CROMOTERAPIA

¿Qué es el color? El universo es un campo magnético de cargas positivas y negativas que vibran y producen ondas electromagnéticas de forma constante. Cada una de estas ondas posee una longitud

y

una

velocidad

de

vibraciones distintas; juntas forman el espectro electromagnético.

EL ESPECTRO ELECTROMAGNETICO Podemos ver aproximadamente en 40% de los colores que se encuentra en la luz solar. Por lo tanto aunque la luz blanca parece carecer de colores y ser intangible, se hayan formado de diferentes vibraciones de color que poseen no solo longitudes de ondas, sino también una estructura corpuscular. La energía radiante de la luz blanca pura constituye un factor vital para nutrir los cuerpos, las mentes y los espíritus y cada vibración de calor posee sus propias cualidades curativas.

LOS COLORES EN LA LUZ Los colores de la luz solar se hacen visibles a nuestros ojos cuando la luz blanca pasa a través de una prisma. Dado que cada uno de los colores posee una longitud de ondas distintas, se curvan de modo también diferente. El arco iris aparece cuando las gotas de agua en el cielo actúan como prismas naturales. Al atravesar esa gotas diminutas, cada uno de los diferentes rayos se curvan en un grado distinto; se crea así un arco iris. Los colores del arco forman una de la luz y se conocen como . El rojo constituye la longitud de onda más larga que podemos ver y posee la frecuencia de vibración más lenta; su energía magnética es cálida y estimulante. El violeta presenta la longitud de onda más pequeña y la vibración más rápida; resulta refrescante y purificador.

MÁS ALLA DEL ESPECTRO VISIBLE A cada lado del espectro visible hay muchas longitudes de onda que no podemos ver. La luz ultravioleta esta inmediatamente después del violeta, y todavía mas allá aparecen rayos electromagnéticos con frecuencias que aumentan a medida que las longitudes de onda se encuentra los rayos X y los rayos gamma. En el extremo opuesto, a continuación de la luz roja, se halla la luz infrarroja. Al igual que el color rojo, posee propiedades acogedoras, aunque despide un calor mas concentrado. Estas cualidades se utilizan en las lámparas infrarrojas. Mas lejos se encuentran otros rayos electromagnéticos con longitudes de onda que aumentan y frecuencias que disminuyen; estas últimas incluyen las ondas de radio. Los místicos siempre han creído que podemos ver los colores que se hallan fuera de nuestro alcance visual con

solo

meditación.

abrir

el



durante

la

PREPARAR COLORES La luz blanca puede dividirse en tres colores básicos o primarios: naranja- rojo, verde y azulvioleta. Cuando estos colores de luz se proyectan  juntos dan lugar a la luz blanca (por ejemplo, si un técnico de iluminación de un teatro combina focos

de

esos

tonos).

Este

fenómeno

se

denomina , y entre su usos se encuentra la cromoterapia con luz de colores. Los colores que conforman los pigmentos que utilizamos en pinturas, telas y otros materiales son diferentes: se obtienen mediante sustracción de luz. Este efecto produce otro trió de colores primarios: rojo azul y amarillo (se consideran primarios porque no se pueden obtener a partir de otros colores). Cuando se combinan en forma de pintura producen el color negro. La mezcla sustractiva de colores se emplea, por ejemplo, cuando se trabaja con pinturas y telas.

¿Cómo percibimos el color?

Los ojos son, indiscutiblemente, los principales órganos sensoriales, ya que sin la facultad de visión la vida resulta dura y difícil. La luz natural penetra en el cuerpo principalmente a través de los ojos, aunque también absorbemos luz por medio de la piel y del aire que respiramos.

PERCIBIR COLOR A TRAVEZ DE LOS OJOS Indiscutiblemente los ojos constituyen los principales órganos sensoriales, ya que sin la vista la vida resulta muy difícil. La luz natural entra en nuestro cuerpo principalmente a través de los ojos, aunque también absorbemos luz por la piel y mediante el aire que respiramos. Cuando los rayos de la luz llegan a los ojos, atraviesan las pupilas hasta alcanzar el cristalino. Como la lente de una cámara, el cristalino curva (refracta) los rayos de luz, de modo que estos se reúnen en un foco de la retina, una capa de células en la parte posterior del ojo. Cuando la luz alcanza la retina, estimula las células que allí se encuentran, que contienen pigmentos sensibles a aquella. Las células son de dos clases: bastoncillos y conos. Los bastoncillos se muestran mucho más sensibles y permiten ver con una luz tenue, pero no registran el color sino tan solo tonos grises. Los conos, menos abundantes, se componen de tres tipos; cada tipo es sensible a uno de los tres colores primarios de la luz (naranja-rojo, verde y azul-violeta). Los conos sensibles a la luz verde se encuentran situados en el centro exacto de la retina, de modo que permiten que la luz penetre en el centro del ojo. Esto hace que el color verde sea más relajante para la vista y para la mente.

La luz que llega a la retina provoca la descomposición del pigmento presente en las células sensoriales, lo que genera un impulso nervioso que se desplaza a lo largo del nervio óptico hasta las zonas visuales (la corteza visual) de la parte posterior del cerebro. Los impulsos del ojo derecho viajan hasta el hemisferio izquierdo cerebral, mientras que los del izquierdo se desplazan hacia el hemisferio derecho. Esto significa que las fibras nerviosas se cruzan en una zona del cerebro; esta zona se denomina quiasma óptico. No todos los impulsos luminosos recibidos a través de los ojos se refieren a la vista. Los impulsos nerviosos viajan no solo hasta la corteza visual del cerebro, sino también a través del hipotálamo hasta las glándulas pituitarias y pineales. Muchas funciones corporales reciben el estimulo o resultan mas vitales a causa de la luz, y los diferentes colores ejercen efectos específicos en el cerebro y el sistema nervioso. Los rayos de distintas tonalidades también influyen en nuestro sistema energético y en las parcelas más sutiles de nuestro ser.

PERCIBIR EL COLOR A TRAVES DE LA PIEL La luz también penetra en el cuerpo a través de la piel. Todos hemos experimentado la sensación de calor que producen los rayos de luz infrarroja cuando nos hemos expuesto al sol durante un tiempo excesivo. Incluso cuando estamos vestidos poseemos una sensibilidad natural hacia las longitudes de onda de calor. Por lo general, somos conscientes de los efectos de la energía cromática recibida por medio de la piel cuando nos resultan incómodas ciertas prendas de vestir y, en cambio, otras nos hace sentir cómo dos y relajados. No nos afecta únicamente la textura de la tela, sino también las diferentes energías que se hallan en los colores. Aunque la sensibilidad hacia el color que nos llegan a través de la piel se manifiesta casi siempre de forma inconsciente, también es posible desarrollar una facultad especial para detectar la energía cromática mediante la yema de los dedos y otras partes del cuerpo. Muchas personas ciegas tienen la capacidad de diferenciar colores pasando sus dedos o sus manos por encima de un objeto, y realmente sienten la cualidad del color. Algunos colores resultan cálidos, mientras que otros aparecen fríos; con frecuencia, los invidentes describen los colores por su textura y por la sensación que les producen.

En Rusia, algunas personas dotadas de visión han aprendido a identificar los colores mediante las manos. Solo se necesitan unas cuantas semanas para adquirir la técnica. Como en el caso de la bicicleta, esta habilidad nunca se olvida. Muchos curanderos que trabajan con el color también son sensibles a las vibraciones y pueden identificarlas dentro del cuerpo de los demás. Intente realizar el siguiente experimento. Corte algunos trozos de papel o cuadrados de fieltro, de colores vivos. Cierrre los ojos y procure sentir la cualidad de cada color mientras mantiene las manos sobre un trozo o cuadrado distinto cada vez. Se sorprenderá de lo sencillo que resulta distinguir entre colores calidos y fríos.

COMO AFECTA EL COLOR A NUESTRO CUERPO

El efecto del color no termina cuando cerramos los ojos. Las células necesitan luz para funcionar con normalidad, y los colores no sólo las afectan sino que  provocan cambios en el desarrollo y el comportamiento. Por tanto, influyen en el tejido célular, así como en los modelos de vibraciones que nos dan vida y nos mantienen unidos. Al morir, estos modelos desaparecen, y el cuerpo se desmorona y descompone.

EL COLOR A NUESTRO CUERPO La luz afecta a la gládula pituitaria, llamada glándula maestra del sistema endocrino porque genera sustancias que regulan las hormonas producidas por las glándulas endocrinas. Éstas controlan muchas funciones corporales, entre ellas, los patrones de crecimiento y sueño, el control de la temperatura, la tendencia sexual, los niveles de energía, la tasa metabólica y el apetito. La glándula pineal, localizada en lo más profundo del cerebro, también es sensible a la luz. Estas glándulas, que actúan como un reloj corporal interno, produce una sustancia denominada melatonina, que regula los ciclos de sueño diarios e inhibe la maduración sexual. Por la noche, la falta de luz natural da como resultado un aumento de la  producción de malatonina, que induce al sueño, mientras que la luz diurna elimina su producción. La cantidad y la calidad de la luz que alcanza las glándulas pineal también varia según las estaciones. Los cambios en las proporciones de los colores en la luz solar según el período anual provocan que nuestras funciones corporales, como la de los animales y las plantas, imiten la energía estacional. Por tanto en verano nos sentimos llenos de vigor, mientras que en invierno ahorramos energía por estar menos activos.

ROJO El rojo es el más físico de los colores, y  posee la tasa de vibración más lenta y la longitud de onda más larga. Es el color de la sangre y ejerce una acción estimulante en el corazón y el sistema circulatorio; la luz roja eleva la presión sanguínea. El cuerpo resulta fortalecido con el rojo, que contribuye a la formación de hematíes. Asimismo estimula las glándulas suprarrenales. El rosa, formado por la adición de  blanco al rojo, ejerce una estimulaión más sutil que el segundo y contribuye a la relajación de los músculos.

NARANJA El naranja estimula los órganos sexuales y ejerce un acusado y beneficioso efecto en el sistema digestivo. Refuerza el sistema inmunológico, incluido el bazo, además de los pulmones y el páncrea

AMARILLO Las longitudes de onda amarillas estimulan el cerebro y nos ayudan a estar despierto, despejados y decididos. El amarillo también refuerza el sistema nervioso en general. Crea energía en los músculos mediante la activación de los nervios motores. Asimismo, activa el sistema linfático y limpia el tracto digestivo. Posee una resonancia favorable al páncreas, al hígado y a la vesícula biliar.

VERDE El verde es beneficioso para el corazón tanto desde el punto de vista físico como emocional Aporta equilibrio y relajación al cuerpo y regula la circulación. También estimula la glándula pituitaria. Funciona a través del sistema nervioso simpático; facilita la relajación de los músculos del pecho: la respiración es más profundad y lenta.

AZUL El azul esta relacionado con la garganta y la glándula tiroides, y actúa como calmante, refrescante y relajante. Se ha demostrado que la luz azul disminuye la presión sanguínea mediante la relajación del sistema nervioso autónomo, mientras que la luz roja aumenta la presión. Generalmente, el azul facilita el  proceso curactivo, y favorece la cicatrización de heridas y quemaduras. Además, ejerce un efecto antiséptico en los cortes y la magulladuras de poca importancia. Posee una acción constrictora y es antiinflamatorio . El azul oscuro estimula la glándula pituitaria, encargada de regular los patrones de sueño. Este tono posee buenas propiedades analgésicas, sobre todo en los casos de insolación, fiebre, migraña o problemas dermatológicos con dolor y picor. Influye en el esqueleto.

TURQUESA El turquesa posee una resonancia favorable al timo, que desempeña un  papel primordial en la producción de las células T (protegen contra las infecciones ). Cuando se sufre de los nervios y el sistema inmunológico se encuentra debilitado, el turquesa actúa como un tónico. Estimula la glándula tiroides y los pulmones.

INDIGO Posee cualidades narcóticas. En Estados Unidos, algunos médicos emplea luz de color índigo para anestesiar en operaciones menores.

VIOLETA El violeta influye en el cerebro y el sistema nervioso central, y posee un efecto purificante y antiséptico. Refresca el sistema y alivia los sarpullidos y las insolaciones. Estimula la circulación, elimina la sensación de hambre y regula el metabolismo corporal al mantener el equilibrio de  potasio en el cuerpo.