Escuela de Liderazgo de Avanzada - 1era. Conf. 09-03-2005 - Noche - Pr. Juan Ballistreri
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1 -ESCUELA DE LIDERAZGO DE AVANZADA - 9/12-03-2005Tema: “LIDERAZGO EMERGENTE” -Turno: Noche - CD Nº 1 -Pr. Juan BALLISTRERI Los cristianos confundimos “Conversión, con “Confesión” de Fe en Jesucristo. Jesucristo. Ese jueguito de palabras que parece tonto -y hasta parece ya exagerado-, tiene que ver con que la Palabra de Dios se revele -o no-, a nuestra vida. Si Usted está convencido que Usted ya está Convertido; no espere Cambios en su vida. Cuando Usted habla de “Conversión”, Usted está hablando de “Redención”; no está hablando de “Salvación”. “Salvación” tiene que ver con tus pecados pasados; “Conversión”, tiene que ver con el regreso al plano original de Dios en tu vida. Ése es el gran tema. El gran problema, es que tú a veces dices: “No… Yo he tenido muchas experiencias experiencias tristes con los creyentes”. creyentes”. Usted ha tenido toda experiencia experiencia triste, con creyentes creyentes que no se terminaron de Convertir. ¿Me entiende? Una persona Convertida, es una persona que la vamos a definir hoy, y en el transcurso de toda la noche; por eso es importante que Usted entienda. El hombre, en todos los órdenes de su vida, ha intentado encontrar la gallina de los huevos de oro. Es decir: Cualquier persona que se dedique a cualquier cosa… ¿Qué va a tratar de buscar? A ver adonde yo, en mi profesión, o en mi trabajo, puedo encontrar la oportunidad de vivir de una manera productiva; productiva; y progresar. Si Usted se dedicaría a la construcción, Usted trataría de encontrar una beta de cómo trabajar para producir más; y vivir más dignamente. ¿Por Qué? Porque hay un sentido de dignidad en su vida que le hace decir: “Yo tengo que encontrar en algún día de estos… Yo me tengo que encontrar con el gran negocio en mi vida; y el día que yo me encuentre con ese gran negocio, entonces mi vida será más digna y viviré más dignamente”. Yo le voy a decir una cosa: En esta noche, al nivel de la palabra -y en esto Usted tendrá que caminar a la luz de la revelación-, vamos a hablar de las gallinas de los huevos de oro; en la Fe. Si nosotros logramos embocar esta palabra en nuestra vida, todo lo que Usted y yo hemos soñado, y hemos anhelado en nuestra vida, se puede comenzar a desatar a partir de hoy. Voy a hacer una de las preguntas más profundas que yo creo que el ser humano se puede hacer: ¿Dónde estaba Dios cuando Adán -varón y mujer-, estaba a punto de comer del árbol del cuál no debía comer? La pregunta es: ¿Dónde estaba Dios en esa escena? ¿Dónde estaba? No hace falta que lo conteste; solamente se lo estoy preguntando dos o tres veces. ¿Dónde estaba Dios cuando la mujer le dijo a Adán: “Comamos”… y mantuvieron ese diálogo? ¿Dónde estaba Dios? Porque la pregunta es: ¿Por qué Dios no irrumpió eso, con palabras de ciencia y don de lenguas?...: “¡No! ¡No! ¡No!... ¡No comas!”. ¿Por qué no les puso un ángel para que no coman, y para que con un palo les pegara en la punta de los dedos?...: “¡No me arruines el plan!”. ¿Dónde estaba Dios, minutos antes de que el hombre llevara el fruto equivocado en su boca? Si en esta noche, y en los próximos minutos logramos contestar esa pregunta, Usted podrá contestarse todas las preguntas. ¿Dónde está Dios, cuando las cosas malas suceden en el mundo? Y cuando hablo de cosas malas, no estoy hablando de circunstancias de la vida de una persona; sino que estoy hablando de las consecuencias del pecado que producen que el propósito de Dios no se manifieste. ¿Dónde estaba Dios cuando los países están gobernados por personas incorrectas, que caen en la miseria y en la pobreza? ¿Dónde estaba Dios cuando el pueblo de Israel pidió rey? Si Usted o yo logramos en esta noche capturar por lo menos algo de esto, Usted tiene su vida solucionada. Usted encontró la gallina de los huevos de oro, y nuestros ministerios tendrán que cambiar. Yo estaba esta tarde exitado en esta palabra; porque si esta palabra se llega a revelar en mi vida, yo mañana tengo que ser otra persona en todos los órdenes de mi vida.
2 ¿Dónde estaba Dios cuando el hombre y la mujer -el varón y la mujer- estaban a punto de dañar, y de frenar -o por lo menos retrasar- el propósito de Dios? El propósito de Dios nunca se puede abortar; sólo se puede retrasar. ¿Dónde estaba Dios cuando Usted iba a cometer un pecado de adulterio; de fornicación; de robo; de mentira? ¿A donde estaba Dios que no le tapó la boca; que no le subió los pantalones; y que no hizo que se cortara la luz en la habitación? ¿Dónde estaba Dios? ¿Dónde estaba Dios cuando Usted -o yoempezamos con chisme; habladurías; o empezamos a hablar mal? ¿Por qué no cayó un rayo, con un hacha -o un papel- que diga: “¡No hables de eso!”? ¿Por qué Dios no hizo esto? ¿Dónde estaba Dios cuando el varón o la mujer se equivocaron? ¿Sabe donde estaba Dios? En la palabra que él había impartido al corazón. Dios estaba en el liderazgo que le había impartido al varón -a Adán en varón, y mujer-. Dios estaba impartido en sus órdenes, impresas en su Espíritu. Ahí estaba Dios. Dios estaba en el liderazgo impartido en Adán, sea este varón o mujer. Recuerden que para Dios, Adán era un varón, y una mujer. ¿Dónde estaba Dios? Escuche bien: Dios estaba en el Liderazgo Gubernamental que le había dado. La imagen y la semejanza de Dios, son la Presencia de Dios en Adán. Camine despacito en esto, y guárdelo en su Espíritu. ¿Dónde estaba Dios, que no lo paró a Usted -ni a mí-, cuando estábamos a punto de cometer un error? Ya sea comprar mal; vender mal… en nuestra capacidad, -o incapacidad- de cumplir nuestro liderazgo en el propósito de Dios en nuestra vida. ¿A dónde estaba Dios cuando yo tomé la decisión equivocada? Dios estaba en tu liderazgo. La gallina de los huevos del oro está en Recobrar en nuestra vida la Concepción correcta, de lo que Dios dice que Usted es, y puede producir en la tierra .
En tanto y en cuanto no desarrollemos esto en nuestra vida, siempre vamos a quedar expuestos al pecado, y a transgredir una ley de Dios. Liderazgo -que ya vamos a hablar un poquito más de eso-, es el seguro de vida. Es por eso que intentar practicar santidad, sin liderazgo; sanidad divina, sin liderazgo; creación o multiplicación del Cuerpo de Cristo en la tierra, sin liderazgo, es un círculo que siempre termina en un problema. ¿Cómo puede ser que ya nos lleve 2000 años, y todavía nosotros decimos: “Hermanos… Vamos a tomarnos tres días para hablar de consagración?”. ¿Por qué Usted tiene que hablarle de consagración a una persona que ya lleva 20 años en el Cuerpo de Cristo? Usted tiene que lidiar con pecados. Usted y yo, tenemos que lidiar con estupideces y niñerías. ¿Por qué? Porque la Concepción de liderazgo que hay en su vida, es la que determina la manifestación de Dios dentro suyo. Por eso es que, cuando la Iglesia fue Apostólica, y la Iglesia tenía Liderazgo de Penetración y de Gobierno Apostólico , no hacía falta lo que hacemos nosotros: Ellos no predicaban santidad. La santidad estaba expresada, y producida por el liderazgo reinante. ¿Dónde estaba Dios cuando Argentina se metía en cien mil millones de dólares de deuda? Dios estaba en Menem. Dice la Biblia: “…Toda autoridad es dada por Dios…” . (Romanos 13:1). ¿Si o no? La revelación que Menem tuvo de Dios, determinó el tipo de influencia que trajo. ¿Dónde está Dios en la Iglesia, cuando las Iglesias se dividen; y un pedazo de cuadrados se levantan contra la vida de la Iglesia, y te la desparraman toda? ¿A dónde está Dios? Dios está en la Capacidad de liderar que las personas de la Iglesia ejercen. ¿Dónde está Dios cuando Usted no tiene para comer dignamente? Dios está en tú Capacidad de liderazgo… Liderazgo desvirtuado por el pecado. ¿Dónde está Dios cuando no puede vivir dignamente en su Capacidad de entender? Por eso te leí ese pasaje, en donde quedamos anoche. Cuando Usted escucha a una persona decir: “Bueno hermano, hay trabajar… Es con el sudor de la frente”. Pero Usted tiene que saber que eso fue para un hombre bajo maldición; no un hombre Redimido.
3 “Acá… ¡Laburando duro!”. “¡Dándole duro!... ¡Para el Señor! “No…”; Dice el Señor. “No me metás en eso. Yo no te puse ahí en la tierra laburando duro; Yo te puse en el huerto”. Lo que te está diciendo Dios es: “Convertíos… Pero no es sapos”. Fíjese qué curioso, porque inmediatamente después que el hombre recibe la sentencia, hay una nulidad de Liderazgo; y ahí sale Adán y le pone a la mujer “Eva”… El varón le pone “Eva”. Es decir: “Hasta acá llegamos juntos”; fue eso. Dios nunca le puso nombre a la mujer; nunca. “Eva” le puso el varón; no Dios. Por eso cuando Usted dice: “Dios creó a Eva”; Usted está equivocado. Dios no creó a Eva. Dios hizo que la mujer naciera por una necesidad de mejor expresión en la tierra. Para Dios, el varón y la mujer eran una sola persona, caminando en dos pies diferentes. Por eso cuando Usted hable: “Cuando vamos a estar unidos… Hermano”. “¡Que se unan los pastores de la ciudad!”. “¡Que se unan los pastores del mundo!”. La Unidad no se produce, hasta que no hay Unidad en la Concepción de lo que es el hombre como líder dependiente de Dios. Ahí se produce la Unidad. No es una Unidad que Usted puede provocar orando, y haciendo reuniones de confraternidad; es Unidad por el recobro por Convertirse. Yo le puedo asegurar hermanos que en el Cuerpo de Cristo hay personas que son líder, pero nunca se han convertido al propósito eterno de Dios. Por eso Usted encuentra que cada pastor tiene una Visión; y nosotros hemos defendido eso: “Y… Bueno… Cada uno, hermano…”. Cada uno haga la Visión que tiene; y que Dios lo ayude. Entonces: Hay diez mil visiones; si ya con dos tenés división… Nosotros, en lo mejor que nos podría pasar, es que tengamos división; nosotros tenemos miles Visión. No “di”; “miles”… y eso pasa aún dentro aún de la Iglesia Local. ¿A dónde está la gallina de los huevos de oro? En que podamos descubrir qué es realmente el liderazgo impartido en la vida de todas las personas que habitamos la tierra; el Cuerpo de Cristo. ¿Donde está Dios cuando en la escuela tuvimos ese problema?: “Cómo puede ser que estaba mi hijo ahí…”. Cuando hubo ese problema en la escuela; ¿Dónde estaba Dios? En el director. “Y… ¿Pero por qué me fue así en la escuela?”. Porque la escuela está marcada por la capacidad que el director tiene de saber que su liderazgo, es un liderazgo impartido por Dios… y eso va a determinar el destino de la escuela. Cuando Usted dice: “¡Los creyentes tenemos que ocupar los lugares de poder!”. Pero… ¿Sabe una cosa? Por más que Usted sea creyente, si a Usted no se le reveló lo que es liderazgo impartido… ¿Sabe que vamos a hacer? Vamos a hacer una escuela evangélica; pero no una escuela con propósito… Sólo evangélica. Usted no le puede pedir que una Institución u Organización sea más de lo que lidera. Nosotros hemos machucado mucho este dicho, y está bien en algún sentido, porque lo ha dicho gente que han sido rebeldes; pero es como dijimos esta mañana: El diablo no tiene poder; pero es un Profesional. Es un Profesional, reconozcámoslo. Por eso dice la Biblia: “Derribando argumentos” . (2 Corintios 10:5). ¿Cuántas veces nosotros hemos escuchado gente en la Iglesia que dice: “Yo no me sujeto a hombres; yo me sujeto a Dios”? Como generalmente los que dicen eso, es gente que lo dice desde un plano de rebelión, nosotros hemos creado un anticuerpo contra eso. Porque lo ha dicho… ¿Quién? Uno que no le gusta nada. Pero fíjese que la expresión es correcta. Es correcta. Es más… ¿Qué es lo que la hace incorrecta? El embase; el espíritu. Nadie te va a comprar un perfume de mil dólares, en una lata de coca cola. Por eso cuando te lo dice un sabandija de esos, Usted no la cree; es más, Usted dice: “De ese… ¡Ni loco!”. Pero, la frase es correcta. Usted no fue creado para ser gobernado por un pastor; ni por un apóstol. Su máxima creación fue: Usted fue creado para ser gobernado por el Espíritu de Dios.
4 Fíjese: En el Antiguo Pacto, vez al padre gobernando. En la transición, vez a Cristo gobernando a los discípulos. Cuando viene el Espíritu Santo a la Iglesia, no viene para que nosotros hablemos en lenguas; el Espíritu impartido en nosotros tiene su primera y más grande función… ¿Sabe cuál es? Gobernar. Entonces, fíjese por qué yo me pongo a buscar esos dichos… Entonces… ¿Cómo? A ver… estoy razonando: “Yo fui creado para ser gobernado solamente por Dios” El tarado que conocí hace treinta años atrás… ¡Tenía razón! Nada más que como lo dijo de un espíritu equivocado, nosotros… ¿Qué hemos hecho? Hemos ridiculizado la expresión. Entonces, hoy te aparece un pastor y te dice: “Señores… Está bien lo que decía el tarado; nada más que lo que está mal es la motivación de su corazón, que más bien estaba justificando su pecado, más que cumplir su propósito”. Porque si ese hubiese dicho algo con razón y con motivación correcta, tendría que ser el tipo más próspero de la tierra. Porque mientras que todos los millones de creyentes en la Iglesia estamos creyendo que la clave está bajo sujeción, y que alguien gobierne; ese que la embocó tendría que tener impresionante éxito. ¿Por qué no lo tiene? Porque la mayoría de los que decían así ni siquiera eran salvos, porque la motivación era equivocada. Y ahí tiene que reconocer que el diablo nos embocó bien. Bien… Hay que reconocerlo. Saquémonos la gorra; el diablo, ahí la embocó. Los dichos correctos en las personas incorrectas han producido anticuerpos; entonces por eso nosotros nunca hemos visto la revelación .
Usted y yo fuimos creados para ser gobernados por Dios. Adán, directamente gobernado por
Dios. Si Dios respetara la institución humana para gobernar a hombres, a Adán le hubiese dado un Karma: “A partir de ahora tu serás…”. “Y todos los que vengan detrás tuyo serán tus discípulos; y tendrás que discipular a tus hijos…”. ¡No! Esto cambia todo el concepto erróneo. Por eso es que los principios fríos de liderazgo, sin revelación son muy peligrosos, y se pueden volver muy humanistas; pero cuando Usted lo ve desde el plano de la revelación de la palabra, todo cambia. ¿Se da cuenta por qué un pastor no se puede meter a gobernar tu casa? ¿Ve por qué Dios le pide que gobierne la de él? No dice que gobierne la tuya. ¿Sabe por qué? Porque Usted le está pidiendo que él haga algo que Dios no lo mandó. Es muy relativo que Usted le traiga a un líder que sea normal los problemas suyos, y que él se meta a solucionárselos; porque él no fue llamado para eso… Y se va a dar cuenta en los próximos minutos, cuál es la esencia del evangelio. ¿Sabe cuál es mi deseo y satisfacción? Que mis hijos -estoy hablando de los engendrados en mi casa; mis yernos; mis nueras-, puedan entender esto. Y me da mucho gusto que estén casi todos acá. Lamentablemente yo tengo a gente muy íntima de la Iglesia, que hoy no está acá. Si las personas que no han estado en esta Escuela mañana y noche, en los próximos diez días no me oyen todo lo que yo estoy impartiendo, yo no sé si yo podré formar equipo con esas personas… ¡No sé! Imagínese… En tres días Dios te revoluciona la cabeza; trae sobre tu vida un concepto que ahora hay que digerirlo, nada más… Y que venga una persona a un debate en santidad -como hicieron los apóstoles-; subamos a un Jerusalén geográfico y disputamos esto. Vamos a llegar a la conclusión que al hombre es imposible que lo gobierne otro hombre -para el propósito de Dios-. Por eso, cuando Elías le pide el manto a Eliseo; Eliseo le dice: “Déjame ir a saludar a mi padre” . Elías le dice: “Qué te he hecho yo ; si tu problema es con Dios, no es conmigo. El que te llama es Dios; yo sigo adelante. No soy yo… ¿Cuál es el problema?”. (1 Reyes 19:19; 20). ¿Cuántos de Ustedes quieren saber si tenemos liderazgo sano en nuestras vidas, y si Usted es pastor, si tiene liderazgo sano alrededor? Número Uno: Liderazgo es “SER” .Diga: “Ser”: Gobernado por Dios . Un lugar en donde tú instruyes a las personas a un camino de dependencia de Dios. A esto no lo logra, hasta que Usted no lo es. Liderazgo es: Ser gobernado por Dios, para luego hacer : Ahí dijimos que primero “Ser” , y luego “Hacer” .
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Cuando uno mira su congregación, -menos los que vienen desde hace uno o dos años; porque hasta que se reconvierten, lleva su tiempo-, si Usted tiene a una persona al lado suyo, de hace quince años oyendo la palabra de Dios… Y si Usted ganó a diez, y ocho de los que Usted ha formado le salen para cualquier lado; está fallando el que los formó. Porque liderazgo divino impartido, produce dos cosas: gente efectiva; o repele lo que no se alinea con lo de Dios, y eso lo vamos a ver un poquito más adelante. Entonces: Liderazgo bíblico es: Primero Soy dependiente y gobernado por Dios, para Hacer que otros se conviertan en gobernados por Dios. Eso es, Señoras y Señores; eso es el evangelio. Ese fue el evangelio de Felipe. ¿Qué le dijo Felipe al etíope? Le vió el evangelio de Jesús y… ¿Qué le dijo? Por favor, es clave. Otra expresión evangélica: “Es clave que te congregues….”. Digo yo: ¿Usted no conoce gente que se congrega siempre, y no sirve para nada en el propósito? Solo para ser salvo, y para levantarle la estima al pastor el domingo, que llena sillas. ¡Pero Usted no las puede contar para nada! Ya sé lo que Usted puede pensar: “Entonces que… ¿No me tengo que congregar más?”. Eso piensan los inmaduros; yo no estoy diciendo eso. Lo que yo estoy diciendo es: ¿De qué te sirve tener gente amontonada como vaca un domingo, si cuando se van, son un montón de dependientes de personas, de trabajo, de…? “Todo lo puedo en Cristo... Aleluya… Amén; Amén…”. Y al otro día vive lo que el patrón impío le determina que vive; esa persona no está siendo gobernada por Dios. Ahí está el caballito de batalla: “Y el salmo 133…”. “¿Y no dice Hebreos: “No dejar de congregarse como algunos tienen por costumbre…?”. Si… Claro. Pero cuando Usted lee hebreos 10:25, que es a donde sale eso: “No dejar de congregarse como algunos tienen por costumbre…” , siga leyendo hebreos 11, y te pone el tipo de personas que sí vale la pena que se congreguen. Si tú tuvieras de esos que se congregan, como los profetas que fueron aserrados por la causa del Señor, vaya y pase; pero si uno tiene veinte años congregado, y después se ofende porque tú no lo saludaste… ¡Ese no pasó ni a 200 Km. de la cruz! ¡No lo salpicó ni la gota! Usted dirá: “Hoy está predicando el diablo”. Nos embocaron eso; tenemos que reconocerlo. Hoy lo dije: “El diablo no tiene poder; pero lleva muchos años con los creyentes”. Por eso dice Pablo: “ Nuestra lucha es contra argumentos” . (2 Corintios 10:4; 5). ¿Qué estoy derribando yo en esta noche? Argumentos; y argumentos pero estos son… Acá se nos salen los demonios… Yo vi algunos ya. No demonios de posesión; demonios de estructuras de pensamiento; de espíritus inmundos. Vea nuestros caballitos de batalla: “Ahhh… ¡Gloria a Dios!... Estuvo hermoso el culto… ¡Estaba lleno!”. Si juntar gente hubiese sido el secreto de liderazgo de Jesús, él no le hubiese dicho a once: “Vayan por el mundo”. Si todo lo que nosotros hemos predicado, nos pasó, y no funcionó. “Cuando seamos muchos; ¡ahí sí que el mundo nos va a respetar!”. Hemos juntado a montones, y ni siquiera hemos salido en el diario; y si te sacan, es para burlarse. “Cuando hagamos cosas con excelencia…”; Todos argumentos equivocados, erróneos. Diga: “La gallina de los huevos de oro, está en el recobro de tu Mentalidad de Liderazgo, impartida por Dios”. Diga: “Liderazgo es ser primero gobernado por Dios; y segundo, que otros sean gobernados por Dios”. Ahí es donde está la diferencia entre “Liderazgo” y “Líder”. El Líder tiene que ver más con una Posición Designada; la actitud de decirte: Haz esto. Ahora, tú puedes ser puesto como Líder, pero no tener Liderazgo. Por eso Pablo dice a Timoteo: “…Si alguno desea obispado, buena obra desea” (1 Timoteo 3:1); no dice ser “Obispo”; “Obispado”. Si alguno desea Liderazgo, buena obra desea. Buena obra desea. Si tú quieres aceptar este desafío que yo acabo de replantearte por el resto de tu vida, está bueno que lo desees; Pero tienes que saber en qué te metes.
6 Cuando a Usted por ahí se le escapa en el culto: “En el culto para el Señor…”, se le escapa esto…. Y claro, hermano. Ese es el problema que a veces tengo yo; y Ustedes tienen que orar por mí para que yo me convierta. A veces uno está predicando y dice: “No… Hoy voy a venir Light”. Por ahí le tiras a este… Y tienes una familia en la Iglesia que dice: “Pastor… Yo tenía problemas pero no me animé a hablarlos; porque como Usted dice: Órese solo”. (Risas). En esto tiene razón la gente; ahí tiene razón. Por eso es que la Iglesia Manantial de Vida, cuando yo viajo, dice: “Pastor… ¡Cómo lo extrañamos!”. ¡Son mentiras!... Es como un desahogo: “Gracias padre”. Yo me doy cuenta que es cierto. Pero como estamos en una Escuela, estamos como calamares en su tinga. Como delfín en el agua; dos o tres tonterías, y después nada; nada; nada. (Risas). Así decía uno: “Delfín”. Hacía dos pavadas a la mañana; y nada todo el día. ¿Cuántos de Ustedes conocen “delfines”? El líder tiene que ver con una Posición Asignada. No siempre da resultado un Líder, si no conoce el espíritu del Liderazgo. Ahora, recuerde lo que dijimos ayer: Todos fuimos creados para ser gente Líder; con Liderazgo Divino. Pero debe meterse a buscar dentro suyo; para lo que Usted fue llamado a liderar. No se logra viniendo a un culto en la semana, y una Escuela cada mes y medio. David dijo: “Te buscaré de mañana; de noche…meditaré en tu palabra de día y de noche.” David sabía que el secreto de su liderazgo con Israel no estaba basado en un don. Dones…Diga: Dones son el condimento; no es el pollo. Es el condimento, del pollo. Por eso Usted va a encontrar gente con dones hermosos; lenguas; profecías; don de sanidad; dones para ejercer prosperidad en la Iglesia; dones apostólicos… ¡Y son dones hermosos! Pero cuando el don no es canalizado con el Concepto de Liderazgo, tu produces puro daño en la gente. Por eso el Líder tiene que ver con Asignación; tiene que ver con Tareas. “Usted, haga eso”. “Usted haga eso…”. Está bien eso. Tiene que ser: “Esta es su tarea… Esa”. Pero cuando te asignan una tarea, tiene que nacer, en el líder, tiene que nacer su Liderazgo. Liderazgo… ¿Qué tiene que ver liderazgo? Tiene que ver con Inducir; con una Administración de tiempo, de pensamiento . Liderazgo tiene que ver con Organización ; Coordinación de Recursos ; Pasión con Propósito . Tengo una guía en mi espíritu; debo de sacar lo mejor de Dios en mí para la tarea que me fue asignada. Ése fue el problema de Adán. Lamentablemente algunos de mis amigos -quienes son co-equiper en el mundo-, nos hemos dado cuenta que hay una maldición que se ha transferido a la Iglesia: “Hermanos… No somos una Organización”. ¡Hemos atacado tanto a la Organización, y a las Organizaciones! Si bien las Organizaciones con mal liderazgo, han sido medias perversas… Con Gobiernos y estilos de Gobierno, y Liderazgo incorrectos; autocráticos. Pero hay un error ahí: La Iglesia sí es una Organización; y lo es en su columna vertebral. Es una organización. Días atrás me habla un amigo del ministerio, y me dice: “Juan… A una persona que la descubrieron en un pecado moral, le dijeron que estaba disciplinada; y le metieron juicio”. Le digo: “¿Sabe por qué pasa eso? Porque nosotros queremos gobernar la Iglesia con la mentalidad de hace cincuenta años atrás, donde Usted a la gente la podía tratar como a perros; pero no quería irse adentro a hablar con un abogado. Hoy, la industria del juicio está en nuestra sociedad”. Y dijo la persona: “¿Y por qué?”… Ahí vino la demanda… “¡Ayúdanos Señor!!!!!”. Somos ingenuos. ¡Eso es ingenuidad! Antes se decía del púlpito: “Hemos disciplinado a Carlitos por adulterio”. ¿Y qué hacía Carlitos? Cuando yo era chico lo sentaban en el último banco; tirado como trapo con piojos. Hoy que seguimos con lo mismo… ¿Por qué? Porque no hemos emigrado. La Iglesia es una Organización. La Iglesia tiene que tener todos los argumentos de Organización. Eso pertenece al liderazgo; no al líder… Al liderazgo. ¿Sabe por qué la mayoría de los creyentes no prosperan? Porque no tienen una Institución; una Organización de lo que hacen para el Señor.
7 ¿Sabe por qué cuando yo oro por una persona, no le funciona? Porque lo está orando el pastor Juan; no lo está orando la Institución del don que está en ese hombre… Por eso no se produce. Por eso Jesús dijo: “A todo lo que yo los envíe, Ustedes irán…”. (Juan 20:21). ¿Por qué? Porque no los estaba enviando Jesús el carpintero; lo estaba enviando la Institución llamada Jesús, el Hijo de Dios. Hay gente que dice: “Ohhh… ¡Me llamaron de tal fábrica a trabajar! ¿Porqué él va a las siete de la mañana, una hora antes de cuando lo llaman? Porque Usted respeta la Institución. ¿Por qué si el pastor te llama a hacer algo, Usted lo piensa tres días? Porque para Usted la Iglesia no es una Institución, ni es una Organización. Es el lugar donde todos hacemos lo que podemos; y en el tiempo que podemos… Y que no me aprieten demasiado las clavijas; porque entonces, voy a otra Iglesia. ¿Por qué no hacemos lo mismo con la fábrica cuando te… aprietan? ¿Por qué no le dice: “Bueno… ¡Me voy! Algunos se van; solamente los que tienen la capacidad de ir a un lugar mejor. Sino, se las soportan. ¿Por qué? Porque soportan a la Institución. Nosotros venimos a la Iglesia, y somos todos “opinólogos” de la Iglesia. A nosotros nos resetearon; nos dijeron así: “No somos Organización”. Cuando Dios creó al hombre, primero creó barro; y después le puso espíritu. Eso significa que Dios primero crea lo frío; y después le pone vida. Si tú no eres una persona institucionalmente organizada, es en vano que el espíritu de Dios venga a ti; es en vano. Dios no dijo: “Bueno… Yo soplo”. Si Dios soplaba sin formar al hombre… ¿Sabe que hubiese hecho? Un montón de monstruos. Había ahí un montículo de tierra… Usted imagínese un montículo de tierra; viene Dios, sopla…. ¿Y que tiene? Un chichón del suelo. (Risas). ¿Sabe Usted que todo lo que Dios sopla, da vida? ¿Sabe por qué hay monstruos en la Iglesia?
Porque el Liderazgo sopló Espíritu, sin formarlos primero.
Cuando vino Pentecostés, los que estaban reunidos, era la gente que estaba a la espera de lo que Jesús les había dicho. En los años 90; 95; 96 juntábamos a las gentes -sea cristiana, o no sea cristiana-, y nosotros qué hacíamos: “A ver… Levante las manos. Y… ¡Ahí va!!! Esos tipos que fueron tocados por el Espíritu en esas reuniones, son los monstruos que hoy manejan el pensamiento de mucha gente dentro de la Iglesia; porque vino Espíritu, pero no había forma. ¿Por qué Usted dice?: “Bueno… Hermano. ¿Pero donde estaba Dios cuando él soplaba? ¿Por qué no le cerró la boca? Dios estaba en el Liderazgo Impartido. Dios no tiene la culpa. ¿Dónde estaba Dios cuando los gobernantes nos empobrecieron? ¿Dónde estaba Dios cuando los presidentes de las naciones nos metieron en guerra? ¿Dónde está Dios cuando el marido le pega a la mujer? Dios estaba en el liderazgo. ¿Dónde está Dios cuando la mujer le pega al marido? ¿Dónde está Dios cuando los padres no le dan de comer a los hijos? ¿Dónde está Dios cuando los hijos no responden a la misión paterna? ¿Dónde está Dios cuando las Iglesias se dividen y se pelean? Yo he visto Iglesias, a donde los obreros se han agarrado a trompadas. ¡Pum! Uno fue con una silla a darle de atrás al otro. Y Usted dice: ¿A dónde estaba Dios? En el Liderazgo. ¿Y por qué no lo detuvo? Porque es Liderazgo Impartido. Y Dios nunca va a recoger lo que él ha impartido . Porque lo que Dios da, son tratados legales irrevocables. Por eso déjeme decir -y con esto termino-, Dios debe de estar un poco contristado con nosotros; porque somos una bola de personas desordenadas. Porque todavía el Reino de Dios sigue siendo opcional. Personas que jamás llegarían un minuto tarde al trabajo, sí lo hacen en la Iglesia. Corremos como locos para pagar la cuota de la tarjeta; corremos como locos para pagar la cuota de la luz; corremos como locos para pagar el teléfono, el colegio de los chicos… ¡Corremos como locos!!! No nos desespera: “Llevo mis diezmos… Cuando vaya al culto”. ¿Y eso quién lo impartió? Nosotros. ¿Qué hay que hacer? Resembrar un Liderazgo por Revelación .
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