Aportaciones en la táctica

July 24, 2017 | Author: Pocomaco | Category: Association Football, Defender (Association Football), Decision Making, Knowledge, Ball
Share Embed Donate


Short Description

Descripción: Articulo de Dani Fernández (RCD Espanyol)...

Description

COLECCIÓN

preparación futbolística

Nuevas aportaciones en el campo de la táctica: Inmersos en un nuevo paradigma Dani Fernández

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

1

“”

(Renné Descartes. “El Discurso del método”) “No consigo decir si lo más importante es defender bien o atacar bien, porque no consigo disociar esos dos momentos” “Creo que el equipo es un todo y su funcionamiento es un todo también”

(José Mourinho citado por Nuno Amieiro)

Corría la década de los 90, cuando de la mano de técnicos de indudable prestigio como Arrigo Sacchi, Maturana o Cruyff, algunos de ellos herederos de los postulados de un genio como Menotti, asistimos a una autentica revolución en el campo del entrenamiento y por añadidura en la fase de recuperación del balón. Era el propio Sacchi quien nos enseñaba, que “defender era atacar el ataque del contrario”. De dicha tautología nació una concepción de la defensa como una unidad mecanizada y estructurada que basándose en una sincronización casi perfecta de las líneas buscaba al rival en su propio terreno de juego provocando el error, no esperándole, a la par que reducía los espacios de forma que el contrario era incapaz de generar situaciones ventajosas. Si esto en un primer momento fue indudablemente positivo, a posteriori estas ideas se simplificaron de tal forma, que se terminó por descontextualizar la defensa del propio juego del fútbol. Se llegó a considerar la fase de recuperación del balón como una etapa distinta de las del resto del juego, sin ninguna conexión, e incluso para una gran cantidad

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

2

de técnicos el único objetivo del partido era defender y de dichas simplezas surgían afirmaciones tales como: “es un equipo ordenado”. Evidentemente cuando algo así se aseveraba, era porque ese equipo se pasaba el partido corriendo detrás del balón, y además se recuperaba la pelota muy cerca de su propia portería y con pocos efectivos por delante del balón ,lo cual castraba gran parte de las posibilidades de contraatacar con éxito (curiosamente de dichos equipos se dice que son “equipos equilibrados”). En un ataque de ego sin precedentes, los entrenadores se regocijaban de crear equipos espartanos que defendían, y solo defendían para quitarse de encima la pelota cuando esta era recuperada. Se ignoraba además que el trabajo desequilibrado provoca pérdida de la llamada “potencia prospectiva”. Si un entrenamiento está dirigido a potenciar un aspecto en detrimento de otro, provoca que los aspectos que postergamos empeoren. Era el reduccionismo cartesiano llevado a su máxima expresión. Cano Moreno afirmaba que: “ éste vocablo (la táctica) es asociado a aglomeración de sujetos alrededor de la propia portería, a renuncia de acciones ofensivas, utilizándola incluso para nombrar el estilo de juego de todo un país como Italia, entre otros improperios, cuando en realidad es propulsora de la disposición ilimitada de recursos, o cuanto menos nos hace conscientes de nuestras propias facultades…” y añadía a la sazón que: “…bien podría sustituir la palabra táctica por la de “sendero” hacia el conocimiento y todas las “veredas” que llevan hacia él, la observación, la movilización de la razón y la conciencia, la implicación, la reflexión, el contemplar con todos los sentidos…” (Óscar Cano Moreno. “Táctica: Victima favorita de la ignorancia”). O como llamó el genial Erick Mombaerts “esa subordinada a otros factores del entrenamiento” Paradójico es también, el hecho de que cuando estos equipos que presumen de la palabra orden hasta la extenuación, son los equipos que más desordenados se muestran una vez que tienen la pelota en su poder. Es tan grande la obsesión por ordenarse (que se confunde con juntarse todos detrás del balón), que en la fase de ataque el conjunto está descompensado y tiene pocas posibilidades de asociarse entorno a la pelota. Y es que, como señalara Lillo “un equipo ordenado es el que tiene ordenados tanto la defensa como el ataque, no sólo el que tiene ordenada la defensa, la defensa se ordena más por masificación que por concepto. Se equivoca el defender bien con defender con mucha gente…”

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

3

La falta de teorización en nuestro deporte traía consigo toda una serie de mitos peyorativos entorno a la defensa y la táctica en general. Cada uno de estos conceptos era dividido en una serie de subconceptos que a su vez daban lugar a más conceptos de carácter minoritario. Paradójicamente cada una de estas divisiones traía consigo una reducción de la comprensión del juego y del fenómeno táctico en su globalidad. Era y es frecuente, que los entrenadores nos prestemos a ese tipo de lenguaje que alimenta la prensa, y en este país en particular un grupo mediático, un país del cual el intelectual Juan Carlos Girauta nos dice: “un país tomado por la anomia y entregado a las comodidades del relativismo, que exoneran del pensamiento crítico, del compromiso y de la responsabilidad personal(…) un país sometido al cansino repertorio de prejuicios, tópicos, sentimentalismos tras el que se parapetan, desde que el mundo se les ha hecho irreconocible…” que se encarga de estereotipar los debates, que reduce el entendimiento sobre el juego y que lejos de cerrar teorías que debieran estar superadas, las abre y las vuelve a reabrir con el objeto de incrementar las ventas y dirigir la teorización en el fútbol. Pero por suerte en los últimos años hemos asistido a una nueva revolución en el campo de la teoría y el entrenamiento. Las magnificas aportaciones de gente como Antón, Seirulo, Espar… en el ámbito de los juegos deportivos colectivos ha permitido la reflexión y el surgimiento de un nuevo marco teórico y posteriormente un nuevo campo metodológico sustentado en el ser humano y el juego en sí, como protagonistas de las nuevas propuestas en el terreno de los procesos de enseñanza aprendizaje. En definitiva un nuevo paradigma que busca una mejora cualitativa en el entrenamiento y a su vez en el juego de fútbol. Hoy día comprendemos que el jugador es táctica en sí, que la táctica es en definitiva el conjunto de posibilidades que tiene un jugador en un momento determinado, dentro de un campo de referencias fundamentales que determinarán su decisión; balón, compañeros, adversarios, espacio de juego y portería, así como las experiencias vividas y, como no, el talento del propio sujeto capaz de generar respuestas que no eran imaginadas.

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

4

Sabemos que en un terreno de juego de cualquier deporte nos encontraremos ante tres tipos de sujetos que participan, aquellos que no se enteran de nada de lo que sucede, aquellos que reaccionan ante los estímulos que les plantea las diversas situaciones del juego los que son capaces de provocar que sucedan cosas (a los que Lillo llamaría jugadores capaces de llevarme la contraria). Pero el aspecto más determinante que encontramos dentro del terreno teórico dentro de la táctica, es la comprensión de que en el fútbol no existen fases diferenciadas, que ataque y defensa es la misma cosa. El verdadero equilibrio en un equipo de fútbol radica en el hecho de que los jugadores en función de las posibilidades de intervenir activamente en el juego reequilibran y reajustan su posición en el terreno para compensar al equipo en las mal llamadas fases de transición. Hoy en día, en el fútbol los partidos se ganan o se pierden en los momentos en que se recupera o se pierde el balón. Llama la atención a su vez, la funesta obsesión de los técnicos por repetir esquemas que un día le fueron propicios y le llevaron al éxito. Así, asistimos como ante entornos diferentes al que un día le auparon a la fama inmediata, ante jugadores que no son los mismos, ante circunstancias irrepetibles, los entrenadores una y otra vez vuelven a llevar consigo, como si de una sombra se tratase, las mismas ideas que antaño. Sucede también, que se escogen jugadores sin analizar sus cualidades, y se les introduce en una idea de juego, esquema táctico o posición en la que es imposible que destaque. Se escucha entonces, comentarios como, este jugador no es el que era, no se ha adaptado, este equipo le viene grande, allí jugaban para él, y otros tantos tópicos, topicazos del común y pobre léxico de nuestro juego. Un ejemplo claro y sonante de esto, lo comentaba mi buen amigo Raúl Caneda en referencia al alemán del Chelsea, Ballack, jugador que destaca por su capacidad de cargar juego sobre las bandas e incorporarse desde atrás a posiciones de remate. Se encuentra que estas dos virtudes suyas, no pueden brillar en un equipo donde no hay jugadores por banda, por consiguiente nadie a quien descargarle juego en los lados, nadie quien se la ponga cuando llegue desde atrás. Al final hemos de rendirnos a la evidencia, “quien sabe de fútbol, es quien sabe de jugadores” Los jugadores a través de sus comportamientos, serán valorados por su capacidad de desequilibrar o equilibrar en las jugadas de participación activa entorno al balón, o cuando se encuentren en situaciones de no intervención directa harán movimientos que estarán centrados en compensar al equipo. Se elimina así la visión mecanicista de la vida que ha colocado a los jugadores en una posición centrada en reproducir movimientos “tácticos” simétricos que no tienen en cuenta las cualidades que hacen diferente a cada jugador del resto.

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

5

Al igual que la sociedad ha creado un tipo de individuos autómatas sin capacidad para tomar iniciativas por su propia cuenta, en el fútbol los jugadores se han convertido en cumplidores de normas. El fútbol pasó en cuestión de pocos años de apellidar a los equipos con el nombre de la estrella de turno, a hacerlo con el del entrenador, podemos decir pues, que a raíz de esto el fútbol se murió un poco. Sin embargo, si vemos aún equipos que cumplen estas premisas que señalábamos anteriormente, el Chelsea de Mourinho (pero también de Terry, Makelele, Lampard…) en las temporadas anteriores, era un digno ejemplo de equipo construido entorno a las peculiaridades de sus miembros, compensado en el juego, donde los jugadores tenían en cuenta sus posibles intervenciones a corto, medio o largo plazo.

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

6

CARACTERÍSTICAS DE LOS JUEGOS DEPORTIVOS COLECTIVOS “El fútbol es un juego de equipo que requiere un grado máximo de capacidad de comunicación y cooperación. Se debe concienciar al jugador para desarrollar el sentido colectivo, el compañerismo, la ayuda mutua y la subordinación de los intereses personales a la colectividad. El individuo es formado por el equipo.” (José Mª Sanz Sánchez)

- Son actividades de PREPONDERANCIA TÁCTICA, lo cual implica necesidad de una constante resolución de las situaciones de juego. - Dependiendo de las experiencias anteriores y de los conocimientos que tenga el sujeto sobre el propio juego, los jugadores adoptan una determinada ACTITUD TÁCTICO ESTRATÉGICA. - La ESTRUCTURA TÁCTICO COGNITIVA prevalece sobre todas las demás. - Los participantes en el juego cooperan entre sí para vencer la oposición del rival. - Los jugadores deben constantemente adaptarse y readaptarse a las nuevas situaciones que el juego genera, a la vez deben ser capaces de elaborar y producir nuevas respuestas ante la constante variabilidad de situaciones y a la gran incertidumbre espacial que provoca que jamás dos situaciones sean iguales entre sí. - La ejecución técnica es importante pero no fundamental en la resolución de situaciones de juego. - El juego es en sí NO LINEAL, es decir no hay un ciclo de comportamiento establecido de antemano, cada situación de juego tiene diversas formas de poder resolverse. - La capacidad de percibir y decidir son las más importantes dentro del ciclo del acto táctico. - Necesidad constante de interactuar constantemente con un entorno evolutivo. - Un valor fundamental que sería inherente a los juegos deportivos colectivos sería su carácter asociacionista. - “Son deportes de situación, ya que el desempeño motor de los jugadores está estrechamente relacionada con la capacidad de éstos para responder de forma adecuada y eficaz a las constantes y diversas modificaciones que se dan en el contexto.”(Moreno del Castillo y Morcillo Losa,2004, citando a Castello y diversos autores) - Poseen una naturaleza problemática y contextual.(ídem anterior citando a Blázquez y diversos autores) - La propuesta de fútbol debe ser el paradigma naturista, que utiliza métodos cualitativos en contra de los cuantitativos. (Seirulo Vargas)

Como sugiere Espar (2001)”…necesidades tácticas o cognoscitivas que surgen de la necesidad de interactuar constantemente con un entorno evolutivo, siendo precisamente esa capacidad la que va a determinar (por encima de la física) el éxito del jugador y del equipo en una competición.” Y en una línea similar se manifiesta Arrigo Sacchi afirmando

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

7

que; “Es correcto comprender la preparación del deporte de equipo como el desarrollo de la capacidad creativa en la persecución del proyecto de juego colaborativo.” De las diversas características expuestas se deduce que la enseñanza del juego de fútbol, como actividad incluida dentro de los juegos deportivos colectivos, debe tener una metodología propia. METODOLOGÍA DEL JUEGO DE FÚTBOL “El cambio de paradigmas requiere una expansión no sólo de nuestras percepciones y modos de pensar, sino también de nuestros valores” Fritjof Capra. La trama de la vida.

“Toda metodología debe ajustarse a lo que la persona es capaz de hacer” (Francisco Seirulo Vargas)

Consideramos que la misión de los técnicos se va a centrar en desarrollar un modelo de entrenamiento que cubra las necesidades que se derivan de la competición, con el objetivo de conferir a los jugadores una formación adecuada y que las sesiones de entrenamiento permitan acceder a niveles óptimos de prestación durante la competición, no entendiendo esta aseveración solo en un plano condicional, sino que creemos que la acentuación ha de recaer en la dimensión cognitiva. Se hace fundamental, habiendo analizado las características del juego, señalar los objetivos generales del entrenamiento que deben regir la propuesta práctica que llevemos a cabo en las sesiones: - Reducción progresiva de la incertidumbre que provoca el juego. ( Cano Moreno y Morcillo Losa) - “Optimizar el rendimiento desde la perspectiva del jugador, es optimizar todas sus capacidades en las dimensiones que requiere esa actividad”(Seirulo Vargas) - Conseguir rendimiento individual y colectivo. - Creas cultura táctica. (“Mi gran misión como entrenador es crear cultura táctica. Enseñar al jugador a interpretar las situaciones, y eso parte de dar mucha información, es decir darle una razón para hacer las cosas. Al final elige el jugador”. J. M .Lillo) - Que las tareas cumplan los propósitos de especificidad y transferencia. - “El mejor entrenamiento es aquel que logra reproducir fielmente una situación para que el jugador que participe en ella optimice ciertos sistemas que son reconocidos inequívocamente ,como de participación necesaria para resolver esa situación propuesta”(Seirulo Vargas)

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

8

La consecución de estos objetivos dependerá del uso de una metodología de campo propia y que se sustente en los principios de nuestro juego, que anteponga los objetivos futbolísticos a los físicos y que no los camufle mediante ejercicios denominados integrales o globales. El método que nosotros pretendemos desgranar e inducir a su uso es el método estructural, donde los entrenadores se fundamenten. Según Cano Moreno y Morcillo Losa, los elementos prioritarios en los que se sustentarían los procesos de enseñanza serían: • Una perspectiva del conocimiento cognitivista sobre las teorías conductistas. • Teorías de aprendizaje que fomenten modelos constructivistas frente a los asociacionistas. • Tareas integradas o sintéticas sobre analíticas. • Y siguiendo a Capra; F (“La trama de la vida”) diríamos que el juego de fútbol sería una actividad intuitiva antes que racional, holística que no reduccionista o cartesiana, donde las actividades deberán programarse teniendo en cuenta la no linealidad abandonando las actividades lineales y cerradas. • Y sabiendo, que como nos advertía el propio Cano Moreno, “no basta con globalizar, hay que estructurar, el contenido de la situación del entrenamiento debe proporcionar la funcionalidad específica del juego del fútbol.” (Fútbol: Entrenamiento global basado en la interpretación del juego. Óscar Cano Moreno)

CULTURA TÁCTICA Nos detendremos ahora, en un punto que como veíamos arriba es fundamental en el quehacer del entrenador de fútbol. Los entrenadores debemos encaminar nuestra labor ha enseñar a los jugadores a interpretar, a sentir y a leer las situaciones de juego. El proceso se inicia desde la base, donde los técnicos habrían de ofrecer una amplia gama de conocimientos tácticos que permitieran a los jugadores poder escoger la mejor solución. El propio Lillo habló de esta categoría conceptual en un magnífico artículo que tenía por sí el título que encabeza este apartado: “Cultura táctica”, algo que el autor decía “parte de la razón del juego”. Señalaba además, que “el jugador ha de conocer el porqué de cada cosa y para esto hay que conocer el juego” y añadía que. “conocer el juego significa conocer esas preguntas: (¿Porqué?, ¿para qué?, ¿cómo?, ¿cuándo?, ¿dónde? Y ¿quién o quiénes?) Y sus respuestas en cada momento.” En consonancia con lo expuesto se manifiesta Manuel Conde al asegurar que: “El grado de eficacia en la competición será mayor si integramos e implicamos en los contenidos diarios, propuestas encaminadas a fortalecer los mecanismos decisionales (táctico-cognitivos).”

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

9

CARÁCTERÍSTICAS DE LAS ACTIVIDADES EN LA ENSEÑANZA DE FÚTBOL “La preparación táctica (…) debe abordarse desde una perspectiva sistémica, es decir en términos de conexiones entre los elementos que forman parte de ella, de orden y relaciones, sin perder en ningún momento la visión global del conjunto. Cada parte o medio táctico (…) no se desarrolla de manera aislada del contexto, sino que está integrada en un conjunto, cuya naturaleza es distinta de las partes que la componen.” (Antón García. Balonmano: Táctica Grupal Defensiva) Una vez señaladas las características propias de los juegos deportivos colectivos y por añadidura del juego de fútbol, los objetivos a tener en cuenta en el entrenamiento, y las características del proceso de enseñanza, apuntaremos ahora las características que deberían tener las actividades de entrenamiento.

- Deben ser abiertas, no cerradas. - Deben ser no lineales. - Deben fomentar la toma de decisiones. Evitar estar decir constantemente diciendo que han de hacer y que no. - Deben forzar al máximo la cadena de percepción-decisión-ejecución, escondiendo por parte del entrenador la mayor cantidad posible de información. - Deben ofrecer orientaciones y referencias a los jugadores para que resuelvan por sí solos las actividades de entrenamiento, debemos evitar dar las soluciones. - Deben estar encaminadas a situar al individuo ante compromisos cognitivos, es por eso que resulta fundamental que cuando los jugadores alcancen las soluciones a la actividad esta se cambie, o no se haga nunca más. No tenemos que enseñar a hacer ejercicios sino provocar que aprendan a jugar a fútbol. - Se debe tener en cuenta siempre la lógica del juego, incluir porterías que ayuden al jugador a acostumbrarse a que ataca y defiende algo. - No desconectar las fases del juego. ¿Por qué proponemos actividades donde algunos atacan a otros y estos al recuperar la pelota concluyen su intervención?

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

10

- Debemos evitar romper los ejercicios con mucha frecuencia, cuando observemos que los jugadores cometen muchos errores, hemos de volver a ejercicios de asimilación. - El trabajo es realmente fructífero cuando los jugadores se implican y se comprometen, es decir sienten lo que hacen, sino es así, el trabajo hecho ha tenido muy poco valor. - Lo componentes tácticos que trabajemos deben estar conectados con nuestra filosofía de juego. - El trabajo en espacios reducidos es necesario, pero hemos de tener en cuenta que obvia factores previos y posteriores a la acción, y que no sitúa mentalmente al jugador en la globalidad del juego. Sí que es primordial que el juego en espacios reducidos está situando al alumno ante constantes acciones de pérdida y recuperación de balón, y es aquí donde antes señalábamos que es donde se decidían los partidos. - Las actividades deben seguir una línea metodológica, es decir que lo que trabajemos previamente esté relacionado con lo que hacemos en ese instante, y con lo que realizaremos a posteriori. - Las capacidades condicionales debemos entrenarlas en las condiciones de variabilidad en que estas capacidades se presentan en las diversas situaciones de juego.

ESTRUCTURA DE LA SESIÓN Una de las modas más nocivas en el campo del entrenamiento de fútbol ha sido la de las dobles y triples sesiones, que permitían a los técnicos justificar su trabajo ante la opinión pública. Estas modas debidas en gran parte al campo de la preparación física tradicional reproducían esquemas que felizmente se están superando en muchos ámbitos. Normalmente puede observarse que muchos entrenadores anteponen los objetivos de tipo condicional a los de tipo cognitivo-decisional. Es frecuente observar como lo táctico queda casi siempre en segundo plano, es por ello que nos conviene preguntarnos como sí consideramos que la estructura táctica es la fundamental para vencer, por qué esta se trabaja en las sesiones de tarde cuando el sujeto tiene menos predisposición mental y física para el aprendizaje. Es también frecuente escuchar a los técnicos excusarse cuando destituidos ante malos resultados, se excusan con aquello de que no tuvieron tiempo, es por esta cuestión que convendría que nos formulásemos una serie de preguntas: • ¿Cuánto tiempo perdemos durante la semana a alcanzar objetivos de carácter físico que camuflamos bajo objetivos tácticos?

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

11

• ¿Cuántas sesiones y actividades de entrenamiento realizamos sin que haya toma de decisiones por parte de los jugadores? Como señala el periodista Federico Jiménez Losantos “Tú tienes que ser libre para equivocarte ¿Por qué sino cómo vas a ser libre para acertar? • ¿Cuántos entrenamientos y sesiones realizamos sin tener en cuenta la individualidad de nuestros jugadores? ( ¿es lo mi entrenar a un lateral como Roberto Carlos, que cuando se incorpora al ataque lo hace por embestida y merced a su enorme potencia, que a Del Horno, que precisa de asociarse con sus compañeros para llegar desde atrás?) • ¿Tenemos en cuenta la lógica estructural del juego cuando proponemos nuestras sesiones? • ¿Tenemos en cuenta que los objetivos del entrenamiento en fases sensibles no pueden ser los mismos que en fases maduras? • ¿Tenemos en cuenta las cualidades de nuestros jugadores para elegir un determinado estilo de juego o un reparto geográfico concreto (sistemas de juego? • ¿Tenemos en cuenta la capacidad para asociarse de nuestros jugadores y las sinergias colectivas que ellos construyen? ¿Potenciamos estas cualidades y sinergias desde las actividades del entrenamiento? O sin embargo las castramos desde nuestras propuestas. • ¿Por qué nos dedicamos a plagiar modelos de juego de equipos concretos, o trasladamos aquello que un día nos dio resultado obviando que cada ser humano, y cada área de relaciones socio emotivas son distintas allá donde vamos?

En definitiva ¿Por qué seguimos perdiendo el tiempo? Y sobretodo ¿Por qué seguimos haciendo que nuestros jugadores pierdan el tiempo?

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

12

Al organizar nuestras sesiones deberíamos tener en cuenta una serie de detalles que enriquecerán el trabajo. Tener en cuenta la estructura del juego y la dinámica de relaciones que se derivan de él. 1- El juego de fútbol es de carácter cooperativo de dinámicas situacionales variables. 2- Estas dinámicas situacionales se pueden manifestar a través de superioridades de tipo numérico o de tipo posicional. 3- La gran mayoría de situaciones de juego no implican a más de 7 jugadores a la misma vez.(teniendo en cuenta a compañeros y adversarios) 4- Es fundamental el dominio de una serie de situaciones que pueden considerarse básicas: 1x1, 1x2, 2x1, 2x2, 2x3. 5- La forma jugada 3x3, es de gran complejidad y de una rica variabilidad decisional. En palabras de Caneda Pérez: “El fútbol, para ser verdaderamente colectivo, debe desarrollar el sentido del “nosotros”, por lo que el número mínimo y el más adecuado para activar el sistema nervioso central es el de 3x3. Las actividades de 3x3 maximizan la capacidad de elaboración (”LA ZONA EN EL FÚTBOL. Raúl Caneda Pérez)

6- Las actividades deberían fomentar las capacidades de anticipación sobre las reactivas. La capacidad táctica de anticiparse a un fenómeno de carácter táctico es herencia de los grandes jugadores de la historia, es un legado que no podemos ignorar y que hemos de considerar un principio a la hora de enseñar. 7- Hemos de entrenar a partir de los principios fundamentales del juego. 8- En fútbol, siempre hay jugadores que intervienen activamente en las situaciones de juego y otros, que cooperan para resolverlas.

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

13

Un sinfín de autores han teorizado sobre la organización de la sesión, unidad temporal de trabajo, ya que es la más repetida durante toda la vida del deportista. El modelo clásico se organizaba a partir de: calentamiento, parte principal, y parte final o de relajación. Dicho modelo puede ser enormemente positivo en deportes de carácter eminentemente físico, pero por las características anteriormente citadas se muestra como poco valido para nuestra forma de entender este juego. Pretendemos pues, formular un tipo de sesión basada en el tipo de actividades que construimos: INTRODUCCIÓN AL MEDIO, ACTIVIDADES DE AYUDAS MUTUAS, ACTIVIDADES DE COLABORACIÓN OPOSICIÓN Y ACTIVIDADES DE JUEGO REAL. Estas actividades se establecen así como modelos de progresión en el aprendizaje táctico:

Introducción al Medio Actividades que se realizan como forma de introducir a los jugadores tanto mentalmente como físicamente. Aunque a simple vista ocuparían el lugar del llamado calentamiento o parte inicial, es mucho más específico y tiene en consideración los objetivos tácticos posteriores y sitúa al jugador en este marco. Sirve también para realizar acciones técnicas aisladas que luego ocuparán un lugar determinante en el tipo de solución al que se enfrenten. (Ejemplo: conducciones para trabajar posteriormente fijaciones en situaciones de 2x1). Se pueden incluir movimientos físicos poco complejos que resulten interesantes para solucionar problemas tácticos. Se incluyen también juegos de carácter lúdico que reproduzcan situaciones semejantes a las que se trabajarán luego. (Por ejemplo pilla, pilla para luego realizar actividades de desmarque). Deben ser variados y que hagan pensar al jugador constantemente, que le supongan un reto cognitivo. Repetir los ejercicios supone crear rutina y acostumbrar al jugador, y eso trae consigo aburrimiento y que no se piense. Si después queremos que el jugador piense y tome decisiones, ya desde esta fase del entrenamiento hemos de acostumbrarlo a ello. Como complemento a lo dicho, podemos destacar lo dicho por SeiruloVargas: “Los calentamientos para las sesiones, deben mantener una pequeña parte de “alerta fisiológica”(los autores añadiríamos que también alerta intelectual o cognitiva) propia del jugador individual y luego otra parte adecuada a las demandas de los contenidos de la sesión que se realice, por lo tanto no debe ser estandarizado.”

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

14

Ayudas Mutuas Se entiende como aquel tipo de actividades donde el jugador está siempre en disposición de ser útil. - Participan menos de 5 jugadores, es decir menos de la mitad del total. - Son situaciones que normalmente se realizan en espacios reducidos, pero donde no podemos olvidar un aspecto importantísimo dentro del estructuralismo, el uso efectivo de los espacios de juego y su disposición geográfica en él. - Los ejercicios plantean un solo problema que se presenta como punto de partida y final. Cuando el jugador ha resuelto dicho problema, la actividad ha concluido. - Con las reglas podemos provocar o esconder respuestas. - Las actividades son meras excusas para que el jugador solucione el problema específico que se le plantea. - Los problemas deben solucionarse en el menor tiempo posible, ya que cuanto más tiempo requiera la solución del problema mayor imprevisibilidad adquiere el juego.

Actividades de colaboración-oposición - Participan una gran cantidad de jugadores, incluso a veces todos. - Los entrenadores debemos analizar como todos los jugadores favorecen la solución del problema planteado en la actividad de ayuda mutua. - Permiten reducir la imprevisibilidad global de las conductas propias. - Permiten enlazar las diferentes situaciones de ayuda mutua. - El objetivo principal es el enlace de una situación a otra. - Se introducen reglas de provocación que condicionan las respuestas. - El objetivo final de dichas situaciones será que los jugadores respondan de la misma forma a una situación de juego y a la misma vez.

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

15

Actividades de juego real Se plantean al final de la sesión, aunque no siempre se han de realizar. El objetivo es observar si el concepto táctico planteado se ha asimilado y se lleva a cabo dentro de la imprevisibilidad del juego. Es importante destacar, el papel del técnico como observador de conductas que mediante reglas dentro de las actividades, evalúa el rendimiento, y evoluciona la dificultad de los conceptos tácticos que va introduciendo. A veces un concepto necesitará más ejercicios de ayudas mutuas que otro. Y sobre todo es vital tener en cuenta los Principios fundamentales del juego. LAS FASES O CICLOS DEL JUEGO

LAS FASES DEL JUEGO El juego de fútbol se manifiesta a partir de unos conceptos generales que son los que le dan sentido. Su transmisión dependerá de la creación de un lenguaje táctico común que a la sazón nos permitirá establecer un funcionamiento de carácter colectivo. A partir del recuadro podemos deducir que el juego tiene una imprevisibilidad

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

16

constante al estar los equipos en constantes cambios de rol. El gran problema en la comprensión de nuestro juego ha sido el considerar cada fase como un compartimiento estanco, fruto de este cerrazón mental surgen ideas tales como el “cambio de mentalidad”, es decir el pasar con velocidad de una fase del juego a otra, cuando lo normal sería que hablásemos de una sola mentalidad: LA DE JUGAR. Según el cuadro adjunto, y la literatura existente surgida de esta idea, el juego tiene 4 momentos o ciclos: • • • •

la posesión del balón. La recuperación del balón La transición a pérdida La transición a recuperar.

Si antes señalábamos ambas fases de transición como fundamentales para dilucidar quién vence hoy en día, sería bueno volver a reseñar que todos los principios y fases que de ellos se derivan (Ataque, contraataque, repliegues y fase defensiva) están interconectados los unos con los otros. Los buenos equipos son aquellos que durante todas las fases del juego tienen en cuenta estos principios, y que a través de los movimientos compensatorios reequilibran constantemente el equipo proveyendo las posibles pérdidas de balón o posibles recuperaciones. Además, el juego es tan imprevisible que estas fases se están dando con una velocidad pasmosa, en breves momentos un equipo que circulaba balón está recogiendo la pelota del fondo de las mallas. El anteriormente citado Caneda Pérez nos advertía de que: “Un error muy habitual en el fútbol es considerar dos fases diferenciadas en el juego: una de ataque, (en posesión de la pelota) y otra de defensa (sin la pelota). En el fútbol estas fases se superponen, de tal manera que el razonamiento anterior sólo es válido para deportes como el balonmano, o donde el espacio geográfico

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

17

de ataque y defensa es diferente, dado que lo que acontece en la media cancha sólo es un tránsito.” Para concluir señalando que: “En fútbol, muy al contrario, es en la media cancha donde discurre el meollo del juego, de tal manera que lo realmente decisivo a la hora de diferenciar fases, nos sitúa en la importancia de pasar a la defensa de la manera más inmediata tras la pérdida de la pelota. Al igual que situarse en el menor tiempo posible en disposición de ataque cuando se deja de defender (pérdida de balón del equipo contrario)” Es pues hora, de que cuando entrenemos tengamos en cuenta dicha lógica del juego, y que planteemos las situaciones de entrenamiento esta imprevisibilidad manifiesta, a través de los llamados movimientos compensatorios, que se manifestarían teniendo en consideración aspectos tales como: • Que cuando ataquemos jamás se incorporen los dos laterales a la vez, y que los defensores que queden basculen hacia el lado desprotegido para compensar los espacios desprotegidos. • Que los jugadores que queden sin posibilidades de desequilibrar en ataque, se dediquen a equilibrar en defensa. • Que ante los jugadores rivales que queden en posiciones adelantadas defendámoslo de forma individual (se siguen manteniendo las referencias de marcaje colectivo) para no cederles espacio. • Que los jugadores que en defensa no tengan posibilidades de intervenir, se sitúen en posiciones que les permitan desequilibrar al equipo contrario cuando se recupere el balón. • Que los equipos tengan en cuenta la lógica de los despejes y rechaces, y que normalmente estos caen siempre hacia el lado que está situada la jugada. (solo los mal despejados van al lado contrario) Una introducción riquísima en el sentido que nos expresamos la da el fútbol a 7, que en nuestro país, está implantado en edades tempranas, pero que en nuestra opinión debería ser un paso previo al juego de fútbol 11 hasta edades de 12 y 13 años. Por la velocidad con la que se transcurren las acciones, porque obliga a los jugadores a pasar de un rol a otro sin mucha dilación, y porqué además es un juego donde las acciones de contraataque y sus respuestas defensivas son constantes. Y es por ello, que se hace fundamental que en las actividades incluyamos siempre porterías o espacios fijados donde marcar y defender, fomentando el sentimiento de protección y penetración, así como acostumbrar al jugador mentalmente al rápido tránsito entre fases.

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

18

HACIA LA CONSTRUCCIÓN DE UN MODELO DE JUEGO BASADO EN LAS CARACTERÍSTICAS DE LOS JUGADORES. Actualmente los entrenadores se encuentran ante dos situaciones comunes a la hora de afrontar el reto de dirigir un equipo. Por una parte nos encontraríamos ante equipos que previamente han sido ya formados, bien sea por directores técnicos, o porqué trabajamos en equipos de base. Entre el tiempo que transcurre desde que firmamos un contrato y cuando nos calzamos las botas para dirigir las primeras sesiones de campo, tiene lugar la llamada fase pre táctica. Fase de observación: Se analizan las características individuales de los jugadores, así como la capacidad de asociarse y de construir sinergias colectivas. Cómo son capaces de participar en el juego, qué aportan para que el equipo sea equilibrado y cómo varían sus comportamientos para compensar constantemente al colectivo. Un problema que nos podemos encontrar, es que no hayamos podido observar al equipo previamente, o que se sumen nuevos jugadores al conjunto que tengan capacidad desde su estilo de variar el comportamiento colectivo del resto. En estos casos, bien haríamos en recabar información de técnicos anteriores, miembros de la dirección técnica del club, o pedir informes y videos. La recolecta de información no solo ha de ir en la línea táctica, sino que es también una herramienta fundamental para conocer las relaciones socio-afectivas de los componentes del grupo, sus cualidades humanas etc. No nos olvidemos que dirigimos un equipo de fútbol desde una perspectiva sistémica de la vida, que cualquier detalle por nimio que sea puede afectar al resultado final del proceso. Análisis de la información recogida: Es el momento trascendental en este periodo pre-táctico, ya que es el instante donde haremos las primeras elecciones que posteriormente serán fundamentales. Elección del modelo de juego. Reparto geográfico espacial de los jugadores (sistema de juego) en función de las capacidades que anteriormente comentábamos. Por ejemplo, si tenemos un medio centro con capacidad para resolver posicionalmente situaciones de juego, y a su lado no son necesarios más elementos, elegiremos un sistema de juego que potencien estas virtudes. Si observamos que tenemos jugadores que se van por fuera en situaciones de 1x1 tendremos que tener alguien que le envíe balones a fuera. Etc. -

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

19

Colectivamente hemos de observar si tenemos jugadores capaces de manejarse bien con la pelota, capaces de asociarse entorno a ella, o por el contrario son jugadores que multiplican su valor con el contacto, es decir son mejores imponiéndose y no jugando mejor que el rival. Elección de los principios de nuestro juego, así como los subprincipios y los subprincipios de los subprincipios. (Para entender estos conceptos ver la bibliografía existente sobre el tema: “Defensa en zona en el fútbol” de Nuno Amieiro y Mourinho: Porqué tantas victorias”.)

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

20

© www.mcsports.es. Artículo publicado en la sección “Ponencias”.

21

View more...

Comments

Copyright ©2017 KUPDF Inc.
SUPPORT KUPDF