April 3, 2017 | Author: Jonathan Dias | Category: N/A
Download Capitalismo Global - Jeffry A. Freiden...
CAPITALISMO GLOBAL
M/MORlA
CRITICA
JEFFRY A. FRIEDEN
CAPITALISMO GLOBAL El trasfondo economico de la historia del siglo xx Prologo de Paul Kennedy Traduccion castellana de Juanmari Madariaga
CRITICA I\flRl'ELONfI
Pr61ogo
Qiedan rigurosamente prohibidas, sin la autorizacion escrita de los titulares del copyright, bajo las sanciones establecidas en las lcycs, la reproduccion total 0 parcial de esta obra por cualquier medio 0 procedimiento, comprendidos la reprografia y e1 tratamiento informatica, y la distribucion de ejemplares de ella mediante alquiler 0 prestamo publicos. Titulo original: Global Capitalism. Its Fall and Rise in the Twentieth Century. W. W. Norton & Co., New York- London Disefio de la coleccion: Compania Disefio de la cubierta: Jaime Fernandez Ilustracion de la cubierta: © Bridgeman Realizacion: Atona, SL
© 2006 by Jeffry Frieden © 2007, de la traduccion castellana para Espana y America: CRiTICA, S. L., Diagonal, 662-664, 08034 Barcelona e-mail:
[email protected] http://www.cd~critica.es
ISBN-IO: H4-H4.12-HSS-4 ISBN 11: 97H-H4-H4,11 HSS 1 I )('llCl~ilo [qt.:.!: n, 49.717 200(, JOel7 IlIlJlIl'~" ~. !'Ill11;l, y d 1 de CIHTo de 1994
entro en vigor el Acuerdo de Libre Comercio de America del Norte (ALCAN,o NAFTA, North American Free Trade Agreement), que fue eliminando durante los diez anos siguientes practicamente todas las barreras al movimiento de mercandas, capital y servicios entre los tres paises. Se fue creando asi gradualmente un mercado unico norteamericano, aunque el movimiento de personas a traves de las fronteras quedaba excluido de esa liberalizacion. EI ALCAN fue pionero en cuanto a unir en una misma area de libre comercio paises desarrollados y subdesarrollados. Muchos paises latinoamericanos querian incorporarse al ALCAN, Y algunos incluso adoptaron el dolar estadounidense como sustituto de su propia moneda. Habia serias perspectivas de extenderlo a paises de la cuenca del Caribe y otras regiones de Latinoamerica. Al mismo tiempo se forma en Sudamerica Mercosur, el tercer bloque comercial mayor del mundo. Entre 1985 y 1990 Brasil y Ar;.;entina negociaron un area comercial que finalmente incluyo tambien a Uruguay y Paraguay como miembros de pleno derecho y a Chile y Bolivia como asociados.* Su tratado fundacional** se concreto e116 de diciembre de 1994 en el Protocolo de Ouro Preto, que entro en vigor cl 15 de diciembre de 1995. Entre miembros y asociados Mercosur rellnia a 250 millones de personas, con una produccion conjunta de ,('rca de 2 billones de dolares al ano, solo por debajo de la UE, el ALCAN YJapan como potencia comercial global. Como sucedio en e1 caso de la UE y del ALCAN, los gobernantes y empresarios de Brasil V Argentina estaban dispuestos a fusionar sus mercados para propor,;onar una base domestica mas amplia desde la que competir en el locrcado mundial. Combinando sus fuerzas, los miembros de Merco",r tambien esperaban atraer mas inversion extranjera, ya que las emI'resas globales estarian mas interesadas en un gran mercado conjunto 'ille en cualquiera de los cuatro miembros por separado. Como en el Illondo desarrollado, Mercosur significo la victoria definitiva de los Ilitcreses eeonomicos que veian su futuro en la exportacion, el endeudallliento en el extranjero 0 la asociacion con empresas extranjeras.
-------
• Ell 2006 s(' illcorporarotl 1:II11hil~n VCIH.'''I.ucla como miclllhro l!'Iilo, V ++
Colomhia, Ecuador y PC'n"J
TrOltado de
!\SlIlh'It".II,
de
plcno dc~
(N. til'! I.) linllildo (,126 dt' (Wlf"'O dt' ]allvor dc 101 dcsregulaci"lIl sc inici,', cn Estados {]nidos a ,"ediados dc Ia deeada de 1'170; "mante los din. arios siguicntcs las
522
---,5~23
Capitalismo global
---------
administraciones de Carter y Reagan redujeron en dos terceras partes el sector de la economia cubierto por estrechos controles reguladores: aviacion, ferrocarriles y transporte por carretera; telecomunicaciones; petroleo y gas natural; finanzas ... Otros paises industriales siguieron el ejemplo y 10 desregularon todo, desde las compaiiias telefonicas y las lineas aereas hasta los corredores de bolsa. A finales de la decada de 1990 las economias industriales estaban mas libres del control estatal que en ningtin momenta anterior desde los aiios treinta. Esto dio lugar a una consolidacion extraordinaria de grandes empresas privadas. En 2000 se anunciaron por todo el mundo fusiones por valor de 3,5 bi!lones de dolares, alrededor de la mitad en Estados Unidos y la mayoria del resto en Europa occidental, con 10 que se quintuplicaba el nivel de 1990, que en su momenta se considero muy alto. 12 Las fusiones, antes casi siempre contenidas dentro de los limites nacionales, eran cada vez mas internacionales; en 2000 casi la cuarta parte de las fusiones atravesaban las fronteras. La adquisicion por Vodaphone (Reino Unido) de Mannesmann (Alemania) por 203 mi!lardos de dolares en 2002 supuso tanto dinero como todas las fusiones y adquisiciones internacionales !levadas a cabo en 1991,1992 Y1993juntas." La desregulacion y la privatizacion fueron a la vez causa y consecuencia de los cambios tecnicos y de la integracion economica global. Los sectores mas comunmente desregulados 0 privatizados -finanzas, telecomunicaciones, transportes- habian experimentado importantes avances tecnologicos 0 grandes aumentos de peso en los mercados globales, 0 ambas cosas. Las nuevas tecnologias hacian obsoletos los viejos sectores regulados por el Estado 0 de propiedad estatal, y el mercado global abria interesantes perspectivas para empresas nacionales antes aisladas. En la banca, por ejemplo, el incremento de la actividad financiera global durante los aiios sesenta y setenta, junto con el rapido cambio tecnologico, !leva a los gobiernos a desregular y privatizar los sistemas financieros nacionales en los ochenta y noventa. Los merca-dos financieros vigorizados redoblaron a su vez la velocidad de la integracion internacional y de la innovacic'Jn tecnolc'Jgica. El nuevo punto de vista, denominado de lihre mercado, neoliheral u ortodoxo, induia austeridad allliilltl,jl"iollisla, reducciolles de
La globalizaci6n, 1973-2000
--------"'----
impuestos y del gasto, privatizacion y desregulacion. El "Consenso de Washington», como fue denominado por el economista]ohn Williamson, fue pronto el principio organizador de la mayoria de las dis,'usiones sobre politica economica. 14 El Consenso de Washington resonaba con fuerza creciente en el mundo subdesarro!lado que se dehatia agobiado por la deuda y las crisis de crecimiento de los aiios ochenta y en el mundo ex comunista a medida que se apartaba de la planificacion centralizada durante los noventa. A finales de siglo haliia mas acuerdo en doctrina economica que en cualquier otro moIllento anterior desde 1914. Las alternativas comunista, radical, desarrollista y populista a la ortodoxia eran debiles 0 inexistentes; era ditlcil encontrar partidarios de la planificacion, la sustitucion de lmI'0rtaciones 0 la propiedad estatal generalizada en ningtin lugar del Illundo. Entre los pensadores economicos habia desacuerdos "inter1l0S», pero pocos cuestionaban la primacia del mercado como mecalIismo de distribucion economica.
I NTERESES
GLOBALIZADORES
I ,a oleada global de la ortodoxa «orientada hacia el mercado» pudo I'a recer un huracan ideologico, pero el giro hacia los mercados tenia Ilielltes tangibles en la politica y en la economia. El cambio de ideas na mas resultado que causa; los cambios conceptuales seguian a los ""Iteriales. La victoria del monetarismo sobre el keynesianismo es un l'jcmplo de como la ideologia puede enmascarar motivaciones pragIII:iticas. Cuando el presidente de la Reserva Federal, Paul Volcker, .llllIIlCic'J en octubre de 1979 que el Tesoro estadounidense atenderia a L, olCrta monetaria mas que a los tipos de interes, el acontecimiento It,,· ampliamente saludado como un triunfo de la teoria monetarista. I,os monetaristas pensaban que la tasa de crecimiento de la oferta ",o"etaria era «su» objetivo politico clave. Sin embargo, las razones .I.. Vokker eran mucho m,is terrenales. Camhiar las tecnicas operativas de la Reserva Federal para «COllcelltrarse en la o[erta monetaria" na, segl'lIl explin'., «llIla li.rma de deeirle all,,',hlico que nos tom,ihaIIlOS la rosa ell serio», a fill de «teller alglllla I'0sihilidad dl' lIloditil'ar
526
Capitalismo global
La globalizacion, 1973-2000
el comportamiento de la gente corriente». En el Tesoro nadie se hacia ilusiones academicas sobre 10 que ese cambio de procedimiento significaba en la pr:ictica. «El mensaje basico que tratamos de enviar era la simplicidad misma», decia Volcker. «Pretendiamos matar al dragon inflacionista» aunque para hacerlo hubiera que elevar mucho los tipos de interes y frenar la economia. 15 Pero el ostensible giro hacia la teoria monetarista proporciono una patina intelectual para 10 que de hecho no era mas que un cambio simple, aunque dramatico, de politica monetaria. Las discusiones populares sobre las nuevas medidas de austeridad iban salpimentadas con referencias al «monetarismo», con 10 que se prctendia aludir al combate contra la inflacion, sin que tuviera apenas nada que ver con la teoria elaborada por los economistas academicos. Eso no quiere decir que las ideas economicas no tuvieran efecto, sino solo que es dificil atribuir los cambios de politica de los afios ochenta y noventa a ningun giro significativo en la teoria economica. La politica economica cambia porque la politica en general cambia. Dos acontecimientos fueron especialmente importantes. En primer lugar, hubo un aumento del tamafio y cohesion de las empresas y sectores favorables a la integracion economica internacional que querian que los gobiernos moderaran su intervencion en la economia nacional. En segundo lugar, habia una creciente preocupacion popular por el elevado desempleo, ellento crecimiento y la inflacion, que facilitaba que los votantes aceptaran nuevas politicas. A principios de la decada de 1980 gran parte de la poblacion habia perdido la paciencia frente a la subida de los precios. Las poblaciones de Europa occidental y Norteamerica no habian experimentado la inflacion durante los veinticinco primeros afios de posguerra y cuando comenzo a aumentar a principios de los afios setenta pilla desprevenidos a muchos. Cuando el nivel de precios se duplico a principios de los afios ochenta los ahorros y rentas resultaron lesionados y aumento la preocupacion. Los halcones de la inflacion, especialmente en las comunidades bancaria e inversora, siempre la habian considerado una importante amenaza economica. Ahora se estaha comiendo eI nivel de vida de la clase media y sectores decisivos del e1ectorado -trabajadores de cuello hlanco, peqlll'iios (,Illprcsarios, jllhilados- qllerlan
que se Ie pusiera freno. Muchos britanicos y estadounidenses concedieron el beneficio de la duda a la dura politica antiinflacionista de las administraciones de Thatcher y Reagan. En los mejores dias de Bretton Woods casi nadie habria pensado en reducir la inflacion par debajo del 10 por 100 anual a cambio de aumentar la tasa de desempleo un 10 por 100, pero durante la decada de 1980 fueron entrando en vigor en un pais tras otro politicas recesionistas que habrian parecido impensables diez 0 quince afios antes. Los votantes parecian creer que valia la pena, ya que reeligieron a los campeones de la lucha antiinflacionista. Aunque la batalla contra la inflacion llevaba aneja la austeridad fiscal y un compromiso redoblado con la inversion y el comercio ,l;lobal, sorprendentemente contaba con un gran apoyo de la poblacion. Poderosos sectores economicos en las industrias competitiva y tecnologicamente avanzadas tambien eran partidarios de la liberalizacion y la integracion economica. Los avances tecnicos incrementahan la importancia de la economia global para muchas de las principales empresas del mundo. Nuevos productos y nuevas tecnicas de I'roduccion se convirtieron en el nucleo del sector de alta tecnologia que ocupo el centro de la escena en todos los paises industriales. En 1979 dieciocho de las veinticinco mayores empresas estadounidenses pertenecian a los sectores del petroleo y la industria y solo tres a la ;lita tecnologia y las comunicaciones. En 1999 trece de las veinticinco principales correspondian a la alta tecnologia y las comunicaciones y ,,',lo dos al petroleo y la industria. Las nuevas empresas lideres de la alta tecnologia, por otra parte, eran mucho mayores que las anteriores: la mayor empresa en 1999, Microsoft, valia tanto en terminos rea1.-.. (esto es, tras deducir la inflacion), como las veinticinco principales veinte afios antes juntas. La empresa numero veinticinco, Yahoo!, que "ilo llevaba seis afios en el negocio, valia mas en dolares ajustados por Ia inflacion que las tres principales compafiias petroleras del pais jun16 I as (Exxon, Amoco y Mobil) en 1979. Empresas de un tamafio antes illimaginable cuyos negocios se basaban en la microelectronica -Mi de Europa occidental. Tras negociar los terminos de su entrada en Lt lInion Europea, los paises mas avanzados de Europa central pusiemn cn pr:ictica politicas europeas y se prepararon para la pertenencia de pleno derecho a la UE. Buscaron formas de aprovechar sus caracI ("risticas geograticas y eCOluimicas para atraer la inversion extranjera y vender sus I'roductos en los mere'ados occidenlaks.
EUROPA ORIENTAL SE UNE A OCCIDENTE
Despues de que cayera el muro de Berlin, era habitual preguntarse si los antiguos paises comunistas de Europa central y oriental podrian alglin dia alcanzar economicamente a Occidente. La respuesta a esa pregunta es ambigua por varias razones. Por un lado, las estadisticas son dificiles de evaluar, tanto las de la epoca de la planificacion centralizada como las del periodo de rapido cambio desde entonces, y en cI momento del cambio de milenio los resultados todavia no eran
566
Capitalismo global
La globalizaci6n, 1973-2000
Algunos paises centroeuropeos partieron con ventaja. Hungria, Polonia y Eslovenia se habian reformado sustancialmente durante la era de la planificacion centralizada y estaban ya familiarizados con un ambiente empresarial competitivo, aunque quiza no tanto como el del autentico capitalismo. La antigua Checoslovaquia tenia experiencia industrial desde muy antiguo, porque las tierras checas habian sido una de las principales regiones industriales de Europa durante un siglo y algunos de sus productos habian seguido gozando de prestigio en Occidente inc1uso durante la era comunista. Estonia, con afinidad lingiiistica y cultural con su prima Finlandia a ochenta kilometros de distancia, habia sido algo asi como una puerta de entrada para Occidente, inc1uso bajo la dominacion sovietica. Aun asi, los escepticos dudaban de la capacidad de Europa central para adaptarse a un orden social capitalista con el que solo los mas ancianos habian tenido contacto personal. Creian que la realidad social y cultural de la region frenaria el impulso hacia el mereado; pero de hecho ese primer nivel de paises centroeuropeos salto rapidamente ala economia de mercado y los mereados globales, inc1uso alii donde las elecciones democraticas pusieron el gobierno en manos de los antiguos comunistas, como sucedio en Polonia y Hungria. La izquierda se reconvirtio en garante socialdemocrata del capitalismo con rostro humano y llevo adelante la privatizacion y otros aspectos de la transicion al mercado. Estabilidad politica, avance de las reformas, mana de obra cualificada y barata y activas comunidades empresariales los hacian atractivos para las inversiones de las corporaciones multinacionales, tanto para las que deseaban acceder a los crecientes mercados de consumo de Europa central y oriental como para las que deseaban utilizar los paises en transicion como plataformas para producir exportaciones de bajo coste susceptibles de venta en Occidente. Durante la decada de 1990 Hungria, con diez millones de habitantes, atrajo veinte millardos de dolares en inversiones directas extranjeras, mas que Rusia con sus doscientos millones de habitantes. Polonia recibio treinta millardos de dolares de corporaciones extranjeras y 1a Republica Checa quince millardos. Las corporaciones multinacionales se volcaron en la regi6n. Las firmas de Europa occidental se movieron rapidamente para restable-
cer lazos comerciales interrumpidos durante decadas y para labrarse nichos de produccion y mercados en el redescubierto traspatio de la UE. Las firmas estadounidenses y asiaticas buscaban un plataforma de lanzamiento de bajo coste hacia el mercado de la DE y tambien aprovecharon la oportunidad. Daewoo gasto mil quinientos millones de dolares en construir dos fabricas de automoviles en Polonia; Sony establecio en Hungria plantas con la Ultima tecnologia para fabricar e1ectrodomesticos; Goodyear absorbio al principal fabric ante de neumaticos polaco; Volkswagen comprola respetada empresa automoviIistica checa Skoda; la firma sueca Electrolux, la principal productora mundial de electrodomesticos de cocina, convirtio un rancio fabricante de frigorificos del Estado hungaro en uno de los escaparates industriales de la region. Las empresas de Europa occidental estaban especialmente disjmestas a comprar las fabric as existentes 0 a crear otras nuevas en Europa central para mejorar su posicion competitiva global. Los trabajadores cualificados con bajos salarios de los antiguos paises mmunistas parecian ideales para producir piezas y componentes para Ia economia industrial integrada europea. En 1991, por ejemplo, Thomson -un conglomerado frances cuya division de electronica para el consumo vende bajo nombres como General Electric, RCA y Te1efunken- se hizo con una fabrica de televisores polaca en bancanota que fabricaba apenas cien mil tubos al ano. Pronto la brillante y diciente planta Polkolor de Thomson producia cerca de cinco milloill'S de tubos al ano, dos tercios de ellos para la venta en el extranjero. En total, Polonia exportaba te1evisores por valor de 500 millones de ,!sito de hacer'.,' ricos ral'idallll'nle, ')"n Sllio ('n RUll1ania hahia seiscientos tinlils
Capitalismo global
piramidales [planes 0 esquemas de Ponzi]; el mayor de ellos, Caritas, prometia duplicar el dinero del inversor en tres semanas. Atrajo a la quinta parte de la poblacion del pais antes de hundirse con mas de mil millones de dolares de deudas irrecuperables. En Albania, el pais mas pobre de la region, las piramides absorbieron a la mitad de la poblacion y crecieron hasta igualar el tamano de la economia del pais. Cuando se vinieron abajo, como era inevitable, el consiguiente panico financiero, la crisis politica y los disturbios en las calles obligaron al gobierno albanes, muchos de cuyos miembros y secuaces habian promovido aquellos planes, a devolver parte de las inversiones, con un coste equivalente a tres cuartas partes de su presupuesto anual. La facilidad con la que las piramides de Ponzi atrajeron a rusos, checos y bulgaros reflejaba una combinacion de desencanto hacia la realidad de la economia de mercado y de engano sobre 10 que esta les podia proporclOnar. Desilusiones parecidas afligian a Latinoamerica, donde la globalizacion aportaba menos frutos tangibles de 10 que esperaban sus partidarios. La mayoria de la region siguio el consejo occidental con mas docilidad de 10 que los adeptos del Consenso de Washington se habrian atrevido a esperar, pero muchas economias de la region estaban estancadas 0 algo peor. Despues de quince anos de estabilizacion, ajuste y reformas economicas, solo un pais latinoamericano, Chile, tenia una produccion per cipita claramente mayor en 2000 que en 1980. Algunos otros podian haber crecido ligeramente, pero el resto no estaban mejor 0 estaban sustancialmente peor. Esto era alarmante, ya que paises como Mexico y Argentina habian sido modelos de privatizacion, liberalizacion del mercado e integridad macroeconomica. Tras la terrible «decada perdida» de 1980, habian puesto en prictica severas reformas que prometian un crecimiento renovado, pero la realidad era decepcionante; 10 que pudo haber de crecimiento durante los anos noventa se vio erosionado por continuas crisis y receslOnes. Algunos problemas latinoamericanos se debian a la adopci6n incompleta 0 insuficiente de nuevas politicas. Al~unos paises, por ejemplo, abrieron sus puertas de par en par a la tinanciaci,',n exterior sin modernizar sus estructuras y re~lIlaciones tinancieras. En oC'asio-
La globalixacion, 1973-2000
---------
579
-----------"-'-
nes los flujos de capital resultantes superaban los limites del sistema hancario nacional y contribuian a devastadoras crisis bancarias. En otros casos los gobiernos se veian atrapados entre el deseo de mantener fuerte la moneda para controlar la inflacion y el deseo opuesto de mantener una moneda debil para estimular las exportaciones. Esto condujo a crisis monetarias -en Mexico en 1994, en Brasil en 19981999, en Argentina en 2001-2002- que interrumpieron el crecimiento. La transformacion de la region genero industrias de mejor calidad, con mejor tecnologia y mas opciones para los consumidores. Ademas, la experiencia de Chile, donde los frutos de la reforma tardaron quince anos en apreciarse totalmente, mantuvo las esperanzas para el resto de la region. Aun asi, la desilusion dominaba Latinoa"lcrica a comienzos del nuevo milenio. La experiencia de la decada de 1990 demostro cuan dificil y penoso podia ser el desmantelamiento de politicas economicas mantenidas durante decadas. Bajo el viejo orden de la sustitucion de importaciones y la planificacion centralizada se habian ido tejiendo rclaciones economicas, politicas y sociales que poseian su propia iner,ia y no cabia suprimir por decreto. Incluso alii donde la reforma ,ontaba con muchos partidarios, como en gran parte de Latinoamerica y Europa central, y los cambios de politica se lIevaron a cabo con hastante prudencia, el crecimiento era lento 0 negativo. En gran parle de la antigua Union Sovietica y los Balcanes, donde habia menos ("ntusiasmo por los esfuerzos reformistas y menos voluntad de hacer sacrificios en su nombre, se corria el riesgo de un largo estancamien10. A principios del siglo XXI la promesa de la globalizacion seguia ',;clllio solo eso, una promesa, para muchas de las economias en desanollo y en transici6n que la habian adoptado.
l\1.l)(~lJEOS EN EL DESARROLLO
.'it los resultados de la adopci6n de una politica economica neoliberal
,." I ,atinoamcrica y cl anti~uo hloque sovictico podian scr dcsalentadon's, en muchos otms 11I~ares del Tercer Mundo eran autcntica""·,,t,' desastmsos: sohn' todo en cl z\tri("a sllhsahariana y Oriente
580
Capitalismo global
Medio, pero tambien en algunos paises de Asia y de la cuenca del Caribe se produjeron autenticas catastrofes economicas, que generaron una abyecta pobreza y desesperacion, Ninglin otro lugar del mundo igualaba el horroroso declive de Africa, aunque este no fuera tan profundo en todos los paises del continente: los paises del sur de Africa, esto es, Sudafrica, Suazilandia, Botsuana y Namibia, y los de la ribera del Mediterraneo en el norte de Africa, asi como Gabon y la Republica del Congo, dos pequenos productores de petroleo, estaban en promedio tres 0 cuatro veces mejor que el resto del continente, Pero los demas cuarenta y tres paises africanos y sus quinientos millones de habitantes eran colectivamente los mas pobres del mundo y se iban haciendo aun mas pobres; entre 1980 y 2000 su renta media cayo una,cuarta parte, EI entusiasmo y optimismo en la decada de 1960 del Mrica recien independizada se hundio en un fracaso sin precedentes, y la mayoria de sus paises acabaron el milenio mas pobres que en el momenta de la independencia. Esos paises africanos empobrecidos -y que seguian empobreciendose- siguieron trayectorias muy variadas en su retroceso economico, Algunos podian responsabilizar a factores que quedaban fuera de su control. Los aumentos del precio mundial del petroleo crearon serios problemas a los paises que necesitaban importarlo; 10 mismo se puede decir de la caida de precios de los principales productos exportados desde la region, como el cacao y el cobre. Algunos investigadores argumentan que el clima y las enfermedades hacen a los tropicos particularmente poco acogedores para la actividad economica moderna; enfermedades infecciosas como la malaria son dificiles de controlar y el extremado calor 0 las lluvias hacen mas penosas las condiciones de trabajo. Otros insisten en las dificultades derivadas de la rala red de transportes, a las que se anaden las grotescas fronteras impuestas por las potencias coloniales. De hecho, la mayoria de los paises africanos son tropicales, sin salida al mar, 0 ambas cosas: Pero por muy desalentadoras que puedan ser las condiciones objetivas para el desarrollo en los paises mas pobres, las distintas experiencias nacionales han sido notahlemente diversas, Basta comparar la evolucion de pares de paises scmejantcs, uno dc los cualcs ha avanzado mientras quc cI otro sc ha cSlancado: Botsuana-Zamhia, (;ah,)n-
La globalizaci6n, 1973-2000 ,----'"
58!
Zaire, Tailandia-Myanmar. Muchos paises han podido superar el g;olpe que supuso el aumento del precio de las importaciones 0 la caida del de las exportaciones. Los mejores resultados de algunos paises con respecto a otros vecinos y con productos similares apuntan a causas distintas de la condena geografica a la pobreza. Los conflictos regionales, politicos y etnicos del mundo poscolonial se han cobrado su peaje. Angola cayo inmediatamente despues de la independencia de Portugal en 1975 en una guerra civil en la que se enfrentaban distintas facciones regionales, ideologicas y etnicas. Pese a sus extraordinarios recursos naturales -petroleo, diamantes, cafe-, veinticinco anos de guerra la condenaron a acabar el siglo un 70 por 100 mas pobre que en el momento de su independencia. En el olro extremo del continente, el pueblo etiope apenas tuvo tiempo de ('clebrar el derrocamiento de Haile Selassie en 1974 cuando el pais se sumergio en quince anos de conflicto, primero dentro del nuevo regimen militar y luego entre el gobierno y grupos rebeldes. La victoria de estos en 1991 dio lugar a unos pocos anos de paz, pero finalmente sc reprodujo la guerra con Eritrea. Paises como Angola y Etiopia y olros muchos entre los mas pobres de los pobres han gastado tanto I iempo, energia y dinero en conflictos militares y civiles que no es sorprendente que haya quedado poco para el desarrollo economico. Luego esta la nueva categoria de «estados fracasados», paises que han dejado de existir como entidades organizadas. La denominacion puede ser cuestionable, pero 10 cierto es que paises como Afganistan, Somalia, Liberia, Yemen y Sierra Leona han caido durante largos periodos en algo parecido ala anarquia, sin un gobierno reconocido y en 111101 atmosfera de terror y ausencia de ley, una quiebra del orden social ",islcnte sin solucion a la vista. Ellento crecimiento economico era ,dg;o trivial comparado con el asesinato de cientos de miles de civiles por bandas de saqueadores 0 como consecuencia del genocidio que ,IITa,,) Ruanda. Sill cmharg;o, esas trag;edias no tienen mucho que ver con los de,asl res ccon6micos dc los paises menos desarrollados. Los fracasos t'llllll'Ullicos hall sido con frcl'llcncia ((JU,W dc la g;ucrra civil y el colap',Il del g;ohiertlll m,is quc su I'('sultado; Ia incapacidad dc los I!:0bcrlI"nll's par" salisLlccr las Ilcccsidad,'s b,isicas d,' SII pucblo condujll al
Capitalismo global
La globalizaci6n, 1973-2000
colapso de sus regimenes. El hecho de que paises como Ghana, Haiti, Sudan, Liberia, Afganistan y El Salvador fueran mas pobres en 1980 que veinte anos antes fue una importante raz6n de los conflictos que los han consumido, a ellos y a otros muchos paises, durante las dos decadas siguientes. 2Q!e es 10 que produjo los desastres econ6micos de finales del siglo xx? Los acontecimientos externos y el incontrolable enfrentamiento interno fueron extenuantes, pero fue la incapacidad del gobierno, no la fuerza de las circunstancias, 10 que produjo el colapso.
Los britanicos querian unir ambas Rodesias, del Norte y del Sur,junto con Nyasalandia (la actual Malaui), en una federaci6n dominada por los colonos. Kaunda y otros africanos, liderados por el Congreso Nacional Africano de Rodesia del Norte (CNARN) se oponian energicamente ala federaci6n. Tras la constituci6n de esta en 1953, Kaunda se convirti6 en secretario genera! del CNARN. Durante cinco anos fue uno de los principales dirigentes de la organizaci6n, fomentando todo tipo de luchas, desde el boicot de las tiendas segregadas a la desobediencia civil. Fue detenido como director de la revista del CNARN y cumpli6 una condena de dos meses de trabajos forzados. Finalmente se enfrent6 con los grupos mas moderados del CNARN v en 1958 fund6 el Congreso Nacional Africano de Zambia (CNAZ). Encarcelado de nuevo por los britanicos en 1959, mientras l'staba en prisi6n el CNAZ se escindi6 y al salir tras cumplir su condena Kaunda fue elegido presidente del nuevo Partido U nido para la Independencia Nacional. En 1964, cuando la Federaci6n de Rodesia v Nyasalandia se deshizo y Gran Bretana reconoci6 la independencia de Rodesia del Norte con el nombre de Zambia, Kaunda gan6 facilmente unas elecciones libres y se convirti6 en el primer presidente del nuevo Estado. Zambia parecia un candidato idea! para el exito, ya que disponia de una riqueza mineral extraordinaria y unos dirigentes habiles y mmprometidos. En el cintur6n del cobre, que se alargaba cerca de doscientos kil6metros a 10 largo de la Frontera con Zaire, se crearon varias ciudades mineras. El nuevo pais habia nacido, como se solia decir, «con una cuchara de cobre en la boca». Pero la corriente continua de rentas procedentes de las minas de n lhre del pais tuvo efectos perversos sobre el desarrollo a largo plazo. !-:I gobierno, suponiendo que el dinero del cobre seguiria afluyendo ininterrumpidamente al pais, no se apresur6 a desarrollar el resto de la l'conomia. Las fkiles rentas del cobre incitaron a los zambianos a dl'dicar su tiempo a tratar de obtener una parte de aquella riqueza. I.os mincros csperaban altos salarios, los habitantes de las ciudades 'iucrian emplcos guhentan1l'ntales bien pagados y com ida harata, y los zamhianos en general dahan por garantizados los programas so('jall's tinanciados I'lli'l'l !-:stad" y l'l patrotlng" po!itico. COIIIO los
_ _ _ _ _----0
LA ViA ZAMBIANA
Kenneth Kaunda condujo al pueblo de Zambia a la independencia y gobern6 el pais durante treinta anos a partir de entonces. Pese a su eficacia politica durante la lucha por la liberaci6n y de una dedicaci6n a! parecer sincera a! bienestar de su pueblo, durante su mandato se produjo un fracaso econ6mico catastr6fico. Esa triste historia comenz6 de forma muy emotiva. Kenneth Kaunda era el octavo hijo de un pastor de la iglesia de Escocia en 10 que ahora es Malaui. Cuando naci6 en 1924 sus padres eran misioneros en la franja septentrional de la colonia britanica de Rodesia del Norte (Ia futura Zambia). En la decada de 1920 se produjeron dos importantes acontecimientos: en primer lugar, la concesi6n otorgada a la Compania Britanica de Sudafrica en Rodesia del Sur (la futura Zimbabue) expir6 y los colonos blancos tomaron el control del gobierno en la colonia; en segundo lugar, se descubri6 cobre en Rodesia del Norte. A principios de la decada de 1940 Rodesia del Norte contaba con un sector cuprifero en expansi6n y su agricultura en manos de los blancos tambien prosperaba. Kenneth Kaunda se gradu6 en la (mica escuela secundaria de la colonia abierta a los africanos y comenz6 a trabajar como maestro de escuela. Desde muy pronto particip6 activamente en los grupos de ayuda mutua y organizaciones independentistas africanas. Durante la decada de 1950 los activistas anticolonialcs alricanos se enfrentaron tanto a los "olonos hlancos como al gohil'nto hrit,inico.
Capitali'mo global
La globalizacidn, 1973-2000
vastagos de padres ricos dedieados a gastar su herencia mas que a imaginar como ganar dinero por su cuenta, los zambianos derrocharon el faeil dinero del cobre en lugar de planificar un futuro economico que no se basara en la riqueza mineral. 5 Durante los diez primeros anos de independencia del pais, el nuevo gobierno emprendio con creciente confianza el control de la sociedad zambiana. Kaunda presento un planteamiento equilibrado del desarrollo economico, explicando a una audiencia inglesa un ano despues de la independencia: «El principal objetivo de nuestro plan de desarrollo economico es hacer que la economia dependa menos de los minerales al tiempo que se asegura que el avance economico se difunde tan ampliamente como sea posible. Ahora bien, esto no se puede hacer renunciando al desarrollo de las minas porquc nccesitamos las rentas minerales como fuente de divisas; pero el impulso ala produccion de mineral requiere equilibrio; de otro modo incrementariamos las diferencias de renta, que ya son excesivas».6 El gobierno de Kaunda alento el desarrollo del cobre, al tiempo que trataba de controlar ciertos aspectos de las operaciones mineras controladas por extranjeros que irritaban los sentimientos nacionalistas. 7 Se ordeno a las companias mineras promover a mas zambianos a puestos de direccion y pagar mas impuestos al gobierno. La nueva politica dio emplea a los zambianos al tiempo que el aumento del gasto publico permitia incrementar los servicios educativos, sanitarios y sociales para una poblacion que crecia rapidamente. Pero Zambia, como la mayoria de los paises subdesarrollados a finales de los anos sesenta, restringio la propiedad extranjera en la produccion de materias primas. Como la mayoria de los lideres africanos, Kaunda erda necesario un estricto control gubernamental sobre la economia para el progreso social del pais. Por otra parte, fomento 10 que llamaba «humanismo" como filosofia orientadora de Zambia, con el socialismo como «instrumento para construir una sociedad humanista,>.8 Con el fin de llevar el pais, como eI dccia, «del capitalismo al humanismo pasando por el socialismo»," en 196R Kaunda lanzQ una nueva orientacion econ6mica en un discurso en Mulungushi, cerca de Lusaka. Bajo ese nuevo prognuna eI Estado se hizo cargo de las minas de cobre y OIl cabo dc unos pOCOS anos Kalin·
dOl habia nacionalizado las empresas en otros sectores clave de la economia: industria, comercio, transportes, construccion y otros. Sin embargo, el fundador del humanismo zambiano no erda en la planificacion centralizada desde el Estado. Kaunda preveia, segUn dijo, que roJpt'(/J q(Ollr Inlcrllatiolltl/1'.'co110mi( Ordt'r (cd. am
I
Bibliograjra
665
pliada). Nueva York, Columbia University Press. (Hay trad. cast.: La diplomacia del dolar y la esterlina, Galaxia, Barcelona, 1994.) Geary, Dick. 1991. European Labour Politic5 from 1900 to the Depression. Atlantic Highlands, Humanities Press. Gerschenkron, Alexander. 1962. Economic BackwardneH in Hi5torical Perspective. Cambridge, Harvard University Press. (Hay trad. cast.: EI atra50 economico en su per5pectiva hi5torica, Ariel, Barcelona, 1968.) Goertzel, Ted. 1999. Fernando Henrique Cardoso: Reinventing Democracy in Brazil, Londres, Lynne Rienner. Goldin, Claudia. 1994. «The Political Economy of Immigration Restriction in the United States. 1890-1921", en The Regulated Economy: A Hi5torical Approach to Political Economy, ed. Claudia Goldin y Gary Libecap, Pl" 223-258. Chicago, University of Chicago Press. Goldman, Marshall. 1975. Ditente and Dollars. Nueva York, Basic Books. Gordon, A. D. 1978. «Businessmen and Politics in Developing Colonial Economy: Bombay City, 1918-1933», en The Imperial Impact: Studies in the Economic History ofAfrica and India, ed. Clive Dewey y A. G. Hopkins. Londres, Athlone Press. Gordon, Colin. 1994. New Dea/;: Businf55, Labor, and Politics in America 1920-1935. Cambridge, Cambridge University Press. Gourevitch, Peter. 1986. Politin in Hard Times: Comparative Responm to International Economic Crises. Ithaca, Cornell University Press. 1977. «International Trade, Domestic Coalitions, and Liberty: Comparative Responses to the Crisis of1873-1896», en Journal ofInterdi5cipiinaryHi5tory 8 (2): Pl" 281-313. Gowa, Joanne. 1983. Cl05ing the Gold Window: Domestic Politic5 and the End ofBretton WOods. Ithaca, Cornell University Press. Gregor, A. James. 1979. Italian Fasci5m and Developmental Dictatorship. Princeton, Princeton University Press. Gregory, Paul, y Robert Stuart. 1990. Soviet Economic Structure and Performance, 4a ed. Nueva York, Harper and Row. Gros, Daniel, y Niels Thygesen. 1998. European Monetary Integration, 2" ed. Harlow, Longman. (;rossman, Gregory. 1966. «Economic Reforms: A Balance Sheet», en Problems o(Communi.lm 15 (6): Pl" 43-55. «1