Amendola La Ciudad Postmoderna

April 4, 2017 | Author: mafer09 | Category: N/A
Share Embed Donate


Short Description

Download Amendola La Ciudad Postmoderna...

Description

THE LffiRARY OF THE UNIVERSITY OF NORTH CAROLINA AT CHAPEL IIlLL

ENDOWED BY THE DIALECTIC AND PHILANTHROPIC SOCIETIES

La Ciudad Postmoderna

J

\\.J\

/\ él Ir) )[5 (J

//1J'.

La Ciudad Postmoderna MAGIA y MIEDO DE LA

METRÓPOLIS CONTEMPORÁNEA

GIANDOMENICO AMENDOLA

PRESENTACIÓN DE LA COLECCIÓN

La coLección "Intersecciones. Arte y Arquitectura" ofrece un conpmto de títulos caracterzzados por eL gran aLcance de Los temas afrontados. Respondiendo. en todo caso, a un pLanteamzento de rzgl.¿rosa Investzgación, las propuestas editorIales se identificarán por fa stgnificattva zmplicación de diversos ámbitos de la cultura. De este modo. arte, arqUitectura, urbanzsmo, estética, historta. serán campos del saber que se mterrelactonarán actIvamente en el interIOr de Las temáticas conszderadas, superando fas estériles barreras disczplinares. Profundizando en aspectos fundamentales de La actualidad (sea en el sector de la prayeetación y producción, como en eL de Los estudios críticos), ia coLección pretende sugertr problemáticas y cuesttones vivas que atañen de igual manera al mundo profestonal y unlVersitarto.

CELESTE EDICIONES

Colección: INTERSECCIONES. ARTE y ARQUITECTURA Director: Antomo Pizza

Título angmal: La cuta postmodema. Mag1c e paUTe del/a metropoLi contemt)Qranea. Giandomemco Amendola.

© 1997. Gius. Laterza & Figli Spa, Roma-Bar! Esta obra ha sido publicada con el permtso de EULAMA Ltterarv Agencc, Roma.

"" .no hablo de la cIUdad SlllO de aquello en lo que a través de ella nos hemos convertldo"

Copynght de esta edidón:

(parafraseando a Ramer María Rilke, del Diarzo Florentmo)

© 2000, Celeste EdicIones Fernando VI, 8, 1. 2 28004 Madrid Tel.: 913100599/902118298. Fax: 91310 04 59 E~mail:

[email protected] www.celesteediclones.com

", .. YO

encuentro bella a toda cIUdad"

Walcer Ben}amlO, Passagenarbezt, Konvolut N. Traducción: Mansa Garcfa Vergaray y Paolo SusterslC Ilustración de la cubierta:

© 1998, Paolo Susterslc. Times Square. Nueva York ISBN: 84-8211-239-2 Depósito legal: MA.418-2000 QLledan ngurosamente prohibidas,

la automación cscma de los titulares del «Copynght», balo las sanciones

Sin

establecidas en las leves, la reproducción

total o pmeta! de esta obra por cualquier medio o procedimiento, comprendidos la reprografía v el tratamlento mformático, v la clis[ribución de ejemplares de ella mediante alquiler ü prestamo públicos.

Impresión: Fareso, S. A.

impreso en Espail.a - Pnnred in Spam

A Giovanna, AncoUlO y Francesco

Índice

INTRODUCCIÓN "Cityscapes" y "Mindscapes"

11

I. LA CIUDAD: OSCURO Y CONTRADICTORIO

OB]ETO DE DESEO .................................................

19 19

La hUIda de la cmdad ................................................. La cIUdad nueva ......................................................... Imágenes y metáforas de cmdades ..............................

33

II. EL NUEVO RENACIMIENTO URBANO Y EL MITO DE LA CIUDAD ...................................

45

Los grandes mItos urbanos ......................................... La cmdad y la hIper-realidad ..... ... ..... ....... ..... ... .... ...... El reenCantamIento del mundo..... ..... ..... ....... ....... ......

52 57 60

III. LA CIUDAD POSTMODERNA .........................

67

La cmdad-bncolage .................................................... El neo barroco ................ .......... ..... ........ .... ..... ....... ...... El cIUdadano postmoderno .... ... ....... ............ ....... ..... ...

72 80 88

IV. LA CIUDAD POROSA.........................................

97

Los nIchos urbanos y los deseos .. ..... ... ....... ..... ....... ...... El "Fuali" ...... ..... ..... .......... ... .......... ....... ..... ....... ..... ..... La luz y la noche.........................................................

102 105 109

28

V. LOS PRINCIPIOS ORGANIZADORES DE LA CIUDAD NUEVA ......................................... . El placer y la belleza: el hedolllsmo de masas ............. . El derecho a la belleza ............................................... . Los arqultectos "superstar" ........................................ . El reencantamlento urbano ........................................ . El pnmado de la Razón Estéttca ................................ .

119 126 132 136 142 147

II ,I

I

VI. LA CIUDAD DE LA SIMULACIÓN .................. .. 155 VivIr" como si" ......................................................... . 16J: VII. LA NUEVA SOCIEDAD MEDIÁTICA y EL PRINCIPIO DE LA REALIDAD .................... .. 167 La múslCa y el relato de la cmdad .............................. . 169 Realidad, Imag111ación e hIper-realidad ...................... . 172 VIII. EL NACIMIENTO DE LAS CIUDADES SUEÑO. Los pasaJes y el fldneur ............................................... . Los grandes almacenes .............................................. .. El Crystal Palace ...................................................... ..

183 185 196 202

I

I f

I I!

XIII. EL MULTICULTURALISMO y EL PROBLEMA DEL OTRO..................................

277

XIV CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD.. El market111g urbano .... .............. ................ ................ Las estrategias de la apanencIa .................................... Los Ángeles: el market111g a través de un siglo ...............

285 292 298 303

Xv. LOS EXCLUIDOS DEL SUEÑO Y LA CIUDAD BLINDADA ............................................... La Ha de los exclUidos ................................................ - Los graffitts ................................................................. La cmdad y el miedo .................................................. Las estrategIas de defensa ........................................... La otra cmdad . ............ ........ .................. .............. ....... La pesadilla ele las comunidades-fortaleza ...... .............

309 312 313 316 325 336 341

BIBLIOGRAFÍA

......................... , ....... " .................... .

ÍNDICE ANALÍTICO

...............................................

349 367

IX. LA CIUDAD COMO PARQUE TEMÁTICO .... . 211 La cmelad-delino ...................................................... .. 222 Puertas y aeropuertos ................................................ . 228 X. LA CIUDAD MUSEO VIVIENTE ...................... .. 233 Los nuevos "tableaux vlvanrs" ....

o • • • • • • • • • o •• "

o •• "

............ .

245

XI. LOS SHOPPING MALLS: DEL FLANEUR ALBUYER ............................................... ................ . 251 El zClppmg de los lugares ............................................ . 257 XII. MERCADOS, ÁGORAS Y ACRÓPOLIS .......... .. 265 La Ciudad de aue acondicIOnado A

270 9

INTRODUCCIÓN UCityscapes" y uMindscapes '!

Hablar de cIUdad posrmoderna en Italia puede parecer un discurso académIco y lepno. Algunas realidades urbanas como Nueva York, Los Ángeles, Tokyo, o en menor medida Londres, generalmente consideradas como las expresú:mes y los símbolos de la nueva fase de la hIstona de la CIUdad, pueden parecer ajenas y poco aprovechables respecto a nuestra situación. Algunas arquItecturas o escenas urbanas partICUlarmente "diferenres" . de los shoppmgs malls a los theme parks, son conSIderadas lD1ágenes de ciudades verídicas e Inquietanres pero específicas y lejanas o, a menudo, nada más que "amerIcanadas"

I-

r

rf'.•· t rI

I

Las Imágenes postmodernas de esras metrópolis corren el nesgo de ser tratadas como apuntes de un carné de vIaje o fotogramas de películas ya vistas, tal vez Interesantes y estunulantes, pero carentes de interés 1l1mediato. También el hecho de conSIderarlas como una antICIpaCIón -para bIen o para mal- de un probable futuro prÓXImo encuentra a menudo amplias reSIstenCIas en nombre de su profunda y esenCIal diverSIdad respecto a la escena Italiana. Aménca parece, cuando se habla de CIUdad, lejana y difereme. Ya se trare de la Aménca metropolitana de los rascaCIelos modernos, postmodernos o tardomodernos, ya de aquélla de las pequeñas CIUdades de las mam streers, SIempre Iguales, o de las grandes aglomeraCIOnes de las edge artes y de las galaxIas periféncas, la 11

LA CIUDAD POSTMODERNA

INTRODUCCION

realidad urbana estadounIdense se cousldera, en general, muy específica y distante de la europea. El palsa)e urbano Italiano, en espeCIal, parece radicalmente diferente del norteamencano y hasta del inglés, que es el palsa)e europeo que con mayor rapIdez tIende a homologarse con el estadoufildense. El distanClamlento de la expeneoCla urbana de estos países parece posible con mayor razón, al enfrentarse a la llamada ClLldad postmoderna, sobre todo SI la postmodernldad hace referencia a las formas fíSIcas arquitectónicas y urbanísticas de la CIudad antes que a su vida y a su cultura SI, en otros térmi-t nos, se asume como ente no de JUIcio el hardware urbano ,más que su software. En Italia, la oleada postmoderna es consIderada leJana, también porque el postmoderno constrUIdo es más escasO que en otras partes. Los motlvos son muchos y sólo en parte atribuibles a un supuesto gusto antl-postmoderno de los arqUltectos

También el mIedo, al fi1enOS declarado, de que lo "nuevo"

no sea comprendido y que los cmdadanos puedan disentIt y retItar su consenso, contribuye a reafirmar la extendida postura conservadora en matena de formas de la cmdad por parte de los admmlstradores, apoyados, más alla de las apanenCIas, por una buena parte del mundo de los proyectlstas. Como últIn1a opción de reSIstenCIa en contra de todo cambIO queda sIempre un posible recurso al referéndum por medio del cual los cmdadanos están dispuestos a rechazar las torres de Boflll en BolonIa o cualquier otra cosa que parezca perturbar el atyscape consolidado. El motIVO puede ser también, como constantemente se sostIene, el carácter valioso y delicado de la cmdad Italiana que no soportaría traumas provocados por InserCIones deInasIado atrevIdas. Aún esta argumentación puede conSIderarse legítIma aunque haya que preguntarse cómo la CIudad francesa -yen especIal la cmdad más cmdad de las cmdades francesas, París- ha logrado acoger, s1l1letales cnslS de rechazo, los grandes monumentos arquitectónicos y urbanístIcos de la moderfildad y de la postmoderfildad, y los ha 1l1sertado, cargándolos de slgniflcados, en el gran texto del espaclO constnudo de la capItal. A menudo se nene la Impresión de que todo el camblO arqllltectónICO se reduce en Italia al discurso sobre el can1blO, que el discurso arqUItectónICo prevalece sobre la práctica y que la arqllltecmra de papel gana a la de pIedra, realizando así, de una forma perversa, la profecía de Hugo. La Srrada Novlsslma de la Bienal de Veneoa corre el nesgo de ser, por lo pronto, SI no el únICO, al menos el más Importante monumento post moderno del atyscape Italiano. Un factor ulterior de --resistenCIa a lo postmoderno se sitúa en la convlCción extendida de que la calidad de la VIda cotIdiana en Italia no necesita de un doble ImaginarlO para ca m-

italianos. Si esto es CIerto, lo es sólo en parte, y es a su vez resultado de otros EacIotes entre los cuales cobra importancia la reSlSrenCla a los cambIOS de nuestras CIudades.

También en Italia, la arqUltecrura contemporánea relevanre es, en general, escasa. La lucha contra la novedad es constante V resulta difícil convencer a un concejal de urbanIsmo o

a una comIsión ediliCIa entera para aceptar camblOs radicales en el panorama urbano consolidado. Intentad Imagmarlo: Moore que propone algo SImilar a Piazza d'Italia al ayuntarlllento de Roma o J ohnson que discute el remate chippendale de su rascaCIelos AT&T con la comIsión ediliCIa de Turín. Hay que preguntarse SI 1mblese SIdo posible un Beaubourg Pom Pldou en Italia, puesto que sólo la propuesta de urilizar en la cubIerta de un auditorio un marerial "nuevo" -por no estar contemplado en las cItculares mmlstenales- ha podido bloquear el proyecto y colocar al arquitecto, en este caso a Piano, en el centro de vlOlentas polémIcas. 12

f

l

13

INTRODUCCION

LA CIUDAD POSTMODERNA

pensar las desiluslOnes y que la relación de la gente con la realidad, clUdad mclUida, no es capaz de produclf por reacción una demanda de sueño y de evasión sufiCIente para trastocar el eltyseape. En esta argumentación, para nada nueva, hay un elemento Importante y fundamentado, constItUido por la relación diferente que de 10 cotIdiano nuestra cultura tIene con el Juego. A diferenCIa de los países de habla alemana, y en menor medida de Estados UOldos, Italia, hasta hace pocos años, no ha teOldo parques de diversión urbanos permanentes comparables al Prates de Viena o a Coney Island. El "Paese del balocchj" de Pinocho es el ÚOlCO espaclO fíSICO urbano permanente con el que los Italianos tIenen CIerta familiandad. El esfuerzo está dingldo al máXImo a dilatar el lotStr en el tIempo -lDventando . puentes y festlvldades- más que en el espaclO. Probablemente porque la clUdad italiana está todavía demaSIado empapada de espíntu barroco para tener neceSIdad de un espaclO de ficción estructurado y separado de 10 cotIdiano. También el mundo de 10sshoPPtng nzalls, típICO de la metrópolis postmoderna, parece leJano, puesto que los pocos eJemplos realizados en Italia se sItúan en su mayor parte en la penferIa y no han causado Impacto en el ImagInario colectivo. Además, su público parece estar aún mayontanamente formado por jóvenes. Las grandes galerías Italianas -monumentales acorazados en proceso de desguace, las últlmas de la glonosa tradición europea- no dan señales de revIvIr los grandes esplendores umbertlanos '. La de Roma está deSIerta y blindada para eVItar la posible creación de dormitorios nocturnos que InqUIetarían a los cercanos palaclOs del poder; la Galería U mberto I de Nápoles ha sldo finalmente rehabilitada, graCIas a los campeonatos mundiales de fútbol y a la reunión del G 7, pero es sólo un espléndido cascarón sm VIda; la de Milán reSIste, colo14

L

cada en el polígono de oro de la clUdad más nca de Italia, pero está volVIendo. a pesar suyo, a su carácter ongmano de calle cubIerta, calle entre las calles, en apnetos por 10 tanto, como todas las otras calles Italianas, por la transformación de la red comerCIal y el CIerre de los restaurantes y los bares de prestIglO que depn lugar a tIendas con alta facturación y productos de consumo maSIVO. Las calles hlstóncas todavía parecen salir ganando en Italia sobre los grandes shopptng nzalls urbanos, aunque la contmua competencIa contra un enemigo inVIsible, pero siempre preparado para entrar en Juego, las obliga cada vez más, sobre todo a las ll1ás famosas, a actuar contlnualllente sobre su imagen, buscando asumlf por antICIpado, graoas aluces,decorados y sOOldos, el aspecto que un mall competIdor podría asumu. No obstante, en Italia también se adVIerte un camblO en el , clima de las clUdades, y sobre todo en la relación que las personas tienen con ellas. Esta sensación no se explica solamente por el desarrollo de algunas tendenCIas que, aunque con valores todavía redUCIdos, observan el creCllUlento de los shopPing ma!!s y de las áreas urbanas temátIcas en este país) Junto a un . 111cremento de la proyectación de programas de evasión y la creoente demanda de arqUitecturas defenSIvas. Un síntoma de la bomologación 1l1ternaclOnal es el elly marketmg, que comienza a afirmarse también en Italia aunque sólo en algunos casos se presenta explícitamente como tal, mientras que se Implementa cada vez más con etiquetas diferentes y más tradiCIOnales. Ni slqUiera se trata de un efecto de los pnmeros edificlOs que entran, de alguna Illanera, en los cánones, por su naturaleza flexibles y hasta 111determ111ados, del postmoderno. El verdadero problema es que no sIempre las cosas son C01110 sostenía Baudela¡re, qluen escribía que: "la forme d'une ville change plus vlte que le coeur d'un mortal" " es decll', que la 15

LA CIUDAD POSTMODERNA

forma fíSICa de la c!Udad cambla más rápIdamente que el alma de su gente. Por el contrarlO, el alma parece estar camblando mucho más ráp,damente que el espaclO constrllldo de la C!Udad. Las argui tectutas postmodernas son en general pocas en los países como Esrados UOldos, Canadá, Gran Bretaña, AlemaOla, Japón, o Brasil, donde su difusión ha sIdo relatIvamente mayor. El Impacto del ambIente construIdo postmodemo tanto sobre el citysi."ape como sobre el Imaginano colectivo, COIDO se verá más adelante, es por lo general mayor de lo que la conSIsten· Cla cuantitativa de las nuevas formas pueda hacernos pensar. Son más bIen las nuevas culturas. los sueños, los deseos y los miedos de su gente, la variedad de las nuevas tribus urbanas, la nueva demanda de cmdad, las que connotan a la cmdad postmoderna. Es en ellntenOr de eSIe segmentado y a menudo cootradictono escenariO donde la nueva Cludad fíSIca adqUIere relevanCia y nuevos Significados. Las arqUItecturas postmodernas no son la CIudad postlTIOcierna: en ésta. aquéllas constituyen Importantes emergencias y señales y se pueden conSIderar como su preCIpItado y metáfora. Son sólo un aspecto de la postmOderOldad. Si el cttyscape, el panorama fíSICO de la cmdad, es todavía sólo en parte postmodemo, su nundscape, el panorama del alma y de las culturas de la cmdad, ya está profundamente marcado por el nuevo estadio. Por este motIVO, el Impacto del postmoderno sobre el gentus toa de la Ciudad es eVIdente para todos, y se puede lOlnediatamente respirar el nuevo cliIna en la metrópolis contemporánea lOdependiente de las formas arqUItectónIcas. En el panorama fíSICO de la cmdad Italiana, en su cztyscape, el postmoderno es todavía raro. Sin embargo, la CIudad está ya más presente de lo que se cree en nuestros deseos y en nuestas almas. La postmoderoIdad ya está marcando el nundscape de la 16

INTRODUCClON

Cludad aunque de ll1anera fragn1entada y lacerada a través de los sueños, los mIedos, los gustos V los consumos de la gente. La c!Udad nueva toma forma aun antes que en las arqUltecturas, en las culIuras, en los valores, en los estilos de VIda. Con los pIes estamos wdavía en la escena fíSIca de la cmdad habItual, y con la cabeza, en la cmdad mediátlca de la hIpetrealidad y del ImaglOaflo. La Cludad nueva italiana tIende, aunque lentao1ente por la VISCOSIdad de las normas y de las praXIS consolidadas, a transformarse en un patcbwork de estilos y de IdentIdades baJO el empuje de una nueva demanda SOCIal en la que aparecen nuevos elelnentos COIDO belleza, seguridad, SIgnificación, variedad, que se agregan a los tradiclOnales. El deseo se vlOcula a la neceSIdad como cntetlO de legIt11nación de una demanda de cmdad que se desmembra por la vanedad de sUjetos que se pre-

sentan con lntenclOoes, lenguajes y proyectos nuevos en las escena urbana. Comienza a emerger en el proyecto una atención nueva y mayor con respecto a la gente, que pide ser conSIderada por lo que es y no pedagógIcamente por lo que tendría que ser. La Ciudad nueva postmoderna empIeza así a ton1ar forn1a también en Italia. De te fabula narratUJc

NOTAS I El período de esplendor de las galerías en It, la cmdad ha asumIdo como metáfora de su relación con el mun- . 160

do en prin1er lugar al espejo en cuanto que lQstrulUento capaz

d~ ~eprodllC1r -de refle¡ar- fieln1ente, aunque sea con sus

C

ca dIgas y lenguajes, la realidad. La cmdad era y es el espejo de su mundo; se ha dicho también que es la cmdad la que hace VISIble la estructura SOCIal. las relaclOnes de poder y de clase, los confllCtos y las práctlcas SOCIales, la proyectualidad y la cultura. La clUdad ha SIdo y es también disfraz por su capaCIdad de ocultar, dIslmLllar, InVentar y marcar una separación entre Imagen y realidad. La polémIca de Rousseau se centraba pues en el potenClal de corrupción de la cmdad-disfraz. En la cmdad neobarroca contemporánea, el límIte entre una máscara fictICIa y una realidad "verdadera" se diluye. El actor SOCIal, el hombre n1etropolitano, vive con el antifaz puesto y tiene tantas lnás posibilidades de superVIvenCia CUantas lnás máscaras sepa utilizar para subIr a los diferentes e Incoherentes escenanos de la VIda. El mundo urbano le proporclOna cada vez nuevas posibilidades de representación que resultan tanto más atrayentes cuanto más gtatificantes y totalizadoras. La escena es real puesto que imita al ImagInarlO. el mundo es real porgue es el deseado; la distInción en la representación sOCJal urbana entre plot y canOVdCClo tIende a desaparecer. En la hlper-rea[¡dad se pIerde no tanto la realidad como el concepto mIsmo de realidad. La realidad es más teal cuando ImIta y reproduce al Imagll1arlO. La Imagll1ación precede a la realidad, el mapa al terntono, el SIgno al objeto, Imitando allmaglnano la CIUdad se convierte en ciudad-sitnulacro. Vivir "como si"

clave para comprender algunos de los p1'lnClpales camblOs la cmdad y de la SOCIedad es el concepto de experteneza . . Cada aspecto de la cmdad tIene que convertIrse en una expeflenCIa actIva que pueda ser promOVIda, deseada o adquinda 161

LA CIUDAD POSTMODERNA

como tal. Un café, Disneylandia, una plaza, la cmdad mIsma se proponen como experienClas globales, más que como SImples lugares. En la base de esta Idea penetrante de expenenCla hay una concepción según la cual lo que hace "grande" a un lugar es su capaCldad de transformarnos por el hecho de atravesarlo y de produclf una expenenCla después de la cual ya no somos los mIsmos. 2 La Idea, desarrollada con respecto a los grandes lugares de la Clvilización -catedrales, espaclOs hlstóncos y míticos, parajes naturales definIdos romántIcamente sublimes- ha sIdo mmediatamente captada por proyectIstas' y promotores lnmobilianos para valonzar las nuevas áreas de

encanto de la cmdad. Puesto que lo que se vende no es el lugar, SIlla la expenencia que éste proporciona, cada lugar de la CUI-

dad nueva contemporánea puede ser proyectado y presenrado para crear expenenClas. las "expenenClas" se están convirtlendo en un refuglO colectIvo. Un restaurante es una expenenCla gastronómica, un museo una expenenCla en la hIstoria, una CIU-

dad puede pues llegar a convertirse en una expenencla de cmdad. El obJetIVO explíClto de esta arqmtectura es la realización de lugares capaces de crear expenenCla. John Erde, el arqmtecto estadounIdense conSIderado como el Inventor Y maestro del shoppmg mall de la últIma generación, describe su actIvIdad como "expenentlal placemakmg" Según este pnnClplO, destacado también en los folletos promoClonales de su despacho en Las Vegas, Erde ha transformado Frermont Street en "Frermont Street Expenence" y ha realizado en Fukoka, en Japón, Canal City Hakata. Ésta es una extraordinana y futunsta catedral urbana, presentada como el modelo de la clUdad del tercer milenlO, donde se mezclan shopptng nzalls, espaClos de encuentro y de diversión: es, en sínteSIS, un experzenttal Place capaz de "inspIrar e mvolucrar al espintu del hombte" Todo se vuelve apetecible y vendible en nombre de la capaodad de convertIrse en expenenCla. la diversión se conjuga con

162

LA CIUDAD DE LA SIMULAClON

la expenencia en formas nuevas cada vez, conVIrtiéndola en

attactlva, deseable y, por lo tanto, vendible. Todos los ambIentes tienen que rezumar expenenCla, tienen

que brillar de expenenClas adqUIribles y sIgnificatIvas. Hasta las estaclOnes -South StatlOn en Bastan, Union StatlOn en

Washlllgton, Penn SratlOn en Nueva York- se ptesentan y promueven como "un mundo de expenenClas con coneXlOnes ferrovianas" ~

En la cllldad contemporánea los nuevos y compartidos pnnClplOS orgalllzadores son aquéllos, lllterdependientes, de la Imagen y del Juego. El Juego gratifica y exalta, no tIene ottas teglas que las suyas ptOplas y entre ellas se encuentra la fundamental, la Grundnot'llZ, según la que un Juego es un Juego del que se puede entrat y salit a voluntad. Baudrillard afirma, haCIendo suya la teSIS de Rem Koolhaas, que Manhattan es la copIa, multiplicada y exaspetada, de las ptlmeras expenmentaclOnes de la cllldades del Juego y de la ficción realizadas a comIenzos de SIglo en la cllldad balneana -hoy desapareClda- de Coney Island. La cual a su vez tenía como modelo a las cllldades termales emopeas de Spa y Bath, ptOtotlpOS [unttonal and [icttonal de cllldades de la diversión y de la ficción. ' En la SOCIedad contemporánea parece realizarse la afinnaóón

de Schiller para qmen el hombre "juega sólo allí donde es hombte en el pleno sentldo de la palabra y sólo allí es enteramente hombre, donde Juega". No sólo pues, la cllldad "es un espectáculo en el que el valor de la divetsión pnma sobre cualqUIer otro valor), SIno que es una realidad en la que el hecho mlsn10 de estar juntos puede convertIrse en un Juego. La CIudad está a punto de convertirse en un slsteITIa de escenanos y de carTI-

pos de Juego donde cada cual puede Jugat y comportarse "como si". Es posible sublf al escenano, entrar en un papel, actuat en consecuenCla "como si", salir de la escena o volver a elnpezar 163

LA CIUDAD POST MODERNA LA CIUDAD DE LA SIMULACIÓN

el juego. Nada, vIccoria o fracaso, es definitIvo o irrevocable. Cada partIdo o espectáculo es un acontecimIento en sí ffiIsnlO: un nuevo lanzamiento de dados, un guión nuevo. las expenenCIas IndivIduales no son necesarIamente acumulables desde el momento en que Juegos y representaclOnes no pueden sunlarse. "Todos somos jugadores, El ¡7áneur urbano es un jugador VIajero, Él lleva conSIgo su juego a cualqUier lugar, Su juego es un solitano: así él puede disfrutar hasta el final de todos los placeres del juego SlQ los vínculos de compañe,os egoístas o.Celosos, \. .. ) El juego es conSCiente de sí mIsmo como juego" 6 Puesto que "la ptox1midad es rética no lQterfiere con la distanCla sOClal". es posible hacer enttat en el juego también al extranjero porque es sólo con la imagen del extranjero, con el slll1ulacro del otro que elfláneur contemporáneo entra en contacto. A este otro se atribuye un relieve sólo estétIco y temporal como el juego en el que es llamado a participar. Elf1áneur contemporáneo es al mismo tiempo Homo Aestetu'Us, Horno Ludens y, sobre todo. Hombte Consumidor, Él está dispuesto a adqumr y gastar la eXperienCia de la que es protagonista S111 que ésta consiga marcarlo o afectarle realmente. La contradicción entre un concepto, el de experienCIa, que presupone una implicación profunda y una práctica de juego y de representación que hace referenCia en camblO a la superficialidad y a la 1l1diferenCia. eXIste y expresa Sin embargo las modalidades inéditas según las cuales la gente Vive la Cludad nueva contemporánea. El uso IuaSlVO del térm1no experiencia no es sólo cuestión termlQOlóg1ca o efecto de difusión de un lenguaje alramente lIupactante, propia de la publiCldad moderna. smo que te a unos conceptos preClsos. El térmIno expenencia cubre Significados nuevos y tranquilizadores las escenas de la cHm,w, nueva y evoca de forma explícita la implicación ptofunda

SUjeto en la representaci6n SOCIal la d pap, el no es, en efecto por d fi '." e un actor que recita un , e InICian una Se Interpreta, la exper . expenenCla: el papel . IenCla se VIve. Se ab lSuperaCión de la Idea d re e camIno hacia la e escena COlno 111 fi CIente de la VIda. omento de InIdo y cans, En este empleo apatentemente m a ' ceptos se de) a entrever el e ' prop1ado de termmos y eon, araeter pl"Ofun 1 d 1 tacu,lo neobartoea prod 'd e o e a emdad-espee_ , UC! o POt la pt lImite entte VIda y ,, agreSIva superación del repreSentaelOn E 1 l' , la cmdad pOstmodern " s a OglCa totalIzadora de , a COntenlporanea en V·· d l to mas ConSCientes somo d 1 d' f lltu e e la cll.:l.l cuans e 1S taz o d 1 d' f vamos V camb1an10s tanto' e Os 1S races que Ue, mas necesan sobre la cual recitar a nos resulta la escena nuestro papel La e onClencm de la representación social aume t i · ' f' n a a necesidad de 1 do adecuados a dieh a escena 1SlCa y el fona representación La demanda de 1 d ' a CIU ad-escena es f( del hombre m e t t o p o l i t ' en el 'Onda, demanda ano Postmoderno d d mo: persona-disfraz. e po er ser él lnlS-

NOTAS , T, Flamand Aa: " I ! '11 p' ,al'eravlea!'écran,elrNi < • a~ls:, Centre Georges Pompido u , 1994 . ney, F. (ee\.) VtJlons Urbames, El verdadero lugar urbano es el ,pp. 8-13 ... ya n,O seremos los que habíam 'd que nos modiftca; alejándonos de él p. os 51 o al entrar" P S aI1S, KllOcksleck, 1984 p 32 ' . ansor, Poétiqlte de la Ville Ww " ", ' . elsch, AesthetlclzatlOu Process" Th 1, ~996, p. 2. ' eory, Cttttt

I¡.

.,, Calvmo escribe en el ensayo La c,udad pensada: la medida de tos espactos: "En cuanto a los estereotlpos como el pIno en pnmer plano y el Ves UbIO en el fondo, nuestros sarcasmos son mevItables, pero tal vez no haya que ver en ellos solamente un producto de la .cultura de masas': un país empIeza a estar presente en la memona cuando a cada nombre se vIncula una Imagen, que como tal no qluere deC1f nada más que ese nombre. con el lado arbItrano y el lado algo de lo motIvado o mO[jvador que cada nombre lleva conSIgo. Las Torres Inclinadas o las Moles Antonelianas no son nada más que Siglas lcónIcas y sintéticas, emblemas o alegorías. Lo Imporrante es que Slfvan para distlngulf y no para confundir y acharar como el gondolero que canta O sale mIO en un filme de LubItsch" 286

CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

La Imagen o narración de la Cludad es una mezcla de elementos construIdos y casuales. Su fuerza está también en el

hecho de que la CIUdad refleja perfectamente en su Imagen la amblvalenCla entre amor y odio, atracción y repulsión que ella

mIsma genera. U na parre de la dificulrad y de la ambIgüedad de nuestra relación con la CIUdad denva del hecho de que ella representa el carácter estructuralmente no resuelto de los confliCtos de nuestra experienCIa contemporánea. También la lllezcla de presente y pasado que eXlsre en cada CIUdad, mc\uso en la rllás llloderna, fascina e inquieta porque hace referenCIa a la relación que cada uno mantIene con el pasado. ranto el propIO como el colectIVO. Roma. cmdad ererna y cmdad de la hlsrona por definIción, es empleada por Freud COIllO n1etáfora para explicar la persIstencia de lo antIguo en lo moderno. El problema de hacer a la cmdad más bella y atractIva ha SIdo SIempre una consrante en la hlsrona de la cmdad. Dinglda a convertlt la CIudad en un n10numento a sí mIsma, al prínCIpe o a su gente y a transformar la urbs en monumento a la ctVttas, la estrategIa de en1belleCImIento de la CIudad se ha declarado explíCIramente ya a finales del ochOCIentos y ha SIdo dingIda a prodUCIr consenso y a arraer empresas y capItales. El City Beatitiful Movement tenía un doble destmatano: la población de la CIudad y, más aún, los Inversores externos. los encantos de una CIUdad, las hlsronas y las leyendas representan una parte importante de sus aCClOnes de auto-representación. También el naCImIento y la difusión de la posral, el más menospreCIado y extendido 1nstrumento del marketIng urbano, se remonta a la época del Ciry Beautiful Movement. Su gran afirmación se debe a la ExpOSIción InternaCIOnal de París de 1889 y a la Fena Mundial de Chlcago de 1893. La posral es un ejemplo extraordinano de síntesis comun1CatIva dirigIda a rransmlflr el carácrer grandioso y arrÍsrlco de la cmdad (monumentos y monumentalidad), su VIda (las calles llenas de tráfi287

CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD LA CIUDAD POSTMODERNA

co, la V1da nocturna, los paseos), la naturaleza (ongInal o pro-

yectada), los tipOS humanos Y los personajes. A través de las postales cada Cludad intenta dar la Imagen de sí que más le agrada para que cada cual pueda encontrar la lnás adecuada para comunIcar sintétlcamente un tIpO particular de expenenCla urbana. Para el ex[ranjero y el tUrista una Imagen SIntética de la ClU-

dad es mdispensable. dado que le permIte orgamzar de una forma selectiva la percepción y ver la Cludad aLln dispomendo de poco tIempo, de pocos puntos de observación o de pocas aper• turas para entrar en la lógIca de la Cludad. Afirmar que Nueva York es una cmdad frenétIca y cosmopolita, que Los Ángeles es te macular, que San FranCISCO es llena de alegría de vIda Y cosmopolita. que París es una mezcla msuperable de modernIdad Y de hlstona o que es una biblioteca cruzada por el Sena -esre últImo es uno de los tantos estereotlpOS creados por autores destacados, en este casO Walter Ben]affiln- no SIgnifica sólo confirmar lugares comunes SIDO dot;r de herramIentas elementales e Indispensables al visitante para leer y VIVl[ la cmdad. En estas unágenes estereotIpadas se enClerran indicaClones prescriptlvas sobre cómo organIZar el encuentro, la lectura Y el

uso de la cmdad. El hecho de que de cada cmdad. y sobre todo de aquéllas dotadas de ncas bibliografías, eXIstan diversas Imágenes, diferentes por espesor Y época, por estrucruras y contemdos, por públicos de referenCla, por cualidad y com pleJ1dad, por grado de profundización, no cambia el problema. Una Imagen fácil de sínteSIS de París, con función prescnpt1va, es la que Hugo construye tanto en sus novelas CQ1na, de una forma profeslOnalmente explíClta, en la Pans Cuzde, redactada en ocasión de la EXpOSIción Umversal de 1867. Igualmeme Imagen fácil es la banal izada Y rápIda de las peque-

la Ciudad VIve en el llnaglnano colectIVO a rravés de sus ~onumentos -Tour Eiffel y Notre-Dame, la Estatua de la Iberrad , y el Empue State Building- y a través de "naves, t~rres. cupulas, teatros y templos". los que Wordsworth defiOla como los monumentos de lo cotIdiano. , El problema de la reducción de la cmdad a palabras no es teCQ1CO y no afecta s~lo a la habilidad metafónca de qUIen la propone. La redUCClOn es tan 1l1dispensable como difícil porque la cmdad se presta cada vez menos a ser comprendida en su globalidad por sus habitantes. Para éstos, la cmdad no es un laben,Dto como para los extranjeros y los VISItantes, sino que es todav1a un concepto abstracto. La capaCIdad de la,cmdad de proporclOnar una Imagen unItana y slntetlca de 51 mIsma, que evoque algo Importante, es fundamental. Las Imágenes de sínteSIS de una cmdad pueden constrUIrse extendiendo un detennlnado aspecto o una función o convHtlendo en eternas las característlcas de una detern11nada época hlstónca que así se vuelve pennanente. El clilna cultural extraordinano de la Viena de la Secesión se ha convenIdo en SIgno que Identifica a Viena en cuanto cal, con lndep~ndenCIa del hecho de que haga referenCIa a un período hIStonca bIen definIdo. También Karl Kraus puede refenrse a cuahdades caSI naturales de su cmdad escribIendo: "Las calles de Viena están pavimentadas con la cultura, las calles de otras ciudades con macadam". La metáfora que da unIdad a la cmdad comparándola a una mUjer o a una planta o a cualgluer otra IdentIdad es un comprobado recurso retónco que permIte comunlCar, aún a costa de la banalizacÍón, una realidad tan compleja como la cmdad. De aquí los mItos y las categorías, como el napolttano; el bostoniano, la pansIna. 4 _ Los eJemplos de sínteSIS con1unicatIva basada en la capaCIdad de un atributo para connotar a toda la cmdad de ImpreSlOnes, son constantes en toda la histona de la representación

ñas guías a la venta en los aeropuertos. 289 288

LA CIUDAD POSTMODERNA

CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

urbana. Para los antIguos, Atenas y sus habltantes eran veloces mIentras que Esparta y los espartanos, lentos. En L'autre monde o les élals el Emptres de la lune (1650) de Cyrano de Bergerac se describen cIUdades sedentanas y móviles, mIentras que Le ctllá invtsibifi (Las cIUdades 1l1vlsibles) de Italo Calv1l10 es una 1l1superable obra maestra por su descnpción de las cualidades antropomórficas de c1l1dades. En la actualidad, como consecuencia de una mayor atención del sentIdo común y de las más sofisticadas consIgnas de los expertos del markeltng urbano, parece banal definu a Milán COlno dinám1Ca, a París sensual o romántica, -(¿quién haría un VIaje de novIOS a Düsseldorf Praga mágICa, Boston elegante, Estambul mlstenosa, Bolonla opulenta, Nueva York adrenalímca, Viena culta y refinada. Por no hablar de Veneoa ... Estas Imágenes, por descontadas y qUlzás banales que sean, resultan 1l1dispensables para el conoomlento y el control PSICOlÓgICO de la CIUdad tanto por parre de sus habItantes como de los VIsItantes V de los extranjeros. Una vez más es París, verdadera protagonista y no sólo telón de fondo o escenarIO de 1l1numerables relatos urbanos, literarIOS V c1l1ematográficos, el ejemplo de una Imagen urbana con fuertes capacIdades de evocación. Es el París de Carné y Prévert de la cult movte Les enfanls du Paradis. Cuando LemaltreBrasseur encuenr:ra a Garance-Arletty pronullCla las famosas palabras que confieren a la CIUdad el papel de protagonIsta absoluta "Pans est grand, vous savez 1 -Pans es tour peot pour ceux gui s"alment carnme nous ¿'un aussi grand amour !". (¡París es grande, usted lo sabe j ¡París es muy pequeña para aquellos que se aman como nosouos, con un amor tan grande!) En las Imágenes de lo cotIdiano V en las literanas París es una sola, antropomórfica e Identificable. Ella no es sólo la Cludad románnca para los amantes, SIno que -como exaltación del mundo y de sus posibilidades- matena!iza el

n-,

290

desafío permanente para qUIen quiera abrirse call1Ino en la vIda. 1

En espeoal para los que VIenen del campo, París es el sueño y el pasaje obligado para el que qlllera ascender socialmente y encontrar su SItIO. En la Comedia humana de Balzac Rastignac desafía a un París-persona y mIrándola, exactalllent~ como al adversano en un duelo, pronunCla la frase que, pasando de escritor en escntor, ha marcado una época: "A nous deux, Pans" También escntores como Dickens, consIderados realistas por excelencIa, recurren a la ficción de hacer pasar por contempo-

ránea a una cmdad ya VIeJa de algunas décadas para hacer h1l1capié en el estereotIpo. De esta forma se establece una tensión

entre presente V pasado. 6 La gran y verdadera acción de la literatura en la creación de la Imagen de la CIUdad no es sólo la de mventar, relatándolas, a las ciudades que no eXIsten, sino de volver lllágicas a ciudades reales transfigurándolas como, por ejemplo, Breton o Balzac han hecho con París. En ROJO y negro, Stendhal opone a la Besanc;on real una Verrieres ImagInarIa, pero no por ello menos verdadera, que se describe conlO en una guía turístICa. El mISmo París es más el reflejO de los deseos y de los sentImIentos de Julien que de su realidad. . la CIudad, confiando tanta parte de su destino a su Imagen ya la atracción que graoas a ella puede ejercer sobre la gente, tIene que enfrentarse también con el problema de la desilusión. La Imagen puede enfatIzar o mcluso exagerar, pero no puede mentIr u ocultar. En el escenano de la c0111petencia entre las CIUdades en el mercado global, y con unos CIUdadanos que se han vuelto muy parsimoniosos en conceder su consenso, ya 110 es posible proponer el sueño -como el del protagonisra de Sin famitia con respero a París- de una cllldad con árboles de oro, calles con palacIOS de mármol y personas vestIdas de seda, y 291

LA CIUDAD POSTMODERNA

presentar luego una realidad degradada. La desilusión produoría efectos devastadores.

Por lo tanto, la ciudad tiene que actuar contemporáneamente

sobre su propia Imagen y sobre la realidad que dicha Imagen presupone y enfatIza. Se reafirma la reflexión de la Clud~d, la difundida conClenCIa de la cmdad de poder acmar sobre SI mlsnla y su 1ll1agen.

El marketltlg urbano En un contexto de inIensa COlnpetencla urbana en el mercado

global, la Imagen deVIene estratégIca en la lucha para atraer capitales, personas, empresas, y ellmaglnano es un factor deCl-

SIVO para "vender" la cmdad y sus partes. La cmdad debe presentarse SI no como Ideal, por lo menos como la mejor posible para vIvir, para producir, para competir. Con este propóslt~, tiene que seducH, convencer tanto emoclOnalmente como dlscurslvamente: tiene que darse una 1magen plausible y adecuada en

función de un oblenvo de mercado (el papel que la cmdad se propone desarrollar), un obJetIVO sOCIal Ca quién se di~Ige) y tIene que enseñar su pasado y sus potenCIalIdades (con que argu-

CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

SIglo XIX Y en la Cludad de las luces y del placer por excelenc~a. hoy todo esto p:lede y tiene que hacerse en un tiempo brevls,Imo. En la actualIdad, las Imágenes, tanto ¡as tóplCas y esquematIcas creadas por la retótIca cotIdiana para representar en el

uso colectIvo una realidad tan difícil de abarcar, como las complejaS y fascinantes creadas por escntores, p1l1tores y grandes vIaJeros, no se pueden deJar al azar. La Imagen de la clUdad es una vanable que hay que tener baJO control y manIpular en tIempos brevíSImos y por lo tanto lo que antaño se deJaba a VIaJeros y escntores, hoyes confiado a los hombres del marketIng y de los media. El relato sobre la cmdad y de la cmdad adqUIere la lóglCa y la esttuctura narratIva de la publiCIdad. ConSClente de su papel refleXIvo y alcanzada la capaCIdad de dIstanCIarse críticamente de si misma, la CIudad postn10derna busca, como el hombre-actor de Goffinan, el control de la Impresión que produce en los demás. La clUdad, en palabras de] ukes, es tmage-consctous. La ClUdad contemporánea elige actuar sobre los demás a través de su Imagen, consIderada por un lado determ1l1ante y por Otro controlable y manIpulable.

Detrás de las Imágenes de sínteSIS de algunas cmdades hay novelas, poetas, notas de VIaJe, cuadros, postales, películas, peculiandades IdiomátIcas. Algunas cmdades han (en Ido la suerte de encontrar condiClones e Intérpretes para la creaClOn

En el folleto de presentación de la conferenCIa sobre Remakmg Cittes, organIzada en Pittsburgh en 1988 por el Amencan InstItute of ArchItects y por el Royal InstItute of Bntlsh Archltects, se puede leer: "La gente y los negoclOs ya no están relaclOnados a los lugares (. .. ) Los negoclOs y los llldivlduos -cada vez más libres de SItuarse donde y cuando les

de una imagen; otras no la han tenIdo. La casualidad es un lujo que la CIudad contemporánea en lncesante competenCla con las

parezca más Oportul1o- eligen a las CIudades con las mejores características y las mayores ventajas" ?

1nentaClOnes).

demás no puede permmrse. Si antes eran necesarios siglos o décadas para consegulr que VIajeros, trovadores, artistas, embajadores construyeran una," Imagen de CIudad V la enraIzasen en la cultura colectIva, y eran necesanos muchos años para convertH a París en la cap1tal del

La creciente competencia entre las CIudades para atraer a per-

sonas Jurídicas y fíSIcas es uno de los pnnClpales factores de redefinlción de la geografía urbana de los COnt1l1entes. En la actualidad, empresas, capItales y personas están mucho menos

v1l1culados por el espaclO que en el pasado. Se desplazan cada

292 29.3

LA CIUDAD POSTMODERNA

CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

vez con mayor facilidad. atraídos por la convenienCla de los mercados fina~cieros) por las ventajas lofraestructurales, por las

urbana. En aquella época no había reportaJe televislvo sobre la v101encIa y los sLums que no empezase con l1nágenes y entre-

nuevas economías de localización. Factores como la calidad de

vIstas desde Glasgow. La deCIsión. tomada en 1987. de nomlnarla "capItal europea de la cultura" para el 1990. ha marcado el camblO de rumbo. Antes, una InCISIva campaña prOlTIOclOnal dingIda haCla el !Dtenor para devolver la confianza a sus habItantes y después la acción publiCltana dinglda haCla el extenor. El efecto de la campaña ha SIdo sorprendente puesto que Glasgow. tradiclOnalmente vIsta como el ejemplo más trágIco de la profunda cnSIS de la coketown bntánlca. es conSIderada hoy en toda Europa como la cmdad a ImJtar por SUlOnovadara política de recuperación económIca fundamentada en la cultura. La Cludad escocesa es conSiderada generaln1ente como un ejemplo de desarrollo económIco consegUldo a través de polítICas culturales y promoclOnales. En 1990, en Glasgow han teOldo lugar 13.000 aconteClmlentos culturales segUldos por nueve millones de espectadores: había más gente --en su mayoría del lugar- en el concierto de Pavarotti que en los partidos de fútbol del Glasgow Rangers. La nueva Cludad postmoderna confía su notorIedad también a su capaCldad de produClr aconteClmlentos. Ella mIsma tIende

vIda, que hasta hace pocos años parecían secundarios y, de alguna manera, de exclusiva pertenencia Individual, pueden lnfhut

de manera determlDanre en las grandes deClslOnes de relocalización de las empresas.

Las clasificaciOnes de las cmdades no son sólo objeto de cunosldad para los lectores de los domlOlcales de los petiódicos. SlDO cntenos efectIvos para la localización/relocalización de las empresas. Calidad de vIda e ImaglDación se convIerten en tactoteS cruClales de motlvaciÓn.para la venta de la cmdad. Seattle. en el estado de Washington, ha vuelto a entrar en la carrera del desatrollo no sólo graClas a la presenCla de Microsofr y de las grandes empresas vInculadas a ésta. SInO también graClas a

una polínca que a partlt de comIenzos de los años setenta ha promovIdo el desarrollo de las attes Y gtaClas a una lDtensa acción de markenng que ha promovIdo la Imagen de la cmdad coma quality ollife capttal, capItal de la calidad de vIda. En los últimos diez años, Seattle ha consegUldo Imponer la Imagen de "cmdad donde se vIve bIen" también con la ayuda de numerosíslmas películas que la han teOldo como escena y, de hecho. como protagoOls ta . Glasgow ha tomado el mIsmO camlDO logrando salir. a finales de los años ochenra. del atolladero de la Cf1SIS l11dustnal gra(las también a la creación de una Intensa, difundida, y sobre codo, provechosa actIvidad cultural Y a una incesante acción promoclOnal: Glasgow tS miles better ha SIdo una de las consIgnas de mayor éXito de las acciones de marketing urbano en el panorama lnternaclOoal. En los años sesenta y setenta la CIUdad escocesa era consIderada como un ejemplo cláSICO de una cnsls estructural determlDada por el colapso del vIeJo aparato !Ddustnal y por el creClmlentO descontrolado de la V101enCla

a convertIrse en aconteCImIento.

La CIudad-aconteCImiento, se tra-

te de Nueva York. París O Milán. es la Cludad donde los acontecImIentos son lo cotidiano y donde cada cosa y cada cual-la Cludad ffilsma- pueden convertlrse en aconteCllTIlento, La exposIción de Van Gogh en París no es una ocasión cultural, SIno un acontecimIento memorable, y con10 tal hay que celebrarlo, Por esta razón, la exposIción atrae como un imán

lOcluso a las muchas personas que, de paso por Amsterdam. no han entrado nunca en el museo Van Gogh, Sería reducIlvo

tachar de comportamIento lOcoherente o ImItativo el hecho de vIajar de Nápoles a VeneCla para ver la exposICión sobre los 295

294

LA CIUDAD POSTMODERNA CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

¡

r

I

¡

Gnegos montada en el Palazzo Grassl aún no habiendo VISItado nunca el Museo NaCIonal para admirar las colecclOnes de la Magna GreCIa. Lo que atrae no es Van Gogh, SinO el aconterzmzento Van Gogh. no es la exposiCión sobre los Gnegos, S100 el acontecmuento exposición sobre ¿os Griegos en Europa. La Cludad-acontecimIento es la verdadera Cludad-mundo, una cmdad en el centro de los muchÍSImos mundos de los que el mundo contemporáneo está formado. (Cada mundo tlene su centro más o menos contemporáneo: allá donde est~ M~donna se halla el centro del mundo de los jóvenes, las o1!mpladaso el campeonato del Mundo de fútbol constlcuyen el centro del mundo deportivo, la exposición de Vermeer en La Haya o la de Braque en Nueva York desplazan haCIa sí el centro del mundo del arte, ete.) , La Cludad-aconteCImIento es también la puerta a traves de la cual todos pueden acceder al mundo de los medios y de la visibilidad. Para las personas, tomar parte en aconteCIm1entos memorables y visibles en todo el mundo representa ser, de alguna manera, parte del mundo, SUbH al escenano con el aconteClmiento, convertirse ellos m1smos en acontecImiento. La estrategia barroca del espectáculo se trasforma cuando emm en contacto con la polítlca de la visibilidad medlátlca. No sólo el público es, como en los siglos barrocos, parte mtegrante del espectáculo urbano, SinO que ser público en un gran aconteCImiento otorga un status absolutamente pnvüeglado y deseado: el de la visibilidad mediáuca. Se eXiste sólo SI se es visible. Cuando la cámara hace una panorámICa sobre e! público en el medio de un gran conCIerto rock o de un espectáculo en directo, éste se convierte de lnme~lat.o en protagonista: aplaude. se mueve. levanta los brazos. El pu~\¡­ co se conVIerte también en protagonIsta. Es el momento maglco en el que cualquiera se conVIerte en aconteCImiento, se SIente protagonista del mundo mediátlcO. La Cludad-aconteCl-

mIento atrae en cuanto puerta para entrar en los sucesos y, a través de éstos. en el mundo de la Visibilidad.

Empeñada en el terreno de! marketing, de lagentrificación y de las rransfonnaclOnes urbanas, la CIudad vuelve a encontrar

su propia reflexIvidad y la capacidad de transformarse. La CIUdad nueva pOstmoderna puede actuar sobre sí 1111sma sólo organIzando Su oferta en relación a la nueva demanda de ciudad. Es necesano, para vencer a la competenCIa, que la CIudad

adqUiera las características deseadas por e! "mercado" (habitantes, tunstas, empresanos, etc.), Hay que convencer para seducH y atraer a la gente, hacer que se quede, que vuelva. Atlanta en Georgla es el clásiCO ejemplo de Una CIUdad cuya Imagen se ha construido sobre "casI nada" y ha SIdo obtenIda mediante una sabia acción de IngenIería mediátIca. La carenCIa de un Sustrato -natural o hIstórico_ sobre el cual constrUIr la Imagen ha quedado eVIdente ya desde el con11enzo de las acciones de autorrepresentación de la Cludad, que acentua-

ban el alma más que el lugar: "The Adama Sptrlt", el espíl'ltu de Atlanta. La CIudad no tenia práctIcan1ente pasado, si exceptuamos

aquél, en buena medida ll1Ventado y fictlclO, de la guerra de secesión filtrado y mediatlzado por Lo que el vmeto se llevó (uno de los pocos lnonun1entos de la nUeva Atlanta es uThe Dump"¡ la casa, por SUpuesto reconstruIda, donde se dice que la

Mitchell esctibló la conoCida novela). En la competenCIa ll1ternaclOnal para la adjudicación de los

Juegos OlímpiCOS de 1996, se presentó a Atlanta como la próXIma CIudad-mundo, Una world dass ez!y, el nuevo modelo de CIudad InternacIOnaL En pruner fugar era necesano crear una Imagen de la Ciudad y del aCOntecln1Iento capaz de atraer los

capitales y los promotores -se trataba de unos Juegos que se tenían que finanCIar COn dinero privado- y en un segundo momento se trataba de crear la escenografía urbana de los Jue-

296 2')7

LA CIUDAD POSTMODERNA

gas para dejar un recuerdo "pOSitIVO Y útil" en turistas, tantes y, más aún, espectadores televisivos. 8

CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

VISI-

Atlanta ya estaba aCO"stumbrada a este tIpO de aCClOnes de marketwg. Un personaje ya famoso en la crómca, SI no se qUIere deClr en la h1stona reClente de la cmdad, es Joel Babb1t, director del marketwg y de las comun1caClOnes de la cmdad entre 1991 y 1993. Babb1t -cuyo nombre, Igual al del conoCldo personaje de SinclaH Lew1s, es una extraordinana y burlesca cowCldenCla- es famoso para haber wtentado vender todo lo vendible y promoclOnar todo lo promoclOnable. "N osorros tenemos, como la mayor parte de las cmdades, miles de bIenes que no producen nada y que por el contrano se pueden transformar en recursos capaces de generar beneficlOs. Por eJemplo, no sacamos nI un duro del hecho de llamar Piedmont Park al mayor parque de la cmdad" , ¿Por qué entonces, se ha preguntado Babb1t, no llamar a la avenIda pnnC1pal Coca-Cola Bulevard en lugar del banal Board Srreet ' Pertenecen al período de Babb1t conSIgnas como Atlanta: Home ofthe Amerzcan Dream y Atlanta: What the World is Comzng To. (Atlanta: casa del sueño amencano, Y Atlanta: a lo que el mundo está llegando.) Probablemente menos realizables, pero

por el príncipe del momento como artIculación de la relación entre el CIudadano y la hIstOrIa. Cada vez más, con una estrategIa definIda "de la apariencia" se tIende a crear una ciudad 11naginaria que preceda, esté por enClma y se adhIera a la cllldad real y matenal. Se trata de crear

o va lanzar el capital-Imagen de una cmdad. Con esta lógICa, el pnmer obJetlvo es crear una cllldad que sea, antes de todo, Imag111able. Para establecer una relación seductora fuerte y estable entre ésta y la gente es necesarlO que la cmdad posea la cualidad de la representabilidad que según Freud es uno de los componentes báslCos del sueño. En estas Imágenes las tenslOnes y las incoherencIas tIenen que mInImIzarse, a menos que no se quiera subrayar la CIudad de los

contrastes. La clUdad real que VIve de la rensión entre los polos de lo pnvado y de lo público, de las paradas y del tránsito, de lo convergente y de lo divergente, del presente y del pasado, de lo funclOnal y de lo accesono, de lo vago y de lo preClso, desaparece. De la polifonía y fragmentación de la cllldad Contemporánea, no coordinada ni homogénea, surge y reaparece una CIUdad todavía fragmentada pero capaz de ser aprendida y comprendida. Así ésta puede llegar a ser expenmentable mediante

19ualn1ente sugerentes han SIdo otras Ideas suyas como l,a de

la únIca clave interpretativa proporclOnada por la imagen.

un globo de una milla de ancho en órbIta alrededor de la TIerra con los símbolos de las grandes corporaclOnes.

En el esfuerzo de sedUCIr cada clUdad se conVIerte, potenCIalmente, en una cllldad turístICa. Los espaClOS de la cmdad se pro-

Las estrategIas de la aparIenCIa

para los habItantes, lugares de OClO y de evasión. Todo en tendenCla se conVIerte en tunsmo y todos pueden ser tunstas en su propIa clUdad. El centro se conV1erre en meta del vIaje y de la mU"ada turística también para los que VIven en la perifena. El obJetlvo es el de hacer de cada cmdadano un tunsta en su propIa cmdad, proporCIOnando a todos la necesana tourtst gaze, la mirada turístICa. 10

yectan cada vez más a menudo como lugares tUrístICOS también

Urbanlsmo y comunIcación tienden a fundirse, cada transfor¡nación urbana capaz de aSUll11r un (lerto SIgnificado vendible

es enfatIzada y la wauguración de sectores prestlglOsos de la CIudad se conVIerte en un acontecimIento mediátlCo. Vuelve, puesta a punto y controlada, la estrategia típICa, aunque n~ exclUSIvamente barroca, de la in1agen de la ciudad construIda 298

Los creCIentes flujos del tunsmo aumentan el carácter lnter-

oaclOnal y cosmopolita de la cmdad nueva postmoderna. Al m1S299

LA CIUDAD POSTMODERNA

mo tiempo, el habitante tIene la sensación de que su espaclO condiano le ha sido sustraído y que los nuevos actores -los tUrlstas- le disputan su uso como tropas de ocupación. Vender la cIUdad conlleva el vender muchas cIUdades distintas a públicos diferentes. Una es la cIUdad que hay que vender a los empresarlOs, otra a los 1ntelectuales y a los investigadores, y otra aún a los habltantes. Las vle¡as estrateglas ya no son sufiCIentes: la 1magen representada a menudo no es coherente con los objetlvos de la cIUdad, con el pape! que ella mtenra desarrollar, con e! secror de mercado que se propone cubrn, con e! blanco al que se dinge. No se puede esperar que cuentos de viajeros, imágenes de pintores, descnpciones de literatos creen con los tiempos largos de la 111Stona lmágenes conV1ncentes y adecuadas. La Cludad, reflexivamente consciente de sí mlsma, tiene que produClr y hacer clrcular las imágenes de sí mIsma a través de las cuales tiene que exista y competIr en el universo mediátlco. Hace falta, además, construH imágenes eficaces en una realidad ya saturada de estímulos. de slgnos y de Imágenes. Para destacar en el rUIdo del universo mediático la comunlcación urbana también nene que ser ruidosa y emplear los códigos más difundidos. Las lmágenes se llevan al extremo, el lenguaje es exagerado, los modelos hacen referenCla al mundo de la publiCldad y de los media. ¿y por qué no utilizar la publiCldad para promoclOnar las Ciudades puesto que una reClente encuesta realizada entre los jóvenes de once países ha revelado que mlentras sólo e! 40% de los entrev1Stados conocía el símbolo de las NaclOnes UOldas, el de la Coca Cola resultaba familiar al 80%? Destinatarios de Imágenes a través de las cuales VIVlf la CIUdad son, en pnmer lugar, los habltantes. La lmagen, en efecto, es cruClal para construlr el proyecto de la cmdad futura y mOVllizar las energías y el consenso de los cmdadanos. En Italia es ejemplar el caso de Nápoles. donde en los últlmOs dos años los 300

CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

Indicadores económ1Cos y sociales lnás ImpOrtantes no han cambiado nI en una déCIma, y SIn embargo en los habitantes ha madurado la convIcción de VIVir una época de extraordinario renaCimIento para su ciudad: el llamado RenaCimiento

Napolitano. En la población ha vuelto e! orgullo de ser napolItanos graCIas a la extraordinana capaCidad de la unagen para movilizar las emOCIOnes y restablecer nuevas relaclOnes POSI-

tivas entre la población y el espacio urbano. Los destmatanos de las lmágenes promoclOnales de la ClUdad son una población vanada. formada por empresarlOs y managers, POlítICOS, perIOdistas, tunstas e Intelectuales. A este público heterogéneo, a menudo portador de culturas y códigos de comunICación diferentes y en contraste entre sí, la CIU-

dad nene que comUOlcar lo que es y lo que puede ofrecer. Tiene que enseñar su constancia, sus propias raíces y el cambio. Las estrategIas pueden ser distintas: en un extremo se encuentran

los moderntstes. que apuntan a la competenCla, a la modernldad, al dinamlsmo, a la mternaclOnalidad y al espíntu empresanal; en el otro los patrzJJZonzales, que enfatIzan los monumentos, las culturas locales, las tradicIOnes y los valores paIsajístICOS.

11

Se juega en el doble plano de la necesldad de ldenudad por parte de los habltantes y de la demanda de prestaclOnes específicas. El pasado, tradiclOnal repertono de lmágenes, es retornado, elaborado y actualizado para estar a la altura del unlverso mediático y de los destInatarIOS. Sin embargo, se corre

el nesgo de que las peculiandades de las CIUdades desaparezcan, puestas entre las manos profeslOnales de los hombres de la publiCldad. Una tendenCla mqUletante es representada no tanto por e! hecho de que el trazo experto de! diseñador sustItuya a los vieJOS escudos munICIpales, cuanto por la crecien-

te homologación a los modelos comerClales consolidados y que, por lo tanto, el nuevo símbolo de la cmdad de Nimes se parezca de forma lmpreslOnante al de Lacoste.

lOl

LA CIUDAD POSTMODERNA

Generalidad y especificIdad son mezcladas sabiamente por los expertos de marketmg y de comumcación publiCltana. En progresión, la Imagen mediátIca adqUiere una autonomía propia con respeto a la ciudad real, vivIda y concreta y constItuye el modelo de referenCla, tanto de la acción proyectual sobre la cmdad como del crIteno de IU1C10 de los habItantes. El estilo de vIda Interpretado como síntesIs del Impulso al camblO y a la permanenCla entra en Juego cada vez más como

uno de los factores constItuyentes de la Imagen. La acción de recreación de la h,stona, llevada a cabo según los modelos pre_" concebIdos y dorados de gran poder evocatlvo graClas a los SIStemas de códigos consolidados y compartIdos por el mercado, no se limIta a reproduClr épocas lejanas y consolidadas. En la Cludad nueva postmoderna es frecuente la creación de una Imagen que resuma, enfatIzados y mitificados, los rasgos esencia-

les y "distmtIvos" de la cmdad en su contemporaneIdad. Las campañas para vender Nueva York o París proponen Imágenes y modelos de los que son generalmente consIderados períodos áureos de la cmdad. Los años de entreguerras se han asumIdo como época dorada de Nueva York en las aCClones de promoción de la nueva urbamzación de Battery Park, realizada en el terreno ganado al mar, del World Trade Center. La Belle Époque es, desde SIempre, la Imagen adecuada para vender París. También la luz entra como mgrediente en la Imagen -según la difundida lóglCa de la gastronomía del oJo- y las llamas de las farolas de Beacon Hill o del Marals "ayudan" el tLlnsta a entrar en el espíntu del lugar y a quedar fascmado. La cmdad se vende también como recuerdo y gadget. Londres ha SIdo la pnmera en vender COpiaS de las placas de sus calles, luego han llegado Nueva York y París. Todas las cmdades, dotadas de Imágenes consolidadas o "de culto" han comerClalizado, con resultados diferentes, objetos capaces de reflejar dicha Imagen. Provlmendo de partes o lugares de la cmdad que se consl302

CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

deran míticos, los recuerdos han adquirido su aura; también 10

Cotldiano urbano puede beneficIarse de los efectos de la Imagen y convemrse en reliqUia. En la Grand Central Termmal de Nueva York -la mayor de las estaclOnes ferrovlanas de la cmdad- se ha abIerto una rIenda --el TranSlt Museum Gift Shop- que vende todo tlpO de objetos que recuerdan al famoso merro de Nueva York: ge,melos hechos con fichas de VIaJe, relOjes que en lugar de los numeros llevan los símbolos de las líneas más famosas. Los Angeles: el market1l1g a u'avés de un siglo Los Angeles es un ejemplo eficaz de cómo se puede constrUir, reflexIvamente y de una forma acelerada, la Imagen de una cmdad en el marco de una estrategia global de marketzng urbano, desarrollada a partIr de la Identificación de la característlca de la demanda y de la pn:disposlCión de una oferta adecuada sobre esta base. Hoy, Los Angeles es una de las prmClpales cmdades del planeta y es conSIderada como la heredera de París, Londres y Nueva York, como metáfora práctlCa de la sOCledad de nuestro tlempo. En el documento del Los Angeles 2000 Comm1ttee, redactado en 1988, el plan para el Los Angeles del 2000 es presentado como ellllstrumenro para convertir a la metrópolis califormana en una cmdad mundo, world crossroads aty, y permIta a sus CIudadanos realizar su sueño, el Los Angeles dream, conSIderado como una vanante específica y progreSIva del Amerzcan dream. Y, S111 embargo, hace tan sólo un SIglo Los Angeles no tenía nada que pudiese hacer pensar en un gran desarrollo, pues[Q

que los puertos Importantes de CalifornIa se encontraban

en San Diego al sur y en San FranCiSCO en el norte. El market11lg urbano ha hecho posible lo que las condiclOnes geográficas y la~ dirección del con1erclO parecían excluH.

Los Angeles ha SIdo objeto de la más larga -ha durado alrededor de un SIglo-- e Incesante can1paña publiCItana de la hlstona.

3D)

LA CIUDAD POSTMODERNA

CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

En 1890, cuando se creó la Cámara de C01nerClO, comenzó una masIva acción pron1oclOnal dirigIda a consrfLUf la llnagen de la CiUdad con el mejor clima del mundo, una espeCle de tierra goetbJana donde no florece el limón, sino el naranJo. Puesto que, (0010 escribió un perIodista en 1891, "SI se hace colgar una naranJa dorada delante de los oJos de un bombre del Norre, se le puede llevar a cualqlller parte", en los Ángeles se montaron fenas de CÍ[f1COS que se envIaban a rodos los Estados UnIdos, empezando por ChlcagO. En 1893, en la Fena mundial de ChICago, Los Ángeles montó, con centenares de millares de naranjas -casi medio millón- la Orange Tower, una espeCle de Columna Trapna de naranjas. un gIgantesco lnapalllundi y una enonne can1pana, todos de naranjas. Prensas espeCializadas, exposlClOnes ItIneranres, libros crearon el mIto de la tIerra del sol: "The Land 01 Sunshine: Soztthern Caiilornta" Los periódicos de finales del sIglo XIX hablaron de una mIgración maSIva de los fríos esrados del Norte y del Este haCIa CalifornIa, una espeCle de nueva carrera del oro que transformó una pequeña cIudad en la que llegaría a ser la gran nlegalópolis de la cosra oeste.

en la Feria de Taranta de 1930. El estane! promOCIOna I e1e Los Anueles b d '0'1) de marketlOg urbano durante caSI un sIglo ha conve,rtl o a U I na aec _ I .' lts Una - cIuclad agrícola calitof111ana en una accua megapo . una pequeoa de las cmdades-mundo por excelenCIa.

")04

La imagen de Los Ángeles precedía a la cIudad mIsnla. Los promotores lnmobilianos, los hombres de negoclOS, los polítICOS y lnás aún la C,:1mara de ConlercIO actuaban con inteligenCIa y tempestivIdad interpretando -en la mejor lógIca del markeung urbano- deseos y mIedos de la gente. Por eJemplo, cuando en 1906 San FranCISCo fue destrUlda por el [erremoto, la acción promocIOnal de Los Ángeles se ennqueció con referenCIas a la segundad geológIca de la CalifornIa mendionaL En 1910 se rodó la pnmera película. Las Imágenes transnlICldas por los media eran las del paraíso terrestre: si las grandes Cludades del Este eran corruptas, frías, Impersonales y duras, Los Ángeles era presentada como amable y cálida. "Un paraíso terrestre de masas para millones de

LA CIUDAD POSTMODERNA CONSTRUIR LA IMAGEN DE LA CIUDAD

Adanes y Evas con su casa unifamiliar." 12 La Imagen de la famIlia de los nuevos plOneros, rodeados por una naturaleza nada hostil smo más bIen amIga, y por unos vecmos sonnenres, de una Cludad donde el Jardín de casa y el clima allanan las diferenClas sOClales, conqLllstó en pocos años a los Estados UnIdos. Vivlf en Los Ángeles era en aquel momento como VIVIr en un sueño, medio sIglo después se convertltía en una pesadilla. El sueño amencano de la casa aIslada y de! jardín requería espaClOS enormes. y con ellos, apenas la mdustna y la tecnología lo hlCleron posible, una difusión S111 precedenres del automóvil.. El Jardín de! Edén de la era mdustrlal que se encammaba haCla el consumo de masas tenía también petróleo en el subsuelo. La polución 111vadió el paraíso y los más ncos conslgUleron eVItarla refugiándose en las colinas, donde los menos favorecidos no pudieron llegar. La Better City o e! Earthly Paradise se convlttió en una megalópolis que para sobrevlvlt se transformó en lo contrano de su proplO sueño. Los Ángeles se ha convemdo así en el más extraordinano [o!!age de sueños y mIedos. de realidades, de mItos y etmas nunca realizado en la hlStona del hombre:

NOTAS 1

Cir. en J. Roudaut, Les Vi/les lInagmatl'es dans la literature franccme, París

Ha'ler. 1990, p. 32.

-

6 F.S, SChwarzbach, Difkem and the City, Londres, The Achlone PressUDlversIty ofLondon, 1979.

"una World City compleJa y cosmopolica como cualqUIer otra cIudad del pasado, una cmdad en la que era posible encontrar práct1camente todo a condición de saberlo buscar, una cmdad que VIerte basura en el aIre en plena libertad, así como lo había hecho Manchester con los ríos, una cIUdad de edifiClOS salvajes, maravillosos, banales, una cIudad de s!ums hecha de bungalows en ¡ardines cubiertos de basura, una (lUdad meXIcana, una cIUdad negra, una cIUdad japonesa, una cIUdad de pozos de petróleo y de galerías de arce, de sur! y de atardeceres, de palmeras y de PepsI-Cola, la Cludad de

Philip Marlawe y de Charlie Chaplin. de Mickey Mause y de Frank Lloyd W nght, una Cludad de exCéntflCOs, profesores, gangsters, gurús, millonaflos, bella gente ordinaria. una Jerusalén fallida, una BabilOnIa de bala densIdad" li

.

R. Ferras, V¡ffe-jJaraÍfre, étre J IJart, Mompellier, Reclus, 1990, p. 95. . 1. CalvlllO, La atta /Jensata; la IlZtmra degli sjJazl, en; CoffeZtone di saMia, Ml1~no, Garzantt, 1.~84, luego en; Saggt, vol r, Milán, Mondadon, 1995, p. 518, tL casto Coleccton de arena, Madrid, Siruela, 1998, p. 131. 4 Sobre la Imagen de París que toma literalmente cuerpo en el mIto de sus mU1eres, véase; M. Nesbit, In the absenee ofthe jJarisienne.." en; B. Colom111a (ed.) Sexuality & Spaee, Pnncetoll, Pnnceton Papers on Architecture, 1992, PP'. 307-32~5. TLcat.; Sexuafitat t espat, Barcelona, EdiCIOnes UPC, 1998. , El Pans del ochoClemos se transforma en el imagmano COlectIvo, bala e~ ..doble Impulso de la revolución romántICa y de la urbanIzación, COnVli"rIen~ose en persona: "Las calles de París tienen cualidades humanas y con su fISIOnomía graban en nosotros ciertas ideas de tas cuales no podemos defendernos ... Por 10 tanto L .. ) hay en París algunas calles tan deshonradas como puede serlo un hombre culpable de lOfamIa; y eXIsten calles nobles, y calles sImplemente honradas, y jóvenes calles sobre cuya moralidad el público todavía no se ha pronunCIado; hay calles aseslOas, calles más VIe1as de lo vIeJa.que pueda estat una vIe1a madre noble, calles estImables, calles sIempre lImpIas, calles SIempre SUCIas, calles obreras, calles trabajadoras mer, cantiles." (Balzac, Ferraglts, 1833)

! Cit. en: M.e. Boyer, The Great Frame-tip, Fantasfte Appearances In Conternporary Spattal POfÚlCS, en: H, Liggett, D.e. Perry (ed.), Spattal P1'aetlees, Londres, Sage, 1995, p. 87.

~ e. Rurhelser, lmagmeermg Atlanta- the politm of /JIace ams, Londres-Nueva York, Verso, 1996. 9

In

the elty of dre-

M.e. Boyer, CyberCitm. Nueva York, Pnnceton Architectural Press

1996, p. 148.

.

J.

Urry, The Yo;,trlst Gaze, Londres. Sage, 1990. 11 A. Mons, Imagerte Urbaine. une symbofique diffide, "Les Annales de la Recherche Urbame" 42, 1989, p. 38, 12 D. Girouard, CitteS & Peo/JIe, New Haven, Yale Unlverslty Press 1985 p.370. . , , 11)

" Ibídem. p, 375.

'106

307

;:

,';"

¡

xv.

LOS EXCLUIDOS DEL SUEÑO Y LA CIUDAD BLINDADA

Los lugares del sueño y del encantamIento no son, obvIamente, toda la clUdad pero nenen la fuerza creCIente de proponerse como la clUdad mejor, la clUdad de las posibilidades y del deseo. Aliado de la clUdad en la cual cada uno desea aunque sea por poco tIempo zambullirse, está la clUdad real. Aquella que la tradición Vlctonana definía como la "otra cIUdad", escondida pero real, está siempre presente, aun cuando no sea ViSIble, Yamenaza a la de los sueños. Si no eX1stIese la segunda CIUdad, por otra parte, la CIUdad recreada y optImIzada no tendría razón de eXlstlt. La nueva CIUdad dellmagInano y de las Imágenes se sItúa aliado de la real frecuentemente desagradable. La CIUdad del deseo estratifica y clasifica de manera nueva, pero no por esto menos contundente que en el pasado. Si los Impulsos fundamentales son los de la tendenCIa a satIsfacer el deseo y la adqUIsIción de status, la CIudad nueva postmoderna organIza y jerarquiza espacIOS y poblacIOnes en relación a su capacIdad/posibilidad de satIsfacer los deseos. Si la tendencIa es en dirección del encantalnlento y la creación de sueños expenmentables, el crlteno de estratificación está dado, en consecuenCIa, por la posibilidad de acceso a los mundos encantados de la CIUdad nueva. Las (radiclOnales categorías neomarXIanas de r.efebvre son ampliadas con las Interrogantes no sólo sobre quién controla 309

LA CIUDAD POSTMODERNA

la cmdad y quién ha sIdo expropiado por la propia cmelad smo mcluso quién se ha apoderado de las Imágenes de la cmdad y de los medios para prodUClrla, quién es capaz de crear los sueños y de ViVIrlOS Y quién en cambio no lo es. La cmdad se ha orgamzado sIempre en partes y ha hecho de la accesibilidad a estas partes un cnteno, SI no absorbente, al menos fuerte, de selección y de discnmmaCÍón. En la sOCledad marcada y estratificada sobre la base de la exclusión, devIene central y cruClalla posibilidad de acceder a otrOS espaClos donde se crean los sueños y la experiencia del Imaglnano urbano. De la pareja explotados Y explotadores se ha pasado a la de mclUldos y exclUldos: "hemos pasado de una sOCledad integrada construIda sobre la oposlción entre dominantes y domInados a una SOCledad marcada por la distanCla entre los que están dentro y los que están fuera, una sOCledad defimda por sus fronteras" -- ta residenCia en la Ciudad pertenece ya a los vértices opuestos por la escala soctal: por una parte, las nuevas clases SOClales pudientes, portadoras de un estilo de vIda VIStoSO y demostratIVO y consumidores voraces e infatigables de bIenes, valores, modas; por otra, los have not, "los que no tlenen", los e.1'
View more...

Comments

Copyright ©2017 KUPDF Inc.
SUPPORT KUPDF