El Poder de La Inteligencia Espiritual - Tony Buzan

El Poder de la Inteligencia Espiritual 10 formas de despertar tu genio espiritual

Tony Buzan

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Tony Buzan, creador de los Mapas Mentales® (un método de análisis sencillo y revolucionario que permite al máximo las capacidades de la mente), es un reconocido experto en el campo de la inteligencia, además de autor de prestigio internacional. Entre sus obras –todas con millones de ejemplares vendidos en más de 100 países y traducidas a más de 30 idiomas- destacan El libro de los Mapas Mentales y El libro de la lectura rápida (ambos publicados por Urano). Es presidente de The Brain Foundation, fundador The Brain Trust e inspirador de los Juegos Olímpicos de la Inteligencia. Asesora a ejecutivos de multinacionales, jefes de Estado y atletas de fama mundial.

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Índice

Dedicatoria El Poder de la Inteligencia Espiritual está dedicado con todo mi cariño y afecto a Lesley y Teri Bias; a mi madre, Jean Buzan; a Lorraine Gill, Vanda North, Nicky y Strilli Oppenheier, al doctor Petite Rao, Caroline Shott y a Carole Tonkinson por su ayuda espiritual en mi vida personal y por su dedicación e intenso trabajo para que este pequeño libro y gran sueño se hicieran realidad.

Lista de Mapas Mentales®…………………………………………3 Agradecimientos…………………………………………………….4

Introducción: Viaje al paraíso……………………………………….5 1. Consigue …………………………..14 2. Explora tus valores………………………………………...23 3. Tu visión de la vida y tu propósito………………………...28 4. Compasión: Compréndete a ti mismo y a los demás………32 5. ¡Da y recibe! Caridad y gratitud…………………………...39 6. El poder de la risa………………………………………….50 7. Vuelve al patio de recreo…………………………………..57 8. El poder del ritual………………………………………….64 9. Paz………………………………………………………….70 10. ¡Lo que necesitas es amor!..............................................77

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Lista de Mapas Mentales Mapa Mental® que resume el capítulo 1. Este Mapa Mental® indica que ser conscientes de la -de nuestro lugar en el universo, de la fragilidad del planeta y de cómo el ser humano puede influir en el mundo- es una parte importante de la Inteligencia Espiritual. Mapa Mental® que resume el capítulo 3. La visión y el propósito de la vida se resumen en este Mapa Mental®, que muestra cómo son la metas importantes y cómo se puedes reforzar mediante ejercicios. Mapa Mental® que resume el capítulo 5, donde se presentan los temas principales de la caridad y la gratitud, junto con los beneficios que dar y recibir te aportan a ti y a los demás. Mapa Mental® que resume el capítulo 6. Este Mapa Mental® resume el tema de la risa, ilustra de qué manera el humor te puede ayudar a superar las circunstancias más adversas y aportar una vida más larga, saludable y con menos estrés. Mapa Mental® que resume el capítulo 7. El Mapa Mental® dee3l patio de recreo resume la forma maravillosa en que los niños contemplan el mundo y la manera cómo nosotros también podemos volver a descubrir una actitud infantil ante la vida. Mapa Mental®, que resume el capítulo 8. El poder del ritual queda resumido en este Mapa Mental®, con ramas que muestran los beneficios de realizar rituales regularmente, sobre cómo se refuerzan mediante su repetición y con los ejercicios espirituales que te ayudan a introducir el ritual en tu vida. Mapa Mental® que resume el capítulo 9. Este Mapa Mental® te muestra cómo puedes crear momentos de paz mediante la meditación y que despejará tu mente y promoverán tu bienestar.

Mapa Mental® que resume el capítulo 10. Este Mapa Mental® resume el poder del amor para superar todos los obstáculos, y cómo el amor es la clave de la conciencia, la compasión y la Inteligencia Espiritual.

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Reitero todo mi agradecimiento a mi equipo del bestseller Head First* porque ¡lo ha vuelto a conseguir en El Poder de la Inteligencia Espiritual! A mi editora de proyectos Carole Tonkinson; a mi jefa de edición Charlotte Ridings; a mi artista e ilustrador, Alan Burton; Paul Redhead; Toby Eatson; Tim Burn; Yvette Coeles; Jo Lal; Mgan Slyfield; Jacqui Caulton; Aislinn McCormick y a nuestro nuevo miembro del equipo, Ariel Kahn. Gracias de nuevo por llevar a cabo sin ayuda un .

Agradecimientos

                                                                                                                        *

 De próxima aparición en Ediciones Urano.

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Teilhard de Chardin

Viaje al paraíso Introducción

¿Eres una persona espiritual? Muchas personas confunden ser espiritual con ser religiosos, pero son dos cosas muy distintas. Cuando eres espiritualmente inteligente eres más consciente de la sobre ti mismo y el universo, del lugar que ocupas en él y de tu propósito. Muchas personas consideran que la Inteligencia Espiritual es la más importante de las múltiples inteligencias y que además posee el poder de transformar tu vida la civilización, el planeta y el curso de la historia. En El Poder de la Inteligencia Espiritual exploro la naturaleza de la espiritualidad y te enseñó de qué forma puedes desarrollar esta maravillosa inteligencia. Serás capaz de desarrollar tus valores personales –conceptos como la verdad y la honestidad-y comprometerte, primero a comprender y conocer más sobre ti mismo, y luego a abrirte para poder participar y colaborar en la comunidad. Afortunadamente, desarrollar tu Inteligencia Espiritual te permitirá ver el lado menos sobrio y más sobrio y más cómico de las cosas y recobrar cualidades como el entusiasmo, la alegría, la energía y la persistencia que caracterizan a los niños. No sólo eso, te 5    

mostraré cómo puede incrementar tu paz y fortaleza interior, para que seas más capaz de controlar y reducir las tensiones que a menudo arruinan nuestras modernas y ocupadas vidas. En primer lugar me gustaría contarte mi propia carrera espiritual y cómo llegué a darme cuenta de que existía la Inteligencia Espiritual. Hay dos historias que explican esta trayectoria.

sobornando al ofrecernos barritas de chocolate? ¡Me dijo que no volviera a hacer esas preguntas y que me fuera de la clase por maleducado e insubordinación! Nunca más volví y a partir de entonces pensé que cualquier cosa que tuviera que ver con la espiritualidad era n cuento, irrelevante o deleznable y esa lógica y argumento fueron un .

Historia 1: ¡Las barritas de chocolate, la pureza del espíritu y el soborno!

Historia 2: La lógica frente a la espiritualidad

Cuando era adolescente empecé a plantearme , como: ¿Cuál es el sentido de la vida? ¿Por qué ay tanto sufrimiento en el mundo? ¿Tienen emociones los animales? ¿Por qué morimos? ¿Qué sentido tiene ser honesto o bueno? ¿Existen otros planetas con vida? ¿Qué tamaño tiene el universo y dónde termina?, etcétera. Mis amigos y yo pensábamos que obtendríamos algunas respuestas yendo a catequesis los domingos, y lo hicimos religiosamente. Nuestro profesor de catequesis era un hombre arrogante y fanfarrón, con un carácter dominante y autoritario. Un domingo nos dijo que si la semana siguiente llevábamos nuevos alumnos a catequesis, nos daría una barrita de chocolate por cada persona nueva que aportáramos. ¡Mi mano enseguida se alzó! Le señalé al profesor que en la lección anterior nos había hablado de la pureza del alma y de los males del soborno. ¿Si éramos verdaderamente espirituales, no deberíamos llevar personas nuevas a catequesis porque quisiéramos ayudarlas en su camino? ¿No deberíamos, por lo tanto, hacerlo puramente por amor hacia la otra persona? ¿No deberíamos hacerlo con gusto, entusiasmo y generosidad, sin esperar recompensa alguna? ¿No nos estaba

Cuando tenía unos veinte años y estaba en la universidad había endurecido mis puntos de vista sobre la supremacía de la lógica y la debilidad de la espiritualidad y de las emociones, me había convertido en un ateo consumado. ¡Había pulido mis habilidades de razonamiento verbal y lógico y me entusiasmaba una buena discusión intelectual! Puedes imaginar mi alegría cuando un día sonó el timbre de mi casa y una frágil señora de mediana edad vino a anunciarme que venía a internar salvar mi alma! Al igual que una araña preparándose para atrapar una mosca, la invité a entrar para que me explicara sus puntos de vista sobre mi necesidad de ser más espiritual. Por aquel entonces, ya estaba bien versado en la historia de la filosofía y en los grandes debates sobre la moralidad, Dios y el sentido de la vida. A los quince minutos la gentil dama ya estaba naufragando, pero, para mi sorpresa, todavía estaba optimista e incólume. Me explicó que ayudar a los demás era algo relativamente nuevo en su vida, que había sido muy difícil y llena de sufrimiento, y que ahora era mucho más bella y tranquila. Me preguntó con alegría si podía regresar otro día 6    

con alguien más experimentado en el tema, asentí, pensando en otra batalla lógica con un oponente que estuviera más a mi . Al cabo de una semana regresó tal como había dicho y me presento a un joven que acababa de licenciase en la universidad y que estaba muy versado en el tema. Al momento tuvimos un encontronazo y se desencadenó una gran batalla intelectual. Al final, al cabo de una hora, cometió un error lógico fatal y le pillé. ¡La victoria era mía! Todavía sin rendirse, la señora me preguntó si podría regresar la semana siguiente con uno de los miembros más antiguos de su organización. De nuevo le dije que sí. El día de la siguiente visita, se desencadenó una tormenta de nieve y hacía mucho frío. A pesar de todo, mi Ángel de la Misericordia estaba allí. Me presentó con orgullo y respeto a su compañero: un hombre de mediana edad que parecía un personaje de película de gánsteres barata, era un miembro muy antiguo de su organización. Parecía todo lo contrario de lo que representaba la espiritualidad, poco sabía de argumentos éticos o morales y daba la impresión de que su única intención fuera recaptar fondos de mí y hacer ostentación de su posición. Le taché de ignorante, avaricioso y falso a los cinco minutos hice que se sonrojara y le dejé sin habla. ¡Otra gran victoria! Sin embargo, esta vez pronto se volatilizó. Cuando la parea se marchó, la señora, me miró con una cara desencajada, una expresión de fracaso, desilusión, pérdida, súplica y un dolor casi insufrible. Cuando le cerré la puerta para siempre, esos mismos sentimientos surgieron en mí. ¿Qué había hecho? Esa amable dama había dedicado varias semanas de su

vida preparándose para venir a verme, con el único fin de salvar mi alma. ¿Y qué había hecho yo para expresarle mi agradecimiento por este gesto totalmente altruista? Golpearla con las cachiporras de la lógica y de las palabras; humillar yh degradar delante de ella a aquellos que respetaba y amaba; intentar destruir los cimientos de una vida inocente, adorable recientemente estructurada, y tras refocilarme con mis la había devuelto a la nieve. Me senté atónito ante el horror que acababa de cometer. La lógica y las palabras de pronto me parecieron irrelevantes y todo mi ser se inundó de tristeza y arrepentimiento. Sin saberlo el Ángel de la Misericordia había cumplido con creces su misión en mi análisis final: ¡ella había ganado el debate, vencida, pero con la moral bien alta! Dondequiera que estés, querida señora, ¡te daré eternamente las gracias por tu maravillosa y triunfal misión de rescate! En un instante de desgarro del corazón, mi vida había cambiado por completo. Vi que la inteligencia era algo más que simples palabras, números y lógica. (De hecho, pronto descubrí que existían múltiples inteligencias: Creativa, Personal, Social, Sensual, Física, Sexual, Espacial y Espiritual, así como Verbal y Numérica, que ha desarrollado en mi libro Head First).

LA INTELIGENCIA ESPIRITUAL: DEFINICIÓN A menudo oímos cosas como: • • 7    

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Personas *

Pero ¿Qué son y ? El concepto de espíritu procede de la palabra latina spiritu, que significa aliento. El término moderno hace referencia a nuestra energía vital y a esa parte nuestra , incluidas las emociones y el carácter. Incluye nuestras cualidades vitales de la energía, entusiasmo, coraje y determinación. (Es interesante observar que espíritu también significa una forma de alcohol purificado. ¡Observa que hago hincapié en purificado!) Tu Inteligencia Espiritual es la forma cómo cultivas y desarrollas estas cualidades. También es la protección y el desarrollo de tu alma, que el Diccionario de inglés de Oxford define como y la intensidad de su . La Inteligencia Espiritual progresa de forma natural desde tu Inteligencia Personal (conocimiento, aprecio y comprensión de ti mismo), a través de la Inteligencia Social (conocimiento, aprecio y comprensión de los demás), hasta el conocimiento, aprecio y comprensión de todas las demás formas de vida y del propio universo. De hecho, contactar con la naturaleza, comprenderla y                                                                                                                        

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 El autor utiliza expresiones anglosajonas que derivan de la palabra latina spiritus, cuya traducción no siempre puede adaptarse a la utilización de la misma palabra. No obstante, las palabras en cursiva indican la palabra correspondiente en nuestra lengua para , que ha utilizado el autor en inglés. (N. de la T)

apreciarla es un aspecto principal en el desarrollo de tu Inteligencia Espiritual.

Autorrealización La autorrealización es el estado último de realización descrito por el psicólogo Abraham Maslow, en lo que denominó su jerarquía de necesidades. Descubrió que los seres humanos, independientemente de la tribu o lugar del planeta al que pertenecieran, atravesaban etapas ascendentes de supervivencia y desarrollo espiritual. Entre ellas se incluían: • • • • • • •

la necesidad de comer; la necesidad de cobijo; la necesidad de tener salud física; la necesidad de tener una familia; la necesidad de tener una educación; la necesidad de integración social; la necesidad de realización intelectual, social y material.

Sólo cuando se cumplen todas estas necesidades las personas alcanzan su último estadio del desarrollo humano: la autorrealización. Maslow definió la autorrealización como un estado espiritual en el que el individuo emanaba creatividad, era juguetón, feliz, tolerante, tenía un propósito y una misión de ayudar a los demás a alcanzar ese estado de sabiduría y beatitud. Todas estas cualidades son las que se han de lograr en un entorno donde medren la compasión y el amor. ¡Maslow estaba describiendo lo que ahora denominamos Inteligencia Espiritual! 8    

La sed global de Inteligencia Espiritual La nueva tendencia global de interés por desarrollar el poder de la Inteligencia Espiritual ha llegado justo a tiempo en un mundo que a menudo describimos como espiritualmente enfermo. , nos preguntamos, cuando palabras como se agradan y se emplean para describir ansiosamente las últimas novedades en muebles o ropa; cuando la gente dice que se siente porque los jardines de sus casas de las afueras son más bellos gracias a los consejos de los expertos de la televisión; y cuando se emplea la palabra , no para descubrir un estado trascendental, sino una droga barata que perjudica al cerebro. Sin embargo, todo no es tan malo como parece, el propio hecho de que la gente esté buscando esa confirma que ¡el espíritu! Todavía está vivo! Simplemente está buscando una guía para hallar el buen camino, puesto que ha perdido momentáneamente su rumbo entre lo mundano y la corriente. Incluso el incesante flujo de malas noticias que diariamente emanan de nuestras radios, televisiones y periódicos contienen algo de positivo. Los desastres naturales como los terremotos, avalanchas e inundaciones causan un dolor y sufrimiento terrible e innegable; pero a la vez se pueden convertir en extraordinarios despliegues de compasión y espíritu de comunidad. Dichos acontecimientos a menudo nos ayudan a salir de golpe de nuestro estilo de vida semirrobótico que dejamos que dirija nuestra existencia y a abrir os ojos a aquello que es fuera de lo común. Ésta es una toma de conciencia y una percepción que, a lo largo de los siglos, también nos la puede aportar el nacimiento y la muerte, la pérdida de seres queridos, un amanecer, un cuadro y todas aquellas coas que han inspirado el arte, la poesía y la música más sublime a lo largo de los siglos. ¡Más buenas noticias!

Cada vez hay más personas en las sociedades opulentas que se están cansando de la superficialidad de sus vidas materialistas y que buscan un nuevo conjunto de valores por los que vivir; valores que enfaticen un nuevo sentido de realización colectiva y de responsabilidad frente a un mundo que se encuentra en un estado de creciente fragilidad. Una encuesta reciente dirigida por John Maisbitt, autor de Megatrends 2000, demostró que por primera vez en la historia había más personas que se marchaban de las grandes ciudades para vivir en las afueras, de las afueras para vivir en los pueblos y de los pueblos para vivir en el campo, que a la inversa. ¿Por qué? Porque la gente decía que, de alguna manera, sentía que estaba y que necesitaba volver a encontrarse consigo misma, con la naturaleza y con el sentido de formar la comunidad humana que tanto ansiaba. Quería más calidad de vida, una vida que nutrirá a su espíritu, en lugar de arruinarlo. Al mismo tiempo, el mundo está experimentando un nuevo Renacimiento. En todos los países cada vez se construyen más galerías de arte, salas de conciertos y museos. Y en muchos de ellos hay más personas que nunca estudiando (por motivos profesionales o personales) música, pintura, escritura creativa, teatro y danza). Estás viviendo el comienzo del Siglo XXI del Cerebro y el Milenio de la Mente, en un mundo que se está transformando desde una relativamente hasta una era de conciencia, desarrollo e iluminación espiritual. Tú formas parte de ese proceso. Ralph Waldo Emerson Historia: Valentina Tereshkova

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Muchas personas destacadas están haciendo llamamientos públicos para que prestemos mayor atención a la Inteligencia Espiritual y para que tratemos a los hijos del futuro y al planeta con más respeto y afecto. Un ejemplo particularmente notable es el de la doctora Valentina Tereshkova. El 16 de junio de 1963, un potente cohete impulsaba a la cápsula espacial Vostok 6 al espacio exterior y Valentina la piloto en 48 órbitas alrededor de la Tierra. Tres días después aterrizó a salvo con su cápsula espacial y se convirtió en la única mujer en el mundo, y sigue siéndolo, que realizó un vuelo espacial en solitario. Recibió muchas condecoraciones y premios y ha dedicado mucho tiempo a hablar en conferencias internacionales por la paz. Recientemente ha sido nominada para el premio de La Mujer del Año como y en su discurso de aceptación enfatizó la responsabilidad que todos tenemos sobre el futuro de la civilización humana: Otro de los problemas es proteger la salud espiritual de nuestros hijos, proporcionarles una orientación moral para elegir el camino correcto en el ilimitado espacio. ¿Podemos resolver todos estos problemas? Sí que podemos, gracias a la responsabilidad y a la solidaridad.>>

Los Juegos Olímpicos del año 2000 en Sydney, Australia, ofrecen un ejemplo vivo de los beneficios y efectos que se producen cuando las personas utilizan su Inteligencia Espiritual. Durante dos semanas 17 millones de personas superaron los más horrendos problemas logísticos, dejaron a un lado las cuestiones personales para ocuparse de los demás, manejaron todo tipo de situaciones estresantes, y en cuatro millones de casos individuales, ofrecieron voluntariamente su tiempo, dinero y energía para celebrar un logro humano. Los comentaristas de todo el mundo se quedaron al ver y oír los coros espontáneos que se formaban en los trenes, barcos y aviones; cómo todo el mundo ayudaba a todo el mundo, y el continuo, y casi hipnótico espíritu de alegría y diversión que se respiraba en todo el país. Éste fue un ejemplo de todo el país, compuesto por muchas razas, religiones y credos, albergando a personas de todo el planeta y triunfando milagrosamente en crear un paraíso momentáneo sobre la Tierra. Historia: princesa de Diana de Gales La muestra compartida de dolor público cuando murió la princesa Diana de Gales, en 1997, fue visto por algunos como una manifestación alarmante del poder de las celebridades y de cómo el vacío en las vidas de algunas personas las conducía a aferrarse a los iconos populares, viviendo sus vidas indirectamente a través de ellos. Aunque ésta podía ser una forma de verlo, hay una visión de los hechos más espiritualmente inteligente y es que las personas superaron sus diferencias para compartir el dolor por la muerte de una mujer que tanto había hecho para ayudar a los demás a través 10    

de sus obras de caridad y que se había convertido en un símbolo de esperanza y compasión. Diana será recordada por millones de personas de todo el mundo por su gran compasión por los enfermos del sida. Aunque tenía problemas personales, llegó a aquellos que estaban muy necesitados, y con su ejemplo, inspiró a otras personas a que hicieran lo mismo. Lejos de irse al tratarse en menos de los que canta un gallo, el mundo en el que vives está atravesando un maravilloso período de crecimiento espiritual. Este poder espiritual que tú, tu familia, amigos y todos nosotros tenemos es infinito. Este libro está diseñado para ayudarte a conectar con ese poder y a usarlo para tu propio bien y el de los demás. Galileo Galilei

Una panorámica de El poder de la Inteligencia Espiritual Los diez capítulos de El Poder de la Inteligencia Espiritual tratan de los que se combinan para formar la Inteligencia Espiritual. Capítulo 1: Consigue una En este capítulo te demostraré que eres un milagro y describirás algunos hechos increíbles sobre ti y tu relación con el universo. Todos nosotros tenemos un efecto tangible y provocamos un impacto en la historia; leerás los pensamientos de algunos de los

mayores pensadores del mundo sobre el ser humano, sus sorprendentes capacidades y su poder. Capítulo 2: Explora tus valores Tus valores y principios determinan tu conducta y tienen un tremendo efecto sobre la probabilidad de éxito en tu vida. Al aplicar las lecciones que aprenderás, ¡mejorarás, literalmente, tus propias posibilidades de supervivencia y las de tus amigos! En este capítulo exploraré el establecimiento y desarrollo de estos principios y te introduciré al pensamiento de Buda, Mahoma y otros grandes sobre este tema. Capítulo 3: Tu visión de la vida y tu propósito En el capítulo 3 te introduciré al poder de tu visión y a tu habilidad para planificar. Al aplicar este poder serás capaz de transformar tu vida para mejor. Para este fin te proporcionaré una técnica especial que he usado para ayudar a los atletas olímpicos, personas de negocios y a otros cientos de miles de personas de todo el mundo que querían aumentar sus posibilidades de éxito. Capítulo 4: Compasión: compréndete a ti mismo y a los demás En el capítulo 4 exploraremos un poco más a ese . Te mostraré juegos y ejercicios que te enseñarán lo creativo y único que eres. Estos mismos ejercicios te revelarán todas las cualidades espirituales que compartes con el resto de la humanidad. También te introduciré al pensamiento de los grandes líderes espirituales de la compasión y la comprensión como Gandhi, las reflexiones de John Donne, Muhammad Ali, Nelson Mandela y Ralph Waldo Emerson. Cada una de ellas te ayudará a desarrollar tu propia compasión y comprensión. Capítulo 5: ¡Da y recibe! Caridad y gratitud 11    

Cuando aprendas los dones gemelos de la caridad y la gratitud multiplicarás tu Inteligencia Espiritual varias veces. Tu alma aprende a inhalar (gratitud) y a exhalar (caridad). Uno de los hombres más ricos del siglo XIX, Andrew Carnegie, es un maravilloso ejemplo de estas cualidades. Al aplicar las lecciones de este capítulo, te harás fuerte y sano espiritualmente, a la vez te vuelves más protector, gentil y amable. Capítulo 6: El poder de la risa La risa es una cualidad vital de la Inteligencia Espiritual y te beneficia de muchas formas, incluyendo la reducción del estrés y en general conduciéndose a una vida más alegre y feliz. Las investigaciones también demuestran que la risa te puede ayudar a vivir más tiempo y más sano. Deberías terminar este capítulo siendo una persona feliz.

Capítulo: 9: Paz El mundo moderno puede proporcionar un montón de : estrés acumulado, ponerte los nervios de punta y caos mental. Para tu supervivencia, tanto espiritual como de cualquier índole, es esencial que adquieras técnicas para reducir y eliminar el estrés, para cultivar un entorno interno tranquilo, calmado y sereno. En este capítulo te guiaré con la ayuda de Maharashi y Confucio, entre otros, hacia ese estado libre de los trastornos mentales, la ansiedad y la aflicción. Capítulo 10: ¡Lo que necesitas es amor! En este último capítulo te introduciré al poder fundamental, el poder del amor leerás historias de aventuras, pruebas y tribulaciones, de muerte y esperanza, y te daré técnicas y visiones para aliviar el sufrimiento, el dolor y la desesperación. ●●●

Capítulo 7: Vuelve al patio de recreo ¿Cómo te puede beneficiar volver a ser un niño? ¡E este capítulo lo descubrirás! Las investigaciones han demostrado que cuanto más inteligente espiritualmente te vuelves, más cualidades de niño como la inocencia, la alegría, la felicidad, la espontaneidad, el entusiasmo y la aventura adquieres en tu vida.

Capítulo 8: El poder del ritual ¿Cómo puedes mejorar tu estabilidad espiritual y emocional, reducir tu nivel de estrés, ser más perseverante y tener determinación, y como resultado, ser más fuerte y estar más seguro de ti mismo?

El Poder de la Inteligencia Espiritual está diseñado para swe4r estimulante, informativo, práctico y divertido. Cada capítulo incluye: una definición de cada o cualidad escrita y la forma en que te beneficiará en la vida cotidiana; historias para inspirarte y guiarte en el desarrollo de tu Inteligencia Espiritual, y palabras de sabiduría que nutrirán tu pensamiento espiritual. En cada capítulo también hay ejercicios espirituales con juegos prácticos y consejos para ayudarte a reforzar el aspecto concreto de la Inteligencia Espiritual que estemos tratando. Una característica adicional son los para aumentar el poder de los ejercicios, que adoptan la forma de y que puedes repetir de forma regular. Te ayudarán a pulir y reforzar tu propósito en la

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vida y mediante su repetición, reforzarán estas conexiones sinápticas de tu cerebro, aumentando este tu poder mental y espiritual. Los potenciadores del espíritu han sido especialmente diseñados cuidando las palabras para evitar las trampas en las que el te puede hacer caer. Su propósito es conseguir que: • • • • •

tu cuerpo esté bien asentado; tu mente clara; tu alma arraigada; tu energía fluya; tu Inteligencia Espiritual y tu vida estén en continua evolución.

El Poder de la Inteligencia Espiritual también incluye Mapas Mentales®: herramientas gráficas y de colores que he estado desarrollando durante toda mi vida. Son excelentes mapas de ruta para la memoria, que te permiten organizar los hechos y los pensamientos de manera tal que desde el principio conectan con la forma natural de funcionamiento del cerebro. En los capítulos habrá ejemplos de los Mapas Mentales® y referencias a los mismos, así como ejercicios en los que se usarán los Mapas Mentales® para potenciar y desarrollar tu Inteligencia Espiritual. Siguiendo las ideas que contiene este libro podrás potencias y desarrollar tu Inteligencia Espiritual. Para que te hagas una idea de tu progreso a lo largo de tu camino espiritual, intenta responder a las siguientes preguntas y luego regresa a ellas cuando hayas terminado de leer este libro. 1. ¿Te sientes uno con la naturaleza? SÍ/NO 2. ¿Eres juguetón? SÍ/NO 3. ¿Considera la gent4 que eres un niño (no infantil)? SÍ/NO

4. ¿Te gustan los niños? ¿Te corresponden de verdad? SÍ/NO 5. ¿Se te conoce por ser comprensivo con los problemas de los demás? SÍ/NO 6. ¿Acude la gente a tu para pedirte ayuda sobre asuntos personales, éticos o espirituales? SÍ/NO 7. ¿Te gustan todos los tipos de climas? SÍ/NO 8. ¿Te disgustan muchos tipos de clima (frío, calor, lluvia)? SÍ/NO 9. ¿Te gustan los animales? ¿Te corresponden? SÍ/NO 10. ¿Te dedicas a matar moscas, insectos y todo tipo de bichos aunque no te molesten? SÍ/NO 11. ¿Crees que la sinceridad es la mejor vía? SÍ/NO 12. ¿Crees que la raza humana tiene un verdadero propósito? SÍ/NO 13. ¿Crees que la caridad y las obras caritativas son sólo para los que ? SÍ/NO 14. ¿Experimentas con frecuencia sentimientos de respeto reverente y asombro? SÍ/NO 15. ¿Tienes momentos de gran júbilo? SÍ/NO 16. ¿Tienes sentimientos de unidad con todo lo que te rodea? SÍ/NO 17. ¿Oras o meditas con regularidad? SÍ/NO 18. ¿Te intrigan o entusiasman las preguntas sobre el sentido de la vida, la naturaleza del bien y del mal y la relación de los seres humanos con el universo? SÍ/NO 19. ¿Te gusta el sonido del silencio? SÍ/NO 20. ¿Te preocupas por el planeta? SÍ/NO 21. ¿Te amas a ti mismo? SÍ/NO 22. ¿Recoges tu basura? SÍ/NO 23. ¿Sientes que hay alguien o algo con un poder o energía mayor que la tuya? SÍ/NO 13    

24. ¿Tienes esperanza? SÍ/NO 25. ¿Tienes entusiasmo? SÍ/NO 26. ¿Eres compasivo? SÍ/NO 27. ¿Estás agradecido por tu vida? SÍ/NO 28. ¿Eres respetuoso y considerado con los demás? SÍ/NO 29. ¿Eres creativo? SÍ/NO

San Agustín

¡El primer principio de la Inteligencia Espiritual es la realización de que eres un milagro y que eres maravilloso! No hay duda al respecto, has de sentir asombro reverente por ti y por los demás. Cada uno de nosotros es más precioso, valioso, único, hermoso e inestimable que el rubí o diamante más precioso y raro. Un milagro se define como cualquier cosa o acontecimiento o , como en . La palabra procede de la palabra latina miraculum, que significa maravilla o cosa maravillosa. No podemos negarlo, todas las pruebas respaldan el hecho de que somos sorprendentes. Pensemos en el milagro de nuestra propia ingeniería:

Consigue una Capítulo uno

• Nuestro cuerpo está formado por 200 huesos de compleja estructura y perfectamente articulados; 500 músculos con miles de millones de fibras musculares y casi doce kilómetros de fibras nerviosas que se encargan de coordinarlo todo. • Nuestros ojos, orejas, nariz, piel y boca son tan sensibles y complejos que los científicos no pueden llegar a explicar

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del todo cómo trabajan, mucho menos duplicar adecuadamente sus funciones. • Nuestro corazón es la bomba mecánica más sorprendente jamás diseñada; bombea a un promedio de 36 millones de veces cada año de nuestra vida. • El número de células de nuestro cerebro equivale a 167 veces la población de nuestro planeta. ¡Cada una de ellas es más potente que los ordenadores personales estándar en los que cada vez confiamos más! También sabemos que somos más únicos y diferentes de las demás personas sobre la Tierra que cualquier copo de nieve lo es de sus compañeros. Además sabemos que los átomos de los que estamos hechos proceden de las estrellas. Somos en el sentido más estricto de la palabra ¡hijos de las estrellas! Todos somos capaces de los actos de valor, resistencia, heroísmo y sacrificio más increíbles, así como, desgraciadamente, de los peores excesos de codicia, egoísmo, depravación y crueldad: éste es el milagro del ser humano.

Proverbio serbio

La visión más amplia Una actividad común para todos los niños del planeta, que están empezando a descubrir las dimensiones más amplias de su

mundo, es enviar una carta a un amigo o a alguien que sólo conocen por correspondencia, encabezándola como sigue: Mi querida amiga Jane Fitzgerald, 16, calle Paraíso, Londres, Inglaterra, Europa, El mundo, La Vía Láctea, El Universo Estos niños están empezando a sentir, como hacen las personas espiritualmente inteligentes, que el universo es su hogar y que viven en una serie de vecindarios cada uno mayor que el anterior. Es la inmensidad del universo lo que crea una sustancia de entusiasmo, asombro y sobrecogimiento, que suscita todo tipo de preguntas espirituales sobre el sentido de nuestra existencia, de nuestro lugar y misión individual en el mismo. Sydney Lovett Y este universo es inmenso: • nuestra Tierra no es más que uno de los nueve planetas de nuestro sistema solar que gira alrededor del Sol; 15    

• nuestro Sol es cientos de miles de veces más grande que nuestra Tierra, y sin embargo, no es más que una pequeña muestra de los diez mil millones de soles que forman nuestra galaxia local, al límite de la cual estamos girando; • nuestra galaxia es una entre el millón de millones de galaxias, todas a millones de años luz entre ellas, y cada una separada a una distancia media tan grande que ¡si viajáramos a la velocidad de la luz durante 100 años todavía no habríamos podido cruzarla! Imagina cuántos átomos (los ladrillos de toda materia) debe haber en el universo, cuando sólo un grano de arena de entre los cientos de miles de playas de nuestro pequeño planeta contiene millones de ellos. Las personas espiritualmente inteligentes intentan ser siempre conscientes de la grandiosidad de todo ser viviente y de la inmensa y gigantesca belleza del universo. Esta conciencia se ha ampliado espectacularmente gracias a la invención de los telescopios, de las sondas espaciales y, por supuesto, de los vuelos espaciales con tripulación. Gracias a estos instrumentos, han sido retransmitidas directamente a nuestras televisiones, en nuestras salas de estar, imágenes de exquisita belleza de planetas, estrellas, galaxias y nubes intergalácticas donde nacen las estrellas. Este amanecer de la conciencia espiritual queda bellamente plasmado en la historia del astronauta Edgar Mitchell. Conocía a Edgar Mitchell en 1973, un par de años después de que hubiera aterrizado en la Luna en la misión Apolo 14. Sus experiencias cambiaron radicalmente su vida y fundó un instituto para el estudio de la humanidad y el medio ambiente. Él cuenta la siguiente historia: La historia del astronauta

El entrenamiento en la NASA del equipo que voló por primera vez a la Luna fue muy exhaustivo. Los astronautas simulaban cada etapa del vuelo en lo que respecta a duración y actividades diarias; literalmente ¡, sin moverse de la propia Tierra! De hecho, el entrenamiento había sido tan intenso que Mitchell decía que apenas había sentido miedo ni entusiasmo cuando despegaron, porque le parecía muy y familiar. Esta familiaridad continuó durante todo el trayecto hasta la Luna, todo iba sobre ruedas, según lo previsto y casi de forma automática. Cuando llegaron empezaron a prepararse para sobrevolar el . Esto, al igual que todo lo demás, también había sido ensayado. El viaje tenía que durar tan sólo alrededor de una hora. Lo especial de ir al lado oscuro de la Luna era que pro primera vez en todo el viaje, no verían la Tierra, y ninguna onda de radio ni televisión podría llegar hasta allí ni rodear la Luna. ¡Los astronautas perderían todo contacto con la Tierra! Mitchell dijo que los primeros cinco minutos en el lado oscuro fueron bien, pero que después el entrenamiento de simulación empezó a desvanecerse, y que la preocupación, cierto grado de temor y su imaginación empezaron a dispararse. Comenzó a pensar cada vez más en la Tierra, en su esposa y sus hijos, su hogar, su vecindario, sus amigos y en los lugares que conocía, en el cambio de colores de las estaciones. Mientras todo esto sucedía el tiempo empezó a estirarse en la imaginación de Mitchell, como sucede cuando estás esperando a alguien que amas y que se retrasa. Pero esto no era sólo por una personas a la que Mitchell estuviera esperando. Esto era por todas aquellas personas y cosas a las 16    

que amaba. Empezó a preguntarse si existirían algunos extraños efectos de salto en el tiempo en el lado oscuro de la Luna y si él y los demás se habían quedado atrapados en una noche eterna. Mitchell narró que los minutos empezaron a parecer días: el tiempo más allá de la Luna se estaba convirtiendo en una eternidad. Después de lo que parecieron eones, regresaron al otro lado. ¡Y allí estaba la Tierra, por fin! Pero la Tierra no era como Mitchell la había imaginado. En su mente era el gigantesco planeta sobre el que existía el universo de su hogar y familia. Lo que ahora veía era un diminuto planeta azul flotando en la vasta oscuridad del espacio. Rodeándola había una frágil y finísima capa blanca, toda nuestra atmosfera. Mitchell sentía que casi podía alcanzarla con la mano y lanzar a la Tierra al olvido, como si fuera una pequeña perla. Ese momento y esa realización repentina de la fragilidad de nuestro hogar en la vastedad de nuestra gran casa, provocó un cambio de paradigma en Edgar Mitchell. Cuando regresó a la Tierra sintió mucha más compasión e interés por los demás seres humanos y decidió dedicar el resto de su vida a ayudar a proteger este delicado, único y hermoso planeta. El amor y el respeto por la naturaleza es muy característico de las personas espiritualmente inteligentes. Las culturas tribales que tan a menudo admiramos por su Inteligencia Espiritual, como los indios nativos americanos y los aborígenes de Australia, son conocidos por su respeto y amor a los animales y otros seres vivos, y por su veneración y respeto por el Universo. Esto surge de una

afiliación con la Tierra y de un sentimiento de responsabilidad de actuar como sus guardianes. Nútrete en la naturaleza Las inspiraciones espirituales a menudo se dejan conocer a través de la música y de la poesía, y los músicos y poetas suelen tener como musa a la naturaleza. Byron en Childe Harold’s Pilgrimage escribió: Así mismo el poeta visionario, artista y místico William Blake escribió: Y al escribir una visión ideal frente al universo, Blake inmortalizó las siguientes líneas: Beethoven, Mozart y muchos otros grandes músicos utilizaron la naturaleza como fuente de inspiración, incorporando en su música los cantos de los pájaros, los sonidos del viento y del agua, las llamadas de los animales y los sonidos creados por los 17    

campesinos y granjeros en sus quehaceres. ¡Los cuatro movimientos de la Sexta Sinfonía de Beethoven (Pastoral) están inspirados en un paseo por el campo! La naturaleza tiene su forma de recompensar a quienes la investigan, realzando sus percepciones en todas las cosas y aumentando de este modo su Inteligencia Espiritual. Uno de los ejemplos de alguien que no ha dejado de sorprenderse ante la belleza y complejidad de la naturaleza es el productor de televisión británico sir David Attenborough, cuyas premiadas series sobre animales, plantas y la vida salvaje han sorprendido e inspirado a millones de televidentes de todo el planeta. Quizá nadie haya quedado más cautivado por las maravillas de la naturaleza como el propio sir David. Si piensas en lo siguiente comprenderás por qué él y personas como las investigadoras Jane Goodall y Dian Fossey en su trabajo con los chimpancés y gorilas en peligro de extinción, han quedado tan fascinados por la vida salvaje. • ¿Cómo aprende una planta a imitar la forma, los colores y el aroma de una avispa hembra a fin de atraer al macho para su apareamiento con y así polinizar las flores? • ¿Cómo evoluciona una semilla gigante que requiere un incendio forestal cada cincuenta años para que queme su cáscara y pueda reproducirse? • ¿Cómo conoce la mariposa monarca el camino desde el norte de Canadá su lugar preciso de anidamiento en el centro de México? • Como sabe exactamente el salmón, tras años de nadar por los océanos, dónde está su lugar de desove vaginal?

Este respeto por la vida y los seres vivos es una parte importante de la Inteligencia Espiritual; si matas moscas, arañas y otros insectos por costumbre, ¡te quedas en la categoría inferior!

¡Han vuelto a nacer tras haber visto la muerte de cerca! A menudo, muchas personas espiritualmente inteligentes narran que ver la muerte de cerca les ha ayudado a de su letargo espiritual. ¡Una de esas experiencias precisamente fue la que me hizo apreciar la vida mucho más que antes! Teri y su segunda vida Un buen amigo mío, Teri, era un hombre atlético que siempre estaba muy en forma, era ciclista, escalador y espeleólogo. El final de su llegó cuando descendía por una pared vertical de una cueva. Se agarró a un pequeño saliente de la roca y éste se desprendió quedándosele en la mano. Sus últimos momentos conscientes los pasó dándose cuenta de que se estaba cayendo hacia atrás desde una altura de 54 metros; se rajó la cabeza en un saliente mientras caía, y terminó sobre un maldito montículo en el fondo de la cueva con una rodilla destrozada, la pierna, el pie, el brazo y las costillas rotos, un pulmón perforado y el cráneo con diversas fracturas. La de Teri comenzó en el hospital cuando recobró la conciencia y se dio cuenta de que había . Todo le parecía mucho más brillante, más memorable y con más sentido. Después de treinta años Teri sigue contando que haber tenido una cambió ampliamente su actitud respecto a la vida cotidiana. Cada día es un regalo y pasa su tiempo 18    

disfrutando de cada momento. Se le conoce por ser un hombre tremendamente humano y compasivo, con el don de hacer que los demás se sientan cómodos con su generosidad y humor. Tal como él mismo lo resume: . Tony y el En unas vacaciones en el Caribe, me había ido a bañar por la mañana temprano en una bahía de extraordinaria belleza con un agua de color azul cristalino, lisa como un espejo por la calma de la noche anterior. Sin prestar demasiada atención a mi rumbo terminé haciendo una larga serie de brazadas lentas hacia atrás. Cuando me detuve y me giré, vi algo que parecía un globo hinchado en la superficie del agua y sin pensarlo (¡lo cual siempre es peligroso!) nadé hacia ello. Observé que el color el agua debajo de la superficie no era el azul lavanda que cabía esperar. De pronto mi cerebro reconoció las señales de peligro y me gritó: ¡Carabela portuguesa! Aterrado, me revolví en el agua, pero era demasiado tarde. Los hermanos tentáculos de color purpura de la medusa gigante se enrollaron alrededor de mi cintura y piernas y me propulsaron fuera del agua con un gran dolor. Sentí como si me hubieran envuelto con una alambrada de espino a través de la cual me estuvieran dando descargas eléctricas. De pronto recordé (y comprendí) los múltiples casos que había leído de personas que habían muerto tras sufrir este percance. Durante 10 o 15 minutos siguientes era como un

personaje de los dibujos animados de Walt Disney, ¡mis piernas daban sacudidas como si fueran un motor fueraborda intentando regresar a la orilla! En cada brazada me preguntaba si el veneno me iba a matar rápidamente o paralizar mis músculos hasta quedarme en una rigidez tal que haría que me hundiera. ¡El hecho de que estés leyendo este libro significa que sabes que lo conseguí! Pasé algún tiempo en el hospital y cuando salí todavía estaba bajo el efecto del shock; la madre naturaleza me había enseñado una serie de lecciones, entre ellas que tenía que ser más observador y estar más atento a los peligros. Sin embargo, lo más importante que aprendí mientras me enfrentaba a la idea de que quizá no me quedara más tiempo, fue prestar mucha más atención a apreciar y disfrutar del de todos los días que había tenido y que todavía me quedaban.

¿Haces que cambien las cosas? Enseñanza sufí Otro de los distintivos de las personas espiritualmente inteligentes es que están convencidas de que pueden cambiar algo. ¡Por supuesto que sí! Todo lo que dices, haces o creas afecta a tu entorno y a las personas que te rodean, y tanto éstas como 19    

aquellas afectan a los demás y así sucesivamente hasta el infinito. Esta causa y efecto se pueden confirmar mediante la teoría del caos, según la cual una mariposa batiendo sus alas en la selva amazónica puede causar suficiente turbulencia de aire como para acabar provocando un tifón en Java. ¡Tu alma y tú sois , tanto si te gusta como si no! Lo que si puedes elegir es que esa influya en la raza humana y en el planeta de una forma positiva; dejarlo a su suerte o bien trabajar en su contra. ¡Es evidente, que la persona espiritualmente inteligente elija la primera de estas opciones! Ahora que ya eres consciente de tu propia magnificencia, de la inmensidad y la belleza del universo en el que vives, de la maravillosa naturaleza de la Naturaleza y del hecho de que tu espíritu es inmortal, ya estás preparado para un ejercicio espiritual.

Ejercicio espiritual 1.

2.

Recuérdate a ti mismo lo milagroso que eres Recuérdate le mágico trabajo de diseño que eres. Fíjate el propósito de recopilar más información sobre las extraordinarias capacidades de tu cuerpo y cerebro. Visita bibliotecas o librerías y busca algunos libros científicos actuales que no sean muy técnicos y que traten del cerebro y de los genes. Mira también algunos documentales científicos en televisión. Aplica constantemente este conocimiento a tu propia autoconciencia y al desarrollo de la confianza en ti mismo. Recuerda que todos somos milagrosos Aplica tu conocimiento recién adquirido sobre tu propio esplendor a todas las personas que te rodean: tus amigos, familiares, hijos, compañeros, las personas que conoces en la

calle, y sí (¡éste es un libro sobre Inteligencia Espiritual!), incluso a tus enemigos. Una vez empieces a darte cuenta de que todo el mundo es tan único como tú, descubrirás que miras a las personas de una nueva forma; las verás con la chispa de la divinidad en su interior. Decide qué puedes hacer para apreciarlas, ayudarlas y aprender más de ellas. 3.

Aprende de las cosas que te han pasado en la vida Revisa tu vida y los principales acontecimientos, traumas, sufrimientos y fracasos. Date cuenta de que cada una de estas cosas es algo que está reforzando tu espíritu. Haz todo lo que puedas para que esa experiencia te ayude a desarrollar más tu fortaleza: busca los aspectos positivos, consuelos y todas las lecciones posibles que puedas aprender.

4.

Aprende a apreciar la vida salvaje Dedica un tiempo a apreciar la belleza polisensorial que te rodea. Camina por un parque o a algún jardín botánico (si eres lo bastante afortunado como para vivir cerca de uno) siempre que puedas. Absorbe aire fresco, huele los diferentes aromas, escucha los sonidos y la paz. Prueba hacer esto solo y acompañado de familiares y amigos.

5.

Juega a Piensa en todos los pensamientos que has tenido en tu vida hasta ahora. Luego piensa en cuántas personas pueden haber pensado exactamente lo mismo, al mismo tiempo y en el mismo lugar. Eres único entre todos los seres humanos que han vivido, viven y vivirán jamás. Estás solo en este vasto universo. Pero al estar solo te conviertes en uno más de esos seis mil millones de seres humanos que habitan en este planeta que también están

20    

solos. ¡Todos juntos estamos solos! Piensa en ello y maravíllate de tu simultánea individualidad y comunalidad. 6.

¡Mira a las estrellas! Miera a las estrellas por la noche e intenta conocer las constelaciones, mejor aún, invierte en un telescopio básico y empieza a explorar los cielos. Es sorprendente, pero todo el universo que estás viendo ¡lo estás recreando en tu cabeza! Piensa ¡el minuto y microscópico tú puedes asimilar, contener y recrear el universo!

7.

Hazte preguntas Hazte preguntas como: • • •

¿Tiene límites el universo? Si es así, ¿cómo y dónde? Si no lo es, ¿cómo es posible? ¿Podría todo nuestro universo ser un simple átomo de otro universo mucho mayor? ¿Existe una fuera unificadora que hace que todo esto funcione? Si es así, ¿cuál es?

Deja volar tu imaginación, mejo aún, pregunta a tus amigos y compañeros y observa qué tipo de respuestas creativas e imaginativas puedes recopilar. Lee libros de cosmólogos y científicos que estén explorando las fronteras del conocimiento sobre el universo y sus habitantes. 8.

• Mercurio: ¡10.000 grados centígrados en su lado soleado, sin aire, más irradiado que un microondas y cerca de los cero grados absolutos en lado oscuro. • Venus: 450 grados centígrados de temperatura media, azotado por vientos de ácido sulfúrico de más de 640 kilómetros por hora, jamás se ve el cielo nocturno. • Marte: temperatura a menudo a menos 100 grados centígrados. Apenas tiene atmosfera y carece de oxigeno. El Sol sólo se ve como una gran estrella. Inhóspito para la vida. • Júpiter, Urano y Neptuno: todos planetas gigantes cuya gravedad es tan fuerte que quedarías aplastado en el momento en que pusieras el pie sobre ellos, lo cual tampoco podrías hacer, puesto que sus superficies son gaseosas. Los vientos soplan a una media de 1.600 kilómetros por hora y no cesan jamás. • Plutón: un diminuto planeta sin aire, más pequeño que nuestra Luna, sin luz solar, ni atmosfera y una temperatura cercana a los cero grados absolutos.

El clima Siempre que los medios de comunicación, los amigos o tus propios pensamientos personales te inciten a quejarte sobre el clima, ¡piensa en otras opciones!

Por el contrario el planeta Tierra ¡es el Paraíso! Tan delicadamente compensado para garantizar nuestra supervivencia que cambios de menos de un 1 por ciento en la que lo creó lo habría hecho inhóspito para la vida y, por consiguiente, para todos nosotros. Por lo tanto, disfruta del tiempo ¡todo es bueno! Disfruta de cada variación desde una ola de calor hasta un viento gélido, una lluvia, helada, niebla o nieve. Son todas estas variaciones las que permiten que nuestro sistema sobreviva, crezca y nos apoye. 9.

Tomate descansos 21    

Siempre que observes que corres para apagar una mini crisis tras otra detente un momento. Utiliza los frenos como herramienta espiritual para dar un contexto y un sentido a tu vida. Estas te ayudarán a tener un mecanismo para afrontar las cosas, te proporcionarán un flujo constante de paz que te servirá para sofocar todos los pequeños incendios. De nuevo, en tiempos de estrés y de prisas, haz un esfuerzo consiente por recordar todas las «cosas buenas espirituales» que pasan «allí fuera»: la gente se esfuerza por alcanzar metas; los padres intentan ayudar y educar a sus hijos; las organizaciones caritativas procuran ayudar; los músicos interpretan y cantan; los artistas dibujan y pintan; los escritores escriben y la gente sueña y trabaja por un mundo mejor. Recuerda que formas parte de esta «visión global», que eres un miembro de un equipo tan grande como el planeta y que has de tener el valor para continuar con tus propios planes e ideales.

Potenciadores del espíritu Tal como he mencionado en la introducción, estos potenciadores del espíritu son para que los repitas en silencio, en voz alta, los cantes, los escribas, etcétera. Al igual que todas las afirmaciones repítelos regularmente, aumentarás la probabilidad de que se hagan realidad. • Soy una milagrosa obra de arte y de diseño, continuamente exploro y desarrollo mi potencial. • Cada día me preocupo más por otros seres vivos. • Soy único e igual a la vez que todos los demás seres humanos. Exploro estos sentimientos de individualidad y comunalidad.

• Todo lo que digo, hago y creo tiene efectos incalculables y eternos. Intento que estos esfuerzos sean beneficiosos para mí y para los demás.

•

Vivo en un planeta que es un paraíso. Estoy agradecido por la oportunidad que me brinda de vivir y por los generosos regalos que me ofrece y me comprometo a cuidar de él.

Mapas Mentales® Un ejercicio mental interesante para complementar este potenciador del espíritu es visualizar que eres un astronauta que estás perdido en el espacio (un poco como se debía de sentir Edgar Mitchell). Toma una hoja de papel grande y anota todos los dones que te ofrece la Tierra y a los que soñarías regresar si estuvieras perdido en el espacio o atrapado en uno de los otros hermosos, pero inhóspitos planetas de nuestro sistema solar. Asimismo, puedes cartografiar® tus pensamientos. Los Mapas Mentales® son divertidos y fáciles de crear, son formas maravillosas de organizar y recordar tus notas y pensamientos, porque actúan conjuntamente con la creatividad natural del cerebro, en lugar de ¡ir en su contra! Para iniciar tu Mapa Mental®, empieza en el centro de una hoja de papel en blanco y dibuja una imagen de tu idea central (en este caso, el planeta Tierra). Desde esa imagen central, irradia líneas curvas de colores, como si fueran ramas de árboles, cada una de ellas con el concepto de la palabra que te surja de la mente cuando piensas en estar perdido en el espacio, soñando con la Tierra. Luego toma cada uno de esos primeros niveles de conceptos y anota lo que pase por tu mente cuando pienses en esas palabras, ¡y así con todos los niveles sucesivos! 22    

Haz tus Mapas Mentales® tan coloridos y pictóricamente inventivos como puedas; tu cerebro no piensa de forma lineal, sino que utiliza colores e imágenes. Mira los ejemplos que aparecen en este libro para ver lo bellos y divertidos que pueden ser los Mapas Mentales®. Buda

Explora tus valores Capítulo dos

Los valores son nuestros códigos de conducta interna; los principios sobre los cuales fundamos nuestras vidas y tomamos nuestras decisiones. De niños nuestros primeros valores nos los dan nuestros padres y éstos posteriormente los complementamos gracias a nuestros compañeros, profesores, creencias religiosas y el resto de la comunidad. De ellos seleccionamos consciente o inconscientemente los principios con los que decidimos regir nuestra conducta y nuestras vidas. Los valores son la ética y las reglas de conducta que nos establecemos para nosotros mismos, y normalmente incluyen conceptos tan universales como veracidad, honestidad, imparcialidad, justicia, honor, etcétera. Dichas reglas de conducta son esenciales para nuestra supervivencia personal y social; sin ellas ¡se provocaría el caos y la anarquía y la civilización se extinguiría muy pronto! Cuando hayas terminado este capítulo tendrás la oportunidad de considerar los principales valores que han elegido las civilizaciones y los grandes pensadores espirituales a lo largo del tiempo. Entre ellos podrás seleccionar esos principios de la 23    

Inteligencia Espiritual que creas que guiarán mejor tu propia vida y conducta y que te proporcionarán un fundamento sólido y reconfortante para todas tus decisiones morales, éticas y de cualquier otro tipo. «El reto para todo ser humano es la creación. ¿Crearás con respeto o con descuido?» Gary Zukav

¡Buenas noticias desde el frente del cerebro! Tus pensamientos son reales Las investigaciones han demostrado que tus pensamientos no son simplemente cosas «vagas» que existen en alguna tierra de nunca jamás. Los pensamientos son señales electromagnéticas y bioquímicas muy reales que transmiten mensajes a través de la red de nuestras células cerebrales, como si uno tras otro se fueran encendiendo por todo el país una cadena de faros de señalización. Lo más importante, al igual que cuando creamos un camino a través de un bosque, es que cada vez que una señal electromagnética y bioquímica en particular (un pensamiento) se transmite a través de una ruta en concreto, su recepción es cada vez más fácil (a medida que el camino queda más marcado) y aumenta la probabilidad de que ese pensamiento tenga su efecto deseado. El pensamiento negativo produce mayor negatividad, mientras que el pensamiento positivo mejora la salud, las perspectivas, la creatividad y más cosas. Con los valores rige exactamente el mismo principio. Si tus valores son contraproducentes para ti mismo y para la salud y el bienestar de los demás, aumentarás la probabilidad de que tu vida y la de los otros

sea insatisfactoria. Si tus valores son positivos serán buenos para ti y para los demás. La repetición de las acciones que rodean tus valores rápidamente se convierten en costumbres y estas costumbres son la base de gran parte de tu carácter y de la expresión del mismo. «El pensamiento se manifiesta como la palabra, la palabra se manifiesta como el acto, el acto se convierte en hábito, y el hábito se consolida en el carácter. Observa el pensamiento y sus formas con cuidado. Y deja que surja del amor que nace de la preocupación por todos los seres.» Buda Ahora que ya eres consciente del poder del pensamiento, significa que recobras el control de tu propia vida y que te deshaces de ideas falsas como que te persigue la mala suerte. Tú puedes crear tu buena o mala suerte y puedes responsabilizarte de ti mismo y de tus acciones. Sinergia Las investigaciones también han confirmado que tu cerebro es sinérgico, lo que significa que sus procesos de pensamiento se expanden y multiplican de forma natural, como lo hacen cuando sueñas despierto o fantaseas. Por consiguiente, si llenas tu mente de valores buenos y positivos, éstos tenderán a multiplicarse internamente. Este acto de multiplicación interior se expresará en tus acciones y empezará a afectar a quienes te rodean. A medida que sus cerebros también se vuelvan sinérgicos, habrás sido responsable de crear el efecto dominó que amplía el bien en ti y en los demás. Te convertirás en 24    

algo parecido a un Ángel de la Misericordia, un embajador de los valores positivos y de la Inteligencia Espiritual. «Quienquiera que interceda para el bien forma parte del mismo; y quienquiera que interceda para el mal también lo comparte.» Mahoma La verdad y la honestidad: el estado natural de tu cerebro Una de las noticias más alegres procedentes de los laboratorios del frente del cerebro es que los seres humanos somos honestos por naturaleza y que tendemos hacia la verdad. ¡De hecho, nuestros cerebros son mecanismos buscadores de la verdad! ¿Por qué es así? La respuesta es sencilla: necesitamos conocer la verdad a fin de poder sobrevivir. Por ejemplo, si no sabes la verdad de lo que sucede cuando un camión de dos toneladas que circula a 60 kilómetros por hora entra en contacto con una forma humana relativamente estática, ¡bien puede ser lo último que sepas en tu vida! Necesitamos conocer la verdad sobre toda causa y efecto, necesitamos saber qué es lo que está pasando a nuestro alrededor, dentro y fuera del alcance Inmediato de nuestros sentidos, necesitamos conocer la verdad. Ésta es la razón por la que prácticamente todos los grandes artistas y científicos -Newton, Einstein, Da Vinci, Cezanne, Dalí, Picasso, etcétera-, dijeron que la estaban buscando. También es la razón por la que los niños insisten tanto en ceñirse por completo a la verdad y a la sinceridad y se sienten tan defraudados cuando sus padres se desvían de lo que les han prometido o dicho. La furiosa acusación «pero esto no es justo, tu

dijiste...» es una expresión de ira; pero lo más importante, es que es una expresión de miedo. ¿Miedo a qué? Miedo de no ser capaz de confiar en algo que otra persona ha afirmado que era cierto. Miedo a la increíble y aterradora incertidumbre producida por la información contradictoria. En otras palabras, miedo a la supervivencia. Pues si los datos que se le dan a un niño son inexactos o contradictorios y si éste actúa según dicha información, es perfectamente consciente del hecho de que sus probabilidades de supervivencia son menores. Del mismo modo, nuestros antepasados de las cavernas tuvieron que ser capaces de confiar el uno en el otro; si uno decía que una cueva concreta era un buen lugar para vivir, los demás tenían que confiar en que no estuviera mintiendo y que ¡la cueva no era en realidad el hogar de un oso enorme, feroz y poco amistoso! Cuando buscas la verdad, lo cual es tu tendencia y tu derecho natural, te estás ayudando a ti mismo y a los demás a sobrevivir. A la inversa, cuando no eres honesto contigo mismo ni con los demás, estás reduciendo tus posibilidades de supervivencia. Estás aumentando la probabilidad de que tú y los demás actuéis basándoos en información falsa, y por consiguiente, que podáis cometer errores de conducta y acciones que puedan poner en peligro vuestros intereses. La pregunta filosófica de «¿Es mejor actuar con deshonestidad para conseguir un bien a corto plazo o con honestidad para una posible desventaja a corto plazo y una gran ventaja a largo plazo?», ha sido tema de debate durante muchos siglos. Tú, al igual que los grandes genios de todos los tiempos, y el universo, ¡responderás que la búsqueda de la verdad a largo plazo es la mejor opción! Ha llegado el momento del ejercicio espiritual, durante el cual tendrás que considerar una gran variedad de valores de los 25    

cuales puedes seleccionar los que desees que te guíen durante el resto de tu vida.

Ejercicio espiritual 1. Código de conducta En esta época de éticas rápidamente cambiantes, presiones para resignarse y creciente egoísmo, si cuentas con tu propio código de conducta personal o con valores firmemente establecidos, tu vida puede ser mucho más sencilla. Si tienes unos cuantos valores sólidos y una clara línea de conducta que no puedes violar, te será más fácil hacer frente a los dilemas y a las situaciones cuando surjan. 2. Valores espirituales Entre los valores espirituales más mencionados se encuentran: Verdad Compasión Amor Tolerancia Unidad Paciencia

Honestidad Cooperación Comprensión Integridad Gratitud Justicia

Valor Libertad Caridad Confianza Humor Igualdad

Simplicidad Paz Responsabilidad Pureza Persistencia Armonía

No cabe duda de que se te pueden ocurrir unos cuantos más. Selecciona «los 7 más importantes» que puedas usar como guías para tu propia conducta y como principios sobre los que basarás tu moral, ética y vida espiritual.

(Es aconsejable incluir la verdad u honestidad entre ellos, puesto que son una buena base en la que se pueden apoyar los demás.) 3. Cartografía mentalmente tus valores Cuando hayas seleccionado tus 7 valores más importantes en la vida, haz un Mapa Mental® basándote en ellos (como hiciste en el capítulo 1, véase página 51). Crea una imagen que resuma tu propio código de conducta y que cada uno de tus siete valores éticos más importantes ocupe una de las ramas principales que irradian del centro. A cada rama añádele palabras que asocies con esa idea en particular, subrayando o poniendo en casillas las que consideres más importantes. 4. Vive tus valores Piensa exactamente cómo puedes poner en práctica cada uno de tus 7 valores principales, haz una lista de actividades específicas que puedes hacer para asegurarte de que vives según ellos. Por ejemplo, si uno de tus principales valores es la caridad, sé generoso con tu tiempo y dinero, colabora en alguna organización benéfica de tu zona o dona algunas de las cosas que no necesitas. Intenta también pensar en lo mejor de las personas, incluso (quizás especialmente) cuando son desconsideradas o groseras, o cuando te resultan muy irritantes. Si la integridad es importante para ti, haz lo que dices: si un compañero de trabajo te hace una confidencia, no vayas por ahí contándola al resto de la oficina; si te consideras una persona honesta, devuelve el billetero perdido que te has encontrado en la calle a la policía local, no te embolses el dinero pensando «¡El que se lo encuentra, se lo queda!» Vive según tus propios valores internos y evitarás todo el estrés y agobio que generan las conciencias incómodas y las 26    

acciones moralmente dudosas, y así ¡estarás usando tu Inteligencia Espiritual en tu propio beneficio y por un bien superior! 5. Habla de tus valores Al hablar de tus valores con tu familia, amistades y compañeros adquirirás un conocimiento más profundo de ti mismo, pulirás lo que has pensado y comprenderás más a fondo a aquellos con quienes hablas de los mismos. Hablar de tus valores te ayudará a asegurarte de que realmente son importantes para ti. «Me doy cuenta de que la mayor parte de las miserias de la humanidad se deben a falsas estimaciones sobre el valor de las cosas.» Benjamín Franklin 6. Confía en ti mismo Confía en ti mismo. Cualquiera puede darte valores, pero para que éstos realmente funcionen, tienes que asimilarlos, han de formar parte de ti. Cuando tomas esta decisión, cuando tus principios morales y valores buenos crecen dentro de ti por sí mismos, se vuelven como músculos de acero flexibles que te protegen contra todos los ataques, que te conceden una fuerza y un poder infinitos.

inmediato a lo que hacemos. Pero piensa de nuevo, cuántas veces has hecho algo bueno y sus resultados han tardado años en llegar. ¡Mi Ángel de la Misericordia no tenía ni idea de que sus actos de amabilidad, compasión y amor un día darían como resultado un libro en el que apareciera ella y que acabarías leyéndolo tú! 8. Deshazte de todos los «bloqueos espirituales» Revisa tu vida y observa si hay alguna situación que te esté «perturbando» porque te estás reprimiendo de decir algo que quieres decir o eres consciente de alguna acción que has hecho en el pasado y de la cual te avergüenzas. Si hay alguna situación similar, busca la manera de «corregir los errores», sé sincero, di la verdad que no quieres callar e intenta enmendar los errores del pasado. 9. Modelos de rol Elige siete modelos de rol del pasado o del presente, de personas a las que consideres ejemplos ideales para encontrar la verdad y conseguir una conducta virtuosa, moral y ética. Siempre que te encuentres en un dilema moral, utilízalas como tu «panteón interno de cerebros» consejeros. «Pregúntale» a cada uno de sus miembros qué harían en tu situación. ¡Los resultados te sorprenderán y agradarán! También te consolará y te dará fuerza saber que tienes unos amigos y aliados tan poderosos.

«Piensa el bien, haz el bien, di la verdad.» Zoroastro 7. Recuerda: tus acciones importan Recuérdate constantemente que tus acciones, no importa de qué tipo, siempre tienen un efecto. En nuestra acelerada sociedad buscamos una causa y efecto inmediato; para un resultado

Potenciadores del espíritu

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• La verdad y la honestidad serán los faros que guíen mi vida. Cada vez soy más honesto conmigo mismo y con los demás y me agrada que así sea. • Soy un ser humano ético y moral. Utilizo mis principios para ensalzar mi propia vida y la de quienes me rodean. • Soy una persona de confianza. Mi palabra es mi deber. • Soy una persona justa. Cada vez soy más justo en todas mis acciones. • Soy una persona respetable y estoy dirigiendo mi conducta y mi vida hacia aquello que me ayudará a sentirme bien.

Capítulo tres

«Cuando no hay visión, la gente perece.» Proverbios 29:18

La visión, en el sentido del propósito de tu vida, se define como la habilidad para pensar o planificar el futuro con imaginación y sabiduría, incorporando una imagen mental de cómo puede ser y será éste. Como visionario en ciernes vas a pensar en tu propio futuro con imaginación, sabiduría y ¡con un poco de ayuda de algunos de los grandes pensadores de todos los tiempos! Tu visión de la vida, tu plan o propósito es la meta a la que aspiras y la «luz que guía» tu vida. Si tu meta es espiritual, tiene que ser personal y transpersonal. La siguiente reflexión de Viktor Frankl resume lo que acabo de decir:

Tu visión de la vida y tu propósito

«Los que hemos vivido en los campos de concentración podemos recordar a los hombres que entraban en los barracones consolando a los demás, dándoles su último trozo de pan. Puede que no fueran muchos, pero ofrecieron suficientes pruebas de que a un ser humano se le puede quitar todo salvo la última de sus libertades, elegir una actitud en cualquier circunstancia, elegir su propio camino.» Esa falta de trascendencia en las metas de muchas personas aparentemente felices, adineradas y con éxito es la que puede 28    

llevarlas a una situación en que se den cuenta de que a pesar de todo su éxito y riqueza material y mundana, sus vidas están vacías y carecen de sentido. Este sentimiento de «debe de haber algo más en la vida que esto...» está conduciendo a un número de personas cada vez mayor a cuestionarse, evaluar y cambiar radicalmente sus vidas. Estas personas están desarrollando su Inteligencia Espiritual. Como ya te irás dando cuenta, cuanto más grande es la meta que te has propuesto en la vida, mayor será el impacto que causarás en quienes te rodean y en la historia. Las metas de los grandes líderes espirituales como Moisés, Lao Tzu, Confucio, Jesús, Buda, Mahoma, eran infinitas y eternas. Su obra e influencia en la actualidad es mayor que cuando estaban vivos. En este capítulo aprenderás la «fórmula de la visión» que he desarrollado para ayudar a los atletas, estudiantes y a cualquiera con un cerebro que desee aprender a usarla y a conseguir éxito. Esta fórmula te ayudará a aportar un mayor sentido y dirección en tu vida -aumentará tu seguridad e interés en el mundo que te rodea, te permitirá hacer amigos con más facilidad, y te proporcionará sorprendentes nuevas reservas de fuerza, resistencia y poder.

La fórmula de la visión espiritual El gran genio Johann Wolfgang von Goethe, escritor, artista, atleta, político y visionario, es el autor de una maravillosa cita sobre la visión y el propósito de la vida, que vale la pena contemplar mientras decides cuál es tu propia meta espiritual: Hasta que no te comprometes existe la duda, la oportunidad de volverse atrás... Sólo hay una verdad elemental, cuyo desconocimiento termina con incontables ideas y espléndidos planes. Esto es, que en el momento en que uno se compromete, la Providencia también lo hace. Para ayudarte

acontecen todo tipo de cosas, que de otro modo nunca habrían sucedido. A partir de la decisión se produce toda una cadena de acontecimientos, provocando todo tipo de imprevisibles incidentes y ayuda material, que ningún ser humano hubiera podido soñar que llegarían a producirse de ese modo. Cualquier cosa que puedas hacer o soñar puedes hacerla, empieza. La audacia es genialidad, poder y magia en sí misma, empieza ya. Lo que significa esto es que cuando refinas tu visión, lo cual estás a punto de conseguir, este nuevo propósito empezará inmediatamente a afectar tu conducta y acciones y cambiará tu visión diaria, dando a tu vida un rumbo que atraerá a personas, ideas y formas nuevas de energía. La fórmula para crear un propósito de vida eficaz se compone de tres elementos: 1. Ha de tener una dirección personal (por lo tanto, has de decir ). 2. Te ha de comprometer con la acción (no puedes decir , o ). 3. Ha de ser positiva. Ejemplos maravillosos de dichas metas incluyen el de Isaac Newton que simplemente decía: Por el contrario, un ejemplo de meta ineficaz sería algo como, . Esto

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se concentra en lo negativo, creando un estrés y un tono desagradable innecesarios. ¡Ha llegado el momento del ejercicio espiritual!

yo soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma. 3. Ayuda a los demás

Ejercicio espiritual 1. Decide la meta de tu vida El compromiso es de suma importancia. Es esencial para que empieces a comprometerte ahora. Tu visión no ha de ser decisiva e irrevocable. Es importante que empieces a dedicarte a una meta que sabes que te beneficiará a ti y a los demás. A medida que pase el tiempo y aumente tu experiencia, podrás adaptar esta meta cuando te veas preparado. Tampoco tengas miedo de imitar. Si quieres empezar con la de Isaac Newton o la de cualquier otro de El Poder de la Inteligencia Espiritual ¡adelante! Una vez hayas seleccionado tu visión y propósito y te hayas comprometido con ellos, has de escribirlos y repetirlos en silencio, idealmente al menos cinco veces al día. Cada repetición hará que tu compromiso con tu visión sea mayor y aumentará tus posibilidades de éxito. 2. Haz tuya tu visión Una vez tienes tu visión, recuerda que es sólo tuya. Es un regalo especial que el universo te ha dado, una anfetamina o vitamina última, que te proporciona una energía increíble y que sólo te beneficia. El siguiente poema de William Henley, citado por Martin Booth en su Industry of Souls te servirá de recordatorio constante e ideal para ti: No importa cuan estrecha sea la verja, los castigos que haya escritos,

«Hay una verdad que permanece firme. Todo lo que sucede en la historia del mundo se basa en algo espiritual. Si lo espiritual es fuerte, se crea la historia del mundo. Si es débil, la historia del mundo sufre.» Albert Schweitzer Adopta la costumbre de contribuir en la sociedad y ayudar a los demás. Hazlo con una actitud positiva. Por ejemplo, si ves basura en la calle, no maldigas a quienes son tan poco conscientes espiritual y medioambientalmente que la tiran sin pensar. No la dejes allí para que otros tengan la misma experiencia desagradable que tú, ¡recógela! Ayuda también a los demás a desarrollar la misma conciencia espiritual que tienes tú, anímales a buscar su visión de la vida. La mejor ayuda es el ejemplo, ¡las acciones siempre valen más que las palabras! 4. Responsabilidad # 1: Haz que el mundo sea un lugar mejor Cualquiera que sea tu visión, incorporará un sentido de la responsabilidad. Decide que tu paso por la vida esté marcado por acontecimientos y acciones, grandes y pequeñas, que dejen el mundo mejor que estaba, gracias a tu aportación. Estas acciones no tienen por qué ser espectaculares, acontecimientos que cambien al mundo (erradicar el hambre de golpe y la deuda mundial, por ejemplo). Las pequeñas acciones son igualmente importantes y todas ellas aportan felicidad: cede tu asiento (¡con 30    

amabilidad!) en el tren o en el autobús a alguien que le cueste más estar de pie que a ti; si alquilas una casa en el campo o un apartamento para verano, asegúrate de que lo dejas limpio y ordenado y piensa en colocar algunas flores frescas para los siguientes ocupantes, si puedes planta un árbol o semillas en tu jardín o dona uno a un parque de tu zona, tú no verás los beneficios de tus acciones, pero tus nietos sí. 5. Responsabilidad # 2: ¡Cuida de ti mismo por tu propio bien! «La responsabilidad es el precio de la grandeza.» Winston Churchi11 Recuerda que para realizar tu visión has de «estar en plena forma». Cuanto más presente estés, más podrás contribuir, de modo que vigila tu dieta y asegúrate de que te «alimentas» regularmente con ejercicio (al menos tres veces a la semana), con lo cual ofreces a tu corazón y músculos un buen ejercicio. 6. Inspírate con los demás Cada vez que tengas la oportunidad, lee o habla sobre las grandes figuras de la historia, especialmente las espirituales. Descubre sus visiones y cómo lucharon para hacerlas realidad. Aprende todas las lecciones que puedas y luego ¡intenta aplicarlas! 7. Analiza tu «diálogo interno» El «diálogo interno» se refiere a esas pequeñas conversaciones constantes que tienen lugar dentro de tu cabeza. Muchas veces son negativas, especialmente en situaciones de aprendizaje. Frases como «Nunca podré hacer esto», «Soy estúpido»,

«¡Mierda! ¿Para qué sirve esto?», «Soy peor que los demás», «No tengo talento para esto», «¡Me rindo!», son bastante comunes. Tu visión de la vida ha de ser positiva y lo mismo tu «diálogo interno». Si es negativa, acaba con tu éxito; si es positiva apoyará tu creciente éxito. 8. Ponte a la cabeza de la visión: afirmaciones de apoyo Explora constantemente los medios de comunicación para hallar afirmaciones y lecciones que apoyen y refuercen tu visión. En una reciente entrevista de televisión, el fenómeno del golf Tlger Woods atribuyó su meteórico éxito en el mundo del golf a una de sus principales metas personales: aprender de cada experiencia, «Al final de cada torneo, analizo cada golpe y hoyo para ver qué es lo que puedo aprender de la experiencia». Sé como Tiger. Tu cerebro ha sido creado para aprender, de modo que aprovecha cada oportunidad en todo lo que haces y realza el poder de tu Inteligencia Espiritual, incorporando en tus actividades las lecciones que has aprendido. «Ningún hombre sin una visión realizará jamás una gran esperanza o emprenderá una gran empresa.» Woodrow Wilson 9. Recuérdate que tu vida es un don Recuerda siempre que la vida es un don precioso, ¡vive plenamente y vive bien!

Potenciadores del espíritu 31    

• Cuando termine mi vida habré dejado todo un rastro de acciones positivas y buenas sobre la Tierra. • Mi Inteligencia Espiritual mejora día a día, de todas las formas posibles. • Soy una persona positiva, emano energía positiva a los demás. • Soy responsable del bienestar de los demás y del mío, acepto esa responsabilidad con entusiasmo y activamente. • Mi vida es el mayor de los dones. La estoy usando para contribuir en el planeta que me ha dado la vida.

Capítulo cuatro

«Ningún hombre es una isla, ni está completo en sí mismo, todo hombre es un trozo del continente, una parte de la totalidad; si un pedazo de tierra fuera barrido por el mar, sería lo mismo que si pasara con Europa, o un promontorio, o la mansión de tus amigos o la tuya propia; la muerte de cualquier hombre me empequeñece, porque estoy integrado en la humanidad; por eso no envíes a nadie a saber por quién doblan las campanas, porque están doblando por ti.» John Donne

La compasión es expresar comprensión e interés por los demás en pensamiento y acción. Es llegar a los demás con un espíritu de amor y de respeto. Una persona espiritualmente inteligente y compasiva estará comprometida con los demás y se responsabilizará de ayudarles. ¡La buena noticia (y para muchos la tarea más difícil) es que la primera persona con la que has de ser compasiva eres tú misma! Te has de respetar, comprometerte contigo mismo y responsabilizarte de convertirte en todo lo que puedes ser.

Compasión: Compréndete a ti mismo y a los demás 32    

«La razón primordial para unir las energías dualistas de nuestras relaciones es aprender a honrarnos mutuamente. Gran parte del modo en que respondemos a los retos externos viene determinado por cómo nos respondemos a nosotros mismos. Además de todas las relaciones que tenemos con las personas, también hemos de crear una relación sana y buena con nosotros mismos...» Carolyn Myss

¿Qué mejor meta podríamos tener en la vida? Cuando aprendas este arte, ¡serás más feliz y dichoso de forma natural! Entretanto, también tienes la mente más abierta y entablas amistades más profundas, basadas en la comprensión y el respeto mutuos. Al comprender tu propio sufrimiento y el de los demás, tendrás una visión más profunda de ti mismo y de la condición humana. En resumen, tu vida adquiere mayor profundidad, sentido, propósito y júbilo.

Sólo cuando sientes compasión por ti mismo, cuando la has cultivado y ensalzado puedes ampliarla a los demás. El Dalai Lama ha dicho que en cierto sentido, la compasión se podría definir como:

Relatos de compasión...

«El sentimiento de no poder soportar ver el padecimiento de los demás, de otros seres sensibles que sufren. A fin de generar ese sentimiento, primero hemos de ser conscientes de la seriedad o de la intensidad del sufrimiento del otro. Cuanto más comprendemos el dolor y los distintos tipos de sufrimiento a los que estamos sometidos, más profundo será nuestro nivel de compasión.» Una persona espiritualmente inteligente será mucho más comprensiva con las personas, con sus causas y con el significado de sus acciones y reacciones. A raíz de ello la persona que ha desarrollado el poder de la compasión será más proclive al perdón, más tolerante y dejará vivir a los demás sin interferir innecesariamente en sus vidas. Tal como dijo Eleanor Roosevelt: «La comprensión es una calle de doble dirección». Pensemos en la compasión como en el «arte de ser feliz». Es el arte de transformar el dolor y el sufrimiento en felicidad y júbilo.

A fin de demostrarte la naturaleza de la compasión y su práctica, te ofrezco los siguientes relatos. La historia del monje tibetano El Dalai Lama cuenta una historia de un monje mayor del monasterio de Namgyal que fue arrestado por las fuerzas de ocupación chinas y retenido como prisionero político en campos de trabajos forzados durante veinte años, allí padeció duras palizas y torturas, dolor feroz y continuado, dificultades y sufrimientos. El joven Dalai Lama le preguntó una vez a su amigo cuál había sido la situación más difícil a la que se había enfrentado en prisión. La respuesta nada tuvo que ver con su sufrimiento físico o mental, ni con el sufrimiento de los demás prisioneros, muchos de los cuales no sobrevivieron. ¡El monje dijo que el mayor peligro al que se enfrentó fue el de dejar de sentir compasión por sus carceleros chinos!

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Mohamed Ali y el vagabundo Cuando estaba en la cumbre de su fama y poder, agasajado en todo el mundo, Ali caminaba un día por el barrio pobre de Harlem, en Nueva York, seguido (como era habitual) por un séquito de reporteros. Mientras iba por una de las calles llenas de basura, vio a un vagabundo desmelenado medio tirado en la calle. Hizo una señal a los reporteros para que se alejaran, Ali se agachó y pasó un tiempo hablando con ese hombre. Cuando Ali se despidió de él y se marchó, un reportero le preguntó al vagabundo qué pensaba de «El Más Grande». «El es el más Grande», dijo el vagabundo. «¿Por qué piensas eso?», le preguntó el reportero. El vagabundo respondió que Ali le había preguntado cómo había llegado al estado en que se encontraba. Le contó que le había explicado la triste historia de su vida y que le habían saltado las lágrimas mientras se la contaba. Entonces le explicó por qué creía que era el más grande. El vagabundo dijo: «Yo lloré y él lloró conmigo».

mismo estaba gravemente deteriorada. Mándela se acercó a Clinton y le ofreció su ayuda, le dijo que todas las personas cometemos errores, pero que esas equivocaciones no eran lo más importante, sino cómo resolvemos el sufrimiento que éstas provocan. Clinton le preguntó a Mándela cómo podía estar tan tranquilo y sereno, después de haber pasado casi treinta años en prisión. Ciertamente, le preguntó Clinton, usted debe de estar todavía muy furioso y deseando vengarse. Mándela le explicó que si tenía que vivir según sus principios, la venganza no tenía importancia. Al igual que el monje tibetano, Mándela se centró en el dolor y el sufrimiento de los que le estaban haciendo sufrir; les perdonó y siguió adelante, para aplicar sus enormes energías en sus proyectos de cambiar el mundo, en la educación y en el desarrollo social, en lugar de albergar resentimientos y malgastar esas mismas energías en pensamientos o acciones de venganza. Clinton dijo que la conversación le ayudó a entenderse mejor a sí mismo; a ser más comprensivo con los demás; a comprometerse, a perdonar y a ser más compasivo. Cambió su vida.

La historia de los dos presidentes Cuando Bill Clinton recapituló los acontecimientos más importante de su mandato, dijo que su encuentro con Nelson Mándela fue uno de los más destacados. En el momento del encuentro, Clinton estaba atravesando todo tipo de dificultades: Estados Unidos estaba involucrado en varios conflictos armados, el impeachment (acusación formulada contra el presidente por delitos cometidos en el desempeño de sus funciones) pendía sobre su cabeza y su confianza en sí

Confirmar los beneficios de la compasión En un fascinante experimento para demostrar los efectos de la compasión en el cuerpo, el doctor David McClelland, un psicólogo de la Universidad de Harvard, proyectó a un grupo de estudiantes un documental sobre una de las heroínas de El Poder de la Inteligencia Espiritual: la Madre Teresa de Calcuta. El documental mostraba a la Madre Teresa en acción entre los pobres, 34    

los enfermos y los indigentes de Calcuta. Los estudiantes, al ver la película, dijeron que les había hecho sentir compasión. Poco después de haberles mostrado el documental, el doctor McClelland analizó la saliva de los alumnos y observó un aumento del anticuerpo que ayuda a combatir las infecciones respiratorias: la inmuno-globulina A. Los sentimientos de compasión de los estudiantes al ver el trabajo de la Madre Teresa habían estimulado sus cuerpos a producir mayores cantidades de este anticuerpo. En otro estudio sobre la compasión, el doctor James House del Centro de Investigación de la Universidad de Michigan estudió los efectos de hacer trabajo social voluntario con regularidad, por ejemplo, con los enfermos y los sin-techo. El trabajo que realizaban los voluntarios les obligaba a actuar hacia los demás de una forma cálida y compasiva durante un período de meses y años. Los resultados mostraban que al hacer dicho trabajo compasivo aumentaba espectacularmente la vitalidad general y la esperanza de vida de los voluntarios. La compasión es un salvavidas, ¡no sólo para quienes la reciben, sino para quienes la dan! Ahora que ya conoces la naturaleza de la compasión y tienes pruebas de su eficacia, así como ejemplos que lo respaldan, ya estás preparado para el siguiente ejercicio espiritual.

La habilidad para «llevarse bien» con nuestros semejantes y sentir compasión por ellos es uno de los elementos que puede convertir tu vida en un gozo o en un suplicio. Toda interacción que tengas con otros seres humanos te ofrece la oportunidad de dejarles con una sonrisa y que ambos os sintáis realizados. Por otra parte, también puedes instigar la ira y el resentimiento. ¿Cuál de las dos opciones aportará más calidad a tu vida y a tu bienestar físico y mental? Por el mero hecho de considerar esta pregunta ya te estás encaminando en la dirección correcta. 2. Ejercicio de ser único A continuación encontrarás la palabra «comprensión» en el centro de un corazón. Del corazón irradian diez ramas orgánicas curvas, parecidas a las ramas de un árbol.

Ejercicio espiritual 1. Muestra compasión «Y cuando te reciben con un saludo, devuelve un saludo todavía más bello, o al menos devuélvelo.» Mahoma

El juego es como sigue: en las ramas centrales escribe las diez primeras palabras que se te ocurran, cualesquiera que sean, cuando pienses en el concepto «comprensión». 35    

Cuando hagas este ejercicio deja que tu mente vuele y escribe las diez primeras palabras que acudan a tu mente, por «descabelladas» o ridículas que parezcan. Cuando lo hayas hecho, léelas. Cuando hayas completado este ejercicio, compara tus respuestas con otras. Éstas son las sugerencias de mis editores cuando hicieron el ejercicio: Escuchar conocimiento voluntad para el punto de sentido vista de los demás tolerancia simpatía apertura mental sentimiento atención compasión empatía empatía simpatía tolerancia sinceridad perdón corazón abierto iluminación observación revelación El descubrimiento sorprendente de este ejercicio, que he dado a hacer por todo el mundo durante treinta años, ¡es que hay muy poco sentido de grupo entre las personas y mucha más individualidad de la que se podía esperar! Esto significa que tú, como hemos visto en el capítulo 2, eres un individuo maravillosamente único. ¡Y que también lo son las demás personas! 3. Ten compasión por tus hermanos humanos En todas las situaciones intenta considerar por qué las otras personas actúan como lo hacen. Procura siempre, sobre todo en

situaciones «difíciles», ponerte en el lugar de la otra persona, hay un antiguo proverbio de los indios nativos americanos que dice: «No juzgues nunca a un hombre hasta que hayas caminado con sus mocasines». Trata a los demás como te gustaría que te tratasen a ti. Esto te ayudará a ver las cosas desde la perspectiva de la otra persona (¡que para ella siempre será la correcta!) y te ayudará a dar muestras de más comprensión y compasión por ella. A su vez, esto hará que tu vida sea mucho más fácil y que tu espíritu esté más tranquilo y feliz. «Obra con los demás como te gustaría que éstos obrasen contigo.» Jesús de Nazaret 4. Actúa desinteresadamente No tengas expectativas respecto a la respuesta que vas a recibir cuando das aprecio o eres comprensivo con alguien. Da sin pensar en tu propio beneficio. Has de estar abierto a la reacción de la otra persona, de lo contrario ambos corréis el riesgo de sufrir un desengaño. Puede que nunca llegues a saber la repercusión que tendrá tu acción. Basta con que sepas que eres más feliz por haber hecho el esfuerzo positivo, y en cierto modo, así será. De modo que sonríe, sé feliz y no esperes nada a cambio. De hecho, desapegarse de los resultados y de las expectativas es una de las cosas más difíciles, sin embargo, es lo que aporta las mayores recompensas. Y el desapego te protege de todos los trastornos que a menudo acompañan a esas expectativas. 5. Participa en organizaciones que promueven la amabilidad y la ayuda entre personas que no se conocen Únete al creciente número de personas que están practicando una «cadena de favores» en un movimiento que se ha iniciado en 36    

Estados Unidos (Random Acts of Kindness Foundation) y que se está extendiendo por todas partes. Esas acciones se llevan a cabo de forma anónima y pueden consistir en algo tan sencillo como poner dinero debajo de la puerta de alguien que lo necesita o pagar el peaje al coche que viene detrás. 6. ¡Coopera con otros! La compasión se ensalza mediante una actitud de cooperación. Por lo tanto, busca formas en las que puedas trabajar e interactuar con las personas que te rodean. Extiende tu mano rápidamente para ayudar siempre que puedas y busca maneras de trabajar en metas comunes con personas afines. Si lo haces, es bastante probable que alcances esas metas más deprisa y la experiencia será más rica por ser compartida. Cuando trabajas con los demás de esta manera, sucede algo bueno: tus energías individuales y entusiasmo no se contentan con sumarse para dar un total. Cada uno de nosotros multiplicamos la energía y la fuerza de los otros para crear una totalidad que es mayor que la suma de sus partes. 7. Respeta a tus hermanos humanos Todos nosotros somos un milagro. Todos sabemos que la historia de la vida de cada persona tiene todo el potencial para convertirse en un bestseller y ¡eso te incluye a ti! Piensa en ello... En lugar de suponer cosas sobre las personas, compórtate como un periodista compasivo y pídeles que te expliquen los aspectos más interesantes y significativos de sus vidas. Descubre sus historias personales, sus mejores momentos, sus recuerdos más entrañables, sus metas y creencias. Sean cuales fueren las circunstancias actuales de una persona, ésta lleva consigo -al igual que Linus, el personaje de la tira cómica, lleva su manta-, todo lo que ha sido y ha hecho. ¡Descubre, admira, respeta y disfruta!

8. Tu «lado oscuro» Éste es un ejercicio que te plantea un reto, ¡date una oportunidad cuando te sientas preparado! Piensa que cualquier persona que en tu vida te resulte especialmente molesta, mezquina o desagradable, ¡está allí para ayudarte específicamente a avanzar en tus estudios sobre la compasión! Piensa que puede ser un espejo para tu lado oscuro oculto y que puedes aprender de la experiencia. Y recuerda: «Errar es humano, perdonar, divino.» Alexander Pope 9. El juego de la combinación Imagina que las personas allegadas contra las que luchas o a las que amas, en realidad no están separadas. Forman parte de ti, tú eres una combinación de tú y de ellas. En otras palabras, eres un yo más grande. Desde esta perspectiva, mira cómo puede esto cambiar tu percepción, sentimientos y acciones. Probar este juego es especialmente interesante en las relaciones amor-odio; alumnoprofesor; jefe-trabajador, etcétera. 10. Confía en tus hermanos humanos Es mucho más bonito confiar en las personas que no hacerlo. Muchas personas que han sido menospreciadas o heridas se cierran emocionalmente para que no les vuelvan a hacer daño. Con ello dejan de vivir y de sentir y a la larga sufren mucho más. Da a todas ¡as personas que conoces un «sobresaliente» y a medida que va pasando el tiempo suma o resta de su «cuenta». Llegado ese punto decide si quieres pasar más o menos tiempo con ellas -desde la persona que te despacha en una tienda hasta tu

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mejor amigo o amiga- ¡es más que probable que recibas un «sobresaliente» por su parte!

• Siempre me estoy esforzando por tratar a los demás como me gustaría que me trataran a mí.

«Confía en los hombres y éstos serán sinceros contigo; trátales con grandeza y serán grandes.» Ralph Waldo Emerson Si aplicas los principios de la compasión que has aprendido en este capítulo, puedes provocar cambios significativos en las múltiples comunidades a las que perteneces, ¡que necesitan mucho esa ayuda! Al convertirte en una persona de negocios compasiva, puedes ayudar a cambiar la dinámica tradicional de los negocios motivada por los beneficios, que son generados ofreciendo servicios a los demás, por la de servir a los demás, gracias a los beneficios. En la política se puede aplicar esta misma dinámica y es especialmente importante para cambiar el concepto de poder externo que se utiliza para gobernar a los demás, por la dinámica que surge de la compasión interna aplicada a todas las demás posibilidades de la vida.

Potenciadores del espíritu • Cada día soy más compasivo y comprensivo. • Soy más compasivo conmigo mismo, me centro en el desarrollo de mi Inteligencia Espiritual. • Puesto que cada vez soy más capaz de comprender a los demás, tengo más capacidad para perdonar y ser tolerante. • Mi profundización en la comprensión del milagro y la complejidad de los demás permite que mi mente sea más flexible y esté más abierta. 38    

¡Da y recibe! Caridad y gratitud Capítulo cinco

«Sé la expresión viva de la... ternura; ternura en tu rostro, ternura en tus ojos, ternura en tu sonrisa, ternura en tu cálida bienvenida.» Madre Teresa de Calcuta

Los dones espirituales gemelos de la caridad y la gratitud son un reflejo el uno del otro. La caridad se encarga de ayudar a los que están necesitados y de ser tolerante al juzgar esa necesidad. La palabra procede del latín carus que significa «valorado» o «amado». Con los que queremos o amamos, tenemos los brazos y el corazón abiertos, somos magnánimos y altruistas. Éste es el espíritu de la caridad. La gratitud es el don opuesto. Es cuando recibes con agradecimiento la caridad, la comprensión y las acciones desinteresadas y muestras tu aprecio de la amabilidad que te están ofreciendo. Tanto la caridad como la gratitud nacen de la compasión que ya has explorado en el capítulo anterior. Ambas acciones se pueden considerar como una especie de respiración espiritual: la gratitud es cuando inhalas y recibes la energía otorgadora de vida; la caridad es cuando exhalas y la devuelves al entorno. 39    

Cuando practicas la caridad y la gratitud, expandes considerablemente el poder de tu Inteligencia Espiritual. Aprendes a «inhalar» y a «exhalar» de una manera rítmica, en lugar de «retener la respiración» continuamente. Esto te ayudará a estar más relajado, feliz y «unido» con el mundo. Del mismo modo que desarrollas tu compasión, las recompensas de las que te beneficias incluyen más amigos, mejor salud y más riqueza, ¡la moneda de cambio de esta divisa es la sonrisa! Por supuesto, también beneficiará inmensamente a la comunidad y al mundo.

Las historias que vienen a continuación son para divertirte, informarte, conmoverte e inspirarte.

emulan el humanitario ejemplo de Trevor en los pueblos grandes y ciudades de todo el mundo donde hay personas sin techo. Trevor ha hablado de su campaña en las escuelas, salas de conferencias, centros oficiales, iglesias y concejos municipales de vecinos. Cuando le preguntaron a Trevor si el auge de la campaña le había sorprendido, dijo: «Nunca pensé que habrían 1.100 voluntarios, tres furgonetas y una casa para los sin techo. Lo único que yo quería era ayudar a ese hombre aquel día». Esa actitud es la misma que la de la Madre Teresa (con la que Trevor trabajó durante un tiempo en la India). A ella le preguntaron por qué continuaba con su trabajo, recogiendo moribundos y rescatando niños de las calles, si el problema continuaba y que lo que estaba haciendo no era más que una «gota en el océano» comparado con los miles de pobres necesitados. Ella respondió: «Sí, es cierto mi trabajo no es más que una pequeña gota en el océano, pero gracias a esa gota, todo el océano es mayor».

La Campaña de Trevor

Clases de malabarismos

En 1983, un joven llamado Trevor Ferrell vio a un hombre sin techo que vivía en las calles de Filadelfia. Posteriormente Trevor preguntó a sus padres por qué estaba ese hombre en la fría calle y cuando se enteró de que era porque no tenía casa o familia que cuidara de él, pidió a sus padres que le llevaran a la ciudad para darle su almohada y manta amarilla. Asilo hicieron. A partir de este acto de compasión que fluyó del ingenuo corazón de un niño de trece años, comenzó la «Campaña de Trevor». Desde entonces, cada noche, voluntarios —niños y adultos— recorren las calles de Filadelfia distribuyendo comidas calientes, mantas, ropa, cuidados y amor, todo gracias a un niño. Con el paso de los años, la campaña se ha extendido, y ahora niños y adultos

En las clases que imparto por todo el mundo sobre «Aprende a Aprender y Expande el Poder de tu Mente», uno de los juegos que realizamos es «Aprende a hacer Malabarismos», basado en el método de la metáfora del malabarismo desarrollado por Mike Gelb. Hacer malabarismos es una oportunidad de aprendizaje y una herramienta de enseñanza perfecta, porque proporciona un espejo inmediato para la forma en que nuestro cerebro se plantea una nueva tarea de aprendizaje. ¡También ofrece mucho feedback inmediato! Un aspecto triste de estas clases que, de otro modo serían divertidas, son las reacciones de mis alumnos a mis felicitaciones por sus progresos. Tanto si han hecho su primer juego de lanzar y atrapar tres pelotas como si han completado un complejo y avanzado

«El verdaderamente grande es el que tiene una gran caridad.» Thomas Á Kempis

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truco, sus respuestas a mis ánimos y exclamaciones de «¡Bien hecho!» son siempre como éstas: «¡No, no, no! Estaba probando la etapa siguiente.» «No está bien, ¡me he quedado encallado aquí!» «No ha estado tan bien.» «Nunca seré bueno.» «Podía haber sido mejor.» ¿Y cuál es el tema subyacente a todas estas respuestas? ¡La negación del yo! Lo más divertido respecto a este tipo de reacción es que no importa lo buena que haya sido la actuación, las personas siempre niegan la excelencia. Si alguien estuviera haciendo malabarismos con siete pelotas, una motosierra y un pollo vivo y yo exclamara «¡Vaya! ¡Esto es increíble!», respondería algo parecido a esto: «¡Bueno, realmente no, lo estaba intentando con ocho pelotas, dos motosierras, un pollo y un pavo!» Si nos critican y castigan por el fracaso cuando somos jóvenes y luego nos dicen que somos arrogantes si nos complacemos con nuestro éxito, estamos entrenados y acostumbrados a castigarnos casi por cualquier cosa. Constantemente rechazamos y negamos la alabanza. «Hay tanta grandeza mental en reconocer una buena obra como en hacerla.» Séneca

Al pensar que somos «modestos», al mismo tiempo, sutil e involuntariamente estamos insultando a la persona que nos alaba. Lo que realmente me estaban diciendo las personas a las que estaba alabando por su excelencia en hacer malabarismos era: «¡Tony, estás equivocado! ¡Eres idiota! ¡Cómo puedes pensar que lo estaba haciendo bien, cuando yo sé que no es así!» ¡Una conducta bastante ofensiva por parte de alguien que está intentando ser dócil, afable y humilde! La moral de esta historia es, por supuesto, aceptar el agradecimiento con gratitud y con ello recibir los dones que los demás te están ofreciendo, a la vez que les reconoces y elevas. «La gratitud es el propio cielo.» William Blake

El muchacho pobre y la educación del mundo A mediados de la década de 1800, un niño escocés de doce años llamado Andrew Carnegie emigró a Pittsburgh, Pensilvania. Al pertenecer a una familia humilde, se vio obligado a empezar a trabajar a una corta edad, primero en una fábrica de hilado de algodón, luego como mensajero del telégrafo, después como revisor en el ferrocarril, antes de entrar en la industria de la fabricación de acero. El joven Carnegie tenía una notable fe en sí mismo. Trabajó duro, aprendió de sus errores y rápidamente ascendió a la cumbre de su profesión. Carnegie acabó construyendo la US Steel Corporation, que se convertiría en la mayor compañía del mundo, y él, posiblemente, en el hombre más rico.

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Hay dos cosas que destacar en esta historia para los que estamos intentando aumentar nuestra Inteligencia Espiritual. En primer lugar, Carnegie atribuyó la mayor parte de su éxito a su estudio y aplicación del cerebro y sus extraordinarios poderes para las Inteligencias Creativa y Espiritual. Él comentó:

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«El ser humano, con todo lo que alardea de cultura y educación, poco o nada entiende de la intangible fuerza (la mayor de todas las intangibles) del pensamiento. Poco sabe referente al cerebro físico y su vasta red o intrincada maquinaria a través de la cual el poder del pensamiento se traduce en su equivalente material; pero ahora está entrando en una era en la que se iluminará este tema.» Carnegie recomendaba que todas las personas en todas partes del mundo estudiaran el cerebro y ¡sus múltiples inteligencias! En segundo lugar, cuando se retiró en 1901, a la edad de sesenta y seis años, Carnegie reflexionó sobre qué podía hacer con las inmensas riquezas que su duro trabajo, la inteligencia y la astucia le habían proporcionado. ¿Cuál fue su decisión? ¡Repartirlas todas! ¿Con qué fin? Aprendizaje y educación. En cifras de hoy en día, Carnegie dedicó más de cien millones de dólares a la educación global, bibliotecas públicas, universidades escocesas y americanas, museos, galerías de arte e iglesias en Europa, y a su propia Carnegie Institution, dedicada a la distribución anual de millones de dólares dedicados a la cultura. Andrew Carnegie, de ser el industrial con más éxito del mundo se transformó en el mayor educacionalista caritativo. Distribuyó lo que probablemente fuera la fortuna más grande de la historia con el fin de elevar el nivel educativo y las oportunidades de sus hermanos humanos.

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Iluminar las garras de la muerte Florence Nightingale es conocida por hacer que la enfermería fuera la profesión respetada en la que ahora se ha convertido y por animar a millones de personas a seguir su ejemplo. Trabajó incansablemente con total entrega y sacrificio para salvar vidas y aliviar el dolor y el sufrimiento en las terribles condiciones de la guerra de Crimea. Para los soldados que tenían que soportar el viento, la lluvia, la nieve y el hambre, así como terribles heridas en condiciones insalubres, Florence Nightingale fue un rayo de esperanza, sus prácticas acciones caritativas dieron fe e inspiración a los que estaban desesperados. Después de la guerra, Florence Nightingale continuó dedicando su energía a proporcionar ayuda y cuidados a los demás. Revolucionó la enfermería y los hospitales -ella es la responsable del diseño de hospitales bien iluminados con salas bien ventiladas. El famoso hospital de St. Thomas es sólo un ejemplo de su trabajo. El trabajo de grandes seres espiritualmente inteligentes como Andrew Carnegie y Florence Nightingale, fue el pilar del interés que existe actualmente por las instituciones caritativas. A principios del siglo XXI, existen miles de organizaciones que recogen grandes sumas de dinero cada año para fines benéficos en todo el mundo, todas ellas dedicadas a mejorar la condición humana. Sin embargo, no son sólo los grandes «actos» de caridad lo que cuentan; las pequeñas donaciones de dinero, la amabilidad o el tiempo (que probablemente sea más importante en este mundo nuestro cada vez más ocupado) que todos podemos dedicar son igualmente importantes.

«... La mejor parte de la vida de un buen hombre: sus pequeños, anónimos y olvidados actos de amabilidad y amor...» William Wordsworth

Ejercicio espiritual ¡Perteneces a una raza caritativa que vive en un planeta cada vez más caritativo! Como residentes privilegiados de este planeta, estamos en una maravillosa posición para ejercer la caridad con esos cientos de miles de personas que necesitan enormemente nuestra ternura. Por consiguiente, es mejor que mantengas en forma tu aspecto caritativo. 1. ¿A quién deberíamos ayudar? Practica lo que recomendó el gran líder espiritual Mahoma: Sé bondadoso con tus padres y parientes, y con los huérfanos y pobres, y con tus vecinos cercanos y con tus vecinos lejanos, y con el compañero que tienes a tu lado, y con el viajero, y con tus palabras. De hecho, dar limosna es una de las prácticas esenciales de muchas de las grandes religiones. Las limosnas son uno de los cinco pilares de la fe islámica, es un principio básico de la práctica del judaísmo y del cristianismo, así como de los budistas e hinduistas. «La caridad ve la necesidad, no la causa.» Proverbio alemán 47    

2. «Hablar con uno mismo» Examina y reconsidera tu conversación interior, como hiciste en el capítulo 3, pero esta vez dale un giro diferente. Mírala desde el punto de vista de ser caritativo contigo mismo y prueba el siguiente ejercicio para el cerebro. Imagina que cada vez que aprendes algo nuevo te divides en dos personas: la primera eres tú, el padre o la madre; la segunda eres tú, el niño o la niña de cinco años. Tú, el padre o la madre adoptas el papel del tutor supremo; tú el niño o la niña de cinco años, el de aprendiz o aprendiza. Tú el padre o la madre reaccionas frente a tú, el niño o la niña, como cualquier padre o madre o tutor afectuoso y humano haría. Dices palabras de ánimo como: «¡Sí!»; «¡Así se hace!»; «¡Bien hecho!»; «¡Vas a ser un gran malabarista, futbolista, guitarrista, etcétera!»; «¡Ésa ha sido una equivocación interesante!»; «¡Vuélvelo a intentar!»; «¡Vuélvelo a intentar!»; «¡Vuélvelo a intentar!»; «¡Puedes conseguirlo!», «¡Bien hecho!» Ser caritativo contigo mismo, de este modo, te aportará mucho ánimo y placer al aprender. También descubrirás que el niño o niña de cinco años aprende increíblemente bien, y te recompensará con gratitud y afecto. 3. Haz un Mapa Mental® Intenta hacer un Mapa Mental® de todas aquellas cosas en tu vida por las que puedas estar agradecido. No te concentres sólo en las cosas obvias —amigos, familia, salud—; piensa también en las cosas pequeñas: poder sentir el sol en tu cara o una suave brisa en tu piel, tu sentido del gusto y del olfato, el modo en que escuchas a las personas y compartes con ellas, etcétera.

«Cuando miramos detenidamente el corazón de una flor, vemos nubes, el Sol, minerales, tiempo, la Tierra y el cosmos entero en ella. Sin las nubes no habría lluvia y sin la lluvia no habría flor.» Thich Nhat Hanh 4. Aprecia las cosas pequeñas y ¡demuéstralo! Asegúrate de que aprecias cosas específicas a lo largo del día. Aprecia a las personas con las que trabajas, vives e incluso las que ves al pasar. Es sorprendente cómo un cumplido rápido o un «gracias» puede alegrarle el día a alguien. Recuerda que todos los seres humanos tenemos la misma necesidad de aprecio y compasión y que los estimamos del mismo modo. Da aprecio a aquellas personas que te sirven y te ayudan, desde el dependiente de una tienda, camarero, basurero, barrendero, personal de limpieza de la oficina hasta al conductor del autobús, y especialmente a aquellas personas que hacen todos esos «horribles» trabajos, sin los cuales la vida sería mucho más desagradable. Muestra tu aprecio a tus amigos y compañeros y a tus supervisores y jefes. Curiosamente, las personas que se encuentran «en la cima», contrariamente a lo que la gente suele pensar, reciben muy poco aprecio de las personas que tienen debajo. ¿Por qué? ¡Porque la gente supone que todo el mundo les alaba! 5. Apoya a tu comunidad Da apoyo a tu comunidad llevando la ropa que no necesitas a algún centro benéfico, colabora en alguna acción para recoger fondos o haz algún voluntariado. Puedes hacerte cargo del hijo de tu vecina durante unas horas o hacer de mentor de algún compañero de trabajo; las posibilidades de realizar acciones caritativas son infinitas.

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6. Apoya a la comunidad global Con demasiada frecuencia vemos en las noticias de la televisión y en los periódicos las imágenes de personas que se encuentran en situaciones desesperadas debido a desastres naturales como terremotos, hambrunas e inundaciones. Durante tales emergencias, intenta enviar dinero, ropa de abrigo u ofrecer parte de tu tiempo para colaborar en las tareas de ayuda humanitaria. Muchas pequeñas acciones, cuando se suman, suponen una gran contribución para aliviar el sufrimiento. 7. Cuenta tus bendiciones Nunca podemos estar seguros de si algo va a tener un efecto positivo o negativo en nuestras vidas, por lo tanto procuremos ver todo lo que nos sucede como una «bendición». Hay una antigua historia china sobre un granjero cuyo caballo se extravió y todos sus vecinos se reunieron con él para mostrarle sus condolencias y decirle la mala suerte que había tenido; el granjero sencillamente respondió: «¿De verdad?» Al día siguiente el caballo regresó, seguido de otro, y los vecinos dijeron que había tenido un golpe de suerte; de nuevo, el granjero respondió: «¿De verdad?» A la mañana siguiente su hijo intentó montar al nuevo caballo, pero éste lo lanzó por los aires y se rompió una pierna. Los vecinos volvieron a compadecerse de la mala suerte de la familia y el granjero volvió a responder: «¿De verdad?» A la mañana siguiente la armada imperial llegó a la aldea para reclutar soldados para la guerra. Todos los jóvenes del lugar fueron reclutados salvo el hijo del granjero, porque tenía la pierna rota.

Potenciadores del espíritu • Soy una persona caritativa y me encanta el acto de dar. • Soy generosa por naturaleza y estoy reforzando esa parte de mi carácter. • Soy una persona humana y que intenta ayudar, siempre estoy dispuesta a echar una mano. • Me encanta recibir ayuda y regalos de los demás, lo hago abiertamente y con entusiasmo. Al recibir permito que los demás den. Su acto de dar les permite recibir. • Soy una persona amable y gentil, siempre pienso en las necesidades de los demás. • Mi credo es la amabilidad.

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El poder de la risa Capítulo seis

«Ríe y el mundo reirá contigo.» Ella Wheeler Wilcox

¡Es cierto! ¡Ríe y el mundo reirá contigo! El sentido del humor es una de las principales cualidades de la Inteligencia Espiritual. Entre sus beneficios se encuentra la reducción del estrés, una mejora general de la salud y más (y mejores) amistades. Te conduce a una vida más feliz, más alegre y más sublime. El humor te ayuda a ver las cosas desde fuera y a dejar que las aguas vuelvan a su cauce. Es una forma estupenda de disolver la tensión y de unir a las personas de todas las clases. Proporciona un vínculo común para la humanidad. En la década de 1970 tuve una espectacular experiencia del poder del humor. Una manifestación estudiantil de tamaño mediano delante de la embajada americana en Londres, de pronto se convirtió en una masa creciente de varios miles de personas, que se apelotonaron en la pequeña plaza de la embajada. Yo me encontraba allí por casualidad y de repente me vi atrapado cerca de la delantera de la manifestación, donde policías a caballo cortaban el paso a la masa de gente cada vez 50    

más hostil. La tensión iba en aumento y se desató el pánico. De pronto, cerca del frente, un joven estudiante se subió a hombros de su compañero y empezó a distraer a la gente con ingeniosos comentarios y observaciones sobre lo que estaba sucediendo. Actuó como si fuera un cómico profesional. Todas las personas que estaban en la zona de peligro, la policía incluida, quedaron cautivadas por su actuación. Pude ver cómo bajaba la tensión, la ira se iba calmando y los temores desapareciendo, un estado de calma relativa se apoderó de la gente. El joven continuó durante media hora, utilizando un arma soberbia —el humor— y con eso evitó que sus compañeros fueran apaleados.

oportunidad frente al ataque despiadado de su risa estomacal. Salió del hospital siendo un hombre mucho más sano y feliz. Humor y sexo Nos han hecho creer que nuestros cuerpos y sus partes, especialmente los ojos, los labios, los pechos, las nalgas y muslos y los genitales son los principales atractivos sexuales. Sin embargo, cuando se han realizado encuestas sobre el rasgo sexual que más atrae a las personas, tales atractivos quedan en segundo lugar ante el «sentido del humor». ¿Por qué? Porque la risa abre la mente y los sentidos, requisitos previos para la intimidad y hacer el amor.

El humor, al igual que la emoción, el arte y la música, muchas veces, equivocadamente, ha sido relegado por considerarse una cualidad mental «débil». De hecho, es una de las más poderosas. Pensemos en lo siguiente:

Historietas cómicas Estas dosis diarias de humor visual y verbal se encuentran estadísticamente entre los temas más populares que leen las personas de todo el mundo en sus periódicos. Los editores experimentados de los principales periódicos nacionales te dirían que si una sola de sus historietas cómicas dejara de publicarse, el periódico podría perder cientos de miles de subscriptores. Cuando sonríes o ríes, tu cerebro instruye a tu cuerpo a liberar «hormonas saludables». Las historietas cómicas son nuestra dosis diaria de humor, tan eficaces y saludables como hacer ejercicio todos los días.

Una fuerza de vida ¡La risa es realmente la mejor medicina! A Norman Cousins, el famoso escritor, le dijeron que tenía un cáncer terminal. Cousins se negó a aceptar esta sentencia irrevocable e inmediatamente empezó a investigar cuáles eran las mejores curas y remedios y eligió su arma final... ¡el humor! Se abasteció de cuentos de cómics, películas de humor, libros de chistes y de amigos ingeniosos. El cáncer no tuvo ninguna

El humor en la guerra ¿Cuál es el arma final que emplean los ejércitos? ¡El humor! En tiempos de guerra, las fuerzas armadas se gastan fortunas en patrocinar giras con los gigantes de la comedia, en las que cientos de miles de soldados y trabajadores del ejército reciben regularmente «inyecciones energéticas» de ingenio y risa. Las giras mundiales que realizó el cómico Bob Hope para el ejército americano durante la Segunda Guerra Mundial, son un magnífico ejemplo.

El poder del humor «La risa es la música más civilizada del mundo.» Peter Ustinov

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Actualmente, muchas fuerzas armadas están proporcionando «Entrenamientos en felicidad» para mejorar la resistencia psicológica de sus soldados en el caso de que sean hechos prisioneros. El sabio tonto Shakespeare, uno de los escritores con mayor visión de todos los tiempos, se dio cuenta de que el humor era una de las formas más elevadas de inteligencia. Por esta razón, en sus obras generalmente convertía al Tonto no sólo en el más ingenioso, sino también en el más sabio de todos los personajes. Lo dijo explícitamente en Noche de Epifanía: «Este tipo es lo bastante sabio como para representar el papel de tonto; y para hacerlo bien se requiere cierto ingenio». Los comediantes como iconos y estrellas A lo largo de la historia, los comediantes han sido estrellas nacionales y mundiales que han tenido un fuerte impacto en la cultura popular. Piensa en el impacto que tuvieron Charlie Chaplin, Danny Kaye, Laurel y Hardy, Bob Hope, Tony Hancock, Lucille Ball, Phil Silvers, Norman Winson, los Goons y los Monty Python. Millones de personas acuden regularmente a los espectáculos de los comediantes y ven sus programas de humor y sus películas, porque ofrecen un Ingrediente vital para la dieta del cerebro: la risa. Estos genios, usando su propia Inteligencia Espiritual estimulan la de muchas otras personas. Ayudan a que veamos nuestras preocupaciones desde otro ángulo y al reírnos con los humoristas podemos distanciaros de nuestros problemas y ver las situaciones con nuevos ojos, aumentar nuestra salud, esperanza de vida y felicidad.

La risa conquista el dolor Los hospitales informan regularmente de que tienen muchas menos quejas sobre el dolor cuando los pacientes reciben visitas que les hacen reír. Los estudios psicológicos también demuestran que la risa aumenta la producción de nuestros propios sedantes naturales, a la que refuerza el sistema inmunológico.

Reírse: la vía hacia una vida más feliz, saludable y larga El doctor Michael Miller, director del Centro de Cardiología Preventiva de la Universidad de Baltimore, ha hallado pruebas directas de que un sentido del humor activo puede ayudar a evitar las enfermedades del corazón. El estudio demostraba que las personas que se ríen a menudo y fuerte, que ven el lado divertido de las cosas, especialmente cuando las situaciones son «difíciles», no tienen tantas probabilidades de padecer ataques al corazón como las personas más «serias» que no sonríen. Los investigadores utilizaron un cuestionario para evaluar si una persona tenía suficiente pie de vivre que la protegiera de padecer ataques al corazón leves o graves y enfermedades cardíacas. A los voluntarios para este estudio se les preguntó cómo respondían a situaciones cotidianas como llegar a una fiesta y ver que alguien llevaba el mismo atuendo o que un camarero te tirara la sopa en la falda. La mitad de las personas encuestadas habían padecido ataques al corazón o habían recibido tratamiento para la obturación arterial. Sus respuestas se compararon con las del grupo de control, que eran de la misma edad, pero que no tenían ningún historial de enfermedades cardíacas. Los resultados fueron sombríos para esas almas menos felices: el grupo sano tenía un 60 por ciento más de probabilidades 52    

que sus homólogos enfermos de reírse en situaciones como las que hemos descrito. Los doctores creen que la risa libera substancias químicas que favorecen la vida y que ayudan a reforzar el sistema inmunológico. Se ha establecido un vínculo, por ejemplo, entre la risa y los anticuerpos que ayudan a combatir los resfriados. Si quieres probar tu propia puntuación en risa-salud, aquí tienes algunas preguntas basadas en el trabajo del doctor Miller. Para cada una de las preguntas, cualquier respuesta a) cuenta 1 punto; cualquier respuesta b) 2 puntos; cualquier respuesta c) 3 puntos; cualquier respuesta d) 4 puntos; y cualquier respuesta e) 5 puntos. Sé sincero contigo mismo, ¡puede salvarte la vida! 1. Si estás viendo un programa de televisión con tus amigos que sólo a ti te resulta divertido, ¿cómo reaccionarías? a) Llegaría a la conclusión de que no lo he entendido. b) Sonreiría para mí, pero sin que se reflejara en mis labios. c) Sonreiría visiblemente. d) Me reiría en voz alta. e) Me reiría a pierna suelta. 2. Un amigo te despierta con una llamada nocturna para decirte que está en la ciudad y que te llama para saludarte. Tu amigo está de broma y de muy buen humor, y no para de contar chistes. ¿Cómo reaccionarías? a) No me haría ninguna gracia. b) Me haría gracia, pero no me reiría. c) Podría reírme con algo divertido que dijera mi amigo. d) Podría reírme y responder con algo ingenioso. e) Me reiría largo y tendido con mi amigo.

3. Has salido a comer con unos amigos y un camarero te tira una bebida con hielo por encima. ¿Cómo reaccionarías? a) No me haría ninguna gracia. b) Me haría gracia, pero sin duda no lo demostraría. c) Sonreiría. d) Me reiría e) Me reiría a carcajadas. 4. La misma situación que arriba, salvo que esta vez la bebida helada la derraman encima de uno de tus amigos. ¿Cómo reaccionarías? a) No me haría gracia. b) Me haría gracia, pero no lo demostraría. c) Sonreiría. d) Me reiría. e) Me reiría a carcajadas. Cuanto más bajo puntúes, mayor es tu riesgo de enfermedades cardíacas. Cuanto más alta sea tu puntuación, menor riesgo tienes de padecerlas. Historias de prisioneros de guerra Un resultado similar es el que encontramos en las investigaciones realizadas con los supervivientes de los campos de prisioneros de guerra de todo el mundo. Al principio resulta bastante sorprendente (pero a la luz de nuestro creciente conocimiento, parece bastante predecible), que los que sólo veían el lado desesperado y horrible de la situación, tenían muchas menos probabilidades de sobrevivir que los que también podían ver el aspecto ridículo. Este segundo grupo a la larga tenía más probabilidades de sobrevivir.

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Una vez más la explicación parece residir en las substancias químicas liberadas por el cuerpo cuando estamos de buen humor y nos sentimos «brillantes», al igual que con las substancias químicas restrictivas que libera cuando estamos «abatidos» y sin esperanza. «Un hombre es feliz mientras elige serlo.» Alexander Solzhenitsyn

Historias de risa A menudo se supone que la espiritualidad es algo muy «serio» y que el humor y la risa no tienen ninguna función en una vida orientada hacia la espiritualidad. Afortunadamente, es justo lo contrario. Esta falsa creencia se debe al hecho de que las personas fotografiadas en meditación u oración suelen parecer «serias» y a que las cualidades de la compasión, comprensión y caridad suelen estar relacionadas con los problemas verdaderamente serios de personas que tienen problemas, hambre o sufren. En general, pensamos que una persona espiritual es alguien que no teme enfrentarse al sufrimiento, al dolor y a la muerte. Al enfrentarse a estas cosas —y al tratar de aliviar el sufrimiento— una persona espiritualmente inteligente se inclina por la risa. Maharishi y la risa A principios de la década de 1970, Peter Russell, de la Universidad de Cambridge, fue uno de los primeros académicos en estudiar con profundidad las técnicas de meditación y sus efectos sobre el cuerpo y la mente. Principalmente se centró en la recientemente popular (gracias a Los Beatles) Meditación Trascendental. Peter observó una cosa extraña e iluminadora: contraria a todas las expectativas: el líder de la MT, Maharishi ¡se reía más que

todos los que tenía a su alrededor! Mientras todo el mundo intentaba «captar el secreto», ¡Maharishi se lo estaba demostrando ante sus propias narices en cada instante! Maharishi explicó que si podías liberar tu espíritu, estaría libre para hacer las cosas que más le gustaban y ¡una de ellas era reírse! Es interesante observar que cuando se dice que alguien está «lleno de vida», lo consideramos repleto de los gozos de la vida, siempre enérgico y feliz. Hemos de mantener este aspecto positivo de nuestra Inteligencia Espiritual en nuestra (gozosa) mente por encima de todo. El ordenador que calculaba dos millones de movimientos por segundo En 1992, el campeón mundial de damas y de damas chinas, el doctor de sesenta y cinco años Marión Tinsley, sólo había perdido cinco juegos en cuarenta años. Le plantearon el desafío de disputar el campeonato mundial enfrentándose a un programa de ordenador preparado para calcular ¡la increíble cifra de dos millones de movimientos por segundo! En todas las entrevistas con los medios de comunicación previas al encuentro, el doctor Tinsley estaba sorprendentemente relajado y seguro, se reía con frecuencia y hacía chistes sobre la máquina y su capacidad, la cual todo el mundo pensaba que era invencible. Durante los diez días del juego de 40 partidas, el doctor Tinsley mantuvo constantemente su carácter optimista y humorista, consiguiendo que tanto la audiencia como los entrevistadores se troncharan de risa con su increíble ingenio y conversación. Cuando hubo conquistado a la «máquina invencible» y ganó el juego, se levantó de su silla con una expresión deslumbrante en su

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rostro, levantó las manos al cielo y dijo: «¡Una victoria para el espíritu humano!». ¡Ahora es el momento de «elevar» tu espíritu con un ejercicio espiritual!

Ejercicio espiritual En este ejercicio espiritual aprenderás a aligerar tu actitud mental y tu energía espiritual. Saldrás sintiéndote espiritualmente renovado y con un mayor sentido del humor y de la diversión. 1. Cultiva amistades divertidas Asegúrate de que tu círculo de amigos incluye al menos dos personas que hagan reír. Procura incluirlas regularmente en tus actos sociales y fiestas y busca constantemente amistades nuevas que sean divertidas. 2. Ve al cine y al teatro Adopta la costumbre de ir a ver películas y obras de teatro de humor o de ir a espectáculos en directo donde haya números cómicos y ríete a pierna suelta junto con otras personas del público. Esto te ayudará a tener tu dosis regular de medicina. 3. Sonríe y el mundo sonreirá contigo Prueba el sencillo ejercicio de «captar» la mirada de las personas con las que te cruzas por la calle y sonríeles. Descubrirás que incluso los rostros más serios te devuelven la sonrisa. 4. Aprende de los prisioneros de guerra Incluso en las situaciones más horribles y desesperanzadoras, intenta mantener, literalmente, el espíritu elevado. Si lo haces eso

aliviará tu sufrimiento y aumentará tus posibilidades de superar la situación. Imagínate contándote esa historia de nuevo con humor explicando la historia de una cita nefasta, un bochorno público debido a algo tremendamente comprometido que ha dicho o hecho tu hijo, una equivocación espectacular en el trabajo—, como si fuera un sketch de una comedia. «El que pierde su riqueza, pierde mucho; el que pierde a sus amigos, pierde más; pero el que pierde su sentido del humor, lo ha perdido todo.» Proverbio español 5. Conviértete en el «doctor risa» Puesto que sabes que la risa es buena para tu salud, utiliza tus cualidades de la compasión, comprensión y caridad para ayudar a los demás a mantener la salud y hacerles sonreír y reír. Proporciona oportunidades a tus amigos y compañeros para que se diviertan y se rían. Practica el arte de contar chistes, haz imitaciones y comedia. Asegúrate de que puedes aplicarte esta medicina a ti mismo. Aprende a reírte de ti. Esto te dará una nueva visión sobre quién eres y aportará nuevas dimensiones a tu personalidad a la vez que ensalza tu creatividad. 6. Libros para hacer reír Ayúdate en el anterior ejercicio comprándote libros de historietas, de chistes y de humor. Éstos proporcionan maravillosos interludios lúdicos durante el día o por la noche. Te levantarán el ánimo y podrás pasárselos a otras personas para ayudarles a dibujar una sonrisa en sus labios.

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7. ¡Hazte la vida más fácil! Fruncir el entrecejo requiere mucho más esfuerzo que sonreír. Para fruncir a fondo el entrecejo usas muchos más músculos que para una gran sonrisa. ¡Adopta «la vía fácil» y sonríe! 8. ¿Qué cara poner? Prueba fruncirle el entrecejo a un bebé. Luego prueba sonreírle. Verás que el bebé normalmente reflejará tu propia expresión. Esta reacción no es exclusiva de los bebés, ¡es una característica humana! Toma la decisión consciente de qué «cara» ponerle al mundo y los resultados que deseas conseguir con ella. 9. Haz ejercicio con la risa La próxima vez que te rías, examina lo que está sucediendo en tu cuerpo. Observa el tipo de respiración que realizas y qué músculos están trabajando. ¡Descubrirás que estás ejecutando uno de los ejercicios físicos más completos! A partir de ahora utiliza la risa como una forma de ejercicio físico y de mantener la salud.

Potenciadores del espíritu • Soy una persona cada vez más feliz y sonrío siempre que tengo la oportunidad. • Aprendo a ver el aspecto divertido de las cosas y comunico esta «buena noticia» a mi familia y amigos. • Suelo estar alegre y procuro aligerar de cargas mi vida y la de los demás. • Espero un futuro positivo para mí y para el mundo. A mi espíritu le encantan las sorpresas y los resultados inesperados. Ese tipo de cosas dibujan una sonrisa en mi rostro y una risa en mi corazón. • Me gusta estar en compañía de personas buenas y alegres y compartir la risa con mis amigos.

10. Haz algo divertido Haz un curso de ejercicios circenses para desarrollar tu flexibilidad, aprende la danza del vientre, aprende a patinar; sea lo que sea lo que hayas escogido intenta hacer algo que te resulte diferente y excitante. Mejor aún, ¡prueba hacerlo en compañía de un grupo de amigos!

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Vuelve al patio de recreo Capítulo siete

«... quien no reciba el reino de los cielos como un niño, nunca entrará en él.» Jesús de Nazaret

Los niños son los exponentes naturales de la Inteligencia Espiritual y para estimular nuestra espiritualidad es una buena idea observarles y aprender de ellos. Esto no quiere decir que optemos por tener una conducta infantil, sino que hemos de parecemos más a los niños en nuestra actitud, descubriendo de nuevo esas cualidades que solemos perder a medida que nos hacemos mayores, como son: • • • • • • • • • •

la energía y entusiasmo ilimitados, el amor incondicional, el júbilo, la espontaneidad y la excitación, el sentido de aventura, estar receptivo y confiado, la sinceridad, la generosidad, la curiosidad y las ganas de hacer preguntas, el asombro y el respeto. 57    

Al abrirnos de nuevo a esta forma de contemplar la vida aumentamos espectacularmente nuestra Inteligencia Espiritual, así como nuestra joie de vivre. Además, nuestra curiosidad y entusiasmo ampliados mantendrán a la mente y al cuerpo sanos y activos, nos ayudarán a vivir más, a tener una mejor calidad de vida, a estar llenos de dinamismo, alegría y éxito. Cuando termines este capítulo habrás decidido desechar tus actitudes infantiles (mezquindad, rencor, etcétera.) y habrás adoptado cualidades más espirituales y afines a los niños. «Los niños son buenos apóstoles de Dios, nos los envían todos los días para predicar el amor, la esperanza y la paz.» James Russell Lowell

¡Los mejores años de tu vida! ¿Por qué se suele hablar de la infancia como algo idílico? La razón es que, afortunadamente para la mayoría de nosotros, la infancia es una etapa en la que vivimos en un relativo paraíso espiritual. Vivimos en un universo totalmente nuevo que nos sorprende; exploramos activamente todos los ámbitos de conocimiento y planteamos preguntas provocadoras y tremendamente interesantes; estamos explorando nuestros sistemas éticos y descubriendo «cómo actúa la gente»; nos quieren y nuestros seres queridos nos dan muestras de compasión; nos dan educación y oportunidades, exploramos los maravillosos mundos de la risa y del entusiasmo, y se nos entrena para que podamos asegurarnos la supervivencia. Tras este período relativamente celestial vienen cargas en la vida cotidiana cada vez mayores: facturas, impuestos, hipotecas, responsabilidades de adulto, heridas, enfermedades y el bombardeo diario de las malas noticias de los medios de comunicación.

El problema cuando maduramos no es tanto lo que nos sucede sino cómo reaccionamos. Tendemos a volvernos más serios y estrictos con nosotros mismos; nos castigamos por nuestros fracasos y dejamos de tomarnos las cosas como un juego. Afortunadamente, es fácil invertir esta tendencia para regresar a nuestro entusiasmo de la infancia. Lo único que hemos de hacer es decidir que vamos a vivir nuestra «segunda infancia». Las historias que vienen a continuación nos muestran cómo podemos hacerlo: Pescar cangrejos en invierno Dos familias con todos sus hijos, pequeños y adolescentes, se fueron a la costa para pasar unas vacaciones de invierno. Los niños decidieron ir a buscar cangrejos. Tomaron sus aparejos de pesca y salieron a toda prisa hacia el embarcadero para lanzar sus sedales en las olas invernales con los anzuelos llenos de cebo. Hacía un día frío y borrascoso y mientras los niños estaban buscando cangrejos, sus padres paseaban por la playa azotada por el viento. Uno de los padres, un alto ejecutivo, se había estado quejando del mal tiempo y del frío y generalmente estaba malhumorado. Cuando pasaban por el embarcadero, preguntó a los otros padres qué estaban haciendo los niños. Al decirle que estaban pescando cangrejos, decidió ir a echar un vistazo, puesto que nunca lo había hecho cuando era pequeño. Se fue hasta donde estaban los niños y les pidió que le explicaran lo que estaban haciendo. Loca de contenta, una de las niñas tiró de su sedal, del que colgaban cuatro grandes cangrejos que estaban masticando felizmente su comida. «¡Es fantástico!», dijo el padre. «Nunca lo he hecho, 58    

¿puedo probar?» Durante las cuatro horas siguientes volvió a ser un niño, se quedó totalmente absorto y perdido en la magia y la excitación de este nuevo juego, olvidándose del tiempo por completo. Regresó a casa orgulloso mostrando su propio alijo, con la cara colorada y calor en el cuerpo y en el espíritu. Las modas no están locas La otra historia de una familia también trata de un grupo de padres y madres que se fueron de vacaciones. Los yo-yos se habían vuelto a poner de moda y los seis niños del grupo tenían sus yo-yos nuevos. El Poder de la Inteligencia Espiritual Uno de los padres era el director ejecutivo de un banco internacional. Dondequiera que fuese, y especialmente (por desgracia) en las salidas familiares (porque tenía «más tiempo») llevaba su maletín. Éste iba acompañado de su ubicuo teléfono móvil, que iba con él a todas partes. Constantemente se estaba excusando cuando sonaba, explicando que eran asuntos internacionales de gran importancia que no podía eludir. La primera tarde de las vacaciones, los niños sacaron sus yo-yos. ¡Se acabó el teléfono! Este hombre, que en salidas anteriores había sido el miembro más «gris» y aburrido del grupo, se transformó al ver los yo-yos. Dio un brinco y le suplicó a uno de los niños que le dejara su juguete. Resultó que de pequeño había sido el rey del yo-yo de su escuela. Durante una hora demostró todas sus técnicas, enseñó a los niños y probó nuevos trucos. Se puso del lado de los niños

cuando los demás adultos querían que hicieran algo y cuando sonaba su teléfono móvil, ¡pasaba de él por completo! Había descubierto, tal como hacen los niños, ¡las cosas realmente importantes de la vida! Todos sabemos por qué los padres compran ciertos juguetes a sus hijos, ¡para poder jugar con ellos! Todos recordamos la emoción que sentíamos cuando íbamos a los parques de atracciones, las peleas con bolas de nieve, los juegos de adivinanzas y los ratos que pasamos disfrutando de la naturaleza, no haciendo más que jugar, explorar, crear y soñar despiertos. Mi libro El Poder de la Inteligencia Creativa contiene mucha más información sobre los genios creativos que son los niños.

Relatos de personas que eran como niños ¡Cuando Arthur Rubinstein cumplió noventa años! Cuando el famoso pianista Arthur Rubinstein estaba celebrando su nonagésimo cumpleaños, un periodista le preguntó cómo se sentía a los noventa años. Rubinstein, famoso por su entusiasmo típico de los niños, respondió que el día de su nonagésimo cumpleaños lo había vivido como cualquier otro. Pero para Rubinstein «como cualquier otro» no era lo mismo que para la mayoría de las personas. Explicó con alegría que cada mañana de su vida, levantarse era como un nacimiento. Por lo tanto, Rubinstein consideraba que hasta la fecha había tenido 365 x 90 = 32.850 cumpleaños en su vida. Dado que cada día era un regalo, lo valoraba inmensamente, consciente de que podía ser la última 59    

oportunidad de maravillarse ante los prodigios y oportunidades que éste le aportaba. ¡A los noventa años, Rubinstein se sentía tan niño como siempre! Otra historia referente a Arthur Rubinstein demuestra de un modo todavía más claro su visión positiva y juvenil de la vida. En sus últimos años, Rubinstein descubrió que se estaba quedando ciego. Un periodista nervioso le preguntó tímidamente cómo le afectaba eso para tocar. Era evidente que el periodista esperaba una respuesta seria y quizás hasta melancólica. Por el contrario, Rubinstein le explicó con entusiasmo que antes de haber empezado a perder la vista, siempre había pensado que tocaba el piano de oído. Ahora que estaba perdiendo la visión, se daba cuenta de que había dependido mucho más de lo que pensaba en ver, a través de su visión periférica, sus dedos volar sobre el teclado. En lugar de estar deprimido y melancólico por esta situación, ¡estaba entusiasmado! Le contó de qué forma la nueva situación le había abierto una puerta hacia un mundo totalmente nuevo. Ahora tenía una oportunidad fantástica para volver a aprender todas las maravillosas y hermosas piezas, esta vez de oído. Apenas podía contener su excitación ante esta estupenda nueva perspectiva de aprendizaje que la vida le brindaba.

Buckminster Fuller y sus ojos de niño Buckminster Fuller, el americano polifacético que fue un genio en casi todo, fue famoso por su capacidad para ver las cosas con una visión «renovada». Cambió la forma en que el mundo contemplaba el clima, la Tierra y las estrellas. Señaló alegremente que el viento no soplaba desde el sudoeste, sino que ¡succionaba desde el nordeste! Y con un júbilo similar al de un niño, decía que el Sol no «sale por el este». Se queda exactamente donde está. La Tierra gira hacia el Sol, dando sólo la impresión de que sale. Una vez compartí un ciclo de conferencias con Buckminster Fuller. En uno de los momentos en que tuvimos un descanso, él salió disparado delante de mí hacia la sala de los conferenciantes, y cuando yo llegué, allí estaba él meditando, sentado con las piernas cruzadas y una sonrisa pacífica en su rostro. Al poco rato, cuando hubo terminado, le pregunté por qué hacía eso. Me dijo que lo hacía para renovar su espíritu y tener más de esa energía (propia de los niños) sin límites que le caracterizaba. «Cada gran paso decisivo en los anales del mundo es el triunfo del entusiasmo. Nunca se ha alcanzado nada grande sin él.» Ralph Waldo Emersor Tina Turner ¡la niña que nunca se retirará! Tina Turner, famosa durante toda su larga y distinguida carrera como cantante por su extraordinaria energía, espíritu insaciable y por estar repleta de cualidades de niña, dijo recientemente sobre su futuro: 60    

«Soy una persona demasiado creativa como para quedarme en casa sentada en el sofá. Ahora, posiblemente podré hacer otra cosa diferente, he de permitirme reinventarme a mí misma, cambiar... Desde que era una niña, he tenido el don de hacerme feliz. No he dependido de nadie para ello. Siempre me he reservado cierta cantidad de amor para mí, porque no siempre pude tenerlo fuera y nunca he sido una persona que recordara los pensamientos negativos o malos recuerdos. Ésta es la razón por la que soy tan feliz.»

«¿Eres Dios?», le preguntaron a Buda. «No», respondió él. «¿Eres un ángel, entonces?» «No.» «¿Un santo?» «No.» «Entonces, ¿qué eres?» Buda respondió: «¡Estoy despierto!»

Ejercicio espiritual Algunos estudios descorazonadores sobre la felicidad Los estudios realizados por el doctor Michael Miller en Florida en la década de 1990 se centraron en el vínculo entre la tendencia a reírse y la edad. Obtuvo como resultado las siguientes estadísticas descorazonadoras: el niño medio de seis años se ríe 300 veces al día. El adulto medio ríe sólo 47 veces al día: ¡unas seis veces menos! Cuanto más infeliz se siente la persona, menos se ríe. Las personas más desgraciadas sólo pueden esbozar una pequeña sonrisa entre dientes menos de seis veces al día. Un estudio todavía más descorazonador con 16.000 niños y adolescentes, de edades comprendidas entre los tres y los quince años, fue el realizado por George Land y Beth Jarman. Éste revelaba cómo la creatividad, el espíritu de aventura, la curiosidad y el afán de aprender cosas nuevas —en otras palabras, esas cualidades espiritualmente inteligentes de los niños— se van viendo frustradas, aplastadas y enterradas con el paso del tiempo. El ejercicio espiritual que viene a continuación está diseñado para ayudarte a romper con tus ligaduras espirituales y despertar de nuevo tus cualidades de niño.

Cuando hagas tu ejercicio ten presente las cualidades positivas de los niños, que son contrarias a la petulancia, egoísmo, celos, ira, tozudez, muecas de desdeño, aburrimiento, insatisfacción, desobediencia y falta de disciplina, que son rasgos infantiles. 1. La variedad es la sal de la vida Introducir la variedad en todos los aspectos de tu vida es una forma excelente de desarrollar y mantener un entusiasmo de niño por las cosas. Proponte probarlo todo al menos una vez: comidas, aficiones y lugares nuevos. Sé un conocedor de experiencias. Míralo todo con un espíritu de investigación abierta -espera encontrar maravillas y motivo de asombro en las cosas— incluso, por ejemplo, aunque sólo sea la sorpresa de que ¡al final has tenido el valor de hacer puenting! 2. Colecciona momentos de satisfacción Se han de buscar, reconocer y apreciar los momentos de satisfacción. Ver el mundo con ojos nuevos como los de un niño te ayudará a recordarte una de las cosas que has empezado a dar por hechas. La cantidad de gozo y la satisfacción total que puede alcanzar un niño con la cosa más sencilla —abrazar a un osito de 61    

peluche, observar una mariposa, jugar con una cañita en la bebida— es sorprendente. Empieza a construirte tus momentos de satisfacción. Observa tu taza de té cuando tiene el color y la temperatura adecuados, cuando te mira una persona a la que no conoces y compartes una sonrisa; cuando has terminado de planchar y toda la ropa está suave y huele a limpia; cuando por fin has ordenado tu mesa de despacho y organizado tus papeles, el sonido inesperado del canto de un pájaro en un paréntesis del ruido que te rodea. Recopila estos momentos. La vida está compuesta de estos pedacitos de paraíso, de nosotros depende disfrutarlos.

«Sólo conozco una libertad y es la libertad del espíritu.» Antoine de Saint-Exupéry

3. Cultiva una actitud lúdica Una actitud lúdica cuando cumples con tus obligaciones es importante para tu desarrollo espiritual. ¡También cambiará la forma en que haces tus tareas! Por raro que parezca, es sólo tu actitud de aburrimiento o desinterés la que hace que te sientas deprimido y ¿quién es el que pierde aquí? Piensa en lo entusiasmado que está un niño por aprender y por que le dejes que te ayude a hacer tareas en la casa y en el jardín. Para él es un juego: diversión y entusiasmo. Puede que pienses que cuando has fregado los platos un millón de veces ya no resulta tan excitante, sin embargo, todavía existe un potencial para la diversión. Está la satisfacción de ver hundirse la pila de platos sucios y crecer la de los limpios; tienes la oportunidad de pensar y de dejar que tu mente vague a donde quiera ir. Puedes ver de esta manera todas las cosas «aburridas» que tienes pendientes. Aunque tu cuerpo esté haciendo un trabajo «monótono», tu mente sigue estando libre para asombrarse y experimentar nuevas oportunidades en cada instante.

5. Manten una mente abierta Manten una mente y una actitud abierta respecto a la vida. Ten expectativas positivas sobre las cosas y deja que el tiempo despliegue y exponga la realidad. Cabe la posibilidad de que «la otra forma» de hacer las cosas produzca mayores beneficios que el modo inicial que habías pensado.

4. ¡Sé alegre! Sea cual fuere la causa de la infelicidad en tu vida, siempre hay un momento en que puedes elegir estar alegre. Para empezar este proceso (si te resulta un poco difícil) pon una «cara feliz», sonríe o sencillamente pellízcate las mejillas (esto estimula al cerebro a creer que eres feliz; luego produce substancias químicas de felicidad, que te harán feliz). Una vez empiezas con esta espiral ascendente es fácil continuar.

6. Viaja ligero Procura ir ligero sin cargas —física, mental y materialmente— por la vida. Los niños disfrutan de la vida, en parte, porque no suelen llevar mucho «equipaje». ¡Aligera el tuyo! Empieza un proceso paulatino de evaluar cualquier exceso de equipaje — ideas viejas, conceptos mentales— que puedas tener y luego piensa cómo deshacerte de él. Mientras reflexionas y actúas sobre las sugerencias de este libro ya estás progresando mentalmente. Esto no significa que no te preocupes de las cosas, ¡sólo que llevar demasiada «carga» no ayuda en nada! La mayoría de las cosas por las que te preocupas o temes nunca llegan a suceder. ¡Qué pérdida de tiempo! Y si suceden como temías, preocuparte no te habrá ayudado; sólo 62    

habrás conseguido tener menos capacidad de reacción para hacer frente a la emergencia real. De modo que reflexiona por si hay algo que debas hacer, pero permanece ligero y brillante. 7. Recuerda tu generosidad natural de niño A los niños les encanta compartir, ayudar y dar. Esa naturaleza generosa está sana y salva dentro de ti, ¡vuelve a conectar con ella y da! Da sin esperar nada, sin que nada te ate. 8. ¡Mantente flexible! ¿Puedes ponerte el dedo del pie en la boca? ¡Bueno, una vez lo hiciste! La flexibilidad tiene dos aspectos, el físico y el mental. En el plano físico, mantenerse flexible y ágil es el secreto de la eterna juventud: te protege de lesiones y permite que tu energía fluya fácilmente. Empieza con un programa de estiramientos suaves: las clases de yoga o de tai-chi son las mejores formas de conseguirlo. ¡Una mente flexible también aporta la juventud eterna! Ya estás explorando la apertura de pensamiento y la curiosidad; vincúlalas con la flexibilidad. Ten en cuenta las alternativas, prueba hacer las cosas de un modo diferente; esto hace que resulten nuevas, aporta diversión y puede darte una idea totalmente nueva: «La necesidad aguza el ingenio». El pensamiento flexible mantiene ágil a tu cerebro: disfruta de las recompensas.

Juguetear y bailar son expresiones naturales de los niños y las expresiones naturales de los seres humanos llenos de vida. La danza promueve la flexibilidad del cuerpo y de la mente; es un maravilloso ejercicio aeróbico y fomenta la expresión de tu dicha y de tu risa. 10. Vive cada día Sé como Arthur Rubinstein y considera que cada día de tu vida es un «nacimiento». ¡Celébralo como tal! Recuerda que si vives hasta los cien años (lo cual en estos días es cada vez más probable), ¡tienes que celebrar 36.500 cumpleaños!

Potenciadores del espíritu • Celebro mis cualidades de niño y sigo reforzándolas. • Soy juguetón y aventurero. • Cada vez soy más feliz y entusiasta, transmito mi felicidad y entusiasmo a los demás. • Soy un bailarín y me muevo con alegría y entusiasmo. • Me encantan mis sentidos y los uso constantemente para «ver» las cosas de siempre con ojos nuevos.

9. ¡Baila! «La danza debería ser una expresión divina del espíritu humano.» Isadora Duncan

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El poder del ritual Capítulo ocho

«¿No siente todo hombre auténtico que se engrandece al reverenciar aquello que realmente está por encima de él?» Thomas Carlyle

La palabra «ritual» procede de la palabra latina ritus, que significa costumbre o forma de hacer algo. Los rituales suelen tener una forma: están limitados por el tiempo y el espacio, conllevan crear un lugar especial o un entorno sagrado, donde se celebra el ritual, gesto simbólico o ceremonia. Los rituales suelen realizarse en un orden prescrito, que a menudo se transmite de generación en generación. También pueden ser privados, personales y muy individuales: por ejemplo, tomarse un tiempo para hacer una pausa y admirar la vista cada vez que pasas por encima de un puente. Los rituales se pueden observar sólo una vez o pueden ser tradiciones comunes que se transmiten a través del tiempo (desde festivales para celebrar el cambio de estación hasta rituales religiosos o hacer la receta especial de las galletas de mantequilla o el pastel de la abuela cada Navidad). Todos participamos en rituales, aunque no nos demos cuenta. Si has ido alguna vez a una boda, participado en una fiesta nacional, o si has mandado una postal para 64    

el día de San Valentín, has experimentado directamente el poder del ritual. Los rituales actúan en un plano transpersonal. Nos conectan con el pasado y con algo superior a nosotros: ya sea una fuerza de la naturaleza, un acontecimiento social o divino. Uno de estos ejemplos es el día de San Valentín. Tiene su origen en el ritual romano de la fertilidad, pero ahora se ha convertido en una ocasión para expresar un amor y afecto romántico. En su forma original conmemoraba algo mucho más grande que un mero sentimiento: era una forma de celebrar una nueva vida y de honrar a la fuerza vital, algo esencial para la continuidad de la comunidad. Los rituales también nos conectan con nuestros yoes más profundos y a los unos con los otros. En este capítulo te demostraré el efecto increíblemente positivo que el ritual puede tener sobre ti, tu cerebro y tu vida; descubrirás cómo potenciar tu Inteligencia Espiritual (¡y tu inteligencia en general!) a través del poder del ritual.

Rituales comunitarios Ritos de paso Los ritos de paso y de iniciación probablemente sean los rituales públicos con los que estamos más familiarizados —bodas, ceremonias de elección de nombre, graduaciones, inauguración de una casa, funerales, cumpleaños y aniversarios—, esos rituales, serios o divertidos (o ambas cosas) que marcan los momentos importantes de nuestra vida. Dichos rituales nos ayudan a afianzarnos y a centrarnos y nos proporcionan un sentimiento de pertenecer a una comunidad más grande. Un ejemplo estupendo es el del levantamiento del granero de los amish: todo el pueblo se reúne para levantar el granero o la casa de una pareja recién casada. Otros de estos rituales son los de la

«mayoría de edad» o «ritos de iniciación». Estos rituales están diseñados para marcar la transición de la infancia o de la adolescencia a la etapa adulta y a los derechos y obligaciones de adulto. Días de descanso «Algunos celebran el Día del Señor yendo a la iglesia, yo lo hago quedándome en casa, con un chambergo como corista y árboles frutales como cúpula.» Emily Dickinson Un ritual que es el eje de nuestro calendario es el domingo como día de descanso, tradición que proviene de la Biblia. Tener un día a la semana en el que dejas a un lado tu trabajo y pasas el día relajándote es bueno para tu salud mental y física. Es algo que podemos probar, aunque no seamos religiosos. No tiene que ser el domingo, puede ser cualquier otro día de la semana que podamos dedicar al descanso. Tradicionalmente, el domingo es el momento en que las familias y amigos se reúnen para comer, pasear por el parque o realizar actos religiosos. El ritual del recuerdo «La muerte de un hombre es más asunto del superviviente que del que muere.» Thomas Mann

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Uno de los rituales públicos de recuerdo más conocido es la festividad anual del Remembrance Day o de los Santos Difuntos, que se celebran en noviembre. El Remembrance Day comenzó como una forma de honrar y recordar a los millones de soldados muertos en la Primera Guerra Mundial, en todos los bandos del conflicto y se ha extendido para conmemorar los caídos en las siguientes guerras y conflictos. A pesar de la naturaleza pública del Remembrance Day, suele ser un ritual de recuerdo privado para muchas personas, un momento para recordar a los seres queridos, aunque no murieran en la guerra. Esos rituales de recuerdo privados también pueden consistir en poner flores en la tumba de alguien en alguna fecha especial. Los seres queridos no tienen que estar muertos para que los recordemos en un ritual, la tradición de brindar por los amigos ausentes también es un acto de recuerdo.

Refuerza tu fortaleza interior El ritmo más acelerado, el creciente caos y bombardeo de información que ahora forman el entramado básico de la «vida moderna», nos mantienen alejados de los pensamientos y actividades espirituales, al mismo tiempo que hacen que los anhelemos todavía más. Incluso nuestra casa puede convertirse en un antisantuario cuando vemos que se amontonan las tareas, que el perro pide salir a pasear, o los niños exigen cada vez más de tu tiempo y energía. ¡Ni siquiera te puedes relajar delante de la televisión debido a todas las catástrofes y desaliento que salen de ella! ¿Cómo puedes escapar de la «enajenada muchedumbre»? ¿Dónde encuentras paz espiritual y revitalización?

¿Dónde encuentras tu santuario? ¡A través del ritual! El ritual se puede considerar el hogar al que acudes a calentarte, descansar y regenerarte. Por su propia naturaleza te ofrece orden, estabilidad, seguridad y certeza en la turbulencia que a menudo te rodea. El ritual hace que tu mente y espíritu se sientan seguros sabiendo que dentro de su «espacio» existe poco riesgo de interrupciones, En el espacio que te proporciona el ritual, es más fácil involucrarse en los pensamientos y acciones que te ayudan a entrar más plenamente en tu ser espiritual. Además, el ritual es una parte inherente de la naturaleza humana y de la espiritualidad; todas las tribus, grupos o naciones de la historia han incluido la constancia del ritual como parte de su entramado social. Tales rituales siempre implican pensar o verbalizar conceptos espirituales, la contemplación de la naturaleza y la implicación con la misma. En la mayoría de los ejemplos el ritual conlleva varias formas de trascendencia, en las que las personas, ya sea como individuos o como grupos, son capaces de superar el dolor, el sufrimiento y el pesar que les aflige y sumar sus propias energías espirituales a las de los demás, al mundo y al universo. Es curioso observar que en todas las sociedades, cuando aumenta el estrés, las personas se suelen refugiar en el ritual como forma de protección última, limpiando su cuerpo y las cosas obsesivamente u ordenándolo todo de la misma manera, como «último recurso» contra las oleadas de problemas que asaltan su alma. El ritual se puede considerar como uno de los métodos principales para limpiar la «contaminación acústica» de nuestras mentes. Incluso actividades tan simples y cotidianas como pasear al 66    

perro, arreglar el jardín o hacer una pausa, pueden proporcionarnos ese orden y estabilidad que nos permite aislarnos de los líos y exigencias que nos envuelven y entablar una forma de comunicación más elevada con nosotros mismos, con los demás y con la naturaleza. Cada vez hay más personas entre las que buscan la Inteligencia Espiritual que crean «espacios» espirituales en sus hogares. Los utilizan regularmente para recobrar el equilibrio que han perdido durante el día. Una amiga mía ha convertido su baño en su «espacio». Generalmente toma un baño caliente con aceites aromáticos una vez al día. Su única iluminación son las velas. Ella lo describe así: «Tan pronto como empiezo a sumergirme en el agua los millones de voces que reclaman mi atención en mi cabeza empiezan a callarse y sólo hay una voz que se vuelve cada vez más intensa: mi voz interior. A medida que me voy introduciendo en el agua empiezo a sentir cómo se abre y libera mi diafragma, mi respiración se relaja y se vuelve más profunda y regular, todo mi cuerpo se calma, aquieta, se siente cómodo y en paz consigo mismo. En cuanto me sumerjo no sólo me baño con el agua caliente, los aceites y los perfumes, sino también con la fuerza que me otorga esa autorreflexión. »Es mi tiempo privado. Mi precioso tiempo. Mi tiempo para mí. Mi tiempo para estar conmigo misma.» Tal como habrás percibido a lo largo de estas páginas de El Poder de la Inteligencia Espiritual, cada vez hay más personas que se dirigen hacia las autopistas espirituales.

Las lecciones de los gurús Los yoguis de India se encuentran entre los líderes y maestros espirituales más venerados del mundo. Mucho antes de la llegada de la civilización moderna los yoguis habían descubierto el inmenso poder de los rituales espirituales y físicos. Los utilizaban para entrenar su cuerpo y su mente en su senda hacia la realización espiritual. Igualmente, los practicantes de las artes marciales asiáticas —kung-fu, karate, tae-kwon-do- utilizan el «ritual correcto» para entrenar sus mentes y cuerpos en las sendas que conducen a la iluminación disciplinada.

¡A las células de tu cerebro les encanta el ritual! Algunas investigaciones recientes y fascinantes sobre el valor del ritual proceden del centro de las «buenas noticias»: ¡el frente del cerebro! El dicho «la práctica hace al maestro» es más que conocido y suele ser cierto (aunque no funciona si la práctica no es correcta, ¡más bien empeora!) Los investigadores querían saber por qué es así y durante los últimos veinte años han hecho el descubrimiento más extraordinario. Como vimos en el capítulo 2, cada acción que realizas ¡abre un camino en tu cerebro! Este camino, al igual que un sendero nuevo por un campo, se vuelve más definido y más fuerte cuanto más utilizas (repites) el pensamiento o la actividad. Esto se aplica a los rituales de entrenamiento físico, pero también a los de repetir oraciones, mantras o meditaciones e incluso rituales tradicionales como comidas especiales o celebraciones familiares. Al repetir rituales y actividades, éstos se convierten en hábitos. 67    

Al encontrar los «rituales correctos» aumentas la posibilidad de ser capaz de vencer los obstáculos y las dificultades con un espíritu mucho más ligero y con mayores probabilidades de éxito. ¡Ha llegado el momento del ejercicio espiritual!

Ejercicio espiritual Sabiendo que los rituales positivos crean buenos hábitos en tu cerebro y te fortalecen contra las adversidades de la fortuna, es bastante razonable incorporarlos en tu vida cotidiana de tantas maneras como puedas. Mientras te preparas para desarrollar tus propios rituales para que te eleven espiritualmente, sé consciente del hecho de que éstos son muy eficaces para ayudarte a mejorar en tu Inteligencia Espiritual y en todos los aspectos. Ya no perderás el tiempo al tener que «empezar todo de nuevo». También te proporcionan más consuelo y puedes recogerte en tus rituales como lo haces cuando te pones tu jersey viejo favorito. A continuación hay algunos ejercicios que te ayudarán a establecer tus propios rituales para que te ayuden durante el día. 1. Haz un Mapa Mental® Haz un Mapa Mental® de todas aquellas áreas de tu vida en las que podrías usar un ritual para ensalzarlas, tanto en un aspecto general como espiritual. A medida que desarrollas este Mapa Mental®, cerciórate de que el ritual no hace que tu vida sea más rígida, sé consciente del aspecto de ahorrar tiempo. Recuerda, el ritual se ha de usar para expandir tu vida y hacerla más flexible y satisfactoria.

2. Haz el ritual de dar las gracias en la comida Dedica uno o dos minutos al ritual de dar las gracias antes de comer. Da las gracias a todas las personas que han participado para que esa comida esté en tu plato. Piensa en quienes plantaron las semillas, recolectaron los alimentos, los envasaron, transportaron, vendieron, compraron y los prepararon para que tu cuerpo digiera la comida y viva sano y feliz. 3. El ritual del amanecer ¡Cada día es un nuevo comienzo! Utiliza el ritual para preparar tu espíritu para el día que tienes por delante. Empieza el día con música relajante o con cinco minutos de meditación para estar a punto para las tareas que has de realizar, o bien haz algunos estiramientos suaves para despertar a tu cuerpo y tu mente. Durante cuatro años, cuando tenía veinte y pocos años, cada mañana ponía la maravillosa música del amanecer de la suite de Peer Gynt; ¡conseguía que el Sol saliera en mi mente, por muy mal tiempo que hiciera fuera! Sé consciente, al despuntar el día, de los regalos omnipresentes del amor, la amistad, la paz, la sabiduría, la naturaleza y la vida de los que gozas y póntelos al igual que te pones la ropa. Llévalos contigo durante el día. 4. El ritual del encuentro o del saludo Las «primeras veces» son muy importantes para todo el mundo. Tu cerebro recordará automáticamente esos primeros encuentros, mejor que los siguientes. Por lo tanto, asegúrate de saludar a las personas, eso se convierte en un punto positivo ¡en un recuerdo feliz en sus bancos de memoria! Haz del comienzo positivo un ritual permanente en tu conducta espiritualmente inteligente.

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5. El ritual de despedida Al igual que tu cerebro recuerda mejor las «primeras cosas», también recuerda mejor las «últimas». Por eso es muy importante que tus «despedidas» sean positivas, pues serás recordado por ellas. Comprueba esto tú mismo; ¿recuerdas la última vez que viste a la persona que más amabas? Acostúmbrate a decir siempre «adiós» con una sonrisa y piensa «¿qué pasaría si nunca más volviera a ver a esa persona y éste fuera el último recuerdo que nos quedara el uno del otro?» Actúa teniendo presente ese pensamiento y crea un ritual de despedida que os deje a ambos en un estado mental espiritualmente elevado. ¿No es más bonito marcharse con un paso alegre y una sonrisa en tus pensamientos? 6. El ritual del final del día Irse a dormir es un ritual en sí mismo que has establecido a lo largo de tu vida. Ahora puedes hacer que sea incluso más positivo. Al final del día, justo antes de quedarte dormido, tu mente se encuentra en un estado particularmente receptivo. Por consiguiente es una buena idea «llenarla» de buenos pensamientos e imágenes, y con cosas que te puedan ayudar en tu crecimiento espiritual. Es muy bueno instaurar el ritual de revisar el día, recordar en la medida de lo posible lo que ha sucedido. Puedes emplear este tiempo para reflexionar sobre las lecciones aprendidas durante el día e incorporarlas en tu vida. Basándote en tu revisión del día, puedes imaginar y visionar las metas generales y planes para el día siguiente, lo cual te dejará con un sentimiento de previsión y expectación, en lugar

de experimentar esa sensación de agotamiento, depresión y miedo a la mañana siguiente, como suele suceder cuando has tenido un día muy duro. Incluso en esos «días duros» se te han dado muchas cosas, de modo que búscalas y duérmete contando tus bendiciones, en lugar de hacerlo contando corderitos. 7. El ritual del servicio perfecto Éste es el ritual de tener presente al máximo el pensamiento de «servicio perfecto». Todo lo que haces por ti y por los demás, hazlo lo mejor que puedas, incluyendo cosas sencillas como preparar un té, limpiar la jaula del canario, decirle la hora a alguien, preparar una comida, hacer la cama o conducir. ¡Piensa en la ceremonia japonesa del té! Hazlo todo con atención y esmero. Piensa siempre que estás haciendo algo para alguien que es muy especial (independientemente de que seas tú mismo u otra persona) y pones todo tu amor en ello. Este ritual te ayuda a que te resulte mucho más agradable hacer cualquier cosa y a que el receptor de tus «servicios» sea más feliz y se sienta espiritualmente más elevado que si lo hubieras hecho sin tanto esmero. 8. Marca tus rituales Marca tus rituales de alguna manera simbólica. Enciende una vela o una varita de incienso cuando comiences tu ritual de meditación o haz uno o dos minutos de silencio para dar las gracias al principio de una comida familiar especial. Estas acciones te ayudan a separar tu momento de ritual de tus actividades normales y son una gran forma de limpiar tus pensamientos y de concentrarte.

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9. Crea un espacio ritual Te puedes crear un espacio sagrado en cualquier parte. En el trabajo basta con poner una postal o escribir un proverbio inspirador. Puedes convertir en un ritual el mirarlos en los momentos de estrés y utilizarlos para afianzarte en un estado más expansivo. Puedes crear un «espacio sagrado portátil» llevando siempre algo encima como una piedra, una fotografía o símbolo especial (una cruz, una llave, un laberinto); incluso cuando viajas puedes transportar ese espacio sacro hasta una habitación de hotel normal y corriente. También puedes crear un espacio sagrado en tu jardín, un lugar concreto donde te puedas sentar y quedarte en un estado contemplativo. 10. El ritual de meditar o descansar Practica una meditación breve o ritual de descanso cada día; esto te ayudará a mantener tu salud física y bienestar espiritual. El capítulo siguiente habla extensamente sobre este tema.

Paz Capítulo nueve

Confucio

Potenciadores del espíritu • Dedico un tiempo a pensar en los momentos importantes de mi vida y a celebrarlos. • Realizo diariamente rituales personales que me ayuden a centrarme. • Utilizo siempre el ritual para acercarme a la realidad de mis sueños. • Me comprometo con mi visión. Cada día refuerzo mi resolución mediante el ritual para cumplirla.

La paz es ese estado de quietud o de calma donde estás libre de ansiedad, distracciones y aflicción. Quizá la mejor metáfora sea la del estanque o lago en calma cuando no hay olas o vientos fuertes que alteren la superficie. La paz es un estado que puede existir en una persona, en una casa, en un vecindario, un país y en el mundo. La sorprendente verdad es que cuantas más personas haya que estén en paz consigo mismas, mayor probabilidad existe de que todas las comunidades, de todos los tamaños, incluida la comunidad mundial, también disfrute de paz.

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John Macquarrie La conducta y la existencia pacifista han sido el distintivo de todos los grandes líderes espirituales: desde Buda y Cristo hasta Mahatma Gandhi. A pesar de los grandes sacrificios y padecimientos personales, estos maestros se las han arreglado para conservar su paz interior; la verdadera prueba del estado de estos seres que gozan de paz interior es ver cómo actúan ante las adversidades y la agitación. Hubert van Zeller Vivimos en una sociedad de 24 horas al día, siete días a la semana y sin pausas, adicta a los teléfonos móviles, Internet, ordenadores, pantallas de vídeo y al ruido. Cada vez hay más persona que interna (¿y también externamente!) exclaman: . Este capítulo te enseñará a hacerlo. A fin de poder gozar de paz interior y crear ese estado de , es esencial que aprendas a reducir las distracciones en tu vida, a minimizar la ansiedad y eliminar el estrés. Esto facilitará que tu cuerpo, mente y alma vivan en un mundo interno de paz y serenidad. Sólo desde ese estado de paz interior puedes aportar paz al mundo.

La paz y la meditación La meditación de define como un período de tiempo dedicado a enfocar la mente con fines espirituales o como un método de relajación. En El poder de la Inteligencia Espiritual usaremos una amplia gama de definiciones, incluidas las meditaciones con la , la oración, centrarse en problemas específicos para conseguir soluciones, meditaciones autoprogramadas, comunión con la naturaleza, descanso y relajación. Al entender la importancia de proporcionarte a ti miso el silencio y el descanso, comprenderás el valor de las técnicas de meditación que tan rápida y beneficiosamente se han extendido por todo el mundo. Estas despejan todo el caos mental, te aportan una nueva sensación de serenidad y de paz, y (como dicen muchas personas) te . Los grandes líderes espirituales y la meditación Es interesante y muy motivador observar que todos los grandes líderes, sin excepción, han practicado y fomentado la meditación como medio para conseguir salud física, mental y espiritual, así como por ser el método principal para obtener sabiduría y alcanzar la iluminación. ¡Una rápida revisión nos resultará bastante esclarecedora! 1.

Moisés (1300 a.C.) Moisés fue conocido por ser un pensador profundo que pasaba largos períodos de introspección, mientras cuidaba del rebaño de ovejas de su suegro en las montañas. El cuarto mandamiento , declaraba específicamente que al menos un día a la semana se ha de dedicar al descanso y a la relajación. 71    

2.

Mahavira (599-527 a.C.) Unos mil años después de Moisés y a más de 11.000 kilómetros de distancia, Mahavira exploró un camino espiritual en el que probó muchos tipos de meditación. La senda espiritual que inició Mahavira, el janaismo, incluye períodos de meditación establecidos, así como preceptos contra dañar a cualquier ser vivo. Por ejemplo, los que practican el janaismo llevan mascarillas para cubrirse la boca y la nariz para no inhalar y matar a ningún insecto al respirar

3.

Buda (563-483 a.C.) Una de las imágenes más difundidas del budismo es la de Budea sentado en meditación. significa y fue a través de la iluminación como llegó al despertar supremo de todas las cosas. Dos de los pilares del Noble Óctuple Sendero –su fórmula para vivir una vida cada vez más espiritual- de Buda son ; , y la : .

4.

Confucio (551-479 a.C.) Confucio (Kung-fu tze) sigue siendo venerado por los chinos como el . De niño se le conocía como un >>Hijo de la Naturaleza>>: alguien que pasa mucho tiempo reflexionando y en contemplación. En sus enseñanzas Confucio hizo hincapié en que la meditación era una parte necesaria para el autodesarrollo.

Entre sus máximas para una buena vida espiritual se encuentran las siguientes: • Las buenas personas se examinan a sí mismas. • Las buenas personas practican la introspección con cautela. • Las buenas personas pueden estar solas sin tener miedo y abandonan la sociedad sin tristeza. • Las buenas personas se refuerzan a sí mismas incesantemente. • Las buenas personas brillan con la cualidad de la iluminación. 5.

Jesús (0-33) Antes de empezar a predicar, Jesús pasó 40 días y 40 noches en la soledad del desierto, sólo en compañía de animales salvajes, meditando y preparándose, mental y espiritualmente, para su misión. Durante toda su vida, Jesús se retiraba regularmente a las montañas y al campo para pasar algún tiempo solo orando y reflexionando. Enseñó que todas las personas podían y debían entablar esta , en cualquier lugar y en cualquier momento.

6.

Mahoma (570-632 d.C.) El profeta Mahoma fundó uno de los movimientos espirituales que más rápidamente ha crecido en el mundo: el islam (que significa ). Para Mah0oma la meditación y la oración fueron tan importantes que forman parte de los primeros cinco fundamentos del islam: . 72    

Pasos prácticos para conseguir la paz Descanso y relajación Según numerosos estudios, hacer descanso o siesta durante media hora aproximadamente a lo largo del día funciona mucho mejor y más rápido que la cafeína para aumentar el estado de alerta y reducir el cansancio y el estrés. Un estudio particularmente interesante sobre los trabajadores de las naciones industriales y postindustriales sugería que la meditación, el descanso o hacer la siesta aumentaban la productividad, la creatividad y la capacidad para resolver problemas en el ¡92,5 por ciento de los trabajadores! ¡El estudio indica que no necesitamos tantas pausas para tomar café, sino para meditar! Otro estudio realizado con soldados americanos dio resultados similares. Se observó que los soldados que tenían treinta minutos para descansar y pausas para relajarse eran mucho más aptos para que los que habían confiado sólo en las tazas de café. Técnicas de meditación Hay muchos tipos de meditación: meditación de pie, en movimiento, sentado, meditación trascendental, meditación con canto, etcétera. Algunas se conectan en la vacuidad de la mente, otras en desarrollar un estado alterado de conciencia parecido al trance, mientras que otras (especialmente las meditaciones en movimiento como el Tai Chi y el Chi Kung) conllevan ejercitar el cuerpo y la mente a la vez. Otras, como la meditación cristiana y algunas formas de meditación judía se centran en cantar o reflexionar sobre textos sagrados específicos. Sin embargo, el punto de partida de casi todos los tipos de meditación es la respiración y respirar. Una meditación muy

sencilla que puedes probar es sentarte en respirar lentamente, en inhalar y exhalar. A algunas personas les gusta contar las respiraciones hasta diez y luego a la inversa hasta uno. De este modo pueden observar si su mente se ha dispersado. Si observan que se dispersa, simplemente vuelven al uno, sin sentirse culpables por haberse distraído. Dejan que los pensamientos fluyan con el ritmo de la respiración, entrando y saliendo. Mientras te concentras en la respiración, irán desapareciendo gradualmente todos los pensamientos que surjan en tu mente y terminarás la meditación relajado, renovado y atento. San Francisco de Sales Mis experiencias personales con la meditación Al igual que la mayoría de las personas que conozco, cuando era pequeño tuve muchas experiencias meditativas: estar sentado al lado de un estanque o de un río y sentirme transportado por los tenues y adormecedores ritmos de la naturaleza o ¡ en clase cuando se suponía que tenía que estar prestando atención al profesor! Mi primer contacto formal con la meditación fue cuando practiqué Yoga y observé las distintas partes de mi cuerpo (¡con algunas resultaba más fácil que con otras!), también practiqué varias técnicas de meditación del budismo Zen donde nos enfocábamos en cantos. Éstas me parecieron especialmente tranquilizantes y relajantes, a la vez que me proporcionaban mucha energía.

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Cuando Los Beatles presentaron a Maharashi Manhesh Yogi y la Meditación Trascendental al mundo a mediados de la década de 1960, un amigo me enseñó este tipo de meditación. Simplemente se trata de repetir un mantra continuamente, utilizándolo para limpiar tu mente de cualquier otro pensamiento intruso. Puedo decir que según mi experiencia personal este tipo de meditación realmente hace que te sientas . También aprendí la relajación profunda y técnicas de autohipnosis. Esto transformó mi vida, me permitió diferentes planos de mi conciencia simultáneamente y dirigir mi voluntad e intención, de una forma muy poderosa. El momento álgido de mi carrera meditativa tuvo lugar en Méjico el último año del milenio. En un bello y soleado día de otoño, un grupo de artistas, escritores y estudiantes de Inteligencia Espiritual mejicanos me invitaron a visitar la pirámide gigante de Teotihuacán. Cuando descendíamos, apareció un guía de nadie sabe dónde y nos preguntó si queríamos visitar la cámara de meditación, privilegio que no suele estar reservado para los turistas como yo. Aceptamos encantados la invitación y nos llevó a través de una puerta hacia un túnel subterráneo, que a veces era tan estrecho que teníamos que andar gateando. Sólo estaba iluminado por una linterna, al final llegamos a la cámara de meditación: una pequeña abertura a unos 6 metros por debajo del suelo y a bastantes más de la cúspide de la pirámide. ¡Nos encontrábamos en el centro de la base de la pirámide! Nuestro guía hizo que formáramos un círculo de pie, que nos tomáramos de las manos, cerráramos los ojos y meditáramos en el silencio y en la energía en ese

lugar mágico, que había sido una cámara de meditación y oración privada para los sacerdotes de este magnífico templo. La sensación era tan relajante y tan fuerte, que todos nos sentíamos con todo y nadie quería marcharse, ¡Jamás!

Ejercicio espiritual 1.

Descubre el poder y la energía en silencio y meditación Es muy fácil de hacer y una experiencia maravillosa en familia o con amigos. Lo fantástico del silencio y de la meditación es que puedes hacerlo en cualquier parte y no necesitas ningún equipo especial.

2.

¡Difunde la paz a tu alrededor! Únete con otras personas y proyecta tu paz interior al mundo exterior. Comprométete con otras personas para difundir la paz y la tranquilidad dondequiera que vayas.

3.

Una forma de comenzar el día con paz La mayoría de las personas se levantan con prisas y no dejan de correr hasta se que acuestan. Empieza el día con calma con más paz y más control sobre ti mismo, tus sentimientos y sobre lo que entra en tu cabeza. Antes de estar totalmente despierto, revisa tus sueños (si puedes recordarlos), observa cómo te sientes en ese momento, cuál es tu estado de ánimo y cómo puedes utilizarlo a tu favor en el transcurso del día. Crea un ritual matinal de estiramientos suaves y sonidos agradables (el canto de un pájaro o música tranquila y relajante) para ¡iniciar tu nuevo cada día!

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¡Desconéctalo todo! Te uno o dos momentos de a ser posible a la misma hora cada día. Sin televisión, ni radio, ni ningún electrodoméstico funcionando, crea el máximo silencio que puedas. Empieza con unos pocos minutos y aumenta el tiempo lentamente. Si vives en un barrio muy ruidoso, cómprate tapones para los oídos o ; compensan el ruido y dan reposo a tus oídos. ¡Un ejercicio más avanzado sería practicar quedarse en ese estado de paz cuando estás en un atasco de tráfico en la cola del supermercado! ¡Controla el tráfico! Busca un momento para hacer una pausa, ya sea a media mañana o a media tarde. Si tienes música tranquila y relajant4e ponla durante unos minutos. Si no, imagínala sonando en tu cabeza. A los pocos minutos, prosigue con lo que estabas haciendo. Si puedes procura que las personas que tienes cerca hagan lo mismo; esto cambia la atmosfera y la energía de tu entorno para mejor. Haz de tu hogar un santuario Haz que tu hogar sea realmente tu centro de paz y creatividad. Revisa tu entorno y las actividades que haces en ella. Por ejemplo, crea una zona donde no haya televisión. Decide no escuchar o mirar todas las noticias (¿cuándo dan buenas noticias?). Si tienes hijos, sabrás que éstos son más rebeldes, irritables y desobedientes si pasan de un entretenimiento a otro (del Nintendo® a la televisión y de está al juego de ordenador Game Boy®, etcétera). Normalmente son mucho más agradables, felices y están más tranquilos si se les deja que se

entretengan con un poco de cada cosa, que lean y que estén solos con sus imaginaciones y fantasías. Procura que tengan su espacio para Haz todo lo posible para que tu hogar sea un refugio de paz. 7. Prueba diferentes tipos de meditación Hay muchos tipos de meditación y unos son más adecuados para unas personas que otros. Vale la pena pasar algún tiempo probando suavemente las distintas opciones, para poder elegir aquellas que veas que tienen más sentido para ti y que te van mejor. Casi todas las religiones tradicionales tienen alguna práctica de meditación: desde los giros de los sufíes, la meditación caminando budista hasta las formas contemplativas cristianas. Entretanto conocerás muchos amigos nuevos e interesantes. 8. Aprende de los grandes maestros espirituales Busca los dichos de los grandes maestros espirituales y aprende de sus palabras y ejemplos. Son maravillosos modelos de rol y te ofrecerán muchas opciones y oportunidades interesantes en tu búsqueda de la verdad. 9.

Meditación bailando En la paz y el santuario de tu hogar, escucha música rítmica bonita, fluida y tranquila, deja que tu cuerpo se exprese como guste y que tu mente vague libremente o se centre en algún aspecto concreto de tu vida. Prueba algunas sesiones de «danza de trance» o incluso ceremonias de los indios nativos americanos.

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10. Pasa tiempo con los animales y la naturaleza Muchos animales viven en un estado de meditación constante: en alerta relajada. ¡Pasa tiempo con ellos; comunícate con ellos, aprende de ellos! Si tienes problemas que trastornan tu paz mental, ves a dar un largo paseo por el campo solo o acompañado de alguien, ¡camina y resuélvelo!

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Hoy invito a mi cuerpo, mente y espíritu a un nivel de conciencia superior. Con gran calma observo el fluir de mi mente, luego le doy la bienvenida al silencio. Me siento cada vez más en contacto con el Cosmos, con su grandeza, su magnificencia y belleza.

11. Medita en tu vida Cualquier actividad se puede convertir en una meditación. Prueba una «meditación de comer»: no hagas nada más que prestar atención total a tu tableta de chocolate o a toda tu comida. Cuando te bañes, hazlo conscientemente, en lugar de estar pensando en la lista de cosas pendientes que te quedan por hacer ese día. «Todo camino, toda calle en el mundo es tu meditación caminando.» Thich Nhat Hanh

Potenciadores del espíritu • • • • • •

Elijo la paz para mí y para todos los seres vivos. Cada vez disfruto de más tranquilidad, estoy más centrado y en paz. Estoy incorporando los rituales de meditación en mi vida diaria. Cada vez siento más paz y tengo más paciencia, dejo que los frutos de mis acciones maduren con el tiempo. Me curo a mí mismo, vuelvo suavemente al equilibrio y la estabilidad, nutro mi paz interior. Permanezco estable en medio de la complejidad y me siento seguro en momentos de angustia. 76    

¡Lo que necesitas es amor! Capítulo diez

«El amor es paciente y afable; no es celoso, engañoso ni orgulloso, el amor no tiene malos modales, egoísmo o irritabilidad; el amor no lleva la cuenta de las equivocaciones; el amor no se complace en el mal; sino con la verdad. El amor nunca se rinde y su fe, esperanza y paciencia nunca se dan por vencidas.» San Pablo, Corintios I «Lleva el amor a dondequiera que vayas: primero a tu propia casa. Da amor a tus hijos, a tu esposa o esposo, a tu vecino... No permitas que nadie acuda a ti sin marcharse mejor y más feliz que llegó.» Madre Teresa «El "amor" se define como un sentimiento de afecto e interés profundo y grande. A aquellos que aman les da un placer intenso cuidar y contemplar al objeto de su amor. Tiene el poder de curar, consolar, dar fuerzas, conquistar, inspirar y, lo más sublime, de dar la vida. »EI amor es la única fuerza capaz de transformar a un enemigo en un amigo.» Martin Luther King 77    

La falta de amor puede provocar ansiedad, depresión, sufrimiento, desesperación, desaliento, enfermedad y, en caso extremo, la muerte. El amor hacia uno mismo, los demás y el universo se puede considerar como la meta mundana y espiritual última. Los orígenes de la palabra «amor» [en inglés «love»], se hallan en la palabra del inglés antiguo de origen alemán «leof», que significa «querido», «agradable» y que suena muy parecido a la palabra «vida». Por lo tanto, en cierto sentido, ¡verdaderamente podemos decir que «la vida es amor» y «el amor es vida»! En este último capítulo te presentaré el Poder Supremo: el Poder del Amor. Te contaré historias de aventuras, desesperación, muerte y esperanza, y espero poder guiarte hacia algunas visiones que te ayuden a aliviar tus penas, sufrimientos y desesperación. Has de terminar este capítulo con la sensación de estar abierto, de comprender y de sentir compasión, y estar inspirado para desarrollar este poder en tu interior, en tu propio beneficio, en el de tu familia, de tus amigos y de toda la humanidad. «El amor no busca complacerse a sí mismo, ni se preocupa de sí, pero por otro lado lo entrega todo, y construye un cielo en la desesperación del infierno.» William Blake

Amor y miedo El amor es el antídoto de ese estado que se encuentra tras casi todas las emociones negativas: el miedo. El miedo es el resultado de un sentimiento de separación -de los demás, del resto de la vida- y el amor es el resultado de ser conscientes de nuestra conexión. Si nos acostumbramos a usar el poder del amor para conquistar el miedo, daremos un paso de gigante hacia una mayor Inteligencia Espiritual.

«Recibir y enviar» Nuestra tendencia natural es intentar distanciarnos del miedo y conseguir tanto amor como nos sea posible. Esta reacción se basa en nuestros temores básicos por la supervivencia. En el Tíbet y en otras partes, intentan cultivar la reacción opuesta con una práctica de meditación profundamente transformadora de «recibir y enviar». En esta práctica en lugar de intentar recibir amor, los meditadores se comprometen a «enviarlo» a los demás. En lugar de alejarse del miedo, intentan recibir la carga del miedo que puedan sentir otras personas. Al «recibir y enviar», en la inhalación visualizas el miedo y el sufrimiento de otro (por ejemplo, ves a alguien en la calle que está intentando caminar) y luego exhalas tu propio amor, júbilo y satisfacción. Transformas la negatividad en energía positiva irradiada hacia otro. Es una práctica muy sutil, pero potencia tu habilidad para generar amor incondicional y verte a ti mismo en los demás. También cambia nuestras relaciones con los demás y con el mundo.

El poder práctico del amor Una historia servirá para ilustrar los poderosos efectos del amor. ¡Procura difundir sus cualidades positivas! La historia del pez bonito Las personas que hayan leído mi libro Head First sabrán que los conejos a los que se les daba afecto y amor en su cautividad estaban más sanos y vivían más que a los que meramente se les daba de comer y de beber adecuadamente. Esta historia del pez bonito confirma cómo ¡un poco de amor llega muy lejos! Cuando era niño, lo que más me interesaba era la naturaleza y el estudio de sus procesos y maravillas. Solía alimentar a muchos 78    

tipos de animales salvajes, incluidas las mariposas, anfibios, peces y conejos. Una de las cosas más bellas que recuerdo haber visto jamás fue un espinoso macho con tres aguijones. El pequeño y aerodinámico animal parecía el prototipo de los «peces». En la estación del apareamiento el cuerpo del macho es translúcido, de un color azul acero casi luminiscente, con la garganta y el vientre de color rojo brillante. Solía alimentar a estas maravillosas pequeñas criaturas en un acuario gigante, cada macho marcaba su territorio, construía los nidos con algas y juncos donde incubaban los huevos. Un día de verano pesqué al macho más grande y de una luminiscencia más bella que había visto jamás. Lo metí cuidadosamente en el acuario, a la espera de que marcara su territorio (probablemente algo más amplio que el de los demás, debido a su tamaño y esplendor). Para mi sorpresa, no fue así. Nadó rápidamente hacia un ramillete de algas en la superficie del acuario e intentó evitar las «arremetidas» esporádicas de los otros machos. Esperaba que la naturaleza cuidara de sí misma y que se produjera un equilibrio natural de poder al día siguiente. Pero el pez seguía en el mismo sitio a la mañana siguiente. Era un poco menos radiante, parecía un poco tímido y seguía evitando los ataques de los otros machos. Día tras día observaba al «espléndido» espinoso en el mismo sitio, cada vez más pálido, más tímido y atacado. A los cinco días el pececito se había vuelto gris y de color apagado y empecé a temer por su vida. Lo único que se me ocurrió fue alimentarlo y cuidarlo. Empecé a acariciarle con suavidad y a darle a entender que yo no suponía una amenaza para él; en las horas de comer me aseguraba de

que tuviera un poco más de ración. También le puse más algas para que pudiera protegerse y defenderse. Al cabo de dos días pude detectar un ligero cambio en su color: ¡estaba un poco más radiante! Cada día le iba dando las únicas manifestaciones de amor que podía ofrecerle y día a día su espíritu fue regresando. Al cabo de una semana su lomo había vuelto a su esplendor y empezó a salir de su territorio de algas. En el plazo de quince días había establecido su propia «área hogar» en el acuario y la naturaleza había cuidado de sí misma. Lo que realmente me sorprendió fue que el hecho de que la «naturaleza se cuidara a sí misma» nada tenía que ver con el tamaño, la belleza o la magnificencia de mi espinoso. La naturaleza cuidándose a sí misma me incluyó a mí, y lo más importante, incluyó el poder del amor. Fue el poder del amor el que triunfó por encima de todo.

Amor y ciencia ¿Sabías que un dependiente puede adivinar, por mucho que intentes disimularlo, qué es lo que te gusta o lo que no te gusta? ¿Cómo? ¡Lo ve en tus ojos! ¿Por qué? ¡Porque cuando miras algo o a alguien a quien amas, tus ojos se abren mucho! Tu cerebro quiere que tus 260 millones de receptores de la luz trabajen a pleno rendimiento para que entre toda la información que tanto te atrae. Lo mismo sucede con el resto de tus sentidos. Cuando amas o estás enamorado, todo tu cuerpo y sistema sensorial se «abre» y permite que entre mucha más información del universo. Tienes la «mente abierta», en el verdadero sentido de la 79    

palabra. Inmediatamente entras en un estado en que aumenta lo que aprendes, tu memoria, concentración, enfoque y capacidad de respuesta, revelándote todo su potencial y poder. El verdadero poder no es la capacidad momentánea de imponerte sobre otra persona o personas; en ese tipo de poder no existe una seguridad interna y duradera. A medida que cambia el tiempo cambiará (y disminuirá) también ese poder. El verdadero poder tampoco es tener un cuerpo fuerte que te haga superior a los demás físicamente. Él también cambiará eso. Todos estos «poderes físicos» son temporales, y si han supuesto tu pilar, la ausencia o pérdida de los mismos te puede conducir al miedo y a la inseguridad. El poder real reside en el poder del amor, tal como hemos visto a lo largo de la historia gracias a seres como Buda, Jesús, Mahoma. Los ejércitos poderosos y los dirigentes mundiales de su tiempo están más que olvidados. Pero el recuerdo de esos espíritus fuertes que lucharon con el poder de su amor todavía florece en un número creciente de almas humanas. Y este amor puede «mover montañas», puede hacer que personas normales y corrientes realicen hazañas extraordinarias: la madre que levanta un coche para liberar a su hijo que se ha quedado atrapado debajo o el padre que cava con las manos para sacar a su hijo que se ha quedado enterrado bajo una montaña de barro.

Sufrir la pérdida de un ser querido Uno de los más grandes sufrimientos que podemos experimentar es la pérdida del amor, especialmente la pérdida de algún miembro querido de la familia o de un amigo. La pérdida es devastadora y puede resultar inaguantable. Este dolor y sufrimiento se puede aliviar comprendiendo la «visión global» y siendo más consciente de los demás y de su

situación. Esto queda bellamente ilustrado con la historia de la vida de Buda. Un día Kisa Gotami acudió a Buda llorando: «¡Oh, Bendito Señor, mi hijo ha muerto! He preguntado a todos: "¿No hay ninguna medicina que pueda devolverle la vida a mi hijo?" Y la gente me respondió: "No la hay, pero ve al Bendito, quizás él pueda ayudarte". ¿Puedes tú, ¡Oh, Bendito Señor!, darme la medicina que devuelva la vida a mi hijo?» Mirándola con compasión, Buda respondió: «Has hecho bien, Kisa Gotami, al venir aquí en busca de una medicina. Ve y tráeme algunos granos de mostaza de cada casa donde no haya muerto nadie, ni padres, hijos, parientes o sirvientes para que pueda curarle». Kisa Gotami, con el corazón rebosante de alegría, partió en busca del máximo número de granos de mostaza que pudiera encontrar. Buscó desesperadamente de casa en casa durante todo el día y cada vez recibía la misma respuesta: «¡Ay! Grande es el número de los muertos en esta casa». Rendida de agotamiento, al final dijo: «Querido hijo, pensaba que sólo tú habías sido arrebatado por esta cosa que los humanos llamamos muerte. Pero ahora veo que no eres el único, pues esta ley rige para la humanidad entera». El sufrimiento es común para todos. Cuando padecemos semejante pérdida de amor, es importante intentar no dirigir esa «pérdida de energía» hacia una espiral de autocompadecimiento y depresión, sino a una espiral positiva de comprensión, cuidados y compasión. A continuación viene la historia extraordinaria de una mujer que al final pudo ver el sentido de su pérdida del amor y tuvo

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la fuerza para utilizar el conocimiento que tanto le había costado conseguir para ayudar a otras personas en situaciones similares. Morir por la pérdida del amor Una vez me presentaron a una mujer que «se estaba muriendo por la pérdida del amor». Ella y su esposo viajaban en un ferry que cruzaba el Canal de la Mancha y se hundió provocando un gran número de víctimas mortales. Ella había sido una de las supervivientes, su esposo había muerto. Durante diez años no había podido «enfrentarse» a la situación, o para ser más exactos, hacer frente al horror de los monstruosos recuerdos que no dejaban de acecharla en la oscuridad cuando su mente intentaba descansar. Durante años había acudido a «expertos» para intentar deshacerse de esos recuerdos. Le expliqué que era imposible «deshacerse» de un recuerdo a menos que ¡ejercitaras una parte de tu cerebro! La única forma de conseguirlo era aceptarlo y usarlo. Le pedí que tuviera valor y que volviera a recordar lo que había sucedido realmente. Cuando lo hubiera hecho, seguramente podría hacer frente a la tragedia de otra manera y utilizarla durante el resto de su vida en su propio beneficio, en lugar de aferrarse a ese terrible naufragio. Tuvo valor y se comprometió a hacerlo; al cabo de poco tiempo estaba reviviendo todo el acontecimiento. Cuando el barco empezó a hundirse, recordó que su marido estaba cantando baladas irlandesas, consiguiendo el Guinness de beber y diciendo, sincera y felizmente: «¡Qué bonita forma de irse!». Toda la gente a su alrededor sufría un ataque de pánico; muchos de ellos gritaban: «¡Todo ha terminado!», «¡Oh, Dios mío, estamos acabados!»,

«Vamos a morir», «No hay esperanza». ¡Su propia reacción fue vivir! Le dijo a su esposo, «Venga, vamos» (pero éste no se movió) y ella se dirigió hacia la salida más cercana. Entre todo el pánico y la confusión consiguió abrirse paso hasta los botes salvavidas, pues sabía dónde estaban y al ver que todos se encontraban ya en el agua, se lanzó al mar y nadó directamente hacia uno de ellos. Subió a bordo con la ayuda de otros supervivientes; en la siguiente horrible hora observó que casi todas las personas que se las habían arreglado para llegar hasta los botes tenían un singular deseo de vivir y se habían comprometido a salvar sus vidas y las de los demás. Todos los que murieron, observó estremeciéndose, de alguna manera se habían rendido mucho antes del momento final. Al revivir el horror de lo que había pasado, se dio cuenta de que su esposo no había tenido miedo a la muerte y de que ella había sobrevivido gracias a su extraordinario espíritu y voluntad de vivir. Al final pudo utilizar sus maravillosas percepciones para ayudar a otras personas a comprender sus propios temores y a superar sus situaciones de pérdidas de seres queridos. A su vez, esto le permitió recobrar algo de paz y su sentido de la vida.

La historia de los presos en el corredor de la muerte A finales del siglo pasado, en Estados Unidos, una periodista de investigación hizo una encuesta extraordinaria, pidió a los bibliotecarios de las prisiones estatales que le informaran sobre el tipo de libros que leían los presos que estaban en el corredor de la muerte el año anterior a su ejecución. De la siguiente lista de temas, elige el que creas que fue, con diferencia, el más popular:

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La Biblia y otros textos religiosos Libros sobre leyes Historias de aventuras Pornografía Poesía Filosofía Biografías Cómo escribir cartas de amor y poesía Astronomía Grandes fugas Libros de cómics Libros de chistes Libros sobre comunicación.

Para sorpresa de todos, los libros más populares fueron los que trataban sobre cómo escribir cartas y poesías de amor. En los momentos más funestos de la vida, incluso para esos condenados como «animales» y «escoria de la sociedad» el amor era lo más importante y la expresión de su amor como la última visión y propósito de su vida. Ahora es el momento de que ejercites el poder espiritual infinito del músculo de tu amor.

Ejercicio espiritual 1. Permítete amar En nuestra era postindustrial de la información, donde el dinero se considera el poder y una vida frenéticamente ocupada una señal de éxito, las emociones, y especialmente, el amor, se ven con malos ojos y se consideran una «debilidad». Tendemos a

degradarnos o a inhibirnos y reprimirnos innecesariamente en esta área. Ahora, que ya te das más cuenta de que la verdadera fortaleza y heroísmo no reside en la fuerza material o física, sino en el amor espiritual y en la compasión, concéntrate en potenciar este aspecto de tu poder personal. Puede aportarte infinitas recompensas. 2. Expresa tu tristeza Al igual que con lo de mostrar compasión y amor, las expresiones de tristeza en nuestra sociedad se consideran como un signo de debilidad. Esto no es cierto. Expresar dolor es un signo de fortaleza. Todos sentimos dolor. «Guardárselo dentro» no es ser fuerte, ¡es absurdo y contraproducente! Llora a gusto y no tengas miedo de mostrar tu dolor y tu tristeza. Para mí, una de las formas más útiles de expresar tu tristeza y sufrimiento es escribiendo, especialmente poemas cortos. Esos escritos breves sirven para expresar, liberar y captar esos momentos de «amor en sufrimiento» y luego nos ayudan a seguir adelante. 3. Sé consciente de los sufrimientos de los demás Como vimos en la historia de Kisa Gotami, todas las personas sufren. Cuanto más mayor eres, más probabilidades tienes de haber experimentado grandes tragedias y sufrimiento en tu vida: enfermedades o la muerte de seres queridos. Refina tu «maquinaria de la compasión» y mira más detenidamente los ojos de tus compañeros de viaje sobre el planeta Tierra. Cuando entiendas mejor las historias de sus vidas podrás acogerles más fácilmente con amor y comprensión.

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«El amor sólo da de sí y nada recibe sino de sí mismo. El amor no posee y no se deja poseer. Porque el amor se basta a sí mismo.» Kahlil Gibran 4. Sé más comprensivo con tu propio sufrimiento Cuando a las personas les pasan cosas «malas» y «negativas», a menudo se oye la queja: «¿Por qué a mí?», «¡No es justo!», «¡Siempre me toca a mí!», «¡Siempre tengo mala suerte!» ¡La verdad respecto a estas lamentaciones es que casi todos las hacemos! En otras palabras, una vez más, no estás solo. ¡Todos estamos en el mismo barco! Perteneces a la comunidad global. En lugar de enfocarte en tu propia desesperación, mala suerte o desgracia, piensa en todos esos millones de personas que también sufren como tú. 5. Utiliza tus «malas» experiencias a tu favor Todo lo que te ha sucedido o has hecho en la vida forma parte de tu historia. Recuerda la historia de la mujer y el barco, y date cuenta de que todas tus experiencias «negativas» o «malas» son acontecimientos especiales y únicos para ti. Puedes utilizarlos para ayudar a los demás a evitar o a tener que enfrentarse al mismo tipo de errores o tragedias que tú has experimentado. La utilización apropiada de toda la gama de las experiencias de tu vida se conoce como sabiduría. Utiliza tu conocimiento de la vida y serás sabio. 6. Ámate a ti mismo Ámate a ti mismo, sólo cuando hayas aprendido a hacerlo podrás empezar a amar y a respetar a los demás.

Muchos problemas a los que se enfrentan las personas en sus vidas se deben a que no se quieren a ellas mismas. Las adicciones a las substancias como la cafeína, la nicotina, el alcohol y otras drogas, son un buen ejemplo. Si estás intentando dejar una adicción, recurre a tu poder del amor. Enfócate en tu esplendor, en la persona única que eres, en el milagro de tu existencia, en tu visión y en tu potencial infinito y expande la burbuja del amor a tu vida cotidiana. A medida que ésta crezca, el «espacio» que le concederás a la adicción irá disminuyendo y tu cuerpo y tu mente se liberarán como es debido. 7. Relaciónate más con los animales Ama a los animales, vive y juega con ellos. Los animales, especialmente los vertebrados superiores experimentan emociones de dolor, tristeza y amor igual que nosotros. Los investigadores también han descubierto que las personas que tienen animales domésticos están más estables emocionalmente, son más felices y viven mejor. Piensa en la inagotable dicha y afecto que siente un perro cuando ve a su amo que ha estado bastante tiempo fuera y aprende de este tipo de expresión del amor para expresarlo tú del mismo modo. 8. ¡Divulga la palabra! Proponte cada día decirle a alguien que le quieres. Cada día busca otras formas de expresar tu amor por los demás. 9. ¡Haz exactamente lo mismo por ti! Ésta es una práctica de visualización para aumentar tu amor y autoestima. Piensa en alguien que te ha amado en el pasado. Revive el sentimiento de sentirte totalmente aceptado por ser como eres. 83    

Esta persona puede ser algún miembro de tu familia, un amigo, un amante o un ser divino. Visualiza a esa persona mirándote con amor. Permite que ese sentimiento penetre en tu cuerpo. Permítete aceptar el amor. Disfruta con él durante cinco minutos. Descubrirás que cuando salgas de ese estado y regreses a tu vida cotidiana te sentirás impulsado a compartir este amor con los demás. 10. Meditación de la ternura afectuosa Siéntate en un lugar cómodo y tranquilo. Relájate y exhala. Luego visualiza a tus seres más queridos. Deja que aumenten tus sentimientos de amor, recuerda lo maravillosos que son y lo agradecido que estás por tenerles en tu vida. Pueden ser personas de tu pasado o presente, vivas o muertas. Permanece conectado con esos sentimientos de gran amor durante unos minutos. Luego centra tu atención en las personas que te gustan; pueden ser compañeros de trabajo, vecinos o conocidos. Procura extender ese mismo amor e interés que sentías por tus seres queridos a esas personas. Reconoce que, al igual que con todos los seres humanos, quieren ser felices y tener paz. Permite que crezca ese espacio que hay en tu corazón para esos sentimientos de amor e interés por tus conocidos. Luego, centra tu atención en aquellas personas que son neutras para ti. Pueden ser personas que veas en el tren, en tu camino al trabajo o en el supermercado. De nuevo, intenta ampliar esos sentimientos de amor hacia esas personas y tu interés por que ellas también encuentren la felicidad y el alivio de sus sufrimientos, así como sus amistades y familiares. Dedica algún tiempo a esta meditación. Al final, y lo más difícil de todo, visualiza a tus enemigos: la persona que te ha hecho una jugarreta en el trabajo, algún «ex»

que se ha comportado mal, alguien que ha amenazado a tu hijo. Intenta ver a esas personas que, al igual que tú, quieren poner fin a sus sufrimientos y quieren experimentar amor. Procura extender tu amor hacia ellas. Sigue practicando. Lo ideal es llegar a sentir el mismo tipo de amor e interés por todas las personas.

Potenciadores del espíritu • Soy una persona amorosa. • El amor es la estrella que me guía. • Utilizo mi propio sufrimiento para ser más sabio, compasivo y caritativo con los demás. • Estoy tranquilo y tengo valor ante la adversidad. • Suelo decirles a quienes tengo más cerca cuánto les aprecio y les amo. «Algún día, cuando hayamos dominado los vientos, las olas, las mareas y la gravedad, aprenderemos a utilizar las energías del amor. Entonces, por segunda vez en la historia del mundo, la humanidad habrá descubierto el fuego.» Teilhard de Chardin No pierdas de vista la «visión global». Valórate a ti mismo y pon a punto tus principios éticos. Mantén siempre tu visión de la vida como si fuera un faro que te guía. Sé compasivo y comprensivo contigo mismo y con los demás. Practica el agradecimiento y la caridad. Ríe y el mundo reirá contigo. Continúa liberando a ese niño que hay dentro de ti. Cultiva tu fortaleza interior a través del poder del ritual. Crea paz interior y exterior. A través de estas acciones desarrollarás, poseerás, realizarás y compartirás el poder del amor. 84    

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