La Naturaleza de La Intuición
January 27, 2023 | Author: Anonymous | Category: N/A
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Intuición: qué es y cómo desarrollarla para tu benefcio
La naturaleza de la intuición (1ª parte) AGOSTO, 2016 BY AMPARO MILLÁN MILLÁN 27 AGOSTO,
La intuición es esa capacidad fascinante que todos querríamos agudizar. Se dene como la facultad de comprender instantáneamente las cosas, sin esfuerzo y sin razonamientos. Es decir, de repente SÉ o COMPRENDO que este es el hombre/la mujer que me conviene (o que no me conviene en absoluto) o que esta empresa empresa y no la otra es en la que voy a ser feliz. Todo esto sucede en un segundo y sin necesidad de hacer listas de pros y contras, simplemente sucede. O ulizando ejemplo más mundano: voy caminando por la calle, veo una librería y de inmediato sé que va a estar allí el libro que estoy buscando. Paso, pregunto por dicho libro y me lo enden en la mano, entonces pienso «vaya, este pensamiento intuivo tenía razón«. La sabiduría popular, las corrientes espirituales e incluso grandes ciencos como Einstein Einstein nos nos animan a desarrollar nuestra intuición y a arnos plenamente de ella. A mí personalmente, me encantaría ser una mujer intuiva. Me gustaría estar en contacto directo con mi me intuición los díassin y recibir cuáles llevantodos a un callejón salida.mensajes claros acerca de qué decisiones son posivas y
Por este movo he estado reexionando e invesgando un poco acerca de la naturaleza de la intuición y posibles vías para «despertarla». Este arculo (que connúa en una segunda parte) parte) es el resultado de lo que he aprendido hasta ahora y coneso que lo estoy escribiendo mientras bebo un gin-tonic para hacer la experiencia, si no más «uida», sí al menos más diverda Todas las preguntas, recomendaciones, experiencias y apuntes las agradezco más que nunca en los comentarios. ¡Transitemos junt@s el camino de re-descubrimiento re-descubrimiento de nuestra capacidad intuiva! ¿De dónde viene la intuición? Ya sabemos que la intuición es una especie de respuesta, más o menos súbita, que no está mediada por un razonamiento consciente. Tenemos la certeza de que algo es de una manera, o de que debemos hacer tal o cual cosa, pero no podemos precisar por qué lo sabemos. En cierta forma, la intuición es un regalo inesperado de un admirador anónimo. ¿Y quién es ese fan? ¿Nuestra mente, nuestro corazón, las células del tracto intesnal como aseguran algunos expertos, la voz de Dios? Hay básicamente dos planteamientos para explicar el «de dónde» nacen estos pensamientos intuivos. Según la visión cienca, la intuición es una rápida respuesta mental producto de que nuestro cerebro recopila automácamente gran candad de datos. Es decir, a diario recibimos información de la que no somos conscientes, nuestro cerebro la almacena y en determinadas circunstancias (de peligro, de alerta, etc) nos ofrece una respuesta rápida que es «el resumen» de esta información procesada. Por ejemplo, un marinero experimentado ene un amplio registro de experiencias que le han sucedido en alta mar. Sabe qué pasa bajo ciertas condiciones meteorológicas, conoce su barco, ha observado durante largos días las corrientes marinas y el oleaje, ha hablado con otros marineros, ha leído, ha tenido «sustos» de los que ha aprendido… Si en un momento dado alguien le pregunta si se va a desatar una tormenta, este marinero dará una respuesta inmediata sin necesidad de pararse a evaluar deliberadamente todos los datos de los que dispone. Esa es la intuición. Es una respuesta que se produce tras un procesamiento mental interno e inconsciente de muchos datos acumulados, proceso que es mucho más rápido que el razonamiento analíco tradicional. Es pues, digámoslo así, una «vía rápida» en la manera de funcionar del cerebro, completamente natural.
La otra forma de ver la intuición es desde la perspecva energéca o espiritual. Si aceptamos que somos más que un cuerpo-mente, la intuición sería el lenguaje de nuestro guía interior que está directamente conectado conectado con Dios o con el universo. Esta voz intuiva nos invitaría a vivir experiencias que están en nuestro desno y que enen el objevo nal de aprendizaje o expansión de nuestra conciencia.
Al contrario de lo que mucha gente supone, la intuición no ene por qué ir aparejada con una capacidad para predecir el futuro. Esto sería la videncia, una cualidad diferente. La persona intuiva no es la que sabe qué equipo va a ganar el pardo o cuál va a ser el resultado de seguir un camino concreto, sino la que sabe que ene que seguir ese camino, aunque no sepa por qué y qué le deparará, porque intuye que será benecioso para su desarrollo personal. Myss describe a la perfección está confusión entre intuición y videncia en su libro Caroline Myss describe «Anatomía del espíritu», y dice: Cuando comencé a dar seminarios sobre la orientación intuiva, mandaba hacer ejercicios interiores y práccas de meditación a los parcipantes. Pero la mayoría de las personas que hacían meditación decían después después que la prácca no tenía ningún éxito en el desarrollo de su intuición. […] Me di cuenta de que el problema no estaba en entrar en contacto con la intuición sino en que los parcipantes tenían un concepto totalmente errado de la naturaleza de ésta. Todos confundían intuición con capacidad proféca. Creían que la intuición es la capacidad de vacinar el futuro. Pero la intuición no es ni la capacidad de profezar ni un medio para evitar una pérdida nanciera o relaciones dolorosas. La intuición es la capacidad de ulizar la información energéca para tomar decisiones en el momento. La información energéca la forman los componentes emocionales, psíquicos y espirituales de determinada situación. situación. Son los componentes del «aquí y ahora» de la vida, no información sica proveniente de algún lugar del «futuro». […] Las sensaciones energécas o intuivas indican que hemos llegado a una encrucijada de la vida y que tenemos la oportunidad de inuir, al menos hasta cierto grado, en la fase siguiente, mediante la decisión que tomamos en ese momento. Independientemente de si el origen de la intuición es puramente orgánico o también de Independientemente naturaleza espiritual, lo cierto es que existe y todos conocemos decenas de casos en que las personas se dejaron llevar por su intuición y no se arrepineron de ello (lo contrario también debe de ser verdad, pero nadie lo cuenta). Si tu interés es desarrollar esta capacidad para ponerla operava en tu vida, a connuación te muestro nueve maneras para hacerlo posible. Espero que encuentres inspiración y ganas de empezar a praccar en alguna de ellas.
1.- No forzar Lo primero que hemos de tener en cuenta es que los chispazos de inspiración o intuición no se pueden forzar. Tanto si la intuición es una respuesta automáca e inconsciente inconsciente del cerebro, como si es una señal de nuestro guía espiritual, no hay manera de recurrir a ella cuando a uno se le antoje. Quizás estés en una situación de tensión o peligro y no recibas ninguna señal. Nada. Cero. Y sin embargo otro día estás en la biblioteca y de repente encuentras un libro que conene las respuestas que buscabas, aun cuando ya casi habías olvidado las preguntas. Esta es la naturaleza de la intuición: aparece y desaparece de forma misteriosa. A mí, que tengo una naturaleza curiosa y juguetona, me encantaría tener corazonadas casi todos los días. Me gustaría conocer a una persona relevante en cada viaje, abrir un libro y recibir justo la indicación que necesito, encontrar señales sobre mi vocación en vocación en los momentos más insospechados. Pero no me ocurre así. A veces, y en algunos temas, tengo respuestas intuivas y a veces no. No puedo controlarlo y creo que está bien así: que las intuiciones lleguen como un regalo inesperado. Si quieres mejorar tus dones intuivos la primera lección es que no trates de forzar las respuestas ni esperes siempre que estas intuiciones se reeran a cosas importantes. A veces tenemos pensamientos intuivos sobre asuntos tan banales sobre dónde comprar o adquirir algo. Un ejemplo de esto úlmo es la historia comparda por Martha Beck Beck en en su libro «Encuentre su propia estrella polar». Cuenta cómo el primer encuentro con su intuición se produjo en un asunto tan banal como dónde comprar cosllas de cerdo. Martha y su marido habían planeado una cena en casa para sus amigos cuyo plato principal iba a ser cosllas con salsa japonesa. Mientras ella
volvía a casa del trabajo unos días antes de la cena, pasó al lado de un supermercado, al que nunca había entrado y, sin pensarlo pasó dentro, sabiendo (es decir, estaba segura de ello aunque no tenía pruebas) que encontraría sucientes kilos de carne para la cena. Cuenta con sorpresa cómo al llegar a la sección de carnicería el encargado estaba colocando cosllas cosllas de cerdo recién cortadas, que ese día además estaban a mitad de precio. La propia Martha dice que en otros momentos mucho más relevantes para su vida no había sendo una llamada con tanta claridad como aquel día. Es una historia diverda que muestra que las vías que sigue nuestra intuición para expresarse pueden ser de lo más variopintas… 2. Tener una actud abierta y curiosa ante la vida Es obvio que si negamos o minimizamos el poder de la intuición, y solamente tomamos decisiones perfectamente argumentadas y meditadas, ésta no va a aparecer (o no la vamos a registrar). No se trata de forzar la intuición, como he dicho anteriormente, pero sí necesitamos tener una actud recepva y abierta ante «los misterios» de la vida. Esta actud ene mucho que ver con estar dispuestos a jugar y a sorprendernos de las casualidades. También ene que ver con «dejarnos llevar» de vez en cuando y desconectar de nuestra parte formal o racional. Obtener respuestas intuivas y seguirlas, independientemente de si los resultados al nal son lo que esperábamos o no, es un placer en sí mismo. La vida se vuelve más interesante, más rica y más placentera cuando experimentamos esas cosas que escapan a la lógica. Contar a los demás que hemos tomado una decisión porque hemos pasado la tarde de antes haciendo una lista de pros y contras, con sus respecvos porcentajes de ponderaci ponderación, ón, no suena muy emocionante. Ahora, contar a los demás que recibimos una indicación repenna en nuestra mente y describir con detalle la sensación de pálpito que la acompañaba, es mil veces más entretenido. De vivir y de escuchar. Añadir esta parte de misterio a la vida codiana no sólo la hace más fascinante, sino que favorece el fortalecimiento de la intuición. Porque el juego, la creavidad y una disposición a ver conexiones apicas entre las las cosas avivan nuestro hemisferio derecho, que es el lado intuivo del cerebro. Sorpréndete, observa las cosas de siempre de un modo nuevo, juega un poco… y la intuición se irá despertando. 3. Prestar atención a las casualidades y contraempos Es muy común que la intuición se amplique cuando nos suceden contraempos. En ese momento en que algún plan se tuerce, o algo no sale como habíamos previsto, podemos pararnos y dejar espacio para que surjan respuestas de nuestro interior. Algunas veces parece que hay cosas quelectora está escrito tenían ser así yen noque de se otra manera. Me gustaría comparr el relato de una sobre que cómo en unque momento rompieron
sus planes decidió seguir el dictado de su intuición y se encontró con insospechadas consecuencias: Creo en la intuición y hago muchas cosas por este movo, así que historias tengo mil, pero tengo una muy importante que hizo que mi vida diera un giro de 180 grados. Una de ellas es la siguiente: hace casi 9 años me encontraba en un momento de crisis existencial bastante duro y lo único que decidí no dejar de lado fue mi gran pasión por viajar. Mi desno inicial era Laos pero no me preguntes por qué … no hice la reserva a empo y me quedé sin plaza. Asustada empecé a buscar otros desnos y al día siguiente a primera hora me llamaron de una agencia para decirme que había sólo una plaza para el Tíbet y que cerraban el grupo. No me lo pensé, sen algo especial y me dije «éste es mi viaje». Y así fue … yo iba en busca de paz interior y justo lo que menos pensaba ¡zas! encontré al hombre de mi vida. Fue algo mágico, una sensación extraña, como si nos conociéramos de toda la vida, y en apenas 5 meses dejé mi ciudad, mi casa, a mis amigos, a mi familia, pedí traslado en mi trabajo y me fui a vivir con él a Barcelona donde seguimos muy felices. Mi intuición de que iba a ser un viaje especial no me falló, mi intuición de que era la persona adecuada, tampoco y mi intuición de hacer un cambio radical en mi vida mucho menos. Historias similares están por todos lados. A veces las decisiones que tomamos sin saber muy bien por qué, pero con una fuerte convicción interna interna que es como una llamarada, son las mejores de toda nuestra vida. Cuando me preguntan por qué empecé un máster de coaching y me conver en coach personal, viniendo del mundo de las Ciencias y la Educación, no sé muy bien qué responder. La verdad es que no me acuerdo. No sé dónde ni cuándo oí la palabra «coaching» por primera vez, nadie me habló de ello, supongo que leería algo por Internet. Lo que sí recuerdo es que unos días antes de mi 30 cumpleaños estaba con mi amiga Inma en Edimburgo, hicimos una lista de 10 deseos cada una para los próximos meses (Inma, si estás por ahí, ¡me acuerdo de tu lista!) y escribí, junto a otras 9 cosas, que quería «aprender algo de coaching». Así de vago quedó mi deseo. Unos tres meses después de ese día tuve la urgencia de apuntarme a un máster de 9 meses de coaching (podría haberme dado por leer un libro, pero no, me inscribí al máster a las 48 horas de haber tenido la idea). Al terminarlo abrí mi web y a los pocos meses me hice emprendedora (¡yo, que en mi vida había tenido ambición por emprender!) No tuve conciencia en ese momento de seguir ninguna intuición pero ahora que lo miro en retrospecva supongo que, en cierto modo… fue así.
En deniva, esos contraempos que parecen «estar escritos», esas casualidades que nos dejan pensavos, esas ideas que aparecen sin saber por qué pero que no se van y nos impulsan a actuar, son todo reejos de la voz interior que nos dice: ¡es por aquí! La sabiduría en este caso consiste en considerar seriamente esas opciones y apostar por ellas si la percepción general es posiva. Indaga en las casualidades, mira qué dice tu intuición en los contraempos. 4. La intuición requiere valena Seguir un pálpito es emocionante, pero también lleva aparejado ciertos riesgos… No siempre las respuestas intuivas signican un camino fácil y libre de obstáculos como en los relatos anteriores. En ocasiones se requiere verdadero coraje para afrontar las consecuencias de seguir nuestra intuición. Coraje y autoesma, cómo no, porque si no nos creemos merecedores, merecedores, válidos o capaces, las respuestas intuivas se quedarán en eso, en «respuestas», sin impacto en el mundo real. Me gusta mucho cómo expone esta idea Caroline Myss y cómo habla del verdadero éxito de una acción en el mundo: Si una persona ene poca autoesma, no puede actuar según sus impulsos intuivos porque su miedo al fracaso es demasiado intenso. La intuición puede ser enormemente ecaz pero sólo si uno ene la valena y el poder personal para llevar a cabo la orientación que le da. La orientación requiere acción, pero no garanza seguridad. Mientras nosotros medimos el éxito por el rasero del agrado y la seguridad, el universo lo mide por la candad que hemos aprendido. Mientras ulicemos el agrado y la seguridad como criterio para medir el éxito, tendremos miedo de nuestra orientación intuiva, porque por su propia naturaleza ésta nos guía hasta nuevos ciclos de aprendizaje que a veces son desagradables. Hay veces en que lo que nos pide la voz interior es un asunto serio. Por ejemplo, trabajar en un lugar en el que resultaremos dañados, sólo para enfrentar nuestras heridas yy nuestros nuestros dolores profundos (y profundos (y aprender a rearmarnos). O bien dejar casa, trabajo, relaciones y modos establecidos de vida sin tener un plan B. Hace falta mucha seguridad interior y autoesma para seguir estos dictados, porque aunque el resultado nal de nuestra decisión sea posivo, el trayecto puede ser dicil.
Como dice Caroline Myss, la intuición sólo sirve si hay valena y poder personal para llevar a cabo las indicaciones que nos da. Por ello, si quieres trabajar en serio con tu intuición, asegúrate de indagar en tus miedos miedos.. El miedo irracional, permanente o desmedido, es como una niebla que nos confunde y nos aturde. Nos deja en un estado de bloqueo que nos impide escuchar los mensajes intuivos. Si quieres mejorar el contacto con tu intuición, despeja un poco el camino de estos miedos. Algunas preguntas Antes de connuar con las siguientes cinco recomendaciones te propongo hacer una pausa y dejar que tu mente divague en estas preguntas: ¿Te consideras una persona intuiva? ¿Tiendes a senrte desilusionad@ cuando la intuición no aparece? ¿Fuerzas que la intuición te diga que el camino que estás tomando es el correcto, en vez de escuchar sin prejuicios? ¿Qué actud¿O enes en la vidade enriesgo, general? ¿La consideras un casgo, una sucesión de obligaciones, una runa? ves una parte sorpresas y aventuras? ¿Qué te sucede cuando ocurren contraempos? ¿Los tomas como nuevas opciones, te bloqueas o bloqueas o te enfadan? Finalmente… ¿a qué enes miedo? ¿Cuándo empezaste a tener ese miedo? ¿Qué cosas estás dejando de hacer en tu vida por causa de esos miedos? Tómate tu empo para pensar calmadamente en estas preguntas, o léelas despacio y luego sal a pasear sin ningún objevo en mente… A ver qué ideas te vienen. A connuación, y si te apetece, sigue leyendo la segunda parte de este arculo arculo sobre sobre cómo despertar tu intuición. Espero que lo que has leído hasta aquí te t e haya gustado y ¡no te olvides dejarme tus comentarios! hps://www.puedoayudarte.es/ edoayudarte.es/intuicion-como intuicion-como-desarrollar/ -desarrollar/ hps://www.pu
Intuición: qué es y cómo desarrollarla para tu benefcio (2ª parte) SEPTIEMBRE, 2016 2016 BY AMPARO MILLÁN MILLÁN 10 SEPTIEMBRE, MATERIALIZAR OBJETIVOS
Algunos dicen que las personas intuivas nacen, yo digo que todos nosotros podemos desarrollar esta capacidad siguiendo determinadas práccas. En la primera parte de este arculo se explicó expl icó qué es la intuició int uición n y por qué no es igual que la capacidad proféca. Las personas intuivas, como decía Caroline Myss, «ulizan la información energéca para tomar decisiones en un momento dado». Anar nuestra intuición y seguir sus principios no es saber lo que nos va a pasar si tomamos una decisión determinada, pero sí es conar en que eso es lo que tenemos que hacer, lo que más nos conviene. Puesto que la intuición es una capacidad pre-consciente, es decir más rápida que el pensamiento consciente, no podemos elegir en qué momento aparecerá. Dicho en otras palabras: la intuición no se puede forzar. Es verdad que, con cierto entrenamiento, podemos aumentar su frecuencia de aparición. Pero esa respuesta intuiva que de repente te hace entrar en un lugar determinado, o acordarte de alguien y llamarlo, o dar con la solución a un problema, o tener una idea fabulosa para un libro, no se puede predecir sino más bien recibir con los brazos abiertos cuando aparezca. La segunda condición para que la intuición se exprese es tener una actud diverda y abierta ante la vida. Conar en las casualidades. Pensar que es posible que nuestra mente almacene mucha más información y datos de los que podemos llegar a imaginar (lo cual es rigurosamente cierto, de esto se aprovecha la publicidad sublimin subliminal). al). En tercer lugar, podemos ejercitar mucho la intuición en momentos de cambios inesperados inesperados.. Los contraempos nos sacan de la forma de pensar habitual y en esa «libertad» de encontrarnos sin planes jos, una respuesta intuiva suele aparecer. Suele ser una vocecita que dice: «¿y si lo hicieras, a pesar de todo?» «Total, ya ha ocurrido el desastre ¿qué más puedes perder?» No siempre, pero a veces los cambios de planes traen sorpresas posivas si sabemos escuchar nuestra intuición en vez de caer en el desánimo. La cuarta recomendación para ser personas más intuivas es ser valientes. Seguir una corazonada no implica un camino de rosas. El héroe que todos llevamos dentro dentro no no se llama «héroe» por casualidad. Se llama héroe porque sale de lo conocido, se enfrenta a peligros externos e internos, sufre, aprende y colecciona victorias y derrotas hasta que mata al monstruo nal. Finalmente, cuando llega a casa, es recibido con honores. Si nosotros somos ese héroe y la intuición es «la llamada», hace falta coraje para seguir esas instrucciones.
Hasta aquí las cuatro recomendaciones de la primera parte de este arculo, sigamos inspeccionando inspeccionan do qué más podríamos hacer para nutrir nuestra parte intuiva: 5. Estar en conexión con el cuerpo y con las emociones
En nuestra civilización vivimos pensando que somos «mentes andantes». Creo que si no tuviéramos enfermedades, dolores o necesidades necesidades siológicas, habríamos desconectado del cuerpo hace siglos. El cuerpo se considera un esclavo al servicio la mente o un sistema con vida propia que va por su cuenta (casi nunca advermos los síntomas iniciales de una enfermedad) pero rara vez es contemplado como un maestro. Rara vez el cuerpo es considerado una parte de nosotros que ene algo que decir. Nunca me había parado a pensar en la relación tan curiosa que tenemos con nuestro cuerpo hasta Bertherat,, fundadora de la terapia corporal conocida como angimnasia. En «El que leí a Thérère Bertherat cuerpo ene sus razones» (libro que recomiendo encarecidamente, encarecidamente, aunque a mí me gustó más el segundo: «Correo del cuerpo») Bertherat dice: En este momento, en el lugar preciso en que usted se encuentra, hay una casa que lleva su nombre. Usted es su único propietario, pero hace mucho empo que ha perdido las llaves. Por eso permanece fuera y no conoce más que la fachada. No vive en ella. Esa casa, albergue de sus recuerdos más olvidados, más rechazados, es su cuerpo. “Si las paredes oyesen…” En la casa que es su cuerpo, sí oyen. Las paredes que lo han oído todo y no olvidado nada son sus músculos. En el envaramiento, en las crispaciones, en la debilidad y en los dolores de los músculos de la espalda, del cuello, de las piernas, de los brazos, y también en los de la cara y en los del sexo, se revela toda su historia, desde el nacimiento hasta el día de hoy.
Fue para mí un descubrimiento extraordinario el que no sólo la mente inconsciente, sino también los músculos del cuerpo, guardan información de lo que nos ha sucedido. Esto explica por qué el cuerpo se pone involuntariamente rígido cuando nos obligan a hacer algo que no queremos o queremos o cuando vemos a una persona que nos recuerda a alguien que nos hizo daño. Nosotros quizás querríamos disimular; el cuerpo, sin embargo, nunca miente (que diría Alice Miller) La intuición, de la forma en que la estamos considerando, no implica sólo un pensamiento. Implica también una emoción o una acción asociadas. Y ambas cosas son dominio del cuerpo. Si una persona me atrae, aun sin conocerla, y sigo mi intuición de invitarla invitarla a salir, ahí no ha habido sólo una idea. Ha habido un senmiento (de ternura, de atracción sexual, de curiosidad, de amor) que es algo siológico experimentado en el cuerpo. O si voy andando por la calle y de repente, sin pararme a pensarlo, decido pasar a una enda a lo que sea, ahí no sólo ha intervenido mi mente. De hecho, quizás me he encontrado haciendo el movimiento de pasar a la enda antes de haber sido consciente de la idea de «voy a pasar». Es esa sensación de estar en un sio y preguntarte ¿pero cómo he llegado aquí? actuaron antes que tu cabeza.
Tus músculos
A veces la razón nos dice que hagamos una cosa, pero la sensación corporal nos dice que será mejor otro camino… Y en este caso, vale la pena pararse a valorar con la misma importancia que la razón la respuesta intuiva del cuerpo. En la siguiente historia, una lectora (escépca, como yo) cuenta cómo eligió entre dos oportunidades de trabajo llevada más por sus senmientos internos que por los factores externos. Siendo una persona bastante escépca y con los pies en la erra también la intuición ha venido a visitarme más de una vez en la vida para hacer ¡zasca! y cambiar mis esquemas. Cuando volví de Uruguay andaba un poco perdida con mi vida vida,, volví a casa de mis padres y no sabía bien qué hacer (acababa de terminar otra carrera y las salidas laborales no me acababan de cuajar). Un día que estaba al límite (había tenido una mala nocia con un trabajo grande que no iban a pagarme y al que había dedicado mucho empo y esfuerzo) empecé a echar ofertas de trabajo por cuenta ajena. Recuerdo que era de madrugada y encontré algunas con las que parecía que podía encajar. Después de unas semanas de entrevistas, dos empresas me ofrecieron trabajo en rme. La primera me pagaba muy poquito, porque era beca formava, unos 600 € y en principio sólo por 3 meses, pero estaba muy cerca de casa, me pagaban la comida y el transporte, y me encantó el ambiente. La otra era un trabajo de verdad y un salario más que digno (21000 €/anuales) pero era cierto que no me acababa de ver trabajando allí. No me preguntes por qué, pero no acababa de
verme. Además esta segunda opción no acababa de cuajar del todo (me dijeron que me llamarían esa semana y tardaron dos) y en el primer sio me pidieron que diera una respuesta esa misma semana. Recuerdo que esos días estaba bastante nerviosa (a mí los nervios siempre me van al estómago). Sin embargo, me di cuenta que todos los nervios eran porque mi intuición me decía claramente que cogiera la primera opción y mi entorno y la racionalidad la segunda. Como vida sólo tenemos una, decidí guiarme por lo que me decía mi intuición y escogí la primera. Entré allí como becaria y al mes de entrar quedó libre un puesto de lo mío y mi jefa me animó a que me presentara al proceso de selección. Me escogieron y aquí sigo. Muy feliz ya que es una empresa que me ha valorado mucho y desde el principio ha apostado por mí. La otra empresa volvió a llamarme al mes de tener el contrato y me ofrecieron incluso más salario, pero ya dije que no. Me sena y me siento muy bien donde estoy ahora, valoro mi vida por algo más que el dinero, y por ahora es una de las mejores decisiones que he tomado guiada por la intuición. Mi trabajo ahora me permite tener empo para mí, con un horario cómodo y además es una empresa que cuida mucho a los trabajadores, cosa que hoy en día es dicil de encontrar. Desarrollar la capacidad intuiva pasa por no ignorar nuestras emociones. Pasa por admir lo que senmos aunque lo consideremos «inapropiado». «inapropiado». También pasa por ser conscientes de que tenemos un cuerpo, un cuerpo que a veces grita (se enferma) para que escuchemos lo que ene que decir. Escuchar el cuerpo y las emociones es tan sencillo como pararnos en mitad de una tarea y preguntarnos: ¿tengo la espalda tensa o relajada? ¿qué siento? ¿qué me pasa? ¿por qué me pasa esto? ¿tengo sed? ¿tengo que ir al baño? ¿necesito descans descansar ar un rato? Aunque se puede profundizar mucho más en la relación mente-cuerpo, estas preguntas son un buena forma de empezar. 6. Claricar el pensamiento Aunque la capacidad intuiva es propia del hemisferio derecho del cerebro, esto no implica que debamos descartar el pensamiento racional y lo que nos aporta. De hecho, opino que no se puede ser una persona intuiva si la forma de pensar es desordenada y sin estructura. Es verdad que en la educación convencional se le da una excesiva importancia el hemisferio izquierdo: leer, escribir, ordenar, memorizar, sintezar, buscar relaciones causa-efecto. Algunas corrientes más subversivas de la educación buscan todo lo contrario: olvidar esos apuntes aburridos y poner a los chicos a crear, bailar, improvisar, inventar historias y desarrollar su capacidad simbólica. Lo que aún (me parece) no hemos conseguido entender del todo es que no hay que elegir un po de acvidad sobre lo que lo mismo: no hay una forma de pensar «mejor» y otra «peor». Estecerebral es un juicio de otra. valorOque, si loesllevamos a otras partes del cuerpo, nos resultaría
ridículo: ¿qué es más importante el riñón o el corazón? ¿priorizamos el buen funcionamiento de nuestros músculos, nuestro sistema nervioso o la capacidad pulmonar? Por ello, desarrollar la intuición no signica dejar de lado el pensamiento formal. Se puede tener una mente lúcida y ordenada y a la vez una capacidad intuiva muy potente. Yo diría incluso que esto es lo natural, lo lógico. Y de hecho, la intuición se ve favorecida cuando claricamos el pensamiento. Para mí la expresión «mente clara» se resume en una metáfora visual: es como una habitación bella, armónica y ordenada. Puede haber cuadros de muchos colores por las paredes, un eslo más casual o más minimalista, pero siempre es un lugar en el que senmos calma y en el que sabemos lo que podemos encontrar. Un pensamiento caóco y desordenado, por el contrario, sería una habitación con demasiadas cosas, mezclas que no cuadran, sillas radas por el suelo y un senmiento de que en cualquier momento puede ocurrir un desastre. Un pensamiento desordenado también provoca que la gente crea cualquier cosa o lea cualquier cosa. Hay libro Hay libross de autoayuda que (con todos mis respetos) son una auténca basura, un baburrillo de cosas que no cuadran la una con la otra y que no llevan a una conclusión clara. También hay escritos que son muy vagos, muy etéreos: «el universo…», «la energía…», «el poder del amor…», «la sanación…» y que ni ayudan a solucionar los problemas codianos ni ayudan a ordenar lo que senmos. Por el contrario, cuando una persona sabe explicar con palabras sencillas lo que siente y lo que le pasa, cuando sabe dónde está el origen de sus problemas (y esto siempre son eventos concretos, no «el patriarcado» o «la conciencia cósmica imperfecta») cuando observa la realidad como es, con sus peligros y oportunidades, y a las personas como son, sin proyecciones negavas o posivas, esa persona ordena su pensamiento y siente paz. Y entonces, como quien no quiere la cosa, si no rechaza la capacidad intuivo-creava de su cerebro, se descubre teniendo impresiones muy fuertes de lo que desea o de lo que ene que hacer. Me parece tan hermoso: intuición e intelecto funcionando juntos. Una mente clara y una conexión con nuestras emociones facilita el trabajo de la intuición. Es más, es precisamente esta claridad mental y emocional la que nos permite disnguir entre la verdadera respuesta intuiva y lo que son ocurrencias, ideas peregrinas o «chispazos mentale mentales» s» que no enen nada que ver con la verdadera intuición. 7. Entrenar la capacidad simbólica El lenguaje verbal o escrito nació como una forma de expresar ideas complejas, pero no ha sido la única a lo largo de la historia. Desde empos remotos han exisdo los símbolos como manera de sintezar el conocimiento y transmir aquéllo donde las palabras no llegan. David Fontana Fontana,, doctor en psicología y un experto en meditación e interpretación de sueños, habla del poder simbólico en su libro «El lenguaje de los símbolos»:
Los símbolos son expresiones profundas de la naturaleza humana. Han estado presentes en todas las culturas y en todos los empos, y desde su primera aparición en las cuevas paleolícas, han acompañado el desarrollo de la civilización. Hoy, dentro de su contexto, siguen teniendo un fuerte poder evocador para nuestro intelecto, nuestras emociones y nuestro espíritu. […] Un símbolo puede representar algún profundo saber intuivo que escapa a la expresión directa. […] Pese a haber sido frecuentemente rechazado por el racionalismo occidental, el signicado interno de los símbolos conserva hoy toda su carga y sigue apareciendo frecuentemen frecuentemente te en el arte, la literatura y el cine, la publicidad, las campañas polícas, los sueños y los cuentos que han entusiasmado a generaciones sucesivas de niños. También se aprecian símbolos en las pinturas y dibujos espontáneos producidos por los niños y por los pacientes en psicoterapia. La ulidad de los símbolos es doble: por un lado, nos acerca a realidades que son diciles de expresar en palabras, como apunta Fontana. Y por otro lado, los símbolos son un modo de , el odio muerte, mostrar «verdades incómodas» (la sexualidad, los deseos prohibidos, el miedo a la muerte reprimido, la insasfacción, la culpa, el mal, etc.) de una forma menos agresiva que el lenguaje. Se dice que el trabajo con los símbolos y con los sistemas de símbolos acva nuestro hemisferio derecho y, por lo tanto, colabora con el desarrollo de nuestra capacidad intuiva. Algunas acciones concretas de trabajo en este sendo podrían ser las siguientes: Prestar atención a nuestros sueños. Los símbolos se despliegan ante nosotros cada noche por medio de los sueños, los recordemos o no, el problema es que no es fácil interpretarlos. Freud era un maestro en la interpretación de sueños (además sueños (además del primer psiquiatra que realmente les dio importancia) Jung también y Fritz Perls introdujo el análisis de los sueño sueñoss en la psicoterapia gestalt. Otros autores, más recientemente recientemente (Ann Faraday, David Fontana, Clara Tahoces) han escrito libros muy interesantes al respecto, que puedes leer si te interesa el tema. Pero hay una recomendación mucho más sencilla sencilla para poner en prácca hoy mismo: escribir un diario de sueños. Hazlo durante muchos días y al cabo de un empo, lee todos lo sueños anotados y busca patrones entre ellos. Busca qué elementos, situaciones, personas o escenarios se repiten y búscales una lógica dentro de tu propia vida. Esos son los símbolos concretos en los que puedes profundizar y sobre los que tu intuición te ayudará a desvelar el signicado. Profundizar los arquepos que nos constuyen. Se llama arquepos humanos a cualidades o pos de personalidad que se representan en forma de gura humana, hombre o mujer. Por ejemplo, el arquepo de la madre representa la nutrición, el de la bruja una facultad seductora y malvada, el héroe es la personicación del impulso de superación en todos nosotros, etc. Acercarte al descubrimiento de loslibros arquepos puede ayudarte a desarrollar tu capacidad simbólica por ende, tu intuición. Algunos que exploran estos conceptos son «Mujeres que corren cony,los lobos»
de Clarissa Pinkola Estés y «Las diosas de cada mujer» de Jean Shinoda para arquepos femeninos y «Iron John: una nueva visión de la masculinidad» de Robert Bly y «los dioses de cada hombre» de Jean Sinoda para arquepos masculinos. La astrología y el tarot son potentes sistemas simbólicos de origen occidental (en Oriente emergieron otros sistemas de símbolos como el I Ching o el tantra). La mayoría de nosotros sólo conocemos el empleo de estas técnicas para adivinar el futuro (a veces, por parte de personajes de dudosa reputación) que es el peor uso que se les puede dar. En su base, la astrología y el tarot expresan vivencias o cualidades psíquicas de las personas por medio de estrellas y planetas (astrología) o arcanos (en el tarot). Es decir, ambas técnicas son formas de representar lo somos y lo que nos pasa en la vida por medio de símbolos. Por eso lo interesante no es ulizarlas para «saber qué me va a pasar esta semana porque mi signo solar es Capricornio» sino profundizar en qué es la energía capricorniana y cómo es la interacción del aspecto «sol» con esa energía. En el tarot (que es un sistema que conozco mejor) la relación entre cada carta o arcano y una experiencia concreta es mucho más evidente. Se pueden ulizar las cartas del tarot para averiguar de qué manera, posiva o negava, asumimos ciertos roles en la vida, qué experiencias hemos transitado bien, cuáles nos resultan muy diciles, qué aspecto de nuestra personalidad necesitamos trabajar porque es una debilidad, etc. Hay muchísimos prejuicios respecto a la astrología y al tarot, que te recomiendo dejar de lado si quieres entrar a fondo en el análisis de los símbolos y sus signicados. Por úlmo, otra forma de relajar el pensamiento racional y entrar en contacto con la parte creava-intuiva es el arte. Ya sea dibujando por libre o coloreando mandalas (algo que se ha vuelto popular) la pintura es un medio de expresión que nos conecta con el hemisferio derecho y nos lleva a universos poco explorados. 8. Reconocer nuestra necesidad espiritual
La palabra «espiritual» puede signicar muchas cosas pero básicamente es el intento de contactar con algo más grande que uno mismo. Con algo o alguien que lo sabe ttodo, odo, que nos protege y que conoce el sendo de todas las cosas.
Si tomamos la intuición en su sendo más mísco, considerado que esa voz interior viene de un lugar más allá del sistema mente-cuerpo, entonces una forma de potenciarla es a través del trabajo espiritual. Cualquier forma de desarrollo espiritual (rezar, meditar, visitar un templo, hacer una peregrinación) implica dos cosas. La primera, es preciso tener una actud recepva y de silencio. Tenemos que dejar un espacio para que esa Palabra sagrada se pueda escuchar, aunque el mensaje no nos guste. Y por otra parte, el trabajo espiritual implica una rendición. Asumimos que no lo sabemos todo, que no lo podemos todos, que hay algo mucho más grande que nosotros mismos y que es hora de entregarse «a lo que tenga que ser». Por paradójico que parezca, esta sensación suele traer alivio. Hay muchas formas de dar espacio e impulsar esta vena espiritual, casi todas sin coste o muy baratas. Algunas que se me ocurren podrían ser las siguientes: Contemplar el cielo de noche (tan sencillo como esto) Pasar empo en un templo o iglesia de forma esporádica o asidua Rezar antes de ir a dormir Hacer algún rito sagrado (puede ser inventado) a solas o en compañía Realizar una peregrinación a un lugar de culto Leer textos religiosos, chamánicos o relacionados con la espiritualidad ancestral Pasear por un cementerio y empaparse de lo que es el ciclo de la vida (vivir-morir) Pasar una noche en vela en algún lugar sagrado Conversar con personas que enen un contacto estrecho (y verdadero) con el lado espiritual Buscar un sendo posivo a nuestras experiencias traumácas y traumácas y negavas. Verlas como un camino de iniciación espiritual, un camino para mejorar como seres humanos. Algunas personas pueden mostrar recencias a realizar alguna de estas acvidades. Me consta que hay gente que se pone rígida nada más pasar a una iglesia, aunque la mayoría son lugares bonitos y tranquilos, pero como yo digo siempre: prueba. Experimenta por mismo disntas formas de contactar con tu lado mísco y trascendental, no hay mucho que perder. 9. Interactuar con el medio Si en vez de la visión espiritual consideramos consideramos la denición más cienca de la capacidad (explicada en el arculo arcu lo anterior) anterio r),, según la cual la intuición es una respuesta preintuiva (explicada intuiva consciente del cerebro tras el análisis de millones de datos, una forma de anar esta intuición será aumentando los inputs (o datos de parda) que recibe el cerebro. Es decir, podemos mejorar nuestra capacidad intuiva viviendo más y más variadas experiencias. experiencias.
En este arculo de El País tulado ¿Podemos arnos de la intuición? los intuición? los autores describen el mecanismo de la siguiente manera: Gran parte de la intuición se adquiere mediante la interacción con el medio» Si intentamos diseccionar el proceso de la intuición vemos claramente tres fases. En primer lugar, el cerebro recopila datos de la experiencia; seguidamente seguidamente los procesa de forma inconsciente y automáca, y en tercer lugar aparece repennamente repennamente el resultado o la conclusión de este procesamiento en nuestra consciencia. Por tanto, si queremos mejorar nuestra intuición debemos opmizar estas tres fases. Cuanta más experiencia vital acumulemos, cuanto más observemos la realidad sin prejuicios, cuanto más aprendamos ya sea mediante libros o mediante conversaciones conversaciones de madrugada con nuestros amigos, más datos tendrá nuestro inconsciente para elaborar sus respuestas intuivas. No desdeñes una película no comercial, un plato de comida de otra cultura, una charla con alguien que trabaja en algo apico, un viaje fuera de los lugares que sueles visitar o una ación nueva que se te ha medo en la cabeza. cabeza. Así que la novena manera que te propongo de alimentar tu creavidad y tu intuición es: adentrándote en el emocionante camino de lo desconocido… Vamos terminando Hay mucha información en este texto, por lo que sería un buen ejercici ejercicio o ahora mismo el que cerraras los ojos y, de todo lo que has leído, pensaras en qué ha sido lo que más te ha inspirado o impactado. ¿Que te viene a la cabeza? Eso que primero has pensado es quizás lo que más necesitas hacer. Por ahí puedes empezar. Otras preguntas para seguir profundizando en tu capacidad intuiva actual pueden ser las siguientes: ¿Sientes que enes un cuerpo? ¿Te as de tus sensaciones corporales ante una persona o acontecimiento, como el disgusto, el miedo, el entusiasmo o la serenidad? ¿Cómo actúas ante una emoción intensa? ¿La rehuyes o indagas en su signicado? ¿Te parece que hay una lucha entre tu lado analíco-racional y tu lado creavo-intuivo? ¿Por qué esa lucha? ¿Qué hábitos o lecturas te ayudarían a claricar y estructurar tu pensamiento? Cuando has leído la parte de los símbolos ¿qué acvidad te ha llamado más la atención? ¿Qué podrías hacer? ¿Llevas una vida abierta a nuevas personas y experiencias? ¿Qué se te ocurre que podrías hacer inusual o novedoso la semana que viene?
Centrada y bien dispuesta, la intuición puede ser una fuerza poderosísima en nuestras vidas. Empezar a entrenarla, al igual que lo hacemos con nuestro cuerpo, con nuestro conocimiento o nuestras habilidades, es sólo cuesón de constancia y compromiso. No te quedes en la teoría y empieza a praccar el empleo de tu mente intuiva. Consigas o no resultados sorprendentes en poco empo, el proceso en sí mismo es fascinante. Hay todo un mundo indómito e impredecible más allá de los límites de la razón que espera ser descubierto… ¿Te atreves a saltar y ver qué hay al otro lado?
Créditos de las imágenes Imagen destacada (1) : 15-06-10 15-06-10 de de Βethan Βethan via via Flickr Creave Commons Imagen 2: Reeditando Reeditando por por Lucía Puertas via Puertas via Flickr Creave Commons tulo por por Lucía Puertas Puertas via via Flickr Creave Commons Imagen 3: Sin tulo
** Si has leído este arculo con interés, signica que eres una persona interesada en el lado racional, pero también en la parte intuiva de la vida. Yo también soy así: no me decanto ni por las funciones del hemisferio izquierdo (analíco, racional, estructurado) ni por las del hemisferio derecho (creavo, salvajemente caóco, intuivo) porque necesito y adoro estas dos partes que me constuyen. Y que también te constuyen a . Y a todo el mundo. Gran parte de mi vida, digamos hasta los 28-29 años, la pasé enfocándome al máximo en mis funciones analícas. No es extraño, porque el sistema educavo está hecho para eso: para el hemisferio izquierdo, para el razonamiento lógico y una forma de ver la vida en la que «lo que no se puede explicar» sencillamente sencillamente no existe. No digo que esté mal, porque yo agradezco mi formación cienca y estructurada, pero es una manera parcial de ver la vida. Fue a parr de mis 28-29 años cuando, de una forma bastante espontánea, empezaron a despertarse en mí intereses que tenían que ver con lo emocional, lo misterioso y lo espiritual de la existencia, y no sólo eso, sino que empecé a apreciar el VALOR de estas experiencias. Es verdad que siempre he sido una persona (para bien y para mal) muy conectada con mis senmientos, pero lo veía más como una debilidad que como una oportunidad. Qué cosas, estoy segura de que tú has pensado lo mismo y admirabas en secreto a esas personas fuertes, disciplinadas, seguras de sí mismas en todas circunstancia y que no se dejaban «inuir» por su estado emocional…
En estos úlmos años, he descubierto que nuestra parte sensible, creava, intuiva, a veces también indolente, no es un enemigo a combar o una debilidad que ocultar, sino una amiga que nos trae un regalo fabuloso. Como culminación de ese proceso de contacto con «mi otro lado», en 2015 empecé a aprender tarot terapéuco (aún no sé muy bien qué andaría buscando en Google para dar con la página de la escuela) y hoy realizo sesiones intensivas ulizando el coaching y el tarot, el lado analíco y el lado intuivo, mi parte prácca obsesionada por «aterrizar» las ideas y mi parte soñadora que quiere que escuches un rato a tus fantasías. Tienes toda la información de este servicio de coaching y tarot AQUÍ . Si quieres hacerte un hermoso regalo, contáctame y descubre de qué manera tu intuición puede ayudarte a vivir con más claridad, más impulso y más conexión con tu propósito verdadero. Te espero. Principio del formulario hps://www.puedoayudarte.es/ser-una-persona-intu hps://www.puedoayudarte.es/ ser-una-persona-intuiva/ iva/
EL SEXTO SENTIDO. Publicado el 8 abril, 2019 2019 por por Alex_Max_LoveAll
Como una voz, que en ocasiones nos grita desde el interior. El conocido como “sexto sendo” es la capacidad natural que ene el ser humano para intuir. Hablemos un poco de esas corazonadas a las que muchos, no dan importancia. Pero, las ideas “sendas” enen, en muchas ocasiones, mucho mayor valor que las ideas “pensadas” porque son el reejo de nuestro ser auténco. aut énco. Pero bueno, ¿podemos arnos realmente de nuestro sexto sendo?
Creo que puedo ofrecerles una sencilla respuesta: démosle el valor que merece. Les cuento, no estamos en presencia de “percepciones extrasensoriales” ni de “precognición”. En realidad, las intuiciones, son regalos de nuestro cerebro, ideas que nos brinda, sin tan siquiera saber como. En el fondo el “sexto sendo” es una delicada y meculosa búsqueda por nuestro océano inconsciente para hallar una respuesta adecuada en un instante de necesidad. “…en el amor, como en el mar, suele ser mejor seguir una corazonada, que hacer caso a toda una biblioteca…” ¿No les ha pasado que, conocen a una persona y sienten como si una voz les dijera que no es de ar? Cuando hemos de tomar una decisión importante, aun después de meditarla, elegimos la opción que habíamos sendo desde el principio. Este “sexto sendo” siempre está ahí, oculto, pero presente. Discreto, pero guiando, modelando la mayoría de nuestras acciones y reacciones, de los caminos que escogemos en la vida. A día de hoy ha tomado gran trascendencia, la inuencia de este sendo, lejos de verlo como algo poco able, debemos centrarnos en esta transcendencia. transcendencia. Una buena inteligencia intuiva, nos perite profundizar en nosotros mismos, para adaptarnos mucho mejor a nuestro entorno. De este modo, seremos más ecaces en nuestros trabajos y más m ás felices en nuestras relaciones. ¿quieres saber por qué? Un privilegiado “rincón” de nuestros cerebros se le otorgó al “sexto sendo”.
Nuestro cerebro, funciona atendiendo a datos e informaciones que obene y conecta entre sí. Pero bueno, nuestro cerebro no lo sabe todo, y en muchas ocasiones está obligado a improvisar. De hecho, esto lo hace casi todo el empo. Lo hace basado en experiencias, se apoya de todo lo que hemos sendo, visto e interpretado, para, de este modo, gestar una intuición. Pero atentos: el sexto sendo es un fantásco sistema de supervivencia. Para decirlo de una manera simple, funciona como una alarma, en ocasiones en las que algo no va bien y necesitamos reaccionar de manera espontánea y efecva, se acva este emocionante circuito interior. Esta brújula. Es por ello, que la puesta en marcha de una respuesta efecva y el ajuste del rumbo de nuestro comportamiento, lo debemos a estos “regalos” en forma de intuición intuici ón que nos hace el cerebro. Se ha desatado un gran interés por este tema en los úlmos años. Al punto de que ya conocemos la zona exacta en la que se desarrolla este sexto sendo. Según los ciencos esta es la corteza cingulada anterior del cerebro, una región, estratégicamente, situada entre ambos hemisferios del cerebro. Es más, expertos arman, que esta área se conecta con nuestro cerebro inconsciente, para así adverr de ciertos peligros. Sin dudas es algo fascinante ¿No creen? La sensibilidad es el vesdo más elegante de la inteligencia. Ser sensibl sensiblee no es algo que deba avergonzarnos, sino que es una muestra de nuestra inteligencia. Vístete de sensibilidad y demuestra tus senmientos. Las personas con sexto sendo.
“una corazonada es la creavidad tratando de decirte algo” -Frank CarpaAlbert Einstein en 1930 armo a un periodista que la nica cosa a la que realmente le otorgaba valor era a la intuición, cuando le preguntaba sobre su teoría de la relavidad. Le declara luego que tenía total conanza en que sus estudios eran ciertos por que el “lo intu intuía”. ía”. Este es un hermoso y gran ejemplo de un sexto sendo. En muchas ocasiones, no es necesario que toquemos y veamos algo, para creer en ello. Nadie, por ejemplo, ene que demostrarnos que el
camino que escogemos es el acertado si así lo senmos en nuestro interior. Como tampoco necesitamos leer toda una biblioteca para saber que amamos y somos amados. Nos lo dice el corazón, y él nos habla la intuición. Rasgos de un sexto sendo escuchado.
Antes que nada, les diré: el sexto sendo, como todos, puede entrenarse y trabajarse a diario. De hecho, podría recomendarles libros muy interesantes como: “educar la intuición: desarrollo del sexto sendo” de Robín Hogarth. Aunque estos autores nos indican que es común común desarrollar entre los 40 y 50 aaños ños de edad, un auténco sexto sendo. Pues esta es una época de mayor crecimiento interior, un despertar a emociones y auténcas necesidades. necesidades. No obstante, podríamos resumir algunos rasgos de las personas con mayor intuición a través de algunas caracteríscas: •~Escuchan su voz interior. •~Deleitan de su soledad, conectan frecuentemente con ella. •~Son personas muy creavas. •~También muy analícas. •~Praccan una atención plena pues son muy observadores. •~Escuchan a sus cuerpos con una nalidad concreta: aprender a sintonizar el cuerpo y prestar más atención a las “corazonadas”. •~Toman en cuenta sus sueños. •~No les agradan las reglas. •~Asumen riesgos. •~Cometen muchos errores, pero aprenden de ellos. •~Son independientes. independientes. Sin duda alguna, asumir una perspecva vital, basándonos en estas estrategias nos llevará por caminos más liberadores y sasfactorios. Porque al n y al cabo la razón raz ón está siempre en nuestro intelecto, pero la intuición, rara vez se equivoca.
¿La mente es nuestro Sexto Sendo?
En medio de toda la invesgación que he realizado para llevar a cabo este nuevo post, hubo algo, una idea que vino a mi cabeza, y al explotarla tranquilamente me pareció bien interesante comparrla con Uds. también, a n de que tengamos otro punto de vista más, y pensando que quizá a alguno le surgiera la misma idea, que la encontraran también un poco esclarecida. Se trata de la idea de considerar la mente como el “sexto sendo”. Pensando bien es los sendos, los cinco que supuestamente conocemos con exactud, veremos que nos resulta imposible desconectarlos, desconectarlo s, a ninguno de ellos. podemos ulizar uno de manera intencionada (tocar, oler algo, jar la vista en algo) pero cuando ya no se trata de algo intencionado, incluso cuando ya ni les estamos prestando atención, nuestros sendos connúan acvos.
Lo mismo ocurre con la mente, podemos pensar en algo con toda intención, planicar o recordar algo, pero también sigue ella sola su acvidad cuando dejamos de pensar intencionadame intencionadamente. nte. Así, es como surgen recuerdos, tareas pendientes, así es como a veces atamos cabos… en realidad nuestra mente como el resto de los sendos, no se desconecta nunca.
Lo que me resulto curioso, es como ninguno de nosotros trata a los fenómenos mentales como al resto de experiencias sensoriales. Les pondré un ejemplo: si vamos por la calle, y vemos o tocamos o escuchamos u olemos algo, no por el hecho de haberlo sendo pensamos que es nuestro. sin embargo, con nuestros pensamientos no es así, somos acreedores de que son nuestros, cunado cometemos algo que a nuestro entender es un error, surgen pensamientos como “eres un inúl” ¿Por qué lo hacemos nuestro y nos lo llegamos a creer? Haciendo que merme nuestra autoesma. Los pensamientos no son más que fenómenos mentales, nosotros no somos nuestros pensamientos. Posiblemente Posiblemente muchos de los pensamientos de cada uno tengan que ver con su historia, incluso puede que los hayan aprendido de otro ser. Des-idencarnos de los pensamientos, o sea, verlos con distancia y como algo ajeno a nuestra persona, es muy importante para nuestro bienestar emocional. ¿Por qué? Pues porque la mayor parte de nuestros malestares no vienen del pensamiento en sí, sino de la manera en que nos relacionamos con ellos.
Una persona puede suspender un examen y pensar “soy incapaz de hacer nada bien” esto es un pensamiento automáco y con algo de frustración, pero concretamente también es un juicio y una generalización que no describen lo que ha sucedido. Pero si se queda enganchada a ese pensamiento es probable que re la toalla y se sienta completamente desanim desanimada, ada, en cambio, si lo ve con cierta distancia, resulta mas fácil f ácil no dejarse caer y buscar una frase m más ás posiva que lo ayude a levantarse; como, por ejemplo: ejemplo: no pasa nada, no soy ni el primero ni el úlmo. Pero claro no es nada fácil f ácil ver con distancia nuestros pensamientos. Esto requiere prácca. Un pequeño truco que recomendaba un maestro es que cuando nos apareciera un pensamiento nos dijéramos “me ha venido un pensamiento de …” en vez de quedarnos en el pensamiento en sí. Esto nos puede ayudar a ganar distancia y analizar este pensamiento. Si se os ocurre algún alg ún otro truco no dudes en dejárnoslo en tus comentarios nos encantara intentarlo seguramente. ¿Cómo podemos desarrollar un sexto sendo?
Lo primerito que debemos entender es que la intuición como sendo, lo podemos desarrollar y culvar, a través del empo, con ciertos pasos o claves que te voy a comparr. 1. EMPIEZA PEQUEO: Cuando te enfrentes a situaciones en las que no sepas que decir, cierra tus ojos, respira e intenta senr en tu interior, cual es la opción más adecuada. Trata de dejarte llevar por tu corazón, por tus impulsos. 2. CONFÍA EN TI MISMO: Hablar de intuición y sexto sendo es como hablar de autoconanza y seguridad en mismo. En situaciones desaantes, desaantes, permítete conar en que harás har ás las cosas bien. Deja de lado las dudas y planeta seriamente el dejarte guiar por mismo. 3. PRUEBA TU HABILIDAD: En eventualidades totalmente aisladas comprueba comprueba que tan h hábil ábil eres con la intuición. 4. COMBINA TU INTUICIN CON TÉCNICA: T ÉCNICA: El póker, por ejemplo, es un juego donde puedes praccar tu intuición, pero, si lo combinas con una vena técnica tus posibilidades se elevan que no veas. Cona en tus corazonadas, pero deja también que el pensamiento aporte una base sólida a estas corazonadas.
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