Evaluación de la personalidad

Evaluación de la personalidad. Nuño Bañuelos Cristina Catalina. Evaluación de la personalidad: orígenes, aplicaciones aplicaciones y problemas. El término de personalidad es un concepto subjetivo; para unos personalidad es lo mismo que temperamento (predisposición natural, basada en lo genético-pensar, sentir y actuar), para otros personalidad es una mezcla de rasgos emocionales, intelectuales y de carácter. Personalidad humana como compuesto de habilidades cognitivas, intereses, actitudes, temperamento y  o otras diferencias individuales en los pensamientos, sentimientos y la conducta. Esta definición enfatiza que es una combinación única de características características cognoscitivas y afectivas que se puede describirse describirse en términos de un patrón típico bastante consistente de la conducta individual.  A partir de esta definición se se dice que para evaluar personalidad deben incluir variables cognoscitivas y afectivas ±aprovechamiento, inteligencia, intereses, actitudes-.  Así como características emocionales, llamadas variables de personalidad. Antecedentes históricos

Se desarrolló desde la investigación de las diferencias individuales y de grupo. Muchos antecedentes se pueden encontrar en la historia de la psicología anormal y la psiquiatría; donde se demostró que eran parcialmente o totalmente incorrectas. Entre esas doctrinas se encuentran la frenología (el desarrollo de áreas especificas en el cerebro humano está asociada con características de personalidad y trastornos mentales), fisionomía y grafología. La psicología de las facultades, facultades, la mente consiste en una serie de facultades que pueden ser  desarrolladas mediante el ejercicio mental, de la misma manera que el cuerpo puede ser desarrollado por el ejercicio físico. La fisionomía se interesa por determinar el temperamento y el carácter de rasgos externos del cuerpo en especial el rostro. Es posible advertir advertir vestigios de la fisionomía de la selección selección del personal y los procedimientos de evaluación contemporáneos. Otro ejemplo es a prueba de Szondi; 6 grupos de fotografía con ocho de cada grupo dependiendo el diagnóstico; el sujeto selecciona las que le cause un impacto emocional. Se supone que las necesidades son similares a los pacientes de la fotografía La grafología se analiza la personalidad mediante el estudio de su escritura ± tipo de conducta estilística, interpretación subjetiva-. Estos son ejemplos de pseudociencias, en el siglo XX. Pero están los esfuerzos de Francis Galton, Emil Kraepelin y  Alfred Binet, fueron muy respetables, no siempre fueron acertadas. 1984 Galton propuso medir las emociones registrando cambios en el latido cardiaco, y evaluar rasgos de la personalidad observando a la gente en situaciones sociales inventada; también estudio la medición del carácter (Lewis & Domínguez, 2003). Donde hizo referencia a franklin como una forma inculta de medición de la personalidad; la pierna atractiva y deforme (Kamphaus & Frick, 2000). Kraepelin desarrolló la técnica de asociación de palabras en 1892. 1890  Alfred Binet, creo métodos para estudiar las características de la personalidad de las personas eminentes. La hoja de datos personales de Robert Woodworth, el primer  inventario estandarizado de la personalidad que se aplicó de manera masiva (1919) y la prueba de manchas de tinta de Hermann Roschach (Lewis & Domínguez, 2003). Robert S. Woodworth, en 1918 se publicó la hoja personal de datos de Woodworth, donde trata de detectar soldados potenciales. 116 preguntas con intereses y problem as. Donde esta prueba sirvió como base para el desarrollo de la escala de personalidad de Thurstone y la de  Allport. No fue la necesidad social o selección del personal la que proporciono la evidencia de la necesidad de estas pruebas. Esto Esto se desarrolló en base a la primera guerra mundial, mundial, donde se percataron que que la psicología podía ser de gran ayuda. Después de la 2da guerra mundial las necesidades de salud mental se intensificaron. Y es donde aportaron sus capacidades p sicométricas. El uso de las pruebas psicológicas se expandió más allá del diagnostico- orientación, selección del personal e inv estigación de personalidad.

Evaluación de la personalidad. Nuño Bañuelos Cristina Catalina. Té cnica

proyectiva dependía de la teoría implícita o explícita, que por lo general es la de Freud. Consisten en estímulos propensos a una variedad de interpretaciones, alentara a los pacientes a revelar  información que de otra manera no compartían. Té cnica

de asociación, Galton empezó estudiando estas técnicas desde 1979, que sirvió como introducción. Más tarde Kraepelin, Wunt, Cattel Estudiaron las asociaciones de palabras y registrando las variables (Kamphaus & Frick, 2000). Donde posteriormente en el siglo XX existió un progreso genuino en la evaluación de la personalidad, las pruebas de asociación de palabras de Carl Jung (1905) para detectar y analizar los complejos mentales (Lewis & Domínguez, 2003). Las características temperamentales, emocionales y variables de la personalidad no se miden con tanta precisión como las variables cognoscitivas. Estos intentos se remontan a la antigüedad, pero hasta el siglo XX inicio una aproximación científica genuina a la evaluación de la personalidad.  Aunque unos instrumentos han sido diseñados sobre una base empírica, muchos han sido elaborados en el contexto de una teoría de la personalidad.  A este respecto, las teorías psicoanalíticas, de rasgofactor y fenomenológica han ejercido particular influencia. Y más recientemente, la teoría del aprendizaje social ha estimulado el desarrollo de una serie de instrumentos y procedimientos para evaluar conductas características. Teorías de la personalidad estas teorías de la naturaleza y la conducta humana consisten, en generalizaciones excesivas o estereotipos, pero sirven como guía a la expectativa y la acción.

Lewis, R. A & Domínguez, V (2003). Tests psicológicos y evaluación (11ed) Pearson educación: México. Pág. 313. Kamphaus, R.W & Frick, P.J. (2000). Evaluación clínica de la personalidad y conducta. Manual moderno: México. Pág. 7