Hielo y Trueno Eterno Destino
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Hielo y Trueno: Eterno destino
By: LadyMischievous07 El tiempo había pasado casi letárgico desde su regreso a Asgard. La libertad de nuevo se abría delante de sus pies como una nueva oportunidad y !unto con ella Lo"i obtuvo algo más. Algo #ue $hor esperaba poder o%recerle como una %orma de resarcir todo el dolor y la agonía algo con #ue mitigar tanto su%rimiento y de!ar atrás el pasado para comen&ar de nuevo' (untos. $hor ) Lo"i. *ated: +iction M , -panish , *omance , $hor Lo"i , hapters: /7 , ords: /77111 , *evie2s: 31 , +avs: 44 , +ollo2s: /7 , 5pdated: May 67 , ublished: -ep 40 60/8, -tatus: omplete , id: /0767891 , ;en yaoi ';o #uiero alargar tanto las notas así #ue solo dirC #ue esperamos sea de su agrado esta creaci>n $hor"i hecha con amor %angirlero $2$' omo siempre a destacar #ue esto es un roleo pasado a ?c Drol?c y los roles son: $hor Centauro Zafro Lo"i una servidora' Advertencias: Lleva de todo un poco así como cierto
comportamiento suave por parte de Lo"i en ciertas partes de los capítulos siguientes mpreg Dpor esto el cambio de humor de Lo"i tico desenlace donde sus acciones mal encaminadas lo llevaron a su propia condena Kdín se había conmovido y otorg> su liberaci>n. +ueron semanas de acalorados debates con el conce!o al darse cuenta el monarca de #ue era -5 hi!o al #ue tenía preso. *ememor> cada parte de la historia cada momento #ue comparti> a lado de su %amilia
con su amada esposa y sus hi!os. -i bien Lo"i se de!> llevar por la ira por el odio y la locura no lo hi&o por gusto no lo hi&o por#uC así lo #uisiera en un principio. Lo"i obr> de acuerdo a lo #ue vivi> a lo #ue recibi> de su parte y Kdín lo entendía así. -u ignorancia arraigada por #uerer ser ciego a la verdad se rompi> al ver en sus recuerdos a#uel rostro de in%ante entre sus bra&os llorando implorando una oportunidad de vivir de e pero lo hi&o a medias. abía responsabilidad en los actos e#uivocados del hechicero pero a#uella responsabilidad era compartida con el propio adre de $odo. I ante a#uella certe&a el rey no podía evadir a su conciencia. Ahora el otoJo se presentaba en el reino eterno trayendo consigo brisas %rescas y ho!as secas de los árboles #ue iban cayendo con%orme la estaci>n se asentaba. A#uello bien podría ser un tipo de mani%estaci>n a lo #ue ocurría en a#uellos días en Asgard era una mani%estaci>n de sanidad de puri?caci>n de liberaci>n. Las ho!as secas se desprendían de las ramas siendo llevadas por la brisa otoJal hasta perderse en el hori&onte tal cual el o!iverde emetros haciendo un eco espantoso podía creerse vivo. I debería estarlo o no habría percibido su entorno alterarse ligeramente. -u mente se había sumido en constante introspecci>n sobre a#uella nueva oportunidad de dar los pasos correctos cuando una presencia tran#uila escondida detrás deLo"i un sabía grupode de#uien arbustos y árboles iuierda#ue disip> sus pensamientos. se trataba noalesue el sentir su mirada cálida ?!a en Cl provocando #ue su pecho resintiera un pincha&o entre alterado y pesaroso. -e vio tentado a girar el rostro para verle pero pre?ri> #uedarse en la misma posici>n sin decir ni hacer nada más #ue tomar un respiro pro%undo y disimulado para ir soltando el aire por la nari& con calma en busca de serenar su in#uietud. Algo le decía #ue las semanas de no cru&ar una sola palabra terminarían esa tarde cuando $hor se situara a su lado. . ada semana cada díasucada segundo #uesentía Lo"i había permanecido encerrado cumpliendo sentencia $hor #ue perdía una parte de sí mismo. Fe no ser por su madre su insistencia hacia su padre Lo"i no habría pasado de la noche cuando lleg> a Asgard. ;o pasaba día #ue no %uera a su celda a visitarlo al menos para saber #ue seguía ahí #ue no volvería a perderlo. uando %ue a Midgard a buscarlo a traerlo de vuelta a su hogar Cl se neg> lo desconoci> como hermano ni si#uiera por todo lo #ue habían vivido. En ese momento $hor no vio el rencor #ue cargaba el nudo #ue lo ataba y lo humillado #ue se sentía por saberse hi!o de nadie... uando ba!aba a los calabo&os solo podía ver un cuerpo sin esperan&as con los ánimos de vivir como los de una piedra. Oeía una e culpándose por ser #uien lo pusiera ahí. Le dolía de como a Cl nouna soportaba solo le dieraCl larehuía. espalda. adatenía ve& #ue trataba conseguir mirada #ue de su hermano Pui&á ra&>n en hacerlo Q#uiCn #uerría recibir al responsable de su encierroR $hor había actuado con%orme las leyes de Asgard pero sin preguntar por su decisi>n misma #ue no era suya a ?nal de cuentas era de su padre. l orden> la condena. -u hermano habría estado me!or en otro lugar cual#uier desierto era me!or #ue el cubículo donde debía pasar el resto de la eternidad. Lleg> el punto donde ambos eran unos completos en +rigga y $hor habían apelado a la clemencia de su rey en espera de una respuesta. $ard> previsto pero el hechicero había sido liberado y a pesar demás #uetiempo $hor sedel alegraba con locura su madre le advirti> #ue no se acercara por el bien de ambos. Lo"i no estaba en las condiciones de #uerer hablar ni si#uiera con ella. El o!ia&ul debi> resignarse esperando el día #ue su hermano #uisiera abrir la puerta de su habitaci>n y salir. +inalmente ese día lleg>. $hor supo #ue tal ve& era hora de entablar conversaci>n' 5na de?nitiva. El n>rdico sigui> a una distancia prudente su paso entre el reino y por entre los !ardines. $al ve& huiría con esa oportunidad tal ve& se ale!aría de #uienes lo hirieron. -i iba a hacerlo no lo detendría pero sí #uería despedirse. on esa idea en mente $hor lo sigui> hacia el vie!o roble Lo"i se había detenido ahí para llevarse antiguas memorias #ue valía la pena conservar. -e acerc> con cautela pero sabía #ue Lo"i ya lo había divisado por lo #ue sali> de su sigilo y camin> hasta #uedar %rente a Cl. . Los pasos calmos y livianos pronto emergieron de entre los arbustos dirigiCndose a Cl. Aun así Lo"i no se movi> ni hi&o amago de #uerer mirar o levantarse para irse solo permaneci> con la mirada inemago. Algo le in#uietaba pero no sabía c>mo llamarlo. ;o #uería saber c>mo nombrarlo a pesar de #ue en el %ondo pareciera #ue un susurro le di!era lo contrario. oco despuCs $hor yacía de pie %rente a Cl obstruyendo el panorama. El hechicero no se inmut> y tampoco se sobresalt> estaba cansado harto de lo #ue ahora era su vida: miseria y soledad. Ahora #ue lo pensaba estar muerto sería una me!or opci>n. Lástima #ue a#uellos mortales apenas si lograron atraparlo y ponerlo ba!o control hubiera esperado más de ellos así al menos le habrían dado una muerte digna. SIa se habían tardado en mandarte a vigilarme or ?n mencion> haciendo sonar su vo& parca sin emoci>n %ría como el hielo distante y pro%unda como un abismo. ;o tard> mucho para #ue al&ara la mirada y la posara sin titubear sobre la celeste. . Al #uedarse de pie esper> #ue Lo"i decidiera #uC hacer al tenerlo ahí. l mismo no sabía #uC pensar al poder estar cerca. abía pasado mucho tiempo tantas cosas tantos desarreglos y heridas #ue no sanaban #ue $hor bien pudo #uebrarse al escuchar las primeras palabras #ue le di!era el
hechicero. ero el n>rdico solo atin> a ba!ar la cabe&a y caminar a un lado para sentarse a su costado. SQEso piensasR Spregunt> sin despegar su mirada de la esmeralda A#uellos o!os no podían verse más tristes apagados avergon&ados por algo #ue no estaba en su control. $hor hubiera #uerido saber #uC decir para devolverle el brillo sin hacerle más daJo. . -igui> con la mirada el trayecto de $hor #uien ahora se sentaba a su costado iuierdo entre #ue le preguntaba a#uello. Ante la cuesti>n Lo"i volvi> a ?!ar su mirada al %rente con desgano. reer... Ia ni si#uiera sabía si creía en algo. K en alguien. SLo #ue piense está de más. -iempre ha sido así Qno te pareceR Fi!o sin alterarse solo lan&ando sus palabras como aces de su magia al trans%ormarlos en estacas. erteras y a?ladas. . S(amás estará de más para mí Fevolvi> doblando las rodillas y recargando sus antebra&os en ellas. -abía #ue Lo"i no le creería ni muerto aun así #uería de!arle claro lo #ue seguía signi?cando para Cl. omo el lugar de hermano menor #ue siempre ador>. . Las palabras del n>rdico lograron hacer #ue su ceJo se %runciera ligeramente. QPuC trataba de hacerR QEs #ue todavía mantenía esas burdas esperan&as en ClR QEn a#uel #ue pudo haberlo asesinado a sangre %ría sin reparar en nadaR SQPuC es lo #ue #uieres $horR Spregunt> sin más no mirándolo al hacerlo SQAcaso esperas #ue todo vuelva a ser como antesR Fe!a de ser tan ingenuo por una sola ve& Sentrecerr> los o!os mostrando %astidio desgastado SEl #ue estC %uera de esa celda no signi?ca #ue estC libre de mal. Aun no entiendo #ue hi&o a tu padre sacarme... -eguramente %ue con uno de sus eternos prop>sitos ocultos . SIo le pedí #ue te liberara Scon%es> sin cambiar su vo& Ahora $hor %ue #uien mir> al castillo compadeciendo a los guardias #ue mantenían o!o a las a%ueras. El roble estaba le!os de su vista pero no del territorio de vigilancia. Sl no te habría mantenido vivo desde #ue llegaste. Io #uería verte %uera de esa celda te hacía más daJo estar ahí guardándote el rencor y el su%rimiento solo para ti Sgir> el rostro para mirarlo de %rente SQEn serio crees #ue solo ba!aba por ba!arR Puería verte romper ese cristal #ue estaba as?sito de #ue tuvieras la oportunidad de decidir #uC hacer con tu vida. Eres y siempre serás mi hermano pero sC #ue no #uerrías escucharlo estando encerrado. Febía demostrarte #ue aGn me importas Lo"i . A pesar de percibir al n>rdico acercarse el hechicero permaneci> le!os de su vista escuchando sus palabras demasiado cercanas casi en su rostro. Q5na buena ra&>n para #uedarseR *ealmente no tenía ninguna. Qara #uC #uedarse en un lugar #ue ni si#uiera era su hogarR Qor #uC rodearse de
gente #ue solo cuchichea a sus espaldas #ue lo !u&gan y seJalan como si tuvieran derecho como si supieran lo #ue llevaba por dentroR ;o... Febía levantarse darle la espalda a ese #ue intentaba mostrarse como el hermano mayor de antaJo ignorarlo como si nada hubiera pasado. Febía buscar su propio camino le!os de todo y todos #uedar %uera sin de!ar rastro ale!arse de?nitivamente de $hor de su protecci>n de su calide&. ero algo lo detenía una cosa lo %renaba y lo hacía no moverse no apartarse. Qor #uC si no lo #uería cercaR Qor #uC si con tan solo ver en esa mirada celeste sentía desvanecerse su recelo y aumentar ese vacío en su est>magoR QPuC le hacía #uedarse cuando el to#ue de su mano en su piel #uemaba de una %orma desconocida y le causaba temorR $emor a una sensaci>n #ue !amás había sentido con tal %uer&a como en ese instante. S-i te importara no me habrías traído de vuelta sabiendo #ue Kdín iba a cobrarse con mi vida Sdiciendo a#uello de!> #ue sus esmeraldas %ueran impregnadas con reproche igual #ue sus palabras SFeberías de!ar de vivir en un cuento de hadas QsabesR ;o tengo un %uturo brillante no tengo un camino por el cual avan&ar con la gloria esperando delante' ace mucho se me acabaron las opciones igual #ue hace mucho sabemos #ue tG y yo no somos hermanos nunca lo %uimos' Así #ue ya de!a de %astidiar con lo mismo -e lo taladr> con la mirada cristalina sintiendo un pincha&o al decirlo al recordar al revivir el dolor de haberse descubierto alguien a!eno a #uien alguna ve& consider> su compaJero su amigo su todo. S-i me #uedo... es por#ue al menos sC #ue a#uí mi cabe&a seguirá pegada a mi cuerpo Fevolvi> girando el rostro con brus#uedad obligando a #ue la mano de $hor le soltara. Entonces se levant> y se ale!> un par de pasos dándole la espalda. . Sadre se ha regido por leyes y el conce!o. +ue benevolente solo por#ue madre se lo pidi>. $al ve& tengas ra&>n en #ue te habría dado muerte por#ue el pueblo lo pedíaSrespondi> en seguida poniCndose de pie y siguiendo a Lo"i #uedando a sus espaldas S;o negarC #ue %ue %atal pensar así pero yo en un principio no bus#uC #ue te con?naran a algo tan in!usto como morir $hor lo tom> del bra&o obligándolo a girar sin soltarlo. S-i vivir un cuento de hadas es tener esperan&a en ti con?ar y seguir creyendo #ue recuerdas lo #ue %uimos entonces sí vivo en uno... -C #ue me odias y lo entiendo. Estás en todo tu derecho... pero no me pidas #ue me olvide de lo #ue signi?cas para mí Lo"i Estaba desesperado por recuperarlo tan a%errado a una idea de estar !untos en la eternidad hombro a hombro lado a lado. $hor no se imaginaba sin su otra mitad sin su compaJero y c>mplice. Ese aprecio y a%ecto no eran solo
amor %raternal sus ganas de sanar su pasado iban más allá #ue una reconciliaci>n entre hermanos. . ronto percibi> al n>rdico levantarse para situarse detrás de Cl mientras seguía dando su punto de vista y le tomaba del bra&o para hacerlo en%rentarlo nuevamente. Lo"i no se resisti> pero tampoco le devolvi> una mirada conciliadora. -e mantuvo en silencio atravesándolo con sus esmeraldas %rías no #ueriendo tomar una sola palabra suya como verdadera. ;o #ueriendo volver a con?ar en a#uel por #uien alguna ve& hubiera dado la vida sin pensar. El mismo #ue por su causa le orill> a ese abismo de perdici>n y obscuridad por#ue todo %ue culpa suya... $hor era responsable Cl y su padre se habían encargado de soba!arlo lo su?ciente encubriendo su presunci>n ba!o la %achada de un cariJo ine a #uedar ante un desplante #ue no sabía si merecía pero tampoco negaba el recibirlo. Mir> de nuevo la espalda del hechicero la había visto por semanas detrás de un endemoniado cristal. -i Cl era #uien conocía me!or #ue nadie a Lo"i Qde d>nde venía esa in#uietud por no saber c>mo actuar ahoraR SMe rehGso a olvidarlos Shabl> con cora!e e impotencia Q>mo había pedido esoR $hor siempre %ue alguien muy visceral y emocional. Era un absurdo tratar de pedirle #ue olvidara algo cuando se le metía en el pecho ya %uera aprecio eno!o rabia o alegría. $odo lo #ue Lo"i
le provocaba era inamovible de su cora&>n aun#ue lo #ue en realidad sentía en esos momentos se parecía más a desespero y temor. Era miedo de ver al o!iverde ale!ándose más como al verlo caer por ese agu!ero negro como se había sentido al creerlo muerto. SQ;o te das cuenta #ue estoy dispuesto a #uedarme a tu ladoR Spregunt> casi como si %uese a?rmaci>n caminando lo su?ciente para #ue el pelinegro sintiera su presencia cercana de espaldas. SQK pre?eres #uemás vivamos en un silencio eternoR... -i tan aun seguro estás de no encontrar nada #ue rencor si de verdad no soportas el tenerme como hermano y no creas #ue yo estC siendo sincero #uiero #ue lo digas de %rente $hor lo gir> por el hombro derecho tomándolo de la nuca. SAsí... Fime #ue me odias. a&lo . err> los o!os con %rustraci>n cansada escuchándole arremeter de nuevo con a#uella necia convicci>n #ue no le permitía darse por vencido. Le sinti> aprordico en tanto su pecho se llenaba de pincha&os agudos y su respiraci>n se tornaba so%ocada. Kdiarlo... l #uería se lo de de %rente con atoda la certe&a y el aplomo de #ue %uera capa&#ue y solo asídi!era de!aría seguirlo todas partes como una sombra. -olo así podría hacerle desistir de luchar por recuperar lo #ue alguna ve& %uera entre ellos. SEres un necio... S di!o entre dientes SQPuC más esperas de míR Ia no hay nada $hor. ;o tengo nada... Lo #ue buscas es solo una sombra un vestigio del pasado #ue !amás volverá a ser el mismo aus> sintiCndose vulnerable y perdido. ;o soportaba estar tan cerca de Cl pero al mismo tiempo deseaba permanecer así. Feseaba sentirse seguro al menos por un instante. SQPuieres #ue diga #ue te odioR Ssonri> con sarcasmo pesaroso S-iempre buscando #ue se diga lo #ue #uieres escuchar. ues no no estaes... ve& odio Sle mir> en%adoso y desolado SEs desprecio es tortura es dolor... por#ue eres tan tonto como para pensar #ue aGn #ueda algo para este despo!o #ue ves ante ti... Febiste de!arme dentro de esa celda o permitido #ue mi condena a muerte se e!ecutara como cual#uier otro criminal... abría sido lo me!or para todos Ssus esmeraldas se habían cristali&ado ya
. SQPuCR... $G... Espera Q#uCR $hor no encontr> otro modo de responder a#uello. Lo había dicho como si %uera una verdad absoluta como si en serio no tuviera nada más #ue dar nada por lo #ue valiera la pena seguir vivo ni nadie por #uien hacerlo. Al n>rdico se le arremolin> el est>mago acentuando su to#ue en la nuca del hechicero estaba aNigido al igual #ue el otro. ;o podía perderlo de nuevo lo había traído de vuelta para evitar #ue eso ocurriera... Aun#ue tal ve& a#uella %ue la ra&>n del gran decaimiento #ue padecía Lo"i. QPuC hacer para darle otro prop>sitoR QPuC más podía decirle si cada palabra suya parecía mentira a sus o!osR Q*ealmente había sido en bene?cio su libertadR -i era verdad #ue no poseía más nada de su alma #uedaba. SQ;o se te ocurri> pensar #ue evitC ese castigo por#ue signi?cas todo para míR Qrees #ue no su%rí viCndote encerrado imaginándome #ue un maldito cristal nos separaría por el resto de la eternidadR Lo acerc> lo su?ciente para abra&arlo con %uer&a acariciando su cabello y reteniCndolo de la cintura temiendo #ue escapara. SAun#ue hubieses muerto habría ido a buscarte hasta los con?nes del cosmos donde %uera #ue tu alma vagara... Sdi!o contra el cuello del hechicero SIa no puedo concebir mi vida sin incluirte en ella. Furante estos meses me has hecho %alta Lo"i. e #uerido encontrar el modo de demostrártelo de tenerte a mi lado... por#ue eres lo más preciado #ue tengo #ue me hace soportar con la esperan&a de ganarme un lugar en ti de nuevo... . Lo"i se esperaba más intentos de $hor por ganarse su con?an&a por asentar #ue todo lo #ue decía cada palabra era verdad. Pue cada pensamiento estaba dedicado y lo incluía a Cl por ese eterno cariJo #ue siempre le tendría muy a pesar de todo. ero lo #ue no había previsto %ue a#uel abra&o #ue ahora lo tenía preso en su rega&o %renando cual#uier paso atrás #ue hubiese #uerido dar para volver a tomar su distancia. El pelinegro se sinti> aturdido con a#uella muestra de a%ecto una #ue no le era pro%erida por $hor desde hacía mucho tiempo demasiado como para poder recordar cuál %ue la Gltima ve&. abía olvidado lo #ue era sentir la calide& de su pecho en colisi>n con el suyo la seguridad de sus bra&os el compás de sus latidos #ue parecieran %undirse a los suyos. abía olvidado cuanto adoraba #ue lo abra&ara así cuando se sentía solo cuando su pe#ueJo mundo parecía reducirse sobre Cl y as?rdico novo& podía saber #uC pasaba por sus pensamientos cuál era su miedo verdadero a con?ar en Cl. SLa di%erencia es #ue no te de!arC solo *espondi> levantando su rostro mirando las esmeraldas de Lo"i con agobio aNicci>n y cora!e. $om> su rostro entre sus manos recargando su %rente a la suya. Febía con%esarle lo #ue las Gltimas semanas había terminado por crecer el su%rimiento #ue compartía con Cl las ganas de golpear el cristal #ue lo mantenía preso hasta #ue le sangraran los nudillos gritar por lo patCtico #ue se sentía al darse cuenta de su error saberse solo en el universo... Lo #uería más #ue a un hermano. Fe tanto dolor #ue había llegado a sentir $hor pensaba #ue ya nada podría renacer. -in embargo naci> ese sentimiento pro%undo escondido entre sus pensamientos hacia el o!iverde #ue se repetían una y otra ve& a lo largo de a#uellas semanas. SLo"i... Sacarici> sus me!illas permaneciendo con su %rente sobre la del hechicero SQle llamarías compasi>n a #ue me haya enamorado de tiR . Oanamente crey> #ue sus palabras llenas de desprecio lo harían ale!arse de Cl #ue lo harían darle la espalda como le pidiera #ue le mostrarían lo e#uivocado #ue estaba al seguir ahí buscando salvarlo #ueriendo acogerlo para devolverle su vida. ero bien #ue mal Lo"i sabía per%ectamente #ue $hor era terco por naturale&a y su aseveraci>n de mantenerse ?rme en su pensar en su anhelo se lo recalc> hasta el punto en #ue su pecho doli>. Qor #uC simplemente no se desvanecía entre sus bra&os y volvía a la reclusi>n de su alcobaR Qor #uC permitía #ue le tomara el rostro y viera a
travCs de sus o!osR Qor #uC su interior pedía a gritos #ue le mostrara un nuevo camino por el cual avan&ar !untos como antesR El hechicero no soportaba tenerlo así pegado a su rostro mirándole con a#uella me&cla de sentimientos #ue solo lo con%undían y atormentaban. re?ri> cerrar los o!os cuando $hor !untara ambas %rentes aun#ue pareci> temblar por el contacto de a#uellas manos sobre sus me!illas entre #ue %runcía entrece!o y tensaba la #ui!ada. Le suave había parecido to#ue trCmuloelcomo devoto una caricia delicada con algo un más #ue tan temía desci%rar. ero !usto esealgo más le %ue revelado en a#uella con%esi>n #ue le hi&o abrir los o!os con sorpresa y alarma ?!ándose de nueva cuenta en el n>rdico. -us esmeraldas se movían in#uietas dentro de a#uel pro%undo mar celeste buscando con insistencia escarbando con desespero no creyendo lo #ue acababa de escuchar. Le di!o #ue estaba enamorado... enamorado de Cl. Eso di!o y no había mentira en sus palabras por#ue de haber sido una %arsa Lo"i se habría dado cuenta y no estaría asustado. $ampoco veía %alsedad en a#uel par de &a?ros cristalinos y transparentes y eso lo aterr> todavía más. SQPuCR S%ue lo primero #ue sali> de entre sus labios en un murmullo aNigido y descolocado SQPuC demonios estás diciendoR $G no puedes... Mientes mientes por#ue ya no sabes #uC más decir para intentar hacerme creerte Sdi!o negando buscando &a%arse del agarre de sus bra&os pero siendo contenido por $hor . ;o estaba seguro si decírselo planteado de esa %orma y con lo dolido #ue seguía el o!iverde había sido prudente. Lo #ue sí sabía $hor era #ue no estaba e#uivocado en revelarlo. Ahora más #ue nunca estaba seguro de lo #ue decía de lo #ue sentía de a #uiCn #uería en su vida y ese alguien era Lo"i. $enía miedo como nunca #ui&á estaba igual de aterrado #ue el hechicero pero no se arrepentía. Aun#ue percibi> el intento del otro por apartarse no le permiti> si#uiera dar un paso. Lo a%err> por la cintura con ambos bra&os inclinándose para mirarlo ?!amente. ;o se arriesgaría a perderlo de nuevo ni por el reino ni por adre de $odo ni por nadie. Así %uera el mismo Lo"i #uien se lo pidiera $hor lo seguiría. Suedes decir y creer lo #ue #uieras pero yo sC lo #ue siento... Srespondi> ante su negativa Sor más #ue decidas no escucharme te lo repetirC cuantas veces sea necesario para #ue vuelvas a con?ar en mi... $om> aire y pas> saliva para aclararse la garganta tomando luego el ment>n de su no,hermano ?!ando sus &a?ros en Cl y reconociendo su verdadera %aceta. S$e has convertido en parte de mi alma Lo"i... En mi mundo mi ra&>n de vivir... Puiero #ue te des cuenta de una endemoniada ve& #ue te amo .
;o... A#uello no podía estar ocurriendo. Febía ser un sueJo una alucinaci>n producto de su mente inestable. 5na pesadilla #ue el destino sembraba en los con?nes de su psi#ue con el Gnico ?n de atormentarlo de llevarlo más ba!o de lo #ue ya había caído. -implemente debía ser un engaJo #ue el mismo Lo"i trataba de alimentar de %orma inconsciente para seguir de pie como ese vie!o roble. Amor... Estaba petri?cado no comprendía c>mo era posible #ue $hor sintiera esa clase de a%ecto por Cl esa clase de amor #ue iba más allá de lo %raterno y #ue lo hacía mantenerse en pie de lucha para sacarlo de a#uella vil miseria. $enía miedo el hechicero tenía miedo de lo #ue eso pudiera signi?car para Cl. on la simple menci>n de lo #ue el n>rdico realmente sentía Lo"i su%ri> un colapso mental e interno como si hubiera estado parado sobre el hielo y de pronto se hubiera roto tragándolo y hundiCndolo deba!o de las aguas. Fe!ándolo sin aire atravesando su cuerpo como cientos de estacas haciCndole perder la noci>n del tiempo y el espacio de lo #ue era %also y verdadero a su %rágil percepci>n. -i temía a los sentimientos de $hor si les rehuía si le causaban sobresalto y a la ve& esperan&a... QEso debería ser llamado amorR -entirse culpable cada ve& #ue lo miraba más de lo permitido tener celos de Cl y por Cl buscar su compaJía en momentos de soledad sentir el cora&>n hinchado de orgullo y %elicidad cuando su entonces hermanosalía en su de%ensa por cual#uier motivo así %uera uno pe#ueJo e intrascendente... QEra por#ue Cl tambiCn pasaba por lo mismo desde antesR A#uello #ue nacía en lo más pro%undo de sus entraJas y se agolpaba en su pecho con violencia con %uego y anhelo con hambre de ser correspondido sin ser consciente de ello... No... No puedo creerte... No debo creerte... No quiero amarte... Ya no... Lo"i pensaba con desespero por#ue era pre%erible ver #ue era mentira por#ue nada bueno le pasaría despuCs de lo #ue hi&o y por#ue no #uería darse cuenta de %uese #ue todo ese odiolatodo a#uelderecelo toda%uerte esa iray #ue sentía por $hor en realidad reacci>n algo más pro%undo. Algo #ue sabía !amás sería suyo. ero ahora todo parecía estar saliCndose de su control entre más pasaba el tiempo y sus esmeraldas #uedaban perdidas en la mirada solemne del rubio igual #ue sus palabras retumbaban en su cabe&a con a#uel certero te amo. -inti> su ment>n ser al&ado provocando #ue su respiraci>n se tornara pesada. S;o es cierto... $G no me amas' ;o puedes amarme no #uiero #ue me ames UQ#uC no lo entiendesR@ Sdi!o entre un sollo&o apagado contenido y resentido %runciendo el rostro en angustia en%urecida SUOive tu vida le!os de mí@ UKlvida todo y no me atormentes más@ UQAcaso no es su?ciente para ti verme vacío como un títere sin almaR@ En ese instante el pelinegro subi> las manos sin dar previo aviso se liber> de los bra&os de $hor al abrirlos de modo agresivo y logr> apartarlo con un empu!>n al tiempo #ue daba un par de pasos atrás advirtiCndole con la mirada consternada #ue no se acercara.
S;o #uiero nada #ue venga de ti QentiendesR... ;ada... ;i si#uiera Cl mismo se lo crey> al decirlo con un par de lágrimas surcando sus me!illas pero aun así no se retractaría así como no pretendía #uedarse más tiempo ahí. -e gir> y comen&> a caminar rápido sintiendo #ue estaba de!ando atrás lo Gnico #ue podría darle sentido a su vida otra ve&. . uando las manos del o!iverde lo apartaron y Cste pretendía caminar de regreso al castillo de!ando todo a medias $hor %ue a alcan&arlo. or la %orma en #ue le había hablado sabía #ue sus palabras no concordaban con sus sentimientos esas lágrimas no eran %alsas !amás lo %ueron en Lo"i. S-C #ue no es verdad Sdi!o al aire El n>rdico se apresur> hasta llegar al pelinegro. ;o había avan&ado más de die& pasos cuando lo intercept> atrapando su diestra y girándolo con %uer&a aun#ue comen&> a resistirse. Lo inmovili&> lo más #ue pudo envolviendo su cintura y pegándolo a su pecho para #ue sus bra&os #uedaran atrapados. A pesar de sentir #ue Lo"i pretendía removerse y buscaba un modo de &a%arse $hor continu> e!erciendo presi>n para impedírselo. SLo"i necesito #ue escuches Shabl> tratando de sonar rígido aun#ue estuviera #uebrándose como el mismo hechicero Somo lo !u&gues ambos siempre hemos estado implicados en lo #ue le sucede al otro desde #ue Cramos niJos. -entimos vivimos su%rimos lloramos padecemos lo #ue pasa con el otro... A estas alturas ya debiste haberte dado cuenta de eso... -omos parte de un todo Lo"i. Pui&á la sangre no nos una pero sí lo hacen nuestras e. Al verte caer en el agu!ero negro al creerte muerto al ser separado de ti por una prisi>n... $odo me ha llevado irremediablemente a eso ;ot> #ue se de su golpear contra armadura pidiendo #ue lo soltara. -ecalmaba aventur>cansado a suavi&ar agarre pero su conservando su posici>n ?rme y pas> lentamente una mano detrás del cuello del hechicero #ueriendo verlo a los o!os. SPui&á nada es seguro en esta vida' Sdi!o mirándole el rostro aun#ue Lo"i seguía apartando la mirada SI tal ve& creas #ue me he vuelto loco... robablemente sí pero si dudas #ue yo sea la %uer&a #ue necesitas para encontrar de nuevo el camino me es%or&arC para probarte #ue no #ue en todo el cosmos yo soy el Gnico #ue te ve tal como eres y te conoce lo su?ciente para tener %e otra ve&... Fe eso estoy seguro . -us presurosos si lo llevaron un par de metros le!os-inti> cuando $horpasos ya estaba detrás apenas suyo rebatiendo y atrapándolo de nuevo. el !al>n en su mano derecha haciCndole %renar con brus#uedad su avance para luego volver a ser encerrado en a#uella prisi>n en #ue los bra&os del n>rdico se convertían. Aun así Lo"i busc> escapar de a#uel abra&o removiCndose como si %ueran espinas las #ue rodearan su cuerpo. Tolpe>
contra el pecho del rubio con los puJos manote> trat> de empu!arlo pero sus intentos %ueron en vano y más #ue hacerlo desistir lo Gnico #ue lograba era #ue $hor se empeJara en mantenerlo unido a Cl. -abiendo #ue no conseguiría nada el hechicero se detuvo comen&ando a escuchar toda esa con%esi>n donde una ve& más $hor le a?rmaba sus sentimientos donde buscaba hacerle recordar todo lo #ue habían vivido !untos como los inseparables hermanos #ue %ueron mucho de un sin encontrar la verdad #ue los separaba. I ciertamente !untos antes recrearon ?n de aventuras e historias. ompartían casi cual#uier cosa #ue pudieran imaginar: alegrías triste&as eno!o apatía dicha y miles de aspectos más. Lo #ue uno sentía el otro tambiCn y por eso cada ve& #ue la noche era perturbada por una tormenta ?era $hor llegaba a su habitaci>n sin necesidad de #ue le llamara por#ue sabía cuánto les temía a los truenos y los aces de lu&. $hor lo conocía de sobra igual #ue Lo"i sabía todo de Cl. Ambos siempre estuvieron conectados de alguna %orma #ue parecía ser imposible. Era un vínculo tan arraigado tan %uerte y sensible a la ve& #ue realmente parecieran ser dos mitades de una sola esencia. Eran dos partes de un todo... pero Lo"i se negaba a creerlo todavía. K me!or dicho se negaba a recordarlo. Mientras el n>rdico seguía hablando el o!iverde apart> la mirada. ;o deseaba tener contacto visual con Cl por#ue resultaría lo contrario de lo #ue #uería obligarse a mantener en pie. -i topaba ese par de &a?ros ahora simplemente sería su perdici>n. or eso aun#ue $hor levantara su rostro y e!erciera presi>n con su mirada luchaba con todas sus %uer&as para no caer así su pecho estuviera resintiendo la cercanía el ansia por #uerer decirle #ue si le prometía darle un nuevo sentido a su presente tal ve&... SFices conocerme me!or #ue nadie... Smencion> ba!o y %río todavía rehuyendo a la mirada celeste S-i lo hicieras sabrías #ue no se puede con?ar en alguien como yo. -i me conocieras lo su?ciente entenderías #ue estás cometiendo el peor error de tu vida tratando de salvar algo #ue hace mucho está perdido Lo"i devolvi> sus esmeraldas a $hor haciendo todo lo posible por no %racturar su escudo de indi%erencia a pesar de #ue estaba lleno de grietas. SEs la Gltima ve& #ue te lo digo... FC!ame tran#uilo. ;o necesito un prop>sito por#ue no tengo más deseos de seguir' QPuerías escucharloR ues ahí lo tienes t>malo y acCptalo como yo lo hice Sdi!o entre dientes con el sentimiento #ueriendo atravesar de nuevo sus orbes desgastadas . SQLe llamas tran#uilidad a #ue renuncie a de!arte perecer en el mismo abismo al #ue te arro!C a no hacer nada al respectoR ercibi> la mirada #ue Lo"i podía sostenerle y aun#ue leía en sus esmeraldas #ue no era lo #ue deseaba ni estaba dispuesto a su%rir otra ve& ya no hallaba #uC más decirle o recordarle. -i el propio hechicero vivía en la negaci>n no #uedaba más #ue de!arlo ir. ual#uier otro lo hubiera hecho
cual#uiera habría desistido desde el primer diálogo incluso mucho antes. ual#uiera habría dado la vuelta admitiendo #ue tenía ra&>n de!ándolo a su suerte en un reino #ue lo seJalaba y lo acusaba de monstruo. ual#uiera hubiese velado por interCs propio... pero $hor no. $hor no podía evitar ser terco y necio #ui&á esa era la ra&>n por la #ue nunca pudo hacer a un lado a Lo"i ni tampoco ignorarlo. Era su hermano menor lo sería. Aun#ue la historia para de sudeshacer srcen y había su%rido siempre esa di%erencia entre ra&asescuch> no era su?ciente el vínculo #ue habían %or!ado a lo largo de los aJos. Los recuerdos de su adolescencia !untos apoyándose de%endiCndose peleando por el otro le daban al n>rdico ra&ones su?cientes para sacri?car todo y arriesgarse. -igui> tomándolo del cuello sin despegar sus &a?ros atraído por una %uer&a e reduciendo el espacio entre ellos S$G #uieres #ue acepte algo #ue no e conmigo a mi lado sin preguntar... I tG hablas de un ser #ue #uiere ?rmar su propio e otro modo más #ue !untando sus labios a los a!enos con presi>n y por segundos prolongados. Era la Gnica %orma de demostrárselo. . Ante a#uella pro cambios positivos en el n>rdico #ue luch> a su lado cientos de batallas #ue cuid> su espalda y vel> por Cl cuando caía herido la %rágil barrera #ue Lo"i había levantado con su orgullo lastimado comen&aba a %racturarse y res#uebra!arse a peda&os. Lo escuchaba hablando de remediar el pasado %or!ar un nuevo %uturo donde pudieran estar !untos otra ve& pero de un modo distinto como dos personas #ue se aman más allá de cual#uier adversidad. $hor lo #uería a su lado por#ue lo amaba con verdad con certe&a. l #uería estar cerca de Cl devolverle su vida sus deseos de seguir. Q>mo luchar contra alguien a #uien !amás pudiste vencer en el campo de batallaR Q>mo ignorar esa sGplica en su mirada esa promesa de hallar un nuevo camino por el cual andar a la parR Q>mo hacer para #ue su cálido respirar no te to#ue el alma igual #ue su hablarR
El hechicero pronto sinti> sus lágrimas correr al tiempo #ue el rubio las secaba con sus manos en un gesto de ternura. A#uello no hi&o más #ue provocar #ue su ceJo se %runciera con pesar y nostalgia mientras su garganta se cerraba por completo. -in embargo lo #ue termin> por hacerle ba!ar la guardia y romper en mil peda&os a#uella barrera %ue el beso #ue $hor le diera sin más. 5n beso de labios presionados con ?rme&a y seguridad con intensi>n de recalcar todas y cada una de sus palabras. Lo"i apret> los párpados ante el contacto #uedándose inm>vil temeroso e incierto por lo #ue a#uel simple beso estaba provocando en su interior. $ambiCn lo amaba siempre lo hi&o siempre lo haría' . or esos segundos el tiempo se había detenido contra la corriente de lo natural. $hor mantenía ?rme su mano en la nuca del hechicero sin despegar sus labios. Lo"i estaba inm>vil #uieto sin seJas de correspondencia pero tampoco de recha&o. Ese detalle era la respuesta en sí misma para el n>rdico para saber #ue podía acogerlo de nuevo poco a poco con paciencia. Feseaba #ue creciera de nuevo en la calide& de sus bra&os su compaJía y sus besos. A pesar de #ue el camino podía ser borroso intra&able o predecible $hor no soltaría su mano no permitiría #ue regresara al sombrío pasado #ue se lo había llevado como al caer en el puente Bi%rost. ;unca !amás lo soltaría y si era su destino caer entonces caerían !untos sin nada #ue los separase. on esa determinaci>n el o!ia&ul movi> un poco sus labios abriCndolos sin e apenas la presi>n en la nuca y boca del otro pero con el ?n de concluir el beso. laro #ue hubiera deseado alargar a#uel contacto el primero como no-hermanos e íntimo #ue tenían o tendrían pero la conversaci>n no estaba cerrada. Febían aclarar todavía #uC pasaría en un %uturo #uC decisi>n tomaría Lo"i. . Lo"i aGn no podía procesar del todo lo #ue estaba ocurriendo. $hor seguía con sus labios sobre los suyos mismos #ue pronto se abrieron livianamente para asentar el beso y hacerlo más presente pero no yendo más allá de la presi>n e!ercida. Entre tanto a#uella mano ?rme permanecía tomando su nuca apretando suavemente casi como si %uese una imperceptible caricia con la #ue pretendiera transmitirle con?an&a. Era cálido tanto #ue a#uella capa de hielo #ue recubría su maltrecho cora&>n estaba derritiCndose de!ando al descubierto la %ragilidad de su alma la debilidad por sentirse protegido por sentirse amado de esa %orma #ue nunca esper> llegar a tocar si#uiera en un roce %uga&. $an %uga& y a la ve& interminable como ese beso #ue había ?nali&ado ya. Los labios de $hor se habían separado muy suavemente de los suyos apenas unos cuantos centímetros permitiCndole respirar su aliento tibio y algo tambaleante. -eguramente por la ansiedad puesto #ue Lo"i estaba igual. Pued> con una sensaci>n de calide& y adormecimiento en sus labios entreabiertos mientras su cora&>n resentía el palpitar acelerado y sus o!os
yacían mirando la boca en %rente suyo. Aun#ue pronto sus esmeraldas in#uietas se ?!aron en los celestes pro%undos. SQor #uCR Sindag> en un #uedo murmullo incierto SQ;o te das cuenta #ue esto no va a %uncionarR ay demasiadas cosas de por medio no deberías arriesgarte por algo #ue no es seguro... ;o por mi' Fi!o esta ve& con agobio considerando un poco el hecho de #ue si $hor le convencía con su pr>rdico tampoco podía sentirse totalmente tran#uilo pero con las palabras del$hor hechicero con sudesde %ormahacía de mirarlo y ese beso #ue culmin> con lo #ue sospechaba ya varias semanas: su amor por Lo"i tuvo la con?an&a su?ciente para de!ar hablar a su cora&>n. S-C #ue a veces es inevitable sentir terror a un cambio y a veces no sería el me!or escenario pero yo #uiero creer #ue es lo correcto Sacarici> su me!illa S... Es lo #ue debí hacer antes de verte su%rir . Me arriesgaré porque te amo… $al %rase cargada de una irrevocable decisi>n colmada de aplomo y seguridad llevaron un golpe seco al pecho de Lo"i #ue lo hi&o erdico mantenía en su bra&o descendi> hasta su cintura envolviCndolo despacio y cuidadoso no #ueriendo ser demasiado impetuoso al actuar. Aun así el pelinegro no podía evitar #ue el temor a descubrir un nuevo sentimiento entre los dos lo con%undiera y desorientara. ero había algo en su interior un susurro de anhelo y remembran&a #ue lo incitaba a de!ar #ue $hor se acercara #ue volviera a %ormar parte de su vida #ue lo incluyera en sus pensamientos por#ue eso era lo #ue necesitaba. $hor era su complemento su alma gemela su otra mitad a#uel con #uien siempre %orm> un todo y sin Cl... -in Cl solo era una parte incompleta. SAun#ue así hubiera sido nada habría cambiado el hecho de c>mo sucedieron las cosas Sre?ri> poco menos alterado sintiendo el roce de a#uella mano en su me!illa S;o estaba en tus manos impedirlo... Así me hubieras colmado de cariJo y protecci>n más #ue nunca... Las cosas habrían sido iguales'
. SQEso piensasR Spregunt> sin preguntar hablándole con ternura la más grande #ue era capa& de generar $hor no esperaba una respuesta llena de optimismo pero le hacía enormemente %eli& el hecho de #ue Lo"i por ?n le daría una oportunidad y tomaría la mano #ue le erdico sabía #ue pasaría y con?aba #ue sucedería en un %uturo no le!ano. Le sonri> ligeramente. En parte todo lo #ue había pasado era por su causa y sí se hubieran evitado todas esas triste&as habría sido un camino di%erente pero destinado a cumplirse por#ue ellos trascenderían como uno solo partes de un todo como hermanos #ue %ueron criados. SIo pensaba lo mismo... -olía creer #ue %ue parte del destino lo #ue ocurri> pero cuando te llevaron a los calabo&os supe #ue lo #ue hiciste %ue por mi causa... Fe una %orma u otra mi egoísmo te apart> y las demás acciones %ueron derivadas de eso Al decir a#uello tom> la mano derecha de Lo"i para a%errarla contra su pecho sin perder sus esmeraldas. S-C #ue en para borrar esos %antasmas... Es para darte lo #ue todos te negaron . or supuesto #ue eso pensaba. A pesar de #ue $hor le hubiera procurado más de #ue sus atenciones hubiesen sido me!or encaminadas para no despla&arlo sin ser consciente nunca estuvo en sus manos impedir el correr de los eventos #ue ya habían sido escritos centurias atrás. El n>rdico no estaba en condiciones de evitar lo #ue el destino tenía deparado por#ue aun#ue !amás se aventuraran a pisar (otunheim a Lo"i se le habría revelado la verdad de un modo u otro. Eso era lo #ue el hechicero trataba de hacerle ver. -in embargo sucedi> y hubo consecuencias %atales #ue casi terminan mermando la e su %rente a la del hechicero de nuevo #ueriendo transmitirle algo de %ortale&a buscando devolverle la esperan&a #ue a Cl parecía sobrarle. Puería salvarlo de su propia agonía y duda. SLo"i... Qestás asustadoR . -olo con escuchar a $hor a?rmarle una ve& más #ue con?aba en sus capacidades y #ue se arriesgaría a todo por Cl #ue lo apoyaría y estaría cerca en cada nuevo paso #ue diera Lo"i se permiti> el bene?cio de la duda. ;o descon?aba de $hor por#ue conocía su temperamento aguerrido !amás se daba por vencido nunca se detenía hasta conseguir su meta y algo le decía #ue esa ocasi>n no sería di%erente. or #uien el o!iverde dudaba era por sí mismo por#ue hablaba totalmente en serio cuando di!o no tener más ra&ones para continuar. Estaba tan desgastado emocionalmente cansado de cargar con tanta %rustraci>n tanta aNicci>n tanto odio #ue al ?nal sentía #ue ya no le #uedaba nada. El hechicero se creía vacío un recipiente roto para una e sin ser una pregunta realmente . El hechicero estaba colapsando por dentro percibiendo el rostro de $hor cada ve& más cerca del suyo cada ve& menos distante de sellar sus promesas con un nuevo contacto entre sus labios #ue seguramente sería el detonante de?nitivo para #ue cediera y se permitiera con?ar creer #uerer de nuevo a ese ser #ue rodeaba su cintura y lo envolvía en su rega&o. La respiraci>n a!ena chocando contra la propia dio por resultado #ue una llama emergiera de sus entraJas y se esparciera por cada parte de su cuerpo cada rinc>n oculto para brindarle ese calor y esa seguridad #ue tanta %alta le hacían. -u pecho se contra!o pero ya no por causa de angustia o desolaci>n como antes ahora se trataba de algo más esperan&ador como eso mismo: esperan&a anhelo un deseo de abrir su cora&>n y mostrarse tal cual era con $hor recibiendo a cambio ese amor latente #ue se le había negado por tanto. -in ser consciente coloc> sus manos sobre el cuello del n>rdico entrecerrando la mirada y ba!ándola para ver los labios gruesos tan pr>rdico pintaba delante así como anhelaba #ue Cste le transmitiera todo lo #ue sentía en ese instante' I !ustamente así lo hi&o. El rubio estaba hablándole con esas caricias de sus labios diciCndole una y otra ve& #ue no lo de!aría solo #ue permanecería velando por Cl #ue lo amaba y #ue por ello daría todo de sí para verlo de!ar atrás el pasado y empe&ar de nuevo. (untos como siempre debi> ser. omprender a#uello hi&o #ue Lo"i se #uebrara y empe&ara a llorar. 5n par de ríos salinos surcaban sus me!illas sin poder contenerse desembocando en medio del beso dándole un sabor amargo pero dulce a la ve& mientras #ue su pecho oprimía #uedas e el contacto más intenso más %uerte al tiempo #ue lo aprisionaba con mayor insistencia entre sus bra&os invitando así a Lo"i a ladear el rostro y su!etarse de su cuello. Buscaba sus labios con desespero como #ueriendo a%errarse de ellos con toda su alma como si ese beso %uera su Gnica oportunidad para escapar del abismo. Entonces el n>rdico sinti> las manos del hechicero rodearle por detrás de la nuca y sus labios abriCndose como si en esos simples gestos pidiera todo como al tomarlo del cuello tuviera de su d>nde sostenerse antes de caer y en esesibeso encontrara el tras%ondo e el beso teniendo la correspondencia de Lo"i. Era sencillo y limpio pero cargado de algo más #ue solo ambos podían comprender en su propio idioma #ue solo ellos sabían interpretar. -u mano iuierda via!> por la espalda arrugando el cuero al tiempo #ue movía sus labios. El beso #ued> entre caricias y lágrimas #ue seguía derramando el hechicero. A#uel beso sería el Gnico #ue le daría por esa tarde pero con ese bastaba para #ue $hor se diera cuenta de #ue podía arriesgarse. Ahora sabía #ue sí. %.%.%.%.%.%.%.%.% Notas fnales: Bueno Q#uC les pareci> este primer capítulo de la
serieR...omo saben de sobra#ue sus esta comentarios serána siempre recibidos aun#ue esperamos introducci>n la nuevabien vida de $hor y Lo"i les haya sido grata y aceptable n.n'-aludos y agradecimientos de parte de ambas roleadoras y si #uieren saber #uC pas> varios meses despuCs lo averiguarán dentro de poco en el siguiente capítulo '
Hielo y Trueno: Eterno destino
By: LadyMischievous07 El tiempo había pasado casi letárgico desde su regreso a Asgard. La libertad de nuevo se abría delante de sus pies como una nueva oportunidad y !unto con ella Lo"i obtuvo algo más. Algo #ue $hor esperaba poder o%recerle como una %orma de resarcir todo el dolor y la agonía algo con #ue mitigar tanto su%rimiento y de!ar atrás el pasado para comen&ar de nuevo' (untos. $hor ) Lo"i. *ated: +iction M , -panish , *omance , $hor Lo"i , hapters: /7 , ords: /77111 , *evie2s: 31 , +avs: 44 , +ollo2s: /7 , 5pdated: May 67 , ublished: -ep 40 60/8, -tatus: omplete , id: /0767891 , V rev
;e algo incierto aun#ue haciendo el es%uer&o por no darle demasiada importancia a pesar de #ue la tenía' I mucha. S(abalí y venado eso es muy bueno. -upongo entonces #ue no tendrás #ue dormir solo por no haber cumplido con tu hora de llegada Sde nuevo a la carga con el Gltimo es%uer&o por hacer #ue se olvidara de los benditos %rascos . S-í sí inmensos... Q;o es un !arabeR regunt> de nuevo ignorando el tema de la cacería inminentemente. Estaba decidido a averiguar #uC contenían esos %rascos y por#ue Lo"i simplemente no se lo aclaraba. QEstaría preparando uno de esos ungHentos especiales #ue usaban en sus sesiones privadasR Eso o solo !ugaba a las adivinan&as pero de inmediato descart> ambas. ;inguna de las dos opciones podría ser por#ue entonces el hechicero le hablaría en su locua& tono travieso y seductor más ahora lucía indispuesto. SI tampoco estás en%ermo... 5hm... El rubio lo medit> pero su cerebro no poseía el don de la deducci>n por lo #ue al ?nal resopl> algo derrotado. Aun#ue sigui> perseverante. S$endrás #ue e de hombros haciendo una mueca de insatis%acci>n mientras #ue tomaba algunos de los %rascos en sus bra&os y los depositaba en el mueble de p>cimas #ue tenía Lo"i al otro lado de la habitaci>n. ero algo de lo #ue $hor no alcan&> a darse cuenta era #ue deba!o de todas las botellas había un pergamino con la %>rmula de a#uellas p>cimas color ámbar. . Eso ya no estaba del todo bien $hor seguía preguntando indagando y acorralándolo al mismo tiempo. Fe haber sido un poco más astuto e insistente ya estaría de nueva cuenta sentado a su lado inclinado hacia Cl y mirándole ?!o dispuesto a sacarle todo de una %orma u otra. or lo #ue agradecía %ervientemente a todos los dioses #ue $hor %uera tan despistado y carente depor deducci>n motivos #ue-in le hicieron rendirse no encontrar respuesta sus propios medios. embargo eso no al #uería decir #uela hubiese desistido del interrogatorio ya #ue le había de!ado entrever su advertencia de #ue más tarde volvería a preguntar.
Lo"i estaba realmente nervioso hasta los huesos. Le de!aría tran#uilo por un rato pero sabía #ue en cual#uier momento sacaría el asunto sobre la mesa y esta ve& sí #ue no le iba a de!ar escapar. ;o hasta #ue tuviera su preciada respuesta. El hechicero le observ> ir acomodando los %rascos en el estante donde solía colocar sus p>cimas y alguno #ue otro material #ue necesitara tener a la mano percibiendo a leguas semblante -abía #ue debía decírselo despuCs de el todo era cosaincon%orme de los dos del algorubio. #ue tenían #ue tratar tarde o temprano y me!or temprano antes de #ue se notara lo #ue trataba de ocultar. -olo #ue no sabía c>mo hacerlo. or primera ve& en su vida Lo"i no tenía las palabras con #uC empe&ar. Estaba lleno de miedos inseguridades con%usi>n todo eso lo volvía vulnerable a la situaci>n más aGn al imaginar el actuar de $hor en cuanto se enterase. $hor lo amaba y era consciente de eso entonces no podría tomarlo a mal. iertamente !amás habían hablado sobre un tema tan delicado como el convertirse en padres simplemente por#ue ninguno de los dos tenía la necesidad de ello. K por lo menos eso era lo #ue el hechicero pensaba. ero el n>rdico no podría ser tan patán como para no hacerse responsable Cl tambiCn había tomado partida en la concepci>n y por lo tanto no podía echarle toda la culpa de haber terminado as"... QOerdadR Estaba considerando el soltarle la noticia de una ve& por todas pero el pánico le corri> por todo el cuerpo haciCndole sudar %río en el instante #ue not> el pergamino con toda la in%ormaci>n #ue podría delatarle. A cada %rasco removido el tro&o de papel #uedaba más e con terror y angustia el ir y venir de $hor sin si#uiera percatarse del papel... aun. El o!iverde #uería saltar de la cama y correr a sacar de vista ese maldito pergamino pero si lo hacía de esa %orma el rubio percibiría su premura y entonces si no tendría escapatoria. ens> entonces con rapide& y clavando la mirada esmeralda en el papel Cste comen&> a desvanecerse hasta #ue se hubo es%umado en el aire causando #ue Lo"i tuviera otro mareo. $anto por la tensi>n elevada debido al miedo a ser descubierto como por la acci>n %or&ada. . ara %ortuna de Lo"i $hor no había notado aun el papiro #ue delataba su condici>n estaba demasiado ocupado tratando de llegar por sí solo a una conclusi>n sobre los e uno de los breba!es en su mano de si#uiera su rostro en observ> de soslayo #ue Lo"i sepero habíaantes sentado y tenía acercarlo una manoarecargada su %rente tratando de e#uilibrarse con la otra para no a&otar contra el respaldo. Fe inmediato el n>rdico avent> el %rasco #ue se %ragment> al impactarse contra el piso y corri> hacia el pelinegro envolviCndolo en sus bra&os a tiempo.
SULo"i@ QPuC sucedeR Q;o me habías dicho #ue no estabas en%ermoR Slo recost> suavemente en la almohada tras Cl tomándole ambas manos despuCs S$engo #ue llevarte con los sanadores ellos sabrán #uC hacer -e dispuso a cargarlo preocupado de #ue algo grave le llegase a pasar si no lo atendían pronto pero una mano lo detuvo de sus prop>sitos. . En cuanto todo comen&> a darle vueltas no le #ued> de otra más #ue mandar al demonio su ?ngida tran#uilidad y de!ar al descubierto su malestar llevándose una mano a la %rente mientras #ue la otra buscaba el e#uilibrio para no caer. Wnmediatamente sinti> los bra&os de $hor rodeándole protector al tiempo #ue le cuestionaba e intentaba tomarlo en bra&os para llevarlo con los ancianos sanadores. -in embargo Lo"i alcan&> a impedir #ue llevara a cabo tal acci>n al colocar su diestra sobre el pecho del n>rdico a modo de pararlo. S;o no hace %alta... Además' de nada servirá ir solo para #ue me digan lo #ue ya sC' E apenas con %uer&a y un tanto incierto escondiCndose todavía deba!o de la mano en su %rente. -u cora&>n estaba alterado ya no había modo de retrasarlo. . La en del rubio %ue primero de renuencia por la resistencia de Lo"i a ser llevado al ala de curaci>n pero luego se volvi> de con%usi>n con un ligero de!e de miedo. El hechicero acababa de decirle #ue no hacía %alta #ue lo en. $hor %runci> el entrece!o seriamente tom> al o!iverde por el ment>n luego de #ue el mareo se evaporara y le mir> pro%undo en sus esmeraldas. SFecirte... Q#uCR ;o sC absolutamente nada. Febes saber #ue si algo malo pasa contigo yo puedo ser de ayuda... Svolvi> a apretarle las manos ahora mostrando un semblante preocupado y agitado temiendo lo peor Sor todos los dioses Lo"i... QPuC está pasándoteR . El pelinegro se mantuvo en silencio mirando los &a?ros #ue le atravesaban con preocupaci>n. Ante esto no pudo más #ue acentuar su semblante angustiado moviendo los o!os con nervio dentro de ese mar celeste lleno de duda y con%usi>n. Las palabras de $hor le tocaron sabía #ue era sincero y #ue de ser necesario Cl ayudaría a solucionar cual#uiera #ue %uera su problema. -olo #ue esta ve& no podía hacer absolutamente nada para resolver algo #ue no estaba en sus manos ni si#uiera en las propias. Lo"i ba!> la mirada respirando con di?cultad entre #ue elegía el modo de revelarle la situaci>n. SQ*ecuerdas #ue un día cuando Cramos niJos' #ueríamos saber c>mo era #ue los !otuns e ba!o y pausado recordando a#uel momento de curiosidad in%antil S Bus#uC por toda la biblioteca hasta #ue encontrC un libro grueso con la in%ormaci>n completa de cada reino. Lo sa#uC a hurtadillas y te leí lo re%erente a los Tigantes de ielo Tuard> silencio por breves instantes sin atreverse a mirar a $hor. SAl llegar a lo #ue #ueríamos saber... decía #ue debido a #ue la ?sionomía de un !otun tenía ciertas cualidades especiales ellos podían ser capaces de dar vida' aun siendo varones. Eso sucedía cuando el cuerpo llegaba a una etapa de madure& interna y mental misma #ue permitía #ue se desarrollara a#uella condici>n para engendrar all> de nueva cuenta pasando saliva con nervio antes de clavar sus esmeraldas aNigidas y atemori&adas en esos &a?ros #ue no de!aban de mirarle con atenci>n. Sas>... +ue lo Gnico #ue pudo decir puesto #ue sentía la garganta cerrársele obstruida por el cora&>n galopante #ue se había trasladado a la parte superior de su pecho. . SQEhR La burda en de $hor acompaJada por un rostro baJado en desconcierto %ue la Gnica rCplica a lo #ue su pare!a le hubo comentado. ;o era una respuesta #ue ayudara a desvanecer su intriga sino #ue le parecía todavía más enredoso #ue aclaratorio. Esperaba #ue Lo"i le hablara de alguna en%ermedad e a#uella anCcdota sobre la ra&a !otun de la cual el pelinegro descendía acerca de la concepci>n entre su gente. uriosidad in%antil más #ue nada pero' Qa #uC venía el temaR El hechicero se veía nervioso petri?cado y casi congelado entre #ue le relataba el pasa!e. ero la respuesta era obvia. Lo"i le había con?rmado con la Gltima palabra #ue estaba en a#uel estado por#ue esa madure& %ísica y mental se había %or!ado y concretado al ?n dando %rutos esperados de cual#uier !otun !oven #ue esperaba reali&arse como padre. SQPuC pas#R ero un E;K*ME de%ecto #ue caracteri&aba al Fios del $rueno además de ser %alto de observaci>n era su bobería e incompetencia para no hilar las ideas. -e #ued> mirando al o!iverde ladeando su cabe&a y rascándola mientras le preguntaba por un acontecimiento cual#uiera o eso creía. -implemente no unía el conte al rubio con sus esmeraldas eR@ UP5E OA- A -E* AF*E TE;WK@ . La rabia con #ue Lo"i le atraves> lo in#uiet> pero no tanto como el escuchar la con%esi>n #ue di!o despuCs. on #ue ese era el meollo del asunto... El orden con #ue $hor reaccion> %ue el siguiente: rimero %ue poniCndose de pie entre #ue iba recorriendo con la mirada al hechicero. Luego su rostro se sonro!> como amapola sus manos empe&aron a sudar %río su cora&>n lati> aceleradamente y su poco raciocinio se evapor> en milCsimas provocando #ue su cuerpo se des,coordinara petri?cara y cayera de bruces al piso estampándose sonoramente de espaldas contra el mismo sin dar crCdito a lo #ue había oído. -us o!os permanecían mirando el techo con en de alguien #ue ve un %antasma o es espantado detrás de una puerta. abía #uedado bo#uiabierto sin emitir sonido ni mucho menos notándose preocupado por responder solo yacía tendido contra la madera barni&ada. . Wnmediatamente despuCs de verle levantarse con esa en descolocada retroceder y caer al suelo como si hubiera sido embestido por uno de esos !abalíes enormes Lo"i volvi> a mostrarse in#uieto y temeroso. -e acerc> con cuidado a la orilla de la cama sintiendo apenas pasar el e%ecto del mareo y se puso en pie avan&ando un par de pasos hacia el n>rdico. Lo mir> ?!o estudiando su rostro en shoc". ;o parpadeaba su respiraci>n era irregular y sus o!os estaban inm>viles totalmente abiertos y clavados en el techo. ;o le había dado una opini>n al respecto ni si#uiera una #ue!a grito nada y eso comen&aba a darle motivos para pensar #ue no aprobaría lo #ue había pasado. SQ$horR... QEstás bienR Spregunt> en un susurro acongo!ado %runciendo el entrece!o y sintiendo un nudo en el est>mago . Entre #ue recuperaba la ra&>n para contestarle $hor vio una imagen pasando como Nasha&o por su mente donde estaban Lo"i Cl y una pe#ueJa personita corriendo hacia ellos en medio del campo %avorito de ambos el mismo donde estaba a#uel roble gigante desho!ándose por el otoJo. -us o!os ad#uirieron un brillo parecido a cuando le daban un regalo de cumpleaJos su boca se curv> en una sonrisa enorme poco a poco plasmando aJoran&a y ligera eu%oria.
Empe&aba apenas a procesar a#uella noticia #ue le había caído como balde de agua helada pero de igual %orma era estupenda. lásico de $hor no ponerse a meditar sobre los e%ectos #ue tendría. Tir> su cabe&a aun recostado viendo c>mo el hechicero se situaba a su lado con los pies descal&os. S-i... si... Lo estoy lo estoy... Scontest> con ansias alegres sin dar una opini>n en realidad . Lo"i parpade> entre con%uso y todavía ansioso notando ese cambio de en en $hor. rimero no tenía un solo ápice de emoci>n y ahora sus o!os resplandecían y se miraban ensoJados y sus labios se habían curvado dibu!ando una sonrisa muy parecida a cuando le di!o #ue lo amaba la primera ve&. Aun permaneciendo de pie el hechicero tom> un respiro pro%undo al tiempo #ue agachaba el rostro y pasaba su diestra por entre su cabello negro peinándolo hacia atrás en tanto #ue hablaba con incertidumbre y pesar. SLo siento... Io... yo no sabía #ue... Bueno no creí #ue %uera a pasar ahora... En serio lo lamento' E a#uella disculpa entrecortada tratando de contener el llanto. ;o sabía ni si#uiera lo #ue estaba haciendo. Oio ese nuevo semblante a%able y hasta entusiasmado en el rostro de $hor pero aun así Lo"i sinti> #ue le debía una disculpa por lo rápido #ue había pasado. . ablando meta%>ricamente el n>rdico puso los pies sobre la tierra en cuanto escuch> la disculpa del o!iverde sumado a la con?rmaci>n de la noticia por su propia boca. A#uello lo desconcert> en cierto modo Qpor #uC la disculpaR Era magní?co asombroso Uincreíble@ $hor sentía una nueva llama recorriCndole todo el cuerpo con eu%oria y alegría !untas. El solo hecho de caer endel cuenta el pelinegro habíaunsido capa&inmerecido de albergar vida producto amor #ue de ambos era como milagro para un bobo como Cl. Más #ue ser un evento inesperado #ue lo de!aba anonadado era el giro #ue necesitaban ambos en sus vidas. $al ve& por eso el rubio notaba un aura especial cada ve& #ue le había hecho el amor a Lo"i en los Gltimos tres meses. Fesde el momento de la concepci>n y hasta dos noches atrás cuando %uera su Gltimo encuentro lo percibía distinto pero en un conte observando el llanto vecino de su pare!a y sin decir nada se#ue arrodill> a Cl posando sus manos rasposas por despuCs encima de la camisa cubría%rente el vientre acariciándolo embelesado para recargar su %rente sobre a#uel lugar y tomar una de las níveas manos a su alcance. S;o hay nada #ue lamentar... Es per%ecto... Pui&á creas #ue no estamos listos pero me es%or&arC por aprender a ser un buen padre para nuestro hi!o' Lo amarC como te amo a ti... ;o me importa lo #ue digan los nueve reinos... Io #uiero esto' -usurr> sin despegar su %rente del sitio donde ese pe#ueJo ser en desarrollo se encontraba alo!ado dentro del cuerpo de su alma gemela. . $an sumido en su agobio tortuoso se encontraba estando ya al borde de las lágrimas #ue Lo"i no %ue consciente de la acci>n #ue $hor iba a reali&ar hasta #ue acarici> su vientre con delicade&a haciCndole sobresaltarse y mirarle desconcertado... Lo estaba aceptando $hor aceptaba esa nueva etapa #ue se cernía sobre ellos. I el verle a%errarse a Cl recargando su %rente en su vientre en considerando el tiempo llevaban !untos el cual si su era bastante pero insu?ciente a o!os de los dos dado #ue seguían sin conocerse totalmente. -iempre encontraban algo nuevo en el otro y tal ve& era esa la causa de #ue no supieran coordinarse para la crian&a.
Aun#ue estaba al tanto de la situaci>n $hor se sinti> con el deber de brindarle seguridad y ser %uerte por los dos. Así #ue poniendo a#uello en práctica recarg> la cabe&a en el hombro del pelinegro sin de!ar de abra&arlo. S-hh... ;o te preocupes' Ssise> #uedo S(amás me molestaría por algo #ue %ue obra del amor. $e lo digo no importa lo #ue pase permanecerC a tu lado lo recibidos #ue cueste. por los tres me asegurarC #ue nuestro hi!o ycueste tG sean conOelarC el trato digno #ueyse merecen . En cuanto $hor se puso en pie y le envolvi> en ese abra&o protector Lo"i no hi&o más #ue a%errarse a Cl sin de!ar de llorar con tal sentimiento. A#uello le era sumamente in#uietante no era como #ue su carácter %uera muy inclinado al lado emotivo y sentimental. -u %uerte era mantener el temple en todo momento no #uebrarse con %acilidad a pesar de lo cruda #ue pudiese ser la cuesti>n. I sin embargo ahí estaba sollo&ando con angustia y miedo temblando cual niJo inde%enso por lo #ue estaba por venir. ;o le preocupaba el #ue dirían eso le tenía muy sin cuidado y tampoco se trataba de #ue $hor pudiera darle la espalda tenía claro #ue !amás pasaría. Lo #ue le realmente le consternaba era el hecho mismo de haber concebido. El hecho de saber #ue !usto ahora en ese preciso momento y desde varias semanas atrás había un pe#ueJo ser %ormándose en su vientre alo!ado en su interior y #ue iría creciendo con%orme pasaran los días. ;o dudaba del buen padre #ue seguramente $hor sería no descon?aba ni un poco al escucharle decir #ue se es%or&aría por#ue estaba seguro #ue así sería. $hor se en%rentaría contra #uien %uera y lo #ue %uera por ellos. Faría la cara incluso la vida misma por protegerlos pero de #uien no estaba seguro si podría con a#uello era el mismo hechicero. $enía miedo como !amás antes temía no estar listo para dar vida muy a pesar de #ue su cuerpo claramente di!era lo contrario. Estaba parali&ado ante la sola ser ideaalde ser alno menos la mitad cosa de capa& de lo #ueno debería. a un nuevo mundo era cual#uier y le aterraba ser un $raer buen padre o madre para ese pe#ueJo. S$engo miedo $hor Smusit> entre sollo&os con el rostro hundido en el pecho del n>rdico y a%errándose desesperado a su rega&o SEsto... no lo planeamos yo... yo no sC si pueda... . El Fios del $rueno escuch> atentamente la incertidumbre de su pare!a #uien se acurrucaba contra su pecho buscando protecci>n misma #ue le brind> rodeándolo %uerte con sus bra&os de guerrero para no de!arlo caer. Lo"i estaba aterrado por no saberse listo o creer #ue haría un mal papel dado #ue nunca habían mencionado el tema. iertamente así resultaba hablaban mucho de otras cuestiones pero cuando $hor sacaba alguna re%erencia respecto a tener descendencia el o!iverde resoplaba o se mostraba renuente. Lo poco #ue habían conversado termin> en una pelea donde Lo"i le aclar> al n>rdico #ue no pensaba tener hi!os no #uería correr
antes de andar y #ue Cl solo estaba viendo por sus propios deseos. Al día siguiente $hor se disculp> y !ur> #ue esperaría el tiempo #ue %uera necesario hasta #ue el hechicero se sintiera listo. $al acontecimiento ahora sí #ue parecía haber llegado de la noche a la maJana ni el mismo rubio se lo imaginaba. Ambos habían aprendido en su tiempo de relaci>n #ue tener %amilia involucraba más responsabilidades otro más serio de compromiso y es%uer&o. en ese instante de sunivel propia capacidad para ser padre no comoIantes cuando era $hor un dud> !oven&uelo #ue creía #ue todo era %ácil. ero esos %antasmas rondando su cabe&a se es%umaron tan pronto aparecieron. Fe acuerdo Cl no entendía todavía el mecanismo ni la ?siología de lo #ue conlleva un embara&o pero ?nalmente los conocimientos salían estorbando. Lo verdaderamente importante era #ue Lo"i había logrado concebir lo #ue signi?caba #ue el amor #ue se pro%esaban día a día tom> %orma y con este nuevo ser $hor nunca miraría atrás y estaba más seguro #ue nunca de #ue Lo"i era el indicado. Fecidi> ser %uerte y hacerle ver #ue no había por #uC temer a nada ni si#uiera a sus propios cuestionamientos de sí mismo. SOen conmigo' Lo tom> por la cintura y lo encamin> hacia su cama para sentarlo al ?lo de esta mientras Cl se ponía de rodillas y se acomodaba entre las piernas del pelinegro acunando su rostro con sus manos toscas. SMírame mírame Lo"i... Escucha no vas a hacer nada #ue sea malo con%ío en ti y sC #ue podrás llevarlo. Io estarC contigo en todo momento QsíR $ienes la %ortale&a #ue se necesita voluntad más ?era #ue la mía. as sido capa& del don de la vida una ra&>n más para seguirte amando con todas mis %uer&as $hor su!et> la mano derecha del hechicero con su iuierda entrela&ando sus dedos y besando el dorso de la pálida mano. S$e amo Lo"i. $ienes mi palabra #ue saldremos adelante . A pesar de #ue $hor le abra&aba con todas sus %uer&as en un intento por transmitirle seguridad y con?an&a Lo"i no de!aba de temblar no de!aba de llenar su cabe&a de cuestiones negativas y desmotivadoras. -u cuerpo estaba listo pero Cl no lo sentía así. -in embargo de no ser apto simplemente no habría ocurrido. Aun así sus pensamientos seguían en%ocados en no saber #uC hacer c>mo actuar c>mo cuidar de sí mismo de ahora en adelante. Le temía a los cambios #ue tendría mismos #ue ya venía presentando desde hacía tres meses en su comportamiento a veces estable y otras molestándose nada. cambios de?nitivamente se verían más intensos con%ormepor pasara el Estos tiempo igual #ue se haría notable su estado. ;o paraba de pensar en ello pero #ue el rubio le tomara con delicade&a y le llevara de vuelta al lecho para hablarle de a#uella %orma con toda la
seguridad del mundo con todo ese amor #ue siempre tenía para Cl ayud> a menguar un poco toda esa carga de tensi>n e incertidumbre. ;o estaba solo y $hor se lo estaba demostrando. A pesar de #ue Cl %uera #uien llevaría la parte más di%ícil durante la gestaci>n de ese pe#ueJo ser el o!ia&ul compartiría el camino hasta el ?nal. -ería su apoyo y su %uer&a su entere&a y paciencia. Lo"i le mir> enternecido con lágrimas aun resbalando poriuierda sus me!illas aun#ue de!ando de lado el llanto desconsolado. -u mano se al&> trCmula y lentamente la acerc> hasta ro&ar la me!illa del n>rdico al tiempo #ue esbo&aba una cándida sonrisa. (amás en su vida había estado tan seguro de amarlo como en ese momento. (amás había sentido #ue su amor se uniera con tal %uer&a como lo hacía ahora. S$ambiCn te amo $hor Scomen&> en susurro S$e prometo #ue... voy a hacerlo lo me!or #ue pueda. ;o será sencillo pero te !uro #ue voy a es%or&arme por adaptarme y... si tG estás conmigo entonces no temerC a nada' Sdeclar> apretando ese enlace entre sus manos #ueriendo re%or&ar sus palabras. . El rubio sonri> de lado sintiendo un %ulgor en el pecho alegrándose por las palabras del pelinegro. SEse es mi chico Era lo #ue deseaba escuchar de boca del propio Lo"i por#ue sería más a%able llevar el embara&o entre los dos poniendo ambos de su parte y el hechicero debía estar lo más calmado posible para #ue su estado no se alterara. Aun#ue $hor entendía #ue Cl llevaba la mayor carga de todas haría hasta lo imposible por alivianar el traba!o ya %uera con sus malestares matutinos o consintiCndolo con mimos para rela!arlo. S-C #ue lo harás bien estarC a#uí contigo. arC lo #ue sea necesario oment> más entusiasta poniCndose en pie y ayudando al o!iverde a recostarse de nuevo sentándose luego a contemplarlo entre #ue posaba su mano en el vientre de Lo"i acercando su rostro y con?riCndole un beso suave en seJal de su emoci>n. . El hechicero sonri> más animoso escuchando al n>rdico pro%erir a#uellas palabras en ese tono socarr>n terminando por llenar de con?an&a su interior. Wnmediatamente las lágrimas de!aron de brotar y ahora su alma reposaba mucho más tran#uila igual #ue Cl mismo lo hacía deba!o de las sábanas con $hor a su lado mirándolo en silencio acariciando su vientre y depositando un beso lleno de emociones y sentimientos en sus labios. Motivo #ue hi&o el cora&>n de Lo"i inundado esas mismas sensaciones #uesaltar $hor había logrado transmitirle conde a#uellas acciones. Era cierto #ue no sería para nada sencillo pero era consciente ahora de #ue tendría la %uer&a y entere&a necesarias la dedicaci>n y el valor para
en%rentar ese nuevo capítulo en su historia de vida. I teniendo a $hor consigo todo sería mucho más ligero y llevadero. El rubio se #ued> descansando el rostro sobre su vientre por lo #ue Lo"i llev> su diestra a la cabe&a de su pare!a comen&ando a acariciarle con parsimonia peinando las hebras doradas !ugando con ellas o acomodándolas detrás de su ore!a mientras #ue trataba de darle un rostro a ese pe#ueJo o pe#ueJa #ue dentro de algunos meses tendrían entre sus bra&os. SQ>mo crees #ue seráR Se mirando al techo con semblante meditabundo . (usto despuCs de terminar ese beso taciturno $hor recarg> su áurea cabe&a sobre el vientre de su pare!a sin de!ar de acariciar la &ona. -entía tanta %elicidad #ue crey> #ue moriría. $endrían un hi!o un pe#ueJo ser seguramente el más bello sobre los nueve reinos. Estaba sumido en esos pensamientos paternales cuando los delgados dedos del hechicero se desli&aron entre sus mechones dorados al tiempo #ue le preguntaba a#uello. Enyseguida anhelante %estivo. el n>rdico se incorpor> y le mir> con semblante S-erá hermoso más bello #ue cual#uier otro bebC en todo el cosmos. uede ser #ue sea parecido a ti con iris esmeralda y cabello negro pero herede la %uer&a y valentía de su padre Sasegur> con bravura golpeando el centro de su peto a modo de acci>n de cora!e . -in poder evitarlo el pelinegro rio con sana diversi>n ante el entusiasmo bravío de $hor. -ería e al instante la #ueda risa de su pare!a hasta #ue sus &a?ros se posaron en el resto de los %rascos ámbar.
Sor supuesto el hi!o de $hor Kdinson y Lo"i Lau%eyson debe ser magní?co. Wgual #ue sus padres Sse levant> de la cama sin decir nada y se acerc> a la mesilla para curiosear y observar los %rascos SKye Qahora si me dirás #uC son todas estas p>cimasR El ba!o intelecto del rubio era tal #ue cuestion> a#uello sin emo se sonro!ada por lo dicho. SULo"i@ S%ue todo lo #ue pudo decir con el cora&>n latiCndole a mil por hora y estrechando al pelinegro entre sus bra&os SI yo #ue pensC #ue era alguna especie de !arabe U#ue tonto soy@ Uero por supuesto@ Uor eso no me #uerías decir #uC eran y estabas nervioso@ . -u mirada apenas cru&aba con la del rubio cuando Cste ya estaba de regreso en el lecho abra&ándole con eu%oria y haciCndole arrugar el entrece!o un tanto inc>modo. ;o por el contacto cabía mencionar. Lo"i adoraba #ue $hor lo abra&ara y apretu!ara contra su cuerpo pero en ese preciso instante había un pequeño detalle por el cual debían ser menos intensos en cuanto a contacto %ísico se re%ería.
S$hor' $hor sabes #ue me encanta #ue me abraces y hagas lo #ue #uieras conmigo pero creo #ue deberías medir un poco tu entusiasmo. ay alguien #ue podría resentir tanto a%ecto en e tratando de hacerle notar #ue debía ser más delicado en sus acciones si #uería #ue todo estuviera en orden y no hubiera sustos innecesarios. . Wnmediatamente despuCs de escuchar a#uello la enorme sonrisa de ore!a a ore!a #ue $hor tenía plasmada en su rostro se borr>. Era cierto ahora no podía ser tan e%usivo como solía serlo aun#ue ello signi?cara abra&ar sin tantos ánimos al hechicero. omen&aba a sentir los cambios #ue conllevaban un embara&o uno delicado y el más importante #ue pudo haber presenciado. SULo siento@ ULo siento@ -e disculp> atemori&ado apartándose y revisando #ue Lo"i no estuviera herido lesionado o %racturado levantando su camisa en el acto para cerciorarse #ue el vientre segu"a en su lugar. SQEstás bienR Q$e lastimCR Sse dirigi> al bebC Serdona es #ue ser padre me emociona demasiado. Más aun sabiendo #ue estás creciendo dentro de Lo"i -onri> entre #ue hablaba con su hi!o por primera ve& mientras acariciaba la &ona donde le imaginaba resguardado ba!o la piel. . Al instante en #ue le hiciera saber al n>rdico #ue debía controlarse el pelinegro observ> c>mo $hor se separaba de Cl con premura en por su actuar impulsivo. Más a#uello #ue lo enterneci> casi hasta el llanto de nueva cuenta %ue verle al&ando su camisa entre #ue anali&aba con suma atenci>n y preocupaci>n el área del vientre para luego dirigirse con el mismo sentimiento alarmado al bebC dentro. Kbviamente el pe#ueJo ser apenas en estado de %ormaci>n no pudo emitir respuesta alguna. ero Lo"i siendo por el momento vocero ocial de su hi!o se encarg> de tran#uili&ar la angustia del rubio. SEstoy bien papá. Fescuida soy %uerte' ;o tanto como tG ahora pero lo serC algGn día' . $hor se incorpor> de inmediato escuchando el mensa!e del pe#ueJo siendo transmitido por Lo"i. Le con o!os le in#uiet> un pero despuCs dedu!o #ueobserv> a#uel llanto #uellorosos veía en eso las esmeraldas de poco su pare!a era producto de la %elicidad #ue compartía con Cl sobre albergar vida en su interior. I por lo #ue pudo apreciar #ui&á esa dicha era mayor en el hechicero #ue en el mismo n>rdico.
SEs a%ortunado de tener un padre como tG Sle di!o mientras limpiaba sus lágrimas con sus pulgares S;o dudes #ue serás en y el empeine. . Lo"i mantuvo su en suave y considerada con el rubio mirándole todavía con algunas lágrimas agolpadas en sus o!os notando en los &a?ros de $hor un brillo intenso y dichoso. -eguramente por la emoci>n #ue le caus> el escuchar a#uel mensa!e improvisado #ue diera a nombre de su hi!o. El pelinegro tambiCn e en calma respirando pro%undo y rela!ando sus emociones mientras escuchaba las palabras de aliento y con?an&a #ue $hor le pro%ería. Mismo #ue en un intento por compensar su e%usividad de momentos atrás y de paso mimarlo un poco empe&> a darle un dulce y concien&udo masa!e en todo su pie iuierdo. La sensaci>n era agradable y recon%ortante por lo #ue Lo"i e largo y pausado entre #ue cerraba los o!os y se de!aba llenar de atenciones. abía sido demasiada tensi>n durante todo el día así #ue realmente necesitaba un respiro de toda presi>n. Sreo #ue comien&o a dis%rutar estar embara,ado E con una liviana sonrisa divertida recargando la cabe&a en la madera detrás y entrela&ando sus manos sobre el vientre. . S(eh pues vete acostumbrando por#ue planeo consentirte y llenarte de amor los pr>modo. Me gustaría ayudar en todo lo #ue sea necesario Fecía el n>rdico destensando los tobillos y aNo!ando los e en tono divertido guiJándole un o!o sin abandonar el masa!e .
Smhmhm Qen serioR Q-erC el blanco de tantas atencionesR Fe?nitivamente esto va a gustarme *eplic> riendo con travesura conservando sus esmeraldas custodiadas por los párpados más arrugando livianamente el entrece!o cuando $hor le tronara un poco el tobillo derecho. ;ada inc>modo ni doloroso solo era la reacci>n a la acci>n placentera. SQPue te gustaría #ue %ueraR Q5n niJo impetuoso ocurrente y algo arroganteR QK una niJa elocuente inteligente y astutaR Sindag> tratando de hacer re%erencia al carácter de cada uno . SQPuC tal una combinaci>n de ambosR $alentoso inteligente astuto pero tambiCn intrCpido saga& con un to#ue de sarcasmo y un %ísico imparable. 5na adorable combinaci>n tuya y mía Sse seJal> a sí mismo con orgullo S *ealmente no hay prisa por saber a #uC gCnero pertenece... ero en cuanto haya indicios de #ue podamos saberlo me dirás QciertoR abl> primero elocuente pero despuCs con impaciencia alterada terminando el masa!e en los pies. SBien ya están. Masa!eados y sin tensiones . S5na combinaci>n de ambos Srepiti> ?ngiendo meditaci>n S5hm... Eso suena interesante. Mientras sea mi intelecto el #ue sa#ue me doy por bien servido -onri> amplio y socarr>n bromeando sobre #ue su pe#ueJo no heredara una capacidad menor en sapiencia #ue la suya obviamente #ueriendo molestar a $hor con ello. ;o para soba!arlo ni mucho menos solo a modo de !uego. Aun#ue lo #ue si iba totalmente en serio era #ue enseJaría a su hi!o a ser un rat>n de biblioteca igual #ue Cl lo %ue desde muy temprana edad. Le enseJaría a devorar todos y cada uno de los libros de las bastas bibliotecas del palacio. -e encargaría personal y pacientemente de educarlo como se debía. -e sentaría horas enteras con Cl o ella en #ue le naciera pero no solo en sus lecturas sino en todo lo demás. Wncluso le mostraría los me!ores trucos de magia y hechicería los #ue llevaban su sello por ser Gnicos en caso de notarle habilidad para el arte. Lo convertiría en un gran hechicero mucho me!or #ue Cl así como $hor le heredaría su gran destre&a en el campo de batalla y la empuJadura de armas. Ambos le de!arían lo me!or de cada uno para #ue su pe#ueJo lo per%eccionara. S$e dirC cuando sea el momento... -i es #ue te lo ganas Lo"i devolvi> abriendo los o!os en cuanto el masa!e termin> re?riCndose a darle a conocer el gCnero del bebC cuando %uera oportuno y pudiera saberse mientras clavaba la mirada !uguetona en esos &a?ros risueJos.
laro #ue tendría #ue hacer mCritos si no #uería enterarse hasta el ?nal del embara&o. . SBueno amo tu intelecto -ecund> su comentario notando el tono sarcástico y ligeramente condescendiente #ue Lo"i hablaba. En el %ondo o!ia&ul #uería #ue su hi!ocon heredara su le lento procesamiento de el ideas. ;otampoco despreciaba sus otros talentos como la %uer&a bruta y el gran estratega #ue había resultado ser en cuestiones bClicas pero debía admitir #ue en otros aspectos no era el más inteligente. Puien lo superaba en todo era el hechicero y su hi!o podría ser bene?ciado por la genCtica y ser el más mortí%ero guerrero de los nueve reinos invencible y con habilidades mágicas de temer. Enorgullecería a sus dos padres sin duda. Más luego escuch> #ue Lo"i le advertía #ue debía ganarse el saber la noticia del gCnero del bebC por lo #ue sus con!eturas paternales e idealistas con las #ue comen&aba a %antasear tuvieron #ue desvanecerse en su mente. Aun#ue todo pintaba a #ue no podría dormir esa noche imaginando de nueva cuenta todo lo #ue su hi!o o hi!a podría llegar a ser en el %uturo. SQFebo ganarloR $G dime #uC hacer y lo harC Fi!o como si no %uera gran cosa pero no por eso de!aba de in#uietarse. Era el padre legítimo muy !usto era #ue %uese el primero en saber #uC tendrían. . SAhm... ;o necesitas #ue te diga #ue hacer. $us acciones serán las #ue me digan a mí si te ganas el privilegio de saberlo antes de #ue na&ca *espondi> con ?ngida arrogancia al&ando el rostro y entrecerrando los o!os de modo retador. Era una broma por supuesto pero le encantaba retarlo para ver #ue tanto estaba dispuesto a hacer cuando #uería algo y estar en ese estado no iba a impedirle seguir desa?ando sus capacidades. Má la cabe&a con%ormándose con la respuesta del o!iverde. robablemente se trataba de una broma típica del mismo o tal ve& en verdad estaba hablando en serio. I si así era lo hacía con !usta ra&>n. A#uello era un asunto de mayor delicade&a por lo tanto Lo"i podría estar corroborando si $hor sería el padre #ue había prometido ser. SFalo por hecho Sasegur> cru&ando el bra&o derecho sobre su pecho y colocando el puJo sobre su cora&>n a modo de !uramento Sor cierto ahora #ue estamos discutiendo tCrminos y considerando el estado en el #ue te encuentras creo #ue sería conveniente... all> dudando por breves segundos. El tema #ue iba a sacar era espinoso y por ello debía irse con cuidado.
SFebemos hacer un anuncio o?cial %rente a todo Asgard . Al escucharle hablar sobre #ue deberían comunicar la nueva situaci>n por la #ue atravesaban el semblante despreocupado de Lo"i pas> a ser de total incertidumbre. ;o era #ue pensara en mantener oculto su estado ni tampoco pretendía permanecer encerrado en su habitaci>n hasta #ue el bebC naciera. Era consciente de #ue se necesitaba hacer el comunicado pero a#uello le in#uietaba más #ue nada por c>mo podrían tomarlo Kdín y +rigga. Apenas lograron aceptar y ver de buen modo su relaci>n ya #ue al haber sido criados ambos como hermanos no %ue %ácil #ue los reyes asgardianos dieran su bra&o a torcer. Especialmente hablando de Kdín. +rigga era amorosa siempre lo había sido y %ue la #ue más pronto acept> el #ue sus hi!os tuvieran una relaci>n e iertamente Kdín nunca le había dicho #ue aprobara su relaci>n con Lo"i desde el momento #ue ambos decidieron con%esar su romance en pGblico. El rubio crey> #ue lo desterraría o incluso algo peor pero solo %ue indi%erente pro?riCndole regaJos y reprimendas sin descanso por meses. Ahora solo se hablaban cordialmente y ba!o protocolo. -u comunicaci>n había decrecido signi?cativamente puesto #ue adre de $odo le repiti> innumerables ocasiones #ue como el príncipe de Asgard #ue era debía seguir el lina!e real y puro de los Kdinson no enrolándose con el hi!o de su peor enemigo. ero $hor de%endi> a Lo"i a capa y espada argumentando #ue nada lo haría cambiar de opini>n y #ue así lo planeaba el cosmos. El tema de la descendencia tambiCn %ue motivo de disputas por#ue Kdín !amás habría creído #ue ambos pudieran concebir. Al menos no como lograba hacerlo un autCntico !otun. ero el estado actual del hechicero sería rebate su?ciente para a?rmarlo y reiterar una ve& más #ue $hor no se había e#uivocado al elegir a su hermano.
SIo me encargarC de hablarle a padre de esto. $G pierde cuidado en cuanto estCs listo y ambos nos den su bendici>n saldremos al palco y lo anunciaremos . on a#uello #ued> poco más tran#uilo. or lo menos lo hablarían con Kdín de primera instancia y sería $hor #uien lo hiciera. El hechicero sabía #ue al n>rdico le aguardaba todo un debate acalorado pero estaba casi seguro de #ue al ?nal adre de $odo no se opondría a permitirles anunciarlo a los cuatro vientos por cada rinc>n del reino incluso %uera de Cste. Además bien podría ser #ue la llegada de un nuevo miembro en la %amilia lograra por ?n ablandar su cora&>n. -e decía #ue un bebC siempre trae dicha y %elicidad no solo a los padres sino tambiCn a los #ue les rodean. or lo tanto el rey no podría ser tan indi%erente a un pe#ueJo ser igual #ue no lo %ue con Lo"i cuando lo tom> entre sus bra&os y lo llev> a Asgard. Más tambiCn estaba el hecho de #ue ese niJo sería hi!o del suyo es decir su nieto. -ería una mínima parte de Cl y debía conmoverse por tal motivo. I si lo veía desde otro punto entonces Kdín se daría cuenta #ue esa uni>n esa pa& y alian&a #ue siempre #uiso %or!ar entre (otunheim y Asgard ahora se vería consolidada por el %ruto de la uni>n entre $hor y Lo"i. Ambos reinos ambas ra&as %usionadas como una sola. or un instante el o!iverde permaneci> sumido en esos pensamientos tratando de mentali&arse y hacerse a la idea de #ue todo saldría bien. ero hasta no saber lo #ue Kdín tuviera #ue decir no podría estar en pa& completamente y esa misma incertidumbre %ue la #ue termin> por cobrarle %actura. Fe un momento a otro un sudor %río le recorri> el cuerpo entero acompaJado por un dolor de cabe&a y unas nauseas horribles obligándolo a salir de la cama con premura y correr hacia el cuarto de baJo con la mano derecha cubriendo su boca a modo de impedir un accidente. -e #ued> dentro por varios minutos de!ando #ue su cuerpo liberara esa tensi>n acumulada de rodillas %rente al retrete saliendo al cabo con desgano y mostrando el rostro hGmedo al haberse re%rescado un poco para estabili&arse. SEsto va a ser un largo proceso E dCbilmente dando pe#ueJos pasos cansinos y arrastrados siendo sostenido por $hor para llevarlo de vuelta a la cama. . El n>rdico le había dado una calurosa sonrisa entre #ue se acercaba de nuevo a su lado. ero antes de poder sentarse !unto a Lo"i Cste sali> precipitadamente de la cama cubriendo su boca y haciendo sonidos e a rodearlo con sus bra&os para servirle de apoyo y llevarlo de regreso a la cama arropándolo una ve& #ue lo acomodara ba!o las sábanas y corriendo a buscar un trapo hGmedo con #ue re%rescar su %rente pasando el paJo repetidas veces por sus sienes. SQEs parte del procesoR or supuesto #ue lo era pero $hor era ignorante del asunto por completo. . Lo"i respondi> apenas en un suspiro a la intriga de $hor manteniendo los o!os cerrados y la cabe&a recargada en la cabecera mientras su mano iuierda descansaba sobre su vientre y la derecha sobre la sábana. oco a poco lo %resco del paJo con #ue el rubio limpiaba su %rente %ue calmándole hasta #ue el malestar ces>. Aun#ue un par de veces estuvo a punto de salir como b>lido de nueva cuenta. Menos mal había logrado controlarse y mantenerse tran#uilo respirando lento y pro%undo por la nari& en del n>rdico la cual percibía muy marcada a pesar de no estarlo mirando. . Así hubiera sido en tono bromista y sarcástico el comentario de Lo"i $hor no pudo evitar torcer la boca y gruJir guturalmente no pareciCndole tan divertida la !ugada. or supuesto #ue no hablaba en serio pero o!ia&ul estaba igual de temeroso #ue Cl y no consideraba un buen momento para bromear al respecto. en -inserio embargo pre?ri> me!or no e %rotando el paJo hGmedo hasta notar completamente restablecido al hechicero.
SIa sC #ue no hemos pasado por esto nunca pero seguro debe haber un remedio para #uitarte las náuseas. Q;o tienes un libro sobre embara&os !otunR . El o!iverde not> cierta molestia en $hor por su comentario lo cual le indicaba #ue realmente estaba tomando las cosas muy en serio y #ue a pesar de #uerer bromear un poco respecto a su estado al rubio no le caía nada en gracia no importando el saber #ue no hablaba en serio. Eso le hi&o %eli& a Lo"i. Ahora ya no tenía la menor duda no se había e#uivocado al abrirle su cora&>n y permitirle adueJarse del mismo. asi enseguida el pelinegro rio #uedo ante la pregunta. iertamente lo tenía se trataba del mismo libro donde aclararon sus dudas sobre la e leerle esa parte a $hor por#ue no consideraba #ue debieran saber algo #ue podría traumar sus tiernas mentes. ero aun así decidi> conservar el libro por si en algGn momento llegaba a necesitarlo cuando %uera mayor. I vaya #ue le iba a ser de utilidad. SLo tengo#ue es voy el libro #ue te leí dedurante niJos. -olo e sereno abriendo los o!os y posándolos sobre su vientre SLas náuseas irán disminuyendo paulatinamente pero no tiene mCtodos para aminorar el malestar... Aun#ue si los hay en mis libros de magia E erdico. SrepararC algunos breba!es maJana creo #ue podrC pasar bien la noche hoy . SIa veo QseguroR or#ue no tendría inconveniente en darte otro masa!e de pies por e!emplo. K #ui&á pueda ir a conseguir algGn ingrediente #ue necesites o tal ve& darte un baJo de espon!a en la espalda para #ue sa#ues tensi>n yo #ue sC... Enumer> con%orme se le ocurrían %ormas de apoyar a Lo"i para hacerlo sentirse más c>modo. Estaba en estado gestacional y por lo tanto como su pare!a debía tirarse al suelo para #ue Cste caminara sobre Cl de ser preciso. . -onri> enternecido al darse cuenta de lo Gtil #ue $hor trataba de ser aun#ue %uera solo para ayudarle a olvidarse de los malestares en lo #ue restaba del día. or lo #ue #ueriendo darle gusto y de paso Cl mismo encontrar la %orma de estar más estable pensando menos en su problemática y en todo lo #ue vendría despuCs decidi> aceptar una de las opciones #ue o%recía su pare!a sonándole más c>moda y anto!able la opci>n del baJo con espon!a. El agua caliente el vapor y la delicade&a de un suave masa!e sobre la espalda sin duda le ayudarían a olvidar la tensi>n y pasar una noche más llevadera.
SBien creo #ue te acepto el baJo. En verdad necesito rela!arme o no podrC conciliar el sueJo y no #uerrás amanecer con un %uturo padre,madre con los nervios de punta a lado E arrugando el entrece!o y los labios a modo de mohín #ue!umbroso in%antil igual #ue lo hacía de niJo y usaba sus habilidades con el rubio cuando #uería #ue su hermano hiciera o le consiguiera algo sabiendo #ue $hor no podía resistir a#uel rostro de puchero conspirador #ue lo desarmaba en segundos. . $hor asimil> con !Gbilo la petici>n de Lo"i y de inmediato sali> corriendo en direcci>n al cuarto de baJo sin mencionar nada. ero antes de entrar en Cl volte> y regres> a darle un be&o %uga& al hechicero. S;o tardo TuiJ> un &a?ro y como la lu& desapareci> detrás de la puerta preparando todo para el baJo de espon!a. -e trope&> unas tres veces intentando recoger !abones por todo el a&ule!o y se estamp> contra la pared al tratar de #uitarse su peto sin desarmarlo de!ándose Gnicamente la camiseta a&ul #ue vestía deba!o aventando luego las botas a un rinc>n y arremangando su pantal>n. +inalmente de!> preparado todo para el o!iverde: velas aromáticas la tina llena de burbu!as y espuma a una temperatura regular varias espon!as a un lado y toallas listas para cuando saliera. l no se metería a baJar por#ue le daría tentaci>n y no saldrían de ahí en horas. En otras circunstancias #ue me!or hubiera sido pero ahora el pelinegro no podía e varias veces #ue no lo tocaría a menos #ue %uera en un lugar adecuado. Al poco $hor sali> de!ando todo en orden anunciándolo en seguida a Lo"i mientras se recargaba en el marco de la puerta. SFe acuerdo puedes pasar . Lo"i le había observado levantarse como si le hubiesen dicho #ue la cena estaba lista y si no se daba prisa Oolstagg terminaría con todo. Aun#ue $hor no tard> en regresar del mismo modo apresurado para estamparle un beso ligeramente tronado haciCndole sonreírse y ponerse ro!o. -i Lo"i Lau%eyson seguía padeciendo a#uel e%ecto de sonro!arse de la nada por culpa del hi!o de Kdín. Al principio le parecía demasiado patCtico tonto y vergon&oso pero el n>rdico se había encargado de hacerle cambiar de parecer. Wnmediatamente despuCs de #ue $hor se encerrara en el cuarto de baJo para preparar su momento de rela!aci>n el pelinegro escuch> varias cosas cayendo al suelo igual #ue golpes en la pared y uno #ue otro sonido de ruptura #ue seguramente se trataba de algGn recipiente de cristal. A#uello le caus> bastante diversi>n pues tal parecía los nervios de saberse un
%uturo padre ya estaban haciendo de las suyas en el n>rdico. -i antes era descuidado ahora lo sería mucho más. Oarios minutos despuCs el o!ia&ul abri> la puerta y recargándose contra el marco le anunci> #ue podía disponer de su baJo. Lo"i le vio ligero de ropa descal&o y notoriamente e de haber sido tan di%ícil ni $hor tampoco durar demasiado pero #ue sin duda en el estado eu%oria #ue aGn mantenía una cosa sencilla le resultaba toda una de proe&a. Fespacio el hechicero se puso en pie y avan&> lento hacia la estancia logrando percibir el suave aroma a !a&mín y man&anilla de las velas y el vapor #ue emanaba del interior. SQ;o entrarásR Spregunt> con%uso al pasar a lado del rubio y no ver #ue Cste le siguiera como de costumbre . Sor supuesto #ue entrarC pero solo a darte el masa!e en la espalda con la espon!a estrictamente. Es #ue no puedo... SseJal> su entrepierna y torci> la boca S$u sabes a lo #ue me re?ero... En tu estado debemos tomar todas las precauciones posibles... ero si #uieres podemos hacerlo cuando salgas del baJo Spropuso sugerente -i no podía hacerle el amor entre burbu!as y velas aromáticas nada le impedía hacCrselo en su cama. . Escuch> atento y serio las primeras palabras para luego sonreír con cierto bochorno por lo #ue $hor en agua y una charla amena de cual#uier cosa #ue no implicara cosas en doble sentido. ero lo llevaban en su naturale&a y no podían evitar demostrarse a#uel amor intenso #ue sentían el uno por el otro ya %uera dentro de la tina de pie contra la pared o en el piso en todo caso. -in embargo era muy cierto y realmente prudente de parte de $hor haber mencionado #ue esa ocasi>n y las #ue siguieran deberían mantener un cuidado especial en no caer tentados de amarse con desen%reno y en poses #ue podrían resultar per!udiciales tanto para Lo"i como para el bebC. Así #ue con ello en mente el mantener la cabe&a %ría y en su lugar no sería tanto problema. El pelinegro asinti> de buena gana el ser solo ob!eto de atenciones desinteresadas en lugar de ser ob!eto de deseo irre%renable pero volvi> a reír con diversi>n cuando tentador el n>rdicopero le propuso llevar ahacerlo cabo lo pudiera demás al terminar el baJo. -onaba temía por#ue traer complicaciones. Ia estaba en para un bien comGn y mayor por#ue ahora su mayor terror era lastimar al bebC a pesar de #ue el cuerpo de Lo"i aGn no tomaba la %orma curva #ue usualmente tienen todos los embara&os. Aun#ue si había una mínima posibilidad de seguir uniCndose en la intimidad con el o!iverde lo haría. SEstá bien Asinti> consolado de #ue el hechicero le de!ara abierta una puerta y se decidiera durante el baJo. -i accedía #ue me!or pero si optaba por mantenerse al margen tambiCn lo tomaría bien. Lo encamin> entonces hacia el interior del baJo siguiCndolo a sus espaldas y abra&ándolo por la cintura. Sonte c>modo Fi!o recargando su ment>n en el níveo cuello mientras le desabrochaba la camisa. -i bien no pasaría de ser un baJo nada impedía #ue siguiera poniendo romanticismo a cada tacto. . El pelinegro se sinti> más en con?an&a al obtener una respuesta positiva de $hor por lo #ue respirando calmado de!> #ue Cste le abra&ara por la espalda y lo encaminara hacia la tina entre #ue le abría la camisa con sumo cuidado. En otro momento Lo"i estaría comen&ando a erdico ro&aron super?cialmente la piel de su abdomen. SQWrás a los entrenamientos diarios o permanecerás en la habitaci>nR -olt> lo primero #ue le vino a la mente. Algo realmente tonto u obvio en respuesta pero necesitaba buscar opciones para desviar su atenci>n. . SAh cierto... $endrC #ue hablar con mis mentores acerca de esto claro despuCs de decírselo a madre y padre Srespondi> con certe&a S-abes #ue no me ale!arC de ti ni un segundo y ya te di!e #ue serC tu pa!e personal para todo lo #ue ordenes mandes reclames y e un poco terminando de desabrochar la camisa y haciendo un es%uer&o por no #uitarle otra cosa. Eso de #uedar en abstinencia ya le estaba cobrando su voluntad. $an solo con observar el abdomen desnudo del hechicero su lívido se impacient> provocando un leve sonro!o y dilataci>n de pupilas. $hor sacudi> la cabe&a y retir> sus manos girándose al instante para ir a recargar su %rente en la pared dándose topes a modo de distracci>n. SQ-abes #uCR Lamento esto pero tendrás #ue #uitarte el resto de la ropa tu solo... Se a Lo"i con cierto agobio mientras luchaba por no voltear e intentaba controlar sus deseos . La tensi>n estaba haciCndose presente en el aire y Lo"i pudo notarlo en la clara incomodidad #ue $hor erdico estaba haciendo un es%uer&o por mantenerse al margen el hechicero tambiCn pondría de su parte. FespuCs de todo de los dos Cl era #uien siempre ponía límites cuando no debían e liberando otro suspiro #uedo aNo!ando el cuerpo y ladeando ligeramente el rostro hacia su diestra sintiendo esa suave espon!a dirigirse a las costillas causando #ue mordiera su labio in%erior tratando de mantener la concentraci>n. Febía permanecer calmado pero por alguna ra&>n simple y sencillamente no podía. I esa ra&>n era #ue debido a su estado las hormonas estaban alterándose y volviCndole mucho más susceptible y sensible a las cosas. rueba de ello el #ue %ulminara a $hor
con la mirada por no adivinar #ue estaba en cinta y el llanto desconsolado en bra&os del rubio. I ahora la erdico gir> la cabe&a intentando no alterarse por a#uello por#ue si llegaba a #uebrarse un poco la %uer&a de voluntad de Lo"i para $hor ya no habría remedio. Qor #uC demonios era tan di%ícil #uedarse #uietoR UEra solo un maldito baJo@ Ante esto el rubio se puso de pie y sali> de la tina sin avisar. -u sola presencia estaba dispersando y descolocando al hechicero y por me!ores intenciones #ue tuviera de apoyarlo y ayudarlo el lívido y la pasi>n llevaban la delantera. Ahora se arrepentía de ser un impulsivo sin remedio. SLo lamento Uno podemos estar en la misma habitaci>n sin #ue se nos ocurra tener se en retraída hecho un ovillo in#uieto dentro de la tina espumosa haciendo todo lo posible por ignorar cada suave roce de a#uel masa!e tentador #ue estaba subiendo de nivel sus latidos igual #ue su propio deseo. Estaba costándole demasiado mucho más de lo #ue había
imaginado y eso no estaba bien. ;o era normal #ue su %uer&a de voluntad decreciera tanto y #ue su lívido estuviera por las nubes tan solo con el to#ue sobre su piel de una maldita espon!a. ;i si#uiera era la misma mano de $hor sino un ob!eto a!eno a su cuerpo. Fe?nitivamente iba a ser un in?erno el periodo de abstinencia si no lograba controlarse o adaptarse a los cambios y las %uertes reacciones #ue Cstos traerían consigo. Mentali&ándose en ello percibi> #ueclaramente el n>rdico e por unos instantes y al la poco hi&o aparecer entre sus manos cuidando de no mo!arlo con espuma. Lo abri> el enlibro la secci>n correspondiente y ho!e> hasta encontrar el apartado re%erente a la ra&a !otun comen&ando a leer en vo& #ueda pero de modo #ue $hor escuchara con claridad. SBien... Sinhal> pro%undo y e liviano antes de continuar SA#uí dice #ue' cuando un !otun está en periodo gestante no implica ningGn tipo de riesgo el conservar su vida serdico SI' se puede tener se cerrando el libro con delicade&a y haciCndolo desaparecer mientras permanecía en silencio resintiendo lo agitado de su cora&>n sin atreverse a girar el rostro hacia el rubio. odían seguir como si nada y estaría bien eso %ue prácticamente lo #ue ley> pero seguía sintiCndose dudoso al respecto. . ada palabra %ue como un golpe a su cabe&a acompaJado de un agui!ona&o de eu%oria en su cora&>n. Era posible hacerlo estaba escrito en un lengua!e #ue $hor no entendía pero escrito en un libro a ?n de cuentas. I los libros siempre eran hechos despuCs de ser veri?cado #ue su contenido %uera verdadero QciertoR El n>rdico suspir> aliviado de no tener #ue entrar en abstinencia pronto. Oaya ese párra%o le habíaa#uitado peso de encima perotan solo hablaba por#ue sí mismo. onociendo Lo"i noun estaba seguro si se #uedaría contento con la primera en. Ma#uin> una idea en segundos tomando por ambas manos al hechicero apretándolas con seguridad y mirándolo serio. S-i lo deseas puedo esperar a #ue revises más re%erencias por si en o si hay algGn cuidado especial sobre las posiciones permitidas o la duraci>n yo #ue sC... Lo importante es #ue te sientas c>modo y seguro si lo hacemos Esa era la segunda ocasi>n #ue $hor le o%recía palabras de calma antes de tener sen bailando sus esmeraldas in#uietas dentro de los &a?ros anhelantes. $hor estaba dispuesto a esperar #ue sus dudas y con%usi>n desaparecieran esperaría #ue se sintiera en completa con?an&a para seguir uniCndose en cuerpo y alma. Lo"i estaba in?nitamente agradecido por a#uel gesto paciente del rubio y en el estado en el #ue se encontraba no %ue raro #ue un nudo en la garganta se le %ormara. ubiera llorado sin más de no ser por#ue se oblig> a mantener el llanto ale!ado pero reempla&ándolo por una en grati?cante y enternecida. ;o #uería hacer algo #ue lastimara a su hi!o así como estaba seguro de #ue el o!ia&ul tambiCn se preocupaba en demasía muy aparte de sus deseos. Aun#ue tambiCn era cierto #ue no #uería de!ar de sentir ese amor pasional #ue $hor le daba tan pronto. I ahora despuCs de haber leído #ue no era contraproducente sino todo lo contrario su mentalidad comen&aba a cambiar. onservaba el ansia pero si un libro lo decía no tenía ra&ones para dudar. or lo #ue Lo"i cerr> los o!os y tom> aire respirando pro%undo de nueva cuenta de!ándolo salir por la nari& con suma lentitud para luego devolver la mirada decidida aun#ue nerviosa hacia el n>rdico en al instante. uesto #ue así se había sentido la primera ve& #ue $hor le hi&o el amor despuCs de haberle calmado con %rases de seguridad y aJoran&a !usto como ahora lo hacía. S;o creo #ue deba buscar más. Este libro es el más completo y... si dice #ue es posible entonces... debe ser cierto... abl> ba!o trope&ando con las palabras y sonro!ándose al instante apretando las manos en torno a las suyas. . $hor le o%reci> una sonrisa cálida bailando de la %elicidad por dentro. ues al menos #uedaba descartada la temible opci>n de la abstinencia por meses dado #ue ni Cl ni Lo"i estaban dispuestos a de!ar de darse cariJo menos ahora #ue sabían serían padres y atravesarían nuevas e rápido y tartamudeando algunas palabras respirando agitado con un %ulgor del demonio. ;unca había sentido tantas ansias locas de hacerle el amor al hechicero como ahora o planearlo en todo caso. uando tenían relaciones todo era espontáneo y ahora debía ser plani?cado pero de igual modo aprovecharía a#uello. $an ansioso estaba #ue solt> las manos de Lo"i y corri> hacia el marco de la puerta sin embargo antes de poner un pie %uera se gir> y regres> a la tina dando &ancadas para besar al o!iverde. Luego de hacerlo sali> corriendo del cuarto de baJo a&otando la puerta tras de sí.
SU;o te preocupes@ U$>mate tu tiempo@ UIo te espero a#uí@ Trit> desde %uera comen&ando a ordenar las sábanas yendo al espe!o a acomodarse el cabello y de!ando todo en un ambiente ameno para cuanto el pelinegro regresara del baJo. . Le mir> livianamente notando como hablaba sin tomar por airecada y trope&aba con lo #ue sonriente decía. El ansia y la %elicidad le transpiraban poro igual #ue emanaban por sus &a?ros resplandecientes. Aun#ue siendo sinceros lo mismo pasaba con Lo"i solo #ue poco más reservado. FespuCs de escucharle $hor ni si#uiera le dio derecho de rCplica más le bes> y sali> como si hubiese sido llamado con urgencia al campo de batalla. El pelinegro #uería decirle #ue podían continuar con ese previo en la baJera pero antes de eso el n>rdico ya se encontraba del otro lado de la puerta yendo de un lado al otro moviendo y acomodando cosas para hacer el encuentro más c>modo de lo #ue era cotidiano. Ante tal muestra de dedicaci>n y emoci>n por parte del rubio Lo"i no pudo evitar sonreír ampliamente ya en completa soledad y aun dentro de la tina rodeado por el %ulgor vacilante de las velas #ue esparcían ese dulce aroma !a&mín me&clado con man&anilla y cobi!ado por la calide& #ue el aguade seguía conservando. El hechicero yacía todavía abra&ando sus piernas aun#ue con menor tensi>n #ue antes mientras escuchaba atento el ir y venir de los pasos en la habitaci>n hasta #ue Cstos cesaron dándole la seJal de #ue $hor había terminado. El o!iverde e cansinamente y echando un %uga& vista&o al %uego de una de las velas decidi> #ue era el momento. -e incorpor> lentamente y sali> de la tina tomando una bata verde cercana con la cual cubri> su cuerpo. Avan&> con pasos cortos demasiado pensados entre #ue su cora&>n latía a mil llegando a la puerta y tomando la mani!a con in#uietud. Oolvi> a liberar el aire contenido al tiempo #ue giraba por completo la mani!a para ir abriendo despacio y con sigilo. *ealmente estaba en regresi>n era muy parecida a#uella sensaci>n de in#uietud y nervio como la primera ve&. . Furante el lapso #ue Lo"i aun estuvo dentro $hor termin> de acomodar todo. Ale!> cual#uier cosa de consistencia dura como algunos co!ines diminutos y ciertos almohadones de!ando solo los rellenos de pluma y tendiendo sobre la cama un edred>n de lino ?no para #ue la super?cie estuviera más tersa y suave. $rope&> algunas veces para alcan&ar las %undas encima del bur> pero todo #ued> lo más seguro posible. -e sent> entonces al borde de la cama esperando #ue el hechicero saliera mismo #ue no tard> en -u aparecer tímido tras la puerta vistiendo tan solo un alborno& verde. %avorito. En seguida el n>rdico se puso en pie y camin> hacia Lo"i #uedando prendando del brillo #ue irradiaba a causa de su estado. -onri> a medio
camino tomándolo por la cintura con un bra&o y acariciando su nuca con la mano libre. SMe haces el hombre más a%ortunado de los nueve reinos . Al abrir la puerta por completo y salir apenas un par de pasos el pelinegro en%oc> a $hor sentado al borde demirada la cama captando inmediatamente su atenci>n. El rubio le devolvía una llena de ilusiones y sentimientos no solo por#ue mantendrían intacta su uni>n %ísica sino por una ra&>n aGn más importante #ue demostrarse amor. Eso %ue lo #ue termin> por convencer a Lo"i de #ue todo estaba bien y en orden. Eso y el #ue su vientre parecía haberse sobresaltado con %uror haciCndole notar #ue no debía temer hacer algo indebido. 5na ve& #ue $hor se levantara con intenciones de ir a su encuentro el hechicero permaneci> inm>vil aun#ue con el nervio a Nor de piel casi temblando. Más todavía cuando el n>rdico le rodeara la cintura y le atra!era hacia sí de %orma delicada tomando su nuca y pro?riCndole a#uella declaraci>n de amor #ue le hi&o el más dichoso en esos momentos igual #ue su otra mitad lo estaba. S-C #ue esto va a sonar estGpido pero... tenme paciencia QsíR Ia sC #ue no hay nada #ue temer pero en un principio no podrC de!ar de pensar si le pasará algo o no... QEntiendes eso ciertoR idi> en actitud suplicante esperando #ue $hor supiera tener el tacto necesario para llevarlo con la su?ciente calma. ;o era la primera ocasi>n #ue lo hacían con el bebC incluido pero si era la primera conscientes de ello y eso seguía siendo in#uietante. or lo menos lo era más para Lo"i aun a pesar de la in%ormaci>n. . $hor resopl> con diversi>n no esperaba #ue Lo"i estuviera tan calmado solo a la primera eso lo contempl> entre #ue acomodaba el cuarto y lo comprobaba !usto ahora. l #ui&á no estaba tan preocupado por#ue no era #uien tenía su cuerpo gestando pero asumía con las mismas prevenciones #ue todo debía llevarse a un ritmo lento tal ve& pero lo llevaría. or lo #ue asinti> a la petici>n del o!iverde dándole un beso en la %rente. S;o es estGpido. $ienes todo el derecho de proteger a nuestro hi!o antes #ue cual#uier cosa. Además es !usto #ue sea yo #uien espere y sea solemne. $G siempre me tienes paciencia así #ue es mi turno de tenerla ahora Ssonri> lento esperando como había prometido . A#uella respuesta hi&o #ue el pelinegro se rela!ara y tuviera la plena seguridad de #ue $hor sería comprensivo y se adaptaría a un ritmo mucho más lento y pasivo de lo acostumbrado estando en intimidad. or lo #ue más con?ado Lo"i rode> el cuello del rubio con los bra&os acercándose a Cl en un cálido abra&o siendo envuelto de modo protector al instante por su pare!a #uien lo apretaba a su cuerpo con delicade&a trCmula casi devota.
Enterr> el rostro en el cuello de $hor mientras llenaba sus pulmones del aroma %uerte y natural #ue aspiraba lentamente a?an&ando ese cruce de bra&os tras la nuca del n>rdico para luego susurrar #uedo contra la piel bronceada. S$e amo' . El o!ia&ul se contagi> de a#uella calma y serenidad alegrándose internamente por#ue Lo"i estuviera de acuerdo. En su cuello descansaban los bra&os del hechicero a%errándose con %uer&a al tiempo #ue le con%esaba su sentir motivo para #ue le besara el cuello y girara su rostro para verlo me!or. -us manos empe&aron a acariciar la cintura y parte del vientre #uedándose #uietas sobre el mismo y a la altura del ombligo. os> sus &a?ros en las esmeraldas tambaleantes %rente a Cl en. SIo tambiCn... Srespondi> tomando una mano pálida y besando el dorso S Los amo a ambos... -in esperar un segundo más $hor acerc> a Lo"i para unirse en un beso esperado por los dos. Abri> sus labios delicadamente y sin prisas como estaba predicho sin perder el to#ue romántico y territorial #ue la boca del n>rdico demostraba al invadir la a!ena ro&ando con su lengua pero sin en hacia Cl y su %uturo primogCnito Lo"i no pudo más #ue de!arse envolver por la calide& de a#uel sentimiento #ue le transmitían a#uellas %rases. -u cora&>n salt> emocionado haciendo #ue esa misma emoci>n se acumulara en la boca de su est>mago y se trasladara a su vientre provocando un escalo%río #ue le corri> por cada milímetro de piel y sus esmeraldas desprendieran un brillo Gnico de regoci!o y correspondencia. on?aba plenamente en $hor y en su capacidad para hacer lo correcto. ondría en sus manos su bienestar y el de su hi!o y sabía #ue cuidaría de ambos mientras le amaba. or lo #ue un acto hecho con amor y entrega con paciencia y calma no podría ser consecuencia de una mala e las manos del rubio posarse en su cintura acercándolo a su cuerpo de %orma delicada y tocando luego su vientre para instantes despuCs reclamar sus labios con una suavidad e intensidad me&cladas #ue incluso los mismos hielos de (otunheim se derretirían con tal muestra de amor incondicional pro%undo y latente. Lo"i correspondi> en el acto ladeando el rostro acompasando los movimientos de sus labios con los de $hor succionando su labio in%erior y ro&ando apenas de modo sutil su lengua con la a!ena. *ode> con toda la en de sus bra&os el cuello del n>rdico entre #ue pasaba de ves en ves las manos por sus dorados cabellos y suspiraba embelesado entre el beso. .
El rubio termin> por complementar a#uel movimiento colando su lengua con ansias controladas pero igualmente evidentes. Acarici> la espalda del hechicero y parte del lumbago encaminando a ambos hacia la cama magní?camente bien tendida con a#uellas %ra&adas de lino verde ocre. Antes ambos se habrían aventado y rebotado con un pasional beso de por medio pero esa ocasi>n el n>rdico tom> lento a Lo"i y apoyándose en la %uer&a sus piernas recost> con sumo #ue cuidado acompaJándolo en seguidadesin romper el lo beso. Le sorprendi> aGn no lo hubieran roto. 5sualmente al llegar a la cama debían tomar un respiro pero ahora no escaseaba el aire y podrían seguir besándose por más tiempo. Eso le gust> a $hor. -us manos hábilmente llegaron al nudo de las cintas de la bata del o!iverde y con sigilo y paciencia las %ue desatando. . oco a poco $hor le %ue conduciendo a la cama tomándolo con %uer&a por la cintura con uno de sus bra&os y sosteniCndose con el otro para colocarlo sobre el lecho. Le %ue ba!ando tan lento #ue Lo"i e la sensaci>n de estar Notando en el aire.yA#uello era nuevo puesmomento siempre era terminaban lan&ándose con desespero ganas locas pero ese y debía ser di%erente especial memorable. El beso continuaba debido a #ue el contacto había iniciado lento por lo #ue ambos contaban con cantidad su?ciente de aire reservado #ue sin duda irían usando en dosis pe#ueJas para #ue la %usi>n entre sus bocas durara todo el tiempo #ue %uera posible. Mientras tanto las manos de Lo"i tomaron el rostro de $hor atrayCndolo y acariciándolo con ternura una #ue !amás crey> ser capa& de irradiar. -u cuerpo yacía tendido livianamente sobre a#uel edred>n ?no y suave sintiendo las manos del rubio acariciarle por sobre la bata dirigiCndose al nudo en las cintas mismo #ue comen&> a &a%ar con sigilo y sin prisa. Ante la acci>n el cora&>n del hechicero se aceler> inevitablemente igual #ue el rubor en sus me!illas se hi&o más notable a la par #ue a#uella en de placer #ue poco a poco iba plasmándose en su rostro. . Antes de desnudarlo por completo el n>rdico se endere&> teniendo #ue romper el beso prematuramente para lograr #uitarse su camiseta con la rapide& acostumbrada y desatar su pantal>n para #uedar erdico se despeg> del suyo rompiendo el beso e incorporándose para desvestirse %rente a Cl. ;ormalmente era Lo"i #uien le ayudaba con eso mientras #ue $hor lo despo!aba de sus ropas pero el o!iverde supuso #ue Cste #uería mantenerlo le!os de cual#uier es%uer&o innecesario llevando a cabo esa tarea por sí mismo. Entre tanto el hechicero no perdía detalle atento al proceso de #uitarse la camiseta de!ando al descubierto su imponente presencia con a#uel t>ra< per%ectamente bien %or!ado dando paso al pantal>n y ropa interior mismos #ue %ueron desechados en un solo movimiento rápido. A los segundos $hor volvi> a recostarse sobre Cl ?nali&ando la acci>n de &a%ar la cinta y abrir la bata en. (ade> entre el beso acomodándose en medio de las piernas del hechicero aun#ue sin presionar su como acostumbraba. -i hi&o contacto suspelvis muslos no recarg> todo su peso sobre Cl. pero e!erciendo tensi>n en Era la misma muestra de a%ecto #ue se pro%erían cada noche en esencia sin embargo esta ve& se mostraba con una particular di%erencia: celebrando la concepci>n y %ruto de su amor. A#uello le dio tiempo a $hor de recordar
otras ocasiones parecidas a esa escasas realmente donde más allá del deseo %ísico se tocaban para sentir al otro para estar con el otro. Esa clase de atracci>n y amor #ue Nuía era digna #ue la noche murmurara: qué envidia. on locura silenciosa cubiertos de deseo y cariJo me&clados deliciosamente como una tempestad de emociones al mínimo roce. Así $hor lo sentía. . Lo"i acompaJ> a#uellos !adeos #ue $hor ahogaba entre sus bocas con los suyos haciendo chocar su aliento con el a!eno. Las caricias trCmulas sobre sus caderas provocaron #ue su piel se eri&ara y ardiera en deseos de más mientras #ue notaba el cuerpo del o!ia&ul acomodarse cuidadosamente entre sus piernas. Lo percibía protegiCndolo siendo calmo en sus acciones en todo momento. Era un instante especial lleno de matices cálidos de entrega su momento de sentirse más allá de la pasi>n y la lu!uria. Era el momento de sentirse con el alma con el cora&>n en el amor y la dicha. Mientras pasaban los minutos y el rubio se dedicaba a de!arlo sin aliento y acariciarle las piernas Lo"i hacía lo propio recreándose en caricias #ue iba esparciendo todocuello el ancho de la espalda bra&os dela$hor terminando luego entre lapor nuca y cabe&a. +ley entonces pierna derecha y la recarg> sobre la del n>rdico ro&ándole en una caricia por toda la en de la misma. . $hor detall> sustancialmente el cuerpo del hechicero surcado miles de veces por esas manos ásperas pero sintiendo la piel sensible y letárgica como la suya piel #ue transpiraba deseo y goce tanto %ísico como emocionalmente. ;ot> a Lo"i tocándolo tambiCn entregándole todo dando su cuerpo y espíritu con una nueva presencia en Cl. El beso tuvo #ue interrumpirse por el aire #ue ya escaseaba. -i bien no se habían devorado pasaba tenían #ue tomarse una pausa. En ese lapso $horcomo pein>usualmente el cabello a&abache embelesado en la per%ecci>n del rostro de su pare!a y la estCtica Gnica de su cuerpo. ;o se tent> a succionar y lamer con prisa esta ve& ahora se dispuso a besar Gnicamente besos acuosos y chas#ueantes #ue recorrieron el cuello clavículas pecho y ombligo deteniCndose en el vientre un buen momento saltándose a los muslos del o!iverde degustando ese sabor peculiar de los #ue se saben padres. . 5na ve& #ue las reservas de aire se terminaron tuvieron #ue separarse a regaJadientes respirando agitados diciCndose todo y a la ve& nada con la mirada sintiCndose piel a piel ericos con cada aliento intercambiado me&clándose entre sí para %ormar un solo respiro.
Lentamente el n>rdico %ue repartiendo besos delicados sobre su nívea piel de!ando huellas hGmedas de su paso por el cuello pecho y toda la en en descenso hasta llegar al vientre provocando #ue Lo"i cerrara los o!os y !adeara #uedo al tiempo #ue al&aba el rostro y dis%rutaba de las placenteras sensaciones #ue ese trayecto sutil de!aba en evidencia sensible por cada parte #ue los labios de $hor tocaban. Labios #ue continuaron su recorrido por los muslos yendo a las rodillas y pantorrillas mientras su pecho y abdomen se hinchaban y contraían y sus manos se ceJían a la sábana no tan %uerte pero si con cierta intensidad. . esando todo a su paso las manos del rubio descansaron en las caderas del hechicero masa!eando los costados. Los besos %ueron en ascenso de nuevo aun#ue $hor pens> por un momento principiar una %elaci>n pero su lívido no le orden> a#uello. Ia %uera por su a%án sobreprotector con Lo"i o el hecho de saber #ue su %uturo hi!o crecía en Cl $hor decidi> #ue esa noche se unirían sin previos adicionales tan solo bastaría lo esencial #ue reNe!ara #ue se amaban más allá de lo permitido hasta para dioses como ellos. Fivag> en a#uello restando en el hombro del pelinegro ol%ateando como solía hacerlo y tomando sus muslos para abrir un poco sus piernas. SLo"i... Kye Qlas p>cimas de prueba de embara,o pueden servir como lubricanteR Spregunt> de imprevisto con seriedad mati&ada de curioseo En otro tiempo hubiera bastado con sus dedos remo!ados en saliva pero ahora tomar precauciones era crucial. . La en del o!iverde iba en ascenso a cada segundo igual #ue ahora lo hacían los labios del n>rdico surcando de nueva cuenta su piel sensible hasta llegar a su hombro donde $hor aspir> su aroma como lo hacía siempre. Ahí lo percibi> llenándose y embriagándose de Cl en tanto #ue tomaba suso!os muslos a modosus de esmeraldas hacer más espacio Lo"i abriera los y en%ocara vidriosasprovocando y nerviosas#ue en los &a?ros de su pare!a respirando alterado y pasando saliva con ansia. asi al instante Lo"i se llen> de una inseguridad y temor aturdidores puesto #ue a#uello signi?caba el preludio del siguiente paso #ue llegaría sin el !ugueteo er>tico y pasional cotidiano. Esa ocasi>n el modo en #ue iban a unirse sería total y plenamente en la ternura y el amor puros en el cuidado mutuo y el tacto en. ero aun así aun sabiendo #ue todo llevaría un ritmo pausado y templado la incertidumbre en el hechicero al pensar en lo #ue el momento de la penetraci>n implicaba crecía apabullante saturando su mente de ideas terribles #ue le hicieron sentirse el peor padre del mundo culpable ruin y desgraciado a pesar de no haber hecho nada todavía. La duda lo hi&oun creerse uncual monstruo por de!ary#ue el ansia de amar le llevara a cometer acto del se arrepentiría no le alcan&aría la vida para llorar y pagar por su error. or breves instantes la idea de parar cru&> la mente del hechicero #uien con ese angustioso escenario rondándole de modo tortuoso estuvo a punto
de apartar a $hor y salir del lecho para ir a re%ugiarse dentro del baJo encerrándose hasta #ue tuviera total con?an&a de #ue no harían nada. ocos segundos bastaron para hacerlo. Más aun despuCs de escuchar la pregunta del rubio sobre si podrían usar las p>cimas #ue hubo creado para veri?car su estado y lubricar con ellas a modo de #uerer hacer la preparaci>n menos inc>moda. $enía las palabras de negaci>n en la punta de la lengua pero record> lo #ue ley> y todas las ocasiones anteriores #ue habían estado !untos durante los Gltimos tres meses el mismo tiempo #ue llevaba gestando ese pe#ueJo ser dentro de su cuerpo. ;ada había salido mal hasta ese día y apenas eran conscientes de su e sus miedos permitiCndose regresar su atenci>n al momento. 5n acto #ue sería hecho en el más verdadero y pleno de los sentimientos no podría causar daJo alguno. En cuanto desech> toda idea %atalista Lo"i le mir> intrigado. ;unca o muy pocas ocasiones se valían de algGn tipo de lubricante en pero el pelinegro comprendi> el #ue $hor compartiera su preocupaci>n y #uisiera en agolpada el n>rdico seguía velando por Cl por su hi!o por ambos y eso !amás lo olvidaría. Al vislumbrar a#uel sentimiento de precauci>n con tintes curiosos Lo"i sonri> con ligere&a e hi&o aparecer uno de los %rascos en el bur> de su iuierda. S-u te mientras la dilataci>n concluía y le calmaba con caricias en sus caderas A los pocos minutos tal cual $hor había pronosticado la entrada se e lo su?ciente brindándole libertad para continuar al siguiente nivel. -ac> sus dedos con lentitud en lo #ue sus labios buscaban la boca del hechicero dando besos repetidos en intervalos y chas#ueantes. -ustra!o a#uellos dígitos por completo tom> a ciegas un %rasco descorchándolo y derramando por completo el contenido en su erecci>n ayudándose de su diestra para lubricarlo totalmente y masturbarse antes de penetrarlo. $om> aire y se posicion> ro&ando con su glande la entrada y oprimiendo un poco besando a Lo"i mientras esperaba #ue Cste le di!era a base de lengua!e corporal #ue continuara. . A pesar de #ue $hor le anunciaba #ue %altaba poco para #ue la preparaci>n ?nali&ara el o!iverde intuía #ue estaba listo desde minutos atrás. $al ve& se debía a la en en plenitud o a la erdico de ve& en ve& percibiendo #ue se preparaba cubriendo su erecci>n con el contenido del %rasco ámbar y se colocaba en su entrada sin moverse. -olo embonando el principio del glande. -in poder emitir palabra debido al beso #ue se había tornado intenso de nueva cuenta el pelinegro aprob> el siguiente paso moviendo las caderas en busca del %alo #ue aguardaba %uera de su cuerpo sosteniCndose con ?rme&a por el cuello de $hor y !adeando a modo de un ahora. . -in dudarlo cuando las caderas del un hechicero buscaron con $hor insert> la punta tan solo liberando sonoro gemido al %undirse separarse deCl Lo"i. El n>rdico se a%err> a su cuerpo abra&ándolo a la altura de la espalda media entre #ue Lo"i pegaba su rostro en su hombro al paso #ue se clavaba en su interior. A cada centímetro #ue se insertaba $hor sentía #ue las uJas de su pare!a se enterraban en sus bra&os. Febi> estar más sensible de lo normal casi como la primera ve& #ue lo hicieron. Así #ue $hor aminor> la velocidad de la penetraci>n pausando de ve& en ve& para cerciorase #ue no estaba lastimando nada. +inalmente lleg> a lo más pro%undo y solt> un gruJido gutural sintiendo el calor de la p>cima y las paredes #ue tenían otra ten parecida a las %elaciones. . FespuCs de haberle indicado a $hor #ue continuara el rubio empu!> lentamente haciendo #ue solo la punta del %alo se adentrara al tiempo #ue el n>rdico apartaba sus labios de los de Lo"i gruJendo por lo placentero #ue seguramente le resultaba siendo inmediatamente copiado por el o!iverde #uien uni> sus gemidos ahogados a los sonoros de $hor. A medida #ue a#uella virilidad iba abriCndose paso dentro de su cuerpo Lo"i busc> a%errarse más a los bra&os del rubio mientras #ue su %rente baJada en sudor se había recargado con desespero en el hombro de Cste igual #ue su rostro se mati&aba de una temoda livianamente aun#ue con tintes de placer. La Gnica ve&abía #ue Lo"i recordaba unaangustiosa sensaci>n igual era la de su primera noche !untos. sido un dolor muy parecido al #ue ahora en #ue estaba acumulando sintiendo abrirse sus caderas con cada desli&amiento. Wnstantes despuCs percibi> #ue $hor había de!ado de moverse terminando de colocarse !unto con un gruJido de satis%acci>n #ue le incit> a volver a tomar un respiro desesperado inNando el pecho y contrayCndolo de %orma constante entre #ue buscaba acostumbrarse y rela!arse para iniciar. -u rostro se mantenía %runcido y los o!os totalmente cerrados de!ando #ue su aliento chocara contra la piel de $hor. *ealmente le resultaba algo curioso y evil Lo"i trat> de concentrar su atenci>n en su vientre a modo de percibir si algo no estaba bien. $ard> varios segundos pero al ?nal sus labios se curvaron en una sonrisa imperceptible para el n>rdico y eso solo indicaba #ue su bebC estaba en per%ectas condiciones. or lo #ue el hechicero estando más tran#uilo se separ> un poco para encarar a $hor y acariciarle la me!illa derecha mientras #ue con la otra mano apartaba los mechones de su cabello #ue colgaban contra su rostro y los acomodaba detrás de la ore!a mirándole con un brillo de nostalgia y amor desbordante. on entrega y ternura. S$u hi!o está bien... -usurr> contra sus labios con?rmando con ello #ue no habría ningGn problema para consumar su uni>n con total plenitud. . A#uella noticia tom> por sorpresa a $hor pero al mismo tiempo le brind> un regoci!o tremendo provocando #ue su pecho se hinchara de %elicidad. Lo"i estaba %rente suyo Dba!o en concreto observándolo con ese par de esmeraldas #ue le daban la seguridad para sentirse vivo y pleno con la ?delidad de seguir intentando ver la misma en tan cálida y llena de amor. S$e !urC #ue lo protegería... Acerc> su rostro y le bes> de nueva cuenta en los labios pensando #ue ese ángel #ue cada día aguardaba por su regreso al irse de en lo recibía con los bra&os abiertos lo volvía el hombre más a%ortunado de los nueve reinos le correspondía sin condiciones y en plenitud le acariciaba ahora su me!illa con devoci>n casi divina era el ser más per%ecto de todo el cosmos y Cl había sido el maldito suertudo de estar a su lado. -u beso %ue pausado y concien&udo casi devoto hasta #ue $hor separ> sus labios de a#uellos rosados rea?rmando un abra&o en silencio y con el nudo en la garganta recostándose poco con la libertad #ue otorga un permiso mutuo. -us caderas de movieron en intervalos cortos y lentos sus penetraciones no rebasaron una línea de demanda solo %ueron con el prop>sito de %undirse en un acto puro de amor entre ambos.
5n sentimiento así de %uerte y eterno debía estar prohibido... E ir>nicamente lo %ue en su tiempo hasta #ue Asgard acept> su romance pero no de!aba de ser mágico. . Lo"i sonri> enternecido al escucharle re%or&ar a#uella promesa de velar siempre por el bienestar de su pe#ueJo. odía ver dentro de a#uel ocCano celeste claro y transparente #ue así sería y el beso siguiente termin> por sellar a#uel !uramento no solo por parte de $hor sino tambiCn por parte del mismo Lo"i. Ambos velarían por ese nuevo ser #ue segundo a segundo crecía lentamente le protegerían y cuidarían le darían lo me!or de ellos para #ue !amás le hiciera %alta amor y con?an&a en sí mismo. Estarían siempre a su lado a cada paso a cada salto #ue diera siempre cercanos siempre presentes para apoyarlo en todo momento. Wnstantes despuCs las embestidas comen&aron lentas luego de #ue el beso se rompiera. Lo"i percibi> el movimiento pausado y sutil delicado en en y %ervor con tal paciencia #ue el hechicero crey> estar muriendo de la %orma más piadosa y placentera posible. -entía c>mo a#uel %alo se apoderaba de su interior invadiCndolo con una ternura abrumadora #ue no había sentido antes. *ealmente el unirse de a#uel modo suave parsimonioso y sin prisas estaba superando y por mucho cual#uier otra sesi>n desen%renada donde el ansia y la lu!uria enardecidas eran las protagonistas en la %orma de amarse entre las sábanas. S$e amo $hor' -usurr> contra la piel bronceada manteniendo los o!os cerrados y los bra&os rodeando parte del cuello y hombros mientras #ue sus piernas se cernían en torno a la cintura del n>rdico. ;o muy %uerte pero lo su?cientemente ?rmes para no menguar el contacto. . Ahora #ue todo estaba en silencio salvo por los ligeros !adeos por parte de ambos $hor tom> aire respirando pro%undo sonriendo internamente agolpado por la emoci>n de #uerer gritar llorando #ue su deseo en la vida crecía dentro del vientre pálido de la persona #ue más amaba y ahora se lo demostraba plenamente tanto en cuerpo como en alma. SIo tambiCn' Más de lo #ue puedo soportar' Abra&> al o!iverde sosteniCndolo con suavidad manteniendo un ritmo paciente en sus estocadas. ;o hacía %alta embestir con brutalidad. ;o debía ni #uería hacerlo por#ue encuentro en la intimidad pro%esando devoci>n con solo cadaimportaba ?bra de susu ser hablándole a travCs de caricias a Lo"i acunándolo y cuidándolo para #ue supiera #ue estaban !untos en eso #ue su mayor anhelo era compartir la eternidad a su lado. Fe lo contrario su vida no tendría sentido.
or eso penetr> con sutile&a e inevitablemente el placer se present> pero era un sentimiento conocido. Esa ocasi>n realmente tenía un increíble parecido a la primera ve& y $hor #uiso #ue las veces siguientes %ueran así cuando hacer el amor era más #ue un acto %ísico era un acto puro transparente cristalino sin prisas por alcan&ar el orgasmo. -olo... entregándose mutuamente aprendiendo a dis%rutar. . Al igual #ue $hor re%or&aba ese abra&o envolviCndole protector entre sus bra&os Lo"i tambiCn lo hacía correspondiendo con entrega y aJoran&a mientras le escuchaba pro%esar ese mismo sentimiento #ue le hubo compartido momentos atrás haciendo #ue el hechicero se llenara de una dicha cálida y plena total. El momento de unirse en cuerpo y alma una ve& más se había presentado como tantas otras veces pero sin duda a#uella uni>n era Gnica mucho más especial y signi?cativa #ue todas las anteriores incluso más importante #ue la primera. K por lo menos era así como Lo"i lo sentía. ;o había el ansia y desespero cotidianos por sentir arder sus cuerpos en medio de la cama. ;o había prisa por %undirse en un contacto desen%renado e impetuoso como las aguas removidas por una tormenta %uriosa. ;o. -olo era calma era uni>n a travCs de una letárgica %usi>n entre dos seres #ue se amaban más allá de los límites. Era complementarse el uno al otro en la más sublime de las %ormas. Era hacer el amor con el alma más #ue con el cuerpo. Lentamente ambos cuerpos %ueron balanceándose en un vaivCn rítmico y armonioso mientras #ue el placer y el calor iban envolviCndolos haciendo #ue sus cora&ones palpitaran cada ve& más alterados y en un mismo compás provocando #ue poco a poco sus ganas de sentirse como uno solo en plenitud %ueran asomándose con timide&. En escaseara o hasta #ue ese mismo balanceo trCmulo les llevara al Cn del n>rdico ralenti&> y no subi> su ritmo como era costumbre hacerlo una ve& #ue su pare!a se lo pedía. Fe!> caer su peso en sus hombros para e#uilibrarse recargando su %rente sobre de la del hechicero y respirando con di?cultad pero manteniendo un compás normal. Feleitado en toda esa uni>n $hor sentía como Lo"i lo enrollaba con sus piernas y le decía en silencio #ue pasara lo #ue pasara no se detuviera como si le pidiera #ue no se ale!ara #ue lo necesitaba ahora más #ue nunca en a#uella nueva etapa !untos. Los pies del pelinegro lo empu!aban más dentro suyo #ueriendo sustituir el ritmo salva!e #ue adoptaban por uno menguante elevado y pro%undo. SAhh... (ade> muy ba!o enardecido en regoci!o y placer !untos con pausas entre gemido y gemido no tan sonoros. Era e a Lo"i al tiempo #ue lo besaba en todo su rostro para luego besarlo de lleno. 5n beso suave limpio lento totalmente enamorado. -us embestidas eran certeras y clavadas con la medida en sublime magnánima y divina. S;gh... Mnh... asado un rato de permanecer en a#uel letárgico vaivCn y mientras el n>rdico se apoderaba de nueva cuenta de sus labios en un beso cálido el cuerpo de Lo"i comen&> a en entre ambas bocas #uedo mientras sus manos apresaban la cabe&a de $hor enredando los dedos en esos mechones ensorti!ados masa!eando el cuero cabelludo con ganas de provocarle para #ue sus besos aumentaran de nivel tan solo un poco. -us largas piernas no de!aban de presionar la espalda ba!a del rubio con sutile&a desli&ando los talones de ve& en ve& sobre la piel entre #ue su miembro se endurecía tanto como podía y lubricaba por las suaves %ricciones #ue lo tenían preso y al borde de la culminaci>n. Los !adeos del n>rdico se unían a sus #ue!idos de goce #ue le hacían la piel arder y eri&arse al mismo tiempo. -onidos combinados y enmudecidos #ue hablaban por los dos y en tambiCn era distinta. ;o sabía describirlo era... di%erente. -ucedía #ue muy pocas veces no se de!aba llevar por el deseo o el %renesí por alcan&ar el clíma. $hor reacomod> me!or beso escondiendo su rostro hombro de se Lo"i por inercia los rompi> el movimientos de su pelvis abrieron más el compás de las piernas del o!iverde y el n>rdico pro%undi&> una Gltima estocada con la espalda llena de calambres miniatura #ue le subieron a lo largo de toda Csta y se e en milCsimas tal como Lo"i había clamado a $hor en el idioma de las caricias y los sonidos. -us bocas colapsaban necesitadas haciendo con elpor parsimonioso mecer de sus cuerpos. Los labios del contraste hechiceroper%ecto eran abiertos los del n>rdico igual #ue hacía con sus piernas al momento en #ue se acomodaba para embestir contundente por Gltima ve& incitándolo a terminar !untos. Me&claron sus gemidos gloriosos igual #ue se me&claban en esencia con $hor llenando todo en Lo"i mientras #ue Cste alcan&aba la cima entre sus ambos %undido en un abra&o intenso a la otra mitad de su alma #uien lo amaba en todos los sentidos y %ormas posibles incluso prohibidas. asado el e%ecto del clíma< en plenitud el pelinegro se de!> abra&ar por el descanso aun sosteniCndose de la espalda %ornida del rubio manteniendo los o!os cerrados mientras intentaba regular su respiraci>n tomando aire constante y !adeante. S$hor... Le nombr> en un susurro cansado pero no por#ue #uisiera llamar su atenci>n o decirle algo más solo #uiso hacerlo pronunciar su nombre por#ue le nacía. or#ue cada ve& #ue lo hacía era como si su vida se llenara de todo Cl como si a#uella lu& dorada y radiante #ue $hor emitía por sí solo iluminara su emo te sientesR Spregunt> solo para cerciorarse #ue seguían bien . 5na ve& #ue ambos estuvieron más tran#uilos Lo"i percibi> c>mo era recostado con suavidad sobre la cama entre #ue $hor se desli&aba %uera de Cl con sumo cuidado haciCndole %runcir livianamente el entrece!o. ;o por dolor sino por lo sensible #ue aGn estaba despuCs del acto consumado. $hor no cambi> de postura más permaneci> mirándole de igual %orma #ue el o!iverde hacía. Le observaba con sus o!os entrecerrados estudiando a detalle cada rasgo de a#uel semblante varonil y solemne con tintes de agotamiento placentero. -e perdi> en sus &a?ros navegando dentro de ese mar cristalino y tan a&ul #ue inmediatamente su pecho se llen> de pa& esa pa& y tran#uilidad #ue solo a#uella mirada podía brindarle. S;o debes preocuparte... $odo está en orden' *espondi> #uedo sonriCndole de modo cálido dándole a entender #ue no había por#ue alarmarse. Entre tanto Lo"i volvi> a acariciar la me!illa iuierda del n>rdico transmitiCndole a#uella seguridad y con?an&a. . Era realmente grato #ue conservaran su intimidad ese to#ue especial #ue volvía Gnicos los encuentros con Lo"i a pesar de no ser tan brutales como usualmente lo eran o en posiciones emo el hechicero estaba empe&ando a dormitar por lo #ue se inclin> a besarle la %rente y los labios en lo #ue esperaba #ue se durmiera. El o!iverde hi&o es%uer&os por corresponder el roce pero poco a poco su boca de!> de moverse y el rubio concluy> #ue estaba soJando. Fespeg> sus labios y le acarici> el cabello recostándose luego a un lado y cubriendo a ambos con las %ra&adas. SFuerme bien -usurr> al instante tambiCn cayendo en los bra&os de Mor%eo aJorando cada segundo con su alma gemela imaginando c>mo serían los pr> a Lo"i y abra&ado a Cl cay> dormitando. %.%.%.%.%.%.%.%.%.% Notas fnales: Febo con%esar #ue antes de esto no me agradaba mucho el
mpreg pensar a Lo"i pan&>n era en se rompe. Lo más di%ícil #ue habían tenido #ue a%rontar !untos %ue dar la noticia a sus padres. omo se esperaban +rigga no dud> en #ue todo sería maravilloso y no escondi> su alegría en cambio Kdín no %ue muy e de avisarle a Cl en-iprivado para de no $odo arriesgar al hechicero con preocupaciones innecesarias. bien adre permaneci> renuente ante la buena nueva y le dirigi> solo un cordial: /elicitaciones! al rubio el peso de saber #ue venía un nieto en camino su primer nieto de su Gnico hi!o de sangre hicieron mella en el peliblanco y eventualmente asisti> a algunas revisiones peri>dicas #ue Lo"i
se reali&aba con los sanadores. -iempre conservando un espacio prudente aun#ue marcando su emoci>n. Fecirlo a sus padres pareci> nada comparado con anunciarlo %rente a todo Asgard. Ese día Lo"i tuvo un mareo repentino en el palco y preocup> a todos en especial a $hor #uien no de!aba #ue los sanadores traba!aran en pa& debido a su impetuosa necedad por #uerer estar con su pare!a. ero a los pocos el el hechicero mayores más. complicaciones y desde eseminutos momento n>rdico despert> le !ur> nosin presionarlo FespuCs del breve susto +rigga se había encargado de la nursery !unto con el o!iverde para el bebC a lo largo de los meses. Esta nueva tutela emocionaba a $hor en demasía y su regoci!o aumentaba aGn más al ver crecer poco a poco el vientre de Lo"i. +ue especialmente %eli& cuando ambos pudieron ser capaces de sentir patadas de la criatura. -í el Fios del $rueno no podía sentirse más en plenitud tenía al amor de su vida a su lado sin impedimentos de por medio y pronto tendrían descendencia. asta ese día #ue el mundo de ambos tom> un giro de 430Y sino era #ue de 760Y todo iba como el itinerario acordaba. $hor salía a dar su vuelta matutina con Lo"i a los !ardines sosteniCndolo de la cintura para apoyarlo mientras el hechicero tenía un bra&o sobre los hombros del n>rdico para e#uilibrarse. -u vientre estaba claramente más abultado y de?nido como todos los vientres suelen estarlo a los ocho meses y medio de gestaci>n. *egresaron tomados de la mano y casi de inmediato el rubio se e puesto #ue lo llamaban a una reuni>n con el conse!o prometiCndole al pelinegro #ue en cuanto el asunto %uera tratado regresaría a sus aposentos. *ato despuCs durante la reuni>n lleg> un sirviente corriendo y gritando histCricamente #ue necesitaba hablar con el príncipe $hor. -e interrumpi> toda actividad en cuanto el !oven&uelo le in%orm> #ue de un momento a otro Lo"i había su%rido un desmayo y se encontraba en ese preciso momento en el cuarto de sanaci>n. -in pedir mayor detalle el rubio sali> hecho una rá%aga humana hasta la sala encontrándose a su madre #uien le impidi> entrar por precauci>n. Ante esto $hor sinti> una gran impotencia por no poder entrar con su pare!a y saber #uC coJo pasaba. Q>mo había sido posible un desmayo si Cl mismo se encarg> de tenerlo todo en orden y cuid> hasta el más mínimo detalle obligando a todos a tratarlo con en como ClR -in embargo lo #ue no se puso a anali&ar %ue la opci>n más obvia ya #ue las evidencias apuntaban a #ue Lo"i había entrado por ?n en labor de parto. +rigga compartía con Cl esa angustia y preocupaci>n pero $hor no de!aba de ser una papa en observar y ver minuciosamente las pistas así #ue asumi> #ue algo no andaba bien con la salud del hechicero y su hi!o corría peligro. Bobo más grande no e golpeando la puerta para #ue alguien se lo in%ormara .
El periodo gestacional estaba por concluir pero a Lo"i le parecía #ue hubiese sido apenas el día anterior cuando descubri> #ue estaba esperando un hi!o de $hor. Las primeras semanas luego de #ue %uera anunciada la noticia tanto a Kdín y +rigga como al reino entero habían sido especialmente di%íciles sobretodo por#ue el monarca asgardiano estaba más renuente #ue de costumbre con su relaci>n. Kdín apenas si había logrado aceptar el hecho de #ue sus hi!os se amaban más allá de lo %raterno y ahora le era noti?cado #ue a#uel amor entre ellos daría %rutos. or varias semanas el hechicero percibi> cierta tensi>n en el ambiente cada #ue se reunían con sus padres en el desayuno o la cena pero +rigga siempre se encargaba de mati&ar todo a#uello con su calide& maternal y c>mplice logrando milagrosamente #ue el momento se tornara ameno y menos pesado. Wncluso una noche la intervenci>n de su madre logr> hacer #ue adre de $odo diera su opini>n acerca de los nombres #ue $hor y Lo"i tenían contemplados para el pe#ueJo. +ue a partir de ese momento #ue el rey de Asgard comen&> a abrirse a la nueva realidad #ue se cernía sobre su casa y sobre el reino mismo. Tracias a la bienaventurada sugesti>n y tacto delicado de +rigga Kdín se permiti> e los cora&ones de ambos príncipes de una dicha enorme tal parecía #ue poco a poco ese muro de roca #ue su padre tenía levantado iba %racturándose y res#uebra!ándose igual #ue su orgullo. I de esto Lo"i %ue claro testigo a#uel primer día #ue Kdín se present> de imprevisto durante la revisi>n con los sanadores !usto en el #uinto mes de espera. Esa maJana el hechicero acudi> acompaJado por su madre como cada semana y mientras los ancianos hacían su labor con dedicaci>n y paciencia el peliblanco arrib> a la sala adentrándose con cautela y cierta indecisi>n sorprendiendo a todos los presentes. Aun#ue mayormente a Lo"i #uien le miraba en #ue emanaba de las palmas del anciano sobre a#uella &ona. -in decir nada más #ue e hasta situarse a lado de +rigga. La reina le miraba con aprobaci>n alegre sentada en una silla de madera al costado derecho de su hi!o. Kdín y Lo"i toparon miradas por breves segundos pero %ue el tiempo su?ciente para #ue el a&abache pudiera notar un brillo distinto en la mirada del monarca. Era un brillo muy parecido al #ue veía en $hor desde #ue supo #ue sería padre. Oer a#uella trCmula y reservada muestra de emoci>n y a%ecto en el peliblanco %ue todo lo #ue necesitaba para #ue su plenitud se completara. +ue así #ue durante los meses siguientes el o!iverde recibía las visitas repentinas del monarca ya %uese en las revisiones o incluso en su propia habitaci>n cuando $hor no se encontraba por algGn motivo #ue en de conse!o. abían salido a dar una caminata matutina por los !ardines del palacio pero al regresar el deber ya esperaba al n>rdico #uien le prometi> ir a verle en cuanto la reuni>n terminara. $odo estaba en orden y no había indicios previos de #ue algo pasaría cuando lo inesperado sucedi>. El pelinegro tuvo un %uerte mareo #ue termin> por trucar la conversaci>n con su madre y detener el caminar hacía su alcoba. $rataba de mantenerse consciente respirando lento y acompasado para llevar on se present> haciCndole #ue!arse de %orma lastimera y doblarse mientras #ue su diestra apretaba la mano de +rigga y su mano iuierda se posaba sobre su vientre al mismo tiempo #ue una mueca de dolor se plasmaba en su rostro' Entonces no hubo duda su hi!o estaba por llegar al mundo. Lo"i estaba aterrado los dolores eran insoportables y aumentaban de nivel a cada segundo cada momento sentía partirse en dos. -u vientre se había endurecido y a#uella sensaci>n de reventar por dentro lo estaba alarmando realmente. -abía #ue era la hora #ue había entrado en labor de parto y #ue eran algo normal a#uellas contracciones y calambres pero !amás se imagin> #ue %uera demasiado %uerte el proceso. Wncluso lleg> a temer por unos instantes #ue algo no estuviera bien y pensar eso le llen> de angustia miedo y desesperaci>n. ;o #uería perderlo no #uería perder a su pe#ueJo. . 5n alarido de dolor emergi> del cuarto de sanaci>n aterrando por completo al rubio #uien en seguida se acerc> para intentar abrir el candado pero por ser mágico no tuvo C a patear y rasguJar la enorme puerta de caoba misma #ue a pesar de ser gruesa no %ue obstáculo para #ue el Fios del $rueno inNigiera un daJo signi?cativo y comen&ara a #uebrantarse. $enía le #ue saberlo debía estar al lado de su amado no importando lo #ue sucediera así se lo había !urado desde #ue se unieron por primera ve&.
+rigga tom> por los hombros al n>rdico y le oblig> a detenerse. Al ver a su madre $hor se ech> en sus bra&os temeroso de lo #ue había detrás de la puerta. SQPuC está pasando madreR Qor#ue nadie me dice #uC le sucede a Lo"iR La diosa solo le acarici> su cabe&a y le susurr> al oído un suave: %No lo has comprendido aun! hijo m"o( 0o1i lucha contra la madre de todos los dolores e2istentes… &l dolor de la concepci#n… Al escuchar a#uello los o!os de $hor se abrieron como platos su respiraci>n de agit> e hiperventil> como si hubiese corrido sin parar alrededor de los nueve reinos. -u cuerpo temblaba la noticia y el impacto consecuente provocaron #ue no moviera un solo mGsculo y #uedara estático cual piedra. -u mundo se derrumb> tan solo para reconstruirse en milCsimas una %elicidad abrumadora y pesada caía sobre sus hombros. -e sinti> con vitalidad alegría ganas de llorar y e hacia la puerta por#ue varios alaridos resonaban incesantes. ubiese deseado con todas sus %uer&as #uerer permanecer con Lo"i en ese momento crítico para ambos pero no podía acceder a la sala y no tenía idea c>mo estuviera yendo el proceso más estaba determinado a apoyar al hechicero en todo incluso si no estuviera en cuerpo presente. on esto en mente $hor se acerc> al gran muro de madera deteniCndose a centímetros de Cste. SULKZW@ U-W 5EFE- E-5A*ME OW;E A FEW*$E P5E E-$KI AP5[ K;$WTK@ Sgrit> a todo pulm>n para #ue el mencionado pudiese oírlo detrás de la barrera SU;K WMK*$A LK P5E -5EFA ME P5EFA* (5-$K AP5[LKA*A OE* K* $W@ U;K E-$A*\-KLKAI;AFA@ ;EE-W$K P5E -EA- +5E*$E K* FKI ;5E-$*K W(K@ U;K $EMAUQE;$WE;FE-R@ U;K E*MW$W* P5E ;AFA $E A-E K*P5E $E AMK LKZW@ U$E AMK@ UI -5+*W* K* $W I K;$WTK@ -in más aire $hor se desplom> de rodillas al suelo recargando su %rente en la madera esperando... . FespuCs de #ue la primera contracci>n se presentara +rigga llev> a Lo"i a la sala de curaciones donde inmediatamente %ueron recibidos por los ancianos sanadores ayudando al o!iverde a recostarse sobre la cama pulcramente preparada con anticipaci>n. Fesde un par de semanas atrás la sala sido limpiada ya esterili&ada !unto con todos los aditamentos en caso había de una emergencia cual#uier hora. -ábanas paJos mantas vasi!as e instrumentos estaban listos para el evento #ue aguardaban. Los ancianos comen&aron a moverse pidiendo a la reina #ue saliera del lugar puesto #ue sería un proceso di%ícil y más aGn al ser la primera ve&
#ue Lo"i daba a lu& por lo #ue se debía actuar con ciertas reservas y prudencia. Ante ello el hechicero se a%err> a su madre y sosteniendo sus manos con desespero le pidi> en medio de una mirada y sollo&o suplicantes rogando #ue permaneciera a su lado y enviara por $hor. ;o #uería pasar por a#uello solo necesitaba a ambos a su lado o por lo menos al padre de su hi!o. Wnmediatamente la reina mand> llamar a un sirviente para #ue in%ormara a su hi!o mayor de la situaci>n. Aun así los ancianos le apresuraron y +rigga solo rode> a Lo"i llevando su cabe&a a su rega&o diciCndole palabras de apoyo mientras #ue Cste se a%erraba a la cintura de su madre. La diosa deposit> un cálido beso en la %rente de su hi!o menor y sali> de la sala de!ando #ue los sanadores hicieran su labor. 5na ve& #ue la puerta se cerrara Lo"i su%ri> una contracci>n mucho más intensa y dolorosa #ue la anterior haciCndole a%errarse a las sábanas y ar#uearse al tiempo #ue sus piernas se Ne a respirar del modo #ue +rigga le había enseJado pero a los pocos segundos otra contracci>n igual de %uerte se present> aun#ue ahora !unto con una pun&ada en la parte ba!a del vientre trayendo consigo la sensaci>n de reventar más pronunciada #ue antes. *ealmente estaba lleno de temor y angustia. Lo necesitaba necesitaba a $hor ahí abra&ándolo y susurrándole #ue todo estaría bien. ;ecesitaba al padre de su hi!o para darle %uer&a y valor pero sabía #ue a pesar de #ue implorara y suplicara no le permitirían entrar por lo delicado del asunto así #ue no tenía de otra más #ue sacar %uer&as de Na#ue&a. +ue entonces cuando lo escuch> a%uera. $hor estaba del otro lado de la puerta gritando dándole su apoyo diciCndole #ue estaría con Cl hasta el ?nal. ;o importaba #ue no estuviera dentro el n>rdico permanecería con Cl en esencia y así lo sentía. Lo"i sentir le era su transmitido valor y ycora!e su #ue con?an&a y podía bravura parac>mo alimentar %uer&a de su voluntad no permitir decreciera. Así sería Lo"i sería %uerte por los dos y por su hi!o. . $hor dio un sonoro golpe en la puerta no recibiendo una respuesta por parte de nadie menos del hechicero. I a !u&gar por los gritos desgarradores supuso #ue Cste debía estar su%riendo mucho y #uedarse del otro lado de la puerta no solucionaría nada. l tambiCn estaba aterrado de lo #ue pasaría. La incertidumbre lo mataba y taladraba su mente su lugar estaba a lado de a#uel ser #ue se desvivía por alumbrar a su hi!o. -in embargo solo podía golpear con impotencia por#ue de irrumpir inoportunamente en el cuarto los sanadores no harían bien su traba!o o el mismo Lo"i caería... ero no podía abandonarlo ahí Lo"i era la persona más importante en su vida y sería egoísta y canalla e el labio in%erior a punto del llanto aun estando de rodillas e implor> a los dioses #ue le dieran el cora!e para hacer las cosas bien. SFebes permanecer a su lado Sescuch> de pronto la vo& de su padre #uien había llegado a dar apoyo S$hor eres el padre. (usto es #ue estCs donde es tu lugar El n>rdico #ued> mudo. ;o esperaba #ue %uera Kdín #uien le di!era esas palabras pero su padre tenía ra&>n no podía permanecer de ese lado de la puerta sin hacer absolutamente nada. on bravura se puso de pie y abri> la puerta de una patada encaminándose a donde estaban los sanadores. Al mismo instante #ue vio a al pelinegro su cora&>n lati> con %uer&a. Estaba bien y sus gritos solo eran a causa del es%uer&o y las contracciones. Wntent> acercarse pero uno de los ancianos se lo impidi> y por más #ue $hor #uiso convencerlo Cste le prohibi> el paso. Entre eso el hechicero gir> y lo observ>. El rubio #ued> en silencio congelado tan solo escuchaba el tum,tra de su cora&>n. Luego una nueva contracci>n #ue oblig> a Lo"i a retorcerse tra!o a $hor a la realidad y sin importarle nada apart> al sanador y sali> corriendo hasta la camilla sosteniendo a su alma gemela entre sus manos. SLo"i Lo"i' $e di!e #ue estaría contigo todo el tiempo Sdi!o acariciándole la me!illa y tomando su mano Los sanadores %rente a Cl lo miraron asustados pero al príncipe de Asgard no le importaba. Febía apoyar a su pare!a en cuerpo y alma. S-C #ue te está doliendo mucho pero me tienes a#uí. -ostente y podrás hacerlo con%ío en ti I a pesar de #ue no podía hablar por el dolor $hor supo al ver en la mirada esmeralda #ue Lo"i no se rendiría. . $rataba de mantenerse en calma o por lo menos mantener la voluntad ?rme despuCs de escuchar a $hor. A pesar del dolor #ue sentía su cora&>n se hinch> con alegría de saberle !unto a Cl solo separados por una puerta pero !untos en espíritu a ?nal de cuentas. A#uella breve tregua #ue en el proceso de alumbramiento le permiti> respirar el pelinegro llen> su cabe&a de los hermosos recuerdos #ue hubo %or!ado a lado del o!ia&ul durante los meses de espera. -us cuidados su paciencia su dedicaci>n y entrega su tacto y sutile&a tanto al hacerle el amor como en todo lo demás. Momentáneamente a#uellas memorias le hicieron esbo&ar una liviana sonrisa aun entre todo a#uel malestar. $enía claro #ue ahora más #ue nunca debía abra&arse a esos recuerdos solo así podría superar su condici>n. ;o pas>retorcerse mucho cuando Lo"ihacer volvi> a ser las presa de a#uellos dolores #ueyle hacían y #uerer aJicos sábanas entre sus manos desgarrar su garganta como sentía #ue esos espasmos lo hacían por dentro de su ser. odía sentir claramente el moverse de su pe#ueJo. Estaba clamando salir ansioso por ver el mundo #ue le esperaba %uera tal y como
el hechicero esperaba y ansiaba ver su rostro tenerlo entre sus bra&os y decirle cuanto había soJado con ese día. Sronto pe#ueJo... ronto... UAgh@ Murmur> ?!ando sus esmeraldas cristalinas sobre su vientre enviando a#uel mensa!e de ánimo a su hi!o al tiempo #ue volvía a #ue!arse de modo lastimero. (usto en ese instante la puerta se abri> de un certero golpe llamando tanto la atenci>n de los ancianos como la del o!iverde. Ahí lo vio $hor había derribado la puerta sin importar nada y lo había hecho para estar !unto a Cl. Fe inmediato corri> hasta la cama en cuanto una nueva oleada de contracciones le sobrevino y tomándolo entre sus manos acariciando su me!illa y diciCndole a#uellas %rases llenas de valor el n>rdico logr> in%undirle toda la seguridad #ue tanto necesitaba en esos momentos. $hor sería su soporte y consuelo. +ue así #ue con solo una mirada entre #ue!umbrosa y con?ada acompaJada de una trCmula sonrisa apenas visible Lo"i le mir> y le dio como respuesta un: 0o haré... por los tres mientras tomaba los bra&os del rubio con certe&a e iba presionándolos con%orme su rostro se %runcía y sus o!os se cerraban sintiendo el pronto estremecimiento #ue se avecinaba. . Muy a tiempo y antes de #ue el líder de los ancianos lo e inminente a la sala ordenando con ?rme&a #ue permitieran a $hor estar ahí. -us palabras %ueron breves y concisas: ejen al pr"ncipe a lado de 0o1i! por el bien de mi hijo * mi nieto. El rubio le agradeci> asintiendo con la cabe&a pero no estando seguro de a #uiCn de los dos llam> hijo en esa ocasi>n. Oolte> de nuevo hacia el hechicero su cara despedía un dolor horrible uno #ue seguramente habría matado al n>rdico si llegase a sentir la dCcima parte. Le preocup> al inicio pero luego un pánico le sobrevino al clavar sus &a?ros en el es%uer&o #ue hacía el o!iverde sumado a su en de estar a punto del desmayo y sus uJas enterrándose con desesperaci>n en sus bra&os como diciCndole a*3dame. $hor crey> #ue Lo"i estaba al límite y su cuerpo des%allecía pero no podía rendirse no ahora #ue ambos estaban a punto de lograr el mayor milagro de sus vidas. -u cuerpo temblaba en serio estaba nervioso al e y a pesar de #ue las indicaciones de los sanadores al hechicero de permanecer consciente hacían mella en su mente bes> en la %rente a su pare!a. $al ve& no podía recibir al bebC por Cl pero sí podía recibirlo !unto con Cl. SLo"i' EscGchame' Ssupo al ver su en #ue estaba al borde del colapso y sus esmeraldas estaban cristalinas por las lágrimas S;o me irC Qde acuerdoR emos luchado por estar !untos tenemos mucho #ue vivir
ambos. -C #ue tienes miedo y no te voy a mentir yo tambiCn lo tengo pero #uiero trans%ormarlo en cora!e para no dudar de nada' Mir> el vientre abultado %rente a Cl tan cerca tenía a su hi!o y a la ve& tan le!os. Las contracciones no cesaban y $hor supo #ue el bebC el hi!o de ambos podía escuchar esas palabras de aliento #ue le brindaba a Lo"i. Lo presentía. Sor eso estarC a#uí por si el cora!e te abandona. -i pierdes %uer&as yo te las darC. -i tu vo& se va yo gritarC por ti' $e necesito conmigo y nuestro hi!o tambiCn' Así #ue no ba!es la cabe&a' Ficiendo a#uello lo bes> lento en los labios para luego pasar un bra&o detrás de su espalda ayudándolo a sentarse me!or y compartiendo el dolor. . Lo"i apenas si %ue consciente de la vo& ?rme de Kdín al demandar a los ancianos #ue $hor debería permanecer en la habitaci>n. ;o tuvo cabe&a para escuchar del todo las %rases #ue us> pero not> su preocupaci>n en las palabras #ue e de algGn modo saber #ue Kdín su padre estaba al pendiente de su bienestar y el de su %uturo nieto aun#ue los calambres constantes no le de!aron dis%rutar de lo #ue había descubierto en el peliblanco. ero eso pasaba a un segundo e incluso tercer plano en ese instante. Ia habría tiempo para a%rontar nuevas realidades y re%or&ar algunas de antaJo pero ahora lo primordial era luchar por #ue las cosas llegaran a buen tCrmino. Aun#ue Lo"i comen&aba a dudar #ue así %uera. A cada segundo #ue pasaba el dolor tormentoso incrementaba de nivel haciCndole creer #ue a#uello ya rebasaba el límite de lo normal por lo #ue empe&> a temer tanto por su vida como por la del bebC. ensar #ue algo podría pasarle imaginar #ue tanto esperar tanto ilusionarse día a día con su llegada había sido en vano le pusieron al borde del llanto. $antas noches había soJado con a#uel pe#ueJo ser le había visto entre sueJos corriendo y riendo abra&ándolo a Cl y a $hor diciCndoles papá. I ahora el imaginar #ue a#uellos sueJos podrían no reali&arse !amás tenían hecho girones el cora&>n agobiado del hechicero. Más aun al sentir #ue sus %uer&as Na#ueaban y #ue la conciencia se le nublaba a pesar de hacer un es%uer&o descomunal por mantenerse al pie del caJ>n por lo #ue solo podía valerse en esos momentos de $hor de su amor y %uer&a. -olo podía suplicarle en silencio #ue no le de!ara y compartiera con Cl su valor y entere&a. Pue compartiera con Cl y su pe#ueJo todo lo #ue era y así lograr a#uel milagro de vida !untos como uno solo. FespuCs vinieron a#uellas %rases de labios del n>rdico. A#uella mirada llena de calide& bravura y decisi>n. A#uel y labios abra&o al posicionarse detrás. Eso %uebeso tododevoto lo #ue en Lo"i%rente necesit> para y ese saberse seguro con la voluntad necesaria para seguir adelante y no de!arse vencer por#ue al ?nal de la tormenta siempre viene la calma. I sería de igual %orma #ue al ?nal de todo a#uel dolor in%ernal vendría la gloriosa recompensa personi?cada en ese hi!o suyo #ue estaba por nacer.
STracias... por no de!arnos... Murmur> entre los espasmos a%errándose a las manos de $hor con las suyas en espera de #ue los ancianos comen&aran su labor #uienes a pesar de no estar con%ormes con la presencia del o!ia&ul acataron la orden del monarca y le permitieron #uedarse. -abían #ue Lo"i necesitaría en #uien apoyarse por lo tanto terminaron por concentrarse en lo realmente importante antesade #ue algo mal.se-obretodo viendo pelinegro sudaba mares y su saliera en de%ormaba en unc>mo grito el mudo acompaJado del ro!o invadiendo el rostro en su totalidad y las venas marcándose en sus sienes por el es%uer&o. +ue entonces #ue los sanadores actuaron sin más demora. . Entrela&> sus dedos entre los del hechicero para darle un me!or soporte y no los apart> a pesar #ue sentía las uJas enterrándose en sus nudillos haciendo #ue sangraran levemente. S$e !urC por mi vida #ue siempre estaría a#uí incluso antes de sabernos padres Srespondi> a Lo"i omo había prometido tiempo atrás cuando ambos eran más !>venes e ine a#uel pacto en silencio. -abía #ue el pelinegro estaba temeroso de lo #ue pasaría ninguno de los dos tenía si#uiera una mínima idea de lo #ue implicaba el alumbramiento pero el n>rdico no se ale!aría por nada del mundo. Lo estaba viendo es%or&arse retorcerse entre las sábanas harto de no poder progresar un poco pero Cl estaba ahí para pasar con Cl ese calvario doloroso. Le besaba el cabello empapado en sudor le besaba su %rente le hablaba suave diciendo: &starás bien… Aguanta un poco… No te rindas… I al parecer todo ese sacri?cio por parte de ambos por ?n dio resultado puesto #ue en una contracci>n más prolongada uno de los ancianos abri> los o!os con asombro. S-u ma!estad veo algo' Uarece #ue es la cabe&a@ Wn%orm> el anciano a lo #ue $hor se volvi> a Lo"i subiendo su emoci>n. Estaban dando pasos lentos pero a cada uno el bebC se acercaba a la vida. SLo"i Qhas escuchadoR ;uestro hi!o está naciendo' QLo"iR Sel o!ia&ul observ> c>mo su pare!a echaba la cabe&a hacia atrás pegándose a su hombro parecía #ue estaba agotado hasta el cansancio SULo"i espera@ Febes resistir. -olo un poco más solo da un Gltimo empu!>n' ;o te rindas ahora nuestro hi!o está a punto de llegar. Oamos yo te ayudarC El rubio lo elev> por la cintura y volvi> a entrela&ar sus manos con las del o!iverde #uedando sentado detrás suyo a modo #ue su pecho sirviera como respaldo para Cste y besándole la nuca para motivarlo a seguir. SOamos amor mío. QEstás listoR .
A cada espasmo lleno de dolor Lo"i enterraba las uJas con %uer&a en los nudillos de $hor tratando de a%errarse a algo y así poder contender con toda a#uella tortura. Entre más tiempo pasaba el temor y la angustia se apoderaban del hechicero a pesar de las palabras de aliento #ue el n>rdico le pro%esaba. -i bien $hor estaba a su lado dándole su apoyo y su valor Lo"i comen&aba a sentirse demasiado abrumado y rebasado por la situaci>n. Estaba a nada de traer al mundo a esa pe#ueJa parte de ambos pero las sensaciones estaban siendo demasiado intensas. osiblemente más de lo #ue creía soportar. ;o pas> mucho cuando despuCs de una contracci>n #ue acalambr> todos sus nervios acompaJada de un #ue!ido prolongado y desgarrador el pelinegro escuch> al anciano decir #ue veía la diminuta cabe&a de su hi!o asomando por su vientre. or un instante Lo"i olvid> todo ese dolor #ue le #uemaba las entraJas y respir> varias veces con alivio. Estaba cerca muy cerca de poder tenerlo entre sus bra&os y poder besar su rostro tan cerca de poder decirle: $e esperé por todos estos meses… $e soñé todas las noches mientras dorm"a! incluso despierto… Y ahora estás aqu"… La emoci>n y el amor de padre estaban a Nor de piel sacándole una sonrisa liviana posando la mirada !usto donde logr> vislumbrar parte de a#uel pe#ueJo cuerpo entre #ue escuchaba al o!ia&ul detrás suyo compartiendo a#uel mismo regoci!o. ero de pronto la vista se le nubl> y una sensaci>n de desmayo le sobrevino haciCndole soltarse y echar la cabe&a atrás cayendo sobre el hombro de su pare!a. -u cuerpo comen&aba a resentir el es%uer&o y el agotamiento estaba causando demasiados estragos. -entía perderse en un letargo sin dolor se sentía tan calmo #ue no #uería despertar estaba realmente al límite de todo lo #ue podía soportar. I estuvo a punto de abandonarse en ese descanso %also cuando la vo& de $hor volvi> a resonar dentro de a#uel limbo en el #ue iba sumergiCndose cada ve& más y más pro%undo. Alcan&> a escuchar sus peticiones sus sGplicas por no rendirse por no darse por vencido cuando estaban a punto de lograrlo. -us o!os volvieron a abrirse mostrándose cansados pero con determinaci>n. Mechas de cabello a&abache se notaban pegadas en su %rente sienes y cuello. Totas de sudor surcaban su rostro y el cuerpo entero. $odo parecía estar en su contra pero no estaba solo en a#uella batalla por la vida tenía al padre de su hi!o consigo para a%rontarlo y salir victorioso. Lo harían !untos. Entonces lleno de una con?an&a renovada con el valor reunido de nuevo aumentado y realimentado por el del rubio Lo"i se acomod> me!or entre su rega&o apret> sus manos con las suyas y respirando pro%undo se concentr> en dar un Gltimo es%uer&o. SListo... . S$odo saldrá bien ya lo verás +ue lo Gltimo #ue di!o el n>rdico antes de #ue el sanador diera la indicaci>n al hechicero de seguir pu!ando. ste apret> con todas sus %uer&as los nudillos de $hor #uien sentía #ue a ese paso le destro&aría ambas manos
sin embargo ahora no había tiempo de preocuparse por Cl mismo sino por su hi!o. Lo"i daba gritos sonoros casi alaridos de muerte pero el o!ia&ul continuaba apoyándolo y con%orme las contracciones sobrepasaban el umbral de su%rimiento el bebC seguía avan&ando. La parte di%ícil era #ue la cabe&a y los hombros salieran completamente por#ue de esa manera los ancianos lo acomodarían y solo desli&arían al niJo %uera del cuerpo de Lo"i. Mientras tanto Cste debía es%or&arse más ya #ue solo habían sacado dos terceras partes de la criatura y aGn %altaban los hombros. odría ser sencillo para $hor solo hablar para #ue se tran#uili&ara pero su compaJía era crucial para brindarle la con?an&a #ue el o!iverde necesitaba aun#ue por dentro estuviera muriCndose de miedo. Lo"i estaba pu!ando pero en un segundo su %uer&a %ísica decay> en bruto haciendo #ue echara completamente la cabe&a hacia atrás y su agarre en las manos de $hor aNo!ara. El rubio se alarm> ante esto observando #ue su pare!a estaba Na#ueando su rostro se veía pálido cansado por estar en labor hacía más de seis horas. Fetenerse un instante result> contraproducente por#ue lo poco #ue había logrado avan&ar la cabe&a estaba disminuyendo anclando al bebC dentro del vientre de nuevo. $hor abri> sus o!os aterrado #uedando como un idiota sin saber #uC hacer y ver #ue los sanadores intentaban sostener las piernas del hechicero para #ue no de!ara de Ne como nunca. -i no lograba #ue se recuperara perderían al niJo incluso podría perder al mismo Lo"i. or un instante crey> #ue su mundo se derrumbaría en %ragmentos invisibles como muJecas de porcelana #ue caen destro&adas. $hor no soportaría vivir con ese remordimiento de no haber hecho algo Gtil para variar toda la %elicidad #ue estuvo a punto de consolidar en una %amilia caería por la borda... $odo #ued> en blanco pero la respiraci>n irregular del pelinegro lo revoc> un par de esmeraldas #ue lo miraban anhelantes le hicieron caer en cuenta de #ue ese momento era el indicado para darle su %ortale&a tal como había !urado. SLo"i' Sllam> susurrando su nombre derramando una lagrima por su me!illa y apretando sus manos SQ*ecuerdas #ue nos prometimos ser %uertes por el otro en caso de necesitarloR Q*ecuerdas #ue te hice el !uramento de ser tu otra mitad y apoyoR ues es momento de cumplirlo. $oma de mí la %ortale&a #ue te haga %alta no me importa si darte mi vitalidad es el precio' ero por %avor no permitas #ue tu cuerpo se debilite ha& realidad este sueJo #ue hemos cultivado por todos estos meses por %avor' on esto $hor se inclin> a darle un beso en la boca transmitiCndole con a#uel acto parte de su propia energía vital. omo si las reservas del n>rdico sirvieran para recargar y reactivar al hechicero. . Mientras más pu!aba más sentía destro&ar su cuerpo entero. ero de la misma %orma a cada es%uer&o #ue hacía Lo"i sentía como su hi!o iba emergiendo de su interior. Apenas lograba apreciarse una mínima porci>n de su ser pero estaba ahí #ueriendo salir y reunirse con ellos. on esa
motivaci>n el o!iverde volvi> a tomar impulso y pu!> una ve& más casi al borde de sentir su columna #uebrarse y sus huesos reducirse a polvo aun#ue a#uello #ue termin> por desvanecerse %ue su %uer&a de voluntad. Fe un momento a otro sus %uer&as se redu!eron casi a cero. -u cuerpo prácticamente se desvaneci> entre los bra&os de $hor igual #ue sentía su vida es%umarse. Lo"i en unno estado incluso mortalahí y Clpero lo sabía. I a pesar de ello estaba el hechicero podíacrucial más. -u valor seguía su %uer&a no. Lo sentía su cuerpo ya no le respondía estaba dormido acalambrado y e por agotarse demasiado pronto. oco a poco aGn entre la vigilia #ue emo ese pe#ueJo cuerpo volvía a hundirse en sus entraJas. *etrocedía lento pero constante y eso era demasiado peligroso Lo"i entendía la gravedad de a#uello y deseaba con toda el alma poder recuperarse para impedir #ue ocurriera algo #ue !amás se perdonaría pero era imposible. or más #ue trataba de endere&arse por más #ue luchaba contra el cansancio y se obligaba mentalmente a reaccionar simplemente estaba atado de pies y manos. ens> #ue sería lo Gltimo #ue a#uel pe#ueJo al #ue tanto habían esperado a#uel pedacito de cielo se les iba de las manos como agua sin poder hacer nada en absoluto. I Cl mismo sentía des%allecer a cada segundo. ;o #uería #ue sucediera no #uería perder a su hi!o ni tampoco #uería partir y de!ar solo a $hor con todo a#uel dolor y %rustraci>n a cuestas pero ya no podía. ;o sentía más #ue el %río y la obscuridad cerniCndose a su alrededor. +ue !usto en ese preciso instante cuando todo comen&> a verlo sombrío #ue $hor se le acerc> y clamándole con palabras llenas de %ervor y un beso devoto le cedi> todo lo #ue tenía. Le dio libre acci>n sobre su propio ser con tal de alimentar su espíritu y sus ganas de vivir no importando #ue su propia esencia se e los o!os y acept> el beso con #ue el rubio le entregaba toda su e suave y lento un par de veces y luego sus labios de!aron de moverse contra los del n>rdico para solo mantener la boca abierta !unto a la a!ena. asaron breves segundos antes de #ue una lu& resplandeciente emanara entre ambas bocas como si estuviera creándose una en diminuta. Lo"i estaba succionando parte de la energía vital de $hor. A#uella era una práctica demasiado delicada en el mundo de la magia incluso era prohibida puesto #ue a#uel de #uien se obtiene la esencia de vida podría morir si el Nu!o no se cortaba a tiempo. ero si #uerían #ue su hi!o viviera ese era el Gnico medio para lograrlo. . Furante el beso el n>rdico apretaba ambas manos del hechicero implorando re&ando a todos los dioses por#ue lo de!aran continuar. -us lágrimas resbalaban pero Lo"i correspondi> el beso y eso %ue lo #ue le
devolvi> la esperan&a al o!ia&ul y mientras pasaba separaba su boca y de!aba #ue su alma gemela tomara de Cl su propia vida. $hor cerr> los o!os de!ando #ue tomara de Cl lo #ue #uisiera. -inti> como su bravura y %ortale&a eran tomadas igual #ue una parte de su alma se desprendía de su cuerpo y via!aba por entre su boca para alimentar la vitalidad del pelinegro. Fe pronto sus nudillos %ueron presionados con la entere&a y ?rme&a de un guerrero con lasupo marca la %uer&a #ue usaba para agarrar cual#uier ob!eto. Entonces #uede había %uncionado Lo"i$hor había recuperado parte de sus energías y conseguido la resistencia #ue poseía el rubio para superar ese obstáculo. iertamente ahora $hor era el cansado. K #ui&á no tanto. ;o solo se sentía como si hubiese entrenando una larga !ornada lo cual era usual en Cl. on esta clase de cansancio lo Gnico #ue restaba era recostarse y dormir así sus energías naturales volverían a restablecerse. En todo esto el n>rdico inclin> su rostro para !untar de nuevo sus labios a los a!enos. SQ5n Gltimo intentoR Spregunt> al separarse sosteniendo a Lo"i de nuevo y uniendo sus manos %uertemente . oco a poco sinti> la energía pasando de $hor hacia Cl comen&ando a correr por sus venas invadiendo cada parte de su cuerpo y restableciendo toda su voluntad. Ahora tenía la entere&a necesaria para traer al mundo a ese hi!o #ue tanto aJoraron y procuraron durante a#uellos meses. El o!iverde pudo notar #ue la %uer&a del rubio le abandonaba para irse con Cl igual #ue percibi> como $hor empe&aba a padecer la %atiga por lo #ue habiendo tomado lo necesario de!> de absorber su energía vital no llegando a e y sus labios volvieron a tocarse por breves instantes. Lo"i abri> entonces los o!os lleno de decisi>n y con una mirada ?!a y cálida murmur> la respuesta #ue su pare!a esperaba. Sagámoslo' Apret> el agarre entre sus manos y con toda la determinaci>n y %uer&a #ue transitaba por cada ?bra de su ser tom> su?ciente aire apoyándose en $hor y pu!> lo más #ue pudo dispuesto a no de!ar de hacerlo hasta #ue su pe#ueJo estuviera %uera y a su lado. ;o pararía hasta escuchar su llanto muestra de #ue era parte del mundo y de sus vidas. . Fe nueva cuenta el n>rdico y el hechicero se sincroni&aron para acomodarse y hacer #ue Lo"i se pusiera en posici>n. 5no de los sanadores le indic> #ue pu!ara y así lo hi&o el pelinegro con todas las %uer&as #ue $hor le había dado gritando con átomosus de uJas on #ue e!ercía Lo"i sobre $hor en desesperaci>n por #uerer dar a lu& de una ve& era enorme pero no se comparaba con la intensa actividad #ue
tenía el parto menos con las contracciones #ue no de!aban prácticamente respiro ni intervalo a descansar. $hor observ> c>mo la en del o!iverde era de ser partido por la mitad y solo se a%err> a su abra&o escondiendo su cara en la nuca de su pare!a en cuanto viera un poco de sangre manchando la sábana blanca. Algo le habían comentado #ue a#uello era normal pero $hor pre?ri> no mirar c>mo sangraba el Aun#ue hechicero tan solonoapret> los parpados y se#uebranta mantuvo los esperando. su espera dur> mucho. Lo"i casi huesos de sus manos al e en esas cuatro paredes como el alarido más horrendo. El o!ia&ul sinti> a su amado curvarse en dolor callando al instante !usto cuando un llanto #ue no era el suyo se sum> a los ruidos de la habitaci>n. Levemente $hor levant> la cabe&a abri> los o!os con temor y lo vio' Era una pe#ueJa criatura embarrada en cebo y algo de sangre con su cord>n umbilical intacto sus pe#ueJas manos y pies crispados y llorando para usar sus pulmones por primera ve&. Pued> sin habla como cuando Lo"i le había comunicado #ue estaba en cinta. ;o pudo evitar #ue la emoci>n lo abrumara mani%estándose en lágrimas. Ahí estaba %rente a sus o!os su hi!o por ?n había nacido. -e gir> de nuevo hacia el pelinegro enternecido por verlo aliviado y respirando pro%undo con su cabe&a recargada en su hombro y una ligera sonrisa invadiendo su rostro. -e inclin> y le dio un beso imposiblemente emocionado orgulloso por haberlo visto tan %uerte y valiente incluso más #ue Cl mismo. El hechicero mantenía sus esmeraldas cerradas pero $hor dese> #ue las abriera para #ue se llenara de a#uella dicha como Cl. SLo"i' Ia naci> Uya naci> amor mío@ Sle comunic> llorando de la alegría SIa naci>' Me siento tan orgulloso de ti %uiste muy %uerte Sdi!o sin soltar sus manos viendo como su hi!o pataleaba siendo e en el rega&o de $hor y seguido de eso un llanto acompaJ> su cansancio. 5n llanto limpio sano %uerte #ue le indicaba #ue su es%uer&o y todo a#uel su%rimiento habían valido la pena. Puiso llorar de alegría pero con tanto agotamiento lo Gnico #ue el o!iverde pudo hacer %ue esbo&ar una trCmula sonrisa entre #ue descansaba el cuerpo y aNo!aba la tensi>n en las manos del n>rdico. Escuchaba claramente lo emocionado de $hor al hablar notando su naciente llanto al in%ormarle #ue su pe#ueJo su hi!o estaba por ?n entre ellos.
El hechicero respiraba agitado tratando de recuperar todo el aliento perdido en gritos manteniendo los o!os cerrados temiendo abrirlos temiendo #ue a#uello no %uera más #ue un sueJo y #ue al devolver la mirada a sus esmeraldas acuosas todo desaparecería como una burda ilusi>n. Más sin embargo al sentir unos labios sobre los suyos saboreando lo salado de sus lágrimas y percibiendo a#uel regoci!o #ue hinchaba su pecho entonces supo #ue todo era real. El dolor el cansancio las lágrimas el llanto #ue hablaba de un nuevo ser reciCn llegado muy esperado y amado. Lentamente abri> sus o!os y ahí lo vio. Los sanadores lo limpiaban con dedicaci>n y cuidado cubriCndole despuCs con una manta de algod>n envolviCndolo delicadamente mientras el bebC sollo&aba y apretaba sus pe#ueJas manos mostrando sus o!os presionados y el rostro ro!o por el es%uer&o al llorar. Lo"i no pudo evitar sentir #ue su cora&>n se #uebraba y restauraba al mismo tiempo así como tampoco pudo evitar #ue su llanto silencioso acompaJara al de su hi!o y al de $hor. Esper> por Cl y ahora estaba ahí siendo colocado entre sus bra&os. Sola pe#ueJo... ;o llores más todo está bien ahora' Smurmur> cerca del rostro del niJo con vo& dulce y temblorosa SEsta a#uí $hor... ;uestro hi!o... Sse dirigi> al n>rdico dedicándole una sonrisa entre lágrimas . Entre #ue Lo"i recuperaba el aliento y el hi!o de ambos era atendido $hor ayud> al hechicero a incorporarse en lo #ue terminaban de limpiarlo a Cl tambiCn. uando el anciano dio buen visto del o!iverde y se llev> todas las mantas y toallas usadas de!ando sábanas limpias el n>rdico lo cubri> con una %ra&ada delgada sentándose despuCs a su lado para esperar !untos #ue les entregaran a su bebC. Luego de unos minutos y al parecer no habiendo surgido ningGn problema uno de los sanadores tom> un pe#ueJo bulto blanco y lo deposit> en el rega&o de Lo"i. uando el pelinegro destap> la manta y el rostro limpio de la criatura #ued> descubierto el cora&>n de $hor rebo&> de alegría y eu%oria. SLo veo Lo"i on?rm> lo #ue el hechicero había dicho pasando su mano derecha a la cabellera negra de Cste mientras #ue su iuierda reposaba !unto a la otra #ue sostenía al pe#ueJo niJo. Acerc> su rostro cerrando los o!os llorosos para besar la %rente de su pare!a sabiendo #ue a#uello era la cGspide de una %elicidad aJorada tiempo atrás. Entre tanto el bebC pareci> calmarse al escuchar los latidos en el pecho de Lo"i y poco a poco su llanto mengu> #uedando balbuceando. Al igual #ue su hi!o $hor calm> su llanto emotivo sin de!ar de abra&ar a ambos. SEs hermoso' . Aun no podía creer #ue a#uello estuviera pasando. Era tan maravilloso tan irreal #ue le parecía estar viviendo un sueJo más. I lo hubiera creído así de no ser por#ue sentía el calor de ese pe#ueJo cuerpo en su rega&o su peso liviano entre sus bra&os su vibrar in#uieto por el llanto mismo #ue poco a
poco iba silenciándose con%orme le sostenía ?rme contra su pecho. abía sido un proceso muy di%ícil pero al ?n le conocía. Lentamente el bebC %ue acallando su primer llanto en pos de anunciar al mundo #ue era parte de Cl. $ambiCn estaba cansado y muestra de ello %ue a#uel boste&o enternecedor abriendo su boca diminuta como #ueriendo atrapar una buena bocanada de aire motivo #ue hi&o reír #uedo al o!iverde. SEres tan %rágil y pe#ueJo. $an inde%enso pero a la ve& %uerte... $e a%erraste a la vida te a%erraste a #uedarte. I te puedo !urar #ue tu padre y yo vamos a cuidar de ti siempre por#ue eres nuestro mayor sueJo Eiliv ronunci> a#uellas palabras con el más grande amor hacia su hi!o dándole así un mensa!e de bienvenida igual #ue un nombre acompaJado por un beso cálido en su liviana %rente. . SEiliv... *epiti> el n>rdico endere&ándose un poco para dirigir su dedo índice y ro&ar el suave rostro de su hi!o pasándolo a su pe#ueJa mano misma #ue se cerr> conapretándolo %uer&a alrededor de su dedo $hor sonri> orgulloso de ver a su hi!o con %uer&a habíagigante. heredado su %ortale&a como bien Lo"i había dicho. $ambiCn había el cabello dorado de su padre pero la piel blanca y per%ecta del hechicero y probablemente sus o!os esmeralda o hasta #ui&á sus dotes mágicos. Escuch> c>mo Lo"i le daba la bienvenida al nuevo integrante de su %amilia. -e le veía genuinamente %eli& reali&ado como !otun y consorte del rubio sonriendo al caer en cuenta #ue ese sueJo estaba dormitando en sus bra&os y se movía para acomodarse me!or. $hor tambiCn se hall> sonriendo sin soltar la manita de su hi!o y acariciando el cabello a&abache de su alma gemela. SPuisiera darle la bienvenida yo tambiCn... Quedo cargarloR Sle pregunto a su pare!a -abía #ue en esos instantes el hechicero no #uerría separarse por mucho tiempo del bebC debido a la conen especial #ue había %or!ado con Cl durante los casi nueve meses de embara&o tanto #ue su hi!o reconocía los latidos la vo& y la respiraci>n del pelinegro. Aun#ue probablemente conocería tambiCn la vo& del n>rdico dado #ue durante la gestaci>n había pataleando al oírlo hablar y besar a Lo"i. Entonces cabía la oportunidad de #ue no llorara estando en bra&os de $hor despuCs de todo era su padre. . Luego de haber dedicado sus primeras palabras a su hi!o Lo"i se perdi> en ese pe#ueJo rostro arrugado y dormitante de ?nos cabellos dorados y te& de porcelana hallándolo en e su semblante amoroso tornándolo serio no molesto pero si un tanto indeciso. ;o respondi> al instante más permaneci> meditando en silencio por varios segundos sin apartar sus esmeraldas del pe#ueJo para luego emitir su respuesta. S-olo si no terminas creyendo #ue es un tarro Fi!o tratando de mantener la seriedad y advertencia en su tono de vo& aun#ue terminando por sonreír con travesura ante la broma ?!ando sus o!os risueJos en los &a?ros erdico solía pedir de a#uella %orma tan peculiar otro tarro de cerve&a o vino a&otando el tarro al suelo mismo #ue terminaba hecho aJicos cuando bebía la Gltima gota del eli y tomando con sumo cuidado al bebC lo deposito en bra&os del o!ia&ul indicándole antes c>mo debía cargarlo. uando Cste lo tuvo por ?n Lo"i no pudo evitar clavar su mirada anhelante en ambos el cuadro #ue veía era de lo más entraJable #ue alguna ve& pudo admirar. $hor despedía un porte Gnico %uerte varonil y protector pero al tener a su hi!o en bra&os era una me&cla de todo eso con delicade&a sensibilidad y vulnerabilidad. -in lugar a dudas $hor era #uien debía estar a su lado por toda la eternidad siempre cuidando de Cl y su pe#ueJo Eiliv. . on paciencia de santo $hor acun> al pe#ueJo entre sus bra&os sonriendo ampliamente con el cora&>n en la garganta dispuesto a romper en lágrimas de nuevo pero conteniCndose para admirar a su hi!o completamente.
S;o claro #ue no *espondi> a la broma de Lo"i con respecto a su costumbre de arro!ar todo contra el suelo e. En un instante observ> en un espe!o le!ano la silueta de ambos. Le pareci> particularmente gracioso el contraste de tamaJos la mano de su hi!o ni si#uiera abarcaba un tercio de su palma podía cargarlo con un bra&o y no se caería pero aun así el n>rdico lo sostenía de %orma protectora con los dos bra&os marcados de mGsculos protuberantes. En realidad el bebC era muy pe#ueJo tanto #ue los bíceps del o!ia&ul llegaban a cubrir su rostro angelical solo de!ando entrever su ri&ada cabellera. Lo contempl> varios segundos embelesado en su inocencia radiante bello como Lo"i a!eno a cual#uier pensamiento amena&ante del mundo e el más a%ortunado de todo el cosmos por ser padre de tan divina criatura #ue era producto del más sincero amor #ue naci> una cálida tarde otoJal entre el hechicero y Cl. Sey' ola EilivSba!> un poco la manta para ver me!or su rostro dormitando mundo e y dio un cálido beso en su %rente haciendo #ue la criatura boste&ara y balbuceara Luego de haberlo cargado por otro rato decidi> entregárselo de nuevo al pelinegro #uien lo veía sonriendo sentado. Lucía cansado pero mantenía ese brillo #ue había adoptado durante el embara&o un brillo #ue reNe!aba su deseo de criar a ese bebC !unto con $hor. I en cuanto Eiliv estuvo dormido enlala%rente. seguridad del rega&o de Lo"i el rubio se sent> a su lado besándole SQ>mo te sientesR Q;ecesitas #ue traiga algoR Spregunt> en pos de ser servicial con el hechicero pero meditando sus palabras de nuevo por#ue seguramente solo deseaba su compaJía SQK solo debería #uedarme a tu lado recordándote cuanto te amoR . *ealmente le parecía gracioso ser partícipe de a#uella escena. OiCndolo desde ese punto gracioso $hor era una monstruosidad en comparaci>n con Eiliv de #uien apenas si lograba distinguirse su pe#ueJa cabe&a entre los portentosos bra&os del n>rdico motivo #ue le hi&o sonreír divertido a Lo"i. -i Cl mismo llegaba a sentirse %rágil diminuto cuando $hor lo de abra&aba ya podía imaginar lo #ue sentiría su hi!oy cuando %uera consciente tal di%erencia corporal. ero no le cabía duda de #ue al igual #ue Cl Eiliv se sentiría mucho más seguro con la protecci>n de a#uella imponente presencia paternal.
5na ve& el bebC envuelto en el rega&o de su pare!a Lo"i permaneci> escuchando las palabras de bienvenida con #ue $hor se dirigía hacia el pe#ueJo. -e #ued> observando silencioso estudiando con detalle cada gesto en el rostro del o!ia&ul #uien parecía conmovido hasta el límite con el pecho desbordante de emociones y sentimientos. ;ot> c>mo en sus &a?ros lágrimas de dicha se agolpaban aun#ue aGn mantenía la ?rme&a necesaria para contener el seguro llanto no por parecer dCbil sino por#ue a pesar de haber pasado ya la etapa crítica el rubio #uería seguir siendo su apoyo y no podía darse el lu!o de doblarse. El hechicero entendía eso pero de haberse de!ado vencer el n>rdico por ese nudo en la garganta #ue seguramente tenía atorado no se lo habría recriminado sino todo lo contrario. Además ambos tenían un motivo %uerte e importante por el cual llorar no un llanto de desaliento un llanto de %elicidad por la consumaci>n ?nal de haberse amado pro%undamente. oco rato despuCs $hor le devolvi> al pe#ueJo Eiliv #uien había terminado por caer rendido al mundo de los sueJos tal y como el propio Lo"i se veía tentado hacer pero sus ganas de seguir contemplando ese peda&o de cielo entre sus bra&os le dieron la energía su?ciente para mantenerse despierto y velar por su sueJo. Lo acun> más cerca de su pecho hasta #ue su cabe&a #uedara pegada a su cora&>n para #ue durmiera plácidamente arrullado por sus latidos. I tal parecía el niJo reconoci> al instante a#uel golpeteo acompasado ligeramente acelerado por la emoci>n puesto #ue lade> su diminuto rostro hacia el pecho de su padre o!vierde removiendo tambiCn su cuerpecito como #ueriendo acurrucarse me!or. A#uello hi&o #ue Lo"i e #ue pudiera llegar a en #ue le parecía demasiado bueno para ser verdad... pero lo era. Estaba ocurriendo !usto en ese preciso instante. S-iento como si cientos de Oolstagg me hubieran caído encima pero creo #ue vivirC Sreplic> sonriendo de lado en son de broma a la primera pregunta del n>rdico iertamente no había sido como si te sacaran una astilla del dedo aun#ue tambiCn era cierto #ue el pelinegro no se sentía al borde de la muerte solo era agotamiento. Más de seis horas de labor dolores #ue ni si#uiera se los deseaba a su peor enemigo y e con ?ngida ingenuidad mirándole cálido y amoroso . El n>rdico asinti> divertido ante lo dicho por el hechicero sobre Oolstagg y luego sonri> con una dicha Gnica cuando le pidi> #ue permaneciera con Cl. (usto donde era su lugar. onserv> su postura en lo #ue ambos admiraban
en silencio a su hi!o #uien no hacía otra cosa #ue dormir pací?camente y de ve& en cuando sacar su lengua diminuta para pasar saliva. $enía un olor bastante peculiar y por alguna ra&>n $hor se dedic> a desci%rar #uC aroma era. ;o había olido algo así en su vida #ui&á era un aroma propio de bebCs. Fecidi> restarle importancia al olor y en%ocarse en prestar su atenci>n al más mínimo movimiento. -abía #ue Lo"i estaba cansado se veía abatido hasta lossuhuesos sus parecían rendirse ante el sueJo. El o!ia&ul recarg> %rente yen la o!os de Lo"i meciCndolo para #ue se recostara en su pecho. abía sido una larga !ornada para Cl y necesitaba reposo $hor vigilaría cada segundo y se mantendría a su lado como perro al pie del lecho de su amo. Eiliv era realmente hermoso una preciosidad personi?cada y combinaci>n de ambos era su amor en miniatura depositado en una criatura #ue pataleaba y balbuceaba. Eiliv representaba para ellos su tesoro más preciado su todo su mundo sus almas me&cladas en una sola personita... $hor no podía pedir más. SFeberías dormir el parto te de!> e tiernamente besando los párpados del o!iverde #uien estaba a punto de caer en los bra&os de Mor%eo . Ambos se mantenían en completo silencio Gnicamente mirando a su hi!o prestando total atenci>n a su liviano respirar y a los sonidos propios de un bebC cuando duerme ya %uera un boste&o el pasar saliva o el imaginar entre sueJos #ue su delicado paladar saboreaba alguna cosa. Eran simples cosas #ue a o!os de otros no tendrían el menor interCs pero para $hor y Lo"i era algo nuevo y emocionante estaban aprendiendo a ser padres y cada mínimo gesto de su hi!o les parecía todo un acontecimiento #ue debían grabar en sus memorias. ;o #uerían perderse ni un solo momento lo #ue %uese #ue hiciera Eiliv #uien aGn era inconsciente del gran impacto emocionalsus #uealmas estaba de!ando losa cora&ones de ese par de seres #ue %undieron para darle en vida Cl. I aun#ue Lo"i #uería seguir recolectando memorias de sus primeros instantes con su pe#ueJo más pronto #ue tarde el cansancio comen&> a ganar terreno en su lucha por mantenerse pendiente de todo lo #ue sucedía. oco a poco sus párpados iban colapsando más aGn por sentir la calide& de ese cuerpecito pegado a su pecho. A#uel calor entre padre e hi!o lo envolvía poco más a cada instante sirviCndole de cobi!o por lo #ue ya era casi inminente #ue entraría en un estado letárgico en cual#uier momento. Fe eso $hor se dio cuenta y %ue cuando le acomod> delicadamente sobre su pecho besándole los párpados y acunándolo !unto con Eiliv mientras le sugería tomarse unas horas de merecido descanso. El hechicero se de!> hacer aun#ue todavía permanecía renuente a #uerer dormir pero sabía #ue estando ahora en el rega&o de $hor bastarían pocos minutos para caer irremediablemente. ens> en re%utar la propuesta todavía #uería seguir contemplando a ese hermoso ser #ue lleg> a sus vidas con tanto es%uer&o de por medio. -in embargo mal #ue le pesara el rubio
tenía ra&>n debía recuperar %uer&as para poder atender a su pe#ueJo como debía más tarde podría #uedarse observándolo todo lo #ue #uisiera y no solo a la noche sino todos los días. Febía estar en >ptimas condiciones para verlo crecer así #ue no le #ued> de otra más #ue tomarle la palabra. Lo"i se reacomod> con cuidado para no despertar a su hi!o y decidi> acompaJarlo a ese maravilloso mundo de ensueJo donde seguro le vería. Aun#ue primero decirle algo muy importante al n>rdico algo #ue no pudo decir antes#uiso por todo el movimiento. S$e amo $hor... $e amo... Murmur> soltando un liviano suspiro al tiempo #ue sus esmeraldas #uedaban custodiadas por los párpados cayendo como cortinas pesadas. Meses atrás a#uella noticia había llegado como un evento inesperado algo #ue ninguno tenía contemplado como una realidad pr>n negativa. -in embargo nada era seguro puesto #ue pese a todo pron>stico en contra Lo"i descubri> a#uella tarde de verano #ue un milagro se había %or!ado entre Cl y $hor. (untos habían consolidado a#uel amor latente %ormando una nueva vida una nueva en total y completa de la relaci>n entre $hor y Lo"i así #ue por a#uí nos vemos la pr> su amor al hechicero un amor más allá de lo %raterno más allá de camaradería un amor real y verdadero del #ue solo un hombre enamorado es capa& de emo se lo di!o nervioso y ansioso tratando de devolverle a#uella %e y esperan&a en sí mismo buscando la %orma de regenerar sus ganas de seguir darle un motivo para continuar y no de!arse tragar por el vacío y la soledad. Le con%es> a#uel sentimiento #ue le atravesaba el pecho y lo hacía #uerer estallar estando solos ba!o la sombra de a#uel vie!o roble aun erguido en la ladera de la montaJa #ue daba al hori&onte. Lo"i estaba con%undido y un tanto renuente sus me!illas se miraban encendidas y sus labios inciertos apenas pudieron en. -in esperar una respuesta inmediata $hor se aventur> y le rob> un beso no intenso más solo presionando sus labios con los a!enos. El o!iverde #ued> estático y pasmado sudando %rio pero al mismo tiempo sintiendo un %uego recorrer su interior. oco despuCs de separarse ambos habían #uedado mirándose sin poder articular palabra alguna. -us labios temblaban igual #ue sus cuerpos y sus cora&ones palpitaban %uertes como el retumbar de un tambor. +ue en ese mismo instante #ue la llama se encendi> o termin> de hacerlo y su historia !untos dio un paso más allá de la hermandad. I
ahora el momento de dar otro paso importante despuCs de haberse convertido en padres había llegado a o!os de $hor. Lo tenía %ríamente calculado. El pe#ueJo Eiliv había sido cambiado y alimentado así #ue estaba listo para pasar toda la tarde siendo consentido por +rigga. -us deberes en el palacio habían concluido luego de asistir a una reuni>n de conce!o y su padre no le necesitaba para más tarde por lo #ue se dispuso a ir a#ue su alcoba y proponerle una salida casual Lo"i solo dos. $hor sabía en un principio el hechicero podría no aaceptar del ellos todo convencido se había apegado tanto a su hi!o #ue le causaba cierta ansia de!arlo por largos periodos. ero si llegaba con su madre no se negaría despuCs de todo ella era la primera persona a #uien Lo"i le con?aría el bienestar de su hi!o. onvencido entonces llev> a su pare!a al pie del roble. -uspir> recordando todo lo #ue el %rondoso árbol había presenciado seguramente. Luego de declararse y %or!ar una relaci>n más s>lida solían regresar a ese sitio y mirarse por horas no les hacía %alta usar palabras de por medio por#ue sus caricias en las manos se comunicaban al igual #ue sonriCndose mutuamente c>mplices en todo. -iempre en todo' Así $hor había tomado esa decisi>n tan importante. Eiliv no tenía tres meses de haber llegado a sus vidas y la conen #ue Cl y su alma gemela tuvieron antes durante y despuCs de su nacimiento había acrecentado su amor probándole a todos los nueve reinos #ue eran las mitades per%ectas. QPuC otras pruebas necesitabaR $odo era más claro #ue el agua. SLo"i este roble nos ha visto por un largo tiempo demostrarnos #ue somos una combinaci>n Gnica en el cosmos. ;os ha oído decir !uramentos y promesas #ue seguimos pro%esándonos día con día. a sido testigo de los puntos clave de nuestra relaci>n y acompaJado en cada uno... oy #uiero escribir otra memoria en este roble Shabl> nervioso ensayando un discurso previo #ue había preparado para el hechicero . SI entonces el drag>n al&> el vuelo surcando los cielos con el guerrero montado en su lomo y... Lo"i contaba una historia al pe#ueJo Eiliv #uien recostado en medio de la gran cama de sus padres movía sus manitas y estiraba y retraía sus regordetes piernas a modo de pataleos mientras sus esmeraldas se entretenían con el drag>n de plasma a&ul #ue el hechicero hubo creado para ambientar su relato de aventura. El drag>n iba de un lado al otro haciendo piruetas en el aire sobre el rostro emocionado del niJo #uien sonreía de ve& en cuando igual #ue intentaba alcan&arlo cuando pasaba entre sus manos. La historia estaba por pasar a la me!or parte cuando la puerta de la habitaci>n se abri> interrumpiendo así la continuidad del relato. El pelinegro observ> con alegría entrar a +rigga y a $hor detrás de ella. Ambos se veían con una e relevante en el momento por lo #ue el o!iverde lo pas> de largo creyendo
#ue le habían visto actuar el cuento con tanto ahínco y ese era el motivo de sus caras tan e su %rente al tiempo #ue le invitaba a dar un paseo entre #ue la reina se situaba al otro lado reclinándose para besar a su pedacito de cielo en ambas me!illas. $hor #uería llevarlo a ver el atardecer como cuando eran más !>venes y mientras tanto sumeses madrede cuidaría de Eiliv. primeros segundos dud>. En esos casi tres ser padre no seLos había separado un soloLo"i instante de su hi!o y eso de ausentarse por un rato le causaba intran#uilidad pero debía admitir #ue la idea no le desagradaba al contrario sería bueno pasar un tiempo a solas con el n>rdico. Ambos se merecían un breve tiempo !untos. Así #ue sabiendo #ue no había nadie más capa& #ue +rigga para hacerse cargo de su pe#ueJo Lo"i acept> la invitaci>n a salir y recordar vie!os tiempos. -e inclin> entonces sobre la cama para despedirse con un beso en la %rente del bebC susurrándole un: 4olveremos pronto. +é buen niño * cuida de mamá /rigga! %de acuerdo(... Luego de eso el hechicero bes> la me!illa derecha de la reina y en seguida tom> la mano #ue $hor le o%recía. -e dispusieron a salir no sin antes el n>rdico despedirse de Eiliv y su madre. Al principio se imagin> #ue irían a alguno de los !ardines incluso al bos#ue pero el o!ia&ul termin> llevándolo al vie!o roble. El lugar donde empe&> todo. Fonde una tarde como esa otoJos atrás $hor le con%esara su amor verdadero. A#uel lugar signi?caba muchas cosas para Lo"i era un sitio especial lleno de bellos recuerdos lleno de e de in#uietud e intriga en cuanto escuch> a#uellas palabras cargadas de seriedad y nerviosismo por parte del rubio #uien le había tomado las manos con un to#ue vacilante. -us esmeraldas le miraban e el ceJo percibiendo #ue cierto tipo de angustia le invadía. SQA #uC te re?eres con esoR Sindag> interesado y algo ansioso por saber lo #ue el n>rdico estaba comunicándole . $hor respir> pro%undo ante la curiosidad de Lo"i. or supuesto #ue preguntaba Q#uiCn no sentiría curiosidad cuando tu pare!a irrumpe durante un tiempo de calidad con tu hi!o te propone sospechosamente #ue caminen por los !ardines y te habla con seriedad latenteR El n>rdico estaba pensando demasiado nunca en su vida tuvo #ue concentrarse tanto en un solo asunto. El comien&o era sencillo sacar las palabras no tanto. I tenía su discurso !usto en la punta de la lengua pero de inmediato su mente se blo#ue>. ;i si#uiera record> c>mo debía dirigirse al pelinegro se sentía diminuto y sumamente alterado sudando %río anticipando respuestas negativas a lo #ue iba a proponer. ero se dio cora!e como siempre lograba conseguirlo a Gltimo minuto.
SIo... Estuve reNen el tiempo #ue llevamos !untos lo #ue hemos en%rentado y vivido !untos el nacimiento de Eiliv... Sempe&> SI parece #ue nada nos %alta... ero lo pensC mucho y creo #ue es tiempo' Le acarici> primero la me!illa para despuCs arrodillarse %rente al hechicero como un caballero de la corte medieval se inclina ante su monarca. Le tom> la iuierda con su diestra mientras #ue con la otra se buscaba algo enmano el bolsillo. . Le escuch> hablar sobre reNen tanto en su vida como pare!a y ahora como %amilia. or breves segundos Lo"i crey> #ue algo andaba mal tal ve& era una clase de duda sobre su relaci>n o algo por el estilo. iertamente las cosas habían ido cambiando en todos esos aJos. rimero los oscuros días donde el odio pudo más #ue el amor su vuelta a casa y la segunda oportunidad #ue tuvo para volver a ser parte de a#uello #ue alguna ve& tuvo. Luego su relaci>n prohibida con $hor misma #ue se trans%orm> en una relaci>n abierta ante sus padres y el reino entero y despuCs la llegada Eiliv. ara Lo"i todo per%ecto no había en el comportamiento dede $hor #ue le di!era #ue era ocurría algo %uera de lonada normal. Entonces no entendía por #uC de la nada le hablaba de todo a#uello y de ese modo tan serio incluso preocupante siendo #ue al rubio la seriedad no le iba... a menos #ue %uera algo realmente importante. I tal parecía lo era. Al oírle decir #ue *a era tiempo su ingenio todavía no lograba procesar la idea #ue el n>rdico #uería mostrarle por lo #ue su en se torn> más intrigada me&clando algo de impaciencia al no encontrar el meollo del asunto. Estaba por cuestionarle por e la me!illa con to#ue suave pero tembloroso terminando arrodillado %rente a Cl y tomando su mano mientras buscaba algo en sus bolsillos con premura valiCndose de su iuierda libre. se Al instante acall>secual#uier pregunta o cuesti>n su boca sec> sus Lo"i entraJas estremecieron sus#ue!a piernas Na#uearon y su cora&>n palpitaba %uerte y desbocado. ero sus esmeraldas y labios se abrieron en una me&cla de incertidumbre temerosa en cuanto el rubio sacara un anillo dorado con una esmeralda incrustada. Puiso decir algo pero simplemente su lengua se había dormido. Puiso salir corriendo pero sus pies estaban pegados al suelo. Puiso retirar su mano de entre la de $hor pero estaba congelado... . El o!ia&ul no se atrevía a levantar la cabe&a por#ue intuía #ue su amado estaba sorprendido y decir sorprendido era poco. odía entender por el temblor #ue se e#ue #uedarse unos#ue segundos sin hablar para darle tiempo a procesar lo #ue seguramente ya sospechaba. A di%erencia de Cl su pare!a era más inteligente y deducía todo con la más mínima pista. $hor sabía #ue Lo"i lo sabía.
ubiera permanecido sin dar la cara pero ante un acto tan importante #ue signi?caba un cambio radical uno más grande incluso #ue el nacimiento de su hi!o era digno de hacerse con los honores #ue merecía. -in más $hor levant> el rostro clavando sus &a?ros con determinaci>n en las esmeraldas de in#uieto mirar sosteniendo el anillo todavía. SMe pasC noches en vela debatiendo conmigo mismo si algo nos hacía %alta. Esinigualable cierto #ue tener una es relaci>n pGblica y aceptada nuestro mundo es algo así como inigualable #ue hayamos por podido concebir a Eiliv su nacimiento %ue nuestra mayor bendici>n... ero entendí #ue solo había un paso más un escal>n más para llegar a la cumbre de la %elicidad eterna amándote Sapret> más su mano y levant> el anillo con decisi>n para #ue %uera visualmente más detallado por el hechicero SLo"i Lau%eyson... ;o tengo dudas estoy dispuesto a compartir el resto de mi vida contigo y #uisiera preguntarte... -e cort> su respiraci>n. Estaba realmente nervioso. SPuisiera preguntarte si... Q-i #uisieras unirte a mí por medio del E"tes"ap y el dote de /riggaR . Mir> sus &a?ros decididos y luego al anillo #ue le había mostrado ya. Wnmediatamente sus orbes bailaron nerviosos sobre a#uel símbolo de uni>n #ue estaba esperando ser colocado en su dedo anular. Ahora ya no era miedo era terror lo #ue estaba sintiendo. I su pánico se increment> más aun cuando $hor le hi&o la propuesta de matrimonio. ;o era #ue Lo"i no lo amara lo hacía lo adoraba como lo más sagrado #ue tenía !unto con Eiliv. -e arriesgaría a todo cual#uier cosa por Cl daría su vida por la suya sin pensarlo. El n>rdico estaba en lo cierto respecto a #ue nada les hacía %alta se amaban se procuraban tenían una vida plena una vida nueva con la balan&a inclinada a %avor de ambos. Eran %elices así sin ataduras más #ue su promesa de amor eterno e incondicional #ue día a día se encargaban de re%or&ar en todos los sentidos. -i todo iba bien hasta ese momento entonces no tenían por #uC recurrir a rituales y ceremonias para !urar ante el cosmos y atar sus almas. ;o había sido necesario antes y a o!os de Lo"i no lo era ahora. S$hor... $hor yo... yo... Fesvi> la mirada y agach> el rostro tratando de articular su respuesta aun#ue el nerviosismo y la incomodidad del momento le hacían di%ícil poder e angustiado aun#ue rápidamente apart> la mirada por segunda ocasi>n al ver los &a?ros inciertos S;osotros... hemos estado !untos desde tiempo atrás y... y estamos bien así. ;o hace %alta #ue alguien selle lo #ue nosotros hemos sellado !usto a#uí cuando di!iste #ue me amabas Smencion> regresando sus esmeraldas al rubio
;o #uería herirlo pero a#uello era un cambio radical demasiado abrumador y no estaba seguro si Cl #uería dar ese paso. ;o por %alta de amor sino por %alta de con?an&a en sí mismo en si podría honrar con dignidad a#uel rito sagrado. . $hor abandon> su postura y se puso de pie %rente a Lo"i. Entendi> en parte la angustia #ue provocaba tocar ese tema pues era un t>pico delicado y decisivo en la vida de los asgardianos. En Midgard las bodas se celebraban tambiCn aun#ue los mortales tenían posibilidad de separarse y no lo consideraban un rito tan importante como ellos. En Asgard el matrimonio signi?caba un la&o eterno #ue por más #ue los involucrados #uisieran romper no podrían. En su mundo el dote de /rigga honraba su nombre uniendo hasta la muerte a los prometidos. -e trataba de un vínculo #ue la misma +rigga imponía entre ellos vínculo #ue no se rompería por más #ue llegaran a odiarse en el matrimonio... En Asgard solo se podía casar una ve&. El n>rdico sabía #ue el indicado sería y siempre seguiría siendo Lo"i no cabía la menor duda. Fel o!iverde pensaba #ue no elegiría a otra persona Qc>moR -implemente lo sentía. Lo"i no estaba aterrado por#ue se enamorara de alguien más solo tenía miedo a un cambio #ue involucraba un verdadero compromiso. ;ada lo eludiría si se casaban ambos ad#uirirían una nueva mirada ante la sociedad. $hor #ui&á no comprendía la magnitud de a#uello como el hechicero pero sí estaba consciente #ue era lo correcto por#ue nada podría salir mal. SLo"i mírame Sle levant> el ment>n guardándose momentáneamente el anillo S;o estoy loco cuando a?rmo #ue has sentido en tu piel tus huesos tu cora&>n #ue estamos destinados a estar !untos... $ienes ra&>n ambos hemos sellado tiempo atrás el amor #ue nos compartimos. I así como nos regoci!amos al recordar a#uellos momentos %rente a este roble mi deseo es #ue todo Asgard se regoci!e con nosotros. A#uí a la sombra de este árbol deseo gritarles a todos los dioses #ue nunca de!arC de amarte... ;o te pido matrimonio por seguir las tradiciones te lo pido por#ue así el universo se enterará #ue $hor Kdinson nunca tuvo un amor tan grande como lo tiene por ti. Pue $hor Kdinson está orgulloso de ti y de Eiliv. Pue $hor Kdinson solo #uiere rea?rmar ese !uramento #ue te pro?ri> esa tarde otoJal como la de hoy... I apenas pude darme cuenta de ello . ada palabra #ue era pro%erida por $hor se clavaba hondo en su cerebro en su pecho en su alma. $hor entendía su inseguridad y así mismo trataba de darle la con?an&a #ue necesitaba trataba de hacerle ver con sus ideales con sus o!os con el cora&>n en la mano #ue si #uería unirse de por vida a Cl era por#ue precisamente Cl era supor#ue vida. or#ue solo de había persona con #uien compartir todo lo #ue era se trataba Cl auna #uien #uería a su lado ahora y siempre por amor más #ue por obligaci>n o seguir una tradici>n.
Lo"i permaneci> en silencio meditando tanto como su mente le permitía en ese momento. -us esmeraldas se ?!aron nerviosas y al mismo tiempo detallando a#uel ocCano celeste como #ueriendo encontrar algo la mínima mancha #ue le hiciera tener una coartada para declinar la propuesta. ero por más #ue se es%or&> en hallar ese diminuto margen de error simplemente no lo encontr> y no lo hi&o por#ue $hor no mentía. Lo #uería a su lado por amor por#ue no había nadie más en su cora&>n por#ue sin Cl era solo una mitad del alma y no un alma completa. Eso era lo mismo #ue Lo"i sentía por el n>rdico su vida no estaría completa sin Cl. Wncluso teniendo solo a Eiliv necesitaba a $hor a su lado para poder sentirse pleno para poder sentirse vivo y saber #ue pertenecía a un sitio a un ser al cual am> amaba y amaría aun despuCs de la muerte. S$G estás seguro pero yo... Se ale!ándose del rubio caminando unos pasos adelante y hablando con incertidumbre S$G sabes todo lo #ue tuvimos #ue pasar para terminar así... !untos... asaron cosas #ue se salieron de control... osas #ue de no haber %allado no estaríamos a#uí como lo estamos ahora... Q>mo estás tan seguro #ue no volverá a ocurrirR -e gir> mirándole agobiado con el entrece!o %runcido y la vo& congestionada oprimida por ese miedo latente a reincidir en sus errores del pasado miedo a volver a caer en ese abismo de %rustraci>n y dolor #ue taladraba su pecho sin piedad. SQPuC tal si no resulta como imaginasR QPuC tal si yo...R Q-i yo no soy lo #ue al ?nal esperas #ue seaR . -u entrece!o se %runci> y su semblante se volvi> uno preocupado al escuchar lo #ue decía el hechicero. QFe #uC hablabaR QPuC #uería decir con #ue tal ve& no resultaría como lo planeabaR QK solo era su inseguridad por dar un gran paso como eseR... $hor no sabía cuál de las opciones era la correcta. Entendía por un lado #ue todo ese temor a pasar por lo mismo le impidiera arriesgarse. QPuiCn no tendría pavor a pasar por lo #ue ellos pasaronR FespuCs de todo al saberse amantes su%rieron el recha&o y casi la condena mán pudo simpati&ar con ellos y sentir esa vibra #ue irradiaban y los demás se negaban a aceptar. -e negaban a ver #ue sus príncipes tenían un la&o más %uerte #ue los vinculaba de por vida y ese egoísmo por Lo"i inclin> la balan&a hacia el odio por $hor de igual %orma. A%ortunadamente Kdín %ue piadoso y gracias a las palabras de la diosa tuvo otra perspectiva #ue sus hi!osde no#ue debían condenados amarse #ue no estaba malsupo sentirlo a pesar Lo"iser %uera el hi!o de por su peor enemigo. Qero #uC eso no cumplía con sus planes desde un comien&o sobre unir a sus reinos en pa&R QPuC el hechicero con todo el engaJo #ue padeci> mismo #ue lo orill> a actuar como lo hi&o no tenía derecho a ser %eli&R Q;o era obvio #ue $hor lo adoraba #ue por Cl %ue #ue Lo"i regres> a
ser el de antes a sonreír a vivir a aceptarse tal cual eraR $odo eso y más tuvieron #ue atravesar ambos. $hor al %rente de toda la travesía de%endiendo al o!iverde en contra de las críticas %ar%ulleos pre!uicios in!usticias contra Cl por#ue cuando alguien le al&aba la vo& al pelinegro al rubio le dolían las palabras tambiCn se eno!aba como Cl y sentía impotencia como Cl. Pue negaran #ue eso no %uera tener conen era por#ue estaban ciegos. El n>rdico vio c>mo Lo"i miraba el hori&onte se perdía en las praderas a la redonda en los bos#ues helados de las montaJas altas. -e acerc> hasta #uedar a sus espaldas no lo abra&> pero su cuerpo casi lo tocaba. -upo en ese instante #ue si a#uel calvario se repitiera con lo de su matrimonio entonces los asgardianos eran unos verdaderos hi!os de puta. S;ada resulta como lo imagino. Io no tengo el derecho de decirte c>mo debes ser o #uC camino vas a elegir... -olo sC #ue te amo más de lo #ue puedo soportar pactarlo %rente a los dioses sería más #ue un !uramento. Al gritarlo en vo& alta con la bendici>n de madre protegiCndonos #uedarían grabados en la historia nuestros votos se escribirían en los pergaminos del Oalhalla nuestras promesas... ;adie podría revocarlo o negarlo si se llegase a hablar a las %uturas generaciones. uede #ue nadie lo crea en aJos venideros pero #uisiera asentarlo #ue cuenten la historia increíble de un romance casi imposible para los demás mundos $hor acerc> su cuerpo y recarg> su %rente en el cabello a&abache al tiempo #ue abra&aba a Lo"i por la cintura. SQ;o recuerdas cuando la primera ve& #ue te hice el amor me susurraste #ue me dabas toda tu con?an&aR ues con%ía en mi ahora cuando te digo #ue tG eres mi hermano mi pare!a mi alma gemela... Eres Lo"i Lau%eyson la persona con #uien #uiero vivir y morir todas tus virtudes y de%ectos me enamoraron y lo siguen haciendo. ;o importa c>mo %uiste o c>mo serás despuCs. -i nos casamos me casarC con el Lo"i #ue tengo entre mis bra&os al #ue cono&co y amo tanto y no me arrepiento de haber traído de vuelta *ompi> el abra&o para darle tiempo al hechicero de reNerdico sus miedos a %racasar en dar ese paso su terror a #ue algo no saliera como debía a #ue cual#uier cosa les arrebatara esa estabilidad esa dicha #ue alguna ve& pens> !amás volvería a sentir Lo"i se gir> de nuevo dándole la espalda a $hor para esconder su pro%unda aNicci>n de los &a?ros ahora contagiados de angustiosa incertidumbre. -us esmeraldas se posaron en el hori&onte le!ano observando sol esconderse de las admirando los alrededoresela#uellos bos#uesdetrás y para!es #uemontaJas ambos visitaban de niJos perdiCndose entre los árboles !ugando a perseguirse ?ngiendo estar en medio de cientos de batallas todas ganadas gracias al poder de su imaginaci>n.
;ada de eso #uedaba ahora no más !uegos in%antiles no más pretender pelear por el honor o la libertad. Aun#ue a#uello #ue un día ?ngieron como !uego termin> por superar la ?cci>n al ?nal volviendo realidad el caos. Lo"i siempre había cargado con el peso de ser el segundo siempre viCndose relegado y a la sombra de $hor. A pesar de siempre ?ngir #ue a#uello le era irrelevante por dentro su odio era alimentado cada día #ue pasaba. Amaba a $horde era su el hermano y lolerespetaba Cl era el amor Gnico y#ue pudosinceros. entender su %orma ser Gnico #ue había demostrado lealtad uando el hechicero supo lo #ue en realidad era su verdadera naturale&a todo se desplom> %rente a sus o!os. -us ilusiones sus sueJos todo se oscureci> a su alrededor y le impidi> ver con claridad. -e sentía usado un simple títere en manos del amo #ue movía los hilos a placer y a su conveniencia. -e sentía traicionado por todos incluso por el n>rdico #uien termin> pagando por algo #ue no %ue culpa suya y #ue si lo veía desde otro punto tambiCn result> ser una víctima de las circunstancias. I aun así aun $hor siendo el blanco donde Lo"i descarg> su ira Cl sigui> insistiendo. -igui> peleando por regresarlo a Asgard y sobretodo luch> con todas sus %uer&as para hacer volver a su hermano al Lo"i #ue conocía al Lo"i con #uien en%rent> a sus padres y al reino entero para hacerles saber #ue se amaban. ;o como hermanos sino como algo más. El o!iverde sabía #ue las buenas memorias superaban a las malas y tambiCn sabía #ue ahora su vida era distinta había sido renovada. La obscuridad #ue se hubo cernido sobre Cl desapareci> y ahora solo veía brillante& lo veía en $hor en todas esas veces #ue le proclamaba su amor. Estaba en su aceptaci>n como un !otun viviendo pací?camente en Asgard. Estaba en su %amilia en Eiliv en ese pe#ueJo ser #ue había logrado unir dos ra&as antes en conNicto y ahora se volvían ra&as hermanas gracias al %ruto de un gran amor #ue sin duda estaba destinado a traspasar tanto las barreras del tiempo como del espacio. ero aun sabiendo eso aun logrando percibir #ue no había por #uC temer Lo"i lo hacía. $emía #ue todo ello %uera una vana ilusi>n y #ue al despertar ese Lo"i al #ue !amás #uería volver a ver regresara para atormentarle. -i de nuevo ocurría le aterraba el pensar #ue no se detendría esta ve&. oco despuCs percibi> a $hor acercarse lo sinti> envolverle entre sus bra&os con precauci>n mientras le decía palabras de con?an&a %e y amor. El hechicero %runci> el entrece!o y cerr> los o!os mostrando una mueca amargosa para luego en%ocar de nuevo la mirada vidriosa en a#uellas montaJas le!anas. ada palabra se enterraba en su cora&>n. ara $hor signi?caba mucho de no ser así simplemente no se lo habría pedido. I para Cl tambiCn era importante por eso era di%ícil darle una respuesta positiva por#ue no se trataba de cual#uier cosa era una responsabilidad mucho más %uerte incluso #ue ser padre por eso no podía tomarlo a la ligera. or eso y por su miedo a ser lo #ue no #uería de nuevo y terminara arruinándolo... omo antes. uando el n>rdico le liber> Lo"i respir> por ?n. $hor aceptaría cual#uiera #ue %uera su respuesta sería dichoso con un s" igual #ue se con%ormaría con el no. Medit> por varios segundos más. *espir> pesado y pro%undo
cerr> los o!os y de!> #ue la %resca brisa otoJal acariciara su rostro con cierto roce cándido y maternal como si %uera la misma +rigga en esencia #uien le di!era: No temas abrir tu cora,#n! hijo m"o... 0o amas * él a ti! nada podr"a salir mal con amor de por medio… -onri> con nostalgia volviendo a abrir sus esmeraldas esta ve& con un brillo distinto plagado de con?an&a y decisi>n. Entonces se gir> encontrando a $hor recargado contra el roble. -uysemblante enterneci> sus pies comen&aron a dar pasos suaves cortos pensados. se Puería estar y seguro por completo cuando llegara ante Cl. S5na ve& me di!iste' #ue tG y yo Cramos la mitad de una sola alma y #ue enca!ábamos a la per%ecci>n... por#ue !untos Cramos uno solo... Shabl> #uedo deteniCndose a pocos pasos del rubio S-in ti solo soy la mitad de uno y #uiero #ue seamos uno por completo' Ahora y por toda la eternidad... Acepto unirme a ti $hor Kdinson... . Furante el tiempo #ue el hechicero tardaba en darle una respuesta concreta $hor cru&> los bra&os sobre su pecho cerrando los o!os para recordar en gritando silencio todos esos momentos eternapor congo!a donde Lo"i despertaba y temblando preso deldepánico las pesadillas donde revivía todo ese in?erno #ue casi lo consume en vida. I $hor lo Gnico #ue podía hacer era abra&arlo y hacerle caricias para ba!arle todo ese terror le susurraba #ue lo amaba #ue nunca lo de!aría solo como cuando cay> por el Bi%rost. Al n>rdico tambiCn le dolía su su%rimiento lo sentía con Cl lo vivía en carne propia. Oivía ese abismo por el #ue se perdi> su descontrol en Midgard su humillaci>n ante todo Asgard su engaJo por parte de su padre su %rustraci>n por ser el segundo vivía todo con Cl y por Cl... E tomar todo ese eno!o toda esa ira en sus manos y convertirla en una lucha contra todas las reglas y c>digos permitidos en los nueve reinos. -eseempeJ> e en a curar heridas #ue el mundo se había de untar en sal. Ahora #ue habían conseguido una %elicidad ut>pica solo esperaba #ue Lo"i se acercara y tomara la mano #ue le e congelado como al escuchar la noticia de #ue sería padre solo #ue esta ocasi>n sus &a?ros se llenaron de agua salina. ontuvo su respiraci>n tomando por ambas manos al hechicero y recargando su %rente en la de Cste procesando poco a poco la noticia. QEstaría pasandoR Q-eguro #ue di!o siR Wronía. Ahora Cl era el dudoso. Uor supuesto #ue estaba aceptando unirse a Cl@ QPuC estaba esperando a comunicarle cuan %eli& lo había hecho con esas simples %rasesR -in embargo no pronunci> palabras no las encontr> por más #ue su mente intentaba hallarlas pero si lo abra&>. Felicado como una pluma lo envolvi> en sus bra&os al tiempo #ue escondía su rostro en su cuello mo!ándolo con lágrimas #ue caían en silencio. En un instante su garganta se cerr> y simplemente de!> #ue la dicha invadiera su ser.
Ahora sí podía a?rmar #ue todo era per%ecto y nada más sería necesario para alcan&ar esa pi&ca de %elicidad #ue les %ue a arrebatada a ambos. A Lo"i cuando se enter> de su naturale&a !otun y $hor cuando el hechicero se lan&> por el puente arcoíris... ;ada de eso se repetiría. . Puedo en total silencio esperando #ue el rubio le diera rCplica con su eterna eu%oria y derroche de %elicidad pero no obtuvo más #ue un acto calmo trCmulo y hasta dudoso con sus manos siendo tomadas con suavidad y tacto y su %rente siendo !untada con la a!ena entre #ue a#uella mirada cristalina era cubierta por el velo de sus párpados. ermanecieron así por breves instantes hasta #ue $hor le rode> con sumo cuidado como si creyera #ue lo rompería en peda&os si lo hacía de otro modo. Aun#ue una ve& ceJido a Cl su pare!a lo aprision> seguro mientras Lo"i percibía el latir desen%renado del cora&>n del n>rdico y lágrimas tibias #ue resbalaban por su cuello acompaJando con livianos espasmos de sentimiento acumulado casi imperceptibles. Wnmediatamente el pelinegro correspondi> el abra&o con la misma intensidad rodeando el cuello de $hor con sus bra&os y hundiendo de igual %orma su rostro. ontagiado de nostalgia las esmeraldas de Lo"i tambiCn se cubrieron de a#uel río salino #ue pronto desemboc> baJando sus me!illas. Era llanto pero uno de dicha y no llanto amargo como el #ue solía derramar cuando todo a su alrededor era gris y carente de sentido. S$e amo $hor... ;o hay nadie más con #uien desee pasar el resto de mi vida... más #ue contigo... -olo contigo... Smurmur> apenas audible con la vo& #uebrada y apretando más el agarre en el cuello del o!ia&ul . $hor era lento y al reaccionar podía serlo más. +ue hasta #ue Lo"i le habl> #ue toda esa %elicidad en su pecho toda esa alegría #ue se arremolinaba en su interior se mani%estaron a travCs de un abra&o más %uerte y una risa nerviosa. SIo tambiCn... Femonios yo tambiCn te amo con toda mi alma Lo"i S respondi> con prisa inyectando el ansia típica en los vi"ingos de su ra&a S laneo dedicar todo mi ser a ti y a Eiliv Shablaba ahora con más ánimo -epar> su rostro del cuello del hechicero limpiándose las lágrimas y sonriendo emocionado. *ealmente estaba a punto de saltar de la alegría. -in en cambio mir> a su amado con ternura le acarici> una me!illa y #uiso besarlo pero record> un pendiente. SUPuC estGpido@ -oy tan !odidamente distraído...S sac> de su bolsillo el anillo de la discordia y lo levant> a la vista SIa #ue aceptaste puedo darte esto... y luego besarte -onri> c>mplice arrodillándose y tomando la mano iuierda del o!iverde para ir desli&ando con arte de !oyero el anillo sobre el dedo anular mismo #ue #ued> incrustado a la per%ecci>n adornando adorablemente la pálida mano de su pare!a. $hor bes> el dorso de Csta sin ponerse de pie todavía.
SAhora sí es o?cial... . Lo"i rio ba!o !unto con $hor pues e a pensar en la posibilidad de unirse en matrimonio al n>rdico y esa ve& #ue lo pens> %ue pocas semanas despuCs del nacimiento de Eiliv. El solo hecho de imaginar la palabra le producía pánico pero ya no ahora solo era ansiedad por lo #ue habría de venir. ;o tendría #ue ser di%erente en cuanto a su vida cotidiana ya #ue prácticamente estaban casados enla&ados por a#uel sentimiento tan %uerte e in#uebrantable #ue los volvía uno solo. A#uello sería como un tipo de re%uer&o para #ue ese la&o !amás se rompiera por más edades #ue pasaran en esas tierras. asi al instante en #ue $hor iba a besarle Cste se reprendi> a sí mismo haciendo sonreír más ampliamente a Lo"i #uien había cesado su llanto liviano. Ahora sus orbes esmeraldas miraban sin estorbo nítida y claramente c>mo $hor se arrodillaba de nuevo %rente a Cl y tomando su mano iuierda le colocaba el anillo #ue daba por sentada la petici>n aceptada. El hechicero sentía su cora&>n galopar emocionado mientras ese anillo era colocado con delicade&a y devoci>n para luego sentir los labios del o!ia&ul en el dorso de la mano besándole %ervoroso provocando #ue su piel se eri&ara y su pecho se hinchara de orgullo. 5n orgullo sano por saberse amado con la misma entrega #ue Cl le amaba. Sm... ;o del todo Sreplic> travieso Sara #ue sea o?cial te %alta algo más. 5n... pequeño detalle Wn#uiri> plasmando cierta ingenuidad insinuante. Le hacía %alta solo una cosa para sellarlo completamente. . El n>rdico se levant> escuchando a Lo"i asegurar #ue %altaba otra cosa algo más para #ue ese compromiso %uera o?cial. $hor no era de intelecto grande crey>ingenuidad. deducir a lo #ue se re%ería. Así #ue lo tom> de la cintura y sonri> pero con ligera SAh... 5n beso me imagino . Oolvi> a rodear el cuello de $hor con sus bra&os entre #ue acentuaba su semblante divertido. Era lento pero no tanto. SE%ectivamente . ;o pudo ocultar su %elicidad y sin dudarlo dos segundos acerc> su rostro y bes> al energía. hechicero. un beso %uerte no brutal ni acelerado perolasiboca con de mucha Los+ue labios de $hor se embriagaban de nuevo con Lo"i. Feseaba grabar una ve& más esa memoria tan especial %rente a ese roble podría a?rmar casi con certe&a #ue a#uel beso constituía tres de los más importantes. 5no había sido el #ue se dieron por ve& primera en ese
sitio el segundo era ese #ue compartían ahora y el tercero sería con el #ue pactarían y sellarían su matrimonio. Al separarse $hor acarici> una de las me!illas de Lo"i no sin antes subrayar algo' Sorri!o. Ahora si es o?cial . Al instante en #ue Lo"i le con?rm> el detalle %altante sus labios %ueron tomados por los de $hor en un beso entregado. Esta ve& no hubo roces más allá de una succi>n intensa y algo ansiosa pero no hacía %alta ser un contacto pasional en ese momento. $endrían la ocasi>n para hacerlo más en a#uel instante solo había cabida para un sentimiento puro donde ambos se pro%esaban a#uello #ue les hacía #uerer despertar al día siguiente tan solo para volver a verse y decirse con esa primera mirada matinal #ue se pertenecían el uno al otro. Lo"i no tenía más dudas sobre el %uturo. Las malas e sus esmeraldas anhelantes en los &a?ros #ue irradiaban alegría y regoci!o para luego sentir su me!illa iuierda ser ro&ada en una suave caricia por los dedos del o!ia&ul entre #ue le escuchaba recalcar #ue ya no %altaba nada para hacer su petici>n o?cial como debía ser. Smhm... $G lo has dicho amor mío Movi> ligeramente la cabe&a buscando seguirse ro&ando con a#uel tacto del n>rdico sobre su piel mientras cerraba los o!os por breves instantes %runciendo el entrece!o y dis%rutando de la calide& del momento. . Wpso %acto $hor le tom> con mayor %uer&a. -inti> como Lo"i buscaba otro roce y Cl #uiso dárselo con otro beso esta ve& uno más calmado y e besando al hechicero hasta #ue la lu& del sol comen&aba a escasear y con su partida llegaba el manto multicolor boreal del cielo en Asgard. Ia se hacía tarde y $hor deseaba continuar a#uel beso dentro de la privacidad de su alcoba. Selebremos este acontecimiento Spropuso al separarse aun#ue no se olvidaba de atender otro asunto importante ahora #ue eran padres SEl primero en enterarse debe ser Eiliv... ablando de Cl seguro nos e como $hor volvía a besarle por lo #ue sin renuencia alguna Lo"i secund> el contacto cubriendo su mirada esmeralda con los párpados de nueva cuenta y de!ándose envolver con más pertenencia por a#uellos bra&os #ue se a%erraban a su cintura. oco a poco ese intercambio de a%ecto mutuo iba llenando su pecho de sentimientos #ue le hacían suspirar embelesado entre el beso mientras el sol apagaba su lu& por ese día para de!ar #ue la noche boreal reinara hasta el amanecer. La intensidad del contacto %ue haciCndose más notoria en la %orma #ue ambos comen&aban a %undirse cada ve& más en ese abra&o y el beso mismo por lo #ue la sugerencia del n>rdico para continuar en su alcoba a modo de celebraci>n le hi&o sonreír a Lo"i con picardía y travesura. l tambiCn ansiaba %este!ar con $hor en intimidad por la nueva etapa #ue se avecinaba en sus vidas. Aun#ue por supuesto antes de !urarse y pro%esarse ese amor a solas debían primero hacerle saber a su pe#ueJo la buena nueva. A pesar de no entender ahora eso no #uitaba el hecho de #ue Eiliv era la personita más importante y la #ue tenía todo el derecho de enterarse antes #ue cual#uier otro #ue sus padres unirían sus almas por toda la eternidad. S-e alegrará de saberlo. Aun#ue no creo #ue nos resienta tanto madre tiene el to#ue per%ecto para hacer #ue no note #ue estamos ausentes S mencion> con ligere&a y cierta socarronería acomodando una mecha dorada detrás de la ore!a iuierda de $hor Sero sinceramente lo estoy echando de menos Se cansino y sonri> trCmulo SOolvamos y dCmosle la noticia. ;o estoy seguro de #ue entienda una sola palabra pero lo hará en unos aJos cuando nos pregunte . $hor enseguida se alegr> más por sentir #ue Lo"i estaba de un ánimo positivo. ;ada de a#uellas nieblas #ue los hicieran dudar sobre su amor. La tormenta había pasado. SEntonces Q#uC esperamosR Ssugiri> tomándolo por Eiliv la cintura y llamando al M!olnir dispuesto a ir volando SWremos primero con lo dormiremos en su habitaci>n... y despuCs podremos hablar sobre cuán %elices estamos por esta nueva etapa Sgir> el martillo en su mano y de inmediato se elevaron Llegaron poco despuCs al palacio caminaron por los pasillos sin hablar con nadie hasta llegar a su alcoba donde hallaron a +rigga meciendo en sus bra&os al pe#ueJo mientras le contaba un cuento. Luego de saludar ambos a Madre de $odo y darle las gracias por cuidar de su retoJo la diosa se lo entreg> a Lo"i #uien lo abra&> con peculiar regoci!o. A#uel sentimiento no pas> por alto a $hor Cl tambiCn #uería llorar solo por ver de nuevo a su hi!o. uanto crecía cada día #ue pasaba aJoraba ver c>mo en un %uturo serían más unidos. Ia estaba ansioso por contarle. SFebemos decírselo antes de #ue se duerma Mencion> tomando a Lo"i por la cintura cuidando #ue Cste siguiera e#uilibrándose con Eiliv entre sus bra&os #uien boste&aba tiernamente y trataba de no cerrar sus párpados.
. El hechicero se abra&> a $hor en cuanto hiciera girar el martillo para llevarlos de vuelta. Wba pensando en lo dicho por el n>rdico sobre #ue hablar"an despuCs pero ambos sabían #ue lo harían sin palabras de por medio. uando llegaron al pasillo #ue daba a su alcoba los pies de ambos les condu!eron con singular prisa hasta llegar a las puertas doradas abriCndolas con impetuosa emoci>n. ;o podían esperar a contarle a su hi!o su ansia por hacerle partícipe de sus planes los consumía cada segundo #ue pasaban sin e a Eiliv al o!iverde Cste lo acun> en su rega&o con especial devoci>n como si no lo hubiera visto en aJos. Lo"i veía en su pe#ueJo su más grande tesoro su mayor logro su adoraci>n. or Cl valía la pena no volver a recaer en su obscuro pasado. or Cl y por $hor por ambos... por ellos. Lo"i se #ued> prendido de la hermosa inocencia #ue su hi!o irradiaba tan inde%enso tan a!eno a las cosas a su alrededor. oco más de tres meses de tenerlo en su vida y aun no creía #ue pudiera estar ocurriendo. Le parecía demasiado bueno para ser verdad demasiada recompensa para alguien como Cl con su historial imper%ecto. ero tal ve& era un modo en #ue el destino el cosmos le e a observar a su hi!o y prosigui> con la noticia. SLo #ue hoy decidimos #ueremos compartirlo contigo por#ue tG eres nuestro amor más grande en todo el cosmos... $u padre y yo vamos a casarnos. ;os uniremos en alma' por toda la eternidad Ficho esto el bebC ampli> una sonrisa mientras soltaba una risilla entre #ue agitaba las manitas y balbuceaba contento. Fe?nitivamente debía estar entendiendo y saber #ue sus padres estarían !untos más allá de la muerte le hacía compartir esa dicha con ellos... Eso era lo #ue $hor y Lo"i #uerían creer #ue su pe#ueJo les daba su aceptaci>n. .
El o!ia&ul escuch> cada palabra con la %uer&a y determinaci>n con #ue su pare!a le dedicaba ese pensamiento y noticia a su pe#ueJo meciCndolo en sus bra&os notando c>mo Eiliv parecía entender. +ue un niJo muy inteligente desde el primer día no cabía duda #ue a pesar de no tener ni un aJo de vida comprendía esa %elicidad genuina por la cual atravesaban sus padres al dar un paso más signi?cativo en su relaci>n. $anto se enorgullecía $hor Cl demismo su primogCnito #uepara al verlo estirarse y sonreír con aceptaci>n y regoci!o rode> a Lo"i poder inclinarse y besar su %rente per%umada. Le acarici> sus pe#ueJos ri&os dorados y sus me!illas sonro!adas de!ando #ue le apresara su dedo con sus manitas. Sreo #ue lo sabe Sse dirigi> al hechicero sin de!ar de mirar al bebC SEs muy listo . or supuesto #ue lo era. -u pe#ueJo era tan despierto a su corta edad #ue no debía sorprenderles #ue sus reacciones al escuchar la noticia %ueran acorde a ello. Esa mirada ?!a en Lo"i sin un solo parpadeo mientras le hablaba y luego esa en de %elicidad como cuando alguno de sus padres provocaba para oírlo reír peculiar risa dedebebC sin dudalealguna esascos#uillas eran claras seJales de con #ue su Eiliv comprendía algGn modo misterioso casi mágico a#uel regoci!o en sus padres. I a su modo el niJo lo compartía por#ue era parte de ambos. SEso lo saco de mí Fevolvi> ?ngiendo soberbia re?riCndose a la inteligencia de su hi!o captando inmediatamente la atenci>n de $hor #uien rio #uedo y con diversi>n e llevarlo a su habitaci>n misma a la #ue se llegaba atravesando una puerta en uno de los muros. Era una alcoba contigua a la suya para #ue estuvieran siempre al pendiente de cual#uier cosa. le sigui> y adelant> poco para abrir #ue la puerta y luego entr> para$hor volver a rodearlo por la un espalda mientras el pelinegro mecía suavemente al pe#ueJo abra&ándolo en su rega&o transmitiCndole calor y seguridad. oco despuCs Eiliv cay> rendido ante el mundo de los sueJos yaciendo recostado dentro de su cuna y siendo cubierto por su adorada manta verde menta.
$hor y Lo"i observaron todavía por algunos minutos el descanso de su hi!o lo contemplaron en silencio sin #ue el n>rdico de!ara de abra&ar al hechicero. I cuando a#uel sentimiento #ue #uedara en espera volvi> a susurrar en la mente de ambos se despidieron del pe#ueJo príncipe deseándole una buena noche al tiempo #ue besaban sus me!illas esperando #ue ninguna pesadilla se adueJara de sus aventuras entre sueJos. +ue así #ue volvieron a la intimidad de su alcoba dispuestos a honrar su reciente compromiso de la Gnica %orma #ue conocían: haciCndose el amor entregándose uno en bra&os del otro mientras se pro%esaban palabras y miradas roces y caricias #ue evidenciaban la llama aGn viva despuCs de tanto. Llama de amor y pasi>n #ue no se e sin más rastros de normalidad el sol sali> e ilumin> todo el valle de Asgard calentando los campos idílicos Norales las montaJas rocallosas el agua cristalina de todos los lagos #ue brillaban como perlas y especialmente ilumin> la habitaci>n de uno de los príncipes. $hor usualmente maldecía con todo su ser #ue los rayos de lu& le golpearan directo en el rostro restregándole #ue la hora de despertar había llegado y se ponía de un humor peor si su hermano no estaba en la misma cama con Cl. Aun#ue ese día no podía decir lo mismo. En cuanto abri> sus &a?ros y su mente se despe!> se sent> en la cama observando #ue nadie estaba a su lado pero eso poco importaba. Lo primero #ue hi&o %ue baJarse saliendo al cabo de un rato con una sonrisa de ore!a a ore!a. Esa maJana debía ser lo su?cientemente buena como para #ue $hor no se eno!ara con el sol. Kbserv> con especial cariJo un co%re dorado #ue yacía al pie de su cama regalo de sus padres. Fentro de Cl se albergaba una tGnica ceremonial especial hecha a la medida del Fios del $rueno y diseJada con esmero por los me!ores sastres de Asgard #ue superaba por mucho su típico atuendo %ormal #ue vestía en las celebraciones importantes del reino. El motivo por el cual tal tGnica %uera portentosa y sumamente brutal a nivel visual se debía a #ue ese día los asgardianos y el cosmos celebrarían en su honor y en el de su hermano sería recordado por toda la eternidad !unto con Cl y grabados sus nombres en las líneas del tiempo. Abri> a#uel co%re solo para mirar de nuevo su tra!e. Oolvi> a cerrarlo y decidi> ba!ar a desayunar. Fesa%ortunadamente como cual#uier día de ceremonias amerita había cierto protocolo a seguir y uno de ellos era desayunar solo no hablando con nadie #ue no %ueran sus padres o los ancianos del conse!o y menos #ue menos ocurrírsele hablar con Lo"i. or tradici>n más #ue nada pero deseaba darle los buenos días como siempre lo hacía. +iel a su costumbre escribi> una sencilla nota y mand> a un sirviente a llevársela al o!iverde. La nota decía: 5uenos d"as! amor m"o. &spero ha*as dis'rutado de la plática con madre a*er * que sus consejos te sean 'avorables. &sto* demasiado ansioso por verte en la ceremonia! mientras tanto! iré a la habitaci#n de &iliv para cuidarlo. $e amo. $hor… . AGn era de madrugada y Lo"i ya se encontraba %uera en la terra&a sentado en el diván de piel verde oscuro y arma&>n dorado. +altaba poco para el amanecer aun#ue ya estaba despierto desde una hora antes. Apenas si pudo pegar los o!os en toda la noche por estar pensando en lo #ue habría de ocurrir al día siguiente. ;o se trataba de algo #ue realmente %uera de susto pero los nervios y el ansia de saber #ue poco a poco el momento se acercaba le habían causado estragos #ue !amás imagin>. Uor todos los dioses solo iba a casarse con $hor@ Qor #uC tanto agobioR ues precisamente por eso por#ue despuCs de hacerlo estarían unidos por toda la eternidad. Así lo decidieron ambos pero aun siendo de esa %orma el
hechicero se sentía sumamente in#uieto. Aun#ue era una in#uietud sana por#ue eso #uería unirse a $hor en alma no solo en cuerpo. ronto sus esmeraldas clavadas en el hori&onte se iluminaron con los colores del amanecer entre #ue una %resca brisa otoJal ro&aba !uguetona su rostro haciCndole sonreír cálido imaginando #ue era el roce de las manos de $hor. El n>rdico solía despertarlo así con una suave caricia en sus me!illas y luego un beso #ue se tornaba cadase uno despertaría pordulce su lado era tradici>n #ue pro%undo. ninguno deEsa losmaJana prometidos viera antes de la ceremonia por eso %ue #ue a regaJadientes tuvieron #ue despedirse la noche anterior sin demostrarse a%ecto más allá de un beso y un abra&o #ue perdur> por varios minutos para luego atravesar las puertas de sus respectivas alcobas. Furante todo el día la rutina debería ser la misma: no verse ni hablarse no tocarse ni si#uiera con el pensamiento. A#uello resultaría mucho más %ácil de resistir para Lo"i #uien casi podía asegurar #ue $hor buscaría la %orma de burlar el protocolo y pasar !untos tan si#uiera unos minutos. Ante el pron>stico el pelinegro sonri> más amplio riendo ba!o y negando con la cabe&a no importaba lo estricto de la tradici>n sabía #ue $hor lo buscaría de un modo u otro para verle. I Cl mentiría si di!era #ue no esperaba #ue lo hiciera. on ese pensamiento en mente Lo"i se puso en pie y entr> a su habitaci>n seguido por el brillo intenso del sol #ue re%ulgía en toda su gloria. omo parte del protocolo ceremonial debía tomar un baJo puri?cador a modo de sauna donde tendría #ue meditar a solas. 5n momento de reNen para limpiar su alma previo al ritual. -e encamin> entonces a la mesa #ue servía de escritorio y vio la amplia ca!a de plata con grabados en simbología n>rdica dentro de la cual yacía resguardada la tGnica #ue debería usar. +rigga se la había dado la tarde anterior mientras terminaban de ultimar detalles así como tambiCn la reina le compartiera algunos conse!os en complicidad. ens> en abrir la ca!a pero pre?ri> hacerlo hasta #ue estuviera listo para usar el ropa!e por lo #ue solo se limit> a pasar la yema de los dedos de su diestra sobre la super?cie al tiempo #ue una en aJorante impregnaba su rostro. Esbo&> una liviana sonrisa pero !usto en ese momento su ensoJaci>n se vio truncada por un par de to#ues a la puerta. -u cora&>n se aceler> y sobresalt> en segundos. or un momento crey> #ue se trataba de $hor por lo #ue se #ued> estático sintiendo el alma a punto de escapársele por la boca. Aun#ue luego de meditarlo cay> en cuenta de #ue no podía ser Cl ya #ue de haber sido su %uturo esposo Cste no habría sido tan delicado al anunciarse hubiera entrado casi tirando la puerta y lo tendría besándolo en ese mismo instante. Así #ue se tran#uili&> en el acto en más su calma se complet> al escuchar a un sirviente #ue decía llevar un recado del n>rdico. El o!iverde se acerc> a la puerta abri> y tom> el papel #ue el muchacho le e la nota habiendo vuelto a la privacidad de su alcoba y no pudo evitar sonreír con aire %estivo. Kdiaba hacer eso' pero el día lo ameritaba.
-uspir> largo y dobl> el papel yendo a guardarlo en el ca!>n del bur> a lado de su cama. Tir> el rostro para observar hacia la terra&a iluminada en dorado por el brillo del astro matutino pro?riendo en seguida un: $ambién *o! al aire esperando #ue el viento llevara su mensa!e al dueJo de la nota. Mientras tanto en lo #ue el ocaso daba la seJal para celebrar su gran día Lo"i aguardaría en su habitaci>n. $omaría sus alimentos y se mantendría enclaustrado dentro de su alcoba para evitar toparse accidentalmente con $hor. Aun#ue tambiCn #uería ver a su hi!o antes de todo pero sabiendo con esa nota #ue el rubio iría a verle primero esperaría un rato prudente para asegurarse de #ue no lo encontraría allí a pesar de #ue ansiaba verlo. Así %ueran un par de minutos solamente. . $hor asom> su aurea cabe&a por la puerta de caoba #ue custodiaba la habitaci>n de su hi!o. -eguía dormido por lo #ue observ> así #ue %ue adentrándose sin hacer el menor ruido para no despertarlo antes de tiempo. -e recarg> al borde la cuna digna de un hi!o de dioses y le contempl> con ternura en de tela para evitar #ue se lastimaran su bo#uita se movía como buscando succionar de su biber>n totalmente adorable. -e sentía orgulloso de Cl no hacía muchos días #ue había demostrado sus notables dotes mágicos durante uno de sus !uegos en la al%ombra donde convirti> por accidente uno de sus !uguetes de madera en un caballo de verdad. El n>rdico sonri> internamente por saberse un padre a%ortunado de tener un hi!o mucho más pr>digo #ue el resto pero más %eli& era esa maJana de saber con #uiCn lo criaría el resto de su vida. recisamente no lo había visto en lo #ue iba de la maJana y le ansiaba hacerlo. -abía #ue era una tradici>n en los matrimonios asgardianos no verse el día anterior a la ceremonia y tampoco la maJana siguiente. En pocas palabras no podrían hablarse hasta entrado el atardecer y para #ue eso ocurriera %altaba un gran trecho de tiempo. $hor no soportaría tanto Q#uC iba a hacer el resto del díaR Era una de las desventa!as #ue nunca le agradaron de a#uellos rituales aun#ue' nadie di!o #ue no podía trope&arse accidentalmente con Lo"i. ensando e ideando una de sus tantas estrategias para burlar las reglas y protocolos como era costumbre mir> de nuevo a su hi!o y acarici> su me!illa sonro!ada. SFuerme Eiliv -usurr> dándole un ligero beso en su %rente provocando #ue el pe#ueJo se removiera un poco pero sin llegar a despertarlo. -ali> con prisa del cuarto cerrando la puerta con precauci>n caminando luego a &ancadas por el largo pasillo preguntándose #uC haría para poder estar tan solo unos minutos con Lo"i #ue descubrieran buen ratoantes hastade #ue diolos con la soluci>n. #uebrantando las normas. avil> un *ápidamente se dirigi> a uno de los guardias #ue resguardaban los aposentos del hechicero y le di!o por lo ba!o: "gale al pr"ncipe 0o1i que Madre de $odo solicita su presencia en el gran sal#n' or supuesto era
mentira pero la idea era #ue pareciera todo como un encuentro plenamente casual. Luego de #ue el guardia asintiera para acatar la orden el n>rdico sali> rumbo a la habitaci>n mencionada esperando poder verlo abra&arlo besarlo decirle cuanto lo amaba y cuan ansioso estaba por volverse uno solo por completo. -uerte #ue era día de ?esta y por tanto nadie se atravesaría por ahí por#ue estarían demasiado ocupados a?nando los detalles para el gran ban#uete al otro lado del palacio en las grandes cocinas. . Era muy temprano todavía para comen&ar a prepararse por lo #ue sin pensarlo demasiado Lo"i opt> por vestir sus ropas cotidianas hasta #ue el momento llegara. Puería estar liviano así #ue solo se coloc> su camisa verde ocre y encima una gabardina de cuero negro sencilla sin mangas y con hombreras discretas mientras #ue el pantal>n negro cintur>n y sus botas ?eles daban el Gltimo to#ue complementando su atuendo. Fe pie %rente a la cama impecablemente hecha la ?na silueta del pelinegro era iluminada por la esplendorosa lu& del cálido sol entre #ue terminaba de a!ustar los botones de las mangas en su respectivo o!al. -e le veía sereno y tran#uilo a la par #ue %resco y radiante. 5n aura especialmente deslumbrante y divina parecía rodearle sin #ue lo notase si#uiera brindándole un poco de a#uella inocencia de !uventud a#uella picardía de adolescente me&clada con ingenuidad #ue tan bien le caracteri&ara en los tiempos de antaJo. $odavía conservaba rasgos de a#uellos días en su %orma de ser especialmente sacados a relucir estando a solas con $hor pero la osadía y atrevimiento así como su natural sentido provocador eran los detalles #ue le daban mayor consistencia a su actitud en el presente. La %rágil y delicada !uventud había pasado muchos ayeres atrás dando paso al atractivo encanto seductor de una !ovial madure& misma #ue era evidenciada en cada rasgo más de?nido en cada acci>n cada movimiento y palabra e el rostro a su diestra manteniCndose #uieto y con los nervios provocando #ue su cora&>n brincara e #ue era el rubio #uien estaba a%uera pero repitiCndose mentalmente #ue de haber sido Cl ya estaría encima suyo sobre la cama no sin antes haber mandado a volar a los guardias #ue resguardaban la entrada a su alcoba para #ue no le prohibieran el paso lo hi&o rela!arse. E de nueva cuenta sacando tensi>n despe!> su mente mientras negaba con la cabe&a y se acerc> a paso liviano hacia la puerta. Abri> de modo cauteloso por si acaso e inmediatamente uno de los guardias le comunic> #ue +rigga solicitaba su presencia en el gran sal>n. A#uel anuncio le caus> cierta en. Al cerrarla le %ue inevitable mirar a lo largo del pasillo vislumbrando la puerta de caoba no muy le!os de la suya. -eguramente $hor aGn se encontraba dentro cuidando de su pe#ueJo Eiliv. ubiera #uerido ir a verlos un momento pero no era correcto pasaría tiempo con su hi!o más tarde luego de lo #ue +rigga le tuviera pendiente y tambiCn dando espacio a #ue el o!ia&ul terminara con su visita. . $hor caminaba de un lado a otro en el gran sal>n. ;o tenía ni cinco minutos #ue había dado la orden al guardia Qlo habría desobedecidoR Absurdo ningGn escolta se atrevería a negar sus >rdenes si no #uerían ver la %uria del príncipe de Asgard !unto con su M!^lnir. Entonces Q#uC podría estar
pasando #ue Lo"i no llegabaR -onaba a paranoia' y lo era pero $hor estaba impaciente por verlo al menos hablar %ormalmente antes de ir a la ceremonia como una pre,conversaci>n para calmarse mutuamente. ;o podía negar tampoco #ue deseaba con %uer&as animales besarlo y hacerle el amor en medio de la al%ombra en cuanto cru&ara la puerta pero eso signi?caría encerrarse ahí el resto del día y por lo tanto adi>s evento nupcial. Era bastante di%ícil un día de ceremonia sin pensar en tener relaciones' o al menos esperar a #ue concluyera el %este!o y se %ueran a tierras le!anas del palacio para pasar su primera noche como esposos y luego regresar casados en cuerpo y alma. Así estaba de ansioso el n>rdico #ue había terminado por arrugar su capa ro!a la #ue era de uso in%ormal y deshilarla de los bordes con solo apretarla y rasgarla. -uspir> bastante impaciente tal parecía #ue el hechicero no podría aparecerse por ahí. 0ástima! deseaba verlo… ens> en lo #ue iba caminando hacia la puerta misma #ue abri> con decepci>n. or casualidad mirandocasual al piso por y nolonot> cierta persona sí había asistido a estaba ese encuentro #ue #ue el rubio choc> contra el o!iverde sin percatarse por completo #ue era Cl atrapándolo en sus bra&os antes de #ue ambos cayeran. I !usto cuando sus &a?ros se dieron cuenta de con #uien había impactado $hor #ued> helado es decir la misma emoci>n lo de!> sin aliento. Sola' Sdi!o con cierto nerviosismo como si %uera la primera ve& #ue hablaba con Lo"i en un plan romántico . El hechicero iba atravesando los pasillos a paso ligero no presuroso pero si seguro y ?rme. AGn seguía preguntándose #uC era lo #ue su madre necesitaba Cl tal ve& algoinconveniente del ban#uete #ue o incluso el horas necesitar de sulisto. magia para de solucionar algGn llevaría en estar -i seguramente era eso. Así #ue de!ando de lado tantas interrogantes mentales desech> sus dudas y dobl> a la derecha para encaminarse por el largo pasillo #ue conducía al sal>n de reuni>n. Avan&> calmo aun#ue ligeramente altivo el tramo restante a la puerta dorada. $om> la mani!a dispuesto a entrar y !usto en ese instante la puerta se abri> al tiempo #ue alguien salía y chocaba con Cl haciCndole trastabillar y casi caer por el contacto brusco. -in embargo %ue atrapado por unos bra&os %uertes bastante %amiliares. asi de inmediato Lo"i al&> la mirada encontrándose con #ue e%ectivamente ese alguien se trataba de $hor. La reacci>n %ue inmediata: su cora&>n brinc> alterado su respiraci>n se cort> sus piernas temblaban y sus esmeraldas bailaban nerviosas clavadas en la mirada celeste del n>rdico. $al parecía se le había cumplido el deseo de verlo antes de la ceremonia.
Sola... Srespondi> el saludo con el ansia a Nor de piel entre #ue sentía sus me!illas arder y la boca secársele SQPuC... #uC haces a#uíR uestion> incierto y con%uso entre #ue era !alado al interior del sal>n al ambos escuchar pasos acercándose por el pasillo. El cuerpo de Lo"i pareci> ser recorrido por una %uerte corriente elCctrica y un nervio intenso estando acorralado contra la pared a un lado de la puerta. I su ansiedad acrecent> todavía más cuando sus labios %ueron atrapados un beso desesperado con las manos de $hor tomándolo por el cuello deen modo ?!o como si la vida del rubio pendiera de un hilo y a#uel contacto entre ellos %uera su Gnica salvaci>n. Aun#ue no solo era $hor #uien estaba muriendo por dentro de no sentir la calide& de la boca a!ena. Esto lo con?rm> el pelinegro #uien olvidándose de la supuesta reuni>n con su madre correspondi> con la misma necesidad a#uel beso #ue le #uitaba el aliento mientras tomaba las muJecas del o!ia&ul con sus manos y ladeada el rostro para hacerlo más íntimo y cercano. . Wnmediatamente despuCs de la interrogante #ue Lo"i le o!os habíadehecho cora&>n de $hor se par> momentáneamente. Abri> sus par enelpar tratando de darle una buena respuesta pero el volverlo a ver despuCs de tantas horas le #uit> la voluntad. or inercia lo empu!> dentro del cuarto cerrando de una patada la puerta y acorralándolo contra la pared mirándolo con anhelo imposiblemente desesperado como si tratara de darle a entender #ue no soportaba estar más tiempo sin tenerlo cerca apresurándose a !untar sus labios de una manera tosca. -u boca sabore> la a!ena. El n>rdico sinti> un alivio enorme al poder deleitarse de nuevo con el hechicero abriendo más sus labios y recargando su cuerpo en el otro. -abía #ue no serían muchas horas hasta #ue %ueran al altar pero no lo aguantaba' abía pasado un día entero sin decirle te amo sin demostrárselo y eso con?rmaba con más ra&>n #ue debían unirse en cuerpo y alma. -igui> besándolo hasta acabársele el aliento y separ> sus labios con brus#uedad de!ando un hilillo de saliva entre ellos. SMadre no te mand> llamar' Io tuve esa idea para poder verte un segundo Scoment> su plan abra&ando a Lo"i con %uer&a y recargando su rostro en su cuello SPuería verte antes de la ceremonia . Ese beso no solo había sido un alivio al suplicio de $hor sino tambiCn lo %ue para el de Lo"i. A pesar de ser #uien más control de sus emociones tenía no podía negar #ue no verlo no sentirlo no besarlo por un solo día le resultaba en verdad un tormento. Más aun siendo por honrar una tradici>n #ue les impedía estar !untos hasta el ocaso. ero los nervios la in#uietud y tantas emociones arremolinadas en su interior hicieron #ue Lo"i olvidara ese c>digo ancestral y se de!ara llevar por el momento. or esos labios #ue se %undían a los suyos por esos dientes #ue casi le mordían hambrientos y
por esa saliva #ue se me&claba con la propia %ormando ese dulce eli el beso se rompi> entre un sonido de chas#uido mientras el o!iverde respiraba agitado sintiendo el aliento tibio y alterado de $hor contra su rostro. -us esmeraldas se perdieron en a#uellos labios carnosos ro!os y hGmedos deseando #ue pronto la noche llegara para poder deleitándose con ellos no solo poco sobremás sus encendido labios sino al sobre todo su ser.seguir El rubor en sus me!illas se vislumbr> pensar en eso aun#ue su ensoJaci>n pronto se vio interrumpida cuando $hor le revelara #ue había sido Cl y no su madre #uien le hiciera salir de su alcoba. -inti> sus bra&os rodearle con %uer&a y pertenencia entre #ue su rostro se escondía en su cuello como #ueriendo retenerlo ante una posible reacci>n negativa a su proceder. ero eso no ocurriría no pasaría por#ue Lo"i #uería verle igual #ue Cl. Sm... Febí suponerlo. Madre hubiera ido hasta la habitaci>n para no e ba!o ?ngiendo indignaci>n para luego sonreír cansino y corresponder abra&o rodeando el cuello parte la espalda sinuosa. eg> su pechoelcompletamente al otro igualy #ue sude rostro se hundía entre el cuello y la clavícula permitiCndose aspirar pro%undo y lento el aroma del n>rdico a modo de llenarse de esa %uer&a y vitalidad #ue todo Cl representaba a pesar de sentirlo igual o más nervioso #ue Cl mismo. SMe alegra #ue lo hicieras... $ambiCn deseaba verte Ssusurr> trCmulo apretándose más a su cuerpo percibiendo como $hor tambiCn lo apretu!aba con necesidad . orrespondi> con el mismo sentimiento de pertenencia entre #ue sonreía livianamente asintiendo con la cabe&a y devolviendo el abra&o. Le acarici> la posterior de la nuca mientras cerraba los o!os agradeciCndoles a la losparte dioses #ue le permitieran tenerlo en sus bra&os hablar con Cl antes de ceremonia y especialmente unirse a Cl esa misma tarde. *ealmente no podría estar más tiempo sin sentirlo cerca. Fesde #ue Lo"i había #uedado embara&ado $hor lo seguía a todas partes. Bueno siempre lo hacía como un perro %aldero sigue a su amo sin separarse de Cl. A veces llegaba a ser algo molesto su insistencia de caminar tras el hechicero incluso cuando Cste le pedía un momento a solas ya %uera para pasar tiempo de calidad con Eiliv o por#ue madre y Cl debían conversar con privacidad. El n>rdico no entendía ese sentimiento de necesidad y dependencia acrecentadas durante los Gltimos meses. Pui&á solo deseaba cerciorarse #ue no lo perdería ahora #ue estaban a punto de alcan&ar una %elicidad inimaginable. SEiliv sigue durmiendo por cierto Sse le ocurri> sacar a colaci>n Sarece #ue estará calmado el resto del día' tenemos dos horas antes de #ue debamos ir a vestirnos
-eguía acariciando el cabello a&abache de Lo"i mientras su mano se desli&aba a su cuello y le miraba con romanticismo terriblemente cursi. . Era tan recon%ortante estar literalmente atrapado en el rega&o de $hor #ue Lo"i parecía perdido sumido en ese cálido bienestar #ue le ayudaba a tran#uili&ar su in#uietud. or#ue a pesar de #ue en todo momento se mostraba sereno y casi imperturbable cada #ue el tema salía a conversaci>n la verdad era #ue mientras más se acercaba el día por dentro su ansiedad se incrementaba. ada #ue lo meditaba estando a solas siempre daba con lo mismo creía #ue era estGpido ponerse tan in#uieto por la ceremonia. Era algo #ue Cl #uería unir su vida a la de $hor en todo conterdico estaba dispuesto a de!ar todos los malos recuerdos atrás y tener una vida plena a lado de ese hombre #ue !amás se dio por vencido #ue !amás perdi> la esperan&a #ue !amás lo solt> a pesar de todo. ero tal ve& era eso lo #ue le provocaba a#uel espantoso vCrtigo mismo #ue siempre encubría ba!o una máscara de seguridad y hasta %rivolidad. El saber #ue $hor nunca lo abandon> y #ue luch> por Cl por estar !untos le hacía temer el #ue todo a#uello %uera una ilusi>n y #ue al despertar las cosas tan hermosas #ue hubo vivido no %ueran más #ue un mísero sueJo vano #ue le mostraba con tortuoso placer lo #ue pudo haber sido y #ue !amás podría tener. Aun#ue su in#uietud tambiCn e ser en el principio con la %uer&a de la con?an&a y no con la debilidad del rencor. FespuCs de a#uel breve momento en #ue sus pensamientos le hicieran convencerse de #ue todo tendría un nuevo rumbo Lo"i escuch> hablar a $hor #uien le comunicara #ue su hi!o seguía plácidamente dormido y por lo tanto no despertaría todavía. El o!iverde sabía #ue no lo haría puesto #ue al despertar en la madrugada le había ido a ver. Lo aliment> cambi> y arrull> hasta #ue el pe#ueJo volvi> a dormirse por lo #ue estaba completamente seguro #ue no abriría los o!os. Aun#ue su sentimiento paternal pronto %ue historia cuando el n>rdico le insinuara #ue tenían tiempo libre antes de prepararse. I por esa mirada romántica ?!a y penetrante de sus &a?ros entendi> per%ectamente a lo #ue se re%ería. Smhm... ;o voy a negarte #ue es una propuesta tentadora Srio entre nervioso y travieso sonro!ándose al mirar los labios de $hor curvados en una sonrisa galante Sero será me!or de!arlo para despuCs de la ceremonia. Ia rompimos uno de los preceptos... Bueno dos de hecho y no sería
muy diplomático romper uno más. Esperemos un poco sC #ue no tendrás problema para ello Le mir> con la petici>n en sus esmeraldas y acariciando su me!illa con suavidad aun#ue por dentro #uería mandar ese otro precepto al cara!o. Ia se habían visto se habían hablado y solo %altaba terminar !untos en medio del sal>n. . or lo #ue a $hor respectaba Cste seguía perdido en los esmeraldas de su prometido y apenas lleg> a oír #ue le pedía ser paciente por honrar el protocolo. or supuesto #ue obedecería con %ervor toda orden #ue viniera de Lo"i pero sinceramente se estaba rebatiendo por dentro si cumplir o no esa ocasi>n. I es #ue ahora no conocía otra manera para acelerar el tiempo más #ue estando con el hechicero por#ue siempre #ue estuviera con Lo"i el tiempo pasaba sin darse cuenta. SLo sC en serio entiendo #ue tendremos una me!or conversaci>n despuCs de la ceremonia y seguro lo dis%rutaremos más Scorrobor> el rubio torciendo sus labios como niJo caprichoso SEs #ue' no #uería estar más tiempo ale!ado me resulta di%ícil ser paciente sabes. Idespierto el asunto!ugaría del matrimonio me tiene muy hiperactivo' -i Eilivlo estuviera con Cl si tuviera permitido ir a cabalgar por el bos#ue lo haría' $hor sonaba desesperado y vaya #ue era cierto. ;o era desesperaci>n por hacerle el amor al pelinegro en ese instante era más bien una desesperaci>n por no poder hacer caminar el tiempo para #ue pudiera hacCrselo más tarde. QWmpacienciaR Bastante y era l>gico por#ue $hor era de esos #uienes se de!an guiar por lo #ue dicta el cora&>n y no se ponen a anali&ar las posibles consecuencias de sus actos. Aun#ue el n>rdico hubiera aprendido a escuchar más detenidamente y estando con Lo"i hubo ad#uirido la cualidad de esperar a #ue todo pase a su debido tiempo esa ocasi>n se le presentaba como una prueba de %uego a su poco autocontrol. S$al ve& solo necesitaba verte para calmarme . La en del hechicero se torn> cálida y ligeramente divertida escuchando el ansia en las palabras de su pare!a. Entendía por lo #ue estaba pasando. $hor era impaciente por naturale&a nunca podía permanecer #uieto por más de cinco minutos seguidos siempre buscaba estar en movimiento motivo #ue muchas veces lo metía en problemas. Le costaba demasiado mantenerse calmado. Lo intentaba a Lo"i le constaba igual #ue le constaba #ue su tiempo límite de #uietud era escaso y se agotaba muy rápido. uando eso pasaba $hor terminaba yendo de un lado a otro buscando algo #uC hacer con la impaciencia reNe!ada en el rostro. Lo mismo pasaba en los momentos #ue no podían estar !untos como ese. *ealmente eran pocos los instantes #ue no podían amarse pero cuando había cuestiones a!enas a ellos #ue los mantenían le!os el uno del otro el n>rdico lo resentía más. Aun#ue Cste siempre lograba sacar %uer&as de
Na#ue&a en todo momento incluyendo su vida privada. I esta ve& no sería la en sabiendo #ue la recompensa sería mayor al ?nal. S$ran#uilo. -C #ue estas ansioso por todo esto. Io estoy igual aun#ue no lo pare&ca pero el tiempo se irá reduciendo abl> #uedo entre #ue pasaba un mech>n rubio detrás de la ore!a de $hor para luego rodear su cuello con los bra&os y pegar su %rente a la a!ena. Semos esperado semanas enteras por este día. 5nas cuantas horas más no serán nada y entonces volveremos a estar !untos... ;o nos separaremos hasta el amanecer. I despuCs de eso !amás lo haremos Asegur> en un suave murmullo cerrando los o!os y de!ándose envolver por la calma tratando de transmitírsela al n>rdico. . -abia por el tono de su vo& #ue Lo"i tenía ra&>n' aun#ue pensándolo bien siempre la tenía ya habría más tiempo para estar !untos. abían consolidado el compromiso semanas atrás #ue se habían ido como agua por el rio y ahora se les presentaba el tiempo de unirse ?nalmente. -i bien $hor podría aguantar unas horas más como el o!iverde el relo! parecía no cooperar. Oolvi> a hacer una mueca caprichosa misma #ue se desvaneci> cuando Lo"i le acarici> la me!illa y entrela&> sus dedos detrás de su nuca pegando su %rente a la suya en un intento por calmar sus ansias. Agradeci> in?nitamente #ue su prometido supiera c>mo controlarlo. Fe hecho el pelinegro lo dominaba en todo aspecto salvo en el momento de compartir lecho. ero %uera de todo el n>rdico todavía no era consciente de c>mo Lo"i podía mane!ar su temperamento #uC decir para lograrlo y c>mo actuar para controlarlo. rueba de ello era #ue $hor rela!> sus hombros y se de!> contagiar de la vibra tran#uila #ue Nuía entre ellos ro&ando la punta de su nari& con la del hechicero y moviCndola en un gesto a%ectivo. SQor #uC siempre resultas más listo #ue yoR Spens> en vo& alta odría hacer todo el escándalo #ue #uisiera pero Lo"i le sacaba venta!a en argumentar. Además tendrían toda la noche para dis%rutar de su enlace así #ue $hor solo atin> a sonreír de lado y besarlo calmadamente. S-i no hay remedio aguardarC entonces . -egundos despuCs Lo"i percibi> c>mo la tensi>n abandonaba a $hor haciCndole rela!arse igual. Era curioso el hechicero le tenía pavor a los truenos cuando era niJo. stos lo hacían correr a los bra&os del o!ia&ul buscando su protecci>n y ahora podía !actarse de ser Cl #uien lograra apaciguar al mismo Fios del $rueno. Sor#ue yo si leía los libros de la biblioteca y no los usaba para improvisar una %ogata o !ugar tiro al blanco
Le di!o con picardía rodeando el cuello del n>rdico con su bra&o derecho mientras #ue el otro se apoyaba en la cama comen&ando a empu!arlo suavemente para recostarlo y Cl #uedar en cuatro. SOoy a llevarte al mismo Oalhalla... Smurmuraba detallando sus labios con la mirada sedienta de sus besos S$e harC delirar igual #ue tG lo haces conmigo... Slami> sutilmente su boca S;o #uerrás #ue me detenga... S ?nalmente hal> su labio in%erior para darle otro beso lleno de pasi>n y saliva . Al darle el control total el n>rdico %ue recostado de nuevo en la cama con una %ranca en de susto. on?aba en Lo"i pero su mirada lasciva y la %orma de hablarle sinceramente estaban le!os de darle calma. QFe d>nde había sacado tales modosR Q>mo aprendi> a hablarle tan seductoramenteR QLo habría escuchado de...R or supuesto. QPuiCn más habría sido la ?gura per%ecta de imitaci>n sino de Cl mismoR Las %rases #ue usaba su manera de hablarle y ambientar la situaci>n las había aprendido del mismo Fios del $rueno. I vaya #ue había aprendido por#ue no pasaba un día #ue $hor no le hiciera el amor. -us tácticas las tenía muy bien estudiadas. Pui&á lo dis%rutaría bastante #ui&á no tenía #ue ponerse tan nervioso considerando #ue era su primera ve& de esa %orma. -e de!> mimar con el beso de Lo"i permitiría #ue lo tocara si eso lo calmaba #ue lo persuadiera para tran#uili&arlo. . ;otando la total sumisi>n y correspondencia del n>rdico Lo"i se permiti> irlo induciendo en el terreno. -igui> besándolo con %uego metiendo su lengua para deleitarse con la a!ena en una dan&a de pasi>n hGmeda mientras #ue lentamente sus manos recorrían los costados de a#uella %uerte anatomía. Lleg> solo hasta la cintura puesto #ue seguía colocado a horca!adas del rubio podía seguir más allá por obstrucci>n de lo sus propios muslos. ero ynonotenía planeado #uitarse de la ahí era parte de #ue vendría despuCs. El contacto entre sus labios continuaba sin menguar un solo instante mordiendo y succionando #uitando el aire encendiendo de nuevo esa hoguera #ue había #uedado a medias. Lo"i !adeaba por la en de saberse con el permiso para dar rienda suelta a sus más ba!os deseos %riccionando suave y rítmicamente su erecci>n contra la de $hor para estimularlos a ambos y preparar el camino a la gloria. SAah... $e darC el me!or de los placeres #ue puedas e la cabe&a hacia atrás de!ando su cuello per%ectamente e los o!os y acarici> la cintura del o!iverde Suando soy yo #uien lo dice suelo tener enterrados dos dedos en ti... Eso me preocupa un poco... -i podía con?ar en Cl pero nada opacaba #ue estaba sumamente nervioso. . -i con solo saberse con el control total ya estaba en palpitara ansiosa. ero era pronto para de!arse envolver por el %uego de la lu!uria aun debía preparar a $hor y !ustamente las palabras #ue Cste le di!era lo alentaron a comen&ar. SEntonces #ue bien... #ue lo di!e antes y no mientras lo hacía sin avisarte... Sdi!o contra la piel enro!ecida por las succiones subiendo luego el rostro para encarar al n>rdico SFate vuelta... Spidi> con perversa intenci>n atravesando con sus esmeraldas a#uel par de &a?ros in#uietos . S5hm... Me!or me #uedo así. -abes me causa algo de ansiedad estar de pecho contra la cama Srespondi> un poco pálido evadiendo la orden Estaba dispuesto a todo lo #ue Lo"i #uisiera o la mayor parte. -i bien estaba en del hechicero era el paraíso si bien amaba sus besos estaba dos por ciento inseguro de lo #ue hacía. Era un porcenta!e ba!o pero ahí estaba. ;o era como si no supiera #uC iba a hacer dioses lo hacía con Lo"i todo el tiempo pero era M5I distinto. $ampoco #uería negarle o ba!ar sus ánimos con su resistencia pero estaba muy acostumbrado a ser el de arriba y era complicado hacerse a la idea de recibir. S... Ammm vale me doy vuelta Sdi!o al notar a su esposo algo resentido por su comentario inicial -in mencionar u ob!etar más se coloc> en la posici>n #ue el hechicero solicitaba. -u cora&>n latía tan solo de ver la silueta de Lo"i en la pared sobre la suya y en seguida apret> las sabanas respirando muy rápido. . Ante la negativa inicial de $hor por #uerer acatar su petici>n #ue más bien era ya una clase de orden por lo ansioso #ue se encontraba Lo"i le mir> con cierto recelo casi echándole en cara #ue había aceptado el trato. -in embargo solo bast> sentenciarlo en silencio para #ue el n>rdico le
obedeciera sin rechistar más. Entonces el o!iverde volvi> a un semblante presuntuoso y bastante sádico al tener ahora toda la retaguardia de $hor para su propio deleite. ;o cabía duda #ue tanto tiempo de prepararse %ísicamente en los entrenamientos había %or!ado la per%ecci>n del cuerpo #ue podía !actarse de ser tocado Gnicamente por sus manos. Lo"i se relami> los labios con lascivia recorriendo con la mirada desde la espalda hasta los glGteos ?rmes y parteyde muslos marcados sintiendoancha el calor acumulándose en su vientre unlos dulce escalo%río placentero atravesar su espina dorsal. A#uello sí #ue iba a ser algo bastante interesante. SMmm sin duda... es un panorama bastante tentador a la vista... -e acomod> me!or entre las piernas de $hor abriCndolas de modo suave para no alterarlo entre #ue ba!aba el rostro y empe&aba a repartir besos desde la espalda ba!a hasta la nuca. S*elá!ate... Lo harC despacio... -usurr> a su oído a modo de calmarlo pues lo percibía tenso y asustado. Luego de eso se retra!o agach> el rostro abri> con sus pulgares las nalgas del rubio y adentr> su lengua por en medio lengHeteando repetidas ocasiones desde el perineo hasta la parte trasera de los testículos y despuCs yendo a salivar la entrada con vehemencia. . edirle #ue se rela!ara en realidad no era del todo buena idea. $hor seguía a%errado a las sábanas como si su vida dependiera de ello buscando un modo de calmarse y pensar #ue no era muy erdico lo hiciera con Cl tiempo atrás. oncentrado en seguir preparando terreno el hechicero tom> la base del %alo con su diestra comen&ando a masturbar con delicado tacto pero ?rme para provocar a $hor y e su mano hasta el glande y se dedic> a pasar el pulgar por encima haciendo círculos y presionando suavemente por encima de la ranura. -onri> de medio lado escuchando ese gemido ahogado en la garganta del rubio. oco a poco cedería.
. En otras ocasiones la masturbaci>n era mutua pero ahora Lo"i estaba bombeando su erecci>n y Cl se a%erraba a las sábanas. En cuanto sinti> #ue el hechicero empe&aba a masa!ear su glande con el pulgar y a presionar $hor hundi> su rostro contra la almohada sosteniCndose de los antebra&os para permitirle a su esposo tocarlo más. SAhh... Aggh... Timi> con C a mover su cadera al ritmo de la masturbaci>n percibiendo #ue el pre seminal emanaba poco a poco. . (usto cuando $hor al&ara las caderas dándole más espacio a su mano para seguirlo masturbando a placer y empe&ando a moverse en un sensual vaivCn contra su mano la cual ya se humedecía por el pre seminal emanado Lo"i olvid> la delicade&a... asta cierto punto. Fesli&> su lengua ve&con más por todo medio volver a succionar los testículos uno una a uno lascivia sinelde!ar de hasta masa!ear el glande y por deba!o del mismo. ;ot> #ue $hor temblaba por el goce recibido y a decir por el !adeo desesperado #ue había sido acallado contra la almohada el hechicero intuy> #ue si continuaba a ese ritmo lo haría correrse. I esta ve& no se detendría hasta #ue lo hiciera era parte del proceso y la idea: empapar su mano de su esencia para subir de nivel. Así mientras seguía provocando el clíma< de $hor se dedicaba a lamer y estimular los testículos con su boca entre #ue el pulgar de su iuierda pasaba por encima de la entrada del n>rdico y presionaba suavemente más no introduciendo el dígito aun. . or la %orma #ue estaba masturbándolo no le cupo duda al n>rdico #ue la intenci>n sombría y perversa de Lo"i era hacerlo correrse y vaya #ue no le %altaba mucho para lograrlo puesto #ue la lengua de Lo"i entr> en acci>n lamiendo sus testículos y su otra mano empe&aba a estimular la &ona. SAggh... Fioses... Ssuspir> intentando aguantar el ritmo de tres estímulos a la ve& on el bombeo en su miembro presionar su entrada y la lengua de Lo"i haciendo maravillas $hor empe&> a sentir una corriente por todo el cuerpo con el pecho e a ar#uearse violentamente y pronto su garganta se cerr> y toda la adrenalina acumulada estall> al eyacularse vastamente sobre la mano derecha del hechicero. . A#uel susurro lleno de ag>nico C en Lo"i una sensaci>n de placer inmensurable !unto con el endurecerse de su erecci>n hasta el
punto de verse tentado a tocarse para satis%acer su necesidad carnal. -in embargo soportaría la tentaci>n puesto #ue si lo hacía lo más seguro era #ue se de!ara llevar y terminara llegando al orgasmo sin haber reclamado a $hor como suyo. I ese no era el plan. Así #ue apegándose a la estrategia el hechicero continu> con su labor masturbando presionando y succionando percibiendo el cuerpo del n>rdico empe&ar a contraerse. los hacía o!os yentre al&> la más #ue pudo para no interrumpir lo #ue suAbri> lengua lascabe&a piernaslode $hor encontrando la espalda del rubio curvada en una bastante provocativa y candente escena escuchando a los segundos ese gemido %or&ado a ser contenido en su garganta mientras su mano se humedecía y comen&aba a escurrir por el semen #ue $hor de!ara correr libremente. Lo"i totalmente complacido sob> un poco más por toda la en del miembro antes de incorporarse con una media sonrisa plasmada en sus labios acompaJando con una mirada decidida. Entonces sac> su diestra de deba!o del n>rdico y con la palma iuierda se apoy> sobre la curvatura entre la espalda y la cintura para hacerlo ba!ar y recostarse completamente. SBueno chico -e tendi> ligeramente sobre $hor solo para chocar su pecho contra la espalda #ue subía y ba!aba constante por el respirar acelerado de su esposo mientras susurraba con malicia cerca de su rostro. on sigilo %ue abriendo las piernas del rubio con las suyas entre #ue iba llevando su diestra baJada en semen hasta la entrada tibia y cerrada... Oirgen. (usto al momento en #ue hi&o contacto sinti> el sobresalto del n>rdico acompaJado de un dCbil murmullo dudoso y temeroso. osa #ue al hechicero le pareci> sumamente erdico presentir era #ue elotro hechicero lo haría suyo. ;o seempe&aba e#uivoc>apuesto #ue#ue not> loshora dedos del sobre su entrada masa!eando asegurándole #ue no pasaría nada malo basándose en e de reo!o al pelinegro suspirando con la estimulaci>n en su entrada. Estaba dis%rutándolo era una sensaci>n nueva por#ue esa parte de su cuerpo nunca la había tocado nadie ni Cl mismo. Estaba en letargo de!ándose llevar por el placer de la primera ve& hasta #ue Lo"i introdu!o un dedo. SAhh... Lo"i... Fe inmediato todo su cuerpo se contra!o ante el intruso provocando #ue $hor se removiera un poco por lo inc>modo #ue se sentía. ;o era dolor pero era una sensaci>n rara muy e respirar con calma y abrir más sus piernas debía hacer lo #ue Lo"i hacía cuando Cl lo dilataba. abía observado #ue trataba de concentrarse en el placer y con?ar en Cl. . Smhmhm eso es lo #ue siento cada ve& #ue pretendes entrar en mí' Murmur> con sus labios ro&ando la parte trasera del oído del n>rdico empe&ando a meter y sacar a#uel largo dígito desli&ándose gracias al semen #ue lo recubría. SFebo con%esar tu dentro estreche& está e de hablarle un solo instante en ese tono siseante y provocador para #ue siguiera respondiendo a cada estímulo y recibiera un segundo intruso con la misma parsimonia con #ue el primero se introdu!era. . S;nngh... Timi> gutural oyendo atentamente la vo& del hechicero en su oído sus labios ro&ándole el hCli< y su dedo moviCndose dentro suyo. $hor hundi> su rostro en la almohada tratando de rela!arse aun#ue con el dedo dentro suyo estaba muy alterado aun#ue no lo admitía. -us uJas estaban a nada de hacer agu!eros en la sábana no teniendo de d>nde agarrarse. Lo"i estaba usando el mismo tono #ue Cl usaba para hacerlo enlo#uecer. Ia le había aprendido ciertas maJas y por lo #ue erdico debería estar sintiendo demasiado calor propagándose desde su entrada hacia todo el cuerpo. S;o temas... -olo dC!ate llevar... Wmagina cuando tG me lo haces... Oeme pidiendo más... *ecitaba suave y ansioso embistiendo con sus dedos con paciencia y mucho tacto al notar #ue las manos de $hor estaban prácticamente desgarrando las sábanas. Oaya en si apenas lo estaba dilatando. Aun#ue Lo"i no podía negar #ue verlo así lo llenaba de un sadismo lu!urioso bastante intenso. -in embargo eso no #uería decir #ue iniciara una táctica de tortura sadomaso#uista a pesar de sonar tentador por lo #ue mantendría la idea principal: unirse a $hor hacerlo suyo y hacerlo e contra su oído llevando un ritmo acompasado con sus dedos penetrándolo retrayCndolos y luego insertándolos despacio para luego hacer círculos y de ve& en ve& separar por dentro al abrir livianamente ambos dígitos. A cambio de ello Lo"i recibi> un temblor interno del cuerpo de $hor mismo #ue provoc> #ue su erecci>n goteara pre seminal y su vientre se llenara de %uego abra&ador desesperado por ser erdico. . Estaba de!ándose llevar lo más #ue su cuerpo podía pero ya tenía la costumbre de no hablar mucho sino escuchar los !adeos de Lo"i para satis%acer suloaudici>n ahora sería pero al revCs. Pui&áintentaba el hechicero buscaba oír emodo tener dos dedos dentro pero tampoco era malo no si se sentía en las nubes en sumamente urgente por parte de $hor. K ya estaba demasiado ansioso por sentirlo o lo pedía por#ue no soportaría más tiempo antes de pararlo y de!ar todo a medias. -iendo así Lo"i no estaba en posici>n de perder más tiempo con el previo. I a sudescomunal !uicio $hor estaba listo.aun#ue ;o era como #ue su erecci>n %uera tan como lamás del #ue n>rdico si tenía buenos atributos con #uC de%enderse. Smhm #uC impaciente... Sdi!o un poco burl>n pero dando una Gltima estocada con sus dedos antes de retraerlos y sacarlos del canal Sero ciertamente... tampoco resisto más espera... Feclar> al tiempo #ue se acomodaba entre las piernas de $hor tomando los muslos para al&ar las caderas y de!arlas a la altura de su pelvis notando al instante como el rubio se a%errarse de la almohada mientras #ue cerraba los o!os y respiraba copiosamente. rocedi> a masturbarse un poco para lubricar su %alo y así hacerlo menos inc#modo. $om> con su iuierda la cadera y entonces acerc> el glande a la entrada dilatada. *o&> un poco para darle aviso de #ue lo haría pero #uiso acompaJar a#uello con un beso en el hombro derecho y una Gltima %rase. S*espira... Lo harC despacio... Ficho esto Lo"i presion> para incrustar el glande siendo inmediatamente recibido por una deliciosa contracci>n #ue lo hi&o gemir y al&ar la cabe&a. Avan&> un poco más y entonces su mano derecha se ubic> al costado de $hor apoyándose y aguardando antes de continuar. . $hor cerr> los o!os los dedos de Lo"i terminaron de hacer su traba!o. El hechicero le advertía al oído lo #ue presentía para lo cual le sinti> acomodarse entre sus piernas tomarle las caderas darlelas un beso en el hombro en un intento de serenarlo. -abíapara #ue al&arlas aun conytodas %rases de advertencia el resultado sería el mismo pero siempre había algo en la vo& de Lo"i #ue lo calmaba. -eguramente eso mismo pas> cuando Cl lo hi&o suyo por primera ve&: el sonido de su vo& lo tran#uili&> y sus mGltiples caricias a los costados. Entonces sinti> el miembro del o!iverde ro&ar su entrada y presionarla para ?nalmente enterrarse despacio. SAgghh... Aahh... (adeo con algo de dolor parecido a #uema&>n dentro suyo. Apret> los párpados tan %uerte como podía. ;o estaba en su naturale&a al&ar la vo& mucho menos gritar aun#ue eso no impidi> el !adeo a inicial más a un alarido #ue un !adeo en sí mismo. Folía#ue y bastante pesarsonara de saber #ue Lo"i no era tan grueso como Cl. Ahora entendía el miedo de la primera ve& al hacerlo suyo... Le sorprendía no haberlo destro&ado en a#uella ocasi>n o en las siguientes.
-us uJas rasgaron más pero $hor permaneci> con el porte orgulloso siempre había sido así y eso era no #uebrarse ni si#uiera %rente a Lo"i. Era una cuesti>n de identidad por#ue nunca había hecho eso antes o pensado si#uiera #ue pudiese llegar a ocurrir. -inti> entonces el %alo a la mitad. Empe&aría a dis%rutarlo en cual#uier momento eso esperaba. . Muy despacio %ue introduciCndose en $hor alo!ando la mitad de su erecci>n y esperando un poco a pesar de #ue las paredes lo apresaban tan deliciosas y calientes hGmedas #ue lo hacían #uerer enterrarse sin mayor delicade&a. ero se trataba de darle goce no su%rimiento de más. Escuch> los !adeos casi alaridos #ue buscaban ser lo menos estruendosos pese a #ue seguramente sentía partirse en dos. A#uello era una clara muestra del orgullo #ue $hor aGn mantenía intacto y en parte eso le gustaba a Lo"i #ue no se de!ara dominar tan %ácil o al menos #ue su ?rme&a todavía estuviera en pie. Así estaba convencido de #ue con%orme el acto se llevara a cabo iría cediendo más y más al placer del momento hasta #ue no pudiera resistir más y lo gritara... K lo evidenciara de %orma poco menos reprimida. SAagh... Aah... Mngh... Al poco Lo"i había desli&ado completamente su %alo hasta #uedar incrustado en el canal entre #ue soltaba !adeos y gemidos #ue había contenido en el proceso. -in duda alguna estar unido así con $hor era un placer sublime elevado y demasiado so%ocante. Ahora comprendía por#ue el n>rdico simplemente no podía de!ar de hacerlo suyo cada ve& #ue tenían oportunidad. Era realmente magní?co verse enterrado y envuelto por un %uego ardiente mientras percibía contracciones succionando su miembro para llevarlo más adentro. Tlorioso. . La columna $hor empe&> moverse casi por de %orma contorsionista la cama no de emitiendo ningGna sonido #ui&á la enorme %uer&a de contra voluntad #ue conservaba o por#ue su mente no de!aba a un lado su lado dominante. Escuch> #ue Lo"i dis%rutaba estar dentro de su cuerpo y seguramente estaría e el rostro mirando los esmeraldas del otro y cerrando de inmediato los suyos. Puemaba era un dolor indescriptible pero tolerable. $hor tom> una gran bocanada de aire para ir respirando y calmarse. -us o!os estaban ?!os en la pared en las sombras reNe!adas en ella y el ligero movimiento de Lo"i para empe&ar las embestidas. Esta ve& $hor empe&> a hiperventilar en lugar de sacar su vo& sintiendo como la primer estocada lo partía en dos. . abía cerrado los o!os para percibir me!or toda esa ola de nuevas sensaciones #ue lo abrumaban y e sus esmeraldas cristalinas plagadas de lu!uria incontenible notando el removerse del cuerpo de $hor. En%oc> su espalda y observ> c>mo se retorcía por el dolor y la inc>moda sensaci>n deconocía una invasi>n pro%unda misma #ue Lo"i conocía per%ectamente. Así como el goce #ue sobrevendría despuCs. *ecorri> con la mirada en ascenso por la piel aperlada a la lu& de las antorchas hasta topar los &a?ros entre angustiosos y nublados #ue pronto le apartaron la vista. ;ot> su ceJo %runcido el sudor en su sien y p>mulos sonro!ados por el es%uer&o sus manos a%errándose con desespero de las sábanas su respiraci>n errática y temblorosa por intuir lo #ue vendría. A#uello solo e más al hechicero #uien a%errando las caderas de $hor con posesi>n y sutile&a me&cladas dio una primera estocada suave lenta pro%unda #uedándose adherido y sin moverse por breves segundos para despuCs retraerse pero sin sacar el %alo. -olo meciCndose despacio para #ue $hor se %uera acostumbrando y su entrada cediera poco a poco. S;gh... *elá!ate... asará dentro de poco... Busc> darle consuelo con esas palabras mientras sus manos acariciaban las caderas y muslos subiendo de nuevo yendo ahora a los costados y por sobre la espina dorsal. . Las caricias en sus muslos y cadera destensaron un poco el cuerpo del n>rdico. Aun#ue seguía teniendo ese esco&or en su entrada y la sensaci>n de ardor con #uemadura escuch> la vo& de Lo"i #ue bien lo hipnoti&> para #ue %uera rela!ándose un poco. -inti> #ue el %alo se retraía pero continuaba dentro suyo podía sentir su %orma cilíndrica a la per%ecci>n así como su entrada se e un poco de sarcasmo recibiendo un gruJido incon%orme por parte del n>rdico lo #ue aliment> aGn más su malicia. Lo haría dis%rutar como nunca como Cl dis%rutaba hasta la locura. Entonces el hechicero su!et> con ?rme&a las caderas de $hor endere&> la espalda se removi> muy apenas y comen&> con las penetraciones. rimero suaves una tras otra moviendo sus caderas adelante y atrás en un compás rítmico constante sintiendo las paredes apretar su erecci>n de %orma tan sublimey#ue su garganta se llen> de lánguidos gemidos so%ocados. SAah... $hor... omo si %uese su esposo #uien lo estuviera embistiendo Lo"i al&> la cabe&a cerrando los o!os y pronunciando su nombre con lascivo deseo aumentando de a poco los movimientos con%orme notaba menos tenso el canal. . Entonces como Cl mismo lo hacía las estocadas iniciaron. Muy parsimoniosas al inicio para volverse raudas y violentas despuCs. $hor curv> su espalda abriendo las piernas para implorar aun#ue no sabía en y delirio puros #ue le pedían más sin hacerlo realmente pero por el tono y la %orma en #ue $hor se #ue!aba y decía su nombre entre !adeos era todo lo #ue Lo"i necesitaba para saber #ue se habían complementado y ahora en algo de%ormada por el Cn curv> sus labios por breves instantes antes de volver a gemir con sonoridad notando lo caliente y hGmedo #ue se volvía dentro con cada estocada. ercibi> a la par el curvarse de la espalda de $hor con insistencia entre más lo penetraba igual sus piernas un movimiento acompasado con el vaivCn de #ue sus caderas #ueabriCndose lo estabanyllevando a perder toda ra&>n y moralidad como cada ve& #ue Lo"i lo sentía clavándose dentro suyo. -olo #ue esta ve& esa sensaci>n de plenitud era nueva y bastante buena para negarse a ir más adentro más pro%undo.
Así #ue pausando momentáneamente toda acci>n Lo"i se reacomod> para tenderse sobre la espalda del n>rdico contactando su pecho con la piel #ue pareciera ser %uego me&clado con sudor entre #ue se daba un momento para acariciar el t>ra< portentoso con sus manos y mordía el l>bulo derecho con hambre. Entonces el hechicero volvi> a moverse su!etándose con su bra&o iuierdo de $hor abra&ándolo por el pecho mientras #ue su mano derecha bombeaba su erecci>n al ritmo de las penetraciones. S;gh... Aah... QLo sientesR... Mngh... Quedes sentirlo... #uemándoteR Agh... Smurmuraba entre gemidos necesitados chocando su aliento en la nuca y parte del cuello del n>rdico SQ-ientes... el placer invadiCndote...R QLlenándoteR . (amás en su vida había e al o!iverde moverse y Cste se lo había concedido estaba algo ansioso por acabar con el dolor y gradualmente comen&> a amainar. Lo"i tenía ra&>n era una sensaci>n e las preguntas el pelinegro se recostara enun sugruJido espalda.ante Lo #ue lo tom> porpermitiendo sorpresa %ue#ue la masturbaci>n #ue comen&> a practicarle. Era demasiado para una sola ocasi>n... Aun#ue Cl solía hacerle lo mismo y más provocadoramente con la idea sádica de hacerlo delirar. Entonces Lo"i planeaba lo mismo. -e de!> hacer apenas conectando los hechos apoyándose en sus antebra&os y ba!ando la cabe&a entre #ue sentía las embestidas cada ve& más %uertes hasta #ue el hechicero toc> un punto dentro de su ser #ue hi&o #ue se incorporara un poco y abriera la boca en busca de aire. SUFioses@ +ue todo lo #ue pudo decir al sentir c>mo era marcado una y otra ve& por Lo"i en ese mismo punto el cual era la di%erencia entre placer y locura. . A#uel gruJido totalmente e #ue su lu!uria %uera soltada hasta el punto de la demencia. osa #ue le hi&o a?an&ar tanto la masturbaci>n en la erecci>n del n>rdico como el agarre #ue mantenía a travCs de su pecho así como el aumento de las estocadas. -us caderas %ueron meciCndose cada ve& más ansiosas más %uerte y deseosas por llegar a ese lugar pro%undo caliente y e de nuevo robándole un beso al hechicero ierto no dudaría de ese !uramento pero dormiría con un o!o abierto por precauci>n... -olo en caso de un imprevisto. . Lo"i no tuvo tiempo de dar una respuesta a lo dicho por $hor puesto #ue ahora el n>rdico se adelant> sellando sus labios en un beso calmo pero %uerte a la ve&. Aun#ue realmente cual#uier palabra salía sobrando al compartir de nuevo un momento donde sus bocas se unían y amoldaban con per%ecta sincronía recreando delicados sonidos acuosos y livianos suspiros.
El hechicero le había tomado del cuello con su diestra para irlo acercando más hasta #ue el antebra&o del rubio descansara al otro lado de su rostro. -abía #ue no podía colocarse de %orma suelta a horca!adas suyas por obvias ra&ones así #ue no lo %or&> a hacerlo. -olo permaneci> deleitándose con el sabor de a#uel eli entre una mirada c>mplice y persuasiva rodeando el cuello del rubio con sus bra&os. SWmagino #ue no habrá más por esta noche QciertoR Sdi!o soltando un largo suspiro cambiando su en pícara por una resignada SPue lástima... ude haberte compensado !usto ahora por cumplir mi capricho de hoy... En ?n supongo #ue puedo vivir hasta #ue amane&ca . SEspera QcompensarmeR $an pronto como Lo"i combin> una sonrisa ladina y provocativa con la palabra compensaci#n el n>rdico alert> sus sentidos casi olvidando #ue estaba sensible de la cintura para aba!o. . El hechicero se mantuvo con en inocente a la vista pero por dentro estaba sonriendo amplio y malicioso al notar lo rápido #ue a $hor se le olvidara la incomodidad por haber sido el de aba!o. SMhm... Antes de hacerte mío te prometí #ue despuCs te compensaría como y cuanto #uisieras QrecuerdasR Le mir> de %orma cándida ro&ando la piel de la me!illa del rubio con la yema de sus dedos en un to#ue super?cial y pausado. Slaneaba hacerlo ahora... pero si estás indispuesto entonces será en otro momento Sdio un beso rápido en sus labios pretendiendo levantarse para ir al baJo . Ese beso y la respuesta solo %ueron un motivo más para #ue el n>rdico intentara ponerse en pie. on solo enterarse #ue Lo"i estaba dispuesto a ser suyo como usualmente pasaba cada noche las pupilas de $hor se dilataron casi como un le>n detrás de su presa. Lo mir> con deseo muy motivado. SUey Lo"i espe...@ Estir> su bra&o para sostenerlo de la muJeca y mantenerlo cerca pero al no poder mover con libertad su espalda ba!a el rubio cay> de la cama #uedando estampado contra la madera y levantando el rostro.
SAuch... Sse sob> la sien A veces se advertía a si mismo #ue ser tan pasional y permitir #ue su debilidad por Lo"i le nublara la consciencia podría llegar a ser letal. En una de esas acabaría metiendo la pata en #uiCn sabe d>nde solo por#ue Lo"i le propuso tener se de nuevo a Lo"i sosteniCndose en sus antebra&os tratando de mover los muslos pero al hacerlo sentía pun&adas en los glGteos. or lo #ue acab> resignándose. SEn serio tenía ganas de hacerlo contigo Sdi!o algo derrotado SFeberC esperar a maJana en tanto pueda mover mi espalda... Q>mo es #ue tG no te parali&as cada ve& #ue te hago el amorR . Estando ya %uera de la cama Lo"i apenas sinti> dedos decuando la mano $hor ro&ando su muJeca en un intento vano porlos detenerlo dede pronto el sonido de un %uerte golpe contra la madera seguido de un #ue!ido lastimero por parte del n>rdico le hi&o detenerse y girar de per?l para encontrar a su esposo tirado en el suelo. El o!iverde no pudo evitar sonreír con diversi>n y ligera mo%a mientras cru&aba los bra&os y recargaba un poco el peso a su derecha manteniendo la mirada risueJa en la derrotada del rubio entre #ue Cste se resignaba a tener su encuentro normal a la maJana y le preguntaba a#uello. Sm bueno... -i no se te #uita la incomodidad para maJana tal ve& tengas #ue entrar en un breve periodo de abstinencia Lo di!o tan campal como si no supiera #ue la sola menci>n de la palabra abstinencia le causaba un terror mayGsculo a $hor #ue ser el pasivo por siempre. SI Qc>mo es #ue no me parali&o cuando me haces tuyoR Srepiti> al&ando la mirada entrecerrada al techo %runciendo los labios como si lo pensara demasiado S5hm... $al ve& sea por#ue... poseo la habilidad de mane!ar la magia de sanaci>n además... aus> un momento ba!ando la mirada anali&ante sobre el n>rdico al tiempo #ue caminaba lento hacia Cl y rompía el cruce de sus bra&os para agacharse en cuclillas y susurrarle al oído con suave y rasposa sensualidad asegurándose de ro&ar con sus labios el contorno de la ore!a. SWmagino #ue el secreto real... es #ue me %ascina tenerte dentro. Me vuelve loco la %orma en #ue me haces delirar y sucumbir al placer #ue me das abiendo dicho el secreto de su goce Lo"i se puso de nuevo en pie y camin> con suma provocaci>n hasta encerrarse en el baJo y re%rescarse un
poco antes de volver a la cama. Esta ve& para dormir ingenuamente entre los bra&os de $hor. . on la sola menci>n de la palabra abstinencia el n>rdico #uit> sus esperan&as en intimar con Lo"i cerrando los párpados en un gesto resignado y temeroso. Wnconscientemente llev> su mano a su glGteo derecho tratando de hacer algo para devolverse sensibilidad pero termin> por aceptar la realidad: no tendría se %rente a Cl susurrándole en el oído #ue el secreto de #ue su cuerpo estuviese habituado era precisamente por el inagotable tiempo #ue pasaban !untos y $hor se encargaba de hacerlo delirar. A#uello alegr> mucho al n>rdico y estaba dispuesto a besarlo pero se #ued> a medias con los labios en el aire observando como el hechicero caminaba sensual al baJo. uando Lo"i cerr> la puerta y $hor se vio desprovisto de ayuda para volver a la cama resignado y sin poder mover sus piernas pre?ri> #uedarse en el suelo. on el orgullo muy muy herido. %.%.%.%.%.%.%.%.% Notas fnales: QI bienR Q>mo vieron el desempeJo de un Lo"i seme y un $hor u"eR rdico presente a pesar de #ue Cste seguramente no le recha&aría pero el hechicero pre%ería la soledad para tratar de acostumbrarse al hecho de una verdad #ue por más #ue %uera enmascarada por hechi&os y con!uros no sería borrada. Lo"i aGn seguía y tratando de aceptarse completamente tal y como era. Aun#ue tal parecía se #ued> inmerso en sus propios pensamientos y no se hubo percatado de la presencia de $hor hasta #ue Cste le hablara suavemente. . $hor volvía de una breve reuni>n con su padre. $uvo la in#uietud de ir a buscar aahí. Lo"i a su sal>n personal pero una cora&onada le di!o #ue nola estaría +ue entonces #ue sigui> el camino a su alcoba abriendo puerta muy despacio al llegar para sorprender a su esposo. Al entrar lo vio parado %rente al espe!o pero eso no le e sino su apariencia. Luego de a#uella discusi>n en la #ue Lo"i se mostr> con sus rasgos !otun no le había vuelto a ver así. ero a#uello más #ue producirle aversi>n le caus> ternura y unas inmensas ganas de abra&arlo. Son tu %orma !otun solo me dan ganas de... Scamin> como ido hacia el hechicero y con los bra&os e acercarse con algo de intriga y renuencia en su mirada rubí. S$e vas a congelar si me abra&as -on> un tanto morda& y golpeado no por#ue %uera la intenci>n sino por tener e risueJo y sonriCndole acercándose aGn más SIo tengo el doble de temperatura #ue tG así #ue se igualaran en algGn momento . Lo"i retrocedi> ni mediosintiendo paso viendo a $hor %ornidos acortar más la distancia. -olo no le miraba en silencio los bra&os encerrarlo en su rega&o. Suando piensas con l>gica me asustas Sdevolvi> apenas sarcástico no mostrando demasiada en al decirlo . El n>rdico mir> más detenidamente al hechicero ladeando el rostro. or ?n lo envolvi> en sus bra&os sintiendo en seguida el %rio del #ue Lo"i hablaba más no importaba. SQL>gicaR Fe hecho creí #ue por sentir mi calor amoroso tu cuerpo elevaría su temperatura Slo vio de nuevo tomándole el ment>n para encararlo S Oamos dime Qsucede algoR . iertamente la temperatura de $hor era más elevada #ue la suya Lo"i bien pudo percibirlo al estar en contacto. Así como tambiCn sinti> la calide& en sus palabras y en el modo de preguntar. S;o me agrada verme así Srespondi> escueto desviando sus rubíes de los &a?ros aun#ue sintiendo todavía su ment>n siendo tomado con suave tacto S-abes #ue no me gusta #ue veas lo #ue hay deba!o de mi otra piel . $hor lo consternado. signi?caba lo #ueyhabía dichoRmás ;o mencion> nada demir> inmediato pero síQPuC continu> abra&ándolo pegándolo a sí mismo. Sero eso eres Slo volvi> a encarar S5n !otun... I aun sabiCndolo sigo amándote. Qor #uC de!aría de hacerloR Es parte de ti tu ascendencia tu pasado todo lo #ue te hace ser tG ser Lo"i. Eso sigue enamorándome a diario. -i no %uCramos compatibles Eiliv no estaría en este mundo . ercibi> el a?an&ar del abra&o en torno suyo lo #ue le llen> de sentimiento el pecho. $hor no lo recha&aba nunca lo hi&o desde #ue supo de su ascendencia !otun. ;unca le rehuy> ni le mir> con hastío imaginando c>mo sería verlo a diario así.con En amor cambio siempre le miraba conese calide& con ternura y aceptaci>n puro !usto igual #ue en instante. ;o no igual era más y eso en parte asustaba a Lo"i por#ue pensaba Qc>mo era posible #ue lo amara así con tanta %uer&a tan neciamenteR ierto era #ue las veces #ue $hor le hubo visto en su %orma !otun eran muy
escasas la Gltima ve& durante a#uella discusi>n de semanas atrás pero aun siendo contadas las ocasiones en ninguna el hechicero sinti> desdCn o recha&o de su parte sino todo lo contrario. uando Cl sí #ue llegaba a sentirse hastiado de sí mismo al verse a travCs del espe!o estando a solas. Era parte de Cl de su naturale&a de su erdico di!era con tal verdad y certe&a. SQMe seguirías amando si tuvieras #ue verme así día y nocheR Spregunt> con vo& neutra ?!ando la mirada en la celeste SQAun... aun desearías #ue estuviera contigoR QOerme al despertarR . Esta ocasi>n lo tom> con ambas manos ?!ando sus &a?ros en sus rubíes. Entendía #ue se sintiera le!ano de ser un !otun despuCs de creer toda una vida ser un asgardiano. El haber descubierto la verdad siempre tuvo más repercusi>n en Lo"i #ue en Cl. I aun así a $hor no le importaba #ue perteneciera a una ra&a #ue alguna ve& odi>. S$e amaría con toda el alma como lo hago ahora Sle bes> la %rente S *ecordar #ue eres un !otun me muestra uno de los milagros más nobles del cosmos: la diversidad y la capacidad para amar aun emulo y le decía a#uello con vo& entrecortada. -u cuerpo no estaba %río sino templado lo #ue permiti> a $hor volverlo a abra&ar contra sí. Subiera buscado una %orma de regresar incluso los dioses hubiera sabido #ue no era mi hora de abandonar este mundo Sa?rm> besando su cabello Sero no hi&o %alta por#ue tus sentimientos por mí se impusieron sobre cual#uier idea oscura #ue atravesara por tu mente Lo mir> de nuevo sonriendo con ternura mientras depositaba un cálido beso en sus labios.
Sey estamos !untos y es lo Gnico #ue importa . Esta ve& Lo"i correspondi> el abra&o #ue $hor a?an&aba como no lo hi&o al principio. *ode> la cintura de Cste al tener sus bra&os siendo apresados por los a!enos de!ando #ue le acercara y lo encerrara más dentro en su rega&o. Ese lugar era su me!or re%ugio siempre lo había sido desde #ue tenía memoria. ;unca hall> mayor seguridad y calma #ue estando protegido por esos bra&os en torno a Cl. Los besos #ue recibiera en su cabello y labios !unto con a#uellas palabras y esa mirada tan comprensiva tan transparente y llena de amor hicieron #ue el hechicero sintiera ganas de llorar pero solo #uedándose el sentimiento latente en su pecho. re?ri> devolverle una mirada parecida a pesar de no sentirse muy c>modo haciCndolo con ese par de rubíes en lugar de sus esmeraldas. ero lo intent>. S-iempre te amC a pesar de todo... or eso %ue #ue descarguC toda mi ira contra ti por#ue por más #ue #uise nunca pude de!ar de sentir ese amor por ti... Me %rustraba no poder odiarte como tanto te lo gritaba *evel> %runciendo apenas el ceJo viendo a travCs de los &a?ros recordando algo #ue no le había contado al n>rdico y era importante #ue lo supiera. Además de lo #ue signi?caba para Cl. SLo sC ahora. -C #ue no estaríamos completos si viviCsemos separados S inhal> pro%undo y luego prosigui> SAl menos Eiliv no pasará por lo #ue yo al enterarme de %orma brusca lo #ue era Mencion> aclarando el punto cuando la mirada de $hor se viera con%usa ante la menci>n de su pe#ueJo. SEiliv tambiCn puede mutar a un aspecto !otun. as> cuando estuviste %uera... -e asust> mucho al principio pero ha empe&ado a controlarlo y ya no llora por eso . Era cierto Lo"i se lo había planteado así y de alguna %orma Cl sabía #ue el rencor del hechicero solo podía reNe!arse en alguien #ue le daría amor a pesar de todo. ero impotente de matarlo termin> empaJando ese amor con odio ?ngido #ue lastim> a ambos. Más ahora eso #uedaba atrás. $hor abra&> con más devoci>n a Lo"i por#ue sabía de lo #ue hablaba cuando se re%ería a sentirse engaJado. Lo vio en esa celda marchitándose por dentro corrompido por la soledad y la %rustraci>n #ue ese mismo dolor los hi&o conectar de nuevo. ada ve& #ue lo miraba cada ve& #ue sus esmeraldas lo veían y su %orma !otun se mani%estaba cambiando ese color por uno rubí $hor sabía lo #ue signi?caba cambiar a su pasado conocía per%ectamente lo #ue Lo"i pensaba sobre tener un srcen !otun cuando siempre se le educ> como un asgardiano. abía algunos #ue eran adoptados pero no cambiaban de apariencia cuando sus padres adoptivos les revelaban la verdad sin embargo el
a&abache cambiaba de apariencia y eso le recordaba #ue era di%erente %ísicamente tambiCn. El n>rdico lo entendía demasiado bien. Aun#ue lo #ue no entendi> del todo %ue a#uella re%erencia de Eiliv por parte del hechicero. Lo mir> unos segundos pero su esposo no tard> en con%esarle sobre la habilidad desconocida de su hi!o. SAh... Slo pens> un momento al&ando las ce!as sorprendido SEiliv puede mutar... Bueno creo #ue podía esperarse eso... ;osotros digo nuestras ascendencias... Oaya su hi!o era mitad asgardiano mitad !otun obviamente por la me&cla de ra&as. A pesar del aspecto normal de Lo"i su sangre llevaba la reale&a de los Tigantes de ielo. Alguna ve& había considerado la posibilidad de #ue parte de la sangre de Eiliv ad#uiriera rasgos distintivos de los !otun pero lo descart> al momento de verlo nacer y observar su te& blanca y tamaJo regulares. ;o #uería decir nada salvo la prueba de #ue Lo"i y Cl eran sus progenitores... S;unca lo vi mutar antes Sdi!o algo dubitativo SEn los primeros seis meses lo vi... creí #ue solo había heredado tu habilidad en la magia no pero estoFioses es sin duda... increíble . Aguard> con en por lo #ue $hor tuviera #ue decir al respecto de la habilidad de su pe#ueJo. A pesar de #ue sus bra&os no de!aran de rodearle ni tampoco menguara el abra&o Lo"i estaba inseguro sobre lo #ue a#uella revelaci>n pudiera ocasionar en el n>rdico. or lo #ue se mantuvo mirándolo en todo momento anali&ando sus %acciones su mirada. $hor se sorprendi> y ciertamente le parecía normal #ue así %uera. Fe hecho el pelinegro tambiCn pas> por lo mismo al ver a su hi!o con las manos y bra&os mutando de su tono claro a ese a&ul característico !unto con las marcas de los !otun. Lo"i sinti> angustia comprobar #ue Eiliv no había heredado su habilidad mágica sinoaltambiCn la capacidad desolo cambiar de piel igual #ue Cl. Al hechicero le hubiera gustado #ue su pe#ueJo no llevara consigo a#uel legado en su sangre pero parte de su esencia era la de un Tigante de ielo además de ser asgardiano. I tal parecía $hor comprendía tal relaci>n de me&cla genCtica. Wncluso llamaba a la misma incre"ble. S$ampoco creí #ue pudiera cambiar. uando naci> no hubo rastros de una posible característica de mutaci>n !otun Scontest> neutro S-upongo #ue no se mostr> antes por#ue no estaba totalmente desarrollada aus> un momento ba!ando la mirada y e devolviendo su mirada carmesí al n>rdico S-us o!os permaneces verdes y
el tono de su piel es poco menos oscura. Las marcas prevalecen... ;o #uiero #ue pase por lo mismo #ue yo cuando el reino se entere de lo #ue hered> de mí además de mi magia. -i llegan a despreciarlo si tan solo intentan hacer algo en su contra... Sesta ve& su vo& son> un tanto amena&adora me&clada con in#uietud S;o te aseguro #uedarme de bra&os cru&ados $hor. -in importar de #uien se trate Lo"i no especi?c> Gltimo era claro se re%ería a la corte a todo miembro desde ellomás ba!opero en cargo hasta#ue el supremo. . $hor direccion> sus pupilas en cada %acci>n del rostro del hechicero. Era obvio #ue estaba preocupado. omo cual#uier padre saber #ue tu hi!o posee dones por los #ue podría ser !u&gado te pone a la de%ensiva. L>gicamente $hor armaría una guerra en contra de cual#uier desa%ortunado #ue se atreviera a decir una palabra sobre su hi!o y su herencia. Estaba consciente y #ui&á era más lento #ue Lo"i para comprender ciertos sentimientos paternales #ue solo Cl conocía por haber gestado a Eiliv pero trataba de empati&ar. FespuCs de todo Cl nunca tuvo problemas por su lina!e ni les mucho menos su srcen. l era legítimo de Asgard pero Lo"i mal #ue pesara no. por -u pasado lo llevaba en la sangre la interminable rivalidad entre reinos era una carga #ue había sido obligado a arrastrar y encima soportar la humillaci>n de ser llamado monstruo. *echa&ado por el mundo por su %amilia por su ra&a. $oda la historia #ue Lo"i llevaba sobre los hombros era algo muy comple!o o #ui&á muy di%ícil de desci%rar para $hor. l siempre vio la vida más %ácil y a veces cuando el hechicero mutaba a su %orma !otun Cl no lograba percibir todo el signi?cado de la piel a&ul y los o!os rubíes. $odo lo #ue veía era a su hermano con la piel de otra ra&a solo eso. Fe no ser por el o!iverde probablemente seguiría sintiendo un odio sin %undamento e in%antil hacia (otunheim. Esta ocasi>n el n>rdico dio unos pasos para colocarse a espaldas del pelinegro y seguir abra&ándolo por la cintura. Le dio un beso en el hombro mientras su mirada se desviaba inconscientemente al cuarto de Eiliv. SLe diremos todo a nuestro hi!o cuando pueda comprender Sempe&> S ual#uier pregunta #ue haga la responderemos sin dudarlo. -abes #ue Eiliv debe sentirse orgulloso por ser mitad asgardiano y mitad !otun... Mirame Lo"i' idi> para #ue el hechicero volteara de lado y lo pudiera ver por el rabillo del o!o. SEiliv es príncipe de Asgard y (otunheim por derecho... ;unca permitiría #ue le pusieran un solo dedo encima o intentaran manchar su nombre. Es nuestro hi!o S$hor tom> la diestra de Lo"i acercando sus nudillos para besarlos S... onocerán la %uria de M!^lnir. Lo !uro por los dioses . El hechicero permaneci> ?rme y sin rastros de arrepentirse por lo #ue de!ara ver entre líneas percibiendo la pronta correspondencia de $hor al situarse
detrás volviendo a rodearlo con sus bra&os pegando su pecho portentoso a su espalda y depositando un beso inocente y cálido en su hombro #ue lo hi&o sentirse seguro. Más no tran#uilo del todo. *ealmente le in#uietaba cada ve& #ue se ponía a pensar en las reacciones #ue acarrearía el dar a conocer ese aspecto del ser de Eiliv. $hor estaba en lo cierto era su hi!o de ambos y los dos eran príncipes por lo tanto Eiliv tenía a ser reconocido tanto Asgard como en (otunheim. or no sus venasderecho corría sangre real por parte de en ambos mundos. ero aun así Lo"i con?aba del todo en la corte incluso en la gente del reino. Ahora lo aceptaban de nuevo a Cl a Lo"i Lau%eyson príncipe de (otunheim igual #ue de Asgard al ser consorte del primogCnito de Kdín y además por haber vuelto a ser recibido como el hi!o adoptivo del adre de $odo. $ambiCn le era claro #ue el reino entero adoraba a su pe#ueJo por encontrar en Cl una esperan&a en el %uturo más brillante incluso #ue con Kdín al %rente. ero cuando supieran de su mutaci>n Qseguirían pro%esándole esa misma lealtad a su hi!oR QK lo recha&arían como pas> Lo"i en un principioR El o!iverde no #uería #ue Eiliv padeciera humillaciones y malos tratos ni dentro ni %uera del palacio. Fe (otunheim no esperaba mucho su poblaci>n había #uedado reducida a solo unos cientos luego de haber intentado ani#uilarlos con el poder del Bi%rost. Además conociendo a los !otuns primero matarían a Eiliv antes de si#uiera rendirle sus respetos. Aun así y como bien $hor se lo di!era llegado el momento hablarían ambos con su hi!o le e el recha&o pero lo e a travCs de Lo"i en su noche de bodas cuando el sagrado vínculo los uni> y los erdico recordaba ese sentimiento y el pesar se acumulaba en su cora&>n. Q>mo hacerle ver a su gente #ue Lo"i no era #uien ellos creíanR Q>mo borrar esos pensamientos carentes de %undamentoR Q>moR A?an&> el abra&o por la cintura cerrando sus dedos sobre los del hechicero recargando su$hor ment>n enimpotencia su hombro por y volviendo a besarle !usto enlaa#uel sitio. A veces sentía ser incapa& de darle toda pa& #ue merecía. -implemente su amor solo se entendía entre ellos. SEiliv es la prueba de #ue (otunheim y Asgard pueden coe S;uestro hi!o nos superará en cual#uier aspecto. Me encargarC #ue todos depositen su con?an&a en Cl . -entir ese a?an&ar del abra&o por parte de $hor entrela&ando sus manos a las suyas volviendo a contactar sus labios con su hombro le transmiti> un sentimiento de conen uni>n. Lo"i de #ue aire cerraba sus pulmones manteniCndolo por brevesy instantes alllen> tiempo los o!os para luego sacarlo despacio por la nari&. ercibi> el rostro de su esposo acomodarse sobre su hombro a lo cual el hechicero lade> un poco el suyo para generar contacto %runciendo el ceJo al hacerlo. Aun le parecía imposible c>mo era #ue $hor lograba in%undirle con?an&a tran#uilidad y %e en sí mismo en ellos en su amor cuando Cl muchas veces tenía dudas a pesar del tiempo transcurrido. ;o era incertidumbre por lo #ue sentía Lo"i !amás dudaría de su amor por a#uel a #uien decidi> unirse en cuerpo y alma a #uien eligi> para procrear a ese pe#ueJo #ue le daba un nuevo sentido a sus vidas y unía a ambas ra&as en una sola. -u in#uietud era precisamente por a#uella cuesti>n: el #ue su hi!o llegara a ser relegado como un día pasara con Cl. Era por Eiliv #ue Lo"i se preocupaba no por sí mismo. ero era cierto Eiliv era la prueba irre%utable de #ue ambos mundos podían converger vivir en concordancia para bene?cio mutuo y no solo de uno. -u pe#ueJo príncipe algGn día lograría plasmar ese ideal como una realidad palpable. SEstaremos respaldándolo siempre. Eiliv es un milagro de la vida misma tG me lo di!iste el día #ue naci>. I lo creo... or eso es nuestro deber abrirle camino hasta #ue Cl mismo pueda hacerlo con sus propios medios. Femostrará ser %uerte inteligente y capa& de llevar una tarea importante el ser un príncipe #ue mire hacia ambos lados. I despuCs un rey #ue gobierne con una bandera unida %or!ada entre hielo y trueno Feclar> con verdad y total certe&a apretando más esas manos enla&adas a las suyas mirando al n>rdico y sonriCndole. .
$hor sonri> de lado. Era cierto #ue parecía un %uturo borroso algo intocable pero el rubio siempre tendría %e en Lo"i y en su hi!o. abía tenido %e cuando solo eran ellos dos contra la palabra de Asgard y de su padre no la perdería ahora sobre todo por su %amilia y la esperan&a de alcan&ar realmente tregua de amistad con otros reinos además de (otunheim y Midgard. S(amás le %altaremos a Eiliv Sapoy> el argumento de Lo"i S;i entre nosotros i&o #ue volteara de nuevo por la cintura mirándolo con anhelo. -us rasgos !otun no le nublaban para nada su imagen de belle&a y en cierta %orma al tener la piel a&ul con símbolos y rubíes como o!os $hor lo veía como la misma gema #ue con su piel nívea y o!os esmeraldas. ;o notaba di%erencia entre esas dos %acetas por#ue su amor por el hechicero !amás le había erdico había comprendido el signi?cado de: el amor es ciego y seguía pro%esándolo. Acarici> la me!illa de Lo"i acercándose para besarlo lento abriendo sus labios y atrayCndolo más. Así en su %orma !otun $hor no tenía vergHen&a de demostrarle #ue su compromiso como consorte no solo se lo había dicho al Lo"i asgardiano sino al !otun por igual. %.%.%.%.%.%.%.%.% Notas fnales: Ahora si #ueridos ojoses el pr>rdico estaba más ansioso por llegar a ese momento de vínculo con el o!iverde #ue beber todo el aguamiel... ero Qc>mo haría para distraer a Lo"i hasta llegado el momentoR Puería #ue %uera sorpresa. SMantener un secreto es muy complicado Sse di!o a sí mismo SAhh' a,pá... UIo@ U;o@ Ua,bar no@... Dapá yo no hablarC Escuch> #ue le decía su pe#ueJo Eiliv a #uien estaba dando su baJo. El pe#ueJo solo chapoteaba en la tina riendo y !ugando con el !ab>n mientras $hor estaba de rodillas tallando su espalda. SLo sC campe>n. on%ío plenamente en ti lo #ue me preocupa es #ue tu papá Lo"i se dC cuenta de la ?esta antes de tiempo... -abes Cl es muy inteligente. ;ada se le escapa Eiliv solo sonri> y lan&> una oleada de agua en!abonada a su padre rubio lo cual no era de sorprenderse. uando el baJo de Eiliv acab> y $hor había terminado de secarlo vestirlo y medio biber>n para alimentarlo estaba vacío el n>rdico not> la silueta de Lo"i acercándose por el pasillo hacia la habitaci>n de su primogCnito. ?ecuerda $hor! debes mantenerte callado... S;os complace tener su presencia entre nosotros gran Fios del EngaJo S salud> al hechicero sonriendo de lado Se de in%ormarle #ue nuestro príncipe solo me mo!> una ve& hoy sin electrocutarme. 5n gran avance en mi desempeJo como padre Qno creeR . Fe acuerdo #uería ser tratado como igual ante la corte pues eso tuvo. Lo"i había pasado gran parte de la tarde atendiendo asuntos con el conce!o y Kdín. ;ada #ue tuviera #ue ver con a%rentas entre reinos o amena&as a la
seguridad. La reuni>n %ue meramente diplomática se buscaba reanudar las relaciones comerciales y políticas entre Asgard y ;ornheim pues luego de aJos sin tener un acercamiento el monarca pretendía volver a unir ambos reinos por medio de un tratado comercial. +inalmente y como se esperaba Lo"i termin> planteando la base del acuerdo mismo en el #ue se asentaba una ceremonia de recepci>n para la reina Zarnilla y suambos corte.reinos Ahí seobtuvieran presentaríaganancias el tratado!ustas a ?rmar cláusulas donde y a con nivelnotorias e#uitativo. Los ancianos y Kdín #uedaron satis%echos con la resoluci>n y ahora el hechicero volvía a su alcoba para pasar tiempo con su pe#ueJo Eiliv y con $hor. A #uien por cierto le había tocado hacerse cargo como todo un padre devoto. Al llegar a la habitaci>n principal la #ue compartía con $hor Lo"i se deshi&o de su gabardina y #ued> solo con la camisa verde ocre. Escuch> la vo& del n>rdico detrás de la puerta contigua misma #ue se notaba entreabierta y entonces decidi> unirse al cuadro %amiliar. Entrando a la habitaci>n de su pe#ueJo observ> a $hor cargándolo mientras lo alimentaba y mecía de pie dedicándole a#uel saludo entre una sonrisa galante así como su in%orme del día. Lo #ue hi&o reír #uedo al o!iverde. SOaya #ue es un gran avance. -e ha mane!ado bastante bien -eJor del $rueno tanto #ue' hasta se me ocurre #ue podría recompensarle por tales dotes notables Le di!o en complicidad maliciosa acercándose despacio y besando la comisura de sus labios para despuCs darle un beso amoroso en la %rente a Eiliv. SOeo #ue no tienes #ue!as de papá $hor Scoment> a su hi!o #uien neg> con la cabe&a pero sigui> tomando de su biber>n . El cuerpo de $hor una habl> en ese tono.sinti> U>mo lo corriente encendía@elCctrica de deseo cuando Lo"i le SEhem... Quedo pedir un adelanto de mi recompensaR Spregunt> con malicia luego de #ue el hechicero le besara . Lo"i le mir> de soslayo al&ando las ce!as y separando los labios ?ngiendo incredulidad con a#uella petici>n. S;o voy a hacer más #ue eso %rente a Eiliv Asent> sonriendo divertido notando #ue su pe#ueJo e y lo carg> para terminar de dormirlo. . Eiliv se removi> del rega&o de $hor yendo contento al de su papá Lo"i.
El Fios del $rueno suspir> emocionado. Pue cuadro más encantador contemplaban sus o!os. -in darse cuenta había plasmado una sonrisa misma #ue conserv> hasta #ue el hechicero volvi> a mirarlo. SQ$e gustaría caminar por los !ardinesR . Fespacio párpados dede Eiliv comen&aban a caer y sus manitas de!aron de sostener ellos biber>n seJal #ue estaba #uedándose dormido. Lo"i sostuvo el biber>n y camin> un poco meciendo levemente a su hi!o al tiempo #ue $hor le hacía a#uella invitaci>n. SQ;o #uerías un adelanto de tu premioR Sin#uiri> travieso mirándolo con ese mismo sentimiento . Los o!os del n>rdico se iluminaron de inmediato. -u supuesto plan de distraer a 0o1i para que no se diera cuenta de la esta se %ueron al caJo con la pregunta. Esper> pacientemente a #ue Eiliv durmiera para susurrarle a su esposo !usto cuando acostaban a su hi!o en la cuna: SEntonces Qme lo daríasR ;o te he tocado desde anoche . ;otar ese brillo de cachorro emocionado en la mirada de su esposo %ue motivo su?ciente para #ue acentuara esa sonrisa en su rostro. -in embargo se contuvo de insinuarse un poco más ya #ue Eiliv se removi> en su rega&o al haber terminado su alimento. -in demora Lo"i hi&o desaparecer el biber>n y se permiti> mecer un poco más a su pe#ueJo para #ue no resintiera su %alta tan pronto. 5na ve& totalmente dormido el hechicero coloc> a Eiliv dentro de la cuna con suma delicade&a lo cubri> con su manta y observ> c>mo se giraba de costado para acurrucarse me!or en su lecho. Las esmeraldas de Lo"i se tornaron enternecidas acarici> sus ri&os y deposit> un beso en a#uella cabecita rubia antes de cerrar la vaporosa cortina blanca. ermaneci> un instante así admirando a su hi!o escuchando a#uel susurro por el cual via!aba la ansiedad de $hor por hacerlo suyo cosa #ue le hi&o volver a sonreír con picardía. SOamos adentro Smurmur> contra los labios del n>rdico y luego lo mir> con el mismo deseo . El rubio tampoco de!> pasar oportunidad para darle un beso antes de dormir a su primogCnito. (usto cuando la cortina de su cuna %ue cerrada y Lo"i lo volte> a ver con deseo y pasi>n susurrándole esa %rase implícita en sus labios el cora&>n de $hor aceler> a un punto imposible. $om> de la mano al o!iverde abri> la puerta de su habitaci>n y en menos de un segundo ya tenía acorralado al hechicero contra la pared besándolo con ansias. Esas ansias #ue no menguaban en cada encuentro.
. 5na ve& entrando a su alcoba Lo"i sinti> ser acorralado con premura para ser besado. Los labios de $hor abrían los suyos de modo ansioso y sus manos lo tomaban de las caderas pegándolo a su cuerpo. Lo"i sonri> en medio del beso y enroscando los bra&os en el cuello del n>rdico lade> el rostro para colar su lengua en la boca a!ena en busca de otra con la cual pro%undi&ar ese contacto. . odía sentir el sabor de Lo"i una ve& más #ue tenía ese no sé qué #ue lo volvía tan adicto dependiente y necesitado de Cl de estar con Cl de sentirlo y amarlo en todas las %ormas posibles #ue tuviera a la mano. $hor se e en segundos tom> de los muslos al hechicero para cargarlo y llevarlo a la cama. Lo recost> con ansiedad besándolo hasta el ahogo mientras #ue sus manos levantaron la camisa de licra para tocar esa piel. Esa per%ecta piel. . ronto a#uel de pasi>n %ue embriagándolo haciCndolo sumirse lo placentero delelin #ue compartía con $hor esos instantes de intimidad so%ocante. Lo"i percibi> la en de $hor hacerse presente en su entrepierna tal cual el mismo hechicero erdico no perdi> tiempo y ahora lo cargaba para continuar en la cama con una sesi>n más %ogosa. El o!iverde lo recibi> sobre su cuerpo enrocando las piernas sobre las caderas del rubio y enredando sus manos en los mechones dorados para tener de d>nde sostenerse y seguir esa dan&a eu%>rica entre boca y boca. Aun#ue varios suspiros acompaJados por livianos !adeos %ueron ahogados entre el beso sintiendo las manos de $hor acariciando desde su vientre al pecho y de regreso. uanto amaba #ue lo tocara así. . on varios !adeos #ue impulsaban y motivaban a $hor a ser más pasional no era de erdico se incorporara para #uitarse la camiseta. El hechicero
contempl> a#uella ?rme y portentosa anatomía una ve& más rindiCndose por completo ante la visi>n de a#uel t>ra< y el abdomen per%ectos. Smhmhm... 5hm... QEn serioR Srespondi> con lascivia relamiendo sus labios y tocando el %rente de $hor con ambas manos en un recorrido lento y delicioso SEsa es una acusaci>n por demás aventurada Sdevolvi> la mirada sugerente a su esposo SI para ser más !ustos entonces tu eres responsable de esto Al decirlo llev> la diestra del o!ia&ul por sobre su muslo iuierdo desli&ándola despacio y dirigiCndola a su propia erecci>n. (usto ahí Lo"i al&> la cabe&a y gimi> despacio por el contacto de a#uella mano sobre su cuerpo. . S5ggh... 5n !adeo gutural no se hi&o esperar por parte del n>rdico #uien sonri> complacido de ver la reacci>n #ue provocaba en el hechicero. Fevolvi> la mirada llena de lu!uria y deseo sabiendo lo siguiente #ue haría. SFebemos a!ustar cuentas entonces... Q;o te parece amor míoR Al preguntar eso en un plan claramente lascivo $hor tom> de la espalda al otro haciendo #ue rodaran por la cama hasta hacer #ue Lo"i #uedara casi en la orilla donde comen&> a besarlo con locura. I una ve& concluido el beso ba!> con una larga lamida hasta el abdomen del o!iverde dispuesto a hacerle una %elaci>n #ue lo llevara al mismísimo Oalhalla. Eso hubiera sido un hermoso momento de convivencia marital de no ser por un detalle. SQAlte&aR UAlte&a@ Fisculpe si lo interrumpo la servidumbre está preguntando #uC Nores debemos usar... Era la vo& del decorador al otro lado de la puerta. UMenos mal #ue no entr>@ Fe lo contrario $hor lo hubiera mandado a volar con un golpe del M!^lnir literalmente. Aun#ue ganas no le %altaban. Mierda… S' or#ue están sacándome de #uicio. Algunos dicen #ue solicit> tulipanes otros #ue rosas pero nadie puede especi?carme en #uC color los desea así #ue ma!estad necesito #ue me in%orme $hor mir> con sumo disgusto la puerta. agaría caro por haber interrumpido su momento privado con Lo"i y lo #ue estaba guardando con celo: el secreto de la ?esta en honor a su aniversario. Sabr>n ya verá lo #ue le harC en cuanto' UAggh@ -e había parado de la cama sin notar #ue ya estaba en la orilla por lo #ue cay> de bruces al piso por calcular mal la distancia.
SQMa!estadR Estoy bastante apurado con los pedidos #ue me dio. +rancamente ya no #ueda tiempo y si los arreglos Norales no son de su agrado no será problema mío El n>rdico al&> el rostro viendo a Lo"i con mueca de: +e supon"a que no ten"as que saberlo porque era sorpresa levantándose y abrochándose el pantal>n. S*osas color esmeralda UWMBWL@ +ue todo lo #ue di!o al abrir la puerta solo para cerrarla en las narices del decorador. Luego hi&o un puchero con la boca sentándose a lado de Lo"i y suspirando %rustrado. S... Ia lo oíste. ;o tendría caso ocultártelo más... Puería #ue %uera sorpresa . Oaya #ue debían a!ustar cuentas con una sesi>n apasionada y todo parecía indicar #ue así sería. *odaron por la cama entre #uedas risas y !adeos entre besos y caricias. Lo"i supo las intenciones de $hor con a#uella lamida desde su pecho hasta la orilla del pantal>n y le %ascinaba la idea. *ealmente lo estaba dis%rutando sobremanera !usto seun mordía el labiodecorador in%erior llam> a presagiando una celestial %elaci>ny cuando inoportuno la puerta. K me!or dicho grit> llamando al n>rdico. El o!iverde respiraba agitado mirándose ya en un avan&ado estado de en pero a#uello no impidi> #ue se percatara de la palabra @ores. $rat> de regular su respiraci>n al tiempo #ue su ceJo se %runcía con intriga buscando los &a?ros de su esposo con la mirada aun#ue el rubio ya estaba por ir a sentenciar al inepto #ue os> interrumpir su velada. -olo #ue no %ue muy le!os pero si lleg> al suelo. Ante la más #ue graciosa caída de $hor al menos para Lo"i al hechicero se le %ueron las ganas en ese mismo instante y solo pudo reírse por la torpe&a del n>rdico. -e #ued> tendido en la cama boca arriba esperando #ue $hor volviera a su lado luego de insultar al decorador y darle la in%ormaci>n #ue necesitaba. *osas esmeralda ahora todo tenía sentido. Esas rosas solo se las obse#uiaba cuando era un motivo muy especial tan especial como podría ser su aniversario de bodas. SQEstabas organi&ando un %este!o para nosotrosR Sin#uiri> desde su posici>n mirando al rubio entre divertido y sorprendido . $hor solt> otro suspiro. -e encogi> de hombros y torci> la boca. S-í... por nuestro aniversario del primer aJo de matrimonio... Mierda realmente deseaba #ue %uera una sorpresa . Lo vio tan decepcionado #ue hasta pena sinti> por Cl. *ealmente parecía #ue se había es%or&ado y cuidado hasta el Gltimo detalle para #ue %uera la
sorpresa per%ecta... A en del incidente de instantes atrás donde su dedicaci>n #ued> hecha polvo. Sey no te culpes no siempre salen las cosas como se planean Sle di!o en tono comprensivo incorporándose y #uedando de rodillas para abra&arlo por la espalda Sodemos hacer de cuenta #ue yo no sC nada si eso te consuela Spropuso con un beso en su me!illa y una mirada suave . El rubio acept> al abra&o de me!or estado. on #ue el o!iverde estuviera ahí le bastaba para olvidarse del eno!o Upero #uería #ue %uera sorpresa mierda@ arecía un niJo encaprichado. Tir> hacia Lo"i sonriendo más calmado. SQuedes auto,hechi&arte para olvidar lo #ue di!o el decoradorR . SQFecoradorR QPuC decoradorR Lo"i %runci> el ceJo preguntando como si realmente no supiera nada sonriendo luego de modo !uguet>n y recargando el ment>n en el hombro del o!ia&ul no de!ando de mirarlo. S-olo sC lo de las Nores lo demás sigue siendo desconocido para mí. Oer #ue tanto empeJo le pusiste será la verdadera sorpresa Sa?rm> dándole un beso lento y delicado . El n>rdico devolvi> el beso con ganas tomándolo de la nuca. SEn ese caso Sdi!o $hor levantándose de la cama S$e dirigirC a la sorpresa. -ugiero asearnos !untos antes . S-ugerencia aceptaba *espondi> sin más sonriendo sugestivamente tomando la mano #ue $hor le o%recía para ba!ar de la cama y dirigirse ambos al cuarto de baJo. SQI debo esperar un adelanto de mi sorpresaR Spregunt> ?ngiendo ingenuidad . $hor ni si#uiera respondi> de inmediato sus acciones hablaron por Cl. arg> de nuevo a Lo"i sin permiso pate> la puerta del cuarto de baJo Desta costumbre #ue tenía había de!ado arruinadas las puertas de la sala de !untas por lo #ue tenía ahecha variosespecialmente conce!eros molestos con Cl como era una habitaci>n privada para ambos nopero le preocupaba ser tosco... En realidad no le importaba nunca serlo. Adentro había una magni?ca estructura #ue seme!aba el interior de un manantial en donde el agua caía por una abertura #ue parecía una
cascada. El n>rdico sostuvo a Lo"i para #ue se apoyara en tierra ?rme de nuevo. En verdad las ganas de estar con su esposo eran bestiales. SQon!uras algo para desnudarnos ahora mismoR Spregunt> más como una orden . El hechicero tuvodonde su respuesta siendo llevado en bra&os hasta el esplCndido cuarto de baJo no solo entraban para asearse !untos sino tambiCn para intimar como seguramente pasaría en ese momento. A Lo"i le %ascinaba #uedar acorralado contra la pared sintiendo toda esa pasi>n desbordante del n>rdico. Ia empe&aba a %antasear con ello y ansiar el instante de ser suyo. Al ser ba!ado $hor le hi&o a#uella pregunta con pinta de orden #ue lo hi&o mostrar un semblante travieso y malicioso. ;o di!o nada. -olo se acerc> cauteloso al o!ia&ul para desli&ar sus manos sobre el t>ra< portentoso ba!ando luego por el abdomen y vientre de!ando como rastro un destello dorado mismo #ue envolvi> el pantal>n de cuero al tocar parte de la piel de la cintura y la prenda la cual %ue desapareciendo por completo. Somplacido mi lord -usurr> en tono aterciopelado mirando los labios gruesos acercándose como si %uera a darle un beso mientras le acariciaba los hombros pero al Gltimo segundo Lo"i se desvaneci> como pas> con la ropa de $hor. -egundos despuCs el hechicero se mostr> de %rente al n>rdico ba!o la caída de agua totalmente desnudo. -ubi> sus manos y las pas> entre su cabello negro al tiempo #ue miraba con deseo a su esposo. . reía #ue tener desnudo a Lo"i era lo e con la vista #ue obtuvo cuando el hechicero se desvaneci> y apareci> en la cascada mostrando ese celestial per?l posterior y lan&ando esa pícara sonrisa mientras !ugaba con su cabello. ara alguien #ue no %uera el o!iverde le hubiera espantado ver el grosor de la erecci>n #ue le produ!o a $hor tal estímulo visual. ero era comprensible simplemente por ser Lo"i. Está por demás decir #ue $hor se lan&> hacia a#uella cascada tom> por la cadera a su esposo y le hi&o el amor como si %uera un salva!e degenerado. Minutos despuCs de haber tenido un orgasmo de dioses ambos se vistieron para la esperada ?esta. $hor opt> por usar su atuendo bClico con pliegues negros aJadiendo una capa ro!a y detalles dorados no muy ostentoso. Mientras #ue Eiliv estaba sostenido por +rigga. Furante el ban#uete el n>rdico hi&o un brindis y e el motivo de la celebraci>n abiertamente. Fi!o cosas de cortesía para agradecer a los presentes los acompaJaran en silla conmemorar tan importante. El pe#ueJo#ue príncipe estaba en una en medioun de evento sus padres sonriendo y !ugando con su comida incluso había lan&ado un peda&o de carne con verdura a ogun.
Entre los invitados los amigos de $hor estaban compitiendo por #uien se emborrachaba más rápido. -i% seguía abstraída en su charla con otras doncellas adre y Madre de $odo veían con emoci>n la ?esta y $hor solo contaba los segundos para poder darle el verdadero obse#uio #ue tenía preparado para Lo"i. . Luego de una candente sesi>n #ue los hi&o tocar el mismo Oalhalla en vida y asearse por supuesto ahora celebraban en el gran comedor !unto a sus padres Eiliv y amigos cercanos. Fe $hor al menos pues Lo"i seguía sin considerarlos parte de su entorno. El hechicero vestía su tra!e de batalla igual #ue $hor solo #ue sin el cinto #ue cru&aba por el %rente del pecho. +rigga se había encargado de vestir a su nieto con un tra!ecito #ue constaba de un chaleco y pantal>n de cuero verde obscuro camisa de algod>n color vino un par de pe#ueJas muJe#ueras negras y botines. $odo un apuesto príncipe de Asgard en miniatura. Lo"i miraba a su hi!o sentado en su silla especial para bebC en medio de Cl y $hor sintiCndose orgulloso del encanto #ue su hi!o ostentaba. *obaba las miradas de cual#uiera y le llovían elogios por do#uier. $hor hubo hecho un brindis %rente a todos compartiendo la ra&>n y algunas palabras #ue avergon&aron ligeramente al o!iverde pero aun así le encantaba #ue siguiera asentando %rente a cual#uiera #ue Cl era el Gnico en su vida. I mientras el brindis pasaba a Eiliv se le ocurri> arro!ar su comida en catapulta hacia ogun #uien solo parpade> sorprendido mostrando una leve sonrisa nerviosa despuCs y limpiándose el rostro sin mayor problema. ;o hi&o %alta mencionar #ue a#uella travesura de su hi!o complaci> a Lo"i. laro #ue si el blanco hubiera sido -i% hasta lo colmaría con una montaJa de obse#uios y golosinas. La celebraci>n pasaba entre anCcdotas risas y alguno #ue otro reto #ue entre los tres guerreros ya se habían acordado. -u amigo era el padre de %amilia esposo y pr>. -olo acudi> por mera cortesía y por no desairar a su amigo había cumplido y ahora se retiraba a sus aposentos. Lo"i solo le dedic> una mirada neutral cuando hiciera una breve reverencia a ambos y a Eiliv con la cabe&a y sigui> tomando la mano de $hor sobre la mesa. Aun#ue pronto +rigga y Kdín comen&aron una charla con sus hi!os. Al hechicero le comían las ansias de ir a su %este!o íntimo con $hor... Ktra ve& pero no de!aría a su madre con la palabra en la boca. Esperar un poco no mataría el deseo. SEsta es una magní?ca ?esta hi!os míos. +elicidades a ambos por tan grata velada y por su primer aniversario como esposos Madre de $odo apremi> sonriendo y mirándolos con alegría. SMi nieto parece muy a gusto !ugando a la guerra
Kdín aJadi> con ligero to#ue sarcástico y una apenas perceptible sonrisa recordando lo de ogun y viendo ahora la comida esparcida %uera del plato del pe#ueJo. S-erá un general ?ero Smir> a $hor SI un hechicero de temer Sahora su o!o se dirigi> hacia Lo"i SLe han obse#uiado un legado poderoso. Figno de un hi!o de Asgard S-iendo un niJo #ue logr> unir dos ra&as en su propia e el n>rdico S Es algo maravilloso +rigga sonri> a sus hi!os mirando a su nieto con alegría. Sablando de eso Sempe&> con un tono curioso la reina SLo"i QaGn no has concebidoR El Fios del $rueno casi se ahoga con el tarro de hidromiel. onocía a su madre como alguien muy dulce pero tambiCn muy directa. Oolte> hacia el o!iverde con en un tanto inc>moda pero no o%endido ni mucho menos. Era cierto. acía unos meses Lo"i y Cl habían discutido sobre ampliar su %amilia a pesar de #ue el hechicero le había dicho #ue el pla&o para otro embara&o sería hasta los cuatro aJos de Eiliv. $hor con el carácter terco y paternal Noreciendo termin> convenciCndolo de tener otro bebC. Llevaban tres meses buscando #ue Lo"i #uedara encinta pero ningGn rastro de un nuevo integrante había asomado. . iertamente Eiliv aGn no era consciente de todo el poder #ue era capa& de manipular y Lo"i se encargaría de pulir sus dotes mágicos hasta hacerlo el me!or. Wncluso más #ue Cl. En eso pensaba el hechicero abstraído en el tierno rostro de su pe#ueJo cuando su madre hiciera a#uella pregunta sin encubrirla o ser más discreta. Al igual #ue $hor Kdín casi se ahoga con el vino pero el hechicero solo la mir> con una ligera en despreocupada. SAun no intentado Srespondi> viendo al tres n>rdico y soltando emos... desde hace meses pero nouna haycansina indiciosen de #ue S haya ocurrido La reina los mir> a ambos con maternal cariJo colocando su diestra sobre sus manos unidas.
SPue eso no les impida seguir intentando. $al ve& se deba al periodo de %ertilidad S+rigga... SKdín interrumpi> carraspeando pues al monarca si se le hacía inc>moda la charla S;o deberíamos tratar este tema %rente a Eiliv SQor #uCR Es algo natural. -e trata de su hermano o hermana Sde%endi> la reina mirando a su nieto Soy podría ser la noche La diosa di!o a sus hi!os en complicidad entre #ue Kdín se bebía de golpe el vino y Lo"i solo sonreía por ver a $hor sonro!ado como un adolescente. S$al ve& Smencion> apretando la mano del rubio . $hor se había bebido dos tarros seguidos. ablar de tener otro bebC era hermoso Cl había sido el primero en sugerirle eso a Lo"i y dis%rutaba conversar sobre darle un hermano o hermana a Eiliv... ero no con sus padres presentes. A pesar de lo comprensivos #ue se mostraban seguía siendo un tema de pare!a al menos para $hor. A pesar del leve sonro!o el #ue el hechicero le apretara la mano lo tran#uili&> y le indic> una seJal implícita: era hora de intentar procrear de nuevo. SLlegará el momento apropiado Sseguía hablando +rigga SI tG sentirás cuándo ese momento se presente Lo"i SEstamos emocionados con la idea madre Sdi!o $hor S-erán los primeros en enterarse si Lo"i #ueda encinta hoy. Ahora si nos disculpan tenemos #ue retirarnos S*ecuerden #ue no deben apresurarse Scontest> la diosa sonriendo $hro asinti> levemente girándose para cargar a Eiliv #uien estaba !ugando con la barba de Oolstagg llevándose unos cabellos en cuanto su padre lo carg>. SUAhh@ U$hor hombre@ Sse #ue!> el pelirro!o Sontrola a tu hi!o Q#uieresR Sey le agradas amigo *espondi> el n>rdico burlándose entre #ue Eiliv movía sus manos y se reía. El pe#ueJo príncipe balbuce> algunas cosas y pidi> a seJas un biber>n de leche. Sadre Madre. ;os retiramos. on su permiso $hor reverenci> a sus padres tomando a Lo"i de la mano mientras cargaba con el otro bra&o a su hi!o. . 0legará el momento adecuado * t3 sentirás cuando se presente... A#uellas palabras hicieron algo de mella en el hechicero. odría ser #ue esa noche %uera la indicada. Lo"i se sentía ansioso por estar con $hor bueno
siempre lo estaba pero si era el momento id>neo no #uería esperar más. A%ortunadamente el n>rdico entendi> la indirecta en a#uel apret>n de su mano y ahora se despedían de sus padres para hacer el segundo intento del día. El primero %ue durante el baJo. STracias por acompaJarnos Fi!o Lo"i entre una reverencia de despedida y pronto se encamin> !unto con Eiliv y $hor a #uien le tom> de la mano. SAhap... Aah... Lo"i not> los balbuceos de su hi!o pidiendo con seJas su biber>n mismo #ue hi&o aparecer y le dio para #ue lo sostuviera con sus manos como todo un niJo independiente de un aJo y cinco meses. Aun#ue antes Eiliv trans%orm> los cabellos de Oolstagg #ue se había llevado en pe#ueJas mariposas naran!a. SQasaremos a#uí nuestra segunda noche de bodas o esa es la verdadera sorpresaR Sindag> con curiosa malicia viendo a su esposo . Eiliv estaba succionando del biber>n con mucha %uer&a vaya #ue estaba hambriento pero tambiCn atento a sus padres. A su escaso aJo de vida era muy inteligente y cuando not> #ue sus padres empe&aban en un plan romántico de!> de tomar su leche e hi&o unos gestos curiosos. SUFa@ UA,ha@... a,pá SseJal> a $hor SQAbahar a pa,páR DEstaría preguntando: apá,$hor Qamas a papá,Lo"i,R El n>rdico antes de responder la pregunta de su esposo volte> hacia su hi!o. S-í Eiliv y mucho. Fe hecho la celebraci>n de hoy %ue por ese motivo S respondi> a su hi!o #uien se emocion> y decidi> escuchar lo #ue su padre Lo"i tuviera #ue decirle . La respuesta a su pregunta tuvo #ue esperar pues Eiliv había preguntado algo o intentado hacerlo. A Lo"i le derretía escuchar la dulce vocecita de su hi!o. Fesde el primer día #ue habl> y di!o papá escuchar a su pe#ueJo sol era su mayor regoci!o. Smhm así es pe#ueJo mío. $u papá $hor %ue #uien organi&> todo sin mi ayuda Sdevolvi> algo bromista al ?nal haciendo #ue Eiliv riera y le hiciera la misma pregunta #ue a su padre rubio SQAbahar a pa,páR SMás de lo #ue podría imaginar cual#uiera Slo di!o sincero mirando a $hor . Eiliv lograba enternecer tanto al Fios del $rueno #ue nadie en sus aJos como adolescente hubiera predicho cuánto cambiaría la vida del n>rdico con
un bebC sonriCndole. Es decir $hor era conocido por ser un guerrero rudo imponente ?ero con sed de pelea de sus antepasados vi"ingos. Era e gustoso a#uel beso corto y casto #ue $hor le pro?riera pues Eiliv no vería nada subido de tono. I hablando del pe#ueJo príncipe Cste solt> una risilla %eli& volviendo a aplaudir y agitando los bra&os al aire con emoci>n por ver a sus padres !untos y más #ue unidos. Al llegar a la habitaci>n de su hi!o ambos se #uedaron de pie %rente a la cuna a su lo hermoso mientras alimento poco aadmirando poco el sueJo vencía. milagro ero luchaba paraterminaba poder versu a sus padresy un rato más. S$al ve& esta sea la oportunidad. ;o perdemos nada intentando Sdi!o el hechicero devolviendo una mirada cálida al n>rdico . En un parpadeo el biber>n sali> de la boca de Eiliv en tanto sus pe#ueJos balbuceos anunciaban #ue se había dormido. $hor recogi> el biber>n y lo coloc> en la c>moda de a lado mirando c>mplice al o!iverde. S$engo el lugar per%ecto para intentarlo amor mío Srespondi> SEs otra sorpresa #ue tengo para nosotros . Lo"i arrop> a Eiliv con su manta en cuanto $hor retirara el biber>n y cubri> la cuna con la cortinilla traslGcida. S5hm más sorpresas. Eso me agrada Smencion> presuntuoso rodeando el cuello del rubio con sus bra&os SQMe vendarás los o!os para #ue sea más emocionante o puedo ver los detalles hacia mi sorpresaR . QOendarle los o!osR Kh esa sería una buena idea e c>mplice con la resoluci>n del n>rdico aceptando de buen modo el de!ar los !uegos er>ticos para otro momento y dis%rutar de su noche en la #ue renovarían sus votos y de paso buscarían agrandar la %amilia. *especto a ello Lo"i comen&aba a pensar #ue tal ve& sucedería no sabía c>mo e a la par de $hor no como un aJo atrás donde lo retara a una carrera. . Estaban por llegar a la campiJa hallándola absolutamente magní?ca como la primera ve& #ue estuvieron en ella. $hor %ue el primero en ba!arse de su caballo y repiti> la táctica de hacía un aJo: o%reci> su mano para cargar a Lo"i hasta el interior del recinto. uando el hechicero estuvo en sus bra&os el n>rdico lo mir> con ese amor #ue solo su consorte le provocaba. Era una noche especial por muchos motivos. Abriendo las puertas de una patada los dioses entraron y $hor camin> de inmediato a la habitaci>n matrimonial. Estaba igual #ue la ve& anterior enditas de las playas más peligrosas de Asgard. Esas perlas eran tan preciosas #ue la misma naturale&a las re%ugiaba en cavernas con aguas bravas y monstruos marinos. $odo eso tuvo #ue ceder ante el gran poder del M!^lnir. La en de Lo"i %ue invaluable para el n>rdico. . Lo"i mir> a $hor con ?ngida descon?an&a pero luego abri> la ca!a como le pidiera. udo creer #ue hallaría un anillo o tal ve& algGn tipo de di!e o incluso una carta pero lo #ue vio %ue algo #ue no se podía creer: una perla esmeralda. El hechicero separ> los labios ligeramente y su en divertida se torn> en sorpresa incrCdula. -e mantuvo en silencio mirando al rubio como preguntando: %#mo 'ue que la encontraste( y entonces la tom> con suma delicade&a. i&o desaparecer la ca!a y detall> la perla viCndola a traslu& con?rmando #ue era autCntica. Fesde niJo siempre dese> poder tener una entre sus manos no solo por lo preciosa #ue era tal regalo de la naturale&a sino por lo #ue signi?caba y tambiCn por sus cualidades mágicas. SEs hermosa S?nalmente habl> yendo inmediatamente a darle un beso en los labios a su esposo STracias Le sonri> con suavidad recordando #ue Cl tambiCn tenía un obse#uio para $hor mismo #ue hi&o aparecer sobre la cama. Era un cintur>n de metal 5ru el mismo material del #ue estaba hecho el M!^lnir. A#uel metal era muy escaso y bastante di%ícil de encontrar igual #ue la perla esmeralda. Los enanos eran los Gnicos en los nueve reinos #ue lo traba!aban. Lo"i tuvo #ue hacer mucho traba!o de convencimiento con el rey de a#uella ra&a herrera y despuCs de un acuerdo d>nde Lo"i accedía a prestar su ayuda en algGn momento de calamidad cual %uera el monarca %or!> personalmente a#uel cintur>n con símbolos n>rdicos grabados y tres gemas de &a?ro incrustadas al %rente. Aun#ue no solo la vistosidad era lo
valioso sino el poder mágico #ue aumentaba die& veces más la %uer&a de #uien lo usara. SEse es mi presente para ti amor. 5n cintur>n de metal 5ru. Puien lo use su %uer&a se verá incrementada a niveles casi imposibles de parar' El complemento per%ecto para un general de las huestes asgardianas Sse hi&o a un lado para #ue $hor pudiera acercarse y tomar su obse#uio . $hor estaba complacido con la en de Lo"i cuando abri> la ca!a y vio la perla esmeralda. El recibir un beso del hechicero lo emocion> pero más el escuchar #ue le tenía un obse#uio el cual ciertamente lo de!> bo#uiabierto. Lo"i era en de metal 5ru super> las erdico se acerc> a la prenda y la tom> en sus manos %ascinado de la elegancia y magnitud #ue poseía. Era un regalo increíble. SLo admito esto es... Es realmente asombroso Lo"i Fi!o entre #ue se giraba hacia su esposo y lo abra&aba por la cintura. El cintur>n era sostenido por su mano derecha. S-e nota #ue conoces al -eJor del $rueno SaJadi> en tono superior S-in duda diste en el clavo amor mío. Tracias . Smhm Q#uC clase de consorte sería si no conociera a mi esposo como lo hagoR Le devolvi> con una sonrisa de medio lado y ligeramente altivo por comprobar #ue había sido el presente ideal para $hor en esa noche. *ode> de nuevo el cuello del n>rdico con sus bra&os mirándolo con travieso curioseo sintiendo una tenue caricia de su mano en su cintura. SQMás sorpresasR QK podemos pasar a la debida celebraci>nR Lo"i ansiaba poder yacer entre los bra&os de $hor. ;o era de erdico le hiciera el amor debía ser por algo además de lo mucho #ue adoraba c>mo lo hacía. Entonces podría ser #ue tal ve&... esa noche %uera la ideal para %or!ar un nuevo milagro entre los dos. . $hor no tuvo #ue pedirlo dos veces. evidente #uemomento ambos estaban suplicando por medio de miradas #ueEra llegaran a ese de uni>n tan intenso. SKh debería devolverte mi agradecimiento Sdi!o el n>rdico
Esperaba #ue esa noche pudieran tener otra sorpresa #ue el mismo acontecimiento el cosmos el destino o #uien %uera les diera un giro imprevisible. Se pedido a los dioses por otra sorpresa. Pui&á hoy se dignen a tomar mi petici>n Entonces el rubio bes> pasional a su esposo acorralándolo contra la cama haciendo #ue Csta rebotara ligeramente. ;o dudaría en ser tosco despuCs de todo la sesi>n de la maJana no era su?ciente. ara ambos hacer el amor una ve& al día parecía poco por lo #ue no era de e a #uitar la capa del atuendo de $hor ladeando el rostro para pro%undi&ar el contacto con su lengua colándose dentro de la boca a!ena y &a%ando los amarres de la armadura. . -u capa el peto los cinturones todo lo #ue %uera utilería empe&> a caer en el suelo o bien era arro!ado por el n>rdico #uien seguía embelesado probando la celestial boca del hechicero. -e parecía a su primera noche de bodas es decir $hor todavía mantenía %rescas las memorias de a#uel encuentro c>mo se sentía la piel de Lo"i y el sabor de sus labios todo el placer #ue destilaba con solo tenerlo entre sus bra&os. Absolutamente todo lo enlo#uecía. ronto la ropa empe&> a estorbar y entonces $hor se #uit> su camiseta e hi&o lo mismo con la del o!iverde de!ando a notar el níveo abdomen el cual no dud> en lamer en toda su en. . SAah... El hechicero clav> la cabe&a en la almohada soltando un !adeo placentero por sentir la lengua de $hor en su abdomen y sus manos acariciarle los muslos por encima del pantal>n. Abri> sus encontrarse a#uellos &a?ros mirándolo penetrante cosaesmeraldas #ue lo hi&opara estremecer comocon si %uera la primera noche !untos. .
$erminando de deleitarse con la piel de Lo"i el n>rdico subi> de nuevo para observar a su consorte. -iempre #ue le hacía el amor lo notaba más bello la imagen #ue obtenía de Lo"i a su merced era un regalo un recuerdo más de una noche e lentamente su me!illa para ir desli&ando la mano por el pecho hasta llegar al miembro del o!iverde #ue comen&> a masturbar mientras paseaba bocalos porprimeros el cuellobesos lechoso. erecci>n de $hor ya su estaba despiertasu desde y aLa veces le atemori&aba propia pasi>n pero era imposible ya #ue estuviera enamorado como imbCcil. . La caricia #ue iniciara en su me!illa y %uera descendiendo por sobre su pecho #ue subía y ba!aba en respiraciones constantes le hi&o morderse el labio in%erior pero gimi> #uedo al tener la mano de $hor colándose por deba!o de la ropa y su!etando con destre&a su erecci>n. err> los o!os cuando el n>rdico succionara la piel de su cuello marcándolo deliciosamente y permaneci> así con sus esmeraldas veladas por los párpados para #ue todo el cGmulo de sensaciones e su diestra la pelvis descender con ella hasta la entrepierna de su esposo. -ob> por encima del pantal>n unas cuantas veces terminando por &a%ar los amarres y meter la mano tal como Cste hiciera con Cl. Masturbarse mutuamente era despertar el deseo de ambos al mismo tiempo. Era sentir lo #ue el otro de manera super?cial antes de hacerlo con el alma unida. . El calor de la habitaci>n se elevaba con%orme se tocaban más. Al percibir la mano de Lo"i en su entrepierna el rubio suspir> %uerte sonriendo de lado y de!ando #ue su consorte le practicara una masturbaci>n e así de sensible al to#ue de las manos de $hor %ue cuando había concebido a Eiliv sin ser consciente de ello aun. Fesde entonces cada #ue $hor le hacía el amor era e por la mente del hechicero misma #ue estaba de!ando de pensar coherentemente con tantas atenciones. -in embargo la petici>n del n>rdico mientras le besaba el cuello lo hi&o sonreír en medio del goce. ambio de posici>n una #ue Lo"i realmente adoraba. Fe hecho le encantaban todas y cada una de las posiciones #ue llegaban a practicar pero tenía sus pre%eridas y esa era una de ellas. S5hm... Amo tu sentido de celebraci>n... Le di!o contra su oído atrapando el l>bulo por un instante con sus dientes y girándose luego de pecho contra la cama. Fe!> escapar un lánguido !adeo tanto por aprisionar su erecci>n contra las sábanas como por estar en a#uella posici>n con su intimidad e su miembro para #ue su pre seminal lubricara todo el tallo dio un par de besos en los hombros de su consorte y con algo de ansia empe&> a enterrarse en el canal. . SAgh... Lo"i se tens> un poco por lo premeditado del acto pero no estuvo en desacuerdo de hecho no podía esperar a sentirse suyo. -us manos estru!aban la sábana mientras era tomado con ansiedad por el n>rdico. -u garganta contuvo los !adeos mismos #ue iba liberando en intervalos y volviendo a tomar aire al tiempo #ue cerraba los o!os y %runcía el ceJo. El ruborde yasus cubría su rostro en su totalidad igual #ue perlas de sudor brotaban sienes y %rente. . Pui&á estaba siendo brusco lo cual era comGn en su persona pero $hor sentía #ue si no se unía a su consorte en por la cual estuvieran haciendo el amor pero aprovechando la ocasi>n... El n>rdico termin> de avan&ar en el canal de Lo"i apoyando sus manos sobre las sábanas ba!ando su cabe&a hasta topar con la nuca del o!iverde y solo así empe&ar a embestir. . Lo"i termin> por abra&arse a la almohada llevándose parte de la sábana con sus caderas siendo abiertas y el %alo de $hor incrustado cuan largo era en su interior. odía sentirlo dentro grueso y ansioso por poseerlo. (usto las embestidas comen&aron sin dar tiempo a respirar. $hor estaba demasiado impaciente esa noche pero tambiCn Lo"i por ello compagin> el movimiento de la pelvis tras de sí con sus caderas buscándolo mientras !adeaba y su espalda se curvaba. . Ansioso era poco para describir el estado de $hor. Movía con algo de brutalidad su pelvis sintiendo como su miembro era succionado y apresado por las paredes de Lo"i. 5na total delicia. SLo"i... Llamaba en su horda de adrenalina aumentando el ritmo hasta hacer chocar las nalgas del o!iverde a su entrepierna con chas#uidos de humedad
inundando el ambiente. $hor hacia rebotar la cama con cada penetraci>n acariciando entre los muslos abiertos de su consorte. . SMngh... $,$hor... Al igual #ue el n>rdico Lo"i pronunciaba su nombre en medio de la dulce agonía esposo le brindaba con estocada pro%unda. El %uego envolvía#ue de su pies a cabe&a el placer lo cada crispaba y lo hacía desearlo más ylo más todo hasta #ue perdiera la ra&>n. I tal pareciera #ue eso mismo planeaba $hor llevarlo al límite arrancar su coherencia de ta!o y volverlo loco de lu!uria. El hechicero al&> la cabe&a y solt> un grito ronco siendo ahogado al poco en su garganta cuando las embestidas se tornaran salva!es al punto de escuchar como chocaba la piel de ambos. Logr> sostenerse de los antebra&os para al&arse un poco y girar el rostro buscando un beso de $hor con desespero animal. . $odo empe&aba pintar di%erente para el n>rdico en el en sentido emocional. uando not> #uea su consorte giraba clamando un beso su mirada $hor accedi> sin pensárselo dos veces. Acerc> su rostro disminuyendo el ritmo de las embestidas para poder saborear la boca de Lo"i. +ue en ese punto cuando $hor sentía #ue volverse uno con Lo"i cobraba sentido literal como en su primera noche como matrimonio. $hor podía sentir los latidos la respiraci>n el revuelo de sensaciones en la mente del hechicero todo. Lo sentía todo. as> ambas manos encima de las del o!iverde entrela&ando sus dedos y pro%undi&ando el beso. Faba penetraciones ?rmes aun#ue estaba más concentrado en los labios #ue lo enamoraban día a día. S Lo"i... Sdi!o entre besos SLevántate un poco Lo ayud> para incorporarse mientras Cl se arrodillaba en la cama y de!aba #ue Lo"i se sentara en Cl con su espalda contactando su pecho. SAh... S$hor acariciaba todo el pecho del o!iverde mientras trataba de continuar el beso SMío... -olo mío... . El beso #ue Lo"i clamara con la mirada le %ue concedido mientras las penetraciones aminoraban ligeramente. (usto la conen #ue entre ambos lograban como un solo ser cobr> mayor %uer&a con ese beso donde se compartían lo #ue cada uno estaba sintiendo en ese momento. El desespero la ansiedad la pasi>n descontrolada y lo intenso de un amor #ue a pesar de los aJos no se en %ísica tambiCn los conectaba de esa %orma tan pura y precisa pero en un beso via!aba todo lo #ue por dentro se !uraban mientras hacían el amor.
Lo"i apret> los dedos del n>rdico entrela&ados a los suyos correspondiendo el contacto entre sus bocas casi #ueriendo devorar a $hor. En breves espacios $hor le pidi> incorporarse para adoptar una nueva posici>n de rodillas contra la cama y así lo hi&o. $rat> de seguir uniendo sus labios a los a!enos arrobado en delirio y C impulso siendo su!etado de las caderas por el n>rdico para acomodarlo sobre su pelvis. Al #uedar#ue sentado la erecci>n seyincrust> lo #ue provoc> el hechicero al&aradel la rubio cabe&a gimierapro%undamente con descaro morboso al tiempo #ue cerraba los o!os y su rostro se de%ormaba en dulce goce curvando los labios y sosteniCndose con el bra&o iuierdo de la nuca de su esposo. $enerlo tan dentro lo e a la par #ue $hor amoldando sus bocas para un nuevo beso comen&ando a subir y ba!ar despacio para volver a iniciar las embestidas mientras sentía las manos del n>rdico en su pecho. 5na de ellas la derecha ba!> hasta su miembro erecto y lo masturb> al ritmo del vaivCn. or su parte Lo"i acarici> todo el antebra&o llegando hasta el dorso de la mano y de regreso. . SAhh... $hor !adeaba con cada embestida con cada ve& #ue Lo"i se sentaba sobre su poderosa erecci>n con el deseo de re%or&ar ese sagrado la&o #ue un aJo atrás habían ?rmado con el destino y con el amor #ue se pro%esaban. El n>rdico no perdi> oportunidad para consentir el %alo e la erecci>n de $hor engrosarse y palpitar la suya derram> pre seminal mismo #ue %ue esparcido por la mano del o!ia&ul en toda la en. Lo"i no podía contender con tanta pasi>n #ue nublaba sus sentidos y aceleraba sus latidos por lo #ue rompiendo el beso recarg> la cabe&a en el hombro de $hor ladeándola ligeramente al tiempo #ue separaba un poco más las piernas y seguía buscando la pelvis del rubio con sus caderas ansiosas. -u pecho se hinchaba y contraía desesperado sus labios separados y ro!os hGmedos de!aban libre paso para todo a#uel coro de gemidos y !adeos so%ocados pidiendo suplicando más.
S$hor... Mngh... -igue... Aah... Ssu espalda se curv> un instante con los espasmos #ue ya presagiaban el orgasmo . -u miembro era succionado casi oprimido por las paredes hGmedas de Lo"i #uien continuaba con ese vaivCn delicioso lleno de pasi>n #ue tanto amaba $hor. ;o par> de hacerle una masturbaci>n casi morbosa a su c>nyuge pero le estaba costando no volverse loco es decir sentía la punta de su glande como un maldito volcán en erupci>n. Estaba a nada de estallar. Bueno no tard> nada en realidad. -egundos despuCs de oír gemir a Lo"i el mismo n>rdico acentu> sus estocadas llegando hasta la pr>stata del o!iverde la cual estimul> sin piedad hasta sentir #ue el orgasmo empe&aba a mani%estarse. -u diestra aceler> las sacudidas hasta sentir el lí#uido espumoso baJando su mano con lo cual $hor sonri> complacido liberando el miembro y eyaculando dentro. Esta ocasi>n el orgasmo se prolong> por alguna ra&>n desconocida para el n>rdico pero eso no le impidi> seguir !adeando para dar dos embestidas ?nales hasta sentir #ue todo su semen había llenado por completo al hechicero. . Lo"i estaba tocando las puertas del mismo Oalhalla. -er amado con tal hambre tal delirio era sucumbir al pleno encanto de dos cuerpos %usionados y volviCndose uno solo a placer. lacer #ue arrobaba goce #ue enviciaba y #uemaba. ronto el interior de Lo"i comen&> a contraerse violentamente succionando el miembro dentro y apresándolo cuando el rubio tocara lo más pro%undo de su ser. +ue una sensaci>n tan intensa y casi pecaminosa #ue el hechicero se deshi&o en gemidos sonoros mientras su erecci>n estaba al borde. ;o pas> mucho cuando Lo"i sepor tens> por completo entre un grito ahogado mismo #ue %ue resbalando su garganta comoyuna en de satis%acci>n total termin> alcan&ando el tan deseado clíma< !unto con $hor. -iempre lograban compaginarse y terminar !untos. Estall> manchando la mano del n>rdico con su tibia esencia #uedando descansando el cuerpo en el portentoso pecho detrás sintiendo c>mo $hor lo llenaba completamente. I entre #ue se recuperaba el hechicero percibi> un e demasiada importancia con lo agitado #ue se encontraba aun#ue le pareci> curioso. $an curioso como el sentir aun el orgasmo en livianos espasmos. . $hor trag> o!osconsorte al ?nal de ese Oalhalla para en vida besando el grueso hombroabriendo iuierdosus de su e inclinándose #ue Lo"i pudiera recostarse contra la cama. El movimiento hi&o #ue puntadas placenteras recorrieran el glande #ue $hor había sentido solo unas cinco veces estando con Lo"i. Era raro sentirlas y muy bienvenidas.
SLo"i... Agh me #uedarC un momento así... -iento #ue podría correrme de nuevo S di!o con algo de diversi>n . El beso en su hombro le eri&> la piel #ue se percibía sensible mucho más de lo normal despuCs del acto. La sensaci>n de des%ogue prevalecía no menguaba como en ocasiones anteriores el %uego seguía encendido en su cuerpo. El hechicero percibi> al n>rdico reclinarse y entonces se apoy> con los antebra&os para ba!ar y #uedar de pecho contra la cama. Aun respiraba copiosamente buscando sosegarse pero algo lo mantenía con los sentidos prendados del momento placentero. SQ-i te digo... #ue me siento... e !adeante y con una sonrisa traviesa . S$e creo S respondi> con una sonrisa de medio lado ;o #uería darse mCritos pero sinti> #ue Lo"i iba a enlo#uecer si duraba un segundo más su encuentro. Estaba acostumbrado a hacerlo delirar aun#ue esta ocasi>n Cl había tenido esa sensaci>n de C la cordura más de lo acostumbrado en una sesi>n de se unos segundos hasta sentir #ue menguaba la montaJa del clíma breves instantes en la misma posici>n hasta #ue se acerc> al n>rdico para reposar la cabe&a sobre su pecho %ornido suspirando cansino. SQ-oy yo o esto %ue mucho más intenso #ue siempreR regunt> haciendo círculos con el índice en medio de los pectorales del rubio mientras trataba de concentrar energía en su vientre. . El n>rdico había recuperado el aliento y entonces sinti> a Lo"i acercarse. Lo rode> con sus bra&os haciCndole caricias en la espalda besando de ve& en
ve& la %rente del o!iverde. odía llamarse a%ortunado de poder dis%rutar esos momentos posteriores al se de pronto al en. Fe un momento a otro %ue como si su percepci>n se diera cuenta de algo debía constatarlo antes de a?rmarlo pero su instinto paterno desarrollado con Eiliv le estaba indicando un asunto importante. S$hor... Q*ecuerdas cuando te di!e #ue esperaríamos a #ue Eiliv cumpliera cuatro aJos para darle un hermanoR regunt> como tanteando ingenuamente el terreno y como supuso $hor lo tom> a la ligera y solo asinti>. S5ps +ue lo Gltimo #ue di!o al&ando el rostro para ver al o!ia&ul con una en entre divertida y c>mplice. Esperaba #ue lo dedu!era por sí mismo. . Entre seriedad el letargode$hor se sorprendi> oírasinti> del tema embara&o. ;o le tom> momento así #uede solo condel la cabe&a. SQ>psR Spregunt> El n>rdico era de lento entendimiento. laro #ue no entendería a la primera. . Fe acuerdo hacerlo #ue adivinara como la primera ve& no result> pero igual no se lo diría tan directamente. -u travieso instinto estaba despierto y un anhelo #ue esperaba %uera cierto le movía a guardar cierto misticismo. -in decir nada todavía Lo"i se levant> un poco y tom> la mano iuierda de $hor #ue descansaba en su cintura para llevarla a su vientre desli&ándola despacio sobre la piel. Ahí la contuvo con su propia mano para #ue su esposo palpara la &ona cálida. laro aun no se notaba un cambio considerable pero en unos meses tal ve&. SQPuC pensarías si te digo #ue... los dioses podrían haber escuchado tus peticionesR Sle mir> sutil y ?!amente
. SQeticionesR Quáles pet,R Kuh... UK5@ Al inicio $hor no supo c>mo interpretar lo #ue le decía Lo"i. ;o %ue hasta #ue el hechicero dirigi> su mano al vientre y di!o peticiones a los dioses! #ue el n>rdico comprendi>. Entonces Lo"i estaba... es decir le estaba dando entender #ue... SUME (5*A- P5E E- OE*FAF@ Sgrit> con entusiasmo sus o!os estaban iluminados -e había incorporado de un sent>n haciendo #ue Lo"i terminara a horca!adas suyas. as> ambas manos por el vientre del o!iverde. $uvo ganas de llorar y podría haberlo hecho sin problema alguno. S(oder Lo"i... Qor eso es tan cálido amor míoR . +inalmente $hor había comprendido motivo #ue hi&o sonreír al hechicero ampliamente mientras era levantado sGbitamente. Pued> sentado a horca!adas del n>rdico mirando c>mo a#uel rostro de hombre portentoso y pasional se trans%ormaba en la imagen de un chi#uillo al cual se le ha dado la me!or noticia del mundo. Las manos de $hor no tardaron en posarse sobre su vientre sobando despacio igual #ue la primera ve& cuando le di!o #ue esperaban un hi!o: Eiliv. S;o #uiero adelantar nada pero... Es muy e hacia aba!o sosteniCndose de los hombros del rubio SAdemás estuve demasiado sensible mientras lo hacíamos eso puede estar ligado a la concepci>n. K eso creo abl> tratando de desci%rar a#uel s"ntoma diciendo la palabra concepci#n con algo de e su %rente en el pecho de su consorte. +uera con?rmado o no esta ocasi>n el o!ia&ul estaba seguro #ue Lo"i había concebido. Fioses Ual ?n despuCs de meses intentándolo@ SFebes sentirse así por#ue seguro pasará Sdi!o el n>rdico acariciando el vientre con suavidad SQ$e imaginas Lo"iR Oiendo crecer a nuestro hi!o día a día . El hechicero acarici> la cabe&a de $hor al tenerlo recargado en su pecho suspirando despacio y con una calide& bastante curiosa invadiendo su pecho. Era su instinto paterno consolidándose.
SMe sorprendería #ue no pasara despuCs de c>mo terminamos hoy Mencion> en broma re?riCndose a la gloriosa plenitud #ue habían compartido minutos atrás aun#ue luego se e de modo sereno y recon%ortado. S-erá como cuando esperamos por Eiliv... Oas a tener #ue armarte de valor por#ue tal ve& mi estado hormonal sea el doble del anterior Srio #uedo no de!ando de enredar los dedos de su diestra entre la dorada cabellera . El rubio estaba demasiado %eli& #ue en verdad no podía contenerse. Puería hacerle el amor a Lo"i por segunda ve&. Estaba ese incesante implacable deseo de amarlo tanto como pudiera más todavía al oír la noticia. SEl necesario para amarlos a ambos Sdi!o con vo& trCmula y alegre SEiliv estará tan contento. Io lo estarC... . Lo"i no pudo evitar un leve nudo en la garganta escuchando las palabras llenas de dicha #ue $hor e en su pe#ueJo. $hor aseguraba #ue sería %eli& sabiendo #ue tendría un compaJero de crecimiento y !uegos pero tambiCn podría suceder #ue se sintiera celoso. FespuCs de todo hasta ese momento Eiliv seguía siendo el Gnico príncipe el Gnico hi!o en #uien recaían todas las atenciones. Oer #ue las mismas deberían ser compartidas tal ve& lo volverían huraJo y renuente aun#ue Lo"i con?aba en #ue siguiera siendo un niJo dulce y lo tomara per%ectamente. SEspero #ue así sea. ;o #uiero #ue se sienta despla&ado Mencion> pensativo recargando su me!illa derecha sobre la cabe&a rubia y abra&ando a $hor por los hombros. . En seguida $hor not> el tono de preocupaci>n de Lo"i. Era l>gico #ue pensara así ellos lo sabían por e pues el ment>n de Lo"i para mirar esos esmeraldas #ue tanto adoraba. SEiliv es y será antes #ue nada nuestro hi!o el primogCnito de la casa de Kdín S coloc> su estos mano momentos en el vientre del hechicero SIimpedirá si ya amamos a este hi!o #ue crece en dentro de ti nada #ue amemos a Eiliv por igual como lo hemos hecho hasta ahora .
El o!iverde arrug> muy tenue el ceJo mirando ese par de &a?ros #ue le in%undían seguridad y calma así como templan&a con esas palabras. SAmaremos a ambos por igual y enseJaremos a los dos #ue así es. Aprenderán a procurarse y #uererse... omo alguna ve& tG y yo Slo di!o en re%erencia al cariJo %raterno de siglos atrás #ue se tuvieran . El n>rdico tom> la diestra de Lo"i entrela&ando sus dedos con suavidad. ;unca permitiría #ue sus hi!os su%rieran lo #ue ellos padecieron. $hor procuraría hacer lo me!or como padre. S(untos lo aprendimos. Ellos tambiCn sabrán apoyarse por sí solos S respondi> con seguridad besando leve a Lo"i . A?an&> ese la&o entre ambas manos con el cora&>n brincando en sentimientos encontrados. El pla&o #ue de algGn modo impuso para volver a engendrar no se cumpli> pero eso no importaba. -i todo marchaba como pensaba dentro de ocho meses y medio tendrían a su segundo hi!o entre sus cual.bra&os y era magní?co. Así %ue destinado a suceder y lo aceptaba tal El hechicero asinti> a las palabras del rubio con?ando en #ue la historia no se repetiría entre ambos hermanos. on a#uella verdad Lo"i correspondi> el delicado beso moviendo suavemente los labios. SLos hi!os de $hor y Lo"i nuestros hi!os serán la gloria de Asgard S murmur> entre el beso . Envuelto en el abra&o $hor se complaci> con la respuesta de Lo"i. +ueran dos tres cuatro hi!os todos recibirían el amor incondicional y completo de sus padres. Bueno $hor deseaba tener una gran %amilia uno de sus sueJos era ser padre de die& muchachos. Kh si el n>rdico aspiraba grandes sueJos. S$odos y cada uno de ellos . Lo"i se había #uedado sumido en el con%ort de a#uel abra&o transmitiCndose mutuamente la calide& de sus cuerpos y la dicha de saberse en espera de un nuevo integrante en la %amilia. 5na %amilia #ue a o!os de Lo"i estaría más #ue completa dos hi!os era un buen testimonio de su %elicidad. -in embargo al escuchar #ue $hor decía todos * cada uno de ellos el hechicero abri> los o!os y %runci> el entrece!o. SQA #uC te re?eres con todos * cada unoR Spregunt> separándose un poco para verlo .
SKh ya sabes... Sno no podía disimular una respuesta inteligente $hor carraspe> un poco mirando a su consorte. Mentirle era algo imposible para Cl. S-iempre me imaginC #ue tendría una %amilia grande de niJo. laro no pensaba #ue la persona con #uien los engendraría serías tG pero como el destino nos ha unido yo creo en el amor #ue nos conecta... -ospecho #ue Eiliv y el bebC #ue estamos esperando no serán los Gnicos #ue nos acompaJen en el cuadro %amiliar . Aguard> con algo de in#uietud por la respuesta del n>rdico misma #ue lo hi&o verlo con susto e incomprensi>n !untos. QPuC estaba diciCndoleR QPuería más de dos hi!osR SEspera un momento... QEstás diciCndome #ue #uieres #ue te de un ejércitoR Spregunt> al tiempo #ue su en se tornaba descolocada viendo una sonrisa de niJo ingenuo curvando los labios de $hor S;o voy a poblar todo Asgard con pe#ueJos dioses. $e lo advierto $hor solo tendremos a Eiliv y al #ue viene -e lo sentenci> con la mirada severa y al&ando las ce!as. . Kh por eso no podía hablarlo aGn. -abía #ue Lo"i era renuente sobre el tema de tener una gran %amilia $hor lo entendía en serio aun#ue... SKh Lo"iiiiii Sle di!o casi en un tono de niJo caprichoso pero con esa sonrisa boba #ue derretía al hechicero S-olo digo #ue tener una gran %amilia es algo #ue deseo y #ue amarC a cada uno de los hi!os #ue me des Lo"i . A#uella sonrisa de $hor más #ue derretirlo en ese momento lo hi&o acentuar su semblante reprobatorio pensando un c"nico al tiempo #ue entrecerraba la mirada. Sues está claro #ue tu deseo no es el mismo #ue el mío Sdi!o con aplomo SAsí #ue vete haciendo a la idea #ue seremos una EP5EA I +5;WK;AL +AMWLWA . Estaba a punto de debatir su punto pero verlo en%adado ,en el buen sentido, le daba ternura. $hor alcan&> a suspirar no de!ando de sonreír incluso se enterneci> cuando trat> de tomar el ment>n de Lo"i pero Cste lo ale!> con resignaci>n. SFe acuerdo seremos una %amilia %uncional... ;o puedo prometer #ue será pe#ueJa #ui&á ni los mismos dioses sepan cuántos hi!os tendremos... Anda no me de!es esperando un beso amor mío. Qor nuestro aniversarioR .
laro un asunto importante como el plani?car su descendencia se lo toma tan a la ligera prácticamente dándole la vuelta y esperaba #ue le compensara con un beso. Kbviamente Lo"i lade> el rostro cuando $hor se apron. -e cru&> de bra&os como pudo por tener los bra&os de su esposo rodeándole y mir> hacia la es#uina de la alcoba con semblante molesto. Estuvo a punto desaparecer irse a re%ugiar a otra habitaci>n pero el liviano ruego delden>rdico lo hi&oemirarle de soslayo todavía en%adado. S;o voy a darte un regimiento para tu reinado QentiendesR Oolvi> a sentenciar antes de darle ese beso. -olo #ue en ve& de ser uno condescendiente %ue uno %uga& y más por obligaci#n #ue por gusto verdadero para luego tratar de &a%arse del abra&o sin conseguirlo. or lo #ue el hechicero suspir> ligeramente e ?rmemente a Lo"i por la cintura y como si no %uera predecible lo gir> hasta de!arlo contra la cama le inmovili&> por las muJecas y meti> una pierna entre las del hechicero sonriendo con sorna. SEse no %ue un beso amor mío. Puiero uno verdadero . En serio se estaba desesperando con el tema y de no ser por#ue $hor lo tumb> sobre la cama y lo inmovili&> el hechicero se habría escapado para ir a tomar un poco de aire a la terra&a. Estando en a#uella posici>n sometida Lo"i mir> desa?ante al n>rdico aun#ue el modo en #ue Cste lo retara provoc> #ue su lado malicioso y venta!oso aNorara. $al ve& necesitaban discutirlo más pro'undamente. S-i lo pones así... Sdi!o en tono aterciopelado cambiando su austeridad por pretensi>n SEntonces ven por Cl Srelami> sus labios y luego mordi> el in%erior para incitarlo . -in anali&ar primero la en de su consorte $hor no dud> en caer en el !uego como perro hambriento. Acerc> su rostro dispuesto a besarlo con la ?nalidad de repetir la celebraci>n. . El hechicero estuvo a punto de gastarle una broma de!ándolo con el beso a medias y las ganas truncadas como un medio para hacerlo escarmentar y asentar #ue su no decisi>n ser una %amilia compacta la revocaría. ero sinceramente #ueríade echar a perder la velada pornada algo #ue ya se encargaría de solucionar paulatinamente. Así #ue como su lívido tampoco deseaba ser desperdiciado Lo"i de!> #ue $hor se adueJara de sus labios con premura mientras lo atraía por la nuca para pro%undi&ar el contacto.
A#uella noche tenía dos buenas ra&ones para seguir celebrando hasta el amanecer. 5na de ellas era su aniversario de bodas honrando a#uel momento donde sus almas se %undieron y %or!aron una sola para toda la eternidad. I la otra el milagro de la concepci>n #ue una ve& más habían conseguido por la %uer&a de su amor. %.%.%.%.%.%.%.%.% Notas fnales: I bueno así ha #uedado grabado en las memorias del
tiempo #ue un nuevo ser %ue %or!ado en esa bella noche de renovaci>n de votos $2$';o nos #ueda más #ue agradecer a cada uno de ustedes el tiempo #ue le dedican a leer esta historia y el #ue nos de!en saber #uC les parece hasta ahora'Enviamos saludos con algo de escarcha Dnos congelamos en la iudad de MCn.
Esa maJana $hor sali> a una caminata con su padre. ada ve& más se aprordico sali> corriendo hacia la habitaci>n donde estaba el hechicero. . Mientras $hor llegaba Lo"i mand> preparar un ban#uete especial para recibirlo pues comerían !untos con su pe#ueJo como habían adoptado la costumbre desde tiempo atrás. ilda se había encargado de asear al pe#ueJo príncipe y el o!iverde lo arrop> para la ocasi>n: una camisa blanca de bordado en seda verde y oro tanto en la orilla de los botones como en o!ales así como el contorno de los puJos y un pantaloncillo corto negro. Al a&abache le pareci> sumamente curioso #ue su primogCnito se le acurrucara en el rega&o al cargarlo como a%errándose a Cl. Apenas lo intentaba separar un poco para verlo y gimoteaba. SEiliv Q#uC pasa pe#ueJoR QAlgo te asustaR regunt> en vo& ba!a acariciando los risos dorados del niJo recibiendo un gimoteo más. S-sshh tran#uilo. ;o tienes por #uC temer... ;ada cambiará Sle di!o adivinando lo #ue Eiliv podría estar intuyendo SOen esperemos a papá $hor Slo llev> entonces a su habitaci>n para sentarse !untos en el diván de la terra&a . El n>rdico subi> unos escalones y en segundos había llegado a la habitaci>n. $oc> un par de veces por educaci>n entrando ?nalmente. -e content> en
demasía viendo a Lo"i con Eiliv. ;o iba a almor&ar con su tra!e de batalla así #ue empe&> a cambiarse dentro del lecho. SEspero #ue el Fios del EngaJo me haga el honor de compartir la mesa conmigo Sdi!o bromista desde dentro mientras retiraba el peto la capa y los escudos . Lo"i se enterneci> de ver c>mo Eiliv intentaba esconderse en su pecho haciCndose un ovillo algo #ue!umbroso. ;unca se había puesto así por lo #ue la con?rmaci>n de su embara&o seguramente lo puso sensible. Eiliv era un niJo muy intuitivo entonces debía saber #ue algo le sucedía. I precisamente eso mismo #ue le pasaba al hechicero pareciera poco a poco ir tran#uili&ando al pe#ueJo príncipe. El niJo se hubo acomodado como si #uisiera dormir pegando su rostro en su abdomen. Fe pronto se silenci> y #ued> muy #uieto sus manitas estaban prensadas de la camisa del o!iverde y su cuerpecito cálido ya no temblaba. Sa,pá... ;go... DUapá hay algo@ Sle di!o asombrado endere&ándose por ?n SQEhleR... DQ$e dueleR Sm no. ;o duele *espondi> con una suave sonrisa !usto escuchando los to#ues en la puerta. Eiliv se asom> de inmediato para ver a su padre rubio con toda la intensi>n de contarle #ue descubri> algo en su papá Lo"i. SUa,pá@ Lo llam> en tanto el hechicero respondía la broma de su esposo. SAhm tal ve& lo haga si vienes a#uí y le das un beso Ssonri> ladino desde el diván viCndolo cambiarse . +inalmente se acomod> su capa grisácea purpGrea Qo a&uladaR... ;o importaba ya estaba decentemente vestido para pasar el resto del día con su esposo e hi!o. Al poco escuch> el llamado de Eiliv por lo #ue %ue caminando hasta la terra&a saludando al o!iverde con un beso en los labios. SA su servicio S respondi> viendo a Eiliv y cargándolo del rega&o de Lo"i SUAaah@ UPuC muchacho tan %uerte@ S$hor bes> en la me!illa a su primogCnito #uien sonri> y ri> por las cos#uillas #ue le daba sentir la barba de su padre SA#uí estoy pe#ueJo Q#uieres decirme algoR Eiliv abri> la boca seJalando a Lo"i. SUAh,ah@... á,o"i' DUAllá allá@... apá Lo"i SQPuC sucede con papá Lo"iR Q$e ha dicho algoR .
El hechicero al&> el rostro con cierta superioridad ?ngida recibiendo ese casto beso al tiempo #ue $hor cargaba a su hi!o. Admir> a su par de soles tan parecidos día con día. Eiliv sonreía por las muestras de a%ecto del n>rdico y pronto le comunic> sobre su descubrimiento. Ante ello y la pregunta de $hor a su pe#ueJo Lo"i ?ngi> no saber nada... AGn no. Sreo #ue nuestro príncipe trata de decir #ue... le emociona la idea de pasar ellos la tarde !untos Sdi!o con naturalidad levantándose y acercándose a . $hor cargaba a Eiliv solo con un bra&o. -u hi!o aGn era pe#ueJo comparado a Cl pero llegaría el día #ue no podría cargarlo solo con su bíceps. Ante la respuesta $hor se dio por satis%echo. *ecibi> a Lo"i envolviCndolo por la cintura para darle otro beso #ue hubiera seguido más de no ser por su pe#ueJo. El n>rdico sinti> un !al>n Ddesventa!as de tener el cabello largo #ue lo oblig> a apartarse un poco del o!iverde. SAgh... Fe acuerdo ya entendí. Ia vamos Eiliv -u hi!o era sumamente impaciente. . omo suponía $hor #ued> con%orme con su en y por %ortuna Eiliv no insisti> en su intento por revelar el secreto. Así #ue sin mayor perturbaci>n Lo"i de!> #ue su esposo le besara nuevamente aun#ue más tard> en corresponder por un escaso par de segundos #ue en reírse de lo posesivo #ue su hi!o seguía siendo. 5n beso estaba bien dos era demasiado. S-erá me!or no provocar #ue vuelva a sus manías de electrocutarte hmhm Mencion> el pelinegro tomando de la mano al n>rdico y saliendo rumbo al comedor privado alo!ado en su estancia. . oco despuCs llegaron al comedor privado donde varios mo&os los esperaban para empe&ar con el ban#uete. -eguramente la mitad de lo #ue había en la mesa terminaría en el est>mago de $hor pero igual había una raci>n de comida decente en sus platos. S;o mientras comemos. Electrocutarme sería %atal ahora El n>rdico ya sabía de las habilidades de su primogCnito y trat> de controlarse teniendo a Lo"i tan cerca. Le o%reci> la silla a su consorte despuCs de sentar a Eiliv en su sillita alta en medio los dos. La mesa pe#ueJa y en %rente de ellos un estante dede metro,ochenta con era todos los man!ares de Asgard. Loshabía mo&os sirvieron vino en las copas de los príncipes. SA tu salud amor mío Sdi!o $hor al&ando su copa
. ierta complacencia ?gur> en el rostro del hechicero al ver todo en per%ecto orden dentro del comedor. $al parecía no tendría #ue despedir a nadie. K en su de%ecto hacerlo desaparecer. $om> lugar a la derecha de su hi!o #uien palmeaba despacio la mesa más como !uego #ue por e en su !uego con la mesa balbuceando y viendo como si estuviera reconociendo el lugar. Al momento del brindis el o!iverde al&> su copa mirando ?!o a $hor. Sor nuestra %amilia SaJadi> algo misterioso pero no demasiado chocando la copa con la del rubio y bebiendo del vino . $om> de la copa. I sí despuCs tom> la !arra como vaso de entrada. Las vie!as costumbres no se olvidan. $hor asinti> con la proposici>n de Lo"i esperando la comida: metsiga D!abalí asado con vegetales y baJado en brandy a lado de su respectiva guarnici>n de pan con especias !engibre con granos de maí& y una enorme pila de pollos rosti&ados... para Cl. Luego seguía el plato %uerte con venado. . Lo"i al&> una ce!a con diversi>n viendo al n>rdico hacerse de la !arra del vino e iluminarse sus &a?ros casi como un depredador al haber sido servido su plato. or su parte Eiliv miraba con o!os bien abiertos la tremenda porci>n de comida #ue degustaba su padre rubio. -eguramente por su mente de bebC pasaba #ue Cl apenas si comería su compacta porci>n de carne y verduras #ue ya le habían sido dispuestas. En cuanto al hechicero su porci>n era notablemente menos #ue la de $hor y aun#ue debía alimentarse por dos por ahora le resultaba su?ciente. SQ>mo estuvo la caminata con KdínR regunt> mientras preparaba el terreno y de!aba #ue el ban#uete pasara cortando un peda&o de su carne. Eiliv tom> un tro&o pe#ueJo de la suya previamente cortada por los mo&os. . SQumR $hor iba por el #uinto pollo cuando Lo"i le hi&o la pregunta. Al&> el rostro limpiándose con su servilleta y tomando más de la mitad de la !arra. S+antástica aun#ue sabes #ue es tedioso... Los tratados con otros reinos hallarles lo %ascinante me cuesta traba!o. +uera de eso lo relacionado con asuntos bClicos y de entrenamientos para el e!Crcito de Asgard me emocion> bastante
Eiliv tomaba de su plato con las manos. -e había rendido con el tenedor despuCs del dCcimo intento y como $hor comía con las manos... Ql por #uC noR S5hm... Sel metsiga estaba en huesos por cierto SQPuC me dices tGR EscuchC #ue madre #uiere enseJarte más hechi&os . SMe e en broma observando a su pe#ueJo imitar la %orma de comer de $hor. Estuvo a punto de colocarle el tenedor de nuevo en la manita pero estaba seguro #ue no serviría de nada. Así #ue lo de!> hacer sin escándalos innecesarios luego le ayudaría con los cubiertos. El hechicero tom> un poco de vino. Menos mal no tenía #ue hacerlo a un lado como los mortales las mortales de lo contrario ya habría levantado sospechas. SAsí es. Madre cree #ue puedo mane!ar algunos con!uros antiguos Sdi!o al tiempo #ue tomaba una pie&a de pan especiado dándole un tro&o pe#ueJo a Eiliv S;o correctamente me cont> sobre pero ellosahora antes.loens> #ue aGn no estaba listo para mane!arlos ve posible Mordi> el pan recargándose en el respaldo de la silla y mirando al n>rdico. S-i al -eJor del $rueno le parece conveniente más tarde puedo ayudarle a encontrar lo 'ascinante de la política Sclaro #ue una discreta insinuaci>n lasciva via!aba en la %rase . SLa capacidad es una de tus cualidades Lo"i Aprob> la idea de #ue practicara hechi&os antiguos para luego sonreír con lascivia. Eiliv estaba presente y solo por eso no se avent> sobre su esposo. SMe encantaría -eJor del EngaJo . Ante ambas respuestas el hechicero le dedic> una en presuntuosa al n>rdico aun#ue no demasiado marcada por consideraci>n a Eiliv. Aun#ue de todas %ormas el pe#ueJo príncipe tenía toda su atenci>n puesta en machacar la verdura de su plato con sus puJos. SEntonces tenemos un trato mi lord Midi> la %orma en #ue sus palabras sugerentes %ueran en al rubio para como su estado comen&aba a crear cambios hormonales no dudaba #ue esa noche %uera bastante prometedora. Más aGn por lo %eli& #ue $hor se pondría cuando supiera la noticia. .
SAsí es $hor al&> su copa Dla !arra en una escena muy c>mica y bebi> el resto del vino. Qabía sido el tono de Lo"i o en serio sus pantalones estaban apretándoleR En ?n tendría #ue terminar el resto de la guarnici>n para averiguarlo. or otro lado Eiliv estaba terminando su comida tratando tiernamente de coordinar sus manitas para no embarrar su tra!e aun#ue %ue inevitable #ue se manchara todo el %rente. SUAh@ Ah... DUAllá@ Sle di!o a su padre rubio S... á,o"i... Dapá Lo"i SQMmhR QLo"iR QPuC sucede con tu papá Lo"i campe>nR . Fe!ando la provocaci>n para más tarde Lo"i volvi> a su platillo aun#ue más tard> en llevarse un tro&o de carne a la boca #ue en pasarlo sin masticar aun#ue de %orma disimulada pues Eiliv pareci> recordar. Oolvi> a tomar del vino acabándolo esta ve& para luego limpiarse la boca con la servilleta. Bien necesitaba una %orma para distraerlos a ambos. Somo veo #ue nuestro príncipe ha comido muy bien hoy creo #ue merece un postre Fi!o mirando al pe#ueJo rubio limpiando su bo#uita y me!illas con la servilleta y haciendo aparecer %rente a Cl un pudín de man&ana. Puit> el plato con algunos sobrantes de comida y le dio una cucharilla a su hi!o para #ue degustara el pudín. En cuanto a $hor... S-olo e ligeramente despreocupado llevando un mech>n de cabello a&abache detrás de su ore!a . Ia. Fecidi> levantarse de su asiento e ir directamente a besar a su esposo. Bien sabía Lo"i #ue esas poses lo enlo#uecían lo hacían babear lo ponían ansioso. Eiliv claro #ue no di!o nada más por#ue su atenci>n se ?!> en el postre. -u gusto por lo dulce lo hered> del o!iverde. SMi -eJor del EngaJo me está tentando a saltar mi guarnici>n y llevarlo conmigo a mis aposentos ;o $hor no tenía reparo en decir lo #ue pensaba %rente a varios mo&os #ue lo escuchaban escandali&ados. . Lo"i sonri> entre el beso no reparando en los mo&os así como estaba seguro #ue Eiliv olvidaría por un rato más el secreto. Al menos en lo #ue terminaba su postre. S5hm Qsería tan desconsiderado mi lordR Me es%orcC por recibirlo adecuadamente no sería un noble gesto de su parte retirarse ahora
Arrug> labios y entrece!o ro&ando la me!illa del n>rdico con su diestra y acercándose a darle un par de besos cortos. -i lo estaba provocando no podía evitarlo pero era parte de su naturale&a y esa %orma de convivencia #ue le daba %orma a su relaci>n. . $hor sonri> de medio lado completamente absorto por las palabras de Lo"i y sus labios. Kh gloriosos labios. Sor usted mi elegante lord estoy dispuesto a #uedarme el tiempo #ue disponga Srespondi> besando sus nudillos . SEntonces #ue así sea Sdevolvi> complacido y con aire pícaro sintiendo estremecer por a#uel beso en sus nudillos SI ya #ue tengo su completa disposici>n tal ve& pueda abusar un poco y pedirle #ue tengamos un breve instante a solas en la terra&a al terminar el ban#uete $rat> de no levantar sospechas sabiendo #ue $hor no desperdiciaría la oportunidad. . El n>rdico asinti>. SQ>mo negarmeR Pui&á Lo"i #uisiera dis%rutar el atardecer !untos tal ve& #uería una plática marital tal ve& solo besarse al caer el sol. $hor siempre aceptaba. . 5na sonrisa amplia curv> los labios del hechicero teniendo la aceptaci>n del rubio. Puería darle la noticia mientras el sol se escondía y la noche los cobi!aba. laro tambiCn lo compartirían con Eiliv tenía todo el derecho de saberLo"i #uedeseaba dentro de unos mesesprimero vería algo nuevo en momento su pe#ueJo ero comunicarlo a $hor en un de mundo. pare!a solamente. Así pas> el resto del ban#uete entre miradas %urtivas denotando complicidad y uno #ue otro intento de Eiliv por decirle a $hor #ue Lo"i tenía algo en su cuerpo. or suerte el pe#ueJo era %ácil de persuadir por el hechicero #uien entre !uegos con magia y alguna breve historia lo hacía desistir. 5na ve& el n>rdico habiendo satis%echo su apetito el pelinegro lo inst> a volver a la alcoba. Aun#ue antes llevaron a Eiliv con ilda. Entonces Lo"i camin> de la mano de $hor hasta el balc>n mir> al hori&onte y luego se gir> de costado para verlo. SEspero #ue el ban#uete haya sido de su agrado -eJor del $rueno S coment> !unto con una sonrisa sutil .
Eiliv se resisti> al inicio pero Lo"i logr> convencerlo de !ugar un rato con ilda. $hor siempre intentaba hacerlo pero su bebC sin duda le hacía más caso a su padre o!iverde. Así el n>rdico sigui> a Lo"i dentro de la alcoba y en la terra&a solo se permiti> dis%rutar del atardecer con su esposo. SOali> la pena la cacería del ?n de semana Sdi!o orgulloso acercándose al otro y abra&ándolo por la cintura S;uestro príncipe estuvo muy in#uieto hoy . Say #ue reconocer #ue tienes talento para la cacería... Entre otras cosas *ode> el cuello de $hor con sus bra&os sintiendo al rubio tomarlo por la cintura con ese to#ue seguro y posesivo #ue tanto le gustaba. SPue observador Sdi!o algo bromista con la re%erencia a su pe#ueJo SQor #uC crees #ue insistía en decirte algoR . SEn realidad no sC si Eiliv intentaba decirme algo pero estaba muy interesado en #ue pusiera mi atenci>n en ti... Eso creo $hor seguía rodeando a Lo"i. robablemente su hi!o solo estaba diciCndole #ue debía dedicarle más tiempo a su padre o!iverde. . S5hm... En parte pudo ser eso Sentrecerr> los o!os SQPuC notas distinto en míR >mo le divertía poner a traba!ar la imaginaci>n de su esposo con preguntas capciosas. . QFi%erenteR onocía esa mirada. Lo"i entonces tramaba algo pero Q#uCR Q-u cabelloR ;o. QLos o!osR laro como si cambiar ese hermoso esmeralda no pudiera notarlo. Q-u pielR U;o $hor@ Uiensa piensa piensa@ $hor torci> los labios %runciendo el ceJo para pensarlo. En serio estaba pensando. $oc> varias veces la cintura de Lo"i incluso se acerc> un poco para olerlo #ui&á traía algGn per%ume... ;o. SAh... QLa tGnica #ui&ásR QEs nuevaR . Oer lo concentrado de $hor lo hi&o curvar los labios en una sonrisa presuntuosa. or supuesto el n>rdico no se acerc> ni medio paso a la respuesta. S;o no es la tGnica Slade> el rostro en actitud de arrogancia ?ngida S -egunda oportunidad... Es algo #ue no puedes ver aun pero en de $hor. or instinto le dio un corto beso en los labios y luego tom> sus manos rompiendo el abra&o pero no ale!ándose de su lado. S-eJor del $rueno me halaga su pensar sobre mi basto intelecto pero me temo #ue no es la respuesta correcta A comparaci>n de la ve& #ue descubri> estar esperando a Eiliv el hechicero no cambi> su ánimo de modo drástico solo estaba entretenido con las observaciones nada acertadas del rubio. S$e darC una pista Smencion> algo misterioso y risueJo Sace tres meses tuvimos una celebraci>n importante. Esa noche ocurri> algo curioso aun#ue no era seguro del todo' Ese algo de!> de ser incierto esta maJana' omo esa noche de aniversario Lo"i llev> la diestra de $hor a su vientre mirándolo ?!o y anhelante. . $res meses. elebraci>n importante. ;oche. &2iste justo ahora. La clave en realidad no %ueron las palabras el gesto #ue hi&o Lo"i acertadamente de colocar la mano del rubiosino sobre su vientre. La en de asombro de $hor %ue invaluable y de inmediato su mente empe&> a asimilar la in%ormaci>n y a compaginar todo. Uor supuesto@ Uor supuesto demonios@ SLo"i... Los labios le comen&aron a temblar y su mano en el vientre de su esposo hi&o un abra&o protector. Fe la e tan e%usivamente al o!iverde para evitar cual#uier #uiebre aun#ue pedirle a alguien tan enCrgico como $hor #ue se guardara la emoci>n era imposible. El n>rdico ampli> su sonrisa tomando al hechicero de la cintura para al&arlo sobre el suelo e con delicade&a a Lo"i de nuevo acariciándolo de la me!illa y arrodillándose en seguida para besar sobre la tGnica a ese pe#ueJo ser resguardado en su consorte. -olo en ese segundo $hor se dio cuenta #ue volvería a ser padre. . Al ver la sin palabras del n>rdico luego ese temblor en sus #ue labios al en decir su nombre Lo"i comprob> #uey lo había entendido. I vaya sí pues ya lo tenía en el aire. El hechicero se su!et> de los bra&os %ornidos sonriendo como un !oven&uelo enamorado mientras $hor sacaba a Note su emoci>n. San sido generosos y ahora... creo #ue seremos cuatro en lugar de tres S lo di!o sonriente acariciando la cabe&a rubia de su esposo arrodillado %rente a Cl . SFioses... $hor seguía arrodillado con esa misma emoci>n #ue sinti> cuando se enter> #ue Eiliv venía en camino. UEiliv@ $enían #ue decirle a su pe#ueJo bebC aun#ue el n>rdico no se pasaba por la cabe&a #ue el pe#ueJo sospechaba ya. Eiliv era más astuto #ue su padre rubio. S;uestro hi!o Lo"i... Eiliv... Sdi!o con emoci>n S$endrá un compaJero de !uegos -e puso al ?n de pie besando ambas manos de su esposo para ?nalmente acercarse y darle otro en los labios. . El beso plagado de sentimientos #ue $hor le diera Lo"i lo correspondi> con la misma dicha. Eran a%ortunados de haber sido bendecidos con otro pe#ueJo ser uno #ue sería el compaJero de Eiliv como bien lo di!era el o!ia&ul. I claro era momento de compartir la buena nueva a su primogCnito. El beso se interrumpi> al colarse un abra&o no demasiado e%usivo pero sin duda emotivo. Lo"i aprovech> para invocar un holograma suyo en la alcoba de su hi!o pidiendo a ilda llevarlo !unto a ellos. Al cabo de breves instantes la nodri&a abri> la puerta contigua llevando al niJo en bra&os #uien se agit> al ver a sus padres. Puería ir a su lado. SMa!estades La castaJa salud> con una breve reverencia y camin> hasta #ue $hor se adelantara para tomar al bebC. ilda se retir> en seguida. SAhora puedes decirle a papá $hor El hechicero le di!o al pe#ueJo o!iverde #uien pareci> entender. SUAh@ UAh pa,pá o"i pa,pá@ UAh@... DUAllá@ Uapá Lo"i papá@ UAllá hay algo@
El niJo en bra&os del n>rdico seJalaba a su padre a&abache !usto en el vientre mirando a $hor con insistencia. Lo"i sonri> y se acerc> a besar los risos dorados de su pe#ueJo. . $hor sonri> de lado al escuchar a su hi!o entrando con ilda. Mir> de reo!o a su consorte para luego ir por el pe#ueJo príncipe. SOen a#uí pe#ueJo Slo al&> con un solo bra&o cuidadosamente y luego espero lo #ue Eiliv #uería decirle SKuh entonces... Qya lo sospechabas ehR Fe acuerdo su hi!o tenía más intelecto. S-i Eiliv papá Lo"i acaba de decirme lo #ue tiene El bebC lade> la cabe&a mostrándose pensativo viendo a su padre rubio con aire de curiosidad. SOen S$hor se arrodill> %rente a su esposo y carg> a su primogCnito lo su?ciente para #ue #uedara a la altura del vientre del o!iverde SAhí dentro de papá Lo"i hay un bebC como tG Eiliv solo #ue mucho más pe#ueJo Eiliv abri> sus o!itos con asombro tocando sobre la tGnica con ambas manos. SQPuiR Ah,entro... QBe,beR... DQA#uí dentro hay un bebCR . or supuesto #ue Eiliv lo sospechaba. Al ser un niJo muy especial dotado de una percepci>n sensible y amplia tanto por la me&cla de ra&as como por su don para usar la magia era normal #ue sintiera cambios en el ambiente. Además el hechicero %ue #uien lo llev> en su vientre por casi nueve meses su apego por Cl era tal #ue pudo notar algo en su interior. Lo"i se mantuvo en total silencio viendo a $hor hablarle a su pe#ueJo mientras lo la acercaba se inocente suponía estaba su hermanito %ormándose. ontempl> cara de d>nde Eiliv tan y asombrado se mostraba colocando sus manitas sobre su vientre. El pecho del o!iverde se llen> de una pro%unda ternura al notar #ue ese era el primer acercamiento entre hermanos. SAsí es pe#ueJo mío. A#uí dentro hay un bebC #ue será tu hermano... K hermana Sdi!o acariciando la me!illa sonrosada de Eiliv Srecerán !untos !ugarán !untos y algGn día tal ve& peleen !untos lado a lado como tu papá $hor y yo alguna ve&... Quidarás de ClR regunt> con paternal mirada recibiendo un asentimiento repetido por parte de Eiliv. SIo ghuido mano' DIo cuidarC a mi hermano El niJo abra&> lo más #ue pudo la cintura de Lo"i recargando su cabecita mientras repetía sus palabras. osa #ue provoc> el cristali&arse de los esmeraldas del hechicero #uien mir> a $hor entre lágrimas agolpadas.
SEs igual a ti . S-í Scon?rm> el n>rdico mirando desde aba!o a su consorte S... -olo #ue más listo $hor era un hombre #ue estaba consciente de su %alto intelecto y no tenía ningGn problema por#uebrillantes. Lo"i siempre a sutenía lado #ue de !>venes y el o!iverde era elcon de eso los planes Bienestaba #ue mal admitir #ue cuando decidía no hacerle caso a su hermano todo salía mal. UTracias a los dioses Eiliv solo había heredado el cabello y la sonrisa de Cl@ ...I un poco de la %uer&a. El n>rdico se puso de pie y el niJo en seguida #uiso regresar !unto a su padre a&abache para proteger a su hermanito o hermanita. $hor sonri> de lado acercándose a Lo"i para secarle las lágrimas #ue comen&aban a caer. SAlguna ve& voy a contarle a Eiliv sobre este día y tambiCn del día #ue me enterC de su concepci>n Sdi!o acariciando la cabe&a de su hi!o . Lo"i recibi> a su pe#ueJo envolviCndolo en un abra&o cálido mientras sus lágrimas eran secadas por las manos de $hor. Lo mir> con el sentimiento agolpado y le sonri> al decir a#uello. SLe gustará saber esas historias Sa?rm> besando entre la sien y la parte superior de la ore!a de su hi!o #uien con sus bracitos rodeaba su cuello S abrá #ue hacer el anuncio. Madre se pondrá muy %eli& Suna lágrima de dicha resbal> por su me!illa derecha . Antes de responder algo $hor tom> el ment>n de Lo"i. Esas lágrimas eran de alegría y Cl mismo tambiCn sentía la emoci>n subirse e inundar sus o!os. Lo bes> de nuevo abra&ándolo incluyendo en ese abra&o a su hi!o obviamente. Eiliv estaba %eli&mente sonriendo aun#ue tambiCn notaba #ue el beso estaba tomando bastante así #ue estir> su manita derecha para tirar de la tGnica de su padre rubio. SUAh@ Ua,pá@ ;ia #uedo beho' Dapá yo tambiCn #uiero beso ;o lo decía por $hor lo decía por Lo"i. Eiliv era celoso demasiado. . A#uel beso entre lágrimas y el abra&o del n>rdico remont> a Lo"i a esa tarde en #ue asustado le diera la noticia a $hor. Esa ve& su sorpresivo embara&o lo desconcert> al punto de temblar entre los bra&os del rubio por el agobio la con%usi>n. -in embargo ahora el hechicero no cargaba con miedos ni ydudas. Fe pronto Eiliv pareci> no estar del todo con%orme con el tiempo del beso pues a su parecer ya se habían en y la clara
demanda del niJo el o!iverde ri> ba!o antes de besar las dos me!illas de su pe#ueJo logrando hacerlo sonreír. S$ran#uilo. -abes #ue te amo más #ue a papá $hor Slo di!o en modo !uguet>n mirando de reo!o al mencionado . SUey@ Fi!o $hor o%endido pero superando el comentario al instante. laro #ue Lo"i amaba más a Eiliv #ue a Cl de un modo distinto paternal. l amaba a ambos con la misma intensidad. otro lado Eiliv solt> una risilla y aplaudi> cuando su padre o!iverde lo carg> y le dio un beso en cada me!illa. SAh tah,ien amha pa,pá' D$ambiCn te amo papá SQ-oy el Gnico #ue se #uedará sin besosR Spregunt> $hor sonriendo regresando a lado del hechicero SLe diremos a madre a primera hora maJana . Oer la indignaci>n de su esposo inevitablemente provoc> cierto tipo de maliciosa complacencia en el pelinegro. laro #ue no hablaba del todo en serio es decir amaba a Eiliv con toda su alma como padre. ero $hor tenía la parte emocional la #ue solo podría darle a Cl por#ue era el Gnico en su vida. -iempre lo %ue y lo sería hasta #ue sus o!os se cerraran para !amás volver a abrirse. Escuchar las palabras de su pe#ueJo lo enternecieron sobremanera. I cuando $hor se acercara con a#uella pregunta el hechicero lo mir> entre escrutador y presuntuoso. S$al ve& tengas uno #ue te robe el aliento más tarde Smencion> sonriendo de lado reparando en su madre SIa puedo imaginarla. a esperado tanto por esta noticia #ue #uisiera decirle ahora. ero maJana será otro día . Los o!os de $hor se iluminaron en seguida sonriendo c>mplice a su esposo. Bendita manía de provocarlo. Luego asinti> ante la a?rmaci>n de hablar con Madre de $odo sobre el embara&o de Lo"i. -eguro sería otra noticia impresionante en todo el reino. SLo sC ella estaba igual de ansiosa #ue nosotros Fe!> #ue Eiliv tomara su dedo índice y lo apretara. Enterneci> sobremanera al n>rdico #ue su hi!o !ugara con Cl #ueriendo tomar parte de la plática. SFe!emos #ue Eiliv sea #uien se lo diga... QPuC dices pe#ueJoR QLe decimos a mamá +rigga #ue tendrás un hermanitoR .
El hechicero gir> un poco a Eiliv para #ue pudiera estar más en contacto con su padre rubio. Mir> a ambos aun#ue se concentr> luego en su pe#ueJo para ver #uC respondía. SUMa,má Mphigga@... DUMamá +rigga@ Se el niJo apretando el dedo del rubio SIo dehci ma,má Mphigga eh mano ahhi pa,pá o"i' DIo le digo a mamá +rigga #ue papá Lo"i me dará un hermanito Sreo #ue Eiliv será nuestro vocero o?cial Sdi!o el hechicero contento con ver a su hi!o decidido a ser #uien diera la noticia a la reina madre . El n>rdico mir> a Lo"i y a su hi!o con ese particular brillo #ue tenía plasmado en sus &a?ros sonriendo de lado. SLo es Scon?rm> lo #ue di!o el o!iverde notando #ue Eiliv boste&aba S ey pe#ueJo... $al parece #ue alguien tiene sueJo . SEstuvo muy activo todo el día AJadi> el pelinegro apareciendo el biber>n y entregándoselo a su primogCnito #uien lo tom> con una manita mientras #ue la otra seguía tallando su o!o derecho. SOamos Eiliv hora de dormir Le di!o al pe#ueJo acomodándolo en su rega&o para comen&ar a mecerlo despacio entre #ue caminaba hacia la alcoba del niJo siendo seguido por $hor. Fentro de la habitaci>n Lo"i se sent> en el so%á esperando #ue su hi!o #uedara pro%undamente dormido para colocarlo en su cuna. S-erá como vernos crecer a nosotros mismos Smencion> ba!o mirando a su pe#ueJo pero dirigiCndose al n>rdico . $hor vio a sus dos amores con ternura. Lo"i era un padre erdico se acerc> mirando desde su altura a Eiliv cayendo dormido. oco a poco la leche del biber>n se agotaba. S;o me lo podría imaginar de otra %orma Sse sent> a lado del o!iverde acariciando su me!illa tomando el biber>n cuando su hi!o boste&> de nuevo SQuedo arrullarlo un pocoR . Ese roce en su me!illa lo hi&o mirar de modo suave a $hor se sonri> ligeramente y devolvi> la mirada a Eiliv cuando lo escuchara boste&ar. SFeberías hacerlo
Le di!o casi en susurro para no despertar a su pe#ueJo pasándolo despacio a los bra&os del n>rdico. Aun recordaba cuando Eiliv era tan diminuto #ue su cabecita ni si#uiera sobresalía de entre el rega&o de $hor. SAun#ue Eiliv me cele en un %uturo #uerrá ser como tu... I espero #ue lo sea Scon%es> al rubio acercándose para estar cerca de sus dos soles . *ecibi> con cuidado a su primogCnito. abía crecido tanto y en tan poco tiempo #ue el n>rdico apenas lo creía. SEs nuestro hi!o. a heredado una parte de nosotros El rubio meci> más lento a Eiliv #uien entre boste&o y boste&o se tallaba sus o!itos no #ueriendo realmente perderse de nada por#ue sus padres seguían hablando y a Cl le gustaban sus voces. Fie& minutos despuCs el niJo había caído dormido. $hor lo con?rm> cuando al de!arlo en la cuna el pe#ueJo no despert> ni llor>. -u padre rubio lo arrop> con sus mantas mientras se acercaba para besarle su cabecita y de!aba pasar a Lo"i para #ue tambiCn lo besara y de!ar #ue durmiera su siesta de la tarde. SQEn #uC piensasR . Lo"i podría pasarse la eternidad viendo a Eiliv. A pesar de #ue ya contaba con aJo y medio de vida seguía siendo su pe#ueJo y hermoso milagro siempre lo sería pero el crecimiento era inevitable y dis%rutaba cada momento de ternura #ue su hi!o le regalaba día con día. En cuanto el n>rdico se encargara de cobi!arlo el hechicero se acerc> para darle un beso en la %rente susurrándole un: uerme bien mi pequeño antes de al&arse y #uedar mirándolo como siempre a lado de su esposo. -e había #uedado un poco pensativo hasta #ue $hor lo sacara de a#uel estado meditabundo. SEn lo mucho #ue ha crecido Srespondi> todavía mirando a su hi!o SI en c>mo será Cl. K ella' Al re%erirse a su nuevo bebC Lo"i sonri> suavemente llevando sus manos a su vientre y posando sus esmeraldas !usto ahí. . El n>rdico mir> de pies a cabe&a a Lo"i y en eso se perdi> en sus esmeraldas #ue lo hipnoti&aban con %uer&a. -e acerc> hasta rodearlo con sus bra&os por la espalda y besar en la me!illa siendo testigo de la belle&a #ue seguía conservando a medida #ue pasaban los días posando sus manos en el vientre #ue albergaba a su nuevo hi!o. SQ$G #ue piensas #ue seráR QPuC presientesR Spregunt> curioso .
El hechicero de!> #ue la calide& y seguridad de a#uel abra&o lo abrumaran sintiCndose a salvo entre los bra&os de $hor. 5n ligero rubor cubri> sus me!illas con ese beso y un suspiro cansino acompaJ> su pensar con a#uella pregunta curiosa del rubio. S5hm no lo sC' Q-abesR Puisiera #ue %uera una niJa. -ería la compaJera per%ecta para madre aun#ue si %uera un niJo tendría más cosas en comGn con Eiliv Sgir> el rostro a sulas derecha para a $hor con unanosonrisa colocando sus manos sobre otras en suver vientre SAl ?nal importa #uerremos igual a este bebC . $hor bes> en el cuello al otro en seJal de acuerdo con lo #ue acababa de decir. El n>rdico no tenía prisa por saber #uC sería y solo deseaba con toda el alma celebrar esta noticia. S$engo una idea Ssusurr> contra el oído del o!iverde SQ*ecuerdas lo sensible #ue estaba tu cuerpo cuando esperabas a EilivR -i tienes todavía una de esas botellas con lavanda puedo darte un masa!e de baJo . Mir> con malicia presuntuosa a $hor ante a#uel comentario sobre el masa!e de baJo. Q-ensibilidadR -i ya la presentaba desde la noche de aniversario de bodas con tres meses de embara&o su sensibilidad debería estar más #ue a Nor de piel. -in decir nada el hechicero hi&o aparecer una botella con aceite aroma lavanda mismo #ue al&> para #ue $hor la viera. S;o estaba preparado . La mirada del n>rdico se concentr> en el %rasco y su mente empe&> a ma#uinar ideas de todo lo #ue haría con Lo"i. SQ;o lo estabasR regunt> en su oído empe&ando a caminar hacia la puerta no sin antes asegurarse #ue Eiliv estuviera totalmente dormido como ángel. 5na ve& %uera $hor dirigi> a su consorte al cuarto de baJo privado de ambos. . Smhmhm bueno... tal ve& un poco Fi!o de modo travieso de!ándose llevar por $hor hacia el cuarto de baJo. $enerlo así abra&ándolo por la espalda mientras le hablaba al oído y !ugaba con su ore!a pasado la punta de su nari& detrás sí #ue lo estaba provocando. . SLo sabía
laro #ue sí. ;o en vano conocía muy bien los modos traviesos de su consorte aun#ue curiosamente conseguía sorprenderle a diario. Al llegar al cuarto de baJo y mientras esperaban #ue el agua cayera libre y llenara la enorme tina de baJo D#ue más bien parecía piscina $hor meti> sus manos en la ropa del hechicero desnudándolo sensualmente con unos cuantos besos en sus hombros. Lo"i lo volvía desesperadamente loco. ;o pas> mucho cuando el -eJorendel $rueno maritales de tiempo una manera e guardarse el tema por ahora. $endrían otro hi!o. -ublime. %.%.%.%.%.%.%.%.% Notas fnales: Ahora sí es o?cial LKZW E-$\ EMBA*A_AFK por segunda
ve& rdico lo sorprendi> cubriendo sus o!os esmeraldas con sus enormes palmas sonriendo. SA veces me da envidia #ue les prestes más atenci>n a esos libros #ue a mí Sdi!o divertido . Lo"i adoraba cuidar de su pe#ueJo Eiliv y contarle acerca de su hermanito aun#ue tambiCn debía procurar seguir retroalimentando sus conocimientos. FespuCs de todo no se sabía cuándo podría ser necesario luchar de nuevo y no por ser ahora consorte de $hor #uería decir #ue ba!ara la guardia y se dedicara a hacer nada. (usto por ese pensar el o!iverde se hallaba enclaustrado en la biblioteca desde la maJana aprovechando #ue +rigga y Kdín estaban con su hi!o. Leía sobre místicos poderes y con!uros a#uellos #ue su madre le de!ara para per%eccionar escuchando la puerta abrirse y unos pasos recios dirigiCndose a Cl. -upo sin al&ar la mirada #ue se trataba de $hor. I hablando de mirar el n>rdico se encarg> de obstruir su panorama al cubrirle los o!os. En otro momento al hechicero no le hubiera caído mal a#uel gesto pero con lo concentrado #ue estaba y su estado susceptible #ue se alteraba %ácilmente por la etapa gestante no era buena idea tentar su paciencia hormonal. SLes presto atenci>n más #ue a ti por#ue necesito estos conocimientos S devolvi> un poco a la de%ensiva apartando las manos de sus o!os y haciendo mueca de pocos amigos
. $hor por ser de cora&>n noble a veces no se le ocurría pensar #ue Lo"i pudiera en%adarse en serio. La mayor parte de las veces era !ugando pesado. Fesde #ue decidieron estar !untos Dmucho antes del matrimonio eran inusuales las peleas. Así #ue $hor no se tom> tan en serio el tono de en%ado de su consorte. SAh vamos Lo"i. ;o dudo #ue son importantes para ti pero' Slo tom> de la barbilla SQEsos libros te besan tan apasionadamente como yoR . El hechicero retir> su rostro con brus#uedad para &a%arse del agarre en su ment>n al tiempo #ue apartaba a $hor con un golpe en su pecho. SAgh no %astidies con eso ahora. ara ti es %ácil por#ue tu %uer&a te precede pero te tengo noticias: IK debo e!ercitar el cerebro cosa #ue aun#ue no lo creas puede superar a la %uer&a bruta Fe!> en claro algo %astidiado y volvi> a ver la página donde estaba recargando su cabe&a en su palma iuierda la cual se apoyaba con el codo sobre la mesa. . Al n>rdico no le pas> ni por un segundo #ue esa reacci>n de Lo"i era por su estado gestante por lo #ue intent> ser comprensivo... -in saber por#ue. Slaro #ue no la supera. -iempre me dices #ue el intelecto triun%a S respondi> arrodillándose a la altura de su consorte SI... Q#uC leesR . SAlgo #ue aun#ue te e escueto sintiCndose un tanto inc>modo pues la curiosidad de $hor ya lo tenía metido en averiguar lo #ue estaba escrito en la página. SQ;o tienes algo me!or #ue hacerR or#ue no vas y te embriagas con +andral y los demás como hacías antes Fi!o poco erdico empe&aba a sospechar #ue Lo"i estaba en serio molesto. Lo sigui> hacia el diván opacando la vista a la chimenea. S-i lo hago te eno!arás. Además tG mismo me pediste #ue no lo volviera a hacer tanto para darle un buen e!emplo a nuestro hi!o Lo"i . E las %osas nasales y arrug> los labios inhalando pro%undo para tratar de calmarse por#ue en serio se sentía demasiado molesto. abía
mencionar #ue no era culpa de $hor solo estaba en sus cinco minutos de ira gestacional. -e mantuvo con la mirada ?!a y dura sobre el cuero del pantal>n de su esposo #uien se hubo parado %rente a Cl. SBueno pues t>mate hoy la libertad de beber hasta la inconsciencia y de!a #ue me concentre. -i su alte,a es tan amable Sle devolvi> la mirada %astidiada antes de regresar a su lectura . $hor sabía #ue no lo decía en serio y #ui&á solo necesitaba leer por#ue adoraba sus libros. Asinti> bobamente inclinándose hacia su consorte y parando los labios. S;o hasta #ue me beses. e estado toda la maJana le!os y #uiero recordar tus labios . Fe acuerdo. $hor en serio #uería desatar a la bestia pese a #ue Lo"i estaba tratando de ale!arlo inconscientemente hasta #ue su eno!o repentino menguara. SQPuieres un besoR Ssise> ba!o al tiempo #ue cerraba de golpe el libro S Qor#ue no vas a ver a -i% o alguna doncella del palacioR -eguro #ue ninguna se negará a darte una docena cuando menos . Kuh. Ese comentario sí #ue %ue directo. Muy directo. $hor conocía los celos de Lo"i pero usualmente no los e el ceJo. ;o le había dado ningGn motivo para #ue pensara así. SQ-i%R QA #uC viene esoR ;o he hablado con ella esSar#ue> un absurdo #ue pienses #ue podría besar a otra persona #ue en no días... %uerasItG. una ce!a SQor #uC dices eso Lo"iR . Esta ve& el hechicero rod> los o!os volviendo a tomar aire buscando tran#uili&ar su temperamento. Qor #uC simplemente no lo de!aba soloR ;o estaba de humor para nada ni besos ni abra&os mucho menos se desde su lugar en%ati&ando con su en ta!ante . QPuCR El rubio mir> at>nito a su consorte. Eso de?nitivamente no era normal demonios no. QFe cuándo acá Lo"i soltaba una negativa tan %uerteR En ese momento no se le ocurría ninguna en coherente al n>rdico.
Sero eso no es l>gico Lo"i... Bien supongo #ue no puedo obligarte pero por todos los dioses no seas tan dramático . La en del hechicero pas> del tedio a la indignaci>n e SUQFramáticoR@ Al&> la vo& y se levant> del diván de!ando el libro a un lado sin cuidado pues termin> cayendo al piso. SUQ$e parece ?AM$98 #ue necesite estar en pa& por un momentoR@ S recrimin> mirándole entre angustiado y molesto SUlaro@ Uomo tG no eres el #ue tiene #ue pasar por toda una revoluci>n interna a cada instante@ Uero #uC vas a entender si no sabes lo #ue se siente gestar una vida@ Fe pronto acall> sus palabras arrugando el ceJo y negando al tiempo #ue apretaba los labios colocando las manos en su cintura y desviando la mirada cristalina. . -us ce!as no podían al&arse más de la sorpresa. Oaya #ue Lo"i estaba tocado por su comentario pero lo #ue lo desconcert> más %ue la re%erencia a su gestaci>n... Uor supuesto@ Ahora recordaba lo susceptible de su carácter cuando esperaban a Eiliv. A partir de entonces debía ser más comprensivo. Sero... Lo"i...Sintent> ablandar su vo& incluso sonriCndole S;o no sC #uC se siente pero lo deseo con toda el alma Sse acerc> lentamente para intentar abra&arlo . Ante el de!e de un abra&o #ue $hor le insinuara al acercarse Lo"i manote> y se ale!> unos pasos dándole la espalda y cru&ando los bra&os sobre su pecho. Estaba hiperventilando con en su rostro se mostraba inNen del reino era tocado por la calide& del ambiente cada prado campo y bos#ue se revestían de un verde vivo y de Nores silvestres de varias %ormas tamaJos y colores. El aire tenía ese aroma salino proveniente del gran ocCano #ue re%rescaba a todo a#uel #ue se tomaba un momento para sentir a#uella caricia sutil en su rostro. (usto como Lo"i. El hechicero leía en el diván de la terra&a de su alcoba. erca tenía una mesita con varios libros sobrepuestos #ue iría leyendo. La mayoría trataban de %>rmulas y hechi&os aun#ue había uno #ue otro sobre historias antiguas de los nueve reinos. Estaba mes de gestaci>n y aunlos no sabían #uC tendrían el bebCentrando siempre al secuarto escondía cuando lo revisaban sanadores o su madre en el lector de almas. A#uello más #ue preocuparle a Lo"i le parecía curioso era como si ese pe#ueJo ser #uisiera !ugar a las escondidas hasta el día de su nacimiento. Furante a#uellos casi cuatro meses de espera el o!iverde había su%rido molestias más notorias #ue las acontecidas con Eiliv. $al ve& por ser el segundo embara&o. I hablando de molestias tuvo #ue interrumpir su lectura por#ue de pronto el est>mago se le revolvi>. err> los o!os y aspir> pro%undo varias veces hasta #ue las náuseas se aplacaron aun#ue de!ando una en de escalo%río. Se#ueJo' -C bueno Q#uieresR Spidi> en vo& suave acariciando su vientre ya notoriamente abultado *ecarg> su cabe&a en el respaldo de!ando #ue el aire %resco le ayudara a sosegarse. .
Al mediodía el entrenamiento de $hor había concluido. Ahora #ue era un príncipe con más responsabilidades además de ser líder de varios batallones tenía #ue es%or&arse en las habilidades bClicas a pesar de ser muy diestro con M!^lnir. Aun así estaba bastante impaciente de regresar al castillo para ver a Lo"i. Fesde #ue se enteraron #ue volverían a ser padres $hor se había vuelto el triple de sobreprotector su consorte incluso más #ue en el embara&o de Eiliv. Eso hostigaba a loscon sanadores cuando intentaban en de la gestaci>n pero el n>rdico era un mar de alegría con el Fios del EngaJo como para perderse cual#uier noticia sobretodo por#ue le emocionaba saber si tendrían un príncipe o una linda princesa. Así el dios regres> para ducharse y hacer sus deberes conyugales. Aprovecharía para sacar a Eiliv a pasear a caballo. +rente a la puerta de su habitaci>n toc> dos veces y entr>. En seguida #ue mir> a Lo"i %ue a sentarse a su lado en la cama sonriCndole. SQa sido una maJana ocupada mi -eJor del EngaJoR Era raro no hallar a su esposo pegado a un libro pero $hor crey> #ue solo estaba un como respiro. $om>'ormal. entonces una mano del hechicero para besarletomando los nudillos saludo SFeseaba pasear con Eiliv el resto de la tarde. $e llevaría pero ya sabes los cuidados rigurosos #ue indicaron los sanadores me lo impiden . uando percibi> el malestar cediendo se levant> despacio del diván llevando consigo el libro #ue tenía sobre las piernas. Fio un primer paso pero trastabill> un poco al perder momentáneamente el e#uilibrio por un mareo repentino ocasionando #ue soltara el libro y se recargara en el mueble. omen&> a hiperventilar sintiendo el %renCtico latir de su cora&>n mientras sus o!os permanecían %uertemente cerrados y su ceJo %runcido. $rag> saliva grueso antes de abrir despacio los párpados y en%ocar la nada. ;o se movi> hasta #ue el mareo pas> yendo a sentarse a la cama con sumo cuidado usando su magia para colocar el libro tirado sobre la pila en a#uella mesa. A veces pienso que esto no es normal… asado un rato ya menos a%ectado escuch> el llamado a la puerta. $hor había llegado lo cual le alegr> el momento haciCndole olvidar su malestar. Le dedic> una sonrisa cansina al tenerlo cerca. S;o mucho Sdi!o sin mencionar nada no #uería #ue $hor erdico hall> un candado %uertemente sellado con magia seguro obra de su madre. En%urecido y sintiendo una impotencia horrible el príncipe comen&> a golpear la caoba con su martillo. SUAB*A;@ UMAF*E@ UQP5 E-$\ A-A;FK K; LKZWR@ Trit> con toda la %uer&a de sus pulmones sin obtener respuesta hasta ?nalmente caer de rodillas con las manos apoyadas en las puertas. Sor %avor... Lo"i... Smurmur> sintiendo c>mo el pánico le hacía soltar ligeras lágrimas . Fentro del cuarto de sanaci>n +rigga con!ur> un cerro!o mágico para asegurar la puerta. ;adie debía inter%erir era un momento crítico muy delicado y no podían darse el lu!o de perder tiempo con interrupciones #ue más #ue ayudar solo entorpecerían la labor. Así #ue conociendo de sobra el actuar impulsivo y desesperado de $hor en cuanto los hallara y supiera la gravedad del problema la reina pre?ri> aislarlo hasta #ue pudiera darle alguna novedad. -in embargo muy pronto el mayor de sus hi!os ya estaba golpeando las puertas con %uria. Aun así el con!uro era lo su?cientemente %uerte como para soportar los impactos del M!^lnir por lo #ue solo se concentraban en salvar a Lo"i y al bebC. Mientras +rigga desvanecía la camisa verde ocre manchada de sangre para de!ar al descubierto el vientre del hechicero tres de los sanadores %ueron al cuarto contiguo para preparar el lector de almas. El otro anciano #ue se encontraba cerca de la reina comen&> a %rotarse las manos envueltas de energía naran!a acercándose hasta la camilla y colocando las palmas sobre la %rente de Lo"i murmurando hechi&os de protecci>n mientras lo sumía en un trance poderoso #ue podría e#uivaler al sueJo de Kdín. ronto a#uella energía lo cubri> por completo. SMi seJora el lector está listo 5no de los tres ancianos volvi> para avisar a Madre de $odo #uien asinti> a lo escuchado. Entonces coloc> su diestra en la %rente de Lo"i mientras #ue la mano iuierda #ued> sobre el pecho. err> los o!os murmur> una breve %rase y de inmediato su hi!o se desvaneci> en la camilla entre un resplandor aperlado. El o!iverde se materiali&> a los segundos en la plancha del lector de almas. +rigga se reuni> con los tres ancianos seguida del otro #uedando
de pie al costado iuierdo del a&abache para mover con dedos hábiles el plasma naran!a del lector. Ia uno de los sanadores había detectado la rasgadura en el campo energCtico #ue protegía el %eto pero necesitaban hallar el área e de labios de la reina acompaJada de un semblante alterado cuando al generar la lectura de la anatomía de Lo"i hall> una e por un velo de oscuridad y silencio. S;o es tu hora Lo"i. Oas a vivir y tu hi!o verá la lu& de este mundo en su nacimiento no este día... *esiste' Fi!o +rigga con aplomo como si hubiera intuido la despedida del hechicero. Entonces la reina comen&>. -us manos se envolvieron de energía dorada y con ellas toc> el vientre de Lo"i sintiendo al instante a la criatura agitarse igual #ue sintiera el Nu!o anormal de la energía. -e drenaba con espantosa rapide&. . Los sanadores estaban al punto mán. QPuC habían hecho malR -eguían todos los cuidados #ue les indicaban Cl procuraba respetar el espacio #ue Lo"i necesitaba y su bebC. ;o estaba preparado para algo peor simplemente no. -i algo llegaba a pasar Cl no podría subsistir. Eiliv era una ra&>n para no rendirse pero su vida sin Lo"i sería un in?erno.
El n>rdico entonces sinti> un pincha&o %uerte de esos #ue te roban el alma y te arrancan un peda&o de vida. $uvo ra&>n en alarmarse más y de inmediato pens> en su hi!o. ;o perdi> tiempo y %ue a buscar al pe#ueJo #uien estaba con ilda !ugando. Entr> a la habitaci>n y sin dar e a Eiliv y sali> de ahí. ;o sabía c>mo pero sabía #ue su hi!o tenía poderes #ue aGn no mostraba... Pui&á si se #uedaban cerca ambos de Lo"i habría posibilidades de #ue los escuchara. $enía #ue resistir. SQapá Lo"iR Spregunt> el pe#ueJo seJalando la puerta de caoba Sapá Lo"i está un poco en%ermo Eiliv. Mamá +rigga está tratando de curarlo. File #ue estamos a#uí para Cl y #ue tG estás bien Eiliv ya era muy listo para su edad y entendi> #ue su padre rubio estaba preocupado se le notaba en su rostro. Al&> sus manos recargándolas en la puerta como si #uisiera abrir y trat> de oír. Sapá Lo"i #ue,o !ugar. 5perate Sy #ued> mirando a $hor esperando una respuesta . Fentro y los cuatro ada sanadores continuaban tarea menguar+rigga un solo instante. con!uro cada re&o la y ardua plegaria a lossin dioses y al mismo árbol del mundo estaban siendo elevados. ada gota de magia gastada para salvar dos vidas #ue parecían e el comentario del anciano mostrando su ?rme temple y el sudor en su %rente SQero #uC más podemos hacer mi seJoraR SAGn #ueda algo #ue hacer -in decir más la reina murmur> en una lengua e a contradecir a su reina. Lo #ue ella hacía era invocar un poder antiguo el mismo #ue Lo"i había usado el día en #ue dio a lu& a su pe#ueJo Eiliv cuando tom> parte de la energía vital de $hor al encontrarse %alto de %uer&as. +rigga iba a darle su %uer&a vital a la criatura pero al mismo tiempo su magia reconstruiría el campo energCtico #ue la envolvía. acer ambas cosas simultáneamente re#uería demasiado es%uer&o. La reina madre podría estar en peligro tambiCn pero en ese momento a la o!ia&ul no le importaba nada más #ue salvar a sus hi!os. Así dos de los sanadores se encargarían de absorber la energía regada en Lo"i mientras los otros dos lo mantenían estable. Entre #ue todo ocurría el hechicero volvi> a ser consciente entre sueJos. -e vio a sí mismo en mitad de una planicie desolada no había más color #ue el plomo por donde #uiera #ue mirase un aura densa se percibía rondando y el aire mismo pesaba. Fe pronto una mano pe#ueJa tom> su iuierda
cosa #ue lo hi&o mirar hacia aba!o' Ahí la vio. 5na niJa de no más de cinco aJos con el cabello negro suelto y desparramado cubriendo parte de su rostro el cual tenía al&ado para verlo. -us o!os eran del color de los de Eiliv una me&cla de a&ul y verde aun#ue le pareci> ver por %racciones de segundo un destello ro!i&o cubrirlos. SMe gusta a#uí papi. Qodemos #uedarnosR La tierna vo& de a#uella niJa lo llam> papi. Entonces' Mi hija… &s mi hija… La dicha se instal> en el pecho del o!iverde mostrándose pronto en su rostro enternecido. -in embargo se sinti> curioso ante la en de su princesa. -e agach> para preguntarle: SQ$e gusta este sitioR Está un poco solitario y parece muerto Qno creesR S le sonri> SEn casa todo es brillante todo está vivo. Además a papá $hor y tu hermano Eiliv no les gustará un lugar tan aburrido como este Sero me gusta La niJa insisti> al tiempo #ue el cielo se estremecía entre relámpagos de tonalidad verde y el viento removía el polvo del suelo... ;o no era polvo eran ceni&as. Lo"i se in#uiet> mirando a su alrededor y luego a su pe#ueJa. (usto en ese momento escuch> un murmullo casi imperceptible. )apá 0o1i! que-o jugar… >perate… Era Eiliv. I no solo pudo sentir la presencia de su hi!o sino tambiCn la de $hor. Estaban llamándolo de vuelta. %0os sientes! 0o1i( &stán aqu"! por ti… +rigga le transmiti> entre pensamientos segura de #ue la escucharía. . El temor de $hor podía palparse en el aire pero trataba de mantener una buena actitud para su pe#ueJo Eiliv #uien seguía con sus manos recargadas sobre la puerta y acercando sus oídos por si algGn ruido surgía. Eiliv era muy listo y aun#ue sabía #ue su padre rubio estaba preocupado Cl no lo estaba tanto... ;o sentía nada amena&ador. SQapá $horR Slo llam> seJalando hacia el cuarto de curaciones El Fios del $rueno casi con ternura not> #ue su pe#ueJo le sonreía. Sapá Lo"i te escucha Eiliv Sdecía con una esperan&a D#ue no sabía de d>nde se srcinaba I #ui&á por a&ares del destino $hor sinti> un pincha&o en el cora&>n aun#ue era un pincha&o de esos #ue te dan cuando presientes algo. -u anillo de bodas empe&> a brillar sin #ue se diera cuenta. Eso nunca había sucedido. SLo"i...
El n>rdico se de!> invadir por ese brillo sintiendo lo #ue pasaba. ;o lo veía ob!etivamente pero algo dentro suyo le avisaba #ue no tenía por #uC tener miedo. Oio un rostro una pe#ueJa corriendo' En seguida $hor al&> el rostro y volvi> a gritar contra la puerta. SULKZW@ UE-$KI K;$WTK@ UEWLWO $AMBW;@ Sa pesar de no saber #uC hacer podía creer #ue los dioses estaban dándole bendici>n de seguir !untos SUE-$KI AP5[ *E5E*FALK@ UI ;AFA ME ;5E-$*K A*\ MKOE*ME A-$A ;K -ABE* P5E ;5E-$*K W(K E-$\ BWE;@ ULKZW W(K E-$A*\ BWE;@ . El pensamiento de +rigga lleg> como un eco suave via!ando en el aire al mismo tiempo #ue Lo"i notaba el brillo dorado de su anillo de bodas. La sensaci>n inmediata #ue cubri> su pecho %ue de %ortale&a y esperan&a. Era $hor su esencia buscándolo. A#uello con%ort> al hechicero. SMamá +rigga Sdi!o la niJa sorprendiendo a Lo"i pero asintiendo S;o podemos #uedarnos mi pe#ueJa princesa Sle tom> del rostro con ambas manos como $hor hacía con Cl SFebemos volver. Mamá +rigga $hor y Eiliv nos esperan La niJa al&> la mirada al cielo #ue de ve& en ve& era perturbado por a#uella tormenta elCctrica. Los rugidos no la asustaban le eran curiosos solamente. SOamos a casa A#uella petici>n acompaJada de una dulce mirada hi&o sonreír al o!iverde con alivio. -e acerc> a besar la %rente de su hi!a se puso de pie y tomando su delgada mano ambos se desvanecieron entre un resplandor dorado. En la sala de curaciones los cuatro ancianos %or&aban sus dones lo más #ue podían al igual #ue +rigga. (usto las %uer&as parecían comen&ar a %altarle a la reina cuando ante ella y los ancianos el cuerpo del hechicero se rode> de un aura dorada. Festell> y se apag> en segundos y el semblante de Lo"i se %ue suavi&ando lentamente. Entonces la reina lo sinti>. La capa de energía #ue recubría el %eto estaba reconstruida y el bebC a salvo igual #ue Lo"i lo estaría. Aliviada +rigga ces> de su magia aun#ue tambale> un poco. 5no de los sanadores estuvo a punto de de!ar su labor para socorrerla pero la rubia se lo impidi> argumentando #ue si rompían el balance mientras el Nu!o de energía continuaba sería contraproducente. Así Madre de $odo busc> recuperar %uer&as sentándose en un ban#uillo de madera cercano dedicándose a mirar a su hi!o y sonreír suavemente. &s hermosa… -í había logrado ver una imagen %uga& de su nieta. as> un rato antes de #ue los ancianos terminaran. El tiempo su?ciente para #ue +rigga se recuperara y pudiera usar de nuevo el lector de almas. Oolvi> a revisar a Lo"i encontrando todo en orden aun#ue claro el hechicero había su%rido un desgaste %ísico y energCtico brutal por lo #ue
tardaría unos días en recuperar la conciencia. ero al menos Cl y la niJa estaban %uera de había #ue trasladarlo a un cuarto ad!unto y por supuesto darle noticias a su hi!o mayor #uien debería estar con los nervios destro&ados. . $hor había de!ado su %rente pegada a la puerta orando por #ue todo saliera bien por oír al menos una respuesta del otro lado. Eiliv seguía recargado en sus bra&os esperando por lo mismo y notando #ue su padre rubio estaba nervioso. SUAh@ Uapá@ +uera pe,igro no pe,igro D%uera de peligro Sdi!o con determinaci>n para #ue $hor pudiera de!ar de preocuparse El n>rdico mir> con ternura a su hi!o abra&ándolo con amor paternal sentándose en las bancas de madera %rente al cuarto de sanaci>n. -u sorti!a de matrimonio ya no brillaba pero no se había perdido la conen mística entre ellos. Ahora mismo el rubio solo deseaba escuchar la vo& de su esposo #ue le di!era #ue todo estaba bien y #ue su hi!o no corría riesgos. . En uno de los cuartos destinados a la convalecencia Lo"i yacía tendido cubierto por ropas limpias y una sábana blanca. -umido en la inconciencia había de!ado de soJar o ver atisbos de visiones no tan irreales. -u semblante seguía pálido pero al menos ese rictus de tortura de antes había desaparecido ahora dormitaba con alivio. Los ancianos se retiraron a su estancia donde estudiaban con!uros y escribían sus bitácoras mientras +rigga recuperaba el porte y en!ugaba su rostro para re%rescarse. abiendo visto al hechicero un momento la reina #uit> el candado mágico y abri> la puerta encontrando a $hor sentado en a#uellas bancas con Eiliv en su rega&o. Madre de $odo sonri> cansinamente al ver #ue su hi!o se acercaba raudo con la interrogante en su mirada celeste. Suedes estar tran#uilo. Lo"i y la pe#ueJa están a salvo +rigga esper> por la reacci>n de $hor al revelarle #ue tendría una hi!a. . El sonido de las puertas abiertas %ue como el Oalhalla para $hor #uien en seguida corri> con Eiliv en bra&os hacia su madre paseando sus &a?ros con esa duda #ue lo asaltaba horas atrás. -u pecho pudo sentir alivio cuando su madre le in%orm> la situaci>n. $anto alivio cay> en sus hombros #ue $hor pens> #ue lloraría ahí mismo pero contuvo su emoci>n lo su?ciente para poder pasar. La palabra hija no lleg> a oídos del n>rdico su atenci>n se había centrado en #ue Lo"i ya estaba %uera de peligro. SMadre Qpuedo podemos...R Spregunt> con un nudo en la garganta y la reina solo asinti>
Sero sC paciente hi!o. Lo"i aGn está dCbil y necesita descansar El o!ia&ul prometi> #ue no haría nada precipitado y entr> con su hi!o al ala de curaci>n. Lo primero #ue atraves> su mirada %ue la cama donde dormía su esposo. $hor oh con su adolorido pecho #uería llorar de %elicidad más opt> por acercarse y sentarse a lado del lecho mientras Eiliv tomaba las sábanas y sonreía hacia su papá hechicero. SQapá Lo"i duermeR S-í campe>n. Está cansado SQAbra&o a papá Lo"iR El n>rdico sonri> con ternura y carg> a su hi!o hacia el hechicero solo para #ue recostara al pe#ueJo en su pecho y pudiera estar cerca de su padre. . -u sosegado descanso se vio ligeramente a%ectado cuando una calide& %amiliar cobi!> su pecho. Lo"i no tenía indicios de ir a despertar todavía pero su aura mágica percibi> la de Eiliv abra&ándolo. 5na gran pa& rode> al o!iverde al sentirse con%ortado por su primogCnito lo mismo #ue por la presencia de $hor. -us dos soles estaban ahí para velar por Cl y eso era su?ciente ra&>n para con?ar en #ue todo iría bien. . $hor había tomado una mano del hechicero tratando de no apretarla con %uer&a y besando el dorso varias veces mientras mantenía la cabe&a ba!a para seguir re&ando a los dioses. 0o1i... &sto* aqu"… SEiliv dC!ame hablar un poco con papá Lo"i QsíR Fi!o $hor a lo #ue su hi!o lo mir> indeciso pues no #uería separarse de su padre pero ?nalmente selade!> cargar Ahí en las rubiomuy parasuave #ue Cste pudiera acercarse más a cabecera. el piernas n>rdico del le habl> a su esposo. SAmor mío lamento no haber llegado antes a#uí para apoyarte. $uve miedo Lo"i. Q-abesR Me sigue aterrando #ue algo te llegue a pasar o al bebC a nuestra %amilia Sla vo& de $hor se hi&o entrecortada S... ;o lo soportaría . Fe nuevo su campo energCtico vibraba aun#ue esta ve& no era Eiliv #uien producía el e%ecto sino $hor. Lo"i podía darse cuenta aun entre el sueJo del pesar #ue su esposo todavía padecía. ubiera deseado abrir los o!os decirle #ue de!ara de su%rir y torturarse seguían !untos y eso era lo #ue importaba. $hor…
ronunci> su nombre en el pensamiento. $al ve& lograra transmitirle calma a travCs de su conen. . La misma conen #ui&á %ue lo #ue hi&o a $hor actuar por inercia. Acerc> su %rente para !untarla a la del hechicero y besarle lentamente los labios. S$e amo Lo"i -usurr> contra sus labios #uedándose cerca para oír su respiraci>n y oír los latidos y tambiCn para ba!ar a besar su vientre donde su bebC estaba segura. SI a ti tambiCn te amo . $al ve& si Lo"i hubiera visto desde %uera de su cuerpo y estando en otra situaci>n menos delicada se habría burlado de la escena: el apuesto príncipe dándole un beso de amor verdadero a su princesa para despertarla del sueJo eterno. -in embargo la sensaci>n de a#uellos labios siendo colocados cuidadosamente sobre los suyos le tra!o descanso y serenidad pues en a#uel suave contacto via!aba un cGmulo de emociones cálidas llenas de esperan&a. $ambién te amo! $hor… or supuesto #ue la pe#ueJa dentro del vientre del pelinegro se removi> despacio al percibir a su padre rubio. El riesgo había pasado y poco a poco todo volvía a la normalidad. 5na semana despuCs... Fespert> poco despuCs del mediodía. AGn se sentía un poco aturdido y agotado pero al menos ya no había dolor ni angustia solo la sensaci>n de haberse perdido por un largo tiempo en el limbo del espacio. Lo primero #ue vio %ue a $hor dormitando en el sill>n a su iuierda. -e veía cansado y c>mo no si se pas> todos esos días metido ahí. Lo"i sonri> muy apenas y antes de llamarlo para #ue despertara #uiso tocar su vientre. 5n inmenso alivio cobi!> su pecho al saber #ue su hi!a estaba ahí segura creciendo y a%errándose a la vida. -olt> un cansino suspiro cerrando los o!os por un momento agradeciendo a los dioses la oportunidad #ue le habían brindado y por supuesto tambiCn a su madre. Fe no ser por ella la historia sería muy di%erente. Entonces !usto cuando el hechicero iba a llamarlo $hor pareci> regresar de su breve letargo. ;o hacía %alta decir #ue una ve& en%ocara ese par de esmeraldas cansadas pero cálidas el n>rdico brinc> del sill>n para ir !unto a su esposo y comprobar era un sueJoyverlo despierto. onvencido de #ue era real $hor colm> de si besos el rostro labios de Lo"i al igual #ue su vientre derramando algunas lágrimas de alivio y %elicidad. Luego del momento e%usivo +rigga lo revis> permitiCndole volver a su alcoba para continuar su recuperaci>n en un ambiente más c>modo. Estar rodeado de su %amilia ayudaría su pronta sanaci>n.
+ue #ue el n>rdico lo llev> de vuelta con sumo cuidado. laro cargándolo cual princesa por todos los pasillos pero daba igual ser visto de a#uella %orma por los siervos y guardias #uienes a su paso les dedicaban sendas reverencias. Al llegar a sus aposentos $hor lo deposit> suavemente sobre la cama. Lo"i aspir> pro%undo recargando la cabe&a en la caoba y mirando a su esposo sentarse %rente a Cl. SIa #uita esa cara Le brome> al tiempo #ue colocaba su mano iuierda sobre la otra del rubio apretándola despacio tratando de disipar la preocupaci>n #ue aun notaba presente en su rostro. . Esos días #ue Lo"i estuvo inconsciente $hor no había soltado su mano se le había olvidado el apetito y se #uedaba con Eiliv ahí. Fe no ser por su madre seguro habría muerto del cansancio o insomnio. ;i se diga la dramática y eu%>rica escena #ue hi&o cuando el o!!iverde despert>. Luego de llevarlo al cuarto y asegurarse de #ue nada lo perturbaba $hor se #uit> de encima las pesadas %undas y tGnicas. -entía su cuerpo algo cortado pero estaba e en la suya y besarla varias veces ba!ando el rostro hacia el vientre del hechicero. Lo palp> con sus dos enormes manos sin de!ar de tener el cora&>n a mil por hora. Aun#ue Lo"i lo tran#uili&ara $hor era muy sobreprotector y a#uel %ue el mayor susto de su vida. SEstaba aterrado Lo"i . ;otar ese miedo #ue aun via!aba por cada acci>n y palabra del rubio lo conmovi> tanto #ue sus esmeraldas se cristali&aron más contuvo el correr de las lágrimas. S;o solo tG Sdi!o casi en susurro el a&abache acariciando la me!illa del n>rdico Suando comencC a sentir esos horribles dolores creí #ue... S desvi> la mirada %runciendo el ceJo S-i madre no hubiera llegado a tiempo... Scall> apretando los labios y cerrando los o!os . $ampoco $hor #uería hacerlo más pesado para los dos. Es decir no era algo #ue se olvidara %ácil pero eso no impedía dis%rutar #ue estaban vivos Uvivos@ En seguida el rubio tom> del rostro a Lo"i y lo bes> con %uer&a de esos besos #ue eran desesperados y #ue le indicaban #ue no se separaría de Cl por nada en el mundo por#ue cuando llegara el momento el n>rdico partiría al Oalhalla !unto a su consorte. omo debía ser. Sero parece #ue somos del agrado de los dioses Srespondi> tomando su barbilla y mirándolo ?!amente SEstos días me recordaron la %ortuna #ue nos regalan diario al poder seguir !untos... QEstás agotadoR Kh seguro lo estás
ah solo #uería #ue supieras #ue... Estoy a#uí y nada me hará moverme de tu lado Lo"i . El hechicero correspondi> a#uel beso necesitado con la misma intensidad. -entía como si no hubiera probado esos labios por milenios y no solo por una semana. omo si en realidad hubiera muerto y ese beso %uerte y marcado %uera el resucitar a la vida. Al separarse respir> contra los labios de $hor convenciCndose por ?n #ue lo malo había #uedado atrás. Lo mir> con anhelo escuchando sus palabras. Oaya #ue los dioses eran condescendientes y pese a ello Lo"i no podía evitar sentir ligera in#uietud por#ue #uiCn les aseguraba #ue despuCs el destino no les cobraría tanta dicha. ero pre%ería no pensar de más en eso. Lo #ue importaba era el a#uí y el ahora el estar !untos todavía. SLo estoy Sasinti> Sero si se te ocurre salir de esta habitaci>n creyendo #ue necesito estar solo voy a matarte. $e necesito a#uí conmigo Sle sonri> despacio entre el cansancio dándole un beso más suave pero pro%undo por igual . $hor sonri> de lado casi %ascinado por la manera en #ue Lo"i podía seguir siendo Cl mismo incluso en momentos donde nadie habría dicho nada. Lo"i tenía esa elocuencia natural #ue siempre le había encantado al n>rdico. SI me tienes Srespondi> ba!o siendo callado por otro beso de su consorte El rubio pos> su mano iuierda de manera protectora en el vientre del hechicero sabiendo #ue su bebC seguía ahí dando seJales de vida... Así #ue casi llora al notar una patada chocando contra su palma. S$ienes mucha vida por delante Seso %ue dirigido a su bebC ;o $hor aGn no se acordaba #ue su madre le di!o #ue tendrían una hi!a. . Lo"i sonri> amplio sintiendo esa patada dentro de su vientre. Muy vigorosa aun#ue sin llegar a lastimar. Sarece #ue tendremos una niJa muy %uerte Sdi!o mirándolo con travesura para ver la reacci>n de su esposo . SEso sin dudarlo será una ni' $hor se cort> en seguida abriendo párpados y boca al mismo tiempo mirando estupe%acto a Lo"i. QKy> bienR Q$endrían una una una...R SQerd>nR reí oír #ue tendremos una... QniJaR .
*ecuper> su pose maliciosa notando la estupe%acci>n en la cara de $hor con tal noticia. SEso di!e Slo ret> un poco antes de recargarse me!or en la cabecera posando sus esmeraldas y mano derecha sobre su vientre SLa vi... Es hermosa . Ahora la sorpresa del n>rdico %ue mayGscula. -u #ui!ada podría haber tocado el piso. 5na niJa... SQLa visteR ero... Qc>moR . Suando estuve inconsciente mientras madre y los ancianos con!uraban para salvarnos Scont> S+ue... %ue una visi>n más #ue solo un sueJo. Estaba en un lugar algo tCtrico y de pronto ella apareci> tomando mi mano... Me llam> papi Ssonri> ante el recuerdo SLo sentí era nuestra hi!a Fevolvi> la mirada hacia $hor mostrándose tran#uilo y a gusto con la idea de tener una linda princesa en casa. . El n>rdico no salía de su sorpresa. Estaba %eli& claro sin dudas. UEs #ue tendría una hi!a@ Bueno... la emoci>n de saber #ue sería padre por segunda ve& %ue enorme cuando Lo"i y Cl se enteraron pero ahora sabían #ue venía en camino una hermosa niJa. I eso le derriti> el cora&>n al bonach>n rubio. S$endremos una hi!a Srepiti> con tono sorprendido pero contento S5na niJa... $hor volvi> a mirar a Lo"i sonriendo con alegría olvidando por un segundo todo el temor #ue albergaba hace unos días. Lo acerc> de nuevo y lo bes> más calmado. SEn serio los dioses nos están sonriendo . Wgual #ue $hor Lo"i se de!> contagiar del ambiente %estivo. Ia habían tenido su?ciente cuota de incertidumbre. Así recibi> ese beso dichoso por notar la aceptaci>n de $hor a su pe#ueJa. S*uego por#ue no se olviden de hacerlo Mencion> entre un lánguido suspiro contactando su %rente con la del rubio al tiempo #ue un leve sobresalto le hi&o casi brincar de la cama. SEiliv' $ráelo #uiero verlo . Fe la emoci>n $hor había tardado mucho en reaccionar pero ?nalmente se movili&> para ir por su hi!o. S;o tardo
orri> por las puertas contiguas #ue conectaban con la habitaci>n de su bebC. Al llegar Eiliv estaba !ugando en el suelo con ilda y sus !uguetes de madera. SOen a#uí travieso Fi!o cargándolo y haciCndole cos#uillas en el est>mago. Eiliv solo se ri> y !al> un poco la barba de su padre. SAh tran#uilo pe#ueJo vamos con papá Lo"i *egresando el niJo se revolvía en el rega&o del n>rdico para saltar hasta la cama con su padre. $hor lo de!> gatear sobre las sábanas y el pe#ueJo pronto estuvo al lado del hechicero sonriendo y abra&ándolo tanto como sus pe#ueJos bra&os le permitían. SQapá me!orR . Al ver #ue $hor regresaba con su pe#ueJo en bra&os totalmente impaciente por estar cerca suyo el cora&>n de Lo"i se rompi> y volvi> a unirse. Lo recibi> en un abra&o tan sobrecogedor #ue el o!iverde crey> empe&aría a llorar ocCanos sin poder detenerse. abía tenido tanto miedo de no volver a tener a su hi!o entre sus bra&os terror de #ue su vida se apagara así sin más sin darle la oportunidad de verlo crecer. -in poder decirle te amo una ve& más antes de desearle buenas noches. $ambiCn su miedo recaía en $hor en separarse de su lado tan repentinamente no pudiendo cumplir su voto de partir al Oalhalla !untos en el mismo barco. Ahora podía decir con certe&a #ue sí los dioses le compensaban por tanto dolor y su%rimiento en el pasado. S-í mi pe#ueJo sol. apá está bien ahora Sle di!o en un susurro entrecortado besando su cabecita risada S$e e delicadamente contra su pecho ba!ando el rostro para ocultar un par de ríos salinos . Eiliv con la inocencia natural de su edad solo mir> sonriendo a su padre y al&> sus bra&os con emoci>n mostrando sus dos dientes delanteros Dlos Gnicos #ue tenía. SE mirando curioso el vientre abultado de Lo"i SQapáR QBebC a#uíR $hor se sent> a lado de su hi!o igual de %eli& como el propio Lo"i. ;o contenía la alegría por ver a sus dos tesoros ,tres, estar !untos. PuC bella escena. SEs tu hermanita Eiliv SQermanaR
S-í Qla #uieres oírR Eiliv agit> los bra&os y asinti> varias veces con la cabe&a riendo. . El hechicero calm> su llanto para no acongo!ar a su hi!o más devolviCndole una sonrisa dichosa asintiendo a la pregunta. Fe!> #ue $hor le ilustrara y acto seguido Eiliv indicándole #ue recargara su rostro sobre vientre. laroacerc> #ue el ape#ueJo príncipe se acomod> sobre Cl como si losu abra&ara guardando silencio al instante SQLa escuchasR Sindag> en tono ba!o acariciando la cabecita rubia de su hi!o . $hor mir> c>mplice a Lo"i cargando un poco a Eiliv para #ue alcan&ara la parte más alta del vientre del hechicero. El pe#ueJo príncipe trataba de agudi&ar el oído y escuchar algo... ;o oy> nada al momento pero entonces un sonido de un cora&>n le indic> #ue su hermanita estaba ahí a centímetros. Eiliv se concentr> más y oy> latidos rápidos muy rápidos. Levant> su cabe&a para mirar a sus dos padres. SUermana@ Sgrit> emocionado riCndose . Smhmhm si Eiliv. Ahí está Lo"i acarici> una de las sonrosadas me!illas de su hi!o mirándolo amoroso igual #ue mir> a $hor. SQ-abesR $u padre cuid> de mí siempre cuando Cramos niJos. Quidarás ahora tG de ellaR . La respuesta era obvia. SU-iiiiiii@ Eiliv grit> eu%>rico brincando en la cama. laro con cuidado de no golpearse o golpear a alguno de sus padres. ero $hor no se #ued> #uieto tampoco y lo carg> para hacerle cos#uillas recostándose a lado de su consorte. SEso hacen los hermanos Smir> de reo!o al hechicero Suidar a los menores. QOerdad Lo"iR . Lo"i se complaci> con la e%usiva respuesta de su hi!o. laro #ue no dudaba #ue así sería pero deseaba escuchar esa con?rmaci>n. $eniendo en su memoria la visi>n de su pe#ueJa podía imaginarse ya c>mo sería verlos !ugar correr y crecer !untos. elear seguramente tambiCn pero
tanto Cl como $hor se asegurarían de #ue esas #uerellas entre sus hi!os distaran un universo de ser como lo %ueron las suyas en su momento. Fevolvi> la mirada c>mplice al n>rdico acercándose despacio en busca de un abra&o para poder estar lo más cerca posible de sus dos soles. Sm por supuesto. 5n hermano mayor siempre debe velar por el pe#ueJo Sle di!o a Eiliv Sero el menor tiene la responsabilidad de sacar de sus casillas al otro de ve& en cuando Smir> de nuevo a $hor algo presuntuoso SEl e#uilibrio es esencial despuCs de todo . SQAh síR ues el hermano mayor tiene la prioridad de' A#uí $hor se acerc> lentamente al rostro de Lo"i pero sin denotar intenciones secundarias. ;o podía por#ue el hechicero tenía tatuada la palabra: descanso en toda la %rente. ero continu>: Somo decía la prioridad de darle a su pe#ueJo hermano toda la %elicidad #ue se merece Eiliv solo los mir> algo con%undido... QPuC no estaban hablando de Cl y su hermanaR . Ah claro. Apenas le mostraba un poco de su recuperado sentido malicioso y ya #uería con?rmar #ue no se hubiera estropeado en todos esos días sin usarlo. Bien pues Lo"i tuvo #ue recalcarle con solo una mirada #ue ni si#uiera lo pensara. A#uello no había sido un malestar sin consecuencias severas casi pierden a su bebC y de paso Cl casi se le adelanta en el via!e al descanso eterno. Las indicaciones de su madre %ueron claras: FE-A;-K $K$AL. Así sería al menos por un mes. Febían estar seguros de #ue no sucedería nuevamente. SI debo decir #ue lo has hecho bastante bien... =ermano abl> despacio volviendo a llamarlo de esa %orma luego de tanto de no haberlo hecho y además aJadiendo una sonrisa de medio lado. asi al instante not> de reo!o #ue Eiliv los miraba sin entender nada cosa #ue lo enterneci>. S$e en por estar... besándose. 5gh.
-í incluso Eiliv con lo pe#ueJo #ue era tenía ese típico sentimiento de eeB1! comGn para cual#uier hi!o #ue nota mucho amor entre sus padres. Uero hey@ Era mil veces me!or verlos besarse a no hacerlo. $hor al&> una ce!a y sonri>. SMe alaga #ue lo digas hermano Srespondi> besando sus manos S;o podía pedir me!or compaJero . Fe acuerdo un beso puro y casto no podía negárselo. FespuCs de todo haber estado al borde de la muerte Den serio esta ve& era ra&>n su?ciente para #uerer percibir #ue seguía respirando y #uC me!or #ue con esos besos llenos de ternura #ue $hor le pro%ería. I hablando de besos al menos Eiliv ya no se ponía tan celoso por verlos en actitud romántica. Al parecer ya solo le causaba ligera renuencia por de!arlo de lado un momento. Eso ya era un avance. S$al ve& yo sí pero no tuve de otra Sregres> en broma sonriendo y dándole un beso %uga& al n>rdico S$e amo Sdi!o contra sus labios . El rubio hi&o un gesto de o%ensa ?ngido claro. ;ada en el mundo lo alegraba más #ue ver a su esposo !unto a Cl y sus dos hi!os sanos y a salvo. S$ambiCn yo Lo"i Fi!o sin resistirse a darle otro beso. I le hubiera gustado seguir besando a su consorte pero Eiliv !aloneo su cabello reclamando atenci>n. Kh sí les daba espacio pero no tanto. SKh está bien ya entendí. Eiliv #uiero besar a papá Lo"i por %avor ero el pe#ueJo hi&o un puchero y se cru&> de bra&os. ;o nada era hora de su baJo además. S;o pongas esa cara... Kh de acuerdo. Ah mi -eJor del EngaJo me temo #ue nuestro príncipe está e a Eiliv con %acilidad y le dio un beso en la me!illa a lo #ue su primogCnito solo rio alargando sus bra&os hacia Lo"i por#ue lo emo el n>rdico lidiaba con la electricidad en contra suya pero debía mantenerse !usto en su lugar. Así #ue aguardaría en la cama leyendo un libro de historias antiguas. S;o de!es tan mal a papá Sle di!o a Eiliv con ligero sadismo paterno . $hor sonri> de pensando en dioses #ue la %ortuna sonreía diario. -eguía sin entender el lado motivo de #ue los le dieranleun susto atan enorme como ese pero son dioses. Ellos tienen un motivo para todo como Cl y Lo"i. SOamos campe>n arg> a su pe#ueJo hacia el cuarto de baJo deteniCndose un segundo en el marco de la puerta para contemplar a su consorte. Ah igual de reluciente como siempre. Se pensado en renovar nuestros votos... ronto. Pui&á despuCs de #ue nuestra hi!a na&ca Scoment> con naturalidad . abía con!urado ya un libro de pasta marr>n #ue ahora ho!eaba con serenidad. abía mencionar #ue estaba %altando a una de las varias indicaciones #ue diera su madre la cual consistía en no usar su magia ni si#uiera para con!uros sencillos como ese. $al ve& el en. Así #ue si +rigga lo hubiera visto aparecer un libro ya la tendría sermoneándolo. -onri> para sí prometiCndose me!or usar a $hor para traerle las cosas. Apenas empe&> a leer sobre la cruenta batalla entre Bor padre de Kdín y el rey de los El%os Kscuros cuando el rubio le comunic> a#uello. Lo"i arrug> el ceJo plasmando una en de %also absurdo. SQI #uC te hace pensar #ue volverC a decirte #ue siR Sal&> la mirada ?!ándola en los &a?ros de su esposo . El n>rdico contuvo una risa genuina. Lo"i podía tapi&ar el ambiente con una tensi>n c>moda. -e gir> hacia el hechicero y asinti> como una reverencia con su hi!o en un solo bra&o. Sor#ue mi -eJor del EngaJo estC a gusto o no ya me ha dicho #ue s" en el pasado. I pienso hacer #ue no cambie de parecer sobre nuestro matrimonio Sdi!o sonriendo SAdemás nadie me #uitaría el amor #ue siento por usted y seguirC cote!ándolo a diario para convencerlo . El o!iverdeentrecerrando enarc> una ce!a ?ngiendo prepotencia más luego tambiCn la mirada y recargando la cabe&a en lasonri> madera haciendo #ue su rostro se al&ara por inercia. SMe agrada su empeJo -eJor del $rueno. Oeamos #uC tan digno es de conservar el s" #ue le he dado
. Sues no #uiero sonar presuntuoso pero tengo talento en esto Le guiJ> un o!o a Lo"i haciendo una reverencia hasta #ue Eiliv volvi> a !alar su barba. Ia no esperaría más su baJo. S;uestro príncipe y yo le deseamos un placentero descanso Sdi!o abriendo laLo"i. puerta y solo un poco de irseIa... SMe #uesolo sigas a#uí ;ada megirando puede dar mayorantes %elicidad... yaalegra regreso unos minutos... $e amo. Q-abes eso verdadR . Ampli> su sonrisa emitiendo un #uedo de!e de risa viendo a#uella e #ue ya era su?ciente de miel y cosas de adultos. Lo"i dio su permiso con una leve inclinaci>n de cabe&a para #ue %ueran dentro del cuarto de baJo aun#ue $hor se detuvo un poco más para decirle a#uello. Lo"i percibi> su sentir en las palabras lo #ue le hi&o mostrarse cálido. SLo sC Sa?rm> S$e prometo estar a#uí cuando vuelvas -onri> suavemente diciCndole también te amo con la mirada. El hechicero tom> un momento pausando su lectura de!ando #ue pensamientos lo envolvieran. abían sido tantas cosas tantos sucesos Dalgunos inesperados %or!ando su nueva vida #ue a veces se preguntaba si los dioses en verdad le sonreían como $hor decía. -i el destino era benevolente y ale!aba de Cl sus %auces y garras permitiCndole avan&ar entre la dicha gloriosa #ue ahora vislumbraba. K si por el contrario solo hacía como #ue no miraba para despuCs recordarle con %uria #ue no estaba libre de sus cadenas. ero no' Febía apartar de su mente cual#uier aspecto negativo #ue lo inclinara a de!arse llevar por %antasmas #ue no tenían cabida en su presente. ;o tenía caso preocuparse por los designios del %uturo tan solo debía tratar de creer #ue todo iría bien. $enía a $hor a Eiliv a su pe#ueJa y claro tambiCn tenía su vida y eso era más #ue su?ciente para %ortalecer su con?an&a. %.%.%.%. %.%.%.% Notas fnales: Esperamos no haberlos hecho su%rir demasiado pero como
entauro y yo decimos el drama le da sabor !e!e!e'Bien pues el siguiente capítulo aGn no tiene %echa para ser roleado así #ue es posible #ue tardemosroleando en volveruncon actuali&aci>n'eeeeroooo la buena #ue estamos iddles2orth o2o Del tercero en nuestranoticia lista es igual tardará en ver la lu& pero seguro les gustará '-aludos de parte de ambas roleadoras cuídense y nos estamos viendo sayonara' Hielo y Trueno: Eterno destino
By: LadyMischievous07 El tiempo había pasado casi letárgico desde su regreso a Asgard. La libertad de nuevo se abría delante de sus pies como una nueva oportunidad y !unto con ella Lo"i obtuvo algo más. Algo #ue $hor esperaba poder o%recerle como una %orma de resarcir todo el dolor y la agonía algo con #ue mitigar tanto su%rimiento y de!ar atrás el pasado para comen&ar de nuevo' (untos. $hor ) Lo"i. *ated: +iction M , -panish , *omance , $hor Lo"i , hapters: /7 , ords: /77111 , *evie2s: 31 , +avs: 44 , +ollo2s: /7 , 5pdated: May 67 , ublished: -ep 40 60/8, -tatus: omplete , id: /0767891 , V rev 17. Chapter 17
ANmo se va desarrollando. ersonalmente no me agrada de!ar cosas incompletas al menos en mis traba!os en solitario es por eso #ue cuando he publicado más de un capítulo K- D#ue han sido pocas veces pre?ero terminar la historia y ponerla a su disposici>n una ve& estC completa pues no me siento capa& de ir actuali&ando sin #ue tenga #ue hacer correcciones o adiciones segGn se vaya %ormando la idea. Iendo al punto lamentablemente esta historia ha #uedado estancada. omo saben los #ue la han seguido desde el primer capítulo y más aGn han leído las ;K$A- esto es o era parte de un rol por lo tanto no solo es creaci>n mía. Fesde la Gltima actuali&aci>n el rol no ha tenido actividad como lo notan ha sido casi un aJo #ue no he publicado nada de ielo y $rueno y realmente no hay una certe&a de #ue se continGe. `(usti?caci>n` en parte tal ve& se está roleando un iddles2orth desde esas %echas #ue igual va muy lento y por tiempos de la otra roler y demás cuestiones #ue no detallarC se ha ido atrasando in?nitamente. Wgnoro si ese rol tendrá un cierre ignoro si despuCs retomaremos el $hor"i pero si se llega a un lado con eso ya tendrán noticias. Fe no continuarse los rol?cs verC si puedo tomar ba!o mi mando la historia y seguirla por mi cuenta cosa #ue no prometo pues el traba!o y estar escribiendo cosas mías me roba tiempo e ideas. or el momento la historia #ueda en suspensi>n. Lamento tener #ue hacer este aviso pero al menos para mí era importante #ue ustedes como lectores y #ue han comentado o esperado leer aun#ue no comenten tuvieran noticias del por #uC no se ha continuado desde hace tanto tiempo. La `buena noticia` pronto publicarC un ?c /00 mío. Estoy terminando así #ue tendrán a lady mischievous de vuelta con sus divagues en solitario.
5n saludo a todos y cada uno espero comprendan el proceder y muchas gracias por haber seguido esta historia por sus revie2s o por estar pendientes aun#ue no comentaran. ual#uier decisi>n `positiva` #ue se tome al respecto lo leerán si ocurre. asta pronto y #ue el $hor"i los acompaJe ciao ciao.
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