LECTURA 05 LIBRO Introduccion A La Economia Jose Paschoal Rossetti CAPITULO 1

October 25, 2024 | Author: Anonymous | Category: N/A
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Introducción a1a Economía José Paschoal Rossetti 18a. edición

Traducción

Mercedes Pimienta Pérez Revisión técnica

Arcadio Víctor Mena Alvear

OXFORD VN I VE RS IT Y PRESS

OXFORD UNIVERSITY PRESS

Antonio Caso 142 , San Rafael, Delegació n Cuauhtémoc, C.P. 06470, México, D.F. Tel. : 5592 4277, Fax : 5705 3738, e-mail: [email protected] Oxford Universicy Press es un departamento de la Universidad de Oxford. Promueve el objetivo de la Universidad relativo a la excelencia en la investigació n, erudición y educación mediante publicaciones en todo el mundo en Oxford México Atenas Auckland Bangkok Buenos Aires Calcuta Caracas Chennai Ciudad del Cabo Dar-es-Salaam Delhi Estambul Florencia Hong Kong Karachi Kuala Lumpur Madrid Melbourne Mumbai Nairobi Nueva York París Santafé de Bogotá Santiago de Chile Sao Pau lo Singapur Taipei Tokio Toronto Varsovia Con compañías afiliadas en Berlín Ibadan Oxford es una marca registrada de Oxford Universicy Press en el Reino Unido y otros países. Publicado en México por Oxford Universicy Press México, S.A. de C .V. División: Profesional Área: Economía y Administración Sponsor editor: Noé Urzúa Bustamante Edici6n: Ester Alizeri Fernández Alejandro López Morcillo Prod11cci6n: Claudia Celia Martínez Amigón

INTRODUCCIÓN A LA ECONOMÍA Todos los derechos reservados © 2002, respecto a la tercera edición en español por Oxford Universicy Press México, S.A. de C.V. Ninguna parte de esta publicación puede reproducirse, almacenarse en un sistema de recuperación o transmitirse, en ninguna forma ni por ningún medio, sin la autorización previa y por escrito de Oxford Universicy Press México, S.A. de C.V. Las consultas relativas a la reproducción deben enviarse al Departamento de Permisos y Derechos de Oxford University Press México, S.A. de C.V., al domicilio que se señala en la parte superior de esta página. Miembro de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, registro número 723.

ISBN 9 7 0 -613-682-7 Traducido de la l 8a. edición en portugués, titulada INTRODUis. '>e puede inferir que los nexo · de la economía con oLras ramas del conocimiento social se establee.en a partir d e que las relaciones humanas y los problemas imp líci tos o sucedidos en ellas no son fácilmente separables, según niveles de referencia rigurosamente p reclasificados. El instrumental teóri co de la economía debe ser visto sólo como una absrracción útil , para que se analicen con mayor pro fundidad aspectos específi cos de la lucha humana po r la sobrevivencia, la prosperidad, el bienestar individual y el bien común. Igualmente sucede que esa misma lucha no termina en los límites de lo que se convino en llamar relaciones económicas. Va mucho más allá, abarcando aspectos que o frecen respeto a la postura ético-religiosa, a la formas de organización política y de relación social, a la e rructuració n del orden jurídico, a los patrones de conquistas tecnológicas, a la · limitaciones impuestas por las condiciones del medio ambiente y, de manera más ex'l:ensiva , a la formación cultural de la sociedad. En la figu ra 1.2 se resumen esquemáticamente estas observaciones.

De qué se ocupa la economía 6

A p esar de la aparente mara ña de relaciones sociales y de la multiplicidad d e los factores condicionantes qu e em uelven la acción económica, hay en todo ello un conjunto notable de aspectos particulares de la realidad socia l que gravitan más específicamente en el campo de interés de la economía. Uno de ellos es el poli-

LA COMPRENSIÓ" DE lA ECONOMÍA

Figura 1.2 La acción económica y sus condicionamiencos principale'>.



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Factores condicionantes de la acción, de las relaciones y del comportamiento económico

~ Formas de organización política de la sociedad. Posturas ético-relig1osas • Formas de relación social

Condiciones hmitativas del medio ambiente

Formación cultural de la sociedad

Estructuración del orden jurídico

Patrones de las innovaciones tecnológicas

Factores que pueden estar condicionados por la acción, las relaciones y el comportamiento económico •

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nomio producción-distribución-gasto-acumulación, destacado por J. B. ay,3 uno de los teóricos m ás reconocido~ de la economía clásica: otro es el trinomio riqueza-pobreza-bienestar señalado por o tro notable profesor. A. Marshall;4 uno má es el binomio crecimiento-d esarrollo, acotado por Ku znets, 5 y finalmente el trinomio recurso -necesidades-prioridades, expresado por L. Robbins.6 3 jcan Baptistc Say, Tratado de econ omia política, Abril Cultura l, Sao Paulo, 1983. 1

5

6

Alfred Marshall, Principies o/ economics. Macmillan, Londres, 1890. imon . Kuznets, .11oder11 eco11omic g roll'th. rate, stn1ct11re c111d spread, Ya le ew Ha,cn, 1966. Lionel Robbins, An essay

011

nivcrsity Press,

tbe 11at11re wul significa11w o/ economic science, Macmillan,

Londres, 1932.

Et

u. Por eso los motlclos de equ1lihno gt•neral se han 1.·mpk·ado más como un in-.trumento t1.·01 K o para comprentler el mec:anasmo cu momico en su 1.nn¡unto que como hcrramicnta opcr.Kional propiamenu, díc:ha El anális~ matricial de los flujos de bienes y servicio-. entre los diferentes sectores de la economía nacional. La present.1ción usua l es l,1 mat riz msumo producto. L! matriz muestra la rcladon de c.1ncretas dL politll 1 1.Tonómit.1 o empresarial, son c'pec:1almente uulcs l.1s simuladonc-. con hase en p.1r.ímecros cuantillt.1hlcs En este c.1so. la econometna ut1h1~1 conu.:pt-. e-.tad1... 11c:os de proh.1hilidad. pron1rando infcnr cstmiac irn11.'s de fac:tibllíd.1d ele diferentes 1..1tegorías de rt'alCÍOn1.· .... 'iu aplic.1ubn -.e obser\.I panicularmcnt1.• en la on1.·m.1dó n del pnx--e-.o de coma de decisionl.!' d1.• l.i-. gr.indl.!s corpomnone-.. Fuente .J.1rnh ÜM:r y 'W1ll1..1111 ( 13lanthllekl, l//.sl !Íria du /'J(.'IJ-;amento eccmC. rn tod;is parte.., 1.1 pasión del esparitu milu.ir o .1rtíst1co prt·dommo cn al~un.1 épnomia no tiene la mi;.ma prensión dL la ... uenu.p, fis1t.1s L''\JOas puesto qut• 'e rcl.1ciona con J,1s fuerzas sutilc' ) sil:mprL' mut;1hles dL· la natur.1leza humana h esenu.tl noc.1r quc el cconomi,ca no 'e .1propí.1 la psibihtl.1d de medir lo' mot1,·os } la., md111.1uonL'S humanas. ~úlo lo h.1le mdirectamcntl' a 11.1\c' de sus cieno" l 'alua las moti' anones ck la acnon por ",., rl'· sultados, del mismo modo como lo han: cl r l.1s grande... prcl.IU dones que toma para aclar.ir los límne-. de -.u concx 1micnto Ak.mza sus conl lusiones pro\ 1sona., med1antc la obscrvaoon dl' la conducta humana en lá presente en la mayor parte de las definiciones de econo mía más recientes. O

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Umbreit, Hunt y Kinter: 12 "La economía es el estudio de la orga nización social a través de la cual los ho mbres satisfacen sus necesidade de b ienes y servicios limitados." Leftwich: 13 "Aunque no siempre es fácil separar el límite de las fro nteras que dividen la economía de otro campos del conocimiento social , actualmente hay concordancia general en relación con u contenido principal. Al ocupar e ele las condicione generales de bienestar. el estudio de la economía incluye la o rganización social que implica la distribución de recursos limitados entre necesidades humanas alternativa , con la finalidad de satisfacerlas a su nivel óptimo." Barre: 1 ' "La economía es la ciencia dirigida a la administración de los limitados recursos de las sociedades humanas: estudia las formas asumida por el compo rtamiento humano en la disponibilidad onerosa del mundo exterior, derivada de la tensión entre deseos ilimitables y medio limitados." Stonier y Hague: 15 ·· i no existieran si tema económicos ni economía no habría e ·ca ez ni nece idad de repartir los bienes entre los hombre . La economía es fundamentalmente el estudio de la escasez y de los problemas que se derivan de ella. " Rogers: 16 autor de un manual de introducció n a la econo mía cuyo título principal es sugerentemente Choise (op ció n o elecció n): " La econo mía estudia el fenó meno llamado esca ez. Aun cuando el hombre haya logrado hasta ahora que se expandieran la producción_y los bienes de servicio ne-

11

Claud io \1apoleoni, O pensamento econ6m ico do século )(X. a sistematiza~do espistemológica de Robhi11s e a economia do bem-esta r, Paz e Terra, Río de Janeiro, 1979.

12

Myron Umbrcit, Elgin l l um y Charles Kinter, Econom ics: t:lll i11/roductio11 to p ri11ciples a nd prohlems, McGraw-Hill, Nueva York, 1957.

lj Richard 11. Leftwich , 11

15 16

A basicframework for economics, Business, Dallas, 1980.

Raymond Barre, Ma nual de economía polít1ca , Fundo de Cultura, Río de Janeiro, 1970. Alfred

tonier y W. 1!ague, A textbook o/ economic tbeory, Longm an G reen, Londres. 1957.

Augus1u~ J Rogers, Choise: cm i11tod11ctio11 to econom ics, 2a. ed., Prenticc-Hall, Englcwood Cliffs. 197 1

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eleccionamos las siguientes:

LA C0 \1PRE.'\SIÓ'\ 01' LA ECONOMÍA

Cu adro 1.4 El concepto de economía dentro del sistema de Robbins.

En 1932, e l economista inglés Lionel Robbins, en su Ensay o sobre la naturalez a y la importm1cia d e la economfa , desarrolló nuevos conceptos sobre el hecho econórmco ) simultáneamente sobre la economra en su conjunto. Para comprender el sistema de Robbins, debemos panir del concepto walrasiano de escasez L. \X/airas define como ec;casa una cosa que al mismo trempo es útil y limitada en relación con las necesidades que pueda satbfocer. 'i las riquezas son limitadas, es decir, si con ellas no es po.'>ibk satisfacer necesidades hast.1 su saturación, el problema que cada agente económico debe rcsoh"er consiste en sacar el maximo prm echo de los limitados recursos disponibles. Por ejemplo, el consumidor tiende a distribuir sus utilidades entre "arios bienes, tratando de maxim1z;.1r las primeras. El productor tiende a distribuir recursos entre vanas opciones ele producción que le sean accesibles, a fin de maximizar su rentabilidad. El ahorrador que dispone de cierta cantidad de capital, procura distribuirlo entre las alternativa:, de ,1plicac1ón para maximizar su ingreso futuro. Y asi. suu::s1\ amente Todos estos casos son particularidades del problema general que consiste en obtener el máximo beneficio de u na actividad económica, condicionado por dccenninada -~ limitada- disponibilidad de medios. Esto Cría suficiente para c.ir.iCll:rizar el hecho económteo. Sm emba rgo, vistas en con1unto, definen cuál es el elemento esencial del aspecto económico de la conductJ humana: la posibilidad de elegir Cuando, por una pane, los medios son li-

mitados y aplicables a usos alternativos, y por otra, los fines son jerarquizables por orden de importancia, la conduua humana asume necesariamente la forma c.lntrad1ctono. desarrollo del tema l.'11 f• ml.l l"•tructur.ili1, dL-ducdon lógica de n>ndtL..,10nl"S .J Cons~tcncia. '>1gnifu.:.1 la capaddad de:.- resistir a argumentanonl.'s contrarias ...1 Originalidad. S1g111fit.1 pnxJucuón no reitcra!i\"J o meramcme rl'petlll\ .1 que repre.,ente una contribución .ti conmo es, no n>mo nos gu..,ta ri.1 que fuera \dem~b dl' lo expuesto .111lenom1t..:nll', ha) atm cntt:nos externos, rL·ductibles ~t 1.1 inter...uhjL'IÍ\ idar d individuo

Fuente Pedro Dcmo, \fetodc>lo~ia científica en ciencias ' ex. wles. Atla.., '>ao Paulo, 1980

FL ALC.\'\(.r Y lAS U\UT \ C IO:\f'> OF lA E(;0'\0 \tL\

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Figura 1.6 Sentido común, ciencia e ideología: atributos diferenciadores.

De la información a la concie ncia , del entendimiento a la inteligencia, de 1a práctica a los ensayos experimentales, e l sentido común va abriendo camino a la cienc ia de generación en generación . Por ejemplo, las prácticas agrícolas rudimentarias d ieron lugar a la agronomía experimental, a la investigación agróno ma y a la se lecció n genética de especies vegetales. En el campo de las ciencias humanas, el análisis de la interacción espontánea proporcionó la clas ificación y codificació n de las más variadas manifestacio nes sociales, procurando conocer las razones o motivos de las diversas formas ele comportamiento o reacciones del hombre. Este nuevo conjunto ele conocimientos, e laborado y experimentado sistemáticamente. tradujo en etapas sucesivas el paso del sentido común a la ciencia, hacie ndo notar q ue en la construcción del conocimiento científico el hombre busca por lo menos tres criterios científicos relevantes. En primer lugar, la coherencia, q ue significa ausencia de contradicción , argumentación estructurada, conjunto de enunciados no contradictorios, desarrollo del conocimiento en forma organizada, conclusiones a partir de deducciones lógicas. En segundo lugar, consistencia, en el sentido de resistencia a cualquier argumentació n contraria. Y en te rcer lugar, la objetividad, en e l sentido ele reproducir la realidad como es, no como al observador le g ustaría que fue ra . O Ideología y normas. Integrá ndose al estado ele conocimie nto humano y reproduciendo su posicionamiento en relación con el mundo que le rodea , consecuentemente surge y se cristaliza un tercer grupo de entendimientos llamado ideología. La d istinción e ntre cie ncia y sentido común se fundamenta, como vimos, en un conjunto ele criterios aceptados generalmente; aun así, esas dos secciones no se pueden considerar estáticas, entrelazá ndose con eslabones de una misma corrie nte. De la distinció n e ntre ciencia e ideología también surgen eslabones interrelacionados; no obstante, los crite rios con los que se de fine la cie ncia son muy distintos ele aquellos con los que se ide ntifica a las ideologías. Éstas se caracterizan po r la jus tificación, el partidarismo y la normatividad. La ideología surge de la exigencia de legitimización, común a las formas más diversas de un sistema institucional. El campo en que gravita n los postulados ideo lógicos es dife rente de aque llos en que incursio nan el sentido común y la cie ncia. La ideología expresa un conjunto de valores, creencias, convicciones, prescripcio nes y normas que se desenvuelven a partir de la necesidad que tocia o rganización social tie ne ele legitimarse. Al 30

LA COMPRENSI Ó

DE LA ECONOMÍA

contra rio de l sentido común y de la ciencia, la ideologías no buscan la neutralidad, la explicació n simple y objetiva con que el hombre trata de e ntende r a l mundo que lo rodea. El carácter distintivo de la ideología es su falta de neutralidad . El discurso ideológico es predominantemente partidario y significa la ado pció n de posiciones políticas de rivadas de corrientes filosóficas y de inte rés de clase. Por ta nto, la ju tificación ideológica se cubre con el velo del argume nto científico. De allí resultan los eslabo nes de enlace entre la ciencia y la ideología. No siempre es fácil separarlos, sobre todo e n e l campo de las cie ncias sociales. Generalmente, las ideologías (es decir, la necesidad de legitimación de determinados sistemas institucionales) se movilizan por medio de grupos dominantes o de grupos que aspiran al pode r. En general , se tiene una ideología dominante, a la cual se contraponen las ideologías alternativas o emergentes. Cada una de ellas gravita en torno a dife re ntes siste mas de valo res, creencias y conviccione , por lo que proponen no rmas dife rentes para el orde namie nto o reordena miento de la sociedad en sus más diversas manifestacio nes, e ntre las cuales sobresale la economía.

La e laboración de la ciencia: método inductivo y deductivo

Las dificultade de disting uir entre los tre conceptos que acaba mos de explorar: e l sentido común, la ciencia y la ideología, no implican la extrema convicció n de que e n economía es imposible separa r la construcción científica, por una parte, del e ntendimiento habitual, acrítico y uperficial, y por otra , de la apare nte profundidad de las justificaciones ideológicas. Esa tarea no es fácil , e n realidad. De uno y otro lado la dificultan e l juego de lo intereses involucrados. Por ello se reconocen, aun cuando posiblemente estén contaminados po r pro puestas ideológicas, los conjuntos refere nciales de principios, teorías, leyes y mode los económicos, conceptuados a partir de las metodo logías convencionales de la elaboración cie ntífica. A este conjunto se le da el nombre genérico de teoría económica o, simplemente, de econonúa. En la conformación de la economía, como ocurre comúnme nte e n otras ramas del conocimiento humano, e l instrumental empleado se asienta sobre bases metodológicas comunes. Como observa De mo, 18 aunque la metodología no deba ser supervalorada, debido a su naturaleza instrume ntal de e mpeña un papel decisivo e n la formación de los producto res de cie ncia, a medida que los hace conscientes de sus limitaciones y posibilidades: "se puede decir igualme nte que la mediocridad y la falta de preocupació n metodológica coinciden". En su estructura fundamental, la metodología de la e la boració n científica busca e n primer lugar observar sistemáticamente la realidad. Después, e laborar modelos simplificados que la reproduzcan, que identifiquen relacio nes de causa y efecto y que interpreten los más variados eventos, así como su desarrollo. En el proceso de elaboración, se recurre básicame nte a dos enfoques distintos, aun cuando sean compleme ntarios: la inducción y la deducción. Así se constituyen en su acepción más simple las bases sobre las cuales se controla el conocimiento cie ntífico, de manera p re liminar, en procesos descriptivos que conducen al reconocimie nto de la realidad , y ubsecuentemente, en dos e nfoques metodológicos distintos, aunque complementarios: el inductivo y el deductivo. En síntesis, estas tres bases son: 1. El reconocimiento. Consiste e n la observación sistematizada de la realidad. Una vez definido el campo específico de investigació n de un aspecto 18 Pedro Demo, Metodologia científica em c ié11cias sociais, Alias, ao Pa ulo, 1980. EL ALCANCE Y lA.S UMITAOONES D E l.A ECONOMÍA

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de la realidad económica , se observan, se clasifica n y e describen las categorías de dicha realidad que sean necesarias a esa investigació n. El reconocimiento involucra a í una amplia ob e rvación del mundo real a partir de la cual se seleccio nan hechos, datos y relaciones ele comportamiento que sirvan para su compre nsión o inte rpretación. 2. La inducció n. La reunión de informaciones resultantes de p rocesos sistematizados de reconocimiento puede conducir a la formulación de principios, teorías, leyes o mode los explicativos de la realidad ob ervacla. La transposición del proceso de reconocimiento ele la realidad e n un e nfoq ue teórico siste matizado es lo que caracteriza el mé todo induc tivo de investigación . Este método es, po r excelencia, el que e mplea la econometría: acoplados a los desarrollos de las matemáticas y ele la estadística, los modelos econométricos se derivan tanto de configuraciones s iste máticas y cuantificaciones de variables económicas como de las relaciones establecidas e ntre ellas. En consecuencia, por más e levado que sea su a lcance y complejidad, el modelo econométrico es una simplificación de la realidad observada con principios, teorías y leyes de él derivadas. Aun así, es una simplificación ele la realidad observada y tie ne, por tanto, el carácter de una abstracción experimenta l. 3. La deducció n . El e nfoque deductivo resulta de procesos a priori, de los q ue e originan hipóte is obre realidades no investigadas a partir de configuraciones siste matizadas, ya sea por la natu raleza de las cuestiones involucradas o por su pro pia complejidad. Las hipótesis formuladas son objeto de desarrollos teóricos, cuya factibilidad no se sujeta p or tanto a la medició n convencional, sino a la tipificació n de hechos o comportamie ntos derivados de abstracciones sobre la realidad concreta . Eso es, en esencia, lo que caracteriza e l m é todo deductivo de investigación. El empleo de uno u otro método de investigación p ara la construcción de s istemas o modelos de la economía depende de la naturaleza de los hechos económicos con los que se trabaja. El méLOdo inductivo es más apropiado para investigar aspectos de la realidad econó mica susceptibles de mediciones más p recisas. El método deductivo, a su vez, se utiliza para clasificar situaciones sujetas a nume rosas influe ncias entrelazadas, las cuales es difícil separa r en sus ele me nto relevantes para practicar observaciones, sistemas e interpre taciones derivadas de configuraciones estadísticas. Los principios q ue tratan de explicar e l comportamie nto racio nal de lo individuos en la e lección de patrones de consumo que maximicen su satisfacción son gene ralmente derivaciones del mé todo deductivo. Po r ejemplo, las relacio nes fu ncionales de dependencia e ntre e l ingreso y el consumo de la sociedad en su conjunto resultan de la aplicación conve ncional del método inductivo sobre multitud de datos obte nidos siste máticame nte. A finales del s iglo x1x, cuando se increme ntó el debate sobre la metodología más apropiada para la investigació n econó mica , Gustav c hmo lle r y Car! Me nger, dos pensadores de la llamada escuela histó rica alemana, al final de un largo debate denominado m ethode nstreit, o la batalla de los métodos, concluyeron que "la observación y la descripción, la definición y la clasificación, son actividades preparatorias. Pe ro lo que deseamos alca nzar por su inte rvenció n es el conocimiento de la interdependencia de los hechos econó micos. Po r ello, la inducción y la deducció n se hacen tan necesarias para el pensamiento cientifico como las extremidades derecha e izquierda lo son para ca minar". En realidad, no es la natu raleza de los métodos empleados lo que confiere mayor pertine ncia, propiedad o adaptació n a lo fundamentos, a las relacione de comportamiento, a las definiciones causa/ efecto y al modelo de economía. Estos tres atributos estimulan resultados a los cuales los economistas llegan por difere nte caminos ele sistematización metodológica. 32

lA COMPRENSIÓN DE lA ECONOMÍA

En la figura 1.7 e esquematizan lo métodos de inve tigación má importante . El trabajo preparato rio, pre liminar, es la observació n sistemática de la realidad, ya ea para el tratamie nto inductivo de configuracio nes cuantitativas o para la fonnulación deductiva de hipó tesis. Cuando e han observado si temáticamente, lo hechos en ge neral muestran que la realidad económica se comporta e n forma casi sie mpre ordenada, previ ible y teóricame nte susceptible de mod ificación, a pesa r de las casi indescriptibles rede de relaciones que se establecen entre los agentes econó micos y los principales ectores en que la actividad económica e n su conjunto puede er disgregada. Aunque formen parte de un gran conjunto de relacio nes sociales y sea n influidos --como ya lo anotamos- por asuntos extraeconómico , los hecho econó micos se manifie tan con cierta regularidad y de acuerdo con algunas condicio nes predeterminadas. Ésa e la razón po r la cual, e n economía, es posible definir las relaciones entre variables. La re laciones causales establecidas por vías deductiva o inductivas evidencian que la ob e rvació n sistemática de la realidad, en econo mía, es su ceptible de llamarse "inte rpretación científica ~. de lo que resulta n las forma usuale de descripción científica de la realidad econó mica: principios gene rales, teorías, leyes y modelos. El conjunto sistematizado de esas de cripciones es la expresión de la economía e n cuanto se considera ciencia social. Vistas en conjunto, son generalizaciones validad as por la ob ervación de la realidad concreta. on suposiciones teóricas probadas, o mode lo simplificadores conformado a partir de relaciones fu ncionale o de identidades q ue tratan de revelar los mecanismos que gobie rnan la realidad. El esquema de la figura 1.7 muestra también que hay un proceso pe rma nente de re tro alime ntació n en la construcción del conocimie nto económico . ue vas realidades exigen nuevos enfoques teóricos. Los hechos económicos, como e l resto de lo hechos sociales, contienen dos dimensiones: la te mporal y la espacial. La realidad econó mica varía e n e l tiempo y en el espacio, sujeta a la condiciones cambiantes que se de rivan de nuevas realidades culturales, políticas, institucionales, tecno lógicas o ambienta les. Por e llo se exigen reelabo raciones derivadas de nuevas observaciones sobre la realidad modificada: los po rulados de la economía, a pe ar de ser elaborados mediante métodos cie ntíficos, no se presentan como verdades definitiva . Desde luego, esta particularidad no diferencia per se a la econo mía de las demás ciencias. Las ciencias exactas y experimentales también están s ujetas a la validació n permanente de sus cuadros refe renciales y de sus hipótesis. En consecuencia, las simplificaciones e interpretaciones de la realidad , resultantes d e los trabajos de teorización y modelación, e confronta n pe rmanentemente con esa misma realidad. En el sistema metodológico de la construcció n de la econo mía , es fundamental la constante confrontación de los hechos con las generalidades teóricas, como lo registra Herskovits: 19 Ninguna ciencia social pued e cumplir sus objetivos s i n o se guía por el principio de que los problemas sólo puede n compre nde rse co n claridad y los datos solamente pueden conducir a interpre taciones válidas m e diante la continua r eferencia cruzada e ntre las hipótesis y los h echos.

El proceso de validació n puede darse no sólo mediante la comprobación deductiva de las hipótesis formu ladas, sino ta mbién por los resultados de la aplicación de e labo rac ione teórica a la realidad concreta . La formulació n de políticas econó mica se fu ndame nta gene ralmente e n conocimientos de rivados de siste matizaciones teóricas. En la confrontació n con la realidad se valida n o se rechazan, total o parcia lme nte, lo conocimientos acumulados. 19

Melville J. Herskovits, Antropología económica, Fondo de Cultura Econó mica, México, 1954.

EL ALCANCE Y l.AS UMITACIONF.S DE LA EC01' 0~fÍA

33

Fundame ntos teóricos y vinculación ideológica: las escuelas económicas

El atributo de la temporalidad, y en cierta fo rma también el de la dimensión espacial de la realidad econó mica, aparecen significativamente en cualquier tentativa de formulación del árbol genealógico de la economía, expresión acuñada por Samuelson 20 para señalar las interconexiones entre las principales escuelas del pensamiento económico. Ademá de esos dos atributos, la economía también tiene vínculos con diferentes corrientes ideológicas, dominantes o alternativas, desarrolladas en cada momento histórico. Las escuela del pensamiento econó mico correspo nden no sólo a conjuntos sistematizados e interconsistentes de princip ios teóricos, sino tamb ién a iscemas de ideas y de valores comprometidos con cuestio nes éti cas, p olíticas y sociales. En consecuencia , no están completamente desunidas la dirección y los resultados de la investigació n científica de cada escuela y su matriz ideológica. La figura 1.8 es una alternativa de pre entación de lo grandes tronco del árbol genealógico de la economía. Las interconexiones de las principales escuelas señalan que ninguna de ellas puede considerarse aislada, en el sentido estricto de la palabra. Cada corriente e cá vinculada, por razones ideológicas o por principios teóricos, a una o más corrientes anteriores. Como señalan Oser y Blanchfield,21 "las nuevas vertientes teóricas se basan generalmente en ideas predecesoras. Otras manifiestan su oposició n a las precedente y encaminan el pensamiento hacia nueva direcciones. Pero tan to en uno como en otro caso hay evidentes nexos entre las principales vertiente ~. Los nexos se dan por dos canales. El primero es el de la convergencia de los fundamentos teóricos. El egundo. y más importante, e el de la vinculación ideológica. Es tal la fuerza de esa vinculación que el estudio del surgimiento y evolución de las ideologías e sobrepone al estudio del su rgimiento y evolución de las principales e cuelas del pen amiento económico. El surgimiento y la consolidación de una ideología determinada se da en eres momentos distinto , resumidos así po r Chauí: 22 l.

2.

3.

La ideología se inicia como un conjunto

iscemático de ideas que los pensadores de una clase en ascenso producen para que esa clase aparezca como repre encante de lo intere es de toda la sociedad, legitimando la luch a de la nueva d a e por el poder. Prosigue po r el camino de la popularizació n y se conviert e en un conjunto de ideas y va lo res aceptados por todos cuanto son contrarios a la estructura dominante y consolidándo. e a medida que e interna en la conciencia ele todas las categorías sociales no dominantes de la sociedad . Una vez interiorizada y asentada, la ideología propuesta sustenta una nueva estructura d e dominación, a pesar de que los intereses de las ca tegorías ociale de donde emergió sea n reprimidos por los intereses particulares de la nueva clase dominante.

Fue así, desde esta perspectiva de interpretación , como surgieron y se desencadenaron lo grande troncos de la economía. El mercantilismo expre ó los intereses del Estado colonialista de los siglo xv1 y XVII. La fisiocracia y la escuela clásica tradujeron los ideales del liberali mo individualista del siglo XVIII: la creencia de que el bienestar de la sociedad podña alcanzarse

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20

Pau l A. amuelson y William O. Nordhaus, Economics, 4a. ed., McGraw-ll ill, Nueva York, 1992.

21

j acob Oser y William Blanc hfield, llistória do pensamento economico, Atlas, iio Paulo, 1983.

22

Ma rile na Chauí, O que é ideolog1a, .36. ed., Brasilie nse, iio Paulo. 1993.

1A CO~fPRE.."1 IÓN DE lA ECON O\ÚA

Figura 1.7 La con trucción de la economía: de Ja ob ervación i cematizacla de la realidad a la modelación implificadora e inrerpretaciva.

'

Método inductivo

Observación sistematizada de la realidad

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-

nr

l

'

Método deductivo

realidad

~

r

Abstracciones resultantes de configuraciones e información cuantitativa. Construcción de modelos validados por pruebas estadísticas

Abstracciones teóricas que implican situaciones y comportamientos no medibles a partir de configuraciones de la realidad concreta. ~ Esfuerzo de teorización sustituible de la validación experimental

L

Formulación de principios, teorías, leyes o modelos explicativos o interpretativos de la realidad

1

~

~

L_

1

...

Reelaboración resultante de nuevas observaciones o de cambios en las condiciones preexistentes

por medio de instiruciones como la propiedad privada de los medios de producción, la libe rtad de empresa y las fuerzas reguladoras de los mercados libres y de la competencia. Los fundamentos del fortalecimiento del Estado mercantilista e rigieron con las nuevas construcciones teóricas y doctrinarias de las escuela liberales. Posteriorme nte e forta lecieron lo ideales del socialismo como una reacción a las inequidades atribu ib les al orden liberal , como el notable y creciente distanciamiento e ntre lo empresarios y la d a e crabajadora. A partir del final de la primera mitad del siglo xrx, con el marxismo, la estrucrura teórica del pensamiento socialista e con olidó. Los fundamentos de una nueva concepción de la econonúa y del sistema del proceso económico estaban definidos. Parale lamente a la consolidación teórica y cientifica del ocialismo, la e cuela neoclásica, toda vía en el siglo x1x, trató de rescatar lo principios ideológico del mode lo liberal. EL ALCA''K E Y LAS UMITAC.10:\'F.S DE 1A EC0:-10\ÚA

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Mercantilismo Thomas Mun Gerard Malynes Jean Bodin Jean Baptiste Colbert

1700 -

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Transición mercanti lismo/liberalismo William Petty David Hume Richard Cantillon

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1750 -

Fisiócratas Frarn,ois Quesnay Robert Jacques Turgot Du Pont de Nemours ""',,_~

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1850-

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