Desafios de La Educacion

DESAFIOS DE LA EDUCACION INTRODUCCION En la actualidad la historia de la educación se ha desvanecido. La educación pareciera que se ha quedado sin historia y con ello ha entrado en una vorágine que persigue cambios incesantes pero sin que ocurra realmente algo. La orientación de la educación se inspira en un instrumentalismo que sólo alcanza metas o estándares mediante un eficientismo administrativo. En otras palabras hemos perdido su norte. Pareciera ser que con la pérdida paulatina en la fe del progreso y la irrupción de discursos de crisis en distintos ámbitos de la vida, se paraliza el proyecto emancipativo del sujeto autónomo y del compromiso social frente a sus ciudadanos. El desafío de la historia de la educación consiste en un trabajo de reconstrucción. Se trata de reconfigurar constantemente los orígenes de la fundación de nuestra sociedad. En el marco de una democracia deliberativa abierta a lo local y a lo cosmopolita se emprende un esfuerzo que pone a prueba las capacidades para dialogar y recuperar los diversos discursos. Al final de cuentas se trata de reescribir la historia de la educación, completar la historia con una nueva fuerza que no construye el futuro para retornar al pasado, sino cómo se construyen incluso futuros que arrastren las fuerzas del pasado. Con ello, podremos reconocer que cualquier planteamiento histórico de la educación que se construya está llamado a atender demandas justas de indígenas, mujeres, jóvenes, ambientalistas y otras formas de expresión en medio de una sociedad que reconoce la diversidad.

EL MUNDO EN CAMBIO VERTIGINOSO Las organizaciones deben desarrollar estrategias que puedan crear y sostener el valor empresarial en la era del cambio acelerado. Es importante entender qué tipos de transiciones ocurren, cómo diseñar empresas que tomen ventaja de estas transformaciones y cuáles son los factores claves en que los presidentes se deben enfocar para asegurar que sus compañías puedan moldear el cambio en vez de ser moldeados por él. Los cambios actuales en el mundo se resumen así: 1. Globalización 2. Innovación 3. Tecnología 4. E-Commerce 5. Gerencia de Conocimiento 6. Creación de Valor 7. Diseño Organizacional Si se analizan en detalle aquellos factores, se comprenderá que los individuos deben moverse en un mundo cada vez más global. Las ideas y las actuaciones de la gente deben ser innovadoras porque la tecnología y el comercio electrónico han cambiado la forma de hacer negocios y la manera en que se transmite el conocimiento. El marco organizacional exige a las personas flexibilidad, agilidad y trabajo en equipo. El resultado de la nueva plataforma empresarial es que las personas crean soluciones óptimas y las compañías se convierten en entidades capaces de adaptarse a las circunstancias y facultadas para el aprendizaje. Los conocimientos, habilidades y comportamientos individuales son las denominadas competencias que deben tener, desarrollar y adquirir las personas en el mundo de hoy. La educación debe crear ventajas competitivas sostenibles y una de las ventajas que puede crear y que es difícilmente “copiable” por los competidores, es contar

con un talento humano con las competencias requeridas para enfocarse a la satisfacción del cliente y a la auto renovación continua. Las competencias nacen de la estrategia de los negocios y su importancia ha sido haber mejorado la productividad de las organizaciones, a través de mejorar el desempeño individual. Por ende, estas se deben poder medir, deben ser observables, alineadas a la estrategia y generadoras de ventajas competitivas. ¿Cuál es la diferencia entre el enfoque de competencias y los perfiles tradicionales? Las competencias van más allá de los perfiles por cargo. Si bien estos últimos son una forma de describir las características que una persona debe tener para desempeñarse bien en un determinado puesto, su visión es estrecha, muy especializada y centrada en el presente. No se atan a la estrategia del negocio, a los resultados particulares de un ambiente de trabajo o al desempeño deseado de la persona en el futuro. En cambio, las competencias representan el desempeño de los individuos, de acuerdo con la estrategia del negocio y a los valores culturales de una organización. Las competencias se identifican a partir de los comportamientos que adoptan las personas para lograr desempeños extraordinarios, que garanticen el crecimiento empresarial.

Las

competencias

se

enfocan

en

los

comportamientos,

conocimientos, habilidades, actitudes y valores de las personas que requiere el negocio para construir una ventaja competitiva. En otras palabras, se basan en las conductas que caracterizan y diferencian a los individuos excelentes de los del promedio. Las competencias describen la calidad del trabajo que una compañía espera de su fuerza laboral. Un modelo de competencias se crea a partir de valores particulares que buscan retar a las personas a mejorar su desempeño para optimizar los resultados. El modelo de competencias pretende focalizar a las personas en las áreas en que podrán realizar con éxito su labor. Utiliza un criterio amplio, basado, sobre todo, en los roles o papeles que desempeñarán las personas y menos en los cargos específicos que ejecutan. Es decir, un enfoque polivalente — palabra que se utiliza

en el medio para denominar la capacidad de una persona para desempeñar diferentes roles— es la respuesta ideal al armazón educativol de la actualidad, que está conformado por estructuras más planas, menos jerárquicas, y en la necesidad de responder con eficiencia y rapidez a los cambios constantes del mundo de negocios. El modelo de competencias cambió el criterio con el cual se definía el éxito. Ya no importan los títulos de los cargos y los grados jerárquicos para escalar dentro de una organización. Lo que importa son las competencias que un individuo demuestre tener y su actitud para adquirir más competencias que lo habiliten para desempeñar diferentes roles. El modelo ayuda a crear una cultura de aprendizaje institucional, en la que la gente tiene claro qué competencias debe desarrollar para tener éxito, y en la que la organización otorga herramientas de auto aprendizaje y recompensa a quienes adquieren y desarrollan las competencias más relevantes. LAS TRANSFORMACIONES DEL SISTEMA EDUCATIVO El pensamiento actual tiene sus cimientos en el pensamiento moderno del siglo XVI, el cual fue inaugurado por la burguesía cuando las luchas de poder entre lo medieval y lo humano trastocaron el paradigma existente permitiendo un cambio radical del pensamiento de la época. Descartes, filósofo francés, inaugura este nuevo pensamiento de racionalismo antropocéntrico, donde incita a un culto a la razón desplazando el culto a Dios. Se hunde el modelo científico del geocentrismo y nace una nueva manera de entender al universo y el papel del planeta tierra, el heliocentrismo. La ciencia y la religión, las más importantes “fuentes” de la verdad, fueron cuestionadas por varios filósofos y científicos, quienes por miedo a nefastas represiones por parte de la Iglesia a través de la Inquisición, no publicaban todas sus obras y cuidaban lo que exponían. Galileo Galilei, fue acusado de hereje por el Santo Oficio tras afirmar que la tierra se movía alrededor del Sol, esto quedaría en las mentes de sus sucesores. Sin embargo, poco a poco nace y se expande el pensamiento cartesiano como una respuesta a la incertidumbre, a los cuestionamientos de las enseñanzas eclesiásticas, nace para construir un nuevo

método de investigación que permitiera la creación de una ciencia verdadera y universal. El sistema actual se analiza fraccionadamente, se le divide, se le mecaniza, se le matematiza. Al analizar nuestro sistema de forma fraccionada estamos perdiendo la visión de conjunto, lo que precisamente define al sistema como tal, estamos obviando su tejido de relaciones, ignorando las diversas conexiones y negando finalmente el sentido de la existencia humana. Hoy por ejemplo, la medicina occidental a diferencia de la oriental, se enfoca en una parte del cuerpo, perdiendo entender los problemas y las enfermedades desde el maravilloso ángulo del sistema humano y resistiendo analizar las causas internas y externas que condujeron a un inconveniente en particular. Cuando estudiamos en los colegios y las universidades cada materia se enseña como una unidad aislada, como si la política, el arte, la religión, la economía no estuviese toda interrelacionada. Mientras estudiamos cada materia, nos presentan, según el pensamiento dominante de la época, una cronología de los hechos pero si quisiéramos trazar una línea transversal por todas estas cronologías sería muy complicado entender la historia integralmente. Muchos de los avances tecnológicos de nuestros tiempos, han ido mecanizando al mundo, hasta el punto de hacernos creer que no hay barreras y que el mundo virtual es el verdadero mundo real. Cada vez nos convertimos más en seres autómatas en vez de seres humanos pensantes; cada vez a diferencia de Descartes, cuestionamos menos el “orden” establecido y aceptamos las injusticias y la pobreza como algo “natural”, propio del sistema. Hoy en día es muy común escuchar a diversos analistas hablar sobre la crisis económica y financiera mundial, inclusive escuchamos que el capitalismo se encuentra en crisis, pero al enfocarnos en el aspecto económico estamos ignorando analizar al sistema como un todo. Mucho más allá de una crisis económica del sistema, hoy estamos viviendo una gran crisis de percepción, de valores, de visión; muchos tienen una parálisis paradigmática, mientras otros apoyan la construcción de un nuevo modelo de sociedad como el Socialismo del

Siglo XXI, lamentablemente este nuevo paradigma aún no se encuentra definido en lo que ES pero sí en lo que NO es. Sin embargo sabemos, como dijo Carlos Marx, que “la sociedad socialista nace infectada de la sociedad que la precede”. Entonces es nuestro deber crear las bases para exterminar con esa mortal infección.

CONCLUSIONES Necesitamos urgentemente un “nuevo renacimiento educativo” del pensamiento que esté sustentado en valores, en la ética, donde el bienestar humano esté supeditado a todas las ciencias y creencias, una verdadera visión humanista. Si arreglamos una parte de sistema, el resto se encargará de dañar a esa nueva parte por la conexión existente. Ojala los filósofos, los intelectuales, politólogos, periodistas y hasta los científicos nos ayuden a crear las bases del nuevo pensamiento. Este cambio radical puede hacernos sentir mucha incertidumbre como se sintió en el s. XVI pero es un paso esencial en la construcción del “hombre nuevo”. El sistema educativo debe reconectarse con la nueva visión de país e impulsar su desarrollo integral y holístico. Finalmente, a pesar de los avances de la revolución en la enseñanza sobre el capitalismo y el resquebrajamiento del pensamiento único de la cuarta seguimos urgidos de un pensamiento creativo, innovador, crítico, que entendiendo el entramado del sistema imperante, las realidades del mundo actual y sustentado en los valores socialistas de la solidaridad, igualdad, el amor, en fin lo innato en los niños, permita desarrollar los elementos teóricos revolucionarios que ayuden a frenar la extinción de la especie humana y le devuelva su grandeza.