Dueño de Tu Cuerpo Capitulo 76 Al 104

 

 

Dueño de mi Cuerpo

 

 

Dueño de mi Cuerpo

Capítulo 76

“Pero quisiste soñar conmigo, por eso es que aparecí. ¡Eso demuestra que me prefieres a mí!”  mí!”  Miguel se acercó y sonrió. Claudia quería escapar, pero estaba entre sus brazos. Sus grandes manos agarraban su cuerpo la encerraba sin ningún lugar al quey escapar. Inmediatamente ella se sintió confundida y nerviosa.  Al ver que la iba a besar, Claudia lo abofeteó. ¡Zas! Sonó hasta en la sala de estar. El golpe fue tan fuerte que lo dejo ciego por un momento.  Al verlo aturdido, Claudia lo empujó con todas sus fuerzas. “Tú... No te me acerques. No creas que puedes hacer lo que quieras solo por ser guapo. Este es mi sueño. ¡Puedo controlarte! Eres realmente

 

  Dueño de mi Cuerpo hermoso y estuve fascinada por un momento, ¡así que quise soñar contigo! Pero ya no me gusta tu apariencia. Me gusta el Miguel que tengo en la vida real.

¡Él es bueno conmigo, así que yo también seré bueno con él!”  él!”  Miguel no sabía si reír o llorar cuando escuchó eso. ¡Solo Claudia tenía el coraje de abofetearlo! “Puedes cambiar tu forma de pensar. Puedes Miguel tener en la aquí. realidadAsíy también tener me apuedes matarás a dos pájaros de un tiro.”  tiro.”  “¡No puedo! ¡Tú no eres él!”  él!”   Ella sacudió sus manos. Aunque la persona frente a ella le dijo una y otra vez que en realidad eran la misma persona, ¡sintió que le estaba siendo infiel a Miguel! ¡No podía estar con dos personas a la vez! Él quería acercarse, pero Claudia agarró una maceta que estaba sobre la mesa y dijo enojada: “¡No te me acerques o te la tiraré! ¡Puedo romperte la cara hasta en mis sueños!” sueños!”    Al ver que estaba muy seria, Miguel solo pudo irse con una sonrisa.

 

 

Dueño de mi Cuerpo

“Deberías recordar bien cómo me veo ahora. ¡No me volverás a ver de nuevo!”  nuevo!”  Después de que se fuera, Claudia se sintió aliviada. ¡Finalmente sacó a ese tipo de su sueño! No pudo evitar pensar en lo que dijo antes de irse. ¿Qué quiso decir con que no lo volvería a ver de nuevo? ¡Si lo veo de nuevo, lo golpearé y no dejaré que sea tan arrogante! Cuando ellaVio regresó a lacon casa, tenía boca seca. un vaso agua en la mesa y se lo bebió sin s in pensarlo. Después de beberlo, se sintió mareada y después de unos minutos, se desmayó. Miguel salió de su escondite, la levantó con cuidado y la llevó de regreso a la habitación. David lo siguió y le pareció extraño que tuviera una marca en el rostro. “Señor... ¿Su cara?”  cara?”  “Ya que lo vistes, ¿todavía no estás buscando a un maquillador? ¿Quieres que ella descubra todo?”  todo?”  Miguel dijo enojado.

 

  Dueño de mi Cuerpo David contuvo su sonrisa. Señor, ¡esta es la primera vez que lo abofetean! Miguel miraba a Claudia en la cama y no sabía qué hacer.

En ese momento, sonó su teléfono móvil. Respondió sin dudarlo, y se escuchó una voz tranquila del otro lado. “He regresado. ¿Vamos a tomarnos algo?”  algo?”  “Está bien.” Miguel le respondió.  respondió.  Luego cubrió a Claudia con una sábana y salió de la casa con su abrigo. Llegó al En barla para encontrarse con esa persona. esquina estaba sentado un hombre que vestía una sencilla camisa blanca y pantalones casuales, pero era difícil ocultar su apariencia ruda. Su rostro mostraba que no estaba contento, lo que hizo que la gente se sintiera incómoda cuando lo miraban. Muchas mujeres querían charlar, pero se desanimaban al verlo. Si Miguel le daba a la gente la sensación de ser malo, este otro hombre era aún peor. Miguel lo vio desde lejos. Eran viejos amigos. Habían pasado muchos momentos

 

  Dueño de mi Cuerpo  juntos. No se sabe cuántas veces Lucas le había salvado la vida. Se acercó y se sentó a su lado. Se sirvió un vaso y dijo: “¿Por qué te atreviste a

volver?”  volver?”  “Por vacaciones.” Dijo en voz baja. Miró su rostro y dijo: “¿Qué le pasó a tu cara?” cara?”   “Un pequeño gatito me golpeó, eso es todo.”   todo.” Miguel encogió los hombros. “¿Fue esa niñita?”  niñita?”  “¿Qué niñita?Miguel Tienelodieciocho años. ¡YaCon es una mujer!” dijo disgustado. una leve sonrisa, Lucas dijo: “Te admiro mucho porque puedes comer carne fresca. Miguel, tienes 28 años, ¿es realmente apropiado que te cases con una chica diez años menor que tú? ¿No tienes miedo de que te llamen pedófilo?”  pedófilo?”  “¡No sabía que tenías un gran gusto por las chicas jóvenes!”  jóvenes!”  Cuando Miguel escuchó eso, se puso tan enojado que quiso taparle la boca de un puñetazo. “Lucas, tú tampoco estás tan joven. También tienes veintiocho, y ni siquiera

 

  Dueño de mi Cuerpo tienes novia. ¿Y te atreves a hablarme así?”   así?” “Me he vuelto vegetariano. Es complicado estar en una relación. A veces ni siquiera

te dan de comer.”  comer.”  Miguel entendía muy bien lo que decía. Él estaba con Claudia por más de un mes, se vieron desnudos y hasta se tocaron, pero no pasó más nada. No quiso seguir hablando de este tema. Pero Lucas lo miraba atentamente. Se dio cuenta, evitar reírse dijo: “¿Acaso nono pudo ha pasado nada y entre ustedes?”   ustedes?” “¡Cállate!”   “¡Cállate!” Miguel había sido descubierto. Lucas escondió su sonrisa. Parece que acertó. Desde que conoció a Miguel, aunque a veces no se llevaban bien, sabía todo lo que pensaba. En esos tiempos, a él le preocupaba que no pudiera salir adelante por todo lo que pasó, pero parece que ha abierto su corazón de nuevo y ha comenzado a aceptar a los demás. ¡Tenía un poco de curiosidad por saber quién era esa niña!

 

Dueño de mi Cuerpo   Escuchó que ella también la conoce… conoce…   Era hora de verla después de haber estado separados durante tanto tiempo. Después de tres rondas de tragos, Miguel

estaba un poco borracho, pero Lucas todavía estaba muy sobrio. Sacudió la cabeza y dijo: “¿Cómo es que ahora que tiene una mujer, no aguante tomar tanto alcohol?”  alcohol?”  Lucas no tuvo más remedio que llamar a un taxi para enviar a Miguel de regreso. Claudia despertó la tarde. Cuando escuchó sealgo en laporplanta baja, bajó inmediatamente para ver qué era. Miguel estaba siendo sostenido por un hombre guapo. Sus mejillas estaban un poco rojas y tenía un fuerte olor a alcohol. Parecía que había bebido mucho. Ella se apresuró para ir a ayudarlo. Ella pensaba que Miguel pesaba mucho, pero cuando lo sostuvo, se sentía muy ligero. Su delgado cuerpo podía cargarlo.  A Lucas le dolía un poco el brazo y miró a Claudia con malos ojos. Esa persona se veía muy joven. Si Miguel no hubiera dicho que tenía 18 años,

 

  Dueño de mi Cuerpo dudaría de que esa chica frente a él tuviera solo 15 o 16 años. Tenía una figura llamativa y un rostro lindo. Lleva una falda azul corta en la casa.

Ella debió haber bajado con mucha prisa, porque no llevaba zapatos, y se le podía apreciar los pies blancos. “Es la primera vez que nos vemos. Mi nombre es Lucas. Soy un viejo amigo de Miguel. No lo había visto en mucho tiempo, así que tomamos dos tragos y eso fue todo.” todo.”    problema. Gracias por traerlo de “No hay vuelta. Disculpa si te causó algún problema. Le pedí a David que te preparara el té. Llevaré a Miguel a su habitación. Siéntase en casa.”  casa.”  Ella le pidió a David que atendiera al invitado, mientras ayudaba a Miguel a subir las escaleras. Lucas notó algo y no pudo evitar reír. Capitulo 77

“Ese Miguel sabe actuar bien. ¡Casi me engaña!”   engaña!”

 

  Dueño de mi Cuerpo Resultó que ese bastardo no estaba borracho. ¡E hizo que lo ayudara todo este tiempo! David dejó de sonreír y dijo: “El señor está

aprendiendo a ser un buen esposo. ¡Se está esforzando mucho!”  mucho!”  “¡No puedo creer que aun quiera ser un buen esposo! No fue fácil sobrevivir por todo lo que pasó.”  pasó.”  “Así es.”  es.”  David suspiró y asintió con la cabeza. En como una pero pesadilla. Soloesos el años, señorfuesobrevivió, su hermano…   hermano… Lucas no quiso estorbarlo y se fue.  Arriba, Claudia había puesto a Miguel en la cama y quiso prepararle algo para la resaca. Inesperadamente, cuando se dio la vuelta, sintió que le agarraban la muñeca. Su cuerpo se fue hacia atrás y luego cayó en los brazos de Miguel. Sus grandes manos eran como grilletes, estaban firmemente sujetos a ella. Su pequeño rostro estaba cerca de su pecho. La ropa que traía era delgada, así que podía escuchar claramente los latidos de su corazón a través de la camisa.

 

  Dueño de mi Cuerpo El olor a alcohol también estaba ahí. Ella estaba un poco confundida. No entendía si estaba realmente borracho o fingía estar borracho.

“¿Miguel?”  “¿Miguel?”  Lo llamó por su nombre. “Sí. Estoy aquí.”  aquí.”  Su voz era sensual, como la melodía de un violín. “¿Estás borracho?”  borracho?”  “No. Si no pretendía, Lucas no me hubiera dejado Él es soltero estar sin nada hacer, yir. no eraundivertido con que él. Prefiero estar contigo.”  contigo.”  Después de decir eso, le dio la vuelta y la abrazó con fuerza. Los dos se miraban y respiraban provocativamente. Se inclinó y le dio un beso. Claudia tembló un poco. Sus manos agarraban de su camisa, y estaba tan nerviosa que no pudo respirar. Rara vez besaba a Miguel. La mimó hasta convertirla en una inocente niña. El beso la tomó desprevenida, pero no se resistió.

 

  Dueño de mi Cuerpo Obviamente ella no había bebido, pero se sintió mareada y no podía pensar con claridad. Ella no pudo describir esa sensación.

Parecía que una pequeña corriente eléctrica atravesaba su cuerpo, haciendo que hasta su alma temblara. Después de un tiempo, la soltó. Le preocupaba que, si seguía así, no podría controlarlo. Su barbilla se apoyaba en su frente, y su voz “Claudia, difíciles ¿estás lista sonaba para muy pasarronca: momentos conmigo?”   conmigo?” “Por supuesto que sí, ¿necesitas preguntar? ¡Me enojaré si te atreves a sentir lástima por mí!”  mí!”  Ella apretó el puño y lo dijo con c on seriedad. “¿Quién te enseñó eso?” Miguel no sabía si reír o llorar cuando la escuchó decir eso. “De Beatriz. Dijo que, si queremos buenos hombres, tendremos que sufrir al principio.”  principio.”  “Ella tiene razón. Deja que te enseñe bien. Ya que estás lista para compartir las dificultades de la vida conmigo, será mejor que te prepares bien. Soy diez años mayor

 

Dueño de mi Cuerpo   que tú. La diferencia es muy grande en la mente de los demás, pero no para mí.”  mí.”   “No hay nada de malo en que yo sea diez años mayor que tú. Recorreré primero el

camino difícil. Solo tienes que quedarte detrás de mí y ver el paisaje hasta el final.”  final.”  Cuando Claudia escuchó eso, se emocionó y su respiración se hizo más lenta. Estaban dispuestos a compartir lo bueno y lo malo. Eso era fácil de decir, pero difícil de hacer. ¡Pero le aseguró que la protegería y ella estabaéldispuesta a creerle! “¡Entonces no me vayas a fallar!”  fallar!”  Ella apretó su gran mano y dijo lentamente cada palabra. Miguel no sabía que sentir cuando escuchó eso. Solía vivir solo para vengarse. La muerte de su segundo hermano fue una carga muy pesada. Todo lo que hacía era por su segundo hermano. ¡Sentía que su vida no era de él mismo! ¡Pero ahora quería tener una buena vida y esforzarse por vivir feliz!

 

Dueño de mi Cuerpo   “Está bien. Te lo prometo, nunca te fallaré, ¡envejeceré contigo hasta el día en que muera!”   muera!” “Tómate un baño primero. Te prepararé

algo para la resaca. Hueles a alcohol. ¡A mí no me gusta!”  gusta!”  Ella lo empujó y lo incitó a levantarse. Miguel le había dicho tantas cosas conmovedoras que ella se sintió un poco avergonzada. Un hombre mayor diciendo esas cosas… Parecía un jovencito enamorado y no se avergonzaba en lo absoluto. Él era muy valiente, ¡pero ella estaba avergonzada! Miguel sabía que ella era tímida. No pudo evitar reírse y dijo: “Bésame y me tomaré un baño. Estaré limpio y te dejaré dormir en mis brazos.”  brazos.”  “¿Te vas a bañar o no?”  no?”  Ella estaba furiosa. “Bebí demasiado y no puedo mantenerme firme...”   firme...” “¿Qué es lo que quieres ahora? ¿Qué te mimé?”   mimé?” Claudia no tuvo más remedio que acercarse y besarlo en el rostro.

 

Dueño de mi Cuerpo   Se levantó de la cama y salió desesperada. Sus mejillas estaban rojas, y sus orejas estaban calientes. Claudia durmió profundamente esa noche, como un pulpo envuelto alrededor de Miguel. Miguel no se atrevió a hacerle nada malo, y comenzó a contar ovejas. Las vacaciones iban a terminar pronto. Javier la envió a la escuela. Miguel y Lucas

tenían asuntos porloresolver. En el auto, Lucas miró, sonrió y dijo: “No tienes vida sexual. ¿Qué te ha pasado?  Acaso tienes problemas con… ¿Y solo estás jugando contigo mismo? ¿Quieres que te recomiende algún medicamento?”  medicamento?”  “¡Cállate!”   “¡Cállate!” Miguel se enojó al instante. “Bueno. Iré al grano.”  grano.”  Lucas sonrió con malicia. Después de todo, él era un médico militar y estaba en el ejército todos los años, por lo que también tenía una personalidad de soldado. “Ellos han estado desaparecidos hace cuatro años desde el atentado en contra

 

  Dueño de mi Cuerpo tuyo y tu hermano. Ahora hay leves señales de su regreso. Capturamos un escuadrón en la frontera. Ellos eran miembros de esa organización. Esta organización se ha mezclado con pandillas y tienen mucho poder. Están involucrados tanto en los países del oriente como en el occidente. Hay que tener mucho cuidado.”  cuidado.”  “No estoy seguro de lo que harán, pero siempre es bueno tener cuidado.”  cuidado.”  “¡Si ellos revelan su ubicación, podremos

vengar a milos segundo hermano!” Entrecerró ojos yhermano!”  apretó los  puños en silencio. Soportó la humillación durante tantos años y convirtió a su empresa en una multinacional. ¡Hizo todo lo posible para vengar a su segundo hermano! “Miguel, solías ser como un muro de acero, ni siquiera las balas podían penetrarte, pero ahora tenías una debilidad. ¿Sabes cuál es tu debilidad? ¡La persona que te hace más fuerte es también tu mayor debilidad!”   debilidad!” Lucas lo dijo incapaz de hacer nada. Miguel frunció el ceño cuando escuchó eso, apretó el puño con tantas fuerzas que

 

  Dueño de mi Cuerpo sus uñas estaban profundamente incrustadas en la piel. La sangre se derramaba lentamente de sus dedos. Lucas era médico y estaba acostumbrado a ver sangre. Bajó la mirada y suspiró. Era hora de que Miguel tomara una decisión. ¿Quería esta debilidad o no? Capitulo 78

“¡Estar con ella me me hace sentir como si todavía fuera una persona!”  persona!”  Estuvo pensando por mucho tiempo y le fue difícil decir esas palabras. “Personalmente, me gusta esta mujer. Quiero que sea mi esposa y la madre de mis hijos en el futuro. ¡No quiero dejarla ir!”  ir!”  “Respeto tu  tu  decisión y sé cómo te sientes en este momento.”  momento.”  Lucas le dio una fuerte palmada en el hombro para mostrar su apoyo. ¿Qué tipo de hombre es si no puede proteger a su propia mujer y elige darse por vencido desde el principio?

 

  Dueño de mi Cuerpo Él iba a resistir viento y marea con solo tenerla a su lado. Claudia regresó a la escuela y se dio cuenta de que todos la miraban y señalaban. “¿Cómo se atreve a venir a la escuela? ¡No tiene pena de lo que hizo!”  hizo!”  Ellas hablaban en voz alta, por lo que Claudia las escuchó con claridad. Claudia escuchó el abucheo. Ella había estado de vacaciones en esos siete días.

¿Qué había en laagachada. escuela? En ese Caminó con pasado la cabeza momento, sonó su teléfono móvil. Era Beatriz. Ella respondió y antes de escucharla hablar, tres mujeres aparecieron delante de ella y la golpearon. Su teléfono móvil cayó al suelo. Conocía a la persona que estaba enfrente, Sara, la vicepresidenta de la asociación de estudiantes, que siempre había gustado de Roger. “¿Qué quieres?”  quieres?”  Cuando estaba a punto de recoger el teléfono, una de ellas lo pisó.

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Qué es lo que quieren? ¿Por qué rompiste mi teléfono?”  teléfono?”  “Porque eres una desgraciada y no me gustas. ¡Hoy te daremos una lección!”  lección!”  “¿Qué significa eso?”  eso?”  Luego, Sara sacó su teléfono móvil y se lo dio para que viera algo. Vio claramente que alguien publicó en la página de la escuela sobre su vida privada. ¡Dice que vendió su cuerpo por dinero y estaba con alguien mayor y feo!

Incluso imágenes comoentrando pruebas.y Tomaronhabía fotos de ella y Miguel, saliendo de restaurantes y otros lugares públicos. Era muy cuidadoso con el ángulo de las fotos. Su rostro estaba completamente expuesto, pero el de Miguel estaba desenfocado.  Alguien debió haberlo hecho a propósito. Y esa persona también conocía la identidad de Miguel, de la familia Santos. No se atrevía a revelar quién era. Después de todo, Miguel tenía al cabecilla que lo protegía. Su compromiso con Miguel no fue revelado al público, y pocas personas lo sabían.

 

  Dueño de mi Cuerpo  Además de la desfiguración facial, la empresa ocultaba intencionalmente toda la información de Miguel, por eso ningún reportero aparecía en los banquetes que él asistía. Por eso que, al ver esas publicaciones, todos pensaron que vendió su cuerpo por dinero. “¡Eso no es verdad!”  verdad!”  Ella estaba apurada por agarrar su teléfono móvil, pero Sara lo agarró primero y lo

puso en su Claudia al bolsillo. inclinarse a recogerlo, cayó al suelo. Se golpeó fuertemente la rodilla con el suelo, y le dolió mucho. Sara cruzó los brazos, la miró con desprecio, y dijo: “Claudia, te vi subirte subirte a un auto de lujo en la intersección cerca de la puerta de la escuela. Pensé que había visto mal, ¡pero no esperaba que fuese verdad que…!”  que…!”  “Todo el mundo sabe que eres la hija rara de la familia Rosas. ¡No me digas que era el auto de tu padre y venía a recogerte! Los autos que te recogían todos los días no eran los mismos. ¡Eran Rolls-Royce,

 

  Dueño de mi Cuerpo Bentley y Cayenne! ¡Parece que conoces a muchos hombres con dinero!”  dinero!”   Al escuchar eso, Claudia quiso correr de regreso a la casa y destrozar todos los autos de Miguel. Sabía que Miguel tenía muchos autos y que fue el cabecilla quien se los dio. Ella no conocía esas marcas, pero sabía muy bien que los precios eran muy altos. Cuando David salía a comprar verduras, ¿no usaba el Rolls-Royce del cabecilla?

¿Cómo pueden auto de lujo? ¿No ¿Por qué teníanllamarlo tantos autos lujosos? podían venderlos y tener algo de dinero? “Sara, no sigas diciendo tonterías. ¡Esto es una calumnia!”  calumnia!”  Ella apretó fuertemente los puños. Si admitía que era culpable, sería acusada por el crimen. Comenzaron a aparecer más gente a su alrededor. Ella solo podía aguantar la presión. Sara no pudo evitar reírse cuando escuchó eso, como si hubiera escuchado un gran chiste. “¿Me acusas de calumnia? Has hecho algo indebido, ¿y no lo confiesas? Claudia, ¿crees que soy la única al que no

 

  Dueño de mi Cuerpo le agradas? ¿Sabes cuántas personas hay que quieren verte sufrir? Mujerzuela, ya estás arruinada. También te atreviste a seducir a Roger. ¡Hoy haré que pagues por eso!”   eso!” Sara le dijo con mucha rabia. “¡Claudia! ¡Pelea!”  ¡Pelea!”  En ese momento, algunas personas en la multitud gritaron fuerte, y todos los demás también lo hicieron.  Al final, se escuchó el alboroto por toda la

escuela, vez más fuerte. y algunas Claudia cada estaba rodeada personas comenzaron a romper cosas. Libros, los desayunos que aún no se comían y otras cosas…  cosas…  Ella estaba sola, pero alguien entró y la protegió con su cuerpo. “¡Atrévanse a tocarla de nuevo y verán!”  verán!”  Roger impidió que hirieran a Claudia de nuevo. Él no fue el único que vino, Beatriz también estaba ahí. Cuando él dijo eso, la gente que estaba a su alrededor se calmó de inmediato.  Al ver que Roger la defendía, Sara pateó al suelo con enojo: “¡Roger, Claudia te mintió!

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella es una prostituta y a cualquiera acompaña…”   acompaña…”  Alguien no permitió que Sara terminara de hablar. No fue Roger, sino Beatriz. Ella actuó sin pensarlo y la abofeteó en la cara. Sara estaba con la guardia baja, no se esperaba que la golpearan, y cayó al suelo. Ella no se levantó durante mucho tiempo. Sara se cubrió la cara, la miró en estado

de shock y dijo enojada: “Tú... ¿Cómo te atreves a pegarme?”  pegarme?”   “¿Qué tiene que te pegue? ¡De tu boca salía mucha basura y tuve que hacerte callar!”   callar!” “Tú... Beatriz, vas a ver. ¿Crees que te tengo miedo? ¿Qué están esperando? ¡Denle una golpiza!”  golpiza!”  Ella les ordenó a las dos chicas que la acompañaban a que golpearan a Beatriz. Roger tenía miedo de que Beatriz no pudiera contra todas ellas. Pero vio que las tumbó con una patada. Después le dio un puñetazo a cada una de ellas.

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia estaba con la boca abierta. Conocía bien a Beatriz, pero no esperaba que fuera tan violenta. ¡Tampoco se esperaba que supiera artes marciales! Beatriz estaba delante de ella protegiéndola. Miró con ira a los estudiantes que estaban alrededor y dijo: “¡Si se atreven a hablar boberías de nuevo, de nuevo, les romperé la boca a cada uno de ustedes!”   ustedes!” “¡Además, no es asunto suyo lo que haga

Claudia! Si de alguno deen ustedes se atreve molestarla nuevo el futuro, ¡no mea culpen si les soy grosera!”  grosera!”  Cuando dijo eso, todos ellos se quedaron muy callados. Ellos se miraban entre sí, y nadie se atrevía a decir una sola palabra. “¿Todavía no se largan de aquí? ¿Acaso no tienen que ir a clases? ¿O quieren quedarse a platicar conmigo?”  conmigo?”  Beatriz vio que nadie se movía. Dio un suspiro fuerte y todos ellos comenzaron a irse. “Roger, lleva primero a Claudia a la enfermería. Esto déjamelo a mí.”  mí.”  “Beatriz…”   “Beatriz…”

 

Dueño de mi Cuerpo   Claudia no se preocupaba en sí misma. En cambio, le preocupa que Beatriz sea demasiado impulsiva. ¿Y si lastimaba a alguien? Beatriz la miraba para que estuviera tranquila y le pidió a Roger que se la llevara lo más pronto posible. Beatriz esperó que se alejaran, comenzó a mirar adonde Sara y las otras chicas mientras se frotaba las manos. Y se arremangó las mangas…   mangas… Capítulo 79

 Al ver a Beatriz así, Sara retrocedió unos pasos, parecía que estuviera viendo un demonio. “Tú... ¿Qué me quieres hacer? ¡Espera que se entere el consejero!”  consejero!”  “¡No te muevas, déjame darte una paliza primero, y dejaré que busques al consejero! Hace tiempo que he querido darte tu merecido…”  merecido…”  Beatriz le dijo groseramente, y luego le comenzó a golpear. Diez minutos después, la nariz de Sara estaba toda hinchada y tenía el cabello

 

Dueño de mi Cuerpo   revuelto. Pero Sara no se había quedado con los brazos cruzados, ella también se defendió y la araño en el brazo. Le informaron al director y fueron llevadas a su oficina.  Antes de decir algo, el director se puso en contacto con sus padres. Beatriz no tenía miedo, porque sabía que ese hombre no estaba en la ciudad y no volvería más. El padre de Sara llegó de inmediato. Su

padre eraTambién traductoreray un trabajaba para en el gobierno. poco famoso la ciudad. Estaba muy enojado cuando vio a su hija golpeada. “Amor, ¿qué te pasó?”  pasó?”  “¡Papá, ese animal salvaje me golpeó! ¡Tienes que castigarla por mí!”  mí!”  El padre de Sara no pudo evitar mirarla enojado cuando escuchó eso. Dio un fuerte golpe en el escritorio del director, he hizo que se asustara, y dijo: “¿Cómo puede su escuela permitir estas cosas? ¿Permiten que ella provoque peleas entre estudiantes y también que

 

Dueño de mi Cuerpo   golpee a mi hija así? ¡Deben expulsarla de inmediato!”   inmediato!” “Señor, así no fueron las cosas. ¡Su hija fue la que comenzó a golpear a una estudiante! ¡Podemos ver las cámaras de seguridad!”   seguridad!” Se fueron a la sala de vigilancia. En las grabaciones, se podía ver que Sara empujó a Claudia al suelo. La evidencia era contundente. Pero inesperadamente, el padre de Sara

no quiso admitir la culpa. que fue solamente un accidente entreDijo compañeros de clase y que Claudia cayó accidentalmente al suelo. Sara también insistió en que Claudia se cayó por sí sola. La cara de Beatriz se puso roja de ira cuando escuchó eso. ¡Tenía muchas ganas de golpear a ese señor de mediana edad! “¿Qué está diciendo? ¿Está ciego? Su hija publicó unos rumores falsos y lastimó a mi amiga. ¿ Acaso no está claro?”  claro?”  “Incluso si mi hija fue la que causó ese problema, era entre ella y esa compañera de clase. ¿Qué tenía que ver contigo?

 

Dueño de mi Cuerpo   Director, debes darme una respuesta ahora mismo, ¡o no me culpe si le pasa algo a usted!”  usted!”  El padre de Sara estaba presionando al director para que hiciera algo. El director también estaba bastante avergonzado. Con esas pruebas, ¡no tenía derecho de solamente castigar a Beatriz! “Beatriz, ¿dónde está su padre?”  padre?”  “¡Está muerto!”  muerto!”  Beatriz lo dijo mientras apretaba los

dientes. “Este...”   “Este...” El director no se esperaba que dijera eso y no supo qué más decir. “Beatriz, ¿cómo puedes hablarle así al director? ¡Por favor muestra un poco más de respeto!” Dijo el consejero.  consejero.  “Estoy diciendo la verdad. Mi padre ha muerto hace tiempo. No tengo familia. ¿A quién quieres que llame? Te voy a decir esto. Hace tiempo que quise largarme de esta escuela. ¡Si quieren expulsarme, háganlo ahora mismo!”  mismo!”  “¡Beatriz, por favor, preste atención a su tono! ¿Es así cómo le habla a su director? Hoy tomaré la decisión. Siempre y cuando

 

Dueño de mi Cuerpo   se disculpe con su compañera Sara, prometo que no la castigaran y no habrá registro de lo que pasó hoy. De lo contrario, ¡haré que la expulsen de una vez!”   vez!” “Lo siento. ¡Eso será imposible! Sara, ¡ten cuidado de que te pase algo después de salir de la escuela!” Beatriz tenía un temperamento fuerte, y no sabía cómo tratar a las personas con amabilidad. Ella solía ser muy rebelde y hacía lo que

quisiera. no hubiera de acuerdo con esa Sipersona, ¡noestado hubiera estado estudiando en esta escuela! Sara no esperaba que Beatriz la amenazara. No pudo evitar temblar y mirar a su padre con miedo. “¡Papá, ella me amenazó!”  amenazó!”  “¿Te atreves a amenazar a mi hija? Nadie te ha disciplinado, ya que no tienes familia. ¡Yo te disciplinaré bien por ellos!” ellos!”   El padre de Sara estaba tan enojado que la abofeteó con mucha fuerza. Beatriz no puedo esquivarlo, solo cerró los ojos y aguantó el golpe.  Antes de sentir el dolor, escuchó una voz familiar.

 

Dueño de mi Cuerpo   “¿Quién te crees que eres para disciplinar a mi familia?”  familia?”  Esa voz la agarró por sorpresa, Beatriz abrió los ojos y miró al hombre frente a ella. Lucas era médico militar. Era bueno con las manos y los pies. Se veía muy fuerte. La cara del padre de Sara estaba pálida cuando lo vio. “Tú... ¿Quién eres?”  eres?”  “Soy el responsable de Beatriz.”  Beatriz.” 

“¿Cómo es posible que sean tan joven...?” Sara se sorprendió. El hombre frente a ella era muy guapo. Parecía tener veintiocho o veintinueve años. Tenía un rostro sobresaliente y difícil de olvidar. ¿Cómo podría alguien tan joven ser el responsable de Beatriz? “Soy su hermano mayor.”  mayor.”  Dijo con enojo, y mirando directamente a Beatriz. Beatriz estaba frustrada y pateó al suelo. “¡Basura de hermano! ¿Quién te pidió que vinieras?”   vinieras?” Miró al director de mala gana.

 

  Dueño de mi Cuerpo El director era quien criticaba a menudo a los estudiantes, pero ahora que Lucas estaba ahí, no se atrevió a decirle nada a Beatriz. Las generaciones de la familia de Beatriz han sido parte del partido político. Su familia también ha estado en el ejército durante generaciones y algunos han sido los comandantes de varias regiones militares.  Aunque ambos padres murieron, su tío aún

sigue y estemilitar, hermano eraamuy hábil.un Es unvivo médico ¡e iba obtener rango más alto! “Este es un asunto familiar. ¡Que se quede privado!”   privado!” El director lo dijo como si comenzara a tener dolor de cabeza. Trató de evitar que ese problema fuera aún más grande. “La oficina es de ustedes. ¡Que tengan una buena charla!”  charla!”  El director se fue con el consejero. El padre de Sara notó que el director le tenía miedo a ese hombre. No pudo evitar entrecerrar los ojos y dijo: “Jovencito, ¿a qué se dedica usted?”  usted?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Escuché que estás trabajando como intérprete para el secretario Lama. Me preguntó cómo está el secretario Lama recientemente. Le había dicho que me enviara un poco de té. Me acuerdo que me dijo que no se sentía bien, ¿cómo está ahora?”   ahora?” El padre de Sara se sorprendió al escuchar eso. Sabía sobre el asunto del té del secretario Lama. Dijo que era para un hombre

importante que iba encantaba tomar té.a venir a la ciudad y le ¿Acaso... era esta persona? El padre de Sara se dio cuenta de la gravedad del asunto y comenzó a sudar por toda la frente. “Discúlpeme, usted es...”  es...”  “Me llamo Lucas, mi padre es Mario Valencia, ¿has oído hablar de él?”  él?”  Mario Valencia…  Valencia…  El padre de Sara ha estado traduciendo para el gobierno por muchos años. Era imposible que no escuchara el nombre de Mario Valencia.

 

  Dueño de mi Cuerpo El famoso general, lamentablemente con solo 40 años, murió en el extranjero mientras estaba de servicio con su esposa. El general Mario tenía un par de hijos. Su hijo tomó el apellido de su madre y su hija toma el apellido de su padre. Acaso…  Acaso…  El padre de Sara se estremeció y tartamudeó: “Yo no... No me imaginaba que usted fuera su hijo. He escuchado sobre su padre...”  padre...”  “Recuerdas el nombre de mi padre, pero…

¿Has hablar de mí?”  mí?” “Lo heoído escuchado…” El  padre de Sara comenzó a temblar. “El director me contó un poco de lo que pasó cuando me llamó por teléfono. ¿Su hija golpeó a alguien?”  alguien?”  Capítulo 80 

“¡Fue ella quien quien me golpeó! ¡Mira cómo me dejó!”   dejó!” Sara lo dijo con mucha lástima. El padre de Sara inmediatamente la regañó y le dijo que se callara. “Debo ser más estricto con ella. ¡La castigaré por lo que ocasionó!”  ocasionó!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Lo ponemos en su registro de antecedentes disciplinarios o la expulsamos?”   expulsamos?” “Esto...” El padre de Sara estaba avergonzado. “Que lo pongan es su registro…”   registro…” “Dejémoslo así. No soy esa clase de persona. Todos tienen la culpa, y no quiero señalar a nadie. Olvidemos esto. Esperemos que no vuelva a pasar o si no será otro cuento.”  cuento.” 

“¡Gracias, señor Lucas! señorita Beatriz!” El padre de ¡Gracias, Sara exhaló un suspiro de alivio. Afortunadamente, Lucas no causó problemas, de lo contrario sería realmente difícil lidiar con este asunto. “Bueno. Ya estoy cansado. Sígueme Sígueme a la enfermería e inyéctate la vacuna contra la rabia.”   rabia.” “¿Vacuna contra la rabia?”  rabia?”  Beatriz todavía estaba un poco enojada. Él no había venido a ayudarla. ¡Solo quería presumir! Pero le pareció gracioso cuando escuchó lo que dijo. ¿Quiso decir que Sara era una perra?

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella miró la cara roja de Sara y dijo con orgullo: “De hecho, es hora de que me vacune contra la rabia. Después de todo, ¡es muy peligroso que un animal rabioso muerda a la gente!”  gente!”  Cuando Sara escuchó eso, no se atrevió a decir nada más, solo apretó los dientes y aguantó su burla. Lucas sujetó la pequeña mano de Beatriz. Ella quiso que la soltara. Sin embargo, Lucas tenía mucha fuerza y no podía hacer

nada. Nocon podía que salir él. soltarse, por lo que tuvo “¡Suéltame! Lucas, ¿quién te cr ees ees que eres para cuidar de mí?”  mí?”  “Soy tu hermano. Nuestros padres murieron y soy el único pariente que te queda. Siempre serás importante para mí.”  mí.”   “¡No me importa! ¡Déjame ir!”  ir!”  Ella luchó con todas sus fuerzas para detener a Lucas. Lucas se detuvo y la miró fijamente. “Si te atreves a desobedecerme, te romperé las piernas y te llevaré cargando.  Acuérdate que soy médico. Puedo curarte, como también lastimarte.”  lastimarte.” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Tú... no estás en el ejército ahora mismo. ¡No tienes derecho para darme órdenes!”  órdenes!”   “Sigue luchando y vas a ver.”  ver.”  Él la agarró con más fuerza. Beatriz apretó los dientes, y no pudo decir una palabra. Ella había perdido los nervios. Ella no podía entender. Con cualquiera podía decir lo que pensaba y también discutir. Pero cuando Lucas estaba en frente, no

podía ganas. decir nada y solo aguantarse las ¡Él era un gran desafío para ella! Ella guardó silencio y Lucas la llevó a la enfermería. Claudia también está ahí. Su rodilla acababa de ser vendada. Se sorprendió mucho cuando vio a Lucas y a Beatriz juntos. “Señor Lucas. Beatriz. Ustedes...”  Ustedes...”  “Soy el hermano de Beatriz.”  Beatriz.”  “Basura de hermano.”  hermano.”  “¿Qué?”   “¿Qué?” Lucas hizo un gesto con la nariz y la boca. De repente, Beatriz se portó muy obediente, como si fuera una cachorrita.

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia estaba a un lado con la boca abierta. Lucas le pidió al médico de la escuela que le trajera algunas cosas. Él le inyectó una vacuna y luego le limpió la herida. Su técnica era muy profesional. Después de terminar, dijo: “No seas tan violenta en el futuro.”  futuro.”  “¡Solo sabes criticarme!” Lucas levantó la mirada y dijo: “Puedes ser violenta y causar problemas, pero no puedes matar a

nadie, yo simple me harétraductor cargo detelodejó demás. La hija deyun así de herida. ¿Acaso no te enseñamos a defenderte en el pasado? No necesito que resuelvas tus problemas de forma racional. Puedes hacer lo que quieras. Si quieres vivir con problemas puedes hacerlo, porque yo no tengo miedo de enfrentarlas por ti.”  ti.”  Beatriz escuchó eso y abrió la boca, pero no supo qué decir. Miraba al hombre que estaba enfrente de ella. Ellos no se parecían en nada. Nadie creería que fuesen hermanos. El hijo se parecía a la madre y la hija, al padre. Por eso es que eran diferentes.

 

  Dueño de mi Cuerpo Pero ellos dos eran de la misma sangre. Ella pensaba que sería genial que no fuese su hermano. Que mejor hubiera nacido siendo otra persona…  persona…  Esa sensación de querer ser otra persona la dejó casi sin aliento.  Al final decidió quedarse callada. “Tengo que ir a hacer algunos trámites y concertar una cita con alguien. Te recogeré en la noche.”  noche.”  “Entiendo.” Beatriz lo dijo con tristeza.  tristeza. 

“Señorita Claudia, despido.”  despido.”  Lucas le dijo eso y me se alejó. Tan pronto como se fue, Claudia se le acercó de inmediato y le dijo a Beatriz: “Tu hermano es tan guapo y agresivo. Si quieres vivir con problemas puedes hacerlo, porque yo no tengo miedo de enfrentarlas por ti. Dios... ¡Qué guapo!”  guapo!”  Ella imitó el tono de Lucas y sintió que había escuchado esa frase en la televisión. Beatriz le golpeó la cabeza: “¿Todavía quieres resolver tu problema?”  problema?”  “Si quiero...”  quiero...”  Claudia asintió con la cabeza agachada. Cuando Lucas salió, llamó a Miguel. “La señorita Claudia, ella...”  ella...” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Abusaron de mi esposa. Ya lo sabía. Estoy en camino para allá.”  allá.”  “Parece que no necesitaba avisarte. Tómate tu tiempo y contáctame si necesitas de algo.”  algo.”  Lucas colgó después de decir eso. La charla entre hombres siempre ha sido concisa y simple, y ellos se entendían bien. En ese momento, Miguel estaba en el auto y usó su influencia en la empresa para lidiar con este asunto.

Las publicaciones comenzaron desde la página web de la escuela, y el escándalo que provocó no ha sido pequeño. Esa persona eligió intencionalmente publicarla en el día en que los estudiantes regresaban a la escuela, solo para que el escándalo sea aún más grande.  Afortunadamente, Miguel lo manejó a tiempo e hizo que no se publicara fuera de la escuela.  Alguien abuso de su prometida. ¿Acaso no quería seguir viviendo? ¡Javier pronto descubrió que la dirección IP de la primera publicación provenía de la casa de los Rosas! De los Rosas…  Rosas… 

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel entrecerró los ojos un poco, y tenía una mirada malvada. Claudia estaba ahora escondida en la enfermería y no se atrevía a salir. En un lugar tan pequeño como la enfermería, solo la iban a ver una docena de personas y todos ellos la miraban de una forma extraña.  Aunque Beatriz los regañaba de mala gana, Claudia sabía que los rumores solo se volverían cada vez más desagradables.

Todas susincluidas cuentaslassociales habían sido atacadas, de Beatriz. Ella leyó la publicación con atención, decía que cada día se subía a un auto de lujo diferente y negociaba con diferentes hombres, y ahora estaba con un hombre mayor y feo. Después de leer la publicación, Beatriz dijo muy seria: “Creo que ellos tienen buen ojo, ¡sabían bien que era mayor y feo!”  feo!”  “Pero tiene medio rostro  rostro que se ve bien…”  bien…”  Claudia se sentía muy triste y trató de defender la apariencia de Miguel. Beatriz tiró de su oreja con enojo y dijo: “¿No vas a llamar a Miguel? ¿Qué tienes en la cabeza? Eres una buena para nada.

 

  Dueño de mi Cuerpo Él fue quien te metió en este lío. ¿Acaso él dejará que resuelvas ese problema por ti sola?”   sola?” “Beatriz, no hables de esa forma. Aunque Claudia no sepa cómo resolver los problemas, no puedes decir eso de ella. He ordenado a alguien para que resuelva ese asunto. Pero mis recursos son limitados. Regresaré a la casa y le pediré a mi padre que me dé una mano.”  mano.”  “Ok...”   “Ok...”

¿Pueden Incluso sihablar era con unatranquilidad? buena para nada, ¡también era una buena para nada con grandes ambiciones! También quería resolver ese asunto. ¿Pero tenía algún modo de resolverlo? Capítulo 81 

“¿Tengo que hacer público mi compromiso con Miguel?”  Miguel?”  “¿De qué serviría hacerlo público? Mira cómo se ve Miguel, ¿creerán que estas con él por amor y no por el dinero de su familia?” Dijo Beatriz con enojo. Roger Roger respiró hondo y dijo: “Claudia, si quieres,

 

  Dueño de mi Cuerpo puedo decir públicamente que estamos enamorados. En esas fotos no se ven los números de las matrículas. Puedo conseguir esos modelos de autos y decir que son míos. También podemos decir que tú eres la de la foto y yo soy ese hombre, y que tenemos una relación romántica.”  romántica.”  “Claudia... Solo estaremos fingiendo. Cuando termine todo, cada uno ira por su lado. No tengo ninguna mala intención y tampoco quiero verte separada de él. Yo

sé muy bien… Que tú seguir gustas de él…”  él…”   Roger quería intentando conquistarla, pero sabía que no lo iba a lograr.  Aunque sabía que no podía estar con Claudia, no soportaba verla en ese estado ante semejantes rumores. Quería ayudarla, abrazarla y darle un hombro para llorar. Si ella aceptaba, también podía pretender ser su amante. Cuando Claudia escuchó eso, levantó la mirada y vio a Roger muy decidido. Sabía que Roger haría lo que fuera por ella.

 

  Dueño de mi Cuerpo Pero no podía aceptar tal propuesta. Tenía miedo que él también saliera lastimado. Ella dijo: “Compañero Roger, lo siento. Yo...”   Yo...”  Antes de que terminara de hablar, una voz familiar se escuchó detrás de ella. “Aprecio tu amabilidad. Déjame proteger a mi mujer.”  mujer.”  Claudia escuchó esa voz y se dio la vuelta muy emocionada, pero vio…  vio…  Un rostro perfecto.

Claudia estaba sorprendida pellizcó para ver simuy no estaba dormida.y se Carajo, ¿acaso estoy soñando de nuevo? ¿Acaso todo lo que pasó hoy fue un sueño? ¿Sus siete días de vacaciones no han terminado y todavía estaba en un sueño? ¡Sí, debe ser así! “Tú...”   “Tú...” Claudia dio unos pasos adelante y lo señaló con el dedo. Miguel reconoció su expresión de sorpresa. Debe de estar maravillada. Su deseo por fin se hizo realidad. Él sonrió: “¿Te sorprendiste al verme de nuevo?”   nuevo?”

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia estaba más que segura que era realmente un sueño cuando escuchó eso. Claudia estaba enojada, se subió la manga y le dio una bofetada. ¡Zas! Ese sonido se escuchó por toda la enfermería. “¡Señor!”   “¡Señor!” Javier estaba detrás de él, con la boca abierta, y su barbilla casi tocaba el suelo. ¿Estaba loca la señorita Claudia?

“¡Te que no nunca más advertí en mis de sueños! Noaparecieras pienses que, por llamarte Miguel, ser alto y fuerte, puedes reemplazarlo. No caeré en tu trampa solamente porque seas guapo. Si realmente me interesara la apariencia física, ¡nunca me hubiera gustado mi Miguel!”   Miguel!” “Señorita Claudia… ¿De qué está hablando? Él es su Miguel. ¡Es Miguel!”  Miguel!”  Javier estaba un poco confundido en este momento. Era obvio que Claudia no se daba cuenta de la verdad.

 

  Dueño de mi Cuerpo “¡Este sueño es tan real que casi me lo creo! No pierdas tu tiempo. ¡Me gusta el feo de Miguel!”  Miguel!”  “No sabía que tenías esa clase de gustos…”   gustos…” Miguel no estaba molesto y comenzó a sonreír. “Señor... ¿Usted también se volvió loco?”  loco?”  Tartamudeó Javier. “¿No sientes que es real? ¿Qué tal esto?”  esto?”  Enfrente de todos, Miguel se inclinó sobre

los dede Claudia. Ellalabios tembló miedo y trató de detenerlo, pero no tenía tanta fuerza como él. Él había agarrado su mano con mucha fuerza y no dejó que se escapara. ¡Pervertido! Claudia estaba a punto de estallar por el enojo, así que levantó una pierna y le dio una patada.  Afortunadamente, Miguel estaba atento y pudo esquivarla. “Este... tú...”  tú...”  Ella quería maldecirlo, pero las palabras se le quedaron atoradas en la garganta. Beatriz corrió las cortinas y no dejó que los que estaban afuera siguieran viendo.

 

  Dueño de mi Cuerpo Roger no apartó su mirada y lo miraba muy atento. Beatriz sabía lo doloroso que era amar y no ser correspondido. Ella le dijo: “Ustedes no están destinados a estar juntos. Si lo fueran, ¿cómo podría Miguel seguir estando aquí?”  aquí?”  “Tienes razón. Se puede decir que no estamos destinados a estar juntos o solo es mala suerte.”  suerte.”  Roger estaba resentido y dejó de mirarlos.

Roger y Claudia se conocían desde hace dos años, pero esos dos solo se conocían unos meses. De verdad que no estaban destinados a estar juntos…  juntos…  Miguel estaba presionando a Claudia sobre la cama de la enfermería, y no quiso despegar sus labios de ella. Su aliento caliente roció su rostro y su voz era baja y ronca. “Soy Miguel. No estás soñando. Soy en  en  realidad Miguel.”  Miguel.”  “¿Cómo puedes ser él? Me estás mintiendo... ¿Acaso te hiciste una cirugía plástica?”   plástica?”

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia comenzó a dudar y lo miró en estado de shock. ¿Cómo se pudo hacer una cirugía tan rápido? Cuando lo vi esta mañana, todavía tenía la cicatriz. Y después de unas horas, ¿ya no estaba? Miguel notó que estaba muy confundida y dijo: “No me sometí a ninguna cirugía. Te había mentido mucho antes.”  antes.”  “¿Qué?”   “¿Qué?” “¿Cómo podía un sueño sentirse tan real?

¿Por tan tonta?”  tonta?” Miguelqué la eres golpeó en la  cabeza de mala gana. No la iba a dejar salir sola en el futuro. Se veía bien, pero era muy incrédula. Iba a ser fácil que la secuestraran. “Eso... Eso es imposible. ¿Cómo pudiste...?”   pudiste...?” Ella quería tocarle esa mitad de su rostro, pero no se atrevía. Miguel tomó su pequeña mano y la puso en su mejilla. No había rastro de una quemadura, como si no le hubiera pasado nada.

 

Dueño de mi Cuerpo   La herida en la ceja todavía estaba ahí y le daba una apariencia un poco malvada, que asustaba a cualquiera. Ella ya se había acostumbrado a mirarla y sintió que era algo normal. Realmente era Miguel. Ella no estaba soñando. ¿Por qué la engañó durante tanto tiempo? Ella comenzó a temblar y se sintió molesta cuando pensó en todo lo que tuvo que pasar.

“¿No confiaste en mí? ¿Así que me pusiste a prueba?”  prueba?”  Preguntó enfadada y con los ojos enrojecidos. Miguel vio sus lágrimas y comenzó a sentirse culpable. Él le secó las lágrimas con la yema de sus dedos y dijo con mucho dolor: “Al principio pensaba así. Pero después quise quedarme con esta apariencia para intimidar a mis enemigos. Lo importante es que al final decidí que ibas a ser la única mujer en mi vida a la que iba a proteger.”  proteger.”  “Me lo hubieras contado antes. ¡Lo hubiera mantenido en secreto y nunca lo hubiera

 

Dueño de mi Cuerpo   revelado! Pero al final, ¡no pudiste confiar en mí!”  mí!”  Ella todavía se sentía lastimada. Beatriz tenía razón, ¡no había que confiar en lo que decían los hombres! “¿Cómo no iba a confiar en ti? Solo estaba esperando el momento adecuado. Admito que es mi culpa. Puedes castigarme como sea y lo aceptaré.”  aceptaré.”  “Puedes castigarme por besarte, o puedes castigarme por comprarte pasteles o

enseñarte a hacerpuedes la tarea. Si nosi es suficiente, también pegarme, es que estás dispuesta a hacerlo.”  hacerlo.”  “¿Crees que no lo quiero hacer?”  hacer?”  Dijo enojada, de mala gana, y lo golpeó fuertemente en el pecho.  A ella le comenzó a doler la mano, pero él no hizo nada, ni siquiera mostró una expresión de dolor. Miguel agarró su pequeña mano y le preguntó: “¿Te duele?”  duele?”  “¿Eres de acero? ¿Acaso no sientes dolor?”   dolor?” El dolor era mutuo. Si a ella le dolía mucho, ¿cómo no le iba a doler a él?

 

Dueño de mi Cuerpo   Simplemente porque él no lo quiso demostrar. “No duele. Se sintió muy tierno.” Dijo con una voz cálida. Capítulo 82

Él dijo que se sentía tierno… ti erno…   El golpe fue tierno. ¿Estaba loco o era ella la que estaba es taba loca? “Tú... ¿Qué tonterías estás hablando?”  hablando?”  Él mirarla de forma Ellacomenzó sintió unapoco de pena y no seductora. se atrevió a mirarlo de nuevo. “Es tierno hacer cualquier cosa juntos, siempre y cuando estés a mi lado. Sé que estás enojada. Primero tranquilízate. Tenemos que resolver este asunto antes y después dejaré que te desahogues como quieras.”   quieras.” Claudia le dio la razón cuando escuchó eso. Miguel no siguió discutiendo con ella y dejó que se tranquilizara. Ella no quiso seguir golpeándolo, ya que admitió su culpa. Tampoco quería lastimarlo.

 

Dueño de mi Cuerpo   Ella murmuró: “¿Por qué ahora quisiste mostrar tu rostro tan bello?”  bello?”  “Quise hacerte sentir orgullosa.”  orgullosa.”  Miguel lo dijo con una cara seria. “¿Qué?”   “¿Qué?” Ella estaba llena de dudas, pero pronto comprendió lo que quiso decir. La cargó en sus brazos y salió. “Gracias por su ayuda. Yo me encargaré de lo demás. Ahora mismo tenemos muchas cosas por resolver. Después de

que termine todo, los compensaré.”  compensaré.” Después decon eso, Miguel cortésmente  se volteó y se fue. “Oye, ¿a dónde me llevas...?”  llevas...?”  Miguel no respondió, pero con su sonrisa mostraba confianza. Claudia atrajo a mucha gente cuando salió. Era obvio al ser un hombre tanque, guapo, iba cargada a atraer por mucha atención. “¿Esa no es Claudia? ¡Ella es lo  lo  suficientemente valiente como para seducir a alguien dentro de la escuela!”  escuela!”  “¿Quién es ese hombre? ¡Se ve muy guapo! Dios, ¿cómo pudo Claudia encontrar a un hombre tan hermoso?”  hermoso?” 

 

Dueño de mi Cuerpo   Las mejillas de Claudia se sonrojaron cuando escuchó eso, quería que se la tragara la tierra. ¡Su reputación estaba arruinada! “¡Miguel, suéltame o me enojaré!”  enojaré!”  “No. Eres mi esposa. No te soltaré. ¡Estamos destinados a estar juntos para toda la vida!”  vida!”  Le dijo con una sonrisa. Esa sonrisa hizo que se le derritiera el corazón.

Sus rectas Cualquiera y delgadas.queSus labioscejas eran eran seductores. lo viera se quedaría fascinado. Las chicas que estaban entre la multitud se habían vuelto locas de admiración. Claudia también estaba obsesionada con ese rostro tan hermoso. Parecía como si fuese cuidadosamente por un dios, haciendo que cada creado centímetro sea perfecto. Todas las chicas se quedaron viéndolo con la boca abierta. Ella no quiso que fuera tan guapo. Nadie le prestaba atención cuando era feo. Y ahora que era atractivo, todo el mundo se fijaba

 

Dueño de mi Cuerpo   en él e iba a estar rodeado de muchas admiradoras. Miguel quería llevarla a la oficina para darle una lección a Sara, pero no esperaba que su rostro llamara tanta atención. Solo le quedaba la opción de llevarla de regreso al dormitorio y esperar a que se mejore. Llegó al dormitorio de las chicas y la cuidadora del dormitorio se acordó de Miguel.

Se le quedó mirando. Era aterrador la última vez que lo vio. ¿Cómo se volvió tan guapo? Ella se olvidó de detenerlo, por lo que Miguel entró como si nada. Era hora de clases y no había nadie más en el dormitorio. Miguel la abriera tenía enla sus brazos, y se detuvo para que puerta. Ella estaba demasiado enojada y no quiso abrirla. “Pero qué chica tan problemática.”  problemática.”  Él no sabía qué hacer, pero le pareció un poco gracioso su forma de ser. Metió la mano en el bolsillo de Claudia y sacó la llave.

 

Dueño de mi Cuerpo   El llavero era de una caricatura amarilla, muy acorde con las preferencias de su prometida. “Oye, este es el dormitorio de las chicas.”  chicas.”  “Yo ya he estado aquí. aquí. Además, solo estoy interesado en llevarte a tu cama. No miraré las cosas de las demás.”  demás.”  “Ni siquiera así te dejaría entrar. ¡Ordenaré la habitación!”  habitación!”  Lo dijo un poco incómoda. “Bueno, esperaré diez minutos aquí afuera.

Ten cuidado. Llámame si necesitas ayuda.”  ayuda.”   Miguel no insistió y respetó su decisión. Claudia se apresuró y rápidamente recogió la ropa tirada. También quiso limpiar el armario, la cama y el escritorio, parecía una buena niña a la que le encantaba la limpieza. Ella noera pudo moverse bien. en la rodilla más grave de lo La quelesión esperaba. Solo tenía la pierna izquierda con la que podía caminar. Ella estaba ordenando tan apresuradamente que no se paró bien y cayó de culo al suelo. Miguel se estremeció cuando escuchó ese sonido y entró sin pensarlo.

 

Dueño de mi Cuerpo    Ayudó a Claudia a levantarse y frunció ligeramente el ceño: “¿En dónde te heriste?”   heriste?” “El trasero... ¡Siento que se me partió el trasero!”   trasero!” “¡Te lo mereces!”  mereces!”   Aunque Miguel le dijo eso, él le comenzó a frotar suavemente su delicado y pequeño trasero. Miró la cama de Claudia. La última vez no la había visto con atención. Ahora se dio

cuenta de que estaba hecha un desastre. Tenía muchas cosas esparcidas sobre la mesa, y la mayoría eran pequeños bocadillos. No sabía cómo calificarla. Solo sabía que su cuidado personal era terrible. Fue él quien la eligió para que fuera su esposa, también quería que mejorara su estilo pero de vida. “Siéntate y no te muevas. Yo me haré cargo.”   cargo.” “Qué vergüenza...”  vergüenza...”  Claudia lo dijo muy apenada. “Por fin entiendo por qué desde pequeño me gustaba la limpieza. Creo que en ese momento supe que me iba a casar con una

 

Dueño de mi Cuerpo   chica muy desordenada. Por eso me he estado entrenando desde pequeño solo para ser tu sirviente.”  sirviente.”  Miguel sonrió. Le sirvió una taza de agua caliente antes de comenzar a ordenar, lo cual fue muy considerado de su parte. Claudia se sintió un poco apenada cuando él le dijo eso. Él limpió la mesa, dejándola impecable, y dejó todo bien arreglado. Se volteó para ordenar el armario. Ella recordó que todas

sus cosas privadas estaban adentro, pero ya era demasiado tarde para detenerlo. Capítulo 83 

Se notaba que esos libros estaban ahí desde hace mucho tiempo. Pero sus pechos no habían para nada. Había probado todos crecido esos métodos, pero no hubo ningún resultado.  A ella aún le quedaba un poco de confianza, pero ahora que Miguel descubrió esos libros, estará avergonzada para toda la vida. “Fui yo quien llamó tu atención, ¿estás feliz?”   feliz?”

 

Dueño de mi Cuerpo   “¿No tienes pena de decir eso? No solo llamaste mi atención, ¡sino de todas las estudiantes de esta escuela!” Claudia murmuró y no pudo evitar enojarse. Miguel no escuchó con claridad, y pensó que no era nada bueno. Él se llevó las manos al pecho y la miró con tranquilidad: “Te has vuelto más atrevida y has empezado a hablar mal de mí.”   mí.” “¿Me culpas?”, dijo ella. “Miguel, quiero

hablar algo contigo. ocultar nuestro de compromiso? No¿Puedes quiero que los demás sepan. A mí... No me gusta ser una figura pública. Quiero vivir una vida normal.”   normal.” “Ya lo sé. No te haré sentir demasiado demasiado avergonzada.”   avergonzada.” Dijo con su unacabeza. voz cálida y se acercó para acariciar Sabía que Claudia estaba bajo una gran presión, si supiera que él era el presidente de su empresa, ¿lloraría, causaría problemas o se ahorcaría? ¡A veces es muy molesto ser guapo y rico! Claudia exhaló un suspiro de alivio cuando lo escuchó decir eso, pero de la nada

 

Dueño de mi Cuerpo   volvió a escuchar su voz maligna: “Esas técnicas que lees están solo escritas en papel. Conozco unos métodos prácticos para realzar los senos. ¿Quieres probarlo? Podemos Po demos estudiarlo en profundidad.”  profundidad.”  “¡Sinvergüenza!”   “¡Sinvergüenza!” Claudia lo mató con la mirada, y se sonrojó. Ese rastro rojo se extendió por las mejillas y los lóbulos de las orejas, como si estuvieran llenos de sangre.

Esas indirectas de Miguel realmente hacían que ella se muriera de vergüenza. Él sonrió, estaba de buen humor y dejó de burlarse de ella. Terminó de limpiar su armario y comenzó a arreglar su cama. En ese momento, un sonido fuerte vino de la puerta. rápido! ¡Ese hombre guapo está “¡Vengan aquí!”   aquí!” “¡Dios mío, mío, Claudia sí que es valiente! ¡Se atrevió a traer a un hombre al dormitorio! ¡Vamos a ver si es verdad que es tan guapo como dicen!”  dicen!” 

 

Dueño de mi Cuerpo   La puerta del dormitorio se abrió y dos chicas entraron corriendo. Eran sus compañeras de cuarto, Lina y Juliana. “¡Wau! ¡Qué hombre tan guapo!”  guapo!”  “Dios mío, ¡qué guapo!”  guapo!”  Cuando entraron por la puerta y vieron la aparición de Miguel, se sorprendieron y exclamaron con gritos alborozados. “Hola, soy Miguel Santos. Ustedes deben ser las compañeras de cuarto de Claudia. Gracias por cuidar de ella.”  ella.” 

“¿Qué le pasó a Claudia? Deberías decirnos que le pasó.”  pasó.”  “Eso es cierto. Miguel... ¿Por qué ese nombre me suena tan familiar?” f amiliar?”   “No piensen mal. Él es solo mi tío. Por respeto lo llamaré tío Miguel.”  Miguel.”  ¿Tío Miguel? Miguel arqueó lasese cejas. Él ya había comenzado a odiar nombre. Claudia inventó una mentira, dijo que, debido a la relación con Carmen, conocía a Miguel. De un día para el otro, se conocieron. Y ahora este tío se preocupaba por ella. Después de escuchar todo, Lina llevó a un lado a Claudia.

 

Dueño de mi Cuerpo   “Claudia, ¿el tío Miguel tiene novia?”  novia?”  “¿Puedes hacer que tengamos una cita?”  cita?”  “¿No es que ustedes ya tienen novios?”  novios?”  “Oye, ¿puedo romper con él ahora mismo?”   mismo?” Claudia no sabía cómo reaccionar cuando escuchó eso. Ser guapo también ocasionaba problemas. Si dejaba así a las chicas que ya tenían novios, ¿cómo se pondrían las que eran solteras?

Miguel recibió una llamada de Javier. La empresa tenía asuntos por resolver. Le pidió a Claudia que esperara en el dormitorio. Regresaría por la tarde. Tenía que arreglar unos asuntos primero. Poco después de que se fuera, alguien le trajo el almuerzo, ¡era lo que más le gustaba! Ella se estaba preparando para comer y de la nada, una gran cantidad de personas entraron a su habitación. ¡Casi toda la escuela estaba ahí! Le preguntaron a Claudia quién era ese hombre tan guapo. Claudia tuvo que contarles todo con detalles.

 

  Dueño de mi Cuerpo  Ahora ha salido a la luz la verdad, de que ella no ha seducido a ningún hombre. Miguel se ocupó de ese asunto. Todas las publicaciones en la página de la escuela fueron eliminadas, y también hizo pública una explicación. Ella se libró de esos falsos rumores, pero le causó más problemas a Miguel... “¿Tu tío Miguel tiene novia? Pienso que no. ¡Según los rumores, está soltero y no se les acerca a las mu jeres!”  jeres!”  

“Sí. Yo también me acuerdo de eso. Según los rumores, ¡es feo y también homosexual!”   homosexual!” “No me importa. Estoy dispuesta a estar con un homosexual. ¡Y haré que se enamore de mí!”  mí!”  “Claudia, ¿tienes su número de teléfono?”  teléfono?”   “¿Cómo no?estaban Son casiansiosas como familia, ¿no?”  ¿no?”  Todas ellas y esperando a que Claudia diera su número de teléfono. Ella se quedó pensando y quiso negarse. Todas ellas notaron que no quiso darlo y una de ellas dijo: “Claudia, ¿tienes miedo de decírnoslo?”  decírnoslo?”  “¿Acaso te gusta él? Ya que Ya que no son familia de sangre, ¿quieres algo más con él?”  él?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Pero una relación así sería muy complicada. Tu hermana se va a casar con Brad. Si te gusta Miguel, ¿qué clase de relación tendrían todos ustedes?”  ustedes?”  “Claro que no. No me gusta Miguel. Nosotros tenemos una relación muy ordinaria. Lo que pasa es que, si doy su número sin su permiso, él se pondrá…”  pondrá…”  “No es que vayas a dar su número sin nada a cambio. ¿Qué tal si te doy cien dólares por su número?”  número?” 

En ese amomento apareció Beatriz y comenzó apartar la multitud. “Cien es muy poco. ¡Yo doy quinientos!”  quinientos!”  Claudia quería negarse desde un principio, pero sabía que, si no se los daba, sería la más odiada de la escuela. ¡También tenía la opción de ganar un dinero extra!su teléfono móvil y comenzó a Ella agarró compartir con todo el número de Miguel. En tan poco tiempo, ganó 10,000 dólares, y de repente sintió que... Miguel era como una máquina para hacer dinero. ¡También quería saber sus cuentas de WhatsApp, Instagram, y Facebook para venderlas!

 

  Dueño de mi Cuerpo Todas ellas recibieron el número de teléfono y se fueron felices. El teléfono privado de Miguel recibió 180 llamadas en solo media hora.  Al final, se lo entregó a Javier. Él tenía un gran dolor de cabeza. Él trataba a Claudia como si fuese su esposa, pero ella lo trataba como si fuera su tío. En la tarde, terminó su trabajo y se fue a la escuela.

Esta vez, quiso a Claudia a la oficina del director de lallevar escuela. En el camino, Miguel mostraba una cara de seriedad. Claudia estaba muy cautelosa en lo que hacía. Él no estaría contento si supiera que fue ella quien dio a todo el mundo su número Pero elladenoteléfono. escuchó que su teléfono móvil sonara. Parece que puso sufrir a Javier.  Ahora él tenía que aguantar todas esas llamadas. “¿Estás enfadado?”  enfadado?”  Ella susurró y tragó saliva.

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel no miró hacia atrás, tomó su pequeña mano y siguió caminando hacia adelante. Ella ya podía caminar bien, pero…  pero…  “Camina despacio. ¡Me duele la pierna!”  pierna!”  “¿Dónde te duele? Déjame ver.”  ver.”  Miguel estaba nervioso. “No me haces caso y parece que estás furioso. Por eso hiciste que me doliera la rodilla...”  rodilla...”  Capítulo 84

“Claudia, ¿te parece divertido hablar así de algo tan serio?” “Beatriz dijo que, si un hombre realmente se preocupa por una mujer, no iba a querer verla lastimada.  Ahora me duele por todos lados, hasta las uñas y el cabello, por el simple hecho de que estás enojado conmigo. De Puedes decirme si tienes algún problema. todas formas, no podré cambiar mi forma de ser. Ya hemos llegado hasta aquí y yo no tengo el poder de hacer nada. ¿Puedes no enojarte conmigo?”  conmigo?”  Miguel no sabía cómo reaccionar ante esas palabras. Parecía que se le había aflojado un tonillo en el cabeza.

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Quieres que no tenga emociones?”  emociones?”  “Claro que si puedes. ¡Yo te lo hubiera explicado!” Ella tiró de su su manga y dijo con un poco de tristeza: “Había tanta gente presionándome. Si no se los daba, ellas me hubieran golpeado. No ibas a querer que tu futura prometida fuera golpeada hasta morir, ¿verdad? Si yo fuera a morir, adonde ibas a encontrar…”  encontrar…”  Claudia se sintió rara después de decir eso.

En el pasado, Miguel era feo y ella no tenía ninguna presión. Creía que no le resultaría fácil encontrar a una esposa. Pero ahora…  ahora…  “Si yo fuera a morir... Aún podrías encontrar a otra, ¿no es así?”  así?”  Ella estaba un poconada triste.de lo que decía. Miguel no entendía ¿De verdad que le faltaba un tonillo en la cabeza? Era obvio que él estaba enojado. ¿Cómo es que se cambiaron los papeles y ahora tenía que consolar a esta niña herida? Claudia…   Claudia… ¡Sabía muy bien cómo torturarlo!

 

  Dueño de mi Cuerpo “No podría encontrar a otra. En este mundo solo hay una Claudia. Si no estuvieras, ¡nunca volvería a encontrar una esposa tan buena como tú!”  tú!”  Le dijo eso para que dejara de decir tonterías. “Quieres que los públicos no nos vean  juntos y tampoco quieres que te abrace enfrente de ellos. Pero yo quiero tomar de tu mano y caminar enfrente tuyo.”  tuyo.”  “¡Pero no deberías caminar tan rápido!”  rápido!” 

Le dijo con mucha prisa. “Bueno, no caminaré rápido para que puedas alcanzarme.”  alcanzarme.”  Le dijo con una voz cálida. Siempre había tenido demasiada paciencia con esta niña. Él había esperado 28 años solo para encontrar a una persona como ella. Llegaron la oficina. padre de en Sara, quien no a estuvo muyEl contento la mañana, fue invitado nuevamente, y esta vez fue el director quien lo llamó personalmente. El padre de Sara todavía estaba enojado por lo que Lucas le había hecho pasar. Esta vez tendría que enfrentarse con la familia Rosas.

 

  Dueño de mi Cuerpo ¡Él no tenía miedo de enfrentarse con Juan Rosas! Cuando el padre de Sara entró a la oficina, quiso comenzar a hacer un escándalo, pero una sensación fuerte hizo que se detuviera. ¡Presión! ¡Sintió mucha presión! El padre de Sara miró y vio a un hombre sentado en el sofá. Tenía ropa y zapatos de estilo occidental y

una apariencia tan sobresaliente que dejaba a las personas con la boca abierta. Él estaba allí sentado y no hizo nada. Su mirada hizo que su cuerpo temblara y sintiera un frío en su espalda.  A primera vista, sabía que ese hombre no era una persona cualquiera. “Dios... ¡Quévisto guapo!” guapo!”  Sara había a  Lucas antes y pensó que era lo más guapo que había en este mundo, ¡pero no esperaba que hubiera alguien más guapo que él! El padre de Sara dijo muy serio: “No sé por qué el director me llamó para que viniera.”  viniera.”  “Sobre la pelea entre Sara y Claudia, ahora ha venido… ¿El padre de Claudia?”  Claudia?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Era el padre, ¿verdad? El director miró a Miguel y pensó en que decir después. Miguel se veía como si fuera el padre de alguien. Pero el director no pudo entender por qué Miguel vino a ayudar a Claudia. ¿Era solo porque Carmen se iba a casar con alguien de su familia? “¿Eres su padre? Yo conozco a Juan. ¿Quién eres tú?” El padre de Sara frunció

el ceño. “Soy Miguel Santos.”  Santos.”  “¿Qué...? ¿Eres Miguel Santos? ¿Cómo es posible? Según los rumores, Miguel es... es...”   es...” El padre de Sara tartamudeó y miró al apuesto hombre frente a él. ¿Dónde estaba hablaban?ese feo hombre que tanto Este hombre era joven y atractivo. “No necesito mencionar sobre la relación que hay entre la familia Santos y la familia Rosas. Claudia y yo tenemos una buena amistad, y salíamos a comer juntos un par de veces. Pero fuimos fotografiados y alguien esparció un mal rumor sobre

 

  Dueño de mi Cuerpo nosotros. Yo soy el que sale en las fotos, por eso vine para aclarar esa situación.”  situación.”  Cuando Padre de Sara escuchó eso, quiso que se lo tragara la tierra. Tenía mala suerte. Había ofendido a Lucas y ahora ofendió también a Miguel. ¡Su hija le daba mala suerte! “¡Señor Miguel, debe haber algún malentendido!” El padre de Sara parecía que quería llorar. Había actuado sin pensar, y ahora quería inclinarse y

disculparse. “¿Malentendido? Solo vi la herida en esta pequeña chica.”  chica.”  Miguel puso a Claudia enfrente de él. Señalo su rodilla. No era difícil de notar que alguien la había lastimado. “¿Te duele?” Preguntó él.  él.  “¡Duele! ¡Duele mucho!” mucho!”    Claudia lo dijo de inmediato. Sara era muy arrogante y no quiso perder esta batalla. ¡Quiso burlarse de Claudia! “¿Por qué hablas con un tono masculino?”  masculino?”  Miguel frunció el ceño y dijo en voz alta. “No te conviertas en un hombre. Me gusta así como eres.”  eres.” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Las mejillas de Claudia estaban rojas. Miró a su alrededor y notó que habían muchas estudiantes mirándola. Era demasiado obvio que estaban hablando de ella. Ella se río un par de veces. Miguel estaba serio, como si nada hubiera pasado en ese momento. “Estimado, ¿cómo ¿cómo usted cree que debería resolverse este asunto? El rumor de su hija ha dañado la reputación y la autoestima de

Claudia. Si manejamos esto por los procedimientos legales...”  legales...”  Procedimientos legales…  legales…  El padre de Sara inmediatamente tembló y se puso pálido cuando escuchó eso. Era obvio que estaba muy asustado. Le gritó enojado a Sara: “¿No le vas a pedir disculpassea la Claudia?”   Sara también dioseñorita cuenta Claudia?”  de la seriedad del asunto. Se mordió el labio inferior y miró a Claudia de mala gana. Ella podía intimidar a Claudia, pero no se esperaba que Miguel apareciera para defenderla. Ella no quería hacerlo, pero no tuvo más remedio que inclinarse y disculparse.

 

  Dueño de mi Cuerpo “Compañera Claudia... ¡Lo siento!”  siento!”  Lo dijo apretando los dientes. Claudia la vio disculparse y admitir su error, y no quería que el problema se hiciera más grande. Ya era suficiente, y ella lo sabía. Ella le hizo una señal a Miguel para que lo dejara así. Miguel sabía que ella era muy bondadosa, por eso no siguió actuado rudo. El padre de Sara prometió compensar los

gastos médicos. Claudia estaba muy confundida cuando vio que sacó su tarjeta de banco. ¿Gastos médicos? Solo eran unos cuantos dólares, incluso si lo multiplicaba por diez, no iba a ser más de mil. ¿Unos billetes no iban a ser suficiente? “La contraseña es seis veces ocho. Por favor acéptela.”  acéptela.”  Ellos se fueron después de que aceptara la tarjeta. Miguel se levantó y le dijo al director: “Lo que le pase a Claudia en el futuro será asunto mío. No tengo otra opción. Mi padre se preocupa mucho por esta chica. Mi padre la quiere como si

 

  Dueño de mi Cuerpo fuera su propia hija, pero ella nunca está en la casa.”  casa.”  “Por eso, si algo le pasa en la escuela, debe informarme de inmediato. Este es mi número de teléfono.”  teléfono.”  “Sí, lo entendemos.”  entendemos.”  Miguel se fue con Claudia. El director estaba muy asustado y se secó el sudor de la frente. Miguel ha dejado en claro que, si alguien se atreve a aprovecharse de Claudia,

tendrá que enfrentarse con él primero. Quizás también con el cabecilla. El temperamento del cabecilla... ¡A cualquiera se le subiría la presión arterial con solo pensarlo! Capítulo 85 

Cuando Claudia salió de la oficina, lo primero que hizo fue verificar cuando dinero había en la tarjeta bancaria. ¡Más de medio millón! ¿Una pequeña herida por más de medio millón? ¿Acaso estaba loco? “¡Se lo devolveré!”  devolveré!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Guárdalo primero. Él quiere que esta situación se calme. Si se lo devuelves, pensará que no aceptas sus disculpas.”  disculpas.”  “Pero... ¡Demasiado... es demasiado! ¡Es casi como si fuera tu ingreso anual!”  anual!”  Ingreso anual… anual…   Miguel se puso serio cuando escuchó esas palabras. “No hay problema. Te volviste rica.”  rica.”  “Ya que no podemos devolverlo, ¿lo guardamos? En el futuro, si necesitamos

dinero para combustible, arroz, aceite o sal. ¡Tendremos este dinero ahorrado para seguir segu ir viviendo felices!”  felices!”  “Está bien. Vivamos felices.”  felices.”  Miguel le dijo con una sonrisa, mientras le tocaba la cabeza. Claudia tenía clases por la tarde, y le insistió se fuera para no llamar la atenciónenenque la escuela. Miguel tenía asuntos por atender y no se quedó para acompañarla. Él quiso mostrarle su poder a la familia Rosas. De lo contrario, iban a pensar que Claudia era fácil de manipular y podrían aprovecharse de ella.

 

  Dueño de mi Cuerpo Si él no se atrevía a aprovecharse de ella. ¿De dónde sacaron ellos las agallas de hacerlo? La familia Rosas planeaba invertir en un balneario costero, pero lo que no se esperaban era que alguien de su empresa lo había adquirido primero. Juan Rosas pensó que su empresa tenía más dinero y era poderoso, simplemente no dijo nada. No esperaba que también le quitara los

terrenos al este de la ciudad. Cuando iban a colaborar con alguien y los contratos ya estaban listos, no se esperaban que al segundo día los demandaran por daños y perjuicios. ¡La familia Rosas se topaba con muchos obstáculos y siempre le ganaba la empresa de Miguel! Juan estaba desconcertado. En solo un día, la familia Rosas había sido rechazada varias veces. Juan no supo cómo ofendió a su empresa. Por eso llevo unos obsequios y se preparó para preguntarles que les hizo y disculparse.

 

  Dueño de mi Cuerpo La secretaria lo llevo al cuarto de espera. Estaba temblando de miedo y esperó a que vinieran a verlo. Escuchó unos pasos. Alguien empujó la puerta y entró. Lo que vio fue…  fue…  En la noche, Claudia fue al bar a trabajar. Beatriz estaba bebiendo alcohol como si fuera agua. No estuvo de buen humor en todo el día. Cuando terminó de trabajar, Beatriz ya estaba borracha.

Sabía que ella no podía conducir y quiso pedirle ayuda a Miguel. Pero inesperadamente, sonó el teléfono móvil de Beatriz. Claudia no sabía quién era porque no tenía el número guardado. “Beatriz, este fin de semana tenemos que ir a la casa tío…”Lucas, tío…”    “Usted es eldel doctor ¿no es así?”  así?”   Claudia reconoció su voz. “¿Es usted... la señorita Claudia?”  Claudia?”  Claudia le pidió que viniera a ayudarla, y Lucas se preparó para ir a buscarlas. Él tomó a Beatriz, que estaba borracha, y le dijo a Claudia en tono de disculpa: “Por

 

  Dueño de mi Cuerpo favor, señorita Claudia, déjeme llevarla de regreso.”   regreso.” En ese momento, Beatriz vomitó. Claudia hizo un gesto con la mano: “Envíe a Beatriz de regreso primero. Tomaré un taxi para regresar a casa. No hay problema.”   problema.” “Está bien.”  bien.”  Lucas no se negó. Tenía que encargarse de Beatriz y no tenía tiempo para preocuparse por los demás.

Beatriz sostuvo el bote de basura y vomitó todo lo que tenía para sentirse mucho más cómoda. Claudia la ayudó a subirse al auto. Beatriz sintió que su cuerpo se calentaba y estaba un poco mareada dentro del auto. Parecía que el auto estaba mal ventilado y sentía quesise “Claudia, nosofocaba. abres la ventana, me voy me  voy a morir de calor. Estoy sudando por todos lados. ¡Te lo demostraré si no me crees!”  crees!”   Ella gimió y empezó a quitarse la ropa. La ropa que llevaba era delgada. Ella solo tenía puesto una blusa y un pantalón corto. Ella comenzó a desabrocharse.

 

  Dueño de mi Cuerpo Lucas frunció el ceño y la detuvo de inmediato con su mano. “¡No hagas ninguna locura!”  locura!”  “Tus manos se sienten tan frías y cómodas... Pero están un poco duras.”  duras.”  Ella estaba delirando y pensó que era Claudia la que estaba a su lado. Lucas pisó el freno y ambos fueron empujados hacia adelante. Ese golpe le hizo doler más la cabeza a Beatriz.

“Duele... Duele mucho...”  mucho...”  Lucas respiró hondo y quiso recobrar la cordura. Él había estado en el ejército durante tantos años y su corazón se había vuelto de piedra. Pero en ese momento, estaba muy preocupado nomano, sabía pero qué hacer. Quería retirary la ella lo agarró y él no se atrevió a moverse por miedo a lastimarla. Le sudaban las palmas y le temblaban los dedos. Beatriz abrió sus ojos y lo miró perpleja.

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Por qué estás nerviosa? nerviosa? Vamos a darnos un baño y cambiarnos de ropa juntos. ¿Acaso eres tímida?”  tímida?”  “Beatriz, despierta. Soy tu hermano Lucas.”  Lucas.”  “No menciones a ese bastardo. ¡No quiero escuchar su nombre nunca más! ¿Qué hermano? Él nunca me cuidó. ¡Por qué debería decir que es mi hermano!”  hermano!”  “Beatriz, deja de decir tonterías.”  tonterías.”  “Claudia, estás como rara. No te muevas. Estoy muy caliente. Déjame abrazarte.”  abrazarte.” 

Murmuró Beatriz. Sintió que sus brazos estaban fríos, pero también cómodos. Ella no pudo evitar querer acercarse más. Como un pequeño gato, se había lanzado a sus brazos. Él era como una gran bolsa de hielo y ella quiso calentarlo. Quería toda sua ropa.  Al final, quitarle ella comenzó hacerlo. Lucas estaba muy nervioso y sintió que se le atoraba la garganta. Él detuvo su pequeña mano inquieta. Si seguía así, temía que lo dejara desnudo. “¡Beatriz, mira bien quién soy!”  soy!”  “Claudia... No te muevas. Déjate llevar. ¡No te morderé!”  morderé!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Dijo ella con insistencia. “Tú…”   “Tú…” “¿Qué?” Beatriz de repente notó algo y comenzó cuestionar lo que estaba haciendo. Lucas se enojó cuando escuchó eso. Temía que, si seguía así, estaría condenado. La separó con mucha fuerza y ató sus manos con el cinturón de seguridad. Ni siquiera el personal militar sabría cómo

desatarse. Él abrió la ventana para que entrara aire. Lucas se bajó y cerró la puerta de golpe. Necesitaba calmarse. Después de un tiempo, ella se despertó de la borrachera. Ella vio claramente todo a su alrededor y se dio cuenta de lo que acababa de suceder. Confundió a Lucas con Claudia y parece que le había coqueteado. Pero pensó que ella no lo había tocado, sino que él…  él…  Él no estaba atado. ¿Por qué estaba enojado? Ella vio afuera una figura alta y recta.

 

  Dueño de mi Cuerpo Él no tenía malos hábitos. No fumaba, no bebía, no se dormía ni se levantaba tarde. Él se portaba de acuerdo con los estándares de un soldado. Él era una persona abstinente. ¿Acaso rompió su abstinencia al ser provocado por su propia hermana? ¿Qué clase de razón era esa? Ella no podía entenderlo. Ella se aclaró la garganta y dijo: “Vamos. No voy a seguir jugando. Estoy sobria.

Llévame de regreso primero. Estoy un poco cansada.”  cansada.”  Cuando Lucas escuchó eso, suspiró y volvió a subirse al auto. Se acercó para desatarle el cinturón de seguridad. Cuando se le acercó, inhaló la fragancia de su cuerpoelvirgen. Frunció ceño. Parece que le atraía mucho ese olor. Él se contuvo, le desató el cinturón de seguridad y dijo: “Abróchate. Ya voy a conducir.”   conducir.” “Vamos.”   “Vamos.” Encendió el auto y no dijeron más nada.

 

  Dueño de mi Cuerpo Después de mucho tiempo, ella rompió el silencio y dijo: “Hace poco... Tú...”  Tú...”  Ella tartamudeó. No entendía bien lo que pasó, pero ella supo que no fue una ilusión. Dentro del auto, el ambiente era muy incómodo. Capítulo 86 

“¿Quieres que analice, desde un punto de vista médico, si estoy bien de la cabeza?” cabeza?”   “¿Tienes que ser tan aburrido?” Beatriz frunció el ceño y lo dijo sin ganas. “Si vas a volver a beber, no bebas tanto. Soy tu hermano, así que no te pasó nada. Pero si fuera otra persona, hubieras estado en peligro.”  peligro.”  “¡Cállate! ¡No necesito que me eduques!” Beatriz estaba enojada. Lucas cerró la boca y no dijo nada después de eso. Siempre se ha mostrado complaciente con su hermana. Por la noche, el ambiente en el auto era tenebroso.

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia había regresado a casa en autobús. Miguel todavía estaba ocupado trabajando. ¡Para ganar 50,000 al mes había que esforzarme más que los demás! Esperó que Miguel terminara su trabajo para llevarle a su estudio una taza con leche caliente. Miguel acababa de terminar con las cosas que tenía que hacer. Estaba agotado física y mentalmente, pero al verla sintió que

recuperó todas sus fuerzas. “Ven aquí.”  aquí.”  La saludó con la mano. Claudia miró a ese apuesto galán y todavía no se acostumbraba. Ella respiró hondo un par de veces y se dijo a sí misma: “Este hombre tan guapo es es mi No es un sueño.” Así supo queprometido. no estaba soñando. Ella se acercó y quería tocarle la mitad del rostro donde anteriormente traía una máscara. “¿No puedes aceptar esta apariencia?”  apariencia?”  Miguel sonrió y la agarró para que cayera en sus brazos.

 

  Dueño de mi Cuerpo Su amada estaba en sus brazos. Él estaba muy fogoso y no quería dejarla ir. Él podía oler la fragancia de su cuerpo, se sentía muy refrescante. “De repente te volviste guapo. Todavía no me acostumbro.”  acostumbro.”  Ella no estaba muy feliz. “Es bueno ser un hombre guapo, pero pero también atrae muchos problemas.”  problemas.”  “¡Yo no soy así!”  así!”  “¡Los hombres son impresionantes! ¡Es

normal que una mujer se vea bien, pero no para un hombre! ¡Vas a atraer a muchas mujeres si eres hermoso! ¡Yo no tengo el poder para que no te vayas con ellas!”  ellas!”  Ella lo dijo muy angustiada. Miguel no sabía cómo reaccionar ante eso. Otras mujeres desearían que sus novios fueran guapos pero ellasegura. quería que fuera feo y que ylaaltos, hiciera sentir “¿Estás celosa?”  celosa?”  “Claro que no.”  no.”  Ella le dijo en voz baja. “Amorcito, “Amo rcito, ¿qué harías si no solo me haya vuelto guapo, sino que también fuera rico?”  rico?”  “¿Un hombre guapo y rico?”  rico?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Sí. ¿Qué harías?” Miguel preguntó con gran interés. “¡Depende de que tan rico seas!”  seas!”  “Lo sabrás mañana.”  mañana.”   Al mediodía del día siguiente, Claudia estaba comiendo con Beatriz. La noche anterior, Beatriz tenía un gran dolor de cabeza. Lucas le ayudó a pedir el día libre en el trabajo. Durmió en el dormitorio toda la mañana y ahora es que se levantó para comer.

La noticia en la televisión de la pared del comedor era sobre J.C, la empresa de Miguel. “La identidad del encargado de la empresa J.C, una empresa de finanzas internacionales, siempre ha sido un misterio. Pero hoy, la junta directiva organizó conferencia de prensa. El misteriosouna encargado aparecerá enfrente de todos ustedes por primera vez.”  vez.”  “Nuestro reportero está ahora mismo en el salón de conferencias. Todavía faltan tres minutos antes de que empiece. ¡Esperemos y veamos que pasa!”  pasa!”  Tres minutos después, comenzó oficialmente la conferencia de prensa.

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia vio a Javier y a Miguel en la televisión. Javier despejó el camino y varios directores de edad mayor estaban protegiendo a Miguel. Al final, Miguel se sentó firmemente en el medio. La placa con el nombre fue revelada y las palabras “Director General: Miguel Santos” estaban claramente escritas en ella. Claudia estaba con la boca abierta y Beatriz jalaba de su brazo. “¡Dios mío! ¡Tu prometido es impresionante!”   impresionante!” Claudia estaba en estado de shock y no sabía qué hacer. Un reportero comenzó a preguntar sobre el plan de desarrollo de la empresa J.C, y estaba muy preocupado por si habría algún

conflicto Santos. entre la empresa J.C y la empresa Miguel solo sonrió, lo que fascinó a todos los presentes.  Al final, un reportero estaba más interesado en la vida sentimental de Miguel. Los reporteros seguían preguntando: “Señor Miguel, anteriormente todos los

 

  Dueño de mi Cuerpo rumores hablaban mal de usted. No esperábamos que usted estuviera enfrente de nosotros y comprobar que todo era falso. Estamos seguros de que muchas chicas estarían interesadas en casarse con usted. ¿Puede decirme cuáles son sus preferencias en una mujer?”  mujer?”  “Ya he elegido a alguien. No es necesario que se preocupen por eso.”  eso.”  “¿Puedes decirnos quién es esa persona? ¡Todos queremos saber quién es esa chica y cómo pudo capturar el corazón del director general!”  general!”  “Lo siento, no es conveniente que lo diga ahora mismo. Lo haremos público en el futuro cuando tengamos la oportunidad adecuada.”   adecuada.” La conferencia de prensa duró mucho

tiempo, pero solo hablar un con Miguel. Solopudieron había estado ahípoco por menos de diez minutos. El resto de las preguntas fue respondido por Javier y los otros directores. Después de que Miguel se fuera, Beatriz golpeó la cabeza de Claudia.

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Es ese el hombre pobre con un ingreso mensual de 50,000 que habías mencionado?”   mencionado?” “Cincuenta mil es más que suficiente. ¿Cuál es la diferencia?” “¿Te burlas de mí? Cincuenta mil, cinco millones y cincuenta millones, o incluso quinientos millones, ¡tienen mucha diferencia! Pensé que Miguel no era el favorito de la familia. ¿Cómo pudo obtener una empresa tan grande? Maldición, él es mi jefe. ¿Por qué no cuida de mí? Pedí un día libre y me deducirán el salario. ¡No es justo!”  justo!”  “Beatriz, ¿estoy soñando? Golpéame rápido. ¡Creo que mi cerebro no puede procesar proc esar bien todo lo que está pasando!”  pasando!”  Beatriz escuchó eso y le dio unas palmaditas con enojo en la cabeza.

Claudia estaba un poco enojada por esos golpecitos. “¿Ahora estás despierta?”  despierta?”  “Beatriz, ¿ese de la televisión era mi prometido?”   prometido?” “Claro que sí.”  sí.”  Claudia volvió en sí. Con que eso era lo que quiso decir anoche.

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel no era nada pobre, ¡sino que ocultaba que era rico y guapo! Ella comenzó a imaginar su vida con todo ese dinero. Tenía puesto un vestido de seda fina, anillos de oro y jade, un collar de perlas alrededor de su cuello, y se juntaba en grupo con otras mujeres millonarias. Quizás también estaba con una copa de vino tinto y un cigarrillo para damas. Estaba maravillada al pensar en eso. Claudia estuvo en las nubes toda esa tarde. Parecía que estaba soñando despierta. Y en la clase, no escuchaba lo que decía la profesora. ¿Cómo se había vuelto de repente tan maravilloso? Antes era un hombre sencillo,

ypensaba la diferencia delmuy hombre que era es grande.que Eso ella era mucha presión para ella. Solía pensar que era digna de estar con Miguel. Antes pensaba que mientras él fuera bueno con ella, nunca se alejaría de su lado.

 

  Dueño de mi Cuerpo Pero ahora... Ella dudaba de sí misma. Sentía que se le iba a explotar la cabeza de tanto pensar. Un hombre se vuelve malo cuando tiene dinero. No había que mencionar que por ser guapo… ¡Iba a ser aún peor!  peor!  Fue a trabajar en el bar por la noche como de costumbre, pero estaba distraída y rompió varias copas de vino. Su supervisora no quiso que siguiera trabajando. Dejó que se fuera temprano para descansar y evitar que ella misma se cortara los dedos. Regresó muy confundida, se quedó en la puerta de la casa y no se atrevió a entrar.  A medida que pasaba el tiempo, la noche se volvía fría y ella vestía ropa muy delgada.

Miguel muy tarde, a Claudia cuclillasregresó y temblando en lavioesquina de en la pared. Se apresuró a salir del auto y corrió hacia ella, se quitó el abrigo y la cubrió. “¿Qué haces aquí afuera? ¿Por qué no entras?”   entras?” “Tengo miedo” Dijo Claudia en voz baja. No podía soportarlo. Cayó en sus brazos y perdió la conciencia.

 

 

Dueño de mi Cuerpo

Capítulo 87

Esta vez ella no estaba muy grave. Solo tenía fiebre baja y necesitaba descansar. Cuando se despertó al día siguiente, chocó contra una pared de carne.  Antes de que pudiera abrir los ojos, alguien le dio un cálido abrazo. Ese era el olor de Miguel. Ese aroma era muy agradable, no como un perfume, sino a hierbabuena. Ella temblaba como un conejo asustado. Trataba de levantarse, pero estaba firmemente envuelta en sus brazos. “No te muevas. El médico dijo que acaba de bajarte la fiebre y necesitas un buen descanso. Estuviste haciendo un alboroto anoche no dormí nada.”    nada.”  “¿Qué? y¿Hice un alboroto?”  alboroto?” “Estuviste hablado cuando dormías y no dejabas que nadie te tocara. Dormí un poco después de la medianoche, así que ahora estoy muy cansado.”  cansado.”  Claudia se sintió terrible al escuchar que estaba cansado por su culpa.

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella levantó la miraba y notó que tenía grandes ojeras.  Al ver sus ojos supo que en verdad estaba muy cansado. Ella se quedó callada y no hizo ningún ruido. Pudo escuchar claramente su respiración. Él no había dormido bien y ella no soportaba verlo así. Ella levantó su pequeña mano y le acaricio el rostro.  Antes pensaba que había visto el verdadero rostro de Miguel, pero ahora estaba confundida. Miguel Santos, director general de la empresa J.C, es alto y poderoso, y su apariencia es hermosa. Era imposible encontrar a otro hombre igual que él.

Ella era incapaz encontrar un hombre así, pero esta vezdetuvo mucha asuerte. ¿Acaso Dios tenía compasión por ella o le estaba jugando una broma? Ella estaba confundida en ese momento. Ella no quería casarse con alguien de una familia rica, o pensarían que estaba con él por su dinero. Solo quería vivir una vida sencilla.

 

  Dueño de mi Cuerpo Pero... Nada salía como ella quería. Ella no sabe qué tipo de persona es Miguel ahora. ¿Por qué estaba disimulando ser otra persona? Le comenzó a doler la cabeza cuando pensaba en esas cosas, por eso dejó de hacerlo. Una hora más tarde, Miguel se despertó. “Debes tener tener hambre. Te traeré el desayuno.”   desayuno.”  Al ver que se levantó para irse, ella no pudo evitar decirle: “Miguel, ¿no crees que deberíamos hablar?”  hablar?”  “¿De qué quieres hablar?”  hablar?”  “No esperaba que... Fueras el líder de una empresa tan grande, y además verte tan guapo. ¿No crees que hay mucha

diferencia entretenosotros dos?” dos?”    joven y “Tú también ves bien. Eres hermosa. También aprendes muy rápido. Creo que somos una buena pareja.”  pareja.”   “¿Ah?” ¿Por qué sonaba raro?  raro?  “¿Crees que no te ves bien?”  bien?”  “¡Claro que si me veo bien!”  bien!”  “¿Piensas que has aprendido algo de mí?”  mí?”  

 

  Dueño de mi Cuerpo “Claro que sí. También soy educada, respeto a los mayores y me gusta ayudar a las personas. Cada año me eligen como una de las mejores estudiantes.”  estudiantes.”  “Basándose en eso, pienso que, si sigues así, serás una excelente prometida.” prometida.” Él sonrió y le tocó la cabeza, “Espérame aquí. Te traeré el desayuno.”  desayuno.”  Miguel dio media vuelta y se fue. Claudia estaba atrapada en sus pensamientos.  Al principio, lo que ella quiso decir fue que no era digna de estar con él. ¿Pero ahora era Miguel quien no era digno de estar con ella? ¿En qué se equivocó?  Algo no estaba bien. ¡Hablaremos cuando regrese! Miguel regresó de inmediato y trajo un

cereal avena Primerode la llevócaliente. al baño para que se cepillara los dientes y se lavara la cara. “¡Espera! “¡E spera! ¡No habíamos terminado de hablar!”   hablar!” “¿Cuál es el problema?” Puso sus brazos alrededor de ella y la miró en el espejo. Él ya sabía cómo ella pensaba.

 

  Dueño de mi Cuerpo Tenía que decirle lo que quería escuchar para que dejara el tema. “¡Soy muy inferior! ¡Aunque sea la hija de la familia Rosas, no tengo ningún estatus en esa familia!”  familia!”  “Qué casualidad. Yo también me siento inferior en mi familia. Aunque sea el hijo de la familia Santos, no tengo ningún estatus en mi familia.”  familia.”  “....” Claudia lo miró fijamente. Él tenía razón y ella se quedó sin habla. “¡Espera! ¡Yo no sea fea, pero tampoco soy una miss universo!”  universo!”  “Yo igual. Aunque no soy feo, no soy considerado como el hombre más guapo del mundo.”  mundo.”  “Yo... No soy muy alta. ¡No sobresalgo por delante ni por detrás!”  detrás!” 

“No soy dealto altobásquetbol. si me comparas un  jugador Tampococon tengo mucho por delante ni por detrás.”  detrás.”  “Yo... Yo todavía...”  todavía...”  Claudia se devanaba los sesos al pensar en la gran diferencia que había entre ellos, pero Miguel sabía cómo responderle y ella no supo qué más decir.

 

  Dueño de mi Cuerpo En ese momento, Miguel golpeó su cabeza: “¡Tu capacidad mental no es grande, no la sobrecargues!”  sobrecargues!”  “¡Sí! Soy muy estúpida, tardó en responder y no sé cómo explicar las cosas.”  cosas.”  “No hay problema. He estado aprendiendo durante 28 años solamente para poder entenderte algún día.”  día.”  “Reducirás el coeficiente intelectual de tus hijos. ¡Deberías tener cuidado!” Claudia lo dijo muy apurada. Miguel se quedó en silencio y la vio muy feliz. ¡Finalmente había algo que él no podía responder! ¡El coeficiente intelectual de la próxima generación es muy importante! “Eso sería un gran problema.”  problema.”  Él lo dijo muy serio. “Sí, claro. Es muy importante.” Claudia lo

dijo con mucha “Entonces no alegría. tengamos hijos. Si es necesario, adoptaremos uno en el orfanato, ¿de acuerdo?” acuerdo?”   “¿Qué?”   “¿Qué?” “Claudia, lo creas o no, ¡estoy muy seguro de que somos una pareja hecha el uno para el otro!”  otro!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo La tomó en sus brazos, pasó su gran mano por su cabello y dijo: “Entiendo tus preocupaciones. No necesitas integrarte a mi mundo con tanto esfuerzo. Intentaré ser parte de tu mundo. No necesitas ser la mejor. Eres perfecta como eres ahora mismo. Deja que me encargue de lo demás.”   demás.” “Pero... Tengo miedo que otros se rían de ti y dirán que tu prometida no tiene dinero ni poder y no es una hija consentida con dinero.”   dinero.” “No te preocupes. Yo soy rico y poderoso. Yo te consentiré.”  consentiré.”  Su voz era baja y elegante, e hizo que temblara cuando escuchó esas palabras. Él había dijo…  dijo…  Soy rico y poderoso. Yo te consentiré.

Esa frasefuerza. hizo que su corazón palpitara con más “Yo todavía...”  todavía...”  No había terminado de hablar, y de la nada, Miguel se inclinó y cubrió su boca con sus labios. “Este...”   “Este...” Ella estaba indefensa, y solo podía susurrar.

 

  Dueño de mi Cuerpo Él ejercía tanta fuerza que no la dejaba respirar. Ella estaba sin aliento y se sintió un poco débil. Parecía que una pequeña corriente recorría su cuerpo de arriba a abajo, quitándole toda la fuerza que tenía. Después de un tiempo, la dejó ir. Tenía miedo de que, si seguía, no lo iba a poder aguantar. Ella todavía era joven. Cualquier movimiento falso podía conducirlos a la lujuria. Su respiración comenzó a acelerarse, y en sus ojos se notaba que quería más. “¿A qué más le tienes miedo?”  miedo?”  “Tengo miedo de…”  de…”  Hace poco, antes de que ella terminara de hablar, él la interrumpió y ahora volvió a

preguntar nuevo. hubiera  dicho lo que quería de decir, acasoSipodría…  podría… Capítulo 88 

“Continua. Te estoy escuchando.”  escuchando.”  “¡No me has dado la oportunidad de decirlo!”   decirlo!”

 

  Dueño de mi Cuerpo “Tú misma dijiste que eras estúpida. Yo pienso que eres inteligente y también muy valiente por tratar de querer alejarte de mí.”  mí.”  Esas palabras la hicieron tener los pelos de punta. “¡Estoy preocupada por ti!”  ti!”  “No necesitas preocuparte de nada. Es un honor que me causes problemas para poder resolverlos, ¿entiendes?”  ¿entiendes?”  Claudia no supo que más decir después de eso. Ella no sabía que Miguel podía hablar de esta manera. Si le decía una cosa, ¡él respondía con diez más! No iba a llegar a nada hablando con él. “No sigamos hablando. Entre más hablé contigo, más enojada estaré. ¡Será mejor que me lave los dientes!”  dientes!” 

Ella estaba enfadada y tomóporel cepillo de dientes eléctrico. Miguel fin pudo relajarse…   relajarse… Después de cepillarse los dientes y lavarse la cara, se tomó el cereal de avena caliente, el sabor era como le gustaba. Miguel pidió el día libre, pero todavía tenía que lidiar con unos asuntos del trabajo.

 

  Dueño de mi Cuerpo Él no quería que ella siguiera pensando en esas cosas, así que la llevó a su estudio. “¿Qué estás haciendo? No me gusta leer esos libros.”  libros.”  “¿Quién te dijo que te vas a poner a leer ? ¿Ya terminaste tu tarea?”  tarea?”  “¡Dios mío!”  mío!”  Claudia se dio unas palmaditas en la cabeza y se acordó que tenía deberes escolares. Miguel vio que se quedó callada y comenzó a ocuparse de su trabajo. Después de diez minutos, le comenzó a doler la cabeza a Claudia y no quiso hacer más. Oye, puedes echar una partida y volver a hacer tu tarea. Cuando termines la partida, tómate un

vaso aguatu tarea. y ve al baño, después vuelvecon a hacer Después de ir al baño, le dio hambre. Planeo en comerse unos bocadillos y después volver a hacer su tarea. Cuando terminó sus bocadillos, ya eran las 10:40. Esperó hasta las 11:00 para continuar su tarea…  tarea… 

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella no tenía fuerza de voluntad para seguir haciendo su tarea. Mientras trataba de evitar hacerla, observó a escondidas a Miguel. Era cierto que los hombres trabajadores se ven más guapos. Miguel estaba tecleando frente a la computadora. Parecía muy concentrado. Él no tenía tiempo para descansar y en ese momento tenía una breve videoconferencia. Todo lo que decía era muy conciso y detallado. Cada vez que hablaba, todos que quedaban en silencio para escucharlo. Ella se sintió muy orgullosa. ¡Este hombre era irresistible! Ella quería publicarlo en Internet y que todos supieran que su novio era alguien

con gran y ariquezas. ¡Se volvería famosa de poder la noche la mañana! Miguel terminó su trabajo y la vio sonriendo. “¿Has terminado tu tarea?”  tarea?”  Preguntó con una ceja levantada. “¡Te estaba esperando, gran maestro!” Ella lo dijo con una sonrisa.

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿También quieres que esté a tu lado cuando cuan do hagas tu examen final?”  final?”  “¡Claro que sí! Pero los profesores no lo permitirán.” Lo dijo muy triste.  triste.  Miguel se acercó y comenzó a explicarle. No sabía por qué, pero un problema tan complejo se volvió fácil de entender cuando lo explicaba. Miguel parecía tener un poder mágico. En el pasado, Beatriz y Roger solían ayudarla. Siempre hacia que repitieran diez veces antes de poder entenderlos, pero Miguel solo tenía que explicarle una vez y ya entendía. Cuando otras personas le explicaban, ella no entendía cuáles eran los puntos claves. Pero él solo tuvo que hacer una marca y parecía que ella podía entender todo el

libro. Si Miguel fuera su maestro, ¡estaría contenta de aprender todos los días! Cuando Claudia terminó de hacer su tarea, se acordó de un problema muy serio. “Miguel, ¿por qué no tengo un abrigo de piel?”   piel?” “¿Qué?”   “¿Qué?”

 

  Dueño de mi Cuerpo “Esos que salen en los programas de televisión. ¡Las mujeres ricas siempre tienen un abrigo de piel! Y después van a

chismear con otras mujeres mostrando sus riquezas. ¿Por quéricas, no tengo teng o uno?”  uno?”  “¿Lo quieres?”  quieres?”  “No, solo quería saber si lo que pasaba en los programas de televisión era verdad o mentira.”   mentira.” “Para la próxima vez te lo mostraré y lo sabrás.”   sabrás.” “¿De verdad? ¡Qué bien!” Claudia lo dijo muy emocionada. “La empresa organizará un viaje mañana. Me llevaré al personal del Departamento de Finanzas conmigo. Puedes acompañarme. Te pediré permiso en la escuela. Detustodos modos, soy yo  el que te ayuda con deberes escolares.” escolares.”  “¿Un viaje? Creo que no está bien. En los ojos de los demás, tú y yo no tenemos nada que ver el uno con el otro. ¿Será apropiado?”   apropiado?” Ella se rascó la cabeza y dijo con una cara triste. ¡Tenía una inmensa presión!

 

  Dueño de mi Cuerpo ¡Tener un prometido rico y guapo, era una inmensa presión! Ella no quería revelar al público sobre su

relación se conlaMiguel, porviva. temor a que esas mujeres comieran Miguel le pellizcó la nariz, sonrió y dijo: “Esta vez puedes llevar a tus amigos. Está bien que vayas con Beatriz.”  Beatriz.”  Eligió a propósito el Departamento de Finanzas. Solo con la condición de que trajeran a los pasantes. Todo fue para que esta chica pudiera ir. Cuando Claudia escuchó que Beatriz también iba a ir, se interesó y aceptó de una vez.  Al día siguiente, Claudia empacó su equipaje y estaba lista para partir. Ella quería primero encontrarse con Beatriz. Estala Montaña vez, ibanFragante. a las Podían aguas termales de escalar la montaña o sumergirse en las aguas termales al pie de la montaña. Ella nunca había oído hablar de este lugar. De verdad que no conocía nada. Era otoño, la temporada en que las hojas de maple se vuelven rojas. Escuchó que hay un gran bosque de maple sobre la

 

  Dueño de mi Cuerpo Montaña Fragante. Era muy hermoso cuando soplaba el viento. Ella buscó toda la información por Internet

y encontró una tierra del amor. No seque sabeera cuántos chicossanta y chicas estuvieron allí para prometerse amor eterno. Muchas gentes escribieron sus deseos, por lo que el bosque estaba lleno de tarjetas con deseos. Estaba emocionada cuando se subió al autobús con Beatriz, y esperaba con ansias llegar a la Montaña Fragante. Esta vez, durante cuatro días, podía divertirse a su lado.  Al ver su expresión emocionada, Beatriz supo que Miguel la había hecho venir. “Te voy a decir algo, Claudia. Miguel te había ocultado algo tan grande, ¿y lo dejaste pasar, así si nada?” n ada?”   “¿Qué quieres quecomo hiciera?” hiciera?”  Claudia parpadeó y la miró con sospecha. “Nada. Así también está bien. Casarse con un hombre rico y guapo, es el mayor logro en esta vida.”  vida.”  “Beatriz, de repente me volví en una mujer rica. ¡Todavía no me acostumbro!”  acostumbro!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Entonces “¿Ent onces necesitas que te pida prestado algo de dinero para que te acostumbres?”  acostumbres?”  “Tengo 3,000 dólares, que ahorré

trabajando. ¿Lo quieres?” Ella se lo creyó.  creyó.  “¿Acaso eres pobre?” pobre?”    “Tres mil dólares es mucho. ¿Está bien? Lo traje para gastarlo. Quiero comer, beber y divertirme. ¡Tengo que aprovechar esta gran oportunidad! ¡Dime qué quieres comer y más tarde te lo compraré!”  compraré!”  Claudia puso sus manos en el pecho y lo dijo luciéndose muy confiada. Beatriz no supo qué decir después. En su corazón, deseaba lo mejor para Claudia y que no la lastimaran. Si la viera lastimada, se sentiría devastada. Madurar es algo bueno, pero sufrir en el proceso era algo inevitable. El autobús se detuvo al pie de la Montaña Fragante. Ellas se iban a quedar a vivir en casas tradicionales del lugar. Las habitaciones estaban limpias y tenía una especie de fragancia a madera. No es de extrañar que se llame Montaña Fragante.

 

  Dueño de mi Cuerpo Compartió una habitación con Beatriz y fue a comer después de echarse una siesta. Era casi de noche. Después de comer,

planearon en ir aporlas aguas termales. Estaban cansadas el viaje en autobús. Capítulo 89 

Después de comer, fueron a las aguas termales, que estaba llena de vapor. Cada piscina tenía una forma única y natural. En el medio de cada una había una gran piedra y arriba, un bloqueador para el viento. Ellas se pusieron sus trajes de baño y se prepararon para salir.  Afuera le habían preparado vino de frutas, que tenía un ligero olor a vino, pero más era dulzura de las frutas. No pudieron evitarlabeber un poco. Cuando las mujeres se juntan, chismean de más, y en este departamento había más de diez mujeres. “¡Dios, ese es nuestro jefe! ¡Se ve mucho mejor que en la televisión! ¡Estaba sentado en la primera fila del autobús! ¡Qué galán!”  galán!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “¡Si tan solo pudiera casarme con él, sería muy feliz! El jefe es guapo y rico, ¡y solo hay unas pocas que son dignas de estar

con él! yHay muchas celebridades en la ciudad, el jefe definitivamente elegirá a una de ellas. ¡No se hagan tantas ilusiones!”   ilusiones!” “No necesariamente. necesariamente. ¿Qué pasaría si al  jefe le gustan las mujeres humildes?”  humildes?”  “¿Qué le gusté una mujer humilde… y muerta de hambre?”  hambre?”  Ellas comenzaron a reírse. Claudia se escondió silenciosamente a un lado, bajó la mirada y suspiró. ¡Qué rabia! ¿Por qué a los hombres no les gustan los de su tipo? Beatriz nadó hacia ella y dijo: “No sigas mirando. con mirada.”  mirada.” “¿Por quéNoa se losagrandarán hombres no le lagustan las  mujeres como yo?”  yo?”  Beatriz pensó por un momento y le dijo: “Creo que tienen miedo a que no vayas a alimentar bien a sus hijos.”  hijos.”  “¿Será que tengo mala suerte?”  suerte?”  “Todavía eres joven. Todavía tienes tiempo.”   tiempo.”

 

  Dueño de mi Cuerpo Las palabras de Beatriz la consolaron mucho. Solo había que esperar. Parece que

debería beber más leche para que crecieran. Después de un tiempo, todas las chicas se fueron. Beatriz estaba cansada y también se fue. Solo Claudia yacía cómodamente dentro de la piscina, y no quería moverse. Después de haber bebido un poco de vino, su cuerpo estaba caliente y sintió que se le abrían los poros. Ella estaba acostada en el borde de una roca. Sus mejillas calientes estaban sobre la fría superficie de esa roca, era muy cómodo. Solo podía enfriarse de esta manera y no quería ¡Si tanirse. solo tuviera en ese momento un gran cubo de hielo! De repente, sintió que alguien se acercaba.  Abrió un poco los ojos, pero solo vio una silueta. Esa persona se acercó y ella vio claramente su rostro. Guao... ¡Qué chico tan guapo!

 

  Dueño de mi Cuerpo “Claudia, ¿has estado bebiendo?”  bebiendo?”  Miguel se dio cuenta de que ella no había regresado, por lo que fue a buscarla. Vio a

Claudia tiradauna en foca. el borde de la piscina como si fuera Cuando entró, olió un leve aroma a vino, miró la botella que estaba a su lado y entendió que había bebido mucho. “¿Miguel?”   “¿Miguel?” Ella reconoció quien era, susurró su nombre y no pudo evitar reír. Claudia agarró su mano. Lo tomó por sorpresa y lo derribó al suelo. ¡Su cuerpo estaba frío y se sentía muy rico! “¡Abrázame!”   “¡Abrázame!” Claudia se le acercó como un pulpo, y la bata que tenía puesta se le estaba cayendo. Miguel pudo ver su cuerpo descubierto, y sintió que su garganta se apretaba. Comenzó a recordar en la última vez que ella estaba borracha, en que casi moría en sus manos. ¡La historia se repite otra vez! “Claudia, es hora de volver.”  volver.” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia se sintió muy bien al escuchar su voz. Una voz muy seductora y también como si

fueraquiero la melodía deNo uname canción. “No volver. he empapado lo suficiente. Hay vino... ¿Quieres un poco? Está delicioso.”  delicioso.”  “Estás borracha.”  borracha.”  “No lo estoy. Me dijeron que tenía poco alcohol.”   alcohol.” “Pero has tomado mucho. Es hora de regresar y descansar.”  descansar.”  “Sí que molestas.”  molestas.”  Claudia no lo aguantaba. Quería taparle la boca a Miguel y sin pensarlo, se levantó y le tapó la boca con sus labios. Se sentía frío, como gelatina helada y sabía muy bien. ¡Parecía que sus estaba comiendo! Miguel sintió labios moverse y no supo si reír. ¡Solo ella podía pensar en comida en este momento! ¿Cómo podría Miguel negarse a ese beso? Había estado ansioso por encontrar la oportunidad de besarla.

 

  Dueño de mi Cuerpo Siempre había sido él quien tomaba la iniciativa, pero ahora se cambiaron los papeles…   papeles…

Miguel a Claudia el borde de la piscina presionó cuando ella menos en lo esperaba. Ella estaba sin aliento y no tenía tiempo para respirar. Solo se sintió un poco mareada. Miguel esperó a que se relajara. Esta vez, Claudia no veía con claridad y sus mejillas estaban enrojecidas. Ella se humedeció los labios y lo miró sin saber qué hacer. Ella era tan inocente. Pero esta expresión inocente le hizo a él querer poseerla de inmediato. El cabello mojado cubría su precioso pecho. Ese cabello negro era como unas serpientes del deseo, llamando su atención. En ese momento, Claudia frunció el ceño, había sentido algo moverse debajo de ella. “No te muevas. Creo que sentí algo.”  algo.”  Esa frase puso muy nerviosa a Miguel. Y apartó su cuerpo de un empujón. “Miguel... ¿Qué te pasa?”  pasa?”  “Nada, ¡estás alucinando!”  alucinando!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿De verdad?”  verdad?”  “Bueno, ya es tarde. Debemos regresar.”  regresar.”  “Está bien. Está bien. Regresemos.”  Regresemos.” 

Miguel suspiro y de alivio, se acercó yexhaló abrazó un a Claudia, luego la llevó de regreso a su propia habitación. Él no se cambió de ropa, sino que la ayudó a cambiarse primero, de lo contrario, se iba a resfriar. Para este viaje, él había preparado dos  juegos de ropa para ella. Una era para emergencias.  Ayudarla a cambiarse de ropa era un gran desafío para Miguel. Era difícil no querer saborear cuando tenía una deliciosa comida enfrente.  A él nunca le han interesado las relaciones sexuales. Era una persona seria y racional. Él se había esforzado mucho para de no pensar en esas cosas, pero después conocer a esta niña, descubrió que tenía una debilidad. Ella podía conducirlo al camino del pecado. ¡Ahora mismo era su esclavo, y también lo será para toda la vida! Él admitió que fue él mismo quien eligió estar con ella.

 

  Dueño de mi Cuerpo Comenzó a ayudarla a cambiarse de ropa, era como vestir a un niño. Después de vestirla, Claudia se inclinó y lo

olió, “Miguel, hueles muy bien. ¿Puedo comerte?”  comerte?”   Miguel estaba sin palabras. Realmente era una comelona. ¿Estaba borracha y todavía pensaba en comer? “¿Acaso me puedes comer?” Le dijo de mala gana y le dio un golpecito en la cabeza. “Hueles muy bien y se siente muy bien cuando te toco. No puedo evitar querer morderte...”   morderte...” “Si de verdad lo quieres hacer. Ven y pruébame.”   pruébame.” La pequeña chica asintió de alegría. Entonces Miguel puso su brazo frente a ella. Claudia lo agarró felizmente y luego se preparó con todas sus fuerzas para morderlo. Pero... Soltó su brazo y lo dejo caer. “¿No era que me querías comer?” “No me atrevo. Te va a doler…”  doler…”  Capítulo 90 

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel se sintió un poco conmovido cuando escuchó eso. Esta chica todavía se preocupaba por él.

“¿Dormirás conmigo?” conmigo?”    juntos esta noche!” “Sí, sí. ¡Vamos a dormir noche!”   Claudia volvió a ponerse feliz. Por temor a pecar, la llevó a la cama y le dijo: “Duerme primero, yo yo tomaré una ducha fría.”  fría.”  Tenía la voz ronca, el puño cerrado y las uñas profundamente incrustadas en la piel. Él tenía miedo de no poder aguantar y querer hacerlo. Miguel salió del baño al terminar de ducharse. Estaba un poco cansado por el tormento que Claudia le había hecho pasar. Pero se sintió muy feliz al ver a Claudia dormida. Dormía como un gatito, acurrucada y sujetándose de las sábanas. Se metió lentamente en la cama por miedo a despertarla, pero ella se dio cuenta. Ella se dio la vuelta, se deslizó en sus brazos y le frotó la cabeza.

 

  Dueño de mi Cuerpo Él tenía una sonrisa de esquina a esquina y le comenzó a acariciar la cabeza. A ella le gustaba estar así.

“Miguel...”  “Miguel...”   con su delicada voz. Ella murmuró “Estoy aquí.”  aquí.”  Cuando supo que estaba ahí, se durmió sabiendo que estaba a salva.  Al día siguiente, Claudia se despertó y olió algo familiar. Dio un salto al ver la habitación en la que se encontraba. Se levantó y miró la hora. Eran las siete de la mañana. Se iban a reunir con las otras a las ocho para desayunar. Todavía tenía tiempo para regresar. Estaba a punto de levantarse e irse, pero Miguel la agarró. Ella escuchó su voz somnolienta: “¿Qué pasó? ¿Dormiste conmigo y quieres irte ahora? ¿No me darás nada a cambio?”  cambio?”  Claudia miró al hombre que estaba a su lado. Tenía los ojos medio abiertos, era obvio que durmió muy bien.

 

  Dueño de mi Cuerpo Esa cara, ella todavía no se acostumbraba a ella. Era tan hermosa que parecía un pecado tenerlo.

“¿Quieres dinero?” Le dijo ella.   Cuando dijo eso, Miguel la ella.  pateó. “Oh.”   “Oh.” Ella cayó de culo. “¡Miguel, eres muy salvaje!”  salvaje!”  “¿Quién te enseñó a decir eso?”  eso?”  Miguel se sentó y abrió los ojos. En esos ojos se notaba que estaba enojado y confundido. Ella se frotó el trasero y dijo: “En las novelas. Cuando una mujer dormía con un hombre, siempre le daban dinero. Por lo general, eran 100 dólares. Pero era algo humillante.”   humillante.” “¿Todavía te atreves a decir eso? Entonces prisa.”   dame dinero, y humíllame. Date prisa.” Insistió Miguel. “Este…” Claudia no entendía muy bien.  bien.   “Yo... No tengo dinero ahora mismo.”  mismo.”  “¡Entonces ve rápido a buscarlo buscarlo y tráemelo!”   tráemelo!” Miguel lo dijo como si fuera una orden.

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia estaba un poco confundida. ¿Acaso a Miguel le gustaba este tipo de  juego y también sentirse humillado?

Ella salió arrastrándose cuidado de su habitación por miedo aconque alguien la viera. Cuando Beatriz la vio regresar, parecía como si fuera a robar algo. Ella no pudo evitar bromear y dijo: “¿No estás cansada de dormir juntos y salirte a escondidas?”   escondidas?” “¡Cansada, pero es mejor estar cansada a que me maten!”  maten!”  Ella encontró su bolso y recibió un mensaje de texto de Miguel, pidiéndole que fuera al bosque de maples a las nueve en punto y que calcule el costo de anoche. Ella estaba pensando en cuánto podría costar hombreacostarse tan guapo.por una noche con un Tres mil dólares... ¡No parece suficiente! Ella estaba angustiada y quería llorar porque no le iba a quedar dinero para una buena comida. Hoy tenían planeado escalar la montaña. Por eso todos habían dormido temprano para estar físicamente preparados.

 

  Dueño de mi Cuerpo Primero se reunieron para desayunar. Cuando Claudia terminó de comer, recibió otro mensaje de texto de Miguel pidiéndole

que recordara fuera a sutraer habitación ahora mismo y el dinero. Claudia se enojó de inmediato. Aunque le dolía gastar ese dinero, no se atrevió a desobedecer la orden de Miguel. Ella miró hacia la mesa. Ellos seguían comiendo y charlando. Nadie le estaba prestando atención a ella. Caminó en dirección al baño y luego se fue por la puerta trasera. Se sentía como si fuera a una reunión secreta. Ella ya estaba cansada cuando llegó a la habitación de Miguel. La puerta estaba abierta, así que la abrió sin tocar. Miguel se había bañado y salió solamente cubriéndose la parte inferior con una toalla de baño. Claudia vio la parte superior de su cuerpo desnudo, se sintió apenada y dio media vuelta. “Tú... ¿Por qué te tomaste un baño?”  baño?”  “Para enfriarme.”  enfriarme.” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel no quiso decirle que se sentía incómodo cuando se despertó esa mañana, y por eso se tomó una ducha fría.

 Afortunadamente, él era que fuerteClaudia y podía aguantar esas torturas le hacía pasar. Claudia estaba confusa cuando escuchó su tono de voz. ¿Él estaba enojado y resentido con ella? ¿Por qué? Su comida diaria es especialmente preparada por un chef, que es diferente a la comida que comen los demás. Debe ser la comida que come que está así. ¿Qué tenía que ver con ella? “¿Trajiste el dinero?”  dinero?”  “¡Sí lo traje!”  traje!”  Ella lo buscó rápidamente dentro de su bolso y sintió un dolor en el500 corazón. Ella dijo: “Solo tengo dólares en efectivo en mi bolso. Si crees que no alcanza, te puedo transferir por teléfono móvil. Yo... tengo solo 3,000 en mi cuenta. Es todo lo que tengo, ¿puedes dejar que me quede con algo?”  algo?”  Lo dijo muy triste, mientras sacaba cinco billetes de cien.

 

  Dueño de mi Cuerpo Ese era el dinero que tanto le costó ganar. Ella miró a Miguel y tembló cuando notó que no estaba muy contento.

¿Tres ¿Quieremil más?dólares no era suficiente? Carajo. Solo dormimos juntos y no hicimos nada. ¿Eso era tan caro? Ella seguía quejándose en su interior y no se atrevía a decírselo. “¿Qué tal sí... te debo ese es e dinero…?”  dinero…?”  “Dame tu bolso.”  bolso.”  Él le dijo un poco triste. Claudia tuvo que entregárselo obedientemente. Miguel rebuscó en su interior y encontró…  encontró…  ¿Qué? ¿Una moneda de un dólar? Ella estaba sorprendida. Él le devolvió el bolso y dijo: “Con esto alcanza.”  alcanza.”   “¿Un  dólar? ¿Tan barato?”  “¿Un barato?”  “¿No dijiste que entre menos dé una mujer, más decidido estará el hombre de estar con ella? ¿No quieres que te sea leal, o qué?”   qué?” “Este...”   “Este...” ¿Qué lógica era esa?

 

  Dueño de mi Cuerpo “No he desayunado todavía. ¿Te gustaría comer conmigo?”  conmigo?”  “Pero... Falta poco para la reunión…”  reunión…” 

“¿Acaso soy yo quien decide cuándo empezaráno la reunión?”  reunión?”   “¡Tienes razón! También puedo comer dos veces. Qué felicidad. ¿Qué hay para comer?”   comer?” Los ojos de Claudia se iluminaron de alegría. Les prepararon un desayuno elegante y delicioso. El color, olor y sabor estaban de primera calidad. El pan incluso estaba hecho en forma de conejo. Se veía muy lindo. Ella no pudo evitar reírse. Miguel le dio un golpecito en la cabeza: “¿De qué te ríes?” “Miguel, te quiero preguntar algo. ¿Te gustan las mujeres coquetas o las mujeres que dicen lo que piensan?”  piensan?”  Capítulo 91

“Me gustan, así como tú.”  tú.”  Miguel respondió sin dudarlo. “¡Tu respuesta ridícula!” ridícula!”   

es

obviamente

muy

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Por qué es ridícula? Si me tratas de forma coqueta, yo te complaceré. Si dices todo lo que piensas, yo también lo haré.

¿Por qué Claudia no?”  escuchó eso, no pudo no?”  Cuando encontrar forma de responderle. “Miguel, supongo que debes ser muy bueno hablando de negocios con los empresarios en la mesa de negociaciones. ¡Sabes cómo responder a todo lo que te digan!”   digan!” “¿Crees que mi boca solo sirve para hablar?”   hablar?” “Tu boca... Además de hablar, comer y beber, ¿qué más podría hacer?”  hacer?”  Claudia estaba confundida. Y en menos de un segundo, él le demostró de forma práctica cuál era su respuesta. Se y puso su granpara manoque en la parte de inclinó atrás de su cabeza ella no pudiera retroceder. Cuando sus labios se tocaron, él le quitó de una mordida un pedazo de postre que tenía a un lado de la boca. “¿Qué tal esta habilidad?”  habilidad?”  “¿Poder “¿P oder   arrebatarle la comida a los demás?” demás?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Tonta. Te estaba besando. ¿No puedes ver lo más obvio?”  obvio?”  Miguel no supo que más decirle.

Su prometida debióPor haber sido una pequeña cerda en su vida pasada. eso se la pasaba pensando todo el tiempo en comida. Las personas normales se iban de vacaciones para jugar y divertirse. Pero ella parecía una cerda que estaba suelta y solo quería llenar su estómago con todo lo que encontrara. Claudia se había llenado con la comida. Miguel le dio unas palmaditas en la cabeza y dijo: “Más tarde irán a escalar la montaña. Talvez yo no iré. Ten cuidado cuando vayas a la cima de la montaña, ¿está bien?”  bien?”  “No te preocupes. cuidado.” cuidado.”  Claudia dio mediaTendré vuelta mucho y se fue. Miguel  todavía quería que ella le diera un beso de despedida, pero ya se había ido antes de poder pedírselo. ¡Parecía que él era invisible! Ella y Beatriz cargaban a sus espaldas mochilas no de era montañismo. camino de la montaña empinado,Elpero debido a

 

  Dueño de mi Cuerpo la continua lluvia de otoño, la montaña estaba muy resbaladiza. Algunos lugares que no llegaba el sol, tenían musgo, por lo

que el camino ayudarse no fue muyentre fácil de recorrer. Necesitaban ellos para poder caminar. Beatriz no había empacado mucho, pero vio que Claudia cargaba una mochila muy grande y no pudo evitar fruncir el ceño: “¿Qué has metido adentro? ¿Por qué tu bolsa es tan pesada?”  pesada?”  “Comida, ¿no era que vamos a acampar en la montaña al mediodía? Debemos llevar comida. ¡También llevaré la tuya y la de Miguel!”  Miguel!”  “¿No crees que es demasiado pesado que pesado  que traigas tantas cosas? Solo con comer un aperitivo al mediodía será suficiente.”  suficiente.”  “Pero... Todo lo que estoy llevando es lo que me gusta comer…”  comer…”  Claudia no quería dejarlo. Había mucha comida... Mucha comida deliciosa. Ella los acababa de comprar en el supermercado. Compró muchos bocadillos por solo 100 dólares. Ella supuso Miguel siempre comía cosas caras yque nunca había probado los

 

  Dueño de mi Cuerpo bocadillos baratos que también eran deliciosos. Así que se lo trajo especialmente para que probara.

Beatriz blanco. se quedó callada y puso los ojos en Parece que Claudia no pensaba bien las cosas. El amor la estaba haciendo más tonta. ¡Su coeficiente intelectual estaba decayendo! “Déjame cargar algunas cosas por ti.”  ti.”   Beatriz finalmente decidió ayudarla. Claudia sacudió la mano mano y se negó. “No está pesado. Puedo cargarla sola. He preparado dos botellas de bebidas energéticas para ti. Avísame si te quedas sin fuerzas.”  fuerzas.”  “Ya veo. También es una bendición estar con una tonta...”  tonta...”  Beatriz no supo que más decirle. El grupo subió a la montaña y Miguel estaba caminando al frente. Claudia solía caminar mucho, porque no quería gastar dinero para el taxi o el autobús. Ella era incapaz de gastar como los demás. No caminaron mucho y todos ellos quisieron detenerse para descansar.

 

  Dueño de mi Cuerpo Todos ellos se detuvieron. Claudia y Beatriz no querían alejarse de los demás. Y también se detuvieron para descansar

un poco. hay una pequeña tienda allí. “Beatriz, ¡Cómprame una botella de agua!”  agua!”  Los demás la escucharon y dijeron a gritos…   gritos… “Sí, cómprame una botella botella también. ¡No traje suficiente agua!”  agua!”  “Solo hay una tienda cerca de aquí y no traje nada. ¡Beatriz, compra una para mí también!”   también!” “Déjame contar cuantos somos. Uno, dos, tres, cuatro, cinco... Compra una docena. ¿Tú qué quieres beber? ¿Y tú?”  tú?”  La primera persona en hablar, comenzó a ver cuánto necesitaba comprar. No querían agua.querían Algunos cafétodos o Gatorade y otros Redquerían Bull. Beatriz solo era una pasante, por eso querían que hiciera esas cosas. Pero la pequeña tienda no estaba tan cerca. Necesitaba caminar por cinco minutos. Diez minutos en total para ir y venir.

 

  Dueño de mi Cuerpo Tenía que comprar tantas cosas que iba a tener que hacer varios viajes. Ella era solo una pasante y no tenía miedo

si en problemas con ellos. Si sesemetía metiera en problemas, de seguro Lucas la iba a ayudar.  Además, el jefe de la empresa era el prometido de su mejor amiga, ¿qué miedo iba a tener? Beatriz los ignoró y se puso a comer tranquilamente unas semillas de melón. La primera persona que gritó estaba avergonzada, frunció el ceño y dijo: “¿Esa pasante es sorda? ¿No escuchaste lo que dijimos? ¿Todavía no vas a la tienda?”  tienda?”  Claudia conocía a esa persona. Ella era la directora del Departamento de Finanzas. Se llamaba Yolanda y solo tenía 30 años. Estaba soltera y era difícilmás de tratar. Beatriz había sido atormentada de una vez por esa bruja. Le gustaba intimidar a los demás, favorecía a las personas que conocía, y les mentía a sus superiores. Sin embargo, ella hacia un fenomenal trabajo, por eso las personas que estaban

 

  Dueño de mi Cuerpo en un nivel inferior no se atrevían a decirle nada. Claudia notó en el rostro de Beatriz que

estaba La problemas. aparto a un lado por temor a enojada. que causara Beatriz se le quedó mirando: “¿Por qué eres tan amable con ellos? Me trata como si fuera una esclava.” esclava.”   “Pero ella es tu superior. ¿Quieres que te trate peor en el futuro?”  futuro?”  “Hace tiempo que quería dejar de trabajar allí. ¡El Departamento de Finanzas es un desastre gracias a ella! Deberías decirle a tu prometido que abra bien los ojos para que vea la clase de persona que tiene trabajando en su empresa.”  empresa.”  “No me voy a meter en sus asuntos. Solo me preocupo por ti. Si piensas que este trabajo no es el adecuado para ti, puedes buscar otro mejor.” mejor.”    “Claudia, ¿cómo puedes estar siempre tan optimista?”   optimista?” Beatriz estaba enojada, pero se calmó al escuchar lo que le dijo Claudia. Ella siempre ha podido ver lo bueno en todo. Podía hacer pequeños. que los grandes problemas se volvieran

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Es eso optimismo? ¿Acaso no es bueno?”   bueno?” “¡Eres una tonta!”  tonta!” 

“Alguien sabio pued e parecer tonto, ¿ok? Sé también que es puede incómodo que alguien te de órdenes, pero solo porque mi prometido es Miguel, no puedo hacer lo que se me dé la gana. Puedo ser una mejor persona estando con él, pero no quiero ser una buena para nada si es que me vaya a dejar.” dejar.”   “Miguel es mi prometido. Puedo ser parte de su vida, pero no quiero vivir dependiendo de él. Si él me da algo, yo lo aceptaré. Y si no me da nada, también podré seguir viviendo. Así también estaré bien.”   bien.” Beatriz se estremeció cuando escuchó eso. Puedo ser parte de su vida, pero no quiero vivir dependiendo de él. Nuestra felicidad nunca deberá depender de los demás. Lo más seguro es depender de uno mismo. Resultó que en realidad ella no era ninguna sino que veía las cosas mejor quetonta, los demás.

 

 

Dueño de mi Cuerpo

Capítulo 92

Si otra persona fuera la prometida del jefe de gran empresa, no que tendría ningún otrouna objetivo en la vida gastar su dinero. Pero Claudia no era así. Ella no iba a estar obsesionada con el dinero y el poder. “Colegas, ¿qué ¿qué más desean tomar? Ya me iré a comprar las botellas.”  botellas.”  Beatriz tomó la iniciativa de ir, lo que sorprendió a Claudia. Claudia pensó que no estaba contenta y no quería comprarles nada. Beatriz la miró, sonrió y dijo: “Puedo ser parte de su vida, pero no quiero vivir dependiendo de él.”  él.”  “¿Quién? ¿Acaso eres la novia de alguien a mis espaldas?” espaldas?”    “No te lo diré.”  diré.”  Beatriz era arrogante y rebelde en el pasado. Si fuera la misma de antes, nunca hubieran llegado a un acuerdo. Pero ahora…  ahora…  Ella pensó que todo lo que decía Claudia era correcto. Lucas, ¡no vas a poder controlarme!

 

  Dueño de mi Cuerpo ¡Eres mi hermano, pero nunca dependeré de ti! ¡Ella quería probarse a sí misma y que

Lucas la subestimara de nuevo! Poco no después de comprar las cosas, estaban cansadas y jadeando como si fueran perros. Ellos no les dieron las gracias, sino que se quejaron. Se quejaban de que se demoraron mucho o que compraron mal las cosas. Se esforzaron mucho por gusto. Beatriz estaba tan enojada que su rostro se puso rojo y sus puños estaban bien apretados. Claudia se asustó cuando la vio. Tenía mucho miedo de que Beatriz golpeara a alguien. Después de un tiempo, ella respiró hondo y se dijo a sí misma: “Inhala, no estoy enojada. Exhala, ¡no mataré a nadie! Inhala, no estoy enojada. Exhala...”  Exhala...”  Después de decir eso varias veces, se detuvo. “Vámonos.”   “Vámonos.” Empacaron sus cosas y continuaron su camino.

 

  Dueño de mi Cuerpo  Aquí hay una cueva del amor. Se dice que las parejas que encuentren la cueva del amor se les concederán sus deseos si

llegaban final. O podíanal obtener las placas de deseos que colgaban de los árboles en la entrada de la cueva. Pero la cueva del amor es profunda y había que caminar mucho.  Algunas personas quisieron entrar y otras quisieron seguir escalando la montaña. Claudia decidió ir a la cueva. Beatriz tenía un dolor en el estómago y quería encontrar un baño, pero cerca de ahí no había baños. El baño más cercano estaba arriba. Entonces Beatriz se fue primero. La cueva del amor estaba más lejos de lo que pensaba. No era una temporada que venían muchos turistas, por eso no había nadie alrededor excepto las personas con las que había venido. Las rocas estaban cubiertas de musgo. Si no tenía cuidado, se podía resbalar y torcerse el pie. Ellos entraron que porque escucharon sonidosno extraños venían desde

 

  Dueño de mi Cuerpo adentro. Todos ellos tomaron la placa de deseos y se fueron. Claudia era baja y también quería tener

una placa de deseos, pero no podía alcanzarla. Quería pedir ayuda, pero ellos estaban apurados en llegar a la cima de la montaña para descansar que tomaron sus cosas y se habían ido sin mirar atrás. Claudia saltó con mucha fuerza y finalmente agarró una placa. Pero aterrizó en una roca con musgo, no la pisó con firmeza y cayó de golpe al suelo. Dolía mucho…  mucho…  Ella respiró hondo y comenzó a llorar. Su palma estaba raspada y había sangre. Ella gritó por ayudar, pero todos ellos ya se habían ido. Todos no como ella, queellos habíaempacaron empacado ligero, tantas cosas. Ella temblaba y quería alcanzarlos, pero le dolían los pies y no podía dar un paso más.  Aun así, ella quería seguir escalando la montaña. También iba a ser difícil bajar de ella en esa condición.

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella solo podía volver a la cueva del amor, sentarse en el suelo húmedo y esperar a que Beatriz la encontrara.

Soplaba cueva…   un viento frío en la oscura cueva… Ella estaba temblando y se abrazó a sí misma. Miró a su alrededor en estado de alerta. Teniendo la protección de los dioses, aquí no debería haber fantasmas ni monstruos, ¿verdad? Ella no pudo controlar sus pensamientos. Entre más pensaba Claudia, más miedo tenía. Solo pudo refugiarse en un rincón y esperar a Beatriz. Los otros ya habían llegado a la cima de la montaña. Miguel se dio la vuelta y frunció el ceño. Claudia ido ella?no estaba ahí. ¿A dónde se había Vio a Beatriz y la llamó. “¿Y Claudia?”  Claudia?”  “¿No está aquí?”  aquí?”  Beatriz también se dio cuenta de ese problema, ¡Claudia no había subido! Ella se apresuró a las personas que fueronaa preguntarles la cueva del amor si

 

  Dueño de mi Cuerpo la vieron. Dijeron que no la vieron, después de todo, no la conocían y por eso nadie le prestaba atención.

“¿Dónde te llamó!”  llamó!” está tu teléfono móvil? ¡Mira si no “Mi teléfono móvil... Se había caído en el baño...”   baño...” Beatriz lo dijo con tristeza. Miguel frunció el ceño cuando escuchó eso. Claudia, la chica que no sabía qué hacer, ¿cómo podía estar sola en la montaña? Él preguntó por la ruta a la cueva del amor y bajó la montaña con mucha prisa. Claudia todavía estaba en la cueva, temblando de miedo, y había comenzado a llover afuera. Ella había visto el pronóstico del tiempo. Decía que iba a ser soleado, y no esperaba que fuera a llover.  Al ver que comenzó a llover, pensó que no iba a durar mucho. Pero era una lluvia de otoño, que también traía vientos fríos. El viento frío sopló y las frías gotas de lluvia cayeron sobre ella. Entró de una vez

 

  Dueño de mi Cuerpo y se refugió debajo de dos estatuas de piedra. “Dioses del cielo, sé que están trabajando

muy duro. acepten tributo.”  de tributo.”  Luego sacóPor defavor su bolsillo dosmipaquetes chocolate M&M's. “Está delicioso. ¡Pruébenlo!”  ¡Pruébenlo!”  Hablaba consigo misma para tranquilizarse. En ese momento, se escuchó una voz desde afuera, como si llamara su propio nombre. “¿Eran los dioses... o fantasmas?”  fantasmas?”  Su corazón latió con más fuerza. “Dioses del cielo, recuerden protegerme. Hay muchas cosas extrañas en la montaña. ¡No quiero morir aquí!”  aquí!”  “¡Claudia!”   “¡Claudia!” La voz se escuchaba muy cerca y estaba segura de que la llamaba. En la cueva se escuchaba unas ráfagas. Sonaba aterrador, como si un fantasma quisiera apoderarse de su vida. Claudia estaba rígida y temblando de miedo. Bajó y alamirar sostuvo sus manos,lanocabeza se atrevió haciacon arriba.

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella no había hecho nada extraordinario en esta vida, ¡pero tampoco le había hecho nada malo a nadie!

¡Los fantasmas y los monstruos no tenían ninguna razón para castigarme! Miguel había entrado a la cueva del amor y vio dentro a Claudia temblando. Estaba agachada y escondida detrás de las estatuas de piedra, agarrándose de su cabeza. Él se alegró de haberla encontrado. Se apresuró para ir adonde ella. Cuando la tocó con su mano, ella tembló y lo empujó. “¡Aléjense!! No he hecho nada malo. “¡Aléjense ¡Demonios y fantasmas lárguense de aquí!”   aquí!” Miguel no sabía si reír. Se le había olvidado que su pequeña prometida no solo sabía comer y dormir, sino que también les tenía mucho miedo a los fantasmas. Debe ser aterrador quedarse sola en una cueva tan desolada. Ella no se atrevió a mirar hacia arriba, así que se dio la vuelta. ¿Por qué no jugar con ella por un rato?

 

  Dueño de mi Cuerpo Bajó su voz e hizo que sonara más profunda. “¿Estás segura de que no has hecho nada

malo? ¿Entonces qué estoy aquí?”   “Yo... ¿Qué voy por a saber por aquí?”  qué estás aquí? He sido una buena estudiante desde que era una niña. Aunque me he vuelto un poco tonta, ¡esa no es una razón para que estés aquí!”  aquí!”  “En ese caso, deberías ser una buena persona. Soy el espíritu de la cueva del amor . ¿Qué tal si te doy un buen marido?”  marido?”  “No es necesario. Ya tengo un prometido. ¡Será mejor que te vayas!” Insistió Claudia. No se atrevió a mirar hacia arriba por miedo de ver a ese espíritu. Capítulo 93 

“Tu prometido ciertamente no es no es tan guapo y poderoso como el hombre que te tengo preparado.”   preparado.” “Igualmente no lo quiero. Con este no puedo vivir tranquilamente y me causa muchos problemas, ¡pero no me quejo! Si realmente quieres lo mejor para mí,

 

  Dueño de mi Cuerpo puedes hacer que Miguel se vea un poco más feo y más pobre. ¡No importa!”  importa!”  Miguel no sabía qué decir después de

escuchar eso.en la cabeza de esta chica? ¿Qué había ¿Ella deseaba que fuera más feo y más pobre? ¿Qué lógica era esa? “¿Entonces también haré que te veas fea?”  fea?”  “Eso no… Puedes hacer que que sea un poco más tonta. No me importa ser tonta. De todos modos, Miguel es inteligente y puede enseñarme.”   enseñarme.” “Siempre mencionas a un tal Miguel. ¿Quién es él?”  él?”  “Él... Él es mi prometido.”  prometido.”  “Entonces levanta la cabeza y mira si es él.”   él.” “¿Ah? ¿Qué?”  ¿Qué?”  Claudia se sorprendió cuando vio enfrente de ella a alguien que le parecía muy familiar. Las esquinas de sus labios se movieron, mostrando una sonrisa. Podía ver su reflejo en sus preciosos ojos. ¡Miguel!

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella se emocionó. Quiso levantarse y abrazarlo. Pero cuando se levantó y cayó de

espaldas. ¡Dolor de pies! “¡Ay!” Ella gritó de dolor y su trasero cayó de golpe contra el suelo. Sintió un dolor terrible. Miguel notó que algo no estaba bien. Se agachó y descubrió que su tobillo estaba hinchado y enrojecido. ¡Era alarmante! “¿Cómo te pasó eso?”  eso?”  Él frunció el ceño y le quitó las zapatillas para revisar la herida. “Quería agarrar la placa de deseos y por accidente me resbalé. Cuando la agarré, los otros ya se habían ido. Solo podía quedarme aquí esperando a Beatriz.”  Beatriz.”  Ella lo dijo con mucha tristeza. “¿Por qué no me buscaste?”  buscaste?”  Frunció el ceño y se miraron el uno al otro. Claudia sintió que estaba enojado y ella comenzó a asustarse. Qué horrible. Miguel estaba enojado. “Yo... No quería molestarte. Tampoco quería que todos  ellos supieran sobre nuestra relación...”  relación...”

 

  Dueño de mi Cuerpo “Si esto vuelve a ocurrir de nuevo, le diré al mundo entero que eres mi prometida.”  prometida.”  “No.…”   “No.…”

“¿No me consideras como tuuna prometido? ¿O tu hombre? ¿Soy simple decoración?”   decoración?” Miguel estaba realmente enojado esta vez. En los momentos que más necesitaba de su ayuda, nunca lo llamaba. Él odiaba que Claudia lo tratara así. Le hacía sentir que no valía nada e incluso le hacía sentir que no podía proteger a su amada. Él no necesitaba que ella lo protegiera, sino que le bastaba que ella se cuidara bien de sí misma. Ella no podía manejar tantas cosas a la vez y aun así se preocupaba por él. ¿Qué más podía hacer él? Claudia sabía que estaba muy enojado, y ella estaba tan asustada que no se atrevió a moverse. Ellos se quedaron mirándose en silencio, y solo se escuchaba la lluvia y el viento. Después de un tiempo, Claudia tuvo el coraje de levantar su pequeña mano y jalar la esquina de su manga.

 

  Dueño de mi Cuerpo “Miguel, sé que me equivoqué. La próxima vez no lo volveré a hacer. No te enojes, ¿está ¿est á bien?”  bien?” 

“Esta admitirás tu error, la próxima vez lo vez volverás a hacer, ¿no esy así?”  así?”   “No lo volveré a hacer. Lo he pensado muy bien. Beatriz tiene razón. Los hombres son criaturas muy miserables y no había necesidad de despreciarlos. Si los desprecias se volverían peores. Para la próxima vez, te trataré mejor, ¿está bien?”  bien?”  Miguel estaba confundido cuando escuchó eso. ¿Era eso un cumplido o un insulto? “No te enojes ahora mismo. Tengo un dolor terrible y necesito que me ayudes. Estoy sufriendo demasiado por tu enojo y también tener que aguantar este horrible dolor.”   dolor.” Miguel sintió lástima por ella. Ella estaba herida y la lesión en el tobillo se veía muy grave. No podía seguir enojado y tenía que ayudarla. “Terminaremos esta conversación después.”   después.” Dijo el impotente hombre.

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia se sintió aliviada cuando escuchó eso. Miguel revisó la lesión. El hueso no estaba

mal tobillo.dislocado. Solo tenía hinchado el Quería llevarla montaña abajo, pero afuera estaba lloviendo y no parecía que se iba a detener.  Afuera estaba todo cubierto de musgo. ¿Qué pasaría si Miguel se resbala y cayera de espaldas? Entonces Claudia insistió en esperar a que llegaran los rescatistas profesionales. Miguel no se atrevió a poner en peligro su vida, por lo que tuvo que esperar con ella. el la. La ayudó a presionar suavemente la herida. Fue muy doloroso para ella, pero la intención era dulce. “Por cierto, ten esto.”  esto.”  Ella sacó algo que tenía guardado entre su brazo, era una placa de deseos. “¿Qué es esto?”  esto?”  “Una placa de deseos. Si escribes los  los   nombres de dos personas, ellos estarán  juntos para siempre. Puede llevártela a casa o arrojarla de vuelta aldeárbol. Se  dice que bendice las relaciones pareja.” pareja.” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel quiso decirle que eso era falso y todo era una superstición. Claudia creía en esas cosas y estaba muy

fascinada. Él no quiso desilusionarla y dijo: “No traje un bolígrafo.”  bolígrafo.”  “¡Yo tengo uno!”  uno!”  Ella sacó un bolígrafo de su mochila. Sabía que hoy iban a escalar la montaña, y había escuchado hablar de esa cueva, por eso llevaba el bolígrafo. Ellos anotaron sus nombres. Claudia quería guardarlo en su mochila, pero Miguel lo agarró. “Es mejor que yo guarde algo tan importante. Creo que lo vas a perder después de cuatro o cinco días.”  días.”  “Tienes razón. Siempre se me pierden las cosas. Es más seguro que lo tengas tú. ¿Tienes hambre? ¿Qué quieres comer?”  comer?”  Miguel no había almorzado y tenía mucha hambre. Vio a Claudia abrir su mochila como si fuera un cofre del tesoro. Ella sacó dos bebidas energéticas, una tetera caliente, dos envases de fideos instantáneos y algunos bocadillos.

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel tenía muchas preguntas. ¿Esta niña subió a la montaña y empacó una mochila llena de comida?

“¡Oh, y también chocolate!”   Claudia agarrótengo los chocolate!”  dos empaques de chocolate que acababa de sacar y le ofreció otros chocolates. “Este “Es te sabe mejor. Prueba estas que son de  Argentina.”    Argentina.” “Este... Tienen muchas calorías... ¿Se puede comer?”  comer?”  Miguel no estaba seguro si comerlas o no. Él no quiso rechazarla y le dio un mordisco. Tenía un extraño sabor…  sabor…  Miguel fue severamente disciplinado por sus padres desde la infancia y nunca comió comida chatarra. Era la primera vez en su vida que comía chocolates. El chocolate tenía un sabor un poco extraño, era amargo y también dulce, como el amor. Probó las papas fritas importadas de Rusia y se las comió todas. Estaban deliciosas. “¿Qué son esos?”  esos?”  “Chocolates M&M's, ¿quieres probarlos?”  probarlos?” 

Sí. Dame uno.  

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Y esos?”  esos?”  “Estos son chocolates de México.”  México.”   “¡Dame esos también!” Después de eso,

Miguel no preguntó qué eran los otros y los agarró sin decir nada. Capítulo 94 

Javier recibió el mensaje de Miguel y fue a buscar de inmediato a los rescatistas. Cuando llegaron, encontró a Miguel sentado en un cojín y estaba comiendo fideos instantáneos con Claudia. Ellos estaban comiendo juntos esos fideos instantáneos mientras él le decía: “¿Eso también se puede comer?”  comer?”  Javier estaba con la boca abierta. ¿Era este el caballero que siempre comía con él las comidas de primera calidad? El líder del equipo de rescate también estaba sorprendido: “¿Necesitaban “¿Necesitaban que los rescataran? Siento que estamos aquí molestándolos.”   molestándolos.” “Esperemos a ver qué pasa…”  pasa…”  Dijo Javier.  Así que todos ellos esperaron afuera a que

salieran los enamorados.

 

  Dueño de mi Cuerpo  Al terminar de comer los fideos instantáneos, Claudia estaba totalmente llena y recogió toda la basura.

“Oye, quiero pero quedarme contigo todavía por un tiempo, el equipoaquí de rescate está afuera. Bajemos de esta montaña.”   montaña.” “Si quieres, podemos volver de nuevo.”  nuevo.”  “Eso suena bien. Vámonos de aquí.”  aquí.”  Con la ayuda de Miguel y el equipo de rescate, Claudia bajó lentamente de la montaña. Después llamaron a un médico. Se sorprendió cuando vio a Lucas. ¿Por qué estaba aquí? Lucas la ayudó a curarse la herida y le pidió que prestara atención de que no tocara el agua y que tenga cuidado al caminar. Y también le dijo que tardaría alrededor de una semana para sanarse por completo. Lucas terminó y dijo: “¿Has visto a Beatriz? Se peleó conmigo por teléfono y colgó. No sé en dónde está.”  está.”  “¿Viniste para buscar a Beatriz?”  Beatriz?”  “Cuando llegué, vi que estabas herida. herida. Fue el destino que nos hayamos encontrado.”  encontrado.” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel, por un lado, se sintió incómodo cuando escuchó eso. “¿A eso le llamas destino?”  destino?” 

Él no pudo evitar interrumpir su conversación. Lucas se le quedó mirando y no le dijo nada. “Claudia, necesitas descansar descansar ahora mismo. Tengo algo que hacer con Lucas.”  Lucas.”  Miguel lo dijo muy apurado, y luego sacó a Lucas. Cuando salieron, notó que algo andaba mal con Miguel. Estaba lleno de sudor y las venas de su frente parecían que iban a explotar. “¿Qué te pasa?”  pasa?”  “Parece que tengo un dolor en el estómago.”   estómago.” Una hora después, Miguel salió de un hospital cercano. Se había hecho un lavado gástrico y tomó algunos medicamentos. Su rostro estaba un poco pálido. Lucas lo envió de regreso y le dijo: “Te sugiero que te quedes en el hospital. Aquí no hay equipo médico. Incluso si estoy

 

  Dueño de mi Cuerpo aquí, solo podría darte algunos medicamentos.”   medicamentos.” “No debes dejar que Claudia lo sepa, de lo

contrario ella se por mí.”  mí.”   los “¿Qué fue lo preocuparía que comiste? Miré resultados de tu gastroscopia. Todo lo que tenías adentro era comida chatarra.”  chatarra.”  “No era comida chatarra. Es lo que le gusta comer a Claudia.”  Claudia.”   Al escuchar eso, Lucas supo que Miguel estaba enamorado. “Como médico, necesito decirte que tu dieta alimenticia y tu sistema inmunitario es diferente. Ella estará bien si come eso, pero tu sagrado estómago no puede comer comida chatarra. Todas esas cosas son venenosas para ti. No podré salvarte si necesitas que te abran el estómago.”  estómago.”  “No me maldigas.”  maldigas.”  “Como médico, ¡tengo el deber de decirte que podrías morir!” morir!”   Lucas lo dijo muy serio. Miguel sacudió la cabeza. Este amigo suyo es demasiado serio. Hacía que los pequeños problemas se vieran grandes, lo que era muy anticuado y pesado.

Quiero ser parte de su mundo.  

 

  Dueño de mi Cuerpo “Tú y ella no son del mismo mundo.”  mundo.”  “Pero debe haber alguien que se comprometa. No es lo suficientemente

inteligente y tampoco coraje. No podría soportar ser tiene parte mucho de mi mundo. Temo que sufra mucho, por eso he tomado la decisión de ser parte de su mundo.”  mundo.”  “¿Así que quieres comer comida  comida  venenosa?”   venenosa?” “Tomaré el tiempo que sea necesario. La primera vez que coma, talvez seré hospitalizado. La segunda vez, que solo me inyecten. La tercera, que solo tenga que tomar medicamentos. Me acostumbraré si lo hago varias veces.”  veces.”  “De verdad qué estas mal de mal de la cabeza. Te lo diré de nuevo. Si sigues así, tu vida se acortará.”   acortará.” “¿Puedes dejar de ser tan serio? ¿No crees que a esto se le puede llamar felicidad?”   felicidad?” “Burlarse de la vida no es una felicidad.”  felicidad.”  “Eso es porque todavía no has amado a nadie. Puedes darlo todo por ella y disfrutarlo.”   disfrutarlo.”

 

  Dueño de mi Cuerpo Lucas estaba ordenando su caja de medicinas. Cuando escuchó eso, sus dedos temblaron con mucha fuerza.

Hizo pausaa la durante varios segundos antes una de volver normalidad. “Voy a buscar a Beatriz, así no perturbaré tu felicidad. Por cierto, Kelly regresará pronto. Ella también pidió el día libre.”  libre.”  “¿Por qué no me lo dijo? ¿Todo tiene que pasar por tu boca?”  boca?”  “Eso no lo sé. Tienes que preguntarle.”  preguntarle.”  Le dijo Lucas como si nada. Luego se fue con sus cosas. Lucas encontró a Beatriz. Estaba cansada y sin aliento. La gente del departamento le ordenó de nuevo comprar muchas cosas.  Ahora es que tenía tiempo para descansar. “Beatriz.”   “Beatriz.” De repente ella escuchó que alguien la llamaba por su nombre. Ella no reaccionó de inmediato. Era la voz de Lucas, pero pensó que los del departamento le habían pedido que volviera a comprar algo, así que se apresuró a responder. “Ya voy. ¿Qué más quieren comprar?”  comprar?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Se dio la vuelta rápidamente y vio a Lucas. Se enojó y dijo muy seria: “¿Por qué estás aquí?” aqu í?”  

“Te pedí que fueras la casa delColgaste tío este fin de semana, pero aviniste aquí. la llamada y vine a buscarte.”  buscarte.”  “Tú le prometiste al tío que lo ibas a acompañar a cenar. No fui yo, ¿por qué debería ir?”  ir?”  “De verdad que entre más tiempo pase, más testadura eres. Ya le prometí al tío. No hagas que te lleve a la fuerza.” f uerza.”   “¡Lo que quieras!”  quieras!”  Lo dijo con tristeza. En ese momento, alguien le pidió a Beatriz que comprara agua. Ella lo hizo de inmediato. Lucas frunció el ceño de enojo. Ella siempre fue arrogante y no le obedecía a nadie. Por eso no quiso alistarse en el ejército y cambió de profesión. Pero ahora, ¿se tragó su orgullo y está ayudándolos a comprar agua? Él la siguió. Vio a Beatriz ir a la tienda y llevar varias botellas de agua a sus

colegas.

 

  Dueño de mi Cuerpo Pero ellos no le dieron las gracias, ni siquiera un centavo. Beatriz no estaba enojada, al contrario,

estaba y dio media vuelta.  Al ver contenta que estaban tomando ventaja de Beatriz, Lucas corrió hacia adelante y dijo: “¿Por qué la llaman para hacer esas cosas? ¿No tienen manos ni pies?”  pies?”  “¿Quién se cree que es esta persona? ¿Por qué te metes en lo que no te importa?”   importa?” “¿Qué tal si te doy una golpiza?”  golpiza?”  Lucas lo dijo muy dominante. Después la agarró de la camisa y levantó el puño. Beatriz se apresuró a detenerlo, lo apartó y se disculpó por él. “¡Qué carajo!”  carajo!”  Lucas comenzó a maldecir. Era obvio que Lucas estaba enojado y quería darles una lección, pero Beatriz lo detuvo a la fuerza. Lucas agarró su pequeña mano y dijo: “Ven a casa conmigo. Te maltratan mucho en la empresa de Miguel. ¿Cómo puedo dejar que te traten así? Yo te criaré, así no tendrás que trabajar tan duro.”  duro.” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “¡Lucas, deja de decir esas cosas! Tú eres tú y yo soy yo. Nuestros padres no están vivos, así que no tienes que preocuparte

por misea propia y me agusta vivir mí. así.Tengo ¡Lo que quevida, me vayas dar, nunca será mío!”  mío!”  “¡Todo lo que tengo es tuyo!” Dijo Lucas enojado. Capítulo 95 

“¡No! ¡Nunca lo será!”  será!”  Beatriz dijo lentamente cada palabra. Lucas sintió que esas palabras golpeaban su pecho. Desde que murieron sus padres, su hermana ha sufrido demasiadas dificultades, por eso su temperamento ha cambiado mucho. Él había tolerado ese cambio desde el principio. Talvez también era culpa suya por haberla consentido tanto. Ella siempre dependía de su hermano. Si tenía algún problema, no se lo decía a sus padres, y al primero que se lo contaba era

a su hermano.

 

  Dueño de mi Cuerpo Pensó que eran como mejores amigos y que podrían ser felices para toda la vida. Pero ahora ella lo odiaba, lo consideraba

su enemigo posible de él.y trataba de estar lo más lejos Él no entendía que fue lo que hizo mal para que ella lo odiara tanto. Lucas bajó la cabeza, ocultando un gran dolor. Ella era muy reservada y difícil de entender. Después de un tiempo, le dijo más calmado: “Beatriz, ¿qué hice mal para que me odies tanto?”  tanto?”  Beatriz tembló cuando escuchó eso. Miró a Lucas impactada, sintió que su corazón latía con más fuerza. Él no había hecho nada malo. Este hermano ha estado cumpliendo con su deber por más de 20 años y era muy bueno con ella. Desde pequeña hasta ahora, todos la envidiaban por tener un hermano así. Ella solía pensar que era muy bueno, pero cuando creció, empezó a odiarlo.

Ella no quería tener a este hermano.

 

  Dueño de mi Cuerpo ¡La palabra “hermano” era algo muy especial! “No hiciste nada malo. Siempre has sido el

orgullo de nuestros padres. Soy yo lahaber que ha hecho todo mal. No debería nacido en una familia así.”  así.”  “Sé que no quisiste alistarte en el ejército. Nadie te iba a obligar, ni siquiera yo. Solo queríamos que estuvieras feliz. Si tanta rabia tienes de verme, entonces no volveré a aparecer en frente tuyo de ahora en adelante.”   adelante.” Lucas decidió que eso era lo mejor. Según su voz, estaba muy decidido de esa decisión. Ser odiado por las personas más amas es lo peor que te puede pasar. Ella era su hermana y no podía ser cruel con ella. Incluso cuando le hablaba en voz alta, sintió que se estaba pasando de la raya.  Algunos dicen que las chicas no pueden ser arrogantes. Cuanto más las complazcas, peor se pondrán.  A él no le importaba. Tenía solamente una

hermana, si quién no lalo haría? iba a complacer, ¿entonces con

 

  Dueño de mi Cuerpo Incluso si todo el mundo dice que Beatriz no es buena, él los ignoraría y se pondría del lado de Beatriz para protegerla contra

viento Esa eray marea. su única misión en esta vida. Beatriz no estaba feliz cuando escuchó eso, pero pensó que esa era la mejor solución. “Sí, me enojo cada vez que te veo. ¡No vuelvas a aparecer enfrente mío!”  mío!”  “Está bien.”  bien.”  Él le respondió y se alejó sin mirar atrás.  Al irse, ella solo pudo ver su espalda recta, y no se dio cuenta de que sus ojos se estaban humedeciendo en ese instante. De repente sintió un gran dolor. Era como si una gran roca estuviera encima de él, haciendo que no pudiera respirar.  A veces, aunque duela lo más sano es decir adiós. Ella regresó a su habitación. Al ver que estaba deprimida, Claudia preguntó muy preocupada: “¿Qué tienes? Parece que no estás feliz.”  feliz.”  “Claudia, hice que la persona que más

amaba desapareciera.  

 

  Dueño de mi Cuerpo Beatriz no pudo evitar correr hacia ella y abrazarla con todas sus fuerzas. Claudia se sorprendió. Ella estaba llorando

en En su suhombro. mente, Beatriz siempre era la más fuerte. Incluso si sangraba por una herida, no lloraba para nada, pero esta vez estaba llorando. Parecía una niña indefensa. Se apresuró a consolarla. Había miles de palabras reconfortantes que le podía decir, pero no sabía por dónde empezar. No sabía por qué Beatriz estaba llorando. ¿Qué quiso decir con “que la persona que más amaba desapareciera”?  desapareciera”?  ¿Ella tenía un novio? “Beatriz, “Beat riz, aunque no sé qué te pasó, no me separaré de ti. Siempre te estaré apoyando.”   apoyando.” Beatriz lloró por un tiempo y comenzó a sentirse más aliviada. Ella se secó las lágrimas, dejó de abrazar a Claudia y dijo: “Eres más delgada que yo. ¿Cómo vas a poder apoyarme? Te caerás si me apoyo de ti.”  ti.” 

¡Entonces estaré cuando en el piso primero  para que no te lastimes te caigas!

 

  Dueño de mi Cuerpo “¡Tonta!”   “¡Tonta!” Beatriz no supo que más decir. “Por cierto, ¿qué te pasó? ¿No era que tu

hermano te ¿Por estaba ¿Te  lo encontraste? qué buscando? volviste llorando?”  volviste llorando?” “Si me lo encontré. Por eso lloré.”  lloré.”  “¿Te hizo algo?”  algo?”  “Claudia. Mi familia es un poco complicada.”   complicada.” Ella respiró hondo después de decir eso. Su familia ha sido muy popular por generaciones. Ellos habían sido parte del ejército y cada generación era mejor que la anterior. Los hombres eran los más importantes y no valoraban mucho a las mujeres. Pero ellas no podían escapar de la tradición. También tenían que ser parte del ejército. Beatriz no quería seguir con esa tradición y sus padres la defendieron frente al abuelo. Lucas no tenía una buena condición física desde que era un niño y no completaba los requisitos para ser soldado. Por eso eligió ser un médico militar. Desde que eran niños, ella siempre se

metía en problemas y Lucas la ayudaba a resolverlos.

 

  Dueño de mi Cuerpo Su mala condición física también se debía a que su abuelo siempre estaba enojado y le golpeaba fuertemente las piernas.

Por esta razón, estuvo casi un año entero antes de volver a lacojo normalidad. Ese año, fue ridiculizado y retrasó su alistamiento en el ejército. Ella todavía sentía lástima por Lucas. Después de eso, su abuelo murió. No pasó mucho tiempo y sus padres también fallecieron. Ellos no tenían quien los cuidara, por eso su tío aceptó que vivieran con él. Lucas comenzó a unirse al ejército. Ella ya no tenía la obligación de ser parte del ejército y eligió lo que le gustaba. Pero luego, descubrió que no escapó de su destino, sino que Lucas aceptó pagar un castigo en cambio de su libertad. En cuanto a qué era el castigo, Lucas no se lo iba a decir, al menos no en esta vida. Pero lo que Lucas no sabía era que ella ya lo había descubierto. Por eso ella quiso que se alejara, y no volverse una carga para él.

Siempre erapero el hermano quien protegía a la hermanita, esta hermanita también

 

  Dueño de mi Cuerpo quería hacer todo lo posible para proteger a su único hermano. Ella pensaba que para que no siguiera

sufriendo Ella…   más, tenía que alejarse de ella. Ella… Era el más grande sufrimiento que había tenido Lucas. Era una carga que no se podía quitar de encima. Después de escuchar toda la historia, Claudia no pudo evitar suspirar. No se imaginaba que Beatriz tuviera este tipo de sentimientos en su corazón durante todos estos años. Era abrumador y hasta daba miedo. “¿Qué tienes planeado en hacer después?”  después?”  “Hice que desapareciera desapareciera de mi vista. Siempre he sido un problema para él.”  él.”  “¿Se lo has preguntado alguna vez al doctor Lucas?”  Lucas?”  “¿Qué necesito preguntarle?”  preguntarle?”  Beatriz se rio de sí misma. Su sonrisa parecía falsa. Pero en sus ojos se notaba que tenía un gran dolor.

 

  Dueño de mi Cuerpo Resulta que Beatriz, que parece fuerte, tiene muchos sentimientos escondidos en su corazón.

Debe ser difícil decirlo después tenerlos guardados por tanto tiempo. “Todavía me tienes. Yo te protegeré.”  protegeré.”  Claudia se dio unas palmaditas en el pecho y lo dijo con una sonrisa. “Sí, me alegro de tenerte todavía.”  todavía.”  Beatriz lo dijo con mucha sinceridad. Al menos cuando tenía problemas con la familia, todavía estaba su mejor amiga a su lado. Capítulo 96 

En la noche, las personas que subieron a la montaña fueron a las aguas termales. Claudia estaba herida del pie, por eso no fue y Beatriz se quedó en la habitación para cuidarla. Podía quedarse sola, pero Beatriz insistió en acompañarla. Cuando fue a buscar algo de comer, escuchó unos chismes.

 

  Dueño de mi Cuerpo Mientras todos ellos estaban en las aguas termales, una chica cayó al agua, y al parecer le dio un ataque al corazón.

Todos estaban asustados e inmediatamente pidieron ayuda. Miguel fue el primero en llegar. Miguel rescató a esa persona y la envió a un hospital cercano. Incluso dijeron que Miguel le dio respiración boca a boca y tocó los pechos de esa persona.  Aunque sabía que esta es la operación básica para salvar a una persona, todavía no le gustaba lo que escuchaba. La boca de Miguel solo podía ser tocada por la de ella. ¿Por qué otra persona lo tocó? Y sus manos solo podían tocarla a ella. No importa si tenía los pechos pequeños, fue él quien aceptó estar con ella. “¡Maldito Miguel!”  Miguel!”  Dijo Claudia enojada. Beatriz la miró y dijo con una sonrisa: “¿Estás celosa?”  celosa?”  “¡No “¡ No solo comí, sino que también tengo

que compartir!   Claudia dijo incómoda.

 

  Dueño de mi Cuerpo “Puedes preguntarle cuando vuelva. ¡No tienes que ponerte así!”  así!”  Claudia se negó a volver a su habitación y

esperó afuera. Beatriz solo pudo acompañarla. Todos los demás volvieron a sus habitaciones para dormir, pero ellas aún estaban sentadas en las escaleras. Miguel y Lucas regresaron juntos y estaban charlando de lo más normal. Cuando regresaron, parecía que veían a dos cachorritas. Las dos chicas tenían tanto sueño que no podían mantener los ojos abiertos. “¿Claudia?”   “¿Claudia?” Miguel se acercó y le tocó el hombro a Claudia. Ella se despertó y vio que había regresado. Ella inmediatamente se puso de pie. “Has regresado. Escuché que le diste respiración boca a boca a alguien, ¿es verdad?”   verdad?” “¿Quién te dijo eso?”  eso?”  “No importa quién me lo haya dicho. Besaste a alguien y también la tocaste,

¿es verdad? contenta.

Claudia no estaba muy

 

  Dueño de mi Cuerpo Él no era el único que estaba en las aguas termales. ¿Dónde estaban las otras personas? ¿Por qué tenía que ser él quien

la tenía que salvar? Ella se sintió muy mal al pensar en eso.  Al escuchar su comentario, Lucas dijo: “Eso no es besar y tocar. Eso es dar los primeros auxilios. Le presionó el pecho para que expulsara el agua que tenía dentro, ¿entiendes?”  ¿entiendes?”  “Sí. Claudia, Claudia, no debes pensar mal. Eso fue una actividad médica.”  médica.”  “Entonces, ¿por qué no lo hizo otra persona? ¿Por qué fuiste tú?”  tú?”  “Antes que todo, él es el jefe. ¡La seguridad de los empleados es primordial!”  primordial!”  Beatriz explicó. Ella estaba un poco avergonzada de ver a Lucas por lo que le había dicho antes. Lucas la miró de forma diferente, como si estuviera mirando a un desconocido. Él estaba tratando de controlar sus emociones y no seguir mirándola. “Ella tuvo un ataque al corazón. ¿Por qué tuviste que darle respiración respiración boca a boca?”

Miguel vio la sonreír. mirada celosa de Claudia pudo evitar “Es verdad, tuvoy no un

 

  Dueño de mi Cuerpo ataque al corazón, se desmayó en las aguas termales y al final se ahogó en el agua. Es cierto que la salve al principio,

pero no sino fui yoLucas. quien Afortunadamente le dio respiración boca a boca, él es médico y supo qué hacer. Yo solo lo iba a estorbar.”   estorbar.” “¿Fue el doctor Lucas?”  Lucas?”  “¿Qué? ¡Fuiste tú!”  tú!”  Beatriz exclamó. “Parece que será la próxima vez que podremos tomarnos unos tragos. No te molestaré. Tengo que conducir esta noche.”   noche.” Lucas no le dijo nada a Beatriz. Dio media vuelta y comenzó a irse. Beatriz estaba desesperada. Le apretó la muñeca y dijo: “¿Besaste a alguien y también la tocaste?”  tocaste?”   “Oye Beatriz, ¿no me convenciste de que era una actividad médica?” médica?”   “Eso era diferente. ¡Pensé que era Miguel!” Beatriz miró a Lucas y dijo: “¡Acaso estás mal de la cabeza!”  cabeza!”  “Soy médico. ¿No debería ayudar a las personas?”   personas?”

Había tanta gente, ¿Por qué tenías que ir?” ir?”   

 

  Dueño de mi Cuerpo “Soy médico. Tengo ética profesional. Bueno, se está haciendo tarde. Que descansen bien.”  bien.” 

Lucas Beatriz.lo dijo sin ganas y apartó la mano de Beatriz lo persiguió. Claudia parecía que estaba mareada. Desde un principio fue sobre su traición. ¿Cómo se convirtió en la traición de Beatriz? En ese momento, sus piernas se levantaron, y lo primero que agarró fue el cuello de Miguel. Él la estaba cargando en sus brazos. “¿Qué estás haciendo? Bájame ya mismo. ¿Qué pasaría si alguien nos ve?”  ve?”  “Todo el mundo está durmiendo ahora mismo. Nosotros también deberíamos irnos a dormir.”  dormir.”  Miguel la llevó a su habitación. Él todavía se sentía débil, pero tenía fuerza suficiente para cargarla. “No esperaba que estuvieras muy celosa. ¿Ni siquiera vas a dejar que le dé respiración boca a boca a alguien?”  alguien?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “No te detendré si es ur gente. gente. ¿Pero por qué tenía que ser tú? ¡Javier también estaba ahí!”  ahí!” 

“Ya entiendo. en las adelante, pensaré primero De antesahora de hacer cosas. Soy el hombre de alguien. Tengo cosas que puedo y no puedo hacer.”  hacer.”  “Me alegro de que lo sepas. ¡Escuchar esos chismes era como si fuera un drama de televisión!”  televisión!”  “Bueno, espérame aquí. Me daré un baño y dormiré más tarde.”  tarde.”  “Esta vez… ¿También tengo que darte dinero?”   dinero?” “¿Tienes algo menor de un dólar?”  dólar?”  “Sí, tengo cincuenta centavos.”  centavos.”  “Entonces solo podemos dormir juntos.”  juntos.”  Miguel le dijo con una sonrisa. Cuando él terminó de bañarse, vio a Claudia revisando sus redes sociales. “¿Te gustan los gatos?”  gatos?”  Él echó un vistazo a lo que estaba viendo. “Sí, siempre me han gustado los gatos.”  gatos.”  “En el futuro, puedes criar a un gato, gato , y yo mantendré de ti, ¿está bien?”  bien?” 

Miguel lo dijo con una cálida voz.

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella se sintió muy bien al escuchar esas palabras. Y se conmovió mucho en su interior.

“Bueno, espero que cumplas lo que dices. Tendremos una habitación llena de gatos cuando nos casemos.” casemos.”   “Puedes tener una habitación llena de gatos, pero yo solo quiero tenerte a ti.”  ti.”   En esta vida, mantenerla era mucho trabajo. Claudia se sintió muy feliz cuando escuchó eso. Ella se acostó en sus brazos y continuó  jugando con su teléfono celular, pero él tenía que lidiar con unos asuntos del trabajo. El ambiente era muy agradable y cada uno estaba haciendo lo suyo. Cuando él terminó con su trabajo, ella ya estaba profundamente dormida. Parecía un gato con sus delgados brazos envueltos alrededor de él. Miguel estaba muy contento. Sabía que era una tortura estar con ella en la misma cama, pero iba a aguantarla porque él

también quería dormir abrazado de ella.

 

  Dueño de mi Cuerpo Esa tortura no era nada comparándolo con la felicidad que sentía.  Al día siguiente, Claudia se levantó

temprano. ya tenía experiencia. Ella sonrióEsta y levez, pagó a Miguel con una moneda de cincuenta centavos. Ella estaba a punto de irse, pero escuchó que afuera venía alguien. Claudia estaba tan asustada que fue corriendo al baño a toda velocidad. De repente, alguien llamó a la puerta. Miguel recogió todo y fue a abrirla.  Afuera estaba la persona que salvó anoche. Después de permanecer en el hospital toda la noche, regresó sana y salvo. Claudia abrió un poco la puerta del baño y pudo ver todo lo que pasaba. Capítulo 97 

Ella conocía a esa chica. Se llamaba Luna y era muy hermosa.  Además, era muy amable y agradable. Había muchos hombres en la empresa que trataban de conquistarla.

Beatriz que algunas personas del viajetambién estabandijo aburridas y organizaron

 

  Dueño de mi Cuerpo un concurso de belleza. Luna estaba en la lista de participantes. Todos ellos pensaban que Claudia también

era Lunahermosa. miró a Miguel tímidamente y dijo: “Señor Miguel, muchas gracias por salvarme ayer.”  ayer.”  Todos ellos pensaban que Claudia también era hermosa. Luna miró a Miguel tímidamente y dijo: “Señor Miguel, muchas gracias por salvarme ayer.”  ayer.”  “Solo soy responsable de llevarte al hospital. Fue el doctor Lucas quien te salvó. Deberías agradecerle a él.”  él.”  “Se lo agradeceré más tarde. Primero quería agradecerle a usted. Por cierto, también quería decirle un secreto.”  secreto.”  “¿Qué me querías decir?”  decir?”  “Señor Miguel… Me gustas. Escuché que todavía estás soltero, así que pienso conquistarlo.” conquist arlo.”   “No es necesario. No podrás conquistarme.”   conquistarme.” Miguel lo dijo sin rodeos.

 

  Dueño de mi Cuerpo “Miguel, no necesita aceptarme ahora. Lo intentaré poco a poco. Por favor, deme una oportunidad.”   oportunidad.”

Luna lo dijo con desesperación. “Lo siento. Nomucha te puedo dar ninguna oportunidad. Puedes ir a agradecerle al doctor Lucas. Ya no tienes más nada que hacer aquí.”  aquí.”  Miguel le dijo eso, pero sus palabras no sonaron muy bien.  A Luna se le rompió el corazón cuando él la rechazó. Ella entró de prisa, y Miguel no tuvo tiempo para detenerla. Cerró la puerta de un golpe y luego…  luego…  De la nada, se quitó el abrigo. ¡No tenía nada por dentro! Claudia tenía la boca abierta y también estaba impactada por la osadía de esa chica. Nadie se esperaba que hiciera tal cosa. ¡Dios mío! Esta chica tenía una buena figura. Su piel era blanca y hermosa. Piernas largas y cintura de avispa.

 

  Dueño de mi Cuerpo Tenía buenas curvas y ningún exceso de grasa. Medía 1.7 metros de altura, casi la misma que la de Miguel.

Sus rasgos faciales la de delicada parecían salidas de unayobra arte. piel Si Claudia fuera un hombre, ¡seguro la hubiera llevado a la cama! Pero... ¡A su hombre no le servía! ¡Esta chica estaba haciendo todo eso por gusto! Miguelinmensa frunció elenceño enojo.y Sintió furia su de interior estabauna a punto de explotar. Luna no podía entender su expresión y no tenía otra opción. Ella ya no tenía marcha atrás. Ella respiró hondo y su pecho comenzó a temblar. Claudia estaba sudando y comenzó a sentirse extraña. Se tocó la nariz y descubrió que estaba sangrando. “Esta es mi recompensa. Gracias Miguel por salvarme la vida. Estoy dispuesta a usar mi cuerpo como paga. Miguel, esta...

Es mi primera vez.  

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella lo dijo con mucha timidez y se mordió sus labios rojos. Ningún hombre se iba a resistir a no estar

con una mujer virgen. Después de todo, Miguel es un hombre. Ella estaba segura de que iba a caer en la tentación. Miguel la miró de arriba a abajo, y sus ojos se posaron sobre ella, haciéndola temblar de miedo. Incluso el calefactor sintió un con escalofrío por todoencendido, su cuerpo. c uerpo. ella Primero lo sintió desde las plantas de sus pies y se extendió por todo su cuerpo. Ella no era una persona sinvergüenza, y esta es la primera vez que hacia una cosa así. Miguel no decía nada y ella se sintió muy avergonzada. ¿Quería que fuera más atrevida? Ella se llenó de valentía y trató de acercarse, pero Miguel dio un paso atrás y la evitó. Todavía no decían una palabra y se notaba en su rostro que estaba muy serio.

¿La comprar empresaropa?”  J? C no para ropa?”   te paga lo suficiente

 

  Dueño de mi Cuerpo “Qué...”   “Qué...” Luna lo miró fijamente. ¿Miguel es una persona que no entiende sobre propuestas

indecentes o lo estaba haciendo a propósito por temor a que ella lo chantajeara? Ella dijo: “Miguel, no tengo ninguna cámara ni menos una grabadora. Simplemente lo amo y estoy dispuesta a ofrecer mi primera vez a un excelente hombre como usted. No lo amenazaré con esto en elNofuturo. Después de esto, renunciaré. tendrías que preocuparte de nada.”  nada.”  “¿Así que has estado interesada en mí?”  mí?”  Miguel lo dijo como si estuviera emocionado. “Sí. Usted es lo que podríamos decir como el hombre perfecto.”  perfecto.”  “Pero yo no estoy interesado en ti.” Miguel lo dijo sin mostrar ninguna emoción. Luna lo miró fijamente y pensó que había escuchado mal. Ella era muy hermosa y tenía buena figura. Se ofreció a él sin que tuviera que hacer algo y ahora… ¿La estaba rechazando?  rechazando? 

Miguel... bromeando?   Ella lo dijo¿Estás muy nerviosa.

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿De dónde sacaste tanta confianza en venir aquí? No estoy interesado en una relación sexual. Trato de evitar esas

distracciones. Espero que cuando te vayas, presentes tu renuncia. No quiero que tu moral arruine nuestra empresa.”  empresa.”   Luna se sonrojó al escuchar tal humillación. Fue rechazada y a la misma vez despedida. No estaba interesado en una¡Era relación sexual y trataba de evitarlo… ¡Era obvio que es un mentiroso! Ella se vistió y dijo: “Dicen que el jefe de la empresa no le gustan las mujeres. Parece que es cierto. ¿Acaso te gustan los hombres?”   hombres?” Ella lo dijo sin vacilar. De todos modos, iba a renunciar. “Nunca dije eso. No es necesario  necesario   que vayas a agradecerle al doctor Lucas. Yo se lo diré, así no tendrás que molestarlo.”  molestarlo.”  Miguel lo dijo como si nada.  Al escuchar eso, Luna no pudo evitar pensar en algo.

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel fue anoche a las aguas termales con Lucas. Estos dos hombres fueron  juntos.

Podría aventura?ser que... ¿Ellos tenían una “Ya veo. No te molestaré.”  molestaré.”  Luna se fue con la cola entre las patas. Claudia estaba en el baño y había escuchado todo. Lo que dijo Miguel ciertamente haría que Luna mal. Claudia de quepensara Luna esparciría por estaba toda la segura ciudad la noticia de que a Miguel le gustaban los hombres. ¿Miguel es estúpido por cometer un error tan obvio? Vio que Luna se había ido y salió corriendo de inmediato. “Miguel, ¿acaso eres tonto? ¿Por qué hiciste que malinterpretara las cosas?”  cosas?”  “¿Por qué estás así?”  así?”  Miguel frunció el ceño. La nariz de Claudia no dejaba de sangrar. La llevó de regreso al baño, la limpió e hizo que levantara la cabeza.

“¿Cómo fue que te pasó eso? yo reaccioné de esta forma.” forma.”    Ni siquiera

 

  Dueño de mi Cuerpo “Su cuerpo... Er a muy sensual y se me subió la presión.”  presión.”  No era como él, que no parecía ser una

persona normal. ¡Una persona normal hubiera tenido alguna reacción! Miguel no sabía si reír. Esta niña se dejaba llevar por esas cosas. Después de que la sangre se detuviera, volvió al tema: “Miguel, debes encontrar a alguien que mal de ti!”  ti!”   detenga a Luna. ¡Ella hablará “Yo temo que no hable de eso.”  eso.”  “¿Qué?”   “¿Qué?” Claudia estaba un poco confundida. “Desde que revelé mi apariencia, muchas personas me han estado persiguiendo. ¿No es bueno dejar que el mundo exterior piense que soy gay y poner fin a mis problemas? Esto también puede poner fin a tus preocupaciones de que me vaya con otra persona.”  persona.”  “¿Lo hiciste a propósito?”  propósito?”  “¿Qué tú piensas?”  piensas?”  Miguel levantó las cejas y dijo: “¿Crees

que estoy estoy sacrificando demasiado?”  demasiado?” 

 

 

Dueño de mi Cuerpo

Capítulo 98

“Por eso tienes que compensarme. No deberías de mi una lado, de lo contrario noapartarte podré encontrar esposa.” esposa.”    Miguel asintió con la cabeza. “De hecho, no necesitaba que fuera de esa forma. Ese sacrificio es demasiado grande y malo para tu reputación. No me gusta que otros hablen mal de ti. Me hace sentir incómoda. Es bueno persigan, muy eso demuestra que eresqueunte hombre encantador. ¡También creo que eres un hombre leal y que no me traicionarías!” traicionarías!”   Después de todo, la mente es fuerte, pero la carne es débil. Miguel no esperaba que ella estuviera tranquila después de todo lo que sucedió. “¿No estabas preocupada en lo absoluto?”  absoluto?”   “La verdad es que tenía algo de preocupación, ¡pero elijo confiar en ti!”  ti!”  “Pero no eras así anoche.”  anoche.”  “¡Lo he pensado bien, y decidí confiar en ti!” Ella puso su mano en el pecho y lo dijo con orgullo.

Miguel cálidodices abrazoesy leverdad dijo: “No importale sidio loun que o

 

  Dueño de mi Cuerpo mentira, te voy a creer. Lo que voy a hacer esta vez es, sin importar si me lo pidas o no, no me juntaré con otras mujeres para

que no sientas celos. Evitaré cualquier posibilidad de que suceda.”  suceda.”  “Hay cosas que no puedo hacerte en público, pero las haré en privado.”  privado.”  “Lo que sea que tengan tengan otras mujeres, tú también lo tienes. Y mientras yo esté aquí, nada te faltara.”  faltara.”  Claudiamás se conmovió cuando escucho eso. ¿Qué puede pedir si tiene un marido así? “Quiero las estrellas del cielo. ¿Me las puedes dar?”  dar?”  “Espera un minuto.”  minuto.”  Dijo Miguel. Luego marcó el número de Javier: “Javier, comunícate con la institución astronómica y averigua cuál es la estrella más cerca. Quiero que compres...”  compres...”  “¡Que compre ni qué ocho cuartos!”  cuartos!”   Antes de que Miguel terminara de hablar, Claudia tomó su teléfono móvil y lo colgó de inmediato.

“¿No lo quieres?”  quieres?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Solo era un decir. ¿Qué pasa si digo que quiero tu corazón?”  corazón?”  “Puedes tenerlo ahora mismo.” “Parece

que no puedo seguir bromeando contigo. Me vas a dar un susto terrible. ¿Estás tan loco que ibas a comprar una estrella? ¡Si vas a quedarte en bancarrota, no quiero que sea de esta manera! Si no sabes cómo gastar tu dinero, puedes dármelo y lo guardaré por ti. En caso de que te quedes pobre en el futuro, lo daré de vuelta!”  vuelta!”   “Está bien. Te haré¡tecaso. Puedes hacerte cargo del dinero de nuestra familia. ¿Te parece bien?”  bien?”  Miguel se lo dijo de forma consentida. Claudia estaba satisfecha con lo que dijo: “Eso era lo que quería escuchar.”  escuchar.”  “Por cierto, Luna estaba desnuda enfrente tuyo. ¿No pensaste en nada?”  nada?”  “Sí” Miguel admitió admitió con franqueza. Claudia está muy contenta de que finalmente tenga la reacción de un hombre normal. “¿Por ejemplo?”  ejemplo?”  “Te comparé con ella y me dejo algo muy

claro.” claro.”  “¿Qué  fue?”  fue?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Que tu pecho necesita más carne. No es de extrañar que siempre tengas hambr e.”  e.”  Claudia no sabía que más decir y quería

que se la tragara la tierra.  Aunque el viaje no fue perfecto, en general fue muy divertido. Después de que Claudia regresara, todas las noticias fueron sobre la atracción sexual de Miguel. Sabía que Miguel lo había hecho a propósito. Muchas de ysus compañeras estaban desilusionadas la llamaron para saber si era verdad. ¿Él había hecho todo esto solo por ella? Ella pensó que necesitaba hacer lo mismo. ¿Qué tal si decía que Beatriz y ella eran una pareja? Ella le dijo a Beatriz la propuesta, y Beatriz le respondió con una pregunta. “¿Quieres que te dé una cachetada tan fuerte que te hará volar hasta la pared?”  pared?”  “¡Claro que no!”  no!”   Allí supo que ella no la iba a ayudar. Pero esa era una buena idea. Si alguien la viera con Miguel, nadie pensaría que

tenían algo amoroso.

 

  Dueño de mi Cuerpo Podrían salir de compras o comer afuera sin estar preocupados.  Al mediodía, Miguel fue a la escuela en su

auto. Cuando ella se subió, todo el mundo estaba señalando a Miguel. Nadie se imaginaba que un hombre tan guapo fuera homosexual. Realmente dejaba a todos sorprendidos. Ellos fueron a un restaurante y antes de entrar, dos hombres borrachos salieron sin tener cuidado. Uno de los hombres era gordo y chocó accidentalmente con Miguel. Miguel se enojó de inmediato y su primera reacción fue levantar la mano y sacudirse la ropa, como si lo hubiera contaminado con alguna enfermedad. Ellos también habían visto ese movimiento. “¡Detente!”   “¡Detente!” El gordo gritó en voz alta, pero eso no impidió que Miguel siguiera caminando. Esa persona estaba un poco enojada. Puso su mano sobre el hombro de Miguel y quiso tirarlo hacia atrás. Él lo soltó cuando Miguel se dio la vuelta.

 

  Dueño de mi Cuerpo También quiso maldecirlo, pero vio el rostro de Miguel. Solo abrió la boca y no pudo decir una sola palabra.

Estaba conpreguntarle... el dedo señalando a Miguel y solo pudo “¿Miguel?”   “¿Miguel?” Miguel entrecerró los ojos y lo ignoró. Cuando estaba a punto de entrar, el hombre sonrió y dijo: “¿Escuché que te gustan los hombres?”  hombres?”  “No te gustan hombres como yo. Vas séa sigozar muylosbien en la cama. ¡Prometo que te haré sentir muy cómodo!”  cómodo!”   Al escuchar esas palabras inmundas, Claudia recordó quién era ese gordo asqueroso. Héctor, el segundo hijo de la familia Zambrano, dueños de una empresa inmobiliaria. Él era gordo y le gustaban los hombres. Con tal de que se vieran guapos, él estaba dispuesto a darles lo que sea para que fueran sus amantes. Había visto noticias sobre él y se burló de ellas. No se esperaba que hoy se lo

encontrara.

 

  Dueño de mi Cuerpo Héctor quería tocar el hermoso rostro de Miguel, pero Miguel dio un paso atrás. Y le dijo: “Si te atreves a dar un paso

adelante de nuevo, destrozaré tu mano.” mano.”    Héctor estaba borracho, pero cuando escuchó eso, sintió un sudor frío por la espalda y se despertó un poco. Héctor estaba un poco sobrio y trataba de enfocarse. Según su padre, recientemente la empresa J.C quería en el desarrollo los terrenos eninvertir los suburbios del este.dePero ese terreno era muy popular y varias empresas también lo querían, ¡incluyendo el hermano de Miguel!  Al recordar eso, Héctor dijo con mucha confianza. “Escuché que Miguel quiere los terrenos en el suburbio del este, pero hay mucha competencia. Incluso tu hermano mayor sueña con eso día y noche. Miguel, a ti te gustan los hombres y a mí también me gustan los hombres. ¿Por qué no nos volvemos una pareja? Déjame tocarte, besarte y dormirme contigo. ¡Vas a tener

muchos beneficios!”  beneficios!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia sintió que se le iba a explotar la cabeza. Había disimulado ser homosexual para que

no estuviera rodeado de mujeres. Y cuando pensaron que se habían librado de ese problema, llegó este otro. Claudia agarró nerviosamente la gran mano de Miguel por temor a que mate a alguien. Ella quería escapar de ahí. “Disculpa.  Nosotros solo vinimos a comer…” comer…”   Antes de terminar, fue empujado por el grueso brazo de ese gordo. “¡No quiero mujeres!”   mujeres!” Capítulo 99 

Claudia se tambaleó hacia atrás. Si no fuera por los buenos reflejos de Miguel, no la hubiera ayudado a tiempo. De lo contrario, su trasero se hubiera golpeado contra el suelo. “Entra primero. Yo iré después.”  después.”  “Miguel, no hagas ninguna locura, ¿está

bien? ¡No quiero aparecer en los titulares de mañana!”  mañana!”  

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia lo dijo angustiada, y tenía miedo de que Miguel no pudiera controlarse. “Está bien. Lo intentaré.”  intentaré.” 

“¿Intentaré? ¿Cómo que intentaré?”  intentaré?”  Cuando Claudia le dijo eso, Miguel la empujó hacia adentro. Cuando entró, un camarero la recibió. “Dame un vaso con yogur. ¡Quiero beber un poco para tranquilizarme!”  tranquilizarme!”   Afuera parecía que se iban a pelear. pelear. “¿Quieres dormir conmigo?” conmigo?”  Miguel tenía una leve sonrisa  en su rostro. Héctor vio que le estaba sonriendo. Era muy hermoso. Tenía tantos hombres, pero ninguno podía igualar la apariencia de Miguel. Mira esa carita, ¡qué guapo! “¡Qué hermoso rostro!”  rostro!”  “¿Eres del noreste?”  noreste?”  Preguntó Miguel. “¡Para año nuevo te llevaré a mi casa!”  casa!”  “Primero te mandaré a tu casa.”  casa.”  Miguel lo dijo lentamente y luego dio unos pasos hacia adelante, agarró fuertemente la muñeca de Héctor, y con su otra mano

lo golpeó con todas sus fuerzas.

 

  Dueño de mi Cuerpo Entonces, Héctor gritó como un cerdo, sonaba como si se le hubiera roto un hueso.

“¡Duele! ¡Duele!”  ¡Duele!”  Héctor retiró su brazo, y este cayó golpeando su cintura como si no pesara nada. ¿Se le dislocó el brazo? Héctor, que estaba sudando del dolor, miró a Miguel en estado de shock y dijo enojado: a golpearme? ¿Todavía “¿Te quieresatreves los terrenos en los suburbios del este?”  este?”  “Solo porque los quiero, quise golpearte con fuerza.”  fuerza.”  Después de decir eso, Miguel arrojó un pañuelo húmedo sobre la cara de Héctor y se volteó sin mirar atrás. Héctor siguió quejándose, pero no tenía fuerzas para gritar. ¡Solo quería regresar a su casa y buscar a su padre! Un grupo de personas que estaban alrededor se quedaron con la boca abierta y están admirados por la apariencia

heroica de Miguel. ¡Qué guapo!

 

  Dueño de mi Cuerpo “Guapo” no era suficiente para describir a ese hombre. ¿Cómo podía ser un hombre tan guapo y

extraordinario ser homosexual? No lo podían creer. Claudia ya había terminado de beber su vaso de yogur. Mientras más bebía, más preocupada estaba. Aun así, pidió otro vaso de nuevo. Cuando lo vio entrar, inmediatamente lo llamó: “¿Estás bien? Lo escuché gritar miserablemente.”  miserablemente.”   “Le di una lección que nunca olvidara.”  olvidara.”  Miguel vio el vaso en la mesa: “¿Ya te la terminaste? ¿Estuviste preocupada por mí?”   mí?” “Yo estaba tan preocupada que mi corazón comenzó a latir más rápido. Me gusta tomar algo cuando estoy nerviosa y quise beber un vaso con yogur. No hay problema, ¿verdad? Después de terminarla, todavía seguía nerviosa y también me sentí con hambre. Así que pedí otro vaso. Yo también pensé en ti y te pedí un vaso de limonada.”  limonada.” 

“Eso es gratis.”  gratis.” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “¡No es lo mismo! He observado que este es el limón que acaba de cortar el camarero. Está fresco. No es el que se ha

usado varias veces. El primer vaso sabe mejor. Un vaso para ti y un vaso para mí, ¡perfecto!”   ¡perfecto!” Claudia sonrió, pensando que había conseguido lo mejor. En los ojos de los demás, esos dos vasos de limonadas eran insignificantes y no tenían valor. a su lado, él no se Si ella ningún no estuviera hubiera dado de cuenta, ni siquiera le hubiera echado un vistazo. Pero ahora creía que estas dos simples limonadas eran como un tesoro. ¡Porque era el primer vaso de esa jarra de limonada! Era verdad, cualquier cosa por mala que sea, tenía un lado bueno. Él no era bueno para observar cosas tan sutiles, pero ella estando a su lado, lo ayudaría a prestar más atención. Ella lo complementaba. Cogió el vaso, tomó un sorbo y dijo: “De

verdad bueno.”varios bueno.”    “¡Claro que que está sí! ¡Tomaré vasos!”  vasos!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Tonta, es por ti que este vaso de limonada tiene un significado diferente y se sabe tan bien.

Sería muy aburrido si no estuvieras a mi lado. “¿Cómo resolviste ese asunto? Ese gordo te estaba avergonzando. ¡Seguramente te seguirá molestando!”  molestando!”  “Estaré feliz si me sigue molestando.”  molestando.”  “¿Por qué?” Claudia Claudia no entendía. “Escuchaste lo queladijo hace tierra un momento. Su padre tiene mejor en los suburbios del este y muchas empresas la quieren. Todo el mundo le ofrece una buena oferta, pero él no sabe a quién dársela por temor a que los demás se ofendan.”   ofendan.” “Mi hermano mayor también lo quiere. Si se lo da a mi hermano mayor, yo me vengaré de alguna manera. Si me lo da a mí, será difícil explicarle a mi hermano porque me lo dio. Y tampoco quiere menospreciar a los demás. Pero ahora su hijo me ofendió y no lo dejaré ir tan fácilmente. ¿Cómo crees que me pagara

para disculparse?”  disculparse?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Entonces, para disculparse, te dará la tierra y no se atreverá a pedir un precio alto, ¿verdad?”  ¿verdad?” 

Una lamparita se iluminó en la cabeza de Claudia y entendió bien lo que él había planeado. “Eres muy inteligente. Te dejaré pedir y comer lo que quieras como recompensa.”  recompensa.”  Miguel le dijo con una sonrisa y le entregó el menú. Claudia estaba Pidió tres platos, una sopa muy y dos contenta. tazas de arroz. “¿Es suficiente?”  suficiente?”  “Suficiente, suficiente. suficiente. Esto basta para dos personas.”   personas.” Claudia se dio cuenta de que Miguel sabía sacarle el provecho a cualquier situación. El gordo probablemente no sabía de este plan y había regresado a su casa llorando. “Miguel, ¿siempre has sido tan astuto para conspirar contra contra la gente?”  gente?”  Preguntó Claudia sin querer mientras comía. Miguel sostenía sus verduras y sus dedos se pusieron rígidos cuando escuchó eso.

 

  Dueño de mi Cuerpo Lentamente dejó los palillos, bebió un trago de agua y dijo con calma: “No. Si ellos no me ofenden, yo tampoco lo haré.” haré.”  

“Con que es así.”  así.”  “Claudia, ¿qué harías si un día descubres que no soy un buen hombre?”  hombre?”  “¿Qué significa que no seas un buen hombre?” Claudia no entendió y estaba un poco confundida. “Olvídalo. Sigue comiendo.”  comiendo.”  Él sonrió,del le tema. tocó la cabeza y no siguió hablando Nunca ha habido una clara distinción entre las personas buenas y las malas en este mundo. Las personas buenas también podían ser egoístas, y las personas malas también podían ser generosas. Él se preguntaba a sí mismo si era un hombre bueno. Ahora no quería hacer cosas buenas ni malas, solo quería... Hacer cualquier cosa para que ella fuera feliz. Temía que un día ella viera su lado malo. Estar siempre preocupado daba una mala

sensación.

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia estaba satisfecha después de comerse toda esa comida y aun así quiso pedir más.

 A los hombres le gustan las mujeres que comen menos, si comían mucho dañaban su figura femenina. Mejor que regrese a su casa y coma sus propios bocadillos. Ella se sentó en la parte trasera del auto, se acomodó y se sintió feliz. “Pensé que hiciste que todos que eras homosexual para nopensaran tener más problemas. No esperaba que aun así aparecieran otras clases de problemas. ¡Mi rival ahora es un hombre! ¿Cómo puedo competir con él?”  él?”  “No puedes igualarlo de todos modos, modos, así que no pienses en eso.” Miguel lo dijo con una sonrisa. Capítulo 100

Claudia se desanimó de inmediato. Beatriz le había dicho que su pecho no era pequeño, sino que no existía.

Un hombre con pequeños pectorales iba a tener más que ella.

 

  Dueño de mi Cuerpo Claudia levantó la mano y tocó el pecho de Miguel. ¡Se sintió como si fuera gelatina!  Aunque era un poco duro, se sintió suave y

agradable. El auto aún no había arrancado. Ella también quería aprovechar la oportunidad para tocar a Javier. Ella se inclinó entre los asientos delanteros y estaba a punto de tocar a Javier, pero Miguel se asustó cuando la vio, que la agarró de la cintura y la empujó de regreso a su asiento. “¿Qué estás haciendo?”  haciendo?”  “¡Quiero tocarlo para ver si es igual que el tuyo!”   tuyo!” “¡No “¡ No puedes tocarlo! ¡Solo puedes tocar el mío!”   mío!” Miguel frunció el ceño, se veía enojado. Esta chica era atrevida e imprudente. Ella tocó el suyo y también quería tocar el de otra persona. ¿Qué ridiculez es esa? “¿Por qué?”  qué?”  “Piénsalo de otra manera. ¿Cómo te  te  sentirías si te tocara y también a otras mujeres?”   mujeres?”

“Este...” “Este...”  Claudia  se quedó sin palabras.

 

  Dueño de mi Cuerpo “Pero estoy tocando a un hombre, y es a través de su ropa.”  ropa.”  “¿También puedo tocarlas a través de la

ropa?”  ropa?”  “No. Tú eres un hombre y yo soy una mujer... Oye, ¿crees que lo que dices es razonable?”   razonable?” Claudia estaba completamente confundida. “Pongamos esta regla entre nosotros. No puedes hacer con otros lo que me hagas a mí. haré.exclusivo, Se puede ¿está decir que Yo es tampoco nuestro lotrato bien?”   bien?” “Está bien. Está bien.”  bien.”  Claudia asintió un poco decepcionada. Ella realmente quería tocar a Javier y pensaba que el de Lucas también debía de sentirse bien. En el camino de regreso a la escuela, Miguel levantó la barrera que separaba los asientos traseros y delanteros, temiendo que Claudia volviera a hacer otra locura. Javier no sabía si reírse o no. Miguel estaba celoso de él. ¡Era muy raro verlo así!

Miguel Claudiaa de regreso a No la escuela envió y él aregresó la empresa.

 

  Dueño de mi Cuerpo esperaba que su padre estuviera allí, y alado de él estaba un señor mayor y una chica joven.

Miguel conocía a ese señor, era el presidente de una empresa de entretenimiento multimedia. Según la costumbre, tenía que llamarlo abuelo Camacho. Morgan corrió hacia él cuando lo vio y dijo: “Camacho, te he dicho dicho que yo no decido por mi hijo. Élcon decide a quién le gusta o no, y también quién quiere casarse. ¿Cómo puedo hacer para que entiendas?”  entiendas?”  “No es que no quiera entender, sino que no quiero desilusionar a mi nieta. Ella no gusta de nadie, pero si gusta de tu hijo. En la casa insistía en querer conocerlo, por eso no tuve otra opción que pedirte que se vieran.”   vieran.” Miguel se dio cuenta de que habían planeado una cita a ciegas. “Esta es mi nieta, Yolanda.”  Yolanda.”  “Hola, mi nombre es Yolanda. Ya me conocías, ¿verdad? ¡Soy una superestrella! En cuanto a ti, Miguel,

también eres muy famoso y divino. ¡Estoy muy interesada en ti!”  ti!”  

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel miró su pequeña mano, la había alzado cortésmente, pero él la ignoró. Él dijo: “Lo siento. La verdad es que no te

conozco. Nunca desperdicio mi energía en cosas que no me gustan. ¿Estás interesada en mí? Vayamos al grano. No somos compatibles.”  compatibles.”  Miguel respondió de manera muy simple y no le dio a Yolanda la oportunidad de seguir hablando. La de Yolanda estaba yroja. Ella teníay 20 cara años. Era elegante hermosa, siempre estaba rodeada de pretendientes. Pero ella no estaba satisfecha con ninguno de ellos. Por ahora solamente estaba interesada en Miguel. No pudo evitar sentir curiosidad por él e hizo todo lo posible para poder conocerlo en persona. Cuando investigó sobre él, descubrió que Miguel era una persona misteriosa e impredecible. ¡No lo podía entender! La mente de este hombre era como el universo, imposible de poder comprenderla

del todo.

 

  Dueño de mi Cuerpo Pero más difícil era que un hombre así pueda interesarse en ella. Lo que quería era un hombre que fuera

mejor que ella y poder depender de él. Miguel era independiente, capaz, responsable, digno y pensaba por sí mismo. Ella era joven y no tenía malas costumbres. Pensaba que era lo que él quería en una mujer y no esperaba que la fuera rechazar. Ella ainsistió en venir para conocerlo, incluso cuando su abuelo le dijo que Miguel estaba comprometido con alguien, todavía quería intentarlo. Ella también investigó a Claudia. ¿Una mujer así merece ser comparada con ella? ¡Estaba segura de que podía ganar esa batalla! Pero no se imaginaba que la primera vez que se vieran, él la rechazaría y no le diera la oportunidad de poder conocerla bien. ¿Qué quiso decir con que no eran compatibles? ¿Cómo podían ser compatibles? ¿Él y esa Claudia eran

compatibles?

 

  Dueño de mi Cuerpo “¿Por qué dices que no somos compatibles?” Yolanda era muy terca y no quería darse por vencida.

“Me gustan los hombres.”  hombres.”  “Eres un mentiroso. Dejaste que esos rumores salieran al público a propósito. Puedes engañar a esa gente común y corriente, ¿pero piensas que puedes engañarme?”   engañarme?” “Dejaremos que los jovencitos sigan charlando. padre y yo tomaremos el té. Por favor, Tu envía a Yolanda de regreso a casa más tarde. Ella es lo más preciado que tengo. ¡Debes protegerla a toda costa, o te la verás conmigo!”  conmigo!”  El abuelo Camacho lo dijo a propósito, para darle a su nieta una buena oportunidad. Miguel frunció el ceño de enojo, sabía que no podía negarse. Después de todo, el abuelo era alguien a quien respetaba. Miguel solo podía mirar a su padre. Morgan se rascó la cabeza, mostrando que no podía hacer nada. Ellos eran amigos desde hace muchos

años y tampoco podía negarse.

 

  Dueño de mi Cuerpo “Vayamos por una taza de té. Tengo un té muy bueno y sabe delicioso.”  delicioso.”  El cabecilla fingió no ver a Miguel y se fue.

Después de un tiempo, ellos estaban solos en la oficina de Miguel. Yolanda puso sus manos detrás de su espalda y dijo: “Miguel, hice todo lo posible para saber todo sobre ti. Has sido lastimado por el amor, te han acechado y tu vida ha estado en peligro. Y eso es lo que te hace ¿verdad?”   Miguel se fuerte, enojó¿verdad?”  muchísimo cuando escuchó la frase “lastimado por el amor”.  amor”.  Él no respondió, y se quedó en silencio. Al ver que no decía nada, Yolanda continuó: “De hecho, escuché sobre ti mucho antes, pero todo lo que decían eran cosas negativas. Decían que eras feo y que tenías mal carácter. Nadie sabía si te gustaban los hombres o las mujeres. Para ese entonces no pensé mucho en ti. Pero ahora que saliste a la luz, supe que eras lo que más quería.”  quería.”  “Has estado estado oculto por cuatro años, soportando tantos abusos y sospechas, e

hiciste que tus enemigos no te descubrieran para hacer que la empresa

 

  Dueño de mi Cuerpo J.C creciera a lo que es ahora. Admiro a una persona así. ¡Por eso he decidido que quiero casarme contigo!”  contigo!” 

“¿Tienes tanta tanta confianza en que te aceptaré solo porque invertiste mucho tiempo para saber sobre mí?”  mí?”  “¡Por supuesto que tengo confianza!” Yolanda dijo con una sonrisa. Tenía la barbilla en alto. No mostraba miedo estando enfrente de Miguel y... Tenía mucho coraje. Capítulo 101  Con sus manos detrás de la espalda, ella continuó diciendo: “También descubrí que estás comprometido con esa chica de la familia Rosas, porque tu padre estaba preocupado de que no pudieras encontrar una mujer para casarte. Se puede decir que le pagaron para que se case contigo.  Aún no están casados, así que no tienen nada establecido. Según mis cálculos, solo estarán juntos por dos o tres meses.”  meses.”  “No hace falta hablar de la familia Rosas.

Carmen tiene un nada. poco No de vas capital, pero Claudia no tiene a ganar

 

  Dueño de mi Cuerpo nada estando con ella. Ella no es como yo. Seré la única heredera de la empresa de entretenimiento multimedia, y cualquier

cosa que tenga ella no se podría comparar con mis riquezas.”  riquezas.”  “Has estado oculto durante tantos tantos años y también has aguantado mucho. De seguro es porque has estado esperando que algo grande apareciera, ¿verdad? Necesitas una esposa que pueda apoyarte. No una tonta queque no la sepa que hacer y siempre necesite protejas. No me importa que no te guste ahora mismo. Puedes casarte conmigo primero y poco a poco comenzarás a gustar de mí. ¡Estoy segura de que con mi encanto, gustarás de mí en el futuro!”  futuro!”  Yolanda lo dijo con mucha confianza, porque sabía muy bien que tenía mucha ventaja.  Aun sin tener las riquezas de su familia, ella tenía más prestigio que Claudia. No había necesidad de comparar a esas dos. Ella tenía mucha confianza en sí misma.

 

  Dueño de mi Cuerpo Miguel no pudo evitar reír. Le dio risa que esta chica haya gastado tanto tiempo en saber tanto sobre él.

Yolanda lo vio reír, estaba feliz y pensó que ya había triunfado. Era obvio que un hombre exitoso de negocios elegirá una transacción favorable para él. “¿Cuándo la vas a echar a la calle y te casarás conmigo?”  conmigo?”  “La puerta en irte.” irte.”    está ahí. No necesitas apurarte Miguel se volteó hacia la silla de su oficina y no la miró de nuevo. Yolanda no lo podía creer y no entendía qué fue lo que hizo mal. “¿Qué quieres decir? ¿No es mi oferta lo suficientemente atractiva?”  atractiva?”  “No es bueno que una mujer sea demasiado inteligente.” inteligente.”   Miguel le dio ese consejo y luego le pidió a Javier que se la llevara. Dejaron a Yolanda afuera de la oficina y se puso roja de rabia. ¡Ella todavía no entendía en que se

equivocó!

 

  Dueño de mi Cuerpo Después de un tiempo, Javier regresó para entregar unos documentos. Cuando abrió la puerta, Yolanda, que estaba esperando

afuera, trató de mirar adentro. Pero Miguel no le prestaba la mínima atención. “Señor, la señorita Yolanda se niega a irse. Insistió en esperar a que saliera del trabajo y que la lleve de regreso a su casa.” casa.”   Miguel frunció el ceño cuando le dijo eso. El cabecilla traía muchos problemas. “Déjala que le espere.” espere.”    Yolanda era perfecta en todos los aspectos, sin embargo, le faltaba algo. Si Miguel realmente quería casarse con alguien por beneficios financieros, entonces no elegiría estar con Claudia. Él ha aceptado tolerar a Claudia, amarla y mimarla hasta la próxima vida. Eso significa que el matrimonio es sagrado para él, no un intercambio de negocios. Yolanda estaba muy segura de que Miguel iba a querer estar con ella. Sin embargo, lo que no contaba era que había personas mejores que ella.

 

  Dueño de mi Cuerpo Con las cualidades como la de Miguel, qué mujer no tomaría la iniciativa para seducirlo.

Yolanda no sabía cómo llamar su atención. En ese momento, llamó Morgan. Miguel respondió respondió muy serio: “¿Terminaste de tomar el té?” “Ese Camacho es muy difícil de tratar. Él me había salvado la vida anteriormente, quería que le devolviera el favor y me daba vergüenza negármele, ¿entiendes? lo queasientes porYolanda. Claudia, así que no teSé obligaré estar con Solo lleva a su nieta de regreso a su casa y sé amable con ella. No quiero que ese Camacho hable mal a mis espaldas.”  espaldas.”  “Deja que hable mal de ti. ¿Acaso esto es lo que debería hacer una persona mayor como tú?” “Ay, no comiences a educarme. e ducarme. Sé que hice mal. ¡Solamente llévala a su casa y si quieres, rompe todo contacto con ella! Pero quiero que me dejes algo en claro, ¿acaso no te gusta la buena apariencia y el gran historial que tiene Yolanda? Aun estando con Claudia, ¿no puedes hacer hacer que se vaya?”  vaya?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Cuando fuiste feo y pobre, ella no te abandonó. ¿Ahora no puedes detestarla por ser pobre y fea?”  fea?”  Miguel se puso muy serio cuando él le dijo eso. Su propio padre estaba hablando mal de su futura esposa, ¿acaso la estaba menospreciando? “¡Papá, “¡ Papá, ten cuidado con lo que estás diciendo!”   diciendo!”

“¡Todavía he terminado! sientesa lástima pornoClaudia y no te Si atreves dejarla, la puedo adoptar para que sea mi hija. ¡Y dejaré que tus hijos la llamen tía!”  tía!”   “Entiendo. Sé quién es la adecuada para mí. Puedo decidirlo por mí mismo. No estoy ciego.”  ciego.”  “Eso es bueno. No te molestaré. Puedes decidirlo por ti mismo. ¡Saldré de viaje por un mes para evitar que Camacho me encuentre!”   encuentre!” Morgan colgó después de decirle todo eso. Cuando Miguel terminó una reunión, ya eran más de las ocho. Yolanda todavía estaba afuera esperándolo y lo vio saliendo

de la sala de conferencias. “¡Ya terminaste!”  terminaste!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Sí.”   “Sí.” “¡Le prometiste a mi abuelo que me llevarías a mi casa!”  casa!”  Yolanda estaba muy furiosa. Le era muy difícil lidiar con este hombre. Pero entre más la rechazaba, más quería luchar. ¡No estaba dispuesta a darse por vencida tan fácilmente! Miguel entrecerró los ojos cuando escuchó eso. No se esperaba que esta mujer fuera

tan molesta y tan paciente como hasta para esperarlo desde la una de la tarde las ocho de la noche. Parece que será imposible no llevarla a su casa. “Vámonos.”   “Vámonos.” Se lo dijo sin ganas. Él entró al auto para conducir. Yolanda abrió la otra puerta y estaba a punto de sentarse en el asiento del copiloto, pero Miguel la detuvo. “Siéntate atrás.”  atrás.”  “¿Por qué? No hay nadie sentado en este asiento.”   asiento.” “A mi lado solo puede sentarse mi

prometida.”  prometida.”  “¡Esa soy yo!”  yo!” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Yolanda lo declaró descaradamente. Ella se subió de inmediato al auto, luego se abrochó el cinturón de seguridad y lo miró con mucho orgullo. Pensó que había ganado, pero no esperaba que Miguel se bajara del auto y ordenara a Javier que condujera. Ella estaba ansiosa y quería bajarse, sin embargo, Javier cerró las puertas y las ventanas.

No y dijo enojada: “Migue erespodía muyabrirlas descarado. Te he “Miguel, estadol, esperando todo este tiempo, ¿y es así como me tratas?”  tratas?”  “Nadie te obligó a hacerlo.”  hacerlo.”  Miguel dijo muy serio.  A excepción de su propia esposa, nadie más podía hablarle de esta manera. Él no era caballeroso con las mujeres, y tampoco quería fingir serlo. Con excepción de su prometida, él trataba a las demás mujeres de la misma forma en la que trataba a los hombres. Tampoco iba a ser amable con las personas que le causaran molestias.

 

  Dueño de mi Cuerpo Levantó la barrera que había en medio del auto porque no quería verle la cara a Yolanda. “Conduce.”   “Conduce.” Él dijo. Javier arrancó el auto. Yolanda apretaba sus dientes por el enojo. Ella no se imaginaba que Miguel iba a ser tan difícil de conseguir. Capítulo 102

El auto se detuvo en la puerta de la villa Camacho. Miguel no tenía ninguna intención de bajarse y las ventanas estaban todas cerradas. Ese tipo de ventana son las que podías ver a través si estabas adentro, pero no desde afuera. Yolanda no pudo ver el rostro de Miguel. Solo observó el auto alejarse. Ella estaba tan enojada que quería golpear algo, y si pudiera, hasta matar a Miguel. Ella era una mujer muy orgullosa y esta era

la primera vez que un hombre la rechazaba.

 

  Dueño de mi Cuerpo Su abuelo salió y dijo: “Ya te lo había mencionado antes. No puedes controlar los sentimientos de una persona. Tú eres solamente un chiste ante sus ojos.”  ojos.”  “¿Y qué? ¿No puede ver que soy mejor que Claudia? ¿Acaso tengo que competir con esa inútil?”  inútil?”  Yolanda lo dijo muy enojada. Apretó sus puños con fuerzas y quiso destrozar a Claudia de una vez por todas.

Claudia llegó a la casa hambre. Ella estaba esperando que con Miguel regresara para cenar juntos. En la nevera había raviolis, pero ella no los cocinó por miedo a que se enfriaran cuando llegara. Vio que ya eran las diez en el reloj de la pared. ¿Por qué aún no había regresado Miguel? Ella se moría de hambre. David no pudo evitar reír cuando vio su miserable apariencia. “La reunión de esta noche terminó muy tarde. La señorita Claudia podía haber comido sola. Tengo miedo de que me

culpe por no darle de comer.”  comer.” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Es aburrido comer sola. Quiero comer con él. Si se atreve a hablarte mal, yo también lo haré con él. Yo te protegeré.”  protegeré.”  “Estaré muy agradecido con la señorita Claudia.” David sacó unos chocolates de su bolsillo. bolsillo. “Coma estos chocolates primero.”   primero.” Claudia contempló los chocolates como si viera un tesoro y se los comió de una vez. Ella estaba comiendo y diciendo que David

era el mejor. Cuando terminó de comer los chocolates, escuchó el motor de un auto y supo de inmediato que Miguel había regresado. Ella salió corriendo para verlo antes de que pudiera ponerse las pantuflas. Cuando estaba a punto de salir de la casa, Miguel empujó la puerta. El exhausto de Miguel estaba ansioso por ver a Claudia. Se vieron a los ojos y no dijeron una sola palabra. Después de un tiempo, ella dijo con una sonrisa: “¡Has vuelto!”  vuelto!”  El rostro cansado de Miguel cambió a un

rostro alegre. “¿Por qué estás descalza?”  descalza?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Él se cambió de zapatos, la levantó y la llevó a la habitación. Claudia se agarraba de su cuello y sintió que Miguel no era el mismo. Su aliento siempre ha sido de menta, fresco y agradable. Nunca había usado perfume, pero tenía una leve fragancia en su cuerpo, como un aroma a rosas. Ella se acercó a su cuello y lo olió con

cuidado. sintiótocándole que su el respiración como unaÉlpluma cuello. era Hacía cosquillas. No sabía si esa sensación de cosquillas lo sentía en el cuello o en su corazón. “Deja de hacer eso.”  eso.”  Su voz era ronca e hizo que ella se sobresaltara. “¿Por qué siento que tienes un aroma a perfume?” Ella dijo con sospecha.  sospecha.  “Tuve una reunión con una clienta. Es posible que me lo haya pegado.”  pegado.”  No le dijo nada sobre Yolanda. Quería resolverlo por sí mismo y no quería involucrarla. Tampoco quería que se

preocupara por eso.

 

  Dueño de mi Cuerpo No quería que su mente tuviera que pensar en tantas cosas y molestarla por eso. Miguel todavía no se había quitado el abrigo. Se arrodilló sobre una rodilla, tomó su pequeño pie y le dijo: “La próxima vez, si estas descalzas, descalzas, te daré una nalgada.”  nalgada.”  “¡Está bien! bien! Comamos algo rápido. ¡Si no comemos ahora mismo, me moriré de hambre!”   hambre!” “¿No has comido todavía? ¿Por qué no te

prepararon nada?” nada?”  “Fui yo quien les  dijo que no lo hicieran. Quería comer cuando volvieras. Vi que había raviolis en la nevera y ahora tengo ganas de comérmelos.”  comérmelos.”  “Está bien. Te lo voy a preparar.”  preparar.”  Miguel fue de inmediato a la cocina para preparar la cena. No quería perder tiempo sabiendo que Claudia tenía hambre. Claudia se paró en la puerta y vio que comenzó a cocinar. Él se quitó el traje y la corbata, y ella se conmovió al ver que le estaba preparando la cena. Se había remangado la camisa y se

desabotonó unos botones, mostrándose menos formal.

 

  Dueño de mi Cuerpo Su figura alta parecía no encajar con la cocina. Claudia se acercó y lo abrazó por detrás. Supo que era ella y dijo: “Espera. Estará listo muy pronto.”  pronto.”  “De repente no me siento con mucha hambre. No te preocupes. Tómate tu tiempo.”   tiempo.” La voz de Claudia era muy dulce. Ella sintió que era una dicha que un

hombre quitase se solo pongapara un delantal se y se lave el lastraje, manos prepararle la cena. “Pareces que tienes mucha hambre. ¿Por qué no me comes primero?”  primero?”  Pasó su brazo sobre su cuello y se lo dijo con una sonrisa. Claudia le siguió la corriente y le dio un fuerte mordisco. Le dejó las marcas de sus dientes. “¿Acaso no te duele?”  duele?”  “Se siente muy bien, así que no siento dolor.”   dolor.” “Beatriz siempre menciona que soy una tonta. ¡Pero creo que el tonto eres tú!

Bueno, esperemos que el agua esté lista. ¿Cuántos quieres comer?”  comer?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Diez. Los raviolis son grandes. No No puedo comer tantos.”  tantos.”  Miguel ha vivido por más de 20 años y además era un hombre. ¿Cómo podía comer menos que una mujer? Cuando Claudia comió los deliciosos raviolis, inmediatamente se emocionó y quería comer mucho más. Claudia tenía mucha hambre. No había comido desde el mediodía y ha estado con

hambre hasta ahora. Se comió todos los raviolis, incluso se tomó un plato completo de vinagre. Pero después de beber el vinagre, se dio cuenta de un problema. El vinagre ayudaba a la digestión. Luego de bebérselo, parecía que volvió a tener hambre. No se había llenado…  llenado…  Ella vio que Miguel dejó los palillos y se limpió la boca, pero todavía le quedaban cuatro raviolis. “¿No te lo vas a comer?” c omer?”   “No puedo comer más. Me sobreestimé.”  sobreestimé.”  “Y yo me subestimé”, se dijo a sí misma. misma.

Miguel se levantó para recoger todos los palillos, pero fue detenido por Claudia: “Si

 

  Dueño de mi Cuerpo no lo vas a comer, yo lo haré. No estoy llena. ¡Es vergonzoso desperdiciar comida!”   comida!” Luego tomó el plato con raviolis de Miguel y quería comérselos con vinagre. Miguel estaba con la boca abierta. ¿Cómo podía Claudia comer más que él? “Claudia, dime con honestidad. ¿Cuánto puedes comer?”  comer?”  “Una taza de arroz.”  arroz.” 

Ella volteó losme ojos. “Quiero que digas la verdad, o no te daré los raviolis.”  raviolis.”  Dijo Miguel. “Está bien. Normalmente Normalmente dos tazas de arroz de tamaño mediano, o si no volveré a tener hambre.”  hambre.”  “Así que cada vez que estás conmigo, ¿no comes lo suficiente?”  suficiente?”  Miguel se dio cuenta de ese problema, frunció el ceño y sintió un dolor en el pecho. ¿Cómo iba, un hombre como él, dejar que su prometida sufriera de hambre? Claudia asintió un poco avergonzada

cuando él le hizo esa pregunta.

 

  Dueño de mi Cuerpo Es posible que antes haya pasado mucha hambre. Ella aún recordaba que cuando Juan salía de viaje, siempre llevaba a Carmen y a su madre, pero a ella la dejaba sola en la casa. La sirvienta solamente iba a la casa cuando se acordaba. Cuando no se acordaba, nadie le hacía caso. Se puede decir que es un milagro que no haya muerto por hambre. Capítulo 103

Desde entonces, ha podido comer de todo. Puede que sea una reacción por haber pasado tanta hambre desde pequeña. Ella tenía miedo de morir de hambre si no comía lo suficiente, y no saber cuándo sería su próxima comida.  Así que se prometió que cuando ganara dinero, lo primero que haría era llenar su estómago. Pero notó que los hombres se reían de las mujeres que comían mucho. Por eso que enfrente de la gente, contenía

su apetito, especialmente cuando estaba con Miguel.

 

  Dueño de mi Cuerpo En ese entonces, no sabía que él tenía dinero. Por eso no le reveló cuanto podía comer por miedo a dejarlo en bancarrota y lo mantuvo en secreto. “Tenía miedo de que me desprecies por comer tanto. Además, no quería que te volvieras pobre. ¿Qué pasaría si sales huyendo?”   huyendo?” Claudia le siguió diciendo: “También es muy estresante comer contigo. Debo

prestar atención a mis modales. Vi bocado que es de buena educación masticar cada 20 veces. También estaban las diferencias de la comida occidental, la comida tailandesa...”   tailandesa...” “¡Es demasiado!”  demasiado!”  “¿Quién te dijo que tenías que recordar recordar esas cosas?”  cosas?”  “¿Qué pasaría si me ven y se ríen de mí cuando me lleves a cenar después de estar casados? ¿Acaso debo de comer a escondidas?”   escondidas?” “Incluso si te escondo, vas a ser mi preciado tesoro.”  tesoro.”  “Me gusta eso. Quiero ser tu tesoro.”  tesoro.” 

“A propósito, Claudia, Claudia, ¡me impresiona mucho que puedas comer más que un

 

  Dueño de mi Cuerpo hombre! ¿Acaso naciste con un estómago vacío?”   vacío?” “Creo que fue de un cerdo.” Ella parpadeó y dijo inocentemente. “¿Hay alguna diferencia?”  diferencia?”  “Sí, los cerdos son animales muy encantadores.”   encantadores.” “Pienso que puedo poner poner cuatro palabras en tu frente.”  frente.”  “¿Cuáles palabras?”  palabras?” 

“¡Cerdo matadero!”  A Miguelpara no elsematadero!”  le ocurrió  otra cosa que decirle. Claudia escuchó eso y dijo: “Si no quieres que coma tu comida, no la comeré. ¡También soy una persona con integridad moral! De todos modos, estando contigo, pasaré hambre más de un par de veces.”  veces.”  “Solo puedes comer mi comida de ahora en adelante. ¿Qué más quieres? Te lo cocinaré ahora mismo.”  mismo.”  “Quiero KFC”, dijo ella.  ella.  Ella no quería una comida normal. Lo que realmente quería comer era comida chatarra.

 Alitas de pollo fritas, chuletas de pollo fritas, hamburguesas de pollo picante y un

 

  Dueño de mi Cuerpo vaso de té con leche. Con todo eso iba a estar de lo más feliz. Ella estaba soñando despierta y Miguel preguntó…   preguntó… “¿Qué es KFC?”  KFC?”  “Este... ¿Eres un extraterrestre? extraterrestre? ¿No has oído hablar de KFC, McDonald y Pizza Hut?”   Hut?” “¿Qué venden?”  venden?”  “¡Hamburguesas, alitas de pollo, pizza y

entre otrasrápida?”  cosas!”   cosas!”  “¿Comida rápida?” “Sí.”   “Sí.” “Oh, yo no como comida chatarra.”  chatarra.”  “Pero ya habías comido antes.”  antes.”  Si, por eso me enfermé. Miguel dijo esa frase en su mente y le dijo a Claudia: “¿Entonces quieres comer esas cosas? Te lo compraré.”  compraré.”  “Deberíamos pedir a domicilio.” Sacó su teléfono móvil mientras se lo decía. Finalmente encontró la debilidad de Miguel. No sabía nada sobre la comida de la gente común.

Nunca había probado comida rápida. Tampoco sabía cómo pedir a domicilio. A

 

  Dueño de mi Cuerpo él no le interesaban esas cosas y pensaba que era un desperdicio. Él estaba acostumbrado a las verduras orgánicas, nutritivas y saludables, y el bistec occidental de primera calidad. Solo bebía tres tipos de bebidas. Té, café, y agua purificada. El té debía ser de hojas recogidas antes de la lluvia. El café tenía que ser de granos recién

molidos. ¿Y de qué montaña nevada provenía el agua? No sabía nada sobre comida en envase, comida de calle, barbacoa, etc. Claudia parecía haber descubierto un nuevo mundo para él. Después de ordenar a domicilio, le dio una fuerte palmada en el hombro a Miguel, sonrió y dijo: “Miguel, se puede decir que tienes una bendición. Hay tanta comida deliciosa en el mundo que no has probado, pero yo haré que pruebes cada uno de ellos.”  ellos.”  “Está bien. Primero haré una llamada. Espera aquí hasta que la comida llegue.”  llegue.” 

“Sí, ve. De verdad que es una bendición que me hayas encontrado. ¿Cómo puedes

 

  Dueño de mi Cuerpo tener una novia tan buena que te dará de comer tanta comida deliciosa?”  deliciosa?”  Miguel se hizo a un lado y marcó a Lucas. “Lucas, ¿la ambulancia es rápida o yo conduzco rápido?”  rápido?”  “Las ambulancias pueden pasarse los semáforos en rojo.”  rojo.”  “Entonces ponte en contacto con con una ambulancia por mí. Que venga media hora más tarde y recuerden no hacer ruido.”  ruido.” 

“¿Vas probar veneno de nuevo? No. ¿Cómo a puedo decir que es probar veneno? Quise decir que si quieres morir de amor.”  amor.”  “Amigo. Deséame suerte.”  suerte.”  Llegó la comida a domicilio. El que entregaba la comida miraba una y otra vez el pedido en su teléfono y también la lujosa villa que estaba enfrente de él. Entonces... ¿Entonces la gente rica todavía come comida a domicilio? ¿Acaso había algún error? Él se llenó de valor para tocar el timbre y apareció una pequeña cabeza. Claudia usaba un sombrero para cubrirse

la cara. “¿Ya llegó la comida que pedí?”  pedí?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo “Aquí está su pizza.”  pizza.”  “Gracias.”   “Gracias.” Después de un rato, llegó lo demás. Cuello de pato, hamburguesas del KFC, dos elotes tostados, dos tazas de té con leche y fideos. Puso todo sobre la mesa. Claudia sintió hambre al instante y también que los raviolis que había comido ya fueron digeridos.

¡Ya volveraalacomer! ¡Diopodía un bocado pizza, dio un sorbo del té con leche, y se sintió en el paraíso! Miguel estaba decidido a morir y sintió como si fuera a consumir drogas. ¿De verdad podía comer estas cosas? ¿No iba a morir después de comer? Miguel estaba comiendo cuando recibió una llamada de Lucas y este le pidió que saliera.  A Claudia no le importó. Podía comer sola. Ella se sentó en la cama con la computadora, y a la misma vez comía felizmente. La vida era una bendición.

Ella no sabía qué Miguel estaba en la ambulancia en ese momento.

 

  Dueño de mi Cuerpo La reacción no fue tan severa esta vez. Fue simplemente un dolor insoportable de estómago. La llamada de Lucas fue a propósito para salvarle la vida. Se puede decir que tenía buenas intenciones. Miguel no volvió en toda la noche. Ella sintió que la comida no tenía ningún sabor porque no había quien la acompañara. Cuando fue a dormir, su costado estaba

vacío, lo que la hacía sentir un poco incómoda. Solía quedarse dormida en los brazos de Miguel. De la nada, él no estaba y ella no se sentía cómoda. Era como... Si el aroma de Miguel en el aire se estuviera desapareciendo. Ella no durmió bien en toda la noche, y al día siguiente fue a la escuela con unas ojeras muy marcadas. Llamó a Miguel. Le dijo que estaba ocupado y que no podía comer con ella en el día. Y por la noche, tenía que ver si podía volver o no. Parece que de la nada, estaba ocupado.

Ella se portó como una niña buena y asintió con la cabeza.

 

  Dueño de mi Cuerpo  Al mediodía, cuando se preparaba para ir a la cantina, no esperaba que alguien la estuviera buscando. Era una chica muy hermosa, vestida a la moda, con una pequeña gorra, luciendo un estilo occidental. Ella cruzó los brazos y levantó la barbilla en alto, y la miró como si pudiera ver a través de su alma. “¿Con qué tú eres Claudia?”  Claudia?” 

La voz eramiró burlona. Claudia a esa persona y estaba segura de que no la conocía. “¿Quién “¿Q uién eres? ¿Por qué me estás buscando?”   buscando?” “Mi nombre es Yolanda. Recuerda este nombre, porque seré la futura esposa de Miguel.”   Miguel.” “¿Qué quieres decir con eso?”  eso?”  Claudia frunció el ceño y lo dijo con cierto disgusto. ¿Era la admiradora de Miguel? ¿Por qué me estaba buscando? ¿Acaso conocía nuestra relación? ¡Nunca había visto a una mujer ser tan arrogante!

Capítulo 104

 

  Dueño de mi Cuerpo “Significa que no eres la adecuada para estar con él.”  él.”  “¿Qué te importa si sea o no la adecuada? Voy a comer. No tengo tiempo para charlar contigo. Has lo que te dé la gana.”  gana.”  Claudia se volteó y quiso irse, pero ella la detuvo. “¿No quieres saber dónde está Miguel y qué está haciendo ahora mismo?”  mismo?”  “Él está trabajando. Si no está trabajando,

estaría almorzando.” “Está enalmorzando.”  el hospital.”  hospital.”   Ella sintió un fuerte golpe en el pecho cuando escuchó esas cuatro palabras salir de la boca de Yolanda. Claudia siguió a Yolanda al hospital. Incluso si era falso, tenía que ir y echar un vistazo en persona para sentirse tranquila. Ella no vio a Miguel, pero si a su historial médico. Intoxicación por alimentos y diarrea. Ella se sintió confundida y preocupada cuando vio esos dos síntomas. ¿Cómo pudo tener una intoxicación por alimentos e ir al hospital? ¡Estuvo bien

anoche!  Anoche… Acaso…  Acaso… 

 

  Dueño de mi Cuerpo Ella recordó lo que pasó anoche y sus pupilas se contrajeron al instante. Yolanda parecía entender cuando vio su pálido rostro. Cruzó los brazos y dijo: “He estado investigando. Escuché que ordenaste mucha comida basura anoche. ¿Sabías que Miguel había salido media hora después para subirse a una ambulancia? Pero es obvio que la tonta de su prometida no lo sabía.”  sabía.” 

“Este… ¿Cómo pasó nada. eso? ¿Por Yo también comí y no me paso qué a él…?”   él…?” Claudia comenzó a tartamudear. Antes de terminar, fue interrumpida por Yolanda: “¡Porque ustedes son diferentes! ¡Una cualquiera y un hombre noble! Tú estás acostumbrada a comer esa comida basura, ¡pero Miguel es diferente! Él tiene un cocinero especial que presta atención a su nutrición. Su estómago es muy delicado. ¿Le das de comer esa comida y esperas que no le pase nada?”  nada?”  “¿Así es como te conviertes en su prometida? Quieres matarlo, ¿no es así?”  así?” 

 

  Dueño de mi Cuerpo Yolanda lo dijo muy seria, e hizo que Claudia sintiera un fuerte golpe en su corazón. Sacudió su cabeza. ¡Ella no quería matarlo! No sabía que Miguel no podía comer comida chatarra. Ella solo quería que comiera comida que nunca antes había comido. Sin embargo, no se dio cuenta de la

diferencia Él nunca había comido esaque clasetenían. de comida y su cuerpo no iba a reaccionar bien. “No lo lo hice a propósito. No sabía qué le iba a pasar eso…”  eso…”  “¡No tuviste la intención de hacerlo, pero lo hiciste! ¡Eres tan estúpida que no mereces estar con Miguel!”  Miguel!”  Yolanda puso su mano sobre ella. Claudia se tambaleó, no aguantó y cayó al suelo. Esta vez, no lloró ni se quejó del dolor. Sintió en ese momento que no tenía derecho de hacerlo. Ella se merecía ese dolor. Se levantó del suelo con los ojos

enrojecidos, pero no derramó ninguna lágrima.

 

  Dueño de mi Cuerpo “Incluso si fue mi culpa, ¿qué tiene que ver contigo? ¿Quién eres para meterte en nuestros asuntos?”  asuntos?”  “Parece que no eres tan estúpida después de todo. Todavía te interesa saber sobre mí. Entonces deberías escuchar con atención. ¡No te asustes cuando revele mi identidad!”   identidad!” Yolanda le contó con orgullo sobre sus antecedentes y la miró como si fuera mejor

que ella. “¿Qué te parece? Soy mejor que tú, ¿sí o no?”   no?” “¿Y qué? ¿Qué es lo que quieres ahora?”  ahora?”  “Quiero que seas sensata y te alejes de Miguel. ¡Eres una carga y un desperdicio para él! No puedes ayudarlo y seguirás reteniéndolo. reteni éndolo. ¡Te ruego que lo dejes ir!”  ir!”  “¿Qué quieres decir con que lo estoy reteniendo? ¡No he hecho nada para retenerlo!”   retenerlo!” Claudia estaba ansiosa por saber lo que significaba eso. Ella no era una carga para Miguel,

¡tampoco un desperdicio!

 

  Dueño de mi Cuerpo Incluso si ella no sabía cómo resolver sus problemas, si podía apoyarlo en los momentos difíciles. ¡Ella era tonta, pero no tanto! Siempre y cuando Miguel la trate bien, ¡ella lo trataría mejor! “¡Es porque te llamas Claudia Rosas que lo retienes! ¿Alguna vez pensaste en la razón por la que Miguel fingió ser feo y engañó al mundo entero durante cuatro años? ¿Por

qué el abuso losde rumores de todo aguantó el mundo?” “Tiene ysed venganza en su corazón y tiene cosas por hacer. Por eso fundó la empresa J.C. Él puede prosperar en su carrera y estar en la cima por muchos años conmigo. Además, soy más hermosa que tú. Tengo mejor figura y mejor temperamento que tú. Soy mejor que tú en todo. ¿No deberías retirarte y aceptar tu derrota? ¿Acaso no te respetas a ti misma?”   misma?” Yolanda tenía un tono agresivo. Ella no podía persuadir a Miguel, pero si lo podía hacer con Claudia.

No necesitaba mencionar que cualquiera que las viera podía decir con seguridad quién era la mejor.

 

  Dueño de mi Cuerpo Cuando Claudia escuchó eso, sintió como si un cuchillo se clavara en su corazón. Y si el cuchillo fuera sacado, un agujero estaría allí para siempre. Un agujero que nunca podrá llenar…  llenar…  Sería difícil de llenarlo con confianza y autoestima. “Tenemos sentimientos el uno por el otro. Él no me menosprecia por no poder ayudarlo.””  ayudarlo.

Era verdad. Miguel nunca laaceptado había menospreciado. Debe haberla por como es. Finalmente encontró algo de confianza. Sus ojos se iluminaron nuevamente y volvió a mirar a Yolanda.  A Yolanda le pareció gracioso. Parecía que había oído un chiste y se echó a reír a carcajadas. Esa risa atormentó a Claudia. “Tú... ¡Deja de reírte!”  reírte!”  Ella perdió el control de sí misma y se enojó mucho. “Detente.”   “Detente.”

Dio unos pasos adelante y empujó a Yolanda para detenerla. Ese empujón fue con poca fuerza.

 

  Dueño de mi Cuerpo Pero Yolanda se volvió feroz y le dio una fuerte bofetada. Tenían suerte de que estaban solas en el pasillo, de lo contrario, atraerían a muchos espectadores. Yolanda sonrió de una forma malvada. “¿Quién te crees para tocarme?”  tocarme?”  Claudia sintió un dolor ardiente y cubrió su mejilla. “Tú...”   “Tú...”

Claudia apretóla el puñode para contraatacar, pero Yolanda agarró la muñeca. “¡Vas a ver si es que te atreves a pegarme! ¡Piensa bien la clase de persona que eres! ¿Acaso te puedes comparar c omparar conmigo?”  conmigo?”  Yolanda le dijo de manera agresiva. Hizo que Claudia se quedara sin palabras. Claudia sabía muy bien que no tenía ningún estatus. Si iba a provocar a Yolanda, su padre no la iba a ayudar.  Acaso... ¿Iba a admitir su derrota? Yolanda la empujó contra la pared, lastimándole la espalda. “¿Qué es lo que quieres?”  quieres?” 

Que te alejes de él. No eres la adecuada para estar con él. ¡Estando contigo solo harás que se canse! Él tiene su venganza

 

  Dueño de mi Cuerpo y otros planes, pero tú solamente quieres comodidad. Le atarás las manos y los pies. En el futuro, si J.C cae en una crisis, él tendrá que sufrir solo. ¿Crees que vas a poder ayudarlo?”  ayudarlo?”  Esa última frase fue un golpe fatal para Claudia.