Abrir Los Ojos

 

Octubre 2011

Por eso les hablo en parábolas; porque viendo no ven, y oyendo no oyen ni entienden. Y  en ellos se cumple la profecía de Isaías que dice: "AL OIR OIREIS, Y NO ENTENDEREIS;  Y VIENDO VEREIS, Y NO PERCIBIREIS; PORQUE EL CORAZON DE ESTE PUEBLO SE  HA VUELTO INSENSIBLE Y CON DIFICULTAD OYEN CON SUS OIDOS; Y SUS OJOS HAN  CERRADO, NO SEA QUE VEAN CON LOS OJOS, Y OIGAN CON LOS OIDOS, Y  ENTIENDAN CON EL CORAZON, Y SE CONVIERTAN, Y YO LOS SANE." ((Mateo Mateo 13:13-15  LBLA)  

Es impresionante la cita anterior; quizá difícil de comprender con la menta natural, aunque por el espíritu si Dios derrama Su unción, podemos ver qué es lo que está escrito a profundidad. Esta es la cita siguiente cuando Jesús expone la parábola del sembrador y cuando los que lo escuchaba no comprendieron; Sus discípulos le preguntan su significado porque tampoco ellos habían comprendido. Sin embargo, lo que ellos habían percibido, fue también la respuesta de Jesús: para que no todos comprendieran, porque si lo comprendían, Jesús los tendría que sanar. Pero entonces, dentro de todo lo que El expone; podemos ver 5 puntos específicos que vienen a representar los 5 ministerios; así como hemos recibido tanta enseñanza que la Biblia nos muestra, por ejemplo: los 5 vinos, las 5 alas, los 5 elementos labrados a martillo y muchos más; todos ellos son figura de los 5 ministerios descritos en Efesios 4:11; eso significa que todo lo que Dios permite que podamos comprender; será ministrado por cada uno de los 5 diferentes ministerios.  

(Antiguamente en Israel, cuando uno iba a consultar a Dios, decía: Venid, vamos al  vidente; porque al que hoy se le llama profeta, antes se le llamaba vidente.) (1 Samuel  9:9 LBLA)    Un vidente es alguien que puede ver en términos generales; pero cuando la Biblia se refiere a un vidente, no se refería a una persona que ve con los ojos naturales; esto se refiere a la visión que no todos pueden percibir; por eso vimos en la l a cita inicial, que aunque muchos veían, no podía ver; porque podía ver con sus ojos naturales pero no con la visión espiritual.  

Sin profecía el pueblo se desenfrena; mas el que guarda la ley es bienaventurado.

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(Proverbios 29:18 RV 1960)    Podemos notar que la profecía es muy necesaria para que el pueblo no se desvíe de camino.  

Donde no hay visión, el pueblo se desenfrena, pero bienaventurado es el que guarda la  ley. (Proverbios 29:18 LBLA)    Entonces la ministración a los ojos, es sumamente necesaria a través del ministerio profético; el problema hoy día es que muchos no saben cómo probar a los verdaderos profetas; es más, algunos que se dicen ser profetas, no saben cuál es el trabajo que deben desempeñar en la obra de Dios y son engañados con lo que creen que deben hacer; pero no son engañados ellos solamente, sino que con aquello que creen que deben hacer, pretenden engañar a los que tienen cerca, porque lamentablemente se ha convertido en un acto de moda el hecho que un profeta diga o haga actos que muchas veces no son de Dios; buscando capturar la atención del pueblo de Dios pero solamente con el propósito de beneficiarse en lo personal.   La función del ministerio profético, no es tanto de profetizarle a la gente o declararle las visiones él que ha tenido; sino que parte de su trabajo es abrirle los ojos espirituales a los demás y que puedan ver aquello que no se ve con los ojos naturales. Es por eso que en esa oportunidad, veremos algunos personajes personajes a los que les fueron abiertos los ojos espirituales y que de alguna manera nosotros podamos buscar que nuestros ojos espirituales sean abiertos y ver aquellos que Dios desea que veamos.  

Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y conocieron que estaban desnudos; y  cosieron hojas de higuera y se hicieron delantales. (Génesis 3:7 LBLA)    En lo espiritual, a veces nos encontramos con gente que está desnuda pero no lo pueden percibir; es ahí donde entra el trabajo profético porque este tipo t ipo de personas necesitan que les sean abiertos los ojos para que vean cuál es su condición, y para eso es que Dios le ha dejado, como parte de las funciones de profetas; abrir los ojos espirituales y que la gente vea su condición y entonces buscar cobertura. El problema es que a veces algunos profetas, se convierten en profetas ambulantes ofreciendo sus servicios y su cobertura, con el propósito de beneficiarse en lo económico; cuando la verdadera cobertura que se debe buscar es del ministerio quíntuple: Apóstoles, Profetas, Evangelistas, Pastores y Maestros.

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Entonces Dios abrió los ojos de ella, y vio un pozo de agua; y fue y llenó ll enó el odre de agua  y dio de beber al muchacho. (Génesis 21:19 LBLA)    El hecho de abrir los ojos es consecuencia de la ministración profética como ya lo mencionamos; de tal manera que al final de la historia que nos refiere la cita anterior; podemos ver que los problemas que se dieron lugar ante los enfrentamientos del hijo de la promesa, Isaac y el hijo que Abraham tuvo con Agar, Ismael; fueron tantos que hubo un momento en el que Agar fue echada del campamento de Abraham y pasado el tiempo en el desierto, se le terminó la provisión, y entonces Agar dispuso morir ella y su hijo; pero antes que ella procediera con el proceso de morir; Dios le abre sus ojos para que viera la solución de su problema. Esto lo que nos enseña entonces es que no se trata tanto que el profeta llegue a decirnos qué es lo que debemos hacer, aunque también se puede dar; pero más que eso; el trabajo ministerial es abrirle los ojos espirituales al pueblo de Dios para que vean la solución a los problemas; porque cuando Dios permite la prueba en nuestra vida, también nos provee de la salida a los problemas que vamos enfrentar; además debemos recordar recordar que Dios nos permitirá una prueba mayor de la que podamos sobrellevar.  

Eliseo entonces oró, y dijo: Oh SEÑOR, te ruego que abras sus ojos para que vea. Y el  SEÑOR abrió los ojos del criado, y miró, y he aquí que el monte estaba lleno de caballos  y carros de fuego alrededor de Eliseo. (2 Reyes 6:17 LBLA)    Giezi, el criado de Eliseo no era ciego en lo natural; los ojos que necesitaba que le fueran abiertos eran sus ojos espirituales y que pudiera ver la ayuda de Dios sobre sus vidas; esa es la ministración que los profetas deben trasladar al pueblo de Dios para que veamos Su mano de protección sobre nuestra vida. Lamentablemente muchos cristianos viven sumidos en medio del miedo porque sus ojos espirituales no les han sido abiertos; es ese tipo de personas los que necesitan que sus ojos les sean abiertos y romper las cadenas de miedo, angustia, etc., y no cederle espacio al enemigo de nuestra alma.  

Entonces Ananías se dirigió a él, a la casa, y habiendo impuesto las manos sobre él, le  dijo: Saulo, hermano mío, nuestro Señor Jesús, que se te apareció en el camino cuando  venías, me ha enviado para que te sean abiertos los ojos y seas lleno del espíritu santo. (Hechos 9:17 NT "Peshitta")   

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No se trata de desacreditar los actos proféticos de los l os verdaderos profetas; sino que debemos pedirle a Dios un espíritu de discernimiento para poder saber qué profeta es verdadero y quién no lo es; porque cuando Dios levanta un ministerio profético no es para hacerlo famoso como lo hace el mundo, sino que es para impartir su don dentro de pueblo y que los ojos espirituales puedan ser abiertos y que de esa forma todos podamos caminar bajo una misma visión espiritual poniendo nuestros ojos en nuestro Señor Jesucristo.

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