February 6, 2023 | Author: Anonymous | Category: N/A
Download Harley - La Nueva Naturaleza de Los Mapas...
J. B. HARLEY
L A NUE NUEVA NATURALEZ NATU RALEZA A DE LOS MAPAS Ensayos Ens ayos sobre sobre la la histor his toria ia de la cartog ca rtografía rafía Compilación Pa u l L a
x t o n
Introducción J.. H J H.. A n d r e w s
FONDO DE CULTURA ECONÓMICA
Primera edición, 2005
Harlev, J. B. La nueva naturaleza de los mapas. Ensayos sobre la his toria histori a de la cartografí cartog rafía a / J. B. Harlev; Har lev; cornp. de Paul Laxton; introd. de J. H. Andrews; trad. de Leticia García Cor tés, Ju Juan an Carlos Rodrígue Rodríguez.— z.— México: Méx ico: f c e , 2005 398 pp.: ilus.; 23 x 17 cm — (Co lee lee.. Tez ontle) ont le) Tít ulo origina orig inall Th e Ne w Nature Natu re o f Maps. Essays in the History of Cartographv Cartographv ISBN 968-16-7531-2 1. Cartografía Cartog rafía — Histo ria 2. Mapas I. Laxto n, Paul, comp. II. Andrews, J. H., introd. III. García Cortés, Leticia, tr. IV. Rodríguez. Juan Carlos, tr. Y. Ser VI. t LC GA201.H37 GA201.H37
Dewey 526 H734n H734n
Títu lo original: The Netz Na ture o fMap s. Ess Essay ays s in th the e History History o f Cartographv D. R. O 2001, The Johns Hopkins University Press 2715 North Charles Street Baltimore, Marvland 21218-4363 www.press.jhu.edu
Comentarios y sugerencias sugerencias::
[email protected] www.fondodeculturaeconomica.com Tel. ( 5 5 ) 5227-4672 Fax Fa x (5 5) 5227-4694 D. R. © 2005, Fo n d o d e C u l t u r a E c o n ó m i c a Carretera Picacho-Ajusco, 227; 14200 México, D. F. Se prohíbe la reproducción total o parcial de esta obra — incluido inclu ido el e l diseño dise ño tipográfi tipog ráfico co y de portada— portad a— , sea cual fuere el medio, electrónico o mecánico, sin el consen timiento por escrito de l edito editor. r.
ISBN 968-16-7531-2 Impreso en México • Printed in Méx ico
I Textos Text os y cont context extos os en la interpretación de los primeros mapas * Los mapas antiguos son testigos escurridizos. Sin em bargo, ¿dónde estarían los historiadores sin ellos? J J.. H.
P a r r y ,
1976
H/ntre los numerosos tipos de documentos que por lo general utilizan los historiadores, los mapas son muy conocidos; sin embargo, no son tan bien comprendidos. Podríamos hacer una antología de afirmaciones que clasifi can a los mapas no sólo como “escurridizos” (adjetivo empleado por el dis tinguido historiador J. H. Parry), sino también como “peligrosos” o “no confiab les” .u .uL Los historiadores historiado res tienden tie nden a relegar los mapas, mapas, jun to con co n cua dros, fotografías y otras fuentes no verbales, a un tipo de evidencia de menor categoría que la palabra escritaJ Gran parte de la investigación y de los textos históricos se realiza sin recurrir sistemáticamente a los ma pas contemporáneos. Aún más, incluso cuando se admite que los mapas son so n documentos, se les les considera útiles principalmente principalm ente en pocas pocas cuestio c uestio nes históricas determinadas. Por ejemplo, se reconoce ampliamente que los mapas son valiosos para estudiar algunos temas dentro de la historia de los Estados Unidos, como los descubrimientos, las exploraciones, la * Este capítulo capítulo apareci apareció ó originalmente como “Introducción: textos y contextos en la interpre tación de los primeros mapas", en David Buisseret (ed.), From Sea Charts to Satellite Images: Interpreting Korth Am erica n Hisco Hiscory ry thr through ough Maps (Chica (Chica go, Unive Universitv rsitv o off Chi Chicago cago Press), 1990 1990,, pp. 3-15. Presenta un grupo de 12 ensayos sobre tipos específicos de mapas norteamericanos.
59
TEXTOS Y CONTEXTOS CONTE XTOS EN LA INTERPRETACIÓ INT ERPRETACIÓN N DE LOS PRIMEROS PRIMEROS MAPAS MAPAS
expansión territorial y la planeación de ciudades. Con mucha menor frecuencia se considera considera que ofrezcan cono conocimien cimiento to crucial para para el proceso de la historia social. Cuando un historiador toma un mapa, por lo general lo hace para responder a alguna pregunta relativamente limitada acerca de la ubicación o la topografía y, con menor frecuencia, para aclarar la historia cultural o los valores sociales de algún periodo o lugar especial. ¿Por qué han recibido este desprecio los mapas? Parte de la respuesta, como ya se dijo, radica en las actitudes de los historiadores. Escribir E scribir acerca de la historia de los mapas mapas per se se ha ha sido, en el mejor de los casos, un interés marginal de los principales historiadores; podemos preguntar: ¿cuándo fue la última vez que Th The e American Ame rican Histori- publicó un artículo sobre cartografía? No obstante, parte del cal Review publicó problema también radica en quienes se hacen llamar historiadores de la cartogra cart ografía fía.. A l describir des cribir la complejidad bibliográfica y técnica de los mapas, pa s, no han logrado comu nicar el co noc imie imiento nto de su naturaleza social. social. A la luz de estas tendencias, la respuesta a la pregunta ¿qué es un mapa? es el antecedente del cuestionamiento fundamental de los mapas como documentos históricos.
¿Imagen o texto? La percepción común de la naturaleza de los mapas es que son una imagen, una representación gráfica de algún aspecto del mundo real. Las definiciones que se pue pueden den encontrar en diccionarios y glosarios glosarios de cartografía lo confirman.2 El papel del mapa es presentar una manifestación concreta concr eta de un una a realidad geográfica den dentro tro de los límites de la lass técnicas de la topografía, de la habilidad del cartógrafo y del código de signos convencionales. Aunque los cartógrafos escriben acerca del arte lo mismo que de la ciencia del trazado de mapas, la ciencia ha ganado la competencia entre estas dos opciones) El resultado es que cuando los historiadores hacen una valoración de los mapas, sus estrategias interpretativas son determinadas por esta idea de lo que se dice que son los mapas. En nuestra cultura occidental, por lo menos desde la Ilustración, se ha definido a la cartografía 60
TEXTOS Y CONTEXTOS EN LA INTER INTERPRETACIÓN PRETACIÓN DE LOS PRIMEROS M MAPA APAS S
como una ciencia concreta. La premisa es que un mapa debe ofrecer una ventana transparente al mundo. Un buen mapa debe ser preciso. Cuando un mapa no representa la realidad de una manera adecuada sobre una escala esc ala concr concreta, eta, se hace acree acreedo dorr a una cali calificaci ficación ón negativa negativa.. Los mapas ssee clasifican según su correspondencia con la verdad topográfica. Se nos ha dicho que la imprecisión es un delito cartográfico. Este juicio de valor a menudo se traslada a la manera en que leemos los mapas antiguos. Promueve un tipo de interpretación en la que se sub rayan las manifestaciones de hechos o literales que hacen los mapas acer ca de una realidad empírica. Ya sea que se describa la ruta costera caribe ña de un navegador del siglo xix o los vestigios de alguna ciudad fantasma después de la explotación de una mina en el siglo xix, se juzga al mapa en términos de la ubicación de sus coordenadas, la forma de sus líneas o la confiabilidad de los accidentes del terreno medidos. Se usa única y exclu sivamente como un conjunto de hechos en la reconstrucción del pasado. De ning ninguna una manera eestoy stoy degradando degrad ando la aplica aplicación ción histórica de los map mapas. as. Gomo un índice de la ubicación de cosas, procesos y hechos del pasado, los los mapas son son la única fo forma rma de documentación.-JJbicar accion acciones es humanas en el espacio sigue siendo el mayor logro intelectual de los mapas como formas de conocimiento^ Sin embargo, hay una respuesta alternativa a la pregunta de qué es un mapa. Para los historiadores, una definición igualmente adecuada de un mapa es: “Una construcción social del mundo expresada a través del medio de la car cartogr tografía” afía” . Lejo Lejoss de fungir como una simple imagen de lla a naturaleza ser verdadera o falsa, los redescriben el mun do, al igualque quepuede cualquier otro documento, enmapas términos de relaciones y prácticas de poder, preferencias y prioridades culturales. Lo que leemos en un mapa está tan relacionado con un mundo social invisible y con la ideo logía como con los fenómenos vistos y medidos en el paisaje. Los mapas siempre muestran más que la suma inalterada de un conjunto de técnicas. La aparente multiplicidad multiplicid ad de los mapa mapas, s, ssu u cualidad de ser “e “escur scurridiz ridizos” os” , no es una desviación idiosincrásica de un perfecto mapa ilusorio. Más bien yacee en el co yac cora razó zón n de las rrep epre rese sent ntac acio ione ness car cartog tográfic ráficas. as. A q u í se encu en cuen en tra una oportunidad histórica. La fascinación que ejercen los mapas como documentos creados por el ser humano radica no únicamente en la medi ►
61
TEXTOS Y CONTEXTOS EN LA INTERPRE INTERPRETACIÓN TACIÓN DE LOS PRIMERO PRIMEROS S MAP MAPAS AS
da en que son objetivos o exactos, sino también en su ambivalencia inherente y en nuestra habilidad para encontrar nuevos significados, agendas ocultas y visiones del m mundo undo opuestas de entre las las líneas de la imagen. Al introducir la lass form formas as de interp interpretación retación de lo loss mapa mapass de Nor Norteam team érica, propongo propong o una metáfo metáfora ra inter interpretat pretativa iva distin distinta. ta. Serán dis discutida cutidass com o un texto más que como una imagen de la naturaleza. Los mapas son textos en el mismo sentido en que lo son otros sistemas de signos no verbales como los cua cuadros, dros, la lass impresion impresiones, es, eell teatro, el cin cine, e, la telev televisión isión y la m músi úsica. ca. Los mapas también comparten muchos intereses comunes con el estudio del libro al exhibir su función textual en el mundo y ser “sujetos de control bibliográfico, interpretación y análisis histórico”.3 Los mapas son un lenguaje gráfico que se debe decodificar. Son una construcción de la realidad, imágenes cargadas de intenciones y consecuencias que se pueden estudiar en las sociedades de su tiempo^ A l igual que los li libros, bros, son tamb también ién p roducto tanto de las mentes individuales como de los valores culturales más amplios en sociedades específicas.
Signos, Sig nos, sím bolos y re tórica
Al igual que otros textos, los mapas usan signos para representar al mundo. Guando éstos son fijos en un género de mapas, los definimos como signos convencion conv encionales. ales. ^Los mapa mapass no tienen una gramática com o el lenguaje escrito, pero igualmente son textos diseñados de manera deliberada y creados bajo la aplicación de principios y técnicas, y desarrollados como sistemas formales de comunicación. En la cartografía moderna se ha trabajado arduamente para estandarizar estas reglas de composición de los mapas. Los libros de texto y los modelos nos dicen cuál es la “mejor” manera de representar gráficamente al mundo en términos de líneas, colores, símbolos y topografía.4 En cuanto a algunos de los mapas más antiguos, que se describen más adelante, también existían libros de normas para su construcción y diseño, así como vocabularios o signos diferentes. Tales obras pueden fungir como una gramática o un diccionario para aprender a leer o a traducir el texto del mapa. 62
TEXTOS Y CONTEXTOS EN LA INTERPR INTERPRETACIÓN ETACIÓN DE LOS PRIMERO PRIMEROS S MAPA MAPAS S
La dimensión simbólica de los mapas también los relaciona con otros textos. text os. Los cartógrafos m moderno odernoss por lo ge general neral consideran que su suss ma mapas pas son manifestaciones escritas concretas en el lenguaje de las matemáticas; no obstante, siempre son metáforas o símbolos del mundo. Más adelante se discutirá una forma de interpretar estas capas simbólicas de significado mediante el empleo de principios iconográfi iconográficos. cos. Los mapas también son imágenes inherentemente retóricas. Es un lugar común decir que la cartografía es un arte de persuasión. Lo que va contra el conocimiento moderno es sugerir que todos los mapas son retóricos. Los cartógrafos actuales distinguen entre los mapas imparciales u obje objetivos tivos y otros map mapas as us usado adoss con fines propagandísticos o publicitarios que se vuelven “retóricos” en sentido peyorativo. Los cartógrafos también aceptan que emplean recursos retóricos como una forma de embellecer o adornar; sin embargo, sostienen que debajo de esta apariencia cosmética siempre está la base rí rígida gida de una ciencia verdadera. Lo que sugiero es que la retórica cubre todas las capas del mapa. Gomo imágenes del mundo, los mapas nunca son neutrales o sin valor, ni siquiera completamente científicos. Cada mapa es un caso distinto. Los mapas temáticos discutidos por Karrow y Gr Grim im ,5 por ejem plo, son espec especialme ialmente nte re retóricos. tóricos. Son parte de un di discurso scurso persuasivo y prete pretenden nden convence convencer. r. La suya no es una realidad realidad inocente dictada por la verdad intrínseca de los datos; están penetrando al antiguo arte de la retórica. En su mayoría, los mapas hablan ante un público específico y emplean invocaciones de autoridad, especialmente los producidos por el gobierno, y apelan a los lectores de diferentes maneras. El estudio de la historia de la representación cartográfica, cuando se usa como apoyo para la interpretación de los m mapa apass com o d documentos ocumentos históricos, también es una historia del uso de los distintos códigos retóricos empleados por quienes los trazan.6
El contexto del cartógrafo La regla básica del método histórico es que sólo se pueden interpretar los documentos en su contexto. Esta norma se aplica igualmente a los mapas, 63
TEXTOS Y CONTEXTOS CONT EXTOS EN LA INTERPRETACIÓN INTERPRET ACIÓN DE LOS PRIMEROS PRIMEROS MAPAS MAPAS
que deben llevarse de regreso al pasado pasado y situars situarsee estrictamen estric tamente te en su propro pio periodo p eriodo y lu luga gar. r. Los lectores de este libro pueden terminar dece decepcionapcionados al enterarse de la escasez de contextualizaciones de mapas en la historiografía de la cartograf cartografía. ía. Los libros de expertos exper tos sobre mapas, mapas, por po r ejemplo, pasan por alto la realidad social que se encuentra detrás de la decorativa etiqueta de precio. Los especialistas técnicos en historia de los mapas, los preparados como cartógrafos, casi nunca van más allá de la puerta del taller para conocer el mundo exterior. El contexto se describe de una manera simplista como “antecedentes históricos generales”. Es necesario entender que el contex contexto to es u un n conjunto com plejo de fuer fuerzas zas interactiv interactivas, as, un diálogo con el texto, dentro del cual resulta fundamental para la estrategia interpretativa. Tendemos a relegar al contexto como “allá afuera” y a los mapas que estudiamos como “adentro”. No es sino hasta que logremos derribar esta barrera, barrera, esta esta fa falsa lsa dicotomía entre e ntre un enfoque exteriorista y uno interiorista de la interpretación histórica, que se podrá estudiar el mapa y el contexto en el mismo terreno. Para lograrlo, es necesario diferenciar tres aspectos del contexto que influyen en la lectura de los mapas com o tex textos.7 tos.7 Estos Estos aspectos aspectos del con context texto o en mi argumentación son: 1) el contexto del cartógrafo, 2) los contextos de otros mapas, y 3 ) el el contexto de la sociedad. El contexto del cartógrafo está representado en las primeras interpretaciones de los mapas. Ya hace varios años el historiador J. A. Williamson escribió: “Es imposible ser dogmático en cuanto a la evidencia de los mapas, map as, a menos que sepamos más más de lo que por lo general gene ral sabemos acerca de la intención inten ción y de la lass circunstancias de quienes los trazaron tr azaron”” .8 Est Esta a simple afirmación, que da un lugar primordial al por qué, al quién y al cómo de los mapas, es un buen punto de partida. No obstante, la relación entre el cartógrafo cartógra fo y el mapa está lejos de ser directa. No es una simple cuestión de establecer una autoría, como con los libros y los documentos, ni de determinar la intención del cartógrafo. Respecto de la autoría, si excluimos los mapas manuscritos que son identificados sin ambigüedad y tienen una procedencia conocida, el historiador con frecuencia se ve ante una intrincada autoría múltiple. En su ma yorí yo ría, a, los mapas son p ro rodu duct cto o de una d ivis iv isió ión n de lab labor ores. es. Cu Cuan ando do en entr traamos en la larga transición de la era del manuscrito a la de la impresión, la 64
TEXTOS TEXT OS Y CONTEXTO C ONTEXTOS S EN LA INTERPRETACIÓN INTERPRETAC IÓN DE LOS PRIMEROS PRIMEROS MAPAS MAPAS
división del trabajo cartográfico se acentúa, el autor se convierte en una figura sombría y la traducción de la realidad que se registra en el mapa es más compleja. Entonces surgen las preguntas: ¿hasta dónde un mapa particular fue obra de un topógrafo, un editor, un dibujante o un grabador?, ¿quién determinó su forma y contenido? Guando nos acercamos a distintos artesanos, la pregunta de Williamson sobre las circunstancias se hace más difícil. La relación entre los hechos de la vida de los cartógrafos y lo que aparece en el mapa es igualmente fragmentaria. Dentro del marco de un mapa puede haber varios textos — una intertextualidad:— que tienen que ser descubiertos en el proceso interpretativo. Más que muchos otros textos, los mapas se ven afectados por una serie de actividades técnicas, cada una realizada por un autor diferente. R. A. Skelton escribió alguna vez: “El análisis técnico de los primeros mapas es al estudio de los mapas lo que la bibliografía a la crítica literaria o la diplomacia mac ia a la interp interpretació retación n de los docum documentos entos medie m edievales vales”” .9 Est Estee requisito, la reconstrucción de los contextos técnicos del trazado de los mapas, implica una enorme exigencia de habilidades auxiliares del historiador. El estudiante de los primeros mapas quizá tenga que volverse experto en las historias de distintos tipos de mapas,10 saber acerca de las técnicas de navegación y topografía top ografía,1 ,11 estar familiarizad familiarizado o con c on los procesos median mediante te los cuales se compilaban, dibujaban, grababan, imprimían o coloreaban los mapas, y saber algo acerca de las prácticas comerciales de los libros y los mapas. Cada mapa es producto de varios procesos que involucran a diferentes individuos, técnicas e instr instrumentos umentos.1 .12 2 Para entenderlos, n ece ecesisitamos desplegar un conocimiento especializado de temas tan diversos como la bibliografía, la paleografía, paleografía, la historia de la geom etría y las las declin declinaaciones magnéticas, el desarrollo de las convenciones artísticas, emblemas y her heráldic áldica, a, así ccom om o las pro propie piedad dades es físic físicas as de dell pap papel el y los sellos de ag agua ua.. La literatura correspondiente está igualmente dispersa en un gran número de disciplinas y lenguas modernas13 que forman parte de la historia de la ciencia, de la tecnología, las humanidades y las ciencias sociales. Sin embargo, el primer paso en la interpretación es la manera en que el o los autores auto res de un ma mapa pa lograron hacerlo h acerlo desde un punto de vista técnico. Establecer la intención del cartógrafo es igualmente menos directo de lo que parece a primera vista. Cada mapa codifica más de una perspectiva 65
TEXTOS Y CONTEXTOS CONT EXTOS EN LA INTERPRETACIÓN DE LOS PRIMERO PRIMEROS S MAPAS MAPAS
del mundo. Gomo expresión de una intención, la función sigue siendo la clave para leer mapas históricos; sin embargo, tales propósitos a menudo estaban estaba n defin definidos idos de una manera m muy uy general o el mapa iba dirigido a más más de un tipo de usuario. Mientras podemos aceptar, por ejemplo, que los mapas de los seguros contra incendios tienen un solo uso, muchos otros grupos de mapas estaban diseñados con múltiples fines. Estos diversos objetivos complican la evaluación de los mapas como documentos históricos. Los mapas topográficos top ográficos o de ciudad y los planos se hicie hicieron ron para sa satistisfacer varias necesidades al mismo tiempo. Se diseñaron como registros administrativos o jurisdiccionales; para defensa, desarrollo económico o, quizá, como obras generales de referencia topográfica. La simple relación entre función y contenido se viene abajo. No es adecuado, por ejemplo, pensar que la finalidad de un levantamiento topográfico sea sólo producir “un mapa que muestra aspectos detallados del paisaje”. Las series de mapas topográficos con frecuencia tenían un militar y subrayaban características de importancia estratégica. En origen los Estados Unidos, incluso después de que el Geological Survey tomó el control de las actividades topográficas nacionales en 1879, aún se esperaba que los mapas cumplieran funciones militares logísticas, así como otras geológicas y gubernamentales. Incluso en la actualidad podemos detectar rasgos de la mentalidad militar en las categorías de densidad de los bosques de los mapas de los uses (United States Geological Survey [Estudios Geológicos de los Estados Unidos]) que todavía están clasificados en relación con la facilidad con que la infantería se mueve en el campo.14 En muchos mapas topográficos del siglo xix, xix, con las nece necesidades sidades militares en mente, también se enfatizaba la facilidad gracias a detalles culturales. Por lo tanto, la intención no se puede reconstruir totalmente a través de las acciones de cartógrafos individuales. Todavía es posible encontrar una intención simple en mapas manuscritos individuales; además, también hay aspectos más amplios de actividad humana que dificultan la interpretación. La intención inten ción cartográfica ca casi si nunc nunca a fue cuesti cuestión ón de capa capacicitación, habilidad o disponibilidad de instrumentos de un individuo, o del mom ento y el dinero necesario pa para ra completa completarr un trab trabajo ajo adec adecuadament uadamente. e. Los cartógrafos casi nunca podían tomar decisiones de manera independiente, ni estaban libres libres de lim itaciones financi financieras, eras, m militares ilitares o políticas políticas.. 66
TEXTOS TEXTO S Y CO CONTEXTOS NTEXTOS EN LA INTERPRETACIÓ INTERPRETACIÓN N DE LOS PRIM PRIMEROS EROS M MAPA APAS S
Por encima del taller siempre hay una persona que encarga el mapa y, como consecuencia, el mapa está imbuido en dimensiones sociales además de técnicas. Podemos adaptar a la cartografía las palabras de Michael Baxandall sobre la pintura italiana del siglo xv. Ese arte siempre era depósito de d e un una a relació relación n social. Por un lado es estaba taba el pintor que pintaba el cuadro o, por lo menos, lo supervisaba. Por otro lado estaba alguien que le pedía que lo hiciera, proporcionaba los fondos necesarios y, una vez termi nado, decidía usarlo de una u otra manera. Ambas partes trabajaban den tro de instituciones y convenciones (comerciales, religiosas, preceptúales, en el sentido social más amplio) diferentes a las nuestras, e influían sobre la formas de lo que habían hecho juntos.15 A lo largo de una ggran ran parte de la historia, el cartógrafo fue un títere ves ve s tido tid o con un lenguaje técn técnico, ico, cuyos hilos eran manejados por po r otras p perso ersonas. nas. El papel de la acción de mandar hacer mapas varía considerablemente en los mapas de Norteamérica. Con los primeros mapas manuscritos, co mo los de la época de las exploraciones europeas, los mapas eran solicita dos por individuos poderosos, reyes o reinas, príncipes o papas. Sin em bargo, para el siglo xix los cartógrafos norteamericanos estaban cada vez más sometidos a la lass órdenes de institucione institucioness más grandes com o la General Gene ral Land Office y los uses. Las habilidades personales del trazado de mapas estaban subordinadas no sólo a conjuntos de instrucciones diseñadas para uniformar clases enteras de mapas, sino también a políticas estatales y federales. Sin perder de vista la influencia política, debemos tener mucho cuidado de no interpretar los levantamientos topográficos oficiales de los Estados Unidos como documentos históricos comunes. Se ha dicho que "los levantamientos geodésicos y topográficos realizados por el gobierno federal durante el siglo xix se convirtieron en subproductos ad hoc de de la legislación del Congreso y la intervención personal de funcionarios públi cos, co s, y no en el resultado resu ltado de una pol política ítica nacio nacional nal de ccartog artografía” rafía” .1 .16 6 Tanto el orden geográfico en que se realizaron los levantamientos levantamientos com o el con te nido de los mapas mapas estuvieron influidos por la necesidad de registrar primero áreas con depósitos minerales valiosos. Los intereses de la política, así como las habilidades de topógrafos individuales, dieron lugar a diversas 67
TEXTOS Y CONTEXTOS EN LA INTE INTERPRETACIÓN RPRETACIÓN DE LOS PRIM PRIMEROS EROS M MAPA APAS S
imágenes del paisaje norteamericano preservadas en la serie nacional de mapas topográficos. Al calificar los límites de la influencia de un cartógrafo individual, no niego que los “ cartógrafos son sere seress h humanos” umanos” .17 Aún aparece alg alguna una habi lidad personal poco común, así com como o la idiosincrasi idiosincrasia, a, en los intersticio intersticioss de la práctica institucional. En los mapas de las ciudades y las sierras “abundaban la lass posibilidades de erro error, r, omisiones, tendencias personales e incluso repr repre e sentaciones erróne er róneas” as” .1 .18 8 Incluso en los ma mapas pas producidos por po r máquinas de la actualidad, y en las imágenes aéreas, los historiadores deben estar alerta en cuanto a las formas equivocadas en que los técnicos pueden haber inscrito sus tareas de rutina. Esto puede ser todavía más difícil de detectar detrás de la retórica directa de la tecnología de las computadoras; sin embargo, de nuevo nos encontramos encon tramos fr frente ente a la au ausencia sencia de u un n registro histó histórico rico común. Se pueden hacer observaciones similares acerca de los mapas comer ciales. Esto es una parte importante del registro cartográfico histórico de los Estados Unidos;19 no obstante, también se perciben conflictos de inte reses. El mercado por lo general limita la libertad de los parámetros carto gráficos. Un texto tex to que siem siempre pre leem os en estos estos mapa mapass es la hoja de balance financiero. “ Donde el dete detective ctive busc busca a hu huell ellas as digit digitales ales — se h ha a sseñal eñalado— ado— debemos buscar algún beneficio si deseamos entender el mecanismo bási co de la pub publicación licación de los primeros map mapas as [. [... .. ] Ningún vend vendedo edorr no noss dice toda la verdad y sólo un historiador incauto tomaría los mapas que están a la venta com c omo o un registro cartog cartográfico ráfico ve verd rdad adero ero”” .20 Más Más aún, aún, en la medida en que aumenta el tamaño de los negocios de mapas y crecen las im prentas la cartografía adquiere una imagen corporativa. Ahora quien soli cita los mapas es un público más grande o, quizá, un grupo de interés espe cial, como los consumidores de mapas de carreteras, que vigilan al cartógrafo para influir sobre lo que se está registrando en el mapa.
El contexto de otros mapas Una pregunta interpretativa fundamental acerca de cualquier mapa se re fiere a su relación con otros mapas. Este cuestionamiento tiene que enío68
TEXTOS TEXT OS Y CONTEXTOS CONTEX TOS EN LA INTERPRETACIÓN INTERPRET ACIÓN DE LOS PRIMEROS MAPAS MAPAS
carse de distintas .maneras. Por ejemplo, podríamos preguntar: 1) ¿cuál es la relación del contenido de un mapa en particular (o alguna característica dentro de él) con otros mapas contemporáneos de la misma zona?; ¿cuál es la relación de ese mapa con otros del mismo cartógrafo o de la 2) ¿cuál misma compañía productora?; 3) ¿cuál es la relación con otros mapas del mismo género (de una visión aérea, por ejemplo, con otras visiones aéreas de No Norteam rteam érica)? érica)?,, y 4) ¿cuál es la relación de un mapa con la producción cartográfica general de un periodo? Las preguntas varían pero su importancia es universal. Ningún mapa está herméticamente cerrado en sí mismo, ni puede responder a todas las preguntas que despierta. Tarde o temprano la interpretación de los mapas anteriores se convierte en un ejercicio de cartografía comparativa.21 Las características cartográficas de toda la familia pueden permitir que se identifiquen mapas anónimos, se interpreten signos o convenciones poco comunes, o se hagan deducciones acerca de parámetros de precisión. Nuestra confianza en un mapa como documento puede aumentar (o disminuir) cuando muestra las características conocidas de un grupo más grande. Esta parte del estudio contextual de un corpus de mapas relacionados entre sí se construye en torno a uno solo. Así como en el análisis de textos literarios tiene que construirse la unidad o identidad de un corpus de de textos,22 en la interpretación de los primeros mapas podemos seguir procedimientos definidos. Éstos pueden aplicarse a un grupo de mapas del mismo periodo; sin embargo, de la misma manera, la descripción de una zona o de una característica se puede rastrear en una serie de mapas a través del tiempo. A continuación se mencionarán tres métodos que pueden usarse por separado separado o com combinados binados para evaluar un un solo mapa dentro den tro de un grupo. grupo. El estudio comparativo de características topográficas lineales en los mapas (como costas, redes de ríos o un sistema de caminos o carreteras) es una técnica bastante probada. Los contornos se reducen a una escala común y se comparan visualmente. visualm ente. En los los estudios estudios clásicos del siglo xix de los primeros mapas aparecen ejemplos;23 el método puede también adaptarse al análisis digital de características lineales por computadora.24 Una reciente aplicación del método antiguo es la realizada con los mapas españoles y franceses del Golfo de México de los siglos xvi y x v ii .25 Después de “fotocopiar, ensamblar y examinar una gran cantidad de mapas” fue posi69
TEXTOS Y CONTEXTOS EN LA INTE INTERPRETACIÓN RPRETACIÓN DE LOS PRIMEROS M MAP APAS AS
ble,26 con base en las principales características de las líneas costeras, identificar cinco etapas principales del trazado de mapas. A través del uso de esta clasificación comparativa, los mapas individuales fueron entonces asignados a diferentes etapas de desarrollo y se estudió su origen, sus fuentes y su confiabilidad topográfica a partir de las características de todo el conjunto. Sin embargo, si bien cada uno tiene una huella genética que el método ayuda a identificar, también se debe ser muy cauteloso. El estudio de los contornos puede quedarse corto al ofrecer evidencias conclusivas de procedencia. Hay muchas carencias. R. A. Skelton escribió que “las impresiones visuales que sugieren afinidad o desarrollo del contorno en dos mapas pueden ocasionar una confusión si no tomamos en cuenta las licencias de dibujo o de interpreta interp retación ción que pudiera haberse dado el cartóg cartógrafo rafo”” .27 Por otra parte, también puede haber variaciones técnicas que influyen sobre la forma de los contornos de los mapas o sus gradaciones de latitud o longitud. Los mapas son fácilmente corruptibles en el proceso de copiado, o pueden surgir de técnicas de levantamiento o de navegación que quizá hayan sido afectadas en el proceso de compilación. Antes del siglo xix, a menudo los mapas se alineaban según el norte magnético y no hacia el norte real. real. La declinac declinación ión m agnétic agnética a variaba llocalmen ocalmen te y cambia cambiaba ba con el paso del tiempo, de manera que sin una observación sistemática los cartógrafos no podían corregi corr egirr este ffacto actor. r. Sigue siendo una fuente imp importante ortante de error en la comparación de contornos.28 Un segundo aspecto del análisis comparativo de los primeros mapas implica el estudio de los nombres de lugares o toponimia. Al igual que los contornos, los nombres de lugares ofrecen una forma de construir genealogías y perfiles de origen para mapas que antes se encontraban dispersos. De hecho, los dos métodos a menudo se usan en conjunto, como en los estudios clásicos de los principios de la cartografía de la costa atlántica de Canadá.29 Aun así, la tabulación cruzada de los nombres de una serie de mapas como medio de clasificación o establecimiento de interrelaciones del grupo también debe usarse con precaución.30 En los periodos iniciales de la exploración, los europeos de distintas nacionalidades seguramente escuchaban nombres de boca de hablantes nativos norteamericanos de una varieda variedad d de lengua lenguass yy,, tamb también ién d deben eben de haber tratado de registrar70
TEXTOS Y CONTEXTOS EN LA INTERPR INTERPRETACIÓN ETACIÓN DE LOS PRIMERO PRIMEROS S MAPA MAPAS S
lo loss de acuerdo con su pro propio pio sistema de sonidos sonidos,, además de una ortografía estandarizada. Incluso en los casos en que se aplicaron nombres europeos a la geografía norteamericana el proceso de traducirlos y editarlos estuvo viciado; resulta entonces que los nombres son producto del descuido, de una mala lectura o de un mal entendimiento de generaciones sucesivas de cartógrafos que no tenían conocimiento de primera mano de los lugares o la lass len lengua guass en cuestión. A Ace cerc rca a de los nomb nombres res en los mapa mapass de la escuela Dieppe de cartógrafos del siglo xvi,31 por ejemplo, se dice que “no hay dos cartógrafos en Dieppe que coincidan completamente en el número de nombres que registran, mientras que la ortografía varía notablemente e incluso clu so lla a coloc colocació ación n de los nombres no siem siempre pre es con consisten sistente” te” .32 No es u una na sorpresa que los nombres de los lugares en ocasiones hayan sido usados incorrectamente con fines de comparar mapas.33 La práctica de sonido tiene como objeto limitar el análisis sólo a aquellos nombres inconfundiblemente comunes a una cantidad considerable de mapas. El tercer m étodo de cartografí cartografía a comparativa, la cartobibli cartobibliografía ografía,, tiene la may mayor or cantidad de publicaciones. No sólo ssee han discutido ampliam ampliamenente la defin definición ición y los detalles del m métod étodo,3 o,34 4 sino que su prác práctica tica tam también bién se encuentra totalmente representada en una serie de obras fundamentales que tratan sobre los inicios de la cartografía norteamericana.35 El objetivo de la cartobibliografía es reunir una serie de mapas impresos sobre la misma superficie. Se aplica igualmente a la corteza de árbol, las placas de cobre, la litografía y otros procesos de impresión de mapas.36 Mediante este método se puede reconstruir una secuencia de cambios geográficos y de otros tipos en mapas relacionados entre sí. Esto a su vez permite seguir la historia de la pub publicación licación de mapas de un área específica. Por otra parte, también permite la ubicación cronológica de un mapa y su inserción en la secuencia correspondiente, así como la detección del alcance de una revisión geográfica entre estados o ediciones de mapas. A menudo los mapas son so n representaciones tanto de tiempo tiemp o com o de espaci espacio. o. G Gomo omo dice Skelt Skelton, on, descubrimos cómo “material de distintos horizontes temporales o descubrimientos intelectuales” se incorpora a sus imágenes. Y aprendemos que “la búsqueda de la fuente principal puede llevamos de regreso a través de muchas etapas de revisión o adaptación, derivación o transcripción, compilación”.37 La cartobibliografía, por lo tanto, es una herramienta funda71
TEXTOS Y CONTEXTOS EN LA INTERPRETACIÓN DE LOS PRIMERO PRIMEROS S MAP MAPAS AS
mental para el historiador historiado r de mapa mapas. s. Ya se sea a com o una técnica o com o un medio para medir los canal canales es y el índice de difusión difusión o de con ocim iento geográfico (por lo tanto, la vinculación de los mapas al contexto de la sociedad), su conocimiento es indispensable.
El contexto de la sociedad El tercer contexto de la cartografía es el de la sociedad. Si el cartógrafo es un agente individual, entonces la sociedad es la estructura más amplia. La interpretación, la lectura del texto cartográfico, implica un diálogo entre estos dos contextos. El marco de las circunstancias y las condiciones históricas definidas produce un mapa que es, indiscutiblemente, un documento social y cultural. Todos los mapas están relacionados con el orden social de un periodo per iodo y un luga lugarr específicos. Todos los mapas sson on cultur culturales ales porque manifiestan procesos intelectuales definidos como artísticos o científicos en la medida en que trabaj trabajan an para pro produc ducir ir un tipo cara caracterís cterístico tico de conocimiento. No existe una flecha causal clara que vaya de la sociedad al mapa, sino flechas causales que viajan en ambas direcciones. Los mapas no son la sociedad exterior, son parte de ella ella,, son eleme elementos ntos con constitutivos stitutivos dentro del mundo en general. El historiador pretende leer toda esa red de interrelaciones que van hacia adentro y hacia afuera del documento del mapa. Al explorar este fenómeno de reflexión pueden emplearse dos estrategias para par a reco reconoc nocer er el co contexto ntexto de la soci sociedad edad en los m mapa apass de América.
Las reglas de la cartografía
La primera estrategia es tratar de identificar “las reglas del orden social” dentro del mapa.38 Cada mapa manifiesta dos conjuntos de reglas. En primer término se encuentran las reglas del cartógrafo, y hemos visto cómo operan oper an en las práctic prácticas as técnic té cnicas as d del el tr trazado azado de m ma apas.\E .\E1 segundo grupo de reglas se puede encontrar en la sociedad inmersa en el mapa, donde influ72
TEXTOS TEXTO S Y CONTEXTOS EN LA INTERPR INTERPRETACIÓN ETACIÓN DE LOS PRIMERO PRIMEROS S MAPA MAPAS S
yen sob sobre re las ca categ tegorí orías as de co con n oc ocim im ien ie n to to.. El map mapa a se con co n vier vi erte te en ento tonc nces es en un sistema de significados a través del cual “se comunica, reproduce, experimenta perimen ta y explor explora a un orde orden n ssocial ocial”” .39,Los mapa mapass no sólo reprod reproducen ucen una realidad topográfica, sino que también la interpretan.! Las reglas del orden social en algunas ocasiones son visibles, e incluso evidentes, dentro de un grupo de mapas. En otras, se encuentran escondidas dentro del modo de representación. Entre la categoría de sociedad visible podemos ubicar las visiones aéreas norteamericanas de ciudades, los mapas y los planos de ciudades y los mapas de condado y atlas. Todos son textos culturales que toman posesión de la tierra.40 Todos proclaman un evangelio social y sirven para reforzarlo. Las visiones aéreas de ciudades, por ejemplo, “cantan el himno nacional de la paz y la prosperidad, del movimiento y la apertura, de la calma y el orden, de los destinos que se van a alcanzar” .41 El mapa tiene guardado el corazón cor azón para el mo mome mento nto en que lo necesite y éste cobra vida en el contexto de la ética de la frontera y el patriotismo cuando se decodifica la topografía a partir de un estilo empáticamente retórico de la imagen. Guando las reglas sociales de la cartografía no están a la vista se tiene que probar una agenda oculta entre las líneas del mapa. Este mapa es engañoso gañ oso y se necesita una estrat estrategia egia distint distinta. a. En luga lugarr de rrecog ecoger er los mens mensaa jes socia sociales les que en enfa fatiz tiza a eell mapa, de debem bem os b buscar uscar a qu quéé le qui quita ta énf énfasis; asis; no tanto lo que muestra el mapa, como lo que omite. La interpretación se convierte en una búsqueda de silencios,42 o quizá resulte de utilidad “deconstruir” el mapa para revelar cómo el orden social crea conflictos dentro de su propio contenido.43 Entre los mapas que podrían entenderse mejor de esta manera se encuentran algunos del siglo XVIII de gran escala, los los levantamientos levantamien tos topográfi topográficos cos de los Esta Estados dos Unidos y las las imágenes aér aéreas. eas. Aquí la tecnología ha suprimido las relaciones sociales. Como parecen ser precisos y objetivos, estos mapas a menudo se ven como documentos que no presentan problemas. Una imagen satelital o un mapa topográfico hecho mediante alg algún ún método “ cientí cie ntífico fico”” — por lo menos eeso so ssee piensa piensa— — es neutral moral y éticamente. Es un documento concreto y directo. En la medida en que reconocemos las limitaciones técnicas, el camino de la interpretación se vuelve más seguro. Estas suposiciones son falsas. La representación nunca es neutral y la 73
TEXTOS Y CONTEXTOS EN LA INTERPRETACIÓN DE LOS PRIM PRIMEROS EROS M MAPA APAS S
cien cia sigue siendo una realidad construida por el ser humano. Los map ciencia mapas as de gran escala de la parte este de Norteamérica de mediados del siglo xvm son un ejemplo de esta limitación. A primera vista cumplen los objetivos de la cartografía de la Ilustración. Están construidos sobre medidas geodésicas; empiezan a mostrar cierto dominio cartográfico sobre los paisajes de esta zona y omiten algunos de los elementos más abiertamente imaginativos, míticos y pictóricos de los mapas anteriores. Sin embargo, si los vemos más de cerca, nos damos cuenta de que también señalan los imperativos territoriales de una agresiva expansión inglesa en este continente.44 El colonialismo se señala en los mapas desde los márgenes. Con frecuencia los títulos hacen referencia al imperio y a la posesión y delimitación de territorio; las dedicatorias definen el rango social de los gobernantes coloniales; y las tarjetas, con todo un desfile de banderas nacionales, escudos de armas o coronas dispuestas por encima de los indios sirvientes, definen d efinen las relaciones de pod poder er en la vida colon colonial.4 ial.45 5 Sin embargo, los contornos de la sociedad colonial también pueden ser leídos entre las líneas de los mapas. La cartografía se ha convertido principalmente en un registro de los intereses coloniales. Es un retrato inconsciente de qué tan exitosamente se había reproducido una sociedad colonial europea en el Nuevo Nu evo Mundo y los mapas otorgan segurida seguridad d a lo loss conquistadores al reprorepro ducir la autoridad y los nombr nombres es de los lugares lugares simb simbólicos ólicos d del el Vie Viejo jo Mundo Mundo.. Aún más, en la medida en que la frontera se movió hacia el occidente, los vestigios del pasado indio fueron eliminados de la imagen. Muchos cartógrafos del siglo xvm prefirieron los espacios vacíos al registro de la geografía india.46 No estoy diciendo que las omisiones, las “reglas de ausencia”, fueran deliberadamente reforzadas a manera de especificaciones técnicas. Sin embargo, incluso cuando eran da dada dass por un hecho, o aplicadas inconscientemente, percibirlas nos ayuda a cuestionar los mapas antiguos.
El significado de los mapas
Otra estrategia estrategia interpretativa aplica lo loss métodos iconográficos de la historia del arte a los mapas. Se define a la iconografía como “esa rama de la 74
TEXTOS Y CONTEXTOS CONTEXTO S EN LA INTERPRETACIÓN INTERPRET ACIÓN DE LOS PRIMEROS MAPAS MAPAS c u ad ad r o
i.l. Paralelismos iconográficos en e ell arte y la cartografía
Arte (Se usan los términos de Panofskv)
Cartografía (Paralelismo cartográfico sugerido sugerido))
1. Tema primario o natural: motivos artísticos 2. Tema secundario o convencional 3. Significado o contenido intrínseco
1. Signos convencionales indiv iduales 2. Identidad topográfica en los mapas: el lugar específico 3. Significado Signifi cado simbóli sim bólico co en los mapa mapas: s: ideologías de espacio
historia del arte que se interesa en el tema o el significado de las obras de arte” .47 La pregunta: ¿qué ¿ qué ssignificab ignificaba a el mapa para para la socied sociedad ad que lo h hizo izo y lo usó por p or pr prim imer era a vvez ez?? es de una imp impor ortan tancia cia in inter terpr preta etativ tiva a crucial. c rucial. Los mapas se han vuelto una fuente para revelar las características filosóficas, políticas y religiosas de un periodo, o lo que en ocasiones se conoce como el espíritu de la época. Puede usarse una interpretación iconográfica para complementar el método de las reglas de la sociedad. Mientras que este último revela las tendencias del conocimiento en los mapas, sus jerar quías, inclusiones y exclusiones, el primero examina de qué forma se tra dujeron las reglas sociales al idioma cartográfico en términos de signos, estilos esti los y vocabularios expresivos expresivo s de la cartogr cartografía. afía. La esencia del análisis iconográfico es que pretende descubrir los dife rentes significados de una imagen. Panofskv sugiere que en un cuadro encon tramos: 1) un tema primario o natural, que consiste en motivos artísticos individuales; 2) un un tema secundario o convencional, definido en términos de la identidad de todo el cuadro como representación de una alegoría o un acontecimiento específico (da el ejemplo de La última cena), y 3) un estrato simbólico de significado que a menudo tiene connotaciones ideoló gi gica cas. s. Esto no ofrece una una fórmula clara p para ara la la interpretación interpre tación de los prime prim e ros mapas; sin embargo, se puede decir que los niveles de significado de un mapa son similares a los de un cuadro.48 Estos niveles paralelos de las dos formas de representación se resumen en el cuadro i.l. En primer lugar, en el primer nivel los signos, símbolos o emblemas decorativos individuales de un mapa se equiparan con los motivos artísti75
TEXTOS Y CONTEXTOS CON TEXTOS EN LA INTERPRETACIÓN INTERPRET ACIÓN DE LOS PRIMEROS PRIMEROS MAPAS MAPAS
eos individuales. Mientras que el significado completo de cualquier signo particular puede volverse aparente sólo cuando se le ve en el mosaico de otros signos signos en el mapa comple completo, to, para algu algunos nos fi fines nes in interpret terpretativos ativos puede resultar necesario evaluar el contenido y el significado de los signos individuales (por ejemplo, al mismo tiempo que establecen su significado cultural, podemos necesitar saber qué tan confiable es el signo usado para describir una iglesia o una casa en un mapa antiguo, desde un punto de vista arquitectónico). En segundo lugar, la identidad del lugar real representado en un mapa se supone que sea equivalente al segundo nivel de Panofsky o a un segundo nivel de interpretación. Su percepción implica el reconocimiento de que un mapa particular es el de una plantación en Carolina del Sur, de Boston o California. Éste es el nivel, el del lugar real, en que los historiadores han usado más los mapas. Es más, para evaluar los lugares reales de los mapas se ha desarrollado la mayoría de las técnicas interpretativas, enfocadas ya sea se a a la precisión prec isión plan planimétrica, imétrica, o bien al contenido. Existen numerosos ejemplares de este tipo de estudios topográficos.49 El tercer nivel n ivel in interp terpretativo retativo de un mapa eess el estrato simbólico. Ha Hast sta a hace pocos años, además de la aportación de unos cuantos historiadores del arte,50 se había dado muy poca importancia a esta dimensión hermenéutica de los principios de la cartografía. Recientemente, la interpretación ha cambiado y ha comenzado a abarcar la lectura simbólica e ideológica de los primeros mapas. Aquí aceptamos que los mapas actúan como una metáfora visual de los valores más importantes de los lugares que representan. Los mapas de Norteamérica siempre están cargados de esos valores culturales e importancia y representan una topología social con un dominio propio culturalmente reafirmado. Los mapas siempre representan más que una imagen física de un lu luga gar. r. El plano d dee una ciudad o una visión aérea es un emblema o un icono legible de la comunidad. Inscribe valores en un espacio cívico y subraya los sitios de creencias religiosas, ceremonias, rituales y autoridad. En los mapas de los atlas históricos y de condado del siglo xix hay mucho más que un registro inerte de una topografía extinta. Lo que leemos es un discurso metafórico, tan grueso como un libro, acerca del orgullo rural inmigrante, de las utopías que se vislumbran, del orden y la prosperidad del paisaje. Estos mapas elogian la posesión de 76
TEXTOS TEXT OS Y CONTEX CONTEXTOS TOS EN LA INTERPRE INTERPRETACIÓN TACIÓN DE LOS PRIMEROS MA MAPAS PAS
la tierra, privilegian las demarcaciones de las propiedades y hacen memorables las haciendas y los nombres de dueños de propiedades. Por medio de la palabra y de la imagen recurren a la industria y al patriotismo de los nuevos norteamericanos. Y mientras más lejos vemos, la cartografía se vuelve más simbólica. Luego entonces, un mapa de carreteras de Rand McNally hace del enamoramiento estadunidense del automóvil un objeto de adoración, e incluso los mapas aparentemente terrenales de los uses son una confirmación simbólica de las percepciones y las prioridades cambiantes de la sociedad, más que sólo mapas de objetos del paisaje. Así es como “los mapas hablan, aunque suavemente, de sutiles juicios de valor” .51 Para lee leerr un mapa de manera adecuada, el h historiador istoriador siempr siempree debe excavar debajo deba jo de su geografía superfici superficial. al.
Conclusión
Al aceptar que los mapas son documentos fundamentales para el estudio del pasado norteamericano, comenzamos a apreciar con qué frecuencia los mapas atraviesan los principales procesos históricos. Desde los tratados territoriales hasta los planos de las ciudades, desde las vías de los trenes hasta las coordenadas rectangulares, subyacen en la construcción de los Estados Unidos modernos.52 Sin embargo, si bien ésta es una inmensa aportación práctica, no debemos ignorar la influencia histórica de los mapas reales sobre los más elusivos mapas cognitivos de generaciones de estaduniden esta dunidenses ses desde el siglo xvi. Adem Además ás de cconsid onsiderar erar al mapa como una fuente topográfica, nos estamos dando cuenta del poder cartográfico inserto en este discurso.53 El poder del mapa, un acto de control de la imagen del mundo, es como el de la imprenta en general.54 Desde la época de Colón, los mapas han contribuido a crear algunos de los estereotipos más dominantes de nuestro mundo. El uso que los historiadores dan a un mapa depende también del contexto del investigador investigado r en cuestió cuestión. n. Las reflexiones que se h haga agan n está están nd detereterminadas no sólo por las cualidades intrínsecas de un mapa particular, sino también por la investigación histórica de la que se trate, por sus objetivos, 77
TEXTOS Y CONTEXTOS EX LA IINTERPRETAC NTERPRETACIÓN IÓN DE LOS PRIM PRIMEROS EROS MA MAPA PAS S
sus métodos de in sus investigació vestigación n y por toda todass las prueba pruebass que pueda apo aporta rtar. r. A All igual que existen innumerables mapas de Norteamérica que el historiador puede consultar, hay infinidad de temas de investigación para los cuales los mapas pueden ser adecuados. No ha sido mi intención minimizar los aspectos técnicos de la interpretación de los primeros mapas; sin embargo, ante el hecho de que ya disponen de bastante literatura, me pareció importante tomar esta oportunidad para trabajar en un marco más amplio dentro del cual pueden mostrarse. Los tres contextos de la cartografía que se han señalado nunca son mutuamente exclusivos, sino que se encuentran entretejidos de manera sutil y con frecuencia inseparable. Una vez que aprendemos a leer mapas, pueden convertirse en textos de una utilidad indispensable para el historiador.
78
II Mapa Ma pas, s, conocim cono cimiento iento y pod p oder* er*1 1 Dadme un mapa; entonces permítaseme ver qué tanto se me ha dejado para conquistar todo el mundo... Aquí comencé a marchar hacia Persia, pasé por Armenia y por el Mar Caspio; después hacia Bitinia, donde tomé prisioneros a los turcos y a sus grandes empresas. Despué Des pués s marché hacia Egipto y Arabia, y aquí, no muy lejos de Alejandría, donde se juntan el Mar Tirreno y el Mar Muerto, con menos de cien leguas de distancia en tre ellos, pretendo cortar un canal para que los hom bres puedan llegar rápidamente a la India. De allí a Nubia, cerca del lago Borno, y entonces por el Mar de Etiopía, cortando la línea del Trópico de Capricornio, lo conquisté todo llegando hasta Zanzíbar. C h r i s t o p h e r M a r l o w e ,
Tamburlaine, segunda parte (V. m, pp. 123-139) U n libro acerca de las las imágenes geográficas geográficas que no aborde el mapa sería sería como Hamlet sin sin el príncip pr íncipe.2 e.2 No obstante, obstante, aunque durante mucho tiempo tiemp o lo los s mapas han sido fundamentales fund amentales en el discurso de la geografía, casi nunca se leen como “ ladrillos” de texto o como una forma forma de conocim iento cons truida tru ida socialmente. socialmente. “ La interpretación interp retación de los los mapas” por lo general implica buscar “accidentes geográficos” sin expresar de qué manera, como forma manipulada manipu lada de conoc imiento imi ento , han ayudado a conform conf ormar ar esos accidentes.3 Es cierto que en la geografía política y en la historia del pensamiento geo gráfico los mapas se relacionan cada vez más con el poder (especialmente ’ Este capítulo apareció originalmen te en Den Denis is Cosgrove y Stephen Danie Daniels ls (eds.), The Icono- graphy o f Landscape: Essay Essays s on th the e S ymb olic Representaci Representación ón , Design and Use ofpast Environ- ment, Cambridge Studies in Ilistorical Geography, 9 (Cambridge, Cambridge University Press, ment, 198S), pp. 277-312.
79
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
en los los periodos de historia colon col on ial).4 ial ).4 Sin embargo, el papel espe cífico cífic o de los mapas, como imágenes con códigos históricamente específicos, sigue siendo identificado con todo el discurso geográfico del que con frecuencia se encuentran imbuidos. Lo que falta es un sentido de lo que Cari Sauer
entendía com o la elocuencia elocue ncia de los mapas.5 De esta esta suert suerte, e, ¿cómo ¿có mo podepode mos hacer “hablar” a los mapas acerca de los mundos sociales del pasado?
Perspectivas teóricas Aquí pretendo explorar el discurso de los mapas en el contexto del poder
político y mi enfoque es ampliamente iconográfico. Considero que los mapas pa s son una una parte parte de la familia más amplia amplia de imágenes cargada cargadas s de valor. valor.
De este modo, he renunciado a entender entend er los mapa mapas s como co mo registros registros inertes de paisajes morfológicos o como reflexiones pasivas del mundo de los objetos; más bien los considero imágenes reflejadas que contribuyen a un diálogo en un mundo construido soc ialm ial m ente en te Por lo tanto, alejo la lectura lectura de los map mapas as de los cánones de la crítica cartográfica tradicional con su lista de oposiciones
binarias binar ias entre los map mapas as “ ciertos y los falsos” falsos” , “ precisos e imprecisos” , “ objeobje tivos tiv os y subjetivos” , “literales y simbólicos” simbó licos” , o los basado basados s en una “ integrida integridad d
cientí cie ntífic fica” a” opuesta a la “ distorsión ideológ ideo lógica” ica” . Los mapas mapas nunca nunca son son imágenes carentes de valor; excepto en el sentido euclidiano más estricto, por sí mismos no son ciertos o falsos. Tanto en la selectividad de su contenido como en sus signos y estilos de representación, los mapas son una manera de concebir, articular y estructurar el mundo humano que se inclina hacia hacia,,
es promovid prom ovido o por y ejerc e jerce e una influencia sobre grupos grupos particulares particulares de rela-
ciones sociales.7 sociales .7 Al aceptar tales premisas premisas se puede ver ve r mejo m ejorr lo susceptibles ble s que son de manipulación p or parte de los poderosos poderoso s de la sociedad. sociedad. En este amplio paisaje conceptual debo destacar tres puntos fundamentales a partir de los cuales se pueden trazar algunos de los contornos ideológicos más específicos de los mapas. En el primero, los mapas son un tipo de lenguaje8 (si esto e sto se toma de manera literal litera l o metafóric m etafórica a no es vital para par a la argum entación enta ción ).9 La idea de un lenguaje cartográ ca rtográfico fico es también conveniente para un acercamiento derivado directamente de la semiótica
80
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
que, mientras ha resultado atractivo para algunos cartógrafos,10 es una herra mienta demasiado pesada para una investigación histórica específica. La idea de lenguaje se traduce más fácilmente a la práctica histórica. No sólo nos ayud ay uda a a ve verr los map mapas as co como mo imágenes re recíprocas cíprocas us usad adas as como mediadoras de diferentes visiones del mundo, sino que también estimula la búsqueda de evidencias de aspectos como los códigos y el contexto de la cartografía, así como su cont contenido enido en un sentido tradicional. Un lenguaje — quizá serí sería a más adecuado adec uado ha hablar blar de un una a ““literatur literatura” a” de mapas— también nos anima a buscar cuestiones como el cambio de lectores de los mapas, los niveles de cartoalfabetismo, las condiciones de autoría, aspectos como secretos y censura y también la naturaleza de las manifestaciones políticas hechas por los mapas. Además, la crítica literaria puede ayudarnos a identificar la forma par ticular del “discurso” cartográfico que yace en el corazón de este ensayo. El discurso ha sido definido como lo relacionado con “aquellos aspectos retó ricos que evalúan, miden o convencen un texto, lo los s que que sim simplem plemente ente nom nombran, bran, ubican ydecuenta cuentan” n” .11en Elcontraposición ““sim simple” ple” hechocon de nombrar o ubicar un accidente en un mapa a menudo tiene un significado político; polític o; no obstante obstante,, se acepta que existen existenma ma divi división sión similar en los map mapas as.. Son un tipo de imágenes retóricas y están determinados por reglas que gobiernan sus códigos y modos de producción, intercambio y uso social, al igual que cualquier otra forma discursiva. Esto, a su vez, puede llevarnos a una mejor apreciación de los mecanismos mediante los cuales los mapas, como los libros, se convirtieron en una fuerza política en la sociedad.12 Un segundo punto de vista teórico se deriva de la formulación de la iconografía de Panofsky.13 Se ha tratado de equiparar los niveles de inter pretación de la pintura de Panofsky con niveles similares que se pueden distinguir en los mapas.14 La iconografía puede usarse para identificar no sólo un nivel literal o “superficial” de significado, sino también uno “más profundo”, por lo general asociado con la dimensión simbólica del acto de enviar o recibir recib ir un mensaje^Ün mapa puede llevar en su imagen un sim bobo-** lismo asociado con el área, el aspecto geográfico, la ciudad o el lugar espe- * cífico que repre representa.1 senta.15 5¡A menu menudo do en este nivel ssimbó imbólico lico el p poder oder po polític lítico o• se reprod reproduce, uce, comunica y experim experimenta enta me mejor jor a tra través vés de los ma mapa pas. s. _ 4 La tercera perspectiva se obtiene de la sociología del conocimiento^ Ya se ha planteado la propuesta de que el conocimiento de los mapas es un
81
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
producto social16, y para hacerla más clara se han dispuesto dos grupos de ideas relacionadas con los ejemplos empíricos de este ensayo. El primer grupo se deriva de Michel Foucault, quien, a pesar de que sus observaciones en el cam po de la geografía geograf ía y los mapas fueron superfi s uperficiales ciales,1 ,17 7 ofrece ofre ce un modelo model o útil para para la historia historia del cono co nocim cim iento ien to de los mapas mapas en su su crítica de la historiografía: La búsqueda de la verdad no era una actividad objetiva y neutral, sino que estaba relacionada íntimamente con el “anhelo de poder” de quien buscaba la verdad. Por lo tanto, el conocimiento era una forma de poder, una forma de presentar los valores propios disfrazados de un un desinterés cien ci entíf tífico ico.1 .16 Asimismo, la cartografía puede ser “una forma de conocimiento y de poder”. Así como “el historiador pinta el paisaje del pasado con los colores del presente” prese nte” ,19 el topógrafo, de manera consciente cons ciente o no, duplica no sólo el “ambiente” en un sentido abstracto, sino también los imperativos territoriales de un sistema político particular. Si se produce un mapa bajo la etiqueta de la ciencia cartográfica (éTcaso de la mayoría de los mapas oficiales) o si se trata de un ejercicio propagandístico abierto, no puede dejar de involucrarse en el proceso mediante el cual se ostenta el poder. Algunas de las implicaciones prácticas de los mapas pueden caer también en la catego ría de lo que Foucault Foucault ha ha definido com o actos de “ vig ilan cia” ,20 especialmente los relacionados con la guerra, la propaganda política, la definición de las fronteras o la preservación de la ley y el orden. —** —
Foucau Fou cault lt no es el únic ún ico o que estudia est udia la rela re laci ción ón entr en tre e pode po derr y c o n o c i-
miento. También Anthony Giddens, al teorizar acerca de cómo los sistemas sociales han estado “insertos” en el tiempo y el espacio (aunque no menciona específicamente los mapas), hace referencia a “recursos de autoridad” (los diferencia de los recursos materiales) controlados por el Estado: “La acumulación de recursos de autoridad implica sobre todo la reten-
ción y el control de información o conocimiento. No cabe duda de que aquí el desarrollo decisiv d ecisivo o es la la inven ción de la escritura y la anotación anota ción”” .21 iLos mapas fueron un invento similar para el control del espacio y facilitaron la expansión geográfica de los sistemas sociales, “una forma de apuntalar empleada empleada por el poder pode r del Estado”; Estado”; Gomo medio de vigilancia, vigilancia, implican
82
MAPAS. CONOCIMIENTO Y PODER
tanto “el cotejo de información relevante para el control estatal de la con ducta de la población sometida”, como la “supervisión directa de esa con ducta” .22 En los tiemp os mo dern os, mien tras m may ay or es la com plejid ad administrativa del Estado, y más penetrantes sus ambiciones territoriales y s sociales, ociales, tam tambié bién n es m ay ayor or su ape apetito tito de mapas mapas.. Lo útil de estas ideas es que nos ayudan a prever imágenes cartográfi cas en términos de su influencia política en la sociedad. El simple hecho de que durante siglos se ha vis visto to a los mapas com como o imág imágenes enes “ cie cientí ntífica fica s” , y siguen sien siendo do con conside siderad radas as así p por or filó filósof sofos os y se sem m iótic ió ticos os,2 ,23 3 dificult difi culta a esta tarea. Las relaciones dialécticas entre imagen y poder no pueden ser encontradas con los procedimientos empleados para recuperar el conoci miento topográfico concreto de los mapas y no existe una prueba química para par a evalua r s su us tenden cias ide oló gica s.2 s.24 4 Los mapas com o form a de “conocimiento que implica poder” son explorados en este capítulo bajo tres rubros: la universalidad de los contextos políticos en la historia de los mapas, cómo el ejercicio del poder estructura el contenido de los mapas, y cómo la comunicación cartográfica, en un nivel simbólico, puede reforzar ese ejercicio a través del conocimiento de los mapas.
Contexto político de los mapas T s a r : Hijo mío, ¿qué escribes?, ¿qué es esto?
F y o d o r : Un mapa de Moscovia; nuestro reino real de principio a fin. Vea, padre, aquí está Moscú. Aquí Novgorod, allá Astrakán. Allá se encuentra el mar, aquí está el bosque virgen de Perm, y más allá Siberia. T s a r : ¿Y qué puede ser esto? ¿Estos trazos serpentinos? F y o d o r : Es el Volga. ¡E spléndido! ¡El delicioso delic ioso fruto fruto del apren dizaje! T s a r : ¡Espléndido! En una una sola imagen, imagen, com o visto desde desd e una n nube ube todo nuestro dom inio: sus sus fronteras, ciudades y río ríos. s. n d e r P ushkin , Boris Godunov A l e x a nd
83
MAPAS, CONOCIMIENTO Y POD1
En cualquier estudio iconográfico, sólo a través del contexto se puede de cubrir adecuadamente el significado y la importancia del objeto de anal •sis. Tales contextos pueden ser definidos como las circunstancias en qu se hicieron y usaron los mapas. Son análogos a la situación del discurso e los estudios estudios lingüísticos 25 e imp lican la recons trucc ión de los ambiente físico y social de la producción y el consumo de los mapas, los hechos qu condujeron a su trazado, la identidad de los cartógrafos y los usuarios di los mapas y sus percepciones del acto de trazar y usar un mapa en ui mundo construido socialmente. Estos detalles hablan no sólo de los moti vos que hubo detrás de los acontecimientos cartográficos, sino también di los efectos que los mapas pudieron haber tenido y de la importancia de k información que comunican en términos humanos. Incluso una inspección superficial de la historia cartográfica revela en qué medida el poder político, religioso o social produce el contexto de la car tografía. Lo anterior ha quedado claro, por ejemplo, en un estudio detallado de la cartografía en la Europa Europa mediterránea mediterrán ea prehistórica, antigua antigua y medieval. A lo largo de este periodo , “ el trazado de los mapas ffue ue una de las las armas armas in telectuales especializadas mediante la cual se podía obtener, administrar, legitimar legitim ar y codificar cod ificar el poder p oder”” .26 Más Más aún aún,, este conocim con ocim iento ient o se concentraba en relativamente pocas manos y “se asociaba a los mapas con la élite re ligiosa del Egipto dinástico y de la Europa cristiana medieval; con la élite intelectual de Grecia y Roma y con la élite mercantil de las ciudades-Estado del mundo mediterrán med iterrán eo durante la etapa etapa final de la Edad Edad Media” Med ia” .27 El mundo de la Europa antigua y medieval tampoco fue la excepción a este respecto. La cartografía, con cualquier otra importancia cultural cultural que se le pueda atribuir, fue siempr e una “ cien cia de prín cipes” cip es” . Se sabe que en el mundo islámico los califas del periodo clásico de la geografía árabe, los sultanes del imperio otomano y los emperadores mongoles de la India encargaban el trazado de los mapas y los usaron con fines militares, políti cos, religiosos y propagandísticos.28 En la antigua China, los mapas terres tres detallados también se hacían expresamente de acuerdo con las herra mientas militares y los emblemas espaciales del destino imperial.29 En los inicios de la Europa moderna, desde Italia hasta los Países Bajos, desde Escandinavia hasta Portugal, en todos lados los monarcas absolutos y los hombres de Estado conocían el valor de los mapas para la defensa y la
84
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
guerra, para la administración interna relacionada con el crecimiento del gobierno centralizado y como propaganda territorial en la legitimación de las identidades nacion nacionales. ales. Escritores como co mo Castigl Castiglione, ione, Ely Elyot ot y Maqu Maquiavelo iavelo # ^ apoyaron el uso de mapas por parte de generales y hombres de Estado.30 Con los deslindes los topográficos topográ nacionales cionales enes Europa partir nes de dell siglo xv xvm, m, jel papel de la cartog cartografía rafía ficos en lasna trans transaccion acciones de lasarelacio relaciones de poder, porr lo general fa po favor voreci eció ó a la lass élites sociales. Lass funciones específic La específicas as de los m map apas as en el ejerc ejercicio icio del poder co confir nfir man también la ubicuidad de estos contextos políticos en un rango con tinuo de escalas geográficas^ Éstas van de la estructura del imperio global, y la c o n se serv rva a ció ci ó n d el E stad st adoo-na naci ción ón,, a lla a c o n firm fi rm a ció ci ó n loca lo ca l de los d e rechos individuales de propiedad. En cada uno de estos contextos, las dimensiones de la política y el territorio se fundieron en imágenes que, al igual que los títulos de propiedad, fueron parte del aparato intelectual del poder.
Los mapas y el imperio Al igual que las armas de fuego y los barcos de guerra, los mapas han sido armas del imperialismo. En la medida en que los mapas se usaron en la promoción colonial y se adueñaron de las tierras en papel, antes de ocu parlas efectivamente, los mapas anticiparon el imperio. Al principio, los topógrafos marchaban al lado de los soldados para trazar mapas con fines de recon reconocim ocim iento, d des espué puéss como iinforma nforma ción general y, con el pas paso o del A, tiempo, como una herramienta de pacificación, civilización y explotación en las colonias ya definidas. Sin embargo, hay algo más allá deí trazado de fronteras para la contención práctica política y militar de las poblaciones sometidas. Los mapas se usaron para legitimar la realidad de la conquista y / el imperio. Contribuyeron a la creación de mitos que ayudarían a conser var el statu quo militar. Como comunicadores de un mensaje imperial, se han usado como complemento agresivo de la retórica de los discursos, periódicos y textos escritos, o de las historias y canciones populares que elogian elog ian las virt virtud udes es de dell iim m pe peri rio o •31 á ?
85 I
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
Fi g u r a i i .I. Federación imperial. Mapamundi que muestra la extensión del Imperio
británico en 1886 fu e pu publi blica cado do p o r pr prim im er era a ve vez z co com m o un supl suplem ement ento o del pe rió dico Graphic, el 24 24 de ju lio li o de 1 188 886. 6. Se usaron la pro yecc ión de Me Mercator, rcator, tinta rosa para el territorio del imperio y emblemas decorativos que muestran a Bri- tania sentada en el mundo para articular el mensaje del “Nuevo imperialismo”. Con permiso de lla a British Library.
En estos contextos imperiales, los mapas por lo general apoyaban el ejercicio directo del poder territorial. Las cuadrículas dispuestas por los agrimensores romanos, puestas en funcionamiento en la centuriación, eran una expresión de poder “extendido descuidadamente en todas direcciones [... [. ..]] homogen hom ogeneizand eizand o todo en su su cam ino” ino ” ,32 al igual igual que el deslinde de tierra rectangular de los Estados Unidos creó “orden sobre la tierra” en más sentidos que sólo el de repetir un diseño clásico.33 El redescubrimiento del sistem a tolom eic o de jáeom etría de de coordenadas co ordenadas en el siglo xv fue un hecho cartográfico importante que favorecía una “sintaxis euclidiana” que estructuró el co ntro l ter ritoria l eu ropeo .3 .34 4 De hecho, la naturaleza naturaleza
86
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
gráfica del mapa dio a sus usuarios imperiales un poder arbitrario que era fácilmente separable de las responsabilidades sociales y consecuencias de su ejerc icio. El mundo podía ser grabado sobre papel. El p papa apa Alejand Alejandro ro VI demarcó las posesiones españolas y portuguesas en el Nuevo Mundo.35 En la división de Norteamérica, ella misma “parte de un vasto proceso y experimento europeo, un desarrollo actual del imperialismo interna cional”” , las cional las “propias líneas de dell mapa exhibían este pode r y proceso imp e rial porque habían sido impuestos sobre el continente con poca referencia a los pueblos indígenas y en muchos lugares con poca referencia a la pro pia tierra. Los invasores se repartieron el continente entre ellos con dise ños que reflejab reflejaban an su sus s comple jas rivalida rivalidades des y su poder r ela tiv o” .36 En e ell siglo xix, cuando los mapas se institucionalizaron más y se vincularon al crecimiento de la geografía como disciplina, los efectos de su poder se manifestaron nuevamente en la ola continua de imperialismo europeo. La lucha por Africa, en que los poderes europeos fragmentaron la identidad de la organización territorial indígena, se ha vuelto casi un texto ejem plar de estos efectos.37 En nuestro propio siglo, en la división británica de la India en 1947, vemos cómo el trazo de una pluma a través de un mapa podía determinar las vidas y las muertes de millones de personas.38 Hay innumerables innumer ables contexto contextos s en los que llos os mapas mapas s se e convir convirtiero tieron n en la moneda de “tratos” políticos, contratos, subdivisiones, ventas y tratados realizados con motivo del territorio colonial y, una vez vueltos permanentes en la imagen, estos mapas con mucha frecuencia adquirieron fuerza de ley en^ el paisaje.
Los mapas y el Estado-nació Estado-nación n I La historia de los mapas se encuentra inextricablemente vinculada al sur gimiento del Estado-nación en el mundo moderno^ Muchos de los mapas impresos de Europa subrayaban los es estados, tados, las cor corrien rientes tes d de e agu agua a y las fro fron n teras políticas que constituían las dimensiones político-económicas de la geografía europea.39 Los primeros teóricos políticos encargaban mapas a los hombres de Estado, quienes, a su vez, estaban entre los primeros colee-
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
cionistas sistemáticos.40 En muchos países, la actividad cartográfica esta ba en gran gran medida me dida bajo ba jo el mando m ando del Estado.41 Estado.41 No obstante, mientras el Estado estaba preparado para financiar esta actividad, de manera directa dire cta a través través del erario erari o público, o in directa gracias gracias a prerrogativas comerciales, a menudo se insiste en que se trataba de conocimientos que gozaban de privilegios gubernamentales. En Europa occidental, la historia de los secretos cartográficos, aunque a menudo no surtían efecto, se puede rastrear hasta el siglo xvi con la política de siglio española y portuguesa.42 Era una práctica para monopolizar el conoci miento, para “usar documentos geográficos como un recurso económico, de la misma manera que se guarda guardaban ban en secreto secre to y se utilizaban los miste miste rios de ofic of icio io”” .43 Un ejemplo importante de la interacción entre los mapas mapas y la política de Estado se encuentra en la historia de la tecnología militar. Ante la mirada de los militares, los mapas siempre han sido considerados un tipo delicado de conocimiento y las políticas de secreto y censura abundan tanto en la ac tualidad, en las especificaciones “escondidas” de defensa y de las agencias cartográficas, como en los cuarteles de campaña del pasado.44 En un nivel práctico, los mapas militares son elementos pequeños pero fundamentales de la infraestructura técnica del ejército en el campo de batalla. Así como se transformaron las técnicas de guerra que pasaron de ser tácticas de sitio a estrategias de mayor movimiento, especialmente a partir del siglo xvm, también tamb ién los mapas que se utilizaron utiliz aron para la guerra fueron fue ron transformados.4 transforma dos.45 5 Sin embargo, incluso en estos contextos activos se dieron procesos históri cos más sutiles. El conocimiento de los mapas fomenta la conducta bélica contr ol remoto, rem oto, de manera que, que, consideramos, el acto de ase f~ mediante un control sinar se contempla con mayor facilidad.46 Los mapas militares no sólo facip litan la la conducta técnica téc nica de la la guerra, sino que también aminoran eTsentido de culpa que sur gea ge a partir de esta conducta. conducta. Las líneas silenciosas del del ¡
paisaje paisaje de papel fomentan fomen tan la la idea de un espacio socialmente socialme nte vacío. No todos los mapas militares son silenciosos; muchos de ellos procla man a gritos la victoria militar. De la misma forma que existen desfiles, canciones y poemas militares, también, por lo menos a partir del siglo xv en Europa, ha habido planes de batalla diseñados para conmemorar los lugares lugar es sagrados de gloria glo ria nacional.4 nacio nal.47 7
88
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
Los mapas y los derechos de propiedad Los mapas catastrales o estatales que muestran los derechos de propiedad revelan el papel de los mapas en la historia de las relaciones de clase agra rias. Aquí los mapas pueden ser considerados un medio a través del cual los señores estatales o individuales podían controlar de manera más efec tiva una población campesina que ocupaba la tierra.48 En la sociedad roman ro mana, a, las las prácticas codificadas de los agrimensores pueden inte rpre-
Fi g u r a i i .2. Los mapas estatales de gran escala y los catastros que los acompa-
ñan ña ns se e convirt convirtiero iero n en un una a herramienta en el surgimiento del capitalismo ag agrario rario en IInglate nglaterra rra a pa rti rtirr del sigl siglo o xv xvi. i. En estefrag me nto del mapa de Samuel Walk Walker er del estado de Gametts, Essex (1622), los detalles de propiedad ( d n = tierras de Edward Naylor, d l = tierras de Richard Laven der), la delincación precisa y la las s me- didas correctas (en acres, roods acres, roods o perches) traducen los derechos de propiedad a una un a imagen tangible y de com pro promis miso o le lega gal. l. E Ell or origin iginal al está en una esca escala la de 5 50 0 cm porr 1 609 m po m.. Esta repr re prod od uc ucci ción ón mid mide e ap apro roxim xim ad adam amen ente te 1.6 x 1 1.1 .1 m. Co Con np perm ermiso iso de la la British Libra ry (Manu scritos Adicionales 41 4184 848) 8)..
89
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
tarse no sólo como manuales técnicos de división en un sentido teórico, sino también como una estructura social para regular legalmente las tie rras expropiadas y para calcular los gravámenes.49 Los mismos mapas for jad ja d os en b ro n c e o talla ta llado dos s en p iedr ie dra a estab est aban an di dise seña ñado dos s para pa ra h a ce r más permanente un orden social en el que había hombres libres y esclavos, y para el cual la división térritorial era la base del estatus.50 También en los inicios de la Europa moderna estaban en funcionamiento algunas de estas fuerzas, a pesar de que el contexto sociológico de los mapas era distinto. El grado hasta el cual el mapeo de las zonas rurales locales estaba encerrado en un proceso de litigio no nos deja duda en cuanto a su contexto sociolegal y a su efectividad como medio para resolver conflictos entre señores y camp esinos por dere chos de propieda prop ieda d de la tierra .51 Los mapas cabían tan bien en la cultura de la sociedad de las tierras como lo habían hecho en las diplomacias de la corte y en las maniobras militares de los Estadosnación del Renacimiento en Europa. En términos similares, los mapas se pueden ver insertos en algunos de I
los cam cambios bios estructurales a largo plazo pla zo en en la transición transic ión del feuda lismo al al
V capitalismo capitalismo.. La economía econom ía del mundo mundo y su su nueva división división geográ fjc a d el tratrabajo se producía con la ayuda de documentos geográficos, entre ellos los mapas.52 Los planos precisos y de gran escala eran un medio para explotar más eficientemente la tierra, para aumentar los costos de renta y para reforzar las obligaciones legales o modificar los documentos de tenencia de la tierra. Al sustituir topografías escritas más antiguas, los mapas sirvieron, f a manera manera de inventario inventario gráfi gráfico, co, como una codificación de información información -^acerca de la propiedad, la tenencia, los valores rentables, las prácticas de cosecha y el potencial agricultor que permitía a los dueños capitalistas de la tierra contemplar sus bienes como un todo y tener un mejor control de '¿ellos.5 '¿ell os.53 Ver era creer cre er en relación rela ción con la las s jerarqu ías territoriales expresadas expresadas en los mapas. Ya sea en la historia general del desarrollo de la agricultura, de la demarcación, del secado o de la construcción de diques en pantanos y ciénegas, ciéne gas, o en la recla re clam m ación ac ión de colin c olinas as y páramos, pára mos, elio el io jtóg jt óg ra fo cada v ez con mayor frecuencia cantina al lado del señor para difundir formas capi talistas de agricultura.54 Los mapas dificultaron de manera invisible la vida cotidiana de la gente común. Así como un reloj, como símbolo gráfico de la autoridad política
90
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
centralizada, trajo consigo la “disciplina del tiempo” al ritmo de los trabad, ¡adores industriales,55 las líneas de los mapas, dictadoras de una nueva agraria, introdujeron una dimensión de “disciplina del espacio”. j topografía agraria, En las sociedades campesinas europeas, las antiguas tierras comunes eran subdivididas y asignadas con ayuda de los mapas, y en la “selva” de las an ti tigu gua as tierras indias de Norte Norteam améric érica a las lí líneas neas front fronterizas erizas del mapa fueron un medio de apropiación que, quienes desconocían los métodos topográfi coss geom co geométricos étricos,, n no o lograron nunca cu cuesti estionar. onar. Los mapa mapass ingresaron en el sistema legal, se colocaron en la artillería militar, adquirieron una aureola de ciencia y con contribuyeron tribuyeron a lla a creación de un una a ética y una vi virtud rtud de de defi fi nición cada vez más precisa. El trazado de mapas excluía tanto como^" incluía. Fijaban la relatividad territorial de acuerdo con los días de naci mient mi ento, o, accidentes de descubrimiento o, con m ayor frecuencia, el meca me ca nismo nis mo del me mercad rcado o mundial.
Contenido de los mapas en las negociaciones de poder “ ¿Ése es el mismo map mapa?” a?” , preguntó Jincey. Jincey. Ella seña ló el gran mapamundi que colgaba, enrollado durante el verano, por encima del pizarrón que estaba detrás de la señorita Dove. “¿China todavía es anaranjada?” “ Es u un n map mapa a nuevo — dijo la señorita Dove— . China ahora es morada.” “Prefiero el mapa viejo —dijo Jin ce y— . Me gu cey— gusta sta el viejo mundo.” “ La cartografía eess un un arte en movimiento”, dijo la señorita Dove. F r a n c é s G r an Pa t t o n , Go Goocl ocl Mornin Morning, g,
Miss Dove
Durante mucho tiempo los cartógrafos y los historiadores cartográficos han estado conscientes de las tendencias del contenido de sus mapas y se refieren a ell ellas as como “inc lin linac ación ión ” , “ desv desviación” iación” , “ distorsión” o “ abuso abuso”” vj de los sólidos principios cartográficos. Sin embargo, se ha dedicado muy poco espacio en la literatura cartográfica a las implicaciones políticas de estos términos y a lo que ellos representan y, todavía menos, a sus conse-
91
MAPAS, MAPA S, CONO CIMIENT O Y PODER
cuencias sociales. Tal “inclinación” o “distorsión” por lo general se mide con una regla de “objetividad” que se deriva, a su vez, de un procedimiento cartográfico. Sólo en los mapas que se distorsionan de manera deliberada con fines, por ejemplo, propagandísticos o publicitarios, se discuten las consecuencias.56 La cartografía “profesional” del Servicio Estatal de Cartografía del usos, Bartholomew o Rand McNally o sus antecesores serían C~.rV rV 'C 'V
© considerados absolutamente libres de estas imágenes políticamente contaminadas min adas.. Que los mapas mapas pueden producir una una imagen verdaderamente verdadera mente ciencie ntífica del mundo, en la que la información concreta se representa de manera objetiva, es una idea muy arraigada en nuestra cultura mítica. Reconocer que toda la cartografía es una una “fic “ ficció ción n intrincada intrinc ada y contro co ntrolad^” lad^” 57 no nos impide conservar una diferencia entre las presentaciones del contenido del mapa deliberadamente inducidas por el artificio cartográfico y aquéllas en las que no se examina el contenido estructural de la imagen.
Distorsiones deliberadas del contenido del mapa En toda la historia de los mapas mapas se pueden pueden encontrar enc ontrar distorsiones d istorsiones deliberadelibe radas del contenido de un mapa con fines políticos y el cartógrafo nunca ha sido un artista, dibujante o técnico independiente. Detrás del cartógrafo está un conjunto de relaciones de poder que crean sus propias especificaciones. Ya sea impuestas por una persona individual, por la burocracia del Estado o por el mercado, estas normas pueden ser reconstruidas tanto a partir del contenido de los los mapa mapas s com o del modo mo do de representación cartográfica. Mediante la adaptación de proyecciones individuales, la manipulación de la escala, la magnificación o el cambio de signos o.de tipografía, o el uso de colores emotivos, quienes trazan los mapas de propaganda por lo general han apoyado la visión unilateral de las relaciones geopolíticas. Estos mapas han formado parte de la vigencia de las estrategias internacionales psicológicas de guerra mucho antes de ser usadas por los geopolíticos nazis. Las guerras religiosas de la Europa del siglo xvn y la Guerra Fría del siglo xx expresaron sus batallas en los contenidos de los mapas propagandísticos tanto como a través de otros medios.58
92
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
Mapas aparentemente objetivos también se caracterizan por la mani pulación constante de su contenido. La “censura cartográfica” implica la representación incorrecta y deliberada, diseñada para confundir a los usuarios potenciales del mapa, quienes, por lo general, eran opositores del / $OQ K ,, -A ' , ' ,V; - ' 1
*
f? f1g f ív3
i
B *&?» I
jd H
'
- ;-
j .", -3 * í , . ,t
fL • 1 ¿
_ __ _ _ _ _ __ _ _
5 .>'.'•■ j-■ -• .— . ----- •*?
. ;•.'>■
FR OM CAPE TOW TOWM M X XO O CA CAIRO IRO VIA VICTO VICTORIA RIA FALLSL-'*' —
? ? ® •í
/
-Slt*-* -Slt*-* ' H;
a«:
>-■ ' V M ' ffEU:
S-4 g i *
.-;' .-; '
-V- '
*'-; A. , 3 “-
v
.
v
—
THE US3.CÍ 0P 0PHI HIR R
•«OltÉOM ’WM WPSI; ~~
ijairrsrü ijairrsr ü us uso o .■
and
' . ;^ V
T ' :~M
,/ ja
’ » < . V .® A ííii A ííff 0 W AT AT O
‘
AMBESI^A
« B
E
' -®
ENGLAND’S EL DORADO IN AFRICA, Being a descripción o f M atabeleland an and d Mashonaland, and che che less-known less-known Adjacent Territórles, and an Accou Account nt of the GOLD FIELOS of BRITISH SOUTH AFRICA,
‘‘
'’*
^* wr sr aS jsa
EY E. P. MATHERS, F.G.S., F.G.S., F.R.G.S.,
!i
'o 'otí tís? s? Editor ° f “ South South Africa,” and Author of “ Golden Golden Sout South h Africa,” “ A Glimpse Glimpse of the Gold Gold F Fíelds, íelds,”” “ Sout South h Africa
/•./<
]M04? ]m M04?Í & Í t sí í)
'
Fi g u r a i i .IO. Portada de Zambesia, Zambesia, England’s El Dorado in Africa (Londres, 1891).
La escena se establece en un mapa del contorno de Africa. Britania, mostrando un mapa de Zambesia, trata de convencer a los colonizadores blancos de apro vechar la riqueza económica del país mientras que se excluye a la población indígena africana de la escena. De la Colección de la Sociedad Geográfica Ame ricana. Biblioteca de la Universidad de Wisconsin-Milwaukee.
111
MAPAS, CONOCIMIENTO Y PODER
Los mapas como tipo impersonal de conocimiento tienden a “desocializar” el territorio que representan. Fomentan el concepto de un espacio socialmente vacío. La cualidad abstracta del mapa, representada tanto en las líneas de una proyección tolomeica del siglo xv como en las imágenes contemporáneas de la cartografía por computadora, aligera el cargo de conciencia respecto de la gente del paisaje. Las decisiones tomadas en el ejercicio del poder se retiran del terreno de los contactos inmediatos frente a frente. Estas ideas aún tienen que ser exploradas en contextos históricos específicos. Al igual que el historiador, el cartógrafo siempre ha desempeñado un papel retórico en la definición de las configuraciones de poder en la sociedad, así como en el registro de sus manifestaciones en un paisaje visible. Cualquier historia cartográfica que ignore la importancia política de la representación represe ntación se relega a una una historia “ahistóric “ ahistórica” a” .
112
III Silenci Sil encios os y secretos
*
LA AGENDA OCULTA DE LA CARTOGRAFÍA EX LOS AL ALBORE BORES S DE LA EUROPA MODERNA1 MODERNA 1
Hace algunos años, en una visita a Leningrado consulté un mapa para saber dónde me encontraba, pero no lo logré log ré.. Desde donde estaba es taba se veían igl iglesi esias as enorm enormes es que no estaban señaladas en mi mapa. Cuando finalmente se me acercó un intérprete para ayudarme, me dijo: “No incluimos las iglesias en nuestros mapas”. Lo contradije señalando una que estaba claramente clarame nte marcada. m arcada. “E “Ess un museo —me dijo- •, no es lo que llamamos una ‘iglesia viva’. Las ‘iglesias vivas’ son las que no incluimos.” Entonces me di cuenta cuen ta de que no era la primera prime ra vez vez que estaba frente a un mapa que no mostraba muchas cosas que tenía ten ía frente a mí. mí. Todo Todo el tiempo que pasé en la escuela y en la universidad había consultado mapas de la vida y el conocimiento en los que casi no había señales de muchas de las cosas que más me preocupa bann y que ba q ue me pa pare recí cíaa que tení te nían an la m ayor ay or im impo port rtan anci ciaa po posi sibl blee paños a ra mi c o nperplejidad d u c ir miadvida. vid a. Rsid ecor ec ordé que e d u ran ra nin te muchos perplejid había sido o dé total; totalqu ; ningún térprete se había acercado a mí para ayudarme. Esto sigui siguióó así hasta que dejé de sospechar sospec har de la cordu cordura ra de mis percepciones y comencé a sospechar de la credibi lidad de los los mapas. „ „ „ '
E . F. SCHU SCHUMACH MACHER, ER,
“Sobre los mapas filosóficos”, Una guía para los perplejos ~ Este capítulo apareció originalmente en I Im m a g o M u n d i. T h e I n te r n a ti o n a l J o u r n a l f o r th e Hi sto ry q f C a r to g r a p h y 40 (1988), pp. 57-76.
113 11 3
SILENCIOS Y SECRETOS
Üiste ensayo recoge un tema explorado con mayor profundidad en el con texto de las dim ension es ideológicas ideológicas de la cartografía.2 Su interés principal es el diálog diálogoo qu e surge de la sup resión, inten cion al o no, de inform ación en los mapas. Se basa en una teoría del silencio cartográfico. Mi lectura del mapa no es técnica (ésta cuenta ya con bastante literatura), sino política. El objetivo de este ensayo es mostrar esos silencios que surgen de las polí ticas deliberadas d e secreto y cen sura , y examinar, al m ismo tiempo, los si si lencios más indirectos arraigados en procedimientos y reglas a menudo ocultos. Se puede decir que estas reglas son una especie de mentalité sub sub consc iente qu e m edia el el conocim iento con tenido en los mapas con el fi fin de sustentar el statu quo y el poder del Estado. Aunque gran parte de lo dicho en e ste en sayo se apli aplica ca a todos los periodo periodo s, incluso el pr ese nte ,2 éste se enfoca principalmente en los albores de la Europa moderna. A par tir del siglo xvi los mapas ofrecen oportunidades particularmente claras pa p a r a e x p lo r a r u n a n u e v a p e r s p e c ti tivv a e n la lass r e l a c i o n e s c a m b i a n t e s y re c í pr p r o c a s e n t r e el s u rg im ie n to d el E s t a d o - n a c i ó n y la e x p a n s ió n d e la c a rt rtoo grafía.4 El origen de este ensayo se encuentra en el establecimiento de la estabilidad y la la durabilidad, tare as princ ipales de todo s y cada uno de los E Ess tados-nación5 en los albores de la Europa moderna, así como en otras épo cas.. Al cas Al establece r el m arco teórico, se d iscutirá que la cartografía fue, prin cipalmente, una forma de discurso político6 relacionada con la adquisición y la conservación del poder. Por lo tanto, para apoyar este argumento se utilizarán ejemplos tomados de los mapas.
Teorías acerca de los silencios de los mapas El trazo de mapas de los Estados-nación de los principios de la Europa moderna ofrece ejemplos de diversos tipos de silencio cartográfico. Al igual que en la historia de la cartografía en general, se podría construir una ti po p o lo logg ía m ás a m p li liaa d e lo loss si sile le n c io s . E x is te n v ario ar io s a g e n te s q u e c o n t r i b u yen a los silencios en el proceso de realización de un mapa durante sus diferentes etapas, desde la recolección de datos hasta su compilación, edi ción, dibu jo, im presió n y pu blic ació n.7 Al evalu ar los los silencios silencios debem os 114
SILENCIOS Y SECRETOS
estar conscientes no sólo de los límites geográficos del conocimiento, sino también de las limitaciones tecnológicas de la representación, así como de los silencios en el registro de la historia debidos a la destrucción de prue bas. Sin Si n e m b ar g o , e n e s te e n s a y o n o m e i n t e r e s a n e s o s s il ilee n c io s s u rg id o s de ignorancia geográfica, carencia de datos, errores, limitaciones de las mediciones, medici ones, diseño deliberado ni otros asp ectos de las caren cias de especificación y técnicas.8 Aquí abordo los silencios políticos. De modo que resulta fundamental plantear una teoría adecuada respecto de los silencios políticos en los mapas, tanto para mi interpretación de la naturaleza de la cartografí cartografíaa del Estado como p ara las diver diversas sas m ane ras e n qu e lo loss m a pas se u t il iz a r o n p a r a c o n s e r v a r y le g i ti m a r el p o d e r de l E s ta d o . Mi p o s ición teórica se deriva de dos vertientes. La primera está relacionada con unaa perce pció n fi un filos losófi ófica ca y y,, m ás espe cíficam ente, fenom enológica de lo loss silencios.9 La segunda, con la sociología del poder y la idea de que el conocimiento es poder. Sabemos por los filósofos que el silencio es un fenómeno “encontrado en todos y cada uno de los segmentos de la experiencia humana en los que se da alguna expresión”.10 Conocemos también la definición de la expresión sión:: “cua lquier a ctuac ión que em plea sign signos, os, sonidos, ges gestos tos o marcas relacionados sistemáticamente y que tienen significados reconocibles para manifestar pensamientos, sentimientos y estados de cosas” y que el “des plieg pl iegue ue de c u a lq u i e r ti tip p o d e len le n g u a je se c o n s id e r a [ ...] .. .] u n a e x p r e s i ó n ” .11 .11 Esto significa que, aunque los silencios más obvios son los que ocurren en el discurso y en la música, también se dan en las artes que no se actúan, como la pintura y la escultura.12 De esta manera, el concepto de silencios se aplic aplicaa tam bién a llos os mapas. Ign orar o des acre ditar estos silencios silencios,, como lo han hecho la cartografía y la historia de la cartografía, es cerrar un camino importante de la exploración histórica, camino en el que se puede observar que los mapas comprenden tanto la imaginación como las preconcepciones sociale socialess de sus lec tore s.1 s.13 3 De tal suerte, sabemos que aquello que no está presente en los mapas es tanto un c am po de investi investigación gación como lo que sí está. Una segunda refl refleexión derivada de la vertiente filosófica es que se puede considerar a los silencios como declaraciones positivas y no sólo brechas en el flujo del lenguaje. Por lo tanto, tomando en cuenta estos huecos en los mapas que 115 11 5
SILENCIOS Y SECRETOS
hacen de la pauta de líneas y puntos una imagen comprensible, debemos es tar prepara dos para c on sider ar a llos os sil silencios encios como alg algo o más que la mera ausencia de otra cosa. Insisto deliberadamente en el uso del término silen cios en el contexto de los mapas, más que en la expresión un tanto negati
va de e s pac ios e n blanc o utilizad a en la antigua lit er at u ra ,14 ,14 porq ue se pu p u e d e v e r el s il e n c io c o m o u n a “a c tu a c i ó n h u m a n a a c ti v a ” . 15 El s il e n cio puede revelar tanto como lo que oculta y, de actuar como pronuncia mientos independientes e intencionales, los silencios en ocasiones pueden volverse una parte determinante del mensaje cartográfico. Entonces, al igual que en la comunicación verbal, el silencio es más que la contraparte de lo que suena; en el caso de un mapa, el silencio no es sólo lo opuesto de lo que se describe. Los espacios en blanco que abundan en los mapas de la Europa moderna, por ejemplo, no se pueden explicar simplemente con el pla p la n te a m ie n to del de l “h e c h o ” c o n tr a el “no “n o h e c h o ” . El si sile le n c io y la e x p re s ió n no son partes alternativas sino constitutivas del lenguaje de los mapas; cada una es necesaria para entender la otra. Una interpretación cartográ fica de los silencios en un mapa parte, entonces, de la premisa de que el silencio aclarp y tiende a ser tan culturalmente específico como cualquier otro as pec to del lenguaje carto gráf ico.1 ico.16 6 Mi segunda reflexión viene de la sociología. Esto nos ayuda a obtener una com prens ión h istórica del ¡¡si sillen enci cio o cartográfico.. cartográfico..Implica Implica ver a la car to grafía como una forma de conocimiento, y a ese conocimiento como dis curso. Bajo esta luz, los mapas se interpretan como perspectivas construi das socialmente en el mundo más que como representaciones “neutrales” o “impa rciales” que, insisten algun algunos os historiado res, definen el surgi surgim m iento de la cartografía del Estado en los albores de la Europa moderna. Este mito de la “objetividad” basada en las medidas de los mapas todavía se tie ne que analizar; la aplicación del concepto sociológico de “poder-conoci m iento ” en la historia de la cartografí cartografíaa es otro paso de ese pr oces o.1 o.17 7 En este ensayo he partido de la lliteratu iteratu ra soci sociológi ológica ca sobre la natur ale za del conocimiento a las ideas de Michel Foucault18 para interpretar las categorías del silencio cartográfico, intencional. y no intencional./ identi ficadas mas adelante. Especialmente dos grupos de ideas parecen tener oirr ) una importancia directa: la idea de poder-conocimiento (pou v oir s av oi y el concepto de episteme.
116
SILENCIOS Y SECRETOS
1. Foucault acentúa constantemente la relación entre el poder y el
conocimiento. Según él, esta relación sirve para enmarcar los ejemplos de secreto secret o deliberad o y cen sura. Y escribe que: Debemos admitir [...] que el poder produce conocimiento (y no solamente al motivarlo porque sirve al poder o al aplicarlo porque es útil); que el po der y el conocimiento se involucran directamente uno con otro; que no hay una relac relación ión de poder si sin n la constitución correspo ndiente de un c am po de c o n o c im ie n to , y ta tam m p o c o h a y c o n o c im ie n to q ue no p re su p o n g a y cons tituya al mismo tiempo relaciones de pode r.1 r.19 9 Mientras se puede rechazar la universalidad de estas afirmaciones result res ultaa más fác fácil il aceptar la impli implicación cación de que el mapa e ra un instrum ento de poder y que gran parte de la instrumentalidad de los mapas a princi pios pi os d e la E u r o p a m o d e r n a e s t a b a r e l a c i o n a d a d e a lg u n a m a n e r a c o n el pod er. F o u c a u lt p a r e c e h a b e r a c e p ta d o q u e el m ap a es u n a h e r r a m i e n t a de poder. medición, investigación, examen y coerción del Estado.20 Desde su punto de vista, los cartógrafos ofrecían al Estado una masa de información que éste, desde su posición estratégica, podía explotar. Más aún, con frecuencia el Estado también podía imponer sus propias reglas sobre el conocimiento cartográf cart ográfico, ico, dando lugar así a llos os silencios inducido s p or esas oc asiones de secreto deliberado y censura tan recurrentes en la historia del registro en mapas de los Estados europeos. En otros puntos, Foucault continúa señalando señal ando que la prod ucción del discurso en todas las sociedades “e “ess al mismo tiempo controlado, seleccionado, organizado y redistribuido según cierto número de procedimientos”.21 En el caso de la cartografía, estos pro p ro c e d im ie n to s i n c lu y e n c o n tr o le s e x te r n o s , re regl glas as in te r n a s y la re g la m e n tación tac ión del acceso al conoc imien to. Por llo o tanto, ttan an Estado obtie ne p ode r a ii-— — tr travé avéss del cono cim iento, j 2. El segundo grupcTde ideas de Foucault, la ep istem e, nos ayuda a interrogar los silencios no intencionales de los mapas (los “espacios en bla b la n c o ” r e s id u a le s d e la a n ti g u a l i t e r a t u r a c a rt o g rá fi c a ). G om o y a se dijo di jo,, estos silencios son “actuaciones activas” en términos de su impacto social y políti político co y de sus efect efectos os sob re la conciencia. Má Máss aún, son u n a specto de todo el discurso,22 parte de los códigos culturales que subvacen a todas las 117
SILENCIOS Y SECRETOS
formas for mas de con ocim iento y que es truc turan “su “su lenguaj lenguaje, e, sus es esquem quem as, su suss técnicas, sus valores, la jerarquía de sus prácticas”.23 Desde los primeros mapas europeos encontramos que estos silencios se comprenden mejor en términos “a p r io r i históricos” que “en un periodo determinado delimitan [...] la totalidad de la experien cia de un cam po del con oc im iento ”.2 ”.24 Es Esto toss “a p r i o r i históricos” forman lo que alguna vez Foucault llamó una epis- teme;25 al igual que el resto del conocimiento, el conocimiento cartográ
fico está delimitado de tal manera que mientras en los mapas se incluye cierta información, otros aspectos de la vida y del paisaje son excluidos de acuerdo con la episteme. Equipados con estas reflexiones filosóficas y sociológicas de los signifi cados com unicados p or llos os “es “espacios pacios en blan co” de los los mapas, me parece que estamos en una mejor posición para tratar de descubrir la historia de esos significados. Quizá también estemos mejor equipados para desci frar esos sistemas del conocimiento “no formal” que abundaba en la prác tica cartográfica cotidian a de lo loss principios de la Europa m ode rna, y que lo sigue haciendo.
El secreto y la censura: los silencios intencionales de los mapas En el sig siglo lo xv xvi, i, la ce nsu ra literaria de diversos tipos era u n a spec to co m ún en la cultura europea, cuando las naciones que empezaban a surgir luchaban tanto por su definición como por un territorio físico.26 Aquí se mostrará cómo la producción del conocimiento cartográfico estaba igualmente con trolada, seleccionada, organizada y redistribuida de acuerdo con procedi mientos definidos. Incluso en muchas sociedades antiguas y tradicionales, a menudo se consideraba a los mapas como un conocimiento privilegiado al que sólo tenían acceso quienes estaban autorizados por el Estado o por su gobernante.27 A principios del periodo moderno, el secreto cartográfico (conservado por lo que se puede definir como reglas de exclusión y prohi b ic i ó n ) e s ta b a c l a r a m e n te d if u n d id o y la c a r to g ra f ía “o f ic ia l” d e e s te p e riodo ofrece un caso clásico de relación “poder-conocimiento”.28 En el 118
MLENCIOS V SECRETOS
mism mi smo o mo m ento en que los m apas eran tr transform ansform ados po r llas as ttécnicas écnicas matemáticas, también estaban siendo apropiados como una arma intelec tual del sistema del Estado. Si bien para el siglo
XVI
su estudio se había
convertido en la “ciencia de los príncipes”, era porque para entonces los mapas map as ssee recono cían com o un lengua lenguaje je vi visua suall que com unicaba de rechos territoriales o de propiedad en un sentido práctico así como simbólico.29 Sin embargo, en términos cartográficos, el ejercicio de ese poder podría resultar negativo y restrictivo. La propia imagen del mapa se estaba vol viendo sujeto de ocultamiento, censura, en ocasiones de abstracción o fal sificación. Son estas manipulaciones deliberadas, producto de la voluntad de individuos, grupos o instituciones,30 las que dan origen a nuestra cate goría de silencios intencionales. Por supuesto que tenemos que reconciliar, mapa por mapa, el estudio Je estos silencios cartográficos intencionales con la complejidad de distin tos acontecimientos históricos. Las circunstancias inmediatas que lleva ron a los príncipes, tanto seglares como eclesiásticos, y a sus consejeros, a controlar la cartografía mediante la censura y el secreto, abarcaban un amplio rango de sus intereses fundamentales. Podían ser militares, comer ciales o religiosas. Por ejemplo, en el mapa del mundo del jesuíta Matteo Ricci, publicado en Pekín en 1602, los lugares sagrados de la cristiandad están correctamente anotados, mientras que los del Islam aparecen sin ningún comentario y la razón del silencio de Ricci es que sabía que “los chinos no se acercarían a la religión que él predicaba al saber que había enormes enor mes griet grietas as de la creencia en el m undo o ccidental del que provenía esa religión”.31 También variaba la manera en que se ejercía el control sobre los mapas y su contenido, reflejando siempre diversas formas de compartir el poder dentro de los Estados-nación de los siglos xvi y xvn. En algu alguno noss Estados, el con trol se cen traba en la Corona y en u n grupo de co n sejeros cercanos. En otros, se delegaba a una institución burocrática. En cualquier caso, los efectos eran complejos, incluso paradójicos, mientras quee en otros lados llas qu as polí políticas ticas de secreto se aplicaban de m ane ra incon sis tente. En los mapas de Europa de los siglos xvi y xvn, estos aspectos de secreto nacional se manifiestan de diversas formas. Aquí tomaremos sólo Jos: en primer término, ejemplos de secreto estratégico y, en segundo, casos de secreto comercial. 119 11 9
SILENCIOS Y SECRETOS
Secreto estratégico Algunos Algu nos d dee lo loss cas casos os en qu e de m ane ra m ás evidente se manifestaba el creciente interés del Estado por el control y la restricción del conocimiento de los mapas se relacionan con aspectos militares o estratégicos. En Euro pa, p a, d u r a n t e los sig siglo loss xvi y XVII, c a si n o p a s a b a u n a ñ o s in q u e h u b ie r a un unaa guerra. Los mapas eran objeto de inteligencia militar; los hombres de Estado y los los príncipes reunía n m apas para planea r y y,, después después,, para conm em orar batallas; los libros de texto militares promovían el uso de los mapas. Las razones estratégicas para conservar la información de los mapas en secreto incluían la necesidad de confidencialidad sobre las operaciones ofensivas y defensivas de los ejércitos del Estado, el deseo de disfrazar los ataques de colonización externa y la necesidad de acallar a la oposición den tro de las pobla poblaciones ciones domésticas desarrollando desarrollando sistem as adm inistrati inistrativos y judiciales, así como la necesida d m ás obvia de ocultar la información detallada acerca de las fortificaciones.32 Sin embargo, además de estas bases comprensibles y prácticas de los secretos militares, un creciente número de Estados adoptó una actitud de m ayor custodia hacia los mapas de sus ciudad es y territorios, p or llo og gener eneral al inde pend iente de tal tales es consideracion es estraté estratégicas. gicas. Por ej ejemplo, emplo, al com erciante alemán Isaac Massa, quien vivía en Moscovia a finales del siglo xvi, le fue difícil obtener mapas de Moscú y de Siberia sólo porque habría sido un delito grave proporcionárselos.33 Ese mismo siglo, el mapa B o l ’s h o y Chertyozh (que m uestra el Esta Estado do m oscovi oscovita ta completo) parece h ab er si sido do
dibujado en u na sol solaa copia y hab er sido totalm ente desconocido pa ra lo loss di di b u j a n t e s de m a p a s d e E u r o p a o c c id e n ta l .34 O t r a s p o lí t ic a s s im il a r e s h a n sido comunes en Europa y se pueden encontrar, por ejemplo, en los siglos xvi y xvn en Prusia;35 a finales del siglo xvi en Italia (el mapa del reino de Náp N áp oles ol es36 36); ); e n el sigl siglo o xvi e n E s p a ñ a (e (ell “at “atla la s e s c o r ia l”37 l”37), ), y e n el sig siglo lo xvn en Suiza (el mapa de Hans Gonrad Gvger del cantón de Zurich38). Aquí yace una de las paradojas de la historia de los mapas. Justo cuando la imprenta facilitaba la mayor difusión de datos obtenidos de las investigaciones, y cuando por primera vez se'hacían mapas regionales topográficos, algunos Estados y sus príncipes guardaban definitivamente sus mapas en secreto p rohibiendo su publi publicación cación.. 120
SILENCIOS Y SECRETOS
¿Por qué algunos Estados insistían en el secreto cartográfico mientras que otros permitían la publicación de sus primeras investigaciones nacionales? Una razón puede haber sido que las monarquías fuertes percibían unaa m enor nec esidad de secretos que la un lass débiles débiles y amenazadas. Es cierto quee en la IInglaterra qu nglaterra isabel isabelina ina fuertem ente centralizad a lo loss docum entos que han sobrevivido dejan ver pocas dudas acerca de la pertinencia de publicar la investigación de Saxton.39 A partir de la década de 1570, los mapas de Saxton Saxt on eran vistos, por hom bres de Estado como Bur Burghl ghley ey,, com o un apoyo par p araa la a d m i n i s t r a c i ó n y la d e f e n s a n a c i o n a l e s , a u n q u e a lg u n o s p u e d e n haber opinado diferente.40 También en la Francia del siglo xvn se ha observado cómo “los mapas parecen haber funcionado como un apoyo incondicional de un régimen monárquico fuertemente centralizado”.41 Sin embargo, tal argumento no lo explica todo. Por el contrario, algunos de estos mapas se convirtieron en un arma de doble filo. Una vez que estuvieron al alcance de toda la gente se usaron para apoyar otros ámbitos de las luchas po lí líti tica cass d e po de r. E n In g la te rr a , p o r e jem je m p lo lo,, los m a p a s d e S a x to n n o s ir vier vieron on únicam ente para reforzar eell poder de llaa m onarqu ía (como se pre tendía). Una vez que se publicaron y salieron a la circulación, sin duda contribuyeron contri buyeron tam bién al creci crecim m iento de dell fuert fuertee sentido de identidad e independencia provinciales tan exitosamente articulado en contra de la Corona en la Guerra Civil.42 De manera similar, se ha subrayado que en los Países Bajos el uso difundido de los mapas iba de la mano del naciente republicanismo burgués del siglo
x v i i .43
Teniendo en mente aspectos tan
comple comp lejo joss y contradictorios, quizá podamos v islumbrar cómo, pa ra la cautelosa monarquía decidida a conservar su poder, el secreto de los mapas llegó a ser considerado una política prudente para un buen gobierno.
Secreto comercial
El aumento de los secretos en los mapas en los inicios de la Europa moderna tam bién se asociaba con un segundo escenario de actividad geogr geográáfica (el del comercio, y el crecimiento del capitalismo de monopolio). En un periodo en que se estaban estableciendo los fundamentos de la econo121 12 1
SILENCIOS Y SECRETOS
mía mundial europea y sus imperios del otro lado del océano,44 los mo narcas absolutos con frecuencia eran también “reyes mercantiles” que p pee rs e g u ía n o b je ti tiv v o s e c o n ó m ic o s a tr traa v é s de dell c o m e rc io q u e los lo s m o n o p o lio li o s abrían con sus navegaciones.45 Como en el caso del Estado-nación, la esencia del imperio es el control. Para que sobrevivieran estos monopolios comerciales y se pusieran en marcha las políticas de
ma re c lc iusum iusum tenía
que haber un monopolio del conocimiento que permitiera que las nuevas tierra s y sus rutas de llegada llegada y partid a se plasm aran en los mapas. Q uizá el el p r o c e s o d e m o n o p o li z a c ió n d e l c o n o c i m i e n t o d e los lo s m a p a s fu e p a ra le lo al secreto y al uso de los misterios del oficio en el control de los gremios medievales.46 El mecanismo por medio del cual la información cartográfica funda mental acerca de los imperios nacientes de ultramar se censuraba, regula ba b a y m a n t e n í a e n s e c r e t o v a r ia b a c o n s i d e r a b l e m e n t e . En a lg u n o s p a íse ís e s era un proceso correspondiente a los viajes individuales. Este parece haber sido el caso de Inglaterra, donde los escritores contemporáneos a las nave gaciones estaban conscientes de la práctica de la censura47 y sabían que el conoc imiento nuevo era co ntrol ntrolado ado p or unas cua ntas m anos poderosas poderosas:: las de la soberanía, un círculo interno de ministros, o los principales comerciantes y navegantes implicados en un viaje. Por ejemplo, los mapas trazados y los dibujos traídos por el viaje de Drake alrededor del mundo (1577-1580) se convirtieron en documentos secretos. Drake había dado ór denes expresas: “Nadie hará una carta de navegación o descripción de dicho viaje”; esta prohibición de publicación seguiría en vigor hasta 1588 (véase figura figura
i i i .I).48
Aún más elaborados eran los sistemas burocráticos establecidos por la lass coronas de Portugal Portugal y España España pa ra reglam entar el el com ercio de ultrama r y el el conoc imiento del que éste depend ía. Los Los mapas p ronto se convirtieron convirtieron en documentos claves para el lanzamiento de los imperios lusohispánicos. Mientras que se ha debatido muy acaloradamente hasta qué punto existió realmente una política de secreto portuguesa y cuál fue su efectividad,49 las pruebas sugieren el alcance que una monarquía poderosa e interesada en sí misma puede llegar a ejercer en el control y la supresión de mapas sensibles. Se sabe, por ejemp lo, que el castigo castigo para los los pilotos pilotos que diera n o vendieran cartas de navegación a los extranjeros era la muerte.50 A finales 122 12 2
'ILENCIOS Y SECRETOS
leí siglo xv, Juan II de Portugal (1481-1495) tomó medidas para desterrar a los extranjero s, e specialm ente a genoves genoveses es y fl florentinos, orentinos, de todo el terr i tori to rio o portugu és, m ientr as que, se dice, llas as cortes de 1481, en cuan to a llaa na vegación hacia Africa occidental, “exigieron medidas estrictas para conservar el secreto de las tierras descubiertas. Los documentos fueron confiscados; estaba prohibido registrar nuevas tierras en los mapas; las obras náuticas se convirtieron en libros secretos; se difundieron cuentos de prohibición; y se obligó a los navegantes a mantener un voto de silencio”.51 LA
HEJRDTKE
La -cuiji ¿(fcripi ¿(fcripiton ton Ju xroia xroiaoe oe Ju s fran/c Cheuaíier LtfgueL frta m a