La Misión en La Orden de Predicadores - Germán Pravia

 

 

La Misión en la Orden de Predicadores  Memoria Final del Diplo Diplomado mado en Teologí Teologíaa Dominicana  …por la profesión que nos incorpora a nuestra Orden nos consagramos totalmente a  Dios y nos entr en treg egamos amos de un unaa manera manera nueva a la Iglesia universal, universal, dedicándonos dedicándonos por ent en tero a la evangelización íntegra de la palabra de Dios... Y, puesto que nos hacemos  partícipes  partíci pes de la misión misión de los Apóstoles, Apóstoles, imitam imitamos os también también su vida según según el modo modo ideado por Santo Domingo, manteniéndonos unánimes en la vida común,…en la oración, asiduos en el estudio, perseverantes en la observancia regular. Todas estas cosas… conjuntamente preparan e impulsan la predicación, la informan y, a su vez, son informadas por ella. Entre nosotros, estos elementos... deben inspirar formas de vida y de predicación p redicación adaptadas adaptadas a las nece n ecesidades sidades de la Iglesia y ddee los hom h ombres bres .1 

Este texto de la Constitución Fundamental expresa sintéticamente en qué consiste la Misión en la Orden de Predicadores   y me permite articular algunos aspectos aspec tos que conforman su desarrollo. La Orden participa de la Misión como acción esencial de la Iglesia  (1)  al dedicarse a la evangelización íntegra de la Palabra de  Dios  Di os,, y  según el modo  modo  de la Vida Apostólica que Domingo asume e concibe para la la  oración y el   estudio estudio.. La fidelidad Predicación en la Orden  (2)  en la vida común, la  creativa a estos elementos fundamentales de la vida dominicana le permitirá a la Orden afrontar los Desafíos de la Predicación  (3)  con  formas de vida y de pr predicación edicación adaptadas  a una adaptadas una reali realidad dad siempre siempre en cambio. cambio.   1. 

La Misión como acción esencial de la Iglesia

La fe cristiana se inicia con un envío. María Magdalena y la otra María, llenas de temor y alegría, van corriendo a dar la Buena Noticia de la Resurrección de Jesús (Cf. Mt 28, 8). La acción de estas mujeres configura el núcleo de la fe: la experiencia del Resucitado lleva dentro de sí el impulso de su propia comunicación en orden a seguir engendrando Iglesia.  Pablo VI, recoge y reflexiona la experiencia misionera de casi dos mil años de Iglesia en la Evang Evangelii elii Nuntiand Nuntiandi,i, la Carta Ca rta Magna Magna de la Evangeli Evangelizació zació n:   La evangeliza evangelización ción de todos los hombres hombres constituye constituye la misión misión esencial de la  Iglesia… Evangeliz Evangelizar ar constituye, constituye, en efecto, efecto, la ddich ichaa y vocación vocación pr propia opia de la Iglesia, su 1

 Libro de l as Consti Constitucione tucioness y Orde Ordenaci naci ones (L (LCO) CO) de la Orden de Predic Predicadores adores 1 § III, II I, IV y VIII   1

 

 

identidad más profunda. Ella existe para evangelizar, es decir, para predicar y enseñar,  ser canal can al del don de la gracia, gracia, reconciliar reconciliar a los pecadores pecadores con Dios… 2 

La Misión de la Iglesia es la Evangelización. La Iglesia se reconoce continuamente enviada por Jesús (“vayan y anuncien”: Mt. 28, 19) siendo Él mismo enviado por el Padre (Cf. Jn 20, 21). Jesús, a su vez, envía desde el Padre el Espíritu  para sosten sostener er y gu guiar a la la Ig Igllesia esia en el testi testim monio onio de la Verdad Verdad (Cf. Jn 16, 7.13). 7.13). La Misión es un término rico en acepciones: puede expresar una “actitud” a desarrollar, la de salir al encuentro del “otro” (a) y también puede concebirse como una tareaa esencial de la Igl tare Iglesia esia realizada realizada de formas formas variadas y en sus múltipl múltiples es accion acc iones es (b). 1.1) 

 De la Iglesia Iglesia-Ciudadela a la la Iglesia Iglesia en e n Salida Salida  A partir de los Edictos de Milán (sigo IV) la Iglesia deja de ser perseguida.

Puede salir de la clandestinidad y afincarse en la sociedad donde prontamente llega a ocupar un lugar preponderante y privilegiado.   Custodia del alma y de la cultura greco - latina, la Iglesia es un factor clave en la conformaciónn de la nu conformació nueva eva Europa bárbar bárbaroo- cristi cristiana, ana, en llos os ini inicc ios de la Edad Media. Med ia. Abadías, catedrales, castillos y ciudades amuralladas se constituyen en el modelo visible de una resistencia frente a la inseguridad reinante en esos tiempos de cambio. También reflejan el aislamiento en una seguridad interna establecida por una simbiosis creciente entre Iglesia Iglesia y So Sociedad ciedad y entre Poder Po der terrenal y espiri esp iritual. tual.  No hay muralla muralla qu q ue no tenga grietas ni castillo qu q ue no tenga zonas franque franqueables. ables. Por eso, eso, cuando Domingo de de Guzmán G uzmán y Diego, el obispo obispo de Osm Os ma, sa sallen de dell Cabildo Cabildo de la Catedral para atravesar el Languedoc, descubren un mundo que sale de lo estableci estab lecido do para para un régimen régimen de cristiandad cristiandad:: la herejía y la ig ignoranc norancia ia religiosa. religiosa. El viaje despierta en el obispo Diego (y en Domingo) la vocación misionera: un “enorme deseo que tenía de renunciar a su episcopado para marchar libremente a  predicar  predi car el Evangelio Evangelio a los pa pagganos” 3 El Papa Inocencio III no accede a este pedido,  pero les solicita qu q ue colabor co laboren en con co n la Predicación que los ccist isterc erc ienses realiz rea lizaban aban entre e ntre los herejes del de l Languedoc. Languedoc. Luego L uego de los en e ncuentros en e n C ite iteaux aux y de Mon Mo ntpellier, Di D iego y Domingo dejarán la vida regular del Cabildo de Osma para salir al encuentro de los 2

 PABLO VI, Evangelii Nuntiandi   (EN)14   VITO TOMÁS GÓMEZ GARCÍA OP, Domingo de Guzmán antes de la Orden: fuentes, contexto e influencias., influencias ., Tema 8. En tierras del Languedoc (1206 -1207), 1207), DOMU  DOMUNI NI 2 2.. 

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herejes y de los los pobres en la la Predicación Narbonen Narb onense. se. 4  El modelo de Iglesia -Ciudadela, amurallada y defendiéndose de un mundo convulsiona convul sionado do no es exclusivo exclusivo del de l tiempo tiempo de Domingo, es una una respuesta reeditada reeditada en los tiempos modernos del Syllabus, entre otros... El Concilio Vaticano II recupera el  propósito  propósi to de que la Igl I gles esiia entre e ntre en di d iálog álo go con co n (y no en e n defensa defensa contra) co ntra) el mundo mundo y la sensibilidad contemporánea. Los teólogos dominicos Chenu y Congar 5 , aportaron al Concilio en el cambio del paradigma de la relación Iglesia -Mundo. Hoy, el papa Francisco en la Evangelii Gaudium afirma que la “salida misionera es el paradigma de todaa obra de la Iglesia” tod Iglesia” (15) (15 ) y pide que seamos una “Igl “Igles esia ia en Sali Salida” da” (20 - 23). 1.2) 

 De las misiones misiones a la Misión.   Evangelizar  Evangeliz ar signi significa fica llevar llevar la Buena Nueva a todos los ambientes ambientes de la humanidad humanidad y

transformar desde dentro a la misma humanidad; para la Iglesia no se trata solamente de  predicar  pre dicar el Evangelio vangelio en zo zonas nas geográficas geográficas cada vez v ez más vastas, vastas, sino sino de transform ransformar ar con con la  fuerza del Evangeli Evangelioo los criterios criterios de juicio, los valores valores determin determinantes, antes, los puntos puntos de interés, las las líneas de pensam p ensamiento, iento, las fue f uentes ntes inspiradoras inspiradoras y los modelos de vida de d e la humanidad. humanidad. 6  

Si la Misión es la renovación de la humanidad a través del Evangelio, la Iglesia ejerce y realiza su misión evangelizadora de muchas maneras: en el testimonio y en el anuncio explícito, en la enseñanza y en la predicación, en la celebración de la liturgia y en la acción pastoral pastora l de convocar a la reconciliac reconciliación ión a la hhum umanidad anidad dispersa 7.  Según la concepción jurídica de la Iglesia como Sociedad perfecta, la misión se entendía a partir del concepto “misiones”: envíos puntuales a zonas geográficas donde la Iglesia no estaba aún implantada. Los misioneros eran aquellas personas que partían a  puebl  pu eblos os remotos remotos para llllev evar ar el prim primer an anuunci cioo del Evan Evanggeli elio. o.  En las décadas previas al Concilio Vaticano II, M. D. Chenu invita a pensar “la Iglesia en estado de Misión” 8   (con ocasión del acompañamiento al Movimiento de Sacerdotes Obreros) y a reconocer que Ella es siempre “enviada” a las fronteras no solo

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 Id ..,, 6 -7   El Conci Concilio lio iincorpora ncorpora la ref reflexi lexi ón de dell carácter his histórico tórico del proceso de la Revelació Revelación, n, el deseo de escrutar los signos de los tiempos como modo de interpret interpretar ar l os designi os de Dios , y eell perc percibir ibir la Igles Iglesia ia no como mera estructura jurídica jur ídica , sino como Sacrament Sacramento o que ref refleje leje el Rostro autént auténtic ico o de Cri sto.   6  EN 18-19   7  Cf. EN, IV. Medios de evangelización, 40ss   8  M.D. CHENU, “El itinerario iti nerario de un teólogo” teólogo”,, Ciencia Tomista 112 (1985), 233   5

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geográficas sino existenciales en donde aún el Evangelio no ha sido asumido 9. El aporte de Y. Congar 10   ayuda a superar una visión prioritariamente jurídica y societaria de la Iglesia, por otra que incluya su dimensión de Misterio: una estructura divino - humana, sacramental, en dependencia de la sacramentalidad de Jesucristo. Congar, al mencionar las propiedades prop iedades de la Iglesi Iglesia, a, dirá que “toda “toda ella ella es misi misione onera ra”. ”.  La Orden de Predicadores es consciente que la Misión adopta muchas modalidades y que ha anunciado el Evangelio de muchas maneras a lo largo de su historia. La realidad misma de la Familia Dominicana expresa que la única Predicación se realiza en diversidad: las monjas, los frailes, las hermanas y las laicas y laicos domini domi nico cos, s, cada cad a un unoo en su estilo estilo y vocación pero pero siempre siempre “ju “juntos ntos en la m misi isión" ón" 11 . 2. 

La Pre Pre dicación como M Mis isión ión de la Or Orden den de P Predicador redicadoree s   En el cambiante siglo XIII, los monjes cistercienses colaboraban con la

evangelización de la Iglesia del sur de Francia, en la Predicación a los herejes. Pero, no siendo ésta una siendo una tarea central en e n su vocación, vocación, y sumado s umado el desánimo de sánimo por por la poca cosecha de frutos, los abades legados pontificios terminaron regresando a sus monasterios. Quedará Qued ará solo Domingo ((lu luego ego de la muerte del obispo Diego) continuando la obra de la Predicación.   2.1) 

Una Orden que se llamase y fuese de Predicadores   El nombre de Predicadores nace en relación a esta “Predicación”, tarea eclesial

encomendada a Domingo y a algunos colaboradores que se le fueron asociando. En  junioo de 1215, el Obi  juni Ob ispo F ulco nombra a Domingo y a sus compañeros Predicadores Predicadores  para su diócesis d iócesis y en octubre oc tubre viaja con Domingo a Rom Romaa para pa ra pedir a Honorio IIII II qu q ue 12 los confirme como “una Orden que se llamase y fuese de Predicadores” . Habrá que

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El Capítulo general de Ávila (1986) señala 5 fronteras actuales de misión: La Justicia y la Paz en el

mundo, los marginados y excluidos, el diálogo interreligioso, las ideologías seculares, los nuevos movimientos religiosos.  10  “partir de una noción a mp mplia lia de la misión de l a Igl Igles esia ia en cua nto tal…después…def tal…después…definir inir la o las misi ones en base a s u objeto o fin. No son te terri rri torios torios , sino personas: los que no conoce conocen n a Cris to o no creen creen en él. …. No se desea introducir un concepto jurídico-estático, sino aplicar el concepto dinámico de la Iglesia que es el de su constitución.” Y VES CONGAR, citado en J. A. BARREDA GARCÍA O.P, Sección I – Misionología dominicana,, DOMUNI, dominicana DOMUNI, 39. La ci ta sigui ent entee es de YVES CONGAR, Cristianos desunidos, desunidos, 1937   11  Cf. DAMIAN BYRNE , “Juntos en la misión. Sobre la Familia Dominicana”, en “ALABAR-BENDECIRPREDICAR” Palabras de Gracia y Verdad (1962 -2001) 2001),, EEditori ditori al San Esteban, Sal amanca, 2004, 238 -249.  12  JORDÁN DE SAJONIA, en SANTO DOMINGO DE GUZMÁN, Escritos de sus contemporáneos  contemporáneos  (= Escritos), Ed. 4

 

 

esperar un poco para este nombramiento. El canon X del Concilio IV de Letrán (noviembre de 1215) que se titula “De la institución de predicadores”, pide “que los obispos asuman varones idóneos para cumplir provechosamente con el oficio de la santa  predicación”.  predi cación”. El nombre de Predicadores se irá tornando tornando cada vez más propio: eell papa Honorio III, el 21 de enero de 1217 escribe una carta y la dirige al “prior y hermanos Predicadores de San Román de Tolosa”, designando así, no solo una misión canónica sino la identidad del grupo. En febrero de 1218, el papa escribe otra carta recomendando “a los frailes de la Orden de Predicadores, porque estaba convencido de su útil mi minister nisterio io y género de vida vida grato al Señor”13 .  El nombre de Predicadores orientará siempre la identidad de la Orden en referencia a la misión que se le encomendó desde sus inicios: proponer la Palabra de Dios, gratis y fielmente, en busca del provecho de las almas, con el intento de seguir só sólo lo al mismo mismo Señor. Señor. El nombre nombre más que una activ actividad idad design designaa una identidad. identidad . La armonía y el equilibrio de elementos que sostienen y acompañan la Predicación dominicana la previenen de consistir en un ‘mero hacer’. Pero no es un dato menor para su iden identidad tidad habe haberr sido la primera prime ra Orden Orde n apostólica apostó lica en la la Iglesi Igles ia. Com Co mo toda ide idenntidad es dinámica, dinámica, bu b uscar la fuente que motivó a San Sa nto Domingo y lo hizo hizo ser “Iglesia “Ig lesia en salida” salida” nos va a actualizar de manera manera continua continua en esa iidentidad dentidad apostóli apo stólica. ca.   2.2) 

 La Compasión como Dinamismo Dinamismo Fontal de la la Misión. Jordán de Sajonia nos relat re lataa en e n sus Orígenes acerca acerca de Doming Do mingo: o: “Dios le había

otorgado la gracia singular de llorar por los pecadores, por los desdichados y por los afligidos. Gestaba sus calamidades en lo íntimo del sagrario de su compasión, y el amor que le quemaba por dentro salía bullendo al exterior en forma de lágrimas” 14 . Uno de los testigos en el proceso de canonización relata que Domingo en su oración clamaba: “Señor, ten misericordia de tu pueblo, ¿qué será de los pecadores?” 15 . Otro testigo afirma que Domingo “era compasivo con el prójimo y deseaba ardientemente su salvación; predicaba con mucha frecuencia y, por todos los medios que podía, animaba a los frailes y los enviaba a predicar, rogando y amonestando para que fueran solícitos Vito Tomás Tomás Gómez Ga García rcía , EDIBESA, Madri Madrid d 2011 2011,, 1148 -1149   Id., Id., Escritos, 1164   14  Id ., ., Escri tos, n. 11 y 12, 20 209 9 -210   15  LORENZO GALMES Y VITO T.  GÓMEZ, Santo Domingo de Guzmán, Fuentes para su conocimiento , B.A.C., Madrid, Madri d, 1987, 186   13

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de la salvación de las almas” almas”16   El objetivo de la Predicación de Domingo es la “salvación de las almas” y este deseo ardiente ardiente nace de su compasión compasió n co conn el prójimo. pró jimo. La compasión co mpasión q ue anida en su corazón es el motor que enciende su oración de intercesión y dinamiza su pasión de  predicación.  predi cación. Es notable cómo en él oraci orac ión y p redicac redicaciión se articulan y se alime alimenntan mutuame mu tuamente. nte. Hablar de Dios a los hombres hombres y a llos os hombres de Dios. Por su compasión con los pobres en Palencia hasta vender sus libros y su ajuar, su tiempo tiempo con co n el hospedero hereje hereje con el que se man ma ntie tienne en vigilia de conversación, su delicadeza en el trato con los hermanos que sufren tentaciones, Domingo es percibido  por los demás como alguien que no excluye excluye a nadie y q ue da cabi cabida da a todos en el abismo de su amor. Su amor no busca la retribución para sí mismo, sino que a todas las  personnas las persuade  perso persuade para que que eli elijan amar amar a Cristo Cristo y despreci despreciar ar lo mu munndano. dano.17   Domingo desarrolla una multiplicidad de actividades: la misión de la  predicación,  predi cación, salir a pedir ped ir como mendigo, mendigo, la celebrac celebraciión de la liturgia y los sacramentos, sacramentos, el trato con los hermanos en la vida comunitaria, la oración y contemplación personal, la atención de problemas o necesidades de la gente que se le acerca, las gestiones por la fundación de la Orden, la atención de las monjas y tantas otras… En él no se cumple aquello de que a mayor número de tareas hay menor rendimiento y eficacia: la abundancia de tareas va a la par de una enorme eficacia, porque todas sus actividades compasión .  brotann de un amor que le quemaba por dentro en el sagrario de su compasión.  brota Los testigos testigos destacan destacan la armoní armoníaa entre su vi vida da in inter terior ior y sus acciones: “Su constancia de ánimo, a no ser que se conmoviera por la compasión y la misericordia,… el sereno equilibrio del hombre interior que aparecía hacia afuera en la manifestación de su bondad y en la placidez de su rostro. En su hablar y actuar se mostraba siempre como un hombre evangélico”.18   El “sagrario de su compasión” 19  revela la fu fuee nte más íntima de sus s us actos. 16

 Id ., ., 159   Ibid ., .,  18  Id ., ., 117 -118. “Con semejante imagen –pues no se trata de otra cosa -  del doble régimen (diurnonocturno) se intenta mostrar una especial cualidad de presencia, una capacidad sorprendente de estar íntegramente donde y en lo que se está. Esta condición, que representa a Domingo pasando sin rupturas de la oración a la acción y viceversa, como se complacen en destacar varias veces los MO, marca sin duda un grado en su perfección e integración psicológica y espiritual, aplicable al conjunto de su vida y de sus múltiples act actividades.” ividades.” BERNARDO FUEYO SUAREZ OP , OP , Los Modos de Orar de Santo do domingo mingo,, Tema 4 El relato y la experiencia rel religi igi osa de Dom Domingo, ingo, DOMUN DOMUNI, I, 5   19  “santu “santuari ari o de su com compasi pasi ón” dice la traducción de LORENZO GALMES Y VITO T.  GÓMEZ, Santo Domingo…  17

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Constantito de Orvieto dice que Domingo tenía un “corazón siempre pendiente del cielo” 20 , de ese ese corazón unificado brotan brota n todas las acciones d iv iversas ersas en arm ar mo niosa cont inuo de un único único Amor .  unidad. unidad. Po Porr eso podemos llamar llamar a sus actividad actividades es oficio continuo La compasión, expresada en todas las dimensiones de su vida, nace en la contemplación de la Pasión del Señor y de la pasión por su pueblo. La compasión sólo es posible cuando la persona se descentra de su egoísmo y es capaz de tener empatía y  percibir  perci bir la situación del otro, sentir como si s iente la otra persona. persona. Por eso se entiende qu quee la escuela de la compasión de Domingo haya sido la contemplación del Crucificado. Salirr de sí Sali s í, por gracia de la oraci orac ión, al a l en encuent cuentro ro de Jesús en e n S u Pasi Pas ión lo va ejercitando en el dinamismo de la compasión. Contemplar la Pasión del Señor le va dando agudeza de mirada para reconocerla presente en la pasión de la humanidad. “Con una gran sensibilidad humana y evangélica asume y se adentra en el misterio del dolor. Y éste se convierte convi erte para él en fu fuente ente de espiritua espiritua lidad lida d cristiana cristiana y de vocación apostóli apo stólica. ca.””21   “¿Quién será capaz de imitar en todo la virtud de este hombre?” se cuestionaba el Beato Jordán, y nosotros: ¿Cómo podremos contemplar hoy esta doble y unida Pasión del Señor y de su pueblo y dejarnos desafiar por nuestra responsabilidad con la humanidad? Ante tantas dificultades que atraviesan nuestros contemporáneos: ¿de qué maneras man eras mantener disponible, como Domingo, Domingo, un “corazón hospital de des desdichas” dichas”?? 2.3) 

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 La Predicaci Predicación ón nace de la la Vida Vida Común, la Oración Oración y el Estudio  “…la vida común,… los consejos evangélicos,…la celebración de la

liturgia,…la litu rgia,…la oraci orac ión,… el estudio,… la observancia regular…sirven directam directa mente a la salvación de los hombres, puesto que conjuntamente preparan e impulsan la  predicaci  predi cación ón,, la inf informan y, a su vez, vez, son in informadas ormadas por el ellla.” 23   La predicación pre dicación domini dominica cana na lllleva eva el sello sello de d e ser entretejida entretejida  por varios elementos elementos::  La vida v ida común. común . El estilo de vida que asume Domingo para la Orden es el estilo de Vita Apostolica  Apostolica  que le fuera ya familiar por la Regla de San Agustín: “Lo primero  porquee os  porqu o s habéis abéis congregado congregado en e n comunidad es para qquue habitéis eenn la casa un unánimes ánimes y

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 Id ., ., 273   F.  MARTÍNEZ DIEZ, La Espiritualidad Dominicana. Dominicana . Tema 1. Espiritualida Espiritualidad d de Domingo y de la vida dominicana.. DOMUNI, 14   dominicana 22   ¡qué magnífica expresión de Pedro Ferrando! en LORENZO GALMES Y VITO T  GÓMEZ, Santo Domingo de Guzmán…, Guzmán …, 224  23  LCO 1, § IV 

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tengáis una sola alma y un solo corazón hacia Dios. Y no tengáis alguna cosa como  propia,  propi a, sino que todo todo sea de todos” (n 1). Es un estilo est ilo de de vida comunitaria donde todo se  ponee en común,  pon co mún, y la comunidad de bien bie nes es e s signo s igno de la comunión entre las personas  por la fe y la cari car idad. Domingo y su s us primeros compañeros eligieron e ligieron la regla regla de San Agustín Agu stín porque por que era la que más más permi p ermitía tía el ejercicio de la Pred Predicación icación..  El Libro de las Constituciones y Ordenaciones de la Orden de Predicadores, luego de su Constitución fundamental, se inaugura con el artículo de la Vida Común (Sección (Secci ón Prim Pr imera, era, Capí Cap ítulo 1, Artículo A rtículo 1). La vocación ocació n común a la fe y a la Pred Predicaci icación ón es también un llamado a la vida común. No solo como consecuencia natural de conveniencia entre quienes comparten un mismo objetivo, sino como don y tarea  particular:  parti cular: la comunidad, al compartir y cel ce lebrar la fe, testi testimoni moniaa y rea realiz lizaa la novedad de la Iglesia Iglesia que predica. La comunidad es un elemento esencial a la Predicación. El predicador no habla en nombre propio, sino que va enviado desde la Iglesia -Comunidad. Tener la experiencia de la vida común es indispensable para un predicador eclesial porque la misma Palabra que predica es una invitación a la reconciliación y a formar comunidad en la Iglesia 24 . El testimonio ev e vangélico de los d iscípulos iscípulos qu q ue fu fueron eron envi e nviados ados por Jesús de dos en dos a proclamar proclamar la Bu B uena Not Notiicia del de l Reino, y el ejem eje mplo de Domingo, Domingo, que el el 15 de agosto de 1217 envía a los frailes en grupos a distintas ciudades a estudiar y a fundar fundar conventos, ililustra ustra el carácter cará cter comunitar comunitario io de la Pre Predicación. dicación.  Todo en la vida de Domingo se establecía en función de la Predicación de Jesucristo. El pedía a sus frailes que le prometiesen comunidad y obediencia 25 , pues integrar la comunidad es asumir un estilo de vida apostólica y regular donde todos obedecemos a la Misión, al Proyecto de Predicación que orienta e informa toda la vida. En este sentido la comunidad es  Instrumento  Instrumento   de la Predicación. La Predicación del Evangelio brinda a la vida común su más profunda perspectiva. Y por ser expresión trinitaria y eclesial, la comunidad también es Palabra es  Palabra de  de predicación. Domingo muestra en su testimonio y en las constituciones la importancia de esta Comunidad -Palabra. “Nadie como él en el trato siempre honesto y amable con sus frailes y compañeros” 26 . La delicadeza de Domingo para la vida comunitaria es 24

 LCO 2, § II    LCO 17  26  LORENZO GALMES Y VITO T.  GÓMEZ, Santo Domingo de Guzmán…, 273   25

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resaltada por todos quienes le conocieron: su palabra y su silencio, su firmeza y su flexibilidad, su audacia y su prudencia, su sinceridad y su capacidad de arrepentimiento,…en fin, era un hombre exquisitamente dotado humana y teologalmente para el trato con los demás y para la vida común: “como amaba a todos, de todos era amado…apenas le veían, se introducía sin dificultad en su corazón.” 27 . Él nos enseña que la comunidad necesita de la comunicación. Una vinculación afectiva e interpersonal en clima de misericordia alentará a cada hermano o hermana a desarrollar y encauzar todo tod o su potencial evang e vangeliza elizador dor en el proyecto de d e la misión misión común. común.  La comunidad debe disponerse real y efectivamente para vivir su misión de Predicación en lo concreto de su situación particular. La ley de la encarnación también exige que la comunidad misma organice y dinamice su vida 28  para ser verdadera Casa de Predicación 29 . Por otro lado, cada hermano luego de su formación inicial es considerado un “hombre maduro”30 , por eso la vida comunitaria debe apoyarse sobre todoo en la tod la responsabilidad resp onsabilidad personal pers onal de quien quien in internali ternaliza za su necesidad e im impor portanc tancia. ia.  Vida Común y Pobreza. Pobreza. Domingo promueve la Vida Común en pobreza, para que que la Pred Prediicación, además de ser eclesial y apostólica apostólica por misión can ca nónica ónica,, también lo sea “verbo et exemplo”31 : esa es su mejor identificación eclesial. Si dejar de procurar una vida digna para los hermanos (“a cada uno según su necesidad” dice la Regla de San Agustín), la pobreza de la comunidad fue siempre uno de los desvelos de Domingo hasta en e n los últim últimoo s momento momentoss de su vi vida da 32 .  La relació relaciónn entre pobrez pobre za, predicaci pred icación ón y comunidad comunidad qquueda muy bien bie n atestiguada atestiguada en los primeros Frailes Predicadores en América A mérica Latina.  El desapego desapego y la pobreza de ssuu vida garantizaban su libertad de palabra al no buscar puestos ni beneficios, ayudaban a una vida más fraterna al compartir lo poco que se tenía y ahondaban la experiencia espirituaa l al vivi espiritu vivirr con mayor mayor radicalidad radicalidad la provi pro videncia dencia de Di Dios os 33 . 

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 Id., Id., 118-119  Cf. Del “Proposi tum tum”” de l a Orden al Pr Proye oyecto cto convent conventual ual de vi da a po postól stólica. ica. Car Carta ta del M .O. Fray Bruno Cadoré, OP a los l os Frai les de la Or Orden, den, 21 de s ept eptiembre iembre de 2015   29  “Casa de Pred Predicación icación es el título que reci ben las Comunida Comunidades des dominican dominicanas as desde eell inicio” ( F.  ARTÍNEZ IEZ     M D , Domingo de Guzmán. Evangelio viviente. viviente . Ed. CIDAL 30  LCO 1, § VI: … son a firmadas y promovida promovidass de modo si singular ngular la respons responsabil abilida ida d y la gr gracia acia persona personall de los frailes. frail es. Cad Cadaa uno, después de terminada la formación, formación, eess considerado ccomo omo hombre hombre maduro, puesto que enseña a otro hombre y as ume m múltipl últipl es funciones een n la Orden.  31  H.M.  VICAIRE, Historia de Santo Domingo, Domingo , EDIBESA, Madrid, 2003, 414.  32  “Deja  “De ja a los frai les en h here erencia ncia l a carida d, la hum humilil dad y la pobreza” pobreza”.. Id ., ., 275  33  Cf. M.  A.  MEDINA ESCUDERO O.P, Misionología y metodología de los dominicos en América, DOMUNI , , 4  28

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 Ni “comunidad-hotel” ni “comunidad -ombligo”: tenemos el desafío de vivir la comunidad dominicana, instrumento y palabra de Predicación. Atender al Proyecto comunitario, a la comunicación afectiva y profunda, al compartir los bienes y nuestras vidas en pobreza, nos irá entrenando en la dinámica de salir de nosotros mismos al encuentro de los otros –en la comunidad y en la misión- y al encuentro del Otro que es quien qui en hace posibl pos iblee todo todo encuentro y toda Predicac Predicación ión..  La Oración. Oración. La vida de oración personal y comunitaria es otro de los elementos vitales en San Sa nto Domingo. “Nadie como él tan dili d iligente gente en las vigilia vigiliass y oracion oracio nes” 34  es el testimonio unánime unánime de quiene q uieness le tratar tr ataroo n. S u deseo de oración oració n le mantenía despierto  por las noches noches y su compasión se volvía intercesión. intercesión. En los viajes viajes pedía ped ía a los hermanos que caminen pensando en el Señor, y recomendaba a todos que hablaran con Dios o de Dios. Celebraba con gran fervor la Eucaristía y asistiendo con los frailes al canto del Oficio Divino, los animaba e iba de un coro a otro estimulándolos en su devoción 35 . Su ejemplo de orante quedó plasmado en la obra  Los nueve modos de oración d e Santo  Domingo. Aquí se nos explica la manera de orar “muy frecuentada por el  Domingo.  bienaventurado  bienav enturado Domingo, según la cual el alma ejercita los miembros miembros del cuerpo cuerpo para dirigirse con más intensidad a Dios y, al ponerlo en movimiento, se eleva por encima de él”36 . Esta obra que, en la principales ediciones, se presenta ilustrada nos da una clase  práctica de antropolo antropología gía al mostrar que alma y cuerpo cuerpo oran juntos juntos : el alma ayuda al cuerpo a orar y el cuerpo ayuda al alma a orar, ora todo el ser humano pues alma y cuerpo se s e conciben un unidos idos formando un solo ser 37 . La oración y la ascesis ayudan a Domingo a “mantener el espíritu totalmente orientado a lo divino” 38 . Esa “total orientación de su vida” nos habla de la transversalidad de la dimensi transversalidad dimensióó n contemplativa contemplati va en la vi vida da dominica dominicana. na. En el texto del Séptimo modo de orar se incluye un relato ejemplar (exemplo ( exemplo), ),

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 LORENZO GALMES Y VITO T.GÓMEZ, Santo Domingo de Guzmán…, Guzmán …, 273   Id ., ., 168  36  “Ignoramos quién ha podido ser el autor del relato... El opúsculo procede de la zona de Lombardía, y acaba integrado a fi nales del siglo XIII en el Libell Libellu us de Te Teodoric odorico o de Apoldia Apoldia””. “La traducción está hecha ERNARDO sobre la edición edición crít crítica ica latina de Simon Tug Tugwe wellll (1985, 81 92)” B FUEYO SUAREZ OP , OP , Los Mod Modos os de Orar de Santo domingo, domingo , DOMUNI, Tem Temaa 2 2,, 10; Tema 1, 1  37  La experiencia experienci a de Domingo cconcuerda oncuerda con lo que TTomás omás cconfirm onfirmará ará con ssu u reflexión teológica: afir afir mar mar la bondad de lo l o corpóreo y que “los elem element entos os mate materi riales ales forman parte substanci substancial al de toda experiencia genuinamente humana”(  G. CELADA, Tomás de Aquino, maestro y testigo de la fe, 214. fe,  214. Material brindado por MARTÍN GELABERT BALLESTER OP, Tomás de Aqu Aquino, ino, TTeología eología y espiritualidad , DOMUNI)  38  LORENZO GALMES Y VITO T.GÓMEZ, Santo Domingo de Guzmán…, Guzmán …, 240  35

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que que ootras tras versiones del texto no presentan presenta n 39 . Después de corregir al a l sacrist sacr istán án con azotes, Domingo le dice: “Vete, hijo, ya has aprendido cómo mirar con atención a una mujer, sin juzgar por las apariencias. Reza también tú para que Dios te haga modesto en la mirada”. Domingo, desde su experiencia de contemplación, adopta la mirada de Dios sobre la historia y las personas, e invita a los demás a adoptar también esa mirada. La oración ayuda a mirar con “modestia”: mirada serena, atenta y que ve más allá de las apariencias. La oración nos ejercita en una mirada contemplativa que debe abarcar toda nuestra vida:  “los miembros de la familia dominicana han de ser contemplativos en el silencio del claustro y en el bullicio de la calle, en la oración y en la acción; en el estudio y la inv investig estigac ación ión personal pers onal y en el diálogo diálogo comunitar comunitario… io…”” 40   La Orden guarda la tradición de llamar al Silencio “padre de los predicadores” 41 . Es muy fecunda la relación que existe entre la Palabra de Dios y el silencio necesario  para que Ella sea escuchada, escuchada, recibida, meditada, meditada, o rada, inte internaliza rnalizadd a, estudiada, estudiada, com co mprendi prend id a, y predicada. predicad a. El silencio de la oración y el estu est ud io es el gozne, la la bisagr bisa graa que une y articula Palabra de Dios y palabra del predicador. Aun reconociendo la existencia de una sana y permanente tensión entre contemplación y acción, entre oración y predicación, es necesario afirmar que toda la vida dominicana, especialmente su dimensió dimensiónn contemplativa, contemplati va, existe existe en fu funci ncióó n de la Pre Predicación. dicación. “Contemplar y entregar a los demás lo contemplado” es el lema que desde To más de Aquino nos nos ayuda a integrar la contemplaci contemplac ió n e n y para la Predi Pred icación. cació n. Y  justame  just amennte, porque en e n el mundo de hoy las palabr pa labras as abun ab undan, dan, es más urgente que nunca  poder compartir con la humanidad humanidad el fruto de la contempl contemplació ación: n: un unaa nu nueva eva mir mirada ada acerca de la vida, la historia y el mundo, una mirada que nos permita descubrir el Sentido de la vida que brota de una experiencia cristiana de Dios. “El drama fundamental del ser humano no es la falta de placer, sino la falta de sentido. Sin placer se puede vivir, vivir, sin sentid se ntidoo sólo cabe el suici s uicidio dio””. 42  La vida de oración nos va volviendo, como Domingo, totalmente orientados a lo divino. El testimonio de esta experiencia motivará moti vará más que muchas palabras palabra s y anim animará a otros otro s al encuentro con el Señor.  39

  La versión más divulgada del Rossianus 3 no presenta la incorporación de dos relatos ejemplares (exempla) en los modos séptimo y noveno, que alargan la narración de forma sensible. Cf. BERNARDO FUEYO SUAREZ, Los modos de orar … …,, Tema 2. Origen, formas y fortuna literaria, DOMUNI, p. 2   40  FELICÍSIMO MARTÍNEZ DÍEZ, O.P. La espiritualidad de la vida dominicana. Tema 2. La espiritualidad dominica na hoy: aportes del domini cani smo smo.. DOMU DOMUNI, NI, 17.  41  Ibid. Ibid.,, 18   42  Victor  Vi ctor Frankl, citado en Ibid., Ibid.,   29   11

 

 

 El Estudio. Estudio. Estudio y contemplación están estrechamente relacionados. El estudio ayuda a la contemplación directamente, iluminando el entendimiento en la consideración de lo divino e indirectamente, removiendo los errores que alejan de la verdad divina 43 . El estudio es también un modo de oración. El Octavo de los Modos de orarr muestra ora muestra a Domin Domingo go en diálogo diálogo con el Señor revelado en los textos qque ue estudia:  se sentaba sentaba tranquilo tranquilo y abría abría ante a nte él é l un libro libro.. Hecha Hecha la señal señal protecto protectora ra ddee la cruz, comenzaba a leer. Su mente se encendía dulcemente, cual si oyese al Señor que le hablaba… Por los gestos de su cabeza, se diría que disputaba mentalmente con un compañero. Pues tan pronto se le veía impaciente como escuchando tranquilo; discutir  y debatir, debatir, reír reír y llorar llorar a llaa vez; fijar la la mirada mirada y bajarla, bajarla, y de nuevo hablar hablar muy muy quedo quedo y  golpearse  golp earse el pecho44 . 

El estudio cristiano difiere de la contemplación filosófica porque “en el corazón de la contemplación cristiana hay amor no a las ideas puras, sino a Dios y a nuestros hermanos” 45 . Para Santo Tomás el estudio de la sabiduría es el más perfecto, el más sublime, el más provechoso y el más alegre de los saberes humanos, porque la semejanza es causa de amor y el estudio de la sabiduría nos une especialmente a Dios  por ami amistad46 . “El estudio no es la finalidad de la Orden, pero es de suprema necesidad para el fin que que es la predicació predicaciónn y el trabajo por la salvación de las alma a lmas, s, porqu porq ue sin el estu est udio no podemos hacer ni una cosa ni otra” 47 . El estudio de la Palabra de Dios así como de otras materias que favorezcan una mejor comprensión de esa Palabra, o una mejor comprensión del mundo y las culturas contemporáneas en donde esa Palabra sigue resonando, reson ando, es un elemento elemento clave c lave para para la Predicación. Predicación. Domingo daba mucha mucha impo importa rtanncia al estudio de la Palabra y de las ciencias auxiliares. El mismo, tanto en Palencia como en Tolouse, se entregaba al estudio 48   y exhortaba a los frailes para que “estudiaran constantemente”49   “y “yaa que tenían que q ue predicar pred icar el e l Evangelio Evangelio””50 . 

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 Cf. TOMAS DE AQUINO, Suma de Teología II -II II,, q. 188, a .5   Cf. BERNARDO FUEYO SUÁREZ O.P., Los modos de orar de Santo Domingo, Domingo , Tema 1, DOMUNI, 19   45  M. D. C HENU,  Santo Tomás de Aquino y la Teología, Teología , Ed. Aguilar, Madrid, 1962. Capítulo III (Editado en DOMUNI, “Documento_CHENU_Sto_Tomas_y_la_Teología”, 10)  46  TOMÁS D E AQUINO, Suma contra los Gent Gentiles iles,, l ibro I, capítu capítulo lo 2. (en: MARTÍN GELABERT BALLESTER,  Textos exto s de Tomás de Aquin Aquino o ccomentados omentados,, DOMUNI, 5)  47  HUMBERTO  HUMBER TO DE ROMA ROMANIS, NIS, Come Comentario ntario a las Con Constituciones, stituciones, Oper Operaa II, p. 4 41. 1. Citado en DAMIAN BYRNE, “El minis te teri rio o de la predicac predicación”, ión”, en “ALABAR-BENDECIR-PREDICAR”…, 223.  48  LORENZO GALMES Y VITO T.GÓMEZ, Santo Domingo de Guzmán…, Guzmán …, 223  49  Id.,  Id.,  161   44

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Mediante el estudio buscamos la Verdad. Santo Tomás, en la Suma de Teología, hace suya una frase de San Ambrosio: “Toda verdad, la diga quien la diga, procede del Espíritu Santo” (I -II, 109,1). 109,1). Esto da al estu est udio dominicano dos cualidades: la bú b úsqueda de la Verdad no es únicamente intelectual sino también afectiva y orante, esto significa que se estudia por amor a la Verdad que es Dios mismo; y también manifiesta una mi mirada rada positi pos itiva va hacia la la cultura cultura hu hum mana y alienta alienta un unaa actitud de ampl amplitud itud intelectual. intelectua l. La tradición de la Orden siempre supo “tener abierta la mirada a los valores y exigencias de la cultura profana”51   . Promovió la amplitud en el estudio en cuanto al contenido: el estudio no se circunscribió a las ciencias sagradas pues ya Fray Alberto Magno consideraba necesario el estudio de otras ciencias además de la teología para  buscar  bu scar la verdad en la naturaleza. aturaleza. Y se estu est udió con amp amplitu litudd en cuanto al modo de  buscar  bu scar la verdad: se abordaba abordaba la sabiduría “profan profa na” de los fil filóso ósoffos desde el e l diálogo y tratando de descubrir el aspecto de verdad que había en todas sus posturas.   El estudio nos pone en camino de itinerancia mendicante. mendicante. No somos dueños de la Verdad, sino sus buscadores y sus “mendigos”. La verdad no se termina nunca de  poseer totalmente porque estamos esta mos siem sie mpre en camino hacia ella. Estudiar Estudiar es disponernos a la conversión, conversión, a dejarnos modificar por la Verdad que, por ser Dios mismo, “es sublime y no no abarcamos” (Salmo 139, 6). El estu est ud io tambi tamb ién nos abre a la esperanza.. En toda ciencia, una verdad mayor puede seguir escondida y no haber sido esperanza aún descubierta del todo. Cuando algo puede parecer ya cerrado a toda novedad, la verdad puede alumbrar nuevos mundos con nuevo resplandor 52 . Y como la verdad no es monopolio de nadie 53 , el estudio nos invita a la comunión con los demás, demás, para buscar  jun  juntos la Verdad Verdad median ediante te la mutua tua escuch escucha. a.  El equilibrio entre tantos elementos de la predicación que fuimos nombrando (vida común, oración, estudio) no parece sencillo de vivir... Quiero proponer una comparación que puede ayudar a comprender el dinamismo de este “equilibrio”: el ejemplo de una red. Cuando un hilo se une o se ata con otro, y con otro, y otro, la debilidad de cada hilo ajustada y unida al otro se va anudando en fortaleza. Creo que este símil de la red tejida o trenzada nos puede ayudar a vislumbrar cómo la búsqueda 50

 Id.,  Id.,  314    MARTÍN GELABERT BALLESTER OP, Tema 2. Tomás de A Aquino quino:: teología y espiritualidad , DOMUNI , 13   52  Cf. TIMOTHY R ADLIFFE, “El manantial de la esperanza. El estudio y el anuncio de la Buena Nueva”, en “ ALABAR -BENDECIR-PREDICAR”….  53  San Ag Agustín: ustín: La verdad no es mía ni tuya, par paraa que pue pueda da ser tuya y mía ((Enar. Enar. In ps . 103, 2, 11).   51

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de vivir el equilibrio inestable de elementos aparentemente contrarios (contemplación y  predicación;  predi cación; libertad perso perso nal y vida común, itiner it inerancia ancia y observancia re regul gular,…) ar,…) es, en realidad, la garantía de la solidez y fortaleza de la Predicación. El cuidado de cada elemento ayuda al sostenimiento de los otros… Y sin embargo, cuando la tensión entre los elem e lementos entos se ex e xceda, y en e n razón del fin de la Orden, O rden, el Libro de las Constit Constituucion cio nes – desde los orígenes - confiere al superior la facultad de dispensar “aquello que pareciere imped im pedir ir el estudio, la predicación pred icación o el provecho pro vecho de las alm almas” as” (LCO 1 § VI)   2.4) 

 La Predicaci Predicación ón de la Ver Verdad: dad: Jesucristo  Después de considerar la fuente que dinamiza la predicación y el modo en el que

ésta se realiza en la tradición dominicana, es necesario abordar el contenido y el objeto de la la P Predicación redicación:: ¿Qué ¿Q ué es lo lo que se anun anuncia? cia? ¿Qué ¿Q ué o a quién se predica? pred ica? Veritas. La Orden ostenta el lema de la Verdad: “Veritas”. El año 1333, el Veritas. emperador Luis de Baviera, habría afirmado que: "La Orden de Predicadores es la Orden de la verdad, ya que la defiende con tanta decisión como libertad". Gerardo de Frachet en su “Vida de los hermanos” pone en boca de Jesús esta frase a su Madre: “Les daréé mis dar mis Predicado Pre dicadores. res. El Ellos los les ilu ilumi minará naránn para que no vi vivan van en el erro error” r”54 . Pero… Per o… ¿qué significa significa hoy la la Predicación de la verdad verdad??  El mismo nombre de Post -modernidad con el que designamos el tiempo actual, expresa que algunos elementos modernos quedaron superados. Uno de ellos es la plena confianza en la razón intelectiva. La humanidad ha sufrido con guerras y masacres la voluntad de imponer una verdad a los demás. La cultura actual ve la tolerancia como un valor y nadie puede imponer a otros “su verdad”, aunque esto nos deje en un cierto escepticismo intelectual y en la sospecha de que no existe una verdad única. Otro de los elementos postmodernos vigentes es el lugar importante que ocupan las emociones y la fidelidad fidelidad a lo que “uno “uno sien s iente” te” como verdadero: verdad ero: ser auténtico auténtico es ““hacer hacer lo que siento”. siento”. Una concepción intelectualista de la Verdad nos dejaría lejos de la comprensión de nuestros contemporáneos y nos haría entender la predicación más como defensa que como proposición de la Verdad: nos convertiríamos en “apologetas de la fe” más que en  predicadores...  predi cadores... ¿Qu ¿Q ué es predi pred icar sino propon propo ner el Evangelio Evangelio como la manera más verdadera verdad era de vivi vivirr y a la la fe fe com co mo la la respuesta re spuesta más propia prop ia y auténtica auténticamente mente hu human mana? a?

54

 Cf  Cf.. https://www.domini https://www.domini cos .org/qui .org/quienes enes -somos/historia -de-los -dominicos/veritas/   14

 

 

 Para la tradición tradición judeo judeo-cris cristiana tiana Dios es la Verdad. Verdad. La verdad bíblica tiene tiene un carácter relacional: alude a la relación de Dios con su pueblo. Tiene un carácter salvífico:  garantizaa la acción  garantiz acción salvífica salvífica y liber liberadora adora de Dios. Dios. Está unida a la fideli f idelida dadd pperson ersonal, al, de Dios y de los hombres, a la alianza…Conocer la verdad es conocer a Dios y a su  plan salvífico salv ífico.. Hacer la verdad es mantenerse mantenerse den dentr troo del plan salvífico 55 . 

Para la Biblia la verdad no es primeramente algo que se conoce mentalmente: la verdad ante todo se experim experime nta, se obra y se vi vive (Cf. Jn 3, 21). La experiencia cristiana confiesa que Jesús es el Verdad de Dios que se nos ha revelado gratuitamente (Cf. Jn 1, 17 -18; 14, 6) para que tengamos “Vida en abundancia” (Jn 10,10). Predicar la Verdad es –en cristiano -  predicar y anunciar a una Persona, Jesucristo, es predicar la Buena Noticia (el Evangelio) de su Vida, Muerte y Resurrección Resurrecc ión (Kerygm (Kerygma), a), y proponer pro poner la la fe como adhesión a ese Misterio de salv salvación. ación.  “El propósito de la predicación no es la ilustración sino la conversión de vida” 56 . La conversión es obra del Espíritu Santo, sin embargo la predicación debe abrir la  persona a la verdad, no solam  persona so lamente ente e n el orden o rden de las ideas, movie ovienndo “l “los os afect a fectos os para que se amen las cosas significadas en las palabras” (Santo Tomás). El Espíritu Santo obraa en el predicado obr pre dicadorr y en el oyente haciendo experim experimenta entarr esta sabiduría sabiduría de vi vida. da.   Para eso son necesarios el estudio y la contemplación: para que la predicación  pueda  pu eda profundizar profundizar en la verdad del Evangelio Evangelio hasta asta abrevar en esta sab sabiiduría que es vital, vital, y pueda ser s er propuesta pro puesta a los demás de forma forma comprensible y convincente. convincente.   La Verdad del Evangelio necesita ser expuesta “verbo et exemplo”: por la  palabra  palab ra y el e l ejemp ejempllo. La L a palabra del del predi p redicador cador no puede ser totalmen tota lmente te contradicha por su testimonio. Hacen falta más que razonamientos para mover el corazón: es indispensable indispensable el ttestimonio. estimonio. La sen se nsibili sib ilidad dad contemporánea contemporánea desconfía d esconfía de elucubra elucubracio cionnes teóricas que no no se corroboren corrobore n e n una prácti práct ica de vida. El ser humano h umano huye de los meros discursos y busca testigos. En este sentido la tradición de la Orden ha recomendado siempre el uso de “exempla”: ejemplos, metáforas y parábolas que ilustran y conectan la verdad con el oyente desde otras significaciones más afectivas. “El corazón tiene razones que la razón desconoce” (Blas Pascal). La Buena Noticia de Jesucristo no solo es Anuncio de Verdad  para  para   la persona sino también  sobre  sobre   la persona misma porque “…el misterio del hombre sólo se 55 56

 FELICÍSIMO MARTÍNEZ DIEZ OP, Teología de la Comunicación en clave Dominicana (I). DOMUNI, (I).  DOMUNI, 29.   Id., Id., (II), 8.  15

 

 

esclarece en el misterio del Verbo encarnado… Cristo, el nuevo Adán, en la misma revelación del misterio del Padre y de su amor, manifiesta plenamente el hombre al  propioo hombre  propi ombre y llee descubre descubre la subl subliimidad midad de su vocaci vocación ón””57   La Verdad que se predica de Jesucristo también implica una manera de entender la vida humana, la realidad del mundo y de la historia. Esta implicancia global y total del Evangelio ya está presente en el anuncio que Jesús hace del Reino de Dios 58 . El Reino es una categoría que expresa la relación de Dios con la humanidad y la humanidad entre sí, según los criterios del Evangelio. Un “reino de verdad y de vida, reino de santidad y de gracia, reino de justicia, de amor y de paz” (Prefacio de la Solemnidad de Jesucristo, Rey del Universo), un Reino ya presente en la historia pero todavía no en plenitud. La Predicación de la Verdad invita a una conversión personal, cultural y social,  por eso la propuesta del Evangelio Evangelio del Reino desafía a realizar camb cambiios en todos los niveles. Estas transformaciones son necesariamente históricas, procesuales, provisorias, cambiantes y nunca cambiantes nunca acabadas. acabadas. No es de eexxtra traññar que, así as í como a Jesú Jes ús y a los apóstoles, a los predicadores predicado res hoy les esperen espe ren también también siempre siempre des desafí afíos os nu nuevos. evos.   3. 

Desafíos De safíos de la Predi Predicación cación  Los desafíos de la predicación son muchísimos. Continuamos predicando porque la

Gracia y la Misericordia de Dios auxilian y sostienen nuestra predicación. Entre tantos desafíos que se podrían abordar, quiero analizar tres: las relaciones entre Predicación y Justicia, entre Predicación y secularización, y el desafío de asumir la Predicación en el Arte y los medios informáticos. La predicación como hecho de comunicación está constituida por tres elementos o instancias: El Evangelio como Acontecimiento -Palabra que se comunica, el Oyente y el Predicador. Los desafíos comprometen a los tres elementos en su conjunto. Sin embargo me propongo vincular cada desafío con alguno de ellos ellos para profundiza profundizarr su anális anális is y ap aporta ortarr propuestas pro puestas más específ esp ecíficas icas.. 

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 Conci li o Vatica Vatica no II, Gaudium eett Spe Spes, s, 22    “El mensaje mensa je de Je Jesús sús tiene su centro een n la proc procla la mac mación ión del Reino que en Él mis mismo mo se hace presente y viene. Este Reino, sin s er una realidad desligab desligable le de llaa I glesia, tra trasciende sciende sus l ímites ímites visibles… De ahí que la Iglesia haya recibido la misión de anunciar e instaurar el Reino en todos los pueblos” III Conferencia Ge General neral del EEpis pis copado Latinoame Latinoameri ricano, cano, Documento de Puebla, Puebla, 226  226 -227   58

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3.1) 

 El compromiso compromiso por la Justicia como desafío del Predicador  Predicador   En la identidad identidad de la Predicación dominica dominicana na ha quedad quedadoo marca marcada da com co mo huel huella la

indeleble la experiencia de los frailes en la Isla La Española, cuando en 1511 Antón Montesino OP, en nombre de la Comunidad, denuncia en sus sermones los abusos de los encomenderos que destruían la población indígena. Fray Bartolomé de las Casas en su su Historia  Historia de las Indias 59   va exponiendo los pasos que la comunidad transitó hasta llegar a esa determinación: la percepción de la realidad, luego un discernimiento y finalmente la respuesta de acción comunitaria que llevaron a cabo. Es el llamado método hermenéutico lascasiano: lascasiano: “La realidad experimentada es considerada a la luz de la Escritura y de la Teología, realizando una nueva “consideración” de ella. Escritura y realidad se ililumina uminann mutuam mutuamee nte” nte ”60 .  La respuesta profética que denuncia las injusticias nace de contemplar la realidad, y de d iscernirla iscernir la co comunitariame munitariamennte, iluminá iluminándola ndola y contrastá co ntrastánndo dolla con la Verdad evangélica 61 .. La contemplación despierta la compasión que nos hace clamar como Domingo: “¿qué será de los pobres?”, porque nos urge su liberación integral. Si este gesto llevado a cabo por la comunidad de frailes de La Española, es una marca de ide ntidad de la ev e vangelización dominicana, nuestra Predicación Predicació n no no puede desentenderse desentenderse del compromiso compromiso con la la justici justiciaa y la la liberació liberaciónn62 .  El predicador no debe acotar su compromiso con la justicia al ámbito de su vida  personal:  person al: su predicac predicaciión es un llamado llamado a la conversión social, a un unaa modificación del entorno que permita “pasar de condiciones de vida menos humanas a condiciones más humanas” 63 . El compromiso no debe ser solo individual sino comunitario e institucional: la comunidad misma se vuelve profecía de lo que anuncia, esbozo y ensayo de una una manera manera evangélica evangélicame mente nte revoluc revoluc ionaria ionar ia de vi vivi vir.r. El compromiso por la Justicia también invita a una articulación entre Predicación y Estudio. Esto se experimentó en la Escuela de Salamanca del siglo XVI,

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 Citado en ALFONSO ESPONERA CERDÁN,  O.P., La Teología de Bartolomé de las Casas . Tema 2. Punto de  partida herm hermenéutico enéutico de Bartolomé las Casas Casas,, DOMUNI, 1  60  ALFONSO ESPONERA CERDÁN, O.P., Id. Id.,, 5   61  “  “Junt Juntar ar el derecho con el hecho… y tratar entre si la feal dad y enormidad de tan nunca oída injusticia” injusticia” Bartolomé De Las Casas, Casa s, Historia de la s Indi as, 1757 -1760  62   “La prioridad de la justicia no es una moda pasajera…la experiencia contemplativa de Dios choca contra la situación en que viven los hombres… situación de injusticia.” MIGUEL ÁNGEL MEDINA ESCUDERO, O.P. Sección II: Misionología…, Misionología…, DOMUNI, 6   63 

Pabl o VI, VI, Populorum Progressio,  Progressio,  20.  17

 

 

donde don de los teólog teólo gos (princi (pr incipalmente palmente Fran Fra ncisco cisco de Vitoria) Vitoria) trataban las problem prob lemát átiicas qu q ue a los frailes frailes se presentaban en la “Mi “M isión sió n de las In I ndias” como co mo a Bartol Bartolomé omé de las Casas,  para darles darles ssuusten ste nto teóri teór ico según se gún razones razones éti éticas cas y teológicas. teológicas. Es un ej ejemplo emplo notable de articulación entre misión, comunidad, estudio y contemplación. El testimonio profético sigue siendo indispensable. Hoy la injusticia es una realidad muy presente que debemos contemplar 64 . Frente a la catástrofe catástro fe ecológi ecoló gica ca q ue estamos protagonizando se nos invita a “integrar la justicia…para escuchar tanto el clamor de la tierra como el clamor de los pobres” 65 . El compromiso por la Justicia y la Paz es una prioridad sustantiva para la Misión dominicana y es condición de credibilidad para los predicadores del Evangelio 66 . ¿Qué significa hoy estudiar en las “pieles vivas” de los que sufren, y no solo en las “pieles muertas” de los libros? ¿Cómo articular la audacia en la reflexión con la audacia en la misión para hacer más efectiva nuestra Compasión? ¿A qué cambios nos invita hoy la  práctiica hermen  práct ermenéu éutica tica de leer leer la Palabra Palabra de Di Dios en la la Bi Bibl bliia y en la la real realiidad del pobre? pobre?  3.2) 

 La secularizaci secularización ón como desafío en el Oyente y la Mística dominicana El Concilio Vaticano II asume una comprensión positiva de la legítima

autonomía de las realidades terrenas, donde “las cosas creadas y la sociedad misma gozan de propias leyes y valores”; pero también advierte la falsedad de la postura que considera que “la realidad creada es independiente de Dios y que los hombres pueden usarla sin sin referencia referencia al Creado Creador” r”67 .  Es un proceso de secularización que reviste ambigüedad. La justa y necesaria autonomía autono mía puede derivar en una una tendenci te ndenciaa a “ne “ne ga r toda trascendencia, trasce ndencia, (prod (produciendo) uciendo) una creciente deformación ética, un debilitamiento del sentido del pecado y un  progresi  prog resivvo au aum men ento to del rel relati ativism vismoo  que ocasionan oca sionan una una desorientaci deso rientacióó n generalizada” generalizada ”68 .  El contexto de secularismo se vuelve desafío para el Oyente de la Predicación  porquee tie  porqu tienne obstáculos y resistencias resistencias que reconocer reconocer y sort sortear, ear, aunque tambié tambiénn en el mismo contexto, se pueden reconocer pistas de acceso a la fe. El secularismo presenta 64

 La V Conferencia Conferencia del Episcopado Lati Latino noamericano americano en Aparecida, 63, nos i nv nvita ita a conte contemplar mplar los rostro rostross de qui ene eness sufren… s ufren… que hoy no son sol amen amente te ““explotados” explotados” s ino “sobrantes” y “desechables” desechables”..   65  FRANCISCO, Laudato Si , 49  66  FELICÍSIMO MARTÍNEZ DIEZ OP, Teología de la Comunicación en clave Dominicana (II). (II) . DOMUNI, 33   67  Gaudium et Spes 36   68  FRANCISCO, Evangelii Gaudium, Gaudium, 64. Ver también: MARTÍNEZ DIEZ FELICÍSIMO  OP, La espiritualidad dominicana. Tema 3. (3.2). Apuntes DOMUNI, 66   18

 

 

algun alg unas as variantes variantes que necesitan identificarse identifica rse para para ser trata tratadas das de forma forma diferente: El  Ra  Racc ionalismo ionalismo científico de formación moderna sigue contraponiendo Fe y Razón. Según esta postura, la fe es un recurso infantil y forma parte del estadio de comprensión mítica, que la ciencia infaliblemente logrará superar 69 . La religión es vista  por muchos como la “principal en e nemiga del de l progreso progreso moral del mundo” mundo” 70 , y hoy en día asistimos a un debate muy interesante (sin abordar aún en profundidad) en el que se critica criti ca a la religi religióó n y sus creenci cree ncias as en nombre nombre de la defensa de los los De Derechos rechos Hum Humanos anos 71 .  El deseo y la búsqueda de la verdad son valores muy presentes en estas  personas.  person as. El oyente oyente de la Predicación Predicación debe poder descubrir que creer creer es razonable, razonable, y que “la verdad racional no contradice las verdades de la fe”. Quienes “piensan que es verdadero todo lo que ellos ven y falso lo que no ven”  72  pueden a nimarse a experimenntar q ue hay experime hay sentido y verdad verdad más allá de la la razón científica cie ntífica o instr instrum umen ental tal y que que e xiste xistenn otras fu fuentes entes de con co nocimien ocimie nto verdadero verdadero como lo simbólico y lo emocional. emocional. Sin excluir la razón, razón, la fe es siempre una in invi vita tacc ión ir con con ella  ella más allá de  de ella mi misma. sma. La Predicación debe ayudar a las personas a acercarse a la Mística: tener experiencia del encuentro con Dios. La experiencia nos abre horizontes de verdad a los que los razonamientos no llegan. Por otro lado, y sin menoscabar el valor de la razón en el acceso a la fe, la mística reconoce que “las realidades sobrenaturales son esencialmente simples y su simplicidad las hace inaccesibles e inexpresables en términos de razón... La experiencia espiritual no compete solamente al entendimiento, sinoo que es también sin también un unaa aventura del amor” amor”73 . La reflexión cultural hoy se abre a otros modos de inteligencia (emocional, artística,...) ¿Podríamos dar cuenta de la inteligencia mística para que nuestros 69

 Según DIEGO GOLOMBEK, Las Neuronas de Dios, Dios, Siglo XXI, Buenos Aires, 2015: “Algunos científicos piensan que ya ha llegado el momento de arrasar con todo; por lo pronto, hace muy poquito se realizó en el Ins tituto Sal k de Californ California ia el prime primerr s eminario eminario s ob obre re el tem tema: a: "Más allá de l as cree creenci ncias: as: ciencia ciencia , religi ón y superv su pervii venc vencii a", donde… entre todos s e dedicaron a d disc iscut utir ir tres cuestiones fundamentalísi fundame ntalísima mas: s: ¿Debe ¿Debería ría la cienc ciencia ia eliminar a la religión? En tal caso, ¿qué de debiera biera reemplazarla? reemplazarla? ¿Podríamos ser moralment moralmentee buenos s in el concepto de Dios ?  70  Bertrand Russ ell, “Por qué no soy cri stia no” no”.. C Confe onferencia rencia públ ica de dell 6 de marzo de 1927 en Londres. Londres.   71  Diferentes  Diferent es concepciones de Verdad  y   y de Tolerancia Tolerancia en  en los debates entre los Líderes de las Iglesias y al gunos sectore sectoress del Fe Feminis minis mo y de a ctivi ctivistas stas por eell Dere Derecho cho a llaa Diversi dad Sexual.   72  TOMÁS DE A QUINO, Suma contra los Gentiles, Gentiles , libro I, a. 9; a.5. Ya Tomás de Aquino protagoniza una situación que está en los orígenes de nuestro problema. Su solución a la “confrontación entre la razón y la fe, consiste en conciliar la secularidad del mundo con las exigencias radicales del Evangelio, sustrayéndose sustrayé ndose as í a la tendencia tendencia i nn nnatur atural al de desprecia despreciarr el mundo y sus val ores, pero sin eludir las exigencias supremas e infl exibles de dell orden sobrenatural” P ABLO VI, Lumen Eclessiae, Eclessiae, 8. 73  MIGUEL ÁNGEL MARTÍNEZ JUAN OP, Místicos Renanos. Renanos. Tema VII. El maestro Enrique Susón, Susón , DOMUNI 4; 9.  19

 

 

contemporáneos hallen verdad en la fe no solamente desde los conceptos sino también haciendo hacien do la experiencia? ¿Qué ¿Q ué modificacion odificac iones es nos im implicar plicaría ía pastoralmente?. pastoralmente?.....  consumista de Otra corriente del secularismo presente es el Pragmatismo el  Pragmatismo   consumista  de placer y confort. Aquí no interesan razones sino simplemente vivir el momento: es la versión más inmediata del Carpe diem, quam minimum credula credula poster poste ro. Aún quienes eligen esta manera de vivir reconocen la provisoriedad e insuficiencias de sus logros. Lo conseguido, con seguido, lo comprado, eell placer placer obteni obte nido, do, nunca nunca es suficiente. La vida se vu vuelve elve una carrera carr era sin sin final final ni objetivos a largo plazo. plazo. En estas personas suele haber una sed profunda de infinito. Su inquietud solo descansará en Dios porque “ busca  buscann fuera (de (d e Dios) D ios) lo q ue no p ueden hallar puro y sin s in mezclaa sino cuando vuelven a Él”74 . Esta sed de pl mezcl pleni enitt ud y de senti sentido do es deseo de Amor. Amor. Los místicos nos muestran que solo en el encuentro con el Amor mayor experimentan la libertad del desasimiento de las cosas y por eso la plenitud aún en la  paradojaa d el vacío. No  paradoj N o se trata de d e dejar de desear d esear,, sino s ino de desear más hondo... ¿Có ¿Cóm mo ayudar nuestros ayudar nuestros contemporá contemporánneos a escapar del de l frenes frenesíí del conf co nfort ort para pa ra qu q ue pu p uedan hacer la experiencia experiencia de ese Amor Amor que q ue transforma transforma y hace libre? libre? Otra corriente de secularización se da en la  Espiritualidad secular y de la autorrealización.. Esta espiritualidad autorrealización espir itualidad ad adhi hiee re a la la opc opción ión de vivir con co n senti sent ido y a descubrir este sentido inmanente en la vida misma. Mantiene con la espiritualidad cristiana algunos puntos en común. Creemos que por la Encarnación (historicidad de la Palabra), la historia se hace transparente de Dios, pues los acontecimientos históricos son el material en el cual la Palabra de Dios se expresa, se revela y salva y son lugares de la la pprese resenci nciaa del Evangelio Evangelio en el tiempo tiempo 75 . En la inm inmane anencia ncia hay Revelaci Revelacióó n.  Pero la espiritualidad secular se concibe como una espiritualidad sin Dios, y si no hay trascendencia, la pura inmanencia nos puede terminar ahogando, porque…¿no termina todo siendo "más de lo mismo"? A veces hemos comprendido a Dios como un titiritero que desde afuera manejaba los hilos del mundo a su antojo, coartando nuestra libertad libe rtad y autonomía. autonomía. Entonces el e l ser humano humano comenzó a bu b uscar su auto -realiza realización ción por su cuenta, sin otros y sin el Otro. Pero la verdadera auto -realización es la salvación, y

74

 SAN AGUSTÍN, Confesiones Confesiones II,  II, VI, VI, 14     “Materia, progreso técnico, sociedad e historia, son los lugares de la presencia del evangelio en el tiempo, de acuerdo con la economía de la encarnación” C HENU  M.D., La fe en la inteligencia, inteligencia , Estela, Barcelona,, 1966, 13   Barcelona 75

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ésta se da a través de la la apertura al Otro.   La mística cristiana descubre la paradoja de que Dios, siendo trascendente, es más íntimo íntimo que q ue nuestra propia intimidad y q ue, a lentan enta ndo siempre nuestros deseos de seos más más  profundos,  profun dos, a la vez se escapa de nu nuestras estras pretens pretensiiones de comprensión y manipulación. manipulación.  Ningunaa realidad p uede ser identificada  Ningun identificada totalmente con Dios aun a unque que toda reali rea lidad dad nos habla ddee Él. Él. La historia historia es Su sacramento: lo revela y lo lo ocul o culta. ta. ¿Cómo dar testimonio de Dios como el Otro que posibilita nuestra realización y es cómplice para nuestro bien y no un enemigo? ¿Cómo persuadir a todos a que se abran a su trascendencia trasc endencia más próxima próxima que es el otro concreto e histórico? histórico?  3.3) 

 Predicaci  Pr edicación ón y comunicación. comunicación. Arte y Medios informáticos. Este desafío involucra al mensaje mismo: “lo que” se comunica y el hecho

encuentro de mi mismo smo de la comunicac comunicación ión (el encuentro  de hecho). La palabra se ha vuelto ambigua y su uso en exceso ha devaluado su valor. La  predicación es comunicación,  predicación comunicación, y la comunicació comunicació n puede darse a trav través és de otras mediacio medi aciones. nes. Hay “palabra “palabras” s” en otros otro s formatos formatos en la cultura cultura actual.  El Arte, es un modo del lenguaje humano, especialmente apto en lo que se refiere a su dimensión espiritual 76 . La tradición de la Orden es rica en utilizar la mediación del Arte en la Predicación. Santo Tomás expuso la verdad teológica, no solo  por la mediación mediación del concepto sin s inoo ta tam mbién bié n en su poesía orante (Pange Lingua, Lingua, Adorote Devote, Lauda Sion Salvatorem,…); Fra Angélico, con su enorme obra pictórica es considerado un notable “predicador del pincel” y los pintores Fray Bartolomé della Porta, Fray Pedro Bedón, Fran Juan Bautista Maíno, han puesto sus dotes artísticas al servicio de la Predi servicio Pred icación. Todos Todos ellos e llos,, ate atenntos a la sensibilidad de su s us contemporáneos, contemporáneos, mediante sus obras movieron a la oración, a la internalización de valores evangélicos, reflejaron una mirada crítica de la sociedad en la que vivían y expusieron los Misterios de la la fe en la perspect pers pectiv ivaa de la la teología teología domini dominica cana. na. Actualmente, el pintor Kim En Joong, O.P, presenta a Cristo como la “Luz que viene a este mundo” en su arte abstracto y busca sin ninguna figuración demasiado narrativa la expresión del Misterio 77 . De este modo puede ayudar a nuestros contemporáneos a percibir la riqueza de la Luz del Evangelio, y abrirse a la 76 77

 I VÁN CALVO,  O.P.,  FÉLIX HERNÁNDEZ MARIANO,  O.P. O.P. Artistas  Artistas Dominicos, Introducción, DOMUNI, 2.    Cf. https://www.olumen.org/evento/kim- en- joo  joong_trazos ng_trazos -de-luz/  21

 

 

Trascendencia rasce ndencia sin la la mediació mediaciónn de dell lengu lenguaj ajee conceptual concep tual y explícito explícito de fe78 .  Además de la pintura, la poesía y la música han sido grandes herramientas en la histo historia ria de la misión misión do domi minica nicana na79 . El arte es predicación que nos permite sintonizar con los hombres y mujeres de hoy a través de las vías de comprensión que exceden lo conceptual y tienen que ver con lo emocional y lo simbólico 80 . La psicología profundiza cada vez más las posibilidades de comunicación emocional que la música despierta en las personas 81   y la semiótica aborda el campo de lo visual para establecer parámetros antropológicos y sociales de comprensió comprensiónn y co comu muni nicac cac ión humana humana en ese in inmenso menso campo (Semi (Semiótica ótica de la im imagen). agen).   Por otro lado, los medios informáticos están modificando la comunicación humana. Está apareciendo un “ser humano más icónico que lógico, más sensitivo que racional, más intuitivo que discursivo, más instantáneo que procesual, más informatizado informatiza do qu q ue comunicado…” comunicado…” 82 . Tenemos el desafío de predicar el Evangelio a este destinatario y en este contexto, recordando que siempre “el éxito de la predicación supone encontrar la conexión entre el mensaje evangélico y la experiencia humana, entre la salvación salvación en Cristo Cristo y las necesidades más hondas del ser human humanoo ”83 . La Orden, a lo largo de la historia, intentó entrar en comunión con las diversas culturas aprendiendo su lengua. Es necesario hoy también formarnos en este lenguaje, sus signos y códigos, y dialogar con los valores implícitos (interconexión,  presencialida  presen cialidad, d, impacto impacto emoci emoc ional, democratización,…) y evangelizar evangelizar sus ant antiv ivalores alores (superficialidad, voyeurismo, individualismo, subjetivismo,…).  La posibilidad de la presencia virtual es mucho más expansiva que la física. El “pentecostés” dominicano del 15 de agosto de 1217 se puede reeditar de formas insospechadas a través de la predicación digital porque el envío a las naciones, tiene en 78

 FÉLIX HERNÁNDEZ MARIANO, O.P., Artist O.P.,  Artistas as Dominicos, Te Tema ma 5 5.. Fray K Kim im En Joong, O.P O.P., ., DOMUNI, DOMUNI,   23. 79  La Musicalización y versificación del Kerygma en la primera evangelización americana para que los nativos expresaran expresaran s u nueva fe mediante la mús música. ica. Cf Cf.. MIGUEL ÁNGEL MEDINA ESCUDERO, O.P., Misionología dominicana. Sección II: Misionología y metodología de los dominicos en América, América , DOMUNI, 65.68 -69   80  Cf. FRANCISCO en EG 167: Es deseable que cada Iglesia particular aliente el uso de las artes en su tarea evangeli zadora … en la vaste evangeli vastedad dad de sus múltiples expresiones aactu ctual al es, en orden a transmitir la fe een n un nuevo «lenguaje parabólic paraból ico» o»   81  WILLIAM FORDE THOMPSON, Music, Thought, Thought, an and d Feeling. Understanding the Psychology of Music, Music , Oxford University Universi ty Pre Press ss , Oxford, 2009, cap. 5.  82  FELICÍSIMO MARTÍNEZ DIEZ OP, Teología de la Comunicación en clave Dominicana (II).  (II).   DOMUNI, 29.  83

 Id .,., 8.  22

 

 

el mundo mundo dig d igita ital,l, una multit multitud ud de ca cauces uces y ca cami minos. nos. ¿Los medios informáticos podrán ser “porta coelis” como han sido los templos cristianos, esto es: mediaciones del único templo que es Jesucristo? ¿Cómo hacer de ellos herramientas para que favorezcan el verdadero encuentro entre Dios y la persona que es siempre siempre real y no virtua virtual? l? 

Conclusión Dios llama para una misión. Vocación y Misión van juntas. La misión es una actividad activi dad pero sobre sobr e todo es un modo modo de d e ser y de estar en la la vida.   Esto se muestra patente en la Orden de Predicadores. La Predicación es la Misión y la Predicaci Predicac ió n es la Vocación. Vocación. La Predi Pred icación cació n es la actividad, act ividad, pero ante todo la Predicación Pre dicación es una una identidad identidad : es el modo modo de d e ser y de viv vivir. ir.  Hemos visto cómo en la Orden todo está en función de la Predicación: es la Misión Misi ón fun fundamental. damental. Es la activi act ividad dad central, a cuyo servicio se orde ordenna la vi vida da común co mún,, el estudio, la contemplación y la observancia regular, y como lo muestra la ley de la dispensa. Pero la Predicación es, ante todo, la Vocación y la Identidad fundamental. Se  profesa  profe sa com co mo Predicad Pred icador, or, se es Predicador Predicador.. Y es es justament j ustamentee la manera en qquue se vive la Predicación, en vinculación a la vida común, al estudio, a la contemplación, etc., lo que testimonia testim onia y sostien sostienee la Predicación Pre dicación como ser, antes que como hacer. Equilibrio en tensión: las estructuras sostienen la vida, pero también pueden llegar a ahogarla. Como herederos de Domingo, pidamos que la Contemplación y la Compasión puedan inspirarnos formas de vida y de predicación adaptadas a las necesidades del mundo de hoy. De esto dependerá que la llama de Domingo siga encendiendo al mun undo do pa para ra el Reino. Reino.  Germán Enrique PRAVIA SILVERA 

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