Carta para Mi Padre

 

Mi viejo Él puede arreglarlo todo y no exagero, de verdad que él puede arreglarlo todo. Desde una canilla, hasta una cocina. Desde enderezar las flores del patio hasta cambiarle el motor a la chata. Sí... él es mecánico, es verdulero, gasista, electricista, zapatero, pintor, lava coches, un poquito médico, un poquito albañil, un poquito trilingüe, cafetero, asador, carpintero, jardinero, cerrajero, consejero, geografo, historiador, pescador, nadador, comerciante, motociclista, experto en billar, buenísimo en el pin pong y hace la mejor sopa posible para una persona que solo tiene a mano tres ingredientes. in gredientes. Tiene las manos, los pies y el corazón curtidos. Tiene callos, cicatrices y fuerza. Lo mirás a la primera y es un tipo duro, lo mirás a la segunda y está hecho de amor. Cuando dice que sí dice que sí y cuando dice que no también dice que sí. A mí me dió un poco de sus ojos y un poco de su corazón. Es fuerte como un árbol de antaño y a veces blando como la tierra entre sus raíces. Si se le sale la tanada agarrate Catalina y si se siente triste difícilmente lo veas llorar... nunca le enseñaron a dejarse ver bien y el pobre carga con eso también. Él lo puede todo, él es mi viejo. Así me crié, mirándolo a él. Nada es imposible si lo miro a él. El tipo nunca me dijo que yo no podía hacer algo o que sí porque nunca necesitamos esa charla, todo lo que hizo fue dejarse ver. Yo crecí así, al lado de él. Soy producto de sus batallas y mi fuerza es producto de la suya. Y este día, en el cual veo todo un poco más claro... que veo que aunque tenga sus cagadas como todos, tiene un corazón que no cabe en el cielo. Este día festejo para él un día del padre. Nuestro día del padre. Gracias viejo Gracias y perdón Perdón y te amo.