Las Mentiras de Los Hornos de Hitler (Enrique Abaroa)
May 4, 2017 | Author: aragor1 | Category: N/A
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Descripción: Esta investigación revisionista fue elaborada con la intención de derrumbar algunas de...
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Prólogo. Esta investigación revisionista fue elaborada con la intención de derrumbar algunas de las mentiras que han propagado hasta el exceso, dos obras proshoah de divulgación masiva durante más de 60 años.
Noche y Niebla es un documental realizado en 1955 por el recién fallecido director Alain Resnais, que muestra los "horrores" del Holocausto mediante una combinación de material cinematográfico de archivo, un guion crudo y una narración mesurada, que, finalmente, dio al mundo una joya propagandística aparentemente inobjetable.
Por otro lado, Los hornos de Hitler (1946) es el título en español que recibe la ya clásica obra literaria escrita por Olga Lengyel, afamada exinterna del campo de concentración de AuschwitzBirkenau. Seguramente cualquier persona que, buscando conocer a fondo la verdad sobre el Holocausto, consulte distintos medios de información, se encontrará con cortometrajes y archivos fílmicos extraídos casi siempre del mítico documental de Resnais, antes mencionado, o bien, leerá el libro de Olga Lengyel, descubriendo el material fotográfico que la autora incluyó para potenciar el impacto de su historia. Aspecto relevante de la falta de originalidad y carencia de rigor histórico e investigativo, pues de esas dos únicas "fuentes fiables" se han multiplicado los sofismas, tergiversando la historia, y finalizando con la creación de una fábula indefendible. ¿Quién no recuerda las tradicionales (pero siempre impresionantes) imágenes de los cientos de cadáveres esqueléticos que yacen en los campos de concentración? ¿Quién no recuerda las fosas atestadas de cuerpos desnudos o a los sobrevivientes que difícilmente caminaban sobre el barro? Y, sobre todo, ¿cómo olvidar aquella terrorífica imagen en la que aparecen más de veinte cabezas rapadas y amontonadas en el piso? Probablemente usted leyó en el libro de Lengyel aquella mítica nota que rezaba: «Los cuerpos pertenecientes a estos cráneos sirvieron para la fabricación de jabón y artículos de cuero»; y, al ver la famosa foto, tomó como verdadera tal afirmación.
Ahora bien, si algún lector o investigador tuvo la oportunidad ver el trabajo fílmico de Resnais, también fue testigo de esta misma escena: Mientras aparecen imágenes de cadáveres almacenados en contenedores de concreto, cuerpos decapitados y cabezas en un recipiente cilíndrico, el narrador Michel Bouquet comenta: «Con los cuerpos... no se puede decir. Con los cuerpos hacían...
jabón...».
Hasta ahora, ambas obras presentan una sola versión de los hechos, que, dicho sea de paso, fue perfeccionada con el paso del tiempo, añadiendo el conocido mito de un "origen judío" a ese jabón. ¿Acaso los alemanes decapitaban a sus víctimas judías para convertirlas en tan escandaloso producto? ¿Era la decapitación algo común en los campos de concentración? Si esto no es cierto, ¿cómo se explica la aparición de cadáveres sin cabeza en las fotos y el filme? No se preocupe, a través del presente texto, usted conocerá las respuestas a estas preguntas. Y cuando logre dimensionar la magnitud del engaño, deseará saber todavía más. Sería mejor que empiece a especular sobre lo que lee o ve en las obras proshoah, pues ni siquiera los periódicos "serios" como El Mundo, de España, informan de manera adecuada. Ya entenderá por qué lo digo.
Enrique Abaroa. Agosto de 2014.
“Cuando todas las mentiras hayan sido contadas y olvidadas, la verdad seguirá estando ahí. La verdad no va de un sitio a otro y no cambia de vez en cuando. No se la puede corromper como no se puede salar la sal. No puedes corromperla porque eso es lo que es”.
Cormac McCarthy
Para consultar este y otros títulos ir al sitio
libros-prohibidos8.blogspot.com
Notas aclaratorias. Decidí trabajar sobre este tema en particular porque, como muchos otros, he leído el famoso libro Los hornos de Hitler , que se ha convertido en una "publicación estrella" para quienes desean mantener vigente la mancha del Holocausto en nuestro tiempo. A los 10 u 11 años tuve mi primer contacto con la obra de Olga Lengyel. Aún cursaba los primeros niveles de educación básica cuando el profesor en turno pidió al grupo entero (20 o 25 niños de la misma edad) adquirirlo para realizar lecturas asiduas de cada uno de sus capítulos. No hace falta decir que todos compramos aquel libro, y, naturalmente, dedicamos una porción de las clases para realizar la actividad de forma grupal. Aunque ha pasado el tiempo, las fotos que incluyó Lengyel en su libro no dejan de asombrarme; las descripciones ofrecidas junto con las imágenes no dan paso al razonamiento individual, y, como puede esperarse, alteran los sentidos para permitir una sola expresión: ¿Cómo es posible? Al igual que en Europa y Estados Unidos, los materiales proshoah son elementos "de aprendizaje", recurrentes en los salones de clase americanos de todos los niveles académicos. Sólo basta con mirar las mochilas de los niños para hallar el famoso Diario de Ana Frank, o en la de los adolescentes para encontrar obras como Si esto es un hombre de Primo Levi o El hombre en busca de sentido de Viktor Frankl. Yo no cuestiono las decisiones que se toman en las escuelas, pero me parece aberrante que poco a poco este tipo de relatos se estén convirtiendo en lecturas obligadas para quienes desean conocer un poco de historia mundial. ¿Acaso es una buena estrategia mostrar a los niños fotos de cadáveres tirados por todos lados, fosas comunes y seres decapitados? ¿Así es como aprenderán historia? ¿No se está forjando en ellos una postura "personal" a base de horror y mentiras? Si después de leer publicaciones (o mirar documentales) que muestran un único lado de los hechos, queda algo de criterio en las personas, espero ansiosamente que sea utilizado para elegir el camino de la libertad de pensamiento. Mi investigación comenzó hace un año, y, a pesar de que estuvo detenida durante varios meses, creo que llegó el momento de terminarla y publicarla. Si ustedes también quedaron impactados con las fotografías de Los hornos de Hitler o con la producción cinematográfica de Resnais, les aseguro que a partir de hoy cambiará su modo de percibir las cosas (al menos dentro del mundo histórico del Holocausto). Aclaro, finalmente, que no analizaré a fondo la cuestión del "jabón judío", pero sí la trataré en ciertas partes del texto, ya que está relacionada con mi publicación. Si desean conocer mejor este y otros temas, pueden consultar la gran cantidad de información especializada que se encuentra disponible en sitios revisionistas de la web.
Los hornos de Hitler: Análisis de una mentira. Al final del Capítulo X: Un Nuevo Motivo Para Vivir, Olga Lengyel termina de sembrar el mito del "jabón judío"; previamente establecido al incluir la siguiente imagen al comienzo del Capítulo VII: Una Proposición en Auschwitz:
Lengyel declara en Un Nuevo Motivo Para Vivir:
«Los Superhombres Nórdicos sabían aprovecharlo todo. En envases inmensos se recogía la grasa humana, que se había derretido a altas temperaturas. No tenía nada de extraño que el jabón del campo oliese de manera tan peculiar». Con todo esto, el lector suele asumir, principalmente, tres cosas: 1. Los alemanes fabricaban jabón en Auschwitz (pues Lengyel no menciona la locación exacta de la foto) a partir de los restos de los internos del campo de concentración. 2. Los alemanes hacían uso de la decapitación para aprovechar los cuerpos y así elaborar el producto antes citado, o, como también alega el libro, artículos de cuero. 3. Todas las actividades anteriores fueron comunes mientras duró el Holocausto. Nada más lejos de la realidad. ***
El proceso de creación de "jabón de grasa humana" no está descrito en Los hornos de Hitler, sin embargo, Lengyel hace ciertos apuntes que permiten reconstruir, grosso modo, cómo se llevaba a cabo dicha práctica. En el Capítulo X: Un Nuevo Motivo Para Vivir, se encuentran estas líneas:
«A veces había tal exceso de trabajo en los crematorios, que no daban abasto en una jornada diaria para desembarazarse de los cadáveres acumulados. Entonces tenían que quemarlos en las "fosas de la muerte". Eran trincheras de más de cincuenta metros de largo por cuatro de ancho. Estaban provistas de un sistema muy hábil de drenaje para dar salida a la grasa humana». Aquí Lengyel habla de un ingenioso sistema que permitía drenar la grasa humana proveniente de los cadáveres incinerados. Anteriormente se vio una anotación similar, aunque en ese caso sólo hacía referencia a los hornos crematorios. Con esta información podemos entender que la fabricación de jabón hecho a partir de grasa humana, comenzaba con la incineración de los cadáveres en hornos o trincheras que tenían sistemas especiales de captación. Después los Sonderkommandos recogían el líquido y, de algún modo increíble, se procesaba en el campo para convertirlo en jabón. Así de fácil. Como esta descripción de hechos es dada por una sobreviviente de AuschwitzBirkenau, se puede inferir que, sin importar su nula meticulosidad, es fiel a los procesos emprendidos por los alemanes. Pero, ¿qué pasa cuando el relato de un testigo entra en conflicto con el de otro?
Medallones (título original: Medaliony) es un libro compuesto por ocho relatos
cortos, todos ellos de la mano de la autora polaca Zofia Nałkowska.
El libro fue publicado en 1946, poco después del final de la segunda guerra mundial. En él, se plasman distintas historias sobre crímenes alemanes cometidos en Polonia (la autora, de hecho, fue miembro de un comité especial para la investigación de aquellos sucesos en ese mismo país). El estilo de Nałkowska ha logrado que Medallones sea considerada una obra de consulta obligada entre los círculos proshoah. Otro de sus puntos fuertes está en el contenido narrativo, ya que la mayor fuente de información proviene de testimonios dados por personas que conocieron personalmente a Nałkowska. El primer relato se titula Profesor Spanner. Y en él se narra la segunda visita de la autora al Instituto de Anatomía de Danzig. En aquella ocasión, la autora iba acompañada de "dos colegas del doctor Spanner", principal científico del lugar hasta 1945. Al llegar al Instituto de Anatomía de Danzig, Nałkowska halló los restos que más tarde incluirían Lengyel y Resnais en sus trabajos.
Algunos extractos de la descripción dada por Nałkowska se pueden leer a continuación:
«Los jóvenes, amarillentos y desnudos cuerpos, duros como esculturas, estaban perfectamente conservados, a pesar de haber esperado durante meses, hasta el momento en que ya no serían necesarios. Reposaban en largos contenedores de concreto parecidos a sarcófagos con las tapas abiertas, apilados unos encima de otros – con los brazos a los lados, sin estar acomodados sobre sus pechos de acuerdo con el rito funerario, y las cabezas desprendidas de los torsos, de manera que los cuerpos parecían estar tallados en piedra». «Uno después de otro, registramos contenedores llenos de cadáveres...». «Dos tinas contenían solamente cabezas decapitadas y rapadas, apiladas una encima de la otra – los rostros humanos cayeron al suelo como papas, algunos de lado, como si estuviesen descansando sobre una almohada, otros boca arriba o boca abajo. Estaban amarillentos, lisos, perfectamente conservados, seccionados por el cuello de manera uniforme, como si ellos también hubiesen sido tallados en piedra». «Más adelante se encontraban alineados incluso otros contenedores llenos de cadáveres, y cerca de ellos tinas con hombres sin piel, partidos a la mitad o en cuartos. Solo un contenedor, lejos de los otros, estaba lleno con los restos de algunas cuantas mujeres». Nałkowska también escribió algo acerca del proceso de fabricación de jabón con "grasa humana" como materia prima; la explicación de los métodos utilizados en el Instituto de Anatomía fue dada por un joven, delgado y pálido hombre con ojos azules y vivaces, que llegó escoltado desde la prisión para testificar ante la comisión que investigaba los crímenes nazis en Polonia. Él joven era de Danzig y había obtenido un trabajo en el Instituto (donde conoció al doctor Spanner). Según el libro de Nałkowska, los cuerpos que se encontraban en el Instituto eran usados por Spanner para realizar investigaciones, que después servirían como material de apoyo, ya que al momento de los hechos, este doctor se encontraba escribiendo un libro de anatomía. El testimonio del joven sólo indica que los cuerpos eran preparados por los alumnos del doctor; en 1944 recibieron la orden de separar la grasa de los cadáveres (Spanner construiría modelos anatómicos de esqueletos humanos a partir de los restos óseos), así como la piel, los músculos y las venas. Varios párrafos más adelante, el joven testigo se encarga de describir cómo se fabricaba el jabón a partir de la grasa extraída de los cuerpos. ***
Como he dicho al principio de esta publicación, no me centraré en desmitificar la historia del "jabón de grasa humana", porque no es mi objetivo principal, y el material disponible en otras fuentes revisionistas es abundante. Pero algo que sí deseo hacer ahora, es contrastar las declaraciones de Olga Lengyel con las del testigo interrogado por Zofia Nałkowska. Hasta ahora, sabemos que Lengyel no entra en detalles, pues se limita a resumir la técnica alemana de creación de jabón al simple hecho de captar la grasa proveniente de los cadáveres incinerados en el campo (¿será que a los cuerpos esqueléticos y malnutridos de los internos de Auschwitz-Birkenau todavía les quedaba grasa?). Por su parte, el testimonio escrito en Medallones, indica que el doctor Spanner solicitaba a sus alumnos separar la grasa de los cadáveres del Instituto de Anatomía de Danzig. Luego la dejaban reposar durante el invierno. Una vez que los estudiantes se habían marchado, Spanner, junto con un equipo selecto de trabajadores del Instituto, preparaba la grasa reposada que, al cabo de cinco o seis días, terminaba siendo una especie de sustancia jabonosa. ¿Qué testimonio luce más creíble? Si bien ambas historias alimentan el conocido mito del jabón creado a partir de grasa humana, cualquier lector que compare ambas versiones entre sí, podrá distinguir que el relato de Nałkowska se centra en los detalles, mencionando tiempo de preparación, origen de la materia prima y locación exacta. Olga Lengyel ni siquiera fue capaz de explicar el método nazi que usaron los Superhombres Nórdicos para crear jabón con grasa humana; pero sí continuó alimentando este cuento con anotaciones engañosas y pruebas parciales... Todavía quedan algunos puntos por revisar. Al final de esta investigación incluiré anotaciones importantes del investigador polaco Joachim Neander, quien, a pesar de no ser revisionista, realizó un estudio completo sobre este asunto, que permitirá conocer a fondo el origen de los cuerpos decapitados del Instituto de Anatomía de Danzig, así como el asunto del jabón del doctor Spanner. *** ¿Qué otros errores comete Olga Lengyel? En Los hornos de Hitler se presenta la primera fotografía incluida en este texto, como única prueba de aquellas atrocidades. Al leer el pie de la imagen, se entiende que los cadáveres pertenecientes a los cráneos sirvieron para la creación de jabón y otros artículos de cuero. Así que las cabezas pueden ser consideradas como un desperdicio que quedó después de que los alemanes fabricaran los productos mencionados por Lengyel, ¿o no? Lo curioso en este caso es que Olga olvidó incluir una fotografía más, que da detalles de la misma escena.
Esta fotografía aparece en los archivos israelíes de la Casa de los Combatientes del Gueto. En la galería en línea posee el número de registro 31,164. En los archivos gráficos cada pieza posee una descripción; para el registro 31,164 se tiene la que sigue: Cabezas (de internos del campo) cortadas y partes de cuerpos desmembradas, en el Instituto de Anatomía en Wrzeszcz. Fotografiado en 1945. Nota: Este instituto usó cadáveres humanos para investigaciones. Los cuerpos llevados al instituto fueron los de los internos del campo 1 , principalmente de ascendencia alemana, y no los cuerpos de los internos judíos. 0F
Cabe destacar que las notas y descripciones vertidas en cada foto son de gran relevancia, pues estos archivos forman parte de uno de los museos del Holocausto más importantes del mundo. La Asociación Cultural Tarbut Sefarad explica que este museo fue fundado en 1949 por sobrevivientes del Holocausto, luchadores del gueto de Varsovia y partisanos, que se asentaron en la Galilea Occidental. Y que además posee un Centro de documentación e investigación que consta de una editorial, una biblioteca, archivos, La descripción contiene un ligero error; los cuerpos de la fotografía 31,164, si bien no son de judíos, tampoco eran de los internos de los campos de concentración. En secciones posteriores se dará a conocer el origen de los cuerpos. 1
una colección de arte relacionada al Holocausto y una base de datos informatizada para la investigación del Holocausto. También hace énfasis al mencionar que los archivos contienen cientos de miles de documentos, fotografías y testimonios conectados con el período del Holocausto y temas relacionados con este. Resumiendo: La descripción otorgada a la fotografía por parte de la Casa de los Combatientes del Gueto, tiene más peso que la suministrada por Olga Lengyel. Creo conveniente resaltar una vez más que las autoridades del archivo gráfico aseguran que los cuerpos de la fotografía no eran de internos judíos. Este punto es vital para la investigación, ya que las aseveraciones del museo contradicen las de algunos autores proshoah (como Lengyel) al tratarse de los cadáveres supuestamente usados para crear jabón. ***
Regresando al tema del libro, podemos observar que en la foto no suministrada por Lengyel, aparecen los cuerpos que, en su propia descripción, ya habían sido transformados por los alemanes. Aunque el número de cuerpos es menor al número de cabezas, la mentira poco a poco se va desmoronando. ¿Será que Olga no incluyó esta foto porque así ya no tendría sentido decir que fueron usados como materia prima por la industria nazi? ¡Claro! Adjuntar una sola imagen con los desechos del proceso criminal (cabezas), y argumentar que los cadáveres decapitados ya fueron consumidos con fines malévolos resulta creíble. Para que no quede duda sobre la veracidad de lo que expongo, he realizado un análisis detenido sobre ambas fotografías.
Primero tomé la foto publicada en el libro, y de ella seleccioné específicamente una cabeza con ciertos rasgos, que después fueron registrados así: I. II. III.
Músculo orbicular de la boca con gesto característico. Mancha oscura en gran parte de la nariz Ceja izquierda poblada, sobresaliente.
Al hacer esto, busqué en la segunda foto una cabeza que coincidiera con las características de la primera, pues sólo de esta forma podría verificar que estoy hablando de los mismos restos.
Finalmente, tenemos que una cabeza de características similares fue hallada en la parte central de la imagen del archivo de la Casa de los Combatientes del Gueto. Por lo mismo, procedí a hacer una comparación con mayor detalle.
A la izquierda se encuentra la cabeza del libro, y a la derecha la que corresponde a la imagen del archivo en línea. En ellas he resaltado los rasgos que se definieron con anterioridad, y, con esto, también he demostrado que hay total concordancia entre el músculo orbicular de la boca, la mancha sobre la nariz y la ceja izquierda sobresaliente.
El análisis permite concluir que Olga Lengyel no eligió el material fotográfico de apoyo suficiente, y, además, que hizo declaraciones mal fundamentadas, ya que los cuerpos supuestamente utilizados para crear jabón y otros artículos, en realidad estaban guardados en el Instituto de Anatomía de Danzig, y no habían sido sino procesados y estudiados con fines médicos y científicos. ¿Habría sido muy difícil para Olga incluir una segunda foto del mismo suceso? En realidad, la documentación existente sobre los hechos ocurridos en el dichoso Instituto de Anatomía es grande. Existen fotografías de todos los cadáveres (en almacenamiento), de las mismas cabezas (en contenedores, apiladas o sobre una mesa) y de la escena en general. Como la foto suministrada por la Casa de los Combatientes del Gueto solamente muestra alrededor de 15 cuerpos, es necesario adjuntar a este documento otro conjunto de imágenes e información. En la siguiente sección llevaré a cabo esta tarea al hablar del documental Noche y niebla.
Noche y niebla: Tergiversación en forma de cine. Esta obra francesa está basada en los hechos supuestamente acontecidos en los campos de concentración alemanes, aunque hace especial énfasis en Auschwitz y Majdanek. A partir del minuto 24, el trabajo de Resnais muestra durante algunos segundos un conjunto de hornos crematorios construidos en el campo de Majdanek, después de esto, enormes pilas de anteojos, peines, platos, ropa, zapatos... incluso depósitos de "cabello de mujer", que fue usado por los alemanes (pues parece que tenían cosas más importantes que la guerra) para crear tela, también incluida en las tomas. Luego montones de huesos, usados como fertilizante... Y, como si el terror no fuese suficiente, capturas de cadáveres almacenados en tanques de concreto, luego, cabezas rapadas en un contenedor, y a un lado, sus cuerpos. En este caso, las últimas tomas son las que más nos interesan. Por eso, son incluidas a continuación. Toma 1.
Contenedores de concreto que abren los rusos al llegar al Instituto de Anatomía de Danzig
Toma 2.
Cuerpos almacenados en aquellos contenedores. Como puede observarse, no presentan signos de desnutrición.
Toma 3.
Este cadáver (que no está rapado) aparece junto a otros en uno de los contenedores.
Toma 4.
Conjunto de cabezas en contenedor cilíndrico. A su lado, cinco cuerpos decapitados. Todos estos restos fueron transportados y acomodados por los rusos para documentar su investigación.
Toma 5.
Detalle de los cuerpos acomodados por los rusos. Resulta interesante la ausencia de cadáveres esqueléticos (típicos en las últimas etapas de la segunda guerra mundial).
Toma 6.
Ampliación de las cabezas depositadas en el contenedor cilíndrico.
Toma 7.
Última captura de la secuencia; muestras de cabezas distintas a las depositadas en el contenedor de las tomas 4 y 6.
¿Cómo saber si estos restos son los mismos que aparecen en las fotos de la Casa de los Combatientes del Gueto y el libro de Olga Lengyel? Esto se hace, una vez más, por medio de un análisis de imagen. Elegí la toma 6, que tiene mayor nivel de detalle al mostrar las cabezas.
Y comparé la cabeza más cercana a la lente de la cámara con las dos anteriores.
La línea amarilla indica la posición de un corte realizado sobre el hueso frontal, aproximadamente a 1.5 centímetros por encima de los arcos ciliares. Este corte continúa a través de la zona temporal y seguramente termina en la escama occipital. ¿Para crear "jabón de grasa humana" es necesario realizar esto? De ninguna manera. En un centro de estudios anatómicos serrar la bóveda craneal, con el fin de estudiar el cerebro, es algo completamente normal.
Se puede notar que el músculo orbicular de la boca presenta una figura parecida a la vista en el primer cuadro y una figura casi idéntica a la que se muestra en el segundo. La ceja izquierda es igualmente sobresaliente en las tres imágenes, mientras que la ceja derecha se acentúa un poco en un extremo del arco ciliar para irse difuminando conforme se sigue su trazo. En este aspecto, el único punto que no concuerda con las imágenes anteriores es el que marqué con color azul. La nariz que aparece en la toma 6 no tiene ningún tipo de mancha. Aunque esto puede desestabilizar la comparación, creo prudente exponer una teoría que explicaría su ausencia. Las fotos del libro de Olga Lengyel y de la Casa de los Combatientes del Gueto fueron tomadas a cabezas que yacían en el piso. La primera fotografía mostrada en esta investigación muestra más de 20 cabezas rapadas, acomodadas por los investigadores rusos. La segunda fotografía es todavía más caótica; aproximadamente 15 cuerpos y una veintena de cráneos desacomodados por los mismos investigadores. Al llegar al Instituto de Anatomía de Danzig, este grupo de personas se encargó de inspeccionar instalaciones, maquinaria y posibles pruebas de crímenes. Primero localizaron todos los restos humanos y los fotografiaron; después los sacaron del inmueble y los "expusieron" sobre el piso. Como dije, de estas últimas acciones provienen las fotografías de Lengyel y el archivo gráfico. Por ello, es muy probable que los restos humanos se ensuciaran y maltrataran al sufrir un manejo tan violento. En cambio, en las tomas 4 y 5 pueden verse cabezas depositadas en un contenedor y cuerpos acomodados sobre un soporte, presumiblemente recubierto de azulejos (el piso está trabajado con baldosas blancas). Lo que busco con esto, es explicar que las capturas tomadas del filme de Resnais fueron realizadas cuando el Instituto de Anatomía aún no había sido totalmente manipulado por los rusos. Los cuerpos estaban posicionados de cierta manera, tal vez en contenedores, tanques de concreto o soportes especiales, pero siempre limpios y en relativo orden. Así se explicaría la ausencia de manchas y suciedad en los restos del filme (y, por lo tanto, en la toma 6). Y también se fundamenta el hecho de que las cabezas del libro y el archivo gráfico presenten evidentes imperfecciones. *** ¿Noche y niebla menciona en qué sitio fueran realizadas las tomas anteriores? No. Conforme van pasando las imágenes, Bouquet hace una sola explicación:
«Con los cuerpos... no se puede decir. Con los cuerpos hacían... jabón...».
Este pequeño grupo de palabras puede crear algo de confusión, ya que da la impresión de que los alemanes tenían en acción un masivo proceso industrial de creación de jabón a partir de cadáveres (principalmente de judíos), cosa totalmente incierta. Si no se menciona una locación exacta, ¿qué puede asumir quien ve Noche y Niebla? Estoy seguro de que, una vez más, Auschwitz es uno de los primeros lugares que el público asocia con estas secuencias y declaraciones. Sin embargo, al hacer esto, se cae nuevamente en un error. Aunque en Los hornos de Hitler y Noche y niebla hay una enorme cantidad referencias a este campo, debo recordar que todas las imágenes provienen del mismo sitio: El Instituto de Anatomía de Danzig (que se encontraba a más de 500 kilómetros de Auschwitz). ***
Hasta este punto de la investigación podemos actualizar las conclusiones: •
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Olga Lengyel, autora de Los Hornos de Hitler, cometió un burdo acto de desinformación al incluir anotaciones falsas en la última foto provista poco antes de iniciar su Capítulo VII: Una Proposición en Auschwitz. Lengyel nunca presentó toda la evidencia fotográfica disponible sobre el supuesto caso del "jabón de grasa humana", a pesar de que podía tener acceso a ella gracias a las labores de investigación previamente efectuadas en Polonia. Tampoco aclaró que la foto fue tomada a cuerpos que se encontraban almacenados en el Instituto de Anatomía de Danzig. Dando por hecho que los crímenes nazis eran cometidos en Auschwitz. En Los Hornos de Hitler se expone implícitamente que los alemanes decapitaban a sus víctimas, para crear jabón y artículos de cuero. Esto hace creer al lector que las decapitaciones eran habituales en los campos de concentración alemanes (algo absolutamente falso). Lengyel solamente da breves indicios del supuesto proceso llevado a cabo por los alemanes para crear jabón a partir de grasa humana, aunque estos entran en conflicto con lo que escribió en el pie de su famosa foto, así como con las declaraciones aportadas por otras fuentes. Las imágenes capturadas durante las investigaciones realizadas en el Instituto de Anatomía de Danzig se encuentran al alcance del público, mediante archivos y galerías pertenecientes a instituciones de renombre 2. Las anotaciones otorgadas por la Casa de los Combatientes del Gueto están mejor desarrolladas que las de Lengyel, y hacen énfasis al aclarar que los cuerpos presuntamente usados para hacer jabón no eran de prisioneros judíos. No puede haber "jabón judío" sin cadáveres de judíos... Los cadáveres fueron tratados con fines meramente científicos. Las señales de autopsias post mortem son evidentes en la foto de la Casa de los Combatientes del Gueto, y en algunas de las tomas del filme Noche y niebla. Sin embargo, Noche y niebla también propagó el mito del jabón hecho con grasa humana a partir de cadáveres provenientes de campos de concentración. Esta obra cinematográfica sí muestra los cadáveres que Olga Lengyel omite; gracias a esto podemos percatarnos de que no presentan signos de inanición. Algunos ni siquiera tienen la cabeza rapada (típica medida que prevenía la proliferación de piojos transmisores de tifus entre los internos de los campos). Michel Bouquet, narrador en Noche y niebla, nunca mencionó de dónde provenían los cadáveres que aparecen en la cinta (el script original del filme ni siquiera lo contemplaba). Por lo tanto, Noche y niebla, documental de Alain Resnais, se queda igual de corto que Los hornos de Hitler al presentar explicaciones sobre la creación de jabón y cualquier actividad criminal alemana asociada con este mito. 1F
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*** En la última sección de esta publicación serán anexadas todas las fotografías que hallé al realizar la investigación, incluyendo las que tiene archivadas Yad Vashem. 2
¿Cuerpos decapitados? ¿Cabezas desprendidas? ¿Cuál es su origen? Jueves, septiembre 10, 2009. Estimado Sr. Irving, escribo en alemán, porque es la forma más rápida para mí, y sé que usted es bueno en el alemán. La foto está en los archivos israelíes de Beit Lohamei Hagetaot, en la Casa de los Combatientes del Gueto [ubicada en "Galilea" entre Acre y Nahariya], como la foto No. 12,322. Se puede descargar desde allí. Vaya a la página web de BLH, pero usando solamente Internet Explorer 5.5, ya que con Firefox no funciona [la página también se congela con Safari y Netscape e IE para Mac]; haga clic en el enlace ARCHIVOS, y luego en BÚSQUEDA SIMPLE y escriba la palabra CABEZAS. Usted encontrará una gran cantidad de resultados – incluyendo esta misma foto. De acuerdo con la descripción, fue tomada en 1945 en el Instituto de Anatomía de la Academia de Medicina en el suburbio de Langfuhr, en Danzig [hoy Wrzeszcz en Polonia]. Por supuesto, la descripción dice que los cadáveres eran de los "prisioneros del campo" y que fueron usados para la fabricación de jabón. En cuanto a mí, estoy bastante seguro de que los cadáveres habían sido sacados de la morgue y apilados en el patio del Instituto, listos para ser enterrados. La fotografía fue tomada probablemente por Nachman Sonneberg, quien se encontraba fotografiando en Danzig durante junio de 1945, y cuyas fotografías también se encuentran en el archivo de BLH. Este fue el momento en que los cadáveres y demás restos tomados del Instituto eran, de hecho, enterrados en el cementerio cercano. ¿Qué pasa con las muchas cabezas desprendidas? En los últimos años de la guerra, el Instituto fue principalmente provisto de los cadáveres de los prisioneros (de las cárceles de Danzig, Elbing y Königsberg) que habían sido guillotinados 3. Las cabezas también fueron removidas de los otros torsos, y por dos razones: en primer lugar, los cadáveres fueron, de esta manera, "deshumanizados", cosa que hacía mentalmente más fácil para los estudiantes realizar disecciones. Y, así, paralelamente a estos estudiantes de medicina general, los especializados en odontología podían contar con cabezas sobre las cuales trabajar, ya que era la única parte que necesitaban. 2F
Para más información sobre la "Fábrica de Jabón de Danzig" ver: German Studies Review XXI/1, páginas 63 a 86.
Saludos cordiales, [Nombre ocultado por acuerdo]
En el sistema jurídico alemán, la decapitación como método de ejecución, fue considerada humana, y, hasta cierto punto, honorable. El régimen nacionalsocialista favoreció su uso ante otras formas de pena capital, como la horca (calificada de deshonrosa y humillante), que estaba reservada para los criminales más deleznables. En el frente de guerra, la horca estuvo destinada a contener públicamente los ataques y movilizaciones de los miembros de la resistencia armada; con los militares sucedía algo distinto, ya que el método estándar (y honorable) de ejecución era el fusilamiento. 3
Ha quedado claro que Olga Lengyel tergiversó los hechos sucedidos en el Instituto de Anatomía de Danzig, que Noche y niebla hizo lo mismo, y que, aun contando con información variada, el origen de los cuerpos decapitados y las cabezas cortadas todavía no se había establecido con seguridad en esta investigación. Es por esto que traduje la carta anterior (que llegó desde Cracovia, de la mano de un experto en historia 4). 3F
La carta iba dirigida al conocido revisionista británico David Irving, ya que el 11 de agosto 2009, un enviado especial del periódico español El Mundo, acudió a su casa, en Windsor, a realizarle una entrevista. David Irving se encargó de reproducirla tal y como la publicó el periódico español el 5 de septiembre de 2009, no sin antes hacer una aclaración muy importante: [Nota: La publicación que sigue, necesariamente es un abreviado, y a veces tendencioso recuento de una entrevista grabada, de tres horas de duración. El traductor español se tomó muchas libertades con lo que originalmente se habló, y por razones legales debemos dejar claro que las palabras utilizadas a continuación no son necesariamente las palabras exactas pronunciadas por el Sr. Irving o el entrevistador]. Es interesante mencionar, que, incluso con la manipulación denunciada por Irving, Israel intentó (infructuosamente) censurar su publicación. La entrevista íntegra (o lo que quedó de ella después de la edición de El Mundo) se puede leer en las páginas siguientes.
Tengo razones suficientes para creer que el remitente de la carta enviada a David Irving, es el historiador e investigador Joachim Neander (a quien mencioné al inicio de este trabajo). Es probable que su nombre fuera omitido en la misiva por razones de seguridad, ya que su postura, a pesar de mantenerse dentro de un margen de objetividad e interés histórico, puede llegar a ser considerada un acto de "negacionismo" por el simple hecho de estar incluida en el sitio web de Irving. Al momento de realizar la traducción, desconocía totalmente la identidad de quien había mandado el texto. Ahora, tres detalles importantes me dejan claro que puede tratarse de Neander. En primer lugar, David Irving menciona que las declaraciones en la carta son emitidas por A Polish expert historian, in Krakow. Después, en la última parte del escrito, el "remitente desconocido" emite una recomendación, expresando que, para obtener más información acerca de la "Fábrica de Jabón de Danzig" se puede consultar la revista académica German Studies Review, de la Asociación de Estudios Alemanes. Finalmente, debo hacer énfasis en el idioma original de la carta (alemán). Mientras realizaba mi investigación, encontré una publicación más de Neander en el conocido blog proshoah Holocaust Controversies, donde se le presenta como un hombre de Cracovia, Polonia, con títulos en matemáticas (Universidad del Sarre, 1962) e historia (Universidades de Gotinga y Bremen, 1997). También se indica que él es el autor de Mathematik und Ideologie (Múnich, 1974), Das Konzentrationslager Mittelbau in der Endphase der NS-Diktatur (Clausthal-Zellerfeld, 1997, 4° Ed., 2001), Gardelegen 1945 (Magdeburgo, 1998) y Hat in Europa kein annäherndes Beispiel: Mittelbau-Dora, ein KZ für Hitlers Krieg (Berlín, 2000). Aparte de esto, Neander escribió artículos sobre el caso del jabón del doctor Spanner; el más importante de ellos se titula The Danzig Soap Case: Facts and Legends around “Professor Spanner” and the Danzig Anatomic Institute 1944-1945 y se encuentra publicado en la revista German Studies Review. Mi posición es clara: El señor Neander, de Cracovia, se forjó académicamente en universidades alemanas, (por lo tanto, su manejo del alemán debe ser fluido), y colaboró en la revista citada en la carta de Irving. Puedo asegurar que su contenido, por consiguiente, tiene toda la credibilidad que puede aportar un investigador serio. Ahí no hay mentiras ni distorsiones. 4
Aunque el esfuerzo de El Mundo fue notable, parece que el entrevistador buscaba solamente respuestas polémicas... así que prefiero no entrar en conflicto con las declaraciones manipuladas de Irving; iré directamente a la imagen que aparece en la segunda página del periódico. Irving hace especial énfasis en la fotografía (que es la misma que yo presenté al principio de la publicación 5) e incluye una nota sobre esta en su sitio web: 4F
Más mentiras. Obsérvese la foto de las cabezas y cadáveres, "la barbarie provocada en el campo de concentración y exterminio de Auschwitz". Pero no es Auschwitz, Buchenwald, o Bergen-Belsen. Díganos si conoce algo más acerca de esta foto. Esto quiere decir que David Irving ya dudaba de la autenticidad de la fotografía (en Auschwitz nunca se realizaron decapitaciones), aunque en realidad no contaba con la información suficiente que requería el exponer las mentiras que había propagado El Mundo. Como antecedente directo del mensaje mandado por Neander, Irving dio a conocer otra carta, enviada por un lector suyo llamado Neal Jackson el día 8 de septiembre de 2009. Jackson fue el primero en dar anotaciones importantes sobre la foto de la Casa de los Combatientes del Gueto; esas son las que siguen: •
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Los tres cuerpos que se encuentran en la parte superior de la foto, tienen indicios de haber sido "cosidos" (suturados) después de formar parte de la examinación típica de una autopsia. Los puntos de la costura se ven desde el cuello hasta el pubis. El hecho de que se encuentren estas marcas en un campo de exterminio resulta incomprensible. Y, aunque estas prácticas forenses fueran realizadas, es aún más ilógico que los alemanes se preocuparan por "cerrar" los cadáveres que examinaban. En Auschwitz hubiera digo más fácil desechar los cuerpos todavía abiertos. Los cuerpos también muestran signos de hipóstasis, hecho que sugiere su posible "transporte" desde un sitio hasta otro, justo antes de ser fotografiados.
El 11 de septiembre de ese mismo año, Jackson envió más comentarios (que estuvieron en la carta del 8 de septiembre, aunque fueron finalmente descartados por el remitente), que ayudaron a solidificar lo dicho por Neander en su propio mensaje. Los puntos de mayor relevancia son listados a continuación:
Para cuando había hallado la mayoría de las inconsistencias entre Noche y niebla y Los hornos de Hitler, la entrevista de El Mundo y la carta de Neander ya habían sido publicadas en internet. Sin embargo, el haber encontrado ambos materiales en la web del revisionista británico, constituyó la formación de un complemento excepcional para esta investigación.
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Ninguna de las muñecas de los cuerpos parecía haber sido atada. Algo necesario en muchos casos para lograr inmovilizar al sentenciado antes de su ejecución. Bajo el régimen nacionalsocialista la decapitación era un método relativamente común dentro de la pena capital, aunque generalmente preferido para actividades criminales (de índole política) bastante graves. Dos de las cabezas en la parte inferior de la foto, tienen lo que parece ser la costura de cierre en el cuero cabelludo; mostrada como un corte en la parte superior de la cabeza, de oreja a oreja, hecho separar el cráneo, extraer el cerebro y efectuar su posterior disección. Esta es una clara muestra de que los cadáveres fueron examinados con fines médicos. Con un par de excepciones, los cuerpos parecen haber sido predominantemente fuertes, sanos y de hombres relativamente jóvenes. Tal vez de partisanos 6. 5F
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El Mundo mintió en 2009. ¿Ya lo había hecho con anterioridad? En 2005, El Mundo realizó un especial fotográfico que conmemoraba el 60° aniversario de la liberación de Auschwitz. Desde entonces la galería conmemorativa sigue en su sitio web. La fotografía número 5 de la serie aparece de esta manera:
Aunque la descripción de Neal Jackson es correcta, los cuerpos no pertenecieron a partisanos. Joachim Neander se encargó de aclarar el origen de los cadáveres en su contribución a la revista German Studies Review. En el año 2009 este recurso académico no estaba disponible al público en formato digital (ahora ya lo está), así que es muy probable que Jackson no tuviera acceso a la investigación de Neander mientras escribía su carta. Para despejar todas las dudas, incluiré los extractos de esa investigación formal en cuanto a este tema. 6
La descripción nos habla de "cientos de cuerpos sin vida" que yacen en Auschwitz, campo de "trabajos forzados y exterminio".
El Mundo es atrevido al asegurar tales cosas, pues, como es evidente, la foto ni
muestra cientos de cuerpos, ni es de Auschwitz. Ahí sólo se puede ver el poco profesionalismo de un diario de talla internacional... ***
En noviembre de 2006 el Instituto Nacional de la Memoria (IPN, por sus siglas en polaco) dio a conocer los resultados de una investigación auspiciada por sus integrantes. En estos resultados se hizo eco de algo muy importante para la comunidad proshoah de todo el mundo; los resultados que arrojaron las pruebas científicas realizadas sobre muestras de "jabón" tomado de Alemania al final de la segunda guerra mundial, afirmaban que la materia prima del mismo era "grasa humana". Esta pieza analizada fue supuestamente hallada en el Instituto de Anatomía de Danzig, lugar del que fueron extraídos los cuerpos y cabezas de las fotografías. El IPN indica que la tecnología actual fue capaz de determinar la existencia de esta base en la muestra de jabón (algo imposible con la tecnología de hace 70 años) y con esto establece una conclusión contundente: Los nazis sí hicieron jabón con grasa humana. Puede que las opiniones vertidas por este organismo estén respaldadas por una reputación construida a lo largo de varias décadas; sin embargo, el tema no está zanjado. Joachim Neander hizo varios comentarios atinados en Holocaust Controversies, esto, con el fin de dejar claro qué tipo de organismo es el IPN. Para que la comunidad lectora no se quede con la idea de que la producción masiva de "jabón de grasa humana" fue algo real, traduje las intervenciones más importantes de Neander: El IPN no es ni una entidad independiente, ni una institución académica. Se trata de una agencia del gobierno, vinculada a las directrices dadas desde arriba. Su presidente es elegido y juramentado por el Sejm (cámara baja del parlamento) de Polonia. Uno de los tres departamentos del IPN es el Comité para la Investigación de Crímenes Contra el Pueblo Polaco. Sus miembros son fiscales del estado, no historiadores. Es el sucesor inmediato de la Comisión
Principal para la Investigación de Crímenes Alemanes Contra el Pueblo Polaco
(ya fundada en 1944) que hizo las investigaciones en el caso del jabón de Danzig a principios de mayo de 1945, y que llevó a cabo las investigaciones también en esta ocasión (2006). ... Cuando, en septiembre de 2005, (el IPN) declaró públicamente que el Instituto Anatómico de Danzig no estaba involucrado en la empresa genocida nazi, una ola de furiosos y calumniosos ataques se extendió a través
de los medios polacos. El IPN fue acusado de traición nacional y de "adular a los alemanes". En el clima político antialemán de la Polonia de hoy, el IPN no tenía otra opción: debía retractarse. ... El IPN confirmó que las actividades realizadas dentro del Instituto de Anatomía de Danzig, de ningún modo podían calificarse de genocidio. Más adelante, el IPN también señaló que ahí se había fabricado jabón con restos humanos – hecho que Spanner en persona había admitido al final de 1945 – y que ahí nunca hubo ninguna "fábrica de jabón", sino una pequeña producción para uso estrictamente interno. ... Todo eso concuerda con los resultados obtenidos gracias a mi investigación. El IPN también comentó que el famoso caso del "jabón RIF" no tenía nada que ver con Danzig, y que nunca se hizo con grasa humana... Un segundo punto que critico (al IPN) es la muy sesgada manera en que las "victimas" de la fabricación del jabón fueron presentadas (en 2006), particularmente en la declaración dada a la prensa occidental: "Los restos humanos fueron llevados... desde Kaliningrado, Bydgoszcz, y el campo de concentración nazi de Stutthof". Como el 99.99% de los lectores/oyentes de esta información no está especializado en la historia del Holocausto, concluirán: Bydgoszcz-Polacos, Stutthof-Judíos (en Polonia: también Polacos), Kaliningrado-Rusos fueron hervidos hasta hacerlos jabón. Y así llegó a la opinión pública, cosa que puede ser fácilmente vista navegando en la web. Y eso es en contra de los hechos que el IPN sin duda conoce. En el periodo considerado para fabricar el jabón, es decir, de febrero de 1944 a enero de 1945, por razones jurídicas y prácticas, ni los cadáveres de judíos, ni los de polacos o rusos ejecutados podrían haber sido entregados al Instituto. Aunque puede que haya habido alguna excepción – incluso los nazis alemanes no siempre acataron las leyes. Sin embargo, todos los testigos que declararon en 1945-1946, confirmaron que hacia el final de la guerra, el "material" provino del manicomio de Conradstein/Kocborowo y de las prisiones de Danzig/Gdańsk, Elbing/Elblag, y Königsberg/Kaliningrado. Eso quiere decir, sin embargo, que los cadáveres de los ejecutados debieron haber sido, en su gran mayoría, ciudadanos alemanes no judíos. Pero los "alemanes" nunca son mencionados (por el IPN). Por cierto, me gustaría saber cómo los demacrados prisioneros de Stutthof podrían haber sido una "materia prima" adecuada para la producción de jabón. Pero tales contradicciones son características de los cuentos y leyendas... El trabajo académico (íntegro) de Joachim Neander puede ser consultado en la primera liga de la sección Fuentes, en el apartado Referencias web. Las anotaciones académicas más importantes de Neander en cuanto al "jabón de grasa humana" y las cabezas y cadáveres de las fotografías, son parafraseadas y resumidas en la siguiente lista:
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El doctor Rudolf Spanner, jefe del Instituto de Anatomía de Danzig, no pertenecía ni a las SS ni a las SA. Nunca hubo fabricación de jabón con grasa humana a niveles industriales o semiindustriales. Hasta ahora, no se ha demostrado que los alemanes tuvieran un nivel extremo de escasez de jabón, como para haber considerado fabricarlo con grasa humana. Las declaraciones de los testigos citados por las partes proshoah son contradictorias, y, en muchos casos, totalmente ilógicas. Varios de los cadáveres del Instituto eran tratados por Spanner, para salvar, a través de un método específico de maceración, los cartílagos que formarían más tarde modelos anatómicos (concretamente preparaciones articulares) que se usarían como apoyo visual en los quirófanos, durante operaciones particularmente difíciles. En este proceso de maceración alcalina, la grasa contenida en las partes del cuerpo, especialmente en los huesos largos de las extremidades, reaccionaba de manera natural con hidróxidos alcalinos, produciendo sales alcalinas de ácidos grasos; esto es, vulgarmente, "jabón a medio terminar". Este "jabón" (grasa de maceración en realidad) de pobre calidad podía servir para efectuar tareas básicas de limpieza. Pero Spanner lo usaba para impregnar los ligamentos de las preparaciones articulares movibles. El compuesto los conservaba y, además, promovía la flexibilidad de sus componentes. De esta manera, el famoso "jabón" no termina siendo sino el subproducto grasoso proveniente de la maceración de cuerpos realizada en Danzig. Tal vez este subproducto llegó a convertirse en "jabón terminado" (ya que podía someterse a un proceso de refinación), pero, aunque hubiese sido refinado en Danzig, hoy nadie tiene las pruebas necesarias que indiquen que fue usado fuera del ámbito médico y científico al que estaba destinada la grasa de maceración original. Los cuerpos almacenados en el Instituto de Anatomía eran utilizados para llevar a cabo prácticas científicas y educacionales. Ante la opinión pública estos restos fueron procesados para crear jabón (algo ilógico; los cuerpos utilizados para crear preparaciones articulares se procesaban en otro edificio). La cantidad exacta de cuerpos y cabezas fue determinada desde mayo de 1945 (ni Lengyel ni Resnais usaron estos datos) y muestra que en el Instituto de Anatomía de Danzig se encontraron 148 cadáveres (18 mujeres, 4 infantes, 126 hombres y 1 mono), 82 cuerpos sin cabeza (2 de ellos de mujeres) y, a su lado, 89 cabezas cortadas. Nunca hubo cadáveres de judíos involucrados en este suceso. El número de cuerpos no es exagerado; cada año se esperaba el arribo a Danzig de 450 estudiantes de medicina general y 100 estudiantes especializados en cirugía. El dato más importante para mi investigación: Spanner contaba con 2 fuentes principales de cuerpos (Un hospital psiquiátrico (Conradstein) y un conjunto de prisiones (Elbing, Königsberg y Danzig).
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Conradstein entregaba cuerpos completos, mientras que las prisiones entregaban cuerpos provenientes de los ejecutados con guillotina. En Conradstein no había judíos. Y en las prisiones los ejecutados fueron previamente procesados y condenados por una corte (hecho que asegura su ciudadanía alemana, o, por lo menos, su condición de Volksdeutsche); esto no sucedía con los condenados de otras nacionalidades, que no visitaban para nada estas prisiones y eran procesados por la Gestapo. Incluso algunos de los guillotinados pertenecieron a la Wehrmacht o a las Waffen-SS. En un principio, Spanner recibió los cuerpos de las personas sin hogar, que provenían de la región de Danzig-Prusia Occidental. También llegó a recibir cuerpos de polacos ejecutados por fusilamiento, pero se negó a aceptar más cadáveres de ese tipo, ya que no podían preservarse de una manera adecuada a causa de las heridas infligidas por las balas. Spanner no recibió cuerpos de "rusos", ni cuerpos provenientes del campo de concentración de Stutthof (tal vez llegó a recibir 2 o 4, pero no más), pues «el
material no podría ser usado por los estudiantes debido a la completa atrofia en el tejido adiposo y músculos».
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Las averiguaciones iniciales (1945), a cargo de investigadores rusos y polacos (sin conocimientos en química o anatomía), estaban politizadas, y sólo buscaban incriminar a los alemanes bajo cualquier excusa. El supuesto crimen contra la humanidad del que se ha hecho tanto escándalo no es sino una infracción menor. De hecho, Spanner nunca fue condenado a muerte; las pruebas de todas las partes acusadoras fueron insuficientes. Bajo las disposiciones contenidas en el Código Penal Alemán, Spanner sólo podía ser acusado de un delito menor: Perturbación al descanso de los muertos (§ 168). Incluso en la Polonia actual, el tema está generalmente marcado por intereses políticos, y no históricos o académicos. El famoso caso del "jabón de grasa humana" de Danzig fue distorsionado y divulgado por la propaganda de la posguerra.
Así, Joachim Neander termina concluyendo terminantemente: Rudolf Spanner, el supuesto "propietario" de la "fábrica de jabón" e inventor de "un proceso para producir jabón con grasa humana", nunca fue un miembro de las SS. Ninguna "fábrica de jabón" existió en Stutthof o en el Instituto de Anatomía de Danzig, ninguna "investigación" era llevada a cabo allí en este sentido, ningún "jabón" se hizo allí con cadáveres de judíos. Nadie fue "ejecutado allí para 'producir' jabón", y ninguno de los cadáveres encontrados durante la liberación de Stutthof había sido "usado" para ese propósito. La mayoría de los cadáveres entregados al Instituto era de alemanes (étnicos o del Reich), el resto, aparte de unos pocos rusos, de polacos. Con la excepción de los rusos, ningún cadáver provino de los internos del campo de Stutthof. Con respecto a las acusaciones formuladas en Núremberg y por la Comisión Principal, podemos, además, asegurar que ningún "experimento semiindustrial para producir jabón a partir de cuerpos humanos", se llevó a cabo en el Instituto, que Zygmunt Mazur (quien dio las declaraciones en Medallones), el principal testigo, nunca fabricó jabón de acuerdo con la "receta" USSR-196 (principal prueba de los historiadores proshoah), y que el número de cadáveres tomados y almacenados en la morgue del Instituto no excedió el número necesario requerido para la enseñanza e investigación médica. El equipo encontrado en el "sospechoso" edificio de ladrillo de una sola planta en las instalaciones del Instituto, fue proyectado y usado no para fabricar jabón, sino para proceder con la maceración química de partes corporales. En este proceso, una grasa jabonosa se originaba, inevitablemente, como un subproducto. Este es el núcleo de la verdad inherente a la leyenda de la Fábrica de Jabón. Con fines científicos, pequeñas cantidades de "jabón de grasa humana" (o "jabón terminado") también fueron producidas, probablemente refinando la grasa de maceración. Esta grasa, y tal vez el "jabón terminado", fue usada dentro del Instituto con fines de limpieza básica hacia el final de la guerra. Si Spanner estaba enterado de esto o incluso había dado su aprobación, es irrelevante – como director del Instituto, él llevaba toda la responsabilidad. Jurídicamente, la fabricación de "jabón con grasa humana" a partir de la grasa de maceración y su uso con fines de limpieza dentro del Instituto fueron infracciones menores. Estos no califican como delitos penales, y mucho menos como crímenes contra la humanidad.
El Instituto Anatómico de Danzig bajo la dirección del Profesor Spanner no estaba involucrado en los crímenes genocidas de los nazis, un hecho que ahora es reconocido oficialmente en Polonia. Por lo tanto, ha llegado el momento de reducir el "Caso del Jabón de Danzig", inflado por la propaganda de la posguerra a un excelente ejemplo de los crímenes alemanes nazis, a sus dimensiones reales. Los "revisionistas" perderían uno de sus "argumentos" favoritos en sus esfuerzos para desacreditar material académico del Holocausto. 7 Por otra parte, "desdemonizar" al "Profesor Spanner" desmantelaría el popular estereotipo Polaco antialemán y contribuiría a una mutua y mejor comprensión. La lista de los crímenes nazis cometidos en Polonia durante la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto, es suficientemente larga. No va a ser significativamente más corta, si un presunto delito se elimina de ella, pero sí será más digna de confianza. 6F
Es mi obligación recordar que el historiador Joachim Neander no es revisionista. El sentido de su investigación está totalmente apegado al marco de legalidad instaurado por las leyes que coartan el derecho a la libertad de expresión (también conocidas como leyes sobre el negacionismo) principalmente en países europeos. Sin embargo, la calidad de sus hallazgos y conclusiones me otorgó bases sólidas con las cuales pude refutar las mentiras de personajes mucho más conocidos dentro del ámbito mercadológico proshoah. De hecho, aunque Neander se declarara revisionista (algo que nunca ha hecho ni hará) y usara su trabajo sobre el "jabón de grasa humana" para apoyar a otros historiadores en su lucha en favor de la verdad, las leyes opresoras europeas no cambiarían; por el contrario, Neander sería juzgado por una corte, condenado a prisión y multado con una alta suma de dinero. 7
Últimos comentarios. No hace falta decir más; con esta investigación se ha probado que los cuerpos de Los hornos de Hitler y Noche y niebla son los mismos que se encontraban almacenados en el Instituto de Anatomía de Danzig en 1945, que el libro Olga Lengyel ha difundido la misma mentira (una de tantas) durante más de 60 años, al igual que la obra cinematográfica de Alain Resnais, y que todos estos hechos se relacionan con el caso del "jabón de grasa humana" del doctor Rudolf Spanner (también desmitificado gracias a las contribuciones de Joachim Neander). Este es solamente un pequeño aporte dentro del mundo del revisionismo histórico, y algo insignificante para la gran industria propagandística del Holocausto. Lo único que pido a los lectores es, entonces, que la próxima vez que lean algo sobre algunos "espantosos crímenes nazis" (sin importar si se trata de guantes, cortes o lámparas de piel humana, tela de cabellos humanos, cabezas reducidas o cualquier otra exageración más de los campos de concentración), desconfíen; incluso si se trata de los testimonios de "sobrevivientes" que vivieron en carne propia los escabrosos sucesos del siglo XX. Revisar la historia escrita por los vencedores no es un delito.
Material fotográfico de archivo (y más mentiras). En este apartado se anexa la mayoría de las fotografías halladas durante el transcurso de la investigación. Cada una de ellas está vinculada al mito del "jabón de grasa humana". Las dos principales fuentes son el museo de la Casa de los Combatientes del Gueto y la institución Yad Vashem. Todas las imágenes fueron capturadas en 1945. Aunque algunas fotografías sólo muestran el interior de un Instituto de Anatomía, que, como cualquier otro establecimiento médico, vivió tiempos difíciles durante la segunda guerra mundial, la carga emocional que transmiten no deja de ser poderosa. Muchos autores proshoah se aprovechan de esta situación, e incluyen en sus "testimonios" ilustraciones como las que a continuación aparecerán, sin importarles siquiera un poco la historia VERDADERA que hay detrás de lo que propagan como realidad absoluta. Afortunadamente, hoy no sucederá lo mismo.
Zygmunt Mazur, trabajador del Instituto de Anatomía de Danzig. Su declaración, evidentemente enriquecida por los investigadores rusos y polacos, sentó la base de uno de los mitos más infames de la historia.
Descripción original de Yad Vashem:
Gdańsk, Polonia, 12/05/1946, Z. administrador de una fábrica de jabón.
Mazuz,
Nota: El nombre está mal escrito y la fecha es incorrecta. Mazur murió en julio de 1945. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/77118.html
Instituto de Anatomía de Danzig. Cabezas cortadas, pertenecientes a criminales alemanes condenados a muerte y ejecutados en las prisiones de Danzig/Gdańsk, Elbing/Elblag, y Königsberg/Kaliningrado.
Descripción original de Yad Vashem:
Danzig, Polonia, Cuerpos en un laboratorio.
http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/31808.html
Restos de criminales alemanes condenados a muerte y posteriormente donados al Instituto de Anatomía de Danzig para la realización de investigaciones médicas. Descripción original de Yad Vashem:
Danzig, Cuerpos en un laboratorio. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/31206.html
Ampliación de la imagen anterior. (Nótese la sutura vertical). Descripción original de Yad Vashem:
Wrzeszcz, Polonia, 1945, Cadáveres en el Instituto Farmacéutico. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/25962.html
Instituto de Anatomía de Danzig. Cabezas cortadas, pertenecientes a criminales alemanes condenados a muerte y ejecutados en las prisiones de Danzig/Gdańsk, Elbing/Elblag, y Königsberg/Kaliningrado. Descripción original de Yad Vashem:
Wrzeszcz, Polonia, 1945, Cadáveres en el Instituto Farmacéutico. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/29992.html
Contenedor de concreto dentro del Instituto de Anatomía de Danzig. Descripción original de Yad Vashem:
Danzig, Polonia, 1945, Un laboratorio. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/34003.html
Contenedor con restos de criminales alemanes y/o pacientes fallecidos en el manicomio de Conradstein/Kocborowo. Descripción original de Yad Vashem:
Danzig, Cuerpos en un laboratorio. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/81400.html
Restos óseos en el Instituto de Anatomía de Danzig (probablemente dentro del edificio destinado a generar la maceración alcalina) y, al fondo, un posible miembro de la comisión investigadora. Descripción original de Yad Vashem:
Danzig, Polonia, Huesos en un laboratorio. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/74107.html
Modelo anatómico probablemente creado por el doctor Rudolf Spanner en el Instituto de Anatomía de Danzig. Descripción original de Yad Vashem:
Wrzeszcz, Polonia, 1945, Partes de cuerpo en el Instituto Farmacéutico. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/24699.html
Diversos instrumentos en el Instituto de Anatomía de Danzig. Descripción original de Yad Vashem:
Polonia, Danzig, Un laboratorio. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/33295.html
Diversos instrumentos y contenedores en el Instituto de Anatomía de Danzig (probablemente dentro del edificio destinado a generar la maceración alcalina). Descripción original de Yad Vashem:
Danzig, Polonia, Un laboratorio. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/34696.html
Rumania. Imagen posterior a la segunda guerra mundial. Mujeres lloran frente a los restos de jabón común (posiblemente "RIF") recolectados por la comunidad judía. Descripción original de Yad Vashem:
Romania, Posguerra, Sepultura de jabón recolectado por la comunidad judía. http://collections.yadvashem.org/photosarchive/en-us/30463.html
Cabezas de criminales alemanes extraídas del Instituto de Anatomía de Danzig por los investigadores rusos. Descripción original de BLH:
Las cabezas cortadas de los internos del campo, en el Instituto Anatómico en Wrzeszcz. http://www.infocenters.co.il/gfh/notebook_ext.asp?book=6470
1945. Instituto de Anatomía de Danzig. Descripción original de BLH:
Edificios del Instituto Anatómico en Wrzeszcz, Gdansk (Danzig). Fotografiado en 1945. http://www.infocenters.co.il/gfh/notebook_ext.asp?book=6458
1945. Miembros de la comisión investigadora que fabricó el mito del "jabón de grasa humana" a partir de los hallazgos realizados en el Instituto de Anatomía de Danzig. Descripción original de BLH:
Una comisión de investigación soviética de pie junto al edificio administrativo del instituto anatómico en Wrzeszcz. http://www.infocenters.co.il/gfh/notebook_ext.asp?book=6481
La comisión investigadora (sin conocimientos en química o anatomía), analizando las pruebas de un crimen que nunca existió. (El origen del cadáver no puede asegurarse). Descripción original de BLH:
La comisión de investigación soviética en una inspección al Instituto Anatómico en Wrzeszcz, examinando el cadáver desmembrado del interno de un campo. http://www.infocenters.co.il/gfh/notebook_ext.asp?book=6483
En marzo de 1975, una placa de bronce fue colocada enfrente de uno de los edificios de la Academia de Medicina de Danzig. Su mensaje era el siguiente: En este edificio, durante la segunda guerra mundial, los fascistas alemanes cometieron un crimen contra la humanidad, usando los cadáveres de prisioneros del campo de concentración de Stutthof como materia prima para la producción de jabón.
Esta placa fue robada en 2005, pero un año más tarde, el gobierno polaco colocó una nueva, solo que usando mármol en lugar de bronce. La actual placa en mármol:
En este edificio, durante la segunda guerra mundial, los nazis usaron los cuerpos de las víctimas de genocidio: Personas ejecutadas en las prisiones de Königsberg y Gdańsk, pacientes de la casa regional para discapacitados mentales en Kocborowo, y los internos del campo de concentración en Stutthof como materia prima para producir jabón. El hombre es el lobo del hombre...
Fuentes. Los comentarios realizados por expertos, así como las publicaciones académicas y la correspondencia citada en el trabajo original, se encuentran en el listado de hipervínculos.
Referencias web. https://www.yumpu.com/en/document/view/22307472/the-danzig-soapcase-ucsb-department-of-history http://forum.axishistory.com/viewtopic.php?f=6&t=6275&start=240 http://winstonsmithministryoftruth.blogspot.mx/2013/10/nazi-soap-humanskin-gloves-in-kiev.html?zx=c6e5423a8e1316de http://www.elmundo.es/fotografia/2005/01/auschwitz/06.html http://www.fpp.co.uk/Letters/Auschwitz/Cracow_100909.html http://www.fpp.co.uk/Letters/Auschwitz/Jackson_060909.html http://www.tarbutsefarad.com/en/enlaces/entidades/3209-la-casa-museode-los-combatientes-del-ghetto-.html http://holocaustcontroversies.blogspot.mx/2006/10/ipn-and-spanners-soapcritical.html
Referencia bibliográfica. Nałkowska, Zofia. Medallions, Estados Unidos de América, Northwestern University Press, 2000.
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