Análisis Agosto Rubem Fonseca

August 31, 2022 | Author: Anonymous | Category: N/A
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LAS PRÀCTICAS MARGINALES, COMO ACTO MEDIADOR ENTRE LO PRIVADO Y LO PÚBLICO AGOSTO (NOVELA DEL AUTOR BRASILERO RUBEM FONSECA)

Presentado por:

ASTRID DAMARIS ORTIZ MAZO COD. 42 133 307

Universidad tecnológica de Pereira Facultad de educación Licenciatura en español y literatura Pereira, de 2007

 

 

LAS PRÀCTICAS MARGINALES, COMO ACTO MEDIADOR ENTRE LO PRIVADO Y LO PÚBLICO AGOSTO (NOVELA DEL AUTOR BRASILERO RUBEM FONSECA)

ASTRID DAMARIS ORTIZ MAZO

Monografía para optar al título de licenciada en Español y Literatura

Director de tesis RODRIGO ARGÜELLO

Universidad tecnológica de Pereira Facultad de educación Licenciatura en español y literatura Pereira, de 2008  

 

TABLA DE CONTENIDOS:

INTRODUCCIÒN……………………………………………… INTRODUCCIÒN…………………… …………………………………………………. ………………………. 1  CAPÍTULO 1 MARCO TEÒRICO: El género negro; Perspectivas en la novela de Rubem Fonseca …………………………… 7 

CAPÍTULO 2 Las prácticas marginales, com como o acto mediador entre lo privado y lo público…………………………………….... público……………………………………........... ....... 39 2.1

Los personajes y sus rasgos de marginalidad desde lo privado………………………………………………… privado………………………………………………………............ ……............ 40

2.2

Actos de marginalidad en la élite...………………………………………… élite...………………………………………… 76 

2.3

Mujer y sexualidad……………………….……………………………………….. 85 

2.4

El aspecto político y los medios de comunicación.......................... comunicación................................ ...... 94 

2.5

Sociedad en Agosto………….……………………..... ……………………................... ............................. .................. ... 114

2.5.1

El espacio de lo público………………………………………………………

119

3. ANEXOS……………………… ANEXOS………………………………..…………... ………..………….................. ............................. ........................... ............. 125 4. CONCLUSIONES…………………… CONCLUSIONES……………………………………………… …………………………….………….….. ….………….…..

127

5. BIBLIOGRAFIA…………………………….…………………………..

129  

 

INTRODUCCION

En el presente trabajo hemos tomado como objeto de estudio la novela titulada  Agosto ,

escrita por el brasilero Rubem Fonseca.

Esta novela se desarrolla en el lapso temporal de 26 días que corresponden a los veintiséis capítulos que la componen; y en donde quedan referidos los últimos días del dictador Getúlio Vargas y Alberto Mattos, un comisario de la policía de Rio de Janeiro. El trabajo que a continuación se realiza, tiene como componente fundamental demostrar que en la novela, se encuentran Prácticas Marginales, que se establecen desde dos instancias: una de ellas la hemos denominado privada y la otra pública; entendiendo por práctica marginal las actuaciones sociales no permitidas por la normativa del colectivo social y político de un topos, (en este caso Brasil); pero que al ser definidas en la instancia de lo público y privado, vemos cómo estas prácticas se realizan de acuerdo a unos elementos específicos (discursos) que facilitan su desarrollo.

En el trabajo, desarrollamos diferentes sub-categorías que nos permiten particularizar tanto los ejemplos, como las prácticas y los espacios en los que se producen y reproducen las diferentes representaciones sociales que se estudiarán desde las prácticas discursivas.

El trabajo está estructurado por dos capítulos, que se divide en cuatro temáticas específicas. El primer capítulo alude a las teorías y marcos referenciales con que  

 

se asumirá el trabajo en general; mientras que en el segundo capítulo asumiremos el desarrollo del trabajo como tal ya que en este capítulo nos posesionaremos de las prácticas marginales como mediación, entre lo público y lo privado. Esta temática a su vez, estará dividida en cuatro temas específicos para realizar el tratamiento del tema general.

Es importante resaltar que en el primer capítulo, se le presentará al lector; los parámetros, categorías y sub-categorías que facilitarán establecer los análisis temáticos de cada tema.

Los temas respectivos a las temáticas del segundo capítulo serán:   Las prácticas marginales, como acto mediador entre llo o privado y lo público.



  Los personajes y sus rasgos de marginalidad desde llo o pri privado vado



  Actos de marginalidad en la élite



  Mujer y sexualidad



  El aspecto político y los medios de comunicación.



  Sociedad en Agosto  



 



El espacio de lo público.

En el primer tema, tomaremos algunos personajes para establecer el carácter privado del texto, asumiendo que estos personajes representas dos instancias, las cuales las hemos catalogado como clase de élite y clase marginal. En mujer y sexualidad identificamos las prácticas marginales que las agreden como las que ellas realizan para transgredir el orden social establecido, argumentando el aspecto sexual como un elemento de poder.

 

 

En el segundo capítulo, se realiza una reflexión en torno de los medios de comunicación y su función como propagadores de información, para así señalar las prácticas discursivas y marginales existentes en la novela; destacando el aspecto político como el paisaje y uno de los elementos más trascendentes en el texto, ya que remite a un contenido histórico.

Por último encontráremos que en sociedad en  Agosto ,  se encuentra un análisis sobre tres aspectos que se refirieren a las condiciones sociales y humanas de individuos marginales, como también la imagen imagen de la fuerza pública (Policía), y la representación de la barbarie de un sistema político convulsionado en el caos.

Dentro de la metodología que hemos diseñado para realizar la medición del trabajo hemos tomado como instrumento una tabulación de palabras que nos permitan identificar ideosemas

en dichas palabras e estableciendo stableciendo que estas

palabras surgen, como: las marcas características de los discursos que tomamos como ejemplo en el desarrollo del trabajo.

La metodología que utilizaremos en el trabajo la hemos tomado del campo investigativo de la sociocrítica; en donde la inducción y el carácter cualitativo se establece en un primer lugar, desde la subjetividad. En una segunda parte del componente metodológico haremos uso de la verificación histórica, como elemento que facilita no sólo la comprobación de los hechos reales de la sociedad Brasilera de los años cuarenta y cincuenta; sino que también nos permite instaurar una relación directa en las tendencias ideológicas de los individuos; teniendo en cuenta que las tendencias ideológicas se establecerán en la reproducción y producción de los discursos.

 

 

Es así que la sociocrítica nos permite acercarnos a la novela de Rubem Fonseca, en este caso, desde la descripción de la sociedad; donde los discursos y su análisis nos facilitan establecer las diferentes relaciones entre los personajes, destacando así, la importancia de los ideosemas como los elementos que se fijan en las palabras una importancia significativa para desentrañar los semas que poseen una mayor carga semántica y semiótica semiótica en el discurso de tipo marginal.

Hemos mencionado la importancia de los ideosemas como instrumentos que facilitan identificar en los discursos la relevancia de algunas palabras para instituir unas características o marcas particulares que distinguen los discursos de tipo marginal. En nuestro caso en particular, esta aclaración nos permite estudiar las prácticas marginales como la mediación del   mundo de lo público (vida política) y el mundo de lo privado (vida de la criminali criminalidad); dad); nos facilita instaurar en el trabajo la existencia de otros tres parámetros específicos para desarrollar la temática en general del trabajo. Dentro de los posibles parámetros encontraremos la importancia de analizar los personajes de la novela  Agosto   con relación al concepto de marginalidad y sin dejar por fuera el interés de rescatar las prácticas marginales de los individuos como un acto mediador entre lo privado y lo público. Por último localizaremos dentro de los parámetros específicos uno de los elementos

fundamentales de nuestro trabajo; ya que en él, se encuentra la

segunda parte del componente metodológico; él cual, por su característica de verificar los aspectos históricos debe buscar dentro de la novela,  Agosto   los aspectos históricos que la contextualiza.  Si bien toda investigación está delimitada por unas temáticas, es importante resaltar que que la sociocrítica permite el acercamiento al tema de acuerdo no solo a lo que ella permite abordar como objeto de estudio en la liliteratura; teratura; sino también en la construcción de la obra como objeto efectivo de estudio. Así, la sociocrítica la encontramos como la oportunidad de sintetizar los principios de observación de la materialidad textual, aprovechándola para observar el dinamismo de la producción de sentido, de lo social que los atraviesa. A partir de la metodología en el campo  

 

sociocrítico de investigación, se realiza una aproximación a la literatura reinsertándola en el artefacto sociocultural, y su objeto de estudio, dentro de un conjunto dinámico constituido por diversas prácticas sociales y culturales en la instancia de circulación.

Dentro de las características de la sociocrítica encontramos que la semiosis es una herramienta importante para el trabajo del sociocrítico, pero sin dejar de lado que se opera con y sobre textos o modalidades textuales, que en éste caso es la novela  Agosto   de Fonseca, la sociocrítica trabaja además en una mixtura metodológica basada en la visión de que todo aquello que manifiesta el tránsito discursivo e ideológico, del sujeto cultural, está inmerso en los contextos sociales.

 Ahora bien, si en la novela de Fonseca se encuentran en cuentran explícitos como implícitos los actos marginales, es claro que llos os discursos son nuestra fuente primordial para establecer, no solo el acto en sí de marginalidad; sino también la reproducción misma de los ideosemas que marcan dichos discursos, desde las instancias de lo público y lo privado. Bajo estas premisas se hace necesario preguntarnos: ¿Cómo se evidencia la mediación de las prácticas marginales en la estructura ideológica de los personajes de  Agosto,  vista desde sus discursos públicos y privados? 

Es evidente que la repuesta a esta pregunta, se establece en la novela, a partir de la acción discursiva, que se hace efectiva en la práctica de dicha acción, teniendo en cuenta que la acción debe ser entendida como cualquier actividad humana, incluso la discursiva.

 

 

El problema propuesto para el trabajo de la novela  Agosto   resulta interesante, ya que permite, poner nuestro centro de atención en la investigación sociocrítica, la cual, nos permitirá develar y delimitar los aspectos de la mediación; que en este caso se encuentran en las prácticas marginales. La mediación debe entenderse como una representación de la realidad. La representación se hace a partir de una oferta de representaciones; esta última, es entendida como la oferta de lo cultural y social asumiendo que en la representación se encuentra comprometido lo ideológico.

Las prácticas marginales como mediación en sí, ya tienen el contenido ideológico; teniendo en cuenta que es una representación de un hecho social o cultural.

Diremos entonces que la novela en su carácter, social, político y económico, permite identificar toda una estructura ideológica del Brasil naciente en sus últimos rezagos de dictadura y crimen velado, al rededor de los estamentos gubernamentales. De esta manera la novela devuelve, un carácter metafórico y flexible de leer el Brasil en los años 40 y 50. Para finalizar, indicaremos que  Agosto   se inscribe en el género negro o novela policíaca; donde la característica fundamental de este género se establece en el aspecto político que interviene en la construcción misma de la novela, y que especificáremos en la siguiente parte del trabajo

 

 

MARCO TEORICO EL GÉNERO NEGRO;

Perspectivas en la novela de Rubem Fonseca

Toda narración en su su estructura est está á determinada desde un entorno que facilita facilita la contextualización tanto del topos como la verosimilitud de la misma; la verosimilitud debe hacer participe entonces, a la realidad de tal manera que los personajes narrativos obtengan en lo posible el mayor parecido con la actuación humana y los contextos en los que se gestan dichos individuos.

Si bien la literatura en su carácter funcional debe revelar la marginalidad de lo humano como un valor agregado a los contenidos de la novela, cuento y poesía. Es necesario entonces resaltar que los relatos, en su seno guardan consciente o inconscientemente el contenido de lo humano donde vemos recogidos aspectos como la moral (ideologías) de los sujetos que se incluyen en las narraciones; sujetos que tienden a ser etiquetados por las clases sociales donde las esferas de poder tanto económico, como político y social, determinan la exclusión de cierta población. Parece ser, que la población referida tuviera valores éticos no aceptables por la sociedad, quedando delegados sus actos y costumbres a simples prácticas vulgares y violentas. Esta última llega en algunos casos a convertirse en actos siniestros y deshumanos, como como es el caso de la ssociedad ociedad que se nos presenta e en n la novela de Fonseca, (una sociedad desordenada en la estructura misma de la novela.)

El sentido de lo humano, como el factor determinante de la cultura y la sociedad es importante en la esencia de la novela de Rubem Fonseca. Donde, los indicios, tanto como los personajes y sus discursos nos llevan a pensar que el escritor brasilero  

 

incluye aspectos sociales y culturales de los individuos que históricamente son marginalizados por las grandes élites sociales y económicas; dejando así, al descubierto individuos marginales caracterizados desde lo humano y su conflicto social. Bajo los anteriores aspectos que rigen a los personajes del escritor brasilero, encontraremos que la norma como tal, se establece en dos vertientes: la primera la asociáremos a lo justo, que alude a la rectitud o aceptación de la sociedad; y la otra está orientada a lo ilegítimo como lo ilícito; es decir que no es aceptado por la sociedad, que se resume en actos violentos y satisfacción de necesidades básicas, imprimiendo así, en los discursos de los personajes características que recogen la forma del mismo, como también su nivel social.

Los personajes utilizados en la obra de Rubem Fonseca nos ponen de antemano entre dos instancias de las cuales surgirá el desarrollo del trabajo, estas instancias el discurso será la unidad de estudio del texto (novela Ago refiere iere Edmond  Agosto  sto ) como lo ref Cros (1992):

 El único modo de existencia de la conc conciencia iencia es el discur discurso so y cualquier que  sea el nivel de conciencia considerado (individual o colectivo), la distancia entre el campo de visibilidad de quien escribe y el campo de legitimidad del texto sólo se puede sacar a la luz a través de unos determinados trazos discursivos. Por lo mismo, dicha distancia sólo se puede est estimar imar por medio del análisis del discurso texto, o sea por el análisis del material lingüístico (incluso el discurso social) reconstruido por la escritura.  (Edmond Cros: 1992, cap. I, Pág. 29)

Si bien, estas instancias están atravesadas por el discurso de los individuos que en éste caso vienen hacer los personajes podemos decir que entre lo público y lo privado existe una mediación la cual denominaremos “ Prácticas Marginales” donde dicha utilización de la práctica marginal nos permite entrelazar lo público con lo privado, esta mediación quedaría así:

 

 

Público

Práctica social y cultural

Privado

Práctica Marginal

 Ahora bien, vamos ha entender la práctica marginal como las actuaciones actuac iones sociales no permitidas por la normativa del colectivo social y político de un topos definido, estableciendo así; que la inclusión de estas prácticas no son bien vistas, por la oficialidad del aparato político, donde se asume que estas están por fuera de lo público, pero que en algún momento los sujetos de vida pública pueden utilizar como un instrumento instrumento que mediati mediatiza za entre la vida privada y la pública. Es decir, que la práctica marginal se convierte en un medio para obtener beneficios personales; con relación a está afirmación Abric escribe en su libro “Prácticas Sociales y Representaciones” (2001) que todos los individuos actúan en términos de representación de acuerdo a su contexto

discursivo y social donde se

encuentran presentes cuatro funciones de las cuales tomaremos las dos más importantes la primera es “Funciones identitarias: define la identidad y permite la  salvaguarda de la especificidad de los grupos, y “Funciones de orientación”: conduce los comportamientos y las práctica”  ( Jean-Claude Jean-Claude Abric, 2001, Pág. 15 y 16.)  con estas

dos funciones expuestas por Abric, entiendo que los individuos en algún momento de sus prácticas o comportamientos hacen uso de variaciones que implica realizar   otras prácticas sociales, diferentes diferentes a las de sus roles; en el caso de la novela de Fonseca, titulada Agosto   vamos a encontrar que las prácticas (marginales) pasan hacer parte de la privacidad de los personajes como nos indica la trama del relato. relato. Un ejemplo de la privacidad de los personajes la hallamos en otra novela del brasilero, titulada “El Gran Arte”, donde un abogado (Mandrake) es agredido  junto con su novia en el interior de su hogar, a manos de dos criminales. Éste se obsesiona con el hecho y la forma como se dio el crimen y decide hacer uso de la misma arma con que fue  atacado. El cuchillo así, logra vincular al abogado de forma directa con el mundo de la criminalidad, durante toda la obra no sólo porque  

 

su trabajo de abogado e investigador así lo requieren; sino también por una razón poderosa, vengarse; dejando de un lado la vigencia de la norma y los procedimientos jurídicos, que él bien conoce. Con este breve aspecto de la historia trato de resaltar, que este personaje, en su construcción ideológica, logra coexistir en dos mundos, el primero es su vida pública (todos la conocen) y el segundo su vida privada, (sus sentimientos, afectos, pensamientos y acciones reprobables.) que al ser violentada por agentes externos (criminales), se pondera desde otra óptica; la cual, vendría a ser, la marginalidad. Convirtiéndose así; el abogado en un hombre del bajo mundo, en cuanto asume otras actuaciones y discursos diferentes de los utilizados en su vida cotidiana. Así la práctica marginal se convierte en un un medio para obtener el objeto o materialización del objeto que persigue el individuo que en e este ste caso sería vengarse.

Las prácticas sociales y culturales deben ser consideradas inicialmente en el texto, como representaciones de actuaciones sociales y culturales; si se entendemos que ellas actúan como el reflejo de las actuaciones discursivas de los sujetos. Estableciéndose así, el aspecto intratextual del texto escrito, en donde encontraremos que Edmond Cros (1992) refiere las representaciones en relación con texto escrito, así:

 Es la cadena de repr representaciones, esentaciones, o, má máss bien dicho, su ensamblado que se deja ver eneneleltexto, ttiene ienedelsutexto origen en pueden una o varias las representaciones que están interior y que ser dedenaturaleza discursiva.  Llegado a este punto debo precisar que no me refiero solamente a representaciones que puedan ser consideradas como intertextos. Estas últimas corresponden, a mi modo de ver, a representaciones reconstruidas por otras representaciones de que gobiernan la dinámica de la producción de sentido.  Pienso que en el marco de mis reflexiones el termino representación es  preferible en la medida que el intertexto, tal como generalmente se concibe,  puede ser considerado como una representación, mientras que una representación reconstruida por la escritura no es forzosamente un intertexto,  pero puede corresponder corres ponder

 

 

-a una práctica discursiva incluso a una práctica social . (Edmond Cros: 1992,

cap. I. Pág. 10)

Esta manifestación de Cros (1992), nos permite precisar una diferencia entre la representación social y las prácticas con relación a lo loss discursos internos del texto escrito.

 Es decir cuando profundizamos de representación en representación, dentro del texto, nos encontramos siempre con prácticas sociales, discursivas  y no discursivas. discurs ivas. Son prácticas sociales las que, pr presentes esentes desde el origen del texto, impulsan a canalizar el dinamismo de la producción de sentido.” “La escritura se institucionaliza a través de ellas.  (Edmond Cros: 1992, cap. I,  Pág. 105)

Podemos decir, que la representación funciona como un sistema de interpretación de la la realidad que rige las relaciones de los individuos en su entorno físi físico co y social; ya que determinará en parte sus comportamientos o sus prácticas. Así la significación de la representación social dependerá por lo lo menos en parte de las relaciones concretas que se verifiquen en el tiempo de una interacción.

La anterior afirmación, nos lleva a decir que en la obra literaria es importante tener presente un tiempo histórico o al menos un tiempo que permita precisar los discursos y categorías, que pueda tener el discurso mismo con el fin de determinar, no solo los sujetos sino también sus representaciones en los espacios temporales y físicos de la obra literaria. En los siguientes párrafos trataremos de establecer desde la delimitación del género de la novela de Fonseca los parámetros que nos permiten integrar la representación de los sujetos de acción en el texto, para así instaurar las prácticas; y por último acercarnos al concepto que nos interesa develar en  Agosto , 

 

 

el cual es la marginalidad y su incorporación en la novela en perspectivas de lo público y lo privado. 

La novela, como creación, se encuentra sumergida en la producción de la ficción, donde se resalta que los elementos que intervienen en ella como “hechos o actuaciones reales” aluden a la construcción de un mundo que sólo coexiste en la ficción, pero que en su afán por se serr verosímil se instala en la complejidad y similitud del mundo real o mundo de la vida. Partiendo de esta afirmación diremos que en la novela moderna como clásica, existen unos componentes que nos van a indicar los elementos que facilitad el entendimiento y desmembración del texto literario, posibilitando el acceso al estudio de sus estructuras.

En las diferentes clasificaciones de la novela vamos a encontrar que existen diferentes formas y géneros de abordarla; pero en este caso nos interesa, referir dos condiciones que se encuentran en los textos literarios y que se hacen más fuertes en unos; que otros. Esta clasificación alude a la expuesta, por Hubert Pöppel, (2001) en su el libro “La novela policíaca en Colombia”, en donde hallamos dos vertientes del género negro, una de ellas es el texto metaficcional el cual incluye los acontecimientos históricos, para construir un texto totalmente ficcional y el segundo que está ya implícito; es el texto ficcional que construye la verosimilitud del “Plot”.

En la novela vamos a encontrar que el espacio está determinado por la vertiente moderna, en donde los personajes se mueven en espacios diferentes. Dichos espacios en la novela están dados en el marco de lo urbano; Allí los personajes se presentan desde sus oficios (actividades a las que se dedican), produciendo, esto; de alguna manera, una clasificación de sus posiciones sociales, donde se determina también la representación social de los personajes, que en este caso nos interesa hacer manifiestos, a partir de los índices narrativos expuestos por  

 

Rodrigo Argüello, (1992) en su libro “ La Muerte del Relato Metafísico”. Pero en este párrafo más que hablar de los indicios nos interesa hablar de otros factores. Uno de los factores interesantes en lla a construcción de lla a novela, es la utilización de elementos narrativos para denunciar y criticar algunos casos específicos que están ocurriendo en el mudo de la vida. Esto sucede a forma de intertextualidad de la realidad del mundo de la vida, con el mundo de la ficción, y en donde encontramos instala la novela de Fonseca; dando así a la novela la inclusión de la crítica y la denuncia un carácter socio-político, propio no sólo del género negro en los años 40 y después de los designios de la segunda guerra mundial, sino que también se encuentra expreso en el tiempo cronológico, en el que se construye la novela Latinoamericana.

 Al referirnos al género de la novela, es importante retomar las discusiones, modernidad y postmodernidad en la novela policíaca. La discusión la tomaremos desde la perspectiva que nos expone el trabajo realizado por Pöppel (2001) sobre la novela policíaca en Colombia; en la disertación que realiza el autor encontraremos dos posiciones en las cuales se instala la visión de Derrida y Habermas con relación a la construcción del lenguaje “normal” y el lenguaje poético. En dicha discusión, Habermas tiene que demostrar la autonomía de la literatura, para así establecer desde Jakobson, que en la obra literaria quedan suspendidas las funciones normales del lenguaje en favor de una autorreflexión del lenguaje, para de esta manera “abrir mundo”. Habermas quien es uno de los últimos filósofos modernos nos instalarán en los actos comunicativos existentes en la novela policíaca; donde, advertimos que si, la novela policíaca busca mantener las reglas del género, esta queda reducida a la construcción de un mundo ficcional el cual es autónomo y paralelo al mundo de la vida.

La novela policíaca al nacer en la modernidad e ilustración, nos fija en otro aspecto que será de vital importancia para la propuesta de Habermas ya que se  

 

centrará en la razón. Habermas al hablar de “apertura de mundo” nos instala en los conocimientos o saberes que tienen los sujetos capaces de lenguaje, que se verán reflejados en la novela policíaca como trasfondo racionalizado del mundo de la vida; estableciendo de esta manera que la realización de actos de habla entre los personajes (que en este caso son los actores comunicativos) se dan a partir de la transformación de los hechos reales a los aficiónales.

Para la transformación de los hechos reales

a la ficción cabe precisar los

siguientes términos: La veracidad, la rectitud y verdad, propuestas en Habermas, con relación a los actos comunicativos con arreglos afines, permitiéndonos así, trasladar estos tres aspectos aplicados del estudio lingüístico a una pretensión de falsificación de la verdad (donde se busca la pretensión de validez de la verdad, como el uso correcto de la razón), la rectitud como la restricción de la moral correcta y de lla a veracidad subjetiva, en conjunto con la adecuación estética. Parto de estos tres elementos característicos de la ciencia racionalizada para volver a la novela y a la aplicación de estos tres elementos; que deben sustentar el arreglo de fines propuestos por Habermas en los actos comunicativos y que en la novela se encuentran presentes desde la construcción de los elementos estéticos y críticos.  Así, la “apertura de mundo”, que tienen los personajes de la novela, se dan,  justamente, porque alude a la creación de un mundo ficcional propio, que exige la construcción de las representaciones sociales y discursivas de sujetos del mundo real.

 Ahora, podemos decir que el hablar de postmodernidad en la novela policíaca es incierto; ya que la diferencia entre modernidad y postmodernidad se establece, a partir de la construcción del género; donde debemos señalar que la novela policíaca en su estructura clásica y moderna busca mantener las reglas del género negro. Mientras que romper con dichas reglas es construir una novela que se instala por fuera del género mismo. Y aunque esta incorpore los elementos  

 

postmodernos que exige la contemporaneidad, vemos en la discusión con Derrida, que la alteración en las reglas del género y la construcción de la novela policíaca por fuera de las ruinas comunicativas, nos llevan a la construcción de un mundo ficcional autónomo que de una u otra manera nos pone frente a la posibilidad de los actos comunicativos.

Cuando hablamos de comunicación, inmediatamente pensamos en dos o más sujetos que realizan el acto comunicativo, donde entendemos que los sujetos o individuos que realizan actos de habla pertenecen al mundo de la vida (o mundo real); partiendo de está primacía, trataremos de establecer las representaciones sociales que se instauran en el texto literario del género negro.

En el caso específico de la novela policíaca encontramos que la construcción del mundo

ficcional esta dado por la existencia de seres

capaces de producir

lenguaje, actos de habla y discursos; que conllevan los actos comunicativos en la producción que realizan los seres (personajes) de la novela policíaca. En la cual se encuentra implícita las representaciones sociales si estas se piensan como: Un producto de la relación con un objeto o sujeto, aunque este sea simbólico, imaginario o mítico-religioso. El contenido mental concreto de una representación social restituye simbólicamente algo perceptualmente ausente.  Lo cual “garantiza a la representación su aptitud para fusionar precepto y concepto y su carácter imagen” de (J (Jodelet, odelet, 1986). Este carácter figurativo de la representación es de inseparable su aspecto significante y simbólico, es a través de la representación como damos el SENTIDO Y CONFIGURACION a nuestras relaciones interpersonales y concepciones sociales en sus diversos dominios (moral, Psicológico, institucional, etc.). La construcción simbólica de la la realidad social efect efectuada uada mediante la representación presenta así mismo un fact factor or creativo en tanto que eell sujeto no sólo puede optar por diversas FIGURAS Y SENTIDOS de un fenómeno social sino que, y esto es quizá lo mas iimportante, mportante, puede cambiar diversos sentidos y desarrollar uno nuevo, el suyo propio… (Universidad Distrital. Cuadernos de investigación 2002.)

 

 

En la novela, como ya lo hemos mencionado, se construye un mundo ficcional, el cual es el trasfondo del mundo real. En la construcción del mundo ficcional se [restituye simbólicamente algo perceptualmente ausente]; donde entendemos que la novela, en su característica textual, funda la restitución simbólica a través de la escritura. Así la escritura se convierte en la representación y su característica textual establece la restitución simbólica a través escritura. La escritura entonces se convierte en la representación de los objetos y sujetos del texto ficcional que han sido tomados del mundo real.

La escritura en su característica de restitución simbólica nos permite en el texto delimitar las representaciones sociales; ya que en dichas representaciones se llevan acabo las prácticas sociales y discursivas de los sujetos, sin dejar por fuera la utilización de los actos de habla (y que en el caso particular de la novela son realizados por los personajes, los cuales en su representación de sujetos reales logran materializar lingüísticamente sus acciones.)

Bajo esta idea debemos tomar el tema de la escritura como la base primordial que sustenta el discurso en los textos literarios, además de establecer el poder que ejerce sobre todo el texto; por encontrarse en ella la materialización lingüística, que, por ente nos pone frente a los discursos y por último a los ideosemas e ideologías existentes en el texto literario.

En el capítulo “la literatura como sistema modelizante secundario y como forma ideológica ” Edmond Cros (1983), toma a Pierre Bourdieu, en su teoría sobre la organización de los bienes simbólicos, en donde nos presenta de forme clara como el arte no es social debido a los modos de producción y sus relaciones, incluso refiere que el origen de las temáticas sociales en la obra literaria, no la hacen social; pero lo que hace social el arte y en éste caso la lit literatura eratura es el carácter puesto en la posición antagónica que se debe adoptar frente a la sociedad como efecto de  

 

una posición autónoma del mismo arte, permitiendo así dar transparencia en si misma a la obra de arte, dejando de un lado la calificación de “socialmente útil” y por último se alude que el arte, por el simple hecho de existir, crítica a la sociedad, y en esta crítica se forma una identidad y posición del pensamiento.

Es así como se instaura la importancia de la escritura como medio que trasciende de los los hechos comerciales (productivos) restringidos a una posición productiva comercial, donde el autor tiene una postura autónoma de la conciencia escritural de la obra literaria literaria iniciada con la aparición de la industria a principios del siglo XIX.

Con la nueva “democratización”; en el texto escrito, se introducen de igual manera una nueva forma del arte que en el caso de la literatura involucra directamente la forma forma estética y ética de abordar el texto no sólo en su lectura sino también en su escritura; de está manera, aparecen la teoría sobre los “Sistemas Modelizantes”, en los cuales hallaremos que la escritura es el lugar

donde se puede distinguir el valor semiótico de la obra. De esta manera, Cros (1992) nos indica que la autonomía dada en la escritura se da “en la medida en que no está ya determinada por lo que ttiene iene que decir, sino preocupada por la manera de decirlo;  saberse fuera de todo tod o circuito económico. ” (Cros: 1992, cap. I, Pág. 24)

El cambio de la perspectiva en los textos escritos de la época nos lleva a pensar que de igual forma, las prácticas cambian ya que surgen nuevos modelos de representación, lo lo cual quedaría así según Cros (1992): “La representación de la  práctica social por la práctica literaria se convierte evidentemente en un efecto ideológico.”  (Edmond Cros: 1992, cap. I, Pág. 40)

 Así, la literatura se constituye como una práctica social, en la medida en que intervienen en su producción, la selección de múltiples temáticas y aspectos; los cuales son iidentificados dentificados en la construcción escritural que pasan a través de los  

 

filtros económicos, políticos, sociales y culturales; que el autor en su producción ha logrado concretizar a través de la materialización lingüística (escritura). Pero esta perspectiva tiende a ser diferenciada por algunos autores como lo son Etienne Balibar y Pierre Machery, cuando definen la práctica social como:  “Una  forma Ideológica”, (  Althuser: Althuser: 1984) que se realiza a través de ciertos Aparatos

Ideológicos de Estado, (AIE.) en forma de prácticas determinadas. Estos autores logran demostrar, está teoría sirviéndose de los trabajos de Renèe Balibar y Dense Laporte, en donde se manifiesta que estas prácticas lingüísticas están estrechamente relacionadas con aspectos como: la escuela, lla a apropiación de la lengua en cuanto a su habla y escritura, es decir las formas estándar y no estándar de toda lengua. Además de aspectos sociales, económicos, políticos y ante todo históricos que de alguna manera son la gran vértice que limita las características ideológicas y escriturales del texto literario.

La definición de la literatura como práctica ideológica se fundamenta en Francia contemporánea, en cuanto es articulada sobre un AIE. (Aparato Ideológico de Estado), específico que permite determinar el discurso.

De está manera podemos decir que en la novela, se encuentra la representación del AIE., a través de las instancias del poder las cuales están determinadas en el aparato administrativo y político (topo y contexto de la novela), donde irrumpen instancias policiales y jurídicas. El aparato económico, donde, se encuentran presentes las representaciones empresariales que a su, vez, se representa por el aparato político, (como son los congresistas y ministros). Todos estos, aparatos presentes en la constitución del aparato social y cultura. Nos ubican no sólo, en el topo, sino también; en el evento histórico. Con estos rasgos presentes en el texto literario, tratamos de precisar la importancia del AIE., en el texto permitiéndonos establecer los discursos expuestos en circunstancias de representaciones y prácticas sociales y culturales.

 

 

La gráfica de los Aparatos Ideológicos de Estado en la novela de Fonseca, quedaría, así:

 Aparato político

 Aparato económico

Empresarial

Aparato administrativo

Comercial

Policiales

Industrial

Jurídicos

Orden Jurídico  Aparato Social y Cultural

Caída de una dictadura, reflejan el deterioro social

Con la delimitación de los AIE en el texto literario, cabe precisar bajo que óptica se limitan los términos de privado y público.

El aspecto de lo público es definido desde la sociología, como: “Área social de la comunicación que puede ser definida por cuales quiera de los intereses comunes que dan lugar a la fformación ormación de los grupos; en cuestiones ajenas a tales iintereses ntereses comunes que dan lugar a llaa unidad

de sentimiento y opinión.”   (Fairchild Henry Pratt: 2004, Pág. 276) Esta

definición, en relación con lo privado sería, el grupo que comprende individuos ajenos al círculo de las relaciones o familia íntima.  

 

Para el caso particular, de la novela  Agosto , cabe precisar lo público desde la siguiente definición: “Sujeto a examen por desconocidos, por sujetos que no pertenecen al círculo de la intimidad, concerniente en muchos respectos a un público que tiene acepción variable que se refiere al pueblo. ( Mitchell Mitchell G. Doncan: 1986, Pág. 1426); con esta

definición se pretende abordar el texto literario, entendiendo lo público desde esta perspectiva que es tomada desde la sociología, y donde se abre paso al factor político que reina en la obra literaria de Fonseca.

La vida política, en relación a los aspectos privados y públicos denota la idea de pueblo, conglomerado, acceso a…, en contraposición con el aspecto privado las ideas asociativas que surgen son: Oculto, secreto, íntimo, discreto, éstas asociaciones son importantes en cuanto apropian espacios en los discursos y actuaciones de los personajes del texto literario, permitiéndonos identificar no sólo indicios ideológicos, sino también los tipos de discursos temáticos de la obra en relación con una o varias temáticas.

Respecto a las ideologías, tomaremos la visión teórica que tiene Edmond Cros (1983), la cual se define como Ideosemas; ahora bien sí, en las prácticas sociales se encuentran presentes los discursos es importante retomar, que:   En todos los casos citados las prácticas sociales se manifiestan por la reproducción de normas de comportamiento, valores, de estrategias, de un  Aparato de Estado o un Aparato Id Ideológico eológico de Estado; o incluso en el caso ddee los ritos, por la producción de las funciones que esos mismos ritos cumplen en el seno de la colectividad. Esas mismas prácticas pueden mostrarse igualmente en los textos bajo la forma de los discursos que producen; a estas  prácticas las llamamos llamamo s discursivas.  (Cros: 1992, cap. I, Pág. 11)

Debemos resaltar así la importancia de las prácticas discursivas como parte integral de las representaciones e interacciones de los sujetos a la hora de hacer

 

 

uso de la comunicación; en las prácticas discursivas discursivas se encuentran instalados los los ideosemas.

Los ideosemas son llamados por Cros (1992), como: “Llamo, en efecto, ideosemas a las  sistemáticas de estructuración que co conduzco nduzco del an análisis álisis del fun funcionamiento cionamiento de pr prácticas ácticas so sociales ciales  y discursivas.” (Cros: 1992, 1 992, cap. I, Pág. Pá g. 15)

Los ideosemas, entonces, según Cros (1992) vendrían a ser las estructuras ideológicas del texto literario, de las cuales cuales deben aparecer en forma de semas como unidades de significado gramatical;  permitiendo de esta manera, identificar su presencia en la construcción misma de las prácticas sociales y/o discursivas.

En consecuencia con la anterior observación, Edmond Cros (1992) escribe que se debe sugerir en el análisis del funcionamiento ideosémico lo que al parecer, caracteriza la producción cultural estableciendo, que: Si el texto procede directamente de la manera como se articulan las  prácticas sociales y/o discursivas, la dinámica del encadenamiento de las estructuraciones – las cuales tienden a desconectarse del conjunto  semiótico o temático del cual proceden – el juego afinidad o contigüidad de nuevas estructuraciones, parecen liberar a la escritura no solamente del  sujeto que supuestamente la produce, sino también de una demasiado estrecha dependencia ideológica. ¿Amenos que este mismo mecanismo no opere a la manera de una mascara? En efecto es la estructura la que permite codificar el mensaje, guardado en la memoria y permitir más fácilmente su reproducción. La estructura no sería simplemente el instrumento de la  semiosis. A través de lo que podemos percibir de la forma como funciona en el texto de ficción, aparece como la condición necesaria de toda comunicación intersubjetiva y toda actividad del imaginario.  (Cros: 1992, cap. I, Pág. 19.) 

El autor en este aparte introduce una nueva prioridad en el estudio del texto literario donde la escritura tendrá un valor primordial para la recuperación  

 

tanto de los hechos de la historia como las ideologías introducidas en el discurso del texto literario.

 Así, la escritura instaura la complejidad de los discursos discurs os puestos en los personajes y cuya relación, expuesta por Roland Barthes (1983), nos permitirá identificar las características propias de la novela. Barthes manifiesta que:  La escritura siendo la forma espectacularmente comprometida con la  palabra, contiene a la vez, por una preciosa ambigüedad, el ser y pa parecer recer ddel el  poder, lo qu quee es y quisiera que ssee crea de él: una hhistoria istoria de las escrituras de  policíacas constituiría por lo tanto la mejor de las fenomenologías sociales. (Roland Barthes: 1983, Escrituras Políticas. Pág. 32)

Esta reflexión sobre las escrituras policíacas nos reafirma la inclusión de las fenomenologías sociales en el texto escrito, constatando así la elección del texto escrito que, en este caso, es  Agosto   y el cual se ubica bajo las prácticas sociales de los elementos públ públicos icos y privados, que conllevan una mediación en las prácticas.

Partiendo de la teoría que las palabras en su significado son unívocas, debemos decir que: El lenguaje trasciende en la escritura, las palabras son fijas mientras, el lenguaje con relación a la escritura es totalmente contrario de la palabra; en cuanto la escritura permita ir más allá en el lenguaje. ”Se desarrolla como un germen y no como una línea, manifiesta en esencia y amenaza con un secreto, es una contra-comunicación íntima.”  Esta relación es considerada por Barthes (1983) como una pasión del

lenguaje que se encuentra inmersa en la escritura literaria, y en donde

 pude ser la amenaza de un castigo como las escrituras policíacas: la escritura esta encargada de unir un trozo de la realidad de los actos y llaa identidad de los fines. Por ello el poder o la sombra del poder siempre acaba de instruir una escritura axiológica, donde el trayecto que separa  

 

habitualmente el hecho de valor esta suprimido en el hecho propio de la  palabra, donde a la vez como descripción y como juicio. La ppalabra alabra se hace excusa (es decir “otra parte” y una excusa). (Barthes; 1983. Pág. 27)

 Así, entendemos la escritura como el pilar fundamental que une la realidad con la construcción del mundo ficcional, por medio de la palabra; en donde el lenguaje en su función poética o “normal”, propio de la literatura y particularmente de la novela policíaca, nos ponen frente a la ideología característica de los personajes que se encuentra tomada de la realidad, ya que provienen directamente del creador o autor.

El lenguaje, al ser poseído por el escritor, debe conversar con un pasado, una historia la cual se teje en una tradición en el tiempo y se reproduce de forma individual y colectiva, como el caso del que escribe (Escritor-Autor), de esta manera el lenguaje tocado y hecho por la realidad pasa a recrear, la necesidad del autor al momento de escribir y con ello queda implícito su mundo, pensamiento y acción.  Así el dialogo entre la tradición y la escritura constituyen la materia de la novela, que solo es heredada del lenguaje puesto en la palabra. (1983) nos indica que: [ En la escritura clásica se manifiesta ceremonialmente la implantación del autor en una  sociedad política particular  ],  (Barthes; 1983. Pág. 28); es por ello que no podemos

aislar la historia y las ideologías de la escritura las cuales están presentes en el texto de Fonseca.

Si bien, la escritura está constituida en el texto escrito por el discurso, es importante definir el discurso como elemento que nos permite identificar los ideosemas de los sujetos y que en este caso aluden a los personajes de la novela de Fonseca.

 

 

 Al leer a Rubem Fonseca, es leer a un autor que tiene conciencia d de e los procesos realizados en su país en cuanto a la situación histórica, política y social del Brasil, y que en el caso de  Agosto, se encuentra situada cronológicamente en los años treinta, cuarenta y cincuenta, estableciendo así en su novela, la importancia de algunos fenómenos históricos, que a la par con la construcción de novela policíaca nos ponen sin dudas frente a una novela de ficción que se funda bajo la distancia del tiempo, permitiendo de esta manera contemplar las situaciones caóticas de la sociedad; situaciones que agudizan en los campos de la política y económica, además de la ética-moral de la sociedad en general, de una dictadura, que se reseña del texto literario como el elemento o suceso generador de la decadencia del estado.

En la novela nos va a interesar hacer expresas las “prácticas marginales”, entendiendo, que la práctica es una ejecución de los sujetos capaces de lenguaje y por ente de comunicación; esto nos pone nuevamente frente al tema de la construcción del “mundo de ficción autónomo” planteado por Pöppel (2001), en su libro sobre la novela policíaca. Ahora bien, vamos asumimos que las prácticas sólo se ejercen en el marco de la acción humana y que de esta manera queda claro que estas se ejercen en un contexto y campo social que va ligado directamente a la representación social de las mismas.

El concepto de marginalidad lo entendemos como las prácticas que se encuentran en el límite o por fuera de la norma, asumiendo que el marginado en su representación social se encuentra en  Agosto , ubicado desde las característica que aportan los índices o marcas narrativas, que en últimas son las que nos permiten establecer el sentido de marginal; ya que se asume que la transgresión de las normas éticas y judiciales (en el caso particular de la novela de Fonseca), apuntan a la construcción de las “prácticas marginales”. Teniendo en cuenta que la novela policíaca es un trasfondo de la realidad y que en la materialización  

 

lingüística (o sea la escritura), se efectúan representaciones, que conllevan a la restitución simbólica de los objetos o sujetos.

Los índices o marcas narrativas serán un instrumento fundamental para detectar y construir la representación y función semiótica de los personajes, los objetos, los espacios y la temporalidad en la novela de Fonseca, facilitándonos de esta manera; identificar mediaciones entre lo público y lo privado, como las “prácticas marginales” sin dejar por fuera fuera que las marcas o índices se acentúan en la medida que se construyen los discursos, actos de habla y en este caso particular los actos comunicativos al interior del texto.

 Así, se establece que a partir de los discursos, actos de habla o actos comunicativos de los personajes se estiman las mediaciones ya que la realidad y el texto de ficción manejan unos niveles de tolerancia en cuanto que, el texto escrito está estructurado por la escritura que conlleva la necesidad de un lenguaje, es claro que lo “real” solo pude existir por el papel fundamental del lenguaje y con esto me refiero directamente a lo que alude Humberto Eco en   el Tratado de Semiótica General   [la existencia del mundo humano solo se da en los limites del lenguaje]; 

pero cómo establecer tolerancias que están mediadas por un mismo hilo que lo conduce como es el lenguaje?, para responder esta

pregunta iinicialmente nicialmente

debemos revisar que entre lo ”real” y la representación de esa realidad está presente la escritura en la cual se instauran los discursos que sobre esa realidad se quieran precisar como es el caso de la novela de Rubem.

En relación con el anterior párrafo se encuentra un problema inicial, el cual, está sujeto en la novela a la naturaleza de la mediación. La cual ha sido establecida desde los índices narrativos, que se producen en los discursos, y que nos permiten identificar la transgresión de las normas éticas y judiciales; como las  

 

“Prácticas Marginales”, incorporando a estas, la representación social que se deriva de las prácticas sociales que conllevan a la vez la práctica discursiva y comunicativa que nos interesa mirar en los personajes de la novela.

 Ahora bien, hemos precisado la mediación en el texto escrito,

donde;

consideraremos la importancia de los personajes como los ejecutantes de las acciones y a su vez de los discursos. Tomando en cuenta que son ellos los que realizan los actos, y que sobre ellos recaen también los actos comunicativos y las acciones que asemejan el mundo de la vida, entonces asumimos que son ellos quienes producen y reproducen las “prácticas marginales”.

En la novela y en especial, la que se asume desde el género negro donde se articula Agosto , buscamos, construir e identificar las marcas “marginales” de desde sde las prácticas que convergen en las representaciones sociales y discursivas de los personajes, asumiendo que, la escritura junto con los índices narrativos son nuestros instrumentos primordiales para construir y presentar el siguiente trabajo, donde; el argumento se mide en la capacidad de demostrar que las “prácticas marginales” como trasfondo de la realidad del mundo, sirven de mediación entre dos mundos (público- privado) que convergen en el mundo real de los seres humanos y que se representan en el mundo ficcional para ponernos frente a la representación simbólica de las cosas y los sujetos.

Hemos realizado la constitución y precisión de algunos conceptos vitalicios para el desarrollo del trabajo; pero aún no hemos tomado el concepto del género literario, al cual pertenece la novela de Rubem Fonseca (  Agosto  ), como tan poco hemos Agosto ), precisado las perspectivas del autor y su importancia. Para instituir dichas relaciones es necesario retomar los conceptos expuestos en este párrafo y así establecer nuevamente la importancia de las ideologías dentro del texto,

 

 

asumiendo así, la importancia e influencia del género negro en la producción discursiva que tratamos de especificar en este trabajo.

En la literatura existen diversas categorías que nos permiten la clasificación de los géneros, en este caso hablaremos del género negro, o novela policíaca; de donde Rubem Fonseca se nutre para crear sus novelas. Es decir él no escribe novela

policíaca en el sentido estricto del género, el escritor brasilero lo que hace es utilizar componentes que le permitan desarrollar elementos pertenecientes al género. Dentro de los elementos que tenemos que destacar del escritor está la postura y representación política de un país que en este caso, está representado bajo la óptica de la realidad del Brasil de los años 40 y 50; es así, entonces que tenemos que precisar, que justamente bajo la influencia fuerte que le imprime el brasilero a su obra esta presenta la intención de romper, de alguna manera, con los convencionalismos establecidos en la novela negra o policíaca en el término clásico de su construcción.

Hemos establecido de lo anterior, que uno de los puntos clave para entender el escritor brasilero y su narrativa que en el caso de Agosto , es especificar cuál es la importancia de su obra desde la construcción y reglas que rigen el texto en general.

 Algunos de los elementos estructurales pres presentes entes en  Agosto, por ejemplo, son: la intriga, el crimen y la investigación judicial, Ardiles que se tejen en un a atmosfera política caótica. Bajo los anteriores aspectos mencionados, como componentes presentes en la construcción de  Agosto , tenemos que decir que son justamente estos elementos los que facilitan que podamos, catalogar la novela de Fonseca como perteneciente al género negro. Determinando al mismo tiempo, que el género negro o novela policíaca actúan sinónimamente, y que en la novela del  

 

brasilero se distingue como elemento fundamental la construcción del mundo político plagiado del mundo de la vida.

 Agosto ,  es

una novela que gira entorno a la investigación del asesinato de un

empresario de Rio de Janeiro; en donde se establecerá un referente muy importante para la novela, ya que en Rio de Janeiro se presenta una atmósfera política, que queda referenciada en el texto como una manera de revelar la realidad de la historia brasilera, una década antes de la dictadura de Getúlio Vargas. Es así como vemos una sociedad caótica, que se devela a partir del

atentado sufrido a un periodista: Carlos Lacerda, en el atentado se dará muerte al mayor Vaz, generando este hecho una convulsión en la ciudad. A la par con éstos dos sucesos encontramos la muerte del comisario   Mattos  y Getúlio Vargas, y sin dejar por fuera que en la novela se construye fuertemente de lo

privado; así para Mattos está se encuentra en la construcción de dos amores que lo ponen en relación directa e indirecta con su investigación sobre la muerte de Paulo Gomes Aguilar.

En términos de lo público, debemos mencionar que unos de los rasgos fuertes de este aspecto se da en la importancia de los medios de comunicación, de los cuales se vale el autor para hacer explícita su presencia e importancia en el texto con relación al aspecto de lo público.

En lo referido de la novela de Fonseca ya hemos avisamos de dos vertientes importantes para revisar, de las cuales hemos dicho también que están asociadas al género negro. Estas dos vertientes se constituyen, inicialmente, por el carácter de los sucesos reales, con los ficcionales, que generan una construcción verosímil que se estima no sólo en la novela si sino no también en el género negro. Nuevamente retomaremos a Hubert Pöppel (2001) y su libro “La novela policíaca en Colombia”,  

 

para aproximarnos a la importancia de los elementos tanto del mundo real como los del mundo ficcional.

La ficción como elemento fundamental de la novela policíaca, permite que la construcción de la misma se de a través de la autorreflexivilidad o pequeñas insinuaciones del género (metaficciónalidad). Estos elementos consisten en ser identificados por los índices o marcadores fuertes del texto, los cuales serían en  Agosto ,

(a forma de ejemplo), la relación obsesiva del comisario Mattos con el

libro de “Código Penal”; el cual actúa como índice en la novela. El texto que alude a la norma penal en este caso específico es un índice

que reflexiona

simbólicamente en dos sentidos el primero sería: autorreflexivilidad del género negro, que se asocia en este caso a la cita textual de libros que aluden al género negro de la vida real. Y el segundo sentido gira en la relación del “Código Penal”, en su sentido estricto, que trasciende significativamente, como una advertencia silenciosa de la ausencia de la norma; si establecemos esta interpretación en el sentido de lo justo y lo injusto.

En la novela policíaca ya habíamos mencionado que esta, se caracteriza por establecer, unas normas específicas, que como vemos se transgreden para formar en la novela de Fonseca una especie de novela policíaca hibrida en cuanto asume las normas básicas del género, realizando una introspección en temáticas de carácter complejo y circunstancial como es el caso particular de  Agosto ; pero que al mismo tiempo son replanteadas sin dejar por fura el sentido principal de la novela policíaca (la verosimilitud de Plot).

En la segunda vertiente para revisar en la novela de Fonseca y que aplica al género; es la cuestión política, sociológica y metaficcional. En donde nos resulta

 

 

interesante el orden y desorden que se plantea y que son propios de la novela policíaca.

En el aspecto político, como ya hemos destacado anteriormente, es un aspecto que reside en el valor fundamental de la construcción misma de la novela de Fonseca para nosotros; ya que en este aspecto residen los elementos que nos permiten caracterizar y delimitar las categorías que instauran los límites de nuestra investigación. En el aspecto político, estructuraremos no sólo lo que refiere a las ideologías, sino también a los elementos que trascienden más allá; pues en ellos se estipula los diferentes roles representativos de los personajes, permitiéndonos establecer las instancias (privado y público), reforzando así la importancia de los discursos como nuestro mayor elemento de análisis en el texto.

Recordemos que en la historia de la humanidad los mejores hechos de intriga, traición, odio, amor y cualquier sentimiento humano, se ha gestado en la obsesión propia del poder la cual se ha visualizado bajo las perspectivas del que tiene el poder y del que no lo tiene (sometido Vs. sometedor.), ahora bien; bajo esta óptica del sometido y el sometedor tenemos que retomar lo que hemos precisado como prácticas marginales, de las cuales establecimos dos categorías y de las que diremos que una de ellas es la ruptura de lo convencional y la otra el sentido de exclusión; el cual se rige, en este caso, bajo la influencia del carácter político que maniobra la representación social de los personajes, poniéndonos entonces en conexión con lo que entenderemos como una visión, no sólo de la importancia del discurso y su focalización (quien emite la exclusión o la evidencia y sobre el sujeto que recae la acción o dicha exclusión), sino que también establece el aspecto sociológico que está dado por una introspección de los sujetos que evidencian y constituyen los discursos mismos y, que nos ponen frente a la posibilidad de análisis

de las acciones, estableciendo así una importancia

relevante en los índices o marcas del text texto o que nos permiten identificar

y  

 

presupuestar los aspectos fí físicos sicos y sicológicos de los personajes, instituyendo así los personajes en la novela negra, cumpliendo unas funciones específicas las cuales quedarán en  Agosto   sujetas a las características particulares como son construidos en el imaginario social.

Desde los inicios de la novela o el género negro, vemos cómo en éste, se nos presentan los personajes con unas funciones específicas que permiten identificar el fin y la construcción de la trama dentro de la novela policíaca; así el asesino es tomado en la novela policíaca como el perturbador del orden social, fundando una regla básica del caos, en la cual el orden impera como desorden y el desorden como orden. Es por esta razón que en el caso de lla a novela policíaca de Fonseca encontramos que la búsqueda del orden entendido convencionalmente se da bajo la ojeriza de la violación a la norma del orden ya que el fin de la construcción de la novela policíaca es instituir el orden convencional, del cual queda determinado que el detective es el encargado en este caso de develar los problemas sociales, que en el caso particular de Agosto  se  se establecen desde la posición contraria ya que el elemento político y social en el que se desarrolla la historia nos demuestra que la presencia y representación del detective genera una transgresión a lo señalado en el funcionamiento de la sociedad, en cuanto a los roles que desempeñan los personajes; es por esta razón que la presencia del asesino se establece en el lector como el orden del mundo ficcional.

En relación con lo anterior encontramos que, de acuerdo a la descripción que refiere directamente a los personajes de Fonseca, se encuentra presente la concepción del periodista Romeo Tello Garrido; quien refiere lo siguiente: Sus héroes se caracterizan por poseer una visión crítica de la vida social, lo que da cómo resultado la reivindicación de la soledad o inclusive, de la misantropía. Suelen ser además personajes que poseen una sensibilidad aguda independiente del rol social que desempeñen… (Romeo Tello Garrido: 1998. Pág. 25)  

 

Tomando la afirmación que hace Tello Romeo, podemos entender cómo funciona el personaje principal, en el engranaje de la novela.

 Ahora bien, si revisamos el personaje encontramos que los signos mencionados por Romeo se encuentran presentes en él, pero cabe develar otro aspecto importante de este personaje, y es con relación al caos y al orden.

La visión de la novela policíaca clásica tiende a cambiar, a principios de los años veinte y finales de los cuarenta, en cuanto las pretensiones de las  tendencias  Norte Americanas marcan pausas para fijar nuevas perspectivas, podríamos decir que el escritor brasilero se instala en estas perspectivas si asumimos que él viene de la tendencia Norte Americana, es así como empieza a entrar la realidad del mundo circundante en el mundo ficcional de la novela policíaca. Pöppel (2001) describe este fenómeno en la novela desde la siguiente perspectiva:   El género se vuelve violento, v iolento, sórdido, negr negro. o. El asesinato ya no interrumpe el orden, sino que representa el desorden de la sociedad. El detective ya no investiga ordenadamente con la mera razón, sino que se vale de métodos violentos que corresponden al estado de la sociedad. La solución ya no  significa el retorno al orden, sino más bien una breve interrupción del desorden.  ( Huber  Huber Pöppel: Pöpp el: 2001. Pág.)  

Bajo esta óptica encontramos que, en Agosto, se utilizan elementos que constatan la perspectiva de Pöppel (2001); valiéndose del caótismo político y social, el escritor brasilero nos narra una historia, que en su estética propia proporciona una dimensión de los aspectos sociales que llevan a la privacidad de los personajes, teniendo en cuenta que la individualidad y sus acciones acuden en el texto como una máquina, que atenta contra la concepción de los discursos deterministas.

 

 

Es así como encontramos, a  Agosto, como una novela  de alto contenido político, donde el crimen y la investigación del mismo, revela, que la aproximación con el género negro sólo se da en la cercanía de la violación de las reglas de las novelas policíacas clásicas. Con lo que establece que la irrupción en la violación de la norma de la novela policíaca se da en la construcción estética característica del escritor Brasilero.

Dentro del aspecto sociológico hemos planteado la importancia del aspecto físico y sicológico de los personajes para la construcción de la práctica marginal; pero en este aspecto, nos falta caracterizar elementos que van a permitir delimitar los personajes y sus características principales; uno de los elementos que utilizaremos como delimitador, será el espacio en el que se producen los discursos comunicativos, los cuales estarán marcados por dos aspectos: el primero de ellos es lo que referiremos como el espacio de la intimidad y, el de la confidencialidad; el cual es establecido desde la teoría que propone Mieke Bal y que alude a: [la confidencialidad como una relación comunicativa en los personajes ], poniéndonos

nuevamente, en el sentido estricto del discurso y la comunicación, que se producen en la novela negra o policíaca que ya hemos referenciado desde Huber Pöppel (2001).

El otro aspecto es una categoría que sale del espacio mismo ya no como marca de intimidad y confidencialidad si sino no como espacio de “lugar”, donde se reproducen las acciones o diálogos di discursivos scursivos de los personajes.

Retomando la importancia del discurso, en nuestro análisis de estudio, estableceremos además de lo ya referido, elementos que son importantes para nosotros, por permitirnos profundizar en aspectos tales como: la importancia de los medios comunicativos donde tomaremos como referente teórico para el  

 

análisis a Teun A. Van Dijk (2003), con su libro “ Racismo y Discurso de las Élites”,  ya que en este texto se encuentra especificado como los elementos de tipo político y público son los que se encuentran atravesados en los discursos de tipo comunicativo, en donde los medios de comunicación instauran dichos discursos bajo la óptica del poder, legitimizando en los lectores discursos de élite. Dichos discursos los analizaremos en el trabajo posteriormente, con el fin de instituir el factor público y la marginalidad en la categoría de exclusión o discriminación presentes en la novela.

El último aspecto que nos falta por revisar es lo metaficcional, del cual podemos decir que es uno de los valores agregados que tiene la novela de Fonseca; además de gestarse desde el nacimiento del género mismo.

La metaficciónalidad consiste entonces en realizar una combinación de hechos históricos con la ficción, en donde cabe revisar que el aspecto histórico como hecho será de un valor significativo en la novela  Agosto   ya que justamente en la construcción de la narrativa aparecen elementos que confirmarán,

que el

referente social real del hecho histórico se funde en el desarrollo de la ficción como sucesos que construyen la novela en su trama; estableciendo así, que los nombres y los acontecimientos políticos se asemejan con gran verosimilitud con la realidad del Brasil que nos refiere Fonseca en su novela.

Otro aspecto que encontraremos presente en el desarrollo del hecho histórico será la inclusión de los medios comunicativos masivos, que facilitan identificar los diferentes aspectos de dicha realidad (en la novela), y que trataremos de referenciar no solamente desde el sentido que nos sugiere la colectividad; sino también sobre los discursos que los medios proporcionan como elementos que constituyen el imaginario de una sociedad.  

 

En el libro “ Publicidad y hegemonía, Matrices ddiscursivas” iscursivas”  de Eliseo Colón Zayas (2001), vamos a encontrar que el autor al referir el tiempo de la modernidad nos pone de inmediato frente, a uno de los aspectos que nos interesa revisar en este aparte sobre el colectivo y los medios comunicativos.

Eliseo (2001) refiere que el colectivo se instaló en el mecanismo que generaban los medios de comunicación a través de la publicidad; donde; Converge fundamentalmente una retórica basada en una doble economía.  Primariamente se orienta hacia fuera, -el público de- lo público. Desde esta  perspectiva, guarda gua rda un estrecho vínculo con lo político, qu quee se logro a través de la problematización de los códigos de comportamiento y subjetividad humana, permitiendo la marginalización de aquellas  partir de las cuales la esfera pública de la “mo “modernidad” dernidad”formas burguesa burgu de esa conducta delimitó sua territorio. (Zayas Colón: 2001. Pág. 131.)

Es así que lo que refiere Eliseo, nos pone de antemano sobre aviso, de la importancia de los medios de comunicación; y del carácter marginal que se encuentra implícito en ellos. De notando una vez más lo que nos da a entender el texto de Van Dijk (2003).

Recordemos entonces, que en segundo capítulo, la tercera parte del libro,  De los Medios a las Mediaciones  de Barbero (1987) , encontramos cómo los medios

comunicativos se dan en dos instancias; en donde la primera está relacionada con las prácticas discursivas de los políticos (clases sociales con poder) en Latinoamérica, estableciéndose así, un control sobre las actuaciones del colectivo (es decir el carácter manipulador del estado a través de medio Comunicativo), con el fin de movilizar el aparato político e ideológico, a través de la esfera pública de la denuncia, motivado por el control del poder quien efectúa en este caso como dueño del discurrir simbólico e ideológico de una sociedad determinada.  

 

El segundo momento que nos refiere Barbero, con relación a los medios de comunicación, en la cultura Latinoamericana, veremos que éste apunta a una teoría de la información que está dada por las teorías positivistas, donde las ciencias exactas expondrán sus más grandes elementos de demostración.

 Ahora bien, bajo los preceptos de Barbero (1987), encontraremos que, en Agosto , existe cierta correspondencia con ese primer momento; en relación con los  medios de comunicación, los cuales están en la novela referenciados bajo la instrumentación que se le da a Radio y  Prensa, como actores que ejercen la influencia simbólica del poder. 

En relación con lo anterior encontraremos el siguiente enunciado de Barbero (1987): De la amalgama de entre comunicacionismo y denuncia lo que resultó fue una esquizofrenia, que se tradujo en una concepción instrumentalizada des los medios de comunicación, concepción que privó a estos del espesor cultural y materialidad institucional convirtiéndolos en meras herramientas de acción ideológica. Con el agravante de reducidos a herramientas los medios se convirtieron en moralizantes de acuerdo a su uso. (Barbero: 1987,  pág. 131)

En las características dadas por Barbero (1987), se entiende entonces, porque en la novela de Fonseca aparecen los medios comunicativos. Estos se encuentran en la novela referidos en dos corrientes políticas, las cuales; como veremos, se relacionan en forma directa con lo que nos retrata Eliseo (2001).

 

 

En Agosto  encontraremos   encontraremos que los medios efectivos de información son la radio y la presea escrita, y en los cuales veremos que se institucionalizan dos vertientes ideo-políticas, las cuales aparecen en el texto, identificadas de acuerdo a los partidos políticos más representativos de la época, y de los cuales notaremos en el desarrollo del trabajo, cómo estos posicionan discursos que van a generar el desorden social, agudizando la crisis cr isis política, económica y social.

Bajo estos antecedentes tanto históricos como intertextuales de la realidad, en la novela, veremos cómo la prensa escrita refiere dos corrientes políticas que aparecen en la novela como elementos instrumentalizados de un aparato político, apuntando así a nuestro interés de estudio, que en este caso, es ver su influencia en la organización social; la cual al ser alterada produce crisis so social cial y con ella el caos; dando las características principales que hemos tomado de Barbero (1987). Como hemos visto, el género negro se nutre de los hechos humanos en el trascurrir del mundo de la vida, permitiéndonos establecer a través de la ficción un mundo de posibilidades que convergen en el orden y desorden de las sociedades modernas, y que Rubem Fonseca logra de manera magistral, esbozar en sus novelas y cuentos, permitiéndonos encontrar en la literatura brasilera, una opción de lo que conocemos como novela negra o policíaca.

Las prácticas marginales, como un acto mediador entre lo privado y lo público

 

 

En la literatura, como en varias expresiones del arte, encontramos que los discursos representan no solo las ideologías de sus productores; sino que también; nos ponen frente a diferentes aspectos, como son por ejemplo, los contextos y los imaginarios sociales, en los que se efectúan dichos discursos.

En la literatura, por ejemplo, vemos cómo las representaciones sociales de los discursos y los personajes se crean en el margen de la representación; estableciendo que las representaciones al interior del texto, no tienen que darse necesariamente como intertextos, facilitando de esta manera entender que la práctica actúa en el texto, como una mediación que se instaura por medio de la escritura (Barthes: 1983).

En este capítulo, veremos que las prácticas y representaciones, se disponen en el texto de tal manera, que nos permiten conjeturar que en su punto de encuentro está implícito el aspecto ideológico (presente en el texto): partiendo de esta focalización en el texto tenemos que pensar en la importancia de los personajes que intervienen en la narración. Si asumimos que en la novela se desarrollan relaciones entre los personajes; que nos llevan a pensar en la producción y reproducción de discursos. Instalándonos así; en nuestro objeto de estudio, el discurso. Ya que es justamente, en la materialización del mismo que encontramos las relaciones de comunicación y, también la reproducción de las tendencias ideológicas que transversalizan el texto. No podemos ol olvidar vidar entonces, que en el cumplimiento de lo ideológico se encuentran presentes las representaciones de las prácticas sociales, culturales y discursivas. Hemos establecido inicialmente, al comienzo de éste trabajo, los parámetros sobre los cuales desarrollaremos el análisis de la novela de Fonseca. Inicialmente recordaremos que la relación que se teje entre los personajes y sus prácticas sociales y culturales, confluyen en la postura ideológica. También dijimos que los  

 

actos efectuados por los personajes de Agosto , se generan en dos instancias las cuales refieren: lo público y privado. Recordemos también que el análisis de los discursos se establece, a partir de la significación semiótica y semántica de algunas palabras; ya que estas nos permiten establecer la postura ideológica de los personajes, como la marca o índice de en los discursos.

Los personajes y en sus rasgos rasgos de marginalidad desde lo privado.

En, Agosto, se nos presentan una gran cantidad de personajes; de los cuales nos interesa para éste trabajo, analizar algunos de ellos a partir de sus actuaciones marginales, como también sus producciones discursivas. En relación con los discursos de los personajes, estableceremos que el discurso que se tome como unidad de análisis para identificar los ideosemas debe tener como característica principal el hecho implícito o explícito de la marginalidad.

El primer personaje que hemos escogido de la novela, es: “el Ángel Negro” el cual desde el primer capítulo vemos cómo el autor nos indica que el personaje,  jugará un papel primordial p rimordial en la vida política o de élite de la novela, ssobre obre él recae una gran carga simbólica, que se asume en dos aspectos importantes para el texto; uno de ellos es el aspecto histórico y el segundo es la connotación misma del apelativo del personaje.

En el aspecto histórico en relación con el personaje tenemos que decir que éste lo hemos asumido desde el imaginario violento y sangriento que encontramos en la novela; ya que al ser presentado el personaje, desde el poder político, se establece que en éste existen varias marcas que nos ponen frente al “Ángel negro” de las sagrados escrituras; de acuerdo con la construcción arquetípica en  

 

que se representa el personaje de Gregório ; uno de los primeros aspectos que se genera en conexión con el arquetipo religioso se funda en la desobediencia y violación a la norma, que en el caso particular de Gregório  sería la actuación desobediente al infringir infringir lo establecido por la ley del estado y las ordenes del presidente (Géntulio), bajo esta desobediencia se funda entonces un aspecto macabro; donde el odio y la venganza se convierten en móviles del crimen. Recordemos pues que Gregório   organiza y lleva acabo la realización del asesinato de Carlos Lacerda , acto en el cual, sale muerto el mayor Vaz , en relación con este incidente encontramos que el ángel de Dios al igual que Gregório  serán  serán expulsados de sus cargos de poder; en Gregório será ir a la cárcel

y en el caso del ángel caído será irse del paraíso.

El segundo aspecto, que nos pone frente a lo histórico, está referido, en el calificativo “negro” del apelativo; ya que éste nos pone simbólicamente en correspondencia con las connotaciones que se han generado en la cultura judíocristianas, al asumir que el Ángel negro; también es conocido en la cultura occidental como el “Ángel de lla a maldad”, pues en él se encarna el mal. Bajo esta expectativa, asumimos entonces que en Gregório  surge   surge una condición similar, al establecer en el personaje que existe una fuerte condición de la maldad y, que en éste caso, se establece en las acciones que realiza el personaje al asumir la violencia y marginalidad como una condición inherente de los ángeles negros de las sagradas escrituras, hemos adjudicado en particular que Gregório,  al encontrarse bajo una mirada política está vinculado directamente a la dictadura política que se nos establece en la novela desde la construcción política e histórica, en donde se funda la violencia como una característica constitutiva de las dictaduras latinoamericanas y que en el caso de  Agosto   se representa en Gregório Fortunato y francisco Albergaría .

 

 

En relación con la dictadura y el aspecto político que se encuentran explícitos en el personaje de Gregório, encontraremos una dualidad que se establece entre los aspecto, que alude al contexto político en el que gesta la dictadura y los signos que caracterizan las dictaduras en Latinoamérica, en donde el terror y la masacre, además de lo macabro como las torturas y la forma como se efectúan, será la base primordial del surgimiento de ángeles como es el caso de Gregório  y de otros personajes que analizaremos en su momento.

Por último y en relación con la carga simbólica que se establece en el personaje de Gregório   diremos que el adjetivo calificativo “negro” alude directamente a un referente de exclusión que refiere en este caso a un doble sentido del cual hemos dicho en primera instancia q que ue se asocia asocia a la significación de maldad. En la segunda instancia encontraremos que éste termino alude directamente en la clase de élite de la novela a una condición física del personaje, marcado así una diferencia, que lo posiciona desde la condición de un sujeto de tipo marginal; en cuanto refiere una marginalización de su persona desde sus rasgos físicos, como veremos en los siguientes apartes.

En las ideologías encontradas en el texto, y que refieren a éste personaje, tenemos que decir que Gregório Fortunato,  es un personaje marginal; si asumimos que éste a pesar de estar en el poder como “ jefe de la guardia  presidencial ”; ”; se nos presenta en la novela con la imagen o mejor aun, con el imaginario del excluido; la cual se asume desde la exclusión política, que inicialmente, se encuentra instalada en la privacidad del poder y que se trasladará en la novela al espacio de lo social, es decir al terreno de lo público. Ahora bien, vamos a asumir en éste párrafo con relación al concepto de marginal, elementos que nos llevan a pensar en la exclusión, como una marca de diferenciación; donde aparentemente el excluyente está centralizado en el poder, mientras el excluido es representado desde características particulares que denotan un estado de  

 

deterioro, ya sea físico o económico. Estos aspectos de que marcan a los personajes denotan inmediatamente un descalificativo por parte de las élites del poder. Es así que el personaje posee una marca muy diciente, que ya la habíamos mencionado, y que se asume desde su condición étnica (Negro).

En las marcas o índices tenues, en relación con el aspecto marginal del personaje, encontramos inicialmente, la alusión por parte del narrador de los objetos que posee Gregório ; los cuales se refieren desde la privacidad de su habitación, donde el narrador la presentará así: Se aligeró del revolver y el puñal que siempre cargaba, los coloco sobre la mesita de noche y se sentó en la cama, donde habían varios periódicos desparramados.” (Fonseca: 1995, capítulo I Pág. 10).

En éste primer aparte, vemos cómo el “revolver” y el “puñal” son objetos que se asocian simbólicamente en dos sentidos; en primera instancia encontramos que el “revolver”, va, a ir en este caso acorde al puesto que tiene el personaje (Jefe de la Guardia Personal del Presidente); y el segundo objeto lo hemos relacionado con la marginalidad vista, desde la insinuación que nos hace el mismo escritor en otra de sus grandes novelas como lo es: “El Gran Arte”; en esta novela vemos que el crimen y la trasgresión del mismo se hace a través de la utilización de un puñal. En está novela hallamos reforzada la alusión al puñal como objeto que distingue los criminales del bajo mundo; en Agosto  vamos a mantener la misma asociación semiótica del objeto (puñal), y aunque en  Agosto ,  Gregório   sólo hará uso del puñal, para transgredir de forma violenta un periódico con la foto del periodista Carlos Lacerda; vemos como esta acción en el personaje nos pone de entrada

en el desarrollo posterior de sus acciones delictivas en la novela. Es así como el solo hecho de poseer

éste instrumento, ya nos está indicando quien es el

personaje y la posición semiótica que lo representa.

 

 

Otro aspecto interesante en relación con éste personaje será la exclusión que maneja el poder al interior del mismo; y la cual que da indicada en el texto, cuando el ministro de relaciones exteriores le dice a Gregório -No meta la nariz donde no le llaman, negro sucio.”*  Sólo porque él había intentado buscar un contacto con el

presidente Perón. Esta primera frase es interesante porque quien la emite es la voz del poder, cual es representado por  Joao Naves. (Ministro de relaciones exteriores). Ahora bien si ésta frase fuese producida por otro personaje que no perteneciera al poder, la frase tendría un sentido totalmente diferente. Recordemos pues, que en ciencias sociales la exclusión se presenta como la representación de individuos marginalizados históricamente y que en el caso particular de este trabajo está vinculado al desprecio por los “negros” que alcanzan un puesto de reconocimiento como lo ha hecho Gregório.

Bajo las circunstancias como se nos presenta Fortunato  podemos   podemos deducir que su condición de “negro” y actuaciones en el desenvolvimiento de su cargo, en la novela, será lo que marcará su caída; es por esta razón nos detendremos un momento para revisar el sentido de marginalidad en la novela y la representación de éste en las acciones de algunos personajes y, así continuar con el propósito de analizar los discursos y sus contenidos ideológicos.

En las marcas profundas de los personajes marginales construidos en la novela de Fonseca, vamos a encontrar que las características están dadas desde la actitud que asuman los personajes; es decir que las actuaciones de éstos no se instauran desde los principios éticos morales sino, más bien; desde las convicciones lógicas *Está expresión resulta interesante por las connotaciones simbólicas que maneja; como son: el calificativo que adquieren los negros, sumado a la suciedad que en este caso llo o asociaremos directamente con el sentido de pobreza y deshonestidad 

del desorden. Es así, que los personajes de Agosto, se mueven entre dos mundos en donde el bien y el mal diferencian las la s actuaciones y aprehensión del mundo. mund o.

 

 

Otro de los aspectos importantes en  Agosto   y que vamos a encontrar, es el asunto referido a los oficios o profesiones que ejercen los personajes de la novela; en donde encontramos que las profesiones u oficios de prestigio social, suelen evidenciarse en dos caras: una de ellas, está cobijada por la suerte y las acciones perspicaces para prosperar; además de estar marcadas por unos reconocimientos sociales de cuna, mientras que en la segunda posición se advierte la contradicción como un complemento, ya que al nacer en clase baja y sin ningún reconocimiento, marcará una derrota en la elección de profesión como queda indicado en la novela con Alberto Mattos. Estableciendo así que la escogencia del oficio en los personajes marca su derrota o triunfo como individuos sociales. Un ejemplo que referencia en la novela el concepto que hemos establecido de los oficios lo encontraremos cuando el comisario Páuda  le refiere a Mattos  su equivoco de profesión; o en la misma introspectiva del personaje al mostrarnos cómo dejó su trabajo de abogado para ingresar en la policía, y por último encontraremos que el pasado de Mattos, se nos refiere desde su oficio la derrota que provoca éste en su vida ya que concluye con la vida misma del personaje.

Por último, diremos que dentro del aspecto de marginalidad que se establece en los personajes de Fonseca, existe otra marca, la cual se representa desde la ignorancia o analfabetismo que tiene una gran cantidad de la población brasilera y que identificaremos más adelante en algunos personajes en particular.

Hemos referido entonces, algunos de los rasgos que distinguen los personajes del brasilero, en la construcción misma del aspecto de marginalidad. Ahora vamos a establecer con relación al aspecto de lo físico, el siguiente ejemplo que nos pone en una de las marcas fuertes que poseen los personajes de Fonseca.

 

 

Dentro de las actuaciones del “ Ángel negro ”, ”, a nivel privado encontraremos cómo éste planea con Climério Euribes “su compadre” el asesinato contra el periodista Carlos Lacerda, en esta conversación que realizan los dos personajes vamos a

encontrar índices que nos dan aviso de lo que pasará posteriormente, además de indicarnos quién es Climério. Este personaje es presentado por el narrador con características como son: la de procedencia (él viene de los suburbios), y el oficio que desempeña (él es integrante de la guardia presidencial.) Dentro de las características posteriores de este personaje encontraremos con relación a la marginalidad y la particularidad de cada personaje, que Climério tiene en su cara las marcas visibles de la viruela, además de ser negro factores que actúan en la novela como sinónimo de pobreza y por ente de exclusión.

Las anteriores características pondrán a Climério claramente en un personaje de tipo marginal el cual está marcado por su aspecto físico y social.

 Ahora bien, hemos referido aspectos de la novela y sus personajes, que se instalan desde las marcas de marginalidad en el marco de lo privado y de lo cual diremos que lo privado en algún momento se hará parte del aspecto público como es el caso de Gregório, el cual revisaremos cuando retomemos el personaje. Dentro del aspecto de lo público vamos a decir que en los “medios comunicativos” se establece no solo la teoría de la recepción, sino que en ellos también se genera el sentido de lo público en cuanto se hace explícita la información sobre un suceso. Y que en el caso de  Agosto se refiere a los actos o actuaciones que se generan en el poder. Es decir que el acto queda sujeto a la revelación del medio comunicativo. La novela, la la radio y la prensa, fij fijan an la intención de comunicar, adquiriendo de esta manera un carácter masivo, que confiere el sentido de lo público. Bajo este criterio, asumimos entonces, que la publicación de las acciones de los personajes de élite son los que determinan el carácter de lo público en la novela; mientras que  

 

los que están al margen de la publicación pública (medios comunicativos, radio o prensa), serán relegados a los actos o actuaciones de carácter privado.

Otro aspecto que debemos tener en cuenta para determinar lo público y privado en la novela de Fonseca será lo relacionado con los lugares y los elementos que intervienen en las conversaciones como mediaciones que facilitan los actos comunicativos. En la novela vamos a encontrara en algunas conversaciones de tipo confidencial o privado la utilización de tres aspectos: Semidirecto, indirecto, y directo.

En el primero encontraremos que las conversaciones se dan a través de la utilización del teléfono y que en éste caso hemos denominado como un acto de carácter semidirecto ya que involucra la mediación de un instrumento como es el teléfono, el segundo acto lo hemos denominado directo por que en el se establece una conversación presencial

en cuanto asume la presencia de los dos

interventores en el mismo lugar y hora (face to face) y el último será de tipo indirecto (medio - sujetos). Asumiendo así; que estas tres categorías nos permitirán,

diferenciar fácil fácilmente mente lo que determinaremos en la novela como

privado y público (con relación a las relaciones entre los personajes; es decir su cercanía en lo íntimo y privado).

Una vez establecidas las consideraciones que nos interesan revisar en la novela de Fonseca con relación a los personajes y los actos comunicativos, además del carácter marginal que los rigen, pasaremos nuevamente a retomar el personaje de Gregorio Fortunato .

 

 

En el personaje de Fortunato  hemos dicho inicialmente que éste se establece desde su condición étnica (es negro), como también dijimos que en él se encuentra de forma explícita el rasgo de la ignorancia, además de venir de abajo (es decir del pueblo), reseñaremos entonces, que el imaginario que se construye del personaje se da bajo el signo de la marginalidad, que converge así, en la exclusión.

En Gregório vamos a encontrar una doble vida, en cuanto podernos ver que éste tiene una imagen pública y otra privada en la cual se instauran actos de carácter marginal que van en contra de su condición como sujeto que representa el estado. En la novela encontramos fuera de planear el asesinato de Lacerda y  la incursión en otros actos delictivos, como son otorgar permisos y certificaciones a funcionarios de empresas privadas y, que en éste caso se trata de la licencia y certificación de la Cemtex. Bajo este segundo signo de los actos de marginalidad que caracterizan a Fortunato , encontramos una de las conversaciones que se da alrededor de la certificación de la Cemtex, empresa en la cual convergen los intereses de unos cuantos personajes de élite. La conversación en este caso marca una de nuestras diferenciaciones en los actos comunicativos y a la cual hemos denominado semidirecto ya que se produce bajo la mediación del teléfono; la conversación se realiza con Magalhães:

-enseguida entró la llamada de Magalhães. - Tengo el dinero del japonés. -  No le comente nada a Roberto y tráigame el cheque. - ¿no se molestará si llega a enterarse? - conozco a Roberto desde que lavaba la letrina del doctor Géntulio en la hacienda Itú, cuando estábamos en el exilio. No se preocupe. -  El doctor Lodi quiere una cita con usted. - Ya estuve con el diputado aquí en mi cuarto del palacio y sé lo que quiere. - ¿Y la licencia de la Cemtex? cincuen ta millones de dólares es mucha m ucha dinero. -  La licencia ya salió. No fue fácil cincuenta - ¡virgen santa! ¿Hay manera de cambiar la licencia para otra empresa? Era  sobre eso que qu e quería hablarle ayer. El nombre de la otra empresa es…

 

 

- ¿Tu piensas que el gobierno es la mama de todo?¿La casa donde se puede abusar? ¿Me vienes vienes con ese cuento, después de todos los problemas que enfrente para conseguir una licencia? -  El presidente de la Cemtex fue asesinado. Eso cambia todo. Usted podría hablarle a Souza Dantas. - Ya es tarde. -  Por favor, teniente, por nuestra señora, la licencia tiene que ser transferida  para otra empresa, emp resa, Brasfesa. - Ya es tarde. - Su parte está en juego. rob en. Dígale eso a sus amigos. a migos. -  No permitiré que me roben. -  Después de colgar, Gregório anotó en un papel la conversación con Magalhães.” (Fonseca: 1994. Pág. 46-47) 

En esta conversación podemos analizar cómo el carácter privado se da en el sentido que generan las palabras utilizadas; además del procedimiento que sigue Gregório al referenciar por escrito la conversación; dándole así, a esta acción

comunicativa y discursiva el doble sentido de la privacidad que se divide en dos momentos uno el confidencial donde se lleva acabo el acto comunicativo y el segundo el íntimo en el cual se establece en el acto de transcribir el hecho comunicativo al papel, como un acto deliberado que le proporciona seguridad al personaje en ese momento.

Dentro de las palabras que categorizan esta conversación cabe resaltar su nivel de importancia como elementos que facilitan identificar el discurso; como un acto que se produce en la privacidad. Además de permitirnos encontrar las marcas que nos indican el nivel social de los personajes (es decir los que producen el discurso en este caso.)

Palabras y oraciones como:  Tengo el dinero del japonés  ,, No le comente nada a Roberto, La licencia ya  salió ,  ¿Tu piensas que el gobierno es la mamá de todo?¿La casa donde se  puede abusar? a busar? , Eso cambia todo , Su parte está en juego…- No permitiré que me roben. ( Fonseca:  Fonseca: 1994. Cap. II. Pág. 46. 46.))   

 

Permiten establecer establecer no solo el sentido de privado, sino tambié también n nos instalan en las acciones delictivas de los personajes. En la primera oración encontramos que las palabras  “Tengo  y  dinero”   marcan el discurso en la categoría del poder en cuanto se institucionaliza en estas dos palabras, que existe una jerarquización en la importancia del tema; estableciendo que la connotación de estas, junto con palabras como:  “licencia ,  salió, Su parte,  y   juego”  aluden directamente a unos intereses que se fundan desde el papel representativo del poder que en este caso es dado a Gregório,  indicándonos también cómo se maneja en el estado los permisos de licencias; y cómo al mismo tiempo se obtienen dineros para las campañas políticas políticas y así mism mismo, o, vemos cómo estos dineros sirven para cometer ilícitos políticos como es la paga de sicarios. En esta conversación encontraremos también los intereses de los personajes políticos y, que en este caso particular será Lodi. Este personaje tiene una caracterización de tipo público. Además diremos de él que es el gestor intelectual del atentado contra Carlos Lacerda, la implicación de este personaje en el suceso de la calle Toledo  queda  queda implícita en la Ya estuve con el diputado aquí en mi cuarto del palacio y sé lo que quiere.”   conversación así; “ Ya

Estableciendo así un hilo interminable que se teje en el poder para realizar actos de carácter ilícito y privados.

Por último encontramos en lo que refiere a las ideologías de la conversación, un factor que marca el micro discurso, ya que en éste micro discurso se establecen una doble percepción del sentido de estado.

En el primer sentido estableceremos que éste se da, bajo la óptica del que posee el discurso del poder. Donde se funda el imaginario del gobierno desde el “no abuso”; mientras que en el segundo sentido vamos a encontrar que el que abusa del gobierno es el que está justamente al interior de él, como elemento constitutivo de su organización, imprimiendo así, un doble sentido a la enunciación de Gregório: “¿Tu piensas que el gobierno es la mamá de todo?¿La casa donde se puede abusar?”    

 

Estas dos oraciones interrogativas nos develan así que el discurrir, del personaje se genera desde la concepción de poder estableciendo así que la temática sobresaliente del discurso en general gira entorno del dinero y el puesto representativo del oficio del poder en el gobierno Brasilero. Estableciendo así que la postura ideológica de Gregorio queda reflejada cuando este refiere al gobierno ya que se entiende que los funcionarios públicos abusan del de sus condiciones elitistas, pero en el caso de Gregório  se muestra el límite para el abuso; demostrando así que en el acto de abusar existen unas normas que no se puede sobrepasar. Poniendo nos así en aviso sobre los llimites imites que rigen el gobierno y su corrupción interna.

 Antes de pasar al siguiente perso personaje naje vamos a precisar algunas características de los personajes de Fonseca; y de los cuales ya hemos nombrado algunos como: la importancia de los oficios que desarrollan los personajes en la vida social de la novela, el carácter de exclusión dado en el color de piel (negro), además de rasgos característicos que conllevan una marca de marginalidad como es el caso de la viruela. Esto lo hacemos con el fin de establecer un imaginario desde el autor sobre nuestro siguiente personaje. (Alberto Mattos.)

En Rubem Fonseca vamos a encontrar que desde sus primeros cuentos a realizado la construcción de personajes marginales, es por esta razón que no es gratuito que en sus textos encontremos personajes con marcas que van más halla de lo superficial; como marcas importantes se encuentran: la viruela, la piel (negra), la nariz ancha (característica que asume el autor para confirmar que Alberto Mattos es negro.), la profesión u oficio que ejercen los personajes, como:

la prostitución y la delincuencia o simplemente la alteración en algunas normas establecidas en la sociedad y, que no, los califica como marginales del todo (es decir romper con la regla establecida y esta revierte a la vez como sinónimo de tragedia en la vida del trasgresor.) Y por último encontraremos la ausencia de los dientes como un determinante que marca en los personajes la condición social,  

 

que en el caso particular de  Agosto   determina la ubicación en la vida social del poder. Al referir que sus personajes van más allá de lo superficial; establecemos entonces, que en los personajes de Fonseca el sentido de lo humano y social se presenta desde la complejidad complejidad misma de la existencia, donde el carácter marginal restituye sus propios imaginarios en el mundo de la vida.

En los siguientes apartes vamos a revisar la relación de otros personajes, inicialmente tomaremos el personaje central de la novela; el cual se llama Alberto Mattos, éste personaje se nos presenta en el texto como un individuo que genera

caos, desorden, al interior del orden establecido en la sociedad de la novela. Mattos, es el comisario que investiga la muerte del edificio Deauville, éste

personaje nos permitirá en el texto identificar las diferentes relaciones que se tejen; en primera instancia encontraremos en éste personaje dos momentos que serán referidos a nuestra pretensión de identificar lo privado y lo público.

Los dos momentos que utilizaremos para ubicar los discursos de Mattos ,  junto con los ideosemas se darán así: los encontramos desde su vida privada íntima y su vida laboral, como el punto de partida para establecer lo público. Ahora bien; vamos, asumir que en la esfera de lo privado es donde se gesta lla a mayor producción ideológica y discursiva de éste personaje.

En éste personaje, al igual que Gregório se nos hace necesario definir cuales son los aspectos marginales que lo rigen y cuales son las categorías en las cuales podemos clasificarlo. Como categorías asumiremos dos, la de exclusión y la que trasgrede la convención, (acto criminal, o que rompe con la norma socialmente establecida).

 

 

Alberto Mattos es presentado por el narrador inicialmente en forma ambigua; ya

que el narrador no precisa de forma explícita el aspecto físico del personaje, se puede decir que el personaje no posee una marca física como los otros personajes de Fonseca que se establecen desde la marginalidad, por el contrario éste personaje se nos presenta claramente desde lla a posición social, la cual queda delegada a un sentido de exclusión. Vamos a ver entonces que un índice de esta exclusión se encuentra en su ropa; ya que su “ropa barata” nos conduce directamente a un discurso que se produce en el seno de la élite, estableciendo así, en éste discurso el sentido ideológico del poder. En éste primer índice de la exclusión del personaje establecemos una tendencia excluyente en la clase de élite, al construir desde éstos personajes el imaginario de los empleados públicos del estado como es el caso de Mattos .

Con relación al imaginario, que se tiene de Alberto   en la élite, tomaremos la conversación del senador Freitas  y su asistente Clemente, donde veremos claramente en su discurso la discriminación social y excluyente, sobre el personaje de Alberto Mattos;  permitiéndonos así, establecer en el discurrir de los dos personajes, la tendencia de lo excluyente como característica de la clase social alta de la novela.

¿Qué historiaeneselesa, la dely tal Se apareció senado dijocomisario? que deseaba hablar conmigo. No lo que quería.  se me olvido el tipo es un don do n nadie, basta con reparar en la ro ropa pa que lleva.  Pero has debido ponerme p onerme al corriente. ¿Es que tengo que acordarme de todo? ¿Dónde estabas metido el jueves por la tarde? - ¿Cómo se llama el policía? - -¿piensas que voy voy a recordar el nombre de un tira que se viste con ropa hecha en Esplanada? –Clemente rio-. Dos cosas que yo no usaría ni muerto: ropa barata y la ropa disponible en esas tiendas…  ( Fonseca:  Fonseca: 1994.Cap. VI.  Pág.105.)  

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En esta conversación observamos que Clemente, maneja el discurso de la exclusión en contra de Mattos al referir al personaje desde su ropa como si esta fuera sinónimo de ser   “un don nadie”,  resulta interesante también la terminación de basta con reparar en la ropa que lleva.” ;  Ya que como vemos esta la oración  “ basta conversación precisamente va conectada con la impresión que tienen otros

personajes sobre Mattos  y  y su ropa; como es el caso ocurrido cuando el comisario se entrevista con el abogado y primo de Gomes Aguilar,

donde los dos

personajes piensan que Rosalvo es el comisario; por la ropa que lleva. Es así que en esta conversación se reconoce el aspecto marginalizador del personaje bajo la huella de su ropa y, que en el discurso de Clemente resulta excluyente; poniendo por ente al individuo en la caracterización de un marginal social.

Hemos establecido desde este ejemplo, la primera postura ideológica que tiene la clase de élite y que en este caso queda representada en Clemente   para establecer la marginalidad de Mattos. Ahora vamos a revisar la categorización de las palabras que surgen en la novela como las marcas relevantes del discurso, bajo la característica de privacidad que tiene la conversación, vamos a resaltar que las palabras que categorizan el nivel de interés de los personajes se focaliza en dos instancias la primera es la de Freitas, el cual esta interesado en saber quién es el policía que lo busca y pará que lo busca; mientras que en Clemente el interés se da en la ropa que lleva el policía ( Mattos). En esta conversación tomaremos como palabras relevantes las siguientes:  “don nadie,  ropa,  un tira, ropa hecha en Esplanada, no usaría ni muerto: ropa barata y la ropa disponible en esas tiendas…”   (Fonseca: 1994.)

Si analizamos las connotaciones de las palabras que hemos tomado como unidad de estudio para éste ejercicio notaremos que el discurrir excluyente de Clemente  pone una marca notoria entre las clases sociales de Brasil; en cuanto fija que existen, unos lugares establecidos para comprar ropa; en donde la calidad de la  

 

misma se verá de manera directa implicada con la calidad de vida de los personajes; como es el caso por ejemplo de Salete quien nos dará una luz sobre la importancia de la ropa para la cultura brasilera. En  Salete encontraremos que el imaginario sobre la importancia de la ropa, se da en un sentido excluyente como el utilizado por Clemente; ya que se establece en una marca que califica el personaje, es así que encontramos la palabra “ Esplanada  Esplanada ”” ,  en el discurso como un sinónimo de mal gusto y pobreza para comprar, por establecerse justamente en este sitio una condición no solo económica en el valor de la ropa, sino también en la comprobación de una calidad de vida de la pobreza de los personajes que acuden a estos lugares a comprar.

En Salete  el discurso sobre la ropa se hace interesante ya que el punto de focalización cambia, si tenemos en cuenta, que Salete  viene de una condición social baja, en donde veremos que este personaje reafirma que la ropa es importante porque de ella depende un lugar en la alta sociedad; bajo este precepto tomaremos la focalización que hace el narrador para describir la imagen de la madre de Salete  saliendo de una tienda donde venden “telas baratas”; (Fonseca: 1995. Cap. VI. Pág. 94 y 95)  recordamos, este suceso narrativo que presenta el

narrador con el fin de reafirmar la postura ideológica y de imaginario que se establece en la novela desde los personajes de élite con relación a la ropa y los lugares de compra de la misma. Bajo la característica que nos aporta el narrador, a traves de su discurso, estableceremos que su posición en la novela converge desde la clase de élite.

En el orden de ideas que llevamos diremos que la tela es una categoría, que se asocia con la calidad de vida de los personajes, además de establecer el lugar de procedencia; es decir el lugar donde se compra, lugar que ya hemos referenciado desde nuestra perspectiva y que alude a lo popular.

 

 

Hemos establecido entonces que el discurso de Freitas y Clemente se genera en un discurso de tipo excluyente, así como hemos establecida que el narrador converge en una posición ideológica similar a la de éstos personajes mencionados. En el siguiente aparte veremos como el narrador es el que establece los rasgos fuertes de marginalidad en el personaje de Raimundo, al realizar una presentación descriptiva excluyente:  “  Era un perbambucano magro, con

una frente estrecha; su cabello parecía que empezaba por encima de la nariz.” ,  esto con relación a la condición física mientras que la descripción del espacio donde se genera la conversación con Mattos  se da en un lugar que caracteriza este personaje dentro del aspecto marginal, al exponerlo así: “Entraron en un cuchitril sin ventanas, con una cama estrecha y un pequeño armario sin puerta en el cual se apilaban ropas ordinarias descoloridas…” (Fonseca: 1995. Cap. VI. Pág. 94 y 95). En este aparte las  “ ropas ropas

ordinarias descoloridas”   aluden directamente al mismo discurrir que utiliza Clemente para referenciar la posición social de Mattos,  permitiéndonos

establecer que el narrador tiene una mirada focalizada que se posiciona desde la exclusión como tal. 

Volviendo a Mattos encontraremos que la ropa será un punto de referencia una vez más para los militares donde se encuentra recluido Gregório Fortunato.

En esta primera marca del personaje pudimos notar entonces, que desde el discurso de la élite se establece su posición social, que está atada de forma directa con otro punto, que nos permite establecer el sentido de posición social, este punto lo hemos se funda en una marca que acompaña al personaje en toda la obra y éste es el “diente de oro” el cual hace antesala a la información que nos darán otros personajes de él; como por ejemplo la proporcionada por Salete  al referir “que ella no tiene la culpa de que sus dientes estén malos”, o mejor aun; la imagen que nos da Pedro Lamagno al referir: “¿Qué pudo haber visto una mujer fina y elegante, de buena familia, como Alice en aquel sujeto?”  (Pág. 36)  Y que nos pone de  

 

inmediato frente a un personaje que se considera marginal; pero que no lo es. Es decir a Mattos  lo salva una diferenciación con los otros personajes de carácter marginal y es que él, es inteligente y estudiado, además de ser un sujeto que se muestra desde la individualidad en medio del caos social que refleja la sociedad de la novela.

Con relación a las marcas que aparecen en la novela y que refieren a Mattos  tenemos que decir que este personaje actúa como un héroe de los que Fonseca sabe crear; para presentarnos así, a un individuo que rompe con la norma y normalidad de la sociedad establecida. Volviendo al índice del diente encontramos que no es gratuito que al personaje, en todo el texto lo acompaña “un diente de oro”. El cual representa semióticamente el estatus y el prestigio obtenido en algún momento de la vida del personaje; donde se enfatiza esta imagen desde el estatus social, cuando el personaje se pone el diente de oro frente al espejo del baño donde analizaremos la imagen a partir de la siguiente narración:  Recogió los labios y coloco el diente de oro frente al sitio donde estuviera antes, ahora ocupado por un incisivo de porcelana. Nadie más se acordaba, incluso tal vez nadie supiese, pues el propio dentista que hizo el ttrabajo rabajo había muerto, que un día había tenido un dient dientee de oro en la boca. Pero el no lo olvidaba. (…” (Fonseca: 1994. Cap. VII. Pág.117)

En esta imagen expuesta en la voz del narrador encontramos como los signos de marginalidad del personaje se reafirman desde la posición social; ya que esto supone que Mattos  en algún momento estuvo en el engranaje del bienestar social; es decir, el diente de oro marca el estatus social posiblemente alcanzado en algún momento de su vida. Pero que en el caso de Mattos vemos cómo éste índice fuerte en el texto, marca claramente una derrota en su vida; ya que se asume bajo este índice que Alberto  no logra alcanzar el reconocimiento social como abogado y comisario. Es decir que el diente de oro surge en el texto como

 

 

una marca que establece desde su oficio una derrota; es por esta razón, que encontramos la ausencia del mismo en la boca del personaje.

En la oración final, de este aparte encontramos que se conecta directamente con la siguiente, expresión:  “Quedo profundamente irritado, empezaba a sentir ya entonces los  primeros síntomas del ssuu ulcera duodenal y de d e su odio por los ricos…” (Fonseca: 1994. Capítulo VI. Pág. 56.)

La expresión sobre el odio por los ricos es interesante en cuando marca una condición que hace claro su rechazo por el diente de oro al sacarlo de su boca para que dejara de identificarlo como un sujeto de posición social, para así convertirse en el individuo que vemos en el texto literario. Es por esta razón que él no olvida la presencia del diente; tam también bién podemos establecer que el rechazo por el diente de oro marcan notoriamente una auto negación del individuo mismo en contraposición con la imagen de fracaso con que se describe su vida social (oficios profesión). Es así que encontramos en este personaje su corriente ideológica bien marcada; ya que se establece una renuncia de su condición como sujeto social (reconocido) para fundarse una nueva concepción del sujeto en sentido individual. (Ya el reconocimiento surge en pro del imaginario marginal).

Como podemos notar en el anterior párrafo encontramos que no es un personaje de carácter excluido, tanto por sus compañeros de trabajo como por los entes gubernamentales de la novela; además su propia exclusión que se gesta en un mundo consiente, y a través de sus acciones como individuo social. Bajo esta percepción diremos que el personaje de Mattos actúa de acuerdo a la descripción que refieren los personajes de Fonseca, donde podemos entender como funciona el personaje de Mattos en el engranaje de la novela.

 

 

Dentro de las características que hemos mencionado con relación al personaje de Mattos, hallamos que los signos que marcan el personaje se encuentran

fundados desde el estereotipo de héroe, que suele crear Fonseca; develando así otro aspecto importante de este personaje encontraremos la relación con el caos y orden.

Respecto al orden y caos que se encuentran presentes en la novela de Fonseca, observamos que los rasgos que constituyen la individualidad de los personajes se funda en un principio de desorden; el cual esta representado en la novela desde las infracciones que comete Mattos  contra el orden social establecido en la novela; éste orden tiene que ver con la forma como funciona el orden gubernamental y, que en el caso de Mattos  alude directamente al aparato administrativo, que se rige en el ámbito de lo policial y jurídico como tal, y en cuyo caso Mattos hace una doble reafirmación de estas dos dependencias, en cuanto sabemos que el pertenece al sistema policial como comisario y al mismo tiempo al  jurídico en calidad de policía investigador y abogado. En  Agosto, el concepto de orden se establece desde una sociedad corrupta, que instaura las acciones desde los actos de tipo marginal o criminal.

momentoss índices de restituir nuevamente el Mattos en la novela da en algunos momento orden, al desorden que genera su honestidad y búsqueda de la “verdad” (esta verdad la entenderemos como la es clarificación de los hechos que mueven una acción de trasparencia y respeto a lo que debería ser la norma jurídica del ente gubernamental de cualquier país.), ahora bien entendemos la honestidad e integridad del personaje como el desorden que se genera en la novela en cuanto está marcado por una fuerte tendencia que contradice los actos del comisario.

Dentro de las infracciones más visibles del personaje encontraremos tres: la primera es cuando presiona al papá de Cosme para que se declare culpable; con  

 

relación a esta actuación del comisario encontraremos índices tenues de la intención del comisario e índices fuertes; como el golpe, que él mismo se provoca contra la pared de la comisaria, (demuestra su culpa e intensión).

En esta primera violación a la norma que maneja el personaje como sujeto individual, encontramos, que él, efectúa una incriminación sobre el anciano con el fin de establecer una normativa de justicia. Donde queda expresado por Cosme  que la intención de restituir el acto de justicia para él mismo proporcionado Mattos  no tiene ningún valor. En vano, vemos entonces cómo la acción de Mattos  por salvar a Cosme de la cárcel, se restituye bajo el signo de la tragedia y al mismo tiempo a restablecer un orden en la vida de los personajes que en éste caso es la muerte del anciano. El orden inicial era que el padre de Cosme  muriera de acuerdo con la angustia que le provocaría el encierro de su hijo y que Mattos  en su afán de cambiar incurre en la violación de la norma, viola la norma.

Otra infracción que refleja el desorden en Mattos es cuando libera los prisioneros de la celda y encerrar a los compañeros de la comisaria para realizar el ilícito, según el estatuto de su trabajo. En estos dos momentos podemos notar que el comisario actúa en pro de un desorden que restablece al orden, si tenemos en cuenta las ideologías que giran en torno de estos dos hechos: uno de ellos es el problema social en el cual se encuentran las cárceles, por la situación aguda de una sociedad en declive. El segundo muestra cómo el desorden político y gubernamental, se establece con la infracción del sujeto que en toda la historia mantiene las condiciones y respeto de la norma, las cuales apuntan a restablecerse con su muerte ya que queda incierto que unos cuantos presos sean liberados cuando el gobierno y las jefaturas policiales atestan de actos ilícitos realizados por los representantes de las mismas instancias sociales y gubernamentales.

 

 

El último acto de infracción a la norma se establece cuando el comisario le da un puntapié al Bicheiro Idilio; del cual diremos que este incidente marca la muerte injustificada del bicheiro restableciendo una vez más las normas que rigen el aparato ideológico de estado en novela y que veremos con detenimiento cuando tomemos el aspecto de lo social.

Concluiremos entonces que las infracciones del sujeto individual que se representan en Mattos,  manejan la particularidad de establecer un orden en contraposición con el desorden que genera la acción del personaje como entidad de honestidad y

respeto a la norma jurídica y que se funda desde su

individualidad como ser autónomo social.

Dentro de los actos comunicativos que se generan con éste personaje encontramos varios, pero; tomaremos a modo de ejemplo los más importantes para develar las posibles ideologías del personaje.

Bajo el carácter de lo que deberíamos considerar como excluyente, notaremos que el comisario, se refiere al amante de Salete  de forma excluyente con el propósito de manifestar de forma clara las pretensiones y actuaciones delictivas del personaje; este personaje ( Magalhães) es un funcionario del gobierno y queda claro en la siguiente conversación la postura ideológica de Mattos se nos manifiesta desde la exclusión. - ¿vas a querer vivir con un tira honesto en lugar de con un ladrón rico? - -No es un ladrón. ladrón? ¿de dónde saca un funcionario del gobierno todo ese dinero? - ¿No es ladrón? Te dio un apartamento en la playa, un automóvil, te acompaño a pasear a  Europa, consiguió con siguió un buen dentista pa para ra arreglar tus dientes. d e que los tuyos estén tan podridos que no tengan ar arreglo. reglo. -  No tengo la culpa de -  El tipo es una rata. aq uí por que quieres.  (Fonseca: 1994. Cap. I. Pág. 32.) -  Entonces vete. Estas aquí

 

 

En este aparte vemos cómo el comisario agrede de forma directa a Salete para instituir que su amante es un hombre corrupto, que en éste caso, es determinado por la palabra “rata” o “ladrón”; en este fragmento del dialogo entre los dos personajes, podemos establecer que: el espacio está determinando el carácter de privacidad íntima; donde relación comunicativa está dada en el sentido comunicativo que hemos denominado como directo (fase to fase), además del sentido que adquiere el espacio y la acción entre los dos personaje, (se están bañando en una tina). Bajo estos signos podemos instaurar que él ideologema implícito en la conversación está infundado en lo que posee Salete a través de su amante, en comparación con lo que tiene Mattos; pero realizando un análisis más profundo del diálogo encontraremos que el tema de relevancia allí está dado en mostrar cómo los funcionarios corruptos del Estado alcanzan bienestar atreves del robo que realizan al interior del Estado; dando así una relevancia a la corrupción y el imaginario que se tiene sobre los funcionarios públicos.

Dentro de las conversaciones que se generan en el texto, bajo el carácter de lo privado encontraremos en especial una conversación que nos permite evidenciar el carácter de la confidencialidad, ya que éste alude a las relaciones de los personajes. El siguiente aparte veremos; cómo el sentido comunicativo de carácter directo se hace explícito en la conversación, correspondiendo así, a las relaciones de comunicación de los personajes. - vamos a su habitación… - me gustaría hacerle otras preguntas sobre el asesinato del señor Gomes  Aguilar. n ada, doctor. -  No se nada. No vi nada, - ¿usted se quedo toda la noche en la portería?.... -Sábado, sábado… sábad o. -  La noche del sábado. -  sí. - ¿Por qué esta usted tan nervioso? n o estoy acostumbr acostumbrado. ado. -  Eso de la policía, doctor no -  Estoy seguro de que usted no estuvo toda la noche en la portería. O salió o se  fue adormir. ¿Cuál de las dos? -  No le entiendo, doctor. Raimundo. do. Lo descubriré y usted será procesado. procesad o. -  No vale la pena mentir, Raimun - ¿qué quiere saber? -  Hable.   

 

- Salí un momento de la portería 

- ¿para qué? - Vino una chica amiga mía…una empleada de la finca… Bien…Estábamos en mi habitación…  - ¿A qué hora? una detiempo la madrugada. mad rugada. --  La ¿Cuánto estuvieron Aquí?  Dos horas, do doctor ctor si el presidente se entera me ech echa… a… - Salí un momento de la portería  - ¿para qué? - Usted dijo que el sábado los vecinos de planta ocho no recibieron visitas. n egro. -  Recibieron una. Un negro. - ¿sabe su nombre? -  No, señor. - ¿Cómo es? - Un negro grande y arrogante. Ceñudo. - ¿Ceñudo? nad a y me miro con ma mala la cara. -  Entro sin decir nada - ¿Cómo es? corb ata. -  Llevaba americana y corbata. - Su cara. - Una cara larga, cerrada. - ¿Por qué no me hablo de ese negro antes? qu e no hablara con nadie. -  Doña Luciana me dijo que - Quizás entrara alguien cuando yo… yo… - ¿Cómo es que doña Luciana le pidió que no mencionase al negro? -  Dijo que el negro había ido hacer un trabajo al apartamento y no quería que nadie lo supiera. - ¿qué trabajo? - Creo que es un trabajo de macumba, un trabajo, una de esas cosas. No losé, no creo en esas cosas, doctor, si doña Luciana…. n ada de nuestra conve conversación. rsación. Por lo menos men os por ahora ahora.. -  Ella no sabrá nada mii empleo. La cuerda siempre se rompe en -  Estoy perdido, doctor, voy a perder m el lugar más flojo. - Calle. No hable con nadie de nuestra conversación.

- Si señor… (Fonseca: 1994. Cap. V. Pág. 94 y 95)   En

esta

conversación

entre

Raimundo  y

Mattos,  encontramos

la

confidencialidad, con el fin de que nadie se entere de la falta de Raimundo;  además de comunicar la advertencia de Luciana  y la su puesta práctica de macumba. Esto con relación a las temáticas del discurso en general.

 

 

Dentro de la relevancia del discurso encontramos los siguientes puntos: en primer lugar, y en orden de relevancia está el temor que genera el interrogatorio de la policía, en segunda instancia está identificar al acecino de Gómez Aguilar, en tercer lugar encontramos la práctica de macumba y en última instancia la falta del portero al dejar su puesto de trabajo. Bajo estas cuatro instancias que categorizan el discurso, realizaremos un análisis más detallado en las páginas 120 -123. Ya que consideramos que esta conversación, permite establecer el imaginario de la sociedad desde los personajes de carácter marginal, que corresponde de en éste caso a la exclusión; que como veremos estará marcada por los dos discursos que se generan y la condición social en la cual se representan los dos personajes.

Con relación al sentido de confidencialidad que se encuentra explícito en esta conversación, veremos en la oración siguiente los índices que nos muestra el carácter confidencial de la conversación;  “- Ella de nuestra conversación. Por lo menos  por ahora.” a hora.” (Pág. 95), 9 5), en esta primera oración, vemos como la conversación y lo que

informa en ella hacen parte de una confidencia en cuanto se enfatiza su carácter de privado en las palabras “no sabrá nada” , otro índice dentro de la conversación que refuerza el sentido de confidencialidad se establece en la siguiente oración:“Calle. No hable con nadie de nuestra conversación .”  (Pág. 95). Por último vamos a referir el

espacio como un índice fuerte que marca nuevamente el carácter de confidencialidad y, que en este caso se establece en un doble sentido de lo privado en cuanto se asume lo íntimo y la confidencial. Como podemos ver el espacio es la habitación de Raimundo, la cual confiere un sentido de intimidad, que se refuerza en el sentido de confidencialidad en la siguiente oración: “vamos a su habitación…” (Pág. 94). 

En el personaje de Mattos, vamos a encontrar otras conversaciones igualmente confidenciales donde intervienen otros personajes como son Alice, (al ir a su casa para contarle que su esposo es amante de Luciana), Laura, (en donde se  

 

presenta el prostíbulo “senadito ””   como como un lugar donde, se saben muchas cosas sobre la vida política; además de conocer la vida íntima de los senadores.), otro personaje es el profesor de su niñez de conclave. Todos estos personajes se encuentran en la intimidad y privacidad de la habitación; ya sea del mismo comisario o de alguno de los personajes como es el caso de Laura, entre otros.

En el personaje del comisario Alberto Mattos, falta realizar la introspección que tienen algunos personajes sobre él. En algunas conversaciones realizadas entre los diferentes personajes encontramos; por ejemplo, a los compañeros de la comisaria, los cuales describen a Mattos  como un hombre desquiciado, por dos razones. La primera porque no recibe plata del bicheiro y la segunda porque realiza muecas constantemente en la novela, además de sus extrañas actuaciones como golpearse contra una pared. Esto en un nivel general del aspecto laboral. Pero veremos que en el caso particular de la jefatura, el comisario es víctima de otras connotaciones como son las dadas por el comisario Páuda, el ayudante de él, Rosalvo, y el jefe de la jefatura Ramos, entre otros, que lo consideran inteligente, honesto, desconfiado, y cumplidor de la ley. Mientras que en los personajes de élite describen y representa al comisario desde otros concepciones, ya que el será visto desde la exclusión y la sexualidad.

Por último encontramos con relación al imaginario íntimo, tres mujeres que buscan sus afectos y aunque sólo dos de ellas logran causar confusión en el comi comisario; sario; veremos como Laura, marca la imagen sexual y sensual del personaje, está es la dueña del prostíbulo, “ el el senadito ”” ,  vemos cómo esta mujer busca el afecto sexual del personaje porque le atrae mucho. Es así pues que estas tres mujeres se muestran atraídas por el personaje estableciendo que la sexualidad en el texto tiene que ver directamente con dos aspectos de los cuales solo tomaremos uno y es el que tiene que ver con el sentido del la sexualidad como signo de poder, que lo estableceremos cuando abordemos la estructura de relaciones que se instauran  

 

en el campo político; donde veremos cómo actúa el poder

mediado por la

sexualidad.

En los personajes, que funcionan en el texto como representantes de las élites tomaremos a Víctor Freitas y Clemente, ya que estos dos personajes manejan el sentido de confidencialidad, con el fin de planear y cometer actos marginales, además de la exclusión que generan sobre otros personajes como hemos particularizado con el caso específico de Mattos. De acuerdo con las representaciones marginales, de éstos dos personajes tomaremos, la que remite a la violación de las normas establecidas en sociedad las cuales referiré directamente en dos acontecimientos, uno es la muerte del administrador del edificio done vive Víctor Freitas y la segunda está referida a la planeación de la muerte de Mattos, refiriendo, claro está, la relación de estos personajes con la licencia de la empresa Cemtex.

En primera instancia vamos a encontrar que la relación de estos dos personajes se establece en forma íntima ya que existen índice índicess en la novela que nos hacen sospechar; que entre ellos dos, existe una cierta atracción de tipo sexual, la cual es explícita; cuando

se nos narran los acontecimientos sucedidos en el

apartamento de Freitas, en donde Clemente le permite a Freitas que le lama y bese las manos, además; de los referentes físicos con que es comparados Freitas y Clemente.

En los actos marginales vamos a encontrar que estos dos personajes, cometen actos

de tipo tipo criminal, de llos os cuales veremos que sus discursos están

atravesados, por la discriminación y marginalización de algunas personajes, quedando delegados sus discursos a fines ideológicos claramente identificables en el texto, es así; que no es gratuito, que encontremos por ejemplo en Freitas, la  

 

utilización pronominal (“negro”, entre otras), para reforzar el imaginario despectivo, de algunos personajes como: Gregório Fortunato, Mattos, Magalhães, Climério; estableciendo una marca en los personajes nombrados. Tomaremos

como ejemplo el siguiente fragmento, de una conversación que se establece como la representación de la práctica discursiva de las élites, de la novela.

- Esa

casa de campo, pocos saben –continuó Freitas-, no pasa de ser una vivienda miserable entre Belford Roxo y Nova Iguaçu. Un lugar que el sicario Climério llama Feliz Descanso, sin agua corriente y alcantarillado, donde algunos puercos se revuelcan en el barro y gallinas cagonas pasean dentro de la casa. Un sargento de las FAB se avergonzaría de vivir en ella. Zé Bonifácio lo sabe, pero es necesario despertar indignación, alboroto, no importa los medios utilizados. (Fonseca: 1994. Cap. XIV. Pág. 224) 

En éste fragmento de la conversación, la cual se da entre iguales (políticos), podemos notar que la condición bajo las cuales se piensan, llas as formas de vida de los marginales se establece en la condición crítica y miserable como se asume la vida de estos personajes (marginales), es d decir; ecir; que la condición de vida entre estas dos clases sociales se marca en este caso por la comodidad y la idea que se tiene sobre la calidad de vida; es claro que la idea de bienestar está dada bajo la óptica de un solo discurso, el cual es producido en la voz de los que tienen poder, es decir en la clase dirigente o de élite.

En éste fragmento del discurso sobre las condiciones como se establece el bienestar de los personajes excluidos podemos exaltar tres puntos temáticos que resaltan la importancia del discursivo, que es el tema de marginalidad.

En primera instancia queda claro que el tema de referencia para la construcción de este discurso se establece desde la marginalidad y su imaginario; en cuanto asume la condición de vi vida da de llos os excluidos. Las palabras que categorizan el tema se establecen desde las siguientes:  “ vivienda vivienda miserable, Feliz Descanso, sin agua  

 

corriente…” (Pág. 224) en estas palabras encontraremos que existe una intención por

parte del discursante que se marca en la escritura claramente y que se refuerzan en las palabras “Feliz Descanso”, notando así, un índice evidente el refuerzo de las mayúsculas al inicio inicio de cada palabra, exalta una categoría de importancia en el fragmento discursivo.

Con relación a las otras palabras cabe notar que el significado de estas actúan en el discurso unívocamente con el fin de categorizar la intención del discursante, que en este caso es Freitas y, cuya intensión, podemos decir que es hacer explícita las condiciones sociales como se concibe la vida de los brasileros marginales por su condición social; estableciendo así, que en el discurso su carácter focalizador se efectúa desde la élite.

En segunda instancia encontraremos que palabras como: “ puercos, gallinas y barro” , actúan en este discurso como una categoría que se asocia directamente con la condición social de los que se identifican con estas palabras; es decir, las clase excluida en éste caso suele identificarse con este tipo de animales y materiales; estableciendo, que existe una visión diferente sobre lo que la clase alta considera casa de campo; instituyendo así que el pensamiento de Climério  en éste caso particular está asociado directamente a un pensamiento rural en el sentido marginal de la palabra; donde se establece el imaginario de un campesino.

Por último encontramos en el discurso un índice tenue para denotar la importancia de los medios comunicativos, como aparatos de terror en la maquinaria política del Estado, tema que precisaremos desde la instancia de lo público con relación a los medios comunicativos.

 

 

Por otra parte vamos a encontrar que Freitas, es presentado por un personaje que acude en este caso a la voz oculta de lla a sociedad; pero, que en el caso particular de  Agosto   surge surge como una voz que se establece desde el discurso de élite aunque su oficio marque un signo visible de marginalidad. Estamos hablando de Laura, (la dueña del “Senadito”) al referir de Freitas lo siguiente: -“Él es racista. Odia a los negros.” (En este aparte habla Laura),  -Freitas decía que Brasil era un país atrasado debido a los negros y la religión católica. Una herencia negra maldita: la sotana jesuita y la piel de los esclavos. No deja de tener un poco de razón... Claro que los negros no tienen la culpa de ser negros, pobres. (Fonseca: 1994. Cap. XVII. Pág. 277) 

La anterior apreciación que realiza Laura  sobre lo que dice Freitas  claramente refuerza el imaginario en el cual, se construye el personaje. Dentro de aspectos que sobresalen en el discurso mismo; diremos que a pesar de ser un discurso de tipo marginal cambia de focalizador, estableciendo así, una intención discursiva por parte del autor en cuanto da voz a un personaje de tipo marginal como ya hemos manifestado.

Este fragmento discursivo surge como un índice tenue en el texto para hacer explícita

la voz de los excluidos socialmente por una parte de la sociedad,

estableciendo que tanto el imaginario socialmente construido sobre el discurso de los negros aplica a una condición que determina los imaginarios de los personajes en general, ya que sus focalizaciones se centran siempre desde la misma condición marginal; es decir, con relación a esta temática discursiva sobre los negros

encontramos que es una característica que identifica lla a sociedad en

general, donde se perpetúa el imaginario del negro como una maldición.

 

 

Bajo el orden de ideas que hemos venido trabajando vamos a instituir las palabras que en éste caso guardan los ideosemas que nos permiten establecer la relevancia del discurso mismo.

Vamos a tomar en primera instancia palabras como:  “herencia, negra, maldita, piel, esclavos, negros y pobres.”  Para

referenciar las marcas ideológicas más

sobresalientes del fragmento, éstas nos sirven para establecer una categoría en cada palabra ya que aluden directamente a calificativos; la palabra “negros” categoriza una connotación ideológica construida desde el imaginario mismo de la sociedad brasileña, que en éste caso cambia su connotación primaria para instituir una condición social humana, mediada por la condición racial que implica una tendencia ideológica; ya que se establece desde el colectivo. Con relación a la tendencia encontramos que la palabra “ hherencia erencia”  remite unívocamente a la connotación semántica; logrando su sentido semiótico en el engranaje mismo de la frase; en donde los adjetivos  “maldita y negra”  actúan como sinónimos de un mismo disgusto, que en este caso son los negros y lo que ellos representan social y culturalmente en la sociedad de la novela.

Con relación a las palabras escogidas notaremos que   “piel y esclavos”  surgen en el mismo fragmento como marcas semióticas que indican la construcción de un imaginario histórico, en cuanto asumimos que Brasil en su condición geográfica fue un lugar, de desembarque de esclavos; teniendo en cuenta esta particularidad entendemos, pues cómo surge el concepto semiótico por encima del semántico.

De los verbos estableceremos en el fragmento que la intervención de los mismos, actúan como los elementos que depositan el sentido ideático de la percepción que se tiene de una parte de la población, como agentes excluidos por su condición  

 

misma y que asumimos, que se representan bajo éstos parámetros del discurso; ya que implican directamente, una intención representativa como individuos que se particularizan bajo los rasgos ya mencionados.

Con relación al focalizador diremos que la expresión de Laura al final del fragmento  [-Claro que los negros no tienen la culpa de ser negros, pobres. ]  (Pág. 277),  nos verifican que sí existe un imaginario que relaciona a los negros con la pobreza y ésta a su vez, con las condiciones de vida que se manifiestan en el sentido que tienen las las representaciones e en n el imaginario m mismo ismo

de los excluidos y los

excluyentes.

Concluiremos, entonces, que el focalizador en éste caso y la focalización misma son una marca importante en el texto; ya que establece la existencia de dos miradas que se posesionan desde instancias diferentes para focalizar una misma realidad, y que convergen en una misma apreciación sobre la marginalidad. Volviendo a Víctor Freitas,  encontraremos que en su discurso sobre la marginalidad converge, en el odio por los negros y la religión, y de lo cual diremos que es una postura que caracteriza la clase alta en la novela.

La exclusión que se genera en un momento determinado entre los personajes que representan la élite, se da en forma

igualmente privada y en el caso que

tomaremos; podemos clasificarla de íntima a partir del lugar donde se genera. Esta conversación se realiza en un Bar donde se encuentran algunos personajes de élite para hablar de negocios, quedando explícito pues que la reunión tiene como fin, tratar el tema sobre los dineros y el permiso de exportación de la “Cemtex”. Entre los presentes está Claudio Aguilar quien, dice sobre Freitas lo siguiente;  “  –Él no puede hacer eso conmigo. Le voy a decir que no quiero a aquel marica en  

 

nuestra mesa. ¡Infame! ¡Infame!” (Cap. VI. Pág. 106),  esta expresión es importante

porque, permite establecer que al interior de ellos se discrimina al otro por la condición sexual, la cual resulta expuesta en la novela en dos sentidos uno de ellos es la la condición homosexual elegida como forma de vida (caso de Freitas) y de la cual diremos que es privada en termino general, ya que queda explícito en el texto que solo personajes de la misma condición y el narrador  (que   (que en el caso de   hemos  Agosto  hemos

dicho representa la élite desde la postura misma del discurso que

posee éste.) estableciéndose así, que la condición sexual es una marca de tipo marginal en la clase de élite.

El otro sentido que sobre el discurso de la homosexualidad se genera en el texto; está bajo el manto de lo privado íntimo; en el cual la condición de elección está velada por una imagen social establecida frente a la comunidad elitista en general, como es el caso de Claudio, su primo Gomes Aguilar y Lamagno, en donde vemos que su intimidad solo se establece por la investigación de Mattos; en relación con el asesinato de Gomes Aguilar. La intención de marcar en el texto la conducta sexual como una forma de ejercer el poder, queda entonces explícita; pero este sentido que hemos establecido en el discurso de la sexualidad lo analizaremos, cuando referenciemos la importancia del cuerpo y el imaginario de la mujer en contra posición con el homosexualismo.

En cuanto los actos que conllevan violación a la norma (marginalidad), vamos a referir solo dos para mirar las actuaciones de estos dos personajes en particular. (Clemente y Víctor F.)

El primero es el que compete directamente al asesinato del administrador donde vive Freitas, el segundo es la construcción del asesinato de Mattos.  

 

Con relación al crimen de asesinato, encontramos que el comentario sale a relucir bajo la influencia del alcohol; en la cual está sumido Freitas  en ese momento. Recordemos entonces, que Clemente y Freitas atienden la visita de Teodoro; un policía que trabaja en la misma comisaria de Mattos. Cuando Teodoro se va de la casa de Freitas se establece entonces,  el incidente del asesinato de un hombre mayor que vive solo en su casa, los acontecimientos de éste acto criminal se dan en las horas de la madrugada y todo ocurre cuando Clemente va al apartamento del hombre con el fin de hacerlo entrar en razón para que no divulgue a la comunidad donde viven, que Freitas se encontraba en el ascensor teniendo sexo oral con un joven; que era casi un niño. La intención de Clemente era evitar que este escándalo no saliera a la luz pública, arruinando así la carrera de su benefactor, entonces es así que Clemente  al ver la Actitud del hombre, en un ataque de ira lo toma por el cuello asfixiándolo, al salir de su casa toma lo primero que ve y que en éste caso es una Biblia; con relación al robo de la biblia vamos a encontrar que los personajes de élite muestran una tendencia ideológica en contra de la Iglesia católica, católica, esta ideología política de la creencia radica claramente en la novela con la apreciación de Freitas, en lo que nos informa Laura sobre lo que dice Freitas en su establecimiento y la segunda y más fuerte es la crítica que le hacen al cardenal de Janeiro, al poner a la Iglesia en el conflicto político que se genera con el asesinato de la calle “ Toledo  Toledo” y por último; y en relación a la ideología de la tendencia de rechazo a la religión católica encontramos al presidente Géntulio Vargas observando un cuadro del papa cuando éste visita el Brasil, dando esta imagen un refuerzo al discurso, que se genera de la Iglesia católica, como un ente en el aparato político que causa confusión.

Volviendo nuevamente a la actuación de Clemente notaremos que la imagen de representación de la Iglesia se establece en Freitas, bajo el imaginario traumante del padre, quien al igual que el hombre asesinado, era pastor. Ahora bien, en el  

 

caso particular de Clemente, vamos a encontrar que este personaje agrede directamente, la imagen simbólica de la Iglesia como estamento social; éste acto lo encontramos referenciado en el texto cuando Clemente, orina en la Biblia frecuentemente; hasta el punto de borrar las letras de tinta del antiguo dueño.

Con relación a Clemente encontramos que este planea y contrata con  Teodoro  un “sicario”, para mandar a matar a Mattos, hecho por el cual se paga, aunque éste no realiza el trabajo; que como veremos en la novela la muerte de Mattos es efectuado por Chicão. En forma paralela a la temporalidad del suceso encontramos Freitas,  en reunión; con un hacendado para discutir la compra de votos en las provincias cerca de Janeiro. (Recordemos entonces que las elecciones esta cerca.)

Como podemos observar los eventos de la práctica marginal en éste caso se producen; ya no sólo en el discurso, sino que trascienden a la acción misma como tal. Donde dicha acción queda en la privacidad; ya que no son expuestos a la opinión pública; es decir son actos que se desconocen en los medios de comunicación.

Dentro de las acciones que hemos denominado como marginales, y que se dan en el aspecto Privado de la novela, vamos a tomar tres personajes más. Estos personajes son Luciana la esposa de Paulo Gomes Aguilar, Pedro Lamagno y Chicão.

Actos de marginalidad en la élite  

 

En primera instancia asumimos que los dos personajes están involucrados sexualmente de la siguiente manera:

Luciana

Pedro Lamagno

Chicão.

La relación que establecen éstos personajes conllevan a la criminalidad, en el sentido que hemos asumido como transgresión a la norma. Como sabemos Chicão  es el asesino de Gomes Aguilar, quien realiza el asesinato bajo las

órdenes de Lamagno y Luciana.

Inicialmente referenciamos a Luciana y  Lamagno, a partir de la utilización de palabras que marcan sus discursos como sinónimo de exclusión, palabras como: “invertido, negro”, entre otras; para revisar las conversaciones que se dan sobre el aspecto de la privacidad y el crimen.

Dentro de las conversaciones encontramos que estas se dan en lugares públicos y privados, como es el caso del apartamento donde mantienen su relación de amantes y el club de jockey, al cual acude la alta sociedad.

Uno de los rasgos distintivos, en las conversaciones entre estos dos personajes (Luciana y Lamagno), es que se generan en dos instancias una de ellas es por medio de conversaciones de tipo directo (cara a cara) y el otro es de tipo semidirecto (con mediación de el teléfono), bajo estas dos perspectivas

 

 

tomaremos uno de los

apartes de una conversación tipo semidirecto para

establecer la referencia del acto delincuente entre estos dos personajes. -Pedro Lamagno, no hice lo que hice para que ahora me

tomes por boba.

 Arpía ninfomaníaca. Por culpa suya dos personas habían sido asesinadas. ¿Cómo había podido llegar llegar la cosa a tal extremo? -¿Oíste lo que dije? -si Luciana… (Fonseca: 1994. Cap. XV. Pág. 247)

En éste fragmento de la conversación se hace interesante ver cómo el narrador, toma voz para contarnos lo que ha sucedido en torno de éstos dos personajes; en éste caso en especial, nos pone frente al imaginario de una mujer maniática por el sexo. Y donde queda claro lo que ellos han realizado como actos de tipo marginal.  Además de mostrar cual es la relación que une a éstos dos personajes; quedando explícito así, que el imaginario sobre  Luciana se da entorno de la locura y el sexo, que se media por el alcoholismo.

En  Lamagno  vamos a encontrar que el imaginario se establece en torno de la buena salud y aspecto físico; encontradas en la presentación de Lamagno  y  Mattos y en la dada con relación a Chicão.

En la relación que se establece entre Chicão y  Lamagno  encontramos que la relación es de tipo íntima, donde; quedan referenciados los crímenes que cometen, en conversaciones de tipo semidirecto; una de llas as conversaciones que analizaremos es la que refiere a la petición de Lamagno  a Chicão para matar a Mattos. sabe be qque ue fue un nnegro egro el que mató a Paulo. Estuvo aquí con conmigo migo y -  Ese tira ya sa habló de eso. - ¿Por qué el señor no me dijo?

 

 

siguiendo iendo una pista falsa porque cría que -  Iba a hablar con usted pero él estaba sigu el negro era Gregório, el guardaespa guardaespaldas ldas de Géntulio. -  Pero ahora sabe sab e que soy yo, Fra Francisco ncisco Albergaría. -… - ¿El señor para que me necesitaba? que mate hijoa de puta Siempre quise conocer la buena tierra. -- Quiero Yo no doctor. Voyaaese huir Bahia. - Conozco a ese tira. Lo va a seguir hasta el infierno. Es un obsesivo, un loco. -  Bahia es grande y esta lleno de negros como yo. Va a ser difícil que me encuentre. terminar a por encontrarlo. Usted va a vivir amedrantado, acosado, -  Le digo que terminara con miedo de revelar que es de Rio, con miedo de boxear, con miedo de decir que fue soldado, asas cosas que el ya sabe de usted. Un día usted baja la  guardia y él lo golpea. ¿Va qquerer uerer vivir en una mad madriguera riguera como un rratón? atón? - ¿Ese comisario es un invertido como el doctor Paulo? h acer un trabajo má máss fácil… -  No- Pausa-. Va hacer - …-Si mata a ese canalla, lo que por otra parte le será más útil a usted que a mí, le doy lo que quiera. Dinero para comprar una casa en Bahia, a la orilla orilla del mar. Un estipendio mensual para sus gastos el resto de su vida. mu cho. Lo voy hacer ggratis ratis para el señor. -  El señor ya me dio mucho. ese regalos. perro usted me dará una alegría tan grande que me comprometo - Matando a darle aesos - ¿Puedo hacerle una pregunta? -  Puede. - ¿Doña Luciana está al corriente de eso? - No. No tengo más nada con Doñ Doñaa Luciana. Nos peleam peleamos. os. (Fonseca: 1994. Cap.  XXI. Pág. 310 - 312) 

Esta conversación, es una de las más importantes entre los personajes en el texto; porque permite precisar información que ya sabíamos de Chicão,  además de establecer directamente la práctica marginal, en los dos sentidos que hemos estado trabajando en el texto. Asumimos así que en esta conversación, se encuentra presente las dos formas de práctica marginal. Respecto a esta conversación tenemos que decir, que es clara la manipulación de Lamagno sobre Chicão en donde se hace hincapié en el discurso del poder, que,

queda referenciado en éste ejemplo de forma impecable; ya que nos específica, lo que hemos tratado de demostrar en la novela y que apunta a cómo las prácticas marginales median entre dos mundos uno el de la vida privada que se establece en los actos marginales y la iintimidad ntimidad de personajes. Y el otro es la vida de lo público que se establece en las acciones publicas de los personajes como son los  

 

escándalos políticos; donde quedan expuestas las prácticas marginales de la élite, es decir se dan a conocer a la opinión pública, por la intervención de medios de comunicación masiva.

Dentro de las palabras que categorizan esta conversación como las más relevantes estableceremos las posturas tanto discursivas como ideológicas de estos dos personajes; donde instauraremos, cómo la posición social está bien marcada en esta conversación de acuerdo a los imaginarios. Dentro de las palabras encontramos: “negro, señor, hijo de puta, doctor, esta lleno de negros como yo, madriguera, como un ratón, Ese comisario es un invertido como el doctor Paulo, perro”.   (Cap.  XXI. Pág. 310 - 312) Los primeros signos que encontramos con estas palabras es que indudablemente mantiene el discurso de la exclusión o marginalidad; en el cual encontramos cómo el discurrir de  Lamagno  se establece desde palabras despectivas como:  “negro, hijo de puta, canalla, madriguera, como un ratón y perro”. Mientras que en el lenguaje utilizado por Chicão, se establece desde el respeto y auto-discriminación como sujeto; palabras como: “señor, doctor, esta lleno de negros

como yo y  Ese comisario es un invertido como el doctor Paulo”,  establecen en este personaje unas marcas características de su conducta frente a la imponencia del poder que en éste caso es representado por Lamagno.  Dentro de las características de esta conversación y que confluyen entre los dos personajes a sumimos que el tema principal es matar al comisario, bajo este precepto encontramos: como las ordenes se establecen bajo el aliciente del dinero como medio que utiliza el poder para instituir que sus requerimientos sean cumplidos, cosa que en éste aparte se establece con una anormalidad de la regla establecida por los infractores de élite; ya que Chicão realizara el acto de matar por el solo placer de liberarse del problema; quedando explícito que en el discurso de Lamagno se encuentra en un discurso que converge desde la manipulación en cuanto éste personaje logra convencer al acecino de llevar acabo el acto que él requiere para su bienestar propio; donde vemos como la persuasión hacia Chicão   

 

a parece disfrazada con las cosas que a él más le gustan y que perderá si se va a Bahía, para finalizar y revisar la imagen de Lamagno  como manipulador y

 

poseedor del control en el discurso revisaremos la expresión: “lo que por otra parte le  será más útil a usted que a mí”,  donde se establece a través de esta oración que la

intención, (acto perlocucionario) del emisor se cumple en el receptor, en cuento logra modificar la conducta de Chicão.

En el orden de presentación de los personajes y temáticas discursivas de la novela de Fonseca, pasaremos a referenciar a los personajes femeninos y su sexualidad para determinar aspectos de marginalidad. Entendida así la imagen de la mujer como parte de la problemática que nos presenta el texto en el discurso mismo de la marginalidad encontraremos como intromisión en el aspecto de lo privado como tal.

Mujer y sexualidad.

Dentro de los imaginarios que se han construido en América latina sobre la mujer encontramos, que la imagen que cobija a la mujer se teje, bajo la concepción del machismo, que agrede, la propia imagen de la misma; es por esta razón que en este trabajo quisimos tomar los personajes femeninos y su sexualidad, como un elemento que nos permite evidenciar en la novela el aspecto de marginalidad.

En éste aparte del trabajo vamos a tomar en primera instancia al personaje de Salete, de quien diremos que se nos presenta en la novela como una joven mujer

que se caracteriza inicialmente por estar enamorada de Mattos y ser la amante de Malgañes. En los primeros referentes que encontramos de este personaje en la novela, vamos a encontrar que existen tres marcas fuertes que nos indican que  

 

Salete,  es un personaje que se construye desde lo marginal. Los tres aspectos

más notorios son:   El origen del personaje



  El rol representativo q que ue cumpl cumple e en lla a novela el personaje



  La fealdad y el imaginario del cuerpo



Bajo estos referentes notaremos cómo el personaje, se establece en algunas de las condiciones de marginalidad que imperan en los personajes de Fonseca. Inicialmente tomaremos como punto de partida el imaginario o rol representativo que cumple en la novela el personaje, en donde trataremos de establecer desde esta representación el aspecto que refiere a la fealdad como un sinónimo de marginalidad (exclusión) y el cuerpo como elemento de poder sobre otros personajes (el cuerpo como instrumento de poder en la sexualidad) con características de igualdad (condición social); es decir que se establece la existen de unas condiciones de marginalidad entre los personajes que llevan acabo actos de tipo sexual en la novela.

Salete es representada en el texto inicialmente como una mujer que lleva acabo

dos relaciones de tipo sexual y emocional con dos personajes diferentes, lo cuales ya hemos referenciado, lo interesante de esta presentación del personaje se establece en la obsesión, que desarrolla Salete  para conquistar Mattos; en cuanto veremos como a partir de la relación con Mattos se realiza una introspectiva del personaje para señalar la importancia del cuerpo y la auto negación del individuo como marca de exclusión.

La exclusión que en éste caso se asocia a la exclusión de sí misma, que está marcada fuertemente por social, en cuanto se establece que el imaginario de esta mujer surge desde la siguiente marca: “ En la casa de doña Floripes le habían enseñado  

 

que los hombres existe para ser agradados, engañados y explotados, y que por ente era preciso  saber disimular.”

“Pero ella no quería engañar o aprovecharse de aq aquel uel hhombre ombre.”  (Fonseca:

1994. Cap. V. Pág. 91),  de éste aparte estableceremos, que existen una condición

sicológica que predispone al personaje culturalmente a actuar como lo hace en la novela, marcada claro está por la condición que se establece en la última oración, que nos pone de inmediato sobre avisos de que ella ésta enamorada. Con relación a éste fragmento encontramos también, que la casa de “doña Floripes”  se refiere directamente a una casa de prostitución donde Salete trabajó hasta que conoció a Malgañes. 

Dentro de los discursos que encontramos en la novela y que refieren al personaje, notaremos que es el narrador quien presenta el imaginario sobre sí misma (Salete), como una forma de marcar la condición del personaje; que en éste caso, se vera que está bien asociado a la formación machista y manipuladora de sociedades y la cultura latina. latina.

Es así, que encontraremos por ejemplo que en el siguiente aparte el discurso del no reconocimiento de si misma, como un índice fuerte que marca marca al personaje.

Aproximó su rostro al espejo. A ella le gustaría mucho ser rubia y tener los ojos azules como aquella mujer, y como aquella mujer saber encarar a los otros, como había hecho la rubia al mirarla desde la puerta. Ahora contemplaba bien recerca su rostro reflejado en el espejo. Los ojos eran muy redondos, todo el mundo decía que los ojos almendrados eran muy bonitos; las cejas muy gruesa y negras; la nariz muy larga; la boca muy grande. ¿Por qué Dios la había hecho, tan fea? Lo que la salvaba era el cuerpo. En aquel momento degustaría mirarse en un espejo grande para olvidar a la muchacha rubia. En su casa bailaba desnuda frente a un enorme espejo colocado en la pared, y la visión de su cuerpo desnudo en movimiento daba siempre una enorme felicidad. Pero en el espejo de Mattos sólo había ese espejo insignificante insignificante que dejaba vver er apenas su rostro horr horroroso. oroso. (Fonseca: 1994. Cap. XIV. Pág. 224)  

 

 

En éste párrafo, es interesante cómo el narrador nos presenta a Salete desde el discurso de la exclusión; donde queda claro que el personaje no posee un discurso propio, en cuanto el personaje asume otro puesto en las relaciones sociales y comunicativas que se generan en el texto; estableciendo así, una marcada diferenciación con su origen y la determinación para negar su pasado, con una nueva vida, que la empuja a asumir una posición elitista de su propio imaginario como mujer.

En este párrafo nos interesa revisar, como aspectos relevantes la descripción del narrador sobre el personaje, en donde nos fijaremos en la construcción del imaginario mismo del personaje; en segundo lugar nos interesa establecer la importancia de autoexclusión como un elemento cultural del personaje. El espejo como ente que reproduce el imaginario en el personaje, la fealdad y por último la importancia del cuerpo como símbolo de poder y sexualidad. En el aparte anterior establecimos los temas esenciales analizar, es por esta razón que tomaremos la descripción del narrador como elemento que categoriza el discurso marginal del personaje, en primera instancia hallamos la descripción de Salete  como el foco que posibilita la intromisión del narrador para exponer la

intimidad del personaje, dentro de los núcleos semánticos de interés encontramos  los siguientes: “ muy, muy, como, tan, gustaría, degustaría, había ,”   en el orden que hemos establecido, observamos que las tres primeras palabras remite a tres adjetivos comparativos y calificativos; donde encontramos que el propósito de estos elementos semánticos en la descripción actúan como los mediadores lexicales para hacer explícita la intención del narrador que en éste caso específico nos pone frente a una negación del individuo, desde la construcción misma de su identidad individual ya que al ser comparada y calificada en relación con otro sujeto, da como resultado una negación de si mismo que solo puede expresarse en una tercera persona como se hace en éste caso. Los verbos que siguen a los  

 

adjetivos son interesantes, en cuanto reafirma una condición que se establece desde la acción misma y que implica el verbo como tal desde su construcción en imperfecto.

El comparativo “como” surge en el texto con una función específica, esta es realizar la comparación de dos individuos, individuos, e estableciendo stableciendo así; que

existen

diferencias marcadas. Donde dichas diferencias se establecen en relación a la condición racial, que surge como un producto de la condición cultural a la cual esta expuesta la sociedad marginal de Brasil (novela).

El adverbio “muy” actúa en el texto como un índice que permite identificar cómo el narrador desde la focalización del personaje exagera en el imaginario del personaje, mostrándonos al final del texto el adjetivo superlativo nuevamente en el sentido semántico y semiótico de la palabra   “ horroroso  horroroso ””   que como entendemos refuerza el imaginario de fealdad en el grado más alto de significación.

Diremos entonces que los adjetivos y adverbios, en este caso particular   son las marcas que nos indican cómo el imaginario de Salete  se establece bajo la sombra de otro personaje que surge en este caso como una contradicción misma a lo que es Salete  en su significado como representante de una parte de la sociedad.

Tomando el tema de la autoexclusión encontramos cómo desde el imaginario cultural de la sociedad en general de la novela se construye una negación misma del individuo; en el cual, establecemos que el imaginario del marginal se establece desde la élite y los cánones, que éstos como una marca que restringe el desempeño del individuo, que es marcado sicológica y socialmente por la  

 

condición que se ha concebido en una pequeña parte de la población; pero que ejerce su poder desde las actuaciones y discursos mismos, integrando su imaginario a una sola voz, y que en este caso surge como un control sobre los excluidos, limitando así, su propia imagen.

Es así que encontramos en esta lectura sobre el fragmento que tomamos como ejemplo que no es gratuito que el referente de comparación se establezca desde dos polos opuestos; en donde el  “  ser rubia y tener los ojos azules” no  tiene que ver nada con  “las cejas muy gruesa y negras; la nariz larga y la boca muy grande”(Fonseca: 1994 Cap. V. Pág. 91-92),  estos referentes de comparación establecen claramente que el

imaginario de élite se institucionaliza desde un prototipo de mujer de clase alta que en éste caso se encarna en Alice y Luciana.

Con relación al simbolismo que encarna el espejo en este fragmento diremos que este tiene que ver directamente con el pensamiento ideológico de una sociedad que culturalmente, reproduce como el espejo; sus pensamientos e ideas, reafirmando la anterior concepción nos instalamos en la focalización misma del narrador en cuanto él actúa como reproductor del imaginario que se proyecta y reproduce en el espejo, como extrapolación de la cultura e ideología de la misma.  Ahora bien si el espejo en su significado simbólico nos lleva a pensar en lo anterior, y que en comparación con la cultura y la reproducción de imaginarioimagen de los individuos, éstos actúan influenciados por la imagen que tiene de ellos mismos; bajo esta óptica establecemos pues, que el tamaño del espejo está asociado a la estrechez de imaginario sobre el sujeto mismo ( Salete).

Con relación a la fealdad y el espejo como reproductor de imagen-imaginario, encontraremos un referente que nos será de gran importancia para establecer el imaginario de la mujer desde su cuerpo; como elemento que le permite acceder a  

 

un tipo de poder que en este caso se reproduce en el aspecto sexual, y donde estableceremos como este tipo de poder se ejerce como una manera de control; donde se asume que en el resultado, se encuentra implícita una exclusión que conlleva marginalidad del sujeto sometido. En este párrafo nos interesa mirar cómo el aspecto de la fealdad, el temor y el imaginario sobre el cuerpo; van a marcar, la imagen de marginalidad que posee Salete y que se mezcla con la buena vida que tiene el personaje para establecer

una doble marginalización que se nos muestra a través de los discursos y los imaginarios de otros personajes y que van en relación con la mujer. Inicialmente diremos que los anteriores signos mencionados al inicio de éste párrafo nos indica las características bajo las cuales buscamos establecer la marginalidad de  Salete; como también, serán las voces que emiten estos referentes de marginalidad; así, que en relación a las voces que refieren el aspecto marginal encontramos que se dan en personajes que poseen cierto reconocimiento de poder en el texto, como, será el caso de Mattos y el narrador quienes son los únicos que refieren al personaje desde sus propios imaginarios. Con relación al narrador diremos que éste no permite que Salete tenga voz para auto- reconocerse como ser marginal; es decir, no permite que el personaje sea consiente en forma discursiva de su propio imaginario. Mientras que genera en el imaginario del lector, que el fin de éste personaje es realizar la acción para legitimizar aun más su rasgo de exclusión y marginalidad.

En relación con el tema del cuerpo resulta muy importante resaltar que en la cultura latinoamericana los cánones de la belleza se generan justamente a partir del imaginario que se ha establecido desde el cuerpo poniendo de antemano los planteamientos teóricos sobre las mezclas de razas y culturas, que caracterizan la hibridación latina. Además es interesante la forma como el autor expone la importancia del cuerpo; ya que dentro de los imaginarios y formación de la cultura  

 

afro-descendiente a la cual pertenece Salete  y parte de la población brasilera, encontramos, que estos grupos, por las condiciones históricas de marginación, han desarrollado referentes de vida que se fundamentan en la conciencia de su cuerpo como instrumento que los pone socialmente, por encima de otros diferentes ellos en condición física. Así, el imaginario del cuerpo con que se contenta y contempla Salete, no es más que ese referente de mostrar como se vive y se imagina la superioridad del individuo marginalizado en relación al que no posee marcas, tan fuertes como las dadas por la exclusión; entonces, diremos bajo los anteriores aspectos; que Salete muestra una marca de doble marginalidad en cuanto la asumimos desde la historia, no solo como miembro de una comunidad específica como la afro, sino que también la asumimos como mujer, donde se encuentra en contraste su posición social que conlleva a una doble vida donde se encuentra entre lo que es y tiene y lo que no es y quisiera tener.

De este personaje tenemos que referenciar que en el siguiente aparte,  “…y como aquella mujer saber encarar a los otros, como había hecho la rubia al mirarla desde la  puerta.”(Fonseca: 1994 Cap. II. Pág. Pá g. 91 - 92)   vemos nuevamente la imagen reproducida

por la cultura, de la cual diremos también, que establece temor, además de conferirle

a este personaje una baja autoestima; el cual está dado en la

comparación para mostrar su diferencia con el otro (en este caso referimos a la primera vez que se ven Alice y Salete en el apartamento de Mattos.), tomando éste aspecto un sentido de marginalidad en cuanto se otorga superioridad al otro personaje (Alice),  visto desde el complejo e intimidación que logra provocar en Salete.

Un índice que antepone y constata nuestro presupuesto está dado en el momento en que Chicão va a matar a Salete y él le hace explícita en su belleza, en esta imagen recordemos pues que Salete le pregunta si de verdad le parece una mujer bonita y éste reafirma su postura, en este breve ejemplo notamos cómo el sentido  

 

de belleza se canaliza en un personaje que como veremos encarna de alguna manera la enfermedad de la sociedad; establecido así el acto de reconocimiento de Chicão  hacia Salete  como una marca que surge para establecer que el reconocimiento de lo no marginal dentro de un patrón marginal solo lo establece un personaje de carácter similar (igual) en su condición social.

Con relación a la marginalidad en el sentido de exclusión veremos cómo en el aparte donde Salete se encuentra con una vendedora de una Boutique, esta, expone a través de la voz del narrador la forma despectiva y lastimera por la vendedora, mostrándonos lo que referimos anteriormente; y es, que el cuerpo en Salete significa superioridad y poder. Bajo esta reflexión encontramos la razón

por la que Salete admira todo el tiempo su desnudez en el espejo la cual conduce a reflejar la auto-negación de ella como individuo. Por otro lado la recurrencia en la utilización de su desnudez alude también al aspecto de la sensualidad, como elemento de poder en la intimidad del cual, basta con analizar el aparte donde  Alice y  Mattos tienen relaciones sexuales, para establecer que el color de piel

surge en el aparte como una marca que categoriza a los personajes desde su constitución de género, recreando así a una mujer pasiva, por un matrimonio y buenas costumbres dogmaticas; donde se muestra el modelo idealizado de las mujeres casadas, en donde la frigidez y los actos fingidos hacen parte de su quehacer sexual, en este mismo orden de ideas encontramos la imagen recreada por el narrador para describir la relación afectiva y sexual que tiene  Lamagno  y  Chicão, donde notamos que  el carácter de poder que se establece entre estos dos personajes a partir de la sexualidad se da en un sentido de compromiso, en donde vemos como Chicão respeta y se somete a las pretensiones que le planta Lamagno, en estos dos personajes y con relación al cuerpo y la sexualidad

encontramos, al igual que el ejemplo de Alice y Mattos en cuanto al color de la piel es un índice que marca lo que hemos establecido desde los rasgos raciales en donde el color de piel y ciertas características como “los ojos azules y ser rubio, a”, marcan un presupuesto de poder sobre el de “color negro” quien es  

 

presentado grotescamente desde Salete, bajo estos índices establecemos que la dominación del color en la piel indica una posición de carácter superior sobre el otro y que solo se establece en igualdad desde el m mismo ismo rasgo de marginalidad que manejan los personajes como es el caso de Salete y  Mattos; y  Freitas y  Clemente, en donde vemos que los actos que se reproducen en relación a las acciones sexuales restablecen un orden de elección individual; donde el poder impositivo surge como una ventaja que desarrollan los personajes desde sus condiciones de igualdad.

Volviendo al tema tema de la mujer encontramos una fijación que nuevamente golpea el imaginario sobre la misma el cual queda en este caso depositado sobre Luciana; a la cual, vemos, que se sale del esquema para mostrarse más liberal siendo bajo esta condici condición ón estigmatizada por el Hombre en un sentid sentido o

de

masculinidad que como podemos notar en la novela se establece en el personaje de el texto Freitas al denominarla “ninfomaníaca” y después por el Lamagno en donde utiliza la misma referencia para calificarla.

La diferencia que podríamos establecer entre Salete  y Luciana  es que siendo ambas de condiciones sociales diferentes y representadas

como amantes,

notamos como el aspecto sexual de Luciana, tiene un estado de poder sobre la actuación misma de Lamagno, en cuanto demuestra en el texto como Lamagno  accede a los requerimientos sexuales de Luciana, y que en este caso dichos requerimientos se establecen establecen en intereses materiales claros (el asesinato de su esposo y acceder a la empresa la Cemtex). Bajo las característica con que se reproduce esta relación de los dos personajes mencionados estableceremos que existe una doble dominación donde Luciana  es dominada; y el medio de dominación se ejerce directamente desde el acto sexual; mientras que Lamagno  es dominado sexualmente por Luciana (porque sabe que si no lo hace ella no accederá a sus requerimientos de tipo material). En el caso particular de Salete  vemos como ella atreves de su sexualidad alcanza conseguir lo que siempre ha  

 

querido estableciendo el “querer” en lograr alcanzar una posición social favorable en comparación con su vida anterior (en la favela), esto en caso con su relación con  Magalhães; mientras que en su relación con Mattos  establecemos que el sexo surge como un mutuo acuerdo de los personajes. Entre estos dos personajes femeninos estableceremos pues, que la representación de la mujer en este caso se establece en dos imaginarios, el primero corresponde al de la élite y el segundo al de la clase inferior, estableciendo un punto intermedio en el cual ubicamos a Alice.

 A partir de los ejemplos expuestos podemos fácilmente ver porque no se enjuician drásticamente las acciones de los personajes que realizan prácticas sodomitas en las que se muestra, claramente el pervertimiento de la sociedad en todas sus capas y que queda establecido en la connotación que leda el pastor que vive en el mismo edificio de Freitas  al expresar la tendencia sexual del personaje en “pervertida”.

Tomando nuevamente el imaginario sobre el cual es construida la mujer en agosto diremos que es también, machista en todo su fundamento ya que como podemos ver realiza una fijación bastante fuerte sobre como se considera la mujer, en éste caso, por el narrador quedando implícitos los compromisos directos del autor. Dentro de los referentes de intimidad ya dijimos que la sexualidad surge como un elemento de poder; de mostrándonos en este caso que Salete a pesar de sentirse excluida por su condición racial y social, tiene poder sobre los personajes masculinos del texto; ya que ella, en su afán de ser reconocida en la vida de Mattos establece que su poder fundamental es su cuerpo y sexualidad con la

que también atrapa aparentemente a Magalhães.

 

 

Dentro del concepto de belleza y marginalidad establecemos que en este personaje se encuentra presente que la relación que se da entre iguales que en este caso es de tipo marginal, (ya que se da entre dos personajes que poseen características sociales similares como son Salete y Chicão; en donde vemos como Chicão  se refiere a Salete como una mujer hermosa, quedando en esta expresión una afirmación hacia la importancia del cuerpo y el imaginario que sobre este a generado la gente de condiciones sociales similares y particularmente en este caso de gente que pertenece a grupos minoritarios. 

Dentro del aspecto de intimidad, entenderemos en estos personajes que una de las características que se establecen, es que las relaciones entre esos personajes se dan de acuerdo con la proximidad física física

y confidencial. En donde

encontraremos a  Salete  contándole a Mattos las verdaderas intenciones de cocinar macarrones; para así; quemarlo y provocar una quemadura que produjera una costra y así llevar acabo la práctica de “macumba”.

En el aspecto de intimidad referiré que el espacio sigue siendo el índice que marca su caracterización en cuanto facilita identificar en los diálogos las categorías tales como el abuso, el respeto y el odio.

Alice es nuestro otro personaje femenino, en ella encontramos además de las

características ya dadas; que en el único diálogo con su esposo (Pedro Lamagno), ella al igual que Salete es pintada por un personaje masculino que en

este caso es el narrador además de revelarse sus intimidades de salud por otros personajes; sobre el ella la se

referirán en sentido compasivo, excepto Luciana, 

personaje también femenino y del cual diré que es descrita en un imaginario de lo machista; porque los rasgos que encontramos en este personaje nos dan a mostrar

que es una mujer que no mide una conciencia ética entre lo que

socialmente se espera que realice, esto con relación a su matrimonio y su amante.  

 

 Además de mostrar en el personaje de Luciana  un personaje que se está degradando a través de un alcoholismo que la lleva hasta el punto de perder a su amante.

Es así que el machismo en Alice se marca por dos características una de ellas es cuando  Lamagno le pide a  Luciana que la respete, que no se refiera a ella en forma despectiva como esta lo está haciendo. Mostrando esta actitud de Lamagno  que el maneja el respeto pragmático que exige el matrimonio. Y en

segunda característica encontramos la posición de Mattos al hacer que se propicie la develación de la depresión de   Alice;  la cual queda como reflejo característico de la la debilidad y fragilidad. Y que veremos en otro personaje como es el de Géntulio Vargas que cae en de presión después de que los escándalos golpearon su carrera política de forma di directa. recta. Es así que en Alice su enfermedad de maniaco-depresión se da como una condición de mujeres que han

sido

sometidas a una condición de vida sicológica que no han podido controlar y que genera ansiedad que muestra como el auto control suele pasar aun segundo plano.

Como podemos ver en las mujeres de Agosto  la  la marca del sometimiento atraviesa sus vidas, sus intimidades sexuales y personales; llevándolas a extremos como el que tienen las tres mujeres que hemos mencionado; en Luciana  por ejemplo encontramos el alcoholismo como la marca a la que nos referimos, en Alice es su enfermedad, y en Salete las prácticas de “macumba”, sumado a la obsesión de su cuerpo.

En las tres mujeres observamos un marcado interés por pertenecer a un hombre, son personajes que buscan a cualquier precio ser tomadas en cuenta; dentro de las características asociadas a estos tres personajes encontramos que la soledad  

 

en que viven estas tres mujeres, en el texto; se da en función de una soledad no escogida sino de tipo obligatorio, donde la sociedad marca sus vidas de forma tajante en cuanto vel vela a otros posibilidades que tienen las las mujeres m modernas. odernas. Es decir que la educación en estos tres personajes marca sus actitudes de forma clara en el texto. (Alice, Luciana y Salete.)

Con relación al origen de Salete diremos que este marca de igual manera que su fealdad, una condición de auto exclusión inconsciente en el personaje en cuanto asumimos desde la presentación de la madre de Salete, la negación de la misma, que surge en el texto como un índice de negación a sí misma, y que se nos presenta en el reflejo e imaginario que se tiene de la figura física y económica; como, la madre es mostrada al lector. En el siguiente aparte nos permite establecer que el factor de masculinidad en la novela pone a la mujer en un imaginario bastante desigual y violento.  El policía p olicía ssintió intió una hostilidad instintiva hhacia acia la m mujer, ujer, por la ppostura ostura del rostro, por la elegancia de su traje negro. No pasa de una plutócrata de buenas maneras, pensó. Como Alice. (Fonseca; 1994 Cap. II. Pág.37)

 Al asumir ésta posición el personaje está rech rechazando azando el poder q que ue en este cas caso o es representado por una mujer q que ue se proyecta sobre otra mujer que es Ali Alice ce como dos seres que titienen enen decisión, pero que cuando vamos a las prácticas sociales de las dos mujeres observamos que ellas tienen libertad en cuanto la sociedad les permite que se mantengan las normas machitas a las cuales ya nos hemos referido.

Dentro de los aspectos que refieren a la mujer, como amante encontraremos que el no estar en los acuerdos establecidos por la oficialidad, arremete, contra la  

 

mujer poniéndola en imaginarios como el que le transfiere Magalhães a Salete al referir lo siguiente, “ jamás dejarían entrar una putita, en Vogue ”. Como podemos ver está connotación sobre la mujer apunto en dos direcciones, una la estigmatización de las mujeres que sostienen relaciones con hombres comprometidos y dos la posición elitista del personaje, que dando claro que quien habla en este caso, es un hombre que en su condición de género ejerce un poder apreciativo sobre la mujer, otro aspecto interesante que surge de este mismo aparte es la representación de marginalidad del personaje en cuanto encontramos que la utilización del lenguaje varia marcadamente en relación a otros personaje que representan la élite y que en este caso sería Lamagno y Freitas, quienes hacen uso de la palabra “ninfomaníaca”, para expresar una conducta sexual liberal. Volviendo nuevamente a Salete  encontramos también que el aspecto machista surge aquí como una marca del poder social que ejercen los hombres.

 A continuación en este trabajo tomaremos nuevamente el espacio de lo público; que si bien, ya, se ha, hecho mención en la intervención referida al personaje de Gregório  Fortunato  han quedado por fuera elementos, como: los medios

comunicativos y los imaginarios que se construyen en torno de estos; señalando que los factores sociales determinaran características de marginalidad.

El aspecto político y los medios de comunicación

“una épica de movimiento, y de conciencia del desorden es a la vez una época de grandes .”   riesgos y grandes posibilidades .”  Altschull (1984)

 

 

es  Agosto   es

considerada como una novela que posee un alto contenido político; ya

que se refiere al evento atmosférico, en que se tornan los últimos días de una dictadura en declive del presidente  Géntulio Vargas  (y que se termina en los últimos días de agosto del año 1954.); es importante resaltar también el contenido ideológico, el cual se expone en el texto a través de los discursos de élite y las marcas diferenciales, que se tejen al interior de la novela. En el siguiente aparte tomaremos el aspecto político de la novela y las ideologías que se tejen en los diferentes discursos; además del fanatismo que provoca el caos.

Hemos indicado que el aspecto de lo público se da en la novela con relación a la presencia de los medios masivos de comunicación; como son la radio y la prensa escrita, referimos también en nuestro Marco Teórico la importancia de Teun A. Van Dijk, y su texto; en cuanto nos permite descifrar e incorporar el discurso de las élites como una forma de exclusión, que conlleva al racismo. Vamos a precisar que la palabra racismo está asociada en este caso directamente con un sentido de exclusión; bajo este primer signo diremos entonces que el racismo estará presente en nuestro trabajo no desde en la estructura rígida de su significado; sino desde uno de sus rasgos particularidades, que en este caso se centra en la exclusión como un elemento que marca el sentido de marginalidad en la novela de Fonseca. Bajo la anterior percepción, tomaremos entonces en éste aparte del capítulo, las siguientes temáticas como elementos fundamentales para reflexión en la novela, los tópicos serian: los medios de comunicación y su función en el texto, los movimientos políticos y las prácticas marginales como elementos reproductores del caos en la sociedad.

 

 

Dentro de los aspectos que nos interesan revisar para el desarrollo de este aparte están: la presencia de la prensa escrita y los discursos que se ponderan en este medio de comunicación como una de los primeros elementos que revisaremos. Una de las imágenes que nos interesa en este caso particular es la siguiente referencia que realiza el periódico  “Tribuna Tribuna   da  Imprensa”, donde se refiere el hecho de la calle “ Toledo  Toledo”, en éste aparte encontraremos, referenciada la acusando que se hace sobre uno de los productores intelectuales del incidente donde resulta muerto el mayor Vaz.

-Miró la página, y la leyenda que subrayaba: Gregório es el símbolo  patente del vicariato con que Getúlio Vargas, temeroso del pueblo,  procura rodearse. Representa lo basto del método de hacer callar las voces que incomodan el sueño del gran oligarca. (Fonseca; 1994 Cap. V.  Pág. 83)

 Antes de revisar el contenido de éste encabezado de prensa, es necesario referenciar el contexto en el cual se produce. En la novela encontramos que este encabezado es producto de la atmosfera política que se esta viviendo en el país (el Brasil de la novela), bajo está premisa, diremos entonces que partir de la denuncia que genera la prensa escrita se establecen el imaginario de corrupción del estado en cuanto se hace pública la denuncia en contra del presidente Géntulio Vargas y su gobierno. Con relación a las denuncias que se generan en

el texto en contra del presidente encontramos que algunas de ellas se fundamentan a partir de sus delitos antes, duran y ahora después de su dictadura. En la novela encontraremos referenciados diferentes hechos que son publicados por el medio impreso y que en este caso particulariza en los asesinatos realizados por el Presidente en 1920, donde es asesinado un importante cacique, de una de las tribus del Brasil.

 

 

En el encabezado de prensa que hemos tomado, como primer ejemplo de los medios de comunicación y su intervención en el texto debemos revisar los posibles ideosemas que se establecen en este aparte.

Una de las características

de los medios comunicativos de imprenta, es el

lenguaje que suele usarse en él y que veremos en este caso en la prensa escrita. Bajo las características de del lenguaje encontraremos el lenguaje es directo, del cual diremos que en algún momento de la obra se torna violento. Dentro de los posibles ideosemas que encontraremos en los aparte de prensa de la novela estarán presentes las palabras como las que categorizan el nivel de importancia del discurso que se establece allí.

Palabras como:  símbolo, patente, patente, vicariato, representa, basto, basto, callar, voce voces, s, pueblo,

temeroso, gran, oligarca y rodearse”. Ponderan el discurso desde una posición política que contribuye a formar un imaginario negativo en los lectores del medio impreso, a partir de la información proporcionada por medio comunicativo, generando así, inferencias de tipo discriminatorio y excluyente; que se instala en el aparato de terror en el que se fijan los medios de comunicación en casos particulares como son las dictaduras o estados políticos de represión. Con relación a los medios de comunicación como aparatos de terror haremos posteriormente una intervención que nos permita entender desde que parámetros asumimos esta percepción en la novela.

Ya hemos identificado las palabras en las que asume una identidad, que contribuye a formar el imaginario y el escenario político por la cual está pasando el gobierno de Géntulio Vargas, es decir la atmosfera política del texto literario (la novela  Agosto). Ahora bien vamos a revisar desde de las palabras que hemos  

 

escogido de los recortes de prensa de la novela , las que nos indican el sentido de marginalidad, estableciendo una vez más que la marginalidad es entendida en nuestro trabajo desde dos sentidos : el de exclusión y el de criminalidad. Dentro de las palabras que refieren la condición de criminalidad encontramos que “símbolo,  patente, vicariato, representa, rodearse y oligarca” son las palabras que mejor logran referenciar el sentido de criminalidad; en cuanto estas, fijan en el discurso lla a connotación semántica univoca. Estableciendo así, características propias de personajes delincuentes. Ya que se hace explícita una acusación que conduce a la incursión del delito y que en esta caso particular es recogida por la palabra  

“vicariato”.

Dentro del carácter político que se establece en éste ejemplo encontramos que palabras como: “oligarca,  método, pueblo  y hacer, callar, las voces.”  se instauran sobre el imaginario político que se titiene ene sobre las dictaduras en Latinoamérica, en cuanto repercute sobre la sociedad de una nación.

Bajo la anterior construcción del sentido de las palabras en el encabezado de prensa pasaremos a referenciar una breve reseña de la vida política del presidente Géntulio Vargas; del mundo de la vida, estableciendo así cuales son las

tendencias y sucesos históricos que pasan a marcar el texto de ficción en comparación con la realidad política que se establece del mundo real.

Inicialmente diremos que Brasil obtuvo un panorama estable con el surgimiento de la primera república (1889), la cual se conoció como la “vieja república” después de 1930.

 

 

En 1928 surge Getúlio Vargas (liberal), quien incorporó el partido oponente a su administración, debido a lo cual obtuvo su apoyo dos años más tarde para asumir el poder del gobierno federal e iniciar la “república nueva”.

Es significativo que en la construcción de la “nueva república” se impulsara el desarrollo industrial y urbanístico del país, ya que como veremos su dictadura se prolongo hasta 1945 donde se implemento los métodos experimentales de Mussolini en el control de los obreros y movimientos de izquierda.

Después de la segunda guerra mundial Vargas,  tuvo que abandonar la escena política; donde se estableció el voto debido a un cambio político. Y del cual nos dirán en el libros de historia que el proceso demoro porque la población era analfabeta en un 70%, además de la aguda situación que se presento en 1945, y que solo sería resuelta en junio 24 de 1950; cuando se firmo un acuerdo que permitía el registro de los partidos pequeños, reformando así la legislación anterior. Cuando Vargas  regresa al poder

en 1951 vi viene ene con una imagen

desfavorable además de encontrarse el congreso conformado en gran parte por la oposición, sin dejar por fuera claro está que la situación económica empeoró después de la Guerra de Corea, obligándolo a suicidarse. Con relación al éste último dato encontraremos que tanto en el hecho histórico como el referido en la novela se tejen a partir de la crisis política liderada por Lacerda quien es  el presidente del partido UDN, develándonos así cual fue una de las principales razones del suicidio del exdictador.

Con relación a Carlos Lacerda encontraremos que éste fue uno de los grandes oponentes del gobierno de Géntulio  y del cual hemos referenciado ya algunos datos.  

 

No es gratuito entonces, que en las páginas del periódico de  “Tribuna Tribuna   da 

Imprensa”, encontremos afirmaciones y connotaciones déspotas y sarcásticas, sobre cómo se está reflejando el gobierno en ese momento de la historia tanto de la novela como de la vida real. Por otra parte encontramos en los datos históricos reales de la novela interesantes en cuanto nos permiten entender como se establecen los imaginarios del gobierno a través de los medios, y que en éste caso es la prensa, que como ya vimos inicialmente crea un ambiente desfavorable para la constitución del orden político, y que en la novela lo encontraremos reflejado en el decaimiento mismo del mandatario. En cuanto vemos como la publicidad, de los los medios generan en el presidente una negación de si mismo y su función en el estado, convirtiéndose así esto, en un factor para que el presidente se suicidarse; por esta razón no es gratuito que encontremos en la conversación que tiene con su hijo en el palacio la siguiente expresión:   “-El tiro que mató al mayor Vaz me alcanzo a mi también en la eespalda spalda -dijo Vargas…” (Fonseca;

1994 Cap. VII. Pág.126);  notamos inmediatamente que el detonante para tal mal se establece desde la función que cumplen los medios de comunicación al publicar las actuaciones de sus allegados; que en este caso quedan referidas a Gregório y su hijo Lutero.

En el encabezado que inicialmente hemos planteado, vamos a encontrar que las acciones de Gregório en este caso, marcan una forma de percibir al dictador. El termino “vicariato”, determina así una característica simbólica que más sobresale en el mandato de  Géntulio. En este mismo fragmento encontraremos que las palabras “temeroso, callar y método”, evidencian la condición política en la cual se establece el estado de poder donde directamente se fija una condición de terror y crimen propia de las dictaduras Latinoamericanas.

 

 

Vamos a precisar que existen dos corrientes políticas que lideran los medios de comunicación en la novela. Donde hemos expuesto inicialmente la que se encuentra en oposición al gobierno administrativo de Géntulio, mientras que la segunda, la veremos desde una alianza directa en favorecer las acciones del presidente.

Con relación al periódico encargado, en la novela de reforzar la buena imagen del presidente, encontraremos éste no tiene fuerza en sus discursos ya que constantemente queda delegado a verse como un medio de poca confiabilidad, un ejemplo de ello es cuando:   Últim

el ministro Nero Moura desmentía enfáticamente las palabras que la or le había atribuido, que Vaz no había sido muerto como oficial de la aviación. Hubiese dicho o no aquello, el ministro tenia que desmentirlo, no  podía repetir lo que los gentulistas prop propagaban agaban ppor or la ciudad ciudad,, que V Vaz az era una especie de capanga* de Lace Lacerda rda y que había muerto en esa condición. (Fonseca; 1994 Cap. X. Pág.162)

En  “Última Última   Hora”, vemos pues; como el discurso del periódico al igual que el de Getúlio es escaso. Lo interesante de este fenómeno es como la inclusión de la *Asesino asueldo. (nota del Traductor, Rodríguez Álvaro 1994.) 

estos entes informativos nos sirven como focos para establecer el carácter de lo público, donde se argumenta la marginalidad (transgresión de la norma), como un hecho propio en la clase dirigente.

La presentación de la radio en el texto, se nos muestra a diferencia de la prensa; como un medio pasivo, inicialmente pero que toma fuerza bajo el discurso que realiza Lacerda desde el altoparlante de un auto que se moviliza por la plaza  

 

donde convergen tres aspectos importantes; uno de ellos es agitación del pueblo dada por el discurso hecho por Lacerda, que conlleva una manifestación que termina en la violencia de la fuerza pública, como elemento intrincado en toda dictadura. Otro elemento que se establece en este mismo orden es la enfermedad y frenetismo como se asume el caos provocado por los discursos del poder, (Lacerda), que en este caso se acentúan en las actuaciones de Chicão, el cual tomaremos en su momento.  momento. 

Por otra parte entendemos que el sentido e importancia de la prensa y la radio, se establecen en el texto desde el aspecto de lo social; y que en este caso particular nos conduce al índice tenue del analfabetismo. En el caso de la novela el analfabetismo opera como un instrumento de doble filo, en cuanto asumimos desde el poder una posición de legitimar a través de los medios de comunicación un discurso que se funda en el aparato político del terror, con relación a éste aspecto recordaremos, que en el gobierno de Vargas (mundo real) se implementó el uso de los métodos experimentales de Mussolini; los cuales consistían en desarrollar tortura y terror entre los habitantes; generando así, en los medios masivos de comunicación (radio) noticias que provocaran pánico en la población, como una manera de anticiparse a posibles revoluciones internas en las ciudades, es decir que la radio y el discurso que se impartía a través en ella servía como medio para controlar y atemorizar la población en general. Con relación a la otra cara de la moneda que refiere a la prensa y la radio, como sistema controlador; podemos decir, que desde la posición del pueblo (analfabetismo) las acciones correspondían a la ingenuidad del mismo (la masa), ya que se basa en los enunciados que hacen los medios de comunicación.

Bajo la anterior concepción encontramos en el texto de Fonseca, la imagen que refiere a Lacerda, en una ventana vociferando un discurso por un altoparlante y  

 

el discurso que se produce desde el interior de un taxi, que se encuentra frente de una multitud en la calle.

Un taxi con un enorme altoparlante sobre la ccapota apota se colocó al  frente de la mu multitud, ltitud, en la avenida Rio Branco. Una voz dentro del carro vociferaba: “Como acontece con todos los brasileños, mi corazón está lleno de tristeza e indignación. Brasileños, la democracia en nuestro país no será posible mientras mientras ese vviejo iejo dictador corrupto ocupe la presidencia. Géntulio tiene las manos manchadas de sangre. Sólo una revolución puede devolver la decencia, la dignidad y honradez al Brasil. Sólo una revolución  puede acabar con el mar de fango. ¡Vote por Wilson Leite Passos  para el consejo!¡Para ddiputado iputado federal vote por Carlos Lacerda!”. Quien discurseaba desde el carro era el propio candidato al consejo…  De repente, el clamor de la multitud cesó. La atención de la turba, ahora silenciosa, se concentro en la ventana del primer piso, donde  funcionaba la oficina electoral de Wilson Leite Passos. En la ventana había un hombre que todos conocían. -¡Lacerda! –grito alguien, y el clamor pareció correr la plaza de punta a punta… -Pidió a todos que vuelvan a sus casas voceó Lacerda, utilizando el altoparlante-. Los desordenes callejeros apenas interesa a los oligarcas asesinos que están en el poder. (Fonseca: 1994. Cap. XII. Pág. 189-  190)  

Dentro de los sucesos que se generan en éste aparte, nos interesa revisar en primera instancia, el discurso de candidato al consejo y en segunda instancia el discurso de Lacerda.

Dentro de las características del discurso de Wilson Leite Passos, vamos a decir que éste se produce con el fin de provocar en la multitud la desestabilidad, que se reflejará en votos para el partido de UDN. En una segunda apreciación, veremos que las oraciones que estructuran el discurso político se centran en desprestigiar el gobierno, usando así, el altavoz como un medio que facilita hacer explícita la  

 

intención del discursante. Es decir, en éste discurso existe un margen que nos pone frente al discurso de tipo excluyente en cuanto refiere directamente unas condiciones del presidente. Dentro de las oraciones relevantes y, que apuntan a la exclusión encontramos las siguientes: “mientras ese viejo dictador corrupto ocupe la  presidencia, Géntulio tiene las manos manchadas de sangre.” En estas dos oraciones identificamos de entrada en las palabras corrupto  y manos manchadas de sangre, la intención por parte del discursante en mostrar una imagen de criminalidad del presidente; estableciendo bajo estos signos que el presidente es un sujeto de tipo marginal en cuanto viola la norma social-jurídica del estado.

Dentro de la intención comunicativa del discursante encontraremos que la frase “Sólo una revolución puede…” se repite dos veces como sinónimo de relevancia en el discurso; vamos a decir entonces, que en esta frase se establece la intención del acto comunicativo y, que como veremos posteriormente, logra que se genere el acto perlocucionario. El cual que consignado en el texto en la respuesta que asumen los manifestantes de la calle al escuchar las palabras que se enuncian por el altavoz.

 Ahora bien vamos a dec decir ir entonces entonces,, que el macrodiscurso macro discurso en e este ste caso, es hace hacerr explícito la marginalidad (criminalidad) del presidente, mientras que en el microdiscurso se instalan dos vertientes. La primera es desestabilizar a la multitud y la segunda es generar una respuesta que se representa en el texto bajo la opresión del estado y así alcanzar el objetivo del acto comunicativo que en este caso es obtener votos para las próximas elecciones.

Con relación al discurso de Lacerda  encontraremos que en éste, refuerza el primer discurso en cuanto expresa lo siguiente: “-Los desordenes callejeros apenas  

 

interesa a los oligarcas asesinos que están en el poder,” como podemos notar ambos discursos se fundan en crear un imaginario desfavorable del presidente, además de realizar un ataque directo a lo que representa el estado, en ese momento, (sistema de represión). Dentro de las palabras más relevantes encontramos “oligarcas, asesinos y el poder,” estas palabras encierran el sentido de exclusión y marginalidad en cuanto asumen en su utilización una posición de diferenciación entre el que enuncia (Lacerda personaje que encarna la élite en este caso) y el sujeto sobre el cual recae la enunciación(el presidente como representante de de la barbarie tomando así un valor de marginalidad). En palabras como: “desordenes,

callejeros, interesa.” vamos a posicionar la intención del discúrsate, en cuanto remite directamente a la condición del pueblo (multitud) en ese momento.

Como podemos evidenciar, en éste aparte de la novela se encuentra implícito, el método de Mussolini, que refiere a los medios de comunicación como un aparato de terror y cuya principal característica es establecer a traves de los discursos imaginarios de represión y sometimiento que se generan claro esta en la voz de la élite.  Ahora, vamos a reflexionar sobre el aspecto de lo público en la novela y la marginalidad que se genera a partir de este aspecto en el espacio público-social; veremos entonces como los discursos generan cierto desorden, social estableciendo así una particularidad del discurso político de élite. El espacio físico va hacer muy importante, ya que en él se establece el desenvolvimiento de las acciones de los interlocutores. Hemos referenciado someramente un primer acercamiento a la importancia del espacio físico en el anterior aparte de la novela, en cuanto establecemos la localidad donde se produce el discurso y que en éste caso se referencia como la “la avenida Rio Branco”. Para analizar la influencia del discurso político sobre los interlocutores, basta con que miremos el siguiente aparte donde se da una conversación entre Rosalvo y el comisario Mattos.

 

 

-Doctor, todavía todavía no he ingresado a la congragación. Lo estoy pensando.  Asistí a una reunión el pasado martes, en el Liceo Literario Portugués,  para ver como era aquello. Había más de cuatrocientos congregantes. El  presidente de la confederación Católica Arquidiocesana, Eurípides Cardoso de Meneses, hizo una alocución contra la revista de Flan, de Samuel Wainar. -Rosalvo tengo más cosas que hacer. -Esos judíos de Flan publicaron un artículo ofensivo sobre nuestra  probidad como católicos. Eu Eurípides rípides venía de un unaa reu reunión nión con el carden cardenal al  Jaime Barros Câmara, en el pa palacio lacio San Joaquín, Joaq uín, donde qu quedo edo concertado que los sacerdotes, en lo sermones dirían a los católicos no deben leer llos os diarios de la corrupción. Los congregados estaban estaban ofendidos con el artículo. Eurípides pidió que fueran enviados telegramas y cartas de  protesta a las revistas Flan y Última Hora, utilizando dos frases “¡Viva el  Papa!” y “¡ Muera la Última Hora Hora y Flan!”. -¡Viva el Papa!... -Deje que acabe la historia. de repente todo el mundo en el Liceo  Literario Portugués Portug ués gritaba: “¡Viva el Papa!” y “¡ Muera la Última Hora  y Flan!” el doctor Rosalvo me dijo que normal mente ellos terminan la reunión recitando una Salve Regina, pero el martes sólo hubo vivas y mueras. Cuando termino la reunión salimos todos a la calle gritando “¡Viva el Papa!” y “¡ Muera la Última Hora y Flan!”De pronto nos encontramos rasgando ejemplares de la Última Hora  en los puestos de  periódicos de las vecindades. Al señor sabe qu quee soy católico y Lacer Lacerdista, dista, más no soy fanático como esos congregados... (Fonseca: 1994. Cap. V.  Pág. 86 y 87)

En éste diálogo nos referencian la actitud de los manifestantes y en especial, cual es la desmesura del poder del discurso cuando éste es producido por la élite. Por otra parte está la cordura de unos pocos; que en éste caso queda representada en el mismos Rosalvo  cuando manifiesta  que el es:  “Católico y Lacerdista, más no soy  fanático como esos congregados.” con gregados.”  (Fonseca: 1994. Capítulo V. Pág. 86)

El tema central del discurso que se establece entre éstos dos personajes, encontramos, que éste alude a la exclusión de ciertos medios informativos como: la revista “Flan Flan   y  el periódico  “la  la  Última ltima   Hora

ya que como dijimos en algún

momento en éstos se representan la buena imagen del estado. La actuación de  

 

los manifiestan marca un precedente en la importancia del espacio, en cuanto permite que los individuos se desinhiben y actúen bajo la brutalidad de la masa y la inteligencia del discursante.

Dentro del microdiscurso del fragmento encontramos la presencia de la Iglesia como ente que focaliza desorden en la comunidad, al hacer uso de palabras como   “Esos judíos”, que nos pone frente a una posición política e ideológica de una

circunstancia política y social que atraviesa el Brasil en ese momento; estableciendo así que la Iglesia en su carácter representativo de la sociedad maneja un discurso de carácter maniqueísta con el pueblo en cuanto asume una posición lineal y radical.

Bajo las anteriores características, establecemos entonces, que los discursos de élite con carácter político adquieren su efectividad comunicativa en la acción que generen en los interlocutores estableciéndose así, un a condicionante que se funda en el discurrir mismo del discursante. En los discursos políticos o de élite que se establecen en la novela, encontramos que, el que se reproducen en la radio el día de la muerte del Presidente Getúlio Vargas, conlleva nuevamente a la inestabilidad del pueblo; determinando una vez

más la actuación del pueblo, en cuanto muestra como éste, después de escuchar

la noticia de la muerte del mandatario, sale a llas as calles a destruir los símbolos del Estado. En éste caso es claro, que la idea de Estado está dada por el imaginario que han construido los medios de comunicación en la sociedad de la novela; la percepción y connotación que tiene Freitas  por ejemplo sobre los medios de comunicación nos proporcionan unas características particulares de los medios de comunicación del Brasil de la novela: “Aquellos bellacos creían realmente el mito provechoso, que ellos mismos habían inventado, de que la prensa era

 

 

el cuarto poder de la república .”  Ahora bien, si los medios de comunicación,

son considerados como el cuarto poder, podemos entender entonces; el porque, ellos son los portavoces del discurso político, que en este caso queda referenciado como el instrumento que a través de su intervención genera caos y conductas agresivas en la masa; y que encontramos referenciado (en las páginas 347- 48) cuando los manifestantes furiosos por la perdida de su presidente acuden a los principales establecimientos comunicativos para destruirlos, este caso los medios referenciados son;  “Última Última   Hora Tribuna Tribuna   da  Imprensa mprensa   y O Globo”,  (radio), son destruidos como sinónimo de la misma decadencia del sistema político y social, que se evidencia desde los medios comunicativos masivos.

Los discursos en este caso se realizan con el fin de mostrar cómo impactan y cual es la verdadera función de los medios de comunicación en la novela estableciendo así que lo público en Agosto  se   se realiza cuando, queda expuesto en los medios de comunicación, reafirmamos lo anterior desde el caso mismo de la calle “ Toledo”, donde se metaforiza el incidente para realizar una persecución política en contra de la oposición. Como hemos referenciado en algún momento; el carácter político en éste caso determina una de las grandes marcas del escritor brasilero en cuanto establece una novela que teje la ficción desde la intromisión de los hechos reales logrando recrear la intriga política desde sus causas originarias en el mundo de la vida, dando paso así, a la construcción de una novela de género negro; donde su mayor interés converge en evidenciar dichas intrigas y las condiciones en las que se teje la trama misma de la novela.

Continuando en el mismo orden de ideas estableceremos pues que los medios comunicativos masivos tienen en la novela la función de focalizar la desestabilidad  

 

política del Estado, además de reseñar los actos criminales desarrollados por la administración gubernamental, del presidente.

Dentro de las temáticas discursivas que se encuentran planteadas para esta parte del trabajo retomaremos los partidos políticos con los elementos que posibilitan establecer una fuerte relación con la historia del mundo de la vida; en los cuales encontramos en primera instancia al partido de Unión Democrática Nacional (UDN, Organización de derecha que promovía los intereses de terratenientes, la burguesía financiera y comercial así como los intereses americanos), este partido en el contexto histórico estuvo influenciado por diferentes corrientes políticas pero su tema favorito fue anticomunismo.

Con relación al tema del comunismo encontraremos en la novela que el índice más fuerte recae sobre el personaje Mattos, en cuanto se referencia desde él, la persecución y tortura política efectuada a los partidarios de esta corriente ideológica en el primer gobierno de Géntulio. En algún momento hemos reseñado que los nombres y las formas de actuación de los partidos políticos, que se establecen en  Agosto   se referencian directamente desde una correspondencia con la realidad, en donde hemos establecido que en la novela a la par con los acontecimientos de la historia encontraremos que Carlos Lacerda, y la UDN  fueron los iniciadores de las grandes crisis políticas

contemporáneas, pidiendo la intervención de los militares cuando se dieron los hechos de la muerte del mayor Vaz, siendo éste, último hecho referente un poco desfasado de las intenciones reales del acontecimiento histórico; ya que las diferencias que condujeron la crisis se establecieron inicialmente por los desacuerdos con el gobierno Norteamericano.

 

 

Por otra parte en la novela veremos como el periódico  “Tribuna Tribuna   da  Imprensa” al cual se le atribuye que su director es Carlos Lacerda. Tiene una correspondencia con la intervención de este medio comunicativo en el acontecimiento real; donde encontramos que la variación abismal con el hecho real varia en el nombre del periódico, ya que el dato histórico nos confirma que su nombre real es “Estado Estado d  dee 

Sao   Paulo” pero que al igual que “Tribuna Sao Tribuna   da  Imprensa”, cumplió con el mismo papel en la sociedad brasilera. (Propagar una campaña desprestigiante contra el gobierno de Getúlio Vargas.)

Dentro de los otros grupos de partidos políticos que se encuentran referenciados en la novela como los partidos que apoyan al presidente y en este caso van en contra de los intereses del partido de la UDN o Lacerdista como se le conoce en su momento en la novela; encontramos: (PSD), Partido Socialista Democrático (que estaba íntimamente relacionado con los coroneles,

(PTB) Partido

Trabalhiista Brasilero ( se asociaba con el populismo, urbano y reformista, que pacto alianzas con los industriales y sirvió para establecer el sentido Varguista de la clase trabajadora), estos dos partidos referenciados concuerdan perfectamente con lo que nos expone Rubem Fonseca en la novela, la diferenciación se da en la variable del medio comunicativo que se encargó de promover la buena imagen del gobierno; el cual es conocido en la novela como

Última   Hora   “Última

”, y del cual

veremos que trata de rescatar la imagen del presidente en el imaginario construido por el partido oponente fuerte de la época (UDN.)

Como hemos visto la influencia de los partidos políticos y las ideas que los rigen son la base fundamental del propósito político que nos plantea Fonseca, donde el fin está en mostrarnos la decadencia en la que se encuentra Brasil en el mes de agosto de 1954, además de proporcionar las circunstancias bajo las cuales se deteriora la sociedad.  

 

Por último vamos a tomar el siguiente aparte para establecer el sentido de lo público en un personaje que se constituye como marginal desde la construcción de los personajes de élite. Éste personaje es Alberto Mattos que como dijimos en su momento está fuertemente marcado por la posición social en la que se construye en la novela. las primeras páginas de los diarios traían titulares del asesinato del industrial Gomes Aguilar. La policía, según el delegado Ramos, tenía una  pista del “latrocinio” que no podía ser revelada para no arruinar las investigaciones. Varias fotos de Gomes Aguilar y una de Alberto Mattos, con la leyenda: “comisario dirige las investigaciones”.  ( Fonseca:  Fonseca: 1994.Cap. II.  Pág.34.)  

En este aparte encontramos los siguientes aspectos que resultan muy interesantes; el primero es que inicia haciendo apertura al segundo capítulo y el otro aspecto que podemos señalar con relación a este encabezado es la iimagen magen simbólica de las fotografías, tanto del muerto como la del comisario, indicándonos semióticamente lo que va a suceder, por último encontramos significativa la frase 

“comisario dirige las investigaciones” ; ya que nos pone sobre aviso de la existencia de otras “investigaciones”, las cuales las las veremos en el transcurso de lla a historia, del personaje.

Escogimos pues, este fragmento referenciado por la prensa para hacer explícito, el poder de los medios comunicativos, sobre los lectores. En el mismo orden de ideas estableceremos entonces como la publicación que refiere directamente a Mattos como investigar del asesinato de un empresario importante de Brasil, va a

generar la visita de su viejo maestro ( Emilio) de conclave.

 

 

Inicialmente estableceremos como Emilio al leer el periódico vuelve a saber de su antiguo estudiante, en este primer acercamiento al tema que queremos precisar, vamos a encontrar en primera instancia la importancia del medio impreso como legitimador de discursos, ya que genera imaginarios sociales sobre los lectores.

Con relación al recorte de prensa que hemos escogido veremos como éste genera un imaginario de bienestar y posición social sobre el personaje de Mattos, imaginario que se construye desde su maestro, quien, al leer el recorte establece que el comisario Mattos  está bien económicamente, al interpretar que solo un hombre con una buena posición social y económica, a parece en el periódico investigando, la muerte de un importante empresario;   -“...cuando vi su retrato me dije es él, es aquel muchacho que trabajó conmigo en la claque… Entonces me dije, voy a llamarlo. No imaginé que usted viniera… Pensé que el éxito se le había subido a la cabeza…”  ( Fonseca:  Fonseca: 1994 Cap. III. Pág. 57.)  Como podemos notar los medios de información y comunicación,

en los cuales se establece la publicación de información, marcan poderosamente los imaginarios de los lectores como en este caso en particular. Recordemos pues que en el caso de Mattos  éste no tiene las condiciones económicas y sociales que se han generado en el imaginario de su amigo Emilio. 

Hemos establecido entonces que los discursos que circulan en los medios de comunicación de la novela si generan legitimidad del mismo; en cuanto establecen imaginarios en los lectores. Es decir que las noticias que suelen circular por los ellos marcan referentes de los cuales hacen uso los consumidores del mismo.

Bajo éste signo diciente del papel que juegan los medios de comunicación en la novela concluiremos entonces en decir; que los medios si generen marcas que conllevan la exclusión y por ente la marginalidad de los personajes, en cuanto  

 

vemos cómo son referidos en ellos personajes concierta representación social elevada. Donde encontramos que los discursos que atraviesan el medio comunicativo se establecen de entrada en esclarecer los diferentes estatus de los personajes que allí se referencian.

En este aparte del capítulo hemos intentado reflexionar sobre la importancia de los medios de comunicación como el elemento crucial para el desarrollo del aspecto público el cual se establece desde la oficialidad en este caso. Ahora pasaremos a revisar en el próximo aparte la importancia de lo público con relación a la sociedad.

La Sociedad en Agosto Dentro de las características expuestas en el texto, referenciaremos tres aspectos que resultan interesantes para analizar el concepto de marginalidad en la novela de Fonseca; estos tres aspectos son: las condiciones sociales y humanas de los presos, la posición de la policía como institución gubernamental que vela por la seguridad social y la representación de la barbarie y el caos en la sociedad de Agosto.

En primera instancia encontramos que la sociedad brasilera que se refleja en la novela está dada por una atmosfera política y social que se agudiza en aspectos relacionados con la corrupción y criminalidad de las calles y los entes políticos. Bajo estos aspectos vamos a revisar cuáles son las posibles ideologías y ejemplos de las mismas, al interior del texto; para así establecer cómo se muestra la marginalidad y mutilación social de las clases sociales menos favorecidas en la novela.

 

 

Desde los primeros capítulos encontraremos en la novela, que tanto la voz del narrador como la del comisario Mattos nos revelan y muestran la representación

de los presos; exponiendo frases y oraciones que nos llevan a pensar en los ideosemas escondidos en los discurso que articulan estos personajes.

Un primer acercamiento, que refiere a las condiciones sociales de los presos, la vamos a encontrar referida en el siguiente aparte; donde Mattos responderá a un preso, las apreciaciones que él tiene de la celda en ese momento.

 Está de verdad insoportable – ddijo ijo Mattos-. Usted no debería estar aaquí, quí, ninguno de ustedes debería estar aquí, pero yo no puedo hacer nada.  El mundo no quería saber de aquellos bandidos. Que revierten unos encima de otros como gusanos inmundos. La policía existía para que los ojos y el delicado olfato de las personas de bien no percibieran aquella  podredumbre.  podredumbr e. (Fonseca: 1994. Capítulo II. Pág. 36)  

Como podemos ver en este aparte se encuentra presente un índice fuerte, en cuanto genera una representación del estado social de Brasil, este aparte lo hemos tomado inicialmente inicialmente porque hace referencia una de las temáticas sociales que nos interesa revisar en la novela.

En el primer párrafo observaremos que en la expresión de Mattos se encuentra presente una posición crítica con respecto a los presidiarios y las condiciones tan reprobables de los mismos; dentro de los palabras que categorizan el discurso del personaje encontraremos que la construcción imperfecta del verbo deber -  

“debería”, guarda una relevancia en cuanto marca en el discurso una posición ética de lo que está ocurriendo en las cárceles del Brasil en ese m momento. omento. Bajo este mismo tópico encontramos que el crimen emerge como una condición social en el texto y, que para éste caso en particular se marca con el lugar, ya que es  

 

 justamente en los calabozos de las comisarías dond donde e se muestra el alto índice de decadencia y las condiciones sociales de la población menos favorecida (Pobres).

En este mismo párrafo encontraremos también como la posición de Mattos, marca una conducta

y condición política del individuo frente a las políticas

gubernamentales del Estado. Hemos resaltado su posición con relación a lo anterior debido a su función como representante del ente gubernamental.

Inicialmente debemos referir que en el ambiente de las cárceles de Rio de Janeiro, apesta, desde el sentido estricto de la palabra: “las cárceles estaban infectadas de presos que esperaban ser juzgados junto con los que cumplían sus condenas.” (Fonseca; 1994 Cap. I.  Pág. 13),  Bajo éste referente asumimos entonces, que las condiciones humanas

eran mínimas, exponiendo en éste caso que el compromiso de Mattos está dado desde un el valor significativo de humano por aquellos desposeídos de la suerte.  En el segundo párrafo vamos a encontrar que es el narrador  el genera el discurso, focalizando su posición ideológica. Su posición sobre el imaginario de las cárceles en la ciudad. Además de generar la visión elitista de una parte de la sociedad para reseñar a los presos. Dentro de las palabras más relevantes en éste discurso están:  “bandidos,  gusanos,  inmundos ”, ”, que emergen en el texto como las características más relevantes para determinar la condición humana de los presos o desposeídos. Bajo estos adjetivos nominativos y calificativos encontramos entonces, que los prisioneros como parte de una sociedad no existen para las élites, élites, estableciendo así, que los entes gubernamentales se fundan en el Estado como el dispositivo que controla y disimula las problemáticas agudas de una sociedad en declive, como es el caso de Agosto , es por esta razón que en la última oración encontremos tan explícita la función y representación de la policía  [La policía existía para que los ojos y el delicado olfato de las personas de bien no percibieran aquella podredumbre.] (Fonseca; 1994 Cap. II. Pág. 36) 

 

 

Con relación a la posición como se construye el imaginario de los presidiarios y sus condiciones; referenciaremos entonces como las condiciones y calidad de vida de los entes representativos de élite cambian cómo es el caso de Gregório, Climério  y  Alcino en donde, se establece en las declaraciones que se dan a la

prensa; que ellos están bien de salud, además de tener comodidad en sus celdas; resaltando que las camas en las que duermen son metálicas y con buenos colchones, y que la la alimentación de la cárcel militar es excelente; creando así un imaginario favorable de las cárceles desde lo público; es decir se crea un imaginario favorable sobre las cárceles, cuando en realidad vemos en la novela que en el aspecto de lo privado las cárceles para los los delincuentes de la clase baja tienen unas condiciones totalmente contrarias a las publicadas por los medios de comunicación. Estas declaraciones tienen una intención de mostrar y limitar socialmente el imaginario de cárcel para la sociedad en general; ya que establece en dos instancias. instancias. Donde veremos que la condición de cárcel que maneja Mattos  y el  narrador sobre los presos, se encuentra en una postura de lo privado; mientras que el imaginario que se construye desde la élite sobre la cárcel es público, ya que hace uso de un medio comunicativo masivo.

Bajo la anterior aclaración, y con intromisión en la misma temática estableceremos que cuando Mattos libera los presos lo hace con el fin de mostrar que la ausencia de unos cuantos presos no determina la crisis de la sociedad que se convulsiona por los diferentes hechos políticos.

Hemos referenciado una de las temáticas que nos introducen en el tema de la delincuencia y las condiciones sociales a las cuales se someten los presidiarios.  Ahora referenciaremos otro aspecto que nos parece interesante; en cuanto nos pone frente al surgimiento de la delincuencia, la cual está marcada por las  

 

condiciones económicas y sociales que se generan en éste proceso, de criminalidad de la clase marginal.

Dentro de los aspectos sociales encontramos el siguiente aparte que nos hace el narrador  sobre el personaje de Climério;  quién, al ir a la casa de Alcino, nos

muestra como las personas de bajos estratos se convierten en delincuentes:

 El compromiso asumido para matar al tal periodista se convirtió en una agonía para él. Pero fue la manera que encontró para satisfacer el sueño de  su vida, de tener casa propia, porque siempre se atrasaba en el pago del arriendo mensual de quinientos cincuenta cruzeiros por la casa en que vivía. Desde mayo, Climério le adelantaba el dinero para el alquiler.  Asimismo le daba para el mercado y para el taller.  (Fonseca: 1994. Cap. IV.  Pág. 61-62)

En éste fragmento encontramos, cómo marcas relevantes las condiciones de miseria que padecen los representantes de la periferia de Rio; las culés nos llevan a pensar en otras condiciones que nos fija el narrador  en el texto. Estas se establecen por ejemplo en la descripción que se hace de la antigua casa de Salete;  donde  podemos ver como los barrios de la periferia, tienen calles sin

pavimentar, además del estado polvoriento del cual se hace referencia en la novela en dos ocasiones. Por otra parte, encontramos como en el antiguo barrio de Salete los olores se resaltan como un valor agregado a la pobreza; y que en éste caso refuerza en el texto, el olor que se genera en las celdas de los presos.

Dentro de las palabras que categorizan el discurso del narrador  se encuentran  matar, satisfacer, mercado y alquiler”   “ matar,

como los referentes que clasifican unas

condiciones que obligan, a éstos personajes a actuar de manera delictiva; es por eso que la enunciación de “ ssueño ueño de su vida ””,, nos pone directamente frente a la situación económica y social del personaje, estableciendo que sus necesidades  

 

básicas se convierten en el pretexto para matar y lograr una mejora en la calidad de vida de los individuos marginales. Establecemos así, que existen unas condiciones desfavorables para una capa de la sociedad lasa cuales se instauran en las necesidades básicas (comer, vestirse, y pagar vivienda), de los personajes.

Otro aspecto fundamental en el texto es la carencia de agua que existe en Rio, donde encontramos a Freitas  dándose un baño de agua caliente en una tina; mientras Mattos, el odontólogo y la población en general carecen del liquido constantemente en la novela. Este índice nos pone a reflexionar sobre dos instancias que se generan sobre la imagen del agua en la novela, una de ellas, es que se puede asociar a la sequia política que se está gestando en el país y que está conectada con los índices ambientales que se presentan al final de la novela cuando aparece [la lluvia que apago es estupor de una de los días más duros para la  presidencia de Getúlio Vargas] . Y por último la relacionaremos con la sequia que se

muestra en la descripción de la periferia “calles polvorientas”. El espacio y lo público  

Dentro de los espacios públicos de la novela, encontraremos los parques y las plazas como punto neurálgico; el cual es contado por el narrador  al referir la niñez de Mattos. En éste aparte, encontramos la representación de la pobreza en relación con los niños. Donde vemos cómo un niño busca, frutos de un árbol que se encuentra en el parque; éstos frutos en éste caso son para comer, bajo este primer antecedente vemos cómo el niño es calificado de “infeliz”; ya que, sólo un niño con hambre comería el fruto de aquel árbol, debido a las características y propiedades del mismo.

Un segundo aspecto con relación a los parques lo veremos cuando entremos a revisar el aspecto de la barbarie en la sociedad de Agosto .   

 

Un aspecto característico de la sociedad de la novela, se establece en la educación; evidenciándose en personajes como el señor Adelino (padre de Cosme); quien no sabe leer y escribir. En el planteamiento inicial que habíamos

referenciado sobre el analfabetismo de la sociedad brasilera; encontramos como punto neurálgico que el factor económico determina las condiciones sociales de los personajes, ya que éste factor establece unos rasgos particulares en los personajes que representan la clase desfavorecida. En un primer acercamiento al tema en cuestión, tomaremos inicialmente como referente a Salete cuando va a buscar un lugar para estudiar y describe a, “una negras polvorientas”,  en una academia de mecanografía de mala muerte; donde sólo gente como ella; (es decir con las condiciones de su vida anterior), podrían acceder.

Con relación a la educación encontraremos cómo ésta, marca de forma directa los discursos de los personajes de tipo marginal; es decir que el discurso en éste caso, nos permite develar a partir de la producción del mismo, el nivel de educación del sujeto. Bajo la anterior observación, vamos a determinar que la utilización de algunos adjetivos calificativos, establecen en la novela un patrón o índice que permite determinar una marca notoria en los discursos de personajes marginales; ya que la utilización de éstos, en los discursos de los personajes de carácter marginal se establecen siempre desde tres posibles usos. En el siguiente aparte estableceremos entonces las categorías que marcan semánticamente e ideológicamente el discurso de los marginales; recordando pues que la utilización de adjetivos en éste caso es dado en el texto como una marca que clasifica una condición educativa.

- vamos a su habitación… - me gustaría hacerle otras preguntas sobre el asesinato del señor Gomes  Aguilar. n ada, doctor. -  No se nada. No vi nada,  

 

- ¿usted se quedo toda la noche en la portería?.... -Sábado, sábado… sábad o. -  La noche del sábado. -  sí. - ¿Por qué esta usted tan nervioso? n o estoy acostumbr acostumbrado. ado. -  Eso de la policía, doctor no -  Estoy seguro de que usted no estuvo toda la noche en la portería. O salió o se  fue adormir. ¿Cuál de las dos? -  No le entiendo, doctor. Raimundo. do. Lo descubriré y usted será procesado. procesad o. -  No vale la pena mentir, Raimun - ¿qué quiere saber? -  Hable.  - Salí un momento de la portería  - ¿para qué? - Vino una chica amiga mía…una empleada de la finca… Bien…Estábamos en mi habitación…  - ¿A qué hora? mad rugada. -  La una de la madrugada. - ¿Cuánto tiempo estuvieron Aquí? do ctor si el presidente se entera me ech echa… a… -  Dos horas, doctor Salí unqué? momento de la portería  - ¿para - Usted dijo que el sábado los vecinos de planta ocho no recibieron visitas. n egro. -  Recibieron una. Un negro. - ¿sabe su nombre? -  No, señor. - ¿Cómo es? - Un negro grande y arrogante. Ceñudo. - ¿Ceñudo? nad a y me miro con ma mala la cara. -  Entro sin decir nada - ¿Cómo es? corb ata. -  Llevaba americana y corbata. - Su cara. - Una cara larga, cerrada. - ¿Por qué no me hablo de ese negro antes? qu e no hablara con nadie. -  Doña Luciana me dijo que - Quizás entrara alguien cuando yo… yo… - ¿Cómo es que doña Luciana le pidió que no mencionase al negro? -  Dijo que el negro había ido hacer un trabajo al apartamento y no quería que nadie lo supiera. - ¿qué trabajo? - Creo que es un trabajo de macumba, un trabajo, una de esas cosas. No losé, no creo en esas cosas, doctor, si doña Luciana…. n ada de nuestra conve conversación. rsación. Por lo menos men os por ahora ahora.. -  Ella no sabrá nada mii empleo. La cuerda siempre se rompe en -  Estoy perdido, doctor, voy a perder m el lugar más flojo. - Calle. No hable con nadie de nuestra conversación. - Si señor… (Fonseca: 1994. Cap. V. Pág. 94 y 95)  

 

 

Inicialmente diremos que esta conversación, es realizada por Mattos y Raimundo, el portero del edificio Deauville, esta con versación, ya la habíamos

referenciado desde el aspecto de lo privado y las relaciones de confidencialidad de los personajes.

Vamos a encontrar entonces que la palabra   “doctor ” siempre esta precedida por una coma, que nos pone de inmediato frente a tres posibilidades: una de ellas es la que se utiliza para referenciar el aspecto de lo formal como símbolo símbolo de respeto. La segunda posibilidad, la hemos asumidos desde los dos siguientes aspectos: el primero está dado en el sentido de la intimidación o miedo, por quien reproduce el adjetivo calificativo y que en este caso es Raimundo. En las cinco utilizaciones del adjetivo calificativo “doctor ” para referir al comisario, podemos establecer que se cumplen llas as dos apreciaciones iiníciales níciales que hemos referido. La tercera posibilidad del adjet adjetivo, ivo, la hemos querido asociar al nivel educativo; teni teniendo endo en cuenta la procedencia de los individuos que hacen uso de él, además de llos os contextos que se marcan por una desigualdad de estatus, como es el caso en de esta conversación. Como podemos notar, la conversación se establece entre un portero y un comisario de policía estableciendo así; un margen notorio de desigualdad en la representación social que asume cada personaje desde su oficio.

En la cultura latina, la utilización de éste tipo de adjetivaciones calificativas se usa, frecuentemente para denominar personas que tienen estudios superiores al que las refiere, señalando que en el sigl siglo o XX la utilización, de lla a palabra es más frecuente en personas que se caracterizan por vivir en la periferia de las ciudades, determinando así; no solo la condición económica del individuo, sino también su procedencia, que en la mayoría de los casos es procedente de una cultura rural y, que refiere directamente al nivel de estudio de los individuos.

 

 

En la novela encontraremos que el imaginario que se crea alrededor de esta palabra establece una marca en el discurso de los personajes de carácter marginal, esta marca se funda en un principio de exclusión; en cuanto el individuo marginal establece una distancia que se media en la diferencia que otorga la palabra. Bajo esta apreciación, veremos en otros personajes tal tales es como: Emilio, (el antiguo profesor de Mattos) al referir el trabajo del comisario como sinónimo de prestigio y bienestar, estableciéndose así una condición de desigualdad que queda marcada en éste caso, por los oficios que representan los personajes.

Hemos relacionado con el nivel educativo que tienen los personajes de carácter marginal la utilización de la palabra “doctor ; en donde expondremos entonces un último referente; el cual es proporcionado por el personaje de Salete, quien es una mujer joven de unos 18 años aproximadamente y tiene en la novela una construcción representativa de la marginalidad, la cual es aludida en este caso particular desde el lugar de nacimiento, lo significativo de éste personaje, se establece en el afán que tiene el personaje por demostrarle a Mattos  que sabe leer, convirtiéndose esta insistencia en una de las preocupaciones de la vida del personaje; ya que ella en algún momento buscara un lugar para formarse a nivel educativo. Justamente, a partir de esta búsqueda del personaje es que se nos refiere la importancia del nivel educativo de los personajes de carácter marginal en la novela; como una marca que caracterizara una condición social frente a la élite. Por último referenciaremos una vez más, que los lugares de formación (entidades educativas) en la novela están veladas bajo el manto de una sociedad, donde los que tienen acceso a este privilegio son las clases altas de la misma; como hemos establecido inicialmente, en los personajes marginales la posibilidad de estudio se establece bajo el signo de la miseria como es el caso de Mattos; que se encuentra en oposición al de Lamagno o Alice por ejemplo.

 

 

Vamos a retomar un aspecto que refiere en el discurso de Raimundo, la relación con el temor que despierta la fuerza publica en los personajes de carácter marginal y que queda en el discurso de este personaje referenciado en la siguiente oración  “-Eso de la policía, doctor no estoy acostumbrado” (Pág. 94), en esta oración encontramos que la palabra que se referencia a la costumbre nos pone de nuevo frente a la situación de nerviosismo que se expresa con anterioridad en otros personajes como son: los empleados de Luciana, quienes toman una actitud similar en el lenguaje, cuando Mattos los interroga con relación al caso del homicidio de Gómez Aguilar. Otro ejemplo que nos permite establecer el temor hacia la fuerza publica está en la actitud que toma el

“macumbero”  

cuando el comisario Mattos lo trae a la ciudad para confrontarlo con Raimundo; en el cual encontramos que el

“macumbeiro”   prefiere

dormir en la estación del

tranvía antes de pasar un minuto cerca de la policía. Encontramos así, en éstos índices de la novela lo que constituye el temor por el aparato policial. Con relación a éste tópico diremos que el nerviosismo surge como un índice que trasciende directamente en la vida política, si recordamos que el acontecimiento se da en una dictadura que viene en declive, a éste aspecto le sumaremos que el nerviosismo a lude directamente a un temor que se generaliza en los personajes marginales debido también a la corrupción del aparato jurídico.

En éste mismo discurso encontraremos otro aspecto que refiere a las prácticas sociales y culturales de la sociedad Brasileña. “ Creo que es un trabajo de macumba, un trabajo, una de esas cosas ”  (Fonseca: 1994. Cap. V. Pág. 95) , Esta referencia que hace Raimundo, sobre la macumba  nos remite a las prácticas sociales de carácter

popular, estableciendo así que la práctica de macumba, no es bien vista por la misma élite; aun que esta haga uso de ella, como en el caso de Gomes Aguilar. Este tipo de prácticas surgen en el texto como una marca que registra unas tendencias en la sociedad que van relacionadas directamente con el carácter popular; entendiendo en este caso específico que lo popular surge en el texto como el acceso indiscriminado que se hace de la práctica, como tal. Donde se  

 

establece un sentido religioso y ancestral en este caso, otro aspecto que se encuentra en la novela y que hace referencia en el mismo orden de ideas con las prácticas marginales es por ejemplo el caso del juego de bicheiro; donde encontramos que es un juego prohibido-marginal pero que en el caso particular de esta sociedad todos lo practican, violando la norma establecida jurídicamente. Bajo esta perspectiva entendemos entonces, que lo popular está por encimo de la misma sociedad como en este caso.

Con relación a las prácticas sociales marginales encontramos, las apuestas de la casa del bicho como las que nos exponen un elemento propio de la cultura y, que a pesar de no estar legalizadas son practicadas por todas las capas de la sociedad como queda expresado en el siguiente aparte:  La mayoría de la población practicaba descaradamente esa modalidad de infracción. Periodistas, jueces, altos funcionarios de ministerio de justicia, a cuya estructura pertenecía el Departamento General de Seguridad Pública, también eran sobornados por los bicheiros. La Comisaría Especializada de Costumbres, que tenía como uno de sus principales objetivos la represión del  juego prohibido, era la que más sobornos recibía. (Fonseca: 1994. Cap. I.  Pág. 14) 

Como podemos ver en el aparte que hemos referenciado, notamos que más que una recurrencia en la violación de la norma, está surge, más bien como una práctica de carácter cultural que no se hace oficial; pero que de igual manera tiene un poder tan fuerte como si fuera oficial; ya que como vemos, estas práctica son realizadas por la élite; está apreciación, ya pone a la práctica en una relevancia que no tienen otras, porque está dada desde la generalidad de la población.

Con relación a la macumba establecemos entonces que éste tipo de prácticas son calificadas como “prácticas vulgares” dentro de los discursos de élites de la novela. Es decir que son acciones de un grupo de personas sin educación supersticiosas que se apoyan en principios empíricos del mundo de la realidad,  

 

revelando así este aspecto una característica que se presenta en la cultura brasilera de la vida del mundo real, poniéndonos así, frente a uno de los referentes sociales y culturales que caracterizan el Brasil en este caso.

 A nivel general encontramos que debido al escándalo político el pueblo se revierte constantemente en protestas y manifestaciones que conllevan amostrar la represión de la dictadura política, que se esboza en éste caso desde un segundo plano, ya que como hemos referenciado para esta fecha Getúlio  ya no, era dictador sino presidente elegido por voto. Con relación a éste aspecto, diremos que surgen dos imágenes que representaran la barbarie como un elemento propio de las dictaduras; dictaduras; donde encontramos dos momentos, uno de ellos es cuando: el ejercito entra en la ciudad con el fin de restaurar el desorden generado por el asesinato del escolta de Carlos Lacerda, (éste incidente lo hemos referenciado como el acto perlocucionario que se realiza después del discurso de Wilson Leite Passos en la avenida Rio Branco Pág. 189-190); donde encontramos la imagen

de un personaje que nos referirá la barbarie en todo el sentido semántico y simbólico de la palabra misma. Nuestro personaje para éste caso es Francisco Francisco   Albergaría, conocido en el texto como el Boxeador Chicão quien es presentado;

como un hombre grande, fuerte. Él presto su servicio militar en las FEB de su país; y el cual, fue enviado con el regimiento 4º del ejército americano a Italia a luchar contra los alemanes en 1944. Bajo este primer signo vamos a encontrar que las características de éste personaje se establecen justamente, a partir de la experiencia adquirida en el ejército. Ya que si observamos bien en el texto encontramos que la presentación de éste evento en la viada del personaje es la más importante de todas; ya que él, al ingresar en el ejército obtiene una mejor calidad de vida, además de los privilegios que obtenía por estar allí. Mientras que al salir del ejército se describe como lo peor que le pudo a ver pasado a éste personaje, quien llego a ser cabo en el ejército.

 

 

Es así, que en éste personaje, podemos, apreciar los signos de violencia y enfermedad de los sistemas políticos basados en la represión como es el caso de la sociedad de Agosto ; no solo, por lo que representa su imagen, en el imaginario creado en la novela; sino también, por la actitud y actos que prosiguen a la presentación del personaje. Donde el poder de éste personaje se establece bajo los siguientes signos: sangre fría, control sobre sus instintos y procedimientos sanguinarios. Vamos a decir entonces que éste personaje bajo las anteriores características estableceremos un sentido de poder desde la violencia, en cuanto encarna de manera grotesca, el esplendor sanguinario de una sociedad en decadencia.

Con relación a la presentación, de este personaje, queremos referir ahora; la importancia de la acción realizada en la manifestación en contra de la muerte del mayor Vaz, en donde Francisco Albergaría realizara un acto que clasificaremos como criminal y bárbaro. Encontramos entonces; que es el narrador quien nos describe la escena donde inicialmente se está llevando acabo la manifestación desatada inicialmente por el discurso del candidato al consejo ( Wilson Leite Passos) y después veremos como la intervención de Carlos Lacerda ocasiona la

ira y descontrol en la mult multitud itud como ya lo hemos mencionado; nuestra insistencia con este aparte del capítulo12 de la novela; es porque se refiere directamente a la forma como se ve representada la barbarie de un sistema político de represión; en cuanto se refleja en la acción de  Chicão y la fuerza pública (Policía):

Se escucho el estallido de granadas de gas lacrimógeno. Luego llaa plaza fue invadida por la tropa tropa de choque de la Poli Policía cía Especial, disti distinguida nguida por sus  Kepis rojos, que comenzó a dispersar la multitud a golpes de bolillo. Un carro-tanque, procedente del cuartel de la PM de la calle Evaristo da Viega, entró en la plaza disparando potentes chorros de agua contra los manifestantes. Algunas personas corrían protegiéndose los ojos del gas bombas, caían sobre el suelo y eran pisoteadas; los poli policías cías arremetían con  

 

violencia contra todos todos los que se encontraban a su paso. Podían escucharse los gritos de pavor. Los detenidos eran arrastrados a los furgones estacionados en la calle Tercera de Mayo. Cuando terminó la intervención de la Policía Policía había en la plaza, ahora vacía, heridos extendidos en le suelo o  sostenidos por personas atemorizadas. Apenas se oían gemidos y órdenes bruscas proferidas por policías.

Chicão presencio todo, sin incomodarse, desde su carro estacionado en la avenida Rio Branco. En la guerra vio cosas peores. Lo que estaba aconteciendo no le interesaba ni lo conmovía. Todos los políticos eran corruptos y aquellos que no eran ladrones, si es que existían eran mentirosos. Y los imbéciles que salían a las calles a vitorear a los políticos no merecían otra cosa que ser aporreados.

Se divirtió arrojando por la ventana del automóvil, en medio del tropel de manifestantes y policí policía, a, los dedos cortados de Raimundo; los pedazos de dedos eran colocados sobre el índice de la mano derecha de Chicão e impulsados por el pulgar, como si ffuesen uesen canicas. (Fonseca: 1994. Cap. XII.  Pág. 191)  

En éste aparte tenemos que revisar, que en el interior del texto se encuentran palabras que nos indican a través del lenguaje y exposición de las ideas del narrador una postura frente al discurrir político que se simboliza en los grafemas

específicos encontrados en el texto y que refieren la dictadura como tal y su fuerza de violencia sobre los individuos.

Dentro de los grafemas encontraremos que el sentido semántico tiende a ser llevado al énfasis totalizante y alertador del lector; las palabras que se manejan en el anterior discurso y las connotaciones del lenguaje político propias de una dictadura son: Estallido, La tropa de choque, Un carro-tanque, disparando, bombas, arremetían, con violencia, gritos de pavor, heridos, personas atemorizadas, se oían gemidos, órdenes bruscas,  proferidas por policías (Cap. XII. Pág. 191);

en estas palabras queda en toces explícito,

el lenguaje que nos pone frente a una lectura de carácter polí político; tico; que en éste caso nos lleva a pensar en la violencia misma que se introduce introduce en el discurso de las dictaduras como lo hemos referenciado en el anterior aparte donde él discurso  

 

es sumamente simbólico para referir la violencia sutil que lo enmarca a través de la palabra y la voz del poder. 

 Al inicio del segundo párra párrafo fo que hemos citado como ejemplo encontramos que la posición del discurso está, dada desde la voz del poder en cuanto refiere la imagen de Chicão dentro del carro y que se complementa con la sutilidad; como se nos presenta la mirada sobre el mismo poder político, en cuanto refleja la imagen de algunos funcionarios del Estado; donde queda claro que la imagen de Chicão  representa el bienestar de unos cuantos que están amparados en el

poder; dejando así fundada en la imagen y las palabras una exposición sobre la violencia simbólica del discurso político. En cuanto refiere que los que vitorean los políticos deben pagar el precio de la paliza o maltrato; como parte concertada de un acuerdo político que transgrede ya, no, en la parte física efectiva; sino en la parte sicológica inconsciente de los individuos y que se refuerza con la intervención del altavoz utilizado por Carlos Lacerda  en éste caso.

En ese mismo capítulo veremos que la imagen de Chicão, -cuando lanza los dedos de Raimundo sobre los manifestantes, mientras estos corren para protegerse de las bombas de gas-, no

solo a lude a la barbarie de una sociedad política en caos;

sino también a una sociedad enferma y enfermiza por un sentido destructor tanto del individuo como de la masa en general, (este último propagado por los medios comunicativos). 

Por último, tomaremos el tema que atañe al aspecto de la policía y la exclusión de está; para observar el discurso que la atraviesa.

La conversación que revisaremos a continuación se da entre   Mattos  y Páuda  cuando Mattos recibe el turno del comisario Páuda.  

 

-¿Vas a poner en libertan a los vagabundos que he cogido en mi guardia? -Si piensas que los debo liberar, lo hago. -….

-Vamos a imaginar una situación Mattos. Tú caminas una calle de nuestra zona a las dos de la madrugada y ves un tío en una esquina en una actitud  sospechosa.

-¿Qué es una actitud sospechosa? -Cojones, un tío parado de madrugada en una esquina oscuras es siempre una actitud sospechosa.

-Principalmente si es negro.

-Eso, cojones. Tu vas a las dos de la madrugada por una calle y ves un negro en una esquina. ¿Qué puede un negro estar haciendo en una esquina a esa hora? ¿O incluso un blanco de mierda? Te digo lo que hace: espera a alguien  para atracarlo o está buscando una casa para asaltar. Voy y lo detengo al hijo de puta. Una Una simple medida ca cautelar. utelar. Después pido pido su ficha. Si está limpio, lo dejo ir.

-Aquella treta de santo santo tomas de Aquino según la cual es preferible absolver absolver cien culpables que condenar a un inocente no es más que una conversación  para dormir un buey. Pura cháchara. No es de esa manera como vamos a  proteger la gente decente. ¿De qué tienes miedo?¿De esa prensa de mierda, corrupta y analfabeta? ¿De ese viejo pretencioso y ruin que es nuestro delegado? La ciudad esta en manos de marginales .Esas filosofía filosofíass cobardes no  pasan de ser justificaciones de tiras egoístas que quieren huir de su responsabilidad. responsabilida d. (Fonseca: 1994. Cap. IV. Pág. 64)

En la presentación de este aparte, encontramos dos posiciones distintas con un mismo punto de encuentro, el cual en este caso particular aluden al imaginario de los delincuentes y el tratamiento correcto que debe realizarse de acuerdo a lo establecido por Páuda; mientras que en el caso de Mattos  la posición que adquiere éste, se revierte en la importancia de establecer cuales son los principios que deben tener los policías.

 

 

Es los párrafos que hemos expuesto, resulta interesante con relación a la policía, la forma como se esbozan dos posturas ideológicas de un mismo oficio; donde notamos que Mattos está interesado en el bienestar de los presos. Mientras que en Páuda se establecen sus interés desde fines maniqueístas, fundando así, los delitos desde la sospecha, argumentando así, que sus acciones se efectúan como una medida de prevención para evitar cualquier acto de tipo criminal. Bajo estos aspectos vamos a encontrar que en la rama judicial de la novela existe un imaginario bastante desfavorable para las instituciones que están en esta rama; y que en este caso específico será analizada desde la policía, con el fin de establecer la marginalidad, se da en discursos y actuaciones.

En el mismo orden de ideas estableceremos entonces, que el discurso expreso en los párrafos de ejemplo se refiere a un discurso de carácter marginal en cuanto refiere a los individuos marginales como sinónimo de acto criminal en proceso. Dentro de las palabras que categorizan el macrodiscurso encontramos que las palabras 

“Vagabundos, negro, atracarlo” constituyen

de manera directa una marca en

los excluidos; ya que como podemos notar, en la utilización de las dos primeras palabras existe una adjetivación nominativa de los sujetos con el fin de caracterizarlos, mientras que en la conjugación del verbo “atracar”, encontramos que la conjugación “atracarlo” sugiere la realización de la acción de la tercera persona que en este caso es un negro o “blanco de mierda”, y en donde establecemos que el adjetivo “mierda” actúa como un calificativo que nos pone nuevamente frente a una marca de exclusión y que en este caso se establece en el imaginario que se tiene sobre el delincuente.

Dentro del microdiscurso que encontramos en el ejemplo anterior, podemos establecer que las palabras que resaltan el discurso en orden temático son : ciudad esta en manos de marginales” (Capítulo IV. Pág. 64);  en

“La

este aparte vamos a

encontrar la mención de la palabra marginal explícita y directa de una institución social, que maneja según Mattos;  una doble posición frente a su trabajo como  

 

defensores de la ley o norma. Con relación a esta reflexión encontraremos que el refuerzo del discurso se realiza en la oración   “proteger la gente decente”, en donde asumimos que es claro que para Mattos ser “gente decente” está muy lejos del imaginario de Páuda. 

En la institución que estamos revisando, encontramos que existen inconsistencias, que despiertan en algunos personajes temor, intimidación; como es el caso de Adelino, el macumbero  que trabajaba para Gomes Aguilar; ahora bien, si la

policía en las sociedades modernas se establece para proteger a la ciudadanía, vemos que en este caso en particular, la ciudadanía está dada en la representación social que tiene; como en el caso que expone el narrador al decir La que;   La

policía existía para que los ojos y el delicado olfato de las personas de bien no

 percibieran aquella podredumbre. (Cap. III. Pág.37).

Bajo éste precepto tenemos que

entender que el imaginario que se introduce en la novela sobre la institución (policía) se establece desde el abuso y violación a las normas que establecen su razón de ser; permitiéndonos observar como la comisaría, donde trabaja  Mattos y las demás de Rio, están patrocinadas por los bicheiros y políticos inescrupulosos que consiguen a través de las comi comisarías, sarías, no solo estropear las investigaciones, sino también, contratar sicarios, e incriminar a inocentes. Es así que el imaginario que se teje de la policía se establece desde una institución que viola todas las normas y, de la cual dicha debe velar por proteger. 

Entre los personajes que encontramos en la policía, debemos resaltar la intervención de  Mattos; ya que él se refleja en el texto como un ser humano excepcional donde la razón y la lógica establecen que este personaje actúe, mientras que en los otros personajes se ve que sus intereses se mueven, en otro sentido; sentido que va dirigido en pro de favores personales, como lo veremos en el caso de Rosalvo, en cuanto da información de Mattos y sus investigaciones con el fin de obtener una promoción a la comisaría de  Costumbres, o por ejemplo  

 

el mismo  Teodoro  al contratar a su propio hermano para matar a Mattos, y por último las venganzas que se desarrollan al interior del texto donde se establece el aspecto privado de estos actos como son los dos actos que realiza el comisario Páuda; en donde notamos como su percepción del mundo criminal lo llevan acometer dos asesinatos: uno cuando mata al “sicario” Turco Velho, con el fin de

dar un escarmiento a todos aquellos que se atrevan a tocar la fuerza pública, que en este caso es la policía , y el otro caso es el crimen, que en relación con este personaje se funda, cuando mata al señor Idilio y le deja las esposas para que enteren  que el trabajo se hizo en casa,  casa,   [los demás bicheiros y delincuentes delincuentes   se enteren   Déjalas, para que los amigos de ese hijo de puta sepan que fue el personal de la casa el que hizo este trabajo. Para que aprendan que no pueden matar a un tira así como así] (Fonseca; 1994 Cap.  XXVI. Pág.358);  en

esta expresión notamos que existe un convenio en donde las

comisaría como las casa del bicheiro son la misma casa. Y en la casa se limpia y ordena toda con el fin de establecer el “orden”. 

Es así que en la policía veremos como los actos marginales que va en pro de la violación de la norma, que dan en la clandestinidad, donde establecemos que el imaginario y la construcción de la imagen de la policía en el texto se encamina bajo el fin de mostrarnos una sociedad decadente, donde los únicos elementos de cambio terminan sepultados; como el caso de Mattos, que al morir restablece un orden del desorden que se ha establecido en el sistema funcionan de la sociedad de la novela como orden, bojo esta condición encontramos que la ciudad se restablece como si nada hubiera pasado, dando a entender que todo sería igual y un poco mejor para la decadencia; sin la presencia de Mattos. Con relación a esta percepción basta con leer la última hoja de la novela.

Para finalizar diremos que nuestro trabajo se realizo basado en las temáticas discursivas más representativas del texto en general; ya que es justamente en ellas donde hemos logrado identificar los propósitos propuestos para este trabajo.  

 

NOTA: En la novela de Fonseca queda consignado que su eje temático gira entorno de discursos elitistas, los cuales construyen el imaginario de marginalidad. Bajo este precepto anexamos las palabras que son más recurrentes en este tipo ti po de discursos. (Ver tabla en anexos 1 y 2

 ANEXO: 1 Palabras representativas encontradas en discursos de carácter político (represivo)  Adjetivos nominativos

Nombres

verbos

pronombres

 Tropa 

carro-tanque 

arremetían 

Acecino

heridos 

Bombas 

órdenes 

violencia 

atemorizadas 

oían 

corrupto 

Estallido 

disparando 

Gritos  Pavor  Gemidos  Choque  Oligarca-s revolución

 

 

Dictador

 ANEXO: 2 Palabras representativas encontradas en discursos de carácter marginal  

Adjetivo calificativo

Adjetivos nominativos

Adverbios y adjetivos

verbos

Nombres

señor

negro

Muy

gustaría

mercado

Doctor

gallinas

como

degustaría

alquiler

Horroroso

gusanos

Tan

había

Esplanada

Bandidos

puercos

atracarlo

piel

Barro

hijo de puta

matar

herencia

Inmundos

perro

satisfacer

nadie

Vagabundos

ratón

Gusanos

Infeliz

canalla

Inmundos

Sucio 

maldita

Insoportable

 

 

hijo de puta

don

Apuesta

Invertido

Bandido

la ropa Barata

Preso podredumbre

Ordinarias Miserable Esclavos Pobres

CONCLUSIONES

En Agosto  encontraremos, pues; que tanto los espacios como los medios que mediatizan la información son claves para establecer si la práctica que se está realizando es de tipo marginal en el aspecto público y privado, íntimo.

En nuestro trabajo, diremos que en el espacio de lo público todo queda expuesto a través de un medio de comunicación, mientras en lo privado encontraremos que las relaciones que se establecen en la intimidad de lo privado se dan bajo el carácter de confidencialidad donde veremos que lo esencial a resaltar es la importancia de lo reservado del asunto que se traten en estos diálogos.

Dentro de las relaciones de los personajes y el acto de marginalidad estableceremos que estos se dan, de acuerdo a unas actuaciones privadas que en

 

 

el caso dado de las prácticas y los discursos se fundan desde la confidencialidad, donde diremos que la confidencialidad es justamente la clave para instituir el éxito del acto marginal en el texto, con relación a lo privado; mientras que la pérdida, del sentido de confidencial nos deja frente al aspecto de lo público como tal.

Con relación al imaginario que se establece en la novela sobre la mujer concluiremos que en todo el sentido de la palabra se da una agresión constante de su imagen en cuanto se reproduce constantemente el imaginario machista latinoamericano. El aspecto de lo público que se fundamenta esencialmente en el conflicto interno político, lo hemos mirado desde el acontecimiento histórico; ya que si, bien asumimos que la novela es de tipo policial; debemos establecer que los datos referenciados por Rubem Fonseca en la novela nos ponen frente a la relación que hace Pöppel sobre la novela policiaca, con relación a los actos comunicativos de Habermas; donde se establece que dichos actos en la novela están referenciados por la intertextualidad que se da en la construcción de ficción a partir del mundo de la vida o mundo real como lo conocemos estableciendo que se cumple para el caso de Agosto, y que intentábamos comprobar con la teoría de Hubert Pöppel.

Para finalizar las conclusiones nos gustaría aclarar que este trabajo nos permite dimencionalizar a futuro posteriores investigaciones donde el análisis se focalice a partir de los temas que hemos abordado en este trabajo; donde el tema central estará dado en el imaginario de la exclusión que se fija a partir de los discursos del poder estableciendo que nuestras herramientas más cercanas de trabajo se darán, en los aportes de la historia como medio constatador de la realidad, asimismo como la literatura; ya que en ella se fijan las representaciones de nuestro objeto de estudio.

 

 

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  LO CONFIDENCIAL, UN ACERCAMIENTO AL ANÁLISIS DE LAS RELACIONES DE LO PÚBLICO Y LO PRIVADO EN LA NOVELA DE RUBEM FONSECA.

En la investigación nos propusimos estudiar las prácticas marginales como un acto mediador entre lo público y lo privado. Nuestra pregunta de investigación indago en la forma en cómo se evidencian estas prácticas marginales en la dimensión ideológica de los personajes de  Agosto,  nuestra unidad de análisis se centro en los discursos públicos y privados.

Este trabajo puso su atención en la investigación sociocrítica, pues esta permite develar y delimitar los aspectos de la mediación que en este caso se encuentran en las prácticas marginales.

La mediación debe entenderse como una

representación de la realidad. La representación se hace a partir de una oferta de representaciones; esta última, es entendida como la oferta de lo cultural y social asumiendo que en la representación se encuentra comprometido lo ideológico.

Pudimos establecer siguiendo esta metodología y teniendo en cuenta los enfoque sociocríticos, el valor de una práctica social que se reitera a lo largo del texto estudiado: la confidencialidad.

Las conversaciones o discursos generados bajo el signo de la confidencialidad; tienen en la novela una gran importancia ya que a partir de ellas pudimos precisar la mediación e instrumentalización del acto comunicativo para generar diferentes

producciones

de

actos

marginales,

establecemos

así

que

las la

 

transgresión a la norma se genera cuando el acto esta precedido de una conversación que conlleva en sí, como particularidad el aspecto privado.

La transgresión de la confidencialidad, genera un desorden en la sociedad representada en la novela, el cual se refleja en los discursos que se adoptan en los medios de comunicación. En la novela vemos pues como los actos marginales atraviesan la vida pública a la luz del escándalo político. Que informan en este caso la prensa y la radio.

En la confidencialidad por ejemplo, encontramos que los aspectos sexuales y de género marcan en los discursos características variables que nos permitieron entender el mecanismo cultural de los personajes; en cuanto a las prácticas que conllevan singularidades de las costumbres de la sociedad de Agosto, además de darle un valor a la postura ideológica de los personajes.

En

las

acciones

de

los

personajes

determinamos,

que

siendo

estas

representaciones de las acciones humanas se establecen en el mismo sentido convencional de una sociedad del mundo real, aportando así a nuestra investigación un sentido crítico sobre la ideología y posición social de los personajes en la novela. Llegamos a esclarecer como la normativa social convencional se restituye en  Agosto   a partir de la transgresión constante de la norma misma.

En la novela  Agosto Agosto evidenciamos cómo la confidencialidad cumple la función de mediación entre lo privado y lo público en cuanto aparece en el texto como el instrumento que fija las acciones marginales de los personajes públicos, siendo estos últimos los que más hacen uso de la confidencia y del acto de privacidad en la novela. Así el aspecto de lo privado en estos personajes marca unas conductas

 

que en su acción marginal protegen desde la confidencialidad la norma establecida en lo público.

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