DESESPERANZA APRENDIDA

DESESPERANZA APRENDIDA

El primero en acuñar el tèrmino desesperanza aprendida fue Abraham en 1911 pero no fue hasta la década del sesenta del pasado siglo que se logro una definición operativa de la misma a partir de un descubrimiento por casualidad mientras se estaban realizando experimentos pavlovianos con perros. En 1967 Martin Seligman y Overmaier diseñaron y condujeron el primer experimento con perros.Consistia en un grupo de control al que se le aplicaban pequeños shocks eléctricos que los mismos podían evadir por si mismos una vez aprendida la manera y un grupo con los mismos shocks electricos pero con las características de incontrolabilidad por parte de los perros Pasado un dia en el que se suponía que se habían disipado los efectos del stress de la prueba se los sometia a los shocks eléctricos con el resultado de que los perros que habían sido expuestos a la incontrolabilidad del estimulo adversivo no hacían intentos por escapar del mismo a diferencia de los de control que si aplicaban técnicas exitosas para hacerlos cesar El experimento fue replicado luego con muchas especies infrahumanas con el mismo resultado significativo Fue en 1974 cuando Hiroto realizo un experimento análogo con humanos con ruidos molestos como estimulo adversivo también con resultados estadísticamente significativos Martin Seligman fue quien propuso estos hallazgos como modelo de la depresión humana El mismo autor en 1975 daba esta definición de la Desesperanza aprendida “ Una persona o un animal se siente desamparado con respecto a cierto resultado cuando el resultado ocurre independientemente de sus respuestas voluntarias” Cuando se lo extendió a humanos inmediatamente se percataron que además de la falta de control se sumaba la experiencia subjetiva de fracaso En el curso de la historia del concepto en psicología se propusieron distintas causas a los resultados obtenidos En el caso de los animales se adujeron razones antagónicas: la habituación adaptativa al dolor o una sensibilización que producia paralisis por miedo

Seligman y Abramson lo atribuyeron tanto en animales como en humanos a una expectativa de no control Wartman y Brehm establecieron que la tarea requeria de tener gran importancia para los sujetos Frankel y Snyder en 1978 conceptualizaron la hipótesis de la evitación para la protección de la autoestima en humanos Lo cierto es que en humanos se destacan los siguientes efectos de la Desesperanza aprendida estos son: A)Enlentecimiento de las respuestas si las hay B)La generalización a otras tareas C) Con un entrenamiento de escasa duración se observa una reactancia es decir un mayor desempeño

Mikulincer sostiene con apoyo experimental que la Desesperanza aprendida consiste en un conjunto de ajustes que el sujeto hace con el objetivo de reequilibrar una disrrupcion con su medio La estrategia de ajuste puede o no ser adaptativa Vg cuando a la evitación del estimulo adversivo se le suma el consumo de alcohol y/o drogas Solo mencionaremos algunas de las màs importantes puesto que se han recopilado cerca de cien estrategias de ajuste Ellas se dividen en aloplasticas cuando van dirigidas a modificar su ambiente y autoplasticas cuando son dirigidas en orden a la modificación de esquemas valores o estructura de la persona misma Alguna de ellas son: La evitación tiene la virtud de disminuir el stress de la Deseperanza aprendida pero la misma no mejora la solución de problemas La reorganización de esquemas y fines que es autoplástica y fue destacada por Alfano y Lazzari La rumiacion mental En gral susceptible de conciencia y consiste en procesar constantemente los problemas a encarar Puede ser adaptativa orientada al logro Puede basarse en el fracaso (Què hice mal?) Puede discurrir sobre un éxito obligado (Debo…)

Para algunos autores existe una rumiacion autonómica no conciente en general desadaptativa Tono emocional: primeramente suele ser ira y miedo ante la frustración con lo que se favorece la reactancia y con la continua exposición se llega según Seligman a la depresión El tipo de valoración de la tarea La magnitud de la expectativa de control Duval en 1972 destaco la predominancia del foco de atención puesto en el yo Cabe destacar que la patología no esta dada por el ajuste en si mismo que puede ser un mecanismo adaptativo sino en su exceso o defecto en analogía con los mecanismos de defensa del yo psicoanalíticos

Deciamos que los déficits son de cuatro ordenes : Motivacional lo que produce la paralisis o el enlentecimiento Cognitivo que produce un cierto estupor ante la tarea Emocional con depresión Baja de la autoestima

Ahora bien una vez una vez que una persona siente desamparo se pregunta PORQUE y su respuesta determina la generalidad y la cronicidad del déficit Podemos distinguir un adentro de un afuera, en el adentro radican las diversas maneras de atribución , asi, no solucione un problema porque no puse el suficiente esfuerzo Personal –Inestable o bien porque soy un estúpido Personal estable o en el afuera diciendo que el problema es insoluble Universal estable etc Estos distintos tipos de atribuciones darán como consecuencia mas o menos déficits de desesperanza aprendida asi como distintos niveles de autoestima Los déficits pueden ser globales extendidos a todas las actividades del sujeto o específicos vg soy malo para las matemáticas A su vez la atribución de estabilidad ( nada va a cambiar) o inestabilidad al resultado desfavorable funcionara como determinante o no de la cronicidad

Estrategias para el cambio de conducta

A) Cambiar la probabilidad del resultado aversivo por cambio de ambiente B) Revalorizacion de los distintos resultados y aun cierta resignación C) Pasar de una atribución de incontrolable a una de controlabilidad D) Cambiar a externo , inestable o especifico

Una verdadera inmunización contra la desesperanza aprendida la otorgan los éxitos subsecuentes o aun el recuerdo de los logros obtenidos

BIbliografia

Learned Helplessness in Humans: Critique and Reformulation ; Abramson, Seligman y Teasdale Lecciones estrategicas de la desesperanza aprendida; J Bruce Overmier en Revista Latinoamericana de Psicologia vol 18 nª 3 1986 Human learned helplessness. A coping perspective ;Springer science N York 1994