Enrique El Navegante (Vive La Historia)

 

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Enrique  Navegante  El seño se ñorr de dell horiz ho rizoo nte

Las expediciones financiadas por el príncipe Enrique de Portugal iniciaron la Era de los Descubrimientos, enviando  barcos  barc os hacia lo descon desconocid ocido o en busca de fama fa ma y fortuna fortuna Por Will Lawrence

n agosto de 1415 Portugal, un país pequeño, habían contribuido a aumentar el prestigio inglés pobre y recién independizado del poderoso en Europa. Cuando fueron nombrados caballeros, Reino de Castilla, asombró a las grandes sus tres hijos eligieron lemas anglo-normandos. potencias europeas. Una flota de navíos El de Enrique era: ‘Talant de bien fere’ (deseo de portugueses navegó a través del estrecho hacerlo bien’) demostrando su afición por el código de Gibraltar y saqueó el puerto musulmán de caballeresco. La idea de cruzada siempre ocupó un Ceuta, en la costa marroquí. Esta ciudad lugar especial en su corazón. floreciente era la joya del norte del En 1416 el rey Juan encargó a Enrique  Al  África islámica y la puerta de la supervisión todos los asuntos reunir sabios entrada a exóticas tierras más relacionados con la defensa y el lejanas. Y sin embargo, tres días gobierno de Ceuta. Esto le permitió  y erudit eruditos os para para después de su conquista, la impulsar la expansión entrar en contacto con un mundo ciudad estaba llena de sangre, desconocido para la mayoría de cultural, Enrique no sus inmensos acopios de oro los príncipes europeos. Cuando tomó en cuenta su estaban guardados en arcas los ejércitos musulmanes aliados portuguesas y los invasores de Marruecos y Granada unieron raza, credo y disfrutaban de las recompensas sus fuerzas en un intento de retomar religión materiales y espirituales de la la ciudad, Enrique se hizo a la mar cruzada. Aquel minúsculo reino cuyos con una fuerza de socorro fuertemente monarcas eran tan pobres que no podían acuñar armada. Cuando llegó, sin embargo, la guarnición su propia moneda, había dado un aviso. Portugal portuguesa ya había rechazado a los sitiadores. estaba en auge. Sin embargo este episodio reforzó su celo por El rey Juan I, más cariñosamente conocido como la cruzada. Anhelaba tomar Granada, y la historia «Juan el Bueno», se aseguró de que sus tres hijos parece sugerir que no gastó los fondos que recibió participaran en el asedio y saqueo de la ciudad, de la corona en la prosaica gestión administrativa y mientras sus compatriotas se manchaban las de preparar a Ceuta para la guerra. Enrique creía manos con la sangre del infiel, Enrique reflexionaba que enfrentarse a los infieles era consustancial con sobre las inmensas riquezas que cosecharía si su mandato, ya fuera financiando a sus corsarios pudiera aventurarse más lejos en el interior del contra la marina morisca o enviando sus carabelas ‘Continente Negro’. Si bien el saqueo de Ceuta por por la costa africana. el rey Juan fue la piedra angular de la expansión Enrique recibió un nuevo espaldarazo en 1420 portuguesa, fueron las expediciones de su hijo cuando su padre recibió el permiso papal para Enrique las que asentaron los cimientos del poner a la principal orden militar cruzada de imperio. Portugal bajo el control de la corona. Portugal Enrique nació en 1394, hijo del rey Juan y ya no tenía frontera con el Islam, y la riqueza de de la noble inglesa Felipa de Lancaster, hija de estas órdenes sería una bendición para las arcas Juan de Gante. A pesar de que los biógrafos reales. La Orden de Cristo estuvo bajo el control contemporáneos pasan por alto gran parte de la administrativo directo de Enrique y para él, ser  juventud de Enrique, es evidente que su madre le la máxima autoridad de los herederos de los enseñó a admirar los logros caballerescos de sus caballeros templarios portugueses, le hacía verse antepasados Plantagenet, cuyos hechos de armas a sí mismo como un auténtico caballero andante.

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También le proporcionó algunos fondos extra que podía desviar a financiar sus propias ambiciones. De hecho, poco después de hacerse cargo de la orden, Enrique chocó con los miembros de la corte real al anunciar que había estado estudiando las cartas de la “Mar Océana” (Océano Atlántico), mostrando especial interés por las islas Canarias y las islas cercanas a Madeira. Su súbito interés por la exploración no está bien documentado. Hasta entonces su prioridad eran las incursiones contra el Islam. Parece que su propia fama y riqueza era una motivación más importante que la mera exploración geográfica. En aquel momento, las Islas Canarias, sus nativos y los colonos cristianos, se encontraban ya bajo el dominio de Castilla. Eso no detendría a Enrique, que en 1424 envió una importante fuerza militar.

e   de a d  ipa  Fe e l l ip e,  F  ue  iq  u  r iq  E n r  re e  de  E n mad r a  ma  La  L  lo-g lo  ng  a n za a anz  lian  a li a a  ró l la  u ró e r  r,, aseg u ste  nccast  La  L a n  n   II a n  ua  n   J u o n  co e c  rse  a l l casa rs esa a  ue g u  tug  r tu o r  po  p

 

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 Enrique el Navegante Navegante  Afirmó que su única motivación era convertir a allá del límite del conocimiento europeo. Las naves los guanches. Esto no parece muy creíble, sobre portuguesas llegaron hasta el Cabo Bojador en todo sabiendo que más tarde acudió al mismo el Atlántico, a unos 1.600 kilómetros al suroeste de Tánger y a 160 kilómetros al sur de las Islas argumento para sus campañas esclavistas en Guinea. No era la primera vez que los europeos Canarias. enviaban expediciones a las Canarias en busca de Este cabo poseía una reputación casi mística esclavos. llena de rumores y leyendas. Los acantilados aquí La expedición fue un fracaso. Los nativos con sus se precipitan en el mar y las corrientes chocan armas primitivas vencieron a los portugueses para formando grandes remolinos, mientras los peces vergüenza de Enrique. Sin embargo, la derrota no plateados brillan bajo la superficie. Las olas se disminuyó sus deseos de establecerse en las Islas estrellan contra los arrecifes y en tierra el desierto Canarias, y durante los siguientes 30 años entabló parece tan estéril como el mismo inframundo. Para una serie de fallidas guerras coloniales en las islas. muchos marineros, el Cabo Bojador era el Cabo Por otro lado, su ocupación de Madeira sin Retorno. Enrique, en cambio, creía El sí fue un éxito, sobre todo porque que el Cabo podía rebasarse y envió al menos quince expediciones. Todas estaban deshabitadas. Según hermano su entusiasta cronista Gomes ellas fracasaron. mayor de Enrique, Eanes de Zurara, los navegantes Le tocó a un escudero de la Pedro, viajó por Zarco y Teixeira descubrieron casa de Enrique, Gil Eannes, Europa y adquirió Madeira y la vecina isla de demostrar que su señor tenía Porto Santo, aunque se sabe razón. Eannes, cuando llegó a los para su hermano una que eran conocidas mucho  bajíos, la espuma y las sardinas traducción del libro antes. Los primeros colonos del Bojador, se adentró navegando de Marco Polo portugueses llegaron hacia 1425. En en el océano hacia el oeste, para Madeira descubrieron buenas tierras volver a la costa una vez superado el de cultivo, que favorecieron los primeros infranqueable Cabo, desembarcando con asentamientos. seguridad y recolectando algunas secas plantas en El interés de Enrique por las islas del Atlántico la costa sahariana antes de trazar su camino de no menguó: en 1439 solicitó a la corona el envío de regreso a casa. A su regreso en Portugal fue recibido colonos a las Azores, un grupo de siete islas que como un héroe. la tradición vincula con una expedición anterior La exitosa apuesta de Enrique le valió al príncipe enviada por Enrique en 1425. Al igual que Madeira, muchos elogios y un gran prestigio en Portugal la colonia prosperó. como cartógrafo y cosmólogo. Los eruditos Sus éxitos en las islas del Atlántico llenaron a modernos creen que su confianza en que el Cabo Enrique de optimismo y entusiasmo. Ahora, su Bojador podía doblarse viene de la lectura del ambición miraba hacia el sur, donde esperaba “Libro del Mundo Conocido”, un relato anónimo y “navegar más allá de la puesta del sol y del curso de enteramente ficticio que narra las aventuras de un todas las estrellas occidentales”. Entre 1425 y 1434 castellano, guiado por un mapa del mundo ahora perdido. Al igual que muchos contemporáneos, envió repetidamente misiones a la costa occidental de África con órdenes de abrir nuevas rutas más Enrique debió otorgar gran credibilidad a este libro y creyó que que contenía referencias referencias reales de los viajes del autor más allá del Cabo. En cualquier caso, Enrique estaba en condiciones de enviar expediciones más allá de Bojador, donde esperaba desembarcar ejércitos que marcharan tierra adentro bajo la bandera cruzada y llevaran la palabra de Dios a las tribus infieles y paganas. Incluso albergaba la esperanza de encontrar al fabuloso Preste Juan, emperador cristiano de las Indias (que en época de Enrique se refería a las tierras del noreste de África) y forjar una alianza contra sus enemigos sarracenos. Su sueño de encontrar a este legendario gran gobernante le acompañó todo la vida, y sin duda determinó sus exploraciones. Estas aspiraciones, sin embargo, se suspendieron a raíz de una campaña traumática en Tánger y por las complicaciones de su regencia a raíz de la muerte de su hermano el rey Duarte. Hasta 1441 1441

ó   ivó  t iv ac t eac  re I I,, r  n  I I a n   ua  y   J u r e y e,  e l re q  u  ue  riq   n ri  E n o de  E  to  ie t  n ie o- n  no  ri n  E l  E l so b ri 0 8 148 14 e   d a   d a éca éc d a  la  n l  e n  n e  ió n  ió c  rac  ra o  lo  l x  p e e    jess  d a je  v i ia os  v  l lo

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Enrique no pudo reanudar la exploración de la costa oeste de África. Se envió a algunos capitanes para reanudar la exploración alrededor de Río de Oro, el punto más lejano alcanzado después del Cabo Bojador, donde podían capturar los leones marinos que habitaban la zona por su piel y su aceite. Otros capitanes recibieron la orden de dirigirse más lejos al sur. Encontraron Cabo Blanco y exploraron la gran bahía que encerraba. Con el consentimiento papal y real, Enrique también continuó con sus ambiciones de cruzado.

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Vela latina

Estas velas triangulares datan de la antigüedad tardía. Su forma les permitía ceñirse más al viento, zigzagueando contra él. Esto permitía a las carabelas avanzar mayores distancias en mucho menos tiempo en comparación con los barcos de velas cuadradas convencionales que se usaban antes.

02Cañones

Aunque los cañones eran bastante primitivos en el siglo XV, se adaptaban bien al combate en las agitadas aguas del Océano Atlántico. Las carabelas eran rápidas y ágiles, yformidables el poder añadido de guerra, la artillería convirtió en armas de y enlas una amenaza para cualquier nave hostil que encontraran durante sus exploraciones.

03Ancla

El ancla es una necesidad para cualquier buque. Está hecha de metal e impedía que el buque se desplazara con la corriente o el viento. Cuando descendía, sus “brazos” se arrastraban sobre el lecho marino, ralentizando el barco.

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Cofa

Era fundamental poder tener una buena visión del entorno cuando recorrían parajes desconocidos. El tripulante con visión más aguda se situaba sobre el mástil para tener la mejor vista. A menudo se prometía una recompensa al primer hombre que divisara tierra, por lo que todos los tripulantes oteaban el horizonte siempre que podían.

05Timón

A diferencia de navíos anteriores, que montaban el timón en un costado del casco, las carabelas contaban con un timón montado en la popa. Esto lo protegía de daños y la tripulación nunca perdía la capacidad de dirigir el barco, lo que sí podía ocurrir si el timón lateral era arrancado por la corriente.

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Barco de remos

Si bien las carabelas eran naves ágiles y de poco calado, tenían un tamaño considerable y corrían peligro de varar en aguas poco profundas. Si la tripulación quería bajar a tierra se utilizaba botes de remos y la carabela se anclaba apartada de tierra.

“Para los hombres de Enrique capturar nativos se convirtió en una prioridad”

 

 Enrique el Navegante Navegante Su cronista relata con con gran placer los hechos de armas de las tropas portuguesas durante la década de 1440, aunque para la mente actual el enfrentamiento entre tropas europeas bien entrenadas y armadas contra pescadores y nómadas mal armados no nos parece algo muy caballeresco. Para los hombres de Enrique, tratar de capturar a los nativos se convirtió en una prioridad, para interrogarlos y adquirir más conocimiento sobre la línea de costa y los desiertos que la delimitaban.

Pero estas misiones adquirieron un tinte más sombrío en 1444. Seis barcos, mandados por el sargento de Enrique Lancarote da Ilha, navegaron con órdenes de tomar esclavos en las islas del Banco de Arguin, justo al sur de Cabo Blanco. Fue Lanzarote quien financió la expedición, pero con el consentimiento del Príncipe Enrique y, por tanto, con su complicidad. El cronista Zurara asistió a la subasta de aquellos esclavos en agosto de 1444 y relató aquel brillante espectáculo y la miseria humana de aquellos hombres.

La participación de Enrique en la trata de esclavos ha sido desde siempre un tema delicado para sus  biógrafos. Los apologistas como Zurara señalan que el deseo de Enrique era convertirlos al cristianismo, mientras que otros consideran que los africanos tenían el estatus de prisioneros de guerra. Tanto los venecianos como los genoveses practicaban la esclavitud, mientras que los moros vendían a sus prisioneros. Sin embargo, Enrique decidió justificar sus acciones, el beneficio económico era evidente y ayudaba a financiar las exploraciones.

Las carabelas de la conquista 04

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“Las carabelas de Portugal son las mejores naves que navegan los mares”, escribió Cadamosto, el explorador italiano que a menudo viajaba bajo el patrocinio de Enrique. “Podían navegar a cualquier parte”. Y, ciertamente, demostraron ser el instrumento de la expansión portuguesa. Uno de los grandes impedimentos para la exploración de la costa oeste africana fueron los vientos del noroeste, que obstaculizaban el viaje de regreso. La carabela, sin embargo, podía solventar este problema gracias a su aparejo, cuyas velas latinas o triangulares, suspendían de una larga verga unida oblicuamente al mástil. Esto permitía a la carabela navegar mucho más cerca del viento y ser capaz de responder a brisas mucho más ligeras que las tradicionales velas cuadradas. El casco de la carabela era liso, en vez de estar compuesto por planchas solapadas. Además, era más delgado que el de otros barcos tradicionales. Su escaso calado era ideal para superar los bajíos del Banco de Arguin y navegar por los sistemas fluviales africanos. Su velocidad era también una ventaja para huir de los corsarios. La mayoría de las carabelas utilizadas por Enrique tenían una capacidad de 40 a 50 toneladas, y muchas estaban equipadas con cañones. Estas naves, por tradición y superstición, llevaban pintados dos ojos en la proa. Se dice que muchos nativos africanos creyeron que estos ojos eran lo que hacía navegar a aquellos barcos por aguas desconocidas.

07Provisiones

Las travesías marítimas llevan su tiempo, y cualquier explorador del siglo XV que navegara hacia lo desconocido necesitaba estar preparado. La comida fresca se estropeaba rápidamente, así que el menú lo componían alimentos menos perecederos como salazones, galletas duras y frutas y verduras deshidratadas. Los marineros también complementarían sus existencias con la pesca y cualquier otro tipo de captura.

08Poco calado

Una de las ventajas de las carabelas era su capacidad de navegar por ríos, además de mares y océanos. El calado del buque, la parte sumergida bajo el agua, era lo suficientemente bajo como para no quedar varado en las aguas someras de los ríos africanos.

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Tripulación

El número de tripulantes en una carabela variaría considerablemente dependiendo del objetivo del viaje. Para la exploración de largo alcance llevaría una media de 35 hombres. La tripulación estaría compuesta por marineros y hombres de armas, para el caso de que toparan con piratas o nativos.

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Exploradores de África Portugal fue una de las naciones más activas durante la Era de los Descubrimientos

Diogo Dias Expediciones: hacia 1460

Al igual que su hermano Bartolomeu, tomó parte en el descubrimiento nuevas tierras para Portugal comodelas islas de Cabo Verde, aunque algunos discuten este punto. Este descubrimiento le proporcionó una plaza en la primera expedición de Vasco da Gama, y actuó como emisario entre Vasco da Gama y el gobernante hindú local.

Enrique el Navegante Expediciones: final del siglo XV

Aunque no participó en ninguna expedición, el príncipe Enrique patrocinó más de 40 viajes para descubrir los misterios de África y empujar los límites del mundo conocido. Sus naves llegaron hasta la actual Sierra Leona, superando la extensión del desierto del Sahara y las caravanas de comercio musulmanes rivales.

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Diogo Cão

Expedición: 1482

Tras los descubrimientos realizados por las expediciones patrocinada s por Enrique, Diogo Cão se financió su propia expedición. Con la bendición del Rey Juan II, Cão se convertiría en el primer explorador en llegar al poderoso río Congo y establecer relaciones comerciales con los nativos que encontró en aquellas tierras.

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Bartolomeu Dias 1487󰀭1488 488 Expedición: 1487󰀭1

Bartolomeu Dias fue el primer europeo del que tenemos noticia en doblar el Cabo de Buena Esperanza y navegar desde el Atlántico hasta el Océano Índico. Comprobó que ambos océanos

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estaban conectados. viaje por provocó un renovadoSu interés encontrar una ruta comercial hacia la India.

Vasco da Gama Expedición: 1497󰀭1 1497󰀭1499 499

Con cuatro naves, se convirtió en el primer europeo en establecer una ruta oceánica entre Oriente y Occidente. Tras meses de navegación, llegó a la ciudad india de Calicut en mayo de 1498. Los esfuerzos para establecer una alianza fueron un fracaso, pero cuando regresó a Portugal sus naves habían recorrido más de 38.000 km.

El botínafricana de la costa El continente africano fue una fuente de tesoros para los comerciantes y ciudadanos europeos

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Esclavos

Sangre de Dragón

El comercio portugués de esclavos era tan floreciente que hacia 1448 Enrique ordenó la construcción de un fuerte y un almacén en la Isla de  Arguin..  Arguin

La valiosa resina del drago era una mercancía muy atractiva que provocó muchas misiones comerciales. Fue muy utilizada en la industria del teñido.

 

 Enrique el Navegante Navegante  Aunqu e  Aunque es conocido como Enrique el Navegante, este epíteto le fue otorgado póstumamente por escrit escr itores ores ingleses.

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Especias

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Durante la época de Enrique, el término “especia” abarcaba una amplia gama de medicamentos, perfumes y cosméticos, aunque se usaba principalmente para condimentos como la pimienta (en la foto).

El oro fue una motivación clave para la expansión ultramarina. En la época de Enrique llegaba a Europa desde las minas aluviales de Guinea, más allá del Sahara, en caravanas de camellos.

Una de ellas fue la de João Fernandes, en 1445. Fernandes debía llegar al Río de Oro para pasar el invierno explorando tierra adentro. Después de muchas aventuras, regresó a Portugal con noticias de tierras fértiles al sur, ricas en gente y polvo de oro. Dinis Dias llegó a Cabo Verde el año anterior, mientras que Nuno Tristão alcanzó la desembocadura del río Gambia en 1446. Durante la década siguiente Alvise Cadamosto, explorador italiano al servicio de Enrique, y Diogo Gomes hicieron nuevas expediciones por la costa africana. Superaron Cabo Verde y atravesaron las tierras al sur del desierto del Sahara, en la costa de Guinea. Enrique creía que sus naves pronto rodearían la punta sur del continente y podrían dirigirse a las tierras ricas en seda y especias sobre las que había leído en Los viajes de Marco Polo. Sin embargo, durante sus últimos años volvió a sus primitivas ambiciones como cruzado, librando una guerra contra los infieles en Marruecos, aunque su interés por los viajes africanos nunca desapareció completamente. Con su muerte, en 1460, las ambiciones portuguesas en África decayeron, aunque pronto cobraron un nuevo impulso en la década de 1480, con la llegada del príncipe Juan al trono. Bajo sus auspicios, Diogo Cão descubrió en 1482 el río Congo y, seis años después, Bartolomeu Dias llegó finalmente al Cabo de Buena Esperanza, en el extremo sur del continente. Y esta nación aventurera seguía adelante sin parar. El Tratado de Tordesillas, firmado con España en 1494, sugiere que Portugal ya era consciente de las tierras en el Atlántico Sur, aunque Brasil no fue descubierto oficialmente hasta el desembarco de Pedro Álvares Cabral en 1500. En 1498, Vasco da Gama se convirtió en el primer europeo en llegar a la India por vía marítima y en 1510 los portugueses se apoderaron de Goa, estableciendo una base permanente en la costa oeste de la India. Desde el Océano Índico los portugueses pasaron a los mares de China, fundando un enclave en Macao en 1557. En poco más de 100 años, e inspirado por Enrique el Navegante, este pequeño reino había abierto el mundo al comercio europeo con sus amplias exploraciones y se había situado en el centro de la historia.

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