El Cuerpo, El Significante y El Goce (María Cristina Oleaga)

June 24, 2018 | Author: Víctor Ballesteros | Category: Jacques Lacan, Unconscious Mind, Psychoanalysis, Metaphysics Of Mind, Behavioural Sciences
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El cuerpo, el significante y el goce Primera parte Por María Cristina Oleaga

“La lengua nos afecta primero por todos los efectos que encierra y que son afectos. Si se puede decir que el Inconsciente está estructurado como un lenguaje es por el hecho mismo de que los efectos de lalengua, ya allí como saber, van mucho más allá de todo lo que el ser que habla es capa de enunciar.! "acques Lacan #

%$Lacan ubica al cuerpo, delimita su construcci&n, seg'n distintos parámetros a trav(s del tiempo. )iller organia ese recorrido traando puentes que hilvanan cada posta. )e interesa pensar ese desarrollo lacaniano como el resaltado, seg'n la (poca de su ense*ana, de diferentes aspectos que juegan tanto en la constituci&n del sujeto y el armado de su cuerpo como en las variantes del sufrimiento. sufrimiento. +stos diferentes abordajes abordajes no se anulan entre sí y cada cad a construcci&n mantiene su riquea. ibujar( s&lo algunos traos de este enorme recorrido. Se puede rastrear, en esta serie, una preocupaci&n lacaniana por las relaciones entre lo simb&lico y lo real, así como por efectos imaginarios de estas operaciones, incluso si se considera -finalmente una equiparaci&n de los tres registros/ 01&mo nace, a partir de la intrusi&n del significante en el viviente, allí donde no lo había, un sujeto2 01&mo interviene el lenguaje sobre lo real del organismo para que el sujeto tenga un cuerpo2 +l 3tro de la prehistoria personal es tambi(n, en este proceso, vehículo de lo simb&lico epocal y ejerce un modo particular de afectaci&n a partir de la cual surge tanto ese ser como la posibilidad de su tener un cuerpo.

4odemos considerar, así, tanto al 3tro de la historia singular como al 3tro social en el cual el primero está inmerso. +l modo de presentaci&n del sufrimiento psíquico así como del involucramiento del cuerpo -entonces no es ajeno a estos datos, al encuentro inaugural del infans, al discurso epocal que aloja ese cruce.

El cuerpo imaginario, la bella forma del cuerpo Se trata del cuerpo especular y del surgimiento del 5o y el 5o Ideal. 6llí se inauguran y -a la ve se e7cluyen de sí los efectos de la prematuraci&n, siempre y cuando haya un garante que sostenga ese proceso, I869 o Ideal del 5o. +s decir que es necesario un soporte simb&lico para que se produca esa operaci&n/ +l 3tro, su mirada, su palabra y su deseo. +n su conceptualiaci&n del +stadio del +spejo, Lacan entiende los desplaamientos libidinales que menciona :reud en relaci&n con el surgimiento del 5o. ;raduce sus desarrollos en una construcci&n que sit'a el momento en el que el infans, sostenido por el 3tro, se embelesa frente a su propia imagen en el espejo y se identifica allí. Se trata de una identificaci&n imaginaria, entendida como captura y fascinaci&n por una forma de la completud, el 5o Ideal. 6simismo, en esta construcci&n Lacan se*ala dos puntos fundamentales. 4or un lado, la prematuraci&n humana tiene, en ese momento, un equivalente psíquico/ comparada con la bella forma del cuerpo visto, la incoordinaci&n motora empiea a e7istir como tal para el infans. +l segundo punto es que este dato es e7pulsado del campo visual, para retornar ya sea ante una dimisi&n por parte del 3tro garante, como ante determinadas e7periencias que dejan en primer plano lo que habitualmente, en la imagen total, ocupa un punto límite de lo visible, tan s&lo un rastro. +sta inconsistencia, la fragilidad de la captura por la imagen de ese otro, que la primera modificaci&n de lo real en el sujeto bajo el efecto de la demanda es la pulsi&n. 4ara ello, se*ala, es preciso que la demanda se repita y que, asimismo, sea defraudada= o sea que se repita como significante. +n ese vacío, por ser defraudada, se funda la nada en la que adviene el objeto del deseo. +n el hecho de ser tomado en el movimiento repetido de la demanda se aloja el objeto del deseo/ el seno, por ejemplo, deviene ya no objeto de alimento sino objeto er&tico. +n la pulsi&n hay ya un efecto de la demanda= la pulsi&n como demanda que será e7igencia del cuerpo, e7igencia de siempre obtener satisfacci&n. +se real inicial que se modifica es un goce supuesto, del viviente= sin embargo no sabemos nada de ello. +l goce que es producido por el efecto de la demanda, el goce pulsional, está trabajado por el significante, que trastoca un cuerpo y lo desnaturalia, a la ve que hace surgir un sujeto del discurso. La particularidad de la demanda pulsional es que sus significantes están tomados del cuerpo. +l cuerpo, vaciado de ese goce primordial y trabajado por el lenguaje, ofrece sus orificios como reductos para el goce que allí se condensa= en tanto se separa de los objetos 8a9, oral, anal, fálico, esc&pico y vocal.

Se trata del recorrido de las pulsiones, así

construidas entre el cuerpo y el 3tro del decir. +n este recorrido, se puede tomar la construcci&n del Seminario >I/ Los 1uatro 1onceptos :undamentales del 4sicoanálisis, así como la del +scrito 4osici&n del Inconsciente, respecto de la 6lienaci&n y la Separaci&n. 6llí podemos entender la constituci&n subjetiva, en estos dos tiempos> 6'n 8$K?>I +ditores, Ouenos 6ires, $KN. Lacan, "acques, Seminario RII La tica del 4sicoanálisis 8$KGKI Los 1uatro 1onceptos :undamentales del 4sicoanálisis 8$KME9, 4aid&s, Ouenos 6ires, $KN. Lacan, "acques, Seminario >> 6'n 8$K?
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