Dialogo Sobre La Vida Carlo Maria Martini

May 10, 2018 | Author: olmohendido | Category: Stem Cell, Euro, Death, European Union, Science
Share Embed Donate


Short Description

Download Dialogo Sobre La Vida Carlo Maria Martini...

Description

DIÁLOGO SOBRE LA VIDA Coloquio entre el Cardenal Carlo Maria Martini e Ignazio Marino (científico católico -jefe de una unidad de trasplantes en Filadelfia)  Ideó y promovió el diálogo, el semanario “L’espresso” (21 de Abril de 2006)  Daniela Minerva! "rad#$o al %as&ellano An&onio '#a&o!

Querido do profe profeso sorr Mari Marino no,, he leído leído con con much muchoo inte interés rés su libr libroo “Cre “Creer er y cura curar” r”.. Me ha MART MARTIN INII – Queri impresionado, por una parte, su amor por la profesión médica y su interés dominante por el enfermo y, por otra, su objetiidad de juicio, su e!uilibrio al tratar los problemas fronteri"os, allí donde las e#i$encias médicas se encuentran y a eces parecen chocar con las e#i$encias éticas. %e isto cómo usted no desea renunciar ni a su objetividad profesional como médico ni a su conciencia como hombre y creyente. &odo esto parece muy importante para el “di'lo$o sobre la ida” !ue interesa justamente tanto a nuestros nuestros contempor'neos, contempor'neos, especialmen especialmente te en los casos límite límite en !ue los avances de la ciencia y de la tecnol tecnologí ogía, a, por una parte, parte, despie despierta rtann maravil maravilla la y gratit gratitud ud y, por otra, otra, suscit suscitan an preocu preocupac pación ión por la  persona humana y su dignidad. (or dignidad. (or eso es necesario necesario y urgente tener un “diálogo sobre sobre la vida” que no  parta de preconceptos ni de prejuicios, sino que sea sea abierto y libre, y a la ve respetuoso y responsable. responsable. MARINO – )eo también yo muchas ra"ones para un diálogo objetivo, profundo y sincero sobre sincero  sobre el tema de la ida humana. !ivimos !ivimos un momento momento histórico histórico especial en el que el progreso científico científico ha revolucion revolucionado ado la  posición del ser humano en relación con la vida, la enfermedad y la muerte. muerte. %oy, a diferencia de ayer, se puede nacer de muchas maneras diferentes, se puede curar con terapias e#traordinarias y mantener la ida durante mucho tiempo en una unidad de reanimación, en un estado !ue se puede puede llamar llamar “ida” “ida” simpleme simplemente nte desde desde el punto punto de ista ista de funcio funciones nes fisiol fisioló$i ó$icas cas.. "a muerte se considera cada ve más como un acontecimiento e#cepcional que debe ser evitado y no el fin natural al !ue cada ida humana lle$a ineitablemente. *stos cambios no sólo influyen en el curso de nuestra e#istencia sino también en nuestra manera de conceb concebir ir la ida, ida, la enferme enfermedad dad y la muerte. muerte. (or esta ra"ón, ra"ón, no es posible ignorar las innumerables  preguntas éticas que surgen de los continuos cambios ligados a las nuevas tecnologías y a las posibilidades posibilidad es que la ciencia pone a disposición de los hombres. *l di'lo$o en estos temas y el encuentro entre personas de formación diferente y papeles diferentes dentro de la sociedad puede contribuir a la circulación de ideas y de posiciones diri$idas a identificar puntos de encuentro, en e" de la diisión. +obre temas tan delicados, de hecho, el ries$o es caer en f'ciles contraposiciones e instrumentali"a ciones !ue no siren para nada !ue no sea crear fracturas en la sociedad. *n cambio, si el ra"onamiento se reali"a reali"a honestamente honestamente y con espíritu de sincera sincera apertura, es posible posible identificar identificar senderos comunes o por lo menos !ue no sean demasiado dier$entes.

El principio de la vida MARTINI – *stoy completamente de acuerdo con su premisa. $uando el progreso científico y tecnológico crean onas fronteria fronteriass o áreas grises, grises, donde no es inmediatame inmediatamente nte evidente lo que es el verdadero verdadero bien del hombre y de la mujer , se trate de un indiiduo en particular o de toda la humanidad, una buena regla regla debería debería ser abstenerse, abstenerse, sobre todo, de jugar jugar apresuradam apresuradamente ente para discutir discutir después después con serenidad , serenidad , de manera !ue no se creen innecesarias diisiones. (ienso !ue podríamos empe"ar un e#perimento de un di'lo$o de ese tipo empe"ando por el principio de la ida y, en concreto, por la pr'ctica cada e" m's com-n de la “fecundación médicamente asistida” y por el destino de los embriones !ue se utili"an para este propósito. o son pocas las diferencias de opinión sobre esto, e incluso incluso incertidumbres incertidumbres en la terminolo$ía terminolo$ía y la pr'ctica. pr'ctica. /Quiere usted clarificar clarificar este punto, desde su competencia0 MARINO – %oy es posibl posiblee crear la ida en una probeta probeta,, recurriend recurriendoo a la fecundación artificial. 1nte problemas de fecundidad dentro de una pareja, la fecundación artificial puede serir para completar una familia con un hijo. o obstante, en muchos países esta pr'ctica se ha e#tendido sin !ue hubiera una ley !ue la re$ulara. re$ulara. "a ciencia y sus aplicaciones médicas han caminado más rápidamente que los legisladores y, por eso ahora nos encontramos frente al problema de millares de embriones humanos con$elados y conserados conserados en los con$eladores con$eladores de clínicas clínicas para la infertilidad infertilidad,, sin !ue se haya decidido decidido cu'l debe ser su destino.

Diálogo sobre la vida

1

2a ley italiana actual, para eitar perpetuar la producción de embriones de resera !ue no se utili"ar'n, ha esco$ido una solución simplista3 crear sólo tres de una e" e implantarlos todos en el -tero de la mujer. (ero este n-mero, si se ra"ona sobre una base científica, debería ser fle#ible y determinado caso por caso, se$-n las condiciones médicas de la pareja. (ero la ciencia iene en ayuda para su$erir alternatias a la creación y la con$elación de embriones. *#isten tecnolo$ías m's sofisticadas !ue las utili"adas hoy, !ue preén la con$elación, no de embriones sino de oocitos en su etapa de dos pron-cleos, es decir, en el momento en !ue los dos pares de cromosomas, el de la hembra y el del arón, est'n todaía separados y no e#iste a-n una nuea cadena de 14. *n esta fase, no es posible determinar !ué camino emprender'n las células en el momento en !ue empe"ar'n a reproducirse3 podrían producir un bebé o dos $emelos monoci$óticos. o e#iste el embrión ni un nueo patrimonio $enético, así !ue no hay un indiiduo nueo. %esde el punto de vista biológico, no hay una vida nueva. &'o podemos pensar también nosotros que no e#isten desde el punto de vista espiritual y que por lo tanto no hay problemas para una persona de fe en fe  en alorar la idea de se$uir este camino0 MARTINI – *ntiendo cómo estas cosas an$ustian a muchas personas, especialmente a los m's sensibles en relación con los problemas éticos. 5 a la e" estoy conencido !ue los procesos de la ida, y por tanto también también los de la transmisión transmisión de la ida, forman forman un continuo continuo en el !ue es difícil individuar los momentos momentos de un verdadero cambio propiamente cualitativo. (l resultado de esto es que cuando estamos estamos tratando con la vida humana, debemos tener un gran respeto  y consideraci consideración ón con todo lo !ue de al$una manera, manera, desde su inicio, manipula o podría instrumentali"ar la ida humana. hu mana. (ero esto no si$nifica !ue no sea posible concretar momentos en los !ue todaía no se manifiesta nin$-n si$no de una ida indiidualmente distin$uible. Me parece !ue es el caso !ue usted menciona del oocito en la etapa de dos pron-cleos. *n este caso, me parece !ue la regla general del respeto puede compaginarse con el tratamiento técnico !ue usted su$iere. Me parece parece tambié tambiénn !ue lo !ue usted propone propone permitiría  permitiría superar el rechao de cualquier forma de  fecundación artificial que a)n está presente en no pocos ambientes y ambientes y !ue produce una dolorosa dier$encia entre la pr'ctica com-nmente admitida por las personas y sancionada por la ley, y la actitud –al menos teóric teórica– a– de muchos muchos creyentes creyentes.. *n todo todo caso, caso, manten manten$o $o !ue es oportuno hacer una distinción entre la  fecundación homóloga y la  fecundación heteróloga.  (ero me parece que un rechao radical de toda  forma de fecundación artificial está sobre todo basado en el problema del destino de d e los embriones . *n la propuesta !ue usted ilustra, este problema podría superarse.

La fecundación eterólo!a MARINO  6sted se ha referido también a la distinción entre la fecundación homólo$a y heterólo$a. *s un problema muy discutido. 4e hecho, si el deseo de la pareja por crear una familia no se puede cumplir por causa de problemas de infertilidad o de enfermedades genéticas en en uno de los dos potenciales padres, &por qué no recurrir al esperma o al ovocito de una persona fuera de la pareja* pareja* &'o podría representar esto una solución para satisfacer este deseo de familia* &$uenta más mantener el patrimonio genético* 7efle#ionando sobre este tema, mi primera ealuación estaría estaría a favor de la fecundación fecundación heteróloga, heteróloga, si este es el )nico medio para tener un ni+o y si para la mujer es importante importante quedar embaraada. embaraada. ero me he encontrado encontrado también con quien mantiene que no es raro que la fecundación fecundación heteróloga heteróloga introduca introduca un desequilibrio en la pareja entre el padre biológico, que transmite al hijo la parte de su -%', y el otro. 1l$unos de los estudios publicados en reistas científicas y reali"ados en los países donde se permite la  fecundación heteróloga han destacado el hecho de que se puede p uede crear un n)cleo familiar desequilibrado  psicológicamente a  psicológicamente a faor del padre !ue ha transmitido transmitido la parte de su patrimonio patrimonio $enético $enético al hijo, como si un $enitor fuera de al$-n modo m's alioso !ue el otro. /8tra /8tra cuesti cuestión ón tiene tiene !ue er con la transpa transparenc rencia3 ia3  &debería el ni+o concebido por la fecundación heteróloga heteróloga ser informado informado de este hecho* , si la respuesta respuesta es afirmativa, afirmativa, &es justo seguir caminos que  pueden crear traumas psicológicos, psicológicos , inclus inclusoo si se nace del deseo por tener un hijo0 hijo0  &rohibir por ley el recurso a la fecundación heteróloga significa limitar la libertad de los padres padres o se debe interpretar como una tutela a favor de las generaciones futuras*  MARTINI – 2as objeciones de una naturale"a psicoló$ica !ue usted ha recordado constituyen al$unas de las ra"ones !ue han blo!ueado a no pocos el acceder a la solución de la fecundación heterólo$a, aun cuando esto pudiera comportar el sufrimiento de al$unos. /e a+ade, desde el punto de vista ético, la protección de la relación privilegiada que con el matrimonio se instaura entre un hombre y una mujer. o obstante, mis refle#iones personales $iran también en torno a las situaciones !ue se crean con las ari arias as  formas de adopción y acogida, donde con independencia del patrimonio genético es posibles establecer una verdadera relación afectiva y educadora con personas personas que no son padres en el sentido físico de la palabra. +ería, por lo tanto, prudente al e#presarme en los casos !ue usted menciona, cuando no es Diálogo sobre la vida

2

 posible recurrir al óvulo en el interior de la pareja. 0anto más si se trata de decidir sobre el destino de embriones embriones de otro modo destinado a la destrucció destrucción, n, y para los que la implantación implantación en el seno de una mujer 1 a)n soltera1 parecería preferible a su pura y simple destrucción. 2e parece que estamos en una de esas áreas grises de !ue hablé antes, en la !ue la probabilidad mayor est' a-n del lado de los !ue recha"an la fecundación heterólo$a, pero en la !ue no es tal e" oportuno ostentar una certe"a !ue espera todaía de confirmación y e#perimentación.

Inve"ti!ación con c#lula" $adre e$%rionaria" MARINO – 2os problemas relacionados con embriones han proocado también encendidas discusiones sobre el uso para propósitos de inesti$ación de células madre mad re tomadas de embriones. +e puede suponer desde un punto de ista científico, aun!ue no haya sido a-n confirmado, !ue esas células embrionarias son las m's conenientes para propósitos de inesti$ación, para indiiduali"ar terapias !ue puedan curar enfermedades muy $raes, como el (ar9inson o el 1l"heimer, etcétera. *#isten otros tipos de células madre, obtenidas de tejidos adultos o del cordón cordón umbilical, !ue ya hoy son utili"adas con al$-n é#ito. $asi todos los investigadores convienen en el hecho de que no es necesario crear embriones embriones con el )nico  propósito de obtener células madre3 madre 3 se pueden conse$uir líneas celulares para reali"ar inesti$aciones y, adem's, adem's, estudios muy recientes recientes reali"ados en ratas han demostrado la posibilida posibilidadd de obtener células !ue ten$an las mismas características de las células madre embrionarias sin tener !ue crear embriones. Queda Queda pendien pendiente te la cuestión cuestión de los embriones embriones conservados conservados en las clínicas clínicas de infertilidad infertilidad y que muy  probablemente nunca serán utiliados por ninguna pareja. pareja . /u fin es cierto, pero &es mejor permitirles morir morir en el frío frío o utili utiliar ar sus preciosa preciosass células células para propós propósito itoss de investi investigac gación ión** (n pura pura ortodo ortodo#ia #ia religiosa, religiosa, se trata de vidas y como tales no pueden ser suprimidas suprimidas para obtener células células con propósitos propósitos terapé terapéutic uticos, os, aun cuando cuando alg)n día estos embrione embrioness serán serán destru destruídos ídos de todos todos modos. modos. /e trata trata de la distinción entre matar y dejar morir. /*s éticamente superable este punto0 /o es oportuno pedir la donación de células madre embrionarias para destinarlas a los laboratorios !ue inesti$an en enfermedades !ue son hoy incurables0 MARTINI – 1nte todo, decirle !ue estoy impresionado por la prudencia con !ue usted habla de la eficacia terapéut terapéutica ica de las células células madre. Me parece parece haber entendid entendidoo !ue estamos todavía en la etapa de investigación y investigación y !ue, por lo tanto, no es honesto honesto proclamar p)blicamente p)blicamente la certidumbre certidumbre en la eficacia curativa de estas células antes células  antes de !ue esto haya sido debidamente probado. 2e alegro de que no pareca ya necesario necesario crear embriones con el propósito de producir células células madre y de que se hayan desarrollado desarrollado métodos métodos alternativos alternativos que no plantean problemas problemas de conciencia. conciencia. *s un motio m's para confiar en la inteli$encia !ue el +e:or ha dado al hombre para !ue supere los problemas !ue la ida plantea. *n nombre de esta esta mism mismaa inte inteli li$e $enc ncia ia,, no me pare parece ce acep acepta table ble utili utilia arr célu célula lass madr madree embr embrio ionar naria iass para para la investigación. (sto estaría en contra de todos los principios  e#puestos hasta ahora.

Lo" e$%rione" con!elado" e&i"tente" contestac tación ión me permite permite e#tender e#tender nuestra nuestra refle#ión refle#ión sobre el destino de los embriones MARI MARINO NO – +u contes e#istentes. e#istentes. Cuando ya no an a ser utili"ados, /!ué sería ético hacer0 %asta %asta ahora ahora no se ha encontrado más solución que dejar las probetas en los congeladores . (ero &es (ero  &es éticamente correcto y aceptable tolerar que millares de embriones humanos se se queden congelados en las clínicas de infertilidad, esperando simplemente que e#piren en el frío con el pasar de los a+os*  &'o podrían, por ejemplo, ser donados a mujeres solteras que quieran quedar embaraadas* &3 a  parejas con problemas ligados a enfermedades genéticas que no pueden recurrir a la fecundación artificial normal para evitar el riesgo de transmitir un defecto genético* MARTINI – Me parece !ue aquí estamos frente a un conflicto de valores, valores , !ue es m's eidente en el caso de la mujer soltera !ue !uiere lle$ar a estar embara"ada, pero !ue también se plantea, por las ra"ones !ue antes e#pli!ué, en el caso de las parejas !ue por ra"ones médicas $raes no pueden acceder a la fecundación artificial normal. %onde hay un conflicto conflicto de valores, valores, me parece parece éticamente más significativo significativo inclinarse hacia la solución que permita a una vida que prospere, prospere, antes que dejarla morir. ero entiendo que no todos compartan esta opinión. +ólo opinión.  +ólo !uisiera eitar un cho!ue en base a principios abstractos y $enerales cuando, por el contrario, nos encontramos encontramos en una ona gris en la que lo apropiado apropiado es no entrar con juicios concluyentes. Diálogo sobre la vida

3

La adopción por per"ona" "ola" MARINO – %ay también otros problemas conectados al desarrollo de la ida, y en concreto al cuidado cuidado que la sociedad debe tener con los ni+os que no tienen una familia . *n estos casos se plantea la posibilidad la  posibilidad y la utilidad , la necesi necesida dadd casi casi,, de una adopción. adopción . *n muchos países hoy, la adopción no es admitida por personas solas y, en $eneral, la legislación legislación es muy compleja compleja y hace difícil cualquier cualquier tipo de adopción adopción.. 5o me pre$unto si, desde el punto de ista ético, es preferible preferible que un ni+o huérfano o abandonado abandonado por sus  padres pase la vida en una institución o en la calle en ve de tener una familia compuesta de un padre sin  pareja. &(stamos seguros de que ésta es la manera correcta de garantiar la mejor educación posible para este ni+o* 1dem's, si uno de los progenitore progenitoress pierde a su pareja, pareja, a)n después del nacimiento nacimiento de su primer ni+o, nadie piensa piensa que el ni+o no deba continuar continuar viviendo en su familia nuclear, nuclear, aunque haya sólo el padre o la madre. madre. -demás, la 4glesia sostiene que en presencia de un feto, en las circunstancias circunstancias que sean, se debe invita invitarr a la mujer a llevar llevar su embarao embarao hasta hasta el final, incluso incluso si el padre está está ausent ausentee o se opone al embarao, con lo que se trata de apoyar a una madre que de hecho, en términos prácticos, es soltera. &-sí que por qué no defender defender la adopción por personas personas solas, una ve que se ha constatado constatado la motivación, motivación, los medios y la capacidad para asegurar una educación pacífica al ni+o adoptado*  MARTINI  – 6sted plantea pre$untas $raes y ra"onables en un tema complejo, donde yo no ten$o la e#periencia suficiente. (ero pienso !ue el punto de partida es la condición !ue usted e#presó al fin. *s necesario ase$urar !ue !uien deba cuidar del ni:o adoptado ten$a la motiación apropiada y también los medios y la capacidad para ase$urarle una educación serena. /Quién cumple estas condiciones0 *n primer lu$ar, ciertamente, una familia compuesta de un hombre y una mujer !ue ten$an conocimiento y madure", y !ue puedan proporcionar también una red de relaciones intrafamiliares para fomentar el crecimiento de ni:o desde todos los puntos de ista. 1 falta de esto, est' claro !ue otras personas, incluidos indiiduos solos, podrían proporcionar al$unas $arantías esenciales. 1sí !ue yo no me limitaría sólo a una posibilidad, sino !ue dejaría a los responsables el determinar cu'l es de hecho la mejor solución, a!uí y ahora, para este ni:o. 2a meta deber' ase$urar las condiciones m's faorables !ue sean en la pr'ctica posibles. 1sí, cuando hay la posibilidad de esco$er, se debe hacer la mejor elección.

El a%orto MARINO – 6no de los temas m's difíciles de afrontar, sobre el !ue se nos pre$unta constantemente a causa de su delicade"a y complejidad, es el aborto. *n ;talia, el *stado ha re$ulado este asunto esfor"'ndose en conju$ar el principio de autodeterminación de las mujeres con la libertad de conciencia de los médicos, !ue pueden esco$er la objeción. *n los -ltimos a:os, hemos podido er los efectos de la le$islación del aborto. 1un!ue cada uno recono"ca !ue el aborto siempre constituye un fracaso, nadie puede ne$ar !ue la ley ha permitido reducir el n)mero total de abortos y ha controlado controlado los abortos clandestinos, clandestinos, evitando el riesgo de muerte a mujeres que se e#ponían a desastres como la perforación del )tero hecha por “comadronas” al inducir el aborto.  &$uál es la  posición  posición de la 4glesia frente a casos e#tremos como como el de la mujer que ha sido violada, el embarao embarao en una adolescente de once o de doce a+os de edad, una mujer sin medios económicos para educar a un ni+o* &/i uno admite el principio de la elección del menor de dos males, o, como sugiere sugiere la 4glesia $atólica, $atólica, el de confiar la decisión a la conciencia individual 5“conciencia perpleja”6 la condición en la que un hombre o una mujer a veces se encuentran al afrontar situaciones de juicio moral incierto y de difícil solución7, no sería éticamente correcto e#plicar abiertamente este punto de vista y sostenerlo p)blicamente*

mucho sufrimiento. sufrimiento. Ciertamente Ciertamente hay que hacer MARTINI – cf. Mateo ?, @AB, pero e#hortaba e#hortaba a no tener Diálogo sobre la vida

4

miedo de “los !ue matan el cuerpo, pero no tienen el poder de matar el alma” >cf. Mateo D, @EB. "a vida vida humana debe respetarse y defenderse, pero no es el valor supremo y absoluto.  *n el ean$elio se$-n =uan, =es-s proclama3 “5o soy la resurrección y la ida3 !uien cree en mí, incluso si muere, iir'” >=uan ?, @AB. 5 +an (ablo a:ade3 “Manten$o !ue los sufrimientos del momento presente no se pueden comparar con la $loria futura !ue se deber' reelar en nosotros” >7omanos E, EB. 1sí !ue hay una di$nidad de la e#istencia !ue no se limita a la sola ida física, sino !ue tiene !ue er con la ida eterna. *so supuesto, me parece !ue incluso en un tema doloroso como el del aborto 5que, como 5que, como usted dice, siempre representa un fracaso7 es difícil que un estado moderno no intervenga intervenga al menos para impedir una situación salvaje y arbitraria. 5 me parece parece !ue, en situac situacion iones es como las nuestra nuestras, s, sería difícil que el estado no planteara una distinción entre actos punibles por ley y actos que no es conveniente castigar castigar por ley. *sto ley. *sto no !uiere decir en absoluto “licencia para matar”, sino !ue el estado prefiere no intervenir en todos los casos posibles, posibles, pero se esfuera por reducir el n)mero de abortos, abortos, en impedirlos impedirlos con todos los medios medios posible posibles, s, especi especialm alment entee después después de un cierto cierto tiempo tiempo desde desde el princi principio pio del embara embarao, o, y se compromete compromete a que disminuyan tanto como sea posible las causas del aborto y a e#igir precaucio precauciones nes para que la mujer que decida decida no obstante obstante llevar a cabo este acto, no punible penalmente penalmente en circunstanc circunstancias ias concretas, concretas, no resulte resulte herida gravemente hasta arriesgar arriesgar la vida. (sto sucede en particular particular,, como usted recuerda, en el caso de abortos clandestinos,  y por lo tanto, en resumidas resumidas cuentas, es positivo positivo que la ley haya contribuido a reducirlos y tienda a eliminarlos. Me ha$o car$o de !ue en ;talia, con la e#istencia del +ericio +anitario acional, esto implica una cierta cooper cooperaci ación ón en el aborto aborto por parte parte de las estructu estructuras ras p)blicas. p)blicas. !eo toda toda la dificul dificultad tad moral de esta esta situación, situación, pero yo no sabría actualmente actualmente qué sugerir, porque cualquier cualquier solución que se quisiera quisiera buscar implicaría probablemente aspectos negativos. (or esta ra"ón, el aborto es siempre algo dramático, que no  puede ser considerado en manera alguna como un remedio para la superpoblación, como me parece que sucede en ciertos países. atura aturalmen lmente te yo no preten pretendo do incluir incluir en este este juicio juicio las situac situacion iones es límite límite,, muy doloro dolorosas sas y quiás quiás también raras, raras, pero !ue se pueden presentar de hecho, en las que un feto amenaa gravemente la vida de la madre. *n madre. *n estos y en otros casos semejantes, me parece !ue la teolo$ía moral desde siempre ha apoyado el principio de la le$ítima defensa y del mal menor, aun!ue se trate de una realidad !ue demuestra la naturale"a dram'tica y fr'$il de la condición humana. (or esto la 4glesia ha proclamado también como heroica heroica y ejemplarment ejemplarmentee evangélica evangélica la conducta conducta de algunas mujeres que han escogido evitar cualquier cualquier da+o a la nueva vida que llevaban en sus vientres, aun a costa de pagarlo con su propia vida. ero no puedo aplicar este principio principio de la defensa defensa legítima y8o del mal menor a otros casos casos e#tremos e#tremos que usted usted antes antes ha plante planteado ado,, ni puedo puedo acoger acogerme me al princip principio io de la “concie “conciencia ncia perpleja perpleja”, ”, que no entiendo bien qué significa. 2e parece que a)n en los casos en los en que una mujer no pueda, pueda, para varias raones, raones, cuidar de su ni+o, no deben faltar otras personas o instituciones instituciones que se ofrecan ofrecan para criarlo y cuidar cuidarlo. lo. ero en todo todo caso, caso, sosteng sostengoo que se debe debe respet respetar ar a toda toda person personaa que, que, quiás quiás tras tras mucha mucha refle#ión refle#ión y sufrimiento, sufrimiento, en estos casos e#tremos e#tremos sigue su propia propia conciencia, conciencia, incluso si se decide a hacer algo que yo no estoy en condiciones de aprobar.

'(o$pen"ación por la donación de ór!ano") MARINO – %ay un tema !ue me ata:e directamente, dado !ue desde hace m's de einticinco a:os !ue yo me he ocupado de trasplantes de ór$anos. 9racias a los trasplantes millares de personas personas que de otro modo estarían estarían destinadas destinadas a una muerte cierta cierta han sido curadas y goan hoy de una vida muy completa completa desde todos puntos de vista. "a limitación primaria primaria en la e#pansión de esta terapia terapia es el n)mero insuficiente de donantes y de órganos para trasplantar, y como consecuencia muchas personas mueren en lista de espera. ara aumentar el n)mero de donantes, en donantes,  en al$unos países, principalmente Fran Greta:a, se ha planteado la hipótesi hipótesiss de establece establecerr una compensació compensaciónn para las familias que deciden donar órganos de parientes parientes después de la muerte. *sto muerte.  *sto podría llear probablemente a un aumento en el n-mero de donaciones y trasplantes, respondiendo así a las necesidades de enfermos !ue est'n en lista de espera del ór$ano !ue sale su ida. (ero esta hipótesis contiene en sí el presupuesto para un tratamiento desi$ual. desi$ual . &'o se corre el peligro de crear una situación en la que sólo los menos afortunados, incentivados por el estímulo de la compensación, estarían dispuestos a donar órganos, mientras mientras los más ricos se limitarían a recibirlos* & la donación, por su misma naturalea, no debería siempre siempre y e#clusivamente estar basada en el principio de la igualdad*

(ersonalmente siento mucho lo !ue usted afirma al final, es decir, la importanci importanciaa del principio principio MARTINI – (ersonalmente de i$ualdad y los peli$ros $raísimos $raísimos de una hipótesis hipótesis de compensación compensación por los ór$anos. ór$anos. Me parece !ue la alternativa alternativa correcta correcta es promover tanto como sea posible el principio de la donación donación y hacer crecer crecer la conciencia colectiva en este asunto. :abría que augurar que no haya quien muera en lista de espera mientras haya órganos disponibles. Diálogo sobre la vida

5

VI* + SIDA MARINO – 2a cuestión de la i$ualdad nos llea directamente a pre$untarnos sobre  problemas y enferme; dades que afligen a millones de personas en todo el mundo, sobre todo en los países más pobres y desfaorecidos, para !uienes la idea de la i$ualdad se !ueda en un sue:o lejano, si no en una utopía total. /Cómo no podemos pensar inmediatament inmediatamentee en el +;410 1lrededor de H@ millones millones de personas personas en el mundo llea el irus de la inmunodeficiencia humana >);%B. (n sólo, seg)n los datos proporcionado proporcionadoss por las agencia agenciass de la 3'?, 3'?, @ millon millones es de personas personas murieron murieron de /4%-, /4%-, mientr mientras as se registr registraro aronn > millone milloness de infecciones nuevas. (l A= por ciento de los portadores del virus vive en los países más pobres del Bfrica subsahariana, con una incidencia media en la población entre el A y el D por ciento, hasta el @AID por ciento en al$unos países como GotsJana o KimbabJe. *l );% es el aote de un continente que genera no sólo enfermos sino huérfanos, pobrea, imposibilidad de mejorar las condiciones condiciones de vida. (n el mundo 3ccidental hoy el virus se mantiene mantiene bajo control gracias gracias al progreso en las terapias farmacológicas !ue farmacológicas  !ue permiten !ue una persona seropositia llee una ida completamente normal, con una esperan"a de ida semejante a la de personas no afectadas por el irus. %asta hace al$unos a:os, el costo anual de medicamentos para una persona seropositia $iraba en torno a los die" mil euros, una cifra prohibitia !ue sólo podía sostenerse en países con un sistema nacional de salud. %oy los precios, en ré$imen de competencia, han bajado hasta situarse a mitad de @DDI en LDD euros para medicinas de marca >producidas por compa:ías farmacéuticas multinacionalesB y en unos @DD euros para productos productos $enéricos fabricados fabricados por ;ndia, Grasil y &ailandia. &ailandia. 1 pesar de estos lo$ros importantes, importantes, en muchos países africanos el $asto per capita en salud no supera los D dólares por a:o, lo !ue imposibilita de hecho el acceso a medicinas y terapias para luchar lu char contra el +;41, sin cesar de difundirse difundir se el irus. +abemos !ue contra contra el /4%- se puede luchar en parte con la prevención prevención y el uso de condones. &$ómo  puede aceptarse el no promover el uso de condones para contribuir al control control de la e#tensión del virus* &(s o no un deber de los gobiernos hacer opciones opciones y tomar decisiones decisiones en este asunto*  con respecto a la doctrina oficial de la 4glesia $atólica, &no se trataría de optar por una mal menor, contribuyendo contribuyendo a salvar muchas vidas humanas* MARTINI – 2as cifras !ue usted aporta proocan confusión y desolación. *n nuestro mundo occidental es bastante difícil tomar conciencia de cu'nto sufrimiento hay en ciertas naciones. %abiéndolas isitado personalmente, yo he presenciado este sufrimiento, !ue en $eneral es soportado con la mayor di$nidad y casi en silencio. (s necesario hacer todo lo posible para oponerse oponerse al /4%-. $iertamente, en algunas situaciones el uso de condones condones puede constituir constituir un mal menor. /e da la situación situación particular particular de esposos, esposos, uno de los cuales se contagia de /4%-. (l infectado está obligado a proteger al otro cónyuge, cónyuge , !ue debe estar también interesado en tomar tomar las medidas medidas protecto protectoras ras.. (ero (ero la cuestión está sin embargo en si es conveniente que las autoridades religiosas sean las que promuevan tales medios de defensa, defensa , casi como si se creyera !ue los otros medios moralmente sostenibles, incluida la abstinencia, deban ponerse en se$undo lu$ar, arries$ando así el promoer una actitud irresponsable. ?na cosa es el principio del mal menor , aplicable en todos los casos preis preistos tos por la doctr doctrina ina ética, ética, y otra cosa es determinar a quién corresponde e#presar tales cosas  p)blicamente. Creo !ue la prudencia y la consideración de las situaciones particulares diferentes permitir'n a todos contribuir efectiamente a la lucha contra el +;41 sin fomentar con ello conductas irresponsables. (ero creo !ue ha lle$ado el momento momento en nuestro di'lo$o de pasar a otra serie de problemas problemas !ue tienen !ue er con la ida, y precisamente a los problemas !ue se refieren a su final. *s necesario iir con di$nidad, di$nidad, y para ello morir también con di$nidad. di$nidad. 1hora bien, como usted sabe, sobre todo en 8ccidente, 8ccidente, se plantean problemas muy $raes.

El fin de la vida ciertamente piensa sobre todo en la eutana"ia, una palabra alrededor alrededor de la cual siempre siempre MARINO – 6sted ciertamente se crea una $ran confusión por!ue tiene m-ltiples si$nificados. (or esta ra"ón, yo prefiero no hablar en término términoss abstra abstracto ctos, s, sino sino e#presa e#presarme rme de manera manera muy concre concreta. ta.  &(s o no permisible que una persona induca voluntariam voluntariamente ente la muerte muerte de otra, que está gravemente gravemente enferma y sometida sometida a un dolor físico devastador, precisamente para aliviar este dolor*  rente dolor*  rente a una situación irreersible en !ue la muerte es ineitable, sosten$o !ue es absolutamente necesario administrar f'rmacos como la morfina, !ue aliian el dolor y permiten al enfermo a$uantar el paso de la ida a la muerte con mayor tran!uilidad. *sto es lo !ue se hace en estas circunstancias dram'ticas, en todas las unidades de reanimación en los *stados 6nidos . o mismo ;a pesar de mi sufrimiento como médico por!ue médico  por!ue uno !uisiera siempre salar la ida de su paciente, Diálogo sobre la vida

6

cuando trabajaba en los *stados 6nidos, tuve que decidir varias veces suspender suspender todo tratamiento tratamiento.. (s un momento momento doloroso para la familia, y, yo le aseguro, aseguro, para el médico también, pero es una aceptación aceptación honesta honesta de que no se puede hacer nada más que evitar la prolongación prolongación de un sufrimiento sufrimiento que es in)til y da+ino para la dignidad del paciente. ;talia paciente.  ;talia todaía no tiene una ley !ue re$ule este asunto, hasta el punto !ue si si$uiera ese mismo procedimiento en nuestro país, podría ser detenido y podría ser condenado de homicidio, aun!ue se trata simplemente de no ensa:arse con terapias sin sentido. o estoy en cambio de acuerdo con administrar sustancias tó#icas con el fin de parar el cora"ón de enfermo e inducirle inducirle la muerte. (ero aun!ue condene el acto, yo no estoy se$uro de !ue la persona !ue lo ejecute deba ser condenada. 4aré un ejemplo3 en una película reciente $anadora de un 8scar, “8ne Million 4ollar Gaby”, se describe el drama de una mujer reducida a un estado semie$etatio tras herirse $raemente en un accidente deportio, !ue pide a un hombre, su punto principal de referencia en la ida, !ue le ayude a terminar su sufrimiento físico y psicoló$ico. *l hombre inicialmente se nie$a, pero después acepta, acepta, por!ue él cree !ue esto es un acto de $ran amor hacia al ser humano !ue m's !uiere. -unque !uiere.  -unque yo no sea capa de justificar justificar la idea de suprimir una vida, me pregunto cómo en situaciones semejantes semejantes uno  puede condenar condenar el acto de una persona persona que obra obra a petición petición de un enfermo y guiado por por un puro sentimiento sentimiento de amor.  por otro lado, &es lícito aceptar el principio de no condenar a una persona que mata* MARTINI – *stoy de acuerdo con usted en !ue nunca puede ser aprobada la acción de alguien que induce la muerte de otro, especialmente si es un médico, médico, cuyo objetivo es la vida del enfermo, no la muerte. ero tampoco tampoco yo quisiera quisiera condenar a esas personas personas que llevan a cabo tal acción a petición petición de una persona impedida hasta ese e#tremo y guiadas por un puro sentimiento del altruismo, ni a quienes quienes en condiciones desastrosas, físicas y psicológicas, piden esto para sí mismos. ero mantengo mantengo también que es importante importante hacer las distinciones distinciones fundamentales fundamentales entre acciones que traen la vida y las que traen la muerte. *stas -ltimas nunca pueden ser aprobadas. Manten$o !ue en este punto siempre debe prealecer prealecer el sentimiento sentimiento profundo de confian"a confian"a fundamental fundamental en la ida !ue, a pesar de todo, encuentra si$nificado en cada momento de la e#istencia humana, un si$nificado !ue nin$una circunstancia por adersa !ue sea pueda destruir. (ero (ero sé !ue !ue no obst obstan ante te uno pued puedee e#per e#perim iment entar ar las las tenta tentaci cion ones es de la deses desesper perac ació iónn sobr sobree el si$nificado de la ida, y pensar en el suicidio para sí mismo o para otros, y por eso rue$o ante todo por mí y por los dem's, para !ue el +e:or proteja a cada uno de nosotros de estas pruebas terribles. (n todo caso, es muy importante importante estar cerca de los que están gravemente enfermos, enfermos, especialmente especialmente los terminales, terminales, y hacerles sentir que se les quiere y que su e#istencia tiene siempre un gran valor y está abierta a una gran esperana. (l médico, también, tiene una misión importante a este respecto.

En"a,a$iento terap#utico e interrupción del trata$iento MARINO – *n relación con este tema est' el del ensa:amiento terapéutico. "a tecnología actual es capa de manten mantener er vivos a enferm enfermos os que hasta hasta hace algunos algunos a+os ni siquie siquiera ra eran llevado llevadoss a una unidad unidad de reanimación. (l progreso científico permite la prolongación artificial de la vida  de una persona !ue ha perdido perdido toda esperan" esperan"aa de oler a un estado estado de salud salud aceptable. aceptable. (or esto  parece urgente encarar el  problema de la interrupción del tratamiento. $ada forma de ensa+amiento ensa+amiento terapéutico terapéutico debería debería ser evitada evitada porque se opone al respeto respeto debido a la dignidad dignidad humana. humana. (ara la ;$lesia, la suspensión del tratamiento se considera como la aceptación de un acontecimiento natural, una decisión de no for"ar m's las cosas. *l Catecismo de la ;$lesia Católica dice3

“"a interrupción de procedimientos médicos onerosos, peligrosos, e#traordinarios o despropor; cion cionad ados os al resu result ltad adoo espe espera rado do pued puedee ser ser legí legíti timo mo.. (n ese ese caso caso se produ produce ce la renun renunci ciaa al ensa+amiento ensa+amiento terapéutic terapéutico. o. 'o se quiere causar la muerteC muerteC se acepta acepta la incapacidad incapacidad de evitarla. "as decisiones deben ser tomadas por el paciente si él es competente y capa capa o, si no, por quienes están legalmente autoriados a actuar actuar por el paciente, respetando siempre su raonable voluntad y sus intereses legítimos.” (#isten (#isten instrume instrumentos ntos legales, legales, como como el testame testamento nto vital, vital, que permiten permiten a un individu individuoo indicar indicar con  precisión,  precisión, y en un momento de la tranquilidad tranquilidad emocional, emocional, hasta qué punto desea aceptar aceptar el recurso recurso al tratamiento e#traordinario. *l e#traordinario.  *l testamento ital ital representa un instrumento sumamente sumamente 'lido para ayudar al médico y a la familia a tomar la decisión decisión final. 4ebería basarse en re$las fle#ibles e indicar a una persona de confian"a para !ue interprete los deseos de ese indiiduo, teniendo presente el pro$reso científico posterior. Muchos países han adoptado esto con resultados buenos. *n ;talia, un proyecto de ley fue presentado al senado tiempo atr's, pero a$uarda todaía el debate. &'o debate.  &'o sería este el momento de empear una refle#ión seria y compartida para introducir tan pronto como sea posible una ley sobre el final de la vida, uno de los momentos más importantes de nuestra e#istencia*

Diálogo sobre la vida

7

MARTINI – *l pasaje !ue usted citó del Catecismo de la ;$lesia Católica lo dice todo. (ero si uno !uiere le$islar en este asunto, es importante que no se introducan escapatorias que conducan conducan hacia la llamada eutana eutanasia sia de la que hablamos hablamos antes. antes. or esto dudo sobre sobre el instru instrumen mento to del testame testamento nto vital. vital. 'o he estudiado estudiado este tema y no sabría dar una opinión definitiva. definitiva. 2antengo 2antengo con usted que una refle#ión refle#ión seria y compartida compartida sobre el final de la vida podría ser )til,  con tal !ue sea sinceramente sinceramente seria y compartida compartida,, sin prestarse a una especulación partidista y, sobre todo, sin introducir de al$-n modo aperturas a un tipo de decisión sobre la propia muerte !ue repu$nan al sentido profundo de la ida, como se ha dicho antes.

La ciencia + el "entido del l-$ite conocimie miento nto,, el progre progreso so cientí científic fico, o, los avance avancess tecnoló tecnológic gicos, os, crean crean las oportu oportunid nidade adess MARINO –(l conoci e#traordin e#traordinarias arias para el crecimiento crecimiento de nuestro planeta. planeta. ero al mismo tiempo ellos depositan depositan un gran  poder en manos de investigadores y científicos, ya científicos,  ya !ue ellos est'n en disposición de interenir en los mecanismos !ue re$ulan el principio de la ida y su fin. "a ciencia corre más rápida que el resto de la sociedad, y también más rápida rápida que los legisladores legisladores,, encargados de establecer las reglas y que muy a menudo son incapaces de intervenir a tiempo. 4esde mi punto de ista, debería e#igirse con firmea a los científicos implicados que asumieran su responsabil responsabilidad idad en un campo de investigación investigación en el que está en juego la esencia de la vida, su creación creación y su final. (artiendo del principio de !ue la ealuación racional es imprescindible, el inesti$ador debería ser tambié tambiénn discip disciplin linado ado en el uso de su liberta libertadd por un sentid sentidoo de respo responsa nsabili bilidad dad ponderado ponderado tras una evaluación de los riesgos y consecuencias. o se trata de apelar a la fe ni a la reli$ión sino de acentuar una toma de conciencia por por parte de cada científico científico.. *sto no significa querer detener el progreso progreso científico, científico, sino preservar preservar y respetar respetar nuestro bien más precioso, la vida. ero la historia desgraciadamente nos ense+a que una apelación a la responsabilidad responsabilidad individual a veces no es suficiente. suficiente. or esta raón, los científicos deben proporcionar proporcionar toda la )til información información que ellos tienen, y al final deben ser los parlamentos o, mejor, las instituciones trasnacionales quienes establecan establecan las reglas en reglas en base al sentir com-n de los ciudadanos. (stamos todos repletos de admiración admiración y de asombro, asombro, y por tanto también de agradecimiento agradecimiento a MARTINI – (stamos %ios, por el formidable formidable progreso progreso científico y tecnológico tecnológico de estos a+os, a+os, que permite permite y permitirá permitirá siempre siempre  procurar más y mejor la salud a las personas. -l mismo tiempo ti empo somos conscientes , como usted dice, del  gran poder que tienen en sus manos los investigadores y científicos y de la firme asunción de respon; sabilidad que debe permitir a ellos realiar su investigación sin dejar de evaluar los riesgos y las consecuencias de sus acciones. Dstas siempre deben contribuir al bien de la vida y nunca a lo contrario. (or esto es necesario saberse parar, no sobrepasar los límites. 2e inclino a alimentar la esperana en el sentido sentido de responsabil responsabilidad idad de estos hombres hombres y quisiera quisiera que ellos tuvieran tuvieran la libertad libertad de investigac investigación ión e iniciat iniciativa iva que permit permitier ieraa el avance avance de la cienci cienciaa y de la tecnolo tecnología gía,, respet respetand andoo al mismo mismo tiempo tiempo los  parámetros inatacables de la dignidad de cada persona humana. /é también que nosotros no podemos  parar el progreso científico, pero le podemos ayudar a los científicos a ser cada ve más responsables. $omo usted usted dice, no se trata de apelar a la fe ni a la religión, religión, sino de se+alar al sentido ético ético que cada uno tenemos dentro de nosotros. n osotros. Ciertamente, Ciertamente, también también las leyes buenas y oportunas oportunas pueden ayudar, ayudar, pero como usted afirma, afirma, hoy la ciencia corre más rápida que los parlamentos. 1sí !ue lo !ue se necesita es una sacudida de la conciencia y un a:adido de buena oluntad para conse$uir !ue el hombre no deore al hombre, sino !ue le sira y le ayude. &ambién &ambién las institucio instituciones nes trasnacionales trasnacionales deben estar alerta del peli$ro peli$ro !ue todos corremos corremos y de la necesidad de interenir oportuna y responsablemente. (n toda esta materia cada uno de nosotros nosotros debemos aportar aportar nuestra parte6 los científicos científicos,, los técnicos, técnicos, las universidades universidades y los centros de investigació investigación, n, los  políticos, los gobiernos y los parlamentos, la opinión opinión p)blica y también las 4glesias. (n cuanto concierne concierne a la 4glesia $atólica, $atólica, quisiera subrayar subrayar sobre todo su papel formativo. formativo. (lla está llamada llamada a formar formar conciencias, conciencias, a ense+ar ense+ar el discernimient discernimientoo de lo mejor en cada situación, situación, a mostrar mostrar las motivaciones profundas para las buenas acciones. (n mi opinión no serán muy )tiles las prohibiciones y los “no”, sobre sobre todo si son prematuros, prematuros, aunque a veces será necesario necesario saber decirlos. decirlos. "o más )til será una  formación de la mente y del coraón hacia el respeto, el amor y el servicio de la dignidad de la persona en todas todas sus manifest manifestacio aciones nes,, con la certe certeaa de que cada ser ser humano humano está destinad destinadoo a partic participa iparr de la  plenitud de la vida divina y que esto puede e#igir también sacrificios y renuncias. 'o se trata de oscilar oscilar entre rigorismo rigorismo y la#ismo, la#ismo, sino de dar los motivos espirituale espiritualess que conducen conducen al amor al prójimo prójimo como a sí mismo 1o, más bien, como %ios nos ha amado1 y también al respeto respeto y amor a nuestro nuestro cuerpo. cuerpo. Como afirma +an (ablo, el cuerpo es para el +e:or y el +e:or es para el cuerpo. uestro cuerpo es templo del *spíritu *spíritu +anto !ue est' dentro de nosotros nosotros y !ue tenemos de 4ios3 4ios3 por esta ra"ón,

Diálogo sobre la vida

8

nosotros no pertenecemos a nosotros mismos y estamos llamados a $lorificar 4ios en nuestro cuerpo, es decir, en la totalidad de nuestra n uestra e#istencia sobre esta tierra >cf.  Corintios ?,I y N@DB.

Diálogo sobre la vida

9

View more...

Comments

Copyright ©2017 KUPDF Inc.
SUPPORT KUPDF