Hipnosis Terapeutica. Teoria, Metodos y Tecnicas Aplicadas.
March 29, 2017 | Author: Diego Alejandro | Category: N/A
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Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Primera parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba. Prólogo: En una época de muchos cuestionamientos y de grandes avances tecnológicos y en el saber científico, queremos, mediante la realización de esta obra sobre hipnosis, dar y aclarar las respuestas a las inquietudes, necesidades y al interés creciente que sienten hoy muchos estudiantes, médicos y psicólogos jóvenes e incluso profesionales de experiencia, por conocer y adentrarse en el tema. El contenido que conforma esta obra, invita a un prólogo analítico que haría extenso el propósito y riesgoso para quien lo escribe, de caer en imprecisiones generadas por lo discutido del asunto y la falta de especialización al respecto. Desde tiempos remotos se discute de la hipnosis, sus inicios, desarrollo, confusa trayectoria a través de prácticas oscurantistas, donde magos e ilusionistas hacían su angosto y convertían en leyendas sus habilidades, como aquellas de los traumaturgos que dormían a un grupo de personas a su antojo y realizaban actos inconcebibles. Posteriormente, en el siglo pasado la escuela francesa, bajo la dirección de Charcot, trato y dio explicación al fenómeno, sosteniendo incluso polémicas con otros ilustres científicos del momento. Muchos investigadores estudiaron con profundidad el método ya fuera para estar en su contra o para defenderlo y practicarlo de forma formal e intensivamente, y liderar famosos movimientos de dicho proceder hasta alcanzar un valor terapéutico con fines curativos dando solución a múltiples problemas de salud, entre los que se encuentran los malos hábitos de vida, que constituyen factores de riesgos en la aparición de enfermedades crónicas no transmisibles. De la manera como se logra la hipnosis en sus mecanismos más íntimos, estamos a penas en el comienzo de su comprensión, sin un consenso general de cómo funcionan y actúan; pero en el mundo de las ciencias de la salud se ha llegado a conocer que los estilos de vida son factores desencadenantes de muchas enfermedades y, que están en relación con la conducta o comportamiento del individuo. La hipnosis permite enfrentar esta polémica, que hoy son causas fundamentales de morbilidad y mortalidad. El autor trata de brindar de una forma escrita al lector interesado una información actualizada sobre la hipnosis, haciendo énfasis en su importancia en la práctica asistencial y social. Es sin dudas, un intento serio de la aplicación clínica de la hipnosis, que se plasma en un libro. Dra. Ana Teresa Govin Cid.
Índice.
Prólogo
Índice Introducción Evolución histórica de la hipnosis La hipnosis en el mundo antiguo La hipnosis en la edad media La hipnosis clásica durante el período de esplendor Las escuelas francesas y rusa Escuelas francesas Etapa del magnetismo animal El método de Mesmer Importancia histórica del magnetismo animal Etapa del abate Faria El método del abate Faria Etapa de james Brald El método de Brald La hipnosis como anestesia según Braid Importancia histórica de Braid Escuela de hipnosis de parís o de la Salpetriére El método de Charcot Importancia histórica de la escuela de hipnosis de parís Primera escuela de hipnosis de Nancy El método de Bernheim El enfrentamiento entre las dos escuelas de hipnosis. Bernheim contra Charcot Etapas de la hipnosis Importancia histórica de la primera escuela de hipnosis de Nancy Freud y la hipnosis Segunda escuela de hipnosis de Nancy El método de Coué Importancia histórica de la segunda escuela de hipnosis de Nancy Unificación de las escuelas de hipnosis La hipnosis clásica en el contexto de la reflexología rusa La escuela de hipnosis rusa. Pávlov su máximo exponente Etapa pavloviana Los reflejos condicionados Procesos de excitación e inhibición de la corteza cerebral Teoría reflexológica del sueño y los estados intermedios entre éste y la vigilia El periodo de silencio de la hipnosis La nueva hipnosis. Postulados y exponentes más importantes Milton h. Erickson. Un nuevo y revolucionario. Enfoque de la nueva hipnosis La actitud La actitud hipnótica El inconsciente El síntoma La psicoterapia La metáfora El símbolo Aprendizaje inconsciente Otros personajes durante el periodo de la nueva hipnosis Análisis de las concepciones contemporáneas sobre la hipnosis Otras técnicas que emplean los estados alterados de la conciencia La sofrología de Caycedo La enseñanza a reacción La noesiología de escudero El futuro pasa por la unidad mente – cuerpo El periodo del resurgir de la hipnosis El desarrollo de la hipnosis en cuba
Definición de hipnosis Diferencias entre hipnotizador e hipnólogo El mecanismo neurofisiológico de la hipnosis La hipnosis y su relación con otras ciencias afines Hipnosis y psicología Hipnosis y sofrología Hipnosis y fisiología Hipnosis y medicina
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Primera parte.2
La hipnosis y su relación con el sueño y la sugestión Sueño fisiológico Sueño ortodoxo Sueño paradójico Sugestión y sugestionabilidad Sugestión en estado de vigilia Sugestión en estado hipnótico Sugestión en el sueño natural Controversias actuales sobre sueño e hipnosis El sueño paradójico inducido por hipnosis Electroterapia cerebral o electrosueño Categorías básicas en la hipnosis La sugestibilidad La resistencia La simulación El signo señal Pruebas y escalas para medir la sugestibilidad hipnótica del paciente Pruebas de susceptibilidad hipnótica Recomendaciones para el uso de las pruebas de susceptibilidad hipnótica Prueba de la caída hacia adelante o hacia atrás Prueba del cuerpo oscilando o de oscilación lateral Prueba de la caída por pérdida de las fuerzas del cuerpo Prueba de los brazos extendidos Prueba del brazo pegado a la pared Prueba del cuerpo pegado al asiento Prueba de las manos pegadas luego del entrecruzamiento de los dedos Escalas de susceptibilidad hipnótica Aspectos técnicos que se deben tener en cuenta en la aplicación de la hipnosis Características del hipnotizador El tono de la voz La palabra como elemento clave Formas de realizar la sugestión Rasgos de sugestibilidad Preparación del paciente Presencia de terceros Duración de las sesiones Frecuencia y hora de aplicación Las posiciones corporales en la hipnosis. De pie, sentado y acostado Las condiciones ambientales. Iluminación Métodos de inducción hipnótica Período de los pases magnéticos. Método de inducción hipnótica de Mesmer (1778) Método de inducción hipnótica de Deleuze (1820) Método de inducción hipnótica de Esdaile (1845): pases y soplo caliente
Métodos de inducción hipnótica basados en la excitación de la mirada Método de inducción hipnótica del abate Faria (1813): fascinación Método de inducción hipnótica de Braid (1842) Método de inducción hipnótica de Philips Durand de Gros (1850): fijación de la mirada y pases con contacto Métodos de inducción hipnótica basados en la excitación sensorial. Método de inducción hipnótica de Charcot (1880): escuela de parís Método de inducción hipnótica de Bérillon (1895): métodos mecánicos verbales Métodos de inducción hipnótica de los estímulos acústicos Métodos de inducción hipnótica con estímulos térmicos. Vestibulares y visuales Métodos de sugestión hipnótica basados en la sugestión verbal. Método de Liébeault (1866) Método de Bernhein (1880). Escuela de Nancy Método de Noiset y Bertrand (1820): del sueño fisiológico al sueño hipnótico Métodos basados en los estímulos químicos. Los estímulos tóxicos. Los estímulos autotóxicos (hiperventilación) Método basado en la estimulación eléctrica: método de Faraday. Método de Birman Método de choque. Método de fraccionado Método de hipnosis ideomotora Métodos hipnóticos utilizados en niños. Métodos para niños de 3 a 7 años. Métodos para niños de 8 a 12 años Método de inducción hipnótica del pestañeo sincronizado Método de inducción oral. Fijación de la mirada. Método de la catalepsia. Método de la rigidez del brazo Métodos de la expectación. El engaño. Del metrónomo con conteo Método de la sensibilidad de la bola. Técnicas 1 y 2 Métodos de la bola. Instantáneo. Semirrápido y del índice Método del brazo ligero Métodos de profundización del sueño hipnótico Métodos de la hiperestesia. De la letargia. Del bosque. De la sordera y de la risa Pasos de la hipnosis Agotamiento palpebral Fenómenos corporales durante el proceso de hipnosis El establecimiento del signo señal El despertar y el signo señal La catalepsia braquial Los movimientos automáticos Sueño hipnótico Abrir los ojos Sueño hipnótico profundo Bloqueo del receptor auditivo Anestesia superficial Sonambulismo Sueño sonambúlico Representaciones alucinatorias Catalepsia general Sugerencias posthipnóticas Anestesia Fenómenos de memoria
Preguntas frecuentes acerca de la hipnosis ¿Que podemos hacer y observar con la hipnosis? ¿Para qué sirve la hipnosis? ¿Cómo aprender a hipnotizar? ¿Cómo se llega al estado hipnótico? ¿Todo el mundo puede ser hipnotizado?
¿Quién puede hipnotizar? ¿Se puede quedar alguien eternamente dormido por la hipnosis? ¿Tiene la hipnosis contraindicaciones? ¿Tiene el hipnotizador algún poder especial? ¿Se puede inducir a alguien a realizar lo que no desea a través de la hipnosis? ¿Cuán real es la pérdida total de la conciencia durante la hipnosis? ¿Nos podemos hipnotizar a nosotros mismos? ¿Nos pueden hipnotizar sin que nos demos cuenta? ¿Existe la hipnosis instantánea? ¿Se puede hipnotizar a distancia? ¿Existe relación entre la hipnosis y la parapsicología? ¿Es peligrosa la hipnosis? ¿Que es la hipnosis regresiva?
Análisis experimental de los estados de hipnosis Dificultades de la hipnosis Causas de fracaso en la inducción hipnótica Defensas del sujeto contra la hipnosis. Negativismo Depreciación Inquietud Simulación
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Primera parte.3
Sueño Reacción de sobresalto Síntomas Despertamiento y pantallas Complicaciones e insuficiencias de la hipnoterapia Contraindicaciones de la hipnosis En las psicosis. Hipocondría Precauciones en los pacientes histéricos Otras causas Recomendaciones prácticas al utilizar la hipnosis Ventajas y principios de la hipnosis Aplicaciones de la hipnosis Nuestras experiencias con la hipnosis Hipnosis en el manejo de la hipertensión arterial esencial y el estrés emocional Hipnosis en el manejo de niños en edad escolar con dificultades en el aprendizaje Hipnosis en el control del asma bronquial Otras experiencias clínicas
Bibliografía Datos del autor
Introducción. Aunque existen precedentes históricos del uso de técnicas similares a la hipnosis empleada por los egipcios en los llamados Templos del Sueño, no sería hasta mediados del siglo XVIII cuando se inicia el primer estudio sistemático de lo que suponía un estado psico-fisiológico especial que más tarde se conocería con el término de hipnosis. Franz Anton Mesmer, (1734 -1815) con doctorado en medicina y filosofía a sus 35 años en Viena, escribió su tesis doctoral titulada "De planetarium Influxu", influenciada por las teorías de Paracelso sobre la interrelación entre los cuerpos celestes y
el ser humano. Mesmer formuló la famosa Teoría del Magnetismo Animal que nos venía a decir que todo ser vivo irradia un tipo de energía similar o parecida al magnetismo físico de otros cuerpos y que puede transmitirse de unos seres a otros, llegando a tener una aplicación terapéutica. El médico austríaco se instaló en París y con el paso del tiempo, fue tan grande su influencia y tan extendida su fama, que se convirtió en el médico tanto de los pobres y desheredados como de los ricos y poderosos, incluso del mismísimo rey de Francia. El asunto llegaría hasta la Academia de Medicina de Francia, que determinó que no existía ningún tipo de influencia o energía magnética en las curaciones mesméricas. ¿Qué era lo que realmente producía la curación? Serían los discípulos de Mesmer y posteriores investigadores quienes determinarían que las "milagrosas" curaciones en los trances hipnóticos, llamados sueños magnéticos o mesmerismo hasta aquel entonces, se producían por una condición llamada sugestión. Un cirujano escocés llamado James Braid (1795-1861) fue el primero en acuñar el término hipnosis enunciando una de las formas que lo explicaban: "la fijación sostenida de la mirada, paraliza los centros nerviosos de los ojos y sus dependencias que alterando el equilibrio del sistema nervioso, produce el fenómeno”. Tradicionalmente la hipnosis se ha asociado a terrenos más cercanos a la magia y lo espectacular que a la técnica que realmente es. La hipnosis es esencialmente eso: una técnica que debidamente aplicada da unos resultados en muchos casos sorprendentes, porque trabaja con el subconsciente humano. La hipnosis es la forma de "modificar" y "re-programar" el software mental del ser humano y, por tanto del comportamiento. Cosa que se puede hacer a veces de manera instantánea. Aprender el por qué y cómo funciona, es una valiosa herramienta de trabajo para ayudar a los demás y a nosotros mismos. A través de sus técnicas podemos lograr un equilibrio y control de esa maravillosa integración mente-cuerpo, como unidad indisoluble. En este caso el hipnólogo, no es un hipnotizador, es un verdadero cirujano de la mente, quitando, poniendo, modificando, o reconduciendo los contenidos de la misma. En una sola sesión de hipnosis se pueden conseguir resultados que nos llevarían meses de psicoanálisis o de modificaciones cognitivo-conductuales. Pero la dificultad radica en que realmente considero hay pocos especialistas y escasa formación e información sobre esta técnica. Intentamos con esta obra darle la oportunidad al lector de adquirir estos conocimientos y formarse de una manera concisa y práctica. Como me decía un compañero de la universidad, en nuestra época estudiantil, Ochoa quiero saber la esencia del tema, eso y solo eso, sin omitir información, pero solo eso y no más. Hablar de hipnosis es hablar de un hecho que nos sigue causando asombro e inquietud, pese a que probablemente sea tan antigua como el hombre. Significa enfrentarse a la frontera entre lo conocido y lo desconocido, lo superficial y lo íntimo de la mente humana; de ahí que siempre haya provocado tanta controversia. Polarizada entre el espectáculo o la magia de supuestos poderes prodigiosos y el mundo académico-científico que ha reconocido su indiscutible valor clínico, la hipnosis ha sufrido a lo largo de su historia numerosos eclipses, épocas en que su prestigio creció o cayó en el peor de los descréditos. El hecho es que nunca ha dejado de causarnos perplejidad y hoy incita de nuevo el interés de todos. Desde épocas remotas el hombre ha incursionado en el campo de la hipnosis: primero en prácticas oscurantistas, luego explicándose el fenómeno y más tarde para dar solución a múltiples problemas sobre todo de salud, entre los que se encuentran los malos hábitos de vida o factores de riesgos para contraer enfermedades, como el estrés, el sedentarismo, la alimentación inadecuada, el alcoholismo, la obesidad, el tabaquismo, el consumo de drogas, entre otros, así como su aplicación en los trastornos psicosomáticos y en los trastornos de origen psíquico o mental, además de las experiencias en la educación y enseñanza de estudiantes, mejorando sus capacidades de asimilación, concentración y memoria, garantizando un mejor rendimiento académico, motivando el estudio, incluso de aquellas asignaturas consideradas como muy difíciles, a la que todos tuvimos cierto grado de temor y el deseo de poder aprender otros idiomas con más facilidad.
En los últimos tiempos hay un resurgir de las medicinas tradicionales o alternativas que abarcan una serie de sistemas terapéuticos incluyendo la hipnosis, divergentes a la medicina clásica y cuyo denominador común es la autocuración. La hipnosis actualmente ha adquirido valor, credibilidad y un elevado grado de satisfacción en los pacientes, donde se ha empleado, tanto en países industrializados de diversas regiones de la Comunidad Europea, en los Estados Unidos, así como en algunos países en vías de desarrollo como Cuba. También se ha cobrado conciencia de los elevados costos en recursos de la medicina moderna así como la aparición de efectos o reacciones secundarias adversas dañinas para el ser humano a corto, mediano y largo plazo. Podemos agregar además que se ha comprobado que muchas dolencias o síntomas de las enfermedades crónicas no transmisibles, relacionadas con aspectos psicológicos y sociales, se normalizan o controlan con los elementos más suaves de la medicina tradicional o alternativa entre ellos la hipnosis, un ejemplo de esto es la compensación de la hipertensión arterial esencial y el estrés emocional con relajación autógena. Por todo lo anterior está surgiendo un interés razonable de los profesionales, médicos, psicólogos, psiquiatras, e incluso de otras áreas del saber y en personas comunes, de conocer sobre el tema, de poder aplicar la hipnoterapia en su quehacer diario y formar parte de su desarrollo científico. Ya en la actualidad algunas universidades donde se imparte la maestría en medicina natural y tradicional incluyen a la hipnosis en sus programas y además se han hecho modificaciones en los planes de estudios pregrados tanto de psicología general y psicología médica como de otras disciplinas y materias que debieron ajustar sus contenidos donde se incluyó a la hipnosis como técnica para impartir entre las psicoterapias sugestivas que deben ser conocidas por el médico general y el psicólogo.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Primera parte.4 Este período de aceptación o momento de auge de la hipnosis ha sido definido por varios autores como “la gran desconocida que renace, o el resurgir de la hipnosis”. Hoy ya no resulta sorprendente encontrar en la literatura o recurrir a términos híbridos e incluso a neologismos tales como hipnoterapeuta o hipnólogo clínico. Es más, la ciencia se expande y emergen nuevas disciplinas que, sin plantearse la necesidad de cuestionar o establecer preguntas acerca de su estatuto, eligen el nombre después. Mi mayor interés por el tema desde que era un estudiante de segundo año de la carrera de medicina fue al conocer su uso para bloquear las sensaciones dolorosas (su efecto anestésico y analgésico). Realmente me pareció bueno, por lo que no escatime en aprender bien la técnica, en aplicarla y en tener mis propias experiencias y conclusiones personales. En un estado de hipnosis apropiado, la piel y hasta los planos anatómicos musculares y corporales en sentido general, incluso los más profundos, de cualquier persona, pueden ser atravesados con un objeto punzante, cortados e incluso quemados sin que sienta dolor, anulando prácticamente las reacciones fisiológicas a la lesión como las hemorragias y la inflamación. De ahí su aplicación y utilidad actual y futura en la odontología, cirugía ginecológica y la cirugía en general, y más recientemente en la neurocirugía. Personalmente tuve la ventaja y oportunidad de tener un profesor de psicología médica, el profesor Alberto Cobián Mena, el cual es un psicólogo por fuera de lo común, doctor en ciencias médicas, quién entendía que un profesor era incapaz de enseñar a resolver adecuadamente problemas de
orden clínico sino adquiría esta experiencia de modo cotidiano, que le permitiera elevar los conocimientos, que no bastaba con leer, había que afrontar y comprobar en el laboratorio natural de la vida lo que ya estaba preestablecido dentro del marco teórico, por lo que había desarrollado una consulta de psicología clínica e hipnosis en el hospital clínico quirúrgico docente Saturnino Lora de Santiago de Cuba, Oriente Cuba, institución de cuarto nivel de atención y centro de referencia nacional e internacional, posteriormente forma el grupo de hipnosis y la clínica de hipnosis junto con sus colaboradores que funciona de forma ininterrumpida, además tuvo el empeño de introducir la hipnosis en sus clases tan pronto fue oportuno e incluso la hizo ocupar a veces el lugar de otros temas intranscendentes y hasta innecesarios, hasta que fue conformando un mecanismo que nos dejaba atónitos, sorprendidos, algunos confundidos y virtualmente convencidos de que la hipnosis era real, que era un proceso natural que se daba en el hombre y provocado por él en su propio cerebro; de ahí que había que basarse en algunas premisas neurofisiológicas y de la actividad nerviosa superior planteadas por Pávlov en sus obras escogidas. Desde que comencé a utilizarla intentando demostrar sus potencialidades, conociendo que en el siglo pasado había tenido éxito en el tratamiento de algunos desórdenes psíquicos, en los trastornos de la personalidad, e incluso de las posibilidades como tratamiento en la actualidad, y en la misma medida en que iba teniendo una mayor experiencia práctica, en mi consultorio me preguntaba por qué ni los psicólogos ni los psiquiatras aplicaban la hipnosis. Por supuesto, sabía la respuesta, pero me negaba a aceptar que la razón fundamental estaba en la ausencia de tan importante y ventajosa técnica en los programas de estudios universitarios o en caso de estar incluida, se realizaba con cierta indiferencia y desacuerdo entre los diversos procederes para la psicoterapia. Creo en la hipnosis terapéutica, no porque quiera creer empecinadamente en ella, sino por mis propias vivencias sostenidas en una práctica constante donde se perfeccionan los métodos empleados y se verifican los resultados teniendo en cuenta sus posibilidades y limitaciones. “La hipnosis es amarga como la cáscara de nuez. Los que persisten y transitan por el amargo camino que es su sabor, son los únicos que finalmente pueden saborear su inefable dulzura”. El asumir esta metafórica frase de nuestro maestro en el tema, nos ha permitido sobrevivir y permanecer trabajando e investigando con la hipnosis con amor, pasión, ética, ganando adeptos, desde estudiantes hasta profesionales reconocidos y de experiencia, los cuales se interesan por ella y comienzan a organizar y desarrollar cursos de postgrado, varios proyectos de investigaciones y semilleros de investigaciones con estudiantes en nuestro medio actual. Desde hace varios años varios colegas, estudiantes, amigos y familiares me han pedido que escriba un libro e imparta cursos sobre mi experiencia en la hipnosis, creo que esto me estimulo para hacer dicho trabajo. La realización de esta obra es el resultado de una paciente y esmerada labor de más de tres lustros de estudios y prácticas de ese fascinante mundo, donde se abordan los postulados y exponentes más importantes, su relación con otras ciencias, sus categorías y ejemplos de algunas de mis experiencias clínicas con resultados aceptables. En este libro pretendo condensar el conocimiento en un solo texto y dárselo al lector de forma resumida pero exhaustiva, completa pero selectiva, práctica pero simple, atractiva pero con rigor científico. No pretendo brindar un libro diferente; solo quise escribir el libro que durante más de quince años no logre leer, que sirva para personas que no conocen el tema, o con poco dominio de este, aunque sí con cierta preparación y conocimientos científicos, también para aquellos que lo conocen bien y tienen experiencia, espero les pueda servir como guía en su quehacer diario, con este fin se ha realizado este libro.
Quiero brindarles a nuestros estudiantes, a médicos, a psicólogos y a otros profesionales afines y en general, conocimientos teóricos prácticos de forma integral sobre las aplicaciones del fenómeno hipnótico y los principales métodos, técnicas y pasos específicos que se utilizan para llevarlo a cabo. Este libro en tus manos te dará la oportunidad de adentrarte en este maravilloso tema, que si lo sabes emplear con fines nobles para la humanidad, podrás hacer mucho por ella y para ella.
EVOLUCIÓN HISTÓRICA DE LA HIPNOSIS. LA HIPNOSIS EN EL MUNDO ANTIGUO. Practicada directamente o a través de diversos ritos o cultos los egipcios, caldeos, sumerios y otras antiguas culturas seguían determinadas pautas que eran similares a lo que hoy conocemos como hipnosis. Y en muchos casos se utilizaba con fines terapéuticos. Según refieren varios datos históricos, en el mundo antiguo, la hipnosis como ciencia estaba reservada tan solo a países como Egipto, Caldea y la India, preferentemente a las castas sacerdotales, que en aquel entonces eran muy privilegiadas. Todo el que se iniciaba en la religión debía conocer la técnica hipnótica, lo cual permitió en un proceso continuo que las experiencias se transmitieran de una generación a otra. Tal como expresan Braulio Martínez Perigod y Moisés Asís (1), así como Cobián Mena (2), la práctica de la hipnosis data desde tiempos remotos, esta se remonta a unos 4000 años atrás con el -sueño sagrado - de los templos egipcios. Todo parece indicar que los sacerdotes del antiguo Egipto inducían el sueño hipnótico en aquellos desesperados que iban a suplicar alivio para sus padecimientos. En el Museo Británico, en Londres, hay un bajorrelieve de Tebas que representa a un sacerdote haciendo - pases - al estilo de Mesmer. La colocación de las manos es mencionada en el papiro de Ebers, del siglo XVI a.C. En Egipto, como en las antiguas regiones de China, India, Grecia. África y otras civilizaciones lejanas, la hipnosis era tanto una experiencia religiosa como método terapéutico, fenómeno que en distintas modalidades es posible observar aún en muchas regiones del mundo, tal es el caso de los cultos sincréticos practicados por los negros afroamericanos descendientes de los esclavos africanos traídos a América por los españoles durante la época colonial. Las técnicas o métodos primitivos de inducción hipnótica tienen como características el uso del canto rítmico al unísono, música, baile y palmadas monótonas, toques de tambor, entre otras formas ideófonas que recuerdan las monodias religiosas y los cantos llanos o gregorianos - y otras expresiones que aún son posibles encontrar en varias comunidades.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Primera parte.5 Estos métodos son utilizados por algunos pueblos o tribus de tradición primitiva como los samburúes Kenianos, en África, los tántricos tibetanos, en el Tíbet en Asia, los aborígenes australianos (negros), los bones de la India, los tungus o shamanes de la Siberia ártica, los amerindios norteamericanos, los bahías, los subudes, y en los rituales afrorreligiosos desarrollados en el Caribe y el Brasil. Llama la atención que estas formas concretas de manifestación mágico-religiosas se relacionan con mecanismos especiales de sugestión, que provocan trances capaces de modificar los parámetros normales de conducta, rendimiento o ambos de una persona, ante situaciones cotidianas muy parecidas a los efectos que hemos logrado en nuestras prácticas en el plano de la sugestopatía.
No olvidemos que el rito es la más común manera que tienen estos pueblos primitivos de hacer práctica religiosa o curativa para expresar momentos significativos del quehacer de los hombres sometidos a tales presiones. Esos momentos se refieren a fenómenos propios del proceso saludenfermedad o a cambios de vida y nacimiento. No se ha precisado aún cómo la hipnosis pasó al occidente, pero seguramente lo hizo a través de las migraciones cognitivas que ocurrieron, sobre todo a partir de la colonización de África y Asia por las potencias europeas. Se sabe que el abate Faría (1755 - 1819), monje portugués, que vivió durante mucho tiempo en la región de Goa, la India, hacia 1815 abrió un curso público sobre magnetismo hipnótico en París y esta quizás haya sido hasta el momento la expresión más clara del carácter oriental de los métodos de hipnosis en cuanto a su origen. LA HIPNOSIS EN LA EDAD MEDIA. La historia de la civilización (1) recoge en sus crónicas los impases que a modo de afectación han tenido ciertos procesos, donde el hombre ha estado inserto y fue precisamente en la Edad Media cuando se produjo la máxima represión de estas actividades, puesto que el imponerse una doctrina cristiana altamente rígida y conservadora, todo acto ajeno a ella, como es el caso de la inducción hipnótica o una simple referencia a la hipnosis eran considerados como una obra de superchería y brujería, con lo cual desnaturalizaban la esencia de la conducta humana, y de esos oscuros siglos no tenemos referencia de ningún hereje que haya desafiado el anatema eclesiástico contra la hipnosis y otros fenómenos. Por eso, si queremos trazar con cierta continuidad el desarrollo histórico de las investigaciones científicas sobre hipnosis, debemos remontarnos a las postrimerías del siglo XVIII, época del llamado magnetismo animal la cual veremos cuando nos refiramos a la hipnosis clásica durante el periodo de esplendor. El hecho político que caracteriza a esta época de la Edad Media es la penetración e injerencia de la iglesia en todas las esferas, tanto socioeconómicas como de otra índole, en su forma más cruda de inquisición. En Europa, luego de la caída del imperio grecorromano, se reactiva el fenómeno demonológico, según el cual el hombre se convertía en el campo de batalla donde demonios y espíritus luchaban denodadamente por la posesión de su alma. Son típicos de esta etapa las denominadas crisis colectivas, consistentes en verdaderas epidemias de brincos, danzas, gritos y contorsiones, entre las que se citan como famosas las epidemias de brincos, danzas, gritos y contorsiones, entre las que se citan como famosas las ocurridas en Italia, llamadas "tarantismos", que no eran más que ataques de histeria multitudinarios. Solían producirse generalmente en verano, cuando - según Segeret (3) - una gran parte de la gente dormida saltaba de pronto al sentir una picada de abeja o dolor. Unos veían una araña y otros no, pero se imponía una especie de visión de que el arácnido estaba allí y se desencadenaban frenéticas carreras hacia la calle para comenzar a danzar con pasos excitantes, que daban lugar a un proceso de sumación. Todos los que estimaban haber sido picados en esa ocasión o en otras anteriores, bailaban, se contorsionaban e incluso hasta cavaban huecos en la tierra y se revolcaban en el lodo como cerdos para evitar o librarse de la acción de la tarántula. Tal era el nivel de enajenación que muchos buscaban látigos para flagelarse. Lo más importante de este fenómeno estaba dado, sin duda alguna, en el hecho de que ser víctima de esa picadura permitía liberar tendencias reprimidas sin que la persona se considerara o fuera vista por los demás como malvado. Véase aquí importantes elementos de sugestión, que conducían a un sujeto o grupo de ellos a situaciones de éxtasis rompiendo con su conducta normal, pero también a la liberación de energías
comúnmente refrenadas. Este es el contexto preciso para hacer alusión a una escuela psicológica que por medio de la hipnosis trataba de eximir tendencias que energéticamente provocaban conflictos generadores de neurosis (La hipnocatarsis de Breuer y Freud). Durante la última parte del siglo XV, las creencias sobre la acción del Demonio tomaron un mayor auge, lo cual trajo aparejado consecuencias tristes y dolorosas para la historia de la humanidad, pues se conoce perfectamente que invocar al Diablo como dueño y señor del alma en plena Edad Media, significaba condenar a los más terribles sufrimientos a aquellos seres humanos que no pasaban de ser, por lo general, simples enfermos mentales. Por fortuna, dignas voces como las de Paracelso, John Weyer, Reginal Scarlet y San Vicente de Paul se alzaron desde valientes posiciones para mostrar lo dogmático de las doctrinas demonológicas, que incluso habían sido inspiradas y oficializadas por el Papa Inocencio VII, quien en su bula "Sumnis desiderantes" (3) exhortó en 1238 al clero a identificar a todos los brujos. Estos ilustres personajes trillaron el camino hacia nuevas concepciones, que socavaron el orden medieval y en cuya empresa se vieron apoyados por fuertes movimientos como el racionalismo y humanismo, el desenvolvimiento de las ciencias naturales y el proceso de la Reforma religiosa. Todo ello propició que la psicología y la Medicina experimentaran no sólo un desarrollo creciente, sino que modificaran sus postulados en pro de un conocimiento más integral de los fenómenos que abordaban. La hipnosis como objeto de estudio de ambas ciencias, no escapó a esta suerte de progreso y pudo avanzar considerablemente como teoría y método desde finales del siglo XVIII hasta imponerse con todo su esplendor a partir de la siguiente centuria. LA HIPNOSIS CLÁSICA DURANTE EL PERÍODO DE ESPLENDOR. LAS ESCUELAS FRANCESAS Y RUSA. ESCUELAS FRANCESAS. Ya a finales del siglo XVIII, el hipnotismo que hasta entonces se conocía como un fenómeno rodeado de misterio, comenzó a ser visto como un proceso distinto, y en ello intervino decisivamente el Doctor Mesmer, médico austriaco que con el uso de la hipnosis como método terapéutico, obtuvo reconocidos éxitos en la curación de diversas enfermedades de carácter psíquico, primero en Viena y luego en Francia. Con este proceder, denominado "Magnetismo animal" (2) por su propio autor - a pesar de que tuvo acérrimos opositores, sobre todo entre altos dignatarios de la Academia Francesa de Ciencias, profesores de la Escuela de Medicina y autoridades de la Real Sociedad de Medicina, quienes cuestionaron severamente sus procedimientos y los conceptuaron como anticientíficos - logró espectaculares demostraciones que sirvieron para estimular las prácticas del hipnotismo y su extensión a otras muchas regiones europeas, donde cautivó y asombró a numerosos investigadores de las Ciencias Médicas. Un ejemplo concreto es el del cirujano escocés James Braid (1795 - 1861), quien apoyado en elementos estructurados con mayor cientificidad, empleó por primera vez el término hipnotismo como sistema; aunque ya Henin de Curvilliers se había referido a ello, aunque muy vagamente (4). Para Braid, la hipnosis representaba un sueño particular, es decir nervioso, de naturaleza neurofisiológica y ligado en gran parte a la fijación de la mirada y al factor psicológico. Según él se trataba de un estado de concentración mental o de abstracción psicológica, en el cual las facultades espirituales eran completamente absorbidas por una única idea o por una serie de pensamientos que en el momento mismo del trance hipnótico se tornaban estables e inconmovibles y, por ende se independizaban o se hacían indiferentes a otras influencias externas.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Primera parte.6
Su gran mérito, además de haber concebido la hipnosis como se considera actualmente, fue mostrar que los conceptos de Mesmer seguían siendo válidos a la luz de nuevas interpretaciones, tales como su explicación por medios fisiológicos. Con estos elementos, sus limitaciones quedaban superadas. Mesmer se convirtió en el pionero de un movimiento científico que ganaría muchos adeptos y que a partir de entonces entraría a formar parte del sistema de las Ciencias Médicas. Según Mesmer era preciso establecer una relación médico paciente sobre la base de una espera cuidadosamente organizada, preconceptualizada y pensada, en la que el tacto revestía suma importancia, pues a través de ese contacto se producía el magnetismo, dado que el ser humano emitía un fluido muy peculiar que generaba las manifestaciones aparecidas en ese contexto (crisis psicomotoras, estadios de sueño y pérdida de la conciencia). Primero Mesmer, luego Braid y más tarde una avalancha de connotadas personalidades, entre ellas Charcot y Berheim, desarrollaron interesantes controversias para interpretar, conceptuar y aplicar la hipnosis; Ellos serían los factores exponenciales supremos de las dos escuelas de hipnosis clásica más famosas en Francia: la de Salpetriére y Nancy, respectivamente.
ETAPA DEL MAGNETISMO ANIMAL. El fenómeno de la hipnosis aunque es conocido desde la Antigüedad, como se refiere anteriormente, donde su explicación estuvo siempre envuelta en un halo de misterio permeado por las prácticas místicas y mágicas de los pueblos antiguos. Se puede precisar que el primer antecedente que abre a la hipnosis como objeto de estudio e investigación científica es la aparición a mediados del siglo XVIII de Mesmer quien formula su “Teoría del Magnetismo Animal”. Este conocido médico vienés Franz Anton Mesmer (1734-1815) quien introdujo esta teoría, también llamada técnica del magnetismo animal la cual tiene sus antecedentes y surge por la influencia de las curaciones magnéticas de Paracelso y de Van Helmont, la filosofía de Fludd sobre el magnetismo y los planteamientos de Digby sobre magia y astrología. Uno de los precursores de la teoría mesmeriana fue Empédocles (483-422 a.C.), quien consideraba que dos fuerzas opuestas, la de atracción y la de repulsión (el amor y el odio) constituyen la fuerza de sostén del universo. Existe también la posibilidad de cierta influencia del fraile Atanasio Kircher, contemporáneo de Mesmer, que expone la importancia de las fuerzas de atracción y repulsión que emanan de la piedra imán. Pudieran tener valor como influencia indirecta los planteamientos del médico inglés Sydenham, el cual consideraba que las convulsiones y alteraciones de las funciones orgánicas se debían a espíritus animales- que se acumulaban en cierta parte del cuerpo y que se desplazaban por el mismo, según fuera la naturaleza de la enfermedad existente. En general, Mesmer tenía una visión permeada por los aspectos románticos y extravagantes de la cultura de su época. Consideraba al universo formado por un principio cósmico y constituido por una fuerza de unión que influía en todo lo existente del cielo y la tierra. Es decir, que mantenía el criterio de que el flujo y reflujo de las mareas eran gobernados por los cuerpos celestes y que al mismo tiempo tenían gran peso sobre los seres humanos y sobre todo lo que existía en el mundo, fuera viviente o no. Mesmer recibió una comunicación de un jesuita, el sacerdote Hell donde éste le escribía acerca de ciertos efectos curativos que había logrado por medio de la piedra imán. Esto creó marcado interés en Mesmer y rápidamente se puso a realizar investigaciones, comprobando que HeIl estaba
equivocado, pues el principio no se limitaba sólo a la piedra imán, sino que dichos fluidos tenían la propiedad de poder ser trasladados desde el imán a cualquier otro objeto animado o no, con sólo ser tocado por el magnetizador. De aquí surge su fluido misterioso al que llamó «magnetismo animal y que emanaba de todo ser vivo. Él consideraba este fluido muy similar al eléctrico. La modificación que realizó Mesmer de los planteamientos del padre Hell no superó en nada el verdadero origen del problema y se convirtió en un mito, como los supuestos poderes sobrehumanos de los sacerdotes-brujos. Mesmer comenzó sus investigaciones en la Universidad de Viena y se acompañaba de las limitaciones dadas por la falta de recursos y por el pobre desarrollo científico de la época, de las cuales Mesmer no se apartó, pues siguió la línea del pensamiento de sus contemporáneos. Planteaba que el magnetismo animal era una fuerza misteriosa que podía emplearse para propósitos curativos y que permitía almacenarse, aunque no era posible medirla, y que sólo se demostraba a través de sus efectos. Como base de su teoría consideraba que no eran solamente los planetas, estrellas y astros los que podían ejercer influencia sobre los seres vivos (magnetismo planetario), sino que existían una serie de poderes que se encontraban en el éter que podían ser trasladados en forma de fluidos y tenían una importancia vital para los hombres y animales. Admitía la posibilidad de trasmitir el fluido por la vía animal-animal, hombre-hombre, hombre- animal y viceversa. Mesmer estableció en sus investigaciones una serie de principios y proposiciones para fundamentar sus teorías, algunos de los cuales exponemos a continuación; Mesmer escribió: -
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Existe una influencia mutua entre los cuerpos celestes, la tierra y los cuerpos animales. El medio de esta influencia es un fluido continuo y universalmente distribuido, exento por completo de vacío y con una naturaleza incomparablemente enrarecida, y que por sus características es capaz de recibir, trasmitir y comunicar todas las impresiones de movimiento. La acción recíproca viene subordinada a leyes mecánicas que hasta este momento se desconocían. Las propiedades de la materia y del cuerpo orgánico dependen de su operación. Según se manifiestan en el cuerpo humano, existen propiedades similares a las del imán; en analogía con esto, son distinguibles polos diferentes y opuestos que pueden intercambiarse, comunicarse, destruirse y reforzarse, incluso se observa el fenómeno de la inclinación. La propiedad del cuerpo animal que se halla bajo la influencia de los cuerpos celestes y la acción recíproca de los que le rodean, como demuestra su analogía con el imán, es lo que se ha denominado magnetismo animal. La acción y propiedades del magnetismo animal así definido, pueden ser comunicadas a otros cuerpos animados o inanimados. Ambas clases de cuerpos son más o menos sensibles al mismo. Esta acción y propiedades pueden ser reforzadas y propagadas por los mismos cuerpos. Los experimentos muestran el paso de una sustancia, cuya naturaleza enrarecida le posibilita penetrar en todos los cuerpos, sin una pérdida apreciable de actividad. Su acción se ejerce a distancia, sin la ayuda de un cuerpo intermediario. No todos los cuerpos animados son igualmente sensibles; existen algunos, aunque muy pocos, cuyas propiedades son tan opuestas que su simple presencia destruye todos los efectos del magnetismo en otros cuerpos. Dando a conocer este método, mostraré, mediante una nueva teoría de las enfermedades, la utilidad universal del principio que empleo en ella. En resumen, esta doctrina permitirá al médico determinar el estado de salud de cada individuo y librarlo de las enfermedades. El arte de curar alcanza así su estado final de perfección. Los estudios realizados durante doce años me han proporcionado la seguridad absoluta de todas estas afirmaciones. Me doy cuenta perfectamente de que, comparado con los principios y conocimientos establecidos desde la Antigüedad, mi sistema puede tener tanta parte de ilusión como de verdad.
Éstos son algunos de los principios y proposiciones establecidos por Mesmer en su libro Mémoire sur la découverte du magnétisme animal (1774), que reflejan las influencias de estudios anteriores y que lo llevaron a construir su teoría del magnetismo animal.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Primera parte.7 EL MÉTODO DE MESMER. El método consistía en pases magnéticos que, según su creador, se formaban por movimientos de las manos prescritos cuidadosamente, que se unían a la sugestión (aunque él no utilizaba este término), dominaban al sujeto y producían las crisis magnéticas, que a la luz de los conocimientos actuales, constituyen solamente estados especiales de la hipnosis. Mesmer disertó en la Universidad de Viena en 1766 acerca de su teoría y esto creó cierto interés científico en ella. Es famoso el caso de la primera paciente atendida por Mesmer, una joven de 29 años que se registra con el nombre de Oesterline en los años 1773 y 1774. Mesmer aplicó imanes en el estómago y en las piernas de la paciente y se refiere que ésta sintió automáticamente en su interior corrientes dolorosas de una materia sutil, que después de varios intentos por adoptar una dirección, se dirigieron hacia la parte baja, es decir, hacia los genitales. La paciente padecía desde hacía varios años de crisis convulsivas, con dolores de cabeza, muelas y oídos, precedidos de delirios, con agresividad, vómitos y desmayos, que mejoraron considerablemente con el tratamiento. A partir de este caso, Mesmer consideró efectivo su método y comenzó su campaña para publicarlo y oficializarlo. En 1775 lo visita un médico inglés para testimoniar la efectividad de su tratamiento, pero no queda convencido del mismo y trata de persuadirlo para que no publicara su método ni los resultados obtenidos. Esto provocó una discusión que trajo como consecuencia la acusación por parte del inglés, de que Mesmer cometía un fraude deliberado. Posteriormente la joven Oesterline fue informada del ataque que el médico inglés hacía al doctor Mesmer y se vio comprometida, por lo que recayó en su anterior estado, pero complicado y agravado por una fiebre nerviosa. Mesmer continuó tratando a la paciente y en un par de semanas, según refiere se recuperó totalmente y hasta llegó a casarse y tener varios hijos. El segundo caso de Mesmer también le trajo complicaciones por las controversias y discusiones con sus críticos, las cuales culminaron con su salida de Austria en busca de un clima científico más favorable. Después que regresa a Viena, sus amigos le convencen y lleva a cabo el tratamiento de María Teresa de Paradis, de 18 años de edad, cuyos padres eran personas de mucho prestigio, incluso ella misma era muy conocida de la Emperatriz, quien le había asignado una pensión por encontrarse totalmente ciega desde que tenía cuatro años. Su diagnóstico era amaurosis completa, con convulsiones oculares (ceguera por neurosis histérica de conversión) acompañado de un cuadro melancólico, con obstrucciones en el bazo y el hígado, y en ocasiones presentaba crisis de excitación psicomotriz y delirios (crisis disociativa histérica).
El tratamiento de la paciente fue un éxito, pues rápidamente mejoró en el uso de la vista y desaparecieron las crisis de agresividad. Los padres, en agradecimiento, difundieron la noticia, y esto provoco que lo visitaran muchos personajes para convencerse de los resultados obtenidos; entre ellos se incluían los dos directores de la facultad de medicina y el Doctor Stoerk, quien había atendido durante 10 años a la paciente sin éxito alguno. El señor Paradis expresó su gratitud mediante escritos que se difundieron por toda Europa en los principales periódicos. Sin embargo, los enemigos no tardaron mucho en convencer a Paradis, por medio de las intrigas características del siglo XVIII, y éste le planteó a Mesmer retirar a su hija del tratamiento. Fue tanta la insistencia, que Mesmer se vio en la necesidad de aceptar la situación, pero durante una discusión con el padre le planteó la responsabilidad que implicaba llevarse a la muchacha, quien aún no estaba curada, y dijo que no contaran con él si ocurría algún problema. Coincidentemente la paciente estaba escuchando la conversación y recayó rápidamente en su cuadro psicopatológico, pero unido a crisis de vómitos y de excitación, desencadenadas por el sonido de campanas o cualquier otro ruido. Mesmer aceptó tratar de nuevo a la paciente poniendo como condición que los padres no podían visitar su casa. Al cabo de 15 días declaró que la paciente ya había recuperado su salud, pero los padres negaron esto, diciendo que estaba en iguales condiciones. De nuevo Mesmer abandona el país y se traslada a París, donde aumentó considerablemente su fama y comenzó con aplicaciones colectivas de magnetismo. Sentaba a los pacientes alrededor de una cubeta de madera llena de agua que él había magnetizado, y se acompañaba la sesión de música suave como fondo. Los ayudantes de Mesmer se situaban al lado de cada enfermo con unas varillas de hierro, que pasaban por el cuerpo de los pacientes, principalmente por las partes enfermas; esto provocaba fuertes crisis de temblores, sudoración, palpitaciones y convulsiones, espasmos de la región epigástrica, entre otros. Mesmer comenzaba entonces sus rituales. Se presentaba vestido con una túnica de color lila y le daba a sus sesiones un matiz de poderío sobrenatural. Es importante señalar que aquellas sesiones colectivas traían como consecuencia un aumento considerable de la sugestión; tanto es así, que un simple cambio de la tonalidad de la música interpretada al piano provocaba el desarrollo de fuertes crisis colectivas que de forma individual presentaba cada paciente; unos comenzaban a reír hasta caer totalmente relajados y extenuados, otros lloraban, algunos saltaban, pero siempre el final era un desplome total con manifestaciones de relajación profunda. Eran diversas las enfermedades que presentaban los sujetos atendidos por Mesmer, quien incluía en estas sesiones a pacientes que padecían de asma, cólicos, fiebres, corea, entre otras. Mesmer solicitó la creación de una comisión científica para darle validez al magnetismo animal. Esta comisión fue nombrada por la Academia Francesa de Ciencias y por mandato directo de Luis XVI, en marzo de 1784. Los integrantes eran miembros de la Academia de Ciencias y de la Facultad de Medicina, y se reforzó con cinco miembros de la Real Sociedad de Medicina. Entre los participantes estaban: Guillotin Lavoisier, Benjamín Franklin y otras famosas figuras de la época. Los resultados fueron desfavorables para Mesmer, pues la comisión declaró que lo que allí ocurría no tenía nada que ver con fluidos magnéticos, sino que era la imaginación y la fantasía de los pacientes lo que provocaba aquellas crisis. Vuelven de nuevo a caer en una situación crítica los métodos de Mesmer, que mostraban un fenómeno hasta entonces desconocido, pero argumentado con una teoría seudocientífica que
reflejaba conceptos mágicos y astrológicos de la época precedente, lo que trajo como consecuencia la prohibición absoluta del mesmerismo, incluso con penas de perder las licencias para ejercer, a toda persona que se relacionara, discutiera o practicara las teorías de Mesmer. El médico austriaco continuó sus investigaciones y creó una sociedad secreta, que llamó Sociedad de Armonía. Uno de sus miembros, Armand M. Chastenet, Marqués de Puységur (1751-1825), pone, énfasis en la inducción del sueño y lo considera como un sonambulismo artificial. El Marqués de Puységur es quien descubre el fenómeno del sonambulismo provocado y de la amnesia posthipnótica, y fue el primero en sugerir a sus pacientes paz, reposo, ausencia de dolor y sensación de bienestar. Los pacientes de Puységur no presentaban las crisis espectaculares y convulsivas de los pacientes de Mesmer, sino que pasaban a un estado de sonambulismo donde las sugestiones del magnetizador creaban gran efecto. En su método también se utilizaban pases pero en realidad le dio un impulso científico al hipnotismo.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Primera parte.8 Los casos estudiados por el Marqués de Puységur manifestaban la posibilidad de realizar telepatía y clarividencia durante la hipnosis, Diagnosticaban sus enfermedades, las de otros y decían el momento exacto de su curación. Se atribuían al estado sonambúlico capacidades para responder a distancia a la voluntad del hipnotizador y de poder ver con los dedos de las manos y de los pies. Como es lógico suponer, estos planteamientos escandalizaron a los científicos y desprestigiaron el magnetismo animal. Puységur se apartó de su profesor Mesmer, negó la existencia de los factores magnéticos y dijo que eran la fe y la voluntad las que provocaban los estados de trance hipnótico. Después de hacer estos planteamientos, Puységur entró abiertamente en contradicción con el creador de] magnetismo animal, quien consideraba lo declarado por el Marqués de Puységur como el descubrimiento de una modalidad de magnetismo animal a la que llamó sonambulismo artificial. Mesmer planteó indignado que el magnetismo animal es independiente del mediumnismo, que da la posibilidad de ser explotados por charlatanes. IMPORTANCIA HISTÓRICA DEL MAGNETISMO ANIMAL. La importancia histórica que tiene la famosa teoría del magnetismo animal es que con ella aparece la sugestión como recurso psicoterapéutico, la cual es hoy una de las formas más importantes de tratamiento, principalmente para las neurosis. Mesmer abrió con sus estudios el camino de la psicoterapia y apartándonos de los errores de su teoría de los flujos magnéticos, se le debe reconocer el mérito de ser el primero que trabajó con las técnicas sugestivas, aunque realmente él mismo desconocía que la sugestión era la explicación de lo que llamaba magnetismo animal. El resultado del informe de la Comisión de la Academia Francesa de Ciencias frenó en parte las investigaciones que se efectuaban, no se les dio importancia ni se tomaron en consideración los fenómenos biológicos y psicológicos que podían obtenerse en 60% de las personas por medio del magnetismo animal.
A Mesmer le corresponde el honor de haber contribuido, aunque con bases teóricas erróneas, al desarrollo del psicoanálisis y de la terapia psicosomática. ETAPA DEL ABATE FARÍA. En el año 1814, el abate José Custodio de Faría (1755-1819), portugués que vivió mucho tiempo en Goa, colonia lusitana en la India, trajo a París alguna información sobre hipnotismo, tal como se practicaba en el Oriente. Sus escritos aparecieron publicados a partir del año 1819 bajo el título (De la cause du sommeil lucide ou étude de la natura de l' homme). Faría no aceptaba la concepción de Mesmer sobre el magnetismo animal y desechó el valor de los fluidos, por lo tanto, explicó estos fenómenos como efectos provocados por causas psíquicas y no como consecuencias de un fluido magnético. El abate Faría estaba matizado por su preparación teológica, así como por ideas tomistas y neoplatónicas, pues consideraba que el despliegue de memoria que hacían sus pacientes se debía a que se hallaban libres de las percepciones ordinarias y engañosas de los sentidos, desarrollando una capacidad compensatoria para recobrar lo que él llamaba (las facultades perdidas del alma). Sus concepciones implicaban un retorno a la antigua y clásica tradición religiosa, que tenia gran importancia en aquella época. Puede ser considerado como el precursor de la moderna técnica hipnótica, por haber sido el primero en intentar una interpretación de los fenómenos hipnológicos, lo que motivó el abandono de las prácticas mágicas. Faría rechazó las teorías en boga, no creía en el fluido ni en el poder de la voluntad. Proclamó la naturaleza subjetiva de los fenómenos magnéticos, a la que adjudicó la causa del sueño lúcido (la hipnosis). Enfatizó que el sonambulismo dependía del propio individuo y no del operador. Introdujo el empleo de lo que hoy conocemos por signo-señal que permite repetir de manera instantánea, sin necesidad de pasar por todos los pasos de la hipnosis, un estado hipnótico especifico en toda persona que ya hubiera sido hipnotizada. También observó los fenómenos de las sugestiones posthipnóticas, la autosugestión y las alteraciones de la personalidad. Faría llamó al hipnotizador concentrateur y al estado hipnótico concentration o sommeil Iucide. EL MÉTODO DEL ABATE FARÍA. Su método hipnótico, que aún es usado por muchos especialistas, consistía en sentarse frente al sujeto, mirándolo fijamente o haciendo que éste fijara su mirada sobre su propia mano, con posterioridad, le gritaba enérgicamente una orden heterosugestiva: ¡Duerma!. Fue el precursor de los ulteriores métodos de fascinación y de sugestión verbal. Según se constata en los datos reportados, el 40% de los sujetos entraban en sueño hipnótico después de la orden. Faría empleaba esta técnica terapéutica en demostraciones teatrales. Esto constituye una yatrogenia, pues creaba angustia en los pacientes y mucho más cuando se enteraban de que habían sido observados por el público. Realizaba infinidad de actos teatrales, podemos citar un ejemplo: en oportunidades le daba de beber agua a un paciente hipnotizado y le sugería que era vino; esto embriagaba al sujeto. Otro de sus métodos consistía en la fijación de la mirada con movimientos similares a los utilizados por Mesmer con su mano.
Faría lograba un control absoluto sobre los hipnotizados y decía que podía hacer sentir enfermos a los sujetos sanos y a los enfermos, saludables. Murió en 1819, a consecuencia de una enfermedad tropical. Partiendo de los trabajos de Faría, sus amigos el general Noiset y el eminente galeno Alexandre J. F. Bertrand crearon las bases de lo que hoy se conoce como narcohipnosis. El método de Noiset y Bertrand consistía en trabajar al paciente en una fase de sueño natural, comenzaban a impartirle órdenes a cierta distancia, se acercaban cautelosamente y dándole pases magnéticos, lo llevaban al sueño magnético. En este método existía un error teórico práctico y es que los llamados pases magnéticos eran decorativos, pues solamente con el uso de la palabra se puede hacer que un sujeto pase del sueño fisiológico al sueño hipnótico. Los trabajos experimentales de Noiset y Bertrand basados en el magnetismo animal estimularon a otros científicos de prestigio y gran experiencia, entre ellos el Barón de Potet de Sennevu, Récamier, Cloquet, Oudet y el médico parisiense Foissac, el cual logró que se nombrase una comisión de la Sección Médica de la Real Academia Francesa de Ciencias, en 1826, para que examinara el fenómeno del magnetismo animal. La comisión trabajó con intensidad durante seis años, llegando a conclusión de que efectivamente, los seres humanos y los animales podían ser magnetizados. El informe fue brindado por Henri M. Husson, quien se manifestó favorable al magnetismo.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Primera parte.9 En años posteriores existían todavía opositores al magnetismo y aprovecharon que un joven hipnotizador llamado Berna propuso a la Sección Médica de la Academia nuevas pruebas para consolidar lo verdadero del magnetismo. Berna aseguraba que era capaz de producir mediante el magnetismo fenómenos de clarividencia, telepatía, precognición, entre otros, y el interés de la comisión se dirigió ante todo a comprobar la existencia de percepción extrasensorial en el sonambulismo. La Academia Francesa se reunió y llegó a la conclusión desfavorable de que el magnetismo humano y animal era un procedimiento sobrenatural y declaró indigno interesarse en este asunto. La situación empeoró cuando un médico ofreció 3 000 francos a quien pudiera leer sin el auxilio de sus ojos o de la luz, hecho que Berna había declarado posible e incuestionable. Esto trajo como consecuencia que, en 1840, se anunciara oficialmente por la Academia Francesa de Ciencias la prohibición de utilizar el magnetismo por los miembros de la misma, así como los comentario y experimentos al respecto, lo cual estancó extraordinariamente las investigaciones sobre el llamado magnetismo y frenó su desarrollo, no sólo en Francia, sino también en gran parte de Europa. Otros investigadores continuaron trabajando, principalmente en Alemania, Dinamarca, Rusia, Hungría, Italia y Norteamérica. Aparecen publicaciones de la Universidad de Leipzig en 1816 y 1826, así como de la Universidad de Berlín, también en 1826. Esto facilitó que se continuara estudiando la hipnosis en países que no se vieron afectados por la resolución de la Real Academia Francesa de Ciencias.
ETAPA DE JAMES BRAlD. En la Inglaterra de 1841 James Braid (1795-1860), médico educado en Edimburgo y que trabajaba en una compañía minera como cirujano-oftalmólogo, asiste a las sesiones de magnetismo realizadas por el famoso magnetizador Charles Lafontaine, quien realizó exhibiciones del 13 al 18 de noviembre de ese año con una conceptualización más aproximada a una base científica. Al principio Braid afirmaba que los hechos reportados por el magnetismo eran falsos, pero, persuadido por las prácticas que presenció, desarrolla una teoría que plantea que los fenómenos observados dependen exclusivamente del propio paciente, es decir, del resultado de la fijación prolongada de la mirada. Braid tiene el mérito de ser el primero en utilizar en sus trabajos la terminología técnica de la hipnosis tal como se emplea actualmente, es decir, con una significación neurofisiológica; habló de la neurohipnología y del neurohipnotismo, aunque el prefijo de ambos términos cayó rápidamente en desuso. Su aporte facilitó que reapareciera en Francia el antiguo mesmerismo, cubierto con una nueva concepción y una base racional más fácilmente aceptable para los científicos. Los trabajos de Braid demostraron de modo concluyente la inexistencia del magnetismo animal de Mesmer y su método permitió establecer que todos los fenómenos espectaculares del mesmerismo se podían producir por muchos fisiológicos, tales como la fatiga de los músculos oculares y de los párpados. Dentro de sus objetivos estaba demostrar que la incapacidad del paciente para abrir los ojos se debía a una parálisis producida por el agotamiento del músculo elevador del párpado, cuando se fijaba la mirada. En las investigaciones de Braid, éste constató que durante la fase de inducción del sueño aparecía un pequeño temblor en los párpados, que culminaba con un giro en los globos oculares hacia arriba, acompañado de una relajación total de la musculatura estriada. El aporte fundamental de Braid fue la agrupación, bajo el término de hipnosis de los sueños magnéticos inducidos de los tiempos de Mesmer. Braid llamó hipnosis al estado de sueño artificial que se obtiene por medio de la fijación de la mirada sobre un punto brillante. Sus primeros experimentos consistieron en solicitar a los pacientes que miraran fijamente el extremo superior de una botella de vino colocada frente a ellos, en una posición tal que los obligaba a realizar gran esfuerzo con los párpados. Esto le permitió observar que en un intervalo aproximado de tres minutos los párpados se cerraban y aparecían lágrimas, la cabeza se inclinaba y los pacientes caían en un sueño profundo, al mismo tiempo que la respiración se volvía cada vez más lenta y profunda, apareciendo en los brazos ligeros movimientos convulsivos. Braid explicaba que, en este experimento no sólo demuestra lo que esperaba, sino que además le llamó la atención el estado espasmódico de los músculos de la cara y de los brazos, así como el estado peculiar de la respiración y el estado mental según se evidencia al despertar el paciente, lo cual tiende a demostrarle que había encontrado la clave para la solución del mesmerismo. Sus descubrimientos desplazaron rápidamente la teoría del fluido magnético, pues la suya permitió desarrollar un método técnico y científico simple que facilitaba inducir la hipnosis.
EL MÉTODO DE BRAID. El método de Braid se perfeccionó y consistía en presentar un objeto brillante luminoso que podía ser un prisma, una bola de cristal, entre otros, ante los ojos del sujeto, un poco por arriba de la base de la nariz, al nivel de la frente. La fijación de la mirada en estos objetos traía como consecuencia cansancio en los músculos elevadores de los párpados, en un tiempo.más o menos corto, que obligaba a cerrar los ojos por el parpadeo y la fatiga ocular y que inducía el sueño. Los resultados a que se llegaba por este método aportaban una explicación científica y racional, que despojaba las suposiciones magnéticas de Mesmer, del porqué se alcanzaba el trance hipnótico, apoyándose en la orientación fisiológica de los colegas médicos de Braid. Sin embargo, se seguía desconfiando del hipnotismo a consecuencia de la trascendencia histórica de la época de Mesmer. Esto obligó a Braid a introducirse en el campo de la frenología, pues los frenólogos pretendían modificar características y conductas de los pacientes manipulando las pequeñas y grandes protuberancias del cráneo. Fueron tan importantes los descubrimientos de Braid y tan efectiva su técnica, que actualmente todos los métodos para hipnotizar que se basan en la fijación de la mirada se conocen como método de Braid. En Rusia, el eminente científico Iván Pávlov trabajó sobre los mecanismos fisiológicos de la hipnosis y sus investigaciones confirmaron la teoría de Braid.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Segunda parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Segunda parte Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
La hipnosis como anestesia según Braid Importancia histórica de Braid Escuela de hipnosis de parís o de la Salpetriére El método de Charcot Importancia histórica de la escuela de hipnosis de parís Primera escuela de hipnosis de Nancy El método de Bernheim El enfrentamiento entre las dos escuelas de hipnosis. Bernheim contra Charcot Etapas de la hipnosis Importancia histórica de la primera escuela de hipnosis de Nancy Freud y la hipnosis Segunda escuela de hipnosis de Nancy
El método de Coué Importancia histórica de la segunda escuela de hipnosis de Nancy Unificación de las escuelas de hipnosis La hipnosis clásica en el contexto de la reflexología rusa La escuela de hipnosis rusa. Pávlov su máximo exponente Etapa pavloviana
LA HIPNOSIS COMO ANESTESIA SEGÚN BRAID. Braid provocó un avance extraordinario en la hipnología, mucho más importante en aquella época en que aún no se conocían los anestésicos, pues descubrió que era posible producir anestesia por medio de la sugestión hipnótica, logrando estados alterados de conciencia. La necesidad y el poco desarrollo de la farmacología obligaron a la utilización de la hipnosis para provocar anestesia como un recurso técnico para la realización de intervenciones quirúrgicas. En Indeston, un amigo de Braid, Esdaile (1818 -1859), señaló la realización de miles de intervenciones quirúrgicas utilizando el hipnotismo de Braid. Se llegó a plantear que de un 80 a un 90% de los pacientes que podían ser hipnotizados tenían la posibilidad de llegar a un grado de insensibilidad completa. El desarrollo científico - técnico impulsó investigaciones que llevaron al descubrimiento del cloroformo, con el cual se lograba anestesiar con rapidez y seguridad en todos los casos en que se aplicara, independientemente de la sugestionabilidad del paciente, y esto trajo como.consecuencia que la hipnosis perdiera importancia. Braid utilizó el término hipnoscopio para designar al instrumento que empleaba para hipnotizar y que, como explicamos anteriormente, era cualquier objeto brillante. Una de las anécdotas sobre la eficacia del método se refiere a la hipnosis cataléptica producida en uno de los discípulos de Braid, mientras trabajaba en su laboratorio junto con un sirviente: ambos se pusieron a mirar fijamente un prisma de cristal y automáticamente quedaron hipnotizados. Braid se vio atacado por los seguidores de Mesmer y por otros científicos que trataban de desacreditar el valor de su método. Ejemplo de ello fue la disputa que tuvo con John Elliotson, prestigioso médico y profesor de Medicina en la Universidad de Londres, presidente de la Royal Medical Chirurgical Society y uno de los fundadores del University College Hospital, quien introdujo el estetoscopio en Inglaterra, mostró la importancia del ácido prúsico en el tratamiento de los vómitos y estableció métodos para el examen del corazón y los pulmones. Como se puede apreciar, era una figura relevante en la comunidad científica británica. Elliotson se dedicó desde 1837 hasta 1868, año en que murió, a practicar el magnetismo. El resultado de las grandes contradicciones entre Elliotson y Braid fue pérdidas morales, materiales y de posiciones, a causa de la defensa individual de sus puntos de vista. El magnetista Elliotson atacaba en su periódico Zoist a Braid y se refería a él con desprecio por utilizar un método que consideraba grosero. En realidad, si Elliotson y Braid se hubiesen puesto de acuerdo, el desarrollo del hipnotismo en Inglaterra hubiera sido completamente diferente, pues ambos gozaban de un gran prestigio científico. Sin embargo, como plantea el materialismo dialéctico, el avance y el desarrollo se establecen por las contradicciones, que permiten dar un salto cualitativo en la adquisición de nuevos conocimientos, de ahí que esta etapa se conozca como la etapa de apertura científica del magnetismo animal, según la denomina Grasset. IMPORTANCIA HISTÓRICA DE BRAID.
La gran contribución de Braid es haber agrupado bajo un término científico todos los fenómenos que aparecían en lo que erróneamente se llamaba magnetismo animal. Fue muy significativa en el desarrollo de la hipnosis la creación de su método de fijación de la mirada, que tiene gran efectividad y es utilizado actualmente por muchos hipnotistas, ya que en realidad la fijación de la mirada provoca cansancio y agotamiento de los músculos elevadores de los párpados, lo que conduce al sueño. Los descubrimientos de Braid motivado un desarrollo en la hipnosis y permitieron que saliera del campo mitológico y sobrenatural que hasta entonces la identificaba. Sus investigaciones y experimentos interesaron a figuras científicas como Ambroise Auguste LiébeauIt (1823 -1904), médico que gozaba de gran prestigio ejerciendo su profesión en Nancy. Liébeault se impresionó con los trabajos científicos de Braid y abrió un dispensario donde trataba gratuitamente por medio del hipnotismo. Estableció que los fenómenos de la hipnosis humana eran producto de la sugestión aplicada a una persona. Otros científicos que se motivaron con los trabajos de Braid fueron Charcot, que formó la Escuela de París, y Bernheim que fundó la Escuela de Nancy, y quienes a su vez prepararon el camino para los futuros experimentos e investigaciones sobre hipnosis. ESCUELA DE HIPNOSIS DE PARÍS O DE LA SALPETRIÉRE. La Escuela de Hipnosis de París fue creada por Jean Martin Charcot (1825 -1893), uno de los más distinguidos neurólogos del siglo XIX, profesor de anatomía patológica en la Facultad de Medicina de la Universidad de París, director de la célebre Clínica Neurológica de la Salpetriére, y por su colega Charles Richet, considerado como uno de los mejores médicos de su época y quien reconoció en la hipnosis un método de investigación psicológica. En 1878 Charcot dirigía sus investigaciones hacia la neurología y la neuropatología. Posteriormente dedicó todos sus esfuerzos al estudio de la histeria y de los fenómenos hipnóticos.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Segunda parte.2 Fueron numerosas las investigaciones realizadas en la Salpetriére; allí surgió el planteamiento de que la hipnosis pasaba por tres períodos o fases a los que Charcot llamó catalepsia, letargia y sonambulismo. Sus planteamientos iban dirigidos a demostrar que la hipnosis no era más que un estado especial de la histeria, producida de manera artificial, y que las tres fases de la hipnosis tenían su contrapartida en las manifestaciones histéricas; es decir, que la hipnosis era una neurosis histérica inducida artificialmente. La hipnosis dejaba de ser para la Escuela de París una influencia psíquica del hipnotizador, para convertirse única y exclusivamente en una peculiaridad somática de la persona hipnotizada. Esto trajo como consecuencia que se estableciera una especie de semejanza entre hipnosis e histeria, y se concibió como un estigma, como una tendencia excepcional para reaccionar. Aunque el desarrollo científico-técnico alcanzado a través de la historia demuestra que Charcot estaba equivocado, no es menos cierto que él mismo se esforzó y luchó por lograr respeto clínico hacia la histeria y la hipnosis. Charcot intentó establecer una relación entre los síntomas histéricos y una predisposición a los trastornos neuropatológicos, poniendo especial interés en destacar los factores hereditarios y constitucionales en la susceptibilidad, tanto a la histeria como a la hipnosis. Esto era la justificación
del porqué los seguidores de la Escuela de París se esforzaban en buscar en las personas hipnotizadas aquellos signos físicos que pudieran explicar los fenómenos de la hipnosis. EL MÉTODO DE CHARCOT. El método utilizado por Charcot consistía en la aplicación de un estímulo intenso que provocaba sobresalto y miedo, para crear una atracción de la atención y proseguir a continuación con la sugestión. Algunos hipnólogos, entre ellos Svengali, consideran esta técnica como la petrificación por miedo. En la clínica de Charcot, la hipnosis profunda era precipitada por un destello cegador y repentino de una lámpara de calcio, por la nota inesperada de un gran diapasón o por el sonido de un gong, con su efecto sugestivo sobre el sistema nervioso. Esta técnica provocaba que en los salones de la Salpetriére cayeran en catalepsia rígida numerosos pacientes. Otro de los métodos para hipnotizar utilizados por la Escuela de París era la aplicación del sonido monótono del tambor africano, para producir una hipnosis más profunda. La fama y el prestigio de Charcot provocaron que de todas partes del mundo llegaran discípulos para prepararse y estudiar con él, entre los que se encontraban, por mencionar algunos, Bernheim, quien se apartó por completo de sus concepciones y fundó más tarde la Escuela de Hipnosis de Nancy; el creador del psicoanálisis, Freud; Heidenheim, fisiólogo que se inclinó por la Escuela de París, y otros. Heidenheim elaboró la idea de la acción refleja por encima de la sugestión psíquica y reconoció la importancia de la aplicación de estímulos monótonos para producir la hipnosis; además introdujo la ayuda del sonido, utilizando el tictac de un reloj o de un metrónomo. Consideraba que los fenómenos producidos por la hipnosis se debían principalmente a cambios físicos musculares; es decir, que para él la hipnosis era como una hipnoeslepsia artificial. Otro de los discípulos de Charcot fue Joseph Babinski, neurólogo que también se decidió por la naturaleza histérica de los fenómenos hipnóticos. Le daba gran peso a la sugestión pura y simple y la consideraba, independiente de todo factor emotivo. Para Babinski, el hipnotismo era la vía para un estado psíquico determinado durante el cual el individuo podía recibir la sugestión de otros. Calificaba al hipnotismo y a la histeria como una especie de simulación en la mayor parte de los casos, y en los restantes, como un engaño recíproco de la persona hipnotizada y del hipnotizador. Creó la palabra pitiatismo, para llamar así a los fenómenos producidos en ambos, y que eran curables por medio de la persuasión. Babinski tenía concepciones organicistas sobre la histeria y la hipnosis, lo que dio lugar a profundas críticas de su teoría. No es posible considerar la sugestión de forma independiente de la emoción, y si aparecen crisis histéricas en una persona hipnotizada este es producto de que la persona ya era histérica antes de ser hipnotizada. Es sabido que los fenómenos producidos en los pacientes hipnotizados varían de acuerdo con cada sujeto y que se relacionan con la personalidad de base. Entre los alumnos más destacados de Charcot se encontraba Pierre Janet, que no tenía bien definida su posición y sus planteamientos eran algo confusos, pues no determinaban claramente las concepciones sobre le innato y lo adquirido. Janet identificaba específicamente la disociación como una debilidad psíquica dada a través de una predisposición innata o adquirida de forma psicoestigmática. En resumen, que la disociación era el rasgo primario de la histeria.
Charcot impulsó con sus investigaciones el desarrollo de la hipnosis creando interés y motivaciones en sus alumnos, aunque muchos de ellos se apartaron por completo de su teoría y fueron posteriormente sus más temibles rivales. Pero otros no se apartaron de él y consideraban la hipnosis como un estado normal cuya posibilidad estaba siempre conexa a un gran desequilibrio o una diátesis nerviosa. Según ese criterio, había que estar afligido por una sensibilidad mórbida para llegar a la hipnosis total. Charcot polemizó de forma tan cruda con su ex alumno y luego poderoso rival Hipólito Bernheim, que esas mutuas querellas cubrieron todas las crónicas de la época y alimentaron tanto las investigaciones como las pasiones (3). No es posible abordar esta problemática con profundidad sin exponer la obra de Bernheim, de la cual hablaremos más adelante, ni esclarecer por qué Paul Richer (1881) publicó El dogma de la Salpetriére y por qué Bernheim estuvo en desacuerdo con los tres estadios de la hipnosis: letargo, catalepsia y sonambulismo (dogma de Charcot). Hasta esa fecha, la histeria era privativa del sexo femenino, pero como bien afirma el Doctor Ramón de la Fuente Muñiz (3), también constituía un enigma para la medicina. Previamente, Jean Martín Charcot había establecido dos signos típicos de la histeria: su aparición y desaparición en forma caprichosa. La no ocurrencia de lesiones cerebrales, a pesar de su carácter reversible y de que se manifiesten a través del sistema nervioso sensorial, pues se producen de acuerdo con la imagen que el sujeto se ha formado de las diversas partes de su anatomía. En su plena dedicación a los trabajos de hipnotismo, Charcot comprobó igualmente que cuando se empleaba la hipnosis, los síntomas que por lo general acompañaban al cuadro histérico (rigidez, parálisis, sonambulismo, anestesia, entre otros) podían ser provocados premeditadamente con exactitud mediante esa técnica, pero también compensados hasta el punto de que la persona histérica retornaba a la normalidad o presentaba síntomas de otra naturaleza. En las últimas dos décadas del siglo XIX se destacaron hechos tan significativos como los anteriormente descritos, que permitieron a las ciencias médicas adentrarse en el estudio de un fenómeno tan importante como la histeria y solucionarlo exitosamente; sin embargo, su excesivo hurgamiento en esta problemática condujo a Charcot a un grave error metodológico, pues al tratar de comparar con sistematicidad los trances hipnóticos con las manifestaciones histéricas, tomó una senda equivocada que lo llevó inexorablemente a obviar las sutilezas del proceso hipnótico y a reducirlo de un modo bastante exagerado a la histeria, lo cual le condenó al aislamiento conceptual de otros científicos, que si bien habían sido sus seguidores y discípulos, decidieron entonces elaborar sus propias fundamentaciones teóricas y defender enfoques diferentes del problema. Para corroborar lo precedente expondremos algunas disensiones como las de Janet, Joseph Breuer, Sigmund Freud y Bernheim, entre otros.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Segunda parte.3 Pierre Janet (1859-1947) fue un alumno de Charcot, que se dedicó al estudio de la histeria con una nueva óptica, pues si bien su maestro investigó primordialmente los síntomas de carácter histérico el prestó una especial atención al estado mental de los enfermos y al sonambulismo, de donde se derivó su énfasis en la amnesia que aparecía cuando el sujeto despertaba de su estado sonambúlico. Para Janet, lo esencial era que en el trance sonambúlico, un sistema o grupo de ideas se liberaban del resto y regían la conducta de los individuos durante un tiempo. Casi siempre esas ideas emancipadas resultaban dolorosas o angustiantes para las personas e incluso les impedían lograr satisfacciones placenteras en la vida real, lo cual generaba en ellas todo un proceso de disociación; componente este esencial del cuadro histérico. Quizás sin proponérselo,
Janet llegó al centro de una de las variedades clínicas de la histeria, conocida hoy en día como histeria disociativa, pero no ahondó en el problema de la personalidad del sujeto y su relación con el síntoma; hecho que sí analizaron más tarde Breuer y Freud (3). Solamente un hombre de estatura científica tan descomunal como Sigmund Freud pudo eclipsar a Janet, y ésa fue la realidad, le eclipsó en el nivel de trascendencia. Janet concibió la hipnosis no como un sueño, sino como un modo inferior de funcionamiento de la psiquis y para demostrarlo la ensayó intensamente, colocándose en el centro de la teoría y la práctica del método, con lo cual marcó un hito importante en el desarrollo de la sugestión. Si bien Freud llegó a superar a Janet, este último le reprochó al primero que muchas de las ideas aplicadas por él y también sus medios, las había tomado de toda su producción científica. Aunque Janet no explicó nunca las causas de la disociación de la conciencia, sus trabajos tuvieron una gran relevancia, pues reforzaron el criterio de que la histeria podía producirse por sugestión. Finalmente, Janet adoptó las posiciones de la primera escuela de Nancy al asumir los postulados de Bernheim, justamente cuando reafirmaba la función preponderante de la sugestión. Otros alumnos de Charcot con renombre universal fueron Joseph Breuer (1842-1925) y Sigmund Freud (1856 -1939), quienes destacaron el papel de la personalidad del enfermo en su relación con el síntoma específico. En los años 1881-1882, Breuer trató en unión de Freud, mediante hipnosis, a una paciente que presentaba una gama de síntomas histéricos y lo más importante era que en la enferma reaparecían los síntomas suprimidos por sugestión, sin que expresara claramente en el trance hipnótico las circunstancias que originaban esas situaciones y que hacían aparecer el síntoma primario. Tanto Breuer como Freud llegaron a una conclusión: los síntomas estaban relacionados con sucesos o áreas conflictivas, y para poder eliminarlas, era preciso que se experimentara nuevamente el cuadro emocional que les había originado. Aquí estriba esencialmente la diferencia con las teorías francesas, específicamente con las de Janet, pues mientras él destacaba una situación disociable de ciertos recuerdos e ideas, Breuer y Freud recurrieron a la explicación dinámica de la relación de las tendencias de su personalidad (motivos, anhelos) con el síntoma como tal. Quizás pudiera pensarse que he cometido un error histórico metodológico al ubicar a Sigmund Freud y a Joseph Breuer en este capítulo de las escuelas francesas, pero lo cierto es que su actividad no estuvo al margen de ellas y que fue precisamente esa adhesión lo que sirvió de raíz o estímulo primigenio. En su libro Psicología del siglo XX, Edna Herdbreder (5) relata que para 1885 Freud comenzó a estudiar en París bajo la dirección de Charcot, quien era ya considerado la máxima autoridad europea en cuanto a tratamiento de desórdenes mentales. Esto hizo que Sigmund Freud llegara a familiarizarse con la hipnosis en mayor medida, pues ya tenía antecedentes al respecto por su trabajo en Viena. Conviene puntualizar que por la elevada ascendencia del profesor Jean Martín Charcot, sus métodos y postulados teóricos estaban ampliamente difundidos por Europa, de modo que ningún entendido en materias psiquiátrica y neurológica podía escapar a su fuerte influjo. Junto a Joseph Breuer, Freud había empleado en Viena la hipnosis conjuntamente con el método del "relato", preconizado por Breuer, que no era más que lo que hoy se conoce como catarsis y a través del cual se liberaba al sujeto hipnotizado de toda emoción reprimida, haciéndolo retrotraerse a las experiencias pasadas que subyacían en la base de su problema, puesto que ambos consideraban
que la experiencia originaria provocaba el trastorno emotivo y le impedían al paciente manifestarse de una manera normal; de ahí que la emoción, al hallar obstruidas las vías adecuadas para patentizarse, derivaba a otras conductas latentes en el nivel psicopatológico (5). Ello les condujo a un gran descubrimiento, pues describieron los síntomas de tipo convertivo, que devinieron un relevante aporte en el desarrollo de la teoría psicoanalítica. A su regreso a París, Freud volvió a asociarse con Breuer para seguir aplicando la hipnosis y el relato; sin embargo -recoge la autora- Sigmund observó que a pesar del éxito alcanzado en la supresión de los síntomas no se lograba en esencia la completa curación, pues muchos pacientes despedidos como curados, retornaban a menudo con otras manifestaciones clínicas. Freud estimaba que la causa específica seguía sin conocerse y que se mantenía a niveles demasiado profundo. Esta conclusión tan personal, tal vez compartida por su asociado Breuer, le hizo ver a la hipnosis como un medio inadecuado y superficial para encontrar el verdadero origen del proceso patológico. Freud (5) consideró que durante un trance hipnótico:
1. El paciente no se hallaba en poder de todas sus facultades, pues era más un fragmento 2. 3.
disociado que una persona íntegra. Que en el estado de sueño podía ignorar totalmente lo que había ocurrido durante el tratamiento y que ello dificultaría su concientización. Que era mejor entonces el relato, pues libremente el sujeto recordaba, cooperaba y permitía ser conducido hasta la fuente real de sus dificultades.
Todos estos elementos revistieron una importancia extraordinaria, por cuanto significaron el rompimiento de Freud con el mundo hipnótico que hasta ese momento no había tenido adversario de mayor relieve. Freud se convirtió simplemente en un opositor pasivo, pero serio, ya que su enorme prestigio como hombre de ciencias obligó a pensar en la posibilidad de lo cierto y creíble de su posición, que indefectiblemente llevó a todos sus seguidores, tanto ortodoxos como nuevos analistas, a defender lo que más tarde sería la teoría de psicoanálisis, con variados fundamentos que no entraré a detallar. Sigmund Freud debe haber tenido razones, partiendo de sus propias percepciones y valoraciones, para actuar como lo hizo; sin embargo, lo indudable es que nunca profundizó en la hipnosis, pues parece ser -a la luz de los conocimientos actuales- que no hurgó lo suficiente en la exploración hipnótica y que tampoco dejó orientaciones poshipnóticas precisas para reconocer los elementos causales después de abandonar el estado hipnótico y poder intervenir al respecto. Es de todos conocido que la psicología científica aboga por la no aplicación dogmática de un solo método de diagnóstico o terapéutico, ya que éste puede ser útil en una ocasión, pero no así en otra. Sin pretender restar importancia a este asertivo freudiano, pienso que él no tuvo tal vez toda la visión necesaria para ahondar en el hecho. Nada más lejos de mi intención que convertirme en un crítico de Freud, pues confieso que le admiro y comparto muchos de sus postulados; pero trato de definir nuestra posición que es un derecho que nos asiste de igual forma que otros tienen también que establecerla ante lo que hemos planteado.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Segunda parte.4
En la obra Psicoanálisis: la herida narcisista, de León Chertok e Isabelle Stenger (6), se aborda con delicadeza extraordinaria los errores clásicos de Freud y los psicoanalistas con respecto a la hipnosis provocado fundamentalmente por una ignorancia muy grande en cuanto a la profundidad de los métodos y resortes del hipnotismo, lo cual les llevó a realizar interpretaciones erróneas que el narcisismo propio de su teoría no les permitió ver, sobre todo lo valioso de este procedimiento como sistema; y aunque llegaron a establecer la teoría dinámica del análisis psicológico, donde hicieron muchos e importantes aportes que todavía mantienen una indiscutible vigencia, no es posible dejar de atribuirle ese yerro histórico que no empaña su trascendencia humana y científica, reconocida por varias generaciones. IMPORTANCIA HISTÓRICA DE LA ESCUELA DE HIPNOSIS DE PARÍS. Charcot fue, sin duda, una figura paradójica. Era un magnífico neurólogo y dedicó la mayor parte de sus estudios e investigaciones a la solución de un problema de gran significación: la histeria postraumática y su etiología física. Consideraba que las contradicciones que aparecían eran atribuibles a la experiencia mental del accidente y no precisamente al impacto físico del sistema nervioso. Sus aportes brindaron una sorprendente demostración de la psicopatogenia de la histeria, aunque en la actualidad se ha comprobado que en su teoría había innumerables errores. El prestigio científico que poseía mantuvo el interés por el hipnotismo al mismo tiempo que formó discípulos que contribuyeron grandemente al desarrollo científico de la hipnosis. Pero no es menos cierto que hacer de dicha técnica sinónimo de una entidad nosológica creó un ambiente de oposición a la utilización de la hipnosis. Los pacientes se negaban a ser hipnotizados para evitar que les pusieran la etiqueta de histéricos, y muchos médicos tampoco utilizaban la hipnosis para evitar que sus pacientes se sintieran diagnosticados como tales. Es decir, que la semejanza que estableció la Escuela de París, entre hipnosis e histeria, provocó recelo científico en cuanto a la utilización de esa técnica de tratamiento. Ha sido tan difundida esta conceptualización, que incluso actualmente algunos médicos y profesionales que no tienen una adecuada información, cuando se les habla de hipnosis se representan automáticamente la similitud con la histeria de la Escuela de la Salpetriére, llegando a considerar que son los histéricos los únicos hipnotizables. PRIMERA ESCUELA DE HIPNOSIS DE NANCY. Tuvo su más alto exponente en Hyppolyte Marie Bernheim (1837-1919), fue un eminente profesor de medicina de la Universidad de Nancy, en Estrasburgo, Francia, el cual acudió personalmente a verificar la curación que según Liébeault se habia producido en un paciente. Hyppolyte M. Bernheim se mostró muy interesado por el caso y comenzó rápidamente a trabajar con la hipnosis, formando la llamada Escuela de Nancy, que fue de vital importancia para el desarrollo científico del uso de la sugestión. Practicó intensamente la hipnosis y concluyó que el sueño natural o provocado no era indispensable para realizar el trance hipnótico, puesto que "toda idea sugerida tiende a convertirse en acto y no existe un estado especial, anormal, artificial o histérico que se pueda calificar de hipnosis; solo hay fenómenos de sugerencias exaltantes que pueden producirse en el sueño natural o provocado" (4). Si nos detenemos a pensar en las sugerencias exaltantes, nos percatamos de que se refieren a la sugestión de una manera inequívoca. Más adelante precisa: "El sueño exalta la sugestibilidad," y aduce dos razones: -
Porque aumenta la creencia de suprimir el razonamiento. Porque incrementa la fuerza ideodinámica por el predominio de facultades de la imaginación.
Éstos eran los elementos básicos que constituían para Berheim el mecanismo de la sugestión; para quien, además, estado hipnótico implicaba sugestión. Estimo que sin llegar a reducir la hipnosis a la sugestión él logró comprobar la función de ésta última en el desarrollo de la primera, como mecanismo a través del cual se produce el sueño hipnótico. Ya aquí hay una diferencia esencial con Charcot, pues mientras para este la hipnosis era un estado de histeria, para Bernheim representaba un estado de sugestión. De ahí que llegara a decir que sólo en la Salpetriére encasillaban a los sujetos sugestionables como histéricos. En realidad, Bernheim tenía razón, pues si bien a través del estudio de la histeria y con el empleo de la hipnosis pudieron identificarse ciertas particularidades del proceso histérico, es perfectamente observable y verificable que ésta puede aplicarse a personas normales para inculcarles determinadas características que nada tienen que ver con rasgos patológicos. EL MÉTODO DE BERNHEIM. El profesor estrasburgués no utilizaba ningún procedimiento técnico auxiliar; trataba de sugerir verbalmente al paciente que estaba entrando en sueño hipnótico, usando sólo la palabra. Consideraba que parte de lo que se puede hacer con las personas hipnotizadas está supeditado únicamente a la sugestión; es decir, que desde la preparación del paciente hasta los efectos posthipnóticos dependen de la misma. Estimaba la posibilidad de despertar recuerdos que al parecer estaban completamente borrados en el paciente. Esto demostraba que bajo la hipnosis la conciencia no está abolida, que la persona hipnotizada no obra como un autómata inconsciente, sino que ve, oye y sabe lo que hace. Su método consistía en poner al paciente sentado o tendido, indicándole como aspecto fundamental un relajamiento de la musculatura estriada y apartar de su espíritu todo temor o pensamiento desagradable. La mirada del hipnotizador se dirigía hacia los ojos del paciente, repitiéndole de manera algo imperativa que poco a poco experimentaría una especie de entorpecimiento que le haría sentir pesados sus párpados, bajo el influjo de la somnolencia, hasta llegar a sentir un deseo irresistible de dormir. La entrega de Bernheim al estudio y a la investigación le permitió que en un periodo de cuatro años acumulaba 5.000 casos, de los cuales hipnotizó a el 75%. Posteriormente llegó a tener 10 000 casos donde el 83% fueron hipnotizables. Ambroise Auguste Liébeault (1823-1904), médico asentado en Nancy, y Bernheim fueron los que en la Escuela de Nancy dieron a la hipnosis una teoría psicológica coherente. Liébeault puso énfasis en la importancia de la sugestión para producir sueño y planteó que la hipnosis y el sueño fisiológico eran similares. Según su tesis, el sueño hipnótico y el sueño fisiológico son producto de la retirada de la atención del paciente o de sus energías nerviosas y ambas presuponen su voluntad o consentimiento en dormirse. Bernheim, no contento con estudiar la sugestión hipnótica y su relación con el sueño, creó una metódica de sugestiones que consideraba como positivas y negativas con fines terapéuticos. Dentro de estas sugestiones se encontraba la sensación de bienestar o de desaparición de los síntomas. Él pretendía comprender a sus pacientes partiendo de las motivaciones de los mismos y del descubrimiento de fenómenos psicológicos provocados en estado hipnótico, principalmente en aquellos casos donde estaba presente la sugestión posthipnótica. Las investigaciones realizadas por los científicos de la Escuela de Nancy permitieron un salto cualitativo en el estudio de la hipnosis, lo que trajo como consecuencia la autorización para que
fuera incluida en la clínica general y neurológica como una forma oficial de tratamiento. Esto constituye para la hipnosis un reconocimiento y, por primera vez, una aceptación oficial de su uso, que hasta ese momento era, prácticamente un método prohibido o por lo menos de utilización clandestina.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Segunda parte.5 En 1884 Bernheim publicó un libro de gran importancia, De la suggestion dans l' état hipnotique et dans l' état de veille, en el que aparecía definida la sugestión en forma más precisa, hasta llegar al término de heterosugestión, el cual se emplea actualmente para definir el tipo de sugestión que se utiliza en la hipnosis humana. Bernheim definía la hipnosis como un estado especial, producido artificialmente y que ponía en estado exaltado en diversos grados la sugestibilidad, o sea, la actitud para sufrir el efecto de una idea y poder ejecutarla. Juzgaba que para que la sugestión hipnótica tuviera efecto y se pudiera trabajar con ella, era necesario que existiera en el paciente una disposición o receptividad cerebral, y afirmaba que en un elevado porcentaje de personas se podía encontrar esta condición, por lo que no era posible reducir la hipnosis a pacientes neuróticos e histéricos como sostenía Charcot, quien había sido su profesor y en aquel entonces era su colega, y que gozaba de gran autoridad en la materia, pues era la principal figura de la Escuela de París. Para Bernheim, el trance hipnótico no era más que un estado de sugestibilidad exaltada que puede producirse con sueño o sin él es decir, consideraba la sugestión como un acto por el cual una idea se introduce en el cerebro de los pacientes a través del receptor auditivo. A pesar de que él y Liébeault juntos en las investigaciones, existían algunas diferencias entre ellos. Para Liébeault, la sugestión era un fenómeno propio de los estados hipnóticos. Bernheim, en cambio, tenía una concepción más amplia y consideraba que la sugestión estaba presente también en estado de vigilia, pudiendo ser utilizada en el mismo. El desarrollo científico-técnico actual confirma que era Bernheim quien tenía la razón, pues la sugestión es la utilización de recursos psicológicos que pueden ser empleados en pacientes que se encuentran en vigilia, aunque no es menos cierto que el efecto es mucho mayor en estado hipnótico. La Escuela de Nancy, se oponía a la Escuela de París en las concepciones sobre la hipnosis. Charcot sostenía una teoría exclusivamente somática, que reducía la hipnosis a histeria y la consideraba como una forma de neurosis experimental, mientras que Bernheim consideraba la hipnosis como sugestión, lo que demuestra la superioridad científica de su teoría respecto a la de Charcot. EL ENFRENTAMIENTO ENTRE LAS DOS ESCUELAS DE HIPNOSIS. BERNHEIM CONTRA CHARCOT. Entre Charcot y Bernheim surgió una gran rivalidad. Por un lado estaba la Escuela de París, dirigida por Charcot con su personalidad prepotente, intransigente y dogmática. Se le enfrentaba la Escuela de Nancy, con Bernheim al frente, la cual en sus métodos sólo utilizaba la sugestión verbal, pues afirmaba que desde la preparación del paciente hasta los efectos posthipnóticos, todo el proceso dependía de la sugestión. Bernheim señalaba que nunca había sido capaz de provocar en sus pacientes hipnotizados las tres fases descritas por Charcot, y que sólo en una ocasión había podido observar en una paciente los periodos de catalepsia, letargia y sonambulismo y eso porque se trataba de una joven que había permanecido tres años en la Salpetriére. En opinión de Bernheim, ese caso se debía al
entrenamiento especial por medio de manipulaciones y por la imitación de los fenómenos que la joven había visto en otros individuos de la misma escuela. Según su interpretación, se producía la imitación con manifestación de fenómenos reflejos, en un determinado y típico orden, y eso ya no se trataba de hipnotismo natural, sino del producto del entrenamiento de una auténtica neurosis hipnótica sugestiva. La posición de Bernheim creó tanta indignación en Charcot, que éste prohibió que se hablara del asunto en la Salpetriére. Incluso, de sólo escuchar el nombre de la Escuela de Nancy, cambiaba su tono afectivo y se ponía furioso. De la controversia entre la Escuela de París, que manifestaba como factor decisivo en la hipnosis los reflejos somáticos, y la de Nancy, que afirmaba que el factor decisivo en la hipnosis era la sugestión psíquica, triunfó esta última escuela, que pudo convencer a la comunidad científica de que la gran variedad de manifestaciones que se producían, desde los trances y las crisis descritas por Mesmer, los estados sonambúlicos estudiados por Puységur y el abate Faría, hasta los tres períodos descritos por Charcot, eran provocados por la sugestión. En este histórico y clásico enfrentamiento debemos profundizar en los aspectos teóricos más importantes de cada uno de ellos. Primero: Charcot consideró que en la estructura de todo fenómeno hipnótico se incluían 3 elementos: a) Letargo. b) Catalepsia. c) Sonambulismo. Bernheim se opuso a esta formulación, pues según él todo lo observado por Charcot era una simple fábula, que no resultaba fácil -a pesar de que había hipnotizado a más de 5 000 sujetoshallar esa estructura y que si bien había podido corroborar ocasionalmente algún estado de letargo, catalepsia, sonambulismo o ambos, se había debido al previo condicionamiento que poseían algunos sujetos por haber pasado por la Clínica de la Salpetriére, donde adquirieron una cierta aptitud - actitud sugestiva. Segundo: Se estima que Bernheim tuvo un basamento tremendamente fuerte para sustentar sus ideas y muy sobradas razones para no reducir la histeria a un acto hipnótico, pero le faltó visión para comprender cuán real era la observación hecha por Charcot en cuanto a la estructura, pues aunque no siempre se llega a una fase sonambúlica o cataléptica, son estadios por los que puede pasar un individuo bajo hipnosis, según ésta sea profunda, intermedia o leve. Debe partirse del hecho de que este enfoque responde a los criterios de la hipnosis clásica en función del nivel de trance que se logre con el sujeto hipnotizado. Analicemos a continuación qué significan los tres estados postulados por Charcot: ETAPAS DE LA HIPNOSIS. El hipnotizador o el hipnólogo (si hablamos del terapeuta), no son personas que tengan un "poder" especial innato o adquirido para someter a su voluntad a otros. Simplemente aplican unas técnicas que llevan al inducido hasta el estado hipnótico. Ello sucede progresivamente pasando de un estado más ligero o trance superficial en el que el sujeto relaja la musculatura de su cuerpo en general: es el estado letárgico. Posteriormente, cuando la persona se relaja más y su cuerpo se abandona pudiendo llegar a un estado de rigidez total, en el que podemos por ejemplo, poner a la persona entre dos puntos de apoyo, como si fuera una tabla, llegamos al estado cataléptico o trance medio. Y finalmente, el trance más profundo que correspondería al estado sonambúlico en
el que el individuo es capaz de abrir los ojos sin salir del sueño hipnótico, aceptando todas las sugestiones que le imponga el hipnotizador. La hipnosis, considerada desde la teoría patológica de la Escuela de París, pasa por las tres etapas o períodos o estados siguientes postulados por Charcot:
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Segunda parte.6 1. Catalepsia. Se caracteriza por una disminución del tono muscular y la mirada posee una fijeza que constituye uno de los signos más característicos de este período, al igual que la inmovilidad. Los miembros conservan durante mucho tiempo las posturas más difíciles que se hayan indicado. Cuando se levanta al sujeto o se le cambia de sitio, no se observa ninguna resistencia. Son abolidos los reflejos tendinosos, no aparece hiperexcitabilidad neuromuscular ni flexibilidad cérea. Existe anestesia cutánea. En los diccionarios se define como un accidente morboso caracterizado por un estado de somnolencia profunda y prolongada, similar a un estado de modorra o sueño muy pesado e insensibilidad, que ocurre en el nivel primario, por cuanto los ojos permanecen cerrados o entreabiertos, con un estremecimiento continuo a nivel palpebral. La insensibilidad se interpreta como un estado analgésico que va in crescendo en la medida en que prosiguen las sugestiones. 2. Letargia. En este período aparecen los miembros en completo estado de flojedad o relajación muscular, obedecen a las leyes de la gravedad, y cuando se levantan y se sueltan caen pesadamente. Los ojos aparecen cerrados o entreabiertos, y en los párpados existe un estremecimiento continuo. Hay hiperexcitabilidad neuromuscular en diferentes grados, pues va de una zona determinada a otra; por ejemplo: de los miembros superiores él a toda la musculatura del cuerpo. Existe analgesia completa de la piel y de las membranas mucosas accesibles, y los aparatos sensoriales conservan cierto grado de actividad. Otros autores refieren que Implica el trance verdaderamente hipnótico en su estadio secundario. Es en esencia un accidente nervioso en el que se suspenden las sensaciones y se inmoviliza el cuerpo. Durante ese estado se manifiesta un cierto nivel de anestesia cutánea y aparecen las catalepsias ocular y de miembros, así como la rigidez cataléptica. Husband y David lo catalogan como el trance ligero de la hipnosis. 3. Sonambulismo. Ésta es la etapa más profunda. El paciente está en relación con el hipnotizador solamente, siente la voz del mismo muy distante y no escucha las voces de las demás personas ni el ruido más intenso que se pueda realizar a su lado. Los párpados aparecen bajos sobre los globos oculares y éstos se presentan convergentes y dirigidos hacia arriba. También es considerado como un sueño anormal -véase la influencia de Charcot y sus concepciones a la hora de categorizar un fenómeno: (sueño anormal = proceso patológico = histeria) - en el que se tiene cierta aptitud para ejecutar algunas funciones de la vida de relación externa, como la de levantarse, hablar, andar, sin que al despertarse pueda el sujeto acordarse de ello, es decir, de lo ocurrido. Evidentemente, para llegar a ello se impone como condición sine qua non un grado de hipnosis muy profundo, que equivale al máximo de sugestión y del mejor efecto deseado, durante el cual el sujeto ejecuta órdenes y acciones (con los ojos abiertos o cerrados) impuestas por el operador y se magnifica el nivel de comunicación entre operador e hipnotizado. Godín considera este fenómeno como una forma muy acabada de sugestión. Expresadas ya en niveles más o menos asequibles, cabría preguntarse entonces:
1. ¿Es cierto que esto ocurre? 2. Y si ocurre ¿por qué negarlo? 3. ¿Qué nivel de consistencia puede tenerse para afirmar su existencia?
Tres preguntas que de forma inexorable nos obligan a expresar una posición ante esta problemática. Trataremos de responderlas para aclarar nuestra opinión al respecto y puedan tener lugar las reflexiones de interpretación de este hecho. Respuesta Nº 1 Si, es cierto que ocurre, y constituye un momento deseado por todos en la hipnosis, poder demostrar que un sujeto es insensible, que se queda petrificado, rígido, que se mueve a designio del experimentador, que es capaz de cargar un objeto pesado y dejarse coser los labios, uniendo los superiores e inferiores, sin dolor alguno, sólo por efecto de la sugestión. Ésta es innegable. Respuesta Nº 2 Se negó en su tiempo y todavía se niega, a causa del encasillamiento rígido con los procesos patológicos (histeria) creado por Charcot, de donde se derivó una conducta prejuiciada hacia este último, de modo que Bernheim no pudo adentrarse en los fundamentos teóricos en la Escuela de París, por más que los desdeñó, al concebir como irreales aquellos fenómenos totalmente perceptibles. Para nosotros hay un asunto claro: la condición de escuelas enfrentadas las llevó a ser partícipes de un antagonismo estéril, puesto que se empecinaron en hacer valer la posición de cada una de las escuelas por encima de la otra; determinación muy dañina, porque jamás hubo canales de comunicación para comparar los planteamientos teóricos de cada movimiento y analizar los aspectos complementarios que, a mí juicio, existían entonces y existen ahora (9). Este enfrentamiento, como se verá más adelante, fue una de las causas fundamentales del debilitamiento de la hipnosis como sistema terapéutico y de su caída en desuso. Si para Bernheim la sugestión era un proceso psicológico con valor terapéutico, para Charcot tenía también un carácter similar, pues fue el primero en destacar que el fenómeno psicológico podía ser utilizado para el tratamiento de una enfermedad. Aquí es obvia la convergencia, tal vez no explícita, pero si común entre presuntos antagonistas. De ahí que hayan elementos válidos en ambas teorías, que conducen a un mismo objetivo. El esquema número 1 nos permite comprenderlo mejor. Todavía en la actualidad algunos niegan ciertos aspectos teóricos enunciados por Charcot, entre ellos los partidarios de la Nueva Hipnosis (Fundamentos que parten de la teoría desarrollada por Erickson). Veamos, por ejemplo, lo planteado por Godín (4): " Los practicantes de la hipnosis tradicional se interesan mucho por los estados de sonambulismo y los defensores de la Nueva Hipnosis quieren ignorar el fenómeno y, de hecho, no los encuentran (podemos observar si el sujeto lo cree)." Recientemente Weitzenhoffer pensó que los estados de sonambulismo podrían tener otra naturaleza que no fuera los estados de hipnosis común, y expresó (9): Personalmente no pienso que los estados de sonambulismo representan el estado incluso de la hipnosis, pero se trata, a decir verdad, de una forma acabada de sugestión. Los estados de sonambulismo -en mi opinión- sólo aparecen en ciertos contextos y en particular ellos llegan en el marco de una espera particular, lo que dicho de otro modo, es el resultado de ciertas actitudes de autoprogramación. Advierta cómo quizás, con sutiles diferencias, estos teóricos siguen reconociendo que el sonambulismo es:
1. Un estado que podía o puede tener una naturaleza diferente de la hipnosis. 2. Una forma acabada de sugestión. 3. El resultado de ciertas actitudes de autoprogramación.
De lo antes expuesto se desprende que: No siempre la hipnosis implica sonambulismo y no siempre este último es la manifestación de un proceso de alteración de la conciencia; más aún, que la hipnosis no constituye un estado de conciencia alterada. Es un fenómeno especial ligado a la sugestión, sin el cual no puede manifestarse. Se requieren ciertas actitudes para la hipnosis y mucho más para el sonambulismo. El sujeto se autocondiciona o se autoprograma, pero a un nivel actitudinal. La hipnosis representa una actitud especial.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Segunda parte.7 Esquema número 1. Convergencia de las teorías antagónicas de Bernheim y Charcot.
Respuesta Nº 3 El nivel de consistencia para afirmar que existe, se sustenta en el ejercicio constante, donde se verifican los hechos y los planteamientos teóricos.
Hace ya varios años que práctico la hipnosis y en muchos pacientes atendidos se le ha provocado estados de catalepsia, letargo y sonambulismo en función de los fines propuestos. Por ejemplo: a pacientes fóbicos les hemos conducido a situaciones tales como enfrentar el objeto promotor de la fobia para romperlo, matarlo y comerlo. Estos actos son de tipo sonambúlico más allá de toda duda cuestionable. En nuestras demostraciones casi siempre hemos logrado las tres fases para mostrar lo que puede conseguirse de un sujeto por medio de la sugestión. Recuerdo, haber promovido estados de rigidez o flacidez totales, sueño profundo con sólo abrir y cerrar los ojos, lecturas de textos, pláticas en otros idiomas, cantos, bailes, defensa personal de un amigo a manos limpias, sensación extrema de frió o calor, que evidentemente son fases de letargo, catalepsia y sonambulismo, de forma indistinta. Como conclusión histórica debemos decir que los presupuestos y acciones de la Primera Escuela de Nancy, triunfaron sobre la de la Salpetriére. IMPORTANCIA HISTÓRICA DE LA PRIMERA ESCUELA DE HIPNOSIS DE NANCY. Los aportes que realizaron Bernheim y sus colegas en la Escuela de Nancy a la hipnosis son extraordinarios. Solamente el haber demostrado que Charcot no tenía razón al plantear que la hipnosis y la histeria eran semejantes, facilitó un desarrollo, pues los médicos de la época no la querían utilizar para evitar que sus pacientes se ganaran el cuño de histéricos. No es posible hablar de la hipnosis como forma de tratamiento sin mencionar el aporte extraordinario que brindó Bernheim mediante sus trabajos significativos, así como la importancia de sus artículos y libros. FREUD Y LA HIPNOSIS. Sigmund Freud, en su condición de médico investigó la hipnosis en profundidad, siendo discípulo de las famosas escuelas de La Salpetriére con el Dr. Charcot y de la Escuela de Nancy, con el Dr. Bernheim. Al principio Freud utilizó la hipnosis para el tratamiento de la neurosis, pero posteriormente, confesándose un mal hipnotizador, lo abandonó entregándose a formular su teoría del Psicoanálisis. Sus puntos de vistas ya fueron abordados cuando nos referimos a los métodos y a los alumnos de Charcot. SEGUNDA ESCUELA DE HIPNOSIS DE NANCY. Entre sus máximos exponentes se encuentran Emile Coué (1857-1926) y Charles Boudim (18931963), pero le correspondió a Cue por una razón cronológica, ser su primer representante y la figura más influida por las concepciones de Liebeault y Berheim sobre la sugestión, aunque él hizo un marcado énfasis en la autosugestión, particularmente en las posibilidades que tenía el sujeto para autosugestionarse y autohipnotizarse. Decía al respecto:" A fin de cuentas, toda hipnosis es autosugestión, lo que es lo mismo que autohipnosis" (3). Emile Coué, nació en Troyes, fue farmacéutico e inicio los estudios de medicina pero no los pudo concluir por presentársele problemas cardiacos, con su labor no solo surge la Segunda Escuela de Hipnosis de Nancy sino también la Sociedad Francesa de Psicología Aplicada. Coué fue un estudioso de los métodos de Liébeault y Bernheim, sus investigaciones reflejaban estas influencias y, sin embargo, existían diferencias entre sus concepciones y las de la primera Escuela de Nancy. Para Bernheim, lo más importante de la hipnosis se centralizaba en la heterosugestión. En cambio, Coué le dio todo el peso a la autosugestión; consideraba que la sugestión no actuaba sobre la voluntad, sino sobre la imaginación. En el aspecto psicológico de sus prácticas hipnóticas,
estimaba que la imaginación era el elemento dominante del subconsciente, que a su vez influía, según su teoría, en todas las funciones del organismo. Sostenía que muchas veces la imaginación se opone a la voluntad, la cual no interviene, sino que permanece oculta en la sombra, excepto cuando es colocada al servicio de la imaginación. Aseguraba que cuando la voluntad y la imaginación entraban en contradicción, vencía siempre la última sin excepción. Estableció una fórmula que sostenía que entre la voluntad y la imaginación, la fuerza de esta última está en razón directa con el cuadrado de la voluntad; cuando la voluntad y la imaginación están de acuerdo, éstas no se suman, sino se multiplican entre sí. Las concepciones de Coué contemplaban la posibilidad de que la imaginación podía ser educada y estableció con tales argumentos las leyes conocidas por su nombre (Leyes de Coué). Coué definía el hipnotismo como la influencia de la imaginación sobre el ser psicológico y físico del hombre. Tomando en consideración sus planteamientos, se llega a la conclusión de que para él la hipnosis dependía de la relación con el hipnotizado y del modo en que éste asimilaba las sugestiones recibidas. Planteaba que la sugestión actúa sólo en caso de que se produzca autosugestión, la cual, para ser operante, debía actuar en estado consciente. Para Coué, la sugestión inducida por el operador debía ser continuada libremente por el individuo y por su propia cuenta, y señalaba que no todas las personas tienen la capacidad de lograrla. Llegó a la conclusión de que existen dos tipos de categorías humanas: los deficientes, incapaces de comprender, y los resistentes, que no quieren comprender. Su posición era reduccionista, al tratar de clasificar a la humanidad en dos simples categorías que están en función de la comprensión. Por su parte, Boudim aportó el criterio del inconsciente positivo, según el cual "bajo estado hipnótico el sujeto asume actitudes inconscientes, que son, en esencia, un todo estructuralmente organizado que permite actuar inteligentemente en función de lograr un objetivo" (5).
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Segunda parte.8 Estos autores tuvieron una importancia capital, pues con sus postulados sentaron las bases para desarrollar métodos y enfoques teóricos que mantienen, por su connotación, una validez actual. Muestras de ellos es el valor de la autosugestión para los métodos de autorrelajación como principio inherente a éstos, y también el fenómeno del inconsciente positivo, que sirvió de basamento metodológico y teórico a la Nueva Hipnosis y a su máximo exponente: Erickson, quien lo enriqueció al considerarlo como una enorme computadora que trabaja sin cesar, independientemente del dueño, para llegar a la síntesis de la conducta humana, pues recibe todas las huellas de las formas de proceder del hombre. "Es quien organiza nuestros comportamientos sin nuestro consentimiento", según este autor (11). Mientras para Coué y Boudim bastaba la imaginación mental para obtener el resultado o síntesis en la mayoría de los casos, para la Nueva Hipnosis ésta constituía el medio de acceso privilegiado; si para los dos primeros la hipnosis era una máquina o mecanismo, para los partidarios de la segunda tendencia es una máquina capaz de programar. Al psicólogo y farmacéutico francés Emile Coué se le atribuye además un gran mérito como precursor de lo que se conocería más tarde como psicoterapia de grupo, pues en un período más avanzado de su vida desistió de la hipnosis y se dedicó tácitamente a la sugestión en grupos, en los que lograba establecer un método de autoeducación cívica. EL MÉTODO DE COUÉ.
Su método está, basado en dos postulados fundamentales: 1- No se puede pensar en dos cosas simultáneamente. 2- Todo pensamiento que absorba por completo nuestra mente se convierte en verdadero para nosotros y tiende a transformarse en acto. El método de Coué se relaciona con el método de entrenamiento autógeno de Schultz, que actualmente tiene gran utilidad en psicoterapia. Entre los aspectos más importantes que Coué señalaba se encuentran las orientaciones que se debían seguir con cada afección. Por ejemplo, a los pacientes que padecían de insomnio se les debía indicar que repitieran una frase estereotipada (Estoy dormido), lo cual provocaría de forma más rápida un relajamiento de la musculatura estriada y así se influía en el sujeto para que se presentara el sueño en forma placentera. IMPORTANCIA HISTÓRICA DE LA SEGUNDA ESCUELA DE HIPNOSIS DE NANCY. Uno de los aportes de la Segunda Escuela de Nancy es haber sido precursora de la psicoterapia de grupo, donde se utilizan métodos clásicos de autosugestión que tienen gran significación en varias formas de tratamiento actuales. Para desarrollar esta técnica, Coué impartió un curso en su Instituto de Nancy que denominó (Autohipnosis como medio para aumentar el autocontrol, fortalecer la voluntad, aliviar el dolor y el sufrimiento, así como cambiar la actitud). Los aportes científicos de Coué motivaron que, luego de su muerte se le hiciera un monumento en la Plaza de Nancy como reconocimiento a su trabajo. UNIFICACIÓN DE LAS ESCUELAS DE HIPNOSIS. El psiquiatra húngaro Karl Schaffer, destacado especialista en las funciones cerebrales, estudió en 1895 profundamente el desarrollo histórico de la hipnosis y estableció una teoría que unía las dos escuelas anteriores. Schaffer demostró experimentalmente que por medio de la sugestión se puede constituir una serie de estímulos capaces de provocar reflejos en las vías superiores de asociación, así como en las áreas subcorticales del cerebro. LA HIPNOSIS CLÁSICA EN EL CONTEXTO DE LA REFLEXOLOGÍA RUSA. LA ESCUELA DE HIPNOSIS RUSA. PÁVLOV SU MÁXIMO EXPONENTE. ETAPA PAVLOVIANA. Iván Pétrovich Pávlov (1849-1936) fue un eminente neurofisiólogo y pensador ruso cuya actividad científica se prolongó durante más de sesenta años. Se dedicó al estudio e investigación de la fisiología de la circulación, de la digestión y de las funciones del sistema nervioso. Fue continuador de las corrientes progresistas de la fisiología y ciencias naturales rusas y de la filosofía materialista del siglo XIX. Se vio influido por el célebre científico Séchenov, al cual llamó el padre de la fisiología rusa. Los descubrimientos de Pávlov sobre la actividad nerviosa superior del hombre y de los animales significaron una revolución en las ciencias naturales. Su teoría constituyó un duro golpe a la tendencia idealista de la psicología de su tiempo. Elaboró una teoría científica donde se le daba el
peso fundamental a la palabra (sugestión verbal) y a la forma en que se podía confirmar su teoría de los reflejos condicionados en los perros, animales superiores y en particular en el hombre. Consideró la hipnosis como una inhibición parcial irradiada cortical y subcortical, y vio los mecanismos que aparecen en el sueño y los sueños como un proceso fisiológico normal. Su teoría planteaba que la hipnosis crea un estado de inhibición que se difunde a partir del área motora cortical a las demás áreas de los hemisferios cerebrales y que puede llegar al mesencéfalo. Esto origina primeramente una inhibición motora, que de acuerdo con la magnitud del estímulo produce presión en los movimientos oculares y favorece la inhibición de los reflejos salivales y, finalmente, aparece el sueño profundo con hipotonía muscular generalizada. Para Pávlov, la hipnosis representa un grado menor que. Por eso los estímulos que son dados por medio de la sugestión son mucho más enérgicos que los del sueño. En conclusión plantea que la sugestión es un estímulo más breve, más aislado y más unificado. Su efecto produce un reflejo que puede ser simple o complejo, pues cuando se ha suprimido la inhibición de los centros superiores aumenta la sugestibilidad y otras tendencias reflejas del paciente. Esto permite que aparezca cierta facilidad para llevar a cabo determinadas acciones que de otra forma sería imposible realizar. Pávlov planteó que la esencia de la hipnosis está en el hecho de que, como resultado de varias influencias endógenas o exógenas, espontáneas o inducidas artificialmente, ciertas áreas del cerebro están excluidas de modo temporal en cuanto a su función en diferentes niveles. Pero, al mismo tiempo, las funciones de los centros que permanecen despiertos, especialmente los subcorticales, están aumentadas. Para él la hipnosis es de por sí una modificación momentánea del funcionamiento cerebral. Los descubrimientos de Pávlov revolucionaron las concepciones de la época. Se vino abajo toda una serie de teorías fundamentadas en especulaciones, carentes de base y rigor científico. Pávlov le dio al hipnotismo una base fisiológica y con esto lo convertía en una técnica con una fuerte sustentación materialista. En una de sus conferencias dijo: Si uno pudiera mirar a través del cráneo y se iluminaran las áreas corticales despiertas excitadas, mientras que las regiones que producen los procesos inhibidores, la hipnosis o el sueño, estuvieran en penumbras, muchos parches de sombras de inhibición se observarían sobre las áreas brillantes. El sueño se reconocería por la amplitud de las sombras de inhibición irradiada; y en medio de las zonas oscuras brillarían puntos del despertar.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Segunda parte.9 Planteaba que en el hombre, además del primer sistema de señales (reacciones a la influencia directa del mundo exterior), existe un segundo sistema de señalización (el lenguaje), capaz de modificar considerablemente la actividad nerviosa superior del ser humano. Sus planteamientos en relación con este sistema constituyen la piedra angular para la teoría materialista del conocimiento, pues por medio de ellos se establece la base fisiológica del pensamiento humano, donde la palabra (el lenguaje) toma gran significación. Pávlov explicó la naturaleza del sueño en los animales superiores, demostrando que es producto de una inhibición generalizada de la corteza a través de los hemisferios cerebrales. No fue hasta que aparecieron los descubrimientos de Pávlov que la hipnosis tuvo una verdadera base científica, que respondiera a una concepción materialista dialéctica de la ciencia.
Los últimos años de su vida, Pávlov los dedicó a la investigación y al estudio de las enfermedades del sistema nervioso. Fue el descubridor de las neurosis experimentales en animales. La generalización filosófica de sus descubrimientos constituyó un salto cualitativo en el desarrollo científico-técnico y enriqueció los principios del materialismo dialéctico aplicados a la naturaleza, estando en contra de las corrientes y manifestaciones del idealismo y del oscurantismo. Sus investigaciones sobre los procesos de inhibición y excitación lo llevaron a plantear que la inhibición interna, la hipnosis y el sueño constituyen el mismo proceso fisiológico. A través de la práctica pudo comprobar que una estimulación monótona, repetida de modo indiferente, produce primero una inhibición interna, luego sueño, después hipnosis y finalmente sueño profundo. Pávlov afirmó que en todos los años de su extensa investigación nunca había encontrado ningún fenómeno que se opusiera a la semejanza fisiológica que existe entre la inhibición interna cortical, la hipnosis y el sueño. Consideraba indudable que la hipnosis es un estado especial de sueño, y planteaba que no era significativa la diferencia que pudiera haber con una inhibición interna, desde el punto de vista fisiológico. Existe una ley que justificaría las leyes del hipnotismo, denominada ley de los puntos reflexógenos, que como refiere Volgyesi neurólogo húngaro que trabajó con Pávlov, esclarece las verdaderas leyes del hipnotismo. Esto nos facilita una comprensión adecuada y científica de los fenómenos hipnóticos. Pávlov demostró mediante experimentos que casi todos nuestros órganos pueden ser influidos indirectamente por medios neurofisiológicos. Sus descubrimientos en los animales y en el hombre comprobaron que la hipnosis no es un poder sobrenatural, sino que constituye una técnica psicológica que facilita la formación de estados alterados de conciencia. Prueba de esto lo constituye el hecho de que los efectos psicosomáticos de la sugestión en este caso los reflejos condicionados pueden producirse de forma más rápida e intensa cuando el sujeto se encuentra en estado hipnótico que cuando se halla en estado de vigilia. Es necesario destacar que a pesar de estar en vigilia, una persona siempre tendrá zonas de la corteza donde existe inhibición. El destacado científico ruso Alexander R. Luria ha planteado que la primera unidad funcional del cerebro es la encargada de controlar el estado de vigilia, mediante la formación reticular activada que regula el tono de la corteza. Es necesario para todo hipnólogo conocer la obra y los aspectos teóricos fundamentales de Iván Petrovich Pávlov sobre como introdujo el concepto de segundo sistema de señales, privativo del hombre, y considerando lo siguiente: "La palabra es un estimulador condicionado tan real como todos los demás, pero a la vez tan universal como ningún otro, que en este aspecto no puede ser comparado en modo alguno, ni cuantitativa ni cualitativamente, con los demás estimuladores de los animales" (7). Tanto Pávlov como sus seguidores Bejterev, Birman, Zukovski y Platonov, dejaron establecido que la hipnosis resulta sumamente valiosa para el tratamiento de determinados procesos patológicos, ya sea con fines curativos, o como paliativos en los casos de dolores agudos y crónicos. Su poder como método concentrador y acelerador de la curación le confiere un carácter de hecho ventajoso en relación con otras técnicas psicoterapéuticas tradicionales. Pávlov representa para cualquier investigador, científico o especialista de las llamadas neurociencias, un punto de referencia obligado. Ningún hombre, como ser biológico y social, puede escapar al influjo de los valores filosóficos de su época. En nuestro caso, en Cuba, por el sistema imperante en la isla, fuimos formados en las concepciones de la teoría materialista-dialéctica del reflejo en cuanto a las funciones psíquicas y a su conocimiento, por lo que nos resulta más fácil reconocer esta propiedad inherente a esa parte de la esfera cognoscitiva. Ello significa que debemos partir:
1. 2.
De una interpretación socio- histórica e histórico-natural del hombre. Del análisis fisiológico de los estados patológicos antes de describir sus formas clínicas y psicológicas.
En la obra de Pávlov merecen ser resaltados varios aspectos basales de su valiosa incursión en el campo de la hipnosis. I. II. III.
La teoría de los reflejos condicionados. La teoría de los procesos de excitación e inhibición, con sus respectivas modalidades e interrelaciones. La teoría reflexológica del sueño y los estados intermedios entre éste y la vigilia (fases oniroides o hipnóticas).
Expondremos brevemente algunas características de los reflejos condicionados. Ver "Hipnosis terapeutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Tercera parte."
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Tercera parte Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
Los reflejos condicionados Procesos de excitación e inhibición de la corteza cerebral Teoría reflexológica del sueño y los estados intermedios entre éste y la vigilia El periodo de silencio de la hipnosis La nueva hipnosis. Postulados y exponentes más importantes Milton h. Erickson. Un nuevo y revolucionario. Enfoque de la nueva hipnosis La actitud La actitud hipnótica El inconsciente El síntoma La psicoterapia La metáfora El símbolo Aprendizaje inconsciente Otros personajes durante el periodo de la nueva hipnosis Análisis de las concepciones contemporáneas sobre la hipnosis
LOS REFLEJOS CONDICIONADOS.
Según Pávlov, tales reflejos se adquieren en la vida y constituyen conexiones de carácter temporal, cuya permanencia depende del reforzamiento o repetición, que es, en definitiva el componente activo de este proceso, pues mantiene a los focos de excitación que se producen en la corteza cerebral, originados por los estímulos que no se inhiben. La intensidad de dichos estímulos estará dada por su duración y frecuencia; los más fuertes o acentuados, cuando son muy repetidos y en corto intervalo, perduran por mucho tiempo, pero los débiles desaparecen (inhibición). Estos condicionamientos pueden convertirse en sistemas cuando están estructurados como un conjunto donde convergen los contenidos de experiencias y conocimientos. Mientras más sean reactivados, más tiempo se mantendrán. Los reflejos condicionados pertenecen a varios órdenes, pero siempre serán adquiridos, y constituyen la base del aprendizaje del hombre. Su no inhibición permite, por una parte, conservar lo aprendido; pero su inhibición tiene también a veces efectos positivos, pues como dijera Pavlov; "Sólo a la inestabilidad y al carácter temporal de la manifestación positiva de los reflejos condicionados y a su inactivación, unido a la elaboración de nuevas conexiones adquiridas, débese el hecho de que la adaptación del animal y el hombre al ambiente resulte adecuada, provechosa y ajustada en forma relativamente perfecta a todos los matices de las cambiantes circunstancias" (7). Destácase aquí el carácter dinámico de estos procesos y la fácil sustitución de unos por otros nuevos, lo cual se conoce como estereotipos dinámicos. PROCESOS DE EXCITACIÓN E INHIBICIÓN DE LA CORTEZA CEREBRAL. La excitación se produce precisamente cuando ese estímulo que llega a la corteza cerebral, refleja toda su actividad; es decir, cuando se expresa como tal. La inhibición es todo lo contrario: representa el cese de actividad, aunque constituye un proceso activo. En la corteza cerebral existen muchas partículas centelleantes, que no son más que la manifestación de diversos focos de excitación o haces brillantes, con continuidad cuando se propagan o irradian. Del mismo modo, cuando cesa la fuerza del estímulo que los provocó, comienzan a aparecer puntos opacos, reveladores de focos de inhibición. ¿Cuándo desaparecen los focos de excitación?
1. Cuando cesa la fuerza que los promueve (relativa al estímulo). 2. Cuando actúa otra fuerza superior a la que los genera y con un valor contrario; esto es: cuando el foco de inhibición elimina al de excitación. Este subsistema es importante, porque toda la teoría pavloviana se basa en los choques permanentes entre la excitación y la inhibición, el predominio de uno de estos o el equilibrio. Y justamente a través de estos enfoques llegó Pávlov a demostrarnos, en unión de sus seguidores, el por qué de las neurosis experimentales y la psicopatogenia de los trastornos mentales. Por su relevancia en el proceso hipnótico, haremos una breve referencia de las tres formas fundamentales de inhibición: Interna o activa. En ella cada estímulo cortical se hace inactivo por sí solo, en dependencia de las mismas condiciones de su aplicación (olvido por falta de actividad). Externa o pasiva. Aquí la acción de excitantes externos o internos sobre el sistema nervioso central genera un foco de nueva actividad que puede manifestarse en el funcionamiento de los órganos. Este es el fundamento de la inducción recíproca de los focos de excitación e inhibición (v gr., el mecanismo defensivo de la represión). Transliminar o ultraliminar. En esta la capacidad funcional de las células nerviosas resulta insuficiente ante la intensidad del estímulo supramaximal que se presenta como destructivo (v gr., Quemaduras profundas que no causan dolor).
TEORÍA REFLEXOLÓGICA DEL SUEÑO Y LOS ESTADOS INTERMEDIOS ENTRE ÉSTE Y LA VIGILIA. Al reducirse la excitabilidad general de la corteza o incrementarse el fenómeno inhibidor en alguna de sus regiones, el cese de actividad puede irradiarse de forma amplia a las restantes zonas de los hemisferios cerebrales y llegar a descender incluso hasta las áreas subcorticales próximas al córtex (formación reticular), que es lo que se conoce como proceso del sueño. Ello permitió a Pávlov enunciar tempranamente la ausencia de diferencia entre la inhibición interna y el sueño desde el punto de vista de la naturaleza psicológica y de la propia hipnosis. Para él, la inhibición era un fenómeno concentrado, que en la hipnosis y el sueño se propagaba a regiones más o menos vastas del cerebro, más allá y por debajo de este órgano; sin embargo a pesar de esas similitudes como propagaciones de focos de inhibición, la hipnosis y el sueño se diferencian, puesto que en la primera la inhibición es parcial y en el segundo generalizada a los grandes hemisferios, con excepción de los puntos cerebrales que se mantienen alertas o de servicio e impiden que la persona se desconecte de su realidad significativa (v gr., la madre que duerme de forma apacible y profunda, pero es capaz de captar el llanto de su bebé, que le hace virarse abruptamente en la cama, prender la luz y levantarse para indagar por qué llora). El sueño puede ser activo o pasivo.
Activo. Cuando se produce por irradiación progresiva de la inhibición desde alguno de sus focos, como resultado de la acción constante de un estímulo monótono o inhibidor con bastante fortaleza. La hipnosis se basa fisiológicamente en esto. Pasivo. Cuando ocurre la abolición de un gran número de excitaciones recibidas de ordinario por los grandes hemisferios cerebrales.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.2 Entre la vigilia como tal y el sueño profundo tiene lugar una serie de estados transitorios o intermedios, que son fases hipnoides; de donde podemos concluir que los trances hipnóticos y el sueño se logran por la irradiación de un foco de inhibición, y esto es importante, porque la estimulación a través del segundo sistema de señales es capaz de dejar sembrado in situ el componente semántico activador, que en forma de sugestiones pueden encontrar los puntos enfermos y tratar diversos desórdenes que se presenten en los pacientes. Pávlov aclaró muy convenientemente en su artículo denominado "El pretendido hipnotismo animal", lo que los científicos y teóricos habían considerado como hipnotismo animal en su acepción más estricta (7). De acuerdo con la concepción pavloviana, el fenómeno consiste en volver al animal sobre su espalda con un movimiento brusco, que ha de vencer toda posible resistencia, obligarlo a que adopte una postura antinatural y mantenerlo en esa posición durante cierto tiempo, que no debe ser muy largo. El animal en ese estado permanecerá completamente inmóvil, aún cuando se le retiren las manos, durante un intervalo que puede abarcar horas. Pávlov declaró que esa conducta animal podía y debía ser catalogada como una expresión autodefensiva del sujeto, basada en la retención, pues ante un estimulo fuerte como el virarlo de bruces, que no le permite luchar, defenderse ni huir y le mantiene retenido, este adoptará esta postura para conservar la vida, ya que al manifestarse estático evitará llamar la atención de la fuerza que ha actuado sobre él. Pávlov describió la fisiología de este proceso como se expone textualmente: La inmovilidad se alcanza del modo siguiente:
Excitaciones que salen de lo común, de una gran intensidad y aspecto extraño, engendran pronto la retención refleja, en primer lugar, de la zona cortical motriz que comanda los movimientos que se llaman voluntarios. Según la intensidad y duración de la excitación, esta retención puede limitarse a la región motriz y no extenderse a las otras zonas corticales ni al cerebro medio o, por el contrario, extenderse igualmente a las regiones indicadas. En el primer caso son conservados los reflejos de los músculos oculares (el animal sigue al experimentador con los ojos), los reflejos glandulares (la saliva corre cuando se presenta la comida al perro, sin que el animal haga movimiento alguno para tomarla) y finalmente los reflejos tónicos, que parten del cerebro medio sobre la musculatura esquelética y que mantienen al animal en la postura en que ha sido colocado (catalepsia). En el segundo caso, todos los reflejos citados acaban por desaparecer y el animal cae en el sueño, en un estado pasivo acompañado de un relajamiento total de la musculatura. Véase aquí la diferenciación que hizo Pávlov en dos tipos de niveles: Si la excitación que provoca el reflejo de retención llega solamente a la corteza motora, se inhiben los movimientos voluntarios, pero hay estado de vigilia, no sueño. Si la excitación se extiende a otras zonas corticales y el cerebro medio, la inhibición se irradia hasta condicionar un estado de sueño, que será en este caso parcial y localizado. En sus investigaciones con perros, auxiliado por la Dra. M. Petrova, Pávlov pudo apreciar como los animales que ya habían sido hipnotizados, caían rápidamente en estado hipnótico tan pronto como eran expuestos a las condiciones de laboratorio; reflejo esto de que también el hipnotismo animal se genera por condicionamiento o reflejos condicionados, donde la experiencia actúa como un elemento condicionante. De igual forma observó reacciones negativistas y cómo las lameduras (reflejos autocurativos) eran mantenidas por largo tiempo, las cuales constituyen expresiones fluctuantes de la hipnosis, donde interviene la fase paradojal. Vasta fue la producción de Pávlov y sus seguidores sobre este contenido temático. Abordado una vez sobre cómo explicar las acciones complicadas realizadas por el hipnotizado si se admitía que su sistema nervioso estaba inhibido, salvo el punto con el cual comunicaba con el hipnotizador, Pávlov respondió que la hipnosis no era más que un sueño que se extendía progresivamente a partir de un punto dado, y con una claridad magistral expuso que jamás el proceso de inhibición abarcaba totalmente los hemisferios cerebrales, de modo que aun cuando predominen focos de inhibición, pueden estar presentes los de la excitación, y esto es lo que permite obrar de forma conjunta al experimentador y el sujeto de experimentación, sobre la base de las órdenes dadas; razón por la cual no influyen en las otras regiones corticales, por el contenido de lo expresado. Según Pávlov, "cuando una persona se despierta de una sugestión, es impotente para hacer cualquier cosa de esta excitación dada y aislada" (7) De ahí que todas esas fundamentaciones teóricas le llevaran a sostener que la hipnosis es un sueño parcial y que esto constituye precisamente el aspecto que la distingue del sueño natural, donde se produce una inhibición general de los grandes hemisferios. En la hipnosis, como inhibición parcial no se ocupa un foco determinado y la mayoría de los puntos permanecen activos. En múltiples investigaciones efectuadas en sus laboratorios sobre la fisiología de la digestión, los reflejos condicionados y las características de la actividad nerviosa superior, este hombre célebre llegó a conclusiones muy sólidas sobre el basamento fisiológico de
los procesos psíquicos, proporcionó una indiscutible base material al respecto y convirtió a la Psicología, de ciencia subjetiva e idealista, en ciencia objetiva y natural.
Continuadores de su obra como Bejterev, Kornilov, Gabrilov, Platonov, Luria, Miassichev y Sviadosh, hicieron gala de los valiosos aportes de Pávlov a la corriente reflexológica y demostraron la validez científica de su contribución. EL PERIODO DE SILENCIO DE LA HIPNOSIS. En el III Congreso Internacional sobre Hipnosis y Medicina Psicosomática, celebrado en París en 1965, se destacó cómo el escepticismo que se adueñó de la psicoterapia occidental, unido a lo inapropiado de algunas posiciones de determinadas corrientes hipnológicas, debilitaron el más fuerte movimiento terapéutico que jamás se conociera (8). En el congreso precedente, que se había efectuado en 1900, se dieron cita prominentes figuras del hipnotismo: Charcot, Babinski, Freud, Janet, Korsakov, Bejterev y Brown Séquard, entre otros; y ésta fue la última vez que se reunieron por tan especial interés. En 1965, Chertok (8) describió las raíces históricas del menosprecio en Europa hacia la hipnoterapia por parte de la medicina académica, que a su criterio eran: La unilateralidad y lo inadecuado de las posiciones adoptadas en el pasado por las escuelas hipnológicas de Nancy y Babinski. La polémica entre esas escuelas solo puso de manifiesto las enormes dificultades que se oponían al descubrimiento de los mecanismos íntimos de los estados hipnóticos, todo lo cual condujo a muchos clínicos, psicólogos y psiquiatras a asumir una posición pesimista respecto a la posibilidad de aplicar directamente la hipnosis en la clínica. La muerte de Charcot que, fue un duro golpe, pues con sus trabajos y su propia vida logró alcanzar la hipnosis su máximo esplendor.
El rompimiento de Freud con la hipnosis y el desarrollo de la teoría del psicoanálisis constituyó el golpe de gracia, pues un científico como él, de tan altísimo renombre, eclipsó toda posición diferente y ganó a los antiguos adeptos de la corriente hipnótica.
También contribuyeron a ello las diferencias entre las principales escuelas del momento, que ya hemos abordado con profundidad en acápites anteriores dedicados al enfrentamiento de las escuelas de hipnosis y a la primera escuela de Nancy.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.3 Por suerte, en la antigua URSS, actual Rusia, no repercutió de igual forma la posición europea, pues aunque allí disminuyó, como en todas partes, el interés por la hipnosis, no se perdió por completo ni en tan gran medida como en otros países. En su libro El problema del inconsciente, F. V. Bassin (8) destaca que "en virtud del profundo interés que por el problema de la hipnosis manifestaron V. M. Bejterev. K. L. Platonov y en el plano teórico toda la escuela fisiológica pavloviana, la doctrina de la hipnosis fue sometida en la Ex Unión Soviética en las décadas del 20 y el 30, a una elaboración sistemática y multilateral y encontró repetidas posibilidades de aplicación en el área clínica." Tal vez la presencia física de Pávlov y su indiscutible liderazgo en la neurofisiología y psicofisiología rusas, impidió la pérdida de motivación por esta práctica que, de hecho, se mantuvo y experimentó un marcado incremento en los decenios ulteriores hasta nuestros días, al respecto. Conviene recordar que Bejterev (quien vivió hasta 1927) fue un profundo conocedor de la metódica hipnótica, a la que hizo aportes significativos, y a la vez uno de los símbolos de la reflexología rusa
y uno de sus máximos exponentes junto a Pavlov, lo cual garantizó que el interés por la hipnosis no decayera tan acentuadamente, primero en la Rusia zarista y luego en la soviética. LA NUEVA HIPNOSIS. POSTULADOS Y EXPONENTES MÁS IMPORTANTES. Según Godín (4) "el término Nueva Hipnosis apareció en un libro de Daniel Araoz, en 1982, y retomado en 1985 para designar la reconceptualización de cierta práctica". Sin embargo tiene sus antecedentes más remotos en la Segunda Escuela de Nancy. Podemos decir que se conecta un poco con toda definición que se aleje del hipnotismo clásico, y en ello adquieren mucho valor las referencias hechas por Weitzenhoffer (9), quién optó por clasificarla como hipnosis no tradicional. Ahora bien, el mayor contenido de la Nueva Hipnosis, se halla fundamentado en los trabajos de Erickson como principal exponente y luego en los de Weitzenhoffer, Barber, Sarbin y otros. Godín opina en su obra que este término se ha defendido bastante, tanto en revistas, entre ellas Phoenix, como en un coloquio internacional sobre hipnosis que se efectuó en la Universidad de Nantiere, donde se debatió el interesante tema: "hipnosis tradicional y nueva hipnosis: ruptura o continuidad", que sentó pautas para su establecimiento definitivo en Francia, aunque se siga trabajando sólidamente con los principios de la hipnosis clásica. La nueva hipnosis se diferencia de la tradicional, pues mientras en este última las orientaciones sugestivas son más directivas y autoritarias, en la primera rige un cúmulo de preocupaciones que podíamos resumir en las siguientes condiciones (teniendo en cuenta que la hipnosis, más que sugestión, es la actitud que asume el hipnólogo ante el sujeto por hipnotizar):
1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8.
Preocuparse por el otro (paciente) Cuidar la comunicación Lograr una buena relación terapeuta-paciente, dada por caracteres empáticos y armónicos. No dañar nunca la escala de valores del paciente. No convertirse en su juez acusador. Valorar la integridad del paciente. Mantener sus propias formas. Velar por la progresión lógica.
Veamos brevemente a que componentes psicológicos se refieren. Preocuparse por el otro, equivale a reconocer que en el plano terapéutico se da una relación de ayuda técnica y humana: por un lado, la persona afectada que viene en su busca porque sufre o se siente mal; y por otro, la persona adiestrada que responde a esa demanda porque comprende la situación y está capacitada técnicamente para ello. Es la dimensión humana y psicológica típica de una relación terapeuta-paciente. Cuidar la comunicación, es vital, ya que debe velarse por el tipo de información que se brinda al paciente y por la búsqueda de mecanismos de retroalimentación, que posibilitan hacer las correcciones necesarias, tanto antes de provocar el estado hipnótico como durante y después del trance, siempre con la finalidad de lograr una plena interrelación. La comunicación no es sólo verbal, sino gestual. Todo proceso comunicativo con el paciente ha de controlar manifestaciones corporales que bien pudieran activar sus defensas en los estados prehipnóticos, hipnóticos y posthipnóticos. Esto resulta sumamente importante, porque en dichos estados no hay toma de conciencia; y si se produce es tan ligera como en el caso del hipnoide.
La buena relación terapeuta-paciente, debe ocupar el primer orden, pues como en la nueva hipnosis se considera que el proceso hipnótico es, en esencia, la expresión de una actitud, la rela-
ción favorable que permita las transferencias y contratransferencias completas y positivas garantiza un aumento de la confiabilidad, sobre todo del paciente hacia el terapeuta, así como el reconocimiento de esa confianza por parte de este último, lo cual le ayudará a estructurar mejor los contenidos terapéuticos y aplicar tácticas seguramente viables siempre y cuando estén matizadas por el afecto. Es conveniente referirse a que el componente esencial de una actitud es el afectivo, pues a través de él se evalúa el objeto que la define. De ahí que sea indispensable lograr un clima afectivo de tal naturaleza, que condicione que cada cual se acepte, que cada cual confíe y coopere, que cada cual asuma sin prejuicios su función. En ello se basa, fundamentalmente, el éxito terapéutico. No dañar nunca la escala de valores del paciente, se inserta en los paradigmas bioéticos, puesto que él es una unidad biopsicosocial, con una estructura funcional sustentada primordialmente en la historia de su ego y en cómo han sido sus múltiples relaciones dinámicas con su propio mundo y el que le rodea. De ahí que sus valores si bien pueden ser comunes a cualquier ente humano y social, también pueden ser particulares, muy suyos, en dependencia de su visión de la vida y de su interrelación con éstos. Aquí se hace plenamente valedero el pensamiento juarista: "El respeto al derecho ajeno es la paz". No actuar como juez reviste tanta importancia como la preocupación anterior, pues si bien pudieran existir dificultades en el activo funcional del paciente que podrían parecernos ridículas, inoperantes, pueriles o estúpidas, todas estas clasificaciones las ha sentido como suyas, como parte de su vida, donde hay inmanentemente funciones afectivas que poseen cierto valor y tal vez una significación, de manera que resulta innecesario juzgar, evaluar o censurar. En este caso lo más indicado es partir de dos premisas esenciales:
Si el paciente no sabe evaluarlas, conducirlo hasta ese nivel. Si él necesita ayuda y se pretende ofrecerla, no se puede jamás propiciar un formato de inseguridad que incremente su incapacidad de funcionamiento útil.
La integridad del paciente es un caro principio bioético, pues se trata de una persona con autodeterminación, para quien orientar, inducir, motivar e invitar no deben constituir un acto de fuerza; por tanto, el respeto a su dignidad y autodeterminación es un principio sagrado, y mantenerlo le dará una visión de la magnitud humana y la competencia del terapeuta. El cuidado de su actuación profesional implica para el terapeuta ser fiel a los postulados éticos,, consistentes en: una elevada motivación, gran capacidad científica, indispensable condición humana y conducta consecuente, de manera tal que el paciente vea en él suficientes valores positivos, que cubran o rebasen sus expectativas. Debe ponerse muchísimo celo en el enfoque estructural lógico del tratamiento, que ha de ser por etapas, cada vez más complejas y profundas, pero sin pasar a la siguiente hasta haber obtenido los resultados esperados en la anterior. Violaciones indiscriminadas o menores de este principio, pueden hacer fracasar el programa terapéutico y sembrar dudas en el paciente sobre la capacidad profesional del terapeuta.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.4 Consideramos entonces, luego de analizadas las ocho preocupaciones básicas de la nueva hipnosis, que debo retomar su precepto: continuidad o ruptura, para de cierta forma intencionada establecer una comparación, lo más racional posible, entre estos presuntos atributos de la nueva
tendencia y determinar si les son inherentes o, muy por el contrario, comunes a toda acción esencialmente terapéutica. Desde los trabajos de Harry Stack Sullivan, enmarcados en el contexto de un psicoanálisis culturalista, se manifestó un creciente interés - y así quedó sentado - por determinadas categorías esenciales a tener en cuenta para lograr una buena relación médico-paciente o, en un plano más amplio, terapeuta-paciente. Veámoslas: Como señala el profesor J. A. Bustamante (10) en el segundo tomo de su Psicología médica, Sullivan insistía en destacar en la relación médico-paciente, la función que desempeñan:
1. 2. 3. 4. 5.
La personalidad Los roles y Status La comunicación Las defensas La situación
Partiendo del hecho de que en la relación terapéutica se enfrentan personas con comportamientos diferentes, ya que ninguna personalidad es idéntica a otra (en ello radica su carácter de irrepetibilidad), se impone entonces determinar cómo ha de ser la conducta de cada miembro de la relación ante el mismo fenómeno terapéutico. Si nos basamos en el criterio de que la personalidad es una estructura psicológica muy compleja (expresión de la combinación armónica de determinantes biológicos y sociales), que permite al hombre su funcionalidad psicológica y social ante todos los eventos de su vida, representada por rasgos de carácter, temperamento, inteligencia, aspiraciones y motivos, manejados todos ellos por el nivel consciente que posibilita su conocimiento, interiorización y uso a voluntad y placer, y que esta funcionalidad refleja un sistema de valores espirituales y morales socialmente asimilados por él según las condiciones de su existencia, podemos entender que sean perfectamente dables las distintas formas de proceder de cada miembro de la pareja terapéutica. ¿Cómo se interpreta esto? Es fácil de explicar mediante un ejemplo. -
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Terapeuta de 36 años de edad, inteligente, de modales refinados, poseedor de una cultura elevadísima, de carácter noble, equilibrado, con rasgos anancásticos y cierta tendencia a ser autoritario y conservador a ultranza de los valores de la sociedad. Paciente de 21 años, sexo femenino, estudiante de una escuela tecnológica, liberal, un poco histérica, muy locuaz, con rasgos coléricos y proveniente de un medio socio cultural desfavorable.
En ambos casos se describen formas de ser y hacer muy diferentes, de modo que como tendencia esperada, los códigos de expresión serán también distintos y se pondrán en juego al establecerse la relación terapéutica. El principal objetivo del terapeuta debe ser siempre lograr una relación exitosa, por lo cual está obligado a regular y amoldar su comportamiento para llegar al paciente pues solo así será reciprocado por este, quien además suele preocuparse por lo que piensa el médico acerca de él y por su propia estimación; de ahí que corregirá sus tendencias para mostrarse conservador, adecuará su lenguaje y buscará información sobre el terapeuta, particularmente si le dan alguna referencia al respecto o si ha de continuar relacionándose con él. Ya aquí aparece un fenómeno de regulación consciente en la conducta de ambos, que implica hacer funcionar sus respectivas personalidades y adecuarlas a la situación, que se crea entre uno y otro al producirse el encuentro. En ese contexto, la comunicación estará en función de sus necesidades, primordialmente por la conciencia que tiene el uno de su posición como técnico y
guía del proceso terapéutico y el otro de su demanda como participante; y de ahí se derivan las funciones concretas que cada cual desempeña en esa relación recíproca. Si esto es así -y constituye un hecho aceptado casi unánimemente en la literatura médica y psicológica-, cómo es posible que un elemento tan abordado y usado históricamente con plena conciencia, devenga entonces una preocupación persistente para la nueva hipnosis y no para otras tendencias afines. Al responder hipotéticamente al respecto, pienso que la nueva hipnosis lo que hace es retomar aspectos universales para conferirles un valor especial y trascendente entre sus propósitos, mucho más dialéctico y contemporáneo, con la finalidad de diferenciarse de la hipnosis clásica y tradicional del mundo europeo, más autoritaria, dogmática e impositiva. Sólo de esa forma nos explicamos que preocupaciones generales sean individualizadas con tanta fuerza, ensalzadas como suyas y colocadas en un nivel harto superior. MILTON H. ERICKSON. UN NUEVO Y REVOLUCIONARIO ENFOQUE DE LA NUEVA HIPNOSIS. El norteamericano Erickson está considerado como el mejor hipnotizador contemporáneo. Muchas de sus curaciones con pacientes ya desahuciados y de personas que no encontraron solución a sus problemas con nadie, la obtuvieron con Erickson; de ahí su fama y el interés por sus métodos. El fue un antiteórico. De hecho apenas dejó material escrito y en gran parte conocemos sus métodos gracias a sus alumnos. Para Erickson paciente y terapeuta son un tándem que establecen una alianza en la que juntos deben desbaratar las resistencias del inconsciente en “desaprender” los viejos comportamientos que nos limitan y nos acaban produciendo enfermedades o alteraciones psico-somáticas y aprender comportamientos más adaptados que nos permitan seguir la vida con verdadera eficacia y felicidad. A sus alumnos les enseñó que el terapeuta debe estar convencido de que los recursos necesarios para resolver los problemas, residen en la historia y la vida del propio paciente; ante cada problema, las soluciones se encuentran en el propio interior. Sin duda alguna no se podría hablar de nueva hipnosis sin su máximo exponente: Milton Erickson (1901-1980), quien para León Chertok ha sido el más grande hipnólogo de todos los tiempos (4). Nacido en los Estados Unidos, estudió Medicina y se especializó en Psiquiatría. Fue un tenaz investigador y ninguna de sus limitaciones personales le llevó a perder el interés por descubrir nuevas conexiones y dimensiones psicológicas, particularmente relacionadas con la hipnosis. Presentó diversas dolencias a lo largo de su vida, entre ellas dislexia, incapacidad para distinguir los colores y arritmia; pero ni esas ni otras dificultades debilitaron nunca su espíritu voluntarioso y de búsqueda. A los 17 años contrajo poliomielitis y quedó temporalmente inválido; sin embargo, según sus biógrafos, este fue un momento importante para él, pues logró a través de profundas lecturas descubrir la autohipnosis. Su afán por la práctica y experimentación constantes, así como su capacidad para abordar los problemas de forma no rutinaria, le permitieron aportar soluciones generalmente nuevas y originales; de hecho, esto significó para Erickson la adopción de un pragmatismo incesante, mediante el cual vio a la hipnosis como un fenómeno más allá de la mera sugestión, donde el papel del inconsciente adquiría una nueva dimensión. Sobre esa base, la hipnosis debía ser considerada como una entidad conceptual, como una actitud especial del sujeto al que se llevaba hasta un trance hipnótico. Para Erickson fueron muy importantes determinadas categorías, que trataremos de abordar lo más cercano posible al valor que tenían para él en su sistema teórico-práctico.
Hablaremos de actitud, actitud hipnótica, inconsciente, síntoma, psicoterapia, metáfora, simbolismo y aprendizaje inconsciente.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.5 LA ACTITUD. Para Erickson era una categoría clave en el desarrollo de la terapia hipnótica y un elemento muy útil para comprender los fenómenos de hipnotismo. De acuerdo con su criterio -recogido por Godín en 1992 (4)-, "todo modo de funcionamiento físico particular no es más que el producto de una actitud mental, es decir, el hecho de concentrar la atención en una dirección determinada". De ese concepto se desprenden varios corolarios:
1. Resulta indispensable que el paciente acepte o desee ser tratado con terapia hipnótica, según sus mecanismos de actuación (consciente o inconsciente).
2. Se hace imprescindible que el paciente aprenda o experimente el hecho de una actitud convincente para que pueda ser colocado en un trance hipnótico.
3. La actitud es la resultante de una serie de conocimientos y preocupaciones de los 4.
protagonistas y reviste gran importancia en el sistema psicoterapéutico. La hipnosis, más que sugestión es una actitud.
Al analizar los aspectos anteriores nos percatamos del valor metodológico y práctico que tenía la actitud para Erickson, y ello nos invita a valorarla en su justa medida para ganar en nitidez. Cuando la actitud es consciente, el sujeto determina si admite o no ser hipnotizado, si vale o no la pena prestarse para ello; pero cuando el individuo actúa mecánicamente, siguiendo un patrón estereotipado, se halla en un plano inconsciente, o lo que es igual, su actitud tiene un carácter inconsciente. La actitud se basa en la disposición que permite poner en juego los mecanismos de aprendizaje y cooperación por parte del sujeto, en tanto perceptivo y analítico, que a nivel de lo consciente interactúa como autorregulador, y automodelador de su conducta. LA ACTITUD HIPNÓTICA. La actitud puede funcionar, y de hecho lo hace, como un interruptor que cierra o da acceso a la corriente. Es un proceso al que se accede en correspondencia con el manejo que del paciente se haga; si es adecuado, su actitud también lo será, salvo algunas manifestaciones de cierta incongruencia afectiva, tal vez condicionadas por causales ajenas. Este principio puede operar a la inversa, pero debe quedar claro que la actitud es positiva o negativa en función de factores tales como: dinámica de esa relación (que incluye la comunicación y las defensas) y respeto a la integridad del paciente. Las defensas constituyen una expresión obligada de las actitudes. Estas regulaciones a favor o en contra están dadas paralelamente, por la percepción que tenga el sujeto acerca de qué cosa es la hipnosis y de las pretensiones que se persiguen en su caso, de modo que el sentido y el contenido ético de las acciones del terapeuta no deben jamás permanecer implícitos, sino que han de ser necesariamente explicados de manera tal que el paciente los perciba y valore. La no observancia de estos requisitos conducirá al fracaso terapéutico, puesto que las tensiones aumentarán y las defensas del paciente se pondrán en guardia, pero esta vez con marcadas reservas y un nivel de cuestionamiento de la capacidad profesional de su terapeuta. EL INCONSCIENTE. Para Erickson, el inconsciente es una enorme computadora que trabaja en función de cada sujeto al cual pertenece y sin el consentimiento de este, que es capaz de funcionar con los datos que les
son proporcionados por la experiencia cotidiana del sujeto, ayudándolo a elaborar verdaderos procesos de síntesis. Es interesante este planteamiento, porque se asemeja a la valoración que del inconsciente hace Uznadzé quien lo ve como expresión del set, que permite reflejar los procesos cambiantes del nivel consciente al inconsciente. Veamos: En defensa de la validez de los criterios de Uznadzé, el propio Bassin (8) expone en su libro el problema del inconsciente (que tomo textualmente por su importancia), lo siguiente: Al caer, el hombre efectúa casi instantáneamente una serie de movimientos de defensa, formulados inconscientemente. Estos movimientos son distintos en las diferentes direcciones de la caída y tienen en cuenta la situación en que se produce esta. Ha quedado demostrado que si al caer tiene en la mano algo precioso o frágil, ello cambia de manera profunda todos los movimientos de defensa que se producen en él "automáticamente". En estos actos realizados de modo o manera no consciente o inconscientemente, se puede manifestar con claridad la voluntad del que cae, no sólo de protegerse a si mismo, sino de proteger la carga. Ello indica con claridad que las acciones automatizadas como las conscientes, pueden reestructurarse de modo complejo y con orientación finalista según la situación, lo cual evidencia con amplitud aquello que bien puede llamarse capacidad de adaptación o plasticidad funcional, y la rapidez y precisión de estas transformaciones inconscientes superan casi siempre las de las modificaciones que se producen de modo consciente. Erickson opinaba que "nuestro inconsciente, que es distinto del postulado por Freud, actúa inteligentemente con vista a un objetivo y organiza nuestro comportamiento sin nuestro consentimiento" (11). Conviene detenerse aquí para buscar las confluencias entre Erickson y Uznadzé, lo cual no es difícil. Analizando nuevamente el ejemplo de Bassin cuando se mostraba a favor de Uznadzé, tenemos que: Está la actuación inteligente, dada por el hecho de que cuando el sujeto cae y tiene algún objeto valioso en su mano, no sólo busca protegerse, sino proteger también el objeto de valor. Esto lo hace automatizadamente, con precisión, rapidez y gran plasticidad o capacidad adaptativa, sin intervención de los procesos conscientes. Ello, además de ser una conducta inteligente, se logra organizando el comportamiento sin autorización de la consciencia al no esperar por su consentimiento. Se trata sin duda alguna de transformaciones inconscientes, a través de las cuales el sujeto se permite realizar sus propias síntesis. Si para Erickson el inconsciente no está establecido de una manera inalterable, significa que no es un patrón rígido, sino dinámico; de ahí la elevada coincidencia con lo que dice Uznadzé, lo que también refuerza nuestro planteamiento inicial. EL SÍNTOMA. Para Erickson, este concepto tenía un alto significado, sobre todo de carácter pragmático, pues entendía que podía ser resuelto mediante una labor tal, que el sujeto casi nunca se percataba de que el síntoma había desaparecido, tanto en su manifestación misma como en el proceso de desarrollo, ya que el trabajo del terapeuta se hace casi imperceptible para el paciente. Erickson valoró el síntoma psíquico en sus múltiples conexiones, es decir, no abstraído del entorno del sujeto, puesto que también este ocupa un lugar en el equilibrio social del enfermo. Así mismo, asumió a la par una posición crítica hacia los terapeutas que solían tratar solamente el síntoma sin tener en cuenta la realidad concreta del individuo afecto, que es donde se genera y desarrolla verdaderamente el proceso desencadenante. Por eso planteó: "Quieren calmar a sus pacientes tratando de sacarlo de la realidad de sus síntomas, en lugar de trabajar con esa realidad" (4).
Al partir de una posición filosófica consistente en ocuparse más del paciente que en la ciencia del paciente abrió la perspectiva de abordar al enfermo con un enfoque ideodinámico, sin que el sujeto supiera por qué, interesándose más por la noción de desarrollo personal en el marco ecológico de un sistema más abierto; y esto es muy importante, porque significa que el trastorno o desorden se manifiesta cuando hay condiciones que lo favorecen como caldo de cultivo. Entre esas condiciones incluyó a las propias personas, la familia y la sociedad, cuando no son capaces de propiciar por si mismos el cambio y alteran "intermitentemente" su equilibrio psíquico, unido a las programaciones o autoprogramaciones inadecuadas que hacen que el individuo pierda el contacto inteligente con su yo, lo cual puede traducirse en las múltiples afectaciones que los sistemas familiares y sociales provocan en el sujeto y en su incapacidad para responder o enfrentarlas exitosamente.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.6 LA PSICOTERAPIA. El desarrollo de una psicoterapia no fundamentada en el análisis de la relación entre el paciente y el terapeuta, como contrariamente hace el psicoanálisis, permitió esclarecer según Erickson lo concerniente al síntoma, sobre todo su manejo contextual. Para ello no se emplearon métodos de abstracción, sino simbólicos, donde predominaba una categoría básica: la metáfora, que debe conducir al paciente a la compresión de su problema, pues lo lleva al camino de que se ha separado o perdido, y aquí radica lo más trascendente de su sistema terapéutico. Veamos lo que dice Godín: "Erickson gustaba mucho contar la historia de un caballo que su familia se había encontrado y desconocían al dueño, pero un día el mismo lo tomó y condujo hasta el lugar donde lo habían hallado y el caballo pudo orientarse y regresar a casa por el camino adecuado". Evidentemente se trata de un enfoque simbólico del problema; pero es mucho más porque conduce a una construcción inteligente y permite aprender y reaprender, a la vez que se basa en la absoluta confianza en el paciente para resolver su problema como expresión del poder del potencial humano y todo eso inserta indudablemente a la terapia ericksoniana en una red de interconexiones con otras, aunque ello no significa que incorpore obligatoriamente los enfoques de estas. Quizás podamos explicarlo mejor. Sin duda alguna, el psicoanálisis freudiano confiere un valor extraordinario al símbolo e introduce esa categoría, que fue reconocida por Erickson, pero dándole una nueva dimensión cuando utiliza la metáfora para comunicarse con el paciente. Si el sujeto aprende y reaprende, ello equivale a la asimilación de nuevas conductas, por lo que debe eliminar viejos patrones inservibles o fastidiantes, es decir, desaprenderlos. Entonces, sí se produce el aprendizaje y desaprendizaje que estipulan en sus enfoques las conductistas Doller y Miller (12) y Joseph Wolpe (5), de modo que aquí hay un punto de unión con la terapia conductual. Se vincula con las terapias humanistas, pues concede valor al poder de desarrollo del potencial humano. Estos tres momentos expuestos anteriormente revelan que la terapia ericksoniana expone las múltiples interferencias de los diversos enfoques psicoterapéuticos, y tomemos para ilustrar esta aseveración el esquema número 2 que aparece en la obra de Godín, el cual abarca el enfoque psicoterapéutico de Milton Erickson y pone de manifiesto un profundo estudio de la temática psicoterapéutica.
Esquema número 2. Enfoques de la terapia ericksoniana.
Como puede verse, del nivel central (Milton-Erickson) se derivan 3 tipos de terapia: a) Terapia de hipnosis estratégicas b) Hipnoterapia ericksoniana c) Milton-terapia Esa triada constituye el resultado evolutivo del trabajo de Erickson en cuanto el quehacer psicoterapéutico y que se impone abordar aunque sea sucintamente, para hallar su clara ascendencia en el curso de la vida científica y creadora de este prestigioso autor. Terapias de hipnosis estratégicas. Se enmarcan en el período en que Erickson trabajó con todo el caudal de información de la hipnosis propia del siglo pasado, donde introduce como elemento indiscutible una virtuosidad tal, que implicaba elementos nuevos. Estos últimos no eran más que estrategias que ayudaban a hacer más factible la aplicación de los conocimientos heredados y acercarse al paciente en un plano más humano. El meollo conceptual estaba dado, en ese momento ericksoniano, por la creencia de que tanto la hipnosis como las sugestiones poshipnóticas permitían a los sujetos adoptar nuevas conductas a partir del funcionamiento de un sistema operativo psíquico. Hipnoterapia ericksoniana. Define el acercamiento de Erickson a la puesta en marcha, por parte del sujeto, de ciertos mecanismos psíquicos inconscientes que le posibilitan alcanzar estados hipnóticos con mayor facilidad y rapidez e iniciar durante estos todos los cambios que desea producir como función terapéutica o como aspiración, apoyado en técnicas verbales que van mas allá de una simple sugestión y reflejan a la vez una actitud hipnótica. Milton-terapia. Hacia el final de su vida y cuando trabajaba en unión de Rossi, otro importante seguidor de la nueva hipnosis, Erickson llegó a plantear que conociendo rigurosamente la Psicología y las sutilidades del lenguaje, el terapeuta puede lograr que el paciente utilice sus descubrimientos anteriores sin necesidad de que medie un trance hipnótico especial o tradicional. Es la llamada hipnosis sin hipnosis.
LA METÁFORA. Es un "tropo que consiste en cambiar el sentido recto de las voces por otro figurado, en virtud de una comparación tácita". Para Erickson, la metáfora (de meta-feria, que significa ir más allá) (4) permite la definición de una vía, de algo que posibilita ir más lejos, lo cual equivale psicológicamente a hacer nuevos aportes en lo concerniente al significado que posee una cosa determinada para la conciencia del sujeto; de ahí que se empleen frases que puedan ayudarle a encontrar caminos para su recuperación, siempre y cuando estas frases le permitan el manejo de algo con valor para él. Usualmente la metáfora encierra un mensaje implícito. El acto de encontrarlo, activará la búsqueda consciente por parte del paciente en cuanto a lo que tiene una relación significativa para él. Digamos que ello está ligado a dos propiedades básicas de la palabra: el sentido personal y el significado. Analicemos, por ejemplo, qué quiere decir la expresión: "Hasta las rocas lloran".
¿Cómo es posible que una roca, elemento inerte, llore? ¿Acaso ocurre en la vida real? Naturalmente que no; pero aquel que necesita hallar su propia verdad, la encontrará en esta imagen metafórica, la cual podría ser, entre otras muchas interpretaciones: a) Que hasta los más duros son sensibles b) Que hasta los más duros se aflojan.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.7 Evidentemente, esto sirve a los propósitos de la acción terapéutica y, Erickson la emplea fuera de la hipnosis y en ello estriba el hecho de que metáfora no es hipnosis, pero al aplicarla adquiere un valor primordial para ésta, pues su uso garantiza activar determinados mecanismos para ayudarse a tomar conciencia de algo que sólo está en la propia dimensión psicológica y personal del paciente, al permitirle llegar a aquellos niveles psíquicos hasta donde la conciencia no puede hacerlo en la vida cotidiana, para entonces, al hallarlos: tocarlos, manejarlos y convertirlos en conscientes. Godín asevera que "las metáforas permiten, en lo particular pasar más allá de las limitaciones psicológicas". Erickson gustaba de hacer historias a sus pacientes, las cuales eran, antes que todo, metáforas útiles. Para que la metáfora sea considerada como tal en el plano terapéutico, debe ser concebida en el curso de la sesión de forma espontánea y, más que crearla, hay que ponerla en función de lo que necesita el paciente, pues de lo contrario se convierte en una sugestión metafórica por su carácter premeditado y en una factura elaborada de antemano. EL SÍMBOLO. El símbolo es un hecho sentencioso y, en última instancia una representación convencional o imaginaria de algo. Para Erickson, la imagen simbólica tiene un peso importantísimo en su sistema terapéutico, a medida que se profundice en el yo del individuo. No puede haber simbolismo sin imaginación o imaginería, ya que es ahí justamente donde la imagen representa lo simbólico y transporta al paciente a un mundo imaginario, donde las cosas que ve, adquieren para él un valor inestimable. En tanto le movilizan hacia el cambio necesario,
cada objeto posee un valor simbólico e intrínseco para la propia dimensión personal del sujeto y esta dimensión es casi siempre emocional y conflictiva. Podríamos decir que el símbolo, al igual que la metáfora -pero por distintos caminos - lleva al paciente a buscar sus verdaderas motivaciones, que son inconscientes y existen en lo más profundo de su ego; de ahí que cuando las haya, comienza a deslindar la senda adecuada para su uso, que le conducirá a modificar su conducta en el mejor sentido. El terapeuta puede reforzar entonces lo que el sujeto ha encontrado, si procede con tacto, y respetando los pasos que este dé, le mostrará el camino de su propio yo, de su verdad y, por ende, de su curación. De ello se deriva que si el paciente utiliza un lenguaje simbólico para comunicarse, el terapeuta deberá hacer lo mismo para poder abordar el problema, facilitar el aprendizaje inconsciente y promover una conducta inteligente. APRENDIZAJE INCONSCIENTE. Está dado como parte del resultado de una psicoterapia eficaz en el acto de aprender, pero aquí significa el resultado de la operatividad de la hipnosis; es decir, si se dirigió hacia lo interno, hacia la verdad del sujeto y hacia el Yo en su profundidad, donde lo más útil es aprender y saber emplear lo aprendido tantas veces como sea necesario, aunque no repare conscientemente en ello. Esto es más bien un dispositivo que se crea (tipo "computadora"), que está guardado y que se activa automáticamente cuando resulta preciso, puesto que se convierte en una información esencial, que se reconoce por si sola para su uso, sin pedir ayuda a nivel consciente para decirle: empléame; de ahí que ella misma se dice:"Me tengo que emplear, porque aprendí a usarme cuantas veces sea necesario y a reconocer tantas situaciones como haya que auxiliar; por tanto, ahora me toca y debo hacerlo, porque ésta es una de las situaciones". El aprendizaje inconsciente es un "biofeedback", una transferencia de aprendizaje. Erickson señala que está claro que "el trance presenta un estado activo de aprendizaje, sin la intervención de actos conscientes". OTROS PERSONAJES DURANTE EL PERIODO DE LA NUEVA HIPNOSIS. Otros representantes de la nueva hipnosis son: Rossi, Barber, Arouz, Weitzenhoffer y Godín. Rossi, por ejemplo fue un autor de mucho prestigio y con planteamientos teóricos muy interesantes. Trabajó con Erickson en la última etapa de la vida de éste, abordó en su extenso trabajo determinados elementos como el aprendizaje inconsciente e intentó explicar las bases fisiológicas de la hipnosis, entre otras cosas. Arouz se destacó en la concepción de la autohipnosis negativa, que según él se halla al servicio de la imaginería y de las autosugestiones muy fuertes. A ello agrega que a medida que el pensamiento negativo no es consciente y escapa a la crítica, se dan fases hipnóticas que podían ser por elección y emplearse también como elementos de hipnosis terapéutica. ANÁLISIS DE LAS CONCEPCIONES CONTEMPORÁNEAS SOBRE LA HIPNOSIS. Hoy nadie duda que la influencia de la sugestión esté presente en toda la vida del hombre desde que se levanta y abre sus ojos, y que su aplicación no tenga nada de misterioso ni sobrenatural, sino que es un procedimiento psicológico que tiene sus leyes y principios y actúa sobre el sistema nervioso del individuo. No podemos conocer el manejo de una técnica si no conocemos su origen y no se estudia su desarrollo histórico social. Por ese motivo hemos reseñado a grosso modo a los principales
científicos que a lo largo de estos últimos 200 años lucharon y soñaron porque fuera reconocido el uso de la sugestión, como Mesmer, Puységur, Faría, Braid. Esdaile, Bernheim, Charcot, Coué, Pávlov, Milton Erickson y muchos otros que no dejan de tener igual importancia. Pretendemos que en nuestro medio la utilización de las técnicas sugestivas se aparte por completo de los dogmatismos fanáticos de pasadas y nuevas escuelas, que no se corresponden con un criterio filosófico materialista, y que no se olvide que siempre que utilizamos la palabra, la misma lleva implícita la influencia sugestiva. La sugestión constituye de por sí un recurso psicológico y se ha utilizado desde que apareció el lenguaje como medio de comunicación. Su utilización permitió conocer que el hombre es una unidad integral donde hay que tener en cuenta no sólo los aspectos biológicos, sino que tienen también gran significación los psicológicos y sociales. La técnica de la sugestión hipnótica ha sido utilizada bajo los nombres de magnetismo, sonambulismo, braidismo, neurohipnotismo, abreacción, psicoanálisis, condicionamiento, sofrología, psicoterapia profunda, psicoterapias varias y psicoterapias breves. Pero la realidad es que todas las terapias derivan de una relación interpersonal entre terapeuta y paciente, cuando el primero desea curar y el segundo necesita y requiere ser tratado. El estudio y la investigación de la hipnosis han sido realizados históricamente por científicos de diversos países y se ha demostrado la existencia de un desconocimiento general sobre la naturaleza que origina la sugestión hipnótica, así como sobre las leyes que rigen su acción, pero la revolución científico técnica ha permitido que actualmente ya la hipnosis sea mejor conocida. Hagamos un análisis crítico de la historia del hipnotismo a partir de la posición que tomó Mesmer con su teoría del fluido magnético y de su discípulo Puységur, que no se apartó mucho de su maestro, pero que admitió la posibilidad de la influencia verbal de una persona sobre otra. Ambas posiciones, materialistas mecanicistas, enmascaraban las tendencias mitológicas, idealistas y oscurantistas de la época, y de las cuales ellos no se apartaron.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.8 Es importante señalar que Federico Engels, uno de los fundadores del materialismo dialéctico, se ocupó del estudio teórico práctico de la hipnosis y la sugestión. Una prueba de ello es la publicación de su trabajo titulado Las ciencias naturales en el mundo de los espíritus, en el año 1878, donde cita el caso de una joven de 20 años que al fijar la mirada y pasarle la mano con suavidad por la cara entraba fácilmente en estado hipnótico. Engels planteó que en la relación entre inductor y sujeto no existe nada misterioso ni sobrenatural, que ese fenómeno no es más que la influencia oral de una persona sobre el sistema nervioso de otra en determinadas condiciones. La sugestión y la hipnosis continuaron su desarrollo en espiral, apoyándose en las contradicciones que se formaban entre los investigadores y estudiosos, pero poco a poco se fue llegando a una concepción más científica. Así, Faría negó el fluido magnético y destacó el valor de la sugestión oral; Braid consideró que la hipnosis era un sueño nervioso, pero no pudo desarrollar más los conocimientos teóricos, pues en aquella época no había el conocimiento actual sobre la fisiología del sistema nervioso. El principio en que se basaba Braid para explicar la causa de la influencia de la sugestión era metafísico e idealista; consideraba que lo que sustentaba la hipnosis era la ley del monoideísmo. Esto se puede ver claramente cuando afirmaba que la influencia de las ideas dominantes sobre la actividad física y espiritual, el monoideísmo, es un estado en que el alma está sometida a una sola
idea dominante. Esta concepción influyó sobre Liébeault, que con sus trabajos constituyó el punto de partida de los postulados de la Escuela de Nancy. Liébeault planteó que la persona que duerme con sueño profundo conserva en su mente la idea de aquel que lo hizo dormir y abandona su atención concentrada y sus sentidos, y se encuentra a disposición de esta idea. Como se puede apreciar, Liébeault no se apartó de la teoría del monoideísmo. Esta posición sobre la hipnosis y la sugestión se apartaba de la verdadera naturaleza del origen del sueño hipnótico, que no es más que una inhibición de la masa principal de la corteza cerebral, con la conservación de la actividad en un punto determinado; es decir, que la sugestión provoca cierta excitación sobre un punto determinado de la corteza y mientras las otras zonas se mantienen en estado de inhibición. Liébeault motivó a Bernheim, que había sido alumno de Charcot, y ambos fundaron la famosa Escuela de Nancy, que consideraba que la sugestión era una influencia que ayudaba a introducir ideas en el cerebro de las personas, siempre que fueran aceptadas por las mismas. Los aportes de esta escuela fueron muy valiosos. Trataron de establecer una relación entre los fenómenos producidos por la hipnosis y la sugestión con las funciones de la corteza cerebral y la psiquis del hombre. Su error principal fue que consideraban la sugestión como un acto de poca duración que se introducía en la psiquis del paciente sin ningún tipo de obstáculo. La realidad es que no todo lo que se le propone a un sujeto en estado de sueño hipnótico es aceptado por él, pues si existe alguna proposición que va en contra de sus principios morales, éticos, ideológicos, entre otros, automáticamente se provoca un rompimiento del rapport establecido con el hipnotizador y se pasa de inmediato a la vigilia; es decir, que una sugestión no es aceptada por el hipnotizado sin crítica ni resistencia. A pesar del error teórico de la Escuela de Nancy, su posición pudo sobreponerse a la concepción de la Escuela de París, que identificaba la hipnosis como sinónimo de histeria. El máximo representante de esta escuela, Charcot, tiene el mérito de haber formado a infinidad de científicos que se motivaron con el estudio y la investigación de la hipnosis. Charcot, en realidad, bloqueó el desarrollo de la hipnosis. Su error catastrófico de considerar la histeria como sinónimo de los fenómenos hipnóticos provocó un rechazo a este método terapéutico en muchos médicos. Su influencia fue tal, que actualmente muchos profesionales desconocedores del fenómeno hipnótico tienen todavía arraigado este concepto, completamente apartado de la realidad. Una teoría, aún en boga, basada en los principios de Charcot, es la de Pierre Janet, que pretende que la hipnosis se debe a un estado de disociación. Janet trabajó en la clínica de la Salpetriére y heredó la tradición de Charcot que relaciona histeria e hipnosis. Los estados disociativos o de disociación son una de las dos formas de manifestación de la neurosis histérica. En estos estados, en ausencia de organicidad, hay un estrechamiento del campo de la conciencia que puede limitarse a un área circunscrita de experiencia en relación con la cual el comportamiento parece consecuente y a menudo dirigido a una meta dentro de dicha área. Janet creía que había disociación de las funciones psíquicas durante la hipnosis, de manera que podían separarse diferentes elementos psicológicos y operar entre sí con mayor o menor independencia. Aunque con frecuencia se ve disociación en la hipnosis, no tiene fundamento la teoría de Janet, de igual modo que no podría jamás explicarse el origen de un fenómeno afirmando que el efecto es el que da lugar a la causa. De cualquier manera, el descubrimiento del mecanismo de disociación durante la hipnosis tuvo gran importancia para el desarrollo del hipnoanálisis. . Hubo científicos que en otras partes del mundo estudiaron también los fenómenos de la sugestión. Por ejemplo, Schaffer, psiquiatra húngaro que estableció en 1895 una teoría ecléctica que unía las Escuelas de Nancy y de París, pero que tampoco se ajustaba a una concepción materialista
dialéctica, pues no podemos hablar de hipnosis en términos de mitad sugestión y mitad soma, y es una posición completamente mecanicista. La sugestión y la hipnosis han sido estudiadas por diferentes escuelas psicológicas. Una de esas escuelas es el asociacionismo, que explica la vida mental mediante un juego de asociaciones entre los estados psíquicos. Los asociacionistas se basan en las concepciones subjetivo idealistas y fenomenológicas de Berkeley y Brown, quienes en vez de hablar de asociación utilizaban el término de sugestión como más general. Científicos como Wundt y Lewenfeld trabajaron sobre la sugestión. El primero la consideraba como una asociación concomitante de la conciencia con las ideas que surgen y no dan la posibilidad de manifestarse contrarias a la asociación. Por otro lado, Lewenfeld comprendía por sugestión la representación de carácter psíquico o psicofísico que, a consecuencia de la limitación o interrupción de la actividad asociativa, produce una acción nada común. En realidad, los asociacionistas se acercaron a la comprensión del fenómeno sugestivo, pero cometieron el error de establecer sinonimia entre sugestión y asociación de ideas, al mismo tiempo que consideraron la asociación como enlace real y que existe independientemente del sujeto que percibe. Esta posición los situaba como idealistas mecanicistas y los apartaba de la realidad objetiva del problema. Otra escuela psicológica que estudió los fenómenos de la sugestión fue la conductista o behaviorista. Para Sidis y Krafft-Ebing, representantes de dicha escuela, la sugestión era contemplada bajo el esquema mecánico de estímulo-respuesta (E - R). Ellos planteaban que en toda sugestión existían sólo dos eslabones: la sugestión y la reacción-respuesta. Se puede apreciar claramente el materialismo mecanicista del esquema conductual, donde se omiten las condiciones internas del sujeto y se ve al hombre como un ser pasivo que ignora su participación y el papel que desempeña en dicha relación. El conductismo no toma en consideración que cuando se estimula a un sujeto, incluso en estado hipnótico, las características de su personalidad no permanecen ajenas al proceso. La mayor prueba que podemos tener de esto lo constituye el rompimiento del rapport que se produce cuando se le da una sugestión al paciente en contra de sus principios morales, ideológicos o religiosos. Si nos referimos al enfoque neoconductista de la hipnología, es importante señalar a Hull y Erickson, quienes han desempeñado un papel muy importante en las investigaciones contemporáneas.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.9 Clark L. Hull (1884 -1952), creador del conductismo deductivo, marca el comienzo de la investigación hipnótica actual con la introducción de las matemáticas en la experimentación sobre hipnosis, específicamente con el uso del modelo probabilístico de la hipótesis de nulidad, alrededor de los años 1930. Aplicó técnicas de correlación estadística con escalas de profundidad hipnótica, para determinar los correlativos psicométricos de la respuesta hipnótica. Según los estudios de Hull sobre sugestionabilidad e hipnosis, en general los niños entre siete y ocho años de edad son más fácilmente hipnotizados que en cualquier otra edad de su vida, las mujeres en general son sujetos algo mejores que los hombres, los adictos a las drogas son en general más sugestionables que los no adictos y los individuos con cocientes de inteligencia altos son también en general más susceptibles a la hipnosis que los individuos de menos inteligencia. Por su parte, a Milton H. Erickson se le debe, entre otras cosas, el enfoque terapéutico que pone énfasis en la brevedad y en objetivos limitados sin introspección, es decir, la llamada hipnoterapia breve.
Para Erickson, la hipnosis es un estado dirigido hacia lo interno del sujeto en el que los múltiples focos de atención característicos de nuestra conciencia visual cotidiana están restringidos a relativamente pocas realidades internas. Al mismo tiempo, la hipnosis es un estado altamente motivado que lleva implícito el aprendizaje activo inconsciente; es un estado alterado de funcionamiento en el que ocurre un aprendizaje que depende del estado hipnótico, llamémosle, para ser más precisos, un aprendizaje estado dependiente. Para ilustrar esta afirmación, Erickson dice que lo memorizado en embriaguez alcohólica, en hipnosis o en un estado de excitación (por ejemplo, por el efecto de anfetaminas) o de inhibición (por el efecto de amobarbital u otros psicofármacos) se recuerda solamente en un estado igual; lo memorizado en estado de vigilia se recuerda sólo en otro estado de vigilia, y así ocurre en otros estados: de un sueño al siguiente, de una inspiración creadora, artística o psicótica a otra igual, de hipnosis a hipnosis y de un embeleso a otro embeleso. Para él, el objetivo de la inducción hipnótica es reducir los focos de atención (a unas pocas realidades), facilitar alteraciones en los patrones habituales de dirección y control del sujeto y permitir la receptividad de los pacientes a sus propias asociaciones internas y habilidades mentales que puedan integrarse en las respuestas terapéuticas. La sugestión fue estudiada también por Sigmund Freud (1856 -1939), creador del psicoanálisis, el cual nació en un hogar judío de Freiberg y vivió en Leipzig y en el ghetto vienés de Leopoldstadt. Freud fue alumno de Charcot en París, pero la principal motivación que impulsó su dedicación al estudio de la sugestión fue la lectura de un libro de Bernheim titulado (La sugestión y sus aplicaciones terapéuticas). Posteriormente visitó a Liébeault y a Bernheim en la Escuela de Nancy y comenzó a tratar a sus pacientes con la técnica hipnótica, aunque en realidad no tuvo éxito y se sabe que fue un mal hipnotizador. Freud investigó el trauma dinámico que Charcot mencionaba, y en esta búsqueda conoce al doctor Joseph Breuer, quien le habló del famoso caso de Anna O. que estudiaron juntos. Freud comprobó que en el estado hipnótico, la paciente explicaba cuáles eran las causas de su padecimiento, el cual se manifestaba por parálisis, inhibiciones y estados de perturbación psíquica, pero esto no lo podía hacer cuando estaba despierta, ya que no era capaz de establecer ninguna conexión entre sus síntomas y las diferentes experiencias de su vida. Breuer llamó catarsis al procedimiento terapéutico de establecer y reconocer las causas a nivel inconsciente que provocan los síntomas, pues decía que cuando un paciente recuerda la situación que le provocó el síntoma por primera vez y pasa por todas las excitaciones afectivas correspondientes al impulso reprimido; el síntoma asociado desaparece y no vuelve. Este procedimiento se conoce como método hipnocatártico, y es utilizado por muchos terapeutas para la eliminación de síntomas psicopatológicos de origen psicotraumático. Freud y Breuer publicaron en 1893 un libro titulado Estudio sobre la histeria. (Studien über Hysterie) donde se referían al uso de este método que ambos continuaron empleando. Freud insistía en que sus pacientes revivieran por medio de la hipnosis las emociones que se suponía habían provocado la enfermedad, para de esta forma hacer que los propios pacientes descargaran la energía psíquica en la que, según él, se apoyaban los síntomas neuróticos. Los casos estudiados por Freud le hicieron considerar que curaciones aparentes podían ser completamente destruidas si se interrumpía su relación personal con el paciente. Este resultado (y quizás su poca destreza como hipnotizador) lo condujo a su decisión de abandonar por completo el método hipnótico y lo sustituyó por el psicoanálisis, que consistía en su inicio en acostar al paciente y colocarle suavemente la mano sobre la frente, insistiéndole en que recordara hechos del pasado. Posterior a esto estableció el término de represión como el mecanismo causal de las llamadas enfermedades inmotivadas.
Freud fue el fundador de la teoría psicoanalítica de la hipnosis y la sugestión. El subjetivismo de esta teoría toma sus fuentes en la filosofía idealista del voluntarismo de Schopenhauer, Hartmann, Nietzsche y otros. El psicoanálisis considera la psiquis del hombre dividida en consciente e inconsciente, como entes autónomos, con funciones inherentes de desplazamiento, condensación, superposición, entre otros, siendo lo más importante el inconsciente, pues según la teoría, constituye la fuerza rectora de la personalidad humana donde se encuentran los instintos. Para los seguidores del freudismo, la conciencia desempeña un papel secundario y de sometimiento. Para los psicoanalistas, la hipnosis, la sugestión y la sugestibilidad tienen una base erótica. Así, por ejemplo, un clásico de esta corriente, Sandor Ferenczi, consideraba que el sueño hipnótico es la rehabilitación de los ajustes infantiles-eróticos-masoquistas y que sobre la base de la sugestión reaparece el complejo de Edipo. Para Ferenczi, la hipnosis era un estado de regresión a una relación paterno-filial. Freud escribió que la esencia de la hipnosis debía buscarse en la fijación inconsciente de la libido en la personalidad del hipnotizador, por medio del componente masoquista del impulso sexual. Como se aprecia, en las concepciones psicoanalíticas se refleja la influencia de la filosofía idealista subjetiva, irracionalista, agnóstica y mecanicista. En realidad, la conciencia es lo primero en la psiquis y es la rectora de la actividad. Los planteamientos que hace el psicoanálisis en cuanto a considerar que la hipnosis tiene una base erótica y que en la sugestión se sobrepone el complejo de Edipo no son reales. El sueño hipnótico es provocado no precisamente por una causa interna, sino por la sugestión externa, aunque no es menos cierto que depende de las condiciones internas, pero desde el punto de vista fisiológico. Freud, con la creación del psicoanálisis, no se apartó del empleo de la sugestión, sino que dejó de utilizar una de sus formas, la del sueño hipnótico, para trabajar en estado de vigilia, pero unido a toda una serie de concepciones que se alejan de la realidad objetiva y del verdadero fundamento fisiológico materialista de la sugestión. Lo correcto de la teoría psicoanalítica de la hipnosis y la sugestión es lo referente a la observación de que en la hipnosis hay una disminución del nivel de conciencialización de la psiquis. Existen muchas otras teorías sobre la hipnosis, además de las ya mencionadas. White planteó la teoría del esfuerzo dirigido a un objetivo, según la cual los fenómenos de la hipnosis se producen por el esfuerzo del sujeto en comportarse como una persona hipnotizada, según el patrón definido por el hipnotizador y comprendido por el sujeto; la teoría de Weitzenhoffer, basada en la homoacción, la heteroacción y la disociación; la teoría de Kubie y Margolin, según la cual las fronteras del consciente están al principio limitadas al hipnotizador y luego se expanden en la hipnosis completa; la hipótesis atavística, que considera la hipnosis ante todo como una regresión al modo primitivo de funcionamiento mental, en el cual las ideas son aceptadas en la mente por el proceso arcaico de sugestión en lugar de la función lógica adquirida más recientemente del cerebro; la teoría ideomotora, y muchas otras. No fue hasta que Pávlov realizó sus descubrimientos sobre la actividad nerviosa superior, que la hipnosis y la sugestión pudieron contar con una verdadera base teórico-científica materialista. Su teoría constituyó una revolución dentro de la ciencia, pues daba una explicación fisiológica de los fenómenos psíquicos.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Tercera parte.10 Pávlov decía que la palabra constituye un reflejo condicionado que permite ser utilizado para provocar el sueño hipnótico, el que a su vez definía como una inhibición cortical interna, que surge en la zona motora cortical y se irradia a las demás áreas de los hemisferios cerebrales, y que
puede llegar al mesencéfalo. Con sus descubrimientos, Pávlov rompió con las concepciones idealistas, metafísicas, sobrenaturales, oscurantistas y mitológicas que se habían formado sobre la hipnosis. En 1897 se llevó a cabo en Moscú el XII Congreso Internacional de Medicina y en su décimo primera sesión se presentó el tema El hipnotismo frente a la ley de determinados países, y el presidente de la sesión era el profesor Mesechede. En dicha sesión se informó de las trabas puestas por algunos países a la aplicación de la hipnosis y se hacía notar que en Rusia, donde se permitía esta práctica, a través de más de treinta mil sesiones de hipnosis realizadas nunca se había podido comprobar ni el más mínimo peligro para el paciente. Dos investigadores, Tokásky y Daniliévsky, consideraron que la hipnosis y la sugestión eran fenómenos psicorreflejos y refutaron lo planteado por Charcot sobre los perjuicios de la hipnosis, demostrando por medio de sus investigaciones que la sugestión actúa beneficiosamente sobre el sistema nervioso y provoca tranquilidad y reforzamiento. Las investigaciones de Tokásky y Daniliévsky demostraron que la sugestión trabaja sobre la corteza y que ésta influye en la esfera vegetativa del sistema nervioso. También señalaron que la sugestión y la hipnosis podían actuar independientemente, es decir, la hipnosis sin la sugestión oral y esta última sin la primera. Tokásky había presentado en 1890 un trabajo titulado (El hipnotismo en la pedagogía), donde planteaba el problema del papel de la sugestión en la educación de los niños y adultos, así como la posibilidad de utilizarla con el fin de intensificar perennemente la energía de la actividad psíquica en general y consideraba que era posible emplear esta intensificación no transitoria para modificar la personalidad y la conducta de niños y adultos. Él afirmaba que la perdurabilidad de la acción sugestiva se debía al efecto de la sugestión posthipnótica. Vladímir N. Béjterev (1857-1927), fundador junto con Pávlov de la escuela reflexológica rusa, fue quien desarrolló la idea sobre la hipnosis como una singular modificación del sueño natural. Este concepto coincidía con el de Pávlov, quien también señalaba cierta similitud entre inhibición interna, sueño hipnótico y sueño natural, diciendo que la diferencia que pudiera existir entre los tres no era significativa. Las investigaciones realizadas por Béjterev lo llevaron a plantear que la esencia de la hipnosis era la introducción, en la esfera psíquica de otra persona, de ideas, sentimientos y emociones en la medida de lo posible, sin que intervinieran la crítica ni el juicio, utilizando la palabra y los gestos y evitando la atención activa, es decir, dando un rodeo a la personalidad crítica del sujeto. Claro que, en la utilización de los gestos para ejercer sugestión, se tiene también en cuenta un contenido verbal significativo, pero codificado en clave. Sus ideas fueron desarrolladas por muchos de sus discípulos, entre ellos Plátonov, Miásishev, Ananiev y otros. Un aporte importante de Béjterev fueron sus investigaciones sobre la sugestión en estado de vigilia. Distinguió la sugestión volitiva o premeditada y la no volitiva o no premeditada. La sugestión no voluntaria actúa en la comunicación mutua de las personas, en forma imperceptible y por esto no provoca resistencia. Esta sugestión se ilustra con el ejemplo de la influencia de una persona alegre sobre una comunidad de personas que están aburridas, las que involuntariamente y sin advertirlo se contagian con su alegría. Sin embargo, debe señalarse que en el presente ejemplo no sólo actúa la sugestión, sino también la imitación y otros medios de interinfluencia. Hasta su muerte, en 1927, Béjterev realizó numerosos estudios y experimentos sobre la sugestión hipnótica por telepatía en el Instituto de Investigaciones del Cerebro, en la ciudad de Leningrado, junto a otros investigadores entre los que se destacó Leonid L. Vasiliev. En 1930 otro científico ruso, discípulo de Béjterev, Plátonov, publicó un artículo denominado (La palabra como factor fisiológico y terapéutico), en el mismo estableció la utilización de la sugestión, pero en forma de persuasión, diciendo que ésta debe ser construida sobre la base de un sistema
de argumentos lógicos y demostraciones desarrolladas consecutivamente. Puso como ejemplo las instrucciones de cómo realizar un parto sin dolor, la profilaxis de los dolores del parto, las conversaciones para el control del alcoholismo, entre otros. Plátonov utilizó el término de sugestoterapia para el uso de la sugestión como tratamiento clínico y refiere que debe tener forma de comunicación imperativa. Puso el siguiente ejemplo: Usted ha olvidado ya todos sus penosos sufrimientos, y cuando los recuerde por casualidad no le producirán inquietud. Plátonov realizó valiosos aportes al desarrollo científico de la hipnosis y la sugestión; consideraba esta última con posibilidad de orientar las ideas y la conducta de las personas, y que incluso llega a ser el motivo de las mismas. También consideraba que la sugestión actualiza y refuerza aquello que debe motivar las acciones y que inhibe todo lo que pueda estorbarlo. En conclusión el análisis histórico del fenómeno de la sugestión y de la hipnosis nos demuestra su desarrollo y evolución, sus cambios cualitativos y cuantitativos. Actualmente nadie niega que la sugestión actúe sobre la psiquis de las personas; es decir, que pueda influir sobre la fuerza o intensidad de fenómenos psíquicos como la percepción, la memoria, el pensamiento, los sentimientos, la imaginación, la voluntad, entre otros. La palabra influye directamente sobre el segundo sistema de señales y la corteza cerebral, se interrelaciona con el primer sistema y recibe su influencia tocando las zonas de la subcorteza, donde se encuentran los centros vegetativos superiores y los reflejos incondicionados de características complejas, como son los instintos y las emociones; es decir, que por medio de la palabra podemos ejercer influencia en estos aspectos mencionados. Es de todos conocida la estrecha relación existente entre los aspectos somáticos y psíquicos; cualquier cambio fisiológico y bioquímico en el organismo provoca cierta reacción psíquica y viceversa. Por eso se utilizan los términos psicosomático y somatopsíquico, y sobre ambos aspectos es posible trabajar con la hipnosis. La utilización de la hipnosis y la sugestión como recurso psicoterapéutico ha tenido que recorrer un camino lleno de obstáculos en su desarrollo histórico, pero finalmente se ha podido comprobar su carácter científico y su valor terapéutico.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Cuarta parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Cuarta parte Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
Otras técnicas que emplean los estados alterados de la conciencia La sofrología de Caycedo La enseñanza a reacción La noesiología de escudero
El futuro pasa por la unidad mente – cuerpo El periodo del resurgir de la hipnosis El desarrollo de la hipnosis en cuba Definición de hipnosis Diferencias entre hipnotizador e hipnólogo El mecanismo neurofisiológico de la hipnosis La hipnosis y su relación con otras ciencias afines Hipnosis y psicología Hipnosis y sofrología Hipnosis y fisiología Hipnosis y medicina
OTRAS TÉCNICAS QUE EMPLEAN LOS ESTADOS ALTERADOS DE LA CONCIENCIA. LA SOFROLOGÍA DE CAYCEDO. La Escuela sofrológica, fundada en 1960 por el psiquiatra español Alfonso Caycedo es definida por su discípulo, el Dr. G.R. Rager como “una ciencia, una filosofía, una terapéutica y un arte. Su objetivo es por una parte, el estudio fenomenológico del conjunto de medios psicológicos, fisiológicos, químicos y físicos capaces de actuar sobre la conciencia humana y modificarla y, por otra, su posible aplicación en terapéutica medica”. La sofrología –dice Caycedo- se sirve no solo de la hipnosis, sino también de cualesquiera técnicas de relajación, variantes de la hipnosis, el entrenamiento autógeno de Schultz, la técnicas de Jacobson, así como sus estados paralelos, como los que aparecen en el yoga o la meditación, los trances mediumnísticos, los éxtasis naturales, en los que nosotros creemos que hay un profundo denominador común fenomenológico. Por tanto la sofrología y sus técnicas se basan, no sólo en la hipnosis clásica, sino en todas aquellas cosas o técnicas que producen un estado alterado o diferente de conciencia. Su denominación deriva del sophrosunem platónico: “estado de calma y concentración suprema del espíritu producido por hermosas palabras” según Carmines. Alfonso Caycedo, médico colombiano nacionalizado español que estudiando diversas técnicas y métodos de modificación de los estados de conciencia (meditación, yoga, hipnosis, entre otros), funda la escuela de la Sofrología con unos postulados y formas propias. Sus fines son eminentemente médicos e hizo hincapié en distinguir sofrología de la hipnosis, buscando en ello la aceptación de estas técnicas por el colectivo científico. LA ENSEÑANZA A REACCIÓN. En 1960 en un centro experimental de Sofía un grupo de alumnos se sometía a una clase especial en la que se aplicaron técnicas de sofrología y “Sugestopedia” del Doctor Lozanov. La clave estaba en someter a la mente de los alumnos a una situación de descanso o “relax”, al mismo tiempo que de atención distendida. Esto produce que ambos hemisferios cerebrales y el resto el cuerpo funcionen altamente integrados. Para ello usaron música clásica de fondo con compases largos (Vivaldi, Teleman, Haendel) El profesor mientras tanto atemperaba sus palabras a dicho compás y melodía. Los alumnos quedaron así sometidos a una autosugestión y estado receptivo que les permitía utilizar mucha más potencia de su cerebro para asimilar y recordar cuanto se les decía. Los resultados fueron sorprendentes: en una sola sesión musical aprendieron mil palabras de inglés. Posteriormente una escuela de idiomas de Washington utilizando similares técnicas conseguía que sus alumnos aprendiesen español, latín y alemán con gran fluidez oral y escrita ¡en sólo tres meses! LA NOESIOLOGÍA DE ESCUDERO.
Desde hace varias décadas el Doctor Ángel Escudero cirujano valenciano viene realizando intervenciones de cirugía mayor por lo que él ha denominado anestesia post-sofrónica. El insiste en que su método nada tiene que ver con la hipnosis puesto que los pacientes están conscientes en todo momento mientras les opera sin dolor, incluso se permite hablar con ellos o mostrarles cómo les interviene. De hecho, Escudero no tiene gran simpatía hacia la hipnosis, quizás por el prejuicio que en el mundo científico o académico se tiene a que se les relacione tal técnica. Lo cierto es que sus pacientes tienen un post-operatorio mejor y más rápido que cuando las intervenciones se realizan con anestesia química; incluso muchos salen del quirófano por sus propios medios (caminando). El nivel de hemorragias o emisiones de sangre es menor y todo ello sin los molestos efectos secundarios que origina la anestesia convencional. Su saber, al que ha llamado Noesiología (ciencia que estudia los efectos producidos en la vida por la puesta en marcha del pensamiento –según su fundador- es difundido actualmente por él mismo en la Comunidad Valenciana a través de cursos dirigidos a médicos, psicólogos y enfermeros/as. EL FUTURO PASA POR LA UNIDAD MENTE - CUERPO. Nuestro cerebro es el órgano más evolucionado y complejo que ha producido la evolución de la vida en el planeta. Por ello sea quizás el más desconocido y donde resida la clave de la cura de muchas enfermedades. Se ha distorsionado la verdad con la idea dualista mente-cuerpo como cosas separadas e independientes cuando la realidad es que son dos caras de la misma moneda. La doctora americana Kringer M. Load somete en su centro pacientes desahuciados de cáncer a técnicas de visualización creativa donde en las células sanas son visionadas substituyendo a las cancerígenas ¡y obtiene unos resultados del 60% de curaciones! Hemos visto aquí algunas de las múltiples posibilidades de la hipnosis y las técnicas similares con las que podemos paliar enfermedades, anular el dolor, aprender más y mejor, desarrollar nuestras facultades psíquicas, investigar en definitiva en lo más profundo de nosotros mismos. Las sorprendentes posibilidades de estas técnicas apenas suponen un ápice de todo a lo que podría llegar. Sin duda, con los avances en los conocimientos de la neurofisiología, de la psicología y las nuevas tecnologías, el futuro se presenta apasionante. EL PERIODO DEL RESURGIR DE LA HIPNOSIS. En un excelente artículo publicado en agosto de 1987 en la revista El correo de la UNESCO, el profesor británico Stephen Filder (13) escribió acerca de las medicinas complementarias lo siguiente: Las expresiones medicinas complementarias, naturales, paralelas, suaves, tradicionales, diferentes o no clásicas abarcan toda una serie de sistemas terapéuticos cuyo denominador común es su divergencia respecto a la medicina clásica. Los principales son la acupuntura, la quiropraxia, la curandería, la fitoterapia, la homeoterapia, la hipnoterapia, los masajes terapéuticos, la naturopatía y la osteopatía.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Cuarta parte.2 Todos estos sistemas, cuentan con un método de diagnóstico, una teoría sobre el origen, la evolución y la curación de las enfermedades, un conjunto de conocimientos prácticos y una agrupación profesional de facultativos. Y señala más adelante: factor común es que todas estas medicinas favorecen la autocuración. Si bien reconoció que dichas técnicas fueron desplazadas cuando el enfoque especifista de la medicina conquistó, tras un combate encarnizado, la supremacía absoluta, pues los nuevos medicamentos obtenidos sintéticamente desplazaron en gran medida a los métodos naturales de curación, también expone que en los años posteriores a 1980, resurgió el interés por tales procedimientos, sobre todo porque se había cobrado conciencia de los elevados costos de la medicina moderna, en recursos, así como en la aparición de efectos secundarios y expone se había comprobado además que muchas dolencias crónicas, relacionadas
con aspectos psicológicos y sociales, se normalizaban con los elementos más suaves de la medicina tradicional. Entre las causas por las cuales estos métodos han resurgido se incluyen:
1. Se ha comprobado que los resultados obtenidos con los procederes "suaves" en el
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tratamiento de las dolencias de las que habitualmente se ocupan, son tan eficaces como los que se alcanzan con los métodos convencionales de la medicina clásica y en un corto plazo; por ejemplo, la acupuntura e hipnosis, por sólo mencionar dos técnicas, alivian el dolor de forma similar a los analgésicos y pueden incluso tener mayor eficacia en un plazo más largo. La expresión de un grado de satisfacción elevado por distintos grupos de pacientes de diversas regiones europeas y de Estados Unidos, en los cuales se emplearon estos métodos, y su marcado interés de que extendiera a otros grupos de personas. Ausencia de reacciones adversas causadas por el tratamiento "suave", aunque no hubiera existido curación. Efectos positivos en la medicina por el uso de estos métodos tradicionales, en tanto han permitido el entendimiento de nuevos mecanismos para controlar el dolor en los casos de la acupuntura y la hipnosis y a la vez incorporar nuevas sustancias medicamentosas en la farmacopea, derivadas de la investigación de los remedios populares. Existencia de cursos y adiestramientos de medicina tradicional en las universidades chinas, vietnamitas, coreanas y de la antigua Unión Soviética.
A estas causas habría que añadir otras como son:
1. Que los buenos resultados obtenidos en países orientales se han extendido como una diáspora multidireccional y encontrada a casi todo el globo terráqueo.
2. En el caso de la hipnosis, los estudios realizados en la ex- URSS, incluso antes de los
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años 60 (década del 40 y 50) sobre el tratamiento de diversas enfermedades mentales, tabaquismo, alcoholismo, como profilaxis del parto y para inducir el alumbramiento, como método anestésico (parto sin dolor), entre otros, se han mantenido hasta nuestros días. El desarrollo de la nueva hipnosis con autores como Erickson, Rossi, Perry, Arouz, Weitzenhoffer, Godín y el grupo de Palo Alto (Universidad californiana), ha influido notablemente, pues se ha creado todo un movimiento en Estados Unidos y Canadá, con elevadas perspectivas y métodos menos autoritarios, pero de igual modo eficaces así como en varios países europeos, entre los que sobresale Francia, que ha tenido la suerte de recuperar su carácter de Meca de la hipnosis. El cada vez más amplio número de enfermedades que se pueden tratar con estos métodos, entre los que se incluyen el asma, las disfunciones sexuales, los trastornos del lenguaje, las fobias, la obesidad, su variado uso en odontología, bien como anestésico o como elemento capaz de eliminar malos hábitos como el de la respiración bucal, y la succión digital; la enuresis y más recientemente algunos desequilibrios con base orgánica, han hecho creer mucho más en la hipnosis y defender su empleo como ciencia de la curación.
EL DESARROLLO DE LA HIPNOSIS EN CUBA. Los primeros antecedentes de la aplicación de la hipnosis en Cuba corresponden al eminente psiquiatra ya fallecido Dr. Araujo y su esposa Dra. Elsa Praderes, prestigiosa psicóloga y pedagoga que imparte Psicología Médica en la Universidad de la Habana, y por el Dr. René Vega profesor de Psicoterapia Infantil de la Facultad de Psicología, también de la Universidad de la Habana, el cual ha publicado incluso varios artículos sobre hipnosis y su empleo en niños; ejemplo de ello es su obra Psicoterapia Infantil, donde describe a la hipnosis como un método no descubridor y ofrece varias técnicas para su aplicación psicoterapéutica. Cabe señalar las clases magistrales del destacado profesor argentino Duprat, quien enseñó a muchos la hipnosis terapéutica.
Reconocidos son también los trabajos de los psicólogos clínicos Insua y Licea, que aún se mantienen incursionado profundamente en ese campo. El Doctor Orlando Licea Díaz ha tenido muy buenas experiencias en el manejo del Asma bronquial, e incluso a publicado un libro “Usted puede vencer al Asma” donde explica el sistema terapéutico para la modulación del estrés de bloqueo y donde expresa como orienta a sus pacientes que a través de su propia voluntad disminuyen de forma progresiva las crisis y su intensidad hasta erradicar totalmente la enfermedad y mejorar su calidad de vida. La primera publicación de envergadura realizada en Cuba es el libro “Hipnosis. Teoría, métodos y técnicas”, de Braulio Martínez Perigod y Moisés Asís, quienes realizaron una excelente y rica compilación en el orden teórico metodológico y exponen algunas técnicas y escalas desarrolladas por ellos en el tratamiento del tema, cuyo uso se ha expandido por toda Cuba. La constitución de la Sociedad Cubana de Hipnosis, adscrita al Ministerio de Ciencias, Tecnología y Medio Ambiente y filiales en algunas provincias, ha contribuido también al desarrollo y aplicación de la hipnosis. Esta sociedad ha efectuado varios eventos y auspició, entre éstos, uno de carácter internacional celebrado hace pocos años. Todos estos factores han favorecido el desarrollo acelerado de estas técnicas e incrementado el interés por parte de médicos de familia, odontólogos, cirujanos, anestesiólogos, ortopédicos, internistas e investigadores en general. En Santiago de Cuba en 1960, el profesor Duprat impartió un curso de hipnosis a odontólogos del Oriente, pero lamentablemente fueron muy pocos los que hicieron aplicaciones prácticas de los conocimientos recibidos. Entre los alumnos de ese curso se encontraban los profesores Lidia Carcases Puentes y Gerardo Hechavarría. Se tienen indicios de su aplicación por diferentes colegas a pequeña escala, muy limitada y sin nivel de sistematización en las décadas de los años 80 y segunda mitad de los 70; pero es en el Instituto Superior de Ciencias Medicas de Santiago de Cuba (ISCM-SC) donde se capitalizó este quehacer y donde más esplendor adquiere, sobre todo a partir de la creación del Grupo de Hipnosis por el Doctor Alberto Cobián Mena y colaboradores, que desde entonces han venido trabajando en las siguientes líneas de investigación fundamentales:
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Hipnoanestesia Tratamiento de enfermedades psicosomáticas Tratamiento de trastornos psicológicos tradicionales Investigaciones aplicadas en otras ramas científicas. Parapsicología. De igual forma la apertura de la clínica de Hipnosis atendida por estudiantes de medicina del ISCM-SC y estudiantes de psicología de la Universidad de Oriente, y por profesores de la Escuela de Medicina, ha constituido un eslabón importante en los propósitos de difusión de la técnica, que ya es solicitada por hospitales ginecoobstétricos y pediátricos, dada su utilidad, así como por diferentes clínicas odontológicas. Esta demanda los ha llevado a impartir conferencias en eventos nacionales e internacionales y en talleres terapéuticos, así como a participar en sesiones científicas de diversas sociedades adscritas al Consejo de Sociedades Científicas del Ministerio de Salud Pública.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Cuarta parte.3 De importancia son los trabajos que viene realizando este grupo de hipnosis acerca del tratamiento de la alopecia, las fobias, enuresis, disfunciones sexuales masculinas y femeninas, asma bronquial
en adultos y niños, tanto en período de crisis como intercrisis, tartamudez, obesidad y psoriasis, incluido su empleo como anestésico en cirugía odontológica, exodoncias, pulpectomías, gingivoplastias, cirugía menor, procederes complementarios, tratamiento del dolor (sola y combinada con acupuntura), tabaquismo, alcoholismo y para facilitar el aprendizaje, lo cual expresan en su libro “ Yo sí creo en la Hipnosis”. Además se han iniciado cursos de postgrado y entrenamientos nacionales e internacionales, auspiciados por la Sociedad Cubana de Psicología de la Salud, las escuelas de Medicina y Psicología y la maestría de Medicina Natural y Tradicional, donde está establecido el módulo de medicina conductual, que incluye la hipnosis terapéutica.
DEFINICIÓN DE HIPNOSIS. ¿Qué es la Hipnosis? Esencialmente podemos definir el estado hipnótico como un estado alterado de conciencia y a la hipnosis como la técnica que nos conduce al mismo. Para alcanzarlo, debemos tener una atención intensa y focalizada en algo, por tanto, el hipnotizado se aísla poco a poco de los estímulos exteriores y alcanza cierto bloqueo sensorial. En resumen, la hipnosis es un estado neurofisiológico que en gran medida se produce por la famosa ley: “a mayor excitación, mayor inhibición”. Esto podemos verlo en una situación de intenso estrés o pánico... el estímulo o la percepción que nos produce la situación estresante es tan intensa, que se bloquean nuestras reacciones emocionales, motoras (movimientos), mentales, entre otros. Por ejemplo, un estudiante que ante un examen se lo sabe todo perfectamente, pero se pone tan nervioso que a la hora de escribir no recuerda nada o sólo parcialmente. La diferencia es que en la hipnosis hacemos una dosificación programada y progresiva del estímulo para producir una inhibición controlada y con los efectos que tenemos previstos. Algunos autores plantean que es difícil definir de forma resumida lo que significa este término; pero consideran que la hipnosis es una técnica con la que conseguimos un estado psico-fisiológico diferente del estado de vigilia normal. El electroencefalograma de una persona hipnotizada es diferente del de una persona despierta o dormida en sueño natural. Dicho estado se caracteriza por una gran sugestionabilidad, ¿qué quiere decir esto? que la persona bajo hipnosis acepta como reales las sugestiones que le sugiere el hipnotizador. Es decir, que si usted hipnotiza a otra persona y esta cae en un trance profundo, si le sugiere que tiene mucho calor, empezará a sentirlo como real y a quitarse la ropa de encima para aliviárselo, por ejemplo. ¿Por qué sucede esto? Porque se produce una disociación entre el consciente y el inconsciente en nuestra actividad mental. Por tanto en la hipnosis, donde el individuo sobre todo opera con su inconsciente, en el que disminuye notablemente la capacidad de raciocinio y auto-consciencia, cualquier sugerencia por parte del hipnotizador, será admitida como un hecho real. Para otros la hipnosis es un procedimiento durante el cual un profesional de la salud o un investigador sugiere a un cliente o paciente cambios en las sensaciones, pensamientos, sentimientos y conducta. La hipnosis, contra lo que mucha gente cree, no es solo un tipo de terapia, como el psicoanálisis, sino un procedimiento adjunto o conjunto de técnicas que se pueden usar para facilitar la terapia. De hecho, generalmente se entrenan a las personas para que sean ellas mismas las que consigan estos cambios mediante la autohipnosis. En el caso de la hipnosis clínica se refiere a una amplia variedad de métodos que pueden servir como catalizadores de diversas psicoterapias. Tal como se practica actualmente, la hipnosis clínica puede ser definida como la suma de la hipnosis a tratamientos aceptados, psicológicos o médicos. Como tal debería ser practicada sólo por profesionales con el entrenamiento y las credenciales adecuadas.
Debemos reconocer que algunos investigadores trataban de explicar el fenómeno de la hipnosis, intentando o dando una cierta definición. Estos intentos o definiciones muchas veces convergen o difieren poco, pero conviene especificar que, al menos hay algunas que si expresan contenidos diferentes, que definidos a través del tiempo han podido influir en hipnólogos, hipnoterapeutas y entendidos en la materia, que de hecho se han convertido en sus seguidores. A continuación veremos cómo fue tratado este problema por las escuelas en algunos casos de forma breve, pues ya en el desarrollo del cuerpo teórico lo hemos abordado. Mencionamos, solo algunos autores que han llegado a sostener conceptos más sólidos. Abate Faría. Fue el primero en comprender que la hipnosis es un fenómeno psicológico y lo conceptuó como un sueño lúcido, destacando que para hacer aparecer este sueño, era necesaria la concentración por parte del sujeto. Introdujo el signo señal. Mesmer: La vio como un caso típico de magnetismo animal, a través del cual se podía influir o comunicarse con el sujeto a hipnotizar, obtuvo conductas extrañas que fueron precisamente originadas por un fluido emitido por los humanos. Charcot la conceptualiza como un estado especial dado por la fascinación sensorial que permite lograr en cada persona hipnotizada, estados diferenciados por las profundas transformaciones que se operan en la mente y el comportamiento humano y son: el letargo, la catalepsia y el sonambulismo. Pierre Janet: La considera como un estado de disociación de la conciencia. Para él, en el trance hipnótico hay dos psiquis: una en relación con la conciencia y la voluntad y otra sin voluntad ni conciencia, pero capaz de acometer complejas actividades. Bernheim: La define como un tipo especial de sugestión, en el que toda idea sugerida tiende a convertirse en acto, aunque no hay estado especial o artificialmente creado; sólo hay ideas exaltantes. Freud: La catalogó como un método válido en el marco de la psicoterapia y como un mecanismo de sugestión e influencia, donde el nivel del actuar de la conciencia estaba disminuido. Estimó que era un segmento de la psiquis el que actuaba y ello impedía una efectividad adecuada, por lo que decidió abandonar a la hipnosis. Pávlov: La conceptuó como un estado de sueño diferente del sueño normal, en tanto fisiológicamente se manifiesta como una inhibición parcial, que si bien se irradiaba a amplias zonas corticales y subcorticales, no es una inhibición absoluta, pues quedan focos de excitación que permiten actuar de diversos modos y mantener el contacto con quien hipnotiza. Bejterev: La definió como una modificación del sueño natural y significó la ausencia de juicio crítico en el sujeto hipnotizado a la hora de asimilar las sugerencias dadas. Platonov: Llegó a su definición partiendo de su rica experiencia psicoterapéutica. La categorizó como un estado de sueño especial, en el que se crea una perceptibilidad aumentada por parte del sujeto paciente, y destacó el papel de la palabra como factor de sugestión cuando dijo: "Cada foco de excitación provocado por la sugestión se fortalece como consecuencia de la acción recíproca de la inhibición por él provocada; de ahí que cada construcción semántica elaborada por el terapeuta debe ser clara, precisa y bien estructurada." Coué: Para él; la hipnosis era más que sugestión, autosugestión; es decir autosugestión, autohipnosis.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Cuarta parte.4 Boudin: Ligó la hipnosis al inconsciente, que consideró como un todo organizado, capaz de actuar inteligentemente para lograr un objetivo. Chertok: Señaló que el estado hipnótico aparece como un estado de conciencia modificada, a merced del cual el hipnotizador puede provocar distorsiones de la voluntad, la memoria y el acto perceptual sensitivo; este último en el tratamiento del dolor. Erickson: Más que un definición exacta, vinculó la hipnosis con el concepto de inconsciente positivo; mecanismo semejante a una enorme computadora que trabaja sin cesar, sin consentimiento del dueño, para llegar a la síntesis de toda actividad humana; por eso la hipnosis debe ir dirigida hacia lo interno, donde lo más importante es la adquisición de conocimientos y el hecho de poder utilizarlos cuando sea necesario y no tanto saber qué cosa se ha aprendido. Esto es, en sí, el aprendizaje inconsciente. Definió la actitud como un elemento básico del proceso hipnótico. Laurence y Perry: Plantean, como afirmara Berheim, que hipnosis no existe, pues lo existente es la interacción entre un contexto determinado y la aptitud del sujeto para responder a ese contexto. Godín: Opinó que era en modo de funcionamiento psicológico en el que un sujeto, gracias a la acción de otro llega a abstraerse de la realidad, aunque siempre queda conectado con su interactuante. Esta desconexión de la realidad es un tomar o dejar y un estado que permite posibilidades complementarias de trabajar con el inconsciente. Martínez Perigod y Asís: Estado especial de sueño con hipersugestibilidad, que es intermedio entre la vigilia y el sueño paradojal. Cobián Mena: Es un estado especial de sueño donde es posible a través de la palabra u otro estímulo siempre potencializado por ella y de modo repetitivo, crear un estado especial en la mente humana que reduce a la mínima expresión los procesos volitivos y permite la manifestación plena de potencialidades cerebrales que en estado de vigilia y por mecanismos neurofisiológicos defensivos no se manifiesta de manera activa. Es un proceso natural creado en el hombre por sí mismo u otro hombre, que implica siempre la actividad cerebral y permitiendo que se evoquen cambios en la actividad cortical lo que facilita precisamente operar bajo nuevas condiciones aumentando la productividad neuronal y psicológica. Enciclopedia Médica de la Ex - URSS: Es un estado artificial, particularmente humano, producido por la sugestión y que se distingue por una selección particular de las reacciones y se manifiesta por un aumento de la receptividad en la acción psicológica del hipnotizador y la disminución de la sensibilidad a las otras influencias. Asociación Médica Británica: Es un estado pasajero de atención modificada en los individuos que se produce por otra persona y en el cual pueden aparecer esporádicamente diversos fenómenos como respuestas a estímulos verbales o de otro tipo. Estos fenómenos implican un cambio en la conciencia y la memoria. Una susceptibilidad aguda en la sugestión y la aparición en el sujeto de respuestas e ideas que no les son familiares en su habitual estado de ánimo. Añade que los fenómenos como anestesia, parálisis, rigidez muscular y modificaciones vasomotoras pueden estar en el estado hipnótico producido y suprimido. Glosario Cubano de Psicología: Estado alterado de la conciencia en el cual las ideas son aceptadas por sugestión, en vez de evaluación lógica. En el caso de la auto-hipnosis, podemos decir que en realidad es el propio individuo quien se hipnotiza, por tanto podríamos afirmar que sólo existe la auto-hipnosis. El hipnólogo lo único que
hace es ir marcando los pasos o pautas para que su paciente vaya entrando progresivamente en el trance. DIFERENCIAS ENTRE HIPNOTIZADOR E HIPNÓLOGO. Llegados a este punto de las definiciones debemos distinguir también la diferencia entre hipnotizador e hipnólogo. La primera denominación podemos dársela a cualquier persona que consigue inducir a otra a la hipnosis. En el segundo caso, hipnólogo es un profesional con una formación suficiente, que realiza un uso clínico de la hipnosis, con unos conocimientos teóricos y prácticos suficientes en materia de hipnosis clínica. EL MECANISMO NEUROFISIOLÓGICO DE LA HIPNOSIS. Sugestiones constantes y repetitivas como: vas relajándote y soltando tus músculos... cada vez estás sintiendo un sopor más profundo... más profundo... por ejemplo, producen un bloqueo progresivo del cortex cerebral, que ralentiza su actividad. Simultáneamente se activa más intensamente el sub-cortex o áreas del cerebro medio y profundo que en términos de la neuroanatomía nos referimos principalmente al sistema límbico, (conocido también como cerebro primitivo, antiguo, arcaico, lóbulo límbico, rinencéfalo, que por sus directas conexiones con las estructuras olfatorias se ha relacionado con la olfación), el cual se encuentra en la porción media del cerebro. La palabra límbico significa límite, y el sistema límbico comprende las estructuras del límite de los hemisferios cerebrales o telencéfalo y el diencéfalo, que rodean principalmente al hipotálamo, está compuesto por varias estructuras, entre las más importantes se encuentran: la amígdala, el hipocampo, los cuerpos mamilares, el septum pellucidum, la circunvolución del cuerpo calloso, el cíngulo y la circunvolución parahipocámpica. Estas estructuras intervienen fundamentalmente en todos los procesos subconscientes de la actividad psíquica, en el asientan funciones relacionadas con el mantenimiento o supervivencia del individuo o la especie, con la integración emocional del comportamiento, con la memoria y el aprendizaje, estas estructuras controlan nuestras actividades emocionales y nuestro comportamiento en cada tipo de situación. A nivel del hipocampo se interpreta la importancia de la mayor parte de nuestras experiencias sensitivas, si se determina que una experiencia es lo suficientemente importante, entonces la experiencia será almacenada como un recuerdo en la corteza cerebral, también este sistema interviene en el control del grado de alerta, el sentimiento de bienestar, el fenómeno de la ira, la docilidad, la vigilia, el sueño, la excitación y el proceso de atención. Las señales del sistema límbico que se dirigen al hipotálamo pueden modificar cualquier, o todas, de las muchas funciones corporales internas controladas por el hipotálamo. Y las señales provenientes del sistema límbico que alimentan el mesencéfalo pueden controlar comportamientos tales como los mencionados anteriormente. Es importante conocer las investigaciones sobre el tema realizadas por Pávlov y sus interpretaciones, ya descritas en el texto. LA HIPNOSIS Y SU RELACIÓN CON OTRAS CIENCIAS AFINES. HIPNOSIS Y PSICOLOGÍA. Siempre que vaya a hablarse de la hipnosis en su relación con la psicología, hay que partir del reconocimiento de que el hombre puede ejercer una influencia social activa sobre aquellos seres humanos con los que se vincula cotidianamente, la que es propia de su condición sociohumana y que, como reconoce el profesor Núñez de Villavicencio (10), en última instancia es el fundamento de toda psicoterapia. Entonces cabría preguntarse, si no es la hipnosis, en sí misma, una acción influyente de un hombre sobre otro; típica y exclusiva de este género; a través del rasgo más humano que tiene el propio hombre, que es su lenguaje materializado en la palabra.
La palabra, segundo sistema de señales, es en sí misma social y encierra un contenido que el hombre ha asimilado históricamente a través de un proceso de comunicación y aprendizaje. Estos contenidos están ligados a toda acción que el hombre realiza y designa y al hacerlo las sustantiviza, las nombra y las define en su pleno significado, y en particular en el sentido individual y personal que adquiere para él en el proceso de comunicación.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Cuarta parte.5 ¿Qué es la hipnosis? La hipnosis es, ante todo, comunicación, donde aparecen como contenidos de ésta: afecto, seguridad, confianza, esperanza, curiosidad, interés, ambiciones y metas individuales, poder, sabiduría, habilidad, intenciones nobles e innobles y arte de curar; todo en relación con cada una de las personas que se comunican en el proceso hipnótico. Al basarse en el lenguaje, se hace privativa del género humano; su portador indiscutible. Todo intento de extrapolarlo a otros subgrupos de la especie viviente con las mismas características, significa forzar las condiciones concretas de la existencia de un agregado estructural anatómico, fisiológico y psicológico indiscutiblemente superior; o lo que es igual, reducir la superioridad humana a móviles de conductas puramente fisiológicas. Si un nivel de hipnosis funciona en animales superiores o inferiores, ha de tener peculiaridades totalmente diferentes en esencia, de lo que ocurre en el ser humano. Al tomar como elemento generador-conductor-efector a la sugestión, indudablemente se influye a nivel afectivo y racional en los estados del sujeto que es sometido a un acto de hipnosis, bien como elemento demostrativo o como función terapéutica, pues la conducta de éste se hallará en dependencia de los contenidos y fines de los argumentos sugestivos. La Psicología, ciencia que tiene al hombre como su centro, emplea entre sus muchas categorías: personalidad, aptitudes, conciencia, actitudes, motivos, defensas, comunicación, roles, status, conductas, sistema nervioso, relación interpersonal y psicofisiológica vinculadas con la hipnosis y otras de gran importancia, que harían la cifra interminable, también asociadas de un modo u otro con la hipnosis, sin dejar de reconocer que la hipnosis es, a la par, una categoría y un fenómeno de índole psicológico. Sería interesante, exponer ciertos elementos explicativos acerca de por qué considero como válido el planteamiento anterior. Personalidad: Es el conjunto de atributos psicológicos, biológicos y sociales que hacen humano al hombre en el estricto sentido de la palabra, semejante a sus congéneres y a la vez diferente e individual. Es lo común entre los hombres y la irrepetibilidad del hombre. La personalidad, en dependencia del tipo de conducta que el hombre asume y las características de estas, tendrá rasgos tales como estabilidad, dependencia, timidez, ansiedad, paranoia, rasgos esquizoides, psicopatías, entre otros; atendiendo todo ello a una manifestación intrínsecaextrínseca de la conducta humana. Por ejemplo: Una personalidad tímida tendría ciertas dificultades iniciales para poder ser buen hipnólogo, ya que el miedo puede ser el bloqueador de una conducta emprendedora y decidida a hacer lo necesario, como también puede devenir el viabilizador de una conducta de no exposición a la hipnosis en el caso de una paciente, pues esta podría asumir un comportamiento evasivo, resistente y paranoide por condicionamiento interno y mucho más marcado por la información perniciosa que tiene como condicionador externo. Aquí es necesario estimar en que medida debe ser manejado este problema para quien se va a dedicar a la hipnosis como acción terapéutica. Es evidente que debe demostrar confianza y seguridad en sí mismo y capacidad para aprenderlo, aplicarlo y lograrlo bien, pues sólo así podrá
trasmitir a su paciente la seguridad y confianza necesarias y eliminar barreras defensivas que como proceso lógico propio de su personalidad tímida puedan manifestarse. Otro caso que puede ser de mucho valor es el de un paciente histérico. Se conoce que el sujeto histérico busca siempre obtener ganancia a su favor, de su propio proceso, y se ha comprobado en la práctica que suele hacer disociaciones extrañas bajo estado hipnótico o bien conversiones al salir de este trance, poniendo rígidos sus miembros, diciendo que no puede volver a la realidad y teniendo crisis de llanto, etc; pero muchas veces simula estar en estado hipnótico, todo como parte de este cuadro antológico que es la teatralidad y la superficialidad del mismo. Algunos autores sugieren no llevarlos al estado hipnótico, pero ninguno como Charcot demostró la invalidez de este argumento hace más de 100 años, cuando se dedicó casi por entero al tratamiento de la histeria por método hipnoterapéutico, lo que le dio un inmenso prestigio en toda Europa. ¿De qué se trata entonces? Se trata de que no puede hacerse hipnosis terapéutica sin un profundo conocimiento de la psicología de la personalidad. Todo aquel que intente curar por vía hipnótica ha de saber sobre quién trabaja, cómo es esa persona y qué perspectiva tiene sobre ella; si es prudente la hipnosis en ese momento y con la persona, cómo manejarla para cambiar su actitud, aun cuando tenga aptitudes, y para ello ha de emplear conocimientos psicológicos que incluyan como lograr una adecuada comunicación afectiva y verbal, infundirle confianza y seguridad y manejarla éticamente, teniendo en cuenta sus valores, motivos y principios éticos y filosóficos, su status social y la transcendencia de la persona. HIPNOSIS Y SOFROLOGÍA. En muchos escritos y para muchos colegas, los términos hipnosis y sofrología son sinónimos, tal vez porque la sofrología sea para muchos una hipnosis menos directiva, menos autoritaria; sin embargo, el fundamento de la sofrología caycediana es precisamente titularse como una ciencia de la conciencia humana y de sus modificaciones hacia un modo de ser armónico y esto quizás nos permite exponer lo siguiente: Etimológicamente, sofrología proviene de tres vocablos griegos: "logos" (tratado), "sos"(de la armonía) y "phren"(de la mente, de la conciencia); de ahí que pudiéramos definirla como el Tratado del funcionamiento armónico de la mente. En un interesante artículo "Sudar la neurona" (14), Luis Martínez expresa algunas ideas sobre el empleo de la sofrología con mucha efectividad en el deporte de alto rendimiento, aún cuando resulte una terapia discutida, y expone el caso de Antonio Rebollo, quien fue sometido a tratamiento sofrológico en su preparación para el acto de encender el pebetero con un flechazo, en la ceremonia de los juegos olímpicos de Barcelona en 1992. Luis Martínez también nos cita, los criterios de renombrados sofrólogos hispanos, quienes partiendo de sus propias autotitulaciones en algunos casos y de la elevada posición en el marco conceptual de la ciencia en otros, expresan sus puntos de vista. Veamos. Mariano Espina (Especialista en Medicina Sofrológica) dice que el objetivo de esta propuesta científica entiéndase Sofrología, es aprender a trabajar con la mente para autoconcentrarse y para ello ha de sudarse la neurona, con ausencia de sugestión. Antonio J. Cano (médico sofrólogo) opina que es un paquete integrado de técnicas orientadas y dirigidas a lograr la relajación y cuestiona la definición original dada a la Sofrología como ciencia de la conciencia, por considerarla excesiva y demasiado exagerada. Héctor González (Profesor de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid) la califica como "Hipnosis light" o hipnosis ligera, menos densa, menos pesada.
Para estas dos últimas sí hay un rol de la sugestión, pero no en el grado tan "exagerado" con que se da en la hipnosis. Estos tres autores, aunque difieren en el empleo de la sugestión, reconocen que la sofrología parte de la hipnosis y que ésta es su centro matriz. Es válido también resaltar que los fundadores de la Sofrología, entre los cuales se encuentran el Doctor Caycedo, fueron hipnólogos destacados que en determinados momentos arguyeron su desacuerdo con métodos demasiado directivos para discrepar de la hipnosis y empezar a conformar criterios un poco más flexibles de la funcionalidad y finalidad terapéuticas en el orden psicológico, que los distanciaron gradualmente.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Cuarta parte.6 Si bien esto es totalmente reconocible y concluyen que la sofrología es algo distinto de la hipnosis, es también una verdad que ésta, como sistema conceptual, no tiene límites precisos y que hay autores que niegan su carácter científico, tal vez porque estiman que no se diferencia de otros métodos ya usados. Se acepta hoy en día que muchos ejercicios orientales, tales como el yoga, la relajación progresiva, las prácticas tibetanas, entre otros, han ido a engrosar los procedimientos que emplean los autodenominados sofrólogos en su afán de lograr el desarrollo personal y el relajamiento dinámico, tan necesario para cualquier paciente, pretendiendo con ello activar el potencial cinético y las reservas que en el orden positivo tiene cualquier persona en función de su curación; pero creo que aquí se impone hacer una reflexión que nos permita entender este fenómeno y a la vez fijar nuestra posición. Por eso vale más la interrogante: ¿No es ésta la finalidad de toda acción psicoterapéutica, con independencia de la escuela o corriente de que se trate? En cualquier tratado de psicoterapia, uno puede encontrar que la curación del hombre enfermo y la creación en él de una capacidad de análisis y de automanejo adecuado de su propia situación como mecanismo de aprendizaje operacional, es la intención suprema de cada sistema psicoterapéutico. Los psicoanalistas lo hacen a través del manejo dinámico de los conflictos del sujeto, que en su base tienen un fundamento inconsciente, pero donde los elementos movilizadores de la personalidad, entiéndase motivos, pulsiones y necesidades están determinando una conducta y a la vez un rol activo por parte del paciente en el camino de su propia curación. Los conductistas lo logran a través de un proceso de condicionamiento, que ya no es tan instrumental y donde los factores de la conciencia humana juegan un cierto papel decisivo al verse en el plano de lo racional. Los reflexologistas, a través de todo un sistema de reflejos condicionados, arcos reflejos, mecanismos aceptadores de acción, unidades funcionales y otros interesantes postulados, han incursionado en distintos enfoques psicoterapéuticos, que si bien no siempre son autóctonos, llevan el sello de una indiscutible y prestigiosa escuela, que nos ha conducido a la comprensión de los mecanismos neurofisiológicos que explican la desintegración de las funciones psíquicas, el aprendizaje y el modo en que el ser humano pueda manejarlos con el máximo nivel de expresión de la conciencia vista como una función cortical superior del hombre. Los métodos sugestivos, entre los cuales figura la hipnosis y a la vez todo lo que emane de ella, partiendo de la palabra y su fuerza moduladora condicionante, persiguen la misma finalidad y demostrada está su altísima validez en todo su funcionar terapéutico.
Si aceptamos la línea de los que niegan por negar, podrían la sofrología y los sofrólogos ser víctimas de su propias inconsecuencias, pues le criticarían que usan para sí los métodos de la psicoterapia racional, del entrenamiento autógeno, de la yoga concentración, que han sido empleados por la ciencia psicológica hace mucho tiempo y pertenecen a sistemas claramente definidos. Se trata aquí de dar una visión esclarecedora del problema, pues todo intento de reafirmación de la existencia de una ciencia cualquiera tiene validez en la medida en que prueba su eficacia y es inválido y desacertado cuando trata de cuestionar propuestas anteriores de probada efectividad a cualquier precio, sobre todo para justificar su propia óptica. Es como preguntar: ¿Tiras al tejado de tu vecino, cuando eres también vulnerable? Si se quiere una respuesta contundente, ahí están los procedimientos de la medicina tradicional y natural, que hoy son reenarbolados como si fueran el descubrimiento más sensacional de fines del siglo XX, a pesar de haber sido enjuiciados por la medicina ortodoxa occidental durante más de 100 años y haber cedido a este empuje en aquella época. Creo en la verdad sofrológica porque ofrece resultados, porque en su intento de separarse de la hipnosis -aún sin lograrlo totalmente - no ha buscado tanto despotencializar el consciente, como aumentar su campo de acción desde un perspectiva racional, y porque logra sus propósitos con todo lo que hace. Reitero que creo en esa verdad y no en una falsa y hueca intención que ha de superarse para no destruirse a sí misma ni quedar en el plano de una seudociencia. HIPNOSIS Y FISIOLOGÍA. Resulta interesante esta relación, no sólo por su enorme importancia, sino por el modo en que ha sido tratado desde hace ya algún tiempo y en la actualidad. Es fundamental conocer el problema de las características fisiológicas de la hipnosis, su necesaria vinculación comparativa con el sueño fisiológico y sus interrelaciones, así como algunos aspectos de un enfoque que aunque no validado, ha ejercido una cierta influencia con respecto a tratar de explicar las bases neurofisiológicas de la hipnosis con otra óptica: la de la actividad neuronal y la activación en los estadios de sueño. Son variadas las imágenes que aparecen a través de un electroencefalograma al analizar los distintos grados de hipnosis, las que van desde una nivelación del ritmo alfa, pasando por un debilitamiento del ritmo beta, hasta llegar a un ritmo theta, con bajo voltaje y ausencia total de los ritmos alfa y beta (1). Diversas son también las experiencias que persiguen medir con electroencefalogramas, electrooculogramas y electromiogramas los diferentes niveles de los ritmos alfa, beta y theta, de los movimientos oculares y del tono muscular. Ello ha servido a la vez para fundamentar teorías que tratan de explicar las relaciones entre el nivel de vigilia y el sueño. El sueño fisiológico puede en su análisis multifactorial, acercarnos a muchos aspectos de la hipnosis, aun cuando esta se considere un estado especial de sueño o un nivel de alteración de la conciencia; y aunque esto parezca contradictorio, pienso que es una expresión que admite cierta complementación por las siguientes razones. En la búsqueda de elementos convincentes para este planteamiento, hay que llegar a la relación entre conciencia y nivel de vigilia; y en este sentido me permito recordar que Bassin (8)alude a la importancia de analizar las relaciones entre el nivel de conciencia de los fenómenos psicológicos y las modificaciones del nivel de vigilia del cerebro, para tratar de examinar la disociación que se produce como parte de la dinámica de los contenidos psicológicos y de las distintas formas de la actividad funcional del cerebro, que por lo general se presentan como un staff bien ordenado y podríamos preguntarnos.
¿Qué es el nivel de vigilia? ¿Es éste invariablemente el efecto de la formación reticular? ¿Es siempre la conciencia sinónimo de nivel de vigilia? Estos cuestionamientos sugieren un rico recorrido al intentar responderlos, por interesantes enfoques que bien pueden ilustrar el papel del componente neurofisiológico en todo el accionar psíquico: La mayoría de los autores entienden por nivel de vigilia un determinado grado de claridad de la conciencia, aunque puede ser considerado como el nivel óptimo del tono de la corteza, que permite realizar consciente o voluntariamente las actividades de cualquier índole. Las tendencias tradicionales estaban enmarcadas en el enfoque de la identificación, dominado por las argumentaciones ofrecidas por Pavlov de: A elevado nivel de vigilia - elevado tono cortical, dado por la activación ascendente de la formación reticular (15); y viceversa: A bajo nivel de vigilia - bajo tono cortical y un descenso o desactivación de la formación reticular. Sin embargo este elemento, desde el punto de vista neurofisiológico, llevó a confundir e identificar el nivel de vigilia y conciencia, lo cual es un aspecto vulnerable en alguna medida, pues si bien es cierto que se requiere un determinado nivel de vigilia como premisa para la toma de conciencia, ésta no constituye la condición fisiológica exclusiva para su existencia en mayor o menor grado.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Cuarta parte.7 Importante elemento explicativo en este caso es la afirmación hecha por Graschemkov y Latash, en cuanto a lo indispensable de tener en cuenta la actividad de los mecanismos cerebrales que garantizan el carácter dinámico de los procesos de aferencia y eferencia, dados en la elección selectiva de la señales ante las cuales se reacciona (aferencia) y en la regulación, control y modulación racional de las respuestas adecuadas, basadas en mecanismos de análisis y síntesis y en todo el dispositivo neurocibernético del cerebro, que a modo de Ships mnémicos conservan información activadora y útil para cada situación. Ejemplo de ello es el sueño paradojal rápido, durante el cual un sujeto puede recibir información efectiva en ese estado; proceso al que Martínez Perigod y Asís (1) denominan hipnosis a través del sueño fisiológico, que expresa una clara disociación entre el nivel de vigilia y el mecanismo de fijación de huellas. También los trabajos de Segundo acerca de la capacidad de distinguir señales sonoras durante el sueño se refieren a esta disociación, pero ya entre el nivel de vigilia y los mecanismos de reproducción de las huellas siempre aludiendo a la posibilidad de una reacción selectiva y un nivel muy exquisito ante los estímulos. Coincido con Bassin en que estas disociaciones, aunque no explícitas, habían sido planteadas por Pávlov cuando describió los llamados puntos de alerta o de guardia que podían observarse particularmente en la conducta de la madre dormida al escuchar el llanto de su bebé. Se impone aquí como una consecuencia el análisis de que las diversas formas del funcionamiento cerebral relacionadas con los niveles de conciencia, tienen una independencia relativa del nivel de vigilancia, lo cual equivale a decir que a niveles más bajos de vigilia pueden generarse actividades concientizadas capaces de ser recordadas, porque se han establecido y fijado selectivamente al evocarse bajo ciertas condiciones. Algo parecido pudiera ocurrir quizás con un contexto diferente, pero que ilustre esta relación no lineal y directa con los estados de alteración de conciencia, en los que aún, cuando el nivel de vigilia es elevado, se imposibilita la selección de los contenidos a concientizar.
La psicología Rusa fue quizás la primera en reconocer este problema que se remite a sus orígenes filosóficos concernientes a una concepción fisiológica, y también la pionera en dar respuesta al hecho de que no siempre un descenso del nivel de vigilia se acompaña de una reducción del funcionamiento adaptativo del cerebro y de que la activación o nivel de vigilia es tan funcional para los niveles conscientes como para los inconscientes, por lo que no puede limitarse el nivel de vigilia al inconsciente. El psicoanálisis más puro nunca vio al inconsciente desde una perspectiva neurofisiología, por cuanto Freud y sus seguidores hablaban de la improductividad de las categorías fisiológicas como medio de elaboración de concepciones psicológicas (8). Mucho se ha dicho de toda esta problemática en los últimos 30 años, y en cierta medida se han producido descubrimientos interesantes en materia neurofisiológica. Entre estos hechos figuran: El conocimiento de que las estructuras neuronales activadoras o frenadoras corresponden a diferentes niveles de la formación reticular. El efecto de excitación nerviosa depende no sólo del sitio donde se aplica la estimulación, sino de la calidad del estímulo. La observación de diversas zonas tonificadoras o tonígenas que no se localizan precisamente en la formación reticular, tanto activantes como inhibidoras (16). Los trabajos de Livánov, Anotjin y Rusinov, entre otros, aportaron importantísimos datos acerca de la relación dable entre las formas diferenciadas de la actividad funcional del organismo, el tono reticulocortical y la dependencia del estado funcional de la formación reticular diferente de las influencias reguladoras, que en vez de ser reticulocorticales son corticorreticulares. Un último elemento, a mi criterio descollante y expresado por Jasper, dado por el aumento de la actividad eléctrica de las neuronas y no en pocas oportunidades en períodos de descenso del nivel de vigilia y de sueño profundo. Todo esto llevó a formular dos grandes conclusiones según Bassin (8): Patentizar el estado activo de las neuronas durante el sueño. El rol primario que ejercen en las más distintas formas de actividad cerebral, las complejas relaciones de los sistemas cerebrales concretos. Estas aseveraciones tal vez parezcan elementos que contradicen la doctrina clásica pavloviana y puede ser que haya suficiente razón para ello, pues cada día más toma fuerza el criterio de que no es precisamente un proceso de inhibición generalizada el que provoca el sueño, sino más bien que aún cuando exista la fase de sueño, pueden darse procesos de activación, tal como expresaron Godín y Mandel al sostener, a través de sus investigaciones, que durante el sueño se incrementa la afluencia de sangre al cerebro, apenas varía la actividad metabólica de las neuronas y se mantiene el consumo de oxígeno por el cerebro en los mismos niveles que en el estado de vigilia; todo lo cual implica una activación. Hernández (8) sustenta también que el sueño, en cualesquiera de sus formas, es un proceso activo, de modo que polemiza con Pávlov en cuanto al criterio de inhibición generalizada; pero a la vez atenúa su debate al no cuestionar la participación de la neocorteza en la determinación de la sincronización del sueño y admite la influencia de los lóbulos frontales y temporales, a través de irradiaciones corticocentrífugas, sobre el sistema hipnógeno. Por ejemplo, Maruzzi enfatiza el concepto del estado activo de las neuronas durante el sueño, que incrementan las descargas y facilitan las respuestas corticales, respectivamente. Dice además que
"es innegable que la inhibición en masa de las neuronas corticales, postuladas por Pávlov no existe; mas no se puede dudar de la existencia de una inhibición condicionada pre o posthipnótica de las formaciones interpuestas, vinculadas con el sueño" (8). Lo interesante de los criterios de Maruzzi estriba en el hecho de que no puede negarse lo teorizado por Pávlov de un modo tajante, aún cuando a su parecer tiene limitaciones. Sin embargo, estas preguntas resultan impostergables: ¿No es la hipnosis, según Pávlov, una inhibición no generalizada? ¿No se mantiene durante el sueño actividad cortical? Considero factibles las respuestas y tal vez me vea precisado a tomar los puntos coincidentes con estas aseveraciones, fundamentalmente las de Hernández y Maruzzi. Al tratarse de una inhibición no generalizada, permite que determinadas zonas de la corteza se mantengan activadas, Quizás Pávlov no pudo apreciar - y así lo creo - un elemento básico en función del desarrollo de la fisiología: el aumento de la activación; pero no descartó su existencia. El mero hecho de los "puntos de vigilancia" patentiza la necesaria disociación entre las zonas de inhibición y el nivel de actividad cortical y revela su renovada vigencia, pues aunque la ciencia y las investigaciones actuales aportan nuevos elementos, aún muchos de la doctrina Pavloviana permanecen inconmovibles a los embates de novedosas hipótesis que están siendo esgrimidas hoy en día.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Cuarta parte.8 Con respecto a la actividad mancomunada de los sistemas cerebrales concretos, debe conocerse que es un elemento de indiscutible validez, por cuanto el cerebro funciona como complejas unidades funcionales con marcada interdependencia. Tal vez este elemento pueda ser capaz de fundamentar las investigaciones más recientes sobre el papel de los hemisferios cerebrales en el proceso hipnótico; que aunque se halla en un plano hipotético, va ganando adeptos. HIPNOSIS Y MEDICINA. Fue precisamente en este campo donde la hipnosis se expansionó científicamente. Los trabajos de Mesmer, Charcot, Berheim, Janet, Breuer, Freud, Bejterev, Babinski, Sviadoch, Platonov y muchos otros, mostraron el camino a seguir y la validez de una opción clara y precisa: el de la hipnosis terapéutica. Variados son los usos de la hipnosis en el campo de la Medicina, pues van desde las afecciones psiquiátricas típicas hasta las entidades psicosomáticas, respondiendo de una manera plena a las necesidades de afrontamiento que en materia de salud tienen estas enfermedades para su manejo, y en otras especialidades donde el empleo de la hipnosis es cada vez más frecuente y cuyos resultados son alentadores, como ocurre en odontología y sus diversos procederes, Cirugía, Anestesia y Ginecoobstetricia. Ya desde los tiempos de Breuer con los métodos de la hipnocatarsis, se abordó el tratamiento de la neurosis con bastante éxito.
La hipnocatarsis consiste en provocar, a través del proceso hipnótico, una abreacción en el paciente, lo cual permite que éste libere toda la energía reprimida, que por lo general es fuente generadora de conflictos no resueltos y que llevan al sujeto a encasillarse mecánicamente en los modos de pensar y actuar produciendo la incapacidad de su manejo adecuado, cuando son conscientes de reconocerlos como elementos psicogenéticos del trastorno neurótico en cuestión cuando actúan inconscientemente. Lo aportado por Freud en cuanto a la regresión para observar y conocer los elementos propios de los primeros años de vida, permiten a la hipnosis contactar posibles efectos psicotraumatizantes y angustiantes, que luego son reprimidos para evitar precisamente la alteración, pero que casi siempre están latentes y muchas veces son causas inconscientes de alteraciones en la adultez, sobre todo en la personalidad. El tratamiento de los pacientes histéricos mediante hipnosis, entre los cuales descollaron como terapeutas Charcot, Janet, Freud, y Breuer fundamentalmente, y que en la actualidad sigue manteniendo un empleo, si bien no tan intenso como en los momentos de esplendor, es una muestra elocuente de su uso en las alteraciones psicológicas. La literatura médica recoge una gran variedad de enfermedades a tratar en este campo, entre las que se incluyen las fobias, alopecias, terrores nocturnos, insomnio, tartamudez, enuresis y hábitos bucales deformantes, las cuales han sido tratadas con bastante éxito en nuestro medio. Por ejemplo, fobias a la oscuridad, a las ranas, a las cucarachas, a las lombrices, a los animales como perros y gatos, a la violencia y conflictos sociales y al odontólogo han sido tratadas satisfactoriamente en nuestro consultorio. Varios niños y adolescentes de los dos sexos han dejado de presentar enuresis después de la aplicación de esta técnica. Igual que las alopecias psicógenas, la tartamudez y el insomnio, En cuanto a las enfermedades psicosomáticas cuyo espectro es muy amplio, cabe decir que la hipnosis ha demostrado ser útil en los hipertensos, asmáticos, personas con afecciones cutáneas como eccemas, verrugas, psoriasis, liquen plano y neurodermitis. Son interesantes los trabajos que en esta rama (dermatología) efectuaron en Rusia los investigadores: Zheltakov, Kortamysher, Milich, Ionkonogi y Miskerich; y en Cuba: Martínez Perigod, Soto Vázquez, Cobián y colaboradores. En nuestro consultorio han sido atendidos asmáticos con grados I, II y III independientemente de la edad y el sexo. Dichas categorías están determinadas por la cantidad de crisis y los ingresos por años:
1. Grado I. Cinco crisis al año sin ingreso 2. Grado II. De 5 a 9 crisis, con un ingreso hospitalario 3. Grado III. Más de 10 crisis o un ingreso en cuidados intensivos Si bien es todo un éxito controlar la crisis de los asmáticos en su fase aguda, más estimulante resulta reconocer que en estos momentos, tanto niños como adultos se favorecen considerablemente con este tratamiento, sobre todo en los períodos intercrisis. La hipnosis es también de utilidad en ginecoobstetricia, especialmente para lograr un adecuado estado nervioso-psíquico como parte de la preparación para el parto psicoterapéutico, para tratar las hipogalactias y para ayudar en el alumbramiento; este último con el establecimiento de un signo-señal favorable al médico o acompañante que permita un parto sin dolor ni complicaciones. Es creciente el empleo de la hipnosis para el tratamiento del dolor crónico, tanto para combatir afecciones reumatológicas como odontológicas, migrañas y cáncer. En nuestro medio hemos tenido experiencia con estos tipos de pacientes, y aunque no siempre el dolor es eliminado, si se logra cuando menos el alivio.
Varios casos se han tratado en el campo de la odontología, cuyos positivos resultados han promovido investigaciones oficiales con el uso de la hipnosis para erradicar la respiración bucal y la succión digital como hábitos deformantes. Numerosas exodoncias se han producido por hipnoanestesia, así como pulpectomías, gingivoplastias y tratamientos quirúrgicos, en los cuales se ha demostrado la efectividad del método, su inocuidad y la rapidez en la obtención de los niveles de analgesias y anestesia. En relación con la cirugía, no son pocos los trabajos que abordan su aplicación en la general y en la estética. Lo más importante de ello es su uso en operaciones electivas, aunque en otros países se utiliza incluso en las urgencias quirúrgicas. Igualmente ha sido empleada para mitigar el dolor en las quemaduras, aun cuando abarquen hasta un 80% de la superficie corporal, según se recogen en estudios realizados en el National Institute For Burn Medicine de Estados Unidos, que dirige el Doctor Leova Bowdeu (18), donde también se ha utilizado para acelerar la cicatrización. Son muy válidas las aplicaciones de la hipnosis en los pacientes alcohólicos y fumadores, en los cuales estimula la deshabituación, así como en aquellos pacientes que consumen sustancias o drogas psicoactivas muy nocivas para la salud.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Quinta parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Quinta parte Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
La hipnosis y su relación con el sueño y la sugestión Sueño fisiológico Sueño ortodoxo Sueño paradójico Sugestión y sugestionabilidad Sugestión en estado de vigilia Sugestión en estado hipnótico Sugestión en el sueño natural Controversias actuales sobre sueño e hipnosis El sueño paradójico inducido por hipnosis Electroterapia cerebral o electrosueño
LA HIPNOSIS Y SU RELACIÓN CON EL SUEÑO Y LA SUGESTIÓN. Los fenómenos producidos durante la hipnosis, así como la definición y nomenclatura, siguen siendo objeto de controversias, prejuicios y hasta de desconocimiento en el mundo científico.
Esto quizás explica la utilización de diferentes términos para hacer referencia a un mismo fenómeno y la confusión entre éste y el procedimiento utilizado para su obtención. Por ejemplo, en la literatura se habla indistintamente de estado hipnótico, trance, sueño hipnótico, trance hipnótico, sonambulismo artificial, para referirse a la hipnosis. Igualmente, se usa el término hipnosis en lugar de hipnotismo. Hipnosis es el estado alterado de conciencia logrado a través de un método de inducción, mientras que hipnotismo es el método en sí, el procedimiento para conseguir el estado de hipnosis. No deben confundirse estos términos, aunque muchas veces no podamos evitar usarlos indistintamente. Es importante tener un claro concepto de lo que es sugestión, hipnosis, sueño y estado alterado de conciencia. Este capítulo está dedicado a explicar dichos conceptos, para tener una base adecuada que nos permita comprender otros aspectos teóricos y metodológicos de la inducción hipnótica. En primer lugar, debemos conocer qué es un estado alterado de conciencia, pues este término abarca tanto a la hipnosis como al sueño normal. Estado alterado de conciencia es el estado psíquico inducido por diferentes agentes fisiológicos, psicológicos o farmacológicos y que puede ser reconocido subjetivamente por el propio individuo, ya que representa una desviación suficiente en la experiencia subjetiva o en el funcionamiento psicológico de ciertos patrones generales existentes para dicho individuo durante la conciencia de vigilia alerta. SUEÑO FISIOLÓGICO. El problema de si el sueño hipnótico es similar al sueño fisiológico ha sido objeto de múltiples investigaciones, a causa de sus diferentes enfoques. Para entrar a analizar este problema comenzaremos en dicha discusión definiendo separadamente las características de cada uno. El sueño es un estado alterado de conciencia resultante de la supresión de las influencias activadoras ascendentes de la formación reticular a la corteza y se caracteriza por patrones típicos en el electroencefalograma (EEG), como son: disminución de la actividad cortical por inhibición de la actividad del sistema reticular activador del tronco cerebral, así como otras características fisiológicas. El sueño se divide en dos fases: sueño ortodoxo y sueño paradójico. SUEÑO ORTODOXO. Es conocido también como sueño lento, sueño no REM y sueño sin movimientos oculares rápidos. Son períodos de sueño que en el hombre están caracterizados electroencefalográficamente por ondas lentas de alto voltaje y puntas más rápidas de 12 a 14 Hz. El pulso y la respiración son bastante regulares y se retiene cierto tono en el sistema osteomuscular. El semblante se mantiene relativamente inmóvil. De acuerdo con el EEG, la fase ortodoxa ha sido dividida a su vez en las etapas 1, 2, 3 Y 4, según la clasificación de Dement y Kleitman (que corresponden a las etapas B, C, D y E en la clasificación de Davis y Loomis. Fernández-Guardiola, Sassin y Johnson, y Williams, describen que a este período de sueño corresponden los husos del sueño y los complejos K. El electrooculograma (EOG) puede registrar movimientos oculares lentos y la musculatura estriada muestra relajación que no llega a ser total. Existe amnesia de los eventos psicológicos de la etapa profunda del sueño ortodoxo. En la fase ortodoxa se reduce en algún grado la experiencia de estímulos externos y se produce fantasía visual vívida. Si se despierta a una persona que se encuentra en este estado de sueño, con frecuencia podrá relatar sus sueños, pero serán breves, simples y pobres, marcadamente
diferentes de los relatos sobre los sueños de la fase paradójica. Sin embargo, esto indica que la actividad mental continúa incluso durante el sueño regular. El doctor Orlandini plantea que este tipo de sueño ocupa de 75 a 80% del sueño real de un adulto joven y en esto coincide con Williams. En la etapa 1 hay mezcla irregular de ondas theta, actividad aleatoria de bajo voltaje, alfoide ocasional y aislada (de 1 a 2 Hz), ondas alfa ocasionales, movimientos oculares lentos y persistencia del tono muscular. La etapa 2 contiene actividad de husos (de 12 a 14 Hz) y ondas lentas de alto voltaje del sueño anterior. Se caracteriza además por ritmo theta, bajo voltaje, aparición de los husos de sueño y los complejos K, con ausencia de movimientos oculares rápidos y persistencia del tono muscular, que también existe en la anterior. En la etapa 3 aparecen los ritmos delta con alto voltaje, persiste la ausencia de movimientos oculares rápidos y surge una reducción del tono muscular. La etapa 4 continúa el ritmo de movimientos oculares rápidos y una marcada reducción del tono muscular. Las etapas 3 y 4 contienen una proporción crecientemente mayor (hasta 100%) de ondas delta (de 1 a3 Hz) de gran amplitud, además de trazos de husos. Kales y Kales describen que la etapa 1 dura entre 5 y 10%; la etapa 2 entre 50 y 55%; la etapa 3, 10%, y la etapa 4, 10%. Franco Salazar hace un resumen del sueño ortodoxo de la siguiente forma:
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Quinta parte.2 1. 2. 3. 4. 5.
Ausencia de movimientos oculares rápidos. Tono muscular conservado. Ausencia de sueños (existen raras veces). Respiración y frecuencia cardiaca regulares. Electroencefalográficamente:
Primera fase: bajo voltaje de las ondas. Segunda fase: ondas lentas de alto voltaje, que alternan con zonas de bajo voltaje. Presencia de husos (complejo formado por la sucesión de ondas rápidas de 12 a 14 Hz, con aspecto creciente-decreciente) y protrusiones parietales o puntas de vertex. Tercera fase: ondas lentas, de alrededor de 2 Hz, de alto voltaje, más continuas, con husos de sueño. Cuarta fase: predominio de las ondas lentas de alto voltaje, sin la presencia de husos de sueño (llamados spindles en la literatura sajona). Las ondas lentas tienen una frecuencia de 1 a 3 Hz. Aparte de las nomenclaturas de Dement y Kleitman, y de Davis y Loomis, otra forma de describir el sueño ortodoxo es dividirlo en dos períodos: el primero es un período superficial que comprende las etapas 1 y 2, Y el segundo es un sueño profundo o delta que comprendo las etapas 3 y 4. En la tabla numero 1 se expresan las etapas del sueño fisiológico y el comportamiento del electroencefalograma (EEG), electrooculograma (EOG) y el electromiograma (EMG). Tabla numero 1. Etapas del sueño fisiológico teniendo en cuenta los estudios neurofisiológicos.
SUEÑO PARADÓJICO. También conocido como sueño MOR (siglas que significan movimientos oculares rápidos), sueño rápido, sueño pontino, sueño paradojal, sueño romboencefálico y sueño onírico. En inglés se le conoce como REM sleep (rapid eyes movements sleep), sueño de movimientos oculares rápidos, por lo que algunos autores de habla castellana también le llaman sueño REM en español. El sueño paradójico es un período progresivo de 8 a 15 minutos de sueño que se establece dentro de cada ciclo de 90 a 120 minutos de sueño fisiológico. Se caracteriza por los movimientos oculares rápidos (MOR) que aparecen de forma episódica en el electroencefalograma (EEG), se registran ondas concomitantes de voltaje relativamente bajo y actividad de frecuencia mixta, con aspectos semejantes a la etapa 1 del sueño ortodoxo, es decir, con ritmo theta, de bajo voltaje, y se diferencia por una reducción notable del tono muscular en el electromiograma (EMG) por hipotonía hipnagógica. Sassin y Johnson plantean que hay presencia de mayores movimientos musculares. Jovanovic destaca que existe exaltación de las funciones vegetativas al nivel de vigilia y que se presenta erección fálica. Desde el punto de vista psicológico aparecen sueños de actividad onírica) que generalmente son recordados de forma clara, y se consolida la memoria a largo plazo. Por otro lado se observa: aumento de la resistencia eléctrica de la piel, irregularidad de los ritmos cardiaco y respiratorio, y frustraciones en la tensión arterial y en el pulso. Se produce la recuperación real del organismo por una mayor producción de RNA. El sueño paradójico presenta componentes fásicos y tónicos, siendo los primeros los movimientos oculares rápidos y los segundos la actividad del EEG y la atonía muscular. Aserinsky y Kleitman, Williams, Aserinsky, Fernández-Guardiola, así como otros investigadores, coinciden en que 80% de las personas que se despiertan estando en esta fase de sueño manifiestan sueños y pesadillas, y son capaces de relatarlos con vivacidad y detalle. Franco Salazar resume así el sueño paradójico:
1. 2. 3. 4.
Movimientos oculares rápidos (MOR). Erección del pene (en el 80% de los sujetos). Presencia de sueños (actividad onírica). Evolución por períodos (cuatro a cinco en la noche) de 20 a 25 minutos.
5. Flaccidez del tono muscular. 6. Aumento de la resistencia eléctrica de la piel. 7. Frustraciones en los niveles de tensión arterial, en el pulso, en la frecuencia respiratoria, en el volumen de orina y en la secreción ácida del estómago. Hartmann señala que el sueño paradójico en una noche de un adulto joven es dé aproximadamente cien minutos. Kales y Kales refieren que el sueño paradójico ocupa 20% del sueño total, con una probabilidad de error de 0,05. Cuando existe en una persona con insomnio grave, según plantean Fisher y Dement, y Rohmer, aparece un solo ciclo de sueño. Este sueño puede ser inducido por sugestión hipnótica. Se reduce la experiencia a partir de estímulos externos y se produce fantasía visual vívida, incluso con contenido psicotrónico. Las distintas etapas del sueño ortodoxo y del sueño paradójico se combinan en forma irregular. La posible secuencia de los dos primeros ciclos de sueño sería: vigilia-1-2-3-4-2-sueño paradójico-2-34-3-2-sueño paradójico. SUGESTIÓN Y SUGESTIONABILIDAD. El Dr. James Braid acuño el término hipnosis después de darse cuenta de que no hacían falta pases magnéticos ni fluidos misteriosos para llegar a este estado; dado que era parecido al sueño fisiológico, le llamo con tal denominación (hipnos en griego significa sueño). Tanto él como otros descubrieron que una de las características de este estado era la sugestionabilidad, es decir, la voluntad y capacidad de discernimiento del sujeto quedaban sensiblemente reducidas y las órdenes y sugestiones (sugerencias) que venían dadas por parte del hipnólogo eran aceptadas. Ello dio lugar por ejemplo a operaciones de cirugía mayor sin ningún tipo de anestesia química, en las que al sujeto se le decía que no sentiría ningún dolor, cosa que sucedía. James Braid cirujano escocés establece por primera vez que para producir el trance sonambúlico, no es necesario la intervención ni si quiera de un magnetizador ni tampoco de ninguna energía o fluido misterioso. A partir de sus investigaciones, a este sueño de origen “nervioso” se le denominará “hipnotismo”, término que ha llegado hasta nuestros días. Braid ordenó a un criado suyo que se quedase quieto mirando la llama de una vela... sin mayor intervención, éste entró en un estado de sopor hipnótico.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Quinta parte.3 En realidad es el propio individuo quien se hipnotiza, por tanto podríamos afirmar que sólo existe la auto-hipnosis. El hipnólogo lo único que hace es ir marcando los pasos o pautas para que su paciente vaya entrando progresivamente en el trance. Otra de las ideas mal entendidas de la hipnosis es que en dicho estado no podemos enterarnos de lo que sucede (pérdida de conciencia), que se pierde el control sobre el propio comportamiento o que al despertar no recordaremos nada; esto no es totalmente absoluto y sólo en determinadas ocasiones se da, cuando se alcanza un nivel bien profundo y la persona queda totalmente dormida y no recuerda muchas o todas las cosas. Por tanto cualquier persona en un estado de atención aguda puede llegar a la hipnosis, ser consciente y recordar después todo lo que ha sucedido. La sugestión es una excitación concentrada en un punto o área de la corteza cerebral, provocada por la acción de la palabra. Es el reflejo condicionado más simple y típico del hombre y se caracteriza por ser el resultado de una influencia verbal no argumentada lógicamente del inductor sobre la psiquis del sujeto, cuando hay un bajo nivel de conciencialización. Depende de las peculiaridades de la personalidad de quien la aplica y de quien la recibe de forma no crítica.
La sugestión tiene las siguientes características:
1. Aparece por influencia verbal, es decir, por la acción de un reflejo condicionado. 2. Hay presencia de una excitación concentrada en un punto o área determinada de los hemisferios cerebrales. El punto de excitación concentrada provoca una inducción negativa que elimina las influencias colaterales que puedan existir, por lo que las posibles asociaciones dadas mediante ciertos estímulos no influyen conscientemente sobre el sujeto. Es importante señalar que mientras mayor sea el proceso de excitación provocado por la sugestión verbal más significativa será la inducción negativa que rodea al foco de excitación creado. Una sugestión se hace mucho más intensa a medida que mayor sea el foco de excitación que provoque la influencia verbal; esto quiere decir que si una sugestión verbal se apoya en reflejos condicionados que estén formados en una persona determinada, y sobre esto suma la influencia sugestiva, la misma será mucho más sólida. Por ejemplo, si una persona lleva varias horas sin ingerir alimentos y se le sugiere que tiene mucha hambre, esto hace que se aumenten considerablemente los deseos de comer. De igual forma sucede con las sugestiones que expresan agrado. La sugestión actúa como medio o forma de acción sobre la psiquis de las personas, es decir, que interviene sobre la percepción, el pensamiento, la memoria, la afectividad, la voluntad e influye en la conciencia. En toda sugestión existen, según Kulikov, cuatro elementos: el inductor, que representa de dónde surge la sugestión y que puede ser un individuo o un colectivo de individuos; el segundo elemento lo constituye el contenido de la sugestión, es decir, lo que indica la acción, que pueden ser ideas, pensamientos, sentimientos, acciones; el tercer elemento de la sugestión es el proceso mismo de la acción de una persona sobre otra, y el último elemento lo forma el sujeto al que va dirigida la sugestión. Por medio de la sugestión se puede influir directa o indirectamente sobre la fuerza o intensidad de los fenómenos psíquicos, aumentando, o disminuyendo las capacidades, modificando umbrales, incluso hasta cambiando el reflejo adecuado de la realidad objetiva, modificando actitudes en las personas. La influencia sugestiva verbal se extiende a las esferas psicológicas de cada individuo, orientando la conducta, y además es capaz de impulsar a las personas a ejecutar actos deseados y no deseados, creando motivos positivos o negativos. El hombre desde que nace está bajo el efecto de la sugestión, entra en un sistema de relaciones sociales que influyen en él. Por ejemplo, el estado de ánimo de la madre (optimista, pesimista, excitado, melancólico) influye sobre la actividad física y mental del niño. Plátonov considera que la sugestión es una influencia no argumentada que está dirigida hacia un fin y que la misma da la orientación a las ideas y conducta de las personas, convirtiéndose en el motivo de la conducta, y actualiza y retuerza aquello que debe estimular las acciones e inhibe lo que las estorba. En la medida en que exista mayor confianza en la persona que induce la sugestión, ésta adquiere una mayor significación, llegando a provocar en el oyente las ideas, imágenes, sensaciones, como si en realidad se estuvieran experimentando y esto se hace aún más significativo si se apoya en reflejos condicionados adquiridos en la experiencia del sujeto y si las sugestiones verbales tienen un contenido lógico que inhiba el posible grado de contrasugestión.
La sugestión puede tomar dos sentidos: positivo y negativo, en dependencia de lo que se sugiere al oyente, es decir, que existen sugestiones que pueden modificar intereses y necesidades, influyendo en la conducta de un individuo para que asuma actitudes socialmente útiles o, por el contrario, mantenga posturas antisociales. El mayor peso de la sugestión está representado por la palabra, por el contenido de lo que expresa el discurso del que dirige la sugestión. Es necesario recordar que toda sugestión establece un foco de excitación en la corteza y que éste, a su vez, inhibe por inducción las demás zonas, formando un potencial de acción; sin embargo, también la mímica, los símbolos y los atributos (banderas, escudos) pueden provocarlo. Por ejemplo, la música de un himno o de una marcha puede levantar el valor de un grupo que se encuentre en una batalla, aunque esté en desventaja de armamentos o de efectivos. En la guerra independentista de Cuba, en el pasado siglo, el ejército de mambises dio muestra de esto con sus toques de trompeta (a degüello) que aumentaban su coraje y los lanzaban a golpes de machete contra los españoles, que en cambio poseían armas de fuego. El mismo toque de trompeta producía un efecto contrario en los españoles, los atemorizaba y debilitaba. Con este ejemplo queremos dejar ver que un mismo estímulo sugestivo puede tener significados diferentes, pues actúa en dependencia de los reflejos condicionados que se han formado anteriormente en los sujetos que reciben la sugestión. La mímica, los símbolos y los atributos actúan como una representación codificada o cifrada que adquiere significado de reflejo condicionado tomando el lugar de la palabra, de la esencia del factor verbal y de la significación y la actitud de las personas hacia ellos. La sugestión es hasta cierto punto una influencia no crítica, pero que no mantiene siempre el mismo grado, ya que, por ejemplo, en el sueño hipnótico la actitud no crítica es mayor que en el caso de la sugestión en estado de vigilia. A cada sugestión siempre se opone una contrasugestión que se relaciona con las convicciones, opiniones, normas, intereses, ideología y otras particularidades de la psicología de cada persona. Por eso es tan importante conocer profundamente al sujeto a quien se le va a trasmitir una sugestión, con vistas a tener en cuenta estos factores para no provocar una oposición mayor. El materialismo reconoce el efecto de la influencia de un fenómeno sobre otro y que esto depende no sólo de la influencia misma, sino también de la naturaleza del fenómeno sobre el que se ejerce dicha influencia. Kulikov lo relaciona con la sugestión, planteando que el contenido de la misma determina la reacción de respuesta del sujeto a través de las condiciones internas. El contenido de la sugestión depende no sólo de causas externas -o sea, de la sugestión y los medios empleados en la misma-, sino también de las condiciones internas, que son las particularidades de la personalidad del sujeto y de su estado de ánimo.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Quinta parte.4 Esto significa que una sugestión no provoca siempre el mismo efecto en todas las personas, ni incluso en el mismo sujeto. La sugestión no responde al esquema conductual de E - R, donde E es el estímulo y R la respuesta, sino que actúa según el esquema dinámico E- S - R, donde S es el sujeto con sus condiciones internas. Un ejemplo de la aplicación de este esquema puede ser la llamada muerte vudú en tribus de África y en algunas de las Antillas. En muchas culturas primitivas, los miembros de la tribu suponen que el médico brujo posee poderes vudús o mágicos suficientemente fuertes como para curar o matar a
las personas de su tribu. Si alguien en el grupo trasgrede las normas o prohibiciones, el médicobrujo puede anatematizarlo mediante ritos y maldiciones. Los demás miembros de la tribu toman por muerto al anatematizado y éste se refugia en su vivienda o vaga solitario por los bosques para ocultarse por la vergüenza. Si la creencia del individuo en los poderes del médico-brujo es suficientemente grande, el efecto de la sugestión es tal que muere uno o dos días después de pronunciada la maldición en su contra. Cannon pudo confirmar la autenticidad de por lo menos treinta muertes vudús en África. La palabra del médico-brujo (estímulo) actúa sobre las creencias y temores del trasgresor (condiciones internas del sujeto) y se produce la muerte (respuesta). Como explican Hiebsch y Vorwerg, al derramar demasiada adrenalina, en el trasgresor se produce un elevado tono del simpático que provoca un rápido ascenso de la presión sanguínea, al mismo tiempo que se estrechan los vasos sanguíneos. Esto viene aparejado generalmente con extrema anorexia, y por la intensa carga de la circulación sanguínea el individuo puede morir de ataque al corazón. Existen tres tipos de sugestión: sugestión en estado de vigilia, sugestión en estado hipnótico y sugestión en estado de sueño natural. SUGESTIÓN EN ESTADO DE VIGILIA. Se considera que la sugestión en estado de vigilia es una de las formas más importantes, pues en la práctica es la más frecuente. Las otras dos son formas especiales de sugestión. Existen dos maneras fundamentales de realizar la sugestión en estado de vigilia: la sugestión directa y la sugestión indirecta. Sugestión directa. Se realiza de forma inmediata a la acción de la palabra que la provoca, es decir, que se ejerce una influencia sobre la persona a quien va dirigida sin la utilización de intermediarios. Por ejemplo: Usted se siente perfectamente bien. Esta forma de sugestión puede ser utilizada en estado de vigilia, pero también es aplicada cuando se trabaja en sueño hipnótico, superficial o profundo. La sugestión directa establece un sistema de conexión con la acción que se solicita y surge un mecanismo complejo que no se puede reducir a la forma mecánica de estímulo-respuesta. Sugestión indirecta. Es necesario definirla como aquella que utiliza un recurso intermediario para provocar la reacción que se espera; emplea placebos que apoyan la sugestión. Por ejemplo: Estos medicamentos que va a tomar, harán que usted duerma mucho mejor. Es decir, que se acude a un estímulo complementario que adquiere un nuevo significado como señal gracias a la sugestión directa. La diferencia fundamental entre la sugestión indirecta y la directa es que en la primera el paciente atribuye erróneamente la acción terapéutica a un agente que por sí solo, sin la participación de la sugestión, no sería capaz de provocarla. Una ventaja que ofrece la sugestión indirecta es la menor oposición que ofrece el paciente a la sugestión, pues parte de un estímulo externo que tiene un significado lógico para el mismo y sobre éste se establece el reflejo condicionado. Por lo general las personas en su experiencia práctica han establecido un sistema de símbolos que indican un contenido. Por ejemplo, los analgésicos disminuyen considerablemente los dolores. Cuando se le dice a un paciente que un medicamento inerte le eliminará un dolor determinado, el producto adquirirá automáticamente esa acción y producirá el mismo efecto que el analgésico (efecto placebo). De esta forma la sugestión indirecta se sostiene en un reflejo condicionado establecido anteriormente en el sujeto y que es reforzado por la influencia verbal.
Tanto la sugestión directa como la indirecta deben estar dirigidas de forma que la oposición contrasugestiva del paciente sea la menor posible, que se base mayormente en la lógica y en la razón, y no precisamente en objetos o medios que puedan reforzar ideas supersticiosas. La sugestión en estado de vigilia, sea directa o indirecta, debe apoyarse en estímulos reflejocondicionados con vista a que el paciente presente menos posibilidad de oposición. El tono que debe usar el inductor cuando trabaja la sugestión vigil debe ser imperativo, seguro. Las consignas deben realizarse con frases cortas, comprensibles y repetidas. Pávlov decía que la sugestión debe tomar la significación de un estímulo breve, aislado e íntegro y esto la hace intensa. Una palabra es un agente de por sí reflejo condicionado y recoge, a su vez, todo el contenido histórico que la misma representa por medio de significaciones establecidas por el sujeto. Es precisamente la palabra la que va a permitir el establecimiento de nuevos reflejos condicionados o modificar los existentes que provocaban reacciones patológicas. El efecto sugestivo que toma la palabra en una persona se relaciona estrechamente con sus condiciones internas, es decir, con los intereses, necesidades, aptitudes, carácter, temperamento, orientación y rasgos de la personalidad, así como con la conciencia y los procesos afectivos, cognoscitivos y conativos. Al mismo tiempo altera las interacciones sociales inmediatas del individuo. Por ejemplo, cuando un sujeto es hipnotizado en presencia de otro o de un auditorio, éste recibe la influencia sugestiva indirecta por un reflejo de imitación. Este principio es el que fundamenta la sugestión e hipnosis colectivas. Para contrarrestar los posibles efectos de la contrasugestión es recomendable utilizar la persuasión, que reafirmaría mediante acciones lógicas el efecto de lo que se quiere provocar. Mucho han sido criticadas las técnicas sugestivas. Sin embargo, no existe un médico que no las utilice, sea consciente o inconscientemente. Un medicamento cualquiera, por muy positivos que sean sus resultados, no tiene éxito si no se acompaña de la palabra (Esta medicina le aliviará su malestar). Esto determina que un mismo medicamento adquiera significados diferentes cuando es recetado por diferentes especialistas. Para resumir, podemos decir que la sugestión vigil, sea directa o indirecta, es un recurso extraordinariamente significativo en cualquier tipo de proceso terapéutico y que la misma no tiene contraindicaciones, pues los efectos contradictorios que se le pueden criticar se deben a un deficiente manejo de ella (yatrogenia) o a falta de ética profesional. SUGESTIÓN EN ESTADO HIPNÓTICO. Según se define en el Tesauro cubano de psicología, la hipnosis es un estado alterado de conciencia en el cual las ideas son aceptadas por sugestión en vez de por evaluación lógica. Se caracteriza por la pérdida de la orientación generalizada de la realidad, es decir, que la persona que se encuentra sometida a ese estado pierde durante el mismo el cuadro consciente de referencia que marca el contexto dentro del cual uno interpreta todas las experiencias conscientes que se producen. La sugestibilidad o propiedad de respuesta ante la sugestión es un rasgo invariable, irreductible y definitivo de la hipnosis. Durante ésta la atención se concentra en un solo estímulo. Los ojos pueden estar abiertos o cerrados, según le indique el hipnotizador al sujeto.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Quinta parte.5 La hipnosis puede ser inducida por la sugestión verbal por impresiones auditivas o visuales, o por movimientos repetidos en forma monótona, como ocurre en determinados rituales, con danza o música rítmica. Se asemeja electroencefalográficamente al patrón del sueño ligero o de la etapa 1 del sueño ortodoxo, es decir, aparece alfa intermitente y de menor amplitud, domina la actividad
alfa desincronizada similar a la del registro de vigilia activada. Es una inhibición parcial que se produce en la corteza cerebral. Durante la hipnosis se presentan cambios psicofisiológicos característicos, según han reportado Sarbin y Slagle:
1. 2. 3. 4. 5.
Disminución en el ritmo respiratorio y en el consumo de oxígeno. Aumento de la temperatura bucal y cutánea. Disminución del pulso y de la presión sanguínea. Reducción en la actividad electrodérmica espontánea (resistencia cutánea basal). Disminución del nivel de atención, lo que lleva implícito una menor actividad electrooculográfica.
Con los ojos abiertos, con los ojos cerrados o durante la solución de un problema aritmético, los sujetos hipnotizados tienen un ritmo de movimientos oculares rápidos (MOR/minuto) significativamente menor que los sujetos en estado de vigilia bajo cualquiera de las tres condiciones señaladas.
6. Aparición de movimientos oculares lentos. 7. Nistagmo optocinético. Las investigaciones de Nevsk muestran los cambios electroencefalográficos producidos en un sujeto que pasa del estado de vigilia al de hipnosis. Aparecen cuatro fases bioeléctricas:
1. 2. 3. 4.
Fase de nivelación del ritmo. Fase de los husos alfa. Fase de mínima actividad eléctrica. Fase de las ondas beta.
Como se puede apreciar en estas cuatro fases, se produce una disminución del ritmo alfa hasta que desaparece por completo. Por otro lado, el ritmo beta se debilita y las curvas de la corriente eléctrica del cerebro se encuentran fuertemente condensadas. Existen diferentes clasificaciones y nomenclaturas de las etapas de la hipnosis, según las características psicofisiológicas y bioeléctricas del sujeto en respuesta a la profundización del estado hipnótico. Nosotros la dividimos en hipnosis simple, hipnosis media e hipnosis profunda. Hipnosis simple. También conocida por catalepsia palpebral. El sujeto no puede abrir los ojos ni hacer movimientos voluntarios. Cuando abordemos los pasos de la hipnosis detallaremos más las características de la etapa y los procedimientos para llegar a ella. En la hipnosis simple aparece lo que Nevsk denomina fase de nivelación del ritmo, es decir, que en el EEG aparece una nivelación del ritmo alfa; la amplitud de las ondas alfas bajas va en ascenso, las altas descienden o no se modifican y la modulación de la ondulación se atenúa. Si se hacen sugerencias en las que participe el sujeto hipnotizado, automáticamente se acrecienta el ritmo alfa, y cuando se indique reposo se nota en el EEG la caída de la actividad bioeléctrica del cerebro. En la tabla número 2 se expresan las etapas del sueño hipnótico y el comportamiento de los estudios neurofisiológicos. Tabla número 2. Etapas del sueño hipnótico.
Hipnosis media. Se caracteriza porque el paciente entra en sueño hipnótico y debe existir convergencia de los globos oculares. No es una etapa profunda de hipnosis y generalmente se recuerdan los experimentos realizados en esta fase. Se establece una inhibición incompleta de la corteza cerebral y durante este estado existe una división funcional consistente en que determinados sectores corticales se encuentran dormidos y otros, en forma paralela, permanecen despiertos. Se mantiene una zona de vigilia o punto de guardia a través de la cual se conserva el rapport con el hipnotizador. En la hipnosis media hay catalepsia braquial, relajación profunda y otras características que serán mencionadas cuando hablemos de los pasos de la hipnosis. Desde el punto de vista de la actividad bioeléctrica del cerebro, se encuentra en el EEG la llamada fase de los husos alfa, en la que aparece depresión y finalmente desaparición de los husos alfa, con debilitamiento del ritmo beta y de la actividad eléctrica del cerebro; el ritmo alfa comienza a tener señales significativas de desaparición y el ritmo beta empieza a debilitarse considerablemente. Hipnosis profunda. Esta fase se conoce por etapa sonambúlica. En la misma es posible realizar todos los fenómenos especiales de la hipnosis. Se caracteriza por pérdida del recuerdo de lo que se hace y se dice (amnesia profunda), se puede establecer bloqueo de los receptores, anestesia superficial, profunda y llegar incluso a la catalepsia general, a un mayor poder muscular (hiperpraxia) y al recuerdo de experiencias extinguidas en la conciencia del sujeto (hipermnesia), así como a la regresión de la edad a sugerencia del hipnotizador. En capítulos venideros se abunda más sobre las características de esta etapa. Desde el punto de vista electroencefalográfico, aparece ritmo theta de bajo voltaje (menos de 8 Hz) y desaparecen los ritmos alfa y beta característicos del estado normal de vigilia del hombre. Las ondas beta se caracterizan por presentar una frecuencia de 4 a 7 Hz, por lo que la etapa ha sido también denominada fase de las ondas beta. El electrooculograma (EOG) no registra movimientos oculares rápidos y en el electromiograma (EMG) aparece una disminución total del tono muscular. A partir de la hipnosis profunda podemos llegar a un estado especial de conciencia inducido experimentalmente, que se conoce con el nombre de sueño paradójico inducido por hipnosis, del cual hablaremos más adelante en este capítulo.
SUGESTIÓN EN EL SUEÑO NATURAL. El contacto con la realidad externa no se pierde durante el sueño natural; es decir, se mantiene una relación de contacto a través de los puntos de vigilia de la corteza cerebral. Por ejemplo, un soldado puede dormir sin que los sonidos de los disparos lo despierten y, sin embargo, se despierta de inmediato cuando escucha una señal de alarma o la voz de un superior.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Quinta parte.6 Es necesario preguntarse qué es lo que sucede, por qué se responde a estímulos incluso de menor intensidad y no a otros. La respuesta lógica es suponer que existe una selectividad en la percepción del estímulo al que se va a responder; o sea, que las zonas que quedan en vigilia están sumamente atentas a un tipo de estímulo determinado, mientras que los otros estímulos no son capaces de provocar excitación. Sobre la base del planteamiento anterior, se han realizado investigaciones con vistas a utilizar la sugestión en estado de sueño natural. Para esto es necesario crear la activación de una zona determinada de la corteza, pero que la misma no provoque el despertar del sujeto. Existen métodos de inducción hipnótica que utilizan el sueño natural como medio inicial para pasar al paciente al estado hipnótico. Noiset y Bertrand, en 1829, y posteriormente Fresacher, lo recomendaron como muy positivo; para su mejor utilización aconsejaban que el paciente estuviera en fase de sueño profundo. Una vez que se ha comprobado esto, se comienza hablando en voz baja y en forma de cuchicheo, pero de modo perseverante se le indica que sentirá la voz del terapeuta y que continuará durmiendo; se recomienda mencionar su nombre con vistas a establecer el rapport. Numerosas investigaciones han demostrado que durante el sueño natural las palabras de otra persona son perceptibles y que las mismas lo despertarán o no, las recordará o no, según la etapa del sueño y la significación personal de dichas palabras. La mejor etapa de sueño natural para aplicar sugestión es la del sueño paradójico, donde se consolida la memoria a largo plazo y se recuerdan los sueños de forma clara. Es necesario destacar que es esta etapa la que más se parece al sueño paradójico inducido por hipnosis. En el sueño ortodoxo por lo general se recuerda menos lo soñado y las sugestiones son menos efectivas, pues es sumamente raro que puedan ser realizadas las representaciones de las sugestiones dadas. El fundamento fisiológico de la sugestión en sueño natural es la formación de un área de excitación y su aprovechamiento para convertirla en zona de vigilia que permita la percepción del habla. Este método ha sido muy utilizado para el aprendizaje de idiomas, ya que al parecer se produce un proceso hipermnésico que permite retener por mucho tiempo en la memoria el material suministrado en esta fase de sueño. Suele ocurrir que se recuerdan las cosas como producto de sueños. Sviadosch, en su libro La neurosis y su tratamiento, plantea que en las investigaciones realizadas por él pudo encontrar que la elaboración de puntos de guardia durante el sueño natural por medio de la sugestión preliminar se logra con mayor facilidad en los adolescentes de ambos sexos. Por otro lado, Viazenski plantea que las sugestiones terapéuticas realizadas durante el sueño natural son sometidas a amnesia, y está de acuerdo con Sviadosch en que es difícil establecer rapport con una persona sumida, en estado de sueño natural. Nuestra opinión es que esto está en dependencia directa con el estado del sueño de las personas, pues lo que ellos plantean ocurre en el sueño ortodoxo, pero no así en el paradójico. Las indicaciones deben comenzar en estado de sueño paradójico sugiriendo siempre sueño. Se le indica, por ejemplo: Duerma... duerma profundamente... duerma cada vez más profundamente. Usted siente mi voz…pero continúa durmiendo... Duerma... tranquila y profundamente... tranquila y profundamente... Es necesario observar el ritmo respiratorio del paciente y cuando se detecte que cambia después de las sugestiones, esto indica que se ha establecido el rapport y que se puede pasar a las sugestiones terapéuticas.
Existe la posibilidad de que el paciente se despierte. En este caso es necesario sumido en sueño hipnótico, pero sin utilizar métodos de fijación de la mirada, pues esto puede contribuir a disipar el sueño. Cuando se haya establecido el rapport y se comience a dar sugestiones, se debe comprobar que el paciente las cumple. Para ello se utilizan sugestiones de levitación de los miembros; si esto ocurre, se continúa sugiriendo sueño, haciendo siempre énfasis en que éste seria cada vez más profundo. Una vez que se ha comprobado que la respiración del sujeto es igual que al comenzar a trabajar con el mismo, se puede llevar la orientación de la sugestión verbal en la dirección que se quiera, pudiendo ser como medio terapéutico para eliminar síntomas, como medio hipnopédico para el aprendizaje o como medio experimental para realizar estudios científicos. Algunos terapeutas corrigen determinados síntomas o hábitos en los niños pequeños mediante la sugestión durante el sueño natural. Para ello orientan a la madre a decir determinadas frases (sugestiones) de contenido afectivo-modificador durante el sueño del niño. Por ejemplo: Mamá te quiere mucho más cuando no te chupas el dedo o cuando duermes sin orinarte en la cama, mamá te quiere más y te lleva a pasear. Para que esta terapia sea efectiva es necesario que la persona que la ejecute (la madre) sea orientada en cómo detectar por signos exteriores (movimientos oculares rápidos) o por el tiempo de sueño, la aparición de la fase paradójica y a utilizar siempre frases de reforzamiento positivo. La hipnopedia, o uso de la hipnosis, del sueño natural o del estado hipnagógico para el aprendizaje, se ha venido desarrollando desde hace muchos años. Ya en los años cincuenta, se hicieron experimentos de aprendizaje de idioma coreano con marines norteamericanos, a los que se les pasaban grabaciones en estado de sueño natural. El resultado fue extraordinario, ya que los sujetos aprendían con rapidez dicho idioma en un período relativamente corto. CONTROVERSIAS ACTUALES SOBRE SUEÑO E HIPNOSIS. No existe un acuerdo general sobre si la hipnosis constituye un tipo de sueño o si se trata de un estado distinto a éste. Reseñar todas las discusiones sobre este polémico aspecto implicaría dedicar varios volúmenes y, por otra parte, otros autores se han ocupado de hacerlo con mayor o menor exhaustividad, aunque sin llegar a una conclusión convincente. Las características electroencefalográficas encontradas en la hipnosis tal como las señalamos al definir este estado, han servido de argumento a diferentes investigadores para destacar que la hipnosis es una variante del sueño, caracterizada por disminución de la actividad eléctrica del cerebro, y que el grado y la calidad de dicho descenso dependen de la profundidad del sueño hipnótico. Para otros científicos, la hipnosis no puede ser clasificada cómo un estado de sueño, puesto que éste cambia de modo bastante característico las corrientes bioeléctricas del cerebro, y agregan que la base de la hipnosis no es el proceso de inhibición. Algunos hipnólogos consideran que la hipnosis aumenta la actividad eléctrica del cerebro. Otros plantean que la hipnosis crea un descenso o que se establece una desincronización con ondas lentas. Para otros, la hipnosis representa un estado de excitación intensa del cerebro (Mendel); para Zimssen es un estado inhibitorio de la corteza cerebral; Verworn ve la hipnosis como el más alto grado de vigilia; Béjterev decía que la hipnosis representa una modificación del sueño natural y así existen infinidad de definiciones que debaten la cuestión de si la hipnosis es un estado o no de sueño natural.
Pávlov plantea que en la hipnosis se producen procesos y efectos similares a los del sueño, diferenciándose sólo en ciertas particularidades. Por ejemplo, la hipnosis es un sueño que al inicio se limita sólo a un radio de acción y que posteriormente se extiende, se propaga a los grandes hemisferios, hasta la región subcortical; deja intactos únicamente los centros de la respiración, las contracciones cardiacas y el denominado punto de vigilia.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Quinta parte.7
Es decir, que considera la hipnosis no como un sueño completo, sino como un sueño parcial, y señala que el sueño es una inhibición generalizada de los hemisferios cerebrales, con excepción de los puntos de la corteza cerebral que se mantienen de guardia; en cambio, la hipnosis es una inhibición parcial, pues ciertas zonas del cerebro permanecen despiertas y son las que permiten el rapport con el hipnotizador, facilitando que el paciente duerma cuando está en estado de inducción hipnótica, pero que al mismo tiempo pueda escuchar la voz del terapeuta, comprendiendo y ejecutando las distintas consignas encomendadas. Se han podido comprobar electroencefalográficamente las variaciones del ritmo que se registran cuando un sujeto hipnotizado ejecuta una consigna y cuando escucha sólo la voz que le ordena dormir. Esto se explica por la irradiación de la inhibición que, de acuerdo con el tipo o la intensidad de la consigna, altera mediante aumento o disminución el tono de la corteza. Es interesante señalar que cuando se termina el proceso de inducción hipnótica y el paciente vuelve a la etapa de vigilia, desaparecen automáticamente las ondas theta y aparecen de nuevo los ritmos alfa y beta normales. La hipnosis crea diferentes grados de intensidad y de extensión de la inhibición en la corteza cerebral y esto se demuestra en los cambios de frecuencia de las oscilaciones eléctricas y de la tensión de los potenciales. De aquí se desprende el planteamiento de que la influencia verbal en el sueño hipnótico suscita modificaciones electrofisiológicas y bioquímicas en la corteza cerebral. Pávlov consideraba que una persona puede pasar del estado de vigilia al sueño hipnótico y de éste al sueño natural. Las investigaciones electroencefalográficas del sueño hipnótico permiten establecer tres rasgos esenciales:
1. Inhibición incompleta de la corteza que se diferencia del sueño fisiológico. 2. División funcional consistente en que determinados sectores psicológicos se encuentran dormidos y otros, en forma paralela, despiertos.
3. Existencia de una zona de vigilia (punto de guardia) a través de la cual se conserva el rapport con el hipnotizador. Este último aspecto no diferencia totalmente al sueño hipnótico del natural, pues se ha comprobado que en el sueño fisiológico se mantiene una relación con el medio. Ejemplo de esto es la madre que se despierta automáticamente ante el aumento del ritmo respiratorio de su hijo pequeño. No nos detendremos a mencionar las posiciones que señalan a la hipnosis como un estado regresivo (hipótesis atavística de los psicoanalistas culturalistas o neopsicoanalistas) y como un
estado disociativo o de fragmentación, ya que las discutimos en el capítulo, dedicado a la evolución histórica del estudio de la hipnosis. La hipnosis es un estado especial de sueño con hipersugestibilidad, intermedio entre la vigilia y el sueño paradójico. Se asemeja al sueño fisiológico en que:
1. Ambos son estados alterados de conciencia. 2. Son expresión de inhibición cortical irradiada. 3. Son intercambiables, es decir, la sugestión hace más fácil el paso a la hipnosis a partir del 4. 5. 6. 7. 8. 9.
sueño fisiológico, y la extinción del estimulo sugestivo lleva al sueño normal y no a la vigilia. A medida que se profundiza en la hipnosis, los registros electroencefalográficos se asemejan a los del sueño paradójico. No se pierde totalmente la relación con el medio, pues en ambos se mantienen zonas de vigilia. Se obtienen movimientos oculares rápidos cuando una persona sueña y cuando se le sugiere en estado hipnótico profundo que lo haga. Ambos parten de un estado hipnagógico que evoluciona hasta un estado de disminución total del tono muscular, y de igual actividad bioeléctrica en algunas fases de la hipnosis. Se hace más lento el ritmo de respiración y disminuyen la frecuencia de los latidos cardiacos, la secreción incondicionada de saliva y el metabolismo. Existe un descenso del nivel de labilidad de las neuronas corticales cuando se aplican estímulos luminosos rítmicos.
Se diferencia del sueño fisiológico en que:
1. La hipnosis no tiene semejanza en ninguna de sus fases con el sueño ortodoxo en cuanto 2. 3. 4.
a la actividad eléctrica del cerebro. Es un estado de hipersugestibilidad. Se producen fenómenos especiales (catalepsia general, anestesia general) previa sugerencia por parte del hipnotizador. Los cambios bioeléctricos en el sueño natural van más allá de los que se observan en la hipnosis, con modificaciones más profundas y la aparición de oscilaciones bioeléctricas con una frecuencia de 1 a 3 Hz. Estas oscilaciones tienen un carácter regular y potenciales evocados hasta de 300 ó 400 mV, que no se ven ni en la hipnosis más profunda.
EL SUEÑO PARADÓJICO INDUCIDO POR HIPNOSIS. Esta variante común de dos estados alterados de conciencia, es decir, el punto de convergencia entre el sueño paradójico en su actividad onírica y la hipnosis, se obtiene experimentalmente sólo a partir de la hipnosis profunda. En la literatura también se le conoce como sueño REM inducido por hipnosis o simplemente como sueños hipnóticos, en referencia a la actividad onírica sugerida en este estado. Al sujeto profundamente hipnotizado se le sugiere que sueñe libremente o que reproduzca sueños anteriores. También se le puede pedir que relacione sus sueños con determinados estímulos que el experimentador indique. Los sueños producidos en este estado son semejantes a los obtenidos en la etapa paradójica del sueño normal. No existe diferencia entre la actividad electroencefalográfica del sueño paradójico normal y la del inducido hipnóticamente. Sin embargo, se registra una menor actividad ocular en el sueño
paradójico inducido por hipnosis respecto a su contrapartida natural, según reportan Sarbin y Slagle. ELECTROTERAPIA CEREBRAL O ELECTROSUEÑO. Desde principios de este siglo se conoce una nueva forma de sueño inducido artificialmente que tiene enormes posibilidades terapéuticas. Se trata del electrosueño, conocido también como electroterapia cerebral, sueño eléctrico, sueño electroterapéutico y electrotranquilización, el cual fue descubierto en la Ex - URSS y se ha usado ampliamente para el tratamiento de diversas enfermedades. Electrosueño significa tanto la técnica terapéutica como el estado alterado de conciencia producido por ésta. Consiste en la estimulación transcerebral con corriente directa de baja intensidad.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Quinta parte.8 La corriente eléctrica débil que pasa a través del cerebro en el electrosueño tiene por lo general una intensidad de 0,1 a 4,0 mA, frecuencia de repetición de ondas cuadradas de 10 a 250 Hz y amplitud de pulsación rectangular o triangular con corriente directa de 0,1 a 6,0 ms. Estas son las dimensiones más usuales, aunque varían mucho de acuerdo con el aparato de electrosueño utilizado, el tratamiento deseado y los objetivos del terapeuta. Por ejemplo, si se quiere producir anestesia (electroanestesia), lo usual es usar corriente alterna a una determinada frecuencia de 100 000 Hz. También varían las especificaciones en cuanto a la combinación y colocación de los electrodos (por lo general de oro-plata) en la cabeza del paciente. Martinovitch señala que el electrosueño está asociado con un estado psíquico relajado o placentero y con una baja actividad electromiográfica. Produce un aumento significativo del sueño profundo de ondas delta (etapas 3 y 4) sin modificar el porcentaje de sueño paradójico. Numerosos investigadores, entre los que podemos citar a Wageneder y Germann, Gindes y muchos otros, mencionan las aplicaciones terapéuticas del electrosueño: tratamiento de trastornos del sueño, trastornos del ánimo del tipo neurosis depresiva, neurosis de ansiedad, neurosis obsesiva, depresión reactiva, melancolía, psicosis maniaco depresiva, esquizofrenia catatónica, estados psicopáticos, logoneurosis, migraña, dermatosis prurítica, soriasis, eccemas, epilepsia, enuresis nocturna, hipertonía, distonía vegetativa, trastornos hipotalámicos, molestias dentro del contexto de un síndrome psiconeurovegetativo, asma bronquial, corea, preeclampsia, toxemia del embarazo, leucorrea funcional, amenorrea funcional, tuberculosis, parálisis y espasmo muscular, encefalitis viral, dolores fantasmas, úlceras duodenales, trastornos gastrointestinales, supresión del dolor durante operaciones, eliminación de los dolores en el trabajo de parto, entre otros usos médicos. El promedio de tratamiento es de 15 a 20 sesiones de una hora cada una. Scherbakov utiliza el electrosueño en la recuperación de los deportistas, mientras que Sánchez Pérez y Jimeno lo han empleado para la memorización de obras teatrales. También puede usarse para producir analgesia o anestesia (cuando se produce un profundo estado de inconsciencia hablamos de electroanestesia) o para la inducción de la hipnosis (electrohipnosis). Los aparatos de electrosueño pueden utilizarse también en la electroacupuntura. Debemos señalar que no siempre el electrosueño implica que el paciente esté dormido. Con frecuencia el sujeto se mantiene relajado y disfrutando de la activación de las estructuras límbicas sin quedarse dormido. Por eso muchos autores prefieren hablar de electroterapia cerebral, para así incluir a los sujetos que permanecen en vigilia.
No hay duda de que tanto el sueño natural como el inducido por electrosueño o electroterapia cerebral (el sujeto puede permanecer durmiendo durante varios días si así se desea) tienen un papel importantísimo en la salud física y mental del individuo y que constituyen un factor determinante en la remisión de una variedad de trastornos psíquicos, psicosomáticos y somáticos. Asís ha sugerido el uso del electrosueño como un estado alterado de conciencia adecuado para la investigación de la percepción extrasensorial.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Sexta parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Sexta parte Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
Categorías básicas en la hipnosis La sugestibilidad La resistencia La simulación El signo señal Pruebas y escalas para medir la sugestibilidad hipnótica del paciente Pruebas de susceptibilidad hipnótica Recomendaciones para el uso de las pruebas de susceptibilidad hipnótica Prueba de la caída hacia adelante o hacia atrás Prueba del cuerpo oscilando o de oscilación lateral Prueba de la caída por pérdida de las fuerzas del cuerpo Prueba de los brazos extendidos Prueba del brazo pegado a la pared Prueba del cuerpo pegado al asiento Prueba de las manos pegadas luego del entrecruzamiento de los dedos
CATEGORÍAS BÁSICAS EN LA HIPNOSIS. LA SUGESTIBILIDAD. No hay hipnosis sin sugestión, que precisamente es incluida en la clasificación de terapias sugestivas. La sugestibilidad es el arma común que poseen, tanto el hipnólogo como el sujeto a hipnotizar, y consiste en el hecho de que a través de la sugestión el primero tiene que lograr el efecto sugestivo; y el segundo, a través de su sugestibilidad, hacer efectiva la sugestión. Una persona puede ser más o menos sugestionable, pero siempre lo es; sin embargo, la experiencia, delicadeza y ascendencia del hipnólogo puede acrecentarla disminuirla o inhibirla si el proceder resulta inadecuado.
La sugestión es, a la vez, externa (mediante la palabra, por fascinación o potencia ligada a otro estímulo verbal) y al propio tiempo interna (autosugestión), en dependencia ésta última de la predisposición o disposición del sujeto para ser hipnotizado. Ello está dado, efectivamente, por una cierta actitud que asume ante la sugestión como tal y que condiciona favorablemente la sugestibilidad. LA RESISTENCIA. La resistencia puede expresarse de forma consciente o inconsciente, en el primer caso, el sujeto se propone hacer frente a las sugestiones hipnóticas, es decir, refuta la acción del hipnotizador; en el segundo desea ser hipnotizado, pero no logra entrar en el trance hipnótico, pues todo parece indicar que hay ciertos mecanismos inconscientes que actúan como barreras y que él desconoce. Otra especie de resistencia estriba en los temores que el sujeto es capaz de experimentar a causa de:
Información previa de que a través de la hipnosis se han violado principios éticos. Pensamiento actuante de que puedan aflorar situaciones comprometedoras para él y poner en peligro su reputación y su Yo interno o público. Miedo "per se"
Todas estas condicionantes expresan un temor generalmente consciente y que no siempre está ligado al no deseo de ser hipnotizado, no por el hecho de la hipnosis en sí misma, sino por sus posibles consecuencias. Tal vez coexistan en estos pacientes algunos conflictos que casi siempre se resuelven con la forma en que el terapeuta maneje la situación. Ciertos tipos de resistentes son más vulnerables a ceder ante la hipnosis, entre ellos los conscientes y estos últimos; porque si existe un enfoque adecuado del problema, la actitud resistente se modifica, en tanto haya seguridad afectiva y conocimiento del elemento cognitivo de la causa de la resistencia, que al conscientizarse positivamente, se convierte en un movilizador del cambio favorable. Si analizamos los elementos expuestos anteriormente, podríamos afirmar que cualquiera puede ser resistente y a la vez ser modificado. En ocasiones, el sujeto a hipnotizar opera con contrasugestiones que repite constantemente y ello obstaculiza la actitud hipnótica, por lo cual podemos considerarla como un tipo de resistencia. LA SIMULACIÓN. Es un elemento que debe tenerse en cuenta en nuestro quehacer hipnótico, puesto que hay sujetos que captan todas las manifestaciones conductuales de otros en estado de trance y simulan éstos en el trance también. Ello implica que siempre el terapeuta ha de comprobar el nivel de hipnosis, y si con el paciente se ha logrado ésta. Un hipnólogo experimentado no carece nunca de recursos para satisfacer esa necesidad cognoscente. Por lo general estos sujetos cumplen "al pie de la letra" todas la orientaciones sugestoras, pero con mayor rapidez que cuando se produce realmente en hipnosis. Hay operadores que hacen el juego al simulador y logran hipnotizarle bajo los mismos términos; sin embargo, de acuerdo con las características psicológicas del sujeto a hipnotizar, puede optarse por este criterio de trabajo o interrumpir la sesión haciéndole saber (suave, dulce y amigablemente) la necesidad de no engañarse a sí mismo, pues no podrá confundir al terapeuta.
La simulación puede responder a un criterio de excentricidad y exaltación del Yo o constituir una genuina defensa psicológica; por ello es que se ve mucho en personas histéricas, tímidas y también en niños, que la llevan al plano del juego para demostrar su infalibilidad. Aconsejo a los menos experimentados tener estos elementos en cuenta. EL SIGNO SEÑAL. Es un elemento de gran utilidad, pues deja abierta la posibilidad de usar cualquier gesto, movimiento o palabra como señal para entrar nuevamente en trance hipnótico. Este signo será efectivo solamente cuando se ha llegado a niveles profundos de hipnosis, donde el acto sugestor llega selectivamente a la corteza con una fuerza tal, que operará como un nuevo condicionamiento que facilitará la ejecución de la acción implícita en el significado del nuevo estimulo-señalizador.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Sexta parte.2 Pueden servir de signo señal varias opciones; palmadas, chasquidos de dedos, apretón de manos, una frase cualquiera pero siempre conectada con el terapeuta o hipnólogo, el cual debe ser preciso y dejar claramente expresados las condiciones de su efectividad. Veamos este ejemplo: Pronto despertarás, muy pronto, cuanto yo te diga despierta suavemente, lo harás sin ningún problema; sin embargo, cada vez que yo te dé la señal CORO CORO, caerás irremisiblemente en el sueño hipnótico. La despierto y apto seguido digo: "CORO CORO", "CORO CORO", y si la señal es efectiva, caerá en sueño hipnótico. Esta señal tiene una ventaja incuestionable y es que sintetiza el trabajo del terapeuta y economiza tiempo. Ello evita que cada vez que haya que enfrentarse a un paciente al que estemos hipnotizando, tengamos que realizar todo el proceder como si fuera la primera vez. Siempre ha de dejarse selectivamente la acción del signo-señal para la eficacia del acto hipnótico, bien para el terapeuta o para otra persona que ha de manejar el caso. Un ejemplo elocuente de ello es que podemos pasar la acción a un familiar o a otro médico, como ocurre en las embarazadas, a quienes tratamos como profilaxis psicológica para prepararlas a la hora del parto, dejándole la señal que recibirá la acción por el médico o del acompañante para proceder a un sueño hipnótico que le permitirá un parto seguro, relajado y feliz. También lo usamos en casos de intervenciones quirúrgicas, para eliminar el estrés que implica una nueva hipnosis. PRUEBAS Y ESCALAS PARA MEDIR LA SUGESTIBILIDAD HIPNÓTICA DEL PACIENTE. La sugestibilidad constituye una característica de todo ser humano en mayor o menor cuantía y su reconocimiento y confirmación para el proceso hipnótico es un elemento de gran importancia. La sola presencia de un hipnólogo con los atributos de poseer un buen rol profesional, ya es un elemento de impacto y sugestión que debe ser aprovechado, partiendo del conocimiento de cómo es la persona a hipnotizar y del empleo de técnicas eficaces y sencillas, entre las que figuran las que mencionamos en este trabajo y que han demostrado su elevada efectividad. PRUEBAS DE SUSCEPTIBILIDAD HIPNÓTICA. La susceptibilidad hipnótica o sugestibilidad es la propiedad de respuesta ante la sugestión. Varía de un individuo a otro y en el mismo individuo de un momento o estado a otro, en dependencia de diversos factores psicológicos y fisiológicos.
Se conocen una serie de pruebas que han sido utilizadas por los hipnotizadores con vistas a detectar a aquellas personas que son susceptibles a la aplicación de determinadas técnicas hipnóticas. Estas pruebas nos dan una idea del grado de sugestibilidad de un sujeto. Las pruebas que describiremos en este capítulo aplican recursos fisiológicos que facilitan unidos a la sugestión y establecer una combinación fisiopsicológica que favorezca la aparición espontánea de la sugestionabilidad del sujeto a quien se le aplican. Las ventajas adicionales que tiene la aplicación de pruebas de susceptibilidad hipnótica son las siguientes, Fortalece el rapport entre el hipnoterapeuta y el paciente. Prepara al sujeto, psicológica y reflexológicamente para el relajamiento corporal completo, así como para las sugestiones verbales bajo las que tendrá que interactuar en el proceso de inducción hipnótica. Permite conocer cómo se comporta el individuo ante ciertas y determinadas sugestiones que se le van aplicando. RECOMENDACIONES PARA EL USO DE LAS PRUEBAS DE SUSCEPTIBILIDAD HIPNÓTICA. Aunque estas pruebas no son las únicas que existen sí son las más usadas. Además, nuestra recomendación parte de la experiencia práctica de haberlas aplicado a un número significativo de sujetos desde hace varios años y comprobar que miden efectivamente lo que se desea valorar, así como que nos permiten tener una visión general de la sugestionabilidad de aquellos a quienes se apliquen, para seleccionar los métodos de inducción hipnótica. Una vez establecido el rapport y obtenidos los datos de la anamnesis del sujeto, se le explicará que se necesita su cooperación para realizar unas sencillas pruebas de reacción motriz que van encaminadas a conocer su capacidad de respuesta desde el punto de vista médico. Debe aclarársele al sujeto que estas pruebas son muy simples, que no tienen ningún tipo de contraindicación y que es necesaria su cooperación activa para que las mismas sean confiables. El paciente debe conocer que las pruebas se basan en el proceso de relajación; nunca se empleará el término hipnosis ni sugestión. Se le orientará que trate de comprender las consignas que se le darán y concentrarse en ellas. Es importante crear en el sujeto una actitud científica hacia las pruebas, o sea, que las tome seriamente. Bajo ningún concepto el individuo se debe sentir desafiado a vencer o ser vencido en estas pruebas, por lo que es necesario poner énfasis en la importancia de la participación activa del mismo. Las consignas deben ser dadas en un tono de voz bajo, preferiblemente como un susurro en forma mantenida y monótona, y con entonación imperativa. Nunca el sujeto debe recibir la impresión de que existe inseguridad por parte del terapeuta; para esto es necesario que la voz del operador sea pausada, firme y segura. Cuando se emplace al sujeto a que trate de ir en contra de una sugestión mediante la consigna "Intente...", ésta se debe dar en voz baja y sugerir automáticamente, de modo imperativo y con una tonalidad de voz más fuerte, la consigna "No puede... imposible...”, para contrarrestar el efecto. La utilización de la voz en tono bajo obliga al individuo a concentrarse para poder captar las consignas del operador. El entrenamiento y la práctica van indicando las distintas tonalidades que en cada momento se necesitan. Estas indicaciones son válidas también para el proceso de inducción hipnótica. Cuando vayan a ser aplicadas las pruebas en sujetos del sexo opuesto con personalidad y neurosis histéricas, no se puede dejar de valorar la posibilidad de que aparezcan vivencias autosugestivas provocadas por la imaginación y la fantasía de este tipo de entidad nosológica, que impliquen comentarios infundados en contra del terapeuta. Para evitar posibles acusaciones, es
necesario realizar las pruebas en presencia de una persona del mismo sexo que la paciente, ya que siempre existe la posibilidad de que sujetos muy sugestionables entren en un estado hipnótico profundo. Al mismo tiempo, la presencia de un tercero tiene inconvenientes, ya que el paciente puede establecer resistencia por temor a hacer el ridículo, pero este riesgo es necesario correrlo para evitar las complicaciones señaladas. A continuación describimos las siguientes pruebas: PRUEBA DE LA CAÍDA HACIA ADELANTE O HACIA ATRÁS. Se le pide al paciente, puesto de pie, que cierre sus ojos, una bien los pies en talones y puntos y se relaje completamente. Una vez situado el paciente parado con los pies bien unidos, el cuerpo relajado, los brazos a los lados del cuerpo. Es importante que se realice la maniobra de levantar los brazos y soltarlos para comprobar que los mismos caigan relajados al suspenderlos, completamente pesados y abandonados, efectuando un movimiento de péndulo al caer. Entonces se le dice: Yo pondré mis manos en sus hombros, y nos colocamos de frente si la sugestión es con la caída hacia adelante, siempre en el mismo sentido de la caída, y se le indica igualmente: Usted siente cómo su cuerpo se echa hacia adelante y no lo puede resistir y no tendrá miedo porque nada malo le pasará.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Sexta parte.3 Si la caída es hacia atrás, el hipnotizador se coloca detrás, pone sus manos en la espalda del paciente y hace que el cuerpo del mismo se apoye ligeramente sobre la mano, dando la sensación de sostén, el paciente debe mantener los ojos cerrados Inmediatamente se comienza con las sugestiones verbales: Su cuerpo debe estar relajado, descansando sobre las manos... no tenga miedo…deje todo su cuerpo relajado... los ojos cerrados…. No trate de abrirlos... los brazos flojos, piense ahora que lo están empujando hacia atrás... su cuerpo relajado... no tenga miedo... Cuando se entienda que efectivamente el sujeto se encuentra apoyado sobre las manos y que el mismo las ha establecido como punto de equilibrio, se comienza a aflojar la presión que se tenía sobre la espalda y se continúa diciendo: Su cuerpo se inclina hacia atrás se inclina hacia atrás... No tenga miedo... Los ojos cerrados... Siempre debe existir entre cada sugestión un intervalo de aproximadamente tres a cinco segundos y es necesario que la voz siga con la misma entonación y en forma imperativa. Si nos encontramos con un sujeto sugestionable y, por ende, susceptible a la hipnosis, se podrá observar que cae hacia atrás. Esta prueba es efectiva para los sujetos que presentan un alto grado de impresionabilidad. Si el sujeto es sugestionable, inclinará fácilmente su cuerpo en la dirección sugerida. Puede ser que mientras siente su caída, despierte abruptamente por temor a dañarse, y será nuestro deber tomarlo y calmarle de inmediato. PRUEBA DEL CUERPO OSCILANDO O DE OSCILACIÓN LATERAL. Se coloca al paciente de pie con las piernas bien unidas, los brazos al lado del cuerpo, totalmente relajados. Es muy importante comprobar este último aspecto. Se le indica que no tenga miedo y se le da confianza, sugiriéndole que cierre los ojos y repitiendo que mantenga los pies bien unidos y el cuerpo relajado. El hipnotizador debe situarse frente al sujeto, ponerle una mano en cada brazo y comenzar a hacer un movimiento oscilatorio. Se le indica que piense en una sábana en blanco o en la pantalla de un cine donde no estén proyectando ninguna película.
Posteriormente se comienza con las sugestiones verbales siguientes:..Sus brazos relajados... Los ojos cerrados... no tenga miedo... No se va a caer... los pies bien pegados... El cuerpo muy relajado... Cada vez más floja... Todos sus músculos sin ninguna contracción... Cuando, se ha comprobado que el movimiento tiene cierta estereotipia, que las manos del hipnotizador no tienen que hacer mucha presión para que se produzca el movimiento, se le indica: Ahora piense que esta sobre un barco. Un barco que se mueve... que se mueve... usted se mueve como si estuviera en el barco... Para un lado y para otro se mueve... Se mueve... Se retiran las manos de los hombros del sujeto y se le dan las siguientes sugestiones: Está muy bien. Continúe... el barco sigue su movimiento... usted se mueve... de la misma forma... de un lado para otro... de un lado para otro... ya su cuerpo se mueve y se balancea...para la derecha y para la izquierda... Esto debe coincidir con los movimientos que el sujeto está experimentando. Cuando en él existe cierto mareo, las oscilaciones tienden a ser circulares; entonces se indica: Ya es imposible parar, esos movimientos son automáticos... imposible parar....imposible parar....aunque usted quiera... no puede parar ese movimiento... imposible parar…imposible parar. Intente... no puede... imposible parar... imposible parar. Estando de pie el sujeto, se le pide que una bien sus pies totalmente y que cierre sus ojos, aclarándole que sentirá como a partir de ese momento su cuerpo oscilará cada vez más y que nada malo habrá de sucederle. Cuando el cuerpo esté oscilando, se detiene el movimiento a través de una orden verbal o sujetándolo suavemente. Este es también un elemento o ejercicio demostrativo de sugestibilidad. El porcentaje positivo que se obtiene con esta prueba en personas sugestionables es alto, pues el movimiento estereotipado con los ojos cerrados provoca cierto mareo, que al unirse con las sugestiones verbales producen cierta tendencia a que los movimientos se hagan involuntarios y respondan a las indicaciones verbales del hipnotizador. PRUEBA DE LA CAÍDA POR PÉRDIDA DE LAS FUERZAS DEL CUERPO. Puesto de pie, nos colocamos frente al sujeto, le pedimos que cierre sus ojos y decimos: "Ejerceré una presión sobre tu cabeza que cuando sea muy fuerte para ti significará que tus fuerzas te abandonan y caerás pero nada te pasará, pues te sostendremos". Procedemos a oprimir con nuestras dos manos, aumentando la fuerza y será fácil observar cómo las personas se doblan o caen rápidamente porque no hay fuerza que los sostenga. Para evitar caídas y daños físicos debemos contar con un auxiliar que pueda ayudarnos a sostener el cuerpo cuando éste caiga. PRUEBA DE LOS BRAZOS EXTENDIDOS. Se puede sentar al paciente o mantenerlo parado, pero los pies deben estar fuertemente unidos y los ojos abiertos, los brazos extendidos paralela y horizontalmente, de modo que las palmas de las manos estén vueltas hacia adentro y a una distancia de 15 a 18 cm entre sí. Inmediatamente después se comienza con las sugestiones verbales siguientes: Su cuerpo debe estar firme. Los pies unidos... las manos extendidas... cada vez más extendidas... sus manos comienzan a aproximarse. .. Se aproximan poco a poco... las manos se pegan... se pegan….se unen... están firmemente unidas... apretadas... duras... pegadas... Muy pegadas. Imposible separarlas. Imposible separarlas. Están pegadas.
El hipnotizador debe tocar con un dedo ambos brazos y continuar diciendo: A medida que yo toco sus brazos... Se ponen cada vez más duros... Duros y extendidos... cada vez más duros y extendidos... Se pegan cada vez están más pegados... más pegados... más pegados..., imposible separarlos... imposible separarlos... están pegados. Esta prueba mide también el grado de sugestionabilidad del sujeto, pero hemos comprobado que tiene menos efectividad que las otras pruebas. Si se obtiene un resultado positivo con alguna de las pruebas aplicadas, es decir, si el sujeto se ha visto incapacitado para desobedecer la sugestión del hipnotizador, se debe comenzar con la aplicación de sugestiones que eliminen el fenómeno provocado y llevar al sujeto a su estado natural. Para esto se le indica relajamiento y se le debe felicitar por su cooperación con vistas a formar un reforzamiento de la conducta del mismo. Por lo general, los pacientes que han respondido afirmativamente a estos ejercicios quedan condicionados para la aplicación de la hipnosis. Es importante conocer que el hecho de que no se responda en forma afirmativa a las pruebas no implica necesariamente que el sujeto no pueda ser hipnotizado, sino que es poco susceptible a la hipnosis mediante los métodos habituales de inducción.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Sexta parte.4 PRUEBA DEL BRAZO PEGADO A LA PARED. Se sitúa al paciente completamente relajado y parado con sus pies unidos, frente a una pared, a una distancia tal que para que llegue el brazo derecho extendido horizontalmente hasta la misma se necesite una inclinación del cuerpo hacia adelante (unos veinte grados). Al paciente se le indica que coloque su mano derecha pegada a la pared, pero con el brazo vuelto hacia arriba, quedando prácticamente apoyado sobre la palma de la mano, mientras que el brazo izquierdo ha de ponerse completamente relajado al lado del muslo. La mirada debe estar dirigida hacia la mano derecha. El apoyo del cuerpo sobre la mano, en esta posición, provoca calambre en el antebrazo, así como rigidez total de los músculos estriados del mismo y sensación de dolor, por la posición forzada del pulso, que hacen sentir la mano como realmente pesada y pegada a la pared, siendo casi imposible separarla si no se retira el cuerpo hacia atrás por un mecanismo completamente físico. Una vez que se ha comprobado que el brazo está contraído y en completa tensión muscular, se le indica al paciente que cierre los ojos y se comienza con sugestiones verbales. Primeramente se le indica en forma pausada: Usted ya a sentir cómo su mano se pega a la pared... no tenga miedo... Su brazo se pone duro y en tensión... Deje el resto del cuerpo relajado." Se debe dejar entre cada sugestión un intervalo de tres segundos aproximadamente. Las indicaciones deben tener cierto énfasis imperativo y afirmativo, procurando que coincidan con lo que físicamente está pasando en el sujeto. A continuación se sugiere: "Su mano continúa pegada... muy pegada... cada vez más pegada. Más pegada...Más dura... Más cansada... Mucho más pegada... Imposible separarla.... imposible separarla. “aunque usted intente no puede. No puede separarla... está completamente pegada... imposible separarla..." Esta sugestión verbal tiene que ser dada cuando se observa en el sujeto una total contracción en el antebrazo y se ha provocado que todo el resto del cuerpo esté completamente relajado. Se comienza a tocar con el dedo el brazo del paciente y se le indica: A medida que yo toco su brazo... éste se pone más duro... mucho más tenso... más contraído. Imposible separarlo... imposible separarlo... Cierre sus ojos... déjelos cerrados... Su cuerpo totalmente relajado. Totalmente relajado. Su brazo está duro... pesado... contraído... sus párpados pegados... Todo su cuerpo
relajado... su brazo duro y contraído...su mano pegada a la pared... Imposible separarla... imposible separarla. Después de repetir varias veces Imposible separarla, se le indica: Intente... no puede... no puede... imposible separarla... imposible separarla. Nunca debe indicarse más de una vez el reto "Intente...Se continua reforzando la conducta del sujeto diciendo: "Está muy bien... no se preocupe... ha cooperado muy bien... fíjese bien. Yo contaré hasta tres... y cuando llegue a tres... usted podrá abrir los ojos y separar la mano... cuando yo cuente hasta tres... Uno... su mano comienza a dejar de estar pegada... Dos... todo su cuerpo flojo... Tres.” Los sujetos de gran sugestionabilidad quedan casi hipnotizados, con imposibilidad de separar la mano. Pero, en general todo aquel que no logre separar la mano de la pared es un buen candidato para la aplicación de la hipnosis. Consideramos que esta prueba es prácticamente la más efectiva que existe para medir la sugestionabilidad de una persona, pues el fenómeno que se provoca se basa en mecanismos puramente físicos, que imposibilitan la retirada de la mano de la pared si el cuerpo no echado hacia atrás. Es conveniente destacar que si se obtiene un resultado negativo en la prueba, esto no implica necesariamente que el sujeto no pueda ser hipnotizado. PRUEBA DEL CUERPO PEGADO AL ASIENTO. Se sienta al sujeto sobre una silla o cualquier asiento y se le dice: “Cierre sus ojos y respire profundo y lentamente. Usted verá cómo su cuerpo comienza a pesarle y le pesa cada vez más y más, que parece está casi pegado al asiento, y aunque usted quiera no puede levantarse. Cada vez es mayor, mucho más, y usted comprueba que es imposible levantarse". Se le repite la inducción varias veces, siempre con un gradiente de compromiso mayor, hasta que al final se le ordena: "Levántese", y no podrá. El sujeto hará entonces marcados esfuerzos para separarse del asiento, pero no lo hará y permanecerá adherido a éste. Ello es un signo de sugestionabilidad elevada y un indicador de que el individuo puede ser hipnotizado. PRUEBA DE LAS MANOS PEGADAS LUEGO DEL ENTRECRUZAMIENTO DE LOS DEDOS. Se trabaja al paciente de pie o sentado (preferiblemente en esta última forma) con los ojos abiertos. Se le indica que entrecruce los dedos hasta su base y haga gran presión con ambas manos entrecruzadas, para que queden fuertemente cerradas. Una vez hecho esto, debe sugerírsele que las voltee de forma que las palmas queden hacia afuera; inmediatamente se le indica que apoye el dorso de los dedos sobre la frente haciendo presión sobre ella, fuertemente, con los brazos arqueados y los codos en una posición alta. Una vez que se ha puesto al sujeto en esta postura que físicamente es incómoda y forzada, pues las articulaciones digitales funcionan como nódulos que dificultan la salida de los dedos que se encuentran entrecruzados, se le manda a cerrar los ojos y se comienza con las sugestiones verbales': "Sus dedos deben permanecer firmemente unidos... firmemente unidos... sus codos y brazos elevados... las manos apoyadas sobre su cabeza. Todo el resto del cuerpo relajado... Completamente relajado... Las manos pegadas. Muy pegadas... Cuando se observe que existe cierta contracción muscular se indica: Ahora ya es imposible separarlas... sus dedos no se pueden separar.. Están pegados... muy pegados... amarrados... apretados... imposible separarlos... Intente... no puede... imposible separarlos... imposible separarlos.” Los sujetos muy sugestionables se impresionan rápidamente con el ejercicio que provoca incomodidad física para poder separar los dedos. Las sugestiones verbales, deben ser dadas de forma pausada, siempre en un tono imperativo y con la misma tonalidad de voz, que hagan notar al sujeto la seguridad del profesional que está aplicando la técnica. Esta prueba es buena, pero la
frecuencia en provocar resultados positivos es menor que la del brazo pegado en la pared o del cuerpo pegado al asiento. Otra forma de realizar esta prueba es la siguiente: Se le pide al sujeto sentarse, que una las palmas de sus manos y que en la medida en que escuche que se crece numéricamente, vaya entrelazando sus dedos y ejerciendo una presión descomunal, que hará que sus manos queden como pegadas y adheridas (el hipnotizador puede contar hasta donde estime). Una vez mencionado el último número, se le dice: "Verá que no puede separar sus manos al tratar de hacerlo". Toda observación que signifique dificultad para desunirlas, constituye un signo de elevada sugestionabilidad. Podríamos mencionar muchas otras pruebas que indican una elevada sugestibilidad, como son: la prueba de los puños caídos y las pruebas de trasmisión de calor o del frío, que son muy populares; pero atiborraríamos de información este acápite. Una vez captada una respuesta positiva o acorde con la inducción, podrá hablarse de que hay sugestionabilidad y se pasará entonces al momento deseado: la hipnosis. Otros signos de sugestionabilidad están dados por el reflejo palpebral aumentado, la mirada hacia arriba y la rotación de los ojos en el sujeto que estamos llevando al trance hipnótico. Algunos experimentadores consideran que una sola prueba de sugestibilidad sirve para diagnosticar el grado de la misma y proceder inmediatamente a aplicar técnicas hipnóticas, pero otros expresan la necesidad de emplear más de una para obtener un mayor grado de confirmación y poder clasificar a los sujetos por niveles de susceptibilidad, en función de puntajes acordados según los resultados de la prueba. Así han surgido escalas, entre las cuales se usa mucho en Cuba la de Martínez Perigod y Asís (2), que permite clasificar al sujeto como: No susceptible, Poco susceptible, Medianamente susceptible, Altamente susceptible y Susceptible total.
Es válido aclarar que las escalas posibilitan estandarizar los criterios de clasificación; sin embargo, en la práctica, cada experimentador aplica sus propios criterios, basados en una fuerte observación de las respuestas del sujeto, su experiencia y su intuición.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Septima parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Séptima parte Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
Escalas de susceptibilidad hipnótica Aspectos técnicos que se deben tener en cuenta en la aplicación de la hipnosis Características del hipnotizador El tono de la voz La palabra como elemento clave
Formas de realizar la sugestión Rasgos de sugestibilidad Preparación del paciente Presencia de terceros Duración de las sesiones Frecuencia y hora de aplicación Las posiciones corporales en la hipnosis. De pie, sentado y acostado Las condiciones ambientales. Iluminación
ESCALAS DE SUSCEPTIBILIDAD HIPNÓTICA. Las escalas de susceptibilidad hipnótica son instrumentos de evaluación que permiten al hipnotizador tener una valoración o índice cuantitativo sobre los individuos con los que va a trabajar. Por regla general, una escala de susceptibilidad hipnótica ofrece la posibilidad de clasificar, así como de ubicar a los sujetos a quienes se les aplique, en una serie de categorías que van desde poco sugestionables a muy sugestionables, lo cual es importante no sólo desde el punto de vista práctico, sino también para los fines de la investigación. Se han creado diferentes escalas de susceptibilidad hipnótica que utilizan distintos recursos, o sea, respuestas a estímulos psicofisiológicos o a pruebas más o menos parecidas a las que explicamos anteriormente. Entre estas escalas son conocidas la escala de susceptibilidad hipnótica para niños, elaborada por London, las escalas de Harvard (Shor y Orne), de Davis-Husband, de Barry-MacKinnon-Murray, de Eysenck-Furneaux, de LeCron-Bordeaux, las de Weitzenhoffer-Hilgard (formas A, B, C, I y II, conocidas también como escalas de perfil de Stanford), la de Barber y la de Martínez Perigod y Asís. A continuación nos referiremos a dos de estas escalas, la de Barber y la de Martínez Perigod y Asís, que consideramos son las más completas de las mencionadas. Escala de sugestibilidad de Barber (BSS). Esta escala se basa en la aplicación de ocho sugestiones estandarizadas como pruebas, las que son valoradas con un punto cada una si es positiva y con cero punto si es negativa:
1. Descenso del brazo. Se aplica la siguiente sugestión: Su brazo derecho está pesado y se 2. 3. 4. 5.
6.
está moviendo hacia abajo. Se le da un punto sólo cuando el brazo no puede ser sostenido en la posición inicial y baja como mínimo 10 cm. Levitación del brazo. Se utiliza la siguiente sugestión: El brazo izquierdo no pesa nada y se está moviendo hacia arriba. Al igual que en la anterior, se le da un punto si sube 10 cm como mínimo. Manos pegadas. Se emplea la siguiente sugestión: Las mallas entrecruzadas están soldadas y no pueden separarse: Se le otorga un punto si se cumple la consigna. Alucinación de sed. Se le dice: Usted ahora siente mucha sed. Se añade un punto a los anteriores si se observa en el sujeto humedecimiento de los labios o movimientos con los mismos que indiquen respuesta a esta sugestión. Inhibición verbal. Se le aplica la siguiente consigna: Los músculos de su garganta y de su mandíbula están rígidos y no son capaces de dejarle a usted pronunciar su nombre. La valoración es de un punto cuando el sujeto hace el intento de pronunciar su nombre, pero no puede. Inmovilidad corporal. En esta prueba se pone al sujeto de pie y se le dice: Su cuerpo está pesado y no puede levantarlo. Se califica con un punto si el sujeto intenta levantar su cuerpo del piso y no puede lograrlo.
7. Respuestas posthipnóticas. Se le indica que tendrá determinada reacción o respuesta (por 8.
ejemplo, que va a toser) ante determinado estímulo, el cual se le presenta después del experimento. Amnesia selectiva. Se le dice al sujeto: Cuando se termine este experimento usted no recordará la segunda prueba. Durante la entrevista postexperimental el sujeto no se referirá al aspecto que se le sugirió olvidar, a menos que se le diga después: Ahora puede usted recordar.
Por supuesto, las sugestiones en estas pruebas no son tan simples. Debe tomarse en cuenta lo que explicamos al referimos a cada una de las pruebas de susceptibilidad hipnótica. En el caso de la escala de Barber hemos simplificado las instrucciones sugestivas. Escala de susceptibilidad hipnótica de Martínez Perigod y Asís. Se basa en la utilización de cinco pruebas de susceptibilidad, de las que ya explicamos anteriormente. El orden de aplicación de las pruebas debe ser el que se señala a continuación:
1. 2. 3. 4. 5.
Prueba del brazo pegado a la pared. Prueba del entrecruzamiento de los dedos. Prueba de oscilación lateral. Prueba de la caída para atrás. Prueba de los brazos extendidos.
Nunca se debe alterar este orden. Entre una prueba y la siguiente debe haber cierta continuidad. La calificación de las pruebas por individual obedece al principio de todo o nada, es decir, puede obtener el máximo de puntos asignados a cada prueba o cero puntos. La puntuación es acumulativa lo que se expresa en la tabla número 3 siguiente. Tabla número 3. Escala de susceptibilidad hipnótica de Martínez Perigod y Asís. NOMBRE: …………………………………. H. C: ……………………. Edad: ………………. Escolaridad: …………………… Sexo: ……………. Nombre de la prueba Valor Puntos 1. Prueba del brazo pegado a la pared 0/1 2. Prueba del entrecruzamiento de los dedos 0/2 3. Prueba de oscilación lateral 0/3 4. Prueba de caída de atrás 0/4 5. Prueba de los brazos extendidos 0/5 Total de puntos 0/15
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Septima parte.2 Calificación: cada prueba se califica con el principio de todo o nada; es decir, o saca 0 punto o saca el máximo de puntos completando así un puntaje total que oscila entre 0 a 15 puntos, lo cual se expresa en la tabla número 4. Tabla número 4. Clasificación del paciente según la puntuación total de la escala de sugestibilidad. Clasificación en la escala de sugestibilidad. (NS) No susceptible a la inducción hipnótica (PS) Poco susceptible a la inducción hipnótica
Puntuación 0 1-3
(SM) Susceptibilidad media a la inducción hipnótica (AS) Alta susceptibilidad a la inducción hipnótica (ST) Susceptibilidad total a la inducción hipnótica
4-6 7-10 11-15
Observaciones: Fecha: ………………………… Aplicada por: ………………………… Así, por ejemplo, un paciente que responde afirmativamente a la primera prueba acumulará un punto, en la segunda acumulará dos puntos, haciendo un total de tres puntos, y así sucesivamente. Si el sujeto saca cero en una de las pruebas, se intentará realizar la siguiente; si obtiene cero en dos pruebas consecutivas, se descontinuará la aplicación del resto y se pasará a la tabulación total. En el protocolo que se expresa en la tabla número 3, aparecen las puntuaciones correspondientes a la variación que se da a cada una de las pruebas. Una vez obtenida la puntuación acumulativa, se buscará el lugar correspondiente en la escala, tal como aparece en la tabla número 4 del protocolo, y de esta forma se tiene la clasificación del sujeto. Las características de cada categoría en la escala son las siguientes: 1. No susceptible a la inducción hipnótica (NS). Dentro de esta categoría consideramos a aquellos sujetos que han sacado cero puntos en la escala y en los cuales, por lo tanto, no debe intentarse la inducción hipnótica por personal que no esté altamente calificado en el dominio de los métodos de inducción. Jacobson, considera que sólo una parte de todas las personas son hipnotizables, pero teniendo en cuenta que el concepto de -hipnotizabilidad- debe interpretarse en relación exclusiva con el empleo de métodos clásicos de inducción, que requieren de la cooperación y sugestibilidad mínima del sujeto, ya que todo individuo puede ser hipnotizado cuando se emplean otros métodos tales como los tóxicos, los instrumentales, la electrohipnosis y la narcohipnosis. Las características más frecuentes en los sujetos considerados dentro de esta categoría son: retrasados mentales, que por su falta de comprensión de las consignas son incapaces de ejecutadas, aunque estos sujetos pueden autosugestionarse, y psicópatas, que por su caracterología van en contra de todas las consignas que se les imparten o se niegan a realizar las pruebas. 2. Poco susceptible a la inducción hipnótica (PS). Dentro de esta categoría consideramos a aquellos sujetos que han obtenido de uno a tres puntos en la escala. Se incluyen en este grupo aquellos sujetos que solamente son capaces de alcanzar una inducción hipnótica parcial, es decir, que con ellos se consigue una hipnosis superficial con catalepsia palpebral y levitación de los miembros superiores. Aquí se pueden ubicar, entre otros, los ancianos y los niños menores de 12 años. Un método adecuado de inducción para este grupo es el pestañeo sincronizado y, específicamente en el caso de los niños, el método de imágenes sensoriales. 3. Susceptibilidad media a la inducción hipnótica (SM). Aquí se incluye a los sujetos que obtienen puntuaciones entre cuatro y seis, que son susceptibles a todos los métodos de inducción que utilicen fijación de la mirada, como por ejemplo: fascinación, vista fija, punto luminoso. También se pueden utilizar los métodos auditivos, de estimulación vestibular y de oscilación lateral. Estos sujetos se caracterizan por un predominio instintivo y poca madurez de carácter. Pueden llevarse a un grado de inducción media (anestesia local, fenómenos sensoriales de tipo térmico.). Se incluyen en esta categoría, entre otras, las personas supersticiosas, personalidades afectivas, narcómanos, alcohólicos, personalidades, histéricas y con neurosis histérica de conversión.
4. Alta susceptibilidad a la inducción hipnótica (AS). Comprende a los individuos que obtienen de 7 a 10 puntos en la escala. En este grupo predominan aquellos sujetos que son capaces de llegar a grados profundos de la hipnosis (abrir los ojos sin despertar, cambios endocrinometabólicos). Estos individuos se caracterizan con frecuencia por tener signos de hiperhidrosis, labilidad vegetativa y vasomotora, así como otros signos psicofisiológicos. Los sonámbulos y los casos de personalidad múltiple (una forma de manifestarse la neurosis histérica disociativa) presentan características de AS y ST. 5. Susceptibilidad total a la inducción hipnótica (ST). Se incluyen en esta categoría los individuos que alcanzan de 11 a 15 puntos en la escala. Estos sujetos son capaces de llegar a la etapa de sonambulismo hipnótico, donde se obtienen fenómenos tales como catalepsia general, anestesia general, flexibilidad total, amnesia total, hipermnesia, regresión y progresión de la edad, sugestiones posthipnóticas de corta y larga duración. Es necesario tomar en consideración que la valoración obtenida por un sujeto cuando se aplique la escala nos refleja únicamente las condiciones del mismo en el momento de utilización de las pruebas, y que esta valoración está sujeta al reflejo psicosomático del individuo, el cual puede variar por diversos factores. Es decir, que la valoración que se obtenga con esta u otra escala en un momento dado puede ser diferente o igual algún tiempo después o en otras condiciones, lo cual no indica necesariamente que haya habido error o deficiencia en la aplicación de las pruebas, sino que el individuo ha variado sus patrones de sugestionabilidad. ASPECTOS TÉCNICOS QUE SE DEBEN TENER EN CUENTA EN LA APLICACIÓN DE LA HIPNOSIS. La hipnosis es una técnica terapéutica y experimental para cuya aplicación hay que tener en cuenta no sólo las características individuales de cada sujeto, es decir, su capacidad intelectual, personalidad, conciencia social, sexo, estado civil, sino también las del hipnotizador, pues la misma se desarrolla mediante la relación entre ambos. No podemos comenzar nunca un tratamiento psicoterapéutico sin conocer perfectamente la anamnesis del paciente. Pero si el tipo de tratamiento es hipnoterapia, este aspecto se hace aún mucho más necesario. Un estudio detallado del paciente permite al hipnotizador conocer las características de la estructura de su personalidad y esto facilita la determinación de las distintas variables que se deben tener en cuenta en la aplicación de la hipnosis, atendiendo a las particularidades de cada individuo. CARACTERÍSTICAS DEL HIPNOTIZADOR. Mucho se ha hablado acerca de las características de la personalidad del hipnotizador, pues se centraba la técnica en las cualidades de éste. A medida que se han desarrollado los métodos de la hipnosis, se ha ido desplazando la centralización hacia el sujeto, apoyándose en la autosugestión. Es importante señalar que, independientemente del desarrollo científico que ha tenido esta técnica y de que se busque un papel activo del sujeto, esto no implica que el hipnotizador no tenga que poseer ciertas características y aptitudes exteriores que permitan que el paciente adquiera absoluta seguridad y no vea la más mínima posibilidad de que la terapia que se va a utilizar sea susceptible de fallo.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Septima parte.3 El autocontrol y la confianza en sí mismo son aspectos importantes para el éxito, además de tener un buen dominio de los pasos de la técnica hipnótica que se vaya a seguir.
El hipnotizador debe saber disimular ante el paciente los errores que cometa, de modo que éstos no sean notados por el mismo. Existen muchos profesionales que comienzan con la aplicación de las técnicas hipnóticas y rápidamente alcanzan buenos resultados. Sin embargo, es necesario advertir que estos éxitos no deben producir en el hipnotizador algo así como un sentimiento de poder sobrenatural, una voluntad irresistible o un don especial, pues incluso sin que el hipnotizador tenga o manifieste esa autovaloración, el paciente verá en él a la persona que domina el poder de la voluntad. En realidad, cualquier médico, odontólogo o psicólogo puede ser un buen hipnotizador en la medida en que domine la técnica y aprenda la teoría y práctica indispensables. Un adecuado control de los impulsos emocionales es una de las características que debe poseer un buen hipnotizador. Nunca debe tener expresiones de disgusto, incomodidad, cuando no aparezca enseguida el estado hipnótico, pues estas expresiones provocan inseguridad en el paciente y lo pueden hacer pensar que no existe dominio de la técnica. No se debe olvidar que el sujeto idealiza un poco al hipnotizador, por lo que no podemos desaprovechar esta relación deontológica positiva. El hipnotizador debe cuidar de su presencia, de sus hábitos higiénicos y estéticos. La presencia de halitosis, conjuntivitis o enfermedades contagiosas establece una influencia inhibidora negativa en el paciente, por lo que consideramos que cuando estén presentes estas condiciones no es conveniente proceder a utilizar técnicas hipnóticas, pues se tiene gran posibilidad de fracasar. Existen tres cualidades que deben estar presentes en todo hipnotizador:
1. Ser objetivo; es decir, que en ningún momento se puede dejar llevar por la acción 2. 3.
emocional, hay que tener dominio de los impulsos emocionales. Poseer cierta flexibilidad, que evite tener una conducta rígida que no facilite modificar estilos de trabajo, programas y actitudes ante situaciones que lo requieran. Ser capaz de establecer relaciones de empatía con los sujetos que le faciliten la relación interpersonal como técnica de ayuda.
En conjunto, la personalidad del hipnotizador debe tener la característica de ser capaz de inspirar confianza al sujeto para que éste se entregue libremente al proceso de inducción hipnótica. El hipnotizador puede expresar sentimientos de consideración, respeto, comprensión y afecto, pero en ningún momento dejará que esto se pueda relacionar con un sentido de posesión. Independientemente de que las cualidades personales del hipnotizador, su actitud, mímica, gestos y el control de la afectividad tienen importancia, lo fundamental radica en el dominio que se tenga de la técnica. EL TONO DE LA VOZ. Son varias las características que debe tener la voz del hipnotizador y dependen de la situación y del fenómeno que se quiera producir. Cuando se desea profundizar en el sueño, el tono debe ser bajo y preferiblemente en forma de susurro, mantenido y monótono. No es recomendable aplicar sugestiones que lleven implícita una misma acción con distinta tonalidad de voz. Por ejemplo, cuando se le va a indicar al sujeto que duerma, que va a sentir sueño y que está cansado, como son acciones similares, siempre debe existir en la voz el hipnotizador el mismo tono.
Todas las indicaciones verbales deben ser de forma imperativa y nunca se brindará la posibilidad de que el paciente pueda tomar conciencia de que el hipnotizador tiene inseguridad. Por eso la voz de éste debe ser pausada, firme y segura; es decir, que la posibilidad de éxito aumenta en la medida en que existe un mejor dominio de la voz. Cuando se emplace al sujeto a que trate de ir en contra de una sugestión mediante la consigna Intente..., ésta debe darse en voz baja, y, automáticamente, de forma imperativa, y con una tonalidad de voz más fuerte, sugerir No puede... imposible... no puede... para contrarrestar el efecto. Un medio de provocar una mayor participación del sujeto o de darle un papel activo es bajar la voz, ya que esto lo obliga a concentrar más su atención para poder captar las consignas del hipnotizador. En algunas oportunidades es necesario alzar el tono de la voz para llamar la atención del sujeto, sobre todo cuando se da una sugerencia verbal que indique una acción motora. La utilización de un murmullo bajo que se haga algo ininteligible por parte del paciente provoca profundización en el sueño hipnótico; por el contrario, una voz clara con intensidad normal o incluso mayor se utiliza cuando se va a sugerir que se termine el sueño hipnótico. El entrenamiento y la práctica van indicando las distintas tonalidades que en cada momento se necesitan, pero repetimos que el reforzamiento del reflejo condicionado que deseamos formar en el sujeto se consolida dando siempre el mismo tonó de voz a las sugestiones verbales que lleven implícitas la misma acción o fenómeno. LA PALABRA COMO ELEMENTO CLAVE. La palabra es el elemento clave para realizar la sugestión hipnótica, y si se emplea algún otro objeto, ella potencializa su acción sugestiva, por lo cual seguirá predominando. Las orientaciones sugestoras deben ser precisas, ordenadas y bien definidas, pues la coherencia de la intención verbal y de su propio contenido, permite que lo captado por el sujeto sea bien interpretado y que este comprenda qué se persigue, pudiendo establecer en si mismo los mecanismos de cooperación en función de sus necesidades y adoptando una actitud igualmente hipnótica. Aunque hay autores que emplean frases con intervalos rápidos, la experiencia nos revela que mientras más pausadas son las sugestiones, es mucho mejor, porque se convierten en estímulos monótonos que provocan una tendencia generalizada a un estado de modorra y luego el sueño. El timbre ha de ser estable y no muy agudo, pues los estímulos con estas características suelen ser contraproducentes con los estados físicos. Actualmente se discute si se debe ser imperativo o no. En la hipnosis empleada en Europa, que es bien directiva -y la que más ha influido en Cuba- se utilizan normas de inducción imperativas, al igual que en los adultos; sin embargo, hay modelos menos directivos como el ericksoniano, que hacen que el paciente sienta al terapeuta más cerca de él. La experiencia asistencial en nuestro caso demostró que con niños se debe aplicar una hipnosis suave, tierna, y en ello tiene mucho que ver el empleo de métodos no autoritarios, sino más bien fantasiosos, melódicos, y que se correspondan con las características psicológicas de los infantes. Este proceder debe ser idéntico en adultos con antecedentes de ser personas que se subvaloran o han recibido maltratos y humillaciones. Ello facilita un clima de confianza para que éstos no se sientan "inferiores".
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Septima parte.4 FORMAS DE REALIZAR LA SUGESTIÓN. La forma de realizar la sugestión es uno de los aspectos más importantes que deben tomarse en cuenta para producir los fenómenos hipnóticos que deseamos. El éxito o el fracaso de la hipnosis dependen en la mayoría de los casos de la forma en que se realizan las sugestiones; es decir, que se relacionan directamente con el hipnotizador. A continuación mencionamos una serie de requisitos indispensables para tener éxito en la sugestión:
1. Las sugestiones deben ser acordes con las características del hipnotizador y variar en dependencia de la personalidad del sujeto.
2. Se presentarán de forma que indiquen cierto sentido imperativo, con autoridad y firmeza, 3. 4.
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dando muestra de seguridad y tranquilidad en el hipnotizador, pero nunca dando impresión de altanería que establezca un reto al sujeto. Se harán las sugestiones en pocas palabras, utilizando una terminología comprensible para el nivel cultural del sujeto y tomando en consideración las características individuales del mismo. La sugestión verbal debe ser repetida varias veces, con intervalos cortos de tiempo, para formar las conexiones reflejo-condicionadas y que las mismas se consoliden en el sujeto. En la práctica, este aspecto suele olvidarse y se convierte en uno de los factores principales que llevan al fracaso. Se deben evitar las sugestiones que indiquen fenómenos complejos en momentos en que el sueño hipnótico es superficial. Esto requiere que el discurso sea bien pensado y elaborado por el hipnotizador antes de trasmitido al paciente. Se tendrá preparada una respuesta adecuada ante la posibilidad de que una sugestión no sea cumplida, para no perder la confianza del sujeto. Frases como; Está muy bien; No se preocupe; Eso lo esperábamos, tienden a disminuir el efecto del fracaso. Deben evitarse siempre expresiones que puedan provocar la oposición del paciente porque vayan en contra de sus ideales sociales o afecten su amor propio. Las sugestiones no pueden realizarse de forma que se hable de un futuro desconocido en que deberá producirse la sugestión (Usted se curará), en esta sugestión no se le indica al enfermo cuándo aparecerá la acción. Es necesario que toda sugestión indique de forma clara y precisa cuándo ocurrirá lo que se está sugiriendo. El éxito de la sugestión -según plantea Plátonov- depende de su contenido, de la expresividad, la dicción, la fuerza del sonido, la entonación de la voz, la acentuación correspondiente y la significación ideacional de las palabras pronunciadas. No se puede olvidar que la mirada, la voz, el porte, la expresión facial y la gesticulación actúan también como estímulos sugestivos.
RASGOS DE SUGESTIBILIDAD. Todo el mundo es hipnotizable, pues la realidad es que aun cuando el sujeto, haga esfuerzo o no para concentrarse, siempre existe un método que lo logra hipnotizar. Sin embargo, en la práctica hay sujetos que entran en sueño hipnótico más fácilmente que otros, a causa de sus características personales. Ya hemos mencionado que existen ciertas características mínimas para que una persona sea hipnotizable. Una de esas características es la inteligencia, ya que generalmente los retrasados mentales no son buenos sujetos por su falta de comprensión, aunque hemos encontrado personas que presentan cierta disminución de su capacidad intelectual y que han sido fáciles de llevar a estados determinados de hipnosis. Algunos autores destacan la necesidad de una inteligencia
precIara; nosotros cambiamos este término por normal, pues consideramos que se necesita cierto nivel para comprender lo que se le indica y se pretende obtener. Sin embargo, no debemos perder de vista los fenómenos especiales de conciencia que por medio de la autosugestión logran establecer algunos débiles mentales. La susceptibilidad a la hipnosis está en dependencia no solamente del sujeto, sino también de la relación que el hipnotizador pueda establecer. Es conocido que sujetos que no han podido ser hipnotizados por un profesional experimentado en la técnica, han podido caer en sueño hipnótico profundo con otro. Por eso es tan importante establecer un buen rapport. Se ha utilizado el término hipnofilia para indicar la capacidad de un individuo de responder afirmativamente a la hipnosis. Un hipnotizador experimentado conoce fácilmente al sujeto hipnofílico o susceptible a la hipnosis. Sin embargo, cuando nos preguntamos qué características presenta el mismo, se hace muy difícil establecerlas categóricamente, pues son múltiples los factores que lo determinan. La capacidad de ser hipnotizado juega con el método o instrumento de inducción que utilicemos y depende del tipo de sistema nervioso y de las disposiciones del sujeto. Hemos encontrado que generalmente aquellas personas que presentan humedad en las manos (signo de hiperhidrosis) y que además tienden a sudar por todo el cuerpo ante un mínimo stress o excitación, son buenos sujetos para asimilar la hipnosis. A los pacientes que presentaban estas características les hemos aplicado pruebas de susceptibilidad y han obtenido resultados positivos al ser sometidos al sueño hipnótico, y la gran mayoría ha podido ser llevada a etapas de sonambulismo. Otro elemento que puede señalar a un sujeto como susceptible a la hipnosis es la labilidad vegetativa y vasomotora (rubicundez o palidez súbita). Se ha comprobado que el nivel de sugestionabilidad aumenta en una persona cuando existe cierto debilitamiento del segundo sistema de señales, porque esto hace que disminuya la capacidad crítica. Lo mismo ocurre cuando existe cierto debilitamiento temporal de la corteza cerebral y un estado fásico hípnoide, como plantea Pávlov. Esto justifica el hecho de que en muchos casos, las personas supersticiosas, las que han sufrido traumas cerebrales, las personalidades afectivas, los narcómanos, algunos psicópatas y los niños sean sujetos con una sugestionabilidad frecuentemente elevada. Otro aspecto que se debe considerar es el sexo. Se ha observado por algunos autores, que las mujeres son ligeramente más sugestionables que los hombres, en tanto el hipnotizador sea un hombre. Nuestra opinión es que en esto influyen también el rapport y otros factores. Es importante tener en cuenta la edad. Los niños son fácilmente sugestionables; sin embargo, por lo general no se alcanzan estados de sueño hipnótico profundo en ellos y responden de forma muy variable. De igual forma sucede con los ancianos, a quienes algunos autores consideran ineptos o no aptos para la hipnosis. PREPARACIÓN DEL PACIENTE.
La preparación comienza desde el mismo momento en que se determina la utilización de la técnica hipnótica en un paciente determinado. Para que se pueda tener una visión panorámica de cómo se desarrolla la misma, expondremos analíticamente su ejecución, con el fin de que el profesional que comienza en el entrenamiento de las técnicas hipnóticas tenga una guía de los aspectos técnicos necesarios que favorecen la hipnotización más fácil del sujeto.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Septima parte.5 Cuando ya hemos decidido que un paciente será sometido al tratamiento con las técnicas hipnóticas, nos vemos en la necesidad de prepararlo psicológicamente para el mismo. Comenzamos en la entrevista a plantearle al sujeto que de acuerdo con el problema que él presenta utilizaremos una técnica muy efectiva que resolverá su problema. En este momento se le debe decir que el método se basa en procesos de relajación que provocarán un equilibrio en su sistema nervioso. Si no es necesario utilizar la palabra hipnosis, se debe omitir; si por el contrario el nivel del paciente determina una argumentación mayor se le explicará en qué consiste el proceso, desde el punto de vista científico, tomando en consideración el nivel de comprensión del paciente y destacando siempre que dicha técnica no tiene nada que ver con los espectáculos circenses que se presentan bajo el nombre de hipnosis. Un aspecto importante que se debe tener en consideración es si se han realizado o no pruebas de susceptibilidad hipnótica, pues si las mismas fueron aplicadas y determinan que el paciente es susceptible a la técnica, el hipnotizador sin práctica puede estar más seguro del éxito. Si las pruebas no han sido utilizadas, entonces es conveniente no emplear la palabra sueño para evitar un posible fracaso. Debe ser objetivo del hipnotizador crear en el sujeto una actitud científica hacia la técnica, nunca plantear disputas o desafíos que puedan establecer una relación de competición. Una orientación que favorece la fijación de una actitud positiva de cooperación en el paciente hacia la técnica hipnótica es manifestarle la importancia de su participación activa, sin la cual es imposible lograr los resultados que deseamos. Se le debe aclarar que el concepto de que los hipnotizados no tienen voluntad es completamente erróneo, pues es precisamente todo lo contrario: se necesita contar con la voluntad del sujeto para que el mismo pueda concentrar la atención. Con estos planteamientos tratamos de neutralizar la influencia que se pueda tener de opiniones de autores como Gebser, que en su libro Abendlandisch wandlung llama a la hipnosis, franca transferencia de la voluntad, o de otros autores que dicen que el hipnotizado presenta conciencia sin voluntad, que hay dominio sobre el hipnotizado o que éste es un fantasma-autómata sin voluntad propia. Se debe, hacer énfasis con el sujeto de que si no contamos con su voluntad no se podrá utilizar esta terapia tan beneficiosa, pues es precisamente el esfuerzo que él realice en concentrarse lo que permitirá llegar al sueño hipnótico. Si se habla en términos de hipnosis con el sujeto, es necesario explicarle que siempre conservará la voluntad, incluso cuando esté profundamente dormido. Cuando notemos preocupación en el sujeto porque podamos llegar a conocer sus intimidades, interrogándole sobre las mismas, se le dirá que en ningún momento le preguntaremos nada ni le
mandaremos a realizar algo que a él le moleste. Esto permitirá disminuir la ansiedad y la angustia que pueda tener. En los primeros pasos de la hipnosis no existe amnesia de lo ocurrido ni mucho menos un sueño profundo; por eso cuando el sujeto despierta hace frecuentemente comentarios como. Yo no me dormí, lo oía y entendía todo; Podía hacer lo que me mandaba o no hacerlo. Para contrarrestar estas posibles expresiones, se le dice de antemano que él no se va a dormir y que no pretendemos producirle un sueño fisiológico, sino un proceso de relajación total provocado por la voluntad de él, que generalmente recuerda todo el curso de la sesión hipnoterapéutica cuando es despertado, aunque algunos memorizan menos que otros. Esta indicación neutraliza la posibilidad de que el sujeto manifieste de forma prepotente el hecho de recordar. Los planteamientos que se le hacen al paciente no se apartan de la realidad, pues la hipnosis se apoya en la autosugestión. Compartimos el criterio de otros autores, como Conn, Kline, Erickson, Kretschmer, Stokvis y Montserrat, en el sentido de que sin la cooperación del sujeto y su participación activa es prácticamente imposible obtener resultados satisfactorios. Por otra parte, rechazamos la opinión de Brown, el cual define la hipnosis como un estado pasivo (hypnotism paralyses the will) y que solamente existe participación activa del sujeto cuando se combinan la sugestión y la relajación. Un aspecto que se debe tener en consideración es llegar a un acuerdo de colaboración con el sujeto, con el fin de que el compromiso para el éxito del tratamiento inculpe a ambos. De esta forma se comparte la responsabilidad del establecimiento del sueño hipnótico y de sus resultados terapéuticos. Se le plantea al sujeto que se requiere de cierta práctica para poder profundizar en la hipnosis y que el hipnotizador solamente le enseñará cómo se deben realizar los ejercicios para ayudarlo. Se le puede decir que toda persona que ponga de su voluntad para concentrarse puede entrar en un estado de sueño hipnótico si es guiado por un hipnotizador. Hay muchos sujetos que temen no poder despertar si son hipnotizados. Este temor es el prejuicio más difundido contra la hipnosis ¿Es verdad que hay personas que después no pueden despertarse? y es necesario combatirlo, pues mientras exista desconfianza y duda en este aspecto no se logrará inducir el sueño. Se le debe explicar a la persona que despertar es tan sencillo como quedar dormido y que nunca el individuo puede dejar de ser despertado. Este tema sólo se menciona si se plantea por el sujeto su temor al respecto; si no, se debe omitir para no crear preocupación. Los que comienzan en el entrenamiento hipnótico no deben tratar nunca de hipnotizar al sujeto en la primera visita y mucho menos si se desconocen las características del caso, pues se aumenta considerablemente la posibilidad de fracaso. PRESENCIA DE TERCEROS. Nuestra experiencia nos ha demostrado que por lo general el paciente se opone a la presencia de otra persona. Hemos tenido casos que cuando le sugerimos que haya familiares presentes en la sesión, se han extrañado y ha aparecido desconfianza inmediatamente. Otros se han negado por completo, diciendo que si los familiares tienen que estar presentes ellos no se aplican el tratamiento. En cambio, hemos tenido casos con planteamientos completamente diferentes; es decir, que solicitan la presencia de un familiar en la consulta. Es lógico suponer que se debe aceptar, sobre todo si es una mujer. Pero el hecho de que se haga este planteamiento espontáneamente nos
indica varias posibilidades: el paciente desconfía del hipnotizador y de su técnica, o el sujeto considera que existe una relación interpersonal de mucha atracción hacia el hipnoterapeuta. Cuando se realice la hipnosis en presencia de un familiar, se debe utilizar al mismo como reforzamiento, pues a través de él podemos dar sugestiones indirectas que son de gran valor para la inducción del sueño. Un tipo de sugestión indirecta puede ser: Fíjese usted lo relajado que se encuentra... su cuerpo está completamente flojo... Si usted quiere también se puede aflojar y relajar, pues esto es muy beneficioso para el sistema nervioso. Hemos tenido varios de casos en los que el acompañante se ha hipnotizado, incluso primero que el paciente.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Septima parte.6 En otros casos la intranquilidad del familiar, manifestada por ruidos con la silla donde está sentado, risa nerviosa, comentarios durante el tratamiento, crea una situación desfavorable para la inducción de la hipnosis. La presencia de un familiar es positiva generalmente cuando se trabaja con niños, pues esto los hace sentirse seguros. Pero una vez que están bajo la inducción hipnótica y se quiera trabajar la técnica hipnocatártica o preguntar sobre dificultades del hogar, se debe indicar al familiar que salga sin hacer ruido para que el paciente no detecte su ausencia. DURACIÓN DE LAS SESIONES. Un hipnotizador experimentado no tardará más de tres o cuatro minutos en producir la hipnosis en un paciente. Para el que comienza en el entrenamiento esto no resulta tan fácil, y le recomendamos el método del pestañeo sincronizado que explicaremos cuando abordemos los métodos de inducción hipnótica. Es una técnica que ofrece una alta posibilidad de éxito y que lleva al paciente a caer rápidamente en la influencia de la sugestión verbal. Todo sujeto va disminuyendo progresivamente en cada sesión el tiempo que requiere para caer en estado hipnótico, pues la posibilidad que ofrece el establecimiento del signo-señal provoca que mediante este reflejo condicionado el paciente entre en estado hipnótico automáticamente. En la primera sesión ya es posible preparar la vía de sugestionabilidad de la próxima y de esta forma reducir el tiempo. Existen distintos criterios con relación al tiempo que debe permanecer un sujeto en estado hipnótico. Nosotros consideramos que esto lo determina el nivel de cansancio, principalmente del hipnotizador. El tiempo que se establece como promedio es aproximadamente cuarenta minutos, para casos donde es necesario eliminar síntomas complejos, y hasta cinco minutos en los simples, aunque el que comienza se demora un poco más en las sesiones, pues pierde cierto tiempo en provocar los fenómenos deseados. FRECUENCIA Y HORA DE APLICACIÓN. La frecuencia de las sesiones está en dependencia fundamentalmente del estado del paciente. Si tiene un síntoma que necesitamos eliminar rápido porque es muy peligroso para la vida del paciente como, por ejemplo, ideas autoadquiridas o suicidas, las sesiones deben ser diarias, por lo menos durante una semana, hasta tanto los síntomas hayan desaparecido. Después la alargamos a dos sesiones por semana hasta llegar a una semanal. Lo importante de la frecuencia de las sesiones es conocer que mientras los síntomas que deseamos eliminar estén presentes, las mismas deben ser lo más próximas posibles una de otra y se van alejando en la medida en que desaparezca lo que deseamos eliminar o cambiar: No es conveniente establecer un esquema fijo para las frecuencias de las sesiones, pues el mismo depende del tipo de problema que tenga el paciente. Hay casos en que con una sola sesión
hipnótica se resuelve la situación, como es el caso de un paciente que atendí en mi consultorio que padecía de estrés emocional, cuyo origen era la fobia a los exámenes universitarios, se ponía extremadamente nervioso y a muchos no asistía. En una sola sesión resolvió satisfactoriamente su problema, esto influyo grandemente en su rendimiento académico, hay otros donde es más difícil el problema, como es el caso, en mi experiencia personal, de los jóvenes que consumen drogas, los cuales hay que reforzarles constantemente las sugestiones a través del tratamiento hipnótico, pues tienen el riesgo de una recaída, e incluso algunos, aunque mejoran, no dejan de consumir la sustancia psicoactiva totalmente. Generalmente es un proceso lento y debe ir acompañado de otras formas de tratamiento y apoyo psicoterapéutico. La hora más adecuada para realizar las sesiones de hipnosis no presenta tanta importancia. Se plantea por distintos autores que en la tarde y la noche se obtienen mejores resultados. Los pacientes trastornos del ánimo o neuróticos responden mejor al tratamiento con hipnosis por la mañana. Sin embargo, por la noche responden de forma más negativa, pues generalmente a esas horas se encuentran más despejados. Lo fundamental de la hora es que la misma debe ser mantenida en todas las sesiones, pues no se puede olvidar que la repetición establece el reflejo en el paciente. LAS POSICIONES CORPORALES EN LA HIPNOSIS. A las personas que van a ser sometidas a las técnicas de hipnosis se les puede colocar en diferentes posiciones. Un especialista experimentado puede hipnotizar a un sujeto que esté lo mismo acostado, sentado o de pie. Para el principiante recomendamos la utilización de aquellas posiciones que faciliten el relajamiento total de la musculatura estriada, con vistas a evitar que aparezcan puntos de excitación en la corteza cerebral procedentes de movimientos y contracciones de los músculos. Para poder llevar a una persona a un estado hipnótico, es necesario producir una inhibición a nivel cortical, ya que ésta aparece primeramente en las zonas motoras que se encuentran en los lóbulos frontales del cerebro y posteriormente se generaliza a las demás zonas. La posición que más facilita la relajación según recomiendan Martínez Perigod y Asís, es la de acostado, siguiendo en orden la de sentado y por último la de pie. No aconsejan la utilización de esta última a los que no tengan experiencia en la aplicación de la técnica, pues es la que menos relajación produce. Además, es necesario tener en cuenta que todas las personas no tienen el mismo grado de sugestibilidad. Algunos son muy susceptibles a la sugestión y otras lo son muy poco. En las primeras bastaría la aplicación de algunas sugestiones y el sujeto puede entrar en un estado de somnolencia y sueño profundo, con flacidez total y que a veces pasa a una catalepsia general, lo que como consecuencia provocaría una caída del paciente ocasionándose daño físico. Los sujetos poco sugestionables, en la posición de pie reciben estimulaciones de la musculatura estriada de los miembros inferiores que están en contracción, y esto provoca que se establezcan puntos de excitación cortical que no facilitan la inhibición necesaria para poder aplicar la hipnosis. Cobián plantea que el problema de cómo hipnotizar: si de pie, acostado o sentado, puede y debe depender de condiciones circunstanciales, entre ellas: el tipo de paciente, el ambiente de aplicabilidad, la comodidad para el enfermo, la referencia que tenga sobre hipnosis y sus posibles temores. Como en todo buen proceder hipnótico, en el momento de realizarlo debe tenerse en cuenta la explicación de cómo vamos a hacerlo; para ello podríamos dar una breve reseña del método, que a nuestro juicio es lo más apropiado para el paciente o tal vez invitarle a que él mismo nos diga de qué forma le gustaría más, especificándole siempre que todas son altamente efectivas, pero que le permitimos escoger; así él tendrá prerrogativas y casi de hecho quedará convencido de que ha seleccionado el idóneo para él.
Existen algunos criterios de que en pacientes temerosos de caerse o que sean sugestionables, de modo tal que pronto puedan perder el control muscular, se aconseja pedirles que se acuesten, ya que ello evitará que caigan, y al hacerlo por las razones antes expuestas, puedan dañarse físicamente o que al estar en un estado de hipnosis ligera sientan la inminente caída y se aterren, activando en sobremanera las defensas y temores. En niños, las formas más factibles son las posiciones de acostado y sentado, pues generalmente les inducimos sugestiones no muy directas y los llevamos a estados de ensoñación, fantasía e imaginación. Esto suele lograrse mejor si están en posición de reposo.
Debemos recordar, y tal vez nos ayude, que los niños pueden experimentar el sueño al permanecer sentados sobre las piernas de los padres, y es ésta una manera tradicional de dormirlos. Estar acostado implica una posición de reposo típica, donde induciéndole un estado de relajación, el niño también cae fácilmente en el trance. Son preferibles estas posiciones a las de pie, porque el niño es muy inquieto y estos procesos de desfocalización de la atención pueden hacerse más acusados cuando permanece de pie, con la libertad de moverse y pensar en otras cosas.
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En los adultos son factibles las tres posiciones, aunque en nuestro caso preferimos la de pie, salvo aquellos sujetos muy temerosos, aunque éstos pueden ser manejados de modo tal que dichos temores queden atrás, porque al haber realizado anteriormente las pruebas de sugestionabilidad, que en su inmensa mayoría se realizan con el sujeto de pie, podemos seguir una secuencia que aprovechamos para hacer la inducción hipnótica y lograr el trance deseado, pues en cierto sentido ya ha existido un condicionamiento previo. POSICIÓN DE PIE. Se le pide al sujeto que una sus pies en talones y puntas, que se relaje y respire suave y profundamente, que ponga su cuerpo aflojado completamente y una vez comprobado este estado de relajación, procedemos a hacer las sugestiones, pudiendo escoger que mantenga los ojos abiertos, mirando a un punto fijo del techo, alto en la pared, o a un objeto brillante, diciéndole que sus párpados le pesan mucho, demasiado, inconteniblemente y que a la vez su cuerpo le pesa mucho, por lo que él siente cómo se mece suavemente y de ahí entonces continuar con los procedimientos que expondremos más adelante. La posición de pie ha sido muy discutida, ya que algunos autores la rechazan pues plantean que es la que menos relajación logra establecer en el sujeto, sobre todo en los miembros inferiores. Bogoliepov, tomando en cuenta el sistema vegetativo, plantea que los sujetos que cuando están de pie experimentan retardo del pulso, se someten mejor a la hipnosis en esta posición. Y recomienda situar al sujeto de pie con los brazos extendidos al lado del cuerpo y haciendo que éstos queden completamente abandonados. El cuerpo debe estar lo más relajado posible y las piernas y los talones deben mantenerse juntos, dejando un ángulo aproximado entre los pies de sesenta grados. Nosotros recomendamos que debe comprobarse y lograrse un total relajamiento de los músculos, principalmente en los miembros superiores. Para esto se levantan los brazos en varias posiciones y, cuando se suelten, deben caer completamente desplomados haciendo un movimiento de péndulo. Si esto no se produce, nos indica que no existe un relajamiento adecuado y que, por lo tanto, no se puede comenzar con la aplicación de la técnica hasta que las miembros estén totalmente flojos y sin tensión.
Se deben evitar los movimientos por parte del sujeto en las manos, piernas, entre otros. Es sumamente importante comprobar que los músculos del cuello y los hombros estén sin contracción, es decir, que se encuentren en total relajación. POSICIÓN DE SENTADO. Lo único que varía es el principio de que en vez de estar de pie, el sujeto permanece sentado, para lo cual resulta preferible una silla de espaldar alto, de manera tal que su cabeza quede reposada y cómoda; entonces funcionan de igual modo los elementos de pesadez, relajación y respiración, lo cual permitirá el logro de una buena hipnosis. Algunas investigaciones han estado encaminadas a localizar qué pacientes se hipnotizan mejor en una posición que en otra. Bogoliepov toma en cuenta el sistema vegetativo y plantea que aquellos sujetos que presenten el signo de Ortner (retardo del pulso cuando se echa la cabeza hacia atrás) se deben tratar bajo hipnosis con la posición de sentado y la cabeza inclinada hacia atrás. A la persona que va a ser hipnotizada en la posición de sentado se le indica que tome la conocida postura de cochero. Esto facilita un estado cómodo y posibilita que la musculatura estriada esté relajada. Se indica que los pies deben estar apoyados enteramente sobre el piso, formando una nueva base, y las piernas abiertas en un ángulo aproximado de sesenta grados. El cuerpo debe estar suelto sin recostarse sobre la silla, con cierta inclinación hacia adelante, y los músculos totalmente relajados. Los brazos deben estar apoyados libremente a lo largo de los muslos o, de lo contrario, con las muñecas descansando sobre éstos. Las ropas serán cómodas y holgadas; es decir, que no produzcan ninguna compresión. La cabeza se coloca en forma que quede ligeramente descargada hacia atrás. POSICIÓN DE ACOSTADO. Es tal vez la más fácil y funciona en ello el principio de irse relajando poco a poco, respirando suavemente y fijando la mirada en el techo, pudiendo incluirle que cuente hasta 100, 200 u otros números y que al llegar a éste sus ojos se habrán cerrado totalmente y un sueño suave y placentero se adueñará de su persona. Esta posición ofrece una gran ventaja, que estriba en la seguridad de que el paciente siente para su cuerpo, sobre todo cuando tiene información visual previa y no le gustan los procederes de pie o sentado. Al sujeto se le indica que se acueste en decúbito supino sobre un diván, camilla o cama, y se le sugiere que se relaje totalmente. Los brazos deben estar al lado del cuerpo y las manos colocadas palmas abajo, las piernas separadas formando un ángulo aproximado de sesenta grados y apoyadas sobre la superficie del diván o del lugar donde se encuentre acostado. El cuerpo debe estar completamente suelto y el hipnotizador observará y comprobará que no existe ninguna contracción muscular. Las ropas serán cómodas y holgadas, sin que las mismas ejerzan ninguna compresión. Es necesario tener en cuenta que la cabeza esté descansando sobre el lugar donde se encuentre acostado el paciente. Esta posición es la que más facilita la obtención de una relajación general pues todo el cuerpo puede permanecer sin ninguna contracción. Con esto se asegura que en la corteza cerebral no aparezcan puntos de excitación provocados por los movimientos y la tensión de los músculos de las extremidades inferiores, y que se facilite la aparición de inhibición cortical. LAS CONDICIONES AMBIENTALES.
El tratamiento psicoterapéutico de base hipnótica debe realizarse en un consultorio médico, pues esto permite que el paciente no pierda nunca de vista la relación interpersonal de ayuda, necesaria para comenzar con la aplicación de la inducción hipnótica. Se debe utilizar un consultorio que sea lo más silencioso posible. En dicha habitación debe haber tranquilidad y un ambiente agradable, aunque en caso de necesidad se puede utilizar cualquier lugar aunque existan ruidos. Hay investigadores que recomiendan darle cierto matiz de mística oriental al consultorio para crear un ambiente sugestivo, pero consideramos que con los adelantos actuales de la técnica esta mistificación lo que hace es desacreditar el procedimiento científico. En ningún momento el paciente debe sentir que no está en un consultorio médico. En el mismo debe haber un diván o camilla y sillas cómodas para que se puedan utilizar de acuerdo con la posición en la que se vaya a trabajar. Otro aspecto importante es la limpieza que debe existir en el consultorio, pues algunos sujetos se inhiben cuando perciben que hay poca higiene. La presencia del hipnotizador estará caracterizada por un cuidado adecuado de sus hábitos higiénicos y estéticos. El uso de la bata sanitaria confiere autoridad y permite trasmitir al paciente el carácter científico del trabajo que se va a realizar. LA ILUMINACIÓN. Con referencia a la luz existen diversos criterios. Algunos especialistas la prefieren frente al sujeto para provocar agotamiento por las molestias que produce; otros la prefieren detrás del sujeto. Nosotros la utilizamos indistintamente. Si el principiante la va a utilizar de frente, debe estar situada por encima de su cabeza para que el sujeto la mire fijamente; de lo contrario, debe ser por detrás y con poca intensidad lumínica, de modo que el local quede en penumbras.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Octava parte Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
Métodos de inducción hipnótica Período de los pases magnéticos. Método de inducción hipnótica de Mesmer (1778) Método de inducción hipnótica de Deleuze (1820) Método de inducción hipnótica de Esdaile (1845): pases y soplo caliente Métodos de inducción hipnótica basados en la excitación de la mirada Método de inducción hipnótica del abate Faria (1813): fascinación Método de inducción hipnótica de Braid (1842) Método de inducción hipnótica de Philips Durand de Gros (1850): fijación de la mirada y pases con contacto Métodos de inducción hipnótica basados en la excitación sensorial. Método de inducción hipnótica de Charcot (1880): escuela de parís
Método de inducción hipnótica de Bérillon (1895): métodos mecánicos verbales Métodos de inducción hipnótica de los estímulos acústicos Métodos de inducción hipnótica con estímulos térmicos. Vestibulares y visuales Métodos de sugestión hipnótica basados en la sugestión verbal. Método de Liébeault (1866) Método de Bernhein (1880). Escuela de Nancy Método de Noiset y Bertrand (1820): del sueño fisiológico al sueño hipnótico Métodos basados en los estímulos químicos. Los estímulos tóxicos. Los estímulos autotóxicos (hiperventilación) Método basado en la estimulación eléctrica: método de Faraday. Método de Birman Método de choque. Método de fraccionado Método de hipnosis ideomotora Métodos hipnóticos utilizados en niños. Métodos para niños de 3 a 7 años. Métodos para niños de 8 a 12 años Método de inducción hipnótica del pestañeo sincronizado Método de inducción oral. Fijación de la mirada. Método de la catalepsia. Método de la rigidez del brazo Métodos de la expectación. El engaño. Del metrónomo con conteo Método de la sensibilidad de la bola. Técnicas 1 y 2 Métodos de la bola. Instantáneo. Semirrápido y del índice Método del brazo ligero Métodos de profundización del sueño hipnótico Métodos de la hiperestesia. De la letargia. Del bosque. De la sordera y de la risa Pasos de la hipnosis Agotamiento palpebral
MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA. En el desarrollo histórico de la hipnosis o mejor dicho, del, hipnotismo, hasta llegar a la época actual, se han utilizado y se utilizan diferentes métodos de inducción que expondremos a continuación en orden cronológica, Muchos de los métodos modernos de aplicación de la hipnosis no son más que combinaciones o modificaciones de los que se empleaban en el pasado. PERÍODO DE LOS PASES MAGNÉTICOS. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE MESMER (1778). El método aplicado por Mesmer consiste en posar las manos sobre los hombros del sujeto y deslizarlas poco a poco a lo largo de los brazos hasta llegar a los pulgares y detenerse unos instantes. Seguidamente se vuelve a la posición inicial, es decir, colocar las manos en los hombros y comenzar de nuevo con los pases. Luego se ponen los dedos o la palma de una mano sobre la sien del sujeto y con la otra mano se continúa con las manipulaciones hasta que el sujeto entra en sueño. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE DELEUZE (1820). Este método utiliza la posición de sentado del sujeto frente al hipnotizador, en un asiento un poco más elevado de forma que las rodillas queden entre las de éste. Se le pide que no se preocupe con ningún pensamiento. Se toman los pulgares del sujeto y se sujetan entre dos de los dedos del hipnotizador. Inmediatamente se utiliza la fijación de la mirada. Cuando han transcurrido entre dos y cinco minutos, aproximadamente, se sueltan los pulgares. El
hipnotizador levanta las manos a la altura de la cabeza del sujeto, las pone sobre los hombros del mismo durante un minuto y las desliza a lo largo de los brazos tocándolos muy superficialmente. La maniobra anterior se realiza cinco o seis veces y se comienza con otros pases, pero esta vez sin tocar al paciente; estos pases son por la cara y en dirección al vientre, principalmente, y cuando se repite esto varias veces se apoyan los pulgares en la boca del estómago y los demás dedos debajo de las costillas durante dos minutos. Los pases continúan después descendiendo hasta las rodillas y los pies. Este mismo procedimiento se aplica en la espalda. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE ESDAILE (1845): PASES Y SOPLO CALIENTE. En este método se utiliza la posición de acostado y poca luz. Se ordena al sujeto que entre en la habitación -la cual estará en penumbras- y se le indica que se acueste. Cuando el sujeto esté dormido durante un término aproximado de una hora, según requiera el caso, se comienza a realizar pases sobre todo el cuerpo y se le sopla aliento caliente sobre la cabeza y los ojos. MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA BASADOS EN LA EXCITACIÓN DE LA MIRADA. Se incluyen en esta categoría todos los métodos que utilizan la fijación de la mirada de forma ininterrumpida en un objeto o un punto, con vistas a establecer una disminución del nivel de conciencia. En este principio se basaban los monjes del monte Athos cuando se autohipnotizaban fijando la vista en su propio ombligo (onfaloscopia). También pertenecen a variantes de este método la catoptromancia (adivinación mediante la fijación de la vista en un espejo), la lecanomancia (adivinación con ayuda de un plato) y la onicomancia (adivinación con ayuda de una uña untada en aceite). En la última forma mencionada se basan autores como Adler y Secunda, quienes para provocar la inducción hipnótica le indican a sus pacientes que fijen la mirada en la uña de un pulgar y que se concentren al mismo tiempo. La realidad es que toda fijación prolongada de la vista en un punto puede ocasionar agotamiento y fatiga visual, y provocar sueño. Esto es lo que le sucede a muchos choferes que manejan durante largo tiempo y mantienen su mirada fija en la carretera.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.2 MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DEL ABATE FARÍA (1813): FASCINACIÓN. El método de fascinación es utilizado aún por muchos hipnotizadores. Se emplea la posición de sentado frente al hipnotizador. Se le mira fijamente a los ojos o de lo contrario se le pide fijar la mirada en una de las manos del hipnotizador. Una vez transcurrido un tiempo que permita observar cierta perplejidad en el sujeto, se le indica que duerma mediante una orden imperativa y bien enérgica: -Duerma-. Si no existe dominio de este método, pueden aparecer desventajas:
1. Que los ojos del hipnotizador comiencen a lagrimear antes de que el sujeto cierre los ojos. 2.
Esto hay que evitarlo, pues puede hacer que el sujeto se sienta superior al hipnotizador. Que el propio hipnotizador se hipnotice.
MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE BRAID (1842). Este método utiliza la posición de sentado. Se le presenta al sujeto un objeto brillante o luminoso, como un prisma o una bola de cristal, a una distancia de unos treinta centímetros, por encima de
los ojos, y se le indica que mire fijamente el objeto brillante (hipnoscopio) sin pestañear. La fijación de la mirada en posición incómoda provoca fatiga y cansancio de los músculos elevadores de los párpados. Cuando se aprecia el cansancio se le cierran los ojos si esto no ocurre por sí solo, y se le insta a dejarlos cerrados. Las investigaciones de James Braid con ciegos lo llevaron a plantear que la fatiga óptica es superflua, que la hipnosis es una cuestión de asociación de ideas y de imaginación que no es posible realizar sin la cooperación del sujeto. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE PHILIPS DURAND DE GROS (1850): FIJACIÓN DE LA MIRADA Y PASES CON CONTACTO. Este método requiere que se trabaje en un medio templado, con iluminación artificial y el establecimiento de calma y de confianza en el hipnotizador. Se coloca un objeto brillante en la mano derecha del sujeto y se le indica que lo mire fijamente sin pestañear y concentrándose en el mismo Al cabo de 15 ó 20 minutos, si el sujeto no se ha dormido, se le cierran los ojos. Con la mano izquierda del hipnotizador se aprieta la mano derecha del sujeto y con la, otra mano se le friccionan los párpados y después la frente, dándoles gestiones verbales imperativas que anuncien su incapacidad para elevar los párpados. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE CHARLES RICHET (1860): SUSTENTACIÓN DE LA MIRADA Y PASES SIN CONTACTO. Se emplea la posición de sentado, cara a cara con el sujeto; se le aprietan frecuentemente los pulgares durante tres o cuatro minutos (procedimiento renovado de Lafontaine y Deleuze). Una vez trascurridos estos minutos se le sugiere relajar los brazos y dejarlos extendidos, comenzando con una serie de maniobras que indican que se le van a cerrar los ojos, pues se le pasa la mano frente a la cara de arriba hacia abajo sin tocarla. MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA BASADOS EN LA EXCITACIÓN SENSORIAL. Estos métodos surgen en un período en que se utilizaban con mucha frecuencia estimulaciones sensoriales para provocar excitación. En la actualidad, casi todos los científicos están de acuerdo con que las excitaciones sensoriales repetidas y monótonas provocan cansancio, agotamiento, fatiga sensorial y, por último, inhibición interna que conduce al Sueño hipnótico. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE CHARCOT (1880): ESCUELA DE PARÍS. El método utilizado por Charcot consistía en la aplicación de un estímulo intenso que tenía el objetivo de provocar o atraer la atención del paciente y en este momento se le aplicaba la sugestión. Este método se conoce con el nombre de petrificación por miedo. Otra de las estimulaciones sensoriales empleadas por Charcot era el destello cegador y repentino de una lámpara de calcio, la nota inesperada de un diapasón, el sonido de un gong o el sonido monótono del tambor africano. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE BÉRILLON (1895): MÉTODOS MECÁNICOS VERBALES. El método de Bérillon utiliza una combinación de estímulos sensoriales para provocar un estado, de sorpresa y sugestibilidad en el sujeto.
Este estado se crea del modo siguiente: Se logra eliminar la tensión del sujeto y se provoca un estado de relajación mediante el empleo de un sillón vibratorio. Por otro lado, se aplica un estímulo monótono, como, por ejemplo, el sonido producido por un metrónomo. para inducir el agotamiento y la fatiga. y llamar la atención del sujeto. Se estimula visualmente al sujeto mediante una lámpara con luz azul colocada a 20 cm por encima de la frente. Cuando se comprueba que existe fatiga en los ojos del sujeto por la presencia del pestañeo característico que ésta provoca. se le dan las siguientes sugestiones: Usted repetirá varias veces las siguientes frases: Estoy en estado de calma... Yo me relajo totalmente No me interesa nada más que dormir profundamente. MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE LOS ESTÍMULOS ACÚSTICOS. El primer método que empleaba los estímulos acústicos fue el Charcot, seguido por el de Bérillon. En realidad, se puede utilizar cualquier estimulación sonora que sea monótona, como el tictac de un metrónomo (Bérillon), un martillo (Neef), el zumbido rítmico de un ventilado (Schneck). Se ha empleado últimamente la auto observación auditiva del sujeto y para esto se le pone un micrófono de forma que su respiración se amplifique y sea escuchada por él Otra variante es utilizar un estetoscopio o una grabadora con audífono para que el sujeto escuche durante largo rato los latidos cardiacos (que pueden ser los de él mismo). Se han aplicado también estimulaciones eléctricas, como las descritas por Lindberg y aplicadas por Skoog. La técnica consiste en la utilización del zumbido de un pequeño generador de corriente eléctrica con fines terapéuticos (faradización), lo cual se diferencia algo de la electrohipnosis, ya que emplea tanto el estímulo eléctrico en la piel como el sonido monótono del generador eléctrico. Se combinan estos estímulos con sugestiones verbales y relajación muscular; para esto se le dice al sujeto que va a perder progresivamente la sensibilidad a la corriente eléctrica, pero en realidad lo que se hace es reducirle la intensidad sin que se dé cuenta. Otra variante de utilización de la estimulación acústica es la aplicación de recursos sonoros combinados en cintas magnetofónicas. Se graba en un cassette música instrumental que tenga la característica de ser monótona y se utiliza la grabación como fondo junto con las sugestiones verbales. También puede usarse una grabación con el sonido del oleaje de una playa, el sonido del océano, del viento, entre otros. La verdad es que de esta técnica existen múltiples variantes y todas facilitan al hipnotizador reforzar el estímulo verbal con la cadencia monótona de la palabra y la estimulación acústica de fondo.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.3 Un recurso que se recomienda para el hipnotizador de poca experiencia es grabar su propia voz en la práctica del ejercicio para poder rectificar los errores cometidos. La utilización de grabaciones de sugestión verbal para hipnotizar no es muy recomendable, pues cada sujeto difiere de los otros en cuanto a grado de sugestionabilidad y muchos necesitan reforzamientos y modificaciones en determinado momento. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA CON ESTÍMULOS TÉRMICOS. Este método es utilizado muy poco y en realidad no tiene ningún valor práctico. Partiendo de la posición de acostado, consiste en aplicar estímulos térmicos en forma rítmica; por ejemplo: se le da movimiento pendular a una fuente térmica (lámpara) colocada arriba del sujeto y se le pasa por
todo el cuerpo sin tocarlo, con vistas a que el mismo reciba la influencia del calor que la lámpara emite. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA CON ESTÍMULOS VESTIBULARES. Este método se relaciona con la prueba de susceptibilidad de oscilación lateral. El objetivo es provocar vértigo artificialmente haciendo girar al sujeto y aplicarle posteriormente sugestiones verbales. En la práctica el método tampoco resulta muy eficaz y generalmente se utiliza como medio para medir sugestionabilidad. MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA CON LOS ESTÍMULOS VISUALES. El Método de Levy-Suhl (1908): contraste cromático. El fenómeno del contraste cromático tiene una base puramente fisiológica y sus resultados dependen en mucho menor grado de la susceptibilidad individual. Para la aplicación del método de contraste cromático, descrito por Levy-Suhl, en 1908, se utiliza una cartulina de 14 cm x 23 cm, de color gris claro uniforme, en cuyo centro se enganchan dos tiras de papel sin arrugas, una amarillo claro y la otra tira de color azul. Otra variante es pintar los colores en la cartulina. Es importante destacar que los colores no pueden ser brillantes ni satinados y que entre ambas tiras debe existir un espacio libre de unos cinco milímetros de ancho. Además, las tiras deben tener una dimensión de 3,2 cm x 8 cm. Se recomienda recortar de forma redondeada las esquinas de las tarjetas, ya que algunas personas encuentran molesto el ángulo acabado en punta. Al sujeto se le pone en la manó el cartoncito de los colores de tal modo que la luz (natural o artificial, que no sea muy intensa ni excesivamente débil) incida directamente sobre la cartulina. Se le indica que fije la vista en el espacio que está entre las dos tiras de colores. Al poco rato de fijar la mirada se crea un fenómeno perceptual, pues aparece un halo amarillo en el margen gris que queda a la derecha de la tira azul y un halo azulado a la izquierda de la tira amarilla. El fenómeno perceptual antes mencionado aparece en toda persona normal, y lo mismo ocurre en los colores dicromáticos rojo-verde, así como en todos los tricromáticos anómalos. Si el sujeto tarda en ver el fenómeno del contraste, se le sugiere que entre cierre los ojos y que continúe mirando a través de las pestañas. La aplicación de este método requiere un mínimo de experiencia y una observación constante por parte del hipnotizador, que le permitan conocer los cambios que se están produciendo en el sujeto. El fenómeno fisiológico provocado termina por convertirse en sugestivo, independientemente de que cuando se le da al sujeto el cartón con los colores se le explica todo lo que va a ir sucediendo, pero sobre esta misma explicación, cuando se vea en el sujeto la extrañeza de lo que ocurre, se le indica la sugestión verbal de fatiga y pesadez de los párpados. Existe una teoría que afirma que toda percepción luminosa y cromática tiene una base bioquímica. Esto ocurre en las sensaciones antagónicas de blanco-negro, amarillo-azul, rojo-verde. Esta teoría fisiológica fue elaborada por Hering en 1878. Stokvis se basa en la teoría de Hering para explicar los contrastes cromáticos. Gothlin dio en 1941 una nueva interpretación de la teoría y se fundamentó en los procesos de inhibición y excitación neuronal; esta nueva versión fue confirmada por Svaetichin en 1956 mediante la técnica de los microelectrodos.
En el año 1959, Land plantea que aparte del papel de la retina en la percepción del color, es necesario tomar en cuenta los factores centrales y psíquicos, sobre todo estos últimos. Posteriormente, investigadores como Wald, Scheibe y Seifert han demostrado experimentalmente que la única sustancia que interviene en la percepción del color es un cromóforo cis del retineno. El Método de las imágenes sensoriales. Este método se debe a Milton V. Klíne, quien utiliza la imaginación como recurso para provocar el sueño hipnótico. Se le indica al sujeto que, con los ojos abiertos, imagine en forma sucesiva una casa, un árbol, una persona y un animal (son imágenes parecidas a las utilizadas en la prueba proyectiva casa-árbolpersona, o HTP, de Buck). Luego se le sugiere al sujeto que cierre los ojos y que piense en su propia imagen, en la misma posición en que él se encuentra en ese momento; es decir, que si está sentado piense en su imagen en esta posición, y si está acostado, igual. Cuando el sujeto exprese que ha formado la imagen de su propia persona, se le sugiere que piense que sus ojos están cerrados y que la imagen creada comienza a profundizar en el sueño y que se va esfumando. Este método se puede utilizar con niños y da muy buen resultado. Se le pide al niño que cierre los ojos y se imagine que está viendo un programa de televisión. Al mismo tiempo que se le sugiere la máxima atención en lo que imagina, en lo que está contemplando en su imaginación, se intercalan sugestiones de sueño, levitación de un brazo, entre otros, de acuerdo con la profundidad de la inducción hipnótica que ha alcanzado el niño. MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA BASADOS EN LA SUGESTIÓN VERBAL. En el mismo momento en que se tomó en consideración el uso de la sugestión verbal para provocar la hipnosis se logró el gran salto cualitativo que necesitaba el estudio de los métodos y fenómenos hipnóticos, pues es indudable que la utilización de la palabra actúa directamente sobre la subcorteza. Si observamos los diversos métodos aplicados por diferentes investigadores, comprobamos que todos emplean la sugestión verbal para provocar la inducción hipnótica. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE LIÉBEAULT (1866). El método de liébeault señala que lo primero que hay que establecer con el sujeto es una relación interpersonal de ayuda; es decir, un rapport que permita llegar a conocer sus padecimientos. Una vez que se conocen los principales problemas del paciente, se comienza a trabajar con el mismo en posición de sentado; se le apoya una mano sobre la frente y sin mirarlo se le dice: Va a dormir, Inmediatamente se procede a cerrarle los ojos y se le asegura que está dormido.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.4 Se le levantan los brazos y se le dice: Ya no puede bajar los brazos. Si por casualidad el paciente baja los brazos, se aparenta que no se ha visto y se le hace girar los brazos asegurándole que el movimiento no podrá ser detenido. Cuando aplicaba su método, Liébeault hablaba sin parar, con voz fuerte y vibrante para provocar la inducción hipnótica. Siempre hacía énfasis en la importancia que tiene la sugestión verbal para producir el sueño hipnótico. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE BERNHEIM (1880): ESCUELA DE NANCY.
Bernheim no utilizaba en su método ningún procedimiento técnico auxiliar, solamente empleaba la palabra y por medio de ella, sugería al sujeto que estaba entrando en sueño hipnótico. El método utiliza la posición de sentado y también la de acostado; se le indica al sujeto relajamiento muscular y eliminar de su mente todo lo que le produzca temor o sensaciones desagradables. Toma del método del abate Faría la fijación de la mirada en los ojos del sujeto (fascinación) y a partir de ese momento se comienzan sugestiones verbales de que los párpados se vuelven pesados y que se comenzará a sentir somnolencia hasta llegar a no poder resistir los deseos de dormir. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE NOISET Y BERTRAND (1820) DEL SUEÑO FISIOLÓGICO AL SUEÑO HIPNÓTICO. Este método, que fue creado por dos amigos del abate Faría, consiste en trabajar con el sujeto a partir del sueño natural. Se realizan sugestiones verbales y pases magnéticos; estos últimos son en realidad decorativos, pues solamente con el uso de la palabra se pasa a un sujeto del sueño fisiológico al sueño hipnótico. Este método es aplicado con poca frecuencia, pero ha sido recomendado como muy positivo si se toman las siguientes medidas:
1. Aprovechar que el paciente esté profundamente dormido y hablar en voz baja, como un cuchicheo perseverante.
2. Es necesario mencionar el nombre del sujeto y decirle que a pesar de sentir la voz del hipnotizador continuará profundamente dormido. MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA BASADOS EN ESTÍMULOS QUÍMICOS. Estos métodos utilizan un medio biológico que provoca que el sujeto caiga en un estado de somnolencia por el efecto de la droga administrada. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE LOS ESTÍMULOS TÓXICOS. Este método hipnótico emplea somníferos, narcoanálisis (la llamada psicoterapia con drogas). Desde el año 1881, Chambard utilizó gotas de cloroformo o de éter administradas al sujeto junto con la sugestión verbal, para producir la hipnosis. Otros investigadores, como Wetterstrand, von Schrenk-Notzing y algunos más, han utilizado hasta morfina con el objeto de inducir la hipnosis. Últimamente se han estado empleando compuestos como el bromuro de etilo, el hidrato de cloral y el bromhidrato de escopolamina. Este método se conoce como narcohipnosis. Martínez Perigod y Asís han utilizado este método con la inyección de tiopental-sódico o pentotal (ácido etilmetilbutil-2-tiobarbitúrico) por vía 3 intravenosa en dosis de 1 cm (50 mg) por minuto, en presencia de un anestesista que se ha encargado de la aplicación del medicamento. Kaunders y Schilder han usado entre 4 y 12 g de paraldehído para llevar al sujeto a sentir sueño y después que éste aparece provocar la inducción hipnótica. Todo método hipnótico que utilice medios tóxicos para el organismo tiene muchos inconvenientes, entre los que podemos mencionar la posibilidad de una reacción alérgica del sujeto, la creación de hábitos al medicamento, un sueño demasiado profundo, la pérdida del rapport, entre otros, por 10 que sólo recomendamos su uso en caso de extrema necesidad.
MÉTODO DE INDUCCIÓN (HIPERVENTILACIÓN)
HIPNÓTICA
CON
ESTÍMULOS
AUTOTÓXICOS
La hiperventilación como proceso provoca un aumento de oxigenación en la sangre y, por ende, autointoxicación, que produce cierta disminución de la conciencia. La primera publicación sobre este método aparece en año 1877, en las descripciones realizadas por Bramwell, quien hace mención a anestesia provocada por hiperventilación. Se ha comprobado experimentalmente que la hiperventilación aumenta la sugestionabilidad y muchas veces lleva a un estado parecido al trance hipnótico, producto de la alcalosis que la misma ocasiona. El método es sencillo y consiste en sugerir al paciente que respire profundo, lo más profundamente posible. Al cabo de cuatro o cinco minutos aparece un desplazamiento alcalótico de los iones en la sangre que ocasiona confusión y una sensación extraña. A pesar de la sencillez del método, no por ello deja de tener complicaciones. Por eso no lo recomendamos para los principiantes o profesionales con poca experiencia en la aplicación de hipnosis y sugerimos no utilizarlo nunca en pacientes con antecedentes de disritmia cerebral, pues se puede provocar un ataque de turbación de conciencia, ya que la hiperventilación aumenta la posibilidad de aparición de convulsiones en esta situación. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE FARADAY EN LA ESTIMULACIÓN ELÉCTRICA. Este método se basa en la utilización de la corriente eléctrica como estímulo para producir la inducción hipnótica. Se emplea para ello un generador eléctrico que pueda producir una corriente con intensidad que varíe entre 1,0 y 5,0 mA, voltaje de 40 a 50 V, frecuencia de 20 a 2000 Hz y pulso de 0,1 a 3,0 ms. El influjo de dicha corriente se aplica al sujeto en la frente, el cuello y los párpados. Esto produce sensaciones placenteras que hacen que el sujeto entre en sueño hipnótico en pocos minutos. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE BIRMAN. Este método utiliza la combinación de la sugestión verbal y la estimulación interoceptiva débil que se recibe de los músculos durante los movimientos de las manos, por el ejercicio que se le indica al sujeto. Se manda a flexionar los brazos en las articulaciones del codo con un ángulo de 90° y que aproxime lentamente las puntas de los dedos 'de ambas manos; para esto se le indica: Usted debe flexionar las brazos en las articulaciones del codo con un ángulo de noventa grados y debe aproximar lentamente entre si las puntas de los dedos hasta que se junten. Cuando esto suceda usted hará una inspiración profunda y se dormirá con un sueño profundo e intenso. Luego se describe el cuadro de adormecimiento y se le dice: Sus dedos se aproximan más y más, la respiración es pareja y tranquila; usted se va durmiendo más y más profundamente, sus dedos se aproximan mas y mas y se tocan, sus dedos se tocan.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.5 Si se observa que los dedos del sujeto se dejan de acercar; el hipnotizador los aproxima y los junta con sus manos.
Haga una inspiración profunda, usted se duerme con sueño tranquilo y profundo, profundo e intenso, duerma, duerma tranquila y profundamente tranquila y profundamente. Este método ofrece resultados positivos con sujetos que tienen un alto grado de sugestionabilidad. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE CHOQUE. Este método emplea la posición de pie. Se sitúa al paciente de espaldas a un sillón o diván. El hipnotizador se debe colocar al costado derecho del sujeto e indicarle: Usted debe mantenerse de pie, derecho, con los talones unidos, no flexione su cuerpo. Cierre los ojos. Se 'le coloca la mano derecha nuestra sobre la frente y la izquierda en el occipucio, de modo que flexione ligeramente la cabeza hacia atrás, y se le sugiere: su cuerpo se balancea libremente. Una vez impartida esta orden, se comienza a aplicar fuerza a la cabeza del sujeto para producir un movimiento oscilatorio. Esto se hace para aprovechar las estimulaciones que provocan los analizadores vestibulares y que producen cierto mareo en el sujeto. El método de choque se relaciona con la prueba de susceptibilidad hipnótica de oscilación lateral. Usted siente cada vez más, cada vez más, que se va mareando, no tenga miedo, yo lo aguanto, yo lo sostengo. Se va ampliando cada vez más el diámetro del balanceo; es ahora cuando con un movimiento preciso se proyecta al sujeto hacia el diván que se encuentra detrás de su espalda y con una orden sugestiva en tono imperativo se le dice: duerma, duerma cada vez más profundamente. Algunos autores recomiendan este método para inducir la hipnosis en sujetos histéricos. En las investigaciones que hemos realizado con este método hemos obtenido resultados muy desfavorables con porcentajes muy bajos de efectividad. No recomendamos su práctica para el que comienza con la aplicación de las técnicas hipnóticas. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICO FRACCIONADO. Se comienza con indicaciones de relajamiento, cansancio y agotamiento, principalmente en las extremidades. Esto se realiza con los ojos cerrados. Con posterioridad se le indica al sujeto que abra los ojos y relate todo lo que ha sentido. Una vez que se analizan las sensaciones del sujeto, se comienza de nuevo en la misma forma, pero ahora indicándole sugestiones verbales de sueño, cada vez con la sugerencia de caer en trance más rápidamente. Se repite el ejercicio una y otra vez, avanzando progresivamente en el proceso de inducción hipnótica. Entre un despertamiento y otro deben transcurrir como mínimo 15 minutos. La finalidad de estas semihipnosis repetidas es establecer, por medio de la repetición, reflejos condicionados que familiaricen al sujeto con el proceso de inducción hipnótica y profundizar en sus vivencias psicofísicas por sugerencias posthipnóticas. Este método nos permite a veces obtener rápidamente la profundidad hipnótica deseada, sobre todo en aquellos sujetos que tienen mucho miedo de quedar profundamente dormidos y no despertar después. El método fraccionado le ofrece cierta seguridad al paciente y elimina la preocupación del despertar. MÉTODO DE INDUCCIÓN DE HIPNOSIS IDEOMOTORA.
Este método ha sido utilizado por Erickson. Consiste en trabajar al sujeto con los ojos cerrados y piense que se está poniendo liviana; al mismo tiempo se le dice que comenzará a elevarse la mano poco a poco. Cuando se observe el fenómeno de levitación, basado en la autosugestión, se le indica en ese momento (se le ordena) que duerma profundamente. Por lo general se obtienen buenos resultados con este método en sujetos muy imaginativos y susceptibles a la sugestión. MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA UTILIZADOS EN NIÑOS. El resultado que se alcanza con la utilización de la hipnosis en los niños es variable aunque algunos investigadores manifiestan que es satisfactorio. Es necesario tener en cuenta la edad para aplicar un método determinado. Uno de los aspectos fundamentales que hay que tener en cuenta para el éxito es el establecimiento de un buen rapport con el sujeto. Se deben utilizar palabras de halago para el niño y decirle que se le enseñará una prueba que solo la pueden realizar los niños que tengan la inteligencia y demás virtudes de él. El lenguaje utilizado tiene que ser sencillo y se deben evitar las palabras que no sean comprendidas por el niño por no estar al nivel de sus conocimientos. Las palabras que se empleen deben corresponder al mundo de las representaciones del niño, las cuales dependen de su estado afectivo y sus características individuales. Analizando la literatura sobre la utilización de la hipnosis en niños, comprobamos que existe discrepancia de criterios. Algunos autores consideran que los niños son fácilmente hipnotizables y señalan cómo algunos niños, con inhibición de sus tendencias agresivas, sienten una verdadera necesidad de entrar espontáneamente en estado hipnótico para provocar así una abreacción. Otros, por el contrario, hacen énfasis en que a pesar de que son sugestionables, no son más fáciles de hipnotizar que los adultos, sino que a veces ocurre lo contrario. Coincidimos con esta última posición. Es necesario tener amplia experiencia y mucha paciencia para trabajar con niños y no utilizar métodos de fascinación, sino de estimulaciones que provoquen agotamiento y cansancio o métodos que aprovechen la fantasía propia de la edad del niño. MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA PARA NIÑOS DE 3 A 7 AÑOS. Como es lógico suponer, a esta edad no existe aún un adecuado desarrollo de los procesos de análisis-síntesis del pensamiento. Existe predominio del primer sistema de señales, lo que nos obliga a utilizar métodos que trabajen principalmente sobre dicho sistema; para esto se emplean estímulos monótonos que produzcan agotamiento; como el balanceo de un sillón, o canciones infantiles que indiquen sueño. Se pueden utilizar grabaciones que tengan canciones monótonas (ver los métodos basados en los estímulos acústicos, explicados anteriormente y que sugieran sueño). En términos generales se obtienen buenos resultados, aunque la hipnosis es superficial y no es usual producir amnesia. En esta edad no es necesaria una gran profundidad en el sueño hipnótico para conseguir los resultados que perseguimos. MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA PARA NIÑOS DE 8 A 12 AÑOS. En esta edad ya el niño es capaz de asimilar técnicas hipnóticas que lo lleven a un mayor grado de profundidad.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.6
El Pensamiento en cintas de imágenes. Este método consiste en utilizar la imaginación y la fantasía características de los niños de esa edad. Mediante imágenes en cintas se le trasmite al niño toda una serie de programas que lleven implícitas sugestiones para conducirle al sueño. Otro método que se relaciona con éste y que se utiliza con éxito en esta edad es el método de imágenes sensoriales. Método de entrenamiento hipnótico. Este método emplea como punto de partida la técnica de Kretschmer, que comienza con el primer ciclo del entrenamiento autógeno de Schultz para pasar al estado hipnótico. Método del pestañeo sincronizado. Dicho método es muy efectivo en esta edad, así como en adultos, por lo que lo explicaremos separadamente a continuación. De acuerdo con nuestra experiencia, es el método que permite obtener más resultados positivos. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DEL PESTAÑEO SINCRONIZADO. Es el método preferido por varios autores, algunos lo utilizan haciéndole algunas modificaciones que les han sugerido la práctica y la investigación empírica, tomando como adiciones variables otros métodos clásicos. La primera modificación es utilizar el pestañeo sincronizado unido a la fijación de la mirada en un punto luminoso (método de Braid). La otra consiste en la fijación de la mirada del sujeto en los ojos del hipnotizador (método de fascinación de Faría) unida al pestañeo sincronizado. Estas modificaciones nos han brindado magníficos resultados, pues se consigue un alto nivel de sugestionabilidad en los sujetos a los que se les realiza la inducción hipnótica. El método del pestañeo sincronizado es sumamente sencillo de aplicar. Su objetivo es producir agotamiento en los músculos elevadores de los párpados, lo cual hace que sea prácticamente imposible abrir los ojos. Este método puede ser utilizado con cualquier posición, aunque la mejor es la de acostado. Si se combina con el método de Braid, se debe situar un objeto brillante frente al sujeto, a una distancia de aproximadamente diez centímetros de la cara, de manera que quede sobre la frente para que tenga necesidad de mirar ligeramente hacia arriba. Si se va a trabajar con la otra modificación (fijación de la mirada del sujeto en los ojos del hipnotizador), es necesario que el hipnotizador tenga cierta preparación, pues debe tener resistencia para sostener la mirada sin que le provoque pestañeo y pueda consecuentemente hipnotizarse él mismo en lugar del sujeto. En caso de no contar con el punto brillante y de no querer usar la fascinación, sencillamente se utiliza el método clásico del pestañeo sincronizado, aunque el empleo concomitante de cualquiera de las variables que sugerimos provoca un agotamiento mucho más rápido de los músculos elevadores de los párpados. Hay cuatro aspectos que es necesario tener en cuenta para la aplicación del método:
1. Establecimiento de rapport con el sujeto. Se le explican las ventajas de la hipnosis, que es inofensiva y no hace correr riesgo alguno, para eliminar o al menos disminuir el nivel de ansiedad que puede producir la espera de un tratamiento que se desconoce.
2. Relajamiento total del sujeto para facilitar la no aparición de puntos de excitación en la
3. 4.
corteza y para que se pueda lograr la inhibición de las zonas frontales del cerebro en las que se encuentran las áreas motoras y premotoras, que son las primeras en inhibirse cuando se va a pasar al sueño. Se le indica al sujeto que fije la vista en un estímulo luminoso, en los ojos del hipnotizador o simplemente en un punto cualquiera, según la variable que se vaya a utilizar. Se le explica que se va a empezar a contar números consecutivos y que a medida que se mencione cada número él debe cerrar y abrir los ojos de forma suave y natural.
Esta consigna debe quedar claramente explicada al sujeto; Si es necesario, el hipnotizador debe realizar él mismo ejercicio de parpadeo a modo de ejemplo y hacer un ensayo con el sujeto. A los casos que hemos aplicado este método con la variante de la fijación de la mirada, sin haber realizado previamente pruebas de susceptibilidad, se les ha podido hipnotizar en su mayoría (95% de los mismos), aunque no todos han sido pasados a hipnosis profunda. Cuando se ha aplicado este método a personas que han obtenido altos valores en la escala que utilizamos para evaluar los resultados de las pruebas de susceptibilidad, se han hipnotizado 100% de los casos. Para los que vayan a utilizar la variante de la fascinación con el parpadeo sincronizado recomendamos:
1. Si se va a trabajar al sujeto en posición de acostado, el hipnotizador debe colocarse por
2.
detrás de su cabeza, de modo que el individuo tenga que mirar hacia atrás y para arriba cuando se le indique que mire fijamente los ojos del hipnotizador. Esta posición incómoda de fijación de la mirada, más el efecto sugestivo del método de la fascinación y el efecto fisiológico del pestañeo sincronizado, establecen una combinación sumamente inductora de sueño hipnótico al unirse a la sugestión verbal. Si se va a trabajar al sujeto sentado, el hipnotizador debe ponerse más alto, para que aquél tenga necesidad de mirar hacia arriba. También es muy efectivo ponerse por detrás del sujeto, lo que lo obliga a inclinar un poco hacia atrás la cabeza, y esta posición tiende a provocar contracción muscular en el cuello.
Como hemos podido ver existen muchos métodos de inducción hipnótica. Incluso podemos inventarnos variantes adecuadas o adaptadas al sujeto que se ha de someter al trance, tal y como hacía en muchas ocasiones el Doctor Milton Erickson, que usaba en muchos de sus “diálogos hipnóticos” metáforas, situaciones imaginarias, historias y cuentos. Algunos procedimientos de relajación y autocontrol, son de gran utilidad y buenos resultados en terapia, de una gran rapidez en su aprendizaje por parte de los pacientes, además de que permiten su aplicación tanto en casos individuales como en grupo. De hecho, nosotros hemos realizado estas técnicas con diversos grupos de personas que van desde estudiantes y personas mayores hasta enfermos psicóticos, aparte del tratamiento de problemas a nivel individual en diversas áreas. Una vez que ya hemos diagnosticado el problema de la sugestionabilidad, y apreciando los requerimientos a tener en cuenta para lograr una buena hipnosis, procedemos entonces a inducirla, pudiendo escoger entre muchos métodos, aquellos que más nos gusten, que más fe les tengamos o que resulten más fáciles de aplicar. A continuación nos referimos a las formas o métodos empleados en nuestra práctica cotidiana en el plano asistencial, algunos de estos métodos son muy usados actualmente por varios investigadores para hipnotizar y profundizar en la hipnosis, el Doctor J.P. Guyonnaud (18) expone de manera sencilla y muy didácticamente estas técnicas.
MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA ORAL. Quizás sea largo, pero es bastante seguro a la hora de obtener resultados. El sujeto puede estar sentado o tumbado. En todo caso en una posición cómoda. Preferiblemente con los ojos cerrados le iremos induciendo con nuestra voz relajando parte a parte del cuerpo, empezando por los pies y acabando por la cabeza o viceversa. Al terminar esta relajación progresiva vamos introduciendo sugestiones de pasividad y sueño: Ahora te encuentras tan a gusto que dormirás... sientes como un ensueño agradable que te va envolviendo...”
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.7 MÉTODOS DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE FIJACIÓN DE LA MIRADA. Son todos aquellos en que indicamos a un sujeto que se fije en cualquier cosa exterior, que puede ser fija, o en movimiento. Puede tratarse de un foco de luz, un péndulo oscilante, un disco hipnoidal. Antes o después –incluso sin sugestiones por parte del hipnólogo- se irá produciendo un cansancio ocular que nos irá adormeciendo. Si introducimos sugestiones serán de este tipo: “Conforme miras este objeto, tus ojos van sintiendo un ligero cansancio que cada vez se hace más intenso. Poco a poco los párpados se vuelven más pesados y es como si quisieras cerrar los ojos porque quieres dormir o descansar...” MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE LA CATALEPSIA. Pedimos al sujeto que una con fuerza sus piernas y que apriete los brazos estirados hacia el cuerpo, que ponga rígidos todos los músculos de su cuerpo, que apriete el abdomen y en definitiva, que se imagine que una especie de tabla o estatua de bronce. Acto seguido la imprimiremos un ligero balanceo para que note su rigidez. Una vez conseguida la rigidez total, podemos con ayuda de otras personas, tumbarle en el suelo, en un diván o camilla. Inmediatamente le indicaremos que se encuentra muy concentrado y que dormirá o entrará en un estado profundo y especial a nuestra indicación. Podemos dar un pequeño chasquido con los dedos o tocarle ligeramente la frente con los dedos al mismo tiempo que decimos: ¡duerme! o ¡Ya está... estas en un estado profundo y especial! A partir de ahí, usamos sugestiones para profundizar. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE LA RIGIDEZ DEL BRAZO. La persona está sentada... le estiramos el brazo y lo colocamos a la altura del hombro. Le sugerimos que se encuentra bien y que su brazo cada vez está más rígido. Le hacemos sentir con ligeras presiones sobre la mano dicha rigidez para que se retroalimente en la sugestión... una vez conseguido le indicamos que el brazo comenzará a pesar, que se ha transformado en plomo...” el brazo en tan pesado que su peso se hace insostenible e irá cayendo. Conforme el brazo va bajando, notarás como un sueño agradable e intenso te va invadiendo... cuando el brazo se desplome por completo, dormirás. Si la sugestión surte efecto, el sujeto irá bajando el brazo hasta soltarlo por completo; en este momento daremos la orden ¡duerme! MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE LA EXPECTACIÓN. Especialmente cuando se hace hipnosis de espectáculo, este método es útil. Supongamos un aforo donde se espera al hipnotizador con expectación... por tanto ya existe un ambiente lo suficientemente sugestivo para inducir con facilidad a cualquier asistente. El hipnotizador deberá hablar con cierto misterio y persuasión. Al acercarse a cualquier espectador que ponga reparos a su proximidad ante el temor de ser hipnotizado, a un solo toque u orden del inductor, entrará con facilidad en hipnosis. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DEL “ENGAÑO”.
Especialmente para usarlo con sujetos difíciles. Pondremos a una persona ante nosotros indicándole que le vamos a hipnotizar (le habremos comentado previamente que en realidad no será a ella a quien induciremos, sino que simplemente debe fingir que está durmiendo); a su lado pondremos a otra –a la que realmente queremos inducir- y le explicaremos que su misión es observar con todo el detalle y atención que pueda cómo se duerme la otra persona. Preferiblemente podremos a uno frente a otro y el inductor se sitúa en medio. Bien... llegado este punto a nuestro compinche le pasaremos un péndulo oscilando por delante de los ojos, por ejemplo y el comenzará a fingir su adormecimiento. Deberemos estar atentos a nuestra verdadera víctima, pues cuando su atención sea intensa, soltaremos de una el péndulo y de inmediato sin darle tiempo a reaccionar, situaremos nuestra mano delante de su frente o sus ojos cerrándoselos y diciéndole enérgicamente: ¡duerme! Una puntualización a tener en cuenta es que muchas personas son reacias ante términos como “hipnosis” “hipnotismo” o “sueño” por el temor que estos suscitan de pérdida de la propia conciencia. En ese caso podemos sustituirlos por palabras o expresiones como “estado especial” “trance”, “ensueño” o “sopor”. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DEL METRÓNOMO CON CONTEO. Pida a la persona acostarse de espaldas, a su comodidad (de preferencia, la cama o el sofá deben estar blandos). Accione el metrónomo (siempre 60 golpes por minutos), luego invite a la persona a escuchar cada golpe, con los ojos cerrados y pensando en el sueño. Alrededor de 10 minutos después, retome la palabra y diga: Continúe con los ojos cerrados y piense en el sueño, no piense en otra cosa... respire tranquilamente, regularmente, profundamente... Nada le altera... Nada lo turba... Nada le inquieta... Todo está en calma... todo está tranquilo alrededor de usted. Usted no escucha más que los golpes del metrónomo... y mi voz, mi voz que le calma y le duerme... Usted escucha mi voz, mi voz, mi voz... Su respiración se vuelve más tranquila...Tranquila Más profunda como cuando usted duerme... A cada respiración, usted. está más calmada... Su respiración es tranquila y regular. Su respiración es tranquila, le absorbe completamente... Pronto yo comenzaré a contar... y con cada cifra que yo pronuncie, con cada golpe del metrónomo, una somnolencia le invadirá... sus miembros se adormecen... Una pesadez agradable se apodera de su cuerpo... Su cuerpo... se relaja... Su cuerpo se pone pesado... pesado, como si se volviera de plomo... Marque un tiempo de pasada, luego prosiga: Yo cuento: uno, un calor agradable corre por sus venas... dos. Usted está en un estado de calma... Usted se relaja y se desinteresa de todo... Usted va a dormir... tres... Una ligera neblina le invade... La neblina aumenta ella se esparce... cuatro... Todo está negro alrededor de Usted.... Es la oscuridad... cinco... La somnolencia aumenta... seis... Alrededor de Usted., todo es aún más calmado... alrededor de Usted todo es aún más oscuro... Mi voz le calma... mi voz le duerme... siete... Usted se duerme profundamente... su corazón late regularmente... ocho... Es el marcador de arena... Nueve... Una somnolencia irresistible le toma... diez... Usted pierde conciencia... más y más profundo... Gracias a un sueño profundo, tranquilo, benéfico... Usted toma conciencia, más y más profunda... once... Ningún ruido le altera... Usted entiende únicamente mi voz y el golpe del metrónomo... doce... Duerma profundamente, más profundamente... trece... Duerma... Duerma... catorce... A cada palabra que yo pronuncie, a cada golpe del metrónomo, Usted. se duerme más profundo... todavía más profundo... quince... Usted va a dormir... nada podrá detenerle... Usted va a dormir bien... dieciséis... Usted duerme mejor y mejor.
La llamada bola hipnótica se trata, de hecho, de una bola de cristal exactamente como aquellas utilizadas en las sesiones adivinatorias (cristalomancia). Si Usted desea utilizarla para hipnotizar, es necesario llegar a sensibilizar por su intermedio a la persona que será hipnotizada y esto inmediatamente acelera la intervención. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA A TRAVÉS DE LA SENSIBILIDAD A LA BOLA (TÉCNICA Nº 1) Pida a la persona (que puede estar de pie, sentada o acostada) mantener las manos abiertas, la palma de la mano hacia arriba y concentrar la mirada en la bola que Usted tiene en la mano izquierda. Diga: Piense que sus manos se cerrarán. Y mirando esta bola, Usted va a sentir que sus manos se cierran... Pequeñas sacudidas van a agitar sus manos, anunciando que ellas no tardarán en cerrarse. Sus manos se contraerán, sus manos se cerrarán... Ya está, los movimientos apenas perceptibles animan sus dedos...
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.8 Estos movimientos se intensifican más y más... Usted comienza a sentir agitarse sus dedos... Sus dedos se agitan... Sus manos tardarán en cerrarse... Ya... Sus manos se cierran y ellas se cerrarán más y más rápido... Una fuerza las cierra... Imposible mantenerlas abiertas... Sus manos se cierran... ellas se cierran... ellas se cierran... siempre... todavía... todavía... Es irreversible... Sus manos se cierran completamente... Abrirlas es imposible, Usted intenta... Sus manos se cierran... Ellas se abrirán en un momento, cuando yo dé término a la influencia de la bola... Usted siente una fuerza que las cierra... Sus manos continúan cerrándose... Sus manos se cierran... Sus manos se cierran y ellas no van a abrirse más... MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA A TRAVÉS DE LA SENSIBILIDAD A LA BOLA (TÉCNICA Nº 2) Pida a la persona que se ponga de pie, los pies juntos y los brazos a lo largo del cuerpo. Con mucha seguridad diga: Observe esta bola. En un momento Usted se sentirá halado hacia atrás. Fije su mirada en esta bola hipnótica e irresistiblemente Usted se sentirá halado hacia atrás... Ya está, porque Usted mira mejor la bola, Usted comienza a sentirse halado hacia atrás... Muy ligeramente, avance la bola hacia la persona (como si Usted deseara obligarle a retroceder) y, en la medida en que ella se aproxime a sus ojos, afirme con sincronismo: Usted es tirado hacia atrás... Usted es tirado hacia atrás... Usted cae hacia atrás... Usted se derriba... Después que la persona asuma la caída hacia atrás, apresúrese a retenerla y diga: Usted lo ve, es suficiente mirar fijamente esta bola, si Usted cae irresistiblemente hacia atrás. (Es de notar que con ciertas personas particularmente sensibles a la hipnosis, no es igualmente necesario acercar la bola, puesto que ellas pierden el equilibrio desde el final de la segunda fase del test). MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DE LA BOLA.
Luego de constatar la eficiencia de la bola por intermedio de una u otra de las técnicas descritas (mejor aún, de las dos), vale apuntar que si Usted se halla en presencia de una persona fácilmente hipnotizable, puede lograr una hipnotización inmediata con el método que se detalla a continuación: Pida a la persona que se instale confortablemente en un sillón o se relaje en posición acostada (siempre sobre la espalda). Aparente "magnetizar" la bola (efectuando sobre ella un simulacro cualquiera) con mucha ostentación. Mire fijamente la raíz de la nariz de la persona (ejerciendo la fascinación con la mirada). Afirme: En un momento, cuando Usted tome esta bola, se dormirá con un sueño profundo. Y tomando esta bola, Usted sentirá que el sueño cae sobre Usted Porque esta bola magnetizada puede hacerle dormir y ella le dormirá para bien. Continúe ejerciendo la fascinación con la mirada, realice algunos pases sobre la bola, luego désela a la persona y diga: Ahora, tome esta bola en su mano derecha (izquierda, para los zurdos), agárrela, agárrela fuerte y usted dormirá un profundo sueño... Usted dormirá un profundo sueño. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA INSTANTÁNEO Nº 1. Colóquese frente a la persona, invítela a que permanezca de pie y mantenga los talones juntos y los brazos extendidos. Apodérese de su mano derecha y pídale cerrar los ojos. Levante su brazo derecho y ejérzale una pequeña presión, para suavizarlo un poco. Ponga su pie izquierdo detrás del pie derecho de la persona y sugiérale la caída hacia atrás (ver método de la caída hacia atrás con fijación de la mirada), siempre manteniendo su mano derecha. Desde que la persona comience a caer, tírela hacia usted (por su mano derecha) y diga: Ahora, Usted dormirá profundamente... En un segundo yo le pediré abrir los ojos y sentarse en la silla señalada por mí. Está hecho... Sus ojos se cierran y Usted caerá en un sueño aún más profundo... Ya está... Abra los ojos y siéntese en esta silla... Para que el método sea más eficaz, siempre coloque una silla detrás de la persona y en lugar de darle la orden de abrir los ojos y de sentarse, sugiérale: Duerma profundamente... Ya Ud. duerme... Ud. tiene deseos de sentarse... sus piernas se ponen blandas, más y más blandas... Y de la misma forma que Ud. se sentará, Usted dormirá aún más profundo. Luego que dulcemente le ayude a sentarse, continúe para sugerirle la llegada del sueño, tan necesario. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA SEMIRRÁPIDO. Se trata de una técnica creada por el hipnoterapeuta Ellman. Funciona como sigue: Tome la mano (izquierda o derecha, poco importa) de la persona y prevéngala. Su hipnotización se desarrollará de una manera extremadamente simple; será suficiente que yo cierre su mano en tres repeticiones.
Con un tono muy sugestivo diga: En el primer cierre Usted sentirá sus párpados ponerse pesados y Usted los dejará ponerse pesados... En el segundo cierre sus ojos... Estos tendrán deseos de cerrarse y Usted los dejará cerrarse... En el tercer cierre... sus párpados estarán completamente cerrados, los músculos que los rodean completamente relajados... y Usted no tendrá deseos de abrirlos. En los intervalos de algunos segundos o minutos (según la reacción de la persona) efectúe los tres cierres de la mano, y después el cierre de los ojos, diga: Relaje los músculos que rodean sus ojos.... Haga como si Usted no pudiera abrirlos, haga como si Usted no pudiera abrir los ojos, como si todos los músculos que rodean sus ojos estuvieran fatigados, relajados... Ahora Usted intentará abrirlos y haciendo esto comprobará que mientras más Usted intenta abrirlos, más ellos permanecen cerrados, más sus párpados se ponen pesados... No intente abrirlos más... Ahora la relajación de sus ojos disminuyen de un solo golpe en todo su cuerpo, hasta llegar a sus dedos... ya está, todo su cuerpo se relajado, relajado. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DEL ÍNDICE. Siguiendo las huellas del célebre Bernheim, Paul Clément Jaget, uno de los más eminentes hipnotizadores franceses de nuestro siglo, tuvo un papel primordial en la creación de este método, que consiste en lo siguiente: Invite a la persona a instalarse confortablemente en un sillón, de espaldas a la luz. Tome entre las manos los pulgares del hombre o la mujer que se encuentra delante de Ud. y ejerza una ligera presión en la raíz de los dedos (zona considerada como hipnógena).
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.9 Diga: Ante todo, Usted debe relajarse... Suelte sus brazos y sus piernas, déjelas, déjelas reposar... deje reposar bien sus miembros... yo voy a dormirlo plácidamente, gradualmente. Sin ninguna inquietud, lo que yo haré le será extremadamente agradable... Poco a poco, una ligera torpeza le invadirá... Usted se sentirá bien, verdaderamente bien... El sueño le vencerá y le vencerá más, mas Usted se sentirá reposado... Esto será como en los momentos en que, luego de una gran fatiga o una carencia de sueño, no pudiendo más, Usted se duerme súbitamente y seguro irresistiblemente. Suelte los pulgares, ponga su índice derecho (izquierdo, si Usted es zurdo) delante de los ojos de la persona y, con un movimiento lento y regular, comience a describir, con el dedo, círculos de un diámetro de cinco centímetros aproximadamente, siempre diciendo: Siga con la mirada la extremidad de mi índice... Fije los ojos en mi índice... La fatiga se apodera de sus ojos...Sus párpados se pondrán pesados... Sus párpados parecen pesados... Sus párpados están pesados... pesados... Sus párpados están pesados... pesados... pesados... Sus párpados se entorpecen y se entorpecerán más y más, sus párpados están pesados... pesados... pesados.... muy pesados, más y más pesados... Ellos pesan... ellos pesan... ellos pesan más y más... Sus párpados están muy pesados... pesados... pesados... como de plomo... pesados como de plomo... Observe siempre mi dedo, que da vueltas, que da vueltas, que da vueltas, le pica en sus ojos... La neblina aumenta... la neblina se esparce... Sus ojos van a cerrarse... sus ojos se cierran... ahora, sus ojos se cierran completamente, y cuando yo diga "siete", sus ojos no podrán abrirse más... a medida que yo vaya contando, sus ojos se van a entorpecer más y más. Sin dejar de girar el índice, cuente:
Uno... Sus párpados están más y más pesados... dos... Sus párpados se cierran más y más... tres... Su cabeza se adormece... Su cabeza se adormece... cuatro... El sueño lo vence, es el sueño... cinco... Sus ojos están cerrados, bien cerrados... seis... Usted no piensa más que en dormir... siete... Usted se duerme. En tal estado, habitualmente la persona cierra efectivamente los ojos. Si el está de esa forma, es el momento de aplicar su magnetismo, especialmente a través de los pasos longitudinales lentos, de la cabeza al epigastrio; y esto es todo para continuar la sugestión: Usted tiene sueño... Usted tiene sueño... El sueño lo gana... Con un profundo sueño, Usted se duerme...irresistiblemente, el sueño lo invade... Cada una de mis palabras le dormirá profundamente y cada segundo que pasa, Usted duerme más y más profundamente... un profundo sueño, muy profundo sueño...Duerma...Usted se duerme... Usted se duerme. En este punto, normalmente la persona no tarda en inclinar su cabeza, lo cual revela la necesidad de que Usted se coloque detrás para tomar la cabeza entre sus manos, de manera de que pueda ejercer una ligera presión en los ojos (apoyando el índice izquierdo sobre su ojo izquierdo y el índice derecho sobre su ojo derecho). Y a partir de este instante se impone realizar las sugestiones de forma rítmica con un timbre grave y haciendo énfasis en las consonantes: Usted duer-me... Usted duer-me...Usted esta dor-mi-do... Usted duer-me con un profundo sueño... Todo está... negro para Usted.... Usted no entiende más que mi... voz... duerme. Ubíquese otra vez delante de la persona y durante tres minutos aproximadamente describa con los pulgares, simultáneamente, dos arcos de círculos tangentes a las cejas de la persona, partiendo del medio de la frente y diciendo siempre: Usted está dormido... Cuando yo diga " siete ", Usted caerá en un profundo sueño... Yo comienzo... uno... El deseo de dormir es grande... dos... Una necesidad irresistible de dormir le invade tres... Usted tiene sueño... cuatro... Sueño, sueño.... cinco... el sueño lo derriba... seis... Usted duerme más y más profundamente y nada puede despertarlo... Usted duerme más y más profundamente... Si desea esto, repita los pases y diga luego la palabra "siete"; pero si la persona da la impresión de reaccionar bien, tome desde ese momento su puño derecho (izquierdo, si es zurdo) y termine con la sugestión: Ahora Ud. está bien dormido... Nada podrá despertarlo, excepto yo... Duerma, duerma profundamente. MÉTODO DE INDUCCIÓN HIPNÓTICA DEL BRAZO LIGERO. Las bases de este procedimiento fueron planteadas en 1923 por uno de los más afamados especialistas modernos de la hipnosis: Erickson. He aquí cómo funciona: Pida a la persona que se instale confortablemente sobre una silla y que coloque sus manos sobre los muslos. Diga: Descanse sobre esta silla y relájese... Preste toda su atención a sus manos... Vigile sus manos y descubrirá que lejos de ser inútil o igualmente fastidioso, esta observación es saludable; ella le hará bien... Piense únicamente en sus manos... Concéntrese en sus manos... Pronto, Usted notará que ciertas cosas se producirán en el transcurso de su relajación. Estas cosas siempre se
producen cuantas veces Usted se deje llevar por la relajación, pero hasta aquí ellas son, para Usted, pasos inapreciables. Marque un tiempo de detención y luego prosiga: Concéntrese Usted en todas las sensaciones e impresiones que Usted experimentará en sus manos, igual en la mano izquierda que en la derecha... Puede ser que Usted sienta el tejido de sus pantalones (o vestido) contra la palma de su mano... o el calor de su mano en su muslo... Las sensaciones que Usted experimentará, yo deseo que Usted las observe... Puede ser que sienta Usted una especie de movimiento... Observe sus sensaciones, cualquiera que éstas sean. Un silencio, luego del cual continúe diciendo: Observe siempre sus manos y note su inmovilidad... Hay movimientos en sus manos, pero ellos no son todavía perceptibles...Yo deseo que su mirada permanezca concentrada en sus manos... Su atención puede desviarse de sus manos, pero vuelve siempre a ellas y Usted mantiene los ojos fijos en las manos... Usted se pregunta cuándo los movimientos que se encuentran en ellas van a ser visibles. La curiosidad le vence, Usted deseará saber lo que la invade... De hecho, las sensaciones que Usted va a experimentar son tales, que no importa que pueda sentirlas.. En uno de los dedos o en las manos, un ligero movimiento, un estremecimiento, va a aparecer... vigile este estremecimiento... Estire sus manos... ¿Cuál de sus dedos va a moverse primero? ¿El mayor?... ¿El índice?... ¿El anular?... ¿El auricular?... ¿El pulgar? Uno de sus dedos va a estremecerse o moverse... Usted no sabe exactamente cuándo... ni en cuál mano... Sin duda, Usted va a sentir pequeños movimientos en sus dedos... Esto podría producirse más rápido de lo que yo pienso... Observe bien... esto podría producirse más rápido de lo que yo pienso.. Observe bien... para comenzar, Usted va a experimentar un ligero estremecimiento. Normalmente, en este estado, unos de los dedos de la persona se mueve efectivamente (en caso contrario, es necesario repetir el texto) a partir de la frase "Estire sus manos", lo que permite decir: ¡Ya está! Su pulgar (o índice, anular, entre otros.) se estremece y se mueve...Probablemente, este movimiento se acentuará... Y, antes del movimiento, Usted observará una cosa interesante... Los espacios entre los dedos se ampliarán notablemente... Los dedos se separan muy ligeramente y Usted nota que los espacios se separan más y más... Ellos van a separarse lentamente... Sus dedos no pueden permanecer cerca... Ellos tienden a separarse... Ellos se separan y van a separarse más y más... Una fuerza los separa... Es más fuerte que usted... Ellos se separan... Sus dedos se separan más y más... Más y más... Más y más, exactamente como esto... Pronto, Usted observará que sus dedos desearán levantarse... Levantarse para formar un arco encima de la rodilla, como si ellos desearan levantarse más y más alto.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.10 Si todo va bien, uno de los dedos de la persona se levanta (o comienza a levantarse), lo que permite proseguir diciendo: Observe como su índice (o pulgar, auricular, u otro.) se levanta... Al mismo tiempo, los otros dedos desean seguirlos... De ahí que se levanten lentamente... Mientras sus dedos se elevan, Usted sentirá una sensación de ligereza en la mano... Una sensación de ligereza, sobre todo porque los dedos se levantan aún y toda la mano se levantará y se elevará lentamente, ligera como una pluma... Su mano va a elevarse como un globo que sube en el aire... Un globo que se eleva más y más alto, más y más alto... En este estado, habitualmente, la mano de la persona comienza efectivamente a elevarse. Si es el caso, en lugar de repetir todavía la sugestión que acaba de hacerse, prosiga diciendo:
Su mano se vuelve ligera, muy ligera... Ya sus dedos se levantan... Ellos se elevan... Su mano está ligera... Ligera... Ligera como una pluma... Más y más ligera... Su mano se eleva... Ella se eleva... Ella sube... Sube... como un globo sube en el aire... Su mano está ligera... Su brazo también está ligero, muy ligero... Observe que su mano se eleva y su brazo sube, sube en el aire, un poco más alto, más alto, más alto todavía, todavía. Normalmente la sugestión aporta sus frutos (el brazo comienza a elevarse), lo que permite continuar: Observe, observe la mano y el brazo que se eleva. Mientras Usted observa, Usted comienza a sentir que progresivamente sus ojos se ponen fatigados, soñolientos... Mientras su brazo continúa elevándose, una sensación de relajación y de fatiga lo invade. Usted tiene más y más deseos de dormir... Un gran deseo de dormir... Sus ojos se ponen pesados y, puede ser, pronto sus párpados desearán cerrarse... y mientras su brazo se eleva más alto, usted tiene deseos de sentirse más y más relajado. Usted tendrá más y más sueño y usted deseará experimentar una sensación de paz y de relajación, cerrando los ojos y durmiéndose... Usted va a sumergirse, porque su brazo se eleva... Su brazo se eleva todavía, todavía y Usted se pone muy soñoliento... Sus párpados se vuelven pesados, su respiración se vuelve lenta y regular... Respire profundamente, inspire y expire... Usted está relajado... Luego continúe: Mientras Usted observa su mano y su brazo, se siente más y más relajado y soñoliento, Usted observará que la dirección de su mano va a cambiar... su brazo se doblará y su mano se aproximará más a su cara, todavía, todavía, todavía, y mientras ella se eleva, Usted va lentamente, pero seguro, a entrar en un profundo, profundo sueño, en el cual Usted se relajará profundamente y Usted lo deseará... El brazo continuará elevándose, más alto, hasta que alcance su cara, y usted tendrá más y más sueño, pero Usted no debe dormirse antes de que su mano alcance su cara... Cuando su mano alcance su cara Usted estará dormido, profundamente dormido... Ahora su mano cambia de dirección... Ella se eleva hacia su cara... Sus párpados se vuelven pesados... Usted tiene más y más sueño, más y más sueño... Cuando vea que la mano se aproxime a la cara y que los párpados pestañeen más rápido, diga: Sus ojos se vuelven pesados, muy pesados, y la mano se eleva hacia la cara. Usted se siente muy fatigado y soñoliento... Sus ojos se cierran... Se cierran... Cuando su mano alcance su cara, Usted estará dormido, profundamente dormido... Usted siente una gran somnolencia... Usted se siente más y más somnoliento... Usted tiene un gran deseo de dormir... Usted tiene una gran fatiga... Sus párpados son como de plomo y su mano se eleva, se eleva derecho hacia su cara... y cuando su mano alcanza su cara, Usted estará dormido. Es la última fase. La mano está cerca de alcanzar la cara y provocar el cierre de los ojos. Termine diciendo: Duerma, duerma, duerma simplemente... mientras Usted duerme, la relajación se apodera de Usted Yo deseo que Usted se concentre en la relajación, un estado de relajación sin la menor tensión... No piense en nada más que en dormir, en dormir, profundamente. Métodos de profundización del sueño hipnótico. La inducción del sueño hipnótico según una u otra de las técnicas descritas anteriormente, no lo es todo. Ella abre solamente la vía a la fase más importante y más constructiva de la hipnosis: aquella que permite al hipnotizador comunicar a la persona hipnotizada, sugestiones (instrucciones) destinadas a combatir un mal determinado (asma, hipertensión, tabaquismo, insomnio, impotencia, entre otros.) Y para que las condiciones ideales exigidas por esta fase decisiva sean reunidas, es
necesario proceder a veces a la profundización del sueño (trance hipnótico) por intermedio de métodos particulares, como los que a continuación citamos. MÉTODO DE PROFUNDIZACIÓN HIPNÓTICA DE LA HIPERESTESIA. El hipnotizador sugiere: Pronto su rodilla izquierda será extremadamente sensible... En el estado en el que Usted encontrará, su sensibilidad no puede más que aumentar... Su rodilla será sensible, más y más sensible... Usted sentirá vivamente todos los contactos... La menor presión le parecerá dolorosa; y Usted sentirá vivamente el más ligero de los contactos... Su sensibilidad en la rodilla izquierda aumenta... Ella aumenta más y más... Cuando yo le toque en la rodilla izquierda, Usted experimentará un vivo dolor... En un momento, el más ligero roce ejercido en su rodilla izquierda le resultará doloroso, Usted se sentirá sobresaltado... Apenas yo roce su rodilla izquierda, Usted se dará cuenta, Usted estará mal... Ya está, Usted no puede soportar un toque en la rodilla. MÉTODO DE PROFUNDIZACIÓN HIPNÓTICA DE LA LETARGIA. Para la persona dormida mediante hipnosis, los propósitos perseguidos son los siguientes: Usted se duerme con un sueño profundo... Usted apenas entiende mi voz... Usted me entiende menos y menos, usted se adormece... imposible hacer un movimiento... Su sueño se vuelve más y más profundo... Cuando haya contado hasta tres, Usted no me entenderá más... Usted no sentirá más mi presencia y Usted no me entenderá hasta después que mi mano sea puesta en su cabeza... A las tres, Usted me entenderá... Para entender de nuevo hará falta que yo coloque mi mano sobre su cabeza... A cada segundo, Usted me entiende menos y menos... Mi voz le parece más y más lejana... Duerma profundamente... Usted no entiende más: Uno... Dos... Tres. Si la experiencia resulta, la persona no entiende nada más (o al menos da esa impresión) y su letargo se manifiesta por la flacidez de sus miembros. Para hacerle salir de ese estado el Hipnoterapeuta le pondrá una mano sobre la cabeza (como anuncio) y le dirá: Usted me entiende... Usted está muy bien... Usted me escucha... Usted me entiende muy bien... Su sueño es menos profundo, pero no se despierte... Continúe dormido. MÉTODO DE PROFUNDIZACIÓN HIPNÓTICA DEL BOSQUE. El hipnotizador sugiere: Mantenga los ojos cerrados... Usted verá un bosque... Usted verá un bosque... un gran bosque... un bosque inmenso, con árboles tupidos represéntese bien este bosque... Usted tiene delante el bosque... Vea bien este bosque delante de Usted.... A todos lados, árboles y aún más árboles... ¡qué verdor!... Es verde... Las hojas verdes... Las ramas... Los árboles del bosque... una visión tranquila y reposada... Usted está tranquilo, perfectamente relajado... Ahora, Usted está en el centro del bosque... En medio del bosque... Es muy agradable... A todos lados, Usted ve árboles... Ve esos árboles... Esas hojas... Este verdor, este bosque... Este inmenso bosque... Esto resulta si se hacen las sugestiones para que las personas "vea" el bosque; por tanto, el hipnotizador debe también ver en su imaginación todo lo que él sugiere.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.11 MÉTODO DE PROFUNDIZACIÓN HIPNÓTICA DE LA SORDERA. Para dar a la persona hipnotizada la impresión de que ella no entiende más, se utiliza una fórmula muy simple:
Usted entiende menos y menos... Los oídos le parecen obstruidos... Usted entiende menos y menos... Sus oídos están más y más obstruidos... Sus oídos están como obstruidos... Los sonidos los percibe mal, muy mal... Los ruidos son lejanos... débiles, imperceptibles... Usted estará sordo, completamente sordo... Usted no entenderá más nada... Usted no percibirá ningún sonido... Ningún ruido... Usted no entenderá más hasta que yo ponga mi mano en su frente... Ahora yo contaré: Uno... Dos... Tres... Al igual que con el método de la letargia, Usted puede producir la ilusión de un silencio total, una ilusión que se disipe desde el momento en que el hipnotizador coloque su mano sobre la cabeza de la persona hipnotizada. MÉTODO DE PROFUNDIZACIÓN HIPNÓTICA DE LA RISA. Para provocar la risa de una persona hipnotizada, riendo uno mismo llegado el momento, el hipnotizador tiene la tarea de evocar una imagen cómica cualquiera, como por ejemplo ésta: ... Imagínese en una comida de bodas, la joven esposa porta un vestido blanco espléndido, con el cual ella está muy bella... un sirviente llega, con el jefe de la obra de la pastelería, una magnifica pieza montada... El pasa detrás de la joven esposa y... !Paf! todo cae sobre ella completamente... La crema Chantillí se desparrama sobre la cara y el bello vestido de la joven novia... La insistente explosión de risa... Usted ve a la joven esposa convertida en crema y Usted también ríe... Usted ríe... Usted ríe... PASOS DE LA HIPNOSIS. EL AGOTAMIENTO PALPEBRAL. El agotamiento de los párpados es el primer objetivo que debe plantearse el profesional que comienza en el entrenamiento hipnótico. Está comprobado que cuando existe agotamiento de los músculos elevadores de los párpados, prácticamente es imposible abrir los ojos. Es decir, que si utilizamos un recurso que provoque físicamente agotamiento de estos músculos, estamos formando de por sí la aparición de una respuesta forzada que actúe independientemente de la voluntad del sujeto, a lo que se va a unir la sugestión verbal para reforzarla. Una forma fácil para agotar los músculos elevadores de los párpados es el método del pestañeo sincronizado; o sea, que se cierren y se abran los ojos constantemente. También la fijación de la mirada en un punto luminoso o sobre un punto fijo, provoca este agotamiento (método de Braid), el cual es el método que más hemos utilizado con buenos resultados. Es posible utilizar la combinación de ambos métodos, que para muchos es la forma de obtener una mayor efectividad. El punto luminoso debe estar situado de forma tal que obligue al sujeto a mirar ligeramente hacia arriba, por lo que recomendamos ponerlo a una altura superior a la de la frente. Este método tiene efecto hipnógeno a causa de que los núcleos oculomotores están situados en la proximidad inmediata del centro del sueño, de modo que se puede suponer que existe una relación asociativa entre el centro del sueño y el núcleo oculomotor. Los globos oculares, dispuestos para el sueño, se hallan girados hacia arriba, posición que se consigue igualmente contrayendo los músculos recto superior y oblicuo inferior del ojo, pudiéndose estimular así el centro del sueño por la mencionada asociación. Antes de comenzar con el procedimiento de inducción hipnótica, es necesario que el sujeto se encuentre totalmente relajado. Esto se logra mediante un buen rapport y explicando lo positivo de la hipnosis, con vistas a eliminar las posibles concepciones negativas que se tengan de ésta. El ejercicio comienza con la siguiente indicación: Fíjese bien... Yo iré contando números consecutivos y usted, cada vez que escuche un número, debe cerrar y abrir los ojos suavemente,
sin apretar los párpados. Aquí el hipnotizador puede hacer el ejercicio a modo de ejemplo para que el sujeto lo observe. Las sugestiones deben ser dadas con el mismo tono de voz y a intervalos de dos o tres segundos unas de otras; por eso las separamos por puntos suspensivos en la transcripción. Su cuerpo manténgalo relajado. Abandonado... flojo... sin contracciones musculares... Acuérdese cuando yo comience a contar, usted debe cerrar y abrir los ojos de manera suave... sin apretarlos fuertemente... Está bien, comenzaremos... uno... cierre y abra los ojos... Dos…cierre y abra los ojos... Tres... cuatro... su cuerpo relajado...cinco... Completamente relajado... Se continúa contando, y cada dos o tres números se le da una sugestión de cansancio, o pesadez. Cuando se observe cierto agotamiento en el sujeto, como si los párpados le pesaran, se pasa a la siguiente sugestión. Esto ocurre en sujetos muy sugestionables entre el intervalo del 20 al 30% aproximadamente, y en los menos sugestionables entre el 40 y el 50%. Sus párpados... Los comienza a sentir muy cansados... Pesados...agotados... Muy cansados (esto debe ir acompañado de los números correspondientes)... no se preocupe... Está cooperando muy bien... Esta última expresión reafirma positivamente la actitud del sujeto y lo estimula, a la vez que le resta preocupación; Como planteamos anteriormente, este ejercicio proporciona al sujeto fatiga muscular y cansancio visual. La asociación del ejercicio con las sugestiones establece un sistema de conexiones nerviosas temporales en la corteza, entre los puntos de excitación creados por el pestañeo y la palabra del hipnotizador, formando un reflejo condicionado que es nuestro principal objetivo. Cuando se haya llegado a un número en que el sujeto muestre cansancio, se le indica que continúe solo a partir de ahí, abriendo y cerrando los ojos, y se continúa con sugestiones. Sus párpados... están cansados... fatigados... agotados... muy bien... no tenga miedo... muy pesados... no tenga miedo... su visión se comienza a poner turbia... Eso es natural... Es lo que esperamos que suceda... No se preocupe... Sus párpados están cada vez más pesados. Su vista se hace cada vez más turbia... Ya casi no puede abrirlos... cuando no pueda abrirlos déjelos cerrados... no haga fuerza para abrirlos. Una vez que se observa que el sujeto es prácticamente incapaz de abrir los ojos, se le debe sugerir: Déjelos cerrados... es imposible separar... Imposible separar... su cuerpo está relajado... no tenga miedo... Están pegados... Completamente pegados…. Imposible separar. Imposible separar... Intente y verá que no puede... Imposible separar... Imposible separar.....Cuando se logre que el sujeto no pueda elevar voluntariamente sus párpados, se ha llegado al objetivo fundamental de esta etapa: provocar fenómenos oculares primarios, como son el agotamiento palpebral y la turbación de la visión. En un sujeto de sugestionabilidad media, cuando se ha llegado aproximadamente al número 35 se comienzan a observar movimientos dificultosos de los párpados, dando la impresión de que no se podrán abrir más por las vibraciones que se observan en los mismos al intentar separarlos. El criterio para determinar en qué momento se va a producir una caída espontánea de los párpados o si es necesario sugerirla lo da la práctica. Pero, generalmente, aunque no se tenga práctica, uno suele darse cuenta de lo que va a suceder.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Octava parte.12 Es sumamente importante la observación del proceso que se está produciendo en el sujeto y sólo suspender el ejercicio de abrir y cerrar los ojos cuando se está completamente seguro de que casi no puede elevar los párpados. Si se ha llegado a un número mayor de 60 sin manifestación de agotamiento palpebral, es necesario interrumpir la inducción y de sugestionar al sujeto sin que se dé cuenta de que algo no marcha bien. Le decimos: Está muy bien o nosotros sabíamos que esto sucedería. No se preocupe, que usted ha cooperado muy bien. Ahora vamos a parar para que usted pueda prepararse mejor. Una forma de comprobación que nos permite saber si el paciente se encuentra en la parte final de esta etapa es la presencia de convergencia ocular, es decir, que los globos oculares tienen que estar dirigidos hacia arriba cuando se levanten los párpados con la mano. Recomendamos antes de hacer esta comprobación, realizar una maniobra que facilite la convergencia: Cuando no pueda abrir los ojos, se le indica al sujeto que mire hacia arriba con los ojos cerrados, como si tratara de ver algo que está en su frente. En ese momento se le pasan los pulgares por los párpados delicadamente, desde los lados interiores hacia los extremos (maniobra de los pulgares) y se le sugiere: Sus párpados están totalmente pegados…muy pegados…. imposible separar…... están cansados…. Abandonados... completamente cerrados... Imposible separar... usted se siente bien... Tranquilo... firme... seguro... tranquilo... firme...seguro…. respire... respire tranquila y profundamente... imposible separar…. imposible separar. Sólo podemos afirmar que se ha completado este estado si existe la plena seguridad de que al sujeto le es imposible abrir los ojos. Si por casualidad el sujeto logra separar los párpados, esto nos indica que no se consiguió la heterosugestión y que él está en un estado de completa vigilia. Eso sucede generalmente cuando: No se ha seleccionado debidamente al sujeto de acuerdo con su sugestionabilidad. Para evitar esto, se deben utilizar las escalas de susceptibilidad hipnótica. No se ha empleado adecuadamente el método de inducción. Existe inseguridad en el hipnotizador. No se han impartido las sugestiones verbales en forma monótona, con el mismo tono de voz, con una frecuencia de dos o tres segundos entre cada sugestión dada. Repetimos que es sumamente importante estar preparado para un fracaso y mantener el prestigio ante el paciente. Para esto se pueden emplear diferentes explicaciones, pero la mejor es la que no exprese falta de cooperación del sujeto ni incapacidad del hipnotizador; por ejemplo: Está muy bien, no se preocupe, nosotros esperábamos esa respuesta, no lo estábamos hipnotizando, sino sólo haciendo una prueba para conocer su reacción. Usted trabajó muy bien; en la próxima sesión seguramente se podrá avanzar más en lo que queremos, pues se relajará y concentrará mejor. Su reacción es normal para una primera preparación. No insista en continuar ese día con el sujeto porque difícilmente podrá hipnotizarlo. Es necesario que en la siguiente sesión este mismo sujeto logre una total concentración y relajamiento que le permita ser hipnotizado. Si se ha logrado la imposibilidad de abrir los ojos, puede profundizarse el estado hipnótico según las características del caso con una ligera presión sobre los globos oculares, moviéndolos desde el interior del ojo hacia afuera. Se le explica mientras que su sueño se va a hacer mucho más profundo; esto facilita que los globos oculares tomen la posición de convergencia ocular mencionada anteriormente. Debe evitarse presionar demasiado fuerte los globos oculares para no producir el reflejo oculocardiaco, que es sumamente peligroso.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Novena parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Novena parte
Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
Fenómenos corporales durante el proceso de hipnosis El establecimiento del signo señal El despertar y el signo señal La catalepsia braquial Los movimientos automáticos Sueño hipnótico Abrir los ojos Sueño hipnótico profundo Bloqueo del receptor auditivo Anestesia superficial Sonambulismo Sueño sonambúlico
FENÓMENOS CORPORALES DURANTE EL PROCESO DE HIPNOSIS. Este paso puede considerarse como una profundización y reforzamiento de la etapa anterior. No se puede comenzar con sugestiones complejas, sino que las indicaciones deben ir de lo sencillo a lo difícil, pero siempre después de haber conseguido catalepsia palpebral o, lo que es lo mismo, la imposibilidad total de que el sujeto pueda abrir los ojos voluntariamente. La preparación para lograr los fenómenos corporales en el sujeto puede realizarse en la misma posición en que fue logrado el primer paso. Lo primero que es necesario conseguir es la caída de la cabeza. Esto se alcanza reafirmando la posición anterior mediante sugestiones que indiquen relajamiento profundo, pesadez del cuerpo, cansancio, agotamiento, imposibilidad de abrir los ojos. Posteriormente a este reforzamiento se comienza otro ciclo de sugestiones. Todo su cuerpo... está relajado... completamente relajado... su cuello... Está flojo... sus hombros relajados... Sus brazos pesados...relajados... Sus piernas... sus músculos... todo su cuerpo... está flojo... Flojo y relajado... Completamente relajado… Es importante señalar que el hipnotizador debe tocar cada parte del cuerpo a medida que la va mencionando y comprobar si efectivamente está relajada. Cuando se constata que existe alguna contracción, se insiste, tratando de ayudar al sujeto para que suelte la contracción muscular, pues es necesario que aparezca un relajamiento total para continuar avanzando. Hay que recordar que la hipnosis se basa en el establecimiento de reflejos condicionados. Esto implica no olvidar nunca los pasos anteriores que hemos logrado y para conseguirlo hay que tener presente el reforzamiento de la catalepsia palpebral, mediante sugestiones que la mantengan en activo y no permitan que desaparezca por extinción de la señal.
Una vez reforzada la etapa anterior se sugiere: Todo su cuerpo….relajado... Completamente relajado... su cabeza... Está floja... y comienza a descolgarse... poco a poco... se descuelga... sus párpados pesados... imposible separar... Imposible separar... Hemos comprobado experimentalmente que muchas veces, a pesar de haberse cumplido el objetivo de la primera etapa, no se logra que el paciente descuelgue la cabeza. Si esto sucede, se debe continuar reforzando la relajación y la catalepsia palpebral y al poco rato se le indica: Fíjese bien... ponga atención….a todo lo que yo diga... Repita mentalmente lo que yo diga... todo lo que yo le diga... Ponga atención sólo a mi voz... cuando yo cuente hasta tres... su cabeza... se va a ir descolgando... cuando yo cuente hasta tres... no tenga miedo... su cuerpo está relajado abandonado... cansado... agotado... sus párpados pegados... muy pegados... imposible separarlos... cuando yo cuente hasta tres... su cabeza se descolgará... poco a poco...uno... se afloja... dos…comienza a inclinarse... tres... se cae lentamente. Muchos pacientes que cuando se les da la sugestión de que aflojen la cabeza no ofrecen una respuesta positiva espontáneamente, lo hacen de forma adecuada con este procedimiento y a veces la cabeza se desploma totalmente de un solo movimiento cuando se menciona el número tres. Otra variable es utilizar una maniobra que provoque que la cabeza se descuelgue. Por ejemplo: se pone una mano sobre la frente del sujeto y la otra en la nuca, continuando las indicaciones de la misma forma: Su cabeza….se va descolgando... se va aflojando... poco a poco… Se aplica una pequeña fuerza con la mano que está sobre la nuca y se afloja la mano que está en la frente, haciendo así que la cabeza se descuelgue. Si la cabeza del paciente queda inclinada hacia adelante y se observa que está descolgada, se debe seguir reafirmando la catalepsia palpebral. Es importante comprobar el grado de relajación que posee el sujeto y para esto existe una maniobra que lo permite. Se levanta el brazo del paciente aguantándolo por la muñeca como si se fuera a tomar el pulso y después se suelta. La respuesta correcta que indica relajación es que el brazo caiga completamente desplomado y que forme un movimiento de péndulo; si el brazo baja lentamente o se demora unos segundos en caer, indica que hay un control voluntario, por lo que se debe insistir en el relajamiento. Para conseguirlo se indica: Su cuerpo relajado... totalmente relajado... yo levanto su brazo... y él debe caer totalmente relajado.... abandonado... pesado... completamente desplomado... Si esta maniobra tiene un resultado positivo, es decir, que el brazo cae completamente relajado con un movimiento oscilatorio, no es necesario continuar; de lo contrario, no se puede seguir avanzando en los pasos sucesivos de la hipnosis hasta conseguir el relajamiento. Insistimos en que se debe seguir reafirmando la imposibilidad de abrir los ojos. Otra respuesta negativa es que cuando se le coja el brazo y se suba, el sujeto lo levante; esto indica que está fingiendo. Una forma de neutralizar esa respuesta es la aplicación de pequeños golpes en los brazos, buscando que se elimine la contracción muscular. También se pueden aplicar las siguientes sugestiones: Su cuerpo se relaja cada vez más relajado... cada vez que yo le doy un golpe... su cuerpo se relajado…. sus brazos se ponen flojos... muy flojos..... Se debe continuar hasta lograr la caída pesada e involuntaria de los brazos. Debe recordarse que la inhibición cortical provocada por la hipnosis comienza por las zonas motoras y premotoras. Por lo tanto, en la medida en que no existan estimulaciones en estas áreas la inhibición inducida será más fuerte.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Novena parte.2
El desplome de los brazos hay que tenerlo muy presente y no se puede pasar a otro ejercicio si no se ha logrado. Debe comprobarse si están presentes algunos de los siguientes aspectos negativos: Que el brazo suba voluntariamente cuando se agarra la muñeca. Que cuando se suelte el brazo, no caiga en el mismo momento, desplomado. Que baje lentamente. Cualquiera de estas conductas lleva consigo la necesidad de trabajar fuertemente para eliminarla. Por lo general son muy pocos los sujetos que no logran realizar de forma adecuada los ejercicios, porque una vez que se ha logrado la catalepsia palpebral las sugestiones se hacen más fuertes y se ha establecido cierta influencia del hipnotizador sobre el sujeto. El ejercicio que se debe aplicar a continuación es de respiración y se provoca así que ésta sea cada vez más tranquila y profunda, reafirmando lo logrado. Para ello se indica: Su cuerpo está pesado... muy pesado... sus párpados pegados... muy pegados... imposible separar... imposible separar...Ahora respire profundamente... tranquila y profundamente... repita mentalmente… todo lo que yo le digo… ponga atención sólo a mi voz... respire profundamente... tranquila y profundamente... a medida que usted respira... tranquila y profundamente... su cuerpo... se relajará cada vez más... cada vez más profundamente... sus párpados pegados... muy pegados... cada vez más- pegados... imposible separar….imposible separar... Recuerde que estas sugestiones son solamente una guía, por lo que no deben seguirse textualmente tal como las ponemos en este libro. Usted adapta, repite y refuerza las sugestiones de acuerdo con sus condiciones personales y las características del sujeto. Aquí presentamos solamente las frases más importantes y sin repetidas las veces necesarias. Escoja usted su propia fraseología para la inducción hipnótica y no tema repetir cada sugestión al sujeto las veces que crea necesario. A medida que avance en el proceso de inducción, será más necesario repetir varias veces cada sugestión. El hecho de que el sujeto realice cinco o seis inspiraciones profundas produce una especie de alcalosis respiratoria (aumento del pH y bajo contenido de dióxido de carbono) a causa de la oxigenación de los centros musculares y cerebrales, lo cual facilita que aumente la inhibición. Cuando la inhibición es profunda, la respiración del paciente es tranquila y no se fuerza la capacidad pulmonar. Es importante no provocar en el paciente una hiperventilación, que traería como consecuencia demasiada oxigenación sanguínea y como secuela de ésta una disminución de la inhibición cortical. Si se ha obtenido una respuesta positiva a los ejercicios realizados hasta ahora, estamos completamente convencidos de que el sujeto se encuentra con una relajación fuerte y profunda que implica, sin lugar a dudas, una inhibición de la corteza cerebral, principalmente de los lóbulos frontales y de las zonas motoras y premotoras. No obstante, siempre se debe volver a lo anterior para reforzar la señal que la provoca. Cuando se ha llegado hasta aquí, es necesario realizar una valoración del tiempo trascurrido desde el comienzo, el agotamiento del paciente y el del hipnotizador. Es fácil que en una primera sesión se logre llegar hasta esta segunda etapa; cuando hay más experiencia, esto se logra en pocos minutos y no se agota ninguna de las partes. Si el análisis de la situación determina que el sujeto y el hipnotizador o uno de los dos se encuentran agotados, se debe interrumpir la sesión, dejando el condicionamiento de un signo -
señal que permita avanzar rápidamente hasta esta fase sin necesidad de pasar por todos los procesos anteriores. En el caso contrario se puede continuar. Cuando se ha terminado este paso es posible observar ciertos fenómenos objetivos y subjetivos. Entre los fenómenos objetivos están: Al reducirse la conciencia y haber relajamiento de la musculatura estriada, es frecuente que el sujeto realice con los pies un movimiento rotatorio hacia afuera, debido al descenso del tono muscular de sus piernas. Se lentifica el ritmo del pulso del sujeto. Entre los fenómenos subjetivos que se pueden observar están: Sensación de cansancio, pesadez, agotamiento. Pérdida de la noción del tiempo; el sujeto considera que ha dormido mucho más tiempo que el real. EL ESTABLECIMIENTO DEL SIGNO-SEÑAL. Para establecer el signo-señal es necesaria la formación de un reflejo condicionado, o sea, que se condicione en el sujeto una respuesta que lleve implícita inhibición, cansancio, agotamiento, relajamiento y sueño, cuando escuche una palabra o un estimulo determinado. El establecimiento del signo-señal se lleva a cabo de la siguiente forma: Su cuerpo está pesado...cansado... relajado... sus párpados están pegados... completamente pegados... imposible separar... Ponga atención... sólo a mi voz... repita mentalmente... todo lo que yo le diga... todo lo que yo le diga... su cuerpo…está cansado... relajado... abandonado... de ahora en adelante... cuando ya le diga…. relájese y duerma... usted cerrará sus ojos... se relajará... totalmente... y entrará en un estado de sueño... muy profundo... cada vez más profundo... mucho más profundo que ahora…sus párpados quedarán pesados... y sentirá el deseo de quedar profundamente dormido...de ahora en adelante... cuando yo le diga... relájese y duerma...duerma... usted cerrará los ojos... se relajará... totalmente... y entrará en un estado de sueño... muy profundo... cada vez más profundo... su cuerpo está cansado... muy agotado... completamente relajado... sus párpados pegados... imposible separar... imposible separar. Este paso resulta imprescindible si se va a terminar o a continuar la sesión. Recomendamos que si han trascurrido más de 60 minutos, el sujeto o el hipnotizador se encuentra agotado y no existe experiencia por parte de éste, se interrumpa la sesión de ese día. Para esto es necesario preparar al sujeto para el despertar. EL DESPERTAR Y EL SIGNO-SEÑAL. El despertar es sencillo y fácil. Sin embargo, es lo que más temor infunde en los sujetos. Muchas personas, cuando se les habla de hipnosis, expresan su gran preocupación de quedar dormidas y no poder despertar. Esto se debe al desconocimiento de que se pasa del sueño hipnótico al sueño fisiológico normal. Para despertar al sujeto es también necesario crear un reflejo condicionado de la siguiente forma: Está muy bien... usted ha cooperado muy bien... su cuerpo está relajado... ahora yo le voy a despertar... cuando yo cuente hasta tres... y dé dos palmadas... usted se va a despertar... sintiéndose completamente bien... sin ningún agotamiento...sin dolor de cabeza... como si hubiera dormido... tranquila y profundamente... durante mucho tiempo... escuche bien... lo voy a despertar.... cuando yo cuente hasta tres... y dé dos palmadas... usted se va a despertar... sin dolor de cabeza... con una sensación... de haber dormido... mucho tiempo... tranquila y profundamente... cuando cuente hasta tres... y dé dos palmadas... se despertará... muy feliz... sonriente...
sintiéndose bien... sin dolor de cabeza... sin dolor en el cuerpo... y con una sensación... de haber dormido mucho tiempo... ponga atención... le voy a despertar... cuando yo cuente hasta tres... y dé dos palmadas... usted se va despertar...recuerde bien... de ahora en adelante... cuando yo le diga relájese y duerma... sus ojos se cerrarán... y entrara en un estado de sueño profundo... mucho más profundo que ahora... sus párpados quedarán pesados... muy pegados... y sentirá el deseo de quedar profundamente dormido...
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Novena parte.3 El establecimiento del signo – señal no es más que la formación de un sistema de conexiones nerviosas temporales en la corteza que entran en funcionamiento por medio de la palabra. La formación del reflejo condicionado signo-señal es importante porque ahorra tener que comenzar desde el principio cada sesión, por lo tanto, es necesario que el mismo quede muy bien establecido, de modo tal que en cualquier parte del tratamiento donde nos encontremos pueda ser aplicado y aparezca la respuesta. Se debe ejecutar el restablecimiento del signo-señal lenta y meticulosamente, repitiendo lo más posible las sugestiones, sin vacilaciones, memorizando el esquema y el texto que se va a utilizar, pero siempre debe estar dentro del siguiente parámetro: De ahora en adelante...será innecesario repetir todos los ejercicios... para que se relaje...totalmente... mucho más profundamente que ahora... Cuando yo le diga a usted... relájese y duerma... usted cerrará sus ojos... aflojará su cuerpo... y estará en un estado... de sueño profundo... mucho más profundo que ahora... sus párpados se sentirán... pesados... y sentirá el deseo de quedar... profundamente dormido... Es necesario repetir esto varias veces para que el sujeto lo grabe y se establezca el reflejo condicionado. Si ya se tiene dominio de la forma de despertar al sujeto, se proceder a realizar dicho acto de la siguiente manera: Ahora yo lo despertaré…y usted no tendrá dolor de cabeza... ni de cuello... estará tranquilo... como si hubiera dormido...durante mucho tiempo... pero cuando yo le diga... relájese y duerma... usted cerrará sus ojos... aflojará su cuerpo... y entrará en un estado... de sueño profundo... mucho más profundo que ahora... Después de aplicada la técnica y que el sujeto haya despertado, se le pregunta cómo se siente, si tiene dolores, si está tranquilo. Posteriormente se le sitúa en la misma posición en que fue hipnotizado, se le relaja y se le dice la consigna del signo-señal relájese y duerma...relájese y duerma…. En la formación del signo-señal deben tenerse en cuenta las siguientes recomendaciones: -
Repita varias veces la consigna y el proceso que la misma producirá. No despierte nunca al sujeto sin haberlo preparado. es decir, sugiérale que al abrir los ojos se sentirá bien, sin dolores de cabeza o corporales. No debe sugerirle que despertará sin sueño. No debe esperar que trascurra mucho tiempo entre el despertar y el uso de la consigna del signo-señal. Solamente se pregunta cómo está, si se siente bien y se cierra la conversación.
Ahora ponga atención, voy a contar... hasta tres... y usted va a despertar... completamente despejado... sin dolor de cabeza... como si hubiera dormido mucho... tranquila y profundamente... Recuerde...cuando cuente hasta tres... y dé dos palmadas... se despertará...Uno... sintiéndose bien... dos... se siente tranquilo... nada le preocupa... ya usted espera mi orden... para despertar... tres…Se dan dos palmadas y se le dice enérgica e imperativamente: ¡Despierte! Por lo general, él paciente se despierta sin dificultades, pero si esto no ocurre, el hipnotizador no debe atormentarse ni preocuparse demasiado. Esto sucede cuando:
El sujeto está en un grado de inhibición muy profundo. Existen fallos en la utilización de la técnica. Se ha perdido el correspondiente rapport con el paciente.
Existe una maniobra que salva esta situación. Si automáticamente que se le da la orden no despierta, se le dan dos palmadas enérgicas en la frente y se le dice imperativamente: ¡Arriba!, ¡abra los ojos!... ¡ya puede abrirlos!... Si no hacemos esto y dejamos al sujeto sin despertar, no le pasará nada, no sufrirá ningún daño, sino que pasará al poco rato a un sueño fisiológico. Podemos asegurar que es extremadamente difícil que el paciente no abra los ojos cuando se le dan las dos palmadas en la frente. Si por casualidad se da el caso y el paciente no despierta, se le hacen las siguientes indicaciones:..Está bien... no importa... duerma...tranquilamente... que esto le hará mucho bien.... Esto se hace por si el paciente aún tiene algún grado de rapport con el hipnotizador, aunque el no despertar indica que el mismo se ha perdido. Recomendamos a los profesionales que comienzan su entrenamiento con las técnicas hipnóticas, que al principio no trabajen sin tener la posibilidad de auxiliarse de un especialista en la materia, pues generalmente cuando se comienza se tiene cierta inseguridad y esto a veces provoca modificaciones en la conducta y actitud de los sujetos. No obstante, sugerimos la utilización de esta técnica que presenta una elevada eficiencia. Cuando nos encontramos de nuevo ante el paciente, es necesario restablecer una buena relación médico paciente (el rapport), preguntarle cómo se ha sentido, decirle que la vez anterior cooperó muy bien, que en esta sesión se va a sentir mucho mejor, que ya conoce el método, que no le tiene temor, a través de una relación afectiva en la cual se logre que el paciente le tenga confianza al hipnólogo. Esto reduce considerablemente el nivel de ansiedad que por lo regular el paciente trae. Una vez que se observa que ha disminuido la tensión y que está más calmado, se le sitúa en la posición adoptada en la sesión anterior y se le invita a que se relaje. Esta es la preparación para aplicar el signo –señal, por lo se comienza diciendo: Ahora usted…se afloje su cuerpo... aflójelo más...deje su cuerpo en reposo... El hipnotizador debe comprobar mediante la maniobra del brazo (levantar el brazo y que caiga desplomado y en movimiento de péndulo cuando se suelta) si existe verdaderamente una relajación de la musculatura estriada; nunca debe dar la consigna del signo-señal hasta tanto no exista una relajación total. Está muy bien... usted se ha relajado completamente... Ahora ponga atención sólo a mi voz... recuerde la sesión anterior... su cuerpo está relajado... relájese y duerma... deje sus ojos cerrados...suavemente... se está durmiendo profundamente... sus párpados están completamente pegados... cansados... abandonados... agotados...pesados... imposible separar... imposible separar... imposible separar... Si el signo-señal quedó bien establecido, bastarán estas breves sugestiones y el sujeto quedará más relajado y en un estado de sueño hipnótico más profundo que la vez anterior. De todas formas, es necesario indicarle que mire hacia la frente y aplicar la maniobra de los pulgares (pasarle los dedos pulgares por los ojos, desde los lagrimales hasta la parte exterior) para lograr la convergencia de los globos oculares. Se continúa buscando más concentración del sujeto con vistas a formar rápidamente la inhibición de las zonas motoras y premotoras de la corteza.
Piense en una sábana en blanco…repita mentalmente todo lo que yo le diga... duerma... tranquila y profundamente... sus párpados están pegados... muy pegados... cansados... muy cansados... imposible separarlos... imposible separarlos... usted cada vez... va sintiendo más sueño... más sueño... sus párpados... están pegados... cansados... abandonados... su cuerpo completamente relajado... abandonado, usted repita mentalmente... todo lo que yo le diga, ponga atención sólo a mi voz... sus párpados pegados... imposible separarlos... imposible separarlo... imposible separarlo... aunque usted intente no puede... imposible... están pegados... imposible separarlo... intente y verá que no puede... imposible... imposible separarlo... Por lo general, no hay dificultad en lograr que el sujeto entre en estado hipnótico. No obstante, si esto no se logra, no debe aparecer preocupación en el hipnotizador y si hay preocupación, tratará de que no sea percibida por el sujeto. Se debe salvar el prestigio del procedimiento diciendo: No importa... está muy bien... eso era lo que yo esperaba.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Novena parte.4 Inmediatamente se comienza de nuevo desde el principio, aplicando el pestañeo sincronizado, que provoque el agotamiento de los músculos elevadores de los párpados y por tanto aparezca la catalepsia palpebral, que siempre se establecerá con mayor rapidez que la vez anterior. En realidad, son pocos los casos que no se duermen cuando se les da el signo-señal que se ha condicionado en la sesión anterior. LA CATALEPSIA BRAQUIAL. Se comienza ahora con la búsqueda de la catalepsia braquial, que es uno de los objetivos de esta fase. Para ello se empieza diciendo: Todo su cuerpo relajado... completamente relajado... cuando yo cuente hasta tres... su mano derecha se va a ir cerrando... poco a poco...fuertemente... se va a estirar... y se va a levantar... escuche bien...cuando yo cuente hasta tres... uno... sus dedos ya se mueven...dos... se comienzan a cerrar... tres... se cierran fuertemente... Si el sujeto no cierra la mano espontáneamente, al llegar a tres se le puede tomar la mano, se la cerramos y le estiramos el brazo, poniéndolo en posición horizontal con un ángulo de 90° respecto al cuerpo, y se le dice imperativamente: Cierre la mano derecha fuertemente... más fuerte... ponga el brazo bien duro... deje todo su cuerpo relajado...menos el brazo derecho que está levantado... que debe estar bien duro. Su cuerpo está totalmente relajado... completamente relajado, completamente relajado, sólo su brazo está duro... muy duro... a medida que yo lo toco... se pone más duro... más fuerte...como si fuera de hierro…romo si fuera de acero... duro... muy duro... muy fuerte... la mano está completamente cerrada... cerrada... completamente cerrada... el brazo está como si fuera de hierro... de acero... está muy duro... duro y rígido... desde los hombros hasta la mano... la mano cerrada... dura y rígida. o completamente dura y rígida... El objetivo de este ejercicio es establecer una catalepsia braquial. La sugerencia: A medida que toco su brazo o se pone cada vez más duro. Se utiliza para provocar la rigidez total del brazo, pues cada toque establece puntos de excitación en las zonas motoras de la corteza donde existe inhibición y fortalece el foco de excitación creado por la sugestión aplicada. Si el paciente no mueve el brazo al contar hasta tres y la técnica ha sido bien empleada, la única explicación es que estamos ante un mal paciente para la aplicación de la hipnosis. Cuando se ha comprobado que efectivamente existe una marcada contracción en el brazo, que está duro y completamente rígido, se indica: El brazo está muy duro... como si fuera de hierro... de acero...está muy contraído... su mano cerrada... fuertemente... el brazo es capaz de soportar cualquier peso... es como si fuera un pedazo de acero... como si fuera un pedazo de hierro... está duro y rígido...imposible bajar... imposible bajar… imposible bajar... aunque usted intente no puede... imposible bajar... imposible bajar... Intente...no puede... imposible... imposible bajar... está completamente duro, duro y rígido…
Siempre que se dé una orden de Intente, se debe dar inmediatamente otra que la neutralice, como, Imposible bajar... no puede aunque intente no puede... El desafío que se le hace al sujeto mediante la palabra, Intente…debe ser pronunciado una sola vez. Cuando es lanzado el reto, generalmente aparece un intento de ir en contra; se trata de bajar el brazo, pero casi nunca es posible si se han seguido adecuadamente los pasos indicados en este procedimiento. Algunas veces el sujeto logra bajar un poco el brazo, con dificultad. Tan pronto como esto sea apreciado, se suspende rápidamente el ejercicio, indicando: Está muy bien... no haga más esfuerzo... es imposible bajarlo... está muy duro... escuche bien... cuando yo cuente hasta tres... sentirá un pequeño golpe en su brazo... y éste caerá... completamente relajado... completamente relajado... muy relajado...sus párpados están pegados,.. imposible separarlos, su cuerpo relajado, sólo su brazo derecho está duro... muy duro...pero cuando yo cuente hasta tres y sienta un golpe en el brazo... éste caerá completamente relajado... uno... dos... tres... (se da un golpe suave en el brazo del sujeto simultáneamente con la pronunciación del último número e inmediatamente se sigue sugiriendo) Ahora....se cae... completamente abandonado... relajado y abandonado, todo su cuerpo está relajado, sus párpados están pegados... cansados...pesados... imposible separar... imposible separar... La orden de reto no se puede dar hasta tanto no exista una fuerte contracción en el puño y en el brazo. Si ésta no aparece de forma espontánea, se le puede indicar mediante la siguiente sugestión: Su puño está fuertemente cerrado... tan fuerte que tiembla, usted lo aprieta fuertemente... muy fuerte... está duro como un hierro. Por regla general, cuando las instrucciones se han ejecutado adecuadamente y el brazo está en una posición que forma un ángulo de 90 grados con el cuerpo, aparece el pequeño temblor provocado por la tensión muscular. Es importante que el sujeto tome conciencia de las contracciones musculares del puño y del brazo, porque esto reafirma el foco de excitación dominante en las zonas frontales de la corteza cerebral inhibida por el sueño hipnótico y se establece la catalepsia braquial. A partir de que se logre una vez, ya es fácil que reaparezca; solamente con decir: Ahora a su brazo izquierdo... cuando yo cuente hasta tres... le va a pasar igual que al derecho, es suficiente para que surja la catalepsia en el otro brazo. LOS MOVIMIENTOS AUTOMÁTICOS. El próximo paso de la hipnosis es la formación de movimientos automáticos o, lo que es lo mismo, la imposibilidad de detener un movimiento una vez comenzado. Para provocar este fenómeno se puede utilizar principalmente una de dos vías. Primero, a partir de la catalepsia braquial de ambos brazos, provocar el movimiento rotatorio. Este es el método que algunos utilizan para ahorrar tiempo. Una vez que inducimos la catalepsia en el brazo derecho, en vez de mandar a bajarlo indicamos la subida del izquierdo, que por mecanismo reflejo aparece rápidamente; es decir, que provocamos la catalepsia de ambos brazos. Cuando estamos completamente convencidos de que está asegurada la rigidez, apretamos las muñecas del sujeto con nuestras manos y flexionamos sus brazos diciéndole: Yo tomo sus muñecas...flexiono sus brazos... pero continúan duros... ellos se doblan por los codos... pero siguen duros... sólo se flexionan... siguen contraídos...duros... Inmediatamente se inicia en el sujeto un movimiento rotatorio de los antebrazos, en forma de molino, o sea que ambas manos giran sobre un punto imaginario y mientras una sube la otra baja. Es importante la posición de los codos, que deben formar un ángulo aproximado de 110 grados con relación al cuerpo. Para que se comprenda mejor esto, si la posición del brazo en la catalepsia
dijimos que era de 90 grados con relación al cuerpo, ahora el codo debe estar en una posición por arriba de los puños cerrados, para realizar la combinación del movimiento. Ahora yo muevo sus manos, comienza a formarse un movimiento rotatorio... yo lo guío... es un movimiento circular... es mecánico...rítmico... constante... cada vez es más mecánico, yo contaré hasta tres... y el movimiento pasará a ser automático... no tenga miedo...cuando yo cuente hasta tres... y suelte sus muñecas... el movimiento pasará a ser automático... imposible parar... imposible parar... uno... ya es un movimiento completamente mecánico... imposible parar... dos... ya no se puede parar... Aunque yo suelte mis manos...ya no se puede parar... cuando yo diga el próximo número y suelte sus muñecas será imposible parar el movimiento, imposible parar...tres... (Se sueltan las muñecas) imposible parar… este movimiento es automático... No responde a su voluntad... es imposible parar... es un movimiento automático... ya no responde a su voluntad... imposible parar... imposible parar... aunque usted intente... no puede... imposible... es un movimiento automático... imposible parar...cuando usted intente pararlo... cogerá más velocidad... imposible parar… imposible parar... Intente... no puede... imposible... imposible parar… es un movimiento automático... que es imposible parar… Es muy difícil que se detenga el movimiento por la voluntad del sujeto, si se ha logrado la catalepsia braquial en ambos brazos de forma adecuada, pues el punto de excitación dominante que la catalepsia es aprovechado para este ejercicio y se facilita la aparición del movimiento.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Novena parte.5 La segunda vía que se puede utilizar para producir movimientos automáticos es la siguiente: Una vez que se ha logrado la catalepsia braquial de ambos brazos, se manda a que caigan completamente relajados. Luego se pone una mano en el codo del sujeto y con la otra se flexiona el antebrazo y se comienza a realizar un movimiento hacia arriba y hacia abajo, en el cual el codo representa el punto de referencia de donde comienza el movimiento. Entonces se le indica: Su cuerpo está completamente flojo… relajado... usted realiza conmigo este movimiento... hacia arriba… hacia abajo... (Se continúa así siete u ocho veces) Ahora usted va a realizar el movimiento solo... yo soltaré su mano… y usted continuará el movimiento… de la misma forma... (Se sueltan las manos) hacia arriba... hacia abajo... hacia arriba... hacia abajo... ya es un movimiento mecánico… mecánico… completamente mecánico... hacia arriba… hacia abajo... hacia arriba…hacia abajo... Es necesario coordinar la sugestión hacia arriba… hacia abajo... de acuerdo con el movimiento del brazo, para que ambos coincidan. Cuando yo cuente hasta tres… el movimiento pasará a ser automático… imposible parar… imposible parar… uno… ya comienza a ser automático… dos… ya es un movimiento semiautomático… prácticamente es imposible parar... imposible parar... tres... ya es un movimiento automático... imposible parar... Imposible parar… Intente… no puede… imposible parar… imposible parar… sus párpados pegados…muy pegados… imposible parar… imposible parar... su cuerpo relajado... ahora cuando yo cuente hasta tres... sus brazos caerán desplomados… el movimiento parará... cuando yo cuente hasta tres…uno… caerán completamente relajados… dos... tres… está muy bien todo su cuerpo…relajado... cansado… abandonado… sus parpados pegados… imposible separarlos… imposible separarlos… Se habrá podido observar que siempre que indicamos una acción decimos: Cuando yo cuente hasta tres… de esta forma se facilita la programación del acto por parte del sujeto. Hemos comprobado experimentalmente que si se da una sugestión que implique realizar una actividad determinada, la ausencia del conteo hace que la respuesta aparezca con más dificultad. Posteriormente se realiza el mismo ejercicio con el otro brazo y luego la rotación de ambos brazos como explicamos con anterioridad. La primera vía simplifica el ejercicio y ahorra tiempo, sin dejar de tener eficiencia.
Es frecuente que cuando se comienza se olviden los pasos. Si esto ocurre, el hipnotizador debe continuar con indicaciones de relajamiento, cansancio, etc., pero nunca dejar de hablar continuamente, para no perder el rapport con el sujeto. Otro aspecto importante es que no se debe sugerir sueño al sujeto hasta que no se haya cumplido esta fase, porque hasta aquí sólo aparece letargo. Para dar por terminado este paso, es necesario haber cumplimentado los siguientes aspectos:
1. Relajamiento total con flexibilidad. 2. Rigidez del brazo e imposibilidad de bajarlo (catalepsia braquíal). 3. Movimiento automático braquial. Si se ha cumplido lo anterior, podemos decir que hemos concluido los dos primeros peldaños de la hipnosis. Por tanto, tenemos creadas las bases para pasar al sueño hipnótico. SUEÑO HIPNÓTICO El sueño hipnótico es la ambición de todo hipnotizador. Según nuestra experiencia, el intervalo de confianza para que el sujeto pase a esta fase está entre 15 y 85% de los casos hipnotizados. Aunque queremos aclarar que para eliminar síntomas menores, con sólo haber cumplimentado los dos primeros periodos o pasos es suficiente para realizar las sugestiones que los contrarresten. El hipnotizador principiante no debe angustiarse por no llegar a esta fase, pues uno de los requerimientos fundamentales para alcanzarla es tener experiencia en la utilización de las técnicas. En la medida en que se unan el dominio del método y la buena sugestionabilidad del sujeto, se llegará fácilmente al sueño hipnótico deseado. En los dos pasos anteriores se hacía énfasis en el relajamiento corporal y en la flexibilidad muscular, para buscar la formación de un reflejo condicionado y el establecimiento de la inhibición de las zonas motoras y premotoras del cerebro. De ahora en adelante el objetivo es generalizar la inhibición por toda la corteza para que se pueda alcanzar el sueño hipnótico. La sugestión de sueño se realiza cuando el sujeto esté en un grado profundo de relajación y no exista ninguna contracción muscular. Se comienza la inducción de sueño apoyándonos en los logros de las dos etapas anteriores, así: Su cuerpo está completamente relajado... abandonado... sus párpados pegados... cansados... piense en que tiene sueño... está cansado... muy cansado... no tenga miedo... duerma...duerma... tranquila y profundamente... cada vez más profundamente... su cuerpo está cada vez más relajado... abandonado... cada vez tiene más sueño... sólo le interesa dormir... poco a poco... cada vez más profundamente... duerma... lenta y tranquilamente... duerma... tiene mucho sueño... Duerma... profundamente... tranquila y profundamente... respire normal... cada movimiento respiratorio... profundizará su sueño... cada vez. más profundamente... tiene sueño... mucho sueño.... Una forma de comprobar si se ha cumplido la etapa y si efectivamente existe un sueño profundo es levantando los párpados del sujeto, donde debe aparecer la convergencia ocular (los globos oculares girados hacia arriba y convergiendo). Si esto no es así, nos está indicando que no hay la profundidad necesaria por lo que debemos seguir buscando el sueño hipnótico. ABRIR LOS OJOS. Esta maniobra se realiza también como medio comprobatorio para determinar hasta qué punto el sujeto está sugestionado. Para mandar a abrir los ojos y que el sujeto continúe bajo el efecto de la sugestión hipnótica, debemos haber cumplido las indicaciones de cada paso en forma adecuada. Si existe una fuerte
sugestión, cuando el sujeto tenga abiertos los ojos aparecerá una mirada fija, sin pestañeo; está prácticamente hipnotizado, con la única diferencia de que los ojos no están cerrados. Pero es necesario conocer que el sujeto está despierto y que va a recibir varias estimulaciones que lo pueden sacar del efecto hipnótico. Esto crea la necesidad de prepararlo antes de mandarlo a abrir los ojos, por lo que las sugestiones son las siguientes: Fíjese bien... yo le voy a mandar a abrir los ojos...pero usted no va a pestañear… es como si continuara dormido...como si estuviera profundamente dormido...pero con los ojos abiertos... su mirada será fija hacia adelante... sin pestañear… cuando yo cuente hasta tres... usted abrirá los ojos... sin pestañear... sin despertar... inmediatamente volverá a cerrar los ojos y continuará durmiendo... uno... recuerde... cuando yo cuente hasta tres... usted abrirá los ojos... Sin pestañear... dos... sin pestañear... inmediatamente... volverá a cerrar los ojos... y continuará durmiendo... tres… El hipnotizador debe observar la conducta del sujeto, pues la misma varía en dependencia del grado de sugestionabilidad que adquiera. El buen sujeto abre los ojos y su mirada está fija, sin pestañear, y a los pocos segundos los cierra, entrando de nuevo en un sueño profundo. Otros pestañean dos o tres veces y después dejan los ojos cerrados; en este caso el hipnotizador continúa profundizando en el sueño. En algunos casos el sujeto no cierra los ojos y es necesario aplicarle el signo-señal, incluso en algunas oportunidades utilizar la maniobra de los pulgares sobre los ojos. Si el ejercicio de abrir los ojos ha salido correctamente, hemos cumplimentado la tercera etapa de la hipnosis y estamos en condiciones de continuar en el cuarto paso, que ya se puede considerar como una hipnosis profunda.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Novena parte.6 SUEÑO HIPNÓTICO PROFUNDO. Esta etapa se caracteriza por la profundidad de la hipnosis, que hace que cuando el sujeto despierte no recuerde nada, por lo general, de lo que sucedió durante el sueño hipnótico, independientemente de que no se le haya dado una sugestión posthipnótica de amnesia. Se considera como una fase de hipnosis profunda y esto implica necesariamente un mayor cuidado en su utilización, porque un error determinado puede ocasionar daños al paciente, cometer yatrogenia que deje dificultades y problemas de difícil recuperación. Uno de los objetivos de esta etapa es la disminución y el bloqueo de algunos órganos sensoriales, como, por ejemplo: la creación de selectividad especial en la audición (sordera selectiva) y la pérdida de la sensibilidad táctil y cutánea (anestesias y analgesias); en fin, se pueden lograr diferentes cambios en los receptores exteroceptivos y provocar el olvido de algún aspecto que se quiera eliminar del recuerdo de un paciente, o todo lo contrario, crear una sugestión posthipnótica con la seguridad casi total de que no se dejará de cumplir la acción indicada. En esta etapa el sujeto se encuentra profundamente dormido, tiene poca sensibilidad y a veces ésta desaparece por completo, aunque generalmente están presentes los reflejos tendinosos, que son aumentados; la conciencia está muy disminuida y existe una fuerte inhibición cortical. En dependencia de si se comienza la sesión ese día o de si es continuación de la fase anterior en la misma sesión, se aplica el signo-señal y se busca un fuerte grado de inhibición del sujeto. Algunos especialistas prefieren producir anestesia superficial antes de provocar la sordera selectiva. Consideramos que el grado de rapport alcanzado hasta aquí es bastante fuerte y nos permite trabajar cualquier aspecto antes, pero si no hay suficiente experiencia se puede invertir el plan y trabajar con anestesias superficiales antes de provocar la sordera.
BLOQUEO DEL RECEPTOR AUDITIVO (SORDERA SELECTIVA). El objetivo de este ejercicio es provocar una selectividad en el receptor auditivo que traiga como consecuencia que sólo sea escuchada la voz del hipnotizador y que cualquier otro estímulo sonoro no sea escuchado por el sujeto ni supere la voz del hipnotizador en intensidad estimuladora. Para lograr este objetivo se refuerza el relajamiento y el sueño del sujeto diciendo: Duerma... duerma... profundamente... tranquila y profundamente... respire... suave... tranquilo... tiene mucho sueño... mucho sueño... mucho sueño... duerma profundamente… El hipnotizador coloca ambas manos sobre los oídos del sujeto y continúa diciendo: Ahora... sus oídos quedarán cerrados... cerrados a todos los ruidos...todos los sonidos… sólo le interesa mi voz...no sentirá nada más que mi voz... sólo escuchará mi voz... exclusivamente mi voz... no sentirá ningún ruido... por fuerte que sea... ninguna otra voz... sólo la mía... sólo la mía... sus oídos están cerrados a todo lo que no sea mi voz... sólo escucha mi voz... imposible que usted pueda escuchar nada que no sea mi voz... nada podrá perturbar su sueño... sólo escucha mi voz... duerma... duerma.., tranquila y profundamente... sólo escucha mi voz... sólo mi voz… Se retiran las manos de los oídos del sujeto y se continúa con las mismas sugestiones. Existe un medio para comprobar si se ha cumplido el objetivo. Hacemos un pequeño ruido con una silla y observamos al sujeto para ver si tiene alguna manifestación que nos permita determinar si lo escuchó. También se pueden dar dos palmadas y observar las reacciones del sujeto. Cuando existe una verdadera selectividad auditiva, al sujeto ni tan siquiera le vibran los párpados. El fenómeno anterior se debe a que se ha formado una fase paradojal de inhibición de la corteza donde sólo se responde a estímulos débiles, en este caso a la voz del hipnotizador. ANESTESIA SUPERFICIAL. El objetivo de la anestesia superficial es reafirmar el grado de profundidad de la hipnosis del sujeto, aumentar la sugestibilidad y comprobar si efectivamente está ocurriendo en el sujeto lo que le estamos sugiriendo. Primeramente trataremos de provocar anestesia en la mano y el antebrazo del sujeto. Para lograr este objetivo, el hipnotizador puede apretar fuertemente la zona inicial del biceps braquial izquierdo para dificultar la circulación y dar pequeños golpes con un dedo en la mano y el antebrazo con vistas a estimular el efecto, e inmediatamente se comienza con las sugestiones verbales. Usted comenzará... a sentir en su mano y antebrazo... una sensación de entumecimiento... de calambre... cada vez más calambre... su cuerpo... relajado... totalmente relajado... usted duerme... profundamente... tranquila y profundamente... a medida que yo toco su mano y antebrazo... éstos comienzan a sentir… como una anestesia …(se suelta el brazo izquierdo del sujeto) poco a poco... se hace cada vez más fuerte... es como si se le pusiera un guante en la mano izquierda... que le cubre hasta el antebrazo... ya usted no siente nada... no tenga miedo... duerma... duerma... tranquila y profundamente... cada movimiento... de su respiración... lo hace dormir…más profundamente... imagine ahora... imagine ahora... que tiene puesto un guante... un guante grueso de cuero... que le protege... creando insensibilidad… una falta de sensibilidad total... en la mano y el antebrazo... ya usted no es capaz de sentir dolor... su brazo y su mano... están anestesiados... insensibles... imposible sentir... no siente nada su mano... ni su antebrazo izquierdo... están anestesiados… anestesiados... imposible sentir... imposible sentir... en la otra mano toco y usted siente... pero en la izquierda no siente nada... no siente nada... imposible sentir...
A continuación se toma un objeto puntiagudo (una aguja, un alfiler) que debe estar esterilizado y cerca, y se pincha el brazo izquierdo para observar las reacciones del sujeto. Cuando se logra producir el fenómeno, no existe ninguna reacción, sino que hay una marcada insensibilidad. Imposible sentir... su brazo está anestesiado... yo pincho su otro brazo y usted lo siente... pero en el izquierdo no siente nada... Se debe realizar una comparación tocando con el objeto puntiagudo ambas manos y observar la reacción del sujeto. La respuesta esperada y natural es retirar la mano derecha y dar muestra de dolor, y no sentir nada en la izquierda. Si el ejercicio fue positivo, se procede a eliminar la falta de sensibilidad de la mano y el antebrazo. Duerma... duerma tranquila y profundamente... usted tiene mucho sueño... mucho sueño... usted tendrá sensibilidad otra vez... cuando yo cuente hasta tres... usted tendrá de nuevo sensibilidad... en su brazo izquierdo tendrá de nuevo sensibilidad... su brazo izquierdo tendrá de nuevo sensibilidad... cuando yo cuente hasta tres... y dé un pequeño toque en su mano... usted tendrá sensibilidad nuevamente en su brazo izquierdo... uno... sentirá de nuevo sensibilidad en su brazo izquierdo... dos... no tenga miedo... tres... ya usted es capaz de sentir... ya su brazo no está anestesiado... su brazo izquierdo ya lo siente todo... Se debe estimular el brazo izquierdo con el objeto puntiagudo para comprobar si efectivamente ya se tiene sensibilidad y existe reacción de dolor ante el pinchazo. Otra forma de producir este mismo fenómeno es pasando sobre la mano y el antebrazo un algodón mojado en un líquido frío o en alcohol, y sugerir que es anestesia, que provocará insensibilidad local en su brazo. Se utiliza el mismo procedimiento anterior de repetición constante de la sugestión verbal. Generalmente esta forma de provocar anestesia es más efectiva. Las indicaciones son las siguientes: Su cuerpo está totalmente relajado... sus párpados pesados... cansados... pegados... usted está profundamente dormido... ahora yo le aplicaré un anestésico... lo aplico sobre su mano y antebrazo... un anestésico de acción rápida… muy efectivo... A medida que usted sienta el líquido... sentirá una sensación fría… que le anestesia la mano y el antebrazo... no tenga miedo... no tenga miedo... su mano y antebrazo... están totalmente anestesiados... imposible sentir... imposible sentir, imposible sentir... usted no siente ninguna estimulación...
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Novena parte.7 Se debe realizar también la prueba de pinchar el brazo y después se restablece la sensibilidad tal como se explicó para la variante anterior. Con esta técnica hemos encontrado sujetos que han extendido la insensibilidad hasta el hombro izquierdo, a pesar de no habérsele sugerido. A continuación presentamos algunas recomendaciones que no deben olvidarse ni dejarse de llevar a cabo bajo ninguna circunstancia:
1. La aguja, alfiler u otro objeto punzante que se vaya a utilizar debe estar esterilizado. 2. Evite crear traumatismos en la piel del sujeto atravesándola con el objeto puntiagudo 3.
cuando no sea necesario hacerlo. Si se atraviesa la piel, aplique siempre algún desinfectante. Nunca despierte al sujeto sin eliminar antes la pérdida de sensibilidad y mucho menos despertarlo con la piel atravesada.
Una vez que se ha logrado establecer la anestesia en la mano y el antebrazo del sujeto, es posible
crear esta misma insensibilidad al dolor en cualquier otra parte del cuerpo, con la firme seguridad de que es igualmente efectiva, aunque si fuera necesario utilizarla para una intervención quirúrgica por intolerancia a los anestésicos, se debe trabajar al paciente en la última etapa (sonambulismo), que es donde existe mayor grado de sugestionabilidad por la fase de inhibición paradojal generalizada que se forma en la corteza cerebral. Este mismo procedimiento se puede aplicar para las zonas faciales cuando se quiere producir analgesia o anestesia con vistas a intervenciones odontológicas. En este grado de profundidad hipnótica es posible realizar trabajos odontológicos sencillos. Cuando éstos sean de larga duración, se debe trabajar con hipnosis sonambúlica (Catalepsia bucal con anestesia de la mucosa). SONAMBULISMO. Este es el paso de más complejidad de la hipnosis, donde llega a su mayor profundidad. En esta fase es posible establecer cualquier fenómeno especial provocado mediante la heterosugestión. No existe recuerdo sobre lo ocurrido en este estado, al despertar, a no ser que se aplique una sugestión posthipnótica. Es posible en la hipnosis sonambúlica crear estados de catalepsia braquial, flaccidez total, cualquier tipo de alucinación, amnesias parciales, aumento de capacidades, disminución o aumento de umbrales sensoriales, anestesias profundas, puente humano, entre otros. Es el paso necesario para realizar cualquier intervención quirúrgica en un paciente. Cuando cualquier especialista realiza una inducción hipnótica, trata siempre de alcanzar este estado en el sujeto. No todas las personas son aptas para llegar a esta fase, a causa de la variación del grado de susceptibilidad hipnótica de las mismas. En la fase de sonambulismo se presenta un fenómeno especial de conciencia, superior al que hemos visto en las etapas anteriores de la hipnosis. En esta fase, la conciencia se reduce considerablemente y existe amnesia posterior más profunda, aunque es posible emplear sugestiones posthipnóticas que hagan al sujeto recordar lo sucedido. SUEÑO SONAMBÚLICO. Antes de explicar cómo profundizar el sueño para inducir el sueño sonambúlico, es necesario hablar de algunas de las características de esta etapa de la hipnosis. En la hipnosis sonambúlica se crea un estado parecido a la fase paradójica del sueño normal. Como ya vimos, el sueño paradójico se caracteriza por movimientos oculares rápidos, erección penil en el 80% de los sujetos masculinos, actividad onírica, flaccidez del tono muscular, aumento de la resistencia eléctrica de la piel y fluctuaciones en los niveles de tensión arterial, pulso, frecuencia respiratoria, volumen de orina y secreción ácida del estómago. La mayoría de estas características se presentan en la hipnosis cuando se sugieren por el hipnotizador, pero sólo en la etapa sonambúlica. En el sueño paradójico se producen la mayoría de los sueños. Numerosos experimentos han demostrado que personas que regularmente dicen que no sueñan, cuando se les despierta en la fase paradójica reconocen que en ese momento estaban soñando. Sin embargo, si se les deja durmiendo, no son capaces de recordar las incidencias de sus sueños; es por eso que por lo regular niegan que sueñan. Sobre la causa de los sueños hay muchas teorías, en las cuales no vamos a incursionar. En el sueño sonambúlico se le puede sugerir al sujeto hipnotizado que sueñe libremente y éste tiende a reproducir varios de los patrones típicos del sueño paradójico (movimientos oculares rápidos y
otras características). Estos sueños hipnóticos han sido llamados sueños de fantasía inducidos hipnóticamente y entre éstos y los sueños normales nocturnos existen diferencias en cuatro dimensiones significativas: circunstancias, contenido, fisiología y percepción subjetiva. Los sueños hipnóticos son más breves y presentan más distorsión que los sueños normales. Mientras más susceptible es el sujeto, más tendencia tiene a soñar bajo hipnosis. Para pasar al sueño sonambúlico, lo primero que hay que tener en cuenta es que existe una selectividad auditiva que provoca un bloqueo a todo ruido, conversación o sonido que no sea la voz del hipnotizador. Nos encontramos en una fase de la hipnosis donde hay un estado paradojal de la corteza en el que los estímulos débiles provocan por lo general una reacción fuerte; es decir, debemos cambiar la tonalidad de la voz y dar las sugestiones en voz baja, en forma de susurro y cerca de los receptores auditivos. Todas las sugestiones verbales se limitarán a inducir sueño y para esto se combinan las indicaciones. Está durmiendo tiene mucho sueño... está cansado... muy relajado... muy abandonado... muy agotado... su cuerpo muy pesado...duerma... duerma... cada vez más profundamente... usted tiene mucho sueño... necesita dormir... dormir profundamente... duerma...duerma... tranquila y profundamente... tiene sueño... mucho sueño... Es necesario continuar repitiendo de forma monótona durante un tiempo, hasta comprobar que el sujeto presenta una total flaccidez, que la respiración es fuerte y profunda, y que la cabeza está completamente descolgada. Una vía para profundizar el sueño es la utilización de la respiración sincronizada. Al sujeto se le controla el ritmo respiratorio diciéndole que a partir de ahora inspirará y espirará profundamente a medida que se le ordene que lo haga. Entre una sugestión de aspiración profunda y la siguiente de espiración o viceversa, se deja una breve pausa de uno o dos segundos. Cuando se haya establecido la frecuencia deseada se le indica que continúe solo, haciendo lo mismo. Al cabo de 10 ó 15 minutos de respiración profunda sin sugestión (es decir, sin repetirle al sujeto la frecuencia de inspiración y espiración), sobreviene el estado hipnótico sonambúlico. ABRIR LOS OJOS SIN DESPERTAR. Con este paso se comprueba el grado de profundidad de la hipnosis del sujeto. Cuando se le oriente que abra los ojos, la mirada debe estar fija y los ojos semicerrados. Las indicaciones son las mismas que las del paso anterior cuando se profundizaba en el sueño. Luego se le sugiere: Usted está completamente dormido... muy dormido... cuando yo cuente hasta tres... sus ojos se abrirán... pero continuará dormido... profundamente dormido... usted estará con los ojos abiertos, pero estará completamente dormido... cuando yo cuente hasta tres... abrirá los ojos... pero quedará... completamente dormido... profundamente dormido... Si el sujeto efectivamente está en la fase de sueño hipnótico sonambúlico, no pestañeará y los estímulos externos serán insignificantes para él. A medida que la conducta del sujeto se acerca a ésta, el grado de profundidad de la hipnosis será mayor.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Novena parte.8 CONVERSAR SIN DESPERTAR.
Este ejercicio cambia por completo las características de la hipnosis, pues hasta ahora el sujeto respondía a las estimulaciones de las sugestiones heterosugestivas influidas por medios exteroceptivos. En lo adelante se hace reaccionar por primera vez la interocepción de su propia fonación, al tiempo que se estimulan las capacidades de análisis y síntesis corticales. Este paso tiene gran significación, pues se tiene la conciencia en un estado especial y permanece la inhibición de la corteza. Este fenómeno se utiliza por muchos hipnoterapeutas para explorar aspectos y acontecimientos importantes del paciente que permitan establecer catarsis. Este es el método hipnocatártico, dirigido a la búsqueda del origen de un síntoma determinado. Para trabajar con este grado de profundidad hipnótica no se deben hacer preguntas directas, sino que éstas deben parecer triviales, neutras, que no perjudiquen el proceso de inhibición. Si se va a utilizar la catarsis, también es necesario preparar al sujeto y no olvidar que generalmente esta fase no se recuerda, por lo que si se considera necesario que el sujeto recuerde algo de lo que diga o haga hay que dejar un señalamiento posthipnótico que le permita representarse mnémicamente lo que al hipnotizador le interesa. Cuando se tiene la seguridad de que el sujeto se encuentra en la etapa de hipnosis sonambúlica, se le dan las siguientes consignas: Duerma profundamente... escuche bien... hay personas que estando dormidas son capaces de hablar y conversar sin despertar. Usted mismo podrá hacer eso ahora. Yo le haré algunas preguntas y usted las responderá sin despertar, y continuará completamente dormido. Las preguntas no tendrán importancia y no debe tener ningún temor, que no va a revelar ningún aspecto de su vida que usted no quiera que se conozca. Esto se le debe decir en forma coloquial y no como hasta este momento se habían dado las sugestiones. Usted está dormido... muy dormido... dormido profundamente...sólo escucha mi voz… sólo escucha mi voz… usted puede hablar...puede hablar sin despertar... sin despertar... Se le tocan levemente los músculos de la cara, la garganta y de la zona tiroidea, y se continúa diciendo: A medida... que yo toco su cara... y su garganta... usted va a ser capaz de mover sus músculos... sus cuerdas vocales... ya son capaces de emitir sonidos... usted va a poder hablar... podrá responder a mis preguntas... sin despertar…continuando profundamente... dormido... tranquilo... cansado... agotado... dormido... tranquila y profundamente... yo voy a contar hasta tres y usted podrá responder... responder a mis preguntas... uno... dos... tres... ¿cómo usted se llama?" Se debe esperar la respuesta; si no aparece, se vuelve a estimular cada zona antes mencionada y se aplica la sugestión. Si en cambio, responde correctamente, se le pregunta: ¿Dónde vive usted?... está muy bien... como usted ve... puede hablar... responder a mis preguntas pero continúa profundamente dormido... duerma... duerma tranquila y profundamente... Por lo general, con dos o tres preguntas de este tipo y la sugestión de Usted puede hablar..., el sujeto está capacitado para responder a la sugestión "Hábleme de su vida..." Hay sujetos que al principio, a causa del profundo grado de inhibición, balbucean mal las respuestas, se les traba la lengua. Algunos cuentan su vida con una pequeña estimulación verbal, como, por ejemplo, “ Hábleme de su vida... o simplemente dígame lo que usted desee..." Hemos encontrado sujetos que no responden a las preguntas a pesar de ser estimulados dos o tres veces. En estos casos, se debe esperar a otra sesión donde generalmente sí lo hacen.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Décima parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Décima parte Dr. Alberto Ochoa Govin.
Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
Representaciones alucinatorias Catalepsia general Sugerencias posthipnóticas Anestesia Fenómenos de memoria Preguntas frecuentes acerca de la hipnosis ¿Que podemos hacer y observar con la hipnosis? ¿Para qué sirve la hipnosis? ¿Cómo aprender a hipnotizar? ¿Cómo se llega al estado hipnótico? ¿Todo el mundo puede ser hipnotizado? ¿Quién puede hipnotizar? ¿Se puede quedar alguien eternamente dormido por la hipnosis? ¿Tiene la hipnosis contraindicaciones? ¿Tiene el hipnotizador algún poder especial? ¿Se puede inducir a alguien a realizar lo que no desea a través de la hipnosis?
REPRESENTACIONES ALUCINATORIAS. En este estado profundo de hipnosis, es posible crear representaciones alucinatorias de todo tipo, pero recomendamos las acústicas, visuales y olfatorias, que aparecen con más facilidad. La inducción de este fenómeno sensoperceptual es importante si el sujeto va a ser sometido a hipnoanestesia. Los fenómenos alucinatorios se sugieren después de preparar los analizadores sensoriales; para ello se crean cambios térmicos en la piel del sujeto, como las sensaciones de calor o frío. Alucinaciones visuales, acústicas y olfatorias. Para producir estos fenómenos sensoperceptuales utilizamos la imaginación del sujeto; partiendo de un objeto físico real se provoca una desrealización (por ejemplo: se le pone una pelota en la mano y se le sugiere que es una bola de hierro muy pesada y que no podrá soportar su peso). Si se utiliza el ejemplo de la pelota, cuando se le va a poner en la mano se le aplican al sujeto sugestiones verbales que indiquen la imposibilidad de soportar el peso, como puede ser: " Se le va a poner una bola de hierro en la mano... usted no podrá soportar su peso...” Debe utilizarse la repetición monótona, con los intervalos correspondientes de dos a tres segundos entre cada sugestión. La respuesta positiva, como es lógico suponer, es no poder soportar el peso de la pelota; la mano baja con la pelota o sencillamente ésta se le cae de la misma. Posteriormente se pasa a la alucinación visual. Para esto se le ordena abrir los ojos tal como hemos señalado y se le dice que verá ante sí la representación de un objeto cualquiera escogido por el hipnotizador, pero que sea conocido por el sujeto y que no sea una cosa irreal o fantástica.
Por ejemplo: "Yo contaré hasta tres... y usted abrirá los ojos... continuará dormido... pero verá ante sí... un caballo… que se encuentra... a cincuenta metros de usted...” Esta sugestión se repite varias veces para establecer la conexión nerviosa del fenómeno sensoperceptual que estamos tratando de crear. Es importante no sugerir objetos o fenómenos que sean rechazados por la ideología y creencias del sujeto. Las alucinaciones acústicas y olfatorias se establecen de la misma forma, tomando en consideración que el estimulo verbal que se vaya a sugerir corresponda a las posibilidades del analizador. Después que se establece la alucinación, se debe preguntar al sujeto qué ve o qué está sucediendo, para analizar el contenido vivencial de la alucinación. CATALEPSIA GENERAL. La catalepsia general constituye para nosotros el fenómeno hipnótico que nos determina con más precisión y seguridad el grado de profundidad de la hipnosis. El sujeto presenta una contracción muscular generalizada que es prácticamente imposible de lograr en una persona en estado de vigilia o en otro estado de conciencia, a no ser que lleve años entrenando su musculatura para ello. Una forma de catalepsia es lo que se conoce como el "puente humano", en el que el sujeto está totalmente rígido, se puede colocar en una posición horizontal sobre dos puntos de apoyo, uno colocado en la cabeza y el otro en los pies, y el sujeto es capaz de soportar gran peso en el estómago, aunque esto no hace falta medirlo para comprobar si existe la catalepsia general. Una manera de comprobar si la catalepsia general está presente es tocar los músculos del sujeto, constatando si los mismos aparecen en una completa contracción. La base fisiológica de la catalepsia general es el foco de excitación dominante que se establece en las zonas frontales del cerebro, donde se encuentra la tercera unidad funcional. Al sujeto se le dan las siguientes indicaciones: Usted está profundamente dormido... profundamente dormido... se siente bien... tranquilo... firme y seguro... ponga atención sólo a mi voz... sólo puede escuchar… mi voz... respire tranquila y profundamente... todos sus órganos internos... funcionan normalmente... fíjese bien... a medida que yo toque su cuerpo... éste comenzará a ponerse rígido... muy rígido... muy duro... muy contraído… Se comienza tocando el brazo izquierdo, se pasa después al derecho y posteriormente a los miembros inferiores; se continúa con los músculos del cuello. Recomendamos no pasar de un miembro a otro ni de un músculo a otro sin haber logrado la tensión muscular máxima del que se está trabajando. "Cada vez que yo toque sus músculos... éstos se ponen más rígidos...muy duros… muy rígidos… yo toco su brazo izquierdo… y éste se contrae... sus manos cerradas… cierre fuertemente su mano izquierda... bien cerrada... todo su brazo duro... muy duro… muy contraído... todo su brazo está duro y en tensión... su mano fuertemente cerrada…” La posición del sujeto para este ejercicio debe ser de pie o acostado. "Usted puede respirar... tranquila y profundamente... todos sus órganos internos funcionan normalmente… su respiración es normal... ahora el brazo derecho se contrae... igual que el izquierdo... duro y fuerte... su mano cerrada fuertemente..."
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Décima parte.2
Se colocan ambos brazos contraídos al lado del cuerpo y se pasa a la contracción muscular de los miembros inferiores. Es importante que el hipnotizador dé en los lados del sujeto con ambas manos para buscar mayor tensión en los músculos y se le dice imperativamente "Sus músculos están duros... duros... fuertes... muy fuertes…todo su cuerpo está contraído….es como un fuerte pedazo de acero… de hierro... respire… respire... respire tranquila y profundamente… todo su cuerpo duro y fuerte... respire tranquila y profundamente... tranquila y profundamente...” Esta indicación es muy importante y debe observarse si la respiración del sujeto es normal. Un hipnotizador con experiencia puede constatar a simple vista si existe una fuerte contracción muscular generalizada; de lo contrario, es necesario comprobar el grado de tensión tocando todos los músculos. No se debe mantener por mucho tiempo al sujeto en este estado, para no producir fatiga muscular, ya que la condición cataléptica se caracteriza por la contracción muscular generalizada, así como por la inmovilidad y plasticidad. En esta situación existe analgesia completa. El estado cataléptico permite que los músculos se mantengan por mucho rato en posiciones incómodas y difíciles de sostener, sin síntomas de fatiga (temblor). Esto puede tener por causa la naturaleza simpática de la inervación muscular. Aparece un tono muscular dependiente de influencias simpáticas, paralelamente con un ligero tétanos de los antagonistas. Como las fibras musculares inervadas por vía simpática son incansables, es menos factible la percepción de la sensación de fatiga en estado hipnótico como consecuencia de la contracción ligeramente tetánica de los antagonistas. Para que el sujeto pase de nuevo a un proceso de relajación se crea una inhibición muscular total. Para esto también se tocan los músculos, pero en vez de sugerir excitación y contracción, se indica flojedad y relajación. Está muy bien… usted ha cooperado muy bien... ahora yo tocaré sus músculos y éstos se van a relajar totalmente… afloje su cuerpo... todo su cuerpo flojo... yo toco sus músculos... y éstos se aflojan totalmente... yo toco su brazo izquierdo y él se afloja... sus manos se abren... su brazo se pone flojo... relajado... muy relajado... ahora el derecho... flojo… muy flojo... relajado... completamente relajado... todo su cuerpo está relajado... Poco a poco, siguiendo el mismo orden en que se provocó la tensión muscular, se va creando la relajación de la musculatura estriada, hasta llegar a un estado de flaccidez total. Se deben hacer sugerencias para eliminar el posible dolor muscular. Su cuerpo relajado... respire tranquila y profundamente... a usted no le duele nada... todo su cuerpo relajado... completamente relajado totalmente relajado... duerma... duerma... tranquila y profundamente... nada le duele... nada le duele... nada le duele... SUGERENCIAS POSTHIPNÓTICAS. La sugerencia posthipnótica no es más que la indicación de una sugestión que surtirá efecto luego que el sujeto salga del sueño hipnótico. El establecimiento de este fenómeno tiene como objetivo dejar fijado un reflejo condicionado que aparecerá cuando se le presente un estimulo determinado al sujeto. Para esto se indica: Usted está profundamente dormido... profundamente dormido... duerma... duerma tranquila y profundamente... ponga atención sólo a mi voz… ponga atención sólo a mi voz... al poco rato que yo le despierte... miraré mi reloj... y usted automáticamente... me preguntará qué hora es...
Esto se debe repetir varias veces, de forma que se fije bien la huella en la memoria del sujeto. El tiempo que se debe esperar para presentar el estimulo que desencadene la acción sugerida debe ser diez minutos aproximadamente después que se ha despertado. En el ejemplo que ilustra este fenómeno, el hipnotizador mirará su reloj y si la sugestión posthipnótica ha quedado bien establecida, el sujeto ejecutará la orden encomendada. Cualquier tipo de sugestión posthipnótica se establece más o menos de la misma forma. Se utiliza muchas veces para sugerir al sujeto que memorice algunos aspectos importantes de su persona y de problemas que ha evidenciado en estado de sueño profundo y que al despertar no se recuerdan. Esto se hace cuando se trabaja con el método hipnocatártico con vistas a hacer consciente un problema que hasta ese momento permanecía enmascarado. En términos generales podemos decir que no existe ninguna diferencia entre las sugestiones intrahipnóticas y las posthipnóticas, pero cuando la sugestión aplicada al sujeto tiene imposibilidad de ser ejecutada se produce una angustia total. Todo el que ha trabajado con sugestiones posthipnóticas conoce las reacciones emocionales que siente el sujeto cuando se ve imposibilitado de cumplir una orden posthipnótica. Por eso alertamos ante el peligro de hacer yatrogenia. Otro aspecto que se debe tener en cuenta es que a veces, cuando se ejecuta una sugestión posthipnótica, el sujeto puede caer en hipnosis espontáneamente, quizás como un mecanismo de defensa con el fin de eludir responsabilidades. ANESTESIA. Ésta es una condición que ya practicamos en forma simple en el cuarto paso, pero en la etapa sonambúlica es posible lograr anestesia en cualquier parte del cuerpo, incluso anestesia profunda. Catalepsia bucal con anestesia de la mucosa. Éste es un fenómeno que se provoca para facilitar el trabajo del odontólogo y del otorrinolaringólogo en aquellos pacientes que, por alergias o por trastornos de cualquier tipo, no son tolerantes a la anestesia química. Se comienza indicando al paciente lo siguiente: Deje su cuerpo relajado... los músculos de su rostro... déjelos completamente relajados... todos los músculos de su cara se relajan su boca... su mandíbula... se relajan... completamente relajados…flojos... sueltos... su boca se abre… abra su boca de forma natural... relajada... sin ninguna contracción... suelta... floja... relajada... Se toca el surco mentoniano (debajo del labio) del paciente y se le hace ligera presión hacia abajo e inmediatamente se le sugiere: su boca está abierta… se abre cada vez más... poco a poco... se abre cada vez más... su boca se quedará abierta... completamente abierta... los músculos laterales de su boca... (se toca en la masa muscular geniana, con vistas a excitar los músculos de la cara) se contraen… se contraen fuertemente… están cada vez más rígidos, más duros, como si fueran de hierro... de acero... su boca completamente abierta... imposible cerrar… imposible cerrar... sólo yo le puedo cerrar la boca... imposible cerrar... imposible que usted la cierre, está completamente abierta… imposible cerrar… imposible cerrar… intente y verá que no puede... imposible cerrar… imposible cerrar…sólo yo la puedo cerrar... ahora se va a producir una insensibilidad…usted va a sentir una anestesia... va a sentir cómo se anestesia… ahora yo le estoy pasando una anestesia… un anestésico… Se le pasa al paciente un algodón húmedo en la zona donde se necesita anestesiar. Yo le paso este liquido anestésico... que provoca insensibilidad…ya se está produciendo una anestesia local... esa zona quedará completamente anestesiada… toda su boca queda insensible... poco a poco…completamente anestesiada… sin dolor... imposible sentir ningún dolor... ningún dolor... su boca... toda su boca... está completamente anestesiada… Con una aguja esterilizada se pincha al sujeto para comprobar el grado de inhibición al dolor.
El proceso de reversión del fenómeno es el siguiente: Ahora... poco a poco… usted… podrá sentir que desaparece la anestesia aparece la sensibilidad... sus músculos de la cara… se aflojan…cada vez más... ya puede cerrar su boca… puede cerrar su boca… sus músculos se ablandan... se ablandan se relajan… completamente relajados… duerma... duerma tranquila y profundamente…
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Décima parte.3 Como hemos visto, la hipnosis puede ser utilizada por odontólogos y cirujanos maxilofaciales, pero nunca como recurso catártico, sino como simple forma de producir analgesia y anestesia en aquellas personas que, por diferentes razones médicas, no pueden ser anestesiadas por otras vías. Las técnicas que recomendamos para el odontólogo le permitirán preparar rápidamente al paciente para la relajación o contracción de la mandíbula cuando sea necesario, así como lograr la quietud de la lengua, con un control adecuado de los reflejos nauseosos, ventajas que son sumamente importantes sobre todo en niños y en pacientes de características nerviosas. Se han realizado investigaciones para comprobar la disminución de las hemorragias y de los períodos de cicatrización cuando se utilizan los métodos de inducción hipnótica. El odontólogo puede emplear la hipnosis como sugestión vigil solamente, combinada con técnicas de relajación, utilizándola en grados más o menos profundos o combinándola con efectos anestésicos, e incluso sugestiones posthipnóticas. Para obtener analgesia suficiente para el trabajo de odontología no necesariamente tiene que alcanzarse una hipnosis sonambúlica, sino que muchas veces con un cuarto paso (hipnosis profunda) de la inducción se logra el objetivo. Si la intervención es demasiado dolorosa y de larga duración, el profesional debe estar convencido de que el paciente permanecerá durante todo el trascurso de la intervención en estado hipnótico, pues una pérdida del rapport puede llevar al paciente a la vigilia y producirse un intenso dolor; por eso, en los casos de intervenciones de larga duración, recomendamos trabajar en fase de hipnosis sonambúlica. Otra recomendación importante es tratar por todos los medios que el paciente no realice movimientos voluntarios, como escupir y nunca despertarlo antes de haber terminado todo el trabajo. Es necesario aplicar sugestiones posthipnóticas que hagan olvidar al paciente lo ocurrido, así como que indiquen que la analgesia continuará cuando se despierte. Anestesia profunda. Sólo es necesario provocar anestesia profunda cuando el sujeto va a ser sometido a intervenciones quirúrgicas y no es posible aplicarla por medios biológicos. La anestesia profunda debe ser provocada después de los fenómenos alucinatorios y de la catalepsia general. El procedimiento es el mismo que se utiliza en la anestesia superficial en el estado de hipnosis profunda, pero indicando que existe una pérdida completa y profunda de la sensibilidad. FENÓMENOS DE MEMORIA. Son variados los fenómenos de memoria que se producen por medio de la hipnosis; aparecen espontáneamente desde el tercer paso (sueño hipnótico), pero pueden ser sugeridos desde el segundo (fenómenos corporales).
A partir de la hipnosis profunda el sujeto por lo general no recuerda al despertar lo que se le ha sugerido, aunque por medio de las sugestiones posthipnóticas se puede hacer recordar lo que le interese al hipnotizador. Amnesia parcial. La amnesia parcial es un fenómeno especial de la memoria que consiste en el olvido de un hecho cualquiera de la vida del sujeto, que puede ser un accidente, o un trauma psíquico. La posibilidad de crear amnesias parciales en el sujeto hipnotizado, mediante la sugestión verbal, nos permite eliminar de su conciencia experiencias y situaciones psicotraumatizantes que pueden estar afectándolo. El procedimiento es sencillo y se puede realizar después de establecer el sueño hipnótico del tercer paso, pero preferimos y recomendamos trabajar los fenómenos de memoria en la fase de sonambulismo. Para esto preparamos al sujeto de la siguiente forma: Duerma... duerma tranquila y profundamente... escuche bien... cuando yo le mande a despertar... usted habrá olvidado esa preocupación que le inquieta… En este momento se le indica al sujeto lo que queremos que olvide, o sea, el trauma psíquico o el hecho que le crea preocupación. "Será imposible recordar… imposible recordar… imposible recordar ese hecho... cuanto más se esfuerce por recordar... más desaparecerá de su mente... es como si no hubiera ocurrido… se borra de su memoria... será cada vez un hecho más confuso... ese recuerdo ha desaparecido de su memoria... imposible recordar... imposible recordar… ahora voy a contar hasta tres… cuando llegue a tres… usted abrirá los ojos... continuará dormido pero no recordará ese hecho…será imposible recordar…uno... imposible recordar…aunque usted intente no puede… dos... imposible recordar… se borra totalmente de su mente… imposible recordar... tres... puede abrir los ojos…imposible recordar... imposible recordar... imposible recordar…” En este momento se aprovecha que el sujeto abre los ojos y se insiste en la sugestión de amnesia parcial. Como medida de comprobación se le pregunta: ¿Recuerda algo?, ¿sabe si hemos conversado sobre algo?. La mayoría de los sujetos manifiestan su incapacidad para recordar el hecho que queremos borrar de su memoria. Su mirada continúa fija y perturbada e informa que no recuerda nada. Una vez que se ha comprobado el logro de la amnesia parcial deseada, se le indica inmediatamente: Cierre sus ojos… continúe profundamente dormido. Profundamente dormido... ya ese hecho se ha borrado de su mente, duerma... duerma tranquila y profundamente…tranquila y profundamente... Se le debe dar una sugerencia posthipnótica que lo incapacite para recordar al despertar. Amnesia profunda. La amnesia profunda o total es la incapacidad de recordar un período de la vida. Existen tres variantes: amnesia de fijación (anterógrada), amnesia de evocación (retrógrada) y amnesia retroanterógrada. La amnesia total puede ser inducida solamente en la etapa de sonambulismo. Permite extinguir las conexiones nerviosas patológicas y olvidar incluso el hecho de haber sido preparado hipnóticamente para este fenómeno. Al sujeto se le indica que memorice un hecho cualquiera de su vida, algo que sabemos que tiene gran significación para la entidad nosológica del paciente y que se concatena con la fecha en que se instalaron los trastornos del mismo. Se le indica que ese período se olvidará totalmente. Se sigue la misma técnica que en la amnesia parcial, pero eliminando el recuerdo total del período. Con posterioridad establecemos una serie de acontecimientos previamente elaborados que le
sugerimos al paciente como vividos por él en esa época y que ocuparán el lugar de los acontecimientos que hemos borrado de su memoria. Es tal la profundidad que adquiere este fenómeno de memoria en los sujetos que se encuentran en la etapa sonambúlica del sueño hipnótico, que incluso pueden olvidar hasta su propio nombre. Esta prueba es sumamente peligrosa si se realiza sin tener suficiente experiencia y buen entrenamiento, pues puede desencadenar trastornos psicológicos graves en el paciente. Como la amnesia total es un fenómeno complejo, dividiremos su explicación en: amnesia de fijación y amnesia de evocación.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Décima parte.4 Amnesia de fijación (anterógrada): este fenómeno se caracteriza por el olvido de hechos recientes, pero recordando los pasados. Es un trastorno de la conciencia que se observa en histéricos y epilépticos. En la etapa sonambúlica de la hipnosis se puede producir experimentalmente este fenómeno. Se utiliza para borrar hechos recientes o lo contrario hacer recordar lo que se ha olvidado y queremos que se memorice. Se comienzan las indicaciones de la siguiente forma: Duerma... duerma... tranquila y profundamente... tranquila y profundamente...tranquila y profundamente... escuche bien... hace varios días a usted le sucedió... Se reproduce la situación psicotraumatizante que pretendemos hacer olvidar al paciente. Ahora yo pondré mi mano en su cabeza... usted sentirá que le aprieto su cabeza... aunque no le duela lo siente... cuando yo cuente hasta tres... usted recordará un hecho agradable de su vida... Muy agradable... es como si lo viviera de nuevo... Usted sentirá alegría... cuando yo cuente hasta tres... usted recordará un hecho muy agradable de su vida... uno... siente que le sujeto la cabeza... Dos... recordará un hecho agradable de su vida... muy agradable... que provocará una expresión de alegría en su rostro. “tres...” Por lo general el paciente sonríe y se ve claramente la manifestación de alegría. En cuanto esto suceda se le indica: Está muy bien... ahora puede hablar sin despertar... ahora diga lo que recuerda... diga lo que ha recordado... sin despertar... Cuando el sujeto exprese verbalmente el recuerdo que le causó alegría, entonces el hipnotizador reafirma la huella mnéstica diciéndole que no lo olvidará más y comienza con una modificación de la relación de tiempo, es decir, que se hace recordar el hecho como reciente, hasta situarlo en el período que se quiere borrar de la mente del sujeto. Esto se hace de la siguiente forma: Ese recuerdo que le crea gran alegría... se fija en su mente... es muy agradable... es como si hubiera ocurrido recientemente… usted lo recuerda perfectamente... ahora ya no es capaz de recordar... (se menciona a continuación lo que queremos borrar del período y hacemos que en su lugar se recuerde solamente el hecho agradable que estamos fijando) Ahora usted recuerda... lo que le crea alegría... (se menciona lo que provocó alegría y satisfacción) pero no puede recordar lo desagradable... no se asuste... ya no podrá recordar ese hecho... es imposible recordar... de ese periodo usted recuerda lo agradable... lo agradable... cuando usted despierte... va a recordar que en ese período de su vida... ocurrió ese hecho que le produce tanta alegría... lo recordará como ocurrido en esa época... Esto se le repite varias veces para establecer en el sujeto un nuevo sistema de conexiones temporales que modifiquen la relación temporoespacial del hecho ocurrido. Por lo general, este fenómeno de memoria se produce sin mayor dificultad, sin dejar de ser por ello un proceso complejo al que es necesario dedicarle gran cuidado y esmero.
Amnesia de evocación (retrógrada): éste es un fenómeno patológico de la memoria donde se pierden recuerdos ya fijados (evocación). Se observa mucho cuando existen psicotraumas muy fuertes, que pueden incluso hasta provocar el olvido del nombre del paciente. Por medio de la hipnosis profunda o sonambúlica se puede inducir este fenómeno al igual que lo inverso (hacer recordar lo que se olvidó). El procedimiento es el mismo que en el caso anterior, pero en vez de provocar el cambio de relación en tiempo y espacio en períodos recientes, se realiza en etapas anteriores. Hipermnesias. Por medio de la sugestión hipnótica en estado sonambúlico es posible crear en el sujeto estados especiales de la conciencia que permitan recordar hasta páginas enteras de un libro cualquiera. Son numerosas las investigaciones realizadas al respecto y sumamente satisfactorios los resultados. Este proceso se ha utilizado para el aprendizaje rápido de idiomas. La técnica es sencilla. Al sujeto se le aplican sugestiones verbales que indiquen que su memoria es muy buena y que es capaz de recordar todo lo que se le dice. Se le deben dar sugestiones posthipnóticas que permitan hacer recordar una vez despierto y reproducir lo que se ha dejado firmemente grabado en su memoria. Otro fenómeno interesante y muy utilizado en hipnoanálisis es la regresión de la edad. Mediante la sugestión en hipnosis profunda o sonambúlica, es posible hacer recordar al sujeto todos los detalles de su vida e incluso comportarse como si tuviera la edad que se le sugiere. La técnica es bastante sencilla. Se le dice al sujeto que va a tener un placentero viaje en el tiempo y en el espacio y que va a recordar perfectamente detalles olvidados de su vida. Cuando yo cuente hasta tres... usted irá hacia atrás en el tiempo....irá hacia atrás en los años... hasta que usted tenga veinte años...Uno... dos... tres... usted tiene veinte años... La regresión de la edad debe realizarse escalonadamente, desde la edad actual hasta donde queramos llegar, pero siempre reforzando el estímulo y suministrando al sujeto la mayor cantidad posible de datos sobre la edad que queremos que él tenga hipnóticamente. A medida que nos alejamos de la actualidad en el proceso de regresión, se produce una mayor imprecisión en la edad; por ejemplo, si queremos llevar al sujeto a los siete años, es posible que él se detenga y ubique a los nueve o que regrese a los cinco; por esa razón hay que ayudar a veces (y cada vez que podamos) al sujeto repitiéndole la sugestión y suministrándole datos complementarios (año en que él tenía esa edad. lugar donde estaba, etc.). El sujeto será capaz de recordar detalles increíbles de su vida, incluso cosas que ya consideraba borradas de la memoria. La regresión de la edad puede hacerse por revivificación, reexperimentando los hechos de esa edad con la mentalidad de la misma; por regresión conductual en la que el sujeto actúa según la edad sugerida, pero no recuerda los incidentes olvidados de esa edad (a veces esta regresión hipnótica tiene marcados rasgos histéricos), o por simple hipermnesia desde la experiencia, conciencia y lenguaje actual del sujeto. Una vez realizada la regresión, el sujeto puede incluso escribir con la misma letra que tenía a esa edad, o dibujar, modelar en plastilina y comportarse en general de acuerdo con los patrones de entonces. Debe tenerse mucho cuidado en seguir el mismo orden, pero inverso, para llevar al sujeto a la edad actual y poner fin a la regresión. Existen muchos aspectos técnicos e investigativos relacionados con la regresión de la edad que resultan de gran interés. Lo mismo decimos respecto a otros fenómenos que se obtienen en la fase sonambúlica de la hipnosis, como la progresión de la edad, la disociación, la hipnoplastía, la percepción extrasensorial y otros.
PREGUNTAS FRECUENTES ACERCA DE LA HIPNOSIS. ¿QUE PODEMOS HACER Y OBSERVAR CON LA HIPNOSIS? Con la hipnosis podemos hacer que el sujeto, bajo tales efectos, pueda comunicarse plenamente con nosotros, abrir los ojos y mantenerse en ese estado de sueño especial, caminar y tener plena orientación del medio circundante, sentarse, leer, estudiar y aprender. Así mismo, llevarlo a la llamada regresión, de extremo valor terapéutico para buscar información referente a los primeros años de vida o a momentos de la historia del paciente, que pueden resultar de interés clínico por ser de tipo hipotéticamente etiológicos. Estos estados lo podemos lograr y observar generalmente en hipnosis media y profunda.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Décima parte.5 ¿PARA QUÉ SIRVE LA HIPNOSIS? Se pueden distinguir dos campos generales de aplicación de la hipnosis y autohipnosis por ejemplo en la psicología: la superación y mejora y la ayuda terapéutica. En el primer caso, mejora el rendimiento de los deportistas, incrementa la autoestima, incorpora mecanismos de autocontrol y superación personal para profesionales con altas exigencias y situaciones de estrés continuadas, ayuda a los estudiantes a centrar la atención, incrementar su motivación y facilitar el aprendizaje y a los artistas les facilita la profundización en sensaciones y percepciones propicias para la creación. ¿Cómo se manifiesta la ayuda terapéutica? Está indicada en temas como la preparación para las intervenciones médicas y sobre todo para el tratamiento del dolor crónico y problemas psicosomáticos. En psicoterapia se aplica como adjunto en tratamientos para la depresión, trastornos por ansiedad (fobias, ataques de pánico) estrés, conductas obsesivo-compulsivas, insomnio y disfunciones sexuales y en trastornos de la alimentación. Muchos coinciden que actualmente aparte de ser utilizada para realizar los espectáculos a veces ridículos y bochornosos que vemos en TV, la hipnosis tiene una aplicación realmente más brillante y práctica que es la de su vertiente clínica, es decir, para curar o mejorar enfermedades o las condiciones físicas o mentales de las personas. Así por ejemplo, es muy conocida la aplicación de la hipnosis o la sofrología (técnica muy parecida pero donde no hay pérdida de conciencia) para la extracción de piezas dentales sin dolor. También para tratar todo tipo de trastornos mentales y psicológicos: fobias, miedos, traumas, depresión, angustia, nerviosismo, estrés, enuresis nocturna, timidez. Por ejemplo, se ha visto su gran utilidad en dermatología para curar prácticamente al instante verrugas, eczemas, y todo tipo de erupciones cutáneas. En definitiva, con hipnosis son tratables cualesquiera de las enfermedades llamadas psicógenas o psicosomáticas, es decir, las que tienen un origen en un conflicto emocional o psíquico. En el campo de las adicciones, es de un éxito notorio para dejar el tabaco, así como para tratar ludopatías y alcoholismo. En este caso, el simple hipnotizador, pasa a ser hipnólogo o persona que usa la hipnosis con un fin terapéutico. ¿CÓMO APRENDER A HIPNOTIZAR? El problema de hipnotizar no es complejo en sí mismo; sólo requiere algunos elementos que a mi modo de ver son muy importantes y están relacionados con la técnica o las técnicas, con la voluntad expresa del terapeuta y del paciente o en otro caso, con la del experimentador y del sujeto a hipnotizar y, por último, con determinados rasgos de personalidad de ambos participantes. La selección del método depende muchas veces de la experiencia concreta del hipnólogo, así como de su marco referencial informativo, pues sobre esta se han elaborado muy diversos procederes que casi siempre, sobre la base de un elemento sugestor muy fuerte, dan un buen resultado, atendiendo particularmente a las características del sujeto a hipnotizar o a tratar y a la pericia del hipnólogo.
Ya aquí, de hecho, estamos implicando algunas condiciones a tomar en cuenta para el buen desempeño de la hipnosis, a saber: Nunca hipnotizar sin haber realizado una evaluación psicológica del sujeto o paciente, pues su no realización puede conducir a errores de aplicación y a la ineficacia del método. Ello debe contemplar una explicación acerca de qué es la hipnosis, sus posibilidades en función de las necesidades del sujeto o paciente y la aceptación por parte de éste. Una vez lograda la disposición, aplicar pruebas o técnicas de sugestionabilidad bien sencillas, que permitan asegurar la evaluación de objetos diagnósticos de una manera rápida y que no impliquen procesos angustiantes para el paciente. En todo momento, el hipnólogo debe poseer y expresar atributos tales como:
Seguridad y confianza en sí mismo. Dominio de la técnica o las técnicas. Serenidad y plasticidad en su conducta. Manejo ético de la situación.
Todo ello llevará al paciente a recibir de un modo muy positivo la influencia del terapeuta, lo que a su vez le brindará confianza y seguridad. Si en el momento del proceder, bien con las técnicas diagnósticas de sugestionabilidad o con la hipnóticas propiamente dicha, el paciente o sujeto se muestra tenso o intranquilo y no se logran los objetivos propuestos, porque hay resistencia o temores por parte de éste, nunca deberá forzarse la situación, lo cual no quiere decir que no se realicen nuevos intentos (1 ó 2), siempre relajando e inspirando confianza; pero es importante no insistir demasiado, pues vale la pena interrumpir y dejarlo para otra nueva sesión e incluso para otro día. Ello evitará un nivel frustrante para el hipnólogo, sobre todo cuando es novel, y que aparezcan elementos de incredulidad en el paciente o que éstos se exacerben si existen en alguna cuantía. Como en toda relación terapéutica, deben mantenerse niveles de comunicación importantes entre el hipnólogo y el sujeto, pues deben concurrir en el primero los atributos de buen comunicador; ello le permitirá establecer una adecuada relación médico-paciente y así obtener toda la información necesaria sobre este, sus características personales, los motivos reales de consulta y sus verdaderos objetivos. Siempre habrá de comunicar equilibradamente afecto y efectividad. Requisito indispensable en toda acción de hipnosis terapéutica ha de ser su sustentación con fines de ayuda, curativos y de investigación. Toda acción que se aparte de estos tres elementos, es en sí morbosa y ajena a intenciones humanistas. Deberá existir siempre el complejo aptitud-actitud para mantener una efectiva relación con el paciente, basadas en componentes tales como: buena relación y adecuada simpatía; pero también para eliminar las más mínimas señales de dependencia por parte del paciente hacia el terapeuta, lo cual significa establecer y conservar una relación a la vez humana y técnica. Como en toda relación terapéutica, ha de mantenerse un buen rol profesional. Ello está dado tanto por elementos estéticos relativos a la buena presencia física, la higiene personal y la adecuada expresión verbal, como por técnicas que son de hecho las importantes para lograr los objetivos que él se ha propuesto y, unido a los primeros, satisfacer la expectativa del paciente. ¿CÓMO SE LLEGA AL ESTADO HIPNÓTICO? Son muchas y muy numerosas las técnicas empleadas, ya mencionamos algunas sucintamente. Sin embargo es importante reseñar las características comunes a cualquiera de ellas. Para conseguir una hipnosis deben darse un requisito esencial:
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El sujeto debe estar concentrado; dicha atención puede situarse sobre un estímulo exterior (un foco de luz, un punto visual concreto, un péndulo, una imagen, el sonido repetitivo de un metrónomo, música, entre otros) o bien sobre una sensación interior (una recreación mental agradable, el ritmo respiratorio, una cuenta numérica hacia atrás, estado de rigidez de alguna de todo el cuerpo o alguna de sus partes). El caso es que estemos concentrados en una sola idea o estímulo, sea éste externo o interno. En el caso de hipnosis instantánea podemos captar repentinamente la atención del sujeto dándole un pequeño “susto” por ejemplo golpeándole ligeramente con la yema de los dedos sobre su frente y exclamando enérgicamente: ¡duerme!; si es suficientemente sugestionable, entrará en trance hipnótico.- Una vez conseguido el primer paso, debemos profundizar en la hipnosis. Para ello lo haremos por medio de la sugestión oral con ideas como: “cada vez estará más a gusto, se siente más dormido, va profundizando más y más en este estado, cada vez más, cada vez más...”
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Décima parte.6 ¿TODO EL MUNDO PUEDE SER HIPNOTIZADO? Si entendemos la hipnosis como un estado focalizado de atención, donde no necesariamente tiene que darse la pérdida de conciencia o la falta de memoria sobre lo que ha sucedido en la sesión, la respuesta rotunda es SI. Pero si entendemos esta pregunta como si todo el mundo puede alcanzar el trance profundo (sonambúlico) –entendido en términos de hipnosis clásica- con una sugestionabilidad prácticamente total y con pérdida de consciencia, la respuesta sería un relativo NO. Conseguir un trance ligero o medio es relativamente fácil. Llegar a un trance profundo es más complejo; aproximadamente un 80% de sujetos puede llegar sin mucha dificultad a un estadio profundo. Al 20% restante les sería difícil por diversas variables complicadas de saber o controlar (temor a perder la propia consciencia, prejuicios o creencias, falta de confianza en el inductor) Pese a este hecho, si usamos la hipnosis a nivel clínico o médico, en la mayoría de las ocasiones es suficiente con un trance medio para obtener resultados. ¿Hay personas más hipnotizables que otras? Hay criterios de que los individuos crédulos y los débiles o tontos, así como las mujeres, se hipnotizan más fácilmente, pero la capacidad para experimentar hipnosis no indica debilidad o credulidad. Tampoco hay diferencias significativas de sexo. Si acaso, la capacidad para el trance requiere un individuo que confíe y se abra a nuevas experiencias. ¿QUIÉN PUEDE HIPNOTIZAR? La hipnosis es esencialmente una técnica. Por tanto todo aquel que la conozca lo suficiente y aprenda a aplicarla, puede hipnotizar. Otra cosa es que el inductor sepa después enfrentarse y resolver las diferentes situaciones que se le presenten durante la sesión. Si el hipnotizador no cuenta con conocimientos teórico-prácticos concretos y suficientes (incluso aunque se trate de médicos o psicólogos), podría ocasionar graves daños al hipnotizado. Más aún si el inductor persigue fines poco lícitos e intenta vulnerar la integridad física, psíquica o moral del inducido, lo cual ha sucedido numerosas veces, manipulando al hipnotizado. En algunos países la hipnosis clínica sólo está permitida a médicos y psicólogos previamente autorizados y preparados. En España por ejemplo existen centros de formación no académicos, aunque cada vez más en el ámbito universitario se están impartiendo cursos de postgrado o especialización. En Cuba es casi exclusivo para médicos y psicólogos con estudios de postgrados en el área. ¿SE PUEDE QUEDAR ALGUIEN ETERNAMENTE DORMIDO POR LA HIPNOSIS? Es completamente imposible que suceda. Tanto si practicamos la auto-hipnosis (sobre nosotros mismos), como la hetero-hipnosis, es decir, sobre otra persona, siempre acabaremos saliendo del estado hipnótico. Si por cualquier causa el hipnotizador desapareciera, el sujeto inducido pasaría progresivamente del trance hipnótico al sueño natural e iría despertando y despejándose
progresivamente. Sucede en ocasiones que la persona está en una situación tan plácida que se resiste a despertarse. En ese caso podemos realizarle una contra-sugestión como: “si quieres permanecer o regresar en un futuro a este estado, debes despertar ahora” y normalmente abandonará la hipnosis. O simplemente le dejamos reposar hasta que despierte al cabo de un tiempo que suele ser corto. Incluso expertos en hipnosis como Gallego y Morales, en Mallorca plantean que la hipnosis no implica la pérdida de la conciencia y no la consideran como una forma de sueño. Expresan que la asociación que se ha desarrollado entre la hipnosis y el sueño no es muy afortunada. La gente a menudo espera, o teme, encontrarse en un estado inconsciente durante la hipnosis. Sin embargo, no es un fenómeno del sueño. Los individuos no pierden la conciencia y no se duermen cuando están en un trance. Si acaso se mejora la concentración y se focaliza de una manera especial. ¿TIENE LA HIPNOSIS CONTRAINDICACIONES? La hipnosis y todos los estados y técnicas similares producen un gran beneficio al organismo, ya que ayuda a eliminar tensiones físicas o emocionales, reduce ligeramente la tensión arterial, regula el ritmo cardíaco y respiratorio, equilibra los hemisferios cerebrales y si hablásemos en términos energéticos, reequilibra la bioenergía del cuerpo. Por tanto si somos personas normalmente sanas, no correremos ningún peligro. Sin embargo existen dos contraindicaciones: en general se sugiere, que no debe practicarse hipnosis a personas con esquizofrenia o graves enfermedades mentales ¿por qué? Porque podríamos agravarles sus síntomas aparte de que serían difícilmente inducibles. El segundo caso se trata de personas con epilepsia o que hayan tenido crisis de este tipo recientes: durante la hipnosis les podría sobrevenir una de estas crisis, por lo que la prudencia aconseja no someterlas. ¿TIENE EL HIPNOTIZADOR ALGÚN PODER ESPECIAL? Rotundamente NO. Cuando se emplea la hipnosis como espectáculo, el hipnotizador se suele presentar con una aureola de poderes mentales excepcionales; esto forma parte del ambiente sugestivo que el inductor empleará para conseguir sus efectos espectaculares. Todo depende de lo sugestionables e impresionables que seamos. Realmente si una persona no lo desea, es muy difícil que se le induzca, a no ser que exista un miedo o un convencimiento tan extremo de que el hipnotizador tiene tal poder (ficticio) que nuestra propia creencia o convencimiento nos hará caer en hipnosis incluso a veces de forma instantánea a la más mínima sugerencia o toque del inductor. Para hipnotizar no se necesitan dotes especiales, aunque sí un mínimo de aptitudes. Por ejemplo una persona tímida, dudosa e insegura de sí misma sería un mal hipnólogo o hipnotizador. ¿La persona hipnotizada se halla bajo el control del hipnotizador? La hipnosis clínica actual poco o nada tiene que ver con los espectáculos que se pueden observar en algunos programas de televisión. La hipnosis no puede inducirse sin la colaboración del sujeto, quien mantienen su capacidad de control sobre su comportamiento. ¿SE PUEDE INDUCIR A ALGUIEN A REALIZAR LO QUE NO DESEA A TRAVÉS DE LA HIPNOSIS? Aunque diversos autores niegan esta posibilidad, nuestra práctica sólo con fines experimentales nos demuestra que SI. Todo depende de muchas y distintas variables, pero si el sujeto inducido tiene un grado suficiente de profundidad hipnótica, puede en todo o en parte, aceptar sin posibilidad de negarse las sugestiones que le imponga el hipnotizador. Se han dado numerosos casos de violaciones y de manipulación mental bajo estados de hipnosis –esto no es nada nuevoPor ello no debemos dejarnos hipnotizar por personas que no tengan nuestra confianza.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Undecima parte.1
Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Undécima parte. Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
¿Cuán real es la pérdida total de la conciencia durante la hipnosis? ¿Nos podemos hipnotizar a nosotros mismos? ¿Nos pueden hipnotizar sin que nos demos cuenta? ¿Existe la hipnosis instantánea? ¿Se puede hipnotizar a distancia? ¿Existe relación entre la hipnosis y la parapsicología? ¿Es peligrosa la hipnosis? ¿Que es la hipnosis regresiva? Análisis experimental de los estados de hipnosis Dificultades de la hipnosis Causas de fracaso en la inducción hipnótica Defensas del sujeto contra la hipnosis. Negativismo Depreciación Inquietud Simulación Sueño Reacción de sobresalto Síntomas Despertamiento y pantallas Complicaciones e insuficiencias de la hipnoterapia Contraindicaciones de la hipnosis En las psicosis. Hipocondría Precauciones en los pacientes histéricos Otras causas Recomendaciones prácticas al utilizar la hipnosis Ventajas y principios de la hipnosis
¿CUÁN REAL ES LA PÉRDIDA TOTAL DE LA CONCIENCIA DURANTE LA HIPNOSIS? Otra de las ideas mal entendidas de la hipnosis es en que dicho estado no podemos enterarnos de lo que sucede (pérdida de conciencia), que se pierde el control total sobre el propio comportamiento o que al despertar no recordaremos nada; esto es falso y sólo en determinadas ocasiones se da. Por tanto cualquier persona en un estado de atención aguda puede llegar a la hipnosis, ser consciente y recordar después todo lo que ha sucedido. ¿NOS PODEMOS HIPNOTIZAR A NOSOTROS MISMOS? Por supuesto. La auto-hipnosis y la sugestión autógena son de las vertientes más interesantes de esta técnica. Para ello podemos utilizar –por ejemplo- un cassette o CD, donde nos grabaremos una inducción para relajarnos progresivamente, incluyendo sugestiones como: “cada vez estoy más tranquilo, mis músculos se van soltando, poco a poco voy sintiendo un ensueño agradable y
profundo...” Al final, añadiremos las sugestiones que deseemos implantarnos para diversos fines, como estudiar más y mejor, dejar el tabaco, estar más tranquilos, de lo que deseemos cambiar o eliminar en particular. ¿NOS PUEDEN HIPNOTIZAR SIN QUE NOS DEMOS CUENTA? La hipnosis está más presente en nuestras vidas de lo que nos imaginamos. De hecho si ésta sólo es un estado de atención más o menos aguda y focalizada, todos los días sufrimos en mayor o menor medida una o varias “hipnosis”. La publicidad especialmente en la TV pretende hipnotizarnos (sugestionarnos) para que compremos un producto. Los políticos usan técnicas de comunicación e imagen muy elaboradas para captar nuestra atención, incluso donde es más importante la impresión final que el discurso en sí. Pero volviendo a la hipnosis clásica, existen técnicas subliminales para inducir a un sujeto a estados hipnóticos e inducirle -sin necesidad de que exista pérdida de conciencia- a determinado comportamiento o actitud. A parte de esto existen algunos casos excepcionales como el caso del polaco Wolf Messing. El mandatario ruso Stalin durante la irrupción de la II Guerra mundial ordeno que detuvieran el trabajo de los “psicotrónicos” (parapsicólogos) soviéticos, los agrupo y los puso en función del desarrollo de la guerra psicológica. Para tener una credibilidad y confianza el propio dictador le propuso a Messing en 1940 que realizara una demostración: debía atracar un banco con las únicas armas de su potencia psíquica. En un céntrico banco de Moscú, Messing entregó una hoja en blanco al empleado, quien en pocos segundos le entregó sin dilación 100.000 rublos. ¿EXISTE LA HIPNOSIS INSTANTÁNEA? Si. Por ejemplo en los espectáculos hipnóticos, cuando el inductor se percata de que alguien entre su público es muy sugestionable e incluso muestra cierto miedo al acercársele, el propio temor y el hecho de que se vea al hipnotizador revestido de un poder especial, hará que a la más mínima insinuación de éste, el espectador caiga inmediatamente en hipnosis (normalmente se tratará de un trance ligero o medio y habrá que profundizarlo). El otro caso sería cuando una vez conseguida una inducción, al sujeto se le deja implantada una orden post-hipnótica como por ejemplo: “cuando despiertes y en las próximas ocasiones en que yo te lo indique, caerás inmediatamente en este mismo estado” Dicha orden –si el estado conseguido es suficientemente profundo- queda implantada en la mente profunda del sujeto y puede perdurar incluso por tiempo indefinido. ¿SE PUEDE HIPNOTIZAR A DISTANCIA? Esta es una de los campos de investigación más apasionantes de la materia. Es inquietante comprobar que en muchas ocasiones bajo hipnosis la actividad mental, su ámbito y alcance de conocimiento superaran espacio y tiempo. Nuestro sistema nervioso es una auténtica red por donde circula electricidad de bajo voltaje; donde hay electricidad, se puede dar electromagnetismo, por lo cual el entramado sistema de neuronas extendidas a lo largo de nuestra anatomía se convierte en un virtual emisor receptor de frecuencias que pueden llevar incorporada determinada información. La aplicación práctica que se deriva de lo que acabamos de decir, es uno de los secretos mejor guardados por los Gobiernos que lo han investigado. En 1997 saltaba a la luz que la extinta Unión Soviética había empleado durante los 70 y 80 espías controlados a distancia y programados mediante hipnosis. El conocido neurofisiólogo Dr José Manuel Rodríguez Delgado declara: “a través de las técnicas empleadas por los soviéticos contra la Embajada de EE.UU. podían leer a distancia las letras de la máquina de escribir de la secretaria”
¿EXISTE RELACIÓN ENTRE LA HIPNOSIS Y LA PARAPSICOLOGÍA? No es de extrañar que esta técnica despertara tanto apasionamiento o desprecio desde sus primeras investigaciones. Serían los seguidores de Mesmer y posteriormente otros investigadores quienes irían desentrañando parte los misterios de la hipnosis y por tanto, del psiquismo humano.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Undecima parte.2 Así por ejemplo un paciente del Marqués de Puységur, llamado Víctor Rase, que era campesino de humilde condición y prácticamente analfabeto, al caer en los trances magnéticos, hablaba con una facilidad que nunca antes había tenido, manifestando conocimientos sobre anatomía y medicina, incluso llegando a diagnosticar con total precisión males y enfermedades y a prescribir remedios para sí mismo u otros que finalmente eran efectivos. Tales hechos se han ido repitiendo en diferentes épocas y sujetos a lo largo de la historia. La hipnosis en sí, no es un estado "paranormal". Sin embargo en estado hipnótico es relativamente fácil producir fenómenos que son objeto de estudio de la parapsicología científica, que se encuadran dentro del estudio de la Percepción Extra Sensorial (P.E.S.). Así en hipnosis es relativamente fácil producir telepatía, es decir, un hipnotizado puede de manera relativamente sencilla captar lo que está pensando una persona concreta, independientemente de que se encuentre cerca o a miles de kilómetros. También es fácil que el hipnotizado establezca el estado de salud o enfermedad de su propio organismo o el de otra persona. Y muy curiosos son los casos de memoria extra-cerebral en los que el hipnotizado puede recordar supuestas vidas pasadas e incluso hablar en idiomas que se supone no conoce; a este fenómeno se le denomina xenoglosia. A lo largo de la historia se han conocido casos de sujetos que en estado hipnótico han tenido una inusual habilidad para predecir el futuro o reconocer hechos de un pasado remoto y desconocido: precognición o retrocognición respectivamente. ¿Por qué sucede esto? Probablemente porque en estado de hipnosis nuestra mente actúa bajo unos parámetros diferentes de los que comúnmente entendemos como espacio / tiempo. ¿ES PELIGROSA LA HIPNOSIS? La hipnosis no es peligrosa, siempre y cuando sea realizada por una persona cualificada y por supuesto tenga la ética suficiente para no someter a su cliente a ninguna práctica que en estado vigil no permitiría. Por lo demás, nadie puede quedarse eternamente dormido si el hipnotizador nos abandonase, ya que en ese caso, pasaríamos del sueño hipnótico a un sueño natural y despertaríamos normalmente. Las únicas contraindicaciones absolutas de la hipnosis como ya mencionamos son en los casos de padecerse epilepsia o esquizofrenia. La epilepsia porque podría suceder que en pleno trance hipnótico sobreviniera una crisis epiléptica a quien padece esta enfermedad, y la esquizofrenia porque, aparte de que sea muy difícil hipnotizar a un esquizofrénico, podríamos empeorarle su enfermedad con la hipnosis. ¿Pero tiene algún grado de peligrosidad? Lo mismo que sucede con cualquier técnica potente, el uso de la hipnosis puede tener ocasionalmente consecuencias imprevistas. Por esta causa sólo la deberían utilizar profesionales cualificados. Pero, no es más peligrosa que la mayoría de las formas de tratamiento psicológico cuando se emplean eficazmente. ¿QUE ES LA HIPNOSIS REGRESIVA? Uno de los episodios más interesantes de esta técnica, es la llamada hipnosis regresiva de la personalidad. Consiste en "llevar" hacia atrás en el tiempo a una persona, para que reviva o recuerde hechos de su pasado. Incluso algunos plantea que podemos llegar hasta un estadio prenatal o intra-uterino, es decir, que recordaremos las sensaciones que teníamos antes de nacer. Pero incluso si al hipnotizado se le sugiere que vaya aún más allá, recordará en muchos casos supuestas identidades anteriores. Incluso en algunos de estos casos hablará en una lengua que no ha estudiado o conocido en su vida actual (el fenómeno de la xenoglosia -que mencionábamos antes-), siendo normalmente esas lenguas arcaicas y con formas antiguas. ¿Reencarnación?,
¿conexión con otros tiempos y otras conciencias? Muchos quieren saber pero la ciencia no sabe o no tiene aún una respuesta con precisión... creo es un tema aún oscuro y lo suficientemente extenso para un futuro artículo. Algunos refieren que han investigado y comprobado que, efectivamente, la hipnosis rompe los esquemas de lo que hoy la psicología científica (en general, la rama cognitivo-conductual) conoce como "mente" porque precisamente ese concepto es tan amplio, que desde la ciencia nos quedamos cortos al definirlo. Un caso de interés es el reportado en la literatura por el Doctor Stevenson sobre un niño en la ladera de una colina con vistas al pueblo turco de Hancagiz, Engin Sungur se volvió hacia sus padres y dijo: "Veo el pueblo donde vivía". Ellos sabían, sin embargo, que él sólo había vivido con ellos en Tavla, un pueblo más grande a unos 4 km de Hancagiz. Lo que el niño de dos años les estaba diciendo es que Hancagiz había sido su pueblo en una vida anterior. Como los Sungur son musulmanes-alevi que, al contrario de sus vecinos, musulmanes-sunni, creen en la reencarnación, reaccionaron con curiosidad más que con risas. "¿De quién eres hijo?", le preguntaron. "Soy Naif Cicek", respondió y empezó a contarles circunstancias de su vida anterior y que había ido a Angora poco antes de morir. Luego, Engin pidió a sus padres que le llevaran a Hancagiz. Al principio los Sungur, quienes nunca habían oído hablar de Naif Cicek, se negaron. Poco después el pequeño Engin se encontró en la calle con Gulhan Cicek, la hija del fallecido, la cual iba al colegio de Tavla. Se dirigió a ella llamándola "hija mía" y, viendo que la chica se asustaba, le explicó que él era su padre. Antes de este incidente no había habido ningún contacto entre las dos familias pero, ante lo sucedido, la madre de Engin decidió llevarlo a Hancagiz para ver al resto de la familia. En cuanto vio a la viuda de Naif Cicek la llamó "esposa mía" e identificó por su nombre a otros siete miembros de la familia. El niño llegó a indicar un terreno asegurando que en el pasado había sido suyo, lo cual resultó ser cierto a pesar de que ya no formaba parte de la finca. También describió con detalle cómo había sido golpeado por una camioneta, conducida por su hijo, al hacer marcha atrás. Además, se supo que Naif fue a Angora a ver a un médico, tal como había dicho Engin, y murió poco después, en diciembre de 1979, a los 54 años. Engin nació casi tres años después, el 8 de octubre de 1982. La historia de Engin es sólo una de las más de 2000 estudiadas por el doctor Ian Stevenson, durante más de 30 años, buscando posibles evidencias de reencarnación. Según Stevenson, desde el déjà vu- la misteriosa sensación de que una experiencia pasada se repite en el presentehasta informaciones sobre una vida pasada recabadas a través de un médium, se han ofrecido muchos datos como pruebas de vidas pasadas. Según Stevenson, gran parte de estos datos deben ser descartados porque los recuerdos son confusos o no pueden verificarse. Incluso cuando los detalles pueden ser confirmados, no hay que desechar las coincidencias. El caso de Engin Sungur, sin embargo, es distinto. Stevenson ha descubierto que, en los niños pequeños, los recuerdos de una vida anterior son más lúcidos y completos. Y, lo que es muy importante, la información puede a menudo ser refrendada por los familiares y cotejada con los lugares a los que se refiere. En un caso típico, el niño empieza a mencionar recuerdos de una vida anterior entre los dos y los cuatro años, en muchos casos en cuanto es capaz de hablar. Luego, los recuerdos se van desvaneciendo hacia los seis o siete años. A menudo, el niño insiste en ellos aunque el resto de la familia no se muestre receptiva. Los recuerdos suelen estar acompañados por peculiaridades de comportamiento o de lenguaje de su anterior personalidad. En el caso de Engin, por ejemplo, la viuda de Naif se percató de que Engin hablaba y actuaba como un adulto. Es más, mientras hablaba, movía las manos igual que su difunto marido. En principio, los increíbles recuerdos de Engin parecían sugerir que una parte de la
personalidad del muerto había sobrevivido, reapareciendo en el niño. Pero algunos parapsicólogos aseguran que puede haber una explicación perfectamente natural. La mayoría de los casos de recuerdos espontáneos se producen en culturas que creen en la reencarnación, a los pocos años de la muerte de la personalidad anterior y siempre a poca distancia de donde vivió la persona fallecida. Para algunos, son demasiadas coincidencias. O toda la familia participa inconscientemente de una "creación fantástica" -los padres implantan la idea de una vida pasada en la mente del niño, quien elabora entonces los detalles-, o se trata de un engaño.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Undecima parte.3 Se cree que en muchos de los casos ocurridos en la India, donde niños de familias pobres aseguran haber pertenecido a una casta superior, los padres "alimentaban" la memoria de los pequeños buscando beneficios económicos. Pero, como indica el doctor Stevenson, incluso si esto es cierto, no ocurre lo mismo cuando el niño y la familia viven lejos del difunto, y no le conocían previamente. Se dan también numerosas evidencias de recuerdos de vidas anteriores en culturas occidentales, en las que la reencarnación, por lo general, no se acepta. Con independencia de sus creencias muchas personas parecen ser capaces de tener recuerdos de vidas pasadas cuando su estado de consciencia es alterado, por ejemplo, por medio de la hipnosis. En cuanto a la regresión a la vida anterior, la mayoría de los investigadores, incluido el profesor Stevenson, desconfían de esta práctica -conocida como regresión a la vida anterior- considerando que los adultos bajo hipnosis pueden adoptar una identidad convincente basada en puras fantasías, dejando aparte su auténtica personalidad. Por otra parte, algunas personas aseguran haber sido personajes históricos famosos y aportan ciertos detalles, convencidos de que no han podido conocerlos en esta vida. Los escépticos argumentan que el subconsciente tiene una asombrosa capacidad para almacenar información adquirida leyendo, viendo la televisión, o escuchando conversaciones sin prestar atención. El subconsciente puede absorber información sobre un determinado personaje histórico o una época y utilizarla para crear recuerdos de una vida pasada. Otros suspicaces ven las regresiones a la vida anterior como la combinación de las preguntas inductoras del terapeuta con la fértil imaginación del sujeto. Cuando el estado de consciencia está alterado, la mente puede estar deseosa de complacer y, en consecuencia, dará las respuestas que cree que el terapeuta desea oír. Que esto ocurre puede verse en los espectáculos con hipnotizadores. A pesar de estas críticas, hay una tendencia creciente a consultar a terapeutas expertos en vidas anteriores, los cuales utilizan la hipnosis y técnicas de relajación para conducir a sus clientes a vidas pasadas, y así descubrir las causas de sus problemas en esta vida. Muchos atestiguan haber sido curados de esta forma, de fobias presumiblemente heredadas de una vida anterior. Se han dado casos de individuos que, sometidos a hipnosis regresiva, han proporcionado informaciones a las que no podían acceder. En uno de ellos, el periodista Ray Bryant regresó bajo hipnosis a su vida anterior: un granjero, en Essex, a finales del siglo pasado. El terapeuta, Joe Keeton, le pidió que retrocediera al 22 de abril de 1884, cuando tenía unos cuatro años. Bryant lo hizo y se mostró aterrorizado, diciendo que la casa se estremecía y los platos caían de los estantes.
Lo que Bryant no sabía es que el investigador había encontrado previamente una referencia al "Gran Terremoto de Essex", fechado ese día. Keeton decidió ver qué ocurría si Bryant regresaba al día en que el terremoto estaba en su apogeo. Casos como éste y el de Engin Sungur parecen desafiar las explicaciones, pero, ¿son prueba de vidas anteriores? Stevenson sólo dice que "sugieren la idea de la reencarnación", mientras que los escépticos creen que la respuesta se encuentra en otra parte. Algunos parapsicólogos mantienen que esta información puede ser adquirida mediante percepción extrasensorial (PES), recordando una vida pasada al conectar telepáticamente con la vida de otro individuo. Pero si la respuesta es la PES, ¿por qué quienes conectan telepáticamente con vidas pasadas carecen de talento para otro tipo de PES? Otra teoría afirma que el recuerdo de una vida anterior es el resultado de una memoria ancestral, racial o colectiva, que se prolonga a través de los siglos. De algún modo, el individuo enlaza con las experiencias o procesos mentales de un antepasado, o alguno de sus conocidos. Otra teoría, en fin, relaciona los recuerdos de una vida anterior con trastornos de personalidad múltiple. Se han dado casos, utilizando la hipnosis con fines terapéuticos, en que un paciente mostraba rasgos de otra personalidad. Esta capacidad de desdoblamiento la tenemos, en cierto grado, todos nosotros y aparece cuando sufrimos un estado de consciencia alterado. Pero si es así, ¿cómo se explican los detalles históricos precisos, y a veces ignorados, que pueden aparecer durante la hipnosis? Las Preguntas permanecen, mientras estas teorías pueden explicar algunos casos, ninguna esclarece satisfactoriamente los datos aportados en esos recuerdos. Si existe alguna evidencia que haga pensar en la supervivencia de la personalidad después de la muerte, quedan aún numerosas preguntas. Por ejemplo, ¿qué parte de nosotros es la que se reencarna en realidad? ¿Si todos vivimos cierto número de vidas, por qué unas se recuerdan y otras no? Y, ¿por qué la mayoría no tenemos ningún tipo de recuerdo de una vida anterior? La Sindéresis es una rama del saber que estudia la capacidad racional natural para ejercer un juicio correcto sobre una materia. Antiguamente usado para dirimir asuntos religiosos, la aplicación de este término se ha generalizado a todas las disciplinas del conocimiento humano, incluso a la política. Podemos traducirla más prácticamente como perspicacia o pensamiento lógico. Nos enseña cómo distinguir los enunciados científicos de los pseudocientíficos. El término Pseudociencia significa " falsa ciencia". Como concepto, la falsa ciencia (pseudociencia) es cualquier declaración o cuerpo de ideas erróneamente exhibidos como científicos, pero carentes de soporte metodológico y/o sistemático. La hipnosis regresiva es considerada por la sindéresis como una pseudociencia. Y plantean que en estos casos, una persona especialista en psiquiatría o psicología clínica asegura que por medio de la hipnosis cualquier persona puede traer a su memoria los recuerdos de vidas pasadas, refiriéndose a "vidas pasadas" como "vidas que se vivieron antes de nacer en este mundo". De esta manera, ellos dicen que la ciencia ha verificado la reencarnación. Por supuesto, ellos eluden el estorbillo de la inducción deliberada que el hipnotizador ejerce sobre el hipnotizado, y hablan poco o nada de ello. Siempre que ellos exhiben un caso de glosolalia (cuando el hipnotizado emite sonidos extraños) se refieren al grupo de sonidos erráticos como "lenguas muertas", "lenguajes no terrenales", "dialectos perdidos de la América precolombina". A juicio, de la sindéresis. Es evidente aquí que la pseudociencia recurre a nociones que no pueden ser comprobadas por tratarse de eventos del pasado y que no fueron registrados por historiadores fidedignos. Por ejemplo, sería imposible comprobar si es verdadera la información dada por una chica que dijo ser, en una de sus
vidas anteriores, la hija de uno de los herreros del rey Enrique VIII, llamado Cardó, quien violaba a sus hijos por las noches. La pseudociencia en última instancia recurre a la fe (creer sin ver) para percibir una fantasía como si fuese una realidad. Esto también se da en todas las formas de pseudociencia, sea creacionismo, panspermia, ufología, magnetoterapia, iridología, astrología, cienciología, medicina naturista, medicina holística, homeopatía, digitopuntura, acupuntura, panaceas (como el Noni y la Uña de Gato). ANÁLISIS EXPERIMENTAL DE LOS ESTADOS DE LA HIPNOSIS. Son diversos los autores, investigadores y terapeutas que han establecido diferentes escalas en el grado de profundidad hipnótica. Estas divisiones son por tanto subjetivas y sólo orientativas. La escala más extendida y sencilla por su comprensión es la que divide la progresión hacia la hipnosis profunda en tres grados, como la que ya describimos que presentó Charcot en la Academia de Medicina de París cuando elaboró su informe sobre la hipnosis. El hablaba de los grados letárgico, cataléptico y sonambúlico.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Undecima parte.4 En el estado letárgico, de primer grado, de trance superficial o hipnoidal. En nuestra experiencia personal hemos visto como signos exteriores que el sujeto tiene su atención concentrada. La respiración es lenta y tranquila. Si los ojos están abiertos, puede aparecer parpadeo rápido hasta que se cierran. Si el lugar no está suficientemente caldeado, el sujeto puede sentir frío. En cuanto a las reacciones del hipnotizado hemos podido apreciar que la tensión arterial puede bajar ligeramente debido a la relajación. Existe sensación de pesadez en el cuerpo, especialmente en los miembros. Todos los músculos se relajan progresivamente y aparece en consecuencia una sensación que expresan como de un agradable entumecimiento. En el estado cataléptico, de segundo grado o trance medio, hemos podido ver que la respiración es más lenta y profunda (de tipo abdominal). La cabeza puede caerse ligeramente por la relajación del cuello. Podemos producir rigidez en todo el cuerpo o en sus partes. Si el sujeto habla, su tono de voz es lento y adormecido. Además aparecen reacciones en el hipnotizado de sensación de profundo bienestar. El paciente admite ya las primeras sugestiones y aunque se percate de ellas, le resulta muy difícil sustraerse a las mismas. Podemos causar y producir insensibilidad al dolor. Sin embargo aún existe consciencia suficiente para que el sujeto salga de este estado si lo desea. Se va perdiendo la noción del exterior. La rigidez muscular total es una característica esencial de este estado cataléptico o también llamado catatónico. Inmediatamente después del mismo, el inducido será capaz de entrar en un estadío profundo de hipnosis rápidamente cuando se lo sugiera el hipnólogo. En el trance profundo, estado sonambúlico, o de tercer grado, el sujeto está completamente pasivo. Pero al sugerirle sensaciones o situaciones, puede abrir los ojos, moverse, hablar o realizar cualquier cosa igual que si estuviera en estado de vigilia normal, sin salir ya del trance hipnótico. Cualquier comportamiento sugerido, es aceptado y manifestado inmediatamente como algo real que le sucede. Podemos inducir la amnesia posthipnótica (que el sujeto no recuerde nada cuando despierte). El sujeto está muy aislado del exterior; se encuentra muy a gusto. El mayor estímulo externo que le hace reaccionar son las sugestiones del hipnólogo. Puede darse amnesia posthipnótica espontánea. Las sugestiones son aceptadas sin ninguna oposición y en esta fase es donde tienen su mayor efectividad. Las funciones inconscientes se manifiestan sin dificultad, por lo que para algunos se podrían dar fenómenos paranormales, especialmente de P.E.S. (telepatía, xenoglosia, precognición, clarividencia...). El estudio en hipnosis regresiva y a “vidas pasadas”, debe hacerse según recomiendan, en este trance, donde ya hubo una progresión desde un estado de vigilia normal consciente al trance ligero, medio, hasta el profundo inconsciente.
Desde Mesmer han sido muchos los que han investigado esta inquietante realidad que a veces se sale fuera de los esquemas de la ciencia académica. Muchos han establecido sus propios modelos y variantes de esta técnica. Así tenemos al norteamericano Doctor Milton Erickson, que trabajaba con sus pacientes usando metáforas o formas determinadas de hablarles, para inducirles ciertas reacciones psico-emocionales que les curasen de sus trastornos mentales, sin necesidad de una hipnosis clásica o que supusiera la pérdida de conciencia del paciente. O por ejemplo el doctor valenciano Antonio Escudero, que llama a su técnica Noesiología o anestesia psicológica, en la que opera a sus pacientes completamente despiertos y sin anestesia química, llegando incluso a conversar con ellos durante la intervención quirúrgica. Un ejemplo reciente de aplicación de la hipnosis y que nos llamo la atención, a propósito de la vuelta al mundo del globo Breitling orbiter 3, que en algunos medios de comunicación se tratara el tema que nos interesa. Lo curioso es que se realizara de una manera seria y haciendo referencia a una de sus funciones, en este caso el uso terapéutico de la misma por parte de un médico, según las informaciones en prensa y televisión. En resumen, los tripulantes del globo casi al final de su agotado viaje evaluaron la posibilidad de abandonarlo, ya que la aventura se estaba haciendo insoportable. Por fortuna utilizaron la hipnosis, transmitida por radio con la ayuda de un médico, y finalizaron con éxito el viaje. DIFICULTADES DE LA HIPNOSIS. CAUSAS DE FRACASO EN LA INDUCCIÓN HIPNÓTICA.
1. La utilización de la hipnosis en un sujeto que haya sido hipnotizado anteriormente y al cual se le dieron sugestiones posthipnóticas de que no podría ser hipnotizado por otra persona.
2. La creación, en el sujeto, de ansiedad e inseguridad al éste darse cuenta o creer que el 3. 4.
5. 6. 7.
hipnotizador no tiene experiencia por la falta de dominio de la técnica. La utilización de los métodos de inducción hipnótica en retrasados mentales de ligero en adelante, pues no son capaces de comprender lo que se pretende de ellos, por su pobre rendimiento intelectual. El empleo de los métodos de inducción hipnótica en personas poco sugestionables que sean capaces de fingir que están haciendo lo que se les ordena. Esto se evita realizando pruebas que permitan comprobar la profundidad de la hipnosis, como, por ejemplo, abrirles los párpados con los dedos pulgares y verificar si existe convergencia en los globos oculares. Falta de una anamnesis adecuada que oculte los deseos del paciente de continuar con los síntomas a causa de una ganancia secundaria que le producen los mismos. Cuando no se toman en cuenta las características del sujeto para la selección del método de inducción hipnótica. Al no ser adecuada la selección, se produce el fracaso. Dar una sugestión que no corresponda con el estado en que se encuentra el sujeto. Por ejemplo: al iniciar la inducción hipnótica, decirle: Sus párpados se cierran solos y no se pueden abrir más... Si esto no se logra, el sujeto puede angustiarse por no caer en estado hipnótico y creer que la hipnosis es inalcanzable para él.
DEFENSAS DEL SUJETO CONTRA LA HIPNOSIS. La inducción hipnótica puede presentar dificultades no imputables al dominio técnico del hipnotizador ni al deseo de cooperación y sugestibilidad del sujeto, sino a diferentes defensas inconscientes que interfieren el proceso de inducción, ya que la sugestibilidad es una función psicodinámica del inconsciente y no una faceta fija de la personalidad. Como ya dijimos, estas defensas son inconscientes en esencia. El sujeto quiere recibir el tratamiento y desea conscientemente ser hipnotizado; es más, hace todo su esfuerzo para cooperar en la inducción. Pero las defensas aparecen, así se emplee un método agresivo o pasivo de hipnotización.
Es importante saber esto, pues con frecuencia nos encontramos con dificultades en la inducción hipnótica y pensamos que el sujeto o paciente no quiere cooperar. Por lo general la tendencia es a interrumpir la sesión y hacerle saber al sujeto que él está haciendo todo lo posible para no dejarse hipnotizar. En realidad, la mayoría de las veces el sujeto sí quiere ser hipnotizado o al menos beneficiado por el tratamiento hipnoterapéutico, pero es ajeno a los mecanismos inconscientes de defensa contra la hipnosis. La solución es: usar siempre la defensa del sujeto contra él. En la práctica clínica, incluso los pacientes fáciles de hipnotizar muestran siempre algún tipo de defensa; y los difíciles de hipnotizar muestran muchas defensas diferentes. Las formas más conocidas de defensa son el negativismo, la depreciación, la inquietud, la simulación, el sueño, la reacción de sobresalto, la superficialidad, los síntomas y la desviación. Una vez lograda la inducción hipnótica pueden aparecer nuevas defensas. El sujeto hipnotizado nunca está completamente indefenso. No tiene ningún fundamento aquel criterio que existía de que el hipnotizador puede reducir al sujeto a un mero autómata. Además de las defensas mencionadas, en el transcurso de la sesión de hipnosis pueden aparecer defensas psicológicas de distintos tipos, como la fantasía, el despertamiento, entre otros. Por ejemplo, un paciente obsesivo, cuando se le hipnotiza, abandona su patrón de conducta característicamente obsesivo y en su lugar se comporta como un histérico típico. En la hipnosis, cuando se le pregunta al sujeto sobre algún hecho traumático, la tendencia es a usar defensas evasivas tales como caer en un estado hipnótico más profundo o desarrollar incoordinación motora seudohistérica.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Undecima parte.5 Mientras que en la «hipnosis de escenario» es fácil hacer que el sujeto se coma una vela, emita sonidos y se comporte como cualquier animal, nade desesperadamente en una piscina imaginaria huyendo de un tiburón también imaginario y haga otras escenas espectaculares, debe señalarse que estos actos no tienen una significación psicológica real para el sujeto. Si, en cambio, se le pide hacer algo que vaya en contra de sus principios, sentimientos o instintos (golpear a su madre, por ejemplo), se perderá el rapport o mostrará su resistencia a través de defensas. NEGATIVISMO. En esta defensa, el sujeto se defiende contra la hipnosis haciendo lo contrario de lo que se le sugiere. De esta forma él trata de asegurarse de que no será hipnotizado y que no perderá el control. Si se le sugiere pesadez de las piernas, trata de moverlas un poco o las levanta. Si se le hacen sugestiones de pesadez de los párpados, abre más los ojos. Lo importante en el sujeto negativista es que en realidad las sugestiones influyen en él, aunque en la dirección contraria. La solución es aprovechar su negativismo y darle sugestiones contrarias para que el sujeto se confunda y haga lo que realmente nosotros queremos que haga. Ante un caso así, lo mejor es cambiar de método y usar uno de movimientos repetitivos como el método del pestañeo sincronizado. DEPRECIACIÓN. La depreciación actúa como defensa contra la ansiedad del sujeto. Este la convierte en defensa contra la hipnosis mediante gestos y sonrisas despreciativas, para expresar que el procedimiento es tonto e infantil, y que lo que hace es sólo para complacer al hipnotizador. El hipnotizador debe mostrar un buen ajuste psicológico en estos casos, pues de lo contrario se deteriora el rapport y se pierde la posibilidad de inducir la hipnosis.
Si el hipnotizador muestra calma, el sujeto no puede mantener esta defensa. Si se continúan las sugestiones, la defensa se desvanece y el sujeto puede ser hipnotizado. INQUIETUD. Ésta es la defensa inconsciente más frecuente contra la hipnosis y aparece sobre todo cuando se realiza la inducción por sugestiones de relajación. La ansiedad se manifiesta de muchas maneras. El sujeto se mueve en el asiento o diván, se siente inquieto, tiene mucho calor o mucho frío, encuentra la almohada muy alta o muy incómoda, se abrocha y desabrocha los botones, no se siente cómodo de ninguna forma. Esta actividad inquieta le impide relajarse y así evita los efectos de las sugestiones, a las cuales realmente teme. A veces la defensa es menos pronunciada y se refleja en los dedos de las manos y en los pies. Si la defensa no es grande, puede ser superada continuando las sugestiones de relajación y calma; la inquietud se reduce gradualmente y el sujeto queda listo para la hipnosis. Si la inquietud es persistente, debe cambiarse el método de inducción por otro que aproveche dicha inquietud; por ejemplo, algún método que implique levitación del brazo, pestañeo sincronizado o movimiento repetitivo de las partes del cuerpo en que se manifiesta la inquietud del sujeto y de esta forma se vuelven las defensas del sujeto contra sí mismo. Otra forma de manifestarse la inquietud es en la conversación. Cuando el sujeto se da cuenta de que está siendo influido por las sugestiones, hace algún comentario, pregunta algo o comienza a hablar sobre cualquier asunto sin importancia. El mecanismo es tan superficial, que basta con pedirle que no hable durante algunos minutos. SIMULACIÓN. Esta es la más interesante de las defensas. El sujeto trata de evitar la hipnosis ejecutando conscientemente todas las sugestiones. Piensa que si sigue todas las sugestiones conscientemente, mantiene el control, ya que actúa por su propia y libre voluntad, al mismo tiempo que no hiere la sensibilidad del hipnotizador, con el que mantiene un buen rapport. Este tipo de defensa se reconoce por la rapidez con la que se ejecutan las sugestiones. Por ejemplo, en la levitación del brazo, lo normal es que las manos sean levantadas lentamente y con mucho temblor y tensión; incluso en los sujetos más sugestionables hay que repetir dos o tres veces las sugestiones antes de que comiencen a levantar las manos. La mirada del sujeto está fija en sus manos. Los párpados inferiores están algo retraídos. En cambio, cuando hay simulación no sucede así. El movimiento de las manos es rápido y, por lo general, no hay temblor ni tensión. La expresión fija de los ojos está ausente y tiende a recorrer la habitación con la mirada. Cuando se detecte esta defensa, es un error decírselo al sujeto y comenzar nuevamente. No debe decírsele nada que pueda indicar que hay dudas sobre la genuinidad de la hipnosis y continuamos como si así fuera. Es importante mantener el buen rapport. Se repite el mismo ejercicio varias veces (si estamos usando levitación del brazo, le hacemos subir y bajar el brazo varias veces) y en la sesión siguiente se repite el procedimiento. Llega el momento en que la respuesta a la sugestión es más lenta y la mirada se fija en un punto. El sujeto queda hipnotizado al dejarlo continuar con su simulación de hipnosis. Es decir, le hacemos creer al sujeto que confiamos en que está hipnotizado y lo despertamos. En la sesión siguiente empleamos el mismo método de movimientos repetitivos o uno similar (por ejemplo, el pestañeo sincronizado) y el sujeto quedará hipnotizado. SUEÑO.
El sueño se utiliza como defensa mucho más comúnmente cuando se ha inducido la hipnosis por sugestión de relajación y sueño. Hemos señalado la ventaja de volver las defensas del sujeto contra sí mismo, pero a veces el sujeto emplea este principio contra el hipnotizador. Tal es el caso del sueño: respondiendo literal o completamente a una sugestión de sueño, el sujeto puede defenderse contra las sugestiones siguientes. Cuando un sujeto use el sueño como defensa contra alguna situación específica, debe despertársele y rehipnotizarlo por un método activo, tal como la levitación del brazo u otro. La inducción se realiza con los ojos abiertos y se le dan sugestiones repetidas al sujeto: Sus ojos están abiertos... usted está bastante despierto... abandónese y que su cuerpo trabaje automáticamente, no se vaya a dormir... REACCIÓN DE SOBRESALTO. A veces las sugestiones de relajación parecen ser bien aceptadas. El sujeto cierra sus ojos espontáneamente, está relajado por completo y parece que estamos a punto de llevarlo a un sueño hipnótico profundo. Pero de pronto se despierta sobresaltado y se levanta del asiento o diván. Esta reacción puede observarse también en formas menos pronunciadas. Si esto se produce una sola vez, la inducción puede continuar satisfactoriamente. Si ocurre más de una vez, debe cambiarse el método por otro más activo.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Undecima parte.6 SÍNTOMAS. A veces algunos pacientes usan sus síntomas o padecimientos como defensa. Un asmático desarrolla un severo ataque de asma justamente en la etapa crítica de la inducción hipnótica; o un paciente que vaya a ser tratado por migraña se queja de pronto de un paroxismo de dolor de cabeza y dice que le es imposible continuar. En un caso así se debe suspender la sesión y sugerirle posthipnóticamente al sujeto que en cuanto despierte se le aliviará su dolencia. En realidad, como se trata de un mecanismo de defensa, el asma o la migraña desaparecerá tan pronto despertemos a la persona, aunque no le demos la sugestión posthipnótica. DESPERTAMIENTO Y PANTALLAS. Estos dos mecanismos de defensa son típicos del proceso de diálogo con el sujeto en estado hipnótico, principalmente cuando se le somete a hipnoanálisis. Cuando se le pregunta a un sujeto acerca de temas que le molestan, puede defenderse de esta amenaza despertándose de la hipnosis. Lo mismo puede ocurrir cuando se le da una sugestión que es demasiado difícil en relación con su profundidad hipnótica. Para evitar esto hay que prestar gran atención al rapport y asegurarse de la profundidad de la hipnosis antes de invitar al sujeto a hablar. Un buen rapport da seguridad al sujeto y reduce la ansiedad, por lo que la motivación para esta forma de defensa se reduce considerablemente o queda abolida. La defensa por pantalla es más difícil de reconocer. El sujeto habla sobre elementos psicopatológicos, pero a medida que el tratamiento avanza se encuentra que los temas discutidos
no son realmente relevantes para el conflicto. El paciente está creando ideas de pantalla, es decir, está ocultando o encubriendo el material más valioso. Cuando se identifique esta defensa, desvíe al sujeto hacia otras áreas de conflicto más significativas. COMPLICACIONES E INSUFICIENCIAS DE LA HIPNOTERAPIA.
1. Los resultados obtenidos por la hipnoterapia no son duraderos, a menos que sean 2.
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reforzados por otros métodos psicoterapéuticos, como la psicoterapia racional. la persuasiva, la sugestión vigil y otras psicoterapias centradas en la palabra. La mayor dificultad está dada por los sueños eróticos que suelen aparecer en algunos pacientes del sexo opuesto y que involucran al terapeuta en acusaciones falsas, pues estos sueños son trasladados por este tipo de sujetos a la vida real e inculpan injustamente al hipnotizador de intento de violación. Esta situación se evita introduciendo a una enfermera o técnica que esté presente durante la sesión. La dependencia que se establece con el hipnotizador, pues la hipnosis resulta generalmente agradable para el paciente, lo cual puede crearle cierto hábito., y quiera ser hipnotizado para resolver cualquier problema que se le presente. La no posible utilización de la hipnosis en todos los casos, pues no todas las personas tienen el mismo grado de susceptibilidad hipnótica y algunas no pueden ser inducidas a la hipnosis por los métodos convencionales. La posible utilización de los métodos de inducción hipnótica por personal no plenamente adiestrado que pueda provocar yatrogenia por el desconocimiento de las técnicas, aunque este problema es común y puede ocurrir igual con cualquier psicoterapia mal utilizada. La pérdida del rapport del paciente con el hipnotizador, pues se deja de responder a las sugestiones. Esto puede suceder cuando no se refuerzan durante un tiempo las sugestiones y también por la falta de dominio de la técnica. Si se pierde el rapport, el paciente pasará al sueño fisiológico, donde sencillamente se despierta por sí mismo o se le puede rehipnotizar por el método de Noiset y Bertrand. Una complicación que se puede presentar es la aparición de reacciones emocionales como lágrimas, gemidos, sollozos, entre otros, que se deben a vivencias pasadas del sujeto; las representaciones mnémicas provocan estas manifestaciones que pueden surgir sin que sea el interés del hipnotizador, aunque en realidad no representan ningún peligro para el paciente, ya que algunos métodos hipnoterapéuticos, como la hipnocatarsis, buscan precisamente provocar estos recuerdos que pueden ser causas de trastornos psicógenos curables cuando se descarga la energía del foco de excitación inerte patológico. Para resolver esos casos, es conveniente y muy eficaz aplicar sugestiones que lleven al paciente a un grado más profundo de hipnosis, unido a la sugestión de sensaciones de bienestar, confianza, tranquilidad y firmeza. Cuando no se cumplen las normas necesarias para sacar al sujeto del estado hipnótico y se produce un mal despertar, por lo que el sujeto se siente tenso, angustiado, con dolores fuertes de tipo muscular y en las articulaciones, vértigos, malestar, fatiga, cefalea, falta de concentración, falta de voluntad y trastornos de la conciencia. Todo esto se evita sugiriendo al sujeto, antes de despertarlo, sentimientos de satisfacción, relajamiento, seguridad, ausencia de dolor, etcétera.
CONTRAINDICACIONES DE LA HIPNOSIS. Toda técnica, por muy buena que sea, tiene siempre una serie de contraindicaciones. En la hipnosis hay casos aislados en los que no es recomendable su utilización, aunque en realidad el tema es muy polémico. EN LAS PSICOSIS. La aplicación de la hipnosis en pacientes psicóticos es muy discutida. Algunos autores reportan
éxitos con pacientes esquizofrénicos, otros recomiendan la hipnosis en psicóticos con el fin de prepararlos para el tratamiento electroconvulsivante, y muchos otros se oponen a esto, sobre todo cuando los delirios tienen un contenido paranoide (ideas delirantes de daño, perjuicio, referencia, etc.). Martínez Perigod y Asís han utilizado la hipnosis en las psicosis depresivas exógena y endógena con magníficos resultados, principalmente en la primera. En nuestra experiencia la hemos utilizado en esquizofrénicos paranoides una vez recuperados con el tratamiento con psicofármacos antipsicóticos como la clozapina, a dosis promedio de 600 mgs, posterior a los 6 meses de tratamiento, para inducirles estilos de vida saludables, por ejemplo: eliminar el hábito de fumar, ser aseado, tener buenos hábitos alimentarios, tener una mejor autoestima, recuperar la vida de relación con su pareja, mejorar su relación con los familiares, la reincorporación a la vida laboral, el deseo de ser útil y de ayudar a los demás. HIPOCONDRÍAS. Los componentes hipocondríacos pueden encontrarse a un nivel neurótico o psicótico. A nivel neurótico los encontramos en la neurosis hipocondríaca, que se caracteriza por una preocupación constante y persistente de desasosiego que se manifiesta con respecto a enfermedades supuestamente padecidas o con la conservación de la salud. Una de las características de los hipocondríacos es la persistente tendencia a los temores, que sólo recesan brevemente, a pesar de que se le demuestre al paciente la inexistencia de la enfermedad a través de los distintos exámenes complementarios. La hipocondría es el temor y el deseo concomitante de tener una enfermedad. Existen ideas hipocondríacas que se manifiestan como trasformaciones de los órganos internos; por ejemplo, se quejan de no tener el cuerpo como todas las personas, se sienten como si estuvieran vacíos por dentro, como que los órganos no funcionan correctamente. A nivel psicótico aparecen los conocidos delirios hipocondríacos que muchas veces se asocian con la melancolía, apareciendo ideas fijas sobre que están totalmente destruidos por dentro, que sus órganos están podridos o dañados; esto se expresa a través de preocupaciones obsesivas y renovadas que llevan al paciente a una inquietud constante por su salud física y que se manifiesta frecuentemente por gemidos estereotipados, trastornos funcionales diversos que son expresados incesantemente.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Undecima parte.7 La preocupación constante por la salud que tienen los hipocondríacos da lugar desde un punto de vista general, a una continua búsqueda de dolores así como de sensaciones anormales en ciertas partes del cuerpo. El sujeto descarga toda su tensión ansiosa por medio de la inculpación de uno o varios órganos determinados. Los aspectos señalados anteriormente sobre las características fundamentales de los hipocondríacos nos hacen valorar la posibilidad de no utilizar la hipnosis en dichos pacientes. Primeramente porque si eliminamos las ideas sobre un órgano que él cree enfermo, dicha idea se desplaza hacia otro órgano. Al mismo tiempo la utilización de la hipnoterapia en estos pacientes hace que ellos consideren que efectivamente están enfermos desencadenando muchas veces
delirios hipocondríacos como consecuencia del pensamiento que les hace concebir ideas acerca de que su cerebro funciona también inadecuadamente. Además, estos pacientes establecen una dependencia absoluta del tratamiento, dependencia extraordinariamente difícil de eliminar, pues se convierten en perseguidores del terapeuta para que les alivie sus molestias, las que -como ya dijimos- cuando prácticamente no ha terminado de eliminar una ya está apareciendo otra. Muchos recomiendan no utilizar la hipnosis en estos casos, a no ser por una situación extraordinariamente necesaria. PRECAUCIONES CON LOS PACIENTES HISTÉRICOS. Las personalidades histéricas y las neuróticas histéricas se caracterizan por su teatralidad, su continuo egocentrismo, su tendencia a trasformar la realidad de los hechos objetivos y olvidar lo que les desagrada. Dicen constantes mentiras, son provocativos sexualmente, aunque casi siempre son frígidas las mujeres e impotentes los hombres. La personalidad del histérico puede considerarse como artificial, pues estos sujetos dan la impresión de falsedad y reflejan el mundo como les conviene a su imaginación, reprimiendo lo que no les gusta y cambiando lo que no está de acuerdo con sus intereses. Son fantasiosos, sugestionables y mentirosos, llegando a inventar historias que ellos mismos acaban por creer. Además de su tendencia a dramatizar, asumiendo el papel de víctimas como recurso para reclamar afecto y atención, presentan otros rasgos de inmadurez como dependencia, egoísmo, vanidad, inestabilidad emocional, intolerancia a frustraciones y la alta sugestionabilidad ya mencionada. Estas características obligan a ser muy cuidadoso en caso de tener que aplicar la inducción hipnótica a una histérica, pues no se deben emplear los métodos de inducción sin la presencia de una enfermera para evitar posibles acusaciones de intento de violación o de insinuaciones sexuales, producto de la imaginación fantasiosa de este tipo de paciente que acostumbra a traer dificultades al terapeuta, pues al principio es muy positivo el rapport que se establece con el hipnotizador, pero cuando éste no secunda las imaginaciones eróticas del sujeto, las mismas se transforman en sentimientos de odio y de venganza. Esta recomendación es válida también para los neuróticos histéricos, tanto los que presentan disociaciones como los que manifiestan síntomas de conversión. Es importante señalar que muchas veces la ganancia secundaria que les establece a los histéricos el síntoma de conversión hace que continúen con él después del tratamiento, a pesar de haberse eliminado por la hipnosis, pero entonces fingen conscientemente para no perder el control de la ganancia mencionada. Otras veces se encargan de manifestar libremente que todo lo que hacían era mentira, que lo hacían voluntariamente para engañar al terapeuta, que no estaban hipnotizados. OTRAS CAUSAS. Se deben tomar precauciones cuando se vayan a utilizar las técnicas hipnóticas en los siguientes casos: Oposición del paciente. Cuando el sujeto está completamente en contra de la aplicación de la hipnosis, no se debe aplicar ésta y mucho menos si se encuentran presentes otras personas. Es muy importante establecer un buen rapport con el sujeto y posteriormente obtener su consentimiento para aplicarle la inducción hipnótica. Resulta necesario y recomendable no utilizar
la palabra hipnosis, sobre todo en aquellos pacientes que no tienen por qué conocer el término, pero sí es importante explicarles en qué consiste el tratamiento. Menores. No se deben aplicar técnicas hipnóticas a menores sin el previo consentimiento de sus padres o tutores. Es conveniente preparar a los familiares con vistas a que los mismos cooperen en el tratamiento; si es necesario, se les puede dejar presenciar parte del mismo. Exhibiciones. Nunca se deben realizar demostraciones o exhibiciones de fenómenos hipnóticos sin que estén justificadas con fines investigativos, terapéuticos o docentes, pues esto puede crear rechazo al método. Ansiedad de espera. Cuando un sujeto se encuentra muy ansioso porque quiere que aparezca rápidamente el estado hipnótico, suele suceder lo contrario, pues la expectación y. la angustia forman un proceso de excitación, cortical. En estos casos lo primero que debe hacerse, es decirle: En el día de hoy no lo vamos a hipnotizar; sino que solamente vamos a provocar una relajación. Esto hace que se bloquee automáticamente la ansiedad de espera del sujeto y se rompa la ley del esfuerzo contraproducente (loi de l'effort convertí, según Baudovin). Rapport hipnótico con otro terapeuta. Este punto ha sido muy discutido, pues algunos autores plantean que es difícil hipnotizar a una persona a la que le fue aplicada la inducción por otro hipnotizador. Esto está en dependencia de la experiencia del terapeuta, pues en realidad puede aprovecharse el hecho de que el sujeto se encuentre condicionado reflejamente a la inducción hipnótica, pero si el hipnotizador no cuenta con recursos y no está práctico, el paciente rápidamente se da cuenta de la falta de dominio de la técnica y se pierde la confianza por ambas partes. Relaciones personales estrechas. Es sumamente difícil hipnotizar a una persona con la que se tienen relaciones personales estrechas, como amigos, familiares, íntimos sexuales; compañeros de trabajo o de la misma profesión, pues siempre existe la duda de si se les va a preguntar algo de su intimidad o si se les va a someter a alguna broma. Lo mejor, cuando exista un vínculo de esta clase, es remitir el caso a un colega. Personalidades psicopáticas de tipo sociopático. Hay algunos tipos de personalidades psicopáticas que tienen ningún interés en curarse y esto trae como consecuencia que hagan todo lo contrario a lo que se les sugiere; es decir, existe una autosugestibilidad negativa. En estos casos hay una forma de romper esta defensa consciente (no confundir con la defensa inconsciente del negativismo). Se le indica al sujeto que debe dejar los ojos bien abiertos; si los cierra se le dice que los deje cerrados, y así sucesivamente, cuanta acción voluntaria haga el sujeto se le retuerza como sugestión. Este procedimiento rompe el negativismo consciente y lleva al individuo al trance hipnótico. Pero en términos generales, estos sujetos son extraordinariamente difíciles para trabajar con ellos y los resultados son tan pobres que no merece la pena utilizar este recurso terapéutico (la hipnosis) con ellos, pues sus rasgos narcisistas hacen que si acaso son hipnotizados no vuelvan más a las sesiones.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Undecima parte.8 RECOMENDACIONES PRÁCTICAS AL UTILIZAR LA HIPNOSIS.
1. Aprender sobre hipnosis y saberla emplear no es difícil; sin embargo, su uso para asuntos 2.
de investigación y terapéutica requiere destreza, habilidad y dominio; de ahí que si es esta última su finalidad, asegúrese de tener un control pleno. Nunca pierda la paciencia ante un caso que se resiste a abandonar el trance hipnótico, pues si usted se desespera, sólo logrará que aumente su propia angustia y disminuirá su capacidad para devolver al sujeto a su estado anterior.
3. Siempre utilice frases suaves y respetuosas de la integridad y valores del paciente; eso hará que a nivel inconsciente o consciente, su inteligencia capte el sentido ético y humano de su actuación y creará mecanismos actitudinales favorables al hecho hipnótico. 4. Mantenga vivo el principio de No hacer daño, ello le evitará caer en errores éticos y a la vez fortalecerá su capacidad humana y vocacional hacia el sujeto que requiere su atención. 5. Ser honesto y reconocer las limitaciones propias prestigiarán su estatura humana y científica, y deberán movilizarle a profundizar sus conocimientos y experiencias. 6. Recuerde que la hipnosis es válida y posible de aplicar, pero no una "llave maestra" que sirva para todo y a todos, por lo que no debe forzar su uso donde no tenga posibilidades. 7. Si se decide por un método o una escuela, recuerde que los otros también son útiles. Acudir a ellos no significa en modo alguno modificar su postura. 8. Es importante tener en cuenta que es posible aliviar un dolor por medio de la hipnosis, pero que este dolor puede ser la manifestación de un trastorno somático y que continuará su curso. Por eso consideramos necesario que sólo se utilice la hipnosis una vez que se ha investigado la causa que produce el dolor, pues de lo contrario se harán desaparecer los síntomas agudos de peligro y se ocultará el origen verdadero del dolor. En caso de que la manifestación sea psicógena, está plenamente justificada la aplicación de la hipnosis. 9. No se debe pasar a un sujeto a un estado de hipnosis profunda sin tener un dominio completo de la técnica. 10. No se deben utilizar sugestiones indeterminadas, sino como un hecho consumado. Por ejemplo: Usted está completamente bien, su dolor desaparece completamente, su voluntad es firme y siente gran seguridad. 11. Cuando se comienza en la aplicación de la hipnosis, se deben realizar pruebas de susceptibilidad, pues existe la posibilidad de encontrar a un sujeto altamente sugestionable que pase a una hipnosis profunda y se pierda el rapport, ocasionando la imposibilidad inmediata de despertarlo. Las pruebas de susceptibilidad hipnótica permiten predecir el grado de sugestionabilidad del sujeto. 12. No se debe vacilar entre una sugestión y otra, para no dar la impresión de que el hipnotizador no sabe qué tiene que hacer, pues se crea inseguridad en el sujeto y esto puede sacarlo del estado hipnótico. 13. Cuando se comienza en la utilización de la hipnosis, es preferible evitar interrupciones o ruidos, pues crearían excitación en las zonas corticales y dificultarían la inducción hipnótica. 14. Si no se dominan los métodos de inducción hipnótica y los pasos de la profundización, se debe tener preparada y cerca una libreta de notas o una hoja de papel, a la cual acudir en caso de duda, sin que el sujeto se percate de la falta de experiencia. 15. No olvide que mientras más sepa y destine su conocimiento a los fines nobles de la humanidad, más podrá hacer por ella y para ella. VENTAJAS Y PRINCIPIOS DE LA HIPNOSIS. VENTAJAS DE LA HIPNOSIS.
1. No utiliza ningún tipo de agente químico que pueda ocasionar intoxicación. 2. Eliminación rápida de los síntomas en comparación con otras técnicas terapéuticas. 3. Posibilidad de ser combinada con otras técnicas de psicoterapia centradas en la palabra para obtener resultados duraderos.
4. Formación de estados especiales de conciencia que permiten trabajar directamente el 5.
problema o fenómeno deseado, así como realizar investigaciones sobre el inconsciente del sujeto. Reforzamiento de las estructuras de la personalidad del sujeto, creando en el mismo sentimientos de tranquilidad, seguridad y firmeza.
6. Fácil aprendizaje de los métodos de inducción hipnótica y de los pasos de profundización de la hipnosis.
7. Posibilidad de usar la hipnosis como hipnocatarsis, que facilita al paciente la toma de conciencia de su problema y la desaparición de éste.
8. Permite crear las bases y enseña al sujeto rápidamente lo que significa la relajación para aliviar la tensión emocional y hace participar activamente al paciente en el tratamiento y solución de sus problemas. PRINCIPIOS DE LA HIPNOSIS.
1. La inducción hipnótica se produce principalmente por la influencia de dos vías fundamentales: una biológica y otra psicológica. La vía biológica es la excesiva fatiga de los órganos de los sentidos, principalmente los de la visión; esto se agudiza cuando se produce cansando en los músculos elevadores de los párpados. Este agotamiento establece una comunicación con los centros nerviosos sensoriales y se crea un estado semejante al sueño, que permite la formación de fenómenos especiales. La vía psicológica se establece por medio de la utilización de la palabra bajo la forma de sugestiones, que pueden lograr un estado alterado de conciencia que facilite la obtención de todos los fenómenos que pueden producirse a través de la hipnosis.
2. Los órganos sensoriales tienen la característica de que, cuando reciben un estimulo
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monótono, constante y persistente, se produce en ellos una especie de agotamiento o fatiga que establece las bases fundamentales para llevar al sujeto a la inducción hipnótica, ya que se provoca un estado de inhibición cortical generalizado que predispone al sujeto hacia el sueño. Se debe tener en consideración que cuando se trabaje al sujeto en fase de hipnosis profunda, al despertar éste olvidará todo lo sucedido. Esto nos hace llamar la atención para que se tenga en cuenta que, cuando necesitemos que un sujeto recuerde algo de lo sucedido en esta fase, se le señale a través de una sugestión posthipnótica como la siguiente: Todo lo que usted me está diciendo en estos momentos lo recordará totalmente cuando despierte. Los fenómenos producidos por la hipnosis, como anestesias, amnesias, catalepsias, etc., no se deben a nada misterioso, sino que son el resultado de excitaciones o inhibiciones de la corteza cerebral establecidas por la comunicación entre el hipnotizado y el hipnotizador, donde el primero se hace susceptible y receptivo a las indicaciones que le hace el segundo. Se pueden dar sugestiones cuando el sujeto se encuentra en hipnosis superficial, pero son más efectivas cuando la hipnosis es más profunda. Las condiciones psíquicas indispensables para lograr una hipnosis perfecta están íntimamente relacionadas con la disposición psicológica del sujeto ante el hipnotizador, es decir, con el rapport que se establece entre ambos desde la primera sesión, así como con lo que ha oído hablar del terapeuta. Si se deja de hablar a un sujeto que se encuentra en hipnosis profunda, se pierde el rapport y lo más probable es que el sujeto pase al sueño fisiológico, aunque esto también se puede conseguir por sugestión.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Undecima parte.9 8. Mientras más sueño tenga un individuo, con más facilidad se entregará al sueño hipnótico. 9. Una persona que esté hipnotizada no queda totalmente incomunicada con el medio exterior, sino que existe selectividad en la comunicación, determinada por condiciones psíquicas. En el sueño fisiológico también existe selectividad, que depende de la naturaleza del
sueño, es decir, que la persona que duerme reacciona sólo a estímulos bien determinados que varían de un sujeto a otro. 10. Existe cierta similitud entre el estado de hipnosis profunda y el sueño natural y se pasa fácilmente de uno al otro. 11. La posibilidad de provocar el estado hipnótico profundo en los sujetos hipnotizados es aproximadamente de veinte por ciento. 12. La hipnosis no requiere ninguna concentración especial y ninguna atención, sino, muy al contrario, una relajación mental. En el estado hipnótico no aparece, desde el punto de vista electroencefalográfico, una disminución de la amplitud del ritmo alfa, como suele provocar la agudización de la atención. Los potenciales demuestran la existencia de cierta tranquilidad o relajación de la conciencia.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.1 Hipnosis terapéutica. Teoría, métodos y técnicas aplicadas. Duodécima parte Dr. Alberto Ochoa Govin. Doctor en Medicina. Especialista en Neurocirugía. Servicio de neurología, neurocirugía y terapia del dolor. Fundación medico preventiva. Clínica médico quirúrgica de Cúcuta. Centro Integral de especialistas de Cúcuta. Colombia. Profesor Universidad de Pamplona. Norte de Santander. Colombia. Colaboradora: Dra Ana Teresa Govin Cid. Doctora en Medicina. Especialista en Hematología. Master en Ciencias en Medicina Tradicional y Natural. Profesora del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba. Cuba.
Aplicaciones de la hipnosis Nuestras experiencias con la hipnosis Hipnosis en el manejo de la hipertensión arterial esencial y el estrés emocional Hipnosis en el manejo de niños en edad escolar con dificultades en el aprendizaje Hipnosis en el control del asma bronquial Otras experiencias clínicas Bibliografía Datos del autor
APLICACIONES DE LA HIPNOSIS. Está ampliamente demostrado que por medio de la palabra se puede ejercer una influencia directa sobre los procesos de excitación y de inhibición de la actividad nerviosa superior, ya sea en vigilia, sueño natural, hipnosis u otro estado alterado de conciencia. Esta influencia puede modificar, desencadenar o inhibir el curso de procesos vegetativos muy definidos y es utilizada con fines diversos. Como plantea Plátonov, la palabra no sólo inhibe, sino también excita y puede provocar cambios en el sistema endocrino y neurovegetativo mediante emociones sugeridas, tal como se ha demostrado a través de registros radiográficos y por análisis de laboratorio de la secreción gástrica. Si aplicamos una sugestión verbal que provoque una emoción negativa (miedo, temor, angustia), aparece inmediatamente una disminución considerable del tono de la corteza cerebral, así como de las funciones de los órganos, lo que hace que se empeoren los procesos de asimilación del organismo. Si la sugestión verbal es, por el contrario, positiva (alegría), aumenta la excitabilidad de la corteza y mejoran los procesos de asimilación.
Una orden verbal puede provocar cambios completos en la conducta del hombre en cuanto a la respuesta a los estímulos externos e internos. Esto es sumamente importante, ya que por medio de la sugestión en estado de vigilia y más aún en hipnosis, se le puede presentar a un paciente un estímulo que originalmente le provocaba pánico y angustia, pero se evitan dichos efectos haciendo acompañar al estímulo desagradable de una sugestión verbal que le indique satisfacción; esto provocará un desacondicionamiento de la reacción emocional negativa ante ese estímulo. Son numerosas las investigaciones experimentales por medio de la hipnosis en las cuales se le ha dado de beber alcohol a un paciente y se le ha dicho que es agua, observándose ausencia de intoxicación y pérdida de la selectividad en la discriminación del producto mediante el gusto. Pudiéramos señalar un sinnúmero de experiencias como ésta. En la Medicina la importancia que tiene la utilización de la sugestión verbal en estado de hipnosis radica principalmente en las excitaciones o las inhibiciones que se pueden establecer directamente sobre la corteza cerebral, ya que ésta es el punto de partida de las alteraciones funcionales psicogenéticas. Por tanto, si aplicamos un estimulador que actúe sobre la corteza, es decir, sobre el segundo sistema de señales, estará actuando directamente sobre dichas alteraciones. Las aplicaciones de la hipnosis en medicina humana incluyen el tratamiento de las alteraciones de los órganos respiratorios, del sistema circulatorio, epidérmicas, de las glándulas de secreción interna y mixtas, y otras. Por medio de la hipnosis puede tratarse el asma bronquial, la taquicardia paroxística, la hipertensión arterial de causa psicosomática, la cefalalgia y la migraña, la colitis ulcerativa, el hipertiroidismo y otros trastornos. En dermatología se emplea para las dermatitis. Por ejemplo, Lehman, Marcuse, Pávlov, Plátonov, Meares y muchos otros autores reportan el éxito en el tratamiento hipnoterapéutico en la eliminación de eccemas, verrugas y otras dermatosis. Se han reportado por Machado buenos resultados en el tratamiento de la psoriasis y el vitíligo. Su efecto anestésico, es una de sus aplicaciones médicas más conocidas, como bloqueadora de las sensaciones dolorosas. En hipnosis profunda, la piel de un sujeto puede ser, atravesada con un objeto punzante, cortada o quemada sin que sienta dolor y anulando prácticamente las reacciones fisiológicas a la lesión (hemorragias y otras). Brugnoli señala que cuando se utiliza la hipnosis para eliminar dolores físicos, es necesario tomar en consideración que no sean expresión de una enfermedad somática, ya que el dolor desaparece considerablemente al sugerirle al paciente estados analgésicos; y éstos pueden borrar la expresión de una enfermedad somática perjudicándolo de esta forma, pues dicha enfermedad no dejaría de continuar su curso. Sacerdote menciona estudios sobre la eficacia de la hipnosis para alterar favorablemente la percepción de los pacientes cancerosos, amortiguando las reacciones somáticas y psicológicas, limitando la morbilidad, prolongando la vida útil y reduciendo el uso de medios quirúrgicos, químicos y radiológicos, así como de otras terapias, incluyendo los narcóticos. Marcuse recomienda el uso de la hipnosis en oncología, para aliviar los dolores del cáncer de mamas y de útero, alegando que permite reducir el consumo de drogas, mejorar la depresión, prolongar la vida y hacer más fácil muerte. De cualquier modo, opinamos que no debe utilizarse la hipnosis con fines analgésicos o anestésicos sin antes conocer el origen del dolor que se pretende aliviar. En la odontología las posibilidades analgésicas y anestésicas de la hipnosis han permitido su uso no sólo en operaciones quirúrgicas, sino también en la práctica diaria odontológica.
Stolzenberg, Shaw, Moss y otros investigadores destacan las ventajas de la utilización de la hipnosis como forma de anestesia bucal, como analgesia y como medio profiláctico para crear reflejos condicionados de higiene y eliminar el clásico temor que tienen las personas cuando deben enfrentarse con el odontólogo. La aplicación de la hipnosis en odontología ha tenido gran auge en los últimos años. Así, existen universidades en diferentes países que consideran la hipnodoncia como asignatura básica en la carrera de odontología. En Cuba, cada día es mayor el número de odontólogos que usa la hipnosis en su práctica diaria, pues las ventajas son evidentes, sobre todo en los pacientes alérgicos o intolerantes a los anestésicos. Otra de las ventajas está relacionada con el comportamiento del paciente en el tratamiento quirúrgico de las encías o en el trabajo de fresado en los dientes afectados por caries. Con la ayuda de la hipnosis, el paciente no siente dolor ni miedo, no contrae la musculatura estriada de la boca y facilita el trabajo del odontólogo. Barber ha utilizado un procedimiento rápido de inducción hipnótica con el cual ha realizado muchos trabajos sobre hipnoanalgesia.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.2 En obstetricia y Ginecología la hipnosis ha sido utilizada como medio psicoprofiláctico de los dolores del parto y sobre esto se han escrito numerosos trabajos. En Cuba es ampliamente conocido el libro de Velvolski y colaboradores sobre el tema. Sersale plantea que el estado hipnótico abrevia las etapas del parto y la dilatación se establece en un tiempo más corto, porque no existe una actitud inhibitoria en la paciente. Por medio de la hipnosis se favorece la desaparición de los temores propios del parto, principalmente en las mujeres que van a parir por primera vez. El momento del parto es en realidad una situación de estrés que se crea en la mujer. Si logramos establecer un estado de tranquilidad, seguridad y firmeza en el momento del alumbramiento y en sus pasos previos, es indudable que el mismo se realizará de forma más segura, con menor tensión emocional y menor presión psicológica, pues a través de la hipnosis se pueden neutralizar todas las sugestiones que desde la niñez reciben las mujeres respecto a los dolores del parto. La mujer bajo hipnosis se concentra y utiliza con mayor eficacia sus esfuerzos, sin dispersar la energía muscular. Esto trae como resultado que se acorten significativa- mente las etapas del parto. El acortamiento del tiempo del parto evita que la mujer se agote, disminuye considerablemente las intervenciones obstétricas y se previene la anoxia fetal. Esto ha quedado demostrado por investigaciones realizadas a través de comparaciones del intercambio gaseoso ácido básico efectuado con neonatos nacidos bajo hipnosis y otros nacidos con anestesias convencionales. Se ha usado la hipnosis para cambiar la posición del feto incluso pocos días antes del parto y para estimular la secreción de leche en las madres. Bowers y Velly plantean que la hipnosis sirve como estrategia para controlar las respuestas específicas al estrés, asi como para diversos fines, principalmente en la inhibición de distintas reacciones emocionales, y hacen énfasis en que la analgesia por hipnosis es más eficaz que la morfina para el alivio del dolor, de lo que se desprende la significación que adquiere la utilización de la hipnosis en los problemas relacionados con el parto. En ginecología, la hipnosis se emplea eficazmente en trastornos psicofisiológicos como: dismenorrea psicosomática, dismenorrea histérica, amenorrea funcional, síntomas de la menopausia, esterilidad psicógena, menorragia funcional, leucorrea funcional, seudociesis (embarazo psicológico) y prurito vulvar psicógeno.
También se emplea para evitar el embarazo. Varios colegas informan estar aplicando con éxito la hipnosis como medio seguro de contracepción. Recientemente se publico un artículo sobre la aplicación de la hipnosis en la neurocirugía, en Chile, donde se practicaron 6 craneotomías en pacientes con afecciones neuroquirúrgicas (hematomas intracraneales y tumores cerebrales), bajo los efectos de una hipnosis profunda se logro mantener dormidos a los pacientes, con una total insensibilidad al dolor de la piel, el tejido subcutáneo y músculos del cuero cabelludo, el periostio, la duramadre en su porción vecina a los senos venosos y de las principales arterias intracraneales. Cabe señalar que como ventaja para realizar este tipo de procedimiento tenemos que el cráneo, el parénquima cerebral y la mayor parte de la duramadre, la piamadre y aracnoides, así como el revestimiento ependimario de los ventrículos y los plexos coroideos son insensibles a los estímulos dolorosos. La hipnosis en los trastornos psicológicos es efectiva, según lo demuestran varias investigaciones. Además de los trastornos ginecológicos mencionados anteriormente, la, hipnosis puede utilizarse en el tratamiento de las disfunciones sexuales. Cheek, Deables, Meares, Lastre y otros, informan un gran número de casos de frigidez y de impotencia curados a través de la hipnosis. También se emplea en el tratamiento de la enuresis, el insomnio, la adicción a las drogas, el alcoholismo, el tabaquismo, los tics, la tartamudez, la agresividad masculina en la mujer, la obesidad psicógena, la anorexia nerviosa, los trastornos de la personalidad y las neurosis o trastornos del ánimo. Feriolz señala el éxito que ha obtenido en la hipnoterapia de casos de vómitos psicógenos y hace énfasis en la rapidez con que se remitieron los síntomas. La obesidad es con frecuencia manifestación de trastornos psicógenos, y muchas personas canalizan la ansiedad a través de la bulimia, lo que trae como consecuencia un aumento considerable del peso. Para resolver esta cuestión se han utilizado técnicas como la acupuntura, la cual estimula a través de agujas los centros nerviosos específicos que se relacionan con el apetito; sin embargo, los resultados son mejores, más duraderos y eficaces cuando se utiliza la hipnoterapia dirigida hacia esta meta. Excelentes han sido los resultados obtenidos por Carmenate, Guelman y Linde, quienes recomiendan trabajar a los pacientes en hipnosis media y profunda, dándoles sugestiones posthipnóticas de falta de apetito y creándoles aversión a los carbohidratos y lípidos. Cualquier tipo de toxicomanía puede ser desacondicionada. La técnica para la deshabituación de drogas, medicamentos, tabaquismo y otras toxicomanías está dirigida a romper las conexiones nerviosas temporales formadas por los reflejos condicionados que sostienen estos tipos de hábitos. En nuestra experiencia hemos obtenido resultados favorables en casos de alcoholismo, tabaquismo y consumo de drogas, pero en aquellos pacientes que nos han pedido ayuda, que tuvieron interés en dejar la dependencia. Su propia voluntad para recuperarse, el deseo de salir adelante ante dicha situación, la necesidad que sintieron de buscar una solución les permitió curarse. En cuanto a la hipnopedia y la experimentación podemos decir que el campo de acción de la hipnosis es inmenso; está dirigido no solamente a la eliminación de un síntoma determinado, sino también ha sido utilizada en el logro de algunos objetivos de índole no médica, como es el aprendizaje de idiomas, en que se destacan los trabajos de Chalbaud, Lozánov y otros investigadores. Las técnicas para el aprendizaje de idiomas reciben el nombre de hipnopedia y sugestopedia, ya se utilice la hipnosis o el sueño natural y la sugestión en vigilia para la fijación de vocabulario y
fonemas de las lenguas extranjeras. Se ha demostrado que su uso acelera el proceso de aprendizaje de cualquier idioma. Otro uso experimental de la hipnosis es en la investigación de la percepción extrasensorial (conocida abreviadamente por sus siglas en inglés: ESP). En este siglo son conocidos los trabajos de sugestión a distancia realizados por Vasiliev, Béjterev y otros científicos en la Ex - URSS. En Cuba, Martínez Perigod y Asís han realizado experimentos de percepción extrasensorial usando sueños inducidos por hipnosis, y en general, la literatura informa de varios trabajos realizados con hipnosis en la investigación de la percepción extrasensorial. Incluso Meares menciona experiencias espontáneas que tuvo con pacientes que respondían en estado hipnótico a las sugestiones pensadas por él. La hipnosis también ha sido empleada en el restablecimiento de la adaptación creadora del hombre a su medio, en la búsqueda de un equilibrio psíquico, es decir, de una estabilidad entre los procesos de inhibición y excitación de la corteza cerebral, creando una elevación del tono positivo de ésta con reacciones parecidas a las de una sugestión verbal emocional positiva (alegría) que eleva el proceso de asimilación, restablece el sueño, el apetito e incrementa el rendimiento físico y mental.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.3 En términos generales podemos plantear que la sugestión y la hipnosis ejercen una influencia extraordinaria sobre la subcorteza cerebral, principalmente sobre el hipotálamo, que es el órgano encargado del equilibrio hídrico, de las emociones, del sueño, de la energía sexual y de otras funciones. La hipnosis adquiere una importancia extraordinaria por todos los aspectos señalados anteriormente, por lo que su conocimiento y estudio revisten gran significación a causa de su amplio campo de utilización. En general, tanto la hipnosis como el resto de técnicas psico físicas pueden emplearse en cualquier campo de la actividad humana con mayor o menor intensidad. A continuación hacemos un resumen de sus aplicaciones en los campos que más incidencia tiene. En la medicina.
Permite producir insensibilidad al dolor (anestesia). Eliminar o atenuar todo tipo de dolores o molestias. Mejorar la efectividad del sistema inmunitario. Mejorar cualquier enfermedad en general. Especial uso en dermatología, donde se eliminan con facilidad eccemas, verrugas o erupciones cutáneas. Hipertensión arterial esencial Asma bronquial, hasta el grado III (periodos de crisis e intercrisis). Asma bronquial en el niño Psoriasis Fobia infantil Obesidad exógena Tabaquismo Alcoholismo Cefalea migrañosa Enuresis nocturna Disfunción sexual Eyaculación precoz Impotencia
Frigidez Jóvenes que consumen drogas Aprendizaje Manejo del dolor crónico. Odontología Ginecología y obstetricia (parto sin dolor, histerectomías) Cirugía general (mayor y menor) Neurocirugía (craneotomías)
En la psicología.
Tratamiento de todos los trastornos mentales. Enfermedades psicosomáticas. Timidez, enuresis, fobias (agorafobia, claustrofobia, miedo a los animales). Adicciones (tabaquismo, ludopatías, alcoholismo). Indecisión, falta de concentración, estrés emocional y postraumático, depresión, ansiedad, angustia, tartamudez. Mejorar las relaciones sociales. Trastornos del comportamiento.
En la economía, empresas y ventas.
Mejorar los dones de convicción. Estimular la capacidad para crear estrategias. Adquirir conocimientos para convencer más y mejor a los clientes. Trabajar en equipo con eficacia.
En la política y comunicación social.
Comunicación de masas. Sugestión colectiva. Técnicas de comunicación social.
En los deportes.
Incrementar la resistencia. Desarrollar los reflejos y la rapidez. Aumentar la concentración durante competiciones o ejercicios. Desarrollar la capacidad física total del cuerpo. Coordinar óptimamente la relación pensamiento-movimiento. Aumentar la fuerza física. Aumentar la motivación.
En la educación y enseñanza.
Mejorar el rendimiento escolar. Mejorar la memoria y acrecentar la asimilación al estudiar. Estimular las capacidades creativas. Incrementar la capacidad de comprensión y asimilación. Motivar para el estudio, incluso de aquellas asignaturas que se “resisten”. Aprender otros idiomas con más facilidad.
Son múltiples las posibilidades de la hipnosis y las técnicas similares con las que podemos paliar enfermedades, anular el dolor, aprender más y mejor, desarrollar nuestras facultades psíquicas, investigar en definitiva en lo más profundo de nosotros mismos. Las sorprendentes posibilidades
de estas técnicas apenas suponen un ápice de todo lo que podría llegar. Sin duda, con los avances en los conocimientos de la neurofisiología, de la psicología y las nuevas tecnologías, el futuro se presenta apasionante. NUESTRAS EXPERIENCIAS CLÍNICAS CON LA HIPNOSIS. Estaría incompleta esta obra si no habláramos al menos parte de nuestras experiencias acumuladas en la asistencia médica diaria durante estos años. Describiremos entonces las investigaciones y los métodos realizados con algunos pacientes en nuestro consultorio y en varios centros de atención médica o instituciones prestadoras de servicios de salud privadas, y en empresas sociales del estado, donde hemos puesto en práctica la hipnosis. HIPNOSIS EN EL MANEJO DE LA HIPERTENSIÓN ARTERIAL ESENCIAL Y EL ESTRÉS EMOCIONAL. En dicha investigación nos planteamos el siguiente problema a resolver: La Hipertensión arterial esencial o primaria es una enfermedad caracterizada por la elevación persistente o mantenida de las presiones sistólicas, diastólicas o ambas, demostrable por lo menos en tres tomas fortuitas. La OMS señala que deben ser catalogadas como tales aquellas personas cuyos valores tensionales se encuentran incluidos o sean superiores a las cifras que para cada intervalo de edad se expresan:
De 15 a 19 años: 140/90 mmHg De 20 a 29 años: 150/90 mmHg De 30 a 64 años: 160/95 mmHg De 65 y más años: 170/95 mmHg
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.4 Es importante saber que el término esencial o de hipertensión primaria se menciona atendiendo a la causa de la hipertensión arterial, hay múltiples clasificaciones, pero debido a que existe un grupo mayoritario de hipertensos (el 90%) en los que a pesar de múltiples estudios no se encuentra la causa del trastorno, se les denomina a esta forma hipertensión primaria o esencial. En el 10% restante, la enfermedad puede ser síntoma de una afección cardiovascular, renal, endocrina, neurógena, entre otras y en este caso se le llama hipertensión secundaria. Es conocido además que existe una labilidad tensional. Personas que ante una situación de tensión emocional mantenida (estrés emocional) tienen ascensos de la presión arterial. Se señala que las tensiones emocionales mantenidas o reiteradas pueden desencadenar reacciones vasopresoras con hipertensión arterial. Dichas tensiones emocionales pueden estar condicionadas por múltiples factores que van desde la personalidad, el nivel de escolaridad, la ocupación, la procedencia y el régimen socio-económico en que se viva. Para comprender mejor el Estrés emocional, podemos decir que en condiciones de equilibrio el organismo vive bajo la actividad normal de sus funciones biopsicosociales, moduladas por los ritmos de sueño y vigilia. Bajo estas condiciones el funcionamiento fisiológico y psicológico esta sometido a niveles de activación que se consideran normales. Esta activación fluctúa según las vivencias diarias y ordinariamente está asociada a emociones (la ira, tristeza, alegría). El estrés se produce cuando ocurre una alteración en este funcionamiento normal por la acción de algún agente externo o interno. El organismo, en estas circunstancias reacciona de forma extraordinaria realizando un esfuerzo para contrarrestar el desequilibrio. La respuesta de estrés es extraordinaria, implica esfuerzo y produce una sensación subjetiva de tensión (presión). Esto suele suponer, además un incremento de la activación o inhibición y, por tanto un cambio en los estados emocionales.
El estrés se concibe como un proceso interactivo o transaccional entre el individuo y la situación, es un encuentro que implican relaciones particulares entre la persona y su entorno. Algunos plantean que se manifiesta cuando las demandas y necesidades existentes que le exigen el ambiente o medio social donde se desarrolla una persona superan sus capacidades u ofertas posibles y reales, sobre todo cuando esta irregularidad es mantenida sin ninguna solución al respecto. Como componentes del estrés están:
Las demandas psicosociales Evaluación cognitiva Respuesta Estrategia de afrontamiento Apoyo social Disposiciones personales Estado de salud
Asimismo las variables del estrés son:
Variables situacionales estresantes (sucesos vitales y sucesos menores) Variables mediadoras (evaluación cognitiva primaria y secundaria y modos de afrontamiento. Respuestas de estrés (emocionales y fisiológicas) Variables moduladoras (disposiciones personales y apoyo social). El estatus de salud como resultado del estrés.
Luego de conocer todo lo anterior nos trazamos como objetivo verificar si la hipnosis era efectiva en el tratamiento de nuestros pacientes con hipertensión arterial esencial y estrés emocional. Tratamos siempre de mantener una buena relación medico paciente. Desde los trabajos de Harry Stack Sullivan, enmarcados en el contexto de un psicoanálisis culturista, se manifestó un creciente interés por determinadas categorías esenciales que se deben tener en cuenta para lograr una buena relación médico paciente: La personalidad, los roles y status, la comunicación, las defensas y la situación. Para la realización de este trabajo se analizó una casuística de 50 pacientes con diagnóstico de hipertensión arterial esencial y estrés emocional que acudieron a nuestro consultorio y fueron atendidos en nuestra consulta de neurocirugia, neurología y neuropsicología en el centro de especialistas de la clínica San José de Cúcuta, Norte de Santander Colombia, en el periodo comprendido de enero de 2001 a enero de 2006, en los cuales se utilizaron técnicas de hipnosis para su tratamiento. Como criterios de diagnóstico clínico, se consideró la existencia de una hipertensión arterial esencial en aquellos pacientes con elevación persistente o mantenidas de las presiones sistólicas, diastólicas o ambas, demostrable por lo menos en tres tomas fortuitas teniendo en cuenta los criterios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que plantea que deben ser catalogadas como tales aquellas personas cuyos valores tensionales se encuentran incluidos o sean superiores a las cifras que para cada intervalo de edad se expreso anteriormente. Los criterios de inclusión fueron los siguientes:
Pacientes mayores de 15 años con hipertensión arterial demostrable. Pacientes denominados grupo marginal o hipertenso marginal o posible con labilidad tensional demostrable.
Pacientes con tensiones emocionales mantenidas o reiteradas por la acción de algún agente externo o interno que ocasionaron una alteración del funcionamiento normal fisiológico y psicológico, un desequilibrio biopsicosocial, un cambio en los estados emocionales. Pacientes sometidos a otros tratamientos con resultados no satisfactorios.
A todos los casos se les realizo una evaluación neuropsicológica para determinar la personalidad, los posibles trastornos psíquicos, los trastornos de origen psicosomáticos. Se les explicó las características del tratamiento, que es la hipnosis, sus posibilidades en función de las necesidades del paciente y la aceptación por parte de este. Una vez lograda la disposición se aplicaron pruebas de sugestionabilidad sencillas. Por razones éticas se solicito el consentimiento del paciente y familiares para realizar el proceder. Una vez seleccionados los pacientes se les indicó un chequeo previo a la terapia. La toma de la tensión arterial siempre fue en el brazo derecho, puesto que es en este donde se obtienen los valores mayores, a consecuencia de la disposición anatómica de los vasos sanguíneos en su emergencia del cayado de la aorta, siempre se pudo confirmar la cifra de presión sistólica según el método de Korotkoff al inicio de los ruidos, y la diastólica en el momento en que estos cambian su intensidad, utilizando un esfigmomanómetro o tensiómetro con una adecuada calibración y un fonendo o estetoscopio para escuchar mejor los ruidos además de tomar el pulso radial. Los paraclínicos indicados son: hemograma, creatinina, sedimento urinario, Rx de tórax, electrocardiograma y estudios renales en casos necesarios. Tuvimos en cuenta y creo que es importante conocer los grados de la hipertensión arterial que son:
Hipertensión ligera, fluctuante, con mínima entre 95 y 110 mmHg, con pronóstico bueno. Presión arterial mínima entre 110 y 130 mmHg, con alteraciones cardiovasculares y en el fondo de ojo. Presión arterial persistente elevada con mínima mayor de 130 mmHg, con alteraciones en el fondo de ojo de mayor cuantía, lesiones cardiacas, renales y cerebrales, el pronóstico es reservado. Hipertensión arterial maligna.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.5 En cuanto a la técnica de hipnosis empleada podemos decir que la palabra fue el elemento clave para realizar la sugestión hipnótica, las orientaciones sugestoras fueron precisas, ordenadas y bien definidas, coherentes de forma pausada para convertirlo en estilo monótono, que provocaron una tendencia generalizada a un estado de modorra y luego al sueño, el timbre fue estable y no muy agudo, poco imperativo, suave, no autoritario, facilitando un clima de confianza, se utilizaron las tres posiciones, de pie, sentado y acostado, sin preferencia por alguna en particular. En el caso de la primera, se le pide al paciente que una sus pies en talones y puntas, que se relaje y respire suave y profundo, que ponga su cuerpo flojo por completo y una vez comprobado este estado de relajación procedemos hacer las sugestiones, pudiendo escoger que mantenga los ojos abiertos, mirando un punto fijo del techo, alto en la pared, o a un objeto brillante, diciéndole que sus párpados le pesan mucho, demasiado inconteniblemente y que a la vez su cuerpo le pesa mucho por lo que el siente como se mece con suavidad, posteriormente con un tono muy sugestivo se le dice, usted sentirá sus párpados ponerse pesados y usted los dejará ponerse pesados, siente mucho sueño, usted sentirá mucho sueño, tendrá mucho sueño, le pesan mucho los párpados, cierre los ojos, usted siente mucho deseo de cerrar los ojos y usted los dejará cerrarse por que tiene mucho sueño.
Siente sueño, cierre sus ojos, estos tendrán deseos de cerrarse, usted los dejara cerrar, sus párpados están completamente cerrados, los músculos que rodean sus párpados estarán completamente relajados y usted no tendrá deseos de abrirlos, relaje los músculos que rodean sus ojos, sus párpados se ponen pesados, poco a poco una ligera torpeza la invadirá y siente mucho sueño y siente mucho sueño, y duer-me y duer-me y siente mucho sueño y duer-me y duer-me, usted duer-me… Usted duer-me con un profundo sueño, Usted no entiende y escucha más que mi voz, escuche mi voz, solamente mi voz, mi voz le manda mi voz le ordena, ahora Usted esta completamente dormido, en un profundo sueño, nada podrá despertarlo excepto yo, escuche mi voz, solamente mi voz. Se les sugirió cansancio, pesadez y, por último, sueño hasta llevarle a un estado hipnótico profundo donde se le deja un signo señal para nuevas sesiones, en caso de ser necesario hacerlas con mayor rapidez. Una vez logrado esto se le inducen las siguientes ordenes, a partir de hoy usted va hacer una nueva persona no se va a tensionar más, no va sentir más estrés no se va sentir más ansioso ni triste, usted va a tener control de su tensión emocional, usted va a resolver sus problemas de una forma apropiada, usted va a tener autocontrol, si es necesario va a pedir ayuda o consejo a un amigo o familiar en quien usted confía y le va contar su problema, si es necesario va aceptar el problema. Va aceptar la responsabilidad y lo va a reconocer y va a cambiar y madurar como persona pues la experiencia enseña, usted va a estar tranquilo, sedado y en paz, no va a sentir más taquicardias ni palpitaciones, sus latidos cardiacos van a estar normales, su corazón va estar bien, su mente va estar bien, su sistema nervioso va estar equilibrado, usted a partir de hoy va ser una persona feliz, muy feliz, va sentir alegría en su mente y su corazón, su presión arterial va estar normal, muy normal, su tensión arterial va estar totalmente normal, dentro de parámetros y cifras normales y usted se va a sentir bien, usted va hacer una persona sana a partir de hoy, usted ya está sana, su tensión arterial va estar bien, porque usted va saber controlar sus emociones, además va a consumir alimentos sanos, va a comer sin sal, sin grasas saturadas, sin muchas harinas o carbohidratos, va a comer muchas frutas y vegetales, va a tener una dieta sana, además, Va hacer ejercicios físicos y va a combatir el sedentarismo y la obesidad o el sobrepeso, va a lograr tener un peso ideal, usted a partir de hoy va a ser una persona sana y feliz, totalmente feliz. También se procedió a orientar a los pacientes para que realizaran solos en su casa ejercicios de relajamiento autógeno y autohipnosis (autoayuda). se liberan finalmente del estado hipnótico y al preguntarles como se sentían, refirieron que bien, incluso en algunos, que habían desaparecido algunos síntomas como, dolor de cabeza, mareos, sensación de tristeza o amargura, dolor precordial o en el pecho, deseos de llorar, un peso en la cabeza y el cuerpo, nervios, ahogo o falta de aire, con el que habían pasado todo el día, se despidieron con el compromiso de una nueva consulta en 15 días, al mes y un seguimiento de 6 meses y al año, permaneciendo durante este tiempo sin hipertensión arterial (con cifras tensionales normales), logrando cambiar sus hábitos alimentarios por otros más saludables y manteniendo estilos de vida más sanos, controlando el estrés emocional durante este periodo, estos pacientes en más del 50% continúan auto aplicándose los ejercicios terapéuticos, logrando la reversión del proceso. Los resultados finales y las conclusiones fueron las siguientes: La edad más frecuente de los pacientes estuvo en el grupo de mayores de 50 años (80%). Predomino el sexo femenino (60%) el grado de hipertensión arterial más frecuente fue el grado I (86%). El tiempo de evolución de la enfermedad fue largo, mayor de 10 años (80%). El tratamiento previo más frecuente fue el uso de medicamentos tales como diuréticos, sedantes, simpaticolíticos, betabloqueadores, vasodilatadores, antagonistas del calcio y bloqueadores de la angiotensina. El control inicial de la tensión arterial se logró en el 100% de los pacientes. La evolución de la enfermedad durante seis meses y al año de seguimiento luego de la terapia hipnótica fue buena con un por ciento de recidiva bajo, logrando cambios notables en sus hábitos de vida, control del estrés emocional y control de la enfermedad en el 88% de los pacientes. El grupo de pacientes en los que no se pudo
controlar la enfermedad se encontraba en los estadios más avanzados III y IV, con manifestaciones propias de las enfermedades cardiovasculares, enfermedades cerebrovasculares e insuficiencia renal crónica. No hubo complicaciones ni secuelas durante el proceder. Las técnicas hipnóticas tienen las siguientes ventajas: poco complejas luego de un entrenamiento adecuado, inocuas, económicas, eficaces, sin molestias para el paciente. La Hipnosis es efectiva en el tratamiento de la hipertensión arterial esencial sobre todo en las etapas o estadios tempranos de la enfermedad y cuando se encuentra asociado como factor de riesgo o predisponente importante el estrés emocional. HIPNOSIS EN EL MANEJO DE NIÑOS DE EDAD ESCOLAR CON DIFICULTADES EN EL APRENDIZAJE. El problema planteado en este trabajo fue la existencia en nuestro medio de un gran número de niños con dificultades y trastornos de inicio de la infancia, la niñez y la adolescencia entre las que se destacan:
Retraso mental. Trastornos del aprendizaje. Trastornos de las habilidades motoras. Trastornos de la comunicación. Trastornos generalizados del desarrollo. Trastornos por déficit de atención y comportamiento perturbador. Trastornos alimentarios. Tics. De eliminación. Otros, ansiedad por separación, mutismo selectivo, reactividad, estereotipados.
movimientos
Y dentro de estos, nos llamo la atención las altas tasas de prevalencia e incidencia de las dificultades o trastornos del aprendizaje entre los que se encuentran:
Trastorno de la lectura. Dislexia, alexia. Trastorno del cálculo. Discalculia, acalculia. Trastorno de la expresión escrita o para escribir. Disgrafia, agrafia. Trastorno del aprendizaje no especificado.
Y dentro de los tipos de alexia o trastorno de la lectura encontramos:
Alexia posterior o pura, sin agrafia, por lesión de la cara medial del lóbulo occipital dominante y el rodete del cuerpo calloso. Alexia central, con agrafia, lesión de la circunvolución angular dominante. Alexia anterior, acompaña a la afasia de Broca, lesión del opérculo.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.6 Incluso la aparición de niños con Síndrome de Gerstman caracterizado por:
Acalculia. Agrafia. Discriminación derecho/ izquierdo. Agnosia digital. Por lesión de la circunvolución angular dominante.
Tuvimos en cuenta que el aprendizaje es el proceso de adquisición de una nueva información para el sujeto que tiene como consecuencia, un cambio en la conducta relativamente sistemático y estable.
La nueva adquisición o aprendizaje consiste en una nueva forma de relacionarse con el medio, el sujeto comprende o realiza una nueva relación de significado, establece una conexión entre experiencia previa y una información actual, utiliza esa información de una manera nueva y distinta. El aprendizaje es el proceso por el cual nosotros adquirimos conocimientos sobre el mundo. Es el proceso de adquisición de una nueva información, de una nueva forma de comunicarse e interactuar con el ambiente. En el diccionario Larousse se define al aprendizaje (de aprendiz) como la acción y efecto de aprender algún arte, oficio u otra cosa. || 2. Tiempo que en ello se emplea. || 3. En psicología. Adquisición por la práctica de una conducta duradera. En el aprendizaje debemos tener en cuenta algunas variables que influyen sobre él como son:
El comportamiento o la conducta. Ejercitación externa. La consolidación. Ejecución conductual. Criterios de evaluación. La maduración psicosomática. La fatiga. La adaptación sensorial. Tendencias reactivas innatas. Cambios provocados por enfermedades, cirugías o lesiones cerebrales.
Existen varias teorías en cuanto al proceso del aprendizaje entre las que se destacan:
Teoría conductual, cambio sistemático de la conducta como resultado de la práctica. El condicionamiento clásico (Pávlov). El condicionamiento operante. Conducta y resultados. Refuerzo y castigo (Thorndike y Skinner). La influencia del ambiente. Teoría mediacional. Aprendizaje observacional de (Bandura). Teoría cognitiva. (Gestalt, Tolman, Jean Piaget). Proceso de intuición. Organización y reorganización perceptual. La huella cerebral.
El condicionamiento clásico implica un aprendizaje de predicción de las relaciones entre los estímulos. El condicionamiento operante implica el asociar una conducta específica con un fenómeno subsiguiente reforzante. Vemos en los antecedentes que Jean Piaget (1956) plantea que el conocimiento no se adquiere a través de la incorporación del entorno social de manera pasiva, sino que el sujeto es capaz de construir su propio conocimiento. Jerome Bruner (1966) señala el aprendizaje por descubrimiento. El sujeto posee la capacidad para organizar los datos que ya ha obtenido de una nueva forma, de una manera novedosa, así se pueden realizar nuevos descubrimientos a partir de lo que ya se conocía. El aprendizaje es un proceso activo por parte del sujeto. Robert Gagné (1985) plantea que potenciar el aprendizaje es hacerlo más efectivo y establece una serie de procesos y fases para que se produzca el aprendizaje:
La atención al estímulo. La motivación. La percepción. La memoria a corto y largo plazo. La codificación semántica de la información. La recuperación de la información y la ejecución.
Estamos de acuerdo en que la mayoría de los aspectos del comportamiento humano implica cierta forma de aprendizaje. Y que mecanismos específicos mediante los sucesos ambientales modelan el comportamiento. Principalmente lo hacen a través del aprendizaje y la memoria. Nos propusimos como objetivo comprobar si la hipnosis podía ser efectiva en el tratamiento de las dificultades o trastornos del aprendizaje. Se analizó una casuística de 30 niños de edad escolar con dificultades del aprendizaje atendidos en consulta médica, en el periodo comprendido de julio del 2002 a enero del 2006, en los cuales se utilizaron técnicas de hipnosis para su tratamiento. Como criterios de diagnóstico clínico se consideró la existencia de dificultades del aprendizaje en aquellos niños de edad escolar que presentaban signos y síntomas característicos de esta entidad nosológica, teniendo en cuenta los criterios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la décima clasificación estadística internacional de enfermedades y problemas de salud y los parámetros del cuarto manual de diagnóstico estadístico de los trastornos mentales (DSM IV) de la Asociación Americana de Psiquiatría. Los criterios de inclusión fueron los siguientes:
Niños de 6 a 12 años de edad y adolescentes hasta los 17 años de edad con dificultades del aprendizaje demostrable. Niños con coeficiente intelectual normal con dificultades en el aprendizaje demostrable por test de CI. Niños con bajo rendimiento académico y en las actividades cotidianas, en lectura, cálculo, escritura o combinados, significativamente inferior a lo esperado para su edad, escolarización, nivel de inteligencia demostrable por pruebas psicopedagógicas, normalizadas y administradas individualmente. Niños sometidos a otros tratamientos con resultados no satisfactorios.
A todos los niños se les realizo una evaluación neuropsicológica para determinar las características personales, los posibles trastornos psíquicos, los trastornos de origen psicosomáticos, las dificultades en las habilidades académicas, trastornos en el comportamiento, los síntomas particulares y trastornos asociados, a través de una entrevista, del interrogatorio y el examen físico, se confecciona posteriormente la historia clínica y la discusión diagnóstica. Se les explicó las características del tratamiento, que es la hipnosis, sus posibilidades en función de las necesidades del paciente y la aceptación por parte de este y de sus padres o tutores. Una vez lograda la disposición se aplicaron pruebas de sugestionabilidad sencillas. Por razones éticas se tuvo en cuenta el consentimiento del niño y familiares (padres o tutor) para realizar el proceder. El diagnóstico preventivo tiene una edad óptima entre los cuatro y cinco años, tratando de conocer el grado de madurez del niño en las habilidades relacionadas con la lectura y escritura. El diagnóstico se realiza a partir de una exploración del trabajo escolar, acompañado de un análisis del grado de inteligencia y aptitud, observando la capacidad para integrar series, orientación en el espacio y tiempo, percepción y discriminación visual y auditiva. Además, es conveniente hacer un estudio de la personalidad del niño.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.7 Fue muy importante hacer un diagnóstico correcto o certero de la etiología, así como el diagnóstico diferencial entre los que se encuentran:
Variaciones normales del rendimiento académico y dificultades escolares, falta de oportunidad, enseñanza deficiente, factores culturales, enfermedad general. Visión y audición alteradas. Enfermedad neurológica. Retraso mental. Trastorno generalizado del desarrollo. Trastornos de la comunicación.
Luego de seleccionar los pacientes se indicó un chequeo previo a la terapia en los casos necesarios. Los estudios que se indicaron fueron: cuadro hemático, hierro sérico, electroencefalograma (EEG), tomografía axial computarizada (TAC) de cráneo simple, resonancia magnética nuclear (RMN) cerebral, estudios de Rx, prueba de agudeza visual, pruebas audiométricas, pruebas genéticas y estudios hormonales. En cuanto a la técnicas de hipnosis aplicadas podemos decir que en los niños el resultado es variable, es importante tener en cuenta la edad, se debe tener un buen rapport, utilizar palabras de halago para el niño, que se les enseñará una prueba que sólo la pueden realizar los niños que tengan la inteligencia y demás virtudes de él, las palabras deben ser sencillas, comprensibles, corresponderse al mundo de representaciones del niño, tener en cuenta su estado afectivo y características individuales, tener paciencia, aprovechar la fantasía propia del niño. Los métodos hipnóticos utilizados fueron:
Estímulos monótonos. Estímulos acústicos. Imágenes sensoriales. Entrenamiento de Kretschmer y Schultz. Pestañeo sincronizado.
Una vez lograda la inducción hipnótica hasta niveles profundos se pudo interactuar con los niños manteniendo el dominio de la situación y para lo cual se utilizaron varias estrategias pedagógicas y métodos para el aprendizaje.
Fichas educativas. Juegos. Uso de la informática. Técnicas para el desarrollo de la lectura. Técnicas para el desarrollo del cálculo. Técnicas para el desarrollo de la escritura. Redes semánticas. El mentefacto conceptual. Ejercicios prácticos.
No se utilizó un modelo pedagógico en especifico, más bien un poco de cada uno de los más empleados: tradicional, conductivista, romántico, constructivista y pedagógico social. El mayor problema encontrado fue la dislexia o dificultad en el aprendizaje para leer y escribir correctamente, causado por un impedimento cerebral relacionado con la capacidad de visualización de las palabras. Esto significa que en un principio, los niños disléxicos no ven las letras que constituyen una palabra, y al concentrarse en la lectura de la misma, realizan un gran esfuerzo para saber lo que están leyendo, produciendo desorientación y confusión, sobre todo en las letras que tienen cierta similitud morfológica o fonética. En las sílabas se produce una inversión y omisión, y en las palabras se sustituye una sílaba por otra que empiece por la misma, o tenga un sonido muy parecido. La lectura es difícil porque el niño no puede distinguir determinadas letras o las invierte mentalmente.
Estos niños con dislexia presentaron algunos de estos síntomas:
Dificultad para leer oraciones o palabras sencillas. Invierten las palabras de manera total o parcial, por ejemplo casa por saca. Escriben la misma palabra de diferentes maneras. Invierten las letras, por ejemplo p por b o d por b. Tienen dificultades para ver cuando una palabra está mal escrita. Hacen muchas faltas de ortografía. Copian mal las palabras aunque se fijen como se escribe. Tienen dificultades para distinguir la izquierda de la derecha.
Una característica común que pudimos apreciar en estos niños, es la falta de atención, desinterés por el estudio e inadaptación personal. Aunque a menudo, se califica a los niños que padecen dislexia, como niños que tienen “incapacidades para aprender”, la mayoría pueden aprender y sus problemas no están relacionados con la inteligencia. Dentro de las técnicas de lectura empleadas para ayudar a estos niños con dislexia recomendamos:
Lectura deletreada. Que consiste en entrenar al niño en el movimiento de los ojos al leer (izquierda-derecha) y a enseñarle a que reconozca grupos de letras como palabras. Técnica de pasar-pasar-deletrear. En la que se dan una serie de instrucciones para conseguir que el niño identifique una palabra. Puntuación-imagen. Para dar significado a las frases, a partir de los signos de puntuación y de su relación en la imagen mental.
Aunque podemos decir que las estrategias pedagógicas son muy amplias y es un campo el cual permite modificaciones al gusto, los conocimientos pedagógicos, la experiencia en este aspecto y la creatividad del terapeuta en cuestión, que en este momento también juega un rol de educador o maestro y donde sus posibilidades son amplias en cuanto a estrategias y técnicas pedagógicas empleadas, puede utilizar estrategias de ensayo, donde se hace una repetición activa de los diversos contenidos, reglas semánticas, copias del material de estudio, tomar notas literarias, realizar el subrayado. Están también las estrategias de elaboración como hacer resúmenes, crear analogías, responder preguntas incluidas en un texto. Así como las estrategias de organización tales como hacer un esquema o un cuadro sinóptico, una red semántica o un mapa conceptual. Además las estrategias de planificación hasta lograr un objetivo o llegar a una meta. Estrategias de regulación, dirección y supervisión, como dejar tareas. Estrategias de evaluación donde se hace una revisión de las tareas asignadas y finalmente se pueden realizar también estrategias de apoyo o afectivas con los niños, que refuercen aún más el proceso de aprendizaje. El otro problema o síntoma importante encontrado en estos niños fue el déficit de atención con hiperactividad. Se trata de niños que desarrollan una intensa actividad motora, tienen dificultades para centrarse en una sola actividad y abandonan rápidamente una tarea para empezar otra, que también dejaran inacabada. Son muy impulsivos y desobedientes, y esto provoca que resulte difícil la educación. Presentan dificultad para establecer un orden en sus tareas o pequeñas responsabilidades, pueden olvidar las cosas necesarias y parece que no escuchen. Los estados de ánimos bruscos y fácilmente excitables que manifiestan, hace que se provoquen frecuentes estados de tensión en la casa y en el colegio. A menudo tienen problemas para relacionarse con los compañeros de estudio, y para mantener los mismos amigos durante periodos largos de tiempo.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.8
Los profesores comentan que el niño con hiperactividad es incapaz de estar sentado, que molesta a los compañeros y que justo después de la explicación de lo que se ha de hacer, lo vuelve a preguntar, ya que tiene problemas de atención y concentración. Por otro lado los padres exponen que les es muy difícil ir a cualquier sitio con él, que siempre está corriendo de una habitación a otra de la casa, que es imposible mantener un orden en casa y que siempre está rompiendo cosas. Suelen definir a su hijo como un niño inmaduro, donde sus comportamientos generan conflicto, desaprobación y repulsa. ¿De que manera se puede ayudar al niño que padece hiperactividad? El tratamiento depende de cada caso individual, pero lo que es común entre todos los niños, es que no se les puede regañar excesivamente, porque se crea y fomenta un déficit de autoestima (sobre todo si lo critican en todo lo que hace y delante de otras personas, amigos y compañeros del colegio). Con esta actitud, realimentan el trastorno, ya que el niño acabará por no esforzarse en portarse bien, porque verá que de todas formas siempre acaban llamándole la atención. Por eso es tan importante que durante las terapias hipnóticas en la consulta participen los padres y tutores y si es posible mantener un contacto estrecho y constante con el maestro o profesor que esta a su cargo. Y así poder orientarlos e incluso aprender mucho de ellos, trabajar juntos en equipo por un mismo objetivo. Debe existir una estrecha relación de trabajo entre el hipnoterapeuta, los padres y el colegio, permitiendo tener además un control y evaluación apropiada de la evolución del niño al cual se le han de elogiar las conductas apropiadas e ignorar las que no lo son, explicándole qué es lo que ha hecho mal, y premiarlo cuando realice una tarea, o cuando se porte bien. También se le ha de enseñar a organizarse en la realización de sus tareas, donde el niño aprenderá a planificar sus actos y su lenguaje interno (un horario regular y estable de las actividades). Adquirirá unos reflejos condicionados apropiados para las diferentes situaciones o actividades programadas que mejoraran su comportamiento de forma definitiva. Los resultados encontrados fueron los siguientes: La edad de los pacientes fue de 8 a 14 años. Predomino el sexo masculino (80%). Los problemas más frecuentes encontrados fueron la dislexia y la hiperactividad (90%). El tiempo de evolución de las dificultades fue mayor de 2 años. El tratamiento previo más frecuente fue el uso de medicamentos psicofármacos del tipo de los psicodepresores hipnóticos, tranquilizantes y neurolépticos y psicoestimulantes tales como los timoanalépticos y los psicoanalépticos. La mejoría inicial de las dificultades se comprobó en todos los pacientes. La evolución durante seis meses de seguimiento y al año, luego de varias terapias hipnóticas fue buena, logrando cambios notables en el rendimiento de los niños en lectura, cálculo y expresión escrita, en la autoestima, estado de ánimo, moralización, habilidades motoras, abandono escolar, adaptación social, mejorando el déficit de atención, la hiperactividad y agresividad. No hubo complicaciones durante el desarrollo de las terapias. Pudimos comprobar que la Hipnosis es efectiva como terapia de apoyo en el manejo de niños de edad escolar con dificultades del aprendizaje, luego de precisar el diagnóstico definitivo del problema que presenta el niño, facilitando el uso de estrategias pedagógicas adecuadas según sea el caso, de forma individual o personalizada, con una participación activa e interdisciplinaria durante todo el proceso, donde además del hipnólogo, el apoyo recibido por los padres o tutores y el maestro que enseña al niño en el colegio es fundamental para lograr resultados aceptables. HIPNOSIS EN EL CONTROL DEL ASMA BRONQUIAL. En esta investigación el problema a resolver era el control del Asma Bronquial en nuestros pacientes, en nuestro medio, tanto en niños como adultos. La American Thoracic Society ha definido el Asma bronquial como una afección caracterizada por una respuesta exagerada de la tráquea y de los bronquios a diversos estímulos, que se traduce por un estrechamiento difuso de las vías aéreas en relación con una contracción excesiva del músculo
liso y una hipersecreción de moco, y que es reversible espontáneamente o bajo el efecto terapéutico. Todo enfermo asmático presenta una hiperreactividad bronquial ante la exposición de diversas sustancias que en otras personas no ocurre. En sus antecedentes familiares hay con frecuencia otros asmáticos o algún otro tipo de enfermedad alérgica. Son importantes los mecanismos neurógenos en la patogenia del asma bronquial. La acción sobre las vías respiratorias de estímulos inmunológicos, la liberación de mediadores químicos irritantes respiratorios entre otros desencadenan la activación de un reflejo broncoconstrictor parasimpático y colinérgico, hay hiperreactividad colinérgica, poca capacidad de respuesta betaadrenérgica e hipersensibilidad de los receptores subepiteliales a irritantes. Otro hecho es la disminución de la actividad del sistema inhibitorio no adrenérgico, su defecto también pudiera explicar la reactividad de las vías aéreas en los asmáticos. Otros estudios refieren que el asma puede ser alérgica o extrínseca y sin alergia demostrable o intrínseca. En el asma extrínseca se originan unas series de reacciones que culminan en la liberación de mediadores químicos como la histamina que aumentan la permeabilidad del epitelio, favorecen la acción de antígenos sobre las células cebadas de la submucosa, y se provoca broncoconstricción y el reflejo colinérgico broncoconstrictor, edema de la luz bronquial y se favorece la secreción de moco. Todo esto trae como consecuencia la obstrucción bronquial que puede ser vencida por la fuerza inspiratoria, pero que impide la expiración completa; de ahí el atrapamiento de aire en los alvéolos y la distensión pulmonar. Las sustancias que pueden desencadenar esta crisis se denominan alergenos los cuales son muy numerosos. Los alergenos inhalantes más frecuentes son el polvo del hogar y de otros lugares, pelos y caspas de animales domésticos, pólenes, hongos, ácaros, medicamentos y algunos alimentos, también puede desencadenarse por una infección sobre todo de origen viral. Clínicamente se manifiesta principalmente por una falta de aire (disnea), de comienzo gradual, que progresivamente se va intensificando. Esta disnea es espiratoria, con sensación de opresión torácica y ruidos en el pecho que se perciben fácilmente, el paciente y los familiares se mantienen muy angustiados y ansiosos debido a que al enfermo le resulta cada vez más difícil respirar, es un esfuerzo respiratorio consciente y desagradable donde hay una participación activa de los músculos accesorios de la respiración. El tórax aparece en inspiración, hay hipersonoridad a la percusión y se auscultan estertores roncos y sibilantes diseminados en ambos campos pulmonares. Hay taquicardia, sudoración, puede aparecer cianosis y fiebre. La tos es un síntoma molesto, agobiante, y con expectoración escasa, viscosa y adherente, de color blanco nacarado (esputo perlado). Cuando la crisis cede, esta se hace fluida y abundante. De acuerdo con el comportamiento evolutivo de la enfermedad, esta se ha clasificado de la forma siguiente:
Grado I. Si el enfermo ha presentado 5 crisis, sin hospitalización, durante el curso del último año. Grado II. Entre 5 y 10 crisis en el año. Grado III. Más de 10 crisis o si hay historia de hospitalización en el curso del último año.
Para la realización de este trabajo se analizó una casuística de 20 pacientes con diagnóstico de Asma bronquial que fueron atendidos en nuestro consultorio médico, en el periodo comprendido de enero de 2002 a enero de 2006, en los cuales se utilizaron técnicas de hipnosis para su tratamiento. Se les explicó las características del tratamiento, que es la hipnosis, sus posibilidades en función de las necesidades del paciente y la aceptación por parte de este y en el caso de los niños, de sus padres o tutores.
Una vez lograda la disposición se aplicaron pruebas de sugestionabilidad sencillas. Por razones éticas se tuvo en cuenta el consentimiento de los pacientes y familiares (en caso de ser menor de edad, de los padres o tutor) para realizar el proceder.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.9 Luego de seleccionar los pacientes se indicó un chequeo previo a la terapia en los casos necesarios. Los estudios que se indicaron fueron: hemograma, examen del esputo, cultivo del esputo, radiografía de tórax, radiografía de senos paranasales, electrocardiograma y pruebas funcionales respiratorias. Según Bernal “El asma es una enfermedad popular, todo el mundo la conoce y muchos la padecen. Es una afección interesante porque no ha sido descubierto el tratamiento totalmente eficaz y definitivo para todos los casos, su origen es variable, tiene cura, pero su tratamiento es casi impracticable actualmente. El asma vuelve siempre a ser nerviosa. Es una entidad sociogenética. Sin duda es una dolencia que merece ser investigada”. Marx planteaba que la enfermedad es la libertad constreñida. Estos pensamientos nos hicieron pensar en un sistema o método terapéutico que nos permitiera ayudar a los pacientes a enfrentar el asma, y al final poder mantenerse sin crisis y sin consumir medicamentos. Durante las primeras y siguientes entrevistas logramos un buen rapport con el paciente y la familia, y abordamos varios temas, antes de la inducción hipnótica. Lo primero fue permitirles que pudieran conocer bien la enfermedad, su definición, mecanismos fisiopatológicos, etiología, manifestaciones clínicas, su evolución, diferenciar las crisis de los periodos intercrisis, opciones de tratamientos actuales y pronóstico. Luego le planteamos la necesidad de conocernos a nosotros mismos, saber controlar nuestras emociones, como es nuestra respiración y su relación con las emociones. Las formas de comunicación humana. El asma y su relación con el estrés. Los mecanismos de control que garantizan la unidad cuerpo mente y entorno. Los factores psicológicos y sociales. La sociología de la enfermedad. La familia del niño asmático (la sobreprotección, la inseguridad y la dependencia). La educación emocional y como lograr la compensación psicológica y física. Finalmente conocer las técnicas psicofisiológicas para asmáticos para poder aplicarlas bajo la inducción hipnótica y posteriormente durante las prácticas de los ejercicios de autoayuda. Aprender a respirar. La respiración abdominal o diafragmática con inspiración rápida y espiración muy lenta y las diferentes técnicas posturales, así como la orientación de diversas actividades colectivas o individuales que les permitieran la pérdida del temor por la enfermedad y les propiciaran, a través de diferentes vías, la percepción de emociones sanas y placenteras como la seguridad, la confianza en sí, el optimismo y la independencia. Luego de conseguir grados de hipnosis profundos las sugestiones inducidas a los pacientes fueron las siguientes: Toser y expectorar las secreciones adherentes, que obstaculizan el paso del aire a través de los bronquios, respirar normal y bien con seguridad y sin temor, con tranquilidad, se le agrego además, que cada vez que se sintieran apretados lograrían sin duda alguna, controlar las crisis y en los periodos intercrisis iban a llevar una vida normal, sana y feliz. El seguimiento fue de un año. El 90% tenían un comportamiento evolutivo grado III. El 60% fueron niños. Antes de la terapia hipnótica necesitaban una gran cantidad de medicamentos, lo cual se logro suprimir debido al control de la enfermedad (ausencia de crisis) y a los cambios notables y favorables en sus estilos de vida. La hipnosis es efectiva como terapia de apoyo en el control del asma bronquial. OTRAS EXPERIENCIAS CLÍNICAS. Se han atendido 4 pacientes con psoriasis, bajo los efectos de la hipnosis se les indujo que su estado era provocado por una inestabilidad psíquica, por lo cual debían convencerse de que sus problemas no debían estar jerarquizados, se le reafirmo que superaran sus inconvenientes, y a medida que lograran esto, sus lesiones irían desapareciendo. La hipnosis se combino con la
acupuntura, la promoción de la actividad física y medicamentos inmunosupresores. Se consiguió la remisión total de la enfermedad. Se atendieron 8 pacientes con fobia. Dentro de estos, dos niños que tenían miedo a la oscuridad y a dormir solos, se aplicaron técnicas de imaginación, utilizando personajes de historias infantiles asociados al esquema terapéutico bajo hipnosis. Una vez lograda la inducción se les ayudo a realizar un viaje imaginario junto a sus juguetes y personajes favoritos. En dicho viaje se encontrarían con unos niños con las mismas características e iguales problemas (su imagen). Debían ayudar a esos niños a enfrentar y solucionar los problemas (el suyo propio). Antes de salir del trance hipnótico se les sugirió la conducta apropiada a seguir ante este temor, que podían dormir solos, más cómodos, tranquilos, así descansaban mejor para estar listos en la mañana para el colegio y que no había ningún motivo para tenerle miedo a la oscuridad, así podían estar tranquilos y descansados para las actividades del próximo dia. La evolución fue satisfactoria. Los otros casos fueron pacientes adultos con fobia a las ranas, a las cucarachas, a los perros, a los exámenes de la universidad y a los espacios públicos rodeados de personas, se logro en todos grados de inducción hipnótica profunda, se indujo la desensibilización mediante terapia paradojal, los resultados fueron aceptables. Además se han atendido 3 casos de enuresis nocturna y uno con encopresis, en los que se logro una hipnosis profunda y se empleo una sugestión indirecta para eliminar la afección utilizando un medicamento placebo, un polivitamínico, explicándoles que era un medicamento muy efectivo y que se recuperarían, la orden posthipnótica consistió en lo siguiente: existe un medicamento muy poderoso y efectivo que al tomarlo antes de acostarse provocara que puedas ir al baño y hacer bien todas tus necesidades fisiológicas sin problemas, además sino te levantas en la noche para ir al baño no podrás dormir más, algunas reacciones adversas impedirán que puedas seguir durmiendo, con esto podrás resolver el problema que tienes y serás muy feliz, se empleo además, la psicoterapia de apoyo y la terapia hipnótica con contenido conductual mejorando su estabilidad emocional, los resultados fueron buenos. A consulta médica han acudido en busca de ayuda algunos pacientes con adicciones entre los que destacamos, 12 pacientes alcohólicos, 6 con tabaquismo y 8 jóvenes que consumían drogas. En todos los casos los pacientes fueron en busca de ayuda, muy angustiados porque querían eliminar su mal hábito pero les resultaba muy difícil controlarse y volvían nuevamente al consumo del tóxico, se sentían presos, atrapados, ahogados en su problema, sufrían mucho por esto y no encontraban una solución apropiada. En las sesiones se realizo un análisis reflexivo sobre los daños y secuelas que producen estos hábitos tóxicos y como ir disminuyendo de forma gradual el consumo de estos (terapia adversiva). La buena voluntad, el comportamiento auto-responsable y de autodeterminación de los pacientes fue fundamental para hacer cumplir con las órdenes poshipnóticas y los ejercicios de autoayuda sistemáticos y para alcanzar un resultado aceptable. Estamos desarrollando un trabajo en las cefaleas sobre todo en la migraña y la de origen tensional por estrés emocional. En consulta se les explica todo lo relacionado con la enfermedad para que la conozcan, sus causas, que es el dolor, el cual podemos modificarlo, transformarlo y eliminarlo. Que la migraña es una enfermedad que aunque molesta no mata, no es nada malo ni mortal en la cabeza y que se puede controlar. Hallándose el paciente en trance profundo se procede a efectuar la inducción hipnótica de la siguiente forma: usted va a sentir cómo mis manos le dan un masaje en su cabeza y su frente, este masaje controla a sus vasos sanguíneos intracraneanos, evitan que estos se dilaten y contraigan controlando el dolor de cabeza, el cual se transforma en una sensación agradable, se modifica y finalmente se alivia totalmente. Los resultados han sido buenos en una casuística de 15 pacientes. Hemos tratado 4 pacientes con eyaculación precoz e impotencia sexual y 3 mujeres con frigidez y dispareunia de origen psicógeno, lo cual les impedía mantener relaciones sexuales adecuadas o
satisfactorias, por lo que refirieron problemas con la pareja sexual. Se les indujo simulaciones imaginarias bajo un estado hipnótico profundo. Es importante para hacer este procedimiento ser muy ético y tener el consentimiento por escrito del paciente, la pareja y los familiares si es preciso y realizarlo siempre acompañado de otra persona preferiblemente por personal de enfermería, del mismo sexo del paciente, sobre todo si es una mujer y el hipnólogo es un hombre.
Hipnosis terapeutica. Teoria, metodos y tecnicas aplicadas. Duodecima parte.10 En el caso de los hombres se aplicó de la siguiente forma: ahora a tu lado hay una joven que deseas mucho, que te gusta mucho como mujer, que la deseas y te acaricia, te toca las partes más intimas, te acaricia, te besa, y comenzaras a tener una erección fuerte, potente y mantenida, no eyacularás hasta saciarla y satisfacerla, hacerla sentir mujer, no eyaculas y sostienes la erección porque eres un hombre muy potente, tú puedes y no estás nervioso, dominas tus nervios y todo va a salir bien. En el caso de la mujer fue de la siguiente forma: Vas a tener relaciones con tu pareja satisfactorias, no vas a tener nervio porque todo va salir bien, vas a sentir sus caricias y besos en tus partes más intimas y te agrada mucho, te sientes muy bien, relajada y tranquila, muy excitada, vas a sentir como liberas secreciones y tu vagina se lubrica y se dilata para realizar el acto sexual de forma agradable, te gusta mucho lo que sientes cuando sientes la penetración y llegas al máximo grado de satisfacción, tu lo puedes lograr y te sentirás satisfecha y sin ningún tipo de dolor, al contrario sientes una sensación muy agradable, placentera y relajante, que te hace feliz muy feliz y será siempre así. Los resultados fueron los siguientes: olvido de las experiencias desagradables, incremento del deseo sexual, mejoría ostensible de los síntomas, la práctica de relaciones sexuales satisfactorias y el aumento de la autoestima. El tratamiento de inducción hipnótica en 5 pacientes con obesidad exógena se realizo de la siguiente forma. Previamente en una entrevista médica se pudo conocer los factores de riesgo existentes, el peso real y la talla, el grado de obesidad, el peso ideal según la talla teniendo en cuenta la fórmula de Broca y los kilogramos que necesitaban bajar para lograr ese peso ideal, sus estilos de vida con pobre gasto calórico por inactividad física (sedentarismo) y sus hábitos alimentarios caracterizados por una ingesta calórica excesiva (transgresiones dietéticas). Durante la terapia se indujo la necesidad de tener una dieta sana y estilos de vida saludables, disminuir la cantidad de ingestión de alimentos, reducir las grasas y los carbohidratos e incrementar el consumo de frutas y hortalizas en la dieta, y alentar el ejercicio físico, confiar en la capacidad de autocontrol, mantener un comportamiento responsable y determinante, además de estar consciente de las posibles complicaciones de la enfermedad, la repercusión sobre la salud y la estética. La evaluación del peso corporal fue progresiva permitiendo reducirlo hasta en un 20%. El tratamiento odontológico, la exodoncia bajo el estado hipnótico se ha realizado en 5 pacientes que acuden a consulta de odontología, previa coordinación con el odontólogo, estos pacientes necesitaban recibir el tratamiento odontológico por presentar la dentadura en muy malas condiciones a causa de los malos hábitos de higiene bucal y sobre todo a causa del miedo o pánico incontrolable (fobia) al odontólogo y al tratamiento odontológico, sobre todo al pinchazo de la anestesia y al sonido y la sensación de la fresa para realizar la cavidad de una obturación. En el examen bucal se observaron un gran número de caries grado V en dientes y molares, con gran destrucción coronaria, por lo que era preciso realizar las extracciones. Se les informa sobre el método a realizar, a través del cual no se sentiría dolor, se hicieron algunas pruebas de sugestión anestésica y una vez logrado el consentimiento se realizo el proceder mediante la fascinación hasta llegar a un estado de hipnosis profundo, dejando siempre un signo señal, se les realizaron y reforzaron sugestiones de anestesia total, comprobadas con pinchazos con agujas estériles en varias regiones de la boca, luego el odontólogo procedió a realizar las exodoncias sin complicaciones. Se le hicieron sugestiones para controlar el sangrado, la inflamación y el dolor posexodoncia luego de salir del trance. La evolución fue buena. La experiencia de 5 partos normales sin dolor fue significativa, pudiendo hacer una psicoprofilaxis días previos al parto que consistió en la educación y preparación psicofisiológica de las maternas,
control de las emociones y actitudes, de la respiración, la frecuencia cardiaca y la tensión arterial, pérdida del temor, confianza y seguridad en sí mismas y control absoluto en el momento adecuado, del trabajo de parto. En todos los casos se logró un nivel de hipnosis profundo, sugestiones poshipnóticas de anestesia y autocontrol de forma clara y precisa, y se dejo un signo señal previo para ser utilizado durante el parto. Los resultados fueron: El poder realizar partos fisiológicos, de bajo riesgo, sin dolor, sin inhibiciones por parte de la paciente, con una buena dinámica de las contracciones uterinas en menor tiempo que el habitual (2 horas promedio), buena dilatación del cuello uterino en un tiempo breve, ruptura espontánea de membranas, garantizar un buen canal del parto, ausencia de desgarros, control del sangrado, la inflamación y el edema, buena vitalidad del recién nacido, un adecuado alumbramiento. Al acortar el tiempo del parto y disminuir considerablemente el estrés, debido a una positiva evaluación cognitiva y una buena estrategia de enfrentamiento y respuesta evitamos que la mujer se agote, disminuye considerablemente las intervenciones obstétricas y se previene la hipoxia y anoxia fetal. El futuro se presenta prometedor y apasionante. Las sorprendentes posibilidades de estas técnicas apenas suponen un ápice de todo lo que se podría llegar a realizar. Sin duda, con los avances en los conocimientos de las neurociencias, la neurofisiología, de la neuropsicología y las nuevas tecnologías. Por nuestra parte seguiremos con nuestro afán, empeño, dedicación, amor y persistencia por el saber a favor de la humanidad toda. Recientemente hemos creado un grupo de investigaciones sobre la hipnosis, en la Universidad de Pamplona, aprovechando la oportunidad de que somos docentes en dicha institución, con el cual pretendemos lograr una mayor credibilidad, aceptación y expansión de estas técnicas en nuestros profesionales y en nuestros educandos donde también se ha creado un semillero de investigación sobre hipnosis, psicoterapia y entrenamiento sugestivo de autocontrol. Teniendo en cuenta los problemas de salud de la comunidad existentes en nuestro medio y las necesidades que demanda la población los proyectos o líneas de investigación propuestos y que se están desarrollando son los siguientes. Aplicar la hipnosis en el manejo de:
La violencia intrafamiliar. La violencia social. La promiscuidad. Las enfermedades crónicas. La educación de la población y el control de los malos hábitos o estilos de vida (factores de riesgos), para la prevención de enfermedades. El manejo del dolor crónico refractario. La anestesia en procederes quirúrgicos (hipnoanestesia). Intervención en el proceso de aprendizaje y memoria a nivel primario, secundario, preuniversitario y universitario. Aprender otros idiomas.
Así como la programación y realización de cursos y eventos con nivel regional, nacional e internacional de hipnosis terapéutica.
Datos del autor Alberto Ochoa Govin. Es graduado de Doctor en Medicina de la facultad número 1 del Instituto Superior de Ciencias Médicas de Santiago de Cuba en 1994 y graduado de la especialidad en Neurocirugía del Hospital Clínico Quirúrgico Docente Saturnino Lora de esa misma ciudad en 1999, con Felow en el Centro
Internacional de Restauración Neurológica (CIREN) y el Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugia en Ciudad de la Habana, Cuba en Neurocirugía funcional y estereotáxica, Microcirugía Vascular del encéfalo, Cirugía percutánea del Dolor, Neuroendoscopia, Cirugía de la base del cráneo y Cirugía de Columna por técnicas quirúrgicas de mínimo acceso y técnicas percutáneas con Láser de Neodinio Yag. Ha recibido otros entrenamientos y estudios postgrados en Neurociencias, Neuropsicología, Medicina tradicional o alternativa; Hipnosis y Pedagogía con énfasis en la educación universitaria. Ha impartido cursos y conferencias concernientes al manejo de las principales enfermedades neurológicas. Tiene más de 10 publicaciones en revistas médicas y científico técnicas. Ha sido ponente en varios congresos, simposios y talleres nacionales e internacionales. Es miembro de varias sociedades científicas y del colegio médico de la federación médica colombiana. Actualmente cumple sus funciones como neurocirujano en la Fundación médico preventiva, en las Clínicas Médico Quirúrgica de y San José de Cúcuta, y es profesor de la facultad de Salud de la Universidad de Pamplona, Norte de Santander, Colombia.
http://www.portalesmedicos.com/publicaciones/articles/1745/1/Hipnosis-terapeutica.Teoria%2C-metodos-y-tecnicas-aplicadas.-Primera-parte
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