orgánicas como huesos o conchas que se descomponen con el calor.
DATACIÓN PALEOMAGNÉTICA. Oiando se for¬ maron las rocas de cualquier tipa adquirieron el antiguo campo magnético de la Tierra, Cuando este conoci¬ miento se relaciona con el hecho de que los campos magnéticos de la Tierra han cambiado» alternando su po¬ laridad muchas veces» se pueden utilizar los patrones geomagnéticos de las rocas para datarlos fósiles contenidos en su interior. La datación paleontagnética fecha las ro¬ cas en su patrón de secuencias paleomagnéticas. Estricta¬
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mente hablando» no es un método de datación absoluta� pero los períodos geomagnéticos sí se han datado de forma absoluta en conjunción con la datación por el potasio-argón (descrito más adelante). La datación paleomagnética ha fechado hallazgos de primates desde el Eoceno hasta el Mioceno» es decir, desde hace 55 crones hasta hace 5 crones (1 cron - 1 millón de años), No sólo varia el campo magnético terrestre» sino que» la localización de los polos se mueve constantemente (aunque muy despacio) en el tiempo. Se ha determinado el desplazamiento del polo Norte para el pasado reciente» y este conocimiento ha permitido a los arqueólogos da¬ tar algunas estructuras arqueológicas. Cuando se calien¬ tan a altas temperaturas los suelos, rocas o metales, se hcuan y sus moléculas se orientan en el sentido de los campos magnéticos de la Tierra. Cuando se enfrian las moléculas mantienen su ahneación, creando una especie de flecha que señala hacia los polos magnéticos terres¬ tres. Si un arqueólogo encuentra un objeto de cerámica o metal» o induso algún demento en donde se calentaron tierra» rocas o metales hasta su punto de fusión y fueron enfriados en d mismo sitio, d arqueólogo puede tomar una muestra de ese material y registrar cuidadosamente su localización en términos dd campo magnético de la Tierra en el día presente para poder medir entonces el campo magnético dd objeto en d laboratorio. La dife¬ rencia entre la dirección de los campos magnéticos te¬ rrestres y la obtenida en la muestra permite conocer cuándo se fundió y enfrió d material. DATACIÓN POR EL MÉTODO DEL POTASIOARGÓN Y DATACIÓN POR ARGÓN-ARGÓN. H
potasio-40 (�°1C) es una forma radiactiva del potasio que se descompone en un tiempo establecido formando argón-40 (�Ar),La vida media dd � es una cantidad co¬ nocida» así que se puede medir la edad dd material que contiene potasio, comparando la cantidad de � con la cantidad de �Ar que contiene. La vida media del potasio radiactivo ('"'K) es muy larga: 1330 crones. Esto significa que la datación potasio-argón (K-Ar) se puede usar para datar muestras que van desde los 5.000 años hasta los 3,000 millones de años, Este método se usa para datar rocas con minerales ri¬ cos en potasio, pero no los fosiles de esas rocas. Las altas temperaturas originadas en los fenómenos volcánicos pueden eliminar d argón contenido originalmente en las rocas. Por tanto» la cantidad de argón que se acumula tras la destrucción dd potasio radiactivo es directa¬ mente proporcional al tiempo transcurrido desde que tuvo lugar la erupción volcánica. Este tipo de datación ha sido extremadamente útil en Africa Oriental, donde se han producido frecuentes eventos volcánicos desde d
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Temas de actualidad ¿Hay tendencias unilineales en la evolución cultural? Eq los últimos años del siglo xiXj eo los primeros días de la Arqueo¬ logía» los puntos de vista dominan¬ tes de teóricos como Edward Tyior y Lewis Henry Morgan eran que la cultura generalmente se desarrolla o evoluciona de forma uniforme y progresiva. Se pensaba que la mayo¬ ría de las sociedades pasaban por estados similares llegando a un ñnal común. Los primeros evolucionis¬ tas creían que tanto las culturas europeas> como las culturas derivadas de ellas eran los estados más altos de evolución, en tanto que otras culturas se encontraban en los nive¬ les más bajos. La escuela del parti¬ cularismo histórico» relacionada con Franz Boas» rechazó la teoría de que existían leyes universales que dirigían todas las culturas huma¬ nas, Por el contrario» el particula¬ rismo histórico mantenía que las culturas se tenían que estudiar en el contexto de la sociedad en la que aparecían. Boas insistía en la necesi¬ dad de recoger datos procedentes de tantas sociedades como foera posible» actividad que llegó a ser la parte central de toda la Antropo¬ logía, £1 evolucionismo no desapare¬ ció con los primeros evolucionistas
y en los años sesenta� por ejemplo� MarshaU Sahlins y Elman Service discutían dos tipos de procesos evo¬ lucionistas: la evolución específica» que se refiere a los cambios particu¬ lares de una sociedad en particular» y la evolución general. La evolución general se refiere a la tendencia ge¬ neral de pasar de las formas «más abas» a las formas «más bajase» lo que no significa que todas las socie¬ dades tenían que pasar por las mis¬ mas etapas para conseguir los estados «más altos». Ningún an¬ tropólogo está particularmente en¬ tusiasmado con la idea de la evolución uniUneal (en una direc¬ ción), quizá porque la idea está to¬ davía asociada con la superioridad europea de los primeros evolucio¬ nistas. Pero buscando en la larga historia de la Humanidad» vemos que algunas cosas parecen haber cambiado fevorablemente. Por ejemplo» la población humana ha crecido» tecnológicamente es más sofisticada y la mayoría de la gente vive en sociedades estatales. ¿Se¬ guro que hay alguna tendencia unilineal en la evolución cultural? ¿Cómo se puede explicar esto? El tercer autor (Peter Peregrine) de este libro de texto abordó esta
Mioceno» que comenzó hace 24 millones de años. Si el material que se va a datar no es rico en potasio o el área no ha experimentado fenómenos con altas temperatu¬ ras, se precisan otros métodos para efectuar la datación absoluta. Uno de los problemas del método del K-Ar es que el aimento de potasio y de argón se debe medir en dife¬ rentes muestras de rocas; los investigadores deben asu¬
cuestión por medio de la investiga¬ ción cultural cruzada» optando por comprobar si la complejidad cultu¬ ral se había incrementado en el tiempo. Para hacer esto necesitó una forma de medir la complejidad cultural y también a un grupo de culturas que fuera representativo de todas las culturas de la Tierra a lo largo de un amplio espacio de tiempo. Felizmente ambos indica¬ dores existían ya que la medida de la complejidad cultural que usó íiie desarrollada por el antropólogo George Peter Murdock para exami¬ nar la complejidad cultural entre culturas etnográficamente conoci¬ das. La medición se basa en 10 lec¬ tores diferentes de la cultura que incluyen su tecnología» sistema po¬ lítico» densidad de población» etc. Peregrine simpÜficó este método para hacedo más íádl de usar con las culturas arqueológicamente co¬ nocidas, limitándose a aplicarlo a culturas del Viejo Mundo datadas en al menos 15.000 años y sacadas del Outline ofArdioeohgkal Traditíons. Después midió la compleji¬ dad cultural para estas culturas usando la información que había obtenido en la Bícícíopídífl íie la
Préihtoría,
mir que ambos elementos están distribuidos en todas las muestras de rocas de un estrato en particular. Los científicos solventaron este problema por medio del método de datación �Ar-�Ar» basado en que después de medirla cantidad de �"Ar y usándose un reactor para convertir otro isótopo del argón» el �'Ar» en potasio» la relación potasio-argón pueda ser medida de la misma muestra.
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Féchas en añosliasta la actualidad Haiadón entra c o m p t a j i d a d cuitural y t i a m p o . la complejidad mltural se ha incrementado con el paso del úempo.
Peregrine encontró um ciara evi¬ dencia de que la complejidad cultu¬ ral se ha mcrementado de forma regular en los últimos 15.COO años. La %ura aneja muestra gráficamente esta tendencia. La escala horizontal es la época de la cultura� comen¬ zando en el dia de hoy a la izquierda y yendo hacia el pasado conforme nos desplazamos hada la derecha. La linea vertical es la complejidad cultu¬ ral. Está daro que en la gráfica la li¬ nea de la complejidad cultural tiende
a incrementarse con el tiempo» siendo este incremento estadisticamente significativo (a menos que sea un fenómeno casual). Sin embargo» está daro que el incremento no es universal: algunas culturas disminu¬ yen en el pasado� mientras otras au¬ mentan y también ocurre lo mismo en el presente donde unas suben y otras bajan. TampcKio todas las cul¬ turas sufren cambios de la misma forma si bien la gráfica sugiere que todas las culturas humanas general¬
DATACIÓrí CON LAS SERIES DEL URANIO. La descomposición de dos isótopos del uranio» y en otros isótopos (tales como el ���*Th) ha sido de gran utilidad para datar yacimientos» particularmente de Homo sapiens (humanos modernos), sobre todo en cue¬ vas en las que se forman estructuras calcáreas como las estalactitas. Como el agua que hay en las cuevas contiene generalmente uranio pero no torio» las formaciones cal¬
mente tienden a ser más complejas en el tiempa Pero� ¿porqué? No po¬ demos ofi�cer una respuesta» pero si podemos asegurar que es una exce¬ lente pregunta para que usted conti¬ núe la lectura de este libro. Peter N, o/ Ardtaeological Tktditiotis (New Haven, CT; HRAF, 2W1); Peter N, y Melvio
Embei, íííSn se re¬ quiere la concurrencia de un hecho principal: una alta temperatura� como pueda ser la de una erupción volcánica> si bien el tipo de muestras que pueden ser datadas con él es muy variada: cristal� vidrio y otros muchos mi¬ nerales ricos en uranio> incluida una variedad mayor que la que se puede datar con el método del K-Ar. Su margen va desde los 20 años hasta 5 billones de años. ¿Cómo funciona la datación por lineas de fisión? Éste quizá sea el método más sencillo de todos los aquí co¬ mentados. El fundamento es el recuento del número de marcas originadas en la muestra durante la fisión -divi¬ sión explosiva- de los átomos de uranio al desintegrarse. Los científicos saben que el el isótopo más común del uranioj se desintegra lentamente» desintegración que se produce en forma de fisión espontánea» y cada una de las fisiones producidas deja una línea o rastro en la mues¬ tra que se puede observar al microscopio después de tra¬ tar químicamente la muestra. Para saber la antigüedad de una muestra basta con contar los rastros» que indican la proporción de uranio contenido en la muestra, Este método se utilizó en Africa Oriental para datar el estrato I en el barranco de Olduvai en Tanzania» donde aparecieron restos de nuestros ancestros humanos. Este método es capaz de confirmar el análisis previamente efectuado con K-Ar» estimándose que las muestras anali¬ zadas procedían de hace dos millones de anos. Dado que tanto el método del K-Ar» como el de las líneas de fisión» utilizan diferentes técnicas y en ambas puede haber dis¬ tintas foentes de error» es efectivo utilizar ambos méto¬ dos contrastándolos entre sí. Cuando ambos métodos confirman sus resultados puede concluirse que propordonan una evidencia muy fiable,
El resultado de la investigación arqueológica Cuando los arqueólogos y paleoantropólogos termi¬ nan un proyecto de investigación» ¿cuál es el resultado?� ¿cuáles son los fines de la investigación arqueológica? Existen varias respuestas a estas preguntas,
Uno de los fines de la investigación arqueológica es la descripción y reconstrucción de lo ocurrido en el pa¬ sado, Gran parte de lo que hacen los arqueólogos e in¬ cluso de lo que pretendemos hacer en este libro entra dentro de este fin. Los arqueólogos intentan determi¬ nar cómo vive la gente en un lugar determinado» en una época determinada» y cuándo y cómo cambiaron sus estilos de vida. Por supuesto que es también de in¬ terés conocer si las nuevas culturas que aparecen des¬ plazan a las previamente establecidas. La creación de la historia de las culturas y sus cambios en el tiempo se denomina historia cultural. El primer fin de la arqueologia hasta los años cincuenta foe hacer historia de la cultura, Un segundo fin de la investigación arqueológica y uno de los que ha llegado a ser primario a partir de los años cincuenta» es la comprobación de las teorías específicas y las hipótesis sobre la conducta y la evolución humanas. En gran parte este cambio de enfoque se debe al aumento de nuestros conocimientos sobre el pasado: la historia cultural de muchas áreas se conoce ya muy bien. Pero este cambio se debe también a las transformaciones ex¬ perimentadas por la Antropología como un todo. Hasta los anos cincuenta una escuela llamada partivularismQ histórico dominaba la Antropología americana. Esta es¬ cuela sugería que la variación de las culturas humanas se exphcaba mejor si se consideraba el desarrollo histórico específico de las culturas particulares. Lo mismo que el particularismo histórico» el fin de la historia cultural era describir la evolución histórica, Después de 1950 surgieron una serie de nuevas y des¬ tacadas aproximaciones a la Antropología» manteniendo la mayoría de ellas la idea de que el medio ambiente y la forma en que activamente lo utilizan los humanos con¬ figura las culturas y explica» en gran parte» su variatñlidad. La Arqueología constituye una herramienta fundamental para los antropólogos al intentar conocer cómo afectan los cambios en la utilización del medio ambiente por los humanos a la variación de las culturas humanas. Uno de los fondamentos de este enfoque sobre la hipótesis del uso del medio ambiente por los humanos fue la investigación sobre los orígenes de la agricultura» que expondremos en el capítulo dedicado al inicio de la producción de los alimentos y la vida sedentaria. Otro de los orígenes fiie el del nacimiento de las ciudades y esta¬ dos» que parece que cambian radicalmente el uso hu¬ mano del medio ambiente. Dedicaremos un capítulo aparte a este tema. Además de verificar hipótesis» la Arqueología tiene importante relación con la Antropología en su in¬ tento de identificar y comprender las tendencias genera¬ les y los patrones de la evolución biológica y cultural
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humana. Como vimos en el último capítulojla investigadón transcultural también tiene €5tí fin, Pero no solo la Arqueología es capaz di mirar a través del tiempo y exa¬ minar directamente las tendencias evolucionistas sino que> como se explica en el apartado «¿Son unilineales las tendencias en la evolución cultural?»» consideramos que la Arqueología es capaz de desvelar a largo plazo las ten¬ dencias. En capítulos posteriores describiremos la evolu¬ ción humana y sus culturas desde los orígenes. Como también veremoSj uno de los mayores empeños de la Paleoantropología es demostrar a largo plazo las tenden¬ cias y patrones que nos ayuden a comprender cómo y por qué hemos llegado a estar donde estamos. En esta investigaciónj tanto la Arqueología como la Paleoantropología caminan unidas para ayudara despejarla pregunta fundamental de la antropología: ¿qué significa ser hu¬ mano?
Sumario 1. Los arqueólogos y paleoantropólogos tienen cua¬ tro fuentes básicas de evidencia sobre el pasador artefectos> ecofectos> fósiles y estructuras, 2. Los yacimientos son localizaciones donde se ha enterrado y preservado la evidencia del pasado. Se hacen descubrimientos� tanto por medio de la investigación pe¬ destre» como con la ayuda de sensores remotos» y los artefectosj ecofectosj fósiles y estructuras se recuperan del yacimiento a través de las excavaciones3. La información sobre el pasado se obtiene anali¬ zando las evidencias extraídas de los yacimientos. Se puede conseguir mucha información analizando las formas> tamaños y composición de los materiales arqueológicos> aunque los materiales mismos no constituyen el objeto principal de análisis. Lo que permite al arqueó¬ logo o paleoantropólogo conseguir evidencias sobre el pasado es el contexto en que se encuentran dichos artefectosj ecofectosi fósiles y estructuras, 4. Un aspecto dave para situar el material arqueoló�co en su contexto es poder datar con seguridad d ma¬ terial extraído. Para ello se usa una amplia gama de técnicas de datación. Las técnicas de datación relativas determinan la edad del material arqueológico en relación con otros materiales de edad conocida> en tanto que las técnicas de datación absoluta determinan la edad real de los depósitos arqueológicos. 5, La Arqueología permite desarrollar y verificar la historia cultural y las hipótesis sobre los cambios cultu¬ rales. Su principal fin es proporcionar evidencias sobre la evolución humana tanto biológicas como culturales� pre¬ ocupación central de este libro,
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Glosario de términos Artefecto Características Cerámica Conservación Contexto Datación por resonancia delspin del electrón Datación mediante líneas de fisión Datación mediante carbono radioactivo o carbo¬ no 14 (i�C) Datación �Ar-�Ar Datación absoluta Datación paleomagnética Datación relativa Datación por teimoluminiscencia Datación por el Potasio-argón (K-Ar) Ecofectos Estratificado Estructuras Fósiles Fósiles indicadores Historia cultural Lítico Paleoantropólogo Tafbnomía Tipología Trio F-U-N Vida media l&cimientos
Cuestiones críticas L ¿Por qué es tan importante el contexto en las ex¬ cavaciones arqueológicas? 2, ¿Qué tipo de información se puede extraer de una punta de flecha de piedra? 3, ¿Qué fectores hay que tener en cuenta para esco¬ ger una técnica de datación?
Ejercicios de Internet L Visite l]|:tp://archiiet.a$u.edu y explore una o más áreas relacionadas con los métodos arqueológicos. Es¬ criba un breve ensayo describiendo un método o técnica nuevos que haya aprendido, 2, Aprenda sobre d muestreo arqueológico en http://archnet.asu.edu/archiiet/topicaiytheory/ sampling/sampling.html estudie las diferentes técnicas y determine cuál proporciona mejores resultados.
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3, Visití la web sobre datadón con carbono-H en http://www.cl4 preparan y analizan las muestras para el carbono-14, Resuma lo aprendido, 4, Obtenga el test de seriación en liitp://emuaeiim.jnaiikato. msu&.ed archeoIogy/datlDg/seriate.ht mi y determine su potencial como arqueólogo.
Lecturas sugeridas BahNj P. ÁTíha&íhgy: A Very SHort Introduction. Nueva York:
Oxford University Press, 1996. Exactamente lo que cl título indica, una corta y Hen escrita introducción a la arqueo¬ logía. BinkjrDj L. /« of ihe Pü5í; Decoding the Archa&fhgkal Record, Nueva York: Tharües y Hudsorii 1953. Uno de lo$ nié$ influyentes arqueólogos contemporáneos que acos-
tu mbra a explicar en $us trabajos cómo se lleva a cabo la in¬ vestigación técnica, FagaNi B. /« thí Beginmnjí; An /níradifcíwn tt? Arc/uíe(?íc"�í 9.® ed. Nueva York: Longman, 1997- Una dásica introducción a la investigación arqueol�ica. Giebon* G, AtithrQpologk�ú ari}ia&?Íogy. Nueva York: Columbia University Press, 19{í4. Quizá la mejor y más sencÜla intro¬ ducción a la arqueología janidi escrita, Peregiune, P. JíesearíA- A Bri� Introduction. Upper Saddle River» NJ; Prentice HaH 5001. Una visión gene¬ ral sobre los objetivos� procediniientos y resultados de la investigación arqueológica, escrita para un publico no espe¬ cialiiado, PuREPí, B. H(íw Uf Dq ArchawUfgy íítí Wí�. GaineSville: University PresS of Plorida* 1996. Una introducción a las ex¬ cavaciones arqueológicas y a los métodos de campo. RenfreWí C. y Bahn, P. ArtDU>t CLASSl.S, ORDlNr.S, G 1' N E ]í. A , t-1' 1 r 1 i; s � Cí M C I U P J�CTR fí fR US. 771 Fr /:r K .VÍ7i S. IMiS L STNOÍi
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La evolución de la Evolución Los principios de la selección natural Herencia Fuentes de variabilidad El origen de las especies Selección natural de los rasgos de comportamiento
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Capítulo 3
Genética y evolución
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OS astrónomos estiman quí ei univírso existí desde hace 15�000 millones de años� es decir� más o menos> desde hace unos pocos miles de millones. Para hacer esta historia algo más comprensible�CailSagan diseñó un calendario que coníentra esta cifra en un solo año� usando como escala 24 días por cada UOOO millones de años y 1 segundo por cada 475 años, Sagan sitúa el «Big Bang» o comienzo del universo el 1 de eneroj el origen de la Vía Láctea el 1 de mayo» el 9 de septiembre el origen de nuestro sistema so¬ lar y el 25 de septiembre el comienzo de la vida en la Tierra, A las 10�0 horas del día 31 de diciembre aparece el primer homínido. Para Sagan� la comprensión de la historia nos proporciona una vía manejable para compa¬ rar el corto tiempo de la existen cia humana con el tiempo total de existencia del universo. Los homínidos» según Saganj habrían aparecido hace solamente 90 minutos de un período de doce meses. En este libro estudiaremos lo que ha ocurrido en las últimas pocas horas del año. Hace de 55 a 65 crones� apareció el primer primate» es decir� el ancestro común de todos los monos y humanos posteriores. Los primeros primates pueden haber vivido o no en los árboles» pero tenían dedos flexibles con los que podían agarrar las cosas. Más tarde, hace unos 35 croneSj aparecieron los primeros Anthropoidea. Hace 15 crones, es decir» unos 20 millones de años después de la aparición de yAttrfirppoídes apareció probable¬ mente el primer antepasado del hombre con aspecto de mono» y hace sólo 4 miñones de anos apareció el primer homínido. Los humanos con aspecto moderno aparecie¬ ron hace solamente unos 100-000 años. ¿Cómo expondremos la evolución biológica y cultural de los seres humanos? Los detalles de la aparición de los primates y la evolución de los humanos y sus culturas se estudiarán en los capítulos siguientes.En este capítulo ve¬ remos cómo se desarrolló la teoría moderna de la evolu¬ ción y cómo se produjo este cambio a lo largo del tiempo.
La evolución de la Evolación En Occidente» las ideas tradicionales sobre la natura¬ leza de las criaturas eran muy diferentes de la teoría de la evolución de Charles Danvin» quien sugirió que las dis¬ tintas especies se desarrollaron, unas a partir de otras» durante un largo espacio de tiempo. En el siglo v a. C,� los grandes filósofos Platón y Aristóteles creían que ani¬ males y plantas formaban una continuidad simple y gradual que iba desde los de mayor a los de menor perfecdón» estando» por supuesto» los humanos en lo más alto de la escala. Posteriormente» los filósofos griegos añadieron la idea de que el creador había concedido la
vida o «resplandor» primero a los humanos» pero que en cada creación subsiguiente» parte de esa esencia se per¬ día. Macrobio» resumiendo las ideas de Plotino» utilizó una imagen, que perduró durante siglos» la imagen de lo que se llamó «cadena de seres»: «La atenta observación mostrará una conexión de partes» que descendería desde el Dios Supremo hasta los últimos niveles» todos ellos re¬ lacionados entre sí y sin una división, Y ésta es la cadena de oro de Homero» que Dios» dice» dejó como herencia del cielo a la tierra», La creencia en la cadena de seres vino acompañada de la convicción de que una especie de plantas o de anima¬ les no se podría extinguir. De hecho, todas las cosas esta¬ ban relacionadas unas con otras en una cadena» y todas ellas eran necesarias. Sobre todo si la noción de extinción espantaba a la gente que creía en Dios» ya que era im¬ pensable que alguna de las creaciones de Dios pudiera desaparecer. La idea de la cadena de seres persistió alo largo de los años» sin ser discutida exhaustivamente por los filósofos, científicos» poetas ni teól(?gos hasta el siglo xvtii. Aque¬ llos debates prepararon el terreno para la teoría evolu¬ cionista. Resulta paradójico que» aunque la cadena de seres no dejara cabida para la evolución, la idea de que existía un orden de cosas en la naturaleza alentara los es¬ tudios de Historia Natural y a los de Anatomía compa¬ rada, que estimularon la aparición de la teoría de la evolución. La gente también estaba motivada por la búsqueda de criaturas hasta entonces desconocidas. Es¬ tando así las cosas, nadie se sorprendió cuando los na¬ turalistas sugirieron que los seres humanos estaban relacionados con los monos, concepto perfectamente compatible con la idea de la cadena de seres, ya que los monos estaban creados de forma más simple» con me¬ nos perfección. A principios del siglo xvm, un influyente científico» Carolus Linnaeus (1707-1778), clasificó plantas y animales en un systema «aíMrae, que situaba al hombre en el mismo orden (primates) que a los monos. Linnaeus no sugirió ninguna relación evolucionista entre el hombre y los mo¬ nos; sólo aceptó la creencia de que todas las especies fue¬ ron creadas por Dios y fijadas en la forma que tenían. Todas ellas tenían un ancestro común (rótíí Figura 3.1). Para otros» las especies no fueron definitivamente fija¬ das en su forma. Por ejemplo, de acuerdo con lean Baptiste Lamarck (1744-1B29), las características adquiridas podrían heredarse y p>osteriormente las especies podrían evolucionan Los individuos que a lo largo de su vida de¬ sarrollaban características que les ayudaban a sobrevivir podrían transmitir dichas características a sus hijos, lo que haría cambiar la estructura física de las especies. Por ejemplo, Lamarck explicaba el cuello largo de las jirafes
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Figura 3.1. La idea de q w áiimpanUs y huimnos descien¿ürt de un amcesíT-c ccmiin se sugUre por los pangcídos anatíírwaM, wrw es eJ ai$o de fcí afitetrüají; Eíquektv del antebrazo de un chimpancé (izquierda) y el de un hombre (deredia)�
como el resultado de que sucesivas generaciones de jirahs habrían tenido que estirar el cuello para alcanzar las hojas de los árboles. Los estirados músculos y huesos del cuello fiaeron transmitidos de alguna manera al resto de �rafes que no los tenían y todas ellas acabaron con esta es¬ tructura de cuello alargado. Pero como Lamarck y más tarde otros científicos no pudieron aportar pruebas que apoyaran la hipótesis de que las características adquiridas se pueden transmitir por la herencia» esta exposición de la evolución hoy día está generalmente desestimada, En el siglo xix algunos pensadores comenzaron a acep¬ tar la evolución, en tanto que otros la refutaban por com¬ pleto. Por ejemplOí Georges Cuvier (1769-1832) mantenía una firme oposición a la teoría evolucionista. La teoría del catastrofismo de Cuvier sostenía que una rápida serie de catástrofes explicaría las grandes alteraciones de la Tierra y el registro fósil. Estas catástrofes y trastornos» según éU
Capítulo 3 Genética y evolución 39
habrían dado lugar a situaciones como el diluvio de la his¬ toria de Noé y habrían exterminado todos los seres vivos que vivían en la Tierra que� a partir de entonces� tuvo que repoblarse con nuevas creaciones. Los cambios en el pensamiento geológico continua¬ ron a lo largo del siglo xix. A comienzos del mismo» el geólogo James Hutton (1726-17�7) se cuestionó la idea del catastrofismo� aunque su trabajo fue ignorado. Lo contrario ocurrió con Sir Charles Lyell (1797-1875) cu¬ yos volúmenes sobre Principios de Geología (1830-1833)» basados en los primeros trabajos de Hutton> recibieron una inmediata aceptación. Su concepto de «actualismo» sostiene que la Tierra está continuamente construyén¬ dose y reconstruyéndose por fuerzas naturales que ope¬ ran en un vasto espacio de tiempo, Lyell discutió también b formación de los estratos geológicos y la Paleontología y utilizó diferentes feunas fosilizadas para definir distin¬ tas épocas geológicas. Los trabajos de Lyell fueron ávida¬ mente leídos por Charles Darwin antes y durante su
f
■t r Charles Darwin (Fuente: Pintura de John Collier, 1883 afirmo decididamente mi preferencia por el mono».
Los principios de la selección natural Darwin no foe la primera persona que vio la creación de nuevas especies en términos evolucionistas, pero sí foe el primero que dio una explicación comprensible y bien
documentada -la selección natural- a lo que había ocurrido. La sdecdon natural es el proceso principal que incrementa la frecuencia de las características adaptativas a través del tiempo. La operación de la selección natural conlleva tres condiciones o principios. El primero es la variabilidad: cada especie está compuesta por una gran variedad de individuos» algunos de los cuales están mejor adaptados a su medio ambiente que los demás. La exis¬ tencia de la variedad es importante: sin ella, la selección natural no tiene nada sobre lo que actuar; sin variación, un tipo de características podría no ser fevorable respecto de otro. El segundo principio de la selección natural es la keredabílidad. Los hijos heredan los rasgos de sus padres» al menos en algún grado y en alguna forma. El tercer principio de la selección natural es el éxito reproductivo diferencial: cuanto mejor adaptados están los individuos, producen generalmente más descendencia a lo largo de generaciones que los peor adaptados. La fi�cuencia de los rasgos adaptativos se incrementa en las sucesivas generadones. Surge una nueva especie cuando los cambios de los rasgos o las barreras geográficas producen el aisla¬ miento reproductivo de la población. Cuando decimos que ciertos rasgos son adaptativos o ventajosos» queremos decir que tienen mayor éxito re¬ productivo en un ambiente concreto. La expresión «me¬ dio particular» es muy importante» ya que aunque las especies puedan llegar a adaptarse en el tiempo a un am¬ biente concreto» no podemos decir que una especie adaptada a su medio es «mejor» que otras especies adap¬ tadas a diferente medio. Por ejemplo» nos gustaría pensar de nosotros que somos «mejores» que otros animales» aunque los humanos están claramente menos adaptados que los peces para vivir bajo el s�a, que los murciélagos para cazar insectos voladores o que los mapaches para vi¬ vir en los basureros de los suburbios. Aunque la teoría de la selección natural sugiere que los rasgos con desventaja o peor adaptados generalmente disminuirán su frecuencia o» incluso» desaparecerán even¬ tual mente» no significa necesariamente que tales rasgos vayan a hacerlo; después de todo» las especies derivan de formas primitivas que poseen ciertas estructuras. Esto dgnifica que no todos los cambios son posibles y también que algunos caracteres están ligados a otros que pueden tener ventajas que superen a las desventajas. El atragan¬ tarse puede ser muy poco adaptativo para un animal» aunque todos los vertebrados pueden atragantarse ya que su sistema digestivo se cruza en la garganta con su sistema respiratorio. Este rasgo es una herencia genética proba¬ blemente de la época en la que el sistema respiratorio se desarroUó a partir de tejidos del sistema digestivo en al¬ gún organismo ancestral, y, aparentemente» el problema de atr�ntarse no se ha corregido de forma evolutiva.
Capítulo 3 Cabe esperar que sucedan cambios en las especies cuando se produzcan cambios en el medio ambiente o cuando una especie se desplaza a un hábitat diferente. Con el cambio medioambientalj algunos caracteres lle¬ gan a adaptarse y las formas de las especies que poseen los rasgos mejor adaptados llegarán a ser las más fe cu entes» en tanto que las que no se adaptan continúan con una existencia más difícil o imposible en el medio ambiente modificadopudiendollegara extinguirse. Si tenemos en cuenta la forma en la que la teoría de la selección natural explicaría por qué las jira:&s tienen el cuello largo» diriamos que» originalmente» el cuello de las jirafes tendría una longitud variable» lo mismo que ocurre con las características físicas de una población. Durante un período de escasez de alimentos» las jirafes que tenían el cuello más largo y que podían alcanzar con mayor fecilidad las hojas de los árboles» estuvieron más
Genética y evolución
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capacitadas para sobrevivir y de�ron más descendientes que las jirafes de cuello corto, A causa de la herencia» este rasgo del cuello largo persistió en sus descendientes» en tanto que las jirafes de cuello corto al estar peor adapta¬ das foeron disminuyendo en número hasta desaparecer por completo» siendo sustituidas por las de cuello largo. La población resultante de jirafes todavía tendría alguna variación en el tamaño del cuello» pero la ventaja del cue¬ llo largo acabaría superando a las otras jirafes. La selección natural no es aplicable a todas las varia¬ ciones en la frecuencia de los caracteres. En particular, no es aceptable en la frecuencia de los caracteres neutros» esto es» aquellos caracteres que no parece que otorguen nii�na ventaja o desventaja a su portador. Los cambios en la frecuencia de los caracteres neutros pueden ser re¬ sultado» en gran parte» del azar que afecta a los genes en las poblaciones aisladas» deriva genéticot o por endogamia de la población, Jlujo genético. Discutiremos estos procesos posteriormente, EIEMPLOS de EVOLUCtóK OBSERVABLES
El cuello largo de las jirafas está adaptado para comer las hojas de los árboles altos. Cuando la connida escasea� la longitud de su cuello les pernnite obtener más alimento y reproducirse con mayor éxito que las jirafas con el cuello más corto; en este medio, la selección na¬ tural favorecería a las jirafas con cuello más largo.
Como los procesos de evolución pueden dar lugar a gradaciones imperceptibles durante generaciones» es ge¬ neralmente difídl observarlos de forma directa. No obstante» como algunas formas de vida se reproducen rᬠpidamente» se han podido observar algunos ejemplos de selección natural en relativamente cortos espacios de tiempo y en entornos cambiantes, Por ejemplo» los científicos creen que han observado la selección natural en acción en polillas inglesas. En 1850» una polilla casi negra apareció moteada por pri¬ mera vez en Manchester, cosa que era verdaderamente inusual puesto que la mayoría de ellas están moteadas de gris. Un siglo más tarde» el 95 por ciento de las polillas de las áreas industriales de Inglaterra eran de color negro; solamente en las áreas rurales permanecían moteadas de gris. ¿Cómo se puede explicar esto? Parece que en las áreas rurales» las polillas de color gris son difícilmente distinguidas por las aves predadoras que las confonden con los liqúenes que crecen en las cortezas de los árbo¬ les. Pero en áreas industriales» los liqúenes mueren por la polución. Las polillas moteadas de gris» al principio bien adaptadas para confundirse con el medio ambiente» se hicieron perfectamente visibles y ficil presa de las aves en las cortezas de los árboles cuando éstos perdieron los liqúenes. En contraste» las polillas negras» que previa¬ mente estaban en desventaja al ser visibles en los troncos más daros y no estaban bienadaptadas para sobrevivir de¬ bido a su color, disminuyeron en número en tanto que au¬ mentaba el de las polillas moteadas, Pero posteriormente
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Capítulo 3
Genética y evolución
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ei color oscuro se convirtió en una ventaja y se transfor¬ maron en la variedad mejor adaptada� siendo las domi¬ nantes. ¿Cómo podemos estar seguros de que fiie la selección natural el mecanismo del cambio� La pnieba más con¬ sistente procede de una serie de experimentos efectuados por H. B. D. Kettlewell: dejó polillas marcadas delibera¬ damente tanto negras como grises en dos áreas de In¬ glaterra -una urbana y otra rural- y entonces colocó trampas luminosas para volver a capturarlas» La propor¬ ción de los dos tipos de polillas recuperadas no reveló la diferencia de supervivencia entre ambos tipos, Kettlwell encontró que las polillas recuperadas en el medio urbano industrial eran sobre todo las de color negroj en tanto que en el medio rural ocurría justo lo contrario� se recu¬ peraron sobre todo las polillas moteadas. La misma transformación -el cambio de color a otro más oscuroocurrió en otras setenta especies de polillas� igual que en un escarabajo y en un miriápodo. Pero esto no sólo ocu¬ rrió en Inglaterra� sino también en otros países en los que había áreas intensamente contaminadas� como la cuenca del Ruhr en Alemania y en el área de Pittsburg� en Esta¬ dos Unidos. Sobre todo en esta última� las medidas anti¬ contaminación tomadas desde hace cuarenta años habían sido la causa» aparentem ente» de que el número de polillas negras mermara otra vez. El tipo de selección natural demostrado en las polillas se denomina sdeoióii dire por aparecer cepas bacterianas resistentes a él, Cepas que se harán más numerosas que las precedentes ya que el antibiótico no las destruye. En Estados Unidos actualmente existen unas pocas bacterias que son resis¬ tentes a todos los antibióticos del mercado» hecho que preocupa mucho a los médicos dinicos. Uno de los me¬ dios de acabar con el problema sería dejar de utilizar an¬ tibióticos durante varios años; así la resistencia a éstos puede que no se desarrollara o que lo hiciera lentamente, La teoría de la selección natural responde a muchas preguntas» aunque también origina otra cuestión que tanto Darwin como otros eludieron. La aparición de un
Lo8 cambios ocurridos en la población de polillas en di¬ ferentes áreas de Inglaterra muestra la selección natural en acción. Antes de la industrialización, los troncos de los árboles eran de color claro y predominaban las polillas de color más claro (en las áreas rurales actualmente� con poca o ninguna contaminación industriad s e demuestra que la selección natural en áreas no contaminadas toda¬ vía favorece a las polillas de color claro). Pero con la con¬ taminación industrial y el oscurecimiento de las cortezas de los troncos� las polillas de color claro son más visibles a los depredadores. Entonces� las polillas de color oscuro han incrementado rápidamente su número en el nuevo medio ambiente industrial.
C a p í t u l o 3 Gené tica y e vo l u c i ó n 43
rasgo beneficioso puede fevorecer la supervivencia de un organismoj pero ¿qué ocurre cuando ese organismo re¬ produce esta nueva variación al aparearse con otros miembros que no la poseen? ¿No desaparecerá eventualmente el nuevo rasgo adaptativo si la nueva generación se aparea con individuos que carecen de él? Darwin sabia que los nuevos caracteres se transmitían por la herencia» pero no tenía ningún método para conocer el modo en que se heredan los caracteres»Fue GregorMendel�el pio¬ nero de los estudios científicos de genética� quien encon¬ tró tal método� aunque sus estudios no llegaron a ser ampliamente conocidos hasta 1900,
Herencia
cogió para su reproducción parejas de plantas que se di¬ ferenciaban sólo en un único carácter� de forma que» por ejemplo» cruzó las plantas más altas con las más bajas» las amarillas con las verdes» etc, Cuando el polen de una planta de guisantes amarillos se cruzaba con otra de guisantes verdes» Meinlel observó un curioso fenómeno: todos los guisantes de la primera generadón eran amarillos» lo que le llevó a pensar que el carác¬ ter verde había desaparecido� pero cuando las semillas de esta generación se cruzaron entre ellas» aparecieron guisan¬ tes amarillos y verdes en una proporción de tres amarillos por uno verde (véase Figura 3,2), Mendel pensó» razona¬ blemente» que el carácter verde no se había perdido ni alte¬ rado» lo que ocurría era que el carácter amarillo era simplemente dominante y el verde era recesivo. Mendel
Los EXPERIMENTOS DE GREGOR MENDEL
Mendel (1822-18&4)j un monje y botánico aficionado que vivió en lo que es ahora la República Checa» recogió varias especies de plantas de guisantes y realizó detalla¬ das observaciones sobre sus descendientes, A este fin, es-
Generación de bs padres
yyX
Primera generación
y yX y y
Segunda generación
yyyyyy
SAmarilkis 1 Verde
Figura 3.2.
Gregor Mendel.
Otando Mendel criBíS um phnta que tenía dcí para guisantes amariüos (YY) con otra planta que f-enífl ¿lafjrmispíjríj (yy)t «ídfl jfxíÍMHte em amariUo aunque portaba un gen para d aimrUlo y otro gen para d verde (Yy). guiantes fueron amarillos porque dgeti armnUo cta íJ Cru:�nJo esta primem generación aparecieron tres píantízs por cada planta verde
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Capítulo 3
Genética y evolución
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Temas de actualidad ¿Es la evolución lenta y sostenida o rápida y repentina? La teoría evolucionista de Darwin sugirió qu« las nuevas especies emergen gradualmente en el tiem¬ po. Por medio del proceso de se¬ lección natural� la frecuencia de los rasgos cambiaría lentamente jy eventualmente> aparecería una nieva especie. Aunque Darwin no explicó por qué se produce el pro¬ ceso (sólo trató los cambios produ¬ cidos gradualmente en el tiempo) ¿no podrían las poblaciones des¬ cendientes retener su capacidad de intercambio y continuar pertene¬ ciendo a las mismas especies? En la década de los años treinta y cuarenta» Theodosiu5 Dobzhanskyj lulian Huxleyj Ernst Mayr� George Simpson y otros científicos que re¬ cibieron el apelativo de la «nueva áíntesis>� sumaron a la teoría evolu¬ cionista los conocimientos sobre la herencia a partir de la Genética. La mutación y la recombinación de ge¬ nes eran las que producían la varia¬ ción genética. El motor de los cambios fue la adaptación al medio ambiente a través de la selección natural: la frecuencia genética de una población presumiblemente cambia de íbrma lenta sus rasgos adaptativos (por la existencia de ge¬ nes o mutaciones) mientras que los rasgos incrementados en prevalenda o mal adaptados disminuyen. Para que se produzca una especiación (desarrollo y divergencia de nuevas especies)» la síntesis mo¬ derna sostiene que se necesita que las subpoblaciones permanezcan aisladas por barreras geográficas o que las diferentes subpoblaciones
encuentren diferentes condiciones climáticas o se desplacen a un nievo nicho ecológico. Este aisla¬ miento ecológico produciría» eventualmente� el desarrollo de un aislamiento reproductivo y con ello la aparición de una nueva especie, Este punto de vista gradual de la evolución cambió en 1972 con NÜes Eldredge yStephen lay Gould quie¬ nes refirieron su modelo de evolu¬ ción al «equilibrio puntual» por el que asumen que la selección natural es el mecanismo primario del cam¬ bio evoludonario» aunque conside¬ ran la marcha de la evolución de forma completamente diferente� Bajo su punto de vista> las nuevas especies surgen rápidamente pero una vez que aparece una nueva es¬ pecie» sus caracteres tienden a cam¬ biar muy poco en largos períodos de tiempo. Así» en contraste con la «nueva síntesis», Eldredge y Gould ¡ñensan que no es común para las especies del planeta cambiar gra¬ dualmente a especies descendientes. Muchas especies nacen más o me¬ nos abruptamente, tienen períodos de tiempo durante los cuales apenas cambian y se extinguen. Como ejemplo, Eldredge y Gould citan la historia de los trilobites de Nortea¬ mérica y de los caracoles de tierra de las Bermudas; en ambos casos parece como si las diferentes espe¬ cies no hubieran cambiado durante un largo período de tiempo -millo¬ nes de anos para algunos casosaunque ciertas especies parecen ha¬ ber sido su�tuidas rápidamente por otras parecidas procedentes de
áreas próximas. En resumen, El¬ dredge y Gould creen que la suce¬ sión de especies, implica un cambio procedente del exterior más que un cambio gradual en el tiempo. La evolución puede producirse o no según un modelo puntual del equilibrio, pero la mayoría de los evolucionistas actuales coinciden en que el cambio podría ser relati¬ vamente rápido, Recientes investi¬ gaciones sugieren que algunos cambios climáticos relativamente rápidos en la historia de la Tierra son los causantes de extinciones masivas de especies y femilias de es¬ pecies, así como del incremento ex¬ ponencial en el número de nuevas femilias,Por ejemplo» existen consi¬ derables pruebas de que un meteo¬ rito colisionó con la Tierra a finales del período Cretácico, hace alrede¬ dor de 65 miñones de años. Luis Alvarez y sus colegas sostienen que gran cantidad del polvo originado por esta colisión contra la Tierra pasó a la atmósfera y la Tierra du¬ rante meses, o incluso más tiempo» quedó sumida en una gran oscuri¬ dad, Actualmente, otros investiga¬ dores creen que el impacto del meteorito pudo desencadenar un gran aumento de la actividad volcᬠnica, incluso en el lado opuesto del mundo» que redujo mucho la radia¬ ción solar sobre la superficie terres¬ tre, No sólo desaparecieron los dinosaurios hace alrededor de 65 crones» sino también muchos ani¬ males marinos y plantas. Después» la Tierra contempló la proliferación de gran cantidad de animales» tales
� Capítulo 3
Genética y evolución
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Raprasentación gráfica efe cambio avokitivo gradual y da cambio avotu�o puntuaS como peces» lagartos� aves y mamíkiQSy adraiás de árboles con flores, Como veremos en el capítulo sobre la evolución de los primates (perte¬ necientes a nuestro mismo orden biológico)� se cree que estw anima¬ les surgieron en esa época. Peter Grant» estudió reciente¬ mente a los pinzones de las Islas Galápagos> islas que parcialmente inspiraron a Darwin su teoría. Pero» a diferencia de éste� Grant tuvo la oportunidad de ver la selección na¬ tural en directo» un proceso sorpren¬ dentemente rápida £1 punto central de su proyecto fiae colocar bandas coloreadas individuales a cada pájaro> lo que permitía su identifica¬ ción a distancia. En la mitad del proyecto» en 1977� cuando la mitad de los pájaros ya tenía sus bandas» tuvo lugar una grave sequía y de las dos especies de pinzones de una de las islas» el pinzón cactus y el pinzón medio» solamente pudo sobrevivir el pinzón cactus» aunque no sus crías. Durante los siguientes 18 meses» el 85 por dentó de los pinzones des¬
aparecieron y aquellos que sobrevi¬ vieron tendían a tener los picos más largos y mayores que los que murie¬ ron, ¿Por qué eran los picos mayo¬ res? Ambas especies de pinzones se alimentan de semillasi pero las pe¬ queñas semillas producidas por las hierbas son escasas durante una se¬ quía; durante estos períodos las se¬ millas de las plantas más altas son más abundantes. De esta forma» pa¬ rece que la selección natural bajo condiciones de sequía fevorece la aparición de pinzones con mayores picos ya que éstos son más útiles para romper las vainas de las semi¬ llas más grandes. Si no fiiera por el hecho de que aparecen años húmedos» que fevorecen a los pinzones menores» entre los años de sequía» veríamos la rápida evolución de nuevas espedes de pin¬ zones» considerando que sólo 20 pe¬ ríodos de sequía serían sufidentes para que aparedera una nueva espe¬ de de pinzones- Los pinzones de Darwin (y de Grant) realmente rw? proporcionan un ejemplo del equili¬
brio puntual (no hay reemplazo de lo ocurrido en el exterior), pero sí sugieren que el cambio evoludonista podría ser mucho más rápido de lo que Darwin imaginaba. Continúan las discusiones sobre si la evoludón es lenta y sostenida o rápida y repentina» pero muchos es¬ tudiosos» induido Gould» creen que no es necesario enfrentar un mo¬ delo contra el otro� ya que ambos pueden ser correctos en casos dife¬ rentes, De cualquier manera» se ne¬ cesitan muchas más investigadones sobre las secuencias evolucionistas» que nos ayuden a evaluar los mode¬ los teóricos en concurrencia. Fuentes: lan 4(f�e{)ai]thropO'' ]{)gy and Evolutioüáry Theory», en Peter N, Peregrine, Caiol R. Ember y Melvin Embec, Physical Origimi Rmdit�sin Me�túd atidPmctice (UpperSáddle Riwii KJ: Prentice Hall, 20D3); Charla DeviIlers y Chdiae, Ewlutiútí- An EwhHng Theory (New Yorki Sprin�-Verlag, 1993); Petei" R- Grent, «Netur?! Selectíoii $nd win's Finche�� ScientificAmericatif October 1991, �2-37; JaoathñH Weine� Bífiit o/ tile i'ÍHCÍi (Nueva York: 1994).
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C a pítulo 3
G e n é t i c a y evolución
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observó los mismos resultados con otros caracteres� así los más altos dominaban a los más bajosj los de piel lisa do¬ minaban a los de piel rugosa» etc. En cada cruce la relación 3 a 1 aparecía siempre en la segunda generación, Pero la autofertilización produjo resultados diferentes de forma que los guisantes verdes siempre producían guisantes ver¬ des y las plantas cortas daban siempre plantas de ese tipo. Mendel concluyó tras analizar sus resultados que al¬ gunas plantas amarillas eran puras (homocigóticas) para este carácter� mientras que otras poseían un fector verde (eran plantas heterocigóticas). Esto es, aunque dos plan¬ tas puedan tener guisantes amarillos� una de ellas puede tener descendencia con guisantes verdes: en tal caso, la estructura genética� el genotipo� difiere de su apariencia observable o fenotipo. Los GENES: PORTADORES DE LOS CARACTERES HEREDÍTARIOS
Las unidades de la herencia de Mendel eran lo que ahora llamamos genes. £l observó que estas unidades apa¬ recían en pares por cada caráaer y que cada descendiente heredaba una de esas unidades del par de cada progenitor. Cada miembro de un par de genes, se llama alelo. Si los dos genes o alelos son iguales para un carácter determi¬ nado, el organismo es homocigótico para ese carácter; si los dos genes para ese carácter son diferentes, el organismo es heteioclgdtlco para dicho carácter. Una planta de gui¬ santes que tiene un par de genes para el color amarillo es homocigótica para é l Una planta amarilla con un gen do¬ minante para el color amarillo y otro gen recesivo para el colorverde, aunque sea fenotipicamente amarilla, tierie un genotipo heterodgótlco. Como demostró Mendel� el gen
verde recesivo puede aparecer en generaciones sucesivasPero Mendel no sabía nada de la composición de los genes o del proceso que los transmite de padres a hijos. Han sido necesarios muchos años de invest�ción científica para recuperar la información perdida. Los genes de los organismos superiores (sin incluir por tanto las bacterias, ni las plantas primitivas como las algas verdeazuladas) están localizados en los cuerpos lla¬ mados cromosomas que están en el núcleo de cada una de las células del organismo. Los cromosomas� lo mismo que los genes, generalmente aparecen formando pares. Cada alelo para un determinado carácter está siempre en la misma posición de su cromosoma correspondiente, Por ejemplo, los dos genes que determinan el color de los gMisantes de Mendel están opuestos cada uno respecto del otro en un par de cromosomas. MITOSIS V MEEOSIS. Todas las células del orga¬ nismo de cada planta o animal portan pares de cromo¬ somas en un ntímero propio para cada especie. Los seres humanos tienen 23 pares, con un total� por tanto, de 46 cromosomas» cada uno de los cuales tiene una gran can¬ tidad de genes. Cada nueva célula del cuerpo recibe este número de cromosomas durante la reproducción celular o mitosis, al igual que cada par de cromosomas se du¬ plica a sí mismo. CD-ROM Simulación 11�
Pero ¿qué ocurre cuando un espermatozoide y un óvulo se unen para originar un nuevo organismo? ¿Qué es lo que evita que el niño reciba el doble de cromoso¬ mas característicos de su especie: 23 pares del esperma¬ tozoide y 23 pares del óvulo? El proceso por el que se forman las células reproductivas» la meiosis, asegurará que esto no ocurra (vóaíe Hgura 33 ). Cada célula re¬ productiva contiene la mitad del número de cromoso¬ mas típico de cada especie. Solamente un miembro de cada par de cromosomas aparece en el óvulo o en el es¬ permatozoide por lo que, en la fertilización� el embrión humano recibe 23 cromosomas por reparado de su pa¬ dre y otros tantos de su madre, que suman un total de 23 pares. ADN. Como hemos dicho» los genes están localiza¬ dos en los cromosomas. Cada gen lleva» en su estructura química» un grupo de instrucciones codificadas. A partir de esta información codificada contenida en los genes, la célula desarrolla el resto de sus estructuras físicas y de su maquinaria química. Parece que en la mayoría de los
Capítulo 3 Genética y evolución
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ij fundamentalmentej es «leer» las bases químicas que lleva d mARN que son las que informan al ribosoma de los aminoácidos especí¬ ficos que hay que unir para formar una proteína (vécise figura 3,5), Por ejemplo» la secuencia del mARN» adenina» adenina» guanina (AAG)» le dice al ribosoma que coloque d aminoácido lisina en esa localización» mien¬ tras que la secuencia: adenina» adenina» citosina (AAC) le pide d aminoácido histidina. También existen comandos dd mARN que le dicen al ribosoma cuándo empezar y cuándo terminar la síntesis de una proteína. Por lo tanto» d código del ADN copiado en d ARN proporciona a los
Figura 3.5.
Transtación y &nt»sis proteica � mASN (opuií�o ADbJentilar $e por ittt rihosorna que capta íÍ íjmrntíííciífo ccn d ARN fíAJÍNJ a una cadem de aminoácidos (denominada cadena de polipéptidoí porque hs aminoácidos «ííín por enlaces pept0icos). La cadena que posee mtís de 100 aminoᬠcidos íí Jifífífíí proteína. ñbosomas toda la información necesaria para construir las proteínas que forman las estructuras dd organismo y dirige los procesos vitales,
CD-ROM Simulación \\*B
Fuentes de variabilidad La sdección natural únicamente se produce cuando varían los individuos de una población. Existen dos fuentes genéticas de variabilidad: recombinación gené¬ tica y mutación,
Recombinacíón
GENÉTÍCA
La distribución de caracteres de los padres a los hi¬ jos varía de una cría a otra. Los hermanos y hermanas no
Capítulo 3 Genética y evolución 49
son exaítamente seniejantesj ni siquiera los hijos se pare¬ cen en un 50 por ciento al padre y en el otro 50 por dentó a la madre. Esta variación se produce porque cuando se forma un espermatozoide o un óvuloj cada par de cromosomas se recibe al azar. Entonces cada cé¬ lula reproductiva lleva un surtido aleatorio de cromoso¬ mas con sus respectivos genes. En la fertilización� tanto el óvulo como el espermatozoide que se unen son diferen¬ tes del resto de óvulos de la madre y también del resto de espermatozoides del padre. De esta forma sólo se consi¬ gue un hijo diferente en cada mezcla de cromosomas de ambos progenitores. Una causa de este azar es la segre¬ gación aleatoria o sorteo� de los cromosomas durante la meiosis. Concebiblemente� un individuo podria conse¬ guir cualquiera de las posibles mezclas de los cromoso¬ mas paternos y maternos. Otra causa de la combinación al azar de los cromosomas es el m?íím�-ííverjO intercam¬ bio de secciones de los cromosomas entre un cromo¬ soma y otro (Figura 3.6), Par
on?mosGma$ homólogos
Durante la separadón la porte final de los
Punto de cruce O oross-over
en el puntü
de cruce
Así, tras la meiosis, óvulo y espermatozoide no reci¬ ben una mezda aleatoria de los cromosomas paternos y maternos en su integridad� porque a causa del fenómeno del también se reciben cromosomas en los que alguna sección puede haber sido reemplazada,
CD-ROM Simulación 11-6
Los caracteres presentes en cada organismo no son simplemente el resultado de combinaciones de genes re¬ cesivos y dominantes> tal como Mendel había sostenido. En los seres humanos la mayoría de los caracteres están influenciados por la actividad de muchos genes; así� el color de la pid> por ejemplo> es resultado de varias ca¬ racterísticas heredadas. Una pigmentación morena re¬ sulta de la presencia de un pigmento denominado melanirta y el grado de pigmentación de la piel depende enormemente de la cantidad de melanina presente y de cómo se distribuya debajo de la piel, Otro fector es la sangre que fluye por los vasos sanguíneos localizados en la hipodermis. Los seres humanos portan al menos cinco genes diferentes para la febricación de la melanina y mu¬ chos otros genes para los otros componentes del color de la piel. De hecho> casi todos los caracteres físicos de los seres humanos son el resultado de la acción concertada de muchos genes. Otros caracteres están ligados al sexo; asíi el cromosoma X, que con la presencia o la ausencia de un cromosoma Y determina el sexo, puede se reí por¬ tador del gen de la hemofilia o el gen del daltonismo, Ambas características dependen del sexo del organismo. La recombinación genética produce variedad, que es lo esencial para la acción de la selección natural. Sin em¬ bargo, en el fondo, la principal foente de variabilidad es la mutación, porque es la que reabastece el suministro de variabilidad, el cual está constantemente reduciéndose por la eliminación selectiva de las variantes menos ven¬ tajosas, La mutación produce también variedad en los oiganismos de reproducción asexual. Mutación
Figura 3.6-
Far de cromosomas homólogos Ibmado d? Bo3�Alniqui$tí BiobgkulAtiÚiTopolpgy,
Copyright © 1997. Reproducido con permiso de Pearson Educaticn, Inc., Upper Saddle Kíver, NJ 0745ít.cev
Una mutación es un cambio en la secuencia del ADN, cambio que produce un gen alterado. La mayoría de las mutaciones se cree que son debidas a la desigual proporción de bases químicas que componen el ADN. Lo mismo que un mecanógrafo puede cometer errores al copiar un manuscrito, de igual forma el ADN al repli¬ carse ocasiona cambios en su código, resultando de
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Capítulo 3
Genética y evolución
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Temas de actualidad ¿DeBemos temer a la Ingeniería Genética? Se sabe tanto de genética mole¬ cular que actualmente es posible al¬ terar genes individuales e incUiso organismos en su totalidad de for¬ mas muy precisas. Esta revolución se produjo rápidamente después de que se identificara por primera vez la estructura del ADN en 1953 por lames Watson y Fiancis Crick. Los caracteres genéticos particulares podrían estar ligados a secuencias particulares de mensajes del ADN. En los años setenta el desarrollo de técnicas recombinantes del ADN permitió a los investigadores en¬ samblar trozos de ADN de un orga¬ nismo en el ADN de otro individuo en una ubicación precisa. Los investigadores aprendieron a hacer copias poniendo estos filamentos «recombinados» de ADN en or¬ ganismos huéspedes tales como bacterias> que se reproducen por clonación. Las aplicaciones de estas técnicas son potencialmente enor¬ mes y las compañías de biotec¬ nología ya están trabajando en ingeniería genética para elaborar medicinas (tales como insulina y una vacuna contra la hepatitis B) y para cultivar plantas y productos animales más adecuados (por ejem¬
plo. una especie de tomates que se pueda embarcar cuando está ma¬ duro sin que se estropee). También están trabajando en la forma de in¬ troducir células alteradas en el or¬ ganismo para reparar defectos genéticos. Dado que actualmente se conocen alrededor de 4,000 altera¬ ciones humanas causadas por de¬ fectos en unos cuantos genes> teóricamente» estas enfermedades podrán ser resueltas algún día por la ingeniería genética. Cuanto más sepamos de la precisa localización de los genes y de las secuencias del ADN que llevan información particular� mucha más ingeniería gené¬ tica podremos hacer. � hay quien imagina que la terapia genética cu¬ rará eventuahnente varios tipos de cáncer y las enfermedades car¬ díacas. ¿Puede haber riesgos asociados a tales intervenciones? Algunos te¬ men que la ingeniería de recombi¬ nación del ADN pueda tener consecuencias desastrosas. ¿Podría elaborarse una peligrosa cepa de bacterias o virus en el laboratorio? ¿Podría producirse algún tipo de Frankenstein? ¿Podría algún go¬ bierno felto de escrúpulos provocar
semejante error� una mutación. Unas mutaciones tienen consecuencias más drásticas que otras. Así suponiendo el error en una base de la cadena de ADNj el efecto depende de qué parte del ADN controla» por lo que puede ser mírnmo si el resultado afecta poco al organismo, Pero, por d contrario» si el cambio se produce en un lugar en el que el ADN regula la producción de muchas proteínas» el efecto sobre el organismo puede ser muy serio.
cierto tipo de alteraciones? ¿Tene¬ mos razones para temer algo así? Es importante recordar que aun¬ que la alteración del ADN por téc¬ nicas recombinantes es nueva» la ingeniería genética no lo es. Los se¬ res humanos hemos alterado ge¬ néticamente plantas y animales durante miles de anos» si bien� ge¬ neralmente» no lo hemos llamado ingeniería genética sino domes¬ ticación o cría. Con seguridad» el mecanismo de ingeniería genética tradicional (cría selectiva) es dife¬ rente del ajuste de ADNj aunque el efecto es también la alteración genética. Para conseguir mejores animales domésticos» los seres hu¬ manos somos capaces de producir razas de perros» caballos» ganado vacuno» variedades de cereales y de judías y de todos los demás ani¬ males y plantas de los que pueda depender nuestra alimentación. To¬ dos ellos son a menudo muy dife¬ rentes de sus progenitores salvajes. Los humanos también hemos do¬ mesticado microorganismos, Un ejemplo, que se remonta a hace miles de años» es la levadura usada para febricar la cerveza y para hacer pani otro ejemplo más reciente es
Es muy difícil estimar las proporciones de las muta¬ ciones que pueden ser perjudiciales» neutras o benefi¬ ciosas» y no hay duda de que algunas de ellas pueden tener consecuencias letales. Valoramos los relativos méritos o desventajas de un gen mutante solamente en términos del medio físico» cultural o genético de ese gen. Por ejemplo» la galactosemia está causada por un gpn recesivo mutante y generalmente causa retraso y
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un particular moho utilizado para elaborar la penioliiia» También las vacunas vivas son virus deliberada¬ mente atenuados� como por ejemplo> la vacuna contra la polio> que tan ampliamente se ha usado para prevenir la enfermedad, Asi es que ¿qué es lo que nos dice nuestro pasado sobre los riesgos de la ingeniería genética? En general� el pasado sugiere que ningún daño se¬ rio es atribuible a la domesticación. De hecho» los animales domésticos son los que están en peores condi¬ ciones cuando son reinsertados entre sus parientes salvajes. Gene¬ ralmente necesitan ayuda del hom¬ bre para comen refugiarse de los elementos y cuidar de sus propias crías, ¿Por qué tendría que ser dife¬ rente la ingeniería genética si tiene, básicamente, los mismos usos que la cría selectiva?; los seres humanos buscan organismos, grandes, pe¬ queños o microscópicos para usar¬ los en su provecho. Las pruebas existentes indican que los organis¬ mos alterados genéticamente satis&cen las necesidades humanas, sin que ello suponga una amenaza, puesto que la supervivencia de los mismos seria improbable sin la asistencia humana. Ni que decir tiene que no hay que obviar la nece¬ sidad de evaluar los riesgos. Y tam¬ bién es cierto que aunque el ADN
puede pasar en la naturaleza de un organismo a otro, tal alteración ge¬ nética natural no es peligrosa para el ser humano, la gente debería asustarse más porque un microbio peligroso pueda salir accidentalmente de un laboratorio y multiplicarse de for¬ ma incontrolable, Pero como ya hemos dicho, cada microbio o nueva íbrma genética es incapaz de ser tan peligrosa como sus parien¬ tes salvajes. Si una bacteria se li¬ bera, por error, no está entrando en un ambiente artificial vacío como una placa petri estéril; su en¬ torno natural está tan lleno de bacterias (la mayoría de ellas bene¬ ficiosas para los humanos), como los organismos a los que ataca la propia bacteria. En resumen� no es fecil producir microbios pató¬ genos. Dicha improbabilidad de hacer organismos destructivos no signi¬ fica que los seres humanos no deban defenderse de ella,y así nues¬ tras agencias y el gobierno certi¬ fican los nuevos productos con directrices e instrucciones para pro¬ cedimientos de prueba y prospectos con advertencias. Un producto recombinante de ADN nuevo ha de aprobarse antes de ser usado. ¿Pueden las personas usar la tec¬ nología para crear superhombres o
ceguera, pero se puede prevenir con restricciones en la dieta si se comienza a edad temprana. De esta forma la intervención de la cultura humana contrarresta al gen mutante y permite al individuo llevar una vida normal. Como vemos, algunos fectores culturales pueden mo¬ dificar los efectos de la selección natural ayudando a perpetuar un gen mutante nocivo. Las personas con galactosemia que están imposibilitadas para vivir con
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bacterias para la guerra? Posible¬ mente sí, pero las técnicas recombinantes de ADN no son el problema, Después de todo, la felta de esta tecnología no ha evitado los genocidios> limpiezas raciales� esteriliza¬ ción Y violaciones. La ausencia de tecnología recombinante no ha evi¬ tado tampoco el uso de las armas biolí�cas (tales como las mantas infectadas de viruela que se entre¬ garon a los nativos americanos en el siglo xix) o la �bricación y uso de los gases venenosos en la Primera Guerra Mundial, que se han se¬ guido elaborando. No es la tecnolo¬ gía ni la felta de ella lo que expÜca el mal: son otras cosas. Si deseamos reducir el riesgo de la violencia hu¬ mana, debemos comprender por qué se produce. Más investigación puede ayudarnos a sentirnos más seguros, AUán M, Cáfflpbell, �(Microbes; Th� Laboi�tory th? B�rmrd D. Davi$, «The Issues; pTO($p�$ Peí' y Comtnent$; The Sáentific Chapters��, y Henry T, MiUer, HRegulatiouv, todos en Bemard D. Devis, ed„ The Genetic Prospícts flHíí AíWíí JVíWpííqHj fBdtimoiei Johas HopkLíis Umveisity Press, 1991), pp, 23-44, 1-�, 239-2�5, 19�-211; �ul Bei� y Mandile Dealing 'wiíA Genes: Latiguage úJHeredity (Mü] Valley, CA: Univensity Science Booksr 1992), pp, 221-44,
normalidad pueden reproducir y transmitir uno de los genes recesivos a sus hijos. Sin la intervención cultural� la selección natural prevendría tal reproduc¬ ción, Generalmente la selección natural actúa fijando solamente aquellas mutaciones que ayudan a sobre¬ vivir, Aunque la mayoría de las mutaciones pueden no ser adaptativas, aquéllas, que sí lo son» se multipÜcarán en
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una población� relativaniente deprima» por la sdección natural. Como ha engerido Theodosius Dobzhansky: las mutaciones consistentemente útiles son como buscar en un pajar dañino. Una �uja es niuy difícil de en¬ contrar en un pajar� induSo, aunque uno pu«la estar se¬ guro de que está allí. Pero si la aguja es valiosa, el esfuerzo de buscarla se facilita pegándole fuego al pajar y buscar luego la aguja entre las ceniias. El papel del fuego en esta parábola es el que juega la selección natural en la evolución biol�ca. La polilla negra que se estudió en Mandiester en IS�O probablemente fue resultado de una mutación. Si los troncos de los árboles hubieran mantenido su color daro, las polillas o sus crias probablemente hubieran muertOj pero con el crecimiento de la industrialización los troncos de los árboles se oscurecieron y un carácter que hasta entonces estaba mal adaptado al medio� se convirtió en bien adaptado, La recombinadón y mutación genéticas son el origen de nuevas variadonesj pero los biólogos evolucionistas han encontrado otros dos procesos que son importantes para distribuiraquellas variaciones a través de las pobla¬ ciones: la deriva genética y el flujo genético,
Deriva
génetíca
H término deriva genética se refiere a varios proce¬ sos que se producen al azar y que afectan a las frecuen¬ cias genéticas en poblaciones pequeñas y relativamente aisladas. La deriva genética también es conocida como a partir del genetista Sewall Wright» que Efecto fue el primero que prestó atención al fenómeno. A tra¬ vés del tiempo y en una pequeña población» la deriva genética puede producirse en un gen neutro o casi neutro hadéndose más o menos frecuente sólo por azan Una variedad de deriva genética� llamada efecto de jiindctdoresy se produce cuando un pequeño grupo� deri¬ vado recientemente de una pobladón mayor» migra a un lugar relativamente aislado. Entonces� si un gen particu¬ lar está ausente» también porcasuaÜdad» en el grupo que emigra» los descendientes asimismo carecerán de este gen» asumiendo que el grupo ha permanecido aislado, Similarmente» si todos los miembros del grupo migratorio> sólo por azar» portan un particular gen» sus descen¬ dientes también estarán predispuestos a compartir dicho gen. El aislamiento se puede produdr por razones físicas» como cuando un grupo se desplaza a un lugar previamente deshabitado y ya no regresa. La pobladón que cruzó el estrecho de Bering (puente intercontinen¬
tal entre Asia y Norteamérica), quizá no pudiera regre¬ sar cuando subió el nivel del mar. Esto puede explicar por qué los nativos americanos tienen mayor propordón de individuos con grupo sanguíneo O que otras po¬ blaciones (los primeros emigrantes pudieron haber tenido» por casuaÜdad» un predominio de individuos con grupo sar�íneo 0), El aislamiento también puede deberse a razones so¬ ciales, Una secta del grupo rehgioso Dunkers emigró desde Alemania a Estados Unidos poco después de 1700, El hecho de que el 50 por ciento de las femilias origina¬ les sólo se mezclara con los de su grupo� es probable¬ mente la explicación de que algunos de sus genes difieran de los que se encuentran tanto entre los alema¬ nes como entre la población general de Estados Unidos,
Flu[o
GENÉT[C0
El flujo genético es el proceso mediante el cual los ge¬ nes pasan de una generación a otra a través del empare¬ jamiento y la reproducción, Al contrario que los demás procesos de selección natural y de deriva genética� que generalmente incrementan las diferencias entre pobla¬ ciones en los diferentes medios, el flujo genético tiende a trabajar en direcdón contraria - en caso de que lo fueran, el embrión no seria viable. En caso de que nacieran descendientes, pronto morirían o serian infértiles, Pero ¿cómo podría aparearse una especie con otra? Y ¿cuál es la explicación para esta diferenciación? ¿Cómo puede hacer un grupo de organismosj que es incompatible con otro grupo que posee el mismo ancestro común, para crear una especie total¬ mente diferente? La especiación o el desarrollo de nuevas especies puede ocurrir en unos subgrupos de una especie cuando se encuentran en un medio ambiente radicalmente dife¬ rente; de este modo, las dos poblaciones pueden experi¬ mentar cambios genéticos suficientes como para impedir tener descendencia. Hay numerosos feaores que evitan el intercambio de los genes: así� dos especies que vivan en la misma área pueden aparearse en diferentes épocas del año, lo mismo que su conducta -el cortejo ritual- du¬ rante el apareamiento puede ser distinta. Las diferencias en las estructuras corporales de los parientes próximos pueden suponer una barrera para el apareamiento, aun¬ que quizá son más habituales las barreras geográficas, Una diferenciación de especies puede ocurrir ya que el proceso evolutivo no es reversible; de este modo las relevas especies no pueden aparearse con otras espedes relacionadas con la población de sus antecesores. Por ejemplo, los humanos y los gorilas tienen los mismos ancestros lejanos� pero sus vías evolutivas han sido di¬ vergentes de forma irreversible.
atención. Las aproximaciones a la misma, denomina¬ das Sociobiología y Ecología dd comportamlentoi consisten en aplicarlos principios evolutivos al compor¬ tamiento de los animales. La Ecología del comporta¬ miento trata de la forma en que todos los tipos de conducta se relacionan con el medio ambiente, en tanto que la Sociobiología trata particularmente sobre la orga¬ nización y el comportamiento social- Está asumido que las conductas típicas de una especie son adaptativas y han evolucionado por selección natural. Por ejemplo, ¿qué es lo que hace que especies relacionadas tengan di¬ ferente comportamiento social aunque ambas deriven de una especie ancestral común? Comparación del león con otros felinos. Aunque los miembros de la &milia de los felinos son normalmente criaturas solitarias, los leones viven en grupos sociales llamados manadas. ¿Por qué? George SchaUer ha suge¬ rido que el grupo social del león puede haber evolucio¬ nado primariamente, porque un grupo cazador tiene más éxito para cobrar grandes mamíferos en terrenos abiertos. También ha observado que, no sólo a más leo¬ nes más probabilidades de éxito en la caza que si se trata de leones solitarios, sino que varios leones tienen más probabilidades de cazar presas grandes y peligrosas como las jira�. Además, también las crías tienen más posibilidades de sobrevivir cuando viven en grupos de adultos que cuando se crían solas con su madre. Por tanto, el comportamiento social del león puede haber evolucionado primariamente porque le proporciona ventajas selectivas en el entorno abierto en que vive, Es muy importante recordar que la selección natural opera sobre características concretas ojhnotípo de un in¬ dividuo, En el ejemplo de las polillas, su color es parte del fenotipo y está sujeto a la selección natural. La
Selección natural de los rasgos de comportamiento Hasta ahora hemos tratado la forma en que la sefecdón natural puede actuar para cambiar los caracteres fí¬ sicos de una población, tales como el color de las polillas o la longitud del cuello de las jirafes, pero la selección natural también puede operar sobre las características de la conducta de una población. A pesar de que esta idea no es nueva� es cierto que no ha recibido mucha
La manada de leones que vive en cannpo abierto tiene más posibilidades de éxito para cazar grandes animales que los leones solitarios. Esi� conducta social puede ha¬ ber evolucionado porque les proporciona ventajas se¬ lectivas en este entorno.
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x"
El puma vivQ en un medio boscoso y caza individual¬ mente. Aquí podemos observar a un ejemplar que ha ca¬ zado un ciervo al oe$te de Montana. conducta ís también una característica expresa. Si se caza en grupo -una característica de comportamientose obtiene más alimento� entonces los individuos cazan en grupo para que les vaya mejor, Pero también hemos de recordar que la selección natural requiere que los ca¬ racteres sean hereditarios. ¿Se puede aplicar el concepto de heredabilidad a la conducta aprendida» y no a la con¬ ducta transmitida genéticamente? Y» lo que es más controvertido» si el concepto de heredabilidad puede incluir el aprendizaje� ¿puede asimismo incluir el aprendizaje cultural? las antiguas teorías de la Sociobiología y la Ecología del comportamiento parecen hacer hincapié en los com¬ ponentes genéticos de la conducta. Por ejemplo» Edward Q Wilson� en su libro Sociobwlogía'i la definió como «el estudio sistemático de las causas biológicas de la con¬ ducta», Pero Bobbi Low añade que aunque el término biología se pueda haber interpretado como «genéticos» la mayoría de los biólogos comprenden que las caracterís¬ ticas expresas u observables son el resultado de los genes y del medio ambiente» así como de b historia vital» ac¬ tuando todas conjuntamente. La conducta es producto de estos tres elementos y> si decimos que alguna con¬ ducta es heredada» queremos decir que el comporta¬ miento de un niño está más orientado a simular la conducta de sus padres que la de otros. El aprendizaje a partir délos padres podría ser una parte importante del porqué los hijos son como los padres. Si el hijo se parece más a los padres que a los demás» entonces el parecido es hereditario» aunque sea totalmente aprendido de los pa¬ dres, La aproximación sociobiológica ha levantado consi¬ derables controversias en Antropología» probablemente por su aparente én;�is en los genes» como determinan¬ tes de la conducta humanaj más que en la experiencia y en el aprendizaje. Los antropólogos aducen que las
costumbres de una sociedad pueden ser más o menos adaptativas porque la conducta cultural también tiene consecuencias reproductivas, No es sólo una conducta individual sino que puede tener consecuencias repro¬ ductivas, Entonces» ¿la selección natural opera también en la evolución de la cultura? La mayoría de los biólogos creen que no y dicen que existen diferencias sustanciales entre la evolución biológica y la cultural, ¿Cómo pode¬ mos comparar la evolución biológica con la cultural? Para contestara esta cuestión debemos recordar que la operación de la selección natural requiere tres condicio¬ nes» como ya sabemosr variación� herencia o mecanis¬ mos que dupliquen los caracteres en los descendientes» y reproducción diferencial debida a las diferencias heredi¬ tarias, ¿Se pueden apHcar estos tres requisitos al com¬ portamiento cultural? En la evolución biológica» la variabilidad procede de la recombinación genética y de la mutación. En la evo¬ lución cultural� procede de la combinación de las con¬ ductas aprendidas y de la invención. Las culturas no están cerradas ni reproductivamente aisladas» como lo están las especies. Unas especies no pueden pedir pres¬ tados los caracteres genéticos de otras especies» aunque unas culturas sí pueden apropiarse de nuevas cosas y conductas procedentes de otras culturas. Así» la cos¬ tumbre de cultivar maíz, que se ha extendido desde el Nuevo Mundo hacia otras áreas» es un ejemplo de este fenómeno. Como para los requerimientos de la herenda» aunque los caracteres aprendidos obviamente no pasan a la descencencia por medios puramente genéti¬ cos» los padres que presentan caracteres adaptativos de la conducta están más inclinados a «reproducir» esos caracteres en sus hijos» que los pueden aprender de ellos por imitación o por la enseñanza paterna. Los niños y los adultos también pueden copiar caracteres adaptati¬ vos que vean en otras gentes» fuera de sus femilias, Einalmente» para las ex:igencias de la reproducción diferencial» no es lo más importante si el carácter en cuestión es genético» aprendido» o ambas cosas a la vez, Como dijo Henry Nissen» «la incompetencia de la con¬ ducta lleva a la extinción con tanta seguridad como lo puedan hacer las desproporciones morfológicas o la de¬ ficiencia de un órgano vital. La conducta está sometida ala selección tanto como la resistencia corporal a la en¬ fermedad», Muchos teóricos están de acuerdo con la idea de apli¬ car la teoría de la selección natural a la evolución cultu¬ ral, pero otros prefieren usar diferente terminología cuando tratan de caracteres que no dependen de la transmisión puramente genética de una generación a la águiente» por ejemplo» Robert Boyd y Peter Richerson dicen que la conducta humana se relaciona con la
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«herencia dualw. Ellos distinguen la transmisión cultuial> por aprendizaje e imitación� de la transmisión gené¬ tica» pero destacan la importancia de comprender ambaSj así como la interacción entre ellas. WUliam Durham trata también por separado la transmisión culturalj usando el término (Ameme» (anᬠlogo al término�ífw) parala unidad de transmisión cul¬ tural. Dirige su atención a la interacción entre genes y culturaj llamando a esa interacción «coevolución» y ofrece ejemplos de cómo la evolución genética y la evolución cultural pueden llegar a cambiar una a otra> cómo una puede mejorar a otra e induso cómo una puede oponerse a otra, AsU en los seres human os> la evolución biológica y la cultural puede que no sean dos procesos separados, Como comentaremos» algunas de las características bio¬ lógicas más importantes de los seres humanos -tales como sus relativamente grandes cerebros- pueden ha¬ ber sido favorecidas por la evolución natural porque sus antepasados fabricaron herramientas» una característica cultural. Contrariamente» la característica cultural de la educación formal e informal puede haber sido favore¬ cida por la selección natural porque los humanos tienen un largo período de inmadurez» una característica bio¬ lógica. Mientras que la especie humana siga existiendo y el medio ambiente social y cultural continúe cambiando� existen razones para pensar que continuará producién¬ dose la selección natural de las características biológi¬ cas y culturales. Sin embargo� como los seres humanos aprenden cada vez más de la estruaura genética» serán capaces de curar las enfermedades causadas genética¬ mente e� incluso» de alterar los procesos evolutivos. Hoy día» los investigadores de esta especialidad son ca¬ paces de diagnosticar los defectos genéticos en los fetos en desarrollo» y los padres pueden y deben decidir si continuar o acabar con el embarazo. En breve» los in¬ genieros genéticos probablemente lograrán que se pue¬ dan diagnosticar los defectos» e induso» tratar de «perfeccionarí> d código genético de un feto en desa¬ rrollo. Si el hombre debe o no y hasta qué punto alte¬ rar los genes será» sin duda» un tema de debate continuo» pero todas las decisiones sobre este tema afectarán al curso de la evolución humana tanto bioló�ca comoculturalmente.
Sumario 1, Si estudiamos la historia del universo en término de 12 meses» la historia de los primeros homínidos sería tan sólo de alrededor de una hora y media. El universo
tiene alrededor de 15.000 millones de años y los seres hu¬ manos actuales alrededor de 100,000 anos. 2. Las ideas sobre la evolución tardaron bastante tiempo en aceptarse debido a que estaban en contradic¬ ción con la visión bíblica; se consideraba que las especies habían sido concebidas con una forma definitiva por el creador. Pero en el siglo xviii y comienzos del xix» d au¬ mento de las evidencias sugirió que la evolución era una teoría viable. En geología» d concepto de actualismo su¬ girió que la Tierra estaba constantemente sujeta a cons¬ trucciones y reconstrucciones por las fuerzas naturales» que actuaban a lo largo de grandes espacios de tiempo. Durante este período» un número de pensadores em¬ pezó a tratar la evolución y la forma en que pudo pro¬ ducirse. 3. Challes Darwin y Alfred Wallace propusieron el mecanismo de la sdección natural para justificar la evo¬ lución de las especies. Los principios básicos de la teoría de la sdección natural son: 1) cada especie está com¬ puesta de una gran variedad de individuos» algunos de los cuales están mejor adaptados a su medio ambiente que otros; 2) los descendientes heredan los caracteres de sus padres» al menos en algún grado y en alguna forma; y 3) cuanto mejor adaptado está un individuo» general¬ mente» tiene mayor descendencia por generación que los peor adaptados; la firoiencia de los caracteres adaptativos se incrementa en generaciones sucesivas. De esta manera la sdección natural acaba incrementando la pro¬ porción de los individuos que tienen caracteres favorabks, 4, Tanto los trabajos de Mendel» como los de poste¬ riores investigadores en genética y nuestra comprensión de la estructura y función del ADN y mAKN» nos ayudan a comprender d mecanismo biológico por d que los ca¬ racteres pueden transmitirse de una generación a la si¬ guiente. 5. La selección natural depende de la variación den¬ tro de una población. Las cuatro fuentes de la variabili¬ dad biológica son: recombinación genética» mutación» deriva genética y flujo genético. 6. La espedadón» o desarrollo de especies nuevas» se puede producir si un subgrupo permanece separado de otro subgrupo. Para adaptarse a los medios diferentes» estas subpoblaciones pueden experimentar bastantes cambios genéticos o dejar de tener descendencia entre ellas» aunque se reestablezca el contacto. Se cree que una vez que se produce la diferenciación entre las espedes» se da un fenómeno irreversible. 7. La selecdón natural también puede operar sobre d comportamiento característico de la pobladón.Los es¬ tudios denominados Sodobiología y Ecología del com¬ portamiento tratan de la aplicación de los prindpios
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evolucionistas ala conducta de los animales.Existen mudias discusiones sobre d grado en que la teoría de la se¬ lección natural se puede aplicar a la conducta humana� particularmente a la conducta cultural� existiendo cada vez más acuerdo en el hecho de que la evolución cultural y la biológica en los seres humanos puedan influirse mu¬ tuamente,
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Glosario de términos
ADN Alelo ARN mensajero (mAKN) Clinal Cromosoma Crossing-Over Deriva genética Dominante Ecología del comportamiento Especiación Especies Fenotipo Flujo genético Gen Genotipo Heterocigótico Homocigótico Meiosis Mitosis Mutación Recesivo Ribosoma Segregación Selección direccional Selección equilibrada Selección natural Selección normaiizadora Sociobiología
íf» 1.
3.
Cuestiones críticas ¿Piensa usted que la teoría de la selección natural es compatible con las creencias religiosas� Ex¬ ponga su razonamiento, ¿Cómo pueden afectar al futuro de la evolución los descubrimientos de la terapia génica y de la ingeniería genética? ¿Por qué cree usted que los seres humanos han permanecido como especie?
Ejercicios de Internet L Explore los Institutos de la Evolución y de las Ciencias Naturales (ENSI), en la página web: http;//www.iiidiana.edu7-eiisiweb y siga algunas de las lecciones sobre la evolución. 2, Visite la página de EvcjÍwííííít (Internatioml Jourml of Orgartíc Evolutiort) en hnp://lwlJa.asu.ed.u7 evolution. Busque en la tabla de contenidos y recoja la tñbliografla de al menos Í5 artículos relacionados con la evolución humana. 3» Visite las salas de exhibición sobre la evolución en el Museo de Paleontología en http:/ywww,ucmp. berkeley.ediiyhistory/evoliitioii.htinl, y escriba una re¬ seña de las exhibiciones presentadas allí.
m
Lecturas sugeridas
Bcmn, R. y KKJfERSON� P. X CUíiire tfií Bíiijiiíwííflr7 JVweíí, Chicago: University of Chicago Press, 19B5, Los autores desa¬ rrollan moddos matemáticos para analizar cómo la biología y la cultura Interactúan bajo la influencia de procesos evolu¬ tivos,
AíjaptatkfTi atid EtMTOiijneTit- Princeton� NJ: Princeton Univeisity Prcss, 1990. Después de definir conceptos básicos sobre la adaptaciM y la teoría de la Selección natural, el autor baoe hincapié en los procesos de adapta¬ ción, cuyos resultados no pueden ser entendidos sin el anᬠlisis del medio ambiente-
Brandon� R. N.
Chiras» D. D. Human £kjí(jj¡7;ííecjlí/ii and ífe £n-
rírdíímení; 2.� ed. St. Paulf MN: WeSt, 1995, Un teito intro¬ ductorio a la biología humana. Véanse los capítulos 3-5 para una exposición detallada sobre los cromosomas» ADN, ARN, principios hereditarios e ir��niería genética. DevilleeSj C. y Chaune, J, £vc?Íuívn: An &t>lvinjr
Nueva York: Springer-Verlagj 1993. Dirigido al público en gmeral, íste libro responde a las s%uientes cuestiones: ¿cuál es la posición de los seres humanos en el desarrollo general de la vida? |Qué es la evolución? ¿Cómo puedín e�splicarse los datos conocidos? Los apéndices ofrecen una detallada información adicional. Dcbzha>eky, T. Aüiinitjnii �k-pIhítch of Hitnmn
Species, New Haven, CT: l�e University Press� 1962. Una obra
dásica que demuestra cómo los mecanismos de evolución, fundamentalmoite la selección natuiali están todavía activos.
Culturet atidHuman Diversity. Stanfbrdt CA: Stanford University Press» 1991. Un aná¬
Durham, W. H. Com»í«íwn: GíWíí,
lisis de la evolución de la cultura que se basa en la investigación de la interacción de genes y cultura en las poUaciones humanas.
� Capítulo 3 Genética y evolución Eeeley» L. Dtínvííí'í Ceníiiry;
Aíe« W/ííi Díí-
covered h, NFu�va York: Anchor BcM>ks, 195S. Un texto clᬠsico és la historia del pensamiento evolutivo y de la moderna teoría de la evoluci�. Mayr, E. The Gríwí:�ofBioJogical Thoughu Drversityt Evolutiotit
and Ifíheritatu:�� Canibridge, MA: Belknap Press of Harvard University PrcSs, 19S2. Uria historia sobre los ¿]dtos y fraca¬
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sos que se han ido sucediendo para oimprender los probleroas dd estudio de la evolución. Matr, E. O le Lonjí Ar�urwfií; Dtórfeí Dflrwin and the Genesis
(f AípíferH Evolvtionary Thought Cambridge* WA: Harvard University Press, 1993. Una concisa visión de la teoría de la evolución.
Los primates vivos INDICE DEL CAPÍTULO
Rasgos Generales de los primates Clasificación de los primates Los diferentes primates Variables adaptativas de los primates Rasgos humanos distintivos
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Capítulo 4
Loe primates vivos �
fin di la Primatob�a o estudio de los prima¬ tes es comprender la forma en la que los dife¬ rentes primates se han adaptado anatómica y al culturalmente a su medio ambiente. El resul¬ tado de tales estudios puede ayudamos a comprender la conducta y evolución del primate humano. Pero ¿cómo pueden contarnos los primates vivoSj como d chimpancés algo sobre los seres humanos o so¬ bre los primates que fueron nuestros ancestros? Después de todo cada especie de primates vivos tiene su propia historia de diveigencia evolutiva de las formas primiti¬ vas, Todos los primates vivos» incluidos los humanos» proceden de los primates antiguos actualmente extingui¬ dos. No obstante� observando cómo difieren y cómo se asemejan entre si los humanos y los otros primates� po¬ dremos deducir cómo y por qué diferimos los humanos de los demás primates. En conjunto» tanto la evidencia fósil» como las compa¬ raciones anatómicas y de conducta de los primates vivos nos pueden ayudara reconstruir cómo fueron los primi¬ tivos primates. Por ejemplo, si sabemos que los primates modernos que trepan a los árboles poseen la particulari¬ dad de tener un tipo singular de estructura ósea en el hombro, podemos inferir que los huesos fósiles similares, probablemente, pertenezcan a un animal que también se desplazaba por los árboles. Otras adaptaciones de los pri¬ mates vivos también pueden sugerir que se produjeron dertas divergencias en la evolución de los primates. Si sa¬ bemos qué caracteres son específicamente humanos» y so¬ lamente humanos» entonces podremos saber por qué la línea de primates que condujo a los seres humanos se se¬ paró de la línea de los chimpancés y los gorilas. En este capítulo, examinaremos primero los rasgos ge¬ nerales de los primates vivos y luego comentaremos los di¬ ferentes animales que pertenecen al orden de los primates, centrando nuestro interés en las características de cada tipo principal para discutir las explicaciones posibles de algurm de las distintas adaptaciones mostradas por las di¬ ferentes especies de primates; terminaremos con una revi¬ sión de los caracteres que diferencian a los seres humanos de los restantes primates. La finaÜdad de este capítulo es ayudar a comprender más cosas sobre los seres humanos. Incidiremos, pues» en las características de la anatomía de los primates, y también de su conducta» que puedan tener mayor relevancia en la evolución humana.
Rasgos generales de los primates Todos los primates pertenecen a la dase de los Mamíjeros y» como tales» comparten todas las características
comunes a dicha categoría. Excepto en el caso de los hu¬ manos» todos los primates tienen el cuerpo cubierto de un pelaje muy denso» que les proporciona aislamiento; induso los humanos tienen pelo en algunas zonas cuya protección no siempre responde a este criterio. Los ma¬ míferos son animales de sangre caliente lo que significa que su temperatura corporal es más o menos constante y templada» generalmente más alta que la temperatura del aire que los rodea. Todos los mamíferos paren crías vivas que alcanzan un desarrollo considerable dentro del seno materno y son alimentadas por succión de las glándulas mamarias. Las crías» después del nacimiento» tienen un período relativamente largo de dependencia de los adul¬ tos» que les sirve para aprender; en gran medida la con¬ ducta de los mamíferos adultos es más aprendida que instintiva. El juego es una técnica común de aprendizaje de los mamíferos jóvenes especialmente importante en los primates» como veremos posteriormente en este mismo capítulo. Los primates poseen un número de caracteres fisicos y sociales que los diferer�ian del resto de los mamíferos,
C aracterísticas físicas Ninguna de las características físicas de los primates es exdusiva» ya que animales de otros órdenes poseen una o más de ellas» aunque su conjunto de días sí es es¬ pecífico de los primates. Muchas de las características de su esqueleto evidendan una existencia arbórea (vida en los árboles): sus miembros inferiores están estructurados» principal¬ mente» para proporcionad es soporte» pero sus «pies», en la mayoría de ellos, les sirven para agarrar cosas Figura 4.1). Algunos primates -el orangután, por ejem¬ plo- puede suspenderse de sus miembros inferiores. Los antebrazos son especialmente flexibles, están estructura¬ dos para empujar y tirar, y cada uno de sus miembros in¬ feriores posee un solo hueso en la parte superior y dos en la inferior (a excepción del Tarsius).E$m características han cambiado muy poco desde la aparición de los pri¬ meros primates» si bien permanecen en los actuales (mu¬ chos otros mamíferos sí las han perdido)» porque esos huesos dobles les dan gran movilidad al permitir girar brazos y pierr\as. Otra estructura característica de los primates es la cla¬ vícula» que les proporciona una gran libertad de movi¬ mientos» dejándoles mover el hombro tanto hada arriba como hacia abajo, hacia atrás y hacia delante. Aunque los humanos» lógicamente» no utilizan esta habilidad para trepara los árboles» sí la usan para otras actividades. Sin la clavícula no podríamos lanzar una jabalina o una pe¬ lota» no se podrían febricar buenas herramientas» y no
Jit Ca p í t ul o 4
Manee y pías prensiee
Los primates vivos
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Figura 4.1. Aígvnos ra$gos comums ios primates
Fwtttex (A) Di Rotiald G. Wblít CkordaU
Afíatpmy
(Lcxington, MA: D. C. Hcath and Corapany, 199l)i p, 255. Repro¬ ducido c0ti permiso di D. C, lícadi. (B, C) De Terreiioc Deacorit sobre todo si se les compara con los de otros anima¬ les tales como los herbívoros. Los dientes anteriores -incisivos y caninos- están muy especializados� especial¬ mente en los primates inferiores. Por ejemplo» en mu¬ chos prosimios el delgado pero fuerte conjunto de incisivos y caninos inferiores forma un «peine dental» que el animal usa para acicalarse o para arrancar las resi¬ nas endurecidas de los troncos de los árboles (que son un alimento para ellos) * Las manos de los primates son extraordinariamente sensibles. Todos ellos tienen manos prensiles -para aga¬ rrar- que se pueden cerrar en tomo a un objeto. Los pri¬ mates tienen cinco dedos tanto en manos como pies (en algunos casos uno de ellos se puede reducir mucho de ta¬ maño), y sus uñas» con pocas excepciones» son anchas y Hsas» no como garras. Esta estructura les permite asir objetosi la felta de pelo» las almohadillas de los dedos» los pulgares» los talones y las palmas de las manos fevorecen la capacidad prensÜ, La mayoría presenta oponibilidad pulgar, una particularidad que aporta a esta estructura mayor precisión y fuerza.
Univcrsity PiíSS* 1992), p. 110(D) Frora Matt Cartraill, «NonHuman PrimatESí�, en ibid., p. 23. (E, F) Di ibid-, p. 24, Copyright © by Cambridge University PreS$. Reproducido con permiso de Cambridge Univereity Press. La vista es muy importante para la vida de los prima¬ tes; comparados con otros mamiíeros» los primates tie¬ nen relativamente mayor la parte del cerebro dedicada a la visión, es un área bastante mayor que la del oLfeto. Se caracterizan por tener visión estereascópica o visión en re¬ lieve. Sus ojos se sitúan en posición frontal» en vez de la¬ teral como en otros animales» una propiedad que les permite enfix:ar los objetos (insectos u otros alimentos, o una rama distante) con ambos ojos a la vez. La mayo¬ ría de los primates tiene también visión cromática» quizá para percibir cuándo una planta está madura para ser comida. Otra importante característica es el gran tamaño de su cerebro comparado con el resto del cuerpo; es decir� que los primates tienen el cerebro proporcionalmente mayor que otros animales de tamaño similar» quizá por su dependencia de una gran cantidad de aprendizajes para poder sobrevivir, como veremos más adelante. En general, los animales con cerebros grandes parece que maduran más lentamente y viven más que los que lo tie¬ nen menor. Cuanto más lentamente madura un animal y más vive» más puede aprender. Finalmente» el sistema reproductor de los primates sitúa a este orden de animales aparte de los otros mamí¬ feros. Los machos de la mayoría de los primates poseen un pene colgante que no está sujeto al abdomen por la piel, un rasgo propio de unos pocos animales, como los murciélagos y los osos. Las hembras de la mayoría de las
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Capítulo 4
Loe primates
vivos
�
especies de primates tienen dos pezones en el pecho (so¬ lamente unos pocos prosimios tienen más de dos pezo¬ nes)* £1 útero está normalmente preparado para contener un solo feto (salvo en la femilia Calliáírkidae, que paren siempre gemelos dizigóticos monocoriónicos) y no una camadaj como la mayoría de los otros mamífe¬ ros. Este sistema reproductor se puede considerar muy adecuado� una adaptación relacionada� posiblemente � con los peligros de la vida en los árboles� especialmente por el riesgo de caídas, Las crías de los primates tienden a estar bien desarrolladas cuando nacen, aunque los humanos� Prosimii y algunos Anthwpoidea nacen bastante indefensos. Casi todosi excepto los humanos� pueden errarse al cuerpo de sus madres desde el momento del nacimiento. Los primates tardan mucho tiempo en ma¬ durar: porejemplo> el mono ríieswy (Mícacíi mw/fíííH) no es maduro sexualmente hasta los tres años de edad y los diimpancés hasta los nueve.
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II 10
Caracteres
so ciales
En su mayoría» los primates son animales sociales* Al igual que poseen características físicas propias como ma¬ nos prensiles y visión estereoscópica» también pueden haber desarrollado algunos patrones de comportamiento social» para adaptarse a su entorno. Para la mayor parte de los primates» especialmente para aquellos que son de costumbres diurnas» es decir» que están activos durante el día» la vida en grup o pu ede se r cru cial para sobrevivir» se gún veremos después. DEPENDENCIA Y DESARROLLO EN UN CON¬ TEXTO SOCIAL. Las relaciones sociales comienzan con la madre y otros adultos durante el largo período de dependencia de los primates Figura 42y para las feses de infencia y juventud). La prolongada dependen¬ cia de las crías de los Anthropoidea probablemente su¬ ponga una ventaja evolutiva ya que les permite tener más tiempo para observar y aprender el complejo comporta¬ miento esen cial para la superviven da» m ient ras disfrutan de los cuidados y la protección de los adultos maduros. Los primates que carecen del cálido cuidado de sus madres o de otros individuos no parece que desarrollen los adecuados patrones de interacción social; así» en una serie de experimentos realizados con monos rftííMS» Harry Harlow investigó los efectos de la negligencia ma¬ terna y del aislamiento de las crías observando que» como resultado de esta felta de cuidado y del aislamiento res¬ pecto del resto de crías» algunos monos eran incapaces de llevar vidas sociales normales» desarrollaban actividades sexuales aberrantes» llegando» incluso» a ser delincuentes juveniles. Harlow emparejó a monos hembra» social-
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�ríodo de depond�ngia (�ños)
Figura 4.2. Comparación de /os períodos de dependencia en' tre tas crías de tos primates Líjí de la antropohgía wpu&kn da�ijkar de acuerdo al tratado f o cidtural) mente carentes» con monos macho bien adaptados; cuando estas hembras parieron» su conducta no íue del todo maternal e incluso rechazaron completamente a sus crías� Su comportamiento anormal demostró que la ma¬ ternidad es algo más que un instinto. Los experimentos de Hadow ponen de manifiesto la importancia que el cuidado materno y la atención tienen para los primates» y» como corolario para los seres humanos. En muchos grupos de primates la madre no es el único individuo que ofrece cuidados a las crías; entre los kngures grises el nacimiento y subsiguiente crianza de un hijo concentran la atención de la mayoría de las hembras del grupo y en algunas especies de pri¬ mates el padre dedica tanto tiempo al cuidado de su prole como la madre. EL [UEGO Y LOS PRIMATES. Las investigaciones de Hadow han proporcionado más información sobre el aprendizaje social de los jóvenes primates. Demostraron la importancia del cuidado materno en las crías de monos fftftíWí y también revelaron que el juego era otro compo¬ nente crucial para el desarrollo normal durante el pe¬ ríodo de dependencia. Lo mismo que los monos a los que
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se les apartó de las madres mostraron de adultos una con¬ ducta social anorraali los monos que�aunque estaban con ellas> no pudieron jugar, mostraron las mismas d�ficiendas. De hechoi cuando a alguno de los monos apartados de su madre se les permitió jugar de forma regular con sus compañeros� la mayoría tuvo conductas normales. Trabajos posteriores han confirmado los hallazgos de Hariow. El juego es de gran importancia para aprender. Pro¬ porciona la práctica necesaria para los esfuerzos físicos que hay que desarrollar más tarde en la vida adulta. Por ejemploi los monos jóvenes hacen carreras de velocidad por las altas copas de los árboles� lo que les proporciona la coordinación que algún día podrá salvarles la vida si se ven atacados por depredadores. También es una forma de aprender habilidades sociales, especialmente en las inter¬ acciones con otros miembros del grupo. Así, algunas rela¬ ciones de dominio se establecen parcialmente a través de los juegos de lucha a los que juegan los jóvenes mayores, en los que ganar depende de fectores como el tamaño� la fuerza y la agilidad. Estas cualidades» o la felta de ellas» pueden inñuir en el estatus del individuo a lo largo de su vida adulta (otros fectores también ayudan a determi¬ nado, por ejemplo, el estatus de la madre se ha demos¬ trado que es de gran importancia para los primates). APRENDER DE OTROS. Sabemos que tanto los primates no humanos como los humanos aprenden mu¬ chas cosas en grupos sociales; entre nosotros» los niños imitan frecuentemente a los mayores y los adultos a me¬ nudo enseñan expresamente a los más jóvenes. Así» son comunes expresiones del tipo: «¿No es cierto que Tommy imita como un mono a su padre?». Pero, los monos ¿imiLos primates pueden aprender de las enseñanzas directas, aunque aprenden má$ por imitación y por enrayo y error.
C a pítulo 4
Los primates vivos 63
tan a otros» o acaban aprendiendo a hacer las cosas pare¬ cidas aunque no tengan un modelo que observar? Hay una controversia entre los investigadores sobre cuánto aprenden los primates no humanos de la imitación y cuánto de forma independiente, e incluso si existe la en¬ señanza deliberada entre los primates no humanos. Algunos investigadores de campo sugieren que los chimpancés pueden aprender a usar herramientas por imitación; así, lañe Goodatl recuerda una ocasión en la que una hembra con diarrea cogió un puñado de hojas para limpiarse el trasero: entonces, su cría, de dos años de edad» la miró cuidadosamente» y en dos ocasiones efectuó la misma operación. La pesca de termitas sirviéndose de un tallo de hierba que introducen en el hormiguero, es probablemente el ejemplo mejor conocido del uso de una herramienta por chimpancés. Se han estudiado chimpan¬ cés inmaduros en estado salvaje cuando miraban atenta¬ mente a otros durante la operación de «pescar» hormigas con el método comentado, y las madres permitían a sus crías arrancar los tallos de hierba mientras ellas «pescan». No obstante» algunos observadores no creen que esto muestre claras evidencias de aprendizaje a través de la en¬ señanza» pues aunque la madre permita a su hijo que arranque los tallos para «pescar», la cría está actuando junto a su madre» lo que no significa que la esté obser¬ vando para hacer lo mismo después.
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vVÍ»
Antropología Aplicada Primates en peligre En contraste con muchas pobladoDes que son demasiado numero¬ sas en relación con sus recursos� otras muchas poblaciones de pri¬ mates se enfrentan con la extinción porque no son lo bastante numero¬ sas, Las dos posibilidades -superpo¬ blación humana y extinción de primates no humanos- están estre¬ chamente relacionadas. Si no hu¬ biera existido expansión humanai en muchas partes del mundo los pri¬ mates no humanos que viven en ellas» no estarían en peligro. Varios lémures y otras especies de ProsimH de Madagascar� el gorila de montana y el colobus rojo de África» y los mo¬ nos león tamarínos deBrasH» figuran entre las especies en mayor peligro de extinción. Hay muchos fectores causantes de las dificultades con las que se tie¬ nen que enfrentar los primates no humanos» aunque las mayores de ellas están directa o indirectamente relacionadas con la actividad hu¬ mana. Quizá el mayor problema sea la destrucción de la selva lluviosa tropical (el hábitat de la mayoría de los primates no humanos)» a causa de la expansión de la agricultura» la cría de ganado y la tala de árboles para explotar la madera. Las perso¬ nas que viven en estas áreas son par¬ cialmente responsables del acoso de los primates: la presión de la pobla¬ ción humana se incrementa mien¬ tras se destruye la selva para sembrar campos de cultivo y» en otras áreas» los primates son una importante fuente de alimentación. Pero» pro¬ bablemente» los mayores responsa¬ bles de este problema son los
Un león tatmrino dorado,
mercados mundiales, ya que el in¬ cremento de la demanda de ham¬ burguesas «americanas� en los restaurantes de comida rápida (fast jüod restaurants) ha acelerado la búsqueda de lugares de pasto para criar ganado de forma barata. Ade¬ más» existe una enorme demanda mundial de maderas procedentes de los bosques tropicales; así» Tapón im¬ porta la mitad de toda la madera procedente de esas selvas para utili¬ zada en contrachapados» papel y muebles. Algunos dirían que esto es im¬ portante para poder salvar a todas las especies» pero los primatólogos nos recuerdan que es especialmente importante preservar la diversidad de los primates. Una de las razones es que los científicos dependen de es¬ tas poblaciones para poder estudiar y comprender en qué se parecen y
diferencian de los humanos» así como las vías por las que han evo¬ lucionado para ser como son. Otra de las razones es la utilidad de los primates no humanos en la investi¬ gación biomédica sobre las enfer¬ medades humanas; compartimos muchas de nuestras enfermedades y muchos de nuestros genes con nuestros parientes primates (como dijimos en el capitulo primero» com¬ partimos el 99 por ciento de los ge¬ nes con los chimpancés). La película Elplaneta de los simiost en la que los humanos están dominados por los ¿mios» nos recuerda que los monos de los zoológicos podríamos haber sido nosotros. Entonces» ¿cómo pueden pro¬ tegerse los primates no humanos de nosotros? Únicamente existen dos formas: o el crecimiento de la población humana se detiene en muchos bagares o tenemos que pre¬ servar sustancialmente las poblacio¬ nes de primates no humanos en parques y zoológicos protegidos. Ambas son difidles» pero humana¬ mente posibles.
Fuen tef; Riis$ell A. Mitt�rmei�r aiid Elea-
üOt J, c(G>l]$etvatÍ0ü of Primát�
en Steve Jones, Kobert Mariúi, y David Pil-
beam, The Cambridge Eticydúpedia cf Hutmn (Cambridge: Cambiid�
Utúversity Press, 1592), pp. 33-36; Toshisada Nbhida, «([ntroduction to the Con�ervatioti Sympo$iiuD�, eo Keo$ul� [toigawa, Yuki� mam Sugiyaim, Gene P. -Sackett, y Ro�r K, R, Thompson, 7 la canti¬ dad de caracteres comunes. Un tercero considera las líneas evolutivas Junto con los caracteres similares y los diferentes> aunque no todos los aspectos se valoran de la misma forma. AsimismOj se subrayan las características más «avanzadas» y especializadas produddas en la línea evolu¬ tiva. La Figura 43 recoge un esquema de clasificación que águe este último criterio, A pesar de las diferentes posibilidades de cUsificadón» en general hay pocas discrepancias sobre la forma de cla¬ sificar a los primates. La mayoría de ellas» como veremos cuando estudiemos a los distintos primates� gira alrede¬ dor de la dasificadón de Tarsius y humanos. El orden Primates se suele dividir en dos subórdenes: los Prosimii -literalmente> premonos- y los Anthwpoidea. Los íViosimíí induyen a los Lemuriformes, Lorisifor-
Los
p r i m at e s
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mesy Tarsiform�s.EL suborden Aflí/irppíJííJffí induye a los primates del Nuevo Mundo (CeÍJíJídes)» primates ddViejo Mundo los Hylobatiruw (Hylobates y los Pongidae (orangután� gorila y chimpancé) y Hominidae�
Los diferentes primates � que hemos tratado las características comunes� es¬ tudiaremos algunas de las formas de vida de los primates actuales. PrOS1M[[ Los Prosimii se asemejan más al resto de los mamífe¬ ros que a los primates An�rvpQÍd&i; por ejemplo» los prosimios dependen mucho más dd oLfeto para la infor¬ mación que los j�ííifi£jpííÍ£Íííj»1ambién» en contraste con éstos» tienen orejas móviles» bigotes» hodco grande y ex¬ presión fedal relativamente fija y también presentan muchos caracteres propios de los primates» entre ellos» manos prensiles» visión estereoscópica y centros visuales cerebrales más desarrollados.
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Afíthn>f}oid&$
Rimates del Nuevo Mundo (Platirrinos)
Primates ded \fí€jo Mundo {Gatairinos)
{Cercopíti ecoidea)
hdíls Aye-Aye
Loris Galago
Tarsifofiri� Cebidae Caiiithricidae Coiot�idae C�copithecii;!�
Figura 4.3. Qa�icadón &mpfíicada
los primates vivos
Pangidae Homin{Cía& (áitiones) (Orangután (Homínidos) Gorlía Chimpancé)
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Los Pros'/mif, como estos lemures de cola anillada, dependen mucho más del olfato que los Anthropoíde�. Los Prosimii también tienen orejas móviles� bigotes, hocico pmminente y la expresión facial es relativamente estática.
Este loris es un pequeño prosimio arbóreo que come in¬ sectos y fruta. Es un animal de hábitos nocturnos que se desplana trepando y saltando.
LEMURIFORMES. IkatO lo5 kmures como sos parientes Indrisy Daubentonia�se encuentran solamente en dcK áreas insulares al suroeste de las costas de Africa� Madagascar y las islas Comores- La diferencia de tamaño de estos primates oscila desde el pequeño lemur-ratón hasta los 4 pies de largo del Indri. Los miembros del grupo de los lemúridos generalmente tienen partos sim¬ ples» aunque a veces pueden tener dos o tres crías a la vez en algunas especies. Muchas de ellas son cuadrúpedos (animales que se desplazan andando sobre las cuatro pa¬ tas), tanto en los árboles como en el suelo. Algunos géneroSj como el Indri� usan sus miembros posteriores únicamente para pasar de una posición vertical a otra forma de locomoción llamada trepadora vierücal y salta¬ dora. Los lémures en general son vegetarianos» se ali¬ mentan de frutas» hojas» cortezas y flores. Difieren mucho en el tamaño de sus grupos; muchas especies de lémures, especialmente aquellas que son de hábitos noc¬ turnos (desarrollan la actividad por la noche)» son soli¬ tarias» en tanto que otras son mucho más sociables»
pudiendo vivir en grupos de hasta sesenta miembros. Un rasgo característico de los lemúridos es que las hembras dominan a menudo a los machos» concretamente en el acceso al alimento» en tanto que en el resto de los mamí¬ feros el dominio de la hembra se observa raramente. LORISIFORMES. Los miembros del grupo Lorisiforme se encuentran en el sudeste de Asia y en el África subsahariana, Son totalmente nocturnos y arborícolas. Se alimentan de fruta» resina de árboles e insectos y ge¬ neralmente paren una sola cría. Hay dos sub&milias de Lorisiformes: los Lorisííiae propiamente dichos y los (Galagos)» observándose entre ellos grandes diferencias de conducta. Los Galagirtae son animales rᬠpidos» activos» que cuando se mueven por los árboles» saltan entre las ramas y los troncos según un modelo de ag�TTt vertical» y cuando están en el suelo se desplazan dando saltos de forma parecida a los canguros. Los Lorisirtae� por el contrario» son mucho más lentos y caminan tranquilamente por las ramas sobre las cuatro patas.
Jit Capítulo 4 Utilizando reflectores y ayudas técnicas como radiotransmiwres� lus investigadores de campo han apren¬ dido mucho de estos animales nocturnos. Por ejemplo» sabemos que entre los Gíj/íj�ínaejias hembras» sobre todo las madres e hijas adultas jóvenes» viven juntas en peque¬ ños grupos» en tanto que los machos viven dispersos» Los recién nacidos son alumbrados en nidos o huecos df los árboles (que las hembras del grupo pueden compartir) y las madres acuden regularmente a dailes su ahmento. Pocos días después del partos la madre puede llevar a su cría en la boca cuando se desplaza a árboles próximos» «aparcándolo» mientras ella come. TARSIIFORMES. Los Tarsiiformes son primates ar¬ borícelas nocturnos» que sólo se encuentran en las islas FiGpir� y en Indonesia. Son los únicos primates que dependen completamente de dieta animal» generalmente son insectívoros aunque a veces capturan y comen otros animales pequeños. Están muy bien preparados para la vi¬ sión nocturna» tienen unos ojos enormes» una vista ex¬ traordinaria y sus áreas cerebrales para la visión están muy desarrolladas. El nombre de larsiiforme procede de que tienen muy desarrollados los huesos del tarso (huesos del tobillo)� lo que les permite dar enormes briocosi también son hábiles trepadores y saltadores. Viven en grupos femiliares compuestos por una pareja y sus crías y» lo mismo que otros primates» el macho y la hembra del Tarsius gri¬ tan todos los atardeceres para demarcar su territorio. La clasificación de los Tamiform�s está sometida a de¬ bate» ya que algunos primatólogos» en lugar de incluirlos Los Tbísíus nocturnos y arborícolas, como éste de las Is¬ las Filipinas, son los únicos primates que dependen completamente de una dieta animal. Sus enormes ojos le facilitan la captura de insectos y otras presas durante la noche. Sus desarrollados huesos de los tobillos (tarsales) le permiten ser un gran trepador en la ascensión vertical y en el salto.
Los primates vivos
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en el suborden como aquí hemos hecho» los cla¬ sifican entre los Aijthropoidea. Según este otro esquema de clasificación el orden primates se divide en dos subór¬ denes: Strepsirhíni (que comprende a los Lorisiformes y a los Lemuriformes) y Haplorhiní (que incluye al Tarsius entre los j4í?ífiTOjJ0Ítíe£í). Los Tarsiiformes tienen los cro¬ mosomas similares a los de los fVipsíffííí; también tienen garras de aseo en los pulgares» más de dos pezones» y el útero (bífido) como el resto de los Prosimii.Al igual que los Galaginaei los Tarsiiformes emplean una locomoción trepadora y saltadora» pero» en otros aspectos» se parecen más a los Anthropoidfa. Tienen menor dependencia del ol&to; no sólo tienen la nariz pequeña sino que también les :Uta el hocico húmedo y prominente de los lemures (rinario).En común con los Aiííircyjoíjiefl» tienen los ojos muy próximos entre sí y protegidos por órbitas óseas completas. Por lo que se refiere a su aparato reproductor» los Tarsiiformes, como todos los Aííí/irpppWeíí» tienen una placenta (hemocoriónica) que permite a la sangre del feto estar en contacto con la sangre de la madre.
Anthropoídea H suborden de los Anthropoidea incluye a los Ce&oideay Cercopithfcoidea y Hominoídea: la mayoría de los Anthropoidea comparte algunas características en mayor o menor grado, Tienen el cráneo redondeado» orejas pe¬ queñas y no móviles y» en vez de hocico» tienen la cara relativamente pequeña y plana; disponen de un sistema reproductivo altamente eficaz y sus manos son muy diestras. El orden de los Ánthropoidea se divide en dos grandes grupos: Platirrhini y Oitnrríimí (v�ííjí Hgura 4.4). Ambos grupos toman sus nombres de la forma de la nariz de los distintos Anííircjpcídeíí pero» como vere¬ mos» difieren también en otras características. Los pla¬ tirrinos tienen narices anchas con el puente nasal plano y con las fo� nasales mirando hacia delante. Estos mo¬ nos se encuentran sobre todo en el Nuevo Mundo» en América Central y en Suramérica. Los catarrinos tienen narices estrechas con las fosas nasales orientadas hacia abajo: este grupo ioduyea los primates del Viejo Mundo (Afi-ica» Asia y Europa) y también a los póngidos y al hombre. PRIMATES DEL NUEVO MUNDO. Además de la forma de la nariz y la posición de las fosas nasales» hay otras características de los primates del Nuevo Mundo (platirrinos) que los diferencian de los catarrinos An¬ tropoidea. Las especies del Nuevo Mundo poseen tres premolares» en tanto que las del Viejo Mundo sólo tienen dos; algunos del Nuevo Mundo tienen la cola prensil; no
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Figura 4.4
Caractarfsticas de Platirrinos y Catirrinos así los del Viejo Mundo. Todos los del Nuevo Mundo son completamente arboiícolas; varía mucho el tamaño de hs grupos y la alimeotadón abarca desde insectos hasta el néctar y el jugo de frutas y hojas, Se han definido claramente dos femilias principales en¬ tre los primates del Nuevo Mundo: una es la de los G?Sithriddae� entre los que figuran los titSs y los tamarinos; la otra femiliaJos Q&ífJíííjincluye otros muchos primates dd Nuevo Mundo. Aunque los expertos encuentran mu¬ chos problemas en esta dasificación� no deja de ser útil para conocer de forma básica a los primates del Nuevo Mando. Los Callithriádae son primates muy pequeños� con garras en vez de uñas» y paren gemelos que maduran al cabo de dos años. Quizá por ser tan comunes los emba¬ razos gemelares y las crías tener que ser transportadas� las madres no pueden cuidarlos por sí solas. Tanto padres como hermanos mayores han podido ser vistos portando a las crías. Los grupos de Callithriádae están formados bien por una pareja (monogamia) j o por una hembra con más de un macho (poliandria). Su alimentación se basa en grandes cantidades de íhita y de savia de árboles aunque�
lo mismo que otros pequeños primates, pueden obtener gran parte de su dieta proteica de los insectos. Los Cebidae son generalmente mayores que los CalUtkriddae� tardan el doble de tiempo en alcanzar la madurez y suelen tener solamente una cría en cada parto. Los Cebidae lorian ampliamente tanto en el tamafw? como en la composición de sus grupos y en sus dietas. Por ejemplo� el mono ardilla (Sííffíín) pesa alrededor de un kilogramo� mientras que el mono araña (Ateles) pesa más de ocho ki¬ logramos. Algunos f>6ííJííí viven engnjpos reducidos con \iTia sola pareja de macho-hembra� mientras que otros lo hacen en grupos de 60 o más individuos. Algunos» de me¬ nor tamaño» se alimentan de hojasj insectos» flores y fra¬ tás» y otros lo hacen principalmente de frutas con una menor dependencia de semillas» hojas e insectos. PRIMATES DEL VIEp MUNDO. Los primates del Viejo Mundo o Cercopithecoidea están más estrecha¬ mente relacionados con los seres humanos que los pri¬ mates d d Nuevo Mundo. Tienen d mismo número de dientes que los pongidos y los humanos- No hay tantas
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El mono ardilla, oomo todoe lo$ Platirrino�, como los mandrileS} son completamente terrestres (viven en el suelo). Los macacos viven no sólo en las selvas tropicales dno también en montañas nevadas» y pueden encon¬ trarse en sitios tan dispersos como el Peñón de Gibraltar» Africa� norte de la India� Pakistán y lapón. Existen dos grandes sub&milias de primates del Viejo Mundo*
los machos que no son miembros del grupo son peligro¬ sos para las crías» habiéndose podido observar a algunos intentando llevárselas y, en ocasiones» se les ha visto ma¬ tadas» Aunque esta descripción puede indicar que un macho por grupo es una estructura típica» no parece un patrón clásico para una especie determinada» Cuando se ha estudiado más de un emplazamiento» se han encon¬ trado tanto grupos con un único macho como grupos de varios machos.
Cúíoiíáüe. Este grupo incluye los langures de Asia> los colobos de África y varias otras especies» La mayoría de ellos vive en los árboles� su dieta consiste sobre todo en semillas y hojas. El aparato digestivo está preparado para obtener el mayor provecho nutritivo de su dieta -alta en celulosa-� pues consta de un estómago abolsado que les proporciona una gran superficie para digerir las plantas» y un largo tracto intestinal Una de las características de estos monos es el típico y llamativo color de sus crias recién nacidas. Por ejemplo» en una especie cuya madre es de color gris oscuro» sus crías nacen de color naranja brillante. Algunos estudios sugieren que en este tipo de monos ocurre algo poco fre¬ cuente entre los primates (excepto en los humanos)� y es que la madre permite a otros miembros del grupo que cuiden a sus hijos desde poco después de nacer� si bien
La subfemilia de los monos Cermás copiáiecidae incluye especies que cualquier otra sub¬ división de los primates del Viejo Mundo, Muchas de ellas se caracterizan por su marcado dimorfismo sexual (ambos sexos tienen muchas diferencias); los machos son mayores» con caninos más desarrollados y son más agresivos que las hembras» Esta subfemilia depende más de la fruta que la de los CpícJÍJídíje» Posee también mayor capacidad de supervivencia en medios áridos y estacio¬ nales» Las bolsas que tienen en el interior de las mejillas (abazones) les permiten el almacenamiento del alimento para comerla y digerida más tarde» Una característica poco fi�cuente de estos animales son las calhsidades isquiáticas.�s decir� los callos en el trasero» adaptación que les permite sentarse cómodamente en los árboles o en el suelo durante mucho tiempo.
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Loe primates vivos Estudios realizados con mandriles y macacos apuntan que hembras» estrechamente relacionadas entre sí» for¬ man el núdeo de un grupo local> o En los gran¬ des grupos, que son muy comunes entre los monos rhesiis� muchas actividades sociales parecen estar deter¬ minadas por el grado de parentesco biológico. Por ejem¬ plo, un individuo está más predispuesto a sentarse más cerca, cuidar o a ayudara otro individuo con el que man¬ tiene un vínculo maternal. Además un subgrupo estre¬ chamente relacionado, tiende a permanecer junto cuando se escinde de un grupo mayor.
E$te langur, como cata trino, tiene la nariz relativamente estrecha con la$ fo$a$ nasales orientadas hacia abajo. Los langures son miembros asiáticos de la familia Cotobidae y son principalmente filófagos.
ijn grupo de mandriles en Kenia. Estos simios perma¬ necen la mav pudiendo alcanzar grandes dimensiones. Aunque esto parezca raro» muchos estudiosos creen que tales acumu¬ laciones de vegetación pudieron constituir un medio para que los Ántkropoidea llegaran hasta Suramérica. PROPLiOPtTHECiDOS. El otro tipo Artthwpotdea encontrado en El Fayum» los PropliopitíiecidoSyt�ni&�
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la formula dental de los catarrinos modernos» existiendo claras coincidencias de caracteres entre PtvpÜQpithmdv� y catarrinos. En contraste con los ParapitíieddoSy que tie¬ nen tres molares» los Proplivpitheádos tenían sólo dos» lo mismo que los modernos Hc/nfm7f�ea»los humanos y los primates del Viejo Mundo. Los PropSopíííiídiiüí compar¬ ten con los Parapiáieádos las características antropoideas de amplios incisivos inferiores» caninos grandes y reduci¬ dos molares con cúspides redondeadas y» lo mismo que los B�irapitkecidos� los Proplhpitheddos tienen una hendi¬ dura ósea detrás de la órbita, El PrQpIiopi�ecído mejor conocido se desplazaba» probablemente» por los árboles como los cuadrúpedos y pesaba unos 6 kg. Sus molares eran bajos con grandes cúspides y tenía relativamente grandes los incisivos» lo que hace pensar que era sobre todo fnigívoro. Sus ojos eran relativamente pequeños» lo que sugiere actividad diurna; tenía gran hocico y un cere¬ bro relativamente pequeño. Los moldes endocraneales apuntan a que el tenía un área cerebral
R�on$trucoión de lo$ que pudieron $er do$ tipo$ de pri¬ mates del Oligoceno: en primer plano aparece un grupo de AegyptoprthectJSj en segundo plano están dos ejem¬ plares de Apydíum.lamb'ién aparecen otros ejemplares de la fauna que existió en El Fayum en aquella época co¬ existiendo con estos primates primitivos.
� Ca p í t ul o 5
E vo l u c i ó n de los primates. Des de los primeros primates a los homínidos
Cráneo fó$il d$ un A&gyptopíthecu$ de El F&yum. Su den¬ tición $$ pequeña, con anillo á$eo continuo y cerebro rela¬ tivamente grande, lo que le convierte en un claro ancestro de los primates del Viejo Mundo y de los pongidos.
dedicada a la visión rdativamente grande� en tanto que
la dedicada al oL�to eia cQmpaiativameDte menQn Los
cráneos hallados muestran que existia un dimorfismo sexual muy marcado y que los individuos cambiaban mucho con la edadi desarrollando crestas óseas en la parte superior y posterior del cráneOj en forma parecida a lo que ocurre con los grandes póngidos. Aunque sos dientes� mandíbulas y algunos aspectos del cráneo eran semejantes a los ffcínímííííftí actuales» el resto de su es¬ queleto era más parecido al de los monos» por lo que la mayoría de los estudiosos los clasifican entre los prime¬ ros catarrinos- Como los Propliopithecidos no poseen las características especiales de los primates vivos del Viejo Mundo y de los HíjmmpííJeíí (catarrinos)� aunque tengan la misma fórmula dental de los catarrínos� algunos paleoprimatólogos piensan que el ancestro, tanto de los primates del Viejo Mundo como de los homínidos (pri¬ mates no humanos y humanos) j estuvo entre los Proplio¬ pithecidos.
Antfiropoidea del Mioceno: prosimios, póngidos y homínidos Durante el Mioceno, hace entre 24 y 5,2 millones de años� los Prosimii y Artthwpcidea divergieron claramente
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en asp>ecto, surgiendo numerosos tipos de estos últimos en Europa» Asia y África- A principios del Mioceno, las temperaturas fiaeron sensiblemente más templadas que durante el Oligoceno- Desde su comienzo hasta el Mio¬ ceno Superior las condiciones climáticas se hicieron más secas, particularmente en Africa Oriental, relacionán¬ dose estos cambios con la deriva continental. Hace unos 16 millones de anos, África entró en contacto con Eurasia� poniéndose fin a los efectos moderadores del Mar de Tethys, que estaba situado entre África y Eurasia e influía en el dima de ambos continentes* El contacto de África y, de forma significativa, de la India con Eurasia inició una serie de plegamientos que dieron lugar a la aparición de cadenas montañosas que cambiaron los patrones cli¬ máticos previamente establecidos. El resultado fiie que tanto Eurasia como África se hicieron notablemente más áridas de lo que lo habían sido hasta entonces y, una vez más, estos cambios climáticos influyeron poderosamente en la evolución de los primates» Podemos deducir que en el Mioceno Superior� hace entre 6 y 5 millones de años, el antecesor directo de los humanos, el primer homínido, pudo haber aparecido en África, Esta conclusión acerca de dófU�e aparecieron los primeros homínidos se basa en el hecho de que ho¬ mínidos, fuera de toda duda, vivieron en África Orien¬ tal hace 5 millones de años� La respuesta a cuárido aparecieron los homínidos no se basa en los hallazgos fó�es sino en los análisis bioquímicos y moleculares de los póngidos y humanos actuales pues, como veremos en el capítulo próximo, el efecto de un clima más seco y la aparición de entornos herbóreos más abiertos pue¬ den haber influido directamente en la evolución de los homínidos, Uno de los póngidos de Mioceno (conocido o desco¬ nocido) fue el ancestro de los homínidos, por lo que comenzaremos estudiando, sobre todov a los proto-kumtírtpí-es decir,j4ftífír(?püí£Íefí con algunas características de los primates- del Mioceno Inferior y a los póngidos definitivos del Mioceno Medio y Superior; pero antes de estudiar a estos póngidos, veremos cómo eran los Prosimii y Anthropoidea del Mioceno, ya que, desgraciada¬ mente, los primates fósiles del Mioceno Inferior son raros. En el Nuevo Mundo, el registro total de fósiles del Mioceno está completamente vacío» Solamente existen algunos primates fósiles hallados en Colombia y Argen¬ tina, que tienen estrechas afinidades con los primates ac¬ tuales del Nuevo Mundo. En el Viejo Mundo del Mioceno Inferior sólo han sido hallados primates fósiles en el norte de África, aunque la situación es diferente en relación con el Mioceno Medio y Superior, de forma que los primates fósiles del Viejo Mundo correspondientes a esta época son mucho más abundantes que los fósiles de
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E v o l u c i ó n de los primates. D e s d e los primeros primates a los ho m ínido s
póngidíw, Los pnísimios fósilís áú Mioceno también 5on raros»pero sabemos quezal menos�algunos AJflpídíie sobreviven en el Mioceno Medio en India y en el Mio¬ ceno Superior en China� y durante todo el Mioceno al¬ gunos prosimios semejantes a los Loris aparecen en el este de África� Pakistán e India, Proto-póngídos
d e l Mioceno Inferior
La mayoría de los fósiles del Mioceno Inferior se des¬ criben como proto-póngidoS} habiéndose encontrado sobre todo en Áfnca» y siendo el género Procámuh loca¬ lizado en yacimientos de Kenia y Uganda hace 20 millo¬ nes de añoS} el más conocido. Todas las especies de i�roaírtSMÍ halladas son de mucho mayor tamaño que cualquiera de los Anthropoídea del Oligocenoj tamaños que varían desde el de un gibón hasta el de un gorila hembra. Todos carecen de cola� lo que supone una de las características más definitivas de los homínidos. La mayoría de los paleoantropólogos cree� en actualidad� que el Prpcénywí era definitivamente un homínido» aunque completamente diferente de cual¬ quier póngido actual. Los homínidos modernos presen¬ tan muchos rasgos anatómicos en hombros� codos> muñecas y dedos que son adaptaciones a la locomoción
Hgura 5-4. Ííií rAíiemtros flHtpriprí5 y poítenore$ d d Procéti�id africano 20 ríííUcrfíí de flñosj tien&n aprojárnadameríU (datado hac� ii misma ¡o que sugiere que se movía sobre ías cuatropa¬ tas etilo alto de las rarmí� El Proeánsul africattuífue tí menor de Í3S de Procónsul� pesatido entre utio$ W a 12 kg� Fuetitef: Temado Interpretatioft of Ape at� Humati .Aticestry, por R. Ciocbon y R. Conjcdoíia» cds. Copyright © 19S3
bf Pknum Publtshers. Reproducido con permiso de Flenum Publishers.
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por suspensión (braquiadón), pero ésta no fue� aparentemente» el modo de desplazarse del PrpcóíTyMÍ, Aunque sus codoS} muñecas y dedos podían haberle permitido la braquiacion�al igual que los jlftrfiropüíííeíí del Oligoceno» el ProctírííMÍ íue> en origen, un cuadrúpedo arborícola Figura 5,4). Algunos de sus representantes de ma¬ yor tamaño debieron vivir en el suelo y� a ju3�r por los dientesj las especies de Prpcéíwwf parece que fueron finjgívorasj aunque los individuos de mayor tamaño tam¬ bién pudieron haberse afimentado de hojas, Aunque el del JVptówMÍ es el grupo mejor conocido de todos los tipos de primates que poseen algunos de los rasgos de los homínidos desde el Mioceno Inferior� algu¬ nos descubrimientos recientes acaecidos en África Oriental sugieren que también había otros tipos de proto-homínidos en escena» si bien estos otros descubri¬ mientos son fragmentarios y no se pueden clasificar con daridad- El Procónsul puede o no haber sido el ancestro de los pongidos y homínidos posteriores» pero dada su mezda de rasgos de póngido y homínidoj se parecería mucho al ancestro común deambos�
PÓNGIDOS DEL MIOCENO MEDIO Los primeros primates semejantes a póngidos en¬ contrados en África Oriental proceden del Mioceno Medio» hace entre 16 y 10 millones de años. Los fósiles de las islas Maboko y localizaciones próximas en Kenia incluyen varios tipos de primates: un prosimio» varios tipos de primates del Viejo Mundo y un homínido in¬ dudable» el iCeíjiyflpifíiecHíEl ünyapíihecus tenía muchos de los rasgos del ProcóttsuU aunque sus molares se asemejaban más a los de los homínidos modernos y» en contraste con el ProcórJsuU el Kenyapi�atSt probablemente» era más terrestre. Tam¬ bién tenía los dientes con una capa mayor de esmalte y las mandíbulas más robustas» lo que sugiere una dieta di¬ fícil» de alimentos duros» o quizás con gran cantidad de tierra en elloSi ya que el K�nyapiihecus vivía principal¬ mente en el suelo* Hallazgos similares al de este animal aparecen en Europa y Turquía, Si el Urtyapith�cus es an¬ cestral respecto de los póngidos posteriores y humanos es algo que forma parte de un rompecabezas. Sus mola¬ res son más modernos» pero sus miembros no muestran la capacidad de braquiación que es característica de los póngidos posteriores. Por ello» quizá» Sue Savage-Rumbaugh acierta cuando dice que el ancestro común a los póngidos y los humanos era esencialmente un bípedo. De acuerdo con este argumento» la marcha sobre los nu¬ dillos se puede haber producido como una forma de lo¬ comoción terrestre sólo en póngidos posteriores. Como los póngidos vivos caminan sobre los nudillos no pueden
Capítulo 5
RoGonetrucción cómo pudo riente próximo del Kenyapithecus.
Evolución de los primates. Des de los prjmeros prjmates a los homínidos
el Heüopfthecus, pa¬
hacer movimientos quebrados con las manos (lo que se llama «abdudr la muñeca»)} como sólo los humanos pueden hacer. Esta última habilidad» junto con otras propias de las manos> siempre que no se utilicen para la locomoción� puede haber sido fundamental en los pri¬ meros humanos para hacer la adaptación del bipedalismocompletojcomo veremos en el próximo capítulo. PÓNGÍDOS DEL MíOCENO SUPERÍOR
Desde finales del Mioceno Medio hasta el final del Mioceno> los póngidos se diversificaron y desplazaron por muchas zonas» Sus fósiles son frecuentes en Europa y Asia y más raros en Aiirica* Esto no significa que fueran més numerosos; de hechoj los registros de fósiles sugie¬ ren que los primates del Viejo Mundo llegaron a ser más numerosos que los póngidos a finales del Mioceno y esta tendencia continua hasta nuestros dias�En la actualidad existen más especies de primates que póngidos, A finales del Mioceno el dima se fue haciendo más fÜo y seco� lo que probablemente fevoredó a las plantas más resisten¬ tes a la sequia y de paredes más gruesas. Los modernos primates tienden a estar mejor adaptados que los póngi¬ dos para consumir hojaSj por lo que los primates pudie¬ ron haber tenido una ventaja en el medio ambiente cambiante de finales del Mioceno y de después. Uno de los pórigidos que mejor se conoce de finales del Mioceno es el OreopithecuSi que vivió hace unos 8 millo¬ nes de años. Es particularmente interesante porque� a pe¬ sar de estar bien representado por sus fósiles» incluyendo uno conservado completamente en un lecho de carbón piedra, su clasificación es erúgmática. El Oreopi�ecus es¬ taba claramente adaptado a la vida en los bosques de las tierras pantanosasi tenía los brazos extremadamente lar¬
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gos y las manos con articulaciones móviles» y era un hábil braquiador. Su dentición sugiere una dieta sobre todo filó&�» aunque tanto la dentición como el cráneo tienen características únicas que sugieren afinidad con los prima¬ tes del Viejo Mundo, Resumiendo» el Oreapitheois poseía un cuerpo semejante al de los póngidos y una cabeza que se parecía a la de los monos. Debido a que su locomoción suspensoria y otras características recordaban a las de los póngidos, actualmente la mayoría de los especialistas» lo consideran un pór�do precoz y especializado» La mayoría de los paleoprimatólogos dividen a los póngidos de finales del Mioceno en dos gruposr los 5�pí�dtui€y representados por el género Sivapi�ecus, que se encuentran principalmente en el sur y occidente de Asia, y los Dryopi�ecimei representados por el género Dryopithecus� hallados generalmente en Europa. SIVAPITHECINAE. Hace algún tiempo se pensó que el Srvapithecus, que data de entre hace 13 y 8 millo¬ nes de años» era antepasado de los homínidos» Tenía mo¬ lares planos y fuertemente esmaltados» pequeños caninos y menor dimorfismo sexual que otros póngidos del Mio¬ ceno y» en algunas reconstrucciones (actualmente consi¬ deradas felsas)> aparecía una arcada dental parabólica; todas ellas son características de los homínidos. También se sabe que vivió en un ambiente mezda de bosque y sa¬ bana» y sus dientes sugieren una dieta de hierbas y semi¬ llas muy parecida a la de los primeros homínidos algo posteriores a él (aunque algunos estudiosos sugieren que la dieta del Sivapitíiecus consistía más en fintas con hueso que en hierbas y semillas).Sin embargo» como no se han descubierto muchos fósiles suyos» los investigado¬ res reconocían que era muy parecido a los modernos orangutanes en la cara» y por eso ahora se cree que lo pudo haber sido su antepasado» Estrechamente relacionado con él estuvo el piíheciiSi de dientes similares a los del Sívapíííieaíy pero» como su nombre indica» era muy grande llegando a al¬ canzar erecto los 3 metros de altura» Algunos paleoantropólogos sugieren que podría pesar alrededor de 275 kg y que llegó a crecer todavía más a lo largo de sus 10 millones de anos de existencia (véase el apartado «¿Qué ocurrió con el Gígantopitheci�»). Vivió en los bosques del sudeste asiático y se cree que pudo tener una dieta basada en la ingestión de bambú. DRYOPITHECINAE. El Dryopithecus, aparecido hace unos 15 millones de años> tenia la forma de un chimpancé y vivió en los bosques de Eurasia» Era princi¬ palmente arborícola y aparentemente omnívoro»Tenía el esmalte dental más delgado que el de los SrvapítkecnSi mandíbulas más ligeras y cúspides molares apuntadas»
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Fronteras de la investigación ¿Qu� úcurrié cm el Gi g a n t ú p i t h e cu s ? Ed el estudio de la evolución hu¬ mana intentamos centrarnos en las líneas de primates que presumible¬ mente fueron los ancestros de los hu¬ manos modernos y de nuestros primos cercanos los primates. Hubo, sin embargo, otros primates que aparentemente no dejaron descen¬ dencia aunque tuvieron mucho éxito en el sentido de que persistieron du¬ rante millones de años, Los prime¬ ros primates indudables fiaeron los Omotnyidae y los Adapídae, apare¬ ciendo en el Eoceno Inferior y vi¬ viendo a lo largo de casi 20 millones de años, mucho más que los homí¬ nidos bípedos. El porqué algunos primates vivieron durante tanto tiempo es una cuestión importante, lo mismo que la causa de su extin¬ ción. Para entender la evolución te¬ nemos que investigar no solamente por qué algunas formas pueden ha¬ ber sobrevivido tanto tiempo, sino también la causa de su muerte. Por ejemplo, ¿qué le ocurrió al primate más grande, el que vivió durante tanto tiempo? Un paleoantropólogo, Russell Ciochon,y un arqueólogo� John Olsen, han investigado las claves para comprender la extinción del «Gi¬ gantón, como le llaman ellos, que aparentemente no dejó descendien-
nví de mantener ocasionalmente la postura bípeda, de la misma forma que los póngidos y restantes primates pueden hacerlo. Como comentamos al final del capítulo anterior, los homínidos claramente bípedos aparecieron, por primera vez, en Áfi-ica� El medio físico en este continente íue pa¬ sando de la extensa selva tropical a zonas desprovistas de árboles alternando con los bosques. Hace entre 16 y 11 millones de años se fue produciendo una sequía progreáva que continuó durante el Plioceno. Esto provocó que los bosques lluviosos africanos, privados de la intensa humedad y de las abundantes lluvias de épocas anterio¬ res, se fueran convirtiendo en amplias regiones de saba¬ nas (zonas herbáceas) salpicadas de zonas de árboles de hoja caduca. Los primates trepadores no perdieron sus antiguas costumbres de forma total ya que persistieron \o$ bosques en las regiones más húmedas� pero la selecdón natural continuó actuando en favor de los arboricolas que subsistieron en esas regiones boscosas� si bien las regiones más secas y desprovistas de ma�a arbórea pro¬ bablemente favorecieron las condiciones para la adapta¬ ción a la vida en tierra tanto de los primates como del resto de animales que las habitaban. En la linea evolutiva que lleva hasta los humanos, estas adaptaciones incluyen ú bipedalismo. Teorí a s para la evolución del bepedalismo ¿Qué es lo que pudo favorecer la aparición del bipedalismo en los homínidos? Existen varias explicaciones
Lo s primeros ho m í ni do s
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posibles para su desarrollo. Una de las ideas es que el bipedalismo fue adaptativo para la vida entre las altas hierbas de la sabana, ya que en postura erguida se pue¬ den divisar mejor a los posibles depredadores, lo mismo que a las potenciales presas. Aunque esta teoría no responde adecuadamente al desarrollo del bipedalismo� sí es cierto que tanto los mandriles como otros monos del Viejo Mundo que viven también en la sa¬ bana pueden, ocasionalmente, tomar una posición erectaj sin llegar a desarrollar totalmente la locomoción bípeda. Recientes investigaciones sugieren que las re¬ giones de África Oriental� donde se desarrollaron los primeros homínidos realmente� no eran predominante¬ mente zonas de sabana, sino una mezcla de zonas arbo¬ ladas y de claros. Otras teorías destacan la importancia de dejar libres las manos. Si el animal tenia que desarrollar alguna acti¬ vidad manual crítica mientras se desplazaba� la selección natural pudo fan�orecer el bipedalismo para que con las manos Übres se pudieran efectuar otras actividades al mismo tiempo� PerOj ¿qué actividades manuales pudie¬ ron ser tan esenciales? Gordon Hewes sugiere que esta actividad esencial pudo ser el llevar alimentos en las manos; si era necesa¬ rio llevar alimentos de un lugar a otro, el desplazamiento sobre los miembros inferiores pudo ser adaptativo. He¬ wes destaca la importancia de poder transportar la carne de la caza o carroña�pero muchos paleoantropólogos ac¬ tualmente se cuestionan si los primeros homínidos caza¬ ban o eran carroñeros. Sin embargo, la habilidad para poder transportar cualquier tipo de comida a un lugar a salvo de los depredadores, pudo ser una de las mayores ventajas del bipedalismo.G. Owen Lovejoy sugiere que el transporte de los alimentos pudo ser importante� pero por otras razones, pues si los machos aprovisionaban a las hembras y a sus crías llevando la comida hasta ellos, las hembrasi al no tener que desplazarse, habrían podido dedicar sus energías a cuidar y sacar adelante a más crías. En este caso� el bipedalismo en los proto-homínidos les permitió transportar la comida favoreciendo su repro¬ ducción, Pero transportar los alimentos o aprovisionar a la femilia puede que no fuera el único beneficio de liberar las manos mientras se andaba, pues el mismo acto de ali¬ mentarse también es importante. Así, Clifford lolly man¬ tiene que el bipedalismo de los primeros homínidos les permitía recoger eficientemente las pequeñas semillas y nueces, ya que podían utilizar ambas manos para coger¬ las y alimentarse con ellas llevándolas directamente a la boca. Según esto� la selección natural no habría favore¬ cido el bipedalismo porla locomoción en si, sino para ha¬ cer el forrajeo más eficiente, En los ambientes cambiantes
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Ca p í t ul o 6
Los primeros homínidos
dú África Oriental� donde los bosques estaban cediendo terreno a los espacios abiertos y a las sabanas� la posibili¬ dad de efectuar un eficaz fonajeo de pequeñas semillas y nueces pudo proporcionar ventajas importantes para la supervivencia» viéndose esto fevoiecido por la selección natural. El bipedalismo también se pudo ver favorecido por la selección natural porque liberar las manos debió de per¬ mitir a los proto-homínidos usarj e incluso febricarj herramientas que podían llevar con ellos en sus des�azamientos. Considerando lo ventajoso que ese uso pudo haber sido> Sherwood Washburn mantuvo que al¬ gunos primates actuales que viven en el suelo extraían raíces para comer� «y si pudieran utilizar una piedra o un palo podrían conseguir el doble de comida para ali¬ mentarse», David Pilbeam sostiene que la utilización de herra¬ mientas por los primates en campo abierto pudo incre¬ mentar de forma apreciable el número y la variedad de plantas comestibles: de acuerdo con sus posibilidades como alimento» muchas de las plantas comestibles de las zonas herbáceas probablemente tenían que ser machaca¬ das o frotadas con la ayuda de alguna herramienta para poder ser consumidas. Estas herramientas también se pudieron utilizar para matar y descuartizar animales para comer. Sin herramientas� los primates en general no están bien capacitados físicamente para cazar o recoger carroña de forma regular pues sus dientes y mandíbulas no son lo suficientemente fo.ertesj ni su velocidad co¬ rriendo es lo suficientemente rápida. Por tantOj la utili¬ zación de herramientas para matar y descuartizar las presas pudo favorecer las posteriores habilidades para explotar los recursos alimentarios existentes. Rnalmente» las herramientas se pudieron utilizar como armas contra los depredadoreSj que debieron ser una gran amenaza para los relativamente indefensos protohomínidos. En opinión de Milford Wolpoff» fue la ventaja de poder llevar armas continuamente la respon¬ sable de sustituir el bipedalismo ocasional por el sistema definitivo de locomoción. En particular� Sue Savagelíumbaugh piensa que la habilidad para abducir o doblar la muñeca pudo permitir a los primeros humanos rodillas y pies* Como dice Adrienne Zihlmanj la presión sobre la parte inferior del cuerpo es incluso mayor en las mujeres ya que éstas tienen que so¬ portar un peso extra durante el embarazo y cuando lle¬ van en brazos a sus hijos pequeños. Pero» a pesar de todo» el bipedalismo tiene más ventajas que desventajas; de lo contrario nuestros ancestros nunca hubieran desarro¬ llado la postura bípeda. Debemos recordar también que la evolución del bipe¬ dalismo exigió algunos cambios dramáticos en el esque¬ leto del póngido ancestral. Aunque los primates actuales pueden andar de forma bípeda» no pueden mantenerse en esta postura durante mucho tiempo. Para ser comple¬ tamente bípedo» el esqueleto del póngido ancestral tuvo que experimentar algunas modificaciones; los mayores cambios que permitieron que los primeros homínidos fueran bípedos son los que experimentaron el cráneo» pelvis» rodillas y pies, A continuación veremos cada uno de estos cambios. Tanto en los pórfidos antiguos como en los actuales» la columna vertebral entra en el cráneo por su parte posteúoT, lo que tiene sentido» porque los póngidos general¬ mente andan a cuatro patas» con la columna vertebral prácticamente paralela al suelo. En los homínidos bípedos la columna sostiene al cráneo por su parte inferior� donde está el agujero denominado bramen maguim� de esta fbima» cuando los homínidos se hicieron bípedos» el crᬠneo se situó en la parte superior de la columna vertebral. La forma de la pelvis en los póngidos antiguos y mo¬ dernos es considerablemente diferente de la de los homí¬ nidos bípedos. Las pelvis de los póngidos son largas y aplanadas» y forman una placa ósea en la parte doisal in¬ ferior en la que se insertan los músculos de las piernas, Fn los homínidos bípedos la pelvis tiene una forma más redondeada» soportando los órganos internos y bajando el centro de gravedad del cuerpo» permitiendo un mejor equilibrio sobre las extremidades inferiores. Estos cam¬ bios han hecho posible que los homínidos puedan mover sus piernas hacia delante en forma de zancada (como si se diera una patada a un balón de fütbol).En comparaáÓTíy los póngidos mueven sus piernas hacia delante (cuando caminan en forma bípeda)» pero desplazando su pelvis de lado a lado» no echando la pierna hacia delante de forma alternativa como hacemos nosotros.
Otro cambio asociado con la habilidad de los homíni¬ dos para llevar las piernas hada delante es nuestra pos¬ tura de «patizambo». Las extremidades inferiores de los póngidos cuelgan derechas de la pelvis; las piernas de los homínidos» por el contrario» forman un ángulo interno entre ellas. Esta configuración no sólo nos ayuda a mo¬ ver las piernas hacia delante» sino que también nos fedlita mantener el centro de gravedad en la línea media del cuerpo» p or tanto» el centro de gravedad oscila de lado a lado cuando corremos. Finalmente» los pies de los homínidos bípedos pre¬ sentan dos cambios importantes en reladón con los de los póngidos. En primer lugar» el pie de los homínidos tiene un grupo de huesos en el tobillo muy engrosados para resistir las foerzas que redben como resultado del bipedaljsmo habitual. En segundo lugar� el pie de los ho¬ mínidos forma un arco que también ayuda a amortiguar dichas fuerzas recibidas al caminar. Sabemos que este arco es vital para nuestro bipedalismo habitual» porque las personas con «pies planos» a las que le felta este arco tienen problemas crónicos en sus pies» tobillos» rodillas y espalda. ¿Cuándo se produjeron estos cambios? No lo sabemos con seguridad» pero los fósiles encontrados en África Oriental -Etiopía» Tanzania y Kenia- muestran clara¬ mente que los homínidos bípedos vivieron aUí desde hace entre 4 y 3 millones de años» o quizá antes. De he¬ cho» existen pruebas de que el Ardipith�cus ramiduSi quizá un antepasado homínido» caminaba de forma bí¬ peda hace unos 4�4 millones de años.
Ardipitfiecus: ¿El primer póngido bípedo? En 1992� un equipo de investigadores dirigido por el antropólogo Tim White encontró un depósito fósil de 4,4 millones de anos en Aramis» en la región de Medio Awash (Etiopía). Allí hicieron un notable descubri¬ mientos 17 fósiles» entre los cuales puede encontrarse el homínido más antiguo (desde entonces se han encon¬ trado otros noventa). Aunque al p r i n d pi o se pubÜcó como una nueva espede de Awsíraíopíííiecws» White y sus colegas pensaron que ramiduSi d nombre espedfico dado al nuevo fosil» era suficientemente distinto de los australopithecinos» tratándo de justificarse un nuevo gé¬ nero: el jWipíííiíCMí. Lo que hace al Ardipith�m rami dm único es su com¬ binación de la dentición similar a la de los póngidos» lo¬ comoción bípeda y» sobre todo» esqueleto de t i po homínido. Como los póngidos»A ramídus tiene los dien¬ tes relativamente pequeños» con esmalte fino y caninos
Capítulo ó
No $ab$mo$ cómo era el �rupo anoe$tral común de lo$ póngido$ V de lo$ homínido$, pero e$ta imagen digital es un híbrido entre la cara de un humano moderno y la de un chimpancé, lo que demuestra que no estamos tan lejos uno del otro.
Lo s primeros ho m í ni do s
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ran en el suelo todo el tiempo. Todos ellos» incluidos los de aparición posterior» eran capaces de trepar y despla¬ zarse por los árboles según refleja la estructura de sus brazos y la longitud de sus piernas junto con otras carac¬ terísticas de su esqueleto, Los australopithecinos muestran una considerable variabilidad y los paleoantropólogos dividen al género Auítrahpitkevuí en» al menos» seis especies» aunque pudo haber otras más; Según algunos estudiosos» los recientes hallai�os habrían descubierto dos nuevas especies de Australopitkevus: el A Bahrelghazáli y el A Garhí (réose el apartado «Nuevos australopithecus sorprendentesí>), La mayor parte de los especialistas divide a las diferentes especies de australopithecinos en dos grupos: los austra¬ lopithecinos «gráciles» y los «robustos», Los australopithecinos gráciles incluyen el A artametisist el A a/urenisíí y el A africanus.Todos ellos poseen dientes pequeños y tanto la estructura muscular fecial como la dental son más Ügeras que las de los australopi¬ thecinos robustos. El Anstríáopilhecus amnterísis, que
relativamente grandes. Sin embargo� los huesos de sus brazos son d« tipo liominido y la base dé. cráneo mues¬ tra el Jüramen rnagmm colocado bajo el cráneo� lo mismo que los homínidos bípedos. Aunque se necesitan más pruebas para estar totahnente seguros� el Ardipithecus ramidtis parece ser el homínido más antiguo encon¬ trado hasta ahora.
Atistralopitfiecus-. el primer homínido definido Aunque existen algunas dudas sobre el estatus de Ardipithecus como un género homínido» no existe ninguna de que los australopithecinos (pertenecientes al género Austrahpith�nis) fueron homínidos (la Figura 63 mues¬ tra los yacimientos donde se han encontrado australopi¬ thecinos) . Su dentición� que presenta caninos pequeños» molares planos> gruesa capa de esmalte y arco dental pa¬ rabólico» es una prueba indudable de que eran completa¬ mente bípedos. Sus esqueletos no solo reflejan este rasgo» sino que en Laetoli (Tanzania) se han encontrado más de 50 huellas de pies con aspecto humano de más de 3j6 mi¬ llones de anos» que confirman que los homínidos ya eran totalmente bípedos. El bipedalismo de los australopithe¬ cinos no significa que estos primeros homínidos estuvie¬
Figura 6.3. Yacimientos d e AitstraiopUit&cus Rietites: Tbmado de Rusdell L. Ciochon y John G. Fleagle, eds,j The Human Eroititwn Soun:? iwíJJt, Copyright ©1993. Kíproducído con permiso de Pearson Eduíatíoíii Inco Upper Saddle Kiveti NI 0743S.
IOS
Ca p í t ul o 6
Los primeros homínidos
Temas de actualidad Nu«iT(r5 Australopithecus sorprendentes En su descripción dí bs nuevas espedes de AustrahpithecK� garhi, el antropólogo etíope Berhane Asfew explica que la palabra significa «sorpresa» en la lengua etíope. El nombre se debe a que ni él ni nin¬ guno de sus colegasi ni tampoco nadie de la comunidad de paleoantropólogos, esperaba encontrar una nueva espede de Australopithecus cuando comenzaron a trabajar en Middle Awash en 1996, En 1992 el mismo equipo había descubierto al Árdypithecus mmidust en tanto que los Australopithecus ammensis y Aisiralopitheats bahretghazali se descu¬ brieron en los años siguientes. En sólo cinco años se habían descu¬ bierto cuatro homínidos arcaicos. Tkrabién eran sorprendentes las característícas esquelétícas y denta¬ les del A garhi que se encontró en rocas datadas en unos millones de aiios aproximadamente» Asfew y sus colegas esperaban que su ha¬ llazgo pertenedera a una de las espedes conoddas de Australopi¬ thecus, pero no fiae así ya que el gé¬ nero no era, daramente> Hmíí, pues ni sus dientes ni su mandíbula lo eran� ni tampoco lo era A afarensh ni ninguna otra de las espe¬ cies de robustus, A �arfií tenía los molares mayores que A afarensis� aunque no tan grandes la cara ni la mandíbula como las espedes de robttsUis. También le feltaba el gran tamaño cerebral de los Homo. Va¬
rios huesos de las extremidades ha¬ llados en el mismo lecho rocoso pa¬ recían de la especie A, afaremis� por lo que se consideró que el A garkí era pareddo a éste> aunque con los molares más desarrollados� Lo más sorprenderíte de todo fue que en las mismas rocas que el A aparecieron restos de animales descuartizados, algunos de cuyos huesos estaban cerca de los restos del Australopiáieois y mostraban señales de haber sido descamados con algún instrumento de piedra Desgradadamente no se encontró ninguna he¬ rramienta lítica� aunque la huella de las marcas demostró que se tuvo que usar alguna, y� como no se encontró en el área ninguna otra especie de homínidos, era razonable p>ensar que el A. Gflfíií fue febricante de herra¬ mientas y carnicera Asfew y sus co¬ legas sugirien?n que el A garhi está en el lugar correcto� en el tiempo co¬ rrecto y tiene las características físi¬ cas y de conducta adecuadas para ser un antepasado directo del primer gé¬ nero ífoíní?. Igualmente sorprendente es el Austrahpithecus bcArelghazali, no sólo por sus características físicas � sino porque fue encontrado al oeste, en lo que actualmente es el Chad central El A bakrelghaoili es el pri¬ mer homínido encontrado fuera del valle del Rift (al este de África) y hasta su hallazgo pocos creían que pudieran existír restos de homínidos
puede tener alrededor de 4,2 millones de anos, es el más antiguo de todos los australopithednos, habiéndose ha¬ llado tínicamente en el norte de Kenia. Otros homínidos hallados en África Oriental, de entre 4 y 3 millones de años de antigüedad, son clasificados por la mayoría de
en esa zona. El A íwíireí�/iímííí tíene una datadón de alrededor de 3 mi¬ llones de años, siendo muy similar a los fósiles de su contemporáneo A afarertsis del valle del Rift. Difíere de é en algunos aspectos (sus premola¬ res, por ejemplo, tienen el esmalte más fino y sus raices mejor defini¬ das), aunque la mayor diferencia está en el lugar en que vivió. La ma¬ yoría de los dentíficos asume que los homínidos primitivos presentan una adaptación específica al valle del Rift si bien el descubrimiento de un antiguo Australopithecus a unos 2,500 km al oeste de este valle pone en duda dicha suposición, A bahretghazali sólo está re¬ presentado por una simple y fi�agmentaria mandíbula y sólo se ha encontrado un puñado de fragmen¬ tos del cráneo y de los huesos de sus miembros. Mientras no tengamos más datos fósiles no podremos sa¬ ber la importancia de esta espede, ni tampoco cómo ni cuándo pudo cambiar, ni tampoco cómo influyó en la evolución de los homínidos* Fuentes: Berhane A$few, Tlm White, Owen Lovejo)� Btuí:� Látimei:, Scott Simpson yGlea Suwa, '¡tAustrahpitkecasgarhi: A Néw Species of £¿ily Hojuioid bom Ethiopia�, 234 (1999); 629'H; Micbd Fnmet, Alálti BeduvJkiü, Yves Coppetts, flile Hetats, Akdjí H, E, Moutay? y David PUbeanii «The FÍT$t AustráloplthecLae 250D (CUometeis West of the Rjfi Valky (Chad)», NífIÍuit, 37S (1995): 273-75,
los paleoantropólogos en la especie A�$tralQpith��$ afarmsis. Unos pocos, sin embargo, creen que estos ho¬ mínidos no deberían clasificarse como espedes distintas, puesto que ambos recuerdan a la espede posterior de Australopithecus africanus, que vivió entre hace 3 y
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2 millones de añoSi principalmente en el sur de África» aunque la separación temporal y espacial de estas formas lleva a muchos paleoantropólogos a creer que eran espe¬ des diftrentesLos australopitbecinos robustos tienen la dentición mayor que las espedes gráciles� así como caras y mandí¬ bulas robustas. Algunos de estos individuos presentan una cresta ósea llamada cresta sagital en la parte superior de su cráneo; a esta estructura se sujetaba la fuerte mus¬ culatura de sus grandes dientes y mandíbulas. La especie más antigua de robustus es el Austndopithecm actiopiCfiSi que vivió en Africa Oriental hace entre 2 J y 2 3 mi¬ llones de años. La mayoría de los paleoantropólogos cree que los últimos australopithecinos robustos� que vivie¬ ron hace entre 2j5 y l millón de años» formaban dos es¬ pecies: la procedente del este de Áfiíca Oriental, el Australopithecus boisei y la procedente del sur de África» el Austraíopiihecus robustus* fl cuadro que se perfila de esta breve visión general de los australopithecinos es de diversidad. Parece que han sido especies muy diferentes e incluso que algunas de ellas han tenido un alto grado de variabilidad. Todos vi¬ vieron en entornos similares» tanto en el este como en el sur de África� aunque aquellos ambientes eran diversos y cambiantes» de forma que los bosques dieron paso a tierras abiertas y herbáceas. Los grandes bgos se dividie¬ ron debido a los plegamientos y a la actividad volcánica del valle del Rift de África oriental. Y el dima continuó calentándose hasta finales del Plioceno» hace unos 2 millones de años- La diversidad aparente de los australopithecinos puede reflejar una rífdiación i�aptativa (dispersión y divergencia) de los homínidos bípedos a estas con didones dinámicas del medio ambiente- Pero sea cual sea la causa» siempre que pensamos en los australopithecinos parece que la palabra dave es diversidad. Veamos en detalle las distintas espedes de Australopi¬ thecus.
Los primeros homí ni dos
cho que «el A flfWíflííwíí es como el A afarensis en el crᬠneo y como el género Híj/tiíj en d resto del esqudeto», úfdreRjfs. Es quizá la especie me¬ de jor representada australopithecinos. Al menos doce individuos de esta espede se desenterraron en Laetofi» Tanzania. Aunque la mayoría de los restos erKiontrados consisten� sobre todo� en dientes y mandíbulas» no hay duda de que los homínidos de Laetoli eran bípedos» ya que foe precisamente en este yadmiento en donde se en¬ contraron las huellas de pies que hemos comentado. En unas de días se puede observar cómo dos individuos que caminaban juntos» erguidos» dejaron su rastro en el sudo hace 3»6 millones de años. El resto de estos 35 individuos foe encontrado en otro yacimiento� Hadar (Etiopía). Los hallazgos de Hadar son destacables por su complejidad ya que aunque los paleoantropólogos» encuentran� fre¬ cuentemente» restos de cráneos y mandíbulas» en Hadar también se encontraron otras partes d d esqudeto. Así» el paleoantropólogo Donald Johanson encontró el 40 por ciento d d esqueleto de un homínido hembra a la que llamó Lucy» por la canción de los Beatles «Lucy in the Sky with Diamonds». La datación de los homínidos encontrados en Laetoli sugiere que vivieron hace entre 3»8 y 3»6 millones de
Australopitecínos GRÁCÍLES
La especie más anti¬ de los es el A ammensis. Se ha gua australopithednos encontrado en varios lugares del norte de Kenia» con una datación de entre 3»9 y 4�2 millones de años, A pesar de que existen discusiones sobre algunos especímenes» induidos en d A ammensist la visión general es que se tra¬ taba de un homínido de tamaño pequeño bípedo y dentadura similar a la del posterior A afarensis. Los es¬ pecímenes más controvertidos tienen largos huesos» que sugieren un bipedalismo bien desarrollado» aunque sus codos y rodillas se parecen más a las del posterior género Homo que a otras especies de Aisíratopíííiecws, Se ha di¬
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El 40 por ciento del esqueleto de una hem¬ bra óe Austraiopithecus afarensis� llamada Lucv su descubridor, Donald Johanson.
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Ca p í t ul o
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Los primeros homínidos
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La expedición de Mary Leakey� en Laetoli (Tanzania)� descubrió una senda de más de 64 km de larga que te¬ nía huellas de pies fosilizadas de alrededor de 3,6 mi¬ llones de años. Aquí s e muestra una de las huellas del pie dejadas por dos adultos que claramente caminaban erguidos. La huella muestra nítidamente el arco del pie bien desarrollado y el dedo gordo dirigido hacia de¬ lante.
años, Aunquí se pensaba que Lucy y los otros homínidos de Hadar eran tan antiguos como aquéllos� las últimas dataciones recientes sugieren que son algo más recientes: menos de 3�2 mülones de años y en el caso de Lucy vivió hace aproximadamente 2�9 millones de años* El am¬ biente en el que vivió Lucy era una sabana semiárida con una estación lluviosa y otra seca. La existencia de colecciones tan extensas de fósiles ha llevado a paleontólogos como Donald Johanson y Tim White a efectuar un retrato de estas antiguas especies de homínidos. El A afare�ísis fue un pequeño homínido� pero» como la mayoría de los póngidos vivos� presentaba dimorfismo sexual. Las hembras pesaban alrededor de 30 kg y medían algo más de 1 metro de altura� en tanto que los machos pesarían unos 40 kg y medirían alrede¬ dor de l m de altura.
Los dientes de A, afarems eran grandes si los compa¬ ramos con el tamaño de su cuerpo y su esmalte era de gran espesor. También tenían caninos grandes seme�tes a los de los póngidos que no sobrepasaban los dientes adyacentes. Pero a pesar de su gran tamaño� los caninos no rozaban los dientes inferiores� pues se alojaban en un diastema (espacio entre los dientes)� y� por lo tantOj no tenían problemas para efectuar movimientos laterales con la mandíbula inferior» Esto es muy importante ya que estos movimientos laterales de la mandíbula inferior permitían al A afarer�is masticar eficazmente semillas y nueces. Tanto el engrosamiento del esmalte de los mola¬ res como el patrón de las coronas sugieren que esos ali¬ mentos duros constituían una parte importante de la dieta de estos homínidos. El cráneo del A afarensis se co¬ rresponde con la forma de su dentadura: la cara se alarga debido al gran tamaño de los dientes y la mandíbula� y la base del cráneo tiene unas prominencias óseas que per¬ miten la inserción de los potentes músculos del cuello necesarios para sujetar la cabeza. Su cerebro era pequeno� de unos 400 centímetros cúbicos (cc)� aunque re¬ lativamente grande si lo comparamos con su tamaño corporal. Las extremidades superiores e inferiores del A afaren¬ sis eran aproximadamente de la misma longitud� y los huesos de los dedos y pulgares estaban curvados� lo que sugiere que tenía poderosos músculos. La mayoría de los estudiosos cree que las proporciones de sus miembros� y sus fuertes manos y pies» apuntan a un estilo de vida par¬ cialmente arborícob- En otras palabras» parece que el A afarensis pasaba gran parte de su tiempo en los árboles» probablemente alimentándose» durmiendo o protegién¬ dose de los depredadores terrestres. Sin embargo» los huesos de la pelvis y de las extremidades inferiores indi¬ can que caminaba erguido cuando se encontraba en el suelo; su pelvis es ancha y acampanada» aunque tiene la forma ovalada de todos los homínidos posteriores. Las piernas están curvadas hacia dentro y los pies poseen un arco y un tobillo que recuerda mucho a los de los posteñores homínidos. Los análisis detallados de las pisadas de Laetoli sugieren que el A afarems pudo tener un paso más corto y menos eficiente que el de los humanos mo¬ dernos. A pesar de que el A afarensis es la especie de Austrabpíth�cus mejor representada» no fue la primera especie descubierta. A continuación veremos a la especie del Austrahpitheoís africanus. Aii«trci[0|�ítA�rui africanuB. En 1925» Raymond Dart» profesor de Anatomía en la Universidad de Witwatersrand» en lohannesburgo (Sudáfiica)» presentó la pri¬ mera prueba de que existió un homínido erecto y bípedo
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ín d Plioceno. Cuando sepan? los huesos de la matriz del material encontrados en la cueva de Taung� en el límite del desierto de Kalahari>Dart se dio cuenta de que lo que había encontrado era algo más que los huesos de un pon¬ id o , Dart describió así su experiencia: El 25 de diciembre (1924) partí la roca; podía con¬ templar la cara� a pesar de que d lado derecho todavía es¬ taba cubierto. La criatura que había tenido �e cerebro tan grande no era un Anthropoidea gigante como� por ejemplo� un gorila. Lo que apareció fue la cara de un nino con un juego completo de dientes de leche y sus molares permanentes en el momento justo de salirle, Por su dentición� Dart identificó al fósil como los res¬ tos de un niño de entre 5 y 7 años (aunque análisis re¬ cientes con microscopio electrónico sugieren que el niño no tendría más de tres años y medio), Dart denominó al espécimen como Awyíraíopíífiecwy ayrícsnws.que significa «simio del sur de África»» Dart estaba en lo cierto al pen¬ sar que el cráneo correspondía a un animal bípedo y basó su conclusión en el hecho de que el foramen magnum miraba hada abajo� lo que indicaba que la cabeza estaba situada directamente sobre la columna vertebral Los incisivos y caninos del niño de Taung eran cortos y� por tanto> más de humano que de póngido. La conclu¬ sión de Dart fue acogida con bastante escepticismo y oposición, siendo uno de los motivos el hecho de que hasta entonces los científicos pensaban que los homíni¬ dos eran originarios de Asia. No obstante� existían tam¬ bién otras razones: Dart encontró un solo fósil que� además, no era de adulto, y en una época en la que toda¬ vía no se había descubierto ningtin otro en África�ya que
Cráneo fósil de un Austraiopithecus africanus (STS 5) apodado «La Señora Pies» descubierto por Robert Broom en la cueva de Sterkfontein en 1947
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Reoonstruoción de una madre Austr�IopitheciJs 9fric�nu$(�n
$u hijo cogiendo bayas de un árbol. Al igual que el A sfs� el A africsnue probable¬ mente pasaba bastante tiempo en lo$ árboles tanto para ali¬ mentarse como para evitar a los depredadores.
los restantes Austrahpitecírws no fueron hallados alU hasta después de 1930� cuando Robert Broom recogió al¬ gunos fósiles de la cueva de Sterkfontein cerca de [ohannesburgo. Las conclusiones de Dart y de Broom no empezaron a aceptarse hasta después de 1945, cuando Wilfred Le Gros Clark> un profesor de Anatomía de Ox¬ ford, apoyó la tesis de que aquellos hallazgos eran real¬ mente de homínidos» Desde que se descubrió el niño de Taung hace más de 75 años, se han desenterrado más de cien Aisíraíopítoínos semejantes en las cuevas de Sterkfontein y de Makapansgat en Sudáfirica, De esta gran cantidad de muestras se ha podido elaborar un cuadro completo del A africartus: «Su cráneo es relativamente redondeado con una frente bastante bien desarrollada. Las moderadas arcadas supraorbitals sobresalen por encima de un rostro bas¬ tante prominente». La capacidad craneal para los dife¬ rentes ejemplares descubiertos en Taung y Sterkfontein se estima entre 428 y 485 cc.
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Lo mismo que d A afatfmsy d. A africanus tenia ub reducido tamaño; los adultos median entre 1 y 135 m de altura> pesaban entre 28 y 40 kg y presentaban dimor¬ fismo sexual. Las grandes mandíbulas sin mejillas de un A africanus recuerdan a las del A a/arensíí�aunque algu¬ nas de las características dentales del A africanus son si¬ milares a las de los humanos modernos (incisivos anchos y cortos y caninos pequeños). Aunque los premolares y molares eran mayores que los de los humanos actuales� su forma era muy similar� siendo� presumiblemente» sus funciones también parecidas. La datadón de los ejemplares de Mtstrahpitedtws en¬ contrados en las cuevas arcillosas de Sudáfrica es difícil� que no se puede aplicar con precisión ninguna de las técnicas de datadón absoluta existentes» aunque sí las de datación relativa* La comparación de la feuna encon¬ trada en sus mismos estratos sugiere que los A africanus de Sudáfrica vivieron hace entre 3 y 2 millones de años, El clima probablemente fue semiárido� no muy diferente del actual. AUSTíy�LOPÍTECLISÍOS ROBUSTOS Losaustralopithecinos robustos vivieron en África del Sur y Oriental hace entre 2�5 y 1 millón de años» siendo completamente diferentes de los australopithecinos grᬠciles. Ciertamente algunos pakoantropóhgos creen que estos fijsiles son diferentes y que tienen que clasificarse en un género distinto» al que denominan literalmente «cerca de los humanos». Los australopithednos robustos fueron encontrados por primera vez en cuevas de Sudáfrica, en Kromdraai y en Swartkrans y más tarde en África Oriental, en el valle del rio Omo en Etiopía y en el barranco de Olduvai en Tanzania. La ma¬ yoría de los paleoantropólogos clasifica a los australopithecinos robustos procedentes de Sudáfrica -que tienen entre 1,8 y 1 millón de años- como A robustust en tanto que las formas procedentes de África Oriental, datadas de hace entre 2,2 y 1J millones de años, como A boisei, la tercera espede de robustus, A ae�iopicus, es incluso anterior (datada de hace más de 2�5 millones de años) que podría haber sido un antepasado del A bpííeí ( v�oíí d apartado «Tratando de encajar los nuevos descubri¬ mientos de los Austrahpithecus rcbustus más antiguos»). En contraste con los Austrahpithecus gráciles, los ro¬ bustos tienen mandíbulas más grandes, con molares y premolares mayores aunque sus incisivos son menores, con fuertes dispositivos musculares para masticar y cres¬ tas sagitales bien desarrolladas para soportar una masticadón interesa. Además los A robustus y A boisei tenían un volumen craneal algo mayor (entre 490 y 530 cc) que las especies de gráciles-
Algunos han pensado que los Australopithfcus robus¬ tus eran bastante más grandes que los otros australopithecinos (de aquí el término rpbHííwj). Pero cálculos recientes confirman que estos J�tralopitíiecus no eran ágnificativamente mayores en peso corporal o en altura que los demás austral opithecinos. Los robustus tienen cráneo y mandíbulas más fuertes�lo mismo que los dien¬ tes. Si las formas del robustus tuvieran mayor tamaño corporal, su capaddad cerebral ligeramente mayor no hubiera sorprendido, ya que los animales mayores suelen tener mayor cerebro� sin embargo> teniendo tamaños corporales similares a los A africanus� sorprende que su cerebro sea relativamente mayor. AuftratdpítAerus aetbiopkus. El A aelhiopicus es el más antiguo y también el más recientemente conocido de losaustralopithednos robustos. Está representado por un pequeño grupo de fósiles encontrados en el norte de Kenia y en el sur de Etiopía, datados de hace entre 2 3 y 2,7 millones de años. Su espectacular halla��o -un crᬠneo casi completo (conocido como el «Cráneo Negro») debido a su color oscuro- se produjo en 1985. Aunque existen pocos fósiles, parece daro que d A aethiopicus es bastante diferente de los demás Aisíratopíí/iecwí. Difiere de los A afarensis en que, pese a aparecer casi en los mis¬ mos lugares e induso con la misma datación, su dentidón es mucho mayor, especialmente en los molares, grandes huesos malares, rostros prominentes en forma de plato (redondos y aplanados) y grandes crestas sagita¬ les- En el resto de sus características son similares a los A afarensis, y� sobre todo, d A íjef/iiíjpíaiy se parece al A afareusis con un aparato dental mucho más grande. En 1936,RobertBroom, conservador de Paleontología de vertebrados en el mu¬ seo de Transvaal en Sudáfrica, comenzó a buscar piezas fósiles para el museo> especialmente homínidos que pu¬ dieran apoyar al antiguo descubrimiento dd niño de Taung porRaymond Dart. En 1938, un cantero entregó a Koom una mandíbula de homíninido que había en¬ contrado cerca de la cueva Uamada Komdraai. Broom comenzó inmediatamente a excavar la cueva y en pocos días fue capaz de encajar las piezas del cráneo de una nueva especie de australopithedno: d Jiustralopithecus robustus, Broom habría esperado otra muestra Australopithecus africani� (dhabía encontrado ya un cráneo de A afri¬ canus en 1936), pero este ejemplar era diferente: tenía dientes y mandíbula mayores y cara más aplanada que d A ííjHfíífíWí.Tras estudios posteriores, Broom decidió que d fósil representaba un género homínido completamente nuevo al que denominó Píjrattrfirppwí; la denominación
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nar la proporción de plantas y de alimentos animales en la dieta» sugiere que el A rpbwsíw era omnívoro. Por tanto» este Amtralopithtvus pudo necesitar grandes dien¬ tes y mandíbulas aptas para masticar semillas» nueces y tubérculos» aunque eso no significa que no se alimentara también de otras cosas. ¿Estaba el A robustus adaptado a un medio ambiente más árido que el A afriumu�� Es una posibilidad» pero la evidencia es controvertida» Lo cierto es que la mayoría de los paleoantropólogos piensa que el A rpÍJwyíwí se extin¬ guió hace poco menos de un millón de anos y que no es un antepasado nuestro»
Cráneo fósil de un Austraiopithecüs robustus [SK46) descubierto por Robert Broom en la cueva de Swartkran$ en 134$. Nóte$e la cre$ta sagital, la gran arcada zigomática v grandes molares.
para el nuevo género de Broom no fiae ampliamente aceptada en aquella época (los científicos pensaban que el espécimen pertenecía a alguna especie de Amtralopith�oís) peroi como hemos dicho antes» muchos estudiosos creen todavía que los An�tralopith��m whustus son lo bas¬ tante diferentes como para separarse» formando el género
Msei� El legendario paleontó¬ logo Louis Leakey comenzó su búsqueda de un ancestro humano en 1931 en el barranco de Olduvai» al oeste de Tanzania. No fue hasta 1959 cuando sus esfuerzos se vie¬ ron recompensados con el descubrimiento del Aíjím/í?pitkecus boisei (nombre dado en agradecimiento a su benefector» Charles Boise), Los aproximadamente 30 anos que Leakey» su esposa Mary Leakey y sus hijos (in¬ cluyendo al paleoantropólogo Richard Leakey) trabaja¬ ron en Olduvai antes de encontrar el A ÍWííeí no foeron inútiles. Durante esos anos» los Leakey acumularon una rica colección de homínidos fósiles» estableciendo una detallada comprensión del antiguo medio ambiente de la región. Como veremos en el próximo capítulo»
Paranthropus, Durante la década de los años cuarenta» Broom aña¬ dió muchos fosiles nuevos de A robustus y de A afrkanus a las colecciones del Museo de Transvaal» pero sus descubrimientos dieron lugar a un problema: ¿cómo era posible que dos especies de homínidos tan diferentes evolucionaran en el mismo medio ambiente? En 1954» John T. Robinson propuso que el A afrimnus y el A n?bustus debían de tener diferentes adaptaciones dietéticas» siendo el A afrimnus omnívoro (se alimentaba de carne y plantas) mientras que el A robustas sería vegetariano» adaptado para masticar con fuerza» La evidencia mos¬ trada por la microscopía electrónica apoya la tesis de Ro¬ binson de que el A robustus comía alimentos duros» tales comonuecesísemillas y tubérculos- Pero ¿qué diferencias existían respecto del A africanus�. Los análisis recientes sugieren que este Austrahpithecus también comía los mismos alimentos duros, La idea de que el A robustus era estrictamente vegeta¬ riano también se ha puesto en duda porque una técnica química -relativamente nueva- que analiza las propor¬ ciones estroncio-caldo en dientes y huesos para determi¬
Cráneo fósil de Austraiopithecue ¿oife/descubierto por Louis y Mary Leakey en 1359. Obsérvese su gran cara y dientes, así como la cresta sagital.
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Fronteras d e la investigación Tratandú de encajar los nuews descuBrimientús de los AmtraUpithecm roBustus más antigms ¿En qué lugar de la evolución hu¬ mana encaban los Australopithecus lobustus con sus grandes mandíbu¬ las y engrosamientos óseos en el crᬠneo? Los paleoantropólogos dicen que esta especie es una rama colate¬ ral de la evolución humana, pero ¿cuándo se separaron de la línea del género Humo? Los primeros datos del Austrahpithecus wbustiis en el África Oriental� de acuerdo con el paleoantropólogo Henry McHenryi forman realmente un puzle. Todos estos fósiles clasificados como Awítralopithecus aethiopicus datan apro¬ ximadamente de hace alrededor 2j5 millones de años. Si las últimas for¬ mas -A robustas y A boisei - des¬ cienden del A aet hi opi ois yúh línea que conduce al Home se ha separado desde un antiguo A�trahpi�cus (véase Figura 6.4)j entonces ¿porqué los Austmlopiátecus rcbustus primi¬ tivos recuerdan al Homo erectus más de lo que puedan ellos recordar a los Austrahpithecus que fiaeron sus su¬ puestos antecesores? El último Aiíírafopíífiecwí robwítus teníaj como el H, erectuS) un ce¬ rebro relativamente grande (si lo comparamos con el A afi-icams)y
prognatismo reducido (proyección inferior de la cara) y profunda arti¬ culación mandibular» Si divergió re¬ cientemente de la linea homínida» igual que el Ho/noj no tenía que pre¬ sentar un verdadero enigma, Pero si la línea del robustus se separó tan pronto� hace unos 2�5 millones de añosj como parece sugerir el A. ae¬ thiopicus» la última forma de robus¬ tus debía de divergir mucho más del Home?. Después de todoi las dos lí¬ neas divergen muy precozmente por lo que cabría esperar que también los ejemplos fueran más divergentes. ¿Qué es lo que podría explicar algq.nas de las similitudes entre los úl¬ timos Austrahpithecus robustus y la línea del Homo? McHenry sugiere dos explicaciones posibles que afec¬ tan a dicha convergencia. Dice que esa la aparición inde¬ pendiente de estructuras similares en las diferentes líneas de deseen dencia� puede oscurecer la incógnita de en qué lugar estaba el grupo ancestral común. Los murciélagosJos pájaros y las mariposas tienen alaSj aunque no están estrechamente relacionados (su ancestro común está muy alejado en el tiempo evolutivo). Una expli¬
también recogieron una minuciosa colección de antiguas herramientas líticas. Fue en una cálida mañana de julio cuando Mary Leakey corrió a contarie a Louis�que se en¬ contraba entonces enfermo en cama� que había descutñerto los reatos de los homínidos que tanto tiempo llevaban buscando; los Leakey foeron capaces de encajar sus hallazgos en su entorno y también en su posible con¬ texto cultural. El descubrimiento del A Íjoiíh fue especialmente im¬ portante porque demostró que los primeros homínidos
cación posible para las similitudes entre los AtfíraíopííJííCHS robustus y la línea del Homo* es que las últimas formas de robustus descendieran de las primeras formas de robustus� pero se asemejaban al H, erectus a causa de su convergencia. Una seg�nda posibilidad es que las últimas formas de robwííuí y los Homo tu¬ vieran un reciente ancestro común� todavía no descubierto; si esto es así� entonces las formas primitivas de robustifs no eran antecesoras de las úl¬ timas formas de robustus. La convergencia� no estrecha con los ancestros» puede justificar entonces el parecido entre las últimas y las pri¬ meras formas de robustus. McHenry prefiere la segunda po¬ sibilidad. Sobre la base de este anᬠlisis de similitudes de características piensa que las dos últimas especies de Austrahpithecus robustus (A ro¬ bustus y A boisei) derivan de un an ¬ cestro común» aunque este ancestro no fue la forma temprana de ro&wytuSy el A aethiopicus. En muchos aspectoSí las últimas formas de robustus no se parecen al A aethio¬ picus. Uno de los mejores ejemplos de A aethiopicus es un cráneo casi
estaban presentes en África Oriental» ya que» hasta el des¬ cubrimiento del A boíííí» se creía que Sudáírica era la tierra original de los primeros homínidos. Inicialmente Leakey asignó al A íioísíí un nuevo género -Zinjantropus- para concretar su localización (Zinj en árabe signi¬ fica «África Orientad). Actualmente sabemos que la mayoría de los homínidos fósiles más antiguos se han encontrado en África Oriental» pero en 1959 sólo el ha¬ llazgo de un homínido fásil en esa región ya era impor¬ tante.
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completo (d «Cráneo Negro»). Es sm duda un robustus�coTi molares y premolares grandes y cresta sagital enorme aunque en otros aspectos re¬ cuerda al A afaremis: prognatismo pronunciado» articulaciones mandi¬ bulares delgadas y cráneo reducido. McHenry piensa que la evolución convergente dio lugar a parecidos entre las formas precoces y tardías de rabwííMí y que dicha convergencia se produjo p o ru ñ a fuerte presión se¬ lectiva debida a la fuerza que tenían que emplear para mastican Las ca¬ racterísticas fevorables a la fiaerte masticación habían cambiado a otros primates tanto como las líneas evolutivas habían afectado a la línea humana. El GigantopíáievuSi con sus premolares y molares enormes» íiie uno de esos primates� Por tanto» aunque McHenry todavía considere que los últimos Australopitheats wbíistus constituyen ramas colaterales de la línea Homo, su análisis sugiere que tanto A rcíbwsíTis como A. boisei no estaban tan lejos del Hoímíj como se pensaba al principio. Timothy Bromage» que ha estu¬ diado el crecimiento fecial de los fó¬ siles» y Randall Susman» que ha estudiado los pulgares de los homí¬ nidos» tienen otras sugerencias sobre los Austrahpitítecus robustus� Bro¬ mee ha utilizado el escáner con mi-
croscopio electrónico para estudiar imágenes fedales de fósiles» parti¬ cularmente para ver el crecimiento óseo desde la infencia hasta la edad adulta. La maduración de la cara está marcada por una serie de capas de hueso en algunas localizaciones y de reabsorción ósea en otras- Por ejemplo, una mandíbula se hace más protuberante cuanto más de¬ pósitos de hueso se colocan en las superficies que miran hacia delante» en tanto que la absorción ósea se efectúa en la parte que mira hacia dentro. Esta técnica también puede revelar qué hueso está depositado o reabsorbido, por lo que Bromage encontró diferencias entre los pa¬ trones de crecimiento de los Aístrahpíthecits robustusyA africanus. Los patrones de crecimiento óseo encontrados en el A africanus e in¬ cluso en ífoffií? son más parecidos a los hallados en los simios que a pa¬ trones encontrados en losAíjíraíopííhífws r(?6wsííií. Susman ha estudiado los huesos de los pulgares y sus insercio¬ nes musculares para ver qué carac¬ terísticas serían necesarias para la febricación de herramientas. Los humanos modernos tienen pulgares mayores y más fornidos que los póngidosj de forma que pueden aplicar la energía con la presión necesaria
¿A quién se parecía el A boisei� Comparado con el A robustus, el A boisei tenía un aparato masticador todavía más poderoso: enormes molares y extensos premolares desarrollados que parecían molares» una maciza» densa y fuerte mandíbula» gruesos huesos malares y una cresta sagital más pronunciada. Por estas razones se ha Uamado al A boisei un austraíopithecitte vhiperrobustiis»� nombre que define completamente a la especie. El A Íwííeí vivió entre hace 33 y 13 millones de años. Como el A rpfpfiyíwsj parece que vivió en un medio árido
L o s primeros h o m í n i d o s
115
para febricar utensilios* ¿Ha tenido algún homínido precoz estas carac¬ terísticas para poder febricar utensi¬ lios? Susman tiene el criterio de que todos los Aiístrahpithecusi desde hace 2j5 millones de años» inclu¬ yendo los robustusv tenían estas ca¬ pacidades, Lo que no significa que forzosamente las hayan desarro¬ llado» sino que lo podrían haber hecho. Los Aííírflícpírfiecws rcjbwyíuy» con sus reducidas firates» rostro extre¬ madamente plano y mandíbulas enormes» pueden haber parecido muy diferentes de las formas de la lí¬ nea ííomoj aunque podrían estar más próximos a nuestra evolución de lo que un día se pensó. Henry M, Me Au$tTalopithecÚ3e$* Otir femily Tree, aüd y Timothy G, «efeleoantbropolc�y and Üf? hi�tor)� Life hi$tory of & �mnthropologiít�, en N, f�egrine, Cárol R. Ember y Mehdn Ember, eds., Pkysical Antkropdogy: Originai RmditigSj. ití Métítod and Pmctice Saddl� Rive� KJ: Pr�tice Hall, 2002); Ran dos líneas separadas de homínidos; 2) los australopithecinos robustos no fueron antepasados de los humanos actuales» sino que se extinguieron hace me¬ nos de 2 millones de años y 3) el fíomü habilis (y las suce¬ sivas especies de Homo) estaban en la línea directa ascendente de los humanos actuales� es decir� que son nuestros ancestros directos� los primeros miembros del género Hpffíp, que estudiaremos en el próximo capítulo, CD-ROM Ejarcicio intaractivo 11-8
Sumario L La tendencia climática hacia la sequía que co¬ menzó hace entre 16 y 11 millones de años disminuyó la extensión del bosque lluvioso afiícanO} dando lugar a la aparición de grandes sabanas (áreas herbáceas) o zonas de bosque de hoja caduca. El nuevo y más daro paisaje fevoreció, probablemente� en algunos primates� la adaptación a la vida en el suelo. En la línea evolutiva que llega hasta los humanos una de estas adaptaciones fiie dbipedalismo. 2, Uno de los cambios más determinantes en la evo¬ lución de los primeros homínidos foe el desarrollo del bipedalismo. Existen varias teorías para explicar su desa¬ rrollo: los homínidos bípedos pudieron incrementar su capacidad para descubrir tanto a sus depredadores como asus potenciales presasmientras se desplazaban entre las altas hierbas de la sabana; al liberar las manos pudieron utilizarlas para acarrear� lo que pudo fecihtar el trans¬ porte de alimentos desde un lugar a otro; el uso de herramientas� que requiere tener las manos hbres» pudo fevorecer la locomoción zancada y el bipedalismo» lo que a su vez� debió balitar la eficacia de desplazamientos a grandes distancias.
Capítulo ó
3. El jWípírfiecwí ramidusy una especií que vivió hace 4,4 millones de afitís� puede que también fuera bí¬ pedo y que haya sido uno de los primeros homínidos. Los homínidos aceptados datan de entre hace 4 y 3 mi¬ llones de años y se descubrieron en el África Oriental. Estos homínidos claramente bípedos se clasifican actual¬ mente en el género Aísíraíppíífecws, 4. Se han identificado� al menos� seis especies de Australopithecus que generalmente se dividen en dos tipos: gracili$ y roíiwyíws. Los AKstralopi�cus gracilis tienen los dientes y las mandíbulas más pequenosi e incluyen a los A a mme miSi A afiiremis y A afrioinus. Los Australopithecus wbustus tienen dientes y mandíbulas mayores siendoj también� más musculosos que los gracilis� Inclu¬ yen a los A aethiopimst A ro b u s t u s y A boisei.
Glosario de términos Árdipitkeciis ramidus Australopiáieois Australopitkecus a�thiopicHS Aiistralopiiheciis afarettsís Australopithecus africanus Australopithecus a m me n s i s Aiistralopitheats boisei Australopithecus robustus
Australopithecinos gráciles Australopithecinos robustos cresta sagital foramen magnum sabana
Cuestiones críticas U ¿Cómo podrían haber convivido más de una espe¬ cie de homínidos en África Oriental a un mismo tiempo? 2. ¿Qué puede haber permitido a los Austrahpi�cus sobrevivir a los depredadores? 3, ¿Qué procesos evolutivos� según usted» permitie¬ ron al género AtfírafopiííiecMS que se dividiera en dos especies mayores: y robwsíHs?
/irí?*Eiercicios de Internet L
Visite
hitp ://wiYW'talkQrigins.qrg/faqs/hqiiis/ specimenlktinl para ver algunos de los principales fósiles homínidos. Basándose en los contenidos de la página web> escriba un corto sumario de sus hallazgos sobre Australopithecus afarertsis y Donald Johanson.
Los primeros homí ni dos 119
2,
Visite la época de las especies de homínidos en httpp://www»wsu,edii:fiOOiyvwsu/geiied/learn modijle$/top_loiigfor/timdine/timeline.htinl y busque entre sus páginas lo relacionado con los Austrahpíthe cws.
3» Examine el Museo de Historia Natural Virtual donde se exhibe la hipótesis del «Mono Acuático» sobre los orígenes de homínidos en hltp://www:wtcarletoii,ca/ Miis�iun/aquatic/introliitin. Escriba un ensayo critico evaluando esta hipótesis. 4. Busque la filogenia ancestral de los humanos en el sitio de la web: Smithsonian Institution Hall of Human Ancestors (ht1p://www.iniih.sLedu /aDthro/humaikorigiD� ha/a_tr«elitinl). Examine cómo compara la filogenia presentada en este capítulo-
Lecturas sugeridas CcNROYt G, C, JVimflb? EwpJuíTíiH. Nutvg Yqrk: NortOn� 1990, El Capítulo 6 resume d registro fósil de los Australopitkecus y krs primeros representantes del género Homo, estudia la gscvgrafía y el clima de los yacimientos más antiguos y ex¬ plica los principios biomecánicos del bipedalismo. Gtüne, F, E. (Ed.), fcjpirfíecÍMíS. Nueva York: Aldine� 198$. Una gran controver¬ sia ha rodeado al AiííTBÍcipiííiíccís rohuítm. En un taller celebrado en 1957, participantes procedíntes de muchas áreas diferentes resumieron los conocimientos más recien¬ tes sobre este grupo de australopithecinos. JcHANSON, D. y Edey+ M. Lucy: Th� Beginrtings of Hurnaníciud. Nueva York: Simón Se Scbuster, 1981. Una apasionante des¬ cripción del descubrimiento, teconstrucción e importancia del-Ai¿5íTHÍopiííi�w5 afarertsis. Peregrine� P. N � Ember� C. R. y Ember, M. (Eds-)í« Aíeí/kxi aiiá Pracíice, Upper Saddle River, NJ. Prentice Hall, 2002. Varios capítu¬ los de esta obra tratan sobre la evolución de los primeros homínidos y sus culturas: T. G. firomage «Paleoantropologja e historia de la vida� e historia de la vida de un paleOantropólogo!»� H. M. McHenry �íAitstralopitkecus r{7&u5íuSf ruestro árbol familiar y homoplastiaí�j S. W. Simpson �iistrahpithecw afar&tíis y evolución hximana»»; y J. D. Speth 1.
Rimrtiva Bvotución
ctef {fénaro Homo
Capítulo
7
Los orígenes de la cultura y la aparición del género h o m o
Barranco de Oíd uvai. Tanza nía. Ee claramente visible la estratigrafía de los sedimentos fósiles. La capa 1� en la que se encontraron evidencias de culturas humanas pri¬ mitivas� está en el fondo del barranco.
ninguna de las herramientas liticas encontradas está daramente asociada con los primeros Homo y por tanto es imposible saber todavía quién las hizo. Como hemos ob¬ servado en un apartado del capítulo precedente dedicado a los Aiistrahpithecus robifstus, todos los homínidos en¬ contrados posteriores a los 2j5 millones de años tenían pulgares capaces de permitirles febricar herramientas y» por tanto> cualquiera de ellos pudo hacerias, A continuadon estudiaremos aquellas primeras herramientas de piedra y veremos lo que deducen los arqueólogos sobre el estilo de vida de quienes las hicieron� los homínidos (quienesquiera que fberan) que vivieron hace entre 2�5 y millones de años*
Herramientas de los primeros homínidos Las primeras herramientas liticas identUicables como tales proceden de varios yacimientos de África oriental con una antigüedad de unos 2�3 millones de años> o quizá más» Las herramientas más antiguaSj alre¬ dedor de 3.000i se han encontrado recientemente en Gona (Etiopía). Sus tamaños oscilan desde unas peque¬ ñas láminas affladaSj del tamaño de un pulgar� hasta guijarros o núdeos líticos del tamaño de un puño. Es¬ tas primeras herramientas antiguas parece que están hechas golpeando una piedra con otra� técnica llamada de laminado por percusión. Tanto las láminas afiladas como los núcleos afilados (de donde se obtienen las lá¬
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minas afiladas) se usaron probablemente como herra¬ mientas. ¿Para qué se utilizaron aquellos instrumentos líticos? ¿Qué nos pueden revelar sobre la forma de vida de los primeros homínidos? Desgraciadamente poca cosa po¬ demos deducir por el hallazgo de estas herramientas� ya que se han encontrado muy pocas piezas asociadas a ellas en los yacimientos. En contraste� la aparición de herra¬ mientas posteriores en la Garganta de Olduvai� Tanzania� sí que iba acompañado de abundante información cultulaL El yacimiento de Olduvai se descubrió de forma ca¬ sual en 19Uj cuando un entomólogo alemán encontró abundantes restos fósiles cuando estaba persiguiendo una mariposa a través del barranco. Como vimos en el capítulo anterior Louis y Mary Leakey comenzaron a in¬ vestigar la garganta en los anos treinta» encontrando allí las claves de la evolución de los primeros humanos. So¬ bre el yacimiento de Olduvai� escribe Louis Leakey: fl sueño de un cazador de fósiles es excavar 300 pies estrato tras estrato de la historia de la Tierra como si 6iera a través de un gig�tesco paítd. Aquí» investigando dentro de él* ya¬ cen inointables fósiles y artefactos que si no hubiera sido por las fellas geol�cas y la erosión podían haber permaneddo sellados bajo gruesas capas de rocas consolidadas. Los materiales culturales más antiguos de Olduvai (Bed 1 o capal) datan del Pleistoceno Inferior. Los arte¬ factos de piedra (hechos por humanos) induyen núdeos y láminas de bordes muy afilados� predominando estas últimas. Entre los núdeosj predominan los llamados chüppen. Estos chvppers son núcleos que han sido par¬ cialmente afilados y presentan otro lado que se puede ha¬ ber usado para golpear. Otros núdeos» con un lado afilado a golpes y un borde aplanado� son denominados raspadores� Siempre que una herramienta se ha tallado de forma a:&cetada solamente por un lado dejando un borde cortante se denomina útil o instrumento unifacial o diopper Si la piedra está afecetada por ambos lados se llama bi�, Aunque existen algunos bi&ces entre los úti¬ les líticos más antiguos� no están elaborados tan comple¬ tamente como los de épocas posteriores. El tipo de instrumentos de piedra encontrados en la capa I e induso algunos otros posteriores se denomina Olduvayense (Figura 7.2),
Estilo de vida de los primeros homínidos Los arqueólogos han especulado sobre el estilo de vida de los primeros homínidos de Olduvai y de otros lugares. Algunas de estas especulaciones proceden de
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Capítulo 7
Los orígenes de la c u l t u r a y la aparición d e l género homo E3
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Hojas Hgura 7.2.
Producción d o un s�ndito núcioo chopp ar Oíd uv a y en s a y tas hojas rasuftantes
FuenUi
como herramientas. Quizás los nticleos se utilizaban� so¬ bre todo� para extraer las hojas de ellos. Los arqueólogos asumen que muchos de los primeros instrumentos se febricarian de madera y hueso» aunque éstos no han perdurado en las excavaciones arqueológi¬ cas. En nuestros días ciertos pueblos utilizan palos agu¬ zados para cavar y extraer las raíces y tubérculos del sudo y las hojas de piedra son muy eficaces si se acoplan a un palo en forma de punta aguzada. Nunca se ha pensado que se utilizaran como armas las primeras hojas de piedra, por lo que�si los homínidos febricantes de instrumentos utilizaron algún tipo de arma para cazar o defenderse� serían lanzas de madera� garro¬ tes o vulgares piedras sin modificar como armas arroja¬ dizas. Los hallazgos posteriores de herramientas olduvayenses incluyen piedras que fueron percutidas para obtener hojas o para darles formas redondeadasTanto las piedras sin modificar como las modificadas de¬ bieron de ser proyectiles letales. Los experimentos pueden indicar qué se podía hacer con los instrumentos de piedra� aunque aquellos no pue¬ dan contarnos qué harían con ellos realmente. Pero hay ciertas técnicas, como el análisis microscópico de las marcas de uso dejadas en los instrumentos� que pueden se r m uy informativas. Los primeros estu dios m icrosc ópicos de las marcas dejadas en los instrumentos líticos por los diferentes usos demuestran que las marcas paralelas que aparecen en el borde de una herramienta, se produ¬ cen si la herramienta se utiliza con movimientos de sie¬ rra; las marcas perpendiculares a los bordes sugieren su
«The First Tídinologp byK. Freyman in Sdentific�
American Reproducido con permiso del artista, Ed Hanson.
análisis de lo que se podía hacer con las herramientas� del análisis microscópico de sus partes desgastadas y del examen de las marcas dejadas por eUas en diferentes huesos; otras se basan en lo encontrado junto a las herramientas. Los arqueólogos han experimentado sobre qué se puede hacer con las herramientas olduvayenses. Las ho¬ jas parecen ser muy versátiles; se pueden usar para cortar pieles> desmembrar animales e introducir en el extremo de un bastón para &bricar un instmmento punzante (lanzas de madera o bastón de excavar), Las herramien¬ tas de piedra de mayor tamaño (dioppers y rascadores) pueden ser utilizadas para partir ramas o cortar y trocear las resistentes articulaciones animales. Todos los que han tratado de utilizar instrumentos de piedra para diversos fines y están sorprendidos por lo cortantes y versátiles que son las hojas extraídas de un ntícleo» por lo que la mayo¬ ría duda de si realmente dichos núcleos se utilizaban
La réplica un instrumento piedra Olduvay$n$e utiliza para golpear un hueso largo y extraer su nutritiva
médula ósea. Pocos animales tienen mandíbulas tan po¬ derosas como para abrir los huesos de los grandes ma¬ míferos, pero las herramientas de piedra podrían habérselo permitido a los primeros humanos.
� Capítulo 7
Los orígenes de la cultura y la aparición del género homo
U50 como cuchiUo o raspador. Lawrence Keeley utilizó micrííscopios di alta resolución en sus estudios experi¬ mentales sobre herramientas y encontró diferentes tipos de «pulido» en ellas según d tipo de uso que se les había dado. El pulido de las herramientas utilizadas para cortar carne es diferente del pulido de las utilizadas para trabaJar la madera. Basándose en la investigación microscó¬ U5 pica efectuada sobre herramientas de más de millones de años encontradas en la orilla oriental del lago Turkana> Keeley y sus colaboradores concluyeron que� por lo menoSi algunas de las herramientas se utili¬ zaron para cortar came� otras para cortar o serrar ma¬ dera y otras» en fin» para seccionar el tallo de las plantas. En los años cincuenta y sesentaj la garganta de Olduvai reveló la existencia tanto de herramientas olduvayenses como la de restos de huesos fragmentados y dientes de muchas especies de animales diferentes. Durante mu¬ chos años se consideró conveniente asumir que los ho¬ mínidos fueron cazadores y esos animales sus presas. PerOf como hemos comentado en el capítulo dedicado a cómo descubrimos el pasado» los arqueólogos han reexa¬ minado estas teorías una vez que apareció el nuevo campo de la mfonomíat que estudia los procesos que pueden alterar y distorsionar una colección de huesos. Por ejemplo» las corrientes de agua pueden juntar huesos y artefectos» que pueden tener una antigüedad en la gar¬ ganta de Olduvai de 1 »S millones de años (el área de lo que es actualmente la garganta bordea las orillas de un lago poco profundo de aquella época). Otros animales» como las hienas» pueden haber traído esqueletos a algu¬ nos de los lugares en los que vivían entonces los homíni¬ dos. La tafbnomía necesita la ayuda de los arqueólogos para considerar todas las cosas posibles que pueden apa¬ recer reunidas. Existen pocas dudas de que hace algo menos de 2 mi¬ llones de años los homínidos cortaban los cadáveres de los animales para obtener su carne. El análisis microscó¬ pico muestra la existencia de marcas de cortes en huesos de animales» desmembrados con hojas de instrumentos de piedra» y el análisis microscópico del pulido de dichos útiles indica que éste es compatible con la carnicería. To¬ davía no sabemos con seguridad si los primeros homíni¬ dos de la garganta de Olduvai se limitaban a buscar restos de carne (sacándola de lo cazado por otros anima¬ les) o si realmente cazaban ellos mismos, Basándose en el análisis de las marcas de cortes de los huesos de la capa I de la garganta de Olduvai» Pat Shipman sostiene que la mayor actividad de los homínidos» de hace entre 2 y U7 millones de años» para la obtención de carne» fue el carroñeo y no la caza. Por ejemplo» las marcas de corte hechas» generalmente (aunque no siem¬ pre)» por herramientas de piedra» están superpuestas a
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marcas de dientes hechas por carnívoros» lo que sugiere que los homínidos» a menudo» carroneaban la carne de animales muertos y parcialmente devorados por depre¬ dadores no homínidos. El hecho de que las marcas de corte se encuentren primero en algunos casos» le sugiere aShipman que los homínidos también fueron cazadores algunas veces. Por otra parte» las marcas de corte he¬ chas en primer lugar pueden indicar que los homínidos carroñearon la carne antes de que los carnívoros tuvieran oportunidad de consumir su presa. Los artefectos y restos animales encontrados en la capa I y en la parte inferior de la capa I I de Olduvai in¬ dican algunas cosas más sobre el estilo de vida de aque¬ llos homínidos. Primero> parece ser que los homínidos se movían por la zona durante el año; la mayor parte de los yacimientos excavados en lo que es ahora la garganta de Olduvai parecen haber sido usados solamente du¬ rante la estación seca» como indican los análisis del t i po de los huesos de animales encontrados allí. Segundo» si los primeros homínidos de Olduvai fueron carroñeros o cazadores» aparentemente» explotaban una amplia gama de animales. Aunque la mayoría de los huesos proce¬ den de animales de mediano tamaño como antílopes y jabalíes» es probable que también consumieran animales de gran tamaño» como elefentes y jirafes. Lo que está daro es que los homínidos de Olduvai carroñearon o mataron para conseguir carne» aunque no podemos co¬ nocer todavía qué grado de importancia tenía la carne en su dieta. Tampoco existe consenso sobre la forma de interpre¬ tarlos yacimientos de Olduvai en los que aparecen gran¬ des concentraciones de herramientas líticas y huesos de animales. En la década de los setenta se pensaba que es¬ tos lugares eran bases en las que los homínidos (presu¬ miblemente machos) llevaban la carne para repartirla con los demás (presumiblemente madres criando y niños pequeños). Mary Leakey identificó dos localizaciones en las que pensó que los primitivos homínidos habían cons¬ truido estructuras muy simples (Figura 73).Una de ellas era un círculo de piedras que pensó que era la base de un pequeño refugio de ramas. La otra era un área circular de densos vertidos que podía ser la localización de un círculo de ramas espinosas con las que los homínidos ha¬ brían rodeado su campamento para defenderse de los depredadores (como todavía hacen los pastores que ahora viven en la misma zona). Pero actualmente los ar¬ queólogos no están seguros de que estos lugares fueran asentamientos humanos temporales. Primero, porque los carnívoros también son frecuentes en los yacimien¬ tos. Los lugares con abundantes huesos descarnados es¬ parcidos alrededor no debían ser tan seguros para los homínidos como para usarlos como bases. Segundo»
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Capítulo 7
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Los orígenes de la c u l t u r a y la aparición d e l género homo E3
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tíC�b�ña» dú Otduvai f>] la cfl�w 1 de ¡a garganta de CUtívai se enconmS un afiííto jbr~ tmdo púr piedras y huesos que MaryLeakey interpretó como restos de una antigua ¿atíaíia, porque los restos de los animales encontrados en los yadmientos no estaban totalmente descarnados ni des¬ membrados. Por tanto» si los yacimientos fueron campamentos base de los homínidos sería de esperar el procesado total de los restos animales. Tercero» el desa¬ rrollo natural del crecimiento espontáneo de arbustos al¬ rededor de una zona pudo crear un área circular de deyecciones semejante a la que Leakey definió como una estructura» y sin evidencias mayores de que la hubieran hecho los homínidos» no se puede estar seguro de que fueran estructuras. Si estos lugares no eran bases ¿qué eran entonces? Al¬ gunos arqueólogos sugieren que estos yacimientos pri¬ mitivos con abundantes herramientas líticas y huesos de animales pudieron ser lugares en los que los homínidos procesaran la carne» pero en los que no vivían. Entonces ¿por qué volvían repetidamente los homínidos a estos lu¬ gares en los que no vivían? Richard Potts sugiere una po¿ble respuesta: esos homínidos dejaron restos de herramientas líticas y de huesos empleados en la febricadón de instrumentos en varias zonas para balitarlas ac¬ tividades de recolección y procesado de alimentos. Investigaciones futuras nos podrán decir más sobre la forma en que vivieron estos primeros homínidos. ¿Cómo construían sus bases o cómo se desplazaban desde un lu¬ gar de preparación de los alimentos a otro? ¿Cómo se protegían de los depredadores? Lo cierto es que» aparen¬ temente» todavía no utilizaban el fuego para ahuyentara los depredadores. ¿Trepaban a los árboles para refugiarse o para dormir?
Herramientas d e píedra y cultura
Dejando aparte las respuestas a estas preguntas» la presencia de ciertos patrones en las herramientas líticas significa que estos homínidos primitivos» probable¬ mente» habían desarrollado» algún tipo de cultura. Los arqueólogos llaman patrón de conducta a una forma particular de construir las herramientas de piedra que está difundida y aprendida por un grupo de individuos» lo que es un signo de conducta cultural. Para entender¬ nos» la fobricación de herramientas no significa que los primeros humanos tuvieran algo semejante a las com¬ plejas culturas de hoy día. Los chimpancés poseen patro¬ nes para el uso y construcción de herramientas que parece que se difunden y aprenden» y sin embargo eso no tiene mucho que ver con la conducta cultural. ¿Qué es lo que hace que la cultura humana sea dife¬ rente de otras formas de conducta animal? Los antropó¬ logos han tardado más de un siglo en responder a esta pregunta y todavía su respuesta no está ampliamente aceptada. Pero hay una cosa dara: la cultura se debe en¬ tender como un grupo de procesos interrelacionados y no como algo aislado. ¿Cuáles son los procesos que con¬ figuran la cultura? Trataremos los más importantesPrimero» la cultura se apret�e y se wtnparte; ésta es la diferencia fundamental entre la cultura y las otras íormas de conducta animal. La cultura no es un conjunto de ac¬ tuaciones innatas» sino que es» sobre todo» un conjunto de cosas aprendidas. Es algo que adquieren los individuos a lo largo de su vida conforme maduran e interactúan con
Capítulo 7
Los orígenes de la cultura y la aparición del género h o m o
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Temas de actualidad ¿cómo sabemos le que es una herramienta?
Cuando uno mira la� foto�grafías o dibujos de los primeros instru¬ mentos de piedra» se pregunta cómo es posible que ios paleoantropóbgos puedan distinguidos de las piedras ordinarias. Esto no es siempre ficil, Los paleoantropólogos observan so¬ bre todo las hojas o las rocas con ho¬ jas desprendidas, aunque las nxas pueden estar golpeadas contra otras rocas en el lecho de un rio o rodando desde lo alto de una colina: p>ara di¬ ferenciar el niadeo de una herra¬ mienta de una roca golpeada de forma natural� los paleoantropólogos buscan tres rasgos, Primero: la herramienta debe es¬ tar elaborada con un adecuado tipo de roca, y ésta debe ser desmenuzíibk y duradera. Por ejemplo� usted puede hacer hojas de la pizarra� pero no son duraderas, en tanto que mu¬ chas rocas metamórfícas son dura¬ deras, pero no se pueden sacar láminas de ellas. La mayoría de las herramientas de piedra son de obsi¬ diana, cuarzo, pedernal o calcedonia. Segundo: los paleoantropólogos buscan la bílsíerafídoii en las hojas, Éstas se producen cuando se extraen hojas de ambos lados de una piedra para formar una estructura cor¬ tante, El proceso natural podría consistir en quitar por medio de gol¬ pes un par de hojas de un lado de la piedra� siendo raras las ocasiones en que se acabaran de trabajar las caras opuestas. Tercero: los paleoantropólogos buscan el retoque que se obtiene
cuando se extraen hojas adicionales de una herramienta existente para reformar su filo. De nuevo, el pro¬ ceso natural puede ser sacar una se¬ rie de hojas en uno y otro lado de una piedra, aunque raramente se produce algo que recuerde a un borde retocado, Los paleoantropólogos también pueden estudiar las llamadas platafi}rtnas de tallarles decirlos lugares en los que se extraen las hojas a par¬ tir de un núcleo. Cuando se extrae una hoja de un núcleo, deja una marca dara que se puede utilizar como plataforma para extraer otra hoja del lado opuesto del nüdeo.En el caso de hojas extraídas por los humanos, la plataforma de golpear es, con fiícuencia� la marca dejada por una hoja previamente extraída, Así como las hojas bilaterales son raras en la naturaleza, también lo es una marca de hoja con una plata¬ forma de golpeo daramente mar¬ cada. Con estas características, los pa¬ leoantropólogos pueden distinguir, generalmente, las piedras talladas de forma natural, de aquellas otras ta¬ lladas como herramientas de piedra, Pero no siempre es así, y muchos pa¬ leoantropólogos pueden equivo¬ carse. De hecho, uno de los más &mosos errores fiaeel cometido por Louis Leakey,uno de los principales paleoantropólogos, al identificar he¬ rramientas de los homínidos primi¬ tivos. A finales de los anos sesenta, Leakey sostuvo que un yacimiento
de California llamado Calicó Hills contenía herramientas de origen humano� lo que se consideró un gran error ya que en ningún momento existió evidencia de humanos pri¬ mitivos en ese lugar de Norteamé¬ rica, y, como veremos al tratar el Paleolítico Supe rior, sí hay daros signos de que los modernos humanos fueron sus primeros habitantes. Sin embargo, como era Leakey quien lo afirmaba fue tomado en considera¬ ción, si bien un grupo de paleoan¬ tropólogos que estudió el yacimiento adaró que aquellos objetos eran na¬ turales y no elaborados por los hu¬ manos, Calicó Hill es un cuento que nos enseña a ser precavidos. ¿Cómo se sabe que algo es una herramienta? Además de las características físicas de las herramientas, los paleoantro¬ pólogos tienen que considerar el contexto en d que se encuentran, Cuando aparecen supuestas herra¬ mientas en ausencia de restos de ho¬ mínidos o sin otra dara evidencia de herramientas utilizadas, como en d caso de Calicó Hills, y d contexto tampoco sugiere la posibilidad de que existan herramientas, los paleoantropólogos deben cuestionarse su presencia. Hayn?$ «The Cdico Site: AitifoctS ür GwfactS?», SciVhWí 131 (1973): 305-IQí Lelend Patlíisonr «Ciitem for Determúiúig tbe Attiibute$ of Man-Made Lithics», icíumíií or los registros arqueológicos que los homíni¬ dos primitivos �bricaban y utilizaban instrumentos de piedra sobre bases reguladas. Las herramientas aparecen, frecuentemente, en concentraciones discretas, y, a me¬ nudo, asociadas a huesos animales y otros residuos de la actividad humana. Y, como hemos comentado� un grupo de paleoantropólogos sostiene que tales concentraciones de residuos pueden representar campamentos o, incluso, pequeños refugios. Los campamentos base, de alguna forma, pueden haber constituido una parte de la cultura de los primeros homínidos,
Reflejen la existencia o no de campamentos, se han encontrado grandes cantidades de huesos de animales y herramientas en algunos lugares y estas acumulaciones sugieren que dichas áreas eran usadas por grupos de in¬ dividuos durante períodos de tiempo. Todo ello significa, probablemente, que existía alguna forma de reparto de la carne pues parece ir en contra del sentido común que los individuos llevaran la carne hasta un lugar determinado sólo para partida. Aunque nos movamos dentro de la más pura especulación, sería razonable pensar que indi¬ viduos estrechamente relacionados entre sí, como pa¬ dres, hijos y otros parientes próximos, tendrían más posibilidades de reunirse para distribuir la carne entre ellos que entre individuos más lejanamente relacionados. Esta sospecha viene confirmada p or el hecho de que cuando se produce la distríbución de alimentos entre los chimpancés, ésta se efectúa entre los individuos más es¬ trechamente emparentados. Por tanto, las antiguas loca¬ lizaciones de la actividad social de los homínidos primitivos pueden ser prueba de la existencia de grupos �miliares, ¿Pero cómo podría haber evolucionado un sistema de conducta social semejante hacia la creación de un lugar común de reunión, descanso y vivienda para un grupo de individuos emparentados para compartir el ali¬ mento? Vamos a considerar el siguiente modelo,
Un modelo para la evoluceóm DE LA CULTURA Los primeros representantes del género Homo tenían cerebros una tercera parte mayores que los del A�fraíopithecus. Como veremos más adelante en la sección sobre las tendencias de la evolución de los homínidos, una de las posibles consecuencias de la expansión del cerebro fue la disminución de la maduración de los recién naci¬ dos, El que los bebés nacieran más inmaduros puede ex¬ plicar, al menos en parte, el alargamiento del período de dependencia en la infencia y la niñez en los homínidos, Comparados con otros animales, consumimos gran parte de nuestras vidas en una etapa de dependencia, lo que ha sido, probablemente, de gran trascendencia en la evolución cultural humana. Según Theodosius Dobzhansky; £5 Lnd€f€n$ión� y prolctngada dependencia del cuidado de los padres y de otras personas, la que 6vorece... la socia¬ lización y el proceso de aprendizaje de los que depende to¬ talmente la transmisión de la cultura- Esto ha podido suponer una abrumadora ventaja para lo$ patrones de credmiento humano durante el proceso evolutivo. Se acostumbra a pensar que los Austmlopithecus tenían un largo período de dependencia in;�til, lo mismo que
Capítulo 7
Los orígenes de la cultura y la aparición del género homo
les ocurre a los humanos modernos» pero el hícho de que tuvieran los dientes aparentemente desarrollados sugiere que los AwFírfíííJpírfieaíí primitivos seguían un patrón de desarrollo del tipo del de los póngidos. Por tanto» la ma¬ duración tardía puede ser un fenómeno relativamente redente» pero cuánto es algo que todavía desconocemos» Aunque el uso de algunos instrumentos para cavar» para defenderse o para el carroñeo pueden haber fevorecido el desarrollo del bipedalismo» su total adquisición pudo hacer posible una mayor eficacia en la febricadón de instrumentos consecuentemente� más eficientes el carroñeo y el forrajeo» Como hemos visto existen evi¬ dencias arqueológicas de que los primeros homínidos pudieron haber sido animales carroñeros (e incluso ca¬ zadores) hasta al menos el PÜoceno Inferior» existiendo también indidos de que los primeros homínidos des¬ cuartizaban y� presumiblemente»devoraban grandes pre¬ sas hace alrededor de 2 miUones de años» Si es cierto que los primeros homínidos carróneaban e incluso cazaban regularmente» la práctica de consumir carroña exigía de los individuos grandes desplazamien¬ tos en busca de los restos de los animales» Entre los gru¬ pos de los primeros -Hempj la larga y gran dependencia de sus hijos pudo fomentar la creación de los campa¬ mentos base: la demanda de cuidados durante los partos y de los redén nacidos debió de dificultar los desplaza¬ mientos de las madres durante las épocas de embarazo» parto» lactancia» etc. ya que indudablemente hubiera sido difícil» si no imposible» para las madres transportar a sus hijos durante largas distandas» Debido a que los machos de Homo (y quizá las hembras sin hijos pequeños) po¬ dían desplazarse más rápidamente y más lejos desús mo¬ radas» eran ellos» probablemente» los que carroñeaban o cazaban. Las mujeres con hijos pequeños es posible que recogieran plantas silvestres de una pequeña área» que eran capaces de cubrir sin desplazarse muy lejos del cam¬ pamento base. La creación de campamentos entre los primitivos grupos de Hpfno pudo incrementar las posibilidades de recolecdón de alimentos» pues si las madres con hijos pe¬ queños estaban limitadas a la recolecdón próxima a sus habitáculos» la única forma de asegurar que tanto ellas como sus hijos pudieran obtener una dieta completa era repartir entre todos cualquier tipo de alimento que se pudiera obtener allí mismo» Pero ¿entre quiénes se repar¬ tirían tales alimentos? Lo más probable es que fuera en¬ tre parientes próximos. La distribución entre ellos fevorecería que sus hijos sobrevivieran para tener tam¬ bién hijos a su vez» Por tanto» si los primitivos J-fomo po¬ seían campamentos y femilias» estas características habrían potenciado el desarrollo de conductas aprendi¬ das y difundidas que es a lo que llamamos cultura.
129
Obviamente, esto no es más que una historia» un cuento que nunca podremos demostrar que ocurrió de esta forma» aunque es un cuento compatible con los des¬ cubrimientos arqueológicos» ya que no se conoce ningún patrón de instrumentos líticos hasta que entran en es¬ cena los primitivos Homo. Y cuando éstos aparecen ve¬ mos el comienzo de varias tendencias en la evolución de los homínidos que parecen reflejar la manufectura y el uso de ciertos modelos de herramientas líticas: la expan¬ sión del cerebro» modificadón de la pelvis femenina para acomodarse a la expansión cerebral del feto y la reducdón general del tamaño de los dientes» cara y mandí¬ bulas,
Tendencias en la evolución de los homínidos Expaimsíón del cerebro Los tienen una relativamente pequeña capaddad cerebral» entre 380 y 530 centímetros cúbicos (cm�), no mucho mayor que la de los chimpancés» Pero hace aproximadamente 23 mÜlones de años» muy cerca de la época en la que comienzan a aparecer los primeros instrumentos de piedra modelados» algunos homínidos empiezan a mostrar un indudable aumento de la capad¬ dad cerebral. Estos homínidos» primeros representantes del género Homo, tienen capaddades craneales entre 630 y 640 cm� lo que supone alrededor del 50 por dentó de la capaddad craneal de los humanos modernos (con unos volúmenes actualmente de algo más de 1»300 cm�) Figura 7»4), Un posterior miembro de nuestro género» el Homo ífieííwsj que apareció por primera vez hace aproxi¬ madamente l»8 millones de años» tenía una capaddad cra¬ neal entre 8�5 y K040 cm�j es decir alrededor del 70 por ciento de la capacidad craneal de los humanos modernos» Los Aiistraiopíthecus eran de pequeño tamaño» en tanto que los primeros Homo, por el contrario» eran bas¬ tante más grandes y con un cerebro mucho mayor Este aumento pudo producirse a lo largo del tiempo como re¬ sultado de su mayor tamaño corporal. Cuando después de 2 millones de años vemos cómo crece evolutivamente el tamaño del cuerpo» observamos que» paralelamente» aumenta no sólo absoluta sino también relativamente» el tamaño del cerebro: hace entre 4 y 2 millones de anos» el tamaño relativo del cerebro permaneció siendo el mismo» Solamente en los dos últimos millones de años los homínidos han duplicado su volumen cerebral rela¬ tivo y han triplicado su volumen cerebral absoluto» ¿Qué pudo fedhtar el aumento del volumen cerebral? Como comentamos anteriormente» muchos antropólogos
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Capítulo 7
Los orígenes de la c u l t u r a y la aparición d e l género homo 13
Aíj�r&Íopithecu$ africenus 440
Homo erectus
I.OOOc�
Homo sapiens 1.300+
Figura 7.4. ifl �Tnpara;�í;¿íííi fo Human Evolution and Pr�istory. Tkprodixido con permiso de Roudedge,
Inc part of The Ta�or & Prancb Groiq?.
creen que este incremento está relacionado con laaparidón de los instrumentos de piedra elaborados desde hace 2j5 millones de años» La razón es que estos instru¬ mentos fueron muy importantes para la supervivencia de nuestros ancestros y, por tanto� la selección natural pudo fevorecer el crecimiento del volumen cerebral de los individuos porque tenían habilidades motoras y con¬ ceptuales que les permitían hacer cada vez mejor las henramientas. Según este punto de vista> la expansión del cerebro y la elaboración de instrumentos cada vez más sofisticados debieron de evolucionar conjuntamente. Otros antropólogos creen que el crecimiento del cerebro pudo verse fevorecido por otros fectores como la guerra� la caza> el aumento de la longevidad y el lenguaje, Cuando unos fectores favorecen el crecimiento del volu¬ men cerebral� al mismo tiempo hacen que los humanos aimenten también su capacidad para la cultura* Asi� junto con el bipedalismoj la expansión del cerebro marcó una línea divisoria en la evolución humana {véase el apartado «Cerebro y sangre» en donde se comentan al¬ gunos de los problemas fisiológicos que se produjeron con la expansión cerebral) * Conforme el cerebro de los homínidos se hacía mayorj la selección natural Moreda la modificación de la pelvis femenina para permitir que nacieran niños con mayores cerebros. Aunque existía un límite hasta el cual podía cre¬ cer la pelvis al mismo tiempo que permitía la existencia del bipedalismoi algo se ganó y también algo se perdió en á grado de adaptación física del niño humano al parto
(por ejemplo� los nioos nacen con huesos craneales tan flexibles que se pueden� incluso� en cierto grado» solapar). Como el parto humano se produce antes de la osificación total de los huesos craneales del feto» el niño puede nacer» a pesar de su cerebro relativamente grande� a través de la pelvis materna. Los niños nacen en un estadio un tanto precoz de desarrollo y dependen totalmente de sus padres durante muchos años. Como hemos visto este largo pe¬ ríodo de dependencia durante la in&ncia pudo ser un importante fector en la evolución cultural. Reduccíón de la cara, DEENÍTES Y MANDÍBULAS Como en el caso del cerebro» en la evolución de los homínidos no se producen cambios sustanciales en la cara� los dientes y las mandíbulas hasta hace unos 2 mi¬ llones de años. Todos los Australopithecus tienen dientes muy grandes en relación con su peso corporal estimado» quizá debido a que su dieta era especialmente abundante en plantas comestibles incluyendo pequeñas semillas» tu¬ bérculos y nueces. También tenían fuertes mandíbulas» probablemente relacionadas con sus necesidades masti¬ catorias» así como caras muy alargadas que proyectaban los ojos hacia abajo. Pero cuando vemos las formas del género fíoffn?» apreciamos la reducción del tamaño de la cara» dientes y mandíbulas (véíise Hgura 7.5). Parece que hubiera terminado la anterior tendencia de la selección natural en fevor de un aparato masticatorio más fuerte.
Capítulo
7
Los orígenes de la cultura y la aparición del género h o m o
Cerebro 430-620
131
Cerebro 600-eoO cc
Mayor constricción po5t-orbitaJ
Menor constricción post-orbital
Dienten posterioi
posteriores en relación anteriores
mayores en proporción a los anteriores Huesos craneales más largos
Huesos craneales más gruesos
Cara grande en relación con el cráneo
Cara menor en relación con el cráneo
Figura 7.5.
Comparación anfra A. afrícanus y H. habilis.
Una explicación para esto pudiera ser que los represen¬ tantes del género Homo comieran alimentos más fóciles de masticar� tales como raíces> frutas y carne. Como ve¬ remos posteriormente� pudo ser el uso habitual de las he¬ rramientas de piedra y el control del fuego lo que permitió que los miembros del género Homo dirigieran su dieta a alimentos más fóciles de masticar� induyendo la carne. Si se cocinanJos alimentos se mastican con ma¬ yor �dlidad� por lo que los individuos con mandíbulas y dientes de menor tamaño no estarían en desventaja» y tanto la cara� como los dientes y las mandíbulas� se redu¬ cirían a lo largo del tiempo.
siles no nos pueden contarsi sus propietarios tenían o no pelo. Por el contrario> sospechamos que la mayoiia del resto de características humanas se produjeron después de que el cerebro comenzara a crecer durante la evolu¬ ción del género Homa ¿Qué prueba hay de que los cambios físicos y de con¬ ducta que hemos comentado se produjeran durante la evolución del género Homo� Para contestar a esta pre¬ gunta estudiaremos a continuación los primeros íosÜes del género Ho/aü y la forma en que están asociados con la expansión del cerebro y la reducción de cara» dientes y mandíbulas*
Otros e�gos evolutivos
Los fósiles que estudiaremos más adelante en el próxi¬ mo capítuloj nos dicen cuándo y en qué homínidos se produjeron los cambios en el tamaño del cerebro» cara> dientes y mandíbulas. Los otros cambios producidos en la evolución de los homínidos no se pueden datar con precisión en el tiempo y respecto de un homínido en concreto. Por ejemplo» sabemos que los humanos actua¬ les poseen comparativamente mucho menos pelo que los primates actuales. Pero no sabemos cuándo empezaron los homínidos a tener menos pelo» porque los huesos fo-
CD�ROM Ejercicio interactivo 11-9
Primeros fósiles del gé nero Homo Los homínidos con el cerebro relativa y absoluta¬ mente mayor que el de los Aiíírflícjpífíiefiís aparecieron
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Capítulo 7
Los orígenes de la cultura y la aparición del género homo 13
Temas de actualidad Cer ebr o y s a n g r e El cerebro humano es ei óigano más complejo del cuerpo y el más exigente. El cerebro tient que tener un abastecimiento continuo de oxí¬ geno y de azúcar para poderíun do¬ nar, además de gran cantidad de sangre. El cerebro produce calor y es muy sensible a los cambios de tem¬ peratura: con sólo algunos grados más de temperatura puede resultar dañado. Estas dos demandas� abas¬ tecimiento sanguíneo y control de la temperatura� según el paleoantropólogo Dean Falk> están relacionadas en el cerebro humano. FaUc ha examinado la evolución del cerebro humano por medio de moldes endocraneales y ha podido observar que los vasos que llevan la sangre a y desde el cerebro (véosí la figura de este apartado) se pueden estudiar en los moldes endocranea¬ les. Lo mismo que otras caracterís¬ ticas cerebrales, dichos vasos dejan su impresión en d interior del cráneOi pero los moldes endocraneales revelan también los pequeños orifi¬ cios de los huesos craneales deno¬ minados agujeros emisaríosy a través de los cuales pasa la sangre. Basán¬ dose en estas observaciones� Falk ha reconstruido la circulación sanguí¬
nea dentro y fuera del cerebro de los homínidos primitivos. Según Falk, el bipedalismo pro¬ dujo un gran obstáculo en la evolu¬ ción cerebral de los homínidos. Con el cerebro situado en la parte superior de la cabeza, el sistema circulatorio no podía mantener un flujo sanguíneo constante. En los primates cuadrúpedosj la sangre del cerebro drena di¬ rectamente a la vena yugular. Pero la fuerza de h gravedad adicional sobre la sangre enun primate bípedo» según Falk, debía de ejercer mucha más pre¬ sión en la yugular, pudiendo causar� poten cialme nte, su ruptura. Los Ausíratopííftícwyj apare ntemente� supera¬ ron este problema desarrollando grandes senos en la parte posterior de sus cerebros que podían ralentizar el flujo sanguíneo cuando los animales estaban de pie. Pero al incrementar el cerebro su demanda de sangre» los primitivos ífomp tuvieron que desarrollar un sistema más eficiente para mantener el flujo sariguíneo y permitir el aumento del tamaño ce¬ rebral. Falk sostiene que los Hcíínc) pri¬ mitivos desarrollaron dos sistemas separados de drenaje sanguíneo. Un o era el sistema de grand es vas os»
hace unos 2J millones de años. Estos homínidos» clasifi¬ cados dentro de nuestro propio género, Heme, se divi¬ den, habitualmente» en dos especies: Homo habiíis y Homo rudolfensis. Ambos fueron inicialmente descuHertos en la parte occidental de Kenia y de Tanzania, ajnque también se han hallado en el este y sur de África» incluyendo la cuenca del Omo (en Etiopía) y la cueva de Sterkfóntein (en Sudáfrica). Ambas especies vivían en las mismas regiones y en las mismas épocas» lo mismo que
similar al de losAHSíraIojííífifcws»que drena la sangre desde lo más alto y los lados del cerebro a las venas yu¬ gulares. Sin embargo»los Austrafopiífceoííj miembros del género usan este sistema como drenaje pri¬ mario de la sangre sólo cuando es¬ tán tumbados. Falk añade que en los Homo primitivos hubo otro sistema secundario añadido consistente en pequeños vasos llamado sistema ftnisarioy que fecilitaba el drenaje sanguíneo del cerebro cuando el in¬ dividuo estaba de pie y que al desa¬ rrollar ambos sistemas de drenaje sanguíneo los Homo primitivos pu¬ dieron tener grandes cerebros ali¬ mentados con sangre sin problemas para estar de pie o tumbados. Las ideas de Falk en relación con el control de la temperatura están so¬ metidas a debate. Asegura que el sis¬ tema de vasos sanguíneos emisarios no sólo ayuda a drenar la sangre del cerebro, sino que también actúa como un �i Miíurvií HiVíor� 1993,65-66.
H, habilis era» al menos parcialmente» arborícola. El H habilis también pudo presentar dimorfismo sexual» igual que los AustralopitheoiSi debiendo de existir grandes di¬ ferencias de tamaño entre ellos, El Homo máolfensis es prácticamente contemporáneo del fí, habilist presentando muchas de sus características» hasta el extremo de que muchos paleoantropólogos no hacen distinción entre ambas especies» incluyendo al H, rudoljertsis dentro de la especie H habilis. Quienes los
consideran como especies diferentes insisten en la capa de esmalte dental más gruesa del H rHdcj(/¥íiííí»así como en su cara� más ancha y plana» y en las proporciones de sus miembros» más semejantes a las de los modernos Homo. A pesar de los dientes más grandes y la cara más plana del H rudolfensist su dentición es considerable¬ mente más reducida que la de los AwsíratopíííiOTís y» como el H, habilis�SM cerebro es» por lo menos» un tercio mayon
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Capítulo 7
Loe orígenes
de la cultura y la a p a r i c i ó n del género homo
El cráneo de un Homo h9bfifs/rüdotfen$i$ (ER-1470) en¬ contrado por Richard Leakey en 1972. O bs e r v e n su alta frente y su gran caja craneal.
Tenemos poco$ materiales esqueléticos extracraneales de las primeras espedes del género lo que es muy saber si las importante para poder proporciones pélvicas femeninas han cambiado, Pero con un tamaño cerebral un tercio mayor que el de los Austmlopithecus, es lógico pensar que se produjeran otras modificaciones para per¬ mitir que nacieran hijos con mayor volumen cerebral. De lo que sí tenemos constancia es de las alteraciones que tuvieron lugar en las pelvis femeninas del HcJífií? erectas� especie que estudiaremos a continuación,
Homo erectiis El fío/fip erecíwy apareció poco después que el R habiliSi hace alrededor de 1>8 millones de años. El Homo erectus fue la primera especie de homínido ampliamente difundida por todo el Viejo Mundo> habiéndose encon¬ trado los primeros ejemplares en Java» después en China más tarde» en Africa. La mayoría de los paeloantropólogos cree que algún os de los ancestros humanos pasaron en algún momento desde África a Asia. Hasta hace poco se pensaba que íue el H. erectus quién pasó a Asia� ya que vivió en África hace alrededor de 1>6 millones de anos y los restos encontrados en Asia son de hace 1 millón de
E3
años. No obstante» datadones recientes sugieren que el más antiguo fue el K mííwí de lava» de hace unos lj8 millones de años, Nuevos hallazgos fósiles de erectas encontrados en Dmanisi� en Georgiaj se han datado redentemente en 1>7 millones de anos. Si esta datadón es segura» los homínidos primitivos debieron surgir fuera de África a la que pasaron más tarde, También hay interrogantes sobre si existió una sola especie de H erectus o si fueron varias especies distintas» ya que algunos expertos sostienen que existen diferen¬ cias entre los ejemplares encontrados en Africa y los ha¬ llados en Asia» por lo que creen que se deben considerar como dos especies diferentes: la especie del H, erectas para las poblaciones de Asia y el ü ergaster para las de África. Con posterioridad se han encontrado también en Europa fósiles de H írecíwí (H, ergaster)� aunque al¬ gunos paleoantropólogos opinan que los fósiles encon¬ trados en Europa y clasificados como H, erectas son� en realidad� ejemplares precoces de H sapiens. Otros creen que los fósiles europeos» que son similares a los encon¬ trados en el sur de África y en el Próximo Oriente» se de¬ ben clasificar como Homo heidelbergertsís. Todo esto» que parece un poco confusQ} intentaremos aclararlo más adelante.
El
descubrímiento del
Homo
erectus
En 189 U Eugene Dubois» un anatomista holandés que estaba excavando en Java» encontró lo que llamó íííííecanihropas erectas� que significa «hombre mono erectos (nos referiremos a este homínido como Homo erectas). Este descubrimiento no fue el primer fósil de aspecto hu¬ mano encontrado»ya que los neandertales»que comenta¬ remos en el próximo capítulo» se habían descubierto muchos años antes. No obstante, nadie estaba seguro» ni áquiera él mismo» de que el fósil que encontró en Java fuera de un mono o de un hombre, Este fósil está constituido por un cráneo y un grueso fémur y durante muchos años se creyó que ambos hue¬ sos no eran del mismo animal. El cráneo era demasiado grande como para ser de un póngido moderno» pero de¬ masiado pequeño para ser humano: tenía una capaddad aaneal situada entre la de los póngido> de 500 c m \ y la de un humano actual» de L300 cm�. El fémur, sin em¬ bargo» era parecido al de los humanos actuales. ¿Podían pertenecer ambos huesos al mismo animal? La cuestión se resolvió muchos años después por el análisis del flúor. Si los fosUes de un mismo depósito contienen la misma cantidad de flúor tienen la misma edad. Los fragmentos craneales y el fémur encontrados porDubois fueron ana¬ lizados en su contenido en ñúor, descubriéndose que te¬ nían la misma antigüedad >
Capítulo 7
Los orígenes de la cultura y la aparición del género h o m o
A mediados de los aá os treintai G» H, R, von Koenigswald» también en lava» no sólo confirmó las primeras hipótesis de DuboiSj sino que amplió nuestro conoci¬ miento sobre las características del H o m o erectusy ofre¬ ciendo una me�or comprensión del lugar en el tiempo que ocupaban los primitivos homínidos. Desde entonces se han encontrado muchos íosiles de H. erecUts en Java» de los que se pensó que no tenían más de 1 millón de años� aunque actualmente mediante la datación con po¬ tasio-argón se sitúa a algunos de los fósiles de lava en US millones de anos* Entre la época de los halla��os de Dubois y la de Von Koenigswald� Davidson Black» un profesor de anatomía canadiense que enseñaba en Pekín (Beijing), China> co¬ menzó a investigar una enorme cueva próxima a Zhoukoudian en la que se habían encontrado varios dientes fósiles. Creyendo que los dientes procedían de un género desconocido de homínidos» consiguió fondos para exca¬ var extensamente la región. Tras dos años de excavacio¬ nes» él y sus colegas encontraron un cráneo en la arcilla a cuyo propietario se le denominó «Hombre de Pekín», Black murió en 1934» continuando su trabajo Franz Weidenreich. No fue hasta los anos cincuenta cuando se descubrie¬ ron en el norte de África fósiles de H, erectus (véiise Fi¬ gura 7.6). Desde entonces hasta ahora se han descubierto muchos ejemplares en África oriental» particularmente
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en dos yacimientos: la garganta de Olduvai en Tanzania y la región del lago Turkana» en ICenia. En Nariokotome» en la orilla occidental del Lago Turkana» se descubrió el esqueleto casi completo de un niño que data de alrede¬ dor de 1>6 millones de anos» en tanto que los restos en¬ contrados en Olduvai son de hace 1�2 millones de años. Características
físicas del Homo e re c t u s
fl cráneo del ü erecíuí generalmente es alargado» de gruesas paredes» con un área frontal aplanada y arcadas supraorbitales prominentes. Si se observa desde atrás es el único que tiene forma pentagonal» constituido» en parte» por un reborde redondeado en la parte superior del cráneo llamado quilla sagital También tiene otro re¬ borde óseo que recorre la parte posterior llamado torus occipital que le proporciona un aspecto más alargado ivéase I�r a 77). Comparado con los ífpmp anteriores» el Jí, írecíwí po¬ seía dientes relativamente más pequeños» siendo el pri¬ mer homínido con tres molares menores que el segundo o el primer molar de los humanos actuales. Cada molar tenia también una cavidad pulpar alargada llamada taiirodontismo» que le debió permitir utilizar los molares con mayor presión y desgaste que los de los humanos ac¬ tuales- Las mandíbulas de H erfctus eran más ligeras y delgadas que las de los Hümí? anteriores o las de los
�A. Yacimientos Homo erectus: i. SMarthrars. Suiáfrica
i. DMiJ'ubI, l�zariia
a. KdoU Fofa, K«nía 4 . NajíDhatoin«H Keria Orno4 Etlofila Lainyamok, K«nla 7. MaIcb. Kurtura, Edopla Íj TemHlre, Aigela 9di MrdMBlYnan, Mwuhús íú. 1�11, Jáua 11. SargifBr, Java tS. Ztiúokúudiafi, Chira t3. VuarifncMj.| Chhia 14. Larig Iblardia 15. Lantlari, dhlna Í6. JiansM, CMna 17. TTiam Khuyer, \4atrem
¡.óO 10 11
Figura 7.6. yacimientos de
Homo er«ctu$ De Kussell L. Qodion y John G, Flcaglc, Fuentes:
Human Evolution
Soitrce Bpok. Copyright © 1993. Reproducido con permiso de Pearson £ducation Ene.» Upper Saddle RiveTj NJ (J7456.
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Capítulo 7
Huesos
craneaies
Los orígenes de la c u l t u r a y la aparición d e l género homo
Constricción postorbitarla
gruesos Torus occipital
Cresta sagital
Rgura 7.7. Características dñ\ Homo Bractus
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espacios abiertos y secos. El H erectas también tenía me¬ nos dimorfismo sexual que los�AMyíííífppíífiífwy o que los anteriores miembros del género Heme» siendo su grado de dimorfismo similar al de los hombres actuales, Los científicos que agrupan las poblaciones africanas como una especie distinta» el H ergaster, apuntan la exis¬ tencia de varias diferencias entre las dos supuestas espe¬ cies de H erectus. Según ellos» las proporciones craneales de ambos son diferentesi de forma que en el H. ergaster los arcos supraorbitarios son más delgados y más ar¬ queados hacia las órbitas oculares» la cara» verticalmente» está más orientada hada abajo» etc. Por el contrario» hay otros que sostienen que las diferencias entre el H erectus y los actuales humanos no son tan grandes como para considerarlos especies diferentes y dicen que las pobladones de H erecíw debían de agruparse con las de H, sa¬ piens. Estos argumentos tardarán en poder clarificarse y en este libro nos quedaremos con el único taxon de R erectus (vé¿(se el Apartado «Homo írecíMí:¿Una o más espedesN). La ev o l u c íó k d e l Ho mo e r e c t u s
Austrahpiáievus, en tanto que la cara presentaba un prognatismo menor� es dedr� el desplazamiento hacia delante de ambos maxilares superior e inferior. El volumen de su cráneo� entre S95-U040 í:m� era mayor que el de cualquiera de los encontrados� tanto en¬ tre los Australopithecus como entre las primeras especies de Homot ainque menor que el que encontramos en los humanos actuales. Los moldes endocraneales que pro¬ porcionan una imagen de la forma de la superficie del ce¬ rebro» sugieren que estaba estructurado de forma más parecida a la de los cerebros de los humanos actuales que a la de los Austrahpiihecits� El Jítjmí? erectus tenia una nariz prominentCj al con¬ trario de lo que sucede en los AuyfrafopíííiífMíj que la terían achatada y no prominente. Desde el cuello hada abajo» el H. erecíws era prácticamente indistinguible del H incluso en su tamaño� en contraste con los pe¬ queños Austrahpithecus y con las primeras especies de Homo que vivían en el este de África en la misma época. H esqueleto casi completo deljoven de Nariokotome su¬ giere que tenía alrededor de 1�6 metros de altura y que murió alrededor de los 11 años de edad; otros investiga¬ dores creen que tenía U9 metros y que murió ya en la madurez, Hace alrededor de 1�6 millones de años» la re�ón de Nariokotome era> probablemente» una zona abierta de hierbas» con arbolado a lo largo de los cauces de sus ríos. Los H, erectus de África tienen el mismo ta¬ maño que los pobladores actuales de la región» que si¬ guen viviendo en las mismas condiciones ambientales de
La evolución del H erectus refleja una continuación de las tendencias evolutivas generales que hemos comen¬ tado previamente. El cerebro continua su expansión»
El cráneo de un Homo erecfu$/ergaster (ER-3733) del este de África.
� Capítulo 7
Los orígenes de la cultura y la aparición del género homo
aumentando su tamaño en más de un tercio respecto de los cerebros de los primeros Homo (de la misma forma que éstos lo incrementaron sobre los anteriores -Akítralopithecus). La cara� mandíbulas y dientes continúan reduciéndose adquiriendo un aspecto casi actual. El in¬ cremento en el uso y la variedad de las herramientas pudo conducirá un desarrollo atín mayor del cerebro� El H, er�vtus comía y» probablemente» cocinaba la carne y esto pudo conducirá la reducción posterior de dientes y mandíbulasUn cambio adicional en el H, fr�i�son las aparentes reducciones en la extensión del dimorfismo sexual hasta casi los niveles actuales. Recordemos que tanto los jImstrahpithectis como los primeros Homo presentaban bas¬ tante dimorfismo sexual� en tanto que el H, erectus no parece presentarlo tanto, ¿Qué pudo originar este cam¬ bio? En los otros primates el dimorfismo sexual parece estar relacionado con el sistema social por el que los ma¬ chos están a la cabeza dd dominio jerárquico y son los machos dominantes los que controlan el acceso sexual a múltiples hembras. En contraste» la felta de dimorfismo sexual parece más pronunciada en los pocos primates y otros animales en que existe vímüo de pareja� esto es» cuando un macho y una hembra tienen una unión de pa¬ reja que dura un largo período de tiempo. ¿Se pudo de¬ sarrollar el vínculo de pareja con el H, erectus? Parece que así file. Recordemos que los primeros fíomo pudieron haber establecido algunos de los elementos básicos de la cul¬ tura humana» incluyendo los campamentos» los grupos �miliares y la participación. Otro elemento básico de la reciente cultura humana que está presente en todas las culturas conocidas es el /nflírímprtíaEl matrimonio es el nexo socialmente reconocido -sexual y económico- en¬ tre dos individuos, para que persista durante toda la vida y para tener hijos socialmente aceptados. Es un vínculo de pareja con un grupo de conductas> expectativas y obli¬ gaciones que se extienden más allá de la pareja» a las :&milias de los individuos. Con el matrimonio la compe¬ tición entre machos por el acceso a las hembras puede haber disminuido» reduciéndose la importancia del di¬ morfismo sexual. Pero ¿porqué se pudo haber desarro¬ llado el matrimonio en el H, erectu�, En las especies de animales en los que las hembras pueden alimentar a sus crias y a si mismas después del parto» el vínculo de pareja es raro, Pero en las especies en las que las hembras no pueden hacerlo» el vínculo de pareja es común, ¿Por qué? Creemos que en estos casos un vÍTKulo de pareja proporciona la mejor solución para conseguir la alimentación de la madre; un macho puede conseguir alimento y llevarlo a su pareja y a sus hijos.
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En la mayoría de los primates :felta la relación de pa¬ reja, Como las crías son capaces de trepar por el cuerpo de sus madres desde poco después del parto» las manos de la madre están libres para efectuar el forrajeo, (Es in¬ teresante comprobar que los niños demuestran una forma residual de esta innata habiÜdad de los primates de trepar durante las primeras semanas de su vida. Esta habilidad se denomina el reflejo de Mow, Si un niño cree que va a caerse de espaldas» automáticamente extiende sus brazos y cierra sus puños,) No tenemos forma de saber si el H, írecíws tenía el pe¬ laje como los otros primates» aunque pensamos que pro¬ bablemente no» porque» como comentaremos después» creemos que llevaban vestidos. El cerebro de íf, erectus debió haberse desarrollado bastante» de modo que los ninos de H, erectuSi lo mismo que los niños actuales» apenas podían sostener la cabeza» llegando a apoyarse
E@ta mono De Brazza no tiene problemas para viajar con su cría, que puede agairaree a $u pelaje. Las madres de Homo erectus probablemente carecían de pelaje al que asirse sus crías� por lo que tendrían que llevarlas en brazos.
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Capítulo
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Los orígenes de la c u l t u r a y la aparición d e l género homo E3
'tu i# Fronteras de l . a investigación , ;vt
Homo erectusi ¿Um o más especies? En las pobladones vivas es posi¬ ble saber si dos primates diferentes pertenecen a especies diferentes, ¿Se pueden reproducir entre ellos? En este caso, ¿son fertiles sus descen¬ dientes? Si la respuesta a estas pre¬ guntas fiiera no, estamos tratando con diferentes especies.Pero� ¿cómo conocemos las especies diferentes a partir de los registros fósiles? En este casOí los paleoantropólogos deben ju2�r según el grado de diferencias existentes entre ellos» Una vez que dos poblaciones cesan de procrear entre ellas> comenzarán a desarrollar características divergentes. Pero ¿cuánto tienen que diferir para que las consideremos diferentes especies? Como los registros fósiles no pueden revelarnos los patrones de procreación� no es sorprendente que los paleoantropólogos tengan dife¬ rencias de opinión sobre si dos fósi¬ les pertenecen o no a la misma especie. Los paleoantropólogos tie¬ nen diferentes predisposiciones; al¬ gunos tienden a ser «divisores�j identificando más especies diferen¬ tes» en tanto que otros tienden a ser «unionistas»} identificando menos especies diferentes. Durante los años veinte y treinta del siglo xx la divi¬ sión fue la postura más comúnj casi a cada nu evo hallazgo de ífoffí a erectus se le asignó una especie diferente � indusOj un nuevo género. Por ejemplo» el Híhecflíífhrppwsírecíwy se denomina actualmente Homo erec¬ tas de Java> y el Simnáiropus pekiuettsis es actualmente el Homo erectas de Pekín (Beijing). Franz Weidenreich sugirió en los años cuarenta esta unificación» que do¬ minó la clasificación entre los años 1960 y 1970. Pero ya en los ochenta� PeterAndrews» Christopher Stringer y Bernard Wood propusieron que los
fósiles asiáticos y africanos� agrupa¬ dos previamente como H, erectas� eran lo suficientemente diferentes como para constituir dos especies separadas: una asiática (H, y otra afiicana (fí, ergaster)� con lo que otra vez había hipótesis opues¬ tas sobre los fósiles de H erectas. Cabe, pues, preguntarse si el H, erectas era una o dos especies, Para saber qué hipótesis es la más correcta� Andrew Krameranalizó las medidas de varios cráneos de fósiles» tanto africanos como asiáticos, ade¬ más de otros dos grupos: humanos modernos» que sabemos que pertenecena la misma especie» y un grupo mezclado de homínidos primitivos que estaban convencionalmente cla¬ sificados como pertenecientes a dos o tres especies diferentes, Kramer pensó que si los fósiles africanos y asiáticos no variaban más que los modernos humanos» podríamos de¬ ducir que estos fósiles pertenecían a una sola especie» la del H erectas. Y el grupo mezclado de antiguos ho¬ mínidos presentaría más variaciones que los humanos modernos, Los 16 cráneos asiáticos y africa¬ nos del análisis de Kramer (que po¬ dían o no ser de la misma especie de H, mcíMs) fueron los únicos que te¬ nían las medidas requeridas. Sus datadones variaban de 1,8 millones de años hasta hace 500,000 años; siendo iguales a pesar del amplio intervalo de su antigüedad debían mostrar más diferencias estructurales de las que presentaban los 16 cráneos de H, y que la que presentaban en¬ tre sí los cráneos de los humanos modernos, Kramer deseaba compa¬ rar sus 16 cráneos de H. erectas con otros tantos de humanos modernos pero ¿cómo escoger 16 cráneos mo¬ dernos entre tantos posibles? (Él te¬
nía medidas de 2,533 cráneos). Una muestraal azar no sería suficiente» ya que no se puede estar seguro de lo representativos que puedan ser sólo 16 ejemplares, por lo que Kramer utilizó 1,000 muestras diferentes ob¬ tenidas al azar� de las que 16 proce¬ dían de los 2,533 cráneos modernos posibles. Para cada característica comp>arada� analizó ui� medida de variabilidad para las 16 muestras, ¿Cuáles fueron los resultados de la comparación? Los 16 supuestos crᬠneos de Jí, erectas no tenían más va¬ riabilidad que la mayoría de muestras de los cráneos de los mo¬ dernos humanos» lo que sugería cla¬ ramente que procederían de la misma especie. Para concretar esta conclusión, Kramer comparó poste¬ riormente las muestras modernas con la muestra mezclada de los crᬠneos de antiguos homínidos (los cráneos usados fueron nuevamen¬ te los que tenían las medidas re¬ queridas), Dado que la muestra de antiguos cráneos probablemente procedía de más de una especie» p>arecían más variables que las mues¬ tras de los modernos humanos por lo que todas las muestras de huma¬ nos modernos eran menos variables que la muestra efectuada con la mezda de antiguos cráneos. Por tanto, d estudio de Kramer sugiere de forma sólida que los ho¬ mínidos de África y Asia de entre 1,8 millones y 500,000 años de antigüe¬ dad eran todos Homo erectas, Fufftites Anck-eiv «(The Natural Ki$tory Evolutiotiajy Fate OÍ Homo en N, Caxol R. EjH" ber y Metvia Embec, eds-, PhysicaiAn (ftrojxihgy; Origimi Reúdings in Metítatí and Practiiv (Upper EUver, NJ; Prentice Hall, 2002),
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Los orígenes de la cultura y la aparición del género h o m o
incluso en sus madres. En cualquier caso» cuando los pri¬ meros homínidos comenzaron a depender de una alimen¬ tación de carroña y de caza (asi como de las pides para vestir)� tuvo que ser difícil para las madres con hijos pe¬ queños seguir ejerciendo estas actividades mientras cuida¬ ban de ellos. Por eso el matrimonio debió de ser una solución efectiva a este problema ya que el padre propor¬ cionaba a la madre y a la cría las provisiones que necesita¬ ban para la subsistencia (para una discusión critica sobre esta teoría» véase el capítulo dedicado al matrimonio). Otro aspecto importante de la evolución del Homo erectus fue ei movimiento de las poblaciones fuera de África del sur y África oriental. Como sucedió con la de¬ saparición del dimorfismo sexual> parece que las innova¬ ciones culturales fueron básicas para permitir que el H, erectus se desplazara hacia nuevos ambientes. ¿Por qué? Pues porque al penetrar en estos nuevos entornos se enfirentarian con nuevas (y generalmente más frias) con¬ diciones climáticas, nuevas y diferentes fuentes de mate¬ rias primas para los instrumentos y nuevas plantas y animales con los que alimentarse. Todos los animales se adaptan a tales cambios a través de la selección natural, aunque ésta, normalmente, lleva bastante tiempo y exi¬ ge cambios físicos en la adaptación de los organismos. El H erectus fiae capaz de adaptarse rápidamente a las mevas condiciones ambientales sin experimentar, apa¬ rentemente, cambios físicos, lo que sugiere que sus me¬ canismos de adaptación fueron fundamentalmente culturales más que biológicos. ¿Qué adaptaciones culturales pudo desarrollar el H erectus�. El fuego pudo ser la adaptación cultural crucial para adaptarse a los climas más íHos. Como dijimos an¬ tes, existen ciertas evidencias del uso del fuego por parte del f£ erecíw, Pero el fuego sólo puede calentar a la gente cuando está quieta y no cuando está recolectando ali¬ mentos. Al ser móvil en climas más fríos, el fí. erectas pudo comenzar a vestirse con pieles de animales para abrigarse; inclusoi, algunas herramientas pertenecientes a estos Homo son semejantes a las que utilizan para proce¬ sarlas pieles muchos grupos humanos recientes, y parece indudable que difícilmente hubiera sobrevivido a las du¬ ras condiciones climáticas donde se han encontrado sus restos> al este de Europa y en Asia, sin tener algún tipo de vestido. Por otra parte, si es cierto que utilizaban las pie¬ les de animales para abrigarse, es muy probable que las mismas procedieran de animales que él mismo había ca¬ zado. Podría no haber dependido dd carroñeo para con¬ seguir las pides (las pides son lo primero que destrozan los depredadores cuando desmembran un cadáver), por lo que d H, erectus no tuvo más remedio que cazar para poder ponerse las pieles que había conseguido pues ne¬ cesitaba pides intactas para vestirse.
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Es interesante considerar que en d este de África d R írpííwy convivió con, al menos, una de las otras espe¬ cies de homínidos (d A boííd), y puede induso que con tres (A boiseit A afrkartus y H habilis/rudolfensis). ¿Qué fue lo que hizo que el H, erectus sobreviviera e incluso prosperara mientras las demás especies se extinguían? De nuevo la cultura puede ser la respuesta. El A ÍJOííeí pa¬ rece haberse especializado en pastizales: sus grandes mo¬ lares y b poderosa estructura de su dentadura le permitía comer las duras semillas de las hierbas y otras materias correosas que los otros homínidos no podían masticar. Sin embargo, ellos no podían competir con los demás animales que se alimentaban de hierba, pero que se re¬ producían más rápidamente y tenían mayor vdocidad para escapar de los depredadores. El primitivo J-fomo fue, aparentemente, un usuario de herramientas que depen¬ día, al menos en parte, dd carroñeo y la caza, aunque comparado con d H, erectns� su primitiva tecnología era tosca y su organización social menos compleja. Además, parece que el K erecttis estaba mejor organizado para el carroñeo, la caza y también para defenderse de los de¬ predadores. Estas diferencias culturales pueden haber proporcionado grandes ventajas al H erectus y llevar al primitivo Homo a su extinción. Este escenario, tal como lo hemos sugerido para la evolución dd primitivo HomOi es un cuento que pudo ser, o no, reaÜdad. Pero sirve para concretar lo que he¬ mos dicho sobre el K erectus y la zona en la que evolu¬ cionó. Dejando aparte detalles particulares, parece que no hay duda de que d desarrollo de una cultura más compleja fue vital para la evolución dd H. erectus,
Culturas del Paleolítico Inferior la tradición de febricar herramientas en piedra del H. erectus se llama Paleolítico Inferior. Esta tradición lí¬ rica induye técnicas denominadas de «núdeo», ya que es d núdeo de piedra, más que las hojas, lo que se utiliza en bruto para obtener herramientas más perfeccionadas (comentaremos con posterioridad más detalles sobre la tecnología lítica del Paleolítico Inferior). Como los ins¬ trumentos de piedra son los materiales culturales que con mayor frecuencia aparecen en los yacimientos ar¬ queológicos de estos antiguos pueblos, la cultura entera d d Homv erectus se denomina fírcuentemente íta/eoííííco Inferior, denominación que seguiremos en este libro, Los hallazgos arqueológicos de herramientas y otros artefectos culturales, datados desde hace 1,5 millones de años hasta alrededor de 200.000 años, se asume que es¬ tán producidos por el H, erectuSy aunque los fósiles no siempre se relacionan con estos materiales, por lo que es
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probable que algunas de las herramientas di este período fueran hechas por otros homínidos» diferentes al H, trectuSi tales como los AustralopithecHS primero y el fiemo sapiens después. El llamado período Adielense de elabo¬ ración de instrumentos Uticos data de hace millones de años y dura algo más de un millón de años� siendo el H ífiecíws el único homínido que vivió durante esta época. Así puesi tradidonalmente� se asume que el H erevtus fue el responsable de la mayor parte� o acaso de todo d con¬ junto» de herramientas del período Achelense» como co¬ mentaremos más adelante. La TIWVDICtóN Achelense de HERIW�MÍENTAS
la tradición de febricación de instrumentos líticos conocida como Achdertse recibe el nombre del lugar de Saint Acheulj en Francia» donde aparecieron los primeros ejemplos» aunque los instrumentos más antiguos encon¬ trados proceden del Africa oriental» en las proximidades del río Peninj en Tanzania» que datan de hace más de l»5 millones de años. En contraste con el olduvayense» el conjunto achelense tiene herramientas más grandes� creadas según diseños o formas estandarizados. Las he¬ rramientas olduvayenses tienen bordes agudos hechos con unos pocos golpes» mientras que en las herramientas achelenses la piedra se descascarilla golpeando más veces la mayor parte de los bordes y muchas de estas herra¬ mientas son hojas grandes que se han hecho a partir de núcleos muy grandes o de cantos rodados. Uno de los instrumentos achelenses más típicos es la llamada hacha de mano» que es una herramienta bi�cial en forma de lágrima con un borde muy afilado. Otros instrumentos de gran tamaño recuerdan hendedores y pcos. También existen otras muchas formas achelenses» tales como rascadores que tienen un gran filo. Los primeros instrumentos achelenses parecen ela¬ borados a foerza de golpes con una piedra muy dura» ainque posteriormente las herramientas son más an¬ chas y planas y pueden haberse febricado con un marti¬ llo delgado de hueso o de asta. Esta técnica del martillo blando para febricar instrumentos de piedra supuso una importante innovación yaque los instrumentos ela¬ borados con las técnicas de piedra contra piedra tienen limitaciones en términos de agudeza de filo y forma» ya que sólo se pueden hacer hojas grandes y gruesas con esta técnica del martillo duro (a menos que quien la ela¬ bore sea muy hábil y que la piedra reúna condiciones ex¬ traordinarias). Por el contrario» las herramientas laboradas con el martillo blando son mucho más del¬ gadas y largas que las obtenidas con el martillo duro y permite» además» tener mucho más control sobre el ta¬ maño y la forma. Esto significa que con dicho procedi¬
miento se pueden elaborar herramientas más afiladas y delgadas» lo mismo que herramientas con formas más complejas. Por ejemplo» aunque las hachas de mano se pueden hacer con cualquiera de las dos técnicas» las he¬ chas con el martillo blando tienen los bordes más afila¬ dos y son mucho más finas. ¿Las hachas de mano estaban hechas para cortar ár¬ boles? No podemos determinar para qué se usaban las hachas de mano pero» experimentando con ellas» parece que no eran muy eficaces para cortar madera» siendo más probable que se utilizaran para descuartizar grandes pre¬ sas. Lawrence Kedey examinó microscópicamente algu¬ nas hachas achelenses y sus conclusiones foeron que se debieron de utilizar para cortar carne. También se pudie¬ ron usar para trabajar madera� particularmente para tallaHa y afilarla y también sabemos que son buenas para excavar. WUliam Calvin ha sugerido incluso que se pudo usar el hacha de mano como proyectil lanzándola contra una manada de animales con la esperanza de herir o de matar a algún ejemplar, Los instrumentos achelenses se encuentran ampliamente difondidos por África» Europa y Asia occidental» aunque las hachas de mano bifeces» pi¬ cos y cuchillas no suelen encontrarse en el este y sudeste de Asia. A pesar de que se haya encontrado H. erecíwy en todas las áreas del Viejo Mundo es sorprendente que la tradición de sus herramientas difiera del este al oeste. Re¬ cientemente algunos arqueólogos han sostenido que la felta de grandes herramientas bifeces en el este y sudeste de Asia� se debe a que el H írecíwí de esos lugares tenía mejores materiales para elaborar instrumentos» por ejemplo el bambú. El bambú se ha usado recientemente en el sudeste asiático para muchos usos» incluyendo fle¬ chas extremadamente afiladas y palos para cavar y cortar. Geoffrey Pope también ha demostrado que el bambú se encuentra precisamente en aquellas regiones de Asia en las que no se han hallado hachas de mano ni otros gran¬ des instrumentos bifeces. Consumo
de grandes presas
Algunos yacimientos achelenses han mostrado evi¬ dencias de haberse consumido en ellos grandes presasAsí» E. Clark HoweUj que excavó yacimientos en Torralba yAmbrona» en España» encontró un número sustancial de restos de elefentes» así como la inequívoca evidencia de presencia humana en forma de herramientas. Howell sostiene que los humanos usaron el fuego en aquellos lu¬ gares para espantar a los elefentes hacia un lugar panta¬ noso del que serían incapaces de escapar. Para cazar elefentes de esta forma era necesario que ¡os seres huma¬ nos diseñaran, previamente» un plan y que trabajaran cooperando en grandes grupos.
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Los orígenes de la cultura y la aparición del género h o m o
Pero ¿acaso é descubrimiínto d i huesos de aiiimales de mediano o gran tamaño� asociados con herramientas� nos aseguran que los humanos cazaban grandes presas? Algunos arqueólogos que han reexaminado los yaci¬ mientos de Torialba piensan que la supuesta cacería pudo no ser más que carroñeo� ya que tanto Torralba como Ambrona están cerca de antiguas corrientes de í�a y� por tanto� muchos elefentes pudieron morir de forma natural� acumulándose sus huesos en ciertos luga¬ res a causa de las corrientes. Lo que sí es indudable es que los humanos descuartizaban deliberadamente> diferentes tipos de presas y por eso se encontraron distintos tipos de herramientas junto a ellos* Si los humanos cazaron o no grandes animales en Ambrona y Torralba es algo discutiblcj pero de lo que sí podemos estar seguros es de que> como actualmente� consumían caza mayor y que, probablemente� practicaban la caza menor, COKTROL DEL FUEGO
Se cree que una de las formas de cazar del ü erevUts fue por medio del fuego, técnica usada todavía por algu¬ nos grupos de cazadores-recolectores contemporáneos. Es un sistema muy efectivo, ya que el fiiego hace que los animales huyan de sus escondites escapando hacia los lu¬ gares en los que los aguardan los cazadores para matar¬ los. La mayoría de las grupos que utiliza estas técnicas aplica el fuego voluntariamente� pero también es posible que aprovechara fuegos originados espontáneamente por los rayos. ¿Hizo estos fuegos el R erectu� Dado que el primer homínido fue encontrado en zonas dd Viejo Mundo con helados inviernos, la mayoría de los antro-
El Homo erectas comía -y probablemente cazaba- grandes y también debió aprender a controlar el fuego
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pólogos cree que había aprendido a controlar el fuego, al menos para calentarse. Existen evidencias arqueológicas de la existencia del fuego en algunos antiguos yacimientosv aunque el fuego también puede ser un evento natu¬ ral. Por ello si fue o no deliberadamente controlado por el H erectuSi es algo que todavía no está establecido defi¬ nitivamente, Los indicios sugieren, aunque no de forma conduyente, que d uso ddiberado del fuego procede de Kenia, en Africa oriental, y tiene más de 1,4 miUones de años. Pero la evidencia más persuasiva, aunque todavía no de¬ finitiva, dd uso dd fuego por los humanos procede de la cueva de Chu-ku-Tien en China, donde han sido halla¬ dos fósiles de H, erectas de hace unos 500.000 años. En esa cueva se erKontraron cientos de huesos de animales astillados y chamuscados, aparentemente restos de ali¬ mentos. También hay restos de cenizas, que sugieren d control humano sobre d fuego. Aunque análisis recientes han despertado ciertas du¬ das sobre estos halla��os, d problema más serio es que estos restos humanos, herramientas y cenizas rara vez se encuentran juntos en d mismo estrato. Además, no hay hogares en d yacimiento de Chu-ku-Tlen, El fuego se puede producir espontáneamente cuando existe un gran cúmulo de materia orgánica, por lo que no se puede ase¬ gurar definitivamente que hubiera control humano dd fuego en ese lugar. Induso la evidencia de que los huma¬ nos llevaran a la cueva a los animales para devorarlos es sólo una posibilidad: se han encontrado restos de hienas y lobos en la cueva, por lo que pudieron ser estos anima¬ les, y no los humanos, los que llevaran muchas de las par¬ tes de los animales a la cueva. La evidencia del uso deliberado del fuego procede, algo más tarde, de Europa. Desgraciadamente esta evi¬ dencia dd control dd fuego en los yacimientos europeos no está asociada con fósiles de H erectus, por lo que la re¬ lación definitiva entre éste y su uso deliberado sigue sin poder establecerse. Pero la felta de una clara evidencia, tampoco significa, por supuesto, que d K erecUts no lo utilizara. Después de todo se desplazaba por áreas filas y es dificil imaginar cómo podría sobrevivir sin d uso de¬ liberado d d fuego, teniendo en cuenta que los humanos estaban desprovistos de pilosidad corporal y que tam¬ poco usaban las pieles de animales que cazaban para abrigarse, Por lo tanto, aunque vestirse se hiciera necesario, el uso dd fuego puede haber sido aún más im¬ portante, no sólo para calentarse, sino para poder cocinar los alimentos. El control del fiiego fue un gran paso para incrementar la presasx energía controlada por los humanos, pues codnar los alimentos (no sólo la carne) permite
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Los orígenes
de la c u l t u r a y la aparición d e l género homo
que fetM sean más fócilmente digeribles por lo tanto� más féciles de utilizar También es imjjortante recordar que con el fuego podian ahuyentar a los depredadores� que eran muy abundantes.
Campamentos Los asentamientos achelenses se encontraban general¬ mente próximos a fuentes de agua� vegetación abun¬ dante y grandes cantidades de animales herbívoros, Otros campamentos se han encontrado en cuevas� pero la mayoría están en lugares despejados rodeados por for¬ tificaciones rudimentarias o sencillos cortavientos. Va¬ nos asentamientos a&icanos están marcados por cascotes de piedra colocados alli por el H erectus, proba¬ blemente con el doble fin de asegurar los cortavientos y proporcionar municiones en caso de un ataque repen¬ tino. Los supuestos campamentos muestran gran variedad de instrumentos» loque indica que eran el centro de mu¬ chas actividades del grupo� También se han encontrado asentamientos más especializados� lejos de los campa¬
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mentos» que se caracterizaban por el predominio de un tipo particular de instrumentos. Por ejemplo, un lugar de despiece en Tanzania contiene restos descuartizados de hipopótamos y pesadas herramientas para aplastar y cor¬ tan Los talleres constituyen otro tipo de yacimientos es¬ pecializados» que aparecen con alguna regularidad y se caracterizan por contener restos de herramientas; su si¬ tuación estaría muy próxima a algún lugar con abun¬ dancia natural de aquellas piedras utilizadas para febricarlos instrumentos» Se ha excavado un campamento en el yacimiento Te¬ rra Amata» cerca de Niza en la Costa Azul francesa. El campamento parece que se ocupó a finales de la prima¬ vera o comienzos del verano» según se deduce de los pó¬ lenes estudiados en heces fosilizadas. Los excavadores describen agujeros de postes hechos en la arena> delimita¬ dos por líneas de piedras» presumiblemente marcando los puntos en los que aquellas gentes construyeron cabanas de aproximadamente 9x5 metros (Figura 7.8). Una ca¬ racterística básica de estas cabanas es el hogar situado en el centro que parece haberse protegido con una pequeña valla construida en su esquina nororiental. Varios indicios
Hgura 7.8. Reconstrucción de ta cabaña ovai levat�ada en Tetra Amata Bta caha� tetim apro�imadamenu � x 5 rrííírw; Fw�íííí; Copyright © 1%9 by EricMoSí. Keproducidt» con permiso de Eric Mo$íJr.
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Los orígenes de la cultura y la aparición del género h o m o
sugieren que los CKupantes de Tírra Amata recolectaban mariscos� como ostras y mejillones� pescaban y cazaban en los alrededores. Los restos animales muestran que co¬ braban tanto animales pequeños como grandes» siendo los más frecuentes las crías de grandes presas» como venados� elefentes» jabalíes» rinocerontes y bisontes. Algunas de las cabanas tienen zonas dedicadas a talleres» encon¬ trándose salpicadas de restos de herramientas; ocasional¬ mente» la impresión de una piel de animal muestra el lugar donde se sentaban a trabajar la piedra.
Relígíón
y rítual
Aunque hemos estudiado el estilo de vida del Paleolí¬ tico Inferior» y en los capítulos anteriores los de las gen¬ tes del Plioceno Inferior» todavía no hemos comentado otros aspectos menos materiales de la vida tales como la religión y el ritual� ¿Qué pensaba el K erfctus sobre el mundo que le rodeaba? ¿Tomaba parte en algún tipo de ritual? ¿Practicaba alguna forma de religión? En general» las respuestas parecen ser negativas. Los datos que po¬ seemos para poder contestar a estas preguntas son muy limitados»aunque hay algunas pruebas deque ritual y re¬ ligión podrían haber formado parte de la cultura del Pa¬ leolítico Inferior Se han encontrado en algunos yacimientos del Paleo¬ lítico Inferior restos de wre rojv (arcilla oxidada). Esto puede ser significativo ya que en muchas culturas anti¬ guas» e induso en algunas modernas» se ha utilizado el ocre rojo para representar la sangre y» en general la vida» en diversos rituales. El ocre parece ser particularmente importante en rituales de enterramiento y se han encon¬ trado restos humanos manchados de ocre rojo en mu¬ chas partes del mundo» que datan del Paleolítico Medio (hace unos 200.000 años), aunque no hay evidencia de que el K frectus enterrara a sus muertos» ni de que el ocre se utilizara en rituales» ya que pudo haber sido em¬ pleado como decoración corporal o» simplemente» como protección contra las picaduras de los insectos o las que¬ maduras solares. Más significativa y más controvertida es la propuesta hecha por los investigadores de la cueva de Chu-ku-Tien (en el norte de China) en el sentido de que algunos res¬ tos de H, erectus presentan evidencias de canibalismo ri¬ tual. En estos casos el fijramen magnum de algunos ejemplares se había roto» había sido agrandado y los hue¬ sos feciales también se habían roto ex profeso. Aparente¬ mente el motivo fiie la extracción del cerebro para comerlo. El canibalismo ritual se ha documentado am¬ pliamente en pueblos actuales» por lo que su presencia en las antiguas poblaciones no es imposible» aunque ante la ausencia de enterramientos formales� parece improbable.
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Además» los especialistas dicen que las partes del cerebro que parecen haberse agrandado (para su extracción) son las que están situadas en los puntos habituales de frac¬ tura del cráneo y podrían haberse roto por el deterioro y las alteraciones producidas a lo largo de milenios. Sobre este punto» nada podemos decir sobre si la reUgión y los rituales formaban parte de la cultura del Paleo¬ lítico Inferior.
Sumario L Los instrumentos de piedra más antiguos apare¬ cen en varios yacimientos de Á&ica oriental y tienen una antigüedad de unos 3»5 millones de años. Aunque predo¬ minan las hojas de corte» son también frecuentes los choppers. Los choppers son ntícleos de piedra parcial¬ mente afilados que se pudieron utilizar para cortar. Estas primeras herramientas se denominan olduvayenses, 2. Los arqueólogos han experimentado los usos probables de las herramientas olduvayenses. Las hojas parece que son muy versátiles: se pueden utilizar para ex¬ traer pieles» desmembrar animales y trabajar madera. Los choppers se pueden utilizar para cortar ramas y para des¬ membrar las articulaciones de los animales. Los homíni¬ dos» hace alrededor de 2 millones de años» cortaban restos de animales para comérselos» consiguiéndolos por medio del carroñeo más que por la caza, 3. Existen yacimientos arqueológicos de hace unos 2 millones de años que tienen grandes concentraciones de herramientas de piedra y huesos de animales. Algunos especialistas piensan que pudieron ser campamentos pri¬ mitivos de homínidos» aunque otros no opinan así. Pero si estos lugares no fueron campamentos» ¿qué foeron? Al¬ gunos arqueólogos comienzan a pensar que estos lugares pudieron ser sitios en los que los homínidos primitivos tan sólo despiezaban la carne pero que no vivían en ellos. 4. La presencia de herramientas Üticas y� quizá» de algunos campamentos sugieren que los homínidos pri¬ mitivos tenían algún tipo de cultura. La cultura es un proceso dinámico y adaptativo de comportamientos aprendidos» compartidos e integrados. 5. La serie de importantes cambios físicos experi¬ mentados por los primeros homínidos que llevaron a la evolución de nuestro género Homo incluyen: la expan¬ sión del cerebro» la modificación de la pelvis femenina para permitir el paso de niños con mayor volumen cere¬ bral durante el parto y la reducción de cara» dientes y mandíbulas. Estos cambios físicos aparecen en las espe¬ cies Homo habiUs y Homo rudolfems, datadas de hace 23 millones de anos. Los primitivos Homo parece ser que utilizaban herramientas» comían carroña y posiblemente
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tazaban� de mudo que la cultura o la evolución del com¬ portamiento cultural parece haber contribuido también a estos cambios físicos, 6, El Homo �rectus apareció hace entre US y U6 mi¬ llones de años. Tenía mayor capacidad cerebral que el Homo habilis y un esqueleto poscraneal muy moderno. Lo que más diferencia al Homo erectus de los humanos modernos es la forma de su cráneo que era alargado� bajo y con prominentes arcadas supraorbitarias. 7» El Homo erectus fue la primera especie de homí¬ nido que se difundió ampliamente por el Viejo Mundo, Algunos de sus halla��os tuvieron lugar en el este de Eu¬ ropa y en Asia� que son lugares fríos. Esta especie fue ca¬ paz de adaptarse a estos nuevos y a menudo más fríos entornos por medio de la cultura. S, Los instrumentos del Paleolítico Inferior y otros utensilios culturales que datan entre 1,6 millones y 200.000 años fueron producidos probablemente por el H erectus. El nombre que recibe la mayoría de esta bien conocida tradición de herramientas de piedra es el de Achelense� Las herramientas achelenses incluyen peque¬ ñas hojas y grandes nücleos> aunque las hachas de mano> que son otras grandes herramientas bifeces» también son frecuentes. 9. Aunque se supone que el fi erectus había apren¬ dido a utilizar el foegp para sobrevivir en los fríos inviernoSj no existen pruebas definitivas del control de este elemento, Sí hay evidencias de que algunos lugares fueron utilizados para comer grandes presas� pero todavía se de¬ bate si fueroncazadas por el H erectus o no. Asimismo hay pocas pruebas de que el H erectus haya celebrado rituales.
Glosario de términos Achelense Cresta sagital Cultura Hacha de mano Herramienta bi�cial Herramienta unifecial Hojas de percusión Homo mctus Homo habilis Homo rudolfertsis Martillo blando Martillo duro Olduvayense Paleolítico Inferior Prognatismo Taurodontismo Torus occipital
Cuestiones críticas Lp ¿Cuál pudo serla causa porla que los primeros ho¬ mínidos comenzaran a elaborar instrumentos de pedra? ¿Podrían haber sido los instrumentos de piedra más efectivos que los de madera o hueso? 2. ¿Cómo se pueden relacionar los aparentes cam¬ inos fisicos habidos en los homínidos primitivos con sus aparentes cambios de conducta? 3. ¿En qué pudo diferir la cultura del H crecUis de la de los primeros homínidos? 4. Cuando lo comparamos con los primeros homínidos, el R erectifs es más grande� con cerebro mayor y dientes más pequeños. ¿Cómo se pueden correlacionar estos cambios físicos con los apa¬ rentes cambios de conducta en el H írecíHí? 5. El Jí erectas vivió en muchos lugares del Viejo Mundor ¿qué es lo que pudo permitirle una dis¬ persión tan amplia?
Ejercicios de Internet L Visite el Museo Virtual de Historia Natural (]4:tp://www.wf.carleton.cay Museuin/1 .htinl) y examine una o más de las muestras exhibidas sobre la evolución humana» después visite la exposición de la evolución hu¬ mana en el Museo Mankato en (httpr//einiiseum. inankatojiisus,edu/biology/humaiievoliitiou/iiidex�ht mi). Compare y contraste lo mostrado en los dos museos virtuales. 2. Visite la página sobre la cultura de los primeros ho¬ mínidos del Palomar CoUege en (httpr/Zdaphne.paloinar. edu/hoino/homo_3Jitin) y escriba un breve ensayo des¬ cribiendo la nueva información que ha obtenido. 3. Vaya a la Sala de los Ancestros Humanos de la Smithsonian Institution en litlpr//www.innlL5Í.eduy antfaro/hiiinanoTÍgins/ha/aiices_5tartJitinl. Examine la imagen QTVR del Homo ergaster (WT15.000). Compᬠrela con las otras imágenes QTVR de cráneos de homíni¬ dos que haya visto en el lugar. 4, Explore un lugar dedicado a la tecnología de he¬ rramientas de piedra en )4:tp:/ywwwJit,uÍQ4iQ/iakn/rQger/lithic/sarchtml. Vea� en particular� las primitivas tecnologías de la piedra.
Lecturas sugeridas Chía, L.
The ítíJiy of PdcingMafU Fri?mArc}ui€oU>gy íc My�tery.
Oxford: Oxford University Press, 1990. Una historia sobre la
Capítulo 7
Los o r í g e n e s de la cultura y la aparición del género homo
investigación en el y�ciniierito de Chy-ku-Tien, que incluye un interesante análisis sobre la misteriosa desaparición de todo el material fósÜ durante la Segunda Guerra Mundial. Krameh, a. «The I�tural HistOry and EvoluUonary Fate of Homq erectuS»�. En P. N. Peregrine» C, R. Ember y W. Eoiber (Eds.). Physkal Ant/íTOj>í)ío�; OrijjíHíjí Reaáings in Method atid Practk�. Upper Saddle Rivert NJ: Prentice HaH 5001, Una buena visión sobre el Homo erectus y la hipótesis muítirregional de los orígenes del hombre moderno. RasmueseNj T. (Ed,), TÍíí Orijíin and BíoÍhíwm of Humatis and H«rrafl«ííííí. EostOn: Jones andBarÜetts 1993- Una colección de ensayos €n torno a los primeros homínidos y los orígenes de la cultura, RiGKTMíiiE, G. P, The Evoluthn of Homo erectusi Comparative AtíatonHcal Stitdk$ of an Eixtinct Hitman. SpeciíS, Cam¬ bridge. Cambridge University Press» 1990. Una revisión de las características anatómicas del Hamo erectus y cómo han cambiado éstas a lo largo del tiempo. SiígHí Stortíí Sp&ik. Nueva York: SCHICK, K. y Toth, N. Simón & SchuSter» 1993, Esta obra Se centra en la conipren-
145
$ión de las tradiciones de las herramientas del pasado» cómo se hacían y cómo se utilizaban. Los autores describen su trabajo de campo y todo lo relacionado con la recons¬ trucción arqueológica de las tradiciones de herramientas del pasado. Shtpman, P. The Alin Wíio Found The Afissínj: Lífiit: Eugene Duhoh and iíií Lifelong Que�t to Prove Darwin Rigkt. Nueva \brk: Simón & schuster, 2001. Una nueva biograt� sobre Rigene Dubois y su díScubrimiento del Homo Tatteesall» i. The Human Odyssey. Nueva York: Pcentice Hall» 1993. Una visión panorániica de la evolución humana muy Uen ilustrada» dirigida a un público no especializado. TATTEmALL, I y SofWARTZi J. E]ttinct HumanS. Boulder, CO: ���stview, 2000. Una atractiva guía ilustrada de los fósiles Ivmanos. Los Capítulos 4 hasta el 6 cubren desde �1H, Mií basta ú H, Waltcei� a. y Shipman� P. The Wisdom of the Bones: In Search of Human Origins. Nueva York: Knop€ 1996. Un informe sobre el descubrimiento y análisis del esqueleto del Homo escrito para un lector no profesional,
: V -�1
Aparición del Homo sapiens Indice del capitulo
-Ai '-v iÉ¿¿
Transición del Homo erectus al Homo sapiens Culturas del Paleolítico Medio £1 surgimiento del hombre moderno ¿Que le ocurrió a los neandertalesi
14S
Ca p í t ul o 8
Aparición del h o mo sapiens
E3
H
asta hace unos 20 años� ios paleoantropólogos creían que nuestra especie Homp sapiem se había desarrollado en los últimos 50,000 años, pero actualmente sabemos que apare¬ ció antes (Figura S.l), La fecha de 50,000 años sólo es aplicable a Europa� pero hallazgos recientes en África del sur indican la presencia hace�al menos�
100,000 años. El Homv sapkns sapiem de aspecto total¬ mente moderno data de hace unos 50,000 años. El paleoantropólogo Chxistopher Stringer define a los humanos modernos Homo sapiens sapiens como poseedores de «un cerebro abovedado, mentón, cejas pequeñas, arcada supraorbitaria reducida y un esqueleto bastante débil», A algunos de nosotros no nos gustarla que se nos llamara
período de años
GEOLÚGfCO
1,6
ñeistaceno Hloceno
5
CAñACTEfilSriCAS CULTUfíALES
H. hdpiens
Biterram lentos efe Shanidar
sapiens 10
Miocerio
100.000 a.
H. BBpieriB
20
Ollgoceno
30 -
H. ne&ncí&rtáfer�siB {¿H. síp/erts ne�ndeFtefen�h ?
200.000 a.
40 Eoceno 50
60
Herramientas musteiienses
300.000 a.
Herramientas levailol&lenses
400.000 a.
Paleoceno
70 -
superior H. húid6Íb0rg0r>sis {¿Homo sspiens BrcBico?) *
Hgura 6. 1.
Las clasificaciones alternativas apanecen en paréntesis.
Tiampo da ap ar i c ió n det hombra modamo
500.000 a.
� Capítulo 8 Aparición
d e l homo s a pi e ns 149
tus y H, sapiens podrían ser variedades precoces y tardías de la misma especie, por lo que tendrían que llamarse ambas H, sapiens (así el H erectas sería denominado Homo sapiens erectus). HOi�O HEÍDELBERGEISÍSÍS
Cráneo reconstruido de Homo heídstbergensisy basado en la mandíbula encontrada en Mauer� Alemania. A pes a r de recordar a I Homo srectuSy el Homo heideitergsntiene los dientes y la mandíbula de menor tamaño y su cerebro es mayor.
«débiles», pero con la excepción de nuestro gran cerebro, la mayoría de los humanos modernos son definitiva¬ mente «débiles» si se les compara con el H, erectas e in¬ cluso con las antiguas formas de nuestra misma especie H ífljjíírty. Somos relativamente débiles en varios aspec¬ tos, incluyendo nuestros huesos delgados y ligeros, lo mismo que nuestros dientes y mandíbulas pequeños. Ed este capitulo estudiaremos las evidencias fósiles, asi como la controversia sobre el paso del H, erectas a los humanos modernos, que pudo haber comenzado hace unos 500.000 años. También estudiaremos lo que sabe¬ mos por la arqueología de las culturas del Paleolítico Me¬ dio, hace entre 300.000 y 40.000 anos.
La transición del Homo erectus al Homo sapiens La mayoría de los paleoantropólogos admite que el H erectus evolucionó en el H, sapiens, aunque hay des¬ acuerdos en el cómo y dónde ocurrió la transición. Tam¬ bién hay desacuerdo sobre la manera de clasificar algunos fósiles de hace entre 500,000 y 200.000 años que tienen una mezcla de características de Homo erectus y Homo sapiens, Así, un fósil concreto puede verse clasifi¬ cado como Homo erectas por algunos antropólogos y como ífo/Mí? sapiens arcaico por otros. Yj como veremos, aún otros paleoantropólogos ven tanta continuidad en¬ tre ambas especies que creen completamente arbitrario considerar que estas clasificaciones pertenecen a especies distintas. Según estos últimos paleoantropólogos H, erec¬
En los últimos años, los científicos han sugerido que los fósiles «intercalares» comparten rasgos comunes y podrían constituir ur\a especie separada,el Homo heiddbergensís, llamado así por una mandíbula encontrada en 1907 en el pueblo de Mauer, cerca de Heidelberg (Ale¬ mania) . Ot ros esp ecím en es que podrían formar parte d e esta especie se han descubierto en diversas partes del mundo: Bodo, Hopefield, Ndutu, Elandsfbntein y Rabat, en Áfi'ica; Bilzingsleben> Petralona, Arago, Steinheim y Swanscombe, en Europa; y Dali y Solo, en Asia. El ífpmp heidelbergensis difiere del Hpíwíj erectas en que tiene dientes y mandíbulas menores y el cerebro mu¬ cho mayor (del orden de 1�00 cc), Altándole la cresta sa¬ gital y el toras occipital y con una arcada supraorbitaria que se divide en arcos separados para cada ojo, además de mostrar una mayor robustez del esqueleto (Figura 8J2). El H, heidelbergensis difiere del H, sapiens en que mantiene parte del prognatismo, posee dientes y mandí¬ bulas relativamente mayores, un tonis supraorbitario, menor capacidad cerebral y frente aplanada y, sobre todo, es más robusto. Muchos estudiosos se preguntan si el H heidelbergensis representa a una o más especies del Pleistoceno Medio o si se trata de una especie completa¬ mente distinta- Muchos creen que el Homo heidelbergen¬ sis debería ser considerado como un Homp sapiens arcaico. Y sólo algunos, como ya vimos, defienden que el Hpmp erectus debería incluirse en la especie Ho/no sapiens,
CD-ROM Ejercicio interactivo 11�10
Neandertales: ¿Homo sapiens u Homo neandertalensis? Puede existir desacuerdo a la hora de clasificar los fó¬ siles con características mixtas de hace entre 500,000 y 200,000 años, pero recientemente ha surgido otra fuerte disputa sobre muchos de los fósiles que tienen menos de 200.000 años. Algunos antropólogos los consideran defi¬ nitivamente H. sapiens, clasificándolos como H sapiens nearuiertalensisi en tanto que para otros son una especie diferente, Homo nmndertidensis, más comúnmente
150
Ca p í t ul o 8
Aparición del h o mo sapiens
E3
Cerebro 1.100-1.450 cc Pequeña wnstncdOn po�torbitaria Amplio fiueso / fjontai I / A'csadas suprHod�it
H. heideibergensis
Figura d.2.
Cerebm 1.125-1.750 cc
Cerero 1.000-2.000 cc
Grandes huesos paHetales Cráneo redondeado
H. ne9nd�&i�9f$
Mantón
H.
Co mp a r aci ón entra t o s c r á n e o s doHQmohsíóB\bBrgBns\�M Homo neandeitaiftnsis y�Homo
sapiens, e n la q u e s e aprecian i m p o r t a t U e s diferencias.
nQcido5 comoneand�itales. Los Deandertales han sido on grupo coníuso de homínidos fósiles desde que se eneontró el primer espécimen en 1856. A través de los años han sido víctimas de su caricatura� que general y equivo¬ cadamente los representa irónicamente con un aspecto más de simio que de humano a pesar de que podrían pa¬ sar por seres humanos no muy diferentes de la actual po¬ blación mundial. Pero» ¿formaban parte de nuestra especie? Por un momento» la respuesta parece ser afir¬ mativa» pero los hallazgos arqueológicos y los estudios genéticos recientes han planteado nuevas dudas sobre su relación con los humanos actuales y la balanza se está indinando del lado de quienes los agrupan con�ntamente� Veamos a continuación la historia de los descubrimien¬ tos de los neandertales� En 1656� tres anos antes de la publicación por Darwin de £í erigen de ¡as espeáest se descubrieron una calota y otros huesos fosilizados en una cueva del valle de Neander (tal es la palabra alemana para «valle»), cerca de Düsseldorf� en Alemania» Estos fósiles fueron los primeros que los científicos pudieron considerar hasta entonces como homínidos primitivos (los fósiles considerados como -Fí, erectus no se encontraron hasta finales del siglo xixj y los del género Austrahpi�evus hasta el siglo xx), Tras la publicación de la revolucionaria obra de Darwin» los neandertales fueron motivo de una gran controversia. Unos pocos científicos evolucionistas» como Thomas Huxley» pensaban que no eran tan diferentes de ios hu¬
manos modernos� en tanto que otros los consideraban irrelevantes en la evolución humana» y no veían en ellos más que una aberración patológica de individuos que padecían una peculiar enfermedad, Pero los fósiles simi¬ lares encontrados en Bélgica» Yugoslavia» Francia y en el resto de Europa demostraron que el origen de los nean¬ dertales no podía considerarse como una rareza. La reacción predominante ante la aparición de los neandertales fiie considerar que eran demasiado «brutos»
Cráneo reconstruido de un Homo neandertsiensis en¬ contrado en La Chapelle-aux-Saint$ (Francia).
Reoonstruociónde Boulede un neandertal (izquierda) como demostraba en 1929 en el Fíeld Muaeum de Chicago,
Y una reconstrucción má$ reciente (derecha). E$ta reconstrucción reciente se asemeja más al hombre actual.
y «priinitivos>� como para ser ancestros de los humanos modernos� concepto que prevaleció entre los estudiosos hasta bien entrados los años cincuenta del siglo pasado. Uno de los mayores defensores de esta idea fue Marcellin Boule> quien sostuvo� entre 1908 y I913i que los neandertalesno habían sido capaces de mantener una postura bípeda completa� a causa de la estructura excesivamente curva de los huesos de las extremidades inferiores que aparecía en algunos ejemplares de neandertal y que se debía a una enfermedad llamada raquitismo, causada por una deficiencia vitamínica* Sin embargo> desde los años cincuenta del siglo pasado» un gran numero de es¬ tudios comenzaron a oponerse a la teoría de Boule y» en la actualidad» se acepta generalmente que las característi¬ cas esqueléticas de los neandertales son completamente compatibles con el bipedalismo. Quizá lo más importante tuvo lugar cuando los fósi¬ les de los Anstrahpith�vus y de H, mucho más an¬ tiguos, se aceptaron como homínidos en los anos cuarenta y cincuenta» cuando los antropólogos se perca¬ taron de que los neandertales no presentaban muchas di¬ ferencias con los humanos actuales a pesar de su frente
huidiza» sus grandes arcadas supraorbitarias» sus cráneos aplanados» sus mandíbulas grandes y su ausencia casi to¬ tal de mentón (Figura Sin embargo» tenían cerebros mayores (más de iA50 cm�) que los humanos actuales (ligeramente superiores a los 1300 cm�). Algunos cientí¬ ficos creen que la gran capacidad cerebral de los nean¬ dertales sugiere que serían capaces de desarrollar un comportamiento complejo» característico del hombre actual. Sin embargo» su esqueleto muestra una serie de peculiaridades que denotan que los neandertales debie¬ ron de hacer un uso agotador de sus cuerpos, Los científicos tardaron más de cien años en aceptar la idea de que los neandertales no eran tan diferentes del hombre actual y que se les debia clasificar» por tanto» como Híímíí ííipierts neatjdertaknsh. Pero en los últimos años se ha generado un debate creciente sobre si los ne¬ andertales de Europa occidental eran antepasados de las gentes actuales» que viven en esas regiones desde hace unos 40.000 años. Los neandertales también vivieron en otras regiones aparte de Europa occidental. Así» en Europa central se ha encontrado una gran cantidad de fósiles muy semejantes
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Aparición del h o mo sapiens
E3
a los de Europa occidental� aunque algunas di sus carac¬ terísticas son diferentes» como la proyección de la parte inferior de la cara> que es menos pronunciada* También han aparecido restos fósiles de neandertales «n el suro¬ este de Asia (liaq e Irán) y en Asia central (Uzbekistán). Una de las colecciones de fosües más completas de nean¬ dertales procede de la cueva de Shanidar� en las monta¬ ñas del nordeste de Iraq» en donde Ralph Solecki desenterró los esqueletos de nueve individuos (véase el pcimiento3Uen la Figura 8J). ¿Qué es lo que ha hecho que cambie la opinión de los estudiosos sobre los neandertales� para que actualmente consideren que no son de la misma especie que los H sa¬
piens�
En I997j un grupo de investigadores de EE UU y Ale¬ mania publicaron unos hallazgos que forzaban a recon¿derar la relación entre los neandertales y el hombre moderno. Estos científicos comunicaron que habían ex¬
Hgura 8.3.
de Homo sapiens
traído el ADN del espécimen o r i n a l de neandertal en¬ contrado en 1856� El ADN que obtuvieron no era ADN nuclear (el material que compone el genoma humano)� ¿no que provendría de unas diminutas estructuras lla¬ madas mítowndriast que se encuentran en todas las cé¬ lulas eucarióticas (es decirj células con membrana perinudear y ADN en los cromosomas). Las mitocondrias �brican las enzimas necesarias para la obtención de energía y tienen su propio ADN� que se replica al mismo tiempo que el de la cflula» aunque se cree que este hecho no está influenciado por el proceso de la selección natural La única fuente de cambio en el ADN mitocondrial (usualmente llamado mADN) es la mutación al azar. fl ADN mitocondrial se hereda únicamente de la madre en los animales> no es transportado hasta el óvulo por el espermatozoide» pues se queda en la cola del mismo» en el exterior del óvulo» durante la fecundación. Estas
FuífiÉe: Tbmado de Russell L. Ctochon y John G. Pleagle, eds,i T)w Hutmn EvtJíuíííJíi 1993. Reproducido con permiso de Pearson Educationj Inc.i Upper Saddle River, Ni 0745S.
Copyright ©
Jí' Capítulo 8
Aparición del homo sapiens 153
25
Neandertal humano 20 -
a 15
Humano-tiumano
Humano-olilmpancé
"O
4> 2" i 10 £
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5
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05
Número de difeiwic�a�
Figura 8-4. Difarandas en ta» secuencias de¡ mADN entre humanos� neanderta� tes y chimpancés Fuente: Heprodiícído de C�U* 90 (1997); 25 con permiso de Elsevier Science.
características linicas hacen posible utilizar el mADN para medir el grado dt parentesco que existe entre dos especiesj e incluso» para poder saber cuánto tiempo hace que esas especies se separaron. De modo que� cuanto ma¬ yor sea el tiempo transcurrido desde esa separaciónj más diferencias se encontrarán en la estructura del mADN» que se piensa que registra aproximadamente una media de mutaciones del 2 por ciento cada millón de años. Por tantOj la cantidad de diferencias que existe entre el mADN de dos organismos puede convertirse en una es¬ timable datación del pasado» cuando esos organismos dejaron de formar parte de la misma población repro¬ ductora. Mientras continúa una serie de discusiones so¬ bre cómo Y por qué se producen las mutaciones del mADN 7 de su ñabilidad para determinar datadones ab¬ solutas de divergencia� la mayoría de los estudiosos coin¬ ciden en que es una herramienta eficaz para examinar los grados relativos de parentesco que existen entre espe¬ cies, ¿En qué se parece el mADN de los neandertales y el del hombre contemporáneo? Uno y otro no son tan si¬ milares como muchos hubieran esperado. Entre los indi¬ viduos actuales existen� generalmente» entre cinco y diez diferencias en la secuencia del mADN examinado por los
investigadores de Alemania o EE UUj pero al comparar los mADN de los individuos modernos con el del neandertal se encuentran alrededor de 25 diferencias» más de tres veces la existente entre los seres humanos modernos (Figura &»4), Esto sugiere a los investigadores que los an¬ tepasados de los humanos actuales y los de los neander¬ tales debieron de divergir hace unos 600,000 años. Si el grupo ancestral común vivió hace tanto tiempo» el neandertal sería entonces un pariente nuestro mucho más le¬ jano de lo que se pensaba. Mientras aún quedan muchos aspectos por adarar en estos estudios» ya que es necesa¬ rio apUcarios a otros ejemplares de neandertal» algunos halla��os arqueológicos recientes en Europa y en Oriente Próximo son muy relevantes para disipar algunas dudas, Se sabe desde hace décadas que muchos de los restos fósiles de neandertal se han encontrado en los mismos lu¬ gares que los fósiles de los humanos recientes (por ejem¬ plo» en algunas partes del Levante español)» pero los actuales avances en técnicas de datación cronológica y los nuevos hallazgos fósiles han demostrado que coexistieron los dos tipos de homínidos. De hecho» en varias cuevas de la región del Monte Carmelo» en Israel» se han encontrado zonas de ocupación de neandertal y del hombre mo¬ derno, El hecho de que ambos grupos de homínidos
154
Ca p í t ul o 8
Aparición del h o mo sapiens
�
, ; vr
Fronteras de l . a investigación Cr�dmí�ntv y desarrollo del neandertal Una las razones por la que mudi05 científicos piensan que los neandertales no pertenecen a la especie Homo sapier�s es porque su cultura material era pobre si se la compara con la del hombre moderno primi¬ tivo que vivió al mismo tiempo que ellos, yk que gran parte de la con¬ ducta de los humanos contemporᬠneos se debe al aprendizaje y eso ex�e bastante tiempo de dependen¬ cia paterna de los hijos� ¿podría ser que los neandertales maduraran an¬ tes que los humanos actuales y de esta forma tuvieran menos tiempo para aprender la conducta culturalí La paleoantropóloga Nancy Minugh-Purvis decidió comprobar esta teoría examinando el crecimiento y desarrollo de los cráneos y caras de los neandertales. El estudio de Minugh-Purvis del desarrollo de los ne¬ andertales fije posible, en gran medida> gracias a que los neanderta¬ les enterraban a sus muertos. En los registros arqueológicos son raros los esqueletos juveniles y de niños� ade¬ más de no estar bien conservados� ya que en ambos casos al estar todavía en crecimiento sus huesos son extre¬ madamente delicados. También son menores que los de los adultos y un elevado número de carroneros pue¬ den devorarlos. Pero debido a que los neandertales enterraban a sus muertosj existe cierto número de esquele¬ tos que permiten su estudio Por ello> Minugh-Purvis pudo localizar más de 100 esqueletos de neandertales que oscilaban desde recién nacidos hasta adultos jóvenes, Nancy Minugh-Purvis efectuó un diagrama en el que comprobó el cre¬ cimiento de los cráneos y las caras de los neandertales desde la in&rKia a la edad adulta, midiendo los fósiles exis¬ tentes con un grupo de índices antro¬
pométricos de uso general, índices ampliamente utilizados en la antro¬ pología física para comparar la forma y el tamaño de los huesos, encon¬ trando que no había grandes diferen¬ cias entre los huesos de los recién nacidos neandertales y los recién r�cidos actuales» aunque los niños nean¬ dertales tendían a tener los huesos craneales más gruesos y, quizás mayo¬ res masas musculares. La mayoría de las características de los neandertales adultos (cara larga con nariz pronun¬ ciada, amplia arcada supraoibitaria y cráneo alargado) no estaba presente en los cráneos infentiles. Estas carac¬ terísticas típicas de los neandertales empezaban a aparecer en los niños, por ejemplo en un neandertal de 4,4 años procedente del yacimiento de Engis (Bélgica), ya que tenía arcadas supraorbitarias. Otro niño de unos 7 anos de edad del yacimiento de La Quinta (Francia) no sólo tenía arca¬ das supraorbitarias, sino también una cara y nariz salientes y un cráneo alar¬ gado. Finalmente, un niño de 10 años del yacimiento de Teshik-Tash (UzbeIdst�) presentaba casi todos los rasgps neandertales típicos� siendo su cráneo básicamente similar al de un adulto, pero con menor tamaño En resumen, los neandertales al nacer eran semejantes a los bebés ac¬ tuales, pero a la edad de 10 años ha¬ bían desarrollado todos los rasgos físicos típicos que los diferenciaban del hombre moderno ¿Qué es lo que nos dice esto sobre el desarrollo y el crecimiento de los neandertales! Minugh-Purvis sugiere que eran muy parecidos a nosotros y que gran parte de sus diferencias físicas, como las dimensiones y la forma de la cara, puede que no sean diferencias gené¬ ticas sino culturales. Los dientes de los neandertales muestran patrones
que sugieren que foeron utilizados como herramientas� particularmente para sujetar objetos mientras traba¬ jaban con las manos. Tanto los dien¬ tes como las mandíbulas tuvieron que sufrir grandes esfoerzos con es¬ tos usos, por lo que Minugh-Purvis opina que el prognatismo fedal y la gran musculatura pueden ser el re¬ sultado del uso al que se sometieron los dientes y mandíbulas que se utili¬ zaron como auténticas herramientas desde la infencia� al revés de los que encontramos en el desarrollo del hombre moderno. Sin embargo, hay otras diferen¬ cias entre los neandertales y el hom¬ bre actual que no se pueden explicar por la conducta. El cuadro que nos presenta Minugh-Purvis en su estu¬ dio es que los neandertales quizá ma¬ duraban un poco más deprisa que el hombre moderno, pero ¿acaso la ve¬ locidad de su maduración no justi¬ fica lo bastante su felta de evolución cultural? ¿Acaso los nearviertales cre¬ cían tan deprisa que no tenían tiempo para aprender? Minugh-Purvis señ¿a que las discrepancias no son tan significativas, y que tienen que existir otros fectores para expli¬ car las diferencias entre los nean¬ dertales y el hombre actual en la elaboración de sus culturas, Nancy MiDi�-Purvi� dertal Growth; Pvaminitig Developrnental Adaptaiioii$úi E�rlier sapiens»� en ter N, F�egiine, C&rol R. Rmber y Melvia Physical Ati�njpology: Original Readir�s in Method atid Practica (Upper Saddle, NJ; Prmticí tíaJl, 20C2); Erik Triu«Tbe Face: Evolution�y and RmctiotiáL Perspectiv�í on e mioid cfMuman Bxijitítian, (1937): 429"43í Chriftopher Strin�r i Clive G&mhlsltíS&rdtpftkeMeatider�is (Nueva York; Thames and Miidson, 1993),
Capítulos
f0
Aparición d el h o m o s api ens
155
Culturas del Paleolítico Medio
El período de la historia de la cultura relacionado con los neandertales se denomina tradicionalmente F�eolítico Medio tanto en Europa como en el Próximo Oriente» y tuvo lugar hace entre 300.000 y 40.000 anos. Para Africa se utiliza el término Edad de la Piedra Media en vez de Paleolítico Medio. Las herramientas utilizadas en esta época se definen como Musterienses tanto en Eu¬ ropa como en el Próximo Oriente y como Pestadíeletíses en África.
CD-ROM Ejercicio interactívii 11-11
El neandertal del lado izquierdo tiene mayores arcadas $upraorbitaria$ y una frente nná$ inclinada que el CroMagnon de la derecha. El cerebro de neandertal era bas¬ tante mayor que el de Cro-Magnon.
COLECCÍÓN DE HER[�MIENTAS
coexistieran en el Próximo Oriente durante unos 30�000 años es una prueba convincente de que se trata de dos es¬ pecies diferentes. Algunos asentamientos semejantes en¬ contrados en Europa también apoyan esta teoría: tan pronto como el hombre moderno comenzó a desplazarse por toda Europa» parece que> a su vez> fue desplazando a las poblaciones de neandertales que ya vivían en esas re¬ giones. Los yacimientos con utensilios que se conside¬ ran asociados a los neandertales desaparecieron del viejo continente y fueron sustituidos por yacimientos con utensilios típicos del hombre moderno (aunque� desgradadamente» existen muy pocos fósiles de este período» hace unos 40.000 años» que nos permitan afirmar con to¬ tal seguridad quiénes febricaron esos utensilios). Signifi¬ cativamente» la península Ibérica (Iberia)» la ultima región de Europa colonizada por el hombre moderno» contiene los líltimos fósiles de neandertal encontrados hasta ahora» con una antigüedad de unos 30,000 años. Con todas estas evidencias que señalan que los nean¬ dertales no pertenecen a la misma especie que el hombre actual» ¿por qué se mantiene este debate? En parte se debe a que ninguna de las pruebas existentes es determi¬ nante» y en muchos casos se pueden interpretar otras po¬ sibilidades; también hay evidencias de que los neandertales no fueron fínicamente muy diferentes del hombre moderno (véase el Apartado «Crecimiento y desarrollo del neandertal»), Pero quizá lo más impor¬ tante es que la cultura neandertalense» tradicionalmente conocida como Paleolítico Medio por la tecnología lítica dominante» tiene algunas características que la asemejan a la cultura del hombre moderno.
MUSTERIENSE. H complejo tipo de herramien¬ tas musteriense se llama así por el conjunto de artefectos encontrados en un refugio rocoso en Le Moustier» en la región del suroeste fiancés de La Dordoña. Comparadas con las herramientas achelenses» las miiíterienses tienen una menor proporción de utensilios de gran núcleo» como hachas de mano y cortadores» así como una mayor proporción de instrumentos de hoja pequeña» como ras¬ padores. Aunque muchas hojas se cortaron de un núcleo» fueron utilizadas como núcleos. Así» el Musteriense se ca¬ racteriza por hojas con fi�uencia modificadas o «reto¬ cadas» golpeando las pequeñas lascas en uno o más de sus bordes (i�íiíe Figura 8.5).Los estudios basados en el uso de los raspadores sugieren que muchos de ellos fue¬ ron utilizados para limpiar las pieles o para tallar ma¬ dera. El hecho de que algunas de estas herramientas» particularmente las puntas» fueran afiladas o reformadas en un borde sugiere que debían de estar unidas a algún mango o astil. Hada finales del período Achelense se desarrolló una técnica que capacitó al artesano para fabricar instrumen¬ tos con laminillas de tamaño prefijado» en lugar de las simples lascas sacadas del nüdeo al azar. Esta técnica se denomina método levaloisiense: el artesano afila pri¬ mero el nüdeo y prepara una plataforma para golpear en uno de los extremos» pudiendo obtener así lascas de un tamaño estándar. Aunque algunas lascas levaloisienses tienen unos 400.000 años de antigüedad» aparecen con mayor frecuencia en los conjuntos de herramientas musterienses, En ciertos yacimientos se han encontrado las herra¬ mientas características musterienses»pero en unos puede
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Ca p í t ul o 8
Figura 8.5.
Aparición del h o mo sapiens
Tfptco g r u p o
¡s
dé h B r r a m / e n t s s
moustQriensBs
£níre íos /ferramienías mcisterwMses h í raspador� (J-4)i loíicas (5)jputita (6} yJentkuhdoí de di cierra (7), L(í forma � la que se usaban estos iiistrumentos nos es desci>tiocida> auilque hs puntas debieron de uuir$e a astas de rnadera, y ¡os denticulados se debieron de uíiíiaar para trabajar lo Los art�actos aquí Tnastiados proceden de yacimientos wcisteriettses de Europa occidentíd� Fuente: 'Eimado de Ridiard G, Klein, í porque estos lugares podrían estar sobre-representados en el registro arqueológico� ya que se descu¬ brieron con mayor fecilidad que otros yacimientos� que tradicionalmente estuvieron al aire libre pero que en la actualidad están ocultos� desde hace miles de anos» por muchos metros de sedimentos» Lo® sedimentos son el polvO} los desechos y los desmoronamientos acumulados a lo largo de los años; cuando quitamos el polvo de los muebles y barremos el suelo estamos removiendo sedi¬ mentos. Campamentos
Sabemos que muchos neandertales vivieron> al menos durante una parte delaño� en cuevas� como por ejemplo a lo largo del río Dordoña» en Francia, Este río ha exca¬ vado profundos valles en las arcillas de la zona y bajo los acantilados existen refugios rocosos con techos salientes y con profundas cuevaSj muchas de las cuales estuvieron ocupadas durante el Paleolítico Medio, Aunque sus habi¬ tantes no las utilizaran durante todo el año� los lugares parecen haber estado ocupados año tras año. Si bien existen indicios del uso del fiaego en las culturas más antiguaSj son los humanos del Paleolítico Medio quienes parecen haber dependido más de él» puesto que se han hallado gruesas capas de cenizas en muchos refugios ro¬ cosos y cuevas que prueban la utilización de hogares para aumentar la eficacia de los fuegos, Muy pocos campamentos neandertales estuvieron en espacios abiertos. Así> en África> se han localizado lugares al aire Übre en las marismas� en el borde de los lagos y cerca de las fuentes. También se han encontrado muchos campamentos al aire libre en £uropa> particularmente en el este. Los ocupantes del bien conocido yacimiento de Moldavia» al oeste de Rusia> vivían en un valle fluvial� en casas de madera cubiertas con pieles. Alrededor de éstas había huesos de mamut» enorme elefente actualmente extii�idoi que parece que se utilizaron para mantener tensadas las pieles de animales. Aunque el dima invernal en los bordes del glaciar era bastante fiio en aquella época> aún debía de haber animales para cazar, ya que las plantas con las que se alimentaban todavía no estaban to¬ talmente cubiertas por las nieves, Quizá los cazadores se desplazaban durante el verano a las altiplanicies entre los valles de los ríos; de todas for¬ mas» las tierras más altas eran tierras de pastos para los grandes rebaños de animales de los que los cazadores de Moldavia dependían para su subsistencia. En los yaci¬ mientos invernales de los valles de los ríos» los arqueólo¬ gos han encontrado esqueletos de lobosj zorros árticos y
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liebres con sus patas cortadas. Estos animales fueron probablemente desollados para utilizar sus pides como abrigos, Obtención
de alímen to
la forma en la que d neandertal» lo mismo que d hombre modemoj conseguía sus alimentos debió variar en función de las condiciones ambientales: en Afi�ica vi¬ vían en la sabana y en d desierto semiárido» en la Europa oriental y occidental tuvieron que adaptarse al frío; du¬ rante los períodos de intensa glaciación» muchos de los entornos ambientales se transformaron en estepas y tun¬ dras, El medio ambiente europeo fue» durante esta época» mucho más rico en recursos animales de lo que la tundra délos países del norte lo es hoy. Así» las regiones europeas habitadas por neandertales eran ricas en caza» tanto ma¬ yor como menor. Los animales típicos de los paisajes al¬ pinos y de la tundra eran renos» bisontes» caballos» toros bravos» mamuts» rinocerontes y ciervos» así como lobos»
Los neandertales (reconstrucción) cazaban gran varie¬ dad de presasp entre ellas� los ciervos.
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Capítulo 8
Aparición d e l homo sa piens
osos y zorros. En algunos yacimientos europeos se han encontrado� además» restos de pájaros y de peces: por ejemplo� los miembros de un campamento de verano en ei norte de Alemania parece que cazaron cisnes y patos y pescaron percas y lucios. Sin embargo, poco se sabe sobre los vegetales consumidos por los neandertales europeos ya que los restos de las plantas se conservan con dificul¬ tad en los climas no áridos durante tantos anos> T�bién en Africa eran diferentes las formas en que los primeros K sapiens conseguían su alimento. Por ejemplo, sabemos que las gentes que vivían en las des¬ embocaduras del río Klasiesj en Sudáfrica� comían mo¬ luscos lo mismo que la carne de pequeños antílopes y de grandes herbívoros como el eland y el bu:Uo> si bien los antropólogos no se ponen de acuerdo en la forma en la que los habitantes del río Klasies conseguían carne cuando empezaron a ocupar las cuevas de esa regiónRichard Klein opina que cazaban pequeños y grandes animales y� dada la gran cantidad de restos de antílope eland de todas las edades descubierta en la Cueva 1, en el )acimiento del río Klasies� cree que la gente probable¬ mente cazaba a este gran antílope acorralándolo en gran¬ des cercados y con otro tipo de trampas� en donde podían matar a animales de todas las edades. Klein cree que los búfelos se cazaban de otra forma diferente: estos animales tienden a cargar contra sus atacantes, lo que di¬ ficultaría su acorralam iento hacia las t rampas, p or lo qu e pensa que los cazadores, dado que la mayoría de los hue¬ sos de búfelos que se han encontrado en la cueva son de animales o muy jóvenes o muy viejos, sólo eran capaces de acosar y matar a los más vulnerables. Lewis Binford considera que la gente del río Klasies sólo cazaba pequeñas piezas y que tanto los antílopes como los búfelos fueron carroneados cuando ya previa¬ mente los habían matado los grandes carnívoros. Para ello, arguye que los yacimientos contendrían todos o casi todos los huesos de los animales si hubieran sido caza¬ dos, pero, según él, ya que sólo se encuentran casi com¬ pletos los esqueletos de los animales más pequeños, es lógico pensar que estas gentes no cazaron a todos los ani¬ males que consumieron, Sin embargo� nuevas evidencias sugieren que estas gentes cazaban grandes presas hace ya 400.000 años, ya que recientemente se han encontrado lanzas de madera de esas fechas en Alemania, asociadas a herramientas de piedra y restos desmembrados de caballos salvajes. Las pesadas lanzas recuerdan a las modernas y aerodinámi¬ cas jabalinas, lo que significa que fueron lanzadas contra los grandes caballos salvajes y no sólo contra animales pequeños. Esta nueva evidencia sugiere que la caza, no el carroñeo, puede ser más antigua de lo que los arqueólo¬ gos pensaban.
¿Rítos f u n era rio s ? Hay constancia de que algunos neandertales fueron deliberadamente enterrados. Así, en Le Moustier, se en¬ contró el esqueleto de un muchacho de 15 o 16 años con un hacha de piedra bellamente decorada cerca de su mano. También cerca de Le Moustier se encontraron las tumbas de otros cinco niños y dos adultos, enterra¬ dos juntos al parecer en una parcela femiliar. Estos ha¬ llazgos, lo mismo que el de la cueva de Shanidar en Iraq> han dado paso a especulaciones sobre la posibili¬ dad de que existieran rituales fonerarios en aquella época. La evidencia de Shanidar se basa en la existencia de polen junto al cuerpo de un individuo. Los análisis de este polen sugieren que procede de flores, de las formas ancestrales del actual jacinto salvaje� acianos� malvas y flores amarillas de senecio, John Pfeiffer dice a este res¬ pecto:
Como ilustra esta reconstrucción, los neandertales fue¬ ron los primeros humanos que, supuestamente* enten'aban a sus muertos.
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Un bqmbre con el crán� aplastado ñie enterrado proíundaniente en la cueva con especial cereraoniar Un día de primaveca de hace 60.000 anos los miembros de su íkmllla subieron a una colina, recc�eron gran cantidad de Qores silvestres � hicieron un lecho de ellas sobre la tierra* un lu¬ gar de descanso para el &llecido. Otras flores se pusieron� probablemente» sobre su tumba y, otras más, parecen ha¬ berse entretejido juntas y con las ramas de xin arbusto pare¬ cido a v n pino para formar una guirnalda. ¿Podemos estar seguros de esto? Realmente no�pues todo lo que sabemos es que había polen cerca y en la parte superior del cuerpo� lo que significa que podía es¬ tar allí bien porque otros humanos colocaran flores en su tumba o bien por otras razones» e incluso por casualidad.
El surgimiento del hombre moderno Guando aparecen en Europa occidental los primeros representantes de Cro-Magnon> con una antigüedad de 35.000 añosv se pensó que se trataba de los primeros ejemplares del hombre moderno u Homo íflpíítty tapietis (el Cro-Magnon se denomina así por el reftigio rocoso francés en el que se encontraron por primera vez en 1868). Pero actualmente sabemos que los hombres de aspecto actual aparecieron antes fuera de Europa. Como los actuales� los más antiguos fósiles pertenecientes in¬ discutiblemente al Homo sapiens sapiens proceden de África. Algunos de estos fósiles descubiertos en una de las cuevas de la desembocadura del río Klasies» tienen pro¬ bablemente unos 100.000 años de antigüedad. Otros fó¬ siles de Homo sapiens de aproximadamente la misma edad se han encontrado en Sudáfrica> en la cueva Borden lo mismo que un hallazgo en el río Orno en Etiopía} que también pudo serun antiguo H, sapiens. Restos humanos anatómicamente modernos (Homí? sapiens sapiens) han aparecido en dos yacimientos de Israel: en Skhul y en Qafeeh que, aunque se piensa que tienen entre 40,000 y 50,000 años de antigüedad, también pueden llegar a te¬ nerlos 90.000. También se han encontrado restos huma¬ nos anatómicamente modernos en Borneo, en Niahj de cerca de 40.000 años de antigüedad y en AustraÜa, en el Lago Mungo, de hace unos 30.000 años, Estos hombres de aspecto moderno difieren de los neandertales y de otros antiguos Homo sapietjs en que tienen frentes más elevadas, huesos más delgados y lige¬ ros, cara y mandíbulas más pequeñas, mentones (protu¬ berancia ósea que ha permanecido después de la retracción evolutiva de la mandíbula) y arcadas supraorbitarias muy finas (o ausencia total de arcadas; véase la Hgura 8,2),
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Teorías s o b r e el o ri g en DEL hombre mo d erno Edsten dos teorías sobre el origen del hombre mo¬ derno que continúan debatiéndose entre los antropólo¬ gos. Una, que se puede denominar la teoría del origen únicOi sugiere que el hombre moderno apareció só b en una parte del Viejo Mundo y después se dispersó hada otros lugares, reemplazando a los neandertales (se piensa que d hombre moderno tuvo su origen en África), La se¬ gunda teoría, que se ha denominado teoría multirregionait sugiere que el hombre moderno evolucionó a la vez en diferentes partes del Viejo Mundo después de disemi¬ narse fuera de Afr�ica, TCORÍA DEL ORIGEN ÚNICO. De acuerdo COn esta teoría el neandertal no evolucionó hacia el hombre moderno, sino que se extinguió hace unos 35,000 años, El lugar en donde se cree que se originaron los primeros hombres modernos ha variado a través de los años con la aparición de nuevos fósiles. En los años cincuenta se su¬ ponía que la primera población se había originado en el Próximo Oriente a partir de grupos neandertales deno¬ minados neandertales «generalizados» o «progresivos», Con posterioridad» cuando aparecieron los primeros Homo sapiens en África, los paleoantropólogos postula¬ ron que el hombre moderno se habría desarrollado pri¬ mero en África pasando al Próximo Oriente y desde allí se diseminaron por Europa y Asia. Los seguidores de la teoría del origen único creen que pequeñas poblaciones de K sapiens sapiens que tenían algunas ventajas biológi¬ cas, culturales, o ambas a la vez, consiguieron difundirse y reemplazara los neandertales, l a principal evidencia de la teoría del origen único procede del estudio del mADN en poblaciones vivas. Así, en 1987, Rebecca Cann y sus colaboradores presentaron pruebas de que el mADN de una muestra de gente de EE UU, Nueva Guinea, África y Asia oriental mostraba diferencias que sugerían que su ancestro común había vi¬ vido, solamente, hacía 200,000 afios (véase el Apartado «Evidencia del ADN y la teoría de "Fuera de Áufrica" so¬ bre el origen de los humanos modernos»). Con poste¬ rioridad, dijeron que ya que la variabilidad entre los individuos era mayor en las poblaciones de África, el giupo ancestral común debió de vivir en ese continente (generalmente la gente que vive en el país original pre¬ senta más variabilidad que la población descendiente que emigró). Esto dio lugar a que se la denominara teo¬ ría de la «Eva mitocondrial» o «hipótesis de Eva» para ex¬ plicar el origen del hombre moderno. Aunque había muchos problemas en este estudio ini¬ cial, éstos se han ido solucionando con el paso de los
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Aparición del h o mo sapiens
E3
Temas de actualidad Evidencia del ADN y la teoría «ejctra-afirícann» del origen del /tomare moderno Los paleoantropólogos suelen creerque los humanos (homíni¬ dos) divergieron de los póngidos hace más de 10 millones de añosLos biólogos moleculares empe¬ zaron por comparar las proteínas sanguíneas y el ADN de las es¬ pecies de póngidos vivos. Los re¬ sultados de estas comparaciones mostraron que la época probable de dicha divergencia debió de producirse hace entre 5 y 6 mi¬ llones de años. La Biología molecular ha introducido ac¬ tualmente otro tema de debate en la Paleoantropologíai que es la época en la que pudieron apa¬ recer los primeros humanos modernos. Basándose en la com¬ paración del ADN mitocondrial (mADN) en varias poblaciones de humanos vivientesjlos biólo¬ gos moleculares generalmente siguen la teoría extra-africana�la opinión de que los humanos actuales aparecieron primero en África y� desde allij se exten¬ dieron por el resto del Viejo Mundo� reemplazando a los neandertales» El ADN mitocondrial se en¬ cuentra en las mitocondrias� par¬ tes de la célula que convierten los alimentos en energía. Hay tres ventajas para usar el mADN so¬ bre otros tipos de ADN encon¬ trados en el núcleo celular. La primera es que el mADN com¬ prende 37 genes solamente; a menos geneSí es más fócil la comparación. La segunda es que en el mADN se acumulan rápida y fócÜmente mu¬ chas mutaciones neutralesi ha¬ ciendo fóciles de encontrar los marcadores de similitudes y dife-
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o 0,2 0> (L$
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rendas entre poblaciones recientes (las mutaciones similares apuntan a las dos poblaciones hacia un ances¬ tro común). La tercera ventaja de este método es que solamente se he¬ reda a partir de la madre� haciendo menos complicado realizar el segíj.imiento de las líneas evolutivas,
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Dado que el mADN se transmite línea materna� los biólogos mof>or eculares se refieren al ancestro co¬ mún de los humanos modernos como a «Eva»! aunque» por supuestOj no existió sólo una «Eva�-� dno más de una en su generación con similar mADN,
� Ca p í t ul o 8
Comparando el mADN de los humanos de diferentes regiones geográficas y usando técnicas com¬ putar izadas para crear árboles genealógicos» los investigadores moleculares sostienen que la solu¬ ción más simple o la más parsimo¬ niosa de las conseguidas dibuja los mADN de los humanos modernos desde hembras que vivieron hace 20,000 años. También sugieren que las evidencias proporcionadas por el mADN son coincidentes con las evi¬ dencias paleoantropológicasjo que indica que los humanos modernos surgieron primero en África� algo más tarde en Próximo Oriente y to¬ davía más tarde en Europa y Asia. Los críticos de la teoría del extraafricana sostienen que la acepta¬ bilidad de este modelo depende de afirmaciones dudosas� siendo» quizá la crítica más fi�cuente que las so¬ luciones conseguidas no están mu¬ cho más lejos de las que pueden ser posibles. Actualmente hay miles de soluciones posibles para construir los árboles genealógicos con datos obtenidos a partir del mADN» orientando todas ellas su punto de partida al oiigen africano de los hu¬ manos modernos; pero otras solu¬ ciones podrían proponer distintos escenarios de aparición. ¿Por qué deberíamos asumir que las solucio¬ nes obtenidas cubren todas las po¬ sibilidades razonables? Una segunda crítica a la teoría del extra-afi'icana se basa en las eviden¬ cias fósiles� sugiriendo evoluciones continuas hacia los rasgos modernos y en varias partes del mundo» En otras palabras» los hallazgos fósiles no son coincidentes con la idea de que los rasgos que vemos actualmente proceden de otras regiones- Los crí¬ ticos dicen que la teoría de extra-afticana puede estar equivocada» si los
rasgos físicos persisten hasta en las regiones de ftiera de Áfi-ica» desde la época de los humanos primitivos hasta los actuales. Para la teoría de «Fuera de África» se asume que los humanos del sur de África sustitu¬ yeron completamente a los neandertales» sin que existiese flujo genético entre ellos. Si es esto lo que ocurrió» 1 os registros fósiles debían indicar al¬ guna discontinuidad en el tiempo; pero tanto en el Sudeste asiático» como en Australia» los fosUes de hace 700,000 años (desde el Homo erectus hasta los humanos modernos) presentan las mismas características a través del tiempo. Asíj aparecen huesos frontales (frates) inclinados en vez de verticales» en contraste con los cráneos de los antiguos humanos actuales encontrados en Sudáfrica (como en la cueva Border), que tie¬ nen frontales verticales. En China aparecen incisivos planos desde los antiguos hasta los humanos moder¬ nos; y� sin embargo» en las poblacio¬ nes africanas tanto antiguas como modernas no aparecen. Por eUo» la persistencia de ciertos rasgos físicos distintivos en las di:ferentes regiones (incisivos aplanados en China» f�ntes inclinadas en el Sudeste asiático y en Australia) no es compatible conla idea de que los humanos modernos sustituyeron completamente a las poblaciones humanas previas en esas regionesT�bién existe una felta de tes¬ timonios arqueológicos que sos¬ tenga la idea de que una población moderna invasora se extendió a partir del sur de África. Una pobla¬ ción invasora puede disponer de un conjunto de herramientas muy diferentes» pero en el Próximo Oriente» se han encontrado fosUes neandertalesy de humanos moder¬ nos con las mismas herramientas y
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tampoco en Asia aparece una dis¬ continuidad tecnológica» como ca¬ bría esperar en el caso de existir una población invasora. En el caso de haber existido ésta» sería de esperar que esos individuos poseyeran alguna superioridad sig¬ nificativa sobre las poblaciones pre¬ existentes. Pero si no existe esa superioridad desde el punto de vista tecnológico» ¿a qué nivel estará? Al¬ gunos de los defensores de la teoría extra-africana han sugerido que los primeros hombres modernos po¬ seían lenguaje» en tanto que las poblaciones previas de humanos ca¬ recían de él. Pero la evidencia mos¬ trada por los estudios anatómicos sobre la capacidad de hablar todavía está sometida a debateComo en la mayoría de las con¬ trove rsiaSi la del «extra-africana» se puede resolver con evidencias fósiles adicionales y con la demos¬ tración de más hipótesis sobre in¬ terpretaciones alternativas, má; $obre la teoría fuere �, 291 (2001): 1730-32,
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suficiente para su subsistencia hasta hace unos 14,000 anos. Algunos investigadores creen que no hubo ningún desplazamiento humano a través del corredor libre de hielos, que es actualmente el sur del Canadá, hasta des¬ pués de esas fechas, Aquellos pueblos puede que cazaran o no animales grandes, pero lo cierto es que poco después ya había gru¬ pos viviendo en la selva del Amazonas (actualmente Braál) que no fueron cazadores de mamuts y de otras grandes piezas de caza, como sí lo fueron sus contemporáneoS) los Clovis� en el norte de América. En otras palataras, parece que los primitivos habitantes del Nuevo Mundo (en Chile> Brasil y el norte de América) tenían culturas diferentes. Así, las gentes del Amazonas recolec¬ taban fi-utas y cocos, además de pescar y cazar pequeños animales; vivían en grutas con pinturas en las paredes y dejaron alrededor de 30,000 herramientas de piedra en forma de puntas de lanza, dardos y arpones. No existe desacuerdo sobre el hecho de que los hu¬ manos vivían en el sur del Canadá hace unos lUOOO anos. El pueblo Chvis (como se le denomina a partir de un yacimiento arqueológico encontrado en Clovis, Nuevo México) nos ha dejado puntas de lanza finamente elaboradas en muchos puntos diferentes del norte de América, y también tenemos esqueletos humanos de hace alrededor de 11,000 años. Ahora que el yacimiento de Monte Verde se ha datado eficientemente sabemos que había pueblos al sur de Canadá antes de que se esta¬ blecieran los Clovis en Nuevo México, Existen probables yacimientos de gentes pre-dovis, a pesar de que muchos arqueólogos no están de acuerdo en que los posibles artefectos encontrados en estos yacimientos fueran febricados por hombres (podrían ser el resultado de de¬ rrumbamientos o desastres naturales), además de que estos lugares no están datados con seguridad. Un yaci¬ miento que pudiera ser pre-dovis es el refijigio rocoso de Meadowcroft> en el oeste de Pennsylvania, En el fondo del estrato tercero, que parece datar de entre 19,600 y 8,000 años, el yacimiento de Meadowcroft muestra claros signos de ocupación humana con peque¬ ños fi-agmentos de huesos humanos, una punta de lanza, cuchillos de piedra y raspadores. Si su datación es correcta> estas herramientas deben tener unos 12,800 años de antigüedad. William Parry sugiere que es necesario datar el hueso encontrado en este yacimiento� y si mues¬ tra una antigüedad superior a los 12,000 años, pocos an¬ tropólogos pondrán en duda que los humanos ocuparon este yacimiento antes que d pueblo Clovis. Según los hngüistas comparativos loseph Greenberg y Merritt Ruhlen, se produjeron tres oleadas migratorias en d Nuevo Mundo. Para realizar este estudio compara¬ ron cientos de lenguas dd norte y el sur de América, y las
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clasificaron en tres grupos lingüísticos diferentes, Como cada grupo de femihas de lenguas tiene una relación más estrecha con las lenguas asiáticas que con cualquier otra dd Nuevo Mundo, parece ser que se produjeron tres oleadas migratorias apartir de Asia, Los de la primera olea¬ da hablaban una lengua que divergió en el tiempo de las otras lenguas habladas en el Nuevo Mundo, la femilia de lenguas Amerindia; los que hablaban esta lengua ocupa¬ ron todo el sur y el centro de América, lo mismo que la mayor parte de América d d Norte. A continuación llega¬ ron los antepasados de los pueblos que actualmente ha¬ blan el grupo de l e r d a s pertenecientes a la femiha Na-Dené, que induye a los navajo y apaches d d suroeste de EE UU> asi como varias lenguas de los athapaskan del norte de CaÜfbmia, costa de Oregón, noroeste de Ca¬ nadá y Alaska, Finalmente, quizá hace 4,000 años, llega¬ ron los antepasados de los esquimales (inuit) y de los aleutianos (que posteriormente ocuparon las islas dd su¬ roeste de Alaska y la tierra firme adyacente), quienes ha¬ blaban el grupo lingüístico de la femilia Inuit-Aleutiana» El estudio de Christy Turner sobre la dentición dd Nuevo Mundo sostiene que las propuestas de Greenberg y Kuhlen de tres migraciones diferentes son ciertas. Para su estudio, Turner analizó las proporciones de incisivos aplanados, característica común a los asiáticos, en las poblaciones dd Nuevo Mundo, Las proporciones de las variaciones entraban en tres grupos diferentes de pobla¬ ción, que coincidían con los descritos por los lingüistas (Figura 9,7), Pero un análisis genético reciente sugiere que los inuit-aleutinos pueden proceder en d Nuevo Mundo de los Na-Dené, El poblamiento dd Nuevo Mun¬ do puede, indusOr haber sido más complicada ya que pu¬ dieron producirse hasta cuatro oleadas migratorias desde diferentes regiones de Asia, Los PALEO-INDÍOS Se han encontrado restos arqueológicos de antiguos grupos de cazadores dd Nuevo Mundo llamados pakoímJí í?í,en EE UU, México y Canadá, En d límite sur de las áreas alcanzadas por los glaciares de la última glaciación, el área este de las Montanas Rocosas conocida como Las Altiplanicies era abundante en mamuts, bisontes, además de camellos y caballos salvajes. Las herramientas encon¬ tradas junto a los restos de los mamuts se conocen como el ojrnpte/í? ctavis e incluyen puntas de flecha dovis, ras¬ padores, cuchillos y herramientas de hueso. Las puntas de flecha dovis son grandes, con forma de hoja y lascas ta¬ lladas en ambas caras. También presentan una acanala¬ dura en su mitad, presumiblemente para que se ajustara un asta de madera. Dado que han sido hallados los restos de un mamut con una punta de flecha davada, hay pocas
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Capítulo 9
El mundo del Paleolítico Superior
�
Quién está relacionado con quién: Fnecuenclasde poblaclá-n con Incisivos en espátula
AJeutlanos Indos de la costa NoTOste y de Alasca Interior
Indios americanos del Norte y del Sur
de indsivos con forma de espátula D 10 20 30 40 £0 60 70 SO SO 100 I
I Datos InsirlIcian'tBf
Hgura 9.7. Loí initit (�quimaUí) y ÍQ5 aleiítiawst quehatían idiomoí grupo Na-Derté, asi conw otros grupos tingühticos de hs Mflrivas flrramcanoí, íJi/iereM Íaí fr�uencias con la que aparecen hs ímcíífvoí apUmaáos entre ellos� Estas diferencias gienétktís parece sef que reft�an tres oteadas nñgratorias al Nuevo Mundo. Fuente: Tomado de Christy G, Turnar H «TcUtalc Tícth»» Hwtpry, mero 19í¡7i p. 6� oOrte$ía de Natural Hjstory magazine.
dudas de que estas herramientas fueran utilizadas por un pueblo de cazadores de grandes presas. La datadón de yadmientos dovis recientemente encontrados los sitúa en¬ tre los 11�00 y los 10.9CX) años de antigüedad. Los mamuts desaparecieron hace unos 10.000 años y d mayor animal de los no extinguidos era el bisonte de cuernos rectos. Los cazadores de esta dase de bisontes utilizaban un tipo de punta de flecha llamado pwííífl�fíPíWj de tamaño mucho menor que la punta dovis. Tam¬ bién se encuentran otras herramientas j u n t o a otros restos animales� induyendo los de lobo� tortuga� conejo� caballo� zorro� ciervo y camello� lo que indica� obviamente> que estos cazadores dependian también de la caza de otros animales. £n el valle de Rio Grande> los ar¬ tesanos fblsom establecieron u n campamento base en una zona de dunas escarpadas que dominaba una gran laguna y amplios espacios de praderas. Si consideramos que la laguna proveía de agua suficiente a las manadas
de animales� los habitantes del campamento debieron disponer de una excelente posición para vigilar a los re¬ baños. Dado que las condiciones climáticas de lo que actual¬ mente es el sudoeste de América se hicieron más secas» tanto los animales como las adaptaciones culturales evo¬ lucionaron. Hace 9.000 años» los bisontes modernos» de menor tamaño» reemplazaron a sus antecesores» mayores y de cuernos rectos. Los campamentos se localizaron más alejados de las lagunas y zonas de pastos y más cerca de las corrientes de agua. El hecho de que las lagunas no fiaeran ya las principales fuentes de agua durante estas temporadas de sequía y los animales ya no acudieran a beber en ellas podría explicar por qué los cazadores cam¬ biaron el emplazamiento de sus campamentos. No se co¬ noce mucho sobre las plantas que comían estos grupos de paleo-indios pero la recolección de plantas de las zonas limítrofes con el desierto debió ser de vital
Capítulo 9 El mundo del Paleolítico Superior 181
Punta$ de flwha$ Clovi$.
en Nevada y Utah los ar¬ importancia para ellw. queólogos han encontrado piedras de molino y otros artefectos utilizados para procesar las plantas de consumo» El yacimiento de Olsen-Chubbucki un yacimiento de caza excavado en Colorado� muéstrala organización que se pudo utilizar para la caza de los bisontes» En una ba¬ rranco árido datado alrededor del 6500 a* se hallaron los restos de unos 200 bisontes» En el fondo se encontra¬ ron los esqueletos y más superficialmente los restos» to¬ talmente descuartizadt3s> de los animales» Este hallazgo muestra claramente que los cazadores paleo-indios em¬ pujaban deliberadamente a los animales hacia trampas naturales (un arroyo� un barranco escalonado» etc»); los animales que marchaban delante serian empujados por los que les seguían hasta el fondo de la trampa» Joe Ben Wheat cree que con este procedimiento los cazadores podrían haber obtenido unos 25»000 kg de carne de una sola vez» Si los comparamos con los cazadores de las pra¬ deras del siglo xix�alosquela carne preparada de un bi¬ sonte les podía durar un mes y» estiraando que cada persona comía aproximadamente medio kilogramo de carne al día» las cacerías del yacimiento de Olsen-Chubbuck pudieron alimentar a más de 1»S00 personas du¬ rante un mes (aunque todos ellos probablemente no vivirían juntos durante todo el año)» Los cazadores de¬ bían de estar muy bien organizados» no sólo para provo¬ car las estampidas, sino también para efectuar el despiece de los animales» y parece que los enormes res¬ tos de éstos se transportaban a lugares llanos para llevar a cabo su descuartizamiento; además del producto obtenido» alrededor de 25»000 kg de carne» también las pieles tenían que ser transportadas luego hasta los cam¬ pamentos. Aunque la caza de los grandes animales debió de ser la norma en Las Altiplanicies» en otras áreas se conocieron distintas adaptaciones» Por ejemplo� los paleo-indios de
las regiones boscosas de lo que es actualmente EE UU parece que dependían sobre todo de la recolección de plantas y de la caza de animales pequeños» y en algunas otras regiones de bosques parece que la pesca y los mo¬ luscos formaban una parte importante de la dieta» En la costa del Pacífico, algunas poblaciones paleo-indias basa¬ ron las estrategias alimenticias sobre todo en la pesca» en tanto que en otras áreas» por ejemplo en el valle inferior del río lUinois» los paleo-indios, que vivían sobre todo de la caza de presas pequeñas y de la recolección de plantas silvestres» fueron capaces de crear poblados permanentes de entre 100 y 150 personas» Una vez que el hombre colonizó América» estableció formas de vida similares a las de sus parientes del Paleo¬ lítico Superior del Viejo Mundo» basadas en la caza de grandes animales» y se foe volviendo más sedentario con el paso del tiempo» además de que se produjo un au¬ mento en las interacciones entre los grupos locales.
El «río de los huesos}> en el yacimiento OIsen-Chubbuck. E$to$ restos proceden de bisontes acon'alados en un an'oyo y cazados por los paleo-indios.
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Capítulo 9
El mundo del Paleolítico Superior
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Hace alrededor de 10,000 añosi los glaciares empeza¬ ron a deshelarse� y con esto se produjeron una larga se¬ rie de cambios medioambientales* En primer lugar� al fundirse el hielo de los glaciares subió el nivel del mar� los mares penetraron en regiones que antes eran tierras e inundaron algunas de las llanuras costeras más productivas� por lo que se crearon islas� ensenadas y bahías. Otras áreas�por el contrario» quedaron despejadas para d asentamiento de nuevas poblaciones a partir del re¬ troceso de los glaciares y del aumento global de las tem¬ peraturas. Las regiones de tundras y praderas» frías y desprovistas de árboles> dieron paso a densos bosques de composición mixta» con abundancia de robles» abe¬ dules y pinos» en tanto que la megafeuna pleistocena acabó por extinguirse. Las corrientes de agua» más tempJadas» se poblaron de peces y de otros recursos acuᬠticos, Los arqueólogos creen que estos cambios medioam¬ bientales indujeron a muchas poblaciones a cambiar sus estrategias alimenticias, de manera que cuando desapa¬ recieron las tundras y las vastas extensiones de praderas» los cazadores ya no podían conseguir grandes cantidades de carne» limitándose a estar simplemente cerca de los grandes rebaños de animales migratorios» como proba¬ blemente hicieron durante el Paleolítico Superior. Yj aun¬ que incluso los ciervos y otras presas seguían estando disponibles» la densidad total de animales por kilómetro cuadrado experimentó una disminuciónj por lo que se hizo más difícil seguir y cazar a los animales escondidos en los espesos bosques. Por lo tanto» en muchas áreas pa¬ rece ser que la gente abandonó la caza mayor para pasar a una economía de recolección intensiva de vegetales» moluscos» peces y caza menor.
car los remos. Las canoas puede que se construyeran para viajar y, quizá» para pescar, en los grandes lagos y ríos que abundaban en la región en la época posglaciar, No conocemos el lugar que en la dieta de los maglemosiense ocupaba el consumo de plantas silvestres» pero se han encontrado gran cantidad y variedad de sus res¬ tos» como las avellanas. A pesar de que sabemos muy poco de otros aspectos de la vida maglemosiense» cono¬ cemos b importancia que tuvo la pesca para ellos, como se desprende de la gran cantidad de espinas de peces, como el esturión y otros, y de los anzuelos encontrados. Pero lo cierto es que la mayor proporción de sus alimen¬ tos procedía de la caza; sus presas incluían animales como alces, toros salvajes, ciervos y jabalíes. Además de encontrarse muchos instrumentos p)ara la pesca, azuelas y hachas» el conjunto de herramientas maglemosiense in¬ cluía el arco y las flechas» algunas decoradas con bellas fi¬ guras grabadas. También aparecen ornamentaciones en pendientes y en pequeñas estatuillas de ámbar o de pie¬ dra; por ejemplo» una de ellas representa la cabeza de un alce. Al igual que sucede con los maglemosienses hay muchos otros yacimientos europeos de finales del Pa¬ leolítico Superior localizados junto a lagos» ríos y cos¬ tas marítimas, aunque la mayoría de ellos quizá no estaba ocupada durante todo el año» ya que existen pruebas de que al menos una parte de los grupos se desplazaba estacionalmente desde un emplazamiento a otro, probablemente desde la costa hacia el interior y viceversa- Algunos hallazgos como los montones de conchas qw fueron apilados durante siglos por los con¬ sumidores de moluscos y los restos encontrados de ins¬ trumentos de pesca (como canoas, botes» etc.)� indican que estos pueblos dependían mucho más de la pesca de lo que dependieron sus antepasados del Paleolítico Su¬ perior.
La cultui� Ma g l e m o s i e k s e d e l n o r t e DE Europa
C u lt u ras arcaicas d e l es te DE No rtea mér[ca
Se pueden observar algunas de estas adaptaciones al nuevo medio ambiente en los restos culturales de unos asentamientos del norte de Europa llamados sienses por los arqueólogos. Su nombre proviene de las turberas pantanosas (ffífí�íe mose en danés significa «gran pantano») en las que se encontraron sus restos. Para enfrentarse con las regiones nuevas y más foresta¬ das, los maglemosienses elaboraron hachas de piedra y azuelas para cortarlos árboles y febricar con ellas distin¬ tos objetos; así se han encontrado grandes troncos for¬ mando paredes de cabanas» otros se vaciaron para hacer canoas y otros» de menor tamaño» se usaron para fabri¬
Se puede apreciar un conjunto de adaptaciones de los pueblos que vivían en el este y norte de América a los cambios producidos en el medio ambiente durante el fi¬ nal de la Edad del Hielo. Como el dima se hizo más seco y templado» la flora y la fauna del norte de América cam¬ bió; también desapareció la megafauna, al igual que en el resto del mundo» y fue sustituida por pequeños mamífe¬ ros» como el ciervo. La disponibilidad de carne animal se redujo mucho: los cazadores podían capturar sólo kilos de carne, en vez de toneladas» para llevar a sus casas. Las plantas de lugares templados sustituyeron a las de luga¬ res fríos recorriéndose a ellas en mayor cantidad» para
El final del Paleolítico Superior
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Algunos ejfimplo$ de herrami$nta$ lítioa$ aro6ic6$ pro¬ cedentes del este de Norteamérica. Incluyen hachas {arriba ¡zquierdah una azuela {abajo izqu'sardah un pe¬ sado atlatl {abajo derechah un martillo y una piedra para cascar nueces {arriba derecbah intentar asi suplir la disminución 5* ¿Cóm o podrían abo rdar este problema? Pues bien� como cualquier campameoto de hoy día> ellos podrían haber enterrado la ba¬ sura para no atraer a los visitantes indeseables, Pero con el paso del tiempo habrían podido quedarse sin espacio para enterrar la basura� y por ello tuvieron que haceragujeros cerca de los campamentos. Por supuestOi podrían haber trasladado el campamento, Pero puede que no quisieran. Después de todo� ellos ha¬ brían pasado mucho tiempo y ha¬ brían dedicado un gran esfiaerzo para construir un hogar perma¬ nente que íuese cálido en invierno y seco en la época de lluvias, Y además� tenían un montón de cosas alU al¬ macenadas. Entonces� ¿qué podían hacer? Quizá no tenían que hacer nada, Tal vez aquellos lobos que merodea¬ ban alrededor del poblado solucio¬ narían el problema de nuestros ancestros. ¿Cómo? Nutriéndose de la basura� lo cual es algo que la mayo¬ ría de ios perros (en especial los grandesj como los primeros perros domesticados) hacen de forma na¬ tural y eficiente. El perro de los Ember come de todo (excepto quizá lechuga). Así incluso unos pocos lo¬ bos o perros domesticados podrían haber mantenido los montones o ajeros de basura sin olores y sin grandes ac umuladon es. Y las p ers onas que «alimentaban» esos agujeros
Origen d e la producción d e alimentos y d e la vida sedentaria
o montones podían permanecer en un lugar durante un largo período de tiempo a salvo de malos olores, bichos y enfermedades. Los perros podrían haberse domesticado la ma¬ yoría a sí mismos, porque era bueno para ellos, a lavez que también lo era para aquellos humanos pre-agricultores, Una teoría sim Bar podría explicar la domesticación de los gatos. Los gatos son especialmente buenos para cazar ratones. Montones de esquele¬ tos de ratones comienzan a aparecer en los sótanos de las viviendas de Oriente Próximo después del surgi¬ miento de la agricultura. Por esto es posible que los seres humanos se propusieran domesticar a los gatos para atrapar a los ratones, pero también podría ser que los gatos se domesticasen a sí mismos para adaptarse a la vida cerca de un granero o almacén. Por supuesto, los seres humanos podrían haber favo¬ recido un poco los procesos de do¬ mesticación matando a los gatos salvajes más feroces que se sintieran atraídos por el asentamiento. Esto mismo fiie probablemente cierto para los lobos que se sintieron atraí¬ dos por la basura. Los lobos en es¬ tado salvaje tendrían una jerarquía de dominación-sumisión, asi que es¬ tarían pre-adaptados para some¬ terse a la dominación humanaAquellos que no fuesen lo suficien¬ temente sumisos serían eliminados,
ancho. Alrededor del 1 por ciento de las herramientas líticas encontradas son de ob�diana o cristal volcánico, procedente de lo que es actualmente el este de Turquía, a varios cientos de millas de distancia, por lo que es lógico pensar que la población de estas primeras etapas de Ali Kosh tuvieran algún tipo de contacto con otros pueblos, La existencia de estos contactos se reafirma por el hecho
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¿Cómo podrían probarse estas teorías sobre la domesticación de pe¬ rros y gatos? Si los perros se domes¬ ticaron a sí mismos al convertirse en carroñeros, los arqueólogos deberían encontrar huellas de la domestica¬ ción de los perros (por ejemplo, cambios en la anatomía) sólo en los yacimientos que fuesen ocupados durante unagran parte del año y du¬ rante un largo período de años. Sólo bajo estas circunstancias la basura sería un problema y los perros una solución. Igualmente, la esencia de la domesticación de los gatos debe¬ ría encontrarse sólo en sitios que mostrasen señales o restos de alma¬ cenamiento de grano año tras ano, Sólo entonces los roedores serían un problema y los gatos una solución, Nosotros esperamos que los ar¬ queólogos realicen estas pruebas en el futurojuliet Qutton-Brock, «(Domesti-
Cátioü of Animáis» y Fiank Hole, hOj�íos of
�licultuíew, en Steve Jones, Robert M�tin y David Pübeam, eds, The Catnirrií�e Encydjfpeilid of Human (Nueva York: Cajnbiií� Univeisity Press, 1992J, pp, 3303S5,373-379i Juliet Qnttou-Brock, y E%oy Robinson, eti lán L, Masón, luúon of Amtnák (Kuevá York; Longman, 19�5, pp, 19a-21(i 217-22�; Stepheo Budiansky, The Covewntcf The Wü: Wky AiiitfMis Domesdcatioti (Kueva York: Motrow, 1992),
de que la dase de trigo que cultivaban no tenía ningún tipo de variedad silvestre en el área, Entre el 6750 y el 6000 a, C, aumentó el consumo de plantas cultivadas; el 40 por ciento de los restos de semi¬ llas encontradas en las tierras y en las zonas de desechos eran variedades domésticas de trigo y de cebada. Se re¬ dujo mucho la proporción de plantas silvestres en la
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Capítulo ¡O
Origen de la producción de alimentos y de la vida sedentaria
tural que culminó con el aumento de las civilizaciones urbanas de Oriente Próximo, como veremos en el próxi¬ mo capítulo, El crecimiento de la población que ocurrió en y alre¬ dedor de Ali Kosh no se produjo por igual en todo el Oriente Próximo después de la domesticación. Por ejem¬ plo, en uno de los mayores poblados primitivos de Oriente Próximo Uamado Ain Ghazal (en las proximida¬ des de lo que es actualmente Ammán, en Jordania), se produjo una disminución de la población y de las formas de vida, quizá porque la región en la que estaba encla¬ vado el asentamiento no pudo soportar durante mucho tiempo el aumento de la población. Una hoz fabricada con microlitos.
dieta, probablemente porque las plantas cultivadas te¬ nían la misma estación de crecimiento y crecían en los mismos tipos de suelos que las plantas silvestres- La cría de cabras y ovejas también contribuyó a la disminución de plantas silvestres consumidas en la dieta. El poblado pudo o no haber crecido, pero lo que es seguro es que crecieron las habitaciones, que ahora tenían más de 3 por 3 metros, las vallas eran mucho más gruesas y los adobes se unían unos a otros con una especie de mortero. Tam¬ bién las tapias tenían, frecuentemente, una capa de barro en ambos lados. Los suelos de barro prensado estaban ahora cubiertos, aparentemente, de esteras de juncos o de canas (se pueden ver sus impresiones en el suelo). Ejdstían patios con hornos de ladrillos en forma de cú¬ pula y asadores hechos en hoyos rodeados con ladrillos, Lógicamente, y considerando el calor en el área durante la estación veraniega, no había ningún horno en el inte¬ rior de las casas. Aunque el poblado no debía tener más de 100 indivi¬ duos, todos participaban en una gran red comercial: así, los moluscos marinos probablemente procedían del Golfo Pérsico, que está a cierta distancia al sur� el cobre pudo venir desde lo que es actualmente la zona central de Irán, la obsidiana procedía todavía del este de Turquía y las turquesas de lo que ahora es la frx>ntera entre Irán y A�anistán. Algunos de estos materiales se usaban para daborar ornamentos que llevaban ambos sexos o, al me¬ nos, así se deduce de los restos humanos encontrados en¬ terrados bajo el suelo de algunas casas. Después del 5500 a.C. el área de alrededor de AliKosh comienza a mostrar signos de un gran aumento de la po¬ blación, quizá debido a un uso más complejo de la agri¬ cultura al utilizarse el regadío y los arados tirados por ganado doméstico. En los mil años siguientes, hacia el 4500 a. C„ la población probablemente se triplicó. Este crecimiento demográfico forma parte del desarrollo cul¬
CATAL HÜYÜK. En una plataforma protegida de los vientos en la abrupta región montanosa del sur de Turquía se encuentran los restos de un poblado cons¬ truido de ladrillos conocido como CatalHüyük (Figura 10,5); el término HriyHl: �gnifica en turco «montículo formado por una sucesión de asentamientos», cada uno construido encima de otro� Hacia el 5600 a, C„ Catal Hüyük era una ciudad de adobe: se han excavado alrededor de 200 casas que están conectadas tipo pueblo (cada estructura de techo plano alberga a un número determinado de Emilias), Sus ha¬ bitantes decoraron las paredes de sus casas con imagina¬ tivos murales y sus santuarios con estatuas simbólicas. Los murales muestran lo que pueden ser escenas religio¬ sas y de la vida cotidiana. Los arqueólogos han descu¬ bierto unos frescos debajo de otros, superpuestos, lo que indica que los antiguos muros se cubrían con pinturas nuevas- Algunas habitaciones se considera que son pequeños santuarios y en ellas aparecen murales con
Restos arqueológicos de la estructura del poblado neolítico d e Catal IHüyük.
Capítulo 10
Origen de la producción de alimentos y de la vida sedentaria
grandes toros» así como estatuillas de toros y también so¬ bre las paredes grandes cabezas de ganado vacuno febricadas con arcilla. Otros murales de las «habitaciones santuario» reflejan escenas de la vida y de la muerte� pin¬ tadas en rojo y negroi respectivamente. En estas habita¬ ciones también se han encontrado estatuillas de arcilla que representaban a una mujer embarazada y a un hom¬ bre con barba sentado sobre un toro, La agricultura estaba muy avanzada en Catal Hüyük: había tal cantidad de lentejas� trigo» cebada y guisantes como para disponer de excedentes. Los arqueólogos se sorprendieron de la rica variedad de manufecturas» in¬ cluyendo cajas y tazones de madera bellamente trabaja¬ dos y febricados por la gente del poblado. También se encontraron dagas de obsidiana y sílex, puntas de lanzas» espátulas� cuchillos» cacillos y cucharas de hueso. En las
Figura 10.& Lflí hermmimtas neolíticas de Suiza ificíujrn hadias (1 -5,24)� atíceles heáws depiedra y hueso (6,9), kz ms de hueso (11,12}, cudiillos (7*3), ins¬ trumentos de arcilla y hueso (14-16) y ornamentos (13-22).
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casas había hebillas de cinturón� tenacillas y alfileres he¬ chos de hueso. Los hallazgos muestran también que tanto hombres como mujeres usaban aderezos de hueso» concha y cobre» y que usaban espejos de obsidiana la Figura 10.6 sobre herramientas y ornamentos simila¬ res del Neolítico de Suiza). Como Catal Hüyük se encuentra situada en una re¬ gión pobre en materias primas» la ciudad dependía» evi¬ dentemente» del intercambio con otras áreas para asegurarse la rica variedad de materiales que utilizaba. Las conchas procedían del Mediterráneo» la madera de las colinas» la obsidiana de lugares a 50 millas de distan¬ cia y el mármol del oeste de Turquía.
Domesticación en Mesoamérica En Mesoamérica se observa un patrón de domestica¬ ción completamente diferente: aquí»los arcaicos seminómadas mantuvieron el tipo de vida basado en la caza y la recolección a pesar de haberse domesticado ya algunas de las plantas. ¿Cómo pudo ocurrir esto? ¿Acaso la gente no se estableció cerca de sus cosechas para cuidarlas? Una vez que domesticaron las plantas» ¿no dejaron de re¬ colectar plantas silvestres? La respuesta es» rotunda¬ mente» no. En Mesoamérica la gente sembraba una serie de plantas y después de hacerio proseguían su migración estacional en busca de caza y recolección� regresando más tarde para recoger lo que habían sembrado. Muchos de los alimentos tempranamente domesticados de Meso¬ américa no eran básicos para su subsistencia ni siquiera aunque fueran altamente deseables. La domesticación en Mesoamérica fiie una consecuencia de que las gentes ar¬ caicas convirtieran en comunes las plantas que deseaban. Por ejemplo» una de esas primeras plantas cultivadas fiie la calabaza vinatera� que no se comía pero se utilizaba para transportar agua. loyce Marcus y Kent Flannery opinan que las calabazas vinateras fueron deUberadamente domesticadas plantándolas en áreas en las que no existían naturalmente» de forma que cualquiergrupo que viajara por esas áreas tuviera acceso a ellas para poder transportar el agua. La calabaza vinatera es una de las muchas plantas do¬ mesticadas en las tierras altas de Mesoamérica. Otras son el tomate» el algodón� una variedad de judías y» quizá la más importante» el maíz, A pesar de que el origen del maíz está en discusión, se ha encontrado una forma do¬ mesticada de alrededor del 5000 a. C, en Tehuacán, Mé¬ xico. Hasta 1970 se creía que el maíz se cultivaba a partir de una forma silvestre» ahora extinguida, del maíz, que tenía pequeñas panochas terminadas en plumeros cortos. Pero aUualmente la mayoría de los especialistas cree que el maíz se domesticó a partir del teosinte» una planta
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Capítulo 10 Origen de la producción de alimentos y d e la vida sedentaria
Te o s l n t e
H g u r a 10�7.
M aí z
Planta de túo�nto� con sus stímiilas, y planta do matz con la panocha y granos
píanta del Tnaíz domestico� h mismo que h panocha y semiUas. Fuente: Copyright €> 2000 by Mayú�ld Publishing Company. Reproducido con permiso del editor. Observe cómo es mayor
herbácea alta y silvestre que todavía crece ampliamente en México� o en todo ca50> que fiie el resultado del cruce en¬ tre una variedad perenne del teosinte y de un tipo de maíz álvestre (Figura 107)� El teosinte es completamente diferente del maíz en muchos aspectos: así» por ejemploj tiene el tallo largo� como el maiz� pero con una «espiga» a la que van unidas entre 7 y 12 semillas individuales en forma de hilera sencilla> a diferencia de la panocha de maíz, que tiene mu¬ chas semillas en numerosas hileras. Cada semilla de teosinte tiene su propia celdilla� en tanto que la panocha entera está cubierta por una gruesa cubierta. Sin embargo> el maíz silvestre también era completamente dife¬ rente del doméstico. Las panochas de maiz silvestre de hace alrededor de 7.000 años son pequeñas� de alrededor de dos centímetros y medio de longitud» tienen sólo unas doce hileras de semillas y cada semilla es delgada. Otro &ctor interesante del maíz antiguo y moderno� es que depende casi completamente del hombre para su reproducdón, ya que la salida de las semillas sólo es posible
in
de K. Feder.
abriendo la gruesa cobertura de la panocha� sin dañadas� para que se puedan dispersar y reproducir. Lo mismo que el maíz y la calabaza vinatera» las judías las calabazas vinateras comunes se domesticaronj pro¬ y bablemente» por simple manipulación de sus variedades silvestres. Las judías» por ejemplo» crecen en el suelo de las lomas y en el exterior de los refugios rocosos y cuevas de forma natural» y no es difícil que estos pueblos primi¬ tivos recogieran las judías para utilizar sus raíces» ya que las judías silvestres tienen unas semillas demasiado pe¬ queñas y probablemente no se comían. Posteriormente» a medida que se fueron plantando» se seleccionaron las formas más idóneas y con las semillas de mayor tamaño. Lo mismo debió de ocurrir con las semillas de la calabaza vinatera común» pero en este caso se comerían las semi¬ llas de la variedad silvestre ya que su carne tiene un sabor y un olor poco atractivos» pero seleccionando las plantas mutantes fueron escogiendo las formas con mejor sabor y olor» consiguiendo variedades domésticas mucho más apetecibles que sus antecesoras silvestres.
JH" Capítulo 10
Origen
de la producción de alimentos y de la vida sedentaria
A la5 personas que vivían en Mesoaméricaj México y América Central� se las relaciona íon el descubrimiento del cultivo del maíz» judías y calabaza vinateras» y se cree que las plantaban juntas en el mismo campo. Dicha cos¬ tumbre proporciona una serie de ventajas, ya que el maíz toma el nitrógeno del suelo mientras que las judías» lo mismo que todas las legumbres� desprenden nitrógeno al suelo- Además� el maíz proporciona a las judías trepado¬ ras su tallo alargado para que crezcan alrededor de ét en tanto que las calabazas vinateras� que son plantas rastre¬ ras, pueden crecer en la base de la caña del maíz. Además» las judías proporcionan a la dieta el aminoácido lisina que le felta al maíz» con lo que maíz y judías juntos pro¬ porcionan todos los aminoácidos necesarios en la dieta humana. El hecho de si el teosinte fue o no el antecesor del maíz» puede proporcionar el modelo de esta combi¬ nación, pues las judías silvestres, las calabazas vinateras comunes y el teosinte suelen crecer juntos en esos lugares. GÜILA NAQUITZ. l a cueva de Güila Naquitz, ex¬ cavada en los años sesenta por ICent Flannery, propor¬ ciona u n buen ejemplo déla domesticación temprana en Mesoamérica. En este lugar vivió de forma intermitente (y probablemente estacionaria) un pequeño grupo de personas, quizá sólo una femilia, a lo largo de 2.000 años (entre el 8900 a, C. y el 6700 a. C,), período durante el cual se domesticaron las plantas. La cueva está situada en el bosque espinoso de las laderas montañosas situadas sobre el valle de Oasaca. Sus habitantes cazaban ciervos y pécaris (animal salvaje parecido al cerdo) con lanzas y lanzadores� además de atrapar pequeños mamíferos como conejos. Recolectaban plantas en las áreas próxi¬ mas, particularmente frutas como peras, cerezas, bellotas y piñones de los bosques situados sobre el nivel de la cueva; además recogían también corazones de m�ey, cebollas y otros tipos de semillas duras procedentes de las plantas espinosas del bosque. En la cueva de Güila Naquitz también han aparecido restos de plantas cultivadas� incluyendo la calabaza vina¬ tera y otras variedades de calabaza. Pero> ¿cómo llegaron éstas a la cueva? ¿En qué lugar plantaron sus habitantes estos vegetales? Probablemente no podamos contestar todavía a estas preguntas. Las calabazas vinateras son plantas silvestres comunes en las tierras altas de Mesoamérica y crecen en suelos irregulares como los situados delante de las cuevas, por lo que quizá los habitantes de éstas las conocieran a base de verlas crecer cerca de su cueva y> posteriormente, plantaran algunas de ellas cuya carne tuviera mejor sabor y aprovecharan sus grandes se¬ millas. Tanto la domesticación como la utilización de las plantas domésticas debió de ser bastante informal» un suplemento a una dieta ya rica de por sí en animales y
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plantas silvestres. Esta situación es bastante diferente de la que hemos comentado en Oriente Próximo, ya que la domesticación de plantas de Güila Naquitz se efectuó por grupos cazadores y recolectores que completaron su dieta básica con algunas plantas que deseaban (calabazas vinateras con carne sabrosa, por ejemplo); por lo tanto aquí no se produjo la «revolución» que permitió contar con ks plantas domesticadas.
La domesticación en otras partes DEL MUNDO SURAMÉRICA Y EL ESTE DE ESTADOS UNI¬ DOS. La evidencia de domesticación de plantas fuera de Mesoamérica procede de, al menos, dos áreas del Nuevo Mundo: Suramérica y las regiones orientales de EE UU. Las primeras plantas domesticadas en el Nuevo Mundo foeron de la femilia de las cucurbitáceas, que in¬ cluyen varios tipos de calabazas vinateras, todas domes¬ ticadas después del 7500 a. C. En relación con estas y otras plantas domesticadas en Mesoamérica podemos reseñar al menos 200 plantas domesticadas desde la re¬ gión de los Andes en Suramérica, entre ellas patatas, ju¬ días» guisantes» amaranto y quina. La primera planta claramente doméstica foe la guindilla (alrededor del año 7300 a. C,)»lo que hace que la domesticación en la región andina sea tan antigua como en Mesoamérica. Los oríge¬ nes del cultivo de las raíces de mandioca y de boniato son más inciertos, aunque estas cosechas probablemente se originaron en los bosques tropicales de las regiones de Suramérica. Muchas de las plantas que crecen en Norteamérica como el maíz, las judías y las calabazas vinateras proce¬ den de Mesoamérica, aunque hay, probablemente, tres
El bosque espinoso del valle de Oaxaoa.
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Capítulo 10
Origen de la producción de alimentos y de la vida sedentaria
Las patatas, una de las plantas más importantes del mundo� se domesticaron en los Andes.
tipos de semillas que fueron domesticadas en Norteamé¬ rica en una época primitiva: girasol» tabaco y pie de ganso. Tanto los girasoles como el tabaco tienen semillas altamente nutritivas� ricas en proteínas y grasas» en tanto que el pie de ganso es rico en almidón y similar a los ce¬ reales en valor alimenticio. El saúco es una fuente inusual de calcio» superado solamente por las verduras» los meji¬ llones y los huesos. También es fuente de hierro (más que el hígado de vaca) y de tiamina. Estas plantas puede que comenzaran a cultivarse en el área de Kentudcy» Tennessee y el sur de Illinois a comienzos del 2000 a. C. (el maíz se introdujo alrededor del 200 d�Cj» Todas las plantas domesticadas antes del maíz tienen un valor nutritivo superior� así que cabe preguntarse: ¿por qué los agricultores de Norteamérica han tenido tanto interés en cultivar maíz en los últimos 1.000 anos? En palabras del arqueólogo Bruce Smith» «con la excep¬ ción del girasol» las cosechas de semillas de Norteamérica no son exactamente conocidísimas». Las cosechas de maíz debían de tener grandes ventajas para superar otros cultivos» o quizá los fectores cruciales fueron la época de cosecha y la cantidad de esfiaerzo requerido. El pie de ganso» por ejemplo» es comparable nutritivamente ha¬ blando a los cereales, Pero su preparación y almacena¬ miento exigen gran cantidad de trabajo que además tiene que hacerse durante el otoño» época del año en la que se
puede cazar el ciervo de forma intensiva. Por tanto esta incompatibilidad entre la recolección de esta planta y la caza del ciervo» además de la fecilidad que tienen los ce¬ reales para su preparación y almacenamiento» explican la difusión conseguida por éstos, En conjunto» los animales domésticos fueron menos importantes en el Nuevo Mundo de lo que lo fueron en la mayoría de los lugares del Viejo Mundo En Nortea¬ mérica los animales más domesticados fueron los perros y los pavos hasta la Uegada de los españoles. Los pe¬ rros del norte y sur de América procedían probable¬ mente de los lobos de Norteamérica y se domesticaron relativamente pronto, El pavo se domesticó alrededor del 500 a, como demuestran sus restos encontrados en el suroeste de América, Las plumas se usaron en flechas» or¬ namentos y para tejer, en tanto que los huesos se usaron como herramientas aunque no parece que el pavo fuera con f�cuencia consumido salvo en México» donde quizá se domesticaron independientemente» lo mismo que en América Central, Cuando llegó Cortés a México en 1519» encontró gran cantidad de pavos domésticos� La región central de los Andes fiae la única región del Nuevo Mundo en la que los animales domésticos íueron parte importante de la economía» ya que se usaron para el transporte» el aUmento y la lana� cuando las llamas y las alpacas (miembros de la femilia de los camellos) se domesticaronj muy pronto» hacia el 5000 a, C, En esta misma región, un poco más tarde» se domesticaron tam¬ bién los cobayas (conejillos de Indias) que llegaron a ser una fuente importante de alimentación, antes incluso de ser domesticados. Desde que se domesticaron se ha di¬ fundido su presencia en los hogares, La domesticación de los animales en el Viejo Mundo difiere mucho de la domesticación en el Nuevo Mun¬ do ya que las especies salvajes son diferentes en ambos casos. En las llanuras y los bosques del Viejo Mundo vi¬ vían los precursores del ganado vacuno» ovejas» cabras» cerdos y caballos que existen en la actualidad» en tanto que en el Nuevo Mundo los grandes rebaños del Pleistoceno se extinguieron junto a los caballos» mastodontes» mamuts y otros grandes animales» con lo que se perdió la oportunidad de domesticarlos. ASIA ORIENTAL. Los registros arqueológicos de domesticación de las semillas de cereales se conocen me¬ jor que los de las cosechas de plantas carnosas» ya que las primeras se conservan mucho mejor que las segundasLas primeras pruebas del cultivo de cereales en el Lejano Oriente proceden de China, en donde a partir del 6000 a� C, se cultivaba» en la zona del norte» una variedad de mijo. Se han encontrado abundantes hoyos y tinajas para su almacenamiento� 3sí como gran cantidad de piedras
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Origen d e la producción d e alimentos y d e la vida sedentaria
de moler» lo que sugiere que el mi� íue de enorme im¬ portancia en la dieta de aquellas personas. Los huesos de animales salvajes, asi como los útiles de caza y pesca en¬ contrados» sugieren que estas gentes dependían de estos recursos para su subsistencia. También se han encon¬ trado restos de cerdos domésticos (lo mismo que perros) en el sur de China» prácticamente de la misma época» Los arqueólogos han encontrado un poblado situado junto a un pequeño lago en donde se cultivaba arroz, calabazas vinateras» castañas de mar y una fruta parecida al dátil llamada jojoba. Los pueblos del sur de China también domesticaron búfelos de agua» cerdos y perros y» lo mismo que los grupos del norte del país, parte de su ali¬ mento procedía de la caza y la pesca. La tierra firme del Sudeste asiático también fue un lu¬ gar de domesticación tan precoz como lo fue el Oriente Próximo» La datación de la domesticación en el Sudeste asiático no está muy dara; los yacimientos con domesti¬ cación más antiguos (la Cueva Espíritu, en el noroeste de Tailandia) están fechados entre el 9000 a, C, y el 5500 a. C, Algunas de las plantas encontradas en esta cueva no se distinguen fócilmente de sus variedades silvestres, pero otras» como la calabaza vinatera» las hojas y nueces de be¬ tel» así como castañas» probablemente ya estaban domes¬ ticadas, La mayoría de los cultivos en la tierra firme del Su¬ deste asiático parece que tuvo lugar en las llanuras y te¬ rrazas bajas pnjximas a los cauces de los ríos» aunque las principales formas de subsistencia fueron probable¬ mente el pescado y los moluscos de las aguas próximas, Es posible que las primeras plantas domesticadas no fue¬ ran los cereales» como sucedió en Oriente Próximo» ya que muchas de las plantas cultivadas al principio no lo fueron con ñnes nutritivos» en particular el bambú» que se utilizaría para hacer instrumentos cortantes y para gran variedad de usos en la construcción; las calabazas vinateras se usaron como recipientes. No sabemos exac¬ tamente cuándo se domesticó el arroz, aunque existen pruebas definitivas de su cultivo en Tailandia alrededor del año 4000 a, C. También se domesticaron por vez pri¬ mera otras plantas importantes en el Sudeste asiático» in¬ cluyendo tubérculos como el taro y la batata y árboles como el árbol del pan» los cocoteros y los bananos, ÁFRICA. Algunas plantas y animales se cultivaron en África por primera vez. La mayoría de las domestica¬ ciones debieron de efectuarse en el ampño cinturón de bosque y sabana entre el sur del Sahara y el norte del Ecuador, Entre los cereales domesticados» el sorgo debió de cultivarse por primera vez en la parte central del este de este cinturón, en tanto que en la parte oeste del mismo parece que se cultivó una variedad de mijo y un
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Un hombre oo$aohando el $orgo en Burkina Fa$o. El $orgo una de la$ e$pacie$ de plantan domeeticadae en África. tipo de arroz (diferente del arroz asiático) y otro tipo di¬ ferente de mijo en el este. Los cacahuetes y batatas se do¬ mesticaron por vez primera en África occidental, Sabemos que la agricultura estaba difundida por el norte de África alrededor del 6000 a, C„ aunque los especialis¬ tas continúan debatiendo si estas primeras cosechas eran indígenas o procedían de Oriente Próximo, Sin embargo» hay pocas dudas de que algunas de las plantas cultivadas procedían del África subsahariana» ya que allí estaban presentes variedades silvestres de esas mismas plantas, Muchos de los animales domésticos del África actual (como ganado vacuno» ovejas y cabras) quizá se domes¬ ticaron por primera vez en Oriente Próximo» aunque otros como el asno y la gallina de Guinea se domestica¬ ron en África por vez primera,
¿Por qué se desarrolló la producción de alimentos? Sabemos que se produjo una profunda transforma¬ ción económica en amplias regiones del mundo hace
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Capítulo 10
Origen de la producción de alimentos y de la vida sedentaria
u r w 10�000 añosi cuando la gentí comenzó a domesti y» quizá» plantando deliberada¬ mente las más productivas de entre ellas. Cohén cree que
Jit Capítulo 10
Origen d e la producción d e alimentos y d e la vida sedentaria
aquellas gentes debieron de utilizar una variedad de estas estrategias que acabarían en el cultivo» ya que éste fue el único medio eficaz que les posibilitaba para vivir en un lugar determinadoRecientemente> algunos arqueólogos han vuelto a la teoria del cambio climático (aunque no a la del cambio extremo de Gordon Childe) y al papel que pudo desem¬ peñar en la aparición de la agriculturaj pues parece evi¬ dente que el dima del Oriente Próximo hace entre 13.000 y 12�000 años se hizo más estacional: con veranos más calientes y secos que antes, e inviernos más fHos. Estos cambios climáticos pudieron fevorecer la aparición de especies anuales de cereales silvestres que los ar¬ queólogos ven proliferar en muchas áreas del Oriente Próxima Pueblos como los Natufienses explotaron in¬ tensivamente los cereales estacionarios, desarrollando una tecnología muy elaborada para almacenar y procesar los cereales y abandonando previamente su vida nómada para poder hacerlo. Por tanto, la transición hacia la agri¬ cultura pudo producirse cuando los forrajeadores seden¬ tarios no conseguían recursos alimentarios suficientes para alimentar a la población; tal cosa pudo ocurrir bien porque la sedentarizadón fevoredó el credmiento de la población y con ello la disminudón de los recursos, o bien porque los recursos silvestres locales se agotaron en los poblados permanentes. En las áreas de Fordania e Is¬ rael en las que vivían los Natufienses, algunos pueblos se hicieron aparentemente agricultores para incrementar el abastecimiento de cereales, en tanto que en otras áreas se volvió a la recolección nómada de los alimentos a causa de la disminudón de la disponibilidad de los cereales sil¬ vestres, El cambio climático hacia unas vanadones climáticas mayores también pudo influir en la disminudón de dertos alimentos entre los recolectores. Así, en las estaciones secas algunos afimentos debían de ser más difidles de conseguir; por ejemplo, los animales domésticos enfla¬ quecen cuando disminuyen los pastos, por lo tanto la caza debió de ser un sustituto en estas épocas. Y, aunque parezca sorprendente,algunos cazadores-recolectores re¬ cientes han p>asado hambre cuando han tenido que ali¬ mentarse de carnes magras, lo que se debe a que necesitan un mayor aporte de carbohidratos o de grasas y esto es fi�cuente en los períodos de sequía, cuando las presas están más flacas. Por ello es posible que algunos cazadores-recolectores del pasado pensaran en cultivar las plantas para poder sobrevivir en las estadones secas cuando la caza, la pesca y la recolección no proporcionan suficientes hidratos de carbono ni grasas para evitar el hambre. Mesoamérica presenta un panorama diferente ya que las primeras domesticadones no fueron muy importan¬
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tes para la subsistencia. Las teorías sobre el aumento de pobladón y la disminución de nutrientes no parece que puedan ser aplicadas a estas regiones, aunque sí parece que existieron épocas de disminución de las plantas de¬ seadas, como las calabazas vinateras, por lo que la do¬ mesticación se produjo como consecuencia de una actividad humana relacionada con estas plantas. La dife¬ rencia entre este modelo y el anterior es que los grupos humanos de Mesoamérica no estaban, aparentemente, forzados a la domesticación por los cambios climáticos ni por la presión demográfica, aunque la efectuaron para obtener muchas de las especies de plantas que deseaban o que eran más útiles. El caso más interesante es el del maíz� que solamente fue un alimento corriente tras 2,500 años de ser domesticado. Pero ¿qué lo convirtió en ali¬ mento habitual? Quizá porque era un alimento corriente (sobre todo cuando se cultivaba asociado a judías y cala¬ bazas vinateras) y porque le gustaba a la gente, fue por lo que se cultivó intensivamente. A lo largo del tiempo, y quizá a causa de algunos conflictos, del crecimiento de población y de otras razones similares a las que habían favorecido la domesticación en el Oriente Próximo, los pueblos de Mesoamérica y, más tarde, los del norte y sur de América, comenzaron a introducir el maíz en su dieta como alimento básico.
Consecuencias del aumento de la producción de alimentos Sabemos que la agricultura intensiva (cultivos perma¬ nentes en vez de variables) probablemente aparedó como consecuencia de la presión demográfica, pero no sabemos con seguridad qué cantidad de personas fueron, ni siquiera parcialmente� las responsables de la primera domesticación de plantas y animales. Como consecuen¬ cia de la aparición de la producción de alimentos la po¬ bladón credó todavía más (Figura 10,8) pero también se produjeron otras consecuencias�quizá,paradójicamente, empeoró la salud y la cultura material se hizo más com¬ pleja, CE�CIMIENTO acelerado d e la POBLACtóN Como hemos visto, la sedentarización (anterior in¬ cluso a la producdón de alimentos) pudo fevorecer el aumento de la tasa de crecimiento de la población, Pero ésta se aceleró mucho más tras la aparidón de la agricul¬ tura y la cría de animales domésticos, posiblemente por¬ que el mayor espaciamiento entre los nacimientos se redujo y la fertilidad (número de nadmientos por cada madre) se incrementó. El aumento de la fertilidad pudo
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C a p í t u l o 10
O r i g e n de la p ro d u c c i ó n de alimentos y de la vida s e d e n t a r i a
Fronteras de la investigación S4)mo5 U ffue Los arqueólogcw estudian las an¬ tiguas dietas de distintas formas» la mayoría de ellas de forma indirecta. Pueden deducir algunas de las cosas que comían los antiguos grupos humanos a partir de los residuos en¬ contrados. Por ejemplo� si encuen¬ tran un montón de cáscaras de semillas de cereales» se puede dedu¬ cir que esas gentes los consumían en gran cantidad. Los restos de plantas y animales consumidos también se pueden identificar a partir de los res¬ tos calcinados encontrados en los fuegos encendidos para hacerla co¬ mida (cuando se han conservado) y también en las heces (íüprcjíííoí) de las gentes primitivas. Tales deduc¬ ciones se obtienen a píartir de los res¬ tos sólidos como semillas» nueces y granos (que son los que mejor se conservan); raramente encontramos restos de plantas blandas como ba¬ nanas o tubérculos. Los arqueólogos
andllsh ífutmlce de huesos y dientes también pueden deducirla dieta» de forma indirecta» a partir de los artefectos encontrados» pudiendo» a ve¬ ces» saber de qué forma procesaron determinados alimentos. Por ejem¬ plo» si se encuentra una herramienta de piedra con una superficie cóncava o convexa se puede deducir que se usó para moler grano» ya que se so¬ lía consumir el grano (igual que otras cosas duras» como semillas) molido como alimento. Pero los restos de plantas encontrados no nos dicen nada sobre la forma en que los primitivos humanos conseguían sus alimentos. También existen formas directas de investigar los alimentos délas die¬ tas antiguas. Los antropólogos han descubierto que de alguna forma «eres lo que comes>>. Por lo que> par¬ ticularmente» los análisis químicos de los huesos y dientes encontrados en los yacimientos pueden demos¬
venir favorecido por la participación de los niños en el trabajo de la agricultura y el pastoreoi existen pruebas obtenidas de estudios recientes de población que prue¬ ban el aumento de los índices de :fertilidad cuando los ni¬ ños colaboran más en la economíaNo sólo los padres pueden desear tener más hijos para que éstos les ayuden en sus labores sino que el in¬ cremento del trabajo femenino puede disminuir (aun¬ que de forma inadvertida) el espacio entre nacimientos, la ocupación de la madre provoca la disminución del período de lactancia del hijo» por lo que éste tiene que mtrirse con aUmentos suplementarios fodlitados por otras personas como sus hermanas mayores. La fre¬ cuencia menor de cuidados maternos y el suministro de otros alimentos que no son la leche materna pueden
trar restos de los alimentos consu¬ midos e incorporados a ellos metabólicamente. Uno de estos exámenes directos se basa en el análisis químico de la relación estroncio-calcio del hueso. Este análisis puede demostrar las cantidades relativas de plantas o de animales presentes en determinada dieta. Por ejemplo» sabemos a partir del análisis del estroncio de los hue¬ sos que poco antes de comenzar la agricultura de los cereales en Oriente Próximo» la gente consumía gran cantidad de plantas en su dieta» pro¬ bablemente cereales silvestres» reco¬ lectados de forma intensiva. Con posterioridad se produjo una dis¬ minución temporal de estas reco¬ lecciones, lo que sugiere un exceso de explotación délos recursos silvestres O!» al menos» la disminución de su disponibilidad. Este problema se re¬ solvió» presumiblemente» con el
producirla ovulación de la madre poco después del na¬ cimiento del hijo (los granjeros y ganaderos son procli¬ ves a alimentar a los niños con leche animal y también con cereales que se transforman» al cocir�rlos» en sus¬ tancias blandas como las papÜlas). Una vez que se re¬ dujo el espacio entre nacimientos la madre estuvo más ocupada tras la aparición de la producción de alimen¬ tos. Empeoramiento de la salud
Aunque el aumento de la producción de alimentos condujo al aumento de la fertilidad» esto no significa que mejorara la salud en términos generales. De hecho» pa¬ rece que ésta disminuyó» al menos algunas veces» con el
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cultivo 7 la doinesticadóii (modifi¬ cación) di los cereales. las proporciones de los isótopos de carbono también nos pueden aclarar qué tipos de plantas comia la gente» ya que áiboles> arbustos y hier¬ bas de las zonas templadas (por ejemplo� el arroz) tienen proporcio¬ nes de carbono diferentes a las de las plantas de las zonas tropicales y sub¬ tropicales (como el mijo y el trigo). Los pueblos de China se alimentaban sobre todo de cereales hace entre 7.000 y 8.000 anos» aunque no eran los mismos cereales en el norte que en el sur. Al contrario de lo que esperᬠbamos, las proporciones de los isó¬ topos del carbono de los cereales procedentes de las regiones templadas (arroz) eran la comida corriente en el sur subtropical de China; en tanto que en la zona menos cálida del norte se consumía con mayor frecuencia una planta original de una región tropical o subtropical (elmijo). La dep>eTidencia en el norte del mijo era enonne> y se estima que entre el 50 al SO por ciento de la dieta entre los años 5000 y 500 a. C, era de mijo,
Origen d e la producción d e alimentos y d e la vida sedentaria
En el Nuevo Mundo» en el este de Norteamérica� se domesticaron las plantas con semillas como elgirasoL pie de ánade y tabaco� mucho antes de que el maíz procedente de México los sustituyera. Conocemos parcial¬ mente esto por medio de la arqueologia> ya que los restos encontrados de las citadas plantas son anteriores a los restos de maíz. Éste� una planta subtropical, tiene una proporción de isótopos de carbono diferente a la que tienen las otras cosechas más an¬ tiguas de plantas en esta zona. Por lo que la aparición de las proporciones de isótopos de carbono después del 800-900 a. C. nos indica que fue el maíz el alimento básico, Los antropólogos y arqueólogos tradidonalmente utilizaban análisis no químicos de los huesos y dientes encontrados para estudiar las seme¬ janzas y diferencias existentes entre gentes de diferentes regiones geográficas� entre seres humanos vivos y posibles feiles de sus ancestros� y entre los humanos y otros primates vivos. Muchos de estos estudios in¬ cluyen medidas de las superficies de
paso a la producción de alimentos. Ambos puntos pare¬ cen paradojicos� pero con el rápido crecimiento de la po¬ blación cada madre paría un gran numero de hijos, parte de los cuales podían morir por enfermedad o desnutri¬ ción. Este indicio de que la salud puede empeorar con el in¬ cremento de la producción de alimentos» se desprende del estudio de huesos y dientes de algunas poblaciones prehistóricas, antes y después de la aparición de la misma. Los problemas nutricionales y las enfermedades se muestran por características tales como una incom¬ pleta fr>rmación del esmalte dental, las lesiones no acci¬ dentales de los huesos (huesos insuficientemente desarrollados), la reducción de la estatura media y la dis¬ minución de la esperanza de vida. Muchos de los pueblos
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los huesos, particularmente del crᬠneo (tanto internas como extemas). £n los úkimos años> los antropólo¬ gos físicos y los arqueólogos han comenzado a estudiar las íduterioridades» de los huesos y los dientes. El hallazgo de nuevos sistemas de anᬠlisis químico� como los anterior¬ mente mencionados, son parte de estos nuevos métodos. En palabras deN.r.vanderMerwe,«elénfe5Ís en los estudios de la evolución humana ha.„ cambiado desde una preocupa¬ ción porelcerebro a un interés igual por el estómago», hj. J. � dentro de las comunidades>a los alimentos ya otros recursos. Como veremos en el próximo capítulo� la estratifica¬ ción social y las grandes desigualdades socioeconómicas son proclives a surgircon el incremento de la producción de los alimentos. Los efectos a largo plazo de la estratifi¬ cación y del dominio político sobre el nivel general de salud se pueden reflejar en los restos esqueléticos proce¬ dentes de tiempos prehistóricos. Asiese han estudiado los restos de los nativos americanos que murieron� en lo que es actualmente Illinois� entre el 950 a, C. y el 1,300 d, C,� el período de cambio en la región� por el paso de la caza y la recolección a la agricultura. Los agricultores que vi¬ vían en la región de los túmulos de Dickson (yacimiento de enterramientos llamado así por el doctor que lo ex¬ cavó por primera vez) tenían peor salud que sus antepa¬ sados cazadores-recolecto res, Pero» curiosamente� los testimonios arqueológicos sugieren que todavía cazaban y pescaban. Quizá tenían una dieta equilibrada todavía pero, ¿por qué conseguían tener esa dieta? Posiblemente eran la elite de Cahokiaj a 110 millas de distancia» donde vivían entre 15,000 y 30,000 personas� alimentándose la mayoría de la caza y la pesca- Los individuos que vivían cerca de los túmulos de Dickson� quienes tenían caza y pesca, podían disponer de objetos de lujo tales como co¬ llares de conchas procedentes de las elites de Cahokia� pero mucha de la gente enterrada en los túmulos de Dickson no recibía los beneficios nutricionales de rela¬ cionarse con Cahokia,
Figura 10.S.
Ciracim/anto d a población
Et crecimiento de ía población w íí«Jer así como una serie de plantas silvestres» y la caza de ciervos y otros animales. Los cambios climáticos pudieron influir parcialmente en el paso a la recolección de amplio espectro. 2- En algunos lugares de Europa» Oriente Próximo» África y Perú la aparición de la recolección de amplio es¬ pectro parece estar relacionada con el desarrollo de co¬ munidades más estables. En otras regiones» como las zonas semiáridas de Mesoamérica» los establecimientos permanentes sólo aparecen después de domesticarse plantas y animales. 3. El paso hacia el cultivo de plantas y la domesti cación de animales se ha denominado «revolución neolí¬ tica» y se produjo» probablemente» de forma indepen¬ diente en un número de áreas» Las primeras pruebas de domesticación proceden de Oriente Próximo y datan aproximadamente del 8000 a, C» Otras dataciones de do¬ mesticación en otras áreas del Viejo Mundo ya no están tan claras» aunque la presencia de diferentes tipos de co¬ sechas domesticadas en diferentes regiones sugiere que existieron lugares independientes de domesticación en China» el Sudeste asiático (en lo que es actualmente Ma¬ lasia» Tailandia» Camboya y Vietnam) y en África algunos anos después del 6000 a. C, En el Nuevo Mundo apare¬ cen varias áreas primitivas de cultivo y domesticación: las tierras altas de Mesoamérica (alrededor del 7000 a, CJ, los Andes centrales alrededor de Perú (aproxima¬ damente en la misma fecha) y las tierras boscosas del este de Norteamérica (alrededor del 2000 a. C,), 4. Las teorías sobre la causa que originó la produc¬ ción de alimentos están en discusión� pero la mayoría de los arqueólogos piensa que se dieron varias circunstan¬ cias que obligaron a pasar de la recolección a la produc¬ ción de alimentos. Algunos de estos fectores causales incluyen: (1) el crecimiento de la población en las áreas de excelentes recursos silvestres (que pudo empujar a ctras gentes a desplazarse hacia áreas más marginales en las que intentaron reproducir sus formas anteriores de djundancia); (3) el crecimiento global de la población (que cubrió las regiones más habitables del mundo y obligó a utilizar un amplio espectro de recursos silvestres y a domesticar plantas y animales); y (3) la aparición de
veranos más secos e inviernos más fríos que pudieron fevoiecer el sedentarismo cerca de las zonas más ricas en cereales silvestres; la población creció en esas áreas» vién¬ dose obhgada a plantar cosechas y a criar animales para mantenerse, 5. Una vez considerado el motivo por el que se ori¬ ginó la producción de alimentos» parece que este aconte¬ cimiento tuvo gran repercusión en la vida de los seres humanos» La población creció sustancialmente después de la domesticación de plantas y animales» y aunque no todos los cultivadores foeron sedentarios» éstos aumen¬ taron considerablemente con la agricultura. También ocurrió algo sorprendente ya que algunas poblaciones prehistóricas que dependían estrechamente de la agricul¬ tura parece que fueron menos sanas que las poblaciones anteriores» que dependían de la recolección de alimentosEn la mayoría de los poblados estudiados» originados después de establecerse la producción de alimentos» las casas y los muebles se hacen mucho más complejos y la gente empieza a confeccionar tejidos y a pintar la cerámica> Estos poblados también han dejado huellas de un comercio de larga distancia que foe en aumento»
Glosarlo de términos Agricultura Domesticación Espiga Neolítico Obsidiana Producción de alimentos Sedentarismo
Cuestiones críticas L ¿Qué pudo hacer que la gente trabajara más para conseguir alimentos? 2, ¿Cómo pudo la gente domesticar ovejas» cabras y ganado vacuno? 3. ¿Cuál de las distintas teorías sobre la aparición de la producción de alimentos explica por qué la do¬ mesticación tuvo lugar en muchas áreas del mundo en unos pocos milenios?
Ejercicios de Internet L Visite el sitio de la página web dedicado a Catal Hüyük en: (http://catal.arch.cam.acuk/catal.html) y aprenda sobre el desarrollo de las excavaciones� Escriba
J i t Capítulo 10
Origen de la producción de alimentos y de la vida sedentaria
un breví ensayo de los descubrimientcw más impor¬ tantes, 2, La domesticación de plantas silvestres no se condgue sin dificultades-Vea la descripción o intente culti¬ var arroz silvestre en: http;//www.hoJt.purdue,edu7 los newcrop/proüeedingsl993/v2-235,htiiil. Ejcplore del desmenuzamiento de las cáscaras de las problemas semillas y d aumento de las enfermedades con el cultivo. 3. Explore la domesticación animal en iátp://www, ag.usask.ca/exhibits/ wallcway/what/aniindom.htiial. Es¬ coja un animal doméstico que le interese e investigue cuándo y dónde íiae domesticado. 4. Visite la página web sobre los orígenes del maíz en: http://farina.qfb, unich.mx/orimaize.htm para aprender sobre las investigaciones en curso acerca de la forma en la que se domesticó el maíz.
Cohén, M. N. «Were Early Agriculturalists Less Healthy than Food CoUectors?'* En P. N. Peregrine� C. R. Erabery M. Erabe r (Ed$,). OngfrtflJ ]Íí«í/ím�í ín Aí�ííuid and Practice. Upper Saddle River, NJ: Prentice Hall, 2002. Un ca¬ pitulo especialmente escrito pensando tti los estudiantes» en el que se revisa la tesis que relaciona el empeoramiento de la salud con la llegada de la agricultura. CowAN, C. W. Y WatsoNí P. J. (Eds.). Títe Oríjfiííí (j/A�rjciJíiíre: Aít Washington, DC: Smithsoniari
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Institution Pressi 1�92. Resume la geografía� climatología� botánica y arqueolíígía de los acontecimientos asociados OH) el surgimiento del cultivo de plantas en diferentes par¬ tes del Viejo y Nuevo Mundo. Henry, D. o. From The Levatit at ífe Efíd of íhe /« AgQ. FÜadelfia: University of Penns�vania Pressi Una investigación y un debate de la$ teorías acerca de los orígenes de la agricultura» con xina referencia particular a la zona del Mediterráneo OrientalHojdek, i. Tk� Domestication ofEuropa: Stritctureand Contingency in Neoíií/ifc 5í>aeíi«. Oxford: BlackweU, 1990. Análisis de los cambios sodales experimentados por las sociedades del norte de Europa tras la adopción de la agricultura. MacNetsh, R. S. TTií Oríjfíííí pf Agricultura and SettUd Ufe. Norman: University ofOklahoma Press» 1991. Después de revisar las teorías previas sobre los orígenes de la agricul¬ tura» el autor nos propone su propio modelo y estudia las secuencias arqueol�cas en todos los lugares en los que se dio una domesticación temprana con el fin de comprobar su propia teoría. Ptuce, T. D. yGebauee, A. B, (Eds,). La�t HuttUr� Pif�t Farrrters; MewPerspectives on the Préústork Tratisitioti to Agrkidtiir€* Santa Pe, NM: Scbool of American Hesearch Press, 1995. Una amplia colección de artículos que tuvieron su origen en una conferencia sobre la transición a la agricultura cele¬ brada �n 1992 en el Scbool of American Research. Algunas de las ponencias son muy técnicas y complejaSi pero todas son brillantes. SMrm, B. D. Emergence ofAgriculture, Nueva York: Scientifc American Library, 1993. Una agradable e interesante vi¬ sión de conjunto sobre los orígenes de la agricultura,
Origen de las ciudades y de los Estados Indice del capitulo Deducciones arqueológicas sobre la civilización Ciudades y Estados al sur de Iraq Ciudades y Estados en Mesoamérica Las primeras ciudades y Estados % en otras áreas Teorías sobre el origen del Estado Consecuencias de la formación del Estado Declive y la caída de los Estados v"--
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Capítulo 11
Orígenes de las ciudades y de l o s Estados
que se inició la agricultura alrededor del 6000 a, los grupos humanos de Oriente Desde Próximo vivieron en poblados relativamente pequeños. Existían pequeñas diíerericias económicas entre las Emilias y» aparentemente� no había ninguna autoridad gubernamental más allá del poblado. No existen evidencias de que estos poblados poseyeran edificios públicos ni artesanos especiafizados� ni de que una comunidad tuviera un tamaño diferente de la de sus vecinos. Resumiendo» estos asentamientos no reunían ninguna de las características que se asocian general¬ mente con la «civilización», Algo después del año tíOOO a, C, en algunos lugares de Oriente Próximo (y posteriormente en otros lugares) pa¬ rece que se produjo una gran transformación en la cahdad y la forma de vida humana. Por primera vez encontramos evidencias de diferencias de estatus entre las femüias» Por ejemplo� algunas casas comienzan a ser mucho mayores que otras» Las comunidades empiezan a diferenciarse en el tamaño y a especializarse en ciertos trabajos� y aparecen muestras daras de que determinadas figuras políticas han adquirido autoridad sobre algunas comunidades� es decir» que había aparecido loque los an¬ tropólogos denominan «ie&turas>*. Algo más tarde» alrededor del 3500 a. C. comenzamos a ver algunas de las características de ladvilizadón (si no
VIEJO MUNOO
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todas): las primeras inscripciones escritas» las ciudades» muchos tipos de artesanos especializados a tiempo total» la arquitectura monumental» grandes diferencias en la posesión de riquezas y categoría» y un fuerte y jerarqui¬ zado sistema político centralizado al que llamamos Es¬ tado (Figura ILl). Este tipo de transformación se ha producido muchas veces y en muchos sitios a lo largo de la historia de la hu¬ manidad, La civilización más antigua ap>arece en el Oriente Próximo alrededordel año 3500 a. C��en el nor¬ oeste de la India después del 2500 a. en el norte de China alrededor del 1750 a» en el Nuevo Mundo (Mé¬ xico y Perú) unos pocos cientos de años antes de Jesu¬ cristo y en el África tropical un poco más tarde. Por lo menos algunas de estas civilizaciones evolucionaron de forma independiente de las demás (por ejemplo» las del Nuevo Mundo en relación con las del Viejo Mundo), ¿Por qué se produjo esta evolución? ¿Qué condiciones fevorecieron la aparición del sistema estatal centralizado? �Qué fectores posibihtaron la aparición de las ciudades? Con¬ testaremos por separado a estas preguntas» ya que los ar¬ queólogos todavía no tienen daro si todas las antiguas civilizaciones estatales tenían ciudades cuando se desa¬ rrolló el primer gobierno centralizado. En este capítulo veremos algunas de las cosas que han aprendido los ar¬ queólogos o que han sospechado sobre el desarrollo de
NUEVO MUNDO
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Figura 11.1. La aparición cfa fa civUtzación
C a p í t u l o 11
Réplica de un enterramiento maya deTikal. Este indivi¬ duo fue enterrado con un funeral especial con pieles de ocelote V jaguar y su cuerpo fue adornado con más de 16 libras de ornamentos de jade� incluyendo el gran co¬ llar, el tocado y los pendientes aquí mostrados. Los arqueólogos suponen que estos enten'amlentos espe¬ ciales indican la existencia de elites y alto estatus.
las antiguas civilizacióneSj pero centraremos nuestra discusión� sobre todo� en el Oriente Próximo y México� ya que los arqueólogos conocen bien ei desarrollo cultural de ambas áreas.
Deducciones arqueológicas sobre la civilización Las civilizaciones más antiguas han sido estudiadas más por los arqueólogos que por los historiadores deWdo aque aparecieron antes del descubrimiento de la es¬ critura. Entonces ¿cómo pueden los arqueólc�os saber si unas gentes del pasado ágrafo tenian clases sociales� ciu¬ dades o gobierno centralizado? Como hemos comentado anteriormente� parece ser que al comienzo del Neolítico las sociedades eran igualitaria$\ esto es» las gentes no diferían mucho en riqueza» prestigio o poder. Algunas sociedades posteriores mues¬ tran ya signos de desigualdad social, como demuestran los descubrimientos de algunas tumbas. Los arqueólo¬ gos deducen de ello que la desigualdad ante la muerte refleja desigualdad en la vida� también en el estatus y, quizái en riqueza y poder. Así» podemos estar casi segu¬ ros de que una sociedad presenta diferencias de estatus cuando sólo algunas personas son enterradas con obje¬ tos especiales como joyas o recipientes de cerámica lle¬ nos de comida. Y también podemos estar casi seguros de que el estatus ftie adquirido al nacer� y no posterior-
O r í g e n e s de las ciudades y de los E s t a d o s 215
mente> cuando encontramos diferencias en las tumbas de los niños� Por ejemplo� algunos (si no todos) de los enterramientos de niños desde el año �500 hasta el 5000 a. C- encontrados en Tell es-Sawwan� en Iraq» y desde el 800 a C, en La Venta (México)� están llenos de estatuas y ornamentos� lo que sugiere que algunos de ellos tenían alto estatus desde el nacimiento, Pero el he¬ cho de que las tumbas indiquen diferencias de estatus, no necesariamente supone que una sociedad tenga im¬ portantes distintas económicas. Los arqueólogos están seguros de que existen diferencias socioeconómicas en¬ tre las distintas clases únicamente cuando se producen otras diferencias sustanciales tales como el tamaño de las casas o en los muebles. Algunos arqueólogos creen que los Estados aparecie¬ ron por primera vez alrededor del 3500 a. C, en Mesopotamia, en la zona que actualmente está entre Iraq� al sur, e Irán, al suroeste. Tampoco coinciden todos los ar¬ queólogos en la forma en que se puede definir el Estado, aunque la mayoría está de acuerdo en que el criterio dave es la existencia de una toma de decisiones jerár¬ quica y centralizada que afecta a una parte sustancial de la población. En estos Estados primitivos también se en¬ cuentran generalmente otras características, aunque no siempre. Así, suelen tener ciudades con una importante parte de la población no dedicada directamente a la re¬ colección o producción de alimentos (lo que significa que una parte de los habitantes de las ciudades es muy dependiente de otra parte): sacerdotes y artesanos espe¬ cializados a tiempo total, edificios públicos y, frecuente¬ mente, un estilo artístico. Existe una estructura social jerárquica con una elite de la que proceden los jefes. Los gobiernos intentan proclamar su monopolio del uso de la fuerza (nuestra propia sociedad estatal opina que el ciudadano no tiene derecho a «tomarse la justicia por su mano») y el Estado utiliza esa fuerza para obligar a la población a pagar las tasas, para hacerla trabajar o ir a la guerra, ¿Cómo pueden deducir los arqueólogos, a partir de la información obtenida de los restos materiales� si una sociedad fue o no un Estado? Esto depende en parte del concepto de Estado que se tenga. Por ejemplo, Henry Wright y Gregory Johnson definen el Estado como una jerarquía política centralizada con, al menos, tres nive¬ les de administración, Pero ¿cómo pueden los arqueó¬ logos deducir que existe esa jerarquía en un área determinada? Wright y Johnson opinan que la forma en que los asentamientos se diferencian en el tamaño es una indicación de cuántos niveles administrativos exis¬ tían en el área� Inorante el período más antiguo de Uruk (justo antes del 3500 a, C J , en lo que actualmente es el suroeste de
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Capítulo 11
Orígenes de las ciudades y de l o s Estados E3
Irán» existían alrededor de 50 asentamientos que parece que se corresponden� de acuerdo con su. tamaño� con tres grupos: había alrededor de 45 poblados pequeños� otros tres semejantes a nuestros pueblos y otro gran en¬ clave» Susa. Estos tres tipos de asentamientos muestran que han formado parte de una administración con tres niveles jerárquicos» ya que ninguno de los pequeños poUados podría comerciar con Susa sin pasar previamente por los pueblos de tamaño intermedio.� que el criterio de Wright y Johnson es la previa existencia de los tres ni¬ al es jerárquicos para que exista el Estado, piensan que éste existía indudablemente en la época primitiva de Uruk. Los testimonios del Estado de Uruk son en el período siguiente» o período medio» todavía más definitivos para permitir afirmar que existió este Estado, Dichos testi¬ monios se basan en la aparición de sellos de arcilla que fueron» aparentemente» empleados en el comercio. Los sellos de comercio se usaban para mantener cerrado un cargamento de géneros hasta que llegaba a su destinata¬ rio y los íeífoí de mensaje para dejar constancia de los gé¬ neros enviados y recibidos* Los sellos encontrados en Susa incluían muchos de comercio y bulíae� recipientes de arcilla que servían como recibos del cargamento para d género que llegaba En contraste» los poblados tenían pocos sellos de comercio y bulhe. De nuevo» este ha¬ llazgo sugiere que Susa centralizaba los desplazamientos de los géneros en toda la región y que era la «capital» de Estado,
Volvamos ahora a las características principales de las secuencias culturales que condujeron a los primeros Es¬ tados en el sur de Iraq,
Qudades y Estados del sur de Iraq No se han encontrado comunidades agrícolas anterio¬ res a los primeros Estados en las áridas llanuras de los va¬ lles del sur de Iraq; el área conocida como Sumer fue una de las primeras ciudades-Estado conocidas (Figura 1L2). Quizá estos enclaves anteriores no se han hallado por ha¬ ber sido cubiertos por los sedimentos de los ríos Tigris y Eúfrates o» como algunos han sugerido» Sumer no fue ha¬ bitado por agricultores hasta que sus habitantes apren¬ dieron a drenar e irrigar los suelos del valle de ambos ríos» anteriormente demasiado húmedos o secos como para que pudieran permitir el cultivo. De alguna forma» pe¬ queñas comunidades dependientes parcialmente de la sericultura surgieron de las colinas próximas del norte y este de Sumer a comienzos del Neolítico, Posteriormente» alrededor del año 6000 a. C,» se desarrolló una economía mixta agrícola-ganadera en aquellas áreas.
La era fo r mat i va Elman Service Uamó Era fortnativa al período de tiem¬ po comprendido entre el 5000 y el 3500 a. C»» durante el
Figura 11.2.
S&is civitizaciom�
arcaicas
Fuente: Adaptada de The State and CjviJíOrigitií. pf zatiott The Procesa of CiAture Evolutiorij pQf Elmari R. Ser¬ vice. Copyright © 1975 por W. W. Norton fie Company, Irle. Usaila con permiso de W. W. Company» Inc.
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que observó abiLn los trabajos arqueológicos de última creación se pueden «gene¬ rar». Asíi la arqueóloga Cathy Costin ha estudiado los efectos del imperialismo Inca sobre el estatus de la mujer en un área conquistada. Costin participó en un proyecto de investigación que estudió los cambios culturales producidos en el valle de Yanamarca» en las tierras al¬ tas del Perú. El proyecto estaba cen¬ trado en el desarrollo de las jefeturas
del grupo étnico de los indios Wanka»entre el 1300 y el 1470 d.C.j asi como en los efectos de la con¬ quista por los Incas de los territorios de estos indios al ñnal de dicho pe¬ riodo, Según los arqueólogos� la ma¬ yoría de estos pueblos� antes de su conquista por los Incas, eran gran¬ jeros, aunque algunas de las :&milias dedicaban parte de su trabajo a la producción de al&reria> herramien¬ tas de piedra y quizá también de tejidos. Los documentos escritos después de la llegada de los españo¬ les sugieren que los WarJca habían desarrollado las jefeturas alrededor del año 1300 d. C,� posiblemente como consecuencia de las guerras ocurridas entre varias de sus co¬ munidades. La configuración y lo¬ calización de sus asentamientos demuestran que existió un alto nivel de conñictividad: la mayoría de la gente vivía en comunidades amura¬ lladas situadas en las cimas de las co¬ linas que dominaban su valle. Según las fuentes documentales, los jefes wanka conseguían su posición por medio de sus éxitos bélicos. Sabemos, a partir de esos docu¬ mentos, que los Wanka fueron con¬ quistados por los incas durante el gpbierno del emperador Pachakuti
Estados, los sistemas de irrigación, incluso los menores, parecen haber originado un acceso desigual a las tierras más productivas, contribuyendo así al desarrollo de la es¬ tratificación social. Además, los sistemas de irrigación pueden dar lugar a disputas fronterizas y a otras desave¬ nencias entre grupos vecinos, lo que debió de favorecer la concentración de los habitantes en las grandes ciudades
(alrededor del año 1470 d.CO con¬ virtiéndose los territorios wanka en una provincia de su imperio gober¬ nada por burócratas incas desde su capital en Cuzco. Estos gobernado¬ res incas, incluyendo el personal militar� constituyeron entonces las clases más elevadas del valle, y los je¬ fes wanka pasaron a ser sus vasallos y tambié n sus imitadores, usando cerámicas de tipo incay ampliando sus casas con estructuras incaicas. La economía del valle se hizo, a partir de entonces, más especializada, apa¬ rentemente para atender las necesi¬ dades de sus conquistadores, y en algunos poblados la mayoría de las ¿milias wanka terminaron dedi¬ cándose a la al&rería, a la elabora¬ ción de herramientas de piedra y a otras actividades, también de forma especializada. Los restos esqueléticos encontrados demuestran que la ma¬ yoría de los habitantes eran más sa¬ nos y vivieron más tiempo que antes de su conquista por los incas. �De qué forma pudo afectar la conquista de los incas al estatus de las mujeres wanka? Una de las claves para contestara esta pregunta fiie el hallazgo en las excavaciones de va¬ rios miles de objetos de cerámica de formas redondeadas y perforados
para fecilitar su defensa y estimularía la aparición de los controles políticos y militares. Finalmente, como sugie¬ ren Robert Adams y Elman Service, el principal signifi¬ cado de la irrigación, tanto a gran como a pequeña escala, puede haber sido el aumento de producción, un avance que indirectamente pudo estimularla especialización artesanal, el comercio y la burocracia administrativa.
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que resultaron ser husos utilizados en las hilaturas para mantener ten¬ sas y lisas sus ñbras. Las ñbras uti¬ lizadas (lana de llama y de alpaca) se transformaban en panos como forma de pago de ios impuestos desde que llegaron los incas al poder, Cada poblado estaba obligado a producir una cantidad de tejido de¬ terminada que se entregaba a los re¬ caudadores estatales de impuestos, y estos tejidos recaudados se utiliza¬ ban para vestir a los soldados y para «pagar» los servicios del resto del personal del gobierno. El grueso de esta producción de tejidos recayó en las tejedoras tradicionales que, según sabemos por los documentos poste¬ riores a la conquista española, eran mujeres de todas las edades, Todas las casas excavadas ante¬ riores a la conquista de los incas tie¬ nen husos, lo que indica que las mujeres de esasfemilias tejían y ela¬ boraban también tejidos, pero aún aparecieron mayor cantidad de hu¬ sos en casas aisladas situadas en las cimas de la colina y próximas a las praderas, en las que se alimentaban los rebaños de llamas y alpacas do¬ mesticadas, lo que muestra que las mujeres que vivían próximas a los pastos hilaban más que las que vi¬ vían en los poblados. Era de esperar que las mujeres pertenecientes a las elites wanka tuvieran menos trabajo que las mujeres procedentes de fe-
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milias más comunes� pero no fue así ya que, a juzgar por el número de pesos encontrados en las casas ma¬ yores, fueron las mujeres pertene¬ cientes a ellas las que tuvieron que trabajar más, Una vez concluida la conquista inca parece que la producción de te¬ jido se duplicó en relación con la producción anterior a la conquista, lo que se demuestra por la aparición del doble de husos en esta época. No existe indicación arqueológica ni do¬ cumental de que las mujeres estu¬ vieran liberadas de sus otras labores para dedicar más tiempo a tejer, por lo que debieron de tener mucho más trabajo tras la conquistaque antes de ella, al tener que tejer mucho más que antes. Tampoco parece que estas mujeres obtuvieran beneficio alguno de su exceso de trabajo y muchos, si no todos, de los tejidos producidos fueron sacados de los poblados para almacenailos en la capital, desde donde eran redistribuidos. Además de hacer su duro trabajo paialos incas, las mujeres parece que se alimentaban peor que los hom¬ bres, pues los análisis químicos de los huesos encontrados en tumbas del período inca, efectuados por Christine Hastorf, muestran que las mujeres comían menor cantidad de maíz que los hombres; además, pa¬ rece ser que éstos tomaban alimen¬ tos fuera de sus casas con mayor
Crecímíento de la POBLACÍÓN, aRCUNSCRíPcróN v guerra
Robert Carneiro ha sugerido que los Estados pueden aparecer a causa de un exceso de población en un área que es física o socialmente limitada. En estas circunstan¬ cias la competitividad y la guerra pueden llevar a la su¬
frecuencia que las mujeres, lo que puede deberse a que lo consumieran bajo la forma de cerveza de chicha, componente fundamental de las fiestas patrocinadas por el gobier¬ no, a las que, probablemente, acu¬ dían más hombres que mujeres. Los hombres trabajaban más en la agri¬ cultura estatal y en la ejecución de proyectos, durante los cuales tam¬ bién pudieron ser recompensados con carne, maíz y chicha a cambio de sus servidos prestados al Estado, Por lo tanto, bajo la dominación inca las mujeres wanka que produ¬ jeron más que antes recibían menos, ¿Acaso es éste un efecto general del imperialismo? Y de ser así, ¿por qué?
guLshed LecturetnArchaeolúgy: Bre�ldiigand the and Faction Sted tbe Shoiv», Attarican Atiera94 (1992): 551-67; Joan M. Geró y Marg�ret W, C{mke}� �Sn Ár-
lutroductioii xo Woiuen ¿nd Preblstory (OKÍord: I59l)j Cathy Lynne «(Cloth Productionand C�nder E�ktions in \\k [nkñEfflpite»,en N. P¡eregtin�, Carol Rp Ember y M�h/in Embe� ed$n dtaeolo�y: Aq
Origimi Readings in and Practice (Upper Saddle NJ: Ptentkc HaH
aoc2); Ottisiine Heítorí wGendí% Space, ñn¿ Food in Prehbtorjiv, en Gero y Gonke% edSn Et�et�ringArduieobgy.
bordinación de los grupos derrotados, que se verán obli¬ gados a pagar tributos y someterse al control del grupo más poderoso, Cameiro ilustra su teoría comentando cómo aparecieron los Estados en la costa norte del Perú, Después de establecerse la gente de aquella región en los núcleos agrícolas, la población creció un poco, surgiendo nuevos asentamientos. Pero en los estrechos
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Capítulo 11
Orígenes de las ciudades y de l o s Estados
Ruinas de \a antigua ciudad de P\tsc, en la región de Cuzco, en Perú.
valles de la costa� bloqueados por las grandes montañas por un lado y por d mar por otro y rodeados por desier¬ tos� este proceso de crecimiento no se pudo mantener por mucho tiempo» El resultado� según Carneiroj fije el intento por parte de unos poblados de apoderarse de las tierras de otros y la consecuencia fue� inevitablemente> la guerra. Rodeados por las altas montañasi el mar y el de¬ sierto no había ninguna escapatoria para los vencidos� no quedándoles más posibilidad que someterse política¬ mente a los vencedores. De esta forma» las jefeturas se transformaron en reinos cuando las comunidades más poderosas controlaron totalmente los valles» Cuando el poder de los jefes se expandió sobre varios poblados» pu¬ dieron nacer los Estados e imperios. Carneiro resalta que las circunscripciones físicas o medioambientales puede que no sean las únicas barreras que dan paso a los Estados, ya que las sociales también pueden ser otra causa importante. Las personas que viven en áreas densamente pobladas pueden ver sus po¿bilidades migratorias bloqueadas por otros asenta¬ mientos próximos» lo mismo que si fijeran montañas» mares o desiertos. Marvin Harris comentó otras formas diferentes de circunscripción. Dijo que los primeros Estados» con su aitoridad coercitiva» sólo pudieron surgir donde existía una agricultura intensiva de cereales (y la posibilidad de gran producción de alimentos) pero quedaron rodeados poráreas que no podían mantener didiaagricultura» Las gentes de aquellas áreas crearon entonces la autoridad coercitiva del Estado previendo que sufnrlan un duro golpe en sus formas de vida si se desplazaban a otros lu¬ gares, Carneiro cree que esta teoría es aplicable no sólo a muchas áreas próximas a la costa norte del Perú sino
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también al sur de Iraq y al valle del río Indo, A pesar de que no existen barreras geográficas al norte de China o en las tierras bajas del Yucatán de los mayas> la aparición del Estado en aquellas regiones también pudo ser el re¬ sultado de una circunscripción» La teoría de Carneiro pa¬ rece ser aplicable al sur de Iraq, donde existen pruebas arqueológicas de crecimiento de población, de circunspripción y de guerras» y donde también existen eviden¬ cias de crecimiento de población antes de la aparición del Estado en el valle de Teotihuacán, No obstante, crecimiento de población no necesaria¬ mente significa presión demográfica» Por ejemplo» las poblaciones del valle de Oaxaca y de Teotihuacán au¬ mentaron antes de la aparición del Estado, pero no hay testimonios de que sus recursos se aproximaran al agota¬ miento. La mayoría de la gente hubiera podido seguir vi¬ viendo en ambos lugares dado que tampoco creció la población. Por ejemplo» de acuerdo con Wright y John¬ son, en el suroeste de Irán muchas poblaciones crecieron tiempo antes de la aparición de los Estados, pero dismi¬ nuyeron inmediatamente antes de aparecer éstos» La teoría de las circunscripciones de Carneiro deja una importante pregunta sin contestan ¿por qué los ven¬ cedores de la guerra permitieron que los vencidos per¬ manecieran en el territorio y pagaran tributos? Si las tropas victoriosas lo primero que querían era tierra» ¿no hubieran preferido exterminar a los vencidos para apo¬ derarse de ella» como ha ocurrido tantas veces a lo largo de la historia? Comercio local y a larga d i s t a n c i a
Se ha sugerido también que el comercio fue un fector importante en la aparición de los primeros Estados» Wright y Johnson dijeron que ks necesidades de organi¬ zar los fectores de la producción para la exportación, la redistribución de productos importados y la defensa de las vías comerciales fevorecieron la formación de los Es¬ tados» ¿Confirman las pruebas arqueológicas esta teoría? En las tierras bajas de los mayas y del sur de Iraq» las rutas comerciales a gran distancia estimularon, induda¬ blemente» el crecimiento de una burocracia»En el caso de las civilizaciones del sur de Iraq, como hemos visto, la necesidad de madera y piedra para la construcción de los edificios favoreció un comercio para conseguir estos pro¬ ductos» En el caso de los mayas, el desarrollo de su civiÜzación parece que estuvo precedido por el comercio a larga distancia; estos agricultores de las tierras bajas co¬ merciaban con pueblos de lejanos lugares para conseguir sal» obsidiana para la febricadón de cuchillos y duras piedras con las que imbricar herramientas para molen En el suroeste de Irán el comercio a gran distancia no tuvo
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T'u-cíiu
La aparición de lo$ E$tado$ permite que $e de$arrollen las ciudades densamente pobladas� en las cuales pue¬ den surgir todos los problemas a los que tanto ellas como s us habitantes dan lugar.
Figura 11.3. Expan&ón da las cuffuras ragionatos naolfficas an China, 4000-3000 a. C. Fuente: Ardia&thgy ofAfuAent Chitut, 4E por K. C, Chang. Rfimpreso con permiso de
University Press.
un papel relevante antes de que Susa se convirtiera en el centro de la sociedad estatal» pero el comercio a corta distancia también pudo desempeñar el mismo papel en la formación de los Estados. Kwang-chih Chang elaboró una teoría similar para explicar los orígenes del Estado en China: sugirió que las sociedades neolíticas del valle del río Amarillo desarroUaron» alrededor del 4000 aX.» una red comercial a gran distancia> a la que llamaron tsfera de interaccíón.VoT me¬ dio de esta esfera de interacciones el comercio diseminó los elementos culturales entre las sociedades» de forma que aquéllas pudieron compartir algunos desús elemen¬ tos comunes (Figura I I J ) . Con el paso del tiempo estas sociedades acabaron por depender unas de otras como socios comerciales y como socios culturales>lo que llevó a que en tomo al año 2000 a,C,se agruparan en una uni¬ dad política bajo la dinastía Shang. Por tanto, Chang ve la unificación política de China como una consecuencia de un sistema preexistente de interacción tanto comer¬ cial como cultural. Las
posibles situaciones. El motivo puede ser que fueron di¬ ferentes las razones en distintos lugares las que fevorederon la aparición de gobiernos centralizados. Después de todo» el Estado» por definición� implica habihdad para organizar grandes cantidades de población en busca de un fin común. En algunas zonas este fin pudo ser la ne¬ cesidad de organizar el comercio con regiones próximas o remotas; en otros casos» el Estado pudo aparecer como una forma de controlar a las poblaciones derrotadas de las áreas circunscritas, Pero» en otros lugares se pudo producir una mezcla de fectores para justificar la apari¬ ción de los Estados.
d if e re n t es teorías: evaluación
Hay muchas teorías que tratan de explicar la forma¬ ción del Estado, aunque ninguna de ellas recoge todas las
El túmulo de Monk en Cahokia e s la mayor estructura precolombina existente al norte de México.
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Capítulo 11
Orígenes de las ciudades y de l o s Estados
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Fronteras de la investigación y EsUidú Las primeras ciudades-Estado pa¬ rece que surgieron durante el pe¬ ríodo Urukj alrededor del cuarto milenio a. C. en las llanuras fluviales del sur de Mesopotamia� actual¬ mente sur de Iraq. Desde sus oríge¬ nes estas primeras dudades-Estado poseían un «comercio exterior» que� quizá> les era imprescindible ya que su medio fluvial� aunque fértilj una vez que se drenaba e irrigaba, care¬ cía de muchas de las materias pri¬ mas, como madera y piedras para la construcción. El comercio con otras áreas parece que fue pacífico y equi¬ librado, como entre iguales; después de todo> cuando una zona posee algo que otra necesita� y viceversa� las gentes de ambas buscan satisfecerse mutuamente por medio de los ne¬ gocios y de los intercambios. Pero los testimonios arqueológicos muestran que durante el período ágrafo de Uruk, de la misma forma que las evi¬ dencias documentales para un pe¬ ríodo algo posterior, estas primeras ciudades-Estado de Mesopotamia estaban enfrentadas en luchas im¬ perialistas y colonialistas desde el principio. De forma parecida a los ingleses y franceses que vinieron al norte de
América a explorar y comerciar y acabaron utilizando la fuerza para proteger sus asentamientos y acceder abases comerciales, las ciudades-Estado de Uruk parece que también dominaron a sus socios comerciales� menos desarrollados que ellos- Por ejemplo> antes del ano 3000 a, C. en la unión de ambos ríos> al norte de Mesofwtamia, había ciudades forti¬ ficadas con cerámica del estilo de Uruk y artefectos de tipo adminis¬ trativo- Pero ¿para qué fiieron allí las gentes de Uruk? Una de las posibili¬ dades es que construyeran delibera¬ damente una serie de puestos comerciales para acceder a los géne¬ ros que necesitaban, como carne seca y pieles. Aunque no había entonces ningíin Estado involucrado en este im¬ perialismo y colonialismo, ya que el sur de Mesopotamia (Sumer) no es¬ tuvo politicamente unificada hasta después del 3000 a.C„sin embaigo, las diferentes feses políticas del pe¬ ríodo de Uruk en los valles del Eu¬ frates y el Tigris parece que fueron intensamente competitivas. Las mu¬ rallas de las ciudades demuestran que estuvieron sometidas a frecuen¬ tes ataques por parte de sus rivales.
Consecuencias de la formación del Estado Hemos estudiado varias áreas en las que apareció el Estado y también cierto número de teorías que tratan de explicar sus orígenes. Pero, ¿cuáles fueron las consecuen¬ cias de que la gente viviera en esas sociedades? Las con¬ secuencias parecen haber sido dramáticas.
Dicho cuadro se asemeja bastante al de las ciudades-Estado griegas des¬ crito por Tucídides, y también re¬ cuerda el contenido reflejado en los jeroglíficos de las ciudades-Estado mayas de México (300-800 d. C.) Jos cuales, con mezcla de historia y de propaganda� exaltan los triunfos de los dirigentes. Por supuesto, estamos ¿miliarizados con la forma en que entraron en conflicto ingleses, ñ'ancesesj holandeses y españoles antes y después de producirse el descubri¬ miento delNuevo Mundo. Sabemos que las ciudades-Estado griegas eran colonizadoras imperia¬ listas porque poseemos evidencias históricas de ello. Así� los grecoparlantes, tanto de Atenas como de otras polis, establecieron colonias en el Mediterráneo (Siracusa en Sicilia y Marsella en Francia, por ejemplo). Pero ¿qué es lo que sabemos de las ciudades-Estado de Uruk? ¿Por qué tenemos que pensar que también Alerón colonizadoras imperialistas? El arqueólogo Guillermo Algaze ha revisado recientemente los testimo¬ nios disponibles. En primer lugar constata la conquista de las llanuras del sur de Irán, a las que las gentes de Mesopotamia podían Uegar en
Una de las formas en la que los Estados modifican los modos de vida de las personas es fevoredendo el creci¬ miento demográfico. Como hemos visto anteriormente, la agricultura por sí misma fevorece un potencial para crecer y, tras este potencial, la capacidad de que apa¬ rezca el Estado- Pero ¿por qué? Porque el Estado es capaz de crear las infraestructuras (sistemas de riego, vías de comunicación, mercados� etc.) necesarias para permitir que la producdón y la distribución de los
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siete o diez días de con sus poblaciones vul¬ nerables (una población urbana siempre lo es� ya que la ciudad� por definición� está habitada por gentes que dependen para alimentarse de otras gentes que viven fuera de la ciudad). Dicha diáspora tomó varias fbrmas> pero todas representan dis¬ tintos aspectos para organizar el in¬ tercambio entre áreas con recursos diferentes aunque complementarios. Como fin de esta variedad de posibilidadesjque pueden afectar o no a las pequeñas organizaciones políti¬ cas» los especialistas comerciales se acaban emancipando de sus propias
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sociedades y se asientan como ex¬ tranjeros en cualquier otra. En el otro extremo del rango de variadónj en los políticamente mejor organi¬ zados» la política expansiva se ve in¬ volucrada desde el comienzo en la fundación de enclaves exteriores que aseguren el comercio. Algaze cree que la expansión de Uruk se motivó por la felta de re¬ cursos existentes al sur de Mesopotamia aunque ¿acaso es ésta una explicación definitiva� Otras áreas del mundo» tanto entonces como después» han sufrido escasez de re¬ cursos y rio se han convertido en co¬ lonizadoras imperialistas, Entonces» ¿que más es necesario» además de la felta de recursos» para explicar la ex¬ pansión de Uruk? Y» ¿cómo pode¬ mos explicar su fin? Algaze sostiene que cuando los colonizadores se desplazaron desde Uruk hacia el su¬ roeste de Irán» penetraron en un área que no estaba densamente po¬ blada» por lo que encontraron una mínima resistencia. De hecho» todos los enclaves de los diferentes perío¬ dos de Uruk y los ubicados fuera de la zona sur de Mesopotamia eran» aparentemente» mayores y más complejos que cualquiera de las co¬ munidades previas situadas en las áreas periféricas. Quizá entonces el colonialismo y el imperialismo eran posibles en un mundo entre des¬ iguales,
productos agrícolas sean más efidentes. Los Estados también &vorecen la coordinación de la infbrmadón, pudiéndose utilizar ésta para mejorar los ciclos de producdón agrícolas y para antidparse o controlar las poábles heladas» sequías y otros desastres naturales. Los Estados también pueden controlar el acceso al dominio de las tierras (por medio del ejérdto y de las leyes)» per¬ mitiendo que los agricultores permanezcan en sus tie¬ rras» así como evitar que otros (procedentes tanto de
Hace unos anos el antropólogo Stanley Diamond dijo que «el im¬ perialismo y el colonialismo son tan antiguos como el Estado». ¿Significa esto que los Estados son proclives a ejercer el imperialismo y el colonialismOiH si es que pueden hacerlo? ¿O acaso existen algunas condiciones que predispor�n a los Estados a ejerce rimperiafismo y colonialismo? ¿Cómo son de intensos los lazos que unen el imperialismo y el colonia¬ lismo con la organización del Es¬ tado? Quizá fiaturas investigaciones» especialmente las transculturales e histórico-comparativasj puedan contestar estas preguntas. QiilJertDO The Unik Worid System; T k s D y n a m i c s E x p a n s i ó n o f
Ertrf/ Ov)iíí»ííí(iry (Cambridg:?, Cambrit� Uníversity Press, 19S4); Staidey Diamond, en S&rdi 0ftííeprí mitive:A CritiqueofCivtlizú'
fidH [Nei� Brun�ch, KJ: Transaction Books 1974); Joyoe MaíCUS, «Maya Hierc�yphs: History oí Propagandaítfr, en Peter Nr Peregrine, Carol R. ¿mber y Mebnii
Ardüíeíílógy: Origiml Readings in Mé�d andPractice (Upper Saddle Rive� NJ; Pren-
tÍi»HdI,2002),
dentro como de fuera de sus fi�nteras) puedan despla¬ zar a sus propietarios o Interferir en sus sistemas de pro¬ ducción de alimentos. Con el incremento de la eficacia de la producción agrícola» los Estados pueden permitir que muchos (si no todos) sus habitantes estén excluidos de la producdón de alimentos» con lo que quedan libres para convertirse en artesanos» comerciantes» artistas» burócratas» soldados o líderes políticos- Además» la gente puede vivir apartada
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Orígenes de las ciudades y de l o s Estados
de ios campos� con lo que puede aumentar la población de las ciudades. Las ciudades también pueden surgir en lugares que no son útiles para la agricultura� pero sí para el comercio (como las ciudades situadas junto a los ríos en el sur de Mesopotamia) o para la defensa (situadas� por ejemplo� en la cima de una montañaj como Monte Albán)» En estos contextos» con frecuencia» han florecido las artes» la música y la literatura» que también se ven fevorecidas por la aparición del Estado» lo mismo que la organización de la religión» que a menudo surge después de aparecer éste. Así, todas estas características que aso¬ ciamos a la civilización se pueden considerar como re¬ sultado de la evolución de los Estados. El desarrollo de los Estados también puede ir acom¬ pañado de efectos negativos: cuando aparecen» la gente está gobernada por la fuerza» sin posibilidad de poder oponerse a los criterios de sus lideres políticos. También la policía y el ejército pueden ser instrumentos de opre¬ sión y terror. Ya un nivel menos obvio» la estratificación de clases produce diferencias de acceso a los recursos y fevorece la aparición de una subclase de gente pobre» sin educación y, frecuentemente» de salud deficiente. Los problemas sanitarios se incrementan con la concentradon de personas en las ciudades» un medio en el que pueden aflorar las enfermedades epidémicas. Sin el ac¬ ceso directo al suministro de alimentos» la gente de las dudades se enfrenta también al peligro de la desnutridón o induso al hambre si �Ua el sistema de distxibudón. Todos los Estados parecen ser expansionistas» por lo que algunos de los impactos más negativos son las situadones de guerra y conquista. De hecho» la mayoría de los sufrimientos humanos están relacionados más con la ex¬ pansión de los Estados que con cualquiera de los otros fectores. Pero ¿por qué tienen que expandirse los Esta¬ dos? Una de las razones básicas es porque pueden hacerlo (véase el Apartado «Imperialismo» colonialismo y Es¬ tado»), Los Estados han mantenido sus ejércitos listos para luchar o para conquistar a sus enemigos. Otra de las razones puede estar relacionada con el temor al hambre o a las enfermedades» que son más frecuentes en las so¬ ciedades de agricultura intensiva. Dos de los autores de este libro han conduido que en sociedades recientes los recursos impredecibles están intensamente relacionados con una mayor frecuencia de guerras» en tanto que los Estados con carencias de recursos pueden recurrir al uso de la guerra como forma de conseguir d acceso a nuevos recursos (o a una limitación de los recursos impredeci¬ bles) . Una tercera respuesta a la cuestión de por qué los Estados tienden a expandirse es simplemente que la beli¬ gerancia forma parte de la naturaleza de los mismos. Mjchas veces la aparición del Estado está relacionada
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con fines militares» por lo que puede ser vital para su mantenimiento la demostración permanente de su po¬ derío militar, A felta de otras causas» guerra y conquistas son consecuencias de la formación dd Estado� aunque también, a veces» la derrota militar puede explicar el des¬ tino de éste,
El declive y la caída de los Estados Cuando se analiza la lista de los Estados que hemos estudiado en este capítulo (Monte Albán> leotihuacán, Sumer» Egipto feraónico) se observa un demento co¬ mún a todos dios: todos se colapsaron en algún mo¬ mento» sin que ninguno fuera capaz de mantener su poder e influencia en tiempos históricos. ¿Por qué? Es una importante cuestión» ya que si d colapso es d úl¬ timo acontecimiento de la mayoría» si no de todos los Estados» también podemos estar seguros de que nuestro propio Estado finalizará en algún momento. Quizá co¬ nociendo cómo y por qué desaparecieron otros Estados podamos evitar (o al menos retrasar) la desaparición dd nuestro, Una supuesta explicación para el dedive y la caída de los Estados es la degradación ambiental» pues si el Estado se origina en rdadón con un ambiente que posibilita d desarrollo de la agricultura intensiva y de cosechas lo su¬ ficientemente grandes como para permitir d manteni¬ miento de la estratificación social» los políticos y d tipo de sistema político estatal» entonces la degradación de su medio ambiente (pérdida de la productividad d d sudo» sequías persistentes» etc,) debió de contribuir po¬ derosamente a su desaparición. El arqueólogo Harvey Weiss sugirió que una pertinaz sequía colaboró en la de¬ saparición dd antiguo imperio de Accad» en d Oriente Próximo, Alrededor dd 2300 a, C. los acadios establecie¬ ron un imperio que se extendía a lo largo de unos 1300 Idlómetros» desde las proximidades del golfo Pérsico» en lo que actualmente es Iraq» hasta d nacimiento del río Eúfrates» en la actual Turquía, Pero un siglo después su imperio se colapsó» y según Weiss fue la sequía persis¬ tente la que terminó con d» lo mismo que sucedió con otras civilizaciones próximas en d mismo tiempo. Mu¬ chos arqueólogos dudan� sin embargo» de que fuera ésta la causa de su desaparición» aunque nuevas evidencias muestran que la peor sequía de los pasados 10,000 años comenzó justo en la zona norte dd imperio de Accad» lo que obligó a abandonar esa región. La evidencia de la se¬ quía» obtenida por medio de los estudios de los sedimen¬ tos eólicos sacados dd fondo del golfo Pérsico» indica que
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La hi$toria Éfe$o, una antigua ciudad, actualmente en ruinan, enclavada en lo que hoy laTurquía occidental, ilustra la temporalidad y mutabilidad de loe Estados e imperios. Entre el 1000 y el 100 a. C. estuvo do mi na da por griegoSp lidios, persasp macedonios y romanos, ent r e otros.
ésta durói al m�DoSi 300 años. Otras pruebas geofísicas muestran que dicha sequía llegó incluso a tener dimen¬ siones mundiales. La degradación medioambiental también puede de¬ berse a motivos no naturales» pudiendo ser responsable» a vecesj la propia conducta humana si consideramos, por ejemplo» el colapso de Cahokia» ciudad de al menos 15.000 personas» situada en el área en la que convergen los ríos Misisipl y Misuri. En el siglo xii d. Cahokia tenía grandes plazas públicas y estaba amurallada con cerca de 20.000 troncos y grandes promontorios. Pero en sólo 300 años los promontorios desaparecieron y los sedimentos procedentes de las inundaciones cubrieron los campos y las zonas habitadas. El geógrafo Bill Woods piensa que fue el uso excesivo de madera como combus¬ tible» para la construcción y la defensa» lo que condujo a la deforestación, las inundaciones y el fracaso persis¬ tente de las cosechas» lo cual tuvo como resultado el abandono de Cahokia. La de forestación de la región también viene demostrada por los estudios efectuados con el carbón hallado en las excavaciones del área» en la que» aparentemente» se demuestra la pérdida de la cali¬ dad de la madera utilizada en las construcciones, lo que sugiere que la obtención de los troncos era cada vez más escasa.
Cahokia es sólo un ejemplo de la degradación am¬ biental que pueden causar los humanos» pero otro ejem¬ plo de la influencia de la conducta humana sobre el medio ambiente procede del incremento de la salinidad de los suelos causado por la evaporación de las aguas uti¬ lizadas durante mucho tiempo para regar los campos, como ocurrió en el sur de Iraq, Las civilizaciones también pueden desaparecer a causa de que la conducta humana haya favorecido la in¬ cidencia de ciertas enfermedades. Por ejemplo» muchas ciudades de las tierras bajas de los mayas se abandonaron entre el 800 y el 1000 d. C, Las explicaciones ofrecidas se han centrado en el sentido de que debió de existir un ex¬ ceso de población que acabó con los recursos. No obs¬ tante» otro factor pudo ser el aumento de fa incidencia de la fiebre amarilla» causada por la de forestación efectuada para hacer claros en el bosque, lo que produjo un au¬ mento de los sitios en los que podían reproducirse los mosquitos» lo que pudo haber faivoreddo la disemina¬ ción de la enfermedad en América Central desde regiones situadas más al sur. También el incremento de la pobla¬ ción de monos locales gracias a la plantación» por los mayas de árboles en las áreas urbanas� puede explicar que aquéllos actuaran como transmisores de la enfermedad (que los mosquitos contagiaban Uiego a las personas).
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Capítulo 11
Orígenes de las ciudades y de l o s Estados
Otra razón id colapso de algunos Estados pudo ser el exíeso de expansión; ésta es� freaientemente� una de las razones ofrecidas para explicar el fin del Imperio Ro¬ mano. Cuando comenzó esta decadenciaj en el siglo n d* C.i el imperio se había extendido por toda la cuenca mediterránea y el noroeste de Europa Un área de tales dimensiones tuvo que ser muy difícil de administrar y las incursiones de los pueblos «bárbaros�» en las regiones pe¬ riféricas del imperio difícilmente pudieron ser rechazadasy ya que era demasiado complicado y costoso reforzar fronteras tan amplias. Algunas veces estas incursiones se convirtieron en verdaderas invasiones que se complica¬ ron con hambrunas» pestes y malos gobiernos* En la época en que gobernaba el último emperador de Occiel imperio estaba reducido a la dente� en el 476 d, nada. Finalmente� se ha esgrimido además como explicadon que los confliaos internos» caucados por la incapa¬ cidad de los gobernantes o por la eíxplotaciónj también pueden justificar la desaparición de los Estados. Por ejemplo» Peter Chamais sostiene que la caída del Impe¬ rio Bizantino (la mitad oriental del Imperio Romano)»se produjo porque los grandes y poderosos terratenientes permitieron que propietarios de tierras demasiado pe¬ queñas se hicieran cargo de sus tierras» creándose así un grupo de campesinos abrumados por impuestos y explo¬ tados poco interesados en mantener el imperio. Cuando los grandes terratenientes le disputaron el poder al em¬ perador, se produjeron guerras civiles que causaron la pérdida de la unidad dejando el imperio en situación vulnerable en manos de sus conquistadores, Se pueden aducir muchas otras ideas para explicar el final de los Estados» que oscilan desde catástrofes hasta fectores casi místicos como la «decadencia social»» pero» h mismo que con las teorías sobre los orígenes de los Es¬ tados» ninguna explicación por sí sola parece, en la ma¬ yoría de los casos» responderá todas las eventualidades, Mientras que no esté totalmente daro cuáles son las con¬ diciones específicas para que se produzca la aparición o d ocaso del Estado en cada uno de los primitivos centros de civilización, la cuestión del porqué se forman y desa¬ parecen es un tema importante para la investigación ac¬ tual» por lo que es de esperar que los estudios futuros aporten más datos sobre dios.
Sumario 1, Los arqueólogos no siempre están de acuerdo en la forma en que se puede definir d Estado» aunque la ma¬ yoría coincide en que la decisión jerárquica y centrali¬ zada que afecta a un número sustancial de la población
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puede ser la clave dd criterio. La mayoría de los Estados poseen ciudades con edificios públicos» especialistas ar¬ tesanos y religiosos en dedicación completa» un estilo ar¬ tístico oficial y una estructura social jerarquizada» encumbrada poruña dase de elite de la que surgen sus líderes. La mayoría de los Estados mantiene el poder con d monopolio del uso de la fuerza con d fin de controlar d pago de impuestos y obligar a la gente a trabajar o a ir a la guerra. 2, Las primitivas sociedades estatales aparecen en Oriente Próximo» en las áreas de lo que es actualmente d sur de Iraq y d suroeste de Irán, Al surdelraq»sumerjse unificó bajo un gobierno único poco después dd 3000 a C. Conocían la escritura» los grandes centros urbanos, los templos» los códigos de leyes» un ejército permanente» una red comercial» un sistema complejo de regadíos y un alto grado de especialización artesanal. 3. Probablemente» la primera ciudad-Estado de Mesoamérica se desarrolló alrededor del año 500 d. C,, en d valle de Oaxaca» con su capital en Monte Albán. Algo más tarde» en la zona norte del valle de México» aparece Teotihuacán. En d dímax de su poder� entre 200-500 d. C� esta ciudad parece haber influido poderosamente sobre toda Mesoamérica. 4. En d resto dd Nuevo Mundo aparecen precoz¬ mente muchas ciudades-Estado: en Guatemala» Yucatán, Perú» y» posiblemente, cerca de S. Luis, En d Viejo Mun¬ do aparecen antiguos Estados en África» en d valle dd Indo en India y en d norte de China. 5. Hay varias teorías para explicar el origen de los Estados. La teoría de la irrigación sugiere que las necesi¬ dades administrativas para mantener los sistemas de irri¬ gación extensivos pueden haber dado d ímpetu necesario para la creación dd Estado. La teoría de las cir¬ cunscripciones sostiene que aparece el Estado cuando se produce la competición y la guerra en las áreas circuns¬ critas» lo que lleva a la subordinación de los grupos ven¬ cidos» que están obligados entonces a someterse al control de los vencedores. Las teorías que se refieren al comercio sostienen que la necesidad de organizar la ex¬ portación así como la redistribución de los productos importados y la defensa de los comerciantes fevorecen la aparición del Estado. ¿Cuál es la teoría correcta? Hasta d momento ninguna teoría explica la formación de todos los Estados. Quizá sean diferentes necesidades organiza¬ tivas en las distintas áreas las que hayan favorecido los �biernos centralizados. 6. El surgimiento de los Estados sude producir un impacto dramático. La población aumenta y se concentra en las ciudades. La agricultura se hace mucho más efi¬ ciente» permitiendo que mucha gente se desligue de la pro¬ ducción de alimentos. Los Estados estimulan d contexto
C a p í t u l o 11
ín íl cual puedí desarrollarse y florecer lo que denomi¬ namos civilización (arte� música� literatura y religión or¬ ganizada), Pero los Estados también proporcionan un contexto «n el que pueden florecer la guerra y el terror po¬ lítico. La diferenciación social basada en el Estado causa una subclase de personas pobres y, a menudo» con una de¬ ficiente salud. Los Estados también son proclives a pade¬ cer enfermedades epidémicas y hambrunas periódicas7- Todos los antiguos Estados acabaron derrumbán¬ dose, Mientras no tengamos respuestas aceptables para la pregunta de por qué se colapsan los Estados, las investi¬ gaciones efectuadas en este terreno pueden tener impli¬ caciones a la hora de prolongar la existencia de nuestros Estados actuales.
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Glosario de términos
Civilización Cuneift>rme Estado Jeroglíficos
Cuestiones críticas L, Las ciudades y Estados no surgen hasta la apari¬ ción de la producción de alimentos, ¿Por qué debe ser necesaria, aunque no suficiente, la pro¬ ducción de alimentos para que se desarrollen las dudades y los Estados? 2, Lo mismo que la aparición de la producción de ahmentos, las antiguas ciudades y Estados se de¬ sarrollan a lo largo de unos pocos miles de años. ¿Cuál puede ser la razón? 3p ¿Puede imaginar un mundo futuro sin Estados? ¿Qué condiciones podrían Uevaral mundo a esa si¬ tuación?
Ejercicios de Internet L Las pirámides de Egipto se consideran fiecuentemente como monumentos asociados a las primeras ciu¬ dades y Estados, Visite las pirámides en el sitio de la página web: http:y/www.pbs.org/wgbh/novaypyraiiiid y resuma sus hallazgos. 2. Teotihuacán fue una de las primeras ciudadesEstado en Mesoamérica. Explore en: http://archaeology, la.asu.eduyAitI_Web„2000yvin/mesoamerica/teo/iiidex.htm y redacte un breve ensayo sobre algunos de los aspectos de esta ciudad.
O r í g e n e s de las ciudades y de los E s t a d o s 2 3 1
3, El Proyecto Perseus de la Tufes University ofrece una entretenida información sobre las civilizaciones clᬠsicas. Visite el sitio de la página web: http://www.perseus. tuñs.edu y explore varias conexiones con las colecciones clásicas de alguna de sus exhibiciones sobre la Grecia o Roma antiguas. 4. Explore algunos de los proyectos de investigación actualmente en marcha sobre el antiguo Oriente Próximo en el Oriental Institute de la Universidad de Chicago en: )ittp://www-oi iichlcago.edii/OI/defaiilt. html y del Museo de la Universidad de Pennsylvania: http:/Avww.JiiLUseuiimpeiiii,edii, Describa alguno de los proyectos de investigación que haya leído.
Lecturas sugeridas BlantoNí R. E.í Kcwalewsxi, S. A., Fhnman, G. y Appel» J, Amoeríf AíewflwerKrt: A Qjmpflriwn of Chatige in Three Re2cd. Cambridge: Cambridge Unive r$ity Press � 1993. Comparación yanálisis del desarroUo oilturali y particular¬ mente d�l desarrollo d« los Estados, en tres regiones de M�soam�rica: el valle de Oa�ca, el valle de México y la parte oriental de las Tierras Bajas mayas. Bkumfiel, E. D, (Ed.), The Econontic Antkropohgy of the State. lanl�m, MD: University Press of America, 1594. Una reco¬ pilación de artículos que analizan el papel de los Estados, tanto modernos como antiguos, y cómo éstos funcionan, centrándose en la economía. Burenhult, G. (Ed.)- Oíd Wíjrítí CmíisaíiottK The Rise of Cities and States. St Lucia, Queenslandi Australia: University oí Queensland Pr«s, 1994. Un precioso libro con fotografías en color de muchas de las culturas antiguas de Asia, Africa y Europa. CcHEN, R. y Service� E. R. (Eds-)- of íííí TTíe Antkropology o f Palitkal Bvoluthti. Filadelfia: Institute for llie Study of Human Issues, 197$. Una compilación de en¬ sayos teóricos y prácticos sobre los orígenes de los Estados. Phnman, G. y Marcus� J. (Eds,). Aithak Santa NM: Scbool of Amcrican Research Press, 199S. Esta colec¬ ción de artículos recoge «1 apogeo y la caída de antiguos Es¬ tados situados �n el Oriente Próximo, India y I�kistán, %ipto, MeSOam�rica y los AníieS, y presenta algunas claves para futuras investigaciones. Sanders, W. Tt Parsons, J. R. y Santley, R. S. Basin of £cciííJgií:íiJ t« íííí EvíjJuíicin of a Crviíiai íTfn. Nueva York: Acad�mic Press, 1979. Una descripción de u n p-oyecto arqueológico a largo plazo q uí investiga la evolu¬ ción de la cultura en el valle de México desde el 1500 a. C, hasta 1500 d. C„ particularmente basada en el estudio de la historia de SUS asentamientos. Service, E. R. of the State attJ TTtí ProCíw Of Cidturat Evolutioti. Nueva York: Norton, 1975. Un tra¬ bajo clásico, aunque algo anticuado, sobre los origenes quizá para prevenir las enfermedades que puedan causar los excesos de la vita¬ mina D» La piel de color daro también puede proporcio¬ nar otra gran ventaja en los dimas frios: ser más resistente a las lesiones causadas por las bajas temperaturas. No tenemos evidencias directas que confirmen, con seguridad, la relación entre radiación solar y pigmen¬ tación de la piel. Antropólogos como Nina Jablonski y George Chaplin usaron datos obtenidos de satélites de la NASA para determinar el nivel de radiaciones ultravioleta en las poblaciones expuestas de diferentes lugares del mundo. Después compararon estos datos con los niveles de reflexión solar de la piel (las pieles más claras reflejan más la luz)j descubriendo que las pieles más oscuras pre¬ valecían en lugares en los que la radiación ultravioleta era más intensa, Pero� curiosamente» encontraron una excep¬ ción: los nativos americanos tienden a tener pieles de co¬ lor más daro de lo que era de esperan Jablonski y Chaplin dicen que esto es debido a que son emigrantes recién lle¬ gados al Nuevo Mundo, y que el color de sus pieles toda¬ vía no se ha adaptado a los nivdes de radiación de estos lugares» de la misma forma que no se adaptaron las pieles de los colonizadores que llegaron desde Europa. Adaptacíók
a la a l t i t u d
El oxígeno constituye el 21 por ciento dd aire que res¬ piramos a nivel del man En altitudes mayores d porcen¬ taje de oxígeno en d aire es el mismo, pero debido a que la presión barométrica es menor, tomamos menos oxi¬ geno en cada respiración; en esas circunstancias respira¬ mos más rápidamente, nuestros corazones laten más deprisa y la actividad es más difícil, siendo los efectos si¬ guientes un malestar general y la llamada hiposia o �ta de oxígeno. Si la altitud causa estos efectos en la mayoría de los se¬ res humanos ¿cómo se explica que exista un gran número de poblaciones que viven de forma saludable y trabajan a 1.200,3,600 e induso 5�00 metros? Las poblaciones que viven en el Himalaya y en los Andes se han adaptado a su medio ambiente y no padecen los síntomas que presentan los recién llegados a las alturas. Además, los habitantes de regiones muy altas se adaptan fisiológicamente al fÜo in¬ tenso, a una nutrición incompleta, a fuertes vientos, a te¬ rrenos escarpados y a intensas radiaciones solares. Los estudios realizados en los habitantes de regiones altas muestran que éstos tienen ciertas particularidades fisiológicas que los diferencian de los habitantes de las
La$ gentes de la$ altiplanicies de los Andes tienen el tó¬ rax más grande y una mayor capacidad pulmonar que la gente que vive en alturas menores. Estas diferencias s e considera que están causadas por la aclimatación a la vida en las grandes alturas y por el problema de la hipoxia o deficiencia de oxígeno.
zonas más bajas de las mismas regiones. Así, los indios de los Andes que viven a gran altura presentan mayores ca� torácicas» mayor capacidad pulmonar y también ma¬ yores áreas de superficie capilar en los pulmones (lo que se cree que es para fecifitar la transferencia de oxígeno a la sangre). Los primeros investigadores de este tema pen¬ saron que los cambios genéticos habían permitido a los indios andinos aumentar su capacidad de captar d oxí¬ geno dd aire a pesar de las bajas presiones barométricas existentes en esas alturas, Pero investigaciones más re¬ cientes han planteado algunas dudas sobre este argu¬ mento» ya que parece que otras poblaciones que también viven a gran altura no presentan estas características fi¬ siológicas de los indios andinos. Por ejemplo» en d Hi¬ malaya, los habitantes de las tierras más bajas no se diferencian en el tamaño de los pulmones ni en d dd tó¬ rax de los habitantes de las alturas» mostrando ambos grupos las mismas capacidades pulmonares. Por lo tanto» según estas investigaciones» no parece que el hecho de vivir a grandes alturas requiera más adaptaciones biológicas que las puramente genéticas. De hecho» hay evidencias que muestran que los seres huma¬ nos que viven a grandes alturas se pueden adaptara la hipoxia a lo largo de sus vidas. Por ejemplo, los peruanos que nacen en lugares situados al nivd dd mar pero que después van avivira grandes alturas, desarrollan las mis¬ mas capacidades pulmonares que los habitantes que han nacido y vivido siempre en esas regiones. También coin¬ cide con d presumido efecto ambiental el hecho de que los niños peruanos nacidos a grandes alturas pero que
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Capítulo 12
Va r j a b i l i d a d humana y adaptación
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Fronteras de i-a investigación Fdctores
Ld fertilidad (la capacidad bioló�ca que tienen las mujeres para te¬ ner una cantidad determinada de hijos) varia ampliamente de una poUación tiumana a otra� Existen lu¬ gares en los que no es extraño que las mujeres tengan diez o más hijos» en tanto que en otros lo normal es te¬ ner menos de dos. Hasta hace poco tiempo se pensaba que estas varia¬ ciones se debían a factores sociales y culturales: cuanto más tarde se casa la gente> menos contacto sexual tie¬ nen y si practican la anticoncepciónj menos ninos nacerán. También se asumía que si la gente no efectuaba ningún tipo de control de la natalidadi ésta tenía que ser naturalmente muy alta> aunque los investigadores están considerando actualmente que las variaciones ec la fertilidad hu¬ mana también se pueden deber a factores psicológicos. En otras pafabras, que Ufiscuruiidcid (capacidad fi¬ siológica para tener hijos) también puede variar en las diferentes po¬ blaciones. En el capítulo dedicado a los orí¬ genes de fa producción de alimentos comentamos la forma en la que fa
que afectan a la fecundidad
lactancia materna puede afectar a la fecundidad. Aunque los efectos psi¬ cológicos todavía no están muy bien estudiados» sabemos que la alimen¬ tación de los hijos impide que se produzca fa ovufación, con lo que se incrementa el tiempo transcurrido entre los nacimientos. También em¬ pezamos a conocer los efectos de la nutrición y de la actividad física so¬ bre fa fecundidad > tanto desde el punto de vista individual como generaL Parece que fa ingesta de in¬ suficientes calorías (cuando fa acti¬ vidad aumenta mucho pero fa dieta se mantiene idéntica� o cuando fa cantidad de alimentos consumidos disminuye considerablemente) re¬ duce fa capacidad de concebir y de tener un embarazo sin problemas. Peroj ¿cuál es su causa? La repro¬ ducción ex�e un aumento sustancial de energía extra. Puesto que fa ma¬ dre no puede sobrevivirá un emba¬ razo o parto si pierde demasfadas calorías o nutrientes del feto» fa se¬ lección natural favorecería aquellos mecanismos que producen fa recu¬ peración de fa capacidad reproduc¬ tiva si las madres� los fetos o ambos
crecen al nivel del mar no desarroUan el aumento del ta¬ maño del tórax. Por tanto» lo que los primeros investiga¬ dores consideraron como adaptaciones genéticas de los habitantes de fas altas regiones de los Andes a su medio» parece no ser más que un efecto de fa aclimatación que aparece precozmente durante fa infancfa y persiste du¬ rante toda fa vida adulta de los individuos- De fa misma forma que otras características que se han estudiado» pa¬ rece que fas experiencias vitales pueden tener intensos efectos sobre el crecimiento corporaL
tienen pocas probabilidades de subsistenda. La ingesta insuficiente de calorías activaría dichos mecanis¬ mos, Para investigar los posibles efec¬ tos de fa actividad y de fa nutrición sobre la fecundidad� los investiga¬ dores necesitan medir el potencial reproductor (fa probabilidad de em¬ barazos con éxito), La falta de mens¬ truación durante varios meses, en ausencfa de embarazo, es un cfaro signo de que la mujer no está ovufando, aunque la existencia de los pe¬ ríodos menstruales» por sí misma» no indica una alta probabilidad de em¬ barazo con éxito. El mej or indicad or de embarazos con éxito es fa medida de los niveles de progesterona en fa segunda mitad del cido menstrual. Estos niveles aumentan después de producirse fa ovufación, lo más fa¬ vorable para que elóvulo fecundado sea viable. En el pasado, los investi¬ gadores aplicaban análisis de sangre costosos e intrusivos para medir los niveles de progesterona» pero ac¬ tualmente se utilizan análisis que pueden determinar los niveles de progesterona en muestras de saliva.
Estatura Los estudios efectuados en gemelos univitelinos en los que se compara fa estatura de padres e hijos demuestran que fa herenda desempeña un papel primordial en fa es¬ tatura de los individuos. Por tanto» las diferencias genéti¬ cas deben explicar, al menos parcialmente, fas diferencias de estatura medfa entre las pobfaciones. Pero si fa esta¬ tura medfa se ha incrementado exageradamente en fas últimas décadas» como ha ocurrido en fapón entre 1950
Capítulo 12
Las investigaciones efectuadas en mujeres pertenecientes a sociedades industriales que efectúan ejercidos agotado res (como las atl etas y baila¬ rinas de ballet) demuestran que ta¬ les mujeres tienen menos tendencia a menstruar yj por lo tanto» a ovular que el resto de mujeres menos ac¬ tivas* Por medio de los análisis de progesterona en saliva se pueden co¬ nocer los efectos causados por bajos niveles de ejercicio y la dieta sobre el potencial reproductivo� incluso en mujeres que estén menstruando, Por ejemplo� los investigadores han descubierto que las mujeres con peso normal que hacen footlng por gusto o efectúan dietas moderadas tienen menores niveles de progeste¬ rona que las mujeres que no hacen ejercido ni dieta» por lo que las po¬ sibilidades de quedarse embaraza¬ das son menores para las que hacen fooúng o siguen una dieta, lambién se han estudiado las fijndones ováricas en las sodedades no industrializadas Asi, un estudio efectuado por Catherine PanterBrickjDeborah Lotsteiny PeterEllison entre los Tamang del Nepal ha demostrado que durante la estación de la luna nueva� que es cuando las mujeres trabajan más en la agricul¬ tura» muchas de ellas adelgazan y tie¬
Va r i a b i l i d a d humana y adaptación
nen síntomas de reducdón de sus funciones reproductoras» Nadine Peacocky RobertBaley encontraron que las mujeres Lese del Zaire tien¬ den a perder peso durante la última parte de la estadón del «hambre» (abriU mayo y junio)� poco antes de que se recoja la cosecha. Las Lese te¬ nían sensiblemente menos partos durante los nueve meses siguientes a la última parte de la estadón del «hambre» (enero» febrero y marzo)» lo que indica que la desnutridón re¬ duce sus fianciones reproductivas. Es posible que la disminudón de la ca¬ pacidad reproductiva se pueda deber a cambios en la conducta� tales como evitar el seso durante la esta¬ dón del «hambre»� pero los estudios de Peter Ellison sobre los niveles de progesterona confirman que era la nutrición la que afectaba a las fun¬ dones reproductivas: el 80% de las mujeres Lese ovularon en abril (el mes de menos �(hambre») y sola¬ mente el 65% ovularon en junio (el mes con mayor «hambre>�). Todavía felta mucho por saber» pero los estudios que poseemos su¬ gieren que la reproducdón está re¬ lacionada con las exigencias de cuidados de los reden naddos y las necesidades calóricas de las madres. Aunque las conductas voluntarias
y 1980 y en otros muchos países en los últimos tiempos, entonces es que las influencias medioambientales tam¬ bién deben ser tenidas en cuenta. La variadón considerable de la estatura media entre poblaciones humanas se puede explicar» parcialmente» por diferencias de temperatura. Entre las poblaciones de Europa» son los holandeses los más altos de la media mundial» y los Mbuti del Zaire» en África central» los más bajos. Sabemos que el peso medio está reladonado con las temperaturas medias anuales (regla de Bergmann) así
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como la abstención sexual o la anti¬ concepción pueden redudr la ferti¬ lidad» también ésta puede verse mermada por los cambios fisiológi¬ cos que se producen en respuesta a la lactancia materna� el ejerddo y las defidendas nutridonales. Estas condidones pueden variar considera¬ blemente de individuo a individuo y entre las distintas poblaciones» con lo que también varían las fundones re¬ productivas y la fecundidad* F u e P e t t r T. Ellisoii, «NatUtal V&iiñtion in Hum� Pecimijitp, en K. P?Carol K Ejuber Physical Origiml Rmdings in
(1 H(í Prdrtící tupper Sa�dle Riv� NJ: Prentia? Hall, 2002); Catherine f�tei-Biick, S. Lotstetn y P&ter T. «Seasoüálity of E%.epTodiictive Pimctloa ánd W�ght Loss io. Rurd Nepáli Wojuen», Hu¬ ma M � (1993): 634~90í Nadine Peecotk y Robert BaiJey, Invest�ting Food and FeitUity in the Ituri Fore�t», en Metvin Embebí Carol Rf Ember y David Levinson, edSp,Ptirííwíí?). Durante el siglo xix, la supremacía blanca europea trató de encontrar justificación científica para la inferio¬ ridad mental hereditaria de los «negros». Para ello se de¬ dicaron a efectuar mediciones de cráneos� ya que asociaban el tamaño de éstos con la capacidad craneana y ésta con el desarrollo cerebral, Pero esta manía de las medidas craneales desapareció pronto y nunca más se consideró como una forma seria de medir la inteligencia� ya que se pueden usar otros métodos para demostrar la presumida superioridad intelectual de la gente «blanca»� tales como las estadísticas extraídas de los tests de inteli¬ gencia. 0. primer test de inteligencia a gran escala usado en EE UU se comenzó a utilizar con la entrada de esta nadón en la Primera Guerra Mundial» cuando se les aplicó el llamado test Alfe-Beta IQ a miles de reclutas para asig¬ narles sus destinos militares. Posteriormente los psicólo¬ gos separaron los resultados de los tests de acuerdo con las categorías raciales de «blancos» y «negros» y encon¬ traron lo que esperaban: las puntuaciones de los «ne¬ gros» eran bastante inferiores a las de los «blancos»� lo que se consideró como prueba científica de la innata in¬ ferioridad intelectual de los «negros», utilizada poste¬ riormente como justificación de la discriminación contra ellos, tanto dentro como fuera del ejército. Los análisis estadísticos del test IQ efectuados por Otto Klineberg demostraron que los «negros» proceden¬ tes de los Estados del norte puntuaban más que los «ne¬ gros» del sur; los racistas justificaban estas diferencias diciendo que se debían a que los emigrantes «negros» que se desplazaron hacia los Estados del norte eran inna¬ tamente más intehgentes, pero los más académicos atri¬ buyeron los resultados a la influencia de la educación superior y a un medio ambiente más estimulante del norte. Cuando estudios posteriores mostraron que los «negros» del norte tenían mayor puntuación que los «blancos» del sur, la teoria de la mejor educación en el norte adquirió más adeptos, pero los racistas insistían en que los resultados se debían a que también emigraron hacia el norte los «blancos» más inteligentes�
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Con posterioridad a esta conclusión, Klineberg vio en el testIQ que entre los escolares «negros» nacidos y cria¬ dos parcialmente en el sur> pero que vivieron parte de su vida en la ciudad de Nueva York, la más alta puntuación la poseían las chicas que habían estado en el norte. Como prueba de que los «negros» no eran congénitamente in¬ feriores a los «blancos» estos estudios demostraban que los fectores culturales eran los más decisivos de los tests IQ, además de que éstos no tenían ninguna exactitud. La polémica entre raza e inteligencia surgió de nuevo en 1969 con Arthur lensen, quien mantenía que aunque en la puntuación obtenida en los tests IQ los americanos «negros» se superponían a los resultados obtenidos por los americanos «blancos», la puntuación media de los primeros estaba 15 puntos por debajo de la obtenida por los segundos, por lo que los tests IQ debían tener un componente genético muy alto; la puntuación media de los negros demostraba, pues, a lensen que éstos eran ge¬ néticamente inferiores a los «blancos». Pero hay otros hallai�os que indican que las pruebas presentadas por lensen y, posteriormente, por Murray y Herrnstein no dan los resultados que ellos creían. Los criticos de la interpretación genética plantean dos problemas. Primero� que existe una extendida creencia de que los tests IQ no sirven para medirla «inteUgencia» puesto que pueden estar desviados a favor de la subcultura de los que los diseñaron, por lo que muchas de las preguntas que aparecen en el test están relacionadas con aquellas cosas con las que los niños «blancos» de dase media están �miliarizados y que éstos siempre tendrán ventaja con este test Por tanto, ninguno llega a la altura de un test culturalmente adecuado, ni libre de sesgos cul¬ turales, También hay coincidencias en que, a pesar de que el test IQ no mide la «inteligencia», sí puede predecir los éxitos escolares o la forma de adaptarse los niños «blan¬ cos» al sistema escolar. Un segundo problema para la interpretación pura¬ mente genética de las diferencias en el test IQ es que hay muchos estudios que demuestran que la puntuación ob¬ ten ida en él pu ede verse influida p or el entorno social. Los niños económicamente poco pudientes, tanto «blancos» como «negros», tendrán una puntuación menor que los niíios más pudientes tanto «blancos» como «negros» y también que los niños con baja puntuación en el test con¬ siguen mejorada tras su educación. La prueba más nota¬ ble procede de Sandra Scarry sus colaboradores, quienes demuestran que los niños «negros» adoptados por femilias «blancas» con buena situación económica presentan medias de puntuación en el test IQ por encima de la me¬ dia de los «blancos»% en tanto que los «negros» con más ancestros europeos no tienen puntuaciones más altas. Por lo tanto, las diferencias de puntuación entre «blancos» y
Capítulo 12 Va r i a b i l i d a d h u m a n a y adaptación 253
«negn>s» en el test IQ no se pueden atribuir a presumibles causas genéticas» y los 15 puntos de separación en la pun¬ tuación se pueden deberjsimpleinente>a diferencias me¬ dioambientales o a sesgos del test El genetista Theodosius Dobzhansky nos recuerda que las conclusiones extraídas de los distintos niveles de resultados en los tests IQ no se pueden comparar hasta que todos no tengan las mismas oportunidades para de¬ sarrollar sus capacidades. Insistió también en la necesi¬ dad de una sociedad abierta bajo el ideal democrático» en la que todas las personas tengan las mismas oportunida¬ des para desarrollarse en fundón de sus aptitudes y de sus elecciones de desarrollo.
El futuro de la variabilidad humana La fertilización en el laboratorio» el subsiguiente tras¬ plante de embriones y el parto sin problemas han sido lle¬ vados a cabo tanto en humanos como en animales. La donación (reproducción exacta de un individuo a partir de tejidos celulares) se ha conseguido en ranas y ovejas» La ingeniería genética (sustitución de unos genes por otros) es una práctica en continuo desarrollo efectuada sobre organismos no humanos. Como comentamos en el capí-
tulo dedicado a genética y evolución� la ir�enieria gené¬ tica se ha comenzado a aplicar en los humanos para eli¬ minar ciertas alteraciones producidas por genes defectuosos» ¿Cuáles son las implicaciones de tales prácti¬ cas para el futuro genético de la humanidad? ¿Será posi¬ ble algún día controlar la estructura genética de nuestra especie? En este caso» los efectos ¿serán positivos o nega¬ tivos? Es interesante especular sobre el desarrollo de un «hu¬ mano perfecto»» Aparte de las serias cuestiones éticas so¬ bre quién decidirá cómo es un humano perfecto» existen serios debates biológicos sobre si tales actuaciones pue¬ den causar» a la larga» beneficios o perjuicios en la espe¬ cie humana» que estando perfectamente capacitada para vivir en un medio físico o social determinado sería inca¬ paz de adecuarse a otro distinto. La colección de atribu¬ tos físicos» emocionales e intelectuales que pueden considerarse como «perfectos» en el presente siglo pue¬ den ser inadecuados en el siglo xxn» Induso defectos como la anemia de células felcifbrmes pueden producir ventajas en ciertas condiciones» como hemos visto. A la larga» la perpetuación de la variabilidad genética es probablemente más ventajosa que la creación de un ser humano «perfecto» e invariable» En el caso de produ¬ cirse drásticos cambios medioambientales a nivel mun¬ dial» la uniformidad absoluta de todas las especies de seres humanos puede suponer su muerte evolutiva. Esta uniformidad puede conducir a la extinción de la especie humana en caso de que las nuevas condiciones favorez¬ can cambios culturales o genéticos que no estaban pre¬ viamente presentes en nuestra especie» Quizá nuestra mayor esperanza para ampliar nuestras oportunidades de supervivencia sea tolerarj e incluso defender� la persis¬ tencia de muchos aspectos de la variabilidad humana» tanto biológica como cultural»
Sumario
Hasta que todo el mundo tenga una educación seme¬ jante V la$ mi$mas oportunidade$, no hay forma de es¬ tar seguros de que algunas personas son más listas que otras.
1, Las diferencias físicas (variaciones en la frecuen¬ cia de los rasgos físicos) entre poblaciones humanas son el resultado de uno o más de los fectores siguientes: adaptación� aclimatación e in;fluencia del entorno social o cultural» 2» Algunas variaciones físicas de las poblaciones hu¬ manas induyen diferencias genéticas» en tanto que otras variaciones como la constitución corporal» la construc¬ ción fecial y d color de la pid pueden ser adaptaciones a las variaciones climáticas» Edstenj además» otras varia¬ ciones tales como la capacidad de producir lactasa» que pueden ser adaptaciones parciales a los diferentes entor¬ nos culturales,
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Capítulo 12
Va r i a b i l i d a d humana y adaptación
3, La mayoría de los bioantropobgos coinciden ac¬ tualmente en que el término raza no es una forma útil para referirse a las variaciones biológicas entre los seres humanoSi ya que las poblaciones humanas no se pueden diferenciar como grupos deñnidos por un conjunto par¬ ticular de características biológicas» Las características fiácas que son adaptables varían de forma dinal» por lo que no tiene sentido clasificara los seres humanos en ca¬ tegorías raciales. Todo esto sugiere que las clasificaciones raciales tienen más de categorías sociales que de ciertas bases biológicas. 4, Quizá los aspectos de la discriminación racial más sujetos a controversia sean las supuestas relaciones entre categorías raciales e inteligencia. Entre los intentos efectuados para exphcarlas� se han utilizado los tests IQ para demostrar la superioridad intelectual innata de u n a categoría racial sobre las demás. Pero hay dudas de que los tests IQ puedan ser aptos para medir la intefigencia� ya que los hechos muestran que las puntuaciones obte¬ nidas en estos tests están condicionadas tanto por los ge¬ nes como p o r las influencias del medioj por lo que las conclusiones sobre los motivos de las diferencias encon¬ tradas al aplicar estos tests no son útiles hasta que todas las personas estudiadas tengan las mismas oportunida¬ des para desarrollar sus capacidades.
Ejercicios de Internet L Busque en http://www.emoiy.eduyPEDS/SICKLE/sicMeptJitm los grupos que son más susceptibles de padecer anemia de células felciformes (un grupo de alteraciones hereditarias de los glóbulos rojos de la san¬ gre). Describa someramente las causas y los síntomas de esta enfermedad hereditaria. 2, En el sitio GeneLetter; l]tip://geiiektier.org existe mucha información sobre asuntos de actualidad. Si se clonaran los seres humanos» ¿cuánta similitud cree que tendrían los individuos donados? Usando las palabras dave «naturaleza» y «nutrición» encuentre algún artícu¬ lo que sitúe estas cuestiones y resuma lo que describa. 3, Consulte el lugar Human Cenóme Project Infor¬ mation en hUp://www.oriil.gov/hgniisydsi/elsi.htinl tanto para revisar nuestros conocimientos sobre genética molecular como para explorar alguna de las aplicaciones de los asuntos éticos que puedan surgir. 4, Lea las condusiones de la Asociación Americana de Antropología sobre raza en: http://www.aaarket.org/ sbnWrac epp.htm y sobre raza e inteligencia en: http7/www.aaaiiet.org/stiiit�race-htm y resuma la posi¬ ción actual de los antropólogos profesionales sobre el concepto de raza.
Glosario de términos Aclimatación Adaptación Anemia de células deifor mes Clinal Hipoxia
Racismo Kaza Regla de Alien Regla de Beigmann Regla de Gloger
Cuestiones críticas 1.
2,
3.
¿Por qué se utiliza más el color de la piel que el color del cabello o de los ojos o las proporciones corporales para las clasificaciones «raciales»? Si los europeos hubieran sido más susceptibles a las enfermedades del Pacífico o del Nuevo Vhindo� ¿sería diferente el mu ndo actual? ¿Cómo pueden ayudar los estudios sobre la selec¬ ción natural a fomentar la tolerancia entre pobla¬ ciones distintas?
Lecturas sugeridas DcfiZHANSKY» T AümjtíMij TTte of Hitmatt Specks. New Haven, CT: Yalc University Press, 1962. Una introducdón dásica a la interacción entre los componentes culturales y biológicos de la evolución humana. Simplifi¬ cando los detalles técnicos y el vocabulario �bre genética al máximo, Dobzliansky estudia la selección natural y las con¬ diciones biológicas de las poblaciones humanas. Durham, W. H, CcievílJFJíFíirí, flíífíHum«nDTVíersity. Stanford, CA: Stanfcrd University Press» 1991. Puesta al diá de la obra anterior de Liob�hansky, este trabajo analiia las teorías e investigaciones recientes sobre la interacción de genes y la cultura como medio para determinar la diversi¬ dad humana. MacKiimtosh, N ,J. 1Q and Human Intelligení�,Oxford: 0]tford University Press* 199S. Suministra una detallada pero amena visión de los muchos problemas rodean a la comprensión de la inteligencia humana. Mascie-Taylou, C. G. N. y La&aker, G. W. of Bio¡ogkal Anútropiflogy to Human Affairs. Nueva York. Cam¬ bridge University PreSS, 1991. Este libro trata cuestiones que son objeto de estudio por parte de la antropol el etnógrafo que desarrolla una posible explicación para algunas costumbres puede comprobar que es mejor cuando se amplía la informadón relacionada con ellas. En este sentido� el etnógrafo es similar a un médico que está tratando de comprender b forma en la que un paciente presenta ciertos síntomas de enfermedad. A pesar de que la Etnografía es extremadamente útil para generar explicaciones� un estudio de campo de un único lugar generalmente no proporciona datos suficien¬ tes para probar una hipótesis. Por ejemploj un etnógrafo puede pensar que una sociedad particular practica lapüHginia (cuando un hombre se casa con dos o más muje¬ res simultáneamente) porque hay más mujeres que hombres. Pero el etnógrafo no podría estar razonable¬ mente seguro de que esta explicación sea la correcta�a no ser que los resultados de un estudio comparativo de una muestra de sociedades revelasen que la mayoría de las so¬ ciedades poligínicas tienen más mujeres que hombres. Después de todo> el hecho de que una sociedad presente ambas condiciones podría ser también un accidente his¬ tórico más que el resultado de algunas conexiones nece¬ sarias entre ambas condiciones. COMPARAaONES IKTRACULTURALES
Un etnógrafo podría comprobar una teoría en una so¬ ciedad si decide comparar individuos» &milias> comurüdades o distritos. La variabilidad natural existente se puede utilizar para establecer comparaciones, Supoi�mos que queremos verificar las teorías de Whiting de que una sociedadj con bajos niveles proteicos en su dieta� pre¬ senta el tabú del posparto para aumentar la supervivencia de los niños. A pesar de que la mayoría de las parejas pueda practicar d tabú sexual� ya que es costumbre� algu¬ nas de ellas puede que no se adhieran a dicho tabú en tanto que otras tampoco conciban rápidamente después de abandonar el tabú� por lo que tendríamos que esperar algunas variaciones en el espaciamiento entre los naci¬ mientos. Si recogemos información sobre los partos de cada madre y la supervivencia de los nifios» podríamos comparar los índices de supervivencia de los niños naci¬ dos poco tiempo después del último embarazo de la ma¬ dre con los de los niños nacidos tras un largo intervalo de tiempo. La teoría de Whitirig se confirmaría cuando en¬ contráramos un índice significativamente alto de supervi¬ vencia de niños nacidos tras largos intervalos de tiempo. ¿Qué ocurre cuando algunas sociedades tienen mayor ac¬
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ceso a dietas ricas en proteínas que otras? Si las teorías de Whitii� son correctasj las comunidades que consumen más proteínas tendrían unos índices de supervivencia más altos para los rúños. Si existiera variación en la duración del tabú del posparto las comunidades con más proteínas deberían tener una duración menor de dicho tabú. Diseñar tests intraculturales de las hipótesis o no hacerio es algo que depende de si tenemos variabilidad su¬ ficiente en nuestras hipótesis. Debemos hacer uso de las variaciones para probar hipótesis dentro de una cultura, COMPARACÍONES REGIONALES CONTROLADAS
En una comparación regional controlada� el antropó¬ logo compara b información etnográfica obtenida de las sociedades que habitan una región determinada, socie¬ dades que� presumiblemente! tienen una misma historia y ocupan un medio ambiente similar. El antropólogo que dirige una comparación regional está capacitado para femiliarizarse con el complejo de características culturales asociadas a esa región. Estas características pueden fedlitar una buena comprensión del contexto de los fenómenos que hay que explicar El conocimiento antro¬ pológico de la región que se está estudiando» sin embargo� no puede ser tan amplio como el conocimiento que tenga é etnógrafo de una sola sociedad. Y, más aún» el conocimiento que tenga el antropólogo de los detalles locales es mayor en una comparación regional que los que se obtengan de una comparación a nivel mundial. Estas comparaciones a nivel mundial son tan amplias que el investigador nunca puede conocer demasiado so¬ bre cada una de las sociedades que va a comparan La comparación controlada a nivel regional no sólo es útil para ofrecer explicaciones sino que también lo es para probarlas� ya que algunas sociedades de las que se comparan tendrán características que se puedan explicar» en tanto que otras no será posible explicarlas. El antro¬ pólogo podrá determinar si las condiciones que se han mostrado como hipótesis están realmente relacionadas» al menos» en esa región. Tenemos que recordar� sin em¬ bargo» que si hay dos o más condiciones relacionadas en una región lo están por condiciones dependientes de esa región» aunque una explicación válida para una región determinada puede que no lo sea para otra. Investígacíón TRANSCULTURAL
Los antropólogos pueden generar interpretaciones ba¬ sadas en comparaciones a nivel mundial para observar las diferencias existentes entre aquellas sociedades que tie¬ nen y aquellas a las que les felta una característica en par¬ ticular» aunque el uso más común de las comparaciones a
Capítulo 14 Teoría y evidencia en la Antropología cultural
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Temas de actualidad Tra6a\0 de campo: ¿Cómo podemos sa6er 4fm algo es ciertú? El antropólogo cultural consigue obtener con grandes esfuírzos� gracias a su trabajo de campcv 1� información sobre otras culturas> tanto para con¬ tribuir así a comprender a los demás� como para comprenderse a sí mismo y asíupropia cultura. Probablemente el trab�o que efectúa viviendo entre otras gentes (observación partici¬ pante) le permite observar cosas que sería imposible conocer de otra forma. Al mismo tiempo, aunque no les puede ayudar» se da cuenta de las pequeñas cosas que ocurren habitualmente y de las que pudo creer que eran habituales pero que su trabajo de campo detecta que estaba equivocada Al comienzo se produce un choque cultural debido a que hay demasiadas cosas que aprender y, al final, se vuelve a producir otro choque cultu¬ ral similar cuando retorna a su hogar. Muchas de las cosas que ocurren ensu propia sociedad ahora le parecen extrañas y su experiencia es tan profianda que la mayoría de los antro¬ pólogos culturales sienten que los trabajos de campo les proporcionan las formas de conodraiento «más pro¬ fundas»� o más que profundas� reales. Aunque hay poca gente que dude del valor del trabajo de campo, se han producido bastantes cambios sobre su veracidad si consideramos la contro¬ versia mantenida sobre el trabajo de campo de Margaret Mead, que vivió en una pequeña isla en la Samoa de EE UU durante los años veinte y es¬ cribió un libro titulado Qjrní� ofAge in Samoa (Adolescencia en SamoaJ sobre la libertad sexual de los adoles¬ centes, Derek Freeman�que trabajó en Samoa occidental en los años sesenta y escribió una dura critica del trabajo de campo de Mead en su libro Margaret Mead and Samoa: The Making and Unrmkíng í:�an Anthwpohgiml Myth (Margaret Mead y Samoa: Coristrucción y Desmantelamiento de
un mito antropológico), Freeman sostiene que la mayoría de los traba¬ jos de Mead están equivocados; por ejempiQ� mantiene que los samoanos son sexualmente muy puritanos. Si ambos antropólogos realizaron tra¬ bajos de campo y este tipo de trabajos nos proporcionan un conocimiento real y profiondo, ¿no deberían estar ambos de acuerdo? ¿A qué se pueden deber estas divei�erKiias? ¿Acaso uno fue un buen trabajador de campo y el otro no? ¿Cómopodemos saber quién tiene razón? Paul Shankman sostiene que am¬ bos pueden tener parte de razón si re¬ conocemos varias cosas. Primero dice que sólo podemos hablar de per¬ misividad sexual o de restricciones sexuales en términos comparativos, Necesitamos entender que Mead realizó su trabajo de campo en una época en la que la sexualidad extramatrimonial era poco firecuente en EE UUj pero este patrón sexual cam¬ bió posteriormente. Así que, en con¬ traste con las chicas americanas, en la época de Mead, las mujeres samoanas tenían mayor libertad sexual. Se¬ gunda Samoa cambió radicalmente a lo largo de los años tras la actuación de los misioneros, la comercialización y la colonización por EE UU tras la Segunda Guerra Mundial, lercera la comparación de la Samoa americana con la Samoa occidental es la de un ambiente rural con la de otro de ca¬ rácter urbana Por lo tanto, las expe¬ riencias de ambos antropólogos pudieron ser completamente dife¬ rentes y, a pesar de toda tener ambos razón en sus afirmaciones. De hecha sugiere Shankman que si ignoramos las conclusiones tanto de Mead como de Freeman sobre la permisividad o las restricciones de la sexualidad, y si separamos la conducta ¿fesf de la con¬ ducta a�tmly y además buscamos datos más actualizados que los obte¬
nidos por Mead y Freeman sobre la conducta sexual individual, ambos autores no parecen disentir tanto: los samoanos están situados en el centro de la relación de las culturas seleccio¬ nadas a nivel mundial en cuanto a la práctica de vida sexual prematrimo¬ nial, ¿Qué podemos sacar en daro de esta discusión? Como muchos an¬ tropólogos están resaltando actual¬ mente, es muy importante reflejar en los trabajos de campo todas las po¬ sibles influencias del contexto, las cualidades de las personas que los es¬ tán realizando, de qué forma pue¬ dan estar relacionadas éstas con las personas que se estudian y también el tipo de métodos utilizados para verificar las conclusiones. Aunque hay otros puntos importantes, nin¬ guno lo es tanto como la reflexión, Si queremos estar seguros de que ha¬ cemos interpretaciones correctas, no es suficiente asumir que el estilo tradicional del trabajo de campo (observación participante y entre¬ vista con unos pocos informadores seleccionados) pueda balitarnos siempre la verdad en una situación de campo, particularmente para aquellas conductas que son privadas, m� variables, o no :fecilmente ex¬ presadas, por lo que quienes hacen trabajo de campo deben entrevis¬ tarse con una muestra representativa de personas y usar los tests de fiabilidad con los informantes, Shankmáii, Lies, and Aiithtopol5 tieDen la habilidad de ítsimbolizar» para referirse a algo (o un tipo de cosa) con una «etiqueta» arbitraria (gestos o secuencia de sonidos), Por ejemplo» el gorila Koko (con un repertorio de alrede¬ dor de 375 signos) aplicó el signo paja para beber a tubos de plástica mangueras» cigarros y antenas de radio. Washoe aprendió originalmente el signo íwcííj para referirse a las heces y otras secreciones y comenzó a utilizarlo como un insulto» como en el «sucio Roger»» cuando su preparador Roger Fouts rehusaba darle lo que él quería, Hasta las equivocaciones cometidas por los póngidos su¬ gieren que éstos están utilizando los signos simbólica¬ mente» de la misma forma que se utilizan las palabras en el lenguaje. Por ejemplo» el signo se puede usar para perro si el primer animal aprendido fiie gato (de la misma fe>rmaque nuestra hija Kathy dijo «perro>� a todas las imágenes de animales con cuatro patas» incluyendo los elefentesj cuando tenía 18 meses de edad), A pesar de las nuevas evidencias» Jane HUI opina que la respuesta a la pregunta de si los póngidos usan un lenguaje� todavía está sujeta a debate ya que el lenguaje no es algo unitario. Por ejemplo» cuando expongamos la es¬ tructura del sonido (fonología) posteriormente en este capítulo» veremos que cada lenguaje humano posee cier¬ tas formas de combinar los sonidos. Aunque los póngi¬ dos no usan los sonidos» la combinación de símbolos se puede considerar análoga a la combinación de los ele¬ mentos del sonido. Todavía no parece que exista nada comparable a las normas de b lingüística para las com¬ binaciones permitidas y no permitidas, Otra gran dife¬ rencia es que los humanos poseen muchos tipos de discurso» hacen listas y conferencias» cuentan historias» argumentan y recitan poesías» etc. Los póngidos no ha¬ cen ninguna de estas cosas» pero tienen algunas de las ca¬ pacidades propias de algunos elementos dd lenguaje humano. No obstante» la comprensión de sus capacida¬ des reales puede ayudarnos a entender la evolución del lenguaje humano.
/ni?* Los orígenes del lenguaje No se sabe cuánto tiempo hace que los humanos co¬ menzaron a utilizar el lenguaje. Algunos creen que los primeros Homo sapiens� hace alrededor de 100.000 años» pudieron empezar a utilizado» en tanto que otros creen que el lenguaje sólo apareció en los últimos 40.000 años. La mayoría de las especulaciones existentes sobre el ori¬ gen del lenguaje se han centrado en el problema de cómo la selección natural pudo fevorecer la estructura abierta del mismo. Todas las lenguas humanas conocidas son «abiertas» en el sentido de que los sonidos pueden com-
tánarse de distintas formas para producir nuevos signifi¬ cados. De esta forma loque era originalmente un sistema de llamadas se transformó en un sistema constituido por pequeñas unidades de sonidos que se pueden combinar de muchas maneras diferentes para formar sonidos Lntehgibles. Por ejemplo» un hispanohablante puede unir dos palabras» des y cjíííííífií?» formando una nueva palabra (deíOíiíJfíip) con un sentido diferente a las otras dos de las que procede. Cada una de las palabras originales se puede utilizar en otra multitud de términos' el prefijo de$ se puede utilizar» entre muchos otros en: desnutrido� des¬ graciada, desheredado� etc� en tanto que la palabra cui¬ dado aparece también en otras formas: cwídfldoítJi cuidador� etc. y como el lenguaje es un sistema de símbo¬ los que se comparten» se puede adaptar auna infinita va¬ riedad de expresiones y ser comprendido por todos los que comparten sus símbolos- Por eso» T. S. Eliot pudo crear una sentencia que nunca se había utilizado ante¬ riormente: «En la habitación» la mujer va y viene / ha¬ blando de Miguel Ángel». El sentido de esta sentencia» aunque no necesariamente su significado particular» puede ser entendido por cualquiera. Un grupo de gramáticos opina que en el cerebro de los humanos puede existir un sistema de adquisición del lenguaje� tan innato en los hombres como pueden serlo los sistemas de llamadas de algunos animales. Conforme se fiae desarrollando el córtex cerebral» este sistema se fue convirtiendo en parte de nuestra herencia biológica. Si tal mecanismo existe realmente no está claro» pero sí sa¬ bemos que el desarrollo actual del lenguaje individual no está biológicamente determinado por completo; si fuera asi» todos los seres humanos hablarían el mismo lenguaje generado por el cerebro. En lugar de esto hay identifica¬ das a nivel mundial entre 4.000 y 5.000 lenguas mutua¬ mente ininteligibles» de las que más de 2.000 se hablan actualmente» y la mayoría por personas que no poseen tradicionalmente un sistema de escritura. Por cierto» que los sistemas de escritura actuales no son tan antiguos ya que aparecieron hace sólo unos 5.000 años¿Podemos aprender algo sobre los orígenes del len¬ guaje estudiando los idiomas de las sociedades ágrafes y tecnológicamente más simples? La respuesta es rotunda¬ mente no» ya que tales lenguas no son más simples ni me¬ nos desarrolladas que las demás. El sistema de sonidos» vocabularios y gramáticas de los pueblos tecnológica¬ mente más simples no es inferior al de los pueblos que viven en contacto con las tecnologías más complejas. Por supuesto que las personas de otras sociedades» e incluso algunas de la nuestra propia» no sabrán el nombre de las sofisticadas máquinas que se utilizan en nuestra socie¬ dad» pero todas las lenguas tienen un enorme potencial de hacerlo así. Como veremos después en este mismo
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Capítulo 15
Comunicación y lenguaie
capítubj h totalidad de Us knguas p ween todas aquilas palabras que sus usuarios nec�itan� y se expanden en respuesta a los cambios culturales. Un idioma que ca¬ rezca de la terminología necesaria para nuestras necesi¬ dades puede, en contraste, tener un vocabulario muy rico para los acontecimientos y fenómenos naturales que sean de particular importancia para esa sociedad. Si no existen lenguas primitivas y si los idiomas más antiguos no nos han dejado muestras que permitan re¬ conocer sus estructuras originales entonces ¿no podre¬ mos investigar el origen del lenguaje? Algunos lingüistas opinan que para ese estudio nos puede ayudar ver la forma en la que los niños aprenden el lenguaje� lo que aquí comentaremos sucintamente. Recientemente, otros lingüistas sugieren que también nos puede enseñar algo sobre el origen del lenguaje comprender cómo se origi¬ nan las lenguas criollas. Lenguas cr[ollas Algunas lenguas surgieron en áreas en donde los po¬ deres procedentes de las colonias europeas establecieron empresas comerciales atendidas por mano de obra im¬ portada, generalmente esdavos. Estos trabajadores pro¬ cedían de distintos lugares, por lo que al principio hablarian con sus amos y con los demás trabajadores en algún tipo de lengua franca chapurreada (simplificada) del idioma de sus amos. En estos idiomas chapurreados faltan gran parte de las construcciones idiomáticas que existen en los idiomas más complejos de cualquier socie¬ dad; así, feltan los grupos de las preposiciones (a* hada y otras) y los verbos auxiliares (utilizados para construir algunos tiempos del fiaturo, participio, etc). Muchas de estas lenguas francas terminaron convirtiéndose en los llamados lengmj� crioUos.qu� incorporaron gran canti¬ dad de palabras procedentes del idioma de los amos aanque también gramáticas que difieren de ésta e incluso de la de las lenguas de origen de los propios trabajadores. Derek Bickerton opina que existen íuertes similitudes gramaticales entre todas las lenguas criollas del mundo y pensa que estas similitudes son coherentes con la teoria de que existe una gramática universalmente heredada por todos los seres humanos. No obstante, los idiomas crio¬ llos pueden parecer lenguas ancestrales: así, todos ellos utilizan la entonación en vez de cambiar el significado de las palabras al hacer una pregunta. En criollo la pregunta equivalente a: «¿puede usted arreglar esto?í> seria: «¿usted puede arreglar esto?», pero haciendo una inflexión al final de la frase; por el contrario la versión original cambia el sujeto y el verbo, pero sin hacer mucha inflexión al final. Todos los lenguajes criollos expresan el futuro y el preté¬ rito de la misma forma gramatical, colocando partículas
(como en inglés, shalt) entre el sujeto y el verbo, y tam¬ bién emplean dobles partículas negativas, como en el criollo de Guayana: «Nadie no gusta a mí», Es posible que haya muchas cosas en relación con el lenguaje que sean universales, que todas las lenguas sean similares en muchos de sus aspectos, bien porque las for¬ mas de ser de los humanos estén muy relacionadas bien porque personas de todas las sociedades tengan expe¬ riencias similares. Por ejemplo, entre los nombres utili¬ zados para designar a las ranas, generalmente todos contienen el sonido r a causa de que las ranas lo utilizan al croar, ADQU[S[C[ÓN del len g u a ie p o r los n iñ o s Aparentemente los niños disponen desde su naci¬ miento de la capacidad para reproducir todos los sonidos usados en las lenguas del mundo, así como para apren¬ der cualquier tipo de gramática. Pero el idioma que aprende d niño es el que hablan sus padres o cuidadores. La adquisición de la estructura y del significado del lenguaje por los ninos se ha considerado como el mayor reto intelectual de su vida, y si esto es así, es grato pensar que se produce de fonna bastante fecile incluso agrada¬ ble. Este «difícil reto intelectual» puede ser en realidad una respuesta natural a la capacidad de adquirir el leng�aje, que es una de las características genéticas de los se¬ res humanos. En todo el mundo los niños comienzan a aprender el lenguaje aproximadamente a la misma edad, de forma que en lugares con poca cultura no lo apren¬ den bástalos 7 o 10 años. Alrededor de los 12 o 13 meses los niños empiezan a rK>mbrar algunos objetos y accionesyalos I8o2 0 meses pueden tener una palabra clave para sustituir a toda una frase: asi, pueden decir «fuera» en vez de «llévame fiaera ahora para dar un paseo»; «zumo» por «quiero un zumo ahora». Las evidencias muestran que los niños adquieren el concepto de una pa¬ labra como un todo, aprendiendo secuencias de sonidos que son fuertes o que están al final de las palabras (por ejemplo� «rafe» por «jirafe») e incluso niños con defi¬ ciencias auditivas que están aprendiendo el lenguaje de los signos tienden a adquirir y utilizar los signos de la misma forma. Los niños de todo el mundo tienden a progresar sir¬ viéndose de oraciones de dos palabras cuando tienen en¬ tre los 1& y 24 meses. En sus frases pueden expresarse a sí mismos de forma «telegráfica», usando palabras con nombres y verbos pero dejando aparte las palabras me¬ nos importantes. Así, una oración de dos palabras como «zapatos fuera» puede ser la sustitución de «quítame los zapatos» o «más leche» puede sustituir a la palabra «dame más leche, por fevor»,
Jí' Capítulo 15
Comunicación y lenguaje
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nido por Derek Bickerton. Los «errores» que cometen los niños al hablar son similares a los que aparecen en las gramáticas criollas; por ejemplo� los niños de entre 3 y 4 años tienden a efectuar sus preguntas solamente modu¬ lando la entonación y también suelen utilizar la doble negación» aunque los adultos no se expresen de esa forma y consideren que los niños hablan «mal», Las invest�ciones futuras sobre la adquisición del lenguaje en el niño y sobre la estructura de las lenguas criollas pueden proporcionar información importante para la comprensión del origen del lenguaje humano. Pero aunque existiera una gramática universal� todavía tendríamos que comprender cómo y por qué varían tanto entre sí las miles de lenguas existentes en el mundo» lo que nos aporta las herramientas conceptuales lingüísticas que se han tenido que inventar para estudiar las lenguas,
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Una niña mue&tra $ua conocí miento? de palabra? $eña' lando dibujos. No suden pronunciar sus dos palabras en u n orden determinado ya que unas veces dicen antes «íuera» y otras «zapatos». Si un niño dicí «zapatos fuera» también dirá cuando proceda «vestido fuera» y «gorra fueraí>j ya que parece que seleccionan las dos palabras en u n orden parecido al de los convencionalismos del lenguaje adulto; por eso dirán «papá comer> y no «comerpapá». En otras palabrasj tienden a colocar primero al sujeto� po r lo que tenderán a decir «mamá abrigo» en vez de «abrigo mamá» cuando quieran decir «el abrigo de mamá». Ge¬ neralmente los adultos no pronuncian frases como «papá comer» de modo que los niños parece que saben mucho sobre la forma en la que tienen que colocar las palabras juntas sin necesidad de aprenderlo directa¬ mente de sus cuidadores. Imaginemos a un niño de 5 años que escucha cantar el himno navideño «Gloria in Excelsis»: cantará feliz «Gloria eats eggshells» (Gloria come cáscaras de huevo)* Construir una frase más o me¬ nos correcta en la gramática de su lengua es más impor¬ tante que construirla manteniendo el significado navideño. Si es cierto que existe una gramática elemental im¬ presa en la mente humana� no debemos sorprendernos de que los patrones del lenguaje de los niños sean simila¬ res en las distintas lenguas. También es de esperar que el lenguaje tardío de los niños se asemeje a la estructura de las lenguas criollas» lo que está de acuerdo con lo soste¬
Ungüístka d�criptíva
En ninguna sociedad necesitan los niños saber gra¬ mática para aprender a hablar ya que empiezan a con¬ trolar la estructura esencial del lenguaje a muy temprana edad y sin necesidad de ninguna instrucción directa. Si se le muestra a un niño hispanohablante la figura de un «gnomo» y luego la imagen de dos de estas criaturas» dirá que son dos «gnomos»» de alguna manera saben que aña¬ diendo una í aun nombre significa más de uno. Pero no saben esto de forma consciente» como tampoco lo saben los adultos» Una de las características más sorprendentes del lenguaje humano es que tiene sonidos con signifi¬ cado» y las secuencias de sonidos se combinan según re¬ glas que» a menudo» n o son reconocidas de forma consciente por los hablantes. Estas reglas no coinciden con las «reglas gramaticales» que estudiamos en el colegio para que podamos hablar «correctamente»* Cuando los lingüistas hablan sobre re¬ glas se refieren a los patrones del lenguaje que se pueden descubrir en el habla actual- No es necesario decir que existen algunos solapamientos entre las reglas actuales del lenguaje y las que se enseñan en el colegio. Hay re¬ glas que los niños nunca han escuchado en el colegio» ya que los profesores no son lingüistas y no dominan esta ciencia. Cuando los lingüistas emplean el término gra/ndííca» no se están refiriendo a las reglas prescriptivas que la gente se supone que sigue cuando habla» sino que la �amáúi� para los lingüistas consiste en los principios actuales y» a menudOí inconscientes� que predicen la forma en la que habla la mayoría de la gente. Como he¬ mos visto» los niños pequeños pueden decir frases de dos palabras que conforman una norma lingüistica» pero su forma de hablar dificilmente se considera «correcta».
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Capítulo 15
Comunicación y lenguaie
Antropología Aplicada ¿Pueden evitar las lenguas su extincim? No sólo desaparecen los animales y las plantas» también lo hacen las personas y sus lenguas. En los últi¬ mos siglos� e incluso actualmente� continúan desapareciendo lenguas en algunas partes del mundo.La ex¬ pansión y emigración hacia Occi¬ dente ha llevado a la despoblación y extinción de muchas sociedades nativas» principalmente a causa de la introducción de enfermedades y de las campañas de extenninio; muchas lenguas han desaparecido con las personas que las hablaban. Más de 50 idiomas aborígenes, de un total aproximado de 200j han desapare¬ cido en Australia de forma relativa¬ mente lápida como resultado de masacres y enfermedades. Actualmente muchos idiomas nativos continúan desapareciendo a causa de que no se transmiten a los ninos. En este proceso tiene un pa¬ pel importante el dominio político y económico de las personas que ha¬ blan lenguas occidentales» por varios motivos. Prime roj porque en los co¬ legios se enseña» generalmente» la lengua dominante. Segundo» porque cuando otra cultura es la dominante» los propios ninos prefieren hablarla lengua que creen que confiere mayor prestigio» siendo esta conducta mu¬ chas veces fevorecida por los propios
padres. Casi todas las lenguas aborí¬ genes de Australia han desaparecido, lo que también es una tendencia mundial. Michael Krauss» un lingpista que estudia las lenguas desa¬ parecidas» dice que ya lo han hecho el 90 por ciento de los idiomas del mundo. Otro ejemplo es que sola¬ mente 2 de las 20 lenguas nativas de Alaska se enseñan habitualmente a los niños» quienes prefieren hablar el inglés. ¿Qué es lo que podemos hacer? Krauss» que está particularmente interesado en las lenguas nativas de Alaska» está tratando de hacer algo. Con la ayuda del gobierno estatal de Alaska está recabando datos sobre las ler d as nativas para ayudar a pro¬ mover entre los profesores una edu¬ cación bilingüe como forma de preservar estos idiomas. Una forma muy diferente de abordar la situadón es la propuesta por RussellBernard» quien cree que «para mantener una let�a completamente viva te¬ nemos que promover a los autores literarios». Con la ayuda de tecnolo¬ gía computarizada» que le permite configurar un sistema para repro¬ ducir determinados caracteres a partir de sonidos» Bernard ha con¬ vencido a varios nativos que hablan su idioma original para escribir sus
Descubrir las más frecuentes normas inconscientes que operan en un lenguaje es una tarea muy difícil Los lingüistas han tenido que inventar conceptos especiales y métodos de transcripción (escritura) que les permitan describir: 1) las normas o los principios que establecen cómo se generan y cómo se usan los sonidos (los sonidos
lenguas directamente en el ordena¬ dor, Estos textos sirven luego como base para escribir un diccionario. Con este sistema» más de 80 perso¬ nas que hablan L2 idiomas en vías de extinción» se han convertido en au¬ tores en México y Suramérica. A pe¬ sar de que estos escritores puede que no utilicen los caracteres estandari¬ zados que usan los lingüistas para representar sonidos» sí están elabo¬ rando un material «escrito» que puede evitar su pérdida para siem¬ pre. Estos textos proporcionan abundante información sobre los idiomas y sus autores vierten en sus trabajos ideas muy interesantes para curar enfermedades» conseguir ali¬ mentos» criar a los niños y zan�r disputas. No estamos seguros de cuándo apareció por primera vez el lenguaje hablado, pero la enorme diversidad lingüística de este planeta tardó mu¬ cho tiempo en desarrollarse»aunque» desgraciadamente» puede ser poco el tiempo que gran parte de esa diver¬ sidad taride en extinguirse. Seth ShuLmau, «Kuttmiüg Native May/June 1993, 16; JóJiíl Hokdtó, Ati Intrúductiúfi íq (Loüijon: Loi�maa, 1992], pp, �1-62,
con pequeñas variaciones se usan frecuentemente de forma intercambiable en las palabras sin producir dife¬ rencias en el significado); 2) la ft>rma en la que las se¬ cuencias de sonidos (e incluso a veces los sonidos iridividuales) convergen con un significado y cómo las secuencias de los sonidos con significado se articulan
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para formar las palabras; y 3) cómo se unen las palabras para formar frases y oraciones. Esta lingüística descrip¬ tiva (o estructural) intenta descubrir las reglas de la fo¬ nología (el modelado de los sonidos)� de la morfología (el modelado de las secuencias de sonidos para formar unidades con signiñcado) y de la áiitaxis (el modelado de las frases y oraciones) que predicen cómo la mayoría de los hablantes hablan una lengua� La comprensión del lenguaje de otros pueblos es una parte esencial para entender su cultura. Aunque a veces lo que la gente dice es distinto de lo que hace> existen po¬ cas dudas de que es difícil entender las creencias» actitudesi valores y concepciones del mundo de las personas si no se entiende su lei�a ni las formas en que la utilizan. Hasta la conducta�que teóricamente pueda uno observar a pesar de no entender el idioma> generalmente no se puede comprender sin una interpretación. Imagine que ve a unas personas caminando y al acercarse a una roca» la rodean para evitarla. Suponga que creen que allí habita un espíritu. ¿Cómo podría saberlo sin ser capaz de preguntarlesi ni de entender su respuesta? Pomología La mayoría de nosotros ha tenido la experiencia de tratar de aprender otro idioma y ha encontrado que al¬ gunos de sus sonidos son excesivamente difíciles de pronunciar. Aunque el aparato de vocalización� teórica¬ mente» puede emitir un gran número de sonidos dife¬ rentes (fonemas para los lingüistas) cada lengua utiliza solamente algunos de ellos. Esto no significa que no po¬ damos emitir esos sonidos extraños para nosotros, sino que no hemos adquirido el hábito de pronunciarlos» por h que hasta que esos sonidos no se hagan habituales se¬ guiremos teniendo dificultades para pronunciarlos. Encontrar estas dificultades para emitir ciertos soni¬ dos es solo una de las razones que nos dificultan el aprendizaje de una lengua «extranjera». Otro de los pro¬ blemas es que no consigamos combinar ciertos sonidos o emitirlos de una forma particular en determinada pala¬ bra, Por ejemplo» los anglohablantes encuentran dificul¬ tad para combinar la z y la ¿J» como pueden hacer los rusos (porque no se pronuncian nunca asi en inglés ni en ruso) o para pronunciar palabras de las lenguas samoana o del Pacifico sur, que comienzan con sonidos que escri¬ biríamos como ng, a pesar de que encontremos en nues¬ tro idioma esos mismos sonidos» ya que son diferentes al estar en otra posición de la palabra, Para estudiar el patrón estructural de los sonidos» los lingüistas interesados en la/íí«pfo�fí tienen que escribir las palabras habladas como secuencias de sonidos. Este intento podría llegara ser casi imposible si los lingüistas
tuvieran que ceñirse a utilizar sus propios alfebetos» por¬ que otras l e í d a s utilizan sonidos que son difíciles de re¬ presentar con los alfebetos occidentales» o también porque el alfebeto inglés puede representar un mismo sonido de diferentes formas (por ejemplo, en inglés la re¬ presentación escrita del sonido/puede ser el de/en/üOii» pero también como�íi en tough yph en pJicJííí). Además» en nuestros al�betos, diferentes sonidos se pueden re¬ presentar con la misma letra: en inglés» por ejemplo sólo hay 26 letras en el alfebeto que tienen más de 40 sonidos diferentes (sonidos que pueden cambiar el significado de una palabra). Para superar estas dificultades en los soni¬ dos escritos con las letras de los sistemas de escritura existentes, los lii�istas han desarrollado sistemas de transcripción con alfebetos especiales en los que cada símbolo representa un único sonido, Una vez que los lingüistas han identificado los soni¬ dos o fonemas usados en una lengua, tratan de diferen¬ ciar cuáles de ellos afectan al significado y cuáles no. Una de las formas es comenzar con una sola palabra como latía Y cambiar el primer sonido» por ejemplo en para hacer la palabra rarta: el lingüista se preguntará entonces si esta nueva combinación de letras significa o no la misma cosa. En castellano lam y mtta ágnifican cosas completamente diferentes. Estos contrastes mínimos permiten al lingüista identificar un fonema en un idioma» un sonido o conjunto de sonidos que hacen di¬ ferente el significado en ese lenguaje. Por tanto el sonido i en Jlírttí es fonéticamente diferente del sonido r de raító. La forma por la que se �rupan los sonidos juntos en los fonemas varía de una ler�a a otra. Nosotros también usamos fonemas en nuestra lengua que pueden hacer di¬ fícil de creer que en otros idiomas los contrastes de letras» como el que hemos visto de í y r no produzcan significa¬ dos diferentes. Por ejemplo, en samoano la í y la r se pue¬ den intercambiar en una palabra sin que cambie su significado (por lo tanto ambos sonidos en samoano pertenecen al mismo fonema) y» de esta forma» los samoanos pueden decir «Leupena» unas veces y «Reupena» otras cuando se están refiriendo a alguien que en español se llamaría «Rubén». Los anglohablantes pueden bromear, como en el caso anterior, con idiomas que «confonden» í y pero no son conscientes de que hacen lo mismo con otros conjuntos de sonidos. Por ejemplo, en inglés la palabra and puede ser pronunciada de forma completamente diferente por dos personas anglohablantes sin que cambie su signifi¬ cado y sin que nadie piense que son dos palabras distin¬ tas, Se puede pronunciar la a en atvi como en el comienzo de la palabra aír� o se puede pronunciar como la fl de fccíí. Si pronuncia esos sonidos variables de a y trata de pensar cómo los va formando en la boca» notará
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Capítulo 15
Comunicación y lenguaie
que una pequeña diferencia en la prpimnciadón no caosa apenas ninguna atención� ya que las dos fornias de pronunciar la £1 en ¿i�no cambian su significado. Ahora piense en la / y r del ejemplo anterior: si las articula «n su boca> notará que son ligeramente diferentes en relación a cómo alarga la lengua a partir de la parte interna del in¬ cisivo superior. La lengua tienden a agrupar Iw sonidos que están próximos dentro de un mismo fonema� pero el porqué preferimos unos sonidos y no otros para agru¬ parlos juntos no es algo totalmente aclarado� Algunas investigaciones actuales sugieren que los ni¬ ños pueden aprender muy pronto a ignorar variaciones no significativas de los sonidos (las que son parte del mismo fonema) en el habla que escuchan en casa* Sabe¬ mos que niños de 6 meses de edad ya «ignoran» los cam¬ bios efectuados dentro de los mismos fonemas de su propia lenguai pero «oyen» una variación de un sonido dentro del fonema de otra lengua. Los investigadores to¬ davía no están seguros acerca de cómo estos bebés apren¬ den a distinguirlos» pero parece que adquieren muy pronto gran parte de la fonología de la ler�a materna. Después de descubrir que los sonidos se agrupan en fonemas» los lingüistas comienzan a distinguir las se¬ cuencias de sonidos que se efectúan en una lengua y las normas» generalmente inconscientes» que predicen esas secuencias. Por ejemplo» las palabras en inglés raramente comienzan con tres sonidos no vocales, Pero cuando lo como hacen� el primer sonido o fonema es siempre en en ímsícíi otras y (en inglés» algunas palabras pue¬ den comenzar con tres consonantes pero solamente se pronuncian dos sonidos» como en cíirpíMe�en donde la di Las descripciones de los lingüistas sustituye al sonido sobre la estructura de los sonidos (fonología) en diferen¬ tes idiomas puede permitirles investigar la forma en la que varían las lenguas en las reglas de sus sonidos, Por ejemplo» ¿porqué aparecen dos o más consonan¬ tes unidas en algunos idiomas» en tanto que en otros apa¬ recen las vocales siempre entre las consonantes? El samoano tiene una palabra para «Navidad» (OiníímAj en inglés) tomada del inglés» aunque esta palabra se ha cambiado para adaptarla a las normas del samoano (así» en inglésj dos consonantes como ¿ y r se pronuncian como ch y r). En samoano la palabra para designar la Na¬ vidad es K�rísimasi (pronunciada como si se deletreara Keh-ri-si-mah-si)» que tiene una vocal detrás de cada consonante o cinco silabas consonante-vocal, ¿Por qué algunas lenguas» como el samoano» alternan consonantes y vocales de forma más o menos regular? Estudios transculturales recientes sugieren tres razones para que ocurra esto: la primera es que sea un pais cᬠlido. Cuando la gente vive en estos climas» la estructura habitual de las sílabas es consonántico-vocálica. Los lin¬
güistas han encontrado que esta estructura en conso¬ nante-vocal proporciona los mayores contrastes en la pronunciación. Quizá cuando la gente habla fuera de casa» lo que es frecuente en los climas cálidos» necesita mayor contraste en sus sonidos para entenderse mejor, Una segunda razón de las alternancias consonántico-vocálicas es la literatura. Las lenguas con escritura tienen menos sílabas de este tipo. Si la comunicación es» como sucede frecuentemente» en forma escrita» significa que no tiene que depender mucho de los contrastes entre so¬ nidos adyacentes. La tercera razón (y� por cierto» la más fuerte) de la alternancia silábica consonántico-vocálica es la cantidad de tiempo que los bebés son cogidos en brazos. Las sociedades que mantienen mucho tiempo a los niños en brazos tienen muchas más sílabas conso¬ nántico-vocálicas, Posteriormente» en el capítulo dedi¬ cado a las artes» veremos algunas investigaciones que relacionan el coger a los niños en brazos con la preferen¬ cia de esa sociedad por un ritmo musical regular. La teoría se basa en que si los bebés son cuidados por una persona durante la mayor parte del día» empiezan a asodar el ritmo regular con sus experiencias placenteras. Los bebés perciben que d ritmo regular de los latidos del corazón de sus cuidadores o el carácter rítmico del tra¬ bajo que éstos están efectuando y las consecuencias de esas experiencias dan lugar a una preferencia por los rit¬ mos regulares durante su vida de adultos» incluyendo la alternancia regular consonántico-vocálica en su lenguaje adulto. Como ejemplo compare el ritmo de la pala¬ bra samoana K&-ismasi con el de la palabra inglesa Oiristmas, Morfología
En un idioma» un fonema generalmente carece por si mismo de significado. Por lo gen eral � los fonemas apare¬ cen relacionados con otros fonemas constituyendo gru¬ pos de sonidos con significado. La morfolo�a es el estudio de los grupos de sonidos con significado de un lenguaje. Con frecuencia estos grupos de sonidos con significado se denominan palabras, pero éstas suelen es¬ tar compuestas de un numero pequeño de unidades con significado. Estamos tan femiliarizados con las palabras que no nos damos cuenta de lo complicado que puede ser definir lo que son. La gente no suele hacer pausas en¬ tre las palabras cuando está hablando; si no supiéramos hablar nuestra lengua» una frase nos parecería una co¬ rriente continua de sonidos. £sta es la forma en la que oímos un idioma extranjero y sólo cuando entendemos y escribimos ese idioma podemos separar (con espacios) lo que dicen las palabras. Aunque una palabra es sola¬ mente una secuencia arbitraria de sonidos que tienen un
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dgnificado� no podríamos «oír� las palabras como uni¬ dades separadas si no entendiésemos el lenguaje ha¬ blado. Como los antropólogos lingüistas estudian lenguas ágrafes> algunas veces sin ayuda de intérpretes� tienen que imaginar el significado correspondiente a una se¬ cuencia de sonidos. � que las palabras en algunas len¬ guas se pueden separar en otras unidades más pequeñas que conservan un significado� los lingüistas han tenido que inventar términos especiales para referirse a esas unidades. Los lingüistas americanos denominan morfo al fonema más pequeño que tiene significado. Dado que un fonema puede contener uno o más sonidos� uno o más morfos con el mismo significado pueden constituir un morfema. Por ejemploj el prefijo in como en Mefínído y el prefijo att como en flnormflí son morfos presen¬ tes en muchas palabras� y significan no. A pesar de que ciertas palabras son simples morfos o morfemas (por ejemploj mar y pues� en español)» otras muchas palabras están construidas con una combinación de morfosj ge¬ neralmente lexemas� prefijos y sufijos. Asíj vaca es una palabra, pero la palabra iwcflF contiene dos unidades significanteSí un lexema (vaca) y un sufijo (s) que significa más de uno. £1 léxico de una lengua» que explica un dicdonarioj consiste en las palabras y morfos con sus res¬ pectivos significados. Parece como si la capacidad intuitiva de los niños para comprender la estructura de su lengua incluyera el reconocimiento de la morfología- Una vez que aprenden que el morfo /-í/ añadido a cualquier palabra indica más de unoj lo aplican a otros términos como iiombresj niños� etc. Una vez que captan los morfemas que, añadidos al verbo, indican que la acción tuvo lugar en el pasado, los aplican habitualmente incluso en las formas irregulares (ando por anduvo). Los niños ven una pelota rodando que se acerca cada vez más, y extrapolan este concepto a una cometa que sube cada vez más alto. De sus errores lo mismo que de sus aciertos, podemos ver que los niños comprenden el uso normal de los morfemas yj a la edad de 7 años, dominan también muchas formas irregulares» lo que significa que aprenden qué morfos de un mor¬ fema se usan y cuándo. La capacidad intuitiva de los niños de la dependencia de unos morfemas sobre otros depende del reconoci¬ miento lingüístico de morfemas libres y trabados. Un morfema (íbre tiene significado por sí mismo, es decir, puede constituir una palabra independiente. Un mor¬ fema trabado expresa su significado sólo cuando va unido a otros morfemas. Por ejemplo�el morfo/-otio/del morfema vinculado que expresa un tiempo pasado se une al lexema am- para formar amado� Pero !-ado/ no puede ir solo, ni tiene significado por sí mismo.
H significado de una palabra (que contiene un sujeto, verbo, complemento directo, etc.) generalmente depende del orden de las palabras; así» la fi�ase «ií wsí Jichis Í; AJ�riíir W35, wanton and merry, A ítrmter [a jriaT limitad tp certain ¿Jisíricís/j a jWÍ wíemn [very important} matt In í/t£ ordersfour there is none So miich ofdaUiani:� [ftirtingjand fair [etigaging] ¡anguage. Fkhad made [arranged] rnanya itiarriage Cfyouttgyvptnen athi�p�vn tosí,
[/nííí Ais pider he >Mflí a [pUlarj, FuU weJÍ Wwííí andfarnUiar yvas he Wiííi/weaítfí)' landownersj atí over his country Atid also wiéí wor� women of the town; ivr he hadpower pfconfe�ont As He Míd Ííimííjfi mere rflíjfl Fíjr pfhü prdeTi he míí a Ikentiate [licettíed hy the Pope}� Hahia «« fraiUy £ÍeriwA�r7 [/n a oerííií distriííisjj íí)í«J �Umne f/íí"mEírí muy importante)� Eti todos Íoí cuatro órdenes no hay nada que rw Thntp dd idioma del ydaridad (cpmpromisp). Hahia mudtas bodas De mujeresjóvenes a sus e�ensas� Hasta este orden fíte un noble poste (pUar). Fue totalmente amado y famÜiar Con todos hs señores (propie�rips ricos) de este país, Y también wn tas mujeres ricas de la t�udad; ñtra tertífl elppder de cpnfesart Se dijp a si mismo, más que un cura, De su orden, fue un Jicenciflíío (licenciadopor d Papa). En este pasaje podemos encontrar varios cambios. Muchas de las palabras actualmente se deletrean de forma diferente y, en algunos casosj han cambiado su ágnificado: Full, por ejemplo� se debería traducir por very (muy) y también se muestran evidentes cambios en la pronunciación� por ejemplo la � de tnarriage (matri¬ monio) se pronunciaba como zh en francés (del cual procede) j en tanto que actualmente se pronuncia como la�de Georg�. Como las lenguas habladas en el pasado no suelen dejar huellasj a menos que se escriban� y la mayoría de las lenguas conocidas por los antropólogos no fueron escritas por los que las hablaban� se puede pensar que la lingüística histórica sólo puede estudiar los cambios lingüísticos ocurridos en las lenguas escritas tales como el español. Pero esto no es cierto� ya que los lingüistas pueden reconstruir los cambios producidos comparán¬ dolos con lenguas actuales que sean semejantes. Tales lenguas muestran similitudes fonológicas» morfológicas y sintácticas a causa de que derivan de una lengua an¬ cestral común. Por ejemplo» el rumano� italiano, francés� español y portugués tienen muchas similitudes. Sobre la base de estas similitudes, los lingüistas pueden reconstruir cómo fue la lengua ancestral común y de qué forma ha cambiado hasta convertirse en las actuales lenguas romances. Por supuesto que esta reconstrucción es posible y está confirmada porque conocemos mu¬ chos textos supervivientes de cómo era el lenguaje an¬ cestral, el latín en este caso> y sabemos también por estos documentos cómo se diversificaba el latín conforme se
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expandía el Imperio roraano. Por tanto� el ancestro co¬ mún es frecuentemente la razón por la que lenguas ve¬ cinas, y algunas veces distantes, muestran patrones de dmilitud. Pero las lenguas también pueden parecerse por otras razones. El contacto entre comunidades, a menudo un grupo dominante sobre otro, puede llevar al dominio de un idioma sobre otro» Por ejemplo, el inglés tomo mu¬ chos términos del francés cuando Inglaterra fue con¬ quistada por los normandos franco-hablantes en el 1066 d* C, Las lenguas también pueden tener similitudes a pesar de que no deriven de un ancestro común e in¬ cluso aunque no haya existido dominio ni influencias de una lengua sobre otra. Tales similitudes pueden re¬ flejar rasgos comunes o universales de las culturas hu¬ manas o del cerebro humano o de ambos (como hemos comentado al principio de este capítulcv las similitudes gramaticales que presentan las lenguas crioUas pueden demostrar cómo funciona el cerebro humano). Final¬ mente, incluso lenguas no relacionadas y distantes pue¬ den mostrar algunas similitudes a causa de fenómenos de convergencia: las similitudes se pueden producir a causa de procesos de cambios lingüísticos debidos a que algunos de ellos sólo tienen unas pocas probabilidades de producirse. FAMÍLÍAS L[NGÜÍST[CAS E HÍSTORÍA DE LA CULTUE�
fl latín es la lengua ancestral de la que proceden las lenguas romances. Sabemos esto por medio de los do¬ cumentos escritos, pero cuando la lengua ancestral de otras lenguas no ha dejado documentos escritos, los lingüistas pueden reconstruir muchas de sus caracterís¬ ticas comparando entre sí sos lenguas derivadas (esta lengua reconstruida se denomina protolengua). Esto es, por medio de la comparación de lenguas presumi¬ blemente emparentadas, los lingüistas pueden llegar a reconocer características comunes entre ellas que pro¬ bablemente estaban ya presentes en la lengua ancestral de la que proceden las demás; todas estas lenguas que proceden de la protolengua común se consideran una jamilia lingüística. La mayoría de las lenguas habladas actualmente se pueden agrupar en alrededor de 30 femilias, siendo la Emilia a la que pertenece el español, inglés, etc. la indo-europeayY&� que incluye ala mayoría de los idiomas hablados en Europa más algunos de los hablados en la India. Alrededor del 30 por ciento de las personas del mundo, más de 4.000 millones de indivi¬ duos, hablan lenguas indoeuropeas- Otra gran femilia lingüística actual, constituida por más de 1.000 millo¬ nes de personas, es la sino-tibetana, que incluye los
idiomas del norte y sur de China además de los del Tibet y Myanmar» H campo de la lingüística histórica comenzó en 17&6, cuando un estudioso inglés que vivía en la India, Sir WiUiam Jones, encontró similitudes entre el sánscrito, un idioma hablado y escrito en la antigua India, el griego y el latín clásicos, además de otros idiomas actuales euro¬ peos. En 1822, lacob Grimm, uno de los femosos her¬ manos Grimm de los cuentos in&ntíles, formuló una serie de reglas para descubrir las variaciones de sonidos ocurridas cuando las distintas lenguas indo-europeas di¬ vergieron unas de otras. Por ejemplo, en inglés y en otras lenguas de la rama germánica de la Emilia iado-europea, la d regularmente cambia a t (comparemos el inglés ilvt? y ten con el latín ¿¿«o y íiecím)� en tanto que la p se con¬ vierte en / (en inglés �theryfoot y en latín pater y pes). Los estudiosos coinciden generalmente en señalar que las lenguas indo-europeas proceden de una lengua hablada hace entre 5.000 a 6.000 años. La lengua ancestral indo¬ europea, muchas de cuyas características se han recons¬ truido, se denomina proto-indo-europeQ o, con el acrónimo PÍE. La Figura 15.1 muestra las ramas y len¬ guas existentes de esta femilia. ¿Cuándo se originó el PIEf Algunos lingüistas opinan que el lugar aproximado en el que surgió una protolen¬ gua se puede reconocer a partir de los nombres de las plantas y los animales encontrados en sus idiomas deri¬ vados. Más concretamente, entre estas lenguas relaciona¬ das las palabras que son afines (esto es� palabras que poseen los mismos sonidos y significados) presumible¬ mente hacen referencia a plantas y animales que están presentes en el lugar de origen de esas lenguas. De esta forma, si somos capaces de saber en qué lugar estaban lo¬ calizados aquellos animales y plantas hace alrededor de 5,000 a 6.000 años, podremos saber también dónde vi¬ vieron las gentes que hablaban el PIE, De todas las pala¬ bras afines para árboles en las lenguas indo-europeas, Paul Friedrich ha identificado a 18 que cree que estaban presentes al este de Ucrania en el 3000 a. C. por lo que, basándose en esto, cree que el PIE procede de esa región. Coincide con esta hipótesis el hecho de que la subfemilia balto-eslava del indo-europeo, que incluye a la mayoría de idiomas de la antigua Unión Soviética, posee la mayo¬ ría de esos nombres de árboles (si se compara con las otras subfemilias indo-europeas) que son similares a la forma reconstruida en el PIE. Marija Gimbutas cree que podemos identificar el PIE arqueológicamente ya que las gentes que lo hablaban es¬ taban relacionadas con lo que denomiremos la cultura de los Kurganes (5000-2000 a- CJ que se difundió por Ucrania alrededor del año 3000 a. C. Esta cultura es¬ taba constituida por pastores que criaban caballos, reses,
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�
Proto indo-tropeo 6000
5000
a JÉ
4000
3000
2000
1000
(Pícente) Hg ura 15-1.
& idiomas dtí la fymitia d& itíngus� ¡ndo'&urop&a�
CJirejas y cerdos� aunque también cazaban y cultivaban cereales* Los enterramientos encontrados muestran dife¬ rencias en el estatas y en la riqueza» especialmente en el caso de los hombres. El porqué la gente perteneciente a la cultura de los Kurganes y otros pueblos lingüísticamente similares fueron capaces de expandirse portantes lugares de Europa y del Próximo Oriente� es algo que todavía no está darpy aunque algunos creen que la posesión de caba¬ llos y de carros les proporcionó importantes venta� mi¬ litares, En cualquier caso� está daro que muchos de los elementos de la cultura de los Kurganes se difian dieron a partir del año 3000 a, C, por gran parte del Viejo Mundo. Colin Renfiw disiente de la teoria de que fuera Ucra¬ nia la patria original del PIE: cree que éste es entre 2.000 y 3.000 años más antiguo que la cultura de los Kurganes� por lo que las gentes del PIE proceden» en su opinión» de otro territorio, Renfbw opina que esta región original puede serAnatolia (en Turquía) entre los años 7000 a 6000 a. C,» lo que sugiere» tomando como base los datos obtenidos a partir de evidencias arqueológicas» que la di¬ fusión del indo-europeo a Europa y lo que actualmente es A�anistán e India se acompañó de la difusión de los cultivos por esas regionesDe la misma forma que los lingüistas históricos y los arqueólogos han sugerido cuándo y dónde pudieron vi¬ vir originalmente las gentes del PIE y de qué forma se
pudieron diseminar» otros lingüistas y arqueólogos han sugerido las historias culturales de otras femilias lingüís¬ ticas, Por ejemplo» las lenguas bantues de África (habla¬ das por cerca de 100 millones de personas) constituyen una sub&milia de la gran Emilia de lenguas NígerCongo, Los bantuhablantes viven generalmente en una amplia banda que ocupa las franjas occidental y oriental del sur de África» derivando todas las lenguas bantues del llamado proto-bantú» pero ¿dónde tuvo esta lengua su origen? Como en el caso del proto-indo-europeo» se han pro¬ puesto diferentes teorías» aunque la mayoría de los lin¬ güistas históricos está de acuerdo actualmente con la opinión de Joseph Greenberg» quien afirma que procede del área de Benue» en el este de Nigeria. Su punto de ori¬ gen es» presumiblemente» donde se encuentra la mayoría de las lenguas asociadas y de sus dialectos (formas va¬ riantes de una lengua); se asume que el lugar de origen ha tenido mucho tiempo para dar lugar a la aparición de una gran diversidad lingüística» si se compara con el área recientemente ocupada por una lengua emparentada. Por ejemplo» Inglaterra tiene más variedad de dialectos que Nueva Zelanda o que Australia. Los antropólogos han comenzado a preguntarse cómo fiaeron capaces los bantúes de difundirse tan rápi¬ damente por un área tan extensa en tan sólo unos pocos
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cientos de añwJnidalmentejlosbantües debían ser pas¬ tores de cabras y practicaban algún tipo de agricultura� desplazando a los recolectores que vivían allí antes de su llegada. Cuando se extendieron� los bantuhablantes co¬ menzaron a practicar el cultivo de ciertos cereales y el pastoreo de ovejas y de vacas. Por estas fechas» alrededor del año lOCW a. C»j también empezaron a utilizar y febricar herramientas de hierro� que les proporcionaron grandes ventajas. En cualquier caso� hace entre 1.500 y 2,000 añoSj los bantuhablantes se habían expandido por África central> pero los que hablaban idiomas no bantues permanecían en las regiones orientales» occidentales» el sur y el suroeste de ese continente.
El proceso de la divergencia lingüística Los lingüistas históricos o comparativos esperan con¬ seguir algo más que registrar y datar las divergencias lin¬ güísticas, De igual forma que los antropólogos biológicos pueden &cilitar explicaciones sobre la variabilidad hu¬ mana» los lingüistas investigan las posibles causas de la variabilidad idiomática» algunas de cuyas divergencias se han producido de forma gradual. Cuando los grupos de personas que hablan una misma lengua pierden el con¬ tacto entre ellos a causa de su separación» tanto física como psíquica o sodalmente» se empiezan a acumular pequeños cambios en la fonología» morfología y sintaxis (que se producen continuamente en cualquier lengua). Si esta separación continúa» los primeros dialectos se acaban convirtiendo en idiomas independientes» esto es» acabarán siendo ininteligibles entre sí» como lo son el alemán y el inglés» por ejemplo. Las barreras geográficas» como las grandes masas de agua y las montañas» pueden separar a los que» original¬ mente» hablaban un mismo idioma» pero la distancia por á misma también puede originar divergencias. Por ejem¬ plo» si comparamos los dialectos del inglés de las Islas Británicas» está claro que en las regiones más distantes unas de otras ap)arecen las mayores diferencias lingüísti¬ cas (comparemos» por ejemplo» las diferencias entre el noreste de Escocia y Londres). En el norte de India» hay cientos de aldeas medio aisladas que han dado lugar a cientos de dialectos locales» aunque todavía los habitan¬ tes de cada una de ellas pueden entenderá los de las otras villas próximas con un poco más de dificultad» los de los siguientes en proximidad. Pero las diferencias entre los dialectos van creciendo con la distancia entre los lu¬ gares en los que se hablan» y en el caso de los extremos de una región» separados por más de mil millas» ya parecen idiomas diferentes.
La palabra $u$hí � ha tomado pre$tada en Norteamé¬ rica para identificar un estilo de comida japonesa.
Induso en lugares geográficos con mucha menor se¬ paración se pueden producir grandes diferencias dialec¬ tales a causa de las desigualdades sociales; así» la difosión de una serie de particularidades dialectales se puede alte¬ rar por las diferencias raciales» religiosas o por clases so¬ ciales que dificulten la comunicación entre esas personas. En la aldea de Khalapur» al norte de la India» lohn Cumperz encontró diferencias sustanciales entre el habla de los intocables y la de los otros grupos sociales» ya que aun¬ que los intocables tenían contacto laboral con los demás grupos» no existía relación amistosa entre ellos» y sin amistad y comunicación fluida entre compañeros se puede desarrollar fócilmente una diferenciación dialectal. Mientras que el aislamiento fecilita la divergencia lingüística gradual entre las comunidades» el contacto fecilita las semejanzas idiomáticas. Este efecto es particu¬ larmente evidente cuando se produce entre lenguas mutuamente ininteligibles» aparecen entonces palabras prestctdaSvY se toman algunos nombres prestados de otra cultura: íomafe* canoa� sushü etc. Los grupos bilingües que están dentro de una cultura también pueden intro¬ ducir palabras extranjeras» especialmente cuando la len¬ gua dominante no tiene equivalentes reales: así» la palabra salsa ha penetrado en el idioma inglés» lo mismo que el término de lo ha hecho en el francés.
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Las conquistas y colonizaciones fevorecen la adopción rápida y extensa di palabras prestadas� si es que no dan tugara la sustitución lingüistica* La conquista normanda de Inglaterra introdujo el francés como la lei�a de la nueva aristocracia» lo que ocurrió 300 años antes de que las clases educadas comenzaran a escribir en inglés. Du¬ rante este tiempo el inglés adoptó muchas palabras del francés y del latín� y estas dos lenguas (francés e inglés) acabaron pareciéndose mucho más de lo que nunca se habían parecido. Hoy aproximadamente el 50 por ciento de las palabras inglesas proceden del francés� lo que muestra cómo diferentes clases sociales pueden reaccio¬ nar de forma distinta al contacto idiomático. Por ejemplo> la aristocracia inglesa denominaba a la carne que comia como «pork» (cerdo) y «beefi> (ternera)» derivadas ambas del francés, en tanto que las gentes que criaban a los animales y los cocinaban los seguian llamando en tanto que otros tratarían de contestar con de¬ talles exagerados� sin darse cuenta de que lo que se espera de ellos es una sencilla contestación� lo mismo que espe¬ ramos nosotros cuando le preguntamos a alguien cómo está. Estatus
so cíal y conveí�acíóisí
Los extranjeros que hablan otro idioma puede que se¬ pan poco sobre las conversaciones triviales de ese idioma, lo que constituye un ejemplo del principio de la sociolingüística de que lo que decimos y cómo lo deci¬ mos no puede ser totalmente pronosticado por las nor¬ mas de nuestro idioma. Quiénes somos socialmente y a quiénes estamos hablando puede afectar profundamente a lo que se dice y a cómo se dice, En un estudio realizado entrevistando niños de una dudad de Nueva Inglaterra» lohn Fischer notó que en entrevistas formaleSj los niños tendían a pronunciar el fi¬ nal de las palabras» como singingy fishing� pero en con¬ versaciones informales decían «síngirt» y «.fiskitt». Pero» sobre todo, notó que el fenómeno también aparecía en relación con las clases sociales» de forma que los niños de
femilias de alto estatus social eran menos proclives a omitir la terminación que los niños de Emilias de bajo estatus social. Los estudios subsiguientes en áreas anglohablantes apoyaban las observaciones de Fisher relacio¬ nadas con los patrones del lenguaje. Otros patrones fueron observados también. Por ejemplo, en Norwich, Inglaterra, las clases bajas tienden a omitir la ít en pala¬ bras como /lííffíffíír, aunque en todas las clases el patrón de omitir esta letra aumenta en situaciones puntuales. Ciertas investigaciones han demostrado que los ingle¬ ses de las clases más altas tienden a tener un lenguaje más es decir, conforme a lo que se considera el inglés estándar (el tipo de conversación escuchada en la radio o la televisión), en tanto que las personas pertene¬ cientes a las clases bajas tienen hablas más Íieíero��íiefís» variando de acuerdo con las áreas locales o dialectales de las que proceden. En algunas sociedades, las diferencias de estatus social pueden estar asociadas a una diferenciadón más marcada de las palabras, Clifford Geertz, en su estudio sobre el idioma javanés» mostró que los vocabu¬ larios de las tres dases de la sodedad javanesa (campesi¬ nos» gente de los pueblos y aristócratas) reflejaban sus posiciones separadas socialmente. Por ejemplo» el con¬ cepto rtCJiv (ahora) es expresado de forma diferente en es¬ tos tres grupos; un campesino utiliza la expresión saíkí (que se considera la forma más baja y ordinaria de la pa¬ labra), el habitante de una dudad usará saníki (conside¬ rada algo más elegante) y un aristócrata» jamíttíííí (la forma más elegante de todas), Las relaciones de estatus entre las personas pueden in¬ fluir también en la forma de hablan Los términos de las direcdones pueden ser un buen ejemplo. En Inglaterra» las formas para dirigirnos son bastante simples: una per¬ sona es Uamada por su primer nombre o por un título
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(como Doctor, Profissor, Misy, Miííer, ítc.) seguido di su último nombre. El estudio realizado porRoger Brown y Marguerite Ford indica que para dirigirnos en inglés los términos varían con la naturaleza de las relaciones entre las personas que hablan. £1 uso reciproco de los primeros nombres significa generalmente una relación íntima o informal entre dos personas. El título seguido por el ape¬ llido usado reciprocamente significa una relación más formal o de negocios entre individuos que se consideran pertenecientes al mismo estatus social. El uso no recí¬ proco de los nombres y títulos se reserva en inglés a los que reconocen una marcada diferencia en el estatus so¬ cial entre ellos. Esta diferencia de estatus puede venir dada en función de la edad> como cuando un niñQ llama a la amiga de su madre Mrs. Miller y ésta se dirige a ella como Sally> o también puede deberse a la jerarquía profesional� como cuando una persona se refiere a su jefe como Ms, Ramírez y ésta a su vez se dirige a él como Toe. En algunos casos, entre chicos y hombres adultos� el uso del apellido sólo representa un nivel medio entre la inti¬ midad y el uso formal. D i f e r e n c í a s de G é n e ro e n el h a b l a
En muchas sociedades el habla de los hombres di¬ fiere de la de las mujeres: esta diferencia puede ser ligera> como en nuestra propia sociedad» o más extrema» como sucede entre los indios caribes en las Antillas me¬ nores de las Indias Occidentales» entre quienes hombres y mujeres utilizan diferentes palabras para los mismos conceptos. En Japón» hombres y mujeres utilizan pala¬ bras completamente diferentes para numerosos concep¬ tos (por ejemplo» la palabra masculina para agua es mízM» en tanto que la versión femenina es ohiya)i además» las mujeres añaden firecuentemente el prefijo educado o- (las mujeres tienden a decir o/wíí para los palillos de comer» en tanto que los hombres los llaman hasi). Tanto en EE UU» como en otras sociedades occi¬ dentales existen diferencias entre la conversación fe¬ menina y la masculina» aunque no son tan manifiestas como en los casos de los caribeños y de los japoneses. Por ejemplo» se observa la tendencia a quitar la� en pa¬ labras como singiug cuando una situación es informal y cuando la clase social es baja» pero también hay otra di¬ ferencia de género: las mujeres tienen mayor tendencia que los hombres a mantener el sonido de la � y menos que ellos a quitar la íi en palabras como happy. En Montreal» las mujeres están mas predispuestas que los hom¬ bres a poner la í en fi-ases como ilfait (�he dves�) o en íI y a (�there is/are�y). Otras diferencias genéricas se producen en la entona¬ ción lo mismo que en las fijases u oraciones. Robin La-
Comunicación y lenguaje
315
koff descubrió que las mujeres inglesas tienen tendencia a contestar preguntas con fijases que tienen un aumento de inflexión al final» en lugar de una entonación asociada a una firme respuesta. Las mujeres también tienen ten¬ dencia a añadir preguntas a una declaración» como: «They caught the robber last week» didn'tthey?» (Cogie¬ ron al ladrón la semana pasada» ¿no es cierto?)» Una explicación para las diferencias de género» parti¬ cularmente las referidas a la pronunciación» es que la mujer en muchas sociedades sude estar más interesada que el hombre en ser «correcta» (no en el sentido lin¬ güístico; es importante recordar que los lingüistas no consideran una forma de lenguaje más correcta que otra» de la misma forma que no consideran un dialecto supe¬ rior a otra Todos son igualmente capaces de expresar una variedad compleja de pensamientos e ideas). En so¬ ciedades con clases sociales» se considera que lo asociado a las clases superiores es más correcto» en tanto que en otras sociedades se considera más correcto lo que es más antiguo. Por ejemplo» en la lengua de los nativos ameri¬ canos de Koasati» usada en la región de Luisiana» hom¬ bres y mujeres utilizan terminaciones diferentes en ciertos verbos. Estas diferencias parece que foeron desa¬ pareciendo a lo largo de los anos treinta» cuando se efec¬ tuó una investigación sobre los Koasati. Las muchachas jóvenes han comenzado a utilizar las formas masculinas» en tanto que sólo las mujeres ancianas utilizan todavía las femerúnas. Los hombres koasati dicen que la forma de lenguaje femenina era la «mejor» forma de hablar» Las diferencias de género en el lenguaje pueden ser paralelas a las diferencias de género observadas en otras experien¬ cias sociales (déla misma forma que vimos en el capitulo dedicado a sexo» género y cultura): el comportamiento de las muchachas es más aceptable para los adultos que el de los chicos, No existen suficientes estudios para conocer hasta qué punto es común para la mujer exhibir una mayor «corrección» en el lenguaje. Pero sabemos de algunos lu¬ gares en los que éste no es precisamente el caso. Por ejemplo» en una comunidad de Madagascar» donde se ha¬ bla d merina» un dialecto d d malagasy» se considera sociahnente correcto evitar normas explícitas. Así» en vez de ordenar directamente una acción» un merinohablante tratará de darla pero de forma indirecta. También es educado evitarlos comentarios negativos» tales como ex¬ presar cólera contra alguien. Sin embargo» en esta comurddad son las mujeres y no los hombres quienes con mayor frecuencia se saltan las normas: las mujeres ha¬ blan de forma más directa y expresan su cólera más a menudo. Esta diferencia puede estar relacionada con d hecho de que las mujeres están más vinculadas con la compra y venta en el mercado,
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Capítulo
15
Comunicación
y lenguaie
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Nuevas perspectivas sobre el. género ¿Promueve el idhma inglés cmcepUts sexistas? ¿Promueve el idioma inglés con¬ ceptos sexistas o sólo refleja las des¬ igualdades de género que existen? Para aquellos que desean promover la igualdad de géneros» las respues¬ tas a estas preguntas son importantesj ya que si el ler�aje influye en el pensamiento (de acuerdo con las lí¬ neas establecidas por Edward Sapir y Benjamín Whorf)»los cambios lingüísticos serán necesarios para fecilitar el cambio en la cultura del género. Si esto es cierto» la otra pregunta� si el lei�aje refleja la des¬ igualdad» supone que se tendrán que producir cambios sociales» econó¬ micos y políticos antes de que se produzcan cambios lingüísticos sus¬ tanciales, Dejando a un lado» por el mo¬ mento» cuáles son los primeros cam¬ bios que se tienen que producir� ¿cómo representa la desigualdad de géneros el idioma inglés? Conside¬ rando las siguientes palabras de Benjamin Lee Whorfi «El idioma es el mejorhombre espectáculo (íÍwwman)... El lenguaje ayuda al hombre en su pensamiento». Dado que el
término man (hombre) en inglés se refiere técnicamente a todos los se¬ res humanos y fiíí (su) se refiere téc¬ nicamente al pensamiento de una persona de ambos géneros» el uso fi�cuente de estos términos podría llevar a pensar que los hombres son importantes. De íbrma similar» las palabras chairmart, poUcetriani bt4sirtessman, saksman ¿significan que son siempre hombres los que desempeñan esas ocupaciones? ¿Qué ocurre cuando existen palabras di¬ ferentes para cada género» como en actor y actress o hero y keroirte�. Ge¬ neralmente la palabra básica es mas¬ culina» a la que se le añade un sufijo para la forma femenina. ¿Acaso este sufijo quiere decir que la forma para el femenino es secundaria o menos importante? No es justo que la estructura del idioma pueda causar desigualdades de género.También existen diferendas en el uso y en las metáforas, A pesar de que existen formas mascu¬ linas y femeninas para alguien que ha perdido a su esposa ()Vídí?m viuda y wiáower� viudo)» mucha
Algunos investigadores se han preguntado si todo esto correcto» si debemos considerar estos ejemplos en los que existe desigual prestigio y poder Las mujeres pueden tratar de conseguir mayor nivel social por medio de un mejor dominio del lenguaje» y cuando contestan a una pregunta con una creciente inflexión de su voz� puede que estén expresando inseguridad y cierta felta de poder, Alternativamente» quizá estén buscando también una mayor cooperación dialogante. Hablar de una forma más «estándar» es compatible con la posibilidad de ser mejor comprendida por los demás y el contestar a una pregunta
gente dirá «Sally is Henry's pero prácticamente nadie dirá «Henry is Sally's miioivír». ¿Por qué? ¿Acaso se considera más im¬ portante que una mujer esté rela¬ cionada con un hombre que el que un hombre lo esté con una mujer? Según este uso» no sorprende que jÍíjw (la forma femenina) sea el tér¬ mino básico en este caso y widower (la forma masculina) el término de¬ rivado, Y como ocurre en las parejas
sir/madarriy master/mstressi wizardi witch (bruja) j ¿la versión femenina
ha adquirido connotaciones negati¬ vas? Y ¿por qué se aplican tantas imágenes de animales a las mujeres? En inglés� se las puede llamar c/iícfcy (gallinas)j (lagartas) j �, La ín 2 C1973): 45�0; Fatemeh Khosrwhdáhi, Don't Cáre, btit Woiuen Do; A Sodbl Tdeutity Amlysiá of a Wborfi¿n Probleiu»� íh Society, 13 (19�9): 505-35; Robert L. Miuiroe y Ruth IL Mimroe, kA Cross-Cultum] Study of Sex, Cender and Social StruclUríw, í! (19íi9): 206-11.
¿Qué ocurre cuando alguien que conoce dos o más idiomas se comunica con otra? Con frecuencia encontra¬ remos el intercambio de códigos (codeswiiching)» que utiliza palabras de más de un idioma durante la conver¬ sación. Este tipo de expresiones se produce» por ejemplo» en medio de una frase bilingüe espanol-inglés» como: «Nb vana bring itup in the meeting» (««Ellos no lo van a sacar en la reunión»). También se puede producir cuando cambia el tópico o la situación» como en una conversación social para el trabajo de escuela. ¿Por qué los interlocutores que conocen más de un idioma a veces
� Capítulo 15 C o m u n i c a c i ón y lenguaie
se desvían? Aunque puede haber múltiples razones para dloi lo que está dan? es que este tipo de lengua no es una mezcla fortuita que proceda de la pereza o la ignorancia, Esta lengua se relaciona con un gran nivel del conoci¬ miento de dos o más idiomas y de una conciencia de lo que es considerado adecuado o inadecuado en la comu¬ nidad» Por ejemploj en la comunidad puertorriqueña de Nueva York, el intercambio de códigos dentro de la misma frase psarece ser frecuente en las conversaciones normales entre amigos� pero si un extraño que parezca hispano interviene en la conversación, ésta transcuriirá completamente en español, Mnque cada comunidad puede tener sus reglas pro¬ pias para hablar con intercambio de códigos, pueden ser necesarias variaciones en su práctica para comprender los términos del amplio contexto político e histórico. Por t�emplo, los germanohablantes en Transilvania, en donde la lengua nacional es el rumano, difícilmente pue¬ den aphcar el intercambio de códigos al rumano. Quizá sea la razón el hecho de que antes de terminar la Segunda Guerra Mundial, los germanohablantes eran un privile�do grupo económico que fiae cayendo bajo el poder de los desposeídos rtimanos y de su idioma. Bajo el gotaerno socialista, los germanohablantes perdieron sus privilegios económicos� pero continuaron hablando ale¬ mán entre ellos. En los raros casos en los que hablan ru¬ mano entre ellos, lo asocian a un idioma hablado por las personas de bajo nivel social y para cantar canciones con un claro tono picante. Una situación opuesta se produjo en una región húngara de la Austria germanohablante. Las gentes de esta región húngara anexionada por Aus¬ tria en 1921 eran campesinos pobres, pero después de la Segunda Guerra Mundial la expansión económica fevoreció la migración de la población rural, por lo que mu¬ chos de esos húngaros pasaron a ocupar puestos de trabajo en la industria. Hablar alemán se empezó a con¿derar, entre las generaciones más jóvenes, como un símbolo de mayor estatus social, además de :&cihtar la movilidad, por lo que no ftie sorprendente que el inter¬ cambio de códigos formara parte de la conversación nor¬ mal entre húngaros y germanohablantes, Qertamente, a partir de la tercera generación, el alemán se ha conver¬ tido en el idioma elegido, excepto cuando se habla a las personas mayores húngaras. Esta situación de Austria es muy común en otras partes del mundo, en las que el idioma de los grupos políticamente dominantes acaba ¿endo también «Üngüísticamente» dominante, COMUNÍCACIÓN interétnica
Ajn cuando hablan el mismo idioma, personas de di¬ ferentes grupos étnicos pueden tener dificultades en la
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comunicación a causa de las distintas normas incons¬ cientes que existen sobre cómo mantener una conversa¬ ción, Por ejemplo, los indios Atapaskan anglohablantes del Ganadá creen que la conversación con un «blanco» (europeo) canadiense debería evitarse, excepto cuando piensan que conocen su punto de vista (del blanco, que es generalmente más poderoso políticamente). Por el contrario� el «blanco» anglohablante cree que ellos debe¬ rían conversar más para hacerse conocer por los demás (como en un cóctel). Por eso hacen una pausa de cierto tiempo de duración mientras que la otra persona habla, aunque ésta es mucho menor de la que un atapasikan an¬ glohablante esperaría. Si la otra persona no responde, el «blanco» anglohablante para no sentirse molesto dirá al¬ guna cosa. Cuando un atapaskan anglohablante ya está preparado para hablar, el «blanco» ya está hablando y en¬ tonces el indio considera poco cortés interrumpirle. Por tanto, es fócil ver por qué tienen dificultades para enten¬ derse «blancos» e indios atapaskan. Los indios atapaskan �ensan que los «blancos» ingleses hablan demasiado y no les permiten a ellos expresar sus ideas, en tanto que los «blancos» creen que los indios atapaskan no quieren hablar para poder conocerá los «blancos». El campo de la sociolingüística es una especialidad relativamente nueva, que en el presente parece que está dedicándose, sobre todo, a describirlas variaciones en el uso del lenguaje. La comprensión de por qué varían los idiomas en los diferentes contextos puede explicar par¬ cialmente por qué cambian los aspectos estructurales de la lengua a lo largo del tiempo. En el contexto de una so¬ ciedad cambiante, la estructura de la lengua también po¬ dría tendera alterarse,
CD-ROM Ejercicio da conceptos IÍM9
ffir Sumarlo 1. La comunicación es la función esencial que tiene el lenguaje en todas las sociedades. Aunque la comunica¬ ción humana no se limita al lenguaje oral, éste es impor¬ tante por ser el vehículo primario a través del que se transmite y difunde la cultura, 2, Los sistemas de comunicación no son exclusivos de los humanos ya que otras especies animales se comu¬ nican de varias formas: por sonidos, olores, movimientos corporales, etc. La habilidad mostrada por los chimpan¬ cés y gorilas para aprender y utilizar el lenguaje de los
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Capítulo 15
C o m u n i c a c i ó n v lenguaje
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signos sugiere que estas comunicadones simbólicas no son exclusivas de los seres humanos. El lenguaje humano es característico como sistema de comunicación en su naturaleza hablada y simbóhca� permitiendo un infinito número de combinaciones y recombinaciones con signi¬ ficado. 3- La lingüística descriptiva (o estructural) trata de describir las reglas de la fonología (patrones de sonidos)» morfología (los modelos de secuencias de sonidos y pa¬ labras) y sintaxis (el patrón de las frases y oraciones) que predicen cómo la mayoría de los hablantes utilizan una lengua. 4. Por el análisis comparativo de seme�zas y de gramáticas� los estudiosos de la lingüística histórica con¬ firman que ciertos idiomas derivan de una lengua ances¬ tral común o protolengua, Los fines son reconstruir las características de esa protolengua para elaborar hipótesis sobre cómo se separaron de ella las lenguas derivadas y para establecer las fechas en las que se produjo esa sepa¬ ración, 5. Cuando dos grupos que hablan la misma lengua pierden comunicación a causa de su separación por ba¬ rreras físicas» psíquicas o sociales» se empiezan a acumu¬ lar pequeños cambios en la morfología, fonología y sintaxis de su idioma. Si continúa esta separación� los dos dialectos del mismo idioma acabarán separándose» cons¬ tituyendo idiomas diferentes» esto es» se harán mutua¬ mente ininteligibles. 6, Mientras que el aislamiento produce divergencias de la lengua entre las comunidades» el contacto fevorece grandes semejanzas. Este efecto es particularmente evi¬ dente cuando el contacto entre idiomas mutuamente in¬ inteligibles introduce palabras prestadas» la mayoría de las cuales son nombres de cosas procedentes de la otra cultura. 7, Algunas de las tentativas efectuadas para exphcar la gran diversidad de lenguas» se han orientado hacia las posibles interacciones entre la lengua y otros aspectos de la cultura. Por el contrario» si se puede demostrar que una cultura puede afectar a la estructura y al contenido de su lengua» entonces se continuaría con la diversidad lingüís¬ tica derivada» al menos en parte» de la diversidad culturaL Por otra parte» la dirección o influencia entre cultura e idioma debe actuar a la inversa; la estructura del idioma puede afectar a otros aspectos de la cultura. 8, En los últimos años» algunos lingüistas han co¬ menzado a estudiar las variaciones existentes en la forma en que las gentes utilizan su lengua cuando hablan. Este tipo de estudios lingüísticos» llamado socioÜngüística» está relacionado con la etnografía del lenguaje» esto es» con los modelos culturales y subculturales del lenguaje en los diferentes contextos sociales.
Glosario de términos Afín Dialectos Fonema Fono Fonología Intercambio de códigos Lexicón Léxico Lingüística descriptiva (o estructural) lingüística histórica Morfo Morfema Morfología Protolengua Sintaxis Vocabulario básico
Cuestiones críticas 1, ¿Por qué pudo fevorecer la selección natural el desarrollo del lenguaje en los humanos pero no en los póngidos? 2, ¿Qué sería mejor, hablar muchos idiomas dife¬ rentes o una lengua única universal? 3, ¿Puede imaginar alguna conducta o forma de pensar que lleve a las personas a adoptar o inven¬ tar nuevos vocabularios o algún modelo nuevo de habla?
Eiercicios de Internet i. Hay miles de lenguas en el mundo actual. Para encontrar cuáles son las diez l e r d a s más habladas véase: http:/Avww.5Íl,of�etfanologue/top.html. 2, Explore: http:/Avww.fiiesian.coin/í!gyplJitm para aprender la pronunciación de algunas palabras del idioma del antiguo Egipto, Basándose en lo aprendido aquí» haga una pequeña descripción de los términos 3. Lea la introducción sobre las lenguas bemba y cherokee en; )ri:tp:/ywww.�c5ta£f.buckDell.�i]/rbeard/ grammarslJitml, que tiene las gramáticas de algunos idiomas en la Red,
Lecturas sugeridas Akmajian, Demer� R. A. y Hatínish, R. M. An In-
troductiott to Language atid Comtnunicatiottt 4.� cd.
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Capítulo 15
Comunicación y lenguaie
Cambridge, MA: MTT Press, 1995. Después de revisar la es¬ tructura del lenguaje humano, los autores se centran en as¬ pectos concretos como el uso del lenguaje� la adquisición del lenguaje en los niños, y lenguaje y cerebro. Eidunt, B. G. (Ed-)- Uifiguaget CiAturet aaá Sockty: A Book of Readitigs, 1.� ed. Prospect Heights, IL: �A�veland, 1995. Un libro de lecturas que incluye algunos de los textos más sig¬ nificativos del estudio del lenguaje y la cultura dísde 1910 a 1990. Brown, C, H. y WiTKowsKj� S. R. «l�nguagfs Universakí>t AppendixB, en D, Levinson y Ai. J. Malone (Eds.). Tinvard Explaifúng Human Ctáture: A Critical Reviewof Úíe Firtdiftgs of Wíjr/wiííí CroiSf-Cu�íiiruJ Research. New Haven, CT: HRAP IVess, l9�p Un e�men $obr� lo$ universales en el lenguaje que abarca los universales en íonolcgía y gramática. Se cen¬ tra principalmente en secuencias desarrolladas del lexicón o vocabulario.
FoleYj W. a . j�ntfirtipíiíogiaíy Afi Introditcthti. Malden, MA: Blackv�élli 1997. Una amplia introducción a los es¬ tudios lir�ísticos relacionados con la Antropología. Hill, J. Do ApeS Kave Language? En C, R. Emb�r, M, Ember y P. N. Peregrine (Eds,). iíewíircíí Froftijers iti AnthfopóhgyUpper Saddle River, NJ: Prentice Hall� 199S. Prentice Hall/Simon & Schuster Custom PubUshing. Una compara¬ ción entre el lenguaje de los hunianos y el de los póngidos. Safir, E, Language: An Introductioii to tke Stwfy of Speedi. Nueva York: Harcourt Brace Jovanovich, 1949 (publicación Original de 19¿ 1). Una clásica Introducción a las lenguas bumanas yla forma en la que ¿stas varían. También estudia las relaciones entre el ler�ajé y el pensaniiento. Wardhaugh, R. j4jí to Sociolinguistkst 3.� ed. Ox¬ ford: Bladcwell, 1997, Esta introducción a los contenidos de la sociolingüística incluye, entre ottos temas, los cambios de lenguaje, el multilingüismo, los lenguajes criollos, las varia¬ ciones regionales y sociales� y el lenguají y género.
jkn
obtención de alimentos INDICE DEL CAPITULO
Recolección de alimentos Producción de alimentos Restricciones medioambientales en la obtención de alimentos Origen, difusión e intensificación de la producción de alimentos
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C a pí t ulo Ió
O b t e n c i ó n de alimentos
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nuestra sociedad� para la mayor partí de la gente� la obtención de alimentos consiste en ir al supermercado. £n sólo una hora pode¬ 0n mos adquirir en sus estantes la cantidad su¬ ficiente de comida como para mantenernos una semana. Las estaciones no nos afectan y semana tras semana sa¬ bemos que las existencias alimenticias estarán aUí. No pensamos cómo serían las cosas si no hubiera supermer¬ cados; no podríamos conseguir alimentos y sin ellos en un tiempo moriríamos de inanición. A pesar del viejo di¬ cho «no sólo de pan vive el hombre (o la muj er ) sin el pan o sus equivalentes no podríamos sobrevivir. La re¬ producción� el control social (el mantenimiento de la paz y el orden dentro de cada grupo), la defensa contra peli¬ gros externos así como la transmisión de conocimientos y técnicas a las generaciones futuras� ninguna de estas co¬ sas podría hacerse sin la energía proporcionada por el alimento. Pero no es sólo la energía lo requerido para po¬ der sobrevivir y reproducirse a largo plazo� ya que la obtención de alimentos supone una apropiada combina¬ ción de nutrientes en las distintas estaciones y a pesar de las alteraciones ambientales. La provisión de alimentos es también importante ya que la forma en que una sociedad los consigue es un indicador de otros aspectos culturales: desde las dimensiones de su comunidad y permanencia en un lugar concreto hasta el tipo de economía� el grado de desigualdad, el tipo de sistema político e incluso de sus estilos artísticos y sus creencias y las prácticas reUgiosas. En contraste con nuestras propias sociedades, la ma¬ yoría no ha contado con especialistas en la producción de alimentos. Casi todos sus miembros adultos estaban ocupados en la obtención de alimentos y durante millo¬ nes de años, los seres humanos obtenían estos recursos recolectando plantas silvestres, cazando animales salvajes o buscando carroña y pescando. La agricultura es un fe¬ nómeno relativamente reciente que data de hace aproxi¬ madamente unos 10.000 años, y la agricultura industrial o mecanizada no cuenta con más de un siglo- Las cosediadoras tienen un poco más de tiempo, pero las máqui¬ nas autopropulsadas han tenido que esperar hasta que se desarrollaran el sistema adecuado de combustión interna y la industria del petróleo, En este capítulo veremos de qué formas sociedades diferentes obtienen alimentos y comentaremos algunas de las características asociadas con los distintos modelos productivos� preguntándonos por qué las sociedades di¬ fieren en sus estrategias productoras de alimentos. Vere¬ mos cómo el medio ambiente físico tiene sólo un efecto restrictivo o limitante en la manera en que una sociedad obtiene la mayor parte de sus alimentos. Para explicar las diferencias de una forma más completa, nc»s preguntare¬
mos por qué las sociedades en el pasado prehistórico evolucionaron desde la recolección de los alimentos de la naturaleza hasta el cultivo de plantas y la cria de ani¬ males,
Recolección de alimentos La iecole la costumbre de las fiestas de los cerdos puede ser una forma de acabar con los excesos de producción de alimentos y almacenar el «crédito social» con los demás poblados» que le devolve¬ rán el crédito con fiestas similares, En algunas sociedades melanesias» la fiesta de los cer¬ dos constituye un elemento de competición entre los hombres que participan en ella. Los «grandes hombres» tratan de reforzar su estatus y prestigio por el tamaño de las fiestas que celebran. La reputación no se manifiesta por poseer más riquezas sino por repartirlas. Una situa¬ ción similar existe entre muchos grupos de nativos ame¬ ricanos del noroeste del Pacífico» donde un jefe puede poner de manifiesto su estatus celebrando un potlatch� En estas celebraciones» un jefe y su grupo regalan man¬ tas» piezas de cobre» canoas» grandes cantidades de alimentos y otros regalos a sus invitados- Con posteriori¬ dad» tanto el jefe que lo ha celebrado» como su grupo» se¬ rán invitados por otros asistentes a los potlatch que celebren ellos, En los potlatch el elemento competitivo entre los indígenas parece haberse incrementado desde que se produjo su contacto con los europeos, A causa del co¬ mercio de pieles» el número de géneros con los que comerciar se incrementó» con lo que se podía regalar un mayor número de cosas. Aunque» posiblemente» lo más importante de estos contactos fue que la población na¬ tiva de los indios declinó a causa de enfermedades como la viruela» introducida por los mercaderes euro¬ peos, Los parientes lejanos de los jefes sin herederos direc¬ tos pueden competir por sus derechos al título regalando más que los demás. Los jefes también pueden intentar atraer más hombres a sus poblados cuando tienen pocos habitantes por medio de espectaculares ceremonias de reparto. También los grupos diezmados pueden unirse a otros grupos para celebrar los potlatch. Así» cuando la
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Capítulo 17
S e t e ma s económicos
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población Tlingit disminuyó drásticamente en la década de 1910j los grupos femiliares se unieron para reunir ar¬ tículos suficientes para celebrar un potlatch, Aun supo¬ niendo que el sistema de los potlatch fuera manirroto y los artículos regalados fueran destruidos en semejante competición � el sistema probablemente serviría para equilibrar la distribución de artículos entre los grupos competidores. Los indios Pomo de California central tenían otro sis¬ tema para poner de manifiesto su crédito por medio de la generosidad. Un poblado con exceso de producción de pescado o bellotas» podía invitar a otro a una fiesta� En oompensación� los huéspedes entregaban a cambio cierto número de abalorios* Antes de comenzar la jornada de la fiesta� el jefe del poblado de los invitados reunía de cada familia tantas sartas de abalorios como era posible. Días después de celebrarse el festín� dicho jefe canjeaba los abalorios por el suministro de pescados o bellotas exce¬ dentes. Cada miembro del poblado visitante recibía una cantidad de excedente proporcional al número de abalo¬ rios con los que había contribuido� Pero los miembros de un poblado no eran invitados a un festín a menos que trajeran los abalorios para comerciar» de la misma forma que ellos tampoco los traerían sino hubieran recibido en otras ocasiones el regalo de alimentos. De esta forma» en¬ tregando pescado y bellotas a cambio de abalorios» se fortalecían los lazos y el crédito social para los tiempos de escasez. Posteriormente» si en el poblado donde se ha¬ bía celebrado el festín escaseaban en algún momento los aÜmentos� los nativos podrían entregar los abalorios a cambio de alimentos a otro poblado que tuviera un ex¬ ceso de producción. La fiesta de comercio tenía el efecto de equiÜbrar el consumo de alimento no sólo en un po¬ blado determinado» sino en toda una amplia región. En un mismo nivel de análisis» la fiesta melanesia de los cerdos» los potlatch del noroeste del Pacífico y las fies¬ tas comerciales de los Pomo eran cambios recíprocos de productos entre comunidades o poblados, Pero estos in¬ tercambios no son la versión entre distintas comunida¬ des de los regalos recíprocos entre individuos» ya que estas fiestas las organizaban pueblos recolectores y po¬ seían otro sistema de distribución al que los antropólo¬ gos denominan rráistribución,
Redístríbucíóisí La redistribución es la acumulación de artículos o trabajo poruña persona en particular o en un lugar par¬ ticular» para efectuar luego la consiguiente distribución. Aunque la redistribución existe en todas las sociedades» sólo llega a ser un mecanismo importante en las que tie¬ nen jerarquías políticas» esto es» jefes o funcionarios es¬
pecializados y administraciones. En todas las sociedades existe algún tipo de redistribución» por lo menos dentro del grupo �miliar, de forma que los miembros de la &milia acumulan su trabajo o sus productos en el con¬ junto de los bienes femiliares. Pero en muchas sociedades existe poca o ninguna redistribución más allá de la femilia. Parece que la redistribución sobre bases territoriales emerge cuando hay un aparato político para coordinar la recolección y distribución centralizada de articulos o para movilizar el trabajo con algún fin público. En el antiguo reino africano de Bunyoro> en Uganda occidental» el rey (llamado My�íimíí) se reservaba gran parte de la riqueza del país para él y para sus �miliares más allegados. El tenía autoridad para garanti¬ zar a sus jefes subordinados el uso tanto de las tierras como de otros recursos naturales; ellos» a su vez» tenían ese poder en relación con el resto de la población. A cam¬ bio» todo el mundo tenía que entregar al Mwírfímfí gran¬ des cantidades de alimentos» equipamientos e incluso trabajo. El Mwíwínfl redistribuía entonces estos bienes y servicios» en teoría a toda la comunidad. El era denominado con distintos nombres que en&tizaban su generosidad: («el que calma la angustia») y (ítel que corre para ayudar»). Pero está daro que mucho de lo que el rey redistribuía no encontraba el camino para llegara la gente común» que era la que pro¬ ducía todos los bienes. En vez de esto» la riqueza se distribuía generosamente según el rango de cada uno dentro del Estado, Otros sistemas de redistribución son más equiÜbrados» como por ejemplo» el de los Buin de Melanesia donde» «el jefe vive» viste y se alimenta exactamente igual que sus siervos». Aunque el jefe obsequie la mayoría de los cerdos» todos disfrutan por igual en el consumo de sus riquezas. En general» en los sitios en los que la redis¬ tribución es importante» como en sociedades con altos niveles de productividad» la riqueza es más idónea que la pobreza para beneficiarse de las redistribuciones, ¿Ciué explica la aparición de un sistema de redistribudón? Elman Service sugiere que se desarrolla sobre todo en las sociedades agrícolas que poseen subregiones sem¬ bradas con diferentes tipos de cosechas o de recursos naturales. Los recolectores de alimentos pueden benefi¬ ciarse de las variaciones ambientales sólo con desplazarse a otras áreas. Con la agricultura» la solución es mucho más difidl» aunque puede ser más :&cil trasladar los dife¬ rentes productos a otro lugar a través de las distintas re¬ giones. Si la demanda para diferentes productos o recursos llega a ser demasiado grande» la reciprocidad entre los individuos puede ser desigual» por lo que puede ser útil contar con algún jefe para coordinar los inter¬ cambios, yá vimos en las fiestas de intercambio de los
Capítulo 17
Pomo qucj aunque parecía que participaba la totalidad de la cpmunidad en los intercambios recíprocosj el estceso di producción de alimentos y de abalorios lo mane¬ jaban los jefes de los poblados» Marvin Harria añrmó que la redistribución es más propia de la agricultura� pero por razones diferentes» Sos¬ tenía que los festines competitivos» como los de Nueva Guinea» se adoptan porque estimulan a la gente a trabajar con más energía para producir más de lo que realmente necesitan, ¿Por qué tiene que ser adaptativa esta actitud? Harris dice que con la agricultura la gente tiene que pro¬ ducir más de lo que necesita porque así pueden prote¬ gerse contra crisis como las producidas por cosechas malas. El grupo que celebra esas fiestas se asegura indi¬ rectamente contra las crisis acumulando mérito social ante otros poblados» que dispensarán un trato recíproco en el futuro. Por el contrario» la inducción a recoger más de lo que se necesita puede que no sea ventajosa para los grupos de recolectores» que se pueden perder en el largo camino del exceso de productos recogidos»
Merca do o cambio c o m e rc ia l Cuando hablamos de mercados pensamos habitualmente en lugares llenos de colorido en los que se com¬ pran y venden artículos» y se efectúan los cambios» normalmente» con dinero» En nuestra sociedad tenemos supermercados» mercados y otros lugares en donde comprar y vender� como almacenes� tiendas y cen¬ tros comerciales» Cuando nos referimos a mercado o cambio comercial» los economistas y antropólogos eco¬ nomistas se están refiriendo a intercambios o transaccio¬ nes en las que los «precios» están sujetos a la ley de la oferta y la demanda» tengan lugar o no dichas transaccio¬ nes en los mercados como lugares de compra y venta» Los intercambios de mercado afectan no sólo al intercambio (comprar y vender) de bienes» sino también a las transac¬ ciones de trabajo» tierras» arrendamientos y crédito» En lo sup>erficial» muchos intercambios de mercado se asemejan a la reciprocidad equilibrada» Una persona en¬ trega algo y recibe otra cosa a cambio. Pero ¿en qué se diferencia el intercambio de mercado del de la recipro¬ cidad equilibrada? Esta diferencia es fócil de señalar, porque la moneda está directamente impÜcada en el in¬ tercambio» ya que en la reciprocidad se define como no impÜcada aunque en el intercambio de mercado no siempre se necesita que la moneda esté implicada direc¬ tamente. Por ejemplo» el propietario de una tierra con¬ cede a un arrendatario el derecho a usada a cambio de una parte de la cosecha. Por lo tanto» para denominar a una transacción intercambio de mercado» tenemos que preguntarnos si realmente es la oferta y la demanda lo
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que determina el precio. Si un propietario de tierras so¬ lamente recibe del arrendatario un regalo» no debería¬ mos llamar a esto cambio comercial» como tampoco el regalo navideño hecho a un profesor es el pago por sus clases» Si los arrendatarios de las tierras tienen que pagar con una gran parte délas cosechas porque la demanda de tierras es alta o si el terrateniente baja sus exigencias por¬ que son pocos los arrendatarios que buscan tierra» en¬ tonces sí debemos llamar a esto transacción de mercado o cambio comercial TIPOS DE MONEDA. Aunque los intercambios de mercado no precisan efectuarse con dinero» la mayoría de las transacciones comerciales> particularmente en nuestros días» se efectúan con lo que llamamos dinero, Algunos antropólogos definen el dinero según las fun¬ ciones y características de la moneda corriente en circu¬ lación usada en nuestra propia sociedad o en otras sociedades complejas» y por la que pueden intercam¬ biarse todos los artículos» recursos y servicios» Según esta definición� el dinero desempeña las funciones básicas de servir como medio aceptado de intercambio> un valor general y un almacén de la riqueza. Como medio de in¬ tercambio» permite valorar todos los artículos y servicios bajo un mismo punto de vista objetivo; según esto pode¬ mos decir que un objeto o servicio cuesta más o menos dinero. El dinero también tiene la propiedad de no ser perecedero» recuperable o almacenable y casi siempre es transportable y divisible» de forma que cualquier trans¬ acción puede hacerse comprando o vendiendo artículos y servicios de distintos valores. A pesar de que técnicamente la moneda puede ser de cualquier material» los primeros sistemas monetarios usaron metales raros como el oro o la plata» ya que son relativamente blandos y pueden fundirse y moldearse íácUmente en distintos tamaños y pesos» Las primeras mo¬ nedas de uso general conocidas se cree que fueron hechas por los Lidios en Asia Menory por los chinos» en el siglo VII a. C, Hay que observar que la moneda tiene poco o nii�n valor intrínseco» es la sociedad la que le concede ese valor» Actualmente» en EE UU tanto billetes de banco» cheques y tarjetas de crédito o de débito se aceptan co¬ mo moneda» y la moneda se transfiere» cada vez más» de forma electrónica» Para el uso general la moneda se utiliza tanto para las transacciones comerciales (comprar y vender) como para las no comerciales (pago de impuestos» regalos per¬ sonales» contribuciones a fines religiosos y otras dona¬ ciones)» La moneda también es acumulable» constituye una forma de atesorarla riqueza: el oro en polvo o en pe¬ pitas es más fócil de transportar que los sacos de harina; el papel moneda» los cheques bancarios y las tarjetas de
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Antropología Aplicada Impacte del sistema mundial. La def�restacién del Amainas Cuando hablamos de los siste¬ mas económicos� tenemos que te¬ ner en mcinte que probablemente no ha existido ningún grupo que haya estado totalmente aislado de la influencia exterior en los eventos económicos» políticos» sociales o medioambientales. En el mundo actual» con la difusión de la de¬ manda y la oportunidad de una economía de mercado a nivel mun¬ dial» ni siquiera los grupos más autosuficientes pueden evitar los efectos de sus relaciones con el mundo exterior. La mayor selva lluviosa está irri¬ gada por el río Amazonas y sus afluentes. Con unas dimensiones de más de mil miUones de kilómetros cuadrados» no solamente es el ho¬ gar de muchas culturas indígenas ampliamente autosuficientes» sino que además posee alrededor del 50 por ciento de todas las plantas y animales de la tierra, Pero tanto la selva del Amazonas como otras sel¬ vas tropicales están desapareciendo alarmantemente por la forma abudva en que se están explotando. Hay quien sugiere que la demanda mundial de madera» hamburguesas y oro es» en gran medida» la respon¬ sable de la disminución de la selva amazónica. Lo mismo que muchos bosques tropicales» el Amazonas posee gran número de árboles de maderas co¬ diciadas. Los bosques de África y Asia han sufrido una explotación tan excesiva que los han reducido mucho» por lo que la demanda de madera de la Amazonia ha crecido considerablemente. Por si esto fuera poco» la Agencia Brasileña
para el Desarrollo del Amazonas» ha ofrecido incentivos por adarar la selva con el objetivo de construir ranchos ganaderos» que pueden surtir de carne a las empresas de hamburguesas para los restaurantes de comida rápida. El exceso de ga¬ nado está consumiendo los pastos» que difícilmente volverán a repo¬ blarse como antes. Las poblaciones indígenas se encuentran a menudo con una tie¬ rra esquilmada por madereros» ga¬ naderos y mineros que tratan de asolar sus territorios. Con menos tierra» estos recolectores y sus prácticas económicas tradicionales están en franca decadencia. Pero es ingenuo pensar que los nativos es¬ tán interesados sólo en mantener sus economías tradicionales; tamHén aceptan con frecuencia el reto del desarrollo económico: pueden perder algunas tierrasi pero ven¬ den sus derechos a los madereros y mineros a cambio de dinero con el que pueden comprar lo que nece¬ sitan o desean. Tanto los expertos en desarrollo como los antropólogps están buscando formas de compatibilizar el desarrollo sin destruir o degradar el medio amWente. Por ejemplo» a los grupos de indígenas se les anima para que recolecten nueces de Brasil para la venta» un recurso silvestre pero renovable. A otros se les insiste para que cosechen el látex (goma natural) y los corazones de palmi¬ tos. También las plantas medici¬ nales poseen un importante valor económico para las compañías multinacionales farmacéuticas y químicas» que han descubierto que
la conservación de la biodiversidad puede ser muy ventajosa económi¬ camente tanto para ellas mismas como para los indígenas y los cien¬ tíficos que estudian dicha biodi¬ versidad. ¿Puede el desarrollo ser sostenible? Esto es: ¿hay recursos renova¬ bles (tales como los árboles) que permitan la productividad econó¬ mica y la protección ambiental a la vez? Aunque es posible alguna forma de desarrollo sostenible» su o�anización requiere los esfuerzos coordinados de todos los afectados que» además» tienen que participar en todas las decisiones que se to¬ men. Nos guste o no» el desarrollo económico y el intento por conse¬ guido no están muy distantes. Pero necesitamos hacer algo más que aceptar o lamentar el desarrollo económico. En particular» hay que investigar los cambios que causará: el impacto sobre las personas» las plantas» los animales y el medio ambiente. Como lo más importante de todo es el respeto a los derechos humanos» es necesario que se escu¬ che a las personas cuyas vidas se puedan ver más afectadas» para comprender cuáles son sus necesi¬ dades» así como la opinión de los nuevos ocupantes. th« Aina20ii>>i �eritific Atnerkatij julio 1993,91 '99í Emilio F. ¿ÍOiaa, 7Ttrc*i4�íí.AmílEyes; The Mumati Ecúhgy qfAmazámati Poptíhtiofis (lowa City; Uiiiversity of Ums. Ptíss, I993)i Robert Wiüterbüttoin, «The Tropical Foreslry Plan: 1$ ít WoTkmg�» en F�mela J. ei, GSohai Eco$y$t�s: Creating Opfi'on; ikrough Aníhnjp�lQgical Perspiscti'W, ATAM BuflffÍH 15 �-70.
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plástico también son más fóciles di transportar que un rebano di ovejas o cabras. £n otras muchas sociedades el dinero no es un medio de cambio para todos los usos. Así� muchas gentes cuya producción de alimentos per cápita no es suficiente para poder mantener a una gran cantidad de no-productores de alimentos poseen una mon�a para uso especial. Ésta consiste en una serie de artículos de valor que sólo se pueden cambiar por determinados artículos o servi¬ cios dependiendo del lugar o según la reciprocidad equi¬ librada. En algunos lugares de Melanesia se asigna a los cerdoSy según su tamaño� un valor en forma de moneda� la longitud de las hileras de conchas ensartadas se mide en unidades aproximadamente similares a U distancia que poseen los brazos extendidos de un hombre. Según su tamaño> un cerdo tendrá asignado un valor en dece¬ nas de estas sartas de conchas hasta cien unidades. Pero con esta «moneda� una persona no puede adquirir to¬ dos los bienes o servicios que pueda necesitar. De forma similar� a cambio de un «regalo de riqueza»j como por ejemplo mantas» un nativo del noroeste del Pacífico po¬ dría cambiar alimentos pero no otros artículos o servi¬ dos� El regalo actúa� en estos casos» como un «recibo» que capacita a la persona que ha hecho el regalo a reci¬ bir un poco más tarde una cantidad proporcional de ali¬ mentos. GRADOS DE COMERCIALIZACIÓN. La mayoria de las sociedades no estaban completamente comerciali¬ zadas cuando fueron descritas por primera vez por los exploradores» misioneros y antropólogos. Tanto es así» que la mayoría de las sociedades descritas no conocían los mercados ni los cambios comerciales para efectuar las permutas o distribuir bienes y servicios. Pero el inter¬ cambio comercial ha conseguido serla forma dominante de distribución en el mundo moderno. La mayoría de las sociedades del pasado etnográfico se incorporan actual¬ mente como grandes naciones-Estado; por ejemplo» las islas Trobriand y otras sociedades de Melanesia son ac¬ tualmente distritos de la nación de Papua Nueva Guinea. Las ventas superan en la actualidad las de las nacionesEstados» de modo que el mundo es ahora un mercado multinacional. Pero hay considerables variaciones en el grado en que las naciones dependen actualmente de mercados o cambios comerciales. Muchas naciones asignan todavía tierras sin ser previamente compradas y distribuyen ali¬ mentos y otros bienes de primera necesidad por recipro¬ cidad y redistribuciÓHj participando de forma superficial en el cambio de mercado. Éstas son sociedades en transi¬ ción; su forma tradicional de subsistencia está en transfbrmación hada la comerdalizadón. Por ejemplo» entre
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los Luo de Kenia ocddental» la mayoría de las femilias ru¬ rales todavía poseen tierras que les asignan los grupos &miliares.La mayor parte del alimento que consumen lo producen ellos mismos» pero muchos hombres se en¬ cuentran ya trabajando por un salario (unos más cerca y otros más alejados) en pueblos y dudades donde traba¬ jan durante uno o dos años. Los salarios se emplean luego en pagar los impuestos estatales» pagar el colegio de los niños y comprar productos comercializados tales como ropas» lámparas de petróleo» radios» pescado del lago Nyasa» té» azúcar y caíé. En ocasiones las femilias venden sus excedentes agrícolas o los artículos que febrican» como esteras de cana. Esta economía no está total¬ mente comercializada» pero lo estará en el futuro. En el capítulo sobre cambios culturales comentamos las imphcadones y los efectos de estas transidones hacia eco¬ nomías más comercializadas» transición que es un fenómeno a nivel mundial. Lo que denominan los antropólogos evoiwmias mmptsims son» a veces» formas de economías más comercia¬ lizadas que las transidonales de subsistencia» como la citada de los Luo. Los campesinos también producen ali¬ mentos de sobra para su propio consumo» por lo que venden parte de su producdón de excedentes (alimentos» otros bienes o trabajo) a otros» y la tierra es uno de los bienes que compran» alquilan y venden. Pero a pesar de que su producción se comercializa algunas veces» las de estos campesinos todavía no son sodedades tan comer¬ cializadas como las de los labradores de las sociedades in¬ dustrializadas» quienes comercializan en el mercado todas o casi todas sus cosechas por todos o casi todos los artículos que necesitan. En las sodedades totalmente comercializadas» como las nuestras» el mercado o los intercambios comerciales dominan la economía. Los predos y salarios se regulan� o al menos se ven significativamente afectados» por la fuerza de la oferta y la demanda. Una economía moderna industrial o postindustrial puede tener repercusión in¬ ternacional» lo mismo que los mercados nadonales en los que todo tiene su predo estableddo en términos de moneda: recursos naturales» trabajo» bienes» servidos» objetos de prestigio» objetos religiosos y ceremoniales» etc. La reciproddad está reservada a los miembros de la femilia y amigos o permanece detrás de los escenarios en las transacciones de los negocios- Sin embargo» la redistribudón es un mecanismo importante que se practica en forma de impuestos y en el uso de rentas públicas para transferir pagos y otros benefidos a las Emilias de bajo poder adquisitivo (seguridad social» seguros» cui¬ dado de la salud» etc.). No obstante» el intercambio comercial es la forma más importante en la que se distri¬ buyen los artículos y los servidos.
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¿POR QUÉ SE DESARROLLAN LA MONEDA Y EL [NTERCAMBtO COMERCIAL? La mayoría d« los economistas creen que la moneda se inventa en una so¬ ciedad o se copia de otra� cuando d comercio se incre¬ menta pero el tráñcQ comercial es insuficiente* Lo más importante oían do se trafica con fi�cuenda es la cre¬ ciente dificultad existente para encontrar a una persona que tenga algo que uno busca y que desee algo que uno tenga. Por eso» el dinero fecilita el intercambio» ya que es un valor que se puede intercambiar por cosí todo� lo que hace de él un eficiente medio de intercambio cuando el comercio llega a ser importante. Por el contrarioj mu¬ chos antropólogos no relacionan el origen del dinero o b s intercambios de mercado con las necesidades del co¬ mercio. En su lugar» relacionan el origen del dinero con varios «pagos» no comerciales como el kula> los abalorios de los Pomo y los impuestos que hay que pagara las au¬ toridades políticas. Todas estas explicaciones sobre el dinero sugieren que éste se encuentra solo en las socie¬ dades con más altos niveles de desarrollo económico» si bien algunas sociedades muy simples conocían ya el di¬ nero cuando sociedades dominantes más comple� to¬ davía no lo habían introducido.
Casi todas las teorías sobre la evolución del dinero y el intercambio de mercado asumen que la mayoría de los productores de alimentos tienen habitualmente exceden¬ tes que desean intercambiar, Pero en primera instancia» ¿qué es lo que hace que la gente tenga excedentes? Quizá estén motivados a producir más cuando necesitan conse¬ guir artículos que vienen de lejos y no conocen a los su¬ ministradores� De esta forma» algunos teóricos tratan de asimilar el intercambio comercial a algo que empieza con un comercio externo e intersocial donde la Emilia no estaría involucrada; las transacciones comprenderían asi desde el regateo al intercambio de mercado� Finalmente» algunos piensan que cuando las sociedades se hacen más complejas y están más densamente pobladas, las relacio¬ nes entre los individuos son menos femiliares y amisto¬ sas y la reciprocidad es también menos creíble. Quizá por esto los comerciantes son fi�cuentemente» en las zonas en desarrollo» extranjeros o inmigrantes. En cualquier caso» Frederic Pryor descubrió en su in¬ vestigación transcultural que todos los tipos de intercam¬ bio de mercado» artículos, trabajo» tierra y crédito, están más relacionados con altos niveles de productividad económica. Pryor también encontró que el intercambio
Lo$ patrocinadores de la fie$ta gastan gran cantidad de dinero en alinnento$ y bebidas, lo mi$mo que en músicos y bailarinas. Aquí vemos una fiesta en Oaxaca (México).
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de mercado de bienes aparece en niveles más bajos de desarrollo económico de lo que lo hace el intercambio de mercado del trabajo y del crédito; el intercambio de mer¬ cado de la tierra� probablemente a causa de su asocia¬ ción con la propiedad privada� aparece sobre todo en los más altos niveles de productividad. Sorprendentemente las sociedades más pequeñas tienden a tener un gran in¬ tercambio de mercado o comercial con otras sociedades» en tanto que las sociedades mayores presumiblemente pueden conseguir más de lo que necesitan de su propia sociedad; por ejemplo� China, a lo largo de toda su historia» ha tenido relativamente poco comercio interna¬ cional. POSIBLES INFLUENCIAS NIVELADORAS EN LAS ECONOMÍAS COMERCIALES. Como veremos en el
próximo capitulo» las sociedades que dependen sustandalmente del mercado o de los cambios comerciales tien¬ den a poseer marcadas diferencias de riqueza entre su gente. No obstante� puede haber mecanismos que dismi¬ nuían las desigualdades que, al menos parcialmente� ac¬ túen como artificios niveladores. Algunos antropólogos han sugerido que la compleja fiesta que se celebra en las tierras altas de Latinoamérica puede ser un mecanismo que tienda a igualar los medios disponibles. En estos po¬ blados campesinos se celebran anualmente fiestas en ho¬ nor de importantes santos locales. Lo realmente curioso de ellas es la sorprendente cantidad de dinero y trabajo que puede aportar la Emilia que las patrocina. Esta femilia patrocinadora contrata especialistas para celebrar el ri¬ tual, paga los servicios eclesiásticos, a los músicos, los trajes de los bailarines y cubre los costes de bebida y co¬ mida para toda la comunidad que pueden superar, fócilmente, los salarios de todo el año. Algunos antropólogos creen que, aunque el indio rico que patrocina las fiestas está distribuyendo claramente buena cantidad de su riqueza entre los pobres de su po¬ blado y de otros poblados próximos, las fiestas realmente no nivelan la riqueza entre todos. Primero, porque una igualdad económica verdadera exigiría la distribución de los recursos importantes, como la tierra o los animales domésticos, por lo que la fiesta sólo incrementa, al me¬ nos temporalmente, el grado general de consumo. Se¬ gundo, los recursos distribuidos por los patrocinadores son generalmente recursos extra que se han ido aco¬ piando específicamente para la fiesta, habiéndolos acu¬ mulado con la suficiente anticipación. Tercero, y quizá lo más importante, las fiestas no parecen haber reducido a largo plazo las diferencias económicas en ninguno de los poblados, En naciones como la nuestra> el ingreso de impuestos y los programas de asistencia social, como la ayuda en si¬
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tuaciones catastróficas y de seguridad social, ¿pueden ser fectores niveladores? En teoría, nuestro sistema de im¬ puestos está pensado para ello de acuerdo con el total de tasas y otros ingresos estatales. Pero sabemos que esto no es así, ya que aquellos que tienen los ingresos más altos pueden deducir, normalmente, gran proporción de lo que tendrían que pagar, por lo que habitualmente el in¬ greso estatal por impuestos es muy inferior a lo que de¬ bería ser. Por ello, nuestro sistema de impuestos sólo sirve para ayudar a algunos a escapar de la extrema po¬ breza, aunque, lo mismo que las fiestas, no ha eliminado las marcadas diferencias económicas.
CD-ROM Ejarcicios de concapto 111-20
Sumario 1. Todas las sociedades poseen sistemas económicos que pueden o no adoptar el uso del dinero. Todas tienen costumbres que especifican el acceso a los recursos natu¬ rales, las vías usuales para transformar o convertir estos recursos» por medio del trabajo, en necesidades y en otros artículos o servicios deseados y las formas de dis¬ tribuir y cazar, intercambiar artículos y servidos. 2, La regulación del acceso a los recursos naturales es un fector básico en todos los sistemas económicos. El concepto de propiedad individual o privada de la tierra (incluyendo el derecho a usar sus recursos y el de vender o disponer de ellos) es común entre los agricultores in¬ tensivos. En contraste, los recolectores, horticultores y pastores generalmente carecen de propiedad individual de la tierra. No obstante, entre los pastores nómadas, los animales se consideran propiedad &miliar y general¬ mente no se comparten. 3. Cada sociedad utiliza una tecnología que induye herramientas, construcciones y requiere habilidad. Aun¬ que los recolectores de alimentos y horticultores tienden a creer que las herramientas son propiedad del que las febrica, compartir las herramientas es tan fi-ecuente que el concepto de propiedad de las mismas carece de sen¬ tido. Entre los agricultores intensivos la febricación de herramientas tiende a ser una actividad especializada: las herramientas no se comparten, excepto aquellas que han sido adquiridas por varias personas. 4. Los incentivos para el trab� varían transculturalmente. Muchas sociedades producen lo necesario para su autoconsumo; si hay más consumidores, los productores trabajan más- En algunas economías de
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subsistencia» la gínte trab�a más para obtener d reconpcimiento social que supone dar a los demás. El trabajo forzado tiene lugar sólo en sociedades más complejas, 5» La división del trabajo por géneros es universal. En muchas sociedades no industriales� los trabajos más complejos se realizan por medio de la cooperación del grupo femiliar. Tal cooperación no existe en las socieda¬ des industrializadas. Ed general» cuanto más avanzada técnicamente está una sociedad» produce más excedentes y posee más miembros dedicados a los trabajos especia¬ lizados. 6. La organización del trabajo alcanza las mayores cotas en las sociedades complejas; los grupos de trabajo tienden a estar organizados formalmente y algunas veces existe una obligación de participar en ellos. En las socie¬ dades recolectoras y horticultoras�por el contrario» existe muy poca organización formal del trabajo. 7, Tanto artículos como servicios se distribuyen en todas las sociedades por sistemas dasificables de tres formas: reciprocidad» redistribución e intercambio co¬ mercial o de mercado. La reciprocidad consiste en dar y tomar sin hacer uso de ningún tipo de dinero; general¬ mente asume dos formas: reciprocidad generalizada y re¬ ciprocidad equilibrada. La reciprocidad generalizada consiste en dar algo sin retorno inmediato o previsto. En la reciprocidad equilibrada» el intercambio individual de géneros o servicios va acompañado de un retorno inme¬ diato o a corto plazo. 8. La redistribución es la acumulación de trabajo o de artículos por una persona particular o en un lugar privado» con el fin de efectuar la subsiguiente distribu¬ ción. Llega a ser un mecanismo importante de distri¬ bución solamente en sociedades con jerarquías políticas, 9. El intercambio de mercado o intercambio comer¬ cial» donde los «precios» dependen de la oferta y la de¬ manda» tiende a surgir con el incremento de los niveles de productividad económica. Especialmente en nuestros días» el intercambio de mercado afecta normalmente a todos los tipos de formas de intercambio (dinero). En la actualidad» la mayor parte de las sociedades están comerdalizadas» al menos parcialmente; el mundo está convir¬ tiéndose en un único sistema de mercado.
Potlacht Reciprocidad Reciprocidad equilibrada Reciprocidad generalizada Redistribución Teoría del forrajeo óptimo
Cuestiones críticas 1. ¿Qué fectores pueden influir negativamente en la construcción de un mundo de recursos sosteniblesí 2. ¿Cuáles son los efectos probables de una econo¬ mía postindustrial en la que una gran proporción de su población tiene un acceso económico a computadores e información? 3. ¿Espera algún cambio apreciable en el foturo so¬ bre la acumulación de los recursos gestionados de forma privada? Exponga su5 razones.
Ejercicios de Internet 1. Para una introducción a la Antropología econó¬ mica» visite una de las organizaciones dedicadas en ex¬ clusiva a este campo. Busque la Sociedad para la Antropología Económica (Society forEconomicAnthropology) en un buscador y lea sobre alguna reunión pro¬ fesional pasada o futura. 2. El concepto de desarrollo sostenible es muy com¬ plejo. Explore alguno de los portales sobre este tema como: http:yAvww.mi.org/esaysiistdev, ¿Cuáles son algu¬ nos de los tópicos discutidos en este lugar?» y ¿cuáles son de relevancia directa para este capítulo? 3. Encuentre en Internet al menos cuatro portales relacionados con el trabajo en Africa. Resuma sus hallaí�os. Por ejemplo: l]ttpr//www5ul..stanford,eduy deptsy&s�africayiabor.htmL. 4. El dinero es un concepto importante. Visite httpr/ywww-ex�c-ukRDaviesy arian/ainserychroiio.htinl para aprender sobre los sistemas monetarios del pa¬ sado. Examine el papel desempeñado por el dinero du¬ rante el siglo I d C, y en el 499 d. C. en el Imperio Romano.
Glosario de términos Anillo del fóííf? Campesionos Corvea Dinero de uso especial Dinero de uso general Intercambio comercial o de mercado
Lecturas sugeridas Blanton� R. E. Variation in Econqmy. En C, K. Ember y M. Eniber (Eds,)' CrtM;s-C«/íunflí Resea�hfi>T SdOaJ Upper SaddleRiver NJ: Prenti« Hall, 199S. Prentice Hall/Sinion 5c Schustcr Custoni Publishing. Una breve visión de conjunto para títudiantíS de íX>nccptos y desafíos planteados por las
Capítulo 17 Set e mas económi cos €Stu socialmente estratifiaidasy �sto esjposeen grupos so¬ ciales como &miliasj clases o grupos étnicos con acceso diferente a importantes ventajas como los recursos económicosi el poder y el prestigio¿Ha existido siempre la desigualdad social? Los antro¬ pólogos, basándose en observaciones de primera mano efectuadas sobre sociedades recientes, dirían que na Para estar seguros, hasta las sociedades más simples (en el sen¬ tido tecnológico) tienen algunas diferencias en ventajas basadas en la edad, el talento o el géneros los adultos po¬ seen más alto estatus que los ninos, los capacitados más que los discapacitados, los hombres más que las mujeres (en el próximo capítulo estudiaremos la estratificación de �nero). A pesar de todo, los antropólogos dirían que las sociedades igmlitarias existen allí donde los grupos soáaks tienen los mismos derechos u oportunidades. Como vimos en el capítulo anterior, los sistemas económicos de muchas sociedades de recolectores y de horticultores pro¬ mueven igual acceso a los recursos económicos para to¬ das las femilias de su comunidad. Todas esas sociedades también tienden a enfetizar el hecho de compartir los ali¬ mentos y los demás bienes, lo que hace que se anule cada pequeña desigualdad en los recursos entre las femilias. Hasta hace aproximadamente 10.000 años todas las socie¬ dades humanas dependían de los alimentos que cazaban, recolectaban o pescaban. Sería, por tanto, de esperar, que la igualdad caracterizase a la mayor parte de la historia de la humanidad, cosa que sugieren los arqueólogos, y que las desigualdades sustanciales aparecieran sólo cuando nacieron las comunidades permanentes con sistemas po¬ líticos centralizados y agricultura intensiva, es decir, en los últimos 10.000 años. Antes de esto, la mayor parte de las sociedades probablemente fueron iguaÜtarias, En el mundo actual, las sociedades igualitarias han ido desapa¬ reciendo a causa de dos procesos: la extensión global del intercambio comercial o de mercado y la incorporación voluntaria o involuntaria de las personas en los extensos ástemas políticos centralizados. En las sociedades moder¬ nas algunos grupos poseen más ventajas que otros: dichos
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grupos pueden incluir a grupos étnicos. Esto es, la diversi¬ dad étnica está asociada casi siempre a diferentes accesos a las ventajas. Cuando la diversidad étnica está asociada con diferencias físicas como el color de la piel, la estratifi¬ cación social puede dar lugar al mcismoy creencia de que algunos grupos «raciales» son inferiores a otros. Los sistemas de estratificación social están fuerte¬ mente relacionados con la línea de actuación de que los recursos económicos son asignados, distribuidos y con¬ vertidos por medio del trabajo en artículos y servidos. Por tanto, no existirían desigualdades sustanciales si todo el mundo tuviera idéntico acceso a los recursos econó¬ micos. Aunque la estratificación no debe entenderse so¬ lamente en términos de recursos económicos; hay otros aspectos como prestigio y poder que pueden estar distri¬ buidos desigualmente. Primero estudiaremos la forma en que las sociedades se diferencian según sus sistemas de estratificación y luego intentaremos explicar el por¬ qué de esas diferencias.
Variaciones en el grado de desigualdad social Las sociedades se diferencian en la forma en que los grupos sociales, lo mismo que los individuos, tienen dis¬ tinta accesibilidad a las ventajas. En este capítulo nos ocuparemos de un acceso diferencial o desigual a tres ti¬ pos de ventajas: riquezas o recursos económicos, poder y prestigio. Como vimos en el capítulo anterior, los recwrsos económicos pueden variar desde territorios para la caza o la pesca a tierras cultivables o dinero; los diferen¬ tes grupos sociales de una sociedad pueden tener o no igual acceso a estos recursos. El poderla segunda ventaja, es la habilidad para conseguir que otros hagan lo que no les gustaría hacer; el poder es la influencia basada en la amenaza de la fuerza. Cuando determinados grupos de una sociedad poseen reglas o costumbres que les causan un acceso desiguala la riqueza o a los recursos, también suelen tener un acceso desigual al poder. Por ejemplo, si hablamos de una «empresa local»j nos referimos a que esa empresa tiene como empleados a la mayoría de los residentes de la localidad y que tiene un control conside¬ rable sobre ellos. Finalmente, está la ventaja á ú prestigio. Cuando hablamos de prestigio queremos decir que alg�ien de algún grupo está considerado con respeto u ho¬ nor particular. Aunque es cierto que no hay siempre un acceso idéntico de los individuos al prestigio (a causa de las diferencias de edad, género o talento), también lo es que según el registro etnográfico, algunas sociedades no tienen grupos sociales con desiguales posibilidades de al¬ canzar el prestigio.
Capítulo 18
Estratificación social: clase, etnicidad y racismo
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Tabla 18/1. La estratificación en los tres tipos de sociedades. Tipo de sociedad �aldad EUngp Gáse/casta
Racursos económicos
Poder
No Ko Sí
Ko No Sí
Prestigio
Los antropólogos distinguen convencionalmente tres tipos de sociedades según el grado por el que los diferen¬ tes grupos sociales pueden tener acceso a las mismas oportunidades: son las sociedades igmliiuriast de rango y de cteí (véase la Tabla 18J), Otras sociedades» según el registro etnográfico» no se dejan fécilmente clasificar en ninguno de estos tres tipos; como ocurre con todas las clasificaciones esquemáticas algunas clases se sitúan en una posición intermedia entre dos grupos* Sociedades igualitarias son las que no contienen grupos sociales con mayor o menor acceso a los recursos económicos» el po¬ der o el prestigio» Sociedades de rango son las que no tie¬ nen un acceso muy desigual a los recursos económicos o al poderj pero sí tienen grupos sociales con una dara des¬ igualdad en el acceso al prestigio. Las sociedades de rango están parcialmente estratificadas. Sociedades de dase son las que tienen acceso desigual a las tres venta¬ jas: recursos económicos» poder y prestigio,
Sociedades igualitarias Las sociedades igualitarias se pueden encontrar no sólo entre los forrajeadores» tales como los !Kung,Mbuti» Aborígenes australianos» Inuit y Aché» sino también en¬ tre horticultores como los �nomami y pastores como los Lapones. Algo importante que debemos recordar es que el concepto de sociedad igualitaria no significa que todo el mundo dentro de esa sociedad sea igual: siempre existen diferencias entre los individuos a causa de la edad y el sexo y en sus habilidades como la destreza para la caza» la percepción, la salud» la creatividad» el atractivo o la inteligencia. De acuerdo con Morton Fried» igualitaria ágnifica que dentro de una sociedad dada «hay tantas posiciones de prestigio en cada grado de edad/sexo como personas capaces de ocuparlas». Por ejemplo» si una per¬ sona puede alcanzar un alto estatus por febricar buenas lanzas» y si muchos individuos de esa sociedad forjan esas lanzas» muchos podrán conseguir también un alto esta¬
No Sí Sí
Ejemplos ! Kaa� Mbuti, Aborígenes austraEanos, Ltmit, Samoanos, Táhití, l�as Trobriand, [Mok Estados Ufdck)$,Caiiadá,Greda, India, Eneas
Yanoinami
tus como &bricantes de lanzas. Si d estatus alto se al¬ canza por tallar huesos transformándolos en artefectos»y hay solamente tres personas capaces de hacer esta labor, entonces» solamente esos tres artesanos estarán reconoci¬ dos como talladores de huesos» aunque en futuras gene¬ raciones puedan surgir ocho febricantes de lanzas y veinte talladores de huesos. En las sociedades igualitarias el número de posiciones de prestigio se adapta al número de candidatos cualificados para ello. Podríamos decir que tales sociedades no están estratificadas. Sin lugar a dudas existen diferencias de posición y prestigio aparte de esas diferencias de habilidad, Induso en una sociedad igualitaria existen diferencias de presti¬ gio, Pero» aunque algunas personas sean mejores cazado¬ res y artistas más hábiles que otras» sigue existiendo una igHa¡dad ¿Je acceso al estatus para los que posean la misma habilidad. Por ejemplo» el prestigio que se gana al conseguir un estatus alto como cazador hábil no se he¬ reda ni se transfiere. Por d hecho de que un hombre sea un gran cazador� no se asume que sus hijos también lo sean. También podrán ser individuos con influencias» pero éstas no se pueden heredarj ni tampoco existen gru¬ pos con influencias claramente apreciables. La sociedad igualitaria mantiene la desigualdad al mínimo nivd, Cada diferencia en prestigio que exista no se relaciona en absoluto con la diferencia económica. Los grupos �alitarios dependen en gran medida en el hecho de ípmpííríirjlo que asegura un acceso similar a los recursos económicos» a pesar de las diferencias que puedan existir en d prestigio adquirido por cada individuo. Por ejem¬ plo» en algunas comunidades iguaÜtarias» ciertos miem¬ bros alcanzan un alto estatus gracias a la caza. Pero» induso» antes de comenzar la cacería» la forma en la que se distribuirá y dividirá d animal cazado entre los miem¬ bros dd grupo ya se ha decidido según la costumbre. La cultura actúa distinguiendo el estatus adquirido por los miembros (reconocimiento como gran cazador) de la posesión actual de riquezas» que en este caso sería d ani¬ mal cazado.
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Capítulo 18
Estratificación social: clase, etnicidad y racismo E3
Sociedades de rango
Las ca$a$ de un poblado de las tierras altas de Camerún son prácticannente iguales� como es típico en los casos en los que la estratificación social es mínima.
Las sociedades igualitarias carecen de grupos sociales que tei�n accíso desigual a los recursos económicos� así como de grupos sociales con acceso desigual al poder. Como veremos más adelante en ei capítulo sobre la or¬ ganización política� d acceso desigual al poder por los grupos sociales sólo parece darse en las sociedades estatales> que poseen autoridades políticas a tiempo com¬ pleto y diferencias marcadas en las riquezas* Las sociedades igualitarias recurren a una serie de costum¬ bres para evitar que algunos dominen a los demás. En este sentidoj tanto la crítica como la ridiculización pue¬ den ser muy efectivas. Asíj los Mbuti de África central abuchean al jefe demasiado enérgico. Cuando algún miembro de los Hadza intenta que alguien trabaje para é, la desobediencia es la principé estrategia empleada y á un líder trata de mandarlesj la gente ignora completa¬ mente su orden. Incluso� en casos extremos� la comuni¬ dad» de mutuo acuerdo� puede llegar a matar a un jefe demasiado dominante; esta conducta se pudo constatar entre los IKung y los Hadza. Finalmente» sobre todo en¬ tre los grupos nómadas» la gente puede expulsar al jeíe que no les gusta. Los Mbuti son un ejemplo de sociedad casi total¬ mente igualitaria: aunque el jefe pueda recibir la denominación de propietario de la tienaj son otros los que tienen el derecho a explotarla. Ade¬ más» Sahlins sugiere que en una sociedad de rangOjel jefe carece de poder, ya que generalmente no puede hacer que la gente le haga regalos ni forzarlos a trabajar en los proyectos comunales. El jefe puede mejorar su produc¬ ción solamente si trabaja de forma intensiva en sus pro¬ pias tierras, Este cuadro de igualdad económica comienza a cues¬ tionarse. Así, Laura Betzig estudió los modelos de distri¬ bución de alimentos y de trabajo en Ifeluk, un pequeño atolón en las Carolinas Occidentales� hallando que el es¬ tatus de jefe se hereda genealógicamente por línea femerüna� aunque la mayoría de los jefes son mascuhnos (en el capítulo de Sexo» género y cultura estudiamos que los líderes políticos son generalmente hombres, incluso en sociedades estructuradas alrededor de la mujer). Como
en otras sociedades con jefeturas, los jefes Ifoluk poseen diferencias acordadas. Por ejemplo» durante las comidas comunales que preparan las mujeres» los jefes son los pri¬ meros a los que se les sirve» y son reverenciados. Se dice que los jefes Ifeluk controlan las áreas de pesca pero ¿es¬ tán las capturas igualmente distribuidas? Betzig midió la cantidad de pescado que cada femilia conseguía y ob¬ servó que todos los pobladores recibían la misma canti¬ dad» pero los jefes recibían una cantidad extra de pescado; su femilia obtenía el doble por persona que una &milia normal. ¿Acaso lo repartían ellos más tarde? teoría» el jefe era generoso y repartía el pescado» pero Betzig encontró que los regalos del jefe a las demás femilias no eran equivalentes al exceso de pescado que había recibido, E incluso» cuando todos habían hecho sus entregas a los jefes» éstos entregábanla mayor parte a sus femiliares. Entre los Ifeluk» los jefes tampoco tra¬ bajan más que el resto» e induso trabajan menos que los demás. Pero» ¿es esto verdad en otras sociedades convencionalmente consideradas como sociedades de rango?
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No lo sabemos» pero debemos pensar que los Jefes Ifeluk ro tienen por qué ser mejores que los de otras socieda¬ des similares. Si vivieran en palacios o estuvieran vesti¬ dos con trajes finos y joyas» no necesitarían cantidades extra de alimentos ni seria necesario estudiar si poseen o no mayor acceso a los recursos económicos» ya que su riqueza sería obvia. Probablemente las sociedades de rango no hayan tenido tanta igualdad económica como creíamos,
En las sociedades de clase> lo mismo que en las socie¬ dades de rango» existe un acceso desigual al prestigio. Pero> a diferencia de las de rango> las de clase se carac¬ terizan porque hay grupos de personas que tienen mayor o menor acceso a los recursos económicos y al poder, Esto es» no todos los grupos sociales tienen las mismas oportunidades para obtener tierras» animales» dinero o cualquier otro beneficio económico» ni la misma oportu¬ nidad de ejercer el poder que la que tienen otros grupos. Las sociedades totalmente estratificadas o sociedades de dase oscilan desde las parcialmente abiertas hasta las de dase virtualmente cerradas o sistemas de casta. Sistemas
de c l a s e abíerta
Una dase es una categoría de personas que poseen to¬ das las mismas oportunidades para conseguir recursos económicos» poder y prestigio. Diferentes clases tienen diferentes oportunidades. Lo denominamos sistema de clases abierto si existe alguna posibilidad de pasar de una dase a otra. Desde 1920 se han efectuado muchos estu¬ dios sobre clases en pueblos y ciudades de EE UU. Los in¬ vestigadores han trazado perfiles de estas diferentes comunidades� por lo que se conocen algunos» como los de Yankee City» Middletown� Jonesville y Oíd City, Todos eUos mantienen la premisa de que en EE UU existen cla¬ ses sociales diferendables» aunque relativamente abier¬ tas. W, Uoyd Warner y Paul Lunt estudiaron �nkee City y Robert y Helen Lynd» Middletown� y conduyeron que el estatus social o prestigio de una Emilia generalmente está relacionado con la ocupación y la riqueza del cabeza de Emilia. Los sistemas de dase no sólo existen en EE UUj sino que se reconoce su existencia en todas las naciones del mundo actual. Aunque el estatus de la dase no viene totalmente de¬ finido por el nacimiento en las sociedades de dase abierta» hay una probabilidad alta de que la mayoría de las personas permanezcan en la clase en que nacieron y se casarán dentro de esa dase. Todas las dases tienden a
Colegio privado con internado, en Nueva Jer$ey, cuyos estudiantes proceden principalmente de familias ricas.
perpetuarse días mismas por medio de la herencia de la riqueza, John Brittain sostiene que en EE UU la transfe¬ rencia de dinero por medio de legados supone para mu¬ chos la riqueza de la próxima generación. Como era de esperarj la importancia de las herencias parece incremen¬ tarse en los niveles más altos de riqueza. Es decir� las ri¬ quezas de las gentes más ricas proceden más de herencias» que las riquezas que poseen las personas no tan ricas, Otros mecanismos para mantener las clases pueden ser más sutiles» pero siguen siendo importantes. En EE UU hay muchas instituciones que lo hacen posible debido a que las personas de las clases superiores tienen poco contacto con las de otras clases. La vida privada y los colegios internos ponen a los niños de las clases más devadas en contacto» predominantemente» con los de su misma dase; en años siguientes» seguirán sus estudios en las universidades de mayor prestigio. Los bailes de debu¬ tantes y las fiestas privadas aseguran a estos jóvenes d en¬ cuentro exdusivo con la «gente bien». Los clubes de campo» así como otros dubes exdusivos» las actuaciones sociales» d reparto de caridad» continúan el proceso de asociación limitada. Por si esto fuera poco» las personas de la misma dase tienden a vivir en los mismos barrios, Hasta Í94B, ciertas clases establecían restricciones explí¬ citas para mantener alejados de algunas barriadas con¬ cretas a ciertos grupos» pero posteriormente la Corte Suprema de EE UU reguló tales discriminaciones como anticonstitucionales» poniéndose entonces en marcha sistemas de control más sutiles. Por ejemplo» las restric¬ ciones de zonas pueden prohibir la construcción de vi¬ viendas multi&miliares en una ciudad o vecindario y distribuir lotes de tierra de un tamaño inferior a un cierto número de acres,
Capítulo 18
£d la vida de una perdona la idectíBcacióit coii una dase social comienza temprano; además di las diferendas en ocupación� riqueza y prestigio� las clases se distin¬ guen por muchas otras cosasj induy«ndo la afiliación religiosa» las relaciones femiliares» las ideas sobre la edu¬ cación de los hijos� la satisfección en é. trabajo� el tiempo de descanso� las actividades� el estilo en el vestir y en los muebles e incluso (como se dijo en el capítulo sobre Comunicación y lenguaje) en la forma de hablar, Las per¬ sonas de cada dase tienden a estar más a gusto relacio¬ nándose con gente de su misma dase: charlan de forma sinular y tienden a tener intereses y gustos similares. Los límites entre clases� aunque vagos» han sido esta¬ blecidos por las costumbres y la tradición, e indusoaveces� se han visto reforzados por las leyes. Muchas de nuestras leyes sirven para proteger la propiedad privada, con lo que tienden a fevorecer a las clases media y supe¬ rior, En contraste» son los más pobres los que parecen te¬ ner desventajas en nuestro sistema legal. Los crímenes cometidos por los pobres se persiguen con más dureza por los tribunales� y la gente pobre pocas veces tiene el dinero para asegurarse una buena defensa legal, En los sistemas de dase abierta no siempre está claro cuál es el número de clases que existen realmente. En el estudio de Stanley Barrett en «Paradise», Ontario» algu¬ nos creen que en el pasado sólo existían dos clases- Una persona dice: «Estaba la jerarquía y el resto de nosotros». Otro dice que había tres dasesr «la gente con dinero» los intermedios y los que no tenían nada�. Muchos opinan que habla cuatro dases: «Los ricos empresarios» la dase media» los trabajadores de mono azul y los tipos que so¬ brevivían» y sólo unos pocos insisten en que había cinco clases» Con la desaparición de la vieja estructura de dase rígida, hay más gente perteneciente a la clase media, como ocurre actualmente en EE UU, donde hay una ideología de «desdasación»» La mayoría de la gente se si¬ túa a sí misma en la clase media aunque la evidencia ob¬ jetiva muestra que sigue existiendo un sistema de clases. GRADO DE APERTURA. Unos sistemas de clases son más abiertos que otros; esto es, es más íádí en algu¬ nas sociedades pasar de una dase a otra. Los sociólogos comparan la clase de una persona con la de sus padres para medir el grado de movilidad. Aunque la mayoría de las personas aspiran a pasar a una dase superior, la mo¬ vilidad también incluye el descenso de clase. Obtener mejor educación» particularmente una educación uni¬ versitaria, es una de las formas más efectivas para ascen¬ der de dase en las sociedades contemporáneas. De hecho, en muchos países los datos sobre educación muestran la tendencia a pasar a una dase mejor que la que disfiutaban los padres a través de la formación.
Estratificación social: clase, etnicidad y racismo
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¿Cómo comparar el grado de movilidad social de EE UU y Canadá con otros países? Canadá y Suecia pre¬ sentan más movilidad que EE UU, Francia y Gran Bre¬ taña. Japón e Italia tienen menos movilidad. Si nos centramos en la Solidad de movimiento de la dase más alta, Italia, Francia, España, Alemania y lapón tienen más dificultades que Gran Bretaña y EE UU, El aperturismo de las clases también varía con los tiempos. Así, en el estudio de «Paradise» Ontario, Barrett encuentra que d sistema rígidamente estratificado de los años cincuenta se abre considerablemente cuando llega gente nueva a la comunidad. Nadie discutía quién perte¬ necía a la elite en el pasado: procedían de Inglaterra» vi¬ vían en casas grandes, tenían coches nuevos e iban de vacaciones a Florida. Sobre todpj controlaban todas las posiciones de liderazgo en la ciudad. Pero en los años ochenta los líderes provienen principalmente de las cla¬ ses medias y trabajadoras. GRADO DE DESIGUALDAD. El grado de movili¬ dad de dase no es lo mismo que d grado de desigualdad económica. Por ejemplo, Gran Bretaña y EE UU no di¬ fieren mucho en el grado de movilidad, pero existe una diferencia considerable entre la riqueza de los ricos, com¬ parada con la de los pobres. En 19&9, en Gran Bretaña, los más ricos eran d 1 por ciento de la población y con¬ trolaban el 18 por ciento de las riquezas; en EE UU, a fi¬ nales de los años ochenta, la cifra comparativa era d d 36,3 por ciento (los más ricos son, hoy día, induso más ricos en EE UU), No obstante, en Gran Bretaña no siem¬ pre ha existido esa desigualdad, pues entre 1911 y 1913� ese 1 por ciento más rico controlaba el 69 por ciento de la riqueza nacional. En contraste, en EE UTIj la desigual¬ dad ha fluctuado considerablemente desde 1900 hasta nuestros días. La mayor desigualdad tuvo lugar en los años anteriores a 1929, cuando se produjo el cradc de la bolsa: entonces el l por ciento poseía el 42,6 por ciento de todas las riquezas. La menor desigualdad se conoció a mediados de los años setenta» cuando disminuyó el mer¬ cado de reservas al 42 por ciento; entonces d 1 por ciento controlaba el 17,6 por ciento de las riquezas. A veces aparecen cambios temporales dd grado de desigualdad por causas económicas; por ejemplo» el Crack de 1929 hizo a los ricos menos ricos. Algunos de los cambios en d tiempo se deben a cambios en la politica: durante la Nueva Política de los años treinta» d cam¬ bio en los impuestos y los programas de trabajo aumentó los ingresos de la gente común; en los ochenta, d recorte de impuestos por riqueza hizo que los ricos fueran más ricos todavía y en los noventa continuó esta tendencia� Otra forma de calcular la diferencia entre ricos y po¬ bres es d uso de la proporción de ingresos dd quinto de
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la población más alta dividido por los ingresos dd quinto de la población más baja. Comparativaniente hablandoj EE UU tiene la mayor discrepancia de todos los países desarrollados (vósíí Figura I8.1)i con una proporción de alrededor de 10 por 1. Es decir, el 20 por ciento de la po¬ blación de EE UU controla diez vcces la riqueza contro¬ lada por el 20 por ciento más bajo. Entre los países en vías de desarrollo Brasil es el más desigual� con una pro¬ porción de 30 a 1, aunque EE UU tiene más desigualdad que los países en vías de desarrollo como la India» Ghana� Pakistán y Filipinas* Sistemas
mayoría de los indios vive en zonas rurales y se dedica a la agricultura» pero sus castas varían ampliamente, Las castas pueden existir de forma conjunta con un sistema de clases más abierto. Así ocurre en la India ac¬ tual» en donde los miembros de una casta inferior que pueden conseguir trabajos asalariados» sobre todo en áreas urbanas» pueden improvisar su estatus social de la misma forma que lo hacen las personas de otras dases sociales. Pero generalmente nunca pueden casarse con personas de las castas más elevadas» con lo que el sistema de castas se perpetua. La cuestión básica de todas las sociedades estratifica¬ das y en particular de la sociedad de castas fue comen¬ tada por John Ruskin� un ensayista británico del siglo XTX�quien afirmó: «¿Quién de nosotros... va a hacer el trabajo más duro y sucio para el resto y por qué sueldo? ¿Quién va a hacer el trabajo más agradable y limpio y por qué sueldo?». En la India estas preguntas han sido respondidas con el sistema de casta» que dicta principalmente qué bienes y servicios se intercambian» particularmente en las áreas rurales. Está claramente es¬ tablecido quién va a hacer el trabajo más duro y sucio para la sociedad: un enorme grupo de «intocables»» que son los que forman la base de la jerarquía. También en¬ tre estos intocables existen subcastas como los Camars» o trabajadores del cuero» y los Bhangis» quienes tradidonalmente son barrenderos. En la cúspide de la jerarquía
de ca s t a
Algunas sociedades tienen clases que están virtualmente cerradas y que reciben el nombre de casta. Una casta es un grupo de rango cuyos miembros están deter¬ minados por el nacimiento» y el matrimonio está restriñ¬ ido a los miembros de la misma casta. La única forma de pertenecer a ella es nacer en el grupo» y dado que na¬ die se puede casar fuera de él» los hijos no pueden adqui¬ rir otro estatus de casta. En la lndia> por ejemplo» existen varios cientos de castas hereditarias- Aunque el rattking exacto de estos cientos de grupos no está claro» parece que existen cuatro niveles principales de jerarquía. Las castas» en la India» se asocian a menudo a diferentes ocu¬ paciones» aunque esto no es completamente cierto. La
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que UD pariente pueda reunirlos a todoSi al meoos tem¬ poralmente! en las ceremonias, TíPOS DE GRUPOS DE RLIACÍÓN UNILÍNEAL
En una sociedad de filiación unilineal> las persorias se reñeren a si mismas como pertenecientes a un particular grupo unilineal o conjunto de grupos�ya que creen com¬ partir la linea de descendencia común tanto de un hom¬ bre determinado (patrilineal) como de una mujer (matrilineal). Estas personas constituyen lo que se llama �po de filiación unilineal Los antropólogos distinguen varios tipos de grupos de filiación unUinealr linajes� clanes� fi'atrías y mitades, LINAJES. Un linaje es un grupo de �miliares cuyos miembros descienden de un ancestro común a través de vínculos conocidos. Pueden existir patriliuajes o matriifiajes» dependiendo de si las sucesiones pueden estable¬ cerse sólo a través de hombres o sólo a través de mujeres. Los linajes se designan con fircuencia por ei apellido del
antepasado común, sea hombre o mujer. En algunas so¬ ciedades la gente pertenece a una jerarquía de linajes� esto es� traza su filiación hacia el antepasado o hacia un linaje menor� o desde el antepasado hacia un linaje ma¬ yor o más inclusivo y así sucesivamente. CLANES. Un dan (también llamado algunas veces sib) es un grupo de femiliares cuyos miembros creen descender de un antepasado comiinj aunque las lineas que conducen a ese ancestro no están especificadas. De hechoj el antepasado común puede incluso ser descono¬ cido. Los clanes con filiación patrilineal se llaman patridanes y los que tienen filiación matrilineal son llamados matrldanes- Los danés suelen designarse por el nombre de un animal o planta» llamado tótem, que puede tener un significado especial para el grupo y constituye una identificación para el mismo. Así si alguien dice que per¬ tenece al dan del Oso» Lobo oTortuga» otros sabrán si esa persona pertenece o no a dicho dan. La palabra tótem procede de la palabra ototeman de los indios Ojibwa> que dgnifica «un pariente mío». En algunas sociedades» las
Ca p í t ul o 21 Residencia c o n y u g a l y p a r e n t e s c o
personas tienen que observar determinados tabúes rela¬ cionados con el animal que es tótem de su dan. Por e�mploi los miembros del dan pueden tener prohibido el matar o comer su tótem. Aunque pueda parecer extraño que un animal o una planta sea d símbolo de un grupo &mÜiar� los animales como símbolos de grupos son conocidos incluso en nuestra propia cultura. Los equipos de fútbol y de béis¬ bol» por ejemplo» se denominan frecuentemente con d nombre de animales (Tigres de Detroit� Cuervos de Baltimoie> Águilas de Filadelfiaj Osos de Chicago» etcO* Las asociaciones de voluntarios» como los dubes de hombres> tienen muchas veces nombres de animales (alces» leones» etc.). T�bién naciones enteras se pueden repre¬ sentar por un animal: hablamos» por ejemplo» dd águila americana� del león inglés» etc. Por qué los humanos es¬ cogen frecuentemente nombres de animales para repre¬ sentara los grupos es una cuestión intrigante para la cual todavía no tenemos una respuesta convincente, FRATRÍAS. Una fratría es un grupo de filiación unilineal compuesto por clanes supuestamente relacio¬ nados- Lo mismo que sucede con los danés» los vínculos de filiación de las fratrías no están especificados. MITADES. Cuando se divide una sociedad com¬ pleta en dos grupos de filiación unilineal» a cada uno de ambos grupos lo denominamos mitad (la palabra mitad -moiety en inglés- procede de la palabra francesa que sigrufíca «mitad»). Las personas de cada mitad se consideran a sí mismas descendientes de un antepasado común» aun¬ que no pueden especificar cómo. Las sociedades con sis¬ temas de mitades tienen en general relativamente poca población (menos de 9.0(W personas). Sin embargo» las sociedades con clanes o fratrías tienden a ser mayores. COMBINACIONES. Aunque hemos distinguido varios tipos diferentes de grupos de filiación unilineal» no debemos creer que todas las sociedades unilineal es tienen sólo un tipo de grupo de filiación. Muchas socie¬ dades tienen dos o más de estos grupos en diferentes combinaciones. Por ejemplci» algunas sociedades tienen linajes y clanes» otras pueden tener clanes y fratrías pero no linajes; y todavía otras pueden tener clanes y mitades aunque no fratrías ni linajes. Dejando a un lado que una sociedad que tenga fratrías debe de tener también danés (ya que las fratrías son combinaciones de danés)» son posibles todas las combinaciones de grupos de filiación. Incluso en d caso de que una sociedad tenga más de un tipo de grupo femiliar unilineal (por ejemplo� linajes y clanes) no existe ninguna ambigüedad sobre la pertenen¬ cia a dios. Los grupos menores están simplemente suje¬
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tos a las unidades mayores; las unidades mayores inclu¬ yen a gente que dice estar relacionada unilinealmente con un pariente lejano en d tiempo. ORGANÍZACIÓISÍ PATR[L[KEAL
Es d tipo de sistema de filiación más frecuente. Los Papuas Kapauku» que viven en las tierras altas dd centro de Nueva Guinea occidental (Irian laya)» son un ejemplo de sociedad patrÜinealcon muchos tipos de grupos de fi¬ liación. La jerarquía de los grupos a los que están asigna¬ dos los Kapauku por medio dd sistema de filiación patrUineal desempeña un papel muy importante en sus vidas. Cada Kapauku pertenece a un patrilinaje o patridán que induye al linaje de d o de día» y a una fratría que induye a su dan, Los miembros masculinos de un patrilinaje (todos los hombres vivos que pueden trazar su relación actual a tra¬ vés de los hombres hasta un antepasado común) consti¬ tuyen la población masculina del poblado o» más propiamente» de poblados adjuntos. En otros términos» cada linaje es una unidad territoriaL Los miembros mas¬ culinos de cada linaje viven juntos en virtud de una norma patrÜocal de residencia y de un patrón de asenta¬ miento estable. Un hijo permanece próximo a los padres trayendo a su esposa a vivir en o cerca del hogar de su pa¬ dre; las hijas abandonan su hogar y van a vivir con sus esposos� Si d grupo vive durante d suficiente tiempo en el mismo lugar» los descendientes masculinos de un hombre vivirán en d mismo territorio» y si d linaje es grande» puede ser dividido en sublinajes constituidos por la gente que puede trazar su linea de filiación desde uno
Muchos indio$ de la Coeta Noroeste del Pacífioo cons¬ truyen postes totémicos representando sus tótems ani¬ males V los antepasados humanos de su clan. En esta fotografía se muestran postes totémicos y una casa re¬ construida en Victoria, Columbia Británica.
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Ca p í t ul o 21
Residencia c o n yu g a l y parentesco
de lo5 hijos dd arktepa�do d d linaje.Los miembros mas¬ culinos de un sublinaje viven bloques contiguos dentro del gran territorio del linaje. Los miembros del mismo patrilinaje hablan afectiva¬ mente entre ellos,y dentro del mismo grupo la ley y el or¬ den son mantenidos por el cabeza de linaje. El asesinato dentro del linaje se considera una ofensa grave y cada enfrentamiento que se produce se hace con palos en vez de con armas letales como lanzas. El cabeza del sublinaje in¬ tenta resolver todas las que� y problemas de la forma más rápida y pacifica posible. Si un compañero del subli¬ naje comete un crimen contra personas ajenas al mismo� todos los miembros del sublinaje pueden ser considera¬ dos responsables y todas sus propiedades les pueden ser arrebatadas� o un miembro del sublinaje puede ser asesi¬ nado en venganza por la femilia de la victima. Los Kapauku también pertenecen a grupos de filiadón patrilineal mayores y más inclusivos (de danés y fratrías).Todas las personas del mismo dan creen que es¬ tán relacionadas con los demás del mismo por medio de un antepasado común por línea paterna� aunque son in¬ capaces de decir quién fue ese pariente. Si un miembro dd patridán come la planta o animal que les sirve de tó¬ tem, se cree que quedará sordo Un Kapauku también tiene prohibido casarse con alguien de su mismo clan; en otras palabrasj el dan es exógamo. A diferencia de los miembros masculinos del patrilinaje» los miembros femeninos dd patridán no viven to¬ dos juntos. Por tanto� d linaje es d mayor grupo de parientes mascuÜnos que se puede localizar. Además es también d mayor grupo de parientes masculinos que ac¬ túan unidos políticamente. No existen mecanismos para resolver las disputas entre los miembros d d dan, y los miembros dd mismo patridán (que pertenecen a distin¬ tos linajes) pueden incluso ir a la guerra con otro. El grupo más indusivo de descendientes patrilineales entre los Kapauku es la fratría, cada una de las cuales está compuesta de dos o más clanes. Los Kapauku creen que la fratría era originalmente un dan, pero que en un con¬ flicto entre hermanos de la i&müia fundadora� d her¬ mano más joven fue expulsado y formó un dan nuevo. Los dos clanes resultantes están vistos como patrilinealmente relacionados, ya que, como se ha dicho, sus fiandadores fueron hermanos. Los miembros de la fratría observan todos los tabúes totémicos de los clanes que pertenecieron a la fratría. Está prohibido d matrimonio entre miembros dd mismo dan, aunque sí se pueden ca¬ sar miembros de la fratría que pertenezcan a clanes dife¬ rentes. Entonces� los Kapauku son un ejemplo de una socie¬ dad unilineal con muchos tipos de grupos de filiación. Tienen linajes con relaciones �miliares demostradas y
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otros dos grupos femiliares de descendientes con relacio¬ nes femiliares de descendientes desconocidas (danés y fratrías). Organización matrilíneal
Aunque este tipo de sociedades parecen en muchos aspectos contraimágenes de su forma patrilineal� se dife¬ rencian de una forma importante. Esta diferencia tiene que ver con quién ejerce la autoridad. En d sistema pa¬ trilineal, la afiliación de descendientes se efectúa a través de los hombres� y son también éstos los que ejercen la au¬ toridad. Consecuentemente� en el sistema patrilineal� las lineas de filiación y la autoridad convergen. En d sistema matrilineal, sin embargo, a pesar de que la línea de filia¬ ción se produce a través de las mujeres, éstas raramente ejercen la autoridad en sus grupos femiliares. Normal¬ mente lo hacen los hombres. De esta manera� la línea de filiación y la autoridad no convergen. Los antropólogos no acaban de entender por qué es esto así� pero es un he¬ cho etnográfico. En todo caso� desde que los hombres son los que ejercen la autoridad en d grupo familiar, es d hermano de la madre de un individuo la figura autori¬ taria más importante, ya que es él d pariente masculino más estrechamente relacionado de la parte matrilineal en la generación parentat Por d contrarioj el padre dd individuOj al no pertenecer al grupo familiar matrilineal, no tiene nada que decir dentro de d. La divergencia entre autoridad y filiación en los gru¬ pos parentales matrilineales causa algunos efectos en la organización de la comunidad y en d matrimonio. La mayoría de las sociedades matrilineales practican la resi¬ dencia matrilocal. Las hijas permanecen en el hogar ma¬ terno tras d matrimonio y traen a sus esposos a vivir con días, los hijos abandonan el hogar para unirse a sus es¬ posas. Pero los hijos que se requiere que se vayan, serán los que eventualmente ejercerán la autoridad en su grupo familiar. Esta situación presenta un problema. La solución que parece haber sido más efectiva en fa mayo¬ ría de las sociedades matrilineales es que» aunque los hombres se vayan a vivir con sus esposas� no se suden alejar demasiado� por lo que suden casarse con mujeres que viven en d mismo pobfado. De esta forma, las socie¬ dades matrilineales a menudo son localmente exógamas. La oiganización matrilineal en las Chuuk (Truk), un grupo de pequeñas islas dd Pacífico, ilustra d moddo general de autoridad en los sistemas matrilineales. Los Chuuk tienen tanto matrilinajes como matridanes. El matrilinaje es un grupo de propietarios comunes cuyos miembros trazan una línea de filiación a partir de un ancestro común por linea materna. Los miembros del linaje femenino y sus esposos ocupan una serie de
C a pítulo 21 R esidencia conyugal y parentesco
Los habitantes de las Islas Trobriand tienen residencia avunculocal y grupos de filiación matrilineal.
viviendas de las tierras del matriliriaje� La propiedad del grupp del matrilinaje es administrada por el hermano mayor del mismo� quien distribuye la propiedad produc¬ tiva del grupo de su matrilinaje y dirige los trabajos de los miembros. También representa a su grupo en las re¬ laciones con el jefe d d distrito y con todos los extraños» y tiene que ser consultado en todos los asuntos que afec¬ ten al grupo. También bay una autoridad femenina del li¬ naje que también ejerce cierto mando» aunque sólo en lo relacionado con las actividades que afectan a las mujeres. Asi> puede supervisar los trabajos de cooperación de las mujeres (que suelen trabajar siempre separadas de los hombres) y del cuidado del hogar. Dentro del núcleo �mUiar� tanto el padre como la madre tienen la primera responsabilidad de la alimenta¬ ción y disciplina de sus hijos. Cuando éstos llegan a la pubertad» cesan los derechos del padre en el ejercicio de la disciplina y la autoridad- La madre puede mantener el ejercicio de su autoridad o disciplina» pero su hermano puede intervenir» El hermano de una mujer raramente interviene en lo relacionado con el hijo de su hermana antes de la pubertad» pero tras ella» puede ejercer cierta autoridad» especialmente si él es el mayor de los hijos del matrilinaje. Los hombres de Chuuk raramente se despla-
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zan lejos de su lugar de nacimiento, Como comentó Ward Goodenough» «ya que la residencia matrilineal hace que los hombres abandonen el hogar de su linaje� la mayoría de ellos se casan con mujeres cuyos hogares d d linaje están sólo a unos pocos minutos andando». Aunque existen algunas diferencias entre d sistema de filiación matrilineal y el patrilineal» también existen mu¬ chas similitudes� En ambos tipos de sistemas puede ha¬ ber linajes» clanes» fratrías y mitades� solos o en cualquier combinación. Estos grupos femiliares» tanto en una como en otra forma de sociedades» pueden efectuar un gran número de funciones: regular los matrimonios» ayudarse política o económicamente entre sí y también efectuar rituales juntos, Ahora que hemos aprendido algo sobre los sistemas matrilineales� comentaremos d patrón de residencia del sistema avunculocal» en d que la pareja casada vive con o cerca del hermano de la madre dd marido. Aunque este tipo de residencia es bastante raro» pertenece a socieda¬ des matrilineales. Como hemos visto» el hermano de la madre desempeña un papel muy importante en la mayo¬ ría de las sociedades matrilineales ya que» ¿quién es d pa¬ riente varón más próximo en la forma matrilineal? Indudablemente el hermano de la madre. Irse a vivir al hogar o cerca del hogar dd hermano de la madre pro¬ porciona una forma de localización de los parientes mas¬ culinos en la forma matrilineal. Pero» ¿por qué algunas sociedades matrilineales practican esta forma de residen¬ cia? La respuesta puede relacionarse con la forma prevalente de guerra en esa sociedad. Las sociedades avunculocales» en contraste con las matrilocales� luchan Internamente. De la misma forma que la residencia patrilocal puede ser una manera de mantener a los �miliares masculinos cerca dd hogar pa¬ terno tras su matrimonio� la avunculocalidad puede ser una manera de mantener a los parientes varones (en este caso» relacionados matrilinealmente) unidos tras el ma¬ trimonio para proporcionar una rápida movilización en caso de ataque por sorpresa desde la proximidad. Las so¬ ciedades que ya son fuertes y donde funcionan los gru¬ pos de descendientes matrilineales pueden escoger hacer frente alataque luchando lejos dd hogar» con la alta mor¬ talidad masculina que lleva esto consigo (que puede ha¬ cer difícil el trazar la filiación a partir de los hombres)»o practicarla avunculocalidad en lugar de cambiar ala patrilocalidad. de los g ru po s u n i l í n ea l es DE FIL[AC[ÓN Funciones
Los grupos unilineales de filiación existen en las so¬ ciedades de todos los niveles de complejidad cultural. Sin
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R esidencia conyugal y parentesco
Nuevas perspectivas sobre el género vttriación en ta residencia Cuando decimos que tanto la re¬ sidencia como el parentesco tienen proñindos efectos en la vida de las personas, ¿qué es lo que queremos decir exactamente? Podemos imagi¬ nar lo duro que es para una mujer de una sociedad patrÜocal tener que desplazar su casa después del matri¬ monio a otro poblado en el que su esposo tiene múltiples parientes» mientras que ella tiene pocos, Pero� ¿tenemos evidencia de esto? La ma¬ yoría de los etnógrafos generalmente no da detalles sobre los sentimientos de la gente, aunque algunos sí lo ha¬ cen. Por ejemplo, Leigh Mintum nos reproduce el texto de una carta que una novia rajput (que creció en el poblado de Khalapur, India) envía a su madre poco después de su matri¬ monio en el pueblo de su esposo. La carta se escribió después de seis me¬ ses de su partida, aunque ella se pre¬ gunta frecuentemente si su madre, su padre y sus tías la han olvidado ya. Pidió que la llamaran de casa y
¡r el
pareateutu maé diferencias presentan las muferes�
que se empaquetaran sus pertenen¬ cias, describiéndose a sí misma como «pájaro enjaulado» y se quejó de su Emilia política. La madre de la novia no se alarm�� sabe que esas quejas son normales, reflejo de la an¬ siedad causada por la separadón de su hija. Siete años más tarde, cuando Minturn regresó a la India, la madre le comentó que su hija era feliz. Sin embargo, otras novias tuvieron pro¬ blemas más serios: posesiones por �tasmas, comas de entre 24 a 36 horas, depresiones graves y suicidios, etc. Lo que no nos cuentan los inves¬ tigadores es si estos graves síntomas están presentes con más írecuencia en las sociedades patrilocales, patrilineales, que en otras sociedades, particularmente en las matrilocales, matrilineales. Por el contrario, ¿tie¬ nen los hombres algunos síntomas en el caso de las sociedades matrilo¬ cales y matrilineales que no tengan en las sociedades patrilocales? No lo sabemos,
embargo, aparentemente, son más comunes en las socie¬ dades no comerciales productoras de alimentos, en opo¬ sición a las sociedades recolectoras. Los grupos de descendientes unilineales frecuentemente tienen impor¬ tantes funciones en los aspectos sociales, económicos, políticos y rehgiosos de la vida, REGULACIÓN DEL MATRIMONIO. En las so¬ ciedades unilineales, usualmente no se permite a los individuos casarse dentro de su propio grupo de filia¬ ción unilineal. Sin embargo, en algunos el matrimonio puede ser permitido dentro de los grupos familiares más inclusivos� aunque se prohibe en el caso de grupos muy reducidos. En unas pocas sociedades, no obs¬ tante, se prefiere el matrimonio dentro del grupo fa¬ miliar,
¿Qué hay sobre el estatus feme¬ nino? Algunos investigadores su¬ gieren que la matrilocalidad y la matrilinealidad intensifican algu¬ nos de los aspectos del estatus de las mujeres, aunque quizá no tanto como podamos pensar. Incluso en las sociedades matrilineales son los hombres los que ostentan el liderazgo político. El efecto principal de la matrilocalidad y matrilineali¬ dad parece ser el control de la propiedad femenina, ya que tien¬ den a tener más autoridad domés¬ tica dentro de su hpgar, mayores o iguales restricciones sexuales y una vida más confortable. Atice Schlegel dice que el estatus de la mujer no siempre es relativamente alto en las sociedades matrilineales, porque pueden estar dominadas por el es¬ poso o por sus hermanos (ya que los hermanos tienen un importante papel en sus grupos femiliares), Solamente cuando ni el marido ni los hermanos las dominan entonces
Pero, generalmente, el tabú del incesto en las socieda¬ des unilineales se extiende hasta todos los supuestos femÜiares unÜineales. Por ejemplo, los Chuuk, cuyos habitantes tienen matridanes y matrilinajes,por la regla de la exogamia del grupo de filiación, se prohibe a una persona casarse con alguien de su matridán, incluyén¬ dose el matrilinaje en el matridán, por lo que la regla exogámica del grupo de filiación también se aphca a aquél. Entre los Kapauku, que tienen fratrías, patridanes y patrilinajes, el mayor grupo de descendientes que es exógamo es el patridán. Aunque la fi'atría alguna vez pudo ser exógama, las reglas de la exogamia ya no le son aplicables. Algunos antropólogos han sugerido que las normas de la exogamia para los grupos de filiación pue¬ den haberse desarrollado a causa de las alianzas existen¬ tes entre los grupos de descendientes generados portales
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las mujeres pueden tener un con¬ trol considerable sobre sus propias vidas. Ciertamentej la combinación de matrilocalidad y matrilinealidad es mejor para la mujer que la patrilocalidad y patrilinealidad. La matrilocalidad y matrilinealidad pueden no favorecer ei estatus de la mujer por el dominio del grupo femiliar masculino matrilineal} pero la patrilocalidad y patrüinealidad están muy próximas a disminuir el estatus femenino. Norma Diamond dijo que incluso después de la Re¬ volución Comunista china> que abolió las propiedades territoriales de los patrilinajes y permitió a las mujeres el acceso ala educación y al trabajo fiaera del hogar» continuó el dominio de los hombres. Los mo¬ dos de producción y de trabajo cambiaron, pero la patrilocalidad no cambió: las mujeres se casan to¬ davía con extraños y los miembros de los patrilinajes son un equipo de trabajo en las granjas colectivas. Diamond afirmó que aquellas mu¬ jeres que conseguían llegar a ser lí¬ deres locales tendían a realizar matrimonios atípicos que les per¬
Residencia c o n y u g a l y p a r e n t e s c o
mitían vivir en los poblados en los que habían nacido. Tanto la residencia como la filia¬ ción también predicen los intentos sociales para el control de la repro¬ ducción, De acuerdo con Su��ne Frayser» las sociedades patrilineales presentan varios dilemas sexuales y reproductivos. Uno es la contradicdón entre la importancia de los hombres en el parentesco y el papel de las mujeres en la reproducción. Si las sociedades patrilineales deni¬ gran a la mujer tanto» ésta deben in¬ tentar disminuir su reproducción. 8i la sociedad patrilineal la exalta demasiado» dicha exaltación puede causar la disminución del valor de los hombres. Un segundo dilema es el de la paternidad» que es tan im¬ portante para la filiación patrilineal» por lo que Frayser dice que» ya que en las sociedades patrilineales las re¬ laciones en los grupos femiliares es¬ tán establecidas a través de los hombres» ellos harán todo lo posi¬ ble para asegurarse que el hombre con el que se casa una mujer será padre. Esta misma autora afirma que las sociedades patrilineales se¬
normas» que pueden estar sdectivamente fevoreddas bajo las condiciones de vida en las que vive la mayoría de las sociedades unilineales. FUNCIONES ECONÓMICAS. Los miembros del linaje o dan de una persona pueden ser llamados junto con esa persona para atender cualquier queja o pleito» para ayudarla o establecerla económicamente» para contribuir al precio de la novia y para apoyarla en mo¬ mentos de crisis vitales. La ayuda mutua a menudo se extiende a la cooperación económica sobre una base re¬ gular. El grupo de filiación unilineal puede actuar como una unidad corporativa en la propiedad de la tierra. Por ejemplo» entre los Chuuk y los Kapauku» las casas situa¬ das en tierras de cultivo pueden ser propiedad de un li¬ naje. También los miembros de un grupo de filiación
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rán más restrictivas con la sexuali¬ dad de las mujeres y» ciertamente» los resultados de sus estudios transcultu rales indican que las socieda¬ des patrilineales tienden más que las demás a prohibir el sexo prema¬ trimonial y extramatrimonial» y son más prodives a establecer barreras que dificulten el divorcio de una mujer de su esposo. Uigh Miatum, SaiV Comitíg Outí�Purdah: T h e Ra jp ut Wo m eti of Kfmhpur Rívisited (New York; Oícford Uni-
veisity Press, 1993), pp, 54-7lí Martin King Whyte, TfteStatus q/WofWn ín PrpíoíÍLíyfrwi S0Cíeti& CPrinceioii, NJ; Princeioii Uníversity Press, pp. 132-34; Alice Sdilegel, «The Status ofWoinen», en Carol R. Ember y Mel' vin Rmbei, eds., Ow5-CLJtijr!(ii RGsardtfar SúciaiScience (Upper Saddie River, NJ: Preatice Hall, 1995), Prentioe HaH/Sitaoo & Sdiuster Ctistoiu PubUshia� Nonuá E>iáiuond, «Collectivmtiofi, Ktdship, anó the Status of Wometi in E%ura] in Rayn� R. Reiter, an An�ropálogy of Women
CNewYork; Moothly lí�ew Press, 1975); Suaaittie G, Frayser, rítfHce (New Haven, CT: HRAF Press, 1935), pp, 335-47.
pueden mantenerse unos a otros en tales empresas y la¬ brar tierras con malezas o bosques para convertirlas en cultivables y proporcionar comida y otros elementos para banquetes» potlaches (celebración india que induye reparto de regalos)» ritos curativos y ceremonias tales como nacimientos» ritos de iniciación» bodas y fu¬ nerales. M dinero ahorrado (tanto de la venta de cosechas» como al abandonar durante un tiempo la comunidad para ir a otro lugar como asalariado) muchas veces es considerado por los miembros d d grupo de filiación como perteneciente a todos. Sin embargo» en tiempos re¬ cientes» la gente joven de algunos lugares ha mostrado su negativa a repartir su dinero con los demás» considerán¬ dolo una forma diferente de los demás tipos de ayuda económica.
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R esidencia conyugal y parentesco
FUNCIONES POLÍTICAS.
La palabra política,
U3ada por los miembros de una sociedad industrializada,
generalmente no es aplicable a los vagos poderes que puede ejercer un cabeza de femilia o los ancianos de un dan o linaje. Pero estas personas pueden tener el derecho de asignar tierras para que las utilicen los miembros de un determinado linaje o dan. Los jefes o ancianos tam¬ bién pueden tener el derecho de mediar en las disputas entre dos miembros dentro de un linaje» a pesar de que generalmente carecerán de la autoridad para obligar a efectuar un asentamiento. Y pueden actuar como inter¬ mediarios en las disputas que se produzcan entre un miembro de su propio dan y el miembro de un grupo femiliar opuesto. Ciertamente, una de las funciones políticas más im¬ portantes de los grupos femiliares unilineales es su pa¬ pel en la guerra (el intento de resolver las disputas dentro y fiaera de la sociedad por medio de acciones vio¬ lentas). En sociedades sin pueblos ni ciudades, la orga¬ nización de tales luchas está frecuentemente en manos de los grupos de linaje. Así, entre los Tiv de Nigeria cen¬ tral, se sabe bien en cada momento qué linajes están en guerra y contra quién, a qué lir\ajes tendrán como alia¬ dos en un momento determinado de lucha, cuándo lu¬ char usando palos únicamente y cuándo hacerlo con arcos y flechas. FUNCIONES RELIGIOSAS. Un clan o linaje puede tener sus propias creencias y prácticas religiosas, adorando a sus propios dioses, diosas o espiritus an¬ cestrales. Los Tallensi de África occidental reverencian y tratan de aplacar a los espíritus de sus antepasados. Ven la vida sólo como una parte de la existencia hu¬ mana; para ellos, la vida existia ya antes del nacimiento y continuará tras la muerte. Los Tallensi creen que los antepasados de sus grupos de linaje, aunque han cam¬ inado su forma, han mantenido su interés en todo lo que ocurre en su sociedad, pueden mostrar su enfedo enviando desastres repentinos o desgracias menores y también su satisfección trayendo buena suerte. Pero nadie sabe qué les puede satis&cer� ya que el espíritu de sus ancestros esi sobre todo, impredecible. Por ello, los iMlensi intentan tener en cuenta los acontecimientos inexplicables atribuyéndolos al siempre vigilante ante¬ pasado. La creencia en los antepasados también les proporciona seguridad� ya que si sus antepasados han superado la muerte, de la misma forma podrán hacerlo dios. La religión de los Tallensi es una religión de grupo de filiación. Los Tallensi no están interesados en los ancestros de otras gentes; creen que sólo sus pro¬ pios ancestros son quienes pueden castigarlos o fevorecerlos.
Desarrollo
de los sístemas unílíneales
Los grupos �miliares unilineales pueden desempeñar papeles muy importantes en muchas sociedades, pero no todas las sociedades tienen tales grupos. En las sociedades que tienen complejos sistemas de organización política, la administración y los funcionarios asumen muchas de las funciones que efectúan los grupos femiliares, tales como la organización del trabajo y d bienestar social así como la distribución de tierras. Pero no todas las sociedades que carecen de una compleja organización política tienen sis¬ temas unilineales de filiación. Entonces, ¿por qué unas so¬ ciedades tienen estos sistemas y otras carecen de ellos? Generalmente se asume que la residencia unilocal, patrilocal o matrilocal es necesaria para d desarrollo de la filiación unilineal- La residencia patrilocal, si se practi¬ cara durante algún tiempo en una sociedad, generaría un conjunto de parientes varones con rdación patrÜineal que vivirían en los mismos territorios; en tanto que la re¬ sidencia matrilocal se localizaría en d tiempo generán¬ dose en un grupo localizado de parientes mujeres relacionadas matrUinealmente. No hay que extrañarse entonces de que las residencias matrilocal y patrilocal es¬ tén asociadas transculturaímente con la filiación matrilineal y patrilocal respectivamente. Pero, aunque la residencia unilocal pueda ser necesaria parala formación de grupos de filiación unilineal, aparen¬ temente no es la única condición requerida. Para una cosa, muchas de las sociedades con residencia unilocal carecen de grupos de filiación unilineal. Para otra, el mero hecho de que los femiliares masculinos o femeninos vivan juntos por virtud de una regla de residencia patrilocal o matrilo¬ cal, no significa necesariamente que los grupos femiliares actuarán considerándose a sí mismos como grupos de fi¬ liación y funcionen como tales. Así, parece ser que se de¬ ben cumplir otras condiciones más para suplir la tender�ia a la formación de grupos de filiación unilineal, Existen evidencias de que las sociedades unilocales que están envudtas en guerras tienen una mayor tenden¬ cia a tener grupos de filiación unilineal que las socieda¬ des unilocales sin guerra Puede ser, entonces, que la existencia de luchas en las sociedades que carecen de los complejos sistemas de organización política favorezca la formación de grupos de filiación unilineal. Éstos propordonan individuos con grupos de personas poco ambi¬ guos que pueden combatir o crear alianzas como unidades discretas. No existe ambigüedad sobre un miembro individual- Está siempre perfectamente daro que si alguien pertenece a un particular dan, fratría o mitad, es esta característica del grupo de filiación unili¬ neal la que le incapacita para actuar en unidades de forma separada y diferente, sobre todo, en la guerra.
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Los sistemas bilaterales� por el contrario, están egocentrados y cada persona» aparte de los hermanos» tiene un grupo diferente de femiliares con los que relacio¬ narse. Consecuentemente» en las sociedades bilaterales, a menudo, no queda claro a quién se puede acudir ni quién tiene la responsabilidad para ayudar a otro. Sin embargo» tai ambigüedad puede no ser un riesgo en las sociedades que no padecen guerras o en las que tienen sistemas políticos complejos que organizan la lucha en nombre de poblaciones grandes,
Sistemas de fíllaclón ambllineal Las sociedades con grupos ambilineales de filiación son mucho menos numerosas que las sociedades unilineaies e incluso que las bilaterales. Las sociedades de fi¬ liación ambilineales» sin embargo» recuerdan a las de filiación unihneal en muchos de sus aspectos. Por ejem¬ plo» los miembros de un grupo de filiación ambilineal creen descender de un ancestro común, a pesar de que fiecuentemente no pueden especificar todas las relacio¬ nes genealógicas. El grupo de filiación se denomina de una forma común y puede tener un emblema identificativo o» incluso» un tótem. La tierra y otros recursos pro¬ ductivos pueden ser propiedad del grupo de filiación, y los mitos y las prácticas religiosas están fi�cuentemente asociados con el propio grupo. El matrimonio también suele estar regulado por los miembros del grupo» de la misma forma que en los sistemas unihneales» a pesar de que la exogamia en este grupo femiliar no es tan común como en los sistemas unilineales. Los sistemas ambilineales, sobre todo» recuerdan a los grupos unilineales con varios niveles o tipos de grupos de filia¬ ción, que se distinguen (como en los sistemas unilinea¬ les) en si están o no especificados todos los escalones genealógicos desde el supuesto ancestro común. Los Samoanos del Pacífico Sur son un ejemplo de so¬ ciedad ambilineal. Samoa tiene dos tipos de grupos de fi¬ liación ambilineal» correspondientes a lo que podríamos llamar clanes y subclanes en una sociedad unilineal. Am¬ bos grupos son exógamos. Asociados a cada dan ambili¬ neal están uno o más jefes. Un grupo toma su nombre del jefe de más edad; en tanto que los subclanes» de los que siempre existen por lo menos dos» pueden tomar su nombre del jefe más joven, La distinción entre el sistema ambilineal samoano y los sistemas unilineales es que, aunque un individuo pueda estar afiliado a un grupo ambilineal a través de su padre o de su madre (y sus parientes» por el contrario» podrían estar afiliados con cualquiera de sus grupos de femiliares)»hay un número de grupos ambilineales a los
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que pueden pertenecer esos individuos. La pertenencia a un grupo de filiación samoano es opcional» y cualquier persona teóricamente se puede afiliara cada uno o a to¬ dos los grupos ambilineales con los que está relacionado, Sin embargo» en la práctica, una persona está originaria¬ mente asociada a un grupo (el grupo ambiÜneal en cuyas tierras vive actualmente y cultiva) aunque pueda partidpar en las actividades (en la construcción de casas» por ejemplo) de varios grupos. Puesto que una persona puede pertenecerá más de un grupo ambilineal, la socie¬ dad no está dividida en diferentes grupos &miliares» en contraste con las sociedades unilineales. Consecuente¬ mente» los miembros centrales de cada grupo ambilineal no pueden vivir todos juntos, como podría ocurrir en las sociedades unilineales, puesto que cada persona perte¬ nece a más de un grupo y no se puede vivir en varios si¬ tios a la vez, No todas las sociedades ambilineales tienen los múlti¬ ples grupos de filiación que hay en Samoa. En algunas so¬ ciedades ambilineales» una persona puede pertenecer sólo a un grupo» en cuyo caso la sociedad puede estar di¬ vidida en grupos, no solapados y separados» de femiliares. ¿Por qué algunas sociedades tienen grupos de filia¬ ción ambilineal? Aunque la evidencia no es muy dara» puede ser que las sociedades con grupos de filiación unilineal se transformen, bajo condiciones especiales» en sociedades con grupos de filiación ambilineal, particu¬ larmente en situaciones de despoblación. � hemos co¬ mentado que la despoblación puede transformar una sociedad previamente unilocal en otra bilocal. Si esa so¬ ciedad previamente unilocal tiene también grupos de fi¬ liación unilineal» los grupos de filiación pueden llegar a transformarse en grupos ambilineales. Por ejemplo, si una sociedad era patrilocal y patrilineal» aunque algunas parejas comenzaran a vivir matrilocalmente» entonces sus hijos estarán asociados a sus madres a partir de un grupo previo de filiación patrilineal en cuyas tierras pue¬ dan vivir. Si esta situación se produce regularmente» el principio unilineal se puede llegara transformar en prin¬ cipio ambilineal. Por lo tanto» los sistemas de filiación ambilineal pueden haberse desarrollado recientemente a partir de una despoblación originada por la introduc¬ ción de enfermedades europeas.
Terminología del parentesco Nliestra sociedad, como todas las demás, se refiere a un número de femiliares diferentes con el mismo término dasificatorlo� Muchos de nosotros probable¬ mente nunca nos detendremos a pensar el porqué llama¬ mos a nuestros parientes de la forma que lo hacemos. Por
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ejemplo� llamamos al hermano di la madre o al hemiano del padre (y a menudo esposo de la hermana de la madre y esposo de la hermana del padre) con el mismo tér¬ mino: tíoMo es que no seamos capaces de distinguir en¬ tre el hermano de nuestro padre o el de nuestra madre o que ignoremos la diferencia entre parentesco consanguijteo (Emilia de sangre) y parentesco (Emilia reladonada con el matrimonio o también Emilia política). ¥ii su lugar, parece que en nuestra sociedad general¬ mente no encontramos necesario distinguir entre las di¬ ferentes formas de tíos. SiTi embargo� de la misma manera que nuestro sis¬ tema de clasificación nos puede parecerútil, los estudios de campo efectuados por los antropólogos han revelado que las sociedades difieren mucho en las formas en las que agrupan o distinguen a los femiliares. La terminolo¬ gía femiliar utilizada en una sociedad puede revelar el tipo de femilia predominante� sus normas de residencia y sus normas de filiación, y otros aspectos de su organi¬ zación social� Los términos utilizados para definir a los diferentes femiliares también nos pueden proporcionar las claves para las características previas a las de los siste¬ mas sociales de esa sociedad» si� como creen muchos antropólogosj los términos femiliares de una sociedad son muy resistentes al cambio. Los sistemas principales de terminología femiliar son los de los Omaha� los de los Crow, los Iroqueses, Sudaneses, Hawaianos e Inuit (Es¬ quimales). Dado que es el sistema más femiliar para nosotros� consideraremos en primer lugar, la terminología femiliar empleada en la nuestra y en otras sociedades comercia¬ les, aunque no esté limitado a este tipo de sociedades ya que también podemos encontrarlo en las Inuit, SíSTEMA ESQUÍMAL O INUÍT
La característica distintiva del sistema Esquimal o Inuit (Figura 21.7) es que todos los primos están com¬ prendidos dentro del mismo término aunque se distin¬ guen los hermanos y hermanas� y todas las tías y tíos están comprendidos dentro de los mismos términos ainque se distinguen los del padre y la madre. En la Figura 21,7 y en las figuras siguientes, los tipos de femilias que se distinguen con los mismos términos se colo¬ rean y marcan de la misma forma; por ejemplo� en el sistema de los Inuit, los parientes del tipo 2 (hermanos del padre) y 6 (hermanos de la madre) se denominan con el mismo término (ííos). Obsérvese que en este sistema, en contraste con otros que estudiaremos, a nir�no de los demás parientes se le denomina generalmente con los mismos términos utilizados para los miembros del nú¬ cleo femiliar: madre» padre» hermano y hermana.
Ncita-; En alggnoc $lfiteina$ kuih el termino primo variar segi;� 9I $63(0� Los Upofi familarefi £9 r e f i m n al ml&rno t érr iho est án maicadoe d e la misma
Figura 21.7. Sistema de terminología fámitiar de /os inuit (e�quimaies). El tipo Inuit de terminología femiliar no se encuentra generalmente donde existen grupos de filiación unilineal o ambilineal; el único grupo femiliar que aparece repre¬ sentado es el parentesco bilateral. Recordemos que el pa¬ rentesco en un sistema femiliar bilateral es un grupo ego-centrado. A pesar de que los familiares tanto de mi madre como de mi padre son igualmente importantes» mis familiares más importantes son, generalmente, los más próximos a mí. Ésta es una verdad particular en nuestra sociedad» en donde el núdeo familiar general¬ mente vive solo, separado y escasamente relacionado con otros familiares» a excepción de las ceremonias ocasiona¬ les. Como el núdeo familiar es más importante» cabría esperar que la terminología de éste para los tipos de fa¬ milia sea diferente de la terminología de otros familiares, Y los lados de la madre y del padre son igualmente im¬ portantes (o no importantes), lo que le da sentido a que utilicemos los mismos términos (ííflj tío y primo) para ambos lados de la familia. Sistema Omaha
El sistema Omaha de terminología familiar toma su nombre de los indios Omaha del Norte de América» pero el sistema se encuentra también en muchas sociedades de todo el mundo» sobre todo en sociedades de filiación patrihneal. Enfa Figura 21.8 podemos ver inmediatamente qué tipos de familia se agrupan en un sistema Omaha. Primero el padre y el hermano del padre (números 2 y 3); ambos son designados con d mismo término. Esta forma de clasificar parientes contrasta marcadamente con fa nuestra» en fa que ningún término que aplicamos a u n miembro dd núdeo familiar (padre, madre» her¬ mano» hermana) es aplicado a cualquier otro pariente. ¿Qué sucede en el sistema Omaha de �rupación fami¬ liar? Una interpretación es que tanto d padre como d
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í1 A Figura 21.S.
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¿A i 1
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Sist&ma dtí torminoiogía famiiiar
Omaha. hermano del padre se �rupan en este sistema porque la mayoría de las sociedades en lasque se encuentra este sis¬ tema tienen grupos femiliares patrilineales» Tanto el pa¬ dre como el hermano del padre están en la generación paterna de mi grupo femUiarpatrilineal y se pueden con¬ siderar muy similarmente con respecto a mí. El hermano de mi padre probablemente también vive cerca de nií> ya que las sociedades patrilineales tienen generalmente resi¬ dencias patrilocales. Entonces» el término para padre y hermano del padre se puede interpretar como «miembro varón de mi grupo feniliar patrilineal en la generación de mi padre». Una segunda agrupación» que en un primer vistazo parece similar al agrupamiento del padre y del hermano del padre» es la de la madre y la hermana de la madre (4 y 5)� a las que se Uama por el mismo término. Pero más sorprendentemente»la hi� del hermano de la madre (16) es mencionada también con idéntico término. ¿Por qué? Si pensamos en el término como: «mujer miembro del patrilina�e de mi madre de CHfííj?Híergeneración»j enton¬ ces el término toma sentido» Coherente con este punto de vista» todos los miembros varones del patrilinaje de mi madre de cualquier generación (hermano de mi ma¬ dre» 6» hijo del hermano de mi madre» 15) son mencio¬ nados también por un solo término. Es claro> entonces» que los femiliares tanto de mi pa¬ dre como de mi madre estén agrupados de forma dife¬ rente en este sistema. Para los miembros del grupo �miliar patrilineal de mi madre» agrupo a todos los miembros varones juntos y a todos los miembros hem¬ bras juntos independientemente de su generación. Sin embargo» para los miembros del grupo patrilineal femiliar de mi padre tengo términos diferentes para hombres y mujeres degeneraciones diferentes. George PeterMurdock sugirió que una sociedad agrupa los tipos femiliares cuando existen más similitudes que diferencias entre ellos,
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Aplicando este principio» y reconociendo que las so¬ ciedades con el sistema Omaha generalmente son patri¬ lineales, me doy cuenta de que el grupo femiliar patrilineal de mi padre es al que pertenezco y en el que tengo importantes obligaciones y derechos. Consecuen¬ temente» las personas de la generación de mi padre son proclives a mantener una actitud diferente hacia mí en comparación con las personas de mi propia generación. Los miembros de mi grupo patrilineal de la generación de mi padre es probable que ejerzan alguna autoridad sobre mí» y yo estoy obligado a mostrarles respeto. Los miembros de mi grupo patrilineal de mi propia genera¬ ción son aquellos con los que es probable que juegue de niño y sean mis amigos. Asi» en un sistema patrilineal» las personas del lado de mi padre pertenecientes a diferentes generaciones es posible que sean distinguidas, Por el contrario» el matrilinaje de mi madre es relativamente poco importante para mí (desde que decido aceptar mi linaje de la linea de mi padre). Y porque mi residencia es probablemente patrilocal» los parientes de mi madre po¬ siblemente no siempre vivirán cerca de mí. Por tanto» considerando que los �miliares patrilineales de mi ma¬ dre son comparativamente poco importantes para raí en este sistema» son lo bastante parecidos como para ser �rupados juntos. Hnalmente» en el sistema Omaha» me refiero a mis primos paralelos varones (los hijos del hermano de mi padre» 9, y los hijos de la hermana de mi madre»13) de la misma forma en que me refiero a mi hermano (H). Me refiero a mis primas paralelas hembras (hijas del her¬ mano de mi padre» 10, e hijas de la hermana de mi ma¬ dre» 14) de la misma forma en que me refiero a mi hermana (12). Considerando que el hermano de mi pa¬ dre y la hermana de mi madre están identificados con el mismo término» utilizo para mis primos procedentes de padre y madre este término de conjunto hermanos (her¬ manos y hermanas). Si llamo a los hijos de mis propios padre y madre (además de mí) «Hermano» y «Herraana»> entonces los hijos de todos aquellos a los que llamo «Madre» y «Padre» se deben llamar «Hermano» y «Hermana» igualmente.
El s[stema Crow H sistema Crow» denominado asi por una cultura de Norteamérica» se ha caracterizado como la contraimagen del sistema Omaha. Se han empleado los mismos princi¬ pios de tipos de agrupaciones femiliares» excepto que en el sistema Crow está asociado con la filiación matrilineal» así� los individuos del grupo matrilineal de mi madre (que es el mío) no se agrupan por generaciones» en tanto que sí se hace con los individuos del grupo matrilineal de
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Capítulo 21
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Residencia c o n yu g a l y parentesco
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Hgura 2 1 .9 . fymHiar Crow.
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Srstema de íarminofogía
mi padre» Comparando la Figura 3 con la Figura 2 Ufij encontramos que la agrupación y la separación de tipos �miliares son las mismas en ambos» excepto que las �rupadones entre generaciones en el sistema Crow apa¬ recen más en el lado del padre que en el de la madre* Rn otras palabras» llamo a mi madre y a las hermanas de mi padre de la misma forma (ya que ambas son mujeres miembros de mi grupo de filiación matrilineal en la ge¬ neración de m i mad re), Llamo a mi padrcj al herman o de mi padre y al hijo de la hermana de mi padre con el mismo término (a todos los miembros masculinos del grupo matrilineal de mi padre de cualquier generación), llamo a las hermanas de mi padre y a las hijas de las her¬ manas de mi padre de la misma forma (ambas son miembros femeninos del grupo matrilineal de mi pa¬ dre)* Y me refiero a mis primos paralelos de la misma manera con que me refiero a mi hermano ya mi her¬ mana. E l sistema I ro q u és El sistema Iroqués» llamado así por los indios Iroqueses del norte de América» es similar tanto al sistema Omaha como al Crow en la forma en que me refiero a los parientes de la generación de mis padres (Figura 2LIO). Esto es» mi padre y los hermanos de mi padre (2 y 3) se denominan por el mismo término» y mi madre y las her¬ manas de mi madre (4 y 5) también se designan por el mismo término. Sin embaigo» el sistema Iroqués difiere del sistema Omaha y del Crow con respecto a mi propia generación. En los sistemas Omaha y Crow» un conjunto de primos cruzados se agrupaba en la terminología femiliar con la generación superior. En el sistema iroqués ambos conjuntos de primos cruzados (hijos de los her¬ manos de la madre» 15 y 16; e hijos de la hermana del pa¬ dre» 7 y 8) son mencionados por los mismos términos» distinguidos por sexos. Esto es» la hija del hermano de la
E3 madre y la hija de la hermana del padre son menciona¬ das con el mismo término. También el hijo del hermano de la madre y el hijo de la hermana del padre son men¬ cionados con el mismo término. Los primos paralelos siempre tienen términos diferentes de los de los primos truzados y son algunas veces» aunque no siempre» men¬ cionados por el mismo término que el hermano o la her¬ mana de uno mismo. Igual que los sistemas Omaha y Crow» el sistema Iro¬ qués tiene términos diferentes para los parientes tanto del lado del padre como de la madre. Tal diferenciación tiende a estar asociada con la filiación unilineal» lo que no es sorprendente ya que la filiación unilineal afocta a la afiliación de la femilia tanto de la madre como del padre. ¿Por qué la terminología Iroquesa» en lugar de las de los Omaha y Crow> requiere una justificación? Una posible explicación es que estas dos se producen en una sociedad en desarrollo» en oposición a la decadente sociedad pro¬ pia del sistema unilineal. Otra expÜcación posible es que la terminología Iroquesa eme�e en sociedades en las que se prefiere el matrimonio con ambos primos cruzados» que en el sistema Iroqués se diferencian de los demás pa¬ rientes. El sistema S uda n és A diferencia de los sistemas Crow» Omaha e Iroqués» el sistema Sudanés generalmente no agrupa a ningún pariente en las generaciones de los padres y en la mía propia. Esto es» el sistema Sudanés es por lo general un sistema descriptivot en el que se utiliza un término descriptivio diferente para cada femÜiar» como muestra la Figura 2L1L ¿Qué tipo de sociedades es probable que tengan tal sistema? Aunque las sociedades con termi¬ nología Sudanesa suelen ser patrilineales» son diferen¬ tes de muchas sociedades patrilineales que tienen los
A A A éAs éA 0A é 10 11 11111
Moto: Aunqw r\o aparezca ef> dagrama, en el cl&tefna inquéfi loe primos paraMo$ $t cteflomfcian cor témilrubc ditarefitef s�gOn pr�ed� (M heimano o efe la hermara de uno. F i g u r a 21.10. fymiliar Irotfués.
Sistema fBrminologfa
Ca p í t ul o 21
Residencia c o n y u g a l y p a r e n t e s c o
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Á®iL[¿]¿A©Xa Figura 21.11.
fámUtar Sudanós.
Sist&ma d& ttírminotogía
términos Omaha o Iioqués* La terminología Sudanesa está asociada a una relativamente gran complejidad politica> estratificación de clases y especialización ocupacional. Se ha sugerido que, bajo tales condiciones, un sistema femiliar puede reflejar la necesidad de ha¬ cer distinciones delicadas entre los miembros de los grupos de filiación que tienen oportunidades y privile¬ gios diferentes en el sistema ocupacional o sistema de dase, Los sistemas Omaha� Crow� Iroqués y Sudanés, aun¬ que diferentes entre ellos y asociados con algunos ins¬ trumentos pronosticad ores distintos� comparten una característica importante: los términos utilizados para la Emilia del lado del padre y de la madre no son los mismos. Si imagina los diagramas femiliares de termi¬ nología doblados por la mitad� las dos partes no serían la misma. Como hemos visto en el sistema Inuit� sin embargo» los términos en el lado del padre y de la ma¬ dre son exactamente los mismos. Esta característica su¬ giere que los dos lados de la Emilia son igualmente importantes o igualmente insignificantes. El sistema Hawaiano también tiene los mismos términos en am¬ bos lados� pero la Emilia fiiera del núcleo �miliar es más importante, El
s[stema
Hawa[ako
El sistema Hawaiano de terminología �miliar es me¬ nos complejo ya que utiliza el menor numero de térmi¬ nos. En este sistema todos los parientes del mismo sexo y en la misma generación se designan con el mismo tér¬ mino (Figura 21,12), Asíj todas mis primas se mencionan con el mismo término que mi hermana; todos los primos se mencionan con el mismo término que mi hermano. Todos los de la generación de mis padres relacionados conmigo se designan con un término si es que son muje¬ res (incluyendo a mi madre) y con otro si son hombres (incluyendo a mi padre).
Figura 2 1 . 1 2 . Stsfoma dB �rminoíogía famUiar Hawaiano. El hecho de que las sociedades con la misma termi¬ nología que la Hawaiana no tengan grupos de filiación unilineal ayuda a explicar por qué los términos utiliza¬ dos para designar a los �miliares son iguales en ambos lados de la ;&milia, ¿Por qué se utilizan los términos aplicados a madre» padre» hermana y hermano para de¬ signar a otros �miliares? Quizá porque las sociedades con terminología Hawaiana son proclives a tener gran¬ des femilias extensas las que puede pertenecer cada tipo de femiliares, como muestra la Figura 21,12» a causa de los patrones de residencia alternativa, Así> en contraste con nuestra propia sociedad» algunos femiliares son muy importantes, un hecho que parece refle¬ jarse en la práctica de referirse a otros parientes con los mismos términos utilizados para los miembros del nticleo �miliar,
CD-ROM EjerciciD da conceptos 111-24
Sumario L En nuestra sociedad» y en muchas otras socieda¬ des industriales» una pareja recién casada generalmente establece su lugar de residencia apartado del de sus pa¬ dres o �miliares (residencia neolocal). Pero alrededor del 95 por ciento de las sociedades del mundo tiene al¬ gún modelo de residencia por el que la nueva pareja se establece dentro o muy cerca del hogar de los padres o de algún pariente cercano del novio o de la novia, 2. Los cuatro modelos mayores en los que viven las parejas recién casadas en el hogar de sus padres (o cerca de él) o de �miliares son:
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C a p í t u l o 21
R esidencia conyugal y parentesco
Residencia patrilocal; la pareja vive con o cerca de Iq® padres del espcjso (67 por ciento de todas las sociedades). b) Residencia matrilocal: la pareja vive con o cerca de los padres déla esposa (15 por ciento de todas las sociedades). c) Residencia bilocal: la pareja vive en o cerca de los padres tanto del novio como de la novia (7 por ciento de todas las sociedades). d) Residencia avunculocal: el hijo y su esposa se asientan con o cerca del hermano de la madre (4 por ciento de todas las sociedades). íí)
3. En la mayoría de las sociedades en las que las co¬ nexiones �miliares son importantes» una regla sitúa a cada persona en un conjunto particular y definible de parientes. Las reglas que afilian a los individuos con los conjuntos de parientes son llamadas reglas de filiación. 4. Las reglas de filiación afilian a los individuos con los diferentes conjuntos de parientes. Sólo hay tres reglas conocidas de filiación: La filiación patrilineal afilia a un individuo con los i�mUiares de ambos sexos relacionados con él o ella a través solamente de los hombres. En cada generación los hijos pertenecerán al grupo de su padre. íp) La filiación matrilineal afilia a un individuo con los femiliares relacionados con ella o él a través solamente de las mujeres. En cada generación los hijos pertenecerán al grupo femiliar de su madre. cj la filiación ambilineal afilia a un individuo con los �miliares relacionados con él o ella a través tanto de los hombres como de las mujeres. Consecuentemente» el grupo de filiación muestra tanto relaciones genealógicas masculinas como femeninas. íí)
5. Las sociedades sin reglas de filiación lineal son so¬ ciedades bilaterales. Los parientes por el lado de la madre y del padre de la femilia tienen la misma importancia Oj más generalmente! son igual de insignificantes. Los pa¬ rientes son grupos de femiliares ego-centrados que pue¬ den reunirse juntos temporalmente con algún fin, 6, Con la filiación unilineal» patrilineal o matrilineal> las personas usualmente se refieren a si mismas como pertenecientes a un grupo particular unilineal o a un conjunto de grupos» ya que creen tener un ascen¬ diente común tanto en la línea masculina como en la fe¬ menina. Esta gente constituye lo que se denomina grupo unilineal de filiación. Hay varios tipos:
13 Los linajes son grupos de femiliares cuyos miem¬ bros pueden trazar su filiación a partir de un an¬ cestro común por medio de relaciones conocidas. Los clanes son grupos de femiliares que creen b) son descendientes de un antepasado común que pero no pueden especificar las relaciones genea¬ lógicas. c) Las fi'atrías son grupos de danés supuestamente relacionados. d) Las mitades se dice que existen cuando se divide una sociedad en dos grupos de descendientes unilineales sin nexos específicos con el supuesto antepasado común de cada una de ellas. a)
7. Los grupos de filiación unilineales son más fre¬ cuentes en las sociedades situadas en los rangos interme¬ dios de complejidad cultural» esto es» en sociedades productoras de alimentos no comerciales» en oposición a las sociedades recolectoras de alimentos. En tales socie¬ dades» los grupos unÜineales de filiación a menudo tie¬ nen importantes funciones en los aspectos vitales sociales» económicos» políticos y religiosos. 8. Las sociedades difieren mucho en la forma de s�rupar o distinguir a los parientes bajo los mismos o di¬ ferentes términos �miliares. Los principales sistemas de terminología son los Inuit (Esquimales)» Omaha» Crow» Iroqués» Sudanés y Hawaiano.
Glosario de términos Clan Filiación ambilineal Filiación matrilineal Filiación patrilineal Filiación unilineal Doble filiación o Doble filiación unilineal Ego Famüiar consanguíneo Familiares afines Fratría Hermanos Hijos Linaje Matriclán Matrilinaje Mitades Parentesco bilateral Patriclanes Patrilinaje Reglas de filiación Residencia avunculocal
Ca p í t ul o 21 Residencia c o n y u g a l y p a r e n t e s c o
Residencia bilocal Residencia matrilocal Residencia neolocal Residencia patrilocal Residencia unilocal Término dasificatorio Término descriptivo Tótem
Cuestiones críticas U 2. X
¿Qué otras cosas de nuestra sociedad cambiarían si practicáramos otro tipo de residencia diferente de la residencia neolocal? ¿Por qué el parentesco proporciona la principal estructura de la acción social en las sociedades no comerciales? ¿Por qué puede ser tan importante para los grupos de filiación unilineal el no solaparse unos con otros?
/ni?* Ejercicios de Internet 1, Lea algo sobre la terminología del parentesco en la Europa Occidental medieval en; http.//kiihttp.ccukaiis. edu/kansas/orb/essays/teKtO 3.html. 2, Muchas de las personas que emigran a otros paí¬ ses se acaban interesando por conocer a sus antepasados. Trazar la genealogía puede ser un arduo trabajo� espe¬ cialmente cuando los sistemas de denominación son diferentes de los que usted utiliza. Vea en: Hipi/fwvrw, nndataJio/home/jborgos/jborgoseJitm una descripción de las denominaciones noruegas y cómo se relacionan para hacer una reconstrucción,
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3, Aprenda más sobre parentescos y organización social utilizando el sitio interactivo de la página web en http://www�umanitoba.ca/faculties/arts/andiropology/ kintitle.hijnl. Utilice el tutorial para repasar algunos de los conceptos que puedan tener dificultad para usted.
Lecturas sugeridas Emb£R, y EmbeR) C, R. ��rriage� FamSyt avd KinMp'. Com-
pamtjv� 5tuífcs of Social Organisation. New Havcn� CT: P�RAP Press» 19S3. Una colección de estudios tcansculturales y estudios comparativos de especies ya publicados que pOQcn a prueba las posibles explicaciones de algunos aspec¬ tos de la organi�cióri social. Son relevantes para este capí¬ tulo los estudios acerca de las variacionís en la residencia marital y en el desarrollo de la fdiación unilineal. Murjxxic� G. P, Social Structure. Nueva York: Macrnillan, 1�4�. Un estudio transcultural pionero acerca de las variaciones que se producen en los diversos aspectos de la or�anÍ2aciún social» incluyendo la familia y el matrimonio, los grupos de parentesco, la tírminqlogía del parentesco� el tabú del in¬ cesto y sus extensiones y la regulación de las prácticas se¬ xuales. Pa&teenak� B. «(Family and Household: Wbo Lives Where, Why Docs It Vary, and Why Is It Important?»?. En C. R. Embír y M. Eraber, Cross-Cidturat Research forSocial ScietKe. Upper Saddle Rivera NJ: Prentice Hallt 1995. Prentice Hall/Simon ScSchuster Publisbing. l a primera parte de este capítulo* specialmente dedicada a los estudiantes� analiza las varia¬ ciones que se producín en la$ prácticas de la residencia ma¬ rital. P�TERNAKi B. Ember, C. R. y Ember, M. Sex, getlder, and Kitiship: A Cross-Cidtural Per$pective. Upper Saddle River, NJ: IVentLce HaUt 1997. Análisis y puesta al día de los estudios edstentes acerca del sexo, el g¿nero, el matrimonio, la Emilia y el parentesco. Véase particularmente el Capí¬ tulo 12.
Asociaciones y grupos de interés INDICE DEL CAPITULO '«
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Asociaciones no voluntarias
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Asociaciones voluntarias "I Cómo explicar la variabilidad en las asociaciones
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As oc i a c i ones y g r u p os de i n t e r é s
lohnsoiij el escritor inglés díl siglp xviiij le pidieron una vís quí describiera ASamud a James Boswdl su compañero y biógrafo, «Boswell», vociferó» «es un hombre muy "dubable">». La respuesta de íohnson no significaba que Boswell le atacara con una porra*: se estaba refiriendo a que era un hombre aficionado a todo tipo de clubes y asociaciones» afición que compartía con muchos de sus contemporáneos» La tendencia a fonnar asociaciones no fue específica de la Inglaterra del siglo xvttl La noción de club nos puede hacer pensar en algo extracurricular y poco importante» aunque las asociaciones» desempeñan papeles muy importantes en la vida econó¬ mica y política de muchas sociedades. En este capítulo estudiaremos los diferentes tipos de asociaciones consti¬ tuidas en sociedades diferentes» cómo funcionan estos grupos y a qué fines generales sirven. Cuando hablamos de asodadones» nos referimos a diferentes tipos de grupos que no están basados en el parentesco» como comentamos en el capítulo anterior» o en el territorio» que estudiaremos en el capítulo próximo� Por tanto» las asociadones son grupos no femiliares ni territoriales y� aunque varíen» tie¬ nen algunas características comunes: 1) algún tipo de es¬ tructura formal e instituuonalizada; 2) la exxlusión de algunas personas; 3) miembros con intereses y fines co¬ munes; y 4) miembros que poseen un perceptible sentido del oigullo de pertenencia. La sociedad americana con¬ temporánea tiene una abundancia de interesas íÍí grupo (usando la terminología de los políticos) que muestra las características generales de estas asociaciones- Tales gru¬ pos varían considerablemente tanto en tamaño como en agnificación social» desde las de nivel nadonal como los partidos Demócrata y Eepubhcano hasta las organizacio¬ nes locales como las hermandades de los colegios» mascu¬ linas (firatemidades) y femeninas (sororidades). Pero estas sodedades difieren considerablemente en el grado que tienen sus asociadones y» si lo tienen» en el tipo. Para feciÜtar nuestro estudio enfocaremos en dos dimensiones cómo las asociadones varían de una sodedad a otra. Una es si la afiliadón de sus miembros es o no voluntaria. En EE UU» todas las sociedades» con excepdón dd derecho dd gobierno a efectuar redutamientos en época de guerra» son voluntarias» esto es» la gente puede escoger entre afiliarse o no afiliarse. Pero en mu¬ chas sodedades» particularmente entre las más igualita¬ rias» la afiliación no es voluntaria: toda la gente de una determinada categoría está obÜgada a afiliarseUna segunda dimensión de la variación en las sode¬ dades es que cahficana una persona por ser miembro de Notá del Tiaducton m tt�és club tmubiéii significa vpoTW>,
Ta bla 22.1. Alg unos ejempíos de asociaciones. Crítaños da Afiliación
�tiación
\Muntatia Invoiuntatia
Aíscrípocín universat
Adscripción
Asodadon�s étnicas AsodadoriíS regionales A�odadoncs ocupacionalcs Partidos políticos Grupos ífe interés especial
Grupos de edad Mayoría de asociadories unisexuales Servicio militar obligatorio
ella. Existen dos posibles tipos de cahficadón: cualidades adquiridas y adscritas. Las adquiridas son las que una persona adquiere durante su vida» tales como aptitudes superiores en el deporte o habilidades necesarias para ser dectridsta» por ejemplo. Las adscritas se definen por d nacimiento de la persona» es dedr» por causas genéticas (por ejemplo» d sexo) o a causa de los antecedentes femiliares (etnicidad» lugar de nadmiento» religión» clase social» etc.). Hablamos de dos tipos o modahdades de adscripción: cualidades adscritas universales» aquellas que se encuentran en todas las sociedades» como la edad y el sexo y cualidades adscritas variables» aquellas que se encuentran sólo en algunas sociedades tales como» dife¬ rencias étnicas» religiosas o de dase social la Tabla 22,1 representa estas dos dimensiones en las asociaciones (voluntarias/no voluntarias y criterios para su afHiadón) y algunos tipos de asodadorws que pueden adaptarse a nuestra clasificación. Algunas asociadones no se ajustan tan estrechamente a estas definiciones (por ejemplo» los criterios que califican a los miembros de los Boy Scout» induyen d interés por afiliarse» d tipo de la ac¬ tividad y también d sexo biológico» una cualidad adscrita),
Asociaciones no voluntarias Aunque las sociedades complejas pueden tener aso¬ ciadones no voluntarias» tales asociadones son más típi¬ cas de sociedades rdativamente no estratificadas o igualitarias. En las sociedades relativamente no estratifi¬ cadas» las asociaciones tienden a estar basadas en las ca¬ racterísticas universalmente adscritas dd sexo y la edad,
C a pítulo 22
A s o c i a c i o n e s y g r u p o s de interés
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Algunas circunstancias han cambiadOp pero los grupos de edad de los Nandi de Kenia todavía tienen importancia. A este joven Nandi (con trajeóle dice un líder espiritual tradicional (con capa de piel): «En el pasado, cuando nuestros jóvenes guerreros salieron fuera por primera vez, les entregamos lanzas y escudos y les dijimos que trajeran rique¬ zas para la comunidad. Hoy te damos una pluma y papel y te pedimos lo mismo».
TMes asociaciones toman dos formas: grupos de edad y asociaciones masculinas o femeninas (unisexuales).
CD-ROM Actividad de vídeo III-6
Grupos
de edad
Todas las sociedades utilizan un vocabulario de términos de edad, de la misma forma que utilizan un vocabulario de parentesco. Por ejemplo, así como distin¬ guimos entre hfrmatWt tfo y primo, también diferencia¬ mos entre rúñOt adolescente y adulto. térmitws de edad se refieren a las categorías basadas en la edad o en los gra¬ dos de la edad. Un grado de edad es simplemente una ca¬ tegoría de personas que están o caen dentro de un rango particular de edad culturaímente distinguido. Un grupo de edad, por el contrario, es el término para un grupo de personas de edad similar y del mismo sexo que se en-
cuentran juntas en algunas o en todas las etapas de la vida. Por «jemplo� todos los chicos de un cierto rango de edad y de un determinado distrito pueden llegar a estar simultáneamente iniciados en d rito de paso a «hom¬ bres», Posteriormente» a lo largo de la vida, este grupo como un todo pued« ser el de los «ancianos» y, todavía más tarde> el de los «retirados». La entrada a un grupo de edad generalmente no es voluntaria y está basada en las universalmente adscritas características de sexo y ídad, Los parientes forman la base de la organización y administración de la mayoría de las sociedades no co¬ merciales, Sin embargo, en algunas sociedades no comer¬ ciales, los grupos de edad entretejen y establecen fuertes lazos añadidos dentro de los grupos femiliares. Dos de tales sociedades son la de los Karimojong de Africa oriental y los Shavante de Brasil, GRUPOS DE EDAD DE LOS KARIMOrONG. Los Karimojong tienen una población de alrededor de 60.000 personas. Predominantemente pastores de reses,
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ocupan círca di 2,000 hectáreas de territorio semiárido d noroeste de Uganda. Su sociedad es particular¬ mente interesante a causa de su organización en grupos de edad y en grupos generacionales. Estos �rupamientos les proporcionan «tanto la fuente de su autoridad po¬ lítica como d principal campo en el que la ejercitan». Un grupo de edad de los Karimojong incluye a todos los hombres que se han iniciado en la virilidad en un es¬ pacio de tiempo de cinco a seis años» El grupo genera¬ cional consiste en una combinación de cinco grupos de edadj que cubren un periodo de 25 a 30 anos. Cada grupo generacional se considera que «origina» al que le ¿gue inmediatamente después» y en cualquier momento existen dos grupos generacionales. La unidad de más edad (cuyos miembros ejercen las funciones administra¬ tivas, judiciales y sacerdotales) es cerrada; la unidad más joven, cuyos miembros actúan como guerreros y poÜcías� continúa incluyendo a gente. Cuando están establecidos los cinco grupos de edad del grupo generacional más joven, estará preparado el grupo generacional (entonces impaciente) para asumir el estatus de sus predecesores de mayor edad. A regañadientes, aunque de forma realista, los más viejos acceden a la ceremonia de sucesión» des¬ plazándose los que una vez estaban en posición de obe¬ diencia a una posición de autoridad. Una vez iniciado, un muchacho se convierte en hom¬ bre, con un estatus claramente definido y con la certeza de ejercer la autoridad total en compañía de sus compa¬ neros de grupo. Ciertamente, un Karimojong no espera casarse (y existen ciertas barreras para fundar una femilia) hasta que ha sido iniciado. La ceremonia de inicia¬ ción ilustra por sí misma las características políticas y sociales del sistema de grupo de edad. Sin la autoridad de los más viejos no se puede efectuar la ceremonia; por medio de cuyos procedimientos se comprende explícita¬ mente su autoridad. La relación padre-hijo de generacio¬ nes adyacentes es enfetizada, ya que los padres están iniciando a sus hijos. El sistema de edad de los Karimojong comprende una sucesión cíclica de cuatro grupos generacionales en una relación continuamente predeterminada» El�riípe de ía g�twración retirada está formado por los más viejos que traspasan el cetro de su autoridad, ya que la mayoría de los cinco grupos de edad dentro de la generación retirada queda mermada, si no difunta. El grupo generacional de más edad está formado por los cinco grupos que ejercen activamente la autoridad, en tanto que el grupo genera¬ cional más joven continúa redutando miembros y> aun¬ que son obedientes a los anteriores, poseen algún poder administrativo. Los todavía no iniciados están empe¬ zando a constituir un grupo generacional. La Figura 22.1 flustra d sistema de edad de los Karimojong.
Grupo de la generación mayor
Figura 22.1 B sistema ífe edad de hs Kdritmjong está compuesta por cua¬ tro grupos degeneraciones distintas fmarcíkiflí o j ™ B�Cy D en este diagrama)t se suceden cíclicamente. Cada grupo generadomli asuvez� está dividido íh dnco grupos de edad o potenciales grupos de edad. El grupo de la generaáón mayor (A) ejerce la autoridad. El grupo de edad menor (B)t hs gue¬ rreros y policíaSi y sigue afiliando gente. El de genera¬ áón Destájbmrndo por hs grupos de edad retirados. Los no iniciados o h í ñ í í to�vla no naádos constituyen potencialmente hs grupos de edad Cl a C5,
GRUPOS DE EDAD DE LOS SHAVANTES. Los Shavantes habitan la región brasileña dd Mato Grosso y a mediados del siglo xx eran muy hostiles contra los bra¬ sileños de origen europeo que trataban de penetrar en sus territor ios. No fo e hasta los añ os cin cu enta cuando se consiguió establecer un contacto pacífico con la pobla¬ ción Shavante, constituida por unos 2.000 individuos. Aunque esta sociedad practica algo la agricultura, son fundamentalmente recolectores primarios de alimentos. La base de su alimentación son los tubérculos silvestres, nueces y fhitas, y la caza es su pasión. Los Shavantes po¬ seen poblados, aunque raramente permanecen en dios más de unas pocas semanas. En su lugar, hacen frecuen¬ tes viajes en comunidad que duran entre 6 y 24 semanas, para cazar o recolectar No invierten más de cuatro se¬ manas al año en sus huertos, que están localizados, al menos, a un día de viaje de los poblados. Los grupos de edad son una parte extremadamente importante en la sociedad Shavante, particularmente pa¬ ra los hombres. Los chicos salen de la niñez cuando son formalmente incluidos en un grupo de edad y se van a vi¬ vir a la «cabana de los solteros». La ceremonia de la ini¬ ciación tiene lugar cada cinco añosi y en día se inician todos los muchachos de entre 7 y 12 años a la vez. Los dnco años que residen en la «cabaña de los solteros» están
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también para las mujeres» Las chicas Shavante son intro¬ ducidas en un determinado grupo de edad cuando los chicos de su edad entran en la cabana de los solteros» aunque ellas pertenecen al grupo de edad sólo de forma nominal. Ellas no participan en la cabai�a de los solteros» ni tienen su propio equivalente» no son iniciadas y no pueden participar en los consejos del poblado» en donde se toman las decisiones de la comunidad- Entre las úni¬ cas cosas que se permiten a los grupos de edad de las chi¬ cas» está su participación ocasional con los hombres en algunas ceremonias. Paralas mujeres Shavante» el sistema de edad no fonciona» por tanto» como una asociación, Los Masa ir que tienen grupos de edadr inician a los jó¬ venes en grupos.
relativameDt� libres de responsabilidad. Las Emilias de los chicos les abastecen de alimentos» y salen de caza y reco¬ lectan cuando les apetece. Pero durante su residencia� los chicos son adiestrados en la caza> en la elaboración de sus armas y en los actos ceremoniales» produciéndose al cabo de los cinco años una serie de elaborados ritos de inicia¬ ción que marcan la entrada de los chicos en un estatus di¬ ferente: el de los «hombres jóvenes». El mismo día en que salen por última vez de la cabana de los solteros y� durante los ritos finales de iniciación, todo el grupo de edad se casa» cada uno de ellos con una muchacha joven» general¬ mente todavía no maduraj escogida por los padres del chico. El matrimonio no se puede consumar en esta épo¬ ca» ya que los jóvenes tienen que esperar a que sus jóvenes esposas maduren. Cuando las ceremonias concluyen» los jóvenes forman dubes de guerreros» ya que desde este mo¬ mento se les considera los guerreros de la comunidad y tienen que ganarse el privilegio de poder sentarse en el consejo vespertino del poblado. Pero en este estadio toda¬ vía no tienen autoridad y sus responsabilidades son pocas. El estadio siguiente es el de los «hombres maduros», Cuando se inicia a un grupo de edad en este estadio» sus miembros comienzan a experimentar alguna autoridad. Es en el consejo de los hombres maduros donde se to¬ man las decisiones importantes de la comunidad. Este último estatus consta actualmente de cinco grupos de edad consecutivos» ya que cada cinco años se forman mevos grupos de edad y cada uno de ellos sigue exis¬ tiendo hasta la muerte de sus miembros. Entre los gru¬ pos de los hombres maduros» los de más edad son muy respetados por los más jóvenes. Los miembros de los grupos de edad más jóvenes raramente intervienen en los consejos: asienten más que progresan en el sistema. En contraste con los Karimojong»que poseen grupos de edad sólo para los hombres» los Shavante los tienen
ASOCIAaONES UNISEXUALES H término unisexual lo utilizamos aquí de forma completamente diferente de su connotación corriente en nuestra sociedad» donde significa algo que es adecuado para ambos sexos. Utilizamos el término unisexual para describir un tipo de asociación que restringe su perte¬ nencia a u n sexo» generalmente masculino. El sexo como un requisito está directamente relacionado con los fines de las asociaciones unisexuales� En muchas de las asocia¬ ciones unisexuales masculinas» el fin es fortalecer el con¬ cepto de superioridad masculina y ofrecer a los hombres un refogio de las mujeres. En las sociedades no comer¬ ciales» las asociaciones de hombres son similares a los grupos de edad» excepto en que hay solamente dos gru¬ pos o grados: hombres maduros» que son miembros aso¬ ciados� y hombres inmaduros» que no son miembros. Lo mismo que las sociedades con grupos de edad» las socie¬ dades con asociaciones unisexuales mascuHnas en el grupo de los hombres «maduros» suelen tener ceremo¬ nias de iniciación masculinas dramáticas y traumáticas. Explicaremos posteriormente estas ceremonias en el ca¬ pítulo de Psicología y cultura. En la mayoría de las sociedades no comerciales� las mu¬ jeres poseen pocas asociaciones» quizá porque en tales so¬ ciedades son los hombres los que dominan los grupos ¿miliares» la propiedad y las esferas políticas de la vida. (También existe la posibilidad de que los antropólogos» la mayoría de los cuales son hombres» hayan prestado menos atención a las asociaciones de las mujeres que a las de los hombres.) En algunas sociedades parcialmente mercanti¬ les» como en las de Afnca occidental» son más comunes las asociaciones de mujeres. Las asociaciones unisexuales o clubes son también características de las sociedades muy industrializadas. Así» los Boy Scouts» los Kiwanis» las Gid Scouts y la liga de mujeres sufragistas son ejemplos punte¬ ros. Sin embargo» la afiliación a estos grupos es voluntaria» en tanto que en las sociedades no comerciales y menos complejas» la afiliación es a menudo involuntaria.
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As oc i a c i ones y g r u p o s de i n t e r é s
E3
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Nuevas perspectivas sobre el género ¿iMS aseciaciaties de muferes separadas aumentan el estatus y el poder de las mujeres? Algunas asociaciones de mujeres como las de los Ijaw del sur de Nigeria> según se ha dicho� tienen mu¬ cho poden ¿Acaso tienen más poder las mujeres cuando crean y se afilian a sus propias organizaciones? Tene¬ mos que asumir que la existencia de tales asociaciones mejoraría mucho la situación de la mujer� o al menos la igualaría de alguna forma a la de los hombres. Pero también se po¬ dría decir que los otros sistemas asociativos no «�separados» no favo¬ recen la igualdad� sino que incluso pueden aumentar las diferencias. Hasta donde podemos llegar a conocerj los investigadores todavía no han tratado de mostrar de forma transcultural ios efectos de las asodaciones de mujeres sobre el estatus femenino en los distintos aspectos de la vida» aunque sí existe un gran interés por observar si la presencia de asociaciones femeninas predice otros aspectos de la participación de la mujer en el proceso político» Marc Howard Ross estudió cua¬ tro aspectos de la participación déla mujer en la política: 1) el grado de desigualdad en la participación de
mujeres y hombres en las decisiones públicas o de la comunidad; 2) el grado de participación privada de la mujer en la política; 3) el grado en el que la mujer tiene acceso a posi¬ ciones de autoridad; y 4) el grado por el que la mujer posee asociacio¬ nes separadas bajo su control exduávo» Es precisamente el último de estos puntos el que ahora nos inte¬ resa. ¿Acaso la existencia de las aso¬ ciaciones exclusivas de mujeres incrementa su participación en la elecdón de las decisiones públicas y su acceso a los puestos de autori¬ dad? Los datos transcultu rales de Ross indican que la respuesta es no, La presencia de asociaciones excludvas de mujeres generalmente tw incrementa la participación de éstas en la toma de decisiones públicas� su acceso a las posiciones de autoridadj ni siquiera su participación en la política privada. Esto no significa que las mujeres de esas asociaciones no tengan influencia» aunque quizá sólo la tengan dentro de estas orga¬ nizaciones* Por supuesto que en futuras in¬ vestigaciones tenemos que conside¬
ASOCIACIONES DE SOLTEROS MAE-ENGA.
Los Mae-enga son un subgrupo de alrededor de 30 000 horticultores sedentarios que viven en las tierras altas de Nueva Guinea, Los antropólogos han prestado mucha atención a su sociedad a causa de que practican la segre¬ gación sexual; ciertamente» en toda su cultura» existe una hostilidad activa contra las mujeres. Los Mae-enga acos¬ tumbran a vivir en casas comunales separadas. A partir de los 5 años se permite que los muchachos vivan en la casa de su madre> aunque sean inconscientes de la «dis¬ tancia» existente entre ésta y su padre. Conforme crece su hijo» el padre» lo mismo que el resto del dan» le adiestra
rar otros fectores posibles. Quizá la participación femenina en el terreno político sería más fácil si las organi¬ zaciones femeninas controlaran im¬ portantes recursos económicos» ya que podrían proporcionar a las mujeres más influencia política. Al¬ gunos tipos de organizaciones feme¬ ninas pueden tener mayor poder que otras; por ejemplo» las asociaciones de mujeres solas pueden tener más poder que aquellas otras asociadas a organizaciones masculinas* Pero también es posible que� añadido a estas condiciones» figure el hecho de que las organizaciones femeninas in¬ dependientes» quizá por el hecho de ser independientes» no tienen nin¬ gún impacto sobre la participación de la mujer en la politica. Recientemente» en EE UU se ha comenzado a discutir un asunto relacionado con lo anterior; los posibles efectos de la «separación» de la mujer en el éxito femenino. Por ejemplo» ¿la separación de sexos en las clases de Matemáticas y Ciencias proporciona a las mujeres más igualdad con los hombres en cuanto a sus éxitos académicos, en
contra las mujereSi y es poco deseable que se le vea en compañía de mujeres» por lo que se le aconseja que vaya acompañado de hombres tanto en su casa como en sus actividades habituales, A medida que crece el chico» se le informa de que debe evitar tener contacto con las muje¬ res» ya que el contacto con la sangre menstrual o con la propia mujer menstruante» si no se neutraliza mediante ritos mágicos» puede «contaminar» al hombre. Puede «corromper sus fluidos vitales haciendo que se oscurezca su piel» le salgan arrugas y se consuman sus carnes» em¬ botándose su entendimiento y» eventualmente» le puede llevara un lento declinar y a la muerte».
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\ Vj ' • conseguir notas altas en estas asig¬ naturas Y en acceder a mejores puestos pagados en estas materias? Es bien conocido por todos que las mujeres suelen estar poco represen¬ tadas en las profesiones científicas de Matemáticas y Física en EE UU, de forma que sólo el 11 por ciento de las personas que se doctoran en Qencias Físicas y el 16 por ciento de las que lo hacen en Informática son mujeres» aunque en Ciencias Socia¬ les y en Humanidades el ntimero de mujeres y el de hombres es aproxi¬ madamente el mismo. Estas desigualdades podrían de¬ berse más al resultado de condicio¬ nes sociales que a diferencias de las mujeres en distintos sujetos y profe¬ siones. Los investigadores han ob¬ servado que los profesores de Matemáticas y Ciencias prestan ma¬ yor atención a los chicos» y cuando uno de ellos da una respuesta equi¬ vocada» el profesor tiende a reaificaiioj en tanto que cuando es una chica la que da la respuesta errónea» los profesores la tratan con mayor simpatía. Los chicos parecen más preparados para utilizar el equipo científico» en tanto que ellas lo están para tomar apuntes, Pero ambos se¬ xos se comportan de forma similar en Matemáticas y Ciencias, Las chi¬ cas tienen menos confianza en sus
habilidades y» cuando se gradtian en los colegios» han recibido menos cursos de Ciencias y de Matemáti¬ cas» por lo que están en desventaja con respecto a los chicos en esos camposSi los efectos amortiguadores de las mujeres son sociales o» sobre todo» sociales» ¿qué se puede hacer? Dado que los investigadores asegu¬ ran que las mujeres aprenden Mate¬ máticas y Ciencias mejor si reciben clases solas que en compañía mas¬ culina» algunos de ellos han propug¬ nado que las clases se impartan de forma separada (en clases y semina¬ rios) , Así» por ejemplo� los clubes de chicas voluntarias (Operación SMART) se han implantado en 240 localidades para interesara las estu¬ diantes de escuelas elementales y superiores en las ciencias» acu¬ diendo una mayoría de chicas de esas escuelas» aunque muchas de ellas no sabían por qué estaban in¬ teresadas en estas asignaturas. Si es¬ taban interesadas o no en las ciencias o cómo surgía este interés es algo que no está nada claro» pero si este programa funciona» tendría¬ mos que concluir que «separados» es mejor que «juntos», Las dos situaciones que hemos descrito aquí no parece que tengan efectos paralelos sobre el estatus de
Como la cultura mae contempla a la mujer como potendalmente suda» refuerza los estrictos códigos de con¬ ducta que deben seguirse entre hombre y mujer. Estos códigos de conducta son designados para salvaguardar la integridad masculina» la fuerza y la posesión de las cose¬ chas y otras propiedades. Son tan estrictas estas normas que son muchos los hombres jóvenes que rechazan ca¬ sarse, Pero los mayores tratan de convencerles de su de¬ ber de casarse y reproducirse. Las asociaciones de hombres tratan de regular las relaciones sexuales mascu¬ linas, La asociación dice tener algunos propósitos; la limpieza y fuerza de sus miembros» promover su creci¬
las mujeres. Las asociaciones de mujeres separadas� por sí mismas» no fen�orecen la igualdad entre am¬ bos géneros en la participación po¬ lítica, Pero la enseñanza separada para las chicas en Matemáticas y Ciencias puede fevorecer la igual¬ dad, ¿Qué diferencia ambas situa¬ ciones? Por lo menos hay una cosa diferente: las asociaciones de muje¬ res separadas» generalmente» no son voluntarias» ya que las mujeres tie¬ nen que afiliarse porque es la es¬ tructura de sus sociedades que han hecho los hombres. En cuanto a la enseñanza separada generalmente es voluntaria; las chicas pueden op¬ tar por la separación con el fin de adquirir mayor experiencia y la confianza que necesitan para actuar en terrenos más flbíírípí a ambos géneros. En otras palabras» cuando es la obra y no el género lo que de¬ fine cómo se puede actuar» la sepa¬ ración temporal para las mujeres puede fecilitarb tendencia de su gé¬ nero por la igualdad en las profesio¬ nes que hasta entonces no han tenido, Futítítes: M�c Howard Ro$&, «cPemale litica] f�rtidpation: A EKpk"
«Women m Sdence �3: Gendeu and tbe Cultura of Science�, �uil 16, 1993,3�3-430,
miento» hace dos atractivos para las mujeres y» lo más im¬ portante» supervisar el contacto entre ambos sexos de forma que» en último término» los «derechos» de las es¬ posas se gestionen por los hombres lo mismo que los «derechos» de los hijos nacidos en el dan, Entre los 15 y 16 años» los jóvenes varones mae se afilian a la asociación de solteros de su poblado» acordando tener un cuidado escrupuloso de no copular con ninguna mujer ni aceptar comida de manos feme¬ ninas. Como miembro del dub» participará en los ritua¬ les sanggaL Los solteros» bajo la supervisión de los miembros mayores dd dub» se reduyen en una cabaña
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perteneciente a éste situada en la profundidad dei bosque� para conseguir la «purificación». Durante cuatro días de »> similares en sus ñnes a los retiros religiososj cada joven observa prohibiciones adicionales para protegerse de todas las formas de sexualidad e im¬ purezas. Por ejemplo� se le deniega el comer cerdo (las mujeres son las que cuidan a los cerdos) y no pueden mi¬ rar hada el suelo durante sus expediciones al bosque por si ven huellas femeninas o heces de cerdos. Su cuerpo será limpiado y sus sueños se discutirán e interpretarán. Finalmente» reunidos en su dubj recuperada la pureza y protegidos� al menos por un tiempo� de la contaminadón> participarán en danzas organizadas y en banquetes con sus compañeras femeninas elegidas. Los festivales sattggaiproporcionan la oportunidad de demostrar su solidaridad a todo el dan y magnificencia a sus enemigos� con quienes en otras ocasiones se lucha. Tkmpoco es sorprendente la hostilidad que sienten hacia las mujeres si tenemos presente que la madre y la esposa de cada hombre suelen proceder de los danés vecinos (los danés mae son exógamos)� que están perpetua¬ mente enfrentados entre ellos. Por tanto» la hostilidad mae parece reflejarla hostilidad entre los danés, Los pro¬ pios Mae describen la situación de forma muy sucintar «Nos casamos con la gente contra la que combatimos». Las casas de hombres y� ocasionalmente» de mujeres se encuentran entre otros puebloSj particularmente en Melanesia� Polinesia» Áfirica y Suramérica, Las asociaciones masculinas son» sobre todo» de solteros» a pesar de que son los hombres casados de más edad los que adiestran a los más jóvenes y les transmiten los beneficios de su ex¬ periencia. £n los dias más militantes» las casas de los hombres actúan como fortalezas y arsenales» e incluso de santuarios para los fogitivos. Pero» generalmente» contri¬ buyen también a simbolizar el poder masculino y su so¬ lidaridad. Como hacen los grupos de edad» los dubes masculinos proporcionan los nexos que separan y com¬ plementan los lazos fomiliares. Por tanto» permiten que un grupo de hombres determinado en una sociedad de¬ terminada actúe a favor de la realización de los objetivos mutuamente acordados» independientemente de las reladones femÜiares. PORO Y SANDE. Generalmente existen algunos secretos en todas las asociaciones» como en la vida social en general. En los ejemplos que comentamos a continúadon» muchos de los detalles de las ceremonias de inidadón masculina se guardan con el mayor secreto. Pero más secretos parecen tener las asociadones Poro y Satide dd África occidental. Las asociaciones Poro y San de exis¬ ten en varios grupos culturales que hablan las lenguas Mande localizadas en lo que actualmente es Liberia» Sie-
ES rra Leona» Costa de Marfil y Guinea» Aunque en Guinea Poro y Sande han sido declarados ilegales» en el resto de los países no sólo no lo son» sino que además constituyen una parte importante de la estructura política. La perte¬ nencia a dios es pública e involuntaria» ya que todos los hombres de la comunidad han de pertenecer a los Poro y todas las mujeres a las Sande. Donde las asociaciones Poro y Sande son legales» la comunidad tiene dos estructuras políticas: la «secular» y la «sagrada>». La estructura secular consta de la dudad prindpal» el vecindario y el grupo �miliar de dirigentes» y los mayores. La estructura sagrada» o Zo» está consti¬ tuida por jerarquías de «sacerdotes» en las asociaciones Poro y Sande. Por ejemplo» entre los KpeUe de Liberia» los Zo Poro y Sande se turnan para asumir las responsabiÜdades de tratarlos problemas de la dudad tales como pe¬ leas» asesinatos» raptos» incestos y disputas sobre la tierraPor tanto» ¿en qué sentido son secretos los Poro y Sande? Si todos los adultos pertenecen a dios» tanto su afiliadón como todo lo que hagan difícilmente se puede considerar secreto� Pero los antropólogos no sólo han escrito sobre estas asociaciones» sino que algunos se han llegado a afiliar a eUas» como Beryl Bdlman» que se afi¬ lió a los Poro de los Kpdle» y considera que d «secreto» en estas sodedades es precisamente la necesidad de que sus miembros aprendan a guardar los secretos» particu¬ larmente los rdadonados con los ritos de iniciación ne¬ cesarios para ser miembro dd. grupo, Sólo cuando la gente aprende a guardar secretos es cuando comienzan a ser realmente considerados para partidpar en la vida política. Los líderes Poro establecen los lugares en los que los iniciados deben efectuar sus escarificadones y vivir en redusión durante alrededor de un ano (anteriormente eran tres o cuatro años). Los jóvenes abandonan los pue¬ blos» partidpan en una batalla ficticia contra un Ngatnu (un miembro de los Poro enmascarado como un demo¬ nio dd bosque)» que les hace unas marcas en d cuello» d tórax y la espalda por medio de cortes. Estas marcas sim¬ bolizan que han sido muertos y devorados por el demo¬ nio; pero entonces los iniciados «renacen»� En el «poblado» de iniciación» fuera del pueblo» los jóvenes aprenden dertas profesiones» a cazar y d uso de las me¬ dicinas básicas. Pero los jóvenes reciben instrucdones es¬ peciales de Zo para que puedan realizar los rituales de sus padres y otros son entrenados para realizar el papd de «demonios». Al terminar d año» los iniciados reciben nombres Poro por los que serán reconoddos desde ese momento. El secreto está asociado a los eventos que acompañan a los distintos aspectos de la inidadón y» aunque todos saben que los jóvenes no son muertos ni devorados por d diablo» sólo unos pocos pueden hablar
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sobre ello. Por ejemplo� las mujeres deben decir que los jóvenes están en el estómago del diablo� y si dicen otra cosa deberán morir como castigo La iniciación de las mujeres en las Sande (cada siete años aproximada¬ mente)» también se efectúa llevando a las iniciadas al in¬ terior del bosque durante un año (anteriormente eran tres). Las jóvenes no sólo son escarificadas; sino que ade¬ más padecen la ditoridectomía» es decir� la extirpación del dítoris y» al igual que los jóvenes» reciben instruccio¬ nes sobre las actividades de la vida adulta. En los años anteriores y durante la iniciación Sande� la mujer es la responsable de la conducta moral de la comunidad» Las personas que cometan un crimen son llevadas�en primer lugar> ante la mujer. Si se acusa a un hombre se le llevará ante el Zo de los Poro» pero una parte de cada multa se entrega a la mujer, Se guarda gran respeto a los Zo de los Poro y Sande» considerándose a los demonios con gran veneración y miedo por el poder que tienen. Algunos autores sugieren que este temor a los Poro y Sande fortalece el brazo de la autoridad política secular» ya que los jefes y propietarios territoriales ocupan las posiciones más poderosas en las asociaciones. Las asociaciones secretas son comunes en muchas áreas del mundo (el Pacífico» norte y sur de América» también en distintas zonas de África) a pesar de que pue¬ den ser voluntarias en muchos lugares. En Áfnca» según un estudio transcultural reciente» las asociaciones secre¬ tas están generalmente relacionadas con actividades po¬ líticas» como lo están los Poro y los Sande- Estas actividades castigan a las personas que» segtín las socie¬ dades secretas» hayan cometido algunos errores. El hecho de que las personas castigadas casi nunca suelan ser miembros de las elites nativas o dirigentes forasteros apoya la idea de que los Poro y Sande fortalecen las au¬ toridades políticas existentes. ASOCIACIÓN DE MUJERES HAW. Entre los Ijaw del sur de Nigeria» sólo las mujeres de la zona norte de esta sociedad están oiganizadas en asociaciones. En cada poblado del norte de la región de los Ijaw hay siete aso¬ ciaciones de mujeres. Una mujer casada muestra su ca¬ pacidad de mantener un hogar de forma independiente de su suegra» a la que deja las funciones del mercado y comercio» perteneciendo a la asociación de mujeres rela¬ cionada con el patrilinaje de su esposo. La afiliación a esta asociación no es voluntaria ya que todas las mujeres aptas para ello deben pertenecer a ella> hasta el extremo de que se multa a los miembros que no acuden a sus reu¬ niones o llegan con retraso. Las asociaciones de mujeres actúan como intermedia¬ rias de las disputas e imponen castigos incluso en los ca-
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La$ nnuj$re$ a vece$ también tienen a$ociacione$. Un grupo de mujeres N'jembede Gabón inicia a las jóvenes en el grupo. sos que se han llevado a los tribunales. Por ejemplo» una asociación puede imponer multas por ««crímenes» como di&mar a una mujer o por adulterio� Una asociación también puede adoptar normas sobre las conductas idó¬ neas. Los juicios y las normas se efectúan por consenso de todas las mujeres miembros» y si un miembro casti¬ gado no acepta el dictamen» los demás miembros» de co¬ mún acuerdo» pueden vilipendiar a la mujer o tomar alguna decisión importante sobre su hogar o rehusar te¬ ner algo que ver con ella. Algunas de las asociaciones mayores actúan también como Instituciones de ayuda» utilizando sus fondos para favorecer a los miembros o no miembros con un interés del 50 por ciento o aún mayor. Induso» si un hombre tiene una deuda con la asociación» permanece cautivo en su casa hasta que p� su deuda» por lo que no es raro que pocos sean los que se opongan a los dictámenes de los juicios efectuados portales asociaciones.No está muy claro por qué las asociaciones de mujeres» tales como la de las Ijaw» son tan frecuentes en Africa. Uno de los fectores que pueden haber sido decisivos podría ser la im¬ portante participación de la mujer en el comercio» lo que le permite ser económicamente independiente de los hombres. En esta sección veremos que las mujeres están incrementando su participación en los grupos de afilia¬ ción voluntaria para prosperar económicamente.
Asociaciones voluntarias Las asociaciones voluntarias» como las asociaciones militares de los Cheyenne del Norte de América» se
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Capítulo 22
Asociaciones y g r u p o s de i n t e r é s
pueden encontrar en algunas sociedades reUtivameiite ¿mples- Pero las asociaciones voluntarias tienden a ser más comunes en las sociedades complejas y estratifica¬ das» presumiblemente porque las sociedades estratifica¬ das están constituidas por personas de muy diferentes� y a menudo competitivos� intereses. Aquí trataremos algu¬ nos ejemplos de asociaciones voluntarias que no son femiliares en la experiencia americana.
A so cia cio n es militares Las asociaciones militares de las sociedades no co¬ merciales son comparables a la Legión Americana o a los veteranos de guerra. Todas ellas tienen como fin unir a sus miembros a través de sus experiencias comunes como guerreros» glorificar las actividades bélicas y efec¬ tuar ciertos servicios para la comunidad* La afiliación en estas asociaciones es generalmente voluntaria y está ba¬ sada en el criterio de participación en la guerra. Entre los indios norteamericanos de las llanuras eran comunes las sociedades militares» no existían límites de edad y esta¬ ban abiertas a cualquier joven u hombre dispuesto a ir a la guerra.
CD-ROM Actividad d e vídeo III-7
A comienzos del siglo xix los Cheyenne tenían cinco asociaciones militares: Zorro» Perro» Escudo» Alce (o casco sonoro) y cuerda de arco (o enemigo). La última asociación fue aniquilada por los indios Pawnee a me¬ diados del siglo xiXi aunque posteriormente aparecieron □tras dos asociaciones nuevas» la Lobo y la de los Perros Locos del Norte, Aunque cada asociación podía tener costumbres diferentes» canciones y danzas» se parecían mucho en su estructura interna» y cada una estaba enca¬ bezada por cuatro líderes quienes estaban entre los jefes más importantes, Cuando los guerreros de varios de los grupos de las llanuras fueron confinados en las reservas»las asociacio¬ nes militares perdieron muchas de sus antiguas funcio¬ nes» aunque no desaparecieron completamente. Por ejemplo» entre los indios Lakota» las sociedades guerreras continuaron siendo una parte importante de la vida so¬ cial» ya que muchos hombres y mujeres participaron en las actividades militares a fevor de EE LTU en la Primera y Segunda Guerra Mundial» en Corea» Vietnam y en la Tormenta del Desierto. Cuando sus soldados regresaban eran recibidos con canciones honoríficas tradicionales y se efectuaban en su honor las danzas de la victoria,
A s o cia cio n es r e g i o n a l e s Las asociaciones regionales se dedican a traer emi¬ grantes procedentes de regiones geográficas distantes. Así» se encuentran a menudo en los centros urbanos» que tradicionabnente son los lugares de asentamiento escogi¬ dos por las gentes procedentes de las áreas rurales. Por ejemplo» en EE UU» la región de los Apalaches ha organi¬ zado asociaciones en Chicago y Detroit, Muchas de estas organizaciones han llegado a ser fuerzas políticas en los gpbiernos municipales. Las asociaciones regionales se constituyen a menudo» a pesar de que los inmigrantes procedan de regiones muy distantes. Por ejemplo» en EE UU y Cariadá» existen muchas de estas asociaciones basadas en los distritos originales de China de donde proceden sus inmigrantes. Tanto las organizaciones re¬ gionales como las femiliares se acaban incorporando a asociaciones étnicas más inclusivas» como veremos pos¬ teriormente en este mismo capítulo, William Mangin describió las normas de las asocia¬ ciones regionales para ayudar a los inmigrantes rurales a adaptarse a la vida urbana en Lima (Perú). Durante los años cincuenta» Mangin estudió a un grupo de in¬ migrantes procedente de las áreas rurales montañosas» los serranos de Ancash, Estos serranas-, que sumaban alrededor de 120,000 personas» vivían en una barriaduy en los suburbios. Ésta no estaba oficialmente recono¬ cida ni por el gobierno nacional ni por las autoridades de la ciudad» por lo que carecía de los servicios habitua¬ les de las ciudades» como abastecimiento de aguas» reco¬ gida de basuras y protección policial. Sus habitantes tuvieron que abandonar sus lugares rurales de naci¬ miento a causa de las habituales razones que motivan estos desplazamientos de población. Estas razones eran sociales y económicas» la mayoría relacionadas con el aumento de la población y la felta de tierras, Pero las principales eran las mejores expectativas asociadas a la gran ciudad: mejor educación» movilidad social» trabajo remunerado» etc. Por lo tanto» los serranos de Ancash formaron una asociación regional típica abierta a ambos sexos. Los hombres generalmente controlaban las posiciones eje¬ cutivas» y los líderes del dub solían ser también hom¬ bres que habían detentado algún tipo de poder político en sus pueblos de origen. Las mujeres» que tenían re¬ lativamente menor libertad económica y social» sin embargo formaban una parte importante en las acti¬ vidades del dub, La asociación regional de los íerrartíJí proporciona¬ ba a sus miembros tres tipos de servicios. Primero» actuaba en sustitución del gobierno central en los asuntos importantes de su comunidad (por ejemplo» el
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abastedniiento di sumiiii5trí>sí dínicas y servidcss piiUicQ$ similares)» Un miembro de la asociación tenía que saber algo sobre los temas de legislación para que a tra¬ vés de los conductos oficiales no fuera olvidado o aban¬ donado. Segundo� la asociación de los serrartoí atendía a los miembros recién llegados ala misma para que se pu¬ dierais adaptar a la vida urbana de Lima. Las caracterís¬ ticas más típicas de la vida rural (masticar coca» el estilo de peinado y las vestimentas peculiares) fueron las pri¬ meras en desaparecer. Los hombres generalmente eran capaces de adaptarse más rápido que las mujeres. La asociación también proporcionó una serie de oportuni¬ dades para conseguir un contacto mayor con la cultura nacional. Y> finalmente» el grupo organizó actividades sociales� como fiestas» utilizadas principalmente como medio para transmitir la información a cada una de sus áreas y para proporcionar una serie de servicios diferen¬ tes que ayudaran a los inmigrantes a adaptarse a su nuevo medio manteniendo lo mejor de su lugar de na¬ cimiento. Las funciones de las asociaciones regionales pueden cambiar con el paso del tiempo. Por ejemplo» en Hawai, durante el período de la colonia� muchos inmigrantes fi¬ lipinos se afiliaron en sus pueblos a asociaciones que les sirvieron como sociedades de ayuda mutua. Cada vez acudían más y más filipinos a Hawai» puesto que todos tenían �miliares que querían ayudarles a venir a estas is¬ las. Las asociaciones de los poblados originales continua¬ ron prestando algunas fundones económicas» tales como asistencia en épocas de emergencia» enfermedades graves o muerte y alguna ayuda de escolarización» aunque las reuniones no eran muy frecuentes y la mayoría de los miembros no solía acudir a ellas. Los miembros más ac¬ tivos parece que querían el reconodmiento y el prestigio que se puede conseguir por medio del liderazgo en las asociaciones locales» que es mucho más de lo que podían conseguir en el gran espado de Hawai. Aunque los clubes regionales pueden ayudar a la inte¬ gración de sus miembros en un medio urbano mucho más complejo o cambiante» la presencia de tales grupos puede incrementar la competitividad y rivalidad entre los grupos. En algunas áreas» los grupos menores se han unido consiguiendo gran poder. Por ejemplo� en los ba¬ rrios chinos de las principales dudades de EE UU o de Canadá» los distintos grupos femiliares y regionales for¬ maron una Asociación China de Benevolencia. Estas grandes asociaciones» controladas generalmente por los comerciantes chinos más ricos» vigilaban los negodos» solucionaban las disputas y se defendían de la discrimi¬ nación procedente del exterior. Así» uniendo sus esfuer¬ zos» las entidades regionales y :&miliares formaron las asociadones étnicas.
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Asocíaceones étnecas
En las dudades de todo el mundo se encuentran va¬ rios tipos de asociaciones étnicas o grupos de interés. La afiliación a estas sociedades se basa en gran medida en la etnicidad. Las asociaciones étnicas están ampliamente distribuidas por los centros urbanos del Afi�ica occiden¬ tal. Allí» los cambios culturales acelerados que se reflejan en las condiciones económicas cambiantes» en los avan¬ ces tecnológicos y en las nuevas condidones de vida urbana� han desplazado a las relaciones �miliares y otras fuentes tradidonales de apoyo y solidaridad. A veces» es difícil saber si una asodadón particular es originalmente étnica o regional» aunque también puede ser ambas cosas a la vez. Los sit�icatos íntflfey se encuentran generalmente en Nigeria y Ghana» y es lo más típico de estas asociadones el hecho de ser extraterritoriales (esto es» que sus miem¬ bros han abandonado sus localizadones tribales)» ade¬ más» poseen una constitudón formal y se han creado uniendo una serie de necesidades que surgieron como consecuencia de la vida urbana, Una de sus prioridades es mantener a sus miembros en contacto con sus cultu¬ ras tradicionales� Por ejemplo» el Sindicato del Estado Ibo» además de proporcionar ayuda y finandadón en caso de desempleo» enfermedad o muerte» efectúa el ser¬ vido de «fomentar y manten er vivo el inte rés p or las can ciones tribales» la historia» el idioma y las creencias morales» manteniendo así la unión de una persona con su poblado o pueblo nativo»� Algunos de los sindicatos tribales colectan dinero para fedlitar las condiciones de sus hogares ancestrales. La educación» por ejemplo» es un área de particular interés. Otras publicaciones comentan las actividades de sus miembros, La mayoría de los sindi¬ catos tienen una sección de miembros jóvenes que ejer¬ cen una poderosa influencia democratizadora en los consejos tribales» y las organizaciones propordonan un trampolín para aquellos que tengan aspiraciones políti¬ cas nadonales. Los clubes ocupadonales del oeste de África también pueden considerarse como pertenecientes a la categoría étnica. Las versiones afncanas de sindicatos organizados a lo largo de la tribu» así como las líneas de destreza» te¬ nían como principal preocupación el estatus y la remu¬ neración de sus miembros como trabajadores. Así» el Sindicato de Conductores a Motor de Keta» en Ghana» se formó a partir de un fondo de seguros y de costes legales para contribuirá pagar los cuidados médicos en casos de acddente o enfermedad y para ayudar a pagar los gastos en caso de foneral. Las íocífíiíídíí de amistíid difieren de los sindicatos tri¬ bales en que sus objetivos se orientan en su mayor parte
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Asociaciones y g r u p o s de i n t e r é s
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Fronteras de la investigación ¿Par qw aparece» las hondas (attejeras y per qué sen tan viotentasf Las bandas callejeras de jóvenesi sobre las que tanto oímos y leemos� son asociaciones voluntarias. Son como pequeños grupos de edadj en el sentido de que sus miembros son todos de las mismas edades� pero se diferencian en que las bandas son asociaciones voluntarias y no se «gradúan» juntos a través de las fo¬ ses de la vida* Nadie tiene la obliga¬ ción de afiliarse» aunque sí existe una fuerte presión social en el veondario para hacerlo. Estos grupos violentos poseen una serie de valores» metasi nonnasj funciones grupales> símbo¬ los e iniciación. Con frecuencia re¬ cuerdan también a las asociaciones militares por el hecho de que sus ac¬ tuaciones son violentas en defensa de los intereses de la banda. Los grupos violentos callejeros se encuentran en muchas de las ciuda¬ des de EE UUj particularmente en sus vecindarios más pobres» aunque la pobreza» por sí sola» no parece mo¬ tivo suficiente para explicar su exis¬
tencia. Por ejemplo» hay mucha po¬ breza en México y sin embargo las bandas no se desarrollan alli» sino que existe la tradición de lapflfomílía (gmpo cómplice);las personas de la mismaedad se reúnen y continúan siendo amigos incluso durante la edad adulta» pero sabemos que no constituyen bandas. También apare¬ cen bandas de mexicano-americanos en los hamos de ciudades como Los Ángeles y» cuando nos damos cuenta de que la mayoría de estos jóvenes de los barrios pobres no forman parte de las bandas> está claro que no es la pobreza únicamente la causa de la aparición de éstas» ya que se estima que sólo del 3 al 10 por ciento de jó¬ venes mexicano-americanos forman parte de las bandas, Pero� ¿por qué unos jóvenes se afi¬ lian a ellas en tanto que otros muchos no lo hacen? Si nos pre¬ guntamos por qué se afilian a estos grupos» parece ser que aquellos chi¬ cos que están sometidos aun mayor
a la ayuda mutua. Uno de tales grupos fue formado por las esposas de los emigrantes Kru en Freetown» Sierra Le¬ ona. Los hombres Kru» generalmente trabajaban en el mar» una arriesgada ocupación, El club está clasificado en tres niveles. Una libre admisión permitía entrar en el grado inferior. La ascensión a los grados superiores de¬ pendía de donaciones posteriores. A la muerte de una miembro o de su esposo> la fomilia recibía una suma de dinero proporcional a su estatus en el dub, Asocíaciones
de
CRÉDÍTO ROTATORÍO
Las asoaactones de crédito roiatorto son una forma de �da social mutua. El principio básico es que cada miembro del grupo está de acuerdo en efectuar una con¬
estrés doméstico son los que se ad¬ hieren con mayor fiecuencia. Éstos suelen proceder de femilias pobres con varios hermanos y que no tienen al padre en casa. Parece que estas per¬ sonas tienen también dificultades en el colegio y han comenzado dema¬ siado pronto a pasar penalidades. ¿Qué es lo que les atrae de las ban¬ das? La mayoría de adolescentes de este país pasa una época difícil tra¬ tando de saber quiénes son y qué tipo de persona quieren llegar a ser» aunque la mayoría de la gente que pertenece a las bandas parece que tiene grandes problemas de identi¬ dad. Por ejemplo» un adolescente de 18 anos decía reflejando su baja au¬ toestimas «Me afilié a la banda por mi ego> para tenerlo más alto». Aque¬ llos que han crecido en hogares sólo con la madre como cabeza de Emi¬ lia parece que buscan una forma de demostrar su «masculinidad»; para ello buscan las bandas callejeras de chicos deseando actuar como ellos»
tribución regular» en dinero o en especie» a la fundación» que entonces lo concede de forma rotativa a cada miem¬ bro. Las contribuciones regulares permiten promover la seguridad de cada uno de sus miembros» a pesar de que lo Limitado de la cantidad concedida impide al receptor hacer algo realmente significativo con ese dinero. Estas asociaciones se encontraron en muchas áreas del Este» Sur y Sudeste de África (particularmente en África Occi¬ dental) y en la Indias Occidentales. Generalmente inclu¬ yen a un pequeño número de personas» quizás entre 10 y 30» por lo que la rotación no es muy prolongada� Estas asociaciones generalmente son informales y normal¬ mente no duran más de una rotación. ¿Cómo trabaja el sistema? ¿Qué puede solucionar si sólo se consiguen pequeñas sumas de dinero? Los datos
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aunque para entrar a formar parte de estos grupos se precisa de una ini¬ ciación. La mayoría de las bandas po¬ see sus propios ritos di iniciación; por íjemploi los grupos de mexi¬ cano-americanos golpean física¬ mente al iniciado» que d�be demostrar entonces su bravura ycoraje y» como ocurre en la maíyoría de los ritos de iniciación Jos nuevos afiHados» tras su iniciación» se identifi¬ can de forma más estrecha con el resto de los pertenecientes al grupo, La pertenencia a una de estas bandas sirve a algunos de sus miembros para creerse que están vinculados a algo importante pero, ¿es esto adaptativo? ¿Acaso pertenecer a una banda per¬ mite a los jóvenes sobrevivir en un vecindario en donde los de su edad son asesinados a menudo? O» por el contrario» ¿mueren con más fre¬ cuencia los jóvenes pertenecientes a las bandas? Realmente desconoce¬ mos las respuestas a estas cuestiones, ¿Por qué se desarrollan las bandas en EE UU y no en México? ¿Existen cosas diferentes en la vida de los mesicano-americanos de las ciudades de EE UU? La vida en EE UU puede
ser diferente en varios aspectos. Pri¬ mero» muchos inmigrantes mexica¬ nos tienen que mantenerse con salarios muy bajos» por lo que tienen que vivir en los vecindarios más marginales de la ciudad* Segundo» tienen que estar sujetos a grandes ni¬ veles de discriminación social y la¬ boral, Tercero» se encuentran inmersos en una cultura diferente en muchos aspectos de la suya. Por tanto» los jóvenes más sensibles a este estrés serán los que» con más proba¬ bilidades» acabarán formando parte de las bandas. Pero» ¿qué es lo que ex¬ plica la violencia de estas bandas? Al¬ gunos expertos han sugerido que la necesidad de demostrar una con¬ ducta «exageradamente» masculina se debe a la felta de un modelo mas¬ culino en sus hogares- La asociación de muchos jóvenes que tienen esta misma necesidad podría explicar la violencia demostrada por estas pan¬ dillas» y si la agresividad es parte de un rol masculino (por ejemplo� hasta hace poco tiempo sólo se permitía a los soldados varones participar en los combates militares)» entonces un jo¬ ven que desee exhibir su hombría
etnográficos indican que la <a de pago de las contribu¬ ciones regulares es algo tan raro que los participantes lo consideran impensable. Una vez que una persona se ad¬ hiere a una asociación de crédito rotatorio» la fuerte pre¬ sión social hace que continúe pagando de forma regular. S alguna persona necesita dinero para afrontar alguna emergencia» la asociación puede cambiar el orden de la rotacióa Cada persona que se afilia no necesita justifi¬ cantes impresos» como en un bancos ya que todo lo que necesita es su reputación de persona formal, Frecuente¬ mente existe un componente social en estas asociaciones» y algunas de ellas celebran reuniones regulares como medidas socializadoras y de entretenimiento. Los principios de una asociación de crédito rotatoria hunden frecuentemente sus raíces en los sistemas tradi¬
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puede volverse extremadamente agresivoPrecisamos muchas más investi¬ gaciones para conocer qué tipos de pandillas se desarrollan con mayor frecuencia en unas sociedades que en otras» y por qué son tan violentas con tanta frecuencia, ¿Existen lugares en los que la agresividad no forme parte tan grande del rol masculino?» y en este caso» ¿tienen tanta tenden¬ cia a formarse bandas agresivas? FíWMítíS: James V�il, «Croup Proand Street Ti5?atity; Adolesc�t Chi¬ cago Gang Membersi>, Síw. lí (195�): 421-45í James Diegp ítMexican Americans: Gtaw'm� Up on the Street$ of Lo$ AH' � MeMa Emb�ip Caiol R. Ember y David Levimoti, úf CtjJíure; Edttiagmpític (Upper Saddle River, NJ: Prentice Hdl,Prentke HáOySLmón & Schuster Cii$toiu PubKshii� Carol R. Eruber eiid kfetvúi Embe� ta CiossOiltura] Studies of Interpersond Vioküce>», VÍ0letKe�tidVictims, 3 (1994): 217-33, ciesses
cionales de compartición. Por ejemplo» entre los Kikuyu» las mujeres emparentadas trabajan juntas para quitar hierbas o para cosechar cada una el campo de las demás. Cuando una persona tiene gastos extraordinarios» tales como un funeral» cada uno que pueda hacedo aporta su contribución. Nici Nelson describe una asociación muy efectiva de crédito rotatorio que funcionaba en una zona de residencia de trabajadores temporeros de Nairobi. La fundadora organizó un grupo de mujeres de situación económica similar que procedía del distrito de Kiambu de Kenia. A principios de 1971 el grupo tenía alrededor de 20 miembros» pero en poco tiempo llegó a 30 miem¬ bros. En pocos años» la fundadora abrió una cooperativa de compradores de tierras» en tanto que el resto de la aso¬ ciación de crédito rotatorio permaneció dedicada a las
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C a p í t u l o 22
Asociaciones y g r u p o s de i n t e r é s
E3
La mayoría de las grandes ciudades posee un barrio chino, como en San Francisco, en donde muchos grupos fami¬ liares V regionales convergen para crear asociaciones de mayor tamaño, como la IHop SingTong, una organización fraternal establecida en 1370 que actúa tanto para supervisar los negocios, como para dirimir disputas y combatir la discriminación.
fijnciones propias de la cooperativa» Algunos perdieron ai utilidad como miembros ya que se fueron enriquedendo� crearon un banco de su propiedad y en los años noventa la asodadón» finalmente� se deshizo. En un mo¬ mento determinado los hombres intentaron pertenecerá la asodaciónj pero las mujeres no se lo permitieron� di¬ ciendo una de ellas: «Ellos se harán los amos y no nos permitirán ni hablar en nuestra propia cooperativa». En Ghana� a pesar de 30 años de instituciones bancarias nacionales� los mejores métodos de ahorro son toda¬ vía informales. En 1991 se estimó que el 55 por ciento del dinero del país se guardaba de forma informal� y flore¬ cían las asociaciones de crédito rotatorio. Las mujeres son más proclives que los hombres a participar en este tipo de asociadonesj por lo que éstas tienden a segregar a los sexos. Frecuentemente� los nombres de estas asocia¬ ciones muestran su insistencia en la ayuda mutua: así� un club del Mercado de Accra Makola tiene un nombre que traducido sería: «Nuestro bienestar depende de los de¬ más». La mayoría de las reservas se utilizan para propor¬ cionar capital para las actividades comerciales. Cuando las personas se desplazan lejos de sus hoga¬ res de nacimiento� hacen un mayor uso de estas asociadones. Por ejemplo� las asociadones de crédito rotatorio de Corea se remontan al año 1633. En el área de Los
Angeles» los coreanos están acostumbrados a utilizar es¬ tas asociaciones de crédito rotativo�sobre todo para acu¬ mular bienes que les permitirán invertirlos en sus negocios. A s o cia cio n es multíétnicas A pesar de que muchas de las asociaciones están cons¬ tituidas por personas de la misma región o grupo étnico» en el mundo actual se están incrementando los grupos voluntarios de miembros procedentes de orígenes dife¬ rentes, Por ejemplo» las asociaciones de los Kafeina o Wok Meri («trabajo de mujeres») de Papua Nueva Gui¬ nea están creando asociaciones que unen a miles de mu¬ jeres de diferentes áreas tribales. Originalmente» eran grupos reducidos que comenzaron a tener pequeñas aso¬ ciadones de ayuda sobre todo en localidades particula¬ res» pero las relaciones entre los distintos grupos dieron lugar a que las mujeres que se habían casado fuera de sus poblados desearan regresara su hogar de procedencia o marchar a otros poblados para formar un grupo �(filial» («grupo-hija»). Las visitas entre los grupos «madre-hija» pueden durar al menos tres días» cada grupo hospeda a otro y los grupos intercambian dinero. Todo el dinero re¬ cogido del otro grupo se dep>osita en una bolsa que se
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esconde y no se puede tocar» por lo que va creciendo con¬ forme pasa el tiempo- Cuando un grupo acumula una cierta cantidad» la asociación construye un edificio del tamaño de una casa de los hombres» celebrándose gran¬ des ceremoniales* ¿Puede el desarrollo de estas asociaciones de mujeres llevarlas a un nuevo poder en unas sociedades tradidonalmente controladas por los hombres? Esto está todavía por ver (véase el apartado: «¿Las asociaciones de mujeres separadas aumentan el estatus y el poder de las muje¬ res?»). Las mujeres, aparentemente frustradas por su ex¬ clusión de la política local» están incrementando su participación en el movimiento Kafeina. Pueden tener cambios dentro de sus grupos y puede que no se impli¬ quen en discursos públicos� pero lo cierto es que sus áreas de influencias están desarrollándose separada¬ mente de las de los hombres. De la misma forma que las asociaciones de mujeres Ka&ina parecen ser una respuesta a las carencias» la for¬ mación de asociaciones con miembros multiétnicos o re¬ gionales no es rara allí donde la colonización o alguna otra forma de dominación política fue considerada
como un problema comtin, Por ejemploj en Alaska> en los años sesenta� los nativos americanos se sintieron ata¬ cados por el desarrollo económico pensando que les pri¬ varía de sus recursos de subsistencia- Se formaron muchas asociaciones multiétnicas durante la crisis» aun¬ que quizá lo más significativo desde el punto de vista de obtener compensaciones sustanciales y títulos de tierras fue la formación de una asociación de toda Alaska deno¬ minada Federación de Nativos de Alaska» ¿Qué fue lo que hizo posible esta amalgama? De la misma forma que los líderes de movimientos multiétnicos de muchos lugares» los líderes de los niveles más altos parece que tuvieron muchas cosas en común: estaban educados» eran habi¬ tantes urbanos que trabajaban en ocupaciones profesio¬ nales y, quizá lo más importante» muchos de ellos habían acudido a las mismas escuelas. Las asociaciones multiét nicas y multirregionales se han visto frecuentemente involucradas en movimientos independentistas en todo el mundo. Muchas veces» los partidos políticos revolucionarios fevorecen la creación de alguna de estas asociaciones y dedican sus esfuerzos a conseguir la independencia. Porqué los movimientos in¬ dependentistas se desarrollan en ciertos lugares pero no en otros» es algo que todavía no comprendemos, Otros
Lae mujera$ Kafaina tienen a$ociadone$ económica$ y de préstamo en Nueva Guinea� que frecuentemente ani¬ man a s us parientes a constituir asociaciones «hijas» [fi¬ liales). En una ceremonia efectuada para una nueva de estas asociaciones «hijas» s e exhibe una muñeca.
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grupos de ínterés
Las sociedades tales como la estadounidense están constituidas por personas que difieren en sus caracte¬ rísticas étnicas. Hay a menudo asociaciones étnicas y re¬ gionales de afiliación voluntaria. Pero la mayoría de las asociaciones de afiliación voluntaria» tanto en la nues¬ tra como en otras sociedades complejas» tienen miem¬ bros que se afilian a causa de intereses comunes. Estos intereses comunes incluyen la ocupación (como las uniones comerciales y asociaciones profesionales)» la afiliación política (como los partidos de significación política nacional y grupos de acción política)» el entre¬ tenimiento (deportes» clubes deportivos� clubes de se¬ guidores o fens» grupos musicales y de teatro)» la caridad y los clubes sociales. A mayor y más diversifi¬ cada sociedad» mayor cantidad y diferentes tipos de asociaciones tendrá. Reúnen gente con intereses» aspira¬ ciones y formaciones comunes» proporcionando» ade¬ más» la oportunidad de trabajar a fevor de causas sociales» o para su beneficio o para satisfecer la necesi¬ dad de vivir nuevas experiencias estimulantes. Nos afi¬ liamos a los clubes y a otros grupos de interés porque deseamos conseguir fines particulares» y uno de tales fi¬ nes es la consecución de nuestra identificación con un grupo «corporativo» y» por medio de ello» la adquisición de cierto estatus e influencias.
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Ca p í t ul o 22
As oc i a c i ones y g r u p o s de i n t e r é s
afiliación a un dub ís mucho importante en unas sociedades que en otras, Noruega es un ejemplo de sociedad con una vida organizativa rica. Induso en áreas con pequeñas comunidades existen muchos clubes dife¬ rentes. Por ejemplo� Douglas Caulkins encontró que en el municipio de Volda� una ciudad de alrededor de 7.000 hatatantesi había 197 organizaciones. La mayor parte de la gpnte pertenecía a dos organizaciones� en las que se reúne de forma regular. De hecho� había más reuniones de las que las asociaciones podian celebrar para coordinar su calendario y que aquéllas se pudieran coordinar con otras» El motivo por el cual algunas sociedades� como la Noruega» tienen tanta afición por las asociaciones volun¬ tarias» todavía no se sabe bien. Tampoco sabemos cuáles pueden ser las consecuencias de esta tendencia a pertene¬ cer a varias asociaciones, Noruega es un país con uno de los menores índices de criminaÜdad y posee altos indica¬ dores en relación con la salud económica y sodaL ¿Acaso la complejidad de esta vida organizada y sus solapadas asociaciones tienen un papel importante en su salud so¬ cial? No lo sabemos» ya que todavía no se han efectuado los oportunos estudios transculturales.
Cómo explicar la variabilidad en las asociaciones Los antropólogos no se conforman sólo con propordonar descripciones sobre la estructura y actuación de las asociaciones humanas. Tratan� además» de compren¬ der por qué se desarrollan los diferentes tipos de asociadones. Por ejemplo» ¿qué puede justificarla aparición de los sistemas de grupo de edad? El estudio comparativo de S, N. Eisenstadt de los grupos de edad afiícanos le llevó a daborar la hipótesis de que cuando fracasan los grupos �miliares para desempeñar una fondón importante para la integración de la sodedad (tales como las fonciones políticas» educativas y económicas) aparecen los sistemas de grupo de edad para llenar el vado. Los sistemas de grupo de edad proporcionan una solución efectiva a las necesidades de la sociedad para efectuar la división fondonal de sus miembros» porque la edad es un criterio que puede ser aplicado a todos los miembros de una sociedad a la hora de asignaries sus fonciones. Pero no queda daro por qué los sistemas de grupo de edad fevorecen la fun¬ dón que no ha efectuado la organización &miliar, Mu¬ chas sociedades tienen estructuras femiliares que están limitadas en sus perspectivas y, sin embargo» la mayoría de ellas no ha desarrollado sistemas de grupo de edad. B.Bernardi» en su evaluación crítica de los sistemas de grupo de edad Nilo-Hamítico» apoya la teoría de que es¬ tos sistemas aparecen ante defidencias en la organiza-
dón social. En contraste con Eisenstadt» se pregunta es¬ pecíficamente porqué se precisa mayor organización so¬ cial y por qué las defidencias particulares en la forma previa de la organización favorecerían el desarrollo de los grupos de edad. Bemardi desarrolló la hipótesis de que los sistemas de grupo de edad aparecen en sodedades que tienen una historia de rivalidad territorial» felta de autoridad central y grupos �miliares dispersos. Cuando están presentes los tres fectores» dice» la necesidad de un mecanismo de integradón territorial se sustituye por un sistema de grupo de edad, Un estudio transcultural sugiere que la rivalidad te¬ rritorial» como se indica por las guerras» puede favorecer el desarrollo de sistemas de grupo de edad. Sin embargo» este estudio no encuentra evidencias para sustentar la hi¬ pótesis de Bernardi de que los grupos de edad se desa¬ rrollan en sociedades que carecen de autoridad centralizada y sólo tienen grupos �miliares dispersos. Por lo tanto» no parece que las sociedades con grupos de edad tengan deficiencias en sus organizaciones políticas o femiliares- Una explicación alternativa» coherente con los datos transculturales» es que los sistemas de grupos de edad aparecen en sodedades que tienen tanto guerras frecuentes como grupos locales que cambian en su ta¬ maño y composición a lo largo del año. En tales situadones» los hombres no siempre son capaces de poner de acuerdo a sus grupos femiliares para que cooperen du¬ rante las guerras a causa de que dichos grupos no siem¬ pre están próximos. Sin embargo» los grupos de edad pueden proporcionar aliados en donde quiera que uno pueda encontrarse. Esta interpretadón sugiere que los sistemas de grupos de edad aparecen además di» mejor que como afemisftvas £¡e»las formas de integradón basa¬ das en los grupos femiliares y políticos. De igual modo que en las asociadones voluntarias cu¬ yos miembros se afilian de forma variable (esto es» deter¬ minados en d nacimiento» pero no en todas las personas de una determinada categoría o sexo) es difícil decir exactamente qué causa su aparición, Como hemos ob¬ servado» existen sugerencias de que las asociadones vo¬ luntarias de cualquier tipo son más numerosas e importantes conforme una sodedad progresa en tecno¬ logía» complejidad y tamaño. No se dispone todavía de una evidencia definitiva que sustente esta expÜcación» pero las siguientes razones parecen estar sufidentemente estableddas como para merecer su consideradón. Primero: hay urbanizadón. Las sociedades en desa¬ rrollo se hacen urbanas» sus ciudades crecenj por lo que el número de personas separadas de sus núcleos Emiliares tradicionales y de sus costumbres locales va en aumento. Entonces» no es sorprendente que las asociadones voluntarias proporcionen ayuda p>ara hacerse
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caigo de las obligaciones femiliares en caso de Medmiento y» posteriormente� para distribuir sus beneficios en otras direcciones. Con respecto a esto> las recientes asociaciones de desarrollo de las sociedades africanas tie¬ nen gran parecido con las asociaciones laborales de clase inglesas. Aquellas asociaciones también sirvieron para mantener el contacto de los inmigrantes de las grandes ciudades con sus formas ancestrales. Las asociaciones re�onales de América Latina recuerdan también a las aso¬ ciaciones regionales de emigrantes europeos de KE UU, TUes asociaciones parece que surgen como respuesta a las necesidades de los emigrantes o inmigrantes en su nuevo hogar, Segundo: existe un fector económico. Los emigrantes e inmigrantes tratan de adaptarse a las nuevas condicio¬ nes económicas� y a los intereses de gmpo. En su nueva situación tienen que organizarse» promocionarse y pro¬ tegerse, EntonceSj ¿cuándo las asociaciones de adscripción \ariable tienden a reemplazarse por un dub de la cate¬ goría deseada en las sociedades industrializadas? Quizá el foco más potente de especialización en las sociedades industrializadas se refleje en la formación de los grupos especializados. Posiblemente la fuerza de la especializadón en las sociedades industrializadas es otro de los Ac¬ tores complementarios� y quizá también una excesiva tendencia hacia la uniformidad» mantenida por la dase comercial y la dase media» explique la importancia asu¬ mida por las distinciones étnicas y regionales. El resul¬ tado parece ser que las organizaciones con mayor base están siendo reemplazadas por otras de menor base que responden mejor a las necesidades particulares y a las que no las asumen las asociaciones de mayor difosión social,
CD-ROM EjarcicioE de concepto� III-2S
Sumario 1, Las asociaciones o grupos de intereses tienen las águientes características comunes: a) algún tipo de es¬ tructura organizativa formal; b) algunas personas están exduidas de su afiliación; c) la afiliación se basa en la dis¬ tribución de intereses o fines; y d) existe un sentido cla¬ ramente discernible de orgullo mutuo y de pertenencia, 1� afiliación varía conforme sea o no voluntaria» y si las cualidades de los miembros están universalmente adscri¬ tas» variablemente adscritas o conseguidas,
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Z Los grupos de edad son asociaciones no volun¬ tarias cuyos miembros pertenecen a ellas a causa de ca¬ racterísticas universalmente adscritas, esto es, grupos de personas de edad similar y sexo que se desplazan juntas a lo largo de las etapas de la vida. La entrada en estos grupos comienza generalmente con ritos de ini¬ ciación y la transición hacia nuevos niveles está mar¬ cada por rituales de sucesión. Las asociaciones unisexuales restringen su pertenencia a un solo sexo y en las sociedades no comerciales la afiliación a estas asociaciones (que suelen ser masculinas) generalmente no es voluntaria. 3, Las organizaciones étnicas y regionales son aso¬ ciaciones voluntarias cuyos miembros pertenecen a ellas a causa de sus características de adscripción variables, Ambas aparecen generalmente en sociedades cuyo avance tecnológico es acelerado» trayendo consigo una complejidad económica y social, A pesar de la variedad de tipos» las asociaciones étnicas y regior�es tienen en común: a) su interés por ayudar a sus miembros a adap¬ tarse a las nuevas condiciones; b) poner a sus miembros en contacto con las tradiciones de sus áreas de proceden¬ cia; y c) promover mejores condiciones vitales para sus miembros que hayan emigrado más recientemente a las áreas urbanas. 4. Las asociaciones cuyos miembros pertenecen a ellas por causa de sus características adscritas variables» tienden a ser sustituidas en las sociedades altamente in¬ dustrializadas por asociaciones cuyo criterio de perte¬ nencia son las cualidades adquiridas,
Glosario de términos Asociaciones Asociaciones unisexuales Cualidades adquiridas Cualidades adscritas Cualidades universalmente adscritas Cualidades variablemente adscritas Grado de edad Grupo de edad
Cuestiones críticas 1, ¿Cómo podrían convencerse los jóvenes que per¬ tenecen a pandillas de que no lo hicieran? 2, ¿A qué asociaciones pertenece usted y por qué? 3, Muchas asociaciones unisexuales han abierto sus puertas al sexo opuesto: ¿cuál puede ser d resul¬ tado de ese cambio?
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As oc i a c i ones y g r u p o s de i n t e r é s
Ejercicios de Internet K Escojauno de SUS temas de interés y busque un si¬ tio en la Red de una organización voluntaria que com¬ parta esos intereses, ¿Cuáles son los criterios necesarios para afiliarse? 2, En las sociedades complejas» las personas con los mismos intereses generalmente constituyen asociacio¬ nes voluntarias. Verifique una de las principales aso¬ ciaciones en la que se inscriben los antropólogos: La Asociación Americana de Antropología en: http://www. ameranthassn.org� la Sociedad de Antropología Apli¬ cada en hitp://www-saax>rg� o la Asociación Canadiense de Antropología Física en http:y/dtd.5car. utoronto.cay CAPAycapa.htmL 3. Utilizando la Ked� consiga dos ejemplos de direc¬ ciones de organizaciones dedicadas exclusivamente a grupos étnicos.
Lecturas sugeridas Ardener� S. y BuRMANt S. Mofi�-Go-Ronfiáí: The Importante of
Rotating 5avínjís «híÍ Credií Aswcwíwrts foT WíPweít Ox¬ ford/Washington, DC; flcrgj 1995. Quince capítulos dedica¬ dos al estudio de las asociaciones de cr�lito rotativo, particularmeiite las a$0c¡aci0rtes de mujeres» en diferentes
partes del mundo- También incluye un estudio comparativo como resumen de cada capítulo. Cauiigns,D. D. Norwegians: Cooperative IndividualLsts. £n M. Ember, C. R. Ember y D. Levirtson, eds-i PortruiU of Cidtitte; EiktiogTaphie I��Jper Saddle River� NJ; Prentice 1998. Prentice Hall/Simon ík Schuster Custom Publishing. Esta narración dd trabajo de campo en dos localida¬ des costeras describe cómo las numerosas organizaciones voluntarias estructuran una gran parte de la vida en socie¬ dad. los perfiles personalizados ilustran la diversidad de es¬ tilos de vida existente. Merecicn una especial atención los roles que desempeñan las organizaciones de mujeres. Eeenstadt, S. N. From Getieratiott to Getieratiotu Age Groups and Social Structure. Niieva�rk: Free Press, 1956. Un estu¬ dio teórico y comparativo de los grupos de edad en diferen¬ tes sociedades. Los capítulos 2 al 5 ofrecen una detallada ptesentación acerca de la formación de grupos de edad en un gran número de sociedades. Ritter, M. L. The Conditions Favoring Age-Set Organization. JourtUil ofAnthwpohgkal Re�rcK 36 (19S0): pp, $7-104. Esta obra evalúa las distintas teorías acerca del desarrollo de los grupos de edad y presenta u na nueva teoría� apoyada por los datos transculturales. Thompson, R. H. «ChinatOwns: Inmigrant Communities in liansitLonv. En Ember y D. Levinson, edso Portraits of Cuííur� £tfi«í>jírap/tic Oríjfiíwk Upper Saddle River» NJ: Prentice Hall, 1998- Prentice Hall/Simon & Schuster Cus¬ tom Publishing. El autor analiza cómo las asociaciones regionalesi familiares y étnicas tienen importantes papeles en los cambios que se ban producido en los barrios chinos de Estados unidos y Canadá.
Vida política: orden y desorden social INDICE DEL CAPITULO
Variabilidad en los tipos de organización política Variabilidad en el proceso político Resolución de conflictos
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Vida política; orden y d e s o r d e n social
n EE UUj la ísxpresión vidapoUtim pc>see mu*IH chas cpnnotadon�. Puede recordar las disH m HVl tÍDta3 delegaciones del gobierno: la laiua ejecutivaj desde el presidente en el nivel nadonal pasando por los gobernadores de los Estados hasta los alcaldesa nivel local; la institución legislativa�desde el Congreso para la legislatura estatal hasta los ayunta¬ mientos; y las oficinas administrativas! desde los depar¬ tamentos del gobierno federal hasta los organismos locales. La vida política también puede evocar el concepto de los partidos políticos» grupos de interés� grupos de preáÓTi, campañas� votantes� etc. En otras palabras» cuando las personas que viven en EE UU piensan sobre la vida política» primero pueden pensar en «políticos»» las acti¬ vidades» no siempre claras» que influyen en quién es ele¬ gido o señalan al responsable político» las políticas públicas que hay que llevar a >. No siempre es el más anciano� sino que por regla general suele Ser un hombre mayOr que es un calador inteligerite O, que oDmo cabeza de una gran �miUa» ejerce gran autoridad. No se le puede considerar un jefe» ni existe obligación de seguir su con$ejo« aunque así lo hacen la mayoría de las veceSi �n parte porque confian ert su eaperiencia� y en parte porque desean llevarse bien con este hombre. En la Tabla 23.1 se muestra un resumen de las caracte¬ rísticas generales de la organización de una banda. Ob¬ sérvese» sin embargo» que existen excepciones a esta generalización. Por ejemplo» no sabemos si los recolectores
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sociales.
TIPO DE ORGANIZACIÓN
Tribu
E3
Tendencias sugeridas en organización poíítica y otras características
Tabla 23.1.
Banda
Vida política; orden y d e s o r d e n s o c i a l
MAVOR
ESPECIALÍZACÍÓN
NtVELDE
DE
TAMAÑO DE LA
FORMA
MODO DE
LA COMUNIDAD
DÍFEISN-
PRÍNCÍPAL
SUBSISTENCIA PREDOMINANTE
Y DENSIDAD DEPOBLAOÓN
CIACIÓN SOCIAL
DE DISTRIBUaÓN
INTEGRACIÓN POLÍTICA
FUNCIONARIOS PÚBLICOS
Grupo local o banda A veces grupos multilocal�s
Poco o nada: informal
Rccolcctor�S
Comuiüidades muy pequeñas
Poco o ninguna: liderazgo informal
Agricultura y/o pastoreo extcnsiva/o (reparto)
Pequeñas comunidades Densidad baja
Mucha reciprocidad Igualitaria Mucha reciprocidad
Igualitaria
Jcfetura
Grupo multilocal
Alguna
Agricultura y/o pastoreo eitertsiva/o intenaiva/o
Grandes comunidades Deñ$idad media
Rango
Reciprocidad y redistribución
Estado
Grupo multilocal A menudo @�po lingüístico compkto
Mucha
Agricultura intensiva y pastoreo
Ciudades y pueblos Alta densidad
Clase y castas
Principalmente de mercado
de alimentos están organizador a nivel de banda o tienen todos los rasgos de un tipo de sociedad de bandas. Excep¬ ciones clásicas son las sociedades de los nativos america¬ nos de la costa Noroeste del Pacífico� que poseían enormes recursos de salmón y de otros peceSj con poblados relati¬ vamente grandes y permanentes y una organización polí¬ tica más allá del nivel de la banda típica de los registros etnográficos.
CD-ROM Actividad interactiva ÍIÍ-1S
ORGANEZACtóNÍ TRÍBAL Cuando las comunidades locales actúan sobre todo de forma autónoma pero tienen grupos femiliares (tales como danés y linajes) o asociaciones (tales como grupos de edades) pueden integrar potencialmente varios gru¬ pos locales formando una unidad mayor (tribu)� deci¬ mos que la sociedad tiene una organización tribalDesgraciadamente el término tribu se utiliza con frecueníia para referirse a una sociedad entera; esto es� a un grupo completo lingüístico que puede ser llamado una tribu. Pero un tipo tribal de sistema politico no per¬
mite generalmente que toda la sociedad actúe como una unidad; todas las comunidades en una sociedad tribal pueden unirse ocasionalmente por motivos políticos (generalmente militares). De esta manera� lo que distin¬ gue una organización política tribal de las bandas es la presencia en la primera de alguna integración multilocal pero no a nivel de toda la sociedad» Sin embargo� la inte¬ gración multilocal no es permanente y es informal en el sentido de que no está dirigida por representantes políti¬ cos, Con fi�cuencia se pide la integración sólo cuando existe una amenaza externa� pero cuando desaparece» cada grupo local vuelve a su sistema de autosuficiencia. La organización tribal puede parecer fiágil (y así suele ser normalmente) j pero el hecho de que existan vías sociales para integrar a los grupos locales formando entidades políticas de mayor tamaño significa que las sociedades con organización tribal son militarmente más efectivas que las sociedades organizadas en bandas, Las sociedades con organización política tribal son si¬ milares a las que están organizadas en bandas en su ten¬ dencia a ser igualitarias (Tabla 23,1), A nivel local» es característica también la existencia de un liderazgo infor¬ mal. En aquellas sociedades en las que el parentesco pro¬ porciona la base de la organización social� son los más vie� de los grupos fcmiliares locales los que tienden a poseer una influencia considerable; donde los grupos de
� Capítulo 23
Vida p olí t i c a : orden y desorden social
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compuesta por segmentos o partes�cada una similar a las otras en cuanto a su estructura y función. Cada seg¬ mento local pertenece a una jerarquía de linajes que se van estrechando genealógicamente cada vez más. Por tanto> la jerarquía de linajes va uniendo los segmentos en grupos cada vez mayores. Dos grupos están más cerca ge¬ nealógicamente cuanto mayor es su proximidad. En el caso de una disputa entre miembros pertenecientes a dis¬ tintos segmentos� la gente relacionada más estrecha¬ mente con uno de los grupos en litigio que con el otro» tomará parte por el de parentesco más próximo, Los Tiv del norte de Nigeria ofrecen un clásico ejem¬ plo de un sistema segmentario de linaje� que incluye a todos los Tiv en una sola estructura genealógica o tribu, Los Tiv constituyen una gran sociedad de más de 800,000 personas: la Figura 23,1 ofrece la representación de la es¬ tructura del linaje de los Tiv de acuerdo con la descrip¬ ción de Paul Bohannan. En la figura aparecen cuatro
En muchas $ocii&dad� igualitana$j lo$ lidfirazgo$ pa$an informalmente de una persona a otra. En gran parte de Nueva Guinea exi$te mucha competencia por adquirir «gran» estatus. En Vanatinai� las mujeres compiten lo mismo que los hombres, por tanto existen «grandes mujeres� de la misma forma que hay ««grandes hom¬ bres». En la fotografía una tal como los jefes de distrito y los jefes dei nivel más elevado. Compa¬ radas con las sociedades tribales� las sociedades con jefeturas están más densamente pobladas y sus comunidades son más permanentes» en parte como consecuencia de su generalmente mayor productividad económica (Ta¬ bla 23,1), La posición de jefe» que algunas veces es hereditaria y generalmente permanente» da un estatus alto a su poseedon La mayoría de las jefeturas tienen rangos sociales y tanto el jefe como su femilia poseen mayor acceso al prestigio. El jefe puede redistribuir bienes» planear y di¬ rigir la utilización de trabajos públicos» supervisar las ceremonias religiosas y dirigir las actividades militares en representación de su jefetura. En las jefeturas del Pa¬ cífico Surj los jefes ejercen estas actividades� Así» en las
jefeturas de las Eidji» por ejemplo� el jefe era responsable de la redistribución de bienes y de la coordinación del trabajo: [El jífc] podía neunir los trabajos comunitarios en $u pro¬ pio beneficio o en bencñdo de alguno que lo solicitaba, o para el bien general [...]. Además de este derecho a reunir a los trabajadore$t �1 acumulaba las mayore$ proporciones de los primeros fn4oS de laí cosechas de ñame [.„] beneficián¬ dose de otras formas de alimentos» como por la adquisición de repartos especiales en las distribuciones ordinarias del poblado [,m] Así, el superior [jeíe] recogía una parte signifi¬ cativa de producciórü de e�ccede rites de la comunidad y la re¬ distribuía para el bienestar general.
Ed contraste con los líderes de las sociedades tribales» que generalmente tenían que ganar sus privilegios por sus cualidades personales» los jefes hereditarios se decia que tenían esas cualidades en su «sangre». Un jefe de alto rango en la Polinesia» que regia una vasta área trian¬ gular de islas del Pacífico Surj heredaba un poder reli¬ gioso especial llamado mam. H mana santificaba su mandato y le protegía. Los jefes en la Polinesia tenían tanto poder religioso que los misioneros sólo podían convertir a la gente al cristianismo una vez que el jefe se había convertido.
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Vida política; orden y d e s o r d e n social
En la mayoría de las jefeturasj Iw jefe no tenían po¬ der para obligar a la gente a obedecerlos; la gente actua¬ ría de acuerdo con los deseos de 3U jefe debido a que el jefe era respetado y a menudo tenía autoridad religiosa. Pero en la mayoría de las jefcturas principales, tales como las de Hawai y Tahití, los jefes parecían tener más sanciones persuasivas� que el «poder» o el respeto o el mana. Las cantidades sustanciales de bienes y servidos recogidos por los jefes se utilizaban para mantener el apoyo de sus subditos� incluyendo a los más especialis¬ tas, como sacerdotes, enviados políticos y guerreros que se podrían enviar para sofocar cualquier intento de su¬ blevación. Cuando la redistribución no Uegaba para todo el mundo (a los jefes se les permitía que reservaran algunos de los bienes para su uso propio) y cuando un jefe comenzaba a utilizar la fuerza armada> el sistema po¬ lítico estaba preparado para llegar a ser lo que llamamos un Estado, Organízaciók estatal
Un Qtado> según una definición más o menos genelalj es «una unidad política autónoma� que reúne a mu¬ chas comunidades dentro de su territorio y que posee un gobierno central con poder para cobrar impuestos, redutar hombres para los trabajos o la guerra y dicta y pone en vigor leyes��. Por lo tanto� los estados tienen una estructura política compleja y centralizada que induye una amplia gama de instituciones permanentes con fun¬ dones ejecutivas, legislativas y judiciales, así como una gran burocracia. En esta definición es básico el concepto del uso de la legitima fuerza como medio para imponer políticas tanto dentro como fuera de las fronteras. En los
Todos los gobiernos, incluso las sociedades estatales, dependen del sentido de la legitimidad del pueblo. Esta estatua deiribada de Lenin simboliza la caída de la Unión Soviética y el fracaso del Partido Comunista-
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estados el gobierno trata de mantener el monopoÜo so¬ bre el uso de la fuerza física. Este monopolio se puede considerar como el desarrollo de un instrumento formal y especializado de control social; una fuerza policial, una milicia y un ejército permanente. De la misma forma que una sociedad particular puede tener más de una banda, tribu o jefetura, también puede tener más de un estado. Las poblaciones distribui¬ das de forma contigua que hablan un mismo idioma pueden o no estar políticamente unidas en un solo es¬ tado, La antigua Grecia estaba compuesta de muchas ciu¬ dades-estado, de la misma forma que lo estuvo Italia hasta 1870, Los germano-hablantes tampoco están polí¬ ticamente unidos: Austria y Alemania son estados di¬ ferentes, e incluso la propia Alemania no estuvo políticamente unida hasta alrededor de 1870. Hemos co¬ mentado que una sociedad tiene organización estatal cuando estó constituida por una o más unidades políti¬ cas que son estados, Un estado puede induir más de una sociedad. Los es¬ tados multisociales son el resultado de la conquista o dd control colonial� en d que la autoridad política domi¬ nante es ella misma un estado que impone un gobierno centralizado sobre un territorio con muy diferentes so¬ ciedades y culturas, como hicieron los británicos en Ni¬ geria y en Kenia- Muchos de los nuevos estados multisociales que surgieron tras la Segunda Guerra Mundial fueron el resultado de movimientos independentistas victoriosos contra los poderes coloniales. La mayoría de dios han mantenido su unidad política a pe¬ sar de que contienen sociedades muy diferentes. Por ejemplo, Nigeria permanece unida a pesar de una guerra civil; la parte oriental, llamada Biafra (poblada p o ruña mayoría de personas con cultura Ibo), en la década de los años setenta trató sin éxito de lograr la secesión� y poste¬ riormente han existido serios conflictos entre algunas sociedades constituyentes. Los estados multiétnicos o multisociales se pueden formar también de forma volun¬ taria, como reacción a amenazas externas. Así, Suiza está formada por cantones, en cada uno de los cuales puede hablarse francés, alemán, italiano o romanesco; los dife¬ rentes cantones se confederaron originalmente para es¬ capar del control del Sacro Imperio Romano, Pero algunos estados han perdido recientemente su unidad, entre ellos la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) y gran parte de Yugoslavia, Además de tener unas características estrictamente po¬ líticas, las sociedades de organización estatal descansan, generalmente, en una agricultura intensiva, cuya alta pro¬ ductividad permite la aparición de ciudades de alto grado de especialización económica y de otras formas de espedalización, y de un mercado o intercambio comercial.
� Capítulo 23 Además, las sociedades estatales tienen generalmente estiatificadón en dases (Tabla 23 J), Guando nacen los estados� el acceso de las personas a los escasos recursos se ve radicalmente alterado� lo mismo que su habilidad para rtí? escuchar a los líderes; y no se puede rehusar el pago de impuestos y evitar las multas. Por supuesto que los líderes políticos de un Es¬ tado no mantienen el orden social sólo por la fuerza: la gente tiene que creer� por lo menos de alguna forma, que los que están en el poder tienen un derecho legítimo a gobernar. Si la gente piensa de otra manera� la historia demuestra que los que están en el poder pueden perder eventualmente su capacidad de control. £n relación con esto hemos presenciado la caída reciente de los partidos comunistas a lo largo de la mayoría de los países de Eu¬ ropa oriental, así como de la antigua Unión Soviética. Por tanto, si la fuerza o la amenaza de su uso no son suficientes para justificar la legitimidad del poder y las desigualdades que comúnmente ocurren en las socieda¬ des estatales, ¿qué lo hace? Existen diferentes teorías. Los dirigentes del estado proclaman frecuentemente su des¬ cendencia divina para justificar su legitimidad, pero esto es raro en nuestros días- Otra teoría es que los padres en¬ señan a sus hijos a aceptar la autoridad, lo que puede lle¬ var a la aceptación de la autoridad política. Algunos analistas creen que la gente acepta la autoridad estatal por razones no demasiado buenas: los gobernantes son capaces de atontados. Finalmente, algunos teóricos pien¬ san que los estados deben proporcionar al pueblo venta¬ jas reales o racionales; de otra forma la gente no pensaría que los gobernantes merecen ejercer la autoridad. La le�timidad no es un fenómeno de todo o nada: varía en grado. Por qué ha variado en diferentes épocas y lugares, es una cuestión dásica tratada por las ciencias sociales, incluyendo a la antropología� así como a la filosofía y otras disciplinas humanísticas. Una sociedad estatal puede mantener su legitimidad, o al menos su poder» durante mucho tiempo. Así, el Im¬ perio Romano fue una sociedad estatal que dominó el área mediterránea y el Oriente Próximo durante cientos de años. Comenzó como una ciudad-estado que a través de la guerra fue anexionando territorios adicionales. En el cénit de su poder» el Imperio Romano tuvo más de 55 millones de habitantes y su capital, Roma, una población de más de un millón de habitantes. El territorio del es¬ tado incluía lo que actualmente son Gran Bretaña, Fran¬ cia, España, Portugal, Alemania, Rumania, Turquía, Grecia, Armenia, Egipto, Israel y Siria, Otro ejemplo de ciudad-estado fue el reino de Nupe en Africa occidental, actualmente parte de la nación-es¬ tado de Nigeria. Como es propio de las sociedades esta¬ tales, la sociedad Nupe estaba rigidamente estratificada.
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En el extremo superior del sistema social estaba el rey o etsu. Próximos a él estaban los miembros de la femilia reaL que formaban la clase aristocrática más alta. Si¬ guiendo el orden estaban otros dos tipos de nobleza: los jefes locales y los líderes militares. En la base se encon¬ traba el pueblo, que no tenía ni poder ni prestigio y no compartía la autoridad política. El rey de Nupe poseía la última palabra en muchos de los asuntos judiciales. Los casos civiles y disputas meno¬ res eran ju��dos por los consejos locales, pero los casos criminales más serios eran prerrogativa del rey. Tales ca¬ sos, llamados «crímenes para el rey», eran abiertos ante la corte real por los representantes locales del rey; él y sus consejeros juzgaban el caso y determinaban los castigos adecuados, La mayor influencia del estado sobre los habitantes de Nuple se ejercía en el área de los impuestos. El rey dispo¬ nía del poder para imponerlos impuestos y recogerlos en cada hogar. El pago se podía efectuar tanto en forma de dinero (originalmente en forma de conchas y después con moneda británica) como de ciertos regalos, como vestidos, alfombras y esclavos. Parte de lo recogido era guardado por el rey, mientras que el resto era repartido entre sus representantes locales y los señores. Como con¬ trapartida de los impuestos pagados, la gente recibía se¬ guridad: protección contra invasiones y desórdenes domésticos.
F a c t o r e s asociado s c o n l a varíabílídad EISÍ l a o rg an ización TOLfTÍCA Las formas de organización política que hemos lla¬ mado banda, tribu, jefetura y estado son puntos en una serie de niveles de integración política o unificación, que van desde las autonomías locales a pequeña escala hasta las unificaciones regionales a gran escala. También hay variabilidad en la autoridad política, desde unos líderes políticos temporales e informales hasta un gran número de representantes políticos especializados y permanen¬ tes, desde la ausencia de un poder político coercitivo hasta el uso monopolizado de la fuerza pública por una autoridad central. Estas variaciones existentes en las or¬ ganizaciones políticas van asociadas generalmente a va¬ riaciones que oscilan desde la recolección hasta la producción de alimentos más intensiva, desde las meno¬ res hasta las mayores comunidades, desde la baja hasta la alta densidad de población� desde una tendencia a la re¬ ciprocidad de la redistribución hasta el intercambio de mercado, y desde las sociedades igualitarias hasta las so¬ ciedades de clases totalmente estratificadas. Las citadas sociedades, que parecen estar confirmadas por medio de estudios transculturales, se resumen en la
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Tabla 23,U Con vistas a la relación existente entre nivel de subsistencia tecnológica y complejidad política�un es¬ tudio transcultural que utilizó una pequeña muestra al azar de sociedades� encontró que a mayor importancia de la agricultura en una sociedad� mayor población polí¬ ticamente unificada y mayor número y tipos también de funcionarios públicos. Un estudio transcultural masivo demostró tendencias similares: a mayor agricultura in¬ tensiva» mayor organización estatal; por el contrarioj las sociedades con instituciones políticas locales tienen ten¬ dencia a depender de la caza> recolección y pesca, En relación con el tamaño de las comunidadeSj el pri¬ mero de estos estudios también sugirió que a mayor importancia de la comunidad� mayor variedad de fiandonarios políticos en ella» Robert Textor presentó un ha¬ llazgo similar; las sociedades con organización estatal tienden a tener pueblos y ciudades» mientras que las que sólo tienen organización política local suelen tener co¬ munidades con una población inferior a 200 habitantes. La investigación transcultural también tiende a confir¬ mar que las sociedades con mayores niveles de integra¬ ción política suelen presentar diferencias sociales» especialmente en la forma de diferencias de dase. ¿Nos proporcionan estas evidencias alguna explicadón de por qué varían las organizaciones políticas? Los datos indican claramente que hay varios fectores asocia¬ dos al desarrollo político» pero no se conoce todavía exactamente por qué se producen los cambios en la or¬ ganización. A pesar de que el desarrollo económico puede ser una condición necesaria para el desarrollo po¬ lítico» esta relación no explica completamente porqué la organización política es más compleja a causa de la eco¬ nomía que la mantiene. Algunos teóricos han sugerido que la competición entre los grupos puede ser una razón muy importante para la consolidación política* Por ejemplo» Elman Service sugirió la competición como una razón por la que puede cambiar una sociedad desde el nivel de organización política de una banda hasta un ni¬ vel tribal. Las sociedades de bandas son» generalmente» cazadoras. Con el cambio a la agricultura» la densidad de población y la rivalidad entre los grupos puede aumen¬ tar, Service creía que tal rivalidad aceleraría el desarrollo de alguna asociación informal más allá de la comunidad (llamada organización tribal) para ataque y defensa. Gomo hemos visto en los capítulos dedicados a residen¬ cia» parentesco y asociaciones» tanto los grupos de paren¬ tesco unilateral como los sistemas de grupo de edad parecen estar relacionados con la guerra. Entre los agricultores» las necesidades defensivas pue¬ den ser la principal razón para pasar de la organización política informal de varios poblados a una organización más formal de jefetura. Los distritos formalmente orga¬
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nizados están más cerca de poder derrotar a los poblados autónomos o induso de ios sistemas segmentarios de li¬ najes. Además» pueden haber razones económicas para d desarrollo político. Así» en relación con las jefeturas» Ser¬ vice sugirió que éstas emergerían cuando la redistribu¬ ción entre comunidades llega a ser importante o cuando eran necesarios grupos de trabajadores coordinados a gran escala. Cuanto más importantes son estas activida¬ des» mayor autoridad adquieren d líder y su femilia. Pero la redistribución está lejos de la actividad universal de los jefes. Tanto las teorías como las investigaciones de los an¬ tropólogos sobre el desarrollo político se han orientado principalmente hacia la cúspide de la escala de la com¬ plejidad política» y particularmente» hacia d origen de las primeras sociedades estatales. Esos primeros estados sur¬ gieron aparentemente de forma independiente» en torno al 3.500 a. C, en lo que actualmente es d sur de Irak» Egipto» noroeste de India» norte de China y México cen¬ tral. Como hemos expuesto en d capítulo dedicado al origen de las ciudades y estados» se han propuesto distin¬ tas teorías para explicar d origen de los primeros esta¬ dos» a pesar de que ninguna de ellas reúne todas las secuencias arqueológicas halladas en la formación de los mismos,
La d[fus[ón de las sociedades estatales Cualesquiera que fueran las razones por las que apa¬ recieron los primeros estados» d nivel estatal de desarro¬ llo político ha llegado a dominar d mundo. Las sociedades con estados tienen comunidades más grandes y mayor densidad de población que las sociedades de bandas» tribus y jefeturas. También poseen ejércitos que están preparados para combatir en cualquier momento. Los sistemas estatales que tienen enfrantamientos béÜcos contra jefeturas o tribus tienen todas las posibilidades de vencerlas» siendo la incorporación política de los venci¬ dos a la organización estatal el resultado de dio. Por ejemplo» la colonización británica primero y posterior¬ mente de EE UU de gran parte de Norteamérica llevó a la derrota e incorporación de muchas de las sociedades nativas americanas. La derrota e incorporación de los nativos americanos se debió» al menos parcialmente» a la catastrófica despo¬ blación que habían sufi'ido esas sociedades a causa de las enfermedades epidémicas» como d sarampión y la viruda» introducidas por los colonizadores europeos. La catastrófica despoblación fue comúnmente lo que acom¬ pañó al primer contacto entre los euro-americanos y los nativos tanto dd norte como dd sur de América» de la misma forma que ocurrió con los nativos de las lejanas
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Un� pintura r$pr$$6nta a lo$ �pañol� luchando contra lo$ indioeTlaxcaltecas en 1519 durante la conqui$ta del Imperio Azteca.
islas del Pacífico. Estas personas no habían estado nunca antes expuestas, y por tanto no eran inmunes, a las en¬ fermedades de las que los euro-americanos eran porta¬ dores cuando llegaron a estos países para colonizarlos, Antes de la expansión de los europeos, los pueblos del Nuevo Mundo y del Pacífico habían estado separados durante mucho tiempo de los pueblos y las enfermeda¬ des de los continentes geográficamente contiguos que conocemos como Europa» Asia y África. La viruela, el sa¬ rampión y otras enfermedades infecciosas de Europa lle¬ garon a ser enfermedades i n s t i l e s a las que la mayoría de los individuos de origen europeo habían sobrevivido. Probablemente la despoblación causada por la con¬ quista o intimidación sea un motivo importante para justificar que el número de unidades políticas indepen¬ dientes a nivel mundial haya disminuido poderosamente a lo largo de los últimos 3,000 anos y� especialmente» en los últimos 200 años. Robert Carneiro estimó que en el año 1000 a. C, podían existir entre 100.000 y 1.000.000 de unidades políticas independientes en el mundo» en tanto que actualmente existen menos de 200. En el regis¬ tro etnográfico» alrededor del 50 por ciento de las casi 2.000 sociedades descritas en los últimos 150 años tenían sólo una integración política local. Esto es» el nivel más alto de integración política en una o dos sociedades re¬ cientes era la comunidad local. Así, la mayor parte de la disminución del número de entidades políticas indepen¬ dientes ha ocurrido bastante recientemente. Pero la reciente secesión de los estados que constitu¬ ían la Unión Soviética y Yugoslavia» así como otros mo¬ vimientos separatistas en todo el mundo» sugiere que las rivalidades étnicas pueden ser el punto de partida hacia la constitución de unidades políticas mayores. Los gru¬ pos étnicos que habían sido dominados por otros en los estados multinacionales pueden optar por la autonomía
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política� al menos en algunos casos. En otros» las nacio¬ nes separadas del occidente de Europa están consi¬ guiendo unirse> tanto política como económicamente» cada dia más. MU tendencia hacia unidades políticas a pesar de algunas excepciocontinuar, mayores parece nesj tanto en el pasado como en el presente. Estrapolando casos de la historia pasada� un número de investigadores han sugerido que el mundo entero es¬ tará pohticamente integrado en algún momento� lo que puede ocurrir, como prontoj en d siglo xxni y no más tarde del año 4.850. Solamente el futuro nos dirá si estas predicciones se confirman. Y sólo el futuro nos dirá si se produce de forma pacífica» con todas las partes de co¬ mún acuerdo» o si se produce por la fuerza o la amenaza» como frecuentemente ha ocurrido en el pasado.
Variabilidad en el proceso político Los antropólogos aumentan su interés por la pohtica o por los procesos políticos de las sociedades que estu¬ dian: quién adquiere influencia o poder, cómo la ad¬ quiere y cómo se toman las decisiones políticas. Pero aunque hayamos descrito la importancia política de mu¬ chas sociedades» existen todavía pocos estudios transculturales sobre los que basarnos para explicar la variabilidad en política. Llegar a ser un líder
aquellas sociedades en las que existe un liderazgo hereditario» lo que es común en las sociedades de rango y en las sociedades estatales con monarquías» las normas de sucesión generalmente establecen cómo se hereda el liderazgo. Tales líderes se identifican a menudo de alguna forma visible: pueden estar permanentemente marcados o tatuados» como en las jefeturas de Polinesia» o pueden llevar vestidos muy elaborados e insignias» como en las sociedades con clases estratificadas (véanse los comenta¬ rios sobre los adornos corporales en el capítulo dedicado a las artes). Pero para las sociedades cuyos líderes se eso?�€íT,ya sean líderes informales o representantes políticos, necesitamos investigar mucho si queremos comprender por qué se escoge a determinados tipos de personas so¬ bre otras, Unos pocos estudios han investigado las cualidades personales de los líderes en las sociedades tribales. Uno de ellos» efectuado entre los Mecranoti-Kayapo de la re¬ gión central de Brasil» encontró que los líderes» en opo¬ sición a sus súbditos» tienden a destacar entre sus
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Fronteras de la investigación Democracia y desarrollo econémko: ¿cómo y por ¿qué eftctosy si hay alguno» produce el desarrollo económico sobre la participación política? ¿Podemos acaso especular sobre el ftituro ba¬ sándonos en investigaciones compa¬ rativas? La mayoría de las investigaciones comparativas sobre la relación exis¬ tente entre desarrollo económico y participación política han sido estu¬ dios transnacionales} comparando los datos de diferentes países. Algu¬
nos de ellos son más demócratas que otros» sobre la base de características tales como la celebración de eleccio¬ nes» una cabeza elegida a nivel esta¬ tal» la elección de una poderosa legislatura y la protección de las li¬ bertades civiles. En los países capita¬ listas� mayor democracia se relaciona con altos niveles de desarrollo económicO} medidos por indicadores como renta per cápita; en los países que no están muy industrializados» existe poca democracia a nivel na¬ cional, Pero» ¿por qué tendría que re¬ lacionarse una mayor democracia con el mayor desarrollo económico? La opinión que prevalece es la de que a mayor desarrollo económico se in¬ crementa el grado de igualdad social en todo el país> y a mayor igualdad entre los grupos de intereses hay ma¬ yor demanda de participación en el proceso político» y de aquí que exista más democracia. Aunque la teoría
semejantes por su mayor inteligencia» generosidad» reco¬ nocimiento» ambición y agresividad. Los líderes también tienden a ser más viejos y más altos� Y a pesar de la natu¬ raleza igualitaria de la sociedad Mecranoti (al menos en relación con la distribución de recursos) j los hijos de los líderes tienen más posibilidades que el resto de la pobla¬ ción de llegar a ser líderes. Las investigaciones efectuadas en otra sociedad brasi¬ leña» los Kagwahiv de la región amazónica» sugieren otras cuahdades personales de los líderes: parece que tienen sentimientos positivos respecto a sus padres y madres, En muchos aspectos» los estudios sobre los líderes efec¬ tuados en los de EE UU» muestran que no son muy dife¬ rentes de sus equivalentes en Brasil» aunque existe una gran diferencia: los líderes Mecranoti y Kagwahiv no son tan ricos como los de EE UU y reparten de hecho sus ri¬
puede enfocarse de otra forma» a me¬ dida que se desarrolla la economía» la mayoría constituida por lo que podemos llamar la dase media y las clases trabajadores pueden deman¬ dar más incentivos y mayor poder, y es menor el poder que puede retener las elites¿Qué dicen los registros etnogrᬠficos y transculturales en las socie¬ dades habituahnente estudiadas por los antropólogos? Sabemos que al¬ gunos de los niveles más altos de par¬ ticipación política se dan en las sociedades menos complejas» tales como las sociedades forrajeadoras, En ellas» muchos de los adultos par¬ ticipan en la toma de decisiones y los liderazgos son informales; los líderes sólo pueden mantener su poder si la gente está de acuerdo con ellos. El poder concentrado y la participación política menor son más frecuentes en las jefeturas que en las bandas y en
quezas. Los líderes de EE UU son generalmente mucho más ricos que los demás. «(GRANDES HOMBRES». En algunas sociedades tribales igualitarias» la carrera hacia el liderazgo parece ser muy competitiva. En algunas partes de Nueva Guinea y de Suramérica los «grandes hombres» compiten con otros hombres ambiciosos para redutar partidarios. Los hombres que desean competir deben mostrar que po¬ seen poderes mágicos» éxito en la agricultura y bravura en la guerra. Pero lo más importante es que tienen que recoger suficientes bienes para hacer grandes fiestas en las que los repartirán. Los grandes hombres tienen que trabajar mucho para conseguir seguidores y no perder¬ los» ya que los que no estén satisfechos con ellos se pasa¬ rán al bando de uno de sus competidores. Las esposas de
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las sociedades tribales. Las jefeturas Y los estados más jerarquizados sue¬ len depender de la agricultura� particularmeDte de la intensiva» que puede febricar más productos y ser¬ vicios per cápita que las sociedades forrajeadoras. La relación entre des¬ arrollo económico y participación política en los registros etnográficos es opuesta a la que encontramos en los estudios transculturales. Esto esj en las sociedades estudiadas por los antropólogos se observa que a mayor desarrollo económico� menor parti¬ cipación política. ¿Por qué? Parece ser que b igualdad social disminuye con d desarrollo económico en los registros etnográficos (daro que és¬ tos no induyen muchas sociedades industriales). En esos registros� una sociedad económicamente desarro¬ llada tiende a tener características como arados, fertilizantes y regadíos, que hacen posibles los cultivos per¬ manentes de los campos y las comu¬ nicaciones, Tal actividad agrícola intensiva fevorece más la con cent ra¬ dón de la riqueza de lo que lo hacen los cultivos de subsistencia (horti¬
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cultura) y la caza-recolección� por lo que en los registros etnográficos, las sociedades económicamente desa¬ rrolladas poseen más desigualdad social y, en consecuencia, menos de¬ mocracia. Las dos formas de estudio, el transnacional y d transculturali no son :&ciles de reconciliar, pues la des¬ igualdad social y económica parecen trabajar en contra de la democracia y la amplia participación política. La desigualdad social se incrementa con d paso dd forrajeo a la agricultura, en tanto que esta desigualdad social disminuye con d paso de la agricul¬ tura preindustrial a los altos niveles de desarrollo económico (industria¬ les). La participación política dismi¬ nuye con d primero de esos sistemas y se incrementa con el segundo, ya que la desigualdad social primero se incrementa para disminuir después. Entonces� ¿qué sugieren los estu¬ dios comparativos con respecto al foturo? Si las clases medias y traba¬ jadoras sienten que no reciben un re¬ conocimiento justo por su trabajo, sus demandas pueden ir en aumento
los grandes hombres frecuentemente son líderes tam¬ bién. Por ejemplo� entre los Kagwahiv, la esposa de un gran hombre es generalmente la que lidera a las mujeres de la comunidad, es la responsable de organizar los ban¬ quetes y de repartir carne en dios. A pesar de que el fenómeno de los grandes hombres es muy común en Nueva Guiñeadlos investigadores están empezando a distinguir diferencias entre la forma y la extensión de los «grandes hombres» en diferentes áreas de Nueva Guinea, Por ejemplo, en las Tierras Altas del sur, grupos de hombres (no grandes hombres) pueden participar en una distribución de regalos a gran escala, por lo que los grandes hombres no son diferentes de los hombres ordinarios. Por d contrario, en las Tierras Altas del noroeste los grandes hombres permanecen aleja¬ dos dd resto de forma evidente. Planifican la política que
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y las elites pueden aceptar las de¬ mandas de aquéllas, con lo que dis¬ minuirá su poden De lo contrario� a menos que las elites traten de retener su poder a cualquier coste, se pro¬ ducirá mayor participación política y más democracia, al menos a largo plazo, Futínt&: ECenaeth A. BoUeti, �Libeiál Detdocmcy; Vdidity &í\¿ Metbod �ctúrs tu Cross-NationfiJ Meeíurís», jlíwnííinyqMraflí ni pueden soli¬ citar acciones contra los hombres. Pero cuando se introdujeron los tri¬ bunales de justicia, las mujeres co¬ menzaron a acudir a ellos para pedir justicia contra las ofensas que reci¬ bían de los hombres. En los tiempos colonialeSj los tri¬ bunales introducidos de estilo occi¬ dental también seguían las leyes occidentales� princpalmente las leyes comunes de Australia y las británicas� pero no las leyes basadas en las costumbres de los nativos. Después de que Papua Nueva Guinea consi¬ guiera ser un país independiente, aquellos tribunales permanecieron en el lugar, de forma que los tribu¬ nales inferioFes> llamados tribunales locales, se situaron en los centros de población, alejados normalmente de los poblados, con lo que los nativos de éstos raramente acudían con sus casos. Pero en 1973 se formó un nievo tipo de tribunales, llamados tribunales de poblados, que se creaion para resolverlas disputas locales en las aldeas� utilizando una mezcla de leyes basadas en las costumbres locales y de leyes occidentales. En contraste con los tribunales locales, los magistrados de los tribunales de
poblados no eran extraños, sino que se seleccionaban entre el grupo de lí¬ deres tradicionales y locales que co¬ nocían a las gentes de la comarca, Guando Richard Scaglion estudió entre 1977 y 1987 los cambios pro¬ ducidos por lostribur\ales de pobla¬ dos entre los Abelam, comentó el incremento del uso de estos tribu¬ nales por las mujeres. En 1977� la mayoría de las demandas fueron efectuadas por hombres, pero en 1987 la mayoría las pusieron las mu¬ jeres. En un amplio estudio sobre los casos vistos en los tribunales en mu¬ chas de las regiones de Papua Nueva Guinea, Scaglion y Rose Whittingham encontraron que la mayoría de los casos en los que las mujeres esta¬ ban involucradas eran intentos de desagravio por ofensas relacionadas con el sexo (celos, violación, incesto, disputas domésticas) cometidas por hombres. La mayoría de las disputas producidas en los poblados de Nueva Guinea se resolvían infor¬ malmente por autocontrol o ape¬ lando a un «gran hombre», y se recurría a los tribunales sólo como último recurso. Como los casos re¬ lacionados con el sexo eran difíciles de resolver, informalmente pasaban al tribunal de poblados. Aparente¬ mente las mujeres no creían que pu¬ dieran obtener alguna satisfección
menores y menos complejas probablemente no necesitan elaborar mecanismos tales como tribunales, juramentos y ordalías para investigarla culpabilidad, pues en ellas to¬ dos conocen qué crímenes se han producido y quiénes son probablemente los culpables,
no formal, por lo que recurrían a los tribunales de poblados. En ellos con¬ seguían algún tipo de castigo paralos ofensores en alrededor del 60 por ciento de los casos, el mismo por¬ centaje que conseguían los hombres cuando presentaban algún caso en busca de castigó¬ los cambios culturales introdu¬ cidos desde fuera redundan con fre¬ cuencia en perjuicio de los nativos, Pero las mujeres de Papúa Nueva Guinea se han beneficiado del sis¬ tema de tribunales de poblados, par¬ ticularmente a la hora de conseguir justicia contra las acciones de los hombres. El sistema tradicional de justicia estaba dominado por los hombres (las mujeres no podían ser demandantes)� por lo que la posibi¬ lidad de resolverdisputas en los nue¬ vos tribunales ha proporcionado a las mujeres algunas de las medidas de �aldad social con los hombres, [%ich�d ScegUon, fcLe� Adaptátion in e Cuin� Courtft, 29 (1990): l7-33í Richard Scag]ioi3 y Whittinghñm, Mpetnde and Sex-Reláted Disputes ta RjucaJ
t�pue Keiv Guinee», en S.
VÍQÍence m Papua New Cuínoi. kfonogreph
No. 3 (PóTt Moresby E�pua Netv Guinea: Law Refonu Cofflfflissioo, 1905),pp. 120-33,
SENTENCIAS, TRIBUNALES Y CÓDIGOS LEGA¬ LES. Hablamos de sentencia cuando una tercera parte, que actúa como juez, toma una decisión que tienen que aceptar las partes en litigio. El juicio se puede efectuar por una persona (un juez), un grupo de jueces, un
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íi�uchas sociedades han adoptado tribunales para resol¬ ver sus disputas�como en ésta de Papua Nueva Guinea.
juradoi un representante político o una instancia mayor (un jefejpersonaje real o un consejo). Los tribunales es¬ tán frecuentemente abiertos a la audiencia pública� aun¬ que pueden no estarlo. Tanto jueces como tribunales pueden confiar en códigos legales y penas estipuladas, aunque no son necesarios los códigos legales para tomar decisiones. Nuestra propia sociedad confía fuertemente en los códigos legales y con tribunales para resolver los pleitos pacíficamente� pero con frecuencia los tribunales se basan en precedentes� esto es� la existencia de casos si¬ milares previos. Los códigos legales y los tribunales no están limitados a las sociedades occidentales� ya que, por ejemploi desde finales del siglo xvn hasta comienzos del siglo XX, los Ashanti de Africa occidental tenían un com¬ plejo sistema político con elaborados acuerdos legales. El estado Ashanti fiie un imperio militar que poseía códigos legales semejantes a los de muchas civilizaciones anti¬ guas. La sanción más efectiva que respaldaba a las leyes As¬ hanti, así como su cumplimiento� era el gran respeto (casi una deferencia religiosa) por los deseos de los ante¬ pasados y también de los ancianos como custodios de las tradiciones ancestrales. La ley Ashanti estaba basada en el concepto de la ley natural o creencia en un orden natu¬ ral del universo cuyos principios seguirían los principa¬ les legisladores en las decisiones que tomaban y en las normas que diseñaban. Los Ashanti combinaron las leyes ariminales y religiosas. Los crímenes (especialmente el homicidio)� la maldición a un jefe> la cobardía y la bruje¬ ría se contemplaron como pecados contra los espíritus de los antepasados. En los tribunales Ashanti, los más viejos examinaban y asistían a la declaración de los testi¬ gos lo mismo que a las partes en litigio. Existían también abogados casi profesionales y se podían efectuar las ape¬
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laciones contra un juicio directamente ante el jefe. Parti¬ cularmente notable era el énfesis en el intento al evaluar b culpa. La borrachera era una defensa válida para todos los crímenes excepto para el asesinato y para la maldi¬ ción a un jefe, y la existencia de algún grado de locura, si se probaba, era útil ante cualquier tipo de ofensa. Los castigos Ashanti podían ser bastante severos. La mutilación físicajcomo arrancarla nariz o las orejas e in¬ cluso la castración en ofensas sexuales, se empleaba con alguna f�cuencia. Las multas eran lo más usual, sin em¬ bargo, una sentencia de muerte se podía conmutar por el destierro y la confiscación de bienes, ¿Por qué algunas sociedades tienen sistemas codifica¬ dos y otras no? Una explicación propuesta por E. Adamson Hoebel, A. R, Radcliffe-Brown y otros, es que en las comunidades pequeñas estrechamente unidas no hay ne¬ cesidad de seguir leyes formales ya que los intereses en conflicto son mínimos. Por lo tanto» las sociedades sim¬ ples necesitan pocas leyes codificadas. Existen pocas ma¬ terias sobre las que preocuparse» y los deberes generales del grupo son suficientemente conocidos y tan frecuen¬ temente demostrados como para disuadir a los transgresores. Este punto de vista es compartido por el estudio de Richard Schwartz en dos asentamientos israelíes. En un Idbbutz comunal� un joven provocó gran resentimiento por parte de su comunidad por haber aceptado como re¬ galo una tetera eléctrica. La opinión general mantenía que había transgredido el código de no poseer ninguna pertenencia personal y por esta causa, el joven, entregó la tetera a la enfermería del kibbutz, Schwartz había obser¬ vado que el «cumplimiento no organizado de la decisión se efectuó por miedo, pero él había desatendido el deseo expreso de la comunidad, su vida [..,] se habría hecho in¬ soportable por el ant�onismo ejercido por la opinión pública». En esta comunidad donde todos trabajan y comen juntos, no sólo se conoce cualquier transgresión, sino que un malhechor no podría escapar a la censura pú¬ blica. Por eso fiie la censura pública una sanción efectiva. En otra comunidad israelí en la que los individuos vivían en casas ampliamente separadas y trabajaban y comían separados, la opinión pública no funciona tan bien, ni tampoco sus miembros eran tan conscientes de los pro¬ blemas, no tenían formas rápidas de expresar sus senti¬ mientos. Como resultado establecieron un cuerpo judicial para controlar los casos incómodos. Las sociedades más heterogéneas y estratificadas tie¬ nen mayor tendencia a tener disputas frecuentes que, al mismo tiempo, son menos obvias para el pública Los in¬ dividuos de las sociedades estratificadas generalmente no son tan dependientes de los miembros de la comunidad
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para su bienestarj y por lo tanto ti�nín menos posibilida¬ des de saber o tener en cuenta otras opiniones» Es enton¬ ces en estas sociedades en las que se desarrollan tanto las leyes codificadas como las autoridades formales para re¬ solver las diferencias� debido quizás� a que las disputas se pueden aislar de forma tan impersonal que las partes pueden aceptarlas decisiones pudiéndose restaurar el or¬ den social. Un buen ejemplo de la forma en la que se desarrolla el sistema formal de leyes foe lo sucedido en las ciudades del Oeste de América durante el período de la fiebre del oro. Estas comunidades estaban llenas de forasteros; las autoridades locales no tenían ningún control (autori¬ dad) sobre estos intrusos a causa de que no tenían nin¬ gún tipo de vínculos locales. Tratando de solucionar los frecuentes disturbios que se producían, pensaron que una posible solución sería contratar pistoleros� que tamWén eran forasteros� que actuasen como fondonarios pacificadores o shrriffs. Pero esta estrategia fue un fra¬ caso. Eventualmente» los pueblos triunferon cuando las ajtoridades federales enviaron jefes de policía respalda¬ dos por el poder federal. ¿Existe alguna evidencia para mantener la teoría de que solamente son necesarias leyes codificadas en las so¬ ciedades mayores y más complejas? Los datos obtenidos en amplias muestras sociales a nivel mundial sugieren que la existencia en una sociedad de leyes codificadas está asociada con la integración política más allá del ni¬ vel local. Por ejemplo� los casos de asesinato se tratan in¬ formalmente en las sociedades que sólo tienen una organización política de nivel local. En las sociedades con unidades políticas multilocales, los casos de asesi¬ nato tienden a ser juzgados o adjudicados a autoridades políticas especializadas. También existe alguna evidencia transcultural de que la violencia dentro de una sociedad tiende a ser menos frecuente cuando existen autoridades formales (jefes> tribunales) con poder para castigar a los asesinos. En general� la adjudicación o las imposiciones tomadas por las autoridades externas tienden a existir en sociedades jerárquicas con clases sociales y poder central.
R es o l u cíó n v i o l e n t a de los COKFLÍCTOS La gente está dispuesta a utilizar la violencia cuando no están disponibles los medios alternativos regulares y efectivos de resolver un conflicto. Algunas sociedades consideran que es apropiada bajo ciertas condiciones la violencia entre los individuos, nosotros generalmente no pensamos de esa forma y la denominamos crimen. Guando la violencia se produce entre entidades políticas� como comunidades� distritos o naciones� la llamamos guerra. Los tipos de guerra� por supuesto� varían según la
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complejidad de la sociedad» existen algunas formas de guerra como: disputa� incursión y confrontaciones a gran escala. Algunos estudiosos hablan de la existencia de un pa¬ trón cultural de la violencia pero, ¿son más violentas unas culturas que otras? La respuesta parece ser que sí. Lo más fií cuente es que la mayoría de las sociedades sean violentas� unas en mayor medida que otras, hasta el ex¬ tremo de que las sociedades con más tendencia a la gue¬ rra ejercen deportes más competitivos� magia negra» castigos más severos en los crímenes, tienen mayores ín¬ dices de asesinatos� disputas y violencia femiliar. ¿Qué podría explicar esta tendencia? Una de las hipótesis es que, si la guerra es algo frecuente, esa sociedad puede acostumbrar a sus jóvenes a ser más agresivos, de forma que lleguen a ser guerreros efectivos, Pero esto puede ser un arma de doble filo ya que la socialización a fevor de la violencia se puede reflejar en otros aspectos de la vida in¬ fluyendo en el alto índice de criminaÜdad, y también se pueden manifestar otros tipos de violencia como resul¬ tado de fevorecer la agresividad. VIOLENCIA INDIVIDUAL.
Aunque en un princi¬ pio pueda parecer paradójico, la conducta violenta se utiliza para tratar de controlar el comportamiento. En al¬ gunas sociedades los padres consideran necesario pegara los niños cuando se portan mal. No consideran esta acti¬ tud como conducta criminal o abuso infentil sino sola¬ mente como un castigo (véanse los comentarios sobre violencia femiliar en el capítulo sobre Problemas sociales globales). Actitudes similares pueden aparecer entre los adultos, Si alguna persona se introduce en nuestra pro¬ piedad o causa un daño a nuestra femilia� algunas socie¬ dades consideran apropiado o justificado matar o lesionar al intruso. ¿Esto es control social o felta de con¬ trol? La mayoría de las sociedades posee normas sobre cuándo es apropiado el «castigo», de forma que la actitud de la persona que observa que alguien hace algo que no es apropiado� así como la actitud de la persona que lo hace> está influida por las «leyes» de su sociedad. Por ejemplo, los sistemas de autocontrol son característicos de las sociedades igualitarias. ¿Cómo se diferencia de la «acción comunitaria» y qué es lo que podemos conside¬ rar como resolución pacífica del conflicto? Como la ac¬ ción comunitaria está basada explícitamente en la consecución del consenso, es útil para terminar con las disputas particulares. En cuanto a la acción individual, o autocontrol, si está relacionada particularmente con la violencia, no es útil para resolver los conflictos. DISPUTAS. Las disputas son un ejemplo de cómo el autocontrol individual puede no ayudar a la resolución
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pacífica de los conflictos. La disputa consiste ín recurrir a la hostilidad entre Emilias q grupos femiliareSj nor¬ malmente motivada por el deseo de vengar una ofensa (pueden ser insultosj injurias� heridas o muerte) contra un miembro del grupo. La característica más común de la disputa es que la responsabilidad de la venganza es asumida por los miembros del grupo femiliar. El asesi¬ nato de uno de los miembros o el agravio al grupo se considera que exige la venganza� ya que el grupo femiliar ofensor es considerado como responsable. Nicholas Gubser describió una disputa femiliar en una comuni¬ dad Inuit Nunamiutj producida por el asesinato de un esposo a manos del amante de su esposa. El tema duro décadas y los Inuit disputaron seriamentej lo mismo que hacen muchas sociedades» especialmente tras cometerse el asesinato, Gubser describe lo que ocurre cuando se asesina aun hombre; Los miembros ríié& próximos de la Emilia no descaigan hasta que se ha efectuado una completa ver�nza. Los patientes inmediatos del muerto reúnen a tantos miem¬ bros �miliares como pueden. Su primera acción� $i es que es posible, es matar al asesino, o en su lugar a uno de sus femiliares más próximos. Entonces» por supuesto» los miem¬ bros de la femilia de éste entran a formar parte del grupo que tiene que vengarlo. Los dos grupos familiares pueden estar durante años enzarzados ai esta espiral de venganza. Las disputas i�miliares no siempre están limitadas a sociedades a pequeña escala; frecuentemente ocurren en sociedades con alto nivel de organización política. INCURSIÓN. IdcutsIód es el uso de la fuerza du¬ rante u n corto espacio de tiempo� planeada y organizada para efectuar un objetivo limitado. Este objetivo puede ser la obtención de bienes> animales u otras formas de bienes pertenecientes a otras comunidades» con frecuen¬ cia vecinas. La incursión es especialmente prevalente en las socie¬ dades pastoriles» en las que reses» caballos» camellos y otros animales son muy apreciados y el rebaño de un particular pastor puede aumentar robándoselo a otros. Las incursiones son organizadas por líderes temporales o coordinadores cuya autoridad no llega mucho más allá de la planificación y ejecución de la aventura. También se pueden organizar incursiones con el fin de capturar gen¬ te» unas veces para casarse (el rapto de mujeres para ser esposas o concubinas es bastante común) y otras para te¬ ner esclavos. La esclavitud se ha practicado en aproxima¬ damente el 33 por ciento de las sociedades conocidas del mundo» y la guerra ha sido uno de los métodos para la obtención de esclavos» tanto con el fin de poseeilos como de comerciar con ellos�
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OONFRONTACIONES A GRAN ESCALA. Tanto las disputas como las incursiones implican a un relativa¬ mente reducido número de personas y casi siempre con¬ llevan un elemento de sorpresa. Como la lucha se produce sin previo aviso» las victimas son incapaces de defenderse de forma inmediata. En contraste» las confrontaciones a gran escala afectan a gran numero de personas que elabo¬ ran por ambas partes estrategias de ataque y defensa. La guerra a gran escala es practicada generalmente por socie¬ dades que tienen agricultura intensiva o industrializada. Sólo ellas disponen de tecnología suficientemente avan¬ zada para mantener ejércitos especializados» líderes mili¬ tares» estrategas» etc. Pero este tipo de confrontaciones no está limitado a las sociedades estatales: pueden produ¬ cirse» por ejemplo» entre horticultores como los Dugum Dani de la región central de Nueva Guinea. l a historia militar de los Dani» con sus alianzas y con¬ federaciones» recuerda a la de Europa» si bien las batallas Dani se efectúan con menor cantidad de guerreros y u n armamento mucho menos sofisticado. Entre los Dani los largos períodos de guerras rituales se caracterizan por batallas formales anunciadas con un intercambio de de¬ safios entre ambos bandos. Si se acepta el desafio» los protagonistas se reúnen para acordar el sitio de la batalla y la situación de sus lineas. Comienza la batalla a media mañana usándose lanzas» garrotes y arcos y flechas» y continúa hasta que cae la noche o la interrumpe la lluvia. Se puede producir un descanso por el calor de mediodía en el que ambas partes intercambian insultos o charlan y descansan entre ellos. El frente de la línea de batalla está compuesto poruña docena de guerreros activos y unos pocos líderes. Detrás de ellos se encuentra la segunda línea» con flechas» com¬ puesta por aquellos que acaban de dejar la primera línea o están preparados para pasar a ella, La tercera línea» también sin flechas» está compuesta por no combatien¬ tes» hombres demasiado viejos o demasiado jóvenes para participar y aquellos que están recuperándose de sus he¬ ridas. Esta tercera línea es meramente de observadores de la batalla que se sitúan en la llanura de hierba. Sobre las laderas de las colinas situadas detrás de la primera línea» algunos de los viejos ayudan a dirigir a los espíritus de los antepasados hacia el campo de batalla excavando una línea en el suelo que apunta hacia el lugar de la misma. Las confii�ntaciones también pueden tener reglas cul¬ turales. Entre los Dani» por ejemplo» la batalla nunca se produce de noche y las armas están limitadas a lanzas y arcos con flechas. De forma similar» en las sociedades es¬ tatales» los gobiernos también firman pactos res¬ tringiendo la utilización de gases venenosos» guerra bacteriológica y similares. Existe una serie de acuerdos no oficiales en términos similares. Basta con recordar a
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La guerra entre lo$ Asmat de la parte indonesia de Nueva Guinea $e produce internamente en $u $ooiedadj como cuando un poblado ataca a otro. través de la memoria de los líderes nacionales partici¬ pantes en las dos guerras mundiales los acuerdos locales tomados en cuanto a las visitas entre posiciones de uno y otro bando� canje de prisioneros de guerra� etc. Explicación de la guerra
La mayoría de las sociedades conocidas antropológica¬ mente ha tenido guerras entre sus comunidades o entre los grandes grupos territoriales. La gran mayoría de sociedadeSj como se muestra en un amplio estudio transcultural reciente� sufrió guerras» al menos de forma ocasional» en algún momento� a no ser que se hubieran pacificado o incorporado a sociedades más dominantes. Todavía se han efectuado pocos trabajos sobre las posibles causas de la guerra y por qué se producen sus variaciones en cuanto a tipo y frecuencia. Por ejemplo� ¿por qué algunas gentes luchan con frecuencia y otras muy pocas veces? ¿Por qué en algunas sociedades las guerras se producen internamente» dentro de la misma sociedad o grupo idiomático? Tenemos respuestas� basadas en estudios transculturales» para algunas de estas preguntas. Hay evidencia de que la gente de las sociedades preindustriales acude a las guerras sin miedo� o con el miedo esperadoj pero no con el miedo ante lo impredecible como el que se siente ante
los desastres naturales (por ejemplo» sequías� inundacionesj plagas de langostas) que destruyen las reservas de alimentos. La gente puede pensar que puede protegerse de esos desastres capturando las cosas de los enemigos derrotados. En cualquier caso» las sociedades preindus¬ triales con mayor tendencia a hacer guerras tienen una historia de desastres esperados pero impredecibles. El hecho de que las carestías crónicas de alimentos (produ¬ cidas anualmente y por tanto prededbles) no conlleve la existencia de una mayor proporción de guerras en una sociedadj sugiere que la gente acude a las guerras con el fin de atenuar el impacto de los desastres que esperan que se produzcan en el futuro aunque no puedan prede¬ cirlos, De acuerdo con este intento de explicación está el hecho de que los vencedores de las guerras casi siempre ocupan tierras u otros recursos de los vencidos, Y esto es verdad» no sólo para las sociedades más simples sino también para las sociedades preindustriales más comple¬ jas. ¿Podrían motivos similares afectar a las decisiones sobre la guerra o la paz en el mundo moderno? Sabemos que las sociedades complejas o política¬ mente centralizadas suelen tener ejércitos prof�onales» jerarquías de autoridades militares y armas sofisticadas, Peroi sorprendentemente�la frecuencia de guerras parece que no es mucho mayor en las sociedades complejas de
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lo que pueda ser en Us simples bandas t> sociedades tri¬ bales, Tenemos alguna evidencia de que la guerra no se produce internamente (dentro de una misma sociedad) si tiene poca población (3LOOO habitantes o menos) o poco territorio; en las sociedades mayores existe mayor tendencia a la guerra interna entre comunidades con grandes divisiones territoriales. De hecho» en las socieda¬ des complejas» induso aunque estén políticamente unifi¬ cadas» no hay menor tendencia a tener guerras internas de lo que la tienen las sociedades más simples� ¿Qué hay sobre la idea de que los hombres de las ban¬ das y las sociedades tribales van a la guerra a por muje¬ res? Si esto fuera cierto» tanto las bandas como las sociedades tribales con frecuentes guerras tendrían esca¬ sas mujeres» y aquellas con pocas o ninguna guerra (me¬ nos de una cada diez años) tendrían igual proporción entre el número de hombres y mujeres. Pero la evidencia transcultural contradice claramente esta teoría» ya que las bandas y sociedades tribales con cuentes guerras no tienen menos mujeres» ¿Qué sabemos» si es que se sabe algo» sobre las guerras recientes entre naciones-Estado? Hemos encontrado co¬ sas sorprendentes» pues aunque mucha gente piensa que las alianzas militares disminuyen el riesgo de guerra� lo cierto es que» por el contrario» las naciones formalmente aliadas con otras han tenido más guerras que las que ca¬ recen de estas alianzas formales» Tampoco parece que las alianzas comerciales disminuyan las posibilidades de te¬ ner guerras» sino que las disputas entre socios comercia¬ les acaban en guerras con mayor fi-ecuencia de las que puedan tener naciones sin lazos comerciales. Por últimoj la igualdad militar entre naciones» particularmente cuando está precedida de un rápido crecimiento militar, parece que incrementa más que disminuye las posibili¬ dades de guerra entre esas naciones. Estos hallazgos contradicen claramente algunas de las ideas tradicionales sobre cómo evitar la guerra. Si las alianzas» el comercio y el fomento del ejército no dismi¬ nuyen las probabilidades de guerra» ¿qué es lo que puede hacedo? hemos comentado que la participación ( homicidios en masa, asesinato de personas por un gobierno� induyendo genocidio, etc. Vaya al sitio: lntp�A�ww2 Jiawaii. edu/rummel. ¿Qué tipo de gobiernos comete la mayoría de asesinatos masivos? Recuerde que usted tiene que aña¬ dir tres ceros a b mayoría de estas cifras para ver d nú¬ mero de personas masacradas. 3. Conozca el tribunal criminal internacional de las Naciones Unidas para investigar los asesinatos de Ruanda en http://wwwictr.org.
Lecturas sugeridas Fry, D. P. y BfÜTiKQViSTi K. (Eds.), Cuííuml Víjrwíwn íh ResolutioiV. Alternativas ta VioUnoe. Mahwah, NJ: Lawrcnce Erlbaura A350ciate$, 1997. El caso estudiado este libro nos muestra que las alternativas a la violenda existen en la
mayor parte de las sodedades, lo quí indica que la violenda no es inevitablCp Si los conílictos $C resuelven con frecuencia mediante la viol�ndai debería $er posibk descubrir los
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los con£íicto$t los principios de la F�splución no violeta cuales podrían s�r aprendidos y puestos en práctica, Haas» J„ (Ed.)- � Antkropohgy ofWar. Cambridge University Press, 1990. liOs autores de estí volurüien analizan el fenó¬ meno de la guerra en lu�es generales particulares, centraadose en los modelos explicativos de la guerra� los orígenes frente a la persistencia de la misma y las causas �nte a los e&ctos de la guerra en las sociedades sin Estado* Mcglynn, E. y Tuden+A., (Ed$,)- AHtkrppóhgkalApproach� te
Politkal Sí/wvwr, Pittsburgh: University of Pittsburgh Press» 1991. Una compilación de artículos que analizan los procesos políticos en diferentes sociedades. Los editores proporcionan una visión global dt los conceptos centrales de la antropología política y sus diferentes aproximaciones. Rcgs» M. H, «Political Participation». En C. R. Embery M. Ember, eds.i CroM-Cií/íuraJ for Social Science Upper Saddle lUverp NJ: Prentice HaU, 1995. Prentice Hall/Simon & Schuster Custom Publishii�. Este capítulo» dedicado es¬ pecialmente a los estudiantes, analiza las variaciones en la participación política (sobre la toma de decisiones y la exi¬
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gencia de responsabilidades) en las sociedades y nacionesEl autor también analiza por qué varía la participación po¬ lítica. ScAGLfON* K. «law and Society?. En C, R. Ember y M. Ember» eds-t CTosa-CidUimI Researdi for Soáal Science. Upper Sad¬ dle River, NJ: Prentice Hall, 199S. Prentice Hall/¿mon 8c Schuster Custom Publishing, Especialmente dedicado a los estudiantes» este capítulo revisa algunos de los estudios comparativos de la ley y resume dos aproximaciones al es¬ tudio de la ley en antropología (la primera centrada en las normas y la segunda en los procedimientos o procesos), Upham» S. (Ed.). ívíjJMíwn o/?í)J¡íícíj/ Systenjsi Sociopolitics iti STTudl-SaiU S&kntary Sockti�� Cambridge: Cambridge University Press� 1990. Los autores de este volumen ofrecen diferentes y a menudo contradictorias ideas acerca de la Or�ni2ación política y el cambio en las sociedades sedenta¬ rias, Exploran cuestiones fundamentales, como el hecho de cómo $e pasa de abandonar la autonomía local y la igualdad para integrarse en unidades políticas más grandes y jerarqyiiadaS-
Psicología y cultura INDICE DEL CAPITULO
La universalidad del desarrollo psicológico Variabilidad transcultural en las características psicológicas Explicaciones psicológicas de la variabilidad cultural
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P s i c ol ogí a y cultura
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uando alguien viaja a un país distinto á ú suyo� a menudo siente que las personas de ese país piensan de forma diferente� o tienen reacciones distintas ante las mismas situaciones y tener diferentes personalidades (formas dis¬ que parecen tintas de pensarj sentir y comportarse) en comparación con las personas de su pais. Los estereotipos han surgido de estas observaciones casuales. Unas personas parecen reservadas� otras autoritarias y otras parecen tener mal carácter, A pesar de que los antropólogos en general rechazan estos estereotipos que suelen estar basados nor¬ malmente en juicios precipitados e incluso etnocéntrieosi no rechazan la idea de que puedan existir diferencias en algunos aspectos de la forma en que pensamos� senti¬ mos o nos comportamos. Consideremos el contraste en las emociones y com¬ portamientos entre los Semai de Malasia central y los �nomami de la frontera Brasil-Venezuelaj un contraste que expresa claramente diferencias en la personalidad. Los Semai� s�n describió Robert Dentan» son femosos en Malasia por su timidez y jamás se han descrito como hostiles o ariscos. Si se les pregunta sobre el enfedo> los Semai contestan «nosotros no nos enfodamos». Por el contrario» los �d�omami, según los describió Napoleón Chagnon� son conocidos por su agresividad. No sólo en¬ tablan constantes guerras entre poblados� sino que tam¬ bién muestran numerosos actos de agresión dentro de un mismo poblado» El griterio y las amenazas son muy frecuentes entre ellos para conseguir cosas�lo mismo que las luchas sangrientas con garrotes� y las palizas a sus es¬ posas, Los hombres se sienten orgullosos de sus cicatri¬ ces y, a veces> llegan a afeitarse la cabeza para enseñadas. Aunque puedan existir diferencias psicológicas entre las sociedades� también se producen semejanzas en todas eUas. Al fin y al cabo> todos somos humanos. Las personasj en cualquier parte del mundo� gritan o lloran cuando muere un ser querido» ríen o sonríen cuando les ocurre algo bueno» aprenden de sus errores y comparten las mismas necesidades. Los antropólogos interesados en las diferencias a nivel psicológico entre las sociedades y dentro de cada una de ellas» así como en las semejanzas que comparten la amplia variedad de sociedades huma¬ nas» suelen denominarse a sí mismos antropólogos psico¬ lógicos. Los psicólogos que estudian a personas de dos o más sociedades se autodenominan psicólogos tmrtsculturales. Hay cuatro cuestiones principales que parecen ca¬ racterizar a la Antropología psicológica: ¿Hasta qué punto el desarrollo psicológico es similar en todos los se¬ res humanos? Si hay diferencias� ¿cuáles son y cómo pue¬ den justificarse? ¿Cómo conciben las personas de distintas sociedades el desarrollo de la personalidad y el desarrollo psicológico? ¿Qué tipos de variabilidad cultu¬ W �
ral pueden ser explicados por fectores psicológicos? En este capítulo abordaremos algunos intentos llevados a cabo por los investigadores para responder a estas cues¬ tiones.
La univei�altdad del desarrollo psicológico Los antropólogos comenzaron a interesarse por la psicología a comienzos del siglo xx» en parte porque no creían que la naturaleza humana pudiera estar completa¬ mente explicada en las sociedades occidentales� como habían supuesto generalmente los psicólogos. Hace sólo unos años que psicólogos y antropólogos han comen¬ zado a trabajar juntos para intentar aclarar el supuesto de que todos los seres humanos son iguales desde el punto de vista psicológico» en todas las sociedades. El psicólogo Otto Klineberg» por ejemplo» reprendía a sus colegas en 1974 diciéndoles: «Mi contacto con la antro¬ pología me afectó de la misma forma que si hubiera sido una conversión religiosa. ¿Cómo pueden hablar los psi¬ cólogos de rasgos humanos y de conductas humanas cuando sólo conocen un tipo de seres humanos?�. ¿Cómo podemos saber qué hay de universal en la con¬ ducta humana y qué hay de específico hasta que no estu¬ diemos todos los tipos de seres humanos? Puesto que todos los seres humanos que pueblan el mundo pertene¬ cen a la misma especie y comparten una gran proporción de sus genes» podríamos suponer que hay un gran nú¬ mero de semejanzas entre las sociedades en la forma en que las personas se desarrollan a nivel psicológico desde el nacimiento hasta la madurez» o en la forma en que las personas piensan» sienten y se comportan. Hemos discu¬ tido ya muchos universales: cultura» lenguaje» matrimo¬ nio» tabú del incesto; pero aquí comentaremos aspectos más relacionados con la Psicología. Donald Brown ela¬ boró una lista de probables universales humanos en el ámbito de la psicología que induía la capacidad para rea¬ lizar taxonomías» hacer contrastes binarios» ordenar los fenómenos» utilizar operadores lógicos (por ejemplo: y> tWt igifal a)i planificar el futuro y tener una concepción del mundo. En relación con las ideas acerca de las personas» pa¬ rece ser universal la existencia del concepto del yo o selfy que se manifiesta en la capacidad para reconocer caras» para intentar averiguar las intenciones de los demás a partir de ciertos indicios en la expresión &cial» de las pa¬ labras o de las acciones y para intentar imaginar lo que otros están pensando. En relación con las emociones» las personas parecen universalmente capaces de empatizar con los sentimientos de los demás» expresar y reconocer
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F�ioologÍa y
cultura
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sarrollo psicológico idéntico en todas las culturas del mundo? ¿En qué otros aspectos es diferente? Investigación inicíal s o b re el desarrollo EMOCIONAL
La adolescencia en muchas sociedades es una época en la que se desan'ollan las habilidades necesarias para el trabajo. En la fotografía un joven Asmat de Nueva Gui¬ nea aprende a tallar, bajo la supervisión de un adulto.
sus emociones a través de las expresiones feciales» asi como esconder o expresar las emociones de Mlcidad» tristeza, ira, miedo, sorpresa, disgusto y desprecio (véase el apartado «¿Muestran las máscaras las emociones de forma universal?» en el capitulo sobre el arte)� sonreír cuando uno está contento, llorar cuando está dolido o se siente desgraciadoJugar para divertirse, mostrar y sentir afecto hacia los demás, sentir atracción sexual, envidia, celos y tener los mismos temores infentiles (como por ejemplo, el miedo a los extraños). Ciertamente parece que las personas de diferentes culturas conciben el amor de forma similar, a pesar de la creencia de que el amor es algo misterioso y culturalmente variable. ¿Qué sabemos sobre d desarrollo psicológico? Vimos en el capitulo de Comunicación y lenguaje que ciertos aspectos de la adquisición del lenguaje parecen ser uni¬ versales en todas las culturas- ¿En qué aspectos es el de¬
Cuando Margaret Mead viajó a la Samoa americana a mediados de los años veinte, los psicólogos creían que la adolescencia se caracterizaba de forma universal por ser un período «tormentoso y estresante» a causa de los cambios fisiológicos que se producían en la pubertad, Las observaciones de Mead y sus entrevistas con las ado¬ lescentes de Samoa le hicieron dudar de que la adoles¬ cencia fiaera necesariamente una época de desorden. Las chicas Samoanas mostraban aparentemente pocas evi¬ dencias de rebelión y de alteración emocional, por lo que parecía cuestionable que el desarrollo psicológico en la adolescencia fuese idéntico en todas las sociedades, Bronislaw Malinowski, otro de los primeros antropó¬ logos que abordó este asunto, se cuestionó la universali¬ dad de un supuesto acerca del desarrollo emocional, concretamente, la creencia de Freud de que los chicos jó¬ venes siempre se ven a sí mismos, de forma inconsciente, como los rivales sexuales de sus padres en la posesión de sus madres. Freud llamó a estos sentimientos wmpíejo de EdipOi el personaje mítico griego que mató a su padre y se casó con su madre sin saber que se trataba de sus pa¬ dres, Freud pensó que todos los niños menores de 7 anos mostraban esa hostilidad contra sus padres, pero Mali¬ nowski no estuvo de acuerdo con esta afirmación, basán¬ dose en los halla��os encontrados en sus estudios de campo en las matrilineales Islas Trobriand, Malinowski dijo que los jóvenes pertenecientes a so¬ ciedades matrilineales podían sentir hostilidad hacia sus padres pero no como rivales sexuales, sino como figuras de autoridad, Malinowski propuso esta teoría porque pensó que el complejo de Edipo se manifestaba de forma distinta en las sociedades matrilineales. Los chicos de es¬ tas sociedades pueden sentir más hostilidad hacia el her¬ mano de sus madres (la principal figura de autoridad en los grupos femiliares matrilineales) que hacia sus padres, Derek Freeman criticó las conclusiones de Mead so¬ bre Samoa, y Melford Spiro cambió las conclusiones de Malinowski sobre los isleños de las Trobriand. Tanto Mead como Malinowski pudieron o no estar acertados en sus conclusiones sobre las sociedades que estudiaron, pero los resultados que obtuvieron siguen siendo crucia¬ les en la cuestión de si el desarrollo psicológico es similar en todas las sociedades. Para conocer la verdad, tenemos que investigar muchas sociedades y no sólo unas pocas. Sólo tras una extensa investigación transcultural estare¬ mos en condiciones de saber qué estadios del desarrollo
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Psicología y cultura
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emocional pueden verse aíectados por las diferencias culturales. Por ejemplo» hace muy poco tiempo que la adolescen¬ cia ha sido sistemáticamente estudiada transculturalmente. Alice Schlegel y Herbert Barry concluyeron que la adolescencia no es generalmente un período de gran re¬ beldía, La razón que ellos aportaban se relaciona con el hecho de que mucha gente en la mayoría de sociedades vivf con o cerca (y dependen) de sus �miliares más pró¬ ximos antes y después de hacerse adultos. Sólo en socie¬ dades como las nuestras» en las que los hijos abandonan el hogar cuando se hacen mayores» los adolescentes pue¬ den ser rebeldes posiblemente como preparación emo¬ cional para su emancipación, (Véase el apartado «¿Está relacionada la neolocaÜdad con la rebeldía de los adoles¬ centes?», en el capítulo dedicado a la residencia matri¬ monial y el parentesco). iNVESTÍGAaONES SOBRE EL DESARROLLO OOGMmVO
Un día dos de nosotros fuimos a comprar pízza.El codnero que la hacía estaba sonriendo divertido� y cuando le preguntamos por qué estaba tan contento, nos dijo: «He preguntado al chico anterior a vosotros» ¿en cuántas por¬ ciones deseas que corte la pizza» en seis o en ocho?». Y me ha contestado: «En seis» porque no tengo mucha hambre». Según la teoría sobre el desarrollo cognitivo (intelectual) propuesta por lean Piaget» un reconocido psicólogo suizo» é chico «que no tenía mucha hambre» probablemente no había adquirido el concepto de Hííí:servfío¿íí»que es carac¬ terístico de uno de los estadios del pensamiento que los niños adquieren normalmente entre los 7 y II años en las sociedades occidentales. El cliente de la pizzerfa anterior a nosotros» lo mismo que muchos niños muy pequeños» pa¬ rece no entender que algunas propiedades de los objetos» como la cantidad» el peso y el volumen permanecen cons¬ tantes tanto si el objeto se divide en pequeños trozos» como si se introduce en un recipiente de diferente ft�ima, No han adquirido atin la imagen mental de la reversibilidad, capacidad de imaginar que si se juntan de nuevo los trozos de la píízs» tendrá el mismo tamaño independien¬ temente de que haya sido cortada en seis o en ocho por¬ ciones, A aquellos niños o adultos que no han adquirido la capacidad de invertir mentalmente las acciones» ocho trozos de pizza les pueden parecer más que seis» debido a que ocho es más que seis, La teoría de Piaget dice que el desarrollo del pensa¬ miento en los seres humanos pasa por una serie de esta¬ dios» cada uno de los cuales se caracteriza por capacidades mentales diferentes. Para poder alcanzar un estadio de pensamiento más alto» se tienen que haber al¬
canzado los más bajos, Así» la teoría de Piaget podría pre¬ decir que el consumidor de pizza no sería capaz de ana¬ lizar sistemáticamente los posibles resultados de aUiaciones hipotéticas» una característica definitoria del estadio piagetiano de las operaciones ft>rmales» puesto que no ha adquirido el concepto de conservación ni otras capacidades mentales características del estadio previo en el desarrollo cognitivo» el de las operaciones concretas, ¿Qué nos dicen los datos respecto a la universalidad de los estadios propuestos por Piaget? ¿Alcanzan las per¬ sonas de todo el mundo cada uno de estos estadios a la misma edad? La primera etapa del desarrollo» el período serisüriomQtorj no ha sido investigado en muchas socie¬ dades» pero los resultados de los estudios realizados hasta ahora son bastante consistentes. Apoyan la teoría de Pia¬ get de que existe un orden predecible en la secuencia de los estadios� Y basándonos en las reacciones que mues¬ tran ante las mismas condiciones» parece que los bebés de todo el mundo piensan de forma similar. Por ejemplo» una comparación efectuada entre bebés franceses y bebés Baoulé de la Costa de Marfil mostró que estos últimos» que jamás habían visto objetos como tubos de plástico de color rojo y dips para sujetar papeles» trataban de intro¬ ducir los dips en los tubos rojos tal y como lo hacían los franceses. E induso ambos grupos de bebés cometían los mismos tipos de errores, A pesar de tener pocos juguetes» los bebés Baoulé mostraron avances en relación con los franceses en aspectos como el uso de instrumentos para intentar llegar más lejos con sus brazos, Pero a los bebés Baoulé les permitían tocar todo tipo de objetos» induso aquellos que los europeos consideraban peligrososla mayor parte de los estudios transculturales sobre los es¬ tadios de Piaget se han centrado en la transición entre el segundo estadio, el período preoperatorio, y el tercero, las iteraciones particularmente en la adquisición del concepto de conservación. Los resultados de muchos de estos estudios son bastante desconcertantes, A pesar de que los rüños de más edad tienden generalmente a mostrar una mayor comprensión dd concepto de con¬ servación que los niños más pequeños» no está claro qué es lo que hace que la adquisición de la conservación se retrase en muchas poblaciones no occidentales. Cierta¬ mente» en algunos lugares la mayoría de adultos evalua¬ dos parece no entender una o más de las propiedades de la conservación, ¿Puede ser cierto esto? ¿Las personas de culturas dis¬ tintas difieren tanto en su funcionamiento intelectual o existe algún problema en relación con la forma en que medimos la conservación? ¿Es posible que un adulto que ha traído d agua que acaba de coger dd río en un jarro grande y la vierte en cinco recipientes más pequeños no
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sepa que la cantidad de agua sigue siendo la misma? También pcwlemos ser escépticos en relación a los hallaz¬ gos obtenidos respecto al estadio de las operaciones for¬ males. La mayoría de los estudios sobre el pensamiento operatorio formal han encontrado poca evidencia de este tipo de pensamiento en las sociedades no occidentales. Sin embargo� las personas de las sociedades no alfebetizadas seguramente poseen este tipo de pensamiento operatorio-formalj ya que son capaces de navegar orientándose a través de las estrellas� recordar cómo re¬ gresar al campamento después de andar 25 kilómetros� o identificar cuántas personas están emparentadas entre sí tres o más generaciones atrás. Una de las razones para ser escépticos sobre los ha¬ llazgos aparentes en relación con el retraso de la adquisi¬ ción del concepto de conservación y del pensamiento operatorio formal es que la mayoría de los psicólogos transculturales han utilizado tests elaborados en nuestras propias sociedades occidentales para medir el desarrollo cognitivo en otros lugares. Este procedimiento sitúa a los miembros de las sociedades no occidentales en una con¬ siderable desventa� ya que no están tan �miliarizados con los materiales de los tests ni con la situación de eva¬ luación como lo están los occidentales. Por ejemplo» en los tests de conservación� la mayoría de los investigado¬ res han utilizado frecuentemente cilindros de cristal de e?£traña apariencia y vasos. Aquellos que han empleado materiales más femiliares para los nativos han obtenido resultados diferentes. Douglas Price-Williams obtuvo los mismos resultados entre los niños Tiv de África Occi¬ dental y los europeos en la comprensión de la conserva¬ ción de la tierra» las nueces y los números. Además» otros investigadores han evaluado de nuevo a los niños tras unas breves sesiones de entrenamiento encontrando que los resultados mejoraban sustancialmente. Parece» en¬ tonces» que los niños de cualquier lugar pueden adquirir el concepto de conservación si previamente han tenido experiencias vitales preparatorias o un entrenamiento adecuadoLos resultados de los tests sobre el pensamiento operatorio-formal realizados en distintos lugares son tam¬ bién cuestionables. Tales tests preguntan cuestiones relacionadas con contenidos que se enseñan en las clases de ciencias y matemáticas. No debería sorprendernos» por tanto» que los individuos que están escolarizados res¬ pondan a estos tests sobre pensamiento operatorio for¬ mal mucho mejor que los que no lo están. En los lugares en los que no existe escolarización obligatoria» no sería de esperar que las personas realizasen bien los tests basa¬ dos en ese tipo de pensamiento. En el intento por descubrir qué hay de universal en el desarrollo emocional y cognitivo� los investigadores han
descubierto algunas diferencias daras entre las distintas sociedades. Estas diferencias» a las que ahora volvemos» precisan ser exploradas y explicadas,
Variabilidad transcultural en las características psicológicas Pensar sobre diferencias de personalidad parece habi¬ tual en la mayoría de los norteamericanos. General¬ mente» nos gusta hablar sobre la psicología de aquellos que conocemos. Especulamos acerca de por qué uno de nuestros amigos es más emotivo que otros» por qué u r o tiene un temperamento más agitado» por qué otro es más tímidOí etc. También podemos preguntarnos porqué un amigo recuerda las caras con tanta fecilidad y por qué otro es tan hábil con los ordenadores. Estamos interesa¬ dos en la personalidad como una característica indivi¬ dual y destacamos la individualidad de cada persona. De hecho» puesto que cada persona posee una única combi¬ nación de caracteres genéticos y de experiencias vitales» podemos decir que» de alguna manera» no hay dos per¬ sonas iguales. Sin embargo» los antropólogos están inte¬ resados en la personalidad desde una perspectiva diferente. En vez de enfocarla desde el punto de vista de la individualidad de las personas» los antropólogos psico¬ lógicos están interesados en aquellos aspectos de la per¬ sonalidad que puedan ser comunes en una población. ¿Por qué tendríamos que esperar que diferentes po¬ blaciones difieran en algunas características de su perso¬ nalidad? Generalmente se cree que nuestra personalidad es el resultado de una interrelación entre la herencia ge¬ nética y las experiencias vitales. Pero una considerable proporción de nuestras experiencias vitales» lo mismo que de nuestros genes, es compartida con otros. Los pa¬ dres indudablemente ejercen una gran influencia en la forma en que crecemos. Puesto que los miembros de una Emilia comparten experiencias vitales y características genéticas similares» también podrían ser semejantes en su personahdad. Sin embargo» debemos considerar por qué una determinada Emilia cría a sus hijos de la forma en que lo hace. Muchas de las maneras en las que los padres crían a sus hijos están influenciadas por su cul¬ tura» por los patrones tipicos de la vida femiliar y por las creencias compartidas sobre la forma en la que hay que criara los hijos, No es fécil determinar hasta qué punto comp)arten los miembros de una sociedad creencias sobre la forma de criar a sus hijos. Si observamos a las Emilias en nuestra propia sociedad» podemos apreciar diferencias en la ma¬ nera de educar, que son un reflejo de las distintas creen¬ cias sobre la forma «correcta» de criar a los niños. De
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Una de las diferencias más importantes respecto a la educación infantil entre Occidente y otros lugares e s el tiempo en que un niño es cogido por su cuidador a lo largo del día-Tanto en EE UU, como en otros países occidentales, los niños pasan la mayor parte del día en la cuna� el parque o la silla de paseo. Los niños Bai de la provincia deYunnan en China (a la derecha) pasan una gran cantidad de tiempo en contacto físico con s us madres o cuidadores.
hecho» algunos padres consideran adecuado emplear es¬ trategias educativas poco convencionales� desde el punto de vista de nuestra propia sociedad. De todas formas, en un estudio con Emilias no convencionales de California� de madres solteras� parejas no casadas� o femilias que vi¬ vían en comunas� los investigadores encontraron que en comparación con los padres de otras sociedades� estos padres considerados como no convencionales no dife¬ rían mucho de los padres convencionales (casadosj vi¬ viendo en Emilias nucleares). Por ejemplo� aunque las madres no convencionales de California amamantaban a sus bebés durante un período significativamente mayor que las madres convencionales� ambos grupos dejaban de amamantados aproximadamente al año de edad, lo que está muy por debajo de la media mundial. En el 70 por ciento de las sociedades del mundo> las madres ama¬ mantan a sus hijos durante, al menos, dos años; los niños nacidos en tiltimo lugar pueden ser amamantados in¬ cluso durante más tiempo. En ciertas sociedades como la de los Chenchu de la India, los niños no son destetados hasta que tienen entre 5 y 6 años de edad. Tanto los pa¬ dres de Emilias convencionales como de Emilias no convencionales de California también difieren en otros
aspectos si se les compara con los padres de otras socie¬ dades. En el estudio de California, no se observó que nin¬ gún padre o madre, tanto convencional como no convencional, tuviese cogido al niño más del 25 por ciento del tiempo, sin embargo era frecuente en muchas de las sociedades preindustríales coger en brazos a los niños durante más de la mitad del dia. Nuestras propias concepciones culturales sólo empie¬ zan a ser evidentes cuando examinamos a otras socieda¬ des y sus patrones de crianza. Consideremos cómo varían las sociedades en la rapidez con la que los padres responden a las necesidades de sus hijos, en otras pala¬ bras, el nivel de «gratificación». En muchos aspectos de la gratificación (cantidad de tiempo que el niño está co¬ gido en brazos, alimentación tras la demanda, respuesta al llanto) las sociedades industrializadas, como la norte¬ americana, tienden a gratificar a los niños menos que las sociedades preindustriales- En contraste con esas socie¬ dades preindust riales en las que los niños pasan cogidos por sus padres más de la mitad del día, en EE UUj In¬ glaterra y los Países Bajos, los bebés pasan la mayor parte del día en artefectos similares a jaulas como los parques o las cunas. Se estima que en estos países, al igual que en
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lapón» lo$ niños son cogidos o acariciados solo «ntre d 12 y d 20 por ciento di las horas dd día» Este mismo pa¬ trón continua durante la noch«. £d las sociedades preindustrialesj los niños tienen una mayor tendencia a acercarse a otras personas� generalmente duermen con su madre en la misma cama o� si no es en la misma cama� en la misma habitación� En las sociedades preindustriales los niños son amamantados durante el díaj generalmente cuando lo piden. En las sociedades industriales suelen ser alimentados con biberón� espadándose la toma cada po¬ cas horas; en algunas sociedades preindustriales se ali¬ menta a los niños entre 20 y 40 veces diarias» Y en muchas de estas sociedades� la gente responde rápida¬ mente ai llanto de un niño. Así> entre los Efe del bosque de Ituri en África Central� un niño de tres meses de edad que llore» obtiene una respuesta a los 10 segundos en el 75 por ciento de las veces» EnEE UU» su cuidador/a deli¬ beradamente w respotíde en el 45 por ciento de las veces, La variabilidad transcultural que acabamos de descri¬ bir parece reflejar una serie de actitudes culturales acerca del cuidado de los niños� Los padres de EE UU recono¬ cen que no desean que sus hijos sean dependientes y pe¬ sados; estos padres quieren tener hijos independientes y autosuficientes. Que los hijos lleguen a ser autosuficientes con nuestros métodos de crianza es discutiblcj pero nuestras actitudes sobre á cuidado de los niños son real¬ mente consecuentes con nuestras prácticas. Volvamos a considerar el caso de los \anomami y los Semai. En relación a la agresividad i las dos sociedades tienen formas muy distintas de educara sus hijos» (Esta variedad no nos sorprende» teniendo en cuenta cómo di¬ fieren en ambas sociedades las conductas y actitudes de los adultos)» A los muchachos �nomami se les incentiva para que sean agresivos y raramente se les castiga por golpear a sus padres o a las chicas del poblado» así, por ejemplo, un padre le permite a su hijo Ariwari que: k pegue en la cara y en la cabesa para manifestarle su ira y malhumor, riéndose y c�q�resando su ferocidad. Aunque Ariwari sólo tiene cuatro año$ de edad» ya sabe que la res¬ puesta apropiada a una expío? ión de ira e� golpear a algu íen can sus manos o con algún objeto, y no es infrecuente que le dé a su padre un cachete en la cara cuando algo le dis¬ gusta. Es también frecuente que provoque a su padre en broma, siendo recompensado con alegres adamaciones de asentimiento tanto por parte de su madre como de los de¬ más adultos de la casa. Mientras que los '�í�omami fomentan dara y activa¬ mente la agresión, los Semai transmiten su rechazo a la violencia de muchas sutiles formas. De hecho, dicen que no ensenan a los niños» Los Semai esperan que los niños no sean violentos y se sorprenden cuando lo son. Si un
niño pierde las formas, el adulto simplemente lo agarra y se lo lleva a su casa» Los Semai no castigan físicamente las agresiones de los niños, y ésta probablemente sea la es¬ trategia educativa más importante de todas» Con estas enseñanzas, por ejemplo� un niño raramente observa un modelo de comportamiento agresivo, por lo que no existe agresión alguna que imitar. En comparación con la forma en que los padres �nomami y Semai tratan a sus hijos, la mayoría de padres norteamericanos se situarían en el punto medio entre ambos. Los padres norteameri¬ canos raramente animan a que sus hijos les golpeen en la cara o a que peguen a otros niños» Sin embargo, muchos padres probablemente utilizan algunas veces el castigo fí¬ sico, y otros muchos creen que los niños varones espe¬ cialmente deberían «defenderse a sí mismos» si otro niño provoca una pelea» Como sugieren estos ejemplos, las sociedades varían en la forma en la que crían a sus hijos. Asumimos que el modo en el que un niño es educado determina en parte el tipo de personalidad que tendrá en su vida adulta» En otras palabras, sociedades diferentes, con distintas cos¬ tumbres respecto a la educación de los niños, probable¬ mente tenderán a generar tipos de personas diferentes» Otros rasgos culturales también pueden producir varie¬ dades en las características típicas de la personalidad» Como veremos, el hecho de crecer en el seno de una femilia extensa e ir a la escuela parece afectar al desarrollo de la personalidad» Con esto no queremos decir� sin em¬ bargo, que todas las personalidades de una determinada sociedad sean iguales. La singularidad de un individuo deriva de su particular dotación genética y de sus propias experiencias vitales, y por eso, la personalidad podrá ser distinta de unas personas a otras, dentro de una misma cultura o subcultura» Los antropólogos culturales están interesados en los patrones comunes o compartidos de comportamiento, creencias, sentimientos y pensamiento» Los antropólogos psicológicos lo están en aquellos aspectos de la persona¬ lidad que son comunes y compartidos con otros (otros miembros de la sociedad u otros miembros de otras subculturas). Los rasgos de personalidad no son caracterís¬ ticos de todo o nada, sino que normalmente deben ser descritos o medidos en términos de grado» Así, por ejem¬ plo, la agresividad no es algo presente o ausente en una persona, sino que se encuentra en mayor o menor grado en unas personas más que en otras» De forma similar, cuando decimos que un elevado nivel de agresividad fí¬ sica o verbal es un rasgo de personalidad característico de una sociedad determinada, estamos efectuando u n juicio relativo» Cuando comparamos las descripciones etnográficas de los ���omami y de los Semai, podemos ver con certeza que los �¿anomami muestran mucha más
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agresividad que los Semai, Sí los investigadores de campo basaban sus juicios en comparaciones sistemáti¬ cas de conductas, podríamos determinar con cuánta fre¬ cuencia se manifiesta una conducta agresiva en una cultura, y podríamos calcular la frecuencia modal de di¬ cha agresión entre los individuos en un período de tiempo concreto. Esta frecuencia modal podría ser com¬ parada con la frecuencia modal de esa misma conducta en otras sociedades» De la misma forma que una cultura no permanece nunca fija o estática, las características típicas de la per¬ sonalidad tampoco son estáticas. Las personas a menudo alteran fi�cuentemente su comportamiento para adap¬ tado a las circunstancias cambiantes. Cuando un nu¬ mero suficiente de individuos en una sociedad han alterado su comportamiento, o la forma en que educan a sus hijos, los rasgos típicos de personalidad pueden tamIwén modificarse, Explicacíones sobre la críanza DE LOS NIROS
Muchos investigadores han tratado de descubrir si la variabilidad en las costumbres de crianza de los hijos pueden explicarlas diferencias psicológicas observadas. SocializaciÓD es el término utilizado tanto por los antro¬ pólogos como por los psicólogos para describir el de¬ sarrollo, mediante la influencia de los padres y de otras personas� de los patrones de conducta� actitudes y valo¬ res en los niños que se ajustan a las expectativas cultura¬ les (el término encülturacióo tiene un significado ¿milar). Los padres y otras personas tratan frecuente¬ mente de socializar a los niños de forma directa, recom¬ pensando ciertas conductas e ignorando o, incluso, castigando otras. La socialización puede ser indirecta o sutil, así como directa. En la asignación de tareas a los niñoS] los padres no sólo están fomentando determina¬ das habilidades necesarias para la vida adulta, sino que pueden también estar transmitiendo de manera sutil el tipo de persona que les gustaría que sus hijos llegaran a ser. Acudir regularmente a la escuela también puede afectar al desarrollo psicológico, especialmente cognitivo, de los niños. Finalmente, los padres pueden afectar al desarrollo psicológico de sus hijos a través de la forma en la que les transmiten lo que sienten por ellos. ACEPTACIÓN Y RECHAZO PATERNO. En un es¬ tudio clásico sobre personalidad, Cora Du Bois, perma¬ neció durante casi 18 meses en la isla de Alor, al este de Indonesia, estudiando a los nativos. Para comprender la personalidad de los Aloreses, inauguró un nuevo campo al pedir a especialistas de distintos ámbitos que la aseso¬
raran y que interpretaran sus datos de campo de manera independiente. Estos expertos no fueron informados previamente acerca de la cultura o actitudes de los Alo¬ reses, ni tampoco les estaba permitido consultar las no¬ tas o interpretaciones etnográficas generales de Du Bois. Los hallazgos de estos expertos coincidieron en gran me¬ dida con los de ella. De su investigación multidimensional emergió un cuadro bastante desfevorable sobre la personalidad típica de los Aloreses, ya que, tanto hombres como mujeres, fueron descritos porDu Bois y sus colaboradores, como suspicaces y hostiles, con tendencia a la violencia, emoti¬ vos y con frecuentes explosiones de envidia. No solían sentir interés por el mundo que les rodeaba, eran descui¬ dados en sus trabajos e indiferentes respecto a sus metas. Volviendo a las posibles influencias causales, Du Bois y sus colaboradores centraron sus estudios en los niños Aloreses, fijándose especialmente en los períodos de tiempo entre las tomas (del pecho). En la base de mu¬ chos aspectos del desarrollo de la personalidad aloresa, según sugirió, se encontraba la larga ausencia de la ma¬ dre durante gran parte del día, pues ésta solía reincorpo¬ rarse al trabajo agrícola entre diez días y dos semanas después del parto. La mujer aloresa era la mayor sumi¬ nistradora de alimentos, trabajando diariamente en los huertos �miliares, en tanto que el hombre se ocupaba de los asuntos comerciales, generalmente la compraventa de cerdos, gongs y timbales. Los niños se dejaban al cuidado del padre, de un hermano mayor o del abuelo, quedando desprovistos de la leche materna y de su madre la mayor parte del día. Aunque se les daban alimentos sustitutivos, los niños solían escupidos, mostrando asi su descon¬ tento. En términos firudianos,los niños experimentaban frustración oral y la ansiedad que esta fiustración con¬ lleva. Al mismo tiempo los niños sufrían por parte de sus cuidadores cambios desconcertantes en la forma de atenderios, que iban desde el carino y las caricias hasta el des¬ cuido y el rechazo. Por este motivo, la desatención materna durante la infencia se considera, en gran pro¬ porción, responsable de la personalidad de los Aloreses. Pero, ¿cómo sabemos si la desatención de la madre es realmente la responsable de la suspicacia y de los estalli¬ dos de envidia entre los Aloreses? Quizá la desatención materna sea responsable, pero la causa o causas también podrían proceder de otras condiciones de la vida de es¬ tos isleños. Por ejemplo, algunos críticos han sugerido que la alta prevalencia de enfermedades debilitantes en Alor podría serla causa de muchas de las conductas de los Aloreses. Para estar más seguros de que un aspecto concreto de la crianza de los niños produce ciertos efec¬ tos en la personalidad alórense, debemos comparar a los habitantes de Alor con personas de otras sociedades.
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Las madres en EE UU� como en otros muchos lugares, tienen que realizar $u trabajo y cuidar a s us hijos al mismo tiempo.
¿Acaso muestran otras sociedades con este tipo de des¬ atención raatemaj los mismos patrones de rasgos de per¬ sonalidad? Si esto es así� entonces la supuesta asociación se hace plausible� y si no lo es» entonces la interpretación es cuestionable. A pesar de que investigadores posteriores no han he¬ cho un seguimiento específico de los posibles efectos de los espacios de tiempo transcurridos entre las tomas del pecho» Ruth y Robert Munroe estudiaron los efectos que tenia coger al nino en brazos durante más o menos tiempo a lo largo de la infencia entre los niños Logoli. Los Munroe tenían información de observaciones reali¬ zadas acerca de la frecuencia con que se cogía a los niños en brazos; y tuvieron oportunidad de entrevistar a mu¬ chos de estos sujetos» ya ninos» cinco anos más tarde. Es¬ taban interesados en observar si los ninos que fueron cogidos con mayor frecuencia por sus madres eran más seguros» confiados y optimistas. Para ello diseñaron una serie de medidas de personalidad� adecuadas para niños pequeños. Como medida del optimismo» enseñaban a los niños caras sonrientes y caras no sonrientes preguntán¬ doles cuál de ellas preferían; para medir la confianza se dedicaron a observar cuánto tiempo permanecía un niño en una habitación con un extraño o jugaba con juguetes nuevosLos resultados del estudio mostraron que los bebés que habían sido cogidos en brazos o llevados por sus ma¬ dres con frecuencia» a los cinco anos de edad eran signi¬ ficativamente más confiados y optimistas que los demás niños. Una cosa que sorprendió a los Munroe fue descu¬ brir que aunque el tiempo que cogían en brazos a los ni¬
ños otros cuidadores no predecía una mayor confianza y optimismo» el número total de personas diferentes que habían cogido al niño sí predecía una mayor confianza y optimismo. El ser cogido en brazos por la madre era importante> pero el nivel de confianza que se adquiría era aún mayor si el niño había sido cogido en brazos por un gran número de personas. Una posible expÜcación es que una madre muy confiada tiende a permitir a muchas personas que cojan a su bebé» y esto transmite una ma¬ yor confianza al niño. ¿Qué tenemos que decir sobre las cualidades de los padres? ¿Tiene efectos positivos sobre la personalidad que los padres muestren cariño» calor y afecto a sus hijos y efectos negativos que los padres se muestren indiferen¬ tes y hostiles con ellos? Estas cuestiones son difíciles de investigar transculturalmente> ya que las culturas varían en la forma de expresar sus sentimientos- Si el amor y el afecto no se expresan de la misma forma� los desconoci¬ dos pueden malinterpretar la actitud de los padres. No obstante» Ronald Rohner y sus colegas realizaron un ex¬ tenso trabajo sobre los efectos de la aceptación paterna y el rechazo de los hijos después de la in&ncia. En una comparación transcultural de 101 sociedades» utilizando medidas basadas en materiales etnográficos» Rohner des¬ cubrió que los niños tienden a ser hostiles y agresivos cuando han sido desatendidos y tratados sin afecto por parte de sus padres. En las sociedades en las que los ni¬ ños tienden a ser rechazados» los adultos tienden a verla vida y el mundo como poco acogedor» incierto y hostil, Otros estudios han comparado individuos de diferentes culturas para ver si los halla��os transcultu rales reciben apoyo y» de hecho> han confirmado estas teorías. Además de considerar el mundo como un lugar poco acogedor y hostil» los sujetos que se han sentido rechazados» tendían a realizar evaluaciones negativas de si mismos, ¿Bajo qué condiciones es más probable que se pro¬ duzca rechazo por parte de los padres durante la infencia? El estudio de Rohner sugiere que el rechazo es frecuente cuando las madres no reciben ayuda en el cui¬ dado de los hijos; cuando los padres y abuelos desempe¬ ñan un papel importante en el cuidado de los niños» el rechazo es menos fi�cuente. Las sociedades recolectoras (que dependen de los recursos alimentarios silvestres) tienden a mostrar calor y afecto hacia sus hijos. Las so¬ ciedades más complejas suelen ser menos afectuosas con sus hijos. No está daro a qué se deben estos fenómenos» pero quizás el rechazo de los padres sea más frecuente cuando éstos tienen menos tiempo libre» lo que hace que estén más cansados e irritables y muestren menor pa¬ ciencia con sus hijos. Como comentamos en el capítu¬ lo dedicado a los sistemas económicos» el tiempo libre probablemente disminuye al aumentar la complejidad
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ooltural.Las sociedades más complejas»que dependen de la agricultura intensiva» tienden también a tener mayor inseguridad económica» como comentamos en el capi¬ tulo dedicado a la obtención de alimentos. No sólo tien¬ den a tener más riesgos de carencias y hambrunas» sino también a tener mayor desigualdad social. En las socie¬ dades con clases sociales» muchas Emilias no tienen su¬ ficientes alimentos ni suficiente dinero para satisfecer sus necesidades» 7 este fector puede causar frustración en los padres. Cualesquiera que sean las causas del rechazo por parte de los padres» éste tiende a perpetuarse» de forma que los hijos que han sido rechazados» también tendrán tendencia a rechazar a sus propios hijos. DIGNACIÓN DE TAREAS. En nuestra sociedad» no se espera que los niños pequeños ayuden en muchas tareas de la casa. Si realizan alguna suele ser ordenar sus habitaciones» y no se espera de ellos que colaboren en las ganancias económicas de la femilia o en su superviven¬ cia. Por el contrario» en algunas de las sociedades estu¬ diadas por los antropólogos» los niños pequeños de entre 3 y 4 años de edad» colaboran en las tareas preparando la comida» cuidando a los animales» llevando agua y leña y» también, limpiando. Un niño de entre 5 y 8 años de edad puede tener incluso la responsabilidad de cuidar a otro niño o bebé durante gran p)arte del día mientras su ma¬ dre trabaja en el campo. ¿Cuáles son los efectos de la asignación de tales trabajos en el desarrollo de la perso¬ nalidad? Actualmente tenemos datos procedentes de más de 10 culturas» de que los niños que regularmente cuidan de los bebés son más educados» esto es» ofrecen más �da y apoyo a los demás que el resto de los niños» in¬ cluso en los momentos en que no están cuidando a los pequeños. Algunos de estos datos provienen de un pro¬ yecto conocido como el estudio Seis Culturas» en el que diferentes equipos de investigadores observaron la con¬ ducta de los niños de Kenya (Nyansongo)» México» In¬ dia» Filipinas» Oldnawa y EE UU (Nueva Inglaterra), Ruth y Robert Munroe recogieron datos sobre la con¬ ducta de niños en otras cuatro culturas que mostraron la misma relación entre el cuidado de sus hermanos más pequeños y la conducta más educada. Los datos obteni¬ dos por los Munroe procedían de Kenia (Logoli)� Nepal» Belice y la Samoa americana. Claramente» los niños que cuidan bebés con menos frecuencia son menos sensibles alas necesidades de los demás que los niños que los cui¬ dan con frecuencia. ¿Cómo puede afectar la asignación de tareas a la con¬ ducta de los niños? Una de las posibilidades es que los ni¬ ños aprendan ciertas conductas durante el cumplimiento de sus tareas» y estas conductas se convierten en hábitos,
Loe niños de muchas sociedades aprenden por imitación, así como a través de la instrucción directa� como en la isla de Pascua en el Pacífico Sur.
Por ejemplo» se presupone que la persona que cuida a un niño pequeño de forma responsable sabe ofi�cer ayuda» y la madre puede instruirla directamente para asegurarse de que eso es así. Pero» probablemente» hacer bien un trabajo produce una satisfecdón intrínseca; por ejemplo» es agradable ver a un niño sonreír y reír, pero es desagra¬ dable oírlo llorar. Por tanto» hemos de esperar que un niño que debe cuidara otro más pequeño debe aprender por sí mismo que cuidar a un niño tiene sus propias re¬ compensas. Los niños a los que se les asignan muchas tareas pue¬ den emplear todo el día en diferentes obligaciones» y és¬ tas pueden influir indirectamente en su conducta. Por ejemplo» los niños a los que se les pide que realicen mu¬ chas de las labores del hogar se desenvuelven bien tanto entre adultos como entre niños más pequeños» mientras que los niños a los que se les asignan pocas o niiiguna ta¬ rea tienen más tiempo para jugar con otros niños de su edad. Algunos de los resultados del proyecto Seis Cultu¬ ras indican que los niños tienden a ser más agresivos conforme se relacionan más con otros niños de su misma edad. Por el contrario» los niños tienden a inhibir su agresividad cuando están más tiempo entre los adultos. � hemos comentado que los niños que están con niños más pequeños se vuelven más educados. Por eso» po¬ demos deducir que los diferentes tipos de quehaceres
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asignados a los niños pueden influir en su comporta¬ miento no sólo porque dertos trabajos requieren ciertas conductas (por ejemplo» cuidar a los bebés exige respon¬ sabilidad) � sino también porque el tipo de trabajo asig¬ nado situará a los ninos en diferentes contextos sociales, lo que también puede afectar al modo en que se comportan. ESCOLARIDAD. La mayoría de los investigadores se centran en los padres cuando estudian las formas en que educan a los niñoSj pero tanto en nuestra sociedad como en otras> los niños a partir de los tres años pueden llegar a pasar una gran parte de su tiempo en el colegio. ¿Qué influencia ejerce el colegio sobre la conducta social de los niños y cómo puede ser medida por los tests? Para investigar los efectos de la escolarización, los investiga¬ dores han comparado a niños o adultos que han ido a la escuela con los que no lo han hecho» Todas las investiga¬ ciones se han realizado en sociedades que no tenían escolarización obÜgatoria; de otra forma no podríamos comparar a los sujetos escolarizados con los no escolarizados. Sabemos relativamente poco sobre la influencia de la escuela en la conducta social. Por el contrario, sa¬ bemos mucho más sobre la forma en la que la escolari¬ dad influye en la realización de los tests cognitivos, La escolarización predice claramente la realización «superior» de los tests cognitivos y» dentro de una misma sociedad» los individuos escolarizados suelen tener un mejor rendimiento que los no escolarizados» Por ejem¬ plo, los individuos no escolarizados en las sociedades no occidentales no están tan capacitados como otros indivi¬ duos escolarizados para percibir la profundidad en figu¬ ras bidimensionales, como tampoco realizan igual de bien los tests de memoria, no son tan hábiles para reaHzar ciertas dasiñcaciones de ítems, ni tampoco dan muestra de pensamiento operatorio-fbrmal. Pero la es¬ colarización no siempre fovorece unos mejores resulta¬ dos en los tests de razonamiento deductivo,
CD-ROM Actividad ds vídeo ÍÍÍ-8 ¿Por qué la escolarización tiene estos efectos? Aunque es posible que exista algún fector relacionado con ella que fevorezca mayores niveles de procesamiento cognitivo en algunos aspectos» hay otras expÜcaciones posi¬ bles. Las diferencias observadas se pueden deber a las ventajas que los niños escolarizados tienen a través de sus experiencias en la propia escuela, ventajas que no están relacionadas con las capacidades cognitivas.Por ejemplo, supongamos que en las investigaciones en las que se pide a los sujetos que clasifiquen o agrupen dibujos de formas
geométricas, se muestran a un sujeto tres tarjetas (un círculo rojo, un triángulo rojo y un círculo blanco) y se le pregunta qué dos dibujos se parecen más entre sí. La persona puede clasificarlos dibujos bien basándose en el color o bien en la forma. En EE UU la tendencia general de los niños pequeños es la de clasificados de acuerdo con el color, mientras que cuando se van haciendo ma¬ yores realizan más a menudo clasificaciones en función de la forma. Muchos psicólogos opinan que la clasifica¬ ción segiin el color sería más «concreta» en tanto que la clasificación por la forma o por la función seria más «abstracta»- Los adultos no escolarizados de muchos lu¬ gares de Africa harían clasificaciones basándose en el co¬ lor, no en la forma ¿Quiere esto decir que estos adultos realizan clasificaciones menos abstractas? No necesaria¬ mente, ya que estos adultos que no han recibido escola¬ rización puede que establezcan clasificaciones de forma diferente debido a que no están �miliarizados con los materiales de los tests (dibujos en papel o formas geo¬ métricas), ¿Cómo puede la gente clasificar de forma más «abs¬ tracta» (por ejemplo, por la forma) si nunca ha tenido la experiencia de manejar o de ver figuras que están dibu¬ jadas en dos dimensiones? ¿Es fectible que puedan clasi¬ ficar figuras como triángulos aunque nunca hayan visto una figura de tres vértices con lados rectos? En contraste, consideremos la cantidad de tiempo que dedican los profesores en EEUU para expÜcar asus alumnos las for¬ mas geométricas. Las personas femiliarizadas con deter¬ minados materiales pueden, por esta sola razón, hacer mejor los tests cognitivos que requieren el uso de tales materiales, Un estudio comparativo llevado a cabo con arroceros de Liberia en África Occidental y con estudiantes univer¬ sitarios de EE UU muestra hasta qué punto la elección de los materiales puede influir en los resultados de las in¬ vestigaciones, Para realizar la comparación se utilizó un conjunto de materiales familiares para los arroceros, ta¬ zas de arroz, y otro conjunto de materiales que eran fa¬ miliares para los universitarios: tarjetas con figuras geométricas. Los arroceros clasificaron las tazas de arroz de una forma más abstracta que los universitarios, mien¬ tras que los universitarios clasificaban de forma más abs¬ tracta que los arroceros las figuras geométricas, Los individuos escolarizados pueden tener también ventajas en los tests cognitivos debido a que están fami¬ liarizados con los tests y con la forma en que éstos les exi¬ gen pensar en situaciones nuevas. Por ejemplo, vamos a analizar la respuesta de una persona no escolarizada de Asia Central a fa siguiente cuestión realizada por un psi¬ cólogo ruso interesado en medir el pensamiento lógico: «En el Norte lejano donde hay nieve, todos los osos son
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Ir a la escuela se ha hecho habitual en muchas partes del mundo, como entre los Baoulé de Costa de Marfil. La escolarización parece af� ar al desairollo cogno$citivo, aunque no sabemos exactamente por qué o de qué forma-
Mancos; Novaya Zemlya está en el Norte lejano y siempre hay nievcj ¿de qué color son los osos allí?»» La respuesta fue: «Nosotros no hablamos de lo que no hemos visto»� Ésta es una respuesta típica de personas no escolarizadas: ni siquiera intentan responder a la pregunta> puesto que no forma parte de sus experiencias. No podemos» por tantft juzgar si las personas poseen o no un pensamiento lógico» si no quieren realizarla tarea cognitiva. Es necesaria aún más investigación para poder cono¬ cer con exactitud cómo y por qué la escolarización afecta a los procesos cognitivos. ¿Es importante considerar qué contenidos específicos se enseñan? ¿Es importante tener que responder a cuestiones que están fuera de nuestro contexto? ¿Es un fector importante saber leer y escribir? Esta última cuestión fue objeto de una investigación rea¬ lizada entre los Vai de Liberia» quienes tenían una situa¬ ción poco habitual debido a que la escolarización y el hecho de saber leer y escribir no eran exactamente lo mismo» Los Vai tenían una escritura indígena que se aprendía fuera de la escuela. Por este motivo» los investi¬ gadores Sylvia Scribner y Michael Colé podían comparar a los sujetos Vai que sabían leer y escribir� pero no habían
ido a la escuela» con los que habían pasado por la escola¬ rización formal (y sabían leer y escribir) y con los que no habían ido a la escuela» y no sabían ni leer ni escribir. Es¬ tos investigadores encontraron algunos efectos� aunque relativamente pequeños� debidos al hecho de haber apren dido por sí mism os a le er y escribir; sin embargo» la realización de los tests cognitivos estaba mucho más in¬ fluida por el número de años de escolarización. Resulta¬ dos similares se obtuvieron en un estudio realizado con los Cree del norte de Ontario» que tenían su propio sis¬ tema de escritura silábico que aprendían fuera de la es¬ cuela� Estas comparaciones sugieren que algunos aspectos de la escolarización son más importantes que el conocimiento de la lectoescritura como detenninantes del rendimiento cognitivo. Estudiando otras sociedades en las que la escolariza¬ ción no es obligatoria» estaremos en mejores condiciones para entender el papel que desempeña la escolarización en el desarrollo cognitivo y en otros aspectos del de¬ sarrollo, El hecho de que la escolarización determine en gran medida las diferencias en el rendimiento cogni¬ tivo» hace que nos planteemos hasta qué punto lo que
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observamos en ú desarrollo de los niños de nuestra so¬ ciedad y de otras sociedades occidentales es simplemente una función de lo que los niños aprenden en la escuela. Después de todo» los niños que crecen en nuestra socie¬ dad no sólo se hacen mayores cada añft sino que tam¬ bién van a la escuela u n año más. Las escuelas no son sólo lugares en los que se aprende un determinado currículumj sino que los niños aprenden también a interactuar con otros niños y con adultos que no son sus padres ni sus �miliares. Por todo esto es de esperar que el cole¬ gio no sólo desarrolle la cognición� sino que también transmita importantes actitudes culturaleSj así como pa¬ trones apropiados de comportamiento hacia los demás (véase el apartado «¿Se enseñan valores en el colegio?»),
Temas generales de la c u l t u r a co mo EXPLÍCACIÓN Muchos de los aspectos de la socialización que hemos expuesto son bastante específicos: costumbres como con cuánta frecuencia se coge a los niños» si se les incita a ser agresivos o no� qué tipo de tareas se les asigna y con qué frecuencia acuden al colegio. Como hemos comentado» muchos de estos aspectos específicos de la socialización pueden tener efectos importantes en la forma en que se desarrolla psicológicamente una persona, Pero los niños también pueden estar influenciados por cuestiones o ideas más generales que predominan en una cultura* Por ejemplo» antes» cuando comentamos algunos aspectos relacionados con el cuidado de los ninos (cuántas veces se coge a los niños» con qué rapidez se responde a sus lla¬ madas) mencionamos que muchas costumbres parecen ser parte de un patrón más general» como el mayor o me¬ nor nivel de gratificación, Pero» ¿qué ideas subyacen y posiblemente explican estos patrones generales? Uno de estos temas generales en EE UU es la creencia de muchos padres de que los niños no deben de crecer siendo de¬ pendientes ni consentidos. Vemos entonces que» quizá» existen ideas o temas generales que están detrás de los pa¬ trones específicos de socialización de una cultura. Estas cuestiones generales pueden ser expresadas de distintas maneras, CONCEPTOS DEL YO (SELF). Los antropólogos han comenzado a estudiar concepciones culturales dife¬ rentes relacionadas con el yo o el concepto de «selfa. Mu¬ chos de ellos han llegado a la conclusión de que este concepto en muchas sociedades no occidentales es bas¬ tante diferente de la concepción occidental, Cliffbrd Geertz describió la concepción occidental del self como «limitado» único,,, un centro dinámico de conciencia» emoción» juicio y acción organizado en un todo distin-
tivoí>. Basándose en sus trabajos de campo efectuados en rava»Baliy Marruecos» consideró que estas sociedades te¬ nían concepciones muy diferentes sobre la persona» no sólo diferentes entre sí» sino bastante diferentes de la concepción occidental. Por ejemplo» los balineses descri¬ ben a una persona como poseedora de roles muy dife¬ rentes» como un actor que interpreta diferentes papeles, Las características distintivas de una persona do son enfetizadas; lo que se enfetiza son las «máscaras» que las personas se ponen y los «papeles» que interpretan, Geertz se centró en la variabilidad y singularidad de las concepciones del self en las distintas culturas. Pero otros expertos opinan que existen patrones reconocibles y predecibles en esta variabilidad. Uno de los patrones más analizado es el én�is occidental en el seifcomo un individuo independiente» f�te a la importancia no oc¬ cidental que se da a las relaciones de una persona con las demás. Las etiquetas utilizadas para describir estas dife¬ rencias culturales occidentales frente a no occidentales son «individualismo» frente a «holismo» o «colecti¬ vismo»» «egocentrismo» firente a «sociocentrismo» y otras seme�tes. Por ejemplo» el concepto japonés del self se describe con frecuencia como «reladonal» o «situacional»; las personas existen en redes de relaciones» y la persona ideal es la que tiene la habilidad para pasar :�cümente de una situación social a otra. Ejdsten dos grandes objeciones a la idea de que el sen¬ tido occidental del jíf/debe compararse con el de socie¬ dades no occidentales. La primera es que los estudios realizados en otras culturas han sugerido otras dimensio¬ nes de variabilidad además de «individualismo» frente a «colectivismo». Por ejemplo» el concepto tradicional de los Inuit de inummarik, «una persona auténtica»» parece incluir un proceso vital de relación con el medio am¬ biente: interactuando con los animales y con el ambiente igual que con las personas. Un concepto cultural del self entonces» puede incluir otras dimensiones» además de lo individual frente a lo colectivo. Una segunda objeción a la comparación entre occidente y no occidente es que dicha comparación puede no estar basada en datos adecuados, Como apuntó Melfbrd Spiro» es necesario saber cómo una muestra de sujetos en una sociedad se ven realmente a sí mismos. Lo ideal en una cultura puede ser diferente de lo actuaL Por ejemplo» los individuos» incluso en EE UU» no se describen a sí mismos como independien¬ tes, Cuando Jane Wellenkamp y Douglas HoUan pregun¬ taron a sujetos americanos sobre sus sentimientos acerca de la muerte de algún ser querido» dieron respuestas de «independencia» tales como «podría superarlo» y «al me¬ nos te tienes a ti mismo»» pero también daban respuestas que reflejaban interdependencia como «te das cuenta de que se han ido» y de que una parte de ti se ha ido con
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Temas de actualidad ¿Se enseñan valeres en el colegh?
En EE UU existe actualmente un debate acerca de la educación en va¬ lores» Muchas personas piensan que los valores deberían enseñarse en los colegios, mientras que otras opinan que la educación en valores debe dejarse en manos de los padres y �miliares. Pero independiente¬ mente de que deban o no los cole¬ gios ocuparse explícitamente de la educación en valores, lo cierto es que las investigaciones realizadas en distintos países sugieren que los co¬ legios» al menos explícitamente� si enseñan valores. No sólo enseñan contenidos, Joseph Tobin, David Wu y Dana Davidson grabaron en vídeo escenas de dase en Japón, Chinay EE UU, En cada uno de estos países pidieron a niños, profesores, padres y directores que comentaran las escenas de los tres países. Analizando estos comen¬ tarios, podemos hacemos una idea de los distintos valores que implíci¬ tamente se enseñan en cada uno de los países. Cuando los sujetos de EE UU vie¬ ron las cintas de los japoneses se sin¬ tieron molestos por dos cosas. Una fue el hecho de que los niños japo¬ neses hacían frecuentemente las co¬ sas de forma simultánea, en grupo. Por ejemplo, el prof�r les mostraba cómo se doblaba una hoja de papel para hacer una pajarita y los niños lo imitaban siguiendo sus indicaciones.
Tanto los padres como los profeso¬ res de EEUU decían que los niños japon eses debían de haber participado más en la elección de qué hacer y cómo hacerlo. La segunda cosa que les molestó a las personas de EE UU y también a las de China fue que los profesores de lapón parecían ignorar lo que podríamos considerar con¬ ductas «disruptivas» de los alumnos, por ejemplo, cuando los niños se vuelven inquietos durante una acti¬ vidad en grupo, se levantan de su si¬ tio, bromean con los companeros o van al baño, En la cinta se veía cómo uno de los niños particularmente in¬ quieto hablaba en voz alta, a veces hacía daño a otros niños intencio¬ nadamente y arrojaba objetos, sin embargo, el profesor parecía ignorar estas conductas. Las personas de EE UU y China pensaban que el pro¬ fesor debería haber hecho algo para evitar esa situación, pero en Japón, sin embargPí la mayoría de los pro¬ fesores prefiere no destacar o llamar la atención sobre el niño problemᬠtico. Los profesores japoneses espe¬ ran que el niño eventualmente se comporte de una forma más apro¬ piada, y en ese momento animan a los otros niños a ejercer una presión social en esa dirección. En palabras de Lois Peak; «Aprenderá ir al cole¬ gio en Tapón se define principal¬ mente como un entrenamiento para la vida en grupo»,
ellos». Esto no significa que la independencia de las per¬ sonas no sea importante en EE UU, sino que las personas también se dan cuenta de que son interdependientes. Lo
la mayoría de las actividades de preescolaren China estaban muy es¬ tructuradas. Por ejemplo, la primera actividad del día era construir cosas con bloques, aunque en contraste con el estilo p reescolar japonés, los niños chinos eran animados a reali¬ zar la actividad solos y en silencio. Si alguno hablaba, el profesor le reñía. Los niños utilizaban un dibujo como guía de lo que tenían que hacer, y cuando por fin lo terminaban el pro¬ fesor revisaba el trabajo. Si estaba bien hecho lo desarmaban y lo vol¬ vían a hacer, pero si estaba mal les preguntaban cómo se podía corregir, Después de esta actividad, tenían clase de aritmética. Después comían el almuerzo que habían llevado al aula. Los profesores supervisaban la clase durante el almuerzo para ase¬ gurarse de que los niños comían toda la comida» y permanecían en silencioL Después de la siesta, los niños escu¬ chaban una historia patriótica ytras ella hacían carreras de relevos, se¬ guidas de 15 minutos de juegos. La cena se servía a las 5 de la tarde y los padres los recogían a las 6. Al verlas cintas de vídeo, los americanos y ja¬ poneses quedaron impresionados por la rigidez y el «control excesivo» de los niños, así como por la felta de intimidad de los aseos comunes, En las clases de preescolarde Ho¬ nolulú en EE UU, lo mismo que en las de Japón, los padres traían a sus
que nosotros realmente pensamos sobre nosotros mis¬ mos puede no ser tan diferente de lo que las personas de otras sociedades piensan sobre ellas mismas.
Capítulo 24
hijos a diferentes horas» pero algunos de ellos permanecían con los niños al menos durante media hora. Com¬ parados con otros preescolares� los estadounidenses fomentaban la par¬ ticipación individual así como la ac¬ tividad individualizada. Por ejemplo» algunas actividades eran voluntarias, En las actividades en el tablón� se pe¬ día a cada niño que añadiese algo en él. Gran parte del resto del día se de¬ dicaba a «centros de aprendizaje»; el profewr anudaba a decidir al nino el centro alque le gustaría ir Los niños comenzaban una actividad pero po¬ dían cambiar cuando lo deseaban, Hasta la comida era más libre� cada niño cogía su almuerzo y se sentaba junto a los demás en una gran mesa en la que hablaban animadamente mientras comían. Muchos de los ni¬ ños se marchaban a sus casas después de la comida y los que se quedaban se echaban una siesta seguida de un tiempo para jugar libremente. Los profesores de EE U H en contraste con los de Japón, intervenían cada vez que un niño se portaba malj como cuando uno de los niños le quitaba el cuaderno a otro. En ese caso� el profesor� sin levantar la vozj pedía a los niños que hablasen entre ellos del asunto. Cuando la disputa no se terminaba por las buenas les imponían un «tiempo feiera» (un pe¬ ríodo de aislamiento), Aunque los valores no se enseñan explícitamente, estos profesores de preescolar sí los transmiten clara¬ mente a través de la forma en que se comportan con los niños. En primer lugar está la importancia que se con¬
cede al grupo frente a la que se con¬ cede al individuo. Así» en los colegios de preescolar de EE UU la mayoría de las actividades cotidianas permi¬ ten la elección individual de alguna manera. En Japón y China predomi¬ nan las actividades de grupos pero los preescolares japoneses permiten una flexibilidad en la hora de llegada al colegio� tienen mayor cantidad de juego libre y mayor libertad para ha¬ blar o para moverse que los preesco¬ lares chinos. En segundo lugar está el tipo de control Los profesores japo¬ neses cuentan� de manera informal» con el grupoj para controlar la con¬ ducta de los niños. Por ejemplo» tras nueve meses» el niño que se portaba mal se sentaba solo durante el al¬ muerzo» ya que los demás niños pre¬ ferían no sentarse con él. Por el contrario» los profeso res chinos vigi¬ lan que los niños se comporten to¬ dos del mismo modo dentro del grupo ejerciendo un gran control so¬ bre su conducta- También los profe¬ sores de EE UU intervienen en el caso de los niños que se comportan de forma inapropiada. Los valores cultural es no son per¬ manentes, Así» aunque muchos di¬ rectores de colegio japoneses piensan que los colegios preescolares de su país tienen un estilo completamente «japonés»» y por tanto» satisfectorio» hay un número considerable de pa¬ dres y profesores japoneses que son críticos con esas escuelas y creen que sería mejor que en Tapón hubiera más colegios de preescolar de estilo estadounidense. También creen mu¬ chos japoneses que se debería pres¬
Si una cuestión cultural como el individualismo es importante, las sociedades pueden expresarlo o transmitirio de distintas formas. Puede ser ya desde el mismo
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tar mayor atención a las necesidades individuales de los niños conflictivos. Algunos chinos se quejaron� viendo las cintas de los colegios de su país» de que tenían unas costumbres «de¬ masiado chapadas a la antigua». Aú n piensan que es demasiada la libertad existente en los colegios de EE UU y de lapón.Los chinos también desta¬ can la importancia que tiene que el colegio no «consienta demasiado» a los niñosj especialmente en la actua¬ lidad» cuando se presupone que los padres no suelen tener más de un hijo. Por tanto» conscientemente o no» los colegios preescolares de los dife¬ rentes países socializan a sus niños de acuerdo con sus valores culturales, Jotsepih J, Tobiü, David Y, H. Wii y H, E)avidsoü, Presáiaoi in Thrée Cul¬ tures: Japati, China, dud � [/mW States (Nw HaveJij CT: Yale Uiiiva:sity Press, 19�9)í Lois Pest, � Gf Cdi£>rim Press, 1991); Margaiet Lock, of Everyd�y li�, ia Mehin Ember, Cáxol R. Roiber y David Levinson, Pcprtmíí� o/ Origimis (Uppet Sád-
die River, NJ: Prentiioe Hdl, 1993), Ptentice Hall/Simon & Sdnister Custom Publishiag.
momento del nacimiento» cuando el bebé es colocado en su cuna o canastilla para dormir solo en lugar de dormir con alguna persona de su femilia» cuando se les da a los
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Los niños de las culturas agrícolas normalmente tie¬ nen muchas responsabilidades, como en esta granja en Canadá.
iññi>s sus «propios» juguetes� cuando se les U�va a la guardería o a preescolar, cuando se les estimula para que tomín sus propias decisiones (véase el apartador «¿Se enseñan valores en el colegio?») o cuando en los colegios de niños mayoresi se exigen resultados individuales» no grupales. ¿Debe enseñarse el individualismo de forma explí¬ cita? Probablemente no» porque puede ser transmitido de muy distintas formas� Explícacíones ADAPTATíVAS
Los antropólogos culturales no sólo tratan de estable¬ cer conexiones entre las costumbres relacionadas con la educación de los ninos y los rasgos de personalidad� sino que> antes que esOj intentan averiguar por qué varían es¬ tas costumbres» Algunos antropólc�gos opinan que las prácticas para el cuidado de los niños son sobre todo adaptativas» esto es» que cada sociedad crea los tipos de personalidad mejor preparados para efectuar las activi¬ dades necesarias para la supervivencia de esa sociedad. Como expresaron Fohn Whiting e Irving Child: «Los ór¬ ganos económicos» políticos y sociales de una sociedad� las costumbres básicas que se relacionan con la nutri¬ ción» la vivienda y la protección de sus miembros,., pare¬ cen una probable fuente de influencia sobre las prácticas para el cuidado de los niños». La creencia en que estas prácticas son adaptativas no implica que las sociedades siempre produzcan el tipo de personas que necesitan. De la misma forma que en el campo de la biología podemos observar adaptaciones pobres y extinciones de especies y subespecies» podemos esperar que las sociedades algunas veces fevorezcan rasgos de personalidad mal adaptados a
los requerimientos de esa sociedad. Por eso» no podemos asumir que un determinado rasgo sea adaptativo» sólo por el simple hecho estar presente. No podremos llegar a esa conclusión a menos que investiguemos cuidadosa¬ mente si dicho rasgo es beneficioso o perjudicial. Sin em¬ bargo» es de esperar que la mayoría de las sociedades que han sobrevivido y han sido documentadas» hayan gene¬ rado rasgos de personalidad que son» en su mayoría» adaptativos. Kobet LeVine propuso una explicación adaptativa de la {�cuencia con la que se toma en brazos y se alimenta a los bebés» y la rapidez con que los cuidadores responden a sus llamadas en las sociedades preindustriales. Sólo un 1 por ciento de los niños mueren en las sociedades indus¬ triales durante el primer año de vida» frente al 20 por ciento que muere en las sociedades preindustriales. ¿Qué pu eden hace r los padres ? Los padres a me nu do n o tien en acceso a cuidados médicos modernos» sin embargo» pue¬ den responder inmediatamente a las quejas cuando el bebé está junto a ellos. Además» los bebés estarán más a salvo cogidos (y no en el suelo)j si en los alrededores hay fuegos para cocinar» insectos peligrosos o serpientes. Cuando la supervivencia no es más que una probabilidad» como sugirió LeVine» los padres consiguen una mayor seg��idad para sus pequeños cuando los llevan consigo. Herbert Barry» Irvin Child y Margaret Bacon investi¬ garon transculturaímente la posibilidad de que las prác¬ ticas para el cuidado de los niños estuvieran adaptadas a las necesidades económicas de una sociedad. Plantearon que tales necesidades podrían expÜcar por qué algunas sociedades se esforzaban en que los niños foesen «dóci¬ les» (responsables» obedientes» educados), en tanto que otras sociedades preferían que fueran más «asertivos» (independientes» autosuficientes y realizados). Los resul¬ tados transcultu rales indican que tanto las sociedades agrícolas como las pastoriles insisten en la responsabili¬ dad y la obediencia» en tanto que las cazadoras-recolectoras optan por la autorrealización y la asertividad. Los investigadores sugirieron que las sociedades agrícolas y pastoriles no pueden permitirse desviaciones en su ru¬ tina establecida» puesto que estas desviaciones podrían poner en peligro la reserva de alimentos durante largos períodos. Por lo tanto» tales sociedades tienden a fomen¬ tar la aceptación de la tradición. La desviación respecto a la rutina en las sociedades cazadoras-recolectores no causa tanto daño al abastecimiento de alimentos» que de¬ ben ser recogidos al menos cada día. Por este motivo» los cazadores-recolectores pueden permitirse fomentar la iniciativa individual. A pesar de que nuestra propia sociedad depende de la producción de alimentos y posee grandes almacenes re¬ pletos de alimentos» nos parecemos más a las sociedades
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cazadoras-recoiectoras puesto que fbmentainos la inicia¬ tiva individual. Según esto� ¿constituimos una excepción a los hallazgos de Barry, Child y Bacon? En realidad no. Hay muy pocos agricultores en nuestra sociedad (en EE UU sólo trabaja en el campo el 2 por ciento de la población)j mientras que la mayoría de nosotros «forrajea» en los supermercados y almacenes� Quizá más impor¬ tante es el hecho de que nuestra intensa economía comercialj con la mayoría de la población viviendo en o cerca de las grandes ciudades» nos exige competir para conseguir un trabajo que nos permita vivir. En una eco¬ nomía como la nuestra la iniciativa individual es� por tanto> muy importante. Consideremos los resultados de una comparación transnacional efectuada en ocho países en la que los investigadores preguntaron a los padres qué cualidad desearían que tuviesen sus hijos de edad escolar. La independencia y la autosuficiencia apenas fueron mencionadas por los padres de las sociedades más rura¬ les (Indonesia� Filipinas y Tailandia), Sin embargo� éstas fueron las características más mencionadas en los países más industrializados (Corea» Singapur y EE UU), Las prácticas del cuidado de los niños también se pue¬ den ver afectadas por las características del hogar, Leigh Mintum y WUliam Lambert demostraron, basándose en los datos obtenidos en el estudio Seis Culturas» que los hijos de femilias que vivían en casas pequeñas tienden a ser castigados con mayor dureza por pegarse con otros que los niños de Emilias que tienen un espado más am¬ plio. Cuantas más personas viven en una casa» menos dispuestos están los padres a permitir la desobediencia. Esta observación apoya hallazgos efectuados por Fohn Whiting en un estudio transcultural, en el sentido de que las sociedades con hogares de femilias extensas tienden a castigar la agresión de forma más severa que las socieda¬ des con Emilias nucleares. El hecho de que los adultos expresen libremente su agresividad se puede relacionar con el tipo de economía de esa sociedad» así como con el dima social. En un estu¬ dio comparativo sobre diferencias de personalidad efec¬ tuado en cuatro sociedades de pastores y agricultores de Áfirica Oriental» Robert Edgerton encontró que los pas¬ tores tendían a expresar su agresividad más abiertamente que los agricultores. De hecho» los pastores tendían a ma¬ nifestar más abiertamente todo tipo de emociones» in¬ cluyendo la tristeza y la depresión, A pesar de que los sericultores mostraban una cierta reticencia a expresar abiertamente su propia agresividad» sí estaban dispuestos a hablar sobre las prácticas de hechicería y brujería que otras personas llevaban a cabo. ¿Cómo podemos explicar estas diferencias de personalidad? Edgerton propuso que el estilo de vida de los agricultores� que pasan gran parte de su vida colaborando con el mismo grupo de vecinos»
requiere que éstos sean capaces de contener sus emocio¬ nes» especialmente las hostiles. (Estos sentimientos no afloian�sin embargo, los agricultores sí pueden «verlos» en los demás), Por el contrario» los pastores pueden apar¬ tarse con mayor fecilidad de las situaciones conflictivas» yaque no dependen tanto de un número determinado de personas. No sólo pueden manifestar su agresividad de forma más abierta» sino que esta agresividad puede in¬ cluso ser adaptativa. Los pastores estudiados por Edger¬ ton se veían envueltos frecuentemente en ataques y contraataques relacionados con los robos de ganado y los individuos más agresivos tenían mayores posibilidades de sobrevivirá dichos ataques, ¿Pueden influir las condiciones ambientales en la forma de pensar y de percibir (interpretar la información sensorial) de las personas en diferentes sociedades? lohn Berry sugirió que distintos procesos cognitivos y percep¬ tivos pueden ser seleccionados y entrenados en socieda¬ des que difieran en sus necesidades adaptativas, Berry se centró particularmente en lo que los psicólogos llaman íkpenderu:ia de vampQ e de mmpQ� La in¬ dependencia de campo hace referencia al hecho de ser capaz de aislar una parte del total de la situación. El es¬ tilo perceptivo opuesto» o dependencia de campo» indica el hecho de que las partes no pueden percibirse de forma separada» sino que la situación se percibe como un todo, La diferencia entre dependencia e independencia de campo puede verse más claramente si atendemos a al¬ guna de las formas en las que han sido medidas. Así» en el test de verticalidad {rod and frame test)� se pide al su¬ jeto» que está sentado en una habitación a oscuras» que trate de poner en posición vertical una barra luminosa que está dentro de un marco. El sujeto era considerado dependiente de campo si ajustaba la barra con el marco manteniendo la misma inclinación que éste» mientras que era cor�derado independiente de campo si tendía a colocar la barra en posición vertical» independiente¬ mente de que el marco que la contiene estuviese incli¬ nado, La independencia de campo también puede medirse a través de la capacidad para percibir una figura simple cuando está incluida (y parcialmente escondida) en una más compleja. ¿Porqué algunas sociedades favorecen que las perso¬ nas sean dependientes o independientes de campo? Berry sugirió que las personas que dependen en gran medida de la caza deben ser independientes de campo para tener éxito» ya que la caza exige el aislamiento visual de los animales respecto a su entorno. Los cazadores de¬ ben aprender a orientarse en su entorno» de forma que puedan localizar a sus presas y volver a casa. En un estu¬ dio comparativo de comunidades en cuatro sociedades» Berry encontró que el grado de confianza en la caza era
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uji predictor de la independencia de campo» Cuanto más depende una comunidad de la cazaj mayor independen¬ cia de campo muestran los sujetos en los tísts. Aquellas comunidades que dependen más de la agricultura de¬ mostraban mayor dependencia de campa ¿Cómo pue¬ den los cazadores desarrollar la independencia de campo como un estilo cognitivo? Diferentes estilos de entrena¬ miento en los niños» pueden estar implicados. En EE UU y en algunas otras sociedades se ha podido demostrar que los hijos de padres muy estrictos tendian a desarro¬ llar con menor ñecuencia independencia de campo que los hijos de padres más tolerantes. Parece ser que es ne¬ cesaria una independencia emocional respecto a los pa¬ dres para que se desarrolle el estilo perceptivo de independencia de campo. Sin importar de qué meca¬ nismo concreto se trate, sabemos por el estudio de Barry, Child y Bacon, que ios cazadores-recolectores son más proclives a educar a sus hijos para que sean indepen¬ dientes y asertivos» y que en las sociedades de agriculto¬ res y pastores tienden a educados para ser obedientes. Por tanto» los cazadores-recolectores pueden hacer que sus hijos desarrollen independencia de campo a través de la independencia emocional en la in:�ncia. Las investigaciones han mostrado que tanto en EE UU como en otras culturas (aunque no en todas) existen diferencias de género en cuanto al grado de de¬ pendencia o independencia de campo. Quizá estas dife¬ rencias reflejen el hecho de que las niñas son educadas para ser obedientes y responsables, en tanto que los ni¬ ños son educados para ser independientes y autosufidentes. Y quizá» también, las diferencias de género en cuanto a la dependencia o independencia de campo se puedan relacionar con el hecho de que las jóvenes suelen trabajar más dentro del hogar o muy cerca de él, junto a □tras jóvenes. Si esto es así, podemos esperar que las chi¬ cas más dependientes del campo tengan también una moralidad más centrada en los asuntos interpersonales (véase el apartado «¿Tienen las mujeres una moraUdad diferente??»). POS[BLES [NFLUENCÍAS GENÉT[CAS Y RS[OLÓGrCAS
Algunos investigadores han sugerido que las diferen¬ cias genéticas o fisiológicas entre poblaciones les predis¬ ponen a tener distintas características de personalidad, Daniel Freedman encontró diferencias de «tempera¬ mento» en recién nacidos pertenecientes a distintos gru¬ pos étnicos. Puesto que se trataba de recién r�cidos, supuso que las diferencias entre ellos deberían ser gené¬ ticas. Comparando a recién nacidos chinos y euroamericanos pertenecientes a femilias con rentas similares y con
el mismo numero de hijos, Freedman encontró que los niños euroamericanos lloraban con mayor fecilidad, eran más difíciles de consolar y se resistían más a los pro¬ cedimientos experimentales. Por el contrario» los niños chinos parecía que eran más tranquilos y mejor adapta¬ dos. Los niños navajos eran similares a los chinos» e in¬ cluso se mostraban todavía más tranquilos. Freedman sugirió también que la conducta de los niños podía estar influida por la forma en la que respondían los padres. Un niño tranquilo podía provocar una respuesta también tranquila en sus padres, en tanto que un nino más activo podía or�ar una respuesta más activa. Por eso, desde el punto de vista de Freedman» la conducta genéticamente determinada de los bebés podría llevara diferencias étni¬ cas en la personalidad de los adultos y en los estilos en el cuidado de los niños, Pero no podemos descartar expÜcaciones no genéti¬ cas sobre la conducta de los recién nacidos. Por ejemplo» la dieta seguida por las madres o su presión sanguínea podrían afectar a la conducta de su hijo. Y puede ser que los bebés puedan aprender induso cuando están aun en el útero materno: después de todo aparentemente los be¬ bés» antes del momento del parto, pueden escuchar y res¬ ponder a sonidos» así como a otros estímulos. Por tanto» es posible que en las sociedades en las que las mujeres embarazadas están tranquilas» sus bebés pueden apren¬ der a ser calmados incluso desde antes de nacer. Por úl¬ timo, todavía ignoramos si las diferencias iniciales observadas en los recién nacidos persisten luego hasta convertirse en rasgos característicos de personalidad en la edad adulta. Lo mismo que la dieta de las madres, incluyendo la in¬ gesta de alcohol o las drogas» puede afectar al desarrollo del feto» la dieta de los niños y bebés puede afectar a su desarrollo intelectual y a su comportamiento. Ciertos es¬ tudios han demostrado que la desnutrición está asociada a niveles más bajos de actividad» menor capacidad de atenciónj felta de iniciativa y baja tolerancia a la fhistradón. La conducta de estos niños puede cambiar con d aporte de suplementos alimenticios a corto plazo. Se ha observado en Guatemala que los niños que recibieron suplementos de este tipo mostraban menor ansiedad» mayor capacidad exploratoria y mayor participación en juegos con otros niños que los que no recibieron los su¬ plementos. El problema de la desnutrición no es sólo un asunto de nutrición, ya que puede llevar asociadas otras carencias relacionadas con los cuidados. Por ejemplo, las personas que cuidan a los niños desnutridos pueden interaccionar con ellos menos que los cuidadores de ni¬ ños bien alimentados, ya que un niño desnutrido mues¬ tra un menor nivel de actividad y sus cuidadores tenderán a responder a los niños con una f�cuencia más
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Nuevas perspectivas sobre el género ¿Tienen las muferes ma moralidad diferente? Resulta ampliamente conocido el hecho de que a medida que los ni¬ ños maduran� desarrollan un sen¬ tido del yo (self) que les permite distinguirse a si mismos de los de¬ más. Pero> ¿qué tipo de sentido del íeí/desarroUan? Algunos investiga¬ dores sugieren que las diferentes cul¬ turas tienen concepciones del seíf. En particular en Occidente se tiende a destacar la individualidad de cada persona, mientras que en otras cul¬ turas se destaca la relación entre las personas. \�ios psicólogos� y entre ellos Carol Gilligan, propusieron que las mujeresj a diferencia de los hombres� tienden mis a desarrollar un sentido del seífque englóbala interacción so¬ cial y la conexión entre las peisonas. Gilligan sostuvo que las mucres tendían también a tener un sentido diferente de la moralidad� más pro¬ clive a tener en cuenta los senti¬ mientos de otros y la conservación de ks relaciones. Los hombres» dijo> tienden más a destacar las normas y principios que son aplicados igual e imparcialmentea las personas. ¿Hay algún dato sólido que apoye su rei¬ vindicación sobre diferencias de gé¬ nero con respecto a la moralidad? 8e han rai zad o estudios en los que se ha entrevistado a mujeres y hombres» comparando después sus afirmaciones sobre ellos mismos ysobre las soluciones propuestas alos di¬ lemas morales. Estas respuestas se catalogaron en fijnción dd grado en que se describía el íef/como «autó¬ nomo» o como «relacionado»! y el grado en que las respuestas a los di¬ lemas morales se expresan en térmi¬ nos de «justicia» o «preocupación por los demás». La expresión: «Bien> tiene usted que pensar si esto es justa., o injusto»! es un ejemplo de una afir¬
mación enfocada en términos de «justicia»! en tanto que «me gustaría que se llevasen bien„. Yo no deseo que nadie se meta en peleas ni nada por el estilo�! es un ejemplo de una afir¬ mación expresada en términos de «preocupación por los demás». La investigación� realizada en su mayoría en EE UU con personas con un cierto nivel educativo» demostró que aunque las mujeres solían des¬ cribirse a sí mismas con mayor fi�cuencia que los hombres como «relacionadas» y mostraban con mayor ñecuencia una moralidad de «preocupación por los demásí>} no existía una separación absoluta en¬ tre ambos géneros. La mayoría de las personasj independientemente del género� dieron respuestas de «rela¬ cionado» y «autónomo» respecto a ellos mismoSj y la mayoría expresó «justicia» y «preocupación por los demás» en relación con los dilemas morales. Si es que existe alguna di¬ ferencia entre los géneros dentro de una cultura, sólo es una tendencia» y no una forma completamente di¬ ferente de entenderla moralidad, Aunque el desarrollo moral de los niHos ha sido estudiado en mu¬ chas culturas» hay relativamente poca investigación que aborde di¬ rectamente las cuestión es planteadas por Gilligan. Para estar seguros» en una investigación de David Stimpson y sus colegas se comparó a es¬ tudiantes universitarios de Corea» China» Tailandia y EE UU encon¬ trándose datos que sostienen la idea de que las mujeres» en comparación con los hombres» estaban mucho más sensibilizadas ante el afecto» la compasión y la sensibilidad hacia las necesidades de los otros. Pero en este estudio no se pidieron específica¬ mente respuestas a dilemas morales,
Otros investigadores sugieren que este panorama puede ser más complicado� yaque los conceptos de mo¬ ralidad pueden ser distintos de los dos tipos descritos por Gilligan. Por ejemplo» Joan Miller encontró que las cl�es medias hindúes de b India tenían generalmente un fuerte sentido de la moralidad interperso¬ nal si se las comparaba con 1� per¬ sonas de EE UU, Sin embargo» la moralidad hindú no se basaba en la preocupación de una persona hada los demás» sino que sus respuestas a los dilemas morales estaban fuerte¬ mente influidas por la consideración de las obligaciones sociales. Miller tampoco encontró diferencias en cuanto al género en sus respuestas. Todo lo que podemos afirmar es que los géneros pueden tener una moralidad distinta en algún aspecto en determimdas culturas» pero ne¬ cesitamos más investigaciones para conocer cómo puede variar el con¬ cepto de la moralidad tanto según el género» como según la cultura. PuffHteí Carol Gilligan, In a Diff�nt Voiix:Psydtohgical Tkeúryand Wometí'sDevebpmetít (Cámbíid�, MA: Hámrd Uüi�eisity Presá, 1982){ Nona Plessner Lyons, «T�vo Pmp��ves; On Relationjhips, ánd Morality», y Cáxol CíU�n y Jane AthTWo Moial Oiietitations>�, ea Carol CiTligp![f>, Jánie Victom Ward, y JiU Malean Ta�ioE, Mipping tíie Moral Domain; A Contribution of WomíMV Thitúiti� í los Saora de Orissa» en la lndia> proporcionan otro ejemplo de conducta normal para una sociedad que puede ser considerada anormal en otra, Los Saora daban por hecho que algunas de sus mujeres eran regularmente cortejadas por amantes procedentes del mundo sobrenatural� que se casaron con ellos y que tuvieron hijos» que nunca han sido vistos» aunque supuestamente eran ama¬ mantados por las noches. Una conducta tan extraña para
Los juegos de estrategia� como éste jugado en Malí, tienden a ser más frecuentes en las sociedades jerárqui¬ cas, donde la obediencia está muy acentuada.
nosotros hace muy diñcil a los investigadores identificar la enfermedad mental en otras sociedades. Sólo compa¬ raremos las tasas de patología mental en sociedades com¬ plejas frente a sociedades menos complejas. Aunque los investigadores no se ponen de acuerdo respecto a la comparabilidad de la enfermedad mental en diferentes culturas» la mayoría de ellos es consciente de que un tratamiento ef�vo exige la comprensión de las ideas culturales sobre lo que es la enfermedad mental (por qué se produce» qué tratamientos se consideran más efectivos y cómo los femUiares u otras personas respon¬ den a este tipo de trastornos). Comentaremos las enfer¬ medades mentales más a fe>ndo en el capítulo dedicado a la Antropología médica.
Explicaciones psicológicas de la variación cultural Hemos hablado sólo sobre la variabilidad de unas so¬ ciedades a otras en las características psicológicas y sobre las posibles causas de dicha variabilidad. Pero los an¬ tropólogos psicológicos» lo mismo que otros científicos
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sodalesj han investigado también las posibles consecuen¬ cias de la variabilidad psicológica� y en concreto cómo las características psicológicas pueden ayudarnos a com¬ prender ciertos aspectos de la variabilidad cultural. Por ejemploj la investigación de David McClellan sugiere que las sociedades que desarrollan altos niveles de mo¬ tivación de logro (un rasgo de personalidad) en los individuos� tenderán a experimentar altos niveles de crecimiento económico. Según este mismo autor� el de¬ clive económico seguirá al declive en la motivación de lo¬ gro, Estas diferencias en la motivación de logro pueden tener induso consecuencias políticas. Por ejemplo� Robert LeVine> que estudió los niveles de motivación de lo¬ gro en tres grupos étnicos de Nigeria� pudo comprobar cómo la introducción de la educación superior y de mu¬ chas de las profesiones emergentes en uno de esos grupos� el de los Ibo� no ha sido muy bien aceptada por los grupos tradicionalmente más influyentes. Poco después de la pubhcación del libro de LeVine» la fricción entre grupos étnicos rivales de ese país desembocó en la rebe¬ lión de los Ibo y� posteriormente� la derrota de su Estado separatista llamado Biafra, Los fectores psicológicos también pueden ayudarnos a explicar por qué algunos aspectos de la cultura están estadísticamente relacionados con otros. Abram Kardiner sugirió que los modelos culturales influyen en el desarrollo de la personalidad a través de la educación infontil y que los rasgos de personalidad resultantes in¬ fluyen a su vez en la cultura. Creía que las instituciones primarias� tales como la organización �miliar y las téc¬ nicas de subsistencia» daban lugar a la aparición de cier¬ tos rasgos de personalidad y que> una vez que la personalidad se ha desarrollado» puede tener su propio impacto sobre la cultura. Bajo el punto de vista de Kardiner� las instituciones secundarias de una sociedad ta¬ les como la religión o el arte» se forman a partir de los rasgos comunes de personalidad (a los que denomi¬ naba Presumiblemente estas instituciones se¬ cundarias tienen poca relación con las necesidades adaptativas de la sociedad pero pueden reflejar y expre¬ sar las motivaciones» conflictos y ansiedades de los miembros típicos de la sociedad- Por este motivo» si pu¬ diésemos entender por qué se desarrollan unos deter¬ minados rasgos típicos de personaÜdad» podríamos» por ejemplo» ser capaces de comprender porqué ciertos tipos de arte están relacionados con ciertos tipos de sis¬ temas sociales, Whitir� y Child utilizaron la frase integración de la cultura en la personalidad para hacer referencia a la podbilidad de que la comprensión de la personalidad nos Acuitara la explicación de las relaciones entre las institu¬ ciones primarias y secundarias. Como ejemplo de cómo
la personalidad puede integrar a la cultura» vamos a re¬ tomar algunas de las explicaciones relacionadas con las preferencias culturales por determinados juegos y con los ritos de paso masculinos, Eq un estudio transcultural dirigido por John Ro¬ be rts y Brian Sutton-Smith� se comprobó que las prefe¬ rencias culturales por determinados tipos de juegos estaban relacionadas con ciertos aspectos de la educa¬ ción infentiL Los investigadores sugirieron que estas re¬ laciones eran la consecuencia de un conflicto originado en muchas personas en una sociedad debido a los distin¬ tos tipos de presiones educativas. Los juegos de estrate¬ gia» por ejemplo» se relacionan con prácticas educativas que potencian la obediencia, Roberts y Sutton-Smith propusieron que al exigir a los niños una obediencia muy estricta» puede generarse un conflicto entre la nece¬ sidad de obedecer y el deseo de no hacerlo� un conflicto que genera una ansiedad» que puede o no ser manifes¬ tada contra la persona que fomenta dicha ansiedad. En todo caso» el conflicto y la agresividad pueden ser Überados en competiciones de juegos de estrategia» como el ajedrez o el juego japonés del go. De forma similar, los juegos de azar pueden reflejar el desafio de una sociedad a las expectativas de docilidad y responsabilidad. La interpretación general sugerida por Roberts y SuttonSmith es que los jugadores (y las sociedades) inicialmente sienten curiosidad por los juegos» después los aprenden y por ultimo se implican mucho en ellos» debido a los tipos concretos de conflictos psicológicos que son controlados o expresados» aunque no necesaria¬ mente resueltos» a través de los juegos, H posible papel de los procesos psicológicos en la re¬ lación entre distintos aspectos de la cultura se pone tam¬ bién de manifiesto en un estudio transcultural sobre ritos de paso de adolescentes varones. En estos ritos los adolescentes son sometidos a dolorosas pruebas de hom¬ bría» que generalmente incluyen operaciones genitales que ponen de manifiesto el paso del joven a la edad adulta, Roger Burton y John Whiting encontraron que las ceremonias de iniciación tienden a producirse en so¬ ciedades patrilocales» en las que los niños varones peque¬ ños suelen dormir con sus madres. Estos investigadores sugirieron que durante los ritos de iniciación en tales so¬ ciedades se intenta resolver el conflicto de la identidad sexual. Se cree que este conflicto existe porque los niños de estas sociedades se identifican inicialmente con sus madres» quienes suelen ejercer un control casi absoluto sobre ellos durante la inicia. Más tarde» cuando los chicos descubren que son los varones los que dominan la sociedad» se identifican secundariamente con sus pa¬ dres. Se asume que este conflicto de identidad sexual se resuelve con los ritos de iniciación, en los que queda
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demostrada la hombría de los varones� consolidándose asi la identificadón secundaria. En los dos siguientes capítulos discutiremos la varia¬ bilidad cultural en la religión y el arte» En esta discusión haremos referencia a algunas explicaciones de tipo psi¬ cológica Algunos investigadores consideran que este tipo de exphcaciones puede ayudarnos a comprender por qué en algunas sociedades los dioses son considera¬ dos malignos� por qué los artistas de algunas sociedades prefieren los diseños repetitivos y por qué en algunas sociedades los forasteros son considerados los «malos» en los cuentos populares. Los antropólogos psicológi¬ cos asumen con frecuencia que las concepciones de los dioses y las creaciones artísticas no están constreñidas por ninguna realidad objetiva� sino que las personas son libres para crearlas como desean. En otras palabras� las personas tienden a proyectar su personalidad (sus sentimientos» sus conflictos» sus asuntos) en estas áreas, Esta idea de proyección es la que subyace a lo que los psicólogos denominan proyectivo�. En estos tests» que presumiblemente revelan las características de la personalidad� se presentan a los sujetos una serie de es¬ tímulos expresamente ambiguos. Así� por ejemplo� en el Test de Apercepción Temática (TAT) se muestra al su¬ jeto una serie de dibujos de situaciones que pueden ser interpretados de distintas maneras y se le pregunta qué cree que está sucediendo en ese momento» qué sucedió antes y que cree que ocurrirá después. Puesto que el material del test da pocas instrucciones sobre qué con¬ testar» se asume que los sujetos interpretarán los mate¬ riales proyectando su propia persor\alidad. Como veremos en capítulos posteriores» algunos de los aspec¬ tos de la religión y del arte pueden ser similares a las historias del TAT» y pueden constituir una expresión o un reflejo de las características comunes de personali¬ dad de una sociedad» CD-ROM EjerciciOE de concepto? 11�27
Sumario 1, Los antropólogos psicológicos están interesados en las diferencias y semejanzas psicológicas entre socie¬ dades. Sus investigaciones se han enfocado sobre todo en cuatro cuestiones: ¿Se desarrollan todos los seres hu¬ manos psicológicamente de la misma forma en la mayo¬ ría de los casos? ¿Qué es lo que puede explicar las diferencias que se observan de una sociedad a otra en los rasgos de personalidad? ¿Cómo conciben las personas
de las distintas sociedades el desarrollo tanto psicoló¬ gico como de la personalidad? Yj ¿qué tipo de variación cultural puede explicarse a partir de los fectores psicoló¬ gicos? 2. Las primeras investigaciones efectuadas en an¬ tropología psicológica se ocupan» sobre todo» de la forma en que» supuestamente» las diferencias culturales afectan a los estadios universales del desarroUo emocio¬ nal. Se han planteado dudas acerca de la idea de que la adolescencia tenga que ser necesariamente una época «tormentosa y estresante» y de que el complejo de Edipo» al menos en la forma descrita por Freud» sea universal. 3, Los estudios más recientes efectuados sobre los universales en el desarrollo psicológico se han centrado» sobre todo» en el desarrollo cognitivo o intelectual. En la búsqueda de los universales» muchos investigadores han encontrado algunas diferencias aparentes. Pero hemos de tener en cuenta que la mayoría de las pruebas utilizadas en las investigaciones fevorecen a las personas de las cul¬ turas occidentales y a aquellas que han pasado por una escolarización formal 4. Para entenderla variacióntranscultural en las ca¬ racterísticas psicológicas» muchos investigadores han tra¬ tado de descubrir si la variabiÜdad en las costumbres en la forma de educar a los niños pueden explicar las dife¬ rencias psicológicas observadas. 5, La íüCífíííMndtt es un término utilizado por an¬ tropólogos y psicólogos para describir el desarroUo a tra¬ vés de la influencia ejercida por los padres y por otras personas en los patrones de conducta de los niños que se ajustan a las expectativas culturales. 6, La socialización puede ser directa o indirecta. In¬ directamente el grado en que los padres se relacionan con los hijos» el tipo de tareas que se les exige que hagan y el que acudan o no al colegio pueden» al menos en parte» ejercer una influencia en el desarrollo psicológico de los niños. 7, Los antropólogos no sólo tratan de buscar rela¬ ciones entre costumbres educativas utilizadas con los hijos y los rasgos de personalidad» sino también apren¬ der cómo han surgido estas costumbres. Algunos antro¬ pólogos creen que las sociedades generan el tipo de personalidad más adecuado para llevar a cabo las acti¬ vidades necesarias para la supervivencia dentro de esa sociedad. 6. Del mismo modo que existen universales transculturales y diferencias entre sociedades en el comporta¬ miento «normal»» también existen semejanzas y diferencias en la conducta «anormal». 9. Los antropólogos psicológicos están interesados no sólo en las posibles causas de las diferer�iias psicológicas
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íntre Us sodídadesj sino también en las posibles consecuíiicias de la variabilidad psicológica» particularmente en cómo pueden ayudarnos las características psicológicas a comprender la asociación estadística entre los diferentes aspectos de la cultura,
Glosario de términos Instituciones primarias Instituciones secundarias Integración de la cultura en la personalidad Personalidad Socialización (o enculturación) Tests proyectivos
Cuestiones críticas K ¿Cree que los niños consentidos serán más o me¬ nos autosufidentes cuando lleguen a la edad adulta?iPor qué? 2, ¿Qué puede explicar la rebeldía adolescente? 3. Tanto los agricultores como los forrajeadores pare¬ cen tener características de personalidad algo dife¬ rentes» por lo que el método para la obtención de alimentos puede estar relacionado con la persona¬ lidad; ¿Cree que existe una relación similar entre la profesión y la personalidad? De ser así» ¿por qué?
/i�Eiercicios de Internet 1. Explore algunas páginas web sobre antropología psicológica. Vea l*tp://www.hamilton.edii/academics/ anthro/Raybeck.htmI o haga una búsqueda sobre «an¬ tropología psicológica» en un buscador para encontrar programas de cursos sobre esta especialidad. 2. La maternidad está más estudiada que la paterni¬ dad, Visite la Web hltpr/ywww.apa.org/psychnet y acuda a la sección sobre padres y femilia. Busque algún artículo sobre el padre o la paternidad. 3p ¿Qué derechos de los niños se han incluido en la Convención sobre los Derechos de los Niños» una decla¬ ración sobre sus derechos humanos (http://www.umce£ org/crc)?
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Lecturas sugeridas BuRBANiCf V. K. «Adclcscent Sociallzaticn and InitiatLon CcrcEn C. R. Ember y M. Ember (Ed$.). Crcíí-CK/íMríjJ Research for 5í¡encÉV Upper Saddk River, NJ: Prenticc Hall, 1998. Prcrtticc HaU/SimonSc Schuster Custúm PublisHng. Un estudio de cómo y por qué varía la socialización en la adolescínda, con una cspcdal atención a los ritos di paso ya las diferencias di género. Hewlett, B-S. «Diverse Cont�xtsof Human In�cy�. En C, R. EmbcryM. Ember (Eds.). CTOís-CuííHraíiíeíeflrc/t�r�acwl Upper Saddle River, NJ: Prentice Hallj 199S. Prenticc Hall/Simon & Schu$ter Custoni Publishing. Un ex�en de los prejuicios que existen en tomo a lo que se considera normal e n la infencia e n Norteamérica y Europa ooddíntal, que se basa en los estudios transcultu rales y que analiza div�as prácticas respecto al parto, el cuidado del bebé y las características de los cuidadores. Munroe, R. H,, Munroe» R. L. y WHmNG, B. B. (Eds-). Hattdof Ctosí-Cultural Human DevdoprtKfit* Nueva York: Garland, 1981. Una amplia colección de artfculoSf que han sido especialmente preparados para este volumen, sobre multitud de aspectos del desarrollo humano qu€ han sido investigados mediante el análisis transcultural, Roqoff, B. ín CtJ�«íí¿ví Development ki Social Cpfítffcí; Nueva York: Oxford University Pressi 1990, Este libro sugiere que el desarrollo cognitivo de los ni¬ ños es aprendido y que las habilidades cognitivas que las personas desarrollan tienen su raíz en las actividades histó¬ ricas y culturales características de cada sociedad. Segalu M. H., D�en, P. R., Berry» J, W. y Poortinga, Y. H, Humati B�utyjor itt Global P�spedivei Att Ititroductioti to Cross-Cultural Psychology. Nueva York Pergamon, 1990. Una introducción a la investigación realizada en muchas so¬ ciedades del mundo acerca de cómo la percepción� la cogni¬ ción, la motivación y otros aspectos del comportamiento Uimano son inñuenciados por variables sodales y fectores culturales. Whiting, B. B. y Edwaiuk� C, P. en colaboración con C. R. Em¬ ber, G. M. Erchak, S. Harkness� R. L. Wunroe,R. H. Munroe� S. B. Nerlove, S. Seymour, C. M. Supcr, T. S. Weisner y M. \\bnger. Oiildren ofDifferent VVíjrltía: Tíií Formatioii of So¬ cial BdiavioT, Cambridge, MA: Harvard University ftess, 19$8. Basándose en los datos recí�dos en el proyecto Seis Culturas, los autores esploran la forma en que la edad, el gé¬ nero y la cultura afectan a la condxjcta social de los niños, Conocer el tipo de compañía que tienen lo€ niños y la can¬ tidad de tiempo que éstos pasan con distintos grupos de personast nos permite predecir importantes aspectos del comportamiento interpersonal de los niños.
% p3 Religión y magia INDICE DEL CAPITULO
La universalidad de la religión Variaciones en las creencias religiosas Variaciones en las prácticas religiosas Religión y adaptación
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Capítulo 25
Religión y magia
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• |j I an kjos como podemos llegar a conocer� todas I35 sociedades han poseído creencias que � W puíden ser agrupadas bajo el término de refi I —I ligión. Estas creencias varían de una cultura a otra y de ana a otra época. No obstante, a pesar de su variedad» definiremos religión como cualquier conjunto de actitudes� creencias y prácticas pertenecientes al poder sobremturah ya sean fuerzas, dioses� espíritus, fentasmas o demonios. En nuestra sociedad� dividimos los fenómenos en na¬ turales y sobrenaturales, aunque no todas las culturas ni lenguas hacen tal distinción. Sobre todo los considerados fenómenos sobrenaturales (poderes que se cree que no son humanos o que no están sujetos a las leyes de la na¬ turaleza) varían de una sociedad a otra» Alguna variación está determinada por lo que una sociedad considera como natural» Por ejemplo� algunas enfermedades que aparecen comúnmente en nuestra sociedad y se considelan resultado de la acción natural de bacterias o virus. En (Xras sociedades, e incluso entre algunas personas de mestra propia sociedad, son consideradas como el resul¬ tado de fuerzas sobrenaturales, por lo que forman parte de las creencias religiosas, Las creencias sobre lo que es o no de origen sobrena¬ tural pueden variar en una misma sociedad en un mo¬ mento determinado o a través del tiempo. Por ejemplo� en la tradición judeo-cristiana las inundaciones, los te¬ rremotos, las erupciones volcánicas, los cometas y las epidemias fueron considerados evidencia de los poderes sobrenaturales que intervenían en los asuntos humanos. En la actualidad sabemos que son simplemente catástro¬ fes naturales, a pesar de que mucha gente siga creyendo que pueden estar relacionados con fiaerzas sobrenatura¬ les. Por tanto, la línea entre lo natural y lo sobrenatural varía dentro de una sociedad de acuerdo con la forma en la que la gente cree sobre las causas de las cosas y de los eventos observables en el mundo, En muchas culturas, lo que podemos considerar como religioso, está incrustado en otros aspectos de la vida cotidiana. Frecuentemente es difidl separar lo reli¬ gioso, lo económico o lo político, de otros aspectos de la cultura. Tales culturas tienen poca o ninguna espedalizadón en cada uno de esos aspectos: no existen sacerdotes a tiempo completo, no hay actividades puramente rehgiosas, etc. Los diferentes aspectos de la cultura (por ejemplo, los que hemos utilizado como títulos de los ca¬ pítulos de este libro) no están separados ni fócilmente re¬ conocidos en muchas sociedades, como lo están en sociedades más complejas como la nuestra. Sin embargo, aveces es difícil, induso para nosotros, darnos cuenta de á alguna de nuestras costumbres particulares es reli�osa. Después de todo, la categorización de las creencias
en religiosas, políticas o sociales es una costumbre relati¬ vamente nueva. Por ejemplo, la antigua Grecia no conoda ningún término para la religión, ya que tenía muchos conceptos relacionados con la conducta de sus dioses y sus propios deberes con ellos. Guando los deberes de las personas con los dioses es¬ tán en relación con los que tienen con sus príncipes, es dificil separar religión de ideas políticas. Gomo ejemplo de nuestra propia dificultad para denominar a un tipo particular de acción o de creencia como «religioso» o «social», podemos considerar nuestras actitudes en d vestir. Greemos que es necesario vestirnos, al menos en compañía de quienes no son nuestros amantes, ¿Es un principio religioso o es algo más? Recordemos que en d Génesis, vestir ropas u hojas de higuera, está asociado con la pérdida de la inocencia: Adán y Eva, después de comerse la manzana, cubrieron su desnudez. De la misma forma, cuando los misioneros cristianos visitaron por primera vez las islas dd Pacífico durante d siglo xix, forzaron a las mujeres nativas a vestirse, particularmente cubriendo sus órganos sexuales, ¿Tenían los misioneros conceptos religiosos sobre el sexo� eran conceptos socia¬ les, o quizá ambos a la vez?
La universalidad de la religión Las creencias y prácticas religiosas existen en todas las sociedades contemporáneas conocidas, y los arqueólogos �ensan que han encontrado signos de creencias rehgiosas asociadas con d Homo sapietts que vivió al menos hace 60,000 años. Estas gentes enterraban deliberada¬ mente a sus muertos y en muchas de estas tumbas se han encontrado restos de comida, herramientas y otros obje¬ tos que probablemente se pensó que necesitarían en su vida después de su muerte. Algunas de las producciones artísticas de los humanos modernos, tras unos 30,000 años, pudieron ser usadas para un fin rehgioso; por ejemplo, las esculturas de mujeres con gran desarrollo de sus caracteres sexuales secundarios pueden haber sido utilizadas en ritos de fertflidad. Las pinturas de las caver¬ nas en las que hay un predominio de figuras de animales de caza pueden reflejar la idea de que las imágenes tenían algún poder sobre los acontecimientos. Quizá estos pri¬ meros humanos pensaban que sus cacerías tendrían más éxito si dibujaban imágenes, pidiendo así buena suerte en dichas cacerías. Los detalles de las religiones dd pa¬ sado son difíciles de recuperar, aunque la evidencia de ri¬ tuales funerarios sugiere que aquellas gentes creían en la existencia de espíritus sobrenaturales con los que trata¬ ban de comunicarse, además de creer en la posible in¬ fluencia que éstos podían ejercer,
Capítulo 2 5 Religión y magia 533
Podímosj por tanto� suponer di forma razonable la existencia de la religión durante la Prehistoriaj y tenemos la evidencia de la univei�alidad de la religión «n los tiem¬ pos históricos» por eso podemos entender que el sujeto de la religión haya sido motivo de muchas especulacionesj investigaciones y teorías. lÉa en el siglo v a. C, Heródoto efectuó afortunadas comparaciones objetivas entre las religiones de alrededor de 50 sociedades por las que viajó desde su país» Grecia» Detectó muchas simiÜtudes entre los distintos dioses y aventuró la opinión de la diíusión de las actividades religiosas. Durante los 2,500 años siguientes a la época de Heródoto estudiosos� teólo¬ gos� historiadores y filósofos han especulado sobre las re¬ ligiones. Algunos han proclamado la superioridad de su propia religión; otrtas han ridiculizado la simpleza de las creencias de los demás; y algunos han expresado su es¬ cepticismo con respecto a todas las creenciasLas especulaciones sobre qué religión es superior no nos conciernen desde el punto de vista antropológico. Lo que realmente nos interesa en Antropología es por qué aparece la religión en todas las sociedades» cómo y por qué la religión varia de una sociedad a otra. Muchos científicos sociales» particularmente antropólogos» soció¬ logos y psicólogos� han elaborado teorías para explicar la universahdad de la reUgión. La mayoría piensa que las rehgiones son creadas por los humanos como respuesta a ciertas necesidades o condiciones universales. Conside¬ remos aquí cuatro de esas necesidades o condiciones: ne¬ cesidad de comprensión intelectual» el regreso a los sentimientos de la infencia» ansiedad e incertidumbre y una necesidad de comunidad,
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Necesidad d e comprenseón
Uno de los primeros científicos sociales que propuso una teoría sobre el origen de la religión foe Edward Tylor, Según su concepción» la religión se originó como resul¬ tado de las especulaciones de la gente frente a los sueños» los trances y la muerte. La muerte» la distante» la de la casa próxima» la de los animales» era vista como real en los sueños y en los trances. Tylor pensó que la apariencia real de las personas y los animales soñados o imaginados sugerían una existencia dual para todo» un cuerpo físico visible y un alma invisible y psíquica. Durante el sueño» el alma puede abandonar el cuerpo apareciéndose a otras personas; en la muerte el alma deja permanentemente el cuerpo. Como los muertos se pueden aparecer en los
sueños» la gente comenzó a pensar que sus almas perma¬ necían alrededor de ellos� Tylor opinaba que la creencia en las almas fiie la pri¬ mera forma de religión; aniimsmo es el término utiÜzado para referirse a la creencia en las almas. Pero muchos estudiosos criticaron la teoría de Tylor por ser demasiado intelectual y olvidar el componente emocio¬ nal de toda religión. Uno de los estudiantes de Tylor» R. K. Marett» creyó que su animismo era una teoría de¬ masiado sofisticada para explicar el origen de la religión, Marett propuso que el animatismo» entendido como la creencia en foerzas naturales impersonales (por ejemplo» el poder de una pata de conejo) precedía a la creación del concepto de los espíritus. Una idea similar sostiene que cuando la gente cree en dioses» los antropomorfizan, es decir, les atribuyen características humanas y motivacio¬ nes no humanas» particularmente acontecimientos so¬ brenaturales. La antropomorfización puede ser un intento de comprender lo que de otra forma sería in¬ comprensible e inquietante. RETORISÍO a los SENTÍMÍEISÍTOS [NFANT[LES
Sigmund Freud opinaba que los humanos primitivos vivían en grupos» cada uno de los cuales estaba domi¬ nado por un tirano que se guardaba a todas las mujeres para él, Freud postuló que» al madurar» los hijos eran conducidos foera del grupo. Más tarde se reunían para matar y comerse al padre odiado. Pero entonces los hi¬ jos sentían una gran culpa y remordimientos que ex¬ presaban (proyectándolos) prohibiendo matar a un tótem animal (sustituto del padre). Con ocasión de los rituales» la escena caníbalística se repetía bajo la forma de la comida del tótem. Freud creía que estas prácti¬ cas ancestrales eran gradualmente transformadas en el conjunto de deidades o de dioses modelados según el padre. la interpretación de Freud sobre el origen de las refigiones no es aceptada por la mayoría de los científicos actuales» aunque sí existe acuerdo en la idea de que los acontecimientos vividos durante la infenda pueden te¬ ner efectos poderosos y a largo plazo sobre las creencias y prácticas de la vida adulta. La ayuda y dependencia de los padres durante tantos años hacen que los niños y jó¬ venes los vean inconscientemente como omniscientes y todopoderosos. Cuando un adulto pierde el control o tiene necesidades» inconsciente e inevitablemente regresa a los sentimientos infentiles o juveniles. Entonces pue¬ den ver en los dioses o en la magia todo lo que ellos no pueden hacer por sí mismos» de la misma forma en la que veían a sus padres cuando cuidaban de sus necesida¬ des� Como veremos después» hay evidencia de que los
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sentiinientcsí sobre ei mundo sobrenatural van paralelos COD los sentimientos de la vida cotidiana» Ansied ad e i n s e gu r i d ad Freud pensaba que los seres humanos regresaban a la religión en épocas de inseguridad» a pesar de que no te¬ nía una opinión positiva di la misma� y creía que los se¬ res humanos debían erradicar la necesidad de la religión, Otros autores veían la religión más positivamente» MU Bronislaw Malinowski dijo que las gentes de todas las so¬ ciedades se enfrentaban con la ansiedad y la inseguridad. Pueden tener la habilidad y el conocimiento necesarios para satisfacer muchas de sus necesidades� pero el cono¬ cimiento no es suficiente para combatir las enfermedades> los accidentes y las catástrofes naturales, La perspectiva más aterradora es la muerte» ConsecuentementCj aparece un intenso deseo de conseguir la inmor¬ talidad yj como observó Malinowski� la religión nace como cor�cuencia de la necesidad universal de encon¬ trar el bienestar en los tiempos inevitables del nervio¬ sismo» Por medio de las creencias religiosas la gente afirma sus convicciones de que la muerte no es el final ni es real> de que los individuos están dotados de una per¬ sonalidad que persiste incluso después de la muerte» En las ceremonias religiosasj los humanos pueden conme¬ morar y comunicarse con aquellos seres queridos que han muerto y� de esta forma� pueden conseguir algunas formas de bienestar, Otros teóricos como William lames» Cari lung� Erich Fromm y Abraham Maslow han contemplado la religión de forma mucho más positiva» Para ellos» la religión do es sólo una forma de mejorar la ansiedad» sino que es in¬ cluso terapéutica» Asi» lames sugirió que la religión pro¬ porciona un sentimiento de unión con algo superior a uno misma Jung opinó que ayudaba a la gente a resolver sus propios conflictos internos y proporcionaba madu¬ rez» Fronun dijo que la religión confería a la gente un marco de valores y Maslow argumentó que proporcio¬ naba una comprensión trascendental del mundo. N e c es i d ad de co m u n i d ad Todas las teorías sobre la religión coinciden en una cosa: sean creencias o rituales» la religión puede satisfacer las necesidades psicológicas comunes a todas las perso¬ nas» Pero algunos científicos sociales creen que la religión surge de la propia sociedad y cubre más las necesidades sociales que las psicológicas. Émile Durkheim» un soció¬ logo francés» per�saba que la vida en sociedad hace que los seres humanos se sientan movidos por fiaerzas sobre¬ naturales» Estas fuerzas dirigen su conducta» hacen que se
resista ante lo que considera erróneo y lo empujan hacia lo que considera acertado- Estas fuerzas son la opinión pública» las costumbres y las leyes. Como éstas general¬ mente son invisibles e inexplicables» los seres humanos las consideran fuerzas misteriosas para acabar creyendo en los dioses y los espíritus» Durkheim sugirió que la re¬ ligión surge de la experiencia de vivir en grupos sociales; las creencias y prácticas religiosas afirman el lugar que ocupa una persona dentro de su sociedad» refuerzan los sentimientos comunitarios y dan confianza a la gente. Propuso que la sociedad es realmente el objeto de culto de la religión, La forma en la que Durkheim explicó el totemismo fije motivo de discusión para los primeros teóricos de las religiones» Creía que nada relacionado con un la¬ garto» una rata o un sapo» animales totémicos para algu¬ nos grupos de aborígenes australianos» sería suficiente para convertido en un animal sagrado, H tótem animal debe de ser un símbolo pero» ¿un símbolo de qué? Dur¬ kheim comentó que la gente estaba organizada en danés y cada d a n tenía su propio tótem animal» que distinguía aun dan de los demás» Asi» d tótem es d foco de los ri¬ tuales religiosos y de los símbolos tanto dd propio dan como de sus espíritus» Es d dan con lo que se identifica la mayoría de las personas» y es d d an lo que se afirma en d ritual. Guy Swanson aceptó las teorías de Durkheim de que ciertos aspectos o condiciones de la sociedad son los que generan la respuesta denominada religión� pero pensó que Durkheim fue demasiado impreciso sobre lo que la creencia en espíritus o dioses generaría en la sociedad, Por eUo» Swanson consideró que la creencia en los espíri¬ tus deriva de la existencia de grupos soberanos en una so¬ ciedad» Éstos son grupos que poseen jurisdicción independiente (poderes de toma de decisiones) sobre al¬ guna de las esferas de la vida como la familia» el dan� d poblado» el Estado» Estos grupos no son mortales; persis¬ ten más allá de la vida de sus miembros individuales» De acuerdo con la teoría de Swanson� los espíritus o dioses que inventa la gente personifican o representan d poder de toma de decisión de los grupos en sus sociedades» Al igual que los grupos soberanos de una sociedad» los espí¬ ritus o dioses son inmortales y tienen metas y fines que sobreviven a los dd individuo,
Variaciones en las creencias religiosas No existe acuerdo general entre los estudiosos sobre porqué fa gente necesita la religión� o cómo aparecen es¬ píritus» dioses y otros seres y fuerzas sobrenaturales»
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Fronteras de la investigación La utilidad de la rell�ién: tabúes entre l«5 pescadores de Nu «v a Inglaterra Las personas que intervienen en actividades arriesgadas intentan te¬ ner mayor seguridad llevando amu¬ letos. Creen que éstos les protegen por medio de ia ayuda de seres o fuerzas sobrenaturales. Tenemos que creer también que pueden proteger¬ nos sin hacer nada. Por ejemplo� los jugadores de béisbol tras ganar un partido pueden escoger entre no cambiarse de medias o de camisa para el próximo partido. También podemos obedecer una determi¬ nada prohibición porque pensamos que al hacerlo podemos ser castiga¬ dos por fuerzas sobrenaturales. Por ejemplo» podemos dejar de tomar una serie de alimentos durante un periodo de tiempo, ¿Por qué? ¡Dios sabe! Si las creencias y prácticas reli¬ giosas pueden incidir en que tenga¬ mos éxito o podamos reducir un riesgo> entonces tenemos que consi¬ derar que son útiles o adaptativas ya quei al menos» reducen nuestra an¬ siedad. Y reducir la ansiedad puede aumentar indirectamente nuestros éxitos. ¿Acaso los actores no tratan de disminuir su «miedo escénico» antes de una representación? Las prohibiciones (tabúes) son muy po¬ siblemente adaptativas en este sen¬ tido, Algunos investigadores han estudiado a los pescadores de Nueva Inglaterra» quienes aseguran que sus tabúes o «rituales de ayuda» pueden reducir su ansiedad. John Poggie y Richard PoUnac ent revistaron una mu estra al azar de
IOS pescadores comerciales de tres puertos de Nueva Inglaterra» tra¬ tando de explicar el número de ta¬ búes que existían entre los pescadores» y para ello les pidieron que describieran todas las supersti¬ ciones relacionadas con la pesca que pudieran recordar. Los pescadores se avergonzaban de explicar sus creen¬ cias rituales y sus prácticas� diciendo que realmente ellos no creían estos tabúes» aunque sí admitían que tra¬ taban de no rompe dos mientras es¬ taban pescando. Los tabúes prohibían decir o hacer ciertas cosas ysi no se cumplían algo malo podía pasar. Los citados con mayor fre¬ cuencia fueron ,Júuma¡far �ScieritificStudy 15 (1976): 257-62,
detalles de las creencias y prácticas religiosas. Las socie¬ dades difieren en el tipo de seres sobrenaturales o fuerzas en las que creen y en las características de esos seres. También difieren en la estructura o jerarquía de esos
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seres� en lo quí hacín actualmíntí y en lo qu í sucede a la gente después de six muerte. Existen variaciones también en las fonnas en las que lo sobrenatural interactúa con los seres humanos. TíPOS DE FUERZAS Y SERES SOBRENATURALES
FUERZAS SOBRENATURALES. Algunas de estas fuerzas sobrenaturales no poseen características perso¬ nales, Como hemos comentado anteriormentej Marett se referia a tales creencias religiosas como animatismo. Por ejemplo� una fuerza impersonal sobrenatural� llamada inaDa« un nombre Malayo-Polinesio� se cree que habita en unos objetos pero no en otros y en algunas personas pero no en otras. Un granjero de Polinesia acumula pie¬ dras alrededor de un campo y> si las cosechas son buenas� es porque las piedras tienen mana, aunque en años suce¬ sivos las piedras pueden perder el mana y las cosechas pueden empeorar. También pueden tener mana las per¬ sonas; por ejemplo� se decía que lo poseían los jefes déla Polinesia. Sin embargo� este poder no se posee necesaria¬ mente de forma permanente y así> los jefes que no tenían éxito durante la guerra o en otras actividades� se consi¬ deraba que habían perdido su mana. Aunque el término mam pueda ser malayo-polinesio, en nuestra sociedad encontramos un concepto muy si¬ milar. Podemos comparare! mana con el poder que los golfistas pueden atribuir a algunos pero� desgraciada¬ mente no a todosj los miembros de su duK y un jugador de béisbol puede pensar que cierta camiseta deportiva o un determinado par de medias tienen poderes o fuerzas sobrenaturales, de forma que gracias a ellas se pueden ganar más carreras o puntos cuando se los pone. Tamtñén tiene mana u n trébol de cuatro hojas» en tanto que no lo tiene el de tres hojas. Por otra parte, tanto objetos como personas o lugares pueden ser considerados tabvu Anthony Wallace distin¬ guió mana de tabú diciendo que las cosas que contienen mana se pueden tocar, en tanto que las que son tabú no se pueden tocar ya que su poder puede causar daño. Por tantOj aquello que se toca también puede convertirse en tabú. Los tabúes relacionados con la comida no se pue¬ den comer, en los que son lugares no se puede entrar, los que son animales no se pueden matar, con ciertas perso¬ nas no se pueden tener relaciones sexuales, a otras no se las puede tocar, etc. Un aborigen australiano no puede matar ni comer el animal que es su tótem, y las tribus de los hebreos tenían prohibido tocara cualquier mujer du¬ rante la menstruación y hasta siete días después de ella. SERES SOBRENATURALES. Los seres sobrena¬ turales pueden entrar en dos tipos de categorías: los de
Hay un $itio en el mundo para toda$ la$ reli�ione$; para aquello8 que creen en las rocas, para los que creen en los árboles, para los que creen en las nubes... (© 1SS4p por Sidney Harris). origen no humano, como dioses y espíritus, y los que tie¬ nen un origen humano, tales como fentasmas y espíritus de los antepasados. Entre los de origen no humano» los principales son los diosas» que a veceSj pueden ser antropomórficost esto es, concebidos a imagen de una persona, aunque a veces se les concede forma de otros animales o de cuerpo celestial, tales como el sol o la luna. Esencial¬ mente se creía que los dioses se han creado a sí mismos» a pesar de que algunos de ellos han sido creados o han nacido de otros dioses. Aunque algunos han sido consi¬ derados como dioses creadores» no todos los pueblos in¬ cluyen la creación del mundo como uno de los actos de los dioses. Tras el esfuerzo de la creación, muchos de los dioses creadores se retiran, tras haber puesto el mundo en mo¬ vimiento» porque no están interesados en las operaciones cotidianas del mismo. Otros dioses creadores sí perma¬ necen interesados en los acontecimientos cotidianos de los seres humanos» especialmente en los asuntos de un reducido grupo de elegidos de la humanidad, Tenga o no tenga determinada sociedad un dios creador, el trabajo de llevar a cabo la creación, a menudo se deja a los dio¬ ses menores. Por ejemplo, los Maoríes de Nueva Zelanda, reconocen a tres dioses principales: uno del mar, otro de los bosques y otro de la agricultura. Adoran a cada uno de ellos en función de la necesidad concreta en cada caso, y a los tres para compartir la forma en la que se creó el
Capítulo 25 Religión universo. Los dioses de la anügua Roma estaban alta¬ mente especializados� erastían tres dioses para ayudar a arar, udo para la siembra� otro para la siega> otro para al¬ macenar el granoj otro para abonar� etc, Próximos a los dioses en cuanto a prestigio» y fre¬ cuentemente muy próximos a los hombreSj están multi¬ tud de espíritus sin denominación. Unos pueden ser espíritus guardianes de las personas� otros que desempe¬ ñan trabajos extremadamente eficaces pueden ser eleva¬ dos hasta el rango de dioses- Hay otros espíritus que� a pesar de ser conocidos por la gente> no se invocan nunca ya que son del tipo de los duendes: éstos» dedicados a ha¬ cer travesuras» suelen tener la culpa de gran numero de las pequeñas desdichas que puedan ocurrin incluso otros espíritus obtienen placer al efectuar acciones diabólicas con las personas. Muchos grupos de nativos americanos creían en es¬ píritus guardianes que ellos tenían que buscar» general¬ mente durante la infancia» Por ejemplo» entre los Sanpoil dd nordeste de Washington se enviaban a chi¬ cos» y a veces también a chicas» para que al caer la noche buscaran a sus guardianes. La mayoría de estos espíritus eran animales» aunque a veces podían ser rocas» lagos» montanas» torbellinos o nubes de formas particulares. Pero esta vigilancia no siempre tenía resultados. Cuando tenía éxito» el espíritu guardián aparecía en una visión o un sueño» y siempre con forma humana. Las conversa¬ ciones mantenidas con el espíritu revelarían su verda¬ dera identidad,
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Entre los seres sobrenaturales que fueron humanos alguna vez se encuentran ios fentasmas y los ®pírllu5 ancestrales. La creencia de que tanto los &itasmas como sus acciones puedan ser percibidos por los seres vivos es casi universal. Esta universalidad no es diñcil de explican Existen muchos asuntos en las experiencias cotidianas asociadas con lo que uno ama» e induso después de su muerte aqudlos asuntos pueden hacer que la persona querida continúe presente de alguna manera. La aper¬ tura de una puerta» d olor dd tabaco o de la colonia en una habitación pueden evocarla idea de que aquella per¬ sona está todavía presente» aunque sólo sea durante un instante. Entonces» también» las cosas amadas viven en los sueños. Por todo eUo no es de extrañar que la mayo¬ ría de las sociedades crean en los �ntasmas, Si la idea de los fentasmas está generada por estas asociaciones fami¬ liares» es de esperar que los fantasmas sean en la mayoría de las sociedades familiares próximos o amigos» nunca extraños, Y así ocurre. Aunque la creencia en fantasmas es casi universal» los fantasmas de los muertos no tienen un papd activo en la vida de los vivos en todas las sociedades. En un estudio transcultural efectuado en 50 sociedades» Swanson en¬ contró que la gente era prodive a creer en espíritus an¬ cestrales activos cuando los grupos de filiación eran importantes unidades de toma de decisiones- Los grupos de filiación son entidades que existen a lo fargo de los tiempos» tanto en d pasado como en d futuro» a pesar de la muerte de sus miembros. La muerte se asocia con la fortuna» el prestigio y la continuidad dd grupo de des¬ cendientes lo mismo que durante la vida. Como decía un anciano Lugbara (en d norte de Uganda» en África): «¿No son nuestros antepasados gente de nuestro linaje? Ellos son nuestros padres y nosotros sus hijos a quienes ellos tienen que engendran Una vez que han muerto per¬ manecen cerca de nosotros en nuestras casas y nosotros los alimentamos y respetamos. ¿No ayuda un hombre a su padre cuando es anciano?>>,
El cae�cter de los s e r e s sobrenaturales
Una manta Navajo del eiglo xix basada en el diseño de una pintura $obre arena muestran a dos seres sobrena¬ turales flanqueados por dos plantas de maíz sagradas, que fue un regalo a los humanos
Sean del tipo que sean» los dioses o espíritus venera¬ dos en una cultura determinada tendrán personalidades o características determinadas. Pueden ser predecibles o impredecibles» fHos o interesados en los asuntos huma¬ nos» ayudar o castigan Pero» ¿por qué exhiben dioses y es¬ píritus de una cultura determinada unos caracteres diferentes de los de otras? Tenemos algunas evidencias procedentes de estudios transculturales de que las características de los seres so¬ brenaturales pueden estar relacionadas con la educación de los niños, Melford Spiro y Roy D'Andrade sugirieron
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que las relaciones dioses-humanos eran una proyección de las relaciones padre-hijo» en cuyo caso las prácticas educativas de los ninos pueden estar relacionadas con lo sobrenatural. Por ejemplo� si un niño era alimentado rápdamente por sus padres nada más comenzar a llorar, o mecido en brazos o golpeado� se podía esperar que cre¬ ciera con la esperanza de ser criado por los dioses cuando atrajera su atención a travos de un ritual. Y, por el contrario� si sus padres lo castigaban con frecuencia� espera¬ ría el castigo de los dioses si los desobedeciera- William Lambertj Leigh Mintum Triandis y Margaret Wolf, en otro estudio transcultural» encontraron que las socieda¬ des con una educación punitiva de los niños eran procli¬ ves a creer en dioses agresivos y malevolentes� en tanto que las sociedades con educaciones menos punitivas de los niños eran más proclives a creer en dioses benevolen¬ tes. Estos resultados coinciden con la opinión freudiana de que el mundo sobrenatural sería paralelo al mundo natural. No es extraño que en este contexto algunas per¬ sonas se refieran a los dioses como a sus padres y a ellos mismos como a sus hijos.
E st r u ct ur a o ierarquía de l o s ser es SOBRENATURALES fl rango de las estructuras sociales humanas� desde las igualitarias hasta las más estratificadas� tiene su contra¬ partida en el mundo sobrenatural. Algunas sociedades poseen dioses o espíritus que no tienen un rango deter¬ minado: un dios tiene tanto poder como otro. Otras so¬ ciedades tienen dioses o espíritus que tienen diferencias en cuanto al grado de prestigio o poder. Por ejemplo, en la isla de Palau en el Pacífico� que tiene una sociedad de rangos� los dioses se clasifican de la misma forma que las personas: cada clan tiene un dios y una diosa que osten¬ tan el mismo nombre que el dan, aunque cada uno de estos dioses sea importante sólo para los miembros de ese dan, y por tanto todos los dioses de los distin¬ tos danés de un poblado tienen los mismos rangos que los clanes a los que están asignados. De esta forma» el dios del dan de rango más elevado es adorado por todos los clanes del poblado. Su santuario está en un lugar de honor situado en el centro del poblado, siendo mayor y más decorado que los demás santuarios. A pesar de que los Palaus no creen en un dios princi¬ pal o ser supremo que esté por encima de los demás dioses� algunas sociedades sí lo tienen. Consideremos el judaismo, el cristianismo y el islam, a los que denomina¬ mos reUgiones monoteístas. A pesar de que el término monoteísUi significa «un dios»» la mayoría de estas reli¬ giones en la actualidad induyen a más de un ser sobre¬ natural (por ejemplo» demonios» ángdes� d diablo)» si
bien d ser supremo o dios principal» como creador del universo o director de todos los acontecimientos (o am¬ bos), se cree que es d responsable último de todo lo que ocurre. Una refigión politeísta reconoce a varios dioses importantes, ninguno de los cuales es d supremo. ¿Por qué unas religiones creen en un dios supremo y otras no? Recordemos la opinión de Swanson de que la gente inventa a los dioses personificando a los grupos que toman las decisiones importantes de su sociedad. Segíín él» las sociedades con estructuras políticas jerárqui¬ cas tienden a creer más en un dios superior. En su estudio transcultural sobre 50 sociedades (ninguna de las cuales practicaba una de las religiones más importantes dd mundo), encontró que la creencia en un dios supe¬ rior estaba fiaertemente asociada con tres o más niveles de grupos de «soberanía» (de toma de decisiones). De entre las 30 sociedades que tenían tres o más de estos grupos de soberanía (por ejemplo» femilia» dan y jefetura) 17 tenían la idea de un dios superior. De entre las 19 sociedades que tenían menos de tres nivdes de grupos de soberanía» solamente dos tenían u n dios superior. Coincidiendo con los hallazgos de Swanson, las socieda¬ des dependientes de la producción de alimentos tienen mayor tendencia a creer en un dios superior que las so¬ ciedades recolectoras de alimentos. Entonces,estos resul¬ tados sugieren firmemente que d reino de los dioses es análogo y puede reflejar el mundo social y político coti¬ diano.
Intervención de l o s díoses EN LOS ASUNTOS HUMANOS Según Chfford Geertz� cuando nos enfirntamos con la ignorancia» con d dolor y las injusticias de la vida es cuando se explican los acontecimientos por la intervendon divina. Así, en la religión griega fiie la intervención directa de Poseidón, como señor de los mares, la que im¬ pidió a Ulises durante diez años regresar a su hogar. En d Antiguo Testamento» fue la intervención directa de �hvé la que causó la gran inundación que mató a la ma¬ yoría de la gente en época de Noé. En otras sociedades» las personas pueden buscar en su memoria para encon¬ trar violaciones de tabúes que hayan provocado los cas¬ tigos por intervenciones sobrenaturales. Además de intervenciones divinas indeseables, exis¬ ten muchos ejemplos de este tipo de actuaciones» tanto para d bien de uno y de los suyos» como para fetalidad de los otros. Se pide la intervención a los dioses para que d tiempo sea fevorable» para que crezcan las cosechas, para que sean capturados peces por los pescadores» para que haya presas para los cazadores, para encontrar las cosas perdidas» para que acompañe a los viajeros y para
Capítulo 25 prevenir accidentes, También se les pide que detengan un río de lava procedente de un volcán� para que paren una guerra o para curar enfermedades, Los dioses no intervienen en todas las sociedades. En algunas» intervienen en los asuntos humanos; en otras no tienen ningún interés en ellos; e incluso en otras interfie¬ ren sólo de forma ocasional. Existen pocas investigacio¬ nes sobre por qué interfieren los dioses en la vida de unas sociedades pero no en otras. Sin embargo� tenemos algu¬ nos datos que sugieren cuándo se interesan por la mora¬ lidad o inmoralidad de la conducta humana. El estudio de Swanson sugiere que los dioses tienden a castigar a la gente por su conducta inmoral cuando existen grandes diferencias de riquezas en una sociedad. Su interpreta¬ ción es que el apoyo sobrenatural de la conducta moral es particularmente útil cuando las desigualdades pre¬ mian la habilidad del sistema político para mantener el orden social y disminuir los desórdenes sociales. La envi¬ dia de los privilegios de otros puede motivar a algunas personas a ser inmorales; la creencia de que los dioses castigarán tal comportamiento podría desalentarlo. VíDA DESPUÉS DE LA MUERTE En muchas sociedades son vagas las ideas sobre una vida después de la muerte� e induso no se les otorga nin¬ guna importancia� pero en otras� por el contrario» existen ideas muy elaboradas y definidas de lo que ocurre des¬ pués de la muerte. Los Lugbara creen en la muerte como forma de irse con los antepasados que viven y permane¬ cen cerca de las femilias en su tierra. Ellos siguen intere¬ sados en la vida de su antigua comunidad y los recompensan o castigan. Los Zuni del suroeste de EE UU creen que tras la muerte se irán con sus muertos� a los que llaman katciíws, que moran en un poblado de katcinas situado en el fondo de un lago próximo. Allí vivirán cantando y danzando y proporcionando lluvias a los Zuni todavía vivos. De la misma forma que castigarán a los sacerdotes que no h�n bien su trabajo» castigarán también a los enmascarados que durante sus danzas ce¬ remoniales personalicen a los katcinas de forma inade¬ cuada,
CD-ROM Actividad de vídeo iii-10
Los Chamulas han unificado la antigua danza Azteca del sol y de la luna con Jesús y María traídos por los con¬ quistadores españoles. Su visión de la vida después de la muerte está formada por la mezcla de las dos culturas. To¬ das las almas van al infi�amundo» donde viven de forma
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semejante a los hombres» excepto en que no pueden tener relaciones sexuales, Después de pasar por el mundo el sol se va al inframundo» con lo que la muerte es luminosa, Sólo son castigados los asesinos y los suicidas» que son quemados por el Cristo-sol durante el resto de sus días. Muchos cristianos creen que hay dos grupos de muer¬ tos: los que no se han salvado» expulsados para que reci¬ ban castigo durante la eternidad» y los que se han salvado» que gozarán de recompensas eternas, A pesar de las diferencias» el infierno se suele concebir ft�ecuentemente asociado a torturas con fuego> y el cielo se asocia con mansiones. Varias sociedades ven la muerte como un retorno ala tierra por medio déla reencarnación. Asi» los hindúes utilizan este modelo de reencarnación para jus¬ tificar sus castas en esta vida y para prometer eventuales escapes de lossufi�imientos de la vida por medio de su in¬ clusión en el nirvana, o inclusión en el Uno. El otro mundo de otras religiones puede recordar al actual» pero feltan estudios comparativos que muestren exactamente de qué forma. �Variaciones en las prácticas religiosas
Las creencias no son los únicos elementos de la reli¬ gión que varían de una sociedad a otra. También existen variaciones en la forma en la que las personas interactúan con lo sobrenatural. La forma en la que nos aproxi¬ mamos a los temas sobrenaturales: desde la súplica (ruegos» oraciones» etc,) a la manipulación. Y las socieda¬ des varían en el tipo de prácticas religiosas que tienen. Formas de ikt era ct ua r CON LO s o b re n a t u r a l Cómo conseguimos contactar con lo sobrenatural ha llegado a ser un problema universal. WaHace identificó cierto número de vías usadas por las gentes de todo el mundo» a pesar de que no todas incluían necesariamente» TÚ se limitaban a rezar (petición de ayuda sobrenatural)» experiencias fisiológicas (haciendo algo con el cuerpo y la mente)» simulación (manipulaciones a imitación de algo)í banquetes y sacrificios. Las oraciones pueden ser espontáneas o memorizadas» privadas o públicas» silen¬ ciosas o en voz alta. Por ejemplo» los Lugbara no dicen las palabras de la oración en voz alta: para hacerio así debe¬ rían ser muy poderosos; ellos simplemente piensan en las cosas que quieren que les ocurran. Los dioses conocen todos los lenguajes, Hacer cosas con el cuerpo o la mente puede incluir las drogas (alucinógenos tales como el peyote o los opiáceos)
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Aunque tod4$ l4$$o{?iedade$ tienan prácticas y craanda? raligio$aQ, a$ta$ fotografías muestran grados de varia¬ ción: fieles vestidos de blanco en un templo vietnamita; un devoto haciendo una ofrenda a los pies de una estatua de un templo Indio; tiempo de oración antes de un partido de fútbol en Arabia Saudí; celebrantes compartiendo ali¬ mentos y bebidas con los difuntos en un cementerio de Perú.
o el alcohol; d ai�mieDtQ q la privaciÓD sensorial; la danza o la carrera hasta caer exhau�os; la privación de alimentos� de agua o de sueño; escuchar un sonido repe¬ tido tal como unos tambores. Tales comportamientos pueden inducir trances o estados alterados de conciencia. Erika Bourquignon descubrió que el logro de estos esta¬ dos alterados, que definió como trances� es parte de las prácticas religiosas en el W por ciento de las sociedades del mundo. En algunas sociedades los trances se relacio¬ nan con la presencia de un espiritu o poder en el interior de una persona que camUa o desplaza la personalidad o el alma de esa persona. Estos tipos de trance se llaman
trances de posesión. Otras formas de trance pueden rela¬ cionarse con el viaje del alma de una personaj experi¬ mentar visiones o la transmisión de mensajes de los espíritus. Los trances de posesión son más frecuentes en las sociedades que dependen de la agricultura, tienen es¬ tratificación social» esclavos y jerarquías políticas más complejas. Los trances sin posesiones suelen producirse en sociedades recolectoras de alimentos. Las sociedades con niveles moderados de complejidad social tienen tanto trances de posesión como de no posesión. El vudú utiliza la simulación o la imitación de cosas. Las muñecas se elaboran a imitación de los enemigos y se
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maltratan «n espera de que el enem�o original experi¬ mente dolor e incluso la muerte- La simulación se em¬ plea con frecuencia durante la adivinación, o forma de alcanzar lo sobrenatural� para obtener una «guia»» Mu¬ chas personas de nuestra sociedad hacen leer su futuro por medio de bolas de cristalj posos de té» la mesa de es¬ piritismo o las cartas» O, induso� prefieren la acción de una moneda arro�da o tirar unos dados- Todo son va¬ riaciones de los métodos utilizados en otras culturas. Omar Moore sugirió que entre los cazadores Naskapi del Labrador> la adivinación es una estrategia adaptativa para una caza con éxito. Para elloj los Naskapi consultan con el adivino cada tres o cuatro días si no han tenido suerte en sus cacerías. El adivino tira un hueso de caribú sobre el fuego; como si el hueso fiaera un mapa» el adi¬ vino lee en las quemaduras y fracturas que aparecen en él y que le indican a qué lugar deberá ir a cazar el grupo. Moore� al contrario que los Naskapi� no cree que el adi¬ vino pueda realmente saber dónde se van a encontrar los animales; las roturas del hueso le proporcionan sólo una pista para escoger al azar dónde ir a cazar. Como los se¬ res humanos tienden a desarrollar patrones de acción ba¬ sados en la costumbre» también pueden tender a buscar las presas de acuerdo con algún plan establecido a pesar de que éstas pueden aprender a evitar a los cazadores que actúan según dicho plan. Por tanto» cada método que ac¬ túe en contra de planes preestablecidos» cada forma de estrategia al azar puede ser ventajosa. La adivinación «le¬ yendo» los huesos podría ser una estrategia al azar» ade¬ más de relevara un individuo de la responsabilidad de tener que decidir dónde i r a cazar� decisión que puede ser causa de hambre si el cazador fracasa, La comida de un alimento sagrado se encuentra en muchas religiones. Por ejemplo» la 0?munión es una si¬ mulación de la Ultima Cena, Los aborígenes australianos normalmente tienen prohibido comer a sus animales totémicos; no obstante hacen un banquete al año co¬ miendo a este animal. Estos banquetes forman parte» frecuentemente» de la celebración de bodas y funerales» al mismo tiempo que constituyen una forma de ofrecer un sacrificio de ahmentos a los dioses, Algunas sociedades hacen sacrificios a los dioses tanto para obtener su influencia beneficiosa como para evitar su disgusto y atraer las bendiciones. Característico de to¬ dos los sacrificios es que se da algo de valor a los dioses» bien sean alimentos» bebidas» sexo» bienes del hogar» o la vida de un animal o persor�. Muchas sociedades opinan que el dios está obligado a actuar en su fevor si el sacrifi¬ cio ofrecido ha sido el apropiado. Otras utilizan el sacri¬ ficio como un intento para persuadir al dios» aun sabiendo que no existen garantías de que la petición tenga éxito,
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De todas las formas de sacrificio» probablemente pen¬ samos que la entrega de vidas humanas es la mayor prueba. No obstante» los sacrificios humanos no son ra¬ ros en los registros históricos o etnológicos, ¿Por qué lo han practicado algunas sociedades? Un estudio transcultural encontró que entre las sociedades preindustriales» aquellas con artesanos especializados a tiempo total» es¬ clavitud y corvea es más probable que practiquen sacrifi¬ cios humanos. La explicación sugerida fue que el sacrificio refleja lo que es sodahnente importante: las so¬ ciedades que dependen principalmente del trabajo hu¬ mano para obtener energía (más que de los animales o de las máquinas) pueden llegar a pensar que una vida humana es una ofrenda adecuada a los dioses cuando la gente busca entregarles algo importante, Magía
Todos estos modos de interactuar con lo sobrenatural pueden ser categorizados de distintas formas. Una di¬ mensión de la variabilidad es cuánta gente de una socie¬ dad pide perdón, o contesta o trata de persuadir a lo sobrer\atural para que actúe en su beneficio» o lo opuesto si creen que pueden hacer que lo sobrenatural les ayude a llevar a cabo ciertos actos. Por ejemplo» rezar es pedir; hacer vudú es presumiblemente impulsar. Cuando la gente cree que su acción puede impulsar a lo sobrenatu¬ ral para que actúe de alguna forma particular y deseada» los antropólogos se refieren a esta creencia y a sus prác¬ ticas relacionadas como magia. l a magia puede involucrar la manipulación de lo so¬ brenatural para bien o para mal. Muchas sociedades tie¬ nen rituales mágicos diseñados para asegurar buenas cosechas» el aumento de presas para la caza» la fertilidad de los animales domésticos y la ayuda para curar en¬ fermedades en los seres humanos. Tendemos a asociar la creencia en la magia a sociedades más simples que la nuestra, Pero alrededor de 80,000 personas de EE UU se toman la magia muy en serio. Muchas proclaman ser brujas. Comprender por qué la magia en nuestra propia sociedad gusta a unos individuos pero no a otros» nos podría ayudar a dilucidar por qué la magia es una parte importante de las conductas religiosas en muchas socie¬ dades. Como veremos» el médico brujo y el chamán recurren frecuentemente a efectos mágicos para curar, Pero el uso dañino de la magia quizá ha provocado el mayor interés en ella. HECHICERÍA V BRU[ERÍA. lanto uno como Otra son intentos de invocara los espíritus para que actúen de forma dañina contra alguna persona. Aunque las palabras
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Tt En 169� produjo una epidemia da acu�cionae da brujaría an Salam, Ma$$achu$att$- Algunos a�tudio�oe han su¬ gerido que al anvananamianto argotínico pudo ear la causa da que la gante actuara y sintiera como si hubiera estado embrujada {Fuente: Un juicio da brujae en Salem, Ma$$achu$ett$, en 1692� Litografía� $iglo xix). hechicería y brujería se utilicen con frecuencia de forma indiferente» a menudo son distinguibles entre sí. La hediicería incluye el uso de materiales» objetos y medicinas para invocar la malevolencia sobrenatural. La brujería» aunque busca los mismos £nes» utiliza como medios sólo el pensamiento y la emoción. Nunca se pueden encontrar evidencias de brujería. Esta felta de evidencia visible hace que la acusación de brujería sea tan difícil de probar como de desechar. Para los Azande de la República Democrática del Gongo» en Africa central» la brujería es una cosa coti¬ diana. No se usa para explicar acontecimientos de causas conocidas» tales como el descuido o la violación de un tabú» sino para explicar lo que de otra forma sería inex¬ plicable. Un hombre es corneado por un ele�nte. Debe haber sido embrujado» ya que en nii�na caza anterior fue corneado. LFn hombre acude a su cabana por la no¬ che» la techumbre se prende foego y arde la cabana. El hombre ha sido embrujado» ya que las cabanas no ardie¬ ron en los centenares de noches anteriores cuando tanto
él como los demás hacían lo mismo. Alguno de los ca¬ charros hechos por un hábil alferero o alguno de los cuencos labrados por un hábil tallador se rompen. Bru¬ jería. Otros cacharros u otros cuencos tratados exacta¬ mente igual no se han roto. La caza de brujas que se produjo en Europa durante los siglos XVT y xviTj así como los juicios por brujería de 1692 en Salem» Massachusetts» nos recuerdan que el miedo de los demás» que probablemente creían en lo que la brujería representa» puede aumentar o disminuir en las sociedades en un relativamente corto espacio de tiempo. Muchos estudiosos han intentado explicar estas cazas de brujas. Uno de los fectores frecuentemente pro¬ puesto es la agitación política» que pudo dar lugar a la extensión de las sospechas y a la búsqueda de víctimas propiciatorias, En el caso de Europa� durante los siglos XVI y xvii> las pequeñas unidades políticas regionales es¬ taban incorporándose a Estados nacionales» practicán¬ dose fluctuantes alianzas políticas. Además» como mantuvo Swanson»la revolución comercial y los cambios
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relacionados con ella originaron la aparición de una nieva clase� la clase media� y «la aparición del protestan¬ tismo y de otras herejías en el catolicismo romano»* £n el caso d« Salem� el gobierno de la colonia de Massachusetts era inestable y conocía muchas disensiones inter¬ nas. En el año I692j el año de la histeria contra las brujas� Massachusetts se quedó sin gobernador inglés� y bs prácticas judiciales se descompusieron. Estas condi¬ ciones extraordinarias exphcan que la acusación de una sola persona por brujería diera lugar a la acusación de cientos y la ejecución de veinte personas, Swanson cree que fue el socavamiento de los procedimientos políticos legítimos lo que pudo originar el miedo extendido a las tMTujas. Es posible que la difusión de la epidemia de acusacio¬ nes por brujería� tanto en Salem como en otros lugares de Nueva Inglaterra o en Europa� pudo ser el resultado de verdaderas epidemias (enfermedades epidémicas).Es¬ tas epidemias implicadas en el caso de Salem�entre otros» las pudo causarla enfermedad por hongos llamada ergotismo (por el cornezuelo de centeno)» que puede crecer en plantas de centeno (la harina con la que se elaboraba el pan que comía la gente de Salem pudo contaminarse por el cornezuelo de centeno). Se sabe que las personas que comen productos elaborados con el grano contami¬ nado padecen convulsiones� alucinaciones y otros sínto¬ mas como la sensación de hormigueo en la piel También sabemos que este hongo tiene LSD� la droga que causa alucinaciones y otras ilusiones que se aseme� a los tras¬ tornos que aparecen en enfermedades mentales graves. Las supuestas víctimas de brujería de Salem y de otros lugares presentaban síntomas muy parecidos a los que muestran en nuestros días las víctimas del envenena¬ miento por este hongo: convulsiones y sensaciones como si fueran pellizcados� pinchados o mordidos. También tienen visiones y sienten como si volaran por los aires. No podemos saber con seguridad si en Salem se produjo un envenenamiento por cornezuelo en la época de la persecución de brujas� ya que no existen evidencias mé¬ dicas directas� pues las «embrujadas» no fueron exami¬ nadas por ningún médico. Pero sí tenemos algunos datos que parecen confirmar la teoría del ergotismo. Sabemos que el cornezuelo crece en las plantas de centeno bajo ciertas condiciones climáticas (particularmente durante los inviernos muy fríos seguidos por primaveras y vera¬ nos frescos y húmedos). Los estudios efectuados en los anillos de los troncos de los árboles muestran que el co¬ mienzo de la década de 1690 fiae particularmente fHo en Nueva Inglaterra. Cuando comenzaron las acusaciones de brujería en Europa también coincidió con la aparición de temperaturas invernales muy fHas. Por otro lado es interesante el hecho de que la época en la que la histeria
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contra las brujas fue mayor en Europa� los europeos uti¬ lizaban ungüentos que contenían una sustancia pe¬ netrante en la piel que actualmente sabemos que puede causar alucinaciones y la sensación de estar volando. No puede causar sorpresa� por tanto> que nuestra imagen popular sobre las brujas sea la de unas personas que vue¬ lan montadas en el palo de una escoba. Pero si la epidemia de histeria contra las brujas se de¬ bió o no al envenenamiento ergotínico o a episodios de inseguridad política o a ambos a la vez, es algo todavía por demostrar. Lo que nos tenemos que plantear aquí es> en primer lugar, por qué tantas sociedades en el registro etnográfico creen en la brujería o en la hechicería, ¿Por qué tantas sociedades creen que existen formas de invo¬ car a los espíritus para que dañen a la gente? Una de las posibles explicaciones la dio Beatrice Whiting, y es que la brujería y la hechicería tienden a darse en sociedades que carecen de procedimientos o de autoridades judiciales que juzguen los crímenes y otras ofer\sas. Su teoría es que todas las sociedades necesitan alguna forma de control social� alguna manera de disuadir a la mayoría de los po¬ tenciales ofensores y de juzgar a los ofensores actuales. Si usted se porta mal puede que la persona a la que perju¬ dique se ponga enferma o que incluso muera. La eviden¬ cia transcultural parece sustentar esta teoría, y es más frecuente la hechicería en las sociedades que carecen de autoridades judiciales que en las que las tienen. Tipos
de pra ctica ntes
Los individuos creen que ellos pueden contactar di¬ rectamente con lo sobrenatural� pero la mayoría de las sociedades también tienen a tiempo parcial o total reÜgiosos o practicantes de magia. La investigación sugiere que existen cuatro tipos principales de practicantes: cha¬ manes, hechiceros o brujas, médiums y sacerdotes. Como veremos, el número de tipos de practicantes de una sociedad parece variar según el grado de compleji¬ dad cultural. EL CHAMÁN. La palabra chamán parece proceder de una lengua que se hablaba en el este de Siberia. El chamán es, generalmente, un hombre especialista a tiempo parcial que goza de un alto estatus en su comu¬ nidad y a menudo está involucrado en curaciones. Exphcamos el papel del chamán como sanador en el capítulo dedicado a la Antropología médica. Aquí lo centraremos en los métodos utilizad os por los chamanes para ayudar a los demás. Los chamanes entran en trance o en algún otro estado alterado de conciencia y viajan a otros mundos para ob¬ tener ayuda de sus guardianes o de otros espíritus� Los
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sueños pueden ser usados para provocar la inspección interior o como forma de comunicarse con los espíritus. La gente puede precisar ayuda por medios mágicos, tanto para obtener recursos alimentarios como para trasladai5e> aunque la solución de los problemas de salud suele ser la meta más comtin de los chamanes» También pue¬ den traer noticias de los espíritus� tales como anunciar un desastre con el fin de impedirlo� Algunos pueden recibir una «llamada» para conver¬ tirse en chamanes cuando se recobran de una enfermedady a través de una visión o en un sueño. Los chamanes en preparación pueden fomentar las vivencias de su ima¬ ginación utilizando alucinógenosy mediante la privación del sueño o de alimentos o efectuando una actividad fl¬ aca muy intensa como la danza. Una parte importante en el proceso de ser chamán es aprender a controlar la imaginación y los poderes del espíritu. El entrenamiento de un chamán� bajo la guía de un maestro chamán� puede durar varios años, HECHICEROS Y BRUJAS. En contraste con los diamanesv que suelen tener un alto estatus, los hechice¬ ros y brujas de ambos sexos tienden a tener bajo estatus social y económico en sus sociedades. Los supuestos he¬ chiceros y brujas suelen ser observados con temor» ya que se cree que conocen la forma de invocar lo sobrenatural para causar enfermedades, lesiones e incluso la muerte. Dado que los hechiceros suelen utilizar materiales para sus hechizos, se pueden encontrar evidencias de estos he¬ chizos y los supuestos hechiceros son asesinados con fre¬ cuencia por sus actividades maléficas. Puesto que la brujeria se efectúa solamente con el pensamiento o la emoción» puede ser difícil demostrar que alguien es brujo o bruja, pero estas dificultades no han evitado que la gente haya acusado y matado a otras personas por ser brujas. MÉDIUMS. Los médiums tienden a ser mujeres» a practicantes tiempo parcial, a las que se les consulta para curar o adivinar mientras están en trance de pose¿ón, esto es, cuando están poseídas por los espíritus. Las médiums son presentadas en estados en los que padecen convubiones, temblores, ataques y amnesia temporal, SACERDOTES. Los sacerdotes son generalmente hombres especialistas a tiempo total que ofician los acontecimientos públicos, gozan de un alto estatus y se considera que pueden relacionarse con los principales dioses que se encuentran más allá del control de las per¬ sonas ordinarias. En la mayoría de las sociedades que poseen sacerdotes, las personas que llegan a serlo lo consiguen por herencia o por designio político. Los sa¬
cerdotes algunas veces se distinguen de las personas or¬ dinarias por su vestimenta especial o por un peinado diferente. La preparación del sacerdote puede ser labo¬ riosa 7 prolongada; suele incluir celebraciones, oracio¬ nes y trabajos fisicos, así como el aprendizaje de los dogmas y rituales de su religión. Los sacerdotes de EE UU permanecen durante cuatro años en una escuela de Teología y continúan después durante un tiempo trabajando junto a otro sacerdote ya establecido. Los sa¬ cerdotes no suelen cobrar un salario por sus servicios, sino que se mantienen por medio de donaciones y de contribuciones efectuadas por sus feligreses, A veces os¬ tentan poder político como resultado de su oficio (el sacerdote principal a veces ostenta la je&tura del Estado o es consejero próximo al jefe del Estado) y su bienes¬ tar material es un reflejo directo de su posición en la je¬ rarquía sacerdotal, Es la dependencia de un ritual memorizado lo que distingue y protege a los sacerdotes. Si un chamán folla repetidamente al curar, probablemente perderá sus se¬ guidores, porque obviamente ha perdido el soporte de los espíritus, Pero si un sacerdote ejecuta su ritual per¬ fectamente y los dioses eligen no responder, el sacerdote normalmente mantendrá su posición y el ritual se con¬ servará suponiéndose su eficacia. La ausencia de res¬ puesta por parte de los dioses será explicada en términos de la felta de mérito del pueblo para el fevor sobrenatural, PRACTICANTES Y COMPLEJIDAD SOCIAL. Las sociedades más complejas tienden a tener un mayor tipo de religiosos o de practicantes de la magia. Si una socie¬ dad tiene solamente un tipo de practicante, casi siempre suele ser un chamán; tales sociedades tienden a ser reco¬ lectores nómadas o seminómadas. Las sociedades que tienen dos tipos de practicantes (generalmente un cha¬ mán-sanador y un sacerdote) suelen ser agrícolas. Aque¬ llas que tienen tres tipos de practicantes son agrícolas o pastoriles, con una integración política más allá de la co¬ munidad (el tipo de practicante adicional suele ser un hechicero, una bruja o un médium). Finalmente, las so¬ ciedades que tienen los cuatro tipos de practicantes sue¬ len ser agrícolas, con integración política más allá de la comunidad 7con clases sociales.
Religión y adaptación Siguiendo a Malinowski, muchos antropólogos consi¬ deran que las religiones son adaptativas ya que sirven para disminuir la inseguridad e incertidumbre que aflige a todas las personas. No sabemos realmente si la religión
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es é único medio de reducir la inseguridad y la incertidumbre> ni incluso que los individuos y las sociedades tengan que reducirlas, A pesar de esoj parece que ciertas creencias y prácticas religiosas tienen consecuencias di¬ rectamente adaptativas. Por ejemploj la creencia hindú en las vacas sagradas ha parecido a muchos precisamente lo contrario a una costumbre útil o adaptativa. Su reli¬ gión no permite a los hindúes sacrificar a estos animalesPeroj ¿por qué mantienen los hindúes esta creencia? ¿Por qué permiten que las vacas deambulen libremente� defe¬ cando en todas partes y no las sacrifican? El contraste con nuestro uso de las vacas llama poderosamente la atención, Marvin Harris sugirió que el uso de las vacas por los hindúes les proporciona consecuencias beneficiosas que ningún otro uso de estos animales podría teñen Harris dijo que hay una razón económica para que no se sacri¬ fique el ganado en la India. Las vacas y los alimentos que producen proporcionan unos recursos que no se podrían obtener de otra forma, Al mismo tiempo ellas vagan li¬ bremente porque el forraje no estáinduido en una ecoTK>mía de producción de alimentos, Los recursos producidos por las vacas son muy varia¬ dos. Primero, un par de bueyes y un arado son impres¬ cindibles para las pequeñas granjas de la India, Los indios podrían criar bueyes con un bajo coste� pero ten¬ drían que emplear parte de su escasa producción de ali¬ mentos en hacerlo. Con el sistema actual no tienen que alimentar a las vacas e incluso su escasa alimentación las hace relativamente infertilesj en tanto que los machos que se castran producen pero no causan costes económi¬ cos, Segundo, el estiércol de las vacas es esencial como combustible parala cocina, además de ser un fertilizante, de forma que el Consejo Nacional de Recursos Económi¬ cos Aplicados estimó que se quemaba anualmente una cantidad de excrementos equivalente a 45 millones de to¬ neladas de carbón. Sobre todo> cuando se encuentran disponibles diariamente a las puertas de las casas y sin coste- Los recursos alternativos de combustibles, tales como la madera, o son escasos o muy caros�por lo que se utilizan alrededor de 340 millones de toneladas de estiér¬ col como abono en un país obligado a obtener tres cose¬ chas al ano en una tierra cultivada de forma intensiva, Tercero, los hindúes no comen la carne del ganado que muere de forma natural, y el que es sacrificado por los no hindúes es comido por las castas inferiores, quienes al ca¬ recer de los tabúes contra la ingesta de carne que tienen las castas superiores, pueden suplir estas proteínas nece¬ sarias, Cuarto, las pieles y los cuernos de las vacas muer¬ tas se utilizan en la India para abastecer su enorme industria del cuero. En conclusión, debido a que las va¬ cas no consumen los recursos que se necesitan para abas¬
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tecer a las personas y que sería imposible conseguir más baratos la tracción, el combustible y los fertilizantes, el tabú contra el sacrificio de las vacas puede ser suma¬ mente adaptativo, El c a m b i o RELrGíOSO como re ví tali za cí óisí
La larga historia de las religiones incluye períodos de gran resistencia contra los cambios, lo mismo que perío¬ dos de cambios radicales. Los antropólogos están espe¬ cialmente interesados en la aparición de nuevas religiones o sectas. La aparición de nuevas religiones es una de las cosas que puede suceder cuando las culturas se alteran por el contacto con sociedades domiriantes. Se han sugerido muchos términos para estos movimientos religiosos: cultos cargo, movimientos indígenas, movi¬ mientos mesiánicos y cultos mÜenaristas, Wallace opinó que todos eran ejemplos de los movimientos de revitalización o esfuerzos para salvar a una cultura infundién¬ dole nuevos fines y nueva vida. Veremos algunos ejemplos de tales movimientos en Norteamérica y en Melanesia, LOS SÉNECA Y LA RELIGIÓN DE HANDSOME LAKE. La reserva Séneca de los Iroqueses en el río Allegheny, en el Estado de Nueva York, era un lugar de «pobreza y humillación» en 1799, Desmoralizados por el whisky y expulsados de sus tierras, incapaces de com¬ petir con las nuevas tecnologías a causa de su analfebetismo y felta de preparación, se encontraban en un callejón sin salida- En esta situación Handsome Lake, de 50 años y hermano de un jefe, tuvo la primera de una se¬ rie de visiones. En ella, se encontraba con emisarios del Creador que le mostraban el cielo y el infierno y le en¬ comendaban la revitalización de la religión séneca y de su sociedad, a lo que dedicó la década y media siguiente, Utilizó como principal texto el GflíVíííJ o «Buena Pala¬ bra», un evangelio que contenía afirmaciones sobre la naturaleza de la religión y la eternidad y un código de conducta para los justos. El Gaiwiio es interesante tanto por la influencia dara del cristianismo cuáquero como por la forma en la que surge el nuevo material en rela¬ ción con los conceptos de la religión tradicional Iroquesa, La primera parte del «Buena Palabra» presenta tres te¬ mas principales, uno de los cuales es la idea de un Apo¬ calipsis, Para ello Lake Handsome ofició muchos signos con los que los fieles podían impedir la muerte cósmica que se avecinaba, Grandes bolas de fiaego caerían desde el cielo y un velo caería sobre la tierra. Aparecerían �os profetas, las brujas harían hechizos y criaturas veneno¬ sas procedentes del infiramundo agarrarían y matarían a
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Temas de actualidad Untt iUmada a la religlén puede ser et deaeo de un muHde mefer Actualmente existen muchas religiones en EE UU y emergen re¬ gularmente nuevas sectas, deno¬ minadas burlonamente cultos. Pocos de nosotros nos damos cuenta de que las mayores iglesias o religiones del mundo comenzaron oomo sectas o cultos minoritarios, dertamentCj algunas de las más prestigiosas y mejor establecidas de las iglesias protestantes comenzaron como movimientos sociales radica¬ les, Por ejemplo� la que conocemos como Iglesia Unida de CristOj que incluye a la Iglesia Congregadonal, fiie fundada en Inglaterra por unos radicales que buscaban que el go¬ bierno de la Iglesia estuviera en ma¬ nos de las congregaciones locales. Machos de estos radicales acabaron convirtiéndose en los que llamamos peregrinos, que vinieron al Nuevo Mando. Pero también fueron fiandamentalistas en sus creencias. Por qemplo, a finales de la década de 1820j los congregacionistas do¬ minaban muchas ciudades de Connecticut prohibiendo las cele¬ braciones navideñas fiiera de las iglesias>ya que dichas celebraciones no estaban mencionadas en la Bi¬ blia. Actualmente estos congrega¬ cionistas están entre los protestantes más liberales.
No deberíamos de sorprendemos de que la mayoría de las Iglesias pro¬ testantes actuales, incluyendo algu¬ nas a las que se las considera muy coT�ervadoraSj comiencen como sectais militantes que pretenden hacer un mundo mejoi; después de todo a esto es a lo que llamamos «Protes¬ tante». En un principio la rebelión fue contra Romay la Iglesia Católica; más tarde las sectas se volvieron con¬ tra la Iglesia y las jerarquías de gobiernop Recordando que el aistianismo comenzó como un grupo radical dentro del territorio del Imperio Romano, las nuevas sec¬ tas o cultos siempre fueron proba¬ blemente movimientos políticos y sociales al tiempo que reÜgiosos, Te¬ nemos que recordar que la palabra mileriioy cuando se utiliza en comen¬ tarios relacionados con los movi¬ mientos reÜgiosos, se refiere a lo que deseamos o esperamos para tiempos futuros en los que la vida humana y la sociedad sean perfectas y libres de temores; la palabra debe ser, por tanto, próspera, ídiz y pacífica. Actualmerite los deseos de conseguir un mundo mejor pueden o no estar ins¬ pirados en motivos religiosos, ya que hay muchas personas que creen que esto se debe intentar obtener sólo con los esfuerzos humanos.
todos aquellos que hubieran rechazado el Gsíivííí?. Se¬ gundo, este Übro insistía en el concepto de pecado, de forma que los pecados mayores eran apartarse del «ca¬ mino de Dios», la bebida, la brujería y el aborto. Los pe¬ cados se tenían que confesar y luego había que arrepentirse de ellos.Finalmente, el Gaiwiio ofrecíala sal¬ vación, La salvación podía conseguirse siguiendo un có¬
¿Cómo tendrían que catalogarse estos deseos de conseguir un mundo mejor? ¿Tendríamos que llamarlos «conservadores» porque ese mundo imaginario pudo existir en el pasado? Y si ese imaginario mundo no ha existido todavía, ¿acaso es «radical» creer que se puede conseguir? Puede ser que el deseo de conseguir un mundo me¬ jor sea más conservador que radi¬ cal, Puede ser que la gente que está insatisfecha con el mundo actual piense que algo tiene que cambiar para poder mejorarlo, con o sin la asistencia divina. Sin embargo cuando llegue el «milenio» todo será diferente de la actualidad, e induso mejor. Las ideas sobre el mienio y el ori¬ gen de los cultos y religiones nuevos deben considerarse como esperanzas humanas; ¿Cuáles son las esperanzas de la gente? ¿Varían según las cultu¬ ras, y si es asi, porqué? ¿Algunas es¬ peranzas son universales? ¿Cómo se pueden realizar? íigion; estaba a la cabeza de sus contemporáneos para exigir un alto en la venta de las tierras a los no Séneca, 4, Ptoacultiiración (favorecer las características culturales externas). A pesar de que tanto la pro[riedad individual como el comercio en beneficio propio estaban prohibidos» se fomentaba la ad¬ quisición de literatura en inglés para que la gente
pudiera comprender y leer los contratos y evitar que los engañaran, 5. Moralidad doméstica. Los hijos tenían que obe¬ decer a los padres� las madres tenían que evitar interferir en el matrimonio de sus hijas� y esposos y esposas respetarían b santidad de los votos de su matrimonio. La enseñanza de Handsome Lake parece haber lle¬ vado a un renacimiento de la sociedad Séneca. La tem¬ planza se admitió de forma unánime� lo mismo que el aprendizaje de nuevos métodos agrícolas y la escolarización. Alrededor de 1801 la producción de maíz aumentó diez veces. Se introdujeron nuevas cosechas (avena� patatasj lino) y tanto la salud publica como la higiene me¬ joraron ostensiblemente. El propio Handsome Lake consiguió gran poder entre su gente. Dedicó el resto de
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5U vida a sus deberes administrativos» actuando íomo representante de los Iroqueses en Washington y exten¬ diendo su evangelio a las tribus vecinas. £n el momento de su muerte en 1815» los Séneca creían que se produci¬ ría su renacimiento de forma dramática> lo que se puede atribuir»al menos en gran partera la nueva religión. Pos¬ teriormente» ya en el siglo xx� algunos de los discípulos de Handsome Lake fundaron una iglesia en su nombre que, a pesar de una serie de disputas políticas» sobrevive hasta la actualidad. Mnque muchos investigadores creen que la presión cultural da lugar al nacimiento de este tipo de movi¬ mientos religiosos» todavía es importante comprender exactamente qué presiones y cuánta fiaerza han de tener para dar origen a la aparición de los nuevos movimien¬ tos religiosos. ¿Los diferentes tipos de presiones produ¬ cen diferentes tipos de movimientos? ¿Depende la naturaleza de estos movimientos de los elementos cultu¬ rales ya existentes? Veamos alguna teoría e investigación sobre las causas de los milenaristas cultos cargo, que co¬ menzaron a aparecer en Melanesia a partir del ano 1885. CULTOS CARGO. Los cultos cargo se pueden con¿derar como movimientos religiosos «en los que hay una esperanza de, y preparación para, la llegada de un sobrenaturales». De período de bienaventuranzas acuerdo con esto» una creencia explícita de los cultos cargo fue la idea de que algún poder liberalizador podía traer todas las cosas de Occidente (cargo, en inglés pidgin) que pueda desear la gente. Por ejemplo, alrededor de I932j en Buka» en las islas Salomón» los líderes de un culto profetizaron que una gran ola arrasaría los pobla¬ dos pero llegaría un barco cargado con hierro» hachas» alimentos, tabaco» coches y armas. El trabajo cesó enton¬ ces en los huertos y se construyeron muelles para recibir el esperado cargo� ¿Cómo podemos explicar tales cultos? Peter Worsley sugirió que» generalmente» es la opresión (en el caso de Melanesia» la opresión colonial) un importante fector para la aparición de los cultos cargo y de los movimientos milenaristas. Dijo que las reacciones ante la opresión to¬ maron en Melanesia formas religiosas más que políticas porque eran una forma de reunir a gente que previa¬ mente había carecido de unidad política y que vivía en grupos sociales aislados en pequeños islotes. Ch;ros estu¬ diosos» como David Aberle» sostienen que es más impor¬ tante la privación relativa que la opresión a la hora de explicar el origen de los cultos; cuando la gente cree que podría tener más y tiene menos de lo que acostumbraba a tener o tiene menos que los demás» puede sentirse atraída por cultos nuevos. De acuerdo con la interpreta¬ ción general de Aberle» Bruce Knauft» en un estudio com¬
parativo de los cultos cargo, encontró que tales cultos eran más importantes en las sociedades de Melanesia que habían padecido una disminución de sus contactos cultu¬ rales con Occidente y presumiblemente también una dis¬ minución de sus contactos con los artículos que más valoraban de esta procedencia durante el año anterior a la aparición del culto. Si sirve de guía el pasado reciente igual que el lejano» podemos esperar que las creencias y las prácticas reUgiosas experimenten una revitalización periódica, particu¬ larmente durante las épocas de presión� por lo que es de esperar que continúen apareciendo en el mundo varia¬ ciones religiosas.
CD-ROM Ejercicio da conceptos 111-28
Sumarlo l. La rehgión es un conjunto de actitudes, creencias y prácticas pertenecientes al poder sobrenatural. Tales creencias pueden variar dentro de una cultura de la misma forma que entre sociedades. También pueden va¬ riar en el tiempo. 2, Las creencias religiosas aparecen en todas las cul¬ turas conocidas y se deducen ya de los artefectos asocia¬ dos al ífomo sapiens hace al menos unos 60.000 años. 3. Las teorías relacionadas con la universalidad de la religión sugieren que los seres humanos crean la reli¬ gión como respuesta a ciertas necesidades o condiciones universales» incluyendo la necesidad de comprender» la regresión a los sentimientos in:�tiles»la ansiedad o incertidumbre y una necesidad de vida en comunidad. 4. Existen muchas variaciones en cuanto a las creen¬ cias religiosas. Las sociedades varían en el número y tipo de los seres sobrenaturales en los que creen. Pueden ser fuerzas sobrenaturales (por ejemplo mana y tabú), seres sobrenaturales de origen no humano (dioses y espíritus) y seres sobrenaturales de origen humano (fentasmas y espíritus de los ancestros). El sistema de creencias reli¬ giosas de una sociedad puede incluirá cualquiera o a to¬ das estas entidades. 5. Los dioses o espíritus pueden ser impredecibles o prededbles» distantes o interesados por los asuntos hu¬ manos» ayudar o castigar. En algunas sociedades todos los dioses son semejantes en rango; en otras, existe una jerarquía de prestigio y poder entre los dioses y espíritus, semejante a la de las sociedades humanas. 6. Una rehgión monoteísta es la que solamente tiene un dios superior como creador del universo o director de
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todos los acontecimientos (oambas cosas); d resto de síres sobrenaturales o están subordinados a él o actúan como sus manifestaciones alternativas. £1 dios superior se encuentra» generalmente� en sociedades con un alto nivel de desarrollo político, 7. Cuando la gente se enfrenta con la ignoranciaj el dolor o la injusticia explica los acontecimientos solici¬ tando la intervención de los dioses. Tal intervención también puede ser solicitada por la gente que espera que le ayuden cuando llegue su fin. Los dioses es más proba¬ ble que castiguen la conducta inmoral de las personas que pertenecen a sociedades con grandes diferencias en cuanto a la posesión de las riquezas. 8. Se lian utilizado varios métodos para intentar co¬ municarse con lo sobrenatural» entre ellos destacan la oración»la ingesta de drogas u otros procesos que afecten al cuerpo y a la mente» la simulación» los banquetes y los sacrificios. 9. Cuando la gente cree que sus acciones pueden obli¬ gar aque actúe lo sobrenatur¿ de forma particulary deseada� los antropólogos se refieren a esta creencia y la práctica con ella relacionada como magia. La hechiceriay la bruje¬ ría intentan que los espíritus actúen contra las personas. 10, Casi todas las sociedades poseen practicantes re¬ ligiosos o mágicos a tiempo parcial o a tiempo completo. La investigación transcultural reciente sugiere que exis¬ ten cuatro tipos principales de practicantes: chamanes» hechiceros o brujas» médiums y sacerdotes. El número de tipos de estos practicantes parece variar según el grado de complejidad cultural: cuanto más compleja es una so¬ ciedad» más tipos de practicantes tiene. IL La historia de las religiones incluye períodos de fuerte resistencia ante los cambios y otros períodos de cambios radicales. Una de las explicaciones para estos ci¬ clos es que las prácticas religiosas aparecen siempre en períodos de presión. Los movimientos religiosos se han llamado movimientos de revitalización» esfuerzos por salvar una cultura por la implantación de un nuevo pro¬ pósito y una nueva vida.
Glosario de términos Adivinación Animatismo Animismo Brujería Chamán Dioses Espíritus Espíritus de los antepasados Fantasmas
Hechicera Magia Mana Médiums Monoteísta Movimientos de revitalización Politeísta Religión Sacerdotes Sobrenatural Tabú
Cuestiones críticas 1,
2, 3,
¿Cuál es SU concepto de Dios comparado con las creencias sobre seres sobrenaturales en otros sis¬ temas reÜgiosos? ¿Cuál cree que es el futuro de la religión? ¿Podría considerarse como magia alguna de las prácticas reUgiosas que usted conoce? ¿Están aso¬ ciadas a situaciones que generan ansiedad?
Eiercicios de Internet 1, Se ha diseñado en la Universidad de Harvard un proyecto sobre pluralismo para estudiar el desarrollo de las religiones en EE UU. Acuda a: http:/ywww.fes, harvard.edu/-pliifallsin. Haga dic en «AbíJWf ííie Prpjecí»; entonces explore las fotos con imágenes de América, 2, A menudo las diferencias religiosas producen in¬ tolerancia. Visite: httpr//www.rellgioustolerarkce,org, Haga clic sobre «Oífi�r y lea lo que venga so¬ bre religiones con las que no esté femiliarizado, 3. Explore algún lugar que dé información sobre las diferentes religiones en la provincia canadiense de Newfe�undland en; http://wwiy.iicsinuih.ca/-hrollmaii/ lnde:!qavaJitinL Compare al menos dos tradiciones reli¬ giosas,
Lecturas sugeridas CfflLD, A. B. y Child, T. L. Míjíion avd AJ�ic in the Life o f
Traditiíffial Engkwood Cliffet NJ: Pr�ntice HalÍ 1993. Basado tfi una rcvisLÓn de datos etnográficos toma¬ dos ío todas las partes del mundoí este libro analiza las características comunes de las religiones tradicionales� así como los Éictores que pueden explicar las distintas varia¬ ciones. Ember, W., Ember, C, K, y Leunson, D. (Eds.). il>ríTiiíto of Cul¬ ture: Eétfiographk Origiruds. UpperSaddle River,NJ: Prentioe
550
Capítulo 2 5
Religión y m a g i a
¡a
Hall, 1995. Prentice T�U/SimOTi & Schijstír Custqm Pyblishing. Varios capítulos tratan sctensam�nte las creendas religiosas dt culturan particulares: G. firandon» Afro-am�ricanos: recogiendo é. espíriti� J. W. Dow, Sierra Otomí: gente de las mOrttañaS niedcanaS j W- K. Powers y M. N. Powers» Lah�ta: un estudio de continuidad cultural� S. B. Sdiaeferj Huidiol: convirtiéndose en la �: lo sagrado en la vida cotidiana. Maltncíwskt, B. Aíf�ic,
attd Religión an d
Carden City, NY: Doubleday, 1954.Una dásicarecopilación de trabajos de Malinowski sobre rituales y conductas reli¬ giosas� y sobre los cultos primitivos»la magia y la fe. M a t l o c k , ] . G, «Universals and Variation in Keligiou$Belief and ftactices�. EnC, ICEmberyM.Ember(Eds,)- Crpss-Cwííwraí JííííwrcASocial 5aertcí. Uppcr saddle River, NJ: Prentice Hall, 199ÍP. Prentice Hall/Siraon & Schuster Custom PuWishing. Una puesta al día de los estudios transculturales sobre
diversidad religiosa que señala cómo las pTáctica$ y creencias religiosas varían en respuesta a los cambios sociales, de or¬ ganización política y de las estrategias de subsistencia. M o r r i s , B. 5íu(iíe5 of Religiotv An Introduc�ry líjfí. Cariibridge: Cambridge University Press� 1937. Un análisis de las teorías sobre el origen y la persistencia de las religiones. SereDí S. S, Aípííter; Sacred Nutva York: Oxford Uníversity Press, 1994. Esta obra analiza la forma y el por¬ qué roás mujeres que hombres, en algunas sociedades cono¬ cidas por la antropología, llegan a dirigir la vida religiosa. SmNSON, G. E, Tííí Bírtfj pf Godx The Ori�n ofPrimitiYe Ann Arbor: University of Midiigan Presst 1969. Uno de los primeros estudios transculturales que explora los orígenes de las creencias religiosas y examina cómo va¬ rios aspectos de la religión pueden ser relacionados con la oi�ani¿ación política y social.
á«ji
Las artes INDICE DEL CAPITULO
Decoración corporal y adornos Explicación de las variaciones artísticas Revisión del arte en otras culturas Cambio artístico y contacto cultural
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Ca p í t ul o 26
Las artes
a mayoría de las sociedades no posee una palabra para arte. Quizá se deba esto a que el I IPI arte> particularmente en las sociedades con relativamente poca especialización, forma parte integral de la vida religiosa� social y política. Ciertamentej la mayor parte de los aspectos de la cultura que hemos comentado (económicos� femiliares� políticos y religiosos) no son :&cilmente separables del resto de la vida social. El arte aparece en la historia de la humanidad hace al menos 28,000 anos. Decimos que aquellos antiguos grabados> abalorios y pinturas rupestres son arte� pero� ¿qué queremos decir por «arteí>? Una punta de flecha de pie¬ dra y un anzuelo hecho con espina de pescado obvia¬ mente requieren de habilidad y creatividad para su daboración, pero no los llamamos arte. ¿Por qué llama¬ mos arte a unas cosas y no a otras? Algunas definiciones de arte destacan su cualidad evocativa. Desde el punto de vista de la persona que lo crea� el arte expresa sentimientos e ideas; desde el punto de vista del observador o del participante� evoca senti¬ mientos e ideas. Los sentimientos e ideas de cada una de las partes pueden o no ser exactamente los mismos, Y pueden ser expresados en variedad de fbrmasr dibujos� pinturas, grabados, decoraciones corporales� danzas, cuentos, etc- Un trabajo o actuación artística intenta ex¬ citar los sentidos, provocar la emoción del observador o del participante. Puede originar sentimientos de placer, temor, repulsión o miedo, pero generalmente no indife¬ rencia, Pero destacar la calidad evocativa dd arte puede dar lugar a que sea difícil comparar el arte de diferentes cul¬ turas, porque lo que puede ser evocativo en una cultura puede que no lo sea en otra. Por ejemplo, una historia humorística en una cultura puede no ser divertida en otra. Por ello, la mayoría de los antropólogos está de acuerdo en que el arte es más un intento de un individuo por expresar o comunicar sentimientos e ideas. También existen algunos modelos o significados culturales; las so¬ ciedades se diferencian en sus tipos característicos y esti¬ los artísticos, lais actividades artísticas son siempre en parte cultura¬ les, involucrando modelos de conducta compartidos y aprendidos, creencias y sentimientos, ¿Cuáles son algunas de las ideas sobre el arte en nuestra propia cultura? Ten¬ demos a pensar que nada que sea útil es arte. Si un cesto tiene un diseño que no lo hace apto para su función, poablemente sea considerado como arte, especialmente si lo ponemos en un estante; pero ese mismo cesto con pan so¬ bre la mesa, probablemente ya no será considerado arte� £1 hecho de que tales distinciones no se hagan en otras so¬ ciedades sugiere claramente que nuestras ideas sobre el
I
arte son culturales. Entre los nativos americanos dd Nor¬ oeste dd Pacífico, los elaborados tótems no sólo muestran los penachos del linaje de sus ocupantes sino que, ade¬ más, sirven para sostener la casa. El hecho de que las acti¬ vidades artísticas sean parcialmente culturales es evidente cuando comparamos las formas en las que personas de diferentes sociedades tratan las fechadas de sus casas. La mayoría de los norteamericanos comparte d valor de la decoración dd interior de sus casas con cuadros, pintu¬ ras, grabados o fotografías colgando de las paredes, Pero no comparten d valor de los cuadros pintados en las pa¬ redes exteriores de sus casas, como hacían los nativos americanos en d Noroeste ddPacífíco. En nuestra sociedad, también insistimos que para ser considerado como arte, una obra debe ser única. Este as¬ pecto es claramente coherente con nuestro énfasis por lo individual. Sin embargo, aunque se exija que el artista sea único e innovador, el arte debe entrar dentro de alguno de los nivdes de renovación aceptables. Los artistas de¬ ben comunicamos en qué forma podemos relacionarnos con, o al menos aprender a relacionarnos con. A me¬ nudo, para que su arte sea aceptado por d público, deben seguir algún estilo o corriente de expresión que haya sido establecido por otros artistas o por los críticos. La idea de que un artista deba ser original es una idea cultural; en ¿gunas sociedades la habilidad para copiar un moddo tradicional se valora más que la originaÜdad, Parece por tanto que d arte debe poseer una serie de cualidades� expresa lo mismo que comunica, estimula los sentidos, afecta a las emociones y evoca ideas. Se produce en modelos y estilos culturales. Tiene un sentido cultu¬ ral, Además, algunas personas se consideran artística¬ mente mejores que otras. Para d arte no se requieren artistas especialistas a tiempo total; muchas de las socie¬ dades de los registros etnológicos no tienen especialistas en arte de nir�n tipo. Sin embargo, todos los miembros de algunas sociedades pueden participar en algunas artes (danza, canto, decoración corporal), pensándose gene¬ ralmente que algunos individuos tienen habilidades ar¬ tísticas superiores, Para ilustrar la variabilidad transcultural que existe en la expresión artística, consideraremos en primer lugar el arte de la decoración corporal y de los adornos,
Decoración corporal y adornos En todas las sociedades la gente adorna o decora sus cuerpos. Esta decoración puede ser permanente con ci¬ catrices, tatuajes, cambios en la forma de algunas partes del cuerpo, o bien temporal, en forma de pintura o con objetos como plumas, joyas, pides y vestidos que no sean
� Capítulo 2ó
El tatuaje corporal utiliza a veces para marcar un es¬ tatus alto y permanente, como en el caso de los jefes de la Polinesia. Pero en muchos lugareSrComo entre los Dayak de Borneo� el tatuaje es más personal; la gente de¬ cora su cuerpo porque así lo desea.
estrictamente utilitarios. La mayoría de estas decoracio¬ nes parece que está motivada por razones estéticas que, por supuesto� varían de una cultura a otra. Las formas de decoración actual dependen de tradiciones culturales. La decoración corporal induye las narices perforadas de al¬ gunas mujeres indiasJos cuellos alargados de las Mangebetu de África central� los tatuajes de los varones de Norteamérica� las pinturas corporales de los Caduveo de Suramérica y todos los tipos de ornamentos encontrados en casi todas las culturas. Sin embargo� además de satisfecer las necesidades esté¬ ticas, la decoración corporal o el ornamento se pueden utilizar para delimitar la posición social, rango, sexo, ocu¬ pación, identidad étnica y local, o la religión de una socie¬ dad. Junto con la estratifi cación social hay m edios visuales para declarar el estatus. El halo simbóÜco (la corona) en la cabeza de los reyes, la chaqueta escariata de caza de los genúeman ingleses, las plumas de águila de los tocados de los jefes de los nativos americanos, las hombreras de oro
Las art es
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de las chaquetas de los rajás indios, cada marca de alto es¬ tatus es reconocida en su propia sociedad. Las joyas en forma de cruz o de Estrella de David indican las tenden¬ cias cristianas o judias. Las ropas pueden indicar que quien los Ueva es un sacerdote, una monja o un miembro de una secta religiosa menonita como la de los Amish. El significado erótico de algunas decoraciones corpo¬ rales también es aparente. Las mujeres atraen la atención a las zonas erógenas dd cuerpo pintándolas, como los la¬ bios, o colocándose algún objetos unos pendientes, una flor encima de la oreja, un collar, brazalete, broche, ajorca o cinturón, T�bién los hombres llaman la aten¬ ción por medio de barbas, tatuajes y estuches peneanos (en algunas sociedades nudistas, a su manera) que apun¬ tan hacia arriba. Sólo tenemos que seguir las modas fe¬ meninas de Europa o de Norteamérica de los últimos 300 años, con su historia de corpinos ajustados, traseros con polisón, caderas abultadas, senos exagerados o al descubierto, caras pintadas, para comprender el signifi¬ cado de los adornos corporales en la provocación sexual. Por qué unas sociedades enfetizan los adornos eróticos de las mujeres y otras lo hacen con los de los hombres es algo que todavía no entendemos. En muchas sociedades se marca o altera el cuerpo de forma permanente, frecuentemente para indicar un cambio en el estatus. Por ejemplo, en la ceremonia de ini¬ ciación Poro practicadas por los Kpelle de Liberia, los chicos recién circuncidados pasan un período de reclu¬ sión en los bosques con los hombres mayores y regresan con cicatrices en sus espaldas, marcas simbólicas de dien¬ tes que significan que han escapado de los ngamuM gran f�ra enmascarada que se come al niño para vomitarlo como adulto joven, La necesidad de decorar el cuerpo parece universal. Tía hemos comentado algunos de los diversos métodos que la gente ha utilizado para adornar sus cuerpos en socie¬ dades diferentes. También somos conscientes de prácti¬ cas de decoraciones corporales que nos plantean preguntas para las que aún no tenemos respuestas. ¿Qué explicaciones tienen los adornos del cuerpo efectuados por medio de marcas permanentes como escarificacio¬ nes, pies vendados, alargamiento de orejas y cuello, ca¬ bezas deformadas, orejas y septos nasales perforados y dientes afilados? (Véase el apartado «Política y arte� para encontrar una explicación de la relación existente entre las marcas corporales permanentes y la política). ¿Por qué las diferentes sociedades pintan o adornan de cualquier otra forma las partes dd cuerpo, sea por razo¬ nes sexuales o de cualquier otro tipo? Y, ¿qué es lo que lleva a algunos miembros de nuestra sociedad a extrapo¬ lar la decoración corporal a sus animales? ¿A qué se de¬ ben las formas dadas a los pdos de los caniche, las crines
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trenzadas de algunos cabaliosi los collares de diamantes� las unas pintadas� mantas� sombreros e induso botines de algunas mascotas?
CD-ROM Actividades da vídeo 111-11
Explicación de las variaciones artísticas En nuestra sociedad destacamos la libertad del artista� por lo que puede parecemos que ei arte es totalmente li¬ bre de variar. Pero nuestro interés por la unicidad en¬ sombrece el hecho de que culturas diferentes no sólo utilizan o destacan materiales distintos y tienen ideas desiguales sobre la belleza» sino que también pueden te¬ ner estilos y temas característicos. Es &cil ver los estilos cuando observamos el arte diferente del nuestro» pero es más difícil ver similitudes cuando observamos arte de nuestra propia cultura» Por ejemplo» si observamos esti¬ los de baile> podemos pensar que los estilos de los años cuarenta son completamente diferentes de los estilos ac¬ tuales» pero a un observador extraño le parecerá que en nuestra cultura siempre se baila� de forma general» en pa¬ rejas más que en grupos alineados o en círculos» como ocurre con ciertos tipos de bailes que llamamos «bailes foldóricos». Yj en nuestra cultura hombres y mujeres bailan juntos más que separados. Además, nuestra mú¬ sica popular tiene un ritmo o combinaciones de ritmos que suelen estar originados por los mismos instrumen¬ tos que utilizábamos en el pasado. ¿Pero de dónde proceden esas similitudes en las for¬ mas y estilos? Muchos de los estudios recientes sobre la variabilidad en las artes sostienen la idea de que la forma y el estilo en el arte figurativo» música» baile y folclore es¬ tán muy influenciadas por otros aspectos de la cultura, Algunos antropólogos psicológicos» como hemos obser¬ vado en el capítulo sobre «Psicología y cultura»» van más lejos y opinan que el arte» al igual que la religión» expresa los sentimientos típicos� ansiedades y experiencias de las personas en una cultura. Y las ansiedades y los senti¬ mientos típicos están influenciados por las instituciones básicas tales como la educación infentil» la economía» la organización social y la política. La forma física dd arte en una sociedad puede reflejar su estilo de vida. Por ejemplo» Richard Anderson» dijo que d arte de los nómadas» como los IKung» Inuit y abo¬ rígenes australianos, es sobre todo transportable. Cantos, bailes o literatura oral son muy importantes para estas
sociedades y» son tan transportables como lo puedan ser dlos� Por eso decoran los objetos que llevan siempre con dios: arpones por los Inuit, por los aboríge¬ nes australianos, «cantimploras» de huevos de avestruz para los !Kung. Sin embargo» no poseen cosas que abul¬ ten como estatuas o vestidos elaborados. ¿Qué podemos decir sobre la presencia de artistas o críticos de arte? Aunque algunas personas de las sociedades a pequeña es¬ cala son más artísticas que otras, los artistas especializa¬ dos» lo mismo que los críticos o los teóricos del arte» tienden a aparecer sólo en sociedades con una compleja y especializada división del trabajo. Arte fígue � te vo
Quizá la forma de creación artística más obvia que re¬ fleja cómo vivimos sea la observación del medio am¬ biente» es decir, los materiales y la tecnología disponibles para una cultura. Piedra, madera» hueso» cortezas de ár¬ boles» ardlla» arena» carbón, pinturas y ciertos derivados de los minerales generalmente son materiales disponi¬ bles. Además, dependiendo de la ubicación, pueden exis¬ tir otros materiales accesibles: conchas» cuernos» oro» cobre y plata. Es de gran interés para d antropólogo los usos diferentes que una sociedad le da a estos materiales» y se puede preguntar, por ejemplo» por qué unas gentes utilizan la arcilla en vez d d cobre cuando están los dos disponibles. Aunque todavía no poseemos respuestas conduyentes» estas cuestiones tienen ramificaciones im¬ portantes. La forma en la que una sociedad contempla su medio ambiente es» con frecuencia» d motivo de que es¬ coja y use unos materiales artísticos determinados. Cier¬ tos metales pueden ser reservados para utilizarlos como objetos en ceremonias de especial importancia. La creen¬ cia en el poder sobrenatural de una piedra o de un árbol puede dar lugar a que un escultor sea especialmente sen¬ sible ante ese material. Lo particularmente interesante para los antropólogos es comprender que» aunque los materiales disponibles de una sociedad puedan limitar o influir en sus resultados ar¬ tísticos» los materiales por sí mismos no determinan d re¬ sultado final ¿Por qué los artistas en la sociedad japonesa rastrillan arena según determinados patrones, los artistas de la sociedad Navego pintan la arena y los artistas de la so¬ ciedad romana fonden la arena para febricar cristal? Ade¬ más» incluso cuando se utiliza d mismo material y la misma técnica en las diferentes sociedades» la forma o el estilo dd trabajo varía enormemente de una cultura a otra. Una sociedad puede escoger representar objetos o fe¬ nómenos que son especialmente importantes para sus gentes o su dite. Asi, d arte de la Edad Media nos dice algo sobre la preocupación medieval acerca déla doctrina
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Los mismos materiales pueden ser utilizados artísticamente en sociedades diferentes. En Japón� la arena s e rastrilla siguiendo modelos tradicionales y en el suroeste de EE UU� un navajo crea una pintura de arena.
teológica. Además de revelar los asuntos principales reladonados con una sociedad» el contenido del arte de esa sociedad puede reflejar también la estratificación social de esa cultura. Las figuras autoritarias se pueden repre¬ sentar de formas obvias. En el arte de la antigua sociedad sumeria� los soberanos se representaban con un tamaño mucho mayor que el de sus subditos» y los dioses más po¬ derosos se representaban con unos ojos enormes- Tam¬ bién las diferencias en los estilos de vestidos y de joyas reflejan generalmente la estratificación social, Los historiadores del arte han distinguido siempre ciertas relaciones entre el arte de una sociedad y otros as¬ pectos de su cultura, Gran parte de esta atención se ha dedicado al contexto del arte� dado que el arte europeo ha sido representativo durante mucho tiempo» Pero el es¬ tilo artístico también puede reflejar otros aspeaos de la cultura. John Fischer� por ejemplo» examinó las caracte¬ rísticas estilísticas del arte con la intención de encontrar «alguna forma de conexión regular entre algunas carac¬ terísticas artísticas y algunas situaciones sociales», y llegó a la conclusión de que los artistas expresan una forma de fentasía social. En otras palabras» en una sociedad esta¬ ble» los artistas responderán a las condiciones que les provoca su sociedad» y la sociedad responderá dándoles seguridad o placer Asumimos que «los diseños de los elementos pictóri¬ cos son» a nivel psicológico» abstractos» principalmente
como representación inconsciente de las personas en la sociedad», Fischer razonó que las sociedades iguahtarias tendían a tener diferentes elementos estilísticos en su arte si se las comparaba con las sociedades estratificadas. Las sociedades iguahtarias suelen estar constituidas por pe¬ queñas comunidades autosufidentes que son estructuralmente similares y en las que existe poca diferenciación entre las personas. Por el contrario» las sociedades estra¬ tificadas tienen comunidades mayores» más interdependientes y distintas» con grandes diferencias de prestigio» poder y acceso a los recursos económicos entre las per¬ sonas. Fischer demostró su hipótesis por medio de un es¬ tudio transcultural» observando que ciertos elementos del diseno estaban estrechamente relacionados con la existencia de la jerarquía social. Sus hallazgos se resumen en la Tabla 26,1, Por ejemplo» en el arte de las sociedades iguahtarias» que tienen poca organización política y pocas autorida¬ des» tiende a encontrarse la repetición de un elemento simple. Si cada elemento representa inconscientemente a los individuos de la sociedad» la relativa similitud exis¬ tente entre las personas parece reflejarse en la repetición del elemento de diseño. Por el contrario» en el arte de las sociedades estratificadas» las combinaciones de elemen¬ tos de diseño diferentes formando complejos modelos» parecen reflejar el alto grado de diferenciación social que existe en tales sociedades-
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Las artes
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'7� Fronteras de l . a investigación Política y arte
El arte varía mucho según se ob¬ serva en los estudios transculturalesi lo que no significa que esta variación sea inexplicable» ni esté relacionada con otros aspectos de la existencia humana. Los diferentes hallazgos descritos en este capítulo indican las frecuentes relaciones existentes entre el arte y los demás aspectos de la cul¬ tura- Aqu í vam os a considerar la po¬ sibilidad de que induso los eventos políticos� que confunden y a veces no son más que un volátil ruedo de la vida social humana» puedan influir en el arte. Por ejemploj Christopher Steiner» en su artículo «Cuerpo Per¬ sonal y Cuerpo Político» se refiere a cuatro formas de autodecoradón personah pintura corporal» tatuaje» máscaras y «coronación» (una más¬ cara oculta la cara y la cabeza de quien la lleva; una corona u otro adorno de la cabeza hace que le pres¬ ten atención» o identifica a quien la
lleva). Steiner comenta en primer lu¬ gar la forma en la que la decoración corporal es un reflejo político en las islas de Melanesia y Polinesia (en el Pacífico), En Melanesia sus líderes políticos son generalmente del tipo «gran hombre». No existe autoridad fi�» y los grandes hombres ganan influen¬ cia mediante la atracción de sus se¬ guidores» que puede que no los sigan durante mucho tiempo. No existen los administradores o funcionarios públicos ni una autoridad perma¬ nente y, por supuesto» no existen jefeturas centralizadas ni jerarquía de personas poderosas o influyentes, Todo el sistema es muy ftógil y está sujeto a rápidos cambios. En Poline¬ sia» por el contrario» existen sistemas con autoridades permanentes» que integran generalmente a gran canti¬ dad de población con un jefe o rey en la cima del poder y cuya jefetura
Diférencias artísticas entre sociedades igualitarias y estratificadas.
Tabla 26.1.
Sociedad iguaOtana Repetición de dementos simples Mucho �pacio v�cío 0 «irrekvante:� Diseño geométrico Feúras $in marcos
Sociedad estratificada Iiitegradón de dementos di�rentes Pwoj espacios WCÍOS Diseño asimétrico Figuras enmarcadas
FuÉtítc Bajado en Johu Fiách�i, vÁsX as Cultuial Coguttive 63 (19�15:80�3, \(ap$», Awtíriííin
suele ser heredada. El líder no con¬ sigue su posición por sus acciones personales» sino que accede a esa po¬ rción por los derechos genealógicos, Por lo tanto» d sistema es perma¬ nente o no cambiante a la vez que je¬ rárquico, Ahora pasaremos a considerar la forma en la que los adornos corpo¬ rales reflejan la situación política de las dos áreas. Los mdanesios pintan su cuerpo con pinturas efímeras que desaparecen al cabo de cierto tiempo o después de lavarse» de la misma íbrma que d alto estatus de un gran hombre puede desaparecer rápida¬ mente dependiendo de lo que haya hecho por sus seguidores. Los poli¬ nesios decoran sus cuerpos por medio de tatuajes» que son perma¬ nentes» lo mismo que sus sistemas de hderazgo. De la misma forma que el líder retiene su poder a lo largo de los años» tampoco se quita d tatuaje. Por
De acuerdo con Fischer» las sociedades igualitarias reUenan los espacios vacíos con un diseño que refleja d ais¬ lamiento relativo de esa sociedad» y ya que las sociedades igualitarias suelen ser reducidas y autosuficientes» tien¬ den a alejarse de lo extraño» para encontrar su seguridad dentro de su propio grupo. En contraste» d arte de las so¬ ciedades estratificadas es generalmente multitudinario. La sociedad jerárquica no busca aislar a sus individuos o comunidades dentro de un grupo porque deben ser in¬ te rdepen dientes» cada nivd social realiza servidos para los que están situados en él» ayudando al mismo tiempo a los que están por debajo. Como decía Fischer, pode¬ mos» en general» discernir una felta de espado vacío en los diseños efectuados en sociedades en las que la seguri¬ dad no depende de evitar a los extraños» sino más bien que «la seguridad se produce por la incorporadón de los
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Vé ejemplojín Samoa> los tatuajes dife¬ rencian a las clases principales de las más sencillas. Las bandas y fran� s e reservan para personas de alto esta¬ tus» mientras que las de bajo estatus sólo pueden tatuarse con figuras só¬ lidas de color negro desde las muñe¬ cas hasta los pies. Dentro de las clases dominantes» el número de triángu¬ los tatuados en las piernas de un personaje indica su rango corres¬ pondiente Yy como los tatuajes son permanentes» es una forma de deco¬ ración corporal muy adecuada para una sociedad con estratificación so¬ cial heredada. Los sistemas políticos tradiciona¬ les de África oscilan desde los reinos centralizados (con el complejo fin de la continuidad)� hasta los poblados basados en el sistema de linajes segmentarios� donde los lidera��os son efímeros o secretos (relacionados con las sociedades secretas). En los sistemas no centralizados frecuente¬ mente se utilizan máscaras que ocul¬ tan la identidad� siendo también recurrentes las coronas u otras for¬ mas de decoración de la cabeza que indican un estatus elevado en los rei¬ nos. Entre los Ibo no centralizados
del este de Nigeria» los hombres jó¬ venes de un poblado utilizan fe cu entem ente máscaras como critica de la conducta de los de mayor edad del poblado. En el reino de Ngoyo» en el oeste de Zaire� el estatus del rey se manifiesta por su gorro especial y su trono de tres patas. Si el arte puede reflejar la situa¬ ción política en los niveles artísticos, también puede hacerlo a nivel psi¬ cológico o individual, Lewis Austin encontró que las preferencias de una persona en cuanto a símbolos (grᬠficos) visuales se puede pronosticar fi�cuentemente a partir de su ideo¬ logía política. Se pidió a una serie de personas de Japón y de EE UU que se situaran a sí mismos en una po¬ sición entre radical o conservadora y que� además» indicaran sus prefe¬ rencias en una serie de parejas de símbolos visuales: equilibrado fi�te a desequilibrado» completo frente a incompleto» uniforme frente a in¬ forme» etc. Así, por ejemplo» un grupo de barras como las de un có¬ digo de barras de la misma altura son uniformes; en tanto que las ba¬ rras de diferentes alturas no lo son, Los individuos conservadores pre¬
extraños dentro de la jerarquía, por medio del dominio o sumisión como indica su poder relativo». La simetría» la tercera característica estilística relacio¬ nada con el tipo de sociedad, es similar a la primera. La simetría puede sugerir similitud o una sociedad igualita¬ ria; la asimetría sugiere diferencias y quizá estratifica¬ ción. La cuarta característica que nos interesa es la presencia o ausencia de cercados o límites («marcos» en nuestro arte) que puede indicar la presencia o ausencia de normas impuestas jerárquicamente que constriñan la conducta individual. Un diseno sin marcos puede refle¬ jar el acceso libre a la propiedad; en las sociedades igua¬ litarias» se desconoce la existencia de un trozo de propiedad para uso de una sola persona. En el arte de las sociedades estratificadas, los límites o marcos pueden re¬ flejar la idea de la propiedad privada o pueden represen¬
ferían los símbolos ordenados (ba¬ rras situadas juntas y ordenadas de menor a mayor frente a las barras de tamaños desiguales colocadas unas en los ángulos formados por otras), lo pasivo (una línea recta fiante a una línea curva) y lo uniforme (cuatro cuadrados fíente a tres cua¬ drados y un círculo). Con relación a estonios japoneses eran más conser¬ vadores» por lo general» que los americanos, aunque en cada país las preferencias artísticas variaban de la misma forma que las ideologías po¬ líticas. Si las preferencias en las imágenes visuales tienen una significación me¬ tafórica que puede estar asociada con los principios políticos, quizá otras preferencias de estilo (en la vesti¬ menta, los muebles, la arquitectura, etc,) reflejen también la ideología po¬ lítica. Sólo las investigaciones foturas lo confirmarán. FuÉtit�: Qiriítópber fi. KBo en bandolera o en un chai» con lo que el niño está en con¬ tacto corporal con ellas durante gran parte del día expe¬ rimentando las oscilaciones producidas al andar rítmicamente. Ayres descubrió que tales sociedades ten¬ dían a tener canciones con un ritmo recurrente y regular. Las sociedades que tienden a criar a los niños en una cur� o en un parque tienden a tener una mü�ca basada en ritmos irregulares o en ritmos libres, Ayres también estudió la cuestión de por qué algunas sociedades tienen mayor gama de tonalidades en su mú¬ sica que otras, y sugirió que esta diferencia se puede ex¬ plicar por ciertas prácticas de crianza infentil» Esta autora sostuvo que la estimulación dolorosa de los niños antes de su destete puede causar una mayor tendencia explora¬ toria durante la vida adulta que influiría en ios modelos musicales de esa cultura. Esta hipótesis se sugirió a partir de sus experimentos con animales de laboratorio. De forma contraria a lo esperado� los animales que recibían descargas eléctricas o eran manipulados antes del destete, mostraban mayor crecimiento físico del habitual y mayor tendencia exploratoria cuando se exponían duiante su vida adulta ante situaciones nuevas. Ayres asimiló la gama de las notas musicales (de bajas a altas) con la capacidad exploratoria de los animales y el refuerzo de la acentua¬ ción musical con el vigor de los animales. Los tipos de traumatismos recibidos por los niños a los que se refería Ayres y observados en los registros an¬ tropológicos eran los que se apücaban a los niños de am¬ bos sexos; por ejemplo� escarificaciones, perforación de la nariz� labios u orejas� vendajes, estrechamiento o de¬ formaciones de los pies, cabeza, orejas, labios o cuello, inoculaciones, circuncisión o cauterización. Los resulta¬ dos muestran que en sociedades en las que los niños pa¬ decen estas actuaciones antes de los dos años de edad, su música se caracteriza por una gama tonal mayor que en las sociedades en las que los niños no las padecen� o las sufren después de esa edad. También es característico de las sociedades que someten a los niños a este tipo de ac¬ tuaciones una firme acentuación o ritmo musicales. La insistencia cultural en la obedierKia o independen¬ cia infentil es otra variable que puede exphcar alguno de los aspectos de las interpretaciones musicales. En socieda¬ des en las que los niños son educados para ser sumisos, predominan las canciones cohesivas; donde se intenta que los niños sean independientes, sus canciones son más individualizadas. Además, la educación con tendencia in¬ dividualista está asociada con voces y canciones ásperasUba voz áspera parece ser una indicación de asertividad y muy a menudo es una cualidad de voz masculina� Es in¬
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teresante que en las sociedades en las que el trabajo feme¬ nino es el predominante en la producción para la subsis¬ tencia, las mujeres canten con voces más ásperas, Otras características de las voces pueden ser asociadas con elementos de la cultura. Por ejemplo, las restriccio¬ nes sexuales en una sociedad parecen asociarse con las restricciones vocales, especialmente con un tono nasal o estrecho y apretado. Estas cuafidades vocales están aso¬ ciadas con la ansiedad y son especialmente apreciables en los sonidos de dolor, privación o pena. Las prácticas se¬ xuales restrictivas también se pueden considerar como una fuente de dolor y ansiedad, por lo que el tono nasal en las canciones puede reflejar tales emociones. Si los resultados transculturales sobre la música son váÜdos, podrían exphcar los cambios producidos en el tiempo de la misma manera que las variaciones de cada sociedad. Las investigación es futuras efectuadas en varias sociedades pueden ayudar a comprobar algunas de las teorías de Lomax y Ayres, Folclore Boldore es una amplia categoría que abarca mitos, le¬ yendas, cuentos populares, baladas� adivinanzas, refranes y supersticiones de un grupo cultural. Generalmente se transmite de forma oral, aunque también por escrito. Los juegos también se consideran algunas veces como fol¬ clore, aunque se pueden aprender por imitación, del mismo modo que pueden transmitirse oralmente. Todas las sociedades poseen un repertorio de historias que se transmiten de unos individuos a otros y se cuentan a los niñeas. Ejemplos de nuestro folclore incluyen los cuentos de hadas y las leyendas que contamos sobre los héroes populares. Muchas veces el foldore es inseparable de otras artes, particularmente de la música y del baile, coincidiendo los cuentos con ese contexto. A pesar de que muchos estudiosos del folclore enfetizan los aspectos tradicionales de éste y la continuidad en¬ tre el presente y el pasado, en la actuafidad se presta mayor atención a los aspectos innovadores y emergentes. Bajo esta perspectiva, el folclore es creado constante¬ mente por un grupo social que comparte sus experien¬ cias. Por ejemplo, un programa de ordenador puede tener sus propias bromas y refranes (por ejemplo «ba¬ sura en, ¡basura fiiera!»). lan Brunvand recopiló un con¬ junto de leyendas urbanas de aparición reciente. Una de ellas es «El Gancho», un cuento que tiene varias versio¬ nes y que básicamente se trata de una joven pareja que aparca en Lover's Lañe con la radio encendida. Entonces oyen que se ha escapado un asesino con una mano arti¬ ficial, por lo que la chica sugiere que se marchen. El chico arranca el coche y la lleva a su casa, pero cuando sale del
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coche para abrirle la puerta� él encuentra un gancho en¬ sangrentado en la manilla de la puerta del coche. Existen leyendas incluso sobre caiupus universitarios. ¿Cuál seria la respuesta a la pregunta de cuánto tiene que esperar el alumno ante la tardanza de un profesor? Los estudiantes han contestado dentro de un espacio que oscila entre 10 y 20 minutos, ¿Es esto una norma o es acaso una leyenda? ¿Brunvand dice que nunca encontró normas sobre cuánto se debe esperar a los profesores en los campus en que cuentan estol Algunos estudiosos del folclore están interesados en los temas universales o recurrentes» Clyde Kluckhohn sugirió que habia cinco temas que aparecían en los mitos y cuen¬ tos fbldóricos de todas las sociedades: catástrofes, general¬ mente inundaciones; muertes de monstruos; incesto; rivalidad firaternai generalmente entre hermanos; y castra¬ ción, a veces real aurnjue comtinmente simbólica. Edward Tylor, que propuso que la religión nace de la necesidad hu¬ mana de explicar los sueños y la muerte, opina que los mi¬ tos heroicos siguen un patrón general en todo el mundo: el personaje central es expuesto al nacer� luego es salvado por □tros (humanos o animales) y crece posteriormente con¬ virtiéndose en un héroe. Joseph Campbell argumentó que los mitos de los héroes recuerdan las iniciaciones: el héroe se separa del mundo ordinario, penetra en un mundo nuevo (en este caso en el mundo sobrenatural) para triunfer sobre fuerzas muy poderosas, y luego regresa al mundo ordinario con poderes especiales para ayudar a los demás. Los mitos pueden, no obstante, mostrar temas uni¬ versales, pero pocos estudiosos tras buscar una muestra representativa de las sociedades mundiales, han llegado a conclusiones absolutas que puedan considerarse verda¬ deras a nivel universal. Lo cierto es que la mayoría de los investigadores del folclore no han estado interesados en los temas generales sino en los cuentos foldóricos parti¬ culares que se cuentan en regiones o sociedades determi¬ nadas, Por ejemplo, algunos estudiosos se han especializado en el «Cuento del Esposo Estrella», un cuento muy comiin entre los nativos americanos,del que Stith Thomson presentó 84 versiones; la meta era re¬ construir la versión original y establecer su lugar de ori¬ gen, así como identificar sus elementos más comunes. Thomson sugirió que el cuento básico (y probablemente el original) es el siguiente: Dos diica� que dormían fijera de sus ca�as desean qiie las es¬ trellas se coiüviertan en sus esposos. Ouranle sus sueños las jóvmes $on recogidas por el cielo» donde se encuentran con que están casadas con dos estrellas* una de eUas es un bomtre joven y la Otra es un viejo. Las mujeres están advertidas de que no deben cavaff pero desatienden la advertencia y acddentalniente abren un agujero en el cielO- Sin ayuda des¬ cienden por una cuerda y llegan a su hcígsr sanas y salvas.
Thomson cree que el cuento debió de originarse en las llanuras y desde allí se extendió a otras regiones de NorteaméricaAlan Dundes ha centrado su trabajo en la estructura de los cuentos foldóricos, piensa que los cuentos de los nativos americanos, induyendo el del «Esposo Estrella» tienen unas estructuras características. Una de ellas es el movimiento fuera del desequilibrio. El equilibrio es un estado deseable; tener demasiado, o demasiado poco de algo, es una situación que hay que rectificar lo antes po¬ sible. El desequilibrio, al que Dundes llamaJ&fto, aparece indicado por las jóvenes del «Cuento del Esposo Estrella» que carecen de esposos. Entonces se corrige la felta, en este caso casándose con estrellas. Este cuento tiene otra estructura común nativo-americana, como dice Dundes: una secuencia de prohibición, violación y consecuencias. Las mujeres están advertidas de que no deben cavar, pero ellas lo hacen y como consecuencia escapan a su casa. Hay que observar que las consecuencias de los cuentos fbldóricos no siempre son fevorables. Recordemos el cuento dd Jardín del Edén. La pareja estaba advertida de que no debía comer la fnita dd árbol pero no hacen caso y son expulsados dd paraíso. Algo parecido ocurre con Icaro en el cuento griego cuando se le advierte que no debe volar ni demasiado alto ni demasiado bajo. Al igno¬ rar esto y volar muy alto, el sol funde la cera que sujeta sus emplumadas alas, cae y se ahoga. Tkn útil como lo anterior debe ser conocer el lugar de origen de los cuentos o cual puede ser su estructura co¬ mún. En relación con esto quedan muchas preguntas por resolver, ¿Qué significan los cuentos? ¿Por qué surgieron en d primer sitio? ¿Porqué existen ciertas estructuras co¬ munes en casi todos los cuentos de los nativos america¬ nos? Tendremos que recorrer todavía un largo camino antes de obtener respuesta para todas estas preguntas, e intentar responderlas es difícil. ¿Qué hay que hacer para comprender d significado de un cuento? Es :&cil para la gente leer los significados diferentes que pueda tener el mismo mito. Por ejemplo, conside¬ rando d mito que cuentan los hebreos acerca de un pa¬ raíso en d que solamente existía un hombre antes de Eva, la primera mujer, que nada más llegar comió d fruto prohibido dd conocimiento. Podríamos conduir que los hombres de esa sociedad debían de tener algún tipo de rencor contra las mujeres. Si d intérprete fuera psicoana¬ lista, debería asumir que d mito refleja un profundo y oculto temor dd hombre a la sexualidad femenina. Un historiador puede pensar que d mito refleja tiempos en los que los hombres vivían en la ignorancia feÜz hasta que las mujeres descubrieron la agricultura: d efecto del «conocimiento» de Eva conduce a una vida basada más en excavar que en recolectar,
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Todo esto no está lo suficientemente daro para pro¬ poner una interpretación, ¿Por qué tendríamos que creeria? Tendríamos que prestarles seria atención sólo si alguna investigación sistemática la apoyara» Por ejemplo» Michael Carrol! sugirió una interpretación fireudiana para el «Cuento del Esposo Estrella»i según la cual el cuento representa los sentimientos reprimidos de la so¬ ciedad. Específicamente! sugiere que subyace en este mito la relación incestuosa» particularmente el deseo de una hija de tener relaciones sexuales con su padre. Su¬ pone que las estrellas simbolizan a los padres. Los padres, como las estrellas� están elevados a ojos de sus hijos. Ca¬ rrol manifestó que si este cuento originado en las Llanu¬ ras simboliza la relación sexual> es porque los nativos de las Llanuras tenían mayor tendencia que otros grupos a tener imágenes de relaciones en sus versiones del cuento. Ése parece ser el caso» ya que analizando S4 versiones de este cuentOj CarroU pudo observar que las sociedades de las Llanuras eran los grupos de nativos americanos más proclives a tener imágenes que sugerían la relación sexual> incluyendo la de bajar poruña cuerda o escalerilla, que simboliza el pene, a través de un agujero en el cie¬ lo, que simboliza la vagina. Pocos estudios han investigado porqué existe una va¬ riación transcultural en la frecuencia de ciertos rasgos definitorios de los cuentos foldóricos. Una característica de la variación de los cuentos foldóricos que ha sido in¬ vestigada transculturalmente es la agresión. George Wright encontró que la variación en los modelos de crianza de los niños podía predecir por qué se manifes¬ taban algunos aspectos agresivos en las narraciones po¬ pulares. Los lugares donde los niños son castigados de forma más severa por cometer agresiones aparecen en los cuentos foldóricos* Y en tales sociedades los extraños presentan en los cuentos foldóricos una mayor tendenda que el héroe o sus amigos a cometer los actos agresi¬ vos, Parece como si los niños tuvieran miedo de exhibir agresividad hacia sus padres y hacia aquellas personas próximas a dios a causa dd temor al castigo. En estos cuentos d héroe o sus amigos más cercanos no tienden a manifestar agresividad, En los cuentos populares pueden reflejarse otros tipos de miedos. En un estudio transcultural realizado por Alex Cohén se encontró que las agresiones sin provocadón aparecen más probablemente en cuentos populares de sociedades que están sujetas a períodos impredecibles de hambrunas, ¿Porqué? Una posibilidad es que los cuentos reflejen una situación real; después de todoj una sequía severa puede aparecer de forma caprichosa, sin que tenga que haber sido provocada por una actividad humana, enviada por los dioses o la naturaleza «de fuera dd azul». Sin embargo, curiosamente, las sociedades que
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tienen historias de carestías imprededbles de sus recur¬ sos alimentarios pocas veces reflejan en sus cuentos los desastres naturales, quizá porque estos desastres son de¬ masiado terroríficos- En cualquier caso, d capricho de los desastres parece transformarse en agresiones capri¬ chosas de ciertos personajes de los cuentos populares. El folclore, lo mismo que otros aspectos dd arte, puede, al menos de forma parcial, reflejar los sentimien¬ tos, las necesidades y los conflictos que tiene la gente como resultado de crecer en su cultura,
Revisión del arte en otras culturas Sally Price desarrolló algunas cuestiones críticas sobre cómo los museos occidentales y los críticos de arte con¬ templan las artes visuales de las culturas menos comple¬ jas, ¿Porqué cuando las obras dd arte occidental o de las civilizaciones orientales se exhiben en los museos llevan el nombre de su autor? Por el contrario, las obras de arte de las culturas menos complejas, frecuentemente denomiriadas «arte primitivo», suelen ser mostradas sin el nombre de su autor; en su lugar, a menudo están acom¬ pañadas de unas notas descriptivas de dónde proceden, cómo se han efectuado y cuál puede ser su utilidad. Las palabras explicativas suden acompañar a las piezas artís¬ ticas que consideramos más necesitadas de una des¬ cripción, como si el observador necesitara alguna justificación de que lo que ve realmente es una obra de arte. Además, las obras de arte adquiridas procedentes de culturas menos complejas tienden a mostrar d nombre d d occidental que la ha adquirido. Es como si fiiera la fema dd coleccionista, no la propia obra de arte, lo que indica el valor artístico de tal obra, De la misma forma que se tiende a que las obras de arte procedentes de culturas menos complejas carezcan de nombre, también sude ser habitual no identificadas en d tiempo. Sabemos que d arte occidental y el de las ci¬ vilizaciones dásicas cambian a lo largo dd tiempo, por lo que hay que datarlos, pero d arte originario de otros lu¬ gares parece considerarse como si procediera de una tra¬ dición cultural fuera dd tiempo, ¿No sabemos que d arte procedente de pueblos con tecnologías más simples tam¬ bién cambia más o menos?, ¿acaso no es esta actitud una forma de etnocentrismo? Price, que estudió el arte de los Saramakas de Surinam, opinaba que aunque los occi¬ dentales piensan que d arte de los Saramakas ya existía en la época de sus ancestros, los propios Saramakas pue¬ den identificarlas características de su estilo artístico en relación con el paso dd tiempo. Por ejemplo, pueden describir cómo las calabazas utilizadas como decoración
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extema íh u b momento detenninado� por cambio dei estilo artístico» se emplearon como decoración de inte¬ riores. También pueden reconocer al artista que hizo ca¬ labazas talladas� lo mismo que a los que fueron innovadores del diseño y las técnicas artísticas de su arte. Aunque los artistas individuales puedan ser reconoci¬ dos en cada comunidad» algunas sociedades parecen ser más «comunales» que otras en sus estilos artísticos. Por ejemplo» comparando a los nativos Pueblo dei suroeste de EE UU con los nativos de las Grandes Llanuras» nos encontramos con que las mujeres Pueblo que son alfereras no firman sus cacharros y siguen los estilos caracte¬ rísticos de su arte. En contraste» cada guerrero de las Grandes Llanuras acentuaba sus actividades individuales pintando representaciones de las hazañas que hablan protagonizado sobre pieles de animales. El guerrero lo podía pintar él mismo o pedir que lo pintara otro. Estas pnturas podía llevarlas puestas el propio guerrero o mostrarlas fuera de su tipi. Cuando los occidentales observan cambios a lo largo del tiempo en el arte de las sociedades menos complejas» parece debido a que se plantean si este arte es realmente una íbrma tradicional o si es un «arte para turistas». El arte para turistas se suele evaluar de forma negativa por¬ que está hecho para ganar dinerc� aunque también es cierto que los artistas más femosos frecuentemente tra¬ bajan también por dinero o son mantenidos por mece¬ nas y» desde luego» el hecho de cobrar por una obra no parece interferir con su evaluación artística-
Cambio artístico y contacto cultural Es realmente cuestionable si el contacto con Occi¬ dente alteró algunos de los aspectos del arte en otras cul¬ turas» pero esto no implica que ese arte no hubiera cambiado previamente. ¿Qué tipo de cosas pueden cam¬ biar con estos contactos? En algunos lugares los artistas comenzaron a representar el momento del encuentro con los europeos. Por ejemplo» en Australia» numerosas representaciones efectuadas sobre rocas por los aboríge¬ nes comenzaron a mostrar buques navegando» hombres a caballo llevando pistolas e incluso hierros de marcar ganado. Animados por los europeos» estos artistas indí¬ genas comenzaron a pintar en cortezas de árboles» lonas y cantería para vendérselas. Este arte pensado para la venta curiosamente rescató temas abandonados antes del contacto» a la vez que incluyó nuevos temas con barcos y cañones. Conforme la población indígena era diezmada por su contacto con los europeos» desapareció gran parte de sus formas artísticas tradicionales» particularmente las
leyendas y las pinturas murales hechas en rocas que esta¬ ban asociadas con los lugares sagrados de cada dan. Las leyendas describían la creación de los lugares sagrados» y los motivos artísticos con animales y héroes humanos marcaban los lugares. En Norteamérica el contacto entre grupos nativos pro¬ dujo cambios en el arte antes incluso de la llegada de los europeos» de forma que se produjo un aumento de los in¬ tercambios económicos para conseguir cobre» dientes de tiburón y conchas marinas con el fin de que personas que anteriormente no habían tenido acceso a esos materiales pudieran ejecutarlas obras de arte. Se tomaron prestadas algunas de las ceremonias de otros grupos» y con su adap¬ tación se produjeron también cambios en las formas ar¬ tísticas tradicionales. Este intercambio existente entre los grupos nativos continuó después de la llegada de los eu¬ ropeos. Los Navajo» muy conocidos actualmente por sus alfombras trenzadas» no las realizaban en el siglo xvn, Probablemente obtuvieron esta técnica de los indios Hopi y después comenzaron a aplicarla con la lana de sus reba¬ ños de ovejas. El contacto con los europeos también pro¬ dujo cambios en el arte; se introdujeron materiales nuevos como los abalorios» los vestidos de lana y la plata. Las herramientas de metal como agujas y tijeras se usan en la elaboración de las pieles para hacer con ellas vesti¬ dos de piel mejor cortados y decorados� En la zona Nor¬ oeste la mayor disponibilidad de herramientas metálicas hizo posible construir tótems mucho mayores y también mejorarla construcción de las casas. CD-ROM Actividad de vídeo iii�12
Después de su reclusión en reservas» cambiaron sus formas de vida» y la venta de sus obras de arte y objetos de artesanía se convirtió en un modo de obtener unos in¬ gresos extra. La mayoría de esta artesanía empleaba dise¬ ños y técnicas tradicionales» algo alterados para complacer las expectativas de los europeos. Los recién llegados tuvieron un papel importante en los cambios aparecidos en el arte y en la artesanía. Algunos tenderos se convirtieron en mecenas de artistas determinados» que dedicaron todo su tiempo a su profesión y los comer¬ ciantes feívorecieron los cambios así como la aparición de nuevos objetos: por ejemplo» ceniceros y tazas de cerᬠmica. También los estudiosos desempeñaron un gran pa¬ pel en estos cambios. Algunos ayudaron a los artesanos a aprender los estilos artísticos del pasado que ya habían desaparecido. Por ejemplo» con el apoyo de antropólogos y de otras personas en el área de Santa Ee» María y lulián Martínez� del pueblo de San Ildefonso» recuperaron un
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Loe aborígane$ au$tralianoe acostumbraban a efectuar pinturas �bre rocae. Actualmente pintan $obre otro$ materialee para el mercado del arte.
estilo de cerámica pulida de color negro sobre negro pro¬ ducida por los antiguos pueblos de la zona. Algunos de loe cambios artísticos producidos tras el contacto con los occidentales se pueden predecir a través de la investigación transcultural de las variaciones artís¬ ticas, Fue Fischer quien descubrió que las sociedades igualitarias tenían diseños menos complejos y más simé¬ tricos que las sociedades estratificadas. Con la pérdida de las formas tradicionales de vida y con el incremento de los trabajos asalariados y de las empresas comerciales» muchos grupos de nativos americanos han llegado a ser socialmente más estratificados» Extrapolando los resulta¬ dos de Fischer� podríamos predecir que los diseños de un arte visual se harán más complejos y asimétricos con¬ forme se incremente dicha estratificación social, Ciertamente> si se compara el arte antiguo de la reserva (1870-1901) de los Shoshone-Bannock del sudeste de Idaho con su arte actual (1973-1983) j está daro que éste se ha hecho más complejo a medida que se ha incremen¬ tado la estratificación social. También podría ser cierto que el arte cambió porque los artistas se dieron cuenta de que la asimetría y la complejidad se vendían mejor a la gente que coleccionaba sus obras.
Sumario 1. No todas las sociedades poseen en su lengua una palabra que designe el concepto de arte> pero el arte parece tener universalmente varias cualidades. Expresa tan bien como comunica» estimula los sentidos» afecta a las emo¬ ciones y evoca ideas. Se produce en vías y estilos basados en modelos culturales y tiene un significado cultural. Ade¬ más se piensa que unos artistas son mejores que otros.
2, Todas las sociedades decoran o adornan el cuerpo de forma temporal o permanente, Pero hay una enorme variación cultural tanto en la forma como en las partes que se decoran. La decoración corporal se puede utilizar para delinear la posición social» sexual u ocupacional. También puede tener un significado erótico como» por ejemplo» dirigir la atención a las zonas erógenas del cuerpo. 3. Los materiales utilizados en las artes visuales» la forma en la que se emplean estos materiales y los objetos naturales que puede escoger el artista para representarlos varían de una sociedad a otra y revelan mucho sobre la relación particular de una sociedad con su medio am¬ biente, Algunos estudios indican una correlación entre el diseño artístico y la estratificación sociaL 4. De la misma forma que las artes visuales» la mú¬ sica es un objeto destacado que muestra variación de una sociedad a otra. Algunos estudios sugieren correlación entre los estilos musicales y la complejidad cultural. Otras investigaciones muestran relación entre las cos¬ tumbres en las prácticas educativas de los niños y la pre¬ ferencia de una sociedad por ciertos patrones rítmicos» rangos tonales y calidad de voz, 5, El folclore constituye una amplia categoría que incluye mitos» leyendas» cuentos populares» baladas» adivir\anzas» refranes y supersticiones de un grupo cultural. Por lo general se transmite oralmente» aunque también se puede hacer de forma escrita. Algunos antropólogos han identificado temas generales en mitos tales como ca¬ tástrofes, matanza de monstruos» incesto» rivalidad entre hermanos y castración. Los mitos también pueden refle¬ jarlas principales preocupaciones de una sociedad, 4 El arte es siempre cambiante, pero los contactos culturales recientes han tenido efectos muy profundos
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sobre el arte en varias partes dei mundo, Al haber sido diezmadas gran parte de las poblaciones indígenas» mu¬ chas áreas han perdido algunas de sus características ar¬ tísticas tradicionales. Pero el arte también cambia cuando los artistas comienzan a vender su arte y su habilidad.
Glosario de términos Foldore Polifonía
gina web relacionado con este tipo de arte (http;// www�une.ed u�au/Arch/ROKCAitT/MM RockArtJitml)» Lea la introducción y después la sección sobre etno¬ grafía del arte rupestre. Siga algunas relaciones para observar este tipo de arte en las diferentes regiones mundiales.
Lecturas sugeridas Anderson, R. L. Gjiíwpí'í A Cpmpflrflírye Stitdy ofPhi-
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