Crisis Vitales Durante El Desarrollo

 

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CRISIS VITALES DURANTE EL DESARROLLO.

Las crisis vitales nos permiten reflexionar y evaluar alternativas y promover toma de decisiones, cambios y la reformulación de valores, así como, creencias, para poder replantear nuevos objetivos, Cada crisis es una confrontación con la posibilidad de elegir aceptarla o rechazarla, es en ese momento cuando se decide si va a constituir como peligro o va a ser una oportunidad. Dentro de la hipótesis del desarrollo del ciclo vital, esta se divide en tres grandes periodos del desarrollo los cuales comprende: infantil, adolescencia (sentido de identidad) y la adultez (la famosas crisis de los 40); dentro de los cuales pueden surgir diferente crisis vitales a lo largo de la vida. Hay momentos del ciclo vital relativamente tranquilos y estables y otros donde aparecen nuevas exigencias, en las que es necesario un periodo de transición para adaptarse a dichas exigencias, esto puede llevar algo de tiempo. Cuando suceden las crisis es necesario entender el contexto histórico de la persona para poder determinar qué lo está provocando. Se debe tener cuidado en diagnosticar cuando es una transición o crisis, ya que la transición se puede dar cuando se está pasando de una etapa a otra de la vida y la crisis cuando el desempeño dentro de una etapa en particular se ve perturbada y no se le ve una salida a esta situación. Por ejemplo hoy en día la transición de los jóvenes a la vida adulta es un acto cada vez más complejo, diversificado y sujeto a las incertidumbres propias de sociedades altamente dinámicas y cambiantes, así como el cambio social acelerado resultante de los procesos de individualización. Otras de las preocupaciones y conflictos es como enfrentamos las etapas de la vida de una a la otro, por ejemplo en la edad temprana, sería el miedo a quedarse solo, miedo a ingresar a la escuela, miedo a socializar con sus compañeros, en la adolescencia, es donde se presentan los mayores cambios físicos y emocionales, ya en la adultez temprana, se presentan otras tipos de estimulantes a las crisis

 

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como pueden ser, rechazo, intimidad, decidir que estudiar, a dedicarse en su vida laboral y en la adultez, en sus diferentes etapas, adaptarse a la familia (esposa e hijos) combinar su vida laboral con la familiar y social, y preparase para el decaimiento de la vejez y los cambios y miedos que esto conlleva. Erikson veía el desarrollo humano como una secuencia de periodos en la que cierto tema es particularmente prominente e importante. Durante cada etapa los individuos experimentan una crisis psicosocial o conflicto. Frank Pittman nos dice “En cada estadio de desarrollo es inevitable una crisis de

algún tipo. Para Erikson una crisis es un punto crucial, un periodo en que el potencial para crecer es grande pero en el cual el sujeto es también muy vulnerable. Las transiciones familiares y crisis; La Familia es un sistema viviente, el cual se encuentra en constante cambio, y a través de su existencia, pasa por diversas crisis que amenazan para bien o para mal su equilibrio y estabilidad, por ejemplo en la etapa de la búsqueda de la pareja y matrimonio; Los problemas más comunes en esta etapa están relacionados con inseguridades, baja autoestima, así como el involucramiento de la Familia en la toma de sus decisiones, La tarea principal en esta etapa consiste en una función de adaptación de ambos miembros del matrimonio a esta nueva vida en común, la llegada de los hijos, una etapa en donde la pareja deberá establecer acuerdos acerca de la educación del menor, se tendrá que establecer reglas que deberán cumplir y hacer cumplir para el buen funcionamiento de la misma. La etapa de la adolescencia de los hijos, una de las más complicadas para ambos, es donde se establecen límites y reglas adecuados a esta etapa, así como intentar comprenderlos en sus cambios y dificultades. Otra de las etapas más difíciles para la mayoría de los padres es cuando estos ya emprenden la salida del ceno familia para formar su propia familia, y es momento de dedicarse a ellos y es cuando se dan cuenta de que han cambiado, es

 

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momento de reencontrase, y la última etapa de la familia en edad avanzada, aquí se debe tener cuidado, en no involucrarse demasiado de los padres con los hijos es tan dañina como un desapego total, es tiempo de la paciencia y de los olvidos. La crisis se presenta cuando la estructura de la familia parece incapaz de incorporar el nuevo estadio de desarrollo. Provocan cambios permanentes en el estatus y función de los miembros de la familia. La crisis masculina en la mitad de la vida; reordenación en la estructura vital, para esto Levinsón estableció estas etapas de desarrollo en el camino de la transición de la mitad de la vida, estas son; a) El abandono de la familia, esta etapa se inicia alrededor de los 16 o 18 años y termina a los 20 o 24 años, a esta edad ya se tiene estudios por lo general universitarios y es el momento de la búsqueda de la independencia. b) Llegar a ser dueño de uno mismo, ocurre a finales de los 30 el comienzo comie nzo de la temprana vida adulta, ya se sabe qué hacer con su vida. c) Transición mitad de la vida, vida, límite de la orientación hacia el logro, en esta etapa de la vida por lo general ya se tiene una estabilidad laboral y familiar. Para finalizar tenemos las Implicaciones de la intervención, para esta se siguen pautas evaluativas, para lo cual se debe de considerar y poder determinar si no es un problema que se está tratando de resolver entre la persona y su familia, por ejemplo que no fue aceptado en tal o cual trabajo y todas sus expectativas estaban puestas en ese trabajo, como se puede apreciar en este ejemplo la crisis puede presentarse mediante algunas dificultades, para lo cual es importante descubrir como el individuo percibe este suceso precipitante, si la persona se siente fuera de fase o destiempo y como afecta al entono de la familia y los amigos, para esta determinación el profesional cuenta con herramientas que le permitieran descubrir el fondo del problema.