Epistolario de San Braulio
February 4, 2017 | Author: madosborn | Category: N/A
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RIESCO TERRERO, Luis. Epistolario de San Braulio. Sevilla: Editora Católica Española, 1975....
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ANALES DE LA UNIVERSIDAD HISPALENSE PUBLICACIONES DE LA UNIVERSIDAD DE SEVILLA
.EPISTOLARIO DE SAN BRAULIO INTRODUCCIÓN, EDICIÓN CRÍTICA Y TRADUCCIÓN POR
LUIS RIESCO TERRERO
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Serie: Filosofía y Letras - N. 0 31 - 1975
ANALES DE LA UNIVERSIDAD HISPALENSE PUBLICACIONES DE LA UNIVERSIDAD DE SEVILLA
EPISTOLARIO DE SAN BRAULIO INTRODUCCIÓN, EDICIÓN CRÍTICA Y TRADUCCIÓN
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POR
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LUIS RIESCO TERRERO Proyecto Diccionario L
Serie: Filosofía y letras - N. 0 31 - 1975
Depósito Legal: SE - 177 - 1975
I.S.B.N. 84-85057-57..()
Editorial Católica Española, S. A. - Conde de Barajas, 21. - Sevilla, 1975
MEMORIA E
PARENTUM
S.
INTRODUCCIÓN Al amparo de los reyes visigodos floreció en Bispania durante el siglo VII una cultura, que dejó muy por detrás todo lo que, por igual tiempo, s~ produjo en Francia y en Italia. Este floreqimiento cultural pudo darse· gracias, sobre todo, a la solidaridad y rápiida fusión de lo hispano-romano y lo visigodo y a las estrechas y óptimas relaciones entre la Iglesia y el Estado, que tienen su manifestación más acusada en los Concilios de Toledo. El _primer representante de esta cultura es, sin duda, San Isidoro de Sevilla, pero no es menos cierto que a este resurgimiento cultural contribuyeron no poco algunos de los reyes visigodos, y de entre los obispos merecen destacarse los nombres de Braulio, Eugenio 11, Tajón, Fructuoso, lldefonso y Julián. A la muerte de San Isidoro ( 636) el centro cultural de la España visigoda pasó de Sevilla a Zaragoza en la figura del más ilustre de sus discípulos, San Braulio. Durante sus. a:iios. .de episcopado ( 631-651), su recia personalidad aparece en los momentos culminantes de la vida política y eclesiástica de España. Las cartas de San Braulio constituyen, si no la fuente única. sí una de las más importantes para conocer la actividad de la Hispania visigoda de la primera mitad del siglo VII. En ellas se nos descubre como el discípulo predilecto y amigo singular de San Isidoro, a quien anima y estimula en la realización de sus obras. Sin ser metropolitano, interviene en los Concilios IV, V y VI de Toledo; es importante y destacada su intervención sobre todo en el Concilio VI (año 638}, en el que los obisws totius Hispaniae adque Narbonensis Galliae le encomiendan la redacción de la carta de contestación al papa Honorio 1, que censuraba al clero visigodo de falta de celo en la represión de los judíos. Interviene y aconseja a Chindasvinto en los altos negocios de la sucesión al trono. Recesvinto le encomienda y alienta en la corrección de un importante códice, probablemente el Fuero Juzgo. Las más relevantes figuras del dero visigodo rle su época: San Eugenio, Tajón, San Fructuoso, Eutropio, su hermano Frunimiano y tantos otros acuden en busca de su consejo en los más variados asuntos doctrinales o pastorales. Los rasgos de su carácter bondadoso quedan reflejados en las cartas nu-
'1
merosas de consuelo, dirigidas tanto a los suyos corno a los extraños, en las desgracias familiares. Y no es sólo su personalidad la que se revela en el Episto1ario, es la Es~aña visigoda la que se nos descubre. Desfilan por sus páginas reyes, obispos, abades, nobles, damas de la aristocracia con sus negocios, consulta'>,, duelos y preocupaciones.
Hasta el siglo XVITI sólo se conocía a San Braulio como el obispo de Zaragoza, que firma en algtmos Concilios de Toledo, y como el amigo y destinatario de las cartas de San Isidoro y autor de la «Vita sancti AemilialJÍ». Fue el canónigo Carlos Espinós ( t 1777), quien descubrió en el códice U. del Archivo de la Catedral de León la colección de sus cartas. Manuel Risco, continuador de Flórez, fue el primer editor de las cartas. y el primero en utilizarlas corno base de sus investigaciones (España Sagrada, t. XXX, Madrid 1775). La edición de Risco fue más tarde incorporada al volumen 80 de la Patrología Latina de Migne. En un artículo de Dom Anselmo Lambert, aparecido en el número primero de la Revista Zurita, Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad ae Zaragoza, 1933, p. 79 ss., sobre «La famille de Saint Braulio et l'expansion de la Regle de Jean de Biclar», se decía en relación con el Epistolario entre otras cosas lo siguiente: «L'Epistolarium de Saint Braulio est la seule source, a peu pres, qui nous fasse pénétrer dans l'intimité de l'église wisigothique. durant la premiere rnoitié du VII sif~cle ... » «L'Epistolarium a été imprimé pour la premiere fois par Risco qui n'a point vu !'original et qui a transcrit la cooie -assez bonne d'ailleurs- fournie par le chanoine Espinós. A l'usage, l'édition de Risco se réveie notoirement insuffisante et apelle une édition critique... » El año 1941 salía a la luz una nueva edición de las Cartas, debida a la labor y gran preparación patrística del Padre _Madoz l. Esta edición representó en relación con la de Risco un avance importante en muchos aspectos, principalmente en el histórico y en el estudio de las fuentes, pero no llenó las exigencias de la crítica. Desde muy pronto Pascual Galindo, intuyendo o adivinando alguno de los fallos de la edición de Madoz, en el prólogo, que dedica a la traducción del libro de Ch. Lynch San Braulio, obispo de Zaragoza, su vida y su obra», Madrid, 1950, p. XIV, dice: « .. .la obra literaria de San Braulio, incluyendo también sus cartas, merece nuevos trabajos y tal vez una nueva edición». Efectivamente, y como podrá COlll!PI'obarse con un simple cotejo del aparato crítico en cualquiera de las páginas de nuestra edición, Madoz unas veces por precipitada o deficiente lectura del códice ha adulterado la tradición manuscrita, otras en un afán de normalización y por haber aplicado unos criterios clásicos a la lengua del Epistolario ha rechazado y relegado al l. ·Jos6 MADOZ, S. 1., Epistolario de San Braulio de Zaragoza. Edición crítica según el Códice 22 del Archivo Capitular de León. Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Madrid, 1941.
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aparato crítico muchas lecciones d'el manuscrito de León, que son concordes con la evolución de la lengua en esta época tardía. Llen~r estos vacíos y presentar el texto, en la medida de mis posibilidades. todo lo fielmente que la tradición manuscrita me permite, pretende ser el empeñq_ 4e esta nueva edición. El manuscrito 22 de León ha atraído la atención de muchos estudiosos e investigadores: F. Fita 2, Beer y Díaz Jiménez 3, García Villada 4, Madoz 5, Lynch- Galiudo 6, Millares Cario 7, Pérez de Urbel8, y la lista se haría inacabable, si hubiera que citar los nombres de los que más o menos directamente han acudido a este manuscrito para apoyar sus escritos o trabajos de investigación. El estudio más reciente sobre el contenido e historia del códice se debe a Díaz y Díaz 9. A él remito a quien pueda interesar el detalle de la posible historia del manuscrito y la descripción de las varias piezas .:¡ue en el mismo se contienen. La colección de las cartas de San Braulio está dividida en el códice en dos partes; precede la correspondencia cori San Isidoro,_ fols. l8 va- 44 ra; se intercalan a continuación, fols. 44 ra- 48 va, las Actas del proceso entre los (Jbispos Marciano y Habencio, procedentes del VI Concilio de Toledo: Exemplar iudicii in ter Marcianttm et Habentium v fols. 48 va- 51 ra la Confesión o profesión de fe propuesta a los judíos conversos de Toledo, año 638: lncipit confessio, y después, fols. 51 ra- 88 vi>, siguen las restantes cartas. la correspondencia braulio-isidoriana aparece en el mismo orden, extensión y contenido, con que se encuentra en los manuscritos de las Etimologías, de las que forma a modo de introducción. Esta disposición -dice Madoz 1~ induce a creer que el primer grupo, es decir, las cartas que forman la correspondencia con San Isidoro, se tomó de un arquetipo distinto del de las otras. Esta hipótesis creemos que se refuerza y consolida con los resultados de un cuidadoso análisis de ras- grafías de ambos grupos, hecho en el que hasta ahora nadie, que sepamos, había reparado. Tomando como base de nuestro análisis determinadas palabras o rasgos fonéticos, podemos deducir que el primer grupo de cartas está tomado de w1 apógrafo con grafías más conservadoras y tradicionales y, en cambio, en el segundo grupo se observan formas más populares y evolucionadas. Así, por ejemplo, el dativo singular del pronombre personal de primera persona aparece en el manuscrito en la forma clásica mihi, en concurrencia con la forma mici. 2. F. PITA, El Papa Honorio 1 y San Braulio de Zaragoza, La Ciudad de Dios, 4 (1870), pp. 189-201 y 264-27~; = (1871), pp. 215-219; 358-363 y 447-4-58; 6 (1871), pp. 421-429. 3. E. PEER y F.. DrAZ JIMÉNfiZ, Noticias biblingráf•cas y Catálogo de los Códices de la Catedral de León, León, 1888, p. 23 ss. 4. Z. GARciA VILIADA, Catálogo de los Códices y documentos de la Catedral de León, Madrid 1919, p. 53 SS. 5. J. MADOZ, O. c., p. 25 S&. 6. Ch. H. LYNCH- P. GALINDO, o. c., p. 234 ~S. 1. MIUARF.S CARLO, Discursos leídos en la recepción de la Academia de la Historia; Madrid, 1935 p. 63 ss. y Manuscritos visigóticos, Madrid, 1963, núm. 37. 8. J. PÉREZ 'lE URBEL, San Eulogio de Córdoba, Madrid, 1928, p. 148 ss. 9. M. C. DiAz Y DíAZ, Colección •Fuentes y Estudios de Historia Leonesa•, núm. 1, León y su Historia, León '1969 p. 133 ss., El manuscrito 22 de la Catedral de León. 10. 1\iADOZ, o. c._ p. TI.
9
El porcentaje para ambas formas es el siguiente:
1.• grupo: mihi, 84'62 por 100; mici, 15'38 por 100. 2. • grupo: mihi, 50'90 por 100; mici, 49'10 por 100. 1.• grupo: opto, 66'66 por 100; obto, 33'33 por 100. 2.• grupo: opto, 50'- por 100; obto, 50'- por 100. 1.• grupo: diptongo ae, 33 por 100 l1; forma monoptongada e, 67 por 100. El resultado del análisis de las seis primeras cartas del segundo gmpo es el siguiente : En las cartas .9, 11, 13 y 14 la forma monoptongada e se da en el I('(l por 100 de los casos. En la carta 10 sólo aparece una vez la forma diptongada: Damascinae; en la 12, el dir¡:rtongo solamente aparece en las grafías hipercorrectas o caprichosas: aenergiae, anxiaeto.tem, enuclaeatius. Diptongo oe. En el 1.• gi1.1/pO solamente aparece coetibus, frente a economiam; en el 2.• grupo siempre se presenta contraído en e. El análisis ¡:;odría ampliarse a otra serie de palabras y fenómenos y el resultado vendría a ser siempre, más o menos, el mismo. También hay que señalar que en el Códice de León falta la carta-dedicatoria de las Etimologías, la número 7, que según la recensión a que corresponda el manuscrito, aparece en unos Códices dirigida a San Braulio y en otros al rey Sisebuto. Este hecho ha dado motivo a algún investigador 12 }Jara sospechar que la carta no iba dirigida a San Braulio. Parece, sin em.bargo, más acertada la tesis sostenida por Díaz 13, de que al compilador, que se afanó por reunir toda clase de piezas salidas de la pluma de San Braulio, pudo no interesarle esta carta-dedicatoria por tratarse de una carta singular, es decir, sin respuesta. La mayor parte de los códices visigóticos de las Etimologías corresponde a la recensión en que la obra iba dedicada a Braulio; sin embargo, pese a la opinión de Díaz, que cree no queda en España testimonio de la primera recensión 14, como puede comprobarse por el aparato crítico de la carta 7 de nuestra edición, en el códice escurialense P 1 8 aparece la carta repetida, llevando la segunda copia la dedicatoria al rey Sisebuto. El problema de la doble recensión: la primera, abreviada, del año 62() y la segunda, la amplia, del 632, ha sido tratado con detalle por J.ynch 13. En nuestra edición la carta 7 aparece dirigida a San Braulio, de acuerdo con los códices correspondientes a la segunda recensión. Podemos admitir que el coleccionador de las cartas mantuvo el criterio cronoló~co com.o móvil princitpal en la ordenación de las mismas, pero sólo en líneas generales, pues, por citar un ejemplo, las cartas cruzadas entre Braulio y Eugenio, cuando éste era metropolitano de Toledo, preceden en el 11. Sin contar las grafías pseudoetimológicas tradicionales o hipercultas, como piaetatem (2 vece. 5,41 economiam; 21,108; 44,300 fetoris; 42,89 fedus; 44,80 cenodoxie. - 3) au > a, cuando sigue sílaba inmediata con u: 44,119; 44,157 Agustinus; 1,8 Agustini; 42,42; 42,53; 44,77 Agustino; 9,10 Agustinum,· 43,1.! agusta; 43,13 Cesaragustam. 12.- Caída de i - en grupo is + consonante: 21,3 Spania; 21,56 Srahel; 22,13; 44,171 Spalensis; 44,191; 44,195; 44,229 Smael,· 43,42 Smaelem; 44,178; 44,248 Smaele; 11,11; 12,34; 14,9; 25,12; 25,14; 25,19; 25,22; 31,4; 31,27; 31,28; 32,9; 35,28; 36,72; 36,82; 43,53; 44,267; ste -· sta- stut. Grafías inversas: 32,12 ispirat ,· 44,231 iscire.
13.-y
>i
1,9 Sinonimarum; ?,22 Sinodi; 5,14 girant; 9;10; 42,94 Hieronimus,· 9,26 martirum; 10,38 misterio; 11,13 Sinagoga; 16,9 tipo,· 21,117 Caribdem,· 21,118 Scille; 23.10 stilo,· 25,9 Sirenarum; 25,31 Apocalipsin,· 42,94 Hierosolimis,· 42,141 míMica; 44,2 presbítero,· 44,154 siro,· 44,176 catacl!smo; y bis abissus.
f57
14.- Conso11ante.~
eh> e: .31,15; 32,29; 33,5 arcediaconus; 35,20; 35,21; 36,47; 36,58; 36,60; 36,65; 36,68; 36,70; 36,lW crismare,· 35,22; 35,27; 36,56; 36,60; 36,66 et passim, crisma,· 44,235 Acaz,· 42,140 Melcisethec,· 4,8 cartis; 44,51 monacorum; 44,223 Maccabeorum: 11,60 scedulam; 21,51 Ezecielis; 14,32 Pasea; 22,31 Pascam; 22,12 Pascasinus; 25,8 Caribde; 43,62 Eucerio; 21,88 Anticrzsti; salvo esta cita, el manuscrito mantiene indefectiblemente para el nombre de Cristo o cristiano la abreviatura Xps, que transcribo por Cri-, tomando como base la cita 21,88 y el uso generalizado de e por eh y de cr- por chr-. -·2) ph >t 11,59; 36,106; 44,298 anforam,· 15,11 Epafras; 28,8 Epafratis; 16,9 Olofornzs; 19,39 orfanos; 21,52 profete,· 21,92 profetas; 32,3 eufoniis. -3) th > t 5,n tesauri; 11,20 antiteta; 21,4 catedre,· 21,108 turis; 37,28 trono; 43,38; 44,136; 44,143 Matusalam; 43,60 Teodoro; 44,139; 44,146 biblioteca. -4) X> S 37,22 ausiliante; 44,99; 44,114 sescentesimo ,· 44,113 sescentos. -1)
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-5) XS >X, 12,34; 15,29 et passim: expectare; 13,31; 22,21; 32,18; 22,21 extare; 29,34 exeqv.amur: 21,9 execrandis. Grafías inversas: 21,34; 37,15 exscitatos; 21,111 exscellentissime; 42,141
exscedit. -6) qu>c e> qu 44,250 cos 21.15 quoadonati ( = coadunati) 15,28 quoha.bitatione 44,227 relincuntur 42,155 quodices 10,28 corsum 42,89 licor - 7) gm um. La vocali7..ación de g ante m es fenómeno característico del latín vulgar: 5,37 traumentorum.
>
1:;.- Fenómenos de sonorización. u > f (grafías inversas) -1) t >u 21,1 referentissimo 44,237 deuinibit = ( definiuít) 44,73 scaua = (scapha) g >e (grafías inversas) -2) e >g 18,21 perecrinorum 11,8 gragulus 14,23; 14,29; 14,38; 21,27; 36,27 eglesia. -3) t > d 44,81 adhletas; 33,2 Chintasuindo (¿metástesis?); 37,20 Recesuindum; 10,15 idem = item.
>
-4) p b 43,31 particebs; 35,11 babtizati; 34,27 precebta; 43,19 percebtUru.s; 44,134 ibsa.
16.- Grupos de consonantes. - 1)
mpt
> mt y
mps
> ms
19,31 Redemtor; 5,68 redemtum; 10,34 promtissima; 15,35 promtuarii; 5,13; 35,23; 31,32; 36,87 presumtio; 36,96; 36,101; 36,103; 36,104 presumtor; 36,15 presumtiosa; 17,17 presumsi; 44,188 sumsit; 25,21 temtationes,· 29,8 temtationibu.c:; 36,21 temtabo; 37;1.6 contemtus; 5,28 contemsisti. Curie>sa es la grafía uolumtas por uoluntas, que aparece en el manuscrito sin exce}X'ión y que procede de la forma contaminada uolumptas 17. -2) pt>t 44,139 Tholomei.
11.--Fenómenos de asibilación. -1) -sti---.> -ssf.-: 32,2; 41,3 suggessionem. - l ) di> z; z >di (grafía inversa): 36,47 babtidiauit. 18.- Fenómenos esporádicos. -1) Metátesis: 14,6 prespicitis,· 22,18 prescribtum; 24,13 precepta = 17 cf. H. Rl!NSCH, Itola und ~o
Vulgata~;
Marburg, 1875, p. 459.
= ( perc-); 36,100 presignari; 21,82 supprestitionem; 42,81; 42,85 suppreszitiosi. -2) Metátesis recíproca o doble: 24,19 fraglantes. -·3) Inserción de una liquida adventicia: 21,62 arbritrati sumus; 21,67 arbritramus.-4) Asimilación a distancia: 26,6 peculialiter.
1!1.- Reduplicación de consonQntes: 19,58 medellam,· 23,27 mallo = (malo); 27,1 Emmiliano; 43,22 presummo; 44,229 adsummamus; 43,37; 44,114; 44,116; 44,125; 44,163; 44,166; 44.176; 44,177 dilluuium; 19,48 rennuere; 31,7 Ninniuitis; 44,223 Maccabeorum; 44,224 Maccabea; 44,181; 44,186 Sarra; 21,82 supprestitionem; 42,81 ; 42,85 supprestitiosi.
- s.._r\\ \t fem. sing.: 3,22 gesta ... dirigatur; 1,9 Sinonimarum; 14,38 de... uela mittenda. -3) Fem. sitlg. >Mase. sing.: 3,22 Sinodi, in quo; 10,30 indagine studioso. --4) Fem . .sing. >Neutro plur.: 14,2 Membrantl nec nobis sutficiunt; 42,60 corruptela nascuntur aut uitia generantur. -1) Neutro sing.
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-5) xs>x, 12,34; 15,29 et passim: expectare; 13,31; 22,21; 32,1S_; 22,21 _ extare; 29,34 exeqv.amur: 21,9 execrandis. Grafías inversas: 21,34; 37,15 exscitatos; 21,111 exscellentissime; 42,141
exscedit. -6) qu >e 44,250 cos 44,227 relincuntur 10,28 corswn 42,89 licor
c>qu 21,15 quoadonati ( = coadunati) 15,28 quohabitation.e 42,155 quodices
- 7) gm > um. La vocali7.ación de g ante m es fenómeno característico del latín vulgar: 5,37 traumentomm. li.- Fenómenos de sonorización.
>f
-1) f >u 44,237 deuinibit definiuit) 44,73 scaua = ( scapha)
21,1 referentissimo
-2) e> g
g
=(
u
(grafías inversas)
> e (grafías inversas)
18,21 perecrinorum
11,8 gragulus 14,23; 14,29; 14,38; 21,27; 36,27 eglesia.
-3) t
>d
44,81 adhletas; 33,2 Chintasuindo (¿metástesis?); 37,20 Recesuindum; 10,15 idem item.
=
-4) p > b 43,31 particebs; 35,17 babtizati; 34,27 precebta; 43,19 percebturus; 44,134 ibsa. 16.- Grupos de consonantes.
>
>
-1) mpt mt y mps ms 19,31 Redemtor; 5,68 redemtum; 10,34 promtissima; 15,35 promtuarii; 5,13; 35,23; 37,32; 36,87 presumtio; 36,96; 36,101; 36,103; 36,104 presumtor; 36,15 presumtiosa; 17,17 presumsi; 44,188 sumsit; 25,21 temtationes; 29,8 temtationibu,t 44,139 Tholomei.
11.--Fenómenos de a.sibilacidn. -1) -sti---.> -ss¡-: 32,2; 41,3 suggessionem. -2) di> z; z >di (grafía inversa): 36.47 babtidiauit. 18.- Fenómenos esporddicos. -1) Metátesis: 14,6 prespicitis; 22,18 prescribtum; 24,13 preeepta 17 cf. H- RllN&::H, !tala und Vulgata¡: Marburg, 1875, p. 459.
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=
= (perc-); 36,100 presignari; 21,82 supprestitionem; 42,81; 42,85 suppresritiosi. -2) Metátesis recíproca o doble: 24,19 fraglantes. -· 3) Inserción de una liquida adventicia: 21,62 arbritrati sumus; 21,67 arbritramus. - 4) Asimilación a distancia: 26,6 peculialiter. El.- Reduplicación de consonttntes: 19,58 medellam; 23).7 mallo =
(malo); 27,1 Emmiliano; 43,22 presummo; 44,229 adsummamus; 43,37; 44,114; 44,116; 44,12S.; 44,163; 44,166; 44.176; 44,177 dilluuium; 19,48 rennuere; 31,7 Ninniuitis; 44).23 Maccabeorum; 44,224 Maccabea; 44,181; 44,186 Sarra; 21,82 supprestitionem; 42,81 ; 42,85 supprestitiosi.
_ 5--
r\· ~ l'\/Jstclásica encontramos a partir de la leng¡.1a del derecho formaciones regulares del tema ·de perfecto en --ui, debidas a la analogía, a la que tendía inr..onscientemente la lengua popular. Este tipo de flexión, que es el único que perdura en las lenguas románicas, era ya el. normal en el período vi.sigodo 29: 42,153 Quapropter ambobus satisfacies, si uni prestaueris. -5) En el Epistolario, lo mismo que en la ltala y escritores eclesiásticos, aparecen dístintas formas del tema de presente de odire, que no se empleaban en la época clásica: 13,43 odiatur y 18,29 odire. De igual modo se crea un tema de presente sobre el clásico memini, 43,68 meminent. - 6) Algunas formas del supino o derivadas de él han arrastrado el infijo nasal, que era sólo propio de la formación del tema de presente en la época clásica30: 1.2.36; 17,31; 44,304 nanctis; 27,12 finctione.
26. Df&Z y llfAZ, E. L. H., p. 182 SS. 27. S. CAVALLfN, Vita S. Caesarii Arelatensis, Lund, 1934, p. 73 ss. 28. J. Vm.n.uw, Le latin des diplomes royaux et chartes privées de l'époque mérovin~t'nne,
Paris, 1927, p
1i3; J.
S\"llNNUNG,
Ur..tersuchur.gen
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Pallat#us und
Fach- und l'olkssprache, Lund, 1935, p. 543 y UDDHiJUI, Form. Marc., p. 16. 29. LuNDSTRtiM, Neue Stud., p. 41. 30. NORBERG, Stud. Il, p. 162 ss.
24
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SINTAXIS 24.- Atracción. -1) ,ll,tracción de casos: 9,32 ínter quas eas quas queritis minime repperiuntur ( eae Mad.) El acusativo eas, que ha sido asimilado al relativo, ofrece un e_jemplo típico de la llamada atracción inversa, que se presenta en otros pasajes del Epistolario, 44,290 Prouinciam narnque quam incolitis et grecam sibi originem defendit ... ( Prouincia Mad.) Este tipo de atracción inversa es corriente en la época tardía y San Gregorio Magno 31 nos ofrece no pocos ejemplos en sus cartas: 3,3 (1 p. 161,6) Causa uero, quae curn Floriano uertitur, incidere uolui; 4,16 (I p. 249,15) · quatenus ... nec eum, quem ordinaueritis, habeatur episcopus. - 2) Más fácil de comprender es la atracción directa del relativo al caso del antecedente: 43,22 adque eodem quo cupimus salutis uestre nuntio uesírorumque sacrorurn apicum indicio reficiamur oramus,· 21,64 cum ueneratione qua Sedi Apostolice et tue Sanctitati honorique debemus ( qüam Mad.); 10,5 procellarum, que loco quo presidemus cotidie naufragia obtentant. - 3) También en el verbo la asimilación psicológica y formal o simpiemente mecánica es un fenómeno frecuente; obsérvense los textos siguientes: 10,20 Nam sufficiat peregri_nj~. indisruptum habere uinculum caritatis ... , carne autem a caris abiungi, ut sit carentibus caris ipsa caritas dulcis. El modo del infinitivo abiungi se debe solamente a una asimilación formal con habere; la norma de la lógica, aquí rota, exigiría un abrungimur o abiunguntur. Por las mismas razones de asimilación apa· rece el infinitivo malle en vez de malis en 13,20 Nam fateor ... non patum stupere ... te ita turbari, ut ah actione senioratus tui optes discedere et malle in silentio uitam degere quam ... Razones rítmicas motivan muchas veces esta igualación. de formas verbales 15,41 nec doleatis quod tali tutore carueritis, sed gaudeatis quod talem habueritis, donde nos resultaría más lógico careatis.
25.- Pleonasmo. - 1) El pleonasmo es fenómeno característico de la lengua popular y tambien de las exposiciones enfáticas y apasionadas. El hablante siente como una necesidad inconsciente de expresar ls conceptos con la mayor fuerza y energía posibles. En los escritores de época tardía el empleo frecuente del pleonasmo representa un esfuerzo por la expresi31. Gregorii 1 papae Registrum epistolarum ediderunt P. Ewald et L. M. Hartmann (MGH epiSI. 1 • 11), Berolini 1887- 1899; c.fr. NORBERG, Synt., p. 75 SS.
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\idad ante el desgaste fonético o de significado de las palabras. 15,15 quorum hic ad presens desolatione destituirnur; 35,g Fuit ide1n ipse frat er molestissimus ... ; 5,34 ote inopia pe1·eant famis; 32,4 per lúcubrationum tuomm uerborum- Mudium; 17,11 indulgentiam uenie; ·44,4 Inter laUdurn tuarum in me precmiia; 39,10 Erit igitu1" uoto tuo a Domino adtributa tuarum uirium fortitudo et mtemorum luminum copiosa preuisio; 9,28 inuito ipsi coacti. -2) Pleonasmo en el uso de las negaciones. Fenómeno conocido y frecuentemente tratado es el de la acumulación pleonástica de las expresiones negativas. Como la mayor parte de los otros pleonasmos se origina también éste por la necesidad inconsciente de expresar un concepto con la mayor fuerza y energía posible. Psicológicamente en tales casos resulta natural que sean negados tanto el verbo como. otras partes de la frase especialmente importantes 32: 34,34 et desinat. dolor; ub"i non subuenitur nullo 1·emedio ( ullo Mad.); 42,79 uas electionis prolziben.te non plus sapere quam oportet sapere; 44,238 Set nec ego contra tanti uiri au.ctoritatem aliut possum sentire ... et ... a maiorwn nostrorum emitis non deuiare; 30,19 non desinamus disperare de illa { desinamus dispe1"nanifesta est (Madoz contra el Códice, manifestas). Aqut nos hall.amos ante un caso claro de acusativo por nominativo, sin razón alguna para justificarlo si no es el uso en la lengua hablada del acusativo como forma única, que ya en la época visigoda debía estar niuy generalizado. -2) Acusativo absoluto descriptivo: 9,19 quatenus os ad os loquentes et mutuo sermone pascamur et in Domino optata tmnquillitate fruamur; 12,18 Porro si me Deus fecerit te uidere, melius os ad os, que petis, t,.adam, quam absens scrib.am. El origen de este acusativo, cuyo significado es bien claro. pues la construcción perdura en las lenguas románicas: «cara a cara», y se recoge variada unas líneas más abajo en el nominativo absoluto: 12,25 Sed, ut dixi, presens presentí facilius tradi potest, ha sido estudiado por Norberg, Synt., p. 87 ss. Los acusativos os ad os son empleados casi absolutamente. El ejemplo es muy inStructivo; se ve que el acusativo es provocado, porque a la mente del que escribe acude la idea del participio habentes.
PRONOMBRE
31.- El indefinido uterque aparece en el Epistolario generalmente emp,Jeado según las normas gramaticales, 21,89 Utraque pars, orientis scilicet et hoccidentis. Pero en la lengua popular latina este indefinido por su significado plnral y su relación con ambo tomaba frecuentemente forma 41. HAVERS, Untersuchungen zur Kasussyntax der idg. Sprachen, Strassb., 1911, p. 173: UFSTBDT, Synt. l, p. 173; SVENNUNG, Unters., p. 221 ss.
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plural, incluso refiriéndose a una pareja de sustantivos singulares 42 Y este uso está bien rer-resentado en el Epistolario, 10,8 et te me~ue contemplatus nihil medium nisi ipsam dilectionem, que ··est utr;orwnque crer.:.tor, sunz coutuitus: 34,7 Ad me peruenit quía filia mea, coniuJc tua, et utrisque carissima eu! ab hac migrasse uita.
32.-Iste. En latín tardío iste sustituye cada vez más a hic, hasta el punto que salvo algún resto, por ejemplo «hogaño», y en catalán el acusativo neutro enclítico «ho», hic desapareció en las lenguas románicas. Con este significado de referencia a lo que está cerca de la persona que habla aparece en todas nuestras cartas; su uso no ofrece peculiaridades: 35,16 nam nescio aut si ste presbiter habeatur aut si illi, qui per ewr. babtizati crismat~ prenotati sunt, recte cristkole uocitentur. 33.- Hic. Por razones de influencia de Escuela encontrarnos en el Epistolario bien representado el uso de hic, pero pn1eba de su debilitamiento es su frecuente uso para reemplazar al is correlativo: 43,39 hic, de quo questio est ... ; 5,80 hoc solum superest, quod et magnopere peto; cf, ademá-> 5,120; 11,49; 14,48; 21,33; 42,51 etc. E. LOfstedt 43 supone que hoc est es giro propio de la lengua culta frente a id est, más usado en la lengua coloquial y vulgar; en cambio, Schrijnen- Mohrrnann 44 dudan que las cosas sean así, basándose en el hecho de que San Jerónimo, autor culto y literario, emplea con frecuencia el giro id est. En el Epistolario alternan ambos giros, pero el más usado es id e!>t (dos veces hoc est, frente a cuatro veces id est): 10,42 uirtus ciuitatzs illius . . hoc est aurum, quod ... ; 44,201 dedit puerum matri, hoc est in manus eius tradidit: 18,14 in lacrimis contabesco, id est reuerende memorie domni mei Nunniti episcopi exitus mici existit exitiosus; 22,9 Me er.im antiqui maiores nostri prescribserunt, id est ad Theudosium imperatorem Teuphilus; 42,69 reddendus est non superfluus (se. sanguis} sed naturalis, id est non alienus sed noster; 44,130 nolentes derogare fidem codicibus -id est translationis Septuaginta-. Como puede comprobarse por los textos que preceden, en el Epistolario no se emplea el acusativo en los palabras apositivas tras los giros hoc est, id est, corno aparece en otros autores tardíos 45. 34.- lile. La función correlativa la asume, si cabe, con mayor frecuencia el poronombre ille: 35,17 aut si i!li, qui per eum babtizati crismate prenotati sunt ... ; 36,75 Nam. et illi, qui ... eum talia narrasse referunt; 5,117; 10,21; 14,40; 22,4; 22,50; 36,39; 36,86; etc.
35.-lpse. - 1) El pronombre ipse es muy frecuentemente emrp:leado en el Epistolario en lugar de is, como anafórico de 3.• persona: 6,3 Sed quamuis 42. l.EUMANN - HOFMANN • SZANTYR, Il, 200 ss.; 43. Philolog. Komm., p. 91. 44. Synt. Cypr., I, p. 157. 45: N no me has contestado al objeto, sino que con sutiles pretextos, diciéndbme unas veces que aún no estaban terminados, otras,· que no tenías copias, otras, que mi carta se había perdido y otn-s muchas excusas, hemos llegado hasta el día de hoy y l?eguimos sin que nii petición haya tenido resultado. Por ello voy a cambiar-mis súplic:as por quejas, de suerte que lo que no he conseguido con ruegos lo logre zahlriéndote con reproches. 1\ veces, en efecto, los mendigos sacan provecho ele sus gritos intemperantes. ¿Por qué, pues, mi señor, no quieres darme lo que te nido? Has dt> saber una cosa, no te voy a dejar dando a entender atte no me importa -lo que me niegas, sino que insistiré y volveré a insistir, hasta que reciba y consiga, de acuerdo con la invitación de nuestro Redentor, que dice: .«Buscad y encontraréis» v añade «Llamad y se os abrirá». He buscado y busco; aún estoy Hamando, por eso doy voces -para que me abrac;. Me consuela el descubrimiento de esta táctica: tal vez.tú, que no hiciste caso a mis súplicas, atiendas mis reproches .. En consecuencia; te sirvo tus propios argumentos, que bien conoces: no me atrevo, presumiendo como un necio, añadir nada nuevo, porque v.o soy ignorante y tú un sabio. Pero no me avergüenza, pese a mi torpeza, hablar contigo, oorque me acuer· do del consejo del Apóstol, que nos manda soportar con agrado al ignorante. Por tanto, escucha mis reproches: ¿Por qué retienes por tanto tiempo la distrib•1ción de los talentos y el reparto de los alimentos que te fueron confiados? Abre ya tu mano, distribúyelos entre las familias para que no perezcan de hambrP. Sabes muy bien qué te va a pedir, cuando vuelva, el que te los ha confiado. No qu~darás privado de lo· que des. Recuerda que con unos pocos de panes fue saciada la multitud y que lo!'l mendrugos que sobraron sobrepasaron el volumen de los oon~s. ¿O es que crees. que los dones que tienes te han sido dados para ti solo? Son tuyos y nuestros, de todos, no de ti sólo. Y ¿quién, por insensato que sea, se atrevería a decirte .que goces de lo que es tuyp, tú, .. que sabes inocentemente gozar .tanto de lo de todos? Pues si Dios te ha confiado· la administración de sus tesor~s. de sus riq~~:ias, de la salvación, de ia sabiduria 'y de la ciencia, ¿por qué no derramas con mano generosa lo que, aunque des, no vas a mermar? Si ·cada miembro de Cristo, nuestra Cabeza,· posee en los demás lo que no ha .recibido, pero sa-
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45 quod habet possidendum sciat, tu forsitan ideo nobis parcus existís, quia quod mutue a nobis resumas non inuenis? Set si habenti ·das, tantille mercedis fructum reportas. Si.Ii. uero non babenti tribuis, preceptis euangelicis satisfacis, ut reddatur tibi in retributione iustorum. Perinde et ego remordeor conscientia eo quod ·in me nihil coiiilllW1icabile boni 50 sentíam, quoniam iubemur per caritatem seruire inuicem, et unusquisque quam accepit gratiam in alterutrum illam administrare, sicut boni dispensatores multiformis gratiae Dei, adque unicuique sicut d.iuisit Deus mensuram fidei in una conpage membrorum, debet eam ceteris partibus communicare, quia hec omnia operatur unus adque idem Spi55 ritus diuidens singulis protit uult. Sed ad unum ac peculiare subsidium quod premisi recurro, ad inportunitatem sciJicet amicam amicitia destitutis ac nulla membrorum honestorum gratia diecoratis. ldcirco audi uocem meam tot mteriacentibus terris: ·'redde, redlde quod debes', nam seruus es, seruus Cristi 60 et cristianorum, ut illic sis maior omnium nostru:m et qúam nostri causa tibi conlatam persentis gratiam sitientibus animis scientiaeque fame cruciatis inpertire non ded.igneris. Non sum saltim pes, qui ad iniuncta discurrens possim aluo aeclesiae, membrorum scilicet iudici, obedientiae discursu parere nec prin6': cipatui capitis imperanti obsequendo placere? Quin etsi de inhonestioribus membris me esse sciam, sufficiat quía, que te constat a capite percepisse, per me est dignum egerere nec te me non egere, quamuis mínimum Cristi tamen sanguine redemtum. Nam nec dicit caput pedibus, 'non estis mihi necessarii', quoniam, que uidentur membra cor 70 poris infi.rmiora esse, necessariora sunt et que putantur ignobiliora esse, bis honorem abundantiorem circumdamus et que inhonesdora sunt nostra maiorem honestatcm habent. Sic itaque creator noster ac dispensator cuneta moderatur ut, cum in altero alteri dona diuina que in se non percepit possidenda tribuuntur, caritas cumuletur. Denique tune '15 bene multiformis gratia dispensatur, quand.o acceptum donum et eius qui boc non habet creditur, quando propter eum cui inpenditur datum putatur. Hoc Apostoli capitulum a nobis in parte premissum optime nouit prudentia sanctitatis uestre huic rei congruere totum et quidquid summatim tetigi te procul dubio nosse melius Iatet nullum. Itaque 45 · exsistk C 46 mutuae eL, mutuo BEFG, Risco 11 resummas ABEFG 11 tanteilli B 47 Si uero AB 11 abenti BeEFL 1¡ tribuisti Lind. 48 Proinde et A, edd. 49 remordo B 11 bonis BCEFGL 50 . in inuicem A 51 administrantes e 52 multiformes F 53 unam conpagem B, Risc:J 54 operatur] auferatur e 56 hac L 11 promisi A 57 amicitiam E 11 distitutis e 58 toth AEF, toht B 60 nostrumJ nostrorum .Aa, Lind. 61 presentis ABFG, Lind. 62 c.ruciatus e 63 quia ad L : 1 iuncta A 11 eglesie A 64 scilicet et A 65 ho66 membris] seruis EFG 67 percipisse L 11 nec te me non egere om. A ne.itioribus e 68 nec om. L 11 capud A 69 uidenter L 71 habundantiorem eEFGL 72 despensator B 73 moderatur] dispeusat Risco, 74 precepit e, percipit ABEFG, edd. 75 multiformes E 11 dispensator e 77 cacapitulum C 11 promissum A 78 uestra B 79 tetigit et AB (tetig1t
rf. Le. 14,12-14 11 50 cf. Gal. 5,13 11 51-52 cf. 1 Petr. 4,10 11 52-53 Roro. 12,3 11 54-55 1 Cor. 12,11 11 58-59 Hier., ep. 50,5,5; 7,2,1 11 59 Mt. 18,28 !1 68--72 1 Cor.
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Mendo que lo que tiene deben poseerlo los otros, ¿eres tú tal vez avaro con nosotros, porque no hallas en .nosotro'i nada que te podamos prestar? Pero, si das al que tiene, consigues un provecho insignificante; en cambio, si das al que n0 tiene, CUI11ples con los mandatos del Evangelio, para que se te devuelva en la recompensa de los justos. Así pues, me apena no encontrar en mí ningún bien que ·pueda · coillllinicar, pues se nos manda servirnos mutuamente con amor y repartir a los deni•ás los dones que cada uno ha recibido, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios; y según que a cada uno Dios ha repartido la medida de la fe en una sola unidad die miembros, debe distribuirla a las restantes partes, porque todo esto lo realiza el sólo Espíritu, que da a. cada uno como quiere. Pf.'ro vuelvo al único remedio que tengo y que ya he citado, es decir, a la impertinencia en la que se refugian los traicionados· en la. amistad y los desprovistos de los dones de los miembros relevantes. Oye, pues, mi voz, no obstante la ·distancia que nos separa: Devuelve, devuélveme lo que me debes, porque eres siervo, siervo de Cristo y de los cristianos, para que puedas ser allí el mayor de todos nosotros, y no rehuses hacer partícipes a nuestras almas, sedientas y atonnentadas por el ansia del saber, deJa gracia que sabes te ha sidO confiada en razón de nosotros. ¿No soy al menos el pie, que acudiendo a las órdenes de la barca de la Iglesia, es decir, del juez de los miembros, pueda prestarle obediencia y agradar con ella al mando de la cabeza? Aunque sé que soy de los miembros más humildes, bástete saber que es conveniente que saques fuera en favor mío lo que consta que has recibido de la cabeza y que tienes necesidad de mí. por insignificante que sea, redimido. sin embar!!'O, por la sangre de Cristo. No dice la cabeza a los pies : «no me sois necesarios»; porque los miemnros del cuerpo que parecen ser los m?s humildes son los más necesarios, y a los que consideramos UJ~nos nobles los rodeamos de mayores atenciones y los que son más baios tienen una mayor dignidad. Así, pues, Dios nuestros Creador gobierna todas las cosas de tal modo que la caridad se acrecienta, cuando uno da a otro los dones divinos que éste no ha recibido. En fin, la gracia que se manifiesta de mil maneras es bien administrada, cuaTtdo el don ha sido recibido y pertenece a aquel que no lo tenía, cuando ha sino dado por causa de aquel a quien se aplica. Este capítulo del Apóstol que he expuesto a grandes rasgos sabe muv bien vuestra santidad que cae como anillo al dedo a este asunto, y lo que he dicho en síntesis a nadie se le oculta que tú lo conoces nieior. Así pues.
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80 hoc solum superest, quod et rnagnopere peto ut prestes postulata, etsi
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non pro me, ~altim pro ipsa caritate diuinitus inpertita, pro qua iubemur et nosse et prestare ornnia et sine qua nicil sunt omnia. Sed et si qua superflua, si qua neglegenter, ·si qua rninus humiliter aut utiliter potius effudi qnam dixi, cuneta queso benigne suscipias, cuneta ignoscas, cuneta ores ut Deus ignoscat. Ergo e': hoc notesco, libros Itymologiarum, quos a te, dom~no meo. posee, etsi detruncatos conrososque iam a multis haberi. lnde rogo ut eos mici transcriptos. integras. emendatos et bene coabtatos dignemini rnittere, ne raptus auiditate in peruersum cmzar uitia ~ro uirtutibus ab aliis sumere. Ego autem obto, quamuis nullim egeas et ultronee clicantur putere mercedes, ut dignatio uestre benignitatis inneret nobis in id quod possnmus et ualemus. tantum ut ob-;equio nostro ntaris, im· mo caritatc quae Deus est, perfruaris. His igitur expletis. erant rmhi questiones de sacris diuinisque paginis, quarum mihi expositioneml cordis uestri lumen aperiret, si tamen et nobis iuhes resplendere et diuine legis obscura reserare. Nec. si ista que peto percepero, de illis silebo; sed uiam reseras ca¡piende fiduciae, cum in hac prima fronte non me confodieris stimulis uerecundie et ignauie meae locum dederis ueniae quodque diligebas, auamlibet inmerito, non iusseris reprobare; quia ignominiosum ualde uidetur ac uile, si necdum satiatus quis caritate ab eo auem amabat inuenitur recedere. Obsequio autem mee seruitutis dependo iura salutis et queso pietatem sanctbsime uestre potestatis ut pro ine orare digneris, quatenus cotidie fluctuantem animam malis tuo intercessu lucreris et ad portum aeterne tranquillitatis deducas, erutam a miseriís et scandalis. Dulce mihi fuit diu ad te loqui, quasi coram positus uultum uiderem tuae faciei. Ideo nec uerbositatem cabui et temeritatem fortassis incurrí. Sed aut hoc aur aliut agere debui tantum ut, quod noluisti per .humilitatem, saltim · tribuas per tunill!ltuantern inprobitatem. Ecce quantum audaciae dedit mid gratia uestre beniuolentiae. Et ideo, si quid in hoc displicuerit, sibi inputet, que tantum amat ut timorerr:. tollat. Nam perfecta caritas foris mittit timorem. Speciali quoque gratia fretus speciali domino, in quo uires sancte eclesic consistunt, suggero ut, quia Eusebius metropolitanus noster decessit, habeas rnisericordiae curam et hoc filio tuo, nostro domno,
ea Lind), tetigi ea EFG 80 magno opere AB, Lind. 83 neclegenter L 11 aut hutiliter L. om. A, aut inutiliter EFG, edd. 86 Hvthvrnologiarum e, Aethi- A 87 a om. C. 90 sumere] ~ereri Lind. ! ~ ~ltronete e 91_ ~átere A, putare EFG 11 ut] et e Risco 11 uestra L . 92 uno e 94 sacns om. E 96 dmme obscura reserare legis EFG 97 que apeto L 11
perctpero e ¡ 1 capiendo B 98 istimulis B 99 ignabia mea B 103 piaetatem L 104 sanctissime et uestN C 105 a mali~ A>, in malis eEFG, Risco 106 tranquill- aeternae Risco, Mad. '11 et ab scandalis EeFG, Risco, Lind. 107 ad te] a te E 108 caui G, Risco, Mcd., carui Lind. 109 debuit EF 110 saltim tribuas per tumultuantem om. E 111 gratie EFG 11 uestre] mi L 112 que] qui BEFG 115 eglesie A 116 misericordiae curam] misericor-
12,21-23 11 75 cf. 1 Petr. 4,10 11 81-82 cf. 1 Cor. 13,1-4 11 90-91 Hier., ep. 26,5,1; 130,16,6 11 93 cf. 1 lo. 4,16 ¡ 1109-110 cf. Hier.. ep. 14,2,1 11 112-lB 1 lo. 4,18.
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solo me resta -Y te lo suplico con el mayor encarecimiento- que me otorgues lo que te pido, si rio por mí, al menos por el amor infundido por Dios, por el que se nos manda conocer y darlo todo, y sin el cual todo es nada. Si he dejado escapar algo superfluo -nunca fue mi intención decirlo- o con negligencia o con poca humildad o utilidad, te pido que todo lo recibas con bondad, ine ·lo perdones todo y reces para que Dios todo me lo perdone. Te 'hago saber en consecuencia que los libros de las Etimologías, que te solicito, están ya, aunque mutilados e incompletos, en manos de muchos. Por eso te ruego que me envíes una copia. íntegra, corregida v bien ordenada, no sea que. llevado por mi ansiedad, me vea obligado a tomar de otros vicios por virtudes. Quiero, aunque no tengas necesidad de nadie y sean sospechosos los ofrecimientos no solicitados, que vuestra bondad me mande en lo que puedo y valgo, de modo que hagas uso de mis servicios, más aún, que goces del amor que es Dios. Expuesto esto, me quedan unas preguntas sobre la Sagrada Escrituru, cuya explicación debe hacerme vuestra luminosa inteligencia, si es que quieres que yo dé lti7. y descubra las dificultades de la Escritura. Pero, aunque consi~a esto que te pido, no callaré respecto a mi primera petición; alláname el catl'Jno para tomar coJ!iianza no zahiriéndome de entrada con los aguijones de !a vergüen?..a y perdonando mi ignorancia y no rechazando aquello que amabas aunque inmerecidamente, porque parece muy verl!;onzoso y vulgar aue uno se aparte del que amaba, cuando todavía puede recibir mayores pruebas de amor. Con el ofrecimiento de mi pequefiez te nresento mis saludos y pido a tu piadosa santidad que reces por mí para que nor tus oraciones salves mi alma que se debate cada dfa entre .los males y la lleves al nuerto de la eterna paz, arrancándola de las miserias v de las ocasiones de pecado. Me ha sido grato hablarte durante largo tiempo, como si colocado delante de ti estuviera viendo tu cara;- Por eso no he huido de la palabrería y tal vez he incurrido en la imprudencia. Pero tenía que hacer esto u otra cosa, pRra que lo que no has querido concederme por la humildad, te lo arranquen mis reproches intemperantes. Fíjate Jo atrevido que me ha hecho tu generosa bondad. Ella, que es capaz de amar hasta hacer desaparecer el temor, es la causa de que en lo dicho por mí pueda haber algo que te desagrade, porque el amor perfectó echa fuera el temor. Confiado en tu singular influencia, a ti, mi particular protector. en quien descansa la fuerza de la santa Iglesia, te pido que, puesto aue nuestro metropolitano Euo;ebio ha muerto, te apiades de nosotros v solicites de tu
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suggetas ut illum iJJi loco preficiat, ··cuíus doctrina et sanctitas ceteris sit uitae forrna. Hui:lc autem filium presentem beatissimae· potestati uestre per omnia con1mendo et tam. de· bis que bic suggessimus quam etiam 120 de bis que supra questi fuimus eloquio uestro per eum mlustrari m~ reamur. di$111 L 11 tuo] tu L 1j. domillo AB, ~dd. 117 illum] utilem. AB, Risco 11 doctrine sanc:titllls e, sanctitatis corr. lid marg. sanctitas L 118 fotmas B 119 comendo e 120 supra] ili Blüs .Jittens L; qu€ supra retulimus, que supra: que5ti f.· EFG 11 eloqulc:i et ·nestro e
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DOMINO MEO ET DFI SERUO BRAULIONI EPIScOPO ISIDORUS 1
Tue sanctitatis epistole me in urbem Toletanam inuenerunt, nam· permotus fueram causa concilii. Sed quamuis iussio principis in itinere positum remeare me admonuisset, ego iamen, q_uia propinquior eram .S presentie ipsius quam. regressionis, malui potius cursum itineris non intercludere. Ueni ad presentiam principis; inueni diaconem presentem: tuum; per eum eloquia tua suscipiens amplexus sum et Iegi et de salute tua Deo gratias egi, desiderio omni desiderans, quamuis dehilis adque fessus, fiduciam tamen babere per Cristum in bac .uita uisendi ··10 te, quía gpes non co~dit per caritatem, que diffusa est in cordibus
riostris. · Codicem Aetymologiarum cum aliis codicibus de itinere transmisi et Iicet inemendatum pre ualitÚdine, tamen tibi modo ad emendan· dum. studueram offerre, si adi destinatum concilii Jocum peruenissem. 15 De constituendo autem episcopo Tarraconensi non. eam quam petitis . sensi sententiam. regís, sed tamen et ipse adhuc ubi certius conuertat animum, illi manet incertum. Peto autem · ut pro rneis peccatis aput. Deum exsistere intercessor digneris. ut inpetratu tuo deleantur delicta mea et remittantur facinora. 20 Item manu sua. Ora .pro nobis, beatissime domne et frater.
VI. 2 In urbe Tnletana edd. 4 ammonuisset A 6 presentem diaconum C, Risco, prae7 tua om. E 9 fiducia L 11 uidendi e, Risco 12 Aethymologsentem diaconem. Lind. A, Ethi- BEFG, Ethy- e 11 transmisi] retransmisi L 13 pre inualitudine B, Risco 15 Terraconensi ACG, Lir.d.,; episcopus Tarraconensis EF 11 petitis ABFL: peditis c. peti• G, 16 set$Dlen E 18 apud Dominum edd. 11 existcre petistis E, Mad., Lind., petisti Risco 20 domne frater AEFL, domine et egregie frater B, Risco, domne et om. G ABeEF
VI. 8 cf. Le. 22,15 11 10 cf. Rom. 5,5
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hijo, nuestro rey, que ponga. en aquel puesto a alguien cuya ciencia y santidad sea modelo de vida para los .demás. Por otra parte encomiendo con todo encarecimiento a tu beatitud ·a este hijo mío (el mensajero) y que merezca ser informado a través de él con una carta tuya tanto sobre esto .que aquí te ¡:lido como sobre lo que más arriba te recriminé.
VI AL OBISPO BRAULIO, MI
SE~OR
Y SIERVO DE DIOS, ISIDORO
La carta de tu santidad la recibí en la ciudad de Toledo. Me puse en camino por razón del concilio y aunque una orden del príncipe me aconsejaba volver, cuando ya estaba de camino, preferí, sin embargo, ya que estaba más cerca de Toledo que de Sevilla, no interrumpir mi viaje. Me presenté al príncipe y allí encontré a este diácono tuyo; él me entregó tu carta, que abracé y leí y di gracias a Dios por tu salud, c.on el deseo ardiente de que, aunque débil y achacoso, Cristo me conceda verte aún en esta vida, porque la E.'speranza no engafia por el amor que ha sido derramad~ en nuestros corazones. Cuando venía de camino te h~ enviado con otros códices el de las Etimologías v aunque sin corregir a causa de mi salud, era ya mi intención ofrecértelo para que lo corrigieras, si lograba llegar al señalado lugar del concilio. Con relación al nombramiento de obispo de Tarragona, me he dado cuenta de que el modo de pensar del rey no coincide con tus deseC'Is; no obstante todavía anda dudando en quién va a hacer recaer su designación. Te pido que intercedas ante Dios por mis pecados para que por tus oraciones sean borrados mis delitos y perdonadas mis maldades. De su propia mano: Reza por mí, venerable señor y hermano.
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VII DOMINO MEO ET DEI SEROO BRAULIONI EPISCOPO. ISIOORUS
En tibi, siCut pollicitus sum, misi opus de origine quarundain rerum ex ueteris lectionis recordatione collectum. adque ita in quibusdam locis adnotatum, sicuti extat conscriptum stilo maiorum. VII. 1 Domino et filio Sisebuto lsidorus e, Lind., Mad.; Domino meo et Dei seruo 8rauhoni episcopo Isidorus ABDE; epistolam om. L; in B titulo praecedunt haec: In nomine Domini. Incipit Iiber Ethimologiarum beatis~imi Isidoli. eclesie spalensis sedis episcopi. Prefatio totius libri; in D luJec: In nomine Domim. lncipiunt libri Ethymologiarum Ysidori Iunioris l•ispalen.~is episcopi ad Braulionem cesaragustanum episcopum scribti; in E haec: Incipit prefatio totius Iibri; in e epistola bis occurrit, primum post hanc praefationem: Incipiunt libri Ysidori Iunioiis ·iipáiensis episcopi ad Sraulioit.em cesaragus~i:ium epjscópurn · scriptl, tkinde post titulum iam memoratum. 2 quarundarum A 4 sicut A, edd.
VIII DOMINO MEO ET DEI SERUO BRAULIONI EPISCOPO YSIDORUS Omni desiderio desideraui nunc Uidere faciem tuam et utinam aliqtiando impleret" Deils uotum meum, ·antequam ·rrioriar~ Ad praesens autem deprecar ut commendes me Deo orationibus tuis, ut et in hac uita S~ meam irilpJeat et in futura ooatitUdinis tue oonsortiUm .mihi c:On.Cedat.. Et rilanü sua. Ora pro nobis, beatissime domine et· trater~ VIII. 1 Braulio F. 11 episcopo om. A.- j 1 lsidorus ABG 3 Ad presens ABBFG -1 depraecor l. 11 ut etJ et ut Risco. 11 in ora~onibus G S in future AEF, in futuro BG, Lind. 6 domne BBF, Lind.
VIII. 2 cf•. Le. 22,15
IX
DOMNO MEO lACTATO PRESBITERO BRAULIO
Exigere a me, frater beatissime, uelle te persentio uerbi pastum diuini, quod ultra uires meas esse intellego. Deuotionem enim tuam eo quam maxim.e adprobo, quo etiam inportunitatem tuam nec ibi S cohibe!! ad sancti studii exercitationem ampliandam, ubi manet tibi scientia parum posse inuenire quesita. Nam quum cotidie in lege Domini mediteris et beatissimorum patrum peritissimorumque reuolbas paginas uirorum, quid in nobis aut quantulum est, quod aut ipse uelis addiscere aut de quibus contingat tibi sacrum desiderium alere? Suf-
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VII AL OBISPO BRAULIO; MI SE.l'il'OR Y SIERVO DE DIOS, ISIDORO
Ahí te _en;vío, _como te prometí, la obra sobre el origen de algunas co&as, compuesta con los recuerdos de antiguas lecturas y comentada en al· gunos pasajes en el estilo en que escribieron nuestros mayores.
VUI AL OBISPO BRAULIO, MI SE&OR Y SIERVO DE DIOS, ISIDORO Con toda ansia estoy deseando ver tu rostro y ojalá alguna vez Dios dé satisfacción a este mri deseo, antes de morir. Por ahora, sin embargo, te suplico que me encomiendes a Dios en tus oraciones, para que colírie en esta vida mi esperanza y en la otra me conceda participar de tu felicidad. De su propia mano: Reza por mí, venerable seiior y hermano.
IX AL PRESBITERO YACTATO, MI SE&OR, BRAULIO Me doy cuenta, hermano reverendísimo, de que pretendes de niJ el ali· mento de la palabra divina que sobrepasa ·nns posibilidades. Te felicito por este entusiasmo tuyo, sobre todo, porque ni siquiera refrenas tus ansias in· contenidas de aumentar tus conocimientos, cuando tienes la seguridad de difícilmente averiguar lo que buscas. En efecto; si siempre estás meditando en la Sagrada Escritura y leyendo los escritos de los santos padres y de los hombres más cultos, ¿qué y cuánto encuentras en mí para que quieras aprenderlo o C'On lo que logres satisfacer tus santas ansias de saber? Basta y so-
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10 f.cit et ualde sufficit ut aniicum tuum legas sanctum Agustinum, ut Hieronimum, ut Hilarium, ut ceteros doctissimos uiros, quos tur, aut forte, ut Apostolorum pt-rturbatio eadem die, dé-. serto officio, ostendatur; immo, quia forte eglesia ab ea die in Petro sumens exordium a merore initium cepit, ut gaudium in resurrectione metat ; an, quía omnis cristianus ad instar Cristi pie in hac uita degens per uarias peruenit ad regnum Dei tribulationes, ideo hec admonitio tristitiarurn rediuiba anni conuersione in Cristo nobis significatur, ut Cristus procul dubio imitetur. Sed et ob hoc mici uidetur illius noctis instituta mestitia et ut ab eglesia que aduc in hoc mundo uisibilis est, ea, que corporaliter in Cristo gesta sunt, uisibili.ter impleantur. Nam sicut resurrectio Domini simpla in letitia, ita nostra dupla et in presentí scilicet et in futuro seculo significatur in Pasea. et ideo necesse est ut illa die premittatur m.eror, quasi presentís uite forma, et sumatur gaudium in redemtoris nostri resurrectione gloriosa. Ecce que sensi, citatim, ut occurrit, quanta potui breuitate suggessi. Uestrum est inde, si quid melius probaueritis, eligere adque, si qua offend.erint, uestro iudicio aut corrigi aut alll!Putari. De uestiendo autem altari seu uela mittenda hoc usus abet eglesiarum, ut iam declinante in uesperam die crnetur eclesia et lumen uerum ab inferís resurgens cum adparatu suscipiatur quo et iile uirgines, qui lampades suas coabtauerunt, in resurrectionis ilaritate sponsi prestolarunt aduentum. Unde ipsa nocte eo usque celebrantur festa, quoadusque nox transeat media, qua ora et nos credimus resurrecturos et Dominum uibos et mortuos iudicaturum; hoc enim sequetur in membris quod precessit in capite. De cetero obsequia seruitutis mee deuotus dependo et me in uite uius tempestate fluctuantem salband.um tuis orationibus committo, si forte respiciat Dominus de celis et mici ignoscat et his, quibus indigni presidemus, misericordiam concedat.
sum edd. deri edd. biliter (uiscripsi: qui
10 nobis om. Mad. 11 addidi (retroscribere edd.) 12 ut] et edd. 16 respon21 tristilia uera edd. 22 addidi 24 coepit Mad. 25 metat. An edd. 30 uisi· s. u.) L 37 corrigere aut amputare Risco ,40 resurgens (ad marg.) L 1l quo L (quia edd.) 41 qui] quae edd. 11 ilaritate] claritate Risco
XIV. 25-26 cf. Act. 14,21
11
35 Leo Magn., ep. 3,4; 16,2 (PL 54, 609; G97)
11 4041 Cf. Mt. 25,1 ss. 11 42-45 cf. Isid., Etym. 6,17,12 ( 44 Cf. 2 Tim, 4,1) 92
Por tu parte, señor, conforme a tu costumbre quieres saber por mí lo que conoces muy bien, de modo que pones a prueba mi ignorancia mientras. dejas traslucir tu hurnildad. Pero, por favor, si en relación con tu consulta digo algo que no sea correcto, la culpa será tuya, porque pretendes saber por mí más de lo que me enseñaste y quieres exigirme más cie lo que me has instruido. · Me consultas, en efecto, si el viernes de Pascua (santo) debe responderse Amén a cada lectura de un pasaje de la Escritura y cantarse el Gloria según la costumbre. Esto no se hace entre .nosotros, ni lo he visto en ninguna parte, ni lo hacía mi señor Isidoro de feliz memoria; tampoco se hace en Toledo ni en Gerona. En Roma, según dicen, ese día no se celebra ningún oficio, en mi opinión, con el solo objeto de que se renueve siempre el recuerdo de la pasión del Señor y se patenticen simbólicamente en este tiempo las tristezas verdaderas del alma; o quizá para que con el aba.TJ.dono de los oficios quede manifiesta la turbación de los Apóstoles en ese día; otra razón todavía, porque la Iglesia, que se inició ese día en Pedro. empezó en la tristeza para luego cosechar el gozo en la resurrección; o quizá, como todo cristiano que vive santamente en esta vida, a ejemplo de Cristo, llega al reino de ~ios a través de las tribulaciones, este recuerdo de las tristezas renovadas en la conmemoración de cada año se nos patentiza simbólicamente en Cristo para que con decisión imitemos a Cristo. Pero además de esta razón, me parece que la tristeza de aquella noche ha sido instituida para que la Iglesia, que todavía es visible en este mundo, realice visiblemente en sí lo que realmente se llevó a cabo en Cristo. Porque así como la resurrección del Señor está simbolizada en la alegría de la Pascua como una, la nuestra lo está doblemente, es decir, en esta vida y en la otra, y por eso es necesario despojarse ese día de la tristeza, como imagen de esta vida, y revestirse de alegría por la gloriosa resurrección de nuestro Redentor. · --- Ahí tienes expuesto mi pensamiento a toda prisa, según se me ha ido ocurriendo y con la mayor concisión que he podido. A tu buen juicio corresponde elegir lo que de él mejor te parezca y si algo no te gusta, o bien corregirlo o supriiDlirlo. Sobre el modo de cubrir el altar y de poner el velo, la costumbre :de las iglesias es que al atardecer se adorne ]a iglesia y que la luz verdadera (Cristo), que surge de los infiernos, sea recibida con la pompa con que las vírgenes que prepararon sus lámparas esperaron la llegada del esposo, en la alegría de la resurrección. De ahí qtie esa tarde se celebra la fiesta hasta que pasa la media noche, hora en la que, según nuestra creencia, nosotros también resucitarelli.os y el Señor juzgará a los vivos y a los muertos, porque en los miembros se realizará lo que sucedió en la Cabeza. Por lo demás te ofrezco afectuosamente mis humildes respetos y me encomiendo a tus oraciones, para que me salves del agitado oleaje de esta vida, por si el Señor degde el cielo me dirige una mirada propicia y me perdona y es misericordioso con los que sin mérito gobierno.
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XV
DOMINA MEA ET DILECTISSIME IN CRISTO FILIE . BASSILLE, BRAULIO SERUUS INUTILIS SANCTORUM DEI
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Inter horribilis nutii procella uexatus cogor tuis litteris respondere inquisitus et quid primum debeam adsumere satagit anim.us, utrum merares meos indicare an tibi consolationem adhibere, uel si commodum sit presentem salutem intimare, si tamen salus dicenda est uita meroribus af..flicta. Nam ecce cotidie migrant ab eclesia boni et augentur cotidie mali, quoiurn. non minus nos illorum defectos quam istorum contristat successus. Et quidem prohibemur ab Apostolo mortuos nostros lugere; sed quis non Juget, quando bono caret presenti? Nam ipse uas electionis gaudet quod Epafras sibi fuerit restitutus de uicini mortis, in q_uo utique sicut gaudium de restitutione, ita procol dubio habere debuit mestitiam de eius decessione. Spe enim erigímur, dum fideJibus uitam in melius mutari non dubitamus, et aput Deum fortiores intercessores illos habemos, quorum hic ad presens desolatiene destituimur. Sed nescio quomodo inter precepta consolationum et spem resurrectionis quamuis credulam mentem desiderii frangit af. fectus. Sed ubi non repperitur quo euadatur alius portus, hunc ipsum aiiiiPlecte-re debemus totis uiribus, quoniam illo, qui iustificat impíos et resuscitat mortuos, spes non confundit, quia credimus nos cum his, qui iam dormierunt, in regionem beatam futuros. Non est siquidem optimus consolator quem proprii uincunt gemitus et quem a uerbis lacrime aut singultus excludunt. Nam ecce merentem merens ipse conso1ari dum cupio, uo1uuntur per ora lacrime, et ohfirmato animo non queo edissimu1are quod patior. Sed quid agimus, quoniam hec sors post peccatum mortalitatis nostre una est? Una sententia pius et impius, iustus et sceleratus, prouus et nequam rapitur; sed non posthac una sententia, una quohabitatione sanctus et damnatus detinetur. Oh hoc toleremus amaritudines uite presentís, patienter expectantes quod quandoque futuri sumus et gaudeamus in Domino de spe uite felicis, orantes pariter et precantes ut tam caris pTemissis quam nobis subsequentibus et placatus ubique occurrat et non distryctionis sue iudicio nos usquequaque discutiat; sed superexaltet misericordia iudicio et > consueta pietate, dum illi beneplacitum fuerit, in refrigerio promtuarii sui nos dignetur adunare.
<
35
X\1. 1 add. Risco 3 add. Risco 11 procellas edd. 8 nos om. Mad. niis edd.) 19 in illo edd. 11 uinbus. Quoniam edd. 21 regione beata edd. edd. 26 una sententia? Pius ... edd. 3G et gaudeamus (ad marg. infr.) L
12 addidi (uici-
25 dissimulare 32 quam] cum
XV. 9-10 Hicr., ep. 3,3,2: 60,2,1 ( cf. 1 Thes. 4,13) 11 11-12 Hier., ep. 60,7,2 (cf. Phil 2,25-2!1) 11 16-18 Hier., ep. 60,2,2 11 19-20 cf. Prov. 17,15; lo. 6,40 11 20 Rom. 5,5 11 22-23 Jlier., ep. 39,2,1 11 24-25 Hier., ep. 60,13,3; 22,35,3 11 3C Hier., ep. 60,14,3 11 33-34 Iac. 2,13 [d. August., Perfect. iust. 34 (CSEL 42 p. 35)] ll
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·xv A BASILA, MJ SEÑORA Y QUERIDISIMA HIJA EN CRISTO, BRAULIO SIERVO INDIGNO DE LOS. SANTOS DE DIOS
Aunque náufrago en medio de la tormenta de la horrible noticia, me veo obligado a contestar a lo que me dices en tu carta, y mis sentimientos pugnan en la duda de por dónde debo empezar, si exponer mi tristeza o tratar de consolarte, o si sería adecuado exponerte mi estado de salud, si salud puede llamarse la vida agobiada por las penas. Pues cada día se nos van de la Iglesia los buenos y aumenta cada día el número de los malos; la pérdida de los primeros nos entristece, no menos que la prosperidad de los segundos y, sia embargo, el Apóstol nos prohibe llorar a nuestros muertos; pero, ¿quién no llora cuando se ve privado de un hombre tan bueno c.omo éste? Porque el mismo Vaso de elección se alegra de que le sea devuelto Epafras de los confines de la muerte; por tanto, sin duda alguna, lo mismo que tuvo alegría por su recuperación, habría tenido pena por su muerte. La e:>:peranza ciertamente nos anima, ya que tenemos la certeza de que la vida de los fieles cambia a mejor y tenemos como intercesores eficaces ante Dios a aquéllos, por los que ahora de momento quedamos aquí abandonados. Pero yo no sé de qué modo, a pesar de las invitaciones al consuelo y de la esperanza de la resurrección, la fe del espíritu queda quebrantada rcr un sentimiento de nostalgia. No obstante, cuando no se encuentra otro puerto en que refugiarnos, debemos abrazar con todas nuestras fuerzas éste: que Aquel que· perdona a los impíos y resucita a los muertos no nos defrauda en la esperanza de que nos hemos de encontrar en la patria de los bienaventurados con los que- ya descansaron. No es ciertamente el más indicado para consolar aquél a quien ahoga su propio llanto y a quien no dejan hablar sus lágrimas y sollozos. Pues heme aquí lleno de penas que al intentar consolarte a ti, que también las tienes, las lágrimas me caen por la cara y a pesar de mis esfuerzos no puedo silenciar mis sufrimientos. Pero, ¿qué podemos hacer, si después del pecado el solo destino del hombre es éste? Según un único veredicto, el pío y el impío, el justo y el injusto, el honrado y el malvado son presa de la muerte; pero después no habrá un solo veredicto, no quedarán en una misma morada el justo y el condenado. Por tanto toleremos las amarguras de esta vida esperando con paciencia lo que alguna vez hemos de ser, y alegrémonos en el Señor con la esperanza de la vida feliz, pidiendo y suplicando al mismo tiempo que acoja siempre indulgente tanto a nuestros deudos, o_ue nos precedieron, como a nosotros, que les seguiremos, y que no nos juzgue con la severidad de su rígida justicia, sino que la misericordia se sobreponga al castigo y que, cuando le plazca, con su acostumbrada bondad nos reúna en la paz de su gloria.
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Hac spe animemur, hoc affectu illi seruiamus, et in inuicem in illo et affectum dilectionis et rem.edium consolationis ~beamus. Te autem quam maxime, domina filia germana, exortans precor ut non solum tibi sed omnibus, quibus recessus tanti uiri m.erorem adtulit, 40 tam prudenter modum consolationis adhibeas, ut illum expectare uideamini, non amisisse; nec doleatis quod tali tutore carueritis, sed gaudeatis quod talero habueritis. De cetero orones pari affectu saluto; orones pari suppHcatione d€> poseo ut et pro me oretis et tristitiam, que accidit, equanimitate ternr 45 peretis. Non sum ignaros quantum uobis adtulerit Iamentum huius nuntii malum. Mad. lldistryctionis (prim. distructionis) L in) L 39 moerorem Risco: memorem L
40-41 Hier., ep. 60,14,6;
79,1,3;
34 iudicium edd.
11
add. IUsco (signum lacunae
123,10,3 11 41-42 Hicr., ep. 60,7.3;
108,1,2
XVI DOMINA ET IN CRISTO FILIA APICELLA, BRAULIO SERUUS INUTILIS SANCTORUM DEI
Siquidem alii fuerat hic codix conscriptus, tamen, quia petitionem uestram offendere non potuimus, uobis eum misimus. Credo enirn su5 perno nutu hoc contigisse ut, alü preparatus, uobis esset conlatus. Habes enim ibi sanctum Tobiarn, cuius amissio óculorum consoletur animum tuum super amissum uirum. Abes et Iudith, qui in uiduitate ornata uiduitatem tuam doceat uirtutibus esse conpositam adque mortificatum in c01-pore tuo eum, in cuius tipo Olofornis precessit. 10 Benedictionem gentis fideique tuae consequaris et in futura posteritate in nomen m.emoriamque perpetuarn benedicta habearis. Uale in Domino et nostri m.emor pro nobis orare dignare.
XVI. 1 Dominae... filiae Apicellac edd. 3 codex edtl. 7 qui] quae edd. 9 Holophn-10 fideique (i alt. s. u.) L 11 tuae nes edd. 11 praecessit, ut oenedictionem (add. ut edd.) (11 s. u.) L
XVI. 6 cf. Tob. 2,11 11 7-8 ludith 10,3 11 9 ibid. 13,10 11 10.11 ibid. 15,10
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Animémonos con esta esperanza, sirvámosle con estos sentimientos, y entre nosotros mantengamos por El los vínculos del amor y el remedio del c-ansuelo. A ti, sobre todo, mi señora, hija y hermana, exhortándote con el mayor encarecimiento te pido que no sólo trates de consolarte a ti misma, sino a .todos los.. q\le_ha entristecido la muerte de un hombre tan bueno y hazlo con tai serenidad qu~ dé la impresión de que lo estáis esperando y no de haberlo perdido, y no tengáis pena por haber perdiido a un protector como él era, sino más bien alegraos de haberlo poseído. Por lo demás, a todos os saludo con igual afecto, a todos os suplico que recéis por nií y serenamente pongáis ténnino a la tristeza que nos ha caído. No se me oculta cuántos lamentos os ha traído esta desgraciada noticia.
XVI A MI SMORA E HIJA EN CRISTO APICELA, BRAULIO SIERVO INDIGNO DE LOS SANTOS DE DIOS Aunque este manuscrito fue copiado para otro, sin embargo, como no puedo negarme a tu petición, te lo envío a ti. Creo, en efecto, que ha sido vol1mtad de Dios el que, estando destinado a otro, te lo haya regalado a ti. Tienes en él la historia de Tobías, cuya pérdida de la vista consuele tu espíritu por la pérd!ida de tu marido. Tienes también la historia de Judit, que con su viudedad engalanada enseñe a tu viudedad a estar adornada de virtudes y a tener mortificado en tu cuerpo a quien representa como modelo Holofemes. Que logres la prosperidad de tu familia y la gloria de tu fidelidad, y que tu nombre y tu recuerdo sea por siempre bendito entre tus descendientes. Adiós en el Señor y sin olvidarme dígnate rezar por mí.
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XVII OOMNO BEATISSIMO ET 1N CRIST-1 MEMBRIS UENERANOO AOQUE OMNI DILECTIONE AMPLECTENDO DOMINO IN CRISTO MEO UUIUGILDO EPISCOPO, BRAULIO SERUUS lNUTIUS SANCTORUM DEI Non sum ignarus me contra ·patnun sanctiones et decreta canonum S egisse, cum monacum uestrum de asili monasterio· me scio et subdiaconem et diaconem sacrasse, quia, quamquarn eclesia Cristi toto orbe terrarum diffusa in uniuersitate catholica habeatur una, tamen, cum rectoribus suis innititur adque presulibus gubernatur, et diuisa in preuilegiis et huna habetur in conpage credulitatis; hac per hoc sentio me 10 ordinem excessi.sse. Unde in prima fronte huius epistole hoc studui ponere, ut fasso errore conpendiosius perciperem indulgentiam uenie. Nam cwn hec ipsa recogito quod, quamuis diuersitate rectorum in multis partiatur ordinatio eclesiarum, tamen, cum unam eam esse procul dubio meminimus, spe caritatis animamur, que nos compulit et de 15 uobis tanta ¡presumere et ordinem pene postponere, quia caritas, ut ayt quidam patrum, ordinem nescit, et Apostolus 'caritas non querit que sua sunt'. Ac sic, cum ego uestra presumsi, non mea quesibi, quod et uos facere credidi, si tamen huic uos pepercisse didicerim.. Et ideo in hunc famulnm uestrum ordinationem dedi, non tamen sine testifica20 tione et inquisitione ipsius uite. linde rogo ut taro mihi quam ei ignoscatis, ut, si a districtionis uestre sententia tam longinquus terrarum me situs inmunem reddit, bine saltim benignitatem ostend.atis, cum isti presentí pietatis et bonitatis intuitu pro me remittitis. Quod si obtineo, queso ut g:radus a me susceptos, imm.o per manus pusillitatis me 25 acreptos eum habere permittatis et pro paruitatis mee infelicitate Cristo Domino indesin.enter supplicetis, quatenu~ non solum a uobis ueniam percepisse me s~tiam, sed etiam uestre orationis ope subfultus, adiuuari me in huius uite mortalitate a Domino manifestis indiciis teneam. 30 Salutem autem religiosa humilitate et deuotissima seruitute uestre beatitudini persolbens, queso ut nanctis occasionibus uestris merear inlustrari apicibus. Hec et Aiulfo presbítero et abbati.
XVII. S de asylo monasterii Risco ¡ 1 subdiaCñ'm et diaconem L (subdiaconum et ctiaconum edd.) 13 eam om. Mad. 21 uestrae Risco: Üsa L 23 me (e s. u.) L 24 add. JUsco 30 devotissima Risco: douotissima L 31 beatitudine (cum i supr. e alt.) L
XVII. 1 cf. Rier., ep. 104,2,2 11 16 Hier., ep. 7,6,3; 46,1,1 1J 16-17 1 Cor. 13,5 11 19-20 Concilios de Braga I c.8 y de Braga II c.24 ( edic. VIves pp. 72 ss. y 93)
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XVII AL OBISPO WILIGILDO S~OR REVERENDISIMO Y VENERABLE EN LOS MIEMBROS DE CRISTO, DIGNO DE SER ABRAZADO CON TODO AFEC'IO YMI S~OR EN CRISTO, BRAUUO SIERVO INDIGNO DE LOS SANTOS DE DIOS Sé muy bien que he obrado contra las disposiciones de los padres y las prescripciones de los cánones al consagrar subdiácono y diácono al monje del monasterio de vuestra jurisdicción, porque, aunque la Iglesia de· Cristo, difundida por todo el orbe de la tierra, sea una en la universalidad católica, sin embargo, como está basada y gobernada por los obispos que la rigen, se n1antiene dividida en los derechos y una en la indisolubilidad de la fe, y por tanto me doy cuenta de que he transgredido los cánones. Por eso me he cuidado de exponer esto al comienzo de esta carta para, confesando mi error, conseguir más fácilmente tu perdón. Pues, cuando pienso en esto mismo que, aunque la organización de las iglesias esté muy repartida por la diversidad de los obispos, sin embargo, la Iglesia es una sola efectivamente, me conforta la esperanza de la caridad, la cual me impulsó a permitirme rlerechos que te pertenecen y a dejar de lado las reglas de los cánones. Porque la caridad, como dice uno de los padres, no sabe de orden y el ·Apóstol añade: «La caridad no busca lo que es suyo». Así, cuando yo me arrogué tus derechos, no busqué los míos, cosa que creo también haces tú, si es que llegas a perdonar a éste. Por eso, he ordenado a éste· tu siervo, no sin antes haber tomado testigos e informes sobre su vida. Por consiguiente, te pido que nos perdones tanto a mí como a él, de modo que si la gran distancia que nos separa me pone a salvo de tu castigo, al menos pongas de manifiesto tu bondad perdonando por mí a éste, que tienes junto a ti, con caridad y generosidad. Si logro esto, te ruego permitas que éste conserve los grados recibidos de mí, mejor dicho por manos de ini debilidad, y que reces sin cesar a Cristo nuestro Señor por mi miserable insignificancia para que no sólo sepa que me has perdonado, sino que tenga pruebas se. guras de que con el apoyo de tus oraciones Dios me ayuda en esta vida mortal. Saludando a tu beatitud con respetuosa humildad y con la más fiel sumisión, te pido que, cuaudo tengas ocasión, me des noticias en una carta. Esto lo hago extensivo también al presbítero y abad Ayulfo
XVIII DOMINE ET I.N CRISTO FILIE POMPUNIE ABBATISSE, BRAULIO SERUUS INUTIUS SANCTORUM DEI
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Uno uulnere confossus et multo dolore excruciatus, cum lingue officium non sineret exercere amaritudinis uinculum et rnagis liberet flere quam loqui, ecce alia afflíctio super affl.ictionem euenit, et contritio super contritionem inruit, quomodo si quis fugiat a facie Ieonis et occurrat ei ursus, aut a percussu scorpionis heiulanti adiciatur morsus colubrí; ita me sentio usquequaque deiecturn et contritionis ·miseria afflictum. Fateor enim, mi domina, quotienscumque uolui aliquid tibi de transitu sancte memorie gerrnane tue domne Bassille scribere, totiens all1aritudine affectus et anime stuporem et sensus ebitudinem et lingue incurri torporem, quia occupatus Iuctu in funere mente uersabar. Sed, dum in temporis prolixitate curn doloris mei relebatione uellem proferre sermonem, rursus geminato malo perculsus in lacrirrJs contabesco, id est reuerende memorie donmi mei Nunniti episcopi exitus mici existit exitiosus. Unde conpressus quantulacumque emitto uerba et gemitus! O quantum in bis duobus nostris bonum perdidimus ternporibus! Quod lurnen ueritatis! Quod exemplum bone actionis quantumque intercessum pro piaculis nostris ! Ubi nunc presidium nostrum, quod in illis fuit apud Deum? Ubi miserorum refugiurn? Ubi susceptio perecrinorum uel ubi monachorum et monacarum refrigerium? Uides tu procul dubio quid tangam et quid explicare non ualeam. Affectum tantum ostendo, nam bonum eorum dicere nec incipio, sciens quia, etiam si esset mici sermonis copia et lingue gratia cum ingenii memoria, inexplicabile mihi fore existimaueram eorum .replicare sanctissima gesta. Sed tantum, ut dixi, demonstro quid merear et quantum meroris in me patiar. Uae, ue presentí uite, quam decet potius flere quam amplectere, odire quam amare. Transeunt bona, succedunt mala et adsiduo cursu transimus, et nos nescio qua ebritate mentís permansuros putamus; insensibiliter enim fugiunt tempora et mors prO!pinquat futura, et nobis spes presentium imaginatur gaudia temporum. Felices quorum letitia Deus et gaudium de beatitudine est futurorum ; quorum cruciatus curn Cristo et obprobria in crucis eius uixillo, ut in eterno recondantur triumpho! Ergo in illo noster omnis dirigatur affectus; ibi omnis extendatur seruitus, ut ab ipso sit interior horno noster consolatus, qui pro nobis est passus, et nos numquam et nusquam relinquat solos. Quapropter adibe anime tue solamen sanctarum scribturarum me-
XVIII, 5 loqui, Ecce edd. 11 uenit cdd. 8 miseriae Mad. 15 contabesco. Id est Mad. domini Risco 17 nostris : nisiS L 25 replicare] refricare Risco 26 tantum1 taJnen
XVIII. 4-5 cf. Greg. Magn., In Evang. Homil., 33,1 (PL 81,1239) 11 Hier., ep. 118,2,1 (Amos 5,19) 100
~7
cf.
XVIII .A LA ABADESA POMPONIA, MI SE:RORA E HIJA EN CRISTO, BRAUUO SIERVO INDIGNO DE WS SANTOS DE DIOS Estando yo .- tré.spasadé por una herida y atormentado por un dolor proñmdo, cuando la congoja anudalYci mi garganta impidiéndole hablar y encontraba más alivio en el llanto que en las palabras, he aquí que una segunda aflicción se añade a la primera y las desgracias se suceden, como si a uno que huyera de un león le saliera al paso un oso, o a quien· gritase de dolor por la picadura de un escorpión le mordiera .una serpiente, ¡tan totalmente agobiado y antJnadado me siento por las desgracias! Te aseguro, señora mía, que cada vez que quise escribirte algo sobre la muerte de tu hermana Doña Basila, de santa memoria, ahogado por la pena acabé con el espíritu abotargado, la sensibilidad embotada y sin poder articular palabra, porque absorbido por el dolor no podía apartar mi pensamiento de la idea de la muerte. Pero, cuando con el paso del tiempo y el alivio de mi pena he querido dirigirte mi palabra, desgarrado nuevam.eme por una segunda desgracia_ me deshago en lágrimas, pues la muerte de mi señor el obispo Nonito, de santa memoria, es para nú una irreparable desgracia. Consternado por ella, ¡qué entrecortadas palabras y lastimeros gritos lanzo! ¡Oh, cuánta bondad se nos ha ido con estos dos en nuestros d1as ! ¡Qué modelo de verdad! ¡Qué ejemplo de bien obrar y qué grandes mediadores por nuestros pecados! ¿Dónde estará la defensa, que con ellos tuvimos, ante Dios? ¿Dónde el refugio de los desgraciados? ¿Dónde los peregrinos hallarán acogida? ¿Dónde consuelo los monjes y las monjas? Comprendes, sin duda, a qué me estoy refiriendo y que no soy capaz de exponer claramente. Solamente dejQ.Jraslucir mis sentimientos, porque de sus virtudes ni siquiera empiezo a hablar, sabiendo que, aunque tuviera facilidad de palabra y elegancia de exposición .Junto con una envidiable mern.oria, me sería imposible tratar detalladamente su actividad intachable. Sólo, como he dicho, dejo trasparentar mi pena y cuán grande es. ¡Oh, vida ésta, que vale más llorar que abrazar, odiar que amar! Pas~ lo bueno, viene lo malo y todos vamos pasando sin interrumpir la marcha. Sin embargo, nosotros no sé por qué enajenación mental creemos que vamos a quedarnos, pero el tiempo pasa sin que nos demos cuenta y la muerte nos va acercando al más allá y la esperanza nos hace soñar con los goces de esta vida. ¡ Felices aquellos cuya alegría es Dios y su gozo está en la gloria futura, que sufren con Cristo y se humillan en el signo de su cruz, para salvarse en la gloria eterna! Por tanto, .dirijamos hacia El todos nuestros sentimientos, hacia El enderecemos toda devoción, para que El, que padeció por nosotros, consuele a nuestro hombre interior y en nin¿.ún memento ni en ninguna parte nos deje solos. En consecuencia, saca consuelo para tu alma de la medit~ciP.~-- c:I~- _Ia_!i
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ditatione et per te consolentur sorores cetere, simulque dignamini orare 40 ut mihi per orationis uestre presidia dirigat · omnipótentia diuina inter uite presentís naufragia uariaque .discrimina pietatis sue suffragia, quatenus merear uestro interuentu omnipotentis uobiscum potire presentía in eterna uita. Saluto omnes, qui tecum Cristi Domini mancipantur serui1io; teque 45 pre ceteris singulari pietate salutans petó ut, sicut illius circa me boni studii persenseras dilectionem, ita tuum in me conferas sanctum an:iorem. Nihil enim extraneum facis, si me diligis, cuius et qualitatem nosti mentís et quem consortem abes sanguinis. Explicit. Mad.
30 add. Ri5CI•
42 potiri Risco
45 peto Risco: puto l.
46 boni] doni Mad.
XIX DOMNIS ET FILIIS MEIS HOIONI ET EUTROCIE, BRAULIO
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Scio, scio non esse optimum consolatorem qui indigeat consolatorem,· et non relebare luctum alterius quem proprii uincunt gemitus. Sed tamen quia, peccante homine, hec lex mundo data est et ista sententia Dei est ut, quodquod hominum natiuitas in lucem prodticit, mors amara succidat, .necesse est ut tam mihi quam uobis hoc ad solacium occurrat, scilicet quia in funere Hugnanis nostri nec primi ista nec nouissimi sustinemus. Sed et ut aliquid de altioribus et nielioribus rebus ad memoriam reducamus, spes omrtium credentium Cristus excedentes a ninndo dormientes uocat, non mortuos, dicens 'Lazarus amicus noster rlormit'. Sed et sanctus Apostolus non uult nos contristari de dormientibus. Ac per hoc, si fides nostra hoc habet, quía omnes credentes in Cristo secundum uocem euangelicam non morientur in eternum, fidi simus quia nec ille mortuus est nec nos moriemur. Quoniam ipse Dominus in iussu et in uóce arcangeli et in tuba Dei descendet de celo et mortui qui in eo sunt resurgent. Spes ergo nos resurrectionis animet, quoniam quos hic amittimus, illic reuidebimus; tantum est ut in eo bene credamus, preceptis scilic'et eius parentes, aput quem est summa uirtutis, suscitare facilius mortuos quam nobis somno cieditos. Ecce ista dicimus, et tamen affectu nescio quo in Iacrimis retraimw·, et credulam mentem desiderii frangit affectus. Heu, miserabilis humana condicio et sine Cristo uanum omne quod uiuimus! O mors, que coniunctos diuidis, et amicitia sociatos dura et crudelis dissocias !
XIX. 2 consolatore alter., edd. 5 quotquot edd. 6 succidat] occidat Risco 13 uocem] fidem Mad. 11 fidi simus] fide scimus Risco 15 descendet Risco: -dit L 23 disso-
XIX. 2-3 cf. Hier., ep. 39,2,1 11 7-8 cf. Cypr., ep. ad Turasium (CSEL III, 3 p. 281) 11 9-10 cf. Hier., ep. 60,2,1 et Cypr., ep. ad Turasium (CSEl. 111, 3 p. 279) J! 10-11 lo. l J ,11 i 1 1t cf. Hier., ep. 3,3,2 ( 1 Thes. 4,12) 11 13 cf. lo. 11,26 11 14-16 1 Thes. 4,15 1! !7 Hier., ep. 75,1,3 11 20.26 cf. Hier., ep. 60,2,2;
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Sagractas Escrituras y por ti sean consoladas las demás hermanas; al mis· tiempo rezad de modo que por vuestras oraciones Dios omnipotente me envíe· el auxilio de Gu bondad en medio de los peligros y calamidades ·1e esta vida, para que por vuestra mediación pueda gozar con vosotras de la presencia de Dios en la vida eterna. ·· Salud:o a torlas Jas qúe contigo están consagradas al servicio de Cristo nuestro Señor y a ti, saludándote con especial afecto, antes que a las otras te pido que así > y «El hierro se aguza con el hierro y el hombre alegra el semblante de su amigo>>. Ahora, en cambie, la orden de vuestra majestad me arranca parte de mi vida y ya a mi edad no sé qué hacer. Estoy perdiendo la vista de mis ojos; mi capacidad es poco firme, los- conocimientos me abandonan y por eso te pido que no lo separes de mí, en cuyo caso ¡ que no seas tú separado del reino de Dios y que tu hijo llegue a ocupar tu reino! Porque en realidad, para hablarte lealmente, ignoro qué utilidad puede tener allí; sin embargo su ausencia en ésta, vuestra ciudad, provocará muchas dificultades porque, como he dicho, yo ya no valgo nada; él, en cam· bio. vale para todo, para hacer lectura en público, para dar cumplimiento a vuestras órdenes y para remediar muchas cosas. A ti, piadosísimo príncipe, todo 1e Jo confleso. Qne Aqnel que penetra con su mirada los secretos y los arcanos y sop¡::sa cuidadosamente nuestras necesidades, inspire vuestro ánimo de modo que arregléis una iglesia sin dejar otra en el abandono.
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XXXII DO.MINUS SANCTO AC UENERABIU PATRI HRAULIO!'i[I EPISCOPO
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Suggessionem eloquentie uestre uerbis florentissimis adomatam cunctisque eufoniis uerborum succintam, quam ad nostram clementiam. tua curauit sanctitas transmittendam, suscepimus. In qua per lucubrationum tuorum uerborum studium nobis datur intellig1 nulla uos intellectus necessitate conpressos, nullaque indigentia sapientie exiguos aput uos Eugenium arcediaconum retineri. Quod a nostra gloria expetitis fusis precibus, inmutato proposito, t.um uobis potius relaxari, etenim uestra sanctitas sta nec inmerito crediderit prouenire, quod nostre serenitatis animus ardenter eum ad hunc honorem nititur prouocare. Nam Deus omnipotens, cuius nutu uniuersa deseruiunt, ubi uult ispirat donec suam bonam uolumtatem impleat, ut ad immolandum sacrificium suo creatori placiturus accedat. Nam preminens Domini pietas hos iam presciuit quos etiam in melius predestinare desiderat. Adeo, si ista in Dei uolumtate ut confi.dimus persistunt, alia nos quam quod ipsi conplacet facere non debemus. Nec enim sub hac uestra postulatione, nostra est pretermittenda iustitia. quod ipse bine extiterit oriundus, ubi nWlC eum consecrandum speculatorem obtamus. Ergo quia nostre parti procul dubio patet iustitia, nostre deuotioni que pr•)missa sunt non fraudabitur, que Cristo sunt pladtura. Hoc nempe ingrate uestra beatitudo recipere non debet. Nam maximum exinde ante Dominum consequi poterit premium, dum speculatorem enm Deo relaxaueris immolandum tuaque sublimior aput diuinam effici poterit laudatio, si ex tuis doctrinis sancta catholica prefulserit eclesia. · Ergo, beatissime uir, quia aliut quam quod Deo est placitum non credas me posse facturum, necesse est ut iuxta nostra adortationem. hunc Eugenium arcediaconem nostre cedas eclesie sacerdotem.
XXXII. 2 Suggesttonem edd. 3 Epístola post uerbum succintam interrumpitur (75 ra,); sequitur (79ra 18 ); quod sic ad marg., qui est inter col. a et b fol. 75r. adnotatur: Hic minus abet per errantia scriptoris, sed in quinta folia pergameni, ubi signam inueneris, recte legebis. 4 lucubrationem Risco 5 studio Risco 9 relaxari. Etenim edd. SimilituLlo hec signe 0 12 inspirat Risco, spirat Mad. 14 hos iam Risco: hostiam L 16 aliud edd. 18 eum om. Risco 21 fraudabuntur edd. 24 addidi. 28 add. Risco~ ma L 11 adhort- Risco: adornationem L 29 Archtdiaconum Risco
XXXII. 11-12 Sap. 19,6 1j 12 lo. 3,8 11 14 Rom. 8,291. 134
XXXII AL OBISPO BRAULIO PADRE SANTO Y VENERABLE, EL REY He ;recibido, adornada con las brillantes palabras de tu elocuencia y hermoseada con: -sonoridad rotunda de tus frases, la carta de súplica que tu santidad hizo enviar a nuestra Clemencia. En ella, por el esmero de tus trabajadas palabras se nos da a entender que, sin padecer el menor fallo de inteligencia ni escaso de buen sentido, retienes junto a ti al arcediano Eugenio. Respecto a la petición, que con toda clase de encarecimientos pero tratando de cambiar mi plan hacéis a nuestra Gloria, de que os lo deje, crea vuestra santidad realmente que no sin razón nuestro ánimo serenísimo desea ardientemente elevarlo a este honor. Porque Dios omnipotente, a cuya voluntad sirve toda la creación, sopla donde quiere para hacer cumplir su voluntad de que acceda a ofrecer el sacrificio a su Creador el que haya de agradarle. Porque la preeminente bondad del Señor conoce ya de antemano a aquellos que quiere ·predestinar a más alto puesto. Por tanto, si ésta es, según creemos, la volunta~ de Dios, no debemos hacer más que lo que a El agrada. En efecto, por consideración a vuestra petición no puede ser pa~ sada por aito nuestra justa decisión de quererlo consagrar obispo de aquí, de donde es originario. Por consiguiente, como la razón está de nuestra parte sin duda alguna, no será sustraído a nuestra Bondad lo que hemos esperado largo tiempo y que será grato a Cristo. Esto no debe vuestra beatitud tomarlo a mal. En efecto, podrás conseguir un premio grandísimo ante el Señor, si lo dejas para consagrarlo obispo a Dios y tu consideración se hará más alta ante El, si por tu ciencia resplandece la santa Iglesia católica. En consecuenda, santo varón, romo. no vas a creer que yo puedo hacer otra cosa que lo que es grato a Dios, es necesario que de acuerdo con nuestra invitación cedas para obispo de esta iglesia al arcediano Eugenio.
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XXXIII
SUGGERENDUM GWRIOSO DOMINO NOSTRO CHINTASUINDO REGI, BRAULIO SERUUS INUTILIS SANCTORUM DEl ET lJESTER Etsi disru.pto potius quam scisso societatis uinculo, quo cum seru.o 5 tuo Eugenio arcediacono in Domino conectebar, tamen eum ad uestram, ut iussio glorie uestre abuit, misimus presentiam non sine spe pietatis uestre, qua soliti estis et miseros respicere et adflictis subuenire, scilicet ut restituatis eum pairono uestro sancto Uincentio in eo quo usque fuit officio. Ceterum, si supeme dispositionis prouidentia cor clementie 10 vestre nostra prece auertit, cedat necesse est quod mortalis uolumtas. e1q)etit adque, dum glorie uestre ordinatio suppleta fuerit, >, y en otro pasaje el profeta: , y en un tercero: tú ·me presentas. Con toda lealtad te digo esto a ti, a quien abrazo en los miembros de Cristo y en Cristo por la gracia de Cristo. Por lo demás nuestra conducta, no la debemos descubrir a aquellos, de quienes se dice: «El óleo del pecador jamás ungirá mi cabeza», a quienes incluso ese mismo servilismo del óleo les fallará al fin, como a las vírgenes necias y fatuas. Porque, ¿qué utilidad tiene descubrir la conciencia a aquel de quien no será posible recibir el perdón de los pecados? En consecuencia, debemos Confesar nuestros pecados a aquellos, por cuyas oraciones somos ayudados y a quienes damos ejemplo de vida. «Me corregirá y reprenderá» se dice «el justo con c.ompasión». Y de éstos se dice: «Confesaos mutuamente vuestros pecados y rezad unos ¡x)r otros». Pero como sería enojoso y largo exponerte mi mala conducta y contártela punto por punto, básteme con descubrir a tu augusta persona que no soy como me juzgas,_ pero te suplico reces a Dios para que me haga tal corno me crees. Pero, si yo alabándote hago lo que intento prohibirte, tal vez vas a decir: ¿Por qué tú haces lo que me prohibes? Pero es que yo debo servir a mis intereses devolviéndote mi deuda, porque el Apóstol nos enseña que devolvamos lo que debernos a todos y a nadie debamos nada. Sin duda no me engaño en la apreciación de lo que en mí hay, pero me abstengo de decir Cómo me parece que tú eres por respeto a ti, respeto que ojalá hubieras guardado tú hablando menos al alabarme. Voy a alabar tu persona, pero -en el Señor, en quien debemos alabar a los justos, por lo que el salmista decía: «Bien está a los rectos la alabanza» y «Mi alma se gloriará en el Señor»,-dé quien es y de quien proviene todo bien, a quien damos además las gracias por vuestro esfuerzo por la perfección. Así pues, cuanto más leal es la disposición de aromo con que sé hablas respecto de mí, tanto más me parece que quedo deudor tuyo y por eso escucha lo que estoy deseando decirte. ¡Feliz tú, que despreciando las cosas de este mundo, has preferido los ocios santos! Comprendo, admiro gozoso, amo y abrazo tu ardor y disposición de alma, tu fortaleza y la blancura de tu luz resplandeciente por el Espíritu Santo y con sed insaciable deseo que tengan eficacia ante Dios por mis maldades y pecados. ¡ Feliz desierto y vasta soledad esa que, poco ha solamente cubil de bestias salvajes, está ahora cuajado de cenobios de monjes reurJdo~ por ti, que cantan las alabanzas de Dios, desterrados del mundo, ciudadanos de Dios! ¡Babilonia de cautivos, Jerusalén de predestinados! En Cristo, pues, te ensalzo a ti y a los tuyos, cuyo entusiasmo em-
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conio, quorum studium; hornat erernum, non ipsam eremum quam doc55 tissimi prestantissimique uirorum Iheronimus et Eucerius olim iam miris uerborum sententiarumue uenustarunt floribus. Et, ut in breui multa conpíngam et quasi in paruá tabella mundum depingcre uelim, quia in longum non est mici temporis spatium nec est ingenii studiurri nec lingue eloquium, gentilis poetc conticuum in te uertam preconium 60 et hoc solum dicam '0 decus lspanie sacrum !' N e, queso, me aut assentatorum uitium aut adolatoris reamini peragere officium sed, cuius minísterii est uera predicare, de uobis quod sentio non debeo reticere. Tantum est ut perseuerantia uestra usque in finem per patientiam perducatur, in qua animas nostras possidere iubemur, quía, qui per65 seucraberlt usque ín finem, · hic saluus erit. Namque finis precepti est caritas, caritas quippe secundum Ioannem Deus est, Deus uero Cristus, proptcr qucm onmia et nicil ob aliut agere debeamus; in quo Psalmista omni consummationi uidit finem, unde et quidam tituli psalmorum in finem prescribuntur. Ad hunc peruenientes non erit ultra quo 70 cursus fidelium diragatur, ipso dicente 'Uenite ad me orones qui laboratis et honerati estis, et ego uos requiescere faciam'. Studium uest1um. ut cepit, ardeat et malares in Domino flammas mittat, quia, nisi profecerit, deficiet, et uelut in rapidissimo amnium cursu scaua consistens, nisi ad superiora progrediatur, ad inferiora delabitur. 75 Cauete autem dudum illius patrie uenenatum Priscilliani dogma, qua et Dictinum et multos alios, ipsum quoque sanctum Orosium inuenimus fuis'>e infectum, quamuis postea a sancto Agustino correctum. Nam ita etiam peruersitatis sue studio sacras deprauauit scripturas, ut anhuc ex ipsius corruptoris neuo deprauatas inueniamus multas. 80 Ncc uos uanitas cenodoxie aut aura popularis in aliam partero flectat, quia oc est postremo aput adhletas Dei certamine, in quo est et nouissimum discrimen. Iam, ne ultra modum epistolarem protraham sermonem, ad questiones quas proposuisti accedam et ea que inde legerim, ut a te spe85 ratum est, maiorum nostrorum sententia, ut occurrit, depromam; quedam uero breuitatis causa meo sermone conpingam. Ita enim petitionis tue sumis exordium. 'Primum' inquis, 'flagito ut quedam, que parens sanctimonie et particeps glorie uestre, beatis· simus eruditissimusque uirorum pretermisit enodare Hieronimus, ut ex 9() Iectione priscorum patrum mihi breui et aperta significes pagella'. Quod ~4 von ipsam ertcmum om. Risco 55 iam om. Mad. 59 conticuum] antiquum edd. 00 hoc] hace Risco 61 adulatods Risco 66 caritas alter. om. Mad. 68 omnis c.onsumma· tionis edd. 70 dirigatur edd. 72 cepit = coep73 scapha edd. (non add. Risco) 76 qua] qno .~ád. /1 Dictiniurn Mad. 79 inuenimus Mad. 81 postremum... certamen edd,
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laude heremi ( CSEL 30) 11 56-57 Hier., ep. 00,7,3; 73,5,1; 123,13,1; 147,12,1 11 60 cf. Virg., Aen. 11,508 11 64 Le. 21,19 11 64-65 Mt. 10,22; 24,13 11 65-66 Tím. 1,5 1! 66 1 lo. 4,16 1: 67 Hebr. 2,10 1! 68 Ps. 118,96 ¡ 1 70-71 Mt. 11,28 11 7677 H1er., .ep. 131,2,1-3; August., ep. 169,4,13 ( CSEL 44, p. 621) 11 83 cf. Hier.,
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bellece el desierto, no el desierto que los más eruditos y eminentes de entre los hombres, Jerónimo y Euquerio, en otro tiempo ya embellecieron con las maravillosas flores de sus paiabras y pensamientos. Y para resumir brevemente muchas cosas· y cual si quisiera representar en un pequeño cuadro al mundo, como no dispongo de tiempo que me sobre, ni tengo w1a inteligencia cultivada; ni· palabra elocuente, voy a aplicarte un breve elogio de un poeta pagano y sólo te diré esto: «¡Oh honor augusto de España!» Por favor, no vayas a creer que cometo el pecado de la. lisonja y que hago el papel de un adulador; por el contrario, yo, que tengo por obligación predicar la verdad, no debo callar lo que pienso de ti. Basta con que vuestra perseverancia se mantenga hasta el fin mediante la paciencia, con que se nos manda ser dueños de nuestros corazones, porque el que perseverare hasta el fin, ése se salvará. Pues el fin de la ley es el amor, y Dios, según San Juan, es amor; pero Dios es Cristo, por quien debemos hacerlo todo y nada por otra causa, en quien el salmista vio el término de toda perfección ; de ahí que algunos títulos de los salmos comienzan con !as palabras In finem. llegando a El, ya no habrá una meta más allá, a donde pu"" dan encaminarse los fieles, según sus mismas palabras: «Venid a mí todos los que estáis fatigados y cargados y yo os haré descansar». Vuestro ardor debe continuar encendido, como empezó y emitir destellos más brillantes en el Señor, porque si no avanza desfallecerá y como una barca que se encuentra en medio de la corriente de un río, si no avanza contra corriente, se lanza río abajo. De todos modos, tened cuidado con la doctrina em¡ponzoñada de Prisciliano, floreciente no hace mucho por esa región, con la que sabemos fueron corrompidos Dictinio y otros muchos, incluso el gran Orosio, aun::Jue después San Agustín lo llevó al buen camino. Porque con el fanatismo de sus errores corrompió el texto de las Sagradas Escrituras de tal modo que aún ahora podemos encontrar muchas marcadas con el sello del falsificador. Y no os lleve al error el humo de la vanagloria y el favor popular, pues los atletas de Dios corren este riesgo en el combate definitivo; en él está también la última prueba. Ya, para no alargar mis palabras más allá de los límites de una carta, abordaré las cuestiones que me has propuesto y te iré exponiendo de acuerdo con el modo de pensar de nuestros mayores lo que he leído en relación con ellas, como me has pedido y según se me vaya ocurriendo; algunos puntos, sin embargo, por razón de brevedad, los trataré con mis propias palabras. Así, pues, comienzas tu petición: «Te pido en primer lugar -dices- que te dignes explicarme en una breve y sencilla carta, de acuerdo con los textos de los antiguos padres, algunas cuestiones, que el padre de la santidad y partícipe de vuestra gloria, el más santo y sabio de entre los hombres, Jerónimo, dejó sin resolver». Todo lo cual ignoro por qué lo has dicho, por-
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qu.ur dixeris ignoro, quum ille sanctissimus uir manifesta mihi expositionem et satis idon.eam reddiderit rationem. In libro nimirum Questionum hebraicarum talem hinc aperuit solutionem: «Famosa questio et disputatione eclesiarum omnium uentilata, quod iuxta diligentem supputationem quattuordecim annos post diluuium Mathusalam uixisse referatur. Etenim quum esset Mathusalam annorum CLXUII genuit Lamech; rursum Lamech quum esset annorum CLXXXUHI genuit Noe, et fiunt simul usque ad diem natiuitatis Noe anni uitae Mathusalae CCCLU. Sescentesimo autem anno uite Noe diluuium factum est ac per hoc, abita supputatione per partes, nongentesimo quinquagesimo quinto anno Mathusalae diluuium fuisse conuincitur. Quum autem supra nongentis sexaginta nouem annis uixisse diciiur, nulli dubium est Xliii eum annos uixisse post diluuium. Et quomodo uenun est quod octo tantum anime in arca salue facte sunt?» Hucusque prepositio, ah hinc solutio. ,. Restat ergo ut quomodo in plerisque ita et in oc sit error in numero, siquidem in Hebreis et in Samaritanorum libris ita scriptum repperi 'Et uixit Mathusalam centum octuginta septem annis, et genuit Lamech; ct uixit Mathusalam postquam genuit Lamech DCCLXXXII annos, et genuit filias et filias; et fuerunt omnes dies Mathusale anni nongenti sexaginta et nouem, et mortuus est, et uixit Lamech CLXXXII annos, et genuit Noe'. A die ergo natiuitatis Mathusale usque ad diem ortus Noe anni sunt CCCLXUIIII : his adde seseentos annos Noe, quia in sescentesimo uite eíus anno dillubium facturo est, adque ita fit ut nongentesimo sexagesimo nono anno uite sue Mathusalam mortuus sit eo anno quo cepit esse dillubium». Cuius rei ueritatem ut certius credas, ad ipsius sanctissimi uiron1m recurrere translationem et nullam habebis dubitationem. Nam et sanctus Agustinus in libro De ciuitate Dei quinto decimo, dum annorum dissonantiam inter Hebreos codices et Sebtuaginta euentilat translationcm ex Hebreo, adfirmans in finem disputationis sue de eadem re ínter cetera sic dicit: «Ümne~ anni uite Mathusalam nongenti sexaginta nobem computantur». Et post modicum: «Detractis nongentis quinquaginta quinque ab ortu[s] Mathusale usque ad dilluuiu.m remanent Xliii, quibus uixisse creditur post dilluuium. Propter quod eum nonnulli, etsi non in terra. ubi omnem naturam, quam uiuere in aquis natura non sinit, constat fuisse deletam, cum patre suo qui translatus fuerat aliquantum fuisse adque ibi, donec dz1luuiwn preterisset, uixisse arbitrantur, nolentes derogare fidem codicibus -id est translationis Septuaginta-, quos in auctoritatem celebriorem suscepit eclesia, et crecientes Iudeo-
89 pratermittit Mad. 91 ad.í. Risco 11 mihi] ibi Mad. 91 nimirum om. Risco 102 annis (i ahr.z;a) L 106 numero. SiqUidem edd. 113 ortus] nativitatis Risco ¡¡ sunt om. M(ld. 118 recurre edrl. 12'i del. Risco 126 creditur] dicitur Mad. 129 dilluuium Risco: doll- L
ep. 54,18,3 11 94-104 et 106-116 Hier., Hebraicae Quaest. in Genesin 5,25-27 ( Corpus Christ. 72, p. 8 ss.) 1 ! 123-137 et 139-156 August., De ciuitate Dei 15,11 et
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que ese mismo santo varón, ·a. mi entender, ha hecho una exposición clara y i.ma explicaCión adecuada. En· efecto, en su libro Quaestiones hebraicae dio esta soitición a tu pregunta : «Cuestión muy tratada y debatida por todas ias iglesias, la de que según un cálculo preciso se asegura que Matusalén vivió catorce años después ael diluvio; En efecto, cuando Matusalén tenía ciento sesenta y siete años, engendró a Lamec; a su vez Lamec ·engendró a Noé a la edad de ciento ochenta y ocho años, y van en total, hasta el día del nacimiento de Noé, trescientos cincuenta y cinco años de la vida de Matusalén. Por otra parte, el diluvio se· produjo cuando Noé tenía seiscientos años, y por tanto, echando cuentas por partes, llegamos al convencimiento de que el diluvio fue el año novecientos cincuenta y cinco de Matusalén. Pero, como se dice que vivió más de novecientos sesenta y nueve años, nadie duda que vivió catorce años después del diluvio. Y ¿cómo es verdad que sólo ocho personas se salvaron en el arca?» Hasta aquí la proposición, en adelante la solución. «Queda, pues, que lo mismo que en otros pasajes haya también en éste un error de números, ya que en los libros hebreos y. en los de los samaritanos he hallado que el. texto es éste: 'Y vivió Matusalén ciento ochenta y siete años y engendró a Lamec y tras engendrar a Lamec vivió Matusalén setecientos ochenta y dos años y fue padre de hijos e hijas y la "ida de Matusalén fue de novecientos sesenta y nueve años y murió; Lamec tema ciento ochenta y dos años cuando engendró a Noé'. Por consiguiente, desde el día. del nacimiento de Matusalén hasta el día del nacimiento de Noé van trescientos sesenta y nueve años; añade a esta cifra seiscientos años de Noé, porque el diluvio se desencadenó el año seiscientos de su vida y así resulta que Matusalén murió a los novecientos sesenta y nueve años, el mismo año en que empezó el diluvio.» Para que tengas más seguridad- de la verdad de lo dicho, consulta la traducción de este mismo santo varón y se acabarán tus. dudas. Pero también San Agustín en el libro decimoquinto De ciuitate Dei, al pasar por la criba de la crítica la discordancia de años entre los códices hebreos y la traducción del hebreo de los Setenta, al final de su exégesis sobre esta misma cuestión entre otras cosas, dice categóricamente así: «Todos los años de la vida de Matusalén suman novecientos sesenta y nueve». Y un poco más adelante dice: «Restando novecientos cincuenta y cinco desde el nacimiento de Matusalén hasta el diluvio, quedan catorce, que se supone vivió después del diluvio. Por eso algunos creen que estuvo durante algún tiempo, aunque no en la tierra, donde consta ·que pereció todo ser viviente al que su naturaleza no le permitiera vivir en las aguas, sí con su padre, que había sido trasladado al otro mundo, y que con él vivio hasta que pasó el diluvio, porque no quieren desacreditar a los códices -natur"lmente a los de la traducción de los Setenta-, que la Iglesia ha considerado de mayor autoridad, y porque creen que son los de los judíos y
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n1m potius quam istos non abere quod uerwn est. Non enim admittunt, quod magis hic esse potuerit error interpretum, quam m ea.Iingua esse falsnm, unde m nostram per Grecam scribtura[m] ibsa tr¡mslata 'est». Et post aliqua: «Hanc opmionem uel suspicionem accipi.at quisque, ut putaberit; certum est tamen non uixisse Matusalam post diluuium, sed eodem anno fuisse defunctum». Deinde, mterpositis quorumdam disputationibus atque rite delectis «Credibilius» inquid, «quis dixerit, cum primum de biblioteca Tholomei describí ista preceperint, tune aliquid tale fieri potuisse in codice uno sed primitus mde describto, unde iam latius enumaret, ubi potuit quidem accedere etiam scribtoris error; sed hoc in illa questione de uita Matusale non absurdum est suspicari». Deinde, non longe: «!taque» ayt, «illa diuersitas numerorum aliter se habentium m codicibus grecis et latinis, aliter in ebreis», et subiungit: «scriptoris tribuatur errori, qui de biblioteca supradicti regis codicem discribendum primus accepit». Deinde, post aliqua: «Sed quomodolibet stut accipiatur, siue cre-datur ita esse factum, siue non credatur, siue postremo , siue non ita sit, recte fieri nullo modo dubitauerim ut, quum diuersum aliquid in utrisque codicibus inuenitur, quandoquidem ad fidem rerum gestan1m utrumque esse non potest uerum, ei lingua potius credatur, unde est m aliarn per interpretes facta translatio. Nam m quibusdam etiam codicibus, grecis tribus et uno latino et uno etiam siro inter se consentientibus inuentus est Mathusalam sex annis ante dilubium fuisse defunctus». Hec sanctus Agustinus per interualla ita, ut posuimus, sicut et beatus Hieronimus narrat. Nec nobis aliter licet sentire quam hii eruditissimi uirorum sensere. Porro Eucerius, uir egregie scientie et precipue intellegentie, uerbis sententiisque adfatim copiosus et copiose disertus, hanc ínter suas reliquas questionem hoc modo describit: «Quid est quod in annis Mathusale quattuordecim anni per diligentem supputationem ultra dillubium repreenduntur, qmun octo tantum anime in arca fuisse referantur?» Responsio. «Error in numero est, quippe quurn in Hebreorum libris ita legatur, ut ante dillubii tempus hic quattuordecim annorum numerus expleatur». Hii tres ad confirmationem solutionis huius sufficere nobis uisi sunt, quum scribtum sit 'In ore duorum uel trium testium stabit omne uerbum'. Nam multi bine multa scribserunt. Nostris uero temporibus inconparauilis scientie uir Ysidorus Spalensis episcopus in libro bthimologiarum, dum uius norninis uult originem absolbere, ita fassus est: «Matusalam interpretatur mortuus est. Euidens ethimologia nominis.
134 del. Mad. 1311 deletis Risco 140 preceperint] coeperunt Mad. 149 add. Mad. 152 uerum litad.: utrum L ! 1 add. Risco 164 repreenduntur] reperiuntur Risco, deprehenduntur
13 (CSEL 40,2, p. 78 ss.) 11 162-167 Eucher., Instructiones ad Salonium 1,17 (CSEL 31, p. 71) 11 169-170 Deut. 17,6 11173-177 Isid., Etym. 7,6,13 JI 181-217
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no éstos los que no contienen la . verdad. No admiten, en efecto, que pudo haber aquj un error de los traduCtores, sino más bien que hubo fallo en aquella lengua de la que la Escritura fue ·traducida a la nuestra a través del griego». Y poco después añade: «Esta inter¡:retación o conjetura júzg:uela cada ~nq_,._. ~omo le parezca; lo cierto es, sin embargo, que Matusalén no vivió después del diluvio, sino que murió ese mismo año.» Después. tras intercalar las exégesis de algunos y seleccionarlas convenientemente dice: «Alguno podría proponer como más verosírilil que, cuando empezaron a ser copiadas estas obras de la biblioteca de Tolomeo, en un códice, precisamente el primero que se copió, pudo introducirse el error de un copista, que luego se difundiría ampliamente; de todos modos, no es absurdo sospechar esto en la cuestión sobre la vida de Matusalén.» No mucho después sigue: «Así pues, aquella diferencia de números, que aparecen en Jos códices latinos y griegos de un modo y en los hebreos de otro», y añade: «debe atribuirse a un error del copista, que primero recibió para copiar el códice de la biblioteca del citado rey». Después, tras algunas cosas dice: «Pero como quiera que esto sea interpretado, bien se crea que sucedió así, bien no se crea, en fin, sea así o no sea así, a mí no me cabe duda de que lo correcto es, cuando se presentan variantes en dos códices, puesto que no pueden ser verdad las dos versiones de los hechos, fiarse más bien de la lengua que fue vertida a otra por los traductores. Ciertamente en algunos códices, tres griegos, uno latino y también uno sirio que concuerdan entre sí, se halla escrito que Matusalén murió seis años antes del diluvio». Estas son las cosas que San Agustín dice a intervalos, como hemos expuesto, lo mismo que San Jerónimo. Y nosotros no podemos pensar de modo distinto que estos hombres tan sabios. Finalmente Euquerio, hombre de- ciencia extraordinaria y de inteligencia no comím, muy rico en palabras y pensamientos y muy elocuente, desarrolla entre las otras esta cuestión en los siguientes términos: «¿Cómo se explica que en la vida de Matusalén aparecen mediante un cálculo preciso catorce at'íos después del diluvio, si está escrito que sólo hubo ocho personas en el arca?» Respuesta: «Existe error en el número, porque en los libros de los hebreos se lee un texto, según el cual· el número de catorce años se cumple antes del diluvio.» Estos tres me parece que son suficientes para confirmar esta solución, ya que está escrito: «Todo testimonio se basará en la palabra de dos o tres testigos». Pero ha habido muchos, que han escrito mucho sobre esta cuestión. En nuestro tieiiJ!Ilo el obispo de Sevilla, Isidoro, hombre de incomparable ciencia, en su libro de las Etimologías al tratar de resolver el origen de este nombre dice así: «Matusalén significa mortuus est. La
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Quidam enim eum cum patre translatum fuisse et dilluuiu.m preterlsse 175 putaberunt. Ob hoc signanter transfertur mortuus est, ut ostenderetur non uixisse euro. post dilluuium, s~d in eodern cataclismo fuisse defuncturn. Solí enim octo homines in arca dilluuium euasetunt». Ceterurn de Smaele quod sciscitarls, quod iubenern eum ceruicibus mater uectarlt, sanctus Iheronimus in prefato Que.stionum libro ita 180 ponit: «''Et uidit Sarra filium Agar Egiptie, quern peperit Abrae, ludentero'; quod sequitur 'cum Isaac filio suo' non abet in ebreo. Dupliciter itaque hoc ab Ebreis exponitur, siue quod idola luto fecerit iuxta illut quod alibi scripturn est 'Sedit populus comedere et uibere et surrexe185 runt ludere', siue quod aduersum Isaac, quasi maioris etatis, ioco sibi et ludo primogenita uindicaret. Quod quidem Sarra audiens non tulit. Et hoc ex ipsius adprobatur sermone dicentis 'Eice ancillam hanc cum filio 5.UO. Non enim heres erit filius ancille cum filio meo Isaac. Et surnsit panc~ et utrem aque et dedit Agar, ponens super hUIIlerum eius, et par190 uu1um et dimisit eam'. Quando Isaac natus est, tredecim annorum erat Smael. Et post ablactationem eius üt et cum matre expellitur e domo. Inter Ebreos autem uaria opinio est, asserentibus alüs quinto anno ablactationis tempus statutum et alüs duodecimum annum uindicantibus. Nos igitur ut breuiorern eligamus etatem, post decem et octo annos 195 Sniael sup:potauimus eiectum esse cum matre et non conuenire iam adulescentem matris sedisse ceruicibus. Uerum est igitur illut Ebreorum lingue idioma, quod ornnis filius ad conparationern parenturn infans uocetur et paruulus. Nec mirernur habere barbaram linguam proprietates suas, cum hodieque Rome omnes filü uocentur infantes. Po200 suit ergo Abraarn panes et utrem super humerum Agar et, hoc facto, dedit puerum matri, hoc est in manus eius tradidit, conmendauit et ita emisit e domo. Quod autem sequitur 'Et proiecit puerum subter habietem et abiens sedit contra longe, quasi iactu sagitte, dixit enim: Non uidebo mortem 205 panmli mei; et sedit contra eum', et statim iungitur 'Et clamabrit puer et flebit et audibit Deus uocem pueri de loco ubi erat. Et dixit angclus Dei ad Agar de celo' et reliqua nullum mobeat. In ebreo enim post hoc quod scriptum est 'Non uidebo mortem pueri mei' ita legitur, quod ipsa Agar sederit contra puerum et lebaberit uocem suam et fleberit et 210 exaudierit Deus uocem paruuli. Flente enim matre mortem fili miserabiliter prestolante, Deus exaudibit puerum:, de quo pollicitus fuerat Abrae dicens 'Sed et filium ancille tue in gentem magnam faciam'. Alioquin et ipsa mater non suam mortero set filii deplorabat. Pepercit igitur ei Deus, pro quo fuderat et tletus. Denique in conse· 215 quentibus dicitur 'Surge et talle puerum et tene manum eius'. Ex quo Mad. 179 uectauerit edd. 183 ludo Risco 191 üt et] iste Mad., ludit et Risco baram] hebraeam Risco 205 clamabit... flebit... audibit -uit 210 add. Risco
=
r·
19il bar· 216 eum
Hier.. Hebraicae Quaest. in Gen. 21,9-18 (Corpus Chri~t. 72, 24 ss.) (181-182 Gen. 21,9 ·¡¡ 184-185 Ex., 32,6 11 187-190 Gen., 21,10 et 14 1 20.3-215 cf. Gen.,
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etimologí~o
del nombre es evidente. Algunos creyeron, en efecto, que se retiró con su padre y sobrevivió al. diluvio. Por eso expresamente se traduce mortuus .est, para indicar que no vivió después del diluvio, sino que murió en el mismo cataclismo. Pues solamente ocho hombres se salvaron del diluvio en el arca.» Por otra p~ü'te~ relación a lo que quieres saber de Ismael, que su madre lo llevó ya mozuelo sobre sus hombros, San Jerónimo en el ya mencionado libro de las Quaestiones dice así: « 'Vio Sara al hijo que Agar la egipcia había dado a Abraham, jugando'; lo que sigue: 'con su hijo Isaac', no está en el texto hebreo. Los hebreos interpretan este texto de dos. - maneras, o bien que hiciera ídolos de barro, según lo que en otro pasaje está escrito: 'Y el pueblo se sentó a comer y beber y después se pusieron a hacer ídolos', o bien que trente a Isaac por su mayor edad, en broma y jugando, exigiera sus derechos de primogenitura. Sara por su parte, oyendo esto no pudo soportarlo. Y esto se desprende de sus propias palabras cuando dice: 'Despide a esa esclava y a su hijo, pues no va a heredar el hijo de una esclava con mi hijo, Isaac... Y cogió panes y un odre de agua (Abraham) y se los dio a Agar, poniéndoselos sobre sus hombros y también al niño y la despidió'.. Cuando nació Isaac, Ismael tenía trece años. Y después del destete de aquél, Ismael salió y fue expulsado de casa junto con su madre. Entre los hebreos, sin embargo, existen distintas opiniones, asegurando unos que el tiempo fijado para el destete es a los cinco años y defendiendo otros que es a los doce. Por nuestra parte, aun eligiendo la edad más corta, hemos calculado que Ismael fue expulsado con su madre cuando ya había cumplido los dieciocho años y que no es posible que siendo ya mozuelo fuese llevado a la espalda de su maare. Así pues, es legítima esa partícula• 1dad dt: la lengua de los hebreos de llamar a todo hijo en comparación con sus padres infante y ~g_ueño. Y no debemos extrañarnos de que la lengua extranjera tenga sus particularidades, pues hoy todavía en Roma a todos los hijos se les llama infantes. Puso, pues, Abraham los panes y el odre sobre los hombros de Agar y tras esto dio el niño a la madre, es decir, se lo entregó en la mano, se lo encomendó y así la despidió de casa. Lo que sigue: · 'Y echó al niño bajo un abeto y retirándose fue a sentarse frente a él, lejos romo a un tiro de flecha y dijo: No quiero ver la muerte de mi hijo; y se sentó frente a él', y se añade a continuación: 'Y el niño gritaba y lloraba, y Dios oyó la voz del niño desde donde estaba. Y dijo el ángel de Dios a Agar desde el cielo' y lo demás, a nadie debe extrañar. En el texto hebreo, en efecto, tras el pasaje: 'No quiero ver la muerte de nn hijo', se lee que Agar se sentó frente al niño y levantó su VOZ y lloró y oyé. Dios la voz del niño. Mientras lloraba la madre, pues, y esperaba desolada la muerte de su hijo, Dios escuchó al niño, del que había prome· tido a Abraham, diciéndole: 'Al hijo de tu esclava lo convertiré en un gran pueblo'. Por otra parte la madre no lamentaba su muerte, sino de la de su hijo. Se compadeció, pues, Dios de aquel por quien había derra~nado lágriInas (la madre). Finalmente en las lineas siguientes se dice: 'Levántate, toma
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manifestum est eum qui tenetur non honeri matri fuisse sed comitem. Quod autem manu parentis tenetur, sollicitus monstratur affectus~o. De hac questione fateor me et alios tractatores eclesiastioos legi:;se set, ut est mici memoria facilis ad oblibiscendum, non hoecurrit in quo opere quisque bine tractaberit, nisi hits] qui secundwn Apostolum hoc uoluerunt allegorizare. Plane, ut in conpendio possim dicere, quum Ebreorum autumatio, alii quinque, alii duodecim in ablactatione con¡;utet annos, nos in Maccabeorum libris pro ablactatione tantundem triennium repperimus scribtum. Ita Maccabea fllium ínter cetera adortante 'Fili' inquid, 'miserere mei, que te in uentrem nouem mensibus portabi et triennio lactabi .et perduxi ad hanc etatem'. Igitur, si uhic auctoritati creditur, demtis duobus annis sidecim relincuntur. Set, cum reditur ad diuine scr.ipture seriem, non inuenitur in ebraica ueritate· ut Smael callo gestatus sit matris sue. Quapropter cur ad.summamus laborem, ubi nullam abemus cliffacultatem? Restat ut et de Salomone hoc uobis intimemus, quod uos iscire in scriptis uestris intelleximus; quoniam in quantum datum est nobis, cum litteras uestras legeremus, intelligi, non ignoratis epistolanl¡ sepe dicti uiri beati Ieronimi ad Uitalem presbiterum scriptam, qualia de Salomone ct de Acaz regibus contineat, et que etiam ipse sub testificatione iuramenti audisse se suis temporibus scribat. Qui et in finem epistole sue tirmam certamque sententiam omnipotentiam Dei deuinibit. Set nec ego contra tanti uiri auctoritatem aliut possum sentire, nisi eius uestigia sequi, et humilitate cristiana a m.aiorum nostrorum semitis non deuiare, Dabit dicente 'Neque ambulabi in magnis neque in mirabilibus super me'. Super se namque in mirabilibus adtollitur qui a niciorum lineis excedens in is, que ultra uires suas abet, uidere conatur. Unde et sequítur: 'Si non humilíter sentiebam, set exaltabi ani· mam meam sicut ablactatus super matrem suam; ita retribues in ani· mam meam'. Hac per hoc oondocibile est nobis humilla sentire, Apos· tolo dicente, 'Non alta sapientes, set humilibus consentientes', et ablactationem cum Isaac percipere, ut fortiori cibo possimus participare, quam cum Smaele ancille filio utrem cum aqua et non mero portare, et ab eterna repelli ereditate. Hís igitur pro uestra bolumtate digestis, codices, cos uobis a nobis dirigendos mandastis, scriptos duplices non inueni. Alíquos nec singulares repperi; subtractos eos de armario nostro animaduerti inquisition.emque occupatio tulit, set, si Deus uoluerit et uita comes fuerit, est spes eos et inueniend!i et uobis mittendi. En respondí pedestri et peculiari sermone, quia non tam uerbis
om. Ri&cG 220 del. Risco 222 computent edd. 225 uentre edd. 2'1:1 auctoritati Risco: -tate L 231 et om. Risco 233 legeremur Mad. 237 deuinibit] definiuit Mad. 238 Set] 241 in mirabilibus om. Risco 242 habent edd. 11 uidere Mlld.: uideri L 244 Eane Risco meam om. edd. 250 cos = quos 253 et uita comes fuerit om. Mad. 259 compellit Mad. :
21,15-18) 11 225-226, 2 Mach .. 7,27 11 235-236 Hier., ep. 12,2,2-4 i 1 240-241 Ps. 130,1 ! 1 .243-245 Ps. 130,2 11 246 Rom. 12,16 11 246-248 cf. Gen. i1,8 et 14 11
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al niño y tenlo de la mano'. Con ello se pone de manifiesto que aquél, a quien tenía, no fue una carga para la madre, sino su acompañante. En el hecho de tenerlo de la mano la madre, se pone de manifiesto su amor solícitO». En reladón co11 esta cuestión confieso haber leído a otros exégetas de la Escritura, pero como mi memoria es propensa al olvido, no se me oCUITe en qüé obra ha 'tratadO de este asunto cada uno y sólo recuerdo a los que, como el Apóstol, trataron esta cuestión alegóricamente. Pero, para abreviar, aunque los hebreos al contar, unos calculan cinco años en- el destete y otros doce, yo en los Iibl"C"s de los Macabeos he hallado escrito un trienio solamente para el destete. Así la Macabea al animar a su hijo, entre otras cosas le dice: «Hijo, apiádate de mí, que te he llevado nueve meses en mi vientre y te he amamantado durante tres años y te he criado hasta ahora». Así pues, si se da crédito a esta autoridad, suprimiendo dos años quedan dieciséis. Pero, cuando se vuelve al texto de la Sagrada Escritura, no encontramos en el texto hebreo que Ismael haya sido llevado al cuello de su madre. Por wnsiguiente, ¿para qué tomarse trabajo, donde no tenemos ninguna dificultad? Queda por exponeros respecto a Salomón lo que por vuestro escrito he visto que sabéis, porque por lo que he podido deducir al leer vuestra carta no desconocéis el contenido de la carta del ya citado varón Jerónimo al presbítero Vital sobre los reyes Salomón y Acaz y lo que bajo juramento dice haber oído en su tiempo. Al final de su carta definió la omnipotencia de Dios como sabiduría firme y segura. Por mi parte, yo no puedo opinar nada contra la autoridad de un varón tan sabio; por el contrario, debo seguir sus huellas y con cristiana humildad no desviarme del camino trazado por nuestros mayores, según las palabras de David: «No he corrido tras grandezas, ni tras cosas demasiado altas para mí». A alturas superiores a- sus posibilidades se encarama el que, apartándose del camino de sus mayores, intenta indagar en lo que está por encima de sus fuerzas. Por eso mismo sigue diciendo: «Humildes eran mi~ sentimientos y he repritnido mis deseos, como niño destetado ante su madre; por eso me darás la recompensa». Por tanto debemos tener sentimientos humildes según nos dice el Apóstol: «No siendo altivos, sino reba.iándonos a los humildes», y llegar al destete con Isaac para poder recibir un alimento má~ fuerte y no tener que llevar con Is:uael, el hijo de la asclava, el odre de agua, que no de vino, y ser rechazados de la eterna herencia. Te he expuesto estas cuestiones según tus deseos. Respecto a los códices que me pedías te enviara,. no los encuentro re¡petidos ; de algunos ni siquiera he encontrado 1m e.iemplar; he descubierto que se los han llevado de la biblioteca y mis ocupaciones no me han dejado buscarlos, pero, si Dios quiere, y la vida no me falla, tengo esperanzas de encontrarlos v enviártelos. • Ahí tienes mi respuesta en forma sencilla como acostumbro, porque no
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m1are quam debemus sententiis studere, ut et locutio nostta euangelicam simplicitatem teneat et spumas · gentilium eloquiorum refugi.at. lam modus superfluus epistole cogi.t me tacere, set desiderium ·ttiui:n Joqui conpellit. Obtabam autem obuiis manibus ·conplexum tuum accipere, ut mutua conlatione uel disceremus aliqua uel doceremus. Siquidcm non sit hoc omnipotenti Domino, aput quem non est difficile omne uerbum, inpossibilc, uerumtamen egritudini mortalitatis mee cotidie spero finem. Mallero tamen ut, si hoc qua< d > premisi tribuebat l'eus, de allogorizandis questionibus et mistice intellegendis et Ueteris lnstrumenti in Nobi adfirmatione exercitatio nostra esset, quam in .iStorie o;uperficie inquisitio nostra constaret, ut uere abissus abissum in uoce cataractarum inuocaret, quía illut precedit tem;pore, stut dignitate[m]. Hoc enim est pauulum anime cristiane; bis enim anima pascitur quibus delectatur. Nam ingenium tuum admirabilem abeo et serm.onis tui supellectilem infinitam ueementer intueor. Macte uirtute, cuius talia erumpunt ·germina, qualia existent Fructuosi fructuosa frumenta! Set huie tanto bono, cum accedit studium diuinarum scripturarum, presertim in conlatione mutua, in breui emittet palmites et afferet suabissimos botros, ut et proprie nature conferat fmctum et aliis subministret iucunditatis gaudium. Nicil in te mediocre contentus sum, crede amori uera dicenti. Si fieri posset, quidquid aliis ex parte datum et ex parte in cognitione reseratum est, totum in te perfectum atque esse desidero s'l.liiDinum, quia ita conuenit finibus seculontm, ut preparentur ad certamen Anticrlsti uasa electa Cristi. Ne, queso uos ex eo contemtibiles uelle extimari, quod occidentali tenebrosa plaga queritis uos esse depressos; quoniam eo clariores estis, quo uos in calígine esse uidetis, dicente Domino Fariseis, ··s¡ .ceci essetis, non haberetis peccatum'. Et cuncti procul dubio nouimus quia ex eo etiam maculas corporeas liquidius uidemus, quo lumini propinquamus; ~t lumen uerum quod inluminat ·homnem hominem uenientem in hum: mundum, ex occasu suo et non continuo natiuitate resplenduit mundo. Unde et Propheta: 'Populus qui sedebat in tenebris lucero uidit magnam; habitantibus in regione umbre mortis lux orta est eis'. Prouinciam namque quam incolitis et grecam sibi originem defendit, que magistra est litterarum et ingenii, et ex ea ortos fuisse recorda. mir.i eligantissimos et doctissimos uiros, ut aliquos dicam, Orosium presbiterum, Turibium. episcopum, Idatium et Carterium Iaudate s·e-
conpollet L, conpellet Risco 262 impossibile. Verumtamen edd. 263 add. Risco 11 tribueret Mad., tribuat Risco 267 cataract. tuarum add. Risco 268 del. Risco 270 admira276 fructus edd. 277 ccintentus Mad. : contemtus L bile edd. 11 sermonis Risco: -nes L :r:87 nativitate Risco: uanitate L 290 Prouincia edd. 294 superabun(contemplatus Risco)
253 Hier., ep. 125,17).. 11 258-259 cf. Hier., ep. 7,6,3 11 259-260 Hier., ep. 102,2,2; 110,5,1; 110,7,2; 116,3,3 .11 261-262 cf. Le. 1,37 1/ 266-268 cf. Hier., ep. 120, praet., 3 (Ps. 41,R) : 1 270-271 Hier., ep. 58,11,1 1 272-273 Hier., ep. 60,13,1; 58,8,2 ! 1 273-274 Hier., ep. 58,11,2 11 276-279 Hier., ep. 58,11,3 11 277 Hier., ep. 7,2,1 11 283-284 lo. 9,41 11 286-287 lo. 1,9 11 288-289 Is. 9,2 11 290 cf. lsid., 180
debemos estar tan pendientes de las palabras como de las ideas, de suerte que nuestro modo de expresarnos presente la sencillez evangélica y evite la hinchazó1:1 retórica de los gentiles. Ya la extensión desmesurada de mi carta me obliga a calíar, pero la añoranza que de ti tengo me impulsa a seguir hablando. -EstoY _d~eando; sin embargo, estrecharte entre mis brazos para en tm cambio mutuo de ideas aprender algo o enseñártelo. Aunque esto no sea imposible a la omnipotencia de Dios, para quien ninguna cosa hay difícil, sin embargo, estoy esperando cada día el fin de mi vida llena de achaques. Preferiría, no obstante, ·si Dios me concediera lo que antes indiqué, que nuestro_ eJercicio consistiera- en la ·interpretación alegórica y mística del Antiguo Testamento para la confirmación del Nuevo, a que se detuviera nuestra investigación en la superficialidad histórica, para que el abismo llame al abismo con la voz de sus cascadas, porque el primero precede en el tiempo, el segundo en dignidad. Este es el alimento del alma cristiana, pue!l el alma se nutre con aquello que la deleita. · · Tengo tu talento por extraordinario y contemplo con admiración la elegancia inasequible de tu palabra. · ¡Adelante, pues! Si ya asoma una sementera tan lozana, ¡qué cosecha tan copiosa no será la tuya, Fructuoso! Pero, si a estas cualidades tan extraordinarias se añade el estudio de la Sagrada Escritura, especialmente en un cambio mutuo de ideas, en breve brotarán sarmientos y madurarán racimos sabrosísimos. fructificando para bien tuyo y proporcionando a los demás un gozo íntimo. No me conformo con nada mediocre en ti. Fíate de mí, que te quiero y te digo la verdad. Si fuera posible, todo lo que los demás tienen en parte por don natural y en parte han llegado a descubrir pensando, todo deseo sea en ti perfecto y todo, lo mejor, porque así conviene al fin de los tiempos, que se preparen para el comb~.te contra el Anticristo los vasos elegidos de Cristo, ---No os consideréis, por favor, despreciable quejándoos de estar hundido en la región tenebrosa de Occidente, porque vuestra inteligencia es tanto mayor, cuanto que veis que estáis en las tinieblas, según dice el Señor a los fariseos: «Si fuerais ciegos, no tendríais pecado». Y todos sin duda sabemos que vemos las manchas del cuerpo con tanta más claridad, cuanto más nos acercamos a la luz; y la luz verdadera, que ilumina a todo hombre, que viene a este mundo, resplandeció en el mundo después de su muerte y no en seguida con su nacimiento. Por lo que el 'Drofeta dice: «El pueblo que estaba en las tinieblas vio una luz grande; sobre los que habitaban en la región de la sombra de la muerte res-plandeció una luz». La región que habitáis sostiene proceder de Grecia, que es la maestra de las letras y del saber, y recordad que de ahí son oriundos varones nobilísimos y llenos de ciencia, por citar alguno, el presbítero Orosio, el obispo Toribio, Idacio y el obispo Carterio, cargado de años y de méritos y muy
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nectutis et sancte eruditionis pontificem. Ac per hoc Cristi gratia su295 perabundans predicanda quam regio segnitie est culpanda. Ecce, dum nescit amor ordinem; plus honeraui epistolam meam senr..one quam utilitate. Et, ut ayt quidam, dum orcium facere nitor, anforam finxit manus. Roe denique superest ut digneris horare pro me cum tuis conperegrinis pauperibusue spiritu, ultra omnes homines pec300 catare, si forte inexausta pietas redemtoris humani exauriad fetores uoraginesue flagitii · facinorisque mei. Uale in Domino, mid caritate germane, merito domine, fili etate, collega diignitate adque parens adfinitate, et pro me tu tuique orate, et nanctis occasionibus stude tuum mihi m.ittere sermonem. dantius Risco
300 fof'tores Mad.: fetoris L
Etym. 9,2,110 ss. 1 j 296 Hier., ep. 7,6;3; 46,1,1 11 297-298 Hier., ep. 107,3,1 (Horat., Ars Poet. 21-22) 11 302-303 cf. Hier., ep. 105,5,2; 60,13;3.
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entendido en Sagrada Escritura. Por tanto hay que proclamar la gracia sobreabundante de Cristo y no culpar sin más a la región. He . aquí que como el amor no sabe de medida, he cargado mi carta más de palabras que de utilidad y, como alguien dice, tratando de hacer un. cántaro, me ha salido un ánfora. te dignes rezar con tus compañeros de cautiverio y poSólo queda bres de espíritu por mí, el más pecador de los hombres, por si la bondad inagotable del Redentor de los hombres quiere hacer desapareeer el hedor y el abismo de mis maldades y pecados. Adios en el Señor, hermano por el amor, señor por los méritos, hijo por la edad, compañero por la dignidad y pariente por la sangre. Rezad por mí tú y los tuyos, y cuando tengas ocasión, prowra enviarme una carta.
que·.
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INDEX NOMINUM Eucerius 43,62; 44, 55,160. Acaz 44,235. Eugenius episc. Toletanus I: 35.10. Agar 43,41; 44, 181,189,200,207,209. episc. Toletanus II: 31,15; 32,7; 32, Agustinus 1,8; 9,10; 42, 42,53; 44, 77, 29; 33,5; 35,3; 36,1. 119,157. Eusebius episc. Tarracone:nsis: 5,115. Aiulfus 17,32. Eutrocia 19,1; 20,1. Anticristus 21,88; 44,280. Eutropius 22,1; 37,3. Apicella 16,1. Ezeciel 21,51. Apocalipsis 25,31. Farisei 44,283. Appius 11,37; 12,13. Filippenses 42,32. Apringius 25,30. Flaccus 11,27. Ataulfus 28,1. Floridius 12,1. Baal 21, 93,95. Fructuosus 43,1; 44, 2,272. Babilonia 44,52. Bassilla, germana Braul., 15,2; 18,10. Frunimianus germanus Braul. 13,1 ; 14,1. Braulio 1, 1 et passim. - úallia Narbonensis 21,14. Caribdis 21,117; 25,8. Germanus 43,54. Carterius 44,293. Gerunda 14,18. Cassianus 43, 53,59. Giuario 29,2. Celsus comes 37,5. Gregorius Magn. papa 11,33; 42,150. Cesaragusta 43,13. Gundesuinda 29,1. Conlationes 43, 2,5,29. Hacab 31,7. Cyrillus 22,11. Hieronimus 9,10; 42,94; 43,33; 44, 55, Chindasuinthus 31,2; 33,2; 37,2. 89,158,179,234. Chintila 21,12. Hierosolima 42,93. Dauid 37,28; 44,240. Dictinus 44,76. Hilarius 9,11. Dionisius 22,11. Hispania 21, 3,14; 42,151; 44,60. Eleazarus 43,34. Hoio 19,1; 20,1. Elias 21,92. Honoratus 43, 53,62. Elladius 43,61. Honorius 21,2. Emilianus abbas 25,1; 26,1; 27,1; Hugna -anís 19,7; 20,5. sanctus 43,54. lactatus 9,1; 10,1. Epafras 15,11; 28,8. Idatius 44,293. Ermenfredus 19,59. lherusalem 44,53. Esayas 21,51. Etymologiae 3,17; S,86; 6,12; 44,171. Ihesus, Josué 37 ,28.
Iob 19~ 53,55. Iohannis 42,116. Iou.inianus 43,59. Isaac 44, 182,185,188,190,247. Isidorus 1,2; 2,2; 3,1,33; 4,1; 5,1; 6,1; 7,1; 8,1; 14,18; 22,13; 44,171. Isopius 11,9. Italia 36,59. Iudith 16,7. Lamech 44, 9'7,109,111. Laurentius 25,35: 26,14. Lazarus 19,10; 29,22; 34, 22,23. Leo domnus 11,22; papa 22,11. Leontius 43, 60,61. . Maccabea 44,224; Maccabei 44,223. Magi 10,44. Mathusalam 43,38; 44, 9·6,99,101,108, 109,110,112,115,123,125,136,143,1.5;5,163, 173. Maurentio 2,10. Melcisethec 42,140. Mello 28,2. Mineruius 43,59. Moyses 37,28. Neemias 21,10. Nibridius 34,1. Nicenum 22,25. Ninniuitae 31,7. Noe 44, 98,99,112,113. Nunnitus 18,15. Olofornis 16,9. Origines 5,15. Orosius 44, 76,292. Oseas 19,25. Ouid.ius 11,36. Pascha 10,31; 14, 15,32; 22, 9,19,22,27, 31,34.
Pascasinus 22,12. Petrus 14,23; 21,73. Pompunia, germana Btaul. 18,1. Priscillianus 44,75. Proterius 22,12. Psalmista 44, 41,67. Questiones hebraicae 44, 93,179. Reccesuintus 37,20; 38,1; 40,1. Roboam 43,46. Roma 14,19; 42,151; 44,199. Saloman 37,29; 43,44; 44, 231,235. Samaritani 44,107. Sarra 44, 181,186. Satanas 11,13. Scilla 21,118. Sedechias 31,7. Sinagoga 11,13. Sinonimae 1,9. Sintharius 3,22. Sirena 25,9. Smael 43,42; 44, 178,191,195,_229,248. Srahel 21,56. Taius 11,1 ; 42,2. Teodorus 43,60. Terentius 11,59. Teuphilus 22,11. Theudosius 22,10. Tholomeus 44,139. Tirassona 9,23 ; '10,28. Tobías 16,6. Toleturn 14,18; Toletanus 6,2. Turibius 44,293. Turninus 21,15. Ualentinus 23,1; 24,1. Uitalis 44,234. Uuiligildu5 17,3. Uuistremirus 30,1.
INDICE GENERAL Págs.
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Introdua::ión . .. . Traducción . . . . Grafías y Fonética · MORFOLOGIA: Sustantivo · . » Pronombre. » Verbo . . ·. SINTAXIS: Atracción, Pleonasmo, Concordancia de número Los casos: Nominativo absoluto.-Nominativo petrificado en. función de otros casos.-Nominativo pro vocativo.-Nom:inativo · pendens. Genitivo de causa.-Dativo simpatético.-Régimen de dignus; gnarus, cognitu5, etc.-Acusativo pc)r Nominativo.-Acusativo absoluto descriptivo . . . . . . . . Pronombres: uterque, iste, hic, ille; -ipse . . . . . . . . . . . . Indefinidos: quicumque = quiuis. . . . . . . . . . . . . . . Calificativos de dimensión usados en vez de cuantitativos de número: totus, tantus, quantus. aliqui, paruus = omnis, tot, quot. aliquot, paucus.-Uso pmnominal de los adverbios inde, exinde, ibi, unde, ubi . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Uso de. Jas preposiciones.-Confusión en el uso de los adv. de lugar. . Verbo: Uso impersonal del verbo habere.-Intransitivación de verbos: mouere, impingere, habere, delectare . . . . . . . . . . . Construcción reflexiva con verbos de lengua y entendimiento. Habeo con infinitivo = futuro.-Pasiva impersonal con acusativo objeto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . , Transitivación de intransitivos: egere, indigere, incurrere, notescere, praeesse, Zibet.-Sim!Ples y compuestos.-Verbos recompuestos . . . . . . . . . . Los deponentes . . . . . . Voz pasiva-Tiempos: Imperfecto de indicativo para expresar el potencial y el ineal . . . . . . . . . . . • • . . . . . . Futuro perfecto.-Imperfecto de Subjuntivo.-Perífrasis verbales
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15 16 21 22 23 25
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_Pdgs. debeat y liceat usados en lugar de debet y licet. . . . . . . Formas nominales del verbo: Infinitivo en sustitución del gerundio.-Infinitivo regido pcr adjetivos.-Infinitivo sustantivado.Acusativo del gerundio y gerundivo.-Construociones de gerundivo ·en la lengua cancilleresca . . . . . . . . . . . . . . Sustantivación del adjetivo verbal en -ndus. -Ablativo del gerundio en sustitución del participio de presente.-Participios indiferentes a la vaL . . . . ·. . . . . . . . . . . . . . . Conjunciones coordinantes: Copulativas-Disyuntivas con significación copulativa: aut, uel, seu, -ue, an . . . . . . . . . . Adversativas : nisi, sane, plane . . . . . . . . . . . . . . Conjunciones subordinan tes: Completivas: quia, quoniam, eo qUDd, ut.-La.s formas del relativo: qui, que .con valor de partículas adhortativas y conjunciones completivas.-Estilo directo introducido por las conjunciones quia y quoniam . . . . . . . . Interrogativas indirectas (tendencia al empleo del modo indicativo).-Si, partícula interrogativa.--Otras partículas interrogativas. . . . . . . . . • . . . . . . . . . . . . . . . Finales: qualiter, quatenus.-Causales: pro id quod, eo quod, ex eo... qilod, quare.-Consecutivas (tendencia al u~ del indicad· vo): (in) tantum ut.-Temporales: quando, dum. . . . . . . Otras conjunciones temporales: quousque, quoadusque, ex quo, quamdiu.-Concesivas: siquidem, acsi = etsi . . . . . . . . . quia concesivo.-Otras conjunciones y partículas: U! estipulativo = si.- uelut = uelut si. -in quantum. - tantum est ut.quam = potius quam ( magis quam). - secus quam quod, prout . . ' .
Contaminación . . . . . léxico: ~sgos cultos . . » Rasgos populares . Cuestiones de crítica textual. · Epistolario: Texto latino y Traducción.
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= secundum
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so 52 54 56 62
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