HIMNARIO ELECTRONICO123.pdf

GLORIA A TI, JESÚS DIVINO ¡Gloria a Ti, Jesús Divino! ¡Gloria a Ti, por Tus bondades! ¡Gloria eterna a Tus piedades! ¡Querido Salvador! Tú me amaste con ternura, Y por mí en la cruz moriste; Con ternura me quisiste, Querido Salvador. Tengo fe sólo en Tu muerte, Pues con ella me salvaste; Vida eterna me compraste, Querido Salvador. Te veremos en el cielo, A vivir contigo iremos; Tu presencia gozaremos, Querido Salvador.

1

DIGNO ES EL CORDERO Digno es el Cordero que inmolado fue, De tomar el reino, honra, gloria y prez. Para abrir el libro nadie se encontró, Él fue sólo digno: ¡Cante nuestra voz! Coro: A Jesús loor, a Jesús loor, A Jesús loor porque Él es digno. A Jesús loor, a Jesús loor; A Jesús loor porque Él es digno. Digno es el Cordero que en la cruz murió, Por llevar el mundo cerca de Su Dios; Y donde reinaba densa obscuridad, Él, la luz del cielo, vino a derramar. Digno es el Cordero, canten voces mil, Que la humana raza vino a redimir: Digno es el Cordero: ¡Salvación a Él! Y al que está en el trono, hoy y siempre, ¡Amén!

2

SOLEMNES RESUENEN

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VENID NUESTRAS VOCES

Solemnes resuenen las voces de amor, Con gran regocijo tributen loor; Al Rey Soberano, el buen Salvador, Es digno el Señor del más alto honor.

Venid nuestras voces alegres unamos Al celestial coro del trono alrededor; Sus voces se cuentan por miles de miles, Mas todas se inflaman en un mismo amor.

Coro: Alabad, alabad, alabad al gran Rey, Adorad, adorad, adoradle Su grey. Es nuestro Escudo, Baluarte y Sostén, El Omnipotente por siglos. ¡Amén!

Es digno el Cordero que ha muerto proclaman, De estar exaltado en los cielos así. Es digno el Cordero, decimos nosotros, Pues Él por salvarnos, Su vida dio aquí.

Su amor infinito, ¿Qué lengua dirá? Y ¿Quién Sus bondades jamás sondeará? Su misericordia no puede faltar, Mil himnos alaben Su Nombre sin par. Inmensa la obra de Cristo en la cruz, Enorme la culpa se ve por Su luz; Al mundo Él vino, nos iluminó, Y por nuestras culpas el Justo murió.

A Ti que eres digno, se dan en los cielos, Honores eternos y gloria y honor; Y más bendiciones que darte podemos, Por siempre a Tu trono se eleven Señor. Que todos los seres que pueblan las nubes, La tierra y el aire, el fuego y el mar; Unidos proclamen Tus glorias eternas, Y darte alabanzas, Señor, sin cesar. El Nombre Sagrado del Dios de los cielos, A una bendiga la gran creación; Y lleve al Cordero, sentado en el trono, El dulce tributo de Su adoración.

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TU DEJASTE TU TRONO Tu dejaste Tu trono y corona por mí, Al venir a Belén a nacer; Más a Ti no fue dado entrar al mesón, Y acostado en pesebre al nacer. Coro: Vive en mí corazón, ¡Oh Cristo! Pues allí es el lugar para Ti. Vive en mi corazón, ¡Oh Cristo! Sí. Pues allí es el lugar para Ti. Siempre pueden las zorras sus cuevas tener, Y las aves sus nidos también; Más el Hijo del Hombre no tuvo un lugar, En el cual reclinara Su sien. Tú viniste Señor con Tu gran bendición, Para dar libertad y salud; Más con odio y desprecio te hicieron morir, Aunque vieron Tu amor y virtud. Alabanzas sublimes los cielos darán, Cuando vengas glorioso de allí; Y Tu voz entre nubes dirá: “Ven a Mí, Que hay lugar junto a Mí para ti”.

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EN LA VERGONZOSA CRUZ En la vergonzosa cruz Padeció por mi Jesús; Por la sangre que vertió, Mis pecados Él expió. Lavará de todo mal Ese rojo manantial, El que abrió por mi Jesús, En la vergonzosa cruz. Coro Sí, fue por mí, Sí, fue por mí, Fue por mí murió Jesús; En la vergonzosa cruz. ¡Oh que amor, inmenso amor, Reveló mi Salvador! La maldad que había en mí, Al suplicio le llevó. Ahora a Ti mi todo doy, Cuerpo y alma tuyo soy; Mientras permanezca aquí, Hazme siempre fiel a Tí.

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SANTA MESA PARA MÍ Santa Mesa para mí, Eres memorial aquí. Tu me enseñas con verdad, El misterio de bondad; Me recuerdas en la cruz, al Cordero mi Jesús. Tu elevas nuestro ser, Al angélico placer; Tipificas con señal, La crucifixión pascual. Meditemos al tomar, en Jesús y Su penar.

7

SUENEN DULCES HIMNOS Suenen dulces himnos, gratos al Señor, Y óiganse en concierto universal. Desde el alto cielo vino el Salvador, Para beneficio del mortal. Coro: ¡Gloria, gloria sea a nuestro Dios! ¡Gloria, sí, cantemos a una voz! Y el cantar de gloria que se oyó en Belén, Sea nuestro cántico también.

Participe el corazón, De tu conmemoración; Nos recuerdas al partir, De Jesús y Su venir. Eres tú nuestra señal, de Su pacto divinal.

Vino JESUCRISTO nuestro Salvador, Para dar Su vida en una cruz; Gócese la Iglesia, cante al Señor, Que a las nubes viene el Rey Jesús.

Como sello del amor, Del Divino Redentor; Volveremos a tomar, Y a Cristo recordar, En la Mesa del Señor, prenda fiel del viador.

Late en nuestros pechos, noble gratitud, Hacia quien nos brinda redención; Y a Jesús el Cristo, que nos dio salud, Tributemos nuestra adoración.

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ROSTRO DIVINO

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UN DÍA QUE EL CIELO

Rostro Divino, desfigurado, Cuerpo herido por nuestro bien: Calma benigna, justos enojos, Lloren los ojos que así te ven.

Un día que el cielo sus glorias cantaba, Un día que el mal imperaba más cruel; Jesús descendió, y al nacer de una virgen, Morando en el mundo nos dio ejemplo fiel.

Manos preciosas tan lastimadas, Por mi clavadas en una cruz; En este mundo sean mi guía Y mi alegría, mi norte y luz.

Coro: Vivo me amaba, muerto salvóme; Y con Su sangre mi alma limpió. Resucitado, me dio justicia; Un día Él viene, pues lo prometió.

Bello costado, en cuya herida, Halla su vida la humanidad; Fuente amorosa del Dios clemente, Voz elocuente de caridad.

Un día lleváronle a crucificarle, Un día claváronle sobre una cruz. Sufriendo dolores y pena de muerte, Se dio por mi eterno rescate Jesús.

Tus pies heridos Cristo paciente, Fueron clavados en una cruz; Y arrepentido hoy te adoro, Tu gracia imploro: Señor pequé.

Un día dejáronle sólo en el huerto, Un día la tumba Su cuerpo encerró; Los ángeles sobre Él guardaban vigilia, Así fue que el Dueño del mundo murió.

Crucificado en un madero, Manso Cordero fuiste por mí; Por eso el alma triste y llorosa, Suspira ansiosa, Señor por Ti.

Un día el sepulcro ocultarlo no pudo, Un día Su espíritu al cuerpo volvió; Habiendo a la muerte por siempre vencido, A la diestra del Padre Jesús se sentó.

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EL GRANDE AMOR

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EN MEDIO DE MORTAL

El grande amor de mi Jesús, Por mi muriendo en una cruz; Su santo empeño por salvar, ¿Quién lo podrá contar?

En medio de mortal dolor, A mi Jesús yo ví; Y allí raudal de gracia hallé, Bastante para mí.

Coro: ¿Quién puede tal amor contar? ¿Quién puede tal amor contar? El grande amor del Salvador, ¿Quién lo podrá contar?

Coro: En Jesús fluye sin cesar, Insondable cual es el mar; Esta gracia que brota allí, Basta para mí.

La copa que Jesús bebió, La maldición que padeció. A fin de vida al hombre dar, ¿Quién lo podrá contar?

Sufriendo fue mi corazón, Y apenas pude allí; Creer que gracia habría de hallar, Bastante para mí.

La mofa y Su dolor tan cruel, La cruz sangrienta amarga hiel; Que padeció en mi lugar. ¿Quién lo podrá contar?

Cuando en la cruz Jesús murió, Mis culpas yo sentí; Raudal de gracia a mi alma entró, Bastante para mí.

¡Incomparable Salvador! ¡Cuán rico es tu Divino amor! ¡Cuán imposible de contar! ¡Cuán vasto y sin par!

Cuando en el cielo con Jesús, Alegre cante allí; Diré que aquella gracia fue, Bastante para mí.

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A TU MESA NOS JUNTAMOS A Tu Mesa nos juntamos, Señor para recordar; Tu dolor y cruel muerte, Y en tu grande amor pensar, Grande amor, grande amor, Y en tu grande amor pensar. Redimidos ya tenemos, En Tu muerte comunión; En el pan Te recordamos, Dios de nuestra salvación. Salvación, salvación, Dios de nuestra salvación. En la copa confesamos, Que Tu sangre es eficaz; Por Tu salvación perfecta, Esperamos ver Tu faz. Ver tu faz, ver Tu faz, Esperamos ver Tu faz. Por Tu gracia congregados, En Tu paz y con amor; En espíritu cantamos, A Ti, nuestro Redentor. Redentor, Redentor, A Ti nuestro Redentor.

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JESÚS ES PRECIOSO Jesús es precioso, mi buen Salvador, Por siempre le alabo por Su gran amor; Si débil me encuentro Su fuerza me da, Él es, mi precioso Jesús. Coro: Precioso es Jesús, mi Jesús; Precioso es Jesús, mi Jesús. Mi gloria será Su rostro mirar, Él es mi precioso Jesús. Y cuando en pecado muy triste me vi, Llamando a las puertas de mi corazón, Me dijo “tu alma, yo quiero salvar”, Él es mi precioso Jesús. Más ya por Su gracia la luz puedo ver; Quitó mi tristeza mi llanto enjugó; Por fe yo contemplo mi eterno hogar, Él, es, mi precioso Jesús. Jesús es precioso, mi Fiel Redentor, Me gozo en Su luz que en mi senda brilló; Muy pronto glorioso por mí viene aquí, Él, es, mi precioso Jesús.

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TE LOAMOS ¡OH DIOS!

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¡SANTO! ¡SANTO! ¡SANTO!

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Te loamos ¡Oh Dios! Con unánime voz; Que en Cristo Tu Hijo, Perdón dístenos.

¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! Señor Omnipotente, Siempre el labio mío, loores te dará; ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! Te adoro reverente, Dios en tres Personas, ¡Bendita Trinidad!

Coro: ¡Aleluya! Te alabamos, ¡Cuán grande es Tu amor! ¡Aleluya Te adoramos! Bendito Señor.

¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! La inmensa muchedumbre, De ángeles que cumplen, Tu santa voluntad, Ante Ti se postra, bañada con Tu lumbre, Ante Ti que Has sido, que Eres y Serás.

Te loamos Jesús, Quien Tu trono de luz; Has dejado por darnos, Salud en la cruz.

¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! en numeroso coro, Santos escogidos, Te adoran con fervor. De alegría llenos, y sus coronas de oro, Rinden ante el trono, glorioso del Señor.

Te damos loor, Santo Consolador; Que nos llenas de gozo Y santo valor.

¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! Por más que estés velado, E imposible sea, Tu gloria contemplar, ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! Y nada hay a Tú lado, En poder perfecto, pureza y caridad.

Unidos load, A la gran Trinidad; Que es la Fuente de gracia, Virtud y Verdad.

¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! La gloria de Tu Nombre, Vemos en Tus obras, en cielo, tierra y mar; ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! Te adorará todo hombre, Dios en tres personas, ¡Bendita Trinidad!

A NUESTRO PADRE DIOS A nuestro Padre Dios, Alcemos nuestra voz: ¡Gloria a Él! Tal fue Su amor que dio, Al Hijo que murió, En Quien confío hoy: ¡Gloria a Él! A nuestro Salvador, Demos con fe loor: ¡Gloria a Él! Su sangre derramó, Con ella me lavó, Y el cielo me abrió: ¡Gloria a Él! Espíritu de Dios, Elevo a Tí mi voz, ¡Gloria a Ti! Con celestial fulgor, Me muestras el amor, De Cristo mi Señor: ¡Gloria a Ti! Con gozo y amor, Cantemos con fervor: ¡Al trino Dios! En la eternidad, Mora la trinidad; ¡Por siempre alabad!: ¡Al Trino Dios!

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FUENTE DE LA VIDA ETERNA Fuente de la vida eterna, Y de toda bendición; Ensalzar Tu gracia tierna, Debe cada corazón. Tu piedad inagotable, Abundante en perdonar; Único Ser adorable, ¡Gloria a Ti debemos dar!. Cánticos espirituales, Te quisiéramos cantar, Entonados por las huestes, Que lograste rescatar. Almas que ha buscar viniste, Porque les tuviste amor; De ellas te compadeciste, Con tiernísimo favor. Toma nuestros corazones, Llénalos de Tu Verdad, De Tu Espíritu los dones, Y de toda santidad; Guíanos en obediencia, Humildad, amor y fe, Nos ampare Tu clemencia; Salvador propicio Sé.

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CUAL MIRRA FRAGANTE

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¡BENDITO NUESTRO DIOS!

Cual mirra fragante que exhala en redor, Su rico perfume, suavísimo olor, Tu Nombre, ¡Oh amado! en mi corazón, Infunde alegría y satisfacción.

¡Bendito nuestro Dios! Que nos ha dado al Hijo de Su amor, El Don que incluye todo otro don. ¡Bendito nuestro Dios!

Coro: Aleluya, Aleluya, al Cordero de Dios; Aleluya, al amado, al bendito Jesús.

¿Qué bien no nos dará? Que dio sin precio Su inefable Don, Don despreciado por el pecador. ¿Qué bien no nos dará?

Cual voz conocida, si escucha el viador, Perdido en el bosque, le inspira valor; Tu Nombre me anima haciendo saber; En donde el descanso se puede obtener.

¡Ni al Hijo perdonó! Verdad que aquieta todo mi temor, Y vence la naciente rebelión. ¡Ni al Hijo perdonó!

Cual faro avistado, distante en el mar, Por náufrago a punto de desesperar, Tu Nombre trayendo mensaje de paz, El corazón llena de dulce solaz.

¿Quién nos condenará? Jesús murió, resucitó y subió; Y aboga por nosotros hoy con Dios. ¿Quién nos condenará?

Jesús tiene Nombre de precio y valor, El Nombre bendito, Jesús Salvador; Por cima de todos, sin par, sin igual, Exhala fragancia de amor celestial.

Nos justifica Dios; Tal gracia ¿Quién la puede revocar? ¿O quién los grillos vuelve a colocar? Nos justifica Dios. Nuestro es el triunfo ya; El Fuerte de Israel se presentó, Luchó y venció, la muerte cautivó; Nuestro es el triunfo ya.

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ROPAJE ESPLÉNDIDO Ropaje espléndido Divinal, Es el de mi Señor; Su mirra célica sin igual, Mi corazón llenó. Coro: Glorias magníficas Él dejó, Para buscarme a mí; Sólo Su incomparable amor, Le hizo venir aquí. Su vida tuvo gran amargor, Los áloes se ven; Llevó la cruz con cruel dolor, Espinas en Su sien. También la casia balsámica, En Su vestido está, Me quita todas mis lágrimas, Profunda paz me da. Con ropa hermosa vendrá otra vez, La Iglesia le verá; Postrándose ante Sus santos pies, Los suyos le adorarán.

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¡REDENTOR! !OH QUE BELLEZA! ¡Redentor! ¡Oh que belleza, En tal título se ve! Cristo sólo con certeza, Digno de llevarlo fue. :¡Redentor mío! ¡Redentor mío! ¡Que alegría tuyo ser!: En miseria sumergido, De satán esclavo fui; Tu escuchaste mi gemido, Cuando sin valor me vi. :¡Redentor mío! ¡Redentor mío! ¡Que alegría celestial!: Cuando a Tu morada eterna, Al final he de llegar, Y con himnos de victoria, Tus loores entonar. :¡Redentor mío! ¡Redentor mío! ¡Que alegría celestial!:

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VED AL CRISTO, REY DE GLORIA Ved al Cristo, Rey de gloria, Es del mundo el Vencedor; De la guerra vuelve invicto, Todos démosle loor. Coro: Coronadle, santos todos, Coronadle, Rey de reyes; Coronadle, santos todos, Coronad al Salvador. Exaltadlo, sí, exaltadlo, Ricos triunfos trae Jesús; Entronadle allá en los cielos, En la refulgente luz. Si los malos se burlaron, Coronando al Salvador; Hoy los ángeles y santos, Le proclaman su Señor. Escuchad las alabanzas, Que se elevan hacia Él; Victorioso reina el Cristo, Adorad a Emmanuel.

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SEÑOR, ¡CUÁN ADMIRABLE! Señor, ¡Cuán admirable! Es Tu Divino amor; Perfecto y perdurable, Nos llena de fervor. Amándonos, bajaste, A nuestro mundo aquí, :La vida entregaste, Llamándonos a Ti.: Por nuestro amor tomaste, Humana encarnación; Por nuestro amor llevaste, Terrible maldición. Probaste el desamparo, La ira y amargor, :Debidos al pecado, En todo su rigor.: Por nuestro amor, Tú diste,. La vida en una cruz, Cual santo Sustituto, ¡Oh Salvador Jesús! Por eso te rodeamos, Con grata adoración; :Y a Ti nos inclinamos, Con alma y corazón.:

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MIRAD AL SALVADOR

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A TU PALABRA MI SEÑOR

Mirad al Salvador Jesús, El Príncipe benigno; Por mí muriendo allí en la cruz, Por mí, tan vil e indigno.

A Tu Palabra mi Señor, Humilde vengo a Ti; Y en esta fiesta con amor, Memoria haré de Ti.

Coro: De amor la prueba hela aquí; El Salvador murió por mí; Por mí, por mí; Jesús murió por mí.

Indigno soy de tal lugar, Pues siempre malo fui; Más Tu viniste a rescatar, Y a libertarme a mí.

Del sol la faz se obscureció, Al ver tu agonía, La dura peña se partió; Oídlo alma mía. Mi buen Jesús por Tú sufrir, Hoy quedo conmovido; Mi corazón te doy, Jesús, Hoy a Tu amor rendido.

Antes perdido me encontré, Más ya salvado soy; Y de Tu amor me acordaré, Al darte gracias hoy. Getsemaní con su sudor, Y copa como hiel; La cruz con todo Tu dolor, Y Tu agonía cruel. Tu muerte allí Señor Jesús, Y la escondida faz; Del Santo Dios, cuando en la cruz, Me procuraste paz.

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CLAVADO EN CRUZ

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AQUÍ TU ROSTRO

Clavado en cruz, Jesús murió, Por mi maldad, allí sufrió, En mi lugar, Él se encontró, Mi salvación, así compró.

Aquí Tu rostro puedo ver, Señor; A lo invisible alcanza aquí la fe, De nuevo abrazo aquí Tu inmenso amor, Y mi solicitud en Ti echaré.

Coro: Oíd la voz del Salvador: “Mirad, y ved si habrá dolor, Cual mi dolor y es para ti, Ven, alma, ven, oh ven a Mí”

Aquí del pan partiendo tomaré, Y de la copa de Tu comunión; El Nombre de mi Dios invocaré, Gozándome en la paz de salvación.

La faz del sol, se obscureció, El velo en dos se dividió; Al Hijo Dios desamparó, La maldición, en Él cargó. ¿Y puede ser? ¿Sufriste así, Señor Jesús de amor por mí? No puedo más, me entrego hoy, Sin más tardar, a Ti me doy.

La culpa del pecado mía fue, Más tuya fue la sangre en la cruz, Por ella y Tu justicia tengo ya, Perdón, vestido y paz, Señor Jesús. Sólo en Tu brazo eterno confiaré; No tengo apoyo más que en Ti, Señor; Está mi fortaleza en Tu poder, Basta, de veras, basta ¡Oh Redentor! Nos levantamos de la Mesa aquí; La fiesta pasa, más no así el amor; Todo se va, más Tú te quedas, sí. Cerca, muy cerca, amado Salvador.

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CRISTO JESÚS HERIDO FUE

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CRISTO JESÚS VINO

Cristo Jesús herido fue, Allá en la cruenta cruz herido fue; Mis rebeliones las pongo por fe, En JESUCRISTO, Quien herido fue.

Cristo Jesús vino para morir; Por el pecado la pena sufrir. :¡Cuán admirable, que pudo venir, Hasta por mí...por mí!:

Cristo Jesús murió por mí, Allá en la dura cruz, murió por mí; Hoy por Su muerte ya soy salvo aquí, Y para siempre pues murió por mí.

Sí, mi peligro de lejos miró; Lleno de caridad, me levantó, :Para salvarme, del cielo bajó. ¡Vino por mí... por mí!:

Cristo Jesús resucitó, Sí, de la tumba, Él resucitó; Y la victoria por mí Él ganó, Sobre la muerte, pues resucitó.

Cristo enseñaba de Dios el amor, Cuando murió por el vil pecador. :Por mis pecados sufrió con dolor, ¡En vez de mí... de mí!:

Cristo Jesús, vendrá por mí, Pronto en las nubes, Él vendrá por mí; Cuando Su faz mire cerca de mí, ¡Oh, cuánto gozo será para mí!.

Pronto en el cielo Su faz miraré; Su comunión y Su amor gozaré. :En Su presencia también cantaré: “¡Vino por mí... por mí!:

Cristo Jesús vive por mí, Allá en el cielo Él vive por mí; Intercediendo por Su hijo aquí, Y para siempre, pues murió por mí.

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¡TUMBA DE MI SEÑOR!

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REY DE MI VIDA

¡Tumba de mi Señor! ¡Cristo, mi Cristo¡ ¿Cuándo de día será? Cristo, Señor.

Rey de mi vida Tu eres ya, Gloria te doy Jesús; No me permitas olvidar, Tu obra en la cruenta cruz.

Coro: Resucitó y ascendió, Con poder la muerte ya venció; Ascendió y a Su trono ya volvió; Si, triunfante con Sus santos a reinar; ¡Revivió! ¡Ascendió! ¡Aleluya ascendió!

Coro: Si olvido del Getsemaní, Tu sufrimiento agudo allí; Y Tu Divino amor por mí, Cristo hazme ver Tu cruz.

En vano velan ya; ¡Cristo, mi Cristo! El velo roto está; Cristo Señor. Muerto no puede estar, ¡Cristo, mi Cristo! Omnipotente Dios, Es mi Señor.

Por fe la tumba puedo ver, Que ya vacía está. Ángeles santos de poder, Fueron Tu guarda allá. Yo cual María a quien su amor, Te demostró Jesús; Quiero servirte fiel Señor, Al recordar Tu cruz. Hazme ser presto, Salvador, Mi cruz llevar por Ti; Con gozo sufriré Señor, Fuiste a la cruz por mí.

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PASO MOMENTOS Paso momentos conmovedores, Cuando me acuerdo de mi Señor, Por mi sufriendo crueles dolores; Miro al Cordero muerto en la cruz. Miro Sus brazos de amor abiertos, Que me convidan a ir a Él. Y haciendo suyos mis desaciertos, Por mí Sus labios gustan la hiel. De Su herida la viva fuente, De pura sangre veo manar; La cual limpiando mi impura alma, La infame culpa logró borrar. Miro Su angustia ya terminada, Hecha la ofrenda de la expiación; Su noble frente mustia inclinada; Y consumada mi redención. !Dulces momentos, ricos en dones, De paz y gracia, de vida y luz¡ Sólo hay consuelo y bendiciones, Cerca de Cristo, junto a Su cruz.

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DAD LOOR A DIOS

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Dad loor a Dios, himnos elevad, Alabando Su bondad; Canta de Jesús, salvo pecador, Canta, sí, Su gran amor. JESUCRISTO descendió, de los cielos a Belén; Nuestra paz allí nació, nuestra dicha, luz y bien. Coro: ¡Oh bendito Dios! Gloria a Ti, Señor, Por Jesús el Salvador. Dad loor a Dios, himnos elevad, Alabando Su bondad; Canta de Jesús, salvo pecador; Canta, sí, Su gran amor. Por venir a padecer, a los ángeles dejó, Y nacido de mujer, con los hombres habitó. Dad loor a Dios, himnos elevad; Alabando Su bondad. Canta de Jesús, salvo pecador; Canta, sí, Su gran amor. En el patíbulo cruel, dio Su vida el Señor; Porque tenga paz en Él, todo mísero mortal.

¡LOOR A TI MI DIOS!

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HASTA QUE VENGA

¡Loor a Ti mi Dios! ¡Loor a Ti! Tu santo amor es grande para mí; Me diste un Salvador. Cristo Jesús, ¡Loor a Ti Señor! ¡Loor a Ti!

Hasta que venga, nuestro Salvador, Nos congregamos para recordar; Sus muchas penas y Su grande amor, Así en memoria de Él, partir el pan.

¡Gloria a mi Salvador, Cristo Jesús! El es el pan de Vida para mí. Su vida dio por mí, allá en la cruz, ¡Loor a Ti, Señor! ¡Loor a Ti!

Estás aquí, sabémoslo Señor, Pues nos has dicho: “Donde dos o tres, Se hallan reunidos en Mi Nombre, Yo, En medio de ellos siempre estaré ”.

Hazme vivir Señor, cerca de Ti, La fuerza de Tu amor la siento en mí. Te entrego a Ti, mi ser, mi corazón, ¡Loor a Ti, Señor! ¡Loor a Ti!

Hasta que venga: Sólo un poco más, Y nuestros ojos le verán en luz, Lleno de gloria, honra y majestad, Llevando aún las huellas de la cruz.

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HAY UN PRECIOSO MANANTIAL

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HUBO QUIEN POR MIS CULPAS

Hay un precioso manantial, De sangre de Emmanuel; :Que purifica a cada cual, Que se sumerge en Él.:

Hubo Quien por mis culpas muriera en la cruz, Tan indigno y vil como soy. Soy feliz pues Su sangre vertió mi Jesús, Y con ella mis culpas borró.

El malhechor se convirtió, Pendiente de una cruz; :El vio la Fuente y se lavó, Creyendo en Jesús.:

Coro: Mis pecados llevó, en la cruz do murió; El bendito, el tierno Jesús. Los desprecios sufrió, y mi alma salvó. El cambió mis tinieblas en luz.

Allí también mi pobre ser, Por Él logré lavar; :La gloria de Su gran poder, Me gozo en ensalzar.:

Él, tierno y precioso cual nadie lo fue, Pues convierte al infiel corazón, Y por esa paciencia y ternura yo sé, Que soy libre de condenación.

Eterna fuente carmesí, Raudal de puro amor; Lavado está por siempre en Ti; El pueblo del Señor.:

Es mi anhelo constante a Cristo seguir, Mi camino Su ejemplo alumbró, Y por darme la vida, Él quiso morir, En Su cruz mi pecado enclavó.

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¡INMENSA Y SIN IGUAL PIEDAD!

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JESUCRISTO QUE TANTO

¡Inmensa y sin igual piedad! Murió por mí Jesús. Y por mi culpa vil sufrió, La muerte en la cruz.

JESUCRISTO que tanto me amaste, Entregando Tu vida por mí. :Por eso alabo Tu Nombre bendito, Por eso adoro Tu Nombre Señor.:

Coro: Me acordaré de Tu dolor, Y de Tu grande amor por mí. Y mientras viva, oh Señor, Me acordaré de Ti.

Tus discípulos Te abandonaron, Y uno de ellos te entregó. :Como a ladrón te arrebataron, No teniendo de Ti compasión.

Por mi maldad Jesús murió, En una cruenta cruz. ¡Oh, que Divina compasión! ¡Oh que infinito amor!

Te llevaron ante de Pilato, El pueblo se atumultó. :Y todos unidos gritaron: ¡Crucifícale! ¡Crucifícale!

Bien pudo el sol su faz cubrir, En negra confusión, Al ver morir al Redentor, Por nuestra salvación.

Te vistieron con manto de grana, Y cargaste la cruz del dolor. :Allí clavaron Tu cuerpo bendito, Porque amaste al vil pecador.

Amado Cristo, no podré, Jamás pagar Tu amor. Más lo que tengo ofrézcote: Tu siervo ser Señor.

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CRISTO JESÚS EN LA CRUZ

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LA CRUZ DE MI CRISTO

Cristo Jesús en la cruz murió, Cristo Jesús la salud me dio; Ya mis maldades Él perdonó, ¡A Su Nombre gloria!

La cruz de mi Cristo hoy puedo yo ver, Que expresa amor eternal; Que me habla y Su voz como fuego en mi ser, Me dice: “Yo sufrí por tí”.

Coro: ¡A Su Nombre gloria! ¡A Su Nombre gloria! Ya mis maldades Él perdonó. ¡A Su Nombre gloria!

Coro: ¡Cuán grande amor en la cruz mostró! ¡Que gran dolor el Señor sufrió! ¡Tan grande amor que por mí murió! ¡Maravilloso amor!

Junto a Su cruz donde le busqué, ¡Cuán admirable perdón me dio! Y con Jesús siempre viviré. ¡A Su Nombre gloria! Fuente preciosa de salvación, ¡Qué grande gozo me pudo dar! Al encontrar en Jesús perdón, ¡A Su Nombre gloria!

Cual sangre el sudor en Su frente se vio, Que expresan amor sin igual. Y caigo a los pies de Aquel que murió, Por darme la vida eternal. Mi alma el Señor con Su sangre limpió, Confieso que fui pecador. Que fue tan terrible mi mal que causó, La muerte del gran Redentor. La vida de Cristo por fe recibí, Su gracia al pecado venció. Hoy reina supremo Su Espíritu en mí, !Que dulce es la paz que Él me dio!

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NO PUDIERON LAS ENTRAÑAS No pudieron las entrañas, Del sepulcro aterrador; Retener entre sus sombras, A Jesús el Salvador. Coro: ¡Aleluya! ¡Aleluya! El Señor resucitó; ¡Aleluya! ¡Aleluya! A la muerte ya venció. Vencedores también somos, Por Su obra en la cruz; Somos suyos y por siempre, Viviremos en la luz. Eres digno de alabanza, ¡Victorioso Redentor! Nuestra vida te ofrecemos, Nuestros cantos, nuestro amor.

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NUESTRO PADRE TE ADORAMOS 44 Nuestro Padre, te adoramos, En el Nombre de Jesús; Dios y Padre te llamamos, hechos hijos de la Luz. Ya del juicio libertados, por la sangre del Señor. Y por Él reconciliados, disfrutamos de Tu amor. Pródigos un tiempo fuimos, y alejados del hogar; Más Tu voz de amor oímos, Pues quisístenos llamar; Por Jesús nos perdonaste, y nos allegaste a Ti. Nos besaste y nos sentaste, en Tu comunión aquí. Por Tu mano revestidos, del ropaje de salud; En Tu casa recogidos, por Tu gran solicitud; Redimidos y lavados, por la sangre de Jesús; Restaurados, bien amados; Hechos hijos de la Luz. Padre todos te alabamos, muy contentos de saber; Que los bienes que gozamos, Claro dan a comprender; Que Tu encuentras complacencia, En mostrarnos Tu favor; Y por tal benevolencia, Te alabamos con fervor.

OBEDIENTE A TU MANDATO Obediente a Tu mandato, Participa hoy Tu grey; De Tu Mesa y con gozo, La recibe nuestra fe. Lo que hiciste en el madero, Por el pobre pecador, Anunciamos en Tu Nombre, Recordando Tu favor. Recordamos Tu angustia, ¡Oh Divino Redentor! Y la copa de amargura, Que por todo pecador; En el Gólgota apuraste, Despreciando Tu dolor. Y deseamos que constantes, Te sigamos con valor. Gracias ¡oh Jesús! Te damos, Los que unidos en Tu amor; En Tu gracia disfrutamos, Tu clemencia, Tu favor. Tuya fue la cruz, más nuestra, Es la dicha y es la paz. Tuya es la gloria toda, Alabado Tu serás.

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CRUCIFICADO POR MÍ Crucificado por mí fue Jesús, De tal manera me amó. Sin murmurar fue llevado a la cruz, De tal manera me amó. Coro: De tal manera me amó. De tal manera me amó. Cristo en la cruz mis pecados llevó, De tal manera me amó. El inocente Cordero de Dios, De tal manera me amó, Que por salvarme sufrió cruenta cruz De tal manera me amó. En mi lugar padeció aflicción, De tal manera me amó. Ya consumó mi eternal salvación, De tal manera me amó.

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RESUCITÓ LA NUEVA, DAD

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SEGÚN TU DICHO AL EXPIRAR

Resucitó la nueva, dad, Al mundo que Su muerte vio; Tomó en la cruz nuestro lugar, Y del sepulcro revivió.

Según Tu dicho al expirar, Que en gratitud oí, Me acordaré, mi Redentor; Me acordaré de Ti.

Coro: ¿Por qué buscáis al Cristo aquí? Entre los muertos ya no está; No le lloréis, cantad gozad; Y proclamad que Cristo vive y reina ya.

Tu cuerpo herido a mi alma es, Divino pan aquí, Y con la copa de Tu amor, Me acordaré de Ti.

Vierónle triste sepultar, Cuantos en Él tuvieron fe; Toda esperanza muerta ya, Creyeron sepultar con Él. Mas el sepulcro no logró, En sus prisiones retener; Al Cristo, Rey que vencedor, Fue del sepulcro y su poder. Gozosos ya, la nueva, dad, Al tercer día revivió. El que creyere vivirá, Creyendo solamente en Él.

¿La angustia cruel podré olvidar, Que en el Getsemaní; Sufriste Tú mi Redentor? ¿Podré olvidarte así? Y cuando al Gólgota al mirar, A Cristo observe allí, De Dios Cordero, Redentor; Me acordaré de Ti.

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¡TAN DULCE EL NOMBRE DE JESÚS! 49

EN RUDO PRESTADO PESEBRE

¡Tan dulce el Nombre de Jesús¡ Sus bellas notas cantaré, Que mi alma llena al proclamar, El Nombre de Jesús.

En rudo prestado pesebre se vio, Cristo, mi Cristo. Ni cama ni almohada Su cuerpo gozó, Jesús, mi Señor.

Coro: Cristo, ¡Oh, que dulce es! Cristo, para siempre es; Cristo, yo te aclamaré, Por siempre, ¡Oh mi Cristo!

Coro: Dueño era Él de las Pléyades mil, Suyos los valles y montes sinfín; Ricos tesoros Él puede contar, Más pobre vivió, mi ser por salvar.

Adoro el Nombre de Jesús, Jamás me faltará Su amor; Y pone aparte mi dolor Él Nombre de Jesús.

En manso pollino mi Rey cabalgó, Cristo, mi Cristo; Ni corte de honor, ni diadema gozó; Jesús, mi Señor.

Tan puro el Nombre de Jesús, Que mi pesar pudo quitar; Y grata paz a mi alma da, El Nombre de Jesús.

En cuarto prestado la pascua tomó, Cristo, mi Cristo; El Siervo y Pontífice santo murió, Jesús, el Señor.

El dulce Nombre de Jesús, Por siempre quiero alabar; Y todos deben ensalzar, El Nombre de Jesús.

En tumba prestada se le sepultó, Cristo, mi Cristo; Ni lápida tuvo, ni gran funeral; Jesús, el Señor.

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NI SANGRE HAY, NI ALTAR

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Ni sangre hay, ni altar, cesó la ofrenda ya, No sube llama, ni humo hoy, ni más cordero habrá. Pero, ¡He aquí la sangre de Jesús! Que quita la maldad, y al hombre da salud. Con gratitud Señor, la sangre veo brotar, Que dio la paz al pecador, triunfando en su lugar. Gran triunfo sobre el reino de satán, Ni queda un enemigo, ni otra lucha habrá. Con gratitud Señor, tu gracia acepto yo, Que sobrepuja nuestro mal, del Padre es este amor. Amor del Hijo eterno que murió, Y amor del Santo Espíritu, del Trino Dios. Con gratitud Señor, decídome a unir, De la esperanza que nos das, Cual ancla firme está. Del velo adentro a donde el Precursor, Entró y hoy vive, por nosotros ante Dios. Con gratitud Señor, corona Tú me darás, De vida y gloria ceñirás, a cada vencedor; Ningún laurel marchito el Juez dará; Más como el trono eterno, de Jehová será.

¡SANTO! ¡SANTO! GRANDE ¡Santo! ¡Santo! Grande eterno Dios, Con alegría hoy Te alabamos; Rey de Reyes, Grande Capitán; Todopoderoso Guerrero. Honor y gloria, luz y dominio, Tributaremos todos a Ti. Coro: ¡Santo! ¡Santo! Eres Tu Señor, ¡Dios de las batallas glorioso! Alabadle cielos, tierra y mar, Toda Su Iglesia, Sus mensajeros; Alabanzas, cantos de loor, Hoy unidos elevaremos. Juez Majestuoso y Reverendo, Fuego y Vida eres, Señor. Rey de siglos, sólo eterno Dios, Veraz y Justo, incomprensible; Inmortal, Autor de todo bien, Eres Tú el Anciano de días. Y para siempre entonaremos, El canto eterno de redención.

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¡OH, PAN DEL CIELO! ¡Oh, Pan del cielo, dulce bien, Más excelente que el maná! :Si el alma busca Tu sostén, Eternamente vivirá.: ¡Oh, Nuevo Pacto del Señor, En santa copa de salud! :Reconciliando al pecador, Se acerca a Dios por Tu virtud.: Ansiosa mi alma viene a Ti, Mi buen Jesús con viva fe; :Tu Mesa es franca para mí, Y en humildad me acercaré.: Eres el Pan que vida me dio, Que al alma nutre y da vigor; :Y en vida y júbilo inmortal, Diré las glorias de Tu amor.:

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CUÁN GLORIOSA SERÁ LA MAÑANA 54

CUANDO LA TROMPETA

Cuán gloriosa será la mañana, Cuando venga Jesús el Salvador; Los creyentes en Cristo muy gozosos, Bienvenida daremos al Señor.

Cuando la trompeta suene, En aquel día final, Y que alba eterna rompa en claridad; Cuando las naciones salvas, A su patria lleguen ya, Y que sea pasada lista, allí he de estar.

Coro: No habrá necesidad, De la luna el resplandor; Ni el sol dará su luz, Ni tampoco su calor. Allí llanto no habrá, Ni tristeza ni dolor; Porque entonces Jesús, el Rey de gloria, Para siempre será el Consolador. Esperamos la mañana grandiosa, Para dar la bienvenida al Dios de amor; Donde todo será vida gloriosa, En la santa presencia del Señor. El cristiano fiel y verdadero, Que trabaja como obrero de valor, Gozará del descanso duradero, En presencia de nuestro Salvador.

Coro: Cuando allá se pase lista, Cuando allá se pase lista, Cuando allá se pase lista, A mi nombre muy feliz responderé. En aquel día sin niebla, En que muerte ya no habrá; Y Su gloria el Salvador impartirá, Cuando los llamados entren, A su celestial hogar, Y que sea pasada lista, allí he de estar. Trabajemos por el Maestro, Desde el alba al vislumbrar; Siempre hablemos de Su amor y fiel bondad, Cuando todo aquí fenezca, Y nuestra obra cese ya, Y que sea pasada lista, allí he de estar.

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DÍA DE VICTORIA Día de victoria y gozo celestial, Cuando Cristo volverá; ¡Que glorioso encuentro, Con mi Salvador; En las nubes se verá! Coro: En las nubes Él vendrá, En aquel día final; Cristo el Salvador, Muy pronto volverá; Por aquellos que Él amó. Día de gran gozo, día sin igual, Cuando Cristo volverá; De la tierra al cielo, El nos llevará; A Su seno paternal. Oye la trompeta, Que anunciando está, La venida del Señor; Ya no más dolores, ya no más afán; Con Jesús triunfó el amor.

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DÍA GLORIOSO SERÁ Día glorioso será para todos, Los redimidos en Cristo Jesús; Que preparados muy limpios le esperan, Cuando vendrá en las nubes de luz. Coro: Viene Jesús, viene Jesús, Yo le veré, yo le veré. Viene Jesús, viene Jesús; Con Él yo estaré. Las profecías cumplidas están, Cristo muy pronto a las nubes vendrá; Con grande gloria y poder celestial, Su pueblo santo arrebatará. La Iglesia pura que quiere Jesús, Limpia, muy limpia le debe esperar, Pues desposada bendita es de Él, Que con Su sangre la vino a comprar. Nada en el mundo podrá comparar, Lo que en el cielo iremos a ver, Vivamos todos muy fieles aquí, Que allá la dicha completa ha de ser.

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UN DÍA CRISTO VOLVERÁ

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VENDRÁ EL SEÑOR

Un día Cristo volverá, Al ascender lo prometió; Del mismo modo volverá, Y Su pueblo ha de ver al Rey Jesús.

Vendrá el Señor, muy pronto a los aires, Para llevarnos al lugar glorioso; Vendrá como Esposo a la Iglesia, Donde será nuestra morada eterna.

Coro: Muy pronto, sí, Jesús vendrá, Y alegre lo verá su pueblo; En vela todos deberán estar, Para poderle mirar.

¿Éste es el mismo que dobló la frente, Delante de enemigo prepotente? ¿Éste es el despreciado, el peregrino? El que murió en la cruz para salvarnos.

Los mensajeros del Señor, Afirman que Jesús vendrá; Y el Espíritu de Dios, Las promesas de la Biblia nos abrió. ¡Oh, gloria sin comparación, Será mirar a nuestro Rey! Su rostro hermoso brillará, Eclipsando el fulgor del mismo sol. ¡Oh, bienvenido, Rey Jesús, Tu Iglesia ya esperando está, Y vana no será la fe, Nuestra dicha es, Señor, que Tú vendrás.

¿Éste es el mismo que ascendió a los cielos, Que los varones galileos vieron? Así vendrá a recoger Su pueblo, Aquellos que por Él salvados fueron. Vendrá el Señor, cumpliendo Su promesa, Contemplaremos todos Su grandeza; Para llevarnos hacia Su morada, Será en la tarde o en la alborada. Vendrá el Señor, mas no sabemos cuando, Y mientras tanto estamos esperando; Será muy pronto, como hasta mañana, Vendrá por todos los que tanto ama.

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VIENE OTRA VEZ

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Viene otra vez nuestro Salvador, ¡Oh, que si fuera hoy! Para reinar con poder y amor, ¡Oh, que si fuera hoy! Ya por Su esposa viene esta vez, Purificada en Su grande amor, ¡Del mundo por la redondez, ¡Oh, que si fuera hoy! Coro: ¡Gloria! ¡Gloria! Gozo sin fín traerá. ¡Gloria! ¡Gloria! Al coronarle Rey; ¡Gloria! ¡Gloria! La senda preparad, ¡Gloria! ¡Gloria! Cristo vendrá otra vez. Terminará el poder de satán, ¡Ojalá fuera hoy! No más tristezas aquí verán, ¡Ojalá fuera hoy! Todos los muertos en Cristo irán, Arrebatados por su Señor, ¿Cuándo estas glorias aquí vendrán? ¡Ojalá fuera hoy! Fieles y leales nos debe hallar, si Él viniera hoy; Todos velando con gozo y paz, si Él viniera hoy, Multiplicadas señales hay, En el oriente se ve el albor. Ya más cercano el tiempo está,

PRONTO JESÚS DE LOS CIELOS Pronto Jesús de los cielos vendrá, Dulce es pensarlo y gran gozo nos da; Transformarános Su rostro al ver, Él es la meta al fin del correr. Coro: Nos cambiará, nos cambiará, Al ver de Él la gloriosa faz; Nos cambiará, nos cambiará, Al ver de Él Su faz. Los separados unidos serán, No más ausentes de Cristo estarán; A los que duermen resucitará, Y a Su imagen Él nos cambiará. Obscuras nubes Él disipará, Noches en días Él transformará; Las tempestades Él ha de cambiar, En dulce calma el llanto en cantar. El hará fuerte lo débil al fin, Todo perfecto, que ahora es ruin; Y por tristeza Su gozo dará, Consigo en gloria a Su Iglesia tendrá.

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CRISTIANOS TODOS Cristianos todos, a prepararse, Ved al esposo vuestro Señor; Llenas están las lámparas siempre, A Su encuentro id con amor. Coro: Cristo ya viene, pronto, sí viene; Sin tardanza, aparecerá, Con Él iremos, ¡Aleluya! A la mansión que Él nos dará. Ya las señales cúmplense todas, Ya la higuera brotando está; Fieles venid, el Salvador llama, Nadie en Sus bodas ha de faltar.

62

¿QUIERES VER A TU SEÑOR? ¿Quieres ver a tu Señor? Viene ya; Cristo nuestro Redentor, viene ya. ¿Andas en la santidad, Confiando en Su bondad? Anda en la luz y orad. Viene ya. Coro: Viene ya, viene ya; ¡Oh, que gozo cuando Él venga, listo estar! Nada puede comparar, Con la gloria que ha de dar. Cuando le hemos de encontrar y mirar. ¿Quieres tú probado estar? Viene ya. ¿Y velando sin cesar? Viene ya. Satisfecho gozarás, al venir el Rey de paz, De Su esposa tú serás. Viene ya. ¿Del pecado limpio estás? Viene ya. Lleno de paz tú serás. Viene ya. Verdaderos salvos son, los llamados a la Sión, Del Cordero Su canción, sí, será.

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SÓLO ESPERO ESE DÍA Sólo espero ese día que Cristo vendrá, Para ir a gozar de Su tierno amor, Cuando todas mis lágrimas enjugará. ¡Oh, que dicha que viniera hoy! Coro: ¡Oh, que dicha que viniera hoy! ¡Oh, que dicha que viniera hoy! Cuando todas mis lágrimas enjugará, Porque Cristo así prometió. Sólo espero ese día glorioso sin par, Cuando Cristo descienda ¡Qué gozo será! Cuando todas mis lágrimas enjugará, Porque Cristo así prometió. Ya parece que veo a mi Amado Señor, ¡Oh, que dicha mirar al bendito Señor! Pues en vez de una cruz o afanes aquí, Mi servicio Él coronará. Esperamos oir el sonar del clarín, Pues los muertos resucitarán; Y los salvos en Cristo con Él se irán, A gozar con Jesús el Señor.

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YO ESPERO EL DÍA ALEGRE

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Yo espero el día alegre, cuando Cristo volverá. Pues vendrá pronto a los aires, y nos arrebatará. ¡Oh, que gozo este pensamiento, a nuestra alma da; El que Cristo venga pronto otra vez. Coro: ¡Oh, Jesús vendrá muy pronto otra vez! Si Jesús vendrá muy pronto otra vez. Le veremos en los aires, contemplándole su faz. Cuando venga por Su pueblo otra vez. La venida del Señor, será el remedio del dolor; Que aflige siempre a este, triste mundo pecador. Toda lágrima se enjugará, por nuestro Salvador; Cuando venga por Su pueblo otra vez. Llegarán los santos a Sión, con gozo eternal, Y en toda aquella gloria, nada daña ni hace mal; Pues conocerán a Dios, entonces todos por igual. Cuando venga por Su pueblo otra vez. El pecado pena y muerte, de este mundo cesarán. Mártires y santos con Jesús, por siempre gozarán. Cada alma gozará, de paz perfecta sin afán. Cuando venga por Su pueblo otra vez.

YO SÓLO ESPERO ESE DÍA Yo sólo espero ese día, Cuando Cristo volverá. Yo sólo espero ese día, Cuando Cristo volverá; Afán y todo trabajo, Para mi terminará, :Cuando Cristo vuelva, A Su pueblo llevará.: Ya no me importa que el mundo, Me desprecie por doquier. Pues ya no soy de este mundo, Soy del reino celestial. Sólo espero ese día, Cuando me levantará; :De la tumba fría, Con mi cuerpo ya inmortal.: Entonces allí triunfante, Victorioso ascenderé. A JESUCRISTO en las nubes, Cara a cara le veré. Allí no habrá más afanes, Ni tristezas para mí. :Con los redimidos, Al Cordero alabaré.:

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YO SÓLO ESPERO ESE DÍA Yo sólo espero ese día, En que Jesús me corone; En la patria de los justos, Donde no hay penas, ni quebrantos. Donde se oyen loores, Al que con sangre nos compró. Coro: Yo quiero alabarte, con todo mi corazón, Por todas tus bendiciones, Quiero Jesús loarte. Y que al partir de este suelo, Pueda en el cielo entonar, Un gloria Dios resonante; Con los santos en luz. Ya Tu conoces mi vida, Y ves que en Ti se recrea; Quita de mi la amargura, Deja que alce yo mi voz; Deja que cante y Te alabe, Porque eres digno de alabanza.

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HOY QUIERO OBEDECERTE

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Hoy quiero obedecerte, Jesús mi Salvador; Y en agua bautizarme, según mandas Señor. Coro: Señor que Tú me ayudes, Tu Nombre a ensalzar; Y en novedad de vida, continuamente andar. También fue bautizado, de Dios el Hijo fiel; Y en Él resucitado, deseo estar con Él. Así la fe demuestra, que sólo está en Jesús; Que ya con Él he muerto, al mundo por Su cruz. Al mundo hoy renuncio, sus pompas vanas son; Ahora al cielo aspiro, de todo corazón. En novedad de vida, contigo andaré, Mi Salvador y guía, mi Redentor y Rey.

EN LAS AGUAS DE LA MUERTE En las aguas de la muerte, Sumergido fue Jesús. Más Su amor no fue apagado, Por Sus penas en la cruz. Levantóse de la tumba, Sus cadenas quebrantó; Y triunfante y victorioso, A los cielos ascendió. En las aguas del bautismo, Hoy confieso yo mi fe; JESUCRISTO me ha salvado, Y en Su amor me gozaré. En las aguas humillantes; A Jesús siguiendo estoy. Desde ahora para el mundo, Y el pecado muerto estoy. Ya que estoy crucificado, ¿Cómo más podré pecar? Ya que soy resucitado, Santa vida he de llevar. Son las aguas del bautismo, Mi señal de salvación. Y yo quiero consagrarme, Al que obró mi redención.

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SOY CONVERTIDO Soy convertido por la gracia del Señor. ¡Qué grande gozo siento en mi corazón! Ya mis maldades las borró mi Salvador; Llegaré puro y limpio a Su mansión. Coro: Seguiré a mi Jesús, Pues para mí lo del mundo se acabó; Y ayudado por Su luz, Proseguir en Su camino quiero yo. ¿Sabes mundo que hasta ayer estuve en ti? Donde el pecado destruía mi vivir, Yo siento gozo desde que me convertí; Y de volver a pecar mejor morir. No veo más que el camino de la fe, Donde muy pocos han querido caminar; Le pido a Dios que me guarde en Su amor, Llegaré puro y limpio a mi mansión.

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DEJO EL MUNDO Dejo el mundo y sigo a Cristo, Porque el mundo pasará; Mas Su amor, amor bendito, Por los siglos durará. Coro ¡Oh, qué gran misericordia! ¡Oh, de amor sublime Don! ¡Plenitud de vida eterna! Prenda viva de perdón. Dejo el mundo y sigo a Cristo, Paz y gozo en Él tendré, Y al mirar que va conmigo, Siempre, salvo cantaré. Dejo el mundo y sigo Cristo, Su sonrisa quiero ver, Como luz que en mi camino, Haga aquí resplandecer. Dejo el mundo y sigo a Cristo, Ya seguro por Su luz; Y después iré a mirarle, ¡Cara a cara en plena luz!

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A LOS PIES DE JESUCRISTO

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ABRE MIS OJOS Y VERÉ

A los pies de JESUCRISTO, Siempre quiero hallarme yo; Escuchando cual María, Las Palabras de Su amor. A los pies de JESUCRISTO, Mi pasado olvidaré; Pues Su mano fiel y tierna, Me ha librado de caer.

Abre mis ojos y veré, Las maravillas de Tu amor; Tu hermosura Señor Jesús, Y la victoria de Tu cruz. Al meditar Señor aquí, Mi voluntad te doy a Ti; Hazme sentir Tu amor por mí. ¡Oh, Salvador!

A los pies de JESUCRISTO, Hallo tierna compasión; Para todos mis afanes, Mis conflictos y dolor. Puedo yo decirle a Cristo, Mis cuidados y temor; Y con Él tendrá mi alma, Gozo, paz, tranquilidad.

Abre mi oído y podré, Oír que dices a Tu grey; Junto contigo en comunión, Voy con sincera devoción. Siempre Señor Te adoraré, Cumple Tu voluntad en mí. Hazme crecer en gracia, sí. ¡Oh, Salvador!

A los pies de JESUCRISTO, Hallo siempre bendición; En sus ojos hay dulzura, Y en Su seno protección. Dame ¡oh, Cristo! de Tu mente, Quiero ser humilde y fiel; Y que el mundo sepa al verme, Que Jesús es mi Señor.

Abre mi boca y diré, Que Tú eres mi Señor y Rey, Unge mis labios de Tu amor, Al anunciar Tu salvación. Mientras que yo te espero aqui, Aumenta más mi amor por Ti. Hasta que vengas Tu por mí. ¡Oh, Salvador!

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A TI DIOS MÍO EN ORACIÓN A Ti, Dios mío, en oración, Con mi cuidado terrenal; Allégome y de corazón, Te manifestaré mi mal. ¡Oh, cuántas veces tuve en Ti, Refugio de mi tentación! Y ¡cuántas cosas recibí! De Ti, Dios mío, en oración. A Ti, Dios mío, en oración, Confiando en Tu fidelidad; Elevaré mi petición, La voz de mi necesidad. Sé bien que Tu me escucharás, Que me darás Tu bendición; Que fortaleza me vendrá, De Ti, Dios mío, en oración. Ahora, ¡Oh Dios! en oración, Aliento y gozo a mi alma da; En este mundo de aflicción, De orar necesidad habrá. Más desde el día en que estaré, Contigo en suma perfección; Mis oraciones cambiaré, En una eterna adoración.

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NO ME DEJES NO ME OLVIDES No me dejes no me olvides, tierno Salvador; Muchos gozan Tus mercedes, oye mi clamor. Coro Cristo, Cristo, oye Tú mi voz. Salvador, Tu gracia dame, oye mi clamor. Ante el trono de tu gracia hallo dulce paz, Nada aquí mi alma sacia; Tú eres mi solaz. Sólo fío en tus bondades, guíame en Tú luz. Mi oración hoy no deseches oyeme Jesús. Fuente viva de consuelo, Tú eres para mí; ¿A quién tengo en este suelo sino sólo a Ti?

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CARIÑOSO SALVADOR Cariñoso Salvador, Huyo de la tempestad; A Tu seno protector, Fiándome de Tu bondad. Sálvame Señor Jesús, De las olas del turbión; Hasta el puerto de salud, Guía mi pobre embarcación. Otro asilo ninguno hay, Indefenso acudo a Ti; Mi necesidad me trae, Porque mi peligro ví. Solamente en Ti, Señor, Puedo hallar consuelo y luz; Vengo con ferviente amor, A los pies de mi Jesús. Cristo, encuentro todo en Ti, Y no necesito más; Caído, me pusiste en pie; Aunque débil, fuerza das. Al enfermo das salud; Das la vista al que no ve. Con amor y gratitud, Tu bondad ensalzaré.

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CERCA, MAS CERCA Cerca, más cerca, ¡Oh, Dios de Ti! Cerca mi vida yo quiero llevar; Cerca, más cerca, ¡Oh, Dios de Ti! :Cerca a Tu gracia que puede salvar.: Cerca, más cerca, cual pobre soy. Nada Señor, yo te puedo ofrecer; Sólo mi ser contrito Te doy, :Pueda contigo la paz obtener.: Cerca, más cerca, Señor de Ti. Quiero ser tuyo, dejando el pecar. Goces y pompas vanas aquí, :Todo, Señor, pronto quiero dejar.: Cerca, más cerca, mientras el ser, Aliente vida y busque Tu paz; Y cuando al cielo pueda ascender, :Ya para siempre conmigo estarás.:

77

CRISTO ES MI DULCE Cristo es mi dulce Salvador, Mi gozo, mi paz, mi amor; El es mi Fortaleza y Luz, Por mí murió en la cruz. Cuando estoy triste encuentro en Él, Consolador, Amigo fiel; Consolador, Amigo fiel, es Jesús. Cristo es mi dulce Salvador, Brillante Estrella y Sol; Por mí Su sangre derramó, Perfecta paz me dio. Dicha inmortal allá tendré, Con Cristo siempre reinaré, Dicha inmortal allá tendré, con Jesús, Cristo es mi dulce Salvador, Mi eterno Redentor; Oh, nunca yo podré pagar, La deuda de Su amor; Le seguiré pues en la luz, No temeré llevar Su cruz, No temeré llevar la cruz de Jesús.

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DIOS NOS HA DADO PROMESA Dios nos ha dado promesa, “Lluvias de gracia enviaré, Dones que os den fortaleza, Gran bendición os daré”. Coro: Lluvias de gracia, Lluvias pedimos Señor; Mándanos lluvias copiosas, Lluvias del Consolador. Dios nos ha dado promesa, De derramarnos Su amor; De bendecir Su dehesa, Para Su gloria y honor. Obra en Tus siervos piadosos, Celo, constancia y valor, Bríndanos dones preciosos, Dones del Consolador.

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EL QUE HIZO TIERRA

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ES JESÚS EL MEJOR AMIGO

El que hizo tierra, cielos y mares, Es el que hizo la salvación. :No hay otro Nombre dado a los hombres, Desde el principio de la creación.:

Es Jesús el mejor amigo, Cuando triste o cansado estás; Colmará de bendición, tu transido corazón. !Es Jesús el mejor amigo¡

Oremos todos con alegría, Pidiendo al Padre, Su bendición. :Siempre en el Nombre de JESUCRISTO, Quien nos ha dado la salvación.:

Coro: :Es Jesús el mejor amigo: Pues Él no nos dejará, Siempre nos protegerá, Es Jesús el mejor amigo.

Los allegados de JESUCRISTO, Arrepentidos de corazón, :Ya por Su sangre se encuentran listos, Para gloriosa resurrección.: Y si Cristo viene antes que yo muera, Pues con Su sangre limpio estoy, :No tendré que irme a la tumba fría, Antes transformado en gloria le veré.:

En Jesús fiel amigo encuentro, Paz perfecta Él a mi alma da, Apoyado en Él estoy, sin temor mi ser le doy. !Es Jesús el mejor amigo¡ Aunque ande en algún peligro, O en sombra de la muerte esté, Ningún mal me alcanzará, pues Jesús me amparará. !Es Jesús el mejor amigo¡ Cuando estemos al fin reunidos, Con los redimidos más allá; Cantaremos con fervor, en presencia del Señor. !Es Jesús el mejor amigo¡

81

ES CRISTO MI TODO Es Cristo mi todo, En sombra y en luz; El vino a salvarme, Mi dulce Jesús. No tengo temores, Pues conmigo está; :Mi tierno Pastor es, Y me cuidará.: Digno eres, oh, Cristo, De todo mi amor; A Ti yo me entrego, Y Te doy loor. Oh, guárdame Cristo, En Ti confiaré, :Refugio Tú eres, Tu siervo seré.: Del cielo le espero, Pues lo prometió; Vendrá a las nubes, Y me llevará. Con Cristo por siempre, Feliz estaré; :Ya no habrá tristeza, Quebranto y dolor.:

82

FUE PROFUNDA LA PAZ Fue profunda la paz que por fin encontré, Santo gozo que el mundo no da; Cuando vine con fe, cuerpo y alma entregué, A mi tierno, bendito Jesús. Coro: ¡Bendito Jesús! ¡Bendito Jesús! Loado por célicas huestes en luz. Me postro en amor, Divino Señor, Mi tierno, bendito Jesús. Te suplico mis pasos ordenes aquí, Que domines mi cruel voluntad; Pues anhelo servir, Tus deseos cumplir, Mi tierno, bendito Jesús. A Tus pies mis talentos gozoso pondré, Tu cariño mi premio será; Nada quiero guardar, todo quiero entregar, A mi tierno, bendito Jesús. Eres Verbo de vida, Cordero de Dios, El Anciano de días, mi paz; Digno eres Señor de mi honra y loor, Mi bendito, mi tierno Jesús.

83

¿HAS OÍDO SEÑOR? ¿Has oído Señor mis oraciones? ¿En Tu gracia has oído mi clamor? Pues derrama Tus ricas bendiciones, Dame fe, y alegría, ¡Oh, Señor! No pretendo riquezas con polillas, Cual los bienes terrenos que se van; :Quiero sí, que me des sabiduría, Para que me conduzca en Tu temor.: No pretendo Señor, cosas terrenas, No pretendo mi Dios más que Tu amor; Que me enseñes las cosas que son buenas, Que edifican, dan vida y dan valor. No lo dudo Señor que Tú has oído, Mis humildes plegarias, mi oración; :No lo dudo Señor, porque he sentido, Que me has dado Tu amor y Tu perdón.:

84

JESÚS ES MI REY SOBERANO Jesús es mi Rey Soberano, Mi gozo es cantar Su loor; Es Rey y me ve cual hermano, Es Rey y me imparte Su amor. Dejando Su trono de gloria, Me vino a sacar de la escoria. ¡Y yo soy feliz, Y yo soy feliz, por Él! Jesús es mi amigo anhelado, Que en sombra y en luz siempre va; Paciente y humilde a mi lado, Su ayuda y consuelo me da; Por eso constante le sigo, Porque Él es mi Rey y mi Amigo. ¡Y yo soy feliz, Y yo soy feliz, por Él! Señor ¿Qué pudiera yo darte, Por tanta bondad para mí? ¿Me basta servirte y amarte, En todo entregarme yo a Ti? ¡Entonces acepta mi vida, Que a Ti sólo queda rendida! ¡Pues yo soy feliz, Pues yo soy feliz, por Ti!

85

MÁS CERCA, ¡OH, DIOS DE TI! Más cerca, ¡Oh, Dios de Ti! Yo quiero estar, Aunque sobre una cruz; me haya de alzar. Mi canto aún así, constante habrá de ser; Más cerca ¡Oh, Dios de Ti! Más cerca, sí. Si caminando voy, y de ansiedad; Me lleno al presentir, la obscuridad; Aun mi sueño así, me mostrará que estoy; Más cerca ¡Oh, Dios de Ti! Más cerca, sí. Que encuentre senda aquí, que al cielo va; Y en ella Tu bondad, me sostendrá; Y ángeles habrá, que nos conducirán; Más cerca ¡Oh, Dios de Ti! Más cerca, sí. Si en vuelo celestial, al cielo voy; Y sol y luna atrás, dejando estoy; Alegre entonaré, mi canto sin igual. Más cerca ¡Oh, Dios de Ti! Más cerca, sí.

86

MUCHAS VECES Muchas veces yo no sé que hacer, Tempestades surgen en mi ser; Más a Cristo puedo ir con fe, Dios es mi refugio. Oraré. Coro: Oraré, oraré, El es poderoso y me contestará; Mi dolor comprende, pues a Él iré. Dios es mi refugio. Oraré. Enemigos vienen con furor, A quitar mi gozo y mi paz; Yo soy débil, esto pues haré, Dios es mi refugio. Oraré. Cristo reina, Él no faltará, Me ha prometido y hará; Más que pido, más que pensaré, Dios es mi refugio. Oraré.

87

NO TE DESMAYES TEN VALOR No te desmayes, ten valor, Dios cuidará de ti. En el peligro el buen Pastor, Dios cuidará de ti. Coro: Dios cuidará de ti, Noche y día, toda la vía. El cuidará de ti. Dios cuidará de ti. Echa tu carga sobre el Señor, El cuidará de ti. De los amigos es el mejor, Dios cuidará de ti. Nada con Cristo te faltará, El cuidará de ti. Dice que nunca te dejará, Dios cuidará de ti.

88

¡OH, PASTOR DIVINO! ¡Oh, Pastor Divino! escucha: Los que en este buen lugar; Como ovejas, congregados, Te venimos a buscar, :Cristo llega: Tu rebaño a apacentar. Al perdido en el pecado, Su peligro harás sentir; Llama al pobre seducido, Que Tu voz hoy pueda oír; :Al enfermo: Pronto dígnate acudir. Guía al triste y fatigado, Al aprisco del Señor; Cría al tierno corderito, A Tu lado, buen Pastor. :Con los pastos: De tu amor y dulce voz. ¡Oh, Jesús! Escucha el ruego, Y esta humilde petición; Ven a henchir a Tu rebaño, De sincera devoción. :Cantaremos: Tu benigna protección.

89

¡OH, QUE AMIGO NOS ES CRISTO! Oh, que Amigo nos es Cristo! Él llevó nuestro dolor, Y nos manda que llevemos, Todo a Dios en oración. ¿Vive el hombre desprovisto, De paz, gozo y santo amor? Esto es porque no llevamos, Todo a Dios en oración. ¿Vives débil y cargado, De cuidados y temor? A Jesús Refugio eterno, Dile todo en oración. ¿Te desprecian tus amigos? Cuéntaselo en oración; En Sus brazos de amor tierno, Paz tendrá tu corazón. JESUCRISTO es nuestro Amigo, De esto pruebas Él nos dió, Al sufrir el cruel castigo, Que el culpable mereció. Y Su pueblo redimido, Hallará seguridad, Fiando en este Amigo eterno, Y esperando en Su bondad.

90

¡TRABAJAD! ¡TRABAJAD! ¡Trabajad! ¡Trabajad! Somos siervos de Dios, Seguiremos la senda, que el Maestro trazó. Renovando las fuerzas, con bienes que da; El deber que nos toca, cumplido será. Coro: ¡Trabajad! ¡Trabajad! ¡Esperad y velad! ¡Confiad, siempre orad! Que el Maestro pronto volverá. ¡Trabajad! ¡Trabajad! Hay que dar de comer, Al que el Pan de la Vida, desea tener. Hay millones que irán, a los pies del Señor, Al saber que por gracia, los salva Su amor. ¡Trabajad! ¡Trabajad! Fortaleza pedid, El reinado del mal, con valor combatid. Conducid los cautivos, al Libertador, Y decid que sin costo, redime Su amor.

91

¿CON QUÉ PAGAREMOS? ¿Con qué pagaremos, el inmenso amor? Que diste Tu vida, por el más vil pecador. Entonces recibe, la ofrenda humilde, :La ofrenda humilde, Señor JESUCRISTO, Mi fiel corazón.: Y cuando la noche, extienda su manto, Mis ojos en llanto, en Ti fijaré. Alzando mis ojos, veré las estrellas. :Yo sé que tras ellas, cual Padre amoroso, Tu velas por mí.: No creo pagarte, con oro ni plata, El gran sacrificio, que hiciste por mí. No tengo que darte, por amarme tanto. :Recibe este canto, mezclado con llanto, Mi fiel corazón.:

92

DIVINO COMPAÑERO Divino compañero del camino, Tu presencia siento yo al caminar; Ella ha disipado toda sombra, Ya tengo luz, la luz bendita de Tu amor. Coro: Quédate Señor, ya se hace tarde, Deseo estar contigo en comunión; Quiero Tu presencia permanente, Reposa ya, reposa ya, mi Salvador. La sombra de la noche se aproxima, Y en ella el tentador acechará, No, no me dejes solo en el camino, Ayúdame, ayúdame, hasta llegar. En la mansión que has preparado, Yo siempre y por siempre viviré; En Tu presencia tan sublime, Te adoraré, Te adoraré, mi Salvador.

93

SIEMPRE ORAD Siempre orad, muy pronto viene Cristo, Guarda bien tu corazón; Retén firme todo lo que tienes, Tus trabajos premiará. Coro: Siempre orad, nos manda Cristo, Y velad ... en oración; Pronto vendrá ... Él en la nubes, Y nos llevará con Él. Siempre orad, que si hoy viniere Cristo, El te halle en la lid; Con la espada tuya bien empleada, Defendiendo la verdad. Siempre orad, no seas imprudente, Sin aceite por tu luz; Sin demora toma la promesa, De Divina plenitud. Siempre orad, con celo y constancia, Ejercítate en la fe; Ten el ánimo de JESUCRISTO, Y Sus huellas sigue fiel.

94

¿HAS TRATADO DE LLEVAR? ¿Has tratado de llevar tu carga? Solo tú, solo tú. ¿No sabiendo que tendrás ayuda, Si acudieres al Señor Jesús? Coro: Si tengo cargas, que solo debo llevar, Paciente las alzo, y acudo a mi Señor. Si tengo cruces, que nadie puede cargar; Su ayuda siempre mi Señor, Me presta con amor. Nunca olvides que a la muerte solo, Fue Jesús, fue Jesús; Para darte salvación y vida, Cuando solo sucumbió en la cruz. Sólo en Cristo protección y ayuda, Hallarás, hallarás; Lleva siempre a Él tus cargas todas, Que a ninguno rechazó jamás.

95

MÁS DE JESÚS DESEO Más de Jesús deseo saber, Más de Su gracia y poder; Más de Su salvación gozar, Más de Su dulce amor probar. Coro: Más quiero amarle, Más quiero honrarle; Más de Su salvación gozar, Más de Su dulce amor probar. Más quiero a Jesús seguir, Más de Su santa ley cumplir; Más de Su voluntad saber, Más de Su Espíritu tener. Más de Jesús, más oración, Más cerca estar en comunión; Más Su Palabra meditar, Más Sus promesas alcanzar. Más de Jesús allá veré, Más semejante a Él seré; Más de Su gloria he de gozar; Más Su gran Nombre alabar.

96

YO QUIERO TRABAJAR Yo quiero trabajar por el Señor, Confiando en Su Palabra y en Su amor. Quiero yo cantar y orar, Y ocupado siempre estar, En la viña del Señor. Coro: Trabajar y orar, En la viña, en la viña del Señor. Si mi anhelo es orar, Y ocupado siempre estar, En la viña del Señor. Yo quiero día por día trabajar, Y esclavos del pecado libertar; Conducirlos a Jesús, Nuestro Guía, nuestra Luz, En la viña del Señor. Yo quiero ser obrero de valor, Confiando en el poder del Salvador; Y el que quiera trabajar, Hallará también lugar, En la viña del Señor.

97

A SOLAS AL HUERTO A solas al huerto yo voy, Cuando duerme aún la floresta. Y en quietud y paz con Jesús estoy, Oyendo absorto allí Su voz. Coro Él conmigo está, puedo oir Su voz, Y que suyo, dice, seré; Y el encanto que hallo con Él allí, Con nadie tener podré. Tan dulce es la voz del Señor, Que la aves guardan silencio, Y tan sólo se oye esa voz de amor, Que inmensa paz a mi alma da. Con Él encantado yo estoy, Aunque en torno llegue la sombra; Más me ordena ir a escuchar Su voz, Su paz doquier, a mi alma da.

98

DESPUÉS DE LA TORMENTA Después de la tormenta, Viene la calma, viene la paz; Si a Cristo de rodillas, Tu se la pides, Él te la da. No importa que legiones, Del enemigo te hagan sufrir; :Si al Nombre de mi Cristo, Sagrado Nombre tendrán que huir.: La noche más obscura, Tiene su aurora, tiene su albor; La vida más perdida, Tiene esperanza del Salvador. No importa que el pecado, Te haya manchado, con su maldad. :Pues Cristo te perdona, Y te corona de santidad. Jesús hoy nos invita, Con voz bendita, a ir a Él; Su paz nos asegura, y nos ofrece, Ser siempre fiel; Con Cristo triunfaremos, Y en Él tenemos buen capitán, :Marchemos victoriosos, Siempre gozosos, con el Señor.

99

PIDO SEÑOR QUITES DE MÍ

100

SI TU HABLAS CON DIOS

101

Pido Señor quites de mí toda maldad, La vanidad, la pretensión y disensión; Quita también orgullo Señor, del corazón, Porque sé bien, que galardón yo no tendré.

Si tú hablas con Dios, las cosas cambiarán, orando, Cualquier necesidad, Dios la resolverá, orando; Meditando en el Señor, las penas liquidad, orando, Bendito el Señor, yo puedo hablar con Dios, orando.

Coro: Limpia mi vida Señor Jesús, E inunda mi alma de Tu hermosa luz; Porque al cielo voy a entrar a ver Tu faz, En Tu presencia anhelo estar; También Tu Nombre allí alabar, Quita de mí Señor Jesús, toda maldad.

Si buscas al Señor, en penas y aflicción, orando, El te responderá, Su gracia te dará, orando; Al trono del Señor acude sin cesar, orando, La paz encontrarás, socorro te dará, orando.

Pon en mi ser, bondad y fe para vencer, Más caridad, gozo también y mucha paz; Benignidad anhelo más mi buen Señor, Porque sé bien, que galardón así tendré.

Los héroes de la fe, buscaron al Señor, orando, Y Dios les respondió, del fuego los libró, orando; Si buscamos al Señor, Él nos responderá, orando, El es el mismo ayer, El es mismo hoy, y siempre.

EN LA CÉLICA MORADA

102

SI LAS TINIEBLAS TE CERCAN

En la célica morada, paraíso celestial, Donde cada voz ensalza, al Autor de todo bien, El pesar recordaremos, y la triste nublazón, Tantas luchas del espíritu, con el débil corazón!

Si las tinieblas te cercan, si viene tempestad; Y si las duras pruebas, te causan ansiedad. Pasará tu temor, clamando al Salvador. Hablando con Jesús, todo está bien, muy bien.

Coro: Sí, allí será gratísimo en el proceder pensar, Del Pastor fiel y benéfico; Que nos ayudó a llegar.

Coro: Hablando con Jesús, todo está bien, muy bien, Hablando con Jesús, todo está bien, muy bien. Si estás en orfandad, si grande es tu ansiedad, Hablando con Jesús, todo está bien, muy bien.

Oración deberes, penas, vías que anduvimos ya, Poseyendo las riquezas, que Jesús nos guarda allá, ¿La memoria retendremos, a cubierto del dolor, Del camino largo, aspérrimo con sus luchas, su temor? La bondad con que nos mira, sin cansarse cuando ve, Poco fruto en nuestra vida, y tan débil nuestra fe, ¿Nos acordaremos de ella, en aquel dichoso hogar, De eternal aurora espléndida, e inefable bienestar?

Así con Cristo hablando, el triunfo obtendrás; Y cantos de victoria, alegre entonarás. Exponle tu dolor, y te dará Su amor. Hablando con Jesús, todo está bien, muy bien. ¿Te dejan tus amigos? ¿Viene persecución? Se fiel a JESUCRISTO, haz ferviente oración. De Cristo la amistad, te pondrá en libertad. Hablando con Jesús, todo está bien, muy bien.

103

EN MIS ANGUSTIAS ME AYUDA

104

¿QUIERES SOBRE EL MUNDO?

En mis angustias me ayuda Jesús, Sobre mi alma derrama Su luz; Todos los días consuelo me da, Cada momento, conmigo Él está.

¿Quieres sobre el mundo ser un vencedor? ¿Quieres tú cantar aún cuando hay dolor? ¿Quieres ser alegre cual fiel luchador? Guarda el contacto con el Salvador.

Coro: Cada momento me guardas, Señor. Cada momento en Tu gracia y amor. Vida abundante la tengo en Ti, Cada momento Tu vives en mí.

Coro: Guarda el contacto con el Salvador, Luego las tinieblas no te cubrirán; Por la senda alegre tú caminarás, Por el buen contacto con el Salvador.

Acudo al trono de gracia con fe; Oye mi voz y mis lágrimas ve, Cristo Jesús en los cielos allí, Cada momento se acuerda de mí. Cristo es mi Roca, mi Libertador; Él es mi Escudo, mi gran Defensor. En mi conflicto, al Señor miraré, Cada momento y salvado seré.

En el mundo hay muchos tristes en pecar, Cuyos corazones lloran de pesar; Dales el mensaje no hay que callar, Con Dios el contacto debes de guardar. ¿Quieres tú con Dios la comunión tener? ¿Y Su gloria siempre en ti permanecer? Que el mundo a Cristo pueda en ti hoy ver, Guarda el contacto con el Salvador. Deja que el Espíritu implante en ti, La humildad de Cristo y Su santo amor; Ora siempre y vela que Jesús vendrá; Guarda el contacto con el Salvador.

105

MI VOLUNTAD A TI Mi voluntad a Ti la he rendido, Y pertenezco solamente a Ti. Humildemente yo te pido, Tu voluntad se haga en mí. Coro: Oh, dulce Bien, a Ti me entrego, Tu voluntad hoy haz en mí. Oh, Dios bendito mi ser contrito, Consagro solamente a Ti. Estoy hastiado de mi culpa, Y sólo Tú podrás perdonar, No puedo darte otra disculpa, A Ti me entrego y nada más. Tu voluntad, oh, Rey precioso, Rendido quiero siempre aceptar. El Santo Espíritu con el gozo, Mi alma quiera siempre inundar. Contigo siempre iré, Dios amado, Mi pie seguro y firme estará. ¿Quién de Tu amor, ilimitado, Separará mi vida de Ti?

106

MI CRUZ NO SERÁ Mi cruz no será más pesada, Que la gracia que Dios da; Aun si la tormenta me espanta; No podrá esconder Su faz. Coro: La gracia de Dios me bastará, Su ayuda jamás me faltará; Consolado por Su amor, Que echa fuera mi temor, Confiaré en mi Señor. Y aunque me lleguen momentos, De ansiedad y prueba aquí; En días los más apurados, No se aparta Dios de mí. La luz de Su rostro me alumbra, En el tiempo de aflicción, Y mi alma gozosa vislumbra, El palacio de mi Rey.

107

VENGO A SUPLICARTE Vengo a suplicarte mi Señor, Que me dejes reposar; En tu tierno pecho, mi Señor, Como el apóstol Juan. Coro Me has dado tantas cosas, Mi precioso Jesús. Me has dado paz, me has dado fe, Me has dado amor. Me has dado gozo eternal en plenitud. Me has dado tantas cosas, Mi precioso Jesús. Que sería un ingrato, Si negara Tu amor. Cerca del Señor yo quiero estar, Cual María a Sus pies. Porque me ha dado bendición, Gozo, dicha y solaz.

108

MI MANO TEN SEÑOR Mi mano ten, Señor pues flaco y débil, Sin Ti no puedo riesgos afrontar; Tenla Señor, mi vida el gozo llene, Al verme libre así de todo azar. Mi mano ten, la vía es tenebrosa, Si no la alumbra Tu radiante faz; Por fe yo alcanzo a percibir Tu gloria, ¡Cuán grande gozo! ¡Cuán profunda paz! Mi mano ten, Señor que a mis oídos, Lleguen palabras de Divino amor; Alienta así, mi espíritu turbado, Para seguirte con un nuevo ardor. Mi mano ten, el enemigo es fuerte, No cesa cada paso en disputar; Más nada puede, si Tú estás conmigo, Porque en Tu fuerza yo he de triunfar. Mi mano ten, se extienden ya las sombras, El sol se pone, nuestro día va; Contigo quiero andar que Tú ilumines, Los pasos que en el mundo Tu hijo da.

109

CUANDO ESTÁS CANSADO

110

CRISTO MI CRISTO

Cuando estás cansado y abatido, Dilo a Cristo, dilo a Cristo; Si te sientes débil, confundido, Dilo a Cristo el Señor. Dilo a Cristo, dilo a Cristo...

Cristo mi Cristo que indigno fui, Cuando no quise oír Tu voz. Cuando perdido, no te serví. Ahora te ruego, que me perdones, Pues Te ofendí.

Coro: El es tu Amigo más fiel; No hay otro amigo como Cristo, Dilo tan sólo a Él.

Cual magdalena hoy vengo a Ti, Con mi llanto a lavar Tus pies. Con mi alabastro a derramar, El olor suave, sobre las almas, Que has de salvar.

Cuando estás de tentación cercado, Dilo a Cristo, dilo a Cristo; Cuando rugen huestes de pecado, Mira a Cristo, el Señor. Mira a Cristo, mira a Cristo... Si se apartan otros de las senda, Sigue a Cristo, sigue a Cristo; Si acrecienta en torno la contienda, Sigue a Cristo el Señor. Sigue a Cristo, sigue a Cristo... Cuando llegue la final jornada, Fía en Cristo, fía en Cristo; Te dará en el cielo franca entrada, Fía en Cristo el Señor. Fía en Cristo, fía en Cristo...

Muestra Tu rostro, haz oír Tu voz, A mi alma triste por el dolor, Dulce consuelo encuentro en Ti, Mi dulce Amado, mi Padre Eterno; Príncipe de paz. Responde ahora a mi clamor, Con que te clama mi corazón. Bajo Tu sombra descansaré; Pues tuya es mi alma, Tuya es mi vida y el corazón.

111

HAY JARDÍN MEMORABLE Hay jardín memorable y hermoso, Do las rosas exhalan su olor. Allí Cristo en santo reposo, Levantó Su plegaria de amor. Coro: ¡Oh que bello jardín, el jardín de oración, Donde el alma se encuentra con Dios. Allí miro al Señor y escucho Su voz, En la hora de la oración. Hay jardín de eternal primavera, Porque Dios allí da bendición. Es el sitio do Cristo me espera, El bendito lugar de oración. Hay un huerto do Cristo me ofrece, Las penurias y cargas quitar; Allí el gozo del cielo florece, Y mi copa se ve rebosar. Es el sitio do Cristo invita, A implorar Su bondad y perdón. Es allí donde el alma contrita, Se recoge con fe y devoción.

112

EN LAS OLAS INMENSAS

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En las olas inmensas, de embravecido mar; Que asaltan de mi alma, la pobre embarcación. De rodillas a Cristo, clamé y el huracán, Se huye humildemente, a la voz de Dios. Coro: Es Cristo la Roca, el Ancla de mi fe; Los males, lamentos, y ayes de temor, Se terminan por siempre, con mi Supremo Rey. Es JESUCRISTO mi refugio. Me guarda de peligros, de pruebas y dolor; Si manda que los vientos, no agiten tempestad. Los mares se detienen, la ola reposó, Y en Cristo el ancla arrojo, confiando más. Mi dulce Salvador, mi buen Amigo y Dios; Que quita de mi vida, tristeza, llanto y hiel. Jesús me lleva al cielo, hogar del Ser de amor. Inagotable fuente, de dicha y bien.

SEÑOR, TE QUIERO EXPRESAR

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EMBAJADOR, QUE A CRISTO

Señor, te quiero expresar mi gratitud, Porque, en el mundo falaz, No podía encontrar, la dicha y solaz, Que sólo Tú me das.

Embajador, que a Cristo representas, En esta tierra de pecado y de maldad; :Es tu deber trabajar hasta que Él venga, Y de sembrar la Palabra de Verdad.:

Coro: Gratitud tan sólo gratitud, Te puedo ofrecer mi Salvador, Gratitud, amor, fidelidad, Merece mi Señor por la eternidad.

Ve, que a veces se amontonan las tinieblas, Y se oyen gritos en la densa obscuridad; :¿Dejarás que perezcan sin defensa, Cuando puedes señalarles libertad?:

En el mundo estaba sin temor, Sin conocer Señor de Tu perdón, Con amor me trajiste a tus pies, Salvándome así de mi pecado atroz. Vengo a Ti, pidiendo mi Señor, Aumentes más mi fe, Para poder vencer, Para así llegar a Tu hogar, Y la corona al fin poderla recibir.

No te olvides del mandato de tu Cristo, A Quién tú con humilde corazón; :Propusiste servirle y estar listo, Y ocuparte sin demora en Su labor.: No desmayes, la victoria está segura, Adelante con valor, sin vacilar; :A las almas hay que hablarles con ternura, Del Señor y de Su sangre eficaz.: Embajador fiel y no de esta tierra, Sino de aquella hermosa patria celestial, :Cumple fielmente que al fin de tu carrera, La bienvenida el Maestro te dará.

115

SI LA LUZ DEL SOL SE OCULTA Si la luz del sol se oculta, Y vacila en mí la fe; Mi plegaria elevo y clamo, Cristo mi Piloto Sé. Coro: Mi Piloto irá conmigo, Y de nada temeré. No me importa el mar furioso, Confiaré por siempre en Él. Siempre que mi barca boga, En el tempestuoso mar; Puedo fiar en mi Piloto, Y en Su seno reposar. Cuando llegue a la ribera, De la patria celestial; Me dará la bienvenida, Mi Piloto sin igual.

116

SUSTÉNTAME SEÑOR Susténtame Señor, susténtame Jesús, Hasta que llegue el día grande del Señor. No ves que débil soy, que tiemblo ante, La tentación del enemigo el tentador. Coro: Dame fuerzas, dame aliento, No te olvides, de mi llanto; Dame fuerzas, dame aliento, No me olvides porque débil soy. Susténtame Señor, susténtame Jesús, Como a Tu siervo Elías cuando no llovió. Susténtame Señor, susténtame Jesús, Que tengo miedo y no puedo regresar.

117

POR LA MAÑANA YO DIRIJO Por la mañana yo dirijo mi alabanza, Al Dios del cielo que es mi única esperanza. Por la mañana en silencio yo le busco, Pues es consuelo y solaz de cada justo. También me cuida, pues me ama tanto, Y me libra de cualquier quebranto; Me da Su mano poderosa y fuerte, Para librarme de la misma muerte. Cuando la noche se aproxima tenebrosa, Con elevarle mi oración el alma goza. Siento Su paz inagotable dulce y grata, Porque temores y ansiedad Jesús los mata; También elevo mi cantar al cielo, Cuando a la tierra baja el negro velo; El sol se oculta pero queda Cristo, A Quien mis ojos por la fe han visto. En todo el día yo le alabo con el alma, Reconociendo mucha paz y dulce calma. Alzo mis ojos a los montes de socorro, Pues es la sombra del lugar donde yo moro; No dará mi pie al resbaladero, Pues de Su mano todo bien espero; El sol no me fatigará en el día; Ni la luna en mi obscura vía.

118

ES JESUCRISTO MI TODO

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SEÑOR MI DIOS

Es JESUCRISTO mi todo, grato es cantar Su loor, ¡Oh, cuán sublime e infinito, es Su Divino amor! Cuando me vio errabundo, cual hijo pródigo, Vino a buscar y salvarme, a Su redil me llevó.

Señor mi Dios, al contemplar los cielos, El firmamento y las estrellas mil; Oír Tu voz en los potentes truenos, Y ver brillar el sol en su cenit.

Coro: Cristo, Cristo, Tú eres mi Salvador, Cristo, Cristo, tuyo soy Señor. Te seguiré dondequiera, si Tú guiando vas, Y al terminar mi carrera, en gloria veré Tu faz.

Coro: Mi corazón entona esta canción: ¡Cuán grande es Él! ¡Cuán grande es Él! Mi corazón entona esta canción: ¡Cuán grande es Él! ¡Cuán grande y fiel!

Cristo es el Lirio del valle, la Rosa es de Sarón. Cristo es el Astro esplendente, la Roca de salvación. Él es la Fuente de vida, y gozo eternal. Ya satisface mi alma, con el maná celestial. Cristo fue puesto en pesebre, la amarga copa bebió, Cual inocente Cordero, allá en la cruz Él murió. Resucitó de la tumba, y al cielo ascendió, Más pronto viene en las nubes; ésta promesa nos dió.

Murió por mí, ¡Qué grande maravilla! ¡Oh, que amor al más vil pecador! Ahora gozo paz y eterna vida, Por fe en mi bendito Salvador. Cuando el Señor me llame a Su presencia, Al dulce hogar, al cielo de esplendor; Le adoraré, cantando la grandeza, De Su poder y Su infinito amor. Contemplaré al Rey en Su hermosura, Veré Su rostro y como Él seré; Con Él gozando de la excelsa gloria. Por la eternidad le ensalzaré.

120

SÓLO EN JESÚS SERÁS FELIZ Sólo en Jesús serás feliz, Sólo por Él tendrás amor, Te guardará de duda atroz, Será tu tierno Protector. Coro: Guardado siempre por la fe Se huye fácil el dolor, No temas de confiar en Él, Él es mi gozo, paz y amor. Cuando vivimos por Jesús Se va la duda con Satán; Dios te dará Su tierno amor, Las dudas nunca volverán. Y tiernamente me guiará Por sendas de justicia y paz. Duras las pruebas podrán ser, Pero Su amor es eficaz. Jesús, bendito Salvador, Confío en Ti mi buen Señor, Ansío verte siempre en mí, Ayúdame a llevar tu cruz.

121

LA MERCED DE NUESTRO La merced de nuestro Padre, Es un faro en su brillar, Él nos cuida y nos protege, Con las luces de alta mar. Coro: ¡Mantened el faro ardiendo! ¡Arrojad su luz al mar! Que si hay nautas pereciendo, Los podréis así salvar. Reina noche de pecado, Ruge airada negra mar, Almas hay que van buscando; Esas luces de alta mar. Ten tu lámpara encendida, Que en la tempestad habrá, Algún náufrago perdido, Y tu luz le salvará.

122

CASTILLO FUERTE

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Castillo fuerte es nuestro Dios, Defensa y buen Escudo; Con Su poder nos librará, en este trance agudo. Con furia y con afán, acósanos satán; Por armas deja ver, astucia y gran poder; Cual él no hay en la tierra. Nuestro valor es nada aquí, con él todo es perdido; Más por nosotros pugnará, de Dios el Escogido. ¿Sabéis quién es Jesús? El que venció en la cruz, Señor y Salvador, y pues Él solo es Dios; Él triunfa en la batalla. Aún si están demonios mil, prontos a devorarnos; No temeremos porque Dios, sabrá aún prosperarnos. Que muestre su vigor, satán y su furor; Dañarnos no podrá, pues condenado es ya; Por Su Palabra Santa. Sin destruirla dejarán, aún mal de su agrado, Esta Palabra del Señor, Él lucha a nuestro lado. Que lleven con furor, los bienes, vida honor, Los hijos la mujer ... todo ha de perecer ... DE DIOS EL REINO QUEDA.

QUIERO VER A JESUCRISTO

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Quiero ver a JESUCRISTO, mi precioso Salvador; Quiero en el alto cielo, ver el trono del Señor, Ver la faz de mi Maestro, Quien por mi sufrió la cruz; Viviré en esa patria, de eterno gozo y luz. Coro: Quiero ver aquella gloria, Donde reina eterno amor; Quiero estar en las moradas, De Jesús mi Salvador. Quiero dar a JESUCRISTO, sin reserva mi amor; Quiero ser un mensajero, conduciendo al pecador; A la luz de JESUCRISTO, y a la patria celestial; Do podrá cantar por siempre, con el coro angelical. Por la obra redentora, de Jesús mi Salvador; Viviré por las edades, do podré gozar Su amor. Por la sangre del Cordero, aunque indigno sé que soy. Con las huestes redimidas, al Señor loor daré.

CREO EN LA BIBLIA Creo en la Biblia, el Libro redentor, Pues de JESUCRISTO, me muestra el amor; Todos mis pecados ya borrados son, Paz y gozo tengo en mi corazón. Coro: Creo en la Biblia, Libro de mi Dios, Música del cielo, oigo en su voz; Muestra el Camino, trae dulce paz, Hallo en la Biblia, todo mi solaz. Creo en la Biblia, me enseña a cantar, Cantos de victoria, y su gran poder; Suaves melodías, siento en mi alma hoy, Porque redimido por la sangre soy. En la Santa Biblia encuentro santidad, Dádiva de Cristo, y Su voluntad; Todos los que buscan plena salvación, Hallarán en Cristo esta bendición. Oigamos la Biblia, mostrando a los demás, El amor de Cristo, y Su profunda paz; Pues la vida nuestra libre de maldad, Honrará el Divino Libro de verdad.

125

¿HAY AQUÍ QUIÉN NOS AYUDE?

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¿Hay aquí quién nos ayude, Que comprenda nuestro ser, Cuando el alma está transida de dolor? ¿Hay quien sienta simpatía, Nuestra condición al ver, Y nos de lo que deseamos con ardor? Coro: Sí, lo hay, uno hay; en Cristo, el Bendito, uno hay. Cuando viene aflicción, a nuestro corazón, Un amigo hay, en Cristo, sí lo hay. ¿Hay aquí quién nos ayude, Nuestra carga a llevar, Aunque grave y difícil pueda ser? ¿Hay quien quiera con ternura, Al caído levantar, Y en Sus brazos amorosos recoger? ¿Hay aquí quién nos ayude, Y nos de tranquilidad, Cuando estamos bajo el peso del dolor? ¿Quién al pecador ofrezca, El perdón de su maldad, Y por él se sacrifique con amor.

CUANDO ANDEMOS CON DIOS

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Cuando andemos con Dios, escuchando Su voz, Nuestra senda florida será; Si acatamos Su ley, Él será nuestro Rey, Y con Él reinaremos allá. Coro: O...be...de...cer, Cumple a nuestro deber; Si queréis ser felices, Debéis obedecer. Cuando Cristo murió, nuestro llanto enjugó, Proclamarle debemos doquier; Gozarás del amor, de tu Rey y Señor; Si obediente le quieres tú ser. No podremos probar, Sus delicias sin par, Si seguimos mundano el placer, Obtendremos Su amor, y el Divino favor, Si Sus leyes queremos hacer.

EL BUEN PASTOR AL VERME El buen Pastor al verme, Perdido e infeliz, Llegando a donde estaba, Me trajo a Su redil; Y al ver que Cristo me salvó, El cielo entero se alegró. Coro: Soy salvo por Su gracia, Su tierno amor me sacia, Su preciosa sangre me lavó, Y hasta hoy, Su brazo me guardó. Al recordar mi vida, De olvido a Jesús, No sé porque quisiera, Morir por mi en la cruz; Mas creo Su Palabra fiel, Y vida eterna tengo en Él. Encuentro en Su presencia, Descanso y dulce paz, Y espero el grato día, En que veré Su faz. Y mientras en el mundo esté, Sus alabanzas cantaré.

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LIBRES ESTAMOS

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A LA VICTORIA JESÚS NOS LLAMA 130

Libres estamos, Dios nos absuelve, El nos protege, paz nos devuelve; Viónos perdidos, nos socorrió, Aunque enemigos, nos amó.

A la victoria Jesús nos llama, Va con nosotros el Capitán; :Marchemos, pues, a combatir, A los ejércitos de Satán.:

Coro: El nos redime; nada tenemos, ¡Verdad sublime! No la dudemos. Nuestra cadena, Cristo rompió, Libres de pena nos dejó.

A la victoria Jesús nos llama, Nos llama a todos los de Su grey; :Hay que triunfar contra el mal, Que con nosotros va nuestro Rey.:

Ciegos, cautivos, faltos de calma, En cuerpo vivos, muertos en alma; Siempre violando contra el Señor, Todas Sus leyes, sin temor. Hoy libertados, ya no pequemos, Ya rescatados, suyos ya somos, Sangre preciosa, Cristo vertió; Vida eterna nos dejó.

A la victoria Jesús nos llama, Sin detenernos sin ir atrás; :Hasta triunfar, hasta vencer, Las fieras huestes de Satanás.: A la victoria Jesús nos llama, Ya los clarines sonando están; :Pues al vencer contra el mal, Los mismos cielos se alegrarán.:

EN CRISTO FELIZ ES MI ALMA En Cristo feliz es mi alma, Precioso es Su célico Don; Su voz me devuelve la calma, Su faz, me anticipa el perdón. Coro: Soy muy feliz en Él, Soy muy feliz en Él; El gozo y la paz, inundan mi ser, Pues, yo soy feliz en Él. Mucho antes, a mí, Él buscóme, Me atrajo a Su amado redil; De amor en Sus brazos llevóme, Do hay dichas y encantos a mil. A Él seré un día semejante, Cambiado este cuerpo mortal; Y mientras discípulo amante, Ser quiero hasta el día final.

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HALLÉ UN BUEN AMIGO Hallé un buen Amigo, mi amado Salvador, Contaré lo que Él ha hecho para mí; Hallándome perdido, e indigno pecador, Me salvó y hoy me guarda para Sí. Me salva del pecado, me guarda de satán. Promete estar conmigo hasta el fin. El consuela mi tristeza, Me quita todo afán. ¡Grandes cosas Cristo ha hecho para mí! Jesús jamás me falta; jamás me dejará, Es mi fuerte y poderoso Protector; Del mundo me separo y de la vanidad, Para consagrar mi vida al Señor. Si el mundo me persigue, si sufro tentación, Confiando en Cristo puedo resistir; La victoria me es segura y elevo mi canción. ¡Grandes cosas Cristo ha hecho para mí! Y sé que JESUCRISTO muy pronto volverá, Y entre tanto me espera un hogar, En la casa de mi Padre, morada celestial; Do el creyente fiel con Él ha de morar. Llevándome a la gloria, ningún pesar tendré; Contemplaré Su rostro siempre allí, Con los santos redimidos, gozoso cantaré. ¡Grandes cosas Cristo ha hecho para mí!

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EN EL VALLE FLORECE LA ROSA

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ERES COMBATIDO

En el valle florece la rosa, La más bella del valle Sarón; Y la vida en Cristo es hermosa, Si le acepta con el corazón.

Eres combatido por la adversidad, Crees ya perdida tu felicidad, Mira lo que el cielo para ti guardó, Cuenta las riquezas que el Señor te dio.

Coro: Estaré con Jesús en los cielos allí, Y por siempre Su rostro veré. Con los santos en sus alabanzas, Con mi canto, también me uniré.

Coro: Cuenta las riquezas de tu Dios, Mira las riquezas de Su amor; Pon los ojos, donde Cristo está, Y tu mente guarde la Divina paz.

En el valle florece la rosa, Es hermosa y trasciende su olor; Y el alma que en Cristo reposa, Ha encontrado la fuente de amor. En el valle florece la rosa, Y adorna los campos do está; La Palabra de Cristo es hermosa, En el alma que le acepta ya. Si la rosa que está en el campo, Que por tiempos hermoseando está; ¿Cuánto más es la vida en Cristo, Que nos dio por la eternidad?

¿Andas agobiado por algún pesar? ¿Tu cruz te parece dura de llevar? Cuenta las promesas del Señor Jesús; Y de las tinieblas nacerá la luz.

134

LA PALABRA HOY SEMBRADA La Palabra hoy sembrada, Hazla Cristo en mí nacer; Para darle crecimiento, Sólo tienes Tú poder. :Ricos frutos, Tú nos puedes conceder.: La semilla que Tus siervos, Han sembrado con saber, No permitas que las aves, Se la vengan a comer. :Ricos frutos, Tú nos puedes conceder.: Haz que crezca con Tu gracia, Y Tu rica bendición, No la ahoguen las espinas, De congojas y aflicción. :Ricos frutos, Tú nos puedes conceder.: Que su efecto muy profundo, En la mente y corazón; Llevará consigo al mundo, Que le das la salvación. :Ricos frutos, Tú nos puedes conceder.:

135

FIRMES Y ADELANTE ¡Firmes y adelante, huestes de la fe! Sin temor alguno, que Jesús nos ve; Jefe Soberano, Cristo al frente va, Y la regia enseña, tremolando está. Coro: ¡Firmes y adelante, huestes de la fe! Sin temor alguno que Jesús nos ve. Al sagrado Nombre de nuestro Adalid, Tiembla el enemigo y huye de la lid; Nuestra es la victoria, dad a Dios loor, Y óigalo el averno lleno de pavor. Muévese potente, pueblo fiel de Dios, De los ya gloriosos, marcha siempre en pos; Somos sólo un cuerpo, y Uno es el Señor, Una es la esperanza y uno nuestro amor. Tronos y coronas, pueden perecer, De Jesús la Iglesia fiel habrá de ser; Nada en contra suya prevalecerá, Porque la promesa nunca faltará.

136

LA FIEL PALABRA La fiel Palabra de Dios no yerra; Lo que Él ha dicho es duradero, Caerá el cielo, también la tierra, Más Dios constante será. Coro: Y Dios Su dicho siempre ha cumplido, Y en todo tiempo ha sido fiel; Lo que en Cristo ha prometido, Sin falta alguna concederá. Lo que el Espíritu ha revelado, Enseña al hombre como ser salvo; Como vivir con Jesús contento, Como tranquilo morir. Cuando mi alma está afligida, Temiendo lo que será mañana; Y el valor ya desfallecido, Por Su Palabra volverá. Y si el cuerpo se debilita, Y al fin muriendo, va a la tumba; Con Cristo el alma está segura Pues va a la gloria eternal.

137

MÁS Y MÁS EN EL AMOR Más y más en el amor de Cristo, Quiero siempre estar; Y que pueda en Su amor bendito, Consagrarme más. Coro: ¡Oh! Más, anhelo dar, A Cristo el Salvador; Si, más a mi Señor, Para amarle con fervor. Más y más quisiera estar más cerca, Cerca de Jesús; Pueda siempre andar en nueva vida, En gloriosa luz. Más y más, Espíritu bendito, Déjame estar; Hasta que mi vida ya se halle, En Su voluntad.

138

LARGOS AÑOS VAGUÉ

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ME GUÍA EL CON CUÁNTO

Largos años vagué por la senda del mal, Sin consuelo, sin fe, sin amor; Y la sombra fatal de la senda que hollé, Puso en mi alma la hiel del dolor.

Me guía Él con cuánto amor, Me guía siempre mi Señor; Al ver mi esfuerzo en serle fiel, Con cuánto amor me guía Él.

Coro: A mis pies el infierno se abrió, Y clamé con el alma a Jesús; Y al instante el infierno cambió, En la hermosa mansión de la luz.

Coro: Me guía Él, me guía Él, Con cuánto amor me guía Él; No abrigo dudas ni temor, Pues me conduce el buen Pastor.

Desde entonces por Él, ya no soy lo que fui, Una sombra sin Dios y sin ley; Mi existencia le di, y al cantar cual cimbel, Me constriñe el amor de mi Rey.

En el abismo del dolor, O en donde brille el sol mejor; En dulce paz o en lucha cruel, Con gran bondad me guía Él.

Peregrino que vais, por el valle del mal, Vuestra senda sólo es de dolor; Y la carga fatal que en el alma lleváis, Ven y ponla a los pies del Señor.

Tu mano quiero yo tomar, Jesús y nunca vacilar; Pues sólo a quien Te sigue fiel, Se oyó decir: “Me guía Él”.

Es hermoso decir, ya no soy lo que fui, Hoy me impulsa el amor de Jesús; Sus Palabras ya oí y hoy ansío morir, Alabando por siempre al Señor.

Y mi carrera al terminar, Y así mi triunfo al realizar; No habrá ni dudas ni temor, Pues me guiará mi buen Pastor.

140

¡GRANDE GOZO HAY EN MI ALMA! 141

¿HAS BUSCADO LA PAZ?

Grande gozo hay en mi alma hoy! Pues Jesús me salvó por fe; Las cadenas Él ya quebró, Y mi alma salvó.

¿Has buscado la paz y Divino solaz, Y deseas que crezca tu fe? Pero te es menester alma y cuerpo traer, Al altar cual ofrenda a tu Rey.

Coro: ¡Gloria, Gloria al Señor Jesús! En verdad es mi todo aquí, De Su gozo me concedió, En la cruz do por mí murió.

Coro: ¿Te has puesto en el santo altar de tu Dios? ¿Te has entregado al Señor? Sólo así tú tendrás, su descanso y solaz, Y Sus ricas delicias de amor.

Gratitud hay en mi al ma hoy, Y con gozo le cantaré; Alabanzas al Salvador, ¡Gloria yo le daré!

Para andar con Jesús y gozar de Su luz, Y vivir libre de la maldad; Lleva pronto al altar para sacrificar, Lo que tengas a Su voluntad.

El me guarda del tentador, Y me ayuda todo a vencer; El me imparte Su protección, Con Su grande poder.

No podremos saber, ni por gracia tener, La dulzura de Su bendición; De colmarnos de amor, el bendito Señor, Sin rendirnos en consagración.

De Su amor quiero predicar, A los que por tinieblas van; Quiero darles a comprender, Que Él los quiere salvar.

Satisfecho estarás, paz y gozo tendrás, Un amor cual las ondas del mar; Y verás lo que es, el sentarte a Sus pies, Cuando traigas tu todo al altar.

142

JUSTIFICADOS POR LA FE

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LA SENDA ANCHA DEJARÉ

Justificados por la fe, Tenemos paz con nuestro Dios; Por medio del Señor Jesús, Nuestro bendito Salvador.

La senda ancha dejaré, Yo quiero por la angosta andar; Y muchos no sabrán por qué, Más voy al celestial hogar.

Coro: Si andamos en la luz de Dios, Tenemos santa comunión; Limpio en la sangre de Jesús, Será nuestro corazón.

Coro: No puede el mundo ser mi hogar, No puede el mundo ser mi hogar; En gloria tengo mi lugar, No puede el mundo ser mi hogar.

Guardados siempre por la fe, Gloriarnos en tribulación; Aunque la pequeña grey, Padezca más persecución.

Algunos quieren verme ir, Por el sendero de maldad; Oír no puedo su llamar; Pues voy a mi eterno hogar.

Por fe los justos vivirán, Por fe andando en la luz; Por fe al mundo vencerán, Por fe en la sangre de Jesús.

¡Oh, ven conmigo pecador, Y sigue en pos del Salvador! ¿Por qué no quieres tú buscar, La hermosa patria más allá.

144

MI DIOS Y YO ANDAMOS Mi Dios y yo, andamos por el prado, Amigos íntimos con gran amor; :Me habla Él, le cuento mis pesares, Mi Dios y yo, hablamos al andar.: Mi Dios y yo, por siempre andaremos, Amigos íntimos en comunión; :El mundo pasa con sus vanidades, Mi Dios y yo, andamos por doquier.: Mi Dios y yo, vivimos complacidos, Amigos íntimos en todo afán; :En la quietud y en mucha alegría, Mi Dios y yo, vivimos en amor.

145

MI PADRE ES UN REY Mi Padre es un Rey, tan rico sin par, El tiene caudales inmensos doquier; Su oro y diamantes no puedo contar, Tesoros que nadie podrá contener. Coro: :Soy el hijo del Rey...el hijo del Rey. Con Cristo bendito, soy el hijo del Rey.: El Hijo de Dios, mi buen Salvador, Viniendo a este mundo muy pobre vivió; Hoy reina en la gloria, cubierto de honor, Hogar en los cielos con Dios me ofreció. Errante viví, sin patria ni hogar, Un vil extranjero sin Dios y sin fe; Más Cristo bendito me quiso adoptar. Corona y morada en los cielos tendré. Que importa que yo, no tenga ni hogar, Yo tengo un palacio del sol más allá; Y mientras que llego, yo puedo cantar: Soy el hijo del Rey, ¡Aleluya a mi Dios!

146

MI SALVADOR EN SU BONDAD

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MIS CULPAS TODAS

Mi Salvador en Su bondad, Al mundo malo descendió; Y de hondo abismo de maldad, El mi alma levantó.

Mis culpas todas borró Jesús, Con infinito amor; Cargó con ellas en cruenta cruz, En medio de mortal dolor.

Coro: Seguridad me dio Jesús, Cuando Su mano me tendió; Estando en sombra, a plena luz, En Su bondad me levantó.

Coro: Salvo por Él ya soy, Salvó por Su poder; A vida nueva Jesús me ha llevado, Ya salvo soy.

Su voz constante resistí, Aunque amoroso me llamó; Mas Su Palabra recibí, Y fiel me levantó.

Sombra de muerte era para mí, Cuando en maldad viví; Y mi alma nunca la paz halló, Ni gozo alguno recibió.

Tortura cruel sufrió el Señor, Cuando en la cruz murió por mí; Tan sólo así salvado fui, Y así me levantó.

Gloriosa vida de libertad, Disfruto ya por Él; Ya no hay temores, no hay ansiedad, Porque Él me guarda siempre fiel.

Que soy feliz, también lo sé, Con esta vida que Él me dio; Mas no comprendo aún por qué, Jesús me levantó.

Eterno canto en mi corazón, Elevo al Redentor; Negar no puedo Su salvación, Negar no puedo, no Su amor.

148

LA BONDAD DE NUESTRO PADRE La bondad de nuestro Padre, Inmensisíma bondad; Sólo en ella hallé la vida, El amor y la verdad, Es por eso que le canto; Mi dulsisíma canción, Y en su altar mi alma levanto; Porque tiene un dulce encanto, La bondad de nuestro Dios. La bondad de nuestro Padre, Mi alma pudo rescatar; Siendo vil y miserable, No me quiso castigar; Hoy por eso es que no sirvo, Al pecado y la maldad; Porque estoy agradecido, Su perdón grato me ha sido; ¡Oh! Que inmensa es Su bondad.

149

PAZ, DULCE PAZ Paz, dulce paz, mi alma recibió, Cuando mi Dios me perdonó; Perfecto amor Su Espíritu me dio, Cuando me santificó. Coro: Perfecta paz, perfecto amor, Siento en mi alma rebosar; Descanso hallé, gozo eternal, En Dios, cuando me santificó. Descanso hallé de mi desilusión, Al confiar en Su poder; Placer total llenó mi corazón, Cuando a Él me consagré. Inmensa paz ya siento en mi ser, Su promesa se cumplió; Poder completo puedo retener, Pues la santidad me dio. Luz, clara luz, alumbra ya mi pie, Mi ceguera disipó; Mirar a Cristo, dióme por la fe, Cuando me santificó.

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HERMANO DINOS HOY

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Hermano dinos hoy algo de Jesús, Dinos otra vez la historia de Su amor. Decláranos tu fe, gozo y gratitud; Dinos otra vez la historia de Su amor. ¿Sigues todavía, cerca del Señor? ¿Arde tu alma del primer fervor? ¿Está tu copa llena de bendición? Dinos otra vez la historia de Su amor. Coro: Dinos otra vez la historia, del amor del Salvador; Tan bendita y grata historia, nos hará cantar Su gloria, Dinos otra vez la historia de Su amor. Al escuchar tu voz que habla del Señor, Dinos otra vez la historia de Su amor. Tal vez un pecador se convierta hoy, Dinos otra vez la historia de Su amor. Muchos tienen sed en su corazón, En el mundo buscan diversión, Señálales la fuente de bendición, Dinos otra vez la historia de Su amor. La ayuda que te ha dado en la tentación, Dinos otra vez la historia de Su amor; Las pruebas de tu fe y Su compasión, Dinos otra vez la historia de Su amor. Dinos que Jesús es Amigo fiel, Que es tu Capitán y gran Pastor; Socorro oportuno has hallado en Él, Dinos otra vez la historia de Su amor.

BELLAS PALABRAS DE VIDA Bellas Palabras de vida, Son las de Cristo Jesús; Ellas alientan mi alma, Dan fortaleza y virtud. Bellas Palabras de vida, Resplandecen en mi ser. :Bellas Palabras que nunca en mi vida, Había escuchado hasta hoy.: Bellas Palabras de vida, Llenan mi alma de paz; Llenan mi vida de gozo, Por dondequiera que voy. Bellas Palabras de vida, Dan alegría a mi ser. :Bellas Palabras que nunca en mi vida, Había escuchado hasta hoy.: Bellas Palabras de vida, En la Biblia encontré; Bellas y hermosas por cierto, Vida por ellas hallé. Bellas Palabras de vida, Llenaron todo mi ser. :Bellas Palabras que nunca en la vida, Había escuchado hasta hoy.:

152

¡OH JUVENTUD CRISTIANA! ¡Oh juventud cristiana ve adelante! Luchando por salvar los pecadores; Que un galardón eterno has de ganarte, Que será con el Señor de los señores. Coro: No dejes que otro tome tu corona, Que Cristo ha preparado para ti; Que será para todos en la gloria, Cuando la trompeta suene allá en el fin. Si la tribulación suele cansarte, Si el enemigo cruel tus pasos vela; Da una mirada al cielo y al instante, El Señor de los señores te consuela.

53

HAZME FIEL EL CORAZÓN Hazme fiel el corazón, Que te alabe noche y día; Hazme fiel el corazón, ¡Oh! Jesús Tu eres mi guía; Hazme fiel el corazón, Porque es morada Tuya; :Hazme fiel el corazón: ¡Aleluya! Quiero amarte mi Señor, Porque estoy agradecido; Ya me diste salvación, Y es un Don inmerecido; Me cambiaste el corazón, Y me diste nueva vida; :¡Oh, que dulce amor de Dios!: ¡Aleluya! Ya estoy listo mi Señor, Para ir con el mensaje; De la paz y del amor, Que las almas necesitan; Siento el gozo de Tu amor, Y la presencia Divina; :Ya Tu Espíritu está en mí: ¡Aleluya!

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DULCES MELODÍAS CANTARÉ

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PUEDO OIR TU VOZ LLAMANDO

Dulces melodías cantaré, Y alabanzas al Señor; A Su Nombre gloria yo daré, por Su incomparable amor.

Puedo oír Tu voz llamando, Con acentos cariñosos; Puedo oír Tu llamamiento: “Trae tu cruz y ven en pos de mí”.

Coro: De Jesús el Nombre, dulce es para mí. Canta el alma mía, melodías a mi Rey.

Seguiré do Tú me guíes, Si Tu mano me conduce; Salvador, seguirte quiero, Donde quiera fiel, Te seguiré.

Yo vivía en sombras y en dolor, Triste, herido, pobre vil; Más la tierna mano del Señor, me llevó a Su redil. Fuente perennal de gracia hallé, Al amparo de Su amor; Su sonriente faz me imparte fe, esperanza y valor. Aunque por el valle de aflicción, Tenga que pasar allí; Mi Jesús dará Su protección, Él se acordará de mí. La rosada aurora anuncia ya, Que Jesús por mí vendrá; Mi alma alegre con Él reinará, en la celestial ciudad.

Yo te seguiré en el huerto, Por la senda dolorosa; Y al seguirte siempre alegre, Sufriré contigo mi Señor. Sufriré por Ti, Maestro, Si Tu gracia me sostiene; Y si Tú irás conmigo, Moriré contigo, mi Señor. Me darás la gracia y gloria, Y me sostendrás por siempre; Cada hora yo Te quiero, Y por siempre Tú me guiarás.

156

MEDITAR EN JESÚS

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SEGUID A JESÚS

Meditar en Jesús ha de ser mi afán, Su bondad hacia el pobre pecador; El ganó para mí la corona celestial, En la cruz, do le puso Su amor.

Seguid a Jesús, andad en Su luz, Sed fieles a Cristo el Señor; Servidle en amor, luchad con valor, Sed fieles a Cristo el Señor.

Coro: ¡Ven! ¡Ven! ¡Buen Jesús! Háblame, dulce bien; En Ti quiero reposar, Y Tu dulce mirada gozar.

Coro: Sed fieles a Cristo el Señor, Su gracia abundante jamás faltará. Su Brazo potente os defenderá, Sed fieles a Cristo el Señor.

Consultar a Jesús ha de ser mi afán, Y Jesús me dará Su clara luz; Sin Jesús, y por mí, nada quiero practicar, Mis acciones inspire Jesús. Predicar a Jesús ha de ser mi afán, Y Jesús me dará fuerza y poder; Sin Jesús y Su amor es en vano trabajar, De Jesús en la cruz hablaré. Imitar a Jesús ha de ser mi afán, En Jesús quiero mi dechado ver; Sin mirar a Jesús nada bueno puedo hacer, Y mirando a Jesús, todo es bien.

Tentados seréis, conflictos tendréis, Sed fieles a Cristo el Señor. A vuestro favor, está el Salvador, Sed fieles a Cristo el Señor. Jamás Jehová, os ha de faltar, Sed fieles a Cristo el Señor. Os sustentará, el triunfo os dará, Sed fieles a Cristo el Señor.

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SEÑOR JESÚS, TÚ ERES Señor Jesús, Tú eres mi Pastor; Y a Tu cuidado yo vivo tan feliz. Yo te conozco pues Tu voz oí, Pacientemente llamándome al redil. Coro: Mi Pastor es Jesús, Mi buen Pastor es Jesús. Mi Pastor es Jesús, Mi buen Pastor es Jesús. En Sus hombros el me lleva, Cuando muy cansado estoy; Mi Pastor es Jesús, mi buen Pastor.

La senda está colmada de abundancia, El pasto delicioso es para mí; Sediento no he estar pues Tu Palabra, Muestra la fuente de salvación aquí.

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OÍD UN SON EN ALTA ESFERA

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Oíd un son en alta esfera: “¡En los cielos gloria a Dios!” Y al mortal paz en la tierra, Canta la celeste voz. Con los cielos alabemos, al eterno Rey cantemos; A Jesús que es nuestro bien, con el coro de Belén. Canta el coro celestial: “¡En los cielos gloria a Dios!” El Señor de los Señores, Él Ungido celestial; A salvar los pecadores, vino al seno virginal. ¡Gloria! Al Verbo encarnado, en humanidad, Mostrado; ¡Gloria! Al Santo de Israel, Cuyo Nombre es Emmanuel. Canta el coro celestial: “¡En los cielos gloria ha Dios!” Príncipe de paz eterna, ¡Gloria a Ti, Señor Jesús! Entregando el alma tierna, Nos trajiste vida y luz. Has Tu majestad dejado, Y a buscarnos te has dignado; para darnos el vivir, Preferiste Tu morir. Canta el coro celestial, ¡“En los cielos gloria a Dios!”

SOY FELIZ EN EL SERVICIO

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TODO A CRISTO YO ME RINDO

Soy feliz en el servicio del Señor, Muy alegre, tan alegre; Tengo paz, contentamiento y amor, En servir al Salvador.

Todo a Cristo yo me rindo, Con el fin de serle fiel; Para siempre quiero amarle, Y agradarle sólo a Él.

Coro: En servir al Salvador, En servirle con amor; ¡Cuán alegre yo me siento, En servir a mi Señor!

Coro: Yo me rindo a Él. Yo me rindo a Él. Todo a Cristo, yo me entrego; Quiero serle fiel.

Soy feliz en el servicio del Señor, Muy alegre tan alegre; Hoy dedico mis talentos al Señor, Serviré al Salvador.

Todo a Cristo yo me entrego, A Sus pies postrado estoy; Los placeres he dejado, Y le sigo desde hoy.

Soy feliz en el servicio del Señor, Muy alegre, tan alegre; En la lucha nunca faltará el valor, Que me da el Salvador.

Todo a Cristo yo me rindo, Sí, de todo corazón; Mi espíritu y cuerpo, Yo le entrego desde hoy.

Soy feliz en el servicio del Señor, Muy alegre, tan alegre; En la noche va conmigo el buen Pastor, Cuando sirvo al Salvador.

Todo a Cristo he rendido, Siento el gozo de Su amor. ¡Oh, que paz hay en mi alma! ¡Gloria, gloria sea a Él!

162

TRAS LA TORMENTA Tras la tormenta surge el arco, Y tras la noche brota luz; Tras el dolor y la tristeza, Esplende el rostro de Jesús. Coro: Elevo un himno de alabanza, Y adoración a Dios mi Rey; Por fe en Él mi ser descansa, Y cara a cara le veré. Vendrá la eterna primavera, Tras el invierno abrumador; Y tras las sombras de la tierra, Despertará perenne albor. Tras los conflictos de la vida, Corona espera al vencedor; Y tras el valle de la muerte, El siervo fiel verá al Señor. Tras todo está Dios nuestro Padre, Su amor jamás nos dejará; Tras este mundo miro al cielo, Do mi alma siempre morará.

163

TENME BRILLANDO SEÑOR Tenme brillando Señor, Tenme brillando por Ti. Puro y limpio seré, si Tu vives en mí. Tenme brillando Señor, Tenme brillando por Ti; Hasta que vengas con Tu gran poder. Coro: ¡Oh! Llévame a la Roca más alta, Señor; Llévame Jesús, yo te seguiré. Oh! Llévame a la Roca, más alta Señor; Sólo en Ti yo refugio tendré. Tenme brillando Señor, Tenme brillando por Ti; La batalla de fe, pelearé con valor. Tenme brillando Señor, Tenme brillando por Ti. Y jamás olvidaré el Primer Amor. Tenme brillando Señor, Tenme brillando por Ti; Con Tu luz refulgente de gracia y de amor, Tenme brillando SeñorTenme brillando por Ti; Y constante testigo yo seré.

164

ISRAEL FUE LIBRADO Israel fue librado de servir, En la tierra de Egipto para ir; A gozar libertad y bendición, En la tierra de Canaán. Coro: La columna de fuego de noche, La columna de nube de día; Alumbraba y guardaba, a aquella compañía, Nuestro Dios es el mismo hoy; Y nos guía en Su amor, Al país hermoso que nos dará con Cristo; Por heredad. Por desierto y senda de calor, Transitaba el pueblo de Israel; La comida de nobles Dios les dió, Fue maná que no faltó. Corrientes de agua Dios sacó, De la Peña herida en Horeb; Y mostró Su poder y caridad, A Su pueblo Israel. Nuestro Dios es el mismo en Su amor, Y nos guía mientras viene el Señor; Guía nuestro sendero con Su luz, Démosle todo loor.

165

CUANDO TEMPESTADES Cuando tempestades surgen alrededor, Y desanimados sois y con temor; Ved las bendiciones que el Señor os da, Y contadlas todas son de nuestro Dios. Coro: Ved lo mucho que el Señor os da, Ved lo mucho que el Señor os da; ¡Bendiciones! Son de vuestro Dios, Ved las bendiciones que el Señor os da. Cuando veis a otros con su rico haber, Y tenéis tan poco en vuestro poder; Ved las bendiciones que el Señor os da, Y contadlas todas son de nuestro Dios. Cuando estáis en lucha con el tentador, Recordad a Cristo y Su gran amor; Ved las bendiciones que el Señor os da, Y contadlas todas son de nuestro Dios.

166

VAGABA EN LA OBSCURIDAD

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YO QUIERO SER CUAL MI JESÚS

Vagaba en la obscuridad, Hasta que vi a Jesús; Más por Su amor y Su verdad, Me amaneció la luz.

Yo quiero ser cual mi Jesús, Sirviéndole con lealtad; Sincero y fiel quisiera ser, Cumpliendo Su voluntad.

Coro: Gozo y luz hay en mi alma hoy, Gozo y luz hay ya que salvo soy; Desde que a Jesús vi, Y a Su lado fui, He sentido el gozo de Su amor en mí.

Coro: Más y más cual mi Jesús, En mi vida quiero ser. Más y más cual mi Señor, Seré por Su gran poder.

Las nubes y la tempestad, No apartan a Jesús; Y en medio de la obscuridad, Me gozo en Su luz. Andando en la luz de Dios, Encuentro plena paz; Voy adelante sin temor, Dejando el mundo atrás. Veréle pronto tal cual es, Raudal de pura luz; Y eternamente gozaré, A causa de Su cruz.

Humilde quiero siempre ser, Cual fuera mi Salvador; No quiero glorias ni poder, Indignos de mi Señor. En todo quiero yo seguir, Las huellas de mi Señor; Y por doquier hacer sentir, Que hizo en mí Su amor.

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YO VAGABA MUCHO TIEMPO

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QUIERO QUE HABLÉIS

Yo vagaba mucho tiempo en el error Agobiado en el pecado y el temor; Cuando vi al Salvador. Y escuché Su tierna voz; Mi Jesús me hizo libre por Su amor.

Quiero que habléis de aquel gran amor, Que en JESUCRISTO Dios nos mostró. Quiero saber del gran Salvador; Háblame más de Cristo.

Coro: Libre estoy, libre estoy, Por la gracia del Señor, libre estoy; Libre estoy, libre estoy. ¡Aleluya! Por la fe libre estoy.

Coro: Quiero escuchar la historia fiel, De mi Jesús, el Salvador. Quiero vivir tan sólo por Él, Háblame más de Cristo.

Yo vagaba mucho tiempo en el error, Sin pensar en el amor del Salvador; Yo vagaba con temor, lejos de mi Redentor. Más ahora por Su muerte libre estoy.

Cuando me asalte la tentación, Y que sus redes tienda a mis pies; Quiero saber que ayuda tendré, Háblame más de Cristo.

Yo vagaba mucho tiempo en el error, Más ahora quiero andar con mi Señor; Quiero oír Su tierna voz, Y seguirle siempre en pos; ¡Gloria, gloria sea a nuestro buen Pastor.

Cuando en la lucha falta la fe, El alma siente desfallecer; Quiero saber que ayuda tendré, Háblame más de Cristo.

170

¡OH!, YO QUIERO ANDAR

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¡Oh!, yo quiero andar con Cristo Quiero oír Su tierna voz; Meditar en Su Palabra, y cumplir Su voluntad. Consagrar a Él mi vida, mis dolores y afán; Y algún día con mi Cristo, gozaré la claridad. Coro: ¡Oh, si yo quiero, andar con Cristo! ¡Oh, si yo quiero, vivir con Cristo! ¡Oh, si yo quiero, morir con Cristo! Quiero serle un testigo fiel. Siempre quiero andar con Cristo, Él es mi ejemplo fiel; En la Biblia yo lo leo, que Jesús es la verdad. Cristo era Santo en todo, el Cordero de la cruz. Y yo anhelo ser cristiano, seguidor de mi Jesús. Siempre quiero andar con Cristo, De mi senda Él es la luz; Dejaré el perverso mundo, para ir al Salvador. Este mundo nada ofrece, Cristo ofrece salvación; Y es mi única esperanza, ver el rostro del Señor.

QUIERO SEGUIR LAS PISADAS

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Quiero seguir las pisadas del Maestro, Quiero ir en pos de mi Rey y Señor; Y modelando por Él mi carácter, Canto con gozo a mi Redentor. Coro: ¡Qué hermoso es seguir, las pisadas del Maestro! Siempre en la luz, cerca de Jesús. ¡Qué hermoso es seguir, Las pisadas del Maestro! En Su santa luz. Ando más cerca de Él que me guía, Cuando el maligno me quiere tentar; Siempre confiando en Cristo mi fuerte, Debo con gozo Su Nombre ensalzar. Sigo Sus pasos de tierno cariño, Misericordia, amor y lealtad; Siempre confiando en Cristo mi Fuerte, Voy al descanso gloriosa ciudad. Quiero seguir las pisadas del Maestro, Siempre hacia arriba con Él quiero andar; Viendo a mi Rey en gloriosa hermosura, Con Él en gloria podré descansar.

¿QUIÉN IRÁ A LABORAR? ¿Quién irá a laborar los campos, Que el Maestro pronto volverá? ¿Quién escuchará el llamamiento: “El mensaje Mío predicad”? Coro: Heme aquí, envíame a mí, Dame todo Tu poder; Llevaré el buen mensaje, Yo iré, mi Señor yo iré. Almas hay que van vagando, En el mundo horrendo del pecar; ¿Quién escuchará el cruel lamento, Del que gime en la obscuridad? Despertad que ya la siega pasa, Y con ella la oportunidad; Cosechemos las blancas gavillas, Que el Maestro fiel nos premiará.

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VEÍA EN CRUENTA CRUZ Veía en cruenta cruz, al Salvador Jesús, Quien por mi pecado se entregó; Y pude en el instante recibir Su luz, De ese inmenso Don de Dios; Yo anduve sumido en el error, Perdido entre tinieblas sin saber; Que había una vida para mí, Más hoy por mi Jesús, yo sé que habitaré; La patria celestial de Dios. Cuando a la cruz llegue cansado de sufrir, Los brazos del Señor abiertos ví; Y pude comprender su inmenso amor y ver, Que fue por rescatarme a mí. Yo sé que con Jesús caminaré, La gloria de Su rostro adoraré; También sé que Su amor Él me dará, Y alegre yo estaré pues mi alma guardará; Por toda la eternidad.

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SEMBRARÉ LA SIMIENTE

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SIEMBRA QUE HICIMOS

Sembraré la simiente preciosa, Del glorioso Evangelio de amor; Sembraré, sembraré, mientras viva, Dejaré el resultado al Señor.

Siembra que hicimos del alba al nacer, Siembra que hicimos subido ya el sol; Siembra que la tarde vio caer, Siembra que cubre nocturno telón.

Coro: Sembraré, sembraré, Mientras viva, simiente de amor. Segaré, segaré; Al hallarme en la casa de Dios.

Coro: ¡Hay! ¿Que se cosechará? ¡Hay! ¿Que se cosechará? Lo que en la luz o en tinieblas sembré, Lo que sembramos cosecha dará. Sea que en el tiempo su fruto se de, O que se de en la eternidad.

Sembraré en corazones sensibles, La doctrina del Dios de amor; Sembraré, sembraré mientras viva, Dejaré el resultado al Señor.

Siembra que hicimos en tierra barrial, Siembra que en medio de espinas murió; Siembra que el viento esparció en pedregal, Siembra que fértil terreno encontró.

Sembraré en corazones de mármol, La bendita Palabra de Dios. Sembraré, sembraré, mientras viva, Dejaré el resultado al Señor.

Siembra que hicimos con llanto tenaz, Siembra que exprime en el alma la hiel; Siembra de fe divisando el solaz, Siega gozosa corona del fiel.

176

TAN SÓLO SÉ QUE TU SEÑOR

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TAN TRISTE Y TAN LEJOS

Tan sólo sé que Tú Señor, Viniste a mí por puro amor; Mi corazón Tu amor llenó, Lo sé bien, esto sé bien.

Tan triste y tan lejos de Dios me sentí, Y sin el perdón de Jesús; Más cuando Su voz amorosa oí, Que dijo: “Oh ven a la luz”

Coro: Tan sólo sé que Él me amó, Y que del mal, mi ser salvó; Que siente paz, mi corazón, Lo sé bien, esto sé bien.

Coro: Ya todo dejé para andar en la luz, No moro en tinieblas ya más; Ya todo dejé por seguir a Jesús, Y vivo en la luz de Su faz.

Tan sólo sé que Él me oyó, Y Su poder la luz me dio; De obscuridad me libertó, Lo sé bien, esto sé bien.

¡Qué Amigo tan dulce es mi tierno Jesús! Tan lleno de paz y de amor; De todo este mundo es la fúlgida luz, El Nombre de mi Salvador.

Tan sólo sé que Él murió, Y que en la cruz vida me dio; Que vive aún porque venció, Lo sé bien, esto sé bien.

De mi alma el anhelo por siempre será, Más cerca vivir de Jesús; Su santo poder y pureza me da, La sangre de Cristo Jesús.

Tan sólo sé que Él vendrá, Y a Su hogar me llevará; Para gozar vida eternal, En la mansión celestial.

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VENID, CANTAD DE GOZO Venid, cantad, de gozo en plenitud, Y dad, loor al que Su sangre dio; Y luego en ella nos lavó, De nuestra lepra nos limpió, Y así librónos de la esclavitud. Coro: El nos libró de culpabilidad, Y nos limpió para la eternidad; Y para siempre al cielo Él nos llevará. Precioso Salvador El que murió en la cruz, El Dios de amor que vino acá sufrir, Llevando en Sí la cruz donde murió; Y en vez de eterna perdición, Nos dio perpetua salvación; Que sin Él nadie puede conseguir. Honor y gloria en todo su esplendor, Serán el fin del que sigue a Jesús; Que tome en pos de Él su cruz, Y guiado siempre por Su luz, Viva de acuerdo con Su Salvador.

179

JESÚS EL BUEN PASTOR

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Jesús el buen Pastor, mostrando Su tierno amor; Del vil abismo me sacó, su mano me extendió; Del lodo me levantó, mis pasos Él enderezó. Coro: Querido Salvador, canto hoy de Tu inmenso amor. Arde mi corazón de gratitud. Solo no puedo andar, A Tu lado yo quiero estar, llévame, oh, Salvador, A la celestial mansión. Andando con Jesús, por sendas de gozo y luz; El mundo pierde su atracción, ya pertenezco a Él; Y anhelo servirle fiel, el mundo es vana ilusión. Con Cristo moraré, y siempre le cantaré; Por la eternidad. De reyes es el Rey, Tributo le brindaré, pues tiene toda potestad.

HE LEÍDO QUE HAY UNA He leído que hay una bella ciudad, Allí voy a estar ¿Y tú? En donde es eterna la felicidad, Allí voy a estar ¿Y tú? Allí los que moran jamás morirán, Allí voy a estar ¿Y tú? En donde la muerte no puede llegar, Allí voy a estar ¿Y tú? Coro: Allí quiero ir, Allí quiero ir, allí quiero ir, ¿Y tú? Allí quiero ir, Allí quiero ir, allí quiero ir, ¿Y tú? Las puertas eternas, abiertas están, Allí voy a entrar ¿Y tú? Es Cristo la luz del país celestial, Allí voy a estar ¿Y tú? Allí los que moran jamás morirán, Allí voy a estar ¿Y tú? En donde terminan congojas y afán Allí voy a estar y ¿Y tú? Y cuando navegue la nave de Sión, Allí voy estar ¿Y tú? Al darse la vela para Su mansión, Allí voy a estar ¿Y tú? Y cuando corone Su Iglesia también, Allí voy a estar ¿Y tú? Y cuando los coros pronuncien amén, Allí voy a estar ¿Y tú?

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PRONTO LA NOCHE VIENE

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Pronto la noche viene, tiempo es de trabajar; Los que lucháis por Cristo, no hay que descansar. Cuando la vida es sueño, gozo, vigor, salud, Y es la mañana hermosa de la juventud. Pronto la noche viene, tiempo es de trabajar; Para salvar las almas, hay que batallar; Cuando la vida alcanza, toda su esplendidez; Cuando es el medio día de la madurez. Pronto la noche viene, tiempo es de trabajar; Si el pecador perece, idlo a rescatar; Aún a la edad proyecta, débil y sin salud; Aún a la misma tarde, de la senectud. Pronto la noche viene, ¡Listos! A trabajar. ¡Listos! Que muchas almas, hay que rescatar. ¿Quién de la vida el día, puede desperdiciar? Viene la noche cuando, nadie puede obrar.

UNA VOZ DEL CIELO Una voz del cielo se oye resonar: “Dad la luz, dad la luz; Muchas almas viven en la obscuridad, Dadles luz, dadles luz” Coro: Dadles luz, la santa y pura luz, De Jesús, el Salvador; Dadles luz, la santa y pura luz, De Jesús el Salvador. Escuchad la voz que dice sin cesar: Dad la luz, dad la luz; La misión cumplamos que el Señor nos da, Demos luz, demos luz. Haz Señor que siempre, siempre por doquier, Demos luz, demos luz Que este mundo nuestra vida pueda ver, Dando luz, dando luz. Cual antorchas vivas vamos con fervor, Dando luz, dando luz; Que saquemos almas fuera de su error, A la luz, a la luz.

183

HE VISTO EL FÚLGIDO RAYO He visto el fúlgido rayo, Y oído el trueno rugir; Las olas con bravo estallido, Querían me destruir. Oí la voz de Cristo, Que ánimo daba mi ser; Pues prometió no dejarme, Nunca ausentarse de mí. Mundanas nubes me envuelven, Y tentaciones también; Ante Jesús se disuelven, Jesús es mi sostén. Me guarda en todo peligro, Se compadece de mí; Pues prometió no dejarme, Nunca ausentarse de mí. Y cuando en obscuras pruebas, Rebusco el mundo cruel; Aquí no hay fin de mis penas, No hay un amigo fiel; Mis pies en zarzas cogidos, Casi me hacen caer; Entonces Cristo promete, Nunca ausentarse de mí.

184

ME SIENTO INUNDADO DE GOZO

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YO TENGO UN PASTOR QUE VIVE

Me siento inundado de gozo, Al ver esa magna creación; Ese vasto y sublime universo, Que de la nada formaste mi Dios.

Yo tengo un Pastor que vive, A la diestra del Padre Creador, Su brazo de amor redime, Del pecado al más vil pecador.

Coro: Ese viento fugaz, Esa bóveda azul; Esos astros que esparcen su luz, Ese mar agitado por la tempestad, Enmudecen cuando hablas Tú.

Coro: Mi buen Pastor, Tu cayado me guiará, Mi buen Pastor, con Tu amor me sostendrás, Mi buen Pastor, nada mi alma temerá, Aunque en valle de sombra de muerte esté, Tú conmigo y seguro estaré.

Mi Dios me hace sentir seguro, Me guía por senderos del bien; Él tiene y tendrá para siempre, Los demonios sujetos a Él.

A la oveja perdida el vino, A buscarla a la tierra bajó, Y por esta oveja Cristo, Por salvarla Su vida entregó.

Mi Cristo vendrá en las nubes, Su voz de poder oiré; Si estoy vivo seré transformado, Y si duermo resucitaré.

Yo tengo un Pastor sublime, Que me guía por senda de paz, Pues Su amor y misericordia, Es muy grande por la eternidad.

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YO CONOCÍ A JESÚS

187

TENGO AL SALVADOR

Yo conocí a Jesús, mi eterno Salvador, También le conocí, como mi Sanador; Su luz el Maestro me mostró, Y Su radiante amor.

Tengo al Salvador conmigo, Sin Jesús no puedo andar; Necesito Su presencia, En Su brazo apoyar.

Sintiendo ese amor que penetró mi ser, Dejé la pretensión, el mundo y el placer; ¡Oh, gloria sea a mi Señor! Que me ayudó a vencer.

Coro: Confiando en el Señor, Consolado por Su amor; Seguiré por mi camino, Sin tristeza, sin temor.

Confiando en el poder de mi buen Salvador, Mi Dios me hará vencer al fiero tentador; Espero gran felicidad. Y ayuda en mi dolor. Apocalipsis dos, nos dice que satán, Dolor nos causará también tribulación; Más en Jesús, habrá solaz, Y gran consolación.

Tengo al Salvador conmigo, Cada día conmigo está; En la tempestad o calma, En conflicto y bienestar. Tengo al Salvador conmigo, Como guía y Pastor; Hasta que estén pasados, Muerte, pena y dolor.

188

YO ANTES ERA UN DESVALIDO Yo antes era un desvalido, Mi alma triste en la maldad; Más a Cristo compungido, Le entregué mi ser y voluntad. Coro: Es Su amor más alto que los cielos, Es más grande que el inmenso mar; Sobrepuja Su grandeza, Toda gloria mundanal. Desde que me redimió Su gracia, Tengo paz y dulce bienestar; En Él pongo mi esperanza, Porque fiel me rescató del mal. El humano encuentra gracia, Para en el Señor confiar; Y poder en abundancia, Si su vida quiere consagrar. En la cruz de JESUCRISTO, Siempre yo me gozaré; A ganar otros me alisto, Y en Su Nombre vencedor seré.

189

HAZ LO QUE QUIERAS Haz lo que quieras de mi, Señor, Tú el Alfarero, yo el barro soy; Dócil y humilde anhelo ser, Cúmplase siempre en mí Tu querer. Haz lo que quieras de mi, Señor, Mírame y prueba mi corazón; Lávame y quita toda maldad. Para que pueda contigo andar. Haz lo que quieras de mi, Señor, Dueño absoluto sé, de mi ser; Para servirte con devoción, Se manifieste así Tu poder.

190

YO HALLÉ UN FIEL AMIGO Yo hallé un fiel Amigo para siempre, Más que hermano, padre o madre es Él; Más que plata, más que oro o que cobre, Es de todos JESUCRISTO el más fiel. Coro: :Sólo Cristo, sólo Cristo, Es el Lirio de los valles, mi Jesús.: Es Jesús benigno, tierno compasivo, Lento en ira, grande en perdonar; El levanta con amor al abatido, Es de todos JESUCRISTO el más fiel. De Sarón Él es, la Rosa tan fragante, Y del valle el Lirio puro es Él; En el alma quebrantada y tan triste, Sus olores de amor exhala Él.

191

CANTA, OH, BUEN CRISTIANO Canta, oh, buen cristiano, Dulce es el cantar; Hace el camino llano, Y quita el pesar. Canta en las noches tristes, Canta en la clara luz; Almas así salvadas, Cantan a Jesús. Canta, oh, buen cristiano, Llena tu corazón; Himnos lo hacen sano, Y del cielo son. Tanto hay en este mundo, De angustia y dolor. Canta el amor profundo, De tú Salvador. Canta, oh, buen cristiano, Dios guardará tus pies; Y Él sostendrá tu mano, Hasta la vejez. ¿Sabes que al diablo invitas, Cuando miedoso estás? Pon ante Dios tus penas, Te dará Su paz.

192

CADA PASO QUE DAS :Cada paso que das, Por la senda en que vas; Hay un Dios que te ve.: Dios te ve, Dios te ve, Mira bien el camino donde vas. :Por obscuro camino, La Palabra de Dios; Luz dará, luz dará.: Cada paso que das, Lámpara fiel será a tus pies. :Y tú pie afirmará, El Señor guardará; Tu salir y tú entrar.: Dios te ve, Dios te ve, Y dejarte, jamás lo hará. :La Palabra de Dios, Luz Divina será; A tus pies, a tus pies.: Muy seguro irás, Santa luz la Lumbrera dará.

193

CUANDO DANIEL FUE

194

Cuando Daniel fue echado, al foso de los leones; Un ángel de los cielos, le vino a rescatar. De pronto vio el quebranto, de duras expresiones; Miró la amarga copa, que había de tomar. Coro: Venid, venid, loemos al Señor, porque libró a Su siervo, De grande aflicción; Así de esta manera, nuestro Señor nos salva; Y en penas y ansiedades, nos da consolación. El rey desesperado, del hecho tan fatal, De tantas diversiones, privóse en general. Aún sus alimentos, rehúsa de tomar, El sueño se le quita, y todo es ansiedad. Al despertar el alba, el rey al foso va, Al mártir le pregunta: “¿Y te libró Tu Dios?” Daniel lleno de gozo, contestación le da: “La boca de los leones, el Ángel la cerró”.

TODOS JUNTOS ALABEMOS Todos juntos alabemos, Al Señor, a quien debemos; Lo que somos y tenemos, Todo viene de Él. Guarda, oh, Dios al pueblo tuyo, De la corrupción del mundo; Contra el diablo Sé su Escudo, Y su Protector. Puede haber terrible lucha, No tengamos ni una duda; Dios es Fiel y nunca muda, Él nos guardará. Haz que todos los cristianos, En verdad seamos santos; Fieles siempre, y consagrados, Al Señor Jesús. Pronto todos estaremos, Con Jesús a Quien veremos; En Su gloria, y seremos, Semejantes a Él.

195

DEL BELLO HOGAR ESTOY Del bello hogar estoy distante, Cansado estoy; Anhelo ver su luz radiante, Ávidamente voy. Este mundo de dolores, Ya no es mi lugar; No quiero más sus esplendores, Pues miro el santo hogar. Cristo me dio Su gran promesa, El volverá; Mi alma de desear no cesa, ¡Oh! ¿Cuándo llegará? Su venida está muy cerca, ¿Cuándo no lo sé? Más Él me manda estar alerta, Bien pronto le veré. Su vuelta espero aquí, cantando, Su rico amor; Y vivo siempre alabando, A mi fiel Redentor. Este mundo de dolores, Ya no es mi lugar; No quiero más sus esplendores, Pues voy a mi hogar.

196

DE LA CASA DEL PADRE De la casa del Padre se fue, Tras los goces que el mundo le dio; Sin pensar en su ruina muy lejos se fue, Un vacío en la casa dejó; El dinero y la ropa que llevó, en senderos perversos gastó Por placeres y amigos este hombre perdió, La herencia que el padre le dio. Coro: Hijo pródigo vuelve a mi lado, Con los brazos abiertos estoy; Esperando que vuelvas, del fango dónde estás, Y a mi casa vengas a gozar. Despreciado por todos allá, Sin dinero y sin comer; Fue a servir apacentando puercos allá, Y una idea a su mente llegó: Esta vida ya no es para mí, volveré a mi padre y diré: Contra el cielo he pecado, y también contra Ti; No soy digno padre no lo soy. Ese día hermoso llegó, En que el pródigo al fin regresó; A su padre humillado llorando llegó, En su seno el hijo descansó. Y si tu te has desviado de Dios, De ese Padre que herencia te dio; Como el hijo pródigo vuelve hacia Él, Y gran gozo en el Padre habrá.

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ES EL TIEMPO DE LA SIEGA

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Es el tiempo de la siega, y tú sin trabajar; En los campos del Señor obreros faltan ya, Mientras tanto que el Maestro, te vuelve a llamar: Joven, joven, ven trabaja ya. Coro: Ven y ve los campos blancos como están, Aguardando manos que los segarán; Joven, ¡Despierta! Hazlo pronto y alerta, Sé el primero en decirle: ¡Heme aquí Señor! Por doquier se inclina la madura mies, Que las auras mueven y ¡Que bella es! Joven, ¡Despierta! Hazlo pronto y alerta, Pocos días hay que restan, para el Segador. Las gavillas que recojas, joyas de esplendor; Brillarán en la corona, que dará el Señor. Busca pronto eternas joyas, Dios es premiador. Joven, joven, ven trabaja ya. Va pasando la mañana, y nunca volverá, Pronto el tiempo de la siega, aquí terminará. Te hallarás al fin vacío, ante tu Creador, Joven, joven, ven trabaja ya.

GRATA NOTICIA VIENE JESÚS

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HERMANOS FIELES

Grata noticia; viene Jesús, Por los salvados mediante Su cruz, Para llevarlos al trono de luz; Sí, pronto viene el Señor.

Hermanos fieles perseveremos, En el camino del Salvador; Guardando pura la fe sencilla, Que en nuestras almas, depositó.

Coro: Cristo Jesús de los cielos vendrá, Pronto en Su gloria vendrá. Para el creyente ¡Qué gozo será, Ver, al amado Señor!

Sigamos firmes, unidos todos, En un bautismo, bajo un Señor; Formando un cuerpo, una esperanza, Teniendo un Padre, de todos Dios.

Con alegría y aclamación, Voz de arcángel, trompeta de Dios. Viene Jesús nuestro buen Salvador; Sí, pronto viene el Señor. Los que han dormido despertarán, Y con los vivos se reunirán. Todos unidos con Cristo estarán, Cuando viniere el Señor.

Seamos sobrios y vigilantes, Contra los lazos del tentador; En tanto el mundo tranquilo duerme, Junto al abismo de perdición. Sufrid pacientes con el Maestro, Aquí en la tierra tribulación; Tomando parte con Sus testigos, En las afrentas y en el dolor.

200

¡OH JAMÁS NOS CANSAREMOS! 201

NO ME ES POSIBLE

¡Oh, jamás nos cansaremos, de la gran canción! ¡Loores a Dios, aleluya! Por la fe la cantaremos con el corazón, ¡Loores a Dios, aleluya!

No me es posible comprender, El gran amor de mi Jesús; Aunque era triste pecador, Sufrió y murió por mí.

Coro: A los hijos del Señor, pertenece el cantar; Pues vendrá el Salvador, y nos arrebatará; Del palacio celestial, gozaremos más allá; ¡Loores a Dios, aleluya!

Coro: Seguro estoy que me salvó, Que del pecado me limpió; Y sigo fiando sólo en Él, Al fiel amparo de Su amor.

¡Oh, la indecible gloria del Divino amor, ¡Loores a Dios, aleluya! Que en sus alas lleve el alma, donde el Salvador; ¡Loores a Dios, aleluya!

Cuando lleno de pecado fui, Que tuve que causar Su muerte; Pero al hallar la fuente fiel, Lavado y limpio fui.

¡Qué vistosos son los ángeles, morando en luz! ¡Loores a Dios, aleluya! Más lucientes los creyentes al venir Jesús; ¡Loores a Dios, aleluya!

Firme promesa es la que dio, Que un día a Él me llevará; Para que donde Él esté, Esté también con Él.

Coronados en la gloria con el Salvador, ¡Loores a Dios, aleluya! Cantaremos alabanzas del Divino amor, ¡Loores a Dios, aleluya!

202

OH, SEÑOR, SI EL TEMOR Oh, Señor, si el temor me domina, Y la duda me quiere alcanzar; De Tu mano potente y Divina, Bien seguro mi Dios quiero andar. Coro: Débil soy, débil soy cada día, Como el tamo ante el viento voraz; Oh, Jesús Sé mi luz y mi guía, Que al cielo feliz quiero entrar. Oh, Señor este mundo y su vida, De pecado hoy quiero dejar; Entregarte mi vida rendida, Para sólo Tú Nombre adorar. Más el mal, más el mal por la vida, Cual gigante me quiere acabar; Pon Señor Tu poder en mi vida, Y victoria tendré hasta el final.

203

¡OH! JÓVENES VENID ¡Oh! Jóvenes venid, Su brillante pabellón; Cristo ha desplegado ante la nación; A todos en Sus filas os quiere recibir, Y con el a la pelea os hará salir. Coro: ¡Vamos a Jesús alistados sin temor, Vamos a la lid, inflamados de valor! Jóvenes luchemos todos contra el mal, En Jesús llevamos nuestro General. ¡Oh! Jóvenes venid, el Caudillo Salvador, Quiere recibiros en Su derredor; Con Él a la batalla salid sin vacilar, Vamos pronto compañeros, vamos a luchar. Las armas invencibles del Jefe guiador, Son el Evangelio y Su grande amor; Con ellas revestidos y llenos de poder, Compañeros acudamos, vamos a vencer. Los fieros enemigos, engendros de satán, Se hallan sostenidos por su capitán; ¡Oh! Jóvenes vosotros, poneos sin temor, A la diestra del Caudillo nuestro Salvador. Quien venga a la pelea, Su voz escuchará, Cristo la victoria le concederá; Salgamos, compañeros, luchemos bien con Él, Con Jesús conquistaremos inmortal laurel.

204

SANTA BIBLIA, PARA MÍ Santa Biblia, para mí, Eres un Tesoro aquí; Tú contienes con verdad; La Divina voluntad; Tú me dices lo que soy, De quien vine y a Quien voy. Tú reprendes mi dudar, Tú me exhortas sin cesar; Eres faro que a mi pie, Va guiando por la fe; A las fuentes del amor, De mi tierno Salvador. Eres infalible voz, Del Espíritu de Dios; Que vigor al alma da, Cuando en aflicción está. Tú me enseñas a triunfar, De la muerte y del pecar. Por tu santa letra sé, Que con Cristo reinaré; Yo que tan indigno soy, Por tu luz al cielo voy. ¡Santa Biblia! para mí, Eres un Tesoro aquí.

205

CUANDO LA IGLESIA Cuando la Iglesia ha de salir, Para encontrar a su Señor; Con este pueblo al cielo eterno, He de viajar, Y allá en las nubes me uniré; Con los salvados por la fe, Y entonaremos el gran coro celestial. Coro: Ven mi Jesús, no tardes más, Yo quiero ir, al más allá; Y en tu mansión, quiero vivir, Y tu presencia disfrutar; Ven mi Jesús; ven mi Jesús, No tardes más. Aquí en la tierra te honraré, Pero también te alabaré; Con ese canto, Allá en la patria celestial; Donde la Iglesia habitará, Y eternamente entonará; Dulce alabanza, A Tu gloriosa majestad.

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SI EN TU SENDA LAS NUBES

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Si en tu senda las nubes agolparse ves, No vaciles por ello, ni flaqueen tus pies; Cada nube que venga no podrá traer, Más que pruebas que pasan, si hay valor y fe. Coro: Si hay valor y fe, si hay valor y fe, En la más obscura noche; Siempre hay luz. Si hay valor y fe, si hay valor y fe; Gozo y paz traerá la lucha, Si hay valor y fe. Si es tu vida una carga de cuidados mil, Olvidado de todos te podrás sentir; Si tu ayuda acudieres a llevar doquier, Esto endulza la vida si hay valor y fe. Pon en alto los ojos sin dudar jamás, Que en las lides del mundo, vencedor saldrás; Que si hay flores y encantos, tras invierno cruel; Trae encantos la vida si hay valor y fe.

JESÚS ES MI REFUGIO

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Jesús es mi Refugio, en toda tempestad, Y es la Roca firme de la eternidad; El viento no me mueve, ni me arrebatará, Jesús es mi Refugio, Jesús es mi Refugio; Nada me faltará. Las turbulentas olas, se arrojan sobre mí, Y las obscuras noches; me empiezan a cubrir, Mi barca navegando, llegando al puerto va, Jesús es mi Piloto, Jesús es mi Piloto, Nada me pasará. Jesús es el Amigo que da tranquilidad, Y es la Medicina de toda enfermedad; No temeré la lucha, porque Él me guardará, Jesús es el Amigo, Jesús es el Amigo. De la humanidad. Jesús está llamando, Él es el Capitán, Si tú eres Su soldado, prepárate hoy también, El llama a la batalla, acude a defender; Es Cristo quien te llama, es Cristo quien te llama, Su voz te dice: Ven.

NOVENTA Y NUEVE OVEJAS Noventa y nueve ovejas son, Las que en el prado están; Más una sola sin pastor, Por la montaña va; La puerta de oro traspasó, :Y vaga en triste soledad.: Por esta oveja el buen Pastor, Se expone con piedad; Dejando solo aquel redil, Al que ama con verdad; Y al fragoroso bosque va, :Su pobre oveja a rescatar.: Obscura noche ve venir, Y negra tempestad; Más todo arrostra, y a sufrir, Lo lleva Su bondad; Su oveja quiere restituir, :Y a todo trance restaurar.: Sangrando llega el buen Pastor, La oveja herida está; El bosque siente su dolor, Comparte su ansiedad; Empero Cristo con amor, :Su oveja pudo rescatar.:

209

GRANDE GOZO Grande gozo hay en mi alma hoy, Pues Jesús conmigo está; Y Su paz que ya gozando estoy, Por siempre durará. Coro: Grande gozo ¡Cuán hermoso! Paso todo el tiempo bien feliz, Porque veo de Cristo la sonriente faz, Grande gozo siento en mí. Hay un canto en mi alma hoy, Melodías a mi Rey; En Su amor feliz y libre soy, Y salvo por la fe. Paz Divina hay en mi alma hoy, Porque Cristo me salvó; Las cadenas rotas ya están, Jesús me libertó. Gratitud hay en mi alma hoy, Y alabanzas a Jesús; Por Su gracia a la gloria voy, Gozándome en la luz.

210

DE CRISTO CADA DÍA

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QUIERO ANDAR MI SEÑOR

De Cristo cada día, quiero yo más cerca estar, El es mi Rey amable mi precioso Salvador; No puedo en todo el mundo, Amigo cual Jesús hallar; Quien maravillas hace y prodigios sin cesar.

Quiero andar mi Señor, Por Tu senda de luz; Acercándome más a Ti. Por doquiera impartiendo, Alegría y solaz, pero lleno de Tu bondad.

Coro: Jamás podrán contarme, De Cristo la mitad; De Su amor Divino, Su poder y majestad.

Coro: Mi sendero de luz llena hoy Señor, Que Tu Espíritu guíe mis pies; Y que siempre al cantar, lleno esté de Tu luz; El camino por donde voy.

Ya miro cerca el día, del regreso del Señor, Y allí con muchos santos, al encuentro sin igual; Iremos en las nubes, alabando con fervor, A Cristo el Rey glorioso, cuyo reino es eternal.

Tenme cerca de Ti, ¡Oh, mi buen Salvador! No permitas jamás, jamás, Que yo vague sin luz, Sin destino, sin paz, Mi sendero de luz llena hoy.

Y cuando transformados, en Su reino celestial; Jamás nos cansaremos de servir al Salvador; Gozosos alzaremos nuestro cántico triunfal; Y de arpas mil los ecos subirán en Su loor.

La jornada fugaz, pronto terminará; Y no habrá más sufrir allá. Permitidme cantar, Al augusto Señor, Mi sendero de luz llena hoy.

212

OYE SEÑOR, YO TE ALABARÉ

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JESÚS ES MI SALVADOR

Oye Señor, yo te alabaré, Quiero Jesús, Tu Nombre alabar; Y proclamar Tu reino celestial, Y así cantar alegre un cántico triunfal.

Jesús es mi Salvador, La vida feliz es Él. La gloria me ha dado ya, Pues Él es mi Salvador.

Coro: :Ahora vivo alegre, Cantándole al Señor: Mi vida peregrina muy pronto pasará, Y alegre con los santos, daréle mi loor.

Coro: Jesús es mi Salvador, Jesús es mi Salvador, Jesús es mi Salvador, Te salva a ti también.

Oye, Jesús, yo te alabaré, Quiero ensalzar Tu Nombre sin igual; Tu gran amor anhelo anunciar, Y así cantar alegre un cántico triunfal.

Señor, dame fe y valor, Para poder testificar. Señor, dame luz y amor, Y almas poder alcanzar.

Oye Señor, a Ti daré loor, Canción de amor a Ti quiero elevar; Y contemplar Tu rostro celestial, Y así cantar alegre un cántico triunfal.

Jesús los invita hoy, A hacerlos salvos por Él. Él dice: “Así lo haré”, Pues Él es supremo Rey.

Oye Señor, yo te alabaré, Tu dulce Nombre siempre ensalzaré; Y para siempre Tu rostro admiraré, Y así cantar alegre, un coro celestial.

A mí me llamó también, A ser Su testigo fiel. Pues Él los invita ya, Que todos crean en Él.

214

NO TENGO CUIDADO

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PUNZANTES LOS ABROJOS

No tengo cuidado ni tengo temor, De lo que me espera aquí; Confío tan sólo en mi buen Salvador, El cual cuida siempre de mí.

Punzantes los abrojos del camino, Nos vienen fe y gozo a confirmar; Y enseñan de este modo al peregrino, Que el mundo no podrá ser nuestro hogar.

Coro: Vivo por fe ... en mi Salvador, No temeré ... es fiel mi Señor; En la dura lid ... nunca me dejará, Yo vivo por fe ... Él me sostendrá.

Coro: Si en sendas escarpadas tú estás, No temas que el Señor te ayudará. Si el mundo en vez de rosas te da espinas, El Señor en rosas todas cambiará.

Vendrán tempestades lo sé yo muy bien, La fuerza del sol faltará; Amigos dejarme lo pueden también, Jesús siempre me sostendrá. Un día vendrá otra vez el Señor, Al cielo, Él nos llevará; Allí cesarán el afán y el dolor, Pues Dios todo dominará. Yo espero el día que Cristo vendrá, Veremos a nuestro Señor; Los muertos en Cristo resucitarán, Y juntos iremos con Él.

Si a nuestra paz azotan tempestades, Tras tempestades calma llegará; Que importa que haya siempre adversidades, La mano del Señor nos sostendrá.

216

OTRO AMIGO NO HAY Otro amigo no hay cual Cristo, ¡Ninguno hay! ¡Ninguno hay! Otro que hubiera salvado mi alma, ¡Ninguno hay! ¡Ninguno hay! Coro: Cristo sabe de nuestras luchas, Con Su brazo me ayudará; Otro amigo no hay cual Cristo, ¡Ninguno hay! ¡Ninguno hay! Otro amigo tan rico y santo, ¡Ninguno hay! ¡Ninguno hay! Y que también Él es muy manso, ¡De corazón! De corazón! Hora no hay cuando no nos cuida, ¡Ninguna hay! ¡Ninguna hay! En toda prueba Él nos ayuda, ¡Sí, cada vez! ¡Sí, cada vez! ¿Cuándo deserta Jesús a Sus siervos? ¡Ninguna vez! Ninguna vez! ¿Cuándo rechaza a los que le buscan? ¡Ninguna vez! Ninguna vez! ¡Hay otra dádiva como Cristo? ¡Ninguna hay! ¡Ninguna hay! Ha prometido estar conmigo, ¡Hasta el fin! ¡Hasta el fin!

217

ADELANTE LOS EMBAJADORES Adelante los embajadores, Que formamos el cuerpo de Cristo; Adelante los hijos del Señor, Que tienen a Cristo en sus corazones. Coro: Nunca olvidemos en el corazón, Que Cristo ha preparado un lugar; Para nosotros allá en Su hogar. Adelante en la gracia Divina, Trabajando en la obra de Cristo; Adelante cantando muy alegres, diciendo: ¡Aleluya y gloria al Señor! Adelante cantando y anunciando, El glorioso Evangelio de Cristo; Adelante que todas nuestras obras tenemos, Que rendir en aquel día final.

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¡PAZ CON DIOS! BUSQUÉ

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Paz con Dios! Busqué ganarla, Con febril solicitud; más mis *obras meritorias* No me dieron la salud. Coro: ¡Oh, que paz Jesús me da! Paz que yo antes ignoré; todo nuevo se tornó, Desde que Su paz hallé. Lleno estaba de temores, Sin sosiego percibir; hoy en paz mañana triste, Con temor del porvenir. Al final en desespero, Nadie pudo consolar; y del cielo oí respuesta: “Todo hecho ya quedó”. De mis obras despojado, Ví aquella de Jesús; ví mi paz con Dios firmada; Con la sangre de Jesús. Esa paz no cambia nunca, Por los siglos durará; ya que Dios la garantiza, Al que a JESUCRISTO va.

SI AL CRUEL ENEMIGO Si al cruel enemigo temes combatir, Si la duda agobia, siempre tu existir; Que la hermosa luz de Dios fulgure en ti, Y serás feliz así. Coro: Deja penetrar la luz, Deja penetrar la luz, Que la hermosa luz de Dios fulgure en tí, Y serás feliz así. Si tu fe en Jesús muy flaca y débil es, Si piensas que Dios contestará: *tal vez*; Que la hermosa luz de Dios fulgure en ti, Y serás feliz así. Si anduviéramos en luz, Divina luz, Limpios nos hará la sangre de Jesús; Claridad tendremos en el corazón, Si vivimos en la luz.

220

YA SEA EN EL VALLE

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AMA LA BIBLIA

Ya sea en el valle, do peregrino esté, O que en la luz gloriosa de paz habite aquí; A mi Jesús diré: “Tu voluntad haré”. Si Cristo me guía doquiera iré.

Ama la Biblia que Dios nos ha dado, Pues nos enseña Divina Verdad; Cristo es su tema, el Hijo entregado, Para salvarnos de toda maldad.

Coro: Si Cristo conmigo va, yo iré, Nada temere, con gozo iré, conmigo va, Es grato servir a Jesús, llevar su cruz, Si Cristo conmigo va yo iré.

Coro: Ama la Biblia, lee la Biblia, Sigue la Biblia de Dios es el Don.

Si al desierto quiere Jesús que vaya yo, Llevando buenas nuevas de santa salvación; Si allí en dura lid, mi campo señaló, A Cristo yo sigo, sin más detención. Aunque mi parte sea mi dura cruz llevar, Diré a mis hermanos que Cristo ayudará; Contento quedaré mi luz haré brillar, Testigo de Cristo doquiera iré. La voluntad de Cristo yo quiero obedecer, Pues en la Santa Biblia encuentro mi saber; Y con Su gran poder al mundo venceré, Si Él va conmigo doquiera iré.

Lee la Biblia sus bellas historias, Traen al alma salud celestial; Llenen tu espíritu todas sus glorias, Viendo a Jesús y sus glorias allí. Gracias a Dios por su Don inefable, Él se revela al humano por fe; En Su Palabra con gozo insondable, Para llevarnos delante del Rey. Aún este mundo y los cuerpos celestes, Han de llegar a su punto final; Más cuando pasen las cosas terrestres, Firme estará la Palabra eternal.

222

AL CRISTO VIVO SIRVO

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ANHELO EN LAS REGIAS

Al Cristo vivo sirvo y Él en el cielo está, Aunque otros lo negaren, yo sé que Él vive ya; Su mano tierna veo, Su voz consuelo da, Y cuando yo le llamo muy cerca está.

Anhelo en las regias moradas vivir, Do reina mi Salvador; Escucho los ecos de un dulce cantar, De triunfo y de gran loor.

Coro: El vive, El vive, hoy vive el Salvador, Conmigo está y me guardará, Mi amante Redentor; El vive, El vive, imparte salvación; Sé que El viviendo está porque: Vive en mi corazón.

Coro: A mi supremo Rey, alegre cantaré, Mis ojos han de ver la patria celestial; Feliz y salvo soy, y caminando voy, Con júbilo a mi eterno hogar.

En todo el mundo entero, contemplo yo Su amor; Y al sentirme triste consuélame el Señor, Seguro estoy que Cristo, mi vida guiando está; El es el Pan de Vida de la eternidad. Regocijad cristianos, hoy himnos entonad, Eternas aleluyas a Cristo Rey cantad; Ayuda y esperanza del mundo pecador, No hay otro tan amante, como el Señor.

Por senda escarpada quizá habré andar, El mundo me olvidará; Más en las moradas del eterno hogar, Los santos me esperan ya. Gloriosa esperanza de inefable paz, Que siento en mi corazón; ¡Cuán dulce es tener comunión y solaz, Con Dios en adoración! Eleva tu vista y contempla a Jesús, Sé fiel a tu Salvador; Los nítidos rayos que emite Jesús, Te envuelvan en Su esplendor.

224

CUAL PENDÓN HERMOSO

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CONFIESO AHORA

Cual pendón hermoso despleguemos hoy, La bandera del amor, La verdad del Evangelio, el honor; Del soldado de Jesús.

Confieso ahora mi vida pasada, Cuando vivía sin luz, sin fe, sin Dios; Ni una esperanza mi corazón hallaba, Ni medicina para mi cruel dolor.

Coro: ¡Adelante, adelante! En pos de nuestro Salvador, Con plena fe, en nuestro Rey; ¡Adelante con valor!

Coro: Hoy soy feliz, sí muy feliz, Al ser testigo por la gracia del Señor, :He pasado de muerte a eterna vida, A una vida, sin fin de gozo y paz.:

Prediquemos siempre lo que dice Dios, De la sangre de Jesús; Como limpia del pecado al mortal, Y le compra la salud.

Perdido anduve y sin rumbo fijo, Hasta que un día reconocí a Jesús, Por mí murió el tierno amado Hijo, Santo Cordero, que nos trajo la luz.

En el mundo proclamemos con fervor, Esta historia de la cruz; Bendigamos sin cesar al Redentor, Que nos dio Su paz y luz.

Sólo en la fuente que salta para vida, Podrá saciar su sed el pecador; Y luego ríos cristalinos de agua viva, Correrán de su vientre sin cesar.

En el cielo nuestro cántico será, ¡Aleluya a Jesús! Nuestro corazón allí rebosará, De amor y gratitud.

Ven pecador, y no te detengas, Que esa fuente es la sangre de Jesús; Que limpia tu alma de todo el pecado, Y gozarás perdón y eterna paz.

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¿CÓMO PODRÉ ESTAR TRISTE? ¿Cómo podré estar triste y entre sombras ir? ¿Cómo sentirme solo, y en el dolor vivir? Si Cristo es mi consuelo, Mi Amigo siempre fiel; :Si aún las aves tienen, seguro asilo en Él.: Coro: ¡Feliz cantando alegre, Yo vivo siempre aquí; Si Él cuida de las aves, Cuidará también de mí! “Nunca te desalientes”, Oigo al Señor decir, Y en Su Palabra fiando, hago al dolor huir; A Cristo paso a paso, le sigo sin cesar, :Y todas Sus bondades me da sin limitar.: Siempre que soy tentado, O que en la sombra estoy; Más cerca de El camino, y protegido voy, Si en mí la fe desmaya y caigo en la ansiedad; :Tan sólo Él me levanta, me da seguridad.:

227

CRISTO ESTÁ BUSCANDO Cristo está buscando obreros hoy, Que quieran ir con Él; ¿Quién dirá?: “Señor contigo voy, Yo quiero serte fiel”. Coro: ¡Oh, Señor, es mucha la labor! Y obreros faltan ya; Danos luz, ardiente fe y valor, Y obreros siempre habrá. Cristo quiere mensajeros hoy, Que anuncien Su verdad; ¿Quién dirá? “Señor yo listo estoy, Haré Tu voluntad” Hay lugar si quieres trabajar, De Cristo en la labor; Puedes de Su gloria al mundo hablar, De Su bondad y amor. ¿Vives ya salvado por Jesús, Su amor conoces ya? ¡Habla pues, anuncia que en la luz, De Cristo vives ya!

228

EL MUNDO NO ES MI HOGAR El mundo no es mi hogar soy peregrino aquí, En la ciudad de luz tendré tesoro, sí; Eterno resplandor por siempre gozaré, Y la vida mundana jamás desearé. Coro: Bendito Cristo, Tú eres siempre fiel, La dicha que das, más dulce es que la miel; La célica ciudad por siempre gozaré, Y la vida mundana jamás desearé. Un himno entonaré a Cristo el Salvador, “Digno eres oh, Señor de gloria y honor”; La patria celestial por siempre gozaré, Y la vida mundana jamás desearé. Ningún dolor habrá al lado de Jesús, Quien derramó Su sangre en la cruenta cruz; Perfecta paz allá por siempre gozaré, Y la vida mundana jamás desearé.

229

EN EL SENO DE MI ALMA En el seno de mi alma una dulce quietud, Se difunde embargando mi ser; Una calma infinita que sólo podrán; Los amados de Dios comprender. Coro: Paz, paz, cuán dulce paz, Es aquella que el Padre me da; Y le ruego que inunde por siempre mi ser, En sus ondas de amor celestial. ¡Qué tesoro ya tengo en la paz que me da, Y en el fondo del alma ha de estar; Tan segura que nadie quitarla podrá, Mientras miro los años pasar. Esta paz inefable consuelo me da, Y descanso tan sólo en Jesús; Y peligro ninguno mi alma tendrá; Al sentirme inundado en Su luz. Vida triste que en rudo conflicto te ves, Sola y débil tu senda al seguir; Haz de Cristo el Amigo que fiel siempre es, Y Su paz tu podrás recibir.

230

ESTOY AGRADECIDO SEÑOR

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Estoy agradecido Señor, Por Tu Hijo amado; Que vino para darme el perdón, Y también salvación; Porque diste a mi alma la unción, De poderte alabar. Coro: Gracias te doy Señor, por la paz que me das; Gracias te doy también, porque a mi lado estás; Y le has dado a mi ser, un eterno solaz. Por brindarme el perdón, por Tu fidelidad, Por guardar para mí la ciudad celestial; Muchas gracias Señor, te digo una vez más. Estoy agradecido Señor, Porque Tú me has amado; Por el día que me has dado mi Dios, Por el aire y el sol; Por Jesús que ha venido a cumplir, Tu Divina voluntad.

EL SEÑOR JESÚS ESTA LLAMANDO El Señor Jesús está llamando, ¿Quién al campo a trabajar irá? ¿Quién irá buscando a los perdidos? Quién la senda les enseñará. Coro: Háblame, ¡Oh, háblame! Y heme aquí responderé Señor. Háblame, Te diré: “Heme aquí, ¡Oh, envíame Señor!” Cuando el trozo de carbón ardiente, Al profeta fiel purificó; Al oír la voz que le llamaba, “Mándame, Señor”, Él respondió. Hay millones que en pecado mueren, Escuchad su llanto de dolor; Acudid con tiempo a rescatarles, ¿Quién dirá?: Oh, envíame, Señor. Pronto el tiempo de la siega pasa, Pronto iremos al eterno hogar; ¡Ojalá! Que aquel solemne día, Cristo allí nos diga: “Hiciste bien”.

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EL AMOR DE DIOS SIENTO El amor de Dios siento en mi corazón, El amor de Dios, el amor de Dios; Él me ha dado hoy también Su salvación, ¡Gloria a Cristo por Su amor! Coro: Cristo es mío, mío, gloria sea a Él, Él me ha dado paz y felicidad; Cristo es mío, mío, gloria sea a Él, Mío por la eternidad. Él ha puesto en mi alma una dulce paz, Es la santa paz, es la paz de Dios; Y al momento Él me da la libertad, Porque es mío en verdad. Él me ha dado gozo y también amor, Sí lo siento en mí, sí lo siento en mí; Pues a Él anhelo siempre serle fiel, Y servirle sólo a Él. Él me guarda siempre, me sostiene fiel, Porque soy de Él, porque soy de Él; Quiero pues, también ser muy brillante luz, Y alabar a mi Jesús.

233

EL SEÑOR ES MI PASTOR El Señor es mi Pastor, Me apacienta con amor; En Sus delicados pastos paceré, Descansando sin temor, Al abrigo del Señor; De las aguas de reposo beberé. Coro: El Señor me pastorea, nada aquí me faltará; Junto a Él caminaré, en Su brazo confiaré; Nada del amor de Dios me apartará. Mi Pastor me guardará, Siempre me confortará; Por la senda de justicia me guiará. En el tiempo del dolor, Me será Consolador; En mi corazón Su paz infundirá. ¡Oh, tan fiel es mi Pastor! ¡Tan constante es en Su amor! Que mi copa rebosando siempre está. Cuando en valle obscuro esté, Mal ninguno temeré; A la casa de mi Dios iré a morar.

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NADA SÉ PARA EL MAÑANA

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NUNCA ESPERES EL MOMENTO

Nada sé para el mañana, desconozco lo que habrá, Es probable que la nubes, mi luz vengan a opacar. Nada temo del futuro, pues Jesús conmigo está; Yo le sigo decidido, pues Él sabe lo que habrá.

Nunca esperes el momento, De una grande acción, Ni que lejos pueda ir tu luz; De la vida los pequeños actos de atención, Brilla en el sitio donde estés.

Coro: Muchas cosas no comprendo, Del mañana con su afán; Más un dulce Amigo tengo, Que mi mano sostendrá. Mi sendero es más brillante, cuando gozo de Su amor, Más ligeras son mis cargas, cuando voy a mi Señor; Cuando llegue a las moradas, que en la gloria preparó; Ya no más tendré temores, desengaños ni dolor. Nada sé sobre el futuro, desconozco lo que habrá; Más si el cuida de las aves, Él también me cuidará. Y al andar por mi camino, en la prueba o tempestad; Sé que Cristo irá conmigo, sé que guarda Su bondad.

Coro: Brilla en el sitio donde estés, Brilla en el sitio donde estés; Puedes con tu luz algún perdido rescatar, Brilla en el sitio donde estés. Puedes en tu cielo alguna nube disipar, Haz a un lado tu egoísmo cruel; Aunque sólo un corazón pudieres consolar, Brilla en el sitio donde estés. Puede tu talento alguna cosa descubrir, Do tu luz podrá resplandecer; De tu mano el Pan de Vida puede aquí venir, Brilla en el sitio donde estés.

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SÍ DESEO OÍR DE CRISTO

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DÍA TAN GRANDE

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Sí deseo oír de Cristo y de Su amor, Como quiso redimir al pecador; Como vino acá a vivir, como vino acá a morir, ¡Oh! Deseo oír de Cristo y de Su amor.

Día tan grande no puedo olvidar, día de gozo sin par; Cuando en tinieblas al verme andar, Cristo me quiso salvar. Gran compasión tuvo Cristo de mí, de gozo y paz me llenó; Quitó la sombra me dio plena gloria, la noche en día cambió.

Coro: Es sólo en Él, que tengo salvación, Que gozo paz y luz, y reconciliación; Es sólo Él, quien por mi mal murió, Que heme confiado y hoy confío en Él.

Coro: Dios descendió de gloria me llenó, Cuando Jesús por gracia me salvó; Fui ciego me hizo ver, Y por gracia renacer; Dios descendió de gloria me llenó.

Sí deseo oír de Cristo que también, En el mundo andaba siempre haciendo bien; Como a todos recibió y al final Su vida dio, En la cruz afuera de Jerusalén. Si deseo oír de Su tan dura cruz, Siempre veo allí ser Dios, Amor y Luz; Por Su sangre mi Señor reveló Su grande amor, Y ahora ya soy salvo por Su amor. ¡Salvador! A Ti ofrezco adoración, Siempre a Tí a Quién yo debo mi perdón; Eres digno de tener, alabanza y poder, Tú que nos trajiste eterna salvación.

Nací de nuevo en virtud de Jesús, en la familia de Dios; De las tinieblas pasé a la luz, para seguirle en pos, Bendito sea mi Padre y Dios; que cuando vine con fe, Fui adoptado por Cristo el Amado, loores por siempre daré. Tengo esperanza de gloria eternal, me regocijo en Jesús, Siempre recuerdo con fe y gratitud, al recordarle en la cruz; Ya preparó un hogar más allá, en la patria celestial; Justificado por siempre alabo, el Nombre bendito eternal.

MILES DE DÁVIDAS

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MANSIÓN GLORIOSA

Miles de dádivas vienen de Dios, Misericordias nos siguen en pos; Gracias a Dios nos ha dado saber, Que el Don mejor es Cristo.

Mansión gloriosa, tengo allá en el cielo, Do las maldades nunca entrarán; Toda tristeza cambiará en consuelo, Y en dulce canto el dolor y afán.

Coro: El Don mejor es Cristo, El Don mejor es Cristo; No tiene igual, jamás habrá tal, Como nuestro Señor JESUCRISTO.

Coro: Bellas mansiones hay allá en la gloria, Tendré en la mía el gozo sin par; Suenan las notas de la grata victoria, Voy pues con gozo a mi dulce hogar.

Dios da las lluvias y hace crecer, Flores y frutas que nos dan placer; Como un padre nos da de comer, Más el Don mejor es Cristo.

En este mundo predomina el llanto, Somos sujetos al dolor fatal; Más en el cielo cesará el quebranto, Y por los siglos nunca habrá más mal.

Doctrina santa enseña de Él, En nuestras pruebas Su gracia es fiel; Y nos dará un hogar celestial, Más el Don mejor es Cristo.

Amigo mío, cuánto anhelo yo verte, Libre de penas y de turbación; A JESUCRISTO debes ya entregarte, Tendrás también una bella mansión.

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UN EVENTO MAGNO Un evento magno se aproxima, Y los hombres preguntan ¿Qué es? Más temor a sus vidas domina, Sin saber que a las puertas está. Coro: Jesús viene, Jesús viene, El vendrá a las nubes; Por Su Iglesia volverá. El reloj de los tiempos anuncia, Que el Maestro muy pronto vendrá. Y llevarnos por siempre a Su gloria; A los que con Su sangre compró. Del sepulcro saldrán victoriosos, Los que duermen en Cristo Jesús; Y con ellos iremos gloriosos, A vivir por la eternidad.

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COMPRADO CON SANGRE

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Comprado con sangre por Cristo, Con gozo al cielo iré; Librado por Cristo bendito, yo sé que su hijo yo soy. Coro: ¡Lo sé! ¡Lo sé! Comprado con sangre yo soy. ¡Lo sé! ¡Lo sé! Con Cristo al cielo yo voy. Cuán libre y gozoso en Cristo, No me es posible decir; Él llena de gracia mi alma, con Él es gozoso vivir. En Cristo por siempre yo pienso, Y nunca le puedo olvidar; Y silencioso no quedo, voy siempre a Jesús a alabar. Seguro sé que la belleza, Del gran Rey yo voy a mirar; Ahora me guarda y guía, y siempre me va ayudar. Yo sé que me espera corona, La cual a los fieles dará; Jesús Salvador en el cielo, mi alma con Él estará.

CUÁN GLORIOSO ES EL CAMBIO 243

CUANDO OÍ ESA VOZ

Cuán glorioso es el cambio operado en mi ser, Viniendo a mi vida el Señor; Hay en mi alma una paz que deseaba tener, La paz que me trajo Su amor.

Cuando oí esa voz amorosa, Que me dijo, oh ven a Jesús; Que murió por amor a las almas, El Invicto y glorioso Jesús.

Coro: :El vino a mi corazón: Soy feliz con la vida que Cristo me dio; Cuando Él vino a mi corazón.

Coro: Acudí presuroso y quedé, Rendido a los pies de Jesús; Y Él lavó los pecados de mi alma, En la sangre vertida en la cruz.

Ya no voy por la senda que el mal me trazó, Do sólo encontré confusión; Mis errores pasados Jesús los borró, Cuando Él vino a mi corazón.

¡Oh, amor tan sublime el de Cristo, Entregando Su vida por mí; Para dar salvación a mi alma, Que desde la infancia perdí!

Ni una sombra de duda obscurece Su amor, Amor que me trajo el perdón; La esperanza que tengo la debo al Señor, Cuando Él vino a mi corazón.

Encontré el perdón de mi alma, A los pies de Jesús por Su cruz; Y mi anhelo es llevar el mensaje, A las almas perdidas sin luz. Hoy estoy consagrado a Jesús, Y mi vida por Él gastaré; Y camino gozoso a la gloria, Donde mora Jesús mi Señor.

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EL ORO Y LA PLATA El oro y la plata no me han redimido, Mi ser del pecado no pueden librar; La sangre de Cristo es mi sola esperanza, Su muerte tan sólo, me pudo salvar. Coro: Me redimió, más no con plata, Me compró el Salvador; Con oro no, más con Su sangre, Grande precio de Su amor. El oro y la plata, no me han redimido, La pena terrible no pueden quitar; La sangre de Cristo es mi sola esperanza, Mi culpa Su muerte la alcanzó a borrar. El oro y la plata no me han redimido, La paz no darán ellos al pecador; La sangre de Cristo es mi sola esperanza, Tan sólo Su muerte me quita el temor. El oro y la plata no me han redimido, La entrada a los cielos no pueden comprar; La sangre de Cristo es mi sola esperanza, Su muerte rescate consiguió ganar.

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¡ETERNIDAD! ¡QUE GRANDE ERES! 246 ¡Eternidad! ¡Que grande eres! ¡Eternidad! ¡Qué nunca mueres! ¿Oh, dime qué encontraré? ¿Qué premio allí recibiré? ¿Feliz o triste qué será? ¡La eternidad! se acerca ya! ¡Eternidad! ¿Qué cuenta llevas? ¡Eternidad! ¿Con qué me pagas? Las horas de carnal placer, Las obras que deje de hacer; Segura pérdida será, ¡La eternidad se acerca ya! ¡Señor Jesús! ¡Mi gran consuelo! ¡Señor Jesús! ¡Oh, Luz del cielo! La vida diste Tu por mí, Mi alma paz halló en Ti; La eternidad no espante ya, ¡La eternidad, que se acerque ya! ¡Eternidad! ¡Suprema gloria! ¡Eternidad! ¡De amor la historia! ¡Que corran siglos a su fin! ¡Que suene el último clarín! ¡Oh, ven Señor, ven sin tardar! ¡La eternidad, se acerca ya!

SUBLIME AMOR Sublime amor, es el amor de Dios, Sublime Don, que de gracia Él nos dio; Con qué pagar, ese tan grande amor, Sublime amor, sublime amor, Que jamás olvidaré. Coro: Por eso le amo, Porque Él me amó primero; Y quiero sentir, Lo que Él sintió por mí; Dando Su vida, y en una cruz murió, Sublime amor, sublime amor, El que tuvo para mí. Cuando Él oraba allá en Getsemaní, Pidiendo al Padre, Perdón por ti y por mí; Como gotas de sangre, De Sus sienes le rodaron, Sublime amor, sublime amor, Que jamás olvidaré.

247

TODAS LAS PROMESAS Todas las promesas del Señor Jesús, Son apoyo poderoso de mi fe; Mientras luche aquí sirviendo a mí Señor, Siempre en sus promesas confiaré. Coro: Grandes, fieles, Las promesas que el Señor Jesús ha dado; Grandes fieles, En ellas para siempre confiaré. Todas Sus promesas para el hombre fiel, El Señor en Sus bondades cumplirá; Y confiando sé que para siempre en Él, Paz eterna mi alma gozará. Todas las promesas del Señor serán, Gozo y fuerza en nuestra vida terrenal; Ellas en la dura lid nos sostendrán, Y triunfar podremos sobre el mal.

248

VAGABA YO POR EL MUNDO Vagaba yo por el mundo, En una noche sin luz; Sabía el Nombre de Cristo, Más no que Él era la Luz; Sabía bien que Su muerte, Había sido en la cruz; :Pero que me amaba tanto: No me lo habían dicho aún. Coro: :¡Y... me ... llamó! Tenía trigales mi Señor, A bellos campos me llevó, Y a cultivarlos me mandó.: Y me llamó mi Jesús, Con dulce tono de voz; Me dijo: “Yo soy la Luz”, Camina del cielo en pos; Pues en la cruz Yo pagué, La deuda del pecador; :Y admirado comprendí: La grandeza de Su amor.

249

NO QUISIERA RECORDAR No quisiera recordar lo que antes fui, Cuando lejos me encontraba de mi Dios; Muchas veces con mis obras le ofendí, Y Su Nombre blasfemaba con mi voz; Con mi mente en Su contra medité, Y hasta odio le guardé en mi corazón. Coro: Hoy que entiendo que El me ama, Que es el Dueño de mi alma; Y que ha hecho tantas cosas para mí, Sólo quiero darle gracias, Tributándole alabanzas; Más no quiero recordar lo que antes fui. Hoy lamento ese tiempo que perdí, Confundido por el diablo engañador; El pecado destruyendo mi vivir, Y mi alma siendo esclava del terror; Más doy gracias por el día en que comprendí, La victoria en Jesús mi Salvador.

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EL SOL SE VA OCULTANDO

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POR FE CONTEMPLO

El sol se va ocultando tras los pinares, Viene la negra noche con su pavor. Por valles y collados por los zarzales, En busca de Su oveja va el buen Pastor.

Por fe contemplo redención, La fuente carmesí; Jesús capaz es de salvar, Su vida dio por mí.

Coro: Eres tú, eres tú la oveja, La oveja perdida que busca el Pastor; Eres tú, eres tu la oveja, Que fuiste comprada con sangre y amor; Ven a Mí, Mi perdida oveja, Desde aquí escuché tu queja; Y He venido a buscarte, Y conmigo llevarte al redil.

Coro: La fuente sin igual hallé, De vida y luz el manantial; ¡Oh, gloria a Dios me limpia a mí! Me limpia a mí, me limpia a mí.

Va despertando el alba y en sus raudales, Brota un canto de vida luz y amor; Por sendas espinosas, por los breñales, Buscando aún su oveja va el buen pastor.

Mi vida entrego a mi Jesús, Las dudas ya se van; El hombre viejo muerto está, En Cristo vivo ya. ¡Cuán inefable gozo es, Saber que salvo soy! Entronizado está Jesús, En este corazón! ¡Oh, gracia excelsa de mi Dios! Profundo es el amor. De mi Jesús, mi buen Señor, Cordero de mi Dios.

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SEÑOR EN TI YO CREO

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Señor en Tí yo creo, y siempre creeré; Que brilla en mi alma, la antorcha de la fe. Al cielo ¡Cuántas veces la vista en mi aflicción; Alcé, y dulce consuelo bajaba al corazón! Es grato, si sufrimos en horas de ansiedad, Saber que desde el cielo nos miras con piedad; Que cuentas nuestras penas, que ves nuestro dolor, Que escuchas nuestros ayes y envías Tu favor. ¡Señor bendito seas, bendito veces mil! Porque si astuto el mundo su red nos arma hostil. En nuestro pecho enciendes la llama de la fe, Y mundo y red podemos hollar con nuestro pie. La fe que al hombre anima, Tu más precioso Don, Es luz en las tinieblas, alivio en la aflicción, Amparo al desvalido, al náufrago salud, Tesoro de alegrías, cimiento en la virtud. Por eso aquí te adoro, por eso creo en Ti, De quién dádiva tanta sin precio recibí. Confirma y acrecienta, Señor, mi humilde fe; Y cual soy tuyo ahora, por siempre lo seré.

VOY CONTEMPLANDO

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Voy contemplando por fe a Jesús, Él me salvó, Él me salvó; Toda mi carga llevó en la cruz, Cristo Jesús me salvó. Causa de gozo y base de paz, Él me salvó, Él me salvó; Es de mi alma constante solaz, Cristo Jesús me salvó. Coro: Toda mi vida aquí cantaré, Él me salvó, Él me salvó; Siempre allá en el cielo diré, “Sólo Jesús me salvó”. Hoy en el Trono de Gracia está, Quien me salvó, Quien me salvó; Nunca mi causa abandonará, Quien en la cruz me salvó. Es mi consuelo que vive por mí, Quien me salvó, Quien me salvó; Gozo me da contemplarle allí, Quien en la cruz me salvó. Dentro de poco del cielo vendrá, Mi Salvador, mi Salvador, En Su presencia mi canto será, Sólo de mi Salvador. El me espera en casa de Dios, Mi Salvador, mi Salvador; Ansío oír del arcángel la voz: Helo tu buen Salvador.

¿SOMOS SOLDADOS DE JESÚS? 255

GRATO ES CONTAR LA HISTORIA

¿Somos soldados de Jesús, Y siervos del Señor? Y sin temor llevar Su cruz, Sufriendo por Su amor.

Grato es contar la historia, del celestial favor; De Cristo y de Su gloria, de Cristo y de Su amor. Me agrada referirla, pues sé que es la verdad, Y nada satisface, cual ella mi ansiedad.

Coro: Después de la batalla nos coronará, Dios nos coronará; Dios nos coronará. Después de la batalla, nos coronará, En aquella santa Sión. Más allá, más allá, en aquella santa Sión, Después de la batalla nos coronará, En aquella santa Sión.

Coro: ¡Cuán bella es esa historia! Mi tema allá en la gloria, Será ensalzar la historia, De Cristo y de Su amor.

Luchando otros, por la fe, ¿Cobarde habré de ser? Y pelearé, por mi Señor Confiando en Su poder. Es menester que sea fiel, Que nunca vuelva atrás; Que siga siempre en pos de Él, Y me guiará en paz.

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Grato es contar la historia, que grata siempre es; Y es más, al repetirla, preciosa cada vez; La historia cuando canto, oíd con atención; Pues es mensaje santo, de eterna salvación. Grato es contar la historia, de todas la mejor; Que cuanto más se escuche, se oirá con más amor; Y cuando allá en la gloria, entone mi cantar; Será la misma historia, que tanto supe amar.

DE MI TIERNO SALVADOR

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De mi tierno Salvador, cantaré Su grande amor; Gozaréme en el favor de Jesús. De tinieblas me sacó, de cadenas me libró, De la muerte me salvó mi Jesús. Coro: ¡Mi Jesús! ¡Oh, mi Jesús! ¡Que precioso es el Nombre de Jesús! Con Su sangre me limpió, de Su gozo me llenó. De Su vida me dotó, mi Jesús. De mi triste situación, del pecado y aflicción; Hame dado salvación, mi Jesús. De pecados el perdón, al esclavo redención, Por tristeza bendición, dio Jesús. Por el mundo al caminar, solitario, sin hogar; Luz y paz me pudo dar, mi Jesús, Y las lágrimas de ayer, han pasado y el placer; Sin medida he de tener por Jesús. De lo falso a Su verdad, de lo impuro a santidad; Me ha cambiado la bondad de Jesús, Feliz soy por la virtud; de Su perennal salud; Cantaré con gratitud a Jesús.

CONCÉDEME JESÚS PODER Concédeme Jesús, poder, Y gracia para comprender; Cuán dulce es Tu amor, Y hazme Tú con santidad; Del cielo la felicidad, Aún aquí gozar. Impárteme la santa sed, De conocerte a Tí, sabré; Entonces la virtud, De Tu perfecta salvación; Y gozará mi corazón, De amor la plenitud. ¡Oh! Santifícame Señor, Llena mi alma de Tu amor; Permíteme oír, Tu voz, Tu rostro contemplar; Tu hermosura admirar, Y en Tí, por Tí vivir.

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TUYO SOY, JESÚS

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¡OH, CUÁN DULCE ES FIAR

Tuyo soy, Jesús, ya escuché Tu voz, De Tu amor hablando aquí; Más anhelo en alas de fe subir, Y más cerca estar de Ti.

¡Oh, cuán dulce es fiar en Cristo, Y entregarse todo a Él! Esperar en Sus promesas, Y en Sus sendas serle fiel.

Coro: Aun más, cerca... cerca, de Tu cruz, Llévame, ¡Oh, Salvador! Aun más cerca, cerca, cerca de Tu cruz, Llévame, ¡Oh, Buen Pastor!

Coro: JESUCRISTO, JESUCRISTO, Ya Tu amor probaste en mí; JESUCRISTO, JESUCRISTO, Siempre quiero fiar en Tí.

A seguirte a Ti, me consagro hoy, Constreñido por Tu amor; Y mi espíritu, alma y cuerpo doy, Por servirte mi Señor.

Es muy dulce fiar en Cristo, Y cumplir Su voluntad; No dudando Su Palabra, Que es la luz y la verdad.

¡Oh, cuán pura y santa delicia es! De Tu comunión gozar. Y hablar contigo, y Tu dulce voz; Cada día escuchar.

Siempre en Ti confiar yo quiero, Mi precioso Salvador; En la vida y en la muerte, Protección me dé Tu amor.

De Tu grande amor no comprenderé, Cuál es la profundidad; Hasta que contigo, Jesús esté, En gloriosa eternidad.

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CUAL ROCA FUERTE

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QUE MI VIDA ENTERA ESTÉ

Cual Roca fuerte es el Señor, ¡Refugio de la tentación! Constante y firme Amparador. ¡Refugio de la tentación!

Que mi vida entera esté, Consagrada a Ti, Señor; Que a mis manos pueda guiar, El impulso de Tu amor.

Coro: ¡Oh, Cristo es nuestro Abrigo en la tempestad, La tempestad, la tempestad! ¡Oh, Cristo es nuestro Abrigo en la tempestad! Refugio de la tentación.

Coro: Lávame en Tu sangre, Salvador, Límpiame de toda mi maldad; Traigo a Ti mi vida, para ser Señor; Tuya por la eternidad.

En el calor canicular, Descanso para el viador; Cual roca, sombra Él puede dar, Descanso para el viador.

Que mis pies tan sólo en pos, De lo santo puedan ir; Y que a Ti, Señor, mi voz, Se complazca en bendecir.

Piloto bueno en alta mar, Consuelo en la tribulación; Pastor que guía al buen lugar, Consuelo en la tribulación.

Que mi tiempo todo esté, Consagrado a Tu loor; Que mis labios al hablar, Hablen sólo de Tu amor.

Jesús es nuestro Bienhechor, Ayuda cuando hay tentación; Presente, eterno Salvador, Ayuda cuando hay tentación.

Toma, ¡Oh, Dios! mi voluntad, Y hazla tuya nada más; Toma sí, mi corazón, Y Tu trono en él tendrás.

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CUANDO TE QUIERO

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ESTOY CONTENTO

Cuando te quiero cerca Tu estás, Mi buen Jesús, no me dejarás; Con Tu potencia me sostendrás, Cuando Te quiero más.

Estoy contento que Dios me mostró, Cuanto a los hombres perdidos amó; Ahora comprendo de cierto que así, Él se acordaba clemente de mí.

Coro: Cuando Te quiero más, Cuando Te quiero más; Cerca Tú estás, mi buen Salvador, Cuando Te quiero más.

Coro: Gozo en contar Su célico amor; ¡Qué rico amor, qué rico amor! ¡Gozo en contar Su célico amor! ¡Su rico amor por mí!

Cuando Te quiero listo Tu estás, Y abandonarme nunca podrás; Paz por tristeza siempre me das, Cuando Te quiero más.

Si me preguntan cómo es que lo sé, Visto que nunca jamás le amé; Contestaré que Su ardiente amor, Me ha revelado por Cristo El Señor.

Cuando Te quiero no faltarás, Hora tras hora Tu me guiarás; Tiernos cuidados Tu me darás, Cuando Te quiero más.

Sigo gozoso la senda de fe, Con Su presencia me contentaré, El enemigo vencido será, Dios que me amó no me abandonará.

Cuando Te quiero allí Tu estás, Con Tu presencia me apoyarás; Brota Tu fuente de gran solaz, Cuando Te quiero más.

Dios por Su Dádiva manifestó, De que manera a los hombres amó; Su rico amor siempre habré de loar, En el descanso de Su santo hogar.

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CRISTO GUARDA SIEMPRE

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¡OH, DIOS ETERNO!

Cristo guarda siempre puedo en El confiar, No me deja nunca, puedo en El confiar; Pues cual la Roca eterna de los siglos, Firme estaré.

¡Oh, Dios eterno Tu misericordia! Ni una sombra de duda tendrá; Tu compasión y bondad nunca fallan, Y por los siglos Tú mismo serás.

Coro: ¡Nada, no, nada me ha de mover! ¡Nada, no, nada me ha de mover! Pues, cual la Roca eterna de los siglos, Firme estaré.

Coro: ¡Oh, Tu fidelidad! ¡Oh, Tu fidelidad! Cada momento la veo en mí; Nada me falta pues todo provees, ¡Grande, Señor, es Tu fidelidad!

Fuerte es JESUCRISTO, puedo en El confiar, Todo me ha provisto, puedo en El confiar; Pues, cual la Roca eterna de los siglos, Firme estaré. En la noche obscura, puedo en El confiar, Mi alma está segura puedo en El confiar; Pues, cual la Roca eterna de los siglos, Firme estaré. Muchos me abandonan, puedo en El confiar, Otros me engañan, puedo en El confiar; Pues, cual la Roca eterna de los siglos, Firme estaré.

La noche obscura, el sol y la luna, Las estaciones del año también; Unen sus cantos cual fieles criaturas, Porque eres bueno por siempre eres fiel. Tú me perdonas, me impartes gozo, Tierno me guías por sendas de paz; Eres mi Fuerza, mi Fe, mi Reposo, Y por los siglos mi Padre serás.

266

CRISTO ME HALLÓ ERRANTE Cristo me halló errante y peregrino, El me encontró hundido en el error; El transformó mi vida y mi destino, ¡Gloria a Su Nombre por ese sublime amor.! Coro: Yo quiero amarle, porque Él salvó mi alma; Quiero entregarle, todo mi corazón; El me guiará con tierna y dulce calma, Y para siempre me dará Su protección. Vagaba yo por sendas peligrosas, Y sin saber que ofendía a Dios; El extendió Su mano milagrosa, Me dio Su gracia cuando oí Su tierna voz.

267

¡OH PRÓDIGO! VUELVE ¡Oh pródigo! vuelve, no sigas vagando, Do solo hallarás, tristeza y dolor. :Medita en que otros, se encuentran gozando De las bendiciones, del Padre de amor.: Tu grande herencia estás defraudando, En esos placeres, del mundo traidor. :Regresa que el Padre, te está esperando, Te está ofreciendo, un vestido mejor.: El Padre jamás te deja en olvido, Sin Él no hallarás, otra vida mejor. :Ven dile tus culpas, cuales hayan sido, Él quiere estrecharte en Sus brazos de amor.: El Padre te ofrece un lugar más hermoso, En aquellas moradas gloriosas sin par, :Cumplido será en el Padre el gozo, Por Su hijo perdido, que al fin regresó.:

268

CANTAD EL AMOR

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TE HAS DESVIADO

Cantad el amor de Cristo, Ensalzad al Redentor; Tributadle santos todos, Grande gloria y loor.

Te has desviado del buen Camino, Y has caído en transgresión; :Dando tu cuerpo al abandono, Dándole al mundo satisfacción.:

Coro: Cuando estemos en gloria, En presencia de nuestro Redentor; A una voz la historia, Diremos del gran Vencedor.

Dime: ¿Qué mal hallaste en Cristo, Que has perdido tu devoción? :Ya no quisiste llevar la cruz, Dándole al mundo satisfacción.:

La victoria es segura, A las huestes del Señor; ¡Oh, pelead con la mirada, Puesta en nuestro Protector! Vuestra cruz tomad cristianos, De Jesús y caminad; De victoria en victoria, Siempre firmes avanzad. ¡Adelante en la lucha, Oh, soldados de la fe! Nuestro triunfo, ¡Oh, escuchen! ¡Dad loores al gran Rey!

Quien te exhorte no faltará, Que has cambiado tu devoción; :Tu testimonio ¿Dónde estará? Dándole al mundo satisfacción.: No ignores, Dios no quiere verte, En el camino de perdición; :Cuando por tí venga la muerte, Habrás perdido tu galardón.: Pero el Señor no es vengativo, Si arrepentido pides perdón; :El es benigno y compasivo, El puede darte restauración.:

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SEGUID ANDANDO EN LA LUZ

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¡ADELANTE CRISTIANOS!

Seguid andando en la luz, fieles al Capitán; Buenos soldados de Jesús, y así conquistarán. Nuestra bandera es amor, ¡Cristianos avanzad! Y a la voz del Salvador, atentos escuchad.

¡Adelante cristianos! Marchemos a la lid, Con Jesús el Capitán, nuestro Rey Libertador. Sin temor a la batalla, iremos por doquier, Que adelante con nosotros va el Señor.

Coro: Fe la victoria es, Fe la victoria es, Fe la victoria es, Del mundo vencedor.

Coro: La victoria nuestra habrá de ser, Por el poder del Capitán; Adelante soldados de Jesús, Ya vencimos a satán; Pues en nosotros la luz que brille, Por el Espíritu de Dios, por el amor; En nuestras frentes, deben leer: “Santidad sea y gloria al Señor”.

Con la Palabra del Señor, que es una espada fiel; Así luchemos sin temor, con nuestro Emmanuel. Las huestes del Libertador, muy bien armadas van, Y peleando con valor, la gloria alcanzarán. Nuestro Escudo es la fe, Escudo sin igual; Y Cristo dice: Os daré, coraza sin rival. En vano lucha satanás, contra la libertad; Furioso ostenta su maldad, más nunca triunfará.

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Es el tiempo que Jesús, pecadores va a salvar; Pues por todos en la cruz, Su preciosa sangre dio. Adelante, hermanos, prediquemos sin temor, Que Jesús por siempre al diablo ya venció. En los montes y valles, en pueblos por doquier; En los mares y tierra, prediquemos a Jesús. No hay remedio para el mal, sino cambia el corazón; El Evangelio es la poderosa luz.

TESORO INCOMPARABLE

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ALELUYA QUE EL SEÑOR

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Tesoro incomparable, Jesús Amigo Fiel, Refugio del que huye, del adversario cruel; Sujeta compasivo a Ti mi corazón, Ya que para salvarme, sufriste la aflicción.

Aleluya que el Señor, tiene grande salvación; Libertad, libertad. Nuestro Dios tiene poder, para satanás vencer, Libertad, libertad.

Delicias Tu de mi alma, Pan de la eternidad, Tú eres mi alimento en mi necesidad; En mi flaqueza extrema se cumple Tu virtud, Y en medio de mis males Tu quieres mi salud.

Coro: Libertad y redención, Aleluya Cristo ya, Me amó y me salvó. Gloria, gloria aleluya, Él es todo en todo es Él.

Dirige a mi Tu rostro, Jesús lleno de amor, Sol puro de justicia, dulce Consolador; Sin Tu influencia santa, la vida es un morir, Gozar de Tu presencia, esto solo es vivir. Jesús, Riqueza mía, mi dulce Salvador, En mi flaqueza Tu eres, mi fuerte Protector; Jamás el enemigo, podrá turbar mi paz, Por más que lo intentare, no lo permitirás. Al mundo de falacias, no pertenezco ya, El cielo es mi morada, allí mi Amado está; En donde Cristo habita, con ansia quiero ir, En sempiterno gozo, con Él quiero vivir.

Al confiar en el Señor, Él me da la santidad; Libertad, libertad. Tengo paz y gozo ya, desde que Él me salvó; Libertad, libertad. Hablaremos siempre aquí, ensalzando a nuestro Rey, Libertad, libertad. Porque bondadoso y fiel, Él nos llama hijos de Él. Libertad, libertad. Cantaremos siempre allí, al dejar el mundo aquí; Libertad, libertad. Alabando al Señor, cantaremos con fervor; Libertad, libertad.

CUANDO SOPLA AIRADA Cuando sopla airada la tempestad, Y tu barca en grave peligro está; ¿Tienes tal confianza y seguridad, Sin tener un ancla que apoyo da? Coro: Ancla tenemos que nos dará, Apoyo firme en la tempestad; En la Roca eterna fija está, Sólo allí tendremos seguridad. Arrecifes hay que marcando van, El sendero triste de muerte cruel; Donde vidas mil, naufragando están, Sin tener un ancla, ni timonel. Más segura está mientras rugen más, Los furiosos vientos de la maldad; Cuyas iras no romperán jamás, Nuestra grande y firme seguridad. En las negras ondas de la ansiedad, Cuando sopla viento de destrucción; Nuestra barca cruza la inmensidad, Del Señor llevando la protección.

275

LA PODEROSA MANO La poderosa mano de mi Salvador, Me sostendrá, me sostendrá; Y cuando surjan siempre penas y dolor; Él me librará. En JESUCRISTO santo siempre confiaré, El es mi Dios, mi Protector; Aunque terrible sea la tribulación, Me guardará en Su amor. Coro: Con amor Su presencia buscad, Y alabad a Jesús, Salvador; Y unánimes todos decid, ¡Aleluya por siempre al Señor! Con reconocimiento gracias demos hoy, Al Salvador, Cristo Jesús; Quien descendiendo al mundo la vida nos dio, Y nos dio la luz. Yo, nunca dejaré de amar a mi Señor, El es mi Dios, mi Protector; Su poderosa mano siempre lista está, Para librarme del mal.

276

MEJOR ES MI CRISTO Mejor es mi Cristo que el oro mortal, Ser suyo prefiero, que andar en el mal. Mejor es mi Cristo que todo oropel, Prefiero ser guiado por Su mano fiel. Coro: Antes que ser rey de dominios mil, Y vivir en la maldad; Prefiero a Cristo y sólo a El, Que lo que este mundo da. Más bello y sublime que flor matinal, Mejor que la miel que destila el panal; Jesús satisface de mi alma el clamor, Prefiero seguirle con tenaz fervor.

277

CRISTO NUESTRO JEFE Cristo nuestro Jefe, nos lleva a la lid, Nunca perderemos si El nos dice, id; Aún Su justa causa se suele ignorar, Más le seguiremos fiel. Coro: ¡Adelante! Es la orden del Señor, ¡Adelante! Vamos sin temor. ¡Adelante! Canta ya Su grey; La victoria es nuestra con el Rey. Nuestro Estandarte luce por doquier, Con poder y gloria, siempre se ha de ver, Cristo nuestro Jefe al mundo ya venció; Y le seguiremos fiel. La furiosa lucha, larga no será; Y a los vencedores, nos congregará, Donde cantaremos un himno triunfal; Y le seguiremos fiel.

278

UN GRANO DE ARENA

279

DÍA FELIZ CUANDO ESCOGÍ

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Un grano de arena fui yo en el desierto. Así es el hombre en la presencia del Señor; De un grano de arena, se ha formado un templo, Donde habita el Santo Espíritu de Dios.

Día feliz cuando escogí Servirte, mi Señor y Dios; Preciso es que mi gozo en Ti, Lo muestre hoy con obra y voz.

Coro: Un grano de arena, fui en el desierto, Un grano de arena, sin utilidad; Ahora soy llamado un hermoso templo, Donde habita el Santo Espíritu, de Dios.

Coro: ¡Soy feliz! ¡Soy feliz! Y en Su favor me gozaré; En libertad y luz me vi, Cuando triunfó en mi la fe; Y el raudal carmesí, vida de mi alma muerta fue.

Hoy que somos templo del Espíritu Santo, Las columnas fieles y apoyo de la verdad, Siempre en nuestros labios se oye un dulce canto, Con el cual podemos a Cristo alabar.

¡Pasó! Mi gran deber cumplí; De Cristo soy y mío es Él; Me atrajo, con cuerdas de amor; Su voz conoce todo fiel. Reposa, débil corazón, A tus contiendas pon ya fin; Hallé más noble posesión, Allá en el cielo, con Jesús. Solemne vida, ofrenda, flor, Que a Cristo santo consagré; Hoy sé mi vínculo de honor; Después testigo de mi fe.

SOBERANA BONDAD Soberana bondad condesciende, Hasta mí mientras pasa mi afán; A mi espíritu falta un albergue, Que Tus alas si más me darán. Coro: Más allá del azul firmamento, Te ensalcen mi Dios. Llena esté de la luz de Tu gloria, La vasta creación. Clamaré al Altísimo y fuerte, Cuyos fines se cumplen en mí; Contra Quien mi confianza está puesta, El socorro enviará que pedí. Entre leones el alma, y con quienes, Echen llamas, en paz dormiré, Cuya lengua es espada, y sus dientes; Lanzas, flechas, que no temeré.

281

SOY LA TRISTE OVEJA Soy la triste oveja que dejó al Pastor, Andaba perdida cuando El me encontró; Con un silbo suave luego me llamó, Y en sus tiernos brazos llevome al hogar; :Para darme aliento con Su dulce voz.: Las noventa y nueve dejó en el redil, Y se fue al desierto a buscarme a mí. Con afán inmenso luego me llamó, Y hallóme gimiendo de acerbo dolor. :Se sentó a mi lado y al verme lloró.: Ven mi triste oveja, escucha mi voz, No me desconozcas, soy el buen Pastor; Vamos al rebaño do reina la paz, Allí donde mora tu Rey celestial, :El que se expone por tu salvación.: Si por la fatiga no puedes andar, Ven entre mis brazos, te puedo llevar; Ven mi triste oveja, vamos al redil, Que muy tiernos pastos tengo para ti, :Conmigo por siempre tú vas a vivir.:

282

DEL SANTO AMOR DE CRISTO

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Del santo amor de Cristo, que no tendrá su igual, De Su Divina gracia, sublime y eternal; De Su misericordia, inmensa como el mar; Y cual los cielos alta, con gozo he de cantar. Coro: El amor de mi Señor, Grande y dulce es más y más; Rico e inefable, nada es comparable; Al amor de mi Jesús. Cuando El vivió en el mundo, la gente le siguió; Y todas sus angustias, en Él depositó. Entonces bondadoso, Su amor brotó en raudal; Incontenible, inmenso, sanando todo mal. El puso en las pupilas, del ciego nueva luz; La eterna luz de vida, que centella en Su cruz; Y dio a las almas todas, la gloria de Su ser; Al impartir Su gracia, Su Espíritu y poder. Su amor por las edades, del mundo Él es la luz; Que marca esplendoroso, la senda del ideal; Y el paso de los años, lo hará más dulce y más, Precioso al darle al alma, su incomparable paz.

UN MENSAJE DEL SEÑOR

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MARAVILLOSA GRACIA

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Un mensaje del Señor ¡Aleluya! Un mensaje de profunda paz, Es de Dios el santo amor, ¡Aleluya! Ven tan sólo a Cristo y vivirás.

Maravillosa gracia, vino Jesús a dar, Más alta que los cielos, más honda que la mar; Más grande que mis culpas, clavadas en la cruz; Es la maravillosa gracia de Jesús.

Coro: Ven a Cristo y vivirás, Ven a Cristo y vivirás; Es de Dios el santo amor, ¡Aleluya! Ven tan sólo a Cristo y vivirás.

Coro: Inefable es la Divina gracia, Es inmensurable cual la mar; Como clara fuente, siempre suficiente, A los pecadores rescatar. Perdonando todos mis pecados, Cristo me limpio de mi maldad; Alabaré Su dulce Nombre por la eternidad.

El mensaje del amor, ¡Aleluya! Infundirá la fe en ti; Que Jesús mi Salvador, ¡Aleluya! Dio por ti Su sangre carmesí. Vida puedes obtener, ¡Aleluya! Que tu Señor te quiere dar; Si tan sólo quieres ver, ¡Aleluya! Por fe a Quien podrá salvar. Como vine te diré, ¡Aleluya! A mi Jesús, que me salvó; Fue tan sólo por la fe, ¡Aleluya! Y Jesús mi alma redimió.

Maravillosa gracia, gracia de salvación, Gracia que sacia el alma, con plena salvación; Gracia que lleva al cielo, gracia de paz y luz; Es la maravillosa gracia de Jesús. Maravillosa gracia, llama con dulce voz, Nos llamó a ser hechos, hijos de nuestro Dios; Colma de Su consuelo, nos llena de virtud; Es la maravillosa gracia de Jesús.

¡OH, BONDAD TAN INFINITA!

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SI TU CANSADO

¡Oh, bondad tan infinita! Hacia el mundo pecador, Dios en Cristo revelando, Su eternal y santo Amor.

Si tu cansado ya estás de pecar, Acepta el perdón de Jesús; Si vida nueva quisieres hallar, Acepta el perdón de Jesús.

Coro: Es Jesús, para mí, La esperanza de salud; Sólo en Él encontré, La Divina plenitud.

Coro: No esperes más ven a Él, Su amor te muestra en la cruz; Es tiempo no seas infiel, Acepta el perdón de Jesús.

Como el vasto firmamento, Como el insondable mar, Es la gracia salvadora, Que Jesús al alma da.

Si vida pura tú quieres tener, Acepta el perdón de Jesús; El es la fuente que limpia tu ser, Acepta el perdón de Jesús.

Aunque fueren tus pecados, Rojos como el carmesí; Por la sangre del Cordero, Hay limpieza para ti.

Si ya no puedes tus luchas calmar, Acepta el perdón de Jesús; Si tus anhelos no puedes colmar, Acepta el perdón de Jesús. Si con los santos te quieres reunir, Acepta el perdón de Jesús; Si a los cielos aspiras tú ir, Acepta el perdón de Jesús.

287

¿DÓNDE ESTARÁS? ¿Dónde estarás por la eternidad? ¿Nunca has pensado con seriedad? Dios te ofrece el perdón, Y franca entrada en Su mansión. Coro: ¡Eternidad! ¡Eternidad! ¿Dónde estarás por la eternidad? Unos se acogen al Salvador, Ya desechando su viejo error; Ellos con Cristo lugar tendrán, Hasta la gloria se irán. Tu indecisión puede ser fatal; ¡Piensa que tu alma es inmortal! Dios quiere darte eterna salud, Y de perdón la plenitud.

288

SOY PEREGRINO AQUÍ Soy peregrino aquí, lejos de mi hogar, En aura playa está mi verdadero hogar; Embajador soy del reino del Señor, Soy mensajero de mi Rey. Coro: Este mensaje fiel oíd, Que dijo la Divina voz; “Reconciliaos ya”, dice el Señor y Rey, “Reconciliaos hoy con Dios”. Dios manda a todos los del mundo terrenal, Arrepentirse del pecado tan fatal; Reconciliados pues, serán, dice el Señor, Soy mensajero de mi Rey. Mi hogar más bello es, que el valle de Sarón, Reinan en él, la vida eterna y el amor; Mi Soberano invita a todos a acudir. Soy mensajero de mi Rey.

289

ERAN CIEN OVEJAS Eran cien ovejas, Que había en el rebaño; Eran cien ovejas, que... Que amante cuidó; Pero una tarde, Al contarlas todas; :Le faltaba una: Y triste lloró. Coro: Las noventa y nueve, Dejó en el aprisco; Y por la montaña, A buscarla fue; La encontró gimiendo, Temblando de frío; :Ungió sus heridas: Y al redil volvió. Esta misma historia, Vuelve a repetirse; Todavía hay ovejas, Que errabundas van; Vagando en el mundo, Sin Dios sin consuelo; :Sin Dios sin consuelo: Y sin Su perdón.

290

SI DEL PECADO ANHELAS Si del pecado anhelas el perdón, ¡Mira al Cordero de Dios! Él por Su muerte trajo redención, ¡Mira al Cordero de Dios! Coro: Mira a Jesús El Salvador, Mira al Hijo de Dios; El solamente puede salvarte, ¡Mira al Cordero de Dios! Si estás triste y falta en ti valor, ¡Mira al Cordero de Dios! Tu alma con canto llenará Su amor, ¡Mira al Cordero de Dios! En tentaciones, dudas y temor, ¡Mira al Cordero de Dios! Él con Su fuerza te hace vencedor, ¡Mira al Cordero de Dios! No temas si tu senda en sombras va, ¡Mira al Cordero de Dios! En pruebas Cristo te amparará, ¡Mira al Cordero de Dios!

291

YO VAGABA EN EL PECADO

292

AL QUE EN BUSCA DE LA LUZ

Yo vagaba en el pecado, Triste, vil, sin fe, sin Dios; Más Jesús me ha salvado, De este mundo tan atroz.

Al que en busca de la luz, Vague ciego y con temor; Lo recibe el buen Jesús, En los brazos de Su amor.

Coro: :Y yo sé, si yo sé: Que Jesús perdona al más vil pecador.

Coro: Volveremos a cantar, Cristo acoge al pecador; Claro hacedlo resonar, Cristo acoge al pecador.

Pecador Jesús te llama, El te quiere perdonar; Con amor Su voz te invita, Cree en Él y salvo serás. Aunque seas tú muy malo, Salvación hay para ti; Pues salvó al más malvado, Cuando me salvó a mí. Hallarás perdón en Cristo, El es vida, Él es Luz; Pecador, no te detengas, Ven al tierno, buen Jesús.

A Sus pies descansarás, Deposita en Él tu fe; De tus males sanarás, A Jesús tu amigo ve. Hazlo, pues, así dirás: “De la pena yo escapé”; Ya la ley no exige más; En Jesús perdón hallé. Acogerte prometió, Date prisa en acudir; Necesitas de Jesús, Vida que Él te hará vivir.

293

¿CÓMO PUEDES PECAR?

294

CON VOZ BENIGNA

¿Cómo puedes pecar, sin temor contra Dios; Echando en olvido Su amor? ¿Cómo puedes vivir, rechazando la voz, De Cristo tu buen Salvador?

Con voz benigna te llama Jesús, Invitación de puro amor; ¿Por qué le dejas en vano llamar? ¿Sordo serás pecador?

Coro: El verano acabó, la siega pasó, Y tendrás tú que ir; Y las cuentas rendir, Delante del trono de Dios.

Coro: Hoy te convida, hoy te convida, Voz bendecida, Benigna convídate hoy.

¿Cómo puedes pensar, que al infierno tú vas; Sin estremecerte de horror? Sin pedir a tu Dios, mientras tengas lugar; Que tenga de ti compasión. Cuando acabe el verano, y llegue la mies; La muerte vendrá con su hoz; Y tendrás que dar cuenta, ante Cristo tu Juez; Entonces no habrá salvación. Cuando Dios haya puesto, Su trono de Luz; Llamándote al juicio final, Y buscares en vano, refugio en Jesús, ¡Qué espanto y terror sentirás!

A los cansados convida Jesús, Con compasión mira el dolor; Tráele tu carga te bendecirá, Te ayudará el Señor. Siempre aguardando contempla Jesús, ¡Tanto esperar! ¡Con tanto amor! Hasta sus plantas ven mísero y trae, Tu tentación, tu dolor.

295

CRISTO QUIERE QUE TU VENGAS

296

¿HAS HALLADO A CRISTO?

Cristo quiere que tu vengas a la luz, Por tus pecados Él murió en una cruz; ¿Por qué quieres en el día del Señor? Ser condenado para la eternidad.

¿Has hallado a Cristo tu buen Salvador? ¿Eres salvo por la sangre de Jesús? ¿Por la fe descansas en el Redentor? ¿Eres salvo por la sangre de Jesús?

Coro: :¡Y si vienes a Jesús! El es vida, Él es Luz; Tus pecados Él llevó enclavados en la cruz:

Coro: Lávame... lávame, En Tu sangre, ¡Oh, Cordero de Dios! Y con alma limpia siempre viviré, En Tu hogar tan glorioso de luz.

Es muy cierto que Dios demostró Su amor, Dando a Su Hijo para nuestra redención; Pero debes tu creer de corazón, Porque también Él es, fuego consumidor. Ven a Cristo Él te quiere perdonar, Porque este mundo y sus deseos pasarán; Si no estás listo Dios la puerta cerrará, Y habrás perdido tu gran oportunidad.

¿Vives siempre al lado de tu Salvador? ¿Eres salvo por la sangre de Jesús? ¿Del pecado eres siempre vencedor? ¿Eres salvo por la sangre de Jesús? Si perdón y paz deseas pecador, Tu refugio es la sangre de Jesús; Si librarte quieres de eternal dolor, ¡Oh, acude ya al Salvador Jesús.

297

HAY UNA SENDA Hay una senda que el mundo no conoce, Hay una senda que yo pude encontrar; :En Cristo tengo la salvación de mi alma, Cristo es la senda que me pudo salvar.: Las amistades y todos mis parientes, Fueron las gentes con quien relacioné; :Me aborrecieron por causa de Su Nombre, Cuando supieron que a Cristo me entregué.: Aquel camino de tanto sufrimiento, Aquel camino que el mundo me trazó; :Fue transformado en aquel feliz momento, Cuando mi Cristo a mí me rescató.:

298

LA PUERTA ES CRISTO

299

La Puerta es Cristo para entrar, a la eternidad; Si tú quieres participar, recibe al Señor. Coro: ¿Por cuál camino vas? ¿Y si resuelto estás? Ya sabes que a Jesús, tus cuentas le darás, ¿Por cuál camino vas? Son dos caminos los que van, hacia la eternidad; Pues el angosto es Jesús, y el ancho es de satán. En el angosto hay aflicción, pruebas y tentación; El que venciere gozará, por la eternidad. En el camino ancho van, todos los que hacen mal; También su pago les dará, en el lago infernal. ¡Ven al Señor! ... no seas infiel, dale tu corazón; Para que puedas recibir, de Cristo salvación.

LA TIERNA VOZ DEL SALVADOR

300

La tierna voz del Salvador, nos dice conmovida: “Oíd al Médico de amor, que da a los muertos vida”. Coro: Nunca los hombres cantarán, nunca los ángeles de luz; Nota más dulce entonarán, que el Nombre de Jesús. Cordero manso ¡Gloria a Ti! Por Salvador te aclamo, Tan dulce Nombre es para mí, la Joya que más amo. La amarga copa del dolor, Jesús fue tu bebida, Y en cambio has dado al pecador; el agua de la vida. Borradas ya tus culpas son, Su voz hoy te pregona; Acepta pues la salvación, y gana tu corona. Y cuando al cielo del Señor, con Él nos elevemos; Arrebatados en amor, Su gloria cantaremos.

POR MUCHO TIEMPO Por mucho tiempo yo vague sediento, Sin encontrar feliz satisfacción; Más cuando a Cristo vine en mi tormento, En El hallé respuesta a mi clamor. Coro: He descubierto la fuente viva, Donde mi ser halló satisfacción; Desde el cielo fluye y da vida, Fuente preciosa de la salvación. Busqué del mundo vanas alegrías, Que sólo fueron causa de sufrir; Perfecto gozo y gracia cada día, En Cristo hallé, que es fuente del vivir. Oh, corazón que vagas extraviado, A Cristo ven y sacia tu clamor; Si con tus culpas vas a Él confiado, Encontrarás la fuente de Su amor.

301

¿QUÉ ME PUEDE DAR PERDÓN?

302

POR FE EN JESÚS

¿Qué me puede dar perdón? Sólo de Jesús la sangre. ¿Y un nuevo corazón? Sólo de Jesús la sangre.

Por fe en Jesús el Salvador, Se hace salvo el pecador; Sin merecer tan rico Don, Recibe plena salvación.

Coro: Precioso es el raudal, Que limpia todo mal; No hay otro manantial, Sólo de Jesús la sangre.

Coro: ¡Oh, excelsa gracia del amor! Que Dios perdona al pecador; Si presto está a recibir; A Cristo en su corazón, No hay otro autor de salvación, Pues Cristo obró la redención.

Fue el rescate eficaz, Sólo de Jesús la sangre; Trajo santidad y paz, Sólo de Jesús la sangre. Veo para mi salud, Sólo de Jesús la sangre; Tiene de sanar virtud, Sólo de Jesús la sangre. Cantaré junto a Sus pies, Sólo de Jesús la sangre; El Cordero digno es, Sólo de Jesús la sangre.

La vida antigua ya pasó, Y todo nuevo se formó; Aquí cual peregrino es, Hogar con Dios tendrá después. Aún cuando el nada tenga aquí, Su gran herencia tiene, sí; Arriba en gloria con Jesús, Quien le ha salvado por Su cruz.

303

PECADOR VEN AL DULCE JESÚS Pecador ven al dulce Jesús, Y feliz para siempre serás; Si en verdad le quisieres tener, Al Divino Señor hallarás. Coro: :Ven a Él, ven a Él; Que te espera tu buen Salvador.: Si cual hijo que necio pecó, Vas buscando a Sus pies compasión; Tierno Padre en Jesús hallarás, Y tendrás en Sus brazos perdón. Ovejuela que huyó del redil, ¡He aquí tu benigno Señor! En los hombros llevada serás, De tan dulce y amante Pastor.

304

¡OH! CANTÁDMELAS ¡Oh! Cantádmelas otra vez, Bellas palabras de vida; Hallo en ellas mi gozo y luz, Bellas palabras de vida, Sí, de luz y vida; Son sostén y guía. Coro: :¡Qué bellas son, qué bellas son! Bellas palabras de vida.: JESUCRISTO a todos da, Bellas palabras de vida; Hoy, escúchalas pecador, Bellas palabras de vida. Bondadoso te salva, Y al cielo te llama. Grato el cántico sonará, Bellas palabras de vida; Tus pecados perdonará, Bellas palabras de vida. Sí, de luz y vida, Son sostén y guía.

305

¡OH, NO RECHACES LA VERDAD! ¡Oh, no rechaces la verdad! Tus ojos abre a la luz; Renuncia a toda la maldad, Y ven a Jesús. Coro: ¡Oh, ven sin tardar! ¡Oh, ven sin tardar! Acepta a Jesús, y salvo serás. Tus ojos ya tal vez el sol, No más aquí contemplarán; Hoy es el día de salvación, ¡Oh, ven a Jesús! Jesús te tiene compasión, ¿Con qué Su amor le pagarás? Hoy trae a Él tu corazón, Y salvó serás. Jesús recibe al pecador, Que quiere a Él su alma unir; Ya no desprecies más Su amor, ¡Oh, ven a Jesús!

306

ME HIRIÓ EL PECADO

307

Me hirió el pecado, fui a Jesús, Mostréle mi dolor; Perdido errante, vi Su luz, bendíjome en Su amor. Coro: En Jesús en la cruz, do primero vi la luz; Y las manchas de mi alma Él lavó, Fue allí por fe, do vi a Jesús, y feliz para siempre seré. En una cruz mi buen Señor, Su sangre derramó; Por este pobre pecador, a quien así salvó. Venció la muerte ¡Qué placer! Y el Padre lo exaltó; Espero sólo en Su poder, morir no temeré. Aunque Él se fue, conmigo está, El gran Consolador; Por Él entrada tengo ya, al reino del Señor. Vivir en Cristo trae la paz, Con Él habitaré; Ya suyo soy y de hoy en más, a nadie temeré.

MI REDENTOR MURIÓ

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NO ES COSA NUEVA EL EVANGELIO

09

Mi Redentor murió en la cruz, Por pecadores todo Él pagó; Quien le reciba, no temerá, Y sus maldades Él perdonará.

No es cosa nueva el Evangelio que se predica, Por todo el mundo y en tus oídos ha resonado; :Y JESUCRISTO por todo el mundo es anunciado; Porque ha sido antes y ahora y por los siglos.:

Coro: Cuando Dios la sangre ve, Que Su Hijo derramó; En la cual el pecador, Se lavó, Dios verá con favor.

“No necesito del Evangelio”, dicen algunos; No tengo vicios como los hombres abandonados; :De la manera que vive el hombre tiene pecado, Y necesita de JESUCRISTO ser perdonado.:

Aún los más malos Él salvará, Como promete así lo hará; En Él confía ¡Oh, pecador! Y por la fe vida eterna tendrás.

Algunos creen que ya son salvos en esta vida; Por buenas obras o sacrificios que han tenido. :Pues Cristo dice que El es el Camino y también la vida, Y si no aceptan las pobres almas quedan perdidas.:

El juicio viene, allí estarás, Si le rechazas, triste saldrás; No te detengas, ven a Jesús, Quien tus pecados anhela borrar.

Nada importa que tenga vicios o no los tenga, Pues JESUCRISTO está llamando al pecador; :Y si no aceptan el dulce Nombre de JESUCRISTO, En aquel día tendrán segura condenación.:

¡Qué maravilla de gran amor! Cristo mostró por el pecador, El que creyere salvo será; Goces eternos él disfrutará.

¡OH, HOMBRE TU DIOS!

310

PRESTE OÍDOS EL HUMANO

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¡Oh, hombre tu Dios de Su gloria te llama! Con dulces acentos de solicitud; Escucha la voz que del cielo proclama, :Que hoy solamente es el día de salud.:

Preste oídos el humano, a la voz del Salvador; Regocíjese el que siente, el pecado abrumador. Ya resuena el Evangelio, de la tierra en la ancha faz; Y de gracia ofrece al hombre, el perdón consuelo y paz.

Su corazón lleno de tierno cuidado, De lejos conoce tu gran inquietud; Al Hijo en rescate por todos ha dado, :Más hoy solamente es el día de salud.:

Vengan todos los que sufran, los que sientan hambre o sed; Los que débiles se encuentren, de este mundo a la merced. En Jesús hay pronto auxilio, hay hartura y bienestar; Hay salud y fortaleza, cual ninguno puede dar.

Si tú le rechazas, Él ha de dejarte, Y no te valdrá de Jesús la virtud; Acéptale amigo, si quieres salvarte, :Pues hoy solamente es el día de salud.:

Vengan cuantos se acongojan, por lograr con qué vestir; Y a su afán tan sólo rinden, servidumbre hasta el morir. Un vestido hay más precioso, blanco puro y eternal; Es Jesús quien da a las almas, ese manto celestial.

Más tarde el Señor traerá para juicio, Delante del Trono a la gran multitud; Entonces no es tiempo de huir del suplicio, :Pues hoy solamente es el día de salud.:

¿Por qué siempre en rumbo incierto, vuestra vida recorréis? A Jesús, venid mortales, que muy cerca le tenéis. El es vida en tierra y cielo, y el exceso de Su amor; Os mejora la presente, y os reserva otra mejor.

SI FELIZ QUIERES SER

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UN HOMBRE DE NOCHE

Si feliz quieres ser ven a Cristo, Cuando tengas tristeza y dolor; Hallarás a Jesús siempre listo, Para darte consuelo y amor.

Un hombre de noche llegóse a Jesús, Buscando la senda de vida y de luz; Y Cristo le dijo “Si a Dios quieres ver, Tendrás que renacer”.

Coro: Si feliz quieres ser, ven a Cristo, Y dichoso en tu vida serás; Que siguiendo al valiente Caudillo, Siempre, siempre, del mal triunfarás.

Coro: Tendrás que renacer, Tendrás que renacer, De cierto, de cierto te digo a ti, Tendrás que renacer.

Si feliz quieres ser, ven a Cristo, Ni la muerte que infunde terror; Causará leve espanto a tu alma, Si ilumina tu senda el Señor.

Si acaso a los cielos tú quieres entrar, Y allí con los santos poder descansar; Si quieres la vida eternal obtener, Tendrás que renacer.

Si feliz quieres ser, ven a Cristo, Y reposo bendito hallarás; ¡Oh! Cuán dulce es la voz que te llama, Ven, si quieres la dicha gozar.

Hermanos se han ido con Cristo a morar, A quienes un día querrás encontrar; Pues esta proclama hoy debes creer, Tendrás que renacer. Amigo no debes jamás desechar, Palabras que Cristo dignóse hablar; Si tu alma no quieres llegar a perder; Tendrás que renacer.

313

VEN A CRISTO, VEN AHORA

314

“VENID A MI”, EL SALVADOR

Ven a Cristo, ven ahora, Pecador, cual estás; Acude y sin demora, El perdón obtendrás.

“Venid a Mí”, el Salvador dice, A los que tienen sed; Venid y de la célica Fuente, De salvación bebed.

Dios no quiere condenarte, Y te ha dado a Jesús; A fin de poder salvarte, Por Su muerte en la cruz.

Coro: Su voz os llama del cielo, ¿Queréis a Cristo ir? Su salvación cual libre don, Podréis hoy recibir.

Deposita tu confianza, En Jesús sin dudar; En Cristo hay esperanza, Pues te vino a salvar. El te ofrece vida eterna, Que es un don celestial; El gozo y la paz eterna, Con amor sin igual. No rehúses pues la oferta, Que te brinda el Señor; Más reconocido acepta, Tan Divino favor.

“Venid a Mí”, si andáis en trabajos, Tendréis descanso así; Llevad mi yugo sobre vosotros, Y aprended de Mí. Jesús al corazón quebrantado, Jamás rechazará; Más ¡ay! de quien no quiera oírle, Y en el pecado está. Colmaros quiere de bendiciones, El tierno Salvador; Jamás oigáis con indiferencia, Su dulce voz de amor.

315

YO CONFIO EN JESÚS

316

YO QUISIERA HABLARTE

Yo confío en Jesús, Y salvado soy; Por Su sangre en la cruz, A la gloria voy.

Yo quisiera hablarte del amor de Cristo, Pues en Él hallé un Amigo Fuerte y Fiel; Por Su gracia transformó mi vida entera, Lo que en esta vida soy lo debo a Él.

Coro: Cristo dio por mí, Sangre carmesí; Y por Su muerte en la cruz; La vida me dio Jesús.

Coro. Nadie pudo amarme como Cristo, Es incomparable Su amistad; Sólo El pudo redimirme del pecado, Por Su amor y Su bondad.

Todo fue pagado ya, Nada debo yo; Salvación perfecta da, Quien por mí murió.

Mi alma estaba llena de ayes y tristezas, Llena estaba de miseria y dolor; Con ternura Cristo me tendió la mano, Y me guió por el sendero del amor.

Todo hizo mi Señor, Me salvó ya Él; Con ternura y amor, Él me guarda fiel.

Cada día viene a darme nuevo aliento, A mi corazón infunde dulce paz; No comprenderé por qué vino a salvarme, Hasta que en el cielo pueda ver Su faz.

Mi perfecta salvación, Eres ¡Oh, Jesús! Mi completa Redención, Mi gloriosa Luz.

317

EN JESUCRISTO HAY

318

SALVADOR BONDADOSO

En JESUCRISTO hay una fuente inagotable, Admirable Manantial de aguas vivas; Donde el pobre pecador puede salvarse, Y a los muertos darles vida.

Salvador bondadoso es el Cristo, Pues por mí en la cruz murió; Derramó Su preciosa sangre, Rescatando al pecador.

Coro: Esta es la fuente carmesí é inagotable; Del costado de Jesús pudo manar. Una fuente carmesí de sangre y agua, Para poder al pecador salvar.

Coro. Padeció en la cruz por mí, Padeció en la cruz por mí. En la cruz me compró mi Redentor, Padeció en la cruz por mí.

Mi Jesús desde la cruz clamó a gran voz, ¡Dios mío! ¿Por qué me has desamparado? Fue dolor incomparable el de Su alma, Porque amaba al mundo tan perdido.

Él dejó Su lugar tan glorioso, Fue el plan de Su Padre así; Y nació en Belén y tuvo, Semejanza de hombre aquí.

Oh, pecador no rechaces al Señor, Que los judíos no quisieron recibirle; Y nosotros titulados como impíos, El vino a salvar y a redimirnos.

Fue llamado varón de dolores, Amargura de hiel bebió; Y negáronle aquí los honores, Que Su dignidad mereció. El expió mi terrible pecado, Con Su llaga Él me sanó; A la gloria iré yo por siempre, Como fruto de Su amor.

319

NUESTRA VIDA ACABARÁ

320

¿QUIERES SER SALVO?

Nuestra vida acabará, cual las hojas caerá; Cual el haz se ligará, busca a Dios; Vuela cada día veloz, y volando da su voz; Ven a dar tu cuenta a Dios, ¡Busca a Dios!

¿Quieres ser salvo de toda maldad? Tan sólo hay poder, en mi Jesús. ¿Quieres vivir y gozar santidad? Tan sólo hay poder en Jesús.

Coro: ¡Busca a Dios! ¡Busca a Dios! Entre tanto tengas tiempo, ¡Busca a Dios! Si te atreves a esperar, Dios la puerta cerrará; Te dirá es tarde ya. ¡Busca a Dios!

Coro: Hay poder, poder, sin igual poder, En Jesús quien murió. Hay poder, poder, sin igual poder, En la sangre que Él vertió.

Pierde el hombre su vigor, se marchita cual la flor; Desvanece cual vapor. ¡Busca a Dios! Como el río a prisa va, hasta entrar al vasto mar; Vas así a la eternidad, ¡Busca a Dios!

¿Quieres ser libre de orgullo y pasión? Tan sólo hay poder en mi Jesús. ¿Quieres vencer toda cruel tentación? Tan sólo hay poder en Jesús.

Clama a Dios de corazón, con sincera constricción; Por Jesús Dios da perdón. ¡Busca a Dios! Si no escuchas al Señor, si desprecias Su perdón; Te acarreas perdición. ¡Busca a Dios!

¿Quieres servir a tu Rey y Señor? Tan sólo hay poder en mi Jesús. Ven y ser salvo podrás en Su amor; Tan sólo hay poder en Jesús.

321

HOY ES TIEMPO DE VENIR Hoy es tiempo de venir, Y escuchar pecador; :Que te llama el Señor, Que te llama el Señor, Ahora ven pecador.: ¡Qué glorioso será, Cuando venga el Señor! :Debes tú prepararte, Confiando en Cristo, Quien te da salvación.: No te tardes pecador, Que Dios perdonará; :En la cruz enclavados, Fueron los pecados, Del más vil pecador.: ¡Oh, que triste será! Para el mundo traidor, :Cuando venga el día, Del fuego ardiente, Del gran juicio final.

322

SI TUS PECADOS FUEREN Si tus pecados fueren muy rojos, Tan rojos como el carmesí; Vendrán a ser cual nieveY blanca lana. Coro: Hay poder en Jesús, Hay poder en Jesús; Por Su sangre preciosa, Para limpiar el corazón. Aunque te laves con lejía, Y amontones jabón sobre ti; Tu pecado está selladoDelante de Dios. No puede el hombre cambiar su color, Ni el leopardo sus manchas quitar; Ni tú también hacer el bienSi haces el mal. Cristo si puede deshacer, Como a nube tus rebeliones; Y como a niebla tus pecados, Si crees en Él.

323

DE JESÚS NO ESCUCHAS

324

UNA CRUZ LEVANTADA YO VÍ

De Jesús no escuchas tierno llamamiento: “Ven a Mí, pecador”, Quiere darte Su perdón, paz y contento; “Ven a Él, pecador”.

Una cruz levantada yo ví, Con un Hombre pendiendo de si; Que moría mas era por mí, Para darme una vida feliz.

Coro: Te llama con un tierno acento, Tu vida quiere rescatar; Oye del Señor el tierno llamamiento: “Ven a Mí, ven a Mí”.

Coro: Ese Hombre se llama Jesús, Y es el Hijo bendito de Dios; Que moría por darme la luz, De un glorioso y eterno perdón.

De tus penas pronto puedes olvidarte, “Ven a Él, pecador. Porque de ellas Cristo puede consolarte, “Ven a Él, pecador”.

Hoy mi alma rebosa de amor, De alegría sin par por quien dio; Su santísima sangre y murió, Por salvarnos de condenación.

Sólo Él puede pleno gozo concederte, “Ven a Él, pecador”. En odiosa cruz por ello, vio la muerte, “Ven a Él pecador”. No Su voz de amor escuches con desprecio, “Ven a Él, pecador”. Por tu salvación pagó Divino precio, “Ven a Él, pecador”.

325

EN SU PROFUNDO AMOR En Su profundo amor, por tí el Salvador, Vino del cielo y obró redención. Tu vida de pecar, debes abandonar, Confiando en Cristo por tu salvación.

326

EN PECADO Y TEMOR En pecado y temor, el Salvador me vio. Aunque indigno pecador, Sin merecer amor. En el Gólgota al morir, mi vida rescató; Mi salud fue consumada en la cruz.

Coro: ¡Oh! Sin igual amor, De Cristo el Salvador; Nuestra salud compró, Cuando en la cruz murió. Tan grande fue el amor, De nuestro Redentor; Que por nosotros Su vida entregó. Perdidos y sin luz, nos encontró Jesús, Sobre el madero Su vida entregó. Por nuestra perdición, mostró Su compasión; Cuando en la cruz nuestros males llevó. Hijo del Padre Dios, es Cristo cuya voz, Hoy tiernamente llamándote está. Él te perdonará, tus males borrará; Confía en Él, pues te quiere librar.

Coro: Ven al Señor, ¡Oh, pecador! Él es tu Amigo fiel, ¡Ven pecador! Ven al Señor, Dios es amor, Escucha Su tierna voz ¡Ven pecador! De la tumba ya surgió, Mi Redentor Jesús; Y la muerte ya venció, dándonos plena luz, Vida eterna el pecador, goza por fe en Él. Y los muertos han de oír Su dulce voz. A los cielos ascendió, Mi Redentor Jesús; A la diestra de mi Dios, está tu Mediador; Intercede en tu favor, no te detengas ya, No desprecies esta voz, es tu Señor.

327

PORQUE DE TAL MANERA

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Porque de tal manera, Dios a Su pueblo amó; Que a Su Hijo santo, Él se lo entregó, Para que arrepentidos, creyendo sólo en Él; Fueran ya redimidos, los hijos de Israel. Coro: Allá sobre el madero, donde Jesús murió, Abierto Su costado, Su sangre derramó; Redimiendo a todos, los que forman Su grey; Quitándonos el peso de Su santa ley. Disposición de los ángeles, fue que vino la ley; Pero Israel rebelde no la pudo guardar, No se justificaron por la ley de Moisés; El pecador perdido en Cristo sí lo es. El vino a los suyos, con infinito amor, Ellos no recibieron, así a Su Salvador; Más al que le recibe, le da la potestad, De que creyendo en Él, lo salva en Su bondad. Por gracia somos salvos, no por obras de ley, Por fe en el Don precioso, que sólo Dios nos da; Porque el fin de la ley, es el Señor Jesús, Confiemos pues en Él, por Su muerte en la cruz.

ALMA PERDIDA Alma perdida que sin Cristo, Vas vagando. Y despreciando con tu errorLa salvación. :Jamás olvides que JesúsTe está llamando; Para librarte del pecadoCon Su amor.: De tal manera Dios amóAl perdido mundo; Que a Su Hijo amadoDio a morir en una cruz; :Para que todo aquelQue le reciba; Sea iluminado eternamenteCon Su luz.:

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SALVADOR A TI ACUDO

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ES AQUÍ DONDE DEBES

Salvador a Ti acudo, Príncipe de amor; Sólo en Ti hay paz y vida, Para el pecador.

Es aquí donde debes creer, Es aquí donde moras sin luz; Es aquí, es aquí, es aquí, Donde debes creer en Jesús.

Coro: Cristo, Cristo, Tierno Salvador; Mi humilde ruego escucha, ¡Sálvame, Señor!

Coro: Es aquí, es aquí, es aquí; Donde debes creer en Jesús.

Salvación y paz buscando, Vengo a Ti Señor; En Tu muerte estoy confiando, ¡Sálvame Jesús! Son Tus méritos la fuente, De mi salvación; En Tu muerte solamente, Hallo paz, perdón.

El castigo por ti, Él sufrió, Al morir enclavado en la cruz; Es aquí, es aquí, es aquí, Donde debes creer en Jesús. Vida eterna te ofrece el Señor, En los cielos morada de amor; Más allá, más allá, más allá, En los cielos morada de amor. Pecador oye pronto y cree, En la obra de Cristo en la cruz; Es aquí, es aquí, es aquí, Donde debes creer en Jesús.

331

LOS TIEMPOS MARCANDO

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Los tiempos marcando están, palabras proféticas mil; Que hablaron tiempos ha, los santos varones de Dios; Señales se ven sinfín, la Iglesia llevada será; A reunirse irá, con Cristo el Esposo de amor; Los cielos testigos serán. Coro: Cuando Cristo venga por Su grey, me llevará. Y Su predominio para siempre durará; Protegida la Iglesia siempre estará, ¡Oh, que gloriosa verdad! Mi tumba burlada será, Y alegre con Él estaré. La ciencia avanzada está, maldades se ven por doquier; La guerra siendo está, consigna del hombre tenaz; Las grandes ciudades ya, cayeron presas de terror; Un terremoto les fue, presagio de gran esplendor; Pues Cristo muy pronto vendrá. Amigo que oyendo estás, que Cristo muy pronto vendrá; Salvarte no podrás, gozando de un mundo fugaz; La mano de Cristo está, tocándote el corazón; Pon tu confianza en Él, confiésale tu condición; Y oveja salvada serás.

UNA FUENTE EN EL DESIERTO Una fuente en el desierto, Fue Jesús mi Salvador; Cuando sediento andaba, En los placeres del mal; :Sin encontrar un amigo, Que me pudiera ayudar.: Coro: Bendito Samaritano, Tú me llevaste al mesón; Donde atendieron las quejas, De mi pobre corazón. Donde mi alma fue limpia, Con la sangre de Jesús; Donde bebí el agua fresca, De la fuente eternal. Pecador atormentado, Mira hoy mismo hacia la cruz, Donde te espera el Cordero, Para darte la salud; No resistas Su llamado, Dale hoy tu corazón; El cambiará tu desierto, En eterna salvación.

333

JESUCRISTO POR SU IGLESIA JESUCRISTO por Su Iglesia viene ya, Viene ya, viene ya; Y Su pueblo redimido, listo está, Listo está, listo está; Tú no debes de quedarte, Ahora debes prepararte, Y con Cristo por los siglos vivirás. Él ha dicho en Su Palabra, Quien su corazón le abra, En la casa de Su Padre morará. Cristo dice tus pecados quitaré, Ven a Mí, ven a Mí; Reconoce que Mi vida di por ti, Di por ti, di por ti. Tu serás perdonado, Si aborreces el pecado, Y acudes a la Fuente carmesí. Verás tu alma emblanquecida, Y en el Libro de la Vida, Por la eternidad tendrás, Tu nombre allí.

334

ESCUCHA POBRE PECADOR Escucha pobre pecador, En Cristo hay perdón; ¡Oh! Ven a Él, y cree en Él, En Él hay salvación. Coro: Ven a Cristo, ven a Cristo, Ven a Emmanuel; Y la vida, vida eterna, Hallarás en Él. Por redimirte el Salvador, Su sangre derramó; Y en la cruz, la cruz cruel, Tu redención obró. Camino cierto es Jesús, Que lleva a la paz; Pues ven a Él y cree en Él, Descanso hallarás. Ven con el santo pueblo fiel, Dejando todo mal; Y así la paz de Dios tendrás, Y gloria inmortal.

335

A JESUCRISTO VEN SIN TARDAR

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QUÉ GRANDE BONDAD

A JESUCRISTO ven sin tardar, Que entre nosotros hoy Él está; Y te convida con dulce afán, Tierno diciendo “ven”.

Qué grande bondad es la Tuya Señor, Jamás la podré comprender; Que muestras Tu amor a este mundo mi Dios, Sin que, lo pueda merecer.

Coro: ¡Oh, cuán grata nuestra reunión! Cuando vengas oh Señor Jesús; Contigo estemos en comunión, Gozando eterno bien.

Coro: No merezco Tu amor soy indigno de Ti, Hoy las gracias te doy, Por Tu grande bondad; Y aunque sólo merezco, El castigo de Ti, Me llevas al cielo de paz.

Piensa que Él sólo, puede colmar, Tu triste pecho de, gozo y paz; Y porque anhela tu bienestar, Vuelve a decirte “ven”. Su voz escucha sin vacilar, Y grato acepta lo que hoy te da; Tal vez mañana, no habrá lugar, No te detengas, ven.

Amigo que oyes la voz del Señor, Por gracia Él te quiere salvar, Recíbele hoy en Su gran plenitud, Y dirás conmigo va Jesús.

337

DEL AGUA DE VIDA

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CUANDO OYES LA PALABRA

Del agua de vida, ¿Quién quiere beber, Y arrepentido en Cristo creer? De todo pecado librado será, Pues Cristo a Su pueblo del mal salvará.

Cuando oyes la Palabra, Puedes atender la voz; Que el Señor con dulce acento, Hoy habla a tú corazón.

El Don es gratuito, Jesús es capaz, De satisfacer con dulcísima paz; Al hombre que acepta, Su pleno perdón, Fiando en la sangre por su salvación.

Coro: :¿Por qué no? ¿Por qué no? Hoy a Cristo puedes ir.:

Mediante la sangre, que Cristo vertió, Del infeliz reo, el rescate pagó; Y el Padre le brinda con célico amor, De Sus bendiciones en Cristo el Señor.

Del pecado ya muy lejos, Has vagado sin cesar; No desprecies el refugio, Que te ofrece el Salvador.

Nos dice el mensaje, que Dios da salud, Y hoy os invita con solicitud; Que a Cristo vayáis, así como estáis, A fin de que la salvación obtengáis.

En el mundo no has tenido, Más que triste decepción; Ven a Cristo, ven ahora, Que te ofrece gozo y paz. Ven a Cristo, Él te llama, En tu triste condición; Ven descansa por la fe, En la sangre que Él vertió.

339

SI ACUDES A JESÚS

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Si acudes a Jesús, salvación tendrás, Del castigo espantoso, del infierno horroroso. :Si acudes a Jesús, salvación tendrás.: Coro: :Salvación, libertad y perdón, Si acudes a Jesús.: Si acudes a Jesús, libertad tendrás, De la vida pecadora, de la carga opresora. :Si acudes a Jesús, el perdón tendrás.: Si acudes a Jesús, el perdón tendrás, Por todos tus pecados, conocidos e ignorados. :Si acudes a Jesús, el perdón tendrás.: Si acudes a Jesús, plena paz tendrás, En tus luchas y temores en tus penas y dolores. :Si acudes a Jesús, plena paz tendrás.

JESÚS, JESÚS, SEÑOR Y REY Jesús, Jesús, Señor y Rey El Nombre de mi buen Jesús; En una cruz murió el Señor, Por culpa de ti pecador. Coro: :No dejes pues, amigo la oportunidad, Y ven a JESUCRISTO, Él te salvará:. Si no oyeres hoy Su voz, Mañana tú lamentarás, Porque te dice hoy Jesús, La puerta Dios la cerrará. Hoy es el tiempo de venir, Mañana muy tarde será, Y si te atreves a esperar, Al cielo no podrás entrar.

341

TODO AQUEL QUE OYE Todo aquel que oye vaya a proclamar: “Salvación de gracia, lléguese a aceptar”. Al perdido mundo débese anunciar: ¡Id al Salvador Jesús! Coro: Todo aquel que cree debe proclamar, Estas buenas nuevas siempre anunciar; Que Jesús de gracia quiere perdonar. ¡Id al Salvador Jesús! Todo aquel que quiera vaya sin tardar, Franca está la puerta y podéis entrar; Cristo es el Camino al feliz hogar, ¡Id al Salvador Jesús! Firme es la promesa, oye pecador: ¿Quieres tu la vida? Ve al Salvador. El a todos llama con Divino amor; ¡Id al Salvador Jesús!

342

SE APROXIMAN LOS JUICIOS Se aproximan los juicios, De Dios sobre la tierra; Hay conflictos y guerras, Pestilencia y dolor; A los ángeles del cielo, Se les llega la hora; De derramar las copas, de la ira de Dios. Coro: Más para todos los redimidos, Será glorioso porque es hermoso; Cuando la Iglesia llena de gozo, Mire al Señor; Ansiosa espera antes que todo, Esto acontezca que allá en las nubes; Cristo aparezca y ella en victoria, se irá con Él. Este mundo camina, Hacia grandes conflictos; Porque ya el anti-cristo, Reinará sobre él. Y aquel que se quedare, Por su desobediencia; Sufrirá la inclemencia, de la ira de Dios.

343

¿TE SIENTES CASI RESUELTO YA? ¿Te sientes casi resuelto ya? ¿Te falta poco para creer? :Pues, ¿Por qué dices a JESUCRISTO: “Hoy no, mañana te seguiré”?: ¿Te sientes casi resuelto ya? Pues vence el “casi”, a Cristo ven. :Que hoy es tiempo, pero mañana, Sobrado tarde pudiera ser.:

Sabe que el “casi” no es de valor, En la presencia del Justo Juez. :¡Ay del que muere “casi” creyendo, Completamente perdido es!:

344

CRISTO VIENE YA Cristo viene ya, en las nubes, sí. Su Palabra pronto se cumplirá; Y feliz seré, pues con Él me iré, Para disfrutar en la eternidad. Tú que vives en este mundo cruel, Sin tener solaz, sin saber, por qué; Ven a Cristo y Él te consolará, Te dará perdón, y también Su paz. Y si tú también, lo recibes hoy, Ir podrías al celestial hogar; Donde morarán, los hijos de Dios, Sin tener penar, sin sentir dolor.

345

OÍ A JESÚS LLAMÁNDOME Oí a Jesús llamándome, Fui sin dudar a Él; Y allí comprendí lo grande, De todo Su amor y bien. Me habló de Su gran dolor, Y fin por mí; Y sangre de Su costado, ví salir; Más no pude comprender lo que sentí, Y en Sus brazos me entregué feliz Escucha a Jesús, llamándote, Ven sin tardar a Él; Pues El quiere perdonarte, Y darte favor y bien. Entonces comprenderás, Su amor por ti; Su sangre te limpiará de todo mal; Y fácil podrás decir: “Ya soy feliz”, Por la grande eternidad.

346

EL MUNDO ES UN DESIERTO El mundo es un desierto, Que agua para el almaNo puede producir. Y en este desiertoMi alma transitaba, Muriéndose de sed. Coro: El agua cristalina, El agua que me diste; Jesús yo la bebí; Y desde ese momento, Has transformado mi alma, Y ahora soy feliz. Jesús está llamando, A todos los sedientos; Venid a las aguas, ya, El da gratuitamente, Del agua de la vida, Al que le acepta ya.

347

JESUCRISTO VINO AL MUNDO JESUCRISTO vino al mundo a salvarnos, Quién ya murió en la cruz; Y Su sangre derramó. También fue sepultado, sepultado, Y ya resucitado; El mandato nos dejó. Coro: Gloria en las alturas, Y paz en toda la tierra; Gloria en las alturas, A nuestro Salvador. Amigo, hoy acepta, sí acepta, Amigo ahora cree; Pues Él es tu Salvador. El quiere perdonarte y limpiarte, También quiere llevarte; A la Patria Celestial. Confía en JESUCRISTO, JESUCRISTO, Confiando en Su potencia; Salvación te brindará. No tarda Su promesa, Su promesa, Vendrá pronto a las nubes; Y nos arrebatará.

348

NO LEJOS DEL REINO No lejos del reino del cielo, Hay muchos que vienen y van; Se encuentran en sombras de muerte, Y pocos entrando están. Coro: :¡Oh, cuántos si vienen y van, Más pocos entrando están!: No lejos del reino del cielo, Son tímidos para entrar; Pues hablan de goces supremos, Más miedo les hace parar. ¿Por qué te detienes afuera? Jesús te desea guiar, A Su redil en esta tierra; Y luego a Su cielo llevar. Muy lejos no estás ya del reino, ¿Por qué no decides entrar? Te resta tan sólo un paso, Ven, dalo, pues sin vacilar.

349

JESÚS ESTA LLAMANDO

350

EN EL PRINCIPIO

Jesús está llamando al pobre pecador, El quiere darle vidaSi escucha hoy Su voz, Y si arrepentido viene a mi Señor.

En el principio Él era el Verbo, Y el Verbo era con Dios; En Él estaba la vida eterna, Y la Vida era la Luz.

Porque de tal manera Dios a este mundo amó, Que dio a Su Hijo amadoEn prueba de Su amor, Para salvar al mundo de la condenación.

Coro: :Ven a Cristo, ven a Él, Ven ahora no seas infiel:.

No vez que JESUCRISTO al Gólgota llegó, Como cordero mudo así El caminó, Por darte vida eternaEn una cruz murió. El mundo está perdido y sin seguridad, No encuentra la salidaLa puerta es el Señor, También es el Camino, a la eternidad. Entrad pues, por la Puerta, Que es Cristo el Señor; Porque ancha es la puerta de eterna perdición, Prepárate al encuentro hoy mismo con tu Dios.

Decían unos de los judíos, A Éste buscan para matarle; Y le prendieron a mi Señor, Y le trataron como un ladrón. Porque los hombres no le creyeron, Crucificaron al Redentor, Fue por tu culpa, amigo mío, Mira al Cordero muerto por ti. Ven pecador no te detengas, Ven a los pies de mí Señor; Si le recibes ahora mismo, Tendrás de Cristo la salvación.

351

LLEGÁRONSE LOS TIEMPOS

352

Llegáronse los tiempos, cumpliéronse los días; De aquellas profecías, que el Señor habló. :Cuando íbase del templo, al monte de las Olivas; Y con palabras vivas, señales nos dejó.: Ya vemos que los tiempos, cuán breves van pasando; Señales demostrando, que Cristo viene ya. :Nos habla por las aguas, nos habla por los vientos; Que ya se acerca el tiempo, que Cristo volverá.: De todos tus pecados el quiere perdonarte, Pues Él los ha borrado, por Su muerte en la cruz. El es tu Abogado, El es tu Intercesor; Que quiere hoy librarte, en prueba de Su amor.: Ya todo está cumplido, ya no hay más que esperar; Si alguno está dormido, hoy debe despertar. :En Cristo encontraremos, alivio y fiel consuelo; Viene el Señor del cielo, Su Iglesia a levantar.:

¡OH, SEÑOR! RECÍBEME ¡Oh, Señor! Recíbeme cual soy, Ya no más, ya no quiero pecar; Del pecado yo me quiero apartar, :Justifica mi ser, Dame Tu dulce paz, Y Tu gran salvación.: ¡Oh, Señor! Toma mi corazón, Y hazlo tuyo por la eternidad; Lléname de Tu santa bondad, :Y en mi alma Tu pon, Una nueva canción, De paz y dulce amor.: Pecador, tú que vagas sin Dios, Ven ahora y acepta al Señor; El Te quiere impartir Su bondad, :El Te quiere salvar, El Te quiere ayudar; Hoy acepta el perdón.:

353

EL SALVADOR JESÚS POR MÍ El Salvador Jesús por mí murió. De la condenación El me libró; La vida eterna es dádiva de Dios, En Su infinito amor. Coro. Es verdad, es verdad, Cristo dice a ti. Es verdad, es verdad, El que cree en Mí. La vida eterna tiene y es así, En Su infinito amor. Toda mi iniquidad Jesús llevó, El precio del rescate Él ya pagó; La vida eterna también Él me dio, En Su infinito amor. Indigno soy mas nunca dudaré, Él no echa afuera aquel que va con fe; Me dio la vida y por amor lo fue, En Su infinito amor.

354

AL SUELO VI CAER UNA FLOR Al suelo vi caer una flor, Que el sol pronto marchitó; Luego el viento vino y fuerte sopló; Y la flor muy lejos llevó; La flor se cae y la hierba muere, Y pasa el viento y se la lleva. Más la Palabra de Dios es fiel, Guárdala siempre y vivirás. Es probable que hoy me digas así: “La vida debo gozar”; Pero el tiempo que vivimos aquí; Tan corto es como una flor. Así es el hombre, así eres tú; Como neblina los días son, Pero si quieres la vida eterna, Recibe a Cristo en tu corazón.

355

CRISTO ES LA PEÑA DE HOREB Cristo es la Peña de Horeb que está brotando, Agua de vida saludable para ti. Cristo es la Peña de Horeb que está brotando, Agua de vida saludable para ti. Ven a tomarla que es más dulce que la miel; Transforma el alma, transforma todo tu ser; Cristo es la Peña de Horeb que está brotando, Agua de vida saludable para ti. Cristo es el Lirio del Valle de las flores, El es la Rosa, blanca y pura de Sarón; Cristo es la vida y amor incomparable, El es la eterna fuente de la salvación; Ven a buscarla en tu triste condición, Transforma el alma, transforma todo tu ser; Cristo es el Lirio de Valle de las flores, El es la Rosa, blanca y pura de Sarón.

356

CON MANTO DE GRANA Con manto de grana y caña en Su mano, Fue escarnecido, el Hijo de Dios; Rey de los judíos, gritaba la turba, Doblan la rodilla, burlándose de Él. Coro: “Elí, Elí, Elí, ¿Lama sabactani?” Clamaba el excelso, Divino Jesús, El buen Redentor, de nuevo clamó; Con fuerzas potentes, Su espíritu dio. Jesús Nazareno, clavado en la cruz, Entre los inicuos contado se vio; Su rostro herido y desfigurado, Corona de espinas, el pueblo le dio. Y crucificaron al Divino Maestro, Vinagre con hiel, diéronle a beber; Soldados reparten, Su santo vestuario, Y sobre Su ropa la suerte se echó.

357

AÑOS MI ALMA EN VANIDAD Años mi alma en vanidad vivió, Ignorando a Quién por mi sufrió; Mi Jesús allá en la cruz murió, El Salvador. Coro: Mi alma allí Divina gracia halló, Dios allí perdón y paz me dio, Del pecado allí me libertó, El Salvador. Por la Biblia miro que pequé, Y Su ley Divina quebranté; Mi alma entonces contempló con fe, Al Salvador. Toda mi alma a Cristo ya entregué, Hoy le quiero y sirvo como a Rey, Por los siglos siempre cantaré Al Salvador. En la cruz Su amor Dios demostró, Y de gracia al hombre revistió, Cuando por nosotros se entregó El Salvador.

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HABÍA UNA CIUDAD

359

Había una ciudad, en la antigüedad, Llamada Sodoma; y otra ciudad, había también, Llamada Gomorra. El pecado creció, Que al cielo llegó, su grande clamor; Y Dios se enojó, de manera tal, Que no se calmó. Dios dijo a Abraham, lo que iba hacer, Con aquellos pueblos, Abraham respondió, Tú eres el Juez de toda la tierra, Más no morirá el justo también, Así como el malo; si hay cincuenta justos, Por amor a ellos, no los destruirás. JESUCRISTO el Justo, del cielo bajó, En forma de siervo. Su sangre vertió, Después que murió, por amor al mundo, Él fue sepultado y resucitó, el día tercero, Ascendió a los cielos, de donde vendrá, Y nos llevará. Amigo que vas al fuego eternal, Ven a Cristo, no rechaces más, La voz del Señor, que te está llamando, La mujer de Lot desobedeció y su rostro volvió; Se tornó en estatua de sal, Al instante y no se salvó.

POR AMOR SE ENTREGÓ Por amor se entregó el Salvador, Por amor a la muerte llegó; :Ese amor con que Cristo me amó, Nunca puedo olvidar ese amor.: Traspasados Sus manos y pies, Duros clavos de inclemencia y dolor; :Roja sangre mi Cristo vertió, Por llevarme al hogar celestial.: Me pregunto: ¿Quién fue el que pecó, Si fue Cristo o si fuimos tú y yo? :Pecador conversemos los dos, Que por todos mi Cristo murió.:

360

LOS OJOS DE JEHOVÁ Los ojos de Jehová, llenos de compasión; Que desde el cielo azul, contemplan la maldad, En días de Noé cuando el hombre sin Dios; No quiso obedecer la voz de santidad. Y por su rebelión y duro corazón, Les alcanzó su mal, :Y del cielo bajó, Con todo su furor el juicio destructor; Del diluvio fatal.: Los ojos de Jehová abiertos siempre están Y desde el más allá, pueden mirar el bien. Allá cuando Israel que cautivo cayó, Jehová siempre miró a su siervo Daniel; Este Dios del ayer, que hoy mirando está, Si tu haces el bien, :Y recompensará, con la vida eternal Al que aborrece el mal, Y se convierte a Él.:

361

¿QUE VAS A HACER?

362

EL EVANGELIO SANTO

¿Qué vas a hacer con la gracia de Dios? ¿Qué vas hacer si no vas de Él en pos? ¿Vas a aceptar a Jesús Salvador? ¿Qué vas a hacer?

El Evangelio santo, Anuncia al pecador; Que Dios al mundo amó, Y dióle un Salvador.

Coro: ¿Qué vas a hacer? ¿Qué vas a hacer? Con Aquel que por ti murió.

Coro: Y quién en Cristo creerá, De vida eterna gozará, De vida eterna gozará.

¿Qué vas a hacer con Jesús Salvador? ¿Qué vas a hacer con Su inmenso amor? ¿Vas a seguir en tu vil condición? ¿Qué vas a hacer?

Aquel que peca muere, Así Dios sentenció; Más Cristo en sumo amor, Su propia vida dio.

¿Qué vas a hacer con Su inmensa bondad? ¿Cuál tu destino por la eternidad? ¿Vas a aceptar a Jesús Salvador? ¿Qué vas a hacer?

El Salvador del mundo, No vino a condenar; Más vino por Su cruz, Los hombres a salvar.

363

DIOS OS GUARDE Dios os guarde en Su santo amor; Hasta el día en que lleguemos, A la patria do estaremos; Para siempre con el Salvador. Coro: Al venir Jesús nos veremos A los pies de nuestro Salvador; Reunidos todos seremos, Un redil con nuestro buen Pastor. Dios os guarde en Su santo amor; En la senda peligrosa, De esta vida tenebrosa, Os conserve en paz y sin temor. Dios os guarde en Su santo amor; Os conduzca Su bandera, Y os esfuerce en gran manera; Con Su Espíritu Consolador. Dios os guarde en Su santo amor, Con su gracia os sostenga, Hasta que el Señor regrese; A llevarnos a Su bello hogar.

364

DIOS BENDIGA LAS ALMAS Dios bendiga las almas unidas, Por los lazos de amor sacrosanto; Y las libre de todo quebranto, En el mundo de espinas erial; Que el hogar que a formarse comienza, Con la unión de estos dos corazones; Goce siempre de mil bendiciones, Al amparo del Dios de Israel. Que el Señor con Su dulce presencia, Cariñoso estas bodas presida; Y conduzca por sendas de vida, A los que hoy manifiestan lealtad; Les recuerde que nada en el mundo, Es eterno y que todo termina; Y por tanto con gracia Divina, Cifrar deben la dicha en Su Dios. Y los dos que ante Dios han llegado, A casarse y vivir juntamente; Busquen siempre de Dios en la fuente, El secreto de dicha inmortal; Y si acaso de duelo y tristeza, Se empañasen sus sendas un día; En Jesús hallarán dulce Guía, Que otra senda les muestre mejor.

365

¡OH, AMOR DE DIOS!

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¡Oh, amor de Dios! Su inmensidad, El hombre no podría contar; Ni concebir la gran verdad, Que Dios al mundo pudo amar. Al primer par de Su hogar, echados, compadeció; Y les vistió, les perdonó, y un Redentor prometió. Coro: Oh, amor de Dios, brotando está. Inmensurable, eternal. Por las edades durará, inagotable raudal. Si fuera tinta todo el mar, Y todo el cielo un gran papel; Y cada hombre un escritor, y cada hoja un pincel; No bastaría para escribir, el gran amor de Dios; Que al hombre ha dado el vivir, Por siempre allá en los cielos. Y cuando el tiempo pasará, Con cada reino mundanal; Y cada trono caerá, Con cada trama y plan carnal; El gran amor del Redentor, por siempre durará; La gran canción de salvación, Su pueblo cantará.

CUANDO AQUÍ DE LA VIDA

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Cuando aquí de la vida mis afanes cesen ya, Y se anuncie bella aurora celestial; En las playas del cielo, mi llegada esperará; El Señor, con bienvenida paternal. Coro: Podré entonces conocerle, Y seguro en Su seno ya estaré; Cara a cara espero verle, Y con El, redimido viviré. ¡Oh, qué gozo incomparable, cuando pueda ver Su faz! Y en eterna vida esté con mi Señor, De Su lado ya nunca me podrán quitar jamás; Los halagos de mi fiero tentador. He de ver a mis hermanos, que en la tierra despedí, Cuando Cristo a Su presencia los llevó; Y aunque de ellos entonces, con dolor me despedí; Junto al trono de Jesús los hallaré. Al entrar por las puertas, de la célica ciudad; Me uniré con los salvados por la fe, Y del himno que alabe, de mi Dios Su Majestad; Los acentos, por los siglos sonarán.

CANTARÉ LA MARAVILLA

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MEDITAD EN QUE HAY

Cantaré la maravilla, Que Jesús murió por mí; Como allá de Su costado, Dio Su sangre carmesí.

Meditad en que hay un hogar, En la casa de Dios más allá; Donde van para siempre a gozar, Los creyentes en Cristo Jesús.

Coro: Cantaré la bella historia, De Jesús mi Salvador; Y con los santos en la gloria, A Jesús daré loor.

Coro: Más allá, más allá, Meditad en que hay un hogar; Más allá, más allá, más allá, En la casa de Dios más allá.

Cristo vino a rescatarme, Vil perdido me encontró; Con Su mano fiel y tierna, Al redil El me llevó.

Meditad en que amigos tenéis, De los cuales marchamos en pos; Y pensad en que al fin los veréis, En el alto Palacio de Dios.

Mis heridas y dolores, El Señor Jesús sanó; Del pecado y los temores, Su poder me libertó.

En que mora Jesús meditad, Donde seres que amamos están; Y a la patria bendita volad, Sin angustia, temores, ni afán.

En el día de la muerte, El Señor me guiará; En Su amor tan fiel y fuerte, Que jamás me dejará.

Reunido a los míos seré, Mi carrera su fin toca ya; En mi hogar celestial entraré, Do mi alma reposo tendrá.

369

NO HAY TRISTEZA EN EL CIELO

370

No hay tristeza en el cielo, ni llanto ni amargo dolor; No hay corazón angustiado, do reina el Dios de amor; La nubes de nuestro horizonte, jamás aparecen allá; El sol en Su gloria esplendente, Derrama Su luz celestial. Coro: El día feliz ya se acerca, En que el sol para mi se pondrá; Oh, que gozo será, cuando mire al Señor, En aquella hermosa ciudad. No hay aflicción en el cielo, ni pruebas existen allá; El alma que en Cristo reposa, segura en Su seno estará; No hay tentación en el cielo, ni sombra de muerte atroz, El Árbol de vida florece, Do fluye el río de Dios. Cuán dulce será en el cielo, pasadas las penas aquí; Volvernos a ver reunidos, con nuestros amados allí; Por todos los siglos eternos, que dicha inefable ha de ser, Estar en presencia de Cristo, Gozando eterno placer.

HAY UN LUGAR Hay un lugar do quiero estar, Muy cerca de mi Redentor; Allí por siempre descansar, Al fiel amparo de Su amor. Coro: Muy cerca de mi Redentor, Seguro asilo encontraré; Me guardará del tentador, Y ya de nadie temeré. Quitarme el mundo no podrá, La paz que halló mi corazón; Jesús por siempre me dará, La más segura protección. Ni dudas ni temor tendré, Estando cerca de Jesús; Rodeado siempre me veré, Con los fulgores de Su luz.

371

CRISTO EL HIJO DEL SANTO Cristo el Hijo del santo Dios, Hizo la salvación; Padeciendo la muerte atroz, Por nuestra redención; Por Su sangre pura, por Su muerte dura, :Sólo Jesús, sólo Jesús, hizo la salvación.: ¡Oh, que gracia nos reveló, Célebre Salvador! Compasión y bondad mostró, A todo pecador; Para los dolientes que le son creyentes, :Sólo Jesús, sólo Jesús, hizo la salvación.: Ni las lágrimas, ni el dolor, Pueden la paz ganar; Nuestro mérito es sin valor, No nos podrá salvar; Sin ayuda nuestra, por Su propia diestra, :Sólo Jesús, sólo Jesús, hizo la salvación.: Confiando en Cristo ya, Nuestro es el perdón; Nuestro Padre es el Señor, Hijos de Su adopción; Su favor tenemos, siempre cantaremos, :Sólo Jesús, sólo Jesús, hizo la salvación.:

372

AUNQUE EN ESTA VIDA Aunque en esta vida, no tengo riquezas, Sé que allá en la gloria tengo mi mansión. De mi alma triste, entre la pobreza, Sólo JESUCRISTO, tuvo compasión. Coro: Más allá del sol, más allá del sol; Yo tengo un hogar, hogar bello hogar, Más allá del sol. Así por el mundo, yo voy caminando, De pruebas rodeado y de tentación; Pero JESUCRISTO que me está probando, Me llevará salvo hacia su mansión. A todas las razas del linaje humano, Cristo quiere darles, plena salvación; También una casa no hecha de manos, Ya está preparada en la santa Sión.

373

DULCE COMUNIÓN

374

PRESENTIMOS LO GRANDE

Dulce comunión la que gozo ya, En los brazos de mi Salvador; ¡Qué gran bendición en Su paz me da! ¡Siempre siento en mi Su tierno amor!

Presentimos lo grande y hermoso, La promesa que Dios cumplirá; Y la patria creemos hermosa, Mas hallarnos allí ¿Qué será?

Coro: Libre, salvo, del pecado y del temor; Libre, salvo, en los brazos de mi Salvador.

Coro: ¿Qué será? ¿Qué será? Mas hallarnos allí ¿Qué será? ¿Qué será? ¿Qué será? Mas hallarnos allí ¿Qué será?

¡Cuán dulce es vivir, cuán dulce es gozar, En los brazos de mi Salvador! Allí quiero ir, y con El morar, Siendo objeto de Su tierno amor. No hay que temer, ni que desconfiar; En los brazos de mi Salvador. Por Su gran poder, Él me guardará, De los lazos del engañador.

Esperamos el gozo, y la gloria, La grandeza sin fin que tendrá; El mortal que ganó la victoria, Mas hallarnos allí ¿Qué será? Anhelamos el día esplendente, Que en la santa ciudad brillará; Por Jesús el Cordero inocente, Mas hallarnos allí ¿Qué será? Bien sabemos que llanto, ni duelo, Ni pecados, ni males habrá; En la casa de Dios en el cielo, Mas hallarnos allí ¿Qué será?

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AL PENSAR EN EL FIN

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EN LA TIERRA SOY UN PEREGRINO

Al pensar en el fin de esta vida fugaz, Me consuela pensar en Jesús; Ya me dio salvación y con ella la paz, Se cambiaron mis dudas en luz.

En la tierra soy un peregrino, Que camina al celestial hogar; Y alentando sólo en mi camino, La esperanza de irme con Jesús.

Coro: En Jesús tengo paz y no puedo temer, Que se acerque la muerte fatal; Porque al fin de esta vidaFugaz obtendré; Libre acceso al hogar celestial.

Coro: Lo veré, no tras obscuro velo, Cuando deje el mundo de dolor; Cara a cara verle solo anhelo, Y vivir guardado por Su amor.

Esto hace sentirme gozoso y feliz, Porque sé que he de ver a Jesús; Cuando deje esta vida de luchas y al fin, Me traslade al país de la Luz. Es mi dicha, mi gloria, pensar en el fin, De esta vida de pena y dolor; Pues así acabarán mis conflictos aquí, Y estaré con Jesús mi Señor.

Sólo estoy de paso en esta vida, Donde todo habrá de perecer; Busco aquella vida bendecida, Que con Dios eterna habrá de ser. ¡Cuán gloriosa habrá de ser la aurora, Que me traiga la postrer visión; Celestial, gloriosa y triunfadora, De Jesús en Su eternal mansión! Nada importa pues, mi desazones, Ni las pruebas mil que encuentre aquí; Sin por fin, ya rotas mis prisiones, Voy a estar con Quien murió por mi.

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EN LA MANSIÓN DO CRISTO En la mansión do Cristo está, Allí no habrá tribulación; Ningún pesar, ningún dolor, Que me quebrante el corazón. Coro: Allí no habrá tribulación, Ningún pesar, ningún dolor; Y cuando esté morando allá, Diré que no hay tribulación. Siento muy triste estarme aquí, Muy lejos, sí, del Salvador; Pues moran ya con Él allí, Los redimidos por Su amor. Perfecto amor encontraré, En el hogar del Salvador; Perfecta paz allí tendré, Mejor que la que gozo hoy.

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CUANDO MIS LUCHAS Cuando mis luchas terminen aquí, Y ya seguro en los cielos esté; Cuando al Señor mire cerca de mí, ¡Por las edades mi gloria será! Coro: ¡Esa será, gloria sin fin Gloria sin fin, gloria sin fin! Cuando por gracia Su faz pueda ver, Esa mi gloria sin fin ha de ser. Cuando por gracia yo pueda tener, Y allá en el cielo, morada de paz; Y que allí siempre Su paz pueda ver, ¡Por las edades mi gloria será! Gozo infinito será contemplar, Todos los seres que sí tanto amé; Más la presencia de Cristo gozar, ¡Por las edades mi gloria será!

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SI CAMINO POR RECTO SENDERO Si camino por recto sendero, Si trabajo cumpliendo un deber; Cuando el último viaje termine, Al gran Rey Admirable veré. Coro: Cuando al tramo postrer llegue al fin, De mi vida en camino hacia Él; Hasta entonces seré más feliz, Cuando el último paso yo dé. Si la historia de Cristo proclamo, Si perdidas ovejas hallé; Mostraráme el Señor Su grandeza, Cuando deje mi triste existir. Caros lazos habrán de ser rotos, En gemidos de angustia al partir; Más todo esto será pasajero, Cuando deje mi triste existir. Y si aquí he ganado la lucha, Esforzándome en obedecer; En el cielo, seré coronado, Cuando el último paso daré.

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YO QUISIERA EN MI HORA Yo quisiera en mi hora postrera, Al oír de mi dulce llamar; De mi alma muy blanca y pura, Y entregársela a Cristo Jesús. Coro: Tuya, tuya es mi vida, Tuya es mi alma; y todo mi ser; Como el barro, Maestro en tus manos, Haz de mi vida a Tu parecer. Al llegar a las bellas moradas, ¡Oh, qué dicha será para mí! Encontrar muchas almas salvadas, Que me diste Señor para Ti. ¡Oh, Señor Tu no cuentas las horas, Sólo esperas un momento más, Por amor a las almas perdidas, Para hablarles Tu Divino amor.

381

AL CANSADO PEREGRINO Al cansado peregrino, Que el pecho tiene fe; El Señor ha prometido: Con Mi brazo te guiaré. Con Mi brazo, con Mi brazo, Con Mi brazo te guiaré; El Señor ha prometido, Con Mi brazo te guiaré. Cuando cruel su lazo el mundo, Arrojare ante tu pie; Te dirá Dios, tu Refugio, Con Mi brazo te guiaré; Con Mi brazo, con Mi brazo, Con Mi brazo te guiaré; Te dirá Dios, tu Refugio, Con Mi brazo te guiaré. Si perdiste la esperanza, Como sombra que se fue; Oye atento la palabra, Con Mi brazo te guiaré; Con Mi brazo, con Mi brazo, Con Mi brazo te guiaré; Oye atento la promesa, Con Mi brazo te guiaré.

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LEJOS ALLENDE ESTA VIDA

383

Lejos allende esta vida, tengo mi dulce hogar; Veo a través de las nieblas, Su eterna luz brillar; Tengo fijado mi rumbo, aunque luchando voy; Es tempestuoso el mundo, pero seguro estoy. Coro: Sión, hermosa ciudad, donde mi hogar tendré; Vida eterna sin par, con Cristo gozaré; Santos gozan allá, con ellos moraré; Ya no hay tristeza, ni más muerte en mi hogar. En la presencia de Cristo, gozoso adoraré; Pasado todo conflicto, corona esperaré; Con los benditos y fieles, por siempre a descansar; Mi alma a unirse con ellos, Cristo a ensalzar. En toda vida hay tristeza, quebranto y dolor; Más tengo gran esperanza, Cristo es mi Salvador; Cual Él seré transformado, Su gloria yo veré; Cuando ya sea llamado, del mundo al cielo iré.

SOY PEREGRINO AQUÍ

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CRISTO PROMETE

Soy peregrino aquí en este mundo triste, No tengo hogar donde morar; Voy caminando con muchas dificultades, Pero en el cielo está mi hogar.

Cristo promete que un día, Feliz, llevarme a gozar; A un lugar tan precioso, Donde no hay que luchar.

Coro: He de llegar para vivir con Cristo Jesús mi Rey, He de sufrir para poder ganar; muchas coronas hay, allá en el cielo, Que si soy fiel, la tengo que ganar.

Coro: Hay un lugar tan precioso, Hay un lugar más de amor; En donde cantan los santos, Siempre del buen Salvador.

En medio del dolor siento el amor de Cristo, Que me hace amarle más y más; Es una bendición llevar la cruz de Cristo, Allá en la gloria he de vivir.

Cuando yo andaba en el mundo, Sin consuelo en mi dolor; Ahora soy muy feliz, Tengo promesa de amor.

Hay un gran resplandor que allá me espera, En mi hogar, mi dulce hogar, Donde dolor no habrá, ni más tristeza; Todo es un gozo espiritual.

Yo sé que esta preparado, Una mansión celestial; Para que canten los santos, Siempre del buen Salvador. Cuando padezco en el mundo. Muchos se burlan de mí; Viene el día en que terminan, Todas mis luchas aquí.

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LOS QUE AMAN AL SEÑOR Los que aman al Señor, Eleven su canción; Que en dulces notas de loor, Que en dulces notas de loor; Ascienda en su mansión , Ascienda en su mansión. Coro; A Sión caminamos, Nuestra mansión, la gloriosa; Cantando todos marchemos, De Dios a la bella mansión. Que callen los que a Dios, No anhelan conocer; Mas canten todos a una voz, Mas canten todos a una voz, Los hijos del gran Rey; Los hijos del gran Rey. Cantemos con fervor, Dejando de llorar; Vayamos libres de temor, Vayamos libres de temor, Al más feliz hogar; Al más feliz hogar.

386

LA SIMIENTE TAN PRECIOSA

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TAL COMO SOY

La simiente tan preciosa sembraremos, En los campos del Señor, del Señor, Esperando que la tierra sea buena, Dando frutos; para gloria del Señor.

Tal como soy, sin más decir, Que a otro yo no puedo ir; Y tu me invitas a venir, Bendito Cristo, vengo a Ti.

Coro: Trigo soy, trigo soy, del granero, del granero, Del Señor, del Señor, Por la sangre de mi Cristo Y el poder de JESUCRISTO, A Su granero yo voy.

Tal como soy, sin demorar, Del mal queriéndome librar; Me puedes sólo Tú salvar, Bendito Cristo vengo a Ti.

Los trigales del Señor son muy hermosos, Alabemos al Señor con amor. Por doquiera la semilla está siendo esparcida, La cosechará el Señor. Los graneros del Señor son muy hermosos, Vamos al trabajo de Su labor, Vamos los que trabajamos y no nos avergonzamos, De los campos del Señor. La cosecha ya se acerca en el cielo, De los campos del Señor, del Señor, Aunque la cizaña crezca juntamente, Con el trigo: “Tú la apartarás, Señor”.

Tal como soy, en aflicción, Expuesto a muerte y perdición; Buscando vida y perdón, Bendito Cristo, vengo a Ti. Tal como soy, Tu gran amor, Me vence, y con grato ardor; Deseo servirte, mi Señor, Bendito Cristo, vengo a Ti.

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LLEGÓ EL MOMENTO Llegó el momento de la triste despedida; Y sollozando, nos diremos el adiós; :Sólo confiando, que al fin de esta vida; Todos unidos, nos iremos al Señor.: Y si aquí ya no nos fuera posible, En esta tierra volvernos a mirar; :Sólo confiando en aquella voz audible, Que nos promete reunirnos más allá.: Que Dios bendiga a mis amados hermanos; Que juntos vamos en peregrinación; :Seamos fieles, que si perseveramos; Allá con Cristo, corona nos dará. Nos despedimos, con un amor profundo, De inefable, confianza en el Señor; :Pidiendo a Dios, que nada en esta vida; Nos impida; recibir el galardón.

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¡ALELUYA! SALVO SOY ¡Aleluya! Salvo soy, Con Jesús al cielo voy; Cantaré con gozo hoy, ¡Aleluya! El Señor me perdonó, Todo el mal que hice yo; Mi alma de su paz llenó, ¡Aleluya! Coro: ¡Aleluya! ¡Aleluya! Cantaremos con ardor, Este año al Señor; ¡Aleluya! ¡Aleluya! Gloria a Dios por Su amor, ¡Aleluya! Se enoja satanás, Porque no le sirvo más; Ni le serviré jamás, ¡Aleluya! Dios conmigo estará, Nunca Él me dejará; La victoria me dará, ¡Aleluya! Ven amigo a Jesús, Pues por ti murió en la cruz; El del mundo es la Luz, ¡Aleluya! Padeció por ti dolor, El bendito Salvador; Hoy te llama con amor, ¡Aleluya!

390

QUISIERA EN ESTE AÑO

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YO QUISIERA CANTAR

Quisiera en este año, Servirte oh Salvador; Quisiera tener consuelo y solaz, Por siempre contigo mi Señor; Estar muy feliz viviendo en Tu amor. Rodeado de resplandor.

Yo quisiera cantar sin cesar y honrar, A Jesús, mi amado Salvador; Quien me hizo pensarQue debía de dejar, Para siempre la senda del error.

Coro: Ayúdame Señor te ruego, A servirte un año más; No dejes Tu que el enemigo, Robe mi felicidad.

Coro: ¡Mi Salvador, mi Salvador! Te alabo, mi Rey y Señor.

Quisiera servirte siempre, Gozar de Tu comunión; Seguir caminando contigo Señor, Gozando de Tu gloriosa paz; Nunca dejaré de amarte mi Señor; Ayúdame a serte fiel.

A Jesús acudí el perdón recibí, Y ahora feliz estoy en Él; El me dijo: “Ten feQue contigo estaré, Y de toda maldad te guardaré”. Serviré a Jesús caminando en Su luz, Y gozoso con Él yo viviré; Él me da protecciónY gratuita salvación, En la lucha victoria me dará.

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NO TE DE TEMOR

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CUÁN DULCE EL NOMBRE

No te de temor hablar por Cristo, Haz que brille en ti Su luz; Al que te salvó confiesa siempre, Todo debes a Jesús.

¡Cuán dulce el Nombre de Jesús, Es para el hombre fiel! :¡Consuelo, paz, vigor, salud, Halla el creyente en Él!:

Coro: No te de temor, no te de temor, Nunca, nunca, nunca. Es tu Eterno Salvador, Nunca, pues, te de temor.

Al alma herida fuerza da, Y calma el corazón; :Al alma hambrienta es cual maná, Y alivia su aflicción.:

No te de temor hacer por Cristo, Cuando de tu parte está; Obra con amor, con fe y constancia, Tus trabajos premiará. No te de temor sufrir por Cristo, Los reproches o el dolor; Sufre con amor tus pruebas todas, Cual sufrió tu Salvador. No te de temor vivir por Cristo, Esa vida que te da; Si tan sólo en Él por siempre fiares, Él con bien te sacará.

Tan dulce el Nombre es para mí, De dones plenitud; :Raudal que nunca exhausto ví, De gracia y de salud.: Jesús mi Amigo y mi sostén, Mi Rey y Salvador; :Mi Vida y Luz, mi eterno bien, ACEPTA MI LOOR.:

394

CANTAREMOS HOY, ALELUYA

395

UN AÑO MAS DE VIDA

Cantaremos hoy, aleluya, Nuestro ser la paz halló; Por doquier el honor daremos, A Jesús nuestro Rey y Dios.

Un año más de vida, Un año más se fue; Y hasta aquí decimos, “El Señor nos ayudó”.

Coro: A la lucha voy, con Jesús estoy, La victoria por fin dará. Con Su gran poder, no hay porque temer, A la gloria nos llevará.

Coro: Un año más de vida, Un año más se fue; Viene el Señor del cielo, Con Él me llevará.

Otro año más, cantaremos, Con nosotros Dios está; El fragor de la lucha se oye, La victoria Él nos dará.

Ya viene el año nuevo, Que el Señor nos da; Debemos alabarle, Y servirle en verdad.

Otro año más, cantaremos, Y el maligno correrá; Y el mal que nos ha causado, Por siempre se quitará.

El año de ayer se fue, Llevóse el dolor; Viene el día alegre, El regreso del Señor.

Otro año más, cantaremos, Con alegre corazón; Vemos ya sin igual victoria, Cuando Cristo nos llevará.

Ya pronto nos iremos, A vivir allá con Él; Y mientras aquí estemos, Debémosle esperar.

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¿A DÓNDE ME IRÉ? ¿A dónde me iré de tuEspíritu Señor? ¿Y a dónde huiré de Tupresencia? :Si dijere las tinieblas, Me encubrirán, Resplandecerá la noche, Alrededor de mi.: De ti no encubren lasTinieblas, ¡Oh Señor! Lo mismo te son lasTinieblas que la luz, :Tu me has examinado, Y conocido mi Señor, Y todos mis caminos, Los conoces Tú.: Mi sentar y levantar, Has conocido, mi Señor, Mis pensamientos TuHas entendido, :Omnisciente eres Tú, Y Omnipresente mi Señor, ¡Cuán preciosos oh Señor, Tus pensamientos son!.:

397

ALLÁ EN BELÉN Allá en Belén, cerca de Nazaret, Nació Jesús el Hijo del gran Rey. Así empezó Su vida mí Señor. No hubo lugar, para Él en el mesón. :No hubo lugar.: Para Él en el mesón. Pobre vivió Jesús en Su niñez, En un pesebre lo vieron yacer; Así nació, así también murió, En una cruz, por todo pecador. :En una cruz.: Por todo pecador. Siento tristeza ahora al recordar, Del templo el velo luego se rasgó, Dando a entender que la puerta se abrió; Para entrar así con mí Señor. :Con mí Señor.: Para entrar así con mi Señor. Ya no las aguas del río Jordán, Cristo es la Fuente para todo mal; Recuerda que la sangre que Él vertió, Tiene poder para tu alma limpiar. :Tiene poder.: Para tu alma limpiar.

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CRISTO A MI VIDA DIO

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EN BELÉN DE PALESTINA

400

Cristo a mi vida dio, lo más hermoso y sin igual, Puso en mi corazón radiante luz, paz eternal; No podré pagar jamás toda la felicidadQue a mi vida vino a dar. Soy feliz cerca de Él, Y espero lo mejor, La corona de justicia para mí.

En Belén de Palestina el Señor Jesús nació, Y después de treinta años; En la cruenta cruz murió. Pero vive para siempre, pues la tumba ya venció, Su Nombre alabaré.

Coro: Todo será hermosura sin par, Al contemplar Su rostro celestial; Cara a cara le veré y feliz admiraré, Y por la eternidad yo viviré.

Coro: ¡Gloria, gloria, aleluya! ¡Gloria, gloria, aleluya! ¡Gloria, gloria, aleluya! A Cristo doy loor.

Felicidad completa para mí todo será, Al vislumbrar la aurora celestial de mi Señor; Más será lamentación para aquelQue no aceptó la gran dulce salvación; ¡Oye bien! Pecador, esta humilde invitación, Pues quizá mañana tarde te será.

Es el Dios de los ejércitos en quien yo confiaré, Y con himnos de alabanza al Señor ensalzaré. El despide los relámpagos, mas nunca temeré, El es mi protector. Con ejércitos no gana sus victorias el Señor; Ni con fuerza lucha en contra de satán, el tentador. La potencia del Espíritu, ha dicho el Dios de amor, Es lo que vencerá.

A Abre mis ojos y veré, las maravillas Adelante cristianos marchemos a la lid Adelante los embajadores ¿A dónde me iré de Tu Espíritu? Aleluya que el Señor tiene grande ¡Aleluya! Salvo soy, con Jesús al Alma perdida que sin Cristo vas Al cansado peregrino que el pecho Al Cristo vivo sirvo y Él en el cielo está Al pensar en el fin, de esta vida Al que en busca de la luz, vague Al suelo vi caer una flor, que el Allá en Belén cerca de Nazaret Ama la Biblia que Dios nos ha dado Anhelo en las regias moradas vivir Años mi alma en vanidad vivió Aquí tu rostro puedo ver, Señor Aunque en esta vida no tengo riquezas A JESUCRISTO ven sin tardar, que A la victoria Jesús nos llama, va A los pies de JESUCRISTO, siempre A nuestro Padre Dios, alcemos A solas al huerto yo voy A Ti Dios mío en oración, con mi A tu mesa nos juntamos A Tu Palabra mi Señor, humilde vengo

73 272 218 397 274 390 329 382 223 376 293 355 398 222 224 358 28 373 336 130 72 17 98 74 13 26

Bellas palabras de vida, son las Bendito nuestro Dios, que nos ha

152 20

Cada paso que das, por la senda Canta, oh, buen cristiano, dulce Cantad el amor de Cristo, ensalzad Cantaré la maravilla, que Jesús Cantaremos hoy aleluya

193 192 269 368 395

B C

Cariñoso Salvador, huyo de la Castillo fuerte es nuestro Dios Cerca, más cerca, oh, Dios de Ti Clavado en cruz, Jesús murió ¿Cómo podré estar triste, y entre? Comprado con sangre por Cristo, con ¿Cómo puedes pecar? Con manto de grana, y caña en Su ¿Con qué pagaremos, el inmenso Con voz benigna te llama Jesús Concédeme Jesús poder, y gracia Confieso ahora mi vida pasada Creo en la Biblia, el Libro de redentor Cristianos todos, a prepararse Cristo a mi vida dio lo más Cristo el Hijo del santo Dios Cristo está buscando obreros hoy Cristo es la Peña de Horeb que Cristo es mi dulce Salvador Cristo guarda siempre puedo en el Cristo Jesús en la cruz murió Cristo Jesús herido fue, allá Cristo Jesús vino para morir, Cristo me halló errante y peregrino Cristo mi Cristo que indigno fui Cristo nuestro Jefe, nos lleva Cristo promete que un día, feliz Cristo quiere que tu vengas Cristo viene ya, en las nubes sí Crucificado por mí fue Jesús, Cual mirra fragante que exhala Cual pendón hermoso despleguemos Cual Roca fuerte es el Señor, Cuán dulce el Nombre de Jesús ¡Cuán gloriosa será la mañana! ¡Cuán glorioso es el cambio operado

76 123 77 27 227 242 294 357 92 295 258 226 125 62 399 372 228 356 78 265 41 29 30 267 111 278 385 296 345 46 19 225 261 394 54 243

Cuando andemos con Dios, escuchando Cuando aquí de la vida mis afanes Cuando Daniel fue echado al foso Cuando estás cansado y abatido, Cuando la Iglesia ha de salir Cuando la trompeta suene en aquel Cuando mis luchas Cuando oí esa voz amorosa, que me Cuando oyes la Palabra, puedes Cuando sopla airada la tempestad Cuando te quiero, cerca Tú estás Cuando tempestades surgen alrededor

127 367 194 110 206 55 379 244 339 275 263 166

¡Dad loor a Dios! Himnos elevad Dejo el mundo y sigo a Cristo Del agua de vida, ¿Quién quiere Del bello hogar estoy distante Del santo amor de Cristo, que Después de la tormenta, viene la De Cristo cada día quiero De Jesús no escuchas tierno De la casa del padre se fue, tras De mi tierno Salvador, cantaré Día de victoria, y gozo celestial Día feliz cuando escogí Día glorioso será para todos, los Día tan grande no puedo olvidar Digno es el Cordero que inmolado Dios bendiga las almas unidas Dios nos ha dado promesa, lluvias Dios os guarde en Su santo amor Divino compañero del camino, Tu ¿Dónde estarás en la eternidad? Dulce comunión la que gozo ya Dulces melodías cantaré y alabanzas

34 71 338 196 283 99 211 324 197 257 56 280 57 238 2 365 79 364 93 288 374 155

D

E El amor de Dios siento en mi El buen Pastor al verme, perdido El Evangelio santo, anuncia al El grande amor de mi Jesús, por El mundo es un desierto, que agua El mundo no es mi hogar soy El oro y la plata no me han El que hizo tierra, cielos y mares El Salvador Jesús por mí murió El Señor es mi Pastor El Señor Jesús esta llamando El sol se va ocultando tras los Embajador que a Cristo representas En Cristo feliz es mi alma En Belén de palestina En el principio el era el Verbo En JESUCRISTO hay una fuente En el seno de mi alma una dulce En el valle florece la rosa, la En la célica morada En la vergonzosa cruz En las aguas de la muerte, sumergido En las olas inmensas de embravecido En la mansión do Cristo está En la tierra soy un peregrino, que En medio de mortal dolor, la En mis angustias me ayuda Jesús En pecado y temor, el Salvador En rudo prestado pesebre se vió En Su profundo amor, por mí el Eran cien ovejas, que había en el Eres combatido por la adversidad Escucha pobre pecador, en Cristo Estoy agradecido Señor, porque Tú Estoy contento que Dios me mostró

233 128 363 11 347 229 245 80 354 234 232 251 115 131 400 351 318 230 133 102 6 69 113 378 377 12 104 327 50 326 290 134 335 231 264

Es aquí donde debes creer, es aquí Es Cristo mi todo, en sombra Es el tiempo de la siega y tú Es JESUCRISTO mi todo, grato es Es Jesús el mejor Amigo, cuando ¡Eternidad! ¡Qué grande eres!

331 82 198 119 81 246

¡Firmes y adelante! huestes de la fe Fue profunda la paz que por fin Fuente de la vida eterna, y de

136 83 18

¡Gloria a Ti Jesús Divino! Gloria Grande gozo hay en mi alma Grande gozo Grata noticia viene Jesús Grato es contar la historia del

1 141 210 199 256

Había una ciudad, Halle un buen Amigo, mi Amado Hasta que venga nuestro Salvador ¿Has buscado la paz y divino solaz ¿Has hallado a Cristo tu buen ¿Has oído Señor mis oraciones? ¿Has tratado de llevar tu carga ¿Hay aquí Quien nos ayude, que Hay jardín memorable y hermoso Hay una senda que el mundo no Hay un lugar do quiero estar Hay un precioso manantial de Haz lo que quieras de mi Señor Hazme fiel el corazón, que te Hermano, dinos hoy algo de Jesús Hermanos fieles perseveremos en He leído que hay una bella ciudad, He visto el fúlgido rayo y oído

359 132 36 142 297 84 95 126 112 298 371 37 190 154 151 200 181 184

F

G

H

Hoy es tiempo de venir, y escuchar Hoy quiero obedecerte, Hubo Quien por mis culpas muriera

322 68 38

Los ojos de Jehová llenos de Los tiempos marcando están, palabras Los que aman al Señor, eleven su

361 332 386

Inmensa y sin igual piedad, murió Israel fue librado de servir,

39 165

JESUCRISTO por Su Iglesia viene ya JESUCRISTO que tanto me amaste JESUCRISTO vino al mundo a salvarnos Jesús el buen Pastor, mostrando Jesús es mi Refugio, en toda Jesús es mi Rey Soberano Jesús es mi Salvador Jesús es precioso mi buen Salvador Jesús está llamando, Jesús, Jesús, Señor y Rey Justificados por la fe, tenemos paz

334 40 348 180 208 85 214 14 350 341 143

La bondad de nuestro Padre, Largos años vague, por la senda La cruz de mi Cristo hoy puedo La fiel Palabra de Dios no yerra La merced de nuestro Padre, es un La Palabra hoy sembrada, hazla La poderosa mano de mi Salvador La puerta es Cristo para entrar La senda ancha dejaré, La simiente tan preciosa sembraremos, La tierna voz del Salvador, nos Lejos allende esta vida, tengo Libres estamos, Dios nos absuelve, Llegáronse los tiempos, cumpliéronse Llegó el momento de la triste Loor a Ti mi Dios, loor a Ti

149 139 42 137 122 135 276 299 144 387 300 383 129 352 389 35

Mansión gloriosa Maravillosa gracia, vino Jesús a Más cerca, oh, Dios de Ti, Más de Jesús deseo saber, más de Más y más en el amor de Cristo Meditad en que hay un hogar, Meditar en Jesús ha de ser mi afán Mejor es mi Cristo que el oro Me guía El con cuanto amor, me Me hirió el pecado fui a Jesús Me siento inundado de gozo, al ver Miles de dádivas vienen de Dios Mirad al Salvador Jesús, el Príncipe Mis culpas todas borró Jesús, con Mi cruz no será más pesada, Mi Dios y yo andamos, Mi mano ten, Señor pues flaco y Mi Padre es un Rey, tan rico y sin Mi Redentor murió en la cruz Mi Salvador en Su bondad, al mundo Mi voluntad a Ti la he rendido Muchas veces yo no sé que hacer

240 285 86 96 138 369 157 277 140 307 185 239 25 148 107 145 109 146 308 147 106 87

Nada sé para el mañana, desconozco Ni sangre hay ni altar, cesó la Noventa y nueve ovejas son, las que No es cosa nueva el Evangelio que se No hay tristeza en el cielo, ni No lejos del reino del cielo, hay No me dejes no me olvides No me es posible comprender, el No pudieron las entrañas, del

235 51 209 309 370 349 75 202 43

I

J

L

M

N

No quisiera recordar lo que antes No tengo cuidado, ni tengo temor No te de temor hablar por Cristo No te desmayes ten valor Nuestra vida acabará, cual las Nuestro Padre te adoramos, en el Nunca esperes el momento de una

250 215 393 88 320 44 236

Obediente a Tu mandato, participa ¡Oh, amor de Dios, su inmensidad ¡Oh, bondad tan infinita, hacia ¡Oh, cantádmelas otra vez, bellas ¡Oh, cuán dulce es fiar en Cristo ¡Oh, Dios eterno, Tu misericordia ¡Oh, hombre Tu Dios de Su gloria ¡Oh, jamás nos cansaremos de la ¡Oh, jóvenes venid, Su brillante ¡Oh, juventud cristiana ve adelante ¡Oh, no rechaces la verdad! ¡Oh, pan del cielo, dulce bien! ¡Oh, Pastor Divino escucha, los ¡Oh! Pródigo vuelve, ¡Oh, que Amigo nos es Cristo! El ¡Oh, Señor, recíbeme cual soy, ya ¡Oh, Señor, si el temor me domina, ¡Oh, yo quiero andar con Cristo, Oí a Jesús llamándome Oíd un son en alta esfera, en los Otro amigo no hay cual Cristo, Oye Señor yo te alabaré, quiero

45 366 286 305 260 266 310 201 204 153 306 53 89 268 90 353 203 171 346 160 217 213

Paso momentos, Paz con Dios busqué ganarla Paz, dulce paz, mi alma recibió Pecador, ven al dulce Jesús, y Pido Señor quites de mí toda maldad

33 219 150 304 100

O

P

Por amor se entregó el Salvador, Porque de tal manera, Dios a Su Por fe contemplo redención, Por fe en Jesús el Salvador, se Por la mañana yo dirijo mi alabanza, Por mucho tiempo yo vague sediento, Presentimos lo grande Preste oídos el humano, a la voz Pronto Jesús de los cielos vendrá, Pronto la noche viene, tiempo es Puedo oír Tu voz llamando, con Punzantes los abrojos del camino

360 328 252 303 118 301 375 311 61 182 156 216

¡Qué grande bondad! ¡Qué me puede dar perdón? Sólo de Que mi vida entera esté, consagrada ¿Qué vas a hacer con la gracia de Quisiera en este año, ¿Quién irá a laborar los campos? Quiero andar mi Señor, por Tu senda Quiero que habléis de aquel gran Quiero seguir las pisadas del Maestro Quiero ver a JESUCRISTO, mí ¿Quieres sobre el mundo ser un ¿Quieres ser salvo de toda maldad? ¿Quieres ver a tu Señor, viene ya?

337 302 262 362 391 173 212 170 172 124 105 321 63

Q

R

Redentor, oh que belleza, en Resucitó la nueva da, al mundo Rey de mi vida Tu eres ya Ropaje espléndido Divinal, es el Rostro Divino,

22 47 32 21 9

Salvador a Ti acudo, Príncipe Salvador bondadoso es el Cristo

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Santa Biblia para mí, eres un Santa Mesa para mí, eres memorial Santo, Santo, grande eterno Dios ¡Santo! ¡Santo! ¡Santo! Señor Seguid andando en la luz, fieles Seguid a Jesús, andad en Su luz Según Tu dicho al expirar, que Sembraré la Simiente preciosa, del Señor en Ti yo creo, Señor Jesús Tú eres mi Pastor, y a Señor mi Dios, al contemplar los Señor, cuán admirable, es Tu Divino Señor, te quiero expresar mi gratitud, Se aproximan los juicios, de Dios Siempre orad, muy pronto viene Siembra que hicimos del alba al Si acudes a Jesús, salvación tendrás Si al cruel enemigo temes combatir Si camino por recto sendero, si Si deseo oír de Cristo, Si del pecado anhelas el perdón Si en tu senda las nubes agolparse Si feliz quieres ser ven a Cristo Si las tinieblas te cercan, y Si la luz del sol se oculta, y Si tu cansado ya estás de pecar, Si tu hablas con Dios, Si tus pecados fueren muy rojos Solemnes resuenen las voces de amor Soberana bondad, Sólo espero ese día que Cristo vendrá Sólo en Jesús serás feliz Soy convertido por la gracia del Soy feliz en el servicio del Señor Soy la triste oveja, Soy peregrino aquí, en

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Soy peregrino aquí, lejos Somos soldados de Jesús, y siervos Sublime amor, es el amor de Dios Suenen dulces himnos, Susténtame Señor, susténtame Jesús

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Tal como soy sin más decir, que Tan dulce el Nombre de Jesús, sus Tan sólo sé, que Tu Señor, viniste Tan triste y tan lejos de Dios Tengo al Salvador conmigo, sin Tenme brillando Señor, tenme Tesoro incomparable, Jesús Amigo Te has desviado del buen Camino Te loamos, oh, Dios, con unánime voz ¿Te sientes casi resuelto ya? Todas las promesas del Señor Jesús, Todos juntos alabemos, al Señor a Todo aquel que oye vaya a Todo a Cristo, yo me rindo, Trabajad, trabajad, somos siervos de Tras la tormenta surge el arco, y Tuyo soy Jesús, ya escuché Tu voz Tu dejaste Tu trono y corona por mí Tumba de mi Señor, Cristo mi Cristo

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Una cruz levantada yo ví, Una fuente en el desierto fue Jesús mi Una voz del cielo se oye resonar Un año más de vida , un año más Un evento magno se aproxima, y Un día Cristo volverá, al ascender Un día que el cielo sus glorias Un grano de arena, Un hombre de noche llegóse a Jesús Un mensaje del Señor, aleluya

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V Vagaba en la obscuridad hasta Vagaba yo por el mundo, Ved al Cristo, Rey de gloria, es Veía en cruenta cruz Vendrá el Señor muy pronto a los Vengo a suplicarte mi Señor, que Venid a Mí, el Salvador dice a los Venid, cantad de gozo en plenitud Ven a Cristo, ven ahora, pecador Venid nuestras voces, Viene otra vez nuestro Salvador Voy contemplando por fe a Jesús

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Ya sea en el valle do peregrino Yo antes era un desvalido Yo confío en Jesús Yo conocí a Jesús Yo espero el día alegre, Yo halle un fiel amigo para siempre Yo quiero ser cual mi Jesús Yo quiero trabajar por el Señor, Yo quisiera cantar Yo quisiera en mi hora postrera Yo quisiera hablarte del amor Yo Sólo espero ese día en que Jesús Yo sólo espero ese día cuando Cristo Yo tengo un pastor que vive Yo vagaba en el pecado Yo vagaba mucho tiempo en el error

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