Libro Aprendedores

Table of Contents PRÓLOGO INTRODUCCIÓN EL SER, EL PENSAR Y EL HACER SER LA MATRIZ DEL SER EL PROPÓSITO DE VIDA ¿CÓMO ENCONTRAR TU PROPÓSITO? METAS (SUEÑOS) METAS PERSONALES METAS MATERIALES METAS ESPIRITUALES METAS SOCIALES METAS FAMILIARES CUALIDADES CUALIDADES PERSONALES CUALIDADES MATERIALES CUALIDADES ESPIRITUALES CUALIDADES SOCIALES CUALIDADES FAMILIARES OTRAS CUALIDADES HÁBITOS HÁBITOS PERSONALES HÁBITOS MATERIALES HÁBITOS ESPIRITUALES HÁBITOS SOCIALES HÁBITOS FAMILIARES OTROS HÁBITOS VALORES RESPONSABILIDAD HUMILDAD GENEROSIDAD TOLERANCIA PERDÓN HONESTIDAD INTEGRIDAD PENSAR TEORÍA DE LOS CANDADOS DE EMPRENDIMIENTO (TCE) EL ÉXITO SEGÚN TCE HABILIDADES BLANDAS DISPOSICIÓN PARA SERVIR Y RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS LIDERAZGO Y TRABAJO EN EQUIPO

ACTITUD Y ESPÍRITU EMPRENDEDOR CANDADOS DEL EMPRENDIMIENTO CANDADO: GESTIÓN DE LA ESPECIALIZACIÓN TALENTO CONOCIMIENTO CAPACITACIÓN INNOVACIÓN DIFERENCIACIÓN PROCESOS CADENA LOGÍSTICA Y DE SUMINISTROS CANDADO: GESTIÓN DEL ENTORNO ENTORNO EXTERNO EMPRESARIAL ENTORNO FAMILIAR DOMINIO DE LA MENTE EDUCACIÓN FINANCIERA FRUGALIDAD INTELIGENCIA EMOCIONAL ESPIRITUALIDAD MENTORES SALUD PLANIFICACIÓN ESTRATÉGICA NORMATIVA LEGAL CONTABILIDAD FINANZAS MARKETING VENTAS PUBLICIDAD HACER MATRIZ DE EVALUACIÓN TCE INTERPRETACIÓN DE LOS RESULTADOS MATRIZ DE ACCIÓN DEL EMPRENDIMIENTO HABILIDADES BLANDAS DISPOSICIÓN PARA SERVIR Y RESOLVER PROBLEMAS DISPOSICIÓN PARA SERVIR RESOLVER PROBLEMAS LIDERAZGO Y TRABAJO EN EQUIPO LIDERAZGO TRABAJO EN EQUIPO ACTITUD Y ESPÍRITU EMPRESARIAL ACTITUD ESPÍRITU EMPRESARIAL CANDADOS DE EMPRENDIMIENTO EL CANDADO DE LA ESPECIALIZACIÓN TALENTO

CONOCIMIENTO: CAPACITACIÓN INNOVACIÓN DIFERENCIACIÓN PROCESOS CADENA LOGÍSTICA Y DE SUMINISTROS EL CANDADO DEL ENTORNO DEL EMPRENDIMIENTO ENTORNO EXTERNO EMPRESARIAL ENTORNO FAMILIAR DOMINIO DE LA MENTE EDUCACIÓN FINANCIERA FRUGALIDAD INTELIGENCIA EMOCIONAL ESPIRITUALIDAD MENTORÍAS SALUD EL CANDADO DEL SISTEMA DE GESTIÓN ADMINISTRATIVA PLANEACIÓN ESTRATÉGICA NORMATIVA LEGAL CONTABILIDAD FINANZAS MARKETING VENTAS PUBLICIDAD BIBLIOGRAFÍA AGRADECIMIENTOS:

Esta publicación contiene las opiniones e ideas de su autor. Su intención es ofrecer material útil e informativo sobre el tema tratado. Las estrategias señaladas pueden no ser apropiadas para todos los individuos y no se garantiza que produzca ningún resultado en particular. Este libro se vende bajo el supuesto de que ni el autor, ni el editor, ni la imprenta se dedican a prestar asesoría o servicios profesionales legales, financieros, contables, psicológicos u otros. El lector deberá consultar a un profesional capacitado antes de adoptar las sugerencias de este manuscrito o sacar conclusiones sobre él. No se da ninguna garantía respecto a la precisión o integridad de la información o referencias incluidas aquí. El autor, el editor, la imprenta y todas las partes implicadas en el diseño de portada y distribución niegan específicamente cualquier responsabilidad por obligaciones, pérdidas o riesgos, personales o de otro tipo, en que se incurre como consecuencia, directa o indirecta, del uso y aplicación de cualquier contenido del libro. Este libro no podrá ser reproducido, ni total ni parcialmente, sin el previo permiso escrito del autor. Todos los derechos reservados.

Aprendedores © Renzo Xavier Aguirre Idrovo (EELA) Corrección editorial: Julia Gutiérrez

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Miedo al fracaso versus temor a emprender El miedo y el fracaso son dos conceptos muy diferentes que necesitas distinguir. El miedo es inherente a la naturaleza de las personas porque lo llevamos en nuestros genes, nacemos con él y se forja en la infancia y durante nuestras vidas. Sin embargo, tener miedo no tiene nada de malo, si bien es una emoción que nos induce a mantenernos en estado de alerta para enfrentarnos a las amenazas que nos presenta la vida. Podemos sentir miedo a morir, a fracasar, al dolor, a la pérdida, a la crítica, y a un sinnúmero de circunstancias. Todos esos miedos son normales y están en la esencia de los seres humanos. Ahora bien, desde el punto de vista de un emprendedor, quiero centrarme en un factor clave: el miedo. El miedo a fracasar nos ayuda a mejorar nuestra capacidad de respuesta ante cualquier alarma que se encienda en el momento de emprender. Por eso, negar el miedo a fracasar es renunciar a la oportunidad de sentirnos vulnerables y, con ello, asumir que somos humanos con todas sus consecuencias. Por el contrario, aceptar el fracaso como parte del emprendimiento es mostrar madurez para reconocer nuestra vulnerabilidad y tener la posibilidad de apalancarnos en él para actuar correctamente cuando perseguimos el éxito para nuestra empresa. Si ya hemos asimilado que en nuestro rol de emprendedores somos vulnerables y que tener miedo al fracaso es un mecanismo para sortear ciertos errores, entonces ha llegado el momento de observar que existe otro elemento que sí está en nuestras manos: el temor. Cuando alguien manifiesta temor es porque su fe está resquebrajada. Por tanto, el temor se traduce en una notoria falta de fe. Al dejar de lado el significado dogmático, podemos definir la fe como una falta de conocimiento que, cabalmente, nos hace dudar de nuestras capacidades para gestionar un emprendimiento. A menudo escuchamos el malentendido de que el emprendimiento es la ejecución de una idea. No olvidemos que no se trata únicamente de eso, sino de gestionar esa idea de la manera correcta para lograr que nuestra actividad económica sea sostenible, escalable y rentable. En este sentido, tanto el conocimiento como la correcta aplicación de todas las herramientas de gestión administrativa que existen en la actualidad están al alcance del emprendedor para que incremente su FE en las capacidades que posee y, con ello, logre disminuir su temor a emprender.

En concreto, para gestionar un emprendimiento tenemos que considerar, sin orden de importancia, cinco áreas: 1) habilidades blandas; 2) desarrollo personal; 3) planificación; 4) ámbito comercial, y 5) ámbito financiero. Cuando hablamos de un grupo de habilidades blandas apostamos por el liderazgo, el trabajo en equipo, la actitud, el espíritu empresarial, la disposición para servir, y la capacidad de resolver problemas a través de nuestros productos y servicios. En el campo de lo personal se trata de adquirir conocimientos en educación financiera, inteligencia emocional, frugalidad, espiritualidad, salud, desarrollo individual y dominio de la mente. Respecto a la planificación, hay que considerar la normativa legal, los recursos humanos, la planeación estratégica, l la innovación y diferenciación, procesos, y la cadena de suministros. En lo comercial se encargará de las ventas, el marketing y la publicidad. Finalmente, el ámbito de las finanzas tiene el cometido de manejar la contabilidad, las finanzas y la tributación. Un emprendedor nato tiene que afrontar el desafío de conocer en profundidad todos y cada uno de estos puntos y, sobre todo, se hace indispensable que sepa aplicarlos mediante las distintas herramientas de gestión existentes. Si llevas a cabo esta premisa, tu FE se incrementará progresivamente hasta que logres convencerte de que cuentas con el potencial que se requiere para gestionar tu emprendimiento con éxito. En conclusión, el miedo a fracasar estará ahí latente porque forma parte de ti como emprendedor, pero tendrás que canalizarlo para que se convierta en un aliado que te ayude a no tomar decisiones equivocadas. Por otra parte, recuerda que el temor lo puedes manejar. Si sientes temor a la acción o temes emprender, podrás dominar la situación al aumentar la fe en tus capacidades para gestionar tu negocio a través del conocimiento. Así que en adelante utiliza el miedo a fracasar para adoptar resoluciones acertadas y tu Fe para poner en marcha tu iniciativa y neutralizar el temor a emprender. Artículo publicado en la Revista Forbes el 12 de enero del 2022

PRÓLOGO El arte de emprender, más que un camino, un acto de fe. Del último informe del Global Entrepreneurship Monitor 2019-2020 se desprende que la creación de riqueza individual no es el único motor para los emprendedores, que se están orientan do, además, a la consecución de un propósito intangible. En este sentido, es destacable que la mayoría de las mujeres que inician un negocio aspiran a cambiar el mundo, mientras que, en los hombres, la principal motivación es principalmente el lucro o el autoempleo. En palabras de José Bayón, consejero delegado de la Empresa Nacional de Innovación (ENISA) española, “el actual contexto socioeconómico marcado por la digitalización y su globalización aso- ciada, así como el necesario avance hacia la sostenibilidad ambiental y los retos de género y demográficos, nos avocan a desarrollar un nuevo modelo productivo que permita generar bienestar social y riqueza de forma eficiente y competitiva y donde la innovación, la creatividad y el emprendimiento resultan fundamentales”. Según el Informe Mundial GEM más reciente, solo seis países del mundo presentan tasas de emprendimiento similares entre hombres y mujeres. España encabeza la paridad en el entorno europeo por sexto año consecutivo, con 9 mujeres emprendedoras por cada 10 hombres, una cifra que supera la media de Europa, donde solo se cuentan 6 mujeres por cada 10 hombres emprendedores. El compromiso de los gobiernos que encabezan la lista, con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU (ODS), así como la promoción estratégica de las pymes y el espíritu empresarial, está alineado con las políticas europeas y de los gobiernos autónomos tales como el emprendimiento estratégico, el emprendimiento femenino, el autoempleo, la gestión del talento, los marcos regulatorios, la financiación, la innovación y digitalización, la sostenibilidad y la internacionalización. Para la mayoría de los países en desarrollo las cifras de emprendimiento son altísimas, pero al mismo tiempo, las tasas de permanencia de estos nuevos negocios son muy bajas (la mayoría no pasan de tres años y algunos solo duran meses). Es inevitable preguntarse: ¿Cuál es el problema? Dice Renzo Aguirre que “Emprendimiento sin conocimiento es un experimento” y añade más adelante que “un emprendedor debe reconocerse y conocerse. Primero tiene que aceptarse como es, entender que puede cambiar y trabajar en

ello”. Entonces pareciera que no basta con tener “olfato” o copiar negocios que parecen “sencillos”, como el fenómeno de los food trucks que tuvimos en el Ecuador. Aprendedores no es un libro más, de aquellos que se compran en el aeropuerto para hacer más llevadera la espera; tampoco es un manual: “sigue estos pasos y tendrás éxito”. Es un texto de cabecera que te invita a meditar, a estudiar y además deberás trabajar con él, porque lo que Renzo propone es un método de trabajo en el que no te dice dónde emprender, sino cómo prepararte para hacerlo con éxito: “Un emprendedor debe tener el suficiente conocimiento para pensar y a partir de ahí desarrollar su capacidad analítica, crítica, creativa e innovadora. La capacidad de pensar es la que te va a facultar para elaborar estrategias con las que enfrentarás los distintos desafíos que se presentan en el día a día de un emprendedor”. El libro tiene una primera parte vivencial, donde el autor cuenta eventos de su vida que lo marcaron y reflexiona sobre ellos. De esta forma ahorra a los emprendedores estos desvíos que no siempre tienen buenos finales, pero al mismo tiempo te hace ver que no es solo un teórico, un estudioso que decide escribir sobre lo que enseña en clase; Renzo es un emprendedor nato, que desde muy temprana edad tuvo negocios, franquicias y empresas, aciertos y desaciertos que le dejaron entre muchas otras una gran convicción: “Para que tu emprendimiento tenga éxito debes pensar como una persona de éxito, y para pensar así, tienes que trabajar en tus creencias”. En la segunda parte, el libro despliega la Teoría de los Candados de Emprendimiento, un compendio de herramientas sobre las cuales cada emprendedor debería enfocarse para no dejar escapar de sus manos los objetivos planteados. En definitiva, un conjunto de conocimientos en los que apalancarse para pensar como un emprendedor de éxito. “Según la Teoría de los Candados de Emprendimiento, toda iniciativa nace con éxito, pero que este éxito dure una hora, un año, o un tiempo indefinido, depende de lo que se haga para retenerlo. Debemos imaginarnos que el éxito es como un globo de helio que se irá volando si no lo sostenemos”. Es por ello por lo que plantea encerrarlo con habilidades blandas y, una vez hecho esto, asegurarlo con tres candados: especialización, entorno de emprendimiento y sistema de gestión administrativa; mientras que las seis habilidades blandas dispuestas en pares son: disposición para servir y resolución de problemas; liderazgo y trabajo en equipo; actitud y espíritu emprendedor. El planteamiento, con mucho sentido y fácil de comprender, se resume

en que, si estos candados no están bien cerrados o son muy vulnerables, se abrirán las esquinas del triángulo y el éxito se escapará. La consecución del éxito, por lo tanto, depende de la fuerza con la que estén cerrados los candados y permanecerá en la medida en que los tres elementos (especialización, sistema de gestión y entorno) estén bien estructurados con cada una de sus variables. La tercera parte del libro se centra en unas matrices que ayudarán al aprendedor a definir en qué plano están sus habilidades o, en este caso, cada uno de los candados, y qué debe hacer para mejorar; así cómo definir exactamente qué es lo que lo hace feliz, pero desde el plano integral, sin descuidar ningún aspecto: “Operar un emprendimiento es un arte, un balance entre la actividad diaria y la búsqueda de nuevos horizontes. Para mantener un equilibrio sano que no te impida crecer debes tener una visión clara de tus metas, que estarán enmarcadas en un tiempo específico. Debes pensar, organizar y proyectar las acciones que vas a ejecutar y que se denominan estrategias”. Hace años que conozco a Renzo Aguirre, un hombre con una gran personalidad que no tiene ningún reparo en reconocer sus errores, que habla de Dios, de Lady y de sus hijos con naturalidad; un profesor carismático, cercano, pero, sobre todo, Renzo es un hombre humilde, porque sigue aprendiendo, sigue pidiendo consejo, sigue escuchando y sigue curioso, investigando y ahondando en el arte de emprender. Este libro es una muestra de su generosidad, se saca de adentro todo lo que tiene y lo pone a disposición de los Aprendedores, para ahorrarles equivocaciones, para allanarles el camino. Pero el camino del emprendimiento no es fácil y se necesita mucho corazón, mucha inteligencia emocional, mucha capacidad para levantarse, seguir adelante y, sobre todo, mucho crecimiento espiritual, porque finalmente, el emprendimiento es un acto de fe. Diego Alejandro Jaramillo. Ph. D

ÌNDICE MIEDO AL FRACASO VERSUS TEMOR A EMPRENDER PRÓLOGO INTRODUCCIÓN EL SER, EL PENSAR Y EL HACER SER LA MATRIZ DEL SER EL PROPÓSITO DE VIDA METAS (SUEÑOS) CUALIDADES HÁBITOS VALORES PENSAR TEORÍA DE LOS CANDADOS DE EMPRENDIMIENTO (TCE) EL ÉXITO SEGÚN TCE HABILIDADES BLANDAS CANDADOS DEL EMPRENDIMIENTO HACER MATRIZ DE EVALUACIÓN TCE INTERPRETACIÓN DE LOS RESULTADOS MATRIZ DE ACCIÓN DEL EMPRENDIMIENTO HABILIDADES BLANDAS CANDADOS DE EMPRENDIMIENTO BIBLIOGRAFÍA

Para mi esposa, mi mayor aprendedora

INTRODUCCIÓN Antes de comenzar me gustaría explicarte las razones por las que, a través de mi historia de vida, creo que puedo permitirme hablar de emprendimiento y sobre todo prepararte para llevarlo a cabo con éxito. Por mucho tiempo he observado que existen miles de vendehúmos, es decir, personas que te enseñan a emprender…, ¡pero que nunca han emprendido! Sí, yo también creí en ellos. Son adoctrinadores cuya fuente de riqueza es precisamente la de instruirte para emprender. En pocas palabras, la formación que trasmiten no procede de prácticas comprobadas, sino de una mera teoría… Comenzaré por decirte que el Renzo que escribe este libro es un Renzo que empezó su verdadero cambio hace apenas 14 años. Hoy tengo 48 años de edad y, sin miedo a equivocarme, puedo asegurar que hasta los 34 la mía es una historia de fracaso en general. Nací en Cuenca, una pequeña ciudad de mi país, Ecuador. Mis padres son de origen humilde. Cuando yo apenas contaba con 5 años de edad mi madre decidió que debíamos salir de ahí, así que agarró a mi hermano con una mano y a mí con la otra, para encaminarnos a Quito, la capital. No es momento para hablar de la influencia que tuvo mi hogar en estos primeros 34 años, pues asumo que la responsabilidad de mis actos es mía y no pretendo contar una historia de tristezas respaldándome en lo que sucedía en el entorno familiar. Pese a que pude ser un estudiante destacado en el colegio, lo cierto es que mis recuerdos de entonces son muy vagos. Para mí era suficiente cumplir con el promedio para no quedarme en supletorios, por lo que me gradué en el puesto número 20. Desde muy niño simplemente me conformaba con sobrevivir. Mi conducta universitaria no es menos mediocre. Hice lo imposible para evitar los viajes que implicaban ir desde mi casa hasta uno de los valles donde se ubicaba la primera universidad a la que asistí. Dos años después nació la institución en la que obtuve mi diploma y, fruto de una “beca”, en el año 98 obtuve mi título universitario. A partir de ahí no paré de estudiar, aunque siempre lo hice por las razones equivocadas, ya que el ego marcaba mi recorrido. Seguramente lo hacía para justificar una vida de mediocridad. No estudiaba para aprender, sino porque era lo único que se me daba medianamente bien. En el año 97 incursioné en el mundo publicitario por invitación de un buen amigo, Xavier. Como todo en aquella época de mi vida, resultó una

debacle, pero no porque el proyecto fuera malo, sino porque yo no estaba preparado para ser un buen socio. Fueron años de intentar, intentar e intentar. En ese mismo año nació mi hijo Sebastián. Como padre también resulté un fiasco y no se diga como marido… El matrimonio me duró apenas dos años. Ahora lo analizo y soy consciente de que el principal problema siempre fui yo, pero entonces no dudaba en culpar al mundo, a mi entorno y a mi familia de muchos de mis fracasos. Las cosas se empezaron a dar algunos años después de estos denodados intentos; sin embargo, yo tenía un concepto equivocado del éxito, y eso hacía que no pudiera ver mi realidad de una forma objetiva. Para resumir, yo era un emprendedor mediocre que sobrevivía y comencé a buscar refugio en el alcohol y las drogas. Las sustancias me ayudaban a distorsionar todo lo que sucedía a mi alrededor y me hacían creer que todo estaba bien. En el año 2007 abrí una cadena de tiendas de ropa. Un año después la vendí, junto con mi cartera de clientes de la agencia, a otra agencia conocida en el medio. Mi cerebro seguía convencido de que yo era exitoso. Eso pasa con el cerebro, te vende la realidad que le conviene, más aún cuando te mantienes en un estado permanente de inconsciencia mental. El balance de esta forma de vida se saldó con dos matrimonios arruinados, un hijo abandonado, alcohol, drogas, excesos, mentiras, promiscuidad, inestabilidad laboral y pésimas (algunas también muy buenas) amistades. Vivía en un mundo paralelo, un mundo donde mi ego justificaba todos mis descalabros. Con 34 años de edad toqué fondo. Lo único que tenía era unos estudios que no aplicaba, la cátedra que de alguna manera llenaba ese vacío existencial, y un mundo plagado de desorden y de falsedad. Hundido, cubierto de deudas, sin un trabajo -el contrato con la agencia a la que le entregué mi cartera de clientes se había acabado-, alejado de mis verdaderos amigos e involucrado con quienes me apoyaban en las drogas y el alcohol. Así estaba yo un día domingo, con ganas de morir y acabar de una vez por todas con esa vida caótica de fracasos, odio y amargura. Ese día en que todo cambió porque conocí a Dios. Había insinuado que todo debía acabar a través de un mensaje en Facebook: “Este cuchillo está mal puesto”. Solo una persona entendió el mensaje, mi buen amigo César. César, un hombre creyente, me llamó por Skype, la única plataforma de video que existía en aquel momento. Yo no creía en Dios y si lo hacía

era sin ningún convencimiento. Mi amigo me hizo leer algunos pasajes de la Biblia y, debo ser honesto, ni él ni yo recordamos cuáles fueron, y aquella noche pude dormir como no lo había hecho por mucho tiempo. Fue César quien me hizo conocer un camino diferente, un camino que nunca había explorado y que me negaba a transitar. Ahora entiendo que se trata de un camino espiritual, no religioso. Ese día domingo, hace 14 años, todo cambió para mí. No ha sido fácil. Como siempre digo en mis charlas, este no es un camino con crecimiento aritmético (2, 4, 6, 8…), sino exponencial, pero la diferencia es que comienzas de muy, pero muy abajo (0,20; 0,40; 0,80; 1,60...), como puedes ver en la Tabla 1, la meta es incalculable. Han pasado 14 años y lo logré. Ahora estoy en el camino correcto, lo estoy recorriendo y no pararé hasta la hora de mi muerte. Este es el camino que quiero enseñarte. Comenzarás desde muy abajo, tendrás que tener mucha paciencia y esperar pocos resultados al inicio, pero te aseguro que redundará en enormes satisfacciones. En 2010 fundé nuevamente mi agencia. Hoy por hoy es una empresa consolidada, organizada y con presencia en Latinoamérica. Me ha permitido contar con el capital para arrancar nuevos emprendimientos, algunos con grandes éxitos (cadena de restaurantes, productora, instituto superior, entretenimiento), y otros con fracasos (farmacéutica, medios digitales, lounge). Ha sido un camino diferente, un viaje de cambio constante. En 2018 fundé la Escuela de Emprendimiento EELA, ahora un instituto de educación superior, nuestro instituto superior, y digo nuestro porque ha sido posible gracias al trabajo conjunto con mis socios, Juanpi B. y mi esposa Lady B., de los que hablaré más adelante para contar su historia. Además, incursioné en el ámbito de la construcción en el país y en el de los bienes raíces en el extranjero, la verdad, sin buenos resultados en el primer caso y con mucha incertidumbre en el segundo. Por último, al momento de revisar esta edición, puedo anunciar que firmé un contrato con Disney, a través de un proyecto en el que participo como socio, en calidad de inversionista y gestor estratégico. Se llama ECOY y considero que es alucinante. ¡Búscalo en redes! Estoy seguro de que te seguirás encontrando con nuevas sorpresas. Me casé por tercera vez. Estoy enamorado de mi esposa, tengo un hogar maravilloso, con sus dos hijos, el mío (a pesar de que no vive conmigo, pero volvió a mi vida hace 13 años, en el 2010) y dos perros. He cumplido con todas mis metas materiales y personales. Llevo una vida sin vicios, gracias a una evolución espiritual que me conecta con el Universo (Dios). Socialmente hablando, estoy trabajando en una cuestión

que no es fácil para mí y que se fundamenta en tratar de llegar a aquellas personas con las que se pueda encontrar una afinidad a través de este cambio de pensamiento, algo que se me complica debido a que mi fobia social me pone muchas trabas al momento de relacionarme. Por lo pronto, tengo a mis dos socios y juntos recorremos esta emocionante senda. Como puedes ver, no pretendo hablarte de emprendimiento y enseñarte sobre él sin ninguna base. Lo hago porque siento que mi vida, mi experiencia, mi investigación y mis estudios son argumentos suficientes que me llevan a pedirte permiso para hacerlo. En este libro te quiero mostrar todo lo que hice para lograrlo. Te aseguro que estoy fuera de ese grupo de vendehúmos (que los hay por miles) y me pongo en tus zapatos con el objetivo de enseñarte todo lo que necesitas para recorrer este camino de transferencia de conocimiento para tu trasformación. ¡¡¡Ven y recorrámoslo juntos!!!

Si bien hace mucho tiempo atrás pensé en escribir este libro, la iniciativa de este texto que estás leyendo se gestó en una cafetería de la ciudad de Quito, junto a mis editores, a quienes debo darles el crédito en las dos primeras páginas y el agradecimiento por el impulso de iniciarlo, para continuar con la tarea de forma independiente durante la pandemia por la COVID-19. Mientras les explicaba los principales objetivos que me había trazado para este trabajo, dibujaba en un papel la teoría que diseñé para alcanzar el éxito en mis emprendimientos y que está fundamentada en la filosofía del SER, PENSAR y HACER. En el 2.000 incursioné en la que sería mi pasión y además mi talento. Ese fue el año en el que tuve la oportunidad de empezar a dictar cátedra

universitaria. Como ya mencioné, hasta los 34 años mi vida no tenía un norte, pero no puedo negar que ser profesor le daba algún sentido. A lo largo de 18 años trabajé para distintas universidades del país y también del extranjero. El día que una de ellas me cerró las puertas debido a una coyuntura maravillosa de la vida (te lo contaré más adelante), fue cuando decidí fundar mi propio instituto de educación. Aunque EELA inició en el campo del emprendimiento, no nos consideramos un instituto de emprendimiento; en cambio, nos definimos como una institución de educación en muchas ramas: emprendimiento, negocios, sistemas, salud, ingeniería, arquitectura, etc. Tanto es así, que nuestra área programa de emprendimiento representa apenas el 4 % de la facturación total. Por tanto, EELA es una combinación de experiencia, vida, negocios, amor y enseñanza. No vivimos del emprendedor, sin embargo, sí le enseñamos a serlo con bases y con experiencia. Demoré más de una década en comprender cuál es el camino para alcanzar el éxito y, más allá de eso, mantenerlo. Gracias a ello, ahora soy capaz de explicarlo de forma didáctica en menos de una hora, aunque también es cierto que podría pasar días enteros hablando con todo detalle sobre este tema que tanto me apasiona. Por otra parte, cabe mencionar que he necesitado más de cuatro años para estructurar y elaborar este libro, basado en todas las caídas, levantadas, instantes de frustración al momento de emprender y, por supuesto, de absoluta satisfacción al obtener los resultados esperados. El proceso no fue sencillo, en especial porque nadie nos enseña a fracasar, a trabajar, a reconocer las condiciones óptimas y a ser constantes. En definitiva, las escuelas convencionales no nos forman en los valores que hemos de aplicar para tener éxito en nuestros emprendimientos. El primer gran error que cometen muchos emprendedores cuando quieren plasmar su concepto de negocio es pensar que únicamente se trata de contar con la idea y con el capital oportuno para arrancar. Desde ese preciso momento comienzan los tropiezos que, en muchos de los casos, pueden desembocar en el temido fracaso. Normalmente, se cree que la carencia de dinero o de una idea brillante es el principal obstáculo para emprender, y de hecho es así cuando se tiene una perspectiva limitada del emprendimiento. Este libro busca que cambies tu perspectiva. Te invito a leer este manual para que puedas contar con una óptica diferente, usualmente no observada por quienes en su momento ambicionan dar los primeros pasos en un nuevo negocio. Es así que nos

debemos olvidar de la falta de dinero y de una buena idea; por un lado, la necesidad de capital se verá opacada por un ecosistema y, por otro, la idea nacerá de este mismo ecosistema a través de la utilización de la mente y el dominio de la misma. Para conseguir los objetivos esperados, esto lo veremos más adelante, y con ello alcanzar y mantener el éxito con un emprendimiento, se debe seguir una estrategia de forma técnica y profesional, dejando de lado las prácticas sin base ni fundamento. Ojo, con esto no estoy queriendo decir que antes de emprender tienes que aprender; lo que has de saber es que mientras emprendes tienes la obligación de aprender. En otras palabras, te tienes que convertir en un APRENDEDOR. Para ser un verdadero APRENDEDOR es vital entender la importancia de la persistencia. Según la teoría que desarrollaremos en este libro te demorarás entre tres y siete años para ser un empresario. La persistencia es una cualidad que toda persona debería adquirir y pulir a lo largo de los años. Basta con decir que solo la gente persistente logra la mayoría de sus anhelos. Las personas que persisten entienden que la vida está para luchar, para pelear, para sudar. No te quedes con el solo intento de aprender: lucha, pelea y suda por aprender. Ahora te quiero contar cómo logré pasar de trabajar en una de las “universidades de garaje” que se fundaron en mi país a incorporarme en una de las más prestigiosas; créeme, todo fue por persistencia. Corrían mis 25 años y uno de mis sueños era ser catedrático universitario. Honestamente, siempre tuve claro que mi talento era el de entregar el poco conocimiento que hasta ese tiempo había adquirido. La primera institución cuya puerta golpeé fue la misma en la que me había graduado. En aquella época, la propia universidad no creía en sus graduados, por lo que durante muchos años se me negó esa posibilidad. Debo decir que fue una de las “universidades de garaje” y otra de muy poco prestigio las que me aceptaron para comenzar mi carrera como docente universitario. Pese a todo, mi sueño der ser parte de alguna de las universidades de prestigio de mi país no salía de mi cabeza. Por cuatro años no dudé en mi intención de formar parte del alma mater, la Universidad de Las Américas (UDLA). Con ese fin, visité todas las facultades, áreas, departamentos e incluso me presenté como exalumno, pero ellos jamás cedieron. No podía ser profesor sin un título universitario del extranjero, o al menos eso es lo que me decían. Años más tarde, cursando un posgrado en la Universidad Andina Simón Bolívar (UASB), tuve el gusto de conocer a quien en ese momento

sería decano de la Facultad de Administración de Empresas de la UDLA, en su calidad de profesor. De esa forma, surgió la oportunidad para ingresar y cumplir con mi propósito en la UDLA, así que me valí de él para recibir una recomendación (una tarjeta de presentación con su firma) dirigida al coordinador de carrera. Durante dos años yo realizaba la visita con la misma tarjeta (se imaginarán cómo lucía con el pasar del tiempo), una vez por mes, para obtener siempre la misma respuesta: “Para la próxima te tomaremos en cuenta”. Yo ya contaba con seis años de experiencia en el mundo de la cátedra universitaria, pero tuvo que ocurrir algo inesperado durante uno de esos días de visita para que se me presentara la oportunidad de entrar a ser parte de la anhelada alma mater. Como todos los meses, no dudé en visitar la universidad y, en especial, al que ya era mi buen amigo, el coordinador, para ofrecer mis servicios. De alguna manera, ya se había entablado una amistad, y ese día, puntualmente sentado en su escritorio, me di cuenta de que tenía algún problema y me ofrecí inmediatamente a brindarle mi apoyo profesional y técnico. Debo confesar que no fue precisamente esta ayuda la que le comprometió a invitarme para dar una “exposición” en la que pudiera mostrar mis capacidades (nunca antes en dos años lo había hecho), pero lo que vi en la pantalla de su computadora sí que influyó. Así fue como conseguí ese chance, fruto de algo que seguramente él no quería que saliera de su oficina, y por eso de alguna forma compró mi silencio. Quédense tranquilos, pues no violaba ninguna norma social, moral o académica; aquello solamente era una conducta infantil por la que no quería correr el riesgo de verse afectado. Para lograr esa presentación tuvieron que pasar seis años en los que calculo que realicé más de medio centenar de visitas y sufrí muchas humillaciones, sí, humillaciones, tal y como lo lees. A pesar de ello, mi persistencia hizo posible que fuera catedrático de la universidad que algún día me formó. Si me hubiese dado por vencido en cada uno de los obstáculos o con el tiempo hubiera desistido, seguramente ahora no te estaría contando esta historia, porque muy probablemente no hubiese podido escribir este libro y, menos aún, estoy seguro, fundar EELA. El carácter es otra virtud en la que debes trabajar. No hay éxito sin acción, y el carácter se adquiere con la acción, forjándose día a día con valores, cualidades, hábitos, pensamientos positivos, sentimientos que aporten y acciones permanentes. El carácter es el que te llevará al éxito, por eso tienes que prepararlo para que sea él quien te guíe por la senda del bien. El carácter se construye a partir de los valores éticos, con tus pensamientos positivos, con sentimientos nobles y con la acción, porque

no hay éxito sin acción. Hay que ver el lado positivo de las cosas, porque si solo te fijas en lo negativo, eso quiere decir que algo está pasando dentro de tu ser y eso hace que veas la piedra, mas no el puente. Repite conmigo: “Declaro que voy a trabajar en un carácter maravilloso que me va a llevar al éxito”. Insisto, el carácter es la manera a través de la cual enfrentas la vida y tienes que alimentarlo a través de tus valores, tus pensamientos, tus sentimientos y sobre todo tus acciones. Emprender es una forma de ganarse la vida, así como ser colaborador y empresario también lo son. Ninguno es mejor que otro, pues todas son ocupaciones, tanto colaborar como emprender o ser empresario, por lo que no se puede decir que alguna de ellas esté por encima de la otra. Vivimos en un mundo donde se ha estigmatizado o sobrevalorado el acto de emprender, pero desde mi visión colaborar es igual de digno que ser empresario. Lo que he descubierto es que lo único que diferencia al emprendedor del colaborador y del empresario es la forma en la que se gestiona el talento de tu negocio a través de las distintas herramientas de gestión, entendiendo por talento todos los recursos de los que tu emprendimiento dispone (Fig. 1). Menciono el talento porque se trata de una cualidad innata que poseen los seres humanos y los tres papeles mencionados involucran a la persona. Cuando eres empleado o colaborador habrá alguien que gestione tu talento de la empresa en la que trabajas a través de las distintas herramientas de gestión, tanto administrativas, como de entorno y de especialización (las veremos más adelante en el desarrollo de la teoría). Por lo tanto, tú tienes un talento o habilidad y será otra persona quien gestione ese talento y los recursos de la empresa.

Por otro lado, tenemos al emprendedor, entendiéndolo como esa persona que debe aprender mientras emprende. Repito que no se trata de aprender para luego emprender, sino de aprender mientras se emprende, tomando conciencia de la necesidad que se tiene de aprender a gestionar las distintas herramientas propuestas en este libro. Cuando un emprendedor decide no aprender, inevitablemente será un empleado, o, mejor dicho, un autoempleado, que viene siendo lo mismo. Finalmente, el último rol es el de empresario, es decir, aquella persona que se ha preparado para gestionar talento (los recursos del negocio) y se ha tomado el tiempo de aprender a administrarlo mediante las distintas herramientas de gestión. No se trata entonces de facturación o de número de empleados, se trata de saber emprender. Personalmente he pasado por todos los roles. El de empleado o colaborador lo ejercí por más de 15 años cuando trabajé para una serie de universidades, dentro y fuera del país, en calidad de catedrático. Esas instituciones fueron las que gestionaron mi talento, y lo único que yo debía hacer era brindar mis habilidades a favor del empresario (las fundaciones fundadoras de aquellas universidades). Hace poco más de cuatro años determiné que yo mismo gestionaría mi talento y decidí fundar mi propio instituto. En ese preciso momento supe que tenía que aprender a gestionar mi talento y el de muchas otras personas en el mundo de la educación. Como ya mencioné, han pasado casi cuatro años y calculo que aún me quedan otros cuatro más para llegar a ser un empresario de la educación.

Finalmente, hace ya un poco más de 25 años incursioné en el mundo de la publicidad y ha resultado ser un camino largo, difícil, lleno de alegrías y fracasos, pero de mucho aprendizaje. Para resumir, no fue sino hace 12 años que entendí todo lo que te voy a enseñar y que hace posible que pueda llamarme empresario. Desde estas páginas quiero mostrarte una nueva forma de aprender y de emprender para que seas un verdadero aprendedor, y lo haré a través de mi experiencia, de mi vida, de mis estudios, de mis fracasos. Aquí está todo, no he dudado en quedarme con nada y tú serás quien con esfuerzo, persistencia y carácter lograrás todos tus sueños. El camino está trazado, solo queda en ti recorrerlo. Cuando menciono que este libro te muestra un camino, no lo hago de forma figurativa, quiero que lo tomes literal. Este camino tiene un inicio, una ruta y una meta, que es evitar el fracaso y con ello disfrutar del éxito. Te recomiendo que no te saltes ningún paso y que realices los ejercicios que se te proponen. Comienza con el SER y la Matriz del Ser, después sigue con el PENSAR, entendiendo la Teoría de los Candados de Emprendimiento, para finalmente cumplir con el HACER, a través de la Matriz de Evaluación y la Matriz de Acción. Es hora de que asumas tu rol de aprendedor y de que aprecies cuál es el verdadero rol de emprendedor. Solamente aceptando que debes aprender a emprender puedes llamarte emprendedor. Después, el tiempo decidirá si estás listo para ser un empresario, y con ello trabajar en la permanencia del éxito en tu vida y tu negocio. Te invito a leer este libro y sobre todo a aplicarlo, y vamos juntos a comernos este &%$·@ pero maravilloso mundo; porque recuerda que este mundo es &%$·@ pero tú lo haces maravilloso con tus acciones, y así mismo este mundo es maravilloso, pero tú puedes hacerlo &%$·@ con tus acciones.

EL SER, EL PENSAR Y EL HACER El SER, el PENSAR y el HACER son cosas totalmente distintas, de hecho, estoy convencido de que la una no tiene sentido sin la otra. Sin embargo, en los emprendimientos actuales se deja de lado el SER, y con ello se da solamente importancia al HACER y muy poca o nula al PENSAR. Gran parte de la literatura y el contenido que existe sobre emprendimiento se centra en el qué HACER para tener éxito, y esto lo puedes identificar cuando te topas con títulos que prometen resolver algún problema a través de una serie de pasos, por ejemplo, se me ocurren los siguientes: 4 pasos para tener éxito en tu emprendimiento, 6 formas de manejar tu flujo de efectivo, 4 pasos para segmentar correctamente en redes sociales, etc. Podría inventarme cientos de títulos, y claramente este contenido trata de qué HACER para lograr el objetivo. Al centrarnos en el camino para la obtención de un resultado, estamos dejando de lado el fondo y obsesionándonos con la forma de cómo hacerlo, lo que significa que no estamos preparados para recibirlo o, en la gran mayoría de casos, para crearlo. Tenemos claro lo que significa el HACER en cuanto al concepto, pero no necesariamente el camino o las herramientas para llevarlo a cabo. Por esta razón, es igual de importante entender las otras dos premisas, la del SER y la del PENSAR. Para interpretar correctamente qué es el SER, lo he definido de esta manera: el SER es transformarte en una persona digna de… (SER una persona digna de…). Más adelante veremos cómo deberás volverte una persona “digna de…”, en cinco áreas de la vida: espiritual, material, personal, familiar y social. Pretender que las cosas se den como queremos simplemente por desearlas es fantasear sobre si podemos o no obtenerlas. Por muchos años no entendí, o, lo que es peor, no supe nada sobre la existencia de este precioso concepto del SER. Por eso, mi vida en lo espiritual, material, personal, familiar y social era un completo caos. Si bien no te voy a hablar de cómo me volví una persona digna de un emprendimiento de éxito, lo que sí te quiero contar es cómo me convertí en una persona digna de una familia maravillosa. Sucedió cuando descubrí la existencia del concepto del SER y empecé a estudiarlo y a aplicarlo. Con ello, mi vida

definitivamente empezó a cambiar. Comenzaré por contarte que me he casado tres veces y que a lo largo de mi vida se ha frustrado mi “intento” de formar una familia. A mis 20 años me enamoré de alguien mucho mayor que yo, seguramente porque, psicológicamente hablando, buscaba a una mamá. En todo caso, fue una relación no correspondida y decididamente sin ningún aporte en mi vida. Años después conocí a una mujer espectacular, la madre de mi hijo, ahora una ejecutiva de éxito, madre y con una familia consolidada, donde uno de sus miembros es mi hijo Sebastián. Aquí debo decir que fui yo quien saboteó esa relación. Mi estilo de vida y mi actitud desordenada fueron los detonantes para que yo decidiera irme de su lado. Como se imaginarán, ahora puedo decir que en ese momento perdí mi primera verdadera oportunidad de tener esa familia. Después vinieron una serie de relaciones que no aportaron nada en mi vida. Llegó un segundo matrimonio, una relación tóxica en la que ni siquiera merece la pena ahondar, aunque para ser honesto debo reconocer que no puedo atribuir ninguna culpa a esas parejas. Yo fui el único culpable y responsable de que esas personas llegaran a mi vida, y del mismo modo el culpable y el responsable de alejarme de quien valía la pena. Definitivamente, la respuesta a estas situaciones es que el error fue mío y de nadie más, porque fui yo quien escogió a las personas equivocadas y también quien rechazó a las adecuadas. En pocas palabras, yo no me creía digno de poseer esa familia maravillosa que deseaba. Ahora sí, quiero enfocarme para que conozcas cómo a mis 45 años llegué por fin a tener la familia que siempre soñé. Hace un poco menos de seis años comencé a dictar cátedra en la Facultad de Pos grados de una de las universidades en la que prestaba mis servicios y en el primer paralelo conocí a alguien que al parecer era una mujer interesante. Un año después se dio la coyuntura de coincidir nuevamente y empezamos a salir. A la par, me incorporé como profesor en un nuevo curso (tomen en cuenta esto último). Volviendo a la persona mencionada (la llamaremos Julia R.), les diré que después de unos meses, cuando ya estaba involucrado en la relación, fui consciente de que su vida estaba asentada en una serie de antivalores (mentiras, alcohol, drogas, cinismo, promiscuidad, y más). La verdad es que no sé si fui descubriendo estos hechos o sencillamente había estado ciego ante esa realidad, y no tomé conciencia de ello, a pesar de ser tan evidente. Finalmente, fue esa oscuridad lo que me llevó a cuestionarme si efectivamente era yo el responsable de lo que me estaba pasando o era el mundo el que me castigaba. Golpeado con lo que me había ocurrido y consciente por fin de que

algo estaba haciendo mal, decidí tomar cartas en el asunto para cambiar esta situación. En aquel momento ya estaba convencido de que para ser un emprendedor de éxito debía SER una persona digna de un emprendimiento de éxito. Pues bien, ya era hora de convencerme también de que para tener una familia maravillosa debía convertirme en una persona digna de esa familia maravillosa. Obviamente no lo era, porque mis valores (antivalores), mis cualidades (anticualidades), mis hábitos (antihábitos) y mis metas (de hecho, no las tenía) no coincidían con ese SER. Me tomó un poco más de dos años trabajar en mi SER. Cultivé cuidadosamente mis cualidades, mis metas, mis hábitos y mis valores, consciente de que si no lo hacía todo seguiría igual. Mientras me encontraba en ese proceso, una noche mi socio llegó de visita al país y nos pusimos de acuerdo para salir a comer y tomarnos algo en un lounge de la ciudad. Debo confesar que al inicio estaba más pendiente de la hora de irme que de disfrutar del momento, hasta que mi colega me hizo reparar en que había alguien en la barra que me estaba mirando. De repente, me armé de valor y con el pretexto de pedir agua me acerqué a la barra, al lugar exacto donde se encontraba ella, y ahí me llevé la primera sorpresa: me conocía y lo que único que hizo fue saludar educadamente a su profesor. Sí, han leído bien, a su profesor…, ya era hora de bajar mi emoción, porque no estaba saludando a un galán (lo digo para sacarte una sonrisa) sino a un docente. Lo singular del caso es que yo no tenía una imagen clara de ella, algo que resulta difícil de creer, porque se trata de una mujer muy, pero muy atractiva. ¿Recuerdan que les había contado que a la par de salir con Julia R. entré a dictar clases en un nuevo curso? Pues bien, la dama en mención era alumna de ese curso y por ello me había reconocido. Lo extraño, como dije antes, es que yo tenía una idea muy vaga de ella a pesar de su belleza, y ahora puedo decirles que también a pesar de su inteligencia. Tuvieron que pasar algunos meses para que me contestara el teléfono y muchos más para que me aceptara una salida. ¡Por fin pasaba algo en mi vida a lo que no estaba acostumbrado! Me encontré con alguien que se hacía valer y se daba su lugar, y yo sentía que estaba ante una mujer por la que estaba dispuesto a esperar y a luchar. Meses después, cuando las condiciones se dieron de lado y lado, por fin me dio una oportunidad para dejarme entrar en su vida. Ahora es mi esposa y gracias a ella tengo la familia maravillosa que siempre soñé, sus hijos son fantásticos y pese a que no son míos y que tienen un padre único, contribuyen a mi felicidad, conjuntamente con mi hijo Sebastián y mi madre. Fíjense en lo curioso de la situación que he relatado. Al mismo tiempo

que salía con Julia R. dictaba clases en el curso donde estudiaba mi actual esposa y pese a su belleza e inteligencia, nunca me fijé en ella. Solo cuando me di cuenta de la necesidad de cambiar para SER una persona digna de la familia que anhelaba, el Universo confabuló para que ella y yo estuviésemos juntos. Mis antivalores, anticualidades, antihábitos y mi falta de metas crearon el inmenso caos anterior a la hora de plantearme establecer una familia. De igual modo, trabajar en valores, cualidades, hábitos y metas en el ámbito familiar me posibilitó transformarme en un SER digno de una familia maravillosa. Estoy convencido de que cuando un emprendedor no se ha vuelto una persona digna de un emprendimiento de éxito, en la mayoría de los casos todos sus esfuerzos serán en vano, o al menos requerirán un gran sacrificio para alcanzar los objetivos. Por el contrario, si un emprendedor se vuelve una persona digna de un emprendimiento de éxito, las acciones que este tome para alcanzar sus objetivos darán los frutos esperados y la ejecución de los mismos requerirá un menor esfuerzo. A ello hay que sumar la importancia de ser conscientes de la conveniencia de contar con los conocimientos apropiados para que los pensamientos y la mente aporten con ideas que generen los resultados que buscamos. Para resumir, el SER, el PENSAR y el HACER en el emprendimiento deben estar conectados indefectiblemente. En la figura 2 te muestro de qué forma los vinculé en lo que he llamado la Filosofía Empresarial del TCE (Teoría de los Candados de Emprendimiento). En esta filosofía el SER representa nuestra CONCIENCIA, mientras que la estrategia está simbolizada por el HACER; finalmente enlazas con tu emprendimiento a través del PENSAR, y este encarna el conocimiento oportuno para ejecutar las acciones (estrategia) que llevarán a tu emprendimiento hacia el éxito.

Mis estudios, mi experiencia y mis reflexiones me han llevado a estructurar la Matriz del Ser que descubrirás en este libro y que

mediante pasos sencillos te servirá para definir el propósito, las metas, cualidades, hábitos y valores que te ayudarán a llegar a SER una persona digna de… En segundo lugar, no olvides que si quieres ser un emprendedor de éxito tienes que PENSAR y para ello necesariamente debes llenarte de información, ¡pero de información válida! Vivimos en un mundo abarrotado de datos, noticias, referencias, investigaciones… Con tal exceso de información, cualquier persona que tenga unos recursos mínimos puede venderse como un experto. El problema se presenta cuando esa información es susceptible de confusión o no cuenta con valor para aportar en un emprendimiento. La sociedad está viviendo un momento de debilidad en el que se exige que todo sea fácil y rápido, mientras que se dedica el mínimo esfuerzo para lograr nuestros objetivos. El pensamiento es el que hará posible que tomes decisiones acertadas, inteligentes, críticas, diferentes y creativas. Por esta razón, se hace indispensable potenciar el cerebro, enriqueciéndolo con información valiosa que abone el terreno para llevar a cabo resoluciones que conduzcan al éxito del negocio. Todos tenemos a mano una herramienta insustituible, el cerebro, así que no te olvides de usarlo para tu emprendimiento (lo escuché por ahí). Sobre esto, el principal obstáculo radica en que nuestro sistema de creencias está estructurado con la información que durante mucho tiempo le estuvimos proporcionando al cerebro y que se basa en la programación que hemos tenido por años. Nuestra familia, el entorno, los amigos y la sociedad han definido la forma en la que debemos pensar y, en consecuencia, actuar. Solamente cuando tomamos conciencia de este error podemos dar un giro a nuestras vidas. Wikipedia ofrece la siguiente definición de pensamiento: “Fenómeno psicológico racional, objetivo y externo derivado del pensar para la solución de problemas que nos aquejan día tras día. El proceso de pensamiento es un medio de planificar la acción y de superar los obstáculos entre lo que hay y lo que se proyecta”. El emprendimiento implica planificar, ponerse en acción, superar obstáculos actuales y futuros, resolver problemas y pensar. Por tanto, un emprendedor tendrá que hacer uso permanente de su pensamiento, porque si no lo hace estará obviando una de las herramientas más importantes que posee. La capacidad de pensar es la que menos utilizan los emprendedores, y no porque no puedan hacerlo, sino porque simplemente no se toma conciencia de ello. “Pensar implica que tienes que conocer, comprender, aplicar, analizar, sintetizar y evaluar”.1 Respóndete con sinceridad a esta

pregunta: ¿Aplicas estas nociones en tu emprendimiento de forma permanente? Te sugiero que reflexiones sobre ello. En consecuencia, si no cuentas con una información conveniente para emprender, difícilmente serás capaz de procesarla y mucho menos podrás PENSAR como un emprendedor de éxito. PENSAR como un emprendedor de éxito implica entender lo que es el emprendimiento y definir qué es un emprendedor, pero además hace falta información de valor para conocerla, comprenderla, aplicarla, analizarla, sintetizarla y evaluarla para tomar las mejores decisiones en pro de tu negocio. Estoy convencido de que en la Teoría de los Candados de Emprendimiento encontrarás ese conocimiento necesario para pensar y tomar decisiones acertadas, obtener una visión más extensa del mundo del emprendimiento, el éxito y todas y cada una de las variables que influyen a favor o en contra de tus objetivos empresariales. Finalmente, tenemos el HACER, lo que significa ejecutar las acciones. Ya no solamente se trata de SER y PENSAR, ahora que te has vuelto una persona digna de un emprendimiento de éxito y piensas como un emprendedor ganador, es momento de ponerse en acción y de HACER las cosas para que todo esto se vuelva realidad. En el ámbito del emprendimiento el HACER comienza con establecer las acciones para ejecutar el plan trazado, es decir, el planteamiento estratégico en sí mismo consiste en ponerse en acción. Las iniciativas y tácticas que vienen debajo son las herramientas que complementan esta gran estrategia que se ejecuta con el HACER. Como dice mi mentor, John Maxwell, el mundo (del emprendimiento) es difícil, el mundo (del emprendimiento) es difícil para todos, pero para unos es menos difícil que para otros, y eres tú quien a través de tus acciones lo haces más fácil, por lo tanto, debes HACER las cosas que te permitan aligerar el camino al éxito. Es importante definir lo que hacemos, porque las consecuencias y los rendimientos de tu emprendimiento serán el reflejo de tus acciones, y es ahí donde se unen el SER, el PENSAR y el HACER. Si las acciones que ponemos en práctica no concuerdan con nuestros valores, cualidades, hábitos, y con las herramientas de gestión estudiadas difícilmente veremos los resultados esperados. Lo que te está pasando en la vida no es consecuencia de lo que otros hacen, en realidad es consecuencia de lo que tú haces con tu vida: si eres procrastinador, ególatra, mujeriego, borracho o irresponsable, no esperes que la vida te sonría. ¡Deja ya la queja y ponte en acción para cambiar!

La suerte en el emprendimiento no es más que la suma de las acciones diarias, que son las que con los años, sí, años, arrojan resultados diferentes a los comunes del mercado. Estructurar la matriz del SER, aprender de la Teoría de los Candados de Emprendimiento, evaluar las variables planteadas en la teoría y ponerse en marcha con los planes, son las actuaciones procedentes que te darán resultados con el tiempo. Por otro lado, es importante entender que un verdadero líder tiene un norte, un mapa y un plan de acción para cumplir con los objetivos de su emprendimiento (planificación estratégica). Cuando tienes todo eso, tu gente deposita su confianza en ti porque se ha manifestado tu condición de líder. Para que sepas como HACER todo aquello que llevaría a cabo un emprendedor de éxito, este libro te ofrece dos herramientas: la Matriz de Evaluación de la Teoría de los Candados de Emprendimiento y la Matriz de Acción del Emprendimiento. Aquí están a tu disposición las claves para tu tarea de SER un emprendedor de éxito mediante la Matriz del SER; para PENSAR como un emprendedor de éxito cuentas con el estudio de la Teoría de los Candados de Emprendimiento, y finalmente puedes HACER las cosas que un emprendedor de éxito ejecutaría a través de la Matriz de Evaluación de la Teoría de los Candados de Emprendimiento y la Matriz de Acción del Emprendimiento. Está en tus manos la voluntad de aplicarlo y con ello palpar el cambio que te garantizo si te pones en acción.

1 https://www.unibe.edu.ec/wp-content/uploads/2017/08/2.3La-importancia-depensar_VRamn1.pdf

SER Durante mucho tiempo me hablaron del SER y la verdad es que entonces no comprendí su verdadero significado. Cuando por fin decidí realmente abrir mi vida al sendero espiritual, y no solo al material, mi mente me ayudó a entender este concepto, pero más allá de eso, logré establecer mi propia visión sobre el SER. El SER de una persona es la capacidad que tiene un individuo para volverse digno de..., en pocas palabras, deberías preguntarte lo siguiente: ¿Cómo debo SER para que cualquier meta propuesta llegue a mí, impacte y se quede en mi vida? Por ejemplo, si tu SER no está preparado para recibir tu primer millón, entonces podrías tener frente a ti ese dinero a través de una idea, una empresa o un negocio, pero como tu SER no es digno de ese millón, simplemente no surgirá. Cuando tú no te has preparado para ser digno de ese millón, esa idea, esa empresa o ese negocio no producirán ese dinero y lo que puede pasar es que tal vez esa idea, negocio o empresa, caiga en manos de quien se preparó para ser digno de..., y esa persona sí generará el millón. ¿Qué les parece si ahora analizamos cada uno de los elementos que forman este proceso del SER? Tendrás que trabajar en ellos para estructurar este camino, o, dicho de otra forma, para volverte esa persona digna de... y su resultado. Digna de: Una familia maravillosa (familiar) Una sociedad con valores (social) Esos logros personales (personal) Esas metas materiales (material) Ese Dios maravilloso (espiritual)

Resultado: Amor Relaciones Logros Dinero Conciencia

Involucra a: Familia Sociedad Yo Emprendimiento Dios

Recuerda que es altamente improbable que tus metas espirituales, materiales, personales, familiares y sociales se cumplan si tú no has trabajado para SER una persona digna de ellas. El hecho de plantearse únicamente las metas no es el camino correcto para lograrlas, aunque sí es cierto que un paso importante para conseguir los objetivos es

definirlos claramente y ponerse a trabajar en ellos. Al margen de esto, tengo la convicción de que hacer las cosas para alcanzar esos objetivos sin estar preparado para ser digno de…, hará que todo este proceso se vuelva más pesado y seguramente con un resultado que no es el deseado.

LA MATRIZ DEL SER Por muchos años escuché a varias personas hablar del SER, pero no se me hizo fácil entenderlo (de hecho, nada que viole nuestras creencias será fácil de entender, por eso es importante hacerlo); sin embargo, de alguna manera pude descifrarlo y con ello diseñar lo que he denominado la Matriz del Ser, un método que he desarrollado para que tengas un mapa que te guíe en el trayecto para convertirte en ese SER al que aspiras.

La Matriz del Ser plantea la estructuración de tu SER a través de una serie de elementos que en su conjunto determinan este esquema que te permitirá ser una persona digna de…

EL PROPÓSITO DE VIDA No se debe confundir el propósito de vida con lo que haces en tu vida laboral ni con tus gustos personales. Por ejemplo, si te gusta el fútbol o haces de este deporte una profesión no puedes decir que tu propósito de vida es ser futbolista. El propósito de vida es la razón de SER. Volviendo al ejemplo del fútbol, teniendo un propósito de vida bien definido puedes disfrutar de esta actividad independientemente del resultado y con ello sentirte pleno. El propósito nos llena de un estado de bienestar personal. En mi caso, mi propósito es ayudar a las personas a partir de mis vivencias y aprendizajes permanentes. Es así que deberías preguntarte si vale la pena hacer algo que no se alinee con tu verdadero propósito, porque si es así, definitivamente no alcanzarás el estado de bienestar que menciono. Ahora, no quiero que te estreses pensando en cuál debería ser tu propósito para el resto de tu vida. En lugar de eso, mejor pregúntate cuál es el propósito para, tal vez, las próximas horas de tu vida, o de este día, o de esta semana; en definitiva, encuentra el propósito idóneo para dejar la frustración que te puede generar ver a tu vecina con rulos, bata y chancletas de color amarillo cuando sale a pasear a su perro. Esto significa que, si cosas tan simples como esas te distraen de tu enfoque es simplemente porque no hay un propósito potente en ese momento que te ayude a evitar dicha distracción. No dudes que será el tiempo, al igual que todas las cosas en la vida, el que jugará a tu favor para plantear un propósito de largo plazo como logré hacerlo yo. Sin embargo, esto no quiere decir que no tenga micropropósitos que definan puntualmente “ese” instante, día o un período determinado. Algo más que he aprendido durante todos estos años es que existen dos propósitos. Según la filosofía oriental, el uno es un propósito externo y que difiere del de los demás; difícilmente el propósito que le dé significado a ese instante de tu vida será el mismo de alguien allegado a ti, además de que este propósito puede diferir permanentemente. Por otro lado, tenemos el propósito interno y ese es el mismo para todos los seres humanos, si bien se trata de alcanzar el mayor nivel de CONCIENCIA posible, el cual va a estar atado definitivamente al grado de madurez de tu SER y de tu alma. En mis charlas hablo permanentemente de apalancamiento financiero y lo hago poniendo como ejemplo una panadería (más adelante explicaré

de qué se trata), que tan solo es un mero supuesto, porque en el caso de que abras un negocio de este tipo, si esta actividad no está alineada con tu propósito, el estado de bienestar no se verá reflejado en ti. Por añadidura, te puedo asegurar que a través de mi agencia de publicidad sí cumplía mi propósito, porque durante 19 años me dediqué a aprender del mundo del marketing y la publicidad para transmitir ese conocimiento a mis clientes y que así experimentaran un crecimiento. Más adelante hablaremos de las 5 áreas en las que debes plantear tus objetivos, sin olvidar que tendrán que alinearse con tu propósito de vida, ya que de no ser así tu estado de bienestar estará ausente. Aquí va otro ejemplo: si mi propósito es aprender para añadir valor a otras personas a través de la enseñanza, al escoger un cliente debo pensar en alguien que entre sus valores tenga la humildad, es decir, que esté conforme con aprender de mí y, de la misma manera, que esté dispuesto a enseñarme, porque es ahí donde sentiré ese estado de bienestar. No siempre va a ser posible que todas las opciones estén equiparadas a tu propósito de vida. Puede ocurrir que tengas que considerar otras variables a la hora de decidir, y con ello dejar de lado tu estado de bienestar para pensar en el de otras personas. Sobre este particular, está claro que tu propósito puede diferir del de otro individuo, como ya lo mencioné antes, por lo que a la hora de decidir debes estar dispuesto a ceder. En mi caso, tengo claro que no a todos les gusta aprender, por lo que habrá momentos en los que mi propósito no se cumpla, pero podré ceder y con ello apoyar el propósito de otra persona. La conclusión es que el estado de bienestar no siempre estará presente. El propósito de vida no es el significado de tu vida. Cuidado con eso, porque no debes buscar una razón para vivir. El propósito es lo que va a darte un estado de bienestar en muchos de los momentos de tu vida, pero no en todos, porque definitivamente la vida no solamente es bienestar, sino también malestar, pues los malos momentos también dan sentido a tu vida, a través de las enseñanzas que te pueden dejar. Los estados de bienestar son necesarios y deberíamos buscarlos a lo largo de nuestra vida, poniendo en práctica nuestro propósito. Igualmente, los sentimientos de malestar también son vitales para crecer, y normalmente llegan cuando nuestro propósito no está involucrado; digo normalmente, porque muchas veces, pese a estar aplicando tu propósito en tal o cual actividad, el bienestar no será parte del resultado y aparecerá el malestar. Recuerdo muchas veces en las que ejecuté algunas acciones aplicando

mi propósito, pero el estado de bienestar nunca llegó. En concreto, hace algunos años licité para una marca importante de mi país. Como siempre, pretendía aplicar mi propósito y con ello ganar la cuenta. No contaba con que el ejecutivo que estaba a cargo no era una persona humilde y su reacción frente a mi intención de enseñar nuevas formas de estructurar un ecosistema digital (estrategia digital) no fue de su agrado. Con esto no quiero decir que el ejecutivo estuviera mal, a lo que me refiero es que mi propósito no calaba en su proyecto. La sensación de malestar estuvo ahí, reflejada en el fracaso de no haber obtenido la cuenta. Reconozco que, a partir de esa experiencia, antes de presentar una propuesta me tomo el tiempo necesario para indagar sobre las características del cliente, y así logro reconocer si aceptará o no la enseñanza. De ese modo, en el primer caso hago la presentación con la idea de aportar o sumar a su vida más allá de lo profesional, y en el segundo solo me limito a mostrar la propuesta. Han pasado varios años de aquello y después de poner en práctica lo que les estoy diciendo, ¿saben una cosa?: ahora esa cuenta es parte de nuestra agencia. No te compliques a la hora de definir tu propósito, puede ser que por ahora tu propósito sea encontrar tu propósito, apoyar a tu pareja a crecer o centrarte en alguna otra circunstancia de vida, hasta tanto trabaja en esos micropropósitos. Ten en cuenta que el tamaño del propósito no define la calidad que tiene. Además, los propósitos no son fijos y pueden evolucionar con el tiempo. Eso sí, una vez que lo encuentres, es hora de que empieces a vivir una vida con propósito, una vida con sentido.

¿CÓMO ENCONTRAR TU PROPÓSITO? El propósito de vida no tiene por qué ser algo complejo o profundo, puede ser algo más sencillo. Me atrevo a confirmar que, cuando una persona identifica su propósito de vida, se vuelve imparable. Cuando descubras el tuyo dirigirás tu vida, establecerás las prioridades y tendrás la capacidad de negarte a las acciones que te alejen de tus objetivos. El propósito de vida, como ya dije anteriormente, es eso que nos motiva, que nos apasiona, que nos lleva e impulsa a levantarnos cada día con una visión diferente. No solo eso, nuestro propósito de vida causa una sensación de bienestar a otras personas cuando nosotros lo ejecutamos. Cada ser humano en este mundo tiene propósitos diferentes, y más allá de que algunas veces puedan parecerse entre ellos, debemos asumir que cada uno se mueve en el contexto determinado de cada persona, es decir, los intereses profundos relacionados con un propósito específico son los que marcan esta diferencia entre uno y otro. Algunos ejemplos de propósito pueden ser los siguientes: hay personas que quieren prevenir o curar la salud de los seres humanos; otras buscan el bienestar de los individuos, de los animales o del planeta; algunas están preocupadas por el desarrollo espiritual de la gente; por el mejoramiento de la calidad de vida de sus semejantes; por enseñar a las personas un camino diferente, e incluso por el crecimiento en su campo de especialización. Descubrir tu propósito es un reto, pero esto no significa que sea difícil hacerlo, lo que quiero transmitir es que merece tiempo y dedicación. Si quieres hallar tu propósito de vida, he investigado algunas técnicas que te propongo a continuación y espero que te pueden ayudar a conseguirlo: - TERAPIA NARRATIVA. Cada ser humano es una historia y tiene una historia que contar, así es que el objetivo de esta técnica es que te sientes a escribir la tuya en primera persona, relatando los sucesos que vale la pena recordar, y sin saltarte ningún detalle. - CARTA AL YO DEL PASADO. Consiste en escoger una época en la que tu vida tuvo una especial trascendencia, ya sea hace 5, 10, 20 o más años. Después de esto, escríbele una carta a esa persona del pasado que tú fuiste y menciona todo lo que te hacía diferente, las

cualidades, los hábitos, los temas de tu interés, tus vivencias. - LISTA DE LOS DESEOS. Toma papel y lápiz y haz una lista de las 50 cosas que te gustaría hacer antes de morir, o mejor aún, pensando en el hecho de que mañana puede ser que no despiertes. Conforme escribas esta lista te irás acercando a descubrir tu propósito. No te preocupes por lo ilógicas que parezcan las ideas, simplemente hazlo y deja que fluya. - ESTRELLA POR UN DÍA. La idea es que te respondas a esta pregunta: ¿Quién serías y qué es lo que harías si fueses una estrella de cine? Al responder te irás dando cuenta de lo que admiras de esa celebridad y las cosas de ella que quieres para tu vida. - ENTREVISTA CONTIGO MISMO. Párate frente un espejo y pregúntate por qué respondiste todo lo que respondiste en las técnicas anteriores. Cuando intentes explicarlo, seguramente irás descubriendo tu propósito.

METAS (SUEÑOS) Las metas son indispensables a la hora de estructurar tu SER. Para ser digno de… debes tener claro cuáles son esos sueños que quieres alcanzar. En este punto, considero que debemos definir las metas en cinco campos, y aunque tú puedes cambiarlos según tu propio criterio, los que te recomiendo tomar en cuenta son (no se mencionan en orden de importancia): el campo espiritual, el campo material, el campo personal, el campo familiar y el campo social. Para evitar que estos sueños se vuelvan fantasías han de cumplir algunos requisitos: - Primero que nada, esa meta tiene que ser solamente tuya, sin que esté impregnada por los deseos de otra persona. Por ejemplo, si estudias una carrera de derecho pese a que no te gusta, simplemente porque tu padre soñó con un hijo abogado, entonces lo que estás haciendo es cumplir con la fantasía de él, mas no con tu sueño personal. - En segundo lugar, el sueño tiene que ser alcanzable y directamente ligado a tus hábitos y cualidades. Esto quiere decir que, si tus hábitos y cualidades dejan mucho que desear, entonces tu sueño podría pasar a ser una fantasía. Una persona irresponsable, mentirosa, promiscua, cínica y procrastinadora, difícilmente podría tener una meta material de un millón de dólares porque no está atada a su realidad; por otro lado, esta persona que aspira alcanzar un millón de dólares puede ser planificadora, responsable, generosa, trabajadora y espiritual, con lo que esta meta sí será alcanzable. En el primer caso es una fantasía y en el segundo es una meta alcanzable. - La tercera pauta es que el sueño tiene que ser claro. Debemos entender que el cerebro interpreta las metas de acuerdo con su conveniencia y subjetividad. Por ejemplo, si mi meta es ser rico cuando sea viejo, el cerebro definirá riqueza y vejez en función de sus creencias. En cambio, yo puedo ser muy conciso para definir mi meta de la siguiente manera: el 5 de julio del 2039, cuando haya cumplido los 65 años de edad, poseeré un patrimonio (dinero y bienes) por valor de 20 millones de dólares que llegarán a mí en diversas sumas durante estos años. Este sí que es un objetivo claro y el cerebro tendrá que cumplirlo según las indicaciones y con objetividad, mas no con la subjetividad a la que está acostumbrado

a trabajar. - En cuarto y último lugar, la meta tiene que generarte pasión, quitarte el sueño y llevarte a hacer cosas que jamás pensarías haber hecho en otras circunstancias. Si un sueño te genera pasión será una meta por la que trabajarás incansablemente hasta alcanzarla. ¿Recuerdas que mencioné anteriormente que el SER tiene que ver con la capacidad de las personas para volverse dignas de…? También hablé de algunos campos (espiritual, material, personal, familiar y social) para volverte digno de… Entonces, ya sabes que tienes que establecer metas en cada una de estas áreas. La idea es que tengas una gran meta y con ello plantees una serie de acciones que te permitan cumplir con dicho objetivo.

METAS PERSONALES Las metas personales son sueños que te propones en tu ámbito personal y que de una u otra manera mejorarán tu vida. Normalmente están relacionadas con las áreas de la salud, la educación, el trabajo, los hobbies, el crecimiento como individuo, el hogar, etc. Mi principal meta personal es cumplir con todos mis sueños individuales sin tener la limitante económica; que sea mi conciencia la que defina este sueño, no el dinero. Acciones personales. A continuación, te menciono algunas de mis acciones planeadas al momento de escribir este libro: - Mejorar la relación con mis padres. - Alimentarme de una forma más sana: suspender el uso de azúcar refinada, disminuir la sal en las comidas y utilizar aceite de oliva. - Iniciar un curso de actuación. - Editar y publicar mi primer libro sobre emprendimiento. - Viajar con mi esposa a los EEUU para capacitarnos y disfrutar de unas vacaciones. - Cambiar el estéreo y las luces internas de mi automóvil. - Renovar la cocina y el horno. - Seguir avanzando con mi tesis doctoral. - Aprender a bailar bachata. - Comer todas las semanas en un restaurante que me guste, tanto con la familia como con mi pareja, sin privarme de nada por la cuestión de precios. - Llevar una vida físicamente más activa. - Dejar de fumar. - Todo lo anterior… y algunas decenas más.

METAS MATERIALES Las metas materiales tienen una relación directa con las metas financieras, pero en este caso planteo la necesidad de que estén ligadas directamente con tus negocios o emprendimientos. Al igual que las metas personales y el resto de metas es necesario plantearlas a largo plazo, con lo que resulta muy efectivo plantear acciones más pequeñas que contribuyan a cumplir con el gran sueño. Mi principal meta material es que el 5 de julio del 2039, cuando haya cumplido los 65 años de edad, poseeré un patrimonio en suma de dinero y bienes por valor de 20 millones de dólares. Acciones materiales. A continuación, te menciono algunas de mis acciones planeadas al momento de escribir este libro: - Distribuir el 50 % de los dividendos de mis empresas en un período de 36 meses para evitar la iliquidez de mis emprendimientos. - Llevar un control mensual del presupuesto personal y familiar. - Reducir los gastos hormiga de este año en un 70 % con respecto al 2022. - Mantener las deudas en 0 como hasta ahora se ha logrado. - Alcanzar rendimientos netos mínimos del 12 % en mis emprendimientos. - Lograr una valoración mínima de 20 millones de dólares en mis emprendimientos. - Todo lo anterior… y algunas decenas más.

METAS ESPIRITUALES El deseo natural de conocimiento y trascendencia hace que busquemos constantemente la conexión espiritual para avanzar en este mundo. La respuesta a estas dudas está en tu interior, pero es indispensable plantearse metas con las que desarrollarnos espiritualmente como seres humanos, a través de la toma de conciencia. Mi principal meta espiritual es conectar y fluir con el Universo (Dios) para que sea él quien guíe mi vida con su sabiduría, alcanzando el mayor nivel de conciencia posible. Acciones espirituales. A continuación, te menciono algunas de mis acciones planeadas al momento de escribir este libro: - Comprender aún más el funcionamiento del Universo (Dios). - Enlazar con mi yo interior y gobernar mi vida a través del alma con el manejo de mi conciencia. - Encontrarme con seres de luz que tengan mis mismas metas. - Profundizar en el estudio y práctica de técnicas espirituales que me ayuden a conectar con Dios, entre ellas el Ho’oponopono* todas las mañanas. - Comunicarme permanentemente con Dios a través de la oración. - Reflexionar de forma continua sobre la necesidad de entender el funcionamiento del Universo. - Todo lo anterior… y algunas decenas más. *Wikipedia: Ho’oponopono es una tradición hawaiana, dirigida a la resolución de problemas interpersonales, basada en la reconciliación y el perdón.

METAS SOCIALES Estas metas se proponen en el ámbito deportivo, religioso, político y social. Normalmente tienen que ver con el logro común y es ahí donde se plantea la importancia de encontrar personas que sigan el mismo camino que nosotros. Mi principal meta social es construir una sociedad que busque, al igual que yo, el bienestar común en lo espiritual, en lo político, en lo social, en lo académico y en lo administrativo. Acciones sociales. A continuación, te menciono algunas de mis acciones planeadas al momento de escribir este libro: - Integrar un grupo de emprendimiento a través de nuestro Instituto EELA. - Crear un grupo de amigos que tengan interés en el desarrollo espiritual. - Organizar reuniones sociales con nuestros principales aliados de la Escuela de Emprendimiento. - Integrar un grupo de profesores que aporten en el desarrollo. - Todo lo anterior… y otras.

METAS FAMILIARES Las metas familiares se plantean de forma grupal e independientemente del tamaño de la familia. Aquí es importante definir el puerto al que queremos llevar a nuestra familia, pues como bien dice John Maxwell, cualquiera puede dirigir un barco, pero pocos saben a qué puerto llegar. Mi principal meta familiar es edificar una familia sólida y unida en la que todos caminemos juntos, apoyándonos los unos a los otros. Cada miembro integrado en la familia tiene que sentir el respaldo de los demás para crecer como individuo. Acciones familiares. A continuación, te menciono algunas de mis acciones planeadas al momento de escribir este libro: - Impulsar la autonomía en cada uno de los miembros de mi familia. - Vivir como familia a través de nuestros valores: humildad, generosidad, responsabilidad, tolerancia, perdón, integridad y honestidad. - Desarrollar la autoestima en cada miembro de la familia. - Crear un ambiente de respeto y de serenidad en el seno familiar. - Tener una vida saludable. - Descubrir y potenciar los talentos de nuestros hijos (el mío y los de mi esposa). - Como padres, ser un modelo para los miembros de la familia. - Todo lo anterior…, entre otras.

CUALIDADES Las cualidades son todas aquellas características que definen a una persona. Existen una multitud de cualidades que intervienen en el cumplimiento de las metas planteadas en cada una de las áreas. En algunos casos serán características que te servirán puntualmente para una meta y en otros para varias metas a la vez. Estas cualidades pueden ser tanto físicas como personales. La diferencia entre una cualidad y un valor es que la cualidad normalmente define al individuo, mientras que el valor puede definir a toda una sociedad y a la vez al individuo. Para lograr que una cualidad sea parte de nuestro ADN debemos tomar conciencia de la exigencia que representa adquirir esa característica.

CUALIDADES PERSONALES - Paciencia. Aprender a esperar para obtener un rendimiento sobre algo. Por ejemplo, cuando decides bajar de peso los resultados se verán con el tiempo, difícilmente llegarán de un día para otro. - Autoexigencia. La única persona que vigila el cumplimiento de estas metas personales eres tú y por eso eres tú quien debe exigirse. Si seguimos con el ejemplo anterior, cambiar tus hábitos alimenticios requiere de tu exigencia personal, no será la sociedad quien se preocupe de que los cumplas. - Adaptabilidad. Te permite aclimatarte a los cambios personales que pueden llegar a tu existencia sin haberlos planificado. Los cambios en la vida son imperativos y necesarios. Si tu meta es escribir un libro, debes entender que existen nuevas plataformas para publicarlo e incluso para comunicarlo. Quedarte anclado en el formato de papel y difundirlo a través de medios tradicionales, seguramente no te dará los resultados que buscas. - Persistencia. La constancia es esa característica que te dará fuerza para seguir pese a los obstáculos. Por ejemplo, si quieres aprender a bailar un ritmo cuando no tienes esa habilidad, podrás lograrlo, pero solamente con persistencia. Darte por vencido al inicio no te brindará la satisfacción de dar tus primeros pasos en el baile que te gusta. - Disciplina. La determinación será la que te lleve a otro nivel. Si quieres graduarte, dejar de fumar o aprender a actuar, la disciplina es fundamental a la hora de lograrlo. - Atención. Evitar las distracciones es imprescindible a la hora de lograr una meta. Escribir tu libro, por ejemplo, requiere de tu máxima atención para no perder el hilo del contenido. - Introspección. Sirve para conocer nuestras fortalezas y debilidades y a partir de ello tomar acciones para cumplir con nuestras metas. Es importante conocerte para tomar cualquier decisión. Estas son algunas de las cualidades que debes fomentar en ti para lograr tus retos. No obstante, no son las únicas, pero sí son aquellas en las que yo he trabajado para cumplir con mis metas personales. En tu

caso particular, puedes prescindir de alguna de ellas o incluir algunas más, eso siempre va a depender de ti.

CUALIDADES MATERIALES - Puntualidad. Es la consciencia del valor del tiempo propio y ajeno. En el mundo de los negocios, definitivamente esto puede apoyarte, porque cumplir con los tiempos es indispensable en cualquier proyecto económico. - Atención al detalle. Darse cuenta de aquellos detalles que no son evidentes a primera vista permite anticiparse a la solución y con ello alcanzar esa meta empresarial con mayor rapidez. - Valentía. El emprendimiento es abrumador, por lo que saber enfrentar esta sensación con determinación, fortaleza y confianza es una gran cualidad para el emprendedor. - Organización. Planificar y ordenar tu empresa, tu agenda y tu vida es una característica que definitivamente te llevará al logro de tus resultados. - Automotivación. Empujarse a uno mismo para conseguir los resultados más allá de los factores internos o externos que puedan detenernos, impidiendo el deseo de abandonar un proyecto que no termina de concretarse. Al igual que en las metas personales, estas son algunas de las cualidades en las que he trabajado para cumplir con mis metas materiales. Sin embargo, es necesario que evalúes si estas son las características que están atadas al cumplimiento de tus sueños económicos.

CUALIDADES ESPIRITUALES - Inteligencia. Entendida como la capacidad para aprender, comprender y sobre todo poner en práctica el conocimiento disponible para todos en cualquier formato. Si quieres entender cómo funciona el Universo, inexorablemente debes ser inteligente para practicar lo aprendido. - Asertividad. Cuando decides seguir un camino espiritual en tu vida has de ser asertivo para defender tu punto de vista, expresándote en términos cordiales y respetuosos, escuchando siempre lo que los demás te pueden decir. - Imaginación. Visualizar el Universo y crear una realidad desde tu imaginación es fundamental a la hora de entender la espiritualidad. Las personas espirituales sueñan despiertas. - Madurez. Vivir y hacer las cosas con espiritualidad para llevar una existencia espiritual implica madurez porque constituye un reto y, como tal, merece una reacción para asumir las consecuencias con responsabilidad. - Fuerza de voluntad. Pasar de conocer a Dios (Universo) a vivir con Dios requiere de impulso interior e integrar nuevos conocimientos y habilidades para romper con las costumbres pasadas. - Bondad. Hacer el bien pensando en el bienestar de otra persona y tener la capacidad de enseñar a otros sobre lo que has aprendido acerca de la espiritualidad es un acto noble que necesitas integrar. - Introspección. Analizando tus fortalezas y debilidades podrás tomar acciones coherentes con lo que sientes y decidir el camino espiritual que quieres seguir. Estas son algunas de las cualidades que para mí son importantes de cara a lograr las metas espirituales, pero como ya mencioné antes, puedes incluir algunas más o prescindir de otras.

CUALIDADES SOCIALES - Elocuencia. Convencer y conectar con otros por medio de la comunicación verbal te facilitará llegar a aquellos miembros con los que pretendes poner en marcha actividades sociales y cumplir metas en común, manejando de forma correcta este entorno. - Actitud. La autoconfianza, asumir retos y ver la vida con visión positiva es vital para crear un círculo social fuerte, contagiando con esta cualidad a otros para alcanzar las metas. - Sinceridad. Actuar de acuerdo con tus valores, con lo que sientes y piensas, hará que tus objetivos sociales sean integrados por personas con la misma vibración. La sinceridad implica delicadeza para decir las cosas ciñéndonos a la verdad, pero sin rebasar el límite de la crueldad. - Sentido del humor. La sociedad requiere personas que perciban al mundo desde una óptica más cómica y relajada. Con ello lograremos una vida social emocional más saludable. - Realismo. Ver a las personas tal cual son nos evitará crear falsas expectativas acerca de lo que esperamos de nuestro círculo social, dejando de lado suposiciones que a corto plazo afectarán nuestras metas sociales. - Lealtad. Este sentido de respeto hacia el pensamiento propio y ajeno te lleva a cumplir con los compromisos adquiridos con la sociedad, defendiendo los valores y creencias propias. - Seriedad. Respetar a los miembros de la sociedad y ser consciente de las consecuencias que implica la falta de esta cualidad. - Carisma. Encantar a los miembros de tu círculo social es fundamental a la hora de cumplir con estas metas.

CUALIDADES FAMILIARES - Sensibilidad. La conexión con los miembros de tu familia, entendiendo la empatía como el camino para conectar con los tuyos, es fundamental para el crecimiento familiar. Así podrás detectar las emociones que pueden afectar al cumplimento de tus metas familiares. - Respeto. La consideración que tenemos hacia los eventos y circunstancias individuales de cada miembro de la familia es clave para lograr armonía en la convivencia. - Capacidad para administrar. Gestionar los recursos familiares y con ello lograr la mayor eficiencia de ellos te ayudará a sacar el máximo provecho en beneficio de la familia. - Oratoria. Sí, la oratoria es de gran utilidad para que te expreses con elocuencia en tu entorno familiar y puedas conectar con los tuyos. - Positivismo. Los pensamientos y las acciones positivas harán que tu familia se contagie de ellas y que saquen el máximo provecho para el desarrollo en conjunto. - Amabilidad. Nos hace dignos de ser amados y respetados, dejando huella por la empatía, generosidad, respeto y afecto con los miembros de la familia. - Solidaridad. Entender las necesidades de tu círculo social y brindar soluciones basadas en tus capacidades. - Confianza. Asumir que las acciones propias y las de los miembros de la familia son correctas sirve para afrontar de la forma más sencilla las adversidades y acertar en las soluciones de acuerdo con las capacidades de cada miembro. - Moderación. Evitar los extremos y centrarse en el equilibrio familiar para favorecer el trabajo en equipo y el liderazgo.

OTRAS CUALIDADES Algunas otras cualidades que, en general, servirán para el cumplimiento de gran parte de las metas anteriores y que podrías considerar, son: - Perfeccionismo. Buscar la mejora continua sobre la base de la experiencia y el conocimiento, sin dejar de lado la autoexigencia y el crecimiento permanente. - Espíritu competitivo. Dar lo mejor de ti demostrando tus capacidades al mundo para aprender más y con ello cumplir las metas propuestas. - Capacidad para negociar. Encontrar y aprovechar las ventajas o desventajas de una situación para lograr un acuerdo que beneficie a las partes. - Prudencia. Evitar perjuicios analizando todos los puntos de la situación y moderando la forma en la que actuamos. - Cuidado. Medir las consecuencias de tus palabras y acciones, pensando bien las cosas antes de actuar. - Determinación. Proceder y pensar de manera independiente de un grupo, respetando tus propias creencias, yendo tras tus sueños sin detenerte ante los obstáculos y dejando de lado las distracciones. - Calma. Enfrentar las diversas dificultades con tranquilidad, entendiendo el entorno con objetividad. - Disfrutar de las cosas. Relajarse con los distintos tipos de estímulos: un paseo, la lectura de un libro, el teatro, el cine, la familia, la pareja y los amigos deberán ser suficientes para satisfacer nuestra capacidad de disfrute, logrando una vida mucho más saludable y centrada. - Empatía. Entender los menesteres de otro poniéndose en sus zapatos es vital para involucrarse con quienes nos apoyarán a cumplir nuestros sueños. - Resiliencia. Al hacerte cargo del proceso, mas no del resultado, aprenderás; gracias a ello tomarás acciones para levantarte

fortalecido y afrontando el futuro con mayor compromiso. - Higiene. Cuidar nuestra salud e imagen demuestra que tenemos respeto por nosotros mismos y por los demás. - Compromiso. Cuando has adquirido obligaciones contigo y con los demás, te tienes que comprometer a cumplirlas. Enfocarse hasta alcanzar los resultados es fundamental. - Agilidad. Pasar de un escenario a otro con rapidez requiere capacidad mental, física y emocional. Con ello lograrás adaptarte al cambio más fácilmente.

HÁBITOS Los hábitos son aquellos comportamientos que hemos adquirido con el pasar de los años a través de la repetición y que suelen realizarse de forma casi automática con el mínimo esfuerzo. El cerebro crea hábitos al intentar ahorrar tiempo y esfuerzo. El cambio de hábitos no es una tarea fácil, máxime cuando se trata de nuestros pensamientos, pues requiere de nosotros un esfuerzo muy parecido al de dejar de fumar o empezar una vida sana a través del ejercicio físico. Existen muchos estudios científicos y además muchos expertos que dicen cómo debes crear un hábito; a mi juicio, el hábito nace de la toma de conciencia, y la conciencia tiene que ver con el gobierno de la vida a través del alma. Cuando tu mente negativa y tu cuerpo vago administran tu vida controlando el ego, los hábitos buenos no serán parte de ella, pero cuando decides que tu alma lleve las riendas de tu vida a través de la conciencia, los buenos hábitos estarán contigo. Vivir en conciencia significa estar en el presente en cada acto que realizamos, dejando de agarrarnos al pasado y fantaseando sobre el futuro. William James (1842-1910), filósofo y psicólogo estadounidense, escribió en 1890 Principios de psicología, basándose en dos ideas principales: 1) la formación de hábitos como pilar fundamental sobre el que se edifica el desarrollo físico y mental de las personas, y 2) el concepto del ego dinámico, que abandona la idea de un ego estático para aceptar la corriente de la conciencia. Según James, el hábito edifica a las personas tanto física como mentalmente, dejando que sea la conciencia quien nos gobierne y creando hábitos que transforman nuestras vidas. Al igual que en el apartado de las cualidades, estoy convencido de que es preciso crear hábitos para cada una de las metas. A continuación, te describo cuales son los hábitos que he elaborado para todas las metas planteadas:

HÁBITOS PERSONALES - Rutina en la mañana, con actividades que me empoderen. En mi caso, 1 hora de lectura, 1 hora de ejercicio y 30 minutos de meditación. - Seguimiento de los gastos diarios, con un registro de todos los gastos, todos los días, sin dejar nada de lado. - Inversión en desarrollo personal, priorizando la inversión en mí mismo: en mi crecimiento, en mi educación… - Duermo por lo menos 7 horas al día, pero no más de 8. - Bebo agua con frecuencia durante todo el día hasta las 7 de la noche para evitar levantarme en la madrugada. - Hago ejercicio todos los días, no importa lo poco que haga, lo importante es que lo hago ¡Ponte en movimiento! - ¡¡¡Ahora!!! No dejo para mañana lo que puedo hacer ahora, porque sé que la procrastinación es la peor enemiga de mis sueños. - Tengo horarios para comer y los cumplo.

HÁBITOS MATERIALES - Aplico la ley de Pareto, según la cual el 80 % de mis resultados vendrán del 20 % de las causas. No pierdo el tiempo en los porcentajes que no rinden. - Realizo un listado de tareas diarias que me ayuden a acercarme al cumplimiento de mis metas materiales. - Identifico las tareas no urgentes pero importantes, y con ello planifico mejor mi tiempo y me centro en lo urgente e importante. - Escribo siempre mis ideas, porque mi mente es frágil y más temprano que tarde me olvidaré de la idea que me permitirá dar un paso más hacia... - Organizo mis espacios, por más insignificantes que estos sean, durante 5 minutos al día. - Estudio, no dejo de aprender algo todos los días, sigo todos los cursos que puedo, leo, veo videos, sigo a expertos y me preparo permanentemente.

HÁBITOS ESPIRITUALES - Chequeo mis logros espirituales diariamente. - Pido ayuda, porque lograr mis metas espirituales implica la necesidad de un guía espiritual; ojo, hablo de un guía espiritual, no necesariamente de un guía religioso. - Despierto más temprano y aprovecho este tiempo para conectar con el Universo a través de la meditación o de la lectura. - Un acto de bondad diario. ¿Qué puedo hacer cada día para mejorar la vida de otro? Te invito a formularte esa pregunta todos los días. - Aprendo algo nuevo todos los días. La espiritualidad me proporciona aprendizaje y crecimiento todos los días. Existe infinidad de material como para que puedas cumplir con este hábito. - Hago uso de los mantras, pensamientos repetitivos y positivos que acabarán con mi estructura de pensamiento negativo. - Medito, no importa si lo hago bien o mal, la práctica hará posible que pueda lograrlo tarde o temprano. - Practico el mindfulness, intentando estar presente en cada acto, y trabajando para evitar la bulla dentro de mi mente.

HÁBITOS SOCIALES - Me tomo tiempo fuera de mi entorno familiar, porque es saludable que tenga mis espacios sociales. - Busco inspiración. Hoy en día las redes sociales están llenas de información, pero yo investigo para encontrar la que realmente sea inspiradora, y también busco gente que me estimule y que me pueda cambiar el pensamiento. - Afecto social. Muestro afecto y respeto a mi círculo social, ya que esta vibración me ayudará a conectar con otros de forma más intensa. - Escucho y aprendo los puntos de vista de otros, me doy tiempo para escuchar, encontrar un punto en común y conectar. - Digo “NO”. Aprendí a decir “NO”, porque aceptar todo y ceder a todo no genera un vínculo social, sino un vínculo dependiente. - Busco personas con vibraciones en común. - Escucho antes de hablar, porque la gente quiere ser escuchada y sobre esta base quieren que les digas algo.

HÁBITOS FAMILIARES - Limito el tiempo en redes sociales y en el celular, porque mi familia merece tiempo y atención. No me siento en las comidas con el celular y en casa nadie lo hace. - Pago las cuentas familiares inmediatamente, no dejo pasar el tiempo porque no quiero acumular las cuentas, las pago y lo hago siempre con alegría. - Tengo un presupuesto familiar. Considero oportuno tener una claridad respecto a los requerimientos de dinero que va a tener mi familia en cada rubro y con ello cumplo con lo planificado. - Lista de compras. Me sirve para cumplir con el presupuesto y no hacer compras innecesarias. - Caminar juntos. Salgo con mi esposa y con sus hijos a caminar, dejo el auto de lado y comparto con ellos esa aventura. - Disfruto en familia. Con asiduidad hago cosas que unen a mi familia, porque sé que estos momentos me integran con ellos. - Un beso antes de acostarme. Nunca dejo de hacerlo…, no sé qué pasará mañana. - Desayuno y lo hago siempre con un miembro de la familia. Aprovecho esta hora del día y conecto con uno de los míos. - Dejo la televisión y me enfoco más en el crecimiento de mi familia. - No me acuesto enojado con ningún miembro de la familia. Enfrento el problema, más allá de si lo resuelvo o no ese día, porque el intento es lo que importa. - Ahorro dinero para ser capaz de resolver cualquier imprevisto familiar. Quiero tener un fondo que me permita afrontar cualquier eventualidad y así evitar malos momentos familiares.

OTROS HÁBITOS - Hago de la gratitud una costumbre. Aprecio todo lo que la vida me pone al frente, sea bueno o malo. El hecho es que estoy vivo y por esto debo estar agradecido. Siempre agradezco antes de ir a dormir. - Recuerdo fechas señaladas. Estar pendiente de las fechas de cumpleaños, aniversario, y otras fechas relevantes de quienes son importantes para mí crea un vínculo especial a la hora de contar con quien me apoye en el logro de las metas. - Hago preguntas, y una de las preguntas más importantes es: ¿Cómo eres para…?, en lugar de ¿Cómo haces para…? La idea es no preguntar por qué pasa algo, sino para qué pasa. - Leo sobre el Universo, el crecimiento personal y familiar, el emprendimiento, la historia… Todos los días encuentro un espacio para la lectura y con ello absorbo la información que me posibilitará lograr mis objetivos.

VALORES Habitualmente hablamos sobre valores, pero tengo la sensación de que lo hacemos de una forma superficial. Sin dudarlo, afirmamos que la ausencia de estos valores determina la degradación de la sociedad en la que vivimos, y la verdad es que esto es muy cierto. Lo extraño es que cuando a las personas que dijeron esto les pregunto cuáles consideran que son esos valores ausentes… ¡No lo saben! En consecuencia, somos conscientes de que existe un problema de valores, y precisamente el principal problema comienza en el hecho de que no sabemos de qué valores estamos hablando. Los valores representan la manera en la que se define un individuo, su forma de pensar y su convivencia con otros. Con ello se escala hasta la sociedad, con un sistema de creencias que definen el accionar de una sociedad. Para estructurar el SER hemos de centrarnos en los valores humanos, puesto que son estos los que te definen a ti y a la sociedad, además de que garantizan la convivencia en armonía y el logro de objetivos en común. Es por esto que estoy convencido de que solo la acción con valores te ayudará a formar un SER potente. Existen cientos de valores humanos que te pueden guiar como individuo y que al mismo tiempo son válidos para guiar a una sociedad. Pese a ello, hace algunos años decidí que son 7 los valores que definirán mi vida. Por eso, reitero lo que ya he mencionado en ocasiones anteriores: puedes construir tu propia tabla de valores o tomar los míos como tuyos. En cualquier caso, lo importante es que cuentes con una estructura de valores en tu mente, para que sean ellos los que te hagan involucrarte para cumplir con tus metas y formar un SER poderoso capaz de enfrentar la vida.

RESPONSABILIDAD La responsabilidad consiste en responder por nuestras acciones y en cuidar de uno mismo y de los demás. Va más allá del significado intrínseco, pues es la capacidad que tienen las personas para asumir las consecuencias de sus actos. Tenemos que hacernos responsables de nuestras vidas para crecer como individuos y hacerlo también como sociedad. Responsabilizar a los políticos de nuestras desgracias es lavarnos las manos y buscar una justificación para nuestros malos resultados. Gracias a la responsabilidad nos cuidamos los unos a los otros y alcanzamos el desarrollo personal, familiar, social e incluso económico. No en vano, la irresponsabilidad es un acto que afecta al individuo y al entorno. Tanto es así que debemos hacernos responsables de absolutamente todo, de nuestras vidas, de nuestras deudas, de nuestros ingresos, de nuestra familia, de nuestros hijos, de nuestra salud, de nuestro desarrollo personal, de nuestra seguridad, de nuestro emprendimiento, de nuestra sociedad, de nuestro futuro, de nuestro pasado, de nuestro presente, de nuestro entorno, de nuestro tiempo, de nuestros espacios, de nuestra limpieza, de nuestra organización, de nuestras pérdidas, de nuestras ganancias, etc. Solamente cuando te haces responsable de todos y cada uno de los episodios de tu vida todo cambiará para ti.

HUMILDAD Humildad es la capacidad que tiene el ser humano para aceptar sus limitaciones, entender que todos somos iguales, que no estamos ni por encima ni por debajo de nadie, sino en las mismas condiciones, y con ello dispuestos a aprender de cualquier persona. La humildad no es humillación y tampoco es la renuncia a la dignidad. Una persona humilde no se deja guiar por el ego, sino por el alma, a través de la conciencia, comprendiendo la igualdad y dignidad que todos nos merecemos. Se trata de valorar el trabajo de otros, reconociendo las propias limitaciones, actuando con modestia, sencillez y mesura, y respetando a los demás desde una visión genuinamente humana. Quiero contarles una historia de humildad que ocurrió con el que ahora es mi socio, un joven emprendedor de 33 años al que llamamos Juanpi. Lo conocí hace 15 años, cuando era mi alumno de Gestión Comercial en una de las universidades donde fui docente. Era un joven impetuoso de apenas 19 años que siempre demostraba su inteligencia en las aulas; sin embargo, su falta de humildad denotaba su soberbia y ese mismo espíritu no solo impedía que aprendiera de todos, sino que solamente se limitaba a aprender lo que para él era importante. En esos años, la universidad lanzó un concurso interno para escoger quién la representaría en los EEUU en la presentación de un proyecto de emprendimiento que, en el caso de ganar, sería financiado. En ese momento yo me estaba tomando un año sabático, pero en realidad atravesaba uno de los peores momentos de mi vida en todos los aspectos, por lo que lo de año sabático era solo una forma de decir: no sé qué hacer con mi vida; aproveché ese tiempo y esa incertidumbre para invitar a cuatro alumnos a participar y presentar un proyecto que tenía en mente sobre tiendas de barrio franquiciadas. Uno de los que iba a estar convocado con seguridad era Juanpi, pero un día en clases noté que su soberbia no le llevaría a ningún lado y decidí que no quería que fuera parte de mi equipo. Además, sentí que esa sería una forma de darle un escarmiento, por lo que escogí a Nelson, a Adriana, a Maggi, y a Carlos. Según Juanpi, eso fue lo peor que le pude hacer, pero lo cierto es que realmente fue la mejor lección que le pude haber dado. Como se imaginarán, la reacción de Juanpi no se hizo esperar y no fue precisamente de las mejores, pues dejó de hablarme por algunas semanas, entraba a clases por obligación y desistió de participar en ellas. Un día, saliendo del aula, le pedí que habláramos; entendía su

indignación, porque después de reconocer su inteligencia le apartaba de un proyecto que, para muchos, era importante. Recuerdo claramente lo que le dije: “Demuéstrame que puedes ser una persona humilde y, a diferencia de esta vez que no te hice parte de un proyecto académico, te haré parte de mi proyecto de vida”. Debo confesar que todavía no sabía cuál era mi proyecto de vida. Por aquel entonces estaba empezando a darme cuenta de que el camino que estaba siguiendo no era el que quería, recién comenzaba a enderezar algunas cosas, pero era apenas el inicio; sin embargo, no dudé en decirle aquellas palabras. El cambio de Juanpi fue inmediato. A la par que yo trabajaba en aquella iniciativa con el equipo escogido, colaboraba con él en lo que sería uno de los primeros proyectos fracasados (quieroquejarme.com). Él me demostró que estaba dispuesto a cambiar, ya no era el muchacho soberbio que había conocido, estaba haciendo un esfuerzo por aprender y por escuchar las opiniones de los demás. Pasaría más o menos un año hasta que un mes de julio le pedí que fuera parte de lo que sería una de las propuestas más importantes de mi vida de emprendimiento (la reapertura de la agencia de publicidad). Juanpi había cumplido con su palabra y yo hacía lo propio con la mía: le estaba invitando a ser parte de mi proyecto de vida. En los 13 años siguientes hemos compartido todos y cada uno de los emprendimientos que he puesto en marcha (excepto en ECOY, no logré convencerle), y él ha fracasado tanto como lo he hecho yo, pero también ha participado de todos mis éxitos. Hemos lanzado iniciativas digitales (quieroquejarme.com; bupets.com, e-colic media); iniciamos la reapertura de nuestra agencia (AMDB); incursionamos en el mundo farmacéutico (rotundo fracaso); abrimos cadenas de restaurantes y lounges; entramos en el mundo de la construcción; nos adentramos en el entorno de la producción audiovisual, y apostamos por EELA, entre tantos otros emprendimientos e intentos fracasados y exitosos. En todo ese tiempo, Juanpi se convirtió no solamente en un profesional exitoso, sino que además se casó y tiene un hogar consolidado. Hace apenas un par de años, durante la pandemia, nació su hijo y ahora también es padre. Nunca dejó de estudiar y se preparó para ser el director general de la agencia. Así fue como pasó de ser un niño soberbio a ser un hombre humilde, dispuesto a aprender de todos, a enseñar a quien lo necesita y, lo mejor de todo, a estar abierto a que el mundo le enseñe. ¡¡¡Ah!!!, me olvidaba… Ganamos el concurso y en los EEUU mis estudiantes quedaron en segundo lugar. Considerando que cursaban el primer año y que competían con alumnos de posgrado de otros

continentes, ¡no estuvo nada mal!

GENEROSIDAD El valor de la generosidad tiene su fuerza en la espiritualidad. Materialmente, la generosidad no tiene cabida, puesto que el dar para recibir no es consecuente, y eso es algo que ya veremos después. La generosidad es dar, pero dar sin esperar nada a cambio, porque cuando una persona da esperando recibir, eso es egoísmo. Las personas egoístas no piensan en la otra parte y sus actos están condicionados; es decir, son de la opinión de que si no van a recibir algo no tienen por qué tener un gesto de ofrecimiento con alguien. Una persona generosa hace las cosas por el simple hecho de disfrutar la sensación de gozo de la otra parte. La generosidad no solamente se materializa con el dinero, también incluye la entrega de conocimiento, de tiempo, de amor, de apoyo, de experiencia, y de todo aquello que pueda aportar a la sociedad. La verdadera generosidad consiste en hacerlo sin esperar nada. El Universo se respalda en las personas generosas porque son fuente de distribución, y es por ello que se les entrega más riqueza. El Universo sabe en quien respaldarse y está claro que una persona egoísta no es una buena fuente de distribución. La generosidad no comienza en casa, pues la generosidad en casa debe ser considerada un acto natural. La generosidad comienza fuera de casa, con tu prójimo y con los desconocidos. Un acto de verdadera generosidad es la dignificación del trabajo. Existen millones de personas en el mundo cuyo esfuerzo y trabajo no es recompensado con un salario digno. En el caso de muchos emprendedores la recompensa no justifica todo el esfuerzo realizado, y es ahí donde podemos dignificar el trabajo de otros. Para dignificar el trabajo de otros primero debes reconocer el esfuerzo que hacen las personas por ganarse el pan de cada día. Admitir este empeño de los demás es un acto de generosidad de tu parte. Personalmente, nunca dudo en dar una recompensa económica a quienes ponen todo su empeño por trabajar; doy propinas generosas a quienes me atienden en un restaurante, no pido el cambio o lo dejo a la persona que me sirvió con el taxi; jamás regateo el valor de un producto y en muchos de los casos pago más de lo que se me pide.

El valor de la generosidad hoy en día está distorsionado y les voy a mencionar algo que veo a diario. En países como los nuestros es muy común ver a mujeres que están vendiendo fruta en las principales avenidas. Ellas hacen un gran esfuerzo cada día por ganarse unos centavos dignamente, pero siempre he visto que los consumidores no dudan en regatear el precio de los productos. Por otro lado, en la esquina de la misma calle será habitual encontrarse con un personaje que lleva a su hijo en brazos y que se respalda en esta condición para pedir caridad. En este segundo caso, la misma persona que regateó a la mujer vendedora, no dudará en regalarle dinero al vago… ¡Algo estamos haciendo mal! No es posible que humillemos con rebajas a quien hace un esfuerzo y premiemos a quien pide caridad utilizando a un niño. Desde la óptica material se puede decir que dar para recibir es generosidad por uno mismo. La conciencia de cumplir con tus metas conlleva entregar de tu parte para que el Universo haga la suya. Cuando das tu tiempo, tu esfuerzo, tu dedicación, cuando estudias, lees o planificas, estarás dando tu parte y con ello eres generoso contigo mismo. Ahora solamente toca esperar a que Dios haga la suya y de él recibas lo que mereces por tu esfuerzo. El Universo conectará de acuerdo con tu vibra (evidenciado en tu esfuerzo): si eres poco generoso contigo (trabajas poco, lees poco y haces muy poco de todo), recibirás ese mismo nivel de recompensa, pero si eres muy generoso contigo (lees, estudias y te esfuerzas al máximo), la recompensa será tan alta como tu esfuerzo.

TOLERANCIA Entender las diferencias de los demás al momento de opinar, creer y sentir, siendo que estas son naturales en el ser humano y evitar cualquier tipo de agresión es tener una actitud tolerante. En un mundo donde la constante es el conflicto podemos afirmar que este es un valor que nos va a facilitar la convivencia social. Tolerancia es escuchar a los demás esforzándose por comprender el pensamiento de otro y aceptándolo como algo tan válido como si fuera el nuestro. Por otro lado, desde el punto de vista social la tolerancia es aceptar las decisiones colectivas a través de los organismos competentes. Con todo, practicar la tolerancia es un reto, y personalmente creo que es necesaria la madurez para ser capaces de ceder en ciertas situaciones y evitar una serie de conflictos que no nos conducen a nada, sin necesariamente aceptarlo. Tolerancia es madurez, y la madurez definitivamente te ayudará a crecer como individuo y a cumplir con tus diferentes metas. La práctica de la tolerancia se da en muchos ámbitos, por ejemplo: en las aulas cuando alguien no tiene el mismo ritmo de aprendizaje que el nuestro; al escuchar a una persona que profesa una religión distinta a nuestras creencias; en el caso de las diferencias económicas; respecto a las distintas ideologías políticas; sobre los comentarios negativos; en la manifestación de las preferencias sexuales; ante los problemas ajenos; con quienes tienen una limitación física o mental; en cuanto a las diferentes opiniones; para con los adultos mayores; en la Administración de Justicia; dentro del ámbito deportivo; en función de las características culturales de la gente; frente a una situación complicada de resolver; por las provocaciones de otras personas...

PERDÓN El perdón no es fácil. Para ser más exacto, creo que poner en práctica la mayoría de los valores mencionados tampoco lo es, pero un gran paso para lograrlo definitivamente es la toma de conciencia. En realidad, pedir perdón es un acto muy sencillo y hoy por hoy la gente lo hace con mucha soltura, pero la cuestión no está en la forma sino en el fondo; lo que quiero decir con esto es que una cosa es pedir perdón y otra muy distinta es sentir ese perdón. Un ser humano tiene la capacidad de perdonar, pero esto no significa que tenga que hacerlo, dado que no es una obligación, sino un don, y al igual que la generosidad se puede dar, pero siempre a cambio de nada y sin recompensas. Más allá de que el perdón no sana la herida ni la hará desaparecer y que la cicatriz estará ahí presente, sin perdón no puedes continuar; el pedir, el dar perdón e incluso perdonarte, fomentan la reconciliación para avanzar, siendo esta la única manera de vivir. Cuando decides perdonar dejas de lado la venganza. La venganza no es vida, es bloqueo, y definitivamente no es continuar.

HONESTIDAD La expresión de respeto por uno mismo y por el resto de los individuos es la honestidad. Decir y hacer la verdad es la capacidad de ser honesto, y aplicarlo es lograr la confianza de otras personas para con uno y hacia los demás. En un mundo de energía como este en el que vivimos, la honestidad trae consigo honestidad. La honestidad es la verdad por encima de tu beneficio personal; es ser justo y razonable actuando con transparencia en las motivaciones que tenemos; es la coherencia entre lo que se piensa, se dice y se hace. No aplicar lo anterior te convierte en deshonesto, te lleva a la mentira, al robo, al engaño y a la falsedad. Practicas la honestidad siendo fiel a tus compromisos, a tus metas y a tus promesas. Eso implica lo siguiente: manejar tus cuentas correctamente y sin alterarlas, para justificar la parte del dinero que te quedas; pagar tus deudas con puntualidad y alegría; cumplir con las obligaciones y tareas dejando de lado la pereza; no inventar, no mentir, decir la verdad; no contar los aspectos negativos de los demás; evitar criticar las normas si no conoces profundamente el contexto y las circunstancias sobre las que se crearon; no utilizar bienes que no son tuyos sin autorización de su propietario; respetar a tu pareja evitando la promiscuidad.

INTEGRIDAD La integridad es el valor de los valores, aunque decirlo así resulte redundante. Un valor aplicado sin integridad dista mucho de ser un valor. Una persona íntegra es honesta, generosa, responsable, tolerante, disciplinada, directa, puntual, correcta, atenta…, una persona íntegra es alguien en quien se puede confiar. Una persona con integridad hace las cosas de acuerdo con lo que su moral y la sociedad establece como correcto, sabe mantenerse en estado de conciencia permanente, siendo congruente en lo que piensa, lo que dice y lo que hace. Una persona íntegra es confiable y en virtud de esa energía confía en otras personas y es responsable de sus acciones. Permanecer fiel a nuestros valores nos hace íntegros. Alguna vez leí en las redes sociales una historia espectacular para poner en contexto lo que significa ser íntegro y te la quiero compartir: “Un hombre pide una pizza por delivery y llega al hotel donde él está alojado. De repente, la mujer que lo acompaña abre la caja y le dice: ‒ Amor, no hay pizza. Él responde: ‒¿¡Cóomo que no hay pizza!? Ella le confirma que efectivamente no hay pizza en la caja, pero con una alegría inesperada, grita: ‒¡Amor, hay dólares! ‒¿Cómo que hay dólares? ‒dice él‒, y ella responde: ¡¡¡Seeeee, dólares!!! ‒Los cuenta y resulta que había 1800 dólares. ‒¡Wouww! ‒exclama ella‒, lo abraza, lo besa y dice: ‒Amor, tenemos 1800 dólares, la pizza costó 16 dólares y ahora tenemos 1800. Él se queda mirando los dólares y se alegra, se ríe, pero le dice a la mujer: ‒No, no, noooo, me acordé de algo que decía mi padre, y si algo me enseñó es a ser honesto. Entonces, introduce de nuevo todo el dinero en la caja y la cierra. En ese instante, ella le espeta: ‒¿Usted es el único tonto en todo el país que va hacer lo que estoy pensando que va hacer? Él responde afirmativamente. ‒Vamos, acompáñame a devolver la caja con el dinero. Ella, como es de suponer, va al costado, furiosa y reclamando tal hecho de honestidad. Cuando llegan a la pizzería, él avanza con decisión y entrega la caja. Ante semejante acto, los empleados del local lo aplauden, lo abrazan, le agradecen y felicitan…, entonces le preguntan… ‒¿Usted escuchó el anuncio en la radio?, a lo que el hombre responde: ‒¿Cuál anuncio? ‒El de la caja perdida, señor ‒responde el empleado de la pizzería‒. Mi hermano trabaja en la radio y difundió un anuncio de la caja perdida. ¿Usted no escuchó el anuncio? Él responde categóricamente que no, y entonces le preguntan que por qué devolvió la caja, a lo que él explica que lo hizo porque es lo más honesto. ‒Señor, personas como usted ya no hay en este país. Justo mi hermano ya viene para acá y quiere que le cuente a todo el

mundo lo que hizo para difundir su gran ejemplo. El hombre mira su reloj, nervioso, y dice: ‒Disculpa, amigo, pero no tengo tiempo, me tengo que ir ya. No puedo salir en ninguna entrevista, yo solo quiero mi pizza e irme. ‒Ah, bueno ‒le dice el empleado‒, entonces déjeme su nombre, sus datos y su teléfono y le cuento a los medios lo que usted hizo, porque es un gran ejemplo y estamos muy agradecidos. En ese momento, el hombre toma del hombro al empleado de la pizzería, lo lleva a una esquina y le confiesa: ‒Ni se le ocurra decir quién soy. ‒Peroooo, ¿por qué, señor, si lo que usted hizo es admirable? ‒Siiiiiii, y me gustaría salir en la radio, en los medios y decir que devolví la caja, pero no puedo. ‒No entiendo, ¿por qué no puede, señor? El hombre mira a todos lados y con voz baja le dice: ‒Porque la mujer que está conmigo no es mi esposa, ¿cómo voy a salir en la radio diciendo que estaba en un hotel y que pedí una pizza? Nooo, amigo, invéntese otro cuento que yo me tengo que ir. Tomó la pizza y sin más ni más se fue”.1 No solamente se trata de ser honesto, se trata también de que esa honestidad se vista de integridad, y lo mismo pasa con todos los valores que tú decidas seguir en tu vida. Si eres generoso con dinero ajeno o robado no eres íntegro; si perdonas esperando la oportunidad para la venganza, no eres íntegro; si eres responsable por conveniencia, no eres íntegro; si eres humilde aprendiendo de un libro pirata, no eres íntegro; si eres tolerante por tus intereses, no eres íntegro. La integridad es untar de valor al valor. La integridad confirma el buen uso del valor. En conclusión, debe quedar absolutamente claro que para tener un emprendimiento de éxito debes volverte un emprendedor digno de dicho emprendimiento exitoso. Un emprendedor de éxito lucha permanentemente por ser un ser integral en todos y cada uno de los ámbitos mencionados. Estableciendo metas y acciones que vienen acompañados de cualidades y hábitos, siempre conscientes de la necesidad de tener un propósito superior que nos permita seguir sin distracciones, apoyado por valores que motiven al emprendedor a dejar el ego de lado y trabajar con el mayor nivel de conciencia posible, siempre teniendo presente que somos seres humanos y que como tal fallaremos, y que son cabalmente estos problemas los que nos permitirán seguir creciendo.

1 http://garyarticahernandez.blogspot.com/2014/11/ser-honesto-o-integro-e-ahi-eldilema.html

PENSAR Si hemos podido definir lo que necesitamos para SER una persona digna de…, es importante ahora PENSAR en cómo aplicar lo planteado en la Matriz del Ser, es decir, PENSAR en qué HACER para llegar a SER. Es aquí también donde interviene nuestra razón, examinando ideas que nos autoricen a tomar decisiones. Pero para PENSAR debemos tener en cuenta la necesidad del conocimiento en nuestras vidas. Como plantea Daniel Kahneman en su libro Pensar rápido, pensar despacio, el automatismo del cerebro, fruto de la incertidumbre permanente, con la utilización de atajos mentales para decidir y actuar, pueden impulsarnos a tomar decisiones que no necesaria mente nos van a llevar hacia el éxito. Esta excesiva simplificación en el proceso de pensar al momento de emprender te puede hacer creer que gestionar las redes sociales es suficiente para tener éxito, o que contar con una especialización académica bastará para mantenerte a flote con tu emprendimiento. Si pretendes que tu emprendimiento surja y tenga éxito no puedes seguir creyendo lo que crees con respecto al éxito, porque son tus creencias las que definen tus pensamientos y son estos pensamientos los que se materializan en éxito o fracaso. Como dijo Albert Einstein: “Tú no puedes resolver problemas con el mismo pensamiento que te metió en ellos en primer lugar”. “Emprendimiento sin conocimiento es un experimento”. Renzo Aguirre

Por lo tanto, para que tu emprendimiento tenga éxito debes PENSAR como una persona de éxito, y para pensar así, tienes que trabajar en tu conocimiento además de en tus creencias. Un emprendedor de éxito está convencido de que el Universo está a su favor. Tal y como yo lo veo, el Universo es Dios y somos parte de este. Por eso, estoy seguro de que todo lo que pasa en mi vida tiene que ver con un fin superior, y mis creencias y mis vibraciones hacen que la energía universal desencadene una serie de caminos que conducen al éxito. Te contaré una historia y con ello te demostraré por qué me resulta indudable que tus creencias atadas a un deseo ferviente (como lo plantea Napoleón Hill en su libro Piense y hágase rico) te conducirán por el

camino adecuado y llegarás a la conquista del éxito. Hace algunos años, en conjunto con mis socios Geovanny G. y Juanpi B., nos hicimos cargo de una marca local de restaurantes, Don Churrasco (ahora no viene al caso contarte esta historia), y fruto de esta acción y con el afán de integrarnos horizontalmente nació un lounge al que llamamos ZOÍ, uno de nuestros tantos fracasos, un establecimiento que en el mejor de los meses cubría sus costos. Mis visitas al local eran básicamente entre semana, difícilmente pasaba por allí un fin de semana y menos aún un día domingo, pero en una ocasión sucedió y un domingo fui. Me encontraba “supervisando” el local, cuando una de las personas de servicio me dijo que alguien quería conocer al encargado. Pensé que algo andaba mal y no me quedaba más que afrontar el problema. Al acercarme, mi sorpresa fue que quien me había llamado lo hacía para felicitarnos por la experiencia que estaba viviendo (servicio, comida, ambiente, etc.). Diego J. es el nombre de la persona a quien hago referencia en esta historia. En aquella conversación hablamos de nuestras actividades y yo le mencioné mi trayectoria como catedrático universitario, mientras él habló de su vinculación con una de las principales universidades del país (tiempo después me enteré de que era su rector). No perdí la pista de Diego, que, por cierto, es uno de los directivos con mayor apertura que alguna vez me haya topado. Ahora puedo decirles con orgullo que es mi mentor y que su aporte en el desarrollo de esta teoría y, por ende, en este libro, es incalculable, pero ese no es el fondo de esta historia. Permíteme hacer un paréntesis antes de seguir, para lo cual debemos volver al punto en el que te conté sobre el SER (pág. SER), y retomar un personaje de la misma historia, mi actual esposa. Muchos meses después de habernos visto y cuando por fin me dio la oportunidad de salir con ella regresamos al mismo lugar donde todo había comenzado. Le pregunté si quería tomar algo y me dijo que sí, que necesitaba un whisky. Recuerden que era la primera vez que salíamos…, y a falta de uno, ¡se pidió dos! En ese momento pensé que me había topado con otra Julia R., pero noooooo, no fue así. La razón por la que se había servido dos tragos seguidos es porque necesitaba armarse de valor para decirme algo. Llevaba ya dos años que había optado por abrir mi propio emprendimiento de capacitación (EELA), y básicamente fue porque la universidad en la que más me enorgullecía colaborar había decidido prescindir de mis servicios profesionales. Por los rumores que me habían llegado, esto se había dado porque uno de los estudiantes se quejó de mí. Ese mismo día resolví que abriría mi propio instituto y dejaría de

colaborar en todas las instituciones en las que trabajaba. Bueno, efectivamente esos dos tragos le sirvieron para tomar fuerzas y contarme que la persona que se había quejado de mí había sido ella. Sí, como lo leen, ella. Después de sincerarse conmigo me dijo que entendería si esa misma noche yo decidía desaparecer de su vida. Lo pensé dos segundos y debo decir que nunca dudé de quererla para el resto de mi vida. Fue gracias a ella y su queja (con justa razón, tengo que reconocerlo) que decidí tomar en serio el proyecto educativo que hasta ese día venía postergando o apenas ejecutando. Volviendo al tema inicial, me puse a trabajar en ello con intensidad y una de las urgencias era la de encontrar un aval para nuestro primer producto, el Programa de Formación de Emprendedores. Contaba con algunas amistades y conocidos y en cada uno de ellos lo que encontré fue buena voluntad, pero muchas trabas. Después de algunas llamadas, contacté con Diego M., gerente de la Universidad Hemisferios, de la que Diego Jaramillo es su rector, quien me lo había presentado en alguna de las reuniones en las que ya sentía que era mi mentor. En esa llamada no solo encontré buena voluntad, sino apertura y decisión. 20 minutos después me estaba contactando con José Luis A., director de educación continua de la Universidad. Bastaron 5 minutos para contar con el aval de la Universidad Hemisferios, a la que me debo y de la que estoy honrado en ser parte. Finalmente, quiero poner en contexto toda esta información. Mis creencias estaban tan arraigadas en mi mente que de alguna manera el Universo se alineó para que todo se diera, porque el Universo actúa de acuerdo con creencias. El fracaso de ZOÍ traía consigo el hecho de haber conocido a Diego J.; él me presentó a Diego M.; fue Diego M. quien me apoyó a través de José Luis A. para que EELA exista ahora y estemos en el lugar en el que estamos. Por otro lado, fue Lady quien impulsó mi salida de la Universidad y gracias a eso decidí crear EELA. Un emprendedor debe tener el suficiente conocimiento para PENSAR y a partir de ahí desarrollar su capacidad analítica, crítica, creativa e innovadora. La capacidad de PENSAR es la que te va a facultar para elaborar estrategias con las que enfrentarás los distintos desafíos que se presentan en el día a día de un emprendedor.

TEORÍA DE LOS CANDADOS DE EMPRENDIMIENTO (TCE) La Teoría de los Candados de Emprendimiento (TCE) es un compendio de herramientas sobre las cuales cada emprendedor debería enfocarse para no dejar escapar de sus manos el tan añorado éxito. En definitiva, un conjunto de conocimientos en los que el emprendedor puede apalancarse para pensar como un emprendedor de éxito. Según la Teoría de los Candados de Emprendimiento toda iniciativa nace con éxito, pero que este éxito dure una hora, un año, o un tiempo indefinido depende de lo que se haga para retenerlo. Debemos imaginarnos que el éxito es como un globo de helio que se irá volando si no lo sostenemos. Es por esto que planteo encerrarlo con habilidades blandas y, una vez hecho esto, asegurarlo con tres candados.

EL ÉXITO SEGÚN TCE El éxito en un emprendimiento no se mide solo por su permanencia en el mercado, sino por la capacidad de lograr los objetivos establecidos. Según la Teoría de los Candados de Emprendimiento, existen cuatro objetivos claves que determinan el éxito o fracaso de un emprendimiento: rentabilidad, escalabilidad, viabilidad y sostenibilidad. Rentabilidad.- Este es uno de los aspectos fundamentales para el éxito de un emprendimiento. Se refiere a la capacidad del negocio para generar ganancias y cubrir sus gastos. Es esencial para justificar la existencia del negocio y para obtener un retorno de inversión satisfactorio para los inversores. Aunque no es imprescindible que esta condición se dé al inicio del emprendimiento, con el tiempo debe ser rentable para considerarse exitoso. Es importante tener en cuenta que un negocio rentable no necesariamente tiene que tener altos márgenes de beneficio, sino que debe tener un equilibrio entre ingresos y gastos. También es fundamental contar con una buena gestión financiera y una estrategia de precios adecuada para lograr la rentabilidad. Un ejemplo de objetivo de rentabilidad en un emprendimiento podría ser lograr un margen de beneficio del 10 % en el primer año de operación, y aumentarlo en un 5 % cada año siguiente. Otra meta de rentabilidad sería alcanzar una tasa de retorno sobre la inversión (ROI) del 20 % en el primer año y del 30 % en el segundo año. Los objetivos de rentabilidad han de ser medibles y realistas, y deben ser alcanzados a través de estrategias y acciones específicas. Escalabilidad.- Se refiere al potencial de un emprendimiento para crecer y expandirse de manera eficiente y sostenible. Es esencial para el éxito a largo plazo de un negocio, ya que el estancamiento puede poner en riesgo su continuidad. La escalabilidad se logra mediante la automatización de procesos, la identificación de nuevas oportunidades de mercado, y la diversificación de productos o servicios. El aumento de la capacidad de producción y la reducción de costos también son factores claves para lograr la escalabilidad. Es necesario tener en cuenta que un negocio escalable no solo debe crecer en términos de ingresos, sino también en su capacidad para manejar el crecimiento y mantener una estructura sólida y sostenible. Un ejemplo de objetivo de escalabilidad en una empresa podría ser aumentar el número de clientes en un 20 % en el próximo año mediante la expansión a nuevos mercados geográficos o la implementación de estrategias de marketing eficaces. Otro ejemplo sería duplicar los

ingresos en los próximos 3 años mediante la diversificación de productos o servicios. El objetivo clave es lograr un crecimiento sostenible en términos de ingresos, clientes y presencia en el mercado. Viabilidad.- Hace referencia a la idoneidad de una empresa para mantenerse a sí misma a lo largo del tiempo, generando beneficios económicos y cumpliendo con su misión y objetivos a largo plazo. La viabilidad siempre tiene que estar presente al momento de planificar y tomar decisiones estratégicas a mediano y largo plazo. Un ejemplo de objetivo de viabilidad en una empresa podría ser lograr un flujo de caja positivo en un plazo de tres años, lo cual indica que es capaz de generar ingresos suficientes para cubrir sus gastos operativos y tener un margen de beneficio. Otro ejemplo sería alcanzar una cuota de mercado significativa en un plazo de cinco años, con lo que sería evidente que la empresa está siendo competitiva y consigue establecer su presencia en el mercado. En resumen, los objetivos de viabilidad buscan asegurar que la empresa sobreviva y se mantenga en el tiempo. Sostenibilidad.- Se refiere a la capacidad de una empresa o negocio de continuar operando de forma rentable y escalable a largo plazo, sin causar daño significativo al medioambiente y a la sociedad. Esto incluye consideraciones ambientales, sociales y económicas. La sostenibilidad es primordial para asegurar la supervivencia de un negocio, así como para cumplir con las expectativas y responsabilidades éticas de las partes interesadas, como los clientes, accionistas, empleados y comunidades locales. Un negocio sostenible también puede tener una ventaja competitiva en el mercado, ya que cada vez son más los consumidores y empleadores que valoran las prácticas sustentables y desean apoyar a las empresas que las adoptan. Un ejemplo de objetivo de sostenibilidad podría ser reducir el impacto ambiental de una empresa a través de la implementación de prácticas de producción más eficientes en términos de energía y recursos. Esto incluiría medidas como el uso de energías renovables, la reducción del uso de plásticos y la implementación de programas de reciclaje. A lo anterior se sumarían objetivos relacionados con la responsabilidad social, como mejorar las condiciones laborales de los trabajadores o apoyar a organizaciones benéficas locales. En conclusión, la rentabilidad, escalabilidad, viabilidad y sostenibilidad son factores claves en el éxito de un emprendimiento. La rentabilidad es esencial para justificar la existencia de un negocio y debe ser alcanzada a medio y largo plazo. La escalabilidad es crucial para la supervivencia del emprendimiento, ya que el estancamiento es riesgoso

para su continuidad. La viabilidad es la capacidad de un negocio de mantenerse en el tiempo. Por último, la sostenibilidad es la consecuencia de un negocio rentable y en crecimiento, y debe ser considerada como un objetivo a largo plazo. Estos factores son primordiales para tener mayores posibilidades de éxito a la hora de planificar y ejecutar un emprendimiento. Finalmente, es preciso mencionar que todo lo contrario o, dicho de otra forma, el hecho de no alcanzar los objetivos planteados, se puede considerar un fracaso más allá de que decidas cerrar o no las puertas de tu negocio. A diferencia de otras propuestas, la TCE muestra la necesidad de identificar y centrarnos en aquellos aspectos en los que somos más débiles y no en los somos más fuertes, porque localizarlos y trabajar en ellos nos ayudará a tomar acciones que eviten que el éxito se nos escape de las manos.

Pongamos un ejemplo para contextualizar lo que acabo de señalar: vamos a suponer que después de evaluar la TCE determinas que tu mayor fortaleza son las ventas y eres un excelente vendedor, mientras que tu debilidad más fuerte es la falta de inteligencia financiera (la administración de tus ingresos); puedes vender y cumplir con tus presupuestos comerciales e incluso alcanzar tus metas en utilidades; sin embargo, no será esta fortaleza la que sostenga tu éxito, dado que tu irresponsabilidad financiera al mezclar las cuentas personales y empresariales será la que te lleve al fracaso. La idea no es, ni mucho

menos, que te descuides de las ventas, sino que te centres en mejorar tu educación financiera y además sigas aplicando tu fortaleza. Fruto de la investigación permanente, he descubierto y confirmado a través de la práctica que las habilidades blandas son seis y los candados sobre los que todo emprendimiento debe cimentar su nacimiento y respaldar su crecimiento son tres. Con las habilidades blandas encierras el éxito en un triángulo y con los candados aseguras que estos no se abran para que el éxito no se escape.

HABILIDADES BLANDAS En la TCE se ha concebido el desarrollo de seis habilidades blandas reunidas en pares para formar un triángulo que encierre a este globo de helio llamado éxito. El riesgo que se corre es que estas habilidades blandas no sean lo suficientemente fuertes y sus paredes fácilmente permeables. Es así que se hace indispensable potencializar estas destrezas a través de estrategias puntuales que las refuercen. Estas capacidades especiales no pertenecen exclusivamente a alguno de los candados que se mencionarán después, son habilidades transversales para todos los pilares y forman la estructura de emprendimiento planteada. Repito, son estas habilidades blandas las que mantendrán al éxito encerrado y cuanto más las dominemos, más difícil será que el éxito se filtre y escape de nuestro emprendimiento. Las seis habilidades blandas dispuestas en pares son las siguientes: · Disposición para servir y resolución de problemas. · Liderazgo y trabajo en equipo. · Actitud y espíritu emprendedor. HABILIDADES BLANDAS: LO QUE SOSTIENE EL ÉXITO EN EL EMPRENDIMIENTO

Todos los emprendedores deben tener conciencia de las seis competencias transversales que formarán los pilares de la TCE. Serán estas aptitudes las que construirán una barrera triangular que sostenga al éxito dentro nuestro emprendimiento, mientras que los candados, como ya se mencionó, sustentarán estos pilares para que se mantengan unidos. Si bien en cada una de las habilidades se plantean dos elementos, es la suma de estos los que forman un solo conjunto.

DISPOSICIÓN PARA SERVIR Y RESOLUCIÓN DE PROBLEMAS Un emprendedor requiere disposición para resolver inconvenientes a través de sus productos o servicios, cuya demanda es la consecuencia de algún problema que le pueda surgir al cliente. La disposición de servir se realizará a partir del conocimiento y con la prioridad de encontrar una solución inmediata para el conflicto. Una persona que carece de esta voluntad de servicio y que no tiene una visión hacia la resolución de problemas del mercado a través de su producto o servicio, es mejor que no emprenda, puesto que los clientes reclamarán parte de su tiempo para ser guiados y apoyados. Solventar problemas implica que el emprendedor posea la capacidad para identificar y analizar las deficiencias del mercado y de su cliente. Además, exige que el emprendedor se involucre en dicha situación, enfocando todos sus esfuerzos para dar una solución efectiva a través de sus productos/servicios. La esencia de esta habilidad blanda, entonces, está en centrarse en satisfacer las necesidades del cliente (problema) mediante la creación de productos o servicios, a los que sumará una experiencia única para el consumidor a través de la estrategia de servicio. En este punto es importante analizar las siguientes variables: - Necesidades (resolver problemas). - Servicio al cliente (disposición para servir). Necesidades. ¿Realmente conoces las necesidades de tu cliente? ¿Estás consciente de qué requerimiento apremia al mercado y cuál puede ser el producto que te ayude a satisfacerlo? ¿Cuáles son los beneficios de tu producto y en qué medida estos solucionan los problemas de tu cliente? Identificar las expectativas de tu cliente es esencial a la hora de desarrollar un producto o servicio o incluso al momento de comunicar sus beneficios con el objetivo de resolver el problema del consumidor. Servicio al cliente. No solo se resuelven los problemas de un usurario ofreciéndole el producto o servicio que espera. Normalmente, en empresas de servicios está de por medio la calidad de la atención al cliente. En el caso de los negocios que producen productos será el consumidor quien considerará el servicio posventa que la marca reciba.

Conocemos como servicio al cliente a todas las acciones que se implementan antes, durante y después de la compra, que buscan completar el ciclo de satisfacción del adquiriente. El objetivo es que el cliente se termine enamorando de nuestra marca, servicio o productos, generando con esto una relación a largo plazo y consolidarnos en el mercado.

LIDERAZGO Y TRABAJO EN EQUIPO En esta teoría el liderazgo tiene una visión más amplia que la de solo liderar a los equipos para cumplir los objetivos. Liderazgo es esa habilidad que debe fortalecer el emprendedor para alcanzar su máxima eficiencia en cada uno de los roles desempeñados en su emprendimiento. Roles como el de estratega, emprendedor, empresario, jefe, proveedor y competidor se deben impulsar por un verdadero liderazgo que potencie su eficiencia y con ello alcance su mayor grado de productividad para cumplir con los objetivos propuestos en la organización. La confianza generada en cada uno de los roles asumidos, así como también una visión clara, planes precisos, esfuerzo constante, sumando y agregando valor a quienes nos rodean será lo que marque este liderazgo tan necesario a la hora de emprender. Por otro lado, está la capacidad de trabajar en equipo, organizando grupos de líderes que multipliquen los resultados y la confianza. Igualmente, la delegación de actividades en los equipos y colaboradores son un elemento fundamental para el éxito. La importancia de la delegación tiene que ver con la necesidad de evitar tareas que podrían realizar nuestros liderados, y con ello dedicar nuestros esfuerzos a la elaboración de planes estratégicos y a la toma de decisiones. La delegación incrementará la productividad dentro de la organización, mejorando a la vez la moral de los colaboradores, consecuencia del permanente incremento de conocimiento adquirido para resolver o ejecutar las tareas.

ACTITUD Y ESPÍRITU EMPRENDEDOR Los emprendedores -normalmente- buscan motivación para sacar adelante su idea a través del emprendimiento. Sin embargo, la motivación tiene un problema y es que funciona en el corto plazo. En tal sentido, los emprendedores deben trabajar en su actitud, que es la que resulta efectiva para enfrentar los problemas de la empresa en el día a día. “No busques motivación para levantarte hoy, trabaja en tu actitud para levantarte mañana”. Renzo Aguirre

Un ejemplo de cómo enfrentar con actitud una situación que pudo volverse adversa, lo viví a finales de 2019, cuando estuve cerca de la fecha de realización del evento Gladiadores Tour, que nació como una idea para dotar de herramientas y ejemplos de vida a emprendedores, y que poco a poco se ha ido consolidando en el tiempo. Gladiadores Tour (ahora Aprendedores Tour) se celebró con gran éxito un sábado, 14 de diciembre, con más de 400 personas presentes en el Auditorio de la Cámara de Comercio de Quito, y eso que hasta el 10 de noviembre apenas se habían vendido una docena de boletos. Esto, lejos de preocuparme o desmotivarme, me recordó que, en la vida, si deseas lograr algo, debes trabajar y esforzarte, así que eso fue lo que hice. Durante los días previos vi e incluso aguanté situaciones difíciles, como ver en mi teléfono celular -sin respuesta- más de 300 mensajes de WhatsApp con doble visto en color azul y más de 500 en color blanco, que nunca fueron revisados. Un hecho anecdótico fue que en esos días muchos alumnos, exalumnos, amigos y otras personas a las que se invitó al encuentro me dijeron y explicaron que “se enfermaron”, la verdad me asustó oír que tengo tantos amigos enfermos, espero que después de su respuesta se hayan puesto mejor (¿saben que es una ironía verdad?); tenían “operaciones programadas”, o simplemente “saldrían de viaje” en esa fecha y por eso no podrían asistir. Haría mal en atribuirme todo el éxito de Gladiadores Tour 2019. Detrás de mí existe un equipo que trabajó duro para alcanzar los objetivos planteados al organizarlo. A pesar de todas las negativas, de los pretextos o de las excusas de muchos, un enorme grupo (400) de emprendedores, empresarios, profesionales y personas interesadas en

cambiar su vida llenó ese auditorio, lo cual me llena de mucho orgullo, porque me demuestra lo que significa trabajar con eficiencia y no desmayar nunca. Si amas algo en realidad, como yo amo a Gladiadores Tour, que no te importe si tienes que ponerte a enviar 100 mensajes, que 50 personas te ignoren, 40 te pongan pretextos absurdos, 10 te tengan eventualmente “tonteando” y saques dos grandes negocios. Lo más seguro es que con el tiempo cumplas con todas tus metas planteadas y sepas que todo ese enorme esfuerzo valió la pena. La motivación externa no sirve para tener una actitud sólida. Para tener una actitud frente al emprendimiento debes enfocarte en cuatro temas: - Trabaja en ti, en el “yo”: yo me amo, yo me respeto, yo me valoro, yo hago deporte. “Cuando yo estoy bien, todo mi alrededor está bien”. - - Concéntrate en recibir lo bueno de la gente. Te debes preguntar todo el tiempo: ¿Qué estás recibiendo de quienes te rodean? ¿Con quienes compartes tu día a día y tu entorno? ¿Qué aceptas de las personas que están a tu alrededor? Entonces te invito a que reflexiones: ¿Qué puedo esperar de la gente que no me aporta, que no suma a mi bienestar? Y la respuesta debe ser clara: si no tiene nada que sume a tu vida, a tu estabilidad, es mejor alejarte. Pero esto también significa haber aceptado y aceptar lo bueno de las personas; debes separar de ellas las experiencias de conflicto, las que no aportan a tu vida. Así solo recibirás lo bueno de la gente. - Conocimiento. Vuelvo a este concepto, que es un elemento vital dentro del emprendimiento, y que debes adquirir. El conocimiento te da actitud y viceversa. La Biblia, en Proverbios 24:5, resalta el poder que da el conocimiento: “El hombre sabio es fuerte, y el hombre de conocimiento aumenta {su} poder”. El emprendedor debe adquirir conocimiento en universidades, institutos, centros de estudio, aunque también se adquiere conocimiento a través de la misma práctica. Para tener actitud necesitas tener conocimiento, otra de las grandes fuentes de apalancamiento que tiene a disposición el emprendedor. - A quién seguir. Esto no solo se refiere al plano físico, a quienes te rodean, sino también a quienes están fuera de tu entorno cercano, pero que puedes seguir en un mundo globalizado y digitalizado. La actitud es un estado con el que puedes afrontar la vida de forma

proactiva y resiliente. No hay que confundir la actitud con la motivación, porque la motivación es un estado de corto plazo, mientras que la actitud es un estado de largo plazo. Puede ser que hoy no estés motivado para hacer tal o cual actividad, pero será la actitud la que te lleve a realizarla el día de mañana. Aunque lo que acabo de mencionar no debería suceder, será la actitud la que te levantará permanentemente para ir detrás de tus sueños. Por lo demás, el espíritu empresarial no es el afán de crear empresa o pretender ser empresario con la puesta en marcha de uno o varios emprendimientos. Un emprendedor con espíritu empresarial es alguien que va más allá de este deseo, porque el verdadero espíritu empresarial tiene que ver con la conciencia de que tu país crezca gracias a tu aporte. Un emprendedor es un patriota que se preocupa por el interés común y por el de la sociedad a través de la creación de riqueza para ella. Otra característica de un emprendedor con espíritu es la concientización de pagar impuestos justos y a tiempo. No existe justificación para no hacerlo, menos aún, cuando los argumentos se basan en que las recaudaciones son robadas o malgastadas por los políticos de turno. En el preciso instante en que actuamos así pasamos a ser tan criminales como los políticos a los que acusamos. Más allá de que estés o no de acuerdo con el sistema de seguridad social de tu país debes tomar conciencia de la obligación de aportar porque existen muchas personas que dependen de tu honestidad para recibir una pensión. Finalmente, un emprendedor deja el egoísmo de lado para entender que su fuente de motivación no es la de crear un empleo para sí mismo, sino la generación de más empleo para otras personas. Cuando un emprendedor decide emprender inmediatamente está originando dos puestos de trabajo: el primero es la vacante que quedará para otro cuando él abandona la búsqueda de empleo, y el segundo es el que se crea a partir de su emprendimiento. Esta es la evidencia de que el espíritu emprendedor fomenta el crecimiento para propiciar nuevas oportunidades de trabajo.

CANDADOS DEL EMPRENDIMIENTO Nos encontramos con que el éxito permanece ahora encerrado gracias al dominio de estas habilidades blandas. No es menos cierto que no está asegurado, puesto que estas variables no se encuentran selladas, motivo por el cual es importante que se aseguren con candados en los vértices. Cada uno de estos candados asegura que los vértices no sean vulnerables y con ellos evitamos que este triángulo se abra y ese globo de helio llamado éxito se vaya volando. Cada uno de estos candados tienen una serie de variables que garantizan que estén cerrados y asegurados. Los tres candados a los que hacemos referencia son: • Especialización. • Entorno de emprendimiento. • Sistema de gestión administrativa. CANDADOS: LO QUE ASEGURA EL ÉXITO DEL EMPRENDIMIENTO

Estos tres elementos serán los candados que el emprendimiento debe reforzar para que el triángulo no se abra. Solo de esta manera podrás sostener el éxito en el emprendimiento que hayas decidido iniciar. Cuando los candados están cerrados adecuadamente llegará el éxito como fruto de su buena ejecución. Cada uno de los candados tienen una serie de combinaciones (variables) que, al ser bien trabajadas, garantizan su cierre hermético. Cuando estos candados no están bien cerrados o son muy vulnerables, lo que ocurrirá es que se abrirán las esquinas y el ÉXITO se irá volando, se escapará. Por tanto, el logro y el mantenimiento del éxito dependerá de la fuerza con la que estén cerrados los candados y permanecerá en la medida en que los tres elementos (especialización, sistema de gestión y entorno) estén bien estructurados con cada una de sus variables. Los candados, cada uno con sus subcategorías, tienen dos aspectos en común: hay que trabajar, trabajar y trabajar para mantenerlos cerrados. Si no hay trabajo, ni esfuerzo, tendrás candados débiles, que se pueden abrir y el éxito podría desvanecerse, hasta por detalles que pueden resultar aparentemente intrascendentes.

Quienes tengan éxito podrán reflexionar y decir: “Soy un experto en tal o cual tema, domino el sistema de gestión y tengo un entorno que me permite emprender”, pero quienes fracasaron pueden llegar a tener una sensación todavía más hermosa cuando triunfen. El fracaso está para realzar el éxito y percibirlo como una sensación fabulosa. Yo no quiero formar panaderos, sino dueños de cadenas de panaderías. Quiero preparar empresarios, personas que tengan sus propios imperios (entendiendo el imperio desde un contexto subjetivo para cada uno), con emprendimientos fuertes y potentes. Si un día decido poner una panadería y tres años después tengo 10 panaderías, ¿qué van a decir muchos? Lavado de dinero, droga, actividades ilícitas, etc. ¿Por qué pasa esto? Por ignorancia, porque no tenemos las respuestas. Eso lleva a muchas personas incluso a difamar a quienes comienzan a alcanzar el éxito. En casos como ese siempre recomiendo algo: Cállate. Si no conoces los procesos de personas o empresas a las que les va bien, evita opinar. ¿Sabes cómo lo lograron en la mayoría de los casos? Trabajando. ¿Sabes quién los acompañó? Dios. Muchas de esas personas siempre lo tuvieron cerca y creyeron en todo momento que su presencia les ayudaría a lograr el objetivo trazado. Quiero poner un ejemplo que demuestra que, con visión, sentido común e inteligencia, pero sobre todo con planificación, podemos lograr nuestros objetivos: supón que tienes un terreno de 1.000 metros cuadrados que compraste hace 10 o 15 años. Está valorado en 50.000 dólares y decides construir allí cuatro casas de 200 metros cuadrados cada una. Si en la construcción de cada una de las viviendas gastas unos 100.000 dólares, pero prevés como meta venderlas en 300.000 dólares cada una, al final podrías recibir 1 200.000 dólares por la venta de las cuatro viviendas. Ahora bien. Seguramente en ese punto te estarás preguntando de dónde vas a sacar tanto dinero para construir. Te sugiero algo: ¿Por qué no haces una preventa en la que te propongas recibir el 20% de lo que pretendes alcanzar por la venta de las cuatro casas? Eso, en buen romance, significa unos 240. 000 dólares que llegarían antes de iniciar la construcción. Otra fórmula para este mismo ejemplo sería la de buscar el apoyo de

un banco, con el que te puedes apalancar. Siempre digo que al banco no se le debe ver como al Cuco, sino como a una entidad que nos puede facilitar las cosas si sabemos manejar los recursos con conocimiento. Al banco le puedes pedir solo la diferencia, es decir, 110.000 dólares. En pago del capital solicitado e intereses tendrías que pagar unos 30.000 dólares adicionales en tres años. Eso significa que ese negocio te podría llevar unos tres años y la ganancia sería de 700.000 dólares. De acuerdo con la filosofía frugal, que será detallada más adelante, en lugar de gastarse ese dinero, debería utilizarse para volver a construir y así sucesivamente (REINVERSIÓN). En resumen, con 50.000 dólares de capital inicial se alcanzaron 700.000 dólares, que más adelante se podrán convertir en 1, 2 o 3 millones de dólares. La cuestión es que la mayoría de los emprendedores no entiende este concepto y por eso censura e incluso ofende a la gente que triunfa en los negocios. Ok, te entiendo, en la vida “real”, tu vida real, tal vez esto no sea posible; sin embargo, quisiera decirte que si, efectivamente, esto no fuese posible, las constructoras no existirían en ninguna parte del mundo. Lo que he tratado exponer con este ejemplo es una forma de resumir el camino que ha llevado a las empresas exitosas de construcción al lugar en el que ahora se encuentran. Otro ejemplo clásico que suelo poner es el del empleado que tiene un gran talento para la panadería y lleva 20 años trabajando para una cadena. Después de 20 años, ese sujeto logra reunir 20.000 dólares. En la mayoría de ocasiones es casi seguro que apostaría por adquirir una vivienda, porque los padres u otras personas mayores le han codificado con la concepción de que es prioritario poseer una casa propia, con aquella idea de “la única forma de llegar a tener es endeudándose”. Yo te invito a pensar diferente: en lugar de adquirir una deuda con el banco y encontrarte en la imposibilidad de renunciar al trabajo durante 15 o 20 años mientras pagas tu crédito, renuncia a comprarte una casa. En lugar de eso, juégatela y abre tu propia panadería, pero con mucho cuidado, debes hacerlo con inteligencia. Hagamos un cálculo. Esta panadería podría vender unos 150 dólares diarios, que al mes significarían 4.500 dólares una vez restados los costos de hacer el pan, que alcanzan unos 1.350 dólares mensuales. Esto supone el 30 % de la venta total y 1.350 dólares por gastos operativos, con lo que te quedarían limpios unos 1.800 dólares cada mes. No obstante, de acuerdo con lo que te enseñaron desde niño, te gastarías ese dinero viviendo como “nuevo rico”, porque “cuanto más

ganas, más gastas”. Puede haber casos en los que apenas comienzan a entrar los ingresos ya se quiere invertir en la casa soñada o gastar en ciertos lujos, como ir a comer fuera con frecuencia o viajar al extranjero. ¡Eso es un error! En su lugar, debes ahorrar para reinvertir ese mismo dinero. Eso quiere decir que tu estilo de vida no ha de cambiar, tienes que seguir viviendo como cuando ganabas 700 dólares al mes. Con esa premisa, podrías destinar 800 dólares mensuales para vivir y reunir los otros 1000 durante 10 meses para abrir una nueva panadería. Con 10.000 dólares como capital inicial tendrías la mitad de lo que invertiste en la apertura de la primera panadería, que era 20.000 dólares. De esa forma, solo sería necesario pedirle al banco (apalancamiento) 10.000 dólares. Con dos panaderías podrías usar el flujo en el pago de la cuota del crédito que hiciste. Con la misma idea anterior, es decir, sin subirte el sueldo o realizar gastos innecesarios, en aplicación de la filosofía frugal y la educación financiera, te resultaría posible abrir otra panadería. Si repitieras ese proceso podrías impulsar la apertura de varias panaderías porque el crecimiento está demostrado. Solo en ese momento, cuando hayas alcanzado verdaderamente el éxito financiero, ya tendría lugar que pensaras en aumentar tu sueldo. Debes tener cuidado al tratar de crecer apoyándote en el concepto de la diversificación, que pasa por aprovechar la capacidad que tengas dentro de la industria- para ampliar ese negocio. Hay personas que, al tener un relativo éxito con una cadena de panaderías, deciden abrir una sastrería. No te lo recomiendo. De forma paralela a los códigos de “cuanto más gano, más gasto” y “solo endeudándote, llegas a tener” existe otro código que intento cambiar: “Estudia para conseguir un trabajo”. En función de mi experiencia, te digo, opta por emprender tu propio negocio y mucho mejor si lo haces a una edad temprana, porque los frutos llegarán también de forma anticipada. Con esto no estoy diciendo que eludas los estudios, ya que sí debes estudiar, y esto es algo muy importante. Mi consejo es que, para evitar actuar con las codificaciones que tenemos, te rebeles y reinviertas tus réditos en tu propio negocio, como si se tratara de lo que genera el interés compuesto, con el que obtienes ganancias de interés sobre interés. Solo así tu empresa o tu negocio será

grande. CANDADO: GESTIÓN DE LA ESPECIALIZACIÓN Definitivamente, el emprendimiento no podrá nacer si quien lo ejecuta no cuenta con un conocimiento especializado y el dominio del mismo. La especialización implica dedicar muchas horas para adquirir experiencia. Estas serán las variables o claves para que este candado sea más hermético. Necesitas una especialización incluso si lo que quieres hacer es copiar. El camino no está en preferir una puerta y abrirla simplemente porque ves que existe un buen negocio o porque ya le funcionó a otros. Te doy un ejemplo que puede constituirse como uno de los errores en el que muchos caen: casi todos comemos pan, lo que supone que abrir una panadería podría ser un negocio lucrativo. Sin embargo, no puedes pretender que por el hecho de que la mayoría coma pan, te vaya a ir bien si abres un local de ese tipo. La explicación es sencilla: es muy previsible que no te hayas especializado en el conocimiento de esa área y mucho menos conozcas cómo funcionan los procesos internos. A la larga, será muy probable que fracases. Lo mismo sucederá si mañana decides poner una peluquería a pesar de no estar especializado en ese tema. Si llegas a dejar huecos en la cabeza de tus clientes… ¡Imagínate! Eso significa que no tienes idea del proceso, por lo que no nunca vas a lograr el éxito. Te aseguro que si no dispones de una especialización en algo no vas a ningún lado. Tu emprendimiento debe tener una especialización, incluso si deseas copiarlo y mejorarlo. Volvamos al ejemplo anterior: si se te ocurre incursionar en el negocio de la panadería, antes de arrancar con tu proyecto tendrás que ser un experto en panadería. El camino no está en abrir la puerta con la idea de que es un buen negocio porque todo el mundo come pan, sino en especializarte previamente… ¡para que todo el mundo quiera comer tu pan! Dentro de la experticia existen algunos elementos dinámicos:

TALENTO Los seres humanos nacemos con un talento innato, pero el reto está en descubrirlo. Es importante aplicar este talento, puesto que se trata de habilidades que se nos dan de forma natural, sin mayores esfuerzos y que -inconscientemente- las destacamos frente a otras capacidades. En mi caso, por ejemplo, tengo un talento muy grande para transmitir conocimiento y es gracias a eso que he logrado crear mi propia red de enseñanza, así como también estructurar una filosofía que gira alrededor de esta habilidad. No me cabe duda de que todos los seres humanos tenemos un talento, una capacidad innata, y es por esto que, además de desarrollar tu talento, también debes, como líder, contribuir al desarrollo del talento de los tuyos y, con ello, alcanzar el beneficio individual, social e, indudablemente, empresarial. La Biblia, uno de los libros más importantes en la historia de la humanidad, lo menciona en dos versículos del Libro de Pedro: “Cada uno ponga al servicio de los demás el don que haya recibido, administrando fielmente la gracia de Dios en sus diversas formas. El que habla, hágalo como quien expresa las palabras mismas de Dios; el que presta algún servicio, hágalo como quien tiene el poder de Dios”. La parábola de los talentos que consta en el Evangelio, según San Mateo 25, versículos del 14 al 30, es ejemplificadora: “En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: Un hombre que se iba al extranjero llamó a sus siervos y les encomendó su hacienda: a uno dio cinco talentos, a otro dos y a otro uno, a cada cual según su capacidad; y se ausentó. Enseguida, el que había recibido cinco talentos se puso a negociar con ellos y ganó otros cinco. Igualmente, el que había recibido dos ganó otros dos. En cambio, el que había recibido uno se fue, cavó un hoyo en tierra y escondió el dinero de su señor. Al cabo de mucho tiempo, vuelve el señor de aquellos siervos y ajusta cuentas con ellos. Llegándose el que había recibido cinco talentos, presentó otros cinco, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes otros cinco que he ganado. Su señor le dijo: ‒¡Bien, siervo bueno y fiel!; en lo poco has sido fiel, al frente de lo mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor. Llegándose también el de los dos talentos, dijo: ‒Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes otros dos que he ganado. Su señor le dijo: ‒¡Bien, siervo bueno y fiel!; en lo poco has sido fiel, al frente de lo mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.

Llegándose también el que había recibido un talento, dijo: Señor, sé que eres un hombre duro, que cosechas donde no sembraste y recoges donde no esparciste. Por eso me dio miedo, y fui y escondí en tierra tu talento. Mira, aquí tienes lo que es tuyo. Mas su señor le respondió: ‒Siervo malo y perezoso, sabías que yo cosecho donde no sembré y recojo donde no esparcí; debías, pues, haber entregado mi dinero a los banqueros, y así, al volver yo, habría cobrado lo mío con los intereses. Quitadle, por tanto, su talento y dádselo al que tiene los diez talentos. Porque a todo el que tiene, se le dará y le sobrará; pero al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará. Y a ese siervo inútil, echadle a las tinieblas de fuera. Allí será el llanto y el rechinar de dientes”. En este punto cabe la pregunta: ¿Cómo descubrir tu talento? John C. Maxwell, en su libro El talento nunca es suficiente afirma lo siguiente: “Si eres una persona altamente talentosa, es probable que te cueste trabajo una disposición de aprender. ¿Por qué? Porque las personas talentosas con frecuencia piensan que lo saben todo, y eso hace que sea difícil para ellas continuar ampliando su talento. La disposición de aprender no es tanto una cuestión de competencia o de capacidad mental como de actitud. Es el deseo de escuchar, aprender y aplicar. Es el deseo de descubrir y crecer” (p. 191). La española Mónica Fusté, emprendedora y autora de libros de desarrollo personal, identifica cinco estrategias para descubrir el talento. Son las siguientes: 1) Iniciar un proceso de introspección formulando preguntas poderosas con el objetivo de llegar a un nivel de autoconocimiento profundo. Para esto, podrías cuestionarte lo siguiente: • ¿En qué disfrutas realmente? • ¿En qué actividades pierdes la noción del tiempo? • ¿Cuáles son tus intereses y aficiones? ¿De qué temas hablas? • ¿Cuál es aquello en tu vida sin lo cual no podrías vivir? • ¿Qué necesitas hacer para sentirte conectado con tu yo auténtico? • ¿Qué es lo que has hecho siempre sin darte cuenta? • ¿En qué cosas recibes reconocimiento de los demás? • ¿Cómo ayudas a los demás? ¿Qué les aportas? • ¿Qué harías, aunque no te pagaran por ello, por el simple placer de hacerlo? • ¿Cuáles son los blogs que lees? Si tuvieras que escribir un blog, ¿cuál sería tu tema? 2) Enfocarte en personas a las que admiras y preguntarte por qué:

“Todo lo que admiras de otros son cualidades y fortalezas que tú también tienes, que quizás aún no has desarrollado o no has reconocido como propias”, señala. 3) Contempla efectuar un listado con todas las actividades en las cuales pierdes la noción del tiempo. Esto requiere prestar mayor atención a los desempeños que realices día a día. 4) Plantearse tomar conciencia de los desempeños que tú realizarías, aunque no te pagaran, y con las te sentirías a gusto por el solo hecho de llevarlos a cabo. 5) Consiste en contar con opiniones de personas allegadas de los diferentes círculos de tu vida en relación con los talentos que perciben en ti. Eso dará una retroalimentación.

CONOCIMIENTO No solo se trata de tener un talento, sino de adquirir una pericia que se acumula a través de los años por todos quienes se han centrado en hacerlo. El conocimiento en cada una de las áreas es infinito y adquirir gran parte de este es un reto que nos permitirá evolucionar en nuestro emprendimiento. Para dar continuidad a lo que mencionaba en el punto anterior sobre el texto de la Biblia, existen numerosos pasajes en los que se habla del tema del conocimiento. En Proverbios, por ejemplo, dice: “El principio de la sabiduría es el temor de Jehová. Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza”, y añade: “El hombre sabio es fuerte, y el hombre de conocimiento aumenta (su) poder”. Por lo tanto, te guste o no, tienes que adquirir conocimiento. Necesitas asistir a la universidad u otro centro de estudios, donde te enseñarán las bases, y después tendrás que conjugarlo con la práctica.

CAPACITACIÓN La especialización proporciona un mejoramiento constante gracias a la capacitación permanente. No se puede dar por sentado que, con el conocimiento adquirido en algún momento, la experticia alcance su máximo grado; un especialista debe demostrar su nivel de humildad y aceptar la necesidad permanente de capacitarse. Los cursos, talleres y seminarios -tanto presenciales como digitalesdeben ser una costumbre del emprendedor, consciente de la evolución perpetua del conocimiento en cada una de las áreas de especialización. ¿Eres de esas personas que estudió una carrera y nunca más siguió un curso de capacitación, un seminario o un alcance adicional sobre lo que conoció? Entonces tienes un problema, porque te vas a quedar estancado. Recuerda que la capacitación es diferente del conocimiento, porque implica adquirir habilidades complementarias a este. En este punto, cabe resaltar que no solo se trata de la actualización de tus conocimientos, sino del conocimiento de los tuyos. En otras palabras, si tu gente no se capacita, se estanca. Por esta razón, si no apoyas su desarrollo intelectual, simplemente verás reflejado ese estancamiento en tu emprendimiento. La capacitación no solo es tarea emprendedor, sino también de quienes le apoyan en su crecimiento.

INNOVACIÓN La especialización exige del emprendedor un espíritu permanente de innovación, de cambio y de evolución. No se puede hablar de especialización si los diferentes elementos del producto o servicio no evolucionan o no mejoran, ya sea desde el proceso, la logística u otros. Tienes que evolucionar permanentemente, entregar cosas nuevas a tus clientes, solucionar sus problemas de forma novedosa. En el mundo actual solo un especialista puede ser innovador. Por ejemplo, en el caso de un panadero: ¿cómo gasto menos dinero para hacer un nuevo pan?, ¿cómo creo un nuevo tipo de pan?, ¿cómo hago más eficiente la preparación?, ¿cómo levanto procesos?, etc. Uno de los grandes problemas que he encontrado a lo largo de estos años es que muchos emprendedores deciden abrir una tienda de barrio, y por eso no logran lo que realmente serían capaces de lograr, porque su mentalidad es de tienda de barrio. Lo que te quiero decir es que, si esa es tu idea de negocio, manos a la obra, pero toma en cuenta algo importante: adminístrala como un gran supermercado, es decir, marca una diferencia. No hablo en vano. Conozco casos de emprendedores que no alcanzan ni siquiera el punto de equilibrio porque lo administran mal, matando el flujo de caja, comiéndose todos los días lo que les sobra, y muchas veces haciendo que eso prevalezca sobre el pago a proveedores, entre otras inconsistencias. También es frecuente que en esas tiendas no existan procesos, ni logística o estructura. La ausencia de esos elementos simplemente implicará el irremediable cierre del negocio.

DIFERENCIACIÓN La búsqueda permanente de innovación tendrá como resultado la diferenciación. Es difícil sobrevivir en un mercado en donde todos los oferentes exponen lo mismo, por lo que será crucial trabajar en elementos diferenciadores que nos ayuden a permanecer en un mercado cada vez más competitivo. La idea es encontrar siempre ese elemento que te va a distinguir de los otros. No puedes ofrecer lo mismo que el resto de tu competencia, porque eso te llevará a una guerra de precios. Tú necesitas diferenciarte. Imagina este ejemplo: me he encontrado con casos de personas que buscan ideas de emprendimiento en Google, lo cual es peligroso, ya que no pones a trabajar a tu cerebro. En otras ocasiones, se fijan en negocios a los que les va bien y deciden iniciar uno similar. ¿Recuerdas a algún conocido tuyo que, por ejemplo, al ver que a la señora de enfrente le iba bien vendiendo empanadas decidió poner el mismo negocio? Eso puede llegar a ser peor, por el simple hecho de que no pone en práctica un elemento diferenciador, como utilizar un tipo distinto de endulzante, que podría ser la estevia. En ese mismo ejemplo, la aparición de un nuevo competidor (nos referimos ahora a quien decidió copiar el negocio de enfrente), puede hacer que se produzca una guerra de precios, que podría derivar, a su vez, en la quiebra y desaparición de todos los actores. En mi clase enseño a entender que hay otro camino para evitar situaciones adversas al momento de iniciar un negocio propio. Les cuento cómo en el Instituto (EELA) que lidero hay gente que siente que le cambié la vida luego de que le transmití mi experiencia y mi conocimiento. Nuestro gran diferenciador es la TCE que yo desarrollé y que ningún programa puede utilizar como parte de su oferta.

PROCESOS El dominio de los procesos es símbolo de especialización, pero el hecho de que tengas el conocimiento de un área en sí no es garantía de que estés especializado. El saber debe sumar el dominio de los procesos en ese campo específico. Los procesos garantizan la calidad y la mejor estructuración del emprendimiento, además de que con ellos puedes determinar una trayectoria de avance que te llevará a progresar incesantemente. El objetivo de estructurar los procesos en tu emprendimiento tiene el propósito de elaborar un sistema capaz de hacer funcionar tu negocio sin que sea imprescindible contar con tu presencia. Este flujo de actividades determina el proceso. Ten en cuenta que, si estos métodos no están claros, no haces que consten por escrito o no están bien redactados, no podrás ser un verdadero especialista. A su vez, su ejecución servirá para alcanzar los objetivos propuestos.

CADENA LOGÍSTICA Y DE SUMINISTROS Toda actividad empresarial, por sencilla que sea, tanto en el ámbito comercial, industrial como en el de servicios, cuenta con una estructura logística. El dominio de esta cadena implica un nivel de especialización, de tal manera que podemos decir que: cuanto más dominio existe en la cadena logística, más especializado estoy. La cadena logística es todo lo que tiene que ver con tu proceso y se aplica en cada actividad. Por muy pequeña que sea la empresa, todas realizan logística y cadena de suministros, porque son actividades inherentes al manejo de un producto o servicio: procesamiento de pedidos, administración de materiales, almacenamiento, embalaje, transporte, control de inventarios, y servicio al cliente, son solo algunas de las tareas que engloban la cadena logística y de suministros. Esta cadena debe contar con algunas características: canales de comunicación tanto internos como externos; correcta coordinación entre todas las partes involucradas: disminuir las pérdidas o buscar fórmulas para evitarlas; respetar y mejorar los tiempos de distribución; mantener los inventarios actualizados; tener la apertura a la adaptación en caso de cambios en la oferta o demanda; controlar el flujo de información en los distintos actores de la cadena y, finalmente, contar con el personal adecuado y capacitado para la ejecución de toda la estrategia logística. CANDADO: GESTIÓN DEL ENTORNO

propuesta de valor.

No conozco empresa de éxito que no haya contado con un mínimo de variables a su favor en el entorno, por lo que quien pretenda poner en marcha un negocio tendrá que trabajar en algunos elementos esenciales, de tal manera que el emprendimiento fluya frente a una serie de obstáculos que normalmente van apareciendo mientras se opera la

El entorno también se refiere a cuáles son las condiciones que te rodean y que te autorizan a emprender. Hay condiciones óptimas y no óptimas, pero más allá de si existen o no, las puedes trabajar, diseñar, elaborar y, con el tiempo, potenciar. Tu entorno también se constituye por tus emociones, la gente que te rodea, las condiciones políticas, sociales y económicas del lugar donde vives, etc.

ENTORNO EXTERNO EMPRESARIAL El emprendimiento no es un ente aislado. Entender que alrededor de tu empresa hay todo un ecosistema externo te abrirá los ojos para conocer lo que pasa. Gracias a eso, podrás tomar acciones y decisiones que, de alguna manera, te ayudarán a convivir con el entorno. En este punto, la información es clave, por lo que es imprescindible hacer un análisis externo y de la industria. “Una auditoría externa se centra en la identificación y evaluación de las tendencias y acontecimientos que están más allá del control de una sola empresa, como el incremento de la competencia extranjera; la migración de la población hacia los estados del sur y suroeste de Estados Unidos; el envejecimiento de una sociedad; el miedo de los consumidores a viajar, y la volatilidad de los mercados financieros. Una auditoría externa revela las oportunidades y las principales amenazas que confrontan a una empresa, de tal manera que los gerentes sean capaces de formular estrategias para aprovechar las oportunidades y evitar o reducir el impacto de las amenazas. Este capítulo presenta un esquema práctico para recopilar, integrar y analizar la información externa”. (David, 2003, p.80) El objetivo de poner en práctica este análisis es identificar una serie de amenazas que podrían evitarse y, a su vez, de oportunidades que tendrían que ser aprovechadas en tu emprendimiento. Una herramienta administrativa que no he dejado de usar desde mis inicios es la que se conoce como matriz PESTEL, creada en 1968 por Liam Fahey y V.K. Narayanan, quienes la mostraron en su ensayo Análisis macro-ambiental en gestión estratégica. Esta matriz plantea el análisis de seis factores o fuerzas: la política, la económica, la social, la tecnológica, la ecológica y, finalmente, la legal. Por otro lado, otra de las herramientas que recomiendo para el análisis del entorno es la matriz de las cinco fuerzas de Porter: el poder de los clientes, la amenaza de nuevos competidores, el poder de los proveedores, la amenaza de productos sustitutos y la rivalidad competitiva. Analizar el entorno que rodea a tu emprendimiento es fundamental. Esto, como ya se ha resaltado antes, servirá para determinar los puntos buenos y los malos con respecto a estas variables, entendiendo con esto que tu emprendimiento no es un mundo aparte, sino que existen muchos elementos adicionales fuera de su entorno que, necesariamente, deben ser tomados en cuenta.

ENTORNO FAMILIAR El apoyo del entorno familiar es indispensable para la ejecución de una idea a través del emprendimiento. Será con la planificación y el apoyo familiar que se estructurará un plan de acción con energía para afrontar las eventualidades que resulten en los inicios. Ojo, con esto no estoy diciendo que los tuyos deban involucrarse en la ejecución del proyecto como tal, lo que quiero dar a entender es que contar con el espaldarazo de tu familia siempre será reconfortante para ti. Este respaldo familiar se centrará en elementos morales, espirituales, sociales y económicos. Cuando menciono la variable económica, no me refiero al apoyo con dinero, sino a la capacidad que se tenga para planificar el elemento monetario dentro de la familia mientras el emprendimiento alcanza su etapa de crecimiento y maduración. El acompañamiento de la familia quiere decir también que debes conversar con tu entorno cercano. Deberás planificar el proyecto con esa persona que está a tu lado. A la vez, él o ella tendrán que comprender con claridad que eso significará que habrá un período en que las cosas no serán sencillas, quizá haya escasez de dinero, poco tiempo para los asuntos personales o tal vez la relación se pueda deteriorar. No obstante, debe ser mucho más fuerte el deseo de avanzar y caminar de la mano hacia el éxito. Suele suceder que en el camino te topas con dos opciones: contar con su apoyo o enfrentarte a un muro de negativas. En esos casos, tu obligación como emprendedor es efectuar un plan para terminar convenciendo a la familia. Debes preguntarte: ¿Quién está en contra? ¿A quién tengo que convencer? Entonces, debes hacer una presentación clara, y mucho mejor si es por escrito, por ejemplo: explicar a tu entorno familiar, que es como tu junta directiva, con cinco o seis láminas, cuál es tu plan. Sin ayuda familiar y planificación no vas a lograr emprender. Muchas veces nuestras madres o nuestros padres, desde su experiencia en una época diferente, van a ser los primeros en sugerirnos que no emprendamos y que, por el contrario, salgamos y busquemos un trabajo. Solo tu fuerza de voluntad, tu conocimiento y tus ganas de emprender te mantendrán con ánimo para seguir adelante. Todos deben tener claro que la planificación familiar no significa

utilizar un condón, aunque a veces sea necesario para otros fines.

DOMINIO DE LA MENTE Los emprendedores deben saber que la idea de negocio nace de uno y básicamente con el dominio de la mente; indudablemente, esta visión debe estar ligada a nuestra especialización. Al respecto, difícilmente podrás avanzar en la ejecución de tu idea si el pesimismo que llega de tu mente es constante. Una mente perdedora es peligrosa y, por lo tanto, necesitas tomar conciencia de la necesidad de dominar tu mente para que, con el tiempo, la manejes a tu conveniencia y seas tú quien decida qué es bueno y qué es malo en tu emprendimiento. No puedes consentir que sea tu propia mente la que boicotee tu futuro con sus pensamientos negativos. Personalmente y, aunque pueda parecer una locura, cuando me pasan este tipo de cosas le hablo a mi mente y le digo: “Silencio, hijo de &%$#, tú a mí no me vas a decir si esto está mal, tú estás para darme soluciones, así que cállate y ponte a trabajar…”. Estamos codificados a través de nuestras creencias, o lo que es lo mismo, nuestras mentes están codificadas. La falta de dominio de la mente normalmente hace que tengamos nuestro mayor enemigo en nosotros mismos. La mente, por su condición de protectora, encontrará miles de excusas para no emprender. Como ya te comenté, el dominio de la mente se basa en dos aspectos. El primero de ellos es que tu cerebro es el que te da las ideas para emprender, para innovar, para mejorar, así que mientras te domine de forma negativa, no irás a ningún lado. Respecto al hecho tan común de que la gente busque en Google, por ejemplo, en qué actividad emprender… ¡Es absurdo! Dominar la mente significa darte cuenta de la capacidad que tienes. Cuando lo logras, tu mente tiene la obligación de darte las ideas para emprender, para innovar, para diferenciarte… ¡Para triunfar! Imagina que vas a una heladería y pides el delicioso helado que tanto deseas, pero el vendedor te dice: “No lo tengo”. Tú le insistes al vendedor: “Ahí lo tiene, lo estoy viendo”, y a pesar de tenerlo delante de ti, el empleado te responde: “No, no tengo”. Exactamente lo mismo ocurre con tu mente. Tú le pides: “Dame una idea”, y tú mismo respondes: “Es que no tengo ideas”. La mente no te puede responder que no tiene ideas porque es la mente la que debería dártelas. Si no te las da, es porque simplemente te tiene dominado y, repito, si no la dominas no saldrás nunca del estancamiento.

El segundo aspecto se centra en que tu mente debe darte las ideas, no Google u otra persona. El buscador podrá suministrar bibliografía, ejemplos, te facilitará datos para ampliar tu conocimiento a través de la lectura, pero no te podrá dar las ideas.

EDUCACIÓN FINANCIERA Es la capacidad que posees para administrar adecuadamente tus finanzas personales e infiere por completo a las finanzas de tu emprendimiento o de tu negocio. Una persona que gasta más de lo que tiene y gana, que se endeuda en exceso o que despilfarra el dinero, no tiene educación financiera. La premisa principal es: no gastes más de lo que tienes. Lamentablemente, los emprendedores no cuentan con los conocimientos precisos sobre educación financiera. Mediante una adecuada educación financiera, los emprendedores tendrán la capacidad de comprender lo que significa el dinero y su funcionamiento. Otros teóricos definen la educación financiera como un conjunto de habilidades que adquiere el individuo para administrar sus finanzas, y con ello formar hábitos de ahorro, inversión y planificación de gastos, que favorecen que el individuo cumpla finalmente con sus metas financieras en el largo plazo. En este aspecto, hay que considerar algunos conceptos financieros personales, respecto a los activos, desde la visión personal y no con un enfoque contable. Existen dos tipos de activos: los productivos y los improductivos. Digamos que un activo productivo es aquello que le “da de comer” y un activo improductivo es lo que “lo come a usted”, por eso podemos llamarlo gasto pasivo. Así, “los ricos tienen más activos productivos que improductivos; los pobres lo opuesto: los activos productivos ponen dinero en tu bolsillo y los activos improductivos lo extraen”. En este sentido, existen dos tipos de ingresos: ingresos pasivos, que se refieren al dinero que entra al bolsillo sin necesidad de que trabajes por este, e ingresos activos, que se centran en el salario que recibes cada mes y que depende por completo de tu trabajo. Es importante remarcar que la gran mayoría de las personas solamente tiene ingresos activos, los cuales provienen de su salario o fuente de trabajo. A muchos pequeños empresarios les ha sucedido que por no tener una adecuada educación financiera han terminado realizando inversiones contraproducentes. Cabe citar el ejemplo de aquel dueño de una tienda de barrio que llegó a ganar 10.000 dólares y que prefirió usar ese dinero en adquirir un vehículo en lugar de pensar en reinvertir. En este punto, te pregunto: ¿Qué pasa con el emprendimiento? ¡¡¡Está cagado!!!, porque en ese momento el negocio tendrá que pagar la cuota de ese carro.

Si llegas a un punto en el que crees que tus deudas te superan, debes buscar la ayuda de una persona entendida en finanzas o al menos leer e informarte sobre métodos, técnicas u opciones para salir de forma efectiva de una mora. Una opción que localicé mientras escribía este libro se relaciona con el Método Harvard, también llamado Método Snowball o -en español- bola de nieve, que implica no solo centrarse en las deudas con tasas de interés más grandes, sino también en aquellas con saldos más pequeños. De acuerdo con estudios hechos por Harvard Bussiness Review, una reconocida revista propiedad de Harvard Bussiness School, en los Estados Unidos, “El mayor impacto no era la cantidad que quedaba por pagar, es decir, la deuda restante, sino el importe que habían conseguido quitarse de en medio una vez pagado”. Dicho en otras palabras, pagar aquellas deudas con más bajas tasas de interés también puede ser efectivo en el progreso de la reducción de la deuda total. Las personas pueden sentirse más confiadas, dice esa propuesta, al ver que parte de sus deudas queda eliminada.

FRUGALIDAD Hay autores que la llaman simplicidad, pero yo considero que debe llamarse filosofía de la frugalidad y no es otra cosa que la potestad que tiene una persona de vivir con lo que realmente necesita. Así, con la frugalidad puedes satisfacer tus necesidades de acuerdo con tu realidad y tus ingresos, y tiene que ser una forma de vida que debe estar implementada en tu ADN y en el de tu familia. La noción de que “cuanto más ganas, más gastas” queda anulada con la filosofía frugal, que te libera de las presiones sociales que apuntan a gastar más de lo que realmente necesitas, con el único fin de buscar la aprobación social. Ser frugal significa aprovechar la posibilidad de vivir solo con lo primordial. Entonces, podrías plantearte las siguientes interrogantes para cambiar la forma de ver tu entorno desde la frugalidad: - ¿Por qué tienes teléfono fijo en casa si no lo ocupas nunca? - ¿Por qué llevas alimentos en exceso y preferentemente no haces una lista para ir al supermercado? - ¿Por qué compras tantas golosinas? - ¿Por qué adquieres un celular que cuesta 500 dólares cuando tu sueldo es de 500 dólares mensuales? - ¿Por qué contratas un sistema de cable tan caro en tu hogar? - ¿Por qué colocas decodificadores en todas las habitaciones? - ¿Comes lo que tu cuerpo necesita o lo haces en exceso, por gula? - ¿Compras lo que necesitas? Esas inquietudes pueden darte un sinnúmero de respuestas que develarán si eres frugal e incluso te abrirán los ojos sobre hábitos en los que puedes mejorar. Cuando has sido frugal con tu emprendimiento desde el inicio y llega el momento de poder gastar el dinero ganado, reflexionas sobre ello y te das cuenta de que no tienes necesidad de hacerlo. No es ansiedad para llenarte: ¿Realmente lo necesitas? Puedes identificar a quienes no son frugales cuando abres las gavetas de la cocina o en sus habitaciones encuentras utensilios, ropa o zapatos que quizá se pusieron una vez o nunca los usaron. La falta de frugalidad está relacionada con vacíos personales, porque en ocasiones las compras son las que te “terminan llenando”.

La frugalidad debe entrar dentro de la planificación de los gastos de la familia. Por ejemplo, analiza si es necesario pagar cada mes un sistema de cable de 80 dólares, cuando puedes adquirir un combo para ver películas en línea, de los muchos que se ofertan en el mercado, por la quinta o sexta parte de ese precio. La lista es larga, por lo que debes ajustar esos gastos y ponerte a trabajar. Por lo general, la gente que vive endeudada denomina a la frugalidad como tacañería. Al que es frugal le identifican como tacaño, dicen que le “duele el codo” o que no sabe disfrutar de la vida, pero puedes preguntarte: ¿Qué prefieres? ¿Llenarte de compras inútiles y luego no tener dinero para algo que realmente deseas o para un imprevisto? ¿O quizá es mejor vivir con lo imprescindible, pero sin deudas que muchas veces te costará pagar? Para entender la frugalidad también se debe recordar lo que menciona el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española (RAE): “Templanza, parquedad en la comida y la bebida”. Traducido a otras palabras: ¿Por qué vivir en abundancia si no es necesaria para ti? El ya fallecido psicólogo estadounidense y escritor de libros de autoayuda Wayne Dyer, en su obra Cambie sus pensamientos, cambie su vida hablaba de que vivir con frugalidad y moderación significa estar en armonía con el mundo a través de su naturaleza, y citando al filósofo chino Lao Tsé, recordó que: “Sentirnos satisfechos con menos, en vez de ansiar más, genera mayor generosidad” (p.336). Ventajosamente, mi trabajo me ha concedido la oportunidad de sentarme con personas exitosas y de ese modo he comprendido algunos hábitos del manejo de sus vidas. Ahora reparo en que la mayoría de ellos tiene coincidencias. Son buenos administradores de lo que ganan, no incurren en excesos, lo que menos les interesa es aparentar que son exitosos ante los demás y tienen un entorno que les facilita crecer. Parte de lo que quiero enseñarles a través de este libro se hace más evidente cuando menciono casos de la vida real, que suceden todos los días y que ponen de manifiesto con claridad los errores que han llevado a la bancarrota sobre todo a pequeños empresarios, aquellos que se están abriendo paso en el mundo de los negocios. Por otro lado, existe un pasaje bíblico que bien pudiera describir el concepto de frugalidad desde la filosofía y que tiene como protagonista al rey Salomón, uno de los más importantes personajes de la historia

antigua, antes del nacimiento de Jesucristo, responsable de un importante progreso y gobernante del pueblo judío durante alrededor de cuatro décadas. A él se le atribuye la conocida expresión “solución salomónica”, que tiene que ver con la búsqueda de un arreglo sabio y justo entre dos posiciones diferentes. En el libro de Crónicas se menciona lo siguiente: “7 Aquella noche Dios se apareció a Salomón y le dijo: Pide lo que quieras que yo te dé. 8 Entonces Salomón dijo a Dios: Tú has mostrado gran misericordia con mi padre David, y me has hecho rey en su lugar. 9 Ahora, oh Señor Dios, tu promesa a mi padre David se ha cumplido, porque me has hecho rey sobre un pueblo tan numeroso como el polvo de la tierra. 10 Dame ahora sabiduría y conocimiento, para que pueda salir y entrar delante de este pueblo; porque, ¿quién podrá juzgar a este pueblo tuyo tan grande? 11 Y dijo Dios a Salomón: Por cuanto esto estaba en tu corazón, y no has pedido riquezas, ni bienes, ni gloria, ni la vida de los que te odian, ni aun has pedido larga vida, sino que has pedido para ti sabiduría y conocimiento para poder gobernar a mi pueblo sobre el cual te he hecho rey, 12 sabiduría y conocimiento te han sido concedidos. Y te daré riquezas y bienes y gloria, tales como no las tuvieron ninguno de los reyes que fueron antes de ti, ni los que vendrán después de ti. 13 Y Salomón salió del lugar alto que estaba en Gabaón, de la tienda de reunión, a Jerusalén, y reinó sobre Israel”. El concepto está claro. Antes que pedir riqueza es fundamental trabajar en cultivar y fortalecer la sabiduría. Como ya has comprobado, a través de estas líneas he insistido en explicarte la importancia del conocimiento para alcanzar cada una de tus metas.

INTELIGENCIA EMOCIONAL Toda persona debe asumir sus defectos y virtudes, los cuales no puedes negar porque eres un ser humano, y tampoco ponerlos en duda; al contrario, debes aceptarlos y entenderte a ti mismo. Solo tú puedes darte cuenta de cómo eres en realidad. Por ejemplo: ¿Tengo mal genio? ¿Soy desordenado? ¿Soy vago? ¿Soy procrastinador? Si no eres consciente de tus imperfecciones, no irás a ningún lado. Hay quienes se excusan, atribuyendo a otras personas la responsabilidad por sus defectos o simplemente no reconociéndolos: “Yo no soy vago”, “Yo no tengo mal genio, ustedes me alteran el carácter”, etc. Negar los errores únicamente generará que no consigas avanzar. Cuando admites y aceptas como eres puedes decir que ha llegado el momento de entender por qué eres así y qué te motivó a adoptar esa forma de ser. De ese modo indagarás en el motivo de tus reacciones y podrás cambiar. La Biblia menciona en varios versículos la importancia de conocerse a sí mismo. En Corintios 11:28 y 11:31, por ejemplo, señala: “Cada uno, pues, examine su conciencia y luego podrá comer el pan y beber de la copa”; “Si nos examináramos a nosotros mismos, no seríamos juzgados”. Un emprendedor debe reconocerse y conocerse. Primero tiene que aceptarse como es, entender que puede cambiar y trabajar en ello. Por ejemplo, si yo soy vago, debo aceptar que así soy y luego, al decidir cambiar, dedicarme a trabajar y tener esquemas de actividades laborales para dejar a un lado el ocio. Esta actitud dará paso al emprendedor que se enfocará en trabajar cada día. El reconocimiento nace de uno mismo, pero es probable que para hacerlo debas acudir a un profesional en búsqueda de apoyo. No lo dudes. Esa persona podrá ayudarte a reconocer tus características y hará que tengas conciencia sobre aquellas barreras que debas superar y que hasta puedan conspirar en contra de tu superación. Desconocer, negar o rechazar tus debilidades simplemente no permitirá que puedas trabajar en ellas.

ESPIRITUALIDAD En primer lugar, si no crees en Dios puedes tomar la decisión de no leer este punto y avanzar al siguiente, depende totalmente de tu acercamiento con el Universo. En lo personal, tener una relación espiritual con Dios me ha conferido cumplir con mis objetivos empresariales con mayor paz y tranquilidad. El secreto aquí es la conciencia. La Fundación para la Investigación de la Ciencia Espiritual (SSRF) define práctica espiritual como: “Esfuerzos honestos y sinceros realizados consistentemente y constantemente cada día para desarrollar cualidades divinas y así conseguir la felicidad perdurable y eterna”. La espiritualidad es un viaje interior para conectar y experimentar el alma (Dios en nosotros) en cada uno de nosotros. Existen dos razones, según las investigaciones espirituales, por las que estamos en este mundo; por un lado, para cumplir con nuestro propósito y, por otro, para vivir en conciencia, que es nuestro propósito interior. Podemos aspirar a ser personas más espirituales haciendo esfuerzos reales para serlo, con un deseo intenso de que así sea, ajustándonos a los seis principios del plan de acción que veremos más adelante. El ser humano busca la felicidad permanentemente y esa búsqueda de satisfacer la sensación de dicha es la que nos impulsa a encontrarla en las cosas materiales, pero conforme vamos logrando estas metas tangibles, reparamos en que necesitamos más y más para cubrirlas. Por mi parte, estoy convencido de que la razón de ser del ser humano no es ser feliz, sino enfrentar los problemas y, con ello, alcanzar esa sensación de bienestar de la que yo siempre hablo. No obstante, este no es un tema sobre el que debamos hablar ahora. Por el contrario, la espiritualidad es un camino interior que nos muestra que la respuesta de la felicidad no está fuera, sino dentro de nosotros, cuando conectamos con nuestro yo divino a través del alma en la toma de conciencia. Tras años difíciles en los que vi de cerca el fracaso, llegué a entender lo importante que es tener presente a Dios, reconociéndolo dentro de mí en cada una de las actividades de mi vida. Por esta razón, he querido aproximarme cada vez más a él y ofrecerle todo de mí para entregárselo, es decir, viviendo en conciencia. Muchos pueden enojarse con Dios porque le piden algo y no lo reciben, pero solo el Universo sabe si estás o no preparado para obtener lo que solicitas (vibraciones). Recuerda que Dios nos ha traído a un

mundo concebido por Él; entonces, ¿por qué criticar todo lo que contempla su mundo? ¿Te imaginas que no existieran enfermedades, ni fracasos, ni violencia, ni problemas en general? Debes aceptarlo. Si no conoces a Dios y sobre todo si no te conectas con Él, es tu decisión, pero no sabes lo que te estás perdiendo. Desde mi experiencia personal, mi espiritualidad es decisiva para alcanzar mi estado de bienestar y es la abundancia espiritual la que me enlaza con la abundancia material. Te invito a conocer la espiritualidad y te indico una de las leyes universales, con la intención de dejarte sembrada la semilla de la curiosidad y que sigas investigando para tomar la decisión de seguir este camino fascinante. “Como es arriba es abajo, como es adentro es afuera”, básicamente quiere decir que el Universo es infinito, saludable, lleno de paz y de abundancia. Admitir que somos parte de Él nos lleva a querer lo mismo para nosotros, sin dudas, convencidos de que al estar integrados en este Universo podemos sin duda exigir este reflejo en nosotros. Por otro lado, como es adentro es afuera, equivale a decir que si tu entorno es de caos, estrés, dolor, ego o ira es porque tu interior es igual de caótico y algo debes sanar. Para alcanzar esta sanación es vital entender y tomar conciencia de nuestra responsabilidad sobre todo lo que nos pasa. Yo entiendo que hay un ser prodigioso que es el todo, a quién puedes pedir y en quién puedes confiar, pero Él no te va a dar algo por el simple hecho de reclamarlo, sino cuando considere que estás preparado, y para ello tienes que trabajar en tu conciencia.

MENTORES Todo emprendedor necesita de una guía, consejos y, sobre todo, mentores. El rey Salomón dice: “Solo un necio confía en sus propias ideas, cuando no hay consulta los planes fracasan. El éxito depende de muchos consejeros, si no hay buen gobierno las naciones fracasan. El triunfo depende de muchos consejeros”. Por tanto, como emprendedor debes saber cuáles son tus consejeros. El emprendedor requiere de alguien que le pueda guiar, y esto es fundamental a la hora de emprender. Este guía o guías pueden evitarte muchos problemas y, sobre la base de su experiencia, te podrán orientar y conducir para que la consecución de tus objetivos sea más rápida. Tus consejeros pueden estar en tu entorno, en la escuela de emprendimiento, en tus profesores, en tus compañeros, en tus amigos. Pero para que ese mentor llegue y quiera apoyarte debes ser digno de él, estar preparado para que sea parte de tu vida y de tu crecimiento personal y profesional. Recuerda que ser humilde no significa ser necio ni débil. Ser humilde entraña reconocer con sinceridad que uno no lo sabe todo y que siempre hay cosas que se pueden aprender de los demás. La humildad es aceptar que podemos cometer errores y que otras personas nos pueden ayudar a mejorar nuestro producto o servicio.

SALUD Debes cuidar tu salud evitando el estrés, e incluyendo en tu día a día, actividades físicas y de distracción que contribuyan a controlar la presión que genera el emprendimiento. Preservar tu vitalidad al momento de emprender y mucho más al arrancar tu emprendimiento es crucial, porque sin una buena salud no podrás mantener el exigente ritmo que conlleva ejecutar las estrategias y actividades en la búsqueda de alcanzar tus objetivos. Es imprescindible que, entre otras cosas, busques tiempo para descansar, para conectar con tu mente y que tu cuerpo renueve sus energías; además, es importante que hagas deporte y que lleves una alimentación balanceada; minimizar el estrés a través de la meditación y el yoga también es un buen recurso para mantenerte saludable. La nutrición equilibrada y la salud preventiva son fuentes indispensables de éxito en el emprendimiento. ¿Estás haciendo ejercicio? ¿Te estás alimentando adecuadamente? ¿Qué estás haciendo para combatir el estrés? CANDADO: GESTIÓN ADMINISTRATIVA La especialización se debe gestionar a través de un sistema de administración. Yo lo he denominado Sistema de Gestión Administrativa, y no es más que la incorporación de una serie de herramientas de gestión en las diferentes áreas de la administración del emprendimiento, de tal manera que el emprendedor cuente con los elementos básicos para administrar su empresa. Dicho en otras palabras, cuando llegas a entender cómo se organizan las cuentas, cómo ajustarte a la norma legal del sitio donde vives, cómo aprender a vender, cómo administrar el flujo de caja, etc., podrás adelantarte a los posibles problemas que se presenten a la hora de emprender. Hay muchas personas que me preguntan, en especial mis alumnos: ¿Qué pasa si uno no tiene dinero para estudiar y adquirir esos conocimientos? Siempre les respondo: todo parte de tu iniciativa, de tu deseo por crecer y por autoprepararte. Además, para eso existen las

becas. Trabaja para alcanzar una y sigue estudiando. También suelo contarles algo sobre mi origen, mi adolescencia y primeros años en la adultez. Mis padres no podían darme todo a lo que yo aspiraba en cuanto a los estudios. A pesar de ello, fue más fuerte mi deseo por alcanzar mi estado de bienestar a través del emprendimiento, eso -por ejemplo- me motivó a pagarme yo mismo mis estudios universitarios (en especial los de posgrado) y los que vinieron luego. Aquí cabe una reflexión importante para entender mejor al Sistema de Gestión Administrativa. Si yo te pregunto: En el caso de que conocieras a una persona que tenga 500 millones de dólares como patrimonio, ¿qué me responderías acerca de cómo se dividen esos millones? Yo antes creía que podía dividirse en bienes, en las casas, los carros o las propiedades que tuviera esa persona. Me equivocaba. Cuando profundicé en mis investigaciones y comencé a leer un poco más sobre ese tema, me di cuenta de que al menos el 90 % de lo que vale ese patrimonio lo constituye su negocio. Ni siquiera las acciones que pudiera tener en otra empresa. Cuando tenía alrededor de los 30 años de edad y me sentía estancado en la vida, esos conceptos comenzaron a tener sentido para mí y poco a poco los fui comprendiendo. Tiempo después, me pregunté a mí mismo: ¿Qué están haciendo algunas personas para lograr el éxito o para alcanzar sus sueños económicos? En ese momento reflexioné sobre el concepto de frugalidad y lo incorporé a mi vida, pero de esa cuestión ya hablé antes. ¿Se les hace familiar cuando conocen a emprendedores o empresarios que muchas veces aparentan mucho cuando aún no lo han obtenido todo? A eso me refiero. Por eso, me identifico con los grandes empresarios, aun sin ser uno, para los que el capital es su empresa. Una vez descritos, a breves rasgos, los tres candados del éxito, reitero la idea inicial de la propuesta que he desarrollado: “Cuando logras que esos tres candados se mantengan bien cerrados, el éxito está asegurado”. El éxito se puede ir agrandando y los candados se tendrán que mantener fuertes, pero pon mucha atención a esto, porque aún así, el éxito también se te puede ir de las manos. Por eso, siempre recomiendo trabajar con profundidad en aspectos como la capacitación y la especialización, además de buscar el entorno más idóneo. A más de uno, seguramente, se le fue el éxito… Tranquilo, se puede

recuperar. Lo importante es determinar dónde estás fallando. Un ejemplo lo encontramos en nuestra misma casa cuando creemos erróneamente- que el futuro de nuestros hijos está en el colegio donde los inscribimos, cuando realmente está en la formación que los padres les damos. Como decían con sabiduría nuestras abuelas: La educación viene del hogar. Una actividad tan simple como limpiar los baños, que rara vez hacemos, ya que se la encargamos a otras personas, nos va a servir de ejemplo. La limpieza de los baños con nuestros hijos puede ayudar a unirnos como familia y también les servirá como legado. Discrepo con aquellos padres que hablan de ser amigos de sus hijos. La razón, por mi propia experiencia, es que ellos no están en este mundo para amarte, sino para respetarte. Los papás de ahora creen falsamente que sus hijos no deben pasar por lo mismo que ellos sufrieron cuando eran niños o adolescentes, pero ¿saben lo que están haciendo, desde mi perspectiva? Los están “matando”, dicho en un sentido metafórico. Si no los educamos en valores, corren un alto riesgo de fracasar en su vida como adultos. Mi recomendación es que ese tipo de actividades en familia se realicen con los hijos desde temprana edad porque así lo verán como algo muy normal. En este punto existe un peligro, que también es muy común hoy en día: Premiar a nuestros hijos por hacer algo normal y hacerlos ver como ganadores. Hay que distinguir entre trabajar y tener obligaciones. Limpiar un baño o tender una cama no es un trabajo, es una obligación que les ayudará a madurar. Desde mi punto de vista, nuestros hijos no deberían recibir dinero nuestro hasta que trabajen. Seguramente alguna persona que lea este libro conocerá a alguien que da dinero a sus hijos por el simple hecho de cumplir sus obligaciones. Eso es un grave error. Los sistemas de recompensa se otorgan por trabajos cumplidos, mientras que los sistemas de agradecimiento se efectúan por obligaciones. A nuestros hijos debemos hablarles bien del dinero, pero a la vez te invito a cerrar los ojos y agradecer a Dios por el dinero que recibes para ti y los tuyos. Ellos no necesariamente van a recibir el dinero, pero sí deben entender que es importante. A quienes forman parte de mi entorno y a mis alumnos siempre les enseño que se ama a Dios y se respeta el dinero. Uno de nuestros retos como padres es enseñar a nuestros hijos a respetar el dinero. Aquí cabe

un ejemplo: ¿A quién no le ha sucedido que sus hijos le piden en un momento determinado un helado? En caso de que no tengas posibilidades económicas, jamás debes decirle que no tienes dinero, sino que es porque así lo decidieron sus papás. Ellos deben entender que la vida también está llena de “noes”. A mí me sucedió cuando era un niño y vivía en uno de los barrios dl norte de la capital. Me fascinaba ver todos los días a un señor que vivía cerca de mi casa. La razón: Salía cada mañana muy bien arreglado y en un costoso carro que me gustaba. Pese a mi corta edad, reflexionaba el porqué de no tener a un padre o a un familiar cercano en una situación similar. Frente a una circunstancia de esas características sugiero que digamos a nuestros pequeños: Aunque no tenemos ese carro en este momento, estamos trabajando para que cuando seas grande puedas tenerlo, pero a través del esfuerzo. A fin de evitar que pierdan sus ambiciones -si se les expone un ejemplo erróneo- se les transmitirá la idea de que lo que poseemos es fruto de nuestro trabajo. Solo así ellos darán importancia a ese concepto. Aspirar a más en la vida no es malo y tampoco se debe confundir con la frugalidad. Pensemos que el Universo es infinito y solo Dios es el dueño de ese infinito. Imagínate por un momento toda la arena del mundo. Existe en todos lados. Para ti es infinita esa arena, ¿sí o no? Y si yo te pido un grano de esa arena respecto a toda la que existe en el mundo y que es infinita, ¿cuánto representaría? Nada. Si traslado ese ejemplo tan simple a una ecuación más grande, tenemos lo siguiente: si le pido a Dios que me conceda administrar 20, 50 o 100 millones de dólares de todos los que existen sobre la Tierra, ¿qué puede significar? La respuesta es nada. ¿Quién otorga la dimensión a las cosas? Nosotros mismos. Seguramente dudarás. Tú puedes pensar que 20 millones es bastante, pero esa diferencia solo la pondrá tu mente, de acuerdo con su formación inicial. Imagina ahora toda la riqueza del Universo y piensa: ¿cuánto costaría el sol?, ¿cuánto costaría la luna?, ¿cuánto costaría el oxígeno que respiramos? Su costo es incalculable. Por lo tanto, lo que usamos es una parte muy pequeña frente a todo el valor que tienen. Nuestros hijos necesitan sentir frustración y fracaso para entender lo que se les vendrá más adelante. Eso cultivará en ellos el concepto de que el trabajo y el esfuerzo servirán para madurar y ser mejores. Además, serán conscientes de que si quieren algo tendrán que esforzarse. Habrá

momentos para todo y aprenderán a respetar a sus padres, un aspecto que está en decadencia en la sociedad actual. El Sistema de Gestión Administrativa se inicia con una base de conocimiento que se refuerza con la incorporación de nuevo y avanzado, además de la experiencia fruto de la aplicación del mismo en el emprendimiento. Los elementos básicos de la gestión que hacen posible que este candado se mantenga cerrado, son:

PLANIFICACIÓN ESTRATÉGICA Esta área de la gestión está dedicada a adquirir un aire mucho más formal, formulando elementos básicos de planificación, filosofía empresarial, objetivos, planes y acciones. Así, el emprendimiento se volverá sostenible (durará con el tiempo), rentable, y escalable (tendrá un crecimiento permanente). En un inicio, es conveniente que, como emprendedor, entiendas que la planeación estratégica puede marcar la diferencia entre seguir, crecer, rentar o cerrar, estancarse o perder en tu negocio. ¡Es así de sencillo! Como veremos más adelante, estos elementos son decisivos a la hora de medir el éxito en tu negocio. Es vital que esto que acabo de decir se vuelva parte de tu ADN empresarial porque, sin ello, simplemente trabajarás en el corto plazo a través de la operatividad y descuidarás el elemento estratégico que se requiere para el mediano y largo plazo. Cuando un emprendedor se olvida del largo plazo lo único que prioriza es el “apagar fuegos” permanentemente. Esto es básicamente operativo, sin darse el tiempo para establecer un objetivo que, más adelante, debería prevalecer en su negocio. En pocas palabras, tendremos un emprendedor reactivo (reacciona ante los problemas) que no desarrollará el espíritu proactivo (anticiparse a los posibles problemas). La planeación estratégica no es más que la serie de acciones que debes planificar y ejecutar para cumplir con tus objetivos de corto, mediano y largo plazo. Créeme, no es nada más que eso. Dejando de lado los conceptos complicados podemos entender de mejor manera esta herramienta. En resumen, la planeación estratégica no es más que una herramienta que nos faculta para cumplir con las metas, poniendo en marcha una serie de acciones, administrando de forma correcta los recursos escasos que tiene tu emprendimiento (tiempo, personas, dinero). Esta herramienta es maravillosa, puesto que te ayuda a establecer la visión de tu empresa desde el comienzo, es decir, cómo visionas en los próximos años tu emprendimiento. Por otro lado, te sirve para definir la misión y la razón de ser de tu emprendimiento. Una empresa sin valores es una empresa sin sentido, con el peligro de pisar el sinuoso mundo de los antivalores, y esto sí que trae consecuencias. Definitivamente, el plan es un mecanismo para definir la cultura de tu emprendimiento a través de la estructuración de valores.

Algunos elementos importantes, adicionales a los ya mencionados, que contribuyen al desarrollo, son las metas, tanto al corto, como al mediano y el largo plazo, para definir el plan de acción que te llevará a cumplirlas. En estos planes debe existir claridad en cuanto a los recursos de los que se dispondrá para su ejecución, tanto en capital humano, como en dinero y tiempo. La planeación estratégica tiene algunas características interesantes. En primer lugar, hemos de ser conscientes de que el ecosistema emprendedor es sumamente variable, por lo que este plan tiene que ser adaptable no estático. Además, el tiempo de ejecución de resultados dependerá de la complejidad por la que está pasando o se pretende resolver con el plan. Finalmente, el plan necesita ser medible, de lo contrario no podrás evaluar los resultados y, en consecuencia, tomar medidas que favorezcan tus avances. En el mundo de la gestión administrativa se habla mucho del famoso FODA, herramienta que, la verdad, es muy útil, pero siempre y cuando se cuente con la metodología para definir claramente los elementos que la componen. En este sentido, tengo que darte una buena noticia: con la TCE, a través de su Matriz de Evaluación, podrás definir de la forma más acertada posible dichas variables (Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas). Si me lo permites, quisiera comentarte algo adicional. Para que la planeación estratégica sea correctamente planteada y ejecutada es necesario que: 1. Involucres a tu equipo de trabajo; 2. No te centres solamente en una metodología, date la oportunidad de salirte de ella, hablando incluso de la TCE; 3. Utiliza un lenguaje con el que sea posible entender a todas las personas en tu empresa; 4. Exígete y piensa fuera de la caja, innova, busca ese gran diferenciador, y 5. Asegúrate de que todos los involucrados o toda la organización conozca este gran plan. Mi consejo es el siguiente: resérvate un espacio de tiempo para respirar profundamente y felicitarte por todo el trabajo operativo que ejecutas diariamente. Si bien al principio no resultará fácil, en algún momento será reconfortante saber que el hecho de planificar correctamente te está permitiendo lograr esas metas en rentabilidad, sostenibilidad y escalabilidad que te van a conducir al éxito deseado.

NORMATIVA LEGAL Cada país y, en la mayoría de casos, ciudad o región tiene una normativa legal que el emprendedor debe manejar a la hora de reportar ante las autoridades, tanto estatales como seccionales. Esta normativa tiene que ver -en principio- con la obligatoriedad exigida para iniciar sus operaciones. Posteriormente, habrá que tener en cuenta la normativa para mantener esa operación y las obligaciones laborales que conlleva. De acuerdo con el país, ciudad o región, podrás entender las diferentes exigencias para operar libremente y con total normalidad. Comencemos diciendo que solo por decidirte a constituir una compañía en tu país de forma legal no equivale a que esté garantizando el éxito del mismo por este hecho; ni mucho menos es así, esto solo quiere decir que estás cumpliendo con las exigencias legales de tu localidad, región o país. La forma legal en la que optes por hacerlo es un formalismo indispensable para funcionar, pero no supone una garantía de éxito. Es más, si no estás preparado para afrontar las obligaciones que esto implica, podrías encontrarte con graves consecuencias a futuro, así que, antes de arriesgarte, cerciórate de estar seguro de lo que quieres hacer. Es por esto que te pido que, antes de tomar una decisión con respecto a este punto, definitivamente tengas la seguridad de que tu emprendimiento es viable. Existen dos caminos jurídicos que puedes elegir a la hora de operar tu emprendimiento. El primero es a través de la forma jurídica, con la constitución de una compañía, y el segundo es la opción de la forma personal o natural, como se conoce popularmente. El primer caso es el habitual para constituir sociedades con otras personas. Aunque no soy un experto en esta área, puedo decirte que es fundamental saber con quién te vas a asociar y si realmente vale la pena hacerlo. Si ya has tomado esa determinación, te recomiendo que todo, absolutamente todo lo que creas importante, sea plasmado en papel. Los pactos de caballeros que se cierran por un apretón de manos no existen, más aún si hay dinero de por medio, por lo que te invito a cuestionarte hasta el más mínimo detalle para redactar un documento legal que te proteja de cualquier viveza. No escatimes preguntas como, por ejemplo, las siguientes: ¿Qué ocurre si uno de los socios decide irse, casarse, o divorciarse? ¿Qué sucede con los miembros de la familia? ¿Hasta dónde llegará su alcance? ¿Cuáles serán su roles dentro del emprendimiento? Todo, absolutamente todo, debe ser plasmado en el documento de constitución de la compañía. Esto te librará de muchos

problemas a futuro. Aunque normalmente no lo consideramos importante, proteger la propiedad intelectual de tu emprendimiento, la idea, el slogan, el nombre y la marca es una cuestión trascendental. Como les he contado, yo fundé un Instituto, EELA, y hace no mucho me topé con la novedad de que alguien más quería registrar el nombre. Quiero creer que lo hizo sin mala intención, pero como suele decirse, de malas intenciones no sabemos. El caso es que, si no hubiese tenido la iniciativa de registrar el nombre, seguramente en este momento estaría tratando de resolver ese problema. Puedo decirles que tengo el 100 % de los elementos importantes registrados, así como patentados, tanto la Teoría de los Candados de Emprendimiento como el desarrollo central de nuestro proyecto ECOY. El emprendimiento implica la relación con muchos actores, clientes, proveedores, colaboradores, asesores, consultores, lo que quiere decir que, en la medida de lo posible, tienes que ser capaz de manejar esta relación de la manera más profesional que esté a tu alcance. Esto te compromete a dejar claros los términos y las consecuencias en caso de no cumplirlos. Solo así podrás evitarte una serie de conflictos legales derivados de tu descuido o irresponsabilidad como emprendedor en el área legal. Esto implica saber sobre contratación laboral, mercantil, ley tributaria, ley societaria, leyes regionales, leyes locales, etc. Finalmente, te quiero brindar esta recomendación: empápate de la normativa legal de tu país, región o ciudad. Te servirá para evitarte más de un dolor de cabeza a futuro y ver los frutos de este esfuerzo reflejados en tu emprendimiento.

CONTABILIDAD Es importante mantener el orden dentro de un emprendimiento, pero en especial el orden de las cuentas. La contabilidad es la forma correcta de hacerlo. Sin embargo, su desconocimiento puede llevar a una anarquía que, tarde o temprano, nos hará pagar su descuido. Aprovechando este punto, me encantaría establecer mi visión sobre lo que pienso acerca de un negocio pequeño, uno mediano, uno grande y una gran corporación. Para empezar, considero que todos los anteriormente mencionados son una empresa, puesto que, más allá del valor de facturación, número de empleados o tamaño de su estructura, todos responden a una organización funcional que debe ser gestionada. Que sus fundadores lo hagan o no, ya es otro tema totalmente distinto. Cualquier empresa, sea del tipo que sea, requiere miles de transacciones y, claramente, cuanto más grande sea su estructura, más cantidad de transacciones tendrá. Aquí, el reto consiste en organizar todas estas transacciones mediante cuentas, con lo cual, todas aquellas que sean similares se organizarán en cuentas contables y, después de eso, se colocarán en un estado financiero. En pocas palabras, la contabilidad se trata de expresar la organización de las cuentas de una empresa en estados financieros. La contabilidad es el reflejo de la salud financiera de tu emprendimiento. De ahí la importancia de llevar un sistema contable, por más básico o esencial que este sea. Se puede comenzar por un simple sistema de registro de ingresos y gastos; un registro de activos y pasivos, así como también un registro de fuentes de ingreso del dinero y de salidas de este. Si hablamos de emprendimientos más formales y estructurados, más preocupados por una correcta ejecución, entonces nos estamos refiriendo a la elaboración de estados financieros. En este aspecto, no es tan relevante el que sea o no obligatorio llevar la contabilidad, lo realmente interesante es saber que sí deberías hacerlo, más allá de la exigencia estatal. El estado de “pérdidas y ganancias” le dice a un emprendedor si su empresa está perdiendo o no dinero en un período determinado. Así, cuando sus ingresos son mayores que sus gastos estamos hablando de ganancias, mientras que, si sus gastos son mayores que sus ingresos, entonces, son pérdidas para el emprendedor. Las principales cuentas son los ingresos y gastos. Por su parte, el estado de “situación general” no es más que el reflejo de la forma en la que están financiados los activos de una empresa a través del pasivo y el patrimonio, siendo cabalmente estas

tres las cuentas principales de dicho estado. Finalmente, tenemos el estado de “fuentes y usos” que, básicamente, le dice al emprendedor de dónde viene el dinero y en qué lo está invirtiendo o gastando, componiéndose de las variaciones de las cuentas de los dos estados financieros anteriores, el de “pérdidas y ganancias” y el de “situación general”. Son muchas las razones por las que te recomiendo que cuentes con un sistema contable: 1.Te será de gran utilidad para organizar las cuentas de tu empresa y, gracias a ello, tener una visión más clara de lo que está pasando en tu emprendimiento; 2. Será este orden expresado en los estados financieros lo que te ayudará a tomar decisiones financieras más acertadas; 3. La contabilidad también es un recurso en el que te puedes apalancar para contar con el apoyo de otros agentes externos como proveedores, la banca (tanto pública como privada) y el apoyo de posibles inversionistas, y 4. El orden contable es clave para que el emprendedor enfrente de mejor manera las exigencias fiscales y, con ello, evitarse problemas derivados de la irresponsabilidad producto de la informalidad y el descuido de esta herramienta tan importante.

FINANZAS No se deben confundir las finanzas con la contabilidad. La contabilidad es la forma en la que organizamos las cuentas de nuestro emprendimiento, y través de las finanzas se buscará analizar esta información organizada para tomar decisiones acertadas a beneficio de la empresa, además de buscar fuentes de financiamiento y usar las más acertadas para la empresa. La contabilidad y las finanzas son ramas totalmente diferentes la una de la otra, al margen de que estén relacionadas en estados financieros. Sobre ello, es importante aclarar que, si bien la contabilidad puede vivir sin las finanzas, estas no tienen razón de ser sin la contabilidad. Esto se debe que, tomar decisiones en cualquiera de los campos financieros de la empresa, es muy riesgoso y, en definitiva, puedes estar haciendo adivinanza financiera, pero no administración financiera propiamente dicha. En consecuencia, un buen contador no tiene por qué ser un buen financiero ni viceversa. Las finanzas abarcan una serie de actividades: administración del flujo de caja de una compañía; administración del recurso existente; administración del ahorro de la empresa, de las inversiones, etc. Dicho de otro modo, supone organizar el recurso financiero de tu emprendimiento. Esto incluye prestar atención a la necesidad de encontrar fuentes adecuadas de financiamiento que sostengan la ejecución de los planes presupuestados de la empresa. Las finanzas dan un paso más allá de la contabilidad, dado que se apalanca en la información proporcionada para tomar decisiones de flujo, de liquidez, de solvencia, de apalancamiento, de inventarios, de créditos, de inversiones en activos de mayor rendimiento, y en inversiones de corto, mediano y largo plazo. De la misma manera, se hace cargo de la administración eficiente de los activos fijos, sacando de ellos el mayor rendimiento posible hasta la toma de decisión de deshacerse de ellos. Además, las finanzas deben mantener una relación estrecha con el resto de las áreas (marketing, ventas, operaciones, gerencia, RRHH), puesto que estas requieren de esta área para financiar su operación. A su vez, las finanzas dependen de estas áreas porque, por un lado, abastecen el flujo de caja en algunos casos y, por otro, pueden aportar en la mayor eficiencia en el uso del recurso financiero. En resumidas cuentas, mediante las finanzas se planifica y ejecuta el

presupuesto; se elabora el modelo financiero del emprendimiento; se administra el recurso dinero de la empresa alcanzando el mayor nivel de eficiencia posible; se gestiona la inversión y el ahorro; se analiza la situación de la empresa a través de los estados financieros y, entre otras muchas más cosas, se administra el riesgo del panorama financiero existente de la empresa.

MARKETING Si el emprendedor entiende esta área, seguro que tendrá clara la importancia de la ejecución de las herramientas básicas de mercadeo, la necesidad de seleccionar un segmento y estructurar un posicionamiento para, finalmente, a través de un plan básico de mercadeo, definir las estrategias de producto, precio, canal de distribución y comunicación. No debemos confundir mercadeo con ventas y, mucho menos, con publicidad o diseño gráfico. Con frecuencia, los emprendedores creemos que hacer mercadeo es buscar un nombre, diseñar un logotipo, crear un eslogan y disponer de papelería impresa de nuestro emprendimiento. Desde luego que estas son herramientas necesarias, pero tenemos que saber que el mercadeo no es operativo, el mercadeo es estratégico. Se escucha permanentemente decir que el mercadeo crea necesidades para ser satisfechas por productos o servicios. Desde esta perspectiva, ya tenemos un problema, porque todas las necesidades ya están creadas…, porque ya fueron creadas en algún momento. ¡Por Dios, definitivamente, los mercadológicos no lo son! Las necesidades básicas ya existen. Si, tal y como se ha mencionado antes, las necesidades básicas ya existen, en realidad, lo que deben hacer los emprendedores o mercadólogos es detectarlas y, con la creación de productos y servicios, satisfacerlas, a partir de impulsar el deseo de adquirir o usar dicho producto o servicio. Me encanta poner un ejemplo para que se entienda mejor este punto. Anteriormente señalé que, desde hace 23, años soy catedrático universitario; desde hace 25, emprendedor y empresario y, desde hace 9, investigador en la rama de la gestión administrativa. Esto me llevó a detectar la siguiente necesidad en los emprendedores: en primer lugar, los emprendedores nuevos no saben por dónde comenzar, mientras que los que ya lo son desconocen cómo mejorar lo que ya tienen. Es así que, después de mi decisión de no colaborar más con la academia, impulsé la creación de un producto pensado para satisfacer dichas necesidades. Así nació el Programa de Formación de Emprendedores, con el único objetivo de que, a través de nuestra filosofía (La Teoría de los Candados de Emprendimiento), se puedan resolver las dos necesidades: a) tener las herramientas para comenzar a emprender, y b) contar con las herramientas para organizar y mejorar lo que ya se tiene.

Si bien existen muchos recursos para aprender sobre administración, en el mercado no existía como tal un producto enfocado en el aprendizaje del emprendedor para trabajar en un ecosistema integral de gestión de emprendimiento. Así fue como nació el programa, la maestría y, finalmente, el libro que ahora mismo estás leyendo. Si te fijas, detectamos una necesidad, creamos productos y, a través de las distintas herramientas de las que se dispone en el mercadeo, impulsamos el deseo sobre nuestro producto. Cuando hablo de impulsar el deseo hago referencia a que el usuario, cliente o consumidor prefiera tu producto y no el de tu competencia, y es ahí donde interviene otra cuestión importante: posicionar tu marca en el mercado o en la mente del posible consumidor. Para esto hay que centrarse en la promesa de valor que puedas desarrollar y, fundamentalmente, comunicar ese gran diferenciador que evitará que entres en una guerra de precios. Otro elemento clave a la hora de hablar de mercadeo es la segmentación, cuyo objetivo principal es la utilización eficiente de los escasos recursos de mercadeo con los que cuentas. Definir correctamente el mercado te evitará el desperdicio de recursos y, con ello, lograrás que la contribución neta de marketing (CNM) sea lo más alta posible, entendiendo al CNM como la contribución que tiene el mercadeo para cubrir los costos operativos de tu emprendimiento. Aquí, es básico comprender qué tan importante es el desarrollo de la mezcla de marketing, comenzando con la creación de un producto o servicio que satisfaga la necesidad detectada. Por último, hace falta estructurar una estrategia de precios con la cual ese segmento pueda acceder a dicho producto, mientras que ese producto o servicio tendrá que estar al alcance del segmento. Esto solo es posible cuando existe una estructuración de los canales de distribución, tal y como se conoce en el plan de mercadeo como plaza. En último lugar, hay que establecer un plan de comunicación para que el segmento sepa de la existencia de dicho producto y sus beneficios para impulsar su deseo hacia él.

VENTAS En emprendimiento, quien no sabe vender tiene una desventaja en el mercado, y quien sí lo sabe hacer o no le teme a la venta porque cuenta con una herramienta muy eficaz para enfrentar el reto de los ingresos. No todos los emprendedores tienen la habilidad de vender, pero todos sí tienen las herramientas suficientes para aprender a vender. El emprendedor que no sabe vender tiene un gravísimo problema, pues la esencia del emprendimiento es la venta. Por ende, debe vender su negocio, su imagen, su proyecto ante inversionistas, su producto, su idea y, seré radical en este punto: si no te gusta vender, mejor no te arriesgues a emprender. En cambio, si no sabes vender te invito a aprender, porque es imprescindible que sepas hacerlo. Las ventas arrancan desde el interior de tu emprendimiento, es decir, debes saber vender la idea en tu hogar; debes venderte como emprendedor ante tus proveedores; tu competencia debe temblar porque sabes vender; debes vender la idea a tus colaboradores, compartiendo lo que tienes en mente sobre la cultura organizacional que quieres desarrollar; debes enseñar a vender; debes ser inspiración para los tuyos por la capacidad que tienes de enfrentar la venta… En pocas palabras, debes ser el primero y mejor vendedor de tu emprendimiento. Tengo que ser honesto. En lo personal, yo prefiero ver las ventas desde una óptica mucho más técnica que romántica, sin dejar de lado las distintas herramientas actuales que pueden apoyar este proceso, como son las neurociencias, la psicología del consumidor y el design thinking (no soy muy amigo de los anglicismos, pero vamos a tener que usarlos). La neuroventa se basa en la neurociencia para entender cómo el cerebro del cliente procesa la información de cara a tomar decisiones de compra. El customer experience se refiere a la percepción total del cliente en relación con una empresa, producto o servicio, mientras que el design thinking se centra en detectar las necesidades y deseos del usuario para crear soluciones innovadoras. Juntos, estos enfoques buscan mejorar la experiencia del cliente y aumentar las posibilidades de cierre de venta. Otro elemento importante que hay que considerar es la relación directa que tienen las ventas con el emprendimiento. De hecho, en la academia se considera que las ventas son una herramienta en el mix de comunicación del que se dispone en el mercadeo. Antes de ponerte a vender es necesario que definas correctamente el segmento al que

quieres llegar; tengas clara tu propuesta de valor; bien definidos los beneficios y atributos de tus productos y servicios, tu plan de precios, los canales de distribución, y la estructura de comunicación que utilizarán para que el mercado te conozca. Ahora bien, además de lo anterior hay que tener claro cuál es el proceso de ventas para que, como emprendedor, te conviertas en un experto. La venta es una metodología que busca lograr una relación entre la empresa y el consumidor. Esta metodología comienza con la identificación de los posibles clientes a través de la segmentación y prospección. En segundo lugar, has de realizar una presentación efectiva del producto o servicio, destacando sus beneficios y características únicas. Lo tercero será negociar las condiciones de venta y llegar a un acuerdo mutuo. El siguiente paso será cerrar la venta, concretando la transacción comercial, indudablemente manejando cualquier objeción que llegue en el momento, para finalmente realizar un seguimiento posventa, medir la satisfacción del cliente y establecer una relación duradera. Las trabas que te pone el cliente a la hora de cerrar la venta es lo que conocemos como objeciones, pero en realidad, en la mayoría de los casos no son más que dudas generadas por la inseguridad al momento de vender. Manejar objeciones es esencial para tener éxito en el proceso de ventas. Es común que los clientes tengan inquietudes o preocupaciones antes de tomar una decisión de compra, por lo que es importante estar preparado para responder de manera efectiva. Además, las objeciones pueden proporcionar información valiosa sobre las necesidades y deseos del cliente, lo que puede ayudar a mejorar la oferta y cerrar la venta. Al manejarlas, también se demuestra profesionalismo y confianza, lo que conlleva que se genere mayor confianza en el cliente. En resumen, manejar objeciones es una habilidad crítica en las ventas que contribuye a mejorar la oferta, cerrar la venta y generar confianza en el cliente. En síntesis, para llevar a cabo un proceso de ventas exitoso hay que tener un buen conocimiento del producto o servicio, así como de las necesidades y deseos del cliente, de forma que podamos presentar una oferta atractiva y cerrar la venta. Además, es fundamental realizar un seguimiento de los clientes después de la venta para asegurar su satisfacción y fomentar futuras ventas. Por favor, ¡deja ese &%$# miedo a vender y atrévete a hacerlo!

PUBLICIDAD Por un lado, tenemos el mercadeo para estructurar las diferentes variables de cara a introducirnos en el mercado, pero por otro está la comunicación, a través de una de sus herramientas, que es la publicidad, enfocándose especialmente al inicio del emprendimiento en el ecosistema digital, puesto que sus presupuestos están normalmente al alcance de la gran mayoría de emprendedores. Los emprendedores nos encontramos con un desafío crucial: hacer que nuestro público objetivo conozca nuestro producto o servicio. Lo ideal es utilizar varias estrategias de marketing y publicidad como redes sociales, ferias y eventos, marketing de contenidos, anuncios en línea, colaboraciones y publicidad tradicional. Aquí, es preciso elegir las estrategias adecuadas para nuestro presupuesto y audiencia, y medir su efectividad para adaptar nuestra estrategia a medida que aprendamos más sobre la audiencia a la que queremos llegar. Si no logramos conectar con nuestro público, debemos revisar dónde estamos fallando. En un emprendimiento hay que tener presentes todos los procesos internos. La propuesta de valor y las estrategias de venta son elementales, pero no es suficiente si el mensaje de tu marca no es conocido en el mercado. Sin una conexión con el público objetivo, todo esfuerzo será en vano. El éxito del negocio se logra cuando hay un intercambio de valor entre el cliente que recibe una solución a su problema y el emprendimiento que recibe un pago por ese beneficio. Es esencial que el mensaje de tu marca sea conocido y atractivo para el público objetivo de cara a lograr ese intercambio de valor. La promoción y publicidad eficaces son fundamentales para conseguirlo. Diseñar la estrategia publicitaria requiere una representación clara de nuestra audiencia objetivo. Esto exige un análisis de su información demográfica, geográfica y psicográfica (comportamiento, necesidades e intereses). Sin embargo, debemos tener en cuenta que esta representación no es estática, sino que cambia constantemente a medida que nuestra empresa evoluciona. Por eso, es importante ser flexibles y adaptarse a los cambios para seguir llegando efectivamente a nuestra audiencia. Después de haber definido muy bien quién es tu cliente, al que quieres llegar con tu comunicación, tendrás que construir un ecosistema publicitario completo y diversificado. Estará conformado por medios tradicionales como TV, radio, prensa, revistas y vía pública, así como también por medios digitales como redes sociales, web, apps, mailing,

SMS, influenciadores y WhatsApp. Hay quea clarar que los medios digitales se seleccionan de forma estratégica y no por simple moda. Por ejemplo, Facebook no es la mejor red social para todos los emprendimientos. Además, no se debe considerar solo a los medios más baratos, sino también a los más eficientes. Los medios digitales ofrecen una serie de ventajas como la posibilidad de tener una medición constante y a tiempo real de los resultados de la campaña; un mejor nivel de segmentación gracias a las variables de los medios online; una descentralización y democratización para comenzar a publicitar, incluso con un presupuesto limitado; una comunicación bidireccional para escuchar al cliente y conocer sus necesidades e intereses, y mayor cantidad de datos disponibles para tomar decisiones informadas y mejorar la eficacia de las campañas publicitarias. Además, hay que tener en cuenta el control del ROI (rentabilidad sobre la inversión) para evaluar la eficacia de las campañas y optimizar el presupuesto de publicidad. No obstante, cabe recordar que, aunque la publicidad tiene como objetivo conocer la oferta del emprendimiento al mercado objetivo, son otros procesos del negocio los que deben cerrar clientes, sostener y fidelizar esas relaciones comerciales generadas. Sin duda, se hace necesario tener una estrategia integral de marketing y no solo enfocarse en la publicidad. En conclusión, al igual que para tener un emprendimiento de éxito debes ser digno de él, de la misma manera debes pensar como un emprendedor exitoso. Y para que esto suceda es importante entender que la consecuencia de un pensamiento exitoso es la relación directa con el conocimiento adquirido con el que contarás para reflexionar y discernir de la mejor manera en la toma las decisiones más acertadas. Recuerda además que el conocimiento que debes adquirir no sólo se centra en el área administrativa sino también en la especialización, en el entorno, y en el desarrollo de habilidades blandas.

HACER Bien, ya has estructurado tu SER y has alimentado tus conocimientos para PENSAR como un emprendedor que busca el éxito a través de la TCE y lo mejor de todo es que la estás poniendo en práctica. Ahora ha llegado el momento de trabajar en el HACER, que se centrará en las distintas áreas que se han mencionado a lo largo de todo el texto (personal, material, espiritual, social, familiar), aunque en adelante apuntaremos hacia el área material, es decir, al desarrollo de nuestro emprendimiento. Cuando hablamos de metas materiales nos referimos a nuestra empresa, porque a partir de ella obtendremos esa riqueza económica que tanto anhelamos, y es nuestro emprendimiento el que nos permitirá lograrlo a través de las utilidades, no solamente de las ventas. Ahora es tiempo de hablar de gestión empresarial. Gestionar es administrar y básicamente se trata de administrar talento a través de las distintas herramientas administrativas existentes. Si queremos ir más allá, hablaremos de administrar o gestionar talento a través de las 32 variables que se plantean en la Teoría de los Candados de Emprendimiento. Laboralmente hablando existen tres caminos a seguir: el del empleado, el del emprendedor y el del empresario. Con esto no estoy planteando que tengas que comenzar como empleado, ahora bien, si puedes hacerlo sería mucho mejor porque con ello vives la experiencia de quienes (colaboradores) en su momento te ayudarán a conseguir tus metas. Para empezar, al empleado le gestionan el talento a través de las distintas variables planteadas en la teoría, mientras que el empresario gestiona esas variables en el colaborador y todo su negocio. En el punto medio está el emprendedor, que según la Teoría de los Candados de Emprendimiento (TCE) es un aprendedor, un estudiante de estas variables que con el tiempo podrá gestionar el talento de los suyos y de su empresa. Si bien el emprendedor es un aprendedor de gestión, esto no significa que primero debe aprender a gestionar para después emprender, de lo que se trata es de que en el camino del emprendimiento aprenda a gestionar y con ello sea el tiempo quien le defina como un empresario.

Al momento de revisar la tercera edición de este libro cuento con una empresa (agencia de publicidad) y con dos emprendimientos (EELA y ECOY). El primero cumple este año 26 años y el segundo y tercero con apenas 5 y 2 años respectivamente, sin embargo, no es el tiempo de existencia lo que define si es un emprendimiento o una empresa; en realidad es mi conocimiento para gestionarlos lo que les otorga su categoría. En el primer caso la experiencia y el conocimiento me permiten gestionar agencia a través de las variables planteadas; en los otros dos casos estoy en una etapa de aprendizaje con el cual podré gestionarlas a través de las mismas herramientas. Se dirige, como ya hemos visto antes, a través de las distintas variables, y básicamente lo que se hace es gestionar el talento, el servicio, el liderazgo, la actitud, el conocimiento, los procesos, la espiritualidad, la salud, las ventas y la contabilidad, entre muchas otras. Gracias a eso podremos implantar un modelo que evitará el fracaso de nuestra aventura. A todo lo anterior debemos sumar variables de gestión administrativa como la planeación estratégica, la contabilidad, las finanzas, la normativa legal, el marketing, las ventas y la publicidad. Mi experiencia y el estudio de muchos empresarios me han confirmado algunas de las cosas que un emprendedor debe tener claro desde el inicio para que su negocio escale, dure y rente durante su existencia, reflejado en los números y en la riqueza material. La primera es separar los ingresos personales de los empresariales a través de un sueldo, es decir, como emprendedor tienes que asignar un salario acorde con tus funciones y tu presupuesto. Más allá de si el flujo te permite o no desembolsar este dinero aplicarás un registro contable que refleje la evidencia de este desembolso a futuro. Normalmente, los emprendedores mezclan los ingresos de su emprendimiento con sus ingresos personales y esto perjudica tremendamente al flujo de caja de la compañía y cualquier plan que este tenga a futuro. Lo que se haga con el flujo de caja de la empresa es administración financiera, mientras que los movimientos de caja personal o familiar es inteligencia o educación financiera. Son dos variables totalmente distintas. Las empresas producen recaudaciones a partir de la utilidad neta en un período, mientras que el dueño de esta empresa genera su ingreso fruto del sueldo que se establezca y la repartición de dividendos de acuerdo con la política que se haya estructurado dentro.

En resumen, lo que haga el emprendedor con su ingreso es una cosa y lo que haga con el flujo de caja de su compañía es otra totalmente diferente. Pero debe tener claro que lo que pase en su bolsillo tarde o temprano afectará el bolsillo de su emprendimiento. Lo segundo es la premisa de reinvertir y apalancarse repetidamente. Cuando mezclas tus finanzas personales con las de tu emprendimiento comprometes el flujo de la compañía y con ello afectas la posibilidad de reinvertir, puesto que tu prioridad son tus gastos y no el crecimiento de la empresa. Solamente la empresa te posibilitará cumplir con tus sueños materiales, no lo harán tus gastos personales. La prioridad es la empresa, no es la casa, no es el auto, no son los viajes, no son los gustos…, es la empresa a través de su crecimiento, valor y utilidades la que te llevará al cumplimiento de tus metas personales. Cuando hablo de reinversión, no solamente estoy hablando de expansión o de crecimiento, hablo además de inversión al largo plazo, hablo de procesos, hablo de estructura, hablo de gestión, hablo de entorno, etc. A continuación, te voy a mencionar una serie de elementos en los que normalmente una empresa reinvierte sus utilidades entre otras decenas de ejemplos de reinversión: - Expansión: las empresas pueden utilizar sus utilidades para expandir su negocio a partir de la adquisición de otras empresas o la apertura de nuevas sucursales. - Inversión en investigación y desarrollo: las empresas pueden utilizar sus utilidades para invertir en proyectos de investigación y desarrollo para mejorar sus productos o servicios. - Mejoramiento de productos existentes: identificación y mejora de los productos que ya se tienen para aumentar su calidad y valor para los clientes. - Capacitación en todas y cada una de las áreas de la empresa: formación y educación para mejorar las habilidades y conocimientos de los empleados en todas las áreas de la empresa. - Impulso del liderazgo: identificación y desarrollo de líderes en la empresa para mejorar la toma de decisiones y la ejecución de estrategias. - Inversión en un ERP: adquisición e implementación de un sistema de gestión empresarial para mejorar la eficiencia en la gestión de operaciones y datos. - Estructuración de un plan de marketing: diseño y planificación de estrategias de marketing para promocionar productos o servicios y atraer clientes potenciales. - Estructuración de un plan estratégico: diseño y planificación a largo plazo para alcanzar los objetivos de la empresa.

- Campañas publicitarias: creación y ejecución de campañas publicitarias para promocionar productos o servicios. - Crédito para captar nuevos clientes: ofrecer opciones de crédito para atraer a clientes potenciales. - Expansión con nuevos locales: apertura de más puntos de venta para ampliar la presencia de la empresa en diferentes mercados. - Incremento de la fuerza de ventas: adquisición de nuevos vendedores o mejora de las habilidades de los que ya están operativos para aumentar las ventas actuales. - Inventarios: control y gestión de los inventarios de productos o materias primas para asegurar la disponibilidad de productos para los clientes. - Sistema contable: implementación de un sistema contable para llevar un registro preciso de las finanzas de la empresa. - Asesoramiento financiero: contratación de un asesor financiero para ayudar en la toma de decisiones financieras y la planificación de inversiones. - Adquisición de activos fijos: las empresas pueden utilizar sus utilidades para adquirir maquinaria, equipos, propiedades o cualquier otro activo fijo necesario para su operación. - Mecanismos de automatización: implementación de tecnologías para automatizar procesos para mejorar. - Adquisición de acciones: las empresas pueden utilizar sus utilidades para comprar acciones propias, con la idea de aumentar el valor de las acciones restantes y mejorar la situación financiera del negocio. - Ahorro o creación de un fondo de emergencia: las empresas pueden usar sus utilidades para ahorrar o crear un fondo de emergencia para hacer frente a situaciones imprevistas. - Pagar dividendos a los accionistas: las empresas pueden utilizar sus utilidades para pagar dividendos a los accionistas, lo que puede atraer a inversores y aumentar el valor de las acciones. - Adquisición de acciones: las empresas pueden utilizar sus utilidades para comprar acciones propias, lo que puede aumentar el valor de las acciones restantes y mejorar la situación financiera del negocio. En resumen, las empresas tienen varias opciones para sacarle el máximo partido a sus utilidades, como la adquisición de acciones propias; el ahorro o la creación de un fondo de emergencia; el pago de dividendos a los accionistas, y la mejora de la situación financiera de la empresa. Cada opción tiene sus beneficios y consideraciones, y las empresas deben elegir cuidadosamente cómo obtener el mayor rendimiento de sus utilidades para alcanzar sus objetivos. En general, estas opciones están encaminadas a aumentar el valor del emprendimiento, pero es importante tener en cuenta las limitaciones y riesgos de cada estrategia.

La tercera es la paciencia, pues el ser humano por naturaleza, y en especial las nuevas generaciones, no tienen esta cualidad y con ello la retirada suele ser en el lapso de tiempo menos indicado. “Haz las cosas con sentido de urgencia y espera con paciencia los resultados; no hagas las cosas con paciencia y esperes con urgencia los resultados”. Renzo Aguirre Sin paciencia no verás los resultados esperados y será esta impaciencia la que acelere tu fracaso. En este punto te quiero recomendar un video para ponerte un ejemplo de las consecuencias de la impaciencia, en el cual me enfoco en los problemas que enfrentamos los emprendedores, especialmente en la falta de paciencia y pasión. Las nuevas generaciones tienen una desesperación y ansiedad inmensa por ver resultados rápidamente, pero el objetivo real debe ser el cumplimiento del propósito y el trabajo en una estructura del SER. Comparto el ejemplo de comprar una casa amparándose en un crédito, aunque debo dejar claro que no estoy a favor de hacerlo y que existen otras cosas prioritarias para el emprendedor. Te invito a tener paciencia, convencido de que las personas que fomentan esta cualidad son las que obtienen mejores resultados.

En cuarto lugar, tienes que mejorar tu relación con el dinero. Si tu vibración va en contra del dinero, este no se quedará en tu vida, y menos aún llegará a tu emprendimiento. Venimos de una cultura donde nos han enseñado que el dinero es el culpable de los males del mundo, de la pobreza mundial y de otras calamidades. La religión, la sociedad y tu familia se han encargado de venderte esa idea. El problema no es el dinero, sino la falta de dinero; por lo tanto, debemos entender que no constituye un inconveniente, sino que en realidad es la solución. Cuando tu percepción del dinero mejora, le pierdes el miedo a ese concepto.

Podemos evaluar rápidamente tu relación con el dinero. Si te reconoces en alguna de las siguientes situaciones que leerás a continuación, quedará demostrado que tienes una mala relación con el dinero: 1. Cuando te has puesto alguna chaqueta u otra prenda de vestir y has encontrado monedas o algún billete guardado en sus bolsillos, esto quiere decir que no administras tu dinero y no sabes dónde lo dejas. 2. Cuando piensas que el dinero es una mierda o que es el culpable de todas las desgracias del mundo, esto demuestra que no aceptas que tu situación económica es tu responsabilidad. 3. Cuando compras chucherías, y en lugar de preferir el dinero lo cambias por cosas que en realidad tienen menor valor del que entregaste. Si tienes dinero y se aleja de ti es porque definitivamente no tienes una vibración a favor de la riqueza. Del mismo modo, podemos darnos cuenta de si realmente tenemos una buena relación con el dinero. En realidad, las cosas van bien si: 1. Puedes cubrir todas tus necesidades esenciales sin ningún problema. 2. No tienes deudas, o están presupuestadas para cubrirlas sin ningún problema. 3. Puedes darte los gustos que tú quieras y privarte de ellos no es por escasez sino por frugalidad. Para pasar de una mala relación con el dinero a una buena relación con el dinero te recomiendo comenzar por lo más elemental: - Deja de comprar chucherías y prefiere el centavo a ese objetivo que vale menos. - Lleva un inventario diario de tu dinero y administra el centavo. - Guarda el dinero en un solo lugar, ordénalo en tu billetera y trátalo con respeto. Por último, después de poner en práctica esas pequeñas rutinas, debes trabajar más duro en cambiar esta realidad y buscar la forma de pasar de una mala relación con el dinero a una buena relación con el dinero. No lo olvides, pasar de… a…

MATRIZ DE EVALUACIÓN TCE Todos los emprendimientos nacen con un nivel de éxito (DEFINICIÓN DE ÉXITO SEGÚN LA TEORÍA DE LOS CANDADOS DE EMPRENDIMIENTO). Lo que recomienda este modelo es no centrarse en ese éxito, sino en las amenazas que nos pueden despojar de él. Nuestro punto de mira, entonces, se dirige a minimizar el riesgo al fracaso, enfocándonos en aquello en lo que somos más débiles y trabajando en cada uno de estos elementos. Lo importante de esta teoría es que nos proporciona la medición del nivel de éxito en el emprendimiento actual o, en su defecto, en el que pretendemos iniciar. Recordemos que el emprendimiento está catalogado como aquella actividad que ponemos en marcha con algún nivel de riesgo a fracasar. Es por esto que es importante medir este nivel de riesgo. La medición de riesgo en el emprendimiento va a estar dado, según esta teoría, básicamente con la probabilidad de fracaso al no alcanzar los objetivos de rentabilidad, escalabilidad, viabilidad y sostenibilidad, es decir: Nivel de riesgo = probabilidad de fracaso La matriz de medición TCE ayuda a calibrar la probabilidad de éxito del emprendimiento en una escala del 1 al 100 (en porcentaje). Otra relación que se plantea en esta teoría es que la probabilidad de éxito, sumada a la probabilidad de fracaso forman una sola unidad, en este caso el 100 %. Así, tenemos que: Probabilidad de fracaso = 100 % - Probabilidad de éxito Por lo tanto, el riego de no cumplir con los objetivos plantados: Nivel de riesgo = 100 % - Probabilidad de éxito Cada uno de los lados y candados tiene una serie de variables para medir el nivel de éxito en ellos, pero para hacerlo hay que evaluar estas variables en una escala del 1 al 100, siendo 1 deficiente y 100 altamente eficiente. Hay que calificar cada una de las preguntas en una escala del 1 al 100, luego sumarlas y dividir por el número de preguntas que se formulan en la matriz. A continuación, se plantean las variables y los criterios de medición en cada una de ellas. Con estos principios lo que se

pretende es que exista una referencia para la medición, de tal manera que podamos tener un referente eficaz para evaluar cada uno de los candados. Te voy a mostrar una serie de preguntas que evalúan a todas y cada una de las variables de la teoría. Una vez más, lo único que tienes que hacer es calificar del 1 al 100 cada pregunta y cuando lo hayas hecho debes sacar el promedio de cada una, sumando el valor de cada pregunta y dividir este total entre el número de preguntas. Este valor te dará la probabilidad de éxito en cada variable. El resultado de cada variable será totalizado y promediado, con lo que se obtendrá el aporte dentro de la probabilidad de éxito de cada lado o candado. El promedio de los lados y candados te brindará el aporte dentro de la probabilidad de éxito de las habilidades blandas y de los pilares. Por último, el promedio de estas dos te ofrecerá la probabilidad de éxito de tu emprendimiento.

PROBABILIDAD DE FRACASO = 100 % - PROBABILIDAD DE ÉXITO PROBABILIDAD DE FRACASO = ________ %

INTERPRETACIÓN DE LOS RESULTADOS La teoría plantea que no tienes que centrarte solamente en tus fortalezas, de hecho, los fracasos en el emprendimiento llegan por descuidar las variables en las que somos más débiles. En la evaluación de cada una de las variables se plantean tres escalas: alerta máxima (1 % a 30 %), alerta media (31 % a 70 %), alerta mínima (71 % en adelante). Vamos a poner un ejemplo para que quede más clara la manera en que debes interpretar los datos que obtengas en la Matriz de Evaluación. Voy a basarme en la evaluación que hice para EELA.

La probabilidad de fracaso en el caso de EELA es del 44 %, es decir, hay un 44% de probabilidad de que no se alcancen los objetivos porpuestos en el plan estratégico en cada una de las variables ya mencionadas (rentabilidad, escalabilidad, viabilidad y sostenibilidad), y es a partir de este nú mero donde comienza el aná lisis. Por otro lado, el mayor nivel de alerta está en los candados.

Como se puede ver, la alerta máxima hay que ponerla en la especialización, mientras que en el caso del entorno y del sistema, podemos seguir trabajando en ellos y mejorándolos, pero sin la prioridad que merece la especialización. Ahora tenemos que analizar más profundamente el candado de la especialización y sus variables.

Al evaluar claramente cada una de las variables nuestra alerta máxima tiene que estar en 6 de las 8 que tenemos. A partir de esto debemos

tomar acciones en cada una de ellas. Finalmente, a manera de ejemplo vamos a analizar la variable procesos, pero en este caso pondremos la atención en suministros, logística, innovación, capacitación y conocimiento.

Ya tenemos clara la importancia de definir la cadena de valor, establecer una política de procesos y mapearlos, estructurar el manual, establecer la matriz de roles y responsabilidades. La calificación del 2 % en todas las variables sobre todo tiene que ver con una calificación al conocimiento y a la necesidad de tener cualquiera de los requerimientos planteados.

MATRIZ DE ACCIÓN DEL EMPRENDIMIENTO Una vez definidas y detectadas las alertas en las variables es hora de ponernos manos a la obra, por lo que se plantean las acciones que recomiendo desde mi punto de vista personal para mejorar o estructurar cada una de ellas. Si bien es lo que yo recomiendo desde mi visión, conocimiento, investigación, preparación, lectura y estudios, te aconsejo que no te quedes solamente con esto y hagas tu trabajo: investiga, estudia, lee, prepárate y crea tus propios planes de acción de modo que las condiciones sean propicias para mantener el éxito en tus manos. En función de la evaluación que hiciste a través de la matriz podrás identificar las alertas y ubicar las acciones que te recomiendo y, como dije, trabajar en las tuyas también.

HABILIDADES BLANDAS

DISPOSICIÓN PARA SERVIR Y RESOLVER PROBLEMAS

DISPOSICIÓN PARA SERVIR ¿Dispones de un protocolo de saludo al cliente? - Establece un protocolo de servicio al cliente y plásmalo en papel. - Comparte el protocolo de servicio al cliente con tu personal. - Nunca le des la bienvenida a un cliente mientras estás sentado. - Invita al cliente a ingresar en tu local, tienda u oficinas. - Ofrécele asiento. - Preséntate formalmente. - Sonríe. - No ayudes, sirve. - Utiliza el “tú” solamente para los amigos. - No dudes en ofrecer una bebida. ¿La cordialidad es parte de tu protocolo de servicio? (GARCÍA, 2016). - Muéstrate respetuoso y educado con tu cliente. - Esfuérzate para que se vaya satisfecho y demuestra una preocupación genuina. - Educa en buenos modales a tu equipo. - No hagas esperar a tu cliente. - Refleja optimismo y actitud positiva. - Pregúntale al cliente cómo se llama y menciona su nombre regularmente. - Encuentra intereses comunes. - Muestra una escucha activa. - Debemos ser un espejo de nuestro cliente. - Descubre qué sentido prima en tu cliente. - Haz preguntas dirigidas a la persona con la que estás hablando. - Evita caer antipático. ¿Valoras y respetas el tiempo de tu cliente, así como los plazos de entrega pactados? - Antes de establecer el plazo de entrega, define el alcance del trabajo. - La estimación del plazo se debe realizar por un encargado del proyecto. - Los tiempos de entrega no pueden ser estimaciones optimistas, trabaja en previsiones realistas. - Debes contar con un método para la determinación del plazo. - Integra tecnología a tus procesos de entrega. - Calcula bien los tiempos antes de establecer la fecha de entrega. - Analiza tus patrones de demanda.

- Planifica rutas de entrega. - La entrega a tiempo debe ser una filosofía empresarial. - No consientas que tu hábito personal (impuntualidad) perjudique la política empresarial de la entrega a tiempo. - Estructura un cronograma de actividades. - Establece los alcances de cada actividad. - Ten claridad en el plazo de entrega. ¿Estás dispuesto a asesorar a tu cliente, independientemente de si adquiere o no tu producto? - Prepárate y prepara a tu equipo. - Debes ser un asesor en el sentido amplio de la palabra. - Tienes que conocer los productos y servicios a fondo. - La proactividad es indispensable. - No utilices lenguaje técnico. - Aprende a ser empático. ¿Están claramente definidas las políticas de devolución, descuento, pruebas y posventa? - Antes de establecer las políticas de devolución, descuento, pruebas y posventa, hay que tener claros los objetivos que se desean lograr. Estos pueden incluir que se garantice la satisfacción del cliente, reducir el número de devoluciones o promover la lealtad a la marca. - Investiga las políticas de la industria y de la competencia para tener una idea de lo que es típico y lo que no lo es. - Consensuar con la empresa las políticas de devolución, descuento, pruebas y posventa. Han de ser acordadas y aprobadas por la alta dirección y otros departamentos relevantes. - Define los términos y condiciones claros para cada política, incluyendo el plazo para las devoluciones, las condiciones para obtener un descuento, los requisitos para las pruebas y los procesos de atención posventa. - Comunica las políticas de devolución, descuento, pruebas y posventa de manera clara y efectiva a los clientes, ya sea a través de una página web, folletos o a través de un representante de atención al cliente. Esto ayudará a evitar confusiones y asegurar la satisfacción del cliente. - La política de devoluciones no representa una pérdida para tu negocio. - Respeta las leyes de comercio. ¿Cuentas con una estrategia de imagen del personal, del local y de las perchas?

- Elige colores para los uniformes de tu personal que se alineen con el posicionamiento deseado. - Exige el cuidado de las manos y uñas (limpias, cortas, arregladas) del personal. - Los zapatos y la ropa de tus empleados deben estar limpios. - Renueva la imagen de tu local regularmente. - Determina cuáles son las zonas de mayor y menor tráfico de tu local. - Despeja los pasillos para que el cliente pueda circular fácilmente y sin obstáculos. - Coloca las ofertas, descuentos, promociones y productos que son considerados de consumo básico en las zonas de la tienda donde tienes menos tráfico. - Coloca la caja en los lugares con poco tráfico. - Los probadores deben colocarse en las zonas frías para generar tráfico. - Evita que las colas se formen en las mejores zonas del cliente, para que no se incomoden con las aglomeraciones. - Ubica productos de impulso alrededor de la caja. - Mantén limpio el local al completo, sin olvidar los pisos y las ventanas. - Cuida la iluminación del local: cambia siempre las bombillas quemadas internas, externas y de rotulación. - Organiza las perchas de manera que los artículos más rentables estén situados a la altura de los ojos del consumidor. - Coloca los productos de consumo diario a la altura de las manos. - Los productos de uso regular y los pesados ponlos a la altura de los pies. - Las mercancías claves deben estar organizadas en perchas de extremo a extremo. ¿Cumples con los compromisos adquiridos (plazos de entrega, precio convenido, lugar de entrega y garantía)? - Define y comunica el plazo de entrega. - Utiliza recordatorios y listas de tareas. - Negocia la fecha de entrega con tu cliente. - Prevé tiempo para imprevistos y anticípate a retrasos por tu vida personal o por la logística. - Evalúa los proyectos que vas a realizar. - Comunícate con tu equipo de trabajo para trasladar la estrategia y la fecha comprometida para la entrega; cuenta con las herramientas (software) adecuadas para cumplir con tus ofrecimientos. - Costea tus productos de manera técnica para evitar hacer ajustes posteriores. - Sé concreto al definir la garantía que ofreces: define el plazo, las

condiciones y los términos. Procura que los documentos no sean muy largos e incomprensibles. - No negocies la garantía: cuando un cliente haga un reclamo, responde rápidamente y cumple con tu ofrecimiento. - Cuanto más largo sea el plazo de la garantía, más confianza transmitirás a tus clientes. Frente a la queja de un cliente, ¿asumes una postura proactiva y ves una oportunidad de crecimiento? - Identifica el problema y su origen. - Cuando tienes una queja, afróntala de inmediato demostrando compromiso a tu cliente. - Escucha al cliente, no lo cortes, déjale desahogarse. - Pide una disculpa sincera y asume tu responsabilidad frente al problema. - Comunica una solución y resuelve el problema. - Además de la solución, ofrece algo adicional. - Haz un seguimiento posterior tras resolver el problema fruto de la queja. - Delega la solución de problemas a tu equipo. - Mantén la calma y demuestra una actitud proactiva. - Cuida tu reputación en las redes sociales y reacciona inmediatamente cuando se activan. ¿Tienes una estrategia de servicio redactada en un documento (manual de servicio)? - Concreta el objetivo del manual. - Define la magnitud del manual: a quién va dirigido, cuál es el alcance geográfico, qué productos involucra, etc. - Establece políticas de servicio al cliente claramente definidas. - Puntualiza los elementos del servicio, políticas y comunicación de las políticas, estructura a cargo del servicio, sistema del servicio, gestión y apoyo. - Gestiona el manejo de quejas con un mejoramiento continuo. - Delimita indicadores de medición de servicio. - Implementa un método de seguimiento. ¿Posees un sistema (software, hardware, asistencia) para ejecutar tu estrategia de servicio? - Debes contar con un sistema multicanal de contacto con el cliente que incluya: correo electrónico, dirección física, línea telefónica de servicio, línea de consumidor y atención personalizada.

- Necesitas un CRM para llevar un historial del cliente e identificar a los que son repetitivos, entre otras características. - Busca un software con funciones colaborativas para conectar con los diferentes involucrados en el requerimiento. - Estructura un modelo de preguntas frecuentes en la página web. - Adquiere un software que categorice el requerimiento del cliente de acuerdo con las preguntas recurrentes. ¿Capacitas a tu personal en servicio al cliente? Quezada, G. (2020). - Elabora un plan de capacitación en servicio al cliente y manejo de quejas para todos los colaboradores o miembros de tu empresa. - Capacita a todos los miembros de la empresa sin excepción. - Capacita en los productos y servicios que ofreces. - “El cliente es lo primero”: este mensaje se debe quedar integrado en el ADN de los colaboradores. - La práctica es la única forma de alcanzar el objetivo. - La actitud y la empatía deben ser parte de la filosofía de la empresa. - Capacita continuamente. - Capacita en negociación. ¿Estableces una política de seguimiento del problema compartida con el cliente - Profundiza en la comunicación formulando preguntas correctas: ¿Qué quieres decir exactamente con...? ¿Podrías ampliar más este punto sobre…? - Identifica el tipo de cliente al que estás sirviendo: conflictivo, frecuente, tímido, premium, se queja poco, es primerizo, etc. - Responde lo más rápido posible. - Presenta una solución y asegúrate de que se ejecute. - Registra la queja y haz un seguimiento.

RESOLVER PROBLEMAS ¿Detectas las necesidades del mercado antes de lanzar un producto? - Entrevista personalmente al cliente y conversa directamente con él. - Recoge información acerca del entorno del producto, las posibilidades técnicas y la viabilidad. - Considera la opinión del segmento al que quieres llegar. - Conoce la competencia a la que tendrá que enfrentarse tu producto o servicio. - Toma en cuenta las opiniones de los tuyos y de tus colaboradores. ¿Realizas evaluaciones de tu producto con tus clientes o segmento de mercado? - Elige el concepto de producto o servicio que quieres evaluar. - Decide los indicadores que quieres evaluar: calidad, relevancia, atracción, valor, originalidad u otros. - Evalúa tu producto con tu público objetivo. - Recurre a herramientas de análisis para encontrar el concepto que integrarás en un producto o servicio. ¿Desarrollas el producto o servicio a partir de estas necesidades? - Genera ideas a partir de las necesidades identificadas y no dejes de tomar en cuenta ninguna de ellas por descabellada que suene. - Depura las ideas. - Realiza una prueba de concepto del producto o servicio. - Prototipa tu producto y haz pruebas antes de lanzarlo. - Determina la viabilidad técnica, comercial y económica del producto o servicio. ¿Tu producto o servicio cumple con los beneficios ofrecidos a través de los distintos atributos? - Desarrolla los productos o servicios basándote en la demanda del mercado. - Evalúa lo que ofreces en función del público objetivo. - Innova y mejora el producto sistemáticamente. - Proporciona nuevas variantes de uso para tu producto o diferentes alternativas para tu servicio.

LIDERAZGO Y TRABAJO EN EQUIPO

LIDERAZGO ¿En tu rol como emprendedor o empresario has sido productivo en las actividades ejercidas? - Estipula todos los días lo más simple y alcanzable, que tendrá que ser concreto y medible. - Planifica el día antes de que comience, estableciendo prioridades y tiempos. - Haz una cosa a la vez. - Debes empezar por lo más difícil: aprovecha el inicio del día para hacer lo más complicado. - Evita el uso de las redes sociales y el teléfono mientras realizas una actividad productiva. - Confiere sentido de urgencia a las actividades poniendo metas de tiempo, por ejemplo: responder un mail en dos minutos. - Apóyate en tu equipo de trabajo y en el software de productividad. - Tómate pausas activas entre cada actividad. ¿Trabajas en tu liderazgo todos los días y eres consciente de esta necesidad? Marone, S. (2018). - Trabaja en tu actitud para fortalecer todos los días tus competencias de liderazgo. - Evalúa tu liderazgo para tener un punto de arranque. - Desarrolla tu inteligencia emocional y tu carácter para dirigir con eficacia. - Estudia (tú y tu equipo) sobre tu negocio para tomar mejores decisiones. - Toma decisiones teniendo en cuenta la perspectiva de los demás, sé empático. - Expande tu sentido de justicia, coraje, prudencia y manejo de emociones. - Celebra tus pequeñas y grandes victorias: recompénsate. - Aprende a delegar. - Inspira a otros: aprende a escuchar y a ser empático. - Entrega poder a tu equipo de trabajo y reconoce que el éxito no es tuyo sino de todos los involucrados. ¿Tienes una influencia positiva sobre todos los actores involucrados en tu emprendimiento? - Descubre qué es lo que te hace único y sé auténtico con los demás. Haz que tu imagen pública coincida con tus valores. - Escucha todo lo que te quieren decir, incluso lo que no se dice.

- Esfuérzate para ser un experto. - Aprende a contar historias: utiliza tu experiencia y testimonios para hacerlo. - Conviértete en un referente para los demás: dirige con el ejemplo. - Antes que recto, sé amable. - Trabaja en tu forma de comunicarte verbal y físicamente con los demás para conocer a quienes te rodean. ¿Agregas valor a través de tus acciones a todos tus stakeholders? - Intenta conocer profundamente a las personas: sus gustos, sus intereses, sus necesidades… - Valora verdaderamente a los demás. - Sirve antes de esperar a ser servido: brinda algo en la vida de los demás. - Apréndete y menciona el nombre de las personas con las que te relacionas. - Haz cumplidos a las personas en los primeros segundos de establecer contacto. - Ayuda a quien lo necesite. - Agradece por todo lo que te pasa en la vida, en el trabajo, en tu empresa, con los tuyos, incluso agradece por lo malo. - Comparte todo lo que aprendes. - Deja de lado los distractores: si estás con alguien debes estar con él y con nadie más. - Mejora y potencializa la vida de los demás a través de tu liderazgo. ¿Tienes claro el camino que debes seguir para cumplir con tus objetivos empresariales? - Decreta objetivos que te motiven tanto a ti como a tu trabajo, que representen un reto y sean considerados prioridad. - Establece también objetivos intermedios y plantea cumplimiento. - Los objetivos deben estar alineados a tus recursos. - Diseña estrategias y planes de acción para los empresariales. - Mide el cumplimiento de todos los objetivos.

equipo de como una plazos de objetivos

¿Has definido la visión de tu emprendimiento? - Fórmate una idea mental de cómo será tu proyecto después de unos años. - Detalla los productos y servicios que ofrecerá tu emprendimiento.

- Describe los valores y plantea cómo serán los empleados de tu negocio. - Visualiza qué es lo que hablarán las personas relacionadas con tu emprendimiento sobre tu proyecto. ¿Los logros de tu emprendimiento son solamente tuyos o te esfuerzas porque sean logros de todo el equipo? - La victoria debe ser parte del ADN de tu equipo, trabaja en ello. - Conviértete en un líder compasivo para involucrarte con tu equipo y sus miembros. - Destruye las barreras entre tu equipo y tú, ayudando a tu equipo a saltar los obstáculos. - Crea valores para los equipos de trabajo: transparencia, enfoque al cliente, colaboración, transparencia, solidaridad. - Empodera a las personas, entrega poder e independencia a tu equipo de trabajo. - No hagas del éxito tu éxito personal, hazlo un éxito grupal. ¿Formas líderes o te conformas con tener seguidores dentro de tu organización? - Preocúpate por el desarrollo personal, profesional y espiritual de los tuyos. - Alienta a tu equipo a utilizar información y a tomar decisiones. - Confía en la gente. - Determina las cualidades y habilidades que buscas en los líderes a quienes quieres liderar. - Forma a tu equipo en valores. ¿Eres un ejemplo para los tuyos? - Practica lo que predicas. - Asume la responsabilidad de todo lo que pasa en la empresa. - No dudes en pedir perdón cuando cometas un error. - Acepta que no siempre tienes todas las respuestas, búscalas con tu equipo de trabajo. - Cumple y respalda lo que dices. - Trata respetuosamente a todos los involucrados en y con tu organización. - Sé coherente con lo que eres, piensas y haces. - Evita todo tipo de favoritismo. - No compitas con los tuyos, colabora con ellos.

TRABAJO EN EQUIPO ¿Delegas? - Define claramente lo que hay que hacer y el objetivo de una tarea. - Elige a la persona idónea para esa tarea. - Tómate el tiempo necesario para que la persona entienda claramente el objetivo de la tarea delegada. - Explica los motivos por los que se le delega la tarea. - Da las instrucciones precisas, incentiva la búsqueda de acciones, ábrete a la opción de consultas. - Establece indicadores de medición de la tarea. - Proporciona retroalimentación. ¿Gracias a tu liderazgo atraes a gente que definitivamente suma a tu emprendimiento? - Trabaja para ser un referente en tu industria. - Desarrolla tu marca personal y utiliza un ecosistema digital para hacerlo. - Abre un perfil profesional en LinkedIn. - Incursiona en la docencia universitaria en tu área. - Crea contenido de valor que llegue a los miembros de tu industria. ¿Te adaptas fácilmente a las necesidades y requerimientos del grupo de trabajo? - La imagen que proyectas debe estar acorde a tu objetivo, principalmente en valores. - Ten claro cuál es el objetivo del equipo y tu rol dentro de él. - Relaciónate con tu equipo de trabajo en los momentos oportunos, siempre dentro de las horas de trabajo (desayunos, almuerzos). - Comparte el mérito y el reconocimiento al equipo. - Pide retroalimentación y resuelve cualquier duda que pudo haber quedado. - Fomenta la diversidad de pensamiento. ¿Sabes comunicarte con los miembros del equipo? Isaza, J. (2017). - Desarrolla mensajes claros, directos y específicos. - Deja claros los roles dentro de la empresa. - Aprende a escuchar. - Haz del mail tu herramienta productiva, úsala para comunicar. - Tómate el tiempo necesario para responder los mensajes

importantes. - Anima a tu equipo a expresarse sin miedos. - Utiliza tecnología para mejorar la comunicación con tu equipo. - Transforma los errores en una plataforma de aprendizaje. ¿Eres empático con los miembros del equipo de trabajo? - Conoce bien a tu equipo de trabajo y colaboradores. - Debes estar al día con todo lo relacionado al ámbito laboral. - Fíjate cómo afecta lo que pasa en el entorno laboral. - Reflexiona frente a lo que pasa con tu equipo de trabajo y con tus colaboradores. - Ayuda y aporta valor siempre que puedas. ¿Aceptas las críticas (observaciones) sobre tu trabajo? - Escucha atentamente las opiniones o críticas sobre tu trabajo. - Pregunta sin dudar acerca de los comentarios recibidos. - No lo tomes como algo personal, sino únicamente profesional. - Agradece siempre por la sugerencia o el comentario. - Saca conclusiones importantes que te puedan ayudar a mejorar. - Pide apoyo en soluciones para mejorar. - Busca retroalimentación posterior, en especial a la persona que realizó la crítica. ¿Disfrutas de la colaboración, mas no la competición? - Aprende a escuchar, entender y hablar. - Sé auténtico, ponle carácter y dota con tu personalidad a lo que haces. - Muéstrate empático y solidario. - Manéjate con tu escala de valores para ser justo y ético. - Incentiva a tus colaboradores para que tengan iniciativa. - Sé recíproco en el largo plazo. - Forma una empresa abierta, solidaria, transparente y participativa. ¿Asumes con responsabilidad las tareas que te asignan en el equipo de trabajo, independientemente de que seas el líder? - Comprométete con tus metas y con los objetivos de tu emprendimiento. - Toma conciencia de cuáles son tus alcances y limitaciones. Sobre ello, decide qué hacer y qué delegar. - Sé puntual con tus compromisos y cumple tus ofrecimientos a tiempo. - Anticípate a los posibles problemas poniendo en práctica la

proactividad. - Toma conciencia de que eres el ejemplo de todos tuyos, lo que vean en ti se reflejará en ellos.

ACTITUD Y ESPÍRITU EMPRESARIAL

ACTITUD ¿Eres pesimista u optimista ante la vida? - La mente tiene poder: oblígate a cambiar un pensamiento pesimista por uno optimista. - Realiza una lista de las cosas por las que debes ser agradecido. - Deja de ver los obstáculos como fracasos, estos son parte de la vida de todos. - Empieza hacer cosas buenas y maravillosas por los demás. - Realiza una actividad que te ayude a librarte de tu negatividad. - Trátate de la mejor manera posible, igual que lo harías con tus seres queridos. - No te taches como pesimista. - Júntate o rodéate de personas positivas. - Muévete, no te quedes quieto, corre, camina, baila. ¿Tienes alta o baja autoestima? - Descubre el origen de tu baja autoestima y si es necesario recurre a un profesional. - Inténtalo, el fracaso es aprendizaje. - Persigue tus valores, lucha para que sean parte de tu ADN. - Identifica tus fortalezas y convéncete de lo bueno que hay en ti. - Conoce tus miedos y trabaja en ellos. - Perdónate. - Deja que tu cuerpo adquiera posturas de poder. - Haz ejercicio. - Piensa también en los demás. ¿Qué acostumbras a hacer en la mañana? ¿Te levantas temprano y te pones en movimiento? - Busca una alarma que te levante, no que te asuste. - Agradece por el nuevo día que tienes la oportunidad de vivir. - Lee: antes de levantarte lee cosas que te ayuden a mejorar tu actitud. - Sal a caminar y aprovecha ese tiempo para reflexionar. - Desayuna y hazlo bien, con alimentos nutritivos. - Mírate en el espejo y repite todos los días lo increíble que eres. - Si es posible, tómate unos minutos para orar, para conectar con el Universo. - Haz una agenda de tu día. ¿Cuáles son las personas que te rodean, qué aceptas de ellos y cuánto

influyen en tu estado de ánimo? - Mira cuál es el verdadero interés que tienen por ti los que te rodean. - Las personas que se quedan en tu vida son las que te aportan, no las que te quitan. - Quédate con quien te dé un punto de vista, no con quien impida tu progreso. - Aprecia a quienes respetan nuestros deseos, sueños y esperanzas. - Quédate con quien perciba la vida como tú quieres empezar a sentirla. - Sé un buen ejemplo de lo que quieres ser en tu vida, una persona que sume. ¿Cómo está tu amor propio? ¿Cuánto te valoras? ¿Te respetas? - Conócete mejor. - Deja de compararte con los demás. - Acéptate tal y como eres. - Empieza a tratarte bien; - Nunca dejes de creer en ti. Más allá del resultado, disfruta del proceso. - Ámate a ti mismo. - Deja de buscar la aprobación de otros. Haz las cosas por ti, no por los demás. - Mira a los ojos, no bajes la mirada. ¿A qué tipo de personas sigues en las redes sociales: suman o restan en tu vida? - Sigue a personas que sepan sobre tu actividad, expertos en tu actividad. - Sigue a personas optimistas. - Sigue a líderes positivos en tu industria. - Sigue a líderes espirituales. - Sigue a personas que agreguen valor a tu vida. - Deja de seguir a personas negativas. - Deja de seguir a personas que critican y que se meten en la vida de los demás. - Deja de seguir a políticos. - Deja de seguir a los medios de comunicación. - Deja de seguir a los ultra-. ¿Lees? Si lo haces, ¿qué tipo de contenido lees?, ¿es contenido que suma o que destruye? - Pídele al Universo libros que te permitan conectar con él. - Lee sobre temas que te interesen. Haz una lista de estos temas.

- Busca un lugar que te brinde la comodidad para leer. - Si no te gusta el libro que has elegido o te aburre, no te obligues a llegar al final, comienza con otro. - Rodéate de personas que leen. - Lee libros espirituales. - Lee libros sobre liderazgo. - Lee libros sobre biografías de grandes personajes de la humanidad. - Lee libros sobre emprendimiento. - Lee libros sobre crecimiento personal.

ESPÍRITU EMPRESARIAL ¿No encajas en el empleo tradicional? ¿Sientes que puedes hacer algo diferente por ti mismo y has pensado en emprender? - Dedícate a lo que te apasiona. - Las decisiones serán tuyas, serás dueño de tu tiempo y tu propio gestor. - Tu salario dependerá de ti mismo y de lo que hagas para ganarlo. - Trabajarás para cumplir tus sueños, no para hacer realidad los sueños de otro. - Crearás valor, mejorarás la vida de otras personas al solucionar problemas y transformar el entorno positivamente. - Superarás tus propios límites a través del crecimiento personal y profesional. - Hay un antes y un después: trascender a través de tu emprendiendo. ¿Aportas al crecimiento de tu país? - Expansiona tu negocio, no dejes que se estanque en ventas, busca escalar y crecer. - No pienses solamente en los tuyos, hazlo también en otros y en la sociedad. - Crea empleos que contribuyan a mermar la tasa de desempleo del país. - Paga los impuestos que debes, no evadas ni justifiques el no hacerlo por la situación política. - Paga siempre a tiempo los impuestos. - Aporta a la seguridad social, más allá de si estás o no de acuerdo con el sistema actual. ¿Pagas impuestos y lo haces a tiempo? - Cuenta con el apoyo de un profesional en el campo de la contabilidad y de la tributación. - Apóyate en un software tributario. - Ten claridad respecto a los distintos impuestos que debes pagar. - Establece la fecha máxima de pago de cada impuesto. - Los valores que vas desembolsar por concepto de cada impuesto tendrán que salir del flujo de caja. - No te gastes el dinero de tus impuestos. - Toma conciencia de la importancia de cumplir con tus obligaciones tributarias. - Asume tu responsabilidad con la seguridad social de tu país, más allá de si estás o no de acuerdo con el sistema.

¿Luchas por tus sueños? - Haz planes corto plazo. - Habla y busca el apoyo de las personas correctas en el círculo que te rodea. - Nunca dejes de investigar, de cuestionar, de estudiar. - Ten siempre un plan alternativo. - Trabaja en tu adaptabilidad. - Analiza tu productividad de forma permanente. - No dudes en pedir ayuda. - Sé realista con tus talentos y habilidades. - Piensa en alianzas. - Aprende de tus errores y aplica lo aprendido en tu emprendimiento. - No pongas excusas para luchar por tus sueños, esfuérzate. - Nunca olvides tus valores. - Sacrifícate y da todo de ti, porque el Universo se encargará de su parte. ¿Eres un eterno soñador y quieres pasar de soñador a emprendedor? - Traslada tus sueños al papel y conviértelos en planes. - Impregna de pasión y de amor todo lo que haces. - Confía en tus propias capacidades. El conocimiento te ayudará a dejar a un lado los temores. - Organiza tus recursos. - No pierdas el foco de tus objetivos. - Trabaja para ser un líder. - Disfruta del proceso y vuélvete una persona resiliente. - Aprende a decir que no y a desistir de un proyecto para enfocarte en otro. - Aprende, aprende y nunca dejes de aprender. ¿Es importante para ti influir positivamente en la sociedad? ¿Piensas en dejar un legado? - Crea soluciones a través de productos y servicios que añadan valor a la sociedad. - Arriésgate, solamente quienes se arriesgan podrán salir de la zona de confort que no permite ningún tipo de crecimiento. - Da ejemplo de valores, lucha, perseverancia, ganas y vida para los que te rodean. - Enseña, crea líderes y prepáralos para que sigan con tus enseñanzas. - Cree en ti y en tu emprendimiento.

CANDADOS DE EMPRENDIMIENTO

EL CANDADO DE LA ESPECIALIZACIÓN

TALENTO ¿Estás seguro de que lo que crees que es tu talento es efectivamente tu talento, o tienes dudas? - Pierdes la noción del tiempo cuando ejecutas esta actividad. - Recibes reconocimiento de los demás cuando realizas esta actividad. - Te encanta hacer esta actividad y difícilmente te aburres al realizarla. - Tu destreza en esa actividad es superior a la que tienes en otras. - Tu destreza para ejecutar esa actividad es superior al común de las personas. - Aprender de esta actividad te resulta muy fácil comparado con otras cosas. - Tienes o no habilidades adquiridas o no adquiridas en esta actividad. - Ejecutar esta actividad te resulta muy fácil respecto a otras. - Lees o te involucras con temas relacionados con esta actividad, incluso en tus tiempos libres. ¿Conoces cuál es tu talento? - Conócete a ti mismo desde el interior. El autodescubrimiento es esencial. - Mira al pasado, observa tu entorno. - Busca tu felicidad. Puedes convertirte en un ser único, y si para ello es necesario el cambio, ¡hazlo! - Empieza a escuchar y a tener conciencia de tus emociones y sensaciones, para discernir qué es lo que te invita a alejarte o a acercarte. - Entiende lo que es el talento. A continuación, te dejo un listado de 34 talentos desarrollado por el Instituto Gallup basado en el estudio de millones de personas: Gallup (s.f.). • El trabajador. Persona que necesita estar en constante actividad, realizando alguna tarea. • El activador. Persona que da pie a que las cosas pasen a la acción. • El flexible. Persona que se adapta a los imprevistos. • El analítico – Objetivo. Persona que ama lo empírico, que actúa siguiendo la lógica. • El organizador, el director de orquesta. Persona que optimiza el resultando mediante la gestión de varias variables al unísono. • El que sigue sus convicciones personales. Persona que se guía en función de sus valores, mediante integridad y congruencia. • El líder. Persona que asume los cargos, los ordena y los encomienda.

• El comunicador. Persona que anima al resto mediante la comunicación, se ocupa de pasar los mensajes de manera cautivadora. • El competitivo. Persona que se centra en el resto para motivarse, y además es consciente del nivel de competencia de los demás. • Sentirse parte de algo más amplio. Persona que se siente unida a otros, siendo consciente de la importancia de la globalidad. • Pasado/Persona que toma el pasado como referencia. Persona que aborda una situación ayudándose del pasado, consiguiendo comprenderla y logrando llegar a una solución. • El prudente. Persona que comprueba, vigila al resto, sabiendo en qué lugar debe poner los pies él mismo y el resto. • El descubridor de potenciales. Persona que revela el talento del resto, y que se ocupa de respaldarlo. • El disciplinario. Persona que establece previsibilidad, estructurando el mundo a través del detalle y de la especificidad. • El empático. Persona que mantiene la capacidad de ponerse en el lugar de otra persona, llegando a sentir lo que esa persona siente. • El justo. Persona que sigue el camino de la igualdad, intentando tomar decisiones justas. • El focalizador. Persona que se centra en la decisión previamente tomada y no la abandona hasta haber alcanzado el objetivo de la misma. • El futurista/visionario. Persona que detecta lo que va a ocurrir antes que los demás, con gran capacidad para visionar el futuro. • El armónico. Persona que se ocupa de generar armonía entre las personas de su alrededor. • El creativo. Persona que genera ideas, abordando el mundo desde otras perspectivas con creatividad. • El que integra. Persona que se dedica a incluir a las personas en un grupo, y que estas se sientan acogidas, generando en ellas un sentimiento de pertenencia. • El que se ocupa de la individualización. Persona que detecta las cualidades especiales de cada persona, y la hace actuar en función de estas. • El “Input” – Entrada de información. Persona que amplía información, colecciona y se documenta. • El intelectual. Persona a la que le gusta profundizar, caracterizándose por el gusto hacia la intelectualización. • El aprendiz. Persona con sed de aprender. Para estas personas aprender es un placer. • El optimizador. Persona que busca extraer lo mejor de las situaciones, haciendo que estas puedan funcionar mejor que lo hacían antes.

• El que repara. Persona que repara las roturas de una situación, haciendo un diagnóstico y una posterior reparación. • El positivo. Persona entusiasta, la cual, a través de esa actitud consigue contagiar a los demás. • El relacional. Persona que alimenta e intenta mantener la relación, procurando que se genere un alto nivel de confianza y fidelidad. • El responsable. Persona comprometida en llevar a cabo lo que dice, con honestidad y lealtad. • El confiado. Persona que convierte las críticas en constructivas, convencida de salir hacia delante, segura de sí misma y de sus capacidades. • El original/diferente. Persona a la que le gusta resaltar y distinguirse frente al resto. Además, también le gusta ser escuchado y admirado. • El estratega. Persona que es capaz de anticipar y de elegir los mejores enfoques de partida. • Poder de convicción. Persona con talento para convencer y seducir a los demás, llegando a unirlos por una misma causa.1 ¿Conoces el talento de los tuyos? - Define las habilidades claves necesarias para el éxito en cada puesto de trabajo y usa esta información para evaluar el talento de tu equipo. - Observa a tu equipo en el trabajo para entender cómo utilizan sus habilidades y cómo contribuyen al éxito de la empresa. - Usa evaluaciones formales, como entrevistas o evaluaciones de desempeño, para conocer más a fondo las habilidades y fortalezas de tu equipo. - Proporciona retroalimentación regular a tu equipo para ayudarlos a mejorar y propiciar nuevas habilidades. - Desafía a tu equipo para que realicen tareas fuera de su zona de confort y puedan descubrir nuevas habilidades y fortalezas. - Fomenta la formación continua para ayudar a tu equipo a impulsar nuevas habilidades y fortalezas. - Mantén una comunicación abierta y honesta con tu equipo para fomentar el crecimiento y el desarrollo de cada individuo. ¿Apoyas a los tuyos en el desarrollo de sus talentos? - Identifica las fortalezas y debilidades de cada empleado para determinar qué habilidades deben potenciar. - Proporciona retroalimentación regular y constructiva para ayudar a cada empleado a mejorar y optimizar sus habilidades. - Ofrece oportunidades de formación continua y desarrollo profesional para ayudar a cada empleado a crecer y mejorar sus

habilidades. - Asigna proyectos desafiantes que requieran el uso de nuevas habilidades para ayudar a cada empleado a activar su potencial. - Fomenta la colaboración y la asignación de tareas en equipo para que cada empleado tenga la oportunidad de aprender de sus colegas e incorporar habilidades sociales y de liderazgo. - Establece objetivos claros y desafiantes para cada empleado y proporciona el apoyo necesario para alcanzarlos. - Reconoce y recompensa el logro y el desempeño sobresaliente para motivar a los empleados a seguir progresando y mejorando sus habilidades. - Promueve un ambiente de trabajo diverso e inclusivo que resulte favorable para que los empleados de diferentes antecedentes y habilidades contribuyan al éxito de la empresa. Ofrece flexibilidad en el lugar de trabajo para que los empleados puedan equilibrar sus responsabilidades profesionales y personales y obtener nuevas habilidades fuera del trabajo.

CONOCIMIENTO: ¿Cuentas con conocimiento técnico en algún área? - Adquiere alguna destreza manual e intelectual. - Aprende a utilizar herramientas y otros conocimientos secundarios acordes a esta destreza. - Combina técnica y ciencia en este aprendizaje. - Respáldate en la enseñanza formal o informal con quien conozca la técnica que quieres aprender. - Ata la técnica que quieres aprender a tus talentos. ¿Has adquirido este conocimiento a través de la experiencia propia o ajena? - Aprende, desaprende y reaprende con cada nuevo método, técnica o herramienta que llegue al mercado fruto de la evolución tecnológica. - Observa cada cambio, cada evolución, cada técnica y herramienta. - Escucha todo lo que puedas sobre tu puesto de trabajo, habilidad y talento. - Pon en tela de juicio lo que haces a través del cuestionamiento permanente y las preguntas exactas. - Haz autocrítica, rompe la lógica racional (busca argumentos para defender las ideas y comportamientos que te interesan) para estar más abierto a tus emociones. - Valora las críticas, ten una mente abierta y receptiva. - Comparte tu experiencia y escucha las experiencias de otros. - Vincula la experiencia con la innovación. - Aprende del fracaso y hazlo parte del crecimiento profesional. - Suscríbete a blogs especializados en tu campo de acción. ¿Apoyas a los tuyos para que mejoren su nivel de conocimiento técnico? -

Identifica las necesidades de formación, habilidades y conocimientos técnicos que tus empleados necesitan para desempeñarse mejor en sus roles y alcanzar sus objetivos. - Proporciona oportunidades de formación continua como cursos en línea, conferencias y talleres, para que los empleados puedan adquirir y mejorar sus habilidades técnicas. - Asigna proyectos desafiantes que requieran el uso de habilidades técnicas nuevas o mejoradas para ayudar a los empleados a ampliar sus conocimientos. - Fomenta la colaboración y el intercambio de conocimientos entre los empleados para que puedan aprender unos de otros y mejorar sus habilidades técnicas.

- Reconoce y recompensa el logro y el desempeño sobresaliente en habilidades técnicas para motivar a los empleados a seguir mejorando y adquiriendo nuevos conocimientos.

CAPACITACIÓN ¿Te actualizas permanentemente en tu actividad? - Desarrolla valor transformando la información en conocimiento. - Toma conciencia de la necesidad de capacitarte permanentemente. - Planifica el tiempo disponible para capacitarte. - Ponte un objetivo en el corto plazo sobre las habilidades que quieres adquirir y las que quieres fortalecer. - Haz un listado de estas habilidades que quieres desarrollar y fortalecer. ¿Utilizas los distintos canales de capacitación existentes? - Adquiere conocimiento a través de la formación presencial, aprovecha para estudiar idiomas en esta modalidad. - Si los horarios no te lo permiten por la poca flexibilidad del método anterior no dejes de usar la modalidad en línea. - Utiliza los beneficios de los dos métodos anteriores a través de la formación blended. - Planifica con tiempo y adquiere conocimiento específico acercándote a profesionales de influencia mediante conferencias y eventos del sector. - Aprovecha toda la capacitación interna que se pueda dar en tu emprendimiento, crea un plan de capacitación para los tuyos. - Benefíciate de las publicaciones especializadas y apaláncate en el aprendizaje autónomo: existen miles de libros especializados, artículos, blogs, revistas y más. - Suscríbete a blogs que brinden información permanente acerca de tu actividad. - Toma cursos digitales de bajo costo utilizando plataformas digitales como Coursera, MiriadaX, EdX, Learning de LinkedIn, etc. - Asiste a charlas gratuitas en las que se habla de tu actividad. - Sigue a los expertos en tu área a través de las redes sociales. - Participa en eventos locales, nacionales o internacionales que se realizan en tu área de conocimiento. - Toma cursos o certificaciones de actualización. ¿Capacitas a los tuyos permanentemente? - Identifica las habilidades y conocimientos que tus empleados necesitan para desempeñarse mejor en sus roles y alcanzar los objetivos. - Establece un plan de formación que incluya cursos, programas y actividades de aprendizaje para satisfacer las necesidades

identificadas. - Proporciona recursos de formación, como materiales didácticos, acceso a plataformas en línea y tutorías individuales para ayudar a los empleados a adquirir nuevos conocimientos y habilidades. - Fomenta la participación activa de los empleados en los programas de formación para que puedan aprender de manera efectiva. - Evalúa regularmente el éxito de los programas de formación y ajusta los planes y recursos según sea necesario. - Reconoce y recompensa el logro y el desempeño sobresaliente en habilidades y conocimientos nuevos para motivar a los empleados a seguir aprendiendo y mejorando.

INNOVACIÓN ¿Sabes cómo innovar? - Innova a través de un modelo de negocio diferente, en la forma en la que la empresa crea valor y facilita al cliente. - Diferénciate con el producto o servicio. - Lleva tu servicio a otro nivel respecto a productos similares. - Enfócate en una mejora de los procesos; - Digitaliza tu empresa: los cambios tecnológicos exigen mayor enfoque en la digitalización. - Perfecciona tu concepto de negocio desde la visión de la organización, del servicio, del producto y del mercado. ¿Trabajas en un sistema de gestión de innovación? - Lidera a un grupo de personas de tu organización para definir estrategias y focos sobre los que se va a innovar. - Trabaja en el proceso de innovación buscando una solución creativa que genere valor. - Difunde, y promueve la innovación a través de una cultura. - Gestiona el conocimiento a través de estrategias para convertirlo en nuevas ideas, experiencias y proyectos. ¿Conoces el nivel de madurez de gestión de innovación en el que te encuentras? - Respáldate en un profesional o conocedor de la innovación. - Evalúa la situación real sobre la innovación en tu emprendimiento para determinar cuál es el punto más fuerte en el que la puedes respaldar. - Analiza los resultados y obtén medidas sobre las distintas variables de innovación. - Mide los avances obtenidos una vez que hayas analizado los resultados. ¿Involucras a tu equipo en la innovación de tu emprendimiento? - Desarrolla un entorno donde los colaboradores puedan organizar su documentación de forma intuitiva, gestionar los proyectos de forma colaborativa y proponer nuevas ideas o plantear mejoras. - Garantiza el pensamiento creativo de los tuyos: la automatización, gestión de tareas, herramientas tecnológicas y de movilidad son fundamentales en este punto. - Procura estar al día o a la vanguardia tecnológica con la utilización de recursos digitales.

- Involucra a tus colaboradores en la toma de decisiones que favorezcan el cambio de estrategias con el fin de cumplir con todos los objetivos. - Implanta un sistema de recompensas, de motivación, de responsabilidades, fija metas y retroalimentación. ¿Conoces y utilizas herramientas para innovar? - “El Plan del Héroe” te ayudará a evitar la procrastinación al momento de hacer licuar un emprendimiento. - El “Lienzo Canvas” es un modelo de gran utilidad para definir todos y cada uno de los elementos cuando desarrollas una idea. - “La Propuesta de Valor” sirve para diseñar productos o servicios que el mercado está esperando. - Si no sabes cómo resolver el problema de un cliente utiliza la metodología de “Design Thinking”. - “La Estrategia del Océano Azul” te vendrá muy bien si deseas mejorar la propuesta de valor reduciendo los costos. - Si quieres mejorar la experiencia de tus clientes recurre a “Customer Journey Map”. - Para medir la experiencia del cliente de la forma más sencilla tienes “Net Promoter Score”. - “La lluvia de ideas” es muy práctica si lo que necesitas son ideas inmediatas. - Para emprender en el mundo tecnológico está “Lean Startup”. - Si no sabes por dónde comenzar en tu emprendimiento o evaluar y tomar decisiones en tu momento actual, no dudes en acudir a “La Teoría de los Candados de Emprendimiento”. ¿Creas experiencias diferentes para tus clientes a través de la innovación? Macias, M. (2019) - Determina cuál es el objetivo principal de tu cliente. - Fija el itinerario para que el cliente cumpla con tu objetivo. - Define las necesidades, las actividades que realiza, todos los puntos de contacto e incluso las sensaciones. - Relaciona las distintas actividades que debes incluir o mejorar para que la experiencia sea inolvidable.

DIFERENCIACIÓN ¿Cuál es tu ventaja competitiva? - Identifica los problemas y necesidades de tu mercado actual y potencial. - Investiga a tu competencia en variables como calidad, precio, atención al cliente, gestión comercial, etc. - Determina la valoración de tu producto o servicio. - Averigua cuál es la ventaja competitiva de tu competencia. - Comunícate con tu personal para saber qué es lo que valora o no de tu producto en el mercado; - Con toda la información anterior y revisando los procesos productivos, de calidad y talento humano, adopta tu ventaja competitiva o promesa de valor. ¿Implementas la estrategia de diferenciación logística en tu emprendimiento? - Automatiza los procesos dentro de la cadena de suministros evitando la intervención humana. - Incluye estrategias de mejoramiento en la experiencia de compra a través del punto de venta. - Trabaja en las entregas más eficientes. - Brinda al cliente atención exclusiva, mostrando un interés real por satisfacer sus necesidades. ¿Implementas la estrategia de diferenciación comercial en tu emprendimiento? - Ofrece un producto que aporte valor al cliente más allá de satisfacer sus necesidades. - Transmite el valor de la marca a través del diseño de estrategias de branding. - Cumple con la promesa de marca. - Trabaja para que la percepción precio-valor sea la que satisfaga al mercado. - Crea una ventaja competitiva basada en: marca, innovación en productos, ubicación, sistemas de producción eficientes, sistema de distribución y logística. ¿Este diferencial es puntual y fácil de comunicar? - Establece tu ventaja competitiva. - Explica por qué lo que haces es valioso para el mercado, cuál es la ventaja que tiene y cuáles son los beneficios que obtiene al elegir tu

producto o servicio. - Escribe en un papel tu propuesta de valor. - Busca la asesoría de un experto en comunicación publicitaria.

PROCESOS ¿Has definido la cadena de valor de tu servicio? - Registra las transacciones básicas desde la materia prima hasta el cliente final: defínelo en un proceso sencillo, agrupando actividades y funciones si es necesario. - Describe a los potenciales actores claves del mercado. - Señala las oportunidades existentes y las limitaciones. - Identifica los diferentes mercados para el producto o servicio. - Determina la cadena logística o la forma en la que los productos llegarán al mercado. - Agrega información relevante. ¿Dispones de una política de procesos en tu emprendimiento? - Informa a todo el personal sobre la futura implementación de los procesos en tu emprendimiento. - Forma un equipo de procesos que deseablemente pueda estar asesorado por un profesional. - Define claramente el valor añadido de la empresa. - Genera un vínculo entre la estrategia general de la empresa y los procesos. - Concreta las prioridades en la creación de los procesos. - Mapea los procesos. - Analiza los procesos creados y ponlos a prueba. - Optimiza todos los procesos después de haberlos puesto a prueba. - Incorpora los procesos desarrollados. - Integra el mejoramiento continuo de los procesos como filosofía del emprendimiento. ¿Has implementado mapas de procesos? - Debes identificar cuáles son los procesos claves, es decir, los que están centrados en satisfacer la necesidad del mercado. - Precisa y define los procesos de apoyo que garantizan el funcionamiento de la empresa, talento humano, finanzas y compras. - Define los procesos estratégicos, que son aquellos que gestionan tu emprendimiento con el entorno, tecnología y marketing. - Identifica los subprocesos e interrelaciones, ya sean eventos, difusión en redes sociales, publicaciones, etc. - Estructura los mapas para cada una de las actividades identificadas. - Traslada todo a un manual de procesos. ¿Tienes un manual de procesos?

- Aclara los efectos que tendrá el manual: objetivo, justificación, involucrados, diagramas, actividades, reglas, políticas, condiciones. - Menciona a los involucrados y el alcance. - Define los procesos y procedimientos. - Concluye el manual. - Valida apoyándote en tu equipo. ¿Cuentas con una matriz de roles y responsabilidades que determinen los procesos para tu proyecto? - Determina la complejidad y el tamaño del proyecto. - Selecciona a las personas que formarán el equipo de trabajo. - Identifica las tareas que debes realizar para lograr el proyecto. - Define las responsabilidades, rol y obligaciones de cada uno de los miembros de la organización. - Establece un calendario con las fases y tareas.

CADENA LOGÍSTICA Y DE SUMINISTROS ¿Están identificados los integrantes de tu cadena de suministros? - Enumera quienes son todos tus proveedores. - Concreta quienes trasladarán tus materias y productos finales para determinar el transporte. - Identifica a los fabricantes, lo que transformarán, la materia prima. - Determina cuáles serán los clientes; - Selecciona el canal de comunicación que se utilizará en toda la cadena de suministros. - Elige la tecnología que utilizarás para mejorar la productividad. ¿Tu cadena de suministros está cumpliendo con sus objetivos? - Busca que tu cadena de suministros apoye a la satisfacción del cliente. - Disminuye los costos, tanto en inventarios, como en transporte y distribución. - Aumenta el nivel de servicio: incrementa la calidad del producto al disminuir los tiempos de producción, los tiempos de entrega y las devoluciones. - Mejora la toma de decisiones. ¿Tu cadena logística está estructurad - Define la red de proveedores. - Define la cadena logística. - Define la cadena de distribuidores. ¿La cadena de suministros es eficiente? - Selecciona buenos canales de comunicación. - Coordina y conecta a todos los integrantes de este proceso de suministro. - Sé eficiente con los recursos para evitar pérdidas innecesarias. - Mejora los tiempos de distribución. - Respeta los plazos pactados de entrega. - Responde de forma eficiente frente a los cambios de la oferta y la demanda. - Asegura y responde por la calidad del producto final. - Si no vas a cumplir, no te comprometas. ¿Cuentas con los KPI más convenientes para medir a eficiencia de la cadena de suministros?

- Desarrolla índices de planeación. - Desarrolla índices de aprovisionamiento. - Desarrolla índices de la producción. - Desarrolla índices de distribución. - Desarrolla índices de nivel de servicio.

EL CANDADO DEL ENTORNO DEL EMPRENDIMIENTO

ENTORNO EXTERNO EMPRESARIAL ¿Tienes identificados a todos los competidores directos e indirectos en el mercado? - Identifica a los competidores que ofrecen productos o servicios similares al tuyo. - Analiza las diferencias y similitudes entre los productos o servicios de los competidores. - Evalúa cómo los competidores se posicionan en el mercado y cómo compiten por los clientes. - Considera cualquier otro producto o servicio que pueda ser una alternativa para tus clientes y pueda amenazar tu negocio. - Investiga a los competidores a nivel de marca y presencia en línea para tener una comprensión más completa de su lugar en el mercado. - Revisa sus sitios web y redes sociales para ver cómo promueven sus productos o servicios. - Analiza cómo interactúan con sus clientes y cómo manejan las opiniones públicas. - Investiga sus estrategias de marketing y publicidad para conocer su enfoque y presupuesto. - Verifica sus reseñas en línea y cómo responden a las opiniones negativas. - Monitorea sus anuncios en línea y sus posibles campañas futuras. ¿Tienes analizada la amenaza de ingreso de nuevos competidores al mercado? - Analiza la barrera de entrada: ¿Qué obstáculos existen para que los nuevos competidores ingresen al mercado? - Evalúa la capacidad financiera y recursos de los posibles competidores. - Verifica la demanda del mercado y la posibilidad de que haya espacio para más competidores. - Investiga la tendencia del mercado y la posibilidad de que nuevos competidores aparezcan con nuevos productos o tecnologías. - Revisa informes financieros y estados de resultados públicos de los competidores existentes. - Verifica inversiones recientes y fuentes de financiamiento. - Monitorea las alianzas estratégicas y acuerdos comerciales que puedan aumentar su capacidad financiera. - Investiga la solvencia de sus proveedores y socios comerciales. - Monitorea los avances tecnológicos y cómo pueden afectar tu mercado.

- Verifica las patentes pendientes y los derechos de propiedad intelectual para identificar posibles nuevos competidores. - Investiga las tendencias de consumo y cómo están cambiando las preferencias de los consumidores. - Participa en ferias y eventos de la industria para mantenerte actualizado sobre los últimos productos y tecnologías. ¿Sabes cuál es la fuerza de los proveedores y su poder de negociación? - Identifica a tus proveedores claves y evalúa su importancia para tu negocio. - Verifica su base de clientes y si tienen una amplia gama de opciones. - Investiga su solidez financiera y si están en una posición fuerte para negociar. - Verifica la disponibilidad de los insumos y si hay una posible interrupción en el suministro. - Verifica si tienen barreras de entrada para nuevos proveedores. - Verifica si tienen una presencia en el mercado global y si pueden afectar los precios internacionalmente. - Analiza tus procesos de producción y los insumos necesarios para ellos. - Identifica a los proveedores que suministran los materiales y componentes críticos. - Evalúa la calidad y el costo de los insumos que proporcionan. - Verifica si tienen un historial confiable y si cumplen con los plazos de entrega. - Verifica si tienen un buen servicio al cliente y si son fáciles de trabajar. - Verifica si tienen capacidades de fabricación adicionales y si pueden adaptarse a tus necesidades futuras. ¿Sabes cuál es la fuerza de los clientes y su capacidad de negociación? - Identifica tus principales segmentos de clientes y entiende sus necesidades y preferencias. - Evalúa el tamaño y la solidez financiera de tus segmentos de clientes. - Verifica si existen barreras para la entrada de nuevos clientes en el mercado. - Verifica si tus clientes tienen múltiples opciones para comprar tus productos o servicios. - Verifica si tus clientes están satisfechos con tus productos y servicios y si están dispuestos a pagar un premium por ellos (encuestas de satisfacción del cliente, comentarios y opiniones en línea, análisis de datos, grupos de enfoque, comunicación directa). - Verifica si tienen una relación estrecha con tus competidores y si

están dispuestos a cambiar de proveedor. ¿Cuál es el impacto de los sustitutos en el mercado? - Analiza la demanda: observa cambios en la demanda del producto y compáralo con la demanda de los productos sustitutos. - Investiga a la competencia: averigua los precios, promociones y estrategias de marketing de los productos sustitutos. - Realiza encuestas a los clientes: pregunta sobre las razones por las que están considerando productos sustitutos y si están dispuestos a pagar un premium por tu producto. - Monitorea las opiniones en línea: revisa las opiniones y comentarios en línea de los clientes sobre tu producto y los productos sustitutos. - Analiza las ventas: compara las ventas de tu producto con las ventas de los productos sustitutos. ¿Tienes identificado el impacto que tienen en tu emprendimiento las políticas gubernamentales y regulatorias de tu país, ciudad o región? - Investiga las leyes y regulaciones aplicables a tu negocio. Esto incluye leer la legislación relevante y consultar con abogados o asesores legales si es necesario. - Monitorea las políticas gubernamentales y regulatorias en constante cambio. Tendrás que estar al tanto de las últimas noticias y avances en el entorno regulador. - Evalúa el impacto de las políticas y regulaciones en tu negocio. Analiza cómo afectarán a tu modelo de negocio, tus operaciones, tu cadena de suministro y tus finanzas. - Toma medidas para adaptarte a los cambios regulatorios. Reevalúa tu estrategia y, si es necesario, modifica tu modelo de negocio para asegurar el cumplimiento y el éxito a largo plazo. - Trabaja en colaboración con otros emprendedores y grupos de interés para influir en las políticas gubernamentales y regulatorias. - Asiste a conferencias y eventos relacionados con políticas y regulaciones. - Participa en grupos de discusión y foros en línea. - Mantén una comunicación regular con los funcionarios gubernamentales y reguladores. - Realiza una revisión periódica de las políticas y regulaciones. ¿Tienes identificado el impacto que tiene en tu emprendimiento la situación económica tanto en tu país como a nivel internacional? - Monitorea las noticias económicas relevantes. Sigue los informes económicos y las noticias relacionadas con las políticas económicas

a nivel nacional e internacional. - Analiza los indicadores económicos claves: el crecimiento del PIB, la inflación, los tipos de interés y la tasa de desempleo, entre otros. - Evalúa el impacto de las políticas económicas en la demanda y el suministro de bienes y servicios: analiza cómo afectarán a la demanda de tus productos o servicios y a la disponibilidad de los insumos. - Identifica las tendencias y desarrollos en el mercado: sigue los cambios en la industria y los mercados relevantes para tu negocio. - Consulta con expertos en economía: habla con economistas y consultores financieros para obtener una evaluación más detallada de las políticas económicas y su impacto en tu negocio. - Evalúa el impacto de las fluctuaciones cambiarias: analiza cómo afectarán a tus costos y a tus ingresos en moneda extranjera. - Adáptate a los cambios en la economía: realiza ajustes en tu estrategia y modelo de negocio para asegurar la sostenibilidad y el éxito a largo plazo, incluso en entornos económicos cambiantes. ¿Tienes identificado el impacto que tienen en tu emprendimiento las variables y políticas sociales? - Monitorea las noticias y avances relevantes: sigue los informes y noticias relacionadas con las políticas sociales y los derechos de las personas, especialmente en relación con tu industria o sector. - Analiza las leyes y regulaciones aplicables revisa las leyes y regulaciones relacionadas con los derechos de las personas y cómo afectan a tu negocio, tanto a nivel local como nacional. - Evalúa el impacto de las políticas sociales en la demanda de tus productos o servicios: analiza cómo las políticas sociales afectan a la demanda de tus productos o servicios y cómo debes adaptar la estrategia en consecuencia. - Participa con la comunidad: mantén un diálogo abierto con los grupos de interés relevantes, incluidos los empleados, los proveedores y los clientes, para comprender mejor sus perspectivas y preocupaciones. - Implementa prácticas sostenibles y responsables: adopta prácticas sociales y medioambientales responsables en tu negocio para cumplir con las políticas sociales y demostrar un compromiso con los derechos humanos y el desarrollo sostenible. ¿Tienes identificado el impacto que tiene en tu emprendimiento la tecnología actual y sus avances? - Mantente actualizado sobre las tendencias tecnológicas: sigue las últimas noticias y tendencias en tecnología, especialmente aquellas

relacionadas con tu industria o sector. - Analiza la competencia: evalúa cómo la tecnología está impactando a tus competidores y cómo debes adaptar tu estrategia para mantenerme competitivo. - Identifica oportunidades de innovación: explora cómo la tecnología actual puede ser utilizada para crear nuevos productos o servicios y para mejorar los existentes. - Evalúa la adopción de tecnología por parte de los clientes: analiza cómo los clientes están utilizando la tecnología y cómo debes adaptar tu estrategia para atender a sus necesidades. - Invierte en tecnología: asigna recursos para la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías y para la implementación de tecnologías existentes. - Colabora con expertos en tecnología: trabajar con expertos en tecnología para comprender mejor cómo la tecnología puede ser utilizada para mejorar tu negocio. - Considera la seguridad de los datos: evalúa cómo proteger los datos de tus clientes y empleados a medida que utilizas la tecnología en tu negocio. - Forma a los empleados: invierte en la formación de los empleados para que utilicen la tecnología de manera efectiva y para que tu negocio aproveche al máximo sus ventajas. - Monitorea continuamente los avances tecnológicos: indaga acerca de cómo estos están impactando a tu negocio y, en consecuencia, adapta tu estrategia. ¿Tienes identificado el impacto que tienen en tu emprendimiento las políticas ecológicas? - Monitorea las políticas ecológicas: esto supone estar al tanto de las últimas políticas ecológicas a nivel local, nacional e internacional que puedan afectar tu negocio. - Analiza la cadena de suministro: evalúa los impactos ambientales de tu cadena de suministro y cómo debes adaptar tu estrategia para ser más sostenible. - Implementa prácticas sostenibles: esto incluye incorporar prácticas ecológicas como la reducción de desechos, el ahorro de energía y la gestión de residuos. - Comunica la sostenibilidad: informa a los clientes, empleados y a la comunidad en general acerca de los esfuerzos ecológicos de tu negocio y cómo estás trabajando para ser más sostenible. ¿Tienes identificado el impacto que tienen en tu emprendimiento las normas legales en tu país y a nivel internacional? - Investiga las leyes y regulaciones relevantes para tu empresa en el

país o región en cuestión. - Consulta a abogados o consultores expertos en el área para obtener una comprensión más profunda de cómo estas leyes y regulaciones afectarán a tu empresa. - Evalúa los costos y riesgos potenciales de cumplir con estas leyes y regulaciones. - Analiza las oportunidades que pueden surgir de cumplir con estas leyes y regulaciones. - Toma una decisión informada sobre cómo manejar el impacto de estas leyes y regulaciones en tu empresa, teniendo en cuenta los costos, riesgos y oportunidades.

ENTORNO FAMILIAR ¿Cuentas con el apoyo de tu familia al momento de emprender? - Por tu salud mental considera que cualquier opinión se hace desde una visión de amor. - Comparte el qué, cómo, cuándo, dónde y el por qué lo vas hacer. Prepárate para las preguntas. - Explica un plan financiero de la forma más clara y digerible que puedas. - Invítalos a ser parte de tu visión. - Ten presente que no puedes reemplazar a tu familia con el emprendimiento. - Deja claro lo que necesitas de tu entorno familiar (tiempo para trabajar o estar a solas, consejos, escucha, sacrificios, apoyo moral, paciencia, etc.). - Comunica los resultados y haz que estos éxitos sean el éxito de todos. - Involucra a tus hijos en el proyecto, serán ellos quienes te apoyen con el resto de familia. - Reemplaza el “pero” por “y”. - Comparte tu idea, desconoces los resultados que obtendrás, así que no te anticipes a las respuestas. - Céntrate en tu círculo familiar más cercano (pareja e hijos) y deja de lado el círculo familiar secundario en el emprendimiento (tíos, primos, abuelos, padres). - Desarrolla la capacidad de comunicación con los tuyos, lo que tú conoces de tu emprendimiento de forma técnica, difícilmente lo entenderán los tuyos de la misma manera. - Alinea tus valores (SER) con tu comportamiento (HACER) para que tu familia se dé cuenta de que practicas lo que predicas.

DOMINIO DE LA MENTE ¿Te conoces - Responde a las siguientes preguntas: - ¿Estás conforme con lo que haces o haces realmente lo que quieres? - ¿Temes la incertidumbre? - ¿Eres emocionalmente inteligente? - Menciona tres virtudes y defectos personales. - ¿Cuál es tu visión a 10 años? - ¿De qué te sientes orgulloso? - Menciona tu libro favorito. - ¿Eres feliz? - ¿Cuáles son tus deseos por cumplir? - ¿Cómo está tu autoestima? - ¿En qué situaciones estarías dispuesto a mentir? - ¿Cuál es el recuerdo más vivo de tu infancia? ¿Tus pensamientos dominantes son mayormente negativos? - Comienza por tomar conciencia de la negatividad de tus pensamientos. - Decide no prestar atención a los pensamientos negativos. - Modifica los pensamientos negativos. - Evita inmediatamente los ambientes negativos: televisión, entorno, personas, canciones, videos, memes, otros. - Crea y vive en ambientes positivos: videos que motiven, libros que sumen, personajes, música, otros. - Mantente en movimiento, cambia de tareas. - Busca soluciones inmediatamente, soluciones para hoy. ¿Controlas tu mente (autocontrol)? - Autoconócete: ¿Quién eres? ¿Qué quieres? ¿Qué esperas? ¿Qué necesitas? ¿Cuáles son tus motivaciones? ¿Cuáles son tus realidades internas? ¿En qué te identificas con este mundo? - Asume la necesidad de vivir en estado de conciencia, deja de funcionar en modo automático. - Vive el presente, olvida el pasado y deja de preocuparte del futuro. - Trabaja en tu inteligencia emocional. - No te quedes en tu zona de confort, sal de ella. ¿Trabajas en tu interior? ¿Te tomas tiempo para meditar, reflexionar y visualizar? - Quítate los zapatos, ponte ropa cómoda y de preferencia que sea lo

más ancha posible. - Busca un lugar tranquilo en tu casa, en algún jardín o donde encuentres paz y tranquilidad. - Siéntate con la espalda recta y la cabeza erguida, mantén los hombros alejados de las orejas y evita tensiones en cualquier parte del cuerpo. Céntrate en la respiración, en cómo inhalas y exhalas. - Acepta todos y cada uno de los pensamientos que lleguen, déjalos pasar, disfruta de ellos, afróntalos. ¿Crees en ti mismo y en tu capacidad para cambiar las cosas y luchar contra las adversidades? - Toma conciencia de que la confianza en uno mismo se puede construir o fortalecer. - Es hora de que te enfrentes a tu yo negativo, párale, háblale, defiende tu postura positiva ante esa voz interna que te destruye. - Trabaja para que tus debilidades se vuelvan fortalezas. - Conócete, descubre cuál es tu verdadero potencial. - Transfórmate en tu propio guía. - Preocúpate por ti mismo y haz algo por los demás.

EDUCACIÓN FINANCIERA ¿Tienes conocimientos sobre los términos de las finanzas personales y sus conceptos? - Educación financiera: conocimiento para sacar el máximo rendimiento del dinero que llega a nuestras manos. - Libertad financiera: lograr que un sistema sea el que genera los ingresos necesarios mientras nosotros nos dedicamos a lo que nos gusta y a agregar valor a las personas. - Finanzas personales: la administración de los bienes materiales de una persona o familia. - Activo: bienes que hacen llegar dinero a tu bolsillo. - Pasivo: activos que hacen que salga dinero de tu bolsillo. - Ingreso activo: ingresos que son fruto de tu presencia física. - Ingreso pasivo: ingresos que son fruto de acciones donde no estás presente. - Deuda: crédito que te hace perder dinero. - Apalancamiento: crédito que te hace ganar dinero. ¿Están claras tus metas y planes financieros personales? - Define el por qué y el para qué quieres alcanzar tus metas financieras. - Enumera todas tus metas financieras. - Ahorra en porcentaje de todos tus ingresos. - Aprende a controlar tus gastos. - Edúcate y prepárate en lo personal y en lo profesional. - Visiona y trabaja por tus objetivos. - Invierte y reinvierte en tu emprendimiento. - Administra correctamente tus ganancias, no seas irresponsable a la hora de gastar el dinero que has ganado. - Construye no solo abundancia financiera (material), sino también personal, familiar, social y espiritual. - Comparte lo que has aprendido y agradece por lo que logras. ¿Haces presupuestos familiares, los ejecutas y finalmente se evalúan periódicamente - Calcula todos los ingresos: sueldos, inversiones e ingresos pasivos. - Calcula todos los gastos fijos: alquiler, préstamos, seguros, telecomunicaciones, transporte, energía, alimentación, vivienda, limpieza. - Calcula todos los gastos variables: gasolina, ocio, alimentación, etc. - Suma todos los ingresos y resta todos los gastos, con esto tendrás el flujo de caja familiar.

- A partir del flujo debes tomar decisiones sobre la economía familiar: ahorros en compras y mejoramiento de los ingresos. ¿Trabajas para el dinero o el dinero trabaja para ti? - Fórmate en finanzas personales y analiza tus creencias sobre el dinero. - Aprende a hacer un presupuesto y a tener disciplina con tu dinero. - Salda las deudas a corto plazo. - Invierte tu dinero en crear un sistema para tu emprendimiento. - Invierte en procesos para tu emprendimiento. - Reinvierte las utilidades en el emprendimiento. ¿Te informas antes de invertir o lo haces visceralmente? - Empápate sobre la empresa que te va a brindar el servicio, o sobre la industria en la que quieres incursionar o invertir. - Determina tu perfil de inversionista (tradicional, conservador, moderado o agresivo). - Analiza las características del fondo de inversión, de la acción, del emprendimiento. - Considera y ten en cuenta todos los aspectos fiscales que afectarán a tu inversión. - Haz una revisión periódica de tu inversión. - Sé consciente de que toda inversión conlleva riesgo. ¿Dedicas tiempo a la semana para evaluar tus finanzas? - Revisa la ejecución del presupuesto al final de cada período. Debes comparar cada gasto presupuestado respecto al ejecutado, y cada ingreso contra la realidad. - Evalúa si tus activos se han incrementado o han disminuido. - Evalúa si tus pasivos se han incrementado o han disminuido. - Evalúa tu liquidez. - Evalúa tu capacidad de endeudamiento. - Evalúa tu capacidad de ahorro. - Utiliza los KPI para evaluar tus finanzas. ¿Te asesoras con un profesional o sigues a expertos en RRSS - Comprueba que este asesor tenga una amplia base de conocimiento. - Averigua si conoce las diferentes herramientas financieras. - Debe saber cuál es tu perfil. - Es importante que tenga empatía para conectar contigo y con tus necesidades. - Tiene que ser sincero a la hora de plantearte las posibilidades de

pérdida o ganancia.

FRUGALIDAD ¿Eres frugal? García, J. (2020). - Adopta la frugalidad de forma voluntaria como filosofía de vida. - Disfruta al máximo de los recursos que posees. - Valora las pequeñas cosas de la vida. - Aprende a decir “NO” para disfrutar del tiempo al máximo. Define prioridades. - Gasta menos de lo que ganas, no vivas por encima de tus posibilidades. - Ajústate y respeta tu presupuesto. - No te prives nada de lo que necesites, simplemente gasta en lo que realmente necesitas. - Ahorra, consume responsablemente, disfruta de la vida sencilla y rechaza la deuda, el gasto innecesario y el despilfarro. - No te endeudes. Aléjate de las deudas (no hablo de apalancamiento). - Elimina cualquier gasto superfluo y consume solamente lo que necesites y te haga feliz. - Cubre tus necesidades básicas de acuerdo con tus ingresos, sé lo suficientemente consciente y responsable con tus gastos. - Compra cosas que agregan valor, cuestiona si ese bien realmente suma o resta en tu vida. - Haz que tus gastos añadan calidad, mas no cantidad. - Haz un inventario periódico de tus posesiones y elimina las innecesarias. - Valora la familia y las relaciones sociales.

INTELIGENCIA EMOCIONAL ¿Te conoces emocionalmente? - Sé consciente de tus emociones, dales un nombre y anótalas. - Determina si tus emociones son positivas: gratitud, serenidad, ilusión, ternura, etc. - Determina si tus emociones son negativas: miedo, ira, envidia, aburrimiento, etc. - Determina si las emociones detectadas son bajas, medias o intensas. - Lleva un diario de tus sentimientos y emociones. ¿Tienes autocontrol emocional? Corbin, J. (s.f.). - Conócete emocionalmente, tómate tiempo para detectar y entender tus emociones. - Pon atención a lo que te dicen los demás, practica la escucha activa. - Libera tensiones haciendo ejercicio físico. - Encaja las críticas, no tomes como algo personal lo que te dicen. - Quiérete tal y como eres, desarrolla la autoaceptación. - Adopta conscientemente una actitud optimista. - Céntrate en lo positivo y deja de lado lo negativo. - Muchas veces es mejor retirarse y hacerlo en el momento adecuado. - Evita reaccionar de golpe, no seas impulsivo. ¿Tienes capacidad de automotivación? - Descubre cuáles son tus horas pico, aquellas en las que eres más productivo y en las que el día funciona mejor. - Muévete, camina, haz ejercicio. - Celebra un logro diario y agradece por todo lo que te sucede. - Sal de tu zona de confort, esto creará nuevos retos. - Descubre lo que te hace feliz. - Comprométete contigo mismo, crea un acuerdo personal. - Hazlo con paciencia, festeja cada logro, las metas altas llevan tiempo. - Nunca te compares con otros, hazlo contigo mismo e intenta superarte. - Hazte cargo del proceso, mas no del resultado, disfruta del recorrido. - Evalúa el proceso y si hay algo que te ha molestado, cámbialo; con ello te volverás una persona resiliente. - Equivócate, no tengas miedo, es parte de la vida. - Conoce, busca y aprende de personas exitosas.

¿Eres empático? Montejano, S. (2019). - Entiende que cada ser humano es diferente, cada uno tiene sus propias necesidades. - Si no demuestran lo contrario, todas las personas son bondadosas. - Exprésate con tacto, habla con cuidado. - Deja de lado tus intereses, aplica un estilo de comunicación pasivo. - Aplica la tolerancia como valor. - Atiende a los gestos, miradas, inflexiones y tonos de voz. Aprende a entender la comunicación no verbal. - No todo es blanco o negro, deja de lado los extremos. - Aprende y disfruta de escuchar. - Presta atención a los sentimientos de otros, pero evita involucrarte con ellos, solamente trata de entender. - Intenta imaginar qué es lo que motiva a otra persona a hacer lo que hace. - Evita dar conclusiones, menos aún si no te las están pidiendo. ¿Son buenas tus relaciones interpersonales? Hotmart (2019). - Acostúmbrate a dar y recibir (feedback), haz de esto una cultura. - Aprende a convivir con las diferencias que tiene cada persona. - Adáptate a los cambios y aprende de ellos, sé resiliente. - Sirve a los demás y pide ayuda a los demás. - Haz observaciones en lugar de juzgar; aprende a expresar tus sentimientos, tus necesidades y tus motivaciones, para pedir las cosas sin dar órdenes. Evita la comunicación no violenta. - Procura no aislarte y mantener una actitud abierta a la interacción. - Respira y evade los conflictos. - Separa lo personal de lo laboral y lo social. - Perdona, haz de esto un valor en tu vida. - Es hora de que te conozcas a ti mismo.

ESPIRITUALIDAD ¿Tienes claras las razones por las que quieres ser o eres espiritual? - ¿Te preguntas cuál es el propósito de tu vida, y qué pasa después de la muerte? - ¿Buscas soluciones a problemas difíciles? - ¿Te interesas por la sanación espiritual? - ¿Quieres mejorar tu personalidad? - ¿Tienes intención de crecer espiritualmente? ¿Conoces los principios básicos para la práctica espiritual? - Reconocer que existen tantos dioses como existen personas. - Ir de muchos a uno. - Ir de lo material (tangible) a lo sutil (intangible). - Iniciar la práctica espiritual según la capacidad espiritual. - Realizar la práctica espiritual en concordancia con los tiempos. - Servir y ofrecer a Dios según nuestro talento o capacidad2. ¿Eres espiritual? - Practica el valor de la tolerancia. - Toma conciencia de los actos de tu vida, permite que el alma dirija tu mente y tu cuerpo a través de la conciencia. - Practica el valor de la generosidad. - Deja de lado la tecnología en lo que tiene con ver con el contenido tóxico que circula en las redes y que debes apartar de ti. - Lee y aprende sobre espiritualidad. - Conéctate con el Universo (Dios) y fluye. - Medita diariamente, deja que el silencio te dé las respuestas. ¿Oras? - Decídete a conectarte con el Universo cada día, encuentra el momento oportuno y busca un espacio adecuado. - Agradece por todo lo bueno y lo malo que te ha pasado en el día. - Reconoce el poder del Universo sobre ti y siente que este poder reside en tu interior. - Pide fervientemente por ti y por los tuyos. - Agradece, porque sabes que te ha escuchado. ¿Meditas? - Busca una posición cómoda: sentado en una silla, erguido sobre un cojín o tumbado.

- Cierra los ojos y baja la vista. Centra la conciencia en la calma, el equilibrio, la comodidad, la quietud y la paz. Es normal que tu mente esté llena de cháchara y alboroto. Cada vez que se distraiga, dulce y suavemente vuelve a centrarla en la calma, el equilibrio, la comodidad, la quietud y la paz. - Ponte cómodo en esta posición. Echa los hombros hacia atrás, estira el cuello y el cuerpo, y busca un espacio físico de calma, equilibrio, comodidad, quietud y paz. - Ahora toma conciencia del ritmo natural de tu respiración. Inspira por la nariz y expira por la boca. - Respira hondo. Inspira contando hasta cuatro. Expira contando hasta cuatro también. - Sincroniza tu cuerpo y tu respiración inspirando el mismo tiempo que cuando expiras. - Hazlo durante unos cinco minutos. Al principio puedes poner un temporizador en un tono agradable para señalarte que ya han pasado. - Pregúntate por qué estás y da gracias por ese día. Inspira agradecimiento y expira energía tóxica y negativa. - Ahora visualiza un recuerdo lleno de alegría, felicidad y agradecimiento. Piensa cinco cosas que puedes ver, cuatro que puedes tocar, tres que puedes oír, dos que puedes oler y una que puedes saborear. Asimila el amor, la alegría y la felicidad. Toma el amor de ese momento y visualízalo fluyendo por todo tu cuerpo: de los pies a las piernas, las caderas, el vientre, el pecho, los brazos, la espalda, el cuello y la cabeza. Lleva amor, alegría y agradecimiento a cada parte de tu cuerpo. Hazlo durante cinco minutos. - Pregúntate cuál es tu intención para ese día. ¿Ser amable, tener confianza, estar concentrado…? Fija esa intención. - Repite tres veces para ti mismo: Estoy contento con la persona en la que me estoy convirtiendo. Estoy abierto a todas las oportunidades y posibilidades. Merezco amor verdadero. Estoy dispuesto a servir con todo lo que tengo. - Para concluir la práctica, repite tres veces un mantra con el que te identifiques. (Shetty, 2021, p. 264).

MENTORÍAS ¿Tienes uno o varios mentores? Salinas, D. (s.f.). - Toma conciencia de la necesidad de tener un mentor. - Evalúa tu entorno, tus contactos en LinkedIn, tu listado telefónico, amigos en redes, antiguos jefes, fíjate si en tu círculo puede haber un posible mentor. - Paga para tomar una mentoría; si es necesario, no dudes en hacerlo. - Busca una incubadora y forma parte de ella. - Busca sistemas de mentoría en línea, evalúa y tómala. - Define el perfil de tu mentor ideal. - Demuéstrale al mentor que eres digno de su apoyo. Sé constante, aplica sus enseñanzas, mantén comunicación permanente. - Sé un gran aprendiz, aplica el valor de la humildad. - Toma en cuenta cuándo decir adiós al mentor, y hazlo de la forma más profesional, el fin de este proceso es natural. ¿Has definido el perfil del mentor ideal? - Evalúa el nivel de experiencia necesaria de tu mentor. - Evalúa la capacidad de comunicación de tu futuro mentor contigo y define las características de comunicación que él debe tener. - Define el nivel de respeto que debes tener por este mentor. - Define el nivel de dureza que debe tener este mentor al momento de decir las cosas. - Define el nivel de conexiones que debe tener tu mentor. ¿Tienes conciencia de que un mentor te puede ayudar a crecer? - Define conjuntamente con el mentor la orientación que quieres en la mentoría: estilo, expectativas, tiempo, etc. - Define las expectativas que tienes con tu mentor para que pueda entender la motivación que tienes en la mentoría. - Menciona las acciones que harán que el mentor tenga un interés genuino por el mentoreado. - Evalúa tu inteligencia emocional y nota su evolución conforme pasa el tiempo. - Define los problemas que quieres resolver y evalúa sus avances y soluciones a futuro. ¿Estás listo para ser un gran aprendiz? ¿Te consideras una persona con humildad? - Acepta que no siempre tendrás la razón, que no eres el dueño del conocimiento absoluto.

- Asume tus equivocaciones con humildad. - Trabaja en tu sed por aprender. - Ten curiosidad, cuestiona todo y siente la vida como una oportunidad para descubrir, no como un problema para resolver. - Disfruta del camino de aprendizaje. - Mira las cosas desde la perspectiva correcta. - Diseña tu propio modelo de aprendizaje. - Si te equivocas, admítelo con madurez. - Aprende de otras personas que tienen la humildad como valor. - Reconoce tus límites. - Agradece lo poco o lo mucho que recibes.

SALUD ¿Tu alimentación es sana y equilibrada? - Establece horarios de comidas y sobre todo respétalos. - Mastica un mayor número de veces y hazlo más despacio. - Aumenta tu ingesta de vegetales. - Evita las grasas de origen animal y reemplaza con aceites vegetales. - Reemplaza las frituras por alimentos hechos a la parrilla, al horno, estofados, asados, al vapor. - Reduce el consumo de sal. - Evita el consumo de azúcar. - Reduce el consumo de alimentos preelaborados. - Reduce el consumo de lácteos. - Incrementa el consumo de carnes blancas (pollo, pescado, pavo). - Ponte en movimiento, deja de lado el sedentarismo. - Deja el tabaco y el alcohol. - Haz ejercicio por lo menos 4 días por semana. - Duerme 8 horas cada día como mínimo. ¿Si bebes lo haces con moderación? ¿Fumas? ¿Consumes estupefacientes? Organización Mundial de la Salud (OMS), (2011). - Toma conciencia de este punto y haz algo por ti, piensa en ti y en los tuyos, busca ayuda. - Comienza por leer el siguiente manual de autoayuda desarrollado por la OMS https://www.who.int/substance_abuse/activities/assist_selfhelp_spanish.pdf - Toma conciencia y acepta que estás en riesgo. - Busca ayuda. ¿Te mantienes activo a través de actividades físicas y/o recreativas? - Si puedes dejar de lado el automóvil, hazlo. Empieza a dar esos pasos adicionales. - Deja el elevador y usa las escaleras, más aún si solo se trata de 1 o 2 pisos. - Usa bicicleta fija o caminadora dentro casa. - Ponte una meta de pasos al día, comienza con los primeros 1000. - Ponte horarios, levántate antes y camina 30 minutos al día. - Hidrátate, nunca dejes de beber agua. - Calienta antes del ejercicio y estira cuando termines. - Procura que todo ejercicio que hagas aumente tu ritmo cardiaco. - Aprovecha las actividades recreativas organizadas en tu comunidad. - Conforme pase el tiempo, ajusta tu intensidad y el volumen de

ejercicio. ¿Descansas lo necesario y te levantas renovado? Simon, S. (2018). - Renueva el aire de tu habitación abriendo las ventanas tanto en el día como en la noche por 15 minutos mínimo diariamente. - Crea una rutina en el horario para acostarte a dormir y para levantarte. - Evita siestas pasadas las 4 de la tarde. - Deja el tabaco. - Crea una rutina antes de dormir (escuchar música, leer). - Saca el televisor de tu dormitorio. - Haz una lista de tareas para el día siguiente, para librarte de las presiones. - Relaja tu musculatura con una ducha de agua caliente por las noches. - Evita hacer ejercicio dos horas antes de dormir. - Apaga todos los dispositivos electrónicos. - Cena poco y sobre todo ligero. ¿Exteriorizas tus sentimientos con ayuda profesional o a través de personas de confianza? Torres, A. (s.f.). Busca ayuda si: - No puedes dejar de pensar en un trauma del pasado. - Sufres de dolores de estómago, cabeza o defensas bajas que no tienen una explicación médica. - Dejaste de disfrutar con actividades que antes tenían una conexión real contigo. - Las relaciones están dañadas. - Tus amigos demuestran una preocupación real de lo que te está pasando. - Usas sustancias adictivas o tienes problemas con el alcohol. Si te encuentras en uno o varios de los supuestos anteriores: - Realiza un esfuerzo y determina la naturaleza o la raíz de tu problema. - Calcula el presupuesto con el que cuentas para eso. - Decide si quieres apoyo en línea, presencial o una mixtura de los dos. - Haz una lista de los posibles profesionales a los que podrías consultar. - Cerciórate de que tienen las credenciales para ejercer su carrera. - En un mundo digitalizado, busca referencias del profesional y su presencia en línea.

- Confía en que tomaste la mejor decisión y trabaja conjuntamente con él en ti. ¿Cuidas de tu higiene física y emocional - No dudes en tomar una ducha diaria, eso sí, cuida del planeta y no te excedas de los cinco minutos. - Cuida diariamente tu aliento, presta atención a tus dientes y a tus encías. - Lava tus manos regularmente. - Cuida tus ojos. - Cuida tus uñas, lávate el pelo, limpia tus orejas, oídos, nariz, seca bien tus pies. - Trabaja en tu autoconfianza. - Reconoce lo que sientes y gestiona estos sentimientos. - Mantén un buen estado de ánimo, piensa positivo. - Conócete. - Descansa, revisa la calidad de tu sueño.

EL CANDADO DEL SISTEMA DE GESTIÓN ADMINISTRATIVA

PLANEACIÓN ESTRATÉGICA ¿Conoces la planeación estratégica y para qué sirve? - Define la misión de tu emprendimiento. - Define la visión de tu emprendimiento. - Estructura los valores de tu empresa. - Plantea los objetivos organizacionales. - Detecta cuáles son las principales oportunidades y amenazas de tu emprendimiento. - Detecta cuáles son las principales fortalezas y debilidades de tu emprendimiento. - Detecta las principales estrategias para cumplir con tus objetivos. - Detecta el plan de acción a seguir para cumplir con las estrategias. - Detecta los principales KPI para evaluar tu plan. ¿Tu empresa tiene una misión? - Responde a las siguientes preguntas, siempre poniéndote en los zapatos de tu cliente: - ¿Qué hace tu emprendimiento? - ¿Para quién lo hace? - ¿Cómo lo hace? - ¿Cuál es la razón por la que lo hace? - Solo o con tu equipo, haz una lluvia de ideas y de palabras con las repuestas que generaste en el paso anterior. - Recoge las palabras y frases que definan tu marca y a tu emprendimiento. - Convierte esas palabras en oraciones. - Edita y mejora lo que has escrito. ¿Tu empresa tiene una visión? - Define el período de referencia sobre el que elaborarás la visión de tu empresa. - Enlista una serie de posibles visiones para tu emprendimiento con base en las siguientes preguntas: - ¿Qué queremos llegar a ser? - ¿Hacia dónde vamos? - ¿En qué queremos convertirnos? - ¿Dónde quieres llegar? - ¿Cuáles son tus aspiraciones? - ¿Cuál es la imagen que quieres proyectar en el futuro? - Elige una de las visiones y compártela. - Actualiza la visión periódicamente.

¿Cuentas con una escala de valores para tu emprendimiento? - Expón cuáles serán los principios de comportamiento y las costumbres que marcarán la forma de hacer las cosas dentro la organización. - Menciona la lista de valores que definen el comportamiento del que se habló en el punto anterior. - Los valores deben ser: definibles, estratégicamente significativos, escogidos en conjunto, coherentes, cuestionados periódicamente, medibles. - Evalúa los valores y de ser necesario redefine los mismos. ¿Conoces cuáles son las principales oportunidades y amenazas que tiene tu emprendimiento? -

Analiza las fuerzas económicas que influyen sobre tu emprendimiento. - Analiza las fuerzas culturales, demográficas y ambientales que influyen sobre tu emprendimiento. - Analiza las fuerzas políticas, legales y gubernamentales que influyen sobre tu emprendimiento. - Analiza las fuerzas tecnológicas que influyen sobre tu emprendimiento. - Analiza las fuerzas competitivas que influyen sobre tu emprendimiento. - Analiza las cinco fuerzas que según Porter influyen sobre tu empresa: competidores, proveedores, distribuidores, acreedores y clientes. - Desarrolla una lista de amenazas y oportunidades que se derivan del análisis anterior. - Desarrolla la matriz de evaluación de factores externos (EFE); - Desarrolla la matriz de perfil competitivo (MPC). ¿Conoces cuáles son las principales fortalezas y debilidades de tu empresa? - Analiza la función administrativa de tu emprendimiento y sus cinco actividades: planeación, organización, dirección, integración de personal y control. - Analiza la función de marketing de tu emprendimiento y sus siete actividades: análisis de clientes, venta de productos, planeación de productos, fijación de precios, distribución, investigación de mercados, y análisis de oportunidades. - Analiza la función de finanzas y contabilidad de tu emprendimiento y sus cuatro actividades: organización de cuentas, inversión,

financiamiento y dividendos. - Analiza la función de producción y operaciones de tu emprendimiento y sus cinco actividades: procesos, capacidad, inventario, fuerza laboral y calidad. - Analiza la función de producción y operaciones de tu emprendimiento y sus cinco actividades: procesos, capacidad, inventario, fuerza laboral y calidad. - Haz un análisis de la cadena de valor de tu emprendimiento que según Porter influye en el seno de tu organización. - Enlista las fortalezas y amenazas que se derivan del análisis anterior. - Desarrolla la matriz de evaluación de factores internos (EFI). ¿Crees en la necesidad de planificar para lograr los objetivos a largo plazo? - Define los objetivos organizacionales (generales). - Define los objetivos departamentales (de cada uno de los departamentos). - Define los objetivos funcionales (de los procesos). - Define los objetivos operacionales (de las personas o del equipo). - Crea tus objetivos pensando en tu estrategia (misión, visión, valores), no en función de tu industria. - Considera las siguientes cuatro áreas a la hora de definir tus objetivos: 1) finanzas, mercado y procesos de negocio; 2) aprendizaje; 3) desarrollo, y 4) crecimiento. - Argumenta declaraciones que expresen claramente tu intención del objetivo y cómo se logrará. - Establece prioridades al momento de plantear los objetivos. - Mantén la flexibilidad al momento de establecer los objetivos. - Utiliza la metodología SMART a la hora de definir los objetivos: específico, medible, alcanzable, relevante y con un tiempo definido. ¿Tu empresa tiene definidas las estrategias para cumplir con los objetivos? - Desarrolla la matriz de fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas (FODA). - Desarrolla la matriz de posición estratégica y evaluación de acciones (SPACE). - Desarrolla la matriz del Boston Consulting Group (BCG). - Desarrolla la matriz interna - externa (MIE). - Desarrolla la matriz de la gran estrategia. - Desarrolla la matriz de planeación estratégica cuantitativa (MPEC). ¿Tu empresa tiene definidas las acciones para implementar las estrategias?

- Define los objetivos anuales de investigación y desarrollo. - Define los objetivos anuales de producción. - Define los objetivos anuales de marketing. - Define los objetivos anuales de finanzas. - Define los objetivos anuales de recursos humanos. - Define los planes de acción para cada uno de los objetivos anuales definidos: investigación y desarrollo, producción, marketing, finanzas y recursos humanos. - Asigna recursos para cada uno de los objetivos anuales definidos: investigación y desarrollo, producción, marketing, finanzas y recursos humanos. ¿Cuentas con el apoyo de la organización y el seguimiento necesario para medir si se está cumpliendo lo planificado? - Trabaja en el cambio organizacional de tu empresa para implementar la estrategia. - Explica al personal cuál es la lógica del plan estratégico. - Involucra al personal en la implementación del plan estratégico. - Retroaliméntate y sé flexible de ser el caso. - Haz un seguimiento de las acciones utilizando herramientas como el Balance Scorecard (BSC).

NORMATIVA LEGAL ¿Estás al tanto de las distintas leyes que influyen sobre tu emprendimiento? - Estudia las distintas leyes sobre sociedades comerciales. - Entérate de los distintos requerimientos legales para iniciar funcionamiento en tu país, ciudad, localidad. - Estudia las distintas leyes sobre propiedad intelectual que afectarán a tu emprendimiento. - Investiga acerca de las distintas leyes laborales. - Investiga acerca de las distintas leyes sobre seguridad social. - Investiga acerca de las distintas leyes tributarias que afectan tu emprendimiento. - Investiga acerca de las distintas leyes que fomentan el emprendimiento. ¿Cuentas con asesoría legal? - Evalúa tus capacidades para constituir cualquier tipo de sociedad o estructura jurídica. - Evalúa tu capacidad para elaborar todo tipo de contratos mercantiles y laborales. - Evalúa tu capacidad para trazar estrategias de defensa legal ante potenciales infracciones en tu emprendimiento. - Evalúa tu capacidad para controlar y solucionar las situaciones de desequilibrio patrimonial. - Evalúa tu capacidad para realizar trámites ante organismos de control. - Evalúa tu capacidad para asesorar en la aplicación de normas de cualquier tipo. - Evalúa tu capacidad para ejecutar cualquier otro servicio legal que pueda tener tu emprendimiento.

CONTABILIDAD ¿Cuentas con nociones elementales de contabilidad para saber si lo que está haciendo tu contador es correcto? - Aprende sobre la definición de contabilidad. - Aprende sobre la definición de empresa tanto desde el punto de vista jurídico como desde el punto de vista económico. - Aprende sobre la definición y estructura de patrimonio. - Aprende sobre la definición de cuentas en los resultados contables y en los elementos de patrimonio. - Aprende sobre la diferencia entre ingresos y cobros. - Aprende sobre la diferencia entre gastos y pagos. ¿Cuentas con un contador o asesor contable para tu empresa? - Comprueba su formación profesional, su preocupación por actualizarse y capacitarse, y finalmente si pertenece o no a un cuerpo colegiado. - Valora si es un profesional reactivo o proactivo. - Revisa su cartera de clientes y no dudes en pedir referencias. - Observa el nivel de accesibilidad al contador (qué tanto puedes contar con él). - Mira sus tarifas, compáralas y no dudes en escatimar esfuerzos económicos en este punto. - Analiza su personalidad y define si es compatible con la tuya. ¿Tienes los documentos que justifiquen las operaciones contables de tu emprendimiento? - Comprobantes de ingreso de caja, para registrar todos los pagos y créditos que reciba tu empresa. - Comprobantes de egreso de caja, para registrar todos los pagos y débitos que tenga tu empresa. - Comprobantes de caja chica, para registrar los movimientos de esta cuenta. - Rol de pago y registro de rol de cada colaborador. - Facturas. - Comprobantes de retención generados y recibidos. - Libro diario para registrar las transacciones del negocio. - Declaración de impuestos. Justificantes de devolución o cambios. - Extractos bancarios. ¿Has adquirido un programa contable para llevar la contabilidad de tu emprendimiento?

- El software contable que elijas debe tener la capacidad de generar estados financieros (balance general, estado de pérdidas y ganancias, estado de fuentes y usos), informes fiscales y financieros, listado de deudores y acreedores, reporte de flujo de efectivo. - Busca que este programa contable sea lo más amigable posible, fácil de entender y que se adecúe a ti. - Determina qué información es más importante y con ello evalúa qué software te brinda esta prioridad. - Elige de preferencia un sistema contable en línea que tenga actualizaciones constantes (normalmente este tipo de software es por arrendamiento). - Revisa el soporte técnico que recibirás. - Considera la opinión del profesional contable con el que vas a trabajar. ¿Das seguimiento permanente a las acciones de los encargados en cuanto a la contabilidad de tu negocio? - Exige estados financieros periódicamente (de preferencia de forma mensual) a tu contador. - El contador debe tener un documento donde se registre el flujo diario de caja. - Trabaja en un presupuesto mensual, para que lo revises diariamente y evalúes su cumplimiento y ejecución. - Pide los comprobantes de pago y las declaraciones de impuestos mensuales y anuales. - Solicita el balance mensual de comprobación al contador.

FINANZAS ¿Tus estados financieros te permiten tomar decisiones financieras? - Exige a tu contador estados financieros periódicos. Si no los tienes, plantea una estrategia para que empieces a tenerlos. - Toma decisiones de inversión y determina los activos reales en los que debes invertir. - Toma decisiones de financiamiento y determina cómo se financiará la operación de la empresa, si será con capital propio o con apalancamiento. - Toma decisiones sobre dividendos y determina cómo se pagarán o entregarán las utilidades de la empresa, buscando siempre el equilibrio financiero. - Toma decisiones directivas que te faculten para llegar a resoluciones estratégicas. ¿Utilizas herramientas financieras para tomar decisiones dentro de tu empresa? - Estado de flujo de efectivo que registre detalladamente los ingresos y egresos de la empresa. - Estado de situación general para fomentar activos eficientes y rentables y un pasivo saludable. - Estado de pérdidas y ganancias, que te revelará posibles riesgos y oportunidad de incrementar el ingreso. - Estado de fuentes y usos, para determinar de dónde vienen los fondos y en qué se utilizaron. - Contabilidad de costes, para llevar un control de los costos, determinar los precios y los márgenes de utilidad, y finalmente conocer el punto de equilibrio a partir del cual obtendrás beneficios. - Coste de financiamiento, buscando el equilibrio en la financiación de la operación de la empresa. - Apalancamiento financiero, para determinar si el endeudamiento mejorará el rendimiento de tu emprendimiento. - Fondo de maniobra. Constata el nivel de solvencia de tu emprendimiento. - Indicadores financieros. Podrás encontrar fortalezas y debilidades en tu empresa. - Evaluación de inversiones, a través del TIR (tasa interna de retorno) y el VAN (valor actual neto) que permitirán evaluar tus proyectos de inversión. ¿Tu emprendimiento tiene un plan financiero anual

- Desarrolla un plan de inversión, detallando el destino, las acciones y los plazos de inversión. Con ello podrás minimizar los riesgos y la rentabilidad del proyecto. - Fija la meta de ventas basándote en el modelo de gestión comercial propuesto. - Identifica las inversiones y los requerimientos de financiación. - Redacta el plan de financiación y describe cuáles serán las fuentes de financiamiento. - Estructura la proyección de gastos en los que incurrirá el proyecto. - Elabora el balance de situación previsional basado en la información anterior. - Elabora el estado de resultados previsional basado en la información anterior. - Identifica el presupuesto de liquidez previsional. ¿Revisas e interpretas los estados financieros de tu empresa para tomar decisiones financieras? Espinosa, D. (2011). - Analiza los índices de liquidez de tu emprendimiento: capital neto de trabajo, índice de solvencia, índice de liquidez, prueba ácida. - Analiza los índices de actividad de tu emprendimiento: rotación de cuentas por cobrar, rotación de cuentas por pagar, rotación de los inventarios, plazo promedio de inventarios. - Analiza los índices de endeudamiento de tu emprendimiento: endeudamiento total, garantía o distancia a la quiebra, calidad de la deuda, coste medio de la financiación, cobertura de gastos financieros, Espinosa, D. (2011). - Analiza los índices de rentabilidad de tu emprendimiento: capital propio (ROE), rentabilidad de ventas (ROE), rentabilidad general (ROA), rentabilidad del capital total, rentabilidad por dividendo. ¿Estructuras el flujo de caja de tu emprendimiento? - Exige a tu contador que realice el informe de flujo de caja de tu empresa. - Señala el saldo inicial con el que se inicia el periodo. - Determina cuáles son los ingresos donde se colocan todos los conceptos por los que el emprendimiento recibe efectivo (ventas de contado, cuentas por cobrar que se hacen efectivas a la fecha de realizar el informe de flujo, préstamos y otros ingresos). - Determina cuáles son los egresos donde se colocan todos los conceptos por los que recibe efectivo el emprendimiento (compras, cuentas por pagar que se hacen efectivas a la fecha de realizar el informe de flujo, gastos de nómina, gastos arrendamiento, pago de cuotas bancarias, pago de servicios, pago de proveedores).

- Totaliza los ingresos y los egresos. - Saca la diferencia entre ingresos y egresos y con ello calcula el saldo final. - Si el saldo es positivo, usa los recursos adicionales (pagos a proveedores para obtener descuentos adicionales, compra de títulos de valores a corto plazo, cobertura de alguna deuda de corto plazo, etc.). - Si el saldo es negativo, analiza probabilidades de financiamiento (posterga pagos, encuentra espacios donde el flujo es más alto y conecta con tus egresos, establece promociones de pago en efectivo, acude a un préstamo bancario para capital de trabajo, realiza una inyección de flujo de los socios). - Si el saldo es neutro o cero, con más paciencia puedes aplicar estrategias planteadas en el punto anterior. - Totaliza las cuentas de ingresos y egresos, y también de las subcuentas.

MARKETING ¿Cuentas con un plan de marketing para tu emprendimiento? Daverio, A. (2018). - Haz un análisis situacional, tanto de los aspectos internos como de los externos. - Define el objetivo general de marketing, alineado con el objetivo de ventas de la compañía o emprendimiento. - Estructura las estrategias en: segmento, posicionamiento, producto, precio, canal de distribución y comunicación. - Define las tácticas y acciones para las estrategias planteadas. - Calendariza las acciones. - Estructura el presupuesto para todas las estrategias, tácticas y acciones. - Define la estructura de KPI para medir el cumplimento del plan de marketing planteado. ¿Conoces la realidad del mercado en el que te desempeñas: competencia, proveedores, sustitutos? - Analiza el mercado: define los actores, su potencial, estacionalidad, madurez, volatilidad, sensibilidad al cambio. - Analiza al consumidor: clientes actuales y potenciales, cantidad, características de cada uno de los grupos, hábitos de compra y consumo. - Analiza a la competencia y los sustitutos: cuáles son, productos y oferta de cada uno, precios, estrategia de diferenciación. - Explica los objetivos de la investigación en los diferentes campos: mercado, consumidor, competencia. - Define los métodos que usas para investigar el mercado: encuestas, comprador fantasma, paneles, grupos focales, basurología, hipnoterapia, pruebas de precio, auditoría de servicio, proceso de decisión, observación, etc. - Menciona las fuentes de información, tanto primarias como secundarias. - Desarrolla las metodologías, formula las preguntas, los planes y acciones para llevarlas a cabo. - Ejecuta los planes para el levantamiento de datos. - Tabula los resultados. - Analiza los datos respondiendo a los objetivos planteados: mercado, consumidor, competencia. - Desarrolla las distintas estrategias de marketing en: segmentación, posicionamiento, producto, precio, plaza, promoción.

¿Está definido tu segmento de mercado? - Define las características que debe tener cada segmento: identificable, de acceso sencillo, con diferencias entre cada uno, estable, con potencial en ventas, fácilmente aplicable con nuestra estrategia comercial, etc. - Identifica las distintas variables: geográficas, demográficas, conductuales y psicográficas; toma en cuenta también las demandas del mercado. - Describe los perfiles de cada segmento: podrías aplicar la metodología del buyer persona. - Selecciona el segmento ideal (segmento objetivo). Identifica las distintas acciones para posicionarte en cada segmento seleccionado. - Elige la estrategia de mercado y posicionamiento: marketing masivo, marketing concentrado, marketing de nicho, marketing personalizado. ¿Tienes una declaración de posicionamiento? Si la tienes, ¿cuál es el posicionamiento que buscas tanto de tu empresa como de la cartera de productos que ofreces? González, N. (s.f.). - Relaciona todos los segmentos escogidos que se beneficiarán de tu marca. - Explica cómo tu marca se diferencia de tu competencia. - Menciona el marco de referencia de la categoría de tu marca. - Establece los argumentos que apoyan tu reclamo de marca. - Redacta un posicionamiento de marca por cada segmento y necesidad. - Define una estrategia de posicionamiento: calidad o precio, categoría de producto, beneficios, atributos, diferenciación, uso o aplicación. - Evita los errores de posicionamiento: sobreposicionamiento, infraposicionamiento, posicionamiento confuso, posicionamiento dudoso, posicionamiento irrelevante. ¿Conoces las necesidades de tu público objetivo, desarrollaste o vendes productos en función de este público? - Determina el tipo de necesidades. Puedes basarte en la escala de valores de Maslow y distinguir si son físicas o sociales. - Calcula el valor que el mercado estará dispuesto a pagar por satisfacer esta necesidad. - Céntrate en la investigación y el entendimiento del mercado para detectar necesidades no satisfechas; esto te permitirá conocer al cliente y con ello identificar el diferenciador para entrar en el mercado.

- Para determinar estas necesidades respáldate en fuentes básicas de información: experiencia del consumidor, comunicación directa con el consumidor, fuente de marketing, pruebas de producto. - Desarrolla el producto o servicio basándote en los siguientes factores: el proceso debe ser deseable y útil en algún aspecto (propósito), mientras que la experiencia de uso tiene que satisfacer la necesidad. - Estructura un modelo de negocio para evaluar la rentabilidad del nuevo producto. - Construye un prototipo para evaluar el futuro producto. - Haz un plan de comercialización de prueba para evaluar la aceptación que el producto tiene en el mercado. - Elabora un plan de lanzamiento del producto. ¿Has diseñado una estrategia de precios? - Establece el objetivo de marketing sobre el que basarás tu estrategia de fijación de precios: aumentar ventas, aumentar ganancias, aumentar valor, bloquear la entrada de nuevos competidores, etc. - Determina el mercado objetivo al que quieres llegar y la sensibilidad del precio en este mercado. - Calcula el punto de equilibrio, considera para esto la estructura de costos fijos y el margen de contribución por unidad. - Estudia el nivel de competencia. - Analiza la cadena de valor de tu emprendimiento y detecta las oportunidades que existen en ella. - Con base en los puntos anteriores, decide la estrategia de precios que vas a implementar: estrategia dinámica ajustada a la oferta y demanda del mercado, valor percibido, entrada al mercado, skimming, descuentos por cantidad, precios estacionales, combos, precio competitivo. ¿Tu estructura de distribución o de canales está delimitada? Figuera, M. (s.f.). - Promedia el mercado objetivo y los distintos formatos de clientes, la forma en la que venden, cómo gestionan su negocio, y el uso que dan a los productos. - Lanza una propuesta de canales para cada uno de los segmentos. - Define dónde, cómo y cuándo comprarán tus clientes. - Elige la arquitectura del canal: directo, indirecto, mixto. - Forma a tus canales de distribución en tu producto, decide la estrategia comercial para aplicar en los canales. - Gestiona los canales de distribución: dimensiona el tamaño de los canales, planifica los territorios, dispón quién atenderá los

diferentes canales. - Evalúa el potencial de mercado, la relación costo-beneficio y encuadra la estructura del canal. - Decide la estrategia de canal que utilizarás: distribución intensiva, distribución selectiva, distribución exclusiva. - Vincula tus canales al modelo B2B (empresa a empresa) o al B2C (negocio a consumidor). - Sella alianzas y relaciones estableciendo objetivos en común. ¿Cuentas con una estructura de comunicación? ¿Tienes desarrollado este mix de comunicación? - Especifica el segmento al que llegarás con tu producto. - Decide el presupuesto con el que cuentas para promocionar tu producto, marca o emprendimiento. - Decide las acciones de publicidad (objetivos, medios, presupuesto, mensaje). - Decide las acciones de promoción de ventas o de merchandasing (promoción comercial, promoción de ventas, promoción al consumidor). - Decide las acciones de relaciones públicas (eventos, patrocinios, gira de medios, influenciadores, reputación). - Decide las acciones de venta personal (cliente potencial, beneficios, objeciones, cierre de ventas). - Decide las acciones de marketing directo (correo, telemarketing, catálogos). ¿Cuál es tu plan de fidelización? - Determina los objetivos del plan de fidelización: engagement, ciclo de vida del producto, volumen de ventas, nuevos clientes, recuperación de clientes, ROI. - Analiza el perfil de cliente, utiliza redes sociales y CRM. - Elige el programa de fidelización: tarjeta física, digital, apps. - Preocúpate de que este plan tenga las siguientes características: fácil de entender, flexible, que enganche, que se pueda hacer seguimiento, atractivo para los clientes.

VENTAS ¿Cuentas con un plan de ventas? Academia de Consultores (2018). - Precisa el objetivo de ventas de la compañía y alinéalo con el objetivo de marketing. - Concreta las metas de ventas: generación de nuevos clientes, incremento de ventas con clientes actuales, recuperación de clientes perdidos. - Concreta la estrategia de ventas. - Estructura la fuerza de ventas para cumplir el plan de ventas. ¿Controlas el proceso de ventas? - Preocúpate de que todos los involucrados en ventas conozcan el producto que van a vender, qué es…, para qué sirve…, qué significado tiene para el cliente. - Identifica el tipo de cliente que puede satisfacer su necesidad a través de tu producto o servicio. - Contáctate con el cliente. - Conoce las necesidades de tu cliente y sus problemas e interésate realmente por ellos. - Presenta el producto. - Ten en cuenta las objeciones. - Cierra la venta. ¿Tienes un plan de reclutamiento de talento para ventas? - Define el objetivo del plan de reclutamiento: metas, cualidades, políticas, filosofía. - Sopesa los recursos que se utilizarán para el proceso de reclutamiento. - Señala quién se encargará de reclutar el personal de ventas. - Prepara la descripción de los puestos de venta. - Puntualiza el perfil de puesto con base en la descripción. - Atrae a los candidatos. - Contrata y capacita. ¿Cuentas con un plan de capacitación en ventas? - Realiza el diagnóstico del personal de ventas para tener claras las necesidades de capacitación del personal. - Crea un plan de capacitación tomando en cuenta las distintas áreas: mentalidad, proceso de ventas, métricas de ventas, innovación en ventas, tipos de ventas, habilidades de ventas, ventas especializadas, sistemas de ventas.

- Implementa el plan de capacitación. - Haz un seguimiento y evalúa la implementación del plan de capacitación.

PUBLICIDAD ¿Cuentas con un plan publicitario para tu emprendimiento? - Define el objetivo general de plan publicitario. - Determina los objetivos específicos para cumplir con el objetivo general: presupuesto, mensaje, medios, KPI. - Calcula el presupuesto para la ejecución de este plan. - Diseña el mensaje publicitario que cumplirá con la estrategia de posicionamiento planteada; - Selecciona los medios que se utilizarán en este plan publicitario. - Selecciona los KPI que medirán el cumplimiento o no del plan de publicidad. ¿Cuál es tu estrategia de comunicación? ¿El mensaje está claramente definido y resalta la promesa de valor de tu marca - De ser posible y de contar con presupuesto, contrata a un experto en creación de campañas publicitarias. - Los mensajes se tienen que diseñar pensando en la audiencia, segmento o cliente, por lo que hay que dejar de lado el sesgo sobre si a ti te gusta o no el mensaje. - Evita un lenguaje demasiado comercial, trabaja en vínculos emocionales y la buena experiencia del consumidor. - El mensaje debe ir al grano, directo. - Despierta la curiosidad a través del uso de un copy directo, dejando de lado el exceso de información. - No lances un mensaje exagerado, complicado, turbio; sé honesto y transparente, trabaja en la credibilidad del contenido. - Adapta el mensaje, la gráfica y los formatos a las características o línea de cada medio. ¿Cuáles son los diferentes canales publicitarios que utilizas en tu emprendimiento? ¿Cuentas con un mix de medios (plan de medios) para ejecutarlo? - De ser posible y de contar con presupuesto, contrata a un experto en medios. - Estructura el brief: ciclo de vida del producto, posición en el mercado, competidores, objetivos de marketing, amplitud de la campaña, alcance de la campaña, periodo, presupuesto, segmento, etc. - Elige los medios que utilizarás: off line (televisión, radio, revista, vía pública, prensa), online (redes sociales, buscadores, plataformas de video, blogs, webs).

- Calendariza cada uno de los medios seleccionados de acuerdo con la estrategia planteada. - Crea contenido de acuerdo con los medios escogidos. - Elabora un plan de medios según lo planteado en los puntos anteriores. ¿Cuentas con KPI (métricas) de medición para tu plan publicitario? Antevenio. (2016). - Mide el alcance campaña. - Mide la frecuencia de la campaña. - Mide el costo por mil (CPM), es decir, el costo de obtener mil impresiones. - Mide el costo por obtención de cliente (CPP), es decir, el costo por adquisición de clientes. - Mide los medios digitales: páginas vistas, visitantes únicos, tiempo de estancia, e-mails abiertos, clips en el mail, formularios completados, taza de rebote, páginas por visita, taza de bajas, seguidores, suscriptores, e-mails reenviados, costo por life, comentarios, nuevos links generados, costo de producción, costo de distribución, ratio de conversión por embudo, CTR, beneficio, engagement. 1 https://marcapersonalonline.com.ar/blog/2020/07/01/la-lista-de-los-34-talentos-segun-elinstituto-gallup/ Recuperado el 12 de marzo de 2021. 2 https://www.spiritualresearchfoundation.org/es/practica-espiritual/principiosespirituales/practica-espiritual-principios/ recuperado el 2 de abril de 2021.

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AGRADECIMIENTOS: Este libro no existiría sin la inspiración que me brindaron todas y cada una de las personas que han influido con su liderazgo en mi vida. A todos aquellos Aprendedores que me impulsaron a compartir mi conocimiento y experiencia a través de su curiosidad y constante cuestionamiento. Gracias al equipo de EELA por haberme dado la oportunidad de estar en contacto con esos miles de emprendedores que lo único que quieren, al igual que yo, es comerse este &%$#@ pero maravilloso mundo. Quiero agradecer además a quienes me han apoyado en este camino directa o indirectamente, a mi madre, a mi socio Juanpi Burneo, y a un chiquitín (Raúl R.) que espera mi nuevo libro para leerlo. Si quieres conocer más sobre EELA o sobre mi te invito a visitar: www.eelaedu.com www.renzoaguirreidrovo.com Sígueme en redes sociales, escanea estos códigos