Ejercicios de Lectura
Short Description
Ideal para practicar comprension lectora...
Description
Prueba ICFES A partir del siguiente texto selecciona la respuesta correcta.
Para un lenguaje solidario En estos últimos días, hablar de discriminación, racismo y xenofobia es desgraciadamente una obligación. Por todas partes se levantan voces indignadas ante el vergonzoso espectáculo que los países civilizados de Europa damos en estos momentos. Y es que las muestras de intolerancia e insolidaridad sublevan a cualquier persona mínimamente sensata. Sin embargo, estos últimos acontecimientos no deberían sorprender demasiado. Se ha dicho que el lenguaje es un reflejo del sistema de pensamiento colectivo, de cómo piensa, siente y actúa una sociedad. A sí, el lenguaje nunca es imparcial; imparcial; con él siempre transmitimos, transmitimos, una determinada ideología. Una ideología que muchos, la mayoría, mayoría, rechazamos en teoría pero que en la práctica cotidiana enfrentamos. Observemos, por ejemplo, que cuando se tiene que utilizar una fórmula para referirse a los individuos de ambos sexos la balanza siempre se inclina hacia la variante masculina: hablamos de profesores, directores para aludir a los profesores y profesoras, directores y directoras. Curiosamente, podemos notar que cuando se diferencian los géneros de ciertas palabras es para otorgar connotaciones bien distinta: no es lo mismo hablar de una mujer “pública” que de un hombre “público”. Y podríamos comentar muchos más casos como éste. Por otra parte, la mayoría de libros de textos que encontramos en el mercado envían mensajes sexistas, escondidos dentro de redacciones normales o ilustraciones gráficas: nunca encontraremos padres haciendo haciendo los trabajos de cas a ni madres ejecutivas. Si analizamos frases hechas de uso muy frecuente, notaremos que constantemente citan a razas diferentes a la nuestra y siempre de manera peyorativa. Las referencias a “negros” y “negras”, “gitanos y gitanas” van íntimamente relacionados con la explotación y la suciedad y la delincuencia y otras cualidades negativas como si fueran las que mejor definieran a estos grupos: siempre trabamos como negros; nuestra suciedad nos acerca a la raza de los gitanos; cuando hablan mal de nosotros nos dejan en el libro de los negros; si una persona se ha enriquecido en poco tempo es algo así como un político corrupto o un narcotraficante. Pasamos una vida de gitanos, hacemos el indio etc. Prostitutas y homosexuales, por aquello de que no son “normales”, no corren mejor suerte. En fin; y después de todo pretendemos que nuestros hijos, hijas sean respetuosos, solidarios y tolerantes. Sin comentarios.
1.
La tesis presentada en este texto es: Los mensajes sexistas se encuentran escondidos en redacciones normales o cualquier tipo de ilustraciones que hablen de género. B. Desafortunadamente aún hoy encontramos una variedad de casos sexistas. C. Lamentablemente nuestra educación favorece un tratamiento discriminatorio entre hombres y mujeres. D. El lenguaje es un reflejo del sistema de pensamiento y este sistema de pensamiento discrimina lo femenino, dándole un lugar privilegiado a lo masculino. A.
23 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
2.
3.
4.
5.
6.
7.
El texto se inscribe en el género discursivo A.
narrativo.
B.
expositivo.
C.
argumentativo.
D.
poético.
La finalidad de este texto es: A.
que todos los padres eduquen a sus hijos para que sean más conscientes del trato que le dan a las niñas.
B.
que todo el mundo acepte recibir una educación que clame por la diferencia y la igualdad.
C.
que se realice un estudio sociológico sobre la manera como los seres humanos se tratan entre sí.
D.
tomar conciencia del trato intolerante y desigual con que lo seres humanos, en general, se relacionan con todo aquel que consideran inferior.
Si se requiriese calificar con una palabra el tex to leído, podría, respectivamente, utilizarse el siguiente adjetivo: A.
coherente.
B.
ejemplarizante.
C.
didáctico.
D.
crítico.
Cuando en el texto el autor se refiere a “pública”, con dicho término quiere indicar: A.
un ejercicio profesional propio de la mujer.
B.
un calificativo de menosprecio a ciertas actividades que puede realizar una mujer.
C.
una intención de resaltar los espacios públicos que frecuentan ciertas mujeres.
D.
una comparación irrelevante entre lo público y lo privado.
Si hubiese que calificar o evaluar objetivamente el texto seleccionado a par tir de sus planteamientos, lo más preciso que podría decirse es que es: A.
analítico, porque amplían hasta sus límites la argumentación en torno a un objeto de estudio.
B.
crítico, porque somete a examen un asunto de gran impor tancia para la convivencia humana.
C.
apologético, porque exalta y elogia el valor sustancial de algo.
D.
didáctico, porque enseña ciertas modelos comportamentales que todos los seres humanos debemos seguir.
De acuerdo con la lectura podemos establecer la siguiente hipótesis para nuestra cultura occidental. A.
no se plantea soluciones para mejorar la convivencia respetuosa entre seres humanos.
B.
no se plantea el problema de la responsabilidad porque esta situación la vivimos en su cotidianidad.
C.
esta situación preocupa más a nivel individual que a nivel social.
D.
porque hasta el momento todo intento de acabar con esta problemática han sido actos fallidos.
24 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
Prueba ICFES Lee el cuento y marca la respuesta correcta.
Hay que romper el bolero de R avel Una tarde de lluvias torrenciales, María, una joven casada de veinticinco años, viajaba por una carretera de poco tránsito cuando se le estropeó el coche. Al cabo de una hora de señales inútiles a los vehículos que pasaban, logró que el conductor de un autobús se compadeciera de ella. No iba muy lejos, pero María le bastaba con encontrar un sitio donde hubiera un teléfono para pedirle a su marido que fuese a recogerla. Nunca se le habría ocurrido que en aquel autobús, ocupado en su totalidad por un grupo de mujeres atónitas había empezado para ella un drama absurdo y surrealista que le cambió la vida para siempre. Al anochecer, el autobús entró en un patio de un enorme y sobrio edificio situado en un descampado. La mujer que mandaba a las demás las hizo descender con órdenes un poco infantiles, es decir, como si se tratara de niños, aunque todas eran mayores. María fue la última que descendió. La encargada del grupo se lo encomendó a otras personas que salieron a recibirlo y se fue sin más en el vehículo. Hasta ese momento María no se dio cuenta de que aquellas mujeres eran 32 locas pacíficas que se iban a internar en un manicomio. Dentro ya del edificio, María se separó del grupo y preguntó a una empleada dónde había un teléfono. Una de las enfermeras que conducía a las pacientes la hizo volver al grupo mientras le decía de un modo muy dulce: “Por aquí, linda, por aquí hay un teléfono”. María siguió, junto con las otras mujeres, por un corredor tenebroso, y al final entró en un dormitorio colectivo donde las enfermeras empezaron a repartir camas. A María le asignaron también la suya. Un poco nerviosa, ya con el equívoco, explicó que su coche se había estropeado en la carretera y que lo único que quería era un teléfono para prevenir a su esposo. La enfermera fingió escucharla con atención y le dijo que se metiera en la cama y que al día siguiente podría llamar. Comprendiendo de pronto que estaba a punto de caer en una trampa mortal, María escapó corriendo del dormitorio. Pero antes de llegar a la puerta, un guardián corpulento le dio alcance, le aplicó una llave maestra, y otros dos le ayudaron a ponerle una camisa de fuerza. Después, como no paraba de gritar, le inyectaron un somnífero. Al día siguiente, como persistía en su actitud insensata, la trasladaron al pabellón de los locos furiosos y la sometieron hasta el agotamiento a una manguera de agua helada a alta presión. El marido de María, preocupado por su tardanza, denunció su desaparición. El automóvil de María fue encontrado abandonado y desmantelado por los ladrones. Al cabo de dos semanas, la policía declaró cerrado el caso y se tuvo por buena la explicación de que María, desilusionada por su breve experiencia matrimonial, se había fugado con otro. María tardó en adaptarse a la vida del manicomio, pero su carácter rebelde se fue doblegando paulatinamente. Aunque se negaba a participar en los juegos de las restantes enfermas, ya nadie la forzaba. Al fin y al cabo, decían los médicos, así empezaban todas, y tarde o temprano terminaban por incorporarse a la vida de la comunidad. Jorge Esteban : Periódico El País, 23 de octubre de 1982.
37 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
1.
2.
3.
4.
5.
¿Cuál es en tu opinión, el enunciado que expresa la macroestruc tura o resumen de este texto? A.
El personal que trabaja en los manicomios es cruel con las enfermas, utiliza el engaño y los malos tratos de forma habitual y no atiende a razones.
B.
María nunca debió ser tan confiada al subir al autobús “que le cambió la vida para siempre”.
C.
En ocasiones, un hecho sin importancia aparente, cambia la vida cotidiana de las personas, la transforma en un drama absurdo y surrealista.
D.
El matrimonio no es garantía de solidaridad.
El propósito o intención principal del autor en este texto es A.
Mostrar cómo una situación absurda puede cambiar la vida de una persona que acaba renunciando a luchar contra la injusticia ante la incomprensión ajena.
B.
Criticar a María, quien pese a ser injustamente tratada, acaba resignándose ante su absurda situación.
C.
Advertir a quienes lean el texto de los peligros que corren las personas cuando piden auxilio “en una carretera de poco tránsito”.
D.
Entretener al lector con una historia curiosa y p oco habitual.
¿Por cuál de los siguientes enunciados podríamos sustituir mejor el texto : “Aunque se negaba a participar en los juegos de las restantes enfermas, ya nadie la forzaba”?. A.
“Cuando se negaba a participar en los juegos de las restantes enfermas, ya nadie la forzaba”
B.
“A pesar de que se negaba a participar en los juegos de las restantes enfermas, ya nadie la forzaba”.
C.
“Porque se negaba a participar en los juegos de las restantes enfermas, ya nadie la for zaba”.
D.
“Desde que se negaba a participar en los juegos de las restantes enfermas, ya nadie la forzaba”.
¿Qué palabras resumen mejor las ideas principales del texto? A.
Tránsito, teléfono, autobús, edificio.
B.
María, carretera, médicos, juegos.
C.
Drama, manicomio, equívoco, absurdo.
D.
Encargada, guardián, camisa de fuerza, policía.
¿Cómo está organizado el texto? El autor ha organizado el texto de una manera determinada con el fin de contarnos una historia de forma atractiva y a la vez ordenada. Para ello, parte de una situación habitual (una avería en el coche), describe luego las consecuencias de esa situación (el intercambio de María en un manicomio ante la indiferencia de enfermeras y de médicos) y ofrece un desenlace con el concluye el texto. Por tanto, este texto tiene al menos tres partes (planteamiento, desarrollo y desenlace) a c ada una de las cuales le corresponde uno o varios párrafos. ¿A qué párrafos corresponde cada una de estas fases del texto? A.
Planteamiento (párrafos 1 y 2), desarrollo (párrafos 3,4 y 6) y desenlace (párrafo 5)
B.
Planteamiento (párrafos 1, 2, 3 y 4), desarrollo (párrafo 5) y desenlace (párrafo 6)
C.
Planteamiento (párrafo 1), desarrollo (párrafos 2, 3, 4 y 6) y desenlace (párrafo 5)
D.
Planteamiento (párrafo 1), desarrollo (párrafos 2, 3, 4 y 5) y desenlace (párrafo 6) 38 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
6.
7.
8.
9.
Por sus características, este texto es A.
narrativo, ya que nos cuenta una serie de cosas que le ocurren a un personaje a la que confunden con una loca.
B.
expositivo, ya que nos informa sobre cómo es la vida cotidiana en un manicomio.
C.
argumentativo; porque la finalidad del autor del texto es convencer al lector de que la finalidad de los manicomios no es curar a los enfermos mentales sino someterlos a la disciplina y doblegar “su carácter rebelde”.
D.
instructivo, porque su finalidad es dar una serie de instrucciones de tipo práctico con el fin de evitar este tipo de situaciones.
Este texto procede de A.
una revista de psiquiatría en la que se investiga sobre algunos errores en el tratamiento médico de los enfermos mentales.
B.
un estudio científico encargado por el Ministerio de sanidad con el fin de mejorar la atención psiquiátrica.
C.
un texto aparecido en la prensa en la que su autor cuenta una historia real acaecida en Barcelona.
D.
un panfleto de una organización revolucionaria en el que se denuncian casos de abusos en la atención psiquiátrica en los manicomios y se defiende la libertad de los enfermos mentales.
El adjetivo que en su opinión mejor describe el espíritu del texto anterior es A.
funesta.
B.
desproporcionada.
C.
inevitable
D.
trágica.
El texto “Nunca se le habría ocurrido que en aquel autobús, ocupado en su totalidad por un grupo de mujeres atónitas había empezado para ella un drama absurdo y surrealista que le cambió la vida para siempre”, escrito al inicio del cuento, tiene como propósito A.
anticipar al lector la atmósfera irracional e incomprensible que nos ofrece esta historia.
B.
ofrecer una estrategia de anticipación de la historia para motivar la lectura.
C.
plantear al lector desde el comienzo lo que posteriormente se va a desarrollar en la historia, concebido en la escritura narrativa como estrategia clave de éxito en los grandes narradores.
D.
referir la historia con tanta naturalidad y sencillez como fuese posible.
10. Según
el sentido que el autor le da a la palabra surrealista, el término más antitético sería:
A.
posible
B.
complejo
C.
verosímil
D.
racional
39 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
Prueba ICFES A partir del siguiente texto, selecciona la respuesta correcta.
La casa de las dos palm as “...Y la piel y los movimientos y las blusas que te ponías para ir de paseo. Y tu paso, Lucía, y los vellos de tus brazos y el pelo de tu nuca y el rastreo que dejabas cuando las yerbas se reponían después de que las habías pisado, y la flor que mirabas y el aire en tus manos y las nubes solas y la tarde y un pájaro blanco en vuelo. Y el pulso dócil cuando hablabas al retoño y al musgo y tu silencio allí, quieto y respirador como un pequeño gato dormido. Lucía se sobresaltaba al lamento agorero del currucutú, Lucía ladeaba la cabeza al sonoro picotazo del pájaro carpintero. Lucía buscaba paraguas de sapo en los potreros y orejas de palo en los troncos vencidos. Lucía libraba las mariposas en las telarañas. Lucía tarareaba a las libélulas sobre las lagunas. Lucía enderezaba el tallo en la flor de los cardos. Lucía guiaba el alma del difunto desconocido cuando en el firmamento rodaba una estrella. Lucía sobaba las raíces adventicias del maíz. Lucía llevaba dos hojas grandes de palmichos para el domingo de ramos. Lucía contemplaba el racimo de corozos maduros, las hojas plisadas y el canto del sinsonte en la altura del Maracay. Lucía sentía arder sus pequeños senos ardientes. Lucía callaba silencios cadenciosos. Lucía deseó, ignoró qué cosa era la entrega. Lucía iba a morir. –No te vas a ir, Medardo. No abrió los ojos para decirlo. El llanto tembló en él al notarla inmóvil. –¡No te me vas muchacha! El espejo quedaba al fondo de la habitación, infinito en su fría soledad. Todos los espejos que Juan Herreros, el desesperado, hizo traer para una vanidad, tantos años antes, y la otra dimensión que los espejos reflejaban. El viento llegaba a la ventana, trataba de mirarse en los cristales y se despedía como un viejo camarada. –Buen viaje decíamos. Se agachaba una rosa, temblaba un helecho, se sacudía una melena, una hoja se iba por corto paraje: todavía en el vuelo trataba de seguir su paso, inútilmente porque sólo aquel viento. Hasta que una voz sopló entre los árboles. Primero refrescó uno sencillo, que apenas tembló en las ramas y entretuvo las mariposas; luego, fue un viento justo para tardes de verano, para juego con alas anchas; después vino un viento adulto que cumplía su deber convencido de que sabía hacerlo y que todo variaba a su presencia; esto duraría media hora. Por último, vimos el tiempo: era un tiempo espeso, estancado dramáticamente y como rodeado de tragedia, como si alguien estuviera muriendo en derredor, herido; o como si el mismo tiempo estuviera amenazado de muerte. Fue entonces cuando mi padre dijo: –Está muy grave. El viento se miró en los espejos largamente; quizá detuvo su fuerza mientras las habitaciones de los espejos se acostumbraban, hasta dejar libre algún pasadizo. El viento se miraba, el viento. Al fin vimos cómo entraba al espejo mayor y movía extraños cortinajes para comenzar lo que parecía una muerte grande y honda, un vacío sin palabras, una hora –las seis –alta de grises lejanos. –Acaba de morir –dijo mi padre. Su voz también era viento y era muerte, fue como si mirásemos caer nieve sobre las seis de la tarde, únicamente sobre las seis, bajas, a nivel del crepúsculo. 52 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
–Nadie muere. Tenía quince años, Lucía Herreros, y la vida se te venía injustamente, precavida en ella, el adiós en ella, la violenta contención. Silbos de pájaros escondidos, alas de mariposas, hojas desprendidas de las altas ramas, retazos de crepúsculo tirados a la noche. Donde escuches un canto y un sollozo. Donde el vacío tenga la medida de tu soledad. Aquí estoy yo, Medardo, tu hermano, el que lloró tu agonía. Dulce Lucía Herreros, voz sin eco, fuerza sin voz, canto sin palabras. Desde este lado de las cosas te llamo. Manuel Mejía Valle jo
1.
2.
3.
4.
5.
El texto anterior tiene como asunto central A.
la descripción del paisaje.
B.
la evocación de la imagen de una niña.
C.
el tiempo como anuncio de la muerte.
D.
una conversación de Medardo, su padre y Lucía.
El texto...el viento llegaba a la ventana, trataba de mirarse en los cristales y se despedía como un viejo camarada... es una metáfora para indicar A.
que llega la noche.
B.
que es tiempo de invierno.
C.
que Lucía va a morir.
D.
que Medardo está triste.
En el texto: ...al fin vimos cómo entraba al espejo mayor y movía extraños cortinajes para comen- zar lo que parecía una muerte grande y honda, un vacío s in palabras, una hora -las seis-alta de grises lejanos... el viento está simbolizando A.
la enfermedad.
B.
la noche invernal.
C.
el silencio.
D.
la muerte.
El texto...dulce Lucía Herreros, voz sin eco, fuerza sin voz, canto sin palabras... puede interpretarse como que A.
Lucía Herreros no podía ya hablar.
B.
Lucía Herreros apenas murmuraba.
C.
Lucía Herreros sigue existiendo en el silencio.
D.
Lucía herreros aún no ha muerto.
La expresión: __ ¡No te me vas muchacha!” tiene el carácter de A.
un pedido angustiado.
B.
una invitación febril.
C.
una invitación.
D.
un ruego lastimero. 53 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
Prueba ICFES 1.
A partir del siguiente texto selecciona la respuesta correcta.
Cómo los romanos obtuvieron las leyes ¿Es posible la comunicación humana? ¿Nos entendemos realmente? En general creemos que sí, y nos parecen acertados algunos dichos como “hablando se entiende la gente” o “de la discusión nace la luz”. Sin embargo, hay quienes aseguran que en la transmisión, el mensaje se desvirtúa: que se entiende mal o, por lo menos, que no se entiende plenamente.
acordaron que el debate se celebraría por señas. Cerrado el acuerdo, se fijó fecha y hora para el debate y unos y otros se retiraron a deliberar. Los romanos, en cuita, no sabían qué hacer Porque no eran letrados ni habían de entender A los doctores griegos ni su mucho saber.
¿Hasta qué punto la comunicación depende del destinatario? Este es un viejo cuento que Juan Ruiz recoge en su libro de buen amor. En él se representa un debate entre griegos y romanos, aunque se trata de unos griegos y romanos que piensan y se comportan como si vivieran en la edad media.
En el bando romano reinaba el desconcierto. ¿Qué podían hacer ellos, un pueblo sencillo, frente a los sesudos helenos? En todo el territorio del lacio no había una sola persona capaz de enfrentarse a tan doctos contendientes. Al fin se alzó la voz de un romano:
Ocurrió que romanos leyes no poseían,
– Amigos, no desesperemos. Elijamos a un villano, a un hombre del pueblo; que acuda al debate y responda por señas como le parezca, como Dios le dé a entender.
Fuéronlas a pedir a g riegos, que tenían; Respondieron los griegos que no las merecían
Por increíble que parezca, los romanos aceptaron la idea. Y para desempeñar tan delicada misión eligieron no a un gran hombre, sino a un hombre grande: un hombretón tosco y necio, pero, eso sí, valentón y atrevido.
Ni entenderlas podrían, pues muy poco sabían.
Hace muchísimo tiempo, los romanos – que más tarde habían de ser grandes legisladores – no tenían leyes, así que acudieron a los griegos y les pidieron que les dieran las suyas. Ante semejante propuesta, los griegos se estremecieron.
Vistiéronle muy ricos paños de gran valía Como si doctor fuese en la filosofía; Subióse en alta cátedra; con bravuconería:
¿Entregar inculto? ¡Era impensable! Sin embargo, para salir airosos de la situación, dieron a los romanos esta bonita respuesta:
“Vengan aquí los griegos – dijo – con su porfía”.
Y llegó el gran día. Griegos y romanos se congregaron en el ágora de Atenas para presenciar el magno acontecimiento. Se había congregado allí la flor y nata de la intelectualidad griega, así como el pueblo heleno, deseoso de comprobar una vez más la sabiduría de sus letrados. Frente a los griegos se hallaban los representantes de los romanos, que habían hecho un largo y penoso viaje hasta Atenas para recibir el Derecho de Grecia. Todos ellos estaban muy inquietos; no era para menos: en ese debate se decidía su futuro.
– Es muy loable, romanos, que aspiréis a regiros por el derecho. Pero para nosotros supone una grave responsabilidad, y antes de entregaros las leyes debemos asegurarnos de que poseéis el suficiente grado de cultura. Por tanto, ponemos por condición que celebréis un debate con nuestros sabios. Muy satisfechos, los romanos accedieron y puesto que griegos y romanos no compartían una lengua común, 71
Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
Preguntaron al griego qué fue lo que dijera
Conforme pasaba el tiempo, la expectativa iba en aumento: parecía que hasta la suave brisa del Egeo se había detenido en espera de los acontecimientos. De pronto, de entre las filas de los romanos salió el bravucón, al que habían vestido con una rica túnica de seda. Querían que pareciese todo un sabio. El hombrón – vestido de seda, pero sin seso – subió a una tribuna y desafió a voces de los griegos. Lenta y sosegadamente se levantó uno de los sabios griegos, y, conforme a lo convenido, comenzó su discurso mímico: alzó majestuosamente el dedo índice, dirigido hacia el cielo, y lo mantuvo en alto unos segundos. Después, con toda parsimonia, tomó asiento muy pensativo. El pueblo heleno aprobó respetuosamente la actuación de su digno representante. Reinaba entre ellos un denso silencio, como convenía a la ocasión. Los romanos no sabían qué hacer. Pero su representante no lo dudó un momento. Dando muestras de gran agitación, el romano levantó tres dedos de su enorme mano, el pulgar y los dos que le siguen, y los dirigió hacia su noble oponente. Después, se sentó mirando al auditorio, muy orgulloso de sí mismo y de su rica túnica. Sin duda todos los admirarían. A continuación, el sabio griego, con toda solemnidad, alzó la palma de la mano, la mantuvo abierta dirigiéndola hacia todos los presentes y, muy sereno se sentó. La respuesta no se hizo esperar . El bravucón saltó precipitadamente de su asiento, levantó su hercúleo brazo y mostró el puño, cerrando con fuerza. Parecía dispuesto a enfrentarse al mundo entero. Y así concluyó la feliz actuación del rústico romano. En la tribuna de los sabios griegos había juristas, filósofos, matemáticos, dramaturgos, estadistas...; todos ellos esperaban el veredicto que había de pronunciar el erudito griego que había sido seleccionado para la contienda. Este, tras unos momentos de reflexión declaró: “Merecen los romanos leyes, no se las niego”. ¡Roma estaba salvada!
Por señas al romano, y qué le respondiera.
El debate entre los “sabios” había concluido, mas para el pueblo había sido harto misterioso, así que todos estaban ansiosos de conocer el meollo de la cuestión. Los griegos, respetuosamente, se congregaron en torno al sabio y le rogaron que les descifrase el significado de sus mensajes. – Como habéis podido ver, yo he alzado el dedo índice para significar que hay un solo Dios. El romano entonces ha mostrado tres dedos, afirmando que se manifiesta en tres personas distintas. Satisfecho con su respuesta, he seguido en la misma línea y le he mostrado la palma de la mano, indicando así que todo está sometido a la voluntad divina. Y él, alzando el puño, ha corroborado mi aserto diciendo que efectivamente Dios tiene el mundo en su poder. Así pues, viendo su saber y su buen juicio, he concluido que el pueblo romano merece regirse por leyes. – También los romanos se reunieron en torno a su representante y, muy intrigados, le preguntaron en qué había consistido la disputa. – Muy sencillo – dijo él con orgullo –. El griego ha empezado por amenazarme, diciéndome que quería sacarme un ojo con su dedo. Yo no podía quedarme atrás, así que le he dicho que yo le sacaría a él los dos ojos y que le iba a romper todos los dientes con mi pulgar. Entonces, ya lo habéis visto, ha hecho ademán de darme una buena bofetada con su palma abierta. ¡ A mí con esas...! Sin pensarlo más, he levantado el puño para decirle que le iba a dar tal puñetazo que se acordaría de él todos los días de su vida. Así que el muy tonto, cuando había visto que tenía la pelea perdida, ha dejado de amenazarme y se ha refugiado entre los suyos.
El burlón del Arcipreste cierra su historia con un dicho popular que parece “venir muy a cuento”: Mala palab ra no hay, si no es a mal tenid a.
72 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
1.
2.
3.
4.
5.
6.
7.
El título del texto hace referencia a A.
la temática del cuento.
B.
la finalidad del texto.
C.
la conclusión del cuento.
D.
la tesis central del texto.
A juzgar por la intencionalidad, se trata fundamentalmente de un texto A.
expositivo.
B.
narrativo.
C.
poético.
D.
argumentativo.
El texto en su conjunto presenta la siguiente estructura A.
tesis (problema) - sustentación - conclusión.
B.
tesis (problema) - ejemplo - solución.
C.
ejemplo - tesis (problema) - argumentos.
D.
tesis (problema) - ejemplo - síntesis.
En el primer párrafo, la expresión “sin embargo” cumple la función de A.
establecer una comparación entre dos ideas.
B.
introducir un ejemplo de la primera idea.
C.
presentar una objeción a la primera idea.
D.
mostrar una consecuencia de la primera idea.
La temática central del texto es A.
El origen de las leyes romanas.
B.
Los rasgos culturales de griegos y romanos.
C.
La vida en la Edad Media.
D.
Las dificultades de la comunicación.
El texto tiene como finalidad principal A.
sustentar una tesis.
B.
mostrar cómo era la vida en la edad media.
C.
ilustrar sobre las disputas entre griegos y romanos.
D.
explicar el origen de las leyes romanas.
La expresión “Mala palabra no hay, si no es a mal tenida” puede interpretarse como: A.
Las palabras en sí mismas no tienen significado.
B.
Las palabras tienen diversos significados.
C.
Las palabras deben ser usadas adecuadamente.
D.
Las palabras significan según quien las interprete.
73 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
8.
9.
En el texto se dice que se trata de griegos y romanos que piensan y se comportan como si vivieran en la Edad Media, porque A.
en épocas anteriores a ésta, las disputas no se efectuaban por medio de debates sino de guerras.
B.
en épocas anteriores a ésta, los griegos y los romanos no tuvieron ningún contacto.
C.
el tema del debate de signos corresponde con las discusiones que se efectuaban en dicha época.
D.
la manera de actuar de los griegos no corresponde a sus costumbres anteriores a esta época.
Del texto se puede concluir que A.
la comunicación humana no es posible, pues los mensajes no se pueden transmitir.
B.
lo que se comunica depende de la interpretación, pues cada persona comprende desde su punto de vista.
C.
los acuerdos son resultados de la confusión, pues quienes se comunican tienen diferentes intenciones.
D.
es posible llegar a acuerdos, pues si las intenciones de quienes se comunican son claras los mensajes serán claros.
10. Con
base en el cuento, respecto a la comunicación se puede inferir que:
A.
el griego era más hábil que el romano.
B.
el romano era más hábil que el griego.
C.
el romano era mucho más astuto que el griego para manipular los mensajes.
D.
el romano y el griego eran igualmente competentes para expresar sus mensajes.
11. Según
el texto, el establecimiento del veredicto
A.
siguió un proceso lógico y coherente por parte de quien lo estableció.
B.
estuvo errado porque se confundieron los mensajes, tanto del griego como del romano.
C.
no fue adecuado porque no tuvo en cuenta la intención comunicativa del romano.
D.
fue manipulado por parte del participante romano al usar trucos semióticos.
12. Según
el texto, los romanos obtuvieron las leyes porque
A.
a pesar de no ser tan sabios, supieron manipular la comunicación en el debate gracias a su astucia.
B.
los griegos no eran tan sabios como se creía, lo cual quedó demostrado en el debate en el cual salieron derrotados.
C.
resultaron ser más sabios que los griegos, lo cual quedó demostrado en el debate en el que salieron triunfadores.
D.
aunque los griegos fueran más sabios, las dificultades de la comunicación humana favorecieron a los romanos.
13. Del
texto se puede concluir que el lenguaje de señas
A.
es más problemático que las palabras.
B.
es tan problemático como las palabras.
C.
no es adecuado para la comunicación.
D.
es imposible de usar en un debate.
14. La
comunicación entre el griego y el romano fue problemática porque
A.
se utilizó el lenguaje de señas.
B.
no fueron claras las intenciones de cada uno en el debate.
C.
no fueron aclarados los significados de los signos.
D.
no se aclaró el tema de discusión. 74 Este material fue tomado de www.voluntad.com.co
View more...
Comments