AVH_EnergiaNuclear

DESASTRE EN JAPÓN

SEIS DÉCADAS DE

¿FIN DE LA PRIMA LA HISTORIA DE LA ENERGÍA NUCLEAR CIVIL Y LA DEL MOVIMIENTO QUE LA HA DE FUKUSHIMA DAIICHI NOS ANIMA A RECORRERLO PARA SABER CÓMO HEMOS LLEGADO

UNA NIÑA DE CINCO AÑOS pasa una

serie de pruebas para detectar los efectos de la radiación nuclear, en la prefectura de Fukushima, el pasado 29 de marzo.

LAS CLAVES U S O B É L I C O . En 1942, un

grupo de científicos logró la primera reacción nuclear en cadena. El Proyecto Manhattan llevó a la destrucción de Hiroshima. USO PACÍFICO. En 1959, el

sector privado construyó la primera central nuclear, en Illinois, sin ayuda del gobierno. LAS CATÁSTROFES. En Three

Mile Island (EE UU), Chernobyl (URSS) y Fukushima (Japón) ha habido escapes radiactivos. LA AVENTURA DE LA

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UNA ENERGÍA POLÉMICA

VE RA N U C L E AR? DESAFIADO DURANTE AÑOS ES UN CAMINO FASCINANTE Y POCO CONOCIDO. EL DESASTRE HASTA AQUÍ E IDENTIFICAR NUESTROS PRÓXIMOS PASOS, PLANTEA GONZALO

TOCA

Aquélla no sólo se convirtió en la priconstruyó sobre una mera central nuclear de la Historia que pista de squash, bajo generaba electricidad para usos comerE el estadio olímpico ciales, sino que despertó definitivade la Universidad de mente el hambre del sector privado. El Chicago. Allí, en el 15 de diciembre de 1959, varias empreaño 1942, un grupo de científicos li- sas construyeron la primera instalación derado por Enrico Fermi consiguió con- de este tipo en Illinois sin recibir ayutrolar y mantener la primera reacción da por parte del Gobierno. Ni siquiera durante los años cincuennuclear en cadena. El Proyecto Manhattan aceleró una investigación que cul- ta, cuando los movimientos antinucleaminaría con la devastación de Hiroshi- res eran sólo incipientes, perdió de vista la comunidad internacional que alguma y Nagasaki. Sólo un año después de que termina- nos de sus miembros podían estar se la II Guerra Mundial, la energía nu- abriendo la caja de Pandora de la proliclear civil dio su primer paso al frente. feración atómica. Por eso, el presidente Eisenhower pronunEl Congreso de los Esció ante la ONU, en una tados Unidos creó en fecha tan temprana 1946 la Comisión sobre como 1953, uno de los la Energía Atómica y primeros discursos soautorizó la construcción bre la necesidad de cooen Idaho del primer perar en el ámbito de reactor capaz de produeste tipo de energía cir más energía de la para uso civil. que consumía. En diExistía una profunda ciembre de 1950, esa desconfianza. Antes ininstalación consiguió cluso de que la primeque elementos químira gran planta nuclear cos como el torio o el para usos comerciales uranio se transformasen abriera sus puertas en mágicamente en elecUna activista PROTESTA EN TOKIO contra la energía Shippingport, Naciones tricidad. nuclear, tras el escape Unidas ya había creado Sin embargo, una radiactivo de Fukushima. la Agencia Internacional cosa era lograr esa transformación y otra muy distinta producir de la Energía Atómica y los Estados Unimasivamente energía eléctrica. La plan- dos habían promulgado una ley que preta que construyeron en Shippingport veía indemnizaciones para los intoxi(Pensilvania), en 1957, demostró que cados por la radiación de las centrales. Si la proliferación podía limitarse a era posible mantener la reacción en cadena empleando agua para enfriar el nú- un club de países responsables, como cleo del reactor. Proporcionaron luz y ca- creían los líderes de las grandes potenlor a Pittsburg durante los siguientes cias, entonces sólo quedaba por discutir el coste de la energía y la segurinueve años. dad de las centrales. Los analistas preGONZALO TOCA. PERIODISTA. veían que a largo plazo los me- ➳ L PRIMER “REACTOR” SE

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➳ gavatios

dente republicano, Gerald Ford, tuvo que dividir la Comisión sobre la Energía Atómica en octubre de 1974, a sólo un mes de las elecciones legislativas que castigarían brutalmente al ParCRECE LA OPOSICIÓN. A tido Republicano por la mediados de los sesenimplicación de Nixon ta, las afirmaciones de en el Watergate. La Colos líderes políticos y misión era la institución empresariales habían pública más poderosa perdido credibilidad del sector, pero sufría para la mayoría de los jóun grave conflicto de invenes y especialmente tereses, porque no sólo para los que militaban HIROSHIMA, 1945. La explosión de la SHIPPINGPORT (PENSILVANIA), 1957. regulaba a las empresas, en los movimientos anInstalación del reactor nuclear de la bomba atómica Little boy en una fotografía hecha a través de una primera central que se utilizó para sino que tenía además tinucleares. Esas orgaventanilla, por uno de los proporcionar energía eléctrica a la sus propios proyectos nizaciones en Reino tripulantes del Enola Gay. población de Pittsburg. industriales de investiUnido, Francia, Alemagación y desarrollo. nia Occidental o los EsEl accidente de la tados Unidos afirmaron planta de Three Mile que los estudios pasaIsland en 1979, la más ban por alto el grave grave catástrofe de una daño del ecosistema, el central comercial de la peligro que suponían historia de los Estados los residuos tóxicos y la Unidos, parecía confirradiación que sufrirían mar las ideas del movilas poblaciones vecinas. miento, que agitó duEntre sus miembros rante años la bandera destacaban colectivos del pánico exagerando muy ideologizados –solas previsiones sobre cialistas, ecologistas, sindicatos con afiliados THREE MILE ISLAND, 1979. El entonces CHERNOBYL, 1986. El mayor desastre el número de víctipresidente de los EE UU, Jimmy nuclear de la desaparecida URSS se mas. Aunque la empretrabajando en las planCarter, abandona la zona tras la cobró inmediatamente cuatro mil mayor catástrofe de una central vidas y deformaciones en muchos sa tuvo que indemnizar tas, obispos católicos comercial en la historia de ese país. recién nacidos después. con millones de dólay pastores protestantes que relacionaban las centrales con Hi- importante es que ese mismo año se res a los vecinos de Harrisburg por las roshima–, pero también expertos muy consumó la retirada de Vietnam y que pérdidas asociadas a la evacuación, la ranotables, como los que fundaron buena parte de los colectivos pacifistas diación no fue tan elevada como para la Union of Concerned Scientists, reorientó sus preocupaciones hacia la po- matar a nadie. El colectivo antinuclear siempre ha esen 1969, en el Instituto Tecnológico de sibilidad de un cataclismo atómico. La primera demostración de fuerza tado dividido entre quienes se manifiesMassachusetts. Como documentó el sociólogo Jerome importante no tardó en llegar. El presi- tan fundamentalmente porque se oponen a las plantas por Price, la marea antisu inseguridad e imnuclear no adquirió pacto medioamverdadera consisbiental y aquellos tencia en todo el EL ASCENSO NUCLEAR NIPÓN que lo hacen sobre mundo hasta que Japón fue uno de los pricir casi el 30 por ciento de trales por toda la costa del todo porque piense produjo la crisis meros países que redujo el su electricidad a través de país y especialmente en san que hay que imdel petróleo en uso de su energía nuclear esa tecnología y tenían prefecturas con menos de pedir la proliferación 1973 y muchos Goa fines completamente paprevisto superar el 40 por 201 habitantes por kilóde las bombas que biernos apostaron cíficos. Si en 1954 emciento en 2017. metro cuadrado. emplean esa tecnocon más decisión pezaba sus investigaciones El primer reactor comercial Las principales anfitrionas logía. Según un inpor la creación de para producirla, sólo un (Tokai-1) se lo compraron son la de Fukui, en la cosforme de la Rand decenas de plantas año después promulgó la a los británicos en 1966, ta este, con cuatro instalaCorporation, 1979 para mitigar su deregulación que prohibía su pero desde entonces han ciones de este tipo, y la fue uno de los pocos pendencia del oro empleo bélico. En 2010, construido 54 más. Los de Fukushima, al norte de años en los que el negro. Otro factor habían conseguido produhan distribuido en 21 cenTokio, con tres. ■

de los reactores competirían cómodamente con los de los combustibles fósiles en precio e impacto medioambiental.

FECHAS DECISIVAS

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POLÉMICA GAROÑA.

rril de petróleo había pasado de costar unos 20 dólares en los noventa al doble durante la década siguiente. Por todo ello, en 2001 coprimer grupo superó al menzó una primavera segundo en influencia. nuclear que se quebró Probablemente 1986, la de repente el pasado fecha de la tragedia de 11 de marzo. Chernobyl, fue el siEl impacto del tsuguiente. Los más de nami desatado por un 4.000 fallecidos inmeterremoto de 9 en la diatamente por el deescala de Richter, que sastre de la central nudañó especialmente la clear ucraniana, las deformaciones de algunos recién nacidos y co. Además, en los veinticinco años si- central de Fukushima Daiichi, devollas perspectivas de unos colectivos anti- guientes al desastre de Chernobyl, no vió el pánico y la inseguridad a la comunucleares que esperaban miles de muer- se desató ninguna tragedia nuclear de- nidad internacional. Hacían falta nuetos en los años siguientes por cáncer bido al mal funcionamiento de las cen- vas restricciones por parte del Estado de tiroides –que afectó a 60 personas se- trales, sino que se produjeron única- y quizás hasta una moratoria de varios gún el informe definitivo de Naciones mente accidentes laborales parecidos años. No sabemos si la primavera conUnidas– destrozaron la credibilidad de a los de otras industrias de riesgo. Las tinuará o el invierno se llevará esos brolas empresas y líderes políticos que ha- empresas, fustigadas sobre todo en los tes verdes. Lo que sí sabemos es que ochenta por los manifestantes y los ba- los colectivos antinucleares han sido bían garantizado su seguridad. jos precios del gas natural al mismo capaces de lo peor cuando exageraron el número de víctimas de las catástrotiempo, habían aprendido la lección. MARCHAS Y OCUPACIONES. El contexLas nuevas circunstancias parecían fes para avanzar en su campaña y de to era idóneo, por tanto, para que los años ochenta presenciaran enormes imponer el renacimiento de la cons- lo mejor cuando elevaron con sus presiones la seguridad de manifestaciones en las plantas y denunciaEuropa y la ocupación CUANDO EL FINAL DE LA GUERRA FRÍA pacífica de algunas ALEJÓ EL FANTASMA DE UN DUELO ATÓMICO, ron los conflictos de intereses de las institucentrales o edificios COMENZÓ UNA PRIMAVERA NUCLEAR QUE ciones reguladoras. públicos relacionados con ellas en los Esta- EL DESASTRE DE FUKUSHIMA HA QUEBRADO Hemos aprendido igualmente que las dos Unidos. Desde entonces hasta finales de los noven- trucción de reactores nucleares. Al fin centrales entrañan importantes pelita, los defensores de los peligros de y al cabo, la combustión del carbón y gros para las poblaciones vecinas y que este tipo de energía transmitieron efi- el petróleo agravaba el temido cambio la industria tiende a minusvalorarlos, cazmente a la población la inseguridad climático más que las nuevas centra- pero también que las instalaciones no de los reactores encarnada por Three les térmicas, los combustibles fósiles han fallado gravemente en los últimos Mile Island o Chernobyl y la sensación estaban enterrados en suelos contro- veinticinco años gracias al esfuerzo de que los Estados Unidos y la Unión lados por dictaduras que patrocinaban de las propias empresas y a la exitosa Soviética caminaban a ciegas sobre el ocasionalmente el terrorismo contra supervisión de los gobiernos. El poOccidente y, por si fuera poco, el ba- pulismo de los políticos todavía puede trapecio de un holocausto nuclear. condenarnos a reSin embargo, algo petir los errores de empezó a cambiar un pasado que descuando los organisconocen, si olvidamos internacionaCENTRALES ATÓMICAS EN EL MUNDO mos que las fugas les aseguraron que Los únicos países que pote los próximos años, hasta nía de la energía nuclear. de Fukushima son las cifras de víctiseen más de 54 reactores un 68 por ciento, si pusieLos siguen de lejos Eslovaesencialmente la mas habían sido son los EE UU (104), Franse en marcha los 27 que quia, Ucrania y Hungría, que consecuencia de enormemente exacia (58) y Japón (55). Aunestá ultimando en la costa fueron capaces de superar el un tsunami y varios geradas en las catásque Rusia queda desplazay mantuviese los 13 que hoy 40 por ciento en esas misterremotos consetrofes de 1979 y da a una cuarta posición se encuentran activos. Los mas fechas. Hay seis centracutivos y que las 1986 y cuando el fiporque sólo dispone de 32, Estados que más dependen les nucleares en España y huellas de la Histonal de la Guerra Fría espera terminar de construir de sus centrales son Francia sólo dos de ellas disponen ria invitan a reacalejó definitivapronto otros 10. China poy Lituania, porque el 70 por de dos reactores (Almaraz cionar ante ellas mente el fantasma dría registrar la cifra más ciento de la electricidad que y Ascó), por lo suman ocho con moderación. ■ de un duelo atómialta de crecimiento duranprodujeron en 2009 provereactores en total. ■ Manifestación en el País Vasco contra la central nuclear situada en Burgos, durante el verano de 1999.

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A IMAGEN DEL VICEPRESIDENTE DE TEPCO y varios de sus ejecuL tivos doblando el espinazo ante los afectados por la crisis nuclear de Fukushima resulta tan peculiar –e irónica– como las escenas de los supervivientes del terremoto que la desencadenó, el pasado 11 de marzo, alineándose obedientemente y sin rechistar para recoger su ración de agua. Japón es un país entrenado para el desastre. Sus islas se sitúan en la confluencia de tres placas tectónicas –la del Pacífico, Eurasia y Filipinas– y forma parte del Cinturón de fuego del Pacífico, la zona con mayor acti-

RAFAEL DE LAS CUEVAS. PERIODISTA.

LA GRAN OLA DE cos para la nación, y muy pervidad sísmica del planeta. KANAGAWA, una de Es habitual que en cual- las estampas ukiyo-e turbadores para el resto del quier parte del archipiéla- de las Treinta y seis mundo, que ha asistido a la vistas del monte go se produzcan pequeños Fuji, por Katsushika aniquilación en directo de temblores semanalmente, Hokusai, entre 1830 ciudades prósperas y desay 1833. rrolladas. y los japoneses practican La historia de Japón está desde niños para reaccionar ante las sacudidas siguiendo instruc- plagada de catástrofes naturales que ciones precisas de desalojo. Incluso han provocado la destrucción y posa los extranjeros empadronados en terior reconstrucción de grandes asencualquier ciudad por motivos de tra- tamientos de población. La idea de bajo se les provee de abundante docu- lo efímero del ser humano ante el orden natural forma parte de su cultumentación de seguridad. Pero el caos y la destrucción que ha ra, plagada de referencias a la flor del provocado el terremoto de magnitud 9 cerezo, de belleza extraordinaria y en la escala Richter (el más intenso en existencia breve, o el ave fénix, cael país desde que se empezaron a re- paz de renacer de sus cenizas. El ejérgistrar datos sísmicos en el siglo XIX) cito estadounidense comprobó las y el devastador tsunami subsiguiente aplicaciones prácticas de esta filosohan resultado especialmente terrorífi- fía durante la II Guerra Mundial en

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TIERRA DE CATÁSTROFES

VIVIENDO ENTRE TSUNAMIS SITUADO EN EL CINTURÓN DE FUEGO DEL PACÍFICO, EL ARCHIPIÉLAGO JAPONÉS HA SUFRIDO TERREMOTOS Y MAREMOTOS DE FORMA CONTINUADA A LO LARGO DE TODA SU HISTORIA. RAFAEL

DE LAS CUEVAS

REVIVE LOS CATACLISMOS MÁS LETALES Y EXPLICA LA NOCIÓN DE TRANSITORIEDAD QUE IMPREGNA LA CULTURA NIPONA, FASCINADA POR LA FUERZA CREADORA Y DESTRUCTORA DE LA NATURALEZA

forma de bombas Oka (pequeños aviones con carga explosiva que manejaban los pilotos suicida), y frustrante resistencia de sus ciudades a los bombardeos ordinarios. DEJA VÛ. Uno de los primeros grandes

cataclismos documentados en las islas tuvo lugar en el año 869, exactamente en la zona castigada por el último: la planicie de lo que hoy son las prefecturas de Miyagi y Fukushima, al noreste del país. El Nihon Sandai Jitsuroku (La historia verdadera de los tres reinos de Japón), un texto oficial del siglo IX, recoge una descripción que se ajusta perfectamente a las imágenes retransmitidas en televisión e internet: “El mar entró con rapidez en aldeas y pueblos, inundando muchas tierras más allá

de la costa. No hubo tiempo para es- fue una llanura de barro parduzco sicapar”. La gigantesca lengua de agua milar a la que las fotos de satélite nos y escombros arremetió contra las aldeas muestran hoy. Otro punto caliente de actividad sísde pescadores a lo largo de 4 kilómetros, segando alrededor de 1.000 almas. La mica se encuentra al suroeste, en la región de Kansai, donzona estaba menos pode en 1707 tuvo lugar blada que hoy en día, LAS CLAVES el seísmo más fuerte pero a diferencia de los EL MÁS MORTÍFERO. El gran que se recuerda hasta afectados por el último terremoto de Kanto en 1923 que el de 2011 le arremaremoto –que tuvieprovocó incendios que arrasabató el récord. Con ron unos minutos de ron Tokio y Yokohama. una magnitud de 8,6 reacción gracias a las ERRORES CORREGIDOS. La hizo caer unas 20.000 boyas electrónicas de estructura de los edificios en las viviendas y se cobró alerta– entonces fuegrandes ciudades niponas está 5.000 víctimas. La ola ron sorprendidos diconstruida a prueba de terremoasesina no tardó en rectamente por la mutos. Los rascacielos resistieron elevarse sobre la costa ralla oceánica y arrasel último temblor. de Honshu. Incluso se trados como muñecos FOLKLORE. Las artes japonebaraja la posibilidad de de trapo entre la espusas suelen representar la vida que los movi- ➳ ma. Todo lo que quedó transitoria y la renovación. LA AVENTURA DE LA

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Fotografía de K. Ogawa que muestra los destrozos del TERREMOTO DE MINO-OWARI en 1891.

➳ mientos de la corteza terrestre re-

torcieran las entrañas del monte Fuji, despertando a otro de los kami (“espíritu” de la naturaleza), que escupió fuego treinta y cinco días después. Al desastre se le conoce como el Terremoto de Hoei y es el más recurrente en los textos históricos y literarios en lengua japonesa. Es probable que incluso el maestro Katsushika Hokusai se inspirase en las descripciones de la época cuando grabó la conocida Gran olade Kanagawa un siglo después. La fuerza salvaje y carga cinética de esta obra es el resultado de la experiencia de Hokusai en la representación del movimiento, pero también de la fascinación de sus ante-

El HOTEL IMPERIAL DE TOKIO, de Frank Lloyd Wright, fue uno de los pocos edificios que quedó en pie tras el seísmo de 1923.

pasados por la belleza creadora y destructora del agua, representada en pintura constantemente. Muchos de los relatos épicos basados en hechos históricos, como la sangrienta batalla de samuráis en la costa de Dan no Ura en el siglo XII o la destrucción de las naves invasoras mogolas por un tifón en el XIII, tienen al líquido elemento como protagonista. La convivencia habitual con los movimientos de tierra también se aprecia en las estampas ukiyo-e de gigantescos y amenazadores peces-gato, los cuales, según la creencia popular, estaban relacionados con los temblores. Bajo la leyenda late el hecho científico de que estos siluros pueden sentir las vibraciones previas a la catástrofe mucho antes que los humanos. IMPOTENCIA CIENTÍFICA. Cuando el país

CÓMO SE ORIGINA UN TSUNAMI Como es bien sabido, el término tsunami es japonés, y resulta de la unión de dos ideogramas que significan “puerto” y “ola”. A diferencia de las olas ordinarias que se mueven sólo en la superficie, estas ondas abarcan toda la masa de agua hasta el fondo oceánico. Se pueden iniciar a causa de terremotos, erupciones volcánicas o, incluso, meteoritos. Las más habituales son las del primer tipo; dos placas tectónicas se desplazan violentamente (una sobre otra) y el cambio de orografía del fondo marino provoca un desplazamiento colosal de la masa acuática. La energía liberada impulsa el fluido en forma de ondas a unas velocidades que pueden alcanzar –y en algunos casos superar– los 1.000 km/h. Las olas van llegando a la costa, y no siempre la primera es la más grande. A veces da la impresión de ser una inundación rápida, pero la fuerza de la corriente es brutal, capaz de arrancar edificios de cuajo.

se abrió definitivamente a Occidente en el siglo XIX comenzó un proceso frenético de industrialización y asimilación de los avances científicos modernos. Paradójicamente, algunos de ellos fueron contraproducentes en un entorno tan hostil. Los edificios de piedra y ladrillo construidos a la europea se cayeron como un castillo de naipes cuando azotó el gran terremoto de MinoOwari en 1891. El geólogo inglés John Milne documentó cuidadosamente el fenómeno y publicó un libro con imágenes del fotógrafo K. Ogawa. El balance de bajas se situó en torno a las 7.000. Aquella tragedia fue un toque de atención para los empresarios y constructores del resto del mundo y un punto de inflexión para la autonomía de la arquitectura local. Pero el Imperio del Sol aún tuvo que arder y renacer varias veces más de sus cenizas. Y hacerlo literalmente; la siguiente gran colisión de placas sumió LA AVENTURA DE LA

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a la ciudad de Tokio en una tormenta de fuego y pasó a la historia como el seísmo más mortífero de todos. El 1 de septiembre de 1923 a las 11.58 horas la tierra comenzó a agitarse en toda la región de Kanto. La mayoría de las familias se encontraba preparando la comida. La presencia de fuego en miles de puntos a lo largo del trazado urbano provocó una reacción en cadena desastrosa e imposible de detener. Y por si esto fuera poco, vientos derivados de un tifón cercano avivaron las llamas e hicieron imposible el trabajo de los bomberos. Miles de personas sucumbieron bajo los escombros o a causa de la inhalación de humo mientras que otros quedaron atrapados como moscas en el asfalto, fundido a causa de las altas temperaturas. Casi toda la ciudad quedó arrasada. Sólo unas pocas estructuras como el Hotel Imperial, diseñado por Frank Lloyd Wright, quedaron en pie. Posteriormente se difundieron rumores de que la población coreana estaba aprovechando el caos para saquear y envenenar los pozos de agua. La histeria colectiva provocó linchamientos en masa que se cobraron más de 2.500 vidas hasta que las autoridades pudieron controlar la situación. Se estima que perecieron de 100.000 a 140.000 personas en total en las prefecturas de Tokio, Chiba, Kanagawa y Shizuoka. Desde entonces, cada primero de septiembre se celebra en todo el país el Día de la prevención de desastres. ■

GONZÁLEZ ROMERO, E., Energía Nuclear, Madrid, CSIC, 2010. GREGORY C., Earthquake Nation. The Cultural Politics of Japanese Seismicity, U. of California, 2007. LOZANO LEYVA, M., Nucleares, ¿por qué no?: cómo afrontar el futuro de la energía, Barcelona, Debate, 2010.