Kotov 1 - Herencia Ajedrecistica ALEKHINE 1

January 18, 2021 | Author: Anonymous | Category: N/A
Share Embed Donate


Short Description

Download Kotov 1 - Herencia Ajedrecistica ALEKHINE 1...

Description

A.

KOTOV

HEl1ENCIA AJEDRECISTICA DE A. A. ALEKHINE Leyes del iuego de posición SEGUNDA EDICION

Versión directa del ruso: VICTOR ANDRESCO Y YOLONDA PERALTA Revisión técnica: JULIO GANZO

RICARDO AGUILERA EDITOR

Apartado 9.138 MADRID-6

©

R I C A R D O A G U I L E R A, EDITOR

PADILLA, 54 - APARTADO 9.138

-

MADRID-6

Título: HERENCIA AJEDRECISTICA DE A. A. ALEKHINE Segunda edición de 3.000 ejemplares Traducción del ruso, de Víctor Andresco

y Yolanda Peralta. Dibujo de Enrique de la Hoz. Revisión técnica de Julio Ganzo Madrid, diciembre 1970

Depósito legal: M. 28.998-1970 Gráficas Breogán - Juan Tornero, 28 - Madrid-11

P RO LO GO

Aparece este libro -ofreciéndose a la atención de los lectores- como un detenido análisis de la obra del grandioso ajedrecista ruso A. A. Alekhine. En un trabajo anterior se publicó su biografía, su característica creadora y deportiva, la aportación del campeón ruso en la teoría de la etapa inicial de la partida de ajedrez. Además, se habían estudiado muchas partidas combinadas de Alekhine, sus ataques al rey enemigo, así como sus golpes tácticos y el sacrificio del peón por la iniciativa. Esta nueva obra está consagrada a tres cuestiones fundamentales: la maestría de Alekhine en el juego de posición, su técnica de final de partida y también la obra de unión entre el jugador y los ajedrecistas soviéticos. El motivo esencial de este libro es ayudar al lector a desentrañar y asimilar la maestría de Alekhine en el juego de posición, mostrar su arte para preparar -con la ayuda de profundas maniobras estratégi­ cas- la base para sucesivas combinaciones de efec­ to. En el libro se resuelven varias cuestiones impor­ tantes de estrategia -a juicio del autor- la más ne­ tamente apreciada en la obra del ajedrecista. Lo pri­ mero es la cuestión sobre el ataque del flanco de dama y en el centro. Este capítulo aparece como complemento al V1 del primer tomo sobre el ataque al rey. La importancia del ataque sobre los dos flan­ cos, lo resuelve el segundo capítulo de la presente obra. He querido dedicar especial atención a cuanto se refiere a los sistemas de defensa. Alekhine interpre­ taba la defensa a su manera, conforme a su visión particular. La maesrtía de la defensa le permitía salvar posiciones difíciles y lo facultaba, en gran me-

6 dida, para y matchs.

A. destacarse

con

salidas

prácticas

en

Kotov torneos

Asimismo, se resuelven en el libro los problemas de la lucha de maniobras y rodeos, los procedimientos para aprovechar la supremacía material y, también, el juego de posiciones corrientes. El autor trata de resolver plenamente todo lo relacionado con estas im­ portantes divisiones de la teoría ajedrecística, tanto más cuanto que todavía están poco desarrolladas en la teoría del ajedrez. Un capítulo especial está dedicado a definir la teoría de las piezas pesadas. Alekhine hizo una gran apor­ tación a la teoría y práctica de estas definiciones. En el libro están detalladamente descifrados los más importantes métodos interpretativos de tales posiciones. Los capítulos sucesivos se destinan a la técnica de' final de partida de Alekhine; técnica, adornada por pequeñas combinaciones, que unen entre sí la cla­ ridad de las maniobras con el amplio vuelo de la fan­ tasía. En esa técnica está recogido todo lo nuevo descubierto por Alekhine en el dominio del final de partida. Un tomo aparte estará consagrado a la alianza entre Alekhine y los ajedrecistas soviéticos, que tomaron de su compatriota muchas opiniones sobre la obra ajedre­ cística, y el honor de la difundida bandera de la escuela ajedrecística nacional en el transcurso de los últimos años. El libro

contiene

191

partidas

de

Alekhine,

muchas

de ellas no han aparecido nunca en la prensa sovié­ tica. Todas las partidas están comentadas nuevamente por el autor, en correspondencia con los problemas de- tal o cual capítulo. Además, se conservan impor­ tantes comentarios de Alekhine que ayudan a asimi­ lar una u otra idea estratégica. En el volumen figuran muchas partidas recibidas por el autor de los admi­ radores de la obra de Alekhine en distintas partes del mundo. Eu autor expresa su profunda gratitud por tan valiosa colaboración. Confía el autor que este trabajo sobre la herencia de la obra de Alekhine ayudará a los lectores en su trabajo de asimilación de las leyes de la lucha ajedrecística y les ofrecerá la posibilidad de esclarecer la poli/acética mentalidad del genial ajedrecista ruso A. A. Alekhine.

CAPITULO El ataque en el centro y en el flanco de dama Lograda la supremacía, el jugador está en su dere­ cho y debe atacar. A tal conclusión hemos llegado después de examinar el asunto sobre el ataque al rey. La finalidad del ataque, los objetivos y métodos de llevarlo a cabo, pueden ser los más distintos en cuanto a la situación concreta en el tablero de ajedrez. Primero fue examinado el ataque al rey, pero en la práctica del aj edrez, ocurre con no menos frecuencia, tan pronto como es posible la realización de la contrapar­ tida, el ataque en el centro del tablero o en el flanco da dama. En este caso el juego tiene un carácter par­ ticular y los métodos tomados ante el ataque del flanco de dama poseen sus particularidades destacadas (vamos a contar con que los dos enemigos han realizado el enroque corto, en caso contrario el papel de los flancos cambia). En el presente capítulo trata­ remos de descifrar las particularidades características y los procedimientos de tal ataque. No vamos a establecer demasiada diferencia entre el ataque en el centro y en el flanco de dama. Natu­ ralmente, las partidas que se deciden por el ataque en el centro y en el flanco de dama se diferencian unas de otras. Sin embargo, en una aplastante mayo­ ría de casos el ataque del centro está tan estrecha­ mente ligado con la ofensiva en el flanco de dama y, al contrario, la disposición del ataque al flanco de dama generalmente se relaciona de tal forma con el ataque en el centro, que es más cómodo examinar estas dos formas de ataque conjuntamente. ¿En qué se diferencian el ataque al flanco de dama y en el centro del mismo el ataque al rey enemigo? En primer lugar, en el objetivo del ataque. Si la fi­ nalidad principal ante el ataque al rey es la perse­ cución de una pieza enemiga, precisamente el rey, en el ataque al flanco de dama, no existe tal concre­ cwn. Además, atacando el flanco de rey podemos realizar mayores sacrificios materiales para inutilizar

8

A.

Kotov

solamente una figura enemiga, el rey atacando el flanco de dama no podemos permitirnos tal despilfa­ rro. Aquí el ataque tiene que ser económico, es preciso tener en cuenta cada unidad guerrera y cuidarla con precaución. La finalidad del ataque al rey es dar mate. El ob­ jetivo del ataque en el flanco de dama y en el cen­ tro según la regla, es la consecución de la suprema­ cía material. Otros aspectos del buen resultado son la presión a distancia, la conversión del peón en da­ ma, y, únicamente, se convierten con su transforma­ ción particular en la supremacía material. Realmente, cuando la pieza del enemigo está presionada contra un extremo del tablero y casi no tiene libertad de movimiento, ¿acaso no se convierte esto en un par­ ticular logro material del atacante? Se encuentran partidas en las cuales el atacante sobre el flanco de dama y, particularmente, en el centro, traslada la acción de sus piezas atacantes sobre el rey enemigo y concluye el ataque con un mate. Tales partidas ofre­ cen una particular mezcla de ataque al fey y al flan­ co de dama. La profunda diferencia de los objetivos de los ata­ ques a los flancos de rey -y dama impone sus par­ ticularidades a los métodos de llevarlos a cabo. Así, si ante el ataque al rey los refuerzos defensivos del enemigo se destruyen frecuentemente con la ayuda de violentos sacrificios, ante el ataque al flanco - d.e dama las piezas que juegan se organizan con la realiza­ ción de un lento cerco, logrando una gradual debili­ tación en la distribución del enemigo y aprovechan­ do esta debilidad en el futuro. El ataque en el cen­ tro y en el flanco de dama, según la norma, es más lento y pocas veces encuentra sacrificios efectivos y variantes forzadas. En todo lo demás, existe una forma muy común en los métodos de juego tanto ante el ataque al rey, como ante el ataque al flanco de dama y en el cen­ tro. Lo mismo que ante el ataque al rey se puede atacar sobre el flanco de dama, aproximando los peo­ nes o bien organizando la presión sobre las piezas, el papel decisivo lo juega aquí el dominio de las lí­ neas abiertas (cierto que en menor medida que ante el ataque al rey) , y también de las diagonales. Vamos a examinar las siguientes variedades fun­ damentales del ataque al flanco de dama y en el centro: l.-El ataque de las piezas. 2.-Aprovecha-

Herencia ajedrecística

de Alekhine

9

miento de las fuerzas de los peones pasados. 3.-Apro­ vechamiento de los líneas abiertas. Cada uno de es­ tos métodos de ataque al flanco de dama y en el centro, que surgen con mucha frecuencia, tienen sus destacadas particularidades y vamos a tratar de re­ velarlas.

El ataque de las piezas Ante la supremacía en el flanco de dama o en el centro del tablero, el atacante empieza a desarrollar las operaciones de ofensiva. El procedimiento más natural de este ataque es el esfuerzo cada vez ma­ yor de presionar las piezas de la posición enemiga. Buscando las debilidades o bien obligando al enemigo a conformarse con la formación de éstas, el atacante, poco a poco, aumenta la presión de sus piezas sobre la posición del que se defiende y aumenta el ataque hasta el momento de recibir una real y continua supremacía. En una aplastante mayoría de casos un ataque así termina con adquisiciones materiales ; a veces, esta forma de ataque, conduce a la rotura de la defensa del enemigo y a una maniobra de desvío de las piezas atacantes, que se abren paso hacia el rey enemigo. En la ofensiva se asigna un gran papel a los peo­ nes del atacante. A menudo rompen el frente de de­ fensa, facilitando la llegada de las piezas atacantes a los puntos débiles del campo enemigo. El asalto de los peones en el flanco de dama ocurre con más fre­ cuencia que el asalto de los peones en el flanco de rey, ya que, moviendo sus peones, los atacantes no corren el riesgo en este caso de dejar al descubierto a su propio rey, toda vez que se encuentra en el otro extremo del tablero. La ayuda de los peones en el ataque del flanco de dama es muy importante para mantener el ataque de las piezas, sin hablar del caso de la formación del peón de paso o de la aper­ tura de línea. Alekhine era un gran maestro en el ataque al rey enemigo, con resultados creadores cuando el cam­ peón del mundo tenía que llevar el ataque al centro o al flanco de dama. Vamos a examinar unos cuantos ej emplos de estos ataques, realizados con la ayuda del aumento metódico de la actividad de las propias piezas.

A. Kotov

10

N .o l.

D E FENSA ORTODOXA Alekhine

Capablanca

21 partida del match, 1927

1. P4D, 2. P4AD, 3. C3AD, 4. A5C,

P4D P3R C3AR CD2D

5. 6. 7. 8.

P3R, C3A, T1A, P3TD,

A2R 0-0

P3TD

Como ha mostrado la práctica, .sobre todo el match Alekhine-Capablanca, 1927, esta jugada no trae a las negras ninguna dificultad y les permite conseguir un juego superior. Muchas más dificultades se les hu­ biera creado a las negras si las blancas hubieran he­ cho el cambio en 5D. No en vano en los últimos años, en todos los torneos el maestro, escoge, preci­ samente, esta continuación, fijando la posición de los peones en el centro y asignando una auténtica, aun­ que no grande, supremacía de las blancas. Esta conti­ nuación la aplicó el mismo Capablanca en las últi­ mas partidas del match.

�:

A4T,

11.

A2R,

P3T Px P

10.

Áx P,

P4CD

Este llamado "fianchetto", ensanchado, ofrece a las negras la posibilidad de desarrollar cómodamente el alfil de las casillas blancas y movilizar con ventaja sus fuerzas para la lucha en el centro.

· Capablanca juega esta parte de la partida muy pa­ sivamente. Le hubiera traído más cuenta retirarse con el alfil a 2T y, seguidamente, después de 12. D2R y 13. A1C y procurar llevar la amenaza al flanco de rey enemigo.

11.

...,

A2C

12.

0-0,

La práctica ha demostrado que no es bueno impe­ dir la jugada . . . , P4A porque el procedimiento 12. P4CD conduce a dificultades para las blancas después de 12 . . . . , P4TD !

12.

P4A

13.

Px P,

11

Herencia ajedrecística de Alekhine

Lleva hacia una completa igualdad d e juego; sin embargo, ya no se vislumbran caminos más activos para las blancas. Es posible que la variante escogida por Capablanca se explique por su deseo de alejarse de continuaciones arriesgadas y pasar el juego a un tranquilo final de partida.

13.

Cx P

14. C4D,

Esto ya no resulta lógico. Habiendo mejorado no­ tablemente la posición de las piezas negras y empeo­ rando la disposición de las suyas (el alfil en 2R): Ca­ pablanca, de pronto, renuncia a la simplificación 14. D X D y organiza un complicado juego de piezas en el centro. Sin embargo, es fácil darse cuenta de que las negras están mejor preparadas que el enemigo para las escaramuzas en el centro y pronto demues­ tran de un modo convincente, su supremacía. Con­ forme indica Alekhine, en lugar de la jugada hecha por las blancas hubiera sido una equivocación 14. A X C, AxA; 15. C X P, D x D; 16. TR x D, C6C ; 17. T7A, Axc; 18. A X A, Pxc; 19. A x T, T x A, con ventaja de las negras.

14.

15.

... ;

T1A

CD2D

-15.

P4CD,

A.

12

Kotov

Resulta característico para el concreto razonamien­ to aj edrecista de Alekhine. En lugar del ataque que surge en 5R, Alekhine escoge esta, al parecer, mo­ desta retirada, considerando justamente que el lu­ gar del caballo está en 5A y dirigiéndolo rápidamente hacia allí a través de 3C. En este momento se organiza una curiosa lucha de piezas por los puntos centrales de apoyo, terminando en favor de Alekhine ; no sola­ mente porque sus piezas estaban mejor preparadas para el combate, sino también porque el campeón ruso ve más concretamente las posibilidades, ahonda más profundamente en el secreto de la situación dada.

16.

A3C,

Capablanca hace evidentes jugadas de sentido lógico, pero con tal procedimiento es dudoso que pueda llevarse una ventaja sobre la genial idea creadora de Alekhine. A las blancas les correspondía calcular, lo que en la actual situación era el punto clave de la posición, la casilla 4AD y partiendo de esto preparar el plan de maniobras de sus piezas. Merecía atención, por ejemplo, 16. C3C con tal de que a 16 . . . . , C3C_ respondiera 17. C5T guardando esperanzadoramente la casilla 4A. Sin embar­ go, como siempre, en la mentalidad del cubano señorean principios generales dogmáticos y en el caso de ambas situaciones no es necesario llevarse al caballo 4D de la buena disposición de la posición.

16.

C3C

17.

D3C,

CR4D

¡Todos a luchar por el punto 4AD! Después del cambio del caballo 3A, el alfil negro 2C adquiere la posibilidad de atacar otra vez el punto 4AD. Además de eso, el ataque en 4D crea una seria amenaza de posición por el procedimiento 18 . . . . , C X C ; 19. T X C, A4D ; 20. D2C, TxT; 21. D X T, D1T y T1A, toma la importante vertical abierta "AD" y la diagonal "TD­ TR".

18.

AJA,

TSA!

View more...

Comments

Copyright ©2017 KUPDF Inc.
SUPPORT KUPDF