Giro Copernicano

 

Giro Copernicano: Copérnico es quien propone que el sol debe estar en el centro. La filosofía anterior a Kant suponía que en la experiencia de conocimiento el Sujeto cognoscente es pasivo, que el objeto conocido influye en el Sujeto y provoca en él una representación fidedigna. Con esta explicación podemos entender, en todo caso, el el conocimiento empírico, empírico, pero no el conocimiento a priori pues lo interesante de este último es que con él podemos saber algo de las cosas antes de experimentarlas. Infinito: Para Platón y Pitágoras el infinito era apeiron, el caos, el infinito carecía de medida: metron. La voz «apeirón» tal como la emplea Anaximandro, significa «sin fin» o «sin límite», suele traducirse como «lo infinito», «lo indefinido», «lo ilimitado». il imitado». En el tercer libro de su obra Física, Aristóteles distingue dos tipos de infinito; el infinito como un proceso de crecimiento sin final o de subdivisión sin final y el infinito como una totalidad completa. El primero es el infinito potencial y el segundo el infinito actual.

Es posible suponer que Kant estaba influenciado por el concepto de infinito de Descartes, a quien por lo demás admiraba. Descartes considera que la causa no es algo inherente al sujeto del conocimiento sino que le viene de un agente externo. Ese agente es la existencia infinita que no necesita de nada para existir ni justificarse. j ustificarse. Descartes toma este concepto de Giordano Bruno quien afirma:

Incluso, (sobre el infnito universo y los mundos) se debe afirmar que el universo es un cuerpo infinito porque no vemos el límite con los sentidos ni con la razón. Kunh llega a decir que para Giordano no es menester que haya centro del universo, siempre y cuando las estrellas estén suficientemente lejos del Sol. Al decir de Hegel, la pretensión Kantiana estriba e conciliar al espíritu abstracto y a la Naturaleza. Es en lo sublime que se llega a un acuerdo en donde el particular se manifiesta conforme al concepto. Más Hegel reconoce que esto es en apariencia, ya que es subjetiva, existe en virtud del juicio del sujeto, sujeto, quien tiene una neces necesidad idad de superación, superación, mas, la única realidad verdadera es la oposición, la búsqueda de la verdadera naturaleza de dicha oposición. Cantor consideraba tres contextos donde surge el concepto de infinito(fundamentos infinito(fundamentos para una teoría general de los conjuntos): primero cuando es realizado en la forma más completa, en un ser independiente de otro mundo, en Dios, al cual llamo l lamo el infinito

 

Absoluto, o simplemente absoluto. Segundo, cuando ocurre en lo contingente en el mundo físico. Tecero cuando la mente lo aprehende en abstracto en una magnitud matemática.. Al primero o llamó Absoluto, en contraste con lo que llamó transfinito es matemática decir, los infinitos actuales que están, sujetos a nuevas extensiones y por tanto relacionados con lo finito. El Absoluto es imposible, imposible de alcanzar Sublime: En Kant la satisfacción de lo bello esta vinculada con la representación de la cualidad; mientras que en lo sublime, la satisfacción se relaciona con la representación de la cantidad. La satisfacción así obtenida *merece llamarse (...) placer negativo. Lo sublime está planteado para Kant a partir de la noción e infinito, i nfinito, algo que supera al sujeto en extensión material. No es sin dolor y angustia como ésta experiencia es vivida. Hay un segundo momento de reflexión segunda en la que se alza de su conciencia de insignificancia a partir de su superioridad moral. Esto es posible porque el objeto inconmensurable inconmensura ble “remueve” una Idea de la razón. Idea que es concepción del infinito, distinta del entendimiento. Torsión de lo sublime a lo siniestro: Lacan interroga la crítica del juicio y aquello que Kant va a resolver a partir de la razón, lacan lo planteará por el lado de la presencia de un real, para leer lo sublime como lo siniestro, tal como Trías lo propone en su libro. Lacan postulará a lo bello como la barrera ante lo real. Lo bello es la zona límite, donde “el rayo del deseo se refleja y se refracta”, produciendo el efecto imaginario de lo bello. Atravesando ese límite, ya que no se habla de sublime, encontramos lo siniestro. Esta hipótesis está fundamentada en el texto de Trías en tanto aquello que va más allá del límite, nos encuentra en un desvelamiento de lo que Lacan llamará (sem10) “más inhabitual que inhabitado; lo unheimlich.

Inventario temático de motivos siniestros: es algo funesto, hay del cuerpo fragmentado, se repite una escena idéntica a la primera vez que se presentó, animación del mundo inanimado y una fantasía que se convierte en realidad. En ocasiones se produce cuando hay realización del deseo escondido e íntimo. La cuestión es que la puesta en acto de la fantasía es motivo angustiante ya que la dimensión de la presentación de la misma, cambia. Freud hace una mención a la castración, en tanto la fantasía sería el modo en que ésta se articula. Cuento de Hoffman Para Freud lo siniestro obedece a complejos reprimidos infantiles que son reanimados en una impresión exterior. Es así que las convicciones primitivas superadas parecen hallar una nueva confirmación por un acontecimiento contingente en el acaecer de la realidad psíquica. La narración de Hoffman hilvana la ficción y lo real, metamorfoseando en su escritura lo siniestro. Lo siniestro es trabajado a la manera del paradigma del tiempo en espiral, el cual

 

señala que los procesos naturales se repiten al infinito. El texto permite a su vez una doble lectura: realista- racionalista y visionaria- fantástica, fantástica, sin que ninguna lo agote. La hipótesis de Trías radica en que lo bello responde a un rostro familiar acorde a la limitación yoica. Eso familiar de pronto se convierte en extraño y revelador de misterios que se han olvidado por represión sin dejar de tener cierto vínculo con un deseo “bañado de temores primordiales”.  primordiales”.  La conclusión estriba en que en la obra artística se traza una solución de continuidad a la vez que una hendidura entre la represión de lo siniestro y su representación sensible. Es así que cifra su ambivalencia: revela sin dejar de esconder. Para Trías la obra artística no patentiza crudamente crudamente lo siniestro sino que lo metaforiza, sustrayendo de la visión la causa. Es entonces aquello horroroso lo que aporta vitalidad a la obra artística y la aporta a través de la obra artística pues en eso radica precisamente su trabajo. Tras la cortina del velo, se encuentran visiones insoportables, castración, canibalismo y muerte. Es de ahí que se formule f ormule que el arte es fetichista, pues esconde y revela, vehiculiza el encuentro con el agujero. Mantiene esa tensión, ese vértigo, del que está a punto de descubrir aquello que no puede ser visto. Lacan propone el abordaje de lo unheimlich para estudiar la angustia tal como abordó el el witz para las formaciones del incc.

Podemos plantear a partir de los desarrollos de Lacan en el seminario 10, que este encuentro supone el encuentro con ese Otro aizado en tanto el a no opera como la causa del deseo. Con ese objeto que como rescata Trías (no es visible) pero que se vuelve tal.