CONSOLIDADO prosocialidad

August 16, 2018 | Author: Yalednys Anibal Castillejo | Category: Behavior, Learning, Emotions, Self-Improvement, Psychology & Cognitive Science
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Descripción: psicologia...

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PROSOCIALIDAD Trabajo Colaborativo 1

PRESENTADO POR:  YOHELIS ANIBAL CASTILLEJO CASTILLEJO COD: 1003382957 1003382957 OSMEIRA ESTHER MERCADO COD: ZEILA LEONOR GUTIERREZ COD: MARGARITA JOSEFINA BAQUERO COD: LUZ ADRIANA FLOREZ COD:

TUTORA MARIA FERNANDA CABALLERO

GRUPO: 403010A_291

UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA Y A DISTANCIA PROGRAMA DE PSICOLOGIA UNAD 2016

INTRODUCCION La temática del siguiente trabajo se fundamenta esencialmente en la prosocialidad con la finalidad de sensibilizar a toda la población, de las frecuentes situaciones de indiferencia que se ven hoy en día en todas partes del mundo, de tal forma queremos identificar los diversos contextos para que las personas sean capaz de ayudar por intuición mas no por intención. De esta forma la presente actividad se enfatiza en el concepto y las bases teóricas de prosocialidad, igualmente se expone una de las infinitas problemáticas, que enfrenta nuestra sociedad, entre tantas que existen siendo este relevancia social ya que afecta al futuro de toda generación. Estas condiciones o requisitos ponen una cuestión crítica, por ejemplo, a una acción deseada por un receptor y percibida por éste como beneficiosa, pero si hay indicadores objetivos de que dicha acción, en realidad, lo daña, no sería prosocial, desde nuestra perspectiva.

DEFINICIÓN DE CONCEPTOS Y NOCIONES DE PROSOCIALIDAD La conducta de ayuda al otro se considera un aspecto importante en la vida social del ser humano, tanto así que puede distinguirse como una forma de equilibrio de la sociedad, ya que permite adquirir un sentido de pertenencia y redes de apoyo, de las cuales se puede disponer en cualquier momento y al mismo tiempo sentirse protegido. Existen muchas definiciones de conducta prosocial, y si bien todas hacen hincapié en distintos puntos de vista, también poseen una base semántica en común: las acciones prosociales son aquellas que brindan algún beneficio objetivo a otros, no siendo esto reciproco a sus hacedores. V. James en su manual de psicología (1986) afirmaba que las conductas prosociales pueden ser definidas como actos realizados en beneficio de otras personas; maneras de responder a éstas con simpatía, condolencia, cooperación, ayuda, rescate, confortamiento y entrega o generosidad. Mientras que para R. Roche (1991) son prosociales aquellos comportamientos que sin buscar una recompensa externa, favorecen a otras personas o grupos sociales, según el criterio de éstos, y aumentan la probabilidad de generar una reciprocidad positiva de calidad y solidaridad en las relaciones interpersonales o sociales. Dentro de las principales conductas prosociales se pueden identificar las siguientes: Ayuda física, servicio físico, dar, ayuda verbal, consuelo verbal, confirmación y valorización positiva del otro, escucha profunda, empatía, solidaridad, presencia positiva y unidad. La manera en que se pueden explicar dichas conductas prosociales desde los fundamentos teóricos guarda una relación directa con la interacción entre el estado emocional del ayudante potencial y los aspectos específicos de la situación de emergencia. El supuesto más generalizado es el de que la gente responde de forma que se maximicen los afectos positivos y se minimicen los negativos. En otras palabras, el comportamiento prosocial puede ser visto como un acto de egoísmo más que de altruismo. Presumiblemente, cuanto más afecto positivo haya en relación con el afecto negativo, más probable es que un individuo se comporte de una forma prosocial. En síntesis, un espectador ayudará a una víctima si esta ayuda se

percibe como conductora hacia un resultado emocional más positivo o menos negativo para el espectador. El desarrollo de conductas prosociales plantea también una alternativa para las conductas indeseables, principalmente en los escenarios y contextos con problemáticas sociales. Las razones principales por la que se deber potenciar las conductas prosociales son: La deshumanización que actualmente se presenta en el tejido social, el enorme desarrollo de los medios de comunicación, que han hecho aumentar la difusión de información y una paradójica reducción de la sensibilidad en la sociedad ante situaciones de emergencia y de necesidad experimentadas por otros. Por ejemplo, en la teoría de Bandura del aprendizaje social se encuentra un método para reemplazar las conductas indeseables por conductas prosociales basado en tres técnicas: ü El modelado: en el cual la persona puede observar como los individuos se comportan de formas socialmente aceptadas. ü La práctica reiterada: tal como su nombre lo indica, en este punto las personas repiten de forma sistemática las conductas. ü La planificación del éxito: la prueba fehaciente de que una conducta en particular produce beneficios.

PRESUPUESTOS TEÓRICOS DE LA PROSOCIALIDAD Humanismo: Hace posible una aproximación al mundo de los valores universales, seleccionando aquellos que pueden coexistir desde un profundo respeto mutuo vivido que permita no sólo respeto sino la estima y el diálogo entre todas las personas y sistemas.

Teoría sistémica: Hace hincapié en la bidireccionalidad, globalidad y circularidad de los procesos que nos permiten trabajar la consciencia de responsabilidad de las personas y nos refuerza el concepto principal de nuestra definición de prosocialidad: la unidad.

Teoría social cognitiva: La conducta humana se describe en términos de la interacción recíproca entre determinantes cognoscitivos, conductuales y ambientales. (Bandura).

Teoría del aprendizaje social: Ofrece ciertas vías para los procesos de aprender como: la observación de modelos, la imitación, el entrenamiento y el ejercicio.

Neo-cognitivismo: Es una metodología que permite acceder a las actitudes e intervenir en un aprendizaje para la generación de alternativas en la toma de decisiones y para el establecimiento de estrategias perceptivas. El conductismo: Hace énfasis en la precisión y rigor de la terminología, en la sistematización y ordenación de los elementos y en su operativización para la replicabilidad y posible evaluación.

Construccionismo social: El construccionismo actuar en la focalización de la prosocialidad como constructo maximizador, en el sentido en que en toda intervención no basta “un poco de prosocialidad” sino que esta ha de ser el eje estructurante de todo el diagnóstico e intervención.

Investigación-Acción Participativa, (PAR): Es un modelo integrador para observar, experimentar y evaluar los procesos de cambio.

APLICACIÓN DE LA PROSOCIALIDAD 1. Ayuda física: Conducta no verbal que procura asistencia a otras personas para cumplir un determinado objetivo, y que cuenta con la aprobación de las mismas.

2. Servicio físico:  Conducta que elimina la necesidad a los receptores de la acción de intervenir físicamente en el cumplimiento de una tarea o cometido, y que concluye con la aprobación o satisfacción de éstos

3. Dar: Entregar objetos, alimentos o posesiones a otros perdiendo su propiedad o uso.

4. Ayuda verbal: Explicación o instrucción verbal o compartir ideas o experiencias vitales, que son útiles y deseables para otras personas o grupos en la consecución de un objetivo

5. Consuelo verbal:  Expresiones verbales para reducir tristeza de personas apenadas o en apuros y aumentar su ánimo.

6. Confirmación y valorización positiva del otro: Expresiones verbales para confirmar el valor de otras personas o aumentar la autoestima de las mismas, incluso ante terceros. (Interpretar positivamente conductas de otros, disculpar, interceder, mediante palabras de simpatía, alabanza o elogio).

7. Escucha profunda: Conductas meta verbales y actitudes de atención que expresan acogida paciente pero activamente orientada a los contenidos expresados por el interlocutor en una conversación

8. Empatía Conductas verbales que, partiendo de un vaciado voluntario de contenidos propios, expresan comprensión cognitiva de los pensamientos del interlocutor o emoción de estar experimentando sentimientos similares a los de éste

9. Solidaridad: Conductas físicas o verbales que expresan aceptación voluntaria de compartir las consecuencias, especialmente penosas, de la condición, estatus, situación o fortuna desgraciadas de otras personas, grupos o países.

10. Presencia positiva y unidad: Presencia personal que expresa actitudes de proximidad psicológica, atención, escucha profunda, empatía, disponibilidad para el servicio, la ayuda y la solidaridad para con otras personas y que contribuye al clima psicológico de bienestar, paz, concordia, reciprocidad y unidad en un grupo o reunión de dos o más personas.

RELACIÓN DE PROSOCIALIDAD Y LO BIOLÓGICO Para J. Piaget (1932) la persona pasa de una moral heterónoma a una moral autónoma a través de un equilibrio cognitivo, el cual gracias a los procesos de adaptación y asimilación, posibilitan la interiorización de normas y valores morales. Sin embargo, para L. Kohlberg (1975) existe una estrecha relación entre el juicio moral y las acciones morales para que se dé un nivel adecuado de conducta moral. Desde esta perspectiva, la “persona moral y prosocial” es la persona que establece lo que es correcto moralmente, y tratando de adaptarse al grupo o a la sociedad construyéndose así mismo. La investigación de los modelos cognitivo-evolutivos aporta que las personas evoluciona no crecen en el

pensamiento moral, y que ese cambio va acompañado de un paso del ser “egocéntrico” a un ser “centrado en los demás”, lo cual favorece que la persona sea prosocial (MartíVilar, 2002). Por otra parte, S. Freud (1968) y Aron freed resaltan las frecuentes inconsistencias entre cognición y acción moral, afirmando que el pensamiento no es por sí mismo suficiente para que se produzca la conducta moral, ya que puede haber otros muchos factores que intervengan. Sin embargo, M. L. Hoffman(1992) plantea que la interacción entre cognición y empatía clarifica la comprensión de la CP. Según este, en la empatía están involucradas, al menos tres habilidades y procesos cognitivos, y que junto a otras variables, explican la CP. En primer lugar, la empatía requiere diferenciar entre uno mismo y el otro; en segundo lugar, requiere un proceso asociativo directo entre experiencias ajenas y experiencias pasadas de emoción similar, y, por último, implica la habilidad cognitiva de asumir roles. Los Estudios longitudinales evidenciaron dos patrones de respuesta en los niños pequeños. “afectivamente prosociales”, ya que respondían con un componente emocional importante, pero con escaso análisis cognitivo, mientras que otros se manifestaban “cognitivamente prosociales”, es decir, ante el malestar de otros niños actuaban con conductas prosociales más cognitivas, del orden de examinar, preguntar, indagar, etc. N. Eisenberg y P. A. Miller (1987) concluyen que la CP está positivamente relacionada con la compasión y la empatía. Pero, indican que otros factores como variables situacionales, estados cognitivos del sujeto, atribuciones causales, análisis del coste/beneficio, entre otros, pueden provocar respuestas aversivas en ocasiones, o bien inhibir totalmente las iniciativas prosociales. Finalmente, I. Etxebarria (1994) destaca “la importancia de las emociones en la conducta moral. De hecho, en el campo de la conducta altruista, la investigación empírica sugiere que la emoción empática jugaría un papel más importante que las normas y el juicio moral. Siguiendo esta evolución científica, Martí, Martí Vilar y Puerta (2011) presentan un artículo de revisión basado en diferentes trabajos de investigación con el objetivo de presentar la responsabilidad

social,

vinculada

conceptualmente

a

paradigmas

organizacionales, hacia una propuesta evolutiva propia del desarrollo humano, denominada Neuro-responsabilidad.

La cognición moral y la prosocilidad son campos de investigación y de trabajo bastante recientes. Afortunadamente, se van aportando nuevos paradigmas, conceptos,

modelos

teórico-explicativos,

instrumentos

de

medida,

e

investigación experimental, que ayudan a entender estos dos conceptos y la relación que hay entre ambos, con el fin de conocer la realidad y mejorarla (Martí Vilar, 2002).3.

PROBLEMA SOBRE LA FALTA DE PROSOCIALDAD JUSTIFICACIÓN DE LA PROBLEMATICA EN EL COLEGIO MANUELA BELTRÁN DE VALLEDUPAR- CESAR Introducción El contexto educativo en Colombia presenta actualmente una problemática en el ámbito de la formación de valores y comportamientos pues no se cuenta las más de las veces con un marco de referencia efectivo que oriente y guíe a los educadores en tal labor. La falta de este marco y de esta formación conlleva a una problemática de falta de conductas prosociales en los educandos y por lo tanto priman en ellos conductas contrarias que son reforzadas por los modelos individualistas, agresivos y egocéntricos que promueve los medio de comunicación y la sociedad de consumo que impera en nuestra sociedad. De acuerdo con Roche(1995), “En los momentos actuales de una sociedad en donde

abundan

los

modelos

agresivos

y

competitivos,

no

sólo

los

investigadores sino los líderes educativos, sociales y políticos están descubriendo la importancia de las actitudes y comportamientos prosociales, por el potencial que ofrecen de cara a la optimización de una convivencia más armónica, funcional y ajustada así como por su valor preventivo de higiene mental

para

la

persona

en

particular,

sometida,

generalmente, a fuertes presiones de una sociedad que no siempre facilita, espontáneamente, las conductas sanas.”La prosocialidad se presenta en la actualidad como una respuesta, principalmente desde la psicología y la educación,

para

educar

no

solo

a

los

niños

y

jóvenes

sino

también a los adultos en todas sus categorías en comportamientos

que

promuevan una sociedad más solidaria que piense en las necesidades de los demás. No basta con una educación que prevea solamente el que no se le haga mal a nadie, el que no seamos violentos. Hoy la sociedad necesita, más bien, una educación que promueva la aceptación de los demás en toda su persona, es decir ,que las personas sean no

solo

toleradas

sino

también

aceptadas

o

vinculadas

en

ella como tal, lo cual lo hace posible una educación que promueva la prosocialidad, el reconocimiento del otro, su aceptación y vinculación. La educación prosocial de las personas representa una respuesta a la demanda sentida de nuevas “normas de urbanidad” o “buenos modales y comportamientos” que con ahínco reclama la sociedad para las nuevas generaciones puesto que estás últimas nacieron sin normas que les digan que hacer o como comportase frente a situaciones sociales. La sociedad mayor reclama una educación civil que derespuesta a los problem as de convivencia de la actualidad ya que no hay respuestas.

Una Definición de prosocialidad De esta manera, la prosocialidad, de acuerdo al Doctor Roche, director del laboratorio de Investigación de Prosocialidad Aplicada- LIPA- de la UAB, se define como: “Aquellos comportamientos que, sin la búsqueda de recompensas externas, favorecen a otras personas, grupos o metas sociales y aumentan la probabilidad de generar una reciprocidad positiva de calidad y solidaria en las relaciones interpersonales o sociales consecuentes, salvaguardando la identidad, creatividad e iniciativa de las personas o grupos implicados” .La conducta Prosocial se podría definir como contraria a la conducta antisocial. Toda persona posee una capacidad para la prosocialidad y además la pone en práctica en muchas ocasiones. Hay múltiples acciones en la interacción humana

que

responden

en principio al comportamiento prosocial: el ayudar, confortar, servir, escuchar, consolar, ayuda verbal, solidarizarse, confirmar positivamente al otro, compartir y otras. (Roche, 1991).

Inhibidora de violencia La educación para la prosocialidad se puede considerar una interesante respuesta para la optimización de las emociones, los valores y las normas: formación integral de la personalidad orientada hacia una convivencia más amable y, a la vez, hacia una presencia más activa y constructiva en el ámbito social.

Se

confiere

un

especial énfasis a la comunicación de calidad, la empatía, el autocontrol, la asertividad y la inteligencia emocional. Un postulado importante de la prosocialidad es el de que uno de los modos más eficaces para la inhibición de las conductas violentas y agresiva es el de equipar a los individuos con repertorios de conductas positivas y prosociales que resulten funcionales para la consecución de objetivos personales y sociales. De hecho la aportación del grupo investigador de la UAB tiene todo su fundamento en la teoría de que es posible una conducta humana totalmente funcional basada en elementos prosociales y que permiten una convivencia social más progresiva y armónica. Podemos considerar hoy la educación para la prosocialidad, en su característica de efectiva prevención a medio plazo de la violencia,

como

una

vía

de

autoanálisis

y consiguiente mejora de las relaciones interpersonales en los claustros de profesores, con implicaciones lógicas en su papel de modelos colectivos positivos para la educación de sus alumnos.

La formación de formadores de prosocialidad De acuerdo con Romersi (2007), “la formación del educador constituye un aspecto esencial para la optimización de la relación educativa en la cual la función de modelo que el educador o formador ejerce deja una huella indeleble en el proceso formativo de cada alumno. La importancia de la función modélica del docente en el contexto educativo marca la educación que les proveen a sus alumnos ya que sirven de modelos

como copia para estos últimos. La relación docente-alumno es reciproca en donde existe un deber ser y así mismo un ser observado. El aprendizaje vicario, en donde el alumno imita lo que observa, se da, entre otros, frente a los valores, la calidad humana, las actitudes del docente. (Roche, 1995) El ser modelos de comportamiento de los aprendices envuelve toda una responsabilidad social ya que forjaran en gran medida las actitudes que tengan sus educandos en cuanto a no solo lo académico sino también lo social. ( Romersi, 1994)Silvia Romersi desarrolló un modelo denominado “La formación

del

formador

y

educador prosocial “el cual está dirigido al desarrollo de las

competencias

básicas y necesarias que debe tener un profesional que desee promover la educación de la prosocialidad en sus alumnos. Este modelo ha sido desarrollado a través de las experiencias de educación para la prosocialidad que se han desarrollado en distintos lugares de España e Italia y se basa en la articulación de seis ejes que representan los ámbitos de la vida del educador, en el contexto escuela. De acuerdo con Lubich, citada por Romersi,( 2007) la técnica de relación que ella denomina “ hacerse uno” invita a acoger al otro , a darle espacio, a abrirse a las necesidades del otro, incluso a sus dolores. El significado de hacerse uno se refiere a la actitud de “ponerse  frente a todos en posición de aprender, porque se tiene que aprender realmente”. Está práctica “requiere  un vacío completo de nosotros mismos: quitar de nuestras cabezas las ideas, del corazón los afectos, de voluntad cualquier cosa, hacer callar incluso las aspiraciones, para ponerse en el lugar del hermano.” El educador que quiere obtener el máximo resultado de sus alumnos tiene que probar en cada encuentro el verlos siempre con ojos nuevos probando esta técnica El formador que quiere promover una educación prosocial debe ejercitar este tipo de empatía para el éxito de las acciones formativas orientadas hacia el desarrollo de las competencias individuales y colectivas. El reto que impone la formación del docente implica el desarrollo de competencias que lo doten de estas formas nuevas prosociales de interacción.

Con la implementación de dicho modelo, en las comunidades educantes, se pretende

dotar

e

incrementar

en

los

docentes

y

profesionales

de

habilidadesprosociales personales y competencias educativas para la f ormació n deprosocialidad en sus alumnos, en la institución educativa en que se desarrollará este proyecto.

OBJETIVO GENERAL Se logrará crear una comunidad educante en el Colegio Manuela Beltrán de Valledupar,

con un perfil

comprometida

formador

prosocial

con

la

integral,

que

es activa

formación

y de

valores y comportamientos prosociales en su estudiantado y que forma ciudadanos solidarios, interesados y comprometidos con el reconocimiento del otro, su aceptación y vinculación.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS 

Diseñar una metodología que ayude a conocer los comportamientospros ociales y patrones de enseñanza que utilizan los docentes del Colegio Manuela Beltrán de Valledupar.



Adaptar el Modelo de Formación del Educador y Formador Prosocial, de Silvia Romersi, de la Universidad Autónoma de Barcelona, Equipo LIPA. por medio de un proyecto formativo dirigido a la población docente del Colegio Manuela Beltrán de Valledupar.



Mejorar la comunicación de los docentes en sus ámbitos personales por medio del trabajo con el Modelo de Comunicación de Calidad y el plan de optimización de ésta.



Promover la educación para la paz por medio de la promoción del comportamiento

prosocial de

los educadores

en ámbitos

personales como: familia, trabajo, educación, amigos, y desconocidos a través del diseño de un laboratorio prosocial personal que ellos mismo elaboren y vivencien. 

Enseñar y formar a los educadores en el conocimiento del concepto deprosocialidad, las categorías de comportamientos y en el del Modelo UNIPRO para que lo incorporen a su cuerpo de conocimientos y lo puedan aplicar en su quehacer educativo.



Dotar a los docentes de instrumentos de medición para que puedan autoevaluar su proceso formativo así como también evaluar el progreso de susestudiantes en cuanto a los comportamientos y actitudes prosocial es optimizadas.



Presentar y dar a conocer a los educadores el “Programa de Aplicación dela Prosocialidad en la Educación Familiar” (PAPEF) para que puedan diseñar un programa prosocial que implique a los padres de familia de los alumnos en el proceso.



Dar herramientas de análisis crítico prosocial a la comunidad educante para que puedan descubrir modelos prosociales en los medios de comunicación y los utilicen como medio de educación prosocial.



Dar a conocer a los profesores la forma en que se integra el proyecto deprosocialidad al currículo y al Proyecto educativo Institucional para qu epuedan integrar sus materias a estos por medio de la planificación educativa prosocial.



Realizar el seguimiento del proyecto por medio de la utilización deinstru mentos de medición aplicados de forma sistemática.



Elaborar un documento final de memoria que recopile la experiencia total del proyecto y que sirva como instrumento de validación del proyecto

METODOLOGÍA La ejecución del proyecto está prevista para realizar por fases. En total son 6 fases a saber: Análisis del contexto, Análisis de la información y diseño de la estrategia metodológica, Intervención Prosocial en ámbitos personales, Intervención Prosocial en ámbitos colectivos, Evaluación y elaboración del documento final del proyecto. La ejecución total del proyecto está planeada para realizarse en un tiempo de dos años. Las metodologías a utilizar para la acción formativa son la trasmisión de información y la enseñanza grupal e individualizada. La formación se realiza através de la acción conjunta de múltiples factores que actúan al mismo tiempo y

que crean un “sistema formador”: El estudio y profundización personal, la

asistencia a sesiones o charlas, la participación a programas aplicativos, la

realización

de actividades,

la motivación

creciente, el

nuevo tipo

de colaboración entre colegas, etc...

FASE 1- ANÁLISIS DEL CONTEXTO Se realizará el análisis del contexto de una institución educativa. Al realizar este análisis se buscará conocer las creencias y valores del grupo educativo que se está investigando. En una palabra la cultura del grupo: sus creencias, ideas, pensamientos, lenguaje, ritos, mitos, tradiciones, costumbres, normas, valores, actitudes, etc. Todo lo anterior especialmente con respecto a la prosocialidad. Se realizara por medio: historias de vida, grupos focales, entrevistas a profundidad, revisión de documentos institucionales, etc.

Procedimientos y técnicas Para acceder a esta información y alcanzar una comprensión rica y plural del objeto de estudio, se utilizarán diversos procedimientos y técnicas de recogida de

datos relativos al tema de estudio: Entrevistas, Diarios, Conversaciones

exploratorias, Análisis de documentos institucionales, Análisis de estudios realizados, Organigramas de estudios

sociológicos

y estructuras o

de funcionamiento,

psicológicos,

Encuestas,

Revisión

Observación

de

situaciones formales e informales, Otras.  Además, para conocer los más y los menos, las fortalezas y debilidades existentes en los perfiles prosociales de los educadores del Colegio Manuela Beltrán de Valledupar, se aplicará, al inicio del proyecto, el “Test de auto evaluación

-

El

perfil

del

educador

prosocial”

y su debido “esquema del perfil personal – Instrumento de Autoevaluación”. Esta medición será utilizada como medida Pre-test del proyecto. Otras técnicas que

pueden

ser

utilizadas

para que

aporten

información

sobre

la

elaboración y características de la propuesta de formación prosocial deformado res, son: Mesas redondas, Grupos focales, Entrevistas en profundidad: individuales

y

grupales,

Análisis

de

documentos

y

Otras A su vez, también, se aplicará a los formadores el formato

materiales, cuestionario

denominado “ Guión de análisis formativo prosocial para la adaptación enconte

xto” , adaptándolo a al contexto docente para detectar en ellos su planificación educativo / formativa en dos niveles: el individual y el colectivo.  A partir del análisis de las respuestas dadas a este se puede desarrollar plenamente el proyecto formativo ya que nos dará la guía para desarrollar los contenidos específicos y más pertinentes de formación prosocial que requieren los docentes Colegio Manuela Beltrán de Valledupar, de acuerdo a las necesidades detectadas. Esta evaluación también será utilizada como medida Pre-test del proyecto.

CONCLUCIONES

Es importante el estudio de la prosocialidad tanto para reconocer las peticiones sociales, como para desarrollar las conductas sociales positivas por parte de los estudiantes y graduados, siendo un componente básico en la investigación que se efectúa para desarrollar la temática del significado de prosocialidad. Los métodos psicológicos básicos cognitivos, afectivos y de motivación asumen un papel en el trabajo íntegro y moralista, igualmente se llama CP tal y como las protegen los principales autores de la psicología moral y prosocial. Las representaciones constructivistas, por su parte, optan por determinar la ideología prosocial, como un retroalimentador del sujeto con su entorno. Y es que, la complicación y multidimension del ser humano hace que en su avance social se ajuste continuamente en función de los numerosos individuos y medios con los que intercambian sus ideas. Ser una persona o un individuo prosocial implica tener un sistema de complementación ya que se necesita ofrecer tipos de ayuda diferentes pero todas van entrelazadas primordial mente de carácter psíquico, como el apoyo, y la escucha, de carácter físico y luego el de carácter social que es en este último en donde se va reflejar la conducta prosocial. De igual manera con este producto se pretende lograr ser una persona prosocial, no es una tarea fácil, pues se necesita es asumir consciente mente que deseas actuar por convicción de ayudar a las personas que conforman tu entorno, sin que ello implique obtener una recompensa.

BIBLIOGRAFIA 1. Promoción de comportamientos prosociales para la identificación y la prevención de la agresión en la primera infancia, tomado de, file:///C:/Users/Nidia%20Ospino/Downloads/Promoci%C3%B3n%20de% 20comportamientos%20prosociales%20para%20la%20identificaci%C3% B3n%20y%20la%20prevenci%C3%B3n%20de%20la%20agresi%C3%B 3n%20en%20la%20primera%20infancia.pdf  2. Cirera M., Escotorín P. y Roche R. (2008) Aplicaciones de la prosocialidad al desarrollo y educación de las actitudes y las conductas cívicas. Diploma civismo, conductas sociales positivas y socialización. Universidad

Autónoma

de

Barcelona.

España.

Recuperado

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y

conductas

cívicas.

Recuperado

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http://datateca.unad.edu.co/contenidos/403010/Prosocialidad/Entono_Co nocimiento/Articulos_Unidad_1_/1_Cap-1_Diplomado-Uni-deValencia.pdf  4. Manuel Marti V, (Octubre 2011). Bases teóricas de la prosocialidad. 5. Modulo de Prosocialidad.

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