Danza fantástica - Enrique Soro (Análisis)

 Análisis de la obra “Danza Fantástica”, Fantástica”, de

Enrique Soro

Nombre: Lucas Mix Fecha: 20/11/14 Profesora: Silvia Herrera Problemáticas de la Música II

 Análisis Poiético El compositor chileno Enrique Soro Barriga nace en Concepción en 1884 y muere en Santiago en 1954. Es considerado como el primer sinfonista de Chile. Comienza sus estudios musicales con su padre, un compositor italiano avecindado en Chile, y los continúa en su ciudad natal. Gracias a una beca otorgada por el Senado chileno en 1898, se perfecciona en el Conservatorio de Milán. En 1904 obtiene el Gran Premio de Composición del conservatorio, en el mismo año se gradúa. A partir de este momento, mantuvo una exitosa carrera pianística, siendo reconocido como gran improvisador e interpretando tanto obras del repertorio universal, como sus propias composiciones. A lo largo de su carrera, estuvo vinculado a grandes personalidades de la música tanto en Chile como en el extranjero, entre ellos: Camile Saint-Saens, Ignace Paderewsky, Paul Casals, Giacomo Puccini y Maurice Ravel. La producción de Soro se concentró en la música pura y en la sala de conciertos, siendo considerado el primer sinfonista de Chile y un romántico neto, en su estilo. El autor no tuvo interés en la ópera, pese a la influencia de la ópera italiana en su obra, y su innegable talento lírico y melódico. Es reconocido como compositor, director de orquesta y pianista (como solista, acompañante e improvisador) a lo largo de América. En 1905 (con 21 años) compone Danza fantástica  como tercer movimiento de Suite para gran orquesta de arco. Es estrenada en el mismo año en Santiago, y a partir de este momento, la pieza

se independiza de la suite y es adaptada para distintos formatos: cuarteto de cuerdas con piano; para dos violines, cello y piano; para piano a cuatro manos y para piano con orquesta. La versión a analizar, para orquesta sinfónica, es terminada en 1916 y fue la última revisión que Soro hace de Danza fantástica.

Diversos autores concuerdan con la opinión de Raquel Barros al señalar dentro de la obra de Soro “dos periodos estilísticos: el de formación, hasta 1911, y el de madurez, entre 1911 y 1952, el que incluye un subperíodo de experimentación”. Encontramos entonces una   obra creada en un momento formativo del estilo del compositor, que luego fue arreglada en una etapa de definición musical.

 Análisis Neutro Instrumentación:

1 Piccolo, 2 Flautas, 2 Oboes, 2 Clarinetes, 2 Fagotes, 4 Cornos en Fa, 2

Trompetas en Fa, 3 Trombones, 1 Tuba, Timbales, Bombo orquestal, Platillos de Choque, Arpa y Orquesta de Cuerdas. Forma:

||: A :|| A’ ||: B – C :|| B’ – A – A’ – B’’(modulación) – C’ – Coda ||

Metro:

¾, estable a lo largo de la obra.

Tonalidad:

inicia en La menor, finaliza en La mayor. Estilo

romántico, forma sinfónica libre, encontramos 3 secciones temáticas importantes: A: 

Sección acentuadamente rítmica, en donde predomina el contratiempo. Tonalidad menor,

melodías con figuraciones cortas (galopa y cuartinas) llevadas por flauta y violín, que son acompañadas

B: Sirve

y

contrastadas

por

ostinatos

de

contratiempo.

de paso entre A y B en ambos sentidos. Se basa en el material temático y el carácter de A.

Predomina la melodía del oboe.

C:  Sección

cantábile, muy lírica y contrastante con el ritmo anterior. Inicia con tonalidad mayor,

posee figuraciones más largas. Diálogo melódico entre violines (frase mayor) y maderas (relativo menor).

Sección menos extensa, se reduce la textura orquestal notoriamente, silenciando toda la sección de vientos. La melodía la lleva el arpa, y las cuerdas mantienen el motivo principal de la sección A. A’:

Se mantiene el antecedente, y se modifica el consecuente: hay un marcado ritardando y una cadencia que en vez de llevar a C, nos vuelve a la sección A. B’:

Nuevamente es modificado sólo el consecuente, que esta vez tiene carácter modulante para llevarnos a C’ en La Mayor. Tiene un gran crescendo y ritardando. B’’:

Sección cantábile en armadura de La Mayor, manteniendo el tono original (en armadura de Do Mayor). El consecuente es modificado y ritardado para llevar a la Coda. C’:

Marcadamente más veloz, utiliza el motivo principal de A y el contratiempo para dar un cierre dinámico y ágil. Coda:

 Análisis Aestésico Carlos Silva Cruz, quien clasifica la obra de Soro (hasta el año 1915) en cinco géneros, ubica la Danza Fantástica en el ciclo Descriptivo (en Barros, “Enrique Soro”, p.69).

Vicente Salas Viú, comenta sobre la obra su “indudable abundancia melódica, y una armonía clara y sin complicaciones”, además de su “grato color orquestal” (Salas Viú, “Enrique Soro en el movimiento musical de Chile”  , p. 13)

Como comentario personal, destaco el poderoso control del ritmo que el compositor demuestra en la obra, específicamente al inhibir los tiempo fuerte de cada compás de modo distinto en dos secciones. Es capaz de contrastar armoniosamente secciones marcadamente rítmicas con un tema cantábile eminentemente lírico, siendo este equilibrio otro elemento que llama mi atención. El

lenguaje que utiliza, definitivamente romántico, parece fresco y original, fuera de lugare s comunes resabidos. Marca una diferencia con sus contemporáneos románticos, de moda en Europa, al preferir una forma sencilla y no extensa para la música sinfónica. En el contexto musical chileno de la época, existía una clara preferencia por las formas simples y pequeñas provenientes del lirismo italiano, arraigado en las salas chilenas. En esta pugna, Soro adquiere un compromiso con la música que buscaba renovar el ambiente musical chileno de inicios del siglo XX. Sin embargo, su obra fue aplaudida por la crítica y el público. Disfrutó en vida de gran recepción a sus trabajos, desde su temprano inicio en el camino compositivo.

Bibliografía Vicente Salas Viú, “Enrique Soro en e l movimiento musical de Chile”, RMCH IV/130 (1948) Raquel Bustos, “Enrique Soro”, RMCH XXX/135-36 (1976), 39-99