Como vencer al demonio «Por favor, no hagamos tratos con el demonio» y tomemos en serio los peligros que se derivan de su presencia en el mundo. Lo recomendó el Papa Francisco el viernes 11 de octure por la ma!ana, en su homil"a en la misa en #anta $arta. «La presencia del demonio %recordó% %recordó% est& en la primera p&gina de la 'ilia y la 'ilia acaa tami(n con la presencia del demonio, con la victoria de )ios sorecorresponde el demonio». Pero (ste«no %advirtió% vuelve siempre con sus tentaciones. *os a nosotros ser ingenuos». +l Pont"ce comentó el episodio en el que Lucas -11, 1/02 cuenta de 3es4s que e5pulsa a los demonios. +l evangelista reere tami(n los comentarios de cuantos asisten perple6os y acusan a 3es4s de magia o, como mucho, le reconocen que es sólo un sanador de personas afectadas por epilepsia. 7 7ami(n ami(n hoy %oservó %oservó el P Papa% apa% «hay sac sacerdotes erdotes qu que e cuando leen es este te pasa6e y otros pasa6es del +vangelio, dicen8 3es4s curó a una persona de una enfermedad enfermeda d ps"quica». Ciertamente «es verdad que en aquel tiempo se pod"a confundir la epilepsia con la posesión del demonio %reconoció%, pero tami(n es verdad que estaa el demonio. 9 nosotros no tenemos derecho a hacer el asunto tan sencillo», liquid&ndolo como si se tratara de enfermos ps"quicos y no de endemoniados endemoniados.. :olviendo al +vangelio, el Papa oservó que 3es4s nos ofrece algunos criterios para entender esta presencia y reaccionar. «;Cómo ir por nuestro camino cristiano cuando e5isten las tentaciones< ;Cu&ndo entra el dialo para turarnos est&s con 3es4s o est&s contra 3es4s. 9 sore este punto no hay matices. ?ay una lucha, una lucha en la que est& en 6uego la salvación eterna de todos nosotros». 9 no hay alternativas, aunque a veces oigamos «algunas propuestas pastorales» que parecen m&s acomodadoras. «@*oA > est&s con 3es4s %repitió el >ispo de Boma% Boma % o est&s en contra. +sto es as". 9 (ste es uno de los criterios». ltimo criterio es el de la vigilancia. «)eemos siempre velar, velar contra el enga!o, contra la seducción del maligno», e5hortó el Pont"ce. 9 volvió a citar el +vangelio8 «Cuando un homre fuerte y ien armado guarda su palacio, sus ienes est&n seguros. 9 nosotros podemos hacernos la pregunta8 ;yo vigilo sore m"< ;#ore mi coraDón< ;#ore mis sentimientos< ;#ore mis pensamientos< ;Custodio el tesoro de la gracia< ;Custodio la presencia del
Thank you for interesting in our services. We are a non-profit group that run this website to share documents. We need your help to maintenance this website.