Como Enfrentarse a Las Inquietudes de La Vida Bosquejo 32
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Como enfrentarse a las inquietudes de la vida ¿Le pone nervioso el futuro? Si es así usted no es el único, desde la antigüedad los hombres han especulado sobre el porvenir y muchos han llegado a la conclusión de que las perspectivas no son precisamente color de rosa. Lo que parecía impensable hace dos o tres generaciones ahora agobia a la humanidad. No es de extrañar que muchos se pregunten que le sucede a este mundo y que les depara el futuro a ellos mismos y a sus familias. ¿Llegará el día en que, por miedo, nadie quiera subirse a un autobús, tren o avión? Con los recursos del planeta cada vez más diezmados y los precios en alza, ¿Podrán las generaciones futuras obtener buena atención médica, comida sana y combustible suficiente? “El futuro se presenta muy tenebroso”, se lamentó el ministro canadiense de salud, refiriéndose al alto costo de la salud. Saltan también las alarmas en cuanto a los alimentos y el combustible. ¿La razón? Con la idea de ser menos dependientes del petróleo, algunos países invierten grandes sumas en biocombustibles como el etanol que se elabora a partir de las plantas. Por primera vez en la historia, el estomago humano compite con los tanques de combustible de los vehículos por los productos de la tierra. Resultado: alza mundial en los precios de los alimentos. Mientras tanto crece la brecha entre ricos y pobres lo que resulta en tensiones sociales. La OMS dice en un informe que en algunos países más pobres “la esperanza de vida ha caído a la mitad respecto a los países más ricos”. Estas dificultades aumentan los problemas económicos y sociales, Los gobiernos y ciudadanos despilfarran el dinero y otros recursos, pensando que creando prosperidad material y fomentando el consumo la gente vivirá más y mejor. Pero al fomentar de esa manera la codicia y el deseo de tener hace que muchos se nieguen a ganarse la vida trabajando. Esto aunado a malos hábitos y el hecho de que el dinero no traiga la felicidad produce tensión y frustración, haciendo decadente incluso la vida familiar, con hogares desechos, divorcios e hijos desobedientes que los padres ya no pueden controlar. Según el INE, en Venezuela los matrimonios duran en promedio sólo 5 años y anualmente se disuelven 25869 matrimonios. Entre los años 2001 y 2007 los divorcios pasaron de 16900 a 28800 o sea se triplicaron en comparación con el número de matrimonios. FUENTE: EL UNIVERSAL. Si a todo esto le sumamos la amenaza del calentamiento global, que contribuye a los fenómenos climatológicos extremos (MENCIONE UNO), no es de extrañar que personas bien informadas le teman al futuro. Pero, ¿Cómo enfrentan muchos este panorama inquietante y sombrío? ESFUERZOS DESENCAMINADOS PARA SUPERAR LAS INQUIETUDES
Muchos recurren a fármacos tales como tranquilizantes. ¿Alivian la ansiedad estos medicamentos? Una prestigiosa empresa farmacéutica estima que alrededor de la cuarta parte de los que toman benzodiacepinas por más de 4 meses adquieren dependencia a ellas. Efectos que producen: insomnio, ansiedad, depresión, ataques de pánico, nauseas, visión borrosa y dolores musculares. Otros recurren a la acumulación de dinero como la solución para enfrentar la inquietud por los problemas. Muchos han pagado un precio muy alto por su ambición materialista: su propia vida. En Sudáfrica, la presión por vivir según los valores materialistas occidentales ha llevado a muchos al borde del suicidio. En Estados Unidos un hombre mató a su esposa y su hijo de 12 años y después se suicidó, motivado al parecer por problemas económicos. Es cierto que el afán de acumular riquezas no mata a la mayoría de la gente, pero si es posible que les impida vivir la vida. A veces, cuando alguien finalmente comprende que tiene que cambiar sus prioridades, es demasiado tarde. Su cónyuge ya le ha perdido la confianza, sus hijos ya se han visto afectados emocionalmente y su salud ya se ha deteriorado. Con razón el apóstol Pablo da esta seria advertencia
1 Timoteo 6:9,10
COMO NOS AYUDA DIOS A ENFRENTARNOS A LAS INQUIETUDES DE LA VIDA El requisito principal para superar las inquietudes es ir en la dirección correcta en busca de alivio. En Jeremías 10:23 expone una de las razones por las que debemos andar con Jehová Dios al decir: LEALO. En efecto el ser humano no tiene ni la capacidad para dirigir su vida ni el derecho a hacerlo. Necesita guía con urgencia. Quienes insisten en seguir su camino sin depender de Dios cometen el mismo error de Adán y Eva, que se creyeron con el derecho de determinar por si mismas lo que era bueno o lo que era malo. Tal derecho sencillamente “no le pertenece” a ningún ser humano. ¿No siente usted la necesidad de tener una guía en su viaje por la vida? A diario nos vemos obligados a tomar todo tipo de decisiones, lo cual no siempre resulta fácil pues algunas de ellas pueden afectar nuestro futuro y el de nuestros seres queridos. ¡Que bueno es saber que hay alguien infinitamente mayor y mas sabio que nosotros que se ofrece de buena gana a orientarnos! Lamentablemente, la mayoría de las personas prefiere confiar en su juicio y dirigir sus propios pasos. El remedio vendrá de Jehová, no del hombre ni de sus instituciones, y alguien que sabía bien esta verdad fue el Rey David. En una ocasión su propio hijo Absalón se había proclamado Rey y había conspirado para apoderarse del trono. Este hijo rebelde formó un grupo de seguidores tan grande que David se vio obligado a huir
de Jerusalén. Pero David continuo poniendo toda su confianza en Jehová Dios. Esto se hace patente por una melodía que David compuso cuando estaba huyendo de Absalón, allí en el Salmo 3. La situación era tan amenazadora que muchos israelitas concluyeron que ni e altísimo podría librar a David de la mano de Absalón y sus hombres. Pero hasta por la noche, cuando había más peligro de un ataque sorpresa, David no sentía pavor, un miedo que le impidiera dormir.
LEA SALMO 3:5-8
El que los dientes de los enemigos de David fueran quebrados significaría que se aplastaría el poder que tenían para causar daño. Solo Jehová podía traeré semejante liberación. Por esto el Salmista reconoció que la “salvación pertenece a Jehová”. Entonces al pensar en sus dificultades personales David se sintió impulsado a considerar al Pueblo de Dios como un todo y oró que la bendición divina estuviese sobre ellos. Otro ejemplo de salvación de parte de Jehová, aunque de manera milagrosa, fue el del profeta Daniel demostrando que Jehová se encarga de nuestros problemas.
LEA DANIEL
6:20-22.
Darío menciona aquí por segunda vez que Daniel servía a Dios con constancia. La raíz aramea de la palabra que se traduce como “constancia” significa “moverse en círculo”, denota la idea de un círculo continuo, de algo perpetuo. Y es que la integridad de Daniel era así. Seguía un curso previsible. Cuando Daniel se enfrentaba a pruebas fueran grandes o pequeñas, no había duda alguna respecto a lo que Daniel Haría. Seguiría el rumbo de lealtad y fidelidad a Jehová que se había trazado décadas antes. Nosotros debemos imitar a Daniel. De hecho el apóstol Pablo en Hebreos 11 señaló que por su fe “se taparon bocas de leones”. Debemos manifestar esa misma fe y constancias de Daniel y correr la carrera que está puesta delante de nosotros. Dios nos ofrece protección y ayuda tanto hoy como en el futuro inmediato. La garantía la podemos leer en Proverbios 18:10. NOTA DE LA BIBLIA CON REFERENCIAS: Lit “Se le pone en lo alto”, es decir, fuera del alcance, seguro. Este texto nos revela una verdad fundamental sobre el tierno interés de Jehová por sus criaturas. Dios ofrece su protección en particular a los justos que lo buscan con presteza, como si corrieran a refugiarse en una torre defensiva. ¿Cómo podemos correr a refugiarnos en los brazos de Jehová, nuestro Padre celestial, cuando atravesamos problemas angustiosos? Hay tres pasos esenciales: primero, acudir a Él en oración. Segundo, tenemos que trabajar en armonía con su Espíritu Santo. Y tercero, hemos de buscar el alivio que proporciona la compañía de otros cristianos obedeciendo así lo que Dios ha dispuesto. Resulta fácil hundirse en pensamientos negativos cuando el desánimo y la tristeza se apoderan de uno. Hasta puede dudar uno de su propia espiritualidad. Pero acudir a Jehová nos liberará de la preocupación y la inquietud.
LEA HEBREOS 13:6.
Por
supuesto es necesario fijarse prioridades correctas asegurándonos de las cosas que son más importantes, lo que significa acumular tesoros en el cielo. Hay que reconocer que a veces somos nosotros mismos quienes nos causamos inquietud y sufrimiento. Vemos por ejemplo lo que Jesús mandó a sus seguidores aquí en
Mateo 6:19.
Pese a este consejo, algunos hermanos se acribillan muchos dolores porque anteponen los intereses materiales a los de Reino. Adquieren deudas innecesarias, sin tomar en cuenta lo inestable de la economía que a veces puede sorprendernos tomándonos desprevenidos con obligaciones financieras de cosas que quizás ni siquiera usemos o necesitemos.¿ Que vamos a sentir se nos vemos envueltos en deudas y de repente quedemos sin trabajo o tengamos una perdida en nuestro negocio? Angustia e inquietud. PUEDES CITAR UN EJEMPLO. Veamos otro aspecto. La Biblia nos da esta seria advertencia en Gálatas 6:3: “Si alguien piensa que es algo, no siendo nada, está engañando su propia mente”. Algunos se causan sufrimiento porque no aplican este consejo. Como desean destacarse en lugar de hacer una obra excelente, se desaniman y contrarían cuando no reciben privilegios en la congregación. Hoy debemos estar dispuestos a portarnos como uno de los menores y no exigir ser el centro dela atención. Si nos parece que quienes llevan la delantera en la congregación no nos dan determinadas asignaciones, hagámonos un examen de conciencia honrado para determinar en qué debemos mejorar nuestra personalidad y la manera de hacer las cosas. EN vez de amargarnos porque no tenemos ciertos privilegios, aprovechemos al máximo el que si tenemos a sabe, ayudar al prójimo a conocer a Jehová. Aférrese a la vida que realmente lo es, deje de inquietarse por asuntos de poca importancia. Como es lógico, preferiríamos que el fin de todas las cosas, en vez de estar cerca, llegara de inmediato. Quizás tengamos una dolencia grave o estemos muy agobiados debido a las presiones económicas. No obstante, debemos recordar que Jehová no trae el fin sólo para rescatarnos de circunstancias difíciles, sino para santificar su nombre. El fin no llegará necesariamente cuando nos venga bien a nosotros, vendrá cuando mejor convenga a los propósitos de Jehová.
Así que cuando los problemas parezcan insoportables, recordemos que Jehová nos ama igual que amó a Daniel, David y otros y que desea que salgamos adelante victoriosos. Por ello, una medida práctica para enfrentarse a los problemas de este sistema es adoptar la costumbre de leer la Biblia a diario. Perseverar en la oración y pedirle a Jehová que nos ayude a aguantar, Él dará su Espíritu Santo a los que se lo piden. Aprovechemos todas las ayudas que Jehová nos suministra para nuestro sustento espiritual tales como las publicaciones y la hermandad mundial. Asistamos fielmente a las reuniones cristianas pues en ellas recibiremos el estímulo que nos hace falta para aguantar. Si así lo hacemos, podremos superar la inquietud, el temor y la preocupación. Haga caso al consejo de Jesús en Mateo
6:25-32
Las palabras de Jesús debieron parecer poco prácticas a muchos, pues sabían que si no trabajaban duro, sus familias sufrían. Evidentemente Jesús no estaba animando a sus oyentes a que dejaran de trabajar y que esperaran que de algún modo Dios se encargara de sus familias. Hasta las aves han de buscar alimento para sí y sus crías La persona que no confía en Jehová plenamente tal vez piense de otra manera. Casi todo el mundo considera que las riquezas son de primordial importancia para obtener seguridad. De ahí que os padres animen a sus hijos a adquirir una educación superior, con la esperanza de que eso los prepare para conseguir buenos puestos de trabajo bien remunerados. Lamentablemente algunas familias cristianas que así lo han hecho han descubierto que el costo de la inversión es muy alto cuando sus hijos han perdido la visión espiritual y se han ido tras metas materiales en el mundo. POR consiguiente, el cristiano sabio comprende que este consejo de Jesús es tan aplicable hoy como lo fue en el primer siglo y procura ser equilibrado. Aun cuando tenga que dedicar muchas horas a su trabajo a fin de cumplir con el deber bíblico de obtener el sustento, nunca deja que la necesidad de dinero lo ciegue a lo más importante: los asuntos espirituales. Así que lo sabio es llevar una vida sencilla y sana. Al enfrentarnos a problemas personales es muy importante arrojar las inquietudes sobre Jehová. Las enfermedades la depresión, los remordimientos, el sentido de inutilidad, la falta de autodominio, la persecución, el prejuicio, los problemas cotidianos, la preocupación por el futuro y los conflictos de personalidad son cargas pesadas. ¿Para que las va a llevar solo? Tenga la seguridad de que Jehová puede y quiere ayudarnos sea cual sea el problema que atravesemos. En el Salmo 46:1 dice: “Dios es para nosotros refugio y fuerza, una ayuda que puede hallarse prontamente durante angustias.”
¿Qué hemos de hacer para recibir la ayuda de Jehová?
LEA SALMO 55:22
También el apóstol Pedro nos aconseja que “echemos sobre Jehová toda nuestra inquietud”. Esto significa dejar que Él se encargue de nuestros problemas, es decir, procurar no inquietarnos más ellos y esperar con paciencia que Dios satisfaga, nuestras necesidades. También significa confiar en ÉL y no en nuestras propias fuerzas o conocimientos. Claro, para ello se necesita humildad. y esto, a su vez, nos hace más fácil sobrellevar todo lo que Jehová permite que nos ocurra. Aunque nos gustaría que nuestros problemas se solucionen de inmediato, confiamos en que él sabrá precisamente cuando y como ayudarnos. Cuando un niño se enfrenta a un problema, puede acudir a su padre amoroso para que lo consuele y lo guie. De igual modo nosotros podemos acudir a nuestro Padre Celestial, Jehová, con nuestros problemas. De hecho nos invita a arrojar las cargas y ansiedades sobre Él. Como el niño a quien ya no le preocupa au problema después de que el padre lo ha tranquilizado, nosotros no sólo debemos arrojar nuestras cargas sobre Jehová, sino también dejarlas con ÉL. ¿Cómo lo hacemos? La oración juega un papel fundamental y debemos ser específicos al hablar con Jehová e incluso exponerle nuestros motivos. Efectivamente yen respuesta a nuestras oraciones y súplicas persistentes, Jehová puede darnos una paz interior que nos proteja la mente de la perturbación que causan las ansiedades innecesarias. Nadie puede negar que los problemas reales de cada día producen suficiente estrés como para que tengamos que preocuparnos por los imaginarios. Si la ansiedad por lo que pueda suceder nos causa aprensión e incomodidad, entonces dirijámonos a Jehová en oración y súplica. Busquemos la guía, la sabiduría y el buen juicio en su palabra y organización. Veremos que, sin importar las circunstancias que se presenten, podemos conseguir ayuda para afrontar la ansiedad. Así pues prevea lo que razonablemente puede esperarse, y deje lo inesperado en manos de Jehová.
BENDICIONES QUE RESULTAN DE ENFRENTARSE A LAS INQUIETUDES
Recuerde que enfrentarse a algo significa disponerse con decisión a pasar o vencer una situación o dificultad. Es una lucha que traerá alivio y liberación del temor constante y de las preocupaciones originadas por pérdidas materiales. Quien confía en Jehová evita la frustración que se produce cuando falla la seguridad material; residirá en seguridad espiritual y no lo perturbará la calamidad, se acostará en paz. Como vimos al principio de este discurso; no podemos enfrentarnos a los problemas del mundo con el ingenio humano. Hoy el derrotero de sabiduría práctica, en vista del punto en que nos encontramos en la corriente del tiempo, es tener la actitud que tuvo al apóstol Pablo en
Filipenses 3:8. LEALO.
Pablo comprendía que lo que verdaderamente importaba en la vida no era la propiedad, riqueza, posición ni reputación que haya tenido en la comunidad. Estuvo dispuesto A desprenderse de aquellas cosas por lo que verdaderamente contaba… hacer la voluntad de Dios y conseguir su favor y bendición. Y se puede visualizar la sabiduría de esta actitud cuando vemos la tristeza, desilusión e irritación que le sobreviene a los que llegan a estar demasiado apegados a las cosas materiales y luego los pierde. Por ejemplo usted, quizás tenga una casa hermosa hoy, pero ¿Qué seguridad hay de que la tendrá mañana? Puede que ni siquiera viva hasta entonces. La persona que mantiene sus necesidades a un mínimo razonable y que está dispuesta a arreglárselas con menos materialmente, no tiene tanto que perder. Además, esto por lo general, le permite emplear más de su tiempo y energías en estudiar y en servir a su creador. Resultados: LEA
PROVERBIOS 1:33.
Así hermano que gane la lucha emprendiendo hoy una vida más clamada y sana. Enfréntese a las inquietudes de la vida haciendo la voluntad de Dios con bendiciones eternas en mira. Mantengámonos constantes y celosos en actividades teocráticas. La garantía divina de que habrá una vida maravillosa bajo el Reino, nos brinda esperanza, lo que a su vez nos ayuda a ser constantes. El gran día de Jehová es inminente pero nada tenemos que temer ni ahora ni en el futuro si permanecemos cerca de Dios. Si nos aferramos a sus justos preceptos y corremos con constancia lograremos terminar la carrera de la vida eterna, recuerde las palabras de Gálatas 6:9. “No desista de hacer lo que es excelente, porque al debido tiempo segaremos si no nos cansamos”.
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