Borges Jorge Luis - El Tamaño de Mi Esperanza

 

  En  El tamaño de mi esperanza, En El esperanza , segundo libro de ensayos de Jorge Luis Borges, se encuentra ya la característica mezcla de apego a lo criollo, a la pampa y al suburbio, de inquietud por la literatura y de preocupación por el lenguaje que caracteriza buena parte de la obra del maestro argentino. Como ocurriera también con !nquisiciones" y El idioma de los argentinos", el libro, publicado en #$%&, 'ue preterido en seguida por su autor,  probablemente por p or el uso que (ace en él de un )ocabulario y ortogra'ía ortogr a'ía criollistas y por su implacable autoe*igencia+ Como el ran !nquisidor -dice aría /odama en el prólogo al )olumen y re'iriéndose al mismo-, a tra)és de un donoso escrutinio, Borges creyó (aber alcanzado su destrucción 012. 3uiz4 el ran !nquisidor, en su a'4n de buscar lo per'ecto, 'ue injusto con ese libro de ju)entud. Creo que los lectores se alegrar4n de que la obra e*ista."  

 

 

Jorge Luis Borges

 El tamaño de mi esperanza

 

 

5ítulo original+ El original+ El tamaño de mi esperanza Jorge Luis Borges, #$%&

 

 

 El tamaño de mi esperanza

6 los criollos les quiero (ablar+ a los (ombres que en esta tierra se sienten )i)ir y morir, no a los que creen que el sol y la luna est4n en Europa. 5ierra de desterrados natos es ésta, de nostalgiosos nostalgiosos de lo lejano y lo ajeno+ ell ellos os son los gringos de )eras, autorícelo o no su sangre, y con ellos no (abla mi pluma. 3uiero con)ersar con los otros, con los muc(ac(os querencieros y nuestros que no le ac(ican la realid4 a este país. i argumento de (oy es la patria+ lo que (ay en ella de presente, de pasado y de )enidero. 7 conste que lo )enideroo nunca se anima a ser presente del todo sin antes ensayarse y que ese ensayo es la )enider esperanza. 8Bendita seas, esperanza, memoria del 'uturo, olorcito de lo por )enir, palote de 9ios: ¿Qué hemos hecho los argentinos?  argentinos?  El arrojamiento arrojamiento de los ingleses ingleses de Buenos 6ires 6ires 'ue la primer (aza;a criolla, tal )ez. La uerra de la !ndependencia 'ue del grandor rom4ntico que en esos tiempos con)enía, pero es di'ícil cali'icarla de empresa popular y 'ue a cumplirse en la otra punta de 6mérica. La rquiza ?sin darse muc(a cuenta de lo que (acía@ mató en onte Caseros y que no (abló con otra )oz que la rencorosa y guaranga de las di)isas y la )oz póstum póstumaa del  Martín Fierro de Fierro de Aern4ndez. =ue una lindísima )olunt4 de criollismo, pero no llegó a pensar nada y ese su empacamiento, esa su sue;era c(cara de gauc(ón, es menos perdonable que su azorca. namuno y F(itman y quiz4 nuestro payador. >na cosa es indesmentible. 6l acriollarse, la copla sentenciosa espa;ola pierde su en)aramiento y nos (abla de igual a igual, no como el importante maestro al discípulo. 5ranscribo una copla peninsular, de esas que lo sermonean al auditorio+  Querer una no es ninguna1 0uerer dos es "anidad   ! 0uerer a tres ! a cuatro cuatro eso sí 0ue es falsedad$   6quí est4 la )ariante criolla, con'orme en la pro)incia de Buenos 6ires suelen cantarla+  Querer una no es ninguna1 0uerer dos es "anid4; el 0uerer a tres o cuatro  !a esparte de ha*ilid4$   na apuntación técnica. Ae censurado siempre las comparaciones )isuales, las que apro)ec(an meramente una semejanza de 'ormas, (ec(o sin importancia espiritual.