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February 9, 2023 | Author: Anonymous | Category: N/A
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Historia del

CRISTIANISMO   CRISTIANISMO LOS PRIMEROS  500 AÑOS 

Dr. Pablo A. Deiros 

EDICIONES DEL CENTRO 

Buenos Aires, Argentina 

Copyright (C) 2005 por Pablo A. Deiros  [email protected]  Publicado por EDICIONES DEL CENTRO  Estados Unidos 1273,  1101 Buenos Aires, Argentina  Telefax: 54-11-4304-334 54-11-4304-33466  e-mail:  [email protected]  e-mail: Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida, almacenada o transmitida de ninguna manera ni por ningún medio, electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabado o cualquier otro sistema de almacenaje o recuperación de información, sin la autorización previa en forma escrita  por parte de su autor.  ISBN: 987-95473-9-X 

 

Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723  Edición y corrección: Martha L. de Dergarabedián  Diseño de portada y diagramación: Luis Adonis  + 5411 4635.5678.  4635.5678. [email protected]  

La versión bíblica utilizada en este libro es la Nueva Versión   Internacional (Miami: Sociedad Bíblica Internacional, 1999).1 

CONTENIDO    libro  Uso de este Prólogo Presentación  Lista de Mapas y Cuadros 

INTRODUCCIÓN GENERAL  UNIDAD 1 - El cristianismo en el Imperio Romano  Introducción  El lugar, el tiempo y el propósito  El lugar El tiempo El propósito Factores que contribuyeron a la expansión del cristianismo   La La contribución contribución romana griega La contribución hebrea Un mundo urbano  El surgimiento de la Iglesia  El lugar de adoración La vida y el ministerio Otras prácticas cristianas Símbolos cristianos La Iglesia y su misión  El comienzo El avance 1

 Deiros, P. A. (2005).  (2005).  Historia del Cristianismo: Los primeros 500 años (pp. 5 –6). Buenos Aires, Argentina:

Ediciones del Centro.

 

La organización La membresía La oposición al cristianismo  La oposición en tiempos neotestamentarios Los cristianos en el Imperio Romano La oposición en el segundo siglo La oposición a mediados del tercer siglo La oposición más seria y final El primer emperador pro-cristiano  El fin de la última y peor persecución El triunfo de Constantino

UNIDAD 2 - El cristianismo más allá del Imperio Romano  Introducción  El primer reino cristiano: Edesa  La conversión de Edesa La contribución de Edesa La primer nación cristiana: Armenia  La conversión de Armenia El de Armenia El apóstol cristianismo en Armenia La Iglesia en Armenia El testimonio cristiano más allá de Armenia Los cristianos de Partia  El lugar La llegada y difusión del cristianismo La oposición al cristianismo Los cristianos de Persia  El desarrollo del testimonio cristiano La oposición a los cristianos La gran persecución de 339 La supervivencia del testimonio Otros períodos de persecución en Persia La Iglesia Persa y el nestorianismo El cristianismo en Etiopía  Ubicación geográfica e histórica El desarrollo del cristianismo en Etiopía Evidencias del cristianismo en Etiopía El cristianismo en Arabia e India  Arabia India Los bárbaros del norte de Europa  Los hunos de Asia Central Los godos de Europa del norte La Iglesia del Oeste y los godos La Iglesia del Este y los hunos La Iglesia y el fin del mundo

 

El cristianismo en las Islas Británicas  El testimonio en Bretaña El testimonio en Escocia El testimonio en Irlanda El testimonio en las Islas Británicas El cristianismo en la Península Ibérica  Una vieja tradición Una encarnizada herejía Un fanatismo riguroso Un extenso peregrinaje UNIDAD 3 - El cristianismo en el Imperio Bizantino  Introducción  El lugar y las circunstancias  La ciudad de Constantinopla La creación del Imperio Bizantino Desarrollo del Imperio Bizantino  La llegada al trono de Justiniano El gobierno de Justiniano Evaluacióny del gobierno de Justiniano Cosmovisión cultura   La civilización bizantina Arte y arquitectura Codificación de la ley Teocracia absoluta Iglesia, Estado y sociedad  La destrucción del paganismo La pugna entre el poder temporal y el espiritual Los efectos de la unión de la Iglesia y el Estado Cristiandad bizantina postnicena  Las dos naturalezas de Cristo Los Padres Capadocios El siglo quinto  Crisóstomo de Constantinopla vs. Teófilo de Alejandría  Nestorio de Constantinopla vs. Cirilo de Alejandría Flaviano de Constantinopla vs. Dióscoro de Alejandría El siglo sexto  El monofisismo Controversia de los Tres Capítulos La vida y ministerio de la Iglesia  Administración Organización Liturgia Teología

UNIDAD 4 - Los problemas del cristianismo primitivo  Introducción 

 

El problema de las Escrituras  Las Escrituras de los primeros cristianos La herejía de Marción (c. 160) El canon del Nuevo Testamento El problema del credo  La fe de los primeros cristianos El problema de los judaizantes La herejía de los gnósticos La reacción cristiana El problema de la ética  La herejía de Montano (c. 179) Otros disidentes La reacción de la Iglesia El problema de la eclesiología  De un ministerio carismático a un ministerio triple Desarrollo del episcopado monárquico Factores que contribuyeron a la supremacía del obispo de Roma El problema de las controversias teológicas   La necesidad de una teología cristiana Las primeras controversias Las controversias trinitarias Las controversias cristológicas La controversia pelagiana El problema de la mundanalidad  El movimiento monástico Los monjes del desierto El monasticismo oriental El monasticismo occidental El problema de la ideología  La unión de la Iglesia y el Estado El concepto de cristiandad Mirada retrospectiva y prospectiva  Evaluación del cristianismo del período La contribución del cristianismo del período

BIBLIOGRAFÍA 

PRÓLOGO  Este libro de texto sobre la historia del cristianismo tiene su historia. Lo publiqué por primera vez en una edición Seminario Internacional Teológico Bautista Aires, Argentina). Por1977 aquelcomo entonces, servía del como Secretario Ejecutivo de la Asociación de (Buenos Seminarios e Instituciones Teológicas del Cono Sur. Éramos bien conscientes de la carencia de libros de texto especialmente

 

 preparados para servir las necesidad necesidades es de los nuevos programas de educación teológica por extensión que estaban surgiendo por todas partes en América Latina. Los libros que tradicionalmente se habían utilizado en instituciones residenciales (Latourette, Walker, Baker, Bainton) no parecían adecuados  por su complejidad y costo. En aquellos años, el Fondo de Educación Teológica (del Consejo Mundial de Iglesias), estaba  publicando una serie de guías de estudio muy prácticas. El único problema es que estaban en inglés y orientadas mayormente para servir a las iglesias en Asia y África. De manera particular, el TEF (Theological Education Fund) a través de la editora S.P.C.K. estaba publicando una serie ser ie sobre historia del cristianismo, que seguía el esquema de Kenneth S. Latourette en su obra magna,  A History of o f the Expansion of Christianity  (Historia de la expansión del cristianismo) en siete volúmenes. Los dos  primeros volúmenes de la serie publicada por TEF (1972 y 1974) fueron escritos por un destacado historiador británico, John Foster; el tercero (1975) por Alan Thomson; y la serie se completó más tarde con un cuarto volumen (1989) escrito por Louise Pirouet. Esta serie de materiales parecía un buen modelo mod elo a seguir en cuanto a los contenidos, pero había que darle un formato más adecuado a las necesidades de los numerosos programas de auto-estudio y de formación ministerial por extensión. En esos eso s años, el Dr. Weldon E. Viertel estaba publicando a través de Carib Baptist Publications (en El Paso, Texas) una serie de guías de estudio, con una metodología  bien adecuada a nuestras necesidades en América Lat Latina. ina. Así, pues, con el permiso del Dr. Viertel para utilizar su formato, y el apoyo y participación del Fondo de Educación Teológica, preparé la edición de 1977. En 1981, la Casa Bautista de Publicaciones (El Paso, Texas) hizo una primera edición con el agregado de dos capítulos sobre el desarrollo del testimonio cristiano en América Latina. Y en 1985 hizo una segunda edición revisada y corregida. Estos materiales han servido a la formación de varias generaciones de siervos y siervas del Señor a lo largo y a lo ancho del continente. Se han sacado fotocopias y copias (algunas autorizadas y otras no) por millares. Miles de personas me han pedido una nueva edición a lo largo de varios años. Finalmente, creo que llegó el tiempo de responder a esas demandas y presentar esta nueva edición, que espero sea de tanta bendición para el cuerpo de Cristo como fueron las anteriores.

Pablo A. Deiros

USO DE ESTE LIBRO  Este libro fue diseñado y escrito por primera vez, especialmente para cumplir con los requisitos y orientaciones de la mayor parte de los diversos programas de formación ministerial, pastoral, misionera y evangelizadora en América Latina. Fue preparado con el propósito de poner en manos de los estudiantes una guía de estudios que resumiera lo mejor de otros materiales más avanzados o que de alguna manera no están accesibles para la mayoría de los interesados en conocer la historia del cristianismo. Este libro de texto está preparado para ser usado especialmente en programas de educación teológica formales y no formales. Esto significa que puede adaptarse fácilmente a programas

 

residenciales de diverso nivel académico, como también a programas de educación teológica por extensión, a distancia o de auto-estudio. De todos modos, la metodología seguida presupone que el estudiante es responsable en forma personal de su propio estudio e investigación de los temas aquí tratados. El énfasis está puesto sobre el trabajo personal del estudiante en el hogar más que en su trabajo en el aula. El estudio independiente del estudiante resultará en el desarrollo de sus aptitudes naturales y sus dones espirituales, y en la formación de una disciplina de estudio que le capacitará mejor para el liderazgo cristiano. El docente que utilice este libro como libro de texto encontrará de utilidad los varios instrumentos didácticos que el mismo ofrece. He procurado presentar los diversos temas de la historia del cristianismo de manera variada, atractiva, simple y lo más didácticamente posible. Algunos mapas y esquemas ayudan a ilustrar y clarificar los contenidos. De igual modo, cada unidad está acompañada de un Glosario de términos técnicos o de uso no muy frecuente, una tabla cronológica, un cuestionario de repaso, tareas diversas para tres niveles diferentes de complejidad académica, y la sugerencia de algunas cuestiones para la discusión en grupos pequeños, como también la sugerencia de algunas lecturas adicionales. La Bibliografía al final del libro presenta los mejores materiales disponibles para el estudio de esta materia en lengua castellana y algunos otros en otras lenguas. El docente verá de qué manera puede utilizar mejor los recursos ofrecidos por este texto en el desarrollo de sus clases. He procurado hacer un uso responsable de las fuentes secundarias, cuyas cu yas referencias se encontrarán al pie de página. Más importante todavía es el hecho que he realizado una selección de fuentes  primarias, con el fin de exponer al estudiante a los documentos más relevantes de la historia del cristianismo. Lamentablemente, las limitaciones de espacio no permiten la presentación de todas las fuentes que uno quisiera. No obstante, es conveniente que el docente tome en cuenta que el conocimiento y discusión crítica de las fuentes primarias es fundamental para la tarea histórica. Dado que el intercambio de ideas es vital en la educación teológica, se sugiere que haya oportunidades suficientes para la discusión de los temas presentados. La participación del estudiante en estos debates tiene dos propósitos: por un lado, compartir su comprensión de la materia con sus compañeros y enriquecerse con el aporte de ellos; y, por otro lado, estimular el pensamiento y la reflexión al enfrentarse con puntos de vista diferentes de los propios. El maestro o tutor actuará en clase como moderador en el repaso del contenido del libro, la realización de los ejercicios y la discusión grupal, y la asignación de las tareas para el hogar o trabajos  prácticos. Se sugiere que el maestro o tutor no dicte d icte clases a la manera tradicional, sino s ino que procure cumplir el papel de dinamizador de la discusión y el diálogo alrededor de los contenidos del libro. Para ello, deberá estar preparado para propias responder a lascontexto, preguntaslosdecontenidos los estudiantes, especialmente para aplicar a las situaciones concretas, de cada q ue se discutan. que El maestro o tutor podrá asignar lecturas complementarias utilizando los materiales de la bibliografía sugerida, siempre y cuando los mismos sean accesibles a los estudiantes. Del mismo modo, el docente podrá requerir la elaboración de una monografía o ensayo escrito sobre algún tema particular, según el nivel académico del curso. La evaluación del estudiante se hará en función a su asistencia a clase y su nivel de participación en la dinámica de la misma, cuando el curso se dicte de manera presencial. En todos los casos, será importante para la evaluación el completamiento de todos los ejercicios y cuestionarios del libro, el cumplimiento satisfactorio de los trabajos prácticos, la realización de las lecturas y trabajos escritos que eventualmente asigne el maestro o tutor. El maestro o tutor podrá establecer algún otro requisito conforme con las circunstancias propias de d e cada curso, el nivel académico con que se s e trabaje y el lugar en que se enseñe. En todo el proceso de enseñanza-aprendizaje deberá tenerse muy presente que el propósito de este curso no es impartir o recoger información sobre el tema que trata, sino producir cambios de conducta significativos tanto en el maestro o tutor como en el alumno, a fin de ajustar la vida y el

 

servicio cristianos en términos del significado y el valor del conocimiento del pasado del testimonio cristiano para la extensión del reino de Dios. Si después de estudiar estas páginas unos y otros aprenden a vivir y servir mejor como ciudadanos del reino de Dios, este material habrá cumplido su propósito fundamental. Originalmente, este libro consistía en un bosquejo desarrollado del proceso histórico del testimonio cristiano, como medio para alcanzar los objetivos de un curso de  Historia del cristianismo. En el caso de esta edición, he procurado incorporar otros materiales que considero importantes para una comprensión más global de esta historia. En el caso de que el lector esté matriculado en un seminario, instituto bíblico, escuela de misión o en algún otro o tro programa de capacitación que utilice este libro como libro de texto, el estudiante será responsable de la lectura cuidadosa cuidados a del texto y la bibliografía indicada. Los ejercicios preferentemente deberán ser hechos en el estudio personal, bajo la guía del instructor. El estudiante es responsable por el cumplimiento de las tareas para el hogar que figuran al final de cada unidad como Trabajos Prácticos, y que el maestro o tutor asignará a lo largo del curso. Los Cuestionarios de Repaso podrán ser utilizados en el estudio personal, para evaluar el progreso en el conocimiento, o bien el instructor los utilizará a modo de ejercicios, según el nivel académico en el que estén trabajando los estudiantes. El cumplimiento adecuado de las lecturas recomendadas, los ejercicios y los trabajos prácticos podrán ser usados como elementos para la obtención de créditos académicos. La Discusión Grupal es un elemento adicional que el docente podrá utilizar en el desarrollo de sus clases, al igual que las Lecturas Recomendadas. El lector notará que con frecuencia se citan a diversos autores que han escrito sobre los temas bajo discusión. Las citas transcriptas son el resultado de una cuidadosa selección de materiales, especialmente de fuentes primarias, hecha con el propósito de dar oportunidad al estudiante de tomar contacto con las fuentes documentales de la historia del cristianismo. La Bibliografía presenta la literatura que yo mismo he utilizado para mi estudio personal del tema. De este modo, estas citas  pueden ser útiles para ilustrar, ampliar, aclarar y fundamentar los conceptos desarrollados en este libro de texto. A su vez, las fuentes están indicadas como notas al pie de página, para que el lector pueda referirse a ellas en caso de tener interés en profundizar el tema. La Bibliografía que se incluye al final del libro no es exhaustiva, pero presenta los materiales publicados más importantes, especialmente en lengua castellana. Este libro de texto puede ser también de particular valor para el lector interesado en conocer más  profundamente el desarr desarrollo ollo histórico del testimonio cristiano. No pretende ser un libro erudito, pero sí es un libro elaborado con el más alto y serio nivel académico. Si bien no es un libro especializado, reúno en años. él unaHe síntesis de mis sintetizar conocimientos y experiencia como historiadorhistóricos profesional a lo largoa de muchos procurado e interpretar los acontecimientos conforme la metodología de la investigación histórica más reciente. Su propósito es introducir a los estudiantes y lectores con diferentes grados de preparación académica a un tema tan importante como es la historia del cristianismo. Los estudiantes y lectores que deseen continuar profundizando sus su s estudios y lecturas sobre esta materia, encontrarán en la Bibliografía algunos de los mejores libros disponibles en castellano.2 

2

 Deiros, P. A. (2005).  (2005).  Historia del Cristianismo: Los primeros 500 años (pp. 7 –15). Buenos Aires, Argentina:

Ediciones del Centro.

 

PRESENTACION  Al momento de preparar estos materiales para su publicación p ublicación estoy celebrando con gratitud al Señor treinta años de enseñanza de historia del cristianismo. A lo largo de este tiempo, he tenido la oportunidad de introducir a miles de estudiantes al fascinante estudio del pasado del testimonio cristiano. Junto con ellos he aprendido a reconocer con acción de gracias y admiración la manera maravillosa en que Dios ha estado obrando su plan redentor para la humanidad. El estudio del pasado adquiere un valor especial cuando el estudiante reconoce su propio papel en el curso de la historia. Cuando tomamos conciencia que somos protagonistas y peregrinos en el tiempo, entonces estamos listos para aprender más y mejor de la historia. Esta actitud hace que el estudio del  pasado no resulte aburrido ni difícil, y que se avive nuestro interés por los eventos acontecidos. De allí allí que nuestra aproximación a la historia del testimonio cristiano será “desde el camino” y no “desde el  balcón,” para expresarlo en los conocidos términos usados por JJuan uan A. Mackay. Mackay.   Este libro de texto contiene material suficiente para un curso introductorio a la historia del cristianismo. No es fácil resumir en relativamente pocas páginas y en forma clara clar a y sencilla la cantidad astronómica de material que existe sobre esta disciplina. Muchos profesores enseñan historia del cristianismo en formas novedosas y experimentales: comenzando desde el presente y remontándose hasta el más lejano pasado, ayudando a los estudiantes a comprometerse con la realidad inmediata,  planeando sus propios materiales programados para el uso en el aula, siguiendo una línea temática determinada, o llevando a cabo trabajos de campo cuando esto es posible. Es difícil que un solo libro  pueda servir a tan diversas necesidades y seguir tan divers diversos os enfoques. No obstante, en la mayoría de los centros de estudios teológicos y de formación ministerial en América Latina, la enseñanza se desarrolla sobre la base de una línea “cronológica,” usando u sando libros tan conocidos como los de Kenneth S. Latourette, Willinston Walker, Justo L. González o Roberto Baker. Un curso completo de historia del cristianismo puede ser dividido en cuatro partes fundamentales: los primeros quinientos años; los mil años de la Edad Media; el período de las reformas de la Iglesia; el cristianismo denominacional. En el presente estamos transitando trans itando por lo que sería un quinto períod período, o, que bien merece ser considerado, al menos provisoriamente, como el período posdenominacional o nuevo período apostólico. El primer período, que cubre los primeros 500 años de expansión del testimonio cristiano, no sólo hacia Occidente sino también hacia África y Asia, fue un período de avance sostenido del testimonio cristiano. Éste el períodoenfundacional la fe cristiana, en el que cumplieron su ministerio los apóstoles y susessucesores, el que se de escribieron y coleccionaron los documentos del Nuevo Testamento, y en el que fue tomando forma y se definió la fe cristiana a pesar de las enormes dificultades internas y externas que soportaron las iglesias. El segundo período abarca los siglos que van desde alrededor del año 500 hasta h asta el 1500, y considera los mil años conocidos tradicionalmente como la Edad Media, o lo que Latourette denomina como los “mil años de incertidumbre.” Entre otros puntos de interés en este largo período está la dilatada lucha entre el cristianismo y el islamismo (que hoy tiene tanta actualidad), las Cruzadas y el surgimiento de importantes movimientos de renovación espiritual, como fueron algunas órdenes monásticas. No obstante, en general, fue un período de retroceso y recuperación en términos del progreso del testimonio cristiano. El tercer período considera los nuevos movimientos de reformas (1500 –  (1500 – 1750) 1750) y las ideas que estaban detrás de ellos, que cambiaron la faz del mundo así como de las iglesias. Estos movimientos fueron también los queindependientes llevaron a la gran expansión misionera losperíodo siglos XIX XX,yyse al desarrolla, desarrollo de iglesias nacionales en todo el mundo. Es endeeste que ynace  primero en Occidente y luego en todo al mundo a través del movimiento misionero moderno, el

 

denominacionalismo. Esta expansión más reciente del testimonio cristiano denominacional es el tema del cuarto período. Este período comienza alrededor del año 1750 y llega casi hasta fines del siglo XX, con la crisis del denominacionalismo y el desarrollo de iglesias autóctonas, independientes y emergentes en todo el mundo. En el presente libro de texto se seguirá mayormente un criterio cronológico, en base al esquema general propuesto por Kenneth S. Latourette y seguido por los autores de las Guías de Estudio de TEF (Theological Education Fund) sobre historia de la Iglesia. El material será arreglado en cuatro unidades  principales, y cada una de ellas dividida en un número de temas de estudio. Así, pues, la primera unidad considera la expansión del testimonio cristiano en el ámbito del Imperio Romano. La segunda unidad  presta atención al mismo fenómeno, pero fuera de las fronteras del Imperio Romano. La tercera se concentra en el análisis del desarrollo del cristianismo en torno a Constantinopla y el Imperio Bizantino. La última unidad de este libro repasa los principales problemas a los que tuvo que hacer frente el cristianismo durante los primeros cinco siglos de su existencia, y cómo se intentó resolver los mismos. El estudio de la historia del cristianismo es de gran provecho para el líder cristiano. Primero, el estudio de la historia del cristianismo reafirma la fe del creyente en la validez de su mensaje y obra .  No hay una explicación adecuada para la vitalidad continua del testimonio cristiano frente a las tremendas dificultades por las que ha atravesado, que no sea la validez del mensaje que Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo consigo. Los frutos de la proclamación de este mensaje renuevan la fe en la obra del Espíritu Santo, como agente de la acción redentora de Dios en la historia. El testimonio cristiano ha hecho una contribución significativa al desarrollo de la humanidad. 1. El cristianismo ha revalorizado la vida del ser humano individual y la sociedad como un todo. Esto ha tenido un impacto especial en los grupos humanos más oprimidos, las mujeres, los niños, los enfermos, los marginados, los prisioneros y los esclavos. El cristianismo también presenta el concepto más alto de sociedad: el reino de Dios, la sociedad de los redimidos bajo el señorío de Cristo. 2. El cristianismo ha revalorizado el trabajo del ser humano. En lugar de ser una fuente de humillación y explotación, el testimonio cristiano ha enseñado que el trabajo es una oportunidad para glorificar a Dios y cumplir el destino propio como mayordomo de su creación. El cristianismo ha contribuido a la elevación social de los trabajadores alrededor del mundo. 3. El cristianismo ha revalorizado la educación del ser humano. Gracias al testimonio cristiano, la educación ya no es entendida como un privilegio para unos pocos, sino como un derecho para todos, sin exclusiones. El ejercicio de este derecho derec ho inalienable es esencial para el desarrollo des arrollo de la dignidad de cada Debe recordarse que los primeros en ofrecer oportunidades de educación a las mujeres fueronpersona. cristianos. 4. El cristianismo ha revalorizado la historia del ser s er humano. El testimonio cristiano ha pprovisto rovisto de una nueva interpretación de la historia, que ofrece esperanza para la humanidad y sentido al devenir. El cristianismo cambió el concepto griego de la historia como una serie de ciclos dominados por el destino o la fortuna. La fe cristiana toma en cuenta tanto la inmanencia como la trascendencia de Dios en los eventos de este mundo. Pero reconoce que el ser humano no alcanzará su destino final dentro de la historia, sino que evoca su esperanza esperanz a para que mire más allá de la historia histor ia a la victoria final en Cristo. 5. El cristianismo ha revalorizado las relaciones del ser humano. Su mensaje mensaj e habla de la eliminación de prejuicios, odios, racismo, discriminación e invita a todos los seres humanos a reconciliarse con Dios y los unos con los otros. El llamado a la reconciliación incluye la idea de una nueva fraternidad y solidaridad entre los seres humanos, que tiene que encontrar expresión concreta en la vida de la comunidad de fe, como modelo de comunidad humana. Segundo, el estudio de la historia del cristianismo demuestra la falacia de confundir los perfiles culturales del cristianismo con el evangelio mismo. En la historia del cristianismo es posible ver  períodos áridos y ooscuros, scuros, cuando apenas la cáscara externa de la religión parecía estar intacta. Las

 

Cruzadas, los papas renacentistas, la imposición del cristianismo a los pueblos nativos en América Latina, los destinos manifiestos y los imperialismos mesiánicos son apenas algunos pocos ejemplos de la confusión entre subproductos culturales de la fe y el evangelio cristiano. La confusión de la fe cristiana con la cultura occidental ha sido frecuente, y generalmente con resultados deplorables. Tercero, el estudio de la historia del cristianismo enseña la futilidad de esperar la perfección aquí en la tierra y de este lado de la eternidad . Esta expectativa de construir un mundo perfecto ha sido el fracaso de más de un idealista. Incluso muchos cristianos se han alejado de sus respectivas comuniones cristianas en razón de que han encontrado imperfecciones en ellas. Por supuesto que parte del ideal cristiano es aspirar a la perfección y trabajar por la santidad. Pero hace falta un balance para ver que de este lado de la eternidad la perfección no es posible, ni siquiera en la Iglesia. Pretender P retender que la Iglesia sea perfecta es confundir al cuerpo de Cristo con el Señor mismo. Cuarto, el estudio de la historia del cristianismo desenmascara a los verdaderos enemigos del evangelio. Estos enemigos no son las imperfecciones de los hermanos, por más perturbadoras perturbado ras que éstas sean. Estos enemigos no son las disparidades en la comprensión teológica entre cristianos sinceros, por más confundidoras que éstas sean. Los enemigos reales no son siquiera las iglesias rivales que alguna vez nos han perseguido, excluido o discriminado. Los verdaderos enemigos del evangelio son Satanás y sus huestes de maldad, junto con los poderes que ellos desatan: secularismo, relativismo, materialismo, hedonismo, consumismo, egocentrismo, imperialismo, terrorismo, etc. Quinto, el estudio de la historia del cristianismo alienta una visión ecuménica de la fe. La historia del cristianismo nos ilustra la unidad esencial de los cristianos en torno a la fe en Cristo. Los períodos de grandes avivamientos espirituales en esta historia no han estado restringidos a un grupo particular. El testimonio cristiano ha sido más impactante y efectivo cuando ha sido el resultado de la unidad de los cristianos en respuesta a la oración de Jesús (Juan 17). Sexto, el estudio de la historia del cristianismo demuestra la validez del principio de unidad en la diversidad . Pablo enseñó esta verdad bajo la figura del cuerpo y sus diversos miembros, cada uno de los cuales tiene sus propias funciones pero necesita de los demás. El gran factor espiritual a lo largo de los siglos ha sido el descubrimiento de que las diversas comuniones de fe dentro del cristianismo  pueden enriquecerse enriquecers e unas a otras y encontrar su s u unidad esencial en Cr Cristo, isto, sin perder perd er la validez de su  propia contribución. Séptimo, el estudio de la historia del cristianismo desarrolla un espíritu de tolerancia y comprensión. Tolerancia no significa renunciar a la verdad. Más bien, es la disposición de permitir a otros ejercer el derecho de expresar sus propios puntos de vista. Nadie puede estudiar la historia del testimonio sentirse perturbado pordel laspasado profundas heridas producidas en la Iglesia por lay intolerancia.cristiano De igualsinmodo, el conocimiento cristiano ayuda a desarrollar una mayor mejor comprensión de los hechos. Y esto, a su vez, permite un ejercicio más inteligente del amor y la aceptación. Octavo, el estudio de la historia del cristianismo provee de una perspectiva adecuada para valorar las tendencias y movimientos del presente. A través de sus estudios históricos, el creyente está mejor capacitado para reconocer en los cultos de nuestros días la reaparición de viejas herejías. Uno puede constatar el hecho triste de que cada generación muchas veces repite los mismos errores del pasado. Una perspectiva histórica puede ayudarnos a ser mejores profetas de Dios al ver su mano obrando en la historia.

 

LISTA DE MAPAS Y CUADROS  Mapas  1. El cristianismo en el mundo 2. Palestina en el centro del mundo 3. Palestina en la historia 4. La expansión del cristianismo hacia el año 350 5. Las grandes sedes episcopales 6. Etiopía, Arabia, Persia e India 7. La expansión del cristianismo a fines del sigl sigloo VI 8. Rutas seguidas por los hunos y godos 9. Imperio Bizantino y Constantinopla Cuadros  1. Progreso del cristianismo 2. La marcha del cristianismo 3. Caracterización de cada siglo 4. La contribución romana al cristianismo 5. griega al 6. La contribución hebrea al cristianismo cristianismo 7. Anagrama de Tertuliano 8. Símbolos cristianos 9. Tres etapas de la misión de los apóstoles 10. Emperadores romanos 11. Zoroastrismo 12. Maniqueísmo 13. Problemas y respuestas de la Iglesia 14. Los Padres de la Iglesia 15. Defensores de la fe 16. Los grandes concilios universales o ecuménicos

Introducción general  La historia del cristianismo ha sido definida de múltiples maneras. Muchos autores, comprometidos con la ideología de la cristiandad, la han definido desde una perspectiva institucional. Es por esto que han titulado sus estudios como “historia de la Iglesia” o “historia eclesiástica.” A. H. Newman señala: “La historia de la iglesia es la narración de todo lo que se conoce de la fundación y el desarrollo del reino de Cristo sobre la tierra.” Según S egún Newman, la expresión “histor “historia ia de la iglesia” se usa comúnmen comúnmente te  para designar no sólo el registro de la vida cristiana organizada de nuestra era, sino también el registro de la carrera de la religión cristiana misma. Incluye dentro de su esfera las influencias religiosas directa directass

 

e indirectas que el cristianismo ha ejercido. Muchos autores protestantes siguen este enfoque, que pone el énfasis en la institución histórica que se conoce como Iglesia cristiana. Obviamente, ésta es también la comprensión de los historiadores católicorromanos. Joseph Lortz  presenta la sigu siguiente iente definición: “La Historia de la Iglesia es, …, similar a cualquiera otra ciencia histórica, y trabaja con las mismas leyes de la crítica histórica. Pero la Historia de la Iglesia es diametralmente distinta de la pura ciencia natural, ya que opera según principios propios tomados de la Revelación: la Historia de la Iglesia es teología.” Otro autor católico, Bernardino Llorca, señala: “Historia de la Iglesia es la ciencia que estudia el desarrollo exterior e interior y toda la actividad de la Iglesia, como como institución de Cristo.”3  Esta comprensión responde al método de la historiografía antigua, y fue inaugurado por Eusebio de Cesarea (260 –340), el padre de la “historia eclesiástica,” a comienzos del siglo IV. Al escribir después de la supuesta “conversión” del emperador romano Constantino (año 312), Eusebio procuró escribir una historia institucional que sirviera a los propósitos del Imperio Romano, más que como un testimonio de la manifestación del reino de Dios. Otros definen nuestra disciplina desde la perspectiva de la historia de las religiones. Según W.J. McGlothlin, “La historia del cristianismo es el relato del origen, progreso y desenvolvimiento de la religión cristiana y de su influencia sobre el mundo.” McGlothlin distingue entre una historia externa, ex terna, que tiene que ver con el relato de la influencia del cristianismo en su crecimiento y expansión; y, una historia interna, que se refiere al relato de los cambios internos. Para Par a Kenneth S. Latourette, “la historia del cristianismo es la historia de lo que Dios ha hecho por el hombre así como la contestación del hombre a la actitud de Dios.”6  La tendencia en la historiografía cristiana contempor contemporánea ánea es ver a la historia del cristianismo como la historia de un movimiento y como una realidad más grande que cualquier institución eclesiástica local o particular. Esta perspectiva histórica toma en cuenta la diversidad de creencias y prácticas que se han dado a lo largo de dos mil años de testimonio cristiano. Además, al considerar al cristianismo como movimiento, estos historiadores hacen el esfuerzo por mantener una perspectiva global en su aproximación a los hechos históricos. El presente libro de texto no es una historia eclesiástica. Tampoco se trata de una historia de la religión cristiana, con énfasis sobre el desarrollo desar rollo de sus doctrinas y prácticas, su clero cler o y organizaciones. Más bien, lo que nos proponemos es elaborar una historia del cristianismo. La historia del cristianismo cr istianismo es el relato crítico del origen, progreso y desarrollo del testimonio cristiano y de su influencia en el mundo. No nos interesa tanto la Iglesia como institución ni el cristianismo como religión, sino más  bien la fe cristiana testimonio vida y de para la humanidad. este sentido, el cristianismo ha sidocomo siempre una fe de histórica. Losalvación ha sido por dostoda razones. Primero, En porque cree en el carácter histórico de su protagonista central: Jesús de Nazaret. Segundo, porque afirma la relación fundamental entre la actividad de Dios y el curso de la historia humana. La historia es central para la fe cristiana. Es en la arena del tiempo y de los eventos humanos donde se desarrolla el plan redentor de Dios y la manifestación y expansión de su reino.

Marc Bloch:  “El cristianismo es una religión de historiadores. Otr os os sistemas religiosos han  podido fundar sus creencias y sus ritos en una mitología más o menos exterior al tiempo humano. Por libros sagrados, tienen los cristianos libros de historia, y sus liturgias conmemoran, con los episodios de la vida terrestre de un Dios, los fastos de la iglesia y de los santos. El cristianismo es además histórico en otro sentido, quizá más profundo: colocado entre la Caída y el Juicio Final, el destino de la humanidad representa, a sus ojos, una larga aventura, de la cualy, cada detanto, stino,encada ‘peregrinación’ ofrece, a cristiana, su vez, elsereflejo; en el la duración por lodestino, la historia, eje centralindividual, de toda meditación desarrolla gran drama del Pecado y de la Redención.”  Redención.”  

 

Hay tres religiones que pretenden ser universales y que en ciertos períodos de la historia se han difundido por el mundo. Estas religiones han apelando a las personas de todas las razas, culturas y lenguas con sus doctrinas y prácticas. Ellas son: el budismo, el cristianismo y el islamismo. El budismo comenzó en el noreste de la India seis siglos antes de Cristo, y el islamismo nació en Arabia seis siglos después de Cristo. El budismo se esparció hacia Oriente, donde llegó a ser la religión más difundida de Asia, mientras que el islamismo se extendió principalmente hacia el oeste de Asia y Arabia, y se transformó en la religión de dos continentes: Asia y África. En los últimos cuatro o cinco siglos ninguna de estas dos religiones ha dado mayores muestras de vitalidad. No obstante, en años más recientes, se han dado ciertos indicios de avance y renovación. El fundamentalismo islámico ha llamado la atención de todo el mundo, mientras que el budismo se ha infiltrado significativamente en la cultura occidental. Ambas religiones han puesto de manifiesto un dinamismo misionero, que ha cautivado a muchos en el mundo noratlántico. A diferencia de estas dos religiones, el cristianismo comenzó desde una posición estratégica mejor. Palestina puede ser comparada con un estrecho corredor entre el mar y el desierto o un puente que une a tres continentes: Asia, África y Europa. El cristianismo pronto se esparció a estos tres continentes, ganando su primer triunfo en forma decisiva alrededor del mar Mediterráneo. A pesar de los retrocesos o detenimientos en su avance, la fe de Jesucristo se ha expandido una y otra vez, llegando a ser la religión más difundida del mundo. MAPA 1 - EL CRISTIANISMO EN EL MUNDO  La vida más fecunda y efectiva del cristianismo corresponde a los últimos cinco siglos, y su avance geográfico más grande se ha dado en los últimos doscientos años. Estos años pasados fueron testigos del desarrollo extraordinario del cristianismo, no tanto numéricamente, como en su influencia general sobre el mundo, llegando a estar presente en casi todos los países de nuestro planeta. Antes de discutir el progreso del cristianismo en los distintos períodos de su historia, es necesario tener una visión global de este proceso. El cuadro que sigue ilustra la manera en que el eminente  profesor Kenneth S. Latourette Latour ette grafica la historia del cristianismo en su obr obraa Historia de la expansión del cristianismo (en inglés), en siete volúmenes. CUADRO 1 - PROGRESO DEL CRISTIANISMO  A la luz de este gráfico, puede verse que ningún período de retroceso del movimiento cristiano fue tan serio y profundo como el primero. Después de cada retroceso vino no sólo un período de recuperación, sino un avance a nuevos logros y expansión. Debe notarse también la continua y realmente creciente influencia del cristianismo en el mundo. Tomada en su conjunto, la línea del desarrollo del movimiento cristiano muestra un balance positivo de crecimiento, avance, logros y realizaciones, que van más allá de lo que cualquier otra religión en el mundo haya logrado. El cuadro que sigue nos ayuda a entender e interpretar el gráfico anterior: CUADRO 2 - LA MARCHA DEL CRISTIANISMO  

AÑO 

CARA CA RACT CTER ERIZ IZAC ACII N 

ACONTECIMIENTOS IMPORTANTES 

 

29 – 500 500

Primer Avance

Conquista Romano.

del

Imperio

500 – 950 950

Primer Retroceso

Caída del Imperio de Occidente y surgimiento del Islam.

950 – 1350 1350

Segundo Avance

Resurgimiento cristianismo occidental.

1350 – 1500 1500

Segundo Retroceso

Declinación de la iglesia medieval y resurgimiento del  poder islámico bajo los turcos otomanes.

1500 – 1750 1750

Tercer Avance

Reforma y Contrarreforma.

1750 – 1815 1815

Tercer Retroceso

Creciente secularización en Occidente y declinación de las

del

 potencias Portugal. cristianas: España y 1815 – 1914 1914

Cuarto Avance

Movimientos modernos y el  período más grande de expansión.

1914 – 1990 1990

Retroceso y Avance

Movimiento ecuménico, y movimientos de consolidación y renovación espiritual.

Como puede verse, el progreso está lejos de ser uniforme. A pesar de la oposición, los primeros cinco siglos se caracterizaron por un avance rápido y sin mayores interrupciones, que resultó en el establecimiento de la fe cristiana en toda la cuenca del mar Mediterráneo. Después de Pentecostés, los discípulos tuvieron nuevas fuerzas para hacer frente a la misión encomendada por Jesús. Las primeras  persecuciones los obligaron a esparcirse y a llevar el mensaje a otros lugares fuera de Palestina. Con Pablo se abrió la puerta a los gentiles y el evangelio llegó hasta Roma, que no era “lo último de la tierra” sino más bien bien el centro del mundo greco-romano. Pero Roma sí era la antesala para llegar hasta lo último de la tierra, como era el deseo del apóstol (Ro. 15:24, 28, España era para los antiguos el extremo occidental del mundo conocido). Con la conversión del emperador romano Constantino, el cristianismo encontró puertas abiertas para su expansión, a pesar de sus controversias internas. Más tarde, las invasiones bárbaras impusieron la necesidad de un ajuste a las nuevas circunstancias históricas y frenaron el dinamismo del avance cristiano. Después de los primeros cinco siglos de avance llegamos a los “mil años de incertidumbre” (como los denomina El período comienza con y medio la más seria deLatourette). toda la historia del cristianismo. El cuatro primersiglos retroceso seráde el declinación, más grande yposiblemente prolongado de todos los que muestra el gráfico. En buena medida, esto se debió a la caída del Imperio Romano de

 

Occidente, que había significado para el cristianismo cristianis mo un medio ambiente estable y seguro, en el que q ue en los primeros siglos la fe cristiana encontró su mayor oportunidad para una expansión rápida e ininterrumpida. Otro factor de esta declinación fue el surgimiento del Islam en el Cercano Oriente, es decir, el nacimiento del rival religioso más grande del cristianismo hasta los tiempos modernos. No obstante, el cristianismo no sólo sobrevivió, sino que hacia el 950 comenzó un paulatino ascenso, que va a continuar hasta cerca del 1350. Noten que deberán pasar 600 años (el período que algunos llaman la “Edad Oscura”) antes de que se alcance una posición comparable con la del año 500.   Hay dos cosas importantes que notar durante este ascenso: (1) En Occidente, la religión cristiana, que sobrevivió a la civilización romana, llegó a ser el núcleo de la nueva civilización europea. Si bien no fue una civilización cristiana, el cristianismo ocupó en ella un lugar primordial. (2) En Oriente, se ven señales de recuperación con las Cruzadas (1096) y en la nueva empresa misionera (siglo XIII). Una segunda declinación comenzó hacia el 1350 y continuó hasta el 1500. La razón fue doble: en Occidente se da la división de la cristiandad y movimientos de revuelta contra los abusos en la Iglesia; en Oriente se da un reavivamiento del Islam y un acrecentamiento de su agresividad. Hacia el año 1500 terminó este período de retroceso para dar paso a un significativo avance del cristianismo. El período del 1500 al 1750 fue un verdadero salto hacia arriba. En su comienzo encontramos nuevas líneas de comunicaciones que comenzaron a abrirse por todo el mundo. Coincidiendo con esto surgieron movimientos de un nuevo celo religioso en algunos sectores de la cristiandad occidental. El resultado fue el período más fecundo y rico, hasta el momento, en la historia del cristianismo.y exploración, Hacia el añocayeron 1750, las grandes potencias que promovieron los viajes de descubrimiento de su sitial de poder y políticas, otras naciones ocuparon su lugar. Parale Paralela la a esta crisis política se dio la crisis religiosa con una pérdida de vigor y un enfriamiento del celo cristiano. En Europa esto se debió a la expansión de una actitud materialista y racionalista, ejemplificada dramáticamente en la política antirreligiosa de la Revolución Francesa de 1789. En otras  partes el retroceso se debió a la declinación de las misiones romanas con el eclipse de España y Portugal, los primeros patrocinadores de aquellas misiones en las nuevas tierras, y luego la situación diferente de Francia, que durante algún tiempo sobrepasó a las naciones mencionadas como potencia católica romana. Con el fin de las guerras napoleónicas en 1815, comenzó para Europa un siglo de comparativa paz, y para el cristianismo uno de progreso sin igual. En América Latina comienza el período de la independencia de España y Portugal, y más tarde (en la segunda mitad del siglo) el período de organización nacional de las repúblicas latinoamericanas. Inglaterra se destacó como la potencia mundial más importante, la Revolución Industrial, la que esta nación tuvo política la delantera, la transformó en la fábrica del d elymundo. Es en el marco de estaennueva situación económica, y social, que se tradujo en la expansión imperialista mundial, que debe interpretarse el papel de Inglaterra en esta etapa de nuevo avance del cristianismo. A partir de comienzos pequeños se desarrolló un movimiento que difundió el cristianismo hasta fronteras desconocidas en cualquier momento anterior de su historia. Es en este período que la religión cristiana llegó a ser universal en el sentido geográfico de la  palabra, es decir, no sólo con un men mensaje saje que es ppara ara todas las pers personas, onas, sino que realmente r ealmente comenzó a ganar a las personas “de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas”. El movimiento misionero moderno surgió en Inglaterra y se extendió a los protestantes en el continente europeo y en  Norteamérica. A los católicos romanos, que habían ocupado un lugar muy importante en el período anterior (1500 – 1800), 1800), les costó mucho tiempo adaptarse a las oportunidades de esta edad, pero pronto comenzaron un nuevo trabajo misionero. Protestantes y católicos, entre los años 1800 y 1914, esparcieron el cristianismo a lugares a los que hasta entonces no había llegado. En este sentido, el siglo XIX ha sido llamado “El Gran Siglo”.  Siglo”. 

 

CUADRO 3 - CARACTERIZACIÓN DE CADA SIGLO   El primer siglo, es el siglo apostólico fundacional; el segundo siglo, es el siglo de los apologistas griegos; el tercer siglo, es el siglo de la persecución en el Imperio Romano; el cuarto siglo, es el siglo de la Iglesia estatal; el quinto siglo, es el siglo de las divisiones en Oriente; el sexto siglo, es el siglo del cesaropapismo; el séptimo siglo, es el siglo del Islam; el octavo siglo, es el siglo de la controversia sobre los íconos en Oriente; el noveno siglo, es el siglo del Sacro Imperio Romano Germánico; el décimo siglo, es el siglo de la conversión de Rusia; el undécimo siglo, es el siglo de la escolástica; el duodécimo siglo, es el siglo de las Cruzadas; el décimo tercer siglo, es el siglo del poder papal; el décimo cuarto siglo, es el siglo del Cautiverio Babilónico y Cisma Papal; el décimo quinto siglo, es el siglo del Renacimiento; el décimo sexto siglo, es el siglo de las Reformas; el décimo séptimo siglo, es el siglo de la razón; el décimo octavo siglo, es el siglo de los avivamientos evangélicos; el décimo noveno siglo, es el siglo de las misiones modernas. El último período se inaugura después de 1914 y coincide con el siglo pasado. Todos los siglos de la historia del cristianismo pueden ser designados por sus tendencias o eventos característicos. ¿Qué nombre podemos darle al siglo XX o cómo podemos caracterizarlo? Quizás es muy pronto  para darle un nombre, nombr e, pero posiblemente sea se a el “siglo de la consolidación y la renovación renov ación espiritual”. Estamos muy cerca de los eventos como para estar seguros de sus causas, de su significado y de su orientación. ¿Será este último período un cuarto retroceso? Muchos europeos, conscientes del secularismo y del proceso de descristianización imperante en sus países, responderían “SÍ”. Algunos norteamericanos, con un pobre desarrollo denominacional y permanente decrecimiento numérico en el  protestantismo troncal, también dirían “SÍ”.  “SÍ”.    No obstante, si interrogamos al continente asiático las respuestas serán diferentes según los lugares. En China, con el advenimiento del comunismo, el cristianismo casi fue cortado de raíz, pero a comienzos del siglo XXI había más de 150 millones de cristianos confesantes en la Iglesia subterránea en esta populosa nación. En otros países de Oriente, las iglesias cristianas han pasado y están pasando  por momentos de extraordinario avivamiento y desarrollo, como en Corea del Sur e Indonesia. En África, a pesar de los choques políticos, raciales y culturales, el progreso del cristianismo continúa siendo notable. En algunos países africanos el desarrollo es explosivo. En América Latina no se ha dado todavía un gran avivamiento de la fe cristiana, lo que no significa un retroceso sino una oportunidad. Es posible que el continente latinoamericano sea testigo en las próximas décadas de una revitalización del cristianismo que afecte a toda la cristiandad, si es que el Señor no retorna antes. Ya hay indicios verificables de este proceso de renovación espiritual y crecimiento de las iglesias. América Latina se está volcando masivamente a una comprensión evangélica (más específicamente pentecostal y carismática) de la fe cristiana. Del resumen histórico anterior surge la observación general de que después de cada retroceso vino no sólo una recuperación sino del un cristianismo. avance de grado superior los anteriores. Esdededesarrollo notar también la continua y creciente influencia Tomada en su s ua conjunto, la línea muestra un crecimiento, avance, logros y realizaciones que van más allá de lo que cualquier otra religión en el

 

mundo haya logrado jamás. Será, pues, como parte de esta línea de desarrollo que analizaremos y estudiaremos la importancia de cada período de la historia del cristianismo. En este primer volumen se considerará el período del primer avance del cristianismo: los primeros quinientos años. Consideraremos estos siglos fundacionales a través de cuatro unidades de desarrollo. En este volumen se estudia el primer avance del cristianismo desde Jerusalén “hasta lo último de la tierra.” El énfasis principal está puesto sobre la gente antes antes que en cuestiones políticas o polémicas. Se  procura hacer una descripción vívida de los cristianos en los primeros cinco siglos s iglos sobreviviendo con su fe a través de la persecución y llevando esa fe hacia el este en Asia, el sur en África, Áfric a, y hacia occidente en Europa. La Unidad 1 considera el rápido proceso de difusión del cristianismo en el ámbito geográfico del Imperio Romano, y se muestra cómo de religión reprimida se transformó en religión favorecida por el Estado. Se destacan los factores que contribuyeron a esa rápida expansión expan sión y la vida y ministerio de los  primeros cristianos. La Unidad 2 considera la expansión del cristianismo fuera del Imperio Romano, procurando mostrar que la fe cristiana no sólo se desarrolló en forma floreciente en Occidente, sino también en Oriente. Se notará cómo, hacia fines del período en consideración, el cristianismo había llegado a los extremos del mundo conocido: Inglaterra en Occidente y China en Oriente; los pueblos bárbaros al norte de Europa y la costa oriental de África hacia el sur. La Unidad 3 presta atención de manera particular al desarrollo del cristianismo en el Imperio Romano Oriental, con atención. su capital Se en procurará Constantinopla. Enconocer la historiografía tradicional ha recibido suficiente no sólo el desarrollo políticoeste sinodesarrollo también no el religioso, que estuvo íntimamente relacionado con el primero. A tal efecto, será de interés la consideración de la cosmovisión y cultura bizantina, así como sus manifestaciones teológicas, religiosas, eclesiológicas y litúrgicas. La Unidad 4 señala los problemas a los que el cristianismo tuvo que hacer frente en sus primeros 500 años de vida. Algunos fueron más profundos que otros, algunos pronto perdieron su vigencia, otros sobrevivieron sin una solución definitiva durante varios siglos, aun otros continúan reapareciendo hasta el día de hoy de una u otra manera.

UNIDAD 1 

El cristianismo en el imperio romano  INTRODUCCIÓN  Esta unidad es una síntesis de la historia del cristianismo desde sus orígenes hasta el siglo VI, en el ámbito de lo que se conoció como el Imperio Romano, pero con una perspectiva global. Se pondrá énfasis en el surgimiento y desarrollo del testimonio cristiano, mayormente en el mundo grecorromano. Se prestará atención a los eventos y movimientos principales, los personajes más importantes, los documentos fundamentales, y algunas de las tendencias teológicas más destacadas. El conocimiento de la historia del cristianismo de los primeros siglos es básico para una comprensión del testimonio y la vida de la Iglesia contemporáneos. Muchas de nuestras creencias y

 

 prácticas actuales son productos de aquellos siglos fundacionales. Mediante el estudio de la enseñanza y práctica de los primeros cristianos, los estudiantes y lectores aprenderán a apreciar a la Iglesia  primitiva y a comprometerse con la misión que el Señor nos ha confiado. confi ado. Todo el Nuevo Testamento señala el hecho del esparcimiento del cristianismo por todo el mundo como una meta que debe cumplirse en la historia. Cada uno de los cuatro Evangelios termina con un claro mandato, dado por Jesús, J esús, en este sentido (Mt. 28:19; Mr. 16:15; Lc. 24:47; Jn. 20:21). El libro de los Hechos de los Apóstoles tiene como propósito propós ito narrar los acontecimientos de ese pro programa grama desde el comienzo comi enzo en Jerusalén “hasta lo último de la tierra”. El resto de la literatura del Nuevo Testamento consiste en cartas de los misioneros a las jóvenes iglesias del mundo mediterráneo med iterráneo con cuya fundación estaban relacionados. Por estos documentos sabemos que los primeros cristianos estaban firmemente firmemen te convencidos que su religión era las “buenas nuevas” para todas las personas (Jn. 3:16; Lc. 24:47). Es posible que ante esta  pretensión muchos de los que oían su prédica se hayan reído. Al fin y al cabo, en comparación con los grandes movimientos filosóficos y los cultos practicados por las mayorías, el cristianismo no parecía otra cosa que una superstición inexplicable y peligrosa, que atentaba contra el orden institucional. Su origen era dudoso y los contenidos históricos de su fe resultaban no sólo paradójicos, sino inaceptables  para la cosmovisión dominante en aquel entonces. Además, ¿qué valor o influencia podía tener una secta judía nacida en un rincón tan oscuro del mundo como era Palestina?

EL LUGAR, EL TIEMPO Y EL PROPÓSITO  Para muchos pensadores de distinción en el primer siglo, Palestina, la cuna del d el cristianismo, no era más que un rincón olvidado y despreciado del mundo. Los griegos pensaban de él como una tierra de ignorantes y los romanos como un territorio rebelde y problemático. Sin embargo, ¿tenían razón los antiguos cuando consideraban a Palestina como un rincón del mundo? Si observamos un mapa, inmediatamente se hace evidente que Palestina no n o está en un rincón, sino en el centro mismo del mundo (ver mapa 2). MAPA 2 - PALESTINA EN EL CENTRO DEL MUNDO  

_ ElEllugar lugar  del   del nacimiento del cristianismo fue importante. Si bien algunos filósofos e intelectuales de las primeras décadas de testimonio cristiano se burlaron de las pretensiones de universalidad de la nueva fe, la cuna del cristianismo —  cristianismo — Palestina Palestina — eestaba staba ubicada en un lugar central desde el punto de vista geográfico. Allá por el año 175, un conocido filósofo pagano, Celso, decía: “Si Dios despertara de un largo sueño y quisiera salvar a todos los seres humanos, ¿piensas que iría a una esquina del mundo?… Sólo un escritor cómico diría que el Hijo de Dios fue enviado a los judíos.” Muchos en sus días compartían el concepto de Celso. Palestina era un territorio pequeño y marginal. Apenas una franja rugosa de 240 kms. de longitud por 120 kms. de ancho. Sin embargo, Palestina era central en términos geográficos. No hay otro territorio que esté mejor ubicado respecto a los cinco continentes. La expansión de la fe cristiana, entonces, comenzó a partir de un territorio estratégicamente ubicado, desde donde su expansión por todo el planeta era más factible. En un sentido, Palestina puede ser considerada como un centro geográfico del mundo.

 _ El tiempo 

 

 No sólo só lo el lugar resultó importante para el ssurgimiento urgimiento del cristianismo, cr istianismo, sino también el tiempo. Palestina es central geográficamente y también lo es históricamente. Este territorio ha ocupado una  posición histórica estratégica a lo largo de la historia de la humanidad en el corredor entre Asia y África (ver mapa 3). MAPA 3 - PALESTINA EN LA HISTORIA  Por un lado, esta posición estratégica de Palestina, significó una verdadera desgracia para sus habitantes, desde la antigüedad hasta el presente. El país está encajado como un estrecho corredor entre los territorios donde se desarrollaron algunas de las más grandes civilizaciones de la antigüedad: el Delta del río Nilo y las cuencas de los ríos Tigris y Éufrates. Fue inevitable que las sucesivas potencias rivales en estas dos áreas culturales se propusieran adueñarse de este corredor estratégico y procurarán conservarlo para sí. De este modo, el pequeño país se vio condenado a ser víctima constante de las guerras entre estos grandes dominios. Esta Es ta situación configura el trasfondo histórico de todo el Antiguo Testamento. Pero no sólo Asia y África compitieron por Palestina, sino que pronto se unió también Europa. El primer monarca europeo en dominar estas tierras fue Alejandro Magno, de Macedonia (c. 330 a.C.), y luego vinieron los romanos (63 a.C.). Ésta era la situación cuando se inició el período del  Nuevo Testamento: Asia, África y Europa rodeaban a Palestina, que era como un estrecho puente entre ellas. La historia del pueblo hebreo, según se nos refiere en el Antiguo Testamento, da testimonio de este hecho. Caldeos, egipcios, asirios, babilonios, persas, griegos y romanos, representantes de tres continentes, invadieron sucesivamente esta tierra y escribieron en ella su historia. Por otro lado, Palestina fue algo más que el escenario histórico de los conflictos bélicos de los imperios de la antigüedad. En el desarrollo de esa historia, Dios escogió el tiempo más propicio para el advenimiento del Salvador del mundo. La Biblia declara que el advenimiento del Mesías no fue fu e una casualidad histórica, sino que Dios escogió el tiempo. Los Evangelios testifican: “Jesús vino …  predicando el evangelio eva ngelio del reino de Dios, diciendo: El tiempo se ha cumplido” (Mr. 1:14, 15). Pablo usa una frase similar: “Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley …” (Gá. 4:4). Ambas declaraciones indican que qu e Dios preparó las cosas y que la preparación fue completa y adecuada para su eterno propósito redentor.

Kenneth S. Latourette: “En el tiempo en que comenzó el cristianismo y en los primeros tres siglos de su existencia más que en cualquier era precedente, las condiciones en el mundo mediterráneo prepararon el camino para la difusión de una nueva fe religiosa a través de toda la extensión de esa área. En realidad, tampoco después de los tres siglos en los que el cristianismo tuvo éxito en establecerse como la religión más fuerte en esa región, volvieron a existir allí las condiciones que favorecieron de tal manera la entrada y aceptación general de una nueva fe.”  fe.” 

 _ El propósito  Tiempo y espacio coincidieron como coordenadas para crear el marco más propicio para la venida de Jesús al mundo. Pero Palestina es central no sólo geográfica e históricamente, sino también espiritualmente. Palestina fue algo más que el escenario espacio-temporal de los conflictos bélicos de la antigüedad. Por sobre todas las cosas, fue la tierra en que nació Jesús, el Salvador del mundo. Fue el lugar del nacimiento del movimiento cristiano, y en esto su posición central adquiere una nueva importancia. Es cierto que Palestina fue el embudo por el que pasaron las potencias po tencias de tres continentes,  pero fue también el punto de partida ideal para que q ue el cristianismo penetrar penetraraa en esos tres continentes

 

con su mensaje de paz y justicia. Jesús había dicho: “Id … a todas las naciones, comenzando desde Jerusalén” (Lc. 24:47), y “desde Jerusalén J erusalén … hasta lo último de la tierra” (Hch. 1:8). Basta con observar observ ar un planisferio para notar cuán sabiamente escogió Dios a esta tierra para la realización de sus planes redentores y para la difusión de su luz por todo el mundo (ver mapa 2). El libro de los Hechos comienza la historia de una nueva era, cuando la posición central de Palestina (geográfica, histórica y espiritual) fue utilizada por Dios en forma novedosa y redentora. Los apóstoles al principio no se dieron cuenta de esto. Jesús les había hablado de la inauguración de un nuevo reino y de un nuevo poder con el que ellos lo pondrían de manifiesto en todo el mundo (Hch. 1:8). Pero ellos no entendieron la dimensión de lo que Jesús les estaba diciendo (Hch. 1:6), hasta que llegó el día de Pentecostés y el Espíritu Santo los ungió para la misión. Algo maravillosamente nuevo estaba ocurriendo y Dios había preparado las cosas. Poco a poco los primeros cristianos comenzaron a entender la misión de Dios y a comprometerse con ella con todo entusiasmo y fe.

FACTORES QUE CRISTIANISMO 

CONTRIBUYERON

A

LA

EXPANSIÓN

DEL

Los cristianos que vivían en el tiempo del primer avance rápido del cristianismo (hasta el año 250) y que habían desempeñado un papel importante en ese avance, veían que Dios había preparado las cosas de tres maneras:

 _ La contribución romana  El mundo romano hizo una quíntuple contribución a la expansión del cristianismo. Cada uno de estos aspectos puede ser recordado por la palabra en latín que lo describe:  pax, lex, via, rex, ars . Pax: la paz romana. Es difícil que una idea se difunda en medio de situaciones de conflicto. El Imperio Romano gozaba de paz cuando apareció el cristianismo. Orígenes de Alejandría (185 –  (185 – 254), 254), uno de los más destacados biblistas y teólogos del cristianismo antiguo, afirma: “Dios estaba  preparando a las naciones para su enseñanza.… Jesús nació en el reino del emperador Augusto (27 a.C. –   – 14 14 d.C.), que incorporó a muchos reinos a un solo Imperio Romano. Las guerras entre reinos rivales habrían entorpecido la difusión de las enseñanzas ens eñanzas de Jesús por toda la tierra.”  tierra.”   Lex: la ley romana. El hecho de tener un solo código legal en el Imperio Romano (el derecho romano) fue un factor crucial en la unificación del diverso mundo romano. Pero la legislación romana no fue un instrumento rígido, porque dentro del amplio margen de uniformidad, la administración romana a nivel local era flexible, tolerante y abierta. Además, muchos residentes de las provincias recibieron la condición de cives romani (ciudadanos de Roma), con todos sus derechos y deberes. Pablo fue uno de ellos (Hch. 22:25 –  22:25 – 229), 9), y esto le dio enormes ventajas en su tarea misionera. Via: las comunicaciones romanas por tierra y por mar. Estas vías de comunicación terrestre y marítima se extendían desde Inglaterra hasta China. En todo el mundo del mar Mediterráneo, las carreteras y vías marítimas, la paz, la ley y el orden romanos animaban a la gente a viajar, tanto por motivos de negocios como por placer, con una libertad y comodidad que fueron desconocidas hasta los tiempos modernos. Las rutas terrestres eran básicamente de uso militar, estaban construidas en piedra, con drenajes, puentes, y postas regulares para el recambio de cabalgaduras y descanso de los viajeros. Eran caminos rápidos y bien cuidados. Las rutas marítimas eran mayormente comerciales y por ellas viajaba mucha gente. Hechos 27:37 da una idea de la cantidad de pasajeros en una nave romana de gran calado. Los barcos en este período cruzaban el Mediterráneo desde Gibraltar hasta Roma en siete días, y desde Roma a Alejandría en dieciocho. El periplo hacia el Lejano Oriente comenzaba con un viaje hasta Alejandría, siguiendo luego por el Nilo, y desde allí se iba por tierra hasta la costa occidental del mar Rojo, para continuar atravesando el mar de Arabia y seguir hacia África del este o hacia la

 

India. Sin estas comunicaciones los viajes misioneros de Pablo y otros cristianos hubiesen sido imposibles.  Rex: el gobierno romano. El gobierno fue el talento supremo de los romanos. Para ellos la política y el gobierno fueron un arte en el que alcanzaron un alto grado de sofisticación. El fuerte gobierno centralizado de Roma proporcionaba paz y protección en todo el ámbito del Imperio. Los soldados romanos protegían a los pueblos y ciudades de los ataques externos y garantizaban el desarrollo del comercio y las misiones cristianas. La unidad política del Imperio Romano hacía que toda la cuenca del Mediterráneo fuese un solo mundo, regido por la misma autoridad. Misioneros como Pablo, Timoteo, Silas, Tito y otros no necesitaron de pasaporte para llevar a cabo sus viajes misioneros. Y fue  por su condición de ciudad ciudadano ano ro romano mano que Pablo pudo apelar a César y llegar a Roma R oma (Hch. 25:21, 25).  Ars: el talento romano. El vocablo ars en latín significa habilidad, talento, y en plural ( artis) se refiere a las cualidades intelectuales o morales, como a las inclinaciones o conducta. En todos estos aspectos, los romanos copiaron a los griegos, pero alcanzaron niveles de desarrollo único y sorprendente. En el campo de la educación, enfatizaron los aspectos prácticos con poca instrucción libresca, y crearon un complicado sistema escolar. La literatura escolar desarrollaba temas de historia y filosofía, con énfasis sobre la retórica. La pintura y la escultura, si bien seguían de cerca los modelos griegos, fue popularizada y orientada a destacar la herencia histórica de Roma, especialmente caracterizada por el retrato. No obstante, el genio romano y su extraordinaria habilidad técnica se expresó sobre las todo en ladearquitectura. como la bóveda y el edificios medio arco romano revolucionaron técnicas construcción,Estructuras de manera que permitieron levantar y estructuras monumentales (puentes, acueductos, circos, anfiteatros, basílicas, templos, foros). Todos estos elementos fueron adaptados y usados por los cristianos en la elaboración de las primeras formas del arte y la arquitectura cristiana. CUADRO 4 - LA CONTRIBUCIÓN ROMANA AL CRISTIANISMO    PAX   - la paz romana: garantizaba estabilidad.  LEX   - la ley romana: el derecho romano daba seguridad. VIA - las comunicaciones romanas: ayudaban a la comunicación.  REX   - el gobierno romano: el imperio era una unidad política.  RS - el talento romano: educación, arte y arquitectura.

 _ La contribución griega  El mundo griego contribuyó a la expansión del cristianismo de cuatro maneras: idioma, cosmovisión, filosofía y cultura. El idioma griego. El griego (coiné) era entendido y hablado por casi todo el mundo conocido del  primer siglo. Se lo utilizaba especialmente en el comercio. Las personas que recibieron la Gran Comisión eran judías. Su idioma natal era el arameo, pero hablaban también el griego. El griego era el idioma más utilizado en el Mediterráneo oriental. Esto proporcionaba un fuerte sentido de unidad cultural. Las Escrituras que usaron los primeros cristianos estaban escritas en griego (la Septuaginta o Versión de los Setenta, LXX) y sus escritos fueron redactados en este idioma, de modo que los documentos que luego se reunieron para formar el Nuevo Testamento no necesitaron traducción. Esto

 

facilitó enormemente el trabajo evangelizador de los primeros creyentes y la clara difusión de sus ideas. El griego es un idioma sumamente adecuado para expresar con exactitud y con una riqueza que no tiene igual en otros idiomas del mundo, las verdades contenidas en el Nuevo Testamento.  La cosmovisión griega. Los griegos contribuyeron con su pensamiento, que magnificaba el valor de la persona humana y ponía gran énfasis sobre la verdad espiritual y moral. Los griegos fueron un  pueblo de visión, conscientes de su protagonismo histórico, y por cierto muy emprendedores. En su cosmovisión, el ser humano era central y la persona person a humana tenía un valor único. Sobre todas las cosas, cosa s, los griegos fueron un pueblo sumamente curioso y amante de la verdad.  La filosofía griega. La filosofía griega tuvo una gran influencia en la formación del pensamiento occidental. Después de estudiar a los pensadores griegos muchos abandonaban las religiones paganas y las supersticiones, y estaban preparados para recibir una religión superior, como es el cristianismo. El amor por la verdad llevó a muchos a encontrarse con el Dios verdadero. Más tarde, cuando los Padres de la Iglesia desarrollaron su teología, utilizaron muchos elementos de la filosofía griega, especialmente su vocabulario e ideas centrales, para expresar las verdades cristianas. Escuelas filosóficas como el estoicismo y el neoplatonismo ejercieron una gran influencia en la formulación del  pensamiento cristiano. Pero hubo hub o también otras escuelas filosóficas que de algún modo impactaron el desarrollo de la fe cristiana o desafiaron su pretensión de ser la verdad: epicúreos, pitagóricos,  peripatéticos y los seguidores de Platón.

Clemente de Alejandría  (150 –215): “Dios es la causa de todas las cosas buenas; pero de algunas en forma primaria, como del Antiguo y del Nuevo Testamentos; y de otras por consecuencia, como la filosofía. Quizás, también, la filosofía fue dada a los griegos directamente y primariamente, hasta que el Señor pudiese llamar a los griegos. Porque ésta fue una educadora para traer a la ‘mente helenista a Cristo,’ así como la ley trajo a los hebreos hebr eos (Gá. 3:24). La filosofía, por lo tanto, fue una preparación, que pavimentó el camino para quien es  perfeccionado en Cristo.”  Cristo.”    La cultura griega. Para los días del Nuevo Testamento, esta cultura había alcanzado un alto grado de desarrollo y difusión. Conocida como helenismo, había sido esparcida por buena parte del mundo conocido de aquel entonces con las conquistas de Alejandro Magno (356 –  (356 – 23 23 a.C.) y tenía influencia tanto dentro como fuera del Imperio Romano. El arte, la literatura, la arquitectura, la música, el teatro, los estilos, los gustos, la retórica, los símbolos y valores del mundo antiguo en los días de Jesús y los apóstoles tenían un marcado tinte helenista.

CUADRO 5 - LA CONTRIBUCIÓN GRIEGA AL CRISTIANISMO  IDIOMA - adecuado para la transmisión de ideas.

COSMOVISI N - valor de la persona humana. FILO ILOSO SOF F A - amor por la verdad. CULTURA - arte, literatura, símbolos, valores.

 _ La contribución hebrea  De todosninguno los factores aportaron que elementos importantes al despegue del cristianismo, fue másque determinante el trasfondo hebreo enpara el queayudar el movimiento cristiano nació. La fe y la vida del pueblo de Dios proveyeron el trasfondo inmediato para el advenimiento de

 

Cristo y de todos sus discípulos. La religión hebrea aportó también instituciones como las sinagogas y el trabajo de los escribas, que fueron de suma importancia en el primer siglo de vida del movimiento cristiano. El mundo hebreo contribuyó a la expansión del cristianismo de seis maneras: monoteísmo, escrituras, diáspora, sinagogas, universalismo y mesianismo. El monoteísmo hebreo. La preparación más grande para la venida de Cristo al mundo fue la religión hebrea. De todos los aspectos del rico mundo religioso hebreo, el más importante fue su monoteísmo ético. Fue este concepto monoteísta hebreo el que atrajo a muchos muc hos gentiles insatisfechos con la religión  pagana  paga na politeísta. Como indican Irvin y Sunquist: “Muchos en las ciudades alrededor alreded or del Mediterráneo y a lo largo de los mundos de Siria y Persia se veían atraídos por la doctrina del monoteísmo: las enseñanzas morales de la Torá, los relatos de las escrituras de Israel, y el estilo de vida comunitario que ofrecía el judaísmo.” Estos autores continúan diciendo: “El monoteísmo fue atractivo en el mundo helenista, donde las enseñanzas de personas como Platón y Aristóteles, y de escuelas filosóficas como el estoicismo, apuntaban lejos de los muchos dioses de la mitología griega y romana y hacia la  presencia unificadora de un ser superior.” 7  Cabe recordar, también, que al principio y debido a su convicción monoteísta, el cristianismo fue considerado como una secta del judaísmo, aunque nunca lo fue, sino que más bien el primero fue la culminación y completamiento del segundo.

Orígenes de Alejandría:  “Dios no estaba durmiendo. Toda cosa buena que alguna vez haya acontecido entre los seres humanos ha sido la obra de Dios. Pero la venida de Cristo sólo podía ser a un lugar, donde las personas creyesen que Dios es uno; donde las personas estuviesen leyendo a los Profetas que señalan a Cristo; y donde las personas supiesen que Cristo vendría en un momento cuando, desde este lugar único, su enseñanza inundaría a todo el mundo.”    Las escrituras hebreas. La versión bíblica más aceptada en el judaísmo helenista del primer siglo era la Septuaginta, que “pronto probó ser tanto un símbolo como un vehículo de una transformación religiosa más amplia que tuvo lugar en el judaísmo helenista.” Quienes leían sus palabras encontraban nuevo significado para su fe a través de esta traducción, lo cual abrió sus mentes y corazones para aceptar el evangelio cristiano. Las escrituras de los judíos señalaban al Mesías, el Cristo. Según los Evangelios, Jesús pretendía ser el cumplimiento de esas profecías (Lc. 4:21; 24:27). Apóstoles,  predicadores y maestros, según los documentos del Nuevo Testamento (Hechos y las epístolas) enfatizaban que en Jesús se habían cumplido las escrituras del Antiguo Testamento. Justino Mártir (100 – 165), 165), el más grande de los apologistas en lengua griega, estaba convencido que la mejor y más clara evidencia a favor del cristianismo, se encontraba en los libros de los profetas. “En estos libros … de los profetas,” según él, “encontramos a Jesús nuestro Cristo preanunciado como viniendo, nacido de una virgen, creciendo hasta ser hombre, sanando toda enfermedad y toda dolencia, y resucitando a los muertos, y siendo odiado, y despreciado, y crucificado, y muriendo, y resucitando nuevamente, y ascendiendo a los cielos, y siendo llamado el Hijo de Dios.” Justino Ju stino era griego y filósofo, pero tuvo una conversión profunda gracias a su lectura de los textos proféticos que anunciaban al Mesías. Según él, “inmediatamente una llama se encendió en mi alma; y fui prendido de amor por los profetas y por aquellos hombres hombres que son los amigos de Cristo (los apóstoles).” 11   La diáspora hebrea . La diáspora o dispersión de los judíos después de la destrucción de Jerusalén en ocasión de la invasión del imperio neo-babilónico (586 a.C.) y en los siglos que siguieron, había llevado al establecimiento de comunidades de judíos desde España, por toda Europa, Asia (Persia y Arabia), India, y África (valle del Nilo y Etiopía). En tiempos de Jesús había más judíos fuera de Palestina que dentro. Estrabón en su Geografía (publicada en el año 7), señala con cierto prejuicio antisemita: “Los judíos han ido a toda ciudad, y es difícil encontrar un lugar sobre la tierra que no los haya admitido y haya caído bajo su control.” Para los días de Jesús, los judíos que vivían en el mundo  persa sumaban alrededor de un millón de almas, la mayoría de ellos dedicados al comercio o la

 

administración, y otros sirviendo como escribas o eruditos en la Torá, especialmente en o alrededor de Babilonia. En Egipto había comunidades judías en las principales ciudades, como Elefantina y Alejandría. En la segunda, ocupaban un barrio completo con alrededor de 100.000 habitantes. 13   La sinagoga hebrea. En las sinagogas (gr. “casa de reunión”), que estaban establecidas desde España hasta la India, se predicaba el monoteísmo ético y el concepto de un Dios personal. En muchos casos, durante los primeros años, el núcleo de las nuevas congregaciones cristianas estuvo constituido  por los prosélitos y adherentes de las sinagogas. Muchos de los elementos de la adoración en las sinagogas, tales como oraciones, la lectura bíblica, exposición de las Escrituras y alabanza, prepararon el camino para la adoración cristiana y fueron su primer modelo. Las sinagogas fueron también los  primeros centros de predicación cristiana. Pablo comenzaba su tarea misionera en una ciudad visitando la sinagoga local y dando testimonio de su fe en Cristo (ver Hch. 13:5, 14; 14:1; 17:1 –  17:1 – 3, 3, 10; 18:4; etc.). Las primeras comunidades cristianas nacieron del testimonio cristiano en las sinagogas de la diáspora. Además, en las sinagogas se enseñaba la importancia de separar un día en la semana para el descanso y la adoración a Dios. La observancia del Sabbath (sábado) como día especial para la adoración pasó a los cristianos, que pronto lo asociaron con la celebración de la resurrección de Cristo. El universalismo hebreo. La fe hebrea confesaba que la religión de Israel era para bendición de las naciones. Esta comprensión del alcance universal de la fe fue transferida del judaísmo al cristianismo, que se transformó en una religión verdaderamente universal. El instrumento clave en este proceso fue el apóstol Pablo. Fue a través de Pablo que se abrió la puerta del cristianismo a los gentiles. Pocos misioneros vez tantas comohaber tuvo pensado Pablo. Elenoficial romano quede lo uno. arrestó después del tuvieron alboroto alguna en Jerusalén (Hch.ventajas 21:33) debe tres Pablo en vez El apóstol era un verdadero prototipo de su época. Primero, Pablo le habló al oficial en griego, y le dijo que era de Tarso, una ciudad que tenía una universidad griega (Hch. 21:37 –  21:37 – 39). 39). Segundo, Pablo apaciguó a la multitud hablándoles en su propia “lengua hebrea”, es decir, aramea (Hch. 21:40– 22:2), 22:2), refiriéndoles de su educación hebrea en Jerusalén. Y, tercero, aterrorizó al tribuno (que (q ue había permitido que sus soldados lo trataran rudamente), cuando le dijo que pertenecía a una familia que tenía el  privilegio de la ciud ciudadanía adanía romana ((Hch. Hch. 22:25 – 229). 9). Pablo pertenecía a estas tres esferas o mundos: era griego, hebreo y romano. Pero, sobre todo, era un misionero cristiano, con un mensaje de vida nueva para todas las naciones. El mesianismo hebreo. El pueblo hebreo tenía una gran expectativa ex pectativa mesiánica, junto con una fuerte convicción de ser el pueblo elegido por Dios para un fin redentor en la historia. El cristianismo nunca se consideró como una religión totalmente diferente del judaísmo, sino más bien como su completamiento y coronación. A También pesar de afirmaban la aperturaque deltodas cristianismo a los concernientes gentiles, los cristianos conservaron las Escrituras judías. las promesas al pueblo escogido de Dios se habían cumplido en la Iglesia cristiana, el Nuevo Israel. Podemos decir, entonces, que el cristianismo fue el cumplimiento del judaísmo, pero fue más allá del judaísmo. No permaneció como una secta judía, sino que se transformó en una fe nueva y fresca. Es esencial la comprensión del  judaísmo para un entendimiento cabal del cristianismo, pero el judaísmo no explica al cristianismo. El cristianismo se levantó sobre los cimientos del judaísmo, pero fue radicalmente diferente. En esta diferencia está el secreto de su vitalidad y de su historia extraordinaria. CUADRO 6 - LA CONTRIBUCIÓN HEBREA AL CRISTIANISMO  MONO MO NOTE TE SMO SMO TIC TICO O - la fe en un Dios personal y moral.

ESCRITURAS - el Antiguo Testamento.

 

DI SPORA - una red de sinagogas en casi todo el mundo. SINAGOGA - modelo de comunidad de enseñanza y culto. UNIVERSALISMO —  bendición a todas las naciones. MESIANISMO — una una misión redentora en el mundo.

UN MUNDO URBANO  Por su enorme importancia como trasfondo positivo para la expansión del movimiento cristiano, vale la pena mencionar de manera especial el contexto urbano y cosmopolita en el que nació la fe en Cristo. No sólo el Imperio Romano sino también el Imperio Persa y las grandes civilizaciones que se desarrollaron en ellos y a su alrededor, se caracterizaron por constituir una trama de nucleamientos urbanos de importancia. Palestina, como se indicó, se encontraba en el medio de esta galaxia de ciudades ligadas las unas a las otras por fluidas vías de comunicación. Esta red de centros urbanos conectaba amplias regiones culturales en tres continentes, con un flujo continuo de política y comercio, que iba desde el Atlántico hasta el Pacífico.

Irvin y Sunquist: “Las ciudades fueron centrales en civilizaciones tales como la mediterránea, la persa, la india y la china. Éstas fueron también civilizaciones que habían desarrollado la escritura. Para el primer siglo cada una de ellas podía hacer gala de una extensa tradición literaria. En particular, los escritos sagrados pasaron a la herencia de las creencias religiosas a través de himnos, escritos sacerdotales, tratados filosóficos (o de sabiduría), y relatos sagrados. Durante el milenio antes del nacimiento de Cristo, estas civilizaciones habían sido testigos del surgimiento de numerosos maestros, especialmente importantes o inspirados, cuyos escritos transformaron el carácter religioso y filosófico de la humanidad. Las obras de estos maestros todavía hoy informan el proyecto de la civilización humana. Kung-fu-tzu (Confucio en latín), Lao-Tzu, el Buda, los escritores del Upanishad , Zoroastro, los profetas de Israel, y los filósofos de Grecia todos ellos pertenecían a una revolución en la conciencia humana, que había configurado de manera muy significativa al mundo en el que los discípulos de Jesús se movieron por primera vez.”  vez.”  Las ciudades desparramadas por el mundo conocido del primer siglo, eran verdaderos conglomerados humanos que concentraban riqueza material y poder político, y servían como focos de difusión cultural e información de gran alcance. Mercaderes, artesanos, esclavos, es clavos, gobernantes, artistas, sacerdotes, maestros, predicadores y obreros se daban cita en estos verdaderos crisoles de cultura. Las ciudades fueron el campo misionero por excelencia de los primeros cristianos, tal como lo ilustra un análisis de los viajes misioneros del apóstol Pablo. Desde su comienzo mismo, el cristianismo se caracterizó como un movimiento urbano.

Wayne A. Meeks: “En aquellos años tempranos, …, a una década de la crucifixión de Jesús, la cultura de la villa en Palestina había sido dejada atrás, y la ciudad grecorromana se transformó en el medio ambiente dominante del movimiento cristiano. Y así permaneció, desde la dispersión dispersi ón de los “helenistas” de Jerusalén hasta bien después del tiempo de Constantino. El movimiento había cruzado la división más fundamental en la sociedad del Imperio Romano,

 

aquella entre la gente rural y los habitantes urbanos, y los resultados iban a probar ser importantes.”   importantes.”

EL SURGIMIENTO DE LA IGLESIA   _ El lugar de adoración  Durante los dos primeros siglospropiedades después de por Cristo, los cristianos no tuvieron eclesRomano. eclesiásticos, iásticos, en razón de que no podían poseer no tener una posición legal enedificios el Imperio Las congregaciones cristianas se reunían en casas de familia, donde desarrollaban su vida como comunidad de fe. Tres grandes acontecimientos en la historia del cristianismo neotestamentario ocurrieron en una casa de Jerusalén: la última cena de Jesús con sus discípulos (Mr. 14:12 – 26); 26); las apariciones del Jesús resucitado a los apóstoles (Jn. 20:14 –  20:14 – 29); 29); y la venida del Espíritu Santo (Hch. 2). 2) . Posiblemente era la casa de Juan Marcos, el futuro autor del Evangelio que lleva su nombre. Cuando se comparan ciertos pasajes y se procura identificar el lugar que mencionan, parece seguro que en los tres casos se trata de la misma casa (Mr. 14:14 –  14:14 – 15; 15; Hch. 1:12 – 15; 15; Jn. 20:19). En Hechos 12 se menciona una casa donde muchos cristianos se reunían para orar (Hch. 12:12). Marcos 14:51 sugiere que el joven en cuestión fue Juan Marcos, porque ningún otro Evangelio menciona el incidente. Si es así, la casa grande en Jerusalén bien puede haber sido la casa de María, la madre de Juan Marcos, el autor del Evangelio que lleva su nombre. En los el Nuevo Testamento se mencionan “casas”enenCorinto lasinto que(Hch. se reunía la en iglesia primitiva, y se dan nombres de sus dueños: en Filiposmuchas (Hch. 16:40); Cor 18:7); Roma (Ro. 16:5, 14, 15); en Éfeso (1 Co. 16:19); en Laodicea (Col. 4:15); en Colosas (Flm. 1 y 2). Estas iglesias caseras fueron características del período neotestamentario y hasta el segundo siglo. Los primeros cristianos se sentían felices de reunirse en sus propias casas. Los paganos tenían templos; los judíos, sinagogas;  pero los cristianos er eran an algo nuevo e ilegal, no tenían reconocimiento recono cimiento oficial y eran sospechosos. La única propiedad privada que tuvieron las primeras iglesias fueron las tumbas (catacumbas), y allí se reunían, especialmente especialmente en tiempos de persecución. Fueron estas iglesias “caseras” o sin templo (Ro. 16:5) las que expandieron el cristianismo por todo el mundo romano y más allá también. Recién hacia el año 250 se construyeron algunos al gunos templos cristianos en el Ponto (Asia Menor), Menor ), Siria y Egipto, pero se perdieron por causa de las terribles persecuciones de mediados del siglo III. Los arqueólogos han descubierto los restos de lo que parece haber sido una casa remodelada y adaptada  para servir como casa de reunión de los cristianos. El descubrimiento fue hecho en 1934, en la localidad localidad arqueológica de Dura-Europos, sobre el río Éufrates en lo que hoy es Irak. Allí se encontró un edificio  probablemente construido alrededor del año 100, pero que fue reformado en el 232. Se trata de una vivienda en la que se derrumbaron algunos muros y en la que se construyó constru yó un bautisterio, y sobre cuyas  paredes se pintaron hermosos frescos f rescos con motivos cristianos.

 _ La vida y el ministerio  La vida y el ministerio de estas iglesias eran muy simples. Lo más importante era la predicación, la Cena del Señor y el Bautismo. No se hacía lo mismo en todas partes, ni todo lo que se hacía estaba  bien hecho o en conformidad con los testimonios de d e los documentos neotestamentarios.  La predicación . Ocupaba un lugar muy importante en el culto cristiano primitivo. Generalmente, era de carácter didáctico y testimonial. Al principio se llevó a cabo siguiendo el modelo de la  predicación rabínica en la sinagoga y consistía en una exposición de algún texto del Antiguo Testamento o de los Evangelios en la forma de una homilía. Hay testimonios sumamente ilustrativos de la predicación cristiana temprana. Uno de los más conmovedores es el que presenta Ireneo de Lión

 

(130 – 202), 202), Padre de la Iglesia que fue discípulo del obispo Policarpo de Esmirna (69 – 155), 155), quien a su vez fue discípulo del apóstol Juan.

Ireneo de Lión:  “Tengo un recuerdo más vívido de lo que ocurrió en aquel tiempo que de eventos recientes (ya que las experiencias de la infancia, manteniendo el ritmo con el crecimiento del alma, se incorporan con ella); de modo que puedo incluso describir el lugar donde el bendito Policarpo solía sentarse y predicar  — su su salida, también, y su entrada —  entrada — su su estilo de vida general y su apariencia física, junto con los sermones que él predicaba a la gente; también la manera en que él hablaba de su relación familiar con Juan, y con el resto de aquellos que habían visto al Señor; y cómo él traía a la memoria sus palabras. Cualesquiera cosas que él había oído de ellos respecto del Señor, tanto en relación con sus milagros y sus enseñanzas, Policarpo, que había así recibido [información] de los testigos oculares de la Palabra de Vida, las solía contar todas en armonía con las Escrituras. Estas cosas, a través de la misericordia de Dios que estaba sobre mí, yo las escuché luego atentamente, por la gracia de Dios, registrando estas cosas exactamente en mi mente.”  mente.”   Es interesante notar que la predicación de Policarpo no se puede repetir y que nosotros no podemos experimentar la emoción que sintió Ireneo al recordarla. Pero no tenemos por qué envidiarlo, porque nosotros tenemos el registro inspirado de la predicación y testimonio apostólico en los escritos del  Nuevo Testamento.  La Cena del Señor . La “eucaristía” (el nombre más antiguo para esta práctica cristiana) fue, junto con la predicación, uno de los actos de mayor significado en las reuniones de los primeros cristianos, en obediencia al claro mandato de Jesús (Mt. 26:26 – 29; 29; Mr. 14:22 – 25; 25; Lc. 22:19 – 24; 24; 1 Co. 11:23 – 26). 26). Generalmente, cuando llegaba el momento de la Eucaristía (“acción de gracias”) o Cena del Señor, se invitaba a los que no eran bautizados a retirarse, porque ésta era sólo “para aquellos que habían sido  bautizados en el el nombre del Señor” (según enseña un documento muy antiguo conocido como como Didaché   o Enseñanza de los Doce Apóstoles ). Justino Mártir nos presenta un cuadro interesante de cómo se celebraba la Eucaristía en Roma, a mediados del segundo siglo.

Justino Mártir:  “Luego es traído al presidente de los hermanos el pan y una copa de vino mezclado con agua; y él tomándolos, da alabanza y gloria al Padre del universo, a través del nombre del Hijo y del Espíritu Santo, y ofrece gracias por un buen rato para que seamos tenidos  por dignos de recibir estas cosas de Sus manos. Y cuando él ha concluido las oraciones y la acción de gracias, todas las en personas presentes asentimiento diciendo Amén. Esta  palabra Amén corresponde la lengua hebr hebrea eaexpresan a genoitosu [así sea]. Y cuando el presidente ha dado gracias, y todas las personas han expresado su asentimiento, aquellos que son llamados  por nosotros diáconos dan a cada uno de los que están presentes para que participen el pan y el vino mezclado con agua sobre los cuales la acción de gracias fue pronunciada, y a aquellos que están ausentes les llevan una porción. Y esta comida es llamada entre nosotros Eujaristia [la Eucaristía], de la que a nadie se le permite participar sino a la persona que cree que las cosas que nosotros enseñamos son ciertas, y que ha sido lavada con el lavamiento que es para la remisión de pecados, y para la regeneración, y que en consecuencia vive según Cristo ha enseñado.”   enseñado.” El Bautismo. El bautismo cristiano es uno de los ritos cristianos más antiguos. Le debe mucho a las  prácticas de abluciones purificadoras del judaísmo y a su aplicación como rito de iniciación de los

 prosélitos. también estar el bautismo de decir, arrepentimiento ministrado Juan el Bautista. SePuede practicó primero enrelacionado en ríos, porquecon el agua “viva” (es corriente) parecía máspor apropiada que el agua “muerta” (estancada), para este acto tan simbólico. El Nuevo Testamento exhorta diciendo,

 

“despojaos del viejo hombre” y “vestíos del nuevo hombre” (Ef. 4:22– 24; 24; Col 3:9, 10); también habla de los creyentes como “muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús” (Ro. 6:11). El  bautismo simboliza todo esto en forma muy real. Por eso, los cristianos primitivos se desnudaban totalmente antes de entrar al agua, y luego se vestían con ropas nuevas, limpias y blancas. Generalmente se los sumergía completamente en el agua. Muy temprano se introdujo la práctica de la aspersión o el rociamiento, derramando agua sobre la cabeza tres veces. A medida que el cristianismo se esparció a regiones con climas más rigurosos esta práctica se fue haciendo cada vez más común. Los primeros cristianos bautizaban sólo a personas que habían confiado en Jesucristo como Salvador y Señor de sus vidas, y que estaban dispuestas a comprometerse como miembros de la comunidad de fe (Mt. 28:19; Mr. 16:16; Jn. 3:5; Ef. 4:5). El bautismo infantil fue una práctica de desarrollo posterior. Esta práctica ya era conocida en los días de Tertuliano de Cartago (160 –  (160 – 220), 220), en la segunda mitad del siglo II, si bien no estaba muy generalizada. Junto con esto, se dio también  paulatinamente un cambio en la comprensión original del bautismo, a medida en que éste se fue interpretando más como un sacramento con cierto poder mágico, con la capacidad de producir regeneraciónn (Justino Mártir lo llama “baño de la regeneración”).  regeneració regeneración”).   Los testimonios sobre la práctica del bautismo son múltiples e ilustran de manera muy vívida cuán importante era este acto de testimonio público para los primeros cristianos.

Justino Mártir:  “Todos aquellos aquellos que están persuadidos y creen que lo que enseñamos y decimos es verdad, y se comprometen a ser capaces de vivir en conformidad, son instruidos a orar y a rogar a Dios con ayuno, por la remisión de sus pecados pasados, orando y ayunando nosotros con ellos. Luego son llevados por nosotros donde hay agua, y son regenerados de la misma manera en que nosotros mismos fuimos regenerados. Porque, en el nombre de Dios, el Padre y Señor del universo, y de nuestro Salvador Jesucristo, Jes ucristo, y del Espíritu Santo, ellos reciben entonces el lavamiento con agua.… Pero nosotros, después que hemos lavado de esta manera a quien ha estado convencido y ha sido afirmado en nuestra enseñanza, lo llevamos al lugar donde aquellos que son llamados hermanos están reunidos, a fin de que podamos ofrecer oraciones sinceras en común por nosotros mismos y por la persona bautizada [iluminada], y por todos los demás en cualquier lugar, para que podamos ser contados por dignos, ahora que hemos aprendido la verdad, y por nuestras obras también ser considerados como buenos ciudadanos y guardadores de los mandamientos, de modo que podamos ser salvos con una salvación eterna. Habiendo terminado con las oraciones, nos saludamos unos a otros con un beso.”   En muchos lugares, con anterioridad a la administración del bautismo, se instruía durante algún tiempo a los catecúmenos (candidatos al bautismo) en cuanto a la fe y conducta de un cristiano. Luego de ayunar y orar estaban listos para el bautismo, que simbolizaba su abandono del paganismo por el cri cristianismo. stianismo. El acto comenzaba con una solemne confesión de fe f e por parte del catecúmeno (“Jesucristo es el Señor;” “Jesús es el Hijo de Dios”), seguía con su inmersión, la unción de aceite e imposición de manos para la llenura del Espíritu Santo, y terminaba con la bienvenida que se le daba a la comunidad de los creyentes y su participación en la Cena del Señor.

Tertuliano de Cartago:  “No hay absolutamente nada que torne más obstinadas las mentes humanas que la simplicidad de las obras divinas que son visibles en el acto [del bautismo], cuando se las compara con la grandeza que es prometida en ello en cuanto al efecto; de modo que de este hecho mismo, que con una simplicidad tan grande, sin pompa, sin ninguna novedad considerable de preparación, finalmente, sin gasto, un hombre es sumergido en agua, y en medio de la pronunciación de algunas pocas palabras, es mojado, y luego levantado nuevamente, no mucho (o casi nada) más limpio, la consiguiente obtención de la eternidad es

 

estimada como más increíble.… ¿Qué entonces? entonces? ¿No es maravilloso, también, que la muerte se lave por el baño?… Nosotros mismos también nos maravillamos, pero es porque creemos.”  

 _ Otras prácticas cristianas  El día del Señor . Hasta el siglo IV, el día del Señor se observaba en algún momento entre el atardecer del sábado y la hora de iniciar la jornada de trabajo, el domingo por la mañana. Para los cristianos primitivos el domingo (“Día del Señor”) ocupó el lugar del Sabbath judío (Hch. 20:7; 1 Co. 16:2; Ap. 1:10). Justino Mártir, en su Primera Apología, se refiere a este día de manera particular. Justino Mártir: “En el día llamado día del sol (en inglés, Sunday), todos los (hermanos) que viven en ciudades o en el campo, se reúnen r eúnen en un lugar, y se leen las memor memorias ias de los apóstoles (los Evangelios) o los escritos de los profetas, en cuanto el tiempo lo permite; luego, habiendo terminado el lector, el que preside instruye y exhorta verbalmente a la imitación de estas cosas  buenas. Después todos juntos nos ponemos de pie y oramos, or amos, y, según dijimos antes, concluida nuestra oración, se trae pan y vino con agua, y el que preside de igual manera ofrece oraciones y acción de gracias, conforme su capacidad, y el pueblo asiente, diciendo ‘¡Amén!’ Y se  procede a la distribución a cada uno y a la participación de aquello sobre lo cual se ha dado gracias, y a aquellos que están ausentes se les envía una porción por medio de los diáconos.… Pero el domingo es el día en el que todos tenemos ten emos nuestra asamblea común, porque es el primer p rimer día en el que Dios, habiendo obrado un cambio en las tinieblas y la materia, hizo el mundo; y Jesucristo, nuestro Redentor, en el mismo día resucitó de entre los muertos. Pues él fue crucificado en el día anterior al de Saturno (sábado); y en el día después del de Saturno, que es el día del Sol, habiendo aparecido a sus apóstoles y discípulos, les enseñó estas cosas, que hemos sometido a vos también para vuestra consideración.”  consideración.”   La ayuda a los necesitados. Los primeros cristianos dieron una importancia primordial a la asistencia de los pobres, las viudas y los huérfanos. Hay Ha y que tener en cuenta que la gran mayoría de los creyentes eran esclavos o libertos muy pobres. El Nuevo Testamento refleja esta característica de la condición social y económica de las primeras comunidades cristianas.

Justino Mártir:  “Después de estos servicios (Bautismo y Eucaristía), nos recordamos continuamente estas cosas. Y los ricos entre nosotros ayudan a los que están en necesidad; y siempre nos mantenemos juntos.… Y los pudientes y todos los que quieren dan lo que a cada uno le parece adecuado; y lo queque, se colecta es depositado con elopresidente, quien socorre a los huérfanos y viudas y a aquellos por causa de enfermedad cualquier otra causa, están en necesidad, y a aquellos que están presos y a los extranjeros que están de viaje entre nosotros, y en una palabra, él cuida de todos los que están en necesidad.”   Los primeros cristianos fueron bien conocidos por su solidaridad y por la efectividad de su amor  puesto en acción. Los P Padres adres Apostólicos y los apologistas utilizaron esta realidad como uno de los argumentos fundamentales en su defensa de la autenticidad de la fe cristiana. Tertuliano fue uno de los que más apeló a esta argumentación a fines del segundo siglo, presentando la manera práctica en que en Cartago la Iglesia atendía a las necesidades sentidas de las personas, como una cuestión prioritaria en el cumplimiento de su misión.

Tertuliano de Cartago: “Si bien tenemos nuestra caja, ésta no está compuesta de dinero mal habido, como el de una religión que tiene su precio. Una vez al mes, si así lo quiere, cada uno  pone en ella una pequeña donación; pero sólo si así lo quiere, y sólo si puede: porque no hay obligación; todo es voluntario. Estos donativos son una especie de fondo de depósito piadoso.

 

Porque no se los toma de allí y se los gasta en fiestas, y borracheras, y comilonas, sino en sustentar y ayudar a gente pobre, a suplir las necesidades de niños y niñas carentes de medios y padres, y de personas ancianas confinadas ahora a la casa; también a los que han sufrido naufragio; y si ocurre que hay alguien en las minas, o exiliado en las islas, o encerrado en las  prisiones, por ninguna otra razón que su fidelidad a la causa de la iglesia de Dios, ellos se transforman en la base de su confesión. Pero es fundamentalmente las acciones de un amor tan noble lo que lleva a muchos a poner una marca sobre nosotros. Miren, ellos dicen, cómo se aman unos a otros.”  otros.”  Según Eusebio de Cesarea (260 – 340) 340) en su  Historia eclesiástica, en el año 250, las iglesias en Roma, sostenían a su obispo, “46 presbíteros, siete diáconos, siete sub-diáconos, sub -diáconos, 42 acólitos, 52 exorcistas, lectores, y porteros, y más de 1500 viudas y personas en desgracia, todos ellos nutridos por la gracia y el cuidado amoroso del Maestro.” Mae stro.” Un siglo más tarde, en 362, el emperador Juliano el Apóstata se quejaba: “Los cristianos alimentan no sólo a sus propios pobres, sino también a los nuestros, mientras que nadie que esté necesitado busca ayuda en los templos (paganos).”  

 _ Símbolos cristianos  La riqueza iconográfica producida por los primeros cristianos es sorprendente. La fe en Jesucristo era proclamada no sólo a través de la palabra hablada y escrita, la conducta y el ejemplo, el amor y la solidaridad de los creyentes, sino también a través del arte y una gran variedad de expresiones plásticas y artísticas. En general, las representaciones más numerosas son de carácter simbólico, y expresan de manera elocuente los contenidos de la fe. La mayoría de los símbolos cristianos se utilizaban en epitafios en las tumbas. El lenguaje simbólico servía para distinguir una cierta tumba como cristiana y transmitir un mensaje, cuyo significado sólo podían entender otros cristianos. Las evidencias más importantes se encuentran en las catacumbas de Roma. Éstas son galerías subterráneas cercanas a las rutas de salida de la ciudad, que se extienden por más de 800 kilómetros y servían como lugares de sepultura. Se conocen unas 35 catacumbas. Las más antiguas datan de mediados del siglo II y se conocen por los nombres de algunos mártires cristianos famosos: Lucina, Calixto, Domitila y Priscila. Las inscripciones y pinturas de las catacumbas ayudan a clarificar el desarrollo del arte y el simbolismo cristiano primitivo. Los símbolos cristianos más comunes son: el pez, la cruz, el ancla, la  paloma, la barca, y el buen pastor. El pez. De todos los símbolos cristianos, éste es uno de los más antiguos y por cierto de los más  populares hasta el día de hoy. El pez representa la esencia de la fe cristiana. En relación con su significado, Tertuliano señala con referencia al bautismo cristiano: “Pero nosotros [los cristianos], somos peces pequeños, que al igual que nuestro  Ichthus  [“pez” en griego] Jesucristo, somos nacidos en el agua, así como tampoco tenemos seguridad de ninguna otra manera que morando  permanentemente en el agua; … ¡la forma de matar a los peces pequeños es sacándolos del agua!” Las  palabras del célebre líder cristiano, apologista y pastor de Cartago Carta go hacen referencia a lo que se conoce como Anagrama de Tertuliano, es decir, el uso de una palabra para formar diversos significados. En este caso, utilizando las letras griegas de la palabra pez ( ichthus), se puede elaborar un anagrama que representa la confesión de la fe cristiana por excelencia: “Jesucristo, el Hijo de Dios (es) el Salvador.”  Salvador.”  Palabra

CUADRO 7 - ANAGRAMA DE TERTULIANO  Latín Griego Traducción

Ι 

lesous 

Ιεσουζ   Ιεσουζ

Jesús 

Χ 

Christos 

Χριστοζ   Χριστοζ

Cristo 

 

  Ζ 

Theos 

Θεοζ   Θεοζ

de Dios 

Υ 

Uios 

Υιοζ   Υιοζ

Hijo 

Σ 

Soter 

Στερ   Στερ

Salvador 

 La cruz . El símbolo de la cruz fue evitado al principio por los cristianos, no sólo por su relación directa con la muerte de Cristo, sino también por su vergonzosa asociación con la ejecución de un criminal común. Además de instrumento de tortura, maldición y muerte, la cruz era conocida como símbolo en el mundo grecorromano. Sus dos barras ya eran en la antigüedad un símbolo cósmico del eje entre el cielo y la tierra. Pero su temprana elección por los cristianos como símbolo característico de su fe tuvo una explicación más específica. Ellos no querían conmemorar como central para su comprensión de Jesús ni su nacimiento o juventud, ni su enseñanza enseñanz a o servicio, tampoco su resurrección o reinado, ni su don del Espíritu Santo, sino su muerte, su crucifixión. Parece seguro que, al menos desde el siglo II en adelante, los cristianos no sólo llevaban, pintaban y esculpían la cruz como un símbolo gráfico de su fe, sino también hacían la señal de la cruz sobre sí mismos u otros, especialmente especialmen te como indicación de protección contra las acechanzas del maligno. La cruz es el símbolo por excelencia de la muerte de Jesús y el centro del mensaje cristiano (1 Co. 1:18; Ef. 2:16; ver 1 Co. 1:23; 2:2). El principal triunfo del cristianismo ha sido el de transformar la cruz como símbolo de vergüenza y dolor, en símbolo de lo que es más glorioso y sagrado —  sagrado — el el amor de Dios — , y del triunfo y exaltación de Cristo. El lábaro de Constantino. Después de la supuesta “conversión” de este emperador romano (312), este símbolo se universalizó como representación de la cristiandad. Está compuesto por las dos  primeras letras del nombre “Cristo” en griego: XP. Según la leyenda, la noche anterior ante rior a su combate comb ate contra Majencio, su competidor por el trono imperial, Constantino tuvo una visión en la cual oyó una voz que le decía: “ In hoc signo vinces” (Con este signo, vencerás). Temprano Tempran o a la mañana, Constantino hizo cambiar el estandarte tradicional de las legiones romanas (SQPR, “el Senado y el Pueblo de Roma”) por las dos primeras letras del nombre de Cristo … ¡y salió victorioso en la batalla sobre el  puente Milvio! Desde entonces, este símbolo ha adornado altares, púlpitos, libros e instrumentos sagrados, indicando que son cristianos.

CUADRO 8 - SÍMBOLOS CRISTIANOS  CRUZ  ALFA Y OMEGA  Muerte de Cristo. La eternidad de Cristo.

PALOMA  Espíritu Santo en el  bautismo de Jesús.

ANCLA  Fe.

CORDERO  Sacrificio expiatorio de Cristo.

PAN Y VINO  Eucaristía — la la muerte de Cristo.

PESCADO 

CHI-RHO  Primeras dos letras griegas del nombre

 

Anagrama: “Jesús Cristo, el Hijo de Dios, es el Salvador.”  Salvador.” 

“Cristo”. Lábaro de Constantino.

PASTOR  Cuidado de Cristo por su pueblo.

VID  La unión de Cristo con su pueblo; el vino de la eucaristía.

BARCA  La Iglesia mundo.

LLAMA DE FUEGO  Espíritu Santo en el día de Pentecostés.

en

el

LA IGLESIA Y SU MISIÓN   _ El comienzo  El comienzo del cristianismo fue muy humilde. El libro de los Hechos nos habla de apenas 120  personas en uuna na casa ddee Jerusalén. Realmente un comienzo pequeño. Sin embargo, a partir par tir de aquel  puñado de creyentes llenos del Espíritu Santo, muy pronto el testimonio cristiano se esparciría a lo largo y a lo ancho del Imperio Romano y más allá también, en todas direcciones. Si bien Hechos no registra la expansión del cristianismo a las diferentes regiones representadas en Pentecostés (Partia, Media, Elam, Mesopotamia y Libia), sí hay testimonios del arribo temprano de la fe cristiana a estos lugares como también a Asia Menor (Capadocia, Ponto, Asia, Frigia y Panfilia), a África del Norte (Egipto y Cirene), Roma, Creta, Arabia, entre otras regiones. De modo que, en las décadas inmediatas después de Pentecostés, el movimiento cristiano se esparció ampliamente tanto dentro como fuera del Imperio Romano. De los relatos de los viajes misioneros de Pablo y de referencias en sus epístolas, sabemos que el evangelio fue llevado a Macedonia, Acaya y posiblemente también a España. Esta rápida expansión ocurrió dentro de los primeros 35 años después de la muerte de Cristo. No obstante, desconocemos con  precisión el grado de penetración en estas áreas o cualquier extensión más allá de ellas, hacia fines del  primer siglo. La Primera Carta de Pedro habla de cristianos en Bitinia, Bitinia, Ponto y Capadocia. También se habla de cristianos en Tiro y Sidón, y muchas otras partes. Para el año 240, Orígenes decía que las profecías del Antiguo Testamento se estaban cumpliendo y que el cristianismo se estaba transformando en una religión mundial. Según él señala, en su Comentario sobre Ezequiel: “Con la venida de Cristo, la tierra de Bretaña B retaña acepta la creencia en el único Dios. Así también los moros de África. Así también todo el globo. Ahora hay iglesias en las fronteras del mundo, y toda la tierra grita de gozo al Dios de Israel.”  Israel.”  

 _ El avance  ¿Cómo ocurrió este extraordinario avance? ¿Quiénes fueron sus protagonistas? Los documentos del Nuevo Testamento y de la primera literatura cristiana nos ofrecen suficientes testimonios como  para ilustrar este proceso proces o asombroso. Sobr Sobree todo, nos muestran cómo, bajo la conducción del Espíritu Es píritu Santo, apóstoles, obispos o pastores, evangelistas y misioneros itinerantes, apologistas, y creyentes anónimos proclamaron las buenas nuevas del evangelio y llevaron su mensaje hasta pueblos remotos.

 

El ministerio de los apóstoles. El libro de los Hechos de los Apóstoles nos presenta a los primeros en asumir la responsabilidad de llegar con el evangelio “hasta lo último de la tierra”. Lucas, el primer historiador cristiano y autor de Hechos, describe los primeros pasos del avance del cristianismo siguiendo el bosquejo trazado por Jesús antes de ascender a los cielos (Hch. 1:8). El cuadro que sigue resume las tres etapas principales del ministerio o misión de los apóstoles, según Hechos.

CUADRO 9 - TRES ETAPAS FIGURAS DE LA MISIÓN DE LOS APÓSTOLES TRES ETAPAS   CENTRALES - EVENTOS  PROGRESO  1. Testimonio “en Jerusalén” (Hechos 1– 

5) 

TESTIMONIO A JUDIOS Y PROSELITOS Los doce con Pedro y Juan como centrales. Sus oyentes eran hombres que provenían de 14 áreas diferentes, 5 en Oriente y 2 en África. Tres mil se convierten en un día. Los números pronto ascienden a cinco mil.

2. Testimonio “en toda Judea y Samaria”

-

TESTIMONIO

A

SAMARITANOS,

(Hechos 6 – 12) 

GENTILES ADHERENTES Y PAGANOS Los Siete, con Esteban y Felipe como centrales. Esteban fue martirizado y los líderes esparcidos por Judea y Samaria. Pedro en Judea (Lida y Jope), y Samaria (Cesarea). Pedro bautiza a un soldado romano que era adherente del judaismo y a su familia. Pedro es arrestado por Herodes, escapa, y huye de Jerusalén.

3. Testimonio “hasta lo último de la tierra” (Hechos 13– 28) 28) 

- TESTIMONIO A LOS GENTILES Profetas y maestros de Antioquía comisionan a Bernabé y Pablo. Pablo es central. Los tres viajes misioneros de Pablo, su arresto en Jerusalén, su defensa en Cesarea y su arribo a Roma.

Como indica Foster: “Cuando consideramos al libro libr o de los Hechos de los Após Apóstoles toles en su totalidad, … podemos ver estas tres etapas no sólo como movimientos de un área a otra, sino como una ampliación del alcance misionero.” El hecho más grande que narra na rra el libro de los Hechos fue la misión a los gentiles, encarada por el apóstol Pablo, porque esto cambió los destinos del cristianismo, que se transformó de esta manera en una religión verdaderamente universal o mundial. Pablo fue el instrumento que el Señor utilizó para dirigir a la Iglesia hacia esta orientación universal de su servicio y ministerio, que es tan característica y propia del cristianismo. No obstante, la expansión apostólica de la fe cristiana fue la visión central que gobernó gober nó las decisiones y acciones de los primeros cristianos.

Eusebio de Cesarea: “Los santos apóstoles y discípulos de nuestro Salvador fueron esparcidos  por todo el mundo. Tomás, nos cuenta la tradición, fue elegido para Partia, Andrés para los

 

escitas, Juan para Asia, donde permaneció hasta su muerte en Éfeso. Pedro parece haber  predicado en Ponto, Galacia y Bitinia, Capadocia y Asia, a los judíos de la Dispersión. Finalmente, vino a Roma donde fue crucificado, cabeza abajo según su propio pedido. ¿Qué se necesita decir de Pablo, quien desde Jerusalén hasta tan lejos como Ilírico predicó en toda su  plenitud el evangelio de Cristo, y más tarde fue martirizado en Roma bajo Nerón?”  Nerón?”   No es muy claro cuál fue fu e el campo de labor apo apostólica stólica de cada uno de d e los primeros apóstoles, y al evaluarr esto conviene tener en cuenta lo que observa Latourette, cuando dice: “La tradición posterior evalua que narra las actividades de varios miembros del grupo original de los Doce Apóstoles en partes del mundo bien diferentes no se ha probado que tenga base alguna en los hechos.” Se dice que Bartolomé llevó el Evangelio de Mateo a la India, adonde también llegó Tomás después despué s de ministrar en Partia. La tradición en cuanto a Mateo es más bien confusa. Se dice que predicó primero a su propio pueblo y más tarde en tierras extranjeras. Jacobo el hijo de Alfeo parece haber ido a Egipto, mientras que se informa que Tadeo fue misionero en Persia. Egipto y Bretaña se mencionan como campos de misión de Simón el Zelote, mientras que también hay reportes de su ministerio en Persia y Babilonia. Se le atribuye al evangelista Juan Marcos haber fundado la iglesia en Alejandría. El ministerio de los obispos y/o pastores . Además de los apóstoles, hubo muchos otros que llevaron adelante esta misión. Entre ellos, los obispos o pastores que son considerados por Eusebio de Cesarea como los “sucesores de los apóstoles.” En la historia del cristianismo muchos de ellos son conocidos también como Padres Apostólicos. Ellos fueron los autores de los primeros escritos cristianos después de los apóstoles. Se los llama “Padres” “Padres ” porque este término se aplicaba al maestro, ya que en el uso de la Biblia y del cristianismo primitivo los maestros son considerados como los padres espirituales de sus alumnos (1 Co. 4:15). El nombre de “apostólicos” deriva del hecho de que fueron discípulos directos o indirectos de alguno de los Doce. Entre los Padres Apostólicos más importantes cabe mencionar: Clemente de Roma (30 – 1100), 00), fue el tercer obispo de Roma, ente los años 91 –  91 – 100. 100. Eusebio (siguiendo a Orígenes) lo identifica con el Clemente de Filipenses 4:3. Eusebio menciona y cita el texto de la carta que Clemente “escribió en nombre de la iglesia romana” a la iglesia de Corinto y la califica de “epístola grande y maravillosa.” También dice que esta epístola “es leída desde tiempos antiguos hasta nuestros días en las iglesias.” En esta carta Clemente enfatiza la idea de la sucesión apostólica, doctrina que más tarde sería fundamental para par a la Iglesia Católica Romana. Clemente escribió esta carta  para hacer frente a un conflicto generado en la iglesia de Corinto, allá por el año 95. Por las expresiones de Clemente, parece seraque la iglesia aquella ciudad había aprendido muy bien las mártir lecciones Pablo quiso enseñarles través de susen varias cartas. Estenonotable obispo de Roma murió bajoque la  persecución de Domiciano. Ignacio de Antioquia (m. 117) sirvió como obispo de Antioquía de Siria hasta que fue arrestado allí y enviado bajo custodia a Roma, donde fue martirizado durante el reinado del emperador Trajano. Durante el viaje escribió cartas a varias iglesias de Asia Menor y a la iglesia en Roma, alentando a los creyentes en su fe y combatiendo a aquellos judíos cristianos que a él le parecía restringían el significado y la práctica del evangelio cristiano con sus enseñanzas y prácticas judaizantes. También atacó a otros (quizás los mismos judaizantes) que no podían aceptar la realidad de la encarnación de Cristo y sus sufrimientos, y en consecuencia se inclinaban a las doctrinas del docetismo. Ignacio fue un gran defensor de la fe y se opuso especialmente a las herejías gnósticas. Sus cartas conocidas son:  A los Efesios , A los Magnesios , A los Tralianos , A los Romanos , A los Filadelfos , A los Esmirnenses Esmirnens es, y una carta A Policarpo. En su carta A los Romanos, Ignacio habla con gran entusiasmo de su inminente martirio en Roma, y lo hace en términos que hoy nos sorprenden.

 

Ignacio de Antioquía: “Ojalá que disfrute de las bestias que están preparadas para mí, y ruego hallarlas ya prontas contra mí. Hasta voy a acariciarlas para que sin demora me devoren, y no (me suceda) como a algunos a quienes, intimidadas, no tocaron. Y si ellas se resistieren, yo mismo las provocaré. ¡Perdonadme! Yo sé lo que me aprovecha. Ahora empiezo a ser discípulo de Cristo. ¡Que nada de las cosas visibles o invisibles me tenga celos, por llegar a Jesucristo! ¡Que fuego o cruz, manadas de bestias, (amputaciones, desmembraciones), descoyuntamiento de los huesos, miembros cortados, tormentos de todo el cuerpo, cuer po, crueles azotes del diablo vengan sobre mí, con tal de llegar a Jesucristo!”  Jesucristo!”   Policarpo de Esmirna (69 –  (69 – 155) 155) fue obispo de Esmirna en Asia Menor y discípulo del apóstol JJuan, uan, y un destacado evangelista. Éste es el Policarpo, que tan profundamente había impresionado al joven Ireneo con su predicación. En razón de su fidelidad, llegó a ser venerado como un testigo viviente de la era apostólica a lo largo de la primera mitad del siglo segundo. Policarpo compiló y preservó las epístolas de Ignacio y escribió una epístola  A los Filipenses. Vivió hasta una edad avanzada, diciendo en el juicio previo a su martirio que había habí a servido a Cristo por 86 años años.. Fue martirizado en el año 155 –  155 –  156, bajo el emperador Antonino Pío. Tenemos el relato de su martirio, que tiene la forma de una carta encíclica de la iglesia de Esmirna, y que fue probablemente proba blemente escrita por testigos oculares del mismo. El relato es sumamente conmovedor y refleja la grandeza espiritual de este gran pastor.

Actas del martirio de Policarpo:  “Cuando Policarpo entró en el estadio, habló habló una voz del cielo: ‘¡Sé fuerte, sé hombre, Policarpo!’ Nadie vio al que hablaba, mas oyeron la voz cuantos estaban presentes de los nuestros.…  nuestros.…  Llevado ante el procónsul, éste le preguntó si era Policarpo. A su respuesta afirmativa, le instaba a renegar de de su fe, diciéndole: ‘¡Apiádate de tu vejez!’ vejez !’ y otras cosas por el estilo, como es su costumbre en tales procedimientos, como: ‘¡Jura por la fortuna de César! ¡Conviértete! Di: ¡Mueran los ateos!’ Entonces Policarpo, volviéndose con semblante sombrío hacia toda hacia  toda esa muchedumbre de impíos paganos apiñada en el estadio, extendió ex tendió hacia ellos su mano y mirando al cielo, con un suspiro dijo: ‘¡Mueran los ateos!’  ateos!’   Luego el procónsul insistió más y dijo: ‘¡Jura y te absolveré! ¡Blasfema a Cristo!’ Le repitió Policar  po: ‘Durante ochenta y seis años he servido a Cristo y nunca me hizo mal alguno. ¿Cómo  puedo blasfemar blasf emar de mi Re Reyy que me salvó? salvó?’’ Per Peroo como el otro insistía aún, diciéndole: ‘¡Jura ‘¡Ju ra  por la fortuna deltus César César!’, !’, contestó: te impulsa la vanagloria hacerme jurar hacermemi  jurar porconfesión: la fortuna del César, según palabras, y estás‘Si fingiendo ignorar quién soy,aescucha franca ¡soy cristiano! Si empero quieres conocer la razón de la fe cristiana, ¡dame un día y óyeme!’   El procónsul le dijo: ‘Te entregaré como pasto pas to de las llamas, si es que las bestias bes tias te parecen  poco, y si no n o cambias de actitud.’ Policarpo le contestó: ‘Me amenazas con un fuego que arde una hora y pronto se apaga, porque no conoces aquel fuego del juicio venidero y del eterno suplicio que espera a los impíos. Pero, ¿para qué más demora? ¡Haz lo que quieras!’  quieras!’  ”  El ministerio de evangelistas y misioneros itinerantes . Además de los apóstoles y pastores hubo muchos otros que llevaron adelante la misión cristiana. Los documentos del Nuevo Testamento ilustran ilu stran la efectividad del ministerio evangelizador y misionero de muchos, que yendo de lugar en lugar ganaban a nuevos creyentes y plantaban iglesias. En los primeros siglos muchos evangelistas y misioneros itinerantes iban de comarca en comarca proclamando el evangelio tal como lo habían hecho los Setenta (Lc. 10:1 – 24), 24), Felipe (Hch. 8), y otros anteriormente. Conforme la indicación de Jesús, estos predicadores itinerantes vivían de lo que los creyentes locales les daban para su sustento y se alojaban en sus casas, mientras cumplían su ministerio en cada localidad. Fue inevitable que muy

 

 pronto se cometieran abusos abu sos y que algunos de estos predicadores itinerantes cumplieran su ministerio  por “ganancia deshonesta” (1 Ti. 3:3; Tit. 1:10– 11; 11; 1 P. 5:2). Leyendo los documentos del Nuevo Testamento se perciben los problemas que provocaban algunos de estos ministerios itinerantes falsos o con motivos equivocados. La  Didaché  es   es un pequeño opúsculo de fines del primer siglo, que gozó de gran autoridad como manual de eclesiología, al punto que compitió seriamente con los escritos canónicos del Nuevo Testamento en la preferencia de los primeros cristianos. El documento pretende basar su enseñanza en los apóstoles, y por eso se lo conoce también como Doctrina de los Doce Apóstoles. La obra se presenta como una síntesis moral, litúrgica y disciplinaria. Es posible haya sido utilizada para la educación cristiana de los catecúmenos. La Didaché  advierte  advierte sobre el ministerio itinerante de algunos evangelistas evan gelistas falsos o deshonestos.  Didaché “En cuanto a los apóstoles y profetas, procedan así conforme al precepto del evangelio:

todo apóstol que llegue a ustedes ha de ser recibido como el Señor. Pero no se quedará por más de un día o dos, si hace falta; quedándose tres días, es un falso profeta. Al partir, el apóstol no aceptará nada sino pan para sustentarse hasta llegar a otro hospedaje. Si pidiere dinero, es un falso profeta. Y a todo profeta que hable en espíritu, no le tienten ni pongan a prueba. Porque todo pecado se perdonará; mas este pecado no será perdonado. Pero no cualquiera que habla en espíritu es profeta, sino sólo cuando tenga las costumbres del Señor. Pues, por las costumbres se conocerá al seudo profeta y al profeta. Y ningún profeta, disponiendo la mesa en espíritu, comerá de la misma, de lo contrario, es un falso f also profeta. Pero todo profeta que enseña la verdad, y no hace lo que enseña, es un profeta falso. Todo profeta, sin embargo, probado y auténtico, que obra para el misterio cósmico de la Iglesia, pero no enseña a hacer lo que él hace, no ha de ser juzgado por ustedes. Su juicio corresponde a Dios. Porque otro tanto hicieron los antiguos  profetas. Mas quien dijere en espíritu: Dame dinero, diner o, u otra cosa semejante, no lo escuchen. escuch en. Si, empero, les dice que den para otros otro s menesterosos, nadie lo juzgue.”  juzgue.”   No obstante, fueron mucho más numerosos los evangelistas y misioneros que cumplieron su ministerio con poder de lo alto y gran efectividad. Entre los más destacados cabe mencionar a algunos que no sólo proclamaron la palabra acompañando el mensaje con señales y milagros, sino también con una profunda reflexión teológica y enseñanza de la sana doctrina. Cuadrato de Atenas (c. 130) fue un gran evangelista, según Eusebio, al igual que Panteno de Sicilia (c. 200). Del segundo se dice que se convirtió del paganismo al cristianismo y se involucró muy pronto en un ministerio de predicación misionera. Hizo un viaje a la India con la idea de ganar a las castas superiores para la fe cristiana. Desde alrededor del año 180 se estableció en Alejandría, donde enseñó y sirvió como el primer director de la escuela catequética en aquella ciudad de Egipto. Entre sus discípulos estuvieron destacados teólogos de la antigüedad, como Clemente de Alejandría y Alejandro de Jerusalén.

Eusebio de Cesarea:  “Para ese tiempo, Panteno, un hombre altamente distinguido por su erudición, estaba a cargo de la escuela de los fieles en Alejandría. Una escuela de erudición sagrada, que continúa hasta nuestro día, fue establecida allí en tiempos antiguos, y tal como se nos ha informado, fue administrada por hombres de gran habilidad y celo por las cosas divinas. Entre estos se informa que Panteno en ese tiempo fue especialmente conspicuo, ya que había sido educado en el sistema filosófico de aquellos llamados estoicos. Ellos dicen que él manifestó tal entusiasmo por la palabra divina, que fue designado como heraldo del evangelio de Cristo a las naciones del Este, y fue enviado hasta tan lejos como la India. Porque realmente todavía había muchos evangelistas de la Palabra que procuraban ardientemente utilizar su celo inspirado, siguiendo los ejemplos de los apóstoles, para el incremento y edificación de la

 

Palabra divina. Panteno fue uno de éstos, y se dice que él fue a la India. Y se informa que entre  personas allí que conocían a Cristo, él encontró el Evangelio según Marcos, que había anticipado su propio arribo. Puesto que Bartolomé, uno de los apóstoles, les había predicado, y había dejado con ellos el relato de Mateo en la lengua hebrea, que ellos preservaron hasta ese tiempo. Después de muchas buenas acciones, Panteno finalmente llegó a ser la cabeza de la escuela en Alejandría, y expuso los tesoros tesoro s de la doctrina divina tanto de manera oral como por escrito.”   escrito.” El ministerio de los apologistas. Los apologistas fueron defensores de la fe cristiana durante el siglo II, que enseñaron y escribieron contra las acusaciones populares popu lares y otros ataques más sofisticados, especialmente por parte de representantes del judaísmo y el politeísmo. Estos escritores, mayormente en lengua griega, se propusieron defender la verdad y posición de la fe cristiana frente a las filosofías, religiones y planteos políticos de sus días. Muchos de sus escritos estuvieron dedicados a los emperadores, pero sus interlocutores fueron mayormente las personas educadas de sus días. Algunos de los apologistas más famosos fueron los siguientes. Arístides de Atenas (76 –  (76 – 138) 138) fue un filósofo ateniense cristiano, que presentó al emperador Antonino Pío una defensa del cristianismo, alrededor del año 140. Eusebio menciona a Arístides A rístides como “un creyente fervientemente devoto a nuestra religión, que dejó, al igual que Cuadrato, una apología de la fe, dirigida a Adriano.” Evidentemente, Eusebio se equivocó en cuanto al destinatario de la Apología, pero no en cuanto a la calidad y compromiso cristiano de su autor. Jerónimo dice que la apología de Arístides estaba llena de pasajes de escritos de los filósofos, y que Justino, más tarde, hizo  bastante uso de ella. Su obra muestra una fuerte influencia paulina. La Apología de Arístides es la más antigua que se conserva.

Arístides de Atenas:  “Los cristianos conocen y confían en Dios. Apaciguan a quienes los oprimen y los hacen sus amigos, hacen bien a sus enemigos. Sus esposas son virtuosas y sus hijas modestas; sus hombres se abstienen de casamientos ilícitos y de toda deshonestidad. Si tienen siervos o niños los persuaden a hacerse cristianos por el amor que a ellos tienen; y cuando lo son, los llaman sin distinción hermanos; se aman los unos a los otros. No rehuyen ayudar a las viudas. Rescatan al huérfano de los que le hacen violencia. El que tiene da al que no tiene. Si ven a un forastero, lo llevan a su casa y se regocijan como un verdadero hermano; no se llaman hermanos por el parentesco, sino por el Espíritu Esp íritu de Dios. Si entre ellos hay alguno pobre y necesitado y no tienen bocado que darle, ayunarán dos o tres días para proporcionarle el alimento necesario. Escrupulosamente obedecen los mandatos del Mesías. Todas las mañanas y a cada hora dan gracias y alaban a Dios por su amorosa bondad hacia ellos; por ellos fluye todo lo bello que hay en el mundo. Pero las buenas acciones que ellos hacen no las proclaman a los oídos de las multitudes y tienen cuidado de que ninguno las perciba. Así es como ellos trabajan trabaj an para ser rectos. Verdaderamente ésta es gente nueva y hay algo de divino en ellos.”   Ya hemos citado a Justino Mártir (114 –  (114 – 165), 165), el más grande de los apologistas del siglo II. Justino nació en Flavia (Neápolis). Desde joven quiso conocer a Dios de manera personal. Así fue como recorrió los caminos del estoicismo, la filosofía de los peripatéticos y pitagóricos, y por último, el  platonismo, pero sin encontrar satisfacción para su búsqueda de la verdad. Cierto día, mientras caminaba por la playa, se encontró con un anciano que lo convenció de la verdad del cristianismo. Se convirtió a la nueva fe, a la que defendió con todo el bagaje de su experiencia intelectual. Justino Jus tino había estudiado como filósofo antes de hacerse cristiano, y como cristiano continuó vistiendo la toga de filósofo, de modo que enseñó el cristianismo como la filosofía verdadera. De sus obras sólo sobreviven las  Apologías (primera y segunda), y el  Diálogo con Trifón el judío . Parece que Eusebio conoció también otras obras de este gran apologista. Sus  Apologías son defensas

 

de la fe cristiana contra la persecución y las sospechas que parecían justificar tal persecución. Están dirigidas al emperador, el senado y el pueblo de Roma. Su Diálogo con Trifón es una larga y estilizada discusión sobre la interpretación de las Escrituras, en la que Justino justifica la interpretación “profética” de la Biblia contra los argumentos del judío Trifón. Sus otras obras estaban dirigidas contra herejes, especialmente Marción y los gnósticos, y parecen haber incluido algunos tratados filosóficos. Justino fue muy influido por la filosofía platónica de sus días, en la que él veía muchos paralelos con el cristianismo. Fue martirizado entre el 162 y 168. El relato de su martirio ha llegado a nuestros días y es conmovedor.  El martirio de los santos mártires:  “Rusticus

el prefecto dijo: ‘¿Dónde se reúnen?’ Justino dijo: ‘Donde cada uno escoge y puede: ¿acaso te imaginas que todos nosotros nos reunimos exactamente en el mismo lugar? De ningún modo; porque el Dios de los cristianos no está circunscrito por un lugar; pero siendo invisible, él llena los cielos y la tierra, y es adorado y glorificado por los fieles.’ Rusticus el prefecto dijo: ‘Dime, ¿dónde se reúnen, o en qué lugar  juntan a sus seguidores?’ Justino dijo: ‘Vi ‘Vivo vo escaleras arriba de un tal Martinus, cerca del Baño Timiotinio; y durante todo este tiempo (y ahora estoy viviendo en Roma por segunda vez) ignoro de cualquier otro lugar de reunión que el de él. Y si alguien deseaba venir a mí, le comunicaba las doctrinas doctrinas de la verdad.’ Rusticus dijo: ‘Entonces, ¿no eres un cristiano?’ Justino dijo: ‘Sí, yo soy un cristiano.’ … Rusticus el prefecto dijo: ‘Entonces vayamos a la cuestión que tenemos por delante, y … ofrezcan sacrificio de buena voluntad a los dioses.’ Justino Jus tino dijo: ‘Ninguna persona en su sano juicio abandona la piedad por la impiedad.’ Rusticus el prefecto dijo: ‘A menos que obedezcan, serán castigados sin misericordia.’ Justino dijo: ‘Por medio de la oración podemos ser salvos por nuestro Señor Jesucristo, aun cuando hayamos sido castigados, porque esto se tornará para nosotros en salvación y confianza en el juicio más temible y universal de nuestro Señor y Salvador.’ Lo mismo dijeron los otros mártires: ‘Haz lo que quieras, porque nosotros somos cristianos, cristianos, y no sacrificaremos a los ídolos’.”  ídolos’.”  

Hay un apologista anónimo, el autor de la Carta a Diogneto (c. 170). Esta carta es una apología cuyo autor y fecha de composición son desconocidos. Está dirigida al filósofo estoico Diogneto, quien fuera maestro del emperador Marco Aurelio (161 –  (161 – 1180). 80). En doce breves capítulos, la carta presenta una de las más bellas y nobles apologías cristianas de su tiempo. El autor demuestra la necedad de la adoración a los ídolos y expone el carácter de la fe cristiana. Carta a Diogneto: “Los cristianos no se distinguen de los demás hombres ho mbres ni por su tierra natal, ni por su idioma, ni por sus instituciones políticas. Es a saber que no habitan en ciudades propias y particulares, no hablan una lengua inusitada, no llevan una vida extraña. Tampoco su orden de vida ha sido inventado por el estudio ingenioso de hombres curiosos; no patrocinan un sistema filosófico humano, como hacen algunos. Moran en ciudades griegas y bárbaras, según la suerte se lo depara a cada uno. Siguen las costumbres regionales en el vestir y en el comer, y en las demás cosas de la vida. Mas, con todo esto, muestran su propio estado de vida, según la opinión común, admirable y paradójico.

Viven en su patria, mas como si fuesen extranjeros. Participan de todos los asuntos como ciudadanos, mas lo sufren todo pacientemente como forasteros. Toda tierra extraña es patria de ellos; y toda patria, tierra extraña. Contraen matrimonio, como todos. Crían hijos, mas no los echan a perder. Tienen en común la mesa, mas no el lecho. Viven en la carne, mas no según la carne. Moran en la tierra, pero tienen su ciudadanía en el cielo. Obedecen las leyes establecidas, y con su vida particular sobrepujan a las leyes. Aman a todos y de todos son perseguidos. Son desconocidos, pero condenados. Los matan, y con ello les dan vida. Son mendigos y enriquecen

 

a muchos. Sufren penuria de todo y abundan en todas las cosas. Son despreciados y en la deshonra hallan su gloria.”  gloria.”  Otro gran apologista fue Atenágoras (c. 177), un filósofo ateniense que se convirtió al cristianismo mientras leía la Biblia con el propósito de refutarla. Fue antecesor de Panteno P anteno en la escuela catequética de Alejandría y el más capaz de todos los apologistas griegos. Escribió muchos libros, la mayoría de ellos ahora perdidos. No obstante, de todas sus obras se conservan su  Apología y un Tratado sobre la resurrección, que dan evidencia de su habilidad como escritor y de su rica cultura. Atenágoras presentó su Apología a los emperadores Aurelio y Cómodo en el año 177. Minucio Félix (m. 180) fue un abogado romano y el primer apologista que escribió en latín. Su obra lleva el título de Octavio, ya que éste era el nombre del protagonista cristiano que discute con un  pagano. La obra consiste en una discusión acerca del paganismo y el cristianismo. El libro está dividido en diez capítulos, que son muy atractivos en razón de su lenguaje fácil y fluido. Lo más interesante de todo el diálogo es que el pagano repite los rumores que circulaban acerca de los cristianos en los sectores populares, y esto nos da una idea de la opinión de la gente en el Imperio Romano acerca de los cristianos.

Minucio Félix: “Oigo que, persuadidos por alguna convicción absurda, ellos adoran la cabeza de un asno, la más baja de todas las criaturas.… El relato acer ca acer ca de la iniciación de los nuevos miembros es tan detestable como es bien conocido. Un niño, cubierto con harina, en orden a engañar a los desprevenidos, es colocado delante de aquél que es iniciado en los misterios. Engañado por esta masa de harina, que le hace creer que sus golpes no causan daño, el neófito mata al infante.… Ellos ávidamente lamen la sangre de este niño y discuten sobre cómo compartir sus miembros. Por esta víctima hacen pacto entre ellos, ¡y es por causa de su complicidad en este crimen que guardan un silencio mutuo! Todo el mundo sabe acerca de sus banquetes, y se habla de éstos en todas partes.… En los festivales se reúnen para una fiesta con sus hijos, sus hermanas, sus madres, gente de ambos sexos y de toda edad. Después de comer su porción, cuando la excitación de la fiesta está al máximo y su ardor borracho ha inflamado las pasiones p asiones incestuosas, provocan a un perro que ha estado atado a una lámpara de pie para que salte, arrojándole un pedazo de carne más allá del alcance de la cuerda que lo sujeta. Apagándose de esta manera la luz que podía haberlos traicionado, se abrazan los unos a los otros, y con quien sea. Si en los hechos esto no ocurre, sí  pasa por sus mentes, dado que qu e éste es su deseo.” deseo.”   Por último, mencionaremos a Teófilo de Antioquía (130 –  (130 – 190). 190). Teófilo nació en un hogar pagano y se convirtió por el estudio cuidadoso de las Escrituras. En 168 fue nombrado obispo de Antioquía y se destacó como apologista. Escribió varias obras contra las herejías de sus días, comentarios de los Evangelios y del libro de Proverbios. Lo único que nos queda de su producción produc ción literaria son tres libros apologéticos, que están dirigidos a su amigo Autólico. El ministerio de creyentes anónimos. Quienes más hicieron por la rápida expansión de la fe cristiana fueron los innumerables creyentes anónimos que viajaban predicando y estableciendo nuevas iglesias allí donde iban. La inmensa mayoría nos es desconocida, si bien a algunos pocos los conocemos por nombre (por ejemplo, Aquila y Priscila, Hch. 18). En general, estos creyentes anónimos eran personas de muy poca educación y muchos de ellos eran esclavos. Su ffalta alta de notoriedad social los constituía en el objeto de la burla de las personas más educadas o de rango social más alto, que consideraban la fe de ellos como una superstición peligrosa y despreciable. El filósofo pagano Celso nos no s da testimonio de cómo funcionaba, según su opinión, el ministerio de estos creyentes anónimos.

 

Celso:  “Vemos en casas privadas a tejedores, zapateros, campesinos ignorantes. Ellos no se atreverían a abrir sus bocas con personas mayores allí, o frente a su amo más sabio. Pero van a los niños, o a cualesquiera de las mujeres que son ignorantes como ellos mismos. Entonces derraman maravillosas declaraciones: ‘No deben prestar atención atención a su padre o a sus maestros. Obedezcan a nosotros. Ellos son necios y estúpidos. Ellos ni conocen ni pueden hacer nada realmente bueno. Sólo nosotros conocemos cómo deben vivir los hombres. Si ustedes, niños, hacen como nosotros decimos, serán felices felices ustedes mismos y harán feliz también a su hogar.’  hogar.’   Mientras están hablando, ven venir a uno de los maestros de la escuela o incluso al padre mismo. Así que murmuran: ‘Con él aquí no podemos explicar. Pero si quieren, pueden venir con las mujeres y sus compañeros de juego a los aposentos de las mujeres, o del tejedor, o a la lavandería, de modo que puedan obtener todo lo que hay.’ Con palabras como éstas, ellos los conquistan.”   conquistan.” Sin embargo, fue el testimonio comprometido de estos miles de creyentes simples pero llenos del  poder del Espíritu Santo, el factor que explica el explosivo crecimiento del cristianismo en los dos  primeros siglos. Se estima que hacia principios del segundo s egundo siglo solamente en el ámbito del Imperio Romano el número de cristianos llegaba a cerca del millón de personas. El celo de estos creyentes anónimos y su disposición de proclamar el evangelio del reino se destacaron por encima de cualquier otra característica de su vida religiosa.

Orígenes de Alejandría: “… los cristianos cristianos no descuidan, hasta donde depende de ellos, tomar medidas para diseminar su doctrina por todo el mundo. Algunos de ellos, consiguientemente, han hecho de esto su ocupación al viajar no sólo a través de d e ciudades, sino incluso villas y casas de campo, con el fin de poder hacer convertidos para Dios. Y nadie sostendría que ellos hacen esto por causa de ganancia, cuando a veces ellos no aceptan incluso el sustento necesario.”   Muchos de estos testigos predicaron más con la calidad de sus vidas transformadas, que con la  profundidad de su teología. Este hecho fue fu e precisamente el argumento preferido de los ap apologistas ologistas en sus defensas de la fe cristiana. Cabe recordar que, en general, los apologistas escribieron y dirigieron sus obras a paganos y enemigos del cristianismo. En su argumentación en contra de las acusaciones de Celso, Orígenes afirma: “Si alguien desea ver a hombres que trabajan por la salvación de otros, en un espíritu como el de Cristo, que tome nota de aquellos que predican el evangelio de Jesús en todas las tierras.… Hay muchos Cristos en el mundo.”  mundo.”   Justino Mártir:  “Él [Jesús] nos ha exhortado a que, con paciencia y mansedumbre, conduzcamos a todos los hombres fuera de la vergüenza y el amor al mal. Y esto realmente lo  podemos mostrar en el caso de muchos que alguna vez eran de vuestr vuestraa manera de pensar, pero han cambiado su disposición violenta y tiránica, siendo vencidos ya sea por la constancia que han visto en las vidas de sus vecinos [cristianos], o por la extraordinaria paciencia que han observado en sus compañeros de viaje [cristianos] al ser defraudados, o por la honestidad de aquellos con los que han hecho negocios.”  negocios.”   Otros dieron testimonio a través de su sufrimiento por Cristo. Jesús fue bien claro cuando estableció la condición para el discipulado discipulado cristiano: “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame. Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá; y todo el que  pierda su vida por causa de mí, éste la salvará” (Lc. 9:23– 24). 24). Muchos cristianos en la antigüedad interpretaron estas palabras como refiriéndose a estar dispuestos a padecer todo tipo de sufrimiento e incluso la muerte misma, por amor al Señor. Algunos sufrieron por confesar a Cristo como Salvador y Señor, y se los llamó “confesores.” Otros murieron por hacerlo, y se los llamó “mártires” (del griego

 

martures, testigos). La mayoría de los creyentes de estos primeros siglos entendió bien que la mejor manera de confesar “Creo en Cristo” es estar dispuesto a morir por él. Entre miles de miles  de estos testigos estuvo Basílides, un oficial del ejército romano en Alejandría allá por el año 210, que condujo a una mujer cristiana, Potamiaena, a su ejecución, y luego fue mártir él mismo al convertirse a la nueva fe gracias al testimonio de ella.

Eusebio de Cesarea: “Acto seguido, ella [Potamiaena] recibió inmediatamente la sentencia, y Basilides, uno de los oficiales del ejército, la condujo a la muerte. Pero mientras el pueblo intentaba molestarla e insultarla con palabras abusivas, él empujó hacia atrás a quienes la insultaban, mostrándole mucha piedad y bondad. Y percibiendo la simpatía del ho hombre mbre por ella, ella lo exhortó a ser valiente, porque ella suplicaría al Señor por él después de su partida, y él  pronto recibiría una recompensa por la bondad que le había mostrado. Habiendo dicho esto, noblemente soportó el tormento, mientras le derramaban brea ardiendo poco a poco sobre varias va rias  partes de su cuerpo, desde la planta p lanta de sus pies hasta la corona de la cabez cabeza.… a.…    No mucho después de esto, Basílides, cuando sus compañeros soldados le pidieron que  jurara por una cierta cuestión, declaró que no podía jurar bajo ninguna circunstancia, porque él era cristiano, y confesó esto abiertamente. Al principio ellos pensaron que estaba bromeando,  pero cuando él continuó afirmándolo, fu fuee llevado ante el juez, y, reconociendo su convicción delante de él, fue puesto en prisión. Cuando los hermanos en Dios lo visitaron y le preguntaron la razón para esta repentina y sorprendente resolución, se dice que él declaró que durante tres días después de su martirio, Potamiaena se paró a su lado en la noche y colocó una corona sobre sobr e su cabeza, y dijo que había orado al Señor por él y había obtenido su pedido, y que pronto ella lo pondría a su lado. Acto seguido, los hermanos le dieron el sello del Señor [bautismo]; y al día siguiente, después de dar un glorioso testimonio por el Señor, él fue decapitado.”  

 _ La organización  Los ministerios de la Iglesia se fueron organizando a lo largo de muchos siglos. Su origen y desarrollo es bastante oscuro. Los términos que se usan en el Nuevo Testamento y en los documentos sub-apostólicos para referirse a los diversos ministerios son muy variados y el mismo vocablo no siempre tiene el mismo significado, que depende del lugar y el período. La organización de la iglesia en tiempos del Nuevo Testamento era totalmente diferente de la organización de las iglesias hoy. La organización de la Iglesia era muy simple. No había una jerarquía eclesiástica. La iglesia era una comunidad carismática, en la que algunos hermanos cumplían ciertas funciones más específicas. Cada comunidad era autónoma, libre y con una autoridad local centrada en la voluntad de la asamblea, y expresada a través del consenso cons enso de sus miembros. No había distinción alguna entre clér clérigos igos y laicos, sino que cada creyente se sentía responsable por el testimonio y el servicio cristianos. Los primeros desarrollos en la organización de la Iglesia ocurrieron conforme las características culturales impuestas por los diversos contextos y sobre todo por la demanda de testificar el evangelio con efectividad en los mismos. En este sentido, hay dos contextos que considerar. Por un lado, la comunidad palestinense, es decir, aquella que se desarrolló en Palestina, especialmente en torno a la ciudad de Jerusalén y su influencia. La comunidad cristiana primitiva en esta tradición tenía una organización doble. El primer liderazgo estaba constituido por el grupo de los Doce, que se remontaba al ministerio terrenal de Jesús (Mr. 3:16 –  3:16 – 19), 19), y cuyo número se completó después de la muerte de Judas (Hch. 1:15 – 16). 16). Este liderazgo colectivo administraba la comunidad palestinense de lengua hebrea (aramea). El segundo liderazgo estaba representado por el grupo de los Siete, inspirados por Esteban (Hch. 6:1 – 6), 6), que cuidaba de la comunidad que había emergido del judaísmo helenista y que hablaba griego.

 

Por otro lado, encontramos la comunidad de la diáspora. La persecución que siguió al martirio de Esteban resultó en la dispersión de los judíos helenistas, que se hicieron misioneros. A partir de aquí, surgieron diferentes formas de organización, que dependían del origen de la comunidad. La comunidad en Jerusalén y otras derivadas del judaísmo se modelaron en base a la comunidad judía por excelencia, la sinagoga. Al frente de estos grupos estaba un colegio de ancianos o presbíteros (del griego  presbúteros, anciano). Santiago (o Jacobo), el hermano de Jesús, era la cabeza en Jerusalén (Hch. 15:13 – 21), 21), probablemente una Parece suerte de presidente del grupo de dirigentes constituido por apóstoles ancianos (Hch. 15:2, 4, 6, 22). claro que los Doce fundaron varias comunidades de este tipo eny Judea, Samaria y las regiones vecinas. La comunidad cristiana en Antioquía era de origen misionero y tuvo una doble organización. Por un lado, un ministerio itinerante constituido por misioneros itinerantes (por ejemplo, 1 Co. 12:28), que  practicaban un ministerio carismático. Este tipo de ministerio itinerante itinerante parece haber sido toda su vida y responsabilidad. Estos agentes misioneros eran apóstoles que no formaban parte del grupo de los Doce (como Pablo y Bernabé). Como responsables de la tarea de evangelización y plantación de iglesias, estos misioneros viajaban todo el tiempo. Por otro lado, había en Antioquía un ministerio residente. Este ministerio estaba constituido por profetas, que exponían la palabra de Dios en las congregaciones, y maestros, que eran una especie de rabinos que se especializaban en la enseñanza de las Escrituras. En el curso de sus viajes, los misioneros fundaban comunidades locales y nombraban a personas responsables cabeza de cadaregiones, una de ellas. El liderazgo de estas comunidades locales, al menos durante algúncomo tiempo y en ciertas durante las primeras décadas de expansión cristiana en el Imperio Romano, estaba constituido por obispos (sobreveedores) o presbíteros presbítero s (ancianos). En Tito 1:5, 7; 1 Timoteo 3:1 – 2 y 5:17 – 19, 19, Pablo se refiere a estos líderes llamándolos indistintamente obispos y/o ancianos. El primer vocablo enfatiza su función (sobreveer (sobrevee r o supervisar la congregación), congre gación), mientras que el segundo indica la necesidad de madurez espiritual y experiencia. También se mencionan a los diáconos, que tenían un ministerio de servicio también de orientación pastoral, ya que se esperaba que ellos cumpliesen con los mismos requisitos que los obispos (1 Ti. 3:8 –  3:8 – 13). 13). En Filipenses 1:1, Pablo hace referencia a ambas funciones ministeriales, “obispos y diáconos.”  diáconos.”   La tarea primordial de estos ministerios residentes era la de predicar, bautizar y presidir la Eucaristía. En general, en todo el movimiento cristiano, obispos y presbíteros llegaron a cumplir muchas de las funciones que eran llevadas a cabo por los sacerdotes de otras religiones. Todos los ministros en la Iglesia eran dedicados al servicio mediante la imposición de manos, acompañada de oración y ayuno (Hch. 6:6; 13:3; 1 Ti. 5:22). De todos modos, el Nuevo Testamento no es muy claro en sus referencias a los diversos ministerios en la Iglesia. Es probable que haya habido una evolución a lo largo del tiempo y que no se haya ha ya hecho lo mismo en todos los lugares. De hecho, da d a la impresión como que había otras categorías o tipos de ministerios en algunas iglesias además de las mencionadas. En Efesios 4:11, por ejemplo, se habla de “apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros,” lo cual representa una estructura carismática de ministerio.

 _ La membresía  El concepto más difundido en las primeras comunidades cristianas era el de entender a la Iglesia como la familia o casa ( oikos) de Dios. En el mundo greco-romano, la familia era el núcleo de la sociedad y su fundamento. El ingreso a la familia de la fe se producía después que la persona tomaba una decisión de fe por Jesucristo y sellaba su compromiso compro miso con la comunidad mediante el bautismo. Los derechos y deberes del miembro de la Iglesia, así como la disciplina a la que se sujetaba, estaban directamente relacionados con el concepto del cuerpo de creyentes como una nueva familia, la familia de Dios. En esta nueva unidad social básica, caracterizada por un nuevo pacto de fe con el Creador, el líder (obispo o presbítero) poco a poco pasó a ocupar el papel del patriarca o padre de familia. Por lo

 

demás, la comunidad de fe estaba integrada y estructurada como cualquier familia patriarcal de aquellos tiempos. La gran masa de cristianos en los primeros dos siglos estaba constituida por esclavos. En el Imperio Romano casi todo el trabajo, el especializado y el más duro, era hecho por esclavos. En el mundo antiguo, la esclavitud de una forma u otra era un fenómeno universal. El famoso historiador inglés Eduardo Gibbon indica que había 60 millones, lo que puede ser una exageración, aunque refleja el alcance de este social. Pablo dice: “Mirad, hermanos, no sois escogió muchos sabios según la problema carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; vuestra sino quevocación, lo necio que del mundo Dios, para avergonzar a los sabios; sab ios; y lo débil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie n adie se jacte en su presencia” (1 Co. 1:26 – 29). 29). Si bien algunos cristianos pertenecían a las clases más privilegiadas e incluso algunos pocos eran funcionarios de gobierno o de muy buena posición económica y social, la gran mayoría eran esclavos o gente de condición muy humilde. El cristianismo no intentó abolir la esclavitud. El mundo antiguo no podía concebir una sociedad sin esclavos. Pero los cristianos negaron firmemente que la distinción entre esclavo y libre tuviera importancia para Dios (Gá. 3:28).  No obstante, había algunos cristianos en posiciones de prestigio y autoridad social. Hubo discípulos de Jesús en lugares prominentes (Lc. 8:3). En la Iglesia primitiva, algunos creyentes fueron personas de relevancia social, como Manaén (Hch. 13:1), “los de la casa de César” (Fil. 4:22), 4:22) , y el procónsul Sergio Paulo en Chipre (Hch. 13:12). Hay otros testimonios de personas distinguidas fuera de los documentos Unagún sobrina de Domiciano, Domitila, esposa cristiano de un cónsul, fue exiliada en eldel añoNuevo 96 porTestamento. ser cristiana (según (se Eusebio). Una catacumba o cementerio ce menterio en Roma lleva su nombre. El emperador Cómodo (180 –  (180 – 192) 192) fue influido positivamente por una concubina cristiana de nombre Marcia. La madre del emperador Alejandro Severo (222 –  (222 – 235), 235), Mamea, mandó una escolta a Orígenes Orígenes en su viaje a Antioquía, donde él “se quedó con ella durante algún tiempo y le mostró muchas cosas concernientes a la gloria del Señor y de la virtud del mensaje divino.” Orígenes mismo escribió al emperador Felipe (244 – 249) 249) y a su esposa porque oyó del interés de ellos en el cristianismo. Allá por el año 248 Orígenes decía que las falsas acusaciones contra los cristianos “ahora son reconocidas, incluso por la masa del pueblo, como calumnias falsas contra los cristianos.” Con un optimismo algo excesivo, excesivo, Orígenes anticipaba que “toda otra adoración se extinguirá y sólo la de los cristianos prevalecerá. Así será algún día, a medida que su doctrina tome posesión de las mentes en una escala cada vez más grande.”  grande.”  El evangelio era proclamado a todos los grupos sociales. La misión cristiana tenía como objetivo llegar a todas las personas en todos los lugares hasta el fin del mundo mun do para anunciarles el evang evangelio elio del reino. Líderes como Orígenes, proveniente de Alejandría, viajaron mucho en el Imperio Romano y por todo el este proclamando el evangelio. Para mediados del tercer siglo la fe en Jesucristo había cubierto todo el ámbito del Imperio Romano y algunas regiones, como Asia Menor y el norte de África, contaban con una considerable densidad de población cristiana.

Orígenes de Alejandría:  “Si observamos cuán poderoso se ha tornado el evangelio en unos muy pocos años, a pesar de la persecución y la tortura, la muerte y la confiscación, y a pesar del pequeño número de predicadores, vemos que la palabra ha sido proclamada por toda la tierra. Griegos y bárbaros, doctos e indoctos se han unido a la religión de Jesús. No podemos dudar que esto va más allá de los poderes humanos, puesto que Jesús enseñó con autoridad y la  persuasión necesaria para que qu e la palabra se esta esta bleciera.”  bleciera.”  

LA OPOSICIÓN AL CRISTIANISMO 

 

 _ La oposición en tiempos neotestamentarios  Situación cambiante. El Nuevo Testamento refleja la cambiante situación de los cristianos en el Imperio Romano, desde el tiempo de Pablo hasta el final del primer siglo. En la carta a los Romanos (año 55), el apóstol se muestra leal al Imperio y lo considera un “agente de Dios,” y exhorta a los creyentes para que sean buenos ciudadanos (Ro. 13:1 –  13:1 – 7). 7). Pero este mismo Imperio en poco tiempo se constituyó en el enemigo más grande del cristianismo en este período, llegando a amenazar su propia

existencia. El gobierno el pueblo el Imperio Romano eran muy tolerantesenenelmateria Eduardo Gibbon señala:y “Las variasenformas de adoración, que prevalecieron mu ndoreligiosa. mundo romano, fueron todas consideradas por el pueblo, como igualmente verdaderas; por el filósofo, como igualmente falsas; y por el magistrado, como igualmente útiles. Y así la tolerancia produjo no sólo indulgencia mutua, sino incluso concordia religiosa.”  religiosa.”   Los romanos reconocían los dioses locales de los pueblos conquistados e incluso los adoraban. Ellos tenían sus rituales tradicionales, suplementados, después de Augusto, por el culto a los emperadores divinizados. Pero estos cultos romanos estaban sumamente condimentados con el aporte de religiones foráneas, como los cultos a Sulis Minerva (diosa celta y romana de la sabiduría), Mitra (dios persa de la luz); o Isis (diosa egipcia de la fertilidad).

Minucio Félix: “Cada pueblo tiene su propia adoración nacional naci onal y honra a sus dioses locales. Y los romanos los honran a todos. Ésta es la razón raz ón por la que su poder ha llenado completamente todo el mundo, han esparcidoa sulosImperio allá de las sendas del sollas y dereligiones los límitesde de los mares.… Ellosy reverencian diosesmás conquistados, investigan extranjeros y las hacen propias.”  propias.”  Los judíos no quisieron compartir su religión con los romanos, pero a pesar de esto, los romanos los respetaron y permitieron su culto, el templo en Jerusalén y sus autoridades, leyes y castigos. En todo esto se mostraron sumamente tolerantes para con la intolerancia judía, a pesar de despreciar su fe monoteísta. Además, el judaísmo no era una religión nueva, sino que representaba una tradición de varios siglos. Como argumentaba el filósofo pagano Celso: “Los judíos no deben ser culpados, porque cada uno debe vivir de acuerdo con las costumbres de sus ancestros.”  ancestros.”  Sin embargo, una minoría que se aísla y se rehúsa a compartir los intereses de la comunidad, generalmente es despreciada o resistida. El cristianismo había comenzado dentro del judaísmo y al  principio parecía p arecía se serr un unaa secta más dentro de esta religión antigua. Es por esto qu quee hasta los días de Pablo, losapóstol cristianos y loscon judíos no fueron mayormente por que las autoridades romanas. el mismo Pablo, su prédica y ministerio, dejómolestados bien en claro el cristianismo no eraPero una secta del judaísmo. Por otro lado, la iglesia creció rápidamente, y los nuevos convertidos comenzaron a ser en su mayoría gentiles. Además, el mismo Nuevo Testamento señala que muchas veces los judíos denunciaban por diversas razones a los cristianos. En el imperio Romano nadie quería a los judíos, pero mucho menos querían a los cristianos, que ganaban nuevos convertidos a expensas de las religiones antiguas y tradicionales. Como señalara Celso: “Los cristianos han olvidado sus costumbres nacionales por la ley de Cristo.” Así es como comenzó a considerárselos como una verdadera amenaza para la sociedad. La guerra de los judíos contra Roma entre el 66 y el 70 acentuó la diferencia entre éstos y los cristianos, al no querer participar los segundos en el levantamiento de aquéllos. Oposición creciente. El Nuevo Testamento refleja la creciente oposición al cristianismo, tanto por  parte del pueblo como de las autoridades romanas. Los documentos neotestamentarios hablan de murmuración, calumnias y acusaciones falsas contra los cristianos 2:12). carta a loscon Hebreos refleja un contexto de inseguridad, peligro, cár cel cárcel e incluso muerte. (1 LaP.carta estáLarelacionada Italia (He. 13:24). Fue escrita a una congregación integrada por gente que en su mayoría habían pertenecido

 

a una sinagoga, pero que ahora eran parte de un nuevo pacto (He. 9:15), un camino nuevo y vivo (He. 10:20). Parece evidente que fue escrita en momentos de peligro. El texto habla de sangre derramada (He. 12:4), diversos padecimientos (10:32 –  (10:32 – 33), 33), pérdida de propiedades (10:34), prisión (13:3), y aun cosas peores (13:13 – 14). 14). El Imperio Romano ya no era un poder seguro y protector. Los cristianos ya no tenían seguridad en ninguna parte.  Hostilidad abierta . El Nuevo Testamento termina mostrando a un Imperio Romano abiertamente hostil losJuan cristianos. Es interesante notar elalcontraste entre lo que Pablo enEnRomanos 13 y lo quehacia señala en Apocalipsis 13 respecto poder del Estado y enseña los cristianos. Apocalipsis, Roma es la bestia con siete cabezas (13:1, 4, 8) y la ramera (17:3 –  (17:3 – 6). 6). Partes del Apocalipsis son como mensajes en código, propios de una situación de extremo peligro y donde conviene que el enemigo no tenga acceso a lo que se comunica. Algunas claves para la comprensión de este lenguaje hermético y críptico están en el capítulo 17. “Babilonia” es el gran poder perseguidor en el Antiguo Testamento (Daniel 7) y parece referirse a Roma como tal en Apocalipsis. La “bestia con siete cabezas” puede tener un doble significado. Por un lado, es la ciudad sobre las siete colinas (Ap. 17:9), que es Roma. Por otro lado, son los siete emperadores desde Nerón hasta Domiciano, el emperador que envió a Juan a Patmos (Ap. 17:10). El vocablo “bestia,” pues, se refiere al emperador de Roma, mientras que la “mujer” es la ciudad, cuyo nombre “Roma” viene del griego rhome  (“fuerte”), que es femenino. Finalmente, “nombres de blasfemia” es una expresión que parece hacer referencia a la adoración del emperador.

 _ Los cristianos en el Imperio Romano  Los cristianos no eran malos vecinos, ni súbditos desleales ni sediciosos, pero cuando un pueblo odia a una minoría y la considera peligrosa, entonces imagina lo peor de esa minoría. La oposición,  pues, fue triple: popular, intelectual y oficial.  La oposición popular . El pueblo se oponía a los cristianos por prejuicio. Los cristianos se sentían obligados a separarse de muchas cosas que en la sociedad pagana eran costumbres aceptadas, y por esto se los consideraba excéntricos. La ética cristiana ponía a los creyentes en conflicto con la ética  pagana imperante y los hacía tan diferentes, que se los consideraba extraños o locos. Sus reuniones nocturnas eran sospechosas. Su amor fraternal, adoración, sacramentos y disciplina eran mal interpretados. Por otro lado, nadie quería aceptar las l as advertencias de juicio de la dura prédica prédic a cristiana. Como sugiere el interlocutor de Octavio, el personaje cristiano en la obra de Minucio Félix, los cristianos eran acusados de celebrar “fiestas de amor” en las que después de comer, todos se emborrachaban y participaban de una orgía sexual. El populacho hablaba de inmoralidad, inmor alidad, incesto entre “hermanos” y “hermanas,” y muchos otros excesos. La Eucaristía y la expresión de Jesús “esto es mi cuerpo … esto es mi sangre” era interpretada como expresión de canibalismo y se acusaba a los cristianos de infanticidio. Tácito (60 – 120), 120), uno de los grandes historiadores romanos, dice que los cristianos eran odiados  por sus abominaciones. Entre otras cosas, menciona magia, brujería, y califica al cristianismo de “superstición foránea.” Otros Otros historiadores romanos utilizan expresiones similares. Plinio dice que el cristianismo es una “superstición irracional y sin límites,” mientras que Suetonio lo valúa como “una superstición nueva y peligrosa.”  peligrosa.”  Por rechazar el politeísmo prevaleciente y la idolatría, los cristianos eran acusados también de ateísmo. Mucha gente pensaba que los cristianos no tenían religión alguna por no participar de la religión tradicional o de los cultos orientales que q ue eran muy populares en todo el Imperio. Minucio Félix registra registra el rumor que escuchó el pagano de su historia: “Oigo que, persuadidos por alguna convicción absurda, ellos adoran la cabeza de un asno, la más baja de todas las criaturas.”   Además, los paganos atribuían a los cristianos todas las calamidades y catástrofes indicando que éstas venían por abandonar a los dioses ancestrales por el Dios cristiano. Los cristianos eran una

 

amenaza también para la economía del Imperio en razón de su exclusivismo y fanatismo. Lo ocurrido en la ciudad de Éfeso y la quiebra del negocio religioso pagano debido a la efectividad de la prédica cristiana, era un ejemplo de esto (Hch. 19:23 –  19:23 – 27). 27).  La oposición intelectual. Poco a poco, los intelectuales fueron investigando al cristianismo, leyeron sus escrituras y lo refutaron con vigor. Dos de los escritos más conocidos en este sentido fueron los  producidos por Celso (siglo II) y Porfirio (siglo III). ¿De qué acusaban a los cristianos estos intelectuales? Por un lado, se los acusaba de ser ignorantes y unos pobres arrogantes. Se decía que los cristianos se aprovechaban de los más pobres e ignorantes para hacer su cosecha de adeptos, tomando ventaja de su credulidad. La realidad es que los cristianos cuestionaban los valores de la civilización grecorromana, que daban prestigio y autoridad al hombre sabio (educado), que no trabajaba con sus manos. Con esto, por supuesto, minaban el sistema patriarcal romano y la autoridad del  pater familias  o jefe de familia. Luciano de Samosata (c. 125 –  125 – 192), 192), escritor griego de aquella ciudad de Siria, atacó a los cristianos por esto mismo. Luciano era un autor cínico que viajó mucho much o y escribió varios diálogos en los que ridiculiza los valores filosóficos y religiosos establecidos. Con el mismo vigor se opuso a lo que consideraba era la religión y superstición de unos pobres diablos, el cristianismo.

Luciano de Samosata: “Los pobres infelices se han convencido, antes que nada, de que van a ser inmortales y a vivir por siempre, y como consecuencia de esto, desprecian la muerte e incluso voluntariamente se entregan como prisioneros, la mayoría de ellos. Además, su primer legislador [Jesús] los persuadió de que son todos hermanos los unos de los otros, después que han cometido transgresión de manera definitiva, al negar a los dioses griegos y al adorar a ese mismo sofista crucificado y vivir bajo sus leyes. Por lo tanto, desprecian todo esto indiscriminadamente y lo consideran propiedad común.… De modo que si cualquier charlatán e impostor, capaz de aprovechar cualquier ocasión, viene a ellos, rápidamente adquiere una riqueza repentina al imponerse sobre esta gente simple.”  simple.”   Por otro lado, se los acusaba de ser malos ciudadanos. Los cristianos no participaban en la adoración oficial de la ciudad en que vivían ni de la religión del imperio. No reconocían las “costumbres ancestrales” y rechazaban ocupar puestos o responsabilidades en las magistraturas y se negaban a cumplir con el servicio militar. No parecían estar interesados en las cuestiones políticas o en el bienestar del imperio. Los soldados cristianos no peleaban con la crueldad y empeño con que lo hacían los que eran paganos. paganos . Y si bien cumplían con las leyes, sólo lo hacían h acían en la medida en que éstas no contradijeran sus principios y valores cristianos. Decían que eran ciudadanos del Imperio, pero afirmaban que su verdadera ciudadanía estaba en los cielos y que servían a un Señor (kyrios) que estaba muy por encima del emperador. Finalmente, se los acusaba de sostener una doctrina irracional. Para los pensadores y filósofos  paganos la doctrina de la encarnación no tenía se sentido. ntido. Según ellos, un Dios perfecto e inmutable no  puede rebajarse y ser un pequeño bebé, como Jesús en Belén. Además, ssii fuera cierto que Dios qquería uería hacerse humano, ¿por qué esta encarnación ocurrió tan tarde en la historia? Para los intelectuales grecorromanos, Jesús fue un pobre hombre, que fue incapaz de morir como se supone que debe morir un sabio (como Sócrates, que con toda dignidad se suicidó). Por otro lado, la enseñanza de Jesús, decían, fue una mala copia de las viejas enseñanzas egipcias y griegas. Y la doctrina cardinal de la fe de los cristianos, la resurrección de la carne, era una mentira monstruosa, una verdadera blasfemia intelectual y religiosa. suficientemente estúpidos como Porfirio: “Incluso suponiendo que algunos griegos fueron lo suficientemente  para pensar que los dioses diose s moran en estatuas, esto sería un concepto más puro que aceptar que lo divino ha descendido al vientre de la Virgen María, que él llegó a transformarse en un

 

embrión, que después de su nacimiento él fue envuelto en pañales, manchado con sangre, bilis y peor.…  peor.…  ¿Por qué cuando fue llevado ante el sumo sacerdote y gobernador, el Cristo no dijo nada digno de un hombre divino …? Él permitió que se le golpease, se le escupiese en el rostro, se le coronase con espinas.… espinas.… Incluso si él tenía que sufrir por orden de Dios, él podía haber aceptado el castigo, pero no soportado su pasión sin algún discurso valiente, alguna palabra vigorosa y sabia dirigida a Pilato, su juez, en lugar de permitir que se le insultara como si fuese un canalla de las calles. ¡Esto es una mentira increíble! (Referencia a la des descripción cripción de la resurrección en 1 Ts. 4:14). Si tú cantas esto a las bestias irracionales que no pueden hacer otra cosa sino producir un ruido como respuesta, las harías bramar y piar con un alboroto ensordecedor frente a la idea de hombres de carne volando por el aire como pájaros, o transportados sobre una nube.”   Según el escritor pagano Porfirio (232 –  (232 – 303), 303), el Antiguo y el Nuevo Testamentos eran una trama de historias crueles de tipo antropomórfico, sin ningún valor espiritual. Él encontraba contradicciones entre el Dios pacífico de los Evangelios y el Dios guerrero del Antiguo Testamento. Los relatos de la  pasión de Jesús se contradecían entre sí. Las ceremonias cristianas eran inmorales. El Bautismo alentaba el vicio al declarar perdonados todos los pecados y la Eucaristía era un acto de canibalismo aun La cuando se la oficial interpretara de laeste manera máslos alegórica. oposición . Durante período, cristianos pudieron sobrellevar con bastante entereza la oposición popular y los ataques de los intelectuales en el ámbito del Imperio Romano. A pesar de confrontar estos conflictos, supieron crecer, expandirse y ganar a decenas de miles para las filas cristianas. Sin embargo, las cosas fueron más difíciles toda vez que la maquinaria política, militar y administrativa del Imperio se puso en su contra. Las razones de la creciente oposición oficial del Imperio fueron diversas. El concepto romano de religión fue una causa importante. Para los romanos la religión era una cuestión política, y por lo tanto, un interés del Estado. El Estado controlaba a los dioses conocidos y desconocidos, e intentaba predecir y manipular el futuro a partir de la religión. El sistema religioso en el Imperio Romano era un mecanismo del Estado para el control social. El propio gobierno romano pretendía ser divino, en la  persona del emperador. Los emperadores se consideraban “poderes” “pode res” de los que dependían las vidas de las personas. Por otro lado, el Imperio Romano temía a las asociaciones secretas que podían asumir un carácter  político y a las nuevas religiones no reconocidas por el Estado. De allí que cualquier grupo o secta religiosa que no se ajustara a las expectativas del gobierno romano fácilmente caía bajo la acusación de sedición o subversión. De este modo, la disidencia religiosa se transformaba en sedición política, con las consecuencias que son imaginables. De hecho, Jesús fue crucificado por orden de Pilato, no  por el delito religioso r eligioso de llamarse “Hijo de Dios,” sino por el delito político de pretender ser “Rey de los judíos” (Jn. 19:19). Además, los cristianos se rehusaban a hacer libaciones y ofrendas en honor al emperador o a participar en otras prácticas del culto pagano oficial, y esto agravaba su situación, aun cuando algunos oficiales querían mostrarse clementes para con ellos. El desarrollo de la creciente oposición oficial del Imperio se fue incrementando en intensidad. La  primera persecución p ersecución local seria ocurrió como consecuencia del incendio de Roma, perpetrado por el emperador Nerón, el 18 de julio del año 64. En la noche de ese día comenzó un fuego que pronto se extendió en uno de los barrios más pobres de la ciudad. Durante seis días el fuego ardió con fuerza debido a un viento constante, lo que llevó a la destrucción de una buena parte de la ciudad e hizo que miles de personas se quedaran sin vivienda. En la calle corrió todo tipo de rumores, pero todos coincidían en señalar al emperador como el responsable final de la catástrofe. Algunos decían que

 

 Nerón había ordenado el incendio para dejar espacio libre para construir algunos edificios públicos. Otros apuntaban a la crueldad del hombre que no tuvo problemas en asesinar a su propia madre. Y aun otros decían que el incendio había sido provocado por la locura del emperador que quería lograr con ello inspiración para componer un poema. Los cristianos fueron acusados oficialmente como responsables por el siniestro y miles murieron martirizados, como señala el historiador romano Tácito (56 – 1120), 20), para satisfacer la crueldad de un hombre, Nerón.

Tácito:  “Todos los esfuerzos de los hombres, toda la largueza del emperador y las  propiciaciones de los dioses, no fueron suficientes para mitigar el escándalo o borrar la convicción de que el fuego había sido ordenado. Y así, para deshacerse de este rumor, Nerón supuso culpables y castigó con los tormentos más refinados a una clase odiada por sus abominaciones, que comúnmente son llamados cristianos. Christus, de quien se deriva su nombre, fue ejecutado a manos del procurador Poncio Pilato en el reinado de Tiberio. Reprimida en un primer momento, esta perniciosa superstición se manifestó de nuevo, no solamente en Judea, la fuente de este mal, sino también en Roma, ese receptáculo para todo lo que es sórdido y degradante desde todo rincón del globo, que allí encuentra seguidores. Consecuentemente, se realizó primero un arresto de todos los que confesaron (ser cristianos); luego, sobre su evidencia, se condenó a una inmensa multitud, no tanto en base a la acusación de incendio premeditado como a causa del odio de la raza humana. Además de ser condenados a muerte se los hizo aservir como objetosotros de entretenimiento; fueron vestidos confuego pielespara de  bestias y desgarrados muerte por perros; fueron crucificados, otros prendidos iluminar la noche cuando desaparecía la luz del día. Nerón había dejado abierta su propiedad  para la exhibición, y montó un espectáculo en el circo, donde él se mezcló con el pueblo con ropas de auriga y condujo su carro. Todo esto dio lugar a un sentimiento de piedad, incluso hacia hombres cuya culpa merecía del castigo más ejemplar; porque se sentía que ellos estaban siendo destruidos no por el bien público sino para gratificar la crueldad de un individuo.”   Otro historiador romano, Suetonio (75 –160), (75 –160), señala: “En su reinado (de Nerón) muchos abusos fueron severamente castigados y reprimidos, y muchas leyes nuevas fueron instituidas.… Se infligió castigo a los cristianos, un conjunto de hombres que se adhieren adhier en a una superstición novedosa y dañina.” Pero esta persecución no se esparció más allá de Roma y no fue por razones de carácter religioso, sino más bien se debió al oportunismo del emperador para desligarse de la responsabilidad por el siniestro  buscando un chivo emisario. Bajo el gobierno de Domiciano (81 –  (81 – 96), 96), se dio una segunda persecución dirigida contra toda  persona que no adorara la imagen del emperador. Domiciano se hizo llamar “Señor y Dios” y ordenó que así fuese confesado por todo ciudadano en el Imperio mientras libaba vino y aceite frente a su estatua. Es interesante notar que esta expresión es equivalente al clímax del Evangelio de Juan (Jn. 20:28). Para los cristianos obedecer la orden imperial era, pues, una blasfemia. El Coliseo de Roma, inmenso estadio con capacidad para más de 50.000 personas sentadas, había sido terminado para este tiempo (86) y miles de cristianos derramaron allí su sangre por testificar de su fe. Es posible que el libro de Apocalipsis se refiera a estas circunstancias, al hacer el contraste entre Cristo y Domiciano (Ap. 17:14).

 _ La oposición en el segundo siglo .  El período del 96 –  96 – 180 180 fue de prosperidad para el Imperio Romano. Fueron años en los que gobernaron buenosAntonino emperadores, granAurelio. capacidad administración del Estado, Nerva, Trajano, Adriano, Pío ycon Marco Si para bien la estos hombres fueron buenos como gobernantes, tomaron medidas que resultaron en la persecución de los cristianos en diversos lugares del Imperio.

 

Durante el reinado de Trajano (98 –  (98 – 117) 117) se desarrolló la norma imperial para la persecución del cristianismo. En 112, Plinio el Joven (62 –  (62 – 113), 113), gobernador romano de la provincia de Ponto-Bitinia (Asia Menor), le escribió a Trajano describiendo su manejo de la superstición cristiana.

Plinio el Joven:  “Es mi regla, Señor, referirme a ti en cuestiones en las que no estoy seguro. Porque, ¿quién puede dirigir mejor mi duda o instruir instr uir mi ignorancia? Yo nunca estuve presente en algún juicio de cristianos; por lo tanto, no sé cuáles son las penas o investigaciones acostumbradas, y qué límites se observan. He dudado mucho sobre la cuestión de si debe haber algún tipo de distinción por edades; si el débil debe tener el mismo trato que el más robusto; si aquellos que se retractan deben ser perdonados, o si un hombre que alguna vez haya sido cristiano no gana algo al dejar de serlo; si el nombre mismo, incluso si es inocente de crimen, debe ser castigado, o sólo los crímenes que están ligados a ese nombre. Mientras tanto, éste es el curso que he adoptado en el caso de aquellos traídos a mí como cristianos. Les pregunto si son cristianos. Si lo admiten, repito la pregunta una segunda y una tercera vez, amenazándolos con la pena capital; si persisten los sentencio a muerte. Porque no dudo que, cualquiera que pueda ser el tipo de crimen que ellos han confesado, su terquedad y obstinación inflexible ciertamente deben ser castigadas. Había otros que manifestaron una locura parecida y a quienes reservé para ser enviados a Roma, dado que eran ciudadanos romanos.”   romanos.” El emperador le respondió sentando los principios para la acción en contra de los cristianos dentro del marco del derecho romano.

Trajano: “Tú has tomado la línea correcta, mi querido Plinio, al examinar los casos de aquellos que te son denunciados como cristianos, puesto que ninguna regla dura y rápida puede establecerse, de aplicación universal. Ellos no deben ser buscados; si se informa en contra de ellos, y la acusación se prueba, deben ser castigados, con esta reserva —  reserva — que que si alguien niega que es un cristiano, y realmente lo prueba, esto es mediante la adoración de nuestros dioses, debe ser perdonado como resultado de su retractación, por más sospechoso que haya sido con respecto al pasado. Los panfletos que son publicados anónimamente no deben tener peso en cualquier acusación que sea. Ellos constituyen un muy mal precedente, y también están fuera de lugar en este tiempo.”  tiempo.”  Tertuliano, más tarde (197), atacó la decisión de Trajano, diciendo: “¿Por qué haces que la justicia  juegue a las escondida escondidass consigo misma? Si tú condenas, ¿por qué no buscas? Si no buscas, ¿por qué no nos declaras inocentes?” No obstante, la indecisión de Trajano fue beneficiosa para los cristianos, que siguieron creciendo a lo largo del siglo II, si bien en medio de incertidumbre e inseguridad. A lo largo de todo el siglo segundo los cristianos padecieron la oposición del gobierno imperial. Tertuliano habla de reuniones interrumpidas por la policía, soldados demandando soborno, vecinos no amigables que denunciaban a los cristianos de manera anónima, siervos de poca confianza que hacían lo mismo, espías, y sobre todo, el sometimiento de los cristianos a procesos ilegales.

Tertuliano: “Si es cierto lo que presumen, que nosotros los cristianos somos los más malos de los hombres, ¿por qué no nos igualan con los malhechores que cometen pecados semejantes a los nuestros? Dado que a igual delito, igual tratamiento debe darse en los tribunales. Si somos iguales a los demás, ¿por qué si a todo delincuente le es lícito valerse de su boca y de contratar abogados para recomendar su inocencia; por qué si ellos tienen plena oportunidad para responder y para altercar, para que ninguno sea condenado sin ser oído; a sólo el cristiano no se le permite abrir la boca para purgar su causa, buscar ayuda para defender la verdad, hablar

 

 por sí para que no ssea ea injusto el juez juez,, condenando al que no se defendió? Pero sólo s ólo en nuestra causa no se admite el examen del delito, que es beneficio de los reos; sólo se atiende a la confesión del nombre cristiano, que es el odioso o dioso título que irrita el odio popular.”  popular.”  A este período corresponde el martirio de Ignacio de Antioquía, del que da testimonio un documento conocido como Las actas del martirio de Ignacio. Estas actas fueron publicadas en el siglo XVII en latín y griego. Se discute su autenticidad, pero obviamente están inspiradas en la persona y correspondencia del célebre mártir, que murió entregado ent regado a las fieras en el año 117, 11 7, bajo el gobierno de Trajano.  El martirio de Ignacio: “Y cuando él fue conducido ante el emperador Trajano, [ese príncipe]

le dijo: ‘¿Quién eres tú, malvado infeliz, empeñado en transgredir nuestros mandatos, y  persuades a otros a hacer lo mismo, para que miserablemente perezcan?’ Repuso Ignacio: ‘Nadie debería debería llamar a Teóforo malvado; porque todos los espíritus han sido echados de los siervos de Dios. Pero si, en razón de que soy un enemigo de estos [espíritus], tú me llamas malvado en respeto a ellos, concuerdo plenamente contigo; porque en la medida en que tengo a Cristo el Rey del cielo [dentro mío], yo destruyo todas las maquinaciones de estos [malos espíritus].’ Trajano respondió: ‘¿Y quién es Teóforo?’ Teóforo? ’ Ignacio replicó: ‘Aquél que tiene a Cristo en su pecho.’ Trajano dijo: ‘Pues qué, ¿te parece que nosotros noso tros no tenemos en nuestra mente a nuestros dioses, cuya asistencia gozamos al luchar contra nuestros enemigos?’ Ignacio contestó: ‘Estás en error cuando llamas dioses a los demonios de las naciones. Es de saber que hay sólo un Dios, el cual ha hecho el cielo y la tierra, el mar y todo cuanto hay en ellos; y un Jesucristo, el Hijo unigénito de Dios, de cuyo reino quisiera gozar.’ Trajano dijo: ‘¿Estás hablando de aquél que fue crucificado bajo Poncio Pilato?’ Ignacio respondió: ‘Del que crucificó mi pecado  junto con su inventor, y quien ha condenado y arrojado todo engaño y malicia del demonio bajo los pies de quienes le llevan en su corazón.’ Trajano dijo: ‘¿Entonces tú llevas al crucificado en ti?’ Ignacio replicó: ‘¡Verdaderamente así es! Porque está escrito: “Habitaré en ellos y andaré entre ellos”.’ Entonces Trajano pronunció el fallo como sigue: ‘Ordenamos que Ignacio, que afirma llevar en sí al crucificado, sea engrillado por soldados y llevado a la gran ciudad Roma,  para que qu e allí sea devo devorado rado por las  bestias, para ddiversión iversión del pueblo.’ Cuando el santo mártir oyó esta sentencia, exclamó con alegría: ‘¡Gracias te doy, oh Señor, que te dignaste honrarme con un amor perfecto para contigo, y me has hecho encadenar con cadenas de hierro, al igual que tu apóstol apóstol Pablo’.”  Pablo’.”  La política de Trajano continuó bajo Adriano (117 –  (117 – 138), 138), Antonino Pío (138 – 161), 161), y bajo Marco Aurelio (161 – 180). 180). Pero en todos estos casos se trató de persecuciones locales y no de un intento por exterminar el cristianismo en todo el Imperio. Adriano insistió en que las personas inocentes del cargo de ser cristianos fuesen protegidas, e incluso ordenó que quienes hacían acusaciones falsas fuesen castigados. No obstante, no impidió la represión de aquellos que insistían en profesar su fe. Bajo el reinado de Antonino Pío, los cristianos sufrieron en Roma. Marco Aurelio sentía aversión hacia los cristianos, probablemente porque los consideraba un peligro contra la estructura de la civilización que él estaba procurando mantener contra las amenazas internas y externas a su Imperio. Cómodo, el hijo de Marco Aurelio, continuó con actos de persecución, si bien más tarde los disminuyó debido a la intervención de su favorita Marcia, que era cristiana. Septimio Severo (193 –  (193 – 211) 211) no fue desfavorable a los cristianos, ya que tenía a algunos de ellos en su propia familia. Sin embargo, en 202 expidió un edicto que prohibía las conversiones al judaísmo y al cristianismo. A lo largo del siglo II, hubo episodios de violencia serios, como en Lión (Galia) en el año 177, según los registra Eusebio.

 

Eusebio de Cesarea:  “Para comenzar, ellos soportaron noblemente todos los daños amontonados sobre ellos por el populacho: gritería y golpes y linchamiento y saqueos y  pedradas y prisión, y todo aquello que una turba enfurecida enf urecida se deleita en infligir a enemigos y adversarios. Luego, llevados al foro por el tribuno y las autoridades de la ciudad, fueron interrogados delante de toda la multitud, y habiendo confesado, fueron encerrados en la cárcel  para esperar el arribo del gobern gobernador. ador. Más tarde, cuando fueron llevados delante de él, él nos trató con la crueldad más terrible.…”  terrible.…” 

 _ La oposición a mediados del tercer siglo  El edicto de Septimio Severo en 202 terminó en persecución. Fue en esta ocasión que el padre de Orígenes murió mártir. Orígenes mismo, en su ardor de adolescente, deseando compartir la suerte de su padre, quiso entregarse a las autoridades, pero fue impedido por la intervención de su madre, quien le escondió la ropa. De todos modos, es muy probable que estas persecuciones de la primera mitad del siglo no se hayan extendido por todo el Imperio. Más bien, el estado de represión era constante puesto que la situación legal de los cristianos era precaria, p recaria, y cualquier oficial local o provincial pro vincial podía encontrar excusas para reprimir a los cristianos. Con Maximino Tracio (235 –  (235 – 238) 238) las hostilidades se reavivaron, y con Felipe el Árabe (244 –  (244 – 2249) 49) disminuyeron, al punto que algunos llegan a considerarlo el primer emperador que favoreció a los cristianos. Desde mediados del tercer siglo en adelante, la oposición se hizo más severa, al transformarse en  persecuciones y organizadas paraeselque exterminio. La razón principalLas para este agravamiento agr en la actitud delgenerales Estado hacia los cristianos se los acusaba de sedición. palabras deavamiento Or ígenes Orígenes  poco antes de las grandes persecuciones de mediados del tercer siglo probaron ser verdaderamente  proféticas: “Parece “Pa rece pro probable bable qque ue la existencia ssegura, egura, en cuanto al mundo, que al presente gozan los creyentes, se va a terminar, ya que aquellos que calumnian al cristianismo de todas las maneras  posibles, están nuevamente atribuyendo la frecuencia presente de rebelión a la multitud de los creyentes, y al hecho de que no están siendo perseguidos por las autoridades como en los viejos tiem pos.”  pos.”   Otra razón era que se quería restaurar la antigua gloria del Imperio Romano. El Imperio estaba decayendo debido a la anarquía militar, la corrupción, corrupción , la inflación, los altos impuestos y la inseguridad en las fronteras. Estos problemas y la idea de volver a los momentos más gloriosos de la historia de Roma fueron discutidos ampliamente en el año 248, cuando el Imperio Romano estaba celebrando el milenio de la fundación de Roma (según la tradición, Rómulo y Remo fundaron Roma en el año 748 a.C.). El emperador Decio (249 – 251) 251) no sólo se propuso restaurar la gloria de Roma sino también su religión tradicional. En el año 250 decretó que los cristianos en todo el Imperio debían abandonar su fe o morir. Su sucesor, Valeriano (253 –  (253 – 2260), 60), continuó con esta política y dejó casi sin líderes a la Iglesia, ya que procuró terminar con el clero cristiano. No obstante, lejos de aniquilar al cristianismo, esta persecución masiva y los martirios que produjo arraigaron todavía más a los cristianos y ayudaron a una mayor difusión de su fe. Como bien afirmara Tertuliano en su expresión ahora bien conocida: “Segando nos sembráis: más somos cuanto derramáis más sangre; que la sangre de los cristianos es semilla. Muchos hay entre vosotros que exhortan a la tolerancia del dolor y de la muerte.… Mas no han hallado tantos discípulos estas palabras como han enseñado los cristianos con sus obras.”  obras.”  Los emperadores que siguieron a Decio continuaron continuar on con su política de represión generalizada. Galo (251 – 253) 253) avivó la persecución en algunas partes del d el Imperio. Valeriano (253 – 260) 260) se mostró amigable hacia los cristianos en sus primeros años de gobierno, pero repentinamente cambió de disposición y casi dejó a la Iglesia sin obispos. La persecución terminó en 260, cuando Valeriano fue tomado  prisionero en una batalla contra los persas. Su hijo y sucesor, Galieno (253 –  (253 – 268), 268), anuló la política de

 

su padre y expidió edictos de tolerancia para el cristianismo. Por algún tiempo en el ámbito del Imperio, el movimiento cristiano gozó de una generación de paz y prosperidad.

 _ La oposición más seria y final  La persecución final se dio durante el reinado del emperador Diocleciano (284 –  (284 – 305). 305). Al llegar al  poder en 284, Diocleciano se propuso el reordenamiento de la administración imperial, que era caótica. Así, pues, dividió el Imperio en cuatro, con dos emperadores, uno en el Este y el otro en el Oeste. El inmenso territorio del Imperio Romano era difícil de gobernar gob ernar y de custodiar. Diocleciano se s e estableció en la zona oriental, fijó su capital en Nicomedia (Asia Menor) y designó por colega a Maximiano, quien se radicó en Milán (Italia). Para evitar que la elección de los emperadores estuviera sujeta al arbitrio de los soldados, como había ocurrido en décadas anteriores, fueron designados dos funcionarios con el título de Césares, que secundarían a los Augustos (emperadores), y que los sucederían en caso de vacancia en el trono. Galerio fue designado como César en el Este, mientras que Constancio Cloro ocupó esa función en el Oeste. Este sistema de dos emperadores y dos césares con el Imperio dividido por la mitad se conoció como la Tetrarquía (gobierno de cuatro). Con el propósito de detener la decadencia y pensando pensan do que la antigua adoración oficial traería unidad y fuerza política al Imperio, Diocleciano ordenó en 303 la destrucción de los templos cristianos, la quema de Biblias y otros libros cristianos, la liquidación de la adoración cristiana y el arresto del clero. Al año siguiente su consigna fue todavía más terminante: los cristianos debían sacrificar a los ídolos o morir. A pesar de estar muy difundido y haber penetrado hondamente la sociedad pagana (casi el 50% de la población del Imperio era cristiana para aquel entonces), el cristianismo corrió un serio peligro de desaparecer. Afortunadamente, el gobierno fracasó fracas ó en sus intentos. El cristianismo sobrevivió, pero las  persecuciones afectaron profundamente su carácter. El rigor de estas persecuciones llevó a la devoción a las reliquias de los mártires y dio lugar a un verdadero verdader o culto del martirio. Muchos fanáticos buscaban el martirio para la obtención de una gloria mayor. Otros, no pudiendo resistir la tortura, negaron su fe, entregaron las Escrituras para ser quemadas o hicieron arreglos con el perseguidor. Los obispos ganaron un prestigio extraordinario en razón de que sus cabezas eran más valiosas para los  perseguidores que qu e la de los demás creyentes. Pero la persecución tuvo también un efecto purificador. pu rificador.  No era fácil ser cristiano en circunstancias tan difíciles.

Irvin y Sunquist:  “Donde quiera que nos volvamos volvamos en la historia del movimiento cristiano temprano, la memoria y presencia mártires. La experiencia que testificaronencontramos de Cristo mediante el sufrimiento pordelalos fe es penetrante. El número núme ro de realaquellos de aquellos que sufrieron martirio martirio en los primeros tres siglos fue en realidad relativamente bajo.… El número total de cristianos que murieron bajo los romanos estuvo muy probablemente por debajo de diez mil —   — esto esto en un imperio que contaba con no menos de cincuenta millones de  personass en su apogeo.”   persona apogeo.” 

NOMBRE 

CUADRO 10 - EMPERADORES ROMANOS  A OS DE DE R RE EINADO 

Augusto

27 a.C.  –  – 14 14 d.C.

Tiberio

14 d.C.  –  – 3377

Calígula

37 – 4411

 

Claudio

41 – 5544

 Nerón

54 – 6688

Galba

68 – 6699

Otón Vitelio

69 69

Vespasiano

69 – 7799

Tito

79 – 8811

Domiciano

81 – 9966

 Nerva

96 – 9988

Trajano

98 – 117 117

Adriano

117 – 138 138

Antonino Pío

138 – 161 161

Marco Aurelio

161 – 180 180

Cómodo

177 – 192 192

Pértinax

193

Septimio Severo

193 – 211 211

Caracalla

198 – 217 217

Geta

209 – 212 212

Macrino

217 – 218 218

Heliogábalo

218 – 222 222

Alejandro Severo

222 – 235 235

Máximo

235 – 238 238

Gordiano I y II

238

Gordiano III

238 – 244 244

 

Felipe

244 – 249 249

Decio

249 – 251 251

Valeriano

253 – 260 260

Galieno Claudio II

253 – 268 268 268 – 270 270

Aureliano

270 – 275 275

Probo

276 – 282 282

Diocleciano y la Tetrarquía

284 – 305 305

Constantino y la Tetrarquía

306 – 313 313

Constantino y Licinio

313 – 324 324

Constantino único monarca

324 – 337 337

EL PRIMER EMPERADOR PRO-CRISTIANO   _ El fin de la última y peor persecución  A comienzos del siglo IV, el mundo romano se encontraba sumido en una crisis profunda. Por un lado, Roma estaba en constante conflicto con su más encarnizado contrincante, el Imperio Persa en el Este. Por otro lado, continuaba el creciente ingreso de tribus germánicas por la frontera norte del Imperio. Además, la burocracia imperial no podía resolver problemas internos como la necesidad de mayores impuestos para mantener la maquinaria estatal, la creciente inflación, los conflictos sociales, la decadencia moral y el vacío espiritual y religioso. Para este tiempo, el movimiento cristiano estaba  bien articulado y presentaba la red social más di difundida fundida y contenedora en todo el Imperio Romano. No es extraño, pues, que la persecución desatada por Diocleciano haya sido la peor de todas. Los cristianos c ristianos  ponían en vilo la unidad del Imperio al rehusarse r ehusarse a participar de la religión r eligión imperial. No obstante, tres eventos dramáticos señalaron el fin de la última gran persecución y ayudaron a cambiar la suerte del movimiento cristiano:  La huída de Constantino en 306 . En 305, Diocleciano abdicó al trono imperial en el Este y lo mismo hizo Maximiano en el Oeste. Tal como estaba dispuesto, ocuparon su lugar los césares Galerio y Constancio Cloro. Éstos a su vez nombraron a nuevos césares: Maximino Daza en el Este y Severo en el Oeste. Siendo todavía César de Occidente, Constancio Cloro había ido a Galia y había dejado a su hijo Constantino al cuidado de Diocleciano. Cuando Galerio ocupó el trono imperial en el Este en el año 305, tomó como rehén a Constantino con miras a presionar a Constancio y adueñarse de todo el Imperio. En 306, Constantino decidió escapar de su cautiverio e ir con su padre, que para entonces ya era el de Occidente. logróa su cometido y después de cruzar toda  por finemperador a Galia, pero su padre se Constantino había trasladado Bretaña. Al llegar allí, Constantino se Europa encontróllegó con que su padre había muerto en York. El ejército de su padre entonces lo proclamó imperator , es decir,

 

general. Por supuesto, Galerio se opuso a tal designación. El hijo de Galerio y recién designado césar del Este, Majencio, avanzó con sus tropas y se adueñó de Roma. El césar de Occidente, Severo, ante el giro inesperado de los acontecimientos políticos se suicidó. De este modo, Galerio y su hijo Majencio, ahora controlando Roma, eran el único poder en todo el Este, mientras que Constantino era el único gobernante en el Oeste, pero también con pretensiones de adueñarse de todo el Imperio. El edicto de tolerancia de Galerio en 311 . Galerio se estaba muriendo y tenía un miedo supersticioso a la situación muerte ypolítica al infierno. de culpa por haber perseguido a los cristianos y desesperado por decretóLleno un edicto que concedía concedí a tolerancia a los cristianos a cambio de sus oraciones a Dios. El edicto de 311 dice: “Dado que un gran número de cristianos persiste todavía, nosotros con nuestra usual misericordia, hemos pensado pen sado correcto permitirles ser nuevamente cristianos, y tener sus reuniones religiosas. De modo que será deber de los cristianos, a causa de esta tolerancia, orar a Dios por nosotros, por el Estado, y por mí mismo.” En definitiva, al menos en la mitad oriental del Imperio, los cristianos sobrevivieron y triunfaron.  La batalla por Roma en 312. Constantino partió de Galia con su ejército y avanzó avanz ó contra Majencio, que había quedado como el único amo en Italia. La victoria de Constantino contra sus opositores por la corona imperial en 312 fue el punto decisivo d ecisivo del futuro del cristianismo en todo el Imperio Romano, especialmente en Occidente. Eusebio de Cesarea dice que Constantino mismo contaba haber visto, la noche antes de la batalla decisiva en el puente Milvio sobre el río Tíber, una u na cruz resplandeciente en el cielo y sobre ella las palabras: “Con este signo vencerás.” Convencido del del poder del Dios de los cristianos, se hizoenhacer un C nuevo en se el conoce que aparecían la cruz ydelas dos primeras letras del nombre “Cristo” griego: y R. estandarte Este símbolo con el nombre lábaro de Constantino.  

 _ El triunfo de Constantino  Con este estandarte al frente de sus tropas, Constantino venció a Majencio, y con él pretendió salvar a su Imperio de la decadencia en que se encontraba. La decisión de Constantino fue más política que religiosa. Su necesidad mayor era lograr la unidad del Imperio, y con gran acierto vio en la fe cristiana la suficiente vitalidad y fuerza como para lograrlo. La lealtad política al emperador unida a la lealtad religiosa a una fe como el cristianismo podía resultar en la salvación de su Imperio. Habiendo fracasado fracasa do en destruirlo, el Estado romano bajo el emperador Constantino, reconoció al cristianismo como religión lícita. El cristianismo, que hasta entonces había sido la religión de una minoría perseguida, pasó a ser la religión favorecida por el Estado. “¡Cuán el poder de Cristo, que llamó a de hombres oscuros Eusebio de Cesarea: y sin educación de su  oficio demaravilloso pescadores, es y les hizo legisladores y maestros la humanidad! ‘Os haré pescadores de hombres,’ dijo Cristo, ¡y qué bien ha cumplido él la  promesa! Él dio  poder a los apóstoles, de modo que lo que recibieron pudiera traducirse a todos los idiomas, civilizados y bárbaros; y pudiera ser leído y ponderado por todas las naciones, y la enseñanza  pudiera ser recibida como la revelación de Dios.… Vi Victorioso ctorioso sobre dioses y héroes, Cristo sólo se está haciendo reconocer en toda región del mundo, por todo todoss los pueblos, como el único Hijo de Dios.”  Dios.”  El cambio fue tremendo. De la noche a la mañana los cristianos se vieron honrados, tenidos en consideración, respetados, consultados y hasta obsequiados por los altos oficiales del Imperio y el emperador mismo. Constantino se mostró sumamente favorable al cristianismo y fue muy difícil para los líderes cristianos percibir su manejo político de esta situación.

Carta de Constantino a Eusebio: “Mucha gente se está uniendo a la iglesia en la ciudad que es llamada por mi nombre (Constantinopla). El número de iglesias debe ser aumentado. Te pido que ordenes cincuenta copias de las Sagradas Escrituras, escritas escr itas legiblemente sobre pergamino

 

 por copistas hábiles … tan pronto como se seaa posible. Tienes autorización para usar dos carros car ros del gobierno para traerme los libros a los efectos de verlos. Envía a uno de tus diáconos con ellos, y yo pagaré por ellos generosamente. Dios Dio s te guarde, querido hermano.”  hermano.”  Para los cristianos, su situación legal dentro del Imperio tuvo un giro total. Si bien es dudoso que Constantino haya sido un cristiano auténtico, concedió muchos favores al cristianismo en Occidente. Entre ellos: (1) terminó con las persecuciones generales con el Edicto de Milán en el año 313; (2) destruyó los templos paganos; (3) incorporó a cristianos como funcionarios de su gobierno; (4) eximió a los cristianos del servicio militar; (5) eximió de impuestos a las iglesias; (6) hizo del día domingo un feriado civil. Constantino llegó a ser el único emperador del Imperio Romano a partir de 323, 323 , después de derrotar a uno de sus opositores, Licinio. En el año 325 hizo una exhortación general para que todo el pueblo del Imperio se hiciera cristiano. Esta decisión influyó grandemente en Teodosio el Grande, quien comenzó a gobernar en 378, y en 380 colocó co locó al cristianismo como religión oficial del Imperio Romano. El 28 de febrero de 380, en Tesalónica, Teodosio promulgó un edicto, que qu e decía: “Todos nuestros  pueblos deben adherirse a la fe transmitida a los romanos por el apóstol Pedro y profesada por el  pontífice Dámaso y el obispo Pedro de Alejandría, es decir, reconocer la Santa Trinidad del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.” El  El   edicto continuaba estableciendo el crimen del sacrilegio, declaraba infames a quienes desobedecieran esta orden, y añadía: “¡Dios se vengará de ellos y nosotros también!”  también!”  perseguidor, el Estado romano pasóesaque ser la el persecución: mayor promotor de la fe cristiana. Ahora la Iglesia teníaDeque enfrentar otros peligros más graves grav la mundanalidad, el mal uso del poder, pod er, el relajamiento de las pautas morales, la corrupción, la pérdida de visión, el relajamiento del celo evangelizador, el desarrollo de la ideología de cristiandad, y el proceso de institucionalización. A partir de este tiempo, el cristianismo va a ir transformándose en cristiandad, mientras la civilización romana se va a ir convirtiendo en civilización cristiana. El período de las persecuciones y la oposición estatal había pasado, pero la Iglesia en Occidente  paulatinamente se fue institucionalizando como Iglesia del Imperio, acomodándose a sus valores y finalmente imitándolo en su estructura de poder. El cristianismo se insertó en la sociedad socieda d de una manera tal que, con todos los cambios que siguieron, jamás se vio seriamente amenazado en Occidente, hasta los tiempos modernos. Esto abrió las puertas a extraordinarias oportunidades, pero también a numerosísimos problemas, fundamentalmente el de la autenticidad de la fe de enormes multitudes cuyas conversiones frecuentemente eran sólo nominales.

GLOSARIO  adherente: persona que forma parte de un grupo o sociedad. Los adherentes o “temerosos de Dios” (Hch. 13:16) fueron personas que simpatizaban con el monoteísmo ético judío y que estuvieron dispuestos a aceptar el mensaje cristiano. El eunuco etíope (Hch. 8:26 –  8:26 – 39) 39) y el centurión (Hch. 10) eran adherentes judíos. anagrama: palabra que resulta de la transposición de las letras de otra (como amor-Roma) o cuyas letras sirven para formar otra palabra o expresión. arameo: idioma semítico conocido desde el siglo IX a.C. como la lengua de los arameos y más tarde usado extensamente en el sudoeste de Asia como lengua comercial y del gobierno. Fue adoptada adoptad a como su lengua franca por varios pueblos no arameos, incluyendo a los judíos después del exilio babilónico.

 

Está emparentado con otras lenguas (siríaco y árabe). Era el idioma que se hablaba en Palestina en tiempos de Jesús.

área cultural: el territorio geográfico dentro del cual las culturas tienden a ser similares en algunos aspectos significativos. Los habitantes del área cultural comparten una cultura o pauta cultural común. catecúmeno: persona que es un nuevo creyente en la fe cristiana y que se instruye en un cuerpo básico de la doctrina cristiana, como candidato para el bautismo. El término significa literalmente “alguien que es enseñado por la palabra de la boca.”  boca.”  

civilización: un nivel relativamente alto de desarrollo cultural y tecnológico. Es el estadio de desarrollo cultural en el que se logra la escritura y la conservación de registros escritos, la domesticación de los animales y el establecimiento de un complejo agrario estable. cosmovisión: concepto filosófico o ideológico del mundo, que puede traducirse como “mirada sobre el mundo.” Es un concepto abarcador o aprehensión aprehens ión del mundo, especialmente desde un punto de vista específico. La cosmovisión es la forma en que las personas perciben la realidad. Es una comprensión general del carácter del universo y del lugar que se ocupa en él. diáspora: dispersión del pueblo judío por todas las naciones, ocurrida a partir de la caída de Jerusalén en manos del Imperio Neo-Babilónico (586 a.C.), lo que los llevó al exilio fuera de su tierra, Israel. La dispersión de los judíos ocurrió en parte como resultado de la guerra y el exilio, y en parte como resultado de viajes y el comercio. documento cristiano conocido también como  Doctrina de los doce apóstoles, que fue redactado entre los años 80 – 100. 100. Se presenta como una síntesis moral, litúrgica y disciplinaria, que es  posible haya sido utilizada para la educación cristiana de los catecúmenos.

 Didaché:

docetismo: creencia considerada como herejía por los primeros cristianos porque enseñaba que Cristo sólo parecía tener un cuerpo humano, y que en realidad él no sufrió ni experimentó la muerte sobre la cruz. Se la conoce también como fantasmismo, por sostener que Cristo era sólo un espíritu con apariencia humana. epicureísmo: la filosofía de Epicuro, quien sostenía una ética hedonista, que consideraba a la tranquilidad emocional y el estado imperturbable como el bien supremo, sostenía que el placer intelectual era superior a cualquier otro, y defendía el renunciamiento a las cosas temporales a favor de placeres más permanentes. estoicismo: la filosofía de Zenón (c. 300 a.C.), quien sostenía que la persona sabia debe estar libre de toda pasión, no conmoverse con alegría ale gría o tristeza, y someterse a la ley natural siendo indiferente a todo dolor o placer. libación: derramamiento o efusión de vino u otro licor, que hacían los antiguos en honor de los dioses o los espíritus ancestrales. neoplatonismo: escuela filosófica que floreció principalmente en Alejandría Alejandrí a en los primeros siglos de la era cristiana (siglos III al VI), y cuyas doctrinas eran una renovación de la filosofía platónica bajo la influencia del pensamiento oriental, prácticas ascéticas y cierto misticismo. Su representante más importante fue Plotino (205 – 270), 270), en Egipto,lasdiscípulo la escuela Alejandría, yPlotino quien enseñó en Roma una filosofía en lanacido que combinaba doctrinasdeantiguas y eldecristianismo. quiso modificar el platonismo para ajustarlo al aristotelismo, postaristotelismo y conceptos orientales.

 

Él concebía el mundo como una emanación de un ser invisible y absoluto, con quien el alma es capaz de reunirse en trance o éxtasis. Sus lecciones se recopilaron en las Enneadas.

pagano: palabra utilizada originalmente por los cristianos para referirse a los pueblos politeístas antiguos y, por extensión, a todos los pueblos politeístas, no convertidos al cristianismo, o que no  profesan una fe verdadera, así como de lo que se relaci relaciona ona con ellos o sus dioses. Hoy tiende a referirse a una persona que no es cristiana, judía o musulmana, o a una persona que es irreligiosa o que se adhiere a alguna forma reavivada de una religión antigua. peripatéticos: los seguidores de la filosofía de Aristóteles o adherentes del aristotelismo. La palabra significa “los que caminan para arriba y para abajo,” y hace referencia al método de Aristóteles de enseñar mientras caminaba. periplo: viaje de circunnavegación de los antiguos marinos. pitagóricos: los seguidores de la filosofía de Pitágoras, quien desarrolló ciertos principios básicos de matemáticas y astronomía, dio origen a la doctrina de la armonía de las esferas, creía en la metempsicosis (la recurrencia eterna de las cosas), y el significado místico de los números. prosélito: gentil o pagano (no judío) convertido al judaísmo y al que se le permitía adorar en la sinagoga y acatar algunas leyes ceremoniales judías. Los prosélitos se sintieron muy atraídos por la temprana  prédica del evangelio cristiano, que comenzó en las sinagogas s inagogas (Hch. 2:11). reliquia: parte del cuerpo de un santo u objeto que le perteneció o sirvió para su martirio, que se conserva piadosamente y al que se presta veneración. ven eración. Generalmente se atribuyen a las reliquias poder poderes es milagrosos. Sabbath:

el día de la semana cuando las personas son llamadas a descansar de sus labores y a pensar en Dios, así como Dios descansó “el día séptimo” de la creación. Esta práctica asegura un ritmo de actividad y recreación en la vida. Los judíos observan el día sábado como su sabbath, desde el atardecer del viernes hasta el atardecer del sábado. Los cristianos hacen lo propio el día domingo, si bien de manera menos rigurosa. Septuaginta:

traducción griega del Antiguo Testamento hebreo, hecha por unos setenta ancianos en Alejandría (Egipto), en tiempos del rey Ptolomeo II Filadelfo, rey de Egipto de 285 a 246 a.C. Fue la Biblia de los primeros cristianos. Upanishad : una de las clases de tratados védicos (Vedas) que trata con amplios problemas filosóficos.

27 a.C. –   – 14 14 d.C.

SINOPSIS CRONOLÓGICA  Augusto

4 a.C.

Nacimiento de Jesús

14 – 37 37

Tiberio

30

Crucifixión de Jesús; Pentecostés

35

Martirio de Esteban; conversión de Pablo

 

  37 – 41 41

Calígula

46

Pablo comienza sus viajes misioneros

48

Concilio de Jerusalén

41 – 54 54

Claudio

57

Pablo escribe su Carta a los Romanos 

54 – 68 68

Nerón

64

Incendio de  persecuciones

65

Pedro y Pablo son ejecutados

66

Cristianos de Jerusalén huyen a Pela

68 – 69 69

Galba

69

Otón

69

Vitelio

70

Caída y destrucción de Jerusalén por Tito Vespasiano

69 – 79 79

Vespasiano

79 – 81 81

Tito

81 – 96 96

Domiciano

86

Domiciano termina el Coliseo de Roma

96 – 98 98

Narva

98 – 117 117

Trajano

110

Martirio de Ignacio de Antioquía

112

Plinio escribe a Trajano

117 – 138 138

Adriano

138 – 161 161

Antonino Pío

Roma;

Nerón

lanza

 

  140

Marción comienza a enseñar

140

Valentino comienza a enseñar

150

Justino Mártir dedica su Apología primera 

154

Policarpo en Roma

156

Martirio de Policarpo

160

Marción y Valentino dejan de enseñar

160

Melitón de Sardis

161 – 180 180

Marco Aurelio

172

Comienza montanismo

175

Celso ataca al cristianismo

177

Mártires de Lión (Francia)

178

Ireneo, obispo de Lión (Francia)

180

Panteno dirige la escuela catequética de Alejandría

180

Ireneo escribe Contra herejías 

180

Clemente de Alejandría

180 – 192 192

Cómodo

195

Controversia sobre la Pascua, en Roma

195

Conversión de Tertuliano

202

Clemente deja Alejandría

202

Martirios en Cartago

203

Orígenes dirige la escuela catequética de Alejandría

193 – 211 211

Septimio Severo

210

Hipólito en Roma

 

  211 – 212 212

Caracalla

215

Orígenes deja Alejandría

216

Nacimiento de Mani

218

Calixto, obispo de Roma

222

Calixto muere

222 – 235 235

Alejandro Severo

230

Primeros edificios eclesiásticos

236

Fabiano, obispo de Roma

248

Cipriano, obispo de Cartago

248

Roma cumple mil años de su fundación

249 – 251 251

Decio

250

Persecución bajo Decio

250

Fabiano muere

251

Cornelio, obispo de Roma

253

Cornelio muere

253 – 260 260

Valeriano

254

Esteban, obispo de Roma

254

Orígenes muere

256

Cae Dura Europos

257

Persecución bajo Valeriano

258

Cipriano muere

260 – 268 268

Galieno

261

Galieno pone fin a la persecución

270

Antonio va al desierto

 

  277

Muerte de Mani

284 – 305 305

Diocleciano

284

Diocleciano instituye la Tetrarquía

285 – 305 305

Maximiano

292 – 306 306

Constancio Cloro en el poder

292 – 311 311

Galerio en el poder

298

Cristianos son forzados a renunciar al ejército

303

Persecución bajo Diocleciano

305

Abdicación de Diocleciano y Maximiano

305

Constancio y Galerio como emperadores

306

Muere Constancio y huída de Constantino

306

Persecución en el este solamente

305 – 313 313

Maximino Daza

306 – 337 337

Constantino

306 – 312 312

Majencio

309

Concilio de Elvira

311

Edicto de tolerancia de Galerio

312

Batalla del Puente Milvio: “conversión” de Constantino

312

Comienza el cisma donatista

313

Edicto de Milán

313

Eusebio, obispo de Cesarea

323

Eusebio completa su Historia eclesiástica 

 

CUESTIONARIOS DE REPASO  Preguntas sobre el material básico (para los niveles 1, 2 y 3) :  1. ¿Cuál es el mandato de Jesús con el que terminan los cuatro Evangelios? 2. ¿Por qué razón Palestina fue un lugar adecuado para el comienzo de una religión que debía esparcirse “a todo el mundo”?  mundo”?  3. Menciona tres factores que contribuyeron a la expansión del cristianismo. 4. ¿Por qué razón la situación geográfica de Palestina ha sido siempre peligrosa? 5. ¿Cuál fue la “Biblia” de los primeros cristianos? ¿En qué idioma estaba escrita? 6. Menciona una o dos razones por las que en el Imperio Romano los que estaban insatisfechos con su religión pagana aceptaban el judaísmo. 7. Menciona las razones por las que consideramos a Pablo un prototipo de su época. 8. ¿Qué tres grandes acontecimientos en la historia del cristianismo del Nuevo Testamento ocurrieron en una casa de Jerusalén? 9. Describe con tus palabras cómo era el bautismo que practicaba la iglesia primitiva. 10. Menciona tres etapas de la misión apostólica según el libro de los Hechos. 11. Lee Hechos 18 y menciona a una pareja de misioneros itinerantes que allí se nombra. 12. ¿Cómo estaba organizada la iglesia cristiana primitiva? 13. Describe la oposición popular al cristianismo. 14. ¿Cuáles fueron los efectos sobre el cristianismo de la persecución desatada por el emperador Diocleciano? 15. Menciona las circunstancias en las que el emperador Constantino se decidió en favor del cristianismo.

 

  16. Menciona los favores que Constantino concedió al cristianismo.

Tareas suplementarias (para los niveles 2 y 3) :  1. Nombra los continentes en los que se encontraban cada uno de los siguientes imperios: Babilonia, Egipto, Grecia, Roma. 2. Lee los pasajes siguientes: Mt. 21:1 –  21:1 – 11; 11; Hch. 8:26 – 31; 31; Hch. 9:1 – 8. 8. En cada caso, menciona: ¿quién estaba viajando?, ¿hacia dónde se dirigía?, ¿por qué medio piensas que estaba viajando? 3. ¿Por qué no fue necesario para los judeocristianos del primer siglo aprender los idiomas de los países a los que iban como misioneros? 4. Menciona los nombres de los propietarios en cuyas casas se reunía la iglesia, en los siguientes lugares: Filipos (Hch. 16:40), Corinto (Hch. 18:7), Roma (Ro. 16:5, 14, 15), Éfeso (1 Co. 16:19). 5. Describe y explica el Anagrama de Tertuliano.

Tareas avanzadas (para el nivel 3):  Lee Baker, Compendio de la historia cristiana , 7 – 28, 28, y responde a las siguientes preguntas: 1. Señala algunos aspectos (no menos de tres) de la influencia griega sobre el cristianismo. 2. Señala algunos aspectos (no menos de tres) de la influencia romana sobre el cristianismo. 3. Señala algunos aspectos (no menos de tres) de la influencia hebrea sobre el cristianismo. 4. Analiza el antagonismo intelectual hacia el cristianismo entre los años 100 al 325, señalando: atacantes, apologistas (¿quiénes eran?) y los resultados. 3  

3

 Deiros, P. A. (2005).  (2005).  Historia del Cristianismo: Los primeros 500 años (pp. 43 –91). Buenos Aires,

Argentina: Ediciones del Centro.

GRUPAL  1. ¿Qué piensan ustedes en cuanto a la necesidad de la indigenización de las iglesias nacionales y su divorcio de toda dependencia exterior (como hizo la Iglesia del Este en Persia respecto de Roma), para

 

 

que haya una auténtica expansión de la fe cristiana? ¿Por qué este proceso de indigenización es importante desde una perspectiva misionológica? 2. ¿Cómo explicarían ustedes la caída de un imperio (como el Imperio Romano), que llevaba el nombre de cristiano? ¿El hecho de que una nación sea cristiana, la libra de la guerra o la autodestrucción? Fundamenten sus respuestas.

LECTURAS RECOMENDADAS  Bainton, La iglesia de nuestros padres , 56 – 64. 64. Daniélou-Marrou, Nueva historia de la iglesia , 1:90 – 91; 91; 230 – 232; 232; 319 – 321 321 González, Historia de las misiones, 73 – 83; 83; 85 – 90. 90. González, Historia del cristianismo, 1:307 – 314; 314; 221 – 232. 232. Latourette, Historia del cristianismo, 1:116 – 118; 118; 138 – 146. 146. 3 Walker, Historia de la iglesia cristiana, 129 – 134. 134.  

UNIDAD 2

El cristianismo más alla del imperio romano   INTRODUCCIÓN  Hacia fines del segundo siglo el cristianismo se había difundido por casi todo el mundo mediterráneo. Se encontraba bien establecido en el norte de África, en Galia y en España. Es probable que para esta época haya alcanzado las Islas Británicas. Hacia el sudoeste, se estaba esparciendo a lo largo de las márgenes africana y árabe del mar Rojo. Hacia el este del Imperio había conquistado la  pequeña ciudad-estado de Edesa, y desde allí se estaba extendiendo hacia el norte llegando a Armenia, y hacia el este iba penetrando en Persia, y aun más allá dirigiéndose hacia el Asia Central. En este tiempo, Tertuliano de Cartago, decía: “Somos apenas de ayer, y hemos llenado todo lugar entre vosotros — ciudades, ciudades, islas, fortalezas, pueblos, mercados, y los mismos campamentos, tribus, compañías, palacio, Senado, Foro —no os hemos dejado nada sino los templos de vuestros dioses.” Para fines del siglo tercero, el cristianismo se había establecido fuertemente en muchas partes del Imperio Romano a pesar de la persecución y seguía avanzando firmemente fuera del mismo, especialmente en Mesopotamia. Para comienzos del siglo IV, estaba ganando a Etiopía, donde desde el rey hasta el último vasallo confesaban la fe de Cristo. Hacia el año 350, la expansión del cristianismo resultaba notable. Primero, el cristianismo era todavía una religión predominantemente “oriental,” ya que su fuerza más grande en este tiempo estaba en Armenia del Imperio Romano), Generalmente, en Asia Menor,seyconcibe en el extremo orientalcomo de Europa en la nueva capital(fuera del Imperio: Constantinopla. al cristianismo una religión europea y casi exclusivamente occidental. La historia no apoya este concepto. Por supuesto, el cristianismo era muy fuerte en el mundo mediterráneo y allí habría de avanzar a pasos agigantados,

 

 

especialmente a partir del momento en que comenzó a contar con el favor imperial. Pero no debemos  pasar por alto el hecho ddel el floreciente desarrollo del cristianismo en la frontera oriental del d el Imperio y más allá de ella. Segundo, en África, además de los puntos fuertes del litoral norteño, en Numidia, Cirenaica y el delta y valle del río Nilo, el cristianismo iba penetrando paulatinamente por las riberas del mar Rojo hasta entrar y conquistar ensalieron este período. El de desarrollo del cristianismo en destacados el norte de de África fue muy significativo, ya Abisinia que de allí algunos los teólogos cristianos más este  período (Tertuliano de Cartago, Cipriano de Cartago, Agustín de Hipona). Hipon a). MAPA 4 - LA EXPANSIÓN DEL CRISTIANISMO HACIA EL AÑO 350  Tercero, el progreso del cristianismo a través de Asia continuó sin pausa. En Persia, donde hacia mediados del siglo IV comenzó a sufrir una severa persecución; a lo largo de las márgenes árabe y  persa del golfo Pérsico; y desde aquí por mar hasta la India (alrededor del 295). Una embajada romana enviada por el emperador Constancio en 354 se encontró con una comunidad cristiana en el sudoeste de la India. La tradición oral, en la Iglesia Siríaca Antigua, que todavía hoy sobrevive en esta región, habla de la llegada de el año 345 provenientes Persia huyendo de la persecución). Escristianos probable allá que por el cristianismo haya llegadodehasta la (presumiblemente India o por lo menos a su frontera noroeste por vía terrestre. En el Concilio de Nicea en 325, un obispo obisp o se autotituló como “Juan de la Gran India y Persia.” Más tarde, el cristianismo penetró más profundamente en Asia Central, llegando a convertir y civilizar a los pueblos nómadas del Turquestán alrededor del año 500.

EL PRIMER REINO CRISTIANO: EDESA   _ La conversión de Edesa  El libro de los Hechos nos dice que el día de Pentecostés la predicación de Pedro y los demás apóstoles fue oída por “partos, medos y elamitas; habitantes de Mesopotamia” (Hch. 2:9), es decir, habitantes de la región al este de Palestina. La ruta que llevaba a estos territorios pasaba por la ciudad siria de Antioquía. Esta ciudad fue, desde muy temprano (Hch. 11:19 –  11:19 – 21) 21) un centro muy importante de cristianismo helenista. De hecho, fue allí que “a los discípulos se les llamó ‘cristianos’ p or primera vez” (Hch. 11:26). Por ser una metrópolis comercial con una ubicación tan estratégica, no es extraño que desde allí el movimiento cristiano se haya expandido en varias direcciones. Desde Antioquía, donde comenzó Pablo su misión hacia Occidente, comenzó también la expansión exp ansión hacia Oriente. Desde fines del siglo I, cristianos de lengua aramea de Palestina predicaron a las comunidades judías de una región denominada Osroene. Esta corriente misionera se conoce como la misión palestinense. Fue el  judío Tobías quien recibió a Addai, el primer misionero judeo-cristiano judeo- cristiano en esa región. La primera ciudad en ser alcanzada fue Edesa (200 kilómetros al este de Antioquía), capital de un  pequeño reino independiente (Osroene), estratégicamente ubicada sobre las rutas principales de comunicación entre Oriente y Occidente. Aquí había también una importante comunidad judía, que  proveía de una buena base para el inicio del testimonio cristiano. Fue esta ciudad la primera en ver a su rey convertido y al cristianismo constituido en religión oficial, cerca del año 200. De este modo, Edesa transformó en el centro más importante para la difusión del movimiento cristiano de habla siríaca,selengua muy cercana al arameo. El testimonio de Eusebio, quien visitó la ciudad en 320, agrega una información curiosa. Dice Eusebio que en Edesa encontró un documento conocido como Crónica de Addai, que según él contenía

 

 

la correspondencia mantenida entre el rey de la ciudad, Abgar, con nadie menos que Jesús. Según estos documentos, el rey invitó a Jesús a ir a Edesa, para que lo curara de una enfermedad en fermedad que padecía. Jesús le respondió que no podía ir, pero que enviaría a uno de sus discípulos. Eusebio dice que después de la ascensión de Jesús, el apóstol Tomás “envió a Tadeo (Addai en siríaco), uno de los setenta,” a Edesa. Tadeo curó a Abgar y a “muchos otros en la ciudad, hizo obras maravillosas y predicó la palabra de Dios.” La pregunta que surge surge es si lo que relata Eusebio es históricamente verificable y cierto. Eusebio así lo creía, pero quizás estaba equivocado. La arqueología ha encontrado una moneda con la esfinge del rey Abgar de Edesa, con una cruz en su corona. Pero no es el Abgar de tiempos de Jesús, sino Abgar VIII ó IX (179 –  (179 – 216), 216), y la moneda fue acuñada entre 180 –  180 –  192. Como ocurría con frecuencia en la antigüedad, los compiladores de la historia tomaron un hecho real y lo remontaron a los días de Jesús para darle lustre. Es muy probable que el primer rey cristiano de Edesa haya sido Abgar IX. Su nombre aparece en la Crónica de Edesa, pero allí no dice que haya sido cristiano. Julio Africano, quien vivió en la corte de Abgar antes del 216, dice que este rey era un “hombre consagrado” (¿ cristiano?). El  Libro de las leyes de las tierras, escrito antes del 250 por un discípulo de Bardaisanes, dice explícitamente que el rey Abgar se hizo cristiano. De todos modos, parece razonable pensar que qu e para fines del primer siglo algunos cristianos arameos ar ameos ya habían llegado de Palestina a Osroene y que predicaron a las comunidades judías en la región. Una indicación de esto es el hecho de que fue un judío, Tobías, quien recibió a Addai. Otro elemento a tomar en cuenta es que los cristianos de Osroene celebraban la Pascua como lo hacían los cristianos  palestinenses y no como los de Asia. 4 

 _ La contribución de Edesa  El reino de Edesa (Osroene) fue “primero” también en varias cosas más. Por un lado, tuvo el primer templo cristiano que recuerde la historia. Gracias al favor real, los cristianos de esta ciudad pudieron tener su templo junto al palacio, cuando no había templos en el Imperio Romano. En el año 201 hubo una inundación, y los registros indican que “Abgar, el rey, se paró sobre la torre, llamada la Torre Persa, y observó las aguas con la luz de las antorchas. Las aguas rompían contra la muralla occidental de la ciudad, entraban a la ciudad, y derribaban el grande y hermoso palacio del rey.… Y las aguas destrozaron el templo de la iglesia de los cristianos.” crist ianos.” De este modo, Osroene fue probablemente el  primer reino en el que se levantaron edificios destinados específicamente al culto cristiano. Además, en esta ciudad se hizo la primera traducción de los Evangelios del griego al siríaco, el idioma que se hablaba por aquel entonces en Mesopotamia. A partir del segundo siglo se hicieron traducciones del griego al siríaco, siendo posiblemente el Nuevo Testamento la primera de estas traducciones, bastante antes del año 200. El siríaco es importante porque se transformó en el idioma eclesiástico del avance cristiano oriental, y fue llevado, en las Escrituras y la liturgia, a través de Asia hasta el mar de la China. Una tercera contribución pionera de Edesa fue su énfasis en un cristianismo ascético, especialmente a partir del siglo III. El cristianismo siríaco que se desarrolló allí puso un fuerte énfasis sobre sobr e la ascesis. Los  Hechos de Tomás  hablan de los convertidos renunciando al matrimonio. Las iglesias estaban compuestas mayormente por ascetas y se caracterizaban por un ejercicio intensivo de los dones del Espíritu y la proclamación del evangelio. La práctica de la castidad estaba muy difundida. Edesa fue también un centro de expansión del testimonio cristiano y de producción de literatura cristiana lenguasesiríaca. En Edesa se de formó lo que conoce como el “ciclo de Tomás” (así como en Frigiaen oriental desarrolló el ciclo Felipe o enseAsia Menor el ciclo de Juan), que significa la  producción de una serie de tradiciones históricas y literarias ligadas al apóstol Tomás y ssuu ministerio. Allí surgen varias obras asociadas a Tomás, como  Hechos de Tomás  (siglo III), Salmos de Tomás 

 

 

(composiciones judeo-cristianas del siglo II, que más tarde fueron adoptadas por los maniqueos), Evangelio de Tomás  (hallado en Nag Hammadi, pero relacionado con el medio judeo-cristiano de Edesa, a mediados del siglo II). Otra obra importante del cristianismo primitivo oriental es Odas de Salomón, un escrito de carácter judeo-cristiano, de orientación o rientación esenia, probablemente de fines del siglo I. También se destacan el Evangelio de la verdad   (una homilía litúrgica) y el Canto de la perla, Tomás . personajes cristianos de renombre. Uno de ellos fue Taciano (c.  preservada en los Hechos Edesa también produjodealgunos 170), quien nació en Mesopotamia, de lengua siríaca, tuvo una buena educación, y quien fue al Oeste  buscando una religión r eligión que le ddiera iera satisfacción. Pr Probó obó muchas de las religiones que se practicaban en el Imperio Romano, hasta el año 150 cuando se convirtió a la fe cristiana en Roma. Fue discípulo de Justino Mártir y autor de obras importantes. Su  Discurso a los griegos  es una reacción contra la civilización greco-romana. En ella Taciano expresa su gratitud personal por su liberación de los dioses del politeísmo pagano. También es el autor de una obra perdida titulada  Diatessaron  (“a través de cuatro”), que fue probablemente la primera armonía de los Evangelios en ser escrita y que qu e tuvo una gran influencia en el cristianismo siríaco. Su testimonio personal de conversión exalta el poder de las Escrituras y su valor por sobre los escritos griegos, que antes habían concentrado su devoción.

Taciano:  “Y, mientras estaba prestando mi más sincera atención al asunto, di con ciertos escritos bárbaros, viejos paracon sersus comparados conguiado las opiniones de fe losengriegos, y demasiado divinosdemasiado para ser comparados err ores; y fui errores; a depositar éstos por la sencillez sincera del lenguaje, el carácter no artificial de los escritores, el pre-conocimiento manifiesto de eventos futuros, la calidad excelente de los preceptos, y la declaración del gobierno del universo como centrado en un solo Ser. Y, al ser mi alma enseñada por Dios, llegué a entender que la clase anterior de escritos llevaba a la condenación, pero que éstos  pondían fin a la esclavitud que está en el m mundo, undo, y nos rescatan de la la multiplicidad multiplicidad de potestades y de diez mil tiranos, mientras que nos dan, no realmente lo que antes no habíamos recibido, sino lo que habíamos recibido pero por el error no podíamos retener.”   Bardaisanes (154 – 2222) 22) fue otro nativo destacado de Edesa. Perteneció a una familia noble de esa ciudad y estuvo ligado a la corte. Julio Africano nos informa que fue un arquero diestro, y que escribía muy bien en griego y siríaco. Se convirtió en 179 y fue conocido como un hombre de pensamiento independiente, y primer himnólogo lengua siríaca. Según líricas Efraín, con Bardaisanes compuso muchos himnospoeta (madrase ), que eran unaen especie de lecciones un refrán. Estas composiciones se cantaban de manera antifonal. Así, pues, Bardaisanes merece un lugar importante como pionero en la historia de la música litúrgica. Bardaisanes se destacó también en la literatura. En este sentido, es muy elogiado por Eusebio. Un discípulo suyo registró su enseñanza en una obra titulada En cuanto al destino, escrita en forma de  preguntas y respuestas. También se atribuye a Bardaisanes el poema El himno del alma  conocido también como El canto de la perla. En El libro de las leyes de diversos países , algunos de sus discípulos registraron sus enseñanzas, en las que se pone en evidencia el amplio conocimiento de Bardaisanes. Lamentablemente, de sus numerosos escritos sólo se conservan unos pocos fragmentos. Sus observaciones nos ofrecen un cuadro de la situación del cristianismo en todo el mundo conocido de sus días.  “¿Yenqué diremos nueva raza dePorque, nosotros cristianos, a quienes quien es Cristo en Bardaisanes: su venida plantó cada país ydeenlatoda región? helos aquí, dondequiera que estamos, todos somos llamados por el único nombre de Cristo: cristianos. En cierto día, el primero de la semana, nos congregamos juntos, y en los días de las lecturas [?] nos abstenemos de tomar

 

 

alimento. Los hermanos que están en Galia no toman a varones por esposas, ni los que están en Partia dos esposas; tampoco se circuncidan aquellos que están en Judea; ni nuestras hermanas que están entre los Geli se unen a extraños; como tampoco aquellos hermanos que están en Persia toman a sus hijas por esposas; ni los que están en Media abandonan a sus muertos, o los entierran vivos, o los entregan como comida a los perros; ni los que están en Edesa matan a sus esposas o a sus hermanas cuando cometen impureza, sino que se alejan de ellas, y las entregan al juicio de Dios; ni los que están en Hatra apedrean a los ladrones a muerte; sino que, dondequiera que están, y en cualquier lugar en que se encuentren, las leyes de los diversos  países no les impiden obedecer la ley de su Soberano, Cristo; ni siquiera el Destino de los Gobernadores celestiales los mueva a hacer uso de cosas que ellos consideran como impuras.”  impuras.”  Es difícil precisar la posición doctrinal de Bardaisanes. Por un lado, luchó contra co ntra la herejía. Eusebio dice que escribió contra Marción. Pero por otro lado, se lo acusó de ser discípulo de Valentino (gnóstico) y de practicar la astrología. Parece evidente que Bardaisanes profesaba profesab a una especie de judeocristianismo gnóstico, pero no está tan claro si s i su gnosticismo era dualista o meramente una un a manera de  pensar algo anticuada. Lo segundo parece ser s er más probable.

LA PRIMERA NACIÓN CRISTIANA: ARMENIA 

Las tradiciones más antiguas atribuyen un origen apostólico al movimiento cristiano en Armenia. Se habla del apóstol Tadeo y se dice que ministró en este país al oeste del mar Caspio por unos ocho años (35 – 43). 43). De igual modo, se dice que el apóstol Bartolomé predicó allí por unos dieciséis años (44 – 660). 0). No obstante, estas tradiciones carecen de todo fundamento histórico.

 _ La conversión de Armenia  Armenia estaba al este del Imperio Romano, pero más al norte que Edesa. El historiador griego Sozómenos, en su  Historia eclesiástica, escrita allá por el año 450, dice: “Los armenios, tengo entendido, fueron los primeros en aceptar la fe cristiana como nación.” Según Eusebio, Armenia se hizo cristiana hacia el 311, cuando el emperador Maximiano les declaró la guerra por esa razón. Dice Eusebio: “Además de esto, el tirano (Maximiano) tuvo que hacer frente a una guerra contra los armenios, desde cristianos una fechaymuy temprana y aliados de los romanos. Como ellosgente eranque también celosos en su habían piedad sido haciaamigos la Deidad, el enemigo de Dios (Maximiano) había intentado forzarlos a sacrificar a los ídolos y a los demonios, haciendo con esto que de amigos se tornaran en contrincantes y de aliados en enemigos.”   Sabemos que hubo persecuciones contra los cristianos en Armenia desde comienzos del siglo II,  pero fue recién hacia el año 301 (según la tradición armenia), que el cristianismo se convirtió en religión dominante en Armenia. Este país fue así el primer Estado del mundo en proclamar al cristianismo como religión oficial. Armenia se encontraba entre el Imperio Persa hacia el Este y el Imperio Romano hacia el Oeste. Debido a esta situación y su necesidad de protección frente a los avances de uno y otro imperio, su política fue pendular. No obstante, los armenios mostraron más acercamiento hacia los romanos que hacia los persas.

 _ El apóstol de Armenia  El promotor de la conversión de Armenia fuecristianos el hijo deeran un noble armenio, fue III. educado como cristiano en Capadocia (Asia Menor), donde los mayoría hacia que el siglo Este varón recibió el nombre latino de Gregorio y llegó a ser conocido como Gregorio el Iluminador (240 –  (240 – 332), 332), el apóstol de Armenia.

 

 

En 224, los persas sasánidas se apoderaron apo deraron de Partia y comenzaron a amenazar a Armenia. Cuando el rey armenio Cosroes (de la dinastía de los arsácidas de origen parto) procuró aliarse con Roma, los  persas mandaron a un noble armenio y pariente suyo, Anak, a matar al rey. El complot fue descubierto y Anak fue ejecutado con toda su familia, excepto un niño, que fue llevado a territorio romano en Asia Menor de Capadocia). era Gregorio. MásCosroes, tarde, los persas sasánidas invadieron Armenia(Cesarea y apresaron a la familiaEste real,niño excepto a un hijo de Tirdat (o Tiridates), que logró escapar al Imperio Romano. El emperador Valeriano atacó a los persas en defensa de los armenios,  pero los persas lo derrotaron e hicieron prisionero, sometiendo a Armenia a su dominio. En territorio romano, Tiridates llegó a ser un soldado distinguido en el ejército de Diocleciano. En 287, con la ayuda de Diocleciano, Tiridates recuperó el trono de su padre y reestableció la independencia armenia. Muchos refugiados volvieron a su patria, entre ellos Gregorio, quien debido a su muy buena educación llegó a ser oficial de confianza de Tiridates. No obstante, con el tiempo Gregorio tuvo  problemas con el rey en razón de que rechazaba su paganismo, porque él era cristiano. El rey finalmente lo arrestó, lo encarceló, torturó y lo tuvo por quince años en una mazmorra. Más tarde lo condenó a muerte, cuando se enteró que Gregorio era hijo del hombre que quiso asesinar a su padre. Pero Pe ro Tiridates cayó enfermo de licantropía. Una esclava cristiana y la hermana del rey exhortaron a Tiridates a buscar la ayuda de Dios, y le dijeron: “Sólo Gregorio tiene la medicina para todos los males del país.” Gregorio fue llevado ante el rey, oró por su sanidad, Tiridates se sanó y proclamó al cristianismo como religión oficial del Estado. El cronista armenio del siglo V, conocido como Agathangelos, recuerda estos episodios, en estos términos:

Agathangelos (c. 450): “Ahora, cuando todos ellos se habían reunido en el lugar de adoración de la casa de Dios, el bendito Gregorio comenzó a hablar, diciendo: ‘Doblen las rodillas, todos,  para que el Señor pueda efectuar la sanidad de sus tormentos.’ Todos ellos doblaron las rodillas a Dios, y el bendito Gregorio con oraciones y súplicas fervientes imploró con lágrimas por la sanidad del rey. Y el rey, mientras estaba de pie entre el pueblo con la apariencia de un cerdo, de pronto tembló y echó de su cuerpo la piel como de cerdo con sus dientes como colmillos y rostro como con hocico, y se quitó la piel con su pelo como de cerdo. Su rostro volvió a su  propia forma y su cuerpo se tornó suave y joven como el de un niño recién nacido; fue completamente sanado en todos sus miembros. De manera similar, todas las personas que se habían reunido en grandes números fueron curadas de la aflicción de cada uno: algunos habían sido leprosos, otros paralíticos, tullidos, hidrópicos,  poseídos, quienes sufrían suf rían de gusanos o gota. De es esta ta manera Cristo en su s u misericordia abrió su gracia sanadora todopoderosa, y sanó a todos a través de Gregorio; aquellos afligidos fueron curados de toda enfermedad. Así también se abrió la fuente del conocimiento de Cristo y ésta llenó los oídos de todos con la verdadera enseñanza de Dios.”  Dios.” 

 _ El cristianismo en Armenia  Pronto surgió un movimiento de pueblos, que resultó en la conversión masiva de casi c asi todo el reino. En pocos meses, el culto pagano casi desapareció y el cristianismo se estableció en todas partes. Por toda Armenia se destruyeron los ídolos, los templos fueron limpiados y consagrados como iglesias cristianas, y muchos sacerdotes y sus hijos se incorporaron al clero cristiano. Esto último hizo que en Armenia el sacerdocio se alhiciera hereditario, como había sidoprimer el pagano. que hasta entonces no estabacristiano ordenado ministerio cristiano, fue loconsagrado obispoGregorio, de Armenia en el año 302 por Leoncio, arzobispo de Cesarea de Capadocia, y llegó a ser conocido como el “Iluminador”.   El propio rey armenio, Tiridates, se convirtió y fue bautizado en enero del año 303. “Iluminador”.

 

 

Gregorio gobernó la Iglesia Armenia durante un cuarto de siglo, haciendo todo lo posible por darle una organización sólida y completa.

Arzobispo Maghakia Ormanian:  “Creó cerca de cuatrocientas diócesis episcopales y archiepiscopales para el gobierno espiritual de Armenia de los países circundantes. Presidió la conversión de Georgia, de la Albania Caspiana y de la yAtropatena, donde envió dirigentes y eclesiásticos. Murió en el momento de la convocación del Concilio de Nicea (325). Sus hijos le sucedieron.… El mantenimiento del patriarcado en la familia de San Gregorio era con el deseo de la nación, sea porque quería rendir homenaje a su gran Iluminador, o porque sufrió la influencia de una costumbre pagana.”  pagana.”  A pesar del rápido proceso de conversión de la nación, hubo algunos avivamientos de paganismo especialmente en los distritos montañosos, y conflictos entre el rey re y y el Catholicós (autoridad episcopal máxima) sobre cuestiones morales y políticas. No obstante, a lo largo del siglo IV, el cristianismo se fue afirmando en Armenia. Este progreso se debió en particular a la perseverancia de grandes obispos como Nercés (353 – 373) 373) y Sajak (387 – 439), 439), que completaron el apostolado de Gregorio el Iluminador. En 365 se llevó a cabo el primer concilio nacional, que estableció las reglas de disciplina necesarias  paraPor la joven iglesia. entonces comenzó a sentirse la necesidad ne cesidad de tener la Biblia y otros escritos sagrados, s agrados, así como la liturgia, en la lengua vernácula. El problema era que el armenio carecía de un alfabeto propio. Bajo el obispo Sajak, un ex-secretario del rey, Mesrop, desarrolló un nuevo alfabeto para el idioma armenio (404), que contaba con treinta y seis caracteres capaces de expresar todos los sonidos de d e la lengua. Una vez creado el alfabeto, Mesrop, Sajak y otros ayudantes se dispusieron a traducir la Biblia. Hacia el año 433 apareció un Antiguo Testamento en ese idioma, traducido de la Septuaginta, pero con muchas variantes en conformidad con la versión siríaca. De este modo, la cultura armenia se fue gestando en torno a la fe cristiana gracias al idioma escrito. Comentarios patrísticos y otros tratados, la liturgia y otra literatura sagrada fueron publicados en armenio, la lengua nacional. De este modo, la nación armenia y su Iglesia estuvieron entrelazadas tan estrechamente que han logrado sobrevivir el paso del tiempo.   los persas sasánidas tomaron nuevamente el control de Armenia y por  _ La Iglesia en Armenia Hacia mediados del siglo V, un edicto de 449 impusieron su religión, el mazdeísmo (zoroastrismo), que se caracterizaba por el culto al sol y al fuego. Los cristianos armenios padecieron una fuerte persecución, mientras solicitaban ayuda a sus aliados cristianos del Imperio Romano Oriental. Esta ayuda no llegó y Armenia quedó sometida al dominio persa. Hubo muchos mártires cristianos como consecuencia de esta persecución. Justo L. González narra estos tristes acontecimientos, de la siguiente manera:

Justo L. González: “Los jefes de la nación armenia se reunieron en Artach Artachat, at, y convinieron en un mensaje que debía serle enviado al rey de Persia, firmado por los obispos del país: ‘De esta fe nadie nos podrá apartar.… Haz lo que quieras.’ Cuando los armenios le enviaron enviaro n este mensaje al rey de Persia contaban con el apoyo del emperador Teodosio II y de Crisapio.… Pero poco después Teodosio murió y sus sucesores, Pulqueria y Marciano, cambiaron de política con respecto a Persia, y por tanto les retiraronlas su tropas apoyo persas a los armenios. EnArmenia, el año 451, el mismo en que se reunió el Concilio de Calcedonia, invadieron y los naturales del país se vieron obligados a defenderse por sí solos. Uno de sus principales jefes militares, Vardan ‘el valiente,’ defendió uno defendió uno de los pasos entre las montañas con sólo 1036 soldados, y

 

 

tras larga batalla todos murieron. Los persas conquistaron el país, y Armenia perdió su independencia.”   independencia.” Como reacción, los cristianos armenios rompieron sus relaciones con el cristianismo occidental, rechazaron las decisiones del Concilio de Calcedonia (451), y mantuvieron un desarrollo teológico y eclesiástico independiente. Su teología fue monofisita, es decir, contraria a los cánones establecidos  por el Concilio de Calcedonia, que definían la doctrina de la doble naturaleza de Cristo como totalment totalmentee humano y totalmente divino. El monofisismo afirmaba que la naturaleza de Cristo permanecía totalmente divina y no humana, aun cuando él había hab ía asumido un cuerpo terrenal y humano con su ciclo de nacimiento, vida y muerte. Bajo el dominio persa, los armenios continuaron su resistencia basados en su fe cristiana, hasta que el monarca persa decidió concederles algo de libertad religiosa y cierto grado de autonomía. Con este  propósito, se nombró como gobernador de Armenia al patriota Vaján (485), uno de los líderes de la resistencia nacional. A partir de entonces, y hasta las conquistas de los turcos selyúcidas, la iglesia de Armenia gozó de relativa paz. El patriarca Hovanes transfirió su sede a la nueva capital, Dvin, bajo la  protección del gobierno y allí pudo consagrarse a la reforma interior de la iglesia y del pueblo. De este modo, su nombre permanece como el más honrado, después del patriarca Sajak. A principios del siglo VI, el episcopado armenio se fue tornando crecientemente hostil al nestorianismo y a todo lo que se le pareciera. Esto ocurrió parcialmente debido a la influencia del movimiento anti-calcedónico que por entonces estaba triunfando en Constantinopla, y fundamentalmente debido a la influencia de los monofisitas de Mesopotamia y más tarde de Siria. Para P ara mediados del siglo VI, el Concilio de Calcedonia fue f ue condenado de manera explícita, ex plícita, junto con el Tomo  del Papa León I. Desde ese momento en adelante, el monofisismo se hizo una parte integral del  patrimonio de la iglesia nacional armenia. Esto se puso en evidencia cuando el emperador bizantino Mauricio, que había conquistado la parte occidental de Armenia de manos de Cosroes II (582), trató de someter a esa región nuevamente a la ortodoxia calcedónica. Apenas logró la adhesión de unos veinte obispos bajo su autoridad, pero  provocó un cisma profundo, el primero en la historia de la Iglesia Armenia (591 –  (591 – 610). 610). Los demás obispos rechazaron su intento y se agruparon en torno al catholicós de Dvin, distanciándose así de Constantinopla. iglesia armenia entrópero en logró una ola de disturbios causados porLalasfe cristiana dificultades exteriores, que laLa absorbieron totalmente, sobrevivir el paso de los siglos. ha sido desde entonces el fundamento de la identidad nacional armenia.

 _ El testimonio cristiano más allá de Armenia  Al noreste de Armenia el cristianismo llegó a Azerbaidján, donde Mesrop nuevamente creó un alfabeto que sirvió para darle forma escrita a la lengua oral y ser usada al servicio de la iglesia. Hacia el noroeste, el testimonio se esparció hacia Georgia (en el Cáucaso). La tradición indica al apóstol Andrés como el pionero en esta región. También habla de algunos pocos convertidos y mártires en la generación siguiente. No obstante, los primeros registros históricos de trabajo misionero son de comienzos del siglo IV. En este caso, la conversión de estos pueblos fue obra de una mujer, Nino (probablemente significa “monja” o “mujer cristiana”). Era una esclava cristiana, capturada capturad a en alguna incursión bárbara en territorio romano, que atrajo la atención de la familia real de Georgia por su piedad ylalas sanidades y milagros resultaron de sus aoraciones. El rey re y seseconvirtió 330) yycon él toda nación. Se solicitó un que obispo y sacerdotes Constantinopla, organizó(hacia la iglesia pronto se desarrollaron de manera autónoma. Aquí también se creó un alfabeto para los escritos sagrados y surgió una literatura y liturgia cristianas en lengua georgiana.

 

 

Rufino de Aquilea (345 – 410): 410): “El rey mandó llamar a la cautiva, y le ordenó que le enseñara de qué manera debía adorar a Cristo. Cuando ella le hubo dado tanta instrucción como era correcto para que una mujer dijera e hiciera, h iciera, él reunió a sus súbditos y les declaró sencillamente las misericordias divinas que habían sido concedidas a él y a su esposa, y si bien no estaba iniciado, declaró a su pueblo las doctrinas de Cristo. Toda la nación fue persuadida de abrazar el cristianismo, los hombres siendo convencidos por los comentarios del rey, y las mujeres por los de la reina y la cautiva. Y rápidamente con el consentimiento general de toda la nación, se  prepararon con mucho entusiasmo para construir una iglesia. Cuando las paredes externas fueron completadas, se trajeron las máquinas para levantar las columnas y fijarlas sobre sus  pedestales. Se cuenta que cuando la primera y la segunda columnas se levantaron por estos medios, hubo gran dificultad para fijar la tercera columna, ya que ni el ingenio ni la fuerza física sirvieron para nada, si bien muchos de los presentes asistieron en empujar. Cuando llegó el atardecer, la mujer cautiva se quedó sola en el lugar, y continuó allí a lo largo de la noche, intercediendo a Dios para que la erección de las columnas pudiese ser completada fácilmente, especialmente porque todo el mundo se había ido frustrado ante el fracaso; porque la columna sólo estaba levantada por la mitad, y permanecía de pie, y una punta de ella estaba tan metida en su fundamento que era imposible bajarla.… Tempranoque enles la mañana, cuando presentaron la iglesia, contemplaron un espectáculo maravilloso, pareció un sueño.seLa columna, que en el día anterior parecía inamovible, ahora aparecía erguida, y elevada por un pequeño espacio sobre su propia base. Todos los presentes fueron sacudidos con admiración, y confesaron, con pleno acuerdo, que sólo Cristo es el Dios verdadero. Mientras todos estaban mirando, la columna se deslizó lenta y espontáneamente y se ajustó como por una máquina a su base. Las otras columnas fueron erigidas con facilidad, y los íberos completaron la estructura con gran presteza.”  presteza.” 

LOS CRISTIANOS DE PARTIA   _ El lugar  Al este de Edesa y Armenia se encontraba el Imperio Parto, que se extendía desde el mar Caspio hasta el río Indo y hacia Occidente llegaba al río Éufrates. Desde 240 a. C. hasta 225 d. C., los partos (originarios del sudeste del mar Caspio) dominaron este territorio y levantaron un imperio militar. Se trataba de una federación de pueblos con poco control central. Los partos eran más bien señores militares que cobraban tributos y mantenían el orden y la seguridad. El siríaco era el idioma más generalizado, si bien también se leía y hablaba griego. Había comunidades judías y otras religiones más primitivas, pero el zoroastrismo era la religión más importante. CUADRO 11 - ZOROASTRISMO  DEFINICI N:  Religión de la Persia antigua, posiblemente relacionada con la religión védica (Vedas) de la India.

DIVINIDAD:  Ahura Mazda/Ohrmazd (“Señor sabio”). Sus atributos son comparables a los de de Varuna, el dios del cielo de losdeVedas . Demanda purezaesética y ritual, y juzga a las almas los seres humanos después la muerte. Su símbolo el fuego sagrado.

FUNDADOR: Zoroastro o Zaratustra (s. VII ó VI a. C.)

 

 

CIRCUNSTANCIA: A los treinta años tuvo una revelación r evelación de Ahura Mazda, que lo llevó a predicar contra el politeísmo. MUERTE: Según la tradición, murió llevando a cabo un sacrificio de fuego, que era la ceremonia central de la nueva fe. CREENCIAS: Zoroastro enseñó que Ahura Mazda juzgará a cada alma individual después de la muerte. Más tarde se desarrolló un complejo sistema doctrinal especulando acerca de la naturaleza interior del universo. PR CTICAS: Religión fuertemente ética. DESARROLLO: La expansión del Islam desplazó al zoroastrismo de Persia. El zoroastrismo es una religión de la antigua Persia, fundada por Zoroastro o Zaratustra (¿660 –  (¿660 –  583? a. C.), quien a los treinta años año s tuvo una revelación de Ahura Mazda, Maz da, que lo llevó a predicar con contra tra el politeísmo. Consiguió la conversión del rey de Irán Oriental, Vishtaspa, y sus seguidores recibieron la protección de Darío el Grande. Según la tradición, Zoroastro murió llevando a cabo un sacrificio de fuego, que era la ceremonia central de la nueva fe. Las ideas y prácticas del zoroastrismo guardan cierta relación con la religión de las escrituras Vedas de la India. Su divinidad era Ahura Mazda/Ohrmazd (“señor sabio”). Sus atributos son comparables a los de Varuna, el dios del cielo de los Vedas. El zoroastrismo demandaba pureza ética y ritual. Su símbolo era el fuego sagrado. Se caracterizaba por su monoteísmo y rigor ético. Zoroastro enseñaba que Ahura Mazda (o Ormuz) juzgaría a cada alma individual después de la muerte. Más tarde, se desarrolló un complejo sistema doctrinal que especulaba sobre la naturaleza interna del universo. Su teología era dualista, ya que Ahura Mazda, el creador supremo, se oponía a Angra Manyú o Ahrimán, el dios malo. Esta confrontación se describe en los escritos sagrados o Zend-Avesta, donde la victoria final le pertenece a Ormuz. Con el tiempo, el zoroastrismo recibió influencias del  politeísmo y ciertos atributos considerarse deidades separadas. separad as. Entre las pueden nuevas deidades estuvo Mitra, el diosdivinos del Solempezaron invencible.a Tanto el mitraísmo como el maniqueísmo haberse fundado sobre ideas extraídas del zoroastrismo. El zoroastrismo fue la religión oficial en Persia durante gran parte del gobierno de la dinastía Aqueménida y más tarde con los Sasánidas, a partir del siglo III. Con la llegada del critianismo, el zoroastrismo tuvo que hacer frente a un serio competidor religioso, y con el surgimiento del Islam, el zoroastrismo perdió su dominio sobre Persia, a partir del siglo VII.  No obstante, es probable que la dinastía reinante en Partia al momento de la llegada del testimonio cristiano — los los Arsácidas — hhayan ayan sido tolerantes hacia el cristianismo en los primeros siglos del movimiento. Los casos de martirios parecen haber sido más el resultado de hostilidades locales que una política del Estado. Esto permitió que el cristianismo se difundiera ampliamente por la región, de modo que hacia el final del período parto (225 d. C.) había más de veinte sedes episcopales en Mesopotamia y sobre la frontera con Persia.

 _ La llegada y la difusión del cristianismo  La primera influencia cristiana en Partia probablemente vino de Edesa. Los documentos hablan de conversiones en la región de Adiabene ya por el año 99. No obstante, se trató de grupos pequeños y

 

 

sometidos a la presión constante de grupos religiosos rivales. Uno de los primeros convertidos fue Pekhidha, el hijo de un hombre pobre, esclavo de un sacerdote zoroastrista. Pekhidha quedó impresionado por el ministerio del misionero Addai (Tadeo) y decidió hacerse cristiano. Pero sus  padres lo encerraron. Él logro escapar y siguió a Addai. E Ell documento que refiere esta historia h istoria es la Crónica de Arbela, escrito en siríaco probablemente en el siglo VI por Mishiha Zkha. Arbela era la ciudad capital del reino de Adiabene. Según la Crónica, el comienzo del testimonio cristiano en Partia fue como sigue: “Dicen que después de cinco años, Addai lo ordenó (a Pekhidha) y envió a su propio  pueblo. De manera que … el primer obispo que tuvo la tierra de Adiabene fue ordenado por el apóstol Addai mismo.” Pekhidha fue el primer obispo obispo de Arbela entre 105 –  105 – 115. 115. La difusión de la fe cristiana se encontró con la resistencia de la nobleza y de los sacerdotes del zoroastrismo, que en el 123 dieron muerte a Sansón, el primer mártir parto. La Crónica de Arbela  cuenta lo siguiente: “Sansón predicó “Sansón  predicó (en las villas vecinas a Adiabene) durante d urante dos años, y bautizó a un gran número. La fe cristiana se esparció ampliamente en su comarca. Cuando los no nobles bles y sacerdotes zoroastristas oyeron de esto, pusieron a Sansón en cadenas, lo torturaron severamente, y cortaron su cabeza.… Sansón fue el primer mártir que de nuestro país ascendió a los cielos.” Sansón había sido diácono del obispo Pekhidha y más tarde (en 121) había llegado a ser obispo de Adiabene.  No obstante, a pesar de la oposición, algunos altos oficiales del gobierno se convirtieron, como Raqbakht (140), gobernante de Adiabene. Raqbakht ayudó a la fe cristiana a esparcirse, hasta que los sacerdotes zoroastristas lo advirtieron y se complotaron para matarlo, pero él se salvó milagrosamente. La Crónica de Arbela lo llama “hombre de Dios, el Constantino de su tiempo.”  tiempo.”   Esta expansión temprana del cristianismo en Adiabene se dio mientras se iba cumpliendo también una importante misión judía en la región. El rey de Adiabene, Izates y su madre se convirtieron al  judaísmo. Fue en este contexto que la misión judeo-cristiana prosperó. Es interesante que los nombres de los obispos cristianos de Adiabene en el siglo II son todos judíos: Sansón, Isaac, Abraham, Moisés, Abel. El obispo de Arbela, Noé, recibió visitantes de Jerusalén, y fue de esta región que provino Taciano, a fines del segundo siglo. De modo que el cristianismo de Adiabene fue fuertemente influido  por las tendencias judeo-cristianas.

 _ La oposición al cristianismo  La oposición del zoroastrismo se transformó en persecución del Imperio Parto en los años 160 y 179, con una gran matanza de cristianos. En 160, refiere la Crónica, “los sacerdotes zoroastristas se levantaron contra los cristianos, despojándolos de sus bienes y torturándolos.” De la crisis de 179, dice: “Nuestros hermanos sufrieron mucho. Muchos que eran jóvenes y débiles en su fe, retrocedieron,  puesto que vieron sus casas saqueadas, sus hijos e hijas arrestados o secuestrados. Y ellos mismos fueron golpeados.” Pero el desarrollo del cristianismo del cristianismo continuó a pesar de las dificultades. Antes de terminar el período parto (224), según la Crónica de Arbela, había alrededor de veinte episcopados en la región que bordeaba al Tigris. Estas sedes estaban dentro del Imperio Parto, casi todas dentro de Mesopotamia, pero había una al sur del mar Caspio y otra en la margen sur del golfo Pérsico. Para el año 225 la Iglesia se había extendido bastante lejos. El  Libro de las leyes de las tierras  dice que había cristianos en Partia, Media y Bactria. El cristianismo de Adiabene resultó de las influencias del d el judeo-cristianismo palestinense y penetró  profundamente hacia el SiEste. En 240, cuandoqueManes la India,siglo, parece que laencontró Crónicaallí de comunidades cristianas. tenemos en cuenta a finesfuedela segundo según  Arbela, todavía había un solo obispo en Adiabene, es posible notar la expansión extraordinaria del testimonio cristiano para comienzos del siglo III.

 

 

LOS CRISTIANOS DE PERSIA  Durante el siglo III, el testimonio cristiano que había alcanzado a Adiabene, al este del río Tigris, y se esparció por toda Mesopotamia, lo quepero hoyfue es Irak y más alládonde también. El cristianismo logró  penetrar profundamente en toda esta en región, también aquí experimentó las mayores dificultades y persecución.

 _ El desarrollo del testimonio cristiano  En el año 225, las provincias persas que estaban al norte del golfo Pérsico, y que eran gobernadas  por su propio rey, se rebelaron contra los partos, quienes debilitados por sus guerras contra los romanos, cayeron vencidos. Los persas formaron un imperio que se llamó “Sasánida” y que pretendía revivir las glorias de la antigua Persia. Hicieron de Ctesifonte, sobre el río Tigris, su capital y proclamaron a Ardacher (¿226 – 241?) 241?) como primer rey de la dinastía de los Sasánidas. El zoroastrismo (o mazdeísmo) mazdeísmo ) era la religión oficial, y desarrollaba un fuerte impulso misionero bajo el estricto control de un clero  jerárquico. Al principio los cristianos cristianos no tuvieron mayores problemas, porque al ser perseguidos por el Imperio Romano, el peor enemigo de los Sasánidas, el gobierno no tenía motivos para sospechar de su lealtad. pocodel a poco, jerarquía mazdeista, la autoridad de suoSumo Sacerdote, invocar Pero la ayuda Estadolapara silenciar las vocesbajo religiosas disidentes rivales, de gruposcomenzó como losa maniqueos y los cristianos siríacos. El personaje religioso más destacado en Persia durante este período fue Manes (216 –  (216 – 277), 277), el fundador del maniqueísmo. Nació en el norte nor te de Babilonia. Su familia parece haber estado relacionada con los Arsácidas (partos). Su religión era típica del sincretismo que caracterizó car acterizó al período parto. Como resultado de una visión, su padre, Palek, se convirtió al ideal ascético y se unió a una secta seudocristiana caracterizada por sus bautismos de purificación. Manes se asoció a este grupo, pero en su  juventud en Babilonia (Seleucia-Ctesifonte) también absorbió de otras religiones (mazdeísmo,  budismo, brahmanismo, judaísmo y cristianismo siríaco). En 240, Manes recibió una revelación, según la cual tenía una misión que cumplir en continuación de la de Zoroastro, Buda y Jesús. Su primera misión lo llevó a la India (Beluchistán), donde convirtió al rey. De regreso pasó por la capital de los reyes Sasánidas, donde fue recibido por Sapor I, quien lo autorizó a predicar su mensaje. Incluso, Manes acompañó a Sapor en una campaña contra los romanos (242 – 244). 244). Pero pronto enfrentó la oposición de los sacerdotes zoroastristas y fue condenado a muerte  bajo el reinado de Bihram I, el segundo sucesor suceso r de Sapor I. CUADRO 12 - MANIQUEÍSMO  DEFINICI N:  religión dualista de Oriente, fundada por Manes o Manetos (s. III). Combinaba elementos del cristianismo, religiones babilónicas y mitraísmo.

FUNDADOR: Manes, quien se consideraba el revelador de una nueva religión. CIRCUNSTANCIAS: Manes decía haber recibido una un a revelación, según la cual tenía una misión que cumplir en continuación de la de Zoroastro, Buda y Jesús. MUERTE: debido a la oposición de los sacerdotes zoroastristas (magos), fue condenado a muerte en 277 bajo el rey Bihram I.

 

 

CREENCIAS:  la base de su sistema es un gnosticismo dualista, inspirado por el gnosticismo judeo-cristiano y el zoroastrismo iraní. El maniqueísmo se caracterizó por su sincretismo religioso: Manes se consideraba heredero de todas las religiones, pero estuvo muy influido por el cristianismo siríaco. Cosmología dualista parecida a la de Bardaisanes, que condenaba el de mundo Jesús y el Paracleto papel importante en es su gnosis. La pasión Jesúsmaterial. no tiene importancia históricajuegan sino ununcarácter místico, pero el corazón de su soteriología. No eran cristianos, pero per o fueron un desarrollo del cristianismo siríaco.

PRÁCTICAS: las iglesias maniqueas se dividían entre los que eran perfectos, los ascetas (miembros verdaderos), y los que no eran perfectos, los oyentes o catecúmenos. Practicaban el encratismo moral, que prohibía el matrimonio y el uso de ciertas comidas (carne, vino). El monasticismo maniqueo se desarrolló de manera paralela par alela al monasticismo cristiano. DESARROLLO:  se esparcieron ampliamente llegando hasta China y África del norte. Continuaron hasta bien entrada la Edad Media. Manes: “Sabiduría y acciones han sido siempre traídas de tiempo en tiempo a a humanidad por los mensajeros de Dios. Así, en un tiempo han sido traídas a la India por el mensajero llamado Buda, en otro tiempo a Persia por Zaratustra, y en otro al Oeste por Jesús. Por consiguiente, esta revelación, esta profecía en este último tiempo, ha descendido a través de mí, Manes, mensajero del Dios de la verdad a Babilonia.”  Babilonia.”   Para mediados del siglo III, en ocasión de la victoria de Sapor contra el emperador romano Valeriano, cristianos de Siria fueron deportados a Elam, y ayudaron a esparcir el evangelio hacia el Este, hasta el corazón mismo del Imperio Persa. Pero debido a las dificultades mencionadas, estas comunidades cristianas siríacas estuvieron mayormente concentradas en torno a la sede episcopal de Seleucia-Ctesifón (entre Babilonia y Bagdad), y demasiado inclinadas a seguir a las iglesias de Occidente en materia doctrinal y espiritual.  _ La oposición a los cristianos   En el año 312, la situación cambió debido a la conversión de Constantino y la aceptación del cristianismo por parte de Roma. Los Sasánidas no sólo rechazaron a los cristianos por oponerse a la religión oficial (mazdeísmo), sino también porque pertenecían a la religión que favorecía el enemigo romano. Para colmo de males, en 315, Constantino envió una carta al emperador persa (Sapor II el Grande, 309 – 3379), 79), en la que alababa la nueva fe que decía profesar. Entre otras cosas, le dice que el Dios de los cristianos fue quien lo ayudó a destronar a los tiranos y a traer paz a Roma. Agregaba que algunos de sus predecesores persiguieron a los cristianos y como consecuencia cayeron por la justicia divina, como Valeriano que había muerto prisionero de los persas. Con gran entusiasmo, Constantino le decía a Sapor: “Imagina mi gozo cuando oí que los mejores distritos de Persia, están llenos de aquellos hombres a favor de quienes estoy hablando, los cristianos. Por eso, te ruego que tanto tú como ellos prosperar.…de Porque tu poder es grande, te pido que los protejas.” protejas .” De más está decir cuáles fueronpuedan las consecuencias tremendos comentarios.  No obstante, a pesar de esto, la persecución no vino de inmediato. Pero en 337, Constantino “habiendo oído de una insurrección de algunos bárbaros en el Este, observó que la conquista la conquista de este

 

 

enemigo todavía le estaba reservada, y resolvió hacer una expedición contra los persas. Consiguientemente procedió de inmediato a poner a sus fuerzas en movimiento, al tiempo que comunicó su plan marcha a los obispos que en ese momento estaban en su corte, a algunos de los cuales él juzgó correcto llevar consigo comoalegremente compañeros, como coadjutores en renunciando el servicio dea Dios. Ellos, por otro lado, declararon su ydisposición de seguirnecesarios su proyecto, todo deseo de abandonarlo, e involucrándose en batalla con él y para él por medio de oraciones a Dios a su favor. Lleno de gozo por esta respuesta a su pedido, él les presentó su proyectado plan de marcha; después de lo cual ordenó que una tienda de gran esplendor, representando en su forma la figura de una iglesia fuese preparada para su propio uso en la guerra que venía. En esto él intentaba unirse con los obispos en ofrecer oraciones a Dios de quien procede toda victoria.” Constantino murió antes de que la campaña militar comenzara, pero el daño ya estaba hecho. En el año 339 comenzó una gran  persecución en el Imperio Persa.

 _ La gran persecución de 339  Sapor II sistemáticamente procuró desmantelar la estructura de la Iglesia de la minoría cristiana, y lo hizo concentrando sus ataques especialmente sobre los miembros del clero y aquellos hombres y mujeres que habían voto de virginidad. P rimero, Primero, a los ordenó cristianos impuestos impuest osy dobles. Cuando estotomado fracasóelen hacerles abandonar su fe, se el obligó emperador quea pagar los sacerdotes ministros de Dios fuesen pasados por la espada. Los edificios eclesiásticos fueron destruidos, la platería del altar fue llevada al tesoro, y el obispo de Ctesifonte fue arrestado como traidor al Imperio y su religión. De esta manera los sacerdotes zoroastristas, con la ayuda de los judíos, destruyeron rápidamente las casas de oración.

Sozómenos:  “Cuando, con el tiempo, los cristianos crecieron en número, y comenzaron a formar iglesias, y nombraron sacerdotes y diáconos, los Magos [sacerdotes zoroastristas], quienes como una tribu sacerdotal habían actuado desde el principio en generaciones sucesivas como los guardianes de la religión persa, se encolerizaron profundamente contra ellos. Los  judíos, quienes por envidia están de alguna manera opuestos naturalmente a la religión cristiana, cristiana, también se ofendieron del mismo modo. En consecuencia, trajeron acusaciones delante de Sapor, el soberano reinante, contra ySimeón, quedeentonces de romanos, Seleucia yy Ctesifonte, ciudades reales de Persia, lo acusaron ser amigoeradelarzobispo César de los de comunicarle las cuestiones de los persas. Sapor creyó estas acusaciones, y al principio, cargó a los cristianos con impuestos excesivos, si bien él sabía que la mayoría de ellos había abrazado voluntariamente la pobreza. Le encargó el cobro a hombres crueles, esperando que, por la carencia de lo necesario y la atrocidad de los exactores, ellos podían ser compelidos a abjurar su religión; porque éste era su propósito. Sin embargo, más tarde ordenó que los sacerdotes y conductores de la adoración de Dios fuesen pasados por espada. Las iglesias fueron demolidas, sus vasos fueron depositados en el tesoro, y Simeón fue arrestado como traidor al reino y la religión de los persas. Así los Magos, con la cooperación de los judíos, rápidamente destruyeron las casas de oración.”  oración.”  Esto fue sólo el comienzo. Tres obispos sucesivos de Seleucia-Ctesifonte sufrieron martirio, y como la sede episcopal permaneció porllegaron casi los acuarenta año s que persecución (348 – 388). 3resultado 88). Sozómenos dice que los mártires vacante conocidos 16.000,años pero queduró hubolauna multitud incontable cuyos nombres no se conocen. Es posible que esta persecución haya sobrepasado los sufrimientos de la Iglesia en el Imperio Romano, durante el siglo anterior. La peor persecución en el

 

 

Imperio Romano fue la de Diocleciano, que no produjo más de 3.000 víctimas fatales. Pero en Persia no hubo un Constantino que cambiara la situación.

Sozómenos: “Por mi parte, pienso que he dicho lo dicho  lo suficiente de él [el obispo Milles] y de los demás mártires que sufrieron en Persia durante el reinado de Sapor; porque sería difícil relatar en detalle cada circunstancia respecto a ellos, tales como sus nombres, su país, el modo de completar su martirio, y los tipos de tortura a los cuales fueron sometidos; porque son innumerables, dado que tales métodos son celosamente llevados a cabo por los persas, incluso al extremo de la crueldad. Brevemente diré que el número de hombres y mujeres cuyos nombres han sido registrados, y que fueron martirizados en este período, ha sido computado en dieciséis mil; mientras que la multitud fuera de estos está más allá de todo cálculo.”  cálculo.”  

 _ La supervivencia del testimonio  A pesar de verse diezmado cruelmente, el cristianismo siríaco en Persia logró sobrevivir con la ayuda de otras comunidades cristianas de lengua siríaca en el norte de Mesopotamia. En este proceso, la Escuela de los Persas, un seminario s eminario instalado primero en Nisibis y más tarde en Edesa Edes a (363) jugó un  papel muy importante. En esta escuela cumplió su ministerio docente Efraín (306 – 373). 373). La escuela fue una combinación de un seminario y una universidad cristianos, que entrenó al liderazgo de las iglesias de lengua siríaca y promovió su cultura. Cuando la persecución terminó, el obispo Maruta dirigió la reconstrucción de la Iglesia Persa. Maruta fue miembro de varias embajadas romanas a la corte de Yezdegerd I (399 – 420). 420). Fue bienvenido  por el monarca, quien se mostró tolerante hacia sus súbditos cristianos. Maruta logró reunir a cuarenta obispos en un sínodo en Seleucia (410), que adoptó las decisiones del Concilio de Nicea y fortaleció los lazos con la Iglesia de Occidente. También restableció el orden y la jerarquía en toda la Iglesia Persa, con un obispo principal o metropolitano en Seleucia-Ctesifonte (que poco más tarde fue fu e llamado Catholikós).

 _ Otros períodos de persecución en Persia  Hubo otros períodos de persecución en Persia, especialmente entre los años 420 –  420 – 422, 422, bajo el emperador Bihram V. Todo esto hizo que el cristianismo persa fuese la religión de una minoría. Pero esta minoría sobrevivió hasta llegar a ser una comunidad reconocida, que si bien no contó con una tolerancia completa, por lo menos pudo sobrevivir. Los cristianos pudieron establecer un acuerdo efectivo con las autoridades del Imperio Persa, al independizarse de los obispados de la Iglesia en el Imperio Romano y “nacionalizarse” al tener sus propios obispos (424). Así se constituyó la “Iglesia del Este,” según se llamaba, con el siríaco como su idioma eclesiástico y el de sus Escrituras. Esta Iglesia contó con su propio patriarca (catholikós) desde el 410, con sede en la ciudad de Ctesifonte, y desarrolló una teología de carácter nestoriano (486), con una cristología del tipo de la escuela de Antioquía, es decir, ponía énfasis sobre la humanidad de Cristo. En 484, el catholikós  Barsumas  permitió a los obispos casarse, lo cual fue una concesión con cesión a lo que era una costumbre costumbr e nacional. Más hacia Occidente, en tanto, había tres “Grandes Obispos” en competencia co mpetencia por ver quién era el  primero y el de mayor influencia: (1) el obispo de Alejandría, que tenía tení a autoridad sobre las iglesias en Egipto, Libia y Cirenaica; (2) el obispo de Roma, que no tenía un área de autoridad declarada, pero que era el único Gran Obispo desde Italia hacia Occidente; (3) el obispo de Antioquía, que tampoco tenía un área de autoridad establecida, pero que tenía influencia sobre los territorios del Mediterráneo oriental. MAPA 5 - LAS GRANDES SEDES EPISCOPALES 

 

 

 _ La y el V, nestorianismo YaIglesia entrandoPersa en el siglo había en el Este  dos corrientes de orientación teológica diferente. Por un lado, estaba la jerarquía establecida en la sede de Seleucia-Ctesifonte (en territorio Persa) y la escuela de Edesa (en territorio romano). Al igual que Antioquía, la sede de Edesa se vio desgarrada con las controversias teológicas que se produjeron pr odujeron en la primera mitad del siglo V. Desde 437 a 457, la escu escuela ela estuvo bajo la dirección de Narsai (m. 502), y subscribió una cristología anti-nicena o nestoriana. No obstante, la reacción calcedónica obligó al traslado de la escuela a territorio persa, en Nisibis (457). La escuela en Edesa finalmente fue cerrada por el emperador Zenón el Isaurio, en 489. La escuela en Nisibis tuvo una gran influencia entre los cristianos persas y contribuyó al triunfo en la región de la cristología nestoriana, que finalmente fue aceptada por un sínodo general de las iglesias del Imperio Persa, celebrado en Seleucia en 486. Estas iglesias tuvieron que padecer muchas  persecuciones a lo largo del siglo V (420, 422, 445 – 447), 447), debido a la oposición del mazdeísmo. Sólo gozaron de cierta tolerancia durante los cortos períodos en los que la evolución de la política exterior obligó al rey persa a reconciliarse con el Imperio Romano Oriental. Pero cuando estas relaciones se deterioraban, como en tiempos de Cosroes I y Justiniano (540 –  (540 – 545), 545), o de Cosroes II y Heraclio (602 en adelante), el número de mártires se multiplicaba. La Iglesia Persa o del Este sufrió también debido a los problemas internos, en razón de problemas sucesorios en el liderazgo, cismas y anarquía. Afortunadamente, gozó de un período de vigor bajo el liderazgo de un gran Catholikós reformador, Mar Aba (540 – 552), 552), quien venció las dificultades y logró restituir el orden y la disciplina. A pesar de los muchos obstáculos, el cristianismo tuvo éxito no sólo en mantener su fortaleza sino en hacer progresos dentro de la sociedad sasánida, al punto de lograr algunos convertidos en la clase gobernante, e incluso en la familia real y el sacerdocio mazdeísta. La labor misionera nestoriana avanzó significativamente en las montañas del Kurdistán, donde todavía hoy se encuentran comunidades nestorianas (los cristianos asirios). asirios ). Los nestorianos también se extendieron en dirección a Asia Central Centr al y la India (la Iglesia Siríaca en la costa Malabar). No obstante, con el correr del tiempo, la Iglesia Nestoriana se fue aislando del resto de la cristiandad y se desarrolló a su propio ritmo. Tuvieron que enfrentar la competencia del proselitismo de los monofisitas, desde Filomeno de Mabbug a Jacobo Baradeo en territorio persa, y que terminaron por organizarse como una Iglesia separada con su propia red de obispos y monasterios. No obstante, le cupo a esta Iglesia ser la  protagonista de la primera expansión del cristianismo hacia el Lejano Oriente, cruzando cruz ando toda el Asia Central hasta llegar a China (635).

EL CRISTIANISMO EN ETIOPÍA   _ Ubicación geográfica e histórica  Sobre las márgenes del mar Rojo hay dos países que tuvieron una participación importante en la historia del cristianismo, no sólo por lo que ocurrió en ellos, sino también porque fueron escalones para par a un mayor avance de la fe cristiana. Estos países son Etiopía y Arabia. MAPA 6 - ETIOPÍA, ARABIA, PERSIA E INDIA 

 

 

Etiopía es el país cristiano más antiguo no sólo de África sino de todo el mundo, que lo ha sido en forma continuada. En Hechos, Lucas menciona la presencia de africanos en Pentecostés (Hch. 2:10), y registra el bautismo de un africano como el primero practicado por un gentil (Hch. 8:26 –  8:26 – 39). 39). Este etíope regresó a su patria portando las buenas nuevas de Jesucristo, y ya los Padres de la Iglesia lo consideraron como el primer misionero en África, específicamente en Meroe, en lo que hoy es Sudán (a 2.700 kms. de Jerusalén), que era el territorio gobernado por la reina Candace.

 _ El desarrollo del cristianismo en Etiopía  La historia del cristianismo en Etiopía es retomada por Rufino (c. 345 –  345 – 410), 410), un monje italiano que escribió una Historia eclesiástica (c. 400). En ella cuenta que la fe cristiana llegó a Etiopía por medio de Frumencio (c. 300 – 383), 383), un joven cristiano de Tiro, que después de haber sido tomado prisionero  por los etíopes, logró ocupar un alto cargo en el gobierno de su país (un caso par parecido ecido al de José en el Antiguo Testamento). Meropio, filósofo cristiano de Tiro, decidió visitar la India y llevó con él a sus dos sobrinos y discípulos (Frumencio y su hermano Edesio). En el viaje de regreso, la embarcación que los transportaba hizo puerto en Adulis, en la costa etíope del mar Rojo, para aprovisionarse de comida y agua. Allí fueron atacados por los locales. Frumencio y Edesio fueron hechos prisioneros y llevados al rey etíope a la capital (Axum), donde en razón de su educación sirvieron como secretario y copero respectivamente. Cuando el rey murió, su hijo era todavía niño y la reina pidió a los dos hermanos que compartieran el gobierno con ella como regentes y especialmente que educaran a su s u hijo como futuro rey. El relato nos dice que los dos hermanos aprovecharon su posición de poder e influencia para esparcir la fe cristiana. Entre otras cosas, encontraron cristianos entre los mercaderes romanos que visitaban el país y los ayudaron a construir lugares de adoración. Cuando el príncipe creció, Edesio decidió regresar a su familia en Tiro, pero Frumencio fue a Alejandría y le informó al obispo Atanasio “lo que el Señor había hecho, y le pidió que consagrara un obispo para los muchos cristianos congregados y las iglesias construidas en esta tierra extranjera. Y Atanasio, después de una reflexión cuidadosa, dijo, ‘¿Y quién más adecuado que tú mismo?’  mismo?’ ” Finalmente, Frumencio fue consagrado obispo por Atanasio de Alejandría (296 –  (296 – 372), 372), alrededor del año 330. Aquí también el rey se convirtió y el cristianismo encontró terreno propicio para su difusión. Como obispo, Frumencio estableció en Etiopía cristianismotalsólidamente niceno. Más tarde, el emperador Constancio imponerun el arrianismo, como lo estaba haciendo con éxito en el Imperio Romano. trató en vano de

 _ Evidencias de cristianismo en Etiopía  Ezana, el rey de Etiopía, dejó inscripciones en Axum, que registran los triunfos de su reino (325 –  (325 –  350). Para los primeros años da gracias a los dioses del país. Luego dice: “Gracias sean dadas al Señor de los cielos, quien tanto en el cielo como en la tierra es más poderoso que todos.” Evidentemente, en algún momento de su vida adulta este monarca se convirtió al cristianismo. Hay una moneda con la efigie del rey que lo presenta rodeado de cuatro cruces, típico símbolo cristiano. Ezana fue muy  probablemente el rey a quien Frumencio sirvió como regente. Esto significa que Etiopía se hizo cristiana antes del año 350. La capital actual de Etiopía es Addis-Adeba, pero Axum continúa siendo la capital religiosa. Salvo un corto período en el siglo X, Etiopía es el país de presencia cristiana continuada más antiguo del mundo. Es interesante que aquí también el cristianismo al desarrollo nacional mediante notar la creación de una lengua escrita. En lacontribuyó primera mitad del siglodeIV,una la cultura lengua nacional, el geez, adoptó una forma de escritura derivada de un alfabeto del sur de Arabia. No obstante, fue después de varias generaciones que se fueron produciendo obras de traducción y edición, que

 

 

hicieron que la Iglesia Etíope pudiera contar con su propia versión de las Escrituras (segunda mitad del siglo V) y de la liturgia y literatura, como también ricas expresiones de arte cristiano. El cristianismo en Etiopía alcanzó su período más glorioso durante los siglos V y VI, cuando la civilización etíope echó raíces, se expandió y floreció con un marcado tinte cristiano. abuna, el Etíope dependiódejó estrechamente de Egipto. Recién en XX (1951)enelAlejandría. líderLadeIglesia la Iglesia de Abisinia, de ser un dignatario nombrado porellasiglo sede patriarcal  No es extraño, pues, que la Iglesia Etíope se haya h aya inclinado a favor del monofisismo. Esta corriente cor riente teológica fue introducida por los “Nueve Santos,” un grupo de monjes siríacos monofisitas que se se refugiaron en Etiopía escapando de la persecución católica a fines del siglo V.

EL CRISTIANISMO EN ARABIA E INDIA   _ El cristianismo en Arabia  El cristianismo llegó temprano a Arabia, introduciéndose desde el norte por la frontera con el Imperio Persa y el Imperio Romano; y desde el sur por el golfo Pérsico y el mar Rojo. Arabia era un  país sin un gobierno central. Las tribus eran nóma nómadas das e independientes. El cristianismo ssee desarrolló de igual manera, ya que no hubo un movimiento de escala nacional. Hacia el año 370 encontramos los  primeros registros de conversiones cerca de la frontera romana entre los nómadas del desierto. Pero es evidente que ya había cristianos en Arabia desde algún tiempo antes. La reputación de algunos monjes del desierto llevó a la conversión de una que otra tribu tr ibu en territorio árabe. Los sarracenos, por ejemplo, se convirtieron por los esfuerzos de la reina María y su obispo, el monje Moisés, para quien se creó una sede en la península de Sinaí, en 374. No obstante, estas conversiones eran pocas y no dan cuenta del surgimiento de verdaderas iglesias nacionales. La difusión del cristianismo en territorio propiamente árabe fue todavía más esporádica. Es posible que mercaderes cristianos de origen romano en sus visitas a puertos árabes sobre el mar Rojo hayan logrado algunos convertidos. Hacia el 350, el emperador Constancio envió una embajada a la corte del rey de los Himyaritas en lo que ahora es Yemén, para pedirle al rey que permitiera las misiones cristianas. Pero parece que no hubo resultados muy positivos. Conocemos el nombre de algunos obispos cristianos árabes o que sirvieron en territorio árabe. En el Sínodo en 364, en laárabe lista de obisposdepresentes, encontramos el nombre obispo dede losAntioquía, árabes”. Otro obispo fuelosTeófilo la India, quien fue el obispo quede se“Teotino, presentó como embajador del emperador Constancio al rey del Yemén y lo instó a aceptar la fe cristiana, alrededor de 356. Este Teófilo es un personaje curioso. Nació en alguna isla distante en el mar Rojo o el océano Índico. A edad temprana había sido enviado como rehén a la corte de Constancio, fue educado en el Imperio Romano, se convirtió al cristianismo, fue ordenado como diácono por Eusebio de Nicomedia y más tarde como obispo por miembros de su partido. Abrazó la forma más virulenta de arrianismo, y esta secta lo honró admirándolo como un gran obrador de milagros. En ocasión de su misión al sur de Arabia, probablemente visitó la isla en la que había nacido y otras regiones alrededor del océano Índico, donde encontró a cristianos que practicaban su religión más o menos de manera estricta. En Yemén, la comunidad judía se opuso firmemente a los intentos proselitistas de Teófilo, pero éste prevaleció y el rey puso de manifiesto la sinceridad de su conversión al mandar construir tres templos. Los cristianos del Yemen, no obstante, sufrieron más tarde y(comienzos del siglo VI) una severa persecución inspirada por los judíos. Muchos hombres, mujeres niños padecieron martirio en 523 bajo Masruq, rey de Yemén, hijo de una mujer judía y judío él mismo. La persecución duró hasta el año 525, cuando el rey judío fue vencido por ejércitos cristianos provenientes de Etiopía, que

 

 

establecieron un protectorado etíope. No obstante, las vicisitudes de los cristianos continuaron, hasta que finalmente el Yemén fue conquistado por los persas en 570. Finalmente, gracias al protectorado etíope, el testimonio cristiano creció hasta que contó con una importante minoría en la población, especialmente en la región de Najrán. Con el surgimiento del Islam, el cristianismo monofisita del sur de Arabia virtualmente desapareció, o por lo menos perdió fuerzas. Este tipo de cristianismo es el que probablemente se ve reflejado en el Corán, las escrituras sagradas de los musulmanes.

 _ El cristianismo en India  ¿Cuándo llegó el cristianismo a la India? No hay documentación suficiente para dar una respuesta definitiva, y los datos que se poseen son fragmentarios. Sin embargo, la Iglesia Ortodoxa Siria, que todavía sobrevive, es testimonio de la presencia del cristianismo desde tiempos remotos en la India. El libro Los hechos de Tomás, escrito probablemente en Edesa alrededor del año 200, cuenta que los doce apóstoles echaron suertes para decidir a qué país iría cada uno, y que a Tomás le tocó la India. Viajó  por mar y llegó a la corte de un rey llamado Gundaforo, a quien bautizó. Finalmente, murió alanceado en otro lugar de la India, y enterrado en Mylapore, al sudoeste de Madrás. Madrás . La historia, si bien está llena de fantasía, puede tener elementos de verdad, y es muy probable que el primer cristiano en llegar a la India haya sido el apóstol Tomás. Al menos, la Iglesia Ortodoxa Siria lo considera su fundador. La tradición menciona también a Bartolomé en relación con la evangelización de la India, si bien es  probable que este apóstol haya ido a Arabia y fue desde allí que el testimonio cristiano se extendió a la India. Otro misionero a la India fue Panteno de Alejandría (c. 180). 18 0). Según Eusebio, Panteno se hizo hiz o cargo de una misión en la India, donde encontró un Evangelio de Mateo  escrito en caracteres hebreos (arameo). Eusebio describe a Panteno como filósofo y misionero. Nacido en Sicilia y convertido del  paganismo, Panteno P anteno ffinalmente inalmente se estableció en Alejandría, dond dondee enseñó enseñ ó y llegó a ser el líder de la escuela catequética en aquella ciudad de Egipto. Diversos documentos dan testimonio de la presencia de cristianos en la India durante el siglo IV. Se menciona a David, obispo de Basora (en Mesopotamia), que “fue a la India dond e evangelizó a mucha gente” (c. 300); a Juan el Persa, que representó a las iglesias de toda Persia y “en la gran India” en el Concilio de Nicea (325); a Tomás el Mercader, que llegó a la costa Malabar M alabar al frente de un gru grupo po de cristianos en el arqueológicos año 345, posiblemente de la persecución  – 379). 379). Es inmigrantes posible, según testimonios que el reyhuyendo de Malabar, Pallivanavar,ensePersia haya (339 convertido  por este tiempo (350). Hacia el año 547, un ex-mercader alejandrino que se hizo monje escribió un libro titulado  La topografía cristiana. Su propósito era demostrar que la tierra era plana y no esférica, como algunos sostenían. Había viajado por todo el mundo (especialmente el océano Índico entre 520 –  520 – 525) 525) y estaba convencido de lo que creía. Si bien su propósito principal estaba errado, su obra es un importante documento para la historia del cristianismo. Refiriéndose a Mateo 24:14, escribe: “El evangelio ha sido  predicado en todo el mundo. Declaro esto como un hecho, en base b ase a lo que he visto y oído en muchos lugares.” Luego menciona los lugares en los que se podía encontrar a cristianos, a lo largo de las rutas comerciales de África y Asia: “En Ceylán (hoy Sri Lanka) hay una iglesia, con clero, y una congregación de creyentes, pero no sé si más allá también hay.… Tal es el caso también de la tierra llamada Male (Malabar o Kerala, en el sur de la India), donde crece la pimienta, y de Kalliana (K (Kalyan, alyan, cerca de Mumbai), un obispo elegido desde Persia.” Luego sigue mencionando a Socotra, una  isla una isla en el mar de Arabia,con donde “hay clero persa y una multitud de cristianos;” toda la tierra de Persia, con “innumerables iglesias, grandes comunidades, y también sus propios mártires; Etiopía y Axum; el Yemén y Arabia.” De esta manera, Cosmas Indicopleustes Indicopleustes en su descripción ofrece detalles sobre la

 

 

situación del cristianismo en la India, pero presenta también un interesante resumen del progreso del cristianismo en todo el Este, fuera del Imperio Romano. Su testimonio es el más antiguo que se tiene de la presencia de cristianos en el subcontinente de la India en sus días. MAPA 7 - LA EXPANSIÓN DEL CRISTIANISMO A FINES DEL SIGLO VI 

LOS BÁRBAROS DEL NORTE DE EUROPA  De Oriente volvemos a Occidente para considerar el desarrollo del cristianismo en Europa, fuera de las fronteras del Imperio Romano. Sin embargo, para entender los procesos históricos que ocurrieron en el norte de Europa es necesario que comencemos refiriéndonos a movimientos de pueblos que se  produjeron en el centro de Asia.

 _ Los hunos de Asia Central  En Asia Central vivía un pueblo de raza mongola, conocido como los hunos. Vivían al norte del desierto de Gobi y de los Himalayas, barreras naturales que defendían a China e India; y de la Gran Muralla china, barrera artificial de 2200 kilómetros de longitud. Los hunos no conocían la agricultura, no tenían ciudades, ni villas, ni casas, sino que eran nómadas que vivían en un lugar hasta agotarlo y luego se movían a otro sitio con sus familias, tiendas y animales. Eran guerreros feroces y tenían una gran movilidad debido a sus cabalgaduras resistentes y veloces. A medida que crecieron, sus desplazamientos se fueron haciendo más frecuentes y rápidos. Entonces se dedicaron al saqueo, al crimen y la destrucción. Eran temidos en Asia y en Europa. A pesar del desierto de Gobi y la Gran Muralla, algunas tribus invadieron China e India. En el año 200 terminaron con la dinastía Han de la China y dieron comienzo a 400 años de una suerte de edad media china. En 480 cruzaron los Himalayas y destruyeron el Imperio Gupta, que desde el 320 había formado una gran civilización en el norte y centro de la India. Otros grupos se dirigieron hacia el oeste  presionando sobre las tribus bárbaras del norte de Europa, que comenzaron a entrar al IImperio mperio Romano atraídas por su clima más cálido, mejores condiciones de vida y, sobre todo, la seguridad que ofrecían sus fronteras.

 _ Los godos de Europa del norte  Desde el siglo II, los gobernantes romanos reconocieron el peligro de las tribus germanas al norte del río Danubio, de las que los godos eran la mayoría. Estos pueblos godos comenzaron a irrumpir  pacíficamente en las fronteras romanas, estableciéndose con permiso imperial como colonos o mercenarios en el ejército de frontera. Algunos llegaron a ser oficiales de los ejércitos romanos, al  punto que en 235 un godo llegó a ser general y más tarde fue aclamado como imperator  por  por el ejército (emperador Germánico, 251). Esto llegó a ser muy peligroso ya que las tribus godas presionaban las fronteras cada vez más y llenaban de mercenarios el ejército que se suponía cuidaba esas fronteras. Los godos estaban establecidos en las llanuras alrededor del mar Negro, entre el Danubio y el Dnieper. En algún momento, durante el siglo III, el testimonio cristiano comenzó a esparcirse entre ellos posiblemente desde Crimea. especialmente En el siglo IV,a los sobre las tribus al norte del Danubio (en Rumania y Hungría), los hunos godos,presionaron y los forzaron a ingresar masivamente al Imperio Romano. En 376, los godos pidieron permiso para ingresar al Imperio. Se instalaron en los Balcanes, cerca de Constantinopla. En 378, hubo un levantamiento de los refugiados godos, que

 

 

terminó en la derrota del ejército imperial del emperador Valente, en la batalla de Andrinópolis. El sucesor, Teodosio el Grande, logró someterlos y los hizo sus aliados a cambio de un tributo anual. Los visigodos permanecieron algunos años custodiando las fronteras del Imperio, pero a la muerte de Teodosio (395) se elalzaron en armas y luego de asesinar asolar a aGrecia y Macedonia, se dirigieron hacia Italia. En el año 408, emperador Honorio mandó Estilicón, el responsable por la defensa de Roma. Entonces el general visigodo Alarico (376 –  (376 – 410), 410), un general godo al servicio del Imperio y que se hallaba en Iliria, reanudó sus ataques contra el Imperio. Finalmente, en 410, Alarico puso sitio a Roma y la saqueó. Para muchos cristianos, la caída de Roma significó el fin del mundo. Jerónimo (342 –  (342 – 420), 420), el autor de la Versión Vulgata de la Biblia (versión latina), desde desd e su lugar de retiro en un mon monasterio asterio en Belén, refiere los acontecimientos y su desarrollo con gran dramatismo. En una carta a Heliodoro, escrita en 396, Jerónimo expresa su espanto frente a la situación en todo el mundo.

Jerónimo: “Durante veinte años años y más, la sangre de los romanos ha sido derramada diariamente entre Constantinopla y los Alpes Julianos.… ¡Cuántas matronas y vírgenes de Dios, damas virtuosas y nobles, han sido sometidas para entretenimiento de estos brutos! Obispos han sido tomados cautivos, sacerdoteslosy caballos aquellos han en las menores asesinados. iglesias han sido demolidas, sidoórdenes guardados junto ahan los sido altares de Cristo,Las las reliquias de los mártires han sido desenterradas. El llanto y el temor abundan por todas partes y la muerte aparece en innumerables formas y maneras. El mundo romano está cayendo: no obstante, mantenemos en alto nuestras cabezas en lugar de inclinarlas.… El Este, es verdad,  parecía estar protegido de todos estos males.… Pero, he h e aquí, en el año que acaba de pasar los lobos (ya no de Arabia sino de todo el norte) se han soltado sobre nosotros desde lo más intrincado del Cáucaso y en corto tiempo han derrotado a estas grandes provincias.… ¡Qué enorme cantidad de monasterios han capturado! ¡Cuántos ríos han hecho correr rojos en sangre!… Son nuestros pecados los que hacen fuertes a los bárbaros, son nuestros vicios los que vencen a los soldaros de Roma.… ¡Oh, si tan solo pudiésemos subirnos a una torre de vigía lo suficientemente alta que de ella pudiésemos contemplar toda la tierra esparcida a nuestros  pies, entonces les mostraría a un mundo en ruinas.” ruinas .”   Poco más tarde, la situación se había agravado y Jerónimo, como si estuviese actuando de reportero en el frente de guerra, informa detalladamente de la situación. En una carta escrita a Ageruchia, una viuda noble de Galia, alrededor de 409, dice: “Sí, el Anticristo está cerca.… Ahora hablaré unas pocas  palabras de nuestras miserias mise rias presentes.… Tribus ssalvajes alvajes en números incon incontables tables han invadido invadi do todas las partes de Galia. Todo el país entre los Alpes y los Pirineos, entre el Rin y el Océano [Atlántico], ha quedado devastado por las hordas de [los [ los bárbaros].… Y los que la espada perdona por fuera, f uera, el hambre los devora por dentro. No puedo hablar sin lágrimas …” Apenas un poco tiempo después, Jerónimo  parece estar redactando los titulares de un diario, cuando en una carta ca rta a Principia (412), comenta: “Un rumor terrible del Oeste. Roma ha sido sitiada y sus ciudadanos se han visto forzados a comprar sus vidas con oro. Luego, así despojados, ellos han sido sitiados nuevamente de modo que perdieron no solamente su sustento sino sus vidas. Mi voz se pega en mi garganta; y, al dictar [esta carta], el llanto ahoga mi palabra. La ciudad que había tomado a todo el mundo ahora estaba cautiva.”  cautiva.”  La caída de Roma el presagio la ainminente del Imperio Romano cruzaron occidental. terminar el siglo V, losfuevisigodos se de iban establecercaída en España, los vándalos al Antes norte de de África, los burgundios ocuparon la región de Francia a la que dieron su nombre, mientras que las regiones al norte del Imperio fueron dominadas por los francos y los anglo-sajones, tribus éstas que

 

 

todavía no habían tenido contacto con el cristianismo. La Edad Oscura se estaba cerniendo sobre Occidente y muchos se habrán sentido tan apesadumbrados como Jerónimo. La caída de Roma fue una tragedia, que despertó varios interrogantes: (1) ¿qué hizo la Iglesia en el Imperio a lossalvajes bárbarosdeque estaban por destruir ese Imperio? (2) ¿qué hizoenseñó la Iglesia del Este Romano respecto respecto de los más todos los pueblos bárbaros, los hunos? (3) ¿qué la Iglesia acerca de la caída de Roma y sobre cualquier crisis similar que pudiera ser considerada como “el fin del mundo”?  mundo”? 

 _ La Iglesia del Oeste y los godos  Si bien la caída de Roma fue una verdadera tragedia, no perjudicó mayormente la situación de la Iglesia cristiana romana. En buena medida, el respeto que los bárbaros invasores tuvieron por la Iglesia latina, su clero, sus templos e instituciones se debió al hecho de que muchos de ellos ya conocían la fe cristiana. El cristianismo había llegado a las tribus germanas no por medio de un plan elaborado para ganarlos, sino a través de prisioneros cristianos. En 264, godos de Rumania cruzaron el mar Negro, atacaron Asia Menor, y tomaron prisioneros griegos cristianos. Uno de ellos fue el abuelo de Ulfilas (311 – 383), 383), quien habría de llegar a ser el apóstol a los godos. Antes del gracias año 400,a la el cristianismo alcanzadodea Ulfilas. los pueblos que vivían hijo al norte del río Danubio, predicación yhabía el ministerio Estegermanos singular misionero, de una mujer goda, pero con educación griega y latina, conocía muy bien las costumbres de los pueblos  bárbaros. Había llegado a cumplir funciones eclesiásticas como lector y estaba bien comprometido con el ministerio, cuando una embajada enviada al Imperio Romano le dio la oportunidad de hacer contacto con las autoridades de la Iglesia en el Este. La embajada llegó siendo emperador Constancio (341), cuando la reacción anti-nicena triunfaba en el Este. Ulfilas, entonces, fue ordenado or denado obispo por Eusebio de Nicomedia y como era de esperar adoptó una teología arriana. El obispo de Constantinopla lo designó como misionero a los godos, donde llevó a cabo una labor misionera extraordinaria. Ulfilas era un hombre práctico. Lejos de enredarse en las especulaciones teológicas y filosóficas de la época, se adhirió a la doctrina arriana porque resultaba más fácil de comprender y comunicar, especialmente a los paganos. A Ulfilas no le interesaba tanto la especulación teológica de sus días, como expresar en la forma más simple posible un credo que fuera fácilmente aceptado. Poreraeso, en su prédica enseñaba que Cristo no era Dios sino un ser inferior, es decir, su cristianismo arriano. Ulfilas fue más hábil como predicador que como pensador; fue un pésimo teólogo, pero un misionero extraordinario. Su obra más importante fue la traducción de la Biblia al idioma gótico. Para aquel entonces, entonces, la Biblia ya estaba traducida al siríaco, el copto (es decir, “egipcio”) y el latín. El  problema era que los godos no tenían escritura, salvo por algunos pocos caracteres rúnicos que eran er an utilizados más en la magia que en la comunicación. Ulfilas entonces inventó un u n alfabeto gótico usando letras griegas para representar los sonidos góticos. Así, la Biblia Gótica llegó a ser el primer libro en la familia de idiomas germanos, a los que pertenecen idiomas modernos tan importantes como el inglés y el alemán. Ulfilas conocía griego y sabía lo que tenía que hacer; pero también conocía a los godos y sabía lo que no tenía que hacer. Por P or eso adaptó su versión vers ión de la Biblia a la cultura y cosmovisión gótica.

Filostorgio: “Ulfilas tuvo un muy gran cuidado de los los godos  godos de muchas maneras. Por ejemplo, redujo su lengua por Los escr ito escrito todos son los libros de la Biblia en su cotidiana, excepto los libros de Reyes. dejóy tradujo fuera porque meramente el relato de habla hazañas militares, y las tribus góticas eran particularmente afectas a la guerra. Ellas tenían más necesidad de controles sobre sus naturalezas guerreras que de estímulos que los urgiera a acciones de guerra.”

sobre sus naturalezas guerreras que de estímulos que los urgiera a acciones de guerra.  

 

 

Ulfilas terminó su carrera en la anterior provincia romana de Mesia, al sur del Danubio. Se retiró allí para escapar a una de las persecuciones dirigidas a interrumpir el avance del testimonio cristiano entre los godos, o bien para acompañar la instalación de un grupo de godos en territorio romano. Las iglesias fundadas por Ulfilas continuaron siendo arrianas en su teología. Varios sucesores de Ulfilas sirvieron como obispos arrianos y escribieron obras y participaron en disputas teológicas importantes. El arrianismo se transformó, de este modo, casi en la religión nacional de los pueblos germanos. Por supuesto, no todos los godos que se llamaban cristianos eran convertidos auténticos. Muchos de los que entraban al Imperio aceptaban el bautismo, así como aceptaban las costumbres romanas. Otros se hacían pasar por cristianos para poder entrar al Imperio, Impe rio, especialmente durante el siglo IV. De todos modos, la Iglesia latina se vio beneficiada ya que recibió el ingreso masivo de nuevos miembros, miembros , admiradores asombrados de las ceremonias cristianas y de la belleza de sus templos. Los bárbaros analfabetos aceptaban todo sin demasiadas preguntas, y si bien tenían la hegemonía política y militar, fueron sometidos al romanismo. En definitiva, la victoria cultural de Roma sobre estas tribus fue un  paso decisivo para el avance de las pretensiones p retensiones de su obispo sobre sob re las de sus competidores del este. MAPA 8 - RUTAS SEGUIDAS POR LOS HUNOS Y GODOS 

_ La Iglesia del Este y los hunos  ¿Hubo testimonio cristiano entre los hunos? Según Jerónimo, en una carta que le escribe a Laeta, la nuera de Paula, que lo acompañaba en su s u monasterio en Belén (403), parece que sí. “Todos los días”— afirma afirma el monje de Belén —“damos Belén —“damos la bienvenida a multitudes de monjes de India, de Persia, de Etiopía. El arquero armenio ha dejado sus flechas de lado, los hunos están aprendiendo el Salterio, y los fríos escitas son templados con la llama de la fe.”  fe.”   El documento que testimonia de la presencia del cristianismo entre los hunos es la Crónica de Sa’art . Este documento fue escrito entre los años 800 –  800 – 1300, 1300, pero está basado en registros anteriores. Cuenta de una revuelta en Persia antes del año 500, que sacó al emperador persa Qbad de su trono y  país. Qbad huyó hacia el nordeste, a una región que se conoce como Bactria, sobre el río Oxus, ocupada en aquel tiempo por los hunos blancos (turcos). El rey re y huno lo ayudó a recuperar su trono, y al regresar a Persia, Qbad se mostró favorable a los cristianos, porque los cristianos entre los hunos lo habían ayudado. Algunos persas miembros de su corte y que lo acompañaron a Bactria se quedaron allí, se casaron y formaron sus familias entre los hunos. Años más tarde, algunos regresaron a Persia y trajeron noticias de la presencia de cristianos entre los hunos. El redactor de la Crónica de Sa’art  copia   copia los nombres de estos testigos y fecha su testimonio en el año 555. Los episodios que describe pueden haber ocurrido entre 525 – 550. 550. Crónica de Sa’art: “Los hunos han aprendido a escribir su propia lengua. Así es como ocurrió:

Luchando contra los romanos, los hunos habían tomado prisioneros. Treinta y cuatro años más tarde, un ángel apareció a Qaradushat , obispo de Arán, en Armenia Oriental, diciendo: ‘En ‘E n respuesta a las oraciones de los cautivos, Dios me ha dicho que te pida que vayas, bautices a sus niños, les proveas de sacerdotes, les des los sacramentos, y he aquí, yo estoy contigo y encontrarás todo lo que necesites.’  necesites.’  Siete de ellos partieron atravesando territorio salvaje, no haciendo rodeos por los pasos, sino

derecho, cruzando las montañas, y cada noche no che eran provistos de siete panes y de una botella de

 

 

agua. Predicaron a los cautivos, convirtieron a algunos de los hunos, y tradujeron las Escrituras a su idioma. Después de catorce años, Qaradushat murió. Su nombre significa ‘llamado por Dios.’ Otro obispo armenio, Makarios, fue llamado a ir, y fue de buen grado con algunos alguno s de sus sacerdotes. Construyeron una iglesia de ladrillos, plantarondelos sembraron realizaron señales, y bautizaron a muchos. Los caudillos loscampos, hunos los honraron,vegetales, invitándolos como maestros, cada uno a su propia tribu, y he aquí, están allí hasta hoy.… Éste es el tiempo del cual habló el apóstol, cuando ‘ha entrado la plenitud de los gentiles’ (Ro. 11:25).”  11:25).”   El documento describe lo que hoy podríamos denominar como misión rural. No se dice mucho sobre la escritura y traducción de la Biblia, como en el caso de Ulfilas. Sin embargo, es muy probable que la situación entre los hunos haya sido similar a la de los godos. El problema de la falta de un abecedario o una forma escrita de la lengua era el mismo y debe haberse solucionado de la misma manera. En este caso, se usaron letras siríacas para los sonidos hunos, y se creó un nuevo lenguaje escrito, del que derivan lenguas como el mongol y el manchú.

 _ La Iglesia y el fin del mundo  El problema de Volusiano En un de tiempo cuando mundo que parecía hacerse añicos,deuncristiano. sensible cristiano se preguntaba por el .porqué la caída de unelImperio llevaba el nombre Volusiano, un joven procónsul, catecúmeno, le escribe a Agustín de Hipona (354 –  (354 – 430), 430), el más importante de los Padres de la Iglesia latina, para compartir sus preguntas y preocupaciones. Así, compara la entrada de Constantino a Roma en el 312 y la entrada de Alarico un siglo más tarde en 410. Según una carta de Marcelino a Agustín (412), “Volusiano piensa que todas estas dificultades pueden ser agregadas a la pregunta previamente planteada, especialmente porque porqu e es evidente (si bien él guarda silencio sobre este punto) que muy grandes calamidades han caído sobre el Imperio bajo el gobierno de emperadores que en su mayor parte observaban la religión cristiana.”   Básicamente, Volusiano levanta dos preguntas. Por un lado, la pregunta pacifista, es decir, ¿está  bien que un cristiano ponga la otra mejill mejilla, a, cuando es responsable de la seguridad de toda una provincia, como era el caso de él? Por otro lado, la pregunta de la providencia, es decir, ¿por qué Dios permite que ocurran estas cosas?

Desde su sede episcopal en Hipona, al norte de África, Agustín procuró responder a éste y a otros interrogantes especialmente a través de su libro  La ciudad de Dios  (escrito entre 413 y 426), que es la  primera filosofía cristiana de la historia y la obra maestra de Agustín. Este libro es la defensa más grande del cristianismo que jamás se haya escrito. Agustín salió al paso de la objeción de que si bien el Imperio Romano había adoptado la religión cristiana, el cristianismo no había podido salvar al Imperio de los bárbaros. Agustín escribió sabiendo que se encontraba encontrab a en el fin de una edad, pero miraba el futuro con esperanza.  La enseñanza de Agustín. Respecto de la crisis del año 410, Agustín admite que la religión cristiana no salvó a Roma, pero afirma que sí salvó a muchos que estaban en peligro y necesidad. Los horrores de la guerra no eran nuevos, pero muchos bárbaros eran arrianos y cuidaron de las mujeres y los niños que se refugiaron en los templos cristianos.

Agustín de Hipona:  “Todo el saqueo, pues, al que Roma se vio expuesta en la calamidad reciente toda toda matanza, despojo,fue incendio  — salvajes fue el resultado fue de la costumbre la guerra.  —  Pero lo laque fue novedoso, que losy miseria bárbaros se mostraron de maneradetan amable, que las iglesias más grandes fueron escogidas y apartadas con el propósito de ser

llenadas de gente a quienes se les dio refugio, y que en ellas nadie fue asesinado, nadie fue

 

 

acuchillado por la fuerza; que muchos fueron conducidos a ellas por sus concesivos enemigos  para ser puestos en libertad, y que de ellas nadie fue puesto en esclavitud por enemigos inmisericordes. Quien no ve que esto debe ser atribuido al nombre de Cristo, y al carácter cristiano, está ciego; quien lo ve y no lo alaba, es un desagradecido; y quien impide a otros a alabarlo, está loco.”  loco.”  En cuanto al problema del sufrimiento humano, human o, señala Agustín que la religión cristiana no pretende que el cristiano pueda evitar el sufrimiento. “Por lo tanto, si bien personas buenas y malas suf ren suf ren por igual, no debemos suponer que no haya diferencia entre las personas mismas, porque por que no hay diferencia en lo que ellos sufren. Porque incluso en la semejanza de los sufrimientos, se da una desemejanza en los que sufren; y si bien están expuestos a la misma angustia, virtud y vicio no son la misma cosa.… Y así ocurre que en la misma aflicción los malvados detestan a Dios y blasfeman, mientras que los  buenos oran y alaban. De modo que la diferencia no está en cuáles son los los males que se sufren, sino en qué tipo de persona los sufre.”  sufre.”   Más complicada es su argumentación en cuanto al problema del mal en el mundo. Según Agustín, la creación de Dios es buena y el mal sólo existe en la mala voluntad humana. En un mundo que se ha alienado de su Creador, el propósito de Dios sólo puede encontrarse en el pueblo de Dios. Dios sabía, antes de que ocurriera, que el ser humano iba a pecar. Agustín de Hipona:  “Y Dios no era ignorante de que el ser humano pecaría, y que, estando ahora sujeto a la muerte, se propagaría en otros hombres condenados a muerte, y que estos mortales correrían a tales enormidades en su pecado, que incluso las bestias carentes de voluntad racional, y que fueron creadas de manera numerosa de las aguas y de la tierra, vivirían más segura y pacíficamente con los de su propia especie que con el hombre, quien se había  propagado de un individuo con el propósito cierto de promover la concordia. Porque ni siguiera los leones o los dragones han luchado entre sí guerras tales como las que los hombres han luchado unos con otros. Pero Dios también previó que por su gracia un pueblo sería llamado a la adopción, y que ellos, siendo justificados por la remisión de sus pecados, serían unidos por el Espíritu Santo a los santos ángeles en paz eterna, siendo destruido el último enemigo, la muerte.”   muerte.” Finalmente, Agustín desarrolla el tema de las dos ciudades, que es el que le da el título a su libro. En el corazón del mismo está el contraste entre la “ciudad terrenal,” que no será eterna, y la “Ciudad Celestial” en la que que está expresado el sentido de la historia. La idea central de Agustín es que toda la historia humana es una lucha entre dos reinos, el de Dios y el del mundo, entre la civitas Dei y la civitas terrena. Para él, la Iglesia es la colonia sobre la tierra de la Jerusalén celestial, establecida para el testimonio acerca de Dios cualesquiera sean las circunstancias que se den en las naciones del mundo. La Iglesia, peregrina a través de la historia, es la que da sentido a la historia y el fin de este peregrinaje está más allá de la historia, en la Iglesia Triunfante.

EL CRISTIANISMO EN LAS ISLAS BRITÁNICAS   _ El testimonio en Bretaña  Uno de los primeros nombres asociados con el cristianismo en Bretaña es el de mártir cristiano en Inglaterra. Albano era un romano de Verulamium (la moderna St. Albano, Albans),eldeprimer quien se cuenta que amparó a un sacerdote cristiano durante la persecución bajo Diocleciano, en 304, a pesar

de que todavía él no era cristiano. Cuando fue arrestado, confesó conf esó su fe cristiana valientemente y después

 

 

de ser torturado, fue ejecutado. Si bien hay ciertas dudas en cuanto a los detalles de esta historia, hay dos cosas que parecen ser seguras. Primero, que el cristianismo para este tiempo ya estaba firmemente establecido en Bretaña. Había obispos en Londres, York y Lincoln, que concurrieron al Sínodo de Arlés pocos años más tarde, en 314. Segundo, el santuario de Albano, cerca de Londres, se transformó en un lugar de peregrinación (hasta el día de hoy), y llegó a ser tan famoso, que su nombre eclipsó el nombre romano que anteriormente tenía el lugar.

 _ El testimonio en Escocia  En Escocia, el nombre que surge al investigar sobre los orígenes del cristianismo en esta región (Galloway) es el de Niniano (c. 360 –  360 – 4432), 32), un bretón hijo de un caudillo cristiano. Siendo joven fue a Roma a estudiar, y de allí al monasterio de San Martín de Tours, en Francia. Niniano regresó a Escocia hacia el año 400, y durante algún tiempo vivió en una cueva. Cerca de allí construyó una iglesia dedicada a Martín de Tours y un monasterio que seguía sus métodos misioneros. Los monjes de este monasterio salieron a muchos lugares del país, evangelizando a los bretones en el sur, a los pictos en el norte, a los escoceses en la costa occidental y en Irlanda del Norte.

 _ El testimonio en Irlanda 

El apóstol de Irlanda es Patricio (c. 389 –  389 – c. c. 461), si bien el cristianismo ya había sido predicado en la isla para cuando él llegó. Era un bretón, hijo de un diácono que vivía en la costa occidental de Bretaña. Cuando tenía dieciséis años fue capturado por piratas irlandeses. Después de seis años como esclavo en tierra pagana, logró escapar y regresar a su hogar. Pero no tenía paz, pues soñaba con los irlandeses, en quienes su fe cristiana había comenzado a influir. Así, aceptó esto como un llamado de Dios, y después de una larga preparación regresó r egresó a Irlanda, a la tierra de sus captores, como misionero. Desembarcó en Ulster y viajó por todo el país desafiando valientemente al paganismo, ganando a los caudillos y a sus seguidores. Su muerte ocurrió en el 461.

 _ El testimonio en las Islas Británicas  El cristianismo de las Islas Británicas durante este período no estaba ligado con el cristianismo latino del Imperio Romano, que empezaba a centrarse en la autoridad del obispo de Roma. Más bien era un cristianismo de origen celta. Este cristianismo celta, imbuido de un fuerte espíritu misionero, se vio de esta manera fortalecido en algunas regiones del noroeste, en un tiempo cuando la ley y el orden romanos estaban en decadencia. De este modo, gracias a la obra de monjes provenientes de las Islas Británicas, se preparó el camino para la evangelización del norte de Europa en el siguiente período.

EL CRISTIANISMO EN LA PENÍNSULA IBÉRICA   _ Una vieja tradición  La tradición señala que el apóstol Pablo logró cumplir con su propósito de visitar Españ Españaa y plantar allí el movimiento cristiano (Ro. 15:24, 28). No obstante, no tenemos prácticamente información alguna en cuanto al desarrollo inicial del cristianismo en esa parte del mundo. Una tradición muy antigua señala también que el apóstol Santiago (Jacobo) predicó en España y que el apóstol Pedro envió acristianismo siete obispos a esta región. probable aque, como en otras partes romano, el haya entrado a laEsPenínsula través de ocurrió comunidades judías endel las mundo ciudades costeras, especialmente en el sureste, donde parece haber estado expandiéndose desde comienzos del siglo

tercero.

 

 

Justo L. González: “Según la tradición Santiago estuvo predicando en la región de Galicia Gali cia y en Zaragoza. Su éxito no fue notable, pues los naturales de esos lugares se negaron a aceptar el evangelio. Cuando Santiago iba de regreso a Jerusalén, desanimado por lo que parecía ser su fracaso, apareciódelsobre un venerada pilar la Virgen —  Virgen  — que queytodavía vivía le dio ánimo. Éste Tras es el origen deselale‘Virgen Pilar’, en España en varias de —  susy antiguas colonias. su regreso a Jerusalén —  Jerusalén — continúa continúa diciéndonos la tradición — Santiago Santiago fue decapitado, y entonces algunos de sus discípulos españoles llevaron sus restos de regreso a España, donde supuestamente reposan hasta el día de hoy en la basílica de Santiago de Compostela. La tradición referente a Santiago en España ha tenido gran importancia para los españoles a través de su historia, pues Santiago Sant iago es el patrón del país, y ‘¡Santiago ‘¡San tiago y cierra España!’ fue el grito de guerra de la Reconquista contra los moros.”  moros.”   Algunos registros del siglo III en cuanto al movimiento cristiano en España presentan un cristianismo poco ortodoxo y maduro. Se menciona a un obispo que apostató de la fe durante la  persecución de Decio (250), pero que luego de pasar el peligro retornó a su oficio. Otros obispos dejaron sus responsabilidades para involucrarse en el comercio. Algunas cartas de Cipriano de Cartago (195  – 258) 258) expresanacudían que en España hubo una suerte de apostasía masiva,deencabezada porunlosderrumbe obispos. Muchos cristianos a los magistrados romanos para retractarse su fe. Hubo general de la moral, y no fueron pocos los creyentes que se sometieron a los sacrificios oficiales, mientras continuaban profesando su fe cristiana. Incluso hubo quienes se desempeñaron como sacerdotes cívicos. Los registros del concilio de Elvira, llevado a cabo alrededor del 309 revelan que la Iglesia tuvo problemas con la idolatría, el homicidio y el adulterio e intentó corregir estos errores. Este mismo concilio muestra que el movimiento cristiano cr istiano se había extendido tan al nnorte orte como Asturias y tan al este como Zaragoza, aunque su fuerza mayor parece haber estado en lo que hoy es Andalucía. En su Vida de Constantino, Eusebio de Cesarea menciona las diferentes regiones representadas en el primer concilio ecuménico (Nicea, 325) convocado por el emperador Constantino. Con énfasis, dice: “Hasta de la misma España, uno de gran fama se sentó como miembro de la gran asamblea.” Este obispo famoso no era otro que Osio de Córdoba, consejero del emperador en materia eclesiástica, y su enviado para tratar de reconciliar a las partes en conflicto en la controversia arriana. Fue precisamente cuandoafectar Osio lelainformó Constantino queellasmonarca raíces del d el profundas y que la disputa  podía unidad adel Imperio, que se conflicto decidió aeran dar muy el paso que había considerado durante algún tiempo: convocar a todos los obispos cristianos del mundo conocido para poner en orden la vida de la Iglesia y para resolver la controversia arriana. Debe tenerse presente que, más tarde (379), el emperador Teodosio, que declaró al cristianismo religión oficial del Imperio Romano, era natural de España, donde probablemente acogió su fe cristiana. Teodosio fue el primer emperador romano de una fe cristiana ortodoxa. De todos modos, el paganismo no desapareció rápidamente de España. En la última década del siglo IV los ritos paganos todavía resultaban atractivos para muchos cristianos que habían renunciado a ellos. Incluso un siglo más tarde, según las actas del concilio de Toledo, la idolatría seguía consiguiendo adeptos. Si bien muchas de estas prácticas paganas pueden haber sido importadas por las tribus germanas que invadieron la Península en el siglo V (vándalos, visigodos, suevos), es probable que hayan sido supervivencias de tiempos anteriores a la llegada de los romanos o de los días del Imperio. No obstante, con los visigodos, muchos de los cuales sostenían una fe arriana, el cristianismo logró un establecimiento definitivo en la Península Ibérica con posterioridad al siglo V.

 _ Una encarnizada herejía 

 

 

Fue en España donde también surgió una “herejía,” que por algún tiempo mantuvo ocupados a los sectores “ortodoxos” de la Iglesia. Lo ocurrido ilustra una constante del cristianismo español: su rigorismo ético y su violencia ortodoxa. En este caso, el acusado fue Prisciliano (340 –  (340 – 387), 387), notable asceta y predicador. Ya en el Concilio de Zaragoza (380), había sido condenado por leer libros apócrifos y seguir prácticas ascéticas. Varios obispos seguidores suyos lo ordenaron como obispo de Ávila. Muy pronto, sus oponentes consiguieron una orden imperial prohibiéndole asumir su oficio. Prisciliano viajó a Milán y Roma para defender su caso ante el emperador y el obispo de Roma. El segundo no lo recibió, pero el primero lo restituyó en su puesto en España. Pocos meses después, un nuevo emperador lo sometió a un tribunal eclesiástico (385), bajo la acusación de gnosticismo, ideas maniqueístas y depravación moral (Prisciliano consideraba que qu e hombres y mujeres eran iguales delante de Dios). Prisciliano fue juzgado en Burdeos de acuerdo con la ley imperial que se aplicaba a la brujería, y se lo obligó a comparecer ante el tribunal imperial de Tréveris. Sometidos a tortura, él y sus compañeros (algunos de ellos eran obispos, como Instancio), confesaron las acusaciones que se les hacían, especialmente de inmoralidad sexual. Pese a las protestas de Martín de Tours (m. 397), un importante obispo galo, y de Ambrosio de Milán (340 –  (340 – 397), 397), los condenados fueron ejecutados por decapitación, “convirtiéndose en el primer caso que conocemos de la masacre de ‘herejes’ y de la caza de brujas bajo los auspicios cristianos.” El cuerpo de Prisciliano y de los otros seis ejecutados fue trasladado traslad ado a España, y se les dio sepultura como si fuesen mártires. El priscilianismo fue condenado por el Concilio de Toledo (400).

Irvin y Sunquist: “El caso de Prisciliano refleja algunas de las ansiedades de su época, incluso las cuestiones concernientes a nuevo papel público de la Iglesia y sus obispos, el ejercicio del  poder en el Imperio Imperio Romano, y las relaciones entre mujeres y hombres en la Iglesia. Prisciliano Prisciliano se rehusó a reconocer tales distinciones agudamente definidas entre los géneros, al menos entre aquellos que se habían comprometido con una vida ascética en Cristo. El uso de la pena capital  para controlar la enseñanza de la Iglesia fue también un paso mayor hacia abajo en el largo camino de los juicios por herejía y el uso de la violencia en el nombre de d e la fe cristiana ortodoxa. Sin embargo, no todos estaban de acuerdo con esta dirección. Martín de Tours, por su lado, vio las ejecuciones como una profunda distorsión de la fe cristiana.”  cristiana.”  

 _ Un fanatismo riguroso  Hubo otras reacciones de indignación contra estos abusos, pero la persecución religiosa en España continuó. Pablo Orosio (385 – 450), 450), historiador y presbítero, llegó a destacarse como un cazador español de herejes. En 414, en razón de la invasión de la Península por los vándalos, se trasladó al norte de África, donde se colocó bajo la supervisión de Agustín de Hipona, quien le pidió escribir una historia del mundo destinada a mostrar que la historia pre-cristiana fue peor que los sufrimientos ocurridos en el Imperio bajo gobernadores cristianos. Los ataques bárbaros, bárb aros, según él, eran expresión del justo juicio de Dios sobre los paganos que todavía no se habían convertido a la fe cristiana. Otro obispo español de renombre fue Dámaso (304 –  (304 – 384), 384), quien llegó a ser obispo de Roma desde 366, después de haber derrotado con violencia a su oponente Ursino. De él, comenta Johnson:

Paul Johnson:  “Su meta parece haber sido bastante clara: presentar al cristianismo como la verdadera y antigua delaImperio a Roma su ciudadela. instituyó una gran ceremonia anualreligión en honor Pedro y yPablo paracomo destacar la idea de Dámaso que el cristianismo ya era muy antiguo y había mantenido su asociación con Roma y los triunfos del Imperio durante

más de tres siglos. Según lo que él alegaba, los dos santos no sólo habían asegurado la primacía

 

 

de Roma sobre Oriente, porque ella era su ciudad adoptiva, sino s ino que también habían demostrado que eran protectores de la ciudad más poderosos que los antiguos dioses. El cristianismo era ahora una religión que tenía un pasado glorioso y un futuro ilimitado. Dámaso vivía bien y agasajaba suntuosamente a sus visitantes. visitantes. En 378 celebró un sínodo ‘en la sublime y sagrada Sede Apostólica’— fue fue la primera vez que se usó la frase —  frase — que que exigió la intervención oficial  para asegurar que los obispos occidentales se sometieran a Roma. El Estado también dictaminó que el obispo de de Roma no estaría obligado a comparecer ante el tribunal: ‘Nuestro hermano Dámaso no debe ser puesto en una posición inferior a la de aquellos con quienes tiene oficialmente una situación de igualdad, pero a quienes supera por la prerrogativa de la Sede Apostólica.’ Ap ostólica.’ Según parece, Dámaso fue un hombre hombr e desprovisto por completo de espiritualidad.” espiritualidad.”  

 _ Un extenso peregrinaje  Afortunadamente, no todos los testigos españoles fueron de un carácter cristiano tan dudoso como el de Dámaso. Hacia fines del siglo IV (384), una mujer aristocrática de nombre Egeria, Eger ia, probablemente una monja del noroeste de España, salió en peregrinaje hacia el Sinaí, Egipto, Palestina y Mesopotamia. Es interesante que, en un tiempo en que casi no había mapas, ella utilizó la Biblia para su orientación y la ayuda de ascetas locales que fue encontrando a lo largo del camino. Su diario de viaje, escrito en un latín coloquial exquisito, es no sólo un testimonio extraordinario de un periplo lleno de aventuras  por parte de una mujer, sino una fuente de información extraordinaria en cuanto a la liturgia, la arquitectura y la vida monástica de casi todo el mundo cristiano. El relato testifica también de la noción, ya establecida para aquel tiempo, de una Tierra Santa cristiana y de la importancia que la peregrinación a los sitios sagrados comenzó a tener. Además, Egeria, con el relato de su viaje piadoso, ofrece una síntesis notable de la mayor parte de los lugares que hemos mencionado en esta unidad, desde España hasta Mesopotamia. En esta unidad hemos realizado un extenso viaje misionero. Comenzamos con los primeros territorios visitados por el movimiento cristiano palestino, iniciando nuestro viaje en Antioquía de Siria, para movernos a la primera ciudad-estado en convertirse al cristianismo, Edesa. De allí nos movimos a la primera naciónde cristiana, Armenia. Pasamos por Partia,cristiano, Persia, Etiopía, Arabiaale punto India. Desde el punto más extremo la expansión oriental del testimonio nos movimos más extremo de la expansión occidental, y así, pasando por el norte de Europa, llegamos finalmente a las Islas Británicas y a la Península Ibérica. En este viaje hemos podido constatar la manera dinámica en que el incipiente movimiento cristiano encontró oportunidades para su expansión, la fundación de iglesias, la contextualización y el testimonio. De igual modo, hemos podido evaluar hasta qué punto la oposición y persecución, como también el impacto de la cultura local y sus manifestaciones, afectaron la configuración del  pensamiento y la acción cristianos. Todo esto resultó no sólo en un movimiento de aspiraciones universales, sino verdaderamente mundial. Su dilatado alcance geográfico es parangonado con su riquísima diversidad. Nuestra mayor cercanía con la cristiandad latina o mediterránea no debe limitar nuestra visión del movimiento cristiano como auténticamente ecuménico y múltiple. Sin embargo, de todos los variados factores que lo configuraron, ninguno parece ser más llamativo que el cristianismo de los primeros siglos fue un movimiento típicamente urbano. Las iglesias que se plantaron, tanto dentro como fuera del Imperio Romano, fueron comunidades urbanas, con todas las características  propias de tal condición socio-cultural. Para el año 500, la mayoría de las grandes urbes del mundo

conocido de entonces, habían sido alcanzadas con el testimonio del evangelio de Jesucristo.

 

 

GLOSARIO  Adiabene: región cercana a la corriente superior del Tigris, con su capital en Arbela, una antigua ciudad sagrada de los asirios, que fue alcanzada tempranamente (c. año 100) por el testimonio judeocristiano palestinense. No obstante, los grupos cristianos fueron pequeños y padecieron una resistencia activa por parte de sacerdotes de otras religiones (especialmente zoroastristas). arriano: seguidor de las enseñanzas de Arrio (256 – 336), 336), que en su herejía negaba la consubstancialidad del Hijo y el Padre. Los arrianos creían que el Hijo había sido creado como un agente para la creación del mundo.  catholikós:

obispo patriarca o primado de ciertas iglesias orientales, especialmente de la Iglesia Armenia o de las iglesias nestorianas (Iglesia del Este) como la Iglesia Ortodoxa Siria.

celta: perteneciente a un grupo de pueblos indoeuropeos que se establecieron estableciero n antiguamente en las Islas Británicas, Galia, y en algunas regiones de España, Alemania, norte de Italia, Suiza, y hasta en Asia Menor. Se refiere también a un grupo de lenguas indoeuropeas habladas especialmente en algunas regiones de las Islas Británicas. ciudad-estado: un estado autónomo que consiste de una ciudad y su territorio vecino. cristología: rama de la teología que trata con la interpretación teológica de la persona y obra de Cristo. Ctesifonte: ciudad de Asiria (hoy Irak), a orillas del Tigris, no n o lejos de Seleucia, residencia de invierno de los reyes partos, arsácidas y sasánidas. decuria: cada una de las diez porciones en que se dividía la antigua curia romana. En la antigua milicia romana, era la escuadra de diez soldados gobernada por un cabo. encratismo: del griego encarteis (autocontrol), designa a movimientos entregados a prácticas ascéticas as céticas extremas, como la prohibición del matrimonio y la ingesta de vino y carne. Por usar agua en lugar de vino en la Cena del Señor, se los llamó “acuarios” o “hidroparastatas.” Jerónimo dice dic e que Taciano fue el fundador del movimiento. godos: antiguo pueblo germánico, que invadió el Imperio Romano en los primeros siglos de la era cristiana y ocupó España e Italia, donde fundó reinos germánicos. Iglesia del Este: Iglesia cristiana que remonta su origen al cristianismo que qu e se desarrolló en el Imperio Romano Oriental (bizantino), pero que se expandió de manera independiente hacia el este (Mesopotamia) y desde allí más tarde hasta China, sosteniendo una teología nestoriana, y con una liturgia y literatura religiosa en lengua siríaca. licantropía: manía en la que el enfermo se imagina a sí mismo y se comporta como si fuese un lobo. liturgia: del gr. leitourgia (adoración) es el orden y forma (rito o conjunto de ritos) que se sigue para

celebrar el culto religioso público.

 

 

maniqueo: seguidor de las doctrinas de Manes (216 –  (216 – 277), 277), que admitía dos principios creadores, uno  para el bien y otro para el mal. : aquella correspondiente a la expansión judeo-cristianismo origen misión palestinense  palestino, nacido en Jer Jerusalén. usalén. Este judeo-cristianismo se extendiódel hacia el este, yendo de de Antioquía de Siria hacia Edesa, y de allí hacia el norte a Armenia y hacia el sur en dirección a Mesopotamia.

monofisismo: herejía de los monofisitas, que enseñaban que en Cristo había una sola naturaleza (divina) y no dos, como enseñaba el credo de Calcedonia Calcedo nia (451), aun cuando él había asumido un cuerpo terrenal y humano con su ciclo de nacimiento, vida y muerte. movimiento de pueblos: resulta de la decisión conjunta de un número de individuos, todos  pertenecientes a un mismo grupo de pueblo, que les permite hacerse cristianos sin sufrir una dislocación social, mientras se mantienen en contacto pleno con sus s us familiares no cristianos. Esto hace posible que q ue otros segmentos de ese grupo de pueblo, a lo largo de los años, llegue a decisiones similares y forme iglesias cristianas constituidas primariamente por miembros de ese grupo de pueblo. : herejíade deldos s. personas V difundida por Nestorio (428en (428 –   – 431), 4él31), patriarca de Constantinopla, nestorianismo  profesaba la existencia en Cristo, separando la naturaleza divina de la humanaque en el Cristo encarnado. El nestorianismo fue condenado condenad o por el Concilio de Éfeso en 431, pero se desarrolló d esarrolló en las iglesias que se separaron del cristianismo bizantino a partir de esa fecha, y tuvieron su centro en Persia, desde donde se esparció desde Asia Menor hasta China.

nómada: familia o pueblo que anda vagando sin residencia fija de lugar en lugar de manera estacional o dentro de un territorio bien definido a fin de asegurarse la provisión pro visión de alimentos, y que generalmente está dedicado a tareas de pastoreo. Osroene: región del NO de Mesopotamia, con capital en Edesa, donde se fundó un pequeño estado gobernado por sus caudillos con co n el título de reyes. El cristianismo llegó a la región con el após apóstol tol Judas, hermano de Jacobo. En 190 y 201 ya había iglesias cristianas en Edesa. El rey Abgar IX (179 –  (179 – 214) 214) se convirtió y abolió los cultos paganos. politeísmo: doctrina de los que creen en la existencia de muchos dioses. Sasánidas: dinastía persa que reinó de 225 a 651. siríaco: lengua hablada y escrita de los antiguos habitantes de Siria, basada en un dialecto arameo oriental y utilizada como la lengua literaria y litúrgica por varias iglesias cristianas orientales. Vedas: en sánscrito significa conocimiento. Se trata de cuatro libros sagrados de la India, escritos en lengua sánscrita, atribuidos a la revelación de Brahma. Son colecciones de oraciones, de himnos, de fórmulas de consagración, y de expiación, que constituyen los escritos sagrados hindúes más antiguos. Los Puranas, los Sutras, etc., son comentarios de dichos libros. zoroastrismo: religión de origen persa, fundada en el s. VI a.C. por el profeta Zoroastro a partir del mazdeísmo, y que sostiene la creencia en Ahura Mazda como la divinidad suprema. Esta doctrina está  promulgada en el  Avesta (el libro de los escritos sagrados del zoroastrismo), y se caracteriza por su rigor ético, ya que requiere de las buenas acciones humanas para ayudar a Ahura Mazda en su lucha

cósmica contra Ahriman, el espíritu del mal.

 

 

90 – 100 100

SINOPSIS CRONOLÓGICA  Ministerio misionero de Addai en Adiabene

105 – 115 115

Pekhidha, primer obispo de Arbela

121

Sansón, obispo de Arbela (Adiabene)

123

Martirio de Sansón

135 – 148 148

Isaac, obispo de Arbela (Adiabene)

155 – 220 220

Tertuliano de Cartago

179

Muere Noé, obispo de Arbela (Adiabene)

c. 180

Panteno de Alejandría visita la India

179 – 186 186

Abgar IX, primer rey cristiano de Edesa

225

Persas sasánidas se apoderan de Partia

235 – 238 238

Maximino, un godo, emperador de Roma

264

Godos de Rumania cruzan el mar Negro

294

Gregorio “el Iluminador,” obispo de Armenia  Armenia 

c. 300 309 – 379 379

David, obispo de Basora Sapor II el Grande, emperador persa sasánida

311 – 383 383

Ulfilas, apóstol a los godos

315

Carta de Constantino al emperador persa sasánida

325 – 350 350

Ezana, rey de Etiopía

c. 330

Frumencio, obispo de Etiopía

337

Expedición de Constantino contra los persas

339 – 379 379

Gran persecución en el Imperio Persa

Sasánida

 

 

339 – 379 379

Shimun, obispo de Ctesifonte

340

Ulfilas es ordenado como obispo (arriano) de los godos

342 – 420 420

Jerónimo

345

Tomás el Mercader y refugiados de Persia llegan a Cranganore, en la costa Malabar (India)

c. 350

Pallivanavar, posible rey cristiano de Kerala (Malabar, India)

364

Sínodo de Antioquía

376

Los godos piden permiso para entrar al Imperio Romano

378

Los godos derrotan al ejército imperial romano

399 – 420 420

Yezdegerd I, emperador persa sasánida

c. 400

Rufino escribe su Historia eclesiástica

410

Nuevo Testamento en Armenio

410

Alarico sitia y captura Roma

412 – 426 426

Agustín de Hipona escribe La ciudad de Dios

420 – 422 422

Bihram V, emperador persa sasánida

420 – 450 450

Período de persecución en Imperio Persa Sasánida

430

Los vándalos sitian Hipona (norte de África)

432

Patricio comienza su misión en Irlanda

450

Sozómenos escribe su Historia eclesiástica

455

Los vándalos sitian Roma

461

Muere Patricio, el apóstol de Irlanda

 

 

480

Los hunos cruzan los Himalayas y destruyen el Imperio Gupta, de la India

486

La Iglesia Persa opta por el nestorianismo. Sínodo de Seleucia

491

La Iglesia Armenia opta por el monofisismo

523

Masruq, rey de Yemén (Arabia)

525

Masruq es derrotado por el ejército etíope

547

Cosmas escribe La topografía cristiana

CUESTIONARIOS DE REPASO  Preguntas sobre el material básico (para los niveles 1, 2 y 3) :  1. ¿Quién fue el primer rey cristiano? 2. ¿Dónde se edificó el primer templo cristiano que recuerde la historia? 3. ¿Qué idioma importante fue probablemente el primero al que se tradujo el Nuevo Testamento griego? 4. ¿Dónde era hablado ese idioma? 5. ¿Quién fue el primer obispo de Armenia, y en qué fecha? 6. ¿Cuándo fue traducido por primera vez el Nuevo Testamento al idioma armenio? 7. ¿Cuál era la religión nacional de Persia en el tiempo de los Sasánidas? 8. ¿Por qué razón la situación de los cristianos en Persia cambió a par partir tir del año 312, con la entrada de Constantino a Roma? 9. En el año 339 comenzó una gran persecución en el Imperio Persa, ¿de qué tres maneras se manifestó?

 

 

10. Menciona un hecho de Constantino que llevó a la persecución de los cristianos en Persia. 11. ¿Cuándo pudo la minoría cristiana en el Imperio Persa establecer un acuerdo efectivo con las autoridades? 12. El Concilio de Nicea (325) decretó que la Iglesia debía reconocer tres “Grandes Obispos,” quienes tenían una autoridad mayor que la de los demás. ¿En qué ciudades tenían sus sedes, y cuáles eran las áreas de su autoridad? 13. Narra con tus propias palabras cómo llegó Etiopía a ser un país cristiano. 14. ¿Desde dónde penetró la influencia cristiana en Arabia? 15. ¿En qué aspectos la yorganización de con Arabia era diferente de la de otros países antes del advenimiento del Islam, qué relaciónpolítica tiene esto el cristianismo? 16. ¿Qué es Los hechos de Tomás  y qué narra? 17. ¿Cuál era el título del libro de Cosmas y qué datos interesantes para la historia del cristianismo en India consigna? 18. Menciona algunas características de los hunos. 19. Menciona tres razones por las que los godos entraron al Imperio Romano. 20. ¿Qué contribución especial hizo Jerónimo al cristianismo? 21. ¿Quién fue Ulfilas? 22. Menciona tres cosas que hizo Ulfilas, que muestran que fue un buen misionero. 23. ¿Quién fue Albano y qué hizo? 24. ¿Quién fue Niniano y qué hizo?

25. ¿Quién fue Patricio y qué hizo?

 

 

26. ¿Cuál fue la característica fundamental del cristianismo céltico? 27. ¿Qué indican las tradiciones más antiguas sobre el origen del cristianismo en España? 28. ¿Quién era Osio de Córdoba y qué hizo? 29. ¿Quién fue Prisciliano y que ocurrió con él y sus seguidores? 30. ¿Quién fue Egeria y qué hizo?

Preguntas suplementarias (para los niveles 2 y 3) :  1. Dibuja un mapa en el que estén indicados los siguientes datos geográficos: mar Mediterráneo, África, mar Rojo, Asia Menor, Constantinopla, río Nilo, Egipto, Persia, golfo Pérsico, India, Mesopotamia, Antioquía, Edesa, Capadocia, Armenia, mar Caspio, Partia, río Indo, río Tigris, río Éufrates, Libia, Cirenaica, Roma, Etiopía, Arabia, Alejandría, Tiro, Yemén, Basora, Costa Malabar y Ceylán (Sri Lanka). 2. La religión oficial de Persia en tiempos de los Sasánidas era el zoroastrismo. ¿Quién fue su fundador y qué cree esta religión? Utilizar un diccionario enciclopédico para la respuesta. 3. ¿Qué nombre se le da en la historia universal al período que siguió a la entrada de los hunos en China y de los godos en el Imperio Romano. 4. Dibuja un mapa que muestre: (1) dónde vivían los hunos y qué regiones invadieron; (2) dónde vivían los godos y qué regiones invadieron. 5. ¿Qué tipo de cristianismo predicó Ulfilas entre los godos? Hacer una descripción del mismo. 6. ¿De qué dos cosas podemos estar seguros en cuanto a los orígenes del cristianismo en las Islas Británicas? 7. Menciona dos características del cristianismo en las Islas Británicas durante este período. 8. ¿Cómo evalúa el historiador Paul Johnson la persona y ministerio de Dámaso, el obispo de Roma?

 

 

9. ¿Cómo evalúa el historiador Paul Johnson la represión de Prisciliano y sus seguidores? 10. ¿Qué lugares visitó Egeria en su peregrinaje al Oriente?

Tareas avanzadas (para el nivel 3):  1. ¿Cuál habría sido el efecto sobre el desarrollo desar rollo de la Iglesia en Persia, si los cristianos hubiesen tratado de escapar de la persecución obedeciendo a las autoridades y negando la religión cristiana? 2. Explica con tus propias palabras qué quiere decir San Agustín cuando afirma en La ciudad de Dios: “La Iglesia, peregrina a través de la historia, es la que da sentido a la historia y el fin de este es te peregrinaje está más allá de la historia, en la Iglesia Triunfante.” Triunfante.”  

3. Leer Walker, La historia de la iglesia cristiana, 129 – 134, 134, y confeccionar una ficha de resumen. 4. ¿Qué piensas del uso de la violencia en la represión de personas y posturas heréticas? 5. El cristianismo se expandió fuera del Imperio Romano durante este período. ¿Cuál es tu evaluación general de esta expansión?

TRABAJOS PRÁCTICOS  TAREA 1: La correspondencia entre Jesús y el rey Abgar Supuesta carta de Abgar, rey de Edesa, a Jesús: Abgar, rey de Edesa, a Jesús el Salvador, que se ha manifestado en Jerusalén. He oído hablar de las curaciones que has hecho, sin usar hierbas, ni otros remedios ordinarios. Y sé que devuelves la vista a los ciegos, y que haces andar a los cojos, y que limpias de lepra, y que arrojas los demonios inmundos, y que curas las enfermedades más crónicas, y que resucitas a los muertos. Y, oyendo tales cosas, me he persuadido de que tú eres Dios, o Hijo de Dios, y que estás en la tierra con el fin de realizar esas maravillas. Y por eso te escribo, para suplicarte que vengas a mí, y que me cures de la enfermedad que me atormenta. Y he oído decir que los judíos murmuran de ti y que te preparan celadas. Y yo poseo una ciudad que es pequeña, pero honesta, y que bastará para los dos.”   Supuesta contestación de Jesús a Abgar: “Bienaventurado seas, tú, Abgar, que crees en mí, sin haberme conocido. Porque de mí está escrito: Los que lo vean no creerán en él, a fin de que los que no lo vean puedan creer, y ser bienaventurados.

Cuanto al ruego que me haces de ir cerca de ti, es preciso que yo cumpla aquí todas las cosas para las

 

 

cuales he sido enviado, y que, después de haberlas cumplido, vuelva a Aquel que me envió. Y, cuando haya vuelto a Él, te mandaré a uno de mis discípulos, para que te cure de tu dolencia, y para que comunique comuni que a ti y a los tuyos el camino de la bienaventuranza.”  bienaventuranza.”   Jorge Luis Borges, ed., Evangelios apócrifos, vol. 2 (Buenos Aires: Hyspamérica, 1985), 433 –  433 – 434. 434. - Hacer un comentario crítico de esta correspondencia, que fue aceptada como auténtica por Eusebio de Cesarea ( Historia  Historia eclesiástica, 1.13).

TAREA 2 * La caída de Roma en 410. Lee y responde:  “¡Ay! repentinamente me han traído noticias de la muerte de Pamaquio y Marcela, el sitio de Roma, y la caída en sueño de muchos de mis hermanos y hermanas. Quedé tan estupefacto y desalentado que día y noche no podía pensar en ninguna otra cosa que en el bienestar de la comunidad; parecía como si estuviese compartiendo la cautividad de los santos, y no pudiese abrir mis labios hasta que no supiese algo más definido; y mientras tanto, lleno de ansiedad, estaba vibrando entre esperanza y desesperación, y me torturando desgracias d e otrasRomano de personas. cuando la de todo el mundo fueestaba apagada, o más con bien,lascuando el Imperio fuePero decapitado y,luz parabrillante hablar más correctamente, todo el mundo pereció en una ciudad, quedé mudo y me humillé, y guardé en silencio las buenas palabras, porque mi pena estalló de nuevo, mi corazón se agitó dentro de mí, y mientras meditaba el fuego fue encendido.…  encendido.…   Todas las cosas, no importa cuán dilatadas sean, tienen su fin; los siglos que han pasado nunca retornan, y es cierto decir que todo lo que comienza debe perecer, y todo lo que crece pasa por decadencia y muerte. No hay obra creada que no sea atacada por la vejez y que consecuentemente no desaparezca. ¡Pero Roma! ¿Quién ¿ Quién podía creer que Roma, levantada por la conquista co nquista de todo el mundo, había caído, que la madre de las naciones había llegado a ser también su tumba; que las costas de todo el Este, de Egipto, de África, que alguna vez pertenecieron a la ciudad imperial, estaban llenas con las huestes de sus siervos y siervas, que nosotros estaríamos recibiendo cada día en esta santa Belén hombres y mujeres que alguna vez fueron nobles y prósperos en todo tipo de riqueza, pero que ahora están reducidos a pobreza? No podemos aliviar a estos sufrientes: todo lo que podemos hacer es simpatizar con ellos, y unir nuestras lágrimas a las suyas.”  suyas.”   Jerónimo, Prefacio al comentario sobre Ezequiel , libros 1 y 3. - ¿A qué se refiere refiere Jerónimo cuando habla de “la caída en sueño de muchos”?  muchos”?  - ¿Qué concepto tenía Jerónimo de la ciudad de Roma, a la luz de sus palabras? - ¿En qué sentido se habla, todavía hoy, de “Roma, la eterna”?  eterna”?   - ¿Qué problemas sociales generó la caída de Roma, según el testimonio de Jerónimo? - Describe la actitud pastoral de Jerónimo.

DISCUSIÓN GRUPAL 

 

 

1. ¿Qué piensan ustedes en cuanto a la necesidad de la indigenización de las iglesias nacionales y su divorcio de toda dependencia exterior (como hizo la Iglesia del Este en Persia respecto de Roma), para que haya una auténtica expansión de la fe cristiana? ¿Por qué este proceso de indigenización es importante desde una perspectiva misionológica? 2. ¿Cómo explicarían ustedes la caída de un imperio (como el Imperio Romano), que llevaba el nombre de cristiano? ¿El hecho de que una nación sea cristiana, la libra de la guerra o la autodestrucción? Fundamenten sus respuestas.

LECTURAS RECOMENDADAS  Bainton, La iglesia de nuestros padres , 56 – 64. 64. Daniélou-Marrou, Nueva historia de la iglesia , 1:90 – 91; 91; 230 – 232; 232; 319 – 321 321 González, Historia de las misiones, 73 – 83; 83; 85 – 90. 90. González, Historia del cristianismo, 1:307 – 314; 314; 221 – 232. 232. Latourette, Historia del cristianismo, 1:116 – 118; 118; 138 – 146. 146. Walker, Historia de la iglesia cristiana, 129 – 134. 134.

UNIDAD 3

El cristianismo en el imperio bizantino  INTRODUCCIÓN  La historiografía cristiana tradicional no ha prestado mucha atención al desarrollo del cristianismo  bizantino. Y cuando lo ha hecho, ha sido generalmente en relación con los desarrollos en el mundo romano occidental. Para nosotros en América Latina, el cristianismo bizantino nos resulta casi totalmente desconocido, y en buena medida esto es debido a que las iglesias que lo representan en la actualidad no han tenido una gran visibilidad en la mayor parte de los países latinoamericanos. De manera particular, hay un desconocimiento descono cimiento bastante generalizado de la historia y desar desarrollo, rollo, teología y  prácticas de esta forma de ser cristiano. No obstante, éste es el cristi cristianismo anismo sostenido por pueblos que hoy tienen una gran relevancia: griegos, rusos, búlgaros, macedonios, serbios, rumanos, eslavos, ucranianos, e incluso algunos árabes, polacos, fineses y albanos. A la ignorancia del cristianismo bizantino se agregan los prejuicios y malos entendidos, que a lo largo de los siglos se han ido desarrollando entre las iglesias de Occidente y Oriente. Es posible que si el movimiento cristiano occidental no se hubiese separado de su contraparte oriental (1054), no se hubiese producido la segunda división de la cristiandad con la Reforma (siglo XVI). Tanto la Iglesia en Occidente como la Iglesia en Oriente hubiesen podido evitar muchos de sus propios conflictos de

haberse entendido mejor entre ellas.

 

 

El mundo cristiano grecorromano era muy cosmopolita. Sin embargo, su diversidad no creaba división. Un obispo tan distinguido como Ireneo, procedente de Esmirna (Asia Menor) y formado por Policarpo, terminó sirviendo como obispo en Lión (Francia). De modo que hasta comienzos del siglo IV casi no tiene sentido hablar de cristianos orientales y occidentales. Los cristianos eran bien conscientes, no de ser occidentales u orientales, sino simplemente de ser cristianos, y como tales  paroikoi), peregrinos en este mundo. La Iglesia consistía de creyentes “extranjeros residentes” ( paroikoi reunidos en torno a los obispos en los pueblos y ciudades del mundo romano. rom ano. Con el correr del tiempo, como se vio, algunas sedes episcopales fueron creciendo en su prestigio y se fueron estableciendo zonas de influencia. Estos obispos, a su vez, comenzaron a competir unos con otros, hasta que en Occidente el obispo de Roma pretendió una posición por encima de los demás, y entró en conflicto, especialmente con el patriarca de Constantinopla. Para fines del siglo IV y a lo largo del siglo V ya se  puede hablar con propiedad de Iglesias orientales y occidentales, occidentales , si bien se seguía pensando en una sola Iglesia, santa, católica y apostólica.  No obstante, hacia mediados del siglo V, la comunión en entre tre latinos y griegos se rompió debido a disputas teológicas, mayormente relacionadas con las naturalezas divina y humana en Jesús. La brech brechaa se amplió todavía más por causas de orden político. Con Agustín de Hipona, la Iglesia Latina desarrollo una teología típicamente occidental. Algo similar ocurrió en Oriente con la teología desarrollada por Basilio de Cesarea, Gregorio de Nisa y Gregorio de Nacianzo. Con ellos se establecieron los lineamientos principales que caracterizaron a la teología cristiana oriental. De este modo, la teología occidental se caracterizó por enfatizar más los aspectos disciplinarios y prácticos, mientras que la oriental fue más especulativa y mística. La Iglesia Católica en Occidente resultó ser más legalista, realista y pragmática, prestando mucha atención al estado del ser humano delante de Dios. Por el contrario, en Oriente las iglesias fueron más místicas e idealistas, colocando el énfasis en el misterio de Dios. Las diferencias se hicieron también agudas en cuanto al carácter del gobierno y el manejo del poder. El sistema de Oriente consistía en una administración y gobierno basado sobre la ausencia de libertad y participación popular. El emperador pasó de ser un  princeps (como era en Roma) y se convirtió en un dominus, es decir, “señor,” con un Estado cortesano, cortesano , con ceremonias orientales, con eunucos y una  pompa desconocida en Occidente. Un helenismo orientalizado fue poco a poco tornando más rígidos los estamentos la cotidianos autonomía ydeminúsculos. las ciudades,Lay Iglesia creandomisma organizaciones jerárquicas que interveníansociales, en todoslimitando los asuntos se fue tornando cada vez menos democrática y su liderazgo más absoluto y divinizado, con una actitud puramente especulativa y contemplativa, situada por encima de la magia sacramental de los niveles inferiores. Fue también durante el siglo V que se produjo una fractura en el cristianismo de Oriente entre lo que podría llamarse la ortodoxia oriental y las iglesias orientales. Esto se debió a la difusión del monofisismo y su adopción por parte de iglesias en Egipto, Abisinia, Siria y Armenia. Para la segunda mitad de ese siglo, la cristiandad estaba dividida teológicamente en tres ramas más importantes, las iglesias occidentales católicas, las iglesias griegas u ortodoxas, y las iglesias orientales, las tres  pretendiendo un origen apostólico y universalidad.

EL LUGAR Y LAS CIRCUNSTANCIAS CIRCUNSTANCIAS  El área geográfica en la que habría de desarrollarse d esarrollarse el cristianismo bizantino varió en su dimensión a lo largo de los siglos. En su apogeo y mayor extensión, el mundo bizantino se extendió por el Mediterráneo hasta incluir Sicilia, el sur de Italia, buena parte de la costa italiana del Adriático, Grecia

y una buena parte de los Balcanes, Anatolia (la moderna Turquía), Siria, Palestina, Mesopotamia y

 

 

Egipto. Sea como fuere, la región de influencia bizantina abarcaba partes de tres continentes: Europa, África y Asia.

 _ La ciudad de Constantinopla Constantinopla  Esta majestuosa ciudad llegó a ser el centro administrativo y económico de unas 1500 ciudades ciudad es que constituyeron la 657 infraestructura de lo que, másprovenientes tarde, se llamó Imperio Bizantino. ciudad había sido fundada en a.C. por colonos griegos de el Megara (ciudad de la La antigua Grecia). Su ubicación en la boca de los Dardanelos le dio el control del acceso al mar Negro y al mar de Mármara. Desde la época de Diocleciano — que que trasladó la capital del Imperio a Nicomedia — Roma Roma  perdió su gran prestigio dentro del mundo antiguo. Constantino prefirió no establecer su gobierno en ella, y resolvió fundar una nueva capital en Oriente en un lugar que sirviera, a su vez, de baluarte contra los ataques de los bárbaros. Para ello, eligió una pequeña población ubicada estratégicamente a orillas del Bósforo, con un buen puerto natural. El nombre de la ciudad cambió de Bizancio a Constantinopla cuando el emperador Constantino movió su capital imperial a este lugar en 330 d.C. Constantino extendió la ciudad, que consideró como una Nueva Roma, ordenando la construcción de un foro, templos, palacio, acueductos, circo y un amplio Hipódromo sobre las siete colinas de la ciudad. Los sucesores de Constantino continuaron embelleciendo la ciudad, que se transformó en una de las más  bellas de todo el mundo conocido. MAPA 9 - IMPERIO BIZANTINO Y CONSTANTINOPLA   A diferencia de Roma, Constantinopla fue fundada como una ciudad cristiana desde el principio. En ella, la tradición romana, la cultura griega y la religión cristiana se dieron cita. Constantino enfatizó el helenismo de la ciudad con sus bibliotecas, museos, erudición y arte. Pero la ciudad fue también romana, ya que el latín se hablaba en sus calles y especialmente era la lengua oficial del Imperio. “La  Nueva Roma que es Constantinopla” era el título oficial de la ciudad y sus ciudadanos siguieron siendo  Romaioi. Las leyes y la organización del Estado continuaron siendo tan romanas como sus tradiciones militares.  No obstante, la característica más sobresaliente de Constantinopla es que era una ciuda ciudadd cristiana. Si bien el paganismo continuó durante un buen tiempo, el movimiento cristiano fue ganando adeptos e influyendo notablemente en la cultura bizantina. Los ciudadanos de Constantinopla eran conscientes de su herencia griega y romana, pero su concepto básico de la vida era diferente. Estaba más afectado  por percepciones per cepciones e ideas orientales que occidentales, entre ellas el cristianismo. Como indica Steven Runciman, “… la historia del Imperio Bizantino es la historia de la infiltración inf iltración de ideas orientales para teñir las tradiciones grecorromanas, y de la reacción periódica. Porque a pesar de todo esto, las tradiciones grecorromanas continuaron hasta el fin.”  fin.” 

Alfred Weber:  “Al igual que Roma— hasta hasta que ésta se desmoronó interna y administrativamente — , Bizancio era un estado-ciudad, a pesar de todo su gran territorio circundante. Por mucho que en Bizancio hubiese cosas procedentes del antiguo Oriente, por mucho que hubiese una burocracia, un hieratismo, un ritualismo, un ceremonial y otras dimensiones por el estilo extrañas a la cultura del prístino mundo antiguo, y por mucho que todo esto circunscribiese y configurase su s u vida, lo cierto es también que Bizancio siguió siendo en esencia una polis antigua; y su base fundamental, su subsuelo continuó siendo la libertad que había sido creada en un principio por el mundo antiguo —  antiguo —  por muy paradójica p aradójica ciertamente

que esta comprobación pueda resultar a la luz del fuerte bizantinismo entonces existente —  existente — . La

 

 

fórmula empleada de ordinario en la que se dice que Bizancio tiene elementos de la antigüedad helénico-cristiana, elementos del Oriente de la última época y elementos del viejo paganismo, fundidos en una unidad viva, es exacta.”  exacta.”   Constantinopla fue creciendo también en tamaño, riqueza y prestigio en función de las circunstancias políticas que la rodearon. Alarmado por el avance de las tribus germánicas, el emperador Teodosio II (408 – 450) 450) ordenó a sus ingenieros la construcción de una muralla alrededor de la ciudad de casi 8 metros de alto y de unos 5 kms. de longitud. Teodosio II dividió sus dominios entre sus dos hijos. Uno gobernó la parte occidental del Imperio mientras que el otro reinó sobre las tierras más ricas y estables del este. En 410, Alarico condujo condu jo a sus visigodos y capturó y saqueó a Roma. Constantinopla quedó como único centro administrativo del Imperio Romano. Después del saqueo de Roma por los vándalos en 455, la posición de Constantinopla como la más grande y más segura de las ciudades romanas fue indiscutible.

 _ La creación del Imperio Bizantino  Durante los siglos IV y V, el ideal de un Imperio Romano unificado y único, que reuniera a Oriente y Occidente, era más una aspiración que una realidad. Los sucesores de Constantino lucharon por quedarse con el Imperio, hasta que Constancio (337 – 361), 361), uno de sus hijos, quedó solo al frente del gobierno. Constancio persiguió a los paganos, ordenó la pena de muerte para quienes ofrecieran sacrificios y quienes se convirtieran al judaísmo. Los opositores paganos de Constancio fueron considerados como traidores. También tuvo incidentes con los cristianos ortodoxos, porque favoreció la herejía arriana. Su primo Juliano (332 –  (332 – 363) 363) lo sucedió en el trono, si bien gobernó sólo dos años (361 – 363). 363). Fue educado desde temprana edad en el cristianismo bajo la dirección del obispo Eusebio de Nicomedia. Mientras residió en Capadocia, ministró en iglesias, probablemente como lector. Sin embargo, en secreto leía las conferencias de un retórico pagano y por influencia de la filosofía griega, especialmente el neoplatonismo, renegó de su fe y puso todo su empeño para establecer de nuevo el  paganismo. Se inició en los misterios eléusicos mientras seguía profesándose cristiano. Se burló de los cristianos a través de numerosos libelos y obras satíricas de las que era autor. Le quitó al clero cristiano los  privilegios e inmunidades que habían recibido bajo Constantino. Prohibió a los cristianos la enseñanza de la literatura clásica y la filosofía, mientras ordenaba destruir sus libros sagrados, con el fin de reducirlos a una secta despreciable e ignorante. Tomó la predicación, las vestiduras púrpuras y los himnos de la adoración cristiana y los aplicó a la adoración pagana. Los cristianos lo llamaron Juliano el Apóstata. Su muerte en batalla contra los persas puso fin al intento de reestablecer el paganismo. Él fue el último emperador romano que abogó abiertamente por el paganismo.

Juliano el Apóstata: “¿No fueron los dioses los que revelaron todo su conocimiento con ocimiento a Homero, Hesíodo, Demóstenes, Herodoto, Tucídides, Isócrates y Lisias?… Pienso que es absurdo que aquellos que exponen las obras de estos escritores deshonren a los dioses a quienes ellos solían honrar.… Sin embargo, si ellos piensan que estos escritores estaban equivocados con respecto a los dioses más honrados, entonces que se trasladen a las iglesias de los galileos para exponer a Mateo y Lucas, dado que ustedes galileos [cristianos] los están obedeciendo cuando ordenan a la gente que se abstenga de la adoración en los templos [paganos]. Por mi parte, deseo que sus oídos y sus lenguas puedan ‘nacer de nuevo,’ como dirían ustedes, en cuanto a cuanto a estas cosas

en las que yo pueda siempre tener parte, y todos los que piensan y actúan como a mí me place.”  place.” 

 

 

Después de Juliano, el Imperio Romano Oriental fue gobernado por emperadores débiles: Joviano, Valente y Teodosio. Joviano (331 – 364) 364) se resistió a su elección por parte del ejército como emperador  porque decía que era cristiano. Las tropas dijeron que ellos también lo eran y no le permitieron declinar. Joviano anuló la legislación anti-cristiana de Juliano y proclamó la libertad de adoración durante su  breve reinado de ocho meses (363 – 364). 364). Valente (328 – 378) 378) gobernó de 364 a 378, pero le faltó el valor, la resolución y la habilidad que tuvo su hermano Valentiniano en su gobierno de Occidente. Además, se vio involucrado en numerosas controversias teológicas. Teodosio (347 – 395), 395), llamado el Grande, era un guerrero español que después de sanar de una enfermedad, se convirtió al cristianismo (380) y se dedicó a su defensa e implantación. Después de ser  bautizado, publicó el famoso edicto de Salónica, por el cual estableció como ley del Estado todos los acuerdos del Concilio de Nicea (325). Teodosio el Grande gobernó de 379 a 395 y se lo considera como el primer emperador bizantino ortodoxo, ya que consiguió que el senado romano reconociera que la religión de Cristo era verdadera e hizo del cristianismo ortodoxo la religión exclusiva del Imperio. En 381, estableció en Oriente la ortodoxia romano-alejandrina como ley del Imperio. Su voluntad ortodoxa quedó registrada en el Código de Teodosio, que junto con el Credo de los Apóstoles, hizo de la doctrina de la trinidad el dogma máximo y fundamental de la cristiandad bizantina. Teodosio el Grande no sólo ortodoxia nicenaelsino que sagrado también custodiado persiguió a los cerróprohibió sus templos y destruyó sus afirmó ídolos. laOrdenó extinguir fuego porpaganos, las vestales, los  juegos olímpicos y castigó con la pena de muerte a todo el e l que adorase dioses falsos. Teodosio era fervientemente ortodoxo, y al convocar el segundo concilio ecuménico en Constantinopla (381), quiso forzar la unidad del mundo cristiano eliminando al arrianismo. En 394 se ciñó la corona del Imperio Romano Occidental. Antes de morir (395), Teodosio dividió el Imperio entre sus dos hijos: a Arcadio le correspondió el Oriente, con Constantinopla como capital; y a Honorio el Occidente, con Milán como capital (y posteriormente Ravena). El reinado de Teodosio había marcado una nueva era en el Imperio Romano, que se había transformado en un imperio cristiano ortodoxo. No obstante, con su muerte, Oriente y Occidente terminaron por separarse para siempre.

José Luis Romero: “Consumada la división del imperio en 395, el Oriente O riente quedó en manos de los emperadores de Constantinopla, cuya primera actitud fue afirmar teóricamente sus derechos sobre el Occidente, pero preocuparse sobre todo de defender su propio territorio. Ésta fue la orientación de los emperadores del siglo V, debido a la cual se manifestó una acentuada tendencia a la afirmación de los elementos griegos y orientales con detrimento de la tradición romana propiamente dicha. Esa tendencia estaba alimentada en parte por la misma Constantinopla, pero más aún por las provincias orientales del imperio.”  imperio.”   La dinastía iniciada por Teodosio el Grande terminó con Valentiniano III (419 –  (419 – 455), 455), quien reinó desde 425 hasta que fue asesinado en 455. Este emperador bizantino lanzó un edicto en 445, que favoreció notablemente las pretensiones del obispo de Roma de ejercer supremacía sobre todas las sedes episcopales en el mundo cristiano. Según él, la Iglesia occidental debía estar sujeta totalmente a Roma y a la primacía de su obispo.

Valentiniano III: “Estamos convencidos de que la única defensa para nosotros y para nuestro Imperio está en el favor del Dios del cielo: y en orden a merecer este favor es nuestro primer cuidado apoyar la fe cristiana y su venerable religión. Por lo tanto, en la medida en que la  preeminencia de la Sede Apostólica sea asegurada por el mérito de San Pedro, el primero pr imero de los obispos, por la posición conductora de la ciudad de Roma y también por la autoridad del

santo Sínodo, que ninguna soberbia intente nada contra la autoridad de esa Sede. Porque la paz

 

 

de las iglesias sólo será preservada en todas partes cuando todo el cuerpo reconozca a su gobernante.… Por lo tanto, … decretamos, como edicto perpetuo, que nada será intentado por los obispos galicanos, o por aquellos de cualquiera otra provincia, contrario a la antigua costumbre, sin la autoridad del venerable papa de la Ciudad Eterna. Pero sea lo que fuere que la autoridad de la Sede Apostólica haya establecido, que eso sea tenido como ley por todos.”   Durante el medio siglo que duró la dinastía teodosiana, el Imperio Romano Occidental entró en rápida decadencia hasta que los bárbaros germanos lo derrumbaron. En 476, el rey ostrogodo Odoacro forzó al último emperador romano, Rómulo Augústulo, a abdicar. Con esto, Constantinopla quedaba como única ciudad imperial. Además, tenía la ventaja de ser más inexpugnable a los ataques bárbaros. Visigodos, hunos y ostrogodos cruzaron el río Danubio, pero se movieron hacia Occidente antes que hacia Constantinopla, cuya invasión consideraron complicada. Con Arcadio (377 – 408), 408), quien gobernó desde 395 como emperador en Constantinopla, nació el Imperio Romano de Oriente o Imperio Bizantino. A la muerte de Arcadio (408) le sucedió su hijo Teodosio II, que gobernó siendo un niño (de 408 a 450), asistido con habilidad por su hermana Pulqueria. Para el año 431, Teodosio había casi limpiado de paganos el Imperio, y en 438 se jactaba de que no había quedado ninguno en sus dominios. Dos de sus contribuciones mayores fueron la ordenación del Código Teodosiano y la fundación de la universidad de Constantinopla. Muerto Teodosio II, Pulqueria se casó con Marciano, quien se hizo cargo del Imperio (450 –  (450 – 457). 457). Su sucesor fue León I, quien gobernó de 457 a 474 y continuó la lucha contra las amenazas de los bárbaros. Su  poder fue sostenido por tropas mercenarias de origen isaurio (pueblo del interior de Asia Menor), que trajo a Constantinopla para contrarrestar las tropas germánicas que hasta entonces predominaban y le eran hostiles. La rivalidad entre los grupos armados complicaba los conflictos religiosos, que distraían la atención de la corte en la capital imperial. Finalmente, en medio del caos, los isaurios lograron imponerse hasta el punto de consagrar como emperador, a la muerte de León I, a uno de entre ellos, Zenón, conocido como el Isáurico, que ocupó el trono desde 474 hasta 491. Zenón intentó reconquistar Italia, para lo cual envió a Teodorico, rey de los ostrogodos, para que sometiera a Odoacro. Pero el intento fracasó. El sucesor de Zenón, Anastasio (491 –  (491 – 518) 518) gobernó en medio de luchas religiosas y ataques extranjeros (eslavos y búlgaros, además de los persas), y se vio forzado a cambiar su política, sosteniendo que los intereses del Imperio estaban principalmente en Oriente. A occidentales lo largo del siglo VI, los Al emperadores orientales hicieron todo lo posible por recuperar las  provincias del Imperio. principio, estos esfuerzos fueron mayormente defensivos. Entre 493 y 526, Teodorico mismo lanzó una serie de campañas contra Constantinopla, que fracasaron. Justino I (518 – 527), 527), un campesino ilírico que no carecía de habilidad, logró contener a los persas y  búlgaros; además estableció la paz religiosa y preparó el reinado de su sobrino Justiniano J ustiniano (482 – 565). 565).

DESARROLLO DEL IMPERIO BIZANTINO   _ La llegada al trono de Justiniano  En 527, Justiniano llegó al trono imperial en Constantinopla. En verdad, el siglo VI está dominado  por la ffigura igura de Justiniano y por su política de reanudación de las relaciones con Occidente. Él y su controvertida esposa, Teodora, reinaron hasta 565, y su gobierno marca el apogeo del Imperio Cristiano Bizantino. Bajo el gobierno dinámico de Justiniano el Imperio Oriental logró recuperar muchos territorios en Occidente, donde los reinos germánicos —  germánicos — con con excepción de los francos en Galia —  Galia — habían habían caído en decadencia. Justiniano se propuso también recuperar el norte de África de mano de los vándalos, Italia de los ostrogodos y España de los visigodos. La guerra con Persia volvió a estallar y

esto mantuvo ocupados a sus ejércitos en el este. Justiniano también procuró reconciliarse con el

 

 

 papado, después de los conflictos que se habían producido entre ambos poderes a causa de las querellas religiosas. Esa reconciliación le atrajo las simpatías de la población romana de Italia, que comenzó a mostrarse hostil hacia los reyes ostrogodos. Esto le dio pie para intentar la invasión militar. En su notable gestión de gobierno, Justiniano fue acompañado hasta 548 por su esposa. La emperatriz Teodora, que había sido actriz, fue una mujer enérgica que influyó en la política religiosa del Imperio. De la relación de ella con el emperador, Steven Runciman comenta lo siguiente:

Steven Runciman: “Su coraje, su claridad y falta de escrúpulos fueron invalorables para él, y su poder incluso superó al de él. Pero estaban divididos en una cuestión de política. Teodora era monofisita, y usaba su influencia para asegurar el triunfo de su herejía. Ella no tuvo éxito,  pero mientras vivió los monofisitas gozaron la seguridad segur idad de su fuerte protección y aliento. De haberse hecho su voluntad, Egipto y Siria podían haber permanecido como provincias leales del Imperio. Pero Justiniano, con sus ambiciones occidentales, temió no complacer co mplacer al Occidente ortodoxo. Además, él se consideraba un teólogo y no estaba convencido con el monofisismo. Pero esperaba encontrar alguna forma de compromiso que pudiera imponer sobre toda la cristiandad. Él y Teodora estaban de acuerdo en que todos, todos , incluso los patriarcas y papas, debían seguir la teología imperial.”  imperial.”  Las dificultades internas empañaron los primeros años del reinado de Justiniano. Finalmente, estallaron levantamientos (532) en relación con una disputa entre los que apoyaban a corredores de carros rivales en el Hipódromo. La ciudad se dividió en dos bandos: los Azules, que pertenecían mayormente a la clase de los propietarios, y los Verdes, que consistían básicamente de la gente común. La causa de la revuelta de Niké de Niké (Niké significa “conquistemos”) descansaba descansab a sobre el aumento general de un impuesto que el emperador necesitaba para sus proyectos. Pero la lucha entre Verdes y Azules era más que deportiva, pues estos grupos eran expresiones de sectarismo político y religioso. Los rebeldes demolieron Constantinopla. Para el año 537, el general eslavo Belisario, líder del ejército de Justiniano, había aplastado la revuelta, que dejó un saldo de 30.000 muertos.

 _ El gobierno de Justiniano  El final de la sublevación de Niké le dio a Justiniano la estabilidad necesaria para lanzar una campaña en conducir orden a recuperar provincias Justiniano escogió Belisariodel al persa  Narsés para la invasiónlaspara desalojaroccidentales. a los ostrogodos de Italia, a los avándalos v ándalos d ely norte de África, y a los visigodos de España. El primer paso de la guerra de Justiniano contra las tribus germánicas fue asegurar la paz a lo largo de la frontera oriental con el Imperio Persa Sasánida, haciendo un acuerdo por el que pagó un fuerte tributo anual. Los ejércitos de Justiniano resultaron victoriosos en sus primeras campañas. Belisario derrotó a los vándalos en el norte de África (533), Sicilia, Córcega y Cerdeña. Los visigodos fueron expulsados de sus dominios en buena parte de España (554). Estas campañas drenaron de recursos al Imperio y Justiniano careció de suficientes reservas como  para mantener sus s us conquistas. El desastre oocurrió currió cuando estalló una plaga en 542. Simultáneamente Simultáneamente,, los eslavos y los ávaros atacaron al Imperio desde el norte y los sasánidas rompieron su acuerdo, e iniciaron hostilidades en la frontera oriental. Justiniano no pudo hacer frente a estos conflictos con los escasos recursos de que disponía. Su reinado terminó con el emperador controlando un Imperio Oriental en decadencia y hundiéndose. El fracaso de Justiniano en mantener bajo su control las provincias occidentales fue definitivo. Sus campañas en Occidente fueron el último esfuerzo de los emperadores bizantinos por reunir bajo su

mando al viejo Imperio Romano. A pesar de estas derrotas militares, Justiniano creó un legado de grandes logros. No obstante, los problemas de las controversias teológicas no terminaron bajo el

 

 

gobierno de sus sucesores. Justino II (565 –  (565 – 5578) 78) procuró poner fin a los conflictos teológicos con un edicto por el cual profesaba la ortodoxia y prohibía las querellas en cuanto a personas y expresiones. Envió al patriarca de Constantinopla a Persia a intentar una reconciliación, pero los líderes monofisitas se rehusaron a discutir cualquier unión posible. Entonces comenzó una persecución contra ellos, que terminó con Tiberio (578 – 582), 582), su sucesor.

 _ Evaluación del gobierno de Justiniano  Justiniano intentó dominar todos los aspectos de su Imperio, incluyendo las decisiones doctrinales de la iglesia. Sus decisiones muchas veces estuvieron motivadas por una combinación de intereses  políticos y convicciones teológicas. Sus planes políticos demandaban la pacificación pac ificación de la Iglesia y la terminación de las controversias teológicas. Su ambición mayor era er a revivir el antiguo Imperio Romano universal y frenar las invasiones germanas. Pero para ello necesitaba de la armonía en el gobierno, las leyes y la Iglesia. Su ideología política era el cesaropapismo, es decir, el dominio absoluto abs oluto del imperio sobre toda realidad, incluida la Iglesia.

Reinhold Seeberg:  “Nadie antes que él había intentado llevar a cabo con tanta amplitud y osadía de la yIglesia de Estado. Las doctrinas y ordenanzas eclesiásticas eran leyes estataleslayidea la herejía el paganismo, crímenes castigados por el gobierno civil. El poder de la Iglesia fue de esta manera vastamente acrecentado, pero perdió a la vez todo vestigio de independencia y carácter distintivo frente al Estado. El Emperador era infatigable en sus esfuerzos por aumentar el poder del clero, pero a la vez gobernaba en la Iglesia con poder despótico. Por grande que era su poder, se veía confrontado, sin embargo, por inmensas dificultades en la realización final de sus propósitos. La antigua unidad de las Iglesias romana y griega se había disuelto. Roma y Constantinopla eran ahora centros independientes, y era necesario combinarlos en uno. Era necesario armonizar primero la Iglesia de Oriente y luego unirla con la de Occidente. Restituir la ortodoxia calcedoniana fue, pues, desde el comienzo, la consigna adoptada. Era una empresa ardua, porque el poder del monofisismo aún permanecía intacto en el Oriente y gozaba, además de la simpatía de la emperatriz, Teodora, por no mencionar el favor de multitudes de piadosos creyentes.” creyentes. ”  Su política de perseguir a los monofisitas sirios y egipcios resultó en que más tarde (siglo VII) estas  poblaciones fueron presa fácil de los invasores musulmanes, que prometieron tolerancia en lugar de  persecución. Sus intentos por unificar Oriente y Occidente resultaron en lo opuesto. Si bien logró restablecer el control militar en algunas partes de su Imperio, llegó a agotar los recursos económicos y humanos a tal grado que sus sucesores no pudieron mantener los logros obtenidos. Italia se perdió totalmente a los diez años de su muerte. El monofisismo poco a poco fue alcanzando el carácter de  patrimonio teológico permanente para las iglesias sirias co conn el jacobismo, y se tornó en la tendencia  predominante en las iglesias copta, abisinia y armenia.

COSMOVISIÓN Y CULTURA  La influencia del helenismo, y su contacto con los pueblos orientales, le otorgaron al Imperio Bizantino fisonomía y características propias. Rodeado de peligros exteriores y carcomido en su interior por las luchas políticas y las querellas religiosas, el Imperio Romano de Oriente pudo

sostenerse tras sus seguras fronteras naturales, con un ejército bien equipado y una eficaz organización administrativa. Además, la fe cristiana y el celo por la ortodoxia llevaron a un fuerte sentido de

 

 

identidad y centralización en torno a la religión. Por esto mismo, Constantinopla se transformó en un centro de irradiación cultural, de tradición grecorromana, pero notablemente influido por el helenismo.    _ La bizantina A civilización diferencia del mundo occidental y latino, que se vio convulsionado por las invasiones bárbaras y el establecimiento de los reinos germánicos, el mundo oriental y griego no sufrió s ufrió una discontinuidad con la cultura clásica grecorromana. Mientras en Occidente la iglesia se vio desafiada a ocuparse de la evangelización de los pueblos invasores y su incorporación a la cultura tradicional, en Oriente la lucha fue contra las herejías emergentes y la resistencia a la penetración de los bárbaros primero y más tarde del Islam. La gran ventaja del Imperio Bizantino fue que su ciudad capital y territorios aledaños no fueron invadidos u ocupados durante los primeros siglos de su existencia, de modo que los bizantinos  pudieron mantener la continuidad de su civilización.

Lawrence Cross:  “La fe y la cultura en el cristianismo oriental son algo multifacéticos, que surge de tres culturas distintivas. Es una fusión de los elementos griego, latino y oriental, con contribuciones a lo largo del tiempo de los pueblos eslavos y otros grupos étnicos. A partir de estas culturas que surgió una cultura particular: un Ésta nuevo rito, una bizantina.”  iglesia con  una espiritualidad fue tanto universalnueva comoyuniversalizante. es la iglesia bizantina.” La civilización bizantina se caracterizó por conservar el legado de la antigüedad grecorromana,  pero modificado con elementos orientales y cristianos. La cultura bizantina se basó en la tradición clásica —  particularmente en lo artístico y en el derecho — y en la cristiana por su interés en las controversias teológicas, en la patrística y en la hagiografía o vida de los santos. Los eruditos de Constantinopla, denominados “los bibliotecarios del género humano,” conservaron manuscritos, escribieron antologías y enciclopedias. La influencia de esta cultura se extendió hacia el Oriente y diversos países de Europa occidental, entre ellos Italia y España.

José Luis Romero:  “Sobre el área del Imperio Romano se advierten dos regiones marcadamente diferenciadas: el Oriente y el Occidente. La primera revela sólo una superficial influencia de la romanización, y por el contrario una acentuada perduración de las tradiciones culturales del Oriente clásico y de Grecia, en tanto que la segunda manifiesta una penetración vigorosa de la romanidad que casi borra las leves tradiciones culturales indígenas: celtas, íberas, italiotas, etc. Esta diferenciación se acentuó a lo largo de la época imperial y se hizo patente a  partir de los tiempos de Diocleciano, en que quedó reflejada en la división política del Imperio, y consagrada definitivamente a la muerte de Teodosio. Durante ese lapso — esto esto es, en el siglo IV — se se acentuó más y más: la tradición greco-oriental despertó notablemente en el área oriental del Imperio, y el desarrollo y la difusión del cristianismo acentuó la diferenciación, pues en un unaa y otra región estimuló un distinto tipo de religiosidad y suscitó, además, la rivalidad entre las distintas iglesias de una y otra parte, cuyos ideales eran diversos: más especulativos en Oriente, más formalistas y activistas en Occidente.”  Occidente.”  El elemento más poderoso como factor f actor aglutinante del nacionalismo y la identidad bizan bizantina tina fue la religión cristiana. Del mismo modo que en el mundo moderno la ciencia y la tecnología definen la cultura, en el mundo bizantino fue la fe cristiana el factor definidor. La doctrina, el rito, el milagro, lo sobrenatural estaban presentes en todos los aspectos de la vida cotidiana. Los héroes populares

favoritos de Bizancio no fueron militares y políticos, sino santos y ascetas. La intensa religiosidad resultó en una unión estrecha entre la Iglesia y el Estado.

 

 

 _ Arte y arquitectura  Muchos padres griegos, como Clemente de Alejandría, consideraban que la prohibición de hacer imágenes del segundo de los Diez Mandamientos, era mandataria para los cristianos. Las imágenes y estatuas religiosas pertenecían al mundo demoníaco de los paganos. No obstante, el mismo Clemente de Alejandría da instrucciones en cuanto a la imagen más adecuada para el anillo de sello de un cristiano, y recomienda que usen representaciones que, sin ser específicamente cristianas, admitan una interpretación como tal. Así sugiere el uso de una paloma, un pez, una barca, una lira o un ancla, y que se eviten aquellos símbolos que sugieran idolatría, borrachera o pasión erótica. En general, los cristianos utilizaron imágenes moral y espiritualmente neutrales (los paganos también las utilizaban),  pero les dieron un significado diferente. Después de la “conversión” de Constantino, la Iglesia en Oriente gozó de mayor libertad para la expresión pública de su fe. La construcción de grandes templos y el desarrollo de una arquitectura, escultura y arte decorativo cristiano fueron alentados por la corona misma. Los mosaicos pintados p intados con temas del evangelio y la creación de símbolos del cristianismo dieron lugar a un desarrollo casi explosivo de lo que se conoce como arte cristiano bizantino. Estos elementos no se limitaron a ser meras expresiones plásticas o artísticas, sino que se integraron como formas fundamentales del culto cristiano y estuvieron muy ligados a sus manifestaciones litúrgicas. Justiniano utilizó la devastación ocasionada por la revuelta de Nika como una oportunidad para reconstruir la ciudad de Constantinopla. En 537 los obreros terminaron la construcción de la iglesia de Santa Sofía (Santa Sabiduría). Santa Sofía fue un extraordinario extraor dinario logro arquitectónico. Su nave principal tiene la forma de una cruz griega y sobre la planta cuadrada donde se cruzan los dos brazos de la cruz se levanta la cúpula central, que tiene un diámetro de 30 metros me tros y se levanta a una altura de 55 metros metros.. La cúpula está sostenida por cuatro pechinas que qu e a su vez descansan sobre otros o tros tantos pilares colosales. Las columnas son de mármol verde y pórfido rojo; el piso es de mosaico. Cuando el edificio fue completado, se dice que Justiniano exclamó: excla mó: “¡Oh, Salomón, te he superado!”  superado!”   La fusión del arte romano con el de los griegos y orientales dio origen a lo que se conoce como arte  bizantino, que tuvo su período de apogeo del siglo VI al XI, y su expresión más destacada la constituyen constituyen los templos monumentales y suntuosos. El predominio de las líneas rectas, característico de las iglesias romanas, fue sustituido por las curvas mientras que la policromía fue el elemento decorativo más empleado. influencia persa en lamateriales construcción del techado, parapara el que utilizaron la  bóveda y laLa cúp cúpula ula dorada. Lospuede ricos yverse costosos de Oriente sirvieron efectuar ef ectuar lujosas decoraciones, que otorgaron a los templos bizantinos características fastuosas y monumentales. La pintura y la escultura fueron utilizadas con fines decorativos. La figura humana no ocupó un lugar destacado, y los artistas se limitaron a copiar los modelos tradicionales, razón por la cual sus obras resultaron brillantes y llenas de colorido, pero carentes de expresividad. Por este tiempo se verificó también un gran enriquecimiento en los ornamentos y elementos decorativos en los templos. Cálices, candelabros, velos de seda, vestiduras blancas y decoraciones en plata sobre el altar comenzaron a enriquecer la estética del lugar de culto. La construcción de un baldaquín o pabellón laminado en plata fina sobre el altar comenzó a ser casi un requisito. De todos modos, las formas plásticas bizantinas fueron una expresión cristiana de la realidad del mundo oriental. Durante más de mil años, Bizancio defendió a Europa oriental contra los ataques de las hordas asiáticas que pugnaban por penetrar en el continente. Además, mientras Occidente estaba en manos de los bárbaros, Constantinopla se transformó en el asilo de la antigua civilización grecorromana. De este modo, el Imperio Bizantino elaboró una cultura propia, que irradió sobre los

 pueblos bárbaros b árbaros que lo rodeaban. Constantinopla ffue ue para los árabes y eslavos lo mismo que Roma  para los germanos.

 

 

Alfred Weber: “La cultura de Bizancio asocia el fresco, el mosaico mosa ico y la muy lujosa decoración interior rica en colores, con aquella expresión de una solemnidad incorpórea, monumental y  piadosa, realizada con medios esencialmente antiguos y que, sin embargo, era algo que no  pertenecía al espíritu de la Antigüedad.… Desde entonces, el Oriente ha seguido adherido firmemente a este tipo de expresión, completándola tan sólo mediante un severo arte ar te de íconos, la mayor parte de las veces frontales. Esto constituye un fenómeno paralelo p aralelo al que se desarrolló en cuanto al culto en el cristianismo oriental; a saber, el hecho de que sobre sobr e la base y dentro del marco de la vieja misa y liturgia oriental se desenvolvió la antífona con himnos entreverados.”  entreverados.”  

 _ Codificación de la ley  Lo más perdurable del gobierno de Justiniano fue su obra legislativa. A comienzos de su reinado, Justiniano creó una comisión para reunir las leyes del Imperio (528 –  (528 – 535). 535). Era necesario reorganizar el derecho romano y efectuar su ordenamiento y eliminar las contradicciones que entorpecían la labor de la justicia. El advenimiento del cristianismo había modificado las costumbres y por lo tanto su influencia se hacía sentir en la aplicación de los fallos. Era necesario actualizar la legislación para eliminar la oscuridad y agilizar la justicia. El trabajo de la comisión resultó en lo que se conoció como Corpus Juris Civilis (Cuerpo de Leyes Civiles). El Corpus estaba dividido en tres partes: un Código (conocido como Código de Justiniano, 529), que incluía todas las leyes desde los días del emperador Adriano; las  Instituciones, que era un libro de texto sobre procedimientos y principios legales; y, el Digesto, que era un resumen de opiniones legales. La importancia del Corpus Juris Civilis era doble. Por un lado, ayudó a Justiniano y a sus sucesores a centralizar el poder y crear un mecanismo burocrático eficiente para administrar el Imperio. Además, la codificación de Justiniano salvó para la posteridad la sabiduría jurídica romana. Al mismo tiempo, el Corpus  se transformó en el modelo sobre el cual más tarde la mayoría de los estados europeos  basaron su sistema legal, a partir del siglo XII.

 _ Teocracia absolutista  Como emperador bizantino, Justiniano ejerció un poder supremo en materia política y religiosa. Esta combinación de la autoridad política y religiosa es conocida como cesaropapismo. En Occidente, el poder político estaba dividido entre un buen número de facciones en conflicto, con flicto, en cambio en Oriente, el emperador (basileus, rey) era al mismo tiempo el jefe de la Iglesia. Por eso, su autoridad era casi divina, y se pretendía revestir a su persona con un carácter sagrado. Sus pronunciamientos teológicos a través de edictos tenían el peso de verdaderas decisiones eclesiásticas. Al nacer el heredero, era costumbre tonsurarlo, del mismo modo como si fuera ordenado sacerdote. Ninguna figura secular o religiosa ejercía un poder tan autocrático y absoluto en Occidente. El cesaropapismo bizantino fue único en su tipo.

Alfred Weber:  “Esta teocracia absolutista fue revestida  revestida  con el ceremonial del Oriente; fue consagrada por la teología cristiana, y se apoyó efectivamente sobre una viejísima tradición oriental y sobre un ejército, formado en los varios tiempos de modo diverso, pero siempre con excelente disciplina. De aquí que existiese siempre —  siempre — lo lo mismo a lo largo de los períodos de descomposición que de las épocas de florecimiento —una florecimiento —una gigantesca corte, un ‘palacio imperial sagrado’ (que constantemente era ampliado a través de los siglos), con un especial departamento de mujeres, con eunucos y con superlativo fausto y lujo; y de aquí que en esta

corte hubiese una etiqueta cuyo carácter puntilloso apenas nos podemos imaginar, una gran arrogancia cortesana.”  cortesana.” 

 

 

Generalmente se ha marcado el contraste entre la actitud dualista en cuanto a la relación Iglesia y Estado que prevaleció en Occidente, con la actitud de dominio autoritario del emperador sobre la Iglesia que caracterizó a Oriente. Pero el contraste no es tan simple. La teoría que se desarrolló en el Imperio Bizantino se basaba enconflictos la necesidad que el emperador fuese ortodoxo. Esto,que a su devastaron vez, fue el resultado de los sangrientos que de rodearon a las controversias teológicas Oriente (las controversias arriana e iconoclasta, especialmente).

Henry Chadwick: “El término ‘cesaropapismo’ no es una un a palabra útil o iluminadora para hacer amplias generalizaciones acerca de la teoría política del Oriente griego. Un escritor tan occidental como el Papa León el Grande puede decirle al emperador ortodoxo griego que él está investido no sólo con imperium sino también con un oficio sacerdotal (sacerdotium) y que  por el E Espíritu spíritu Santo está preservado de todo error doctrinal. Tanto el Papa Gelasio como el Papa Gregorio el Grande reconocieron la autoridad del emperador en cuestiones temporales. La diferencia entre Oriente y Occidente descansa más en que el mundo bizantino no pensaba de sí mismo como dos ‘sociedades,’ sagrada y secular, sino como una sola sociedad en armonía con el emperador como la contraparte terrenal del Monarca divino. El balance de esta teoría  podía ser afectado ser seriamente iamente por el dominio del Estado por par parte te de la Iglesia; I glesia; la teoría más dualista de Occidente podía producir el dominio eclesiástico sobre la sociedad civil.”  civil.”  

IGLESIA, ESTADO Y SOCIEDAD   _ La destrucción del paganismo  Los emperadores cristianos de Oriente comenzaron a desarrollar la idea que ser hereje o infiel era sinónimo de deslealtad al Imperio. A su vez, era responsabilidad del emperador favorecer en todo lo  posible a aquellos ciudadanos que se llamaban cristianos. Con el tiempo, la legislación imperial fue f ue introduciendo limitaciones a quienes no se confesaban cristianos. Todo esto resultó en verdaderas  persecuciones contra los paganos y la destrucción de sus templos muchas veces llevadas a cabo por monjes fanáticos con la ayuda de fuerzas militares. El gran templo de Serapis en Alejandría fue desmantelado en 391 bajo la dirección del obispo Teófilo de Alejandría (m. 412). Los paganos enfurecidos se volvieron contra los cristianos y masacraron a un buen número. El emperador ordenó la destrucción del templo y de su famoso ídolo que se creía aseguraba la inundación del río Nilo cada año. En otros casos, los templos paganos fueron transformados en iglesias (siglo V), como el Partenón en Atenas, que fue consagrado como la iglesia de Santa María. Surgieron conflictos en otras partes del Imperio a medida que obispos guiaban a su gente en la destrucción de santuarios paganos e incluso en matanzas para par a lograr estos propósitos. El paganismo no  pudo sobrevivir como una religión singular y pública, porque carecía del celo que caracterizaba al cristianismo. Sin embargo, logró sobrevivir infiltrándose en las iglesias, en sus creencias y en sus  prácticas. De todos modos, el paganismo fue desapareciendo paulatinamente a lo largo de mucho tiempo. En Atenas, la escuela neoplatónica, que había sido el último refugio del paganismo, sobrevivió hasta el 529 cuando el emperador Justiniano la cerró. Pero hasta los días de Justiniano, los paganos continuaban ocupando altas posiciones de gobierno sin mayores dificultades.

 _ La pugna entre el poder temporal y el espiritual  Después del establecimiento del cristianismo como religión del Imperio, comenzó el uso del poder

 político y militar con fines religiosos, especialmente la persecución de los paganos. En 388, los monjes de Callinicum en Mesopotamia condujeron a cristianos a poner fuego a una sinagoga judía. El

 

 

emperador Teodosio le ordenó al obispo de esa diócesis que restaurara el edificio, pero Ambrosio, obispo de Milán, intervino y amenazó con no administrar los sacramentos al emperador hasta que cancelase esa orden. Teodosio cedió a la demanda. En otra ocasión, Teodosio ordenó la masacre de 3.000 ciudadanos en venganza por la muerte de un general a manos de una turba. El obispo Ambrosio le notificó a Teodosio que sería excomunicado hasta que se arrepintiera públicamente por este crimen. Después de ocho meses, el emperador se humilló públicamente y reconoció su error. Estos incidentes  plantearon el problema de si la Iglesia era suprema sup rema por sobre la autoridad autor idad secular o si los oficiales del gobierno tenían autoridad sobre la Iglesia. En el desarrollo de este conflicto se pueden ver las diferencias de cosmovisión entre Oriente y Occidente. A partir de Justiniano, la diferencia entre la cristiandad latina y la bizantina era clara e irreversible. Esta oposición entre Oriente y Occidente en cuanto a valores culturales habría de perfilar dos mundos diferentes bajo el nombre de cristianos. Sobre este particular, José Luis Romero observa lo siguiente: “La rivalidad entre la Iglesia de Roma y los patriarcas de las grandes iglesias orientales— Alejandría, Alejandría, Constantinopla, Jerusalén — no no era solamente una puja por la preponderancia prepon derancia eclesiástica, sino también un conflicto entre concepciones diversas, pues el patriarca de Constantinopla, por ejemplo, admitía la supremacía del emperador sobre la Iglesia oriental, en tanto que el papa de Roma no sólo se negaba al  poder civil sino que en ocasiones aspiraba a sobreponerse a él. Cosa semejante ocurrió en el plano doctrinario.”   doctrinario.”

 _ Los efectos de la unión de la Iglesia y el Estado  El historiador A.H. Newman enumera ciertos beneficios y pérdidas que resultaron de la adopción del cristianismo como religión del Estado. Entre los beneficios cabe mencionar: (1) Más personas cayeron bajo la influencia del cristianismo. (2) El cristianismo tuvo una influencia más directa y  poderosa sobre la legislación del Imperio, forzando f orzando al Estado a prestar más atención a los derechos de las personas. (3) La posición de las mujeres se elevó notablemente, los castigos por celibato y falta de hijos fueron abolidos, se prohibió el concubinato, y el adulterio fue condenado como uno de los crímenes más grandes. (4) El asesinato de niños fue considerado como un crimen y eventualmente se abolieron los espectáculos de gladiadores. (5) El cristianismo ejerció una influencia positiva sobre la moralidad pública. Perolostambién hubo negativos: (1) Los cristianos se mostraron en cristianas sus leyes contra paganos. (2)resultados El cristianismo se secularizó: la legalización de las intolerantes corporaciones hizo que los obispos se dedicaran más al enriquecimiento de las iglesias, la legalización del domingo como feriado cambió este día de una fiesta espiritual a una legal, la oferta de incentivos temporales  para la profesión del cr cristianismo istianismo atrajo a multitudes de personas pers onas no regeneradas reg eneradas a las iglesias, y los  beneficios otorgados otor gados a los obispos incrementaron su orgullo y mundanalidad; (3) los paganos que se hicieron cristianos introdujeron al movimiento numerosos objetos, ritos, reliquias e instrumentos de adoración no cristianos; (4) el desarrollo jerárquico del clero se vio estimulado; (5) la iglesia se transformó en un poder perseguidor perse guidor al usar a la autoridad civil para suprimir el ddisenso isenso y el paganismo; (6) algunos cristianos reaccionaron a la mundanalidad mediante excesos de ascetismo y alejamiento del mundo en monasterios.

CRISTIANDAD BIZANTINA POSTNICENA   _ Las dos naturalezas de Cristo 

Durante todo el siglo que siguió a las decisiones del Primer Concilio Ecuménico de Nicea (325), la doctrina de las dos naturalezas de Cristo continuó bajo intenso debate, primero en cuanto al aspecto

 

 

humano y luego el divino. El Segundo Concilio Ecuménico de Constantinopla (381) afirmó la integridad de la naturaleza humana de Cristo, y el Tercer Concilio Ecuménico de Éfeso (431) afirmó la unidad de su persona. Finalmente, en el Cuarto Concilio Ecuménico de Calcedonia (451) dio la expresión más plena a la fe de la Iglesia, al declarar a Cr isto Cr isto “perfecto en divinidad y perfecto en humanidad.” Las discusiones posteriores agregaron poco a la declaración defensiva de Calcedonia, si  bien ésta en la práctica no fue definitiva. Después de la muerte de Juliano el Apóstata, los seguidores de Atanasio y los conservadores que seguían las enseñanzas de Orígenes (semi-arrianos) unieron sus fuerzas. En un sínodo realizado en Alejandría en 362, se acordó anatematizar (condenar) (cond enar) a quienes sostenían la her herejía ejía arriana y a quienes decían que el Espíritu Santo es una criatura separada de la esencia de Cristo. El sínodo también confesó la fe de los padres de Nicea. Mientras los conservadores y el partido de Atanasio estaban reunidos en Alejandría, los arrianos se estaban separando de algunos que ya no estaban dispuestos a decir que el Hijo es como el Padre, sino que estaban diciendo que el Hijo es diferente del Padre. También decían que el Hijo era falible mientras estuvo sobre la tierra y que podía haber pecado.    _ Los ConPadres la ayudaCapadocios de los tres grandes teólogos capadocios —  capadocios — Basilio Basilio de Cesarea, Gregorio de Nisa y

Gregorio Nacianceno — quedó quedó establecida la doctrina de una esencia ( ousia) o substancia compartida  por Padre, Hijo y Espíritu Santo, pero tres hupóstasis (personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo) como la declaración ortodoxa de la Trinidad. Basilio, influido por tendencias ascéticas, visitó Egipto y regresó a Asia Menor para propagar el monasticismo. Llegó a ser obispo de Cesarea de Capadocia en 370, una  posición que le dio autoridad eclesiástica sobre una amplia región en Asia Menor oriental. Por nueve años, promovió la doctrina neo-nicena. Gregorio de Nisa, el hermano menor de Basilio, fue un gran orador y escritor. Conocía muy mu y bien el pensamiento de Orígenes, y puso la filosofía helenista al servicio se rvicio de la doctrina cristiana. Sirvió como obispo de Nisa de 371 a 394 y se lo considera uno de los cuatro grandes padres de la Iglesia Bizantina. Gregorio Nacianceno (329 – 389) 389) era el hijo de un obispo y amigo íntimo de Basilio. Fue el  predicador más grande de los tres. Se opuso al arrianismo en Constantinopla y, con el apoyo del emperador Teodosio, convirtió a la ciudad la de fe los nicena. En padres 381, Teodosio hizo obispo de Constantinopla. También fue reconocido comoauno grandes bizantinosloy se le dio el título de El Teólogo. Los tres Capadocios modificaron el concepto atanasiano. Atanasio había enseñado que había un Dios único que lleva una vida personal triple y se revela como tal. Los Capadocios enseñaron que hay tres hupóstasis divinas que, como manifiestan la misma actividad, son reconocidas como poseedoras de una misma naturaleza y la misma dignidad. Para Atanasio, el misterio estaba en la Trinidad, mientras que para los Capadocios estaba en la Unidad. Estos padres bizantinos interpretaron la doctrina de Atanasio en conformidad con las concepciones y principios básicos de la cristología del Logos de Orígenes. Lamentablemente, lo único que se logró con los vaivenes entre el triunfo original niceno y el triunfo transitorio del arrianismo después de Nicea fue la intervención imperial y la creciente intromisión del Estado en la vida y la fe de la Iglesia. Como indica Williston Walker: “Pasando revista a esta larga controversia, se puede decir que fue lamentable que en Nicea no se adoptara una expresión menos discutible, y doblemente lamentable que la intromisión imperial jugara un papel tan preponderante en

las discusiones que siguieron. Esa lucha dio nacimiento a la iglesia imperial. El apartamiento de la ortodoxia oficial llegó entonces a ser considerado c onsiderado un delito.”  delito.” 

 

 

EL SIGLO QUINTO  A lo largo del siglo V, el Imperio Bizantino tenía otras preocupaciones además de las continuas amenazas de los Éste fue un período historia sedes del cristianismo oriental. Durantey algún tiempo en elbárbaros. pasado había habido rivalidadvital entreenlasla grandes de Alejandría y Antioquía; Alejandría estaba todavía más celosa del nuevo patriarcado de Constantinopla al que se le había dado  precedencia sobre ella en el S Segundo egundo Concilio Ecuménico (381). Las rivalidades que se manifestaron entre el patriarcado de Alejandría y el de Constantinopla en la primera mitad del siglo V, también  pusieron en peligro la estabilidad del Imperio Bizantino. Estas rivalidades se pusieron de manifiesto en ciertas controversias que se dieron entre representantes de posturas teológicas divergentes e intereses políticos diferentes.

 _ Crisóstomo de Constantinopla vs. Teófilo de Alejandría  Juan, a quien se lo apodó Crisóstomo (boca de oro) por su extraordinaria elocuencia, llegó a ser  patriarca de Constantinopla en 398. Inmediatamente se dedicó a la reforma de la corte corrupta, el clero y el pueblo de la ciudad. Su combinación de honestidad, ascetismo y falta de tacto muy pronto le crearon enemigos, a la emperatriz Eudoxia, de casi reforma como una censura contra incluyendo ella. Las controversias que surgieron sur gieron quien entre élinterpretó y Teófilosus de intentos Alejandría resultaron en un cisma. Crisóstomo fue condenado en el Sínodo de Oak (403), acusado de veintinueve cargos, siendo los más importantes la acusación de origenismo (ser seguidor de la teología de Orígenes) y de declaraciones impropias respecto a la emperatriz. Algunos meses más tarde, fue exiliado a una región cercana a Antioquía y luego trasladado al Ponto. Su vida como ermita debilitó su salud, y finalmente fue asesinado al ser forzado a viajar a pie bajo condiciones climáticas severas. Su fama está fundada en su santidad personal, su habilidad como predicador y exegeta, y sus reformas litúrgicas.

 _ Nestorio de Constantinopla vs. Cirilo de Alejandría  El dilatado gobierno de Teodosio II (408 –  (408 – 4450) 50) se vio plagado de dificultades internas alimentadas  por las controversias religiosas que se s e suscitaron a raíz de la posición teológica adoptada adoptad a por Nestorio (380 – 451). 451). Este monje del monasterio de Euprepio cerca de Antioquía, famoso por su austeridad y elocuencia, a ser patriarca Constantinopla 428,leyganó sostenía teología antioqueña. Erapor un hombre bienllegó intencionado, pero de carente de tacto, loencual ciertauna impopularidad en su sede atacar herejías que gozaban de cierta popularidad, como el culto a la Virgen María. Un capellán del emperador, Anastasio, había predicado contra el título de Theotokos (“Madre de Dios” o “Portadora de Dios”) dado popularmente a la Virgen. la Virgen. Nestorio lo apoyó señalando que sólo Dios puede ser llamado Theotokos y que María sólo fue la madre de la naturaleza humana de Jesús. Según él, el término podía implicar que el que nació de María no era humano sino sólo divino, lo cual era la doctrina herética de Apolinario. Nestorio sugirió que el término correcto era Christotokos, “Madre de Cristo.” Es probable que más tarde Nestorio haya cambiado su concepto sobre Theotokos, pero éste fue el centro de toda la controversia. Cirilo, patriarca de Alejandría, protestó contra Nestorio en Roma, expresando la cristología alejandrina contra la tendencia humanizante de la cristología antioqueña, que sostenía Nestorio. Pero Cirilo no actuó por buenos motivos y utilizó métodos dudosos, ya que quería exaltar la sede de Alejandría a expensas de la de Constantinopla. Además, Cirilo tenía la ambición de llegar a ser el  patriarca de la Iglesia de Oriente. Era un teólogo capaz y astuto, y jugó un papel muy mu y importante en la

formulación de la doctrina cristológica de la Iglesia. El emperador Teodosio II accedió al pedido de  Nestorio de convocar a un concilio ecuménico, lo cual se efectivizó en 431 (Concilio de Éfeso). Cirilo

 

 

se aprovechó de la demora de los delegados de Antioquía y se aseguró la condena de Nestorio, quien no quiso participar del concilio. La familia imperial y la sede romana tomaron partido a favor de Cirilo, y condenaron al nestorianismo por separar las dos naturalezas de Cristo. Cuando finalmente llegaron los antioqueños, hicieron un concilio aparte y condenaron a Cirilo. El emperador depuso a Nestorio y aalgunos Cirilo,oponentes pero luegoderestituyó segundoenaelsuextremo patriarcado y al primero lo mandó al exilio. Incluso, Nestorioalcayeron de proponer la doctrina de una sola naturaleza en Cristo. Nestorio vivió en el desierto egipcio hasta su muerte (451). Algunas traducciones siríacas de escritos de Nestorio revelan que no fue fu e responsable personalmente de la herejía por la que fue condenado y que lleva su nombre. Más bien parece que Nestorio fue víctima de las palabras que se usaron en el debate y de su propio temperamento. Muy probablemente Nestorio no subscribiría lo que hoy conocemos como nestorianismo. Hay que entender que en esta controversia se utilizaban términos teológicos técnicos, no bien definidos todavía, lo cual generaba gran confusión y malas interpretaciones. Para poner fin al conflicto, el emperador Marciano convocó al Cuarto Concilio Ecuménico en Calcedonia (451). El emperador oriental estaba ansioso por mantener buenas las relaciones con Roma. Bajo la influencia del Papa León I el Grande y del emperador, el concilio condenó la doctrina de Eutiques y el monofisismo como herejía, junto con el nestorianismo. Los nestorianos fueron excomulgados y establecieron la Iglesia Nestoriana Siria que se expandió por todo Oriente.

 _ Flaviano de Constantinopla vs. Dióscoro de Alejandría  Cuando Cirilo murió en 444, fue sucedido por Dióscoro, que entró en disputa con Flaviano de Constantinopla por el poder en Oriente. El primero apoyó a Eutiques, un monje anciano e ignorante de un monasterio cercano a Constantinopla que enseñaba una cristología apolinarista. Eutiques partía de un concepto alejandrino extremo y se decía discípulo de Cirilo. En 448, Flaviano convocó a un sínodo en Constantinopla, que condenó al eutiquianismo como docetismo enmascarado. Pronto volvió a surgir la controversia y el emperador Teodosio II convocó a un sínodo en Éfeso (449), que fue presidido por Dióscoro apoyado por monjes egipcios. Mediante el uso de la violencia, Flaviano y sus seguidores fueron forzados a firmar los decretos del sínodo, que fue por ello calificado como “sínodo de ladrones” o “latrocinio de Éfeso.” Flaviano fue depuesto y murió poco después como resultado de las heridas recibidas en Éfeso. Esto produjo conmoción en toda la cristiandad. El Papa León I el Grande apro aprovechó vechó  para excomulgar a Dióscoro. El nuevo emperador, Marciano, convocó convo có a un nuevo concilio ecuménico  para terminar con el escándalo, concilio que se reunió reun ió en Calcedonia en 451, y que depuso a Dióscoro Dióscor o y lo desterró. Esto resultó en el alejamiento definitivo def initivo de los cristianos egipcios (coptos) que apo apoyaban yaban a Dióscoro y que repudiaron la Definición de Calcedonia, sosteniendo una posición monofisita. Con posterioridad a Calcedonia, los emperadores se ajustaron a las decisiones doctrinales de este concilio. El emperador Zenón intentó cambiar las cosas y buscar una fórmula intermedia de conciliación entre el monofisismo y la posición calcedónica con su  Henotikon, un edicto de reunión  promulgado en 482. El propósito del edicto era procurar ponerle fin al cisma, lo cual implicaba un gran riesgo político. El edicto enfatizaba las decisiones de Nicea (325) y Constantinopla (381), pero dejaba de lado las decisiones de Calcedonia (451) (4 51) al utilizar un lenguaje vago, lo cual no satisfizo a nadie. La mayoría de los monofisitas en Oriente aceptaron el edicto, pero no fue así en Occidente. En lugar de  producir unión el documento creó más discordia. Acacio, patriarca de Con Constantinopla stantinopla lo apoyó y fue excomunicado por Félix Occidente que duró hasta III, 518.obispo de Roma (484). Esta acción produjo un cisma entre Oriente y

 Henotikon: “Estamos convencidos de que la fuente y sostén de nuestra soberanía, su fortaleza

y salvaguarda impenetrable, es esa única fe genuina y verdadera que, por la inspiración ins piración de Dios,

 

 

fue publicada por los 318 santos Padres reunidos en Nicea, y confirmada por los 150 santos Padres que, de igual manera, se reunieron en el concilio en Constantinopla. Nosotros por tanto  procuramos noche y día por todos los medios, por la oración, por los esfuerzos agotadores, por la legislación, promover en todas partes par tes el incremento de la santa Iglesia Católica y Apostólica, la madre impoluta e inmortal de nuestro reino; que los laicos piadosos, permaneciendo en paz y armonía con las cosas divinas, puedan, con los obispos, los muy queridos amados de Dios, el clero más piadoso, los archimandritas y monjes, ofrecer aceptablemente su sacrificio en  beneficio de nuestra so soberanía. beranía. En la medida en que nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo, quien fue encarnado y nacido de María, la Santa Virgen y portadora de Dios, apruebe y acepte con agrado nuestra adoración y servicio armoniosos, en esa medida el poder de nuestros enemigos será superado y disperso, y las bendiciones de la paz, del tiempo favorable y las cosechas abundantes, y todo lo que es para el beneficio del hombre, será libremente concedido sobre nosotros.”  nosotros.”  El siguiente emperador, Anastasio, simpatizante del monofisismo, trató de mantener una posición intermedia entre ambas posturas a fin de resolver resolve r la confusión religiosa en el Imperio, sin sacrificar sacr ificar los intereses de una y otra parte. Eventualmente, anatematizó a los monofisitas en un intento por reconciliar r econciliar a Roma con Constantinopla, y el problema quedó sin resolver.

EL SIGLO SEXTO   _ El monofisismo  La Definición de Calcedonia no puso fin a la controversia teológica en Oriente. El eutiquianismo se perpetuó en Egipto con monjes fanáticos y se lo conoció como monofisismo por su insistencia en la única naturaleza de la persona de Cristo. La controversia prevaleció por más de un siglo en el Imperio Bizantino. La mayor parte de Egipto y Etiopía y buena parte de Siria se volcaron al monofisismo y amenazaron la unidad de la Iglesia y el Imperio. En 476, el emperador Basilisco condenó el Tomo de León y las decisiones de Calcedonia. En un intento por sanar la brecha entre los monofisitas y los calcedonios, el emperador Zenón revirtió la política de Basilisco y produjo un documento que deliberadamente admitía diversas interpretaciones (el  Henotikon). Sin embargo, los monofisitas más extremos el obispo dey Roma lo interpretó que rechazaba La conclusiónnoa lo la aceptaron, controversiay monofisita más tarde la disputacomo monotelita (sosteníaalaCalcedonia. unidad divina  pero relación con su voluntad) se extendió ex tendió a lo largo del siglo sexto. Justino I (518 – 527), 527), quien era ortodoxo, adoptó una política de reconciliación con Roma y reprimió al monofisismo, pero se ganó la oposición de Egipto y Siria. La reconciliación con Roma requería la firma de una declaración que afirmara los privilegios de la sede de Roma e hiciera obligatoria la unidad con el obispo de Roma y seguir sus indicaciones. Oriente no estaba unánime en apoyar la sumisión imperial a las demandas papales y continuó con su monofisismo. Hacia fines de su reinado, Justino depuso a Severo, patriarca de Antioquía, y a más de cincuenta obispos. En 524, lanzó un edicto contra el arrianismo. La mayoría de los centros de controversia retomaron la ortodoxia, pero Alejandría continuó fiel al monofisismo. Cuando Justiniano llegó al trono imperial (527), era del parecer que las diferencias entre calcedónicos y monofisitas, que amenazaban con dividir su Imperio, podían superarse ya que no eran más que cuestiones verbales. El problema más difícil de resolver parecía ser más bien de carácter  político, cultural, étnico y especialmente económico. Quizás por esto mismo, Justiniano se mostró

 bastante tolerante hacia los monifisitas. Alrededor de 529 bajo la influencia in fluencia de Teodora, comenzó una  política de conciliación, incluso permitiendo a algunos obispos exiliados a rretornar etornar a sus sedes. En 535

 

 

un obispo monofisita fue nombrado patriarca de Constantinopla. Esta acción renovó la controversia e hizo que el Papa depusiera al patriarca y nombrara a otro en su lugar. La persecución contra los monofisitas se renovó, pero Teodora protegió a algunos de sus líderes en su propio palacio. La teología bizantina de la época se acomodó a los intereses políticos y económicos del emperador Justiniano. Para fomentar el diálogo, el emperador convocó a un grupo de teólogos de ambos bandos (538) en Constantinopla. Por el lado calcedónico participó Leoncio de Bizancio, quien había escrito contra los nestorianos y eutiquianos. En el grupo hubo a su vez varios teólogos monofisitas. Teodora también persuadió a su esposo a involucrar a los líderes monofisitas en el ministerio de la Iglesia. Uno de ellos, llamado Jacobo, reorganizó las iglesias monofisitas de Oriente bajo la protección de la corte. En 539, Justiniano publicó su confesión de fe, en la que no hablaba de las dos naturalezas de Cristo, como para atraer a los monofisitas moderados. Pero esto mismo suscitó una nueva controversia, conocida como de los Tres Capítulos.

 _ Controversia de los Tres Capítulos  En 544, Justiniano intentó reconciliar a monofisitas y ortodoxos con un decreto conocido como los “Tres Capítulos.” Lo que estaba en discusión no era tanto el contenido de la Definición de Calcedonia, como las enseñanzas de ciertos teólogos. Lo que Justiniano quería era conciliar el monofisismo moderado con la posición ortodoxa que él sostenía, siguiendo a Calcedonia. El edicto fue resistido en Occidente. Estos tres temas consistían de las posiciones teológicas representadas por Teodoro de Mopsuestia, Teodoreto de Ciro e Ibas de Edesa. Los tres ya habían muerto, pero algunas de sus declaraciones parecían estar incluidas en la Definición de Calcedonia. El problema es que los monofisitas consideraban que en sus obras estos teólogos estaban muy cerca del nestorianismo, en razón de que los tres eran antioqueños y tendían a enfatizar la humanidad de Cristo. El primero, Teodoro de Mopsuestia (350 – 428), 428), fue un distinguido exégeta y teólogo antioqueño. Según él, en Cristo se podían distinguir dos sujetos históricos obrando, el Logos divino y el ser humano que había sido asumido. Después de su muerte, su posición teológica fue asociada con la de su discípulo  Nestorio, razón por la cual Justiniano anatematizó sus obras (543) en el primero de los Tres Capítulos. Más tarde, fue condenado por el Quinto Concilio Ecuménico de Constatinopla Co nstatinopla II (553). Su pensamiento teológico era más bíblico y menos filosófico que el de los alejandrinos, y tuvo una gran influencia sobre la tradición eclesiástica siria y persa. Irvin y Sunquist:  “Las dimensiones ética e histórica de la vida de Jesús dominaron en la teología de Teodoro. En su naturaleza humana Jesús podía haber repudiado su vocación mesiánica en cualquier momento hasta su muerte sobre la cruz cuando dijo: ‘Consumado es.’ Para Teodoro esto también significaba que Jesús podía haber pecado mientras estuvo sobre la tierra, una posición que fue una de las más controversiales contro versiales que él tomó. Por lo tanto, fue a través de su obediencia, llevada a cabo en el poder de su humanidad, human idad, que Jesús ganó nuestra salvación. Sólo de esta manera podemos nosotros estar seguros de que nuestra humanidad experimenta salvación a través de él. El énfasis para Teodoro y el resto de los antioqueños caía consistentemente sobre la obra histórica de la persona humana de Jesús en la carne, que él comparte plenamente con nosotros.”  nosotros.”  El segundo, Teodoreto de Ciro (390 – 4458), 58), se hizo monje siendo muy joven y luego sirvió como obispo de Ciro por el resto de su vida. Fue un buen pastor, teólogo, historiador y controversista. Según él, Cristo tuvo dos naturalezas, unidas en una persona más no en una esencia. Fue opositor de Cirilo de

Alejandría, y esto le valió su destitución. En el Concilio de Calcedonia fue restituido, pero se vio obligado a condenar a Nestorio, con quien simpatizaba en algún grado.

 

 

El tercero, Ibas de Edesa (380 –  (380 – 457), 457), fue obispo de esa ciudad, y procuró mantener una posición intermedia entre Nestorio y Cirilo de Alejandría. No obstante, fue acusado de nestorianismo y fue depuesto en 449 por el Concilio de Éfeso. El Concilio de Calcedonia lo restituyó, pero terminó más tarde siendo condenado por Justiniano y el Quinto Concilio Ecuménico de Constantinopla II (553). Los dos que del promulgó (544 y(que 551) contra estos tres teólogos socavabany laa autoridad y laedictos enseñanza ConcilioJustiniano de Calcedonia había declarado ortodoxos a Teodoreto Ibas). No obstante, los patriarcas orientales los aceptaron sin oposición, especialmente en el quinto concilio ecuménico de Constantinopla (553). Este concilio tuvo como propósito aprobar los edictos de Justiniano, pero esto fracasó en reconciliar a la mayoría de los monofisitas. No obstante, le dio una victoria parcial a la doctrina monofisita alejandrina y condenó la teología antioqueña de las dos naturalezas de Cristo, que había sido aprobada por el Concilio de Calcedonia.

Cánones del Segundo Concilio de Calcedonia (553):  “1. Si alguien no reconoce la única naturaleza o substancia (ousía) del Padre, Hijo y Espíritu Santo, su única virtud y poder, una Trinidad consustancial, una Deidad adorada en tres personas (hupostáseis) o caracteres  prósopa), que éste sea anatema. Porque hay un solo Dios y Padre, de quien provienen todas ( prósopa las cosas, y un solo Señor Jesucristo, a través de quien son todas las cosas, y un solo Espíritu Santo, quien son 2. Sidel alguien confiesa hay dosyengendramientos de Dios laen Palabra, unotodas anteslas de cosas. los siglos, Padre,nosin tiempoque ni cuerpo, otro en los últimos días, el engendramiento de la misma persona, quien descendió del cielo y fue hecho carne de la Santa y Gloriosa Portadora de Dios y siempre virgen María, y fue nacido de ella, que éste sea anatema.”  anatema.” 

LA VIDA Y MINISTERIO DE LA IGLESIA  La teología bizantina desarrolló un concepto muy particular sobre la Iglesia. Para los bizantinos la Iglesia era “una comunión sacramental con Dios en Cristo y el Espíritu.” Como tal, era el lugar de encuentro de todos los misterios de la fe, especialmente del misterio de la comunión divino-humana en el tiempo y el espacio, un misterio que sobrepasa las capacidades y poderes de nuestro intelecto. Para la ortodoxia, el evangelio jamás ha sido una ideología descorporalizada. La vida cristiana no es algo más o menos privado o una experiencia individual, sino la participación plena en el oikos de Dios (la casa o familia de Dios), que es la Iglesia. Incluso, la misión de la Iglesia emana de su vida como señal, símbolo y sacramento de lo divino. La dinámica de la misión, su corazón mismo, es la adoración, y más específicamente la liturgia. De allí que, las cuestiones de administración, organización y liturgia de la iglesia han sido fundamentales para la configuración de la vida y ministerio de la misma.

 _ Administración  El gobierno de la Iglesia en el ámbito bizantino estaba regimentado celosamente por el emperador. En general, para mediados del siglo quinto la unidad de gobierno normal de la Iglesia era la ciudad. Todos los cristianos de una ciudad estaban bajo la conducción de un obispo y sus clérigos. La sede o esfera de la autoridad del obispo incluía un territorio más o menos extendido alrededor de su ciudad. En las regiones más densamente habitadas y donde el cristianismo había estado por más tiempo, las diócesis episcopales eran más reducidas en extensión. En general, en el este tal era el caso en comparación con las diócesis más dilatadas de Occidente. La esfera de autoridad episcopal era conocida como parroquia del obispo. Muy pronto las sedes

episcopales fueron agrupadas para constituir provincias eclesiásticas, bajo la autoridad de un metropolitano u obispo de la sede madre. Era la responsabilidad del metropolitano supervisar la

 

 

elección de un nuevo obispo en caso de vacancia. Estas elecciones eran hechas por el clero, los nobles y el pueblo de la parroquia vacante, bajo la dirección de obispos vecinos convocados para llevar a cabo las exequiasdedel obispoEnanterior. El metropolitano también cánones convocaba y presidía los sínodos  provinciales obispos. estos sínodos, los obispos discutían o reglas regla s sobre cuestiones de de disciplina y doctrina, que luego eran decretados y puestos en vigencia por los metropolitanos. Estos cánones regían el gobierno y la vida de la iglesia, y tenían carácter obligatorio para los cristianos. Las provincias eclesiásticas estaban agrupadas en eparquías o patriarcados, cuya sede era generalmente una parroquia o sede ubicada en una ciudad de gran importancia, en la que se suponía había ministrado algún apóstol. En Oriente había cuatro de estos patriarcados (Constantinopla, Antioquía, Jerusalén, Alejandría), mientras que en Occidente sólo había uno (Roma). Antioquía era una importante ciudad en Siria, ubicada estratégicamente a la entrada de Asia Menor. Según la tradición, su conversión estaba ligada al ministerio del apóstol Pedro, y se había transformado en un importante centro de difusión del cristianismo tanto hacia el este como el oeste después de la destrucción de Jerusalén. Esta última ciudad había sido la cuna del cristianismo y era considerada como  patriarcado más por su historia y valor simbólico que por su influencia en la cristiandad. En cuanto a Alejandría, se decía que Marcos, el discípulo de Pedro y autor del Evangelio que lleva su nombre, había ministrado allí. Constantinopla no podía argüir un origen apostólico, pero era la capital del Imperio y como Nueva Roma fue considerada como patriarcado, al igual que la Vieja Roma, por el Concilio de Calcedonia. De todos los patriarcados, el de Constantinopla fue el más importante en cuanto a su extensión territorial y peso político. Su influencia se extendía por la mayor parte de los Balcanes, el sur del Danubio, las islas del mar Egeo y Asia Menor.

 _ Organización  La organización de la Iglesia en todos los patriarcados orientales fue más o menos la misma. El funcionamiento de la Iglesia descansaba sobre un conjunto de clérigos entrenados y ordenados localmente, bajo la supervisión de un obispo que era elegido localmente, pero necesitaba de la sanción de un sínodo provincial para gobernar. La unidad de la Iglesia se mantenía en torno a la común confianza en el carácter normativo de las Escrituras para la fe y la práctica cr cristiana, istiana, y su interpretación siguiendo las conclusiones de los Padres de la Iglesia o los grandes doctores de la fe tanto del este como del oeste. De este seguimiento compartido de las Escrituras Escr ituras y los Padres surgió el énfasis énfas is en una doctrina y práctica común de la Iglesia con respecto a la vida cristiana, la ética, y los sacramentos como medios de gracia para poder llevar a cabo esa vida. El eje fundamental de la organización de la Iglesia pasaba por el obispo. Su poder no era de este mundo ni estaba ligado a las estructuras mundanas de poder. Se creía que sin el obispo, la Iglesia no  pasaba de ser un ideal abstracto. El oficio del obispo, que era el del apóstol, resultó fundamental en la comprensión bizantina de la Iglesia. La jerarquía estaba integrada por el obispo, los sacerdotes y los diáconos, que eran considerados como dones de la iglesia. El poder del obispo de atar y desatar era entendido como un poder para el servicio se rvicio del creyente y la comunidad, y no un poder que le pertenecía a él. Por eso, el obispo no era un monarca en el sentido mundano, ni la jerarquía era autoritaria (salvo las inevitables excepciones a lo largo de la historia). La misión fundamental del obispo era la de guardar la unidad de la Iglesia, defender la fe contra las herejías y sobre todo conducir la celebración de la

liturgia y en especial el sacrificio eucarístico. Los obispos también tenían la responsabilidad de  participar en los sínodos ecuménicos y los concilios con cilios episcopales.

 

 

Lawrence Cross:  “Dondequiera que el apóstol u obispo se encuentre, la maravilla de la Encarnación es manifestada en la Eucaristía y la vida de la Trinidad es revelada en la comunidad. Consiguientemente, el papel del obispo es de primera importancia para entender en espíritu las iglesias orientales organizadas y paraessentir algo depermanentemente la atmósfera interior de qué las comunidades de la iglesia. El están ministerio del apóstol mantenido en la iglesia por el obispo. Así como Dios el Padre es el principio de unidad en la Santa Trinidad, así el obispo es dotado por el Espíritu Santo para mantener y manifestar la unidad de la iglesia. Así como Dios el Padre preside en la unión de amor de la Santa Trinidad, engendrando eternamente al Hijo y soplando al Espíritu, así el obispo trae entre los hombres el misterio de Jesús en la Eucaristía, concediendo y compartiendo al Espíritu Es píritu entre los creyentes. En la iglesia  primitiva el obispo era el único celebrante de la Eucaristía.”  Eucaristía.”  Para preservar la unidad de fe y práctica, se llevaron a cabo concilios generales o ecuménicos (universales). En estos encuentros se discutieron doctrinas rivales, que pretendían tener fundamento apostólico. Los obispos reunidos contaron la más de las veces con el apoyo de las autoridades imperiales y sus deliberaciones se llevaron a cabo en lengua griega. Uno de los concilios más importantesresolver fue el delasCalcedonia (451). este Concilio, patriarcas, obisposDespués y el ués emperador mismo  procuraron contr oversias controversias queEn amenazaban con dividir el Imperio. Desp de Calcedonia, la preocupación que los mantuvo ocupados fue cómo mantener las decisiones doctrinales tomadas y cómo imponerlas sobre todas las personas en el ámbito del Imperio. La jerarquía bizantina aceptó la primacía del sucesor de Pedro en la sede episcopal de Roma (el Papa) y su autoridad espiritual sobre toda la cristiandad, en tanto presida a la Iglesia Católica con amor. Pero ya en el período bajo discusión se podían ver profundas diferencias teológicas y prácticas, que terminaron por producir el cisma que todavía divide a la cristiandad latina de la griega. Entre otras cuestiones, la mayor parte del clero bizantino estaba casado, mientras que para este período el celibato se estaba imponiendo en Occidente. En el caso de los obispos, éstos generalmente fueron monjes y, en consecuencia, célibes. Los obispos eran monjes en orden a que pudiesen estar totalmente libres para ministrar a su iglesia, a su clero y a su pueblo, actuando como un verdadero padre para ellos.    _ Liturgia En la tradición bizantina, la liturgia ocupó un lugar fundamental. Las iglesias bizantinas se describían a sí mismas como “ortodoxas,” que significa “adorar correctamente,” una comunidad que adora a Dios como él desea ser adorado. La Iglesia recibe su identidad cuando enseña y celebra los Santos Misterios. El ser de la Iglesia se revela en su hacer, en su leiturgia. De modo que el misterio de la Iglesia, según lo ha concebido el cristianismo oriental a lo largo del tiempo, se manifiesta más cabalmente en lo que la Iglesia hace, es decir, en su adoración. De allí que la liturgia haya ocupado un lugar tan central en la vida y ministerio de las iglesias pertenecientes a la tradición bizantina. Ya en la segunda mitad del siglo IV el culto cristiano bizantino comenzó a tornarse cada vez más elaborado. El clero comenzó a vestir ropas especiales y suntuosas y el ritual religioso fue adquiriendo  poco a poco un esplendor cada vez más dramático. La espontaneidad y carácter carismático de los  primeros tiempos fue cediendo lugar a un culto en el que lo que se decía y hacía, junto con el ambiente físico, estaba orientado a crear un sentido de santo asombro ante la presencia de lo trascendente y numinoso. Es probable que la asistencia masiva a los cultos como también las luchas contra el arrianismo haya favorecido este culto ceremonioso y con un fuerte énfasis místico.

Esta actitud de temor reverente durante la celebración del culto ya se pone en evidencia en las enseñanzas de Cirilo de Jerusalén (315 –  (315 – 386), 386), pero fue enfatizada todavía más por Basilio de Cesarea

 

 

y especialmente por Juan Crisóstomo quien, por ejemplo, habla de la Mesa del Señor como un lugar de “terror y temblor.” Teodoro de Mopsuestia, a su vez, enseña ba enseña ba que el culto debía estar rodeado de un esplendor ritual. La consecuencia de todo esto fue que antes de fines del siglo IV ya se consideraba necesario cubrir con cortinas el altar. Cuando Justiniano construyó Santa Sofía, hizo poner un cortinado Pantokrator  delante del altar, sobre elcon quesubordó oro unay ssosteniendo figura de Cristo   (gobernador de mano todo)  bendiciendo a su pueblo manoenderecha osteniendo un ejemplar del Evangelio en su izquierda. También hizo colocar en el pórtico central una mampara con tres puertas sobre las que había figuras de ángeles y profetas, y los monogramas del emperador y la emperatriz Teodora. Éste fue el  primer caso de iconostasis (del griego eikón, imagen, y stasis, estación), que luego se hizo tan popular en las iglesias griegas. Las puertas en la mampara eran usadas para las “entradas” cerem oniales al momento de la lectura del Evangelio y del Ofertorio. Los elementos básicos y la estructura de la liturgia oriental perdieron la sencillez y fluidez de los  primeros siglos. La liturgia se fue tornando más puntillosa y rígida. Para el año 500, el Kyrie Eleison, que había sido una parte regular de las letanías griegas, fue incorporado a la primera parte de la misa en latín, lo cual muestra cuán arraigado estaba en la liturgia griega. También de larga tradición en Oriente era el uso del Gloria in excelsis y del Credo. El segundo se recitaba en ocasión del bautismo,  pero era el Credo Niceno ddee 325, que recién entró en la liturgia de la eucaristía bajo la influencia de

los monofisitas en el siglo V. Así, pues, es posible ver un buen número de diferencias entre entr e la tradición litúrgica que se fue formando en Oriente y en Occidente, especialmente en torno a la eucaristía y el  bautismo. En Oriente era usual uutilizar tilizar pan leudado común para p ara la eucaristía, mientras en Occidente sólo se usaba pan sin levadura. La costumbre en Oriente era tener una sola celebración de la eucaristía  bajo el obispo el día domingo, mientras que en Roma los presbíteros podían celebrarla celebrarla en sus parroquias y en otros días. La oración regular y la adoración han sido desde muy antiguo elementos fundamentales de la adoración en el cristianismo oriental. Los bizantinos entendieron desde bien temprano que las realidades de la fe no debían encontrarse solamente en los enunciados enunciado s o conceptos de la fe, sino a través de signos y símbolos que fuesen comprensibles para cualquier congregación en adoración. De allí que el objetivo fundamental de los misioneros orientales fue siempre el establecimiento de comunidades de adoración, en las que la celebración de los misterios sagrados hablara por sí misma. Para el cristianismo oriental, la asamblea eucarística local era la que revelaba y hacía real la naturaleza de la iglesia. La liturgia divina era la que transformaba a seres humanos pecadores en el verdadero “pueblo de Dios.” De este modo, la liturgia rev r evelaba elaba la realidad de la iglesia como el sacramento de la comunión divina y humana. La música religiosa ocupó también un lugar muy importante en la liturgia bizantina. Dos veces en sus cartas el apóstol Pablo hace referencia al uso del canto en la adoración (Col. 3:16; Ef. 5:19). El canto congregacional era parte de la liturgia de la sinagoga judía y probablemente fue de aquí que los  primeros cristianos tomaron esta práctica del culto. Hay un buen número de himnos griegos anteriores a Constantino que han sobrevivido el paso del tiempo. También hay un papiro de Egipto del siglo III (mutilado) en el que se preserva un himno en el que la creación se une a la iglesia en la alabanza a la Trinidad. Desde los días de Basilio de Cesarea se cantaba un himno para el atardecer, que todavía la cristiandad ortodoxa canta al encender las luces del atardecer. Salve, Luz de alegría, de su gloria pura derramada Que es el Padre inmortal, celestial, y bendito, Santísimo, Jesucristo nuestro Señor.

Ahora llegamos a la hora del descanso del sol, Las luces del atardecer brillan a nuestro alrededor,

 

 

Alabamos como divinos al Padre, Hijo y Espíritu Santo. Sólo tú eres digno que se te cante en todo tiempo Con lenguas puras, Hijo de nuestro Dios, dador de vida: Por eso en todo el mundo tus glorias, Señor, ellos tienen. Clemente de Alejandría fue el primer escritor cristiano que discutió qué tipo de música era el más apropiado para el culto. En su enseñanza, indica que no debe ser ese tipo de música que está asociado con la danza erótica. Las melodías debían evitar los intervalos cromáticos y tenían que ser austeras. Quizás estaba reaccionando contra los cánticos de algunas sectas gnósticas, en las que había mucho menos restricciones e inhibiciones en materia musical, y que muchas veces cantaban himnos que iban acompañados de una danza ritual. La danza, que era muy común en la adoración del Antiguo Testamento y en la tradición judía, no era bien vista por los padres griegos, que la asociaban con las  prácticas de los misterios paganos de Dionisos. La música coral era muy popular entre los cristianos griegos. El canto antifonal (dos grupos corales cantando alternadamente) ya era conocido desde mediados del siglo IV y se difundió a lo largo de Mesopotamia y Siria. Basilio de Cesarea abogó por su introducción en su diócesis. No obstante, el uso de la música la liturgiadenolas gozaba de la Atanasio aprobación todos. Muchos consideraban quedificultad el canto oscurecía el en significado palabras. dedeAlejandría procuró superar esta exigiendo que se mantuviera el ritmo del habla en el cántico de los Salmos. De todos modos, es imposible saber cómo era la música instrumental o cantada de aquel tiempo. Hay un fragmento de  papiro del siglo III, que presenta un precioso himno: “Mientras alabamos al al Padre,  Padre, Hijo y Espíritu Santo, que toda la creación cante Amén, Amén. Alabanza, poder al único dador de toda cosa buena. Amén. Amén.” Es interesante que en este papiro el escriba hiciera ciertas anotaciones musicales utilizando signos, que pueden ser descifrados con la ayuda de analogías en textos bizantinos  posteriores. El himnólogo más grande de las iglesias orientales vivió en Constantinopla: Romanos (m. 555). Era un judío convertido que llegó a Constantinopla de Siria y escribió himnos para las espléndidas fundaciones de Justiniano en la capital del Imperio. El fue el creador del d el Kontakion, un verso en forma de acróstico para las estrofas. Cada estrofa era cantada desde el púlpito por un solista con un refrán que era cantado por el coro. Romanos inspiró parcialmente al autor del más famoso de los himnos griegos, el así llamado Akathistos (para ser cantado de pie) en honor de la Virgen María. La temática preferida de los himnos griegos fue el misterio de la encarnación y la Trinidad. La señal de la cruz, junto con infinidad de otros gestos litúrgicos, se practicó desde muy temprano, utilizando la mano derecha y tocando la frente primero y luego los hombros derecho e izquierdo (a diferencia de cómo se hacia en Occidente). Además, se juntaban el dedo pulgar con el índice y el mayor  para simbolizar la Santa Trinidad. Los otros dos dedos de la mano simbolizaban las naturalezas divina y humana de Cristo. La forma bizantina de la señal de la cruz es la más antigua que se conoce.

 _ Teología  Las cuestiones de doctrina ocuparon un lugar destacado en la Iglesia griega. Las declaraciones de fe se transformaron en testimonios de autenticidad e integridad teológica. Mientras que en el Nuevo Testamento el énfasis está en la participación de Dios en los eventos redentores en la historia humana, los teólogos griegos pusieron el énfasis en las declaraciones correctas acerca de Dios. Esta teología no se hizo desde la periferia sino desde el centro, no desde abajo sino desde arriba. No fue el resultado de

la experiencia cristiana de hombres y mujeres redimidos y comprometidos con la misión, sino de varones aristócratas y bien educados, que comenzaron a ocupar lugares de liderazgo en la Iglesia y a

 

 

definir lo que todo el mundo debía creer, si querían ser ortodoxos. La tradición teológica del cristianismo oriental, según se fue constituyendo a partir de los primeros siete concilios ecuménicos (todos ellos ocurridos en el mundo helenista), puede sintetizarse en torno a tres temas fundamentales: la Santa Trinidad, la Encarnación, y el Arrepentimiento. No obstante, estas cuestiones fundamentales de la teología ortodoxa no quedaron como meros postulados o enunciados abstractos, sino que se expresaron fundamentalmente a través de la liturgia. La Santa Trinidad es uno de los temas fundamentales de la teología bizantina. La fe en el Dios trino se manifestó a través de los sacramentos y la adoración. Cada culto comenzaba con una doxología (palabras de alabanza: doxa, gloria; logos, palabra). La invocación y alabanza a las Tres Personas, un  Dios, se repetía una y otra vez en todos los cultos. Lo mismo ocurría con la oración privada del creyente, que se hacía de manera litúrgica y no espontánea. El Espíritu Santo ocupaba un lugar muy  prominente en la teología bizantina y, en consecuencia, en su liturgia. Los escritos patrísticos lo describen como el Espíritu de Dios, bueno, santo y dador de vida, cuya actividad configura la eucaristía, sostiene a la Iglesia, y quien es la fuente de todo amor, oración y buenas obras humanos .  La encarnación (Dios hecho hombre) recibió un fuerte énfasis en la teología bizantina, a partir de los concilios de Éfeso (431) y Calcedonia (451). Estos concilios fueron los que debatieron la relación de las dos naturalezas de Cristo y concluyeron que el Redentor Redento r es verdadero Dios y verdadero ho hombre, mbre, sin confusión ni alteración, en la única persona de Jesús, histórica y siempre viviente. El misterio de la encarnación resultó ser el punto focal al que todo lo demás estaba referido. Cristo, el Dios-hombre, era considerado como el comienzo de la comunión divino-humana. Ésta era la fuente de la naturaleza de la iglesia y el trasfondo de la vida cristiana. Las oraciones litúrgicas exaltaban la maravilla de la encarnación, al igual que los himnos y canciones que se repetían en el desarrollo del culto .  La tercera característica de la teología bizantina era el tema del arrepentimiento, que también era el motivo de muchos himnos. En la poesía cristiana bizantina aparecían una y otra vez caracteres como la ramera, el publicano en el templo y Pedro luchando por creer. El tema del arrepentimiento también se destilaba en varios ejercicios litúrgicos, especialmente aquellos referidos a la cuaresma, y era un aspecto permanente de la vida monástica. El arrepentimiento no era uuna na cuestión del momento ni un acto reservado para poco antes de morir. En la comprensión bizantina, toda la vida debía ser arrepentimiento, por hacer real cooperar con la bendición de la encarnación. El arrepentimiento eslalalucha entrada permanente a lay vida de la resurrección .

GLOSARIO  acróstico: del griego akros, extremidad, y stichos, verso. Composición poética en que las letras iniciales, medias o finales de cada verso, leídas en el sentido vertical, forman un vocablo o expresión. Bizancio: villa pequeña escogida por el emperador Constantino como el sitio para su nueva ciudad capital del Imperio Romano. Su nombre se s e utiliza para describir a la civilización romana oriental como com o un todo y para describir la síntesis maravillosamente rica de la adoración que allí se forjó y que se esparció desde Bizancio a lo largo del Cercano Oriente y a Europa del este. carismático: se refiere a alguien que enfatiza de manera particular la importancia del Espíritu Santo

en la vida cristiana, la adoración y el testimonio. Los dones del Espíritu ( charismata) también reciben un gran énfasis.

 

 

cesaropapismo: supremacía del Estado sobre la Iglesia (como en el Imperio Bizantino y en Rusia hasta 1917). Es lo opuesto de la hegemonía de la Iglesia respecto al Estado, como ocurrió con el papa Inocencio III sus (1198  – 1216). 1216). Elesferas. cesaropapismo significa una restricción tanto sobre la Iglesia como sobre el Estado en respectivas

Cuaresma: festividad del calendario litúrgico cristiano, que se refiere a los cuarenta días que van desde el Miércoles de Cenizas hasta la Pascua, y que es observada por cristianos católicos occidentales, ortodoxos y algunos protestantes como un período de penitencia y ayuno. Dardanelos: estrecho entre la península de los Balcanes y Anatolia (Turquía), que une el mar Egeo y el de Mármara. Llamado antiguamente Heleposto. hagiografía: del griego hagios (santo) y grafos (escrito). Se trata de la biografía de santos o de personas venerables. helenismo: período de la cultura griega que va desde Alejandro Magno hasta Augusto, y se caracteriza sobre todo por la absorción de elementos de las culturas de Asia Menor y de Egipto. En general, gener al, designa a la influencia ejercida por la cultura antigua de los griegos en la civilización y cultura modernas. hieratismo: del griego hieros (sagrado) hace referencia a todo lo que pertenece a los sacerdotes sacerd otes o tiene las formas de una tradición litúrgica. En arte, designa a aquello que reproduce en escultura o pintura religiosas las formas tradicionales. El término indica el carácter de una solemnidad extrema. ícono: representación devota de pincel, o de relieve, usada en las iglesias orientales. En particular se aplica a las tablas pintadas con técnica bizantina, llamadas en Castilla en el siglo XV “tablas de Grecia.” Grecia.”   iconostasio: mampara con imágenes sagradas pintadas, que lleva tres puertas, una mayor en el centro y otra más pequeña a cada lado, y aísla el presbiterio y su altar del resto de la iglesia.  jacobismo: movimiento religioso de Siria. Los jacobitas eran partidarios del monofisismo y rechabaron las decisiones del Concilio de Calcedonia (451). A pesar de las persecuciones, los jacobitas lograron sobrevivir gracias a líderes como Jacobo Baradeo (de allí su nombre). La iglesia jacobita subsiste con una membresía reducida.  Kyrie eleison:

significa “Señor, ten misericordia.” Es una oración litúrgica breve que comienza con esta expresión o consiste de las palabras “Señor, ten misericordia.”  

metropolitano: obispo que se desempeña como arzobispo, es decir, como obispo de una iglesia metropolitana de quien dependen otros obispos (sufragáneos). misterios eléusicos: forma de religión pagana y ritos de la antigüedad proveniente de Eleusis, un  pueblo de Ática, al noroeste de Atenas, donde había un templo de Deméter en el que se celebraban unas fiestas famosas en toda Grecia. Estos misterios eran ritos de iniciación ligados a prácticas de esoterismo y de carácter secreto. monofisismo: del griego monos (uno) y  fusis (naturaleza). Consistía en una controversia que dividió la Iglesia en Oriente. Fue una reacción contra el nestorianismo, pues puso en oposición las dos

naturalezas de Cristo al afirmar que sólo existe una naturaleza en él. De este modo creían proteger la unidad de la persona de Cristo.

 

 

numinoso: sobrenatural y misterioso; lleno de un sentido de la presencia de lo divino; algo santo y espiritual que apela a las emociones superiores o a un sentido estético elevado. paganismo: la religión y adoración de aquellos que no son cristianos, judíos o musulmanes, especialmente de los que creen y practican pr actican el politeísmo. Por extensión, se considera pa pagana gana la actitud de incredulidad, indiferencia, irreligiosidad y/o hedonismo de una persona sin religión o con poco de ella, que se deleita en los placeres sensuales y en los bienes materiales. A tal persona pagana se la califica de irreligiosa y hedonista. pechina: cada uno de los triángulos curvilíneos que forma el anillo de la cúpula con los arcos torales (cada uno de los cuatro en que estriba la media naranja de un edificio). vestales: mujeres vírgenes romanas consagradas a la diosa romana Vesta y al servicio de cuidar el fuego sagrado mantenido encendido de manera permanente sobre su altar.

657 a.C.

SINOPSIS CRONOLÓGICA Fundación de Bizancio 

160 – 215 215

Clemente de Alejandría

185 – 250 250

Orígenes de Alejandría

189 – 232 232

Demetrio, obispo de Alejandría

250 – 306 306

Constancio I

312 – 326 326

Alejandro de Alejandría, patriarca de Alejandría

315 – 386 386

Cirilo de Jerusalén

317 – 361 361

Constancio II

321 – 375 375

Valentiniano I (emperador de 364 a 375)

325

Primer Concilio Ecuménico-Nicea

328 – 378 378

Valente (emperador de 364 a 378)

329 – 379 379

Basilio de Cesarea, el Grande

330

Constantino mueve Constantinopla

su

capital

a

330 – 390 390

Gregorio Nacianceno

 

 

332 – 363 363

Juliano el Apóstata (emperador de 361 a 363)

332 – 364 364

Joviano (emperador de 363 a 364)

335 – 395 395

Gregorio de Nisa

337

Muere Constantino el Grande

337 – 350 350

Reinado de Constante en África, Italia e Ilírico

337 – 340 340

Reinado de Constantino II en Occidente

337 – 361 361

Reinado de Constancio en Oriente

341

Constante prohibe sacrificios paganos en

347 – 395 395

Italia Teodosio I, el Grande (emperador de 379 a 395)

345 – 410 410

Rufino

347 – 407 407

Juan Crisóstomo de Constantinopla

385 – 412 412

Teófilo de Alejandría

350 – 428 428

Teodoro de Mopsuestia

353 – 360 360

Constancio único emperador

m. 441

Juan de Antioquía

361 – 363 363

Reinado de Juliano el Apóstata como único emperador

363 – 364 364

Reinado de Joviano como único emperador

364 – 378 378

Reinado de Valente

376 – 444 444

Cirilo de Alejandría

379 – 395 395

Reinado de Teodosio, el Grande; único emperador desde 392

380 – 451 451

Nestorio

 

 

m. 449

Flaviano de Constantinopla

m. 454

Dióscoro de Alejandría

380 – 457 457

Ibas de Edesa

381

Segundo Concilio Constantinopla

390 – 458 458

Teodoreto de Ciro

395 – 408 408

Reinado de Arcadio

408 – 450 450

Reinado de Teodosio II; Artemio, regente de 408 – 414 414

419 – 455 455

Valentiniano 425 a 455) III (emperador de Occidente de

428 – 431 431

Nestorio, patriarca de Constantinopla

431

Tercer Concilio Ecuménico-Éfeso

444 – 451 451

Dióscoro, patriarca de Alejandría

449

Sínodo de Ladrones en Éfeso

450 – 457 457

Reinado de Marciano

451

Cuarto Concilio Ecuménico-Calcedonia

455

Vándalos toman Roma

457 – 474 474

Reinado de León I, el Grande

474

Reinado de León II

474 – 491 491

Reinado de Zenón, el Isáurico

475 – 476 476

Reinado de Basilisco como usurpador del trono

476

Odoacro depone a Rómulo Augústulo

Ecuménico-

476 – 491 491

Reinado de Zenón, el Isáurico

 

 

478 – 568 568

Narsés, general de Justiniano

482

 Henoticón de Zenón

490 – 562 562

Justiniano I

491 – 518 518

Reinado de Anastasio I

494 – 565 565

Belisario, general bizantino

518 – 527 527

Reinado de Justino I

527 – 548 548

Teodora, emperatriz de Oriente

527 – 565 565 529

Reinado de Justiniano I Código de Justiniano

532

Sublevación de Niké (partidos Verde y Azul)

533

Toma de Cartago por Belisario

537

Iglesia bizantina de Santa Sofía

553

Quinto Concilio Ecuménico-Constantinopla II

562

Bizantinos completan la conquista de Italia

565 – 578 578

Reinado de Justino II

573 – 574 574

Sofía como regente

574 – 578 578

Tiberio I como regente

578 – 582 582

Reinado de Tiberio II

582 – 602 602

Reinado de Mauricio; Teodosio como coemperador

602 – 610 610

Reinado de Focas

 

 

CUESTIONARIOS DE REPASO  Preguntas sobre el material básico (para los niveles 1, 2 y 3): 1. ¿Qué atención ha prestado la historiografía cristiana tradicional al desarrollo del cristianismo  bizantino? 2. ¿Por qué motivo la comunión entre latinos y griegos se rompió hacia mediados del siglo V? 3. ¿Cuándo cambió de nombre la ciudad de Bizancio? 4. ¿Quién fue Constancio y qué hizo? 5. ¿Por qué al emperador Juliano se lo llamó el Apóstata? 6. ¿Quién fue Teodoro el Grande y qué hizo? 7. ¿Cuál fue la importancia del edicto del emperador Valentiniano III, de 445? 8. ¿Con quién nace el Imperio Romano de Oriente? 9. ¿Cuál fue la importancia del gobierno de Justiniano? 10. Menciona dos resultados de la estrecha relación entre la Iglesia y el Imperio en Oriente. 11. ¿Cuál fue el propósito y el resultado del edicto de unión del emperador Zenón? 12. ¿Qué creían los monofisitas en cuanto a la naturaleza de Cristo? 13. ¿Qué creía Justiniano que era su deber y de qué manera se propuso lograrlo?

14. ¿Cuál fue el propósito y los resultados del Quinto Concilio Ecuménico?

15. Describe la revuelta de Niké.

 

 

16. ¿Qué es el cesaropapismo? 17. ¿Qué tres elementos se fusionaron para crear la civilización bizantina? 18. ¿Qué lugar ocupó el cristianismo como factor aglutinante del nacionalismo y la identidad bizantina? 19. ¿Qué es el Corpus Juris Civilis y cuál fue su importancia? 20. ¿En qué sentido se puede hablar de una teocracia absolutista en relación con el gobierno de Justiniano? 21. Describe la destrucción del paganismo en el Imperio Bizantino. 22. Enumera los efectos positivos de la unión de la Iglesia y el Estado en el Imperio Bizantino. 23. Enumera los efectos negativos de la unión de la Iglesia y el Estado en el Imperio Bizantino. 24. Nombra a los tres Padres Capadocios. 25. ¿Qué era y qué decretaba el  Henotikón? 26. ¿Qué fue el monofisismo? 27. ¿Cómo era la administración de la Iglesia Bizantina? 28. Describe la organización de la Iglesia Bizantina. 29. Describe la liturgia de la Iglesia Bizantina. 30. ¿Cuáles son los tres temas fundamentales de la tradición teológica el cristianismo bizantino?

Tareas suplementarias (para los niveles 2 y 3):

1. Menciona dos contribuciones de Teodosio II.

 

 

2. Describe la revuelta de Niké.

3. Haz una descripción general de la emperatriz Teodora. 4. Haz una evaluación del gobierno de Justiniano tomando en cuenta especialmente su efecto sobre el cristianismo. 5. ¿Qué es el helenismo? 6. Describe en tus palabras la civilización bizantina. 7. Describe el arte y la arquitectura bizantina y su relación con el cristianismo. 8. Evalúa la obra legislativa de Justiniano. 9. Describe la pugna entre el poder temporal y el espiritual en el Imperio Bizantino. 10. Sintetiza la controversia de los Tres Capítulos.

Tareas avanzadas (para el nivel 3):  1. Leer González,  Historia del cristianismo, 1:298 – 303. 303. ¿Qué tres teólogos orientales fueron condenados por los de Tres Capítulos de Justiniano? ¿Cuál fue la resolución del Quinto Concilio Ecuménico respecto los Tres Capítulos de Justiniano? 2. Escribe un ensayo de 2000 palabras sobre el tema: “El cesaropapismo.”  

TRABAJOS PRÁCTICOS  TAREA 1: Experimentando cambios. “Desde 313 a 640, el mundo romano y la iglesia cristiana experimentaron cambios y desarrollos tan  profundos y extensivos que ellos no podían haber sido ni siquiera soñados por los hombres en los últimos años del siglo tercero. En este espacio corto de trescientos años la l a trama política, económica y

social de la Europa romana se vio profundamente alterada tanto desde dentro como por presiones externas. La iglesia misma inevitablemente pasó por los cambios corrientes junto con el mundo. En estos años, los tres estilos católicos de la Iglesia [occidental o latino, ortodoxo o griego, y oriental]

 

 

comenzaron a emerger más distintivamente. Basado sobre el fundamento pre-existente del idioma, la cultura y la geografía, el desarrollo de estilos fue acelerado.”  acelerado.”   Cross, Eastern Christianity, 9 – 10. 10. - ¿De qué manera, en cada caso, el idioma, la cultura y la geografía contribuyeron al desarrollo de un estilo propio? Iglesia occidental o latina: Iglesia ortodoxa o griega: Iglesia oriental o persa:

TAREA 2: El Código de Teodosio el Grande (381). Lee y responde: “Es nuestro deseo que todas las varias naciones que están sujetas a nuestra clemencia y moderación, continúen en la profesión de esa religión que fue entregada a los romanos por el divino apóstol Pedro, tal como ha sido preservada por la tradición fiel; y que ahora es profesada por el pontífice Dámaso y  por Pedro, obispo de Alejandría, un hombre de santidad apostólica. Conforme a la enseñanza apostólica y la doctrina del Evangelio, creemos en una deidad de Padre, Hijo y Espíritu Santo, de igual majestad y en una santa Trinidad. Autorizamos a los seguidores de esta ley a asumir el título de cristianos católicos; pero en cuanto a los demás, dado que, en nuestro juicio, ellos son locos e insensatos, decretamos que sean calificados con el ignominioso nombre de herejes, y que no se atrevan a dar a sus conventículos el nombre de iglesias. Ellosautoridad, sufrirán enenprimer lugar el con castigo de la condenación divina, y en segundo lugar el castigo que nuestra conformidad la voluntad del Cielo, decida infligirles. … Que ellos sean totalmente excluidos incluso de los umbrales de las iglesias, dado que no  permitimos a ningún hereje llevar a cabo sus asambleas ilegales en los pueblos. Si ellos intentan cualquier perturbación, decretamos que su furia sea suprimida y que ellos sean expulsados fuera de las murallas de las ciudades, de modo que las iglesias católicas en todo el mundo puedan ser restauradas a los obispos ortodoxos que sostienen la fe de Nicea.”  Nicea.”   Código de Teodosio (380, 381), 16:1.2; 5.6.

- ¿Cuál es la posición teológica que expresa el Código de Teodosio? - ¿Contra qué herejía está dirigido el Código de Teodosio?

TAREA 3: La Iglesia Bizantina

 

 

“La Iglesia Bizantina no ha sido bien tratada por los historiadores. Su piedad no fue la piedad de Occidente. Su monasticismo tendió más y más a transformarse en quietismo; puso un énfasis casi histérico sobre el valor del arrepentimiento. Susescenas pasionesdefueron rápidamente encendidas, y muchos de sus sínodos y concilios fueron animados con la violencia más indigna. Mientras que en Occidente el problema escatológico fue el que ocupó principalmente la mente de los cristianos, los cristianos orientales estuvieron ansiosos por entrar entra r en el estado de gracia, la relación correcta con Dios, aquí y ahora. A tal fin la naturaleza de la encarnación de Cristo, su Mediador, fue de importancia enorme. A tal fin si él [el cristiano bizantino] podía lograr una unión mística con Dios, todas las demás d emás formas de religión parecían sin valor en comparación. Pero muy frecuentemente la Iglesia Ortodoxa ha sido denunciada de ser anti-intelectual y estar contra el progreso. Ninguna de estas acusaciones es  justa.”    justa.” Steven Runciman, Byzantine Civilization, 104. - Escribe un ensayo de 2000 palabras haciendo una comparación entre la Iglesia Latina y la Iglesia Bizantina, a partir de las observaciones de Runciman.

DISCUSIÓN GRUPAL  1. El dominio de la Iglesia por parte del Estado (cesaropapismo) ha sido característico del Imperio Bizantino. A la luz de la experiencia en el Imperio Bizantino, evalúen los intentos de algunos evangélicos en diversos países de presionar al Estado Estad o a que imponga la lectura de la Biblia y la oración en las escuelas públicas, como también la imposición de principios éticos cristianos sobre toda la  población a partir de su legislación. 2. Un elemento destacado en la cultura y civilización bizantina fue el desarrollo de un arte típicamente cristiano. ¿Cuál es el lugar de la fe cristiana en la modelación de expresiones artísticas? ¿Hay lugar hoy para el desarrollo de un auténtico arte cristiano? ¿Qué valor misionológico tienen las diversas formas artísticas?

LECTURAS RECOMENDADAS  Bainton, La Iglesia de nuestros padres , 65 – 73. 73. González, Historia del cristianismo, 1:176 – 183; 183; 193 – 202; 202; 209 – 214; 214; 289 – 303. 303. Latourette, Historia del cristianismo, 1:133 – 136. 136. Muirhead, Historia del cristianismo, 1:137 – 147. 147. Romero, La Edad Media, 9 – 18; 18; 24 – 31. 31. Walker, Historia de la iglesia cristiana, 153 – 172. 172.3 

 

 

 _ UNIDAD 4 

Los problemas del cristianismo primitivo  INTRODUCCIÓN  Los cristianos del siglo XXI, que damos por sentadas las grandes doctrinas de la fe, no siempre somos conscientes de la larga lucha por la que tuvieron que pasar nuestros antepasados en los caminos del Señor, para dejarnos la herencia maravillosa de nuestra doctrina y vida cristianas. El pensamiento y la práctica de la Iglesia fueron madurando con el correr del tiempo, a medida que los creyentes iban desplegando y formulando gradualmente las doctrinas implícitas en el Nuevo Testamento, conforme comprendían la revelación divina en su Palabra y la aplicaban a sus circunstancias históricas. El desarrollo del pensamiento cristiano y su expresión doctrinal fue un largo proceso lógico-cronológico. Fue un proceso lógico, pues las doctrinas se fueron desarrollando las unas a partir de las otras, y este  proceso es cronológico puesto que esto es to ocurrió a lo largo del tiempo. Además, la fe y la vida cristianas se fueron modelando conforme las diversas y variadas experiencias que los creyentes fueron confrontando con el correr del tiempo. A cada nueva dificultad o desafío, los cristianos respondieron conforme su comprensión del actuar redentor de Dios, según lo  percibían en sus propias vidas y relaciones. La teología y la ética cristianas son siempre el resultado de la experiencia cristiana, bajo la guía del Espíritu Santo y en conformidad con co n el registro autoritativo de la revelación divina, la Biblia. En el deseo de predicar y vivir su fe en un lenguaje claro y comprensible, la Iglesia se vio forzada a definirse en torno a diversos problemas, y para ello, tuvo que reflexionar sobre su fe. Fuerzas hostiles, que la atacaron desde afuera, y filosofías sutiles, que la minaron desde adentro, obligaron a los cristianos a defender lo que entendían era la ortodoxia doctrinal y ética. Esto se dio ya desde una etapa  bien temprana de su historia, incluso antes de que el Nuevo Testamento se hubiese terminado de componer o se hubiese cerrado el canon de las Escrituras. Así, pues, desde bien temprano hubo intentos  por declarar la fe según surgía la necesidad de hacerlo, y esta necesidad se dio en un orden lógico. Esto dio como resultado el desarrollo razonado de la doctrina a lo largo de líneas de pensamiento que han regido la fidelidad “a la fe que ha sido una vez dada a los santos” (Judas 3).   El ideal cristiano de una iglesia inclusiva y una, pronto se vio amenazado por las fuerzas fu erzas disolventes de la división. La misma noche en que Jesús oró por la unidad de su iglesia (Juan 17), los discípulos estuvieron discutiendo sobre quién de ellos sería el primero, y uno de los Doce se retiró para traicionar al Maestro. Aun en la primera generación de cristianos, c ristianos, la Iglesia se vio desgarrada por p or las disensiones. Los documentos neotestamentarios ofrecen numerosos numeroso s testimonios de esta desgracia. Antes de terminar el primer siglo ya eran numerosos los motivos de discordia y las ocasiones de división, que echaban  por tierra con el ideal de una Iglesia unida.

Kenneth S. Latourette:  En este contraste entre lo ideal y lo real en la iglesia, tenemos otro ejemplo de las aparentes paradojas que son tan familiares en las enseñanzas de Jesús y en el  Nuevo Testamento en general. Es el de establecer la perfe perfección cción como la meta hacia la cu cual al los

 

 

cristianos deben esforzarse, meta para ellos mismos y para todos los hombres, parangonada por po r el franco reconocimiento del grado al cual el cumplimiento deja de llegar a la meta.”  meta.”   CUADRO 13- Problemas y Respuestas de la Iglesia   En esta unidad procuraremos considerar algunos de los problemas más importantes a los que el cristianismo de los primeros siglos tuvo que confrontar, en relación con la base de su fe, sus doctrinas, sus prácticas, y su manera de entender la vida cristiana y el servicio a Dios.

EL PROBLEMA DE LAS ESCRITURAS   _ Las Escrituras de los primeros cristianos  Los primeros cristianos fueron judíos, y por supuesto, su Biblia era el Antiguo Testamento en la versión de los Setenta o Septuaginta (LXX). Estos primeros discípulos palestinos leían el Antiguo Testamento en todo lo que tenía que ver con el Mesías y veían en Jesús el cumplimiento de todas sus  profecías. Estos Es tos cristianos guardaban también los mandamientos y algunas de las leyes ceremoniales  prescritas en las escrituras hebreas. Para mediados del segundo siglo la situación había cambiado. Ahora la mayoría de los cristianos era gentil, y si bien los más educados leían el Antiguo Testamento en griego, comenzaban a leer otros libros. Las cartas de Pablo se leían en las iglesias caseras (1 Ts. 5:27), y se pasaban de una congregación a otra (Col. 4:16), hasta que llegaron a ser ser consideradas como “Escritura” (2 P. 3:16). Los Evangelios, también llamados “Memorias de los apóstoles,” eran leídos como “Escritura” junto con los “Profetas”. También se leían otros escritos cristianos, como las cartas de Clemente de Roma a los Corintios, la Epístola de Bernabé, las Epístolas de Ignacio, El Pastor de Hermas, la Epístola de Policarpo a los Filipenses, la Didaché  o  o Doctrina de los Doce Apóstoles, entre otros. Todos estos escritos fueron producidos por los “Padres Apostólicos,” es decir, personas personas que se suponíanreflejan tuvieron contacto más menos directoposterior con losa apóstoles. En las su iglesias gran mayoría, escritos un un cristianismo puro.oEn el período los apóstoles tuvieronestos que decidir cuáles de todos estos escritos iban ib an a ser incluidos en su lista (“canon”) de libros sagrados. La tarea no fue fácil.

 _ La herejía de Marción (c. 160)  A mediados del segundo siglo, había muchos cristianos de cultura griega que no estaban del todo satisfechos con las Escrituras judías y sus enseñanzas. Uno de ellos fue Marción, un comerciante rico, dueño de una flota de barcos en el mar Negro (Sínope, Ponto), hijo del obispo de la ciudad, que lo excomulgó por inmoralidad. Marción adquirió renombre en las filas cristianas ortodoxas como hereje. Había viajado a Esmirna, donde conoció al gran obispo Policarpo. Más tarde (140) llegó a Roma, donde se ganó las simpatías de la iglesia romana debido a sus ricos donativos. Estando en Roma, se encontró con el venerable Policarpo que lo descalificó totalmente como hereje.

Eusebio: “Policarpo mismo, cuando Marción en cierta ocasión se encontró con él y dijo: ‘¿Nos

conoces? respondió: Sí, conozco al primogénito de Satanás. Tal cuidado ejercieron los apóstoles y sus discípulos para evitar incluso el intercambio de palabras con cualquiera de aquellos que pervertían la verdad; como Pablo también dijo: ‘Al hombre que es hereje después

 

 

de la primera y segunda amonestación, rechácenlo; sabiendo que el tal es un rebelde, y peca, y está condenado’ (Tito 3:10).”  3:10).”  ¿Qué hizo Marción para que un pastor respetable como Policarpo lo repudiara como hereje? ¿Cuál fue su errordeque lo hizo merecedor de un título “primogénito de Satanás”? Marción era unTenía gran admirador Pablo, quien, según él, había sidocomo el único que entendió la enseñanza de Jesús. dificultades para aceptar el Antiguo Testamento, ya que pensaba contradecía las Escrituras cristianas, especialmente las cartas de Pablo. La esencia de su enseñanza era un sentido agudo de la novedad del evangelio cristiano y su contraste con el judaísmo. Por eso, rechazaba rechaz aba el Antiguo Testamento y al Dios creador que allí se presenta, al que consideraba como totalmente diferente del Dios proclamado por Jesucristo. Pero Marción fue todavía más allá. Él se consideraba el único intérprete de los escritos paulinos, y en consecuencia, él único intérprete del cristianismo. Según él, Pablo había liberado a los cristianos de la Ley de Moisés, y él los había liberado de las Escrituras judías y del Dios de esas Escrituras. Este Dios judío era un Dios que gobernaba sobre el mundo material, que creó con todas sus imperfecciones, y que no actúa por otro motivo que no sea la justicia punitiva (Éx. 21:24). Para Marción, éste no es el Dios de los cristianos. El Dios verdadero está en los cielos, es espíritu puro y sólo actúa por amor. En definitiva, las enseñanzas de Marción eran gnósticas. Por predicar estas enseñanzas, el obispo de Roma excomulgó a Marción y las iglesias que habían recibido generosas donaciones tuvieron que devolverlas. Marción reunió a sus seguidores y se estableció en la ciudad capital, desde donde esparció su doctrina a Galia, África y Mesopotamia. Su secta estaba bien organizada con un clero reconocido y con altas y severas normas morales. En algunos lugares los marcionitas fueron perseguidos e incluso hubo quienes fueron martirizados. Las iglesias marcionistas persistieron por unos 150 años más, y en la Edad Media, sus ideas fueron retomadas y seguidas por los paulicianos. Habiendo “liberado” a sus seguidores de las Escrituras Es crituras judías, Marción compuso su propia “Biblia,” que incluía: 10 epístolas paulinas (excluía 1 y 2 Timoteo y Tito), y un solo Evangelio (Lucas), pero corregido a su gusto. Tertuliano dice de él: “Marción enseña la Biblia no con su pluma, sino con su cortaplumas, cortando todo lo que no concuerda con sus propias ideas.” Ireneo de Lyon dice de él que  blasfemó contra Dios porque puso de lado mucho de la enseñanza de Cristo y se colocó por encima de los apóstoles.

Ireneo de Lión: “Marción de Ponto … presentó presentó la blasfemia más atrevida contra Aquel que es  proclamado como Dios por la ley y los profetas, declarando que él es el autor de los males, que se deleita en la guerra, y es inconstante en su propósito, e incluso de estar con contra tra sí mismo. Pero de Jesús dice dice que es derivado de ese Padre que está por encima del Dios que hizo el mundo, … y que se manifestó en la forma de un hombre a aquellos que estaban en Judea, aboliendo a los  profetas y la ley, y todas las obras de ese Dios que hizo el mundo.… Además de es esto, él mutila el Evangelio que es según Lucas, quitando todo lo que está escrito respecto a la generación del Señor, y poniendo a un lado una buena parte de la enseñanza del Señor, en la que el Señor aparece como confesando más firmemente que el Hacedor de este universo es su Padre. De igual modo, él persuadió a sus discípulos de que él era más digno de crédito que todos esos apóstoles que nos han transmitido el evangelio, proveyéndoles no con el Evangelio, sino meramente un fragmento del mismo. De igual modo, también, él desmembró las epístolas de

Pablo, quitando todo lo que dice el apóstol respecto de que el Dios que hizo el mundo es el Padre de nuestro Señor Jesucristo, y también aquellos pasajes de los escritos proféticos que el apóstol cita en orden a enseñarnos enseñarnos que ellos anunciaban de antemano la venida del Señor.”  Señor.” 

 

 

 _ El canon del Nuevo Testamento  Frente al desafío de Marción, las iglesias tuvieron tuvie ron que decidir cuáles libros debían sser er incluidos en las Escrituras cristianas y cuáles no. La condición establecida para incluir un libro en la lista era que su autor debía ser unyapóstol, ya que sea en forma directa o indirecta en elactuales caso deen Marcos que dependió de Pedro, de Lucas dependió de Pablo). De los(como 27 libros el Nuevo Testamento, sólo se incluían 24, ya que 2 Pedro, Hebreos y Santiago eran discutidos. La fijación del canon (del griego “regla” o “lista” de libros) comenzó en Occidente, pero su influencia se esparció por todas partes. Una inscripción china que registra el arribo del cristianismo a este país en el año 635, dice: “Las Escrituras han quedado establecidas en veintisiete libros.” De un extremo al otro mundo, todos los cristianos reconocían un solo canon neotestamentario hacia fines de este período. En razón de esta cristalización temprana del canon, los cristianos se vieron librados de tener en su Biblia escritos de poco valor o libros heréticos y dañinos. En definitiva, Marción hizo más bien que daño al desarrollo des arrollo del cristianismo.

EL PROBLEMA DEL CREDO   _ La fe de los primeros cristianos 

El Nuevo Testamento contiene algunas confesiones de fe, que las personas hacían frente a la congregación generalmente al ser bautizadas. Algunas de estas confesiones de fe son: “Jesús es el Señor” (1 Co. 12:3; Ro. 10:9; Fil. 2:11); o “Jesús es el Hijo de Dios” (Hch. 8:37– 38; 38; 1 Jn. 4:15). Quien más hizo por establecer la creencia cristiana según debía ser enseñada (es decir, “doctrina”) fue el apóstol Pablo. La formulación doctrinal no fue en él algo especulativo sino parte de su vida activa como agente del reino de Dios. La doctrina cristiana fue el corazón de su predicación y tarea misionera. El primer tema de su predicación a los gentiles iba contra el politeísmo pagano y era “hay un solo Dios” (Hch. 14:15; 1 Ts. 1:9). El segundo seg undo tema presentaba a Jesucristo como Hijo de Dios, como resucitado y como Salvador (1 Ts. 1:10). Pablo era bien práctico y nada especulativo. Su método de enseñanza y comunicación de la verdad cristiana era escribir cartas a las jóvenes iglesias para responder a las necesidades de los nuevos convertidos. Su propósito no era especulativo, ni pretendía hacer una teología sistemática o responder a todas las preguntas y cuestiones teológicas. Su concepto de la “sana doctrina” tiene que ver con cuestiones bien prácticas y mayormente éticas (ver Tito 2:1 –  2:1 – 10). 10).

 _ El problema de los judaizantes  El principal problema teológico que enfrentó Pablo fueron los judaizantes. Por eso escribió acerca de cómo salva Jesús, y desarrolló la doctrina de la salvación por gracia mediante la fe (especialmente en Gálatas y Romanos). Los ebionitas fueron los continuadores de estos judaizantes del Nuevo Testamento. Se originaron en Palestina a fines del primer siglo, y se esparcieron más tarde por Asia Menor. La mayoría eran judeo-cristianos y utilizaban como escritura fundamental el Evangelio de Mateo en lengua hebrea (aramea). Sus enseñanzas características eran: (1) enseñaban la universalidad de la ley mosaica y decían que la obediencia a la misma era necesaria para la salvación; (2) rechazaban los escritos y enseñanzas de Pablo,sólo a quien consideraban como ap óstata de lareley; (3) el reconocían Jesús Jesúvenido s comoen Mesías y profeta,  pero pensaban de él como un un ser s erapóstata humano sob sobre quien Espíritu había haabía el momento de

su bautismo; (4) esperaban un milenio inminente.

 _ La herejía de los gnósticos 

 

 

Así como Marción procuró separar al cristianismo cr istianismo de sus orígenes judíos, en el segundo siglo hubo otros que quisieron liberarlo de sus “pequeños comienzos”. Querían relacionar al cristianismo con las ideas corrientes de aquel entonces sobre el mundo, los seres humanos y Dios. Estas ideas provenían de la filosofía griega, de las religiones orientales (como el hinduismo, el gnósticas budismo yeran el zoroastrismo), incluso de prácticas como la astrología y la magia. En general, las ideas expresión de une sincretismo que combinaba varios elementos orientales con las religiones tradicionales grecorromanas. greco rromanas. Este movimiento se denominó gnosticismo, porque sus seguidores decían que poseían un conocimiento especial de Dios y del mundo que los demás no tenían (del griego gnosis, “conocimiento,” “ciencia”). El gnosticismo penetró ampliamente en las comunidades cristianas hacia el siglo II, cuando se convirtieron algunos filósofos paganos e introdujeron intro dujeron algunas ideas de la filosofía griega pagana. Su intención era: (1) elevar al cristianismo del plano inferior de la fe al plano superior de la gnosis (ciencia); y (2) procurar así al cristianismo una mayor fuerza de expansión y propaganda en los ambientes intelectuales helenísticos. Los gnósticos cristianos desplegaron una gran actividad literaria, pero sus escritos han desaparecido casi enteramente. Conocemos sus ideas mayormente a través de los escritores que los impugnaron. Sus ideas principales eran: El mundo: está hecho de materia, que es mala, y está gobernado gobern ado desde los siete planetas por poderes p oderes que no son buenos. A su vez, el mundo y los planetas son gobernados por el Creador (el Jehová del Antiguo Testamento), un dios inferior conocido como Demiurgo, que cometió su mayor error al crear a los seres humanos. El Demiurgo era un eón lo suficientemente corrompido como para crear un mundo material. Los eones eran emanaciones de Dios en grado descendente.  Los seres humanos : están compuestos de cuerpo y mente, pero en algunos hay también una chispa de espíritu, que está encarcelado en el cuerpo material.  Dios: el verdadero Dios es espíritu puro, y vive con otros seres espirituales en un reino de espíritu y luz, lejos de nuestro oscuro mundo material. Jesús, que es inferior a Dios, es enviado por éste al mundo para liberar a los espíritus encarcelados. Jesús parecía tener un cuerpo material y necesidades materiales, pero esto sólo eran apariencias ya que él también es espíritu puro. Por eso, no podía sufrir ni morir. Jesús salva trayendo tra yendo el conocimiento del reino espiritual y de cómo retornar a él. Esto incluye contraseñas mágicas, que después de la muerte permiten a los espíritus de las personas llegar hasta el alejado reino espiritual donde está Dios, pasando sin peligro las amenazas de los poderes planetarios y del Creador. La salvación consiste en llegar al reino espiritual y ser absorbido por Dios, que es espíritu  puro. Por supuesto, este conocimiento salvador no era para todos sino sólo para los “espirituales,” es decir, aquellos que habían recibido la gnosis o “conocimiento.” Por eso se autotitulaban “gnósticos.”  “gnósticos.”  

 _ La reacción cristiana   La Regla de Fe. Frente a la atractiva enseñanza de los gnósticos, los cristianos se vieron forzados a definir con claridad su propia fe. El Nuevo Testamento mismo presenta la reacción cristiana ante la amenaza de la herejía gnóstica (1 Co. 2:6; Col. 2:8 –  2:8 – 10; 10; 1 Jn. 1:1 – 3; 3; 2:22; 4:2 – 3; 3; Ap. 2:6, 15). Antes de ser bautizado, todo creyente debía repetir ante la congregación una confesión de fe, que resumía algunas de las verdades centrales de la doctrina cristiana (1 Co. 12:3; Ro. 10:9; 1 Jn. 4:15). Según Tertuliano, este credo básico era la Regla de Fe o Símbolo de la Fe como también se lo llamaba. Según el gran teólogo de África del norte, la iglesia católica (universal) “reconoce a un solo Señor Dios, el

Creador del universo, y a Cristo Jesús (nacido) de la Virgen María, el Hijo de Dios el Creador; y la resurrección de la carne; ella une la ley y los profetas pro fetas en un volumen con los escritos de los evangelistas y apóstoles, del que bebe su fe. Ella sella esto con el agua (del bautismo), engalanada con el Espíritu

 

 

Santo, alimentada con la eucaristía, y alegrada con el martirio, y contra esta disciplina así (mantenida) ella no admite opositores.” opositores.”   “Laque regla de laen fe precisamente una, ella solacreador inmutable incambiable; egla, aTertuliano: saber, por  la se cree un único Diosesomnipotente, del euniverso, y en lasurregla, Hijo Jesucristo, que nació de la Virgen María, fue crucificado bajo Poncio Pilato, resucitado al tercer día de entre los muertos, recibido en los cielos, que está sentado ahora a la diestra del Padre, que ha de volver a juzgar a vivos y muertos a través de la resurrección de la carne así como (del espíritu).”   espíritu).” Ireneo de Lión (¿130 – 200?), 200?), otro de los Padres Apostólicos, registró una confesión de fe similar:

Ireneo de Lión: “La Iglesia, si bien dispersa por todo el mundo, incluso hasta los términos de la tierra, ha recibido de los apóstoles após toles y de sus discípulos, esta fe: f e: [Ella cree] en un Dios, el P Padre adre todopoderoso, Hacedor de los cielos y la tierra, los mares y todas las cosas que en ellos hay; y en Cristo Jesús, el Hijo de Dios, que se encarnó para nuestra salvación; y en el Espíritu Santo, quien proclamó a través de los profetas las dispensaciones de Dios y los eventos, y su nacimiento de una virgen, y la pasión, y la resurrección de los muertos, y la ascensión al cielo en la gloria del Padre “para reunir todas las cosas en una,” y para resucitar de nuevo a toda carne de toda la raza humana, en orden a que delante de Cristo Jesús, nuestro Señor, y Dios, y Salvador, y Rey, conforme la voluntad del Padre invisible, “toda rodilla se doble, de las cosas que están en el cielo, y en la tierra, y debajo de la tierra, y que toda tod a lengua confiese” a él, y que él ejecute un justo juicio para con todos; para que él envíe a las “maldades espirituales” y a los ángeles que transgredieron y se hicieron apóstatas, junto con los impíos e injustos y malvados y profanos entre los hombres, al fuego eterno; pero que pueda en el ejercicio de su gracia, conferir inmortalidad a los justos y santos y a aquellos que han guardado sus mandamientos, y han perseverado en su amor, algunos desde el comienzo [de su carrera cristiana], y otros desde [la fecha fecha de] su arrepentimiento, y pueda rodearlos de gloria eterna.”   Una teología más sistemática. El gnosticismo también obligó a los cristianos a formular la doctrina cristiana en forma más sistemática y didáctica, a fin de poder comunicarla con más facilidad a los nuevos convertidos y catecúmenos. En esta tarea se destacaron varios teólogos. Clemente de Alejandría (150 –  (150 – 216), 216), nació de padres paganos en Alejandría, donde se hizo cristiano y fue discípulo de Panteno, a quien sucedió como director de d e la escuela de catecúmenos en el año 189. 189 . Fue maestro de Orígenes y del obispo Alejando de Jerusalén (m. 251). A causa de la persecución de Septimio Severo tuvo que salir de Egipto y refugiarse en Capadocia, donde quizás murió. Su propósito era armonizar la filosofía griega con la doctrina cristiana, o las verdades de la ciencia y el conocimiento humanos con las de la revelación divina. Quería convencer a los gentiles de la verdad del cristianismo,  para luego educarlos educ arlos en la vida cristiana, y, finalmente, perfeccionarlos perfe ccionarlos en los misterios de la fe. Este triple objetivo es el que se desarrolla en sus tres obras principales: el Protréptico o  La exhortación a los gentiles, el Pedagogo, y la Strómata o Miscelánea (conocida también como Tapices). Orígenes (185 – 254), 254), nació en Alejandría y murió en Tiro. Recibió su primera educación de su  padre, Leónidas, y fue discípulo en la escuela de Alejandría. En 202 fue nombrado sucesor de Clemente al frente de la escuela y la dirigió por treinta años. Fue oyente del fundador del neoplatonismo, Amonio

Sacas. Hacia el año 230 fue ordenado sacerdote sac erdote en Cesarea. Fue un hombre de una cond conducta ucta intachable y de una erudición enciclopédica. Orígenes se destaca como uno de los pensadores más originales de todos los tiempos. Escribió comentarios bíblicos, compiló textos de las Escrituras en varios idiomas

 

 

 Hexapla), defendió la fe cristiana de los ataques intelectuales ( Hexapla in telectuales del paganismo, produjo diversos escritos devocionales y preparó la primera teología sistemática cristiana.  La apologética cristiana. Otra influencia del gnosticismo fue que puso en movimiento ideas y métodos de argumentación que tuvieron gran repercusión sobre el cristianismo. Según ellos, su autoridad provenía de un conocimiento secreto que les había sido transmitido por tradición. En respuesta a esto, los cristianos afirmaban que también ellos tenían una tradición dada por Jesús a sus apóstoles y transmitida por éstos a sus seguidores. De esta manera el movimiento gnóstico llevó a una veneración de la tradición, que llegó a valorarse tanto como la misma palabra de Dios en cuestiones de fe y práctica. Éste fue un resultado negativo de la influencia gnóstica sobre el cristianismo. Aquí está el origen de la pretensión católico romana de autoridad basada en la tradición de Pedro como primer obispo romano y de una sucesión continuada de obispos como primados de Roma. León I (440 –  (440 – 461) 461) le dio base escrituraria a esta teoría, diciendo que Pedro y sus legítimos sucesores habían recibido autoridad para regir sobre todo el cristianismo, y  para ello utilizó tres pasajes bíblicos: Mateo 16:18 –  16:18 – 19; 19; Juan 21:15 – 17; 17; y Lucas 22:31 –  22:31 – 32. 32. Según esta teoría, Pedro tenía autoridad sobre los demás apóstoles y había transferido esta autoridad a sus sucesores en el episcopado romano. El ascetismo y el monasticismo. Finalmente, el énfasis gnóstico sobre la pecaminosidad de la materia y la indignidad del cuerpo preparó el camino para el ascetismo y el monasticismo dentro del cristianismo. Poco a poco se fueron haciendo cada vez más populares prácticas tales como el ayuno, el celibato, la castidad de las viudas y las vírgenes, la prohibición del casamiento, y la flagelación o mortificación del cuerpo. De esta manera llegó a asociarse aso ciarse la mortificación o limitación de la carne con la piedad. A mayor mortificación, mayor piedad. En 305, un sínodo en Elvira (España) exigió el celibato de los obispos y el clero. En 385, el obispo Siricio de Roma ordenó el celibato para todos los sacerdotes bajo su jurisdicción. En 390, un concilio en Cartago mandó la castidad para obispos, sacerdotes y diáconos. Estas tendencias fueron preparando el camino para el monasticismo.

CUADRO 14 - LOS PADRES DE LA IGLESIA  Oeste  Este  Primer siglo (95 – c. c. 150)

Padres Apostólicos - Propósito: edificar la Iglesia

EDIFICACIÓN

Clemente de Roma

Ignacio de Antioquía Policarpo de Esmirna Epístola de Bernabé Epístola de Diogneto Segunda Epístola de Clemente Papias

El pastor de Hermas Didaché

 

 

Segundo siglo (120 – 220) 220)

Apologistas - Propósito: defender el cristianismo

EXPLICACIÓN

Justino Mártir Tertuliano de Cartago

Arístides de Atenas Taciano Atenágoras Teófilo

Tercer siglo (180 – 250) 250)

Polemistas - propósito: luchar contra doctrinas falsas

REFUTACIÓN

Escuela de Roma  (acercamiento práctico)

Escuela de Alejandría  (acercamiento alegóricoespeculativo)

Escuela de Antiquía  (acercamiento históricogramatical

Ireneo vs. gnósticos Tertuliano vs. Praxeas Cipriano y el episcopado

Panteno Clemente de Alejandría

Cuarto siglo (325 – 460) 460)

Teólogos - propósito: establecer la sana doctrina

DEFINICIÓN

Jerónimo traductor de la Atanasio - homoousios  Biblia al latín: Vulgata. Crisóstomo - predicador Ambrosio de Milán Basilio de Cesarea  predicador. Agustín de Teodoro de Mopsuestia. Hipona - teólogo, filosofía de la historia en La ciudad de  Dios 

Orígenes - Hexapla (texto del AT); De Principiis (primera teología sistemática)

EL PROBLEMA DE LA ÉTICA  Frente al relajamiento de la conducta que pareció incrementarse con el correr del tiempo, hubo tres movimientos en los primeros siglos, que si bien fueron diferentes, guardan cierta relación. Se caracterizaron por su lucha contra el aflojamiento de las pautas éticas y por su insistencia en un ministerio moralmente calificado. Los tres movimientos se opusieron a que personas que habían negado su fe o entregado sus Biblias durante la persecución pudiesen recibir o administrar los sacramentos. Los creadores y líderes de estos movimientos diversos fueron: Montano, Novaciano y Donato.

 _ La herejía de Montano (c. 179)   Hacia el año 156, este recién convertido de Frigia (Asia Menor), estando en trance recibió varios mensajes del Señor. Entre estos mensajes había uno que decía que Cristo volvería pronto y reinaría en

 

 

la Nueva Jerusalén (Ap. 21:2), que se establecería en Pepusa, un pueblo de aquel país. Pronto se le unieron dos profetisas, Priscila y Maximilla, que también pasaban por trances y decían estar “inspiradas” por el Espíritu Santo. Para algunos, estos predicadores estaban poseídos por el demonio;  para muchos, eran verdaderos cristianos al estilo de los del primer si siglo. glo. Ellos se llamaban la “Nueva Profecía,” y decían que Dios hablaba a su iglesia a través de profetas y profetizas, cuya autoridad debía ser acatada en lugar de la de los obispos, que estaban corrompidos. Para Eusebio, tanto Montano con sus profetisas eran falsos profetas.

Eusebio de Cesarea: “… un convertido reciente, llamado Montano, por su ambición insaciable de liderazgo, le dio al adversario oportunidad en su contra. co ntra. Y cayó fuera de sí mismo, y cayendo de pronto en una especie de trance y éxtasis, deliró y comenzó a parlotear y pronunciar cosas extrañas, profetizando de una manera contraria a la costumbre constante de la iglesia transmitida por tradición desde el comienzo. Algunos de aquellos que escucharon sus declaraciones falsas en ese tiempo estaban indignados, y lo reprendieron como a alguien que estaba poseído, y que estaba bajo el control de un demonio, y era guiado por un espíritu engañador, y estaba perturbando a la multitud; y le  prohibieron distinción hechaPero por otros, el Señor y su advertencia a velar atentamente hablar, contra recordando la venida dela falsos profetas. imaginándose ellos mismos  poseídos por el Espíritu Santo y de un espíritu profético, se exaltaron y se envanecieron no  poco; y olvidándose de la distinción del Señor, desafiaron al espíritu loco, insidioso y seductor, y fueron seducidos y engañados por él. Como consecuencia de esto, él ya no pudo ser controlado, como para que guardara silencio. Así, por algún artificio o más bien mediante tal sistema de artificio maligno, el diablo, al maquinar la ruina de los desobedientes, y ser honrado indebidamente por ellos, secretamente excitó e inflamó sus entendimientos que ya se habían apartado de la verdadera fe. Y él, además, ad emás, levantó a dos mujeres, y llenándolas con el espíritu falso, de modo que ellas parlotearon salvajemente e irracionalmente y extrañamente, como la persona ya mencionada [Montano] mismo.”   mismo.” Las enseñanzas de Montano se centraban en torno a dos puntos fundamentales: 1. Énfasis sobre el Espíritu Santo y los dones carismáticos. Se acusaba a Montano de pretender ser el Espíritu Santo y que sus palabras tenían el mismo valor que las de la Biblia. En realidad, había un fuerte énfasis sobre el don de profecía. Esto era demasiado para el cristianismo ya institucionalizado de aquel entonces. 2. Énfasis sobre la conducta. Eran muy estrictos en la disciplina, los ayunos y las ofrendas. No se comprometían con el paganismo ni escapaban a la persecución. Su creencia en el inmediato retorno de Cristo los llevó a separarse del mundo y a buscar el sufrimiento como camino de perfeccionamiento y a prohibir el casamiento. Fue el alto código moral de los montanistas lo que provocó la oposición de muchos. A pesar de la  persecución (los montanistas tuvieron muchos mártires, especialmente en el norte de África) y el rechazo (muchos obispos en Asia Menor se opusieron duramente), el montanismo se esparció a Roma donde encontró mayor oposición todavía, y al norte de África donde se hizo fuerte en Cartago. En esta última ciudad atrajo la atención de Tertuliano en el 207 y lo ganó para este movimiento. Según

Tertuliano, el montanismo era ortodoxo en la doctrina y ascético en la práctica. El montanismo continuó su obra en Oriente hasta mucho después de la aceptación ace ptación del cristianismo  por parte del gobierno imperial. Su inf influencia luencia sobre el cristianismo tuvo una vigencia todavía mayor.

 

 

El montanismo (1) ejerció una influencia purificadora, especialmente sobre el clero; (2) distinguió por  primera vez entre pecados mortales (que no tienen perdón) y pecados veniales (que pueden ser  perdonados); (3) preparó el camino para el movimiento monástico al iinsistir nsistir en la separación del mundo y una vida ascética. ¿Fue el montanismo un movimiento cristiano o no? Antiguamente se acusaba al montanismo de ser sabeliano, pero Tertuliano (que era anti-sabeliano) era montanista y relaciona al sabelianismo con el rechazo de la Nueva Profecía. El montanismo fue en realidad r ealidad un profundo movimiento de renovación espiritual en una Iglesia que comenzaba a mostrar signos de relajamiento y decadencia. Significó el resurgimiento de la moribunda tradición de la profecía cristiana en un contexto eclesiástico caracterizado por un creciente proceso de institucionalización. Fue también una instancia temprana de los movimientos apocalípticos y adventistas que de tanto en tanto han emergido en la historia del cristianismo. Y fue una expresión temprana de un cristianismo de corte carismático, revivalista e inspiracionista, con un fuerte énfasis sobre ciertos dones del Espíritu Santo.

 _ Otros disidentes   Novaciano (c. 270) . Fue un destacado teólogo y presbítero de Roma, autor de varias obras, la más importante de ellas Sobre la Trinidad . En el año 251 se opuso a la designación de Cornelio como obispo de Roma, por considerarlo indigno de tal puesto ya que favorecía la restauración de los que habían huido de la persecución, entregado las Escrituras o negado su fe. La posición opositora de Novaciano se fue tornando cada vez más rígida, hasta que se transformó en un antipapa, probablemente contra su voluntad. Así comenzó un cisma que se prolongó hasta el siglo VII. Según el historiador eclesiástico Sócrates, Novaciano sufrió el martirio en la persecución de Valeriano. Los novacianos fundaron iglesias disidentes y estrictas en casi todo el Imperio, especialmente en el norte de África y en Asia Menor, donde se le unieron muchos montanistas.  Donato el Grande (c. 35 355) 5). Fue elegido obispo de Cartago en el año 313 por un partido estricto, que acusaba al obispo anterior, Cecilio, de haber sido ordenado por alguien que no estaba en condiciones de hacerlo, dado que bajo la persecución de Diocleciano había entregado las Escrituras  para ser quemadas. Los donatistas eligieron primero a Mayorino como obispo de Cartago, quien pronto fue sucedido por Donato. Los donatistas llegaron a ser fuertes en el norte de África, especialmente en  Numidia. Sus enseñanzas eran muy rigurosas. Ellos enseñaban que si un obispo, por cualquier razón, era indigno o había sido ordenado por alguien que lo era, su ministerio carecía car ecía de validez y los sacramentos  perdían su efecto salvad salvador or y de gracia si él los administraba. Además, creían que ellos representaban la verdadera sucesión episcopal, y por lo tanto, eran los únicos que estaban en condiciones de administrar los sacramentos con efectividad.

 _ La reacción de la Iglesia  El debate teológico entre estos disidentes y la Iglesia oficial tenía que ver formalmente con la cuestión de la restauración de los caídos en tiempos de persecución. En realidad, había otras causas que se revestían de argumentos teológicos, como diferencias sociales, políticas y económicas entre los  partidos en conflicto. Pero sobre todo, se trataba de d e la luch luchaa entre dos d os formas de cristianismo. Por un lado, un cristianismo ya bastante institucionalizado y establecido con respaldo imperial, y por el otro lado, un cristianismo no establecido, crítico de la relación de la Iglesia con el Estado romano y no institucionalizado.

La conversión de Constantino y la paz para la Iglesia profundizaron las diferencias entre un cristianismo “imperial” y mundano, y un cristianismo no ligado al poder y opuesto al mundo. El cristianismo institucionalizado, con el apoyo oficial del Imperio, terminó por aplastar a la disidencia.

 

 

Por su parte, en algunos casos, los disidentes asumieron actitudes terroristas y de fuerte rechazo del status quo  religioso que resultó de la conversión de Constantino y su favoritismo hacia la Iglesia cristiana. En otros casos, la disidencia fue una reacción contra la pérdida de la vitalidad espiritual en las iglesias. En este sentido, se trató de verdaderos movimientos de renovación espiritual.

EL PROBLEMA DE LA ECLESIOLOGÍA   _ De un ministerio carismático a un ministerio triple  El desarrollo en relación con el ministerio se aceleró y complicó no sólo en respuesta a los montanistas sino también debido a las divisiones y al inevitable proceso de institucionalización y concentración del poder. Cuando leemos los documentos del Nuevo Testamento nos llama la atención el hecho de que no hay una estructura de gobierno y organización que parezca normativa. Más bien, los textos neotestamentarios parecen representar una gran variedad de formas según los lugares y en diferentes épocas. En ningún otro aspecto de la eclesiología antigua se puede ver esto más claramente que en la estructura del liderazgo de las iglesias. El ministerio Jerusalény .ancianos” En Jerusalén, menos en elsi bien momento mayor desarrollo institucional, habíaen “apóstoles (Hch. al 15:2, 4, 6, 22), parecedequesuPedro todavía tenía cierta autoridad espiritual y prestigio (Hch. 15:7). De todos modos, es evidente que el líder indiscutido de la iglesia en la ciudad o al menos el que tenía la palabra final era Santiago o Jacobo, el hermano carnal de Jesús (Hch. 15:13, 19). No obstante, es interesante notar el papel protagónico y dinámico de “toda la iglesia” en la discusión (Hch. 15:4, 12) y en la toma de decisiones (Hch. 15:22).   El ministerio en Antioquía. En Antioquía Antioquía había “profetas y maestros,” que probablemente ministraban de manera carismática como parte de un equipo integrado por lo menos por cinco miembros aparentemente nombrados por la iglesia (Hch. 13:1). Bernabé y Saulo, que integraban este equipo ministerial y que fueron enviados como misioneros, siguieron con la misma práctica y “constituyeron ancianos en cada iglesia” por ellos fundadas fun dadas en su primer viaje misionero (Hch. 14:23). En general, parece que en Antioquía y en las iglesias que nacieron de su proyecto misionero se seguía el modelo de la sinagoga: una junta de ancianos presidida por un presidente. El ministerio en Éfeso. En Éfeso había “ancianos” u “obispos” (Hch. 20:17, 28). Pablo utiliza indistintamente estos dos vocablos para referirse a las mismas personas, que servían como líderes de la Iglesia en la ciudad. Jerónimo comenta: “El apóstol enseña claramente que ‘presbítero’ es lo mismo que ‘obispo’.” Posiblemente “presbítero” indica por qué fueron nombradas como líderes estas personas (por su experiencia y madurez), mientras que “obispo” señala para qué fueron designados (para cuidar y supervisar el rebaño). El ministerio en Filipos. En Filipos había “obispos” y “diáconos” (Fil. 1:1). Parece claro que aquí los obispos (del griego epíscopos) todavía no tienen una autoridad o una posición de tipo monárquica, sino que funcionan más bien como los presbíteros o ancianos que dirigían y atendían espiritualmente a la comunidad de fe (Tit. 1:5). Los diáconos ayudaban a los obispos en el cumplimiento de sus responsabilidades pastorales, de allí que los requisitos personales para este ministerio sean los mismos que para los obispos (1 Ti. 3:8 – 13; 13; ver Hch. 6:1 –  6:1 – 6 donde los diáconos aparecen como ayudantes de campo de los apóstoles). El ministerio en Roma. En Roma (hacia el año 95) había “obispos “obispo s y diáconos”. Para este tiempo la

estructura era similar a la de Filipos, si bien un poco más compleja, jerárquica, y ya con cierta idea de continuidad apostólica. La autoridad del ministerio descansaba en el hecho de que fue instituido por los apóstoles y debía continuar en forma apostólica. Nótese que la idea de sucesión apostólica y de

 

 

apostolicidad del ministerio ya estaba comenzando a desarrollarse. Esta idea se profundizaría todavía más con el desafío del montanismo, las persecuciones, y el surgimiento de las herejías.

Clemente de Roma:  “Los apóstoles nos han predicado el evangelio de parte del Señor Jesucristo; y Jesucristo [hizo lo propio] de parte de Dios. Cristo, por lo tanto, fue enviado por Dios, y los apóstoles por Cristo. Ambos nombramientos, entonces, fueron hechos de una manera ordenada, conforme a la voluntad de Dios. Por eso, habiendo recibido sus órdenes, y estando plenamente afirmados por la resurrección de nuestro Señor Jesucristo, y establecidos en la palabra de Dios, con plena seguridad del Espíritu Santo, ellos salieron proclamando que el reino de Dios estaba cerca. Y así predicaron por países y ciudades, y ordenaron a los primeros frutos [de sus labores], habiéndolos probado primero por el Espíritu, para que fuesen obispos y diáconos de aquellos que creerían más tarde.… Nuestros apóstoles también sabían, a través de nuestro Señor Jesucristo, que habría contiendas en razón del oficio del episcopado. Por esta razón, por lo tanto, ya que ellos habían obtenido un preconocimiento perfecto de esto, nombraron a aquellos [ministros] ya mencionados, y después dieron instrucciones, que cuando éstos murieran, otros hombres aprobados debían sucederlos en el ministerio. Nosotros somos de la opinión, por lo tanto, aquellos ordenados por ellos, o posteriormente otros hombres prominentes, con que el consentimiento de toda la Iglesia, y que hanporservido intachablemente al rebaño de Cristo en un espíritu humilde, pacificador y desinteresado, y que  por un largo tiempo han poseído la buena opinión de todos, no pueden ser sacados del ministerio con justicia.”  justicia.”  El ministerio en Asia Menor . En Asia Menor (hacia el año 115) había “obispos, presbíteros y diáconos.” En buena medida debido al crecimiento de la Iglesia en una ciudad, ciudad, uno de los presbíteros al frente de una congregación local pasaba a supervisar a todas las congregaciones de la ciudad y a los demás presbíteros. Este pastor más destacado era nombrado obispo ob ispo y estaba a la punta de una pirámide  jerárquica de tres niveles: obispo, presbíteros y diáconos. El oficio de obispo con este significado surgió de la costumbre de tener una junta de presbíteros u obispos con un presidente. El presidente, bajo circunstancias especiales como fueron las épocas de persecución o la amenaza de las herejías, llegó a

tener una autoridad espiritual sobre los demás en aununárea determinada. Así se llegó a un ministerio triple, con unespecial obispo en la ciudad, quepresbíteros supervisaba número de presbíteros y de diáconos. Ignacio de Antioquía llama la atención sobre la necesidad de que los líderes de la Iglesia estén sujetos bajo la autoridad de su obispo, a fin de preservar la unidad de la Iglesia.

Ignacio de Antioquía: “Y por tanto es adecuado que vosotros marchéis juntos en armonía armoní a con la voluntad de vuestro obispo, cosa que también hacéis. Porque vuestro presbiterio justamente renombrado y digno de Dios, está ajustado al obispo exactamente como las cuerdas de un arpa. De manera que en vuestra concordancia y amor armónico, vuestra canción sea Jesucristo. Y transformaos, hombre por hombre, en un coro, que siendo armonioso en amor y tomando la canción de Dios en unísono, pueda cantar a una voz al Padre a través de Jesucristo, de modo que él pueda tanto oíros como percibir a través de vuestras obras que sois verdaderamente miembros de su Hijo.”  Hijo.” 

 _ Desarrollo del episcopado monárquico 

El proceso de centralización institucional y de concentración de la autoridad espiritual en la figura del obispo fue lento pero persistente en los primeros cinco siglos. Poco a poco, los dones y ministerios que habían estado en manos de todos los creyentes, se fueron concentrando con exclusividad en los

 

 

obispos. Éstos se fueron constituyendo también en depositarios de la doctrina, la correcta interpretación de la Biblia, el ejercicio de los carismas, la administración de los sacramentos y el poder eclesiástico. Varios factores ayudaron a este proceso, entre ellos, el surgimiento de las herejías, las divisiones internas, las persecuciones y la decadencia de las estructuras políticas y sociales dentro del Imperio Romano. Nodeobstante, se manera trató de ni undebido lento proceso, que serazones. fue desarrollando a lololargo los siglos y no siempre la misma a las mismas En el fondo, que de ocurrió fue el inevitable proceso de institucionalización acompañado de la pérdida de visión y sensibilidad espiritual, que culminó en el desarrollo del modelo de cristiandad. En el Nuevo Testamento mismo ya es posible detectar el comienzo de este proceso de institucionalización a medida que, primero, los ancianosobispos y diáconos en cada iglesia local estuvieron bajo la supervisión de los apóstoles y más tarde algunos obispos más destacados en las principales ciudades del Imperio asumieron el papel directivo de los primeros. A partir del siglo II ya puede detectarse el ascenso y jerarquía del ministerio episcopal, al menos en algunas ciudades. El episcopado durante el siglo II . Temprano en el segundo siglo podemos ver la distinción entre obispos y presbíteros, especialmente en los escritos de Ignacio de Antioquía (50 –  (50 – 115). 115). Cada congregación era gobernada por un ministerio a la cabeza del cual estaba el obispo, seguido por los  presbíteros y los diáconos. Más tarde en el siglo II, Ireneo de Lión y Tertuliano de Cartago dieron testimonio del ministerio de obispos diocesanos, sobre una región geográfica que más o menos se correspondía con las diócesis administrativas del Imperio Romano. Estos obispos eran sobreveedores sobre un grupo de congregaciones locales en un área geográfica determinada. A su vez, se los consideraba como los legítimos sucesores de los apóstoles, con todo lo que ello implicaba en términos de autoridad espiritual.

Ireneo de Lión:  “Por lo tanto, esto está al alcance de todos, en cada iglesia que desea ver la verdad, contemplar claramente la tradición de los apóstoles manifestada a través de todo el mundo; y estamos en posición de reconocer a aquellos que fueron instituidos por los apóstoles como obispos en las iglesias, y [demostrar] la sucesión de estos hombres hasta nuestro propio tiempo; aquellos que ni enseñaron ni sabían nada parecido a lo que entusiasma a estos [herejes].… Porque ellos estaban deseosos de que estos hombres fuesen fue sen bien perfectos e intachables en todas las cosas, a quienes ellos también estaban dejando atrás como sus sucesores, entregando su propio lugar gobierno a estos hombres; hombres que, de cumplir sus funciones honestamente, serían de de gran beneficio a la iglesia, pero si caían, serían la peor calamidad.”   calamidad.” El episcopado durante el siglo III . Para mediados del siglo III, el mono-episcopado estaba bien establecido y era el eje de la realidad institucional de la Iglesia en todo el mundo cristiano. Para este tiempo ya estaba también fijada la idea del sacerdocio (el sacerdote actuaba como un mediador entre Dios y los seres humanos) y del culto como un sacrificio. Para entonces ya comenzaba a afirmarse la  primacía del obispo de Roma por sobre los obispos en otras regiones. Nadie como Cipriano de Cartago (c. 195 – 258) 258) ayudó más a fortalecer estos conceptos con sus enseñanzas.

Cipriano de Cartago:  “El que habla aquí (Juan 6:67– 69) 69) es Pedro, sobre el que había sido edificada la Iglesia, enseñando y mostrando en nombre de la Iglesia, que, a pesar de que la muchedumbre rebelde y soberbia de los que no quieren escuchar ni obedecer obedece r se aleje, la Iglesia, sin embargo, no se aparta de Cristo; y ellos son la Iglesia, quienes son un pueblo unido al

sacerdote (obispo), y el rebaño que se adhiere a su pastor. Por eso, debes saber que el obispo está en la iglesia, y que la Iglesia está en el obispo; y que si alguno no está con el obispo, el tal no está en la Iglesia, y que en vano se lisonjean aquellos que se infiltran, sin tener paz con los

 

 

sacerdotes (obispos) de Dios, y piensan que se pueden comunicar secretamente con algunos; cuando la Iglesia, que es católica y una, no está dividida ni partida, sino que está realmente bien conectada y ligada con el vínculo de los sacerdotes (obispos), (ob ispos), que están unidos entre sí.”  sí.”   El episcopado el que siglogobernaban IV . Para el siglotoda IVuna aparecen (arzobispados) y losdurante patriarcas sobre región los másobispados amplia. A metropolitanos comienzos del siglo, en ocasión del Concilio de Nicea (325), se ve a los obispos metropolitanos (arzobispos) que, en razón de su ubicación en centros más poblados, ganaron ascendencia sobre los chorepiscopi  (obispos rurales). Desde mediados del siglo (341), se había mandado que en cada provincia del Imperio, el obispo de la ciudad principal o metrópoli tuviera superioridad sobre los obispos del interior de la  provincia. Para fines del siglo IV, en ocasión del Concilio de Calcedonia (381), ya se ve el surgimiento de los patriarcas territoriales. A éstos se les reconocía un honor especial por ser los obispos de las ciudades principales del Imperio Romano: Roma, Alejandría, Antioquía, Constantinopla y Jerusalén, que eran las sedes episcopales más importantes en Oriente y Occidente. El episcopado durante el siglo V . Para mediados del siglo V, la supremacía del obispo de Roma era indiscutible. León I, en ocasión del Concilio de Calcedonia (451), pretendió autoridad sobre toda la Iglesia y las demás sedes episcopales en base a la teoría de la sucesión apostólica y el primado de Pedro.

 _ Factores que contribuyeron a la supremacía del obispo de Roma  Un supuesto fundamento bíblico. Las pretensiones del obispo de Roma descansaban sobre la afirmación de que Pedro había recibido autoridad sobre toda la Iglesia de parte de Jesús mismo. En  base a Mateo 16:17 16:17 –19,  –19, se argumentaba que Pedro tenía el “primado,” es decir, el primer lugar lu gar entre todos los obispos cristianos, por ser la “roca” sobre la cual el Señor edificaba su Iglesia y por haber recibido la autoridad de atar y desatar (perdonar pecados). En base a Juan 21:15 –  21:15 – 17, 17, se argumentaba que Pedro era el pastor principal p rincipal de la Iglesia, que tenía la tarea ddee alimentar, cuidar y vigilar todas las ovejas del rebaño de Cristo en todo el mundo. En base a Lucas 22:31 –  22:31 – 32, 32, se argumentaba que Pedro, después de haber sido restaurado por Cristo de sus errores, era el maestro principal de la cristiandad. Estos argumentos fueron sostenidos por primera vez por León I, quien bien puede ser considerado como el primer papa de la Iglesia Católica Apostólica Romana. El argumento de la sucesión apostólica. La enseñanza de que los apóstoles transmitieron su autoridad a sus sucesores llevó a la conclusión de que la autoridad suprema de Pedro había sido transferida a los obispos de Roma, que lo sucedieron en su ministerio en la ciudad más importante del Imperio. Fue a partir del siglo V que la pretensión romana de autoridad basada en la tradición del  primado petrino se sostuvo con consistencia y continuidad hasta hoy. El martirio de Pedro y Pablo en Roma . La persecución bajo el emperador Nerón dio a la Iglesia romana un lugar prominente en virtud de los sufrimientos padecidos por los cristianos en aquella ciudad. Más tarde, con el surgimiento de la veneración de los mártires, Roma ganó un prestigio especial como el lugar de las muertes de dos de los apóstoles principales: Pedro y Pablo.  La población de Roma. Como capital del Imperio Romano, la ciudad contaba con una muy numerosa población. El número de cristianos era también importante, especialmente hacia mediados del siglo V. El peso demográfico de Roma contribuyó a la exaltación del obispo de esa ciudad. El traslado de la capital del Imperio a Constantinopla. Después del Edicto de Milán (313), los emperadores buscaron el consejo de los obispos de Roma, especialmente en cuestiones de carácter

religioso. Con el traslado de la capital imperial a Constantinopla (330), (33 0), la Iglesia de Roma y su obispo quedaron como los únicos factores de poder y de orden social en todo Occidente, lo cual aumentó su  prestigio e influencia.

 

 

 Idioma y cultura. El mundo occidental de habla y cultura latina, conducido por el obispo de Roma, resultó ser mucho más pragmático y eficiente que el mundo oriental de cultura griega. Los intrincados dilemas teológicos que enredaban a la Iglesia en el Este de habla griega, no entretuvieron a los teólogos latinos. El latín no era tan sutil como el griego para expresar significados precisos, y los líderes occidentales se ocuparon más de cuestiones prácticas que especulativas. Mientras los teólogos en Oriente se enredaban en controversias interminables, los obispos de Roma iban construyendo de manera persistente su estructura y poder políticos. Ubicación estratégica. De las cinco sedes patriarcales (Constantinopla, Jerusalén, Antioquía, Alejandría y Roma), sólo Roma estaba en la mitad occidental del Imperio Romano. De este modo, el obispo de Roma pudo ejercer su autoridad, sin competencias, sobre un territorio mayor que el de cualquier otro patriarca.  Alcance misionero. Algunos obispos de Roma, como Gregorio I (540 –  (540 – 604), 604), tuvieron un interés misionero mucho más profundo que otros patriarcas de otras regiones. En general, alentaron trabajos misioneros exitosos entre las tribus bárbaras del norte, que por entonces admiraban todo lo que fuese romano. Los patriarcas orientales fueron mucho menos meno s exitosos en materia evangelizadora y misionera.  No lograron penetrar con el testimonio cristiano el mundo persa, pers a, y más tarde, el mundo musulmán.  Las invasiones bárbaras. El colapso del Imperio Romano de Occidente bajo las invasiones invas iones bárbaras dejó a la Iglesia como la principal fuerza integradora de la sociedad, tanto dentro del Imperio como entre los bárbaros “cristianizados” (arrianos). En 404 se trasladó la sede imperial occidental de Roma a Rávena, con lo cual el obispo de Roma controló la ciudad como único representante del genio romano. roman o. Fue el obispo romano Inocencio I, que gobernó la ciudad del 402 –  402 – 417, 417, el único poder político y civil que enfrentó a Alarico y tuvo que sobrevivir al saqueo de la ciudad. Los obispos romanos confrontaron a los bárbaros invasores con la firmeza de su convicción de que eran los pastores de toda la cristiandad y defensores de la civilización romana. León I, papa desde 440 –  440 – 461, 461, enfrentó a Atila y los hunos cuando éstos estaban por atacar Roma, y logró que levantaran su asedio.  La conquista del Islam. Con el surgimiento del Islam y las invasiones árabes en el siglo VII, se  perdieron los territorios que controlaban las otras sedes patriarcales. Antioquía, Jerusalén y Alejandría quedaron bajo el islamismo, y Constantinopla padeció una permanente presión y amenaza. Al no tener

otras sedes que le hicieran competencia, el obispo de Roma incrementó su autoridad y prestigio. CUADRO 15 - DEFENSORES DE LA FE 

Apologistas 

Polemistas 

Convertidos del paganismo

Criados en una cultura cristiana

Confrontaron persecusión externa

Confrontaron herejías internas.

Usaron básicamente el AT.

Usaron básicamente en NT.

Defendieron o explicaron la fe cristiana.

Atacaron las ideas y doctrinas heréticas

Literatura apologética o dialógica

Literatura polémica o controversial.

 

 

EL PROBLEMA DE LAS CONTROVERSIAS TEOLÓGICAS     _ La una teología cristiana Lanecesidad necesidad dede reflexionar sobre su fe fue impuesta sobre los cristianos por la oposición pagana externa y las filosofías que internamente querían minarla. Esta batalla comenzó bien temprano. El cristianismo comenzó con el testimonio de Jesús como el Hijo de Dios, y la deidad de Cristo fue la  base de su fe. Pero esta creencia cr eencia tenía implicaciones que debían ser explicadas y defendidas. defendid as. Mientras Jesús estaba presente en la carne con sus discípulos, éstos lo consideraron como una gran  personalidad, con cualidades extraordinarias. Marcos M arcos presenta a un hombre fuera de serie (“¿Quién es éste?”, Mr. 4:41). Pero luego de la resurrección, ese hombre admirable se transformó tra nsformó para los discípulos en el Hijo de Dios. Por eso, la predicación de la Iglesia primitiva fue una predicación de la resurrección, resurrecció n, y sobre esta doctrina se fundó el cristianismo. La doctrina cristiana más temprana surgió como un intento por explicar la experiencia de los primeros discípulos con el Cristo resucitado.

 _ Las primeras controversias  Durante el período de los comienzos del cristianismo (hasta el año 100), la literatura del canon del  Nuevo Testamento todavía no estaba organizada. Las iglesias utilizaban el Antiguo Testamento y con él fundamentaban sus creencias. De todos modos, las iglesias crecían sin mayores problemas doctrinales y conservaban con pureza la enseñanza apostólica (Hch. 2:42). Las doctrinas capitales de la predicación apostólica, en el orden en que generalmente las enseñaban, fueron: (1) hay un solo Dios verdadero (1 Ts. 1:9; Hch. 14:15); (2) Jesús es el Hijo de Dios (1 Ts. 1:10), que resucitó y es el Salvador. Fue en torno a la segunda doctrina donde se presentaron los primeros  problemas. La primera cristología (doctrina de Cristo) era mesiánica, es decir, Jesús Jes ús era el Mesías de las esperanzas judías. Pero pronto se planteó el problema de interpretación entre el Cristo que los discípulos conocieron en su vida terrenal y el Cristo resucitado y ascendido, que era predicado a quienes no fueron testigos presenciales de su vida y ministerio. No era difícil pensar en un Cristo sufriente,  pero ese Cristo había sido glorificado con la resurrección, y en un mundo de cultura griega, esto resultaba en una creencia escandalosa. La cristología de Pablo resuelve esta oposición combinando conceptos hebreos y gentiles, y en sus cartas el apóstol habla del Siervo sufriente y del Señor exaltado. Otro foco de conflicto fueron los judaizantes judaiz antes que insistían en que los cristianos debían deb ían guardar toda la Ley de Moisés. En respuesta a éstos, Pablo escribió Gálatas y Romanos, donde expone acerca de Jesús y de cómo salva, desarrollando la doctrina de la salvación por gracia mediante la fe. Ante dudas respecto a la vida después de la muerte, Pablo escribió 1 Corintios, donde considera el tema de la resurrección del cuerpo. A partir del segundo segundo siglo aparecen las primeras herejías (“partidos”) entre las que se pueden mencionar las siguientes: Ebionitas (herejía judía). Los ebionitas fueron los continuadores de los judaizantes del Nuevo Testamento. Confesaban a Jesús como el Mesías, incluso algunos como el más grande de los profetas,  pero no reconocían recon ocían su di divinidad vinidad y exigían la observancia estricta de la Le Ley. y. Esta herejía continuó por largo tiempo, ya que Jerónimo (c. 340 –  340 – 420) 420) a comienzos del siglo V habla de ellos.  Docetistasa (herejía gentil) . Los a Si fines delestaba período neotestamentario. Consideraban Dios como remoto y nodocetistas interesadoaparecieron en el mundo. Jesús identificado con Dios,

entonces no sufrió en la cruz, porque Dios no puede sufrir. Además, no tuvo hambre, no se enojó, ni  puede haber tenido un cuerpo, pporque orque la materia es imperfecta. Para ellos el Jesús humano era como un fantasma. No podían pensar de otra manera ya que partían del concepto griego de Dios como

 

 

trascendente e impasible, un Dios remoto y demasiado puro como para contaminarse con el mundo material e imperfecto. Juan los ataca por su negación del cuerpo de Jesús (2 Jn. 7; 1 Jn. 1:1 –  1:1 – 3; 3; 4:1 – 33). ). Jerónimo dice: “La sangre de Cristo todavía estaba fresca en Judea, cuando ya se decía que su cuerpo era un fantasma.” fantasma.” Es por esto que el docetismo fue también conocido como “fantasmismo.”    Adopcionistas (herejía judía y gentil). Los adopcionistas quisieron resolver el problema de la relación de Cristo con el Padre, para evitar lo que les parecía era politeísmo (creencia en varios dioses) y afirmar la unidad de Dios. Para ellos, sólo podía haber un solo ser Supremo. Por eso, se los llamó “monarquianos”.   “monarquianos”. Hubo dos tipos de monarquianos. (1) Dinamistas o adopcionistas, que enseñaban que Jesús fue un  poder o una emanación de Dios, un hombre tan bueno que Dios lo “adoptó” como su Hijo en una forma especial. (2) Modalistas o sabelianos, que enseñaban que las tres personas de la Trinidad no son tres existencias o personalidades separadas, sino sólo tres modos de la existencia de una sola personalidad divina. Sabelio (c. 265) enseñó en Roma en el tercer siglo y gozó de amplia popularidad. Según él, Dios desempeñó tres papeles en la historia: primero como Padre Creador, que se reveló rev eló en las Escrituras  judías; segundo, como Hijo, que se reveló en el Jesús histórico; y, tercero, como Espíritu Santo, que es la forma en que ahora debe ser adorado.

 _ Las controversias trinitarias 

Con la conversión de Constantino, muchos paganos se bautizaron sin ser verdaderamente convertidos, y con ellos penetró en la Iglesia la idea pagana de Dios, que llevó a la primera herejía seria: el arrianismo. Arrio (256 –  (256 – 336) 336) era un presbítero en Alejandría, que tuvo una discusión con el obispo Alejandro (¿-328) en el año 318, por causa de un sermón que éste último predicó sobre la divinidad de Cristo. La cuestión fundamental que abordó Alejandro era cómo podemos creer en un solo Dios y aceptar la divinidad de Cristo. Arrio replicó diciendo que sólo Dios el Padre es eterno y verdadero. Padre e Hijo no pueden ser iguales porque “hijo” significa que tuvo un comienzo, es decir, hubo un momento cuando Cristo no existió. Arrio pensó que facilitaría la comprensión de la fe cristiana a los paganos, puesto que éstos creían en semidioses. Esperaba hacerlo enseñando que Dios es Dios, uno y único, y que Cristo no es ni Dios ni hombre, sino alguien en el medio, como los semidioses  paganos. Arrio fue excomulgado y la Iglesia se dividió porque la enseñanza arriana tuvo una rápida difusión se popularizó. En elyaño 324, Constantino, que temía ver quebrantada la unidad del cristianismo y de su Imperio  por causa de este problema doctrinal, quiso intervenir. Lo hizo enviando a Osio (c. 257 –  257 – 358), 358), obispo de Córdoba (España), para arreglar la disputa, pero éste fracasó. El emperador, por recomendación suya, convocó para debatir el tema a un concilio general, que se reunió en Nicea en el año 325. Trescientos dieciocho obispos se reunieron. Se presentaron tres posiciones en cuanto a la relación del Padre con el Hijo: (1) el Hijo era de la misma sustancia del Padre ( omousios); (2) el Hijo era de una sustancia diferente de la del Padre (heterousios); (3) el Hijo era de una sustancia similar a la del Padre (omoiousios). Atanasio (296 – 372), 372), diácono del obispo de Alejandría, jugó un papel principal al definir que Cristo es una esencia con el Padre. El arrianismo fue condenado, pero la controversia no terminó. A veces los arrianos parecieron ganar, incluso contando con el favor imperial. Atanasio fue exiliado varias veces de Alejandría, pero su posición finalmente tuvo éxito en occidente.

Atanasio: “Todo el que quiere ser salvo, antes que todo es necesario que tenga la verdadera fe

cristiana. Y si alguno no la guardare íntegra e inviolada, es indudable que perecerá p erecerá eternamente. Y la verdadera fe cristiana es ésta: que veneremos a un solo Dios en la Trinidad, y la Trinidad en la unidad, no confundiendo las personas, ni dividiendo la sustancia. Una es la persona del

 

 

Padre, otra la del Hijo, otra la del Espíritu Santo. Pero una sola es la divinidad del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; igual es la gloria, y coeterna la majestad. Cual el Padre, tal el Hijo, tal el Espíritu Santo. Increado el Padre, increado el Hijo, increado el Espíritu Santo.el El Padre es inmenso, el Hijo es es inmenso, el Espíritu Santo es tres inmenso. El Padre es eterno, Hijo es eterno, el espíritu Santo eterno. Sin embargo, no son eternos, sino un Eterno. Como tampoco son tres increados, ni tres inmensos, sino un Increado y un Inmenso. Igualmente, el Padre es todopoderoso, el Hijo es todopoderoso, el Espíritu Santo es todopoderoso. Sin embargo, no son tres todopoderosos, sino un Todopoderoso. Todopoder oso. Así que el Padre es Dios, el Hijo es Dios, el Espíritu Santo es Dios. Sin embargo, no son tres dioses, dios es, sino un solo Dios. Asimismo, el Padre es Señor, el Hijo es Señor, el Espíritu Santo es Señor. Sin embargo, no son tres señores, sino un solo Señor. Porque, Porqu e, así como somos compelidos por la verdad cristiana a confesar a cada una de d e las tres personas por sí misma, Dios y Señor, así nos pprohíbe rohíbe la religión cristiana decir que son tres dioses y tres señores. El Padre no fue hecho por nadie, ni creado, ni engendrado. El Espíritu Santo es del Padre y del Hijo; ni hecho, ni creado, ni engendrado, sin precedente. Así que es un Padre, no tres padres; p adres; un Hijo, no tres hijos; un Espíritu Santo, no tres espíritus santos. Y en esta Trinidad ninguno es  primero o postrero; ninguno mayor o menor; sino que todas las tres personas son coeternas  juntamente y coiguales; así que en todas las cosas, como queda dicho, debe ser venerada la Trinidad en la unidad, y la unidad en la Trinidad. Quien, pues, quiere ser salvo, debe pensar así de la Trinidad. Además, es necesario para la salvación que se crea también fielmente en la encarnación de nuestro Señor Jesucristo. Ésta es, pues, la fe verdadera, que creamos y confesemos que nuestro Señor Jesucristo, el Hijo de Dios, es Dios y hombre; Dios de la sustancia del Padre, engendrado antes de los siglos; y hombre de la sustancia de su madre, nacido en el tiempo; perfecto Dios y  perfecto hombre, subsistiendo de alma racional y de carne humana; igual al Padre según la divinidad, menor que el Padre según la humanidad; quien, aunque es Dios y hombre, sin embargo no son dos, sino un solo Cristo; uno empero, no por la conversión de la divinidad en carne, sino por la asunción de la humanidad en Dios; absolutamente uno, no por la confusión de la sustancia, sino por la unidad de la persona. Porque como el alma racional y la carne es un hombre, así Dios y el hombre es un Cristo; quien padeció por nuestra salvación; descendió descend ió al infierno, al tercer día resucitó de los muertos; subió al cielo; está sentado a la diestra de Dios Padre Todopoderoso; de donde va a venir a  juzgar a los vivos y a los muertos; en cuya venida todos los hombres han de resucitar con sus cuerpos; y han de dar cuenta de sus propias obras. Los que hicieron bien, irán a la vida eterna;  pero los que hicieron mal, al fuego eterno. Ésta es la verdadera fe cristiana; que si alguno no la creyere firme y fielmente, no podrá ser salvo.”  salvo.”  El Credo de Nicea niega el viejo concepto griego o gnóstico de Dios y establece la creencia correcta en las tres personas de la Trinidad, centrando la atención sobre la relación del Padre y el Hijo: Cristo

es totalmente divino, de la misma esencia y sustancia del Padre.

Credo Niceno: “Creemos en un Dios Padre todopoderoso, hacedor de todas las cosas visibles e invisibles. Y en un Señor Jesucristo, el Hijo de Dios; engendrado como el Unigénito del Padre,

 

 

es decir, de la sustancia del Padre, Dios de Dios; luz de luz; Dios verdadero de Dios verdadero; engendrado, no hecho; consubstancial al Padre; mediante el cual todas las cosas fueron hechas, tanto las que están en los cielos como las que están en la tierra; quien para nosotros los hombres hombr es y para nuestraasalvación descendió semuertos. hizo carne, se hizo hombre, hombr e, y sufrió, y resucitó al tercer día, y vendrá juzgar a los vivos y ylos Y en el Espíritu Santo. A quienes digan, pues, que hubo hub o (un tiempo) cuando el Hijo de Dios no ex existió, istió, y que antes de ser engendrado no existía, y que fue hecho de las cosas que no son, o que fue formado de otra sustancia (hipóstasis) o esencia (usía), o que es una criatura, o que es mutable o variable, a éstos anatematiza la Iglesia católica.”  católica.” 

 _ Las controversias cristológicas  Estas controversias tuvieron que ver con la persona de Cristo. El primer problema había sido cómo tres personas podían ser un Dios. Ahora, a comienzos del siglo V, se discutía cómo dos naturalezas (divina y humana) podían estar en Cristo. Había tres puntos de vista asociados a tres escuelas.  La escuela de Antioquía. Esta línea de pensamiento enfatizaba la realidad de la naturaleza humana y olvidaba la divinidad de Cristo. En razón de una fuerte influencia judía, mantenía separadas las dos naturalezas. Un destacado representante de esta escuela de pensamiento fue Nestorio (m. 451), que fue monje y presbítero en Antioquía y luego obispo de Constantinopla en el año 428. Sus enemigos lo acusaron de herejía y fue excomulgado ex comulgado por el Concilio de Éfeso (431), porqu porquee se opuso al culto a María y rechazó el título “Madre de Dios” (theotokos) como irreverente. Según él, había que separar las naturalezas: una era la naturaleza del ser humano que nació de María, y otra la del ser divino que habitaba en él. Sus seguidores enseñaron que en Cristo un hombre y Dios se unieron sin mezclarse, y que Cristo era realmente dos personas: una divina y otra humana.  La escuela de Alejandría. Esta línea de pensamiento enfatizaba la divinidad de Cristo minimizando su humanidad. Uno de los exponentes de esta línea de interpretación fue Apolinario (m. 392), obispo de Laodicea (360), que era sirio de nacimiento pero alejandrino de pensamiento. Fue un hombre abnegado, estudioso y reputado como un gran erudito. Comenzó su reflexión con la divinidad perfecta y completa de Cristo, señalando que sólo Dios puede salvar al mundo. mundo . Si Cristo es el Salvador, entonces debe ser divino por necesidad. Su error vino v ino cuando quiso especificar el modo preciso de d e la encarnación y afirmó que en la personalidad de Cristo no hay un espíritu o mente humana, porque el lugar del espíritu en Cristo fue ocupado por el Logos. Así, según él, Cristo fue Logos, cuerpo y alma. El Logos vivía una vida divina en la carne humana. Apolinario fue condenado por varios concilios, especialmente por el de Constantinopla, en el año 381. Otro exponente de la escuela alejandrina fue Eutiques (378 –  (378 – 454), 454), un monje anciano e ignorante, que enseñó una cristología apolinarista. Sostenía que la naturaleza humana en Cristo había sido absorbida por la naturaleza divina, de manera tal que el cuerpo mismo de Cristo no fue de la misma esencia que el nuestro, sino que fue un cuerpo divino. Según él, Cristo tuvo dos naturalezas antes de la encarnación y una sola después. Fue condenado por el Concilio de Calcedonia en el año 451, el más grande de todos los concilios, porque terminó con las controversias cristológicas.  La escuela de Roma. Esta línea de pensamiento enfatizaba los aspectos prácticos de la vida

cristiana. Los teólogos latinos no comenzaron con la vida interior de Dios, sino con la vida humana,  pensando del ser humano como una persona pecadora y necesitada de salvación, y preguntándose cómo  podía ser perdonado. El énfasis en Occidente estaba estab a puesto sobre el pecado y la gracia. El ser humano está ante Dios como un deudor que no puede pagar; Cristo viene al mundo y paga la deuda. Por ser

 

 

Dios, puede actuar como mediador; por ser hombre, puede pagar la deuda; por ser tanto Dios como hombre, puede ser el Salvador. Desde Tertuliano de Cartago hasta Agustín de Hipona (354 –  (354 – 430), 430), los cristianos occidentales pensaban así. Este concepto fue presentado por León I (390 – 461), 461), obispo de Roma, a través de una carta suya conocida como el “Tomo,” que fue leída en el  el  Concilio de Calcedonia. La carta entusiasmó a los obispos asistentes, que se pusieron de pie y gritaron: “¡Pedro ha hablado!” Influido por esta carta, el concilio aprobó la “Definición de Calcedonia” que, dejando de lado el cómo de la cuestión, afirmó las  las   dos naturalezas de Cristo (divina y humana). La Definición no resolvió el misterio, pero sí lo definió y aclaró, estableciendo en forma definitiva la comprensión doble de la naturaleza de Cristo. CUADRO 16 - LOS GRANDES CONCILIOS UNIVERSALES O ECUMÉNICOS   LUGAR  FECHA  EMPERADOR  PARTICIPANT RESULTADOS  ES   NICEA

325

Constantino

Arrio Alejandro Declaró al Hijo Eusebio de  Nicomedia Eusebio de Cesarea Osio Atanasio

homoousios (coigual, consubstancial y co-eterno) con el Padre. Condenó a Arrio. Redactó la forma original del Credo de  Nicea.

CONSTANTINO 381 PLA

Teodosio

Confirmó Melecio de Antioquía resultados del Gregorio Concilio de  Nacianceno  Nicea. Produjo el Gregorio de Niza Credo de Nicea revisado. Terminó con la controversia trinitaria. Afirmó la deidad del Espíritu Santo. Condenó el apolinarianismo.

EFESO

Teodosio II

Cirilo Nestorio

431

Declaró herético al nestorianismo.

al nestorianismo. Aceptó por implicación la cristología alejandrina.

 

 

Condenó a Pelagio. CALCEDONIA 451

Marciano

León I Dióscoro Declaró las dos Eutiques naturalezas de Cristo sin mezcla, sin cambio, indivisibles, inseparables. Condenó eutiquianismo

CONSTANTINO 553 PLA

Justiniano

Eutoquio

CONSTANTINO 680 – 681 681 PLA

Constantino IV

Rechazó el monotelismo. Condenó al papa Honorio (m. 638) como hereje.

 NICEA

Constantino VI

Declaró como legítima la veneración de íconos y estatuas.

787

Condenó los “Tres Capítulos”  para ganar el apoyo de los monofisitas. Afirmó la interpretación de Cirilo de la “Definición de Calcedonia”.   Calcedonia”.

Definición de Calcedonia:  “Siguiendo pues a los santos Padres, enseñamos todos a una voz que ha de confesarse uno y el mismo Hijo, nuestro Señor Jesucristo, el cual es perfecto en divinidad y perfecto en humanidad; verdadero Dios y verdadero hombre, de alma racional y cuerpo; consubstancial al Padre según la divinidad, y asimismo consubstancial a nosotros según la humanidad; semejante a nosotros en todo, pero sin pecado; engendrado del Padre antes de los siglos según la divinidad, y en los últimos días, y por nosotros y nuestra salvación, de la

Virgen la Madre Dios ( theotokos ), según lasin humanidad; y el mismo Hijo y SeñorMaría, unigénito, en dosdenaturalezas, sin confusión, mutación, uno sin división, sin Cristo separación, y sin que desaparezca la diferencia de las naturalezas por razón de la unión, sino salvando las  propiedades de cada naturaleza, y uniéndolas en una persona o hipóstasis; no dividido o partido en dos personas, sino uno y el mismo Hijo Unigénito, Dios Verbo y Señor Jesucristo, según fue

 

 

dicho acerca de él por los profetas de antaño y nos enseñó el propio Jesucristo, y nos lo ha transmitido el Credo de los Padres.”  Padres.”  

 _ La controversia pelagiana  Esta controversia dos protagonistas principales: y Agustín de Hipona. Pelagio (c. 370 – 440) 4tuvo 40). Pelagio fue un monje británicoPelagio muy hábil e instruido, que se estableció en Roma hacia el año 400 y que fue seguido en sus ideas por Celeste y Juliano. Los pelagianos afirmaban que el ser humano se reconcilia con Dios haciendo uso de su capacidad cap acidad natural de escoger entre el bien y el mal. El ser humano tiene poder para par a hacer lo bueno, decían, decían , de otro modo Dios no le hubiese ddado ado la Ley para que la cumpliese. Además, no hay nada en el ser humano que lo lleve a pecar y es posible que pueda llevar una vida sin pecado. Los pelagianos rechazaban la idea del pecado original o de la inclinación pecaminosa transmitida de padres a hijos, señalando que la caída de Adán no afectó a su posteridad. Para ellos, la muerte no es una consecuencia del pecado, sino una necesidad del organismo, y el bautismo infantil es innecesario y la gracia divina también. La doctrina del pecado original, según era enseñada por aquel entonces, se contradecía. “Si el pecado es natur al, al, no es voluntario; si es voluntario, no es innato. Estas dos definiciones son tan mutuamente contrarias como son la necesidad y la (libre) voluntad.” Incluso después de pecar, la voluntad permanece tan libre como era antes de que el pecado fuese cometido,  porque según los pelagianos el ser humano tenía “la posibilidad de cometer pecado o de refrenarse del  pecado.”    pecado.” Ellos explicaban la universalidad del pecado señalando a la naturaleza sensual, que si bien es totalmente inocente en sí misma, es la ocasión para la tentación y el pecado. No tuvieron un concepto de la unidad ética de la raza humana y del individuo. Según Celeste, el concepto de pecado debe desarrollarse tomando en cuenta los siguientes hechos: (1) Adán fue creado mortal y hubiese muerto de todos modos, ya sea que hubiese pecado o no pecado; (2) el pecado de Adán lo dañó sólo a él y no a toda la raza humana; (3) la Ley lleva al reino (de los cielos), así como lo hace el evangelio; (4) incluso antes de la venida de Cristo hubo seres humanos sin pecado; (5) los niños recién nacidos están en el mismo estado en que estaba Adán antes de su trasgresión; (6) toda la raza humana no muere a través de la muerte y trasgresión de Adán, ni resucita nuevamente a través de la resurrección de Cristo. Según Seg ún Pelagio, el pecado “es llevado a cabo por imitación, cometido por la voluntad, denunciado  por la razón, manifestado por la Ley, y castigado por la justicia.” Con estos co conceptos, nceptos, Pelagio quería evitar la idea del pecado como hereditario. Según él, el pecado no es una necesidad universalmente trágica, sino una cuestión de un mal ejercicio de la libertad humana. Además, los pelagianos no creían en una gracia divina real; no concebían la gracia como una influencia divina en el ser humano. La gracia gr acia era una suerte de iluminación de la razón del ser humano, que le permitía descubrir la voluntad de Dios de tal manera que en su propio poder podía escoger y actuar conveniente y correctamente. La gracia tenía para Pelagio un cuádruple contenido: (1) doctrina y revelación, (2) revelación del futuro con sus recompensas y castigos, (3) demostración de las trampas del diablo, y (4) “iluminación  por el multiforme e inefable don de la gracia celestial.”  celestial.”   Los pelagianos creían que la función de Cristo era doble: (1) proporcionar el perdón de los pecados pec ados en el bautismo a aquellos que creen, y (2) dar un ejemplo de vida sin pecado no sólo evitando cometer

los pecados también evitando ocasiones cometerlos ascetismo. gracia es idéntica a la sino remisión general de loslas pecados en el de bautismo. Unamediante vez que laelpersona está La bautizada, la gracia carece de sentido ya que a partir de allí el ser humano es capaz de hacer todo por su cuenta.  Agustín de Hipona (354 – 430) 430). El antagonista de Pelagio fue Agustín de Hipona, quien después de haber pasado por el maniqueísmo, el escepticismo y el neoplatonismo tuvo una profunda experiencia

 

 

de conversión cristiana. Sus enseñanzas más importantes han ejercido una notable influencia sobre el desarrollo de la teología cristiana occidental. Según él, el ser humano original era justo, sin pecado y libre. Adán tenía la libertad de no caer, ca er, de no morir, de no alejarse del bien; estaba en paz paz,, libre de todo deseo y necesidad. Pero podía usar su libertad en la dirección equivocada, es decir, podía pecar y morir. De hecho, Adán era libre cuando cayó. La razón raz ón de su caída no fue externa sino interna. Según A Agustín, gustín, el pecado es esencialmente pecado espiritual: el ser humano quería ser y permanecer por sí mismo, sin la asistencia de su Creador. La caída de Adán fue debida a su orgullo (soberbia), y significó la pérdida de la libertad y la pur pureza eza original. Su voluntad se tornó mala, la mente se hizo carnal, perdió el control propio y en consecuencia la ayuda de la gracia divina, y quedó solo. Agustín afirma: “El principio de todo pecado es el orgullo; el principio del orgullo es el alejamiento de Dios por parte del ser humano.” Ahora, el pecado de Adán fue el pecado de toda la raza humana. Los niños están incluidos en esta condición de pecado y sólo se salvan si son bautizados. El pecado de Adán es, pues, hereditario porque todos los seres humanos existían potencialmente en Adán, en su poder de procreación. pr ocreación. En este sentido, todos los seres humanos  participamos en su decisión libre y, en consecuencia, somos culpables. Adán introdujo la libido, el deseo, proceso generación sexual, estemal elemento pasó, por herencia, a toda su posteridad. Es por en estoelque todosdeloslaseres humanos naceny del deseo sexual. La restauración del ser humano pecador viene sólo por la gracia, que es absolutamente necesaria. Esta gracia es gratia data (gracia otorgada sin mérito alguno por parte del ser humano pecador). Ella comienza con el bautismo, que como sacramento (es decir, medio de gracia) quita el pecado original. La transformación resulta de la influencia divina sobrenatural sobre sob re la voluntad. La gracia es irresistible y predestinadora, porque cambia el corazón del ser humano para que escoja con libertad las cosas espirituales. De este modo, la persona se convierte no porque quiere, sino que quiere porque se convierte. Además, Dios concede a los predestinados para la salvación el don de la perseverancia. El creyente puede caer, pero no permanentemente, porque la gracia de Dios es irresistible. El pelagianismo fue rechazado en el año 418 en el Sínodo de Cartago, que excomulgó a Celeste; y luego, en el Concilio de Éfeso en el año 431. Pero esto no significó la aceptación del agustinianismo. Lo que más se rechazaba en Agustín era su concepto de la predestinación.

EL PROBLEMA DE LA MUNDANALIDAD   _ El movimiento monástico  El monasticismo, en general, puede ser considerado como un movimiento de renovación espiritual, que comenzó como protesta contra la mundanalidad imperante en la Iglesia en los tiempos de  prosperidad y tranquilidad. t ranquilidad. Desde un comienzo, las co comunidades munidades cristianas honraron la opción o pción por la virginidad y la castidad por amor al reino de Dios. Esta opción se fundamentaba en la enseñanza de Jesús (Mt. 19:22, 30) y de Pablo (1 Co. 7). Las primeras evidencias de una vida consagrada, es decir, dedicada totalmente al servicio de Dios y el prójimo, son las viudas de 1 Ti. 5 y las cuatro hijas de Felipe, vírgenes que tenían un ministerio profético (Hch. 21:8 –  21:8 – 99). ). En los siglos II y III, se multiplicaron los casos de hombres y mujeres que escogían la vía del

ascetismo y la castidad como manera de servicio a Dios.yAliberarse esta motivación se agregaban otras: disconformidad con la inmoralidad prevaleciente (varones) de la opresión del matrimonio  patriarcal (mujeres). (mujeres ). No existía todavía un hábito identificatorio y las personas seguían viviendo con sus familias, pero en pobreza, llevando a cabo obras de misericordia, meditando en las Escrituras y dedicando bastante tiempo a la oración y la contemplación. En el siglo III aparece el tema del

 

 

matrimonio con Cristo y un énfasis mayor sobre la abstención del matrimonio y el retiro del mundo malo. Sobre la base de la vida ascética, tanto de hombres como mujeres, se edifica lo que puede ser considerado como el primer estadio de la vida monacal: el anacoretismo. En ocasión de las  persecuciones sistemáticas contra el cristianismo (Decio y Diocleciano), muchos cristianos abandonaron las ciudades y se fueron a vivir al desierto, donde permanecieron incluso después de terminadas las persecuciones. Allí vivieron una vida solitaria y ascética. Una vez que el martirio ya no era estimado como el ideal del cristiano perfecto, la vida monacal se convirtió en el substituto del martirio. Los monjes se transformaron en los herederos de los mártires, al interpretar así el ideal de la imitación de Cristo. Si antes se imitaba a Cristo en su muerte con el martirio, ahora se lo imitaba en su vida consagrándose a la ascesis.

 _ Los monjes del desierto  A mediados del siglo tercero, algunos hombr es, es, en Egipto y Siria, comenzaron a “abandonar el mundo” y a vivir como ermitaños y anacoretas cristianos. Hubo varios personajes que alcanzaron un gran nivel de notoriedad y popularidad, especialmente en Egipto.  Antonio (251 – 356) 356). El movimiento se inició en Egipto con Antonio, que en el año 270, siendo muy  joven, se fue al desierto a vivir solo, transformándose así en el padre de los ermitaños y anacoretas del desierto egipcio. Con el tiempo se fueron agregando otros, pero viviendo solos, con Antonio como  padre espiritual y mentor. Cuando el cristianismo triunfó en el Imperio Romano en el año 312, el movimiento recibió un ímpetu extraordinario. La Iglesia ya no era perseguida y ser cristiano ahora no sólo era más seguro sino que también estaba de moda. La Iglesia Iglesia misma se había “mundanalizado” y muchos no eran otra cosa que cristianos nominales. En reacción contra esta situación, algunos de los cristianos más sinceros siguieron el camino opuesto, yéndose a la soledad del desierto para vivir su vida cristiana en santidad. Las formas de esta vida anacoreta fueron diversas y algunas bien singulares. Algunos ermitaños vivían sobre un árbol (dendritas), otros sobre una columna (estilitas), otros andaban desnudos (adamitas), y aun otros imitaban a Juan el Bautista en su manera de vestir y sus hábitos alimenticios. Todos ellos representaban un tipo de cristianismo popular y dramático. Las historias de estos monjes del desierto están plagadas de relatos de luchas encarnizadas contra los demonios, de domesticación de animales animales salvajes y de milagros y portentos asombrosos. Estos “monjes del desierto” en sus cuevas o chozas iban preparando el camino para el monasticismo posterior, donde los monjes vivirían en una comunidad bajo el gobierno de un abad y obedeciendo una regla disciplinaria determinada. Pacomio (286  – 346) 346). Pacomio fue otro conocido monje egipcio, quien fue el padre de la vida cenobítica, que consiste en una forma de vida común bajo un superior. Siendo joven fue forzado a ingresar en el ejército romano. Los cristianos lo ayudaron a salir, y al quedar libre pidió el bautismo y se hizo anacoreta. A él se debe la organización de las primeras comunidades de monjes o cenobitas (hombres “que comparten una vida común”). Su hermana María estableció una comunidad para mujeres. Hacia el año 350, Pacomio fundó el primer monasterio en Tabennisi (Egipto) y compuso una regla con instrucciones para la vida en el monasterio. Diez años después de su muerte había diez monasterios en varias partes de Egipto, y el movimiento se estaba extendiendo extend iendo rápidamente a Palestina, Siria y Mesopotamia. Había también monasterios de monjas o monjeríos. monjer íos. En Egipto los monjes fueron

 personas simples, de lengua cóptica y de poca educación, y no tenían una estructura legal muy precisa.  _ El monasticismo oriental  En Asia Menor los monjes tenían una mejor preparación que en Egipto. En esta región hubo también algunos personajes que alcanzaron gran prestigio en razón de su vida consagrada y que

 

 

ejercieron una notable influencia no sólo en su generación sino también en el desarrollo futuro del movimiento monástico.  Basilio de Cesarea (329 – 379) 379). Fue uno de los monjes más famosos de esta región. r egión. Pertenecía a una familia respetable de Capadocia, si bien consideraba que el trabajo manual debía acompañar a la oración. quemonacal la vida en Para él,yellamonje era Su un regla, error. Además,Basilio asoció creía la vida concomunidad el servicioeraa lo losmejor. necesitados tarea solitario intelectual. formulada en el año 360, influyó mucho en los monasterios griegos hasta el día de hoy. Según él, el ideal para la vida monástica era la primera comunidad de cristianos en Jerusalén (los ciento veinte en el aposento alto). Él creía que el monasticismo era expresión de la sociedad cristiana ideal, y que con el tiempo reemplazaría a la sociedad pecaminosa terrenal. El deber del monje era er a su obediencia al abad, cuya responsabilidad era interpretar y aplicar a la vida cotidiana la regla suprema del evangelio. La vida monástica estaba basada en una antropología platónica, que daba poco valor al cuerpo humano y lo consideraba esencialmente malo. Esto explica su rigor ascético. Efraín de Siria (c. 300 – 379) 379). En Siria el monje más famoso fue Efraín, un gran escritor. Escribió sobre la Biblia, la doctrina, la vida cristiana y, sobre todo, llegó a ser muy conocido por sus poemas e himnos, todo esto en idioma siríaco. Algo digno de destacar de los monjes sirios es que fueron extraordinarios misioneros. Fueron ellos quienes llevaron adelante la expansión oriental del cristianismo, ya que fueron monjes persas los que llegaron a China en el año 635.

 _ El monasticismo occidental  Las influencias del Este, el número creciente de vírgenes, los abusos, las tendencias a desarrollar instituciones, junto a otros factores ayudaron al surgimiento y organización de la vida religiosa en Occidente. Existían varias comunidades monacales en Roma alrededor del año 350, fundadas por mujeres de alcurnia. Había también una liturgia para la dedicación de las vírgenes o una ceremonia  para la colocación del velo que las identificaba. Ambrosio de Milán sugiere que la virgen María era un modelo para las vírgenes en la iglesia y su ministerio. Varios monjes se destacan en Occidente por su fama y contribución al movimiento monacal.  Jerónimo (347  – 419) 419). En el Occidente latino el monje más destacado fue Jerónimo, un hombre bien  preparado, que después de una seria s eria enfermedad, tuvo una visión en la que se vio con condenado denado por Dios  por ser más seguidor de Cicerón que de Cristo. Entonces, aba abandonó ndonó todo para hacerse mon monje, je, primero en el desierto egipcio, y desde el año 368 en Belén, donde trabajó en una cueva cercana al lugar del nacimiento de Jesús. Algunas personas que pertenecían a la aristocracia romana lo siguieron, entre ellas una mujer llamada Paula, que dirigió un monasterio para mujeres en Palestina, desde donde defendió la superioridad del estado de virginidad por sobre el matrimonio. Con su pluma elocuente, Jerónimo atacó la mundanalidad del clero romano, y él mismo renunció a los honores y altos cargos eclesiásticos que le ofrecieron prefiriendo una vida austera. Después del saqueo de Roma por los godos en el año 410, muchos más se le unieron desesperanzados del mundo. En Belén, Jerónimo se dedicó a la erudición y tradujo el Antiguo Testamento del hebreo al latín, y revisó la versión latina antigua del Nuevo Testamento. Esta Biblia latina es la Vulgata (que es la versión en el idioma “vulgar”), que desde el Concilio de Trento (1545– 1563) 1563) ha sido la versión oficial de la Iglesia Católica Romana. Se puede decir que Jerónimo, junto con Agustín, fueron los constructores del d el cristianismo latino.  – 

 Agustín (354escogió 430). Nuevamente mencionamos a Agustín, pero esta vez como Después de de su Hipona conversión, vivir como monje e hizo que su clero secular adoptase las monje. pautas de la vida monástica. Éste fue el comienzo de una nueva tendencia en la iglesia occidental: la asimilación del sacerdote al monje. Los sacerdotes eran escogidos esco gidos con preferencia de entre los monjes, y se les requería que adoptasen ciertos aspectos de la vida monástica, como el celibato. La  Regla de

 

 

San Agustín, que consiste de su  Regla ( Regula  Regula ad servos Dei ) completada con una carta que dirigió a una monja (Carta 211), bosqueja observaciones y consejos generales sobre la vida religiosa y ministerial.  Martín de Tours (m. 397). Fue el pionero de la vida monástica en Francia, donde estableció

monasterios en Tours A sude muerte existían en Francia más demonasterios dos mil monjes.  Juan Casiano (360y – Poitiers. 435). Venía 435) Rumania, y después de visitar en el Este, fundó dos en Marsella (410): el de San Víctor para hombres y el de Santo Salvador para mujeres. Escribió  Las instituciones monásticas  y las Conferencias, obras éstas que establecían un puente entre el monasticismo de Oriente y el de Occidente. Para él, la discreción era la virtud monástica fundamental.  Benito de Nursia (c. 480 – c. c. 550). Benito es considerado como el patriarca de los monjes de Occidente. Fue enviado de adolescente a estudiar a Roma, pero impactado por la inmoralidad de la ciudad, se fue a vivir solo en una cueva en Subiaco. En 529, después de haber vivido en pequeños grupos con algunos seguidores, Benito construyó un monasterio en Monte Casino (entre Roma y  Nápoles), donde permaneció hasta su muerte. El ideal de Benito para sus monjes era una comunidad que elegía ele gía a su propio abad (del siríaco abba,  padre) y que obedecían o bedecían su regla paternalista. Los monjes eran admitidos como novicios (a prueba po porr un año), luego tomaban votos de por vida, y servían en una comunidad sin ningún tipo de posesiones. La vida de los monjes era simple, ocupada y disciplinada. Estaba acompañada y guiada por lo que Benito llamaba el Opus Dei (la obra de Dios), que consistía de ocho períodos de oración diarios cada tres horas, en los que se hacían oraciones, se cantaban salmos y se leía la Biblia. La Regla de San Benito  fue de gran influencia en el desarrollo del monasticismo occidental hasta el siglo XII. Era un manual de disciplina estricto, detallado, conciso y práctico. Reunía toda la tradición monástica anterior, pero insistía sobre la estabilidad y la disciplina de los monjes. El monje tenía que  prometer vivir en su monasterio. El abad funcionaba como maestro espiritual y cabeza de la comunidad. Era elegido de por vida por los propios monjes, quienes le debían obediencia absoluta si querían ascender la escalera de la humildad, que era la base de todo progreso espiritual. Los monjes  benedictinos vivían una vida dedicada a la pobreza, el trabajo, el estudio y la oración.

EL PROBLEMA DE LA IDEOLOGÍA  A partir de la “conversión” de Constantino, el movimiento cristiano tuvo que hacer frente a dos  problemas de carácter car ácter ideológico, que amenazaron con hacerle perder ssuu sentido original: la unión de la Iglesia y el Estado, y el desarrollo del concepto de cristiandad.

 _ La unión de la Iglesia y el Estado  Como se indicó, movido por intereses políticos, Constantino consideró conveniente lograr el apoyo de la Iglesia cristiana a fin de mantener la unidad de su Imperio desmembrado por múltiples intereses. Habiendo asegurado su control del Imperio, decidió establecer en Bizancio (sobre el Bósforo, entre Europa y Asia Menor) su nueva capital, a la que le dio su nombre, Constantinopla. Allí construyó muchos templos cristianos y prohibió la reparación de templos paganos y la erección de nuevas imágenes de los dioses. La madre de Constantino, Elena, fue una cristiana devota en sus últimos años. Sus hijos recibieron una formación cristiana. No obstante, Constantino hizo ejecutar a su esposa espos a Fausta

y aConstancio) su hijo mayor Crispo en 326 bajocomo cargos de adulterio. aduylterio. otros tres el hijos (Constantino II, Constante, fueron reconocidos Césares se lesSus encomendó gobierno de amplias regiones del Imperio y más tarde fueron nombrados Augustos (después de la muerte de Constantino en 337). En 341, Constante abolió los sacrificios paganos en Italia, mientras que continuaron otros ritos  paganos, tales como procesiones, fiestas sagradas y los ritos de iniciación en las religiones de misterio.

 

 

El apoyo imperial hizo que las comunidades cristianas crecieran rápidamente. Como religión triunfante, el cristianismo comenzó a usar el poder político contra los oponentes paganos y judíos. Estos incidentes suscitaron el problema deNo si laobstante, Iglesia estaba sob re laBizantino sobre autoridad la secular o si los del gobierno tenían poder sobre la Iglesia. en el Imperio tendencia fueoficiales colocar a la Iglesia bajo el Estado y considerar al emperador como jefe supremo con dominio sobre ambas esferas, la espiritual y la temporal. En Occidente, la Iglesia había disfrutado de cierta libertad respecto del Estado en razón de los conflictivos procesos sucesorios que siguieron a la desaparición desap arición de Constantino, su división del Imperio entre sus hijos y sobrinos, la centralización de las luchas políticas en Constantinopla, y las interminables disputas teológicas. De este modo, mientras en Oriente los emperadores se movieron hacia una acumulación de poder y absolutismo político, en Occidente la Iglesia de Roma resistió todo lo que pudo tales pretensiones. Hubo numerosos obispos que defendieron la autonomía de la Iglesia respecto al Estado.

Daniel-Rops:  “Las voces de la libertad cristiana fueron innumerables. Osio de Córdoba, el viejo obispoendelos España, escribió así al¡Dios todopoderoso amo Constancio: ‘¡Noel tienes derecho inmiscuirte asuntos religiosos! te ha dado la autoridad sobre Imperio, pero a nosotros nos la dio sobre la Iglesia! ¡Y en materia de fe, es de nosotros de quienes tú tienes que oír las lecciones!’ Y a Atanasio le oímos ya exclamar: ‘¡Mezclar el Poder romano con el gobierno de la Iglesia es violar los cánones de Dios!’ E Hilar io, io, portavoz de las Galias, trató de Anticristo al Emperador y pronunció, sobre las sospechosas seducciones del Poder, estas  penetrantes frases: ‘Enemigo insinuante, perseguidor astuto, no hace que nos azoten la espalda,  pero cosquillea nuestro vientre; no nos reserva la libertad de la prisión, sino la servidumbre del  palacio; no nos corta la cabeza, pero intenta degollarnos el alma.’ Intrépidas palabras, a las que acompañaban los actos.”  actos.”  Así como Eusebio de Cesarea rindió su dignidad episcopal ante las aspiraciones teocráticas de Constantino, hubo otros obispos que resistieron al poder imperial. “El poder de la Iglesia,” proclamó Juan Crisóstomo, “supera valor al Poderdecivil tanto como “¡El el cielo supera a está la tierra, los supera todavía mucho más.en más.” ”Y Ambrosio Milán, declaró: Emperador dentroo más de labien Iglesia,  pero no por encima de ella!” No obstante, desde Constantino en adelante, quedó planteado el principio del Imperio Cristiano, tal como se fue plasmando tanto en Oriente como en Occidente a lo largo de la Edad Media. Desde entonces, la unión de la Iglesia y el Estado ha sido una constante, que ha minado la libertad de la Iglesia para cumplir con su misión en el mundo y ha corrompido sus ideales y fidelidad al evangelio del reino.

 _ El concepto de cristiandad  Constantino, probablemente bajo la influencia de Eusebio de Cesarea, fue el primero en desarrollar la idea de una teocracia cristiana, en la cual los intereses del Estado se mezclaban con los de la Iglesia, en una asociación de la cual ambas esferas de poder obtenían beneficios. Justo L. González señala: “Tal como Eusebio nos cuenta la historia de la iglesia, el plan de Dios no era solamente que la

revelación judía y la cultura grecorromana se uniesen en yelelcristianismo, sino también el cristianismo y el imperio se uniesen en Constantino. La iglesia Imperio habían sido creadosque el uno  para la otra.” La comprensión que Eusebio tenía de la Iglesia y el Estado era monocéntrica y  providencial. Para él, todos los acontecimientos del pasado llevaban a la formación de un imperio cristiano, tal como el que él mismo estaba experimentando con Constantino, y esto era obra de Dios.

 

 

Este concepto involucraba la suposición de que todos los súbditos sú bditos del Imperio eran cristianos, desde el momento de su bautismo (bautismo infantil), por el que se integraban a la esfera de la Iglesia y del Estado al mismo tiempo. Se identificaban en una un a íntima relación los derechos civiles y religiosos, como también la creencia de que la Iglesia y el Estado, como instituciones divinas, eran los dos brazos del gobierno divino sobre la tierra. Esta idea se desarrolló mucho más profundamente durante el Sacro Imperio Romano Germánico en la Edad Media y ha reaparecido en múltiples formas a lo largo de los siglos hasta nuestros días.

Enrique D. Dussel: “La cristiandad (cristianitas) no es el cristianismo.… El cristianismo es la religión cristiana; cristianitas, como la romanitas, es una cultura. De tal manera que una es la religión y otra la totalidad cultural que, orientada por el cristianismo, se constituye como cristiandad.… La cristiandad primero fija y unifica la liturgia. Ésta, en lugar de seguir creciendo como la vida, se fija para siempre. En el imperio no se pueden admitir fluctuaciones, diversidades.… Este proceso toca proceso toca a la iglesia latina casi en su s u nacimiento. En el occidente latino quedan en poco tiempo sólo algunas liturgias y, por último, de hecho, una sola: la romana. Al mismo tiempo acontece la aparición de conglomerados multitudinarios. Los que habían sido mercados hasta ayer ahora son los templos y se llaman basílicas. Esas multitudes, multitudes que muchas veces se preguntan qué significa ser cristiano, son bautizadas, investidas de una enorme responsabilidad, porque tienen una función histórica irreemplazable que cumplir y, muchas veces, no estaban bien catecumenizadas como en el origen: las habían bautizado bautiz ado cuando niños. Esas multitudes entran en la iglesia.”  iglesia.”  Así, pues, el concepto de cristiandad representa una totalidad cultural y una unidad política: es el conjunto de los fieles cristianos, el mundo cristiano. Ésta es la razón por la que Constantino se consideraba con autoridad como para convocar convo car concilios y disolverlos, y por qué las disputas teológicas tuvieron efectos económicos y políticos. Pero Per o también la cristiandad es al mismo tiempo unidad militar,  jurídica y eclesiástica. Los obispos defendían la fe cristiana con la espada, legislaban para todo el  pueblo y dominaban soberanos desde la Iglesia. En el paradigma de cristiandad, la Iglesia funciona como una parte integral del aparato del Estado. En esta asociación, el cristianismo proveyó a los líderes del Estado la ideología capaz de pacificar a los pueblos sometidos y la legitimación moral para llevar a cabo sus objetivos políticos y económicos. A cambio, el Estado garantizó a la Iglesia un acceso ilimitado y protegido a nuevas fuentes de recursos humanos y materiales. En el paradigma de cristiandad el énfasis énf asis caía sobre el carácter institucional y pastoral pas toral de la Iglesia. El liderazgo jerárquico y la tradición eclesiástica reforzaban la autoridad de la Iglesia sobre sus miembros. La teología estaba más preocupada con las cuestiones cues tiones intelectuales y pastorales de la Iglesia, que con su compromiso misionero con el mundo. Cuando la Iglesia se involucraba en la misión era  para imponer por la fuerza la fe cristiana sobre los pueblos sometidos por el Imperio. De este modo, la acción misionera de la Iglesia terminó siendo considerada como una actividad fuera del mundo cristiano, y de desarrollo exclusivo en los pueblos todavía no conquistados y convertidos al cristianismo (paganos). En el modelo de cristiandad, la misión cristiana era considerada como la expansión del mundo cristiano y la meta era la adquisición de más territorio. Este modelo, pues, pues , tendía

amás enfatizar un acercamiento deinculturación arriba hacia abajo efen la misión, desde posición de poder e influencia, que desde un proceso de de la en desde abajo haciauna arriba. Cuando el emperador Teodosio (en 380) decretaba que todos los pueblos del Imperio debían adherirse a la fe cristiana, es decir, la del emperador, quedó establecido de manera definitiva el concepto de cristiandad y se selló la unión de la Iglesia con el Estado.

 

 

Daniel-Rops: “El Estado romano y el cristianismo, desde entonces, eran ya  una sola cosa. La unidad espiritual, cuya nostalgia habían tenido tantos emperadores, que Juliano había creído fundar en el paganismo y que Constantino no se había atrevido a imponer, la establecía Teodosio, firme ortodoxo: una sola fe, un solo Imperio; los adversarios de Dios se convertían en los del Estado. Solución que tenía a su favor la lógica de la historia, aunque no dejaba de tener sus peligros.”  peligros.”  Uno de los gestores ideológicos del concepto de cristiandad fue Agustín de Hipona. Su  preocupación con la formación espiritual de los nuevos convertidos y su énfasis sobre el bautismo, como medio sacramental de la incorporación de éstos a la Iglesia —  Iglesia — el el único lugar donde se podía encontrar salvación — ayudó ayudó a desarrollar la identificación de la Iglesia con el reino de Dios. Durante algún tiempo, Agustín se resistió a la idea de forzar a los paganos o herejes a someterse a la fe f e católica,  pero finalmente terminó por consentir con la conversión forzosa. De este modo, Agustín proveyó los antecedentes y la teología que llevó al paradigma misionológico de la cristiandad, según el cual los cristianos podían justificar la guerra santa, declarar cruzadas religiosas y, con la ayuda del Estado, imponer el cristianismo sobre los pueblos sometidos por el Imperio.

MIRADA RETROSPECTIVA Y PROSPECTIVA   _ Evaluación del cristianismo del período   No obstante obs tante la declaración de Agustín de que los propósitos de Dios se cumplen en los cielos, a  pesar de las circunstancias que dominan en la tierra, es casi impo imposible sible cerrar la consideración consideraci ón de estos  primeros cinco siglos de vida histórica del cristianismo y en especial de la crisis cr isis de los últimos años del mismo sin preguntarnos: ¿qué significado tiene todo esto sobre el futuro de la vida de la Iglesia? Hemos visto, primero, cómo el cristianismo se esparció rápidamente por todo el Imperio Romano, hasta que se produjo su cristianización nominal. Luego recordamos cómo los bárbaros destruyeron esa seguridad y demás condiciones que habían favorecido la expansión veloz y el éxito asombroso del cristianismo. Al La llegar a comienzos sigloque V, sobreviviría, la pregunta inevitable ¿sobreviviría el cristianismo a esta crisis? respuesta es sí, ydel no sólo sino que sees:expandería todavía más ampliamente hacia el norte de Europa. Por extraño que parezca, el secreto no estuvo en la Iglesia institucionalizada, sino en los cristianos que desengañados del mundo corrompido, lo abandonarían. Estos creyentes fueron los monjes. Fueron ellos los que protagonizaron el movimiento de mayor vitalidad espiritual, que llevó a la fe cristiana hacia Oriente hasta la China y hacia Occidente hasta Inglaterra con los  benedictinos. Antes de su arribo, los monjes celtas cruzaron desde Irlanda y como resultado de las misiones celtas y romanas, las Islas Británicas se transformaron en un centro desde el que se llevó a cabo la conversión del norte de Europa, Holanda, Alemania y Escandinavia.

 _ La contribución del cristianismo del período  Los cristianos hoy tenemos una deuda muy grande hacia los hombres y las mujeres que supieron ser fieles al Señor y a la causa de su reino. Hay tres elementos que se destacan por sobre cualquier otro

en este período: la Biblia, la Iglesia y el testimonio cristianos. El cristianismo es Cristo, pero Cristo se da a conocer a través de las páginas del Nuevo Testamento, y el Nuevo Testamento nos fue entregado por la Iglesia primitiva. Fueron los cristianos de este período los que redactaron, seleccionaron, preservaron y transmitieron, bajo la inspiración y guía del Espíritu Santo, los libros que hoy componen nuestro Nuevo Testamento. Frente a la amenaza marcionita, los

 

 

cristianos primitivos afirmaron la validez del Antiguo Testamento y se consideraron como una continuación y cumplimiento del judaísmo, si bien no se identificaron con él. Con su actitud, afirmaron la autoridad de la Biblia (tanto del Antiguo como del Nuevo Testamentos), como único fundamento  para la fe y la práctica cr cristianas. istianas. Con Tertuliano, podemos po demos cons considerar iderar a toda la Biblia como nuestra herencia. “Ésta es mi propiedad. La he poseído po seído por largo tiempo. Tengo títulos de propiedad seguros de parte de los dueños originales. Soy heredero de los apóstoles.”  apóstoles.”  Fue la iglesia primitiva la que también tradujo la Biblia y la hizo accesible a pueblos que hasta entonces no tenían una lengua escrita. Para el año 200, el texto sagrado ya estaba en cuatro idiomas  principales (griego, siríaco, copto, latín). Para el año 400 la palabra de Dios había sido traducida al armenio, georgiano, etiópico y gótico. Para el año 500 incluso el texto bíblico estaba traducido a un dialecto huno. La traducción de la Biblia fue una gran contribución al desarrollo de la lengua escrita, ya que antes de hacer la traducción fue necesario en algunos casos inventar un alfabeto para la nueva lengua escrita. Además, la traducción bíblica contribuyó al desarrollo de la cultura general, puesto que estimuló la necesidad de aprender a leer para poder tener acceso al texto sagrado. sagr ado. También la traducción de la palabra contribuyó al desarrollo de la literatura en muchas lenguas, al ser la Biblia la primera  pieza literaria en muchas culturas. Por otro lado, los cristianos primitivos nos legaron la Iglesia. La comprensión de la Iglesia como una, santa, católica y apostólica es la herencia fundamental que compartimos todos los cristianos. Si  bien a lo largo de los siglos la comprensión de algunos de estos elementos que definen el carácter de la Iglesia recibieron diferentes interpretaciones, los cristianos en todo el mundo continuamos confesando una Iglesia santa, católica y apostólica. A pesar de la realidad dolorosa de las divisiones y disensiones de la única Iglesia de Jesucristo durante los siglos estudiados, sorprende la conciencia que tenían los primeros cristianos de formar parte de un solo pueblo. En medio de los conflictos y diferencias entre Oriente y Occidente, y las luchas contra las herejías y la oposición externa, el ideal de la unidad y la aspiración de testificar como un cuerpo unido en torno a Cristo, fue permanente. La comprensión de que la verdadera unidad de la Iglesia se da en Cristo y que él, a través de su Espíritu Santo, es la fuerza unificadora de la Iglesia, ha sido la oración y aspiración de la Iglesia primitiva. Del mismo modo, se entendió el carácter universal de la Iglesia, como una comunidad de fe abierta aestodas las personas, ningún tipo detraza distinción. en la Iglesia un testimonio quesin rompe barreras, puentesElytestimonio crea redes que entreobservamos los seres humanos, amaprimitiva a todos sin hacer acepciones de personas, acepta a otros como hermanos, y se entrega al mundo en el nombre de Cristo para reunir a un solo pueblo que confiese su nombre como Señor. No menos importante es su carácter como santa y apostólica. La comunidad cristiana fue entendida como la comunidad de los santos, hombres y mujeres perdonados y sanados por el poder del Espíritu Santo. Como tal, se entendió el ministerio de la Iglesia como el de una nación de sacerdotes (1 P. 2:4 –  2:4 – 5), 5), que se relaciona con Dios en términos de santidad y con el mundo en términos término s de pureza. Los primeros cristianos servían a otros con compasión, sabiendo que así reflejaban la presencia del Espíritu y cumplían su labor apostólica. Como comunidad apostólica, enseñaban, predicaban, hacían teología, testificaban y actuaban seguros de contar con el poder y la autoridad de los primeros apóstoles de Jesús, según las promesas que él les había hecho. Del mismo modo, enviaban a los suyos a predicar el evangelio del reino y plantar iglesias, con miras a llegar “hasta lo último de la tierra.”  tierra.”  

Carlos Van Engen: “Los primeros teólogos de la Iglesia no distinguen entre la Iglesia visible y la invisible. La comunión o fraternidad universal se entiende como una sociedad tanto invisible como empírica. Ésta era la real y reconocible comunión en Cristo, llamada por el Espíritu y abierta a recibir a todas las familias de la tierra. En la auto-percepción de la Iglesia

 

 

 primitiva sobre su unidad, santidad, catolicidad y apostolado, se entendía que éstos eran criterios por medio de los cuales se medían los diversos errores que aparecían. Posteriormente las confesiones de fe fijaron estas perspectivas como puntos de referencia para medir la verdadera naturaleza de la Iglesia.”  Iglesia.”  En cuando al testimonio cristiano hay tres cosas que se destacan en este período: la continuidad, la expansión, y la profundidad del mismo. Nos sorprende la milagrosa continuidad del testimonio cristiano, a pesar de las muchas dificultades que los creyentes tuvieron que sobrevivir. A lo largo de estos siglos ha habido una sucesión de vidas cristianas, que han seguido a Cristo y han testificado de él, conforme al testimonio de los apóstoles. Esta sucesión de testimonio fiel del evangelio corrió peligro de cortarse en varios momentos de la historia,  pero de manera sobrenatural, logró mantener mantene r su continuidad. Además, la expansión del testimonio cristiano durante este período fue notable. La meta del testimonio cristiano de llenar todo el mundo con el evangelio de Cristo (Jn. 3:16; Mr. 16:15; Hch. 1:8) se cumplió durante estos siglos. La expansión alcanzada por el mensaje es todavía más sorprendente cuando se tiene en cuenta los escasos recursos humanos y las enormes dificultades para lasdecomunicaciones. Nuevamente, la acción Espíritupara Santo se hace evidenteque en había la superación las barreras insuperables que hubieron hubiero n dedel sortearse llegar hasta pueblos no alcanzados y lugares inhóspitos con la palabra de vida. Como se vio, en algunos lugares el evangelio no sólo llegó a ponerse en contacto con ciertos pueblos, sino que logró penetrar a los sectores más dinámicos de la sociedad. En muchos casos, durante este  período, la fe cristiana llegó a modelar la cultura a tal grado que el evangelio pasó a ser parte de la cosmovisión de ciertos pueblos. Así fue cómo la fe cristiana llegó a modelar  profundamente la cultura en el ámbito del Imperio Romano. Palabras, gestos, costumbres, hábitos de conducta, moralidad publica, legislación, estructuras sociales fueron marcadas  profundamente por el evangelio cristiano.

GLOSARIO  abad: del arameo abba, padre, a través del griego ábbas, se refiere al superior de un monasterio de hombres, considerado abadía. anacoreta: persona que vive en un lugar solitario, entregada completamente a la contemplación y a la  penitencia. El anacoretismo es la vida retirada del anacoreta, caracterizada por la soledad, la abstinencia abstinencia y la piedad. antipapa: Papa elegido irregularmente o no canónicamente, que pretende ser reconocido como tal,  pero que no es reconocido como legítimo legítimo sucesor de Pedro por la Iglesia Católica Apostólica Romana. ascetismo: doctrina y práctica de la vida ascética, que consiste en dedicarse particularmente a la  práctica y ejercicio de la perfección espiritual, mediante una vida consagrada. El ascetismo consiste de

 prácticas austeras designadas para llevar al control del cuerpo y los sentidos. Éstas pueden incluir ayuno y meditación, la renuncia a las posesiones materiales y la búsqueda de la soledad.

budismo: nombre de la religión fundada por el buda Siddharta Gotaza en la India en el siglo VI a.C., que consiste en una doctrina filosófica y religiosa derivada del brahmanismo. Tiene por fin la

 

 

realización plena de la naturaleza humana y la creación de una sociedad perfecta y pacífica. Enseña que el sufrimiento es inherente a la vida humana, y que es el resultado de la pasión. Sólo es posible ser liberado de él por la renuncia a sí mismo, y la autopurificación mental y moral. El ideal del budismo consiste en conducir al fiel a la aniquilación suprema o nirvana. canon: del latín canon (regla, medida, modelo, lista), designa la lista o catálogo de los libros sagrados declarados auténticos, inspirados, sagrados y autoritativos por los cristianos y reconocidos como Palabra de Dios.

carisma: del griego carisma (don, don de gracia), es un don gratuito concedido abundantemente por Dios a una persona por medio del Espíritu Santo y para la edificación de la iglesia. cenobita: del griego koinos (común) y bios (vida), designa la vida en común de monjes y anacoretas, que comparten el mismo convento o casa. confesión de fe: declaración de lo que se confiesa en materia de fe y práctica religiosa, expresada de manera formal, generalmente por escrito. Es autoritativa para el individuo o el grupo y es expresión de sus creencias. doctrina: del latín docere (enseñar; significa enseñanza), es una enseñanza o creencia religiosa que es enseñada y sostenida dentro de una comunidad religiosa particular.

eón: en el gnosticismo era cada una de las inteligencias eternas o entidades divinas de uno u otro sexo, emanadas de la divinidad suprema o de Dios, que es espíritu puro. ermitaño: persona que vive en soledad, como monje, en una ermita (santuario o capilla) y que cuida de ella mientras profesa una vida de piedad solitaria. escepticismo: doctrina de ciertos filósofos antiguos y modernos, que consiste en afirmar que la verdad no existe, o que, si existe, el ser humano es incapaz de conocerla. Tal idea descansa en la suspensión del juicio afirmativo o negativo mientras no se tienen pruebas materiales, sobre todo en materia de metafísica. El escéptico tiene desconfianza o duda de la verdad o eficacia de alguna cosa. El escepticismo es el estado de ánimo de los que niegan su adhesión a las creencias y convicciones de la mayoría. herejía: del griego hairesis, originalmente significaba simplemente un partido o escuela de  pensamiento. Es un término que significa cualquier doctrina o creencia que, si bien es sostenida por un adherente profesante, está en oposición con las pautas de la verdad reconocidas y generalmente aceptadas, que son definidas e impuestas autoritativamente por una institución, partido o sistema establecido. En su uso más general, designa un error en materia de fe, sostenido con pertinacia. hinduismo: denominación más usual actualmente de la religión predominante en la India, procedente del vedismo y brahamanismo antiguo. Brahma es el dios creador, la realidad divina absoluta, cuya autoridad fue burlada por el Buda. Se trata de una religión ritualista y sacrificial con énfasis en la supremacía de una clase superior, que ostenta una autoridad sacerdotal sobre todos los aspectos de la

vida. La lengua religiosa es el sánscrito.  judaizantes: cristianos judíos conservadores que rechazaban la misión a los gentiles o demandaban que los que se convertían se hicieran judíos en orden a ser verdaderos cristianos. Insistían en la necesidad de la circuncisión y otros requisitos legales judíos para formar parte del verdadero Israel (la

 

 

iglesia), y se rehusaban a todo tipo de contacto con los gentiles, a quienes consideraban como ceremonialmente “inmundos.”  “inmundos.” 

maniqueísmo: secta de los maniqueos, los seguidores de las doctrinas de Manes (nacido en Persia, 215 – 2276), 76), que admitía dos principios creadores, uno para el bien y otro para el mal. Por extensión, tendencia a interpretar la realidad sobre la base de una valoración dicótoma, es decir, en dos extremos opuestos. Mesopotamia: del griego que significa “región entre ríos,” designa la región de Asia entre los ríos Éufrates y Tigris, que fue la cuna de las civilizaciones sumeria, acádica, babilónica y asiria. milenio: un período de mil años al final de los tiempos, cuando Cristo reinará en la tierra sobre un orden mundial perfecto (Ap. 20:1 –  20:1 – 10), 10), caracterizado por paz, justicia y rectitud. El tiempo y naturaleza del “milenio” son controvertibles, controvertibles, y ha dado lugar a varias teorías dentro del cristianismo (premilenialismo, postmilenialismo, amilenialismo, etc.). : movimiento de formar renovación espiritualde caracterizado por Esta la práctica de retiro eno monasticismo alejamiento total del mundo para comunidades monjes o monjas. práctica comenzó los primeros siglos del cristianismo y ha asumido muchas formas y continúa hasta el presente.

ortodoxia: calidad de ortodoxo, es decir, conforme conform e al dogma de una religión o con la opinión religiosa considerada como verdadera. En el caso del cristianismo, es la conformidad con la verdad, la doctrina fundamental o los principios tradicionales y establecidos del cristianismo histórico. paulicianos: grupo cristiano que apareció en las partes orientales del Imperio Bizantino después de 650. Su fundador, Constantino, rechazó el formalismo de la Iglesia Ortodoxa estatal que dominaba la vida religiosa del Imperio. Basó su enseñanza sólo en la Biblia, pero sostenía que sólo los Evangelios y las cartas de Pablo estaban divinamente inspirados. Un espíritu maligno había inspirado el resto del  Nuevo Testamento y el Antiguo Testamento. sabelianismo: influyente movimiento teológico del siglo III, cuyo origen parece haber estado en Asia Menor, pero fue difundido por Praxeas y Sabelio. Sostenía conceptos del monarquianismo moralista o  patripasianismo. Procuraba resolver el problema de cómo aceptar la deidad de Cristo y a la vez mantener la unidad de Dios. Los sabelianos lograron esto a expensas de una trinidad de personas en la divinidad. Redujeron la posición de las personas a modos o manifestaciones del Dios único. Fue resistido por Tertuliano. sacramento: signo sensible de efecto interior y espiritual, que Dios obra en el alma del creyente. Agustín lo llamó “un signo exterior y visible de una gracia interior e invisible.” Es un signo o dramatización, que produce un efecto más poderoso que las palabras. Los dos sacramentos del evangelio ordenados por Jesús son el bautismo y la eucaristía o cena del Señor. Los católicos romanos y ortodoxos consideran como sacramento a otras ceremonias o ritos como: confirmación, matrimonio, ordenación, penitencia y la extremaunción o unción de los enfermos.

sincretismo: del griego sugcretismós (coalición de dos adversarios contra un tercero), es el sistema filosófico o religioso que trata de conciliar doctrinas y prácticas diferentes. Es también el desarrollo de dos o más religiones de manera conjunta, que produce un nuevo desarrollo en materia religiosa, y que contiene algunas de las creencias y prácticas de cada una.

 

 

 theotokos:

del griego (“madre de Dios” o “la que da a luz a Dios”). Título dado a María, la madre de Jesús. Preferido por la escuela de Alejandría a partir de Orígenes. Nestorio en el siglo V se opuso al término y prefirió usar christotokos (“madre de Cristo”) o incluso theodojos (“receptora de Dios”).  Dios”). 

314

SINOPSIS CRONOLÓGICA  Concilio de Arlés (cuestión donatista)

318

Condena de Arrio en Alejandría

324

Pacomio funda su monasterio

325

Primer Concilio de Nicea

328

Atanasio es consagrado obispo de Alejandría

330

Fundación de Constantinopla

335

Destitución de Atanasio y muerte de Arrio

306 – 337 337

Constantino

337 – 340 340

Constantino II

346

Muerte de Pacomio

350

Hilario es consagrado obispo de Poitiers

356

Muerte de Antonio

358

Basilio el Grande funda una comunidad monástica

365

Primer concilio nacional de Armenia

367

Carta de Atanasio define el canon del Nuevo Testamento

370

Martín es consagrado como obispo de Tours

370

Basilio Cesarea es consagrado como obispo de

374

Ambrosio es consagrado como obispo de Milán

 

 

380

El cristianismo como religión oficial del Imperio Romano

381 382

Primer Concilio de Constantinopla Jerónimo en Roma con el obispo Dámaso

385

Prisciliano es ejecutado como hereje

386

Agustín se convierte al cristianismo

389

Jerónimo en Belén

390

Latín como lengua litúrgica oficial

390

Ambrosio desafía al emperador

391

Prohibición total de la adoración pagana

395

División definitiva del imperio

396

Agustín es consagrado como obispo de Hipona

397

Muerte de Ambrosio y Martín de Tours

398

Crisóstomo es consagrado Constantinopla

400

Las Confesiones de Agustín

405

Jerónimo completa la Vulgata

407

Muerte de Juan Crisóstomo; invasiones germánicas

411

Condena de Pelagio

418

Sínodo de Cartago

354 – 430 430

Agustín de Hipona

obispo

de

431

Concilio de Éfeso

440

León el Grande consagrado obispo de Roma

 

 

445

Edicto de Valentiniano fortalece la primacía de Roma

449

Sínodo de Ladrones en Éfeso

451

Concilio de Calcedonia

455

Captura de Roma por Genserico

476

Fin del Imperio Romano en Occidente

478

Persecución de cristianos por los vándalos

482

Clovis rey de los francos

500 500

Dionisio el Seudo-Areopagita escribe Bautismo de Clovis

CUESTIONARIOS DE REPASO  Preguntas sobre el material básico (para los niveles 1, 2 y 3): 1. ¿Es cierto que para mediados del segundo siglo la mayoría de los cristianos eran gentiles? 2. Menciona algunos de los escritos cristianos producidos por los Padres Apostólicos (no menos de cinco). 3. ¿Quién era Marción? 4. ¿Qué pensaba Marción? 5. ¿Qué libros de la Biblia reconocía Marción como “Escrituras”?  “Escrituras”?   6. ¿Cuál era la condición establecida para incluir un libro en las Escrituras cristianas?

7. ¿Es cierto que hacia fines de este período (500) los cristianos reconocían un solo canon neotestamentario?

 

 

8. ¿Qué cuatro influencias ejerció el gnosticismo sobre el cristianismo? 9. Menciona cinco contribuciones de Orígenes al cristianismo. 10. ¿Cuál fue la influencia del montanismo sobre el cristianismo? 11. ¿Qué fue lo que impuso sobre los cristianos la necesidad de reflexionar sobre su fe? 12. Menciona las dos doctrinas capitales de la predicación paulina, en el orden en que él las enseñaba. 13. ¿Cómo se denomina la escuela de pensamiento cristiano que puso énfasis en la divinidad de Cristo y la que puso énfasis en su humanidad? 14. ¿Quién fue el autor de la carta conocida como el Tomo? 15. ¿Qué enseñaba Apolinario sobre la naturaleza de Cristo? 16. ¿Qué enseñaba Nestorio sobre la naturaleza de Cristo? 17. ¿Quién enseñaba que Cristo tuvo dos naturalezas antes de la encarnación y una sola después.

18. ¿Cuál era el énfasis de la escuela de pensamiento cristiano de Roma? 19. ¿Cuál fue el concilio que afirmó las dos naturalezas (divina y humana) de Cristo? 20. ¿Dónde vivió y cuál fue el énfasis característico de la vida monacal de Antonio? 21. ¿Quién fue y qué hizo Pacomio? 22. ¿Dónde vivió y cuál fue la contribución de Basilio de Cesarea?

23. ¿Quién fue Efraín? 24. Menciona al menos tres contribuciones de Jerónimo al cristianismo?

 

 

25. ¿Cómo se conoce a la versión de la Biblia hecha por Jerónimo y qué significa?

26. es? ¿Cuál es la versión oficial de la Biblia de la Iglesia Católica Apostólica Romana y desde cuándo lo 27. ¿Es cierto que Jerónimo, junto con Agustín de Hipona, fueron los constructores del cristianismo latino? 28. ¿Quiénes fueron los protagonistas de la recuperación r ecuperación del cristianismo después de las crisis del siglo IV? 29. ¿Hasta dónde llevaron la fe cristiana? 30. ¿Qué personaje, de todos los mencionados en clase o en esta unidad, te impresionó más y por qué?

Preguntas suplementarias (para los niveles 2 y 3): 1. Busca en un diccionario las palabras “doctrina” y “dogma,” y luego explica brevemente, con tus  propias palabras, las diferencias de concepto con cepto que hay entre ellas. 2. “En definitiva, Marción hizo más bien que daño  daño al desarrollo del cristianismo.” ¿Estás de acuerdo con esta afirmación del autor? Da razones para tu respuesta. 3. ¿De dónde provenían las ideas de los gnósticos? 4. Los gnósticos negaban las doctrinas cristianas de la encarnación, la muerte y la resurrección de Cristo. ¿Por qué? 5. ¿Es cierto que Montano pretendía ser el Mesías? Explica. 6. La controversia arriana trató la interpretación de d e la persona de Cristo. Más específicamente, ¿cuáles ¿ cuáles eran las cuestiones bajo discusión?

7. ¿Es cierto que Eutiques creía que después de la unión de lo divino y lo humano en Cristo había dos naturalezas? 8. El movimiento monástico de Antonio se caracterizó por ciertos matices particulares. ¿Cuáles?

 

 

Tareas avanzadas (para el nivel 3): 

1. Da ejemplos  bíblicos que ilustren la siguiente afirmación del autor: “La doctrina cristiana más temprana surgió como un intento por explicar la experiencia de los primeros discípulos con el Cristo resucitado.”   resucitado.” 2. Considera las creencias de algunas sectas modernas (mormones, testigos de Jehová, J ehová, ciencia cristiana, espiritismo, dianética, etc.). Discute las diferencias con las enseñanzas del cristianismo histórico, y compáralas con las enseñanzas de Marción y los gnósticos. 3. Lee Baker, Compendio de la historia cristiana, 29 – 43, 43, y confecciona una ficha resumen.

TRABAJOS PRÁCTICOS  TAREA 1: ¿Cómo es el verdadero profeta? Lee y responde: “El falso profeta, al no tener el poder pode r del Espíritu Divino en él, les responde (a ( a los que lo consultan como adivino) según las preguntas, y según los deseos perversos, y llena sus almas con expectativas, según sus propios deseos. Porque al estar él mismo vacío, da respuestas vacías a inquisidores vacíos.  Ningún espíritu que es ddado ado po porr Dios necesita que q ue se lo interro interrogue; gue; sino que tal espíritu esp íritu por tener el  poder de la Divinidad habla todas las cosas por sí mismo, en tanto que procede de arriba, del poder del Espíritu Divino. Probad al hombre que tiene el Espíritu Divino por su vida. En primer lugar, quien tiene el Espíritu Divino que viene de arriba es manso, y apacible, y humilde, y se abstiene de toda iniquidad y del vano deseo de este mundo, y se contenta con menos exigencias que las de otros hombres, y cuando se le  pregunta no responde; ni tampoco habla en privado, ni tampoco habla del Espíritu Santo cuando el hombre quiere que el espíritu hable, sino que habla sólo cuando Dios quiere que hable. Entonces, cuando un hombre que tiene el Espíritu Divino viene a la congregación de los justos que tienen fe en el Espíritu Divino, y esta asamblea de hombres ofrece oración a Dios, entonces el ángel del Espíritu  profético, que está destinado para él, llena al hombre; y el hombre al ser lleno con el Espíritu Santo, habla a la multitud según el Señor desea. De esta manera, entonces, se manifestará el Espíritu de la Divinidad.”   Divinidad.”

Pastor de Hermas, Mandamiento 11. (c. 140). - Hacer una comparación entre las declaraciones del Pastor de Hermas en cuanto al ejercicio del don de profecía en la iglesia y las del apóstol Pablo en 1 Corintios 12 –  12 – 14. 14.

 

 

- ¿Cuál es el contexto en el cual debe llevarse a cabo el verdadero ministerio profético según el Pastor de Hermas? A la luz de su declaración, ¿hay lugar para las profecías de carácter privado? - Según las indicaciones del Pastor de Hermas, ¿cuán importante es la condición espiritual del profeta? - Confeccionar una lista de las condiciones morales del verdadero profeta.

TAREA 2: Una teología trinitaria y carismática. Lee y responde: Tertuliano fue uno de los defensores más aguerridos de la doctrina de la Trinidad y de la vigencia de los dones del Espíritu Santo. En su obra Contra Práxeas (año 213) su condena de una teología no trinitaria y de la negación de los dones espirituales es terminante: “Práxeas fue el primero que trajo de Asia a Roma este género de  perversidad herética. Era hombre de carácter inquieto, hinchado por el orgullo de haber sido confesor (alguien que sufrió por confesar su fe cristiana), sólo por algunos momentos de fastidio que padeció durante algunos días en la cárcel. En aquella ocasión, ocasión, aun cuando ‘hubiese entregado su cuerpo al fuego, de nada le habría servido’ (1 Corintios 13:3), porque no tenía amor. Había resistido a los dones de Dios y los había destruido. El obispo de Roma había reconocido los dones d ones proféticos de Montano, de Pris Prisca ca y de Maximila. Con este reconocimiento había devuelto su paz a las iglesias de Asia y de Frigia, cuando Práxeas, urdiendo falsas acusaciones contra los mismos profetas y contra sus iglesias y recordándole la autoridad de los obispos que le habían precedido en la sede (de Roma), le obligó a revocar las cartas de paz que había expedido ya y le hizo renunciar a su propósito de reconocer los carismas. Práxeas, pues, prestó en Roma un doble servicio al demonio: echó fuera la profecía e introdujo la herejía; puso en fuga al Espíritu Santo y crucificó al Padre.”  Padre.”  Tertuliano de Cartago, Contra Práxeas, 1. - ¿Qué relación existe entre una teología trinitaria y la afirmación de la actualidad y vigencia de los dones del Espíritu Santo, especialmente el don de profecía? - ¿Por qué motivos te parece que Práxeas se opuso al ministerio carismático de profetas como Montano? - ¿Qué quiere decir Tertuliano cuando afirma que Práxeas “crucificó al Padre” con su negación del ministerio profético?

- ¿En qué sentido doctrinas falsas como el “cesacionismo” de los dones del Espíritu y de las señales y milagros son expresión de la posición herética de Práxeas?

 

 

DISCUSIÓN GRUPAL  1. Discutir la siguiente afirmación del autor: “El pensamiento y la práctica pr áctica de la Iglesia fue madurando con el correr del tiempo, a medida que los creyentes fueron desplegando y formulando gradualmente la doctrina del Nuevo Testamento, conforme comprendían la revelación divina en su Palabra y la aplicaban a sus circunstancias históricas.” históricas.” ¿Es posible distinguir un desarrollo lógico-cronológico lógico -cronológico en la historia de las doctrinas cristianas? 2. ¿Es necesaria la formulación de un credo oficial para evitar el problema de las “herejías” dentro de la iglesia? Responder la pregunta a la luz de la experiencia de la iglesia de los primeros siglos y de la realidad de las iglesias cristianas hoy.

LECTURAS RECOMENDADAS  Bainton, La Iglesia de nuestros padres , 26 – 30; 30; 42 – 55. 55. Baker, Compendio de la historia cristiana , 31 – 80. 80. González, Historia del cristianismo, 1:77 – 101; 101; 145 – 177; 177; 185 – 192; 192; 203 – 208; 208; 215 – 220; 220; 263 – 272. 272. Latourette, Historia del cristianismo, 1:164 – 240; 240; 275 – 289. 289. Muirhead, Historia del cristianismo, 1:84 – 95; 95; 149 – 179. 179. Vos, Breve historia de la Iglesia cristiana , 21 – 27; 27; 35 – 56. 56. Walker, Historia de la Iglesia cristiana, 53 – 83; 83; 115 – 153; 153; 172 – 194. 194.

bibliografía  FUENTES PRIMARIAS  Baillie, John, John T. McNeill y Henry P. Van Dusen, eds. The Library of Christian Classics .26 vols. Filadelfia: Westminster Press, 1953. Bettenson, Henry S. Documents of the Christian Church. Oxford: Oxford University Pess, 1979. Borges, Jorge Luis, ed. Evangelios apócrifos. 2 vols. Buenos Aires: Hyspamérica, 1985. Coakley, John W. y Andrea Sterk, eds.  Readings in World Christian History. vol. 1: Earliest Christianity to 1453. Maryknoll, N.Y.: Orbis Books, 2004. Comby, Jean.  How to Read Church History. Vol. 1: From the Beginnings to the Fifteenth Century 

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FUENTES SECUNDARIAS  Alvarez Gómez, Jesús. Manual de historia de la Iglesia. Buenos Aires: Editorial Claretiana, 1982. Backhouse, E. y C. Taylor.  Historia de la Iglesia primitiva. 2 vols. Terrassa: CLIE, 1986. Bainton, Roland H. Early Christianity. Londres: Van Nostrand Reinhold, 1960.  ——— . La iglesia de nuestros padres . Buenos Aires: La Aurora, 1969. Baker, Robert A. Compendio de la historia cristiana . El Paso, TX: Casa Bautista de Publicaciones, 1974. Bloch, Marc. Introducción a la historia. México-Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 1957. 787). Miami: Logoi, 1981. Boer, Harry R. Historia de la Iglesia: Iglesia primitiva (A.D. 1 – 787) Brown, Peter. The Rise of Western Christendom. Malden, Mass./Oxford: Blackwell, 1996. Campenhausen, Hans Von. Los padres de la Iglesia . 2 vols. Madrid: Ediciones Cristiandad, 1974. Cross, Lawrence. Eastern Christianity: The Byzantine Tradition. Sidney-Filadelfia: E.J. Dwyer, 1989. Chadwick, Henry. The Early Church. Nueva York: Penguin Books, 1980. Chidester, David. Christianity: A Global History. San Francisco: Harper, 2000). Danielou, J. y H. I. Marrou,  Nueva historia de la iglesia. Vol. 1. Madrid: Cristiandad, 1964. Daniel-Rops. La Iglesia de los apóstoles y de los mártires . Madrid: Anzos, 1992. Deiros, Pablo A. Historia del cristianismo: con énfasis en los evangélicos en América Latina. El Paso, TX: Casa Bautista de Publicaciones, 1985.  ——— .  La acción del Espíritu Santo en la historia: las lluvias tempranas (años 100 – 550). 550). Miami:

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 A Global of Christians: Spickard, Paul R. y Kevin Cragg. Experienced Their World .M. Grand Rapids, Mich.:History Baker Books, 1994. How Everyday Believers Viertel, Weldon e. y William L. Womack. Early and Medieval Christianity: First Course on Church  History. El Paso, Tx.: Carib Baptist Publications, 1975. Vos, Howard F. Breve historia de la iglesia cristiana . Chicago: Editorial Moody, 1965.

 

 

 Historia de la iglesia cristiana. Kansas: Casa Nazarena de Publicaciones, 1957. Walker, Williston. Wand, J.W.C.  A History of the Early Church to A.D. 500. Londres: Methuen, 1979. Weber, Alfred. Historia de la cultura. México y Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica, 1963.

LIBROS DE REFERENCIA  Anderson, Gerald H., ed.  Biographical Dictionary of Christian Missions. Nueva York: Simon & Schuster Macmillan, 1998. Briggs, J.H.Y., R.D. Lindner y D.F. Wright, eds. The History of Christianity. A Lion Handbook. Berkhamsted, Inglaterra: Lion Publishing, 1980. Cross, F.L., ed. The Oxford Dictionary of the Christian Church . Oxford, Londres, Nueva York: Oxford University Press, 1972.  Nelson, Wilton M., ed. Diccionario de historia de la Iglesia. Miami: Editorial Caribe, 1989.

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