Leyenda de Pácaritambo o del Cerro Tamputoco

Leyenda de Pácaritambo o del Cerro Tamputoco (Llamada también leyenda de los hermanos Ayar)

Según esta leyenda, dice que en tiempos muy lejanos, de tres ventanas del cerro Tamputoco salieron los hermanos Ayar, con sus respectivas hermanas. Sus nombres eran: Ayar Manco, Ayar Carchi, Ayar Uchu y Ayar Auca. Sus hermanas eran: Mama Ocllo, Mama Huaro, Mama Ipacura y Mama Rahua. Las cuatro parejas marcharon en dirección al Cuzco en busca de tierras fértiles …

 Esto me hace pensar, de lugares distintos pero pertenecientes a un mismo” imperio o reyno” salen 4 tribus representadas por cada uno de los hermanos y sus esposas.  Posiblemente como consecuencia de la caída de Tiahuanaco. Estos salen o mejor dicho huyen en busca de un nuevo lugar para asentarse y empezar una nueva civilización.  Además de que es así como esta historia convertida en mito ha llegado a nuestros días,  seriamente trastocada, debido al paso del tiempo, el olvido, la transmisión oral y la hispanización.

- Los Hermanos convierten en piedra a Ayar Cachi: Ayar Cachi era el mas fuerte y de cada hondazo que arrojaba formaba una quebrada, alarmando a los hermanos por sus poder. Con engaños lo hicieron volver a Tamputoco en busca de ciertos vasos de oro y semillas.

 La etnia o ayllu representado por Ayar Cachi, posiblemente los vestigios de alguna de las etnias guerreras de Tiahunaco, era la mas poderosa y/o con mayor cantidad de integrantes (mayor fuerza de trabajo), esto hizo que los demás se sintieran en profunda desventaja y le tendieran una trampa para “restarle importancia” a este ayllu.

 En el camino hacia la fundación del Cuzco estas etnias o ayllus representados por cada uno de estos hermanos Ayar, van pereciendo o son llevadas al borde de la total  extinción, ya sea por decisión de los propios hermanos o por consecuencia de las luchas con pobladores de las zonas.

Al final solo queda Ayar Manco con las esposas de sus hermanos, que son quienes se establecen en el Cuzco, en donde se funda el Imperio de los Incas.

 La etnia representada por Ayar Manco es la única superviviente a todas estas vicisitudes unida a los restos de lasa etnias de sus hermanos, principalmente sus mujeres para poder aumentar su numero con rapidez, son quienes inician lo que seria después el imperio incaico.

Leyenda del Lago Titicaca (Llamada también leyenda de Manco Cápac y Mama Ocllo)

Cuenta esta leyenda, que el dios Sol, compadecido del estado de barbarie y anarquía en que vivían los pueblos, envió a sus hijos Manco Cápac y Mama Ocllo, con el fin de unirlos y enseñarles a los hombres el arte de buen vivir y el culto al sol.

Se puede notar claramente la influencia hispano-cristiana, establece cierta similitud  con “Adán y Eva” así como un carácter mesiánico, cuando envía a sus hijos (Manco Cápac y Mama Ocllo) comparada con la venida de Cristo.

Se les entrega una barrita de oro, encargándoles que por donde fueran buscaran voluntad, que allí fundaran la capital del Imperio y redimieran a las gentes. Obedeciendo el mandato divino, la pareja salió de una de lasa islas del Lago Titicaca y se dirigió hacia el norte en busca del sitio donde establecerían la ciudad Imperial.

 Esta barrita es divina o “milagrosa”, donde se hunde significa tierra fértil, que viene a  ser lo más importante para una sociedad agrícola, porque es la base de sus existencia.  Para el Psicoanálisis esto sería: Manco Cápac tiene el don de mando, la capacidad de  procrear una gran prole (simbolismo de la barrita de oro); el lugar donde fundan el   futuro imperio sería el lugar con mejores condiciones para iniciar una nueva civilización (posiblemente abundaban las mujeres fértiles).  Es muy probable que estén vinculados a la cultura Tiahuanaco. Una vez hundida la barrita se inicia el proceso de aculturación, es decir, la división de las tareas por genero.

La Leyenda de los Pururaucas

Esta leyenda Inca cuenta que cuando los Chancas invadieron ele Cuzco de 1483, el  príncipe Cusi Yupanqui (Pachacútec) logró derrotarlos con ayuda de los Pururaucas.

Mientras que le ejército Inca se enfrentaba los Chancas, cuando en los primeros aumentaban las bajas, sentía que llegaban nuevos contingentes silenciosos que se incorporaban a pelear a su lado y extenuaban el empuje de los contarios. Los Soldados del Cuzco dieron voces anunciando a sus enemigos que las piedras y las  plantas de aquellos campos se convertían en hombres y venían a pelear en defensa del Cuzco, porque el Sol y Viracocha se lo ordenaban. Los Pururaucas después de vencer a los Chancas, se convirtieron en piedras. Fueron llevados al Cuzco después de aparecerle al Inca en sueños quejándose de dejarlos abandonados en el campo, sin rendirles homenaje. El Inca Viracocha los llevan al Cuzco, en donde fueron venerados entre sus huacas más importantes.

 Los Pururaucas pueden serían las tribus aledañas al Cuzco que apoyaron a los Incas en su batalla contra los Chancas, el convertirse en piedras significaría que los estragos que les fueron causados hicieron que estén al borde de la extinción, así se unieron al  Cuzco para empezar su época de mayor auge y prosperidad.