El Pecado

 

Estudios sobre la Vida cristiana

Los enemigos del cristiano: El pecado CÓMO SER LIBRES DEL PECADO En el mismo momento en que una persona cree en Señor es librada del pecado. No obstante, puede ser que ésta no sea la experiencia común de eltodos losJesús creyentes. Son salvos, pertenecen al Señor y poseen vida eterna, pero todavía son asediados por el pecado sin poder servir al Señor como desean.   Para aluien que recién !a creído en el Señor Jesús es una experiencia muy dolorosa ser acosado continuamente por el pecado. Es sensible al pecado y tiene una vida que condena el pecado, pero todavía peca. Esto da como resultado "rustraci#n y des$nimo.   %uc!os cristianos tratan de vencerlo usando sus propios es"uer&os. 'reen que si renuncian a él y rec!a&an sus tentaciones, ser$n librados. (lunos luc!an constantemente contra éste con la esperan&a de vencerlo. )tros piensan que el pecado los !a !ec!o cautivos y que tienen que emplear todas las "uer&as para librarse de sus ataduras. Pero éstos son pensamientos !umanos, no es lo que la Palabra de *ios nos enseña. Ninuno de estos métodos conducen a la victoria. +a Palabra de *ios no dice que luc!emos contra el pecado con nuestras propias "uer&as, "ue r&as, sino que seremos rescatados del pecado, es decir, puestos en libertad. El pecado es un poder que esclavi&a al !ombre, y la manera de acabar con éste no es destruyéndolo por nosotros mismos, sino permitiendo que el Señor nos libere de él. El Señor nos salva del pecado anulando el poder que éste tiene sobre nosotros. En omanos - y  vemos c#mo c#mo puede puede lorarse lorarse esto. anulando

I. EL PECADO ES UNA LEY (Rom. 7: 15-25).   En los versículos /0 al 12, Pablo usa repetidas veces las expresiones "querer"  y  y "no quiero"  y  y !ace muc!o én"asis en esto3 pero, en los versículos del 1/ al 10 !ace !incapié en la ley. Estos dos asuntos son la clave de este pasa4e.  +a ley es alo inmutable e invariable, que no da luar a excepciones. Su poder es natural, no arti"icial. Por e4emplo, la ravedad es una ley ley.. Si lan&amos un ob4eto al aire, inmediatamente cae al suelo, aunque a unque nosotros no lo tiremos !acia aba4o. omanos - nos muestra que Pablo trataba de librarse del pecado, porque deseaba aradar a *ios. No obstante, al "inal tuvo que admitir que era vano tomar la determinaci#n de !acer el bien. Esto nos muestra que el camino a la victoria no reside en la voluntad ni en la "irme&a del !ombre. El deseo est$ en uno, pero no el !acerlo. *espués del versículo 1/, Pablo nos muestra que aún permanecía en derrota. Esto se debe a que el pecado es una ley ley.. En su cora&#n, él estaba su4eto a la ley de *ios, pero pe ro su carne se rendía ante an te la   ley del pecado. Pablo "ue la primera persona en la 5iblia que di4o que el pecado era una ley. Este es un descubrimiento de suma importancia. Es una l$stima que muc!os cristianos aún no se den cuenta de ello. %uc!os saben que la ravedad es una ley y que la dilataci#n de los ases  ases con el calor es otra ley ley,, pero no saben que el pecado es una ley. (sí que, detr$s de nuestros "racasos !ay una ley ley..

II. LA VOLUNTAD DEL HOMBRE NO PUEDE VENCER LA LEY DEL PECADO.   *espués del versículo 1/, los o4os de Pablo se abrieron, y pudo ver que su enemio, el pecado, era una ley. Entonces di4o6 "¡Miserable de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte?"  7l comprendi# que era imposible prevalecer sobre el pecado usando su voluntad.   89ué es la;na voluntad: que el !ombre quiere decide !acer3 y est$loconstituida de +a las voluntad opinionesdel y 4uicios !umanos. ve& queEslalovoluntad del !ombre seypropone !acer alo, lleva a cabo. !ombre tiene cierto poder3 existe "uer&a en la voluntad. Pero a!í yace el problema. 'uando la voluntad entra con"licto con la ley del pecado, 8cu$l de los dos prevalece: Por lo eneral, la voluntad prevalece al principio,

 

pero "inalmente ana el pecado. Suponamos que usted sostiene con su mano un libro que pesa un