(40) Manero Brito Introduccion Al Analisis Institucional
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Introduccion al analisis institucional...
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I nt r o d uc c i ó na l a ná l i s i s i ns t i t uc i o na l Roberto Manero Brito
%1 prop(sito de este tra-ajo es reunir los principios del psicoan)lisis y confirmarlos* como si de dogmas se tratara* en una forma lo m)s concisa concisa posi-le posi-le y expuestos expuestos en los términos m)s inequ&voco inequ&vocos... s... !as ense/an0as del psicoan)lisis est)n -asadas en un n,mero incalcula-le de o-servaciones y experiencia y s(lo aquél que a repetido estas o-serv o-servacio aciones nes en s& mismo mismo y en los dem)s dem)s est) est) en posici(n posici(n de alcan0ar un juicio personal so-re ellas. 2
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Tu as fait de douloureux et de joyeux voyages Avant Avant de t'apercevoir du mesonge et de l'age Tu as souffert de l'amour a vingt et a trete ans J'ai vécu comme un fou el j'ai perdu mon temps Tu n'oses plus regarder tes mains el a tous moments je voudrais sangloter Sur toi sur celle que j'aime sur tout ce qui t'a épouvante1. AP!!"#A"$%.
%ste art&culo me a sido encomendado como una primera introducci(n al campo conceptual del An)lisis "nstitucional* en el marco de una formaci(n universitaria para la licenciatura en Psicolog&a. +omo todo esquema* esto es en realidad una falsificaci(n del campo conceptual* en la medida en la que m,ltiples m,ltiples pro-lem)tica pro-lem)ticas* s* de car)cter car)cter te(rico te(rico y sociopol&ti sociopol&tico* co* se encuentran encuentran de antemano antemano descartada descartadas. s. alsifica alsificaci(n ci(n tam-ién* tam-ién* puesto que la forma misma del escrito* escrito* la implicació implicación n en la
Doctor Doctor en Cienci Ciencias as de la Educac Educación ión.. Profes Profesor or de la Univer Universid sidad ad Autónoma Metropolitana - Xochimilco
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escritura* traiciona en s& misma las ense/an0as y los procedimientos propios del An)lisis "nstitucional. e aqu& pues* un escrito fuertemente pro-lem)tico. S(lo quisiera decir* a mi descaro* aquellas mismas pala-ras con que reud inicia su inicia su Compendio del Psicoanálisis:
Tú has hecho dolorosos y felices viajes/Antes de darte cuenta de la mentira y de la edad/ Tu has sufrido el amor a los veinte y a los treinta años/ Yo he vivido como loco y he perdido mi tiempo/ Tu no osas más mirar tus manos y en todo momento/yo quisiera sollozar/o!re ti so!re la que amo so!re todo lo que te ha horrorizado"
Pronto veremos que este 3descargo4 puede estar planteado en términos -astante vanos e imprecisos* en términos términos del An)lisis "nstitucional. "nstitucional. %l pro-lema de la ense/an0a ense/an0a del An)lisis An)lisis "nstitucional "nstitucional es -astante -astante complejo* y a dado lugar a intermina-les discusiones* conflictos y escisiones en el movimiento institucionalista francés. !a imposi-ilidad de comunicar el An)lisis "nstitucional a través de los canales m)s o menos tradicionales 5c)tedra* conferencias* etcétera.6* a dado lugar a las m)s m)s divers diversas as posici posicione ones* s* desde desde la postur posturaa de que el An)li An)lisis sis "nstitucional no se puede ense/ar* asta experimentaciones diversas* pasando por el entrenamiento a la intervenci(n* las exposiciones de perspectivas te(ricas* etcétera. %n una comunicaci(n personal* !ourau dec&a que el pro-lema de la formaci(n a ca&do en una serie de falsos dilemas7 dilemas7 ense/an0a te(rica vs. aprendi0a aprendi0aje je por la intervenci intervenci(n8 (n8 al interior de esta ,ltima corriente* aprendi0aje por intervenci(n interna vs. vs. apre aprend ndi0 i0aj ajee por por inte interv rven enci ci(n (n exte extern rna. a. !our !ourau au dec& dec&aa que que la pro-lem)tica real se encuentra en la oposici(n entre estas v&as institucionales y las v&as no institucionales de aprendi0aje del An)lisis "nstitucional* los movimientos anti9institucionales o eventualmente las experiencias contra9institucionales* que son los que podr&an dar sentido a su proyecto. 2
#reud$ "$ %ompendio del psicoanálisis &en Obras completas, t" completas, t" '''$ (a ed"$ )i!lioteca *ueva$ +adrid$ 1,-($ p" ((-,"
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Roberto Manero Brito
%n :éxico* un art&culo como el presente* corre el peligro de reafirmar la posici(n desde la cual se a insertado esta disciplina en el panorama actual7 actual7 el An)lisis An)lisis "nstitucio "nstitucional nal constituye constituye una disciplina disciplina auxiliar de otras otras pr)cticas pr)cticas 5psicosoci 5psicosociol(gic ol(gicas* as* psicotera psicoterapéutic péuticas* as* comunitari comunitarias* as* etcétera6* perdiendo la especificidad tanto pr)ctica como te(rica de sus conceptos. Sin em-argo* creo que un tra-ajo como el presente puede tener la virtud de consti constitui tuirr un refere referente nte que permit permitaa entend entender er las pr)cti pr)cticas cas y la comprensi(n espec&ficas del An)lisis "nstitucional* so-re todo frente a la dispersi(n y descontextuali0aci(n de las traducciones de su +orpus te(rico. Para la reali0aci(n de este tra-ajo* me -asé en la estructura de los primeros cap&tulos del li-ro Sociologue a Plein Temps Temps3 de !ourau* en el cual intenta reali0ar una s&ntesis de los conceptos -)sicos del An)lisis "nstitucio "nstitucional* nal* destinada a permitir permitir la comprensi( comprensi(n n de los cap&tulos cap&tulos su-secuente su-secuentes* s* intervenci intervenciones ones espec&fic espec&ficas as y experienci experiencias as reali0ada reali0adass desde el An)lisis "nstitucional. %s importante mencionar tam-ién que este li-ro es una reela-oraci(n de uno anterior* que lleva-a por t&tulo Analyse "nstitutionnelle et Pédagogie. ;e los los dos dos prim primer eros os cap& cap&tu tulo los* s* donde donde se encu encuen entr traa la s&nt s&ntes esis is mencionada* e prescindido de las secciones dedicadas a la génesis social del An)lisis "nstitucional* as& como de las reflexiones de su lugar en el panorama de la Sociolog&a francesa* por ser o-jeto de un li-ro que me encuentro actualmente preparando.
Los tres terrenos profesionales del Análisis Institucional. La Psicoterapia Institucional. #acida en la inmediata posguerra* la Psicoterapia "nstitucional es un movimi movimient ento o de cuesti cuestionam onamien iento to y de an)lis an)lisis is de la instit instituci uci(n (n (
.ourau$ "$ Sociologue a plein Temps$ Temps$ 0d" 0pi$ ar2s$ 1,-3"
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psiqui)trica. %ste movimiento pronto se dividi( en dos corrientes7 una sociol(gica* que no deja-a de tener inserciones pol&ticas importantes a nivel de los partidos pol&ticos franceses* y una tendencia psicoanal&tica que* que* con con la sola sola exce excepc pci( i(n n de Tosque osquell lles es** esta esta-a -a cons consti titu tuid idaa funda fundame ment ntal alme ment ntee por por los los j(ven j(venes es que que part partic icip ipaa-an an en dic dico o movimiento. %l movimiento de la Psicoterapia "nstitucional pas( por tres fases. !a primera de ellas* ayudada por la situaci(n de racionamiento y las condiciones de vida durante la ocupaci(n* se constituy( a partir del eje de camcam-ia iarr la rela relaci ci(n (n médi médico co99 paci pacien ente te.. %ste %ste camcam-io io se ve&a ve&a promovido por la necesidad de dejar los aspectos propiamente terapéuti terapéuticos cos en funci(n funci(n de las necesidade necesidadess de supervivencia supervivencia de los pacientes. !os médicos* m)s que pensar en los procesos de la enfermedad mental* ten&an que esta-lecer* junto con los pacientes* los mecanismos necesarios para acerse de los satisfactores -)sicos* muy escasos en situaci(n de guerra y ocupaci(n. A este per&odo* sucedi( la fase de sociali0aci(n mediante el grupo. %n esta esta segund segundaa fase* fase* la ergot ergotera erapia pia** la psicot psicoter erapi apiaa de grupo* grupo* los experimentos alrededor del +lu- Terapéutico* espacio organi0ado por los pacientes* pacientes* todas estas modalidade modalidadess pusieron pusieron de manifiesto manifiesto que* como los psicoterapeutas institucionales dec&an* no era al paciente* sino a la instituci(n a la que de-&an curar. Sin em-argo* su cr&tica no se deten&a all&. %l tra-ajo con los p acientes permiti( descu-rir* en lo que se refiere a los procesos terapéuticos* que era la actividad instituyente de los pacientes el elemento propiamente terapéutico. %sto descentra-a la posici(n del médico* inserto en un cuestionamiento m)s o menos permanente de su lugar de poder. !a autogesti(n de los pacientes y del ospital ten&a una eficacia terapéutica.
!a tercera fase se constituy( como una fase propiamente psicoanal&tica. !a ta-la de actividades permaneci( pr)cticamente inaltera-le* o con
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enriquecimientos eventuales. Sin em-argo* si en el momento anterior era la autogesti(n y las posi-ilidades instituyen tes de los pacientes el agente terapéutico* el psicoan)lisis* introducido por los médicos al ospital* convert&a dicas actividades en soporte de otro an)lisis. %l agente terapéutico ya no es la actividad misma paciente* sino el an)lisis reali0ado so-re dicas actividades. %l psicoan)lisis que se introdujo en el ospital era un psicoan)lisis cr&tico frente a las pr)cticas predominantes en el medio francés7 el lacanismo* en nom-re del 3retorno a reud4* se manten&a cr&tico frente a la pro-lem)tica del sujeto individual* relevando el papel de la 3estructura4. %sto permiti( un avance te(rico innega-le en el seno de la Psicoterapia institucional* pero al mismo tiempo merma-a las -ases mismas desde las que ésta se a-&a constituido. !a inserci(n del Psicoan)lisis sustituy( con la teor&a la experimentaci(n que se reali0a-a en psicoterapia. Tiempo después* los movimientos de las comunidades terapéuticas en "nglaterra* la experiencia italiana liderada por "$ %e la Ansiedad al m&todo en las ciencias del comportamiento$ i7lo BB'$ +69ico$ 1,--"
)asa7lia$ #" et alK .os cr2menes de la paz$ i7lo BB' +69ico$ 1,--"
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@ess$ "$ .Ganalyse 'nstitutionelle$ 8#"$ ar2s$ 1,?1"
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d6 campo de implicaci(n* en donde todas estas dimensiones anteriores se formulan como un campo de fuer0as que atraviesa las totali0aciones de los dispositivos estructurados para producir cono cimientos* dando sentido y relatividad ist(rica a conocimientos que* queriéndose universales* en realidad se constituyen como conceptos situados y fecados* sometidos* como todo concepto* a un proceso de envejecimiento y caducidad. 9 !a autogesti(n de la sesi(n. %l pro-lema de la autogesti(n atraviesa de inicio a fin la istoria del An)lisis "nstitucional. $ecordamos que en el segundo momento de la Psicoterapia "nstitucional* el momento de la sociali%ación mediante la psicoterapia de grupo* el elemento propiamente terapéutico podr&a entenderse como una autogesti(n en ciernes del ospital. ;e la misma manera* la escisi(n en la Pedagog&a "nstitucional estuvo fuertemente marcada por las experimentaciones de car)cter autogestivo. ;esde su creaci(n* el An)lisis "nstitucional estuvo en contacto con corrientes y momentos ist(ricos en los cuales la autogesti(n jug( un papel protag(nico. !as experiencias en Argelia y ugoslavia de autogesti(n generali0ada* aunque en cierta medida controlada por aparatos de %stado que finalmente traicionar&an el proceso* constitu&an referencias importantes para sacar la reflexi(n sociopol&tica de los pantanos creados por el stalinismo desde el final de la guerra. Se empie0an a rescatar las experiencias ag(nicas de la guerra en %spa/a* con la importancia de la organi0aci(n anarquista del rente Popular. ;e esta manera* mucas fuer0as sociales al interior de rancia ponen atenci(n a una discusi(n que cuestiona de fondo las alternativas de organi0aci(n social y pol&tica. %n el origen del An)lisis "nstitucional* se encuentra precisa mente una demanda de formaci(n a la din)mica de grupos* pero una demanda que a-&a sido veiculi0ada por un sindicato estudiantil 5la Q#%* Qni(n #ationale dR%tudiants de rance6* %s as& que la autogesti(n* siendo un concepto cuya referencia es fundamental mente pol&tica* se integra en el
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mismo origen de la constituci(n de un +orpus de nociones que constituir&a al An)lisis "nstitucional. %n este sentido* en un primer momento* la autogesti(n sirvi( para anali0ar lo que esta-a ya all&* ya instituido por el curso en din)mica de grupos. $oles de animador de la sesi(n y de participante* los tiempos* los espacios* los calendarios* todo esto constitu&a una serie de normas que* justificadas técnicamente* determina-a ya desde un inicio el desarrollo de todo el proceso grupal* y normas que se considera-a natural que quedaran en manos del coordinador o animador de la sesi(n o del curso* normas sin las cu)les era imposi-le tra-ajar. %l proyecto autogestivo atac( de inicio esa situaci(n. +on los estudiantes de la Q#%* en este caso el cliente* fue posi-le organi0ar conjuntamente el curso* una especie de cogesti(n* que permit&a mostrar las posi-ilidades de tra-ajo. Si era posi-le tra-ajar sin que el coordinador o animador fijara desde su propia voluntad las condiciones del curso. %n el origen de la Pedagog&a "nstitucional al estilo del CP! 5Crupo de Pedagog&a "nstitucional6 se encuentra precisamente esta discusi(n. %n el momento de la creaci(n del Socioan)lisis como método de intervenci(n* el pro-lema de la autogesti(n se generali0a. $ecordemos tam-ién que este momento es muy especial en la istoria francesa. !a primera intervenci(n socioanal&tica se reali0a a finales del a/o 1K?* cuando ya empie0an a manifestarse algunos elementos de la efervescencia que tendr&a lugar el siguiente :ayo. %l movimiento de :ayo de 1K?B estuvo fuertemente marcado por ideolog&as de car)cter anarquista y li-ertario en las cuales la autogesti(n tiene un lugar central. ;ec&amos que en las primeras intervenciones socioanal&ticas el pro-lema de la autogesti(n generali0a. Si en el An)lisis "nstitucional anterior se a-&a visto que el acting out se constitu&a propiamente en un anali0ador y* consecuentemente* se encontra-a en el campo de an)lisis y de intervenci(n* a partir de 1K?
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ser) el conjunto del grupo cliente el que gestione e proceso de la intervenci(n socioanal&tica. Se rompe completamente la condici(n de setting o encuadre que se a-&a eredado de la psicosociolog&a. !a Asam-lea Ceneral se da si tiempos* sus espacios* sus condiciones de tra-ajo* a través de puesta en juego de las contradicciones que la atraviesan y q estallan de una manera m)s o menos violenta. %n cierto momento* la autogesti(n d la sesi(n comen0( cuestionar tam-ién el pago al staff anal&tico. %xiste tam-ién una autogesti(n del pago* que se constituir) en el anali0ador privilegiado de la -ase material oculta de la instituci(n. +omo podemos o-servar* la autogesti(n se constituye como un disparador de una serie de procesos al interior del grupo cliente y* en general* de todos los participantes en la intervenci(n socioanal&tica. Sin em-argo* en los procesos sociales la suerte d la pro-lem)tica autogestiva corri( por distintos caminos. !os planteamientos autogestivos* que de alguna manera eran -andera de grupos sociales -astante radicales* que a-&an tenido experiencias de este tipo en sus propias organi0aciones* fuero pronto a-sor-idos por el %stado. Se constituyen as& 3autogestiones dirigidas4 o lo que !ourau denomin( 3la autogesti(n de le gerentes4. !apassade anali0a con una claridad sorprendente como* en el movimiento universitario y juvenil de 1K?B* la cogesti(n en instancias colegiadas fue el arma m)s efica0 del %stado contra el fantasma de la autogesti(n. %n lo que respecta la intervenci(n socioanal&tica* la autogesti(n es una especie de mito movili0ador* la escenificaci(n de una fuer0a que tra-aja en favor de una des9institucionali0aci(n necesaria par el proceso de An)lisis "nstitucional. 9 !a transversalidad. %ste concepto a sido central para 1 cr&tica de las diferentes metodolog&as para a-ordar al grupo. Tosquelles dec&a* en una istoria de la Psicoterapia "nstitucional* que todos ellos* respecto del tra-ajo grupal* se a-&an iniciado a partir de la
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teor&a de la Cestalt. %sta afirmaci(n contin,a siendo v)lida* en términos de manejo de grupos y an)lisis grupal* es necesario ver el grupo como una totalidad* como una unidad que nos permite pensar las determinaciones ps&quicas y sociales de su proceso. Sin em-argo* Sartre1B ya ac&a una cr&tica a esta concepci(n* qui0)s sin a-er conocido la amplitud de las repercusiones que el grupismo tendr&a a nivel de la organi0aci(n social. Sartre opon&a dos argumentos a las distintas teor&as so-re los grupos7 no existe tal totalidad del grupo. Todo tipo de agrupaci(n o colectivo social son momentos de totali0aci(n* totali0aciones tra-ajadas permanente mente por la istoria. Por otro lado* opon&a al argumento de la distancia que supone el an)lisis grupal* que tal distancia de-&a* a su ve0* ser anali0ada* puesto que en realidad no es una distancia técnica la que separa al coordinador del grupo* sino una distancia sociol(gica. %sto es lo que quiere decir la m)xima7 no se puede estar fuera de un grupo sin estar dentro de otro 5cfr. m)s arri-a* el apartado so-re la implicaci(n6. As&* Sartre a-la* qui0)s nada m)s de paso* de una transversalidad constituyente del grupo. Cuattari1K miem-ro so-resaliente de la corriente de Psicoterapia "nstitucional* desarroll( con m)s profundidad este concepto. %sto lo reali0( desde dos marcos referenciales en momentos distintos. ;e inicio con una referencia psicoanal&tica* y posteriormente con una referencia m)s filos(fica y sociol(gica. %n Cuattari* existen dos puntos de partida para tra-ajar el pro-lema de la transversalidad del grupo7 por un lado* el pro-lema de la contratransferencia institucional* que nos remit&a* como vimos m)s arri-a* a una serie de elementos en la cual el médico reacciona-a a partir de la totali0aci(n de vectores sociales que aparec&an* m)s o menos ocultos* en la situaci(n del ospital. Pero la transversalidad no se detiene all&. !os grupos de pacientes* y cualquier 1? 1,
artre$ =""$ op" cit
>uattari$ #"$ 'sicoan(lisis $ trans)ersalidad i7lo BB'$ +69ico$ 1,-3"
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otro grupo* eran tam-ién o-jeto de estos vectores. ;e esta manera* Cuattari reali0a una especie de taxonom&a* una clasificaci(n din)mica de los grupos a partir de la manera como se sit,an en el contexto social* de inicio el m)s inmediato7 la instituci(n. Surge as& la aproximaci(n a las nociones de grupo o-jeto y grupo sujeto. Crupo o-jeto y grupo sujeto son denominaciones que Sartre 5recordemos que Cuattari estuvo sumamente impactado 9 quién no lo estar&aH9 por la lectura de la +r&tica de la $a0(n ;ialéctica ya a-&a enunciado en dica o-ra. Pero estas denominaciones r tienen sentido sino en relaci(n con dos pro-lemas7 el de la verticalidad y la ori0ontalidad. A diferencia de la teor&a de los Crupos perativos* la noci(n de verticalidad no nos refiere a la verticalidad ist(rica* procesal* de los sujetos. #o es la istoria d e los sujetos que constituyen al grupo. Podr&amos decir* de manera muy grosera* q la verticalidad designa las relaciones sociales institucionali0ada jerarqui0adas* mediati0adas en funci(n de un tipo de sociedad* d sistema econ(mico* etcétera. ;e igual manera* la ori0ontalidad n es solamente un aqu& y aora que articula las istorias individuales !a ori0ontalidad designa las relaciones inmediatas* no mediati0adas por la instituci(n o intentando uir de tal mediati0aci(n a través de la transparencia intervenciones9 individual. As&* la autonomi0aci(n de la dimensi(n vertical del grupo nos conduce a un nivel ideol(gico* a una visi(n de grupo alienado* reificado 5pala-ra que se deriva del lat&n res* cosa7 cosificado6 de las relaciones sociales reales7 vivas* contradictorias* en movimiento perpetuo. !a autonomi0aci(n de la dimensi(n ori0ontal nos conduce a un nivel li-idinal* en donde no existe nada m)s que las relaciones inmediatas correspondiente a una ideolog&a 3li-idinalista4 que ace a-stracci(n de otras dimensiones. !os grupos o-jeto son aquellos que caen en cualquiera de esta dos autonomi0aciones7 el grupo fuertemente -urocrati0ado* que n se reconoce sino en funci(n de la jerarqu&a que aparentemente lo funda8 o la peque/a secta o -anda* que no puede reconocer sus atravesamientos
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verticales* en funci(n de una ori0ontalidad de su relaciones que se constituye como ley. Cuattari dice que el pasaje al grupo sujeto se da en la ela-oraci(n de estas dos formas de alienaci(n. !a ela-oraci(n de la verticalidad y la ori0ontalidad del grupo lo remite a su estar en mundo* a su situaci(n y* en ,ltima instancia* al sin sentido* en es proceso de totali0aci(n y destotali0aci(n que constituye a toda forma colectiva. %sta elucidaci(n de la relaci(n entre verticalidad y ori0ontalidad que atraviesa al grupo es su coeficiente de transversalidad. !a elucidaci(n de la transversalidad del grupo es un o-jeto fundamental en la intervenci(n socioanal&tica. ;esconstrucci(n de las relaciones marcadas por el signo de la verticalidad pura o la pura ori0ontalidad* y ela-oraci(n de las relaciones transversales* in conscientes* ignoradas o des9conocidas* que revelan el an)lisis de la encomienda y de la demanda* el an)lisis de la implicaci(n de cada participante y del socioanalista* la alteraci(n de lo instituiFo por efecto de la autogesti(n de la -ase material* sin olvidar la acci(n su-terr)nea o espectacular de los anali0adores. Sin em-argo* entre la concepci(n de Cuattari so-re la transversalidad y la concepci(n socioanal&tica ay un salto* que se refiere a la referencia te(rica* al nivel conceptual del an)lisis. Porque la verticalidad en Cuattari nos refiere a verticalidades inmediatas* que s(lo en un segundo an)lisis se ligan con el conjunto de las instituciones sociales. %n el Socioan)lisis* esta verticalidad totali0adora es inmediata* en la multiplicidad de instituciones sociales que atraviesan segmentariamente al grupo cliente. Cuattari tiene enfrente un grupo en proceso* con cierta istoria* -uscando* qui0)s sin muco desearlo* porque lo teme* su lugar en el mundo* cuestionado su propia actividad .cotidiana. %l Socioan)lisis tiene enfrente un colectivo que presenta* en su propia constituci(n* los atravesamientos del sistema social completo* que
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constituye* de inicio* su propio o-jeto de elucidaci(n. #o ay m)s proyecto fuera de esto. %sto tiene repercusiones a nivel de la concepci(n de la instituci(n. Tratando de elucidar este coeficiente de transversalidad* nos damos cuenta de que no es anali0a-le desde esa concepci(n en la cual el esta-lecimiento es sin(nimo de instituci(n. %ste tema lo a-ordaremos m)s adelante. Pero aqu& podemos adelantar que* a partir de la elucidaci(n de la transversalidad* la instituci(n aparece como una pr)ctica social* como un proceso din)mico que est) constituido por diversos momentos. !a instituci(n es una forma en que aparece la praxis umana. %l pro-lema de la transversalidad ace aparecer al grupo* entonces* como un grupo a-ierto* permanentemente atravesado por fuer0as cuyo origen es mucas veces desconocido* y articulado por el no9sa-er de estos mismos atravesamientos. ;e aqu& la cr&tica socioanal&tica a los diversos métodos grupales que* en su mayor&a desconocen esta dimensi(n. Aparece un grupo determinado por y desde lo social* pero que al mismo tiempo es capa0 de dar formas espec&ficas y de curvar* desde su propio proyecto* dicas determinaciones. %l interjuego entre el adentro y el afuera grupal resulta cada ve0 m)s dif&cil de determinar7 no se sa-en exactamente las fronteras de dico grupo. %n la elucidaci(n de la transversalidad no -uscamos un 3equili-rio4 entre la verticalidad y la ori0ontalidad* que ser&a el de la ausencia de la istoria* sino una confrontaci(n* un conflicto* una contradicci(n .por resolver o resuelta a nuestro pesar en la acci(n* primer y ,ltimo anali0ador. 9 %l anali0ador. %l anali0ador es un concepto -)sico del An)lisis "nstitucional* y su validaci(n es la validaci(n misma del método. a-lar del anali0ador es a-lar del principio mismo del an)lisis* que en esta corriente de pensamiento tiene significados distintos al significado com,n* significados que ponen en juego el proyecto mismo del An)lisis "nstitucional.
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A grandes rasgos* podemos decir que el anali0ador es toda aquella persona* situaci(n* acci(n* que descontruye lo instituido de la instituci(n. en esta definici(n encontramos ya una serie de elementos interesantes. %l primer elemento en el que podr&amos situar la atenci(n es precisamente el que nos se/ala que lo que reali0a el an)lisis es el anali0ador. :)s all) de las teor&as o conceptuali0aciones* el an)lisis es aqu& entendido como el efecto anali0ador* el an)lisis es una acci(n de desconstrucci(n que tiene efectos mediatos e inmediatos* en funci(n de las relaciones de poder* de autoridad* del sa-er de los participantes de toda la estructura oculta de la instituci(n* revelada de manera m)s o menos virulenta por los anali0adores. As&* el proyecto de An)lisis "nstitucional revela dos cuestiones7 una concepci(n del an)lisis que critica la concepci(n tradicional* en donde* a través del sa-er de los especialistas* es posi-le develar dimensiones no perci-idas por el sentido com,n de los participantes 5esto ser) profundi0ado m)s adelante* en la exposici(n del efecto Le-er y del efecto !uc>acs68 la segunda cuesti(n se precisa mente la colectivi0aci(n del an)lisis* puesto que la significaci(n y el efecto de los anali0adores no puede existir sino en relaci(n a las diferentes posiciones y jerarqu&as presentes en el grupo cliente. ;e esta manera* el concepto de anali0ador es un concepto que tiene que ver m)s con una acci(n espec&fica* una acci(n de denuncia o de develar las situaciones que conforman el no9sa-er de los miem-ros respecto de la instituci(n a la que pertenecen. !a acci(n del anali0ador se opone a las fuer0as institucionales* que pueden tener origen en diferentes momentos de la instituci(n* que pugnan por mantener un secreto* un no9sa-er* incluso de ellas mismas* que constituye la -ase del funcionamiento y la funcionalidad institucional. %l an)lisis deja de ser un mero ejercicio intelectual* con
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posi-les aplicaciones pr)cticas* y se constituye como un tra-ajo* una acci(n de desconstrucci(n en la acci(n de lo instituido* de las formas de funcionamiento ya esta-lecidas y naturali0adas* ya integradas en la instituci(n. Podemos reconocer tres tipos fundamentales de anali0adores7 a6 (l ana li%ador construido* dispositivos de intervenci(n diversos que tienden a poner de manifiesto* durante su operaci(n* dimensiones y elementos diversos que normalmente se constituyen como un no9sa-er colectivo so-re la instituci(n. As&* por ejemplo* el dispositivo socioanal&tico intentar&a constituir una crisis en fr&o de lo instituido* de lo ya esta-lecido* para desmontar su funciona miento y estructuraci(n. tro ejemplo ser&a la autogesti(n del pago del staff anal&tico* que intenta poner de manifiesto la - ase material de la instituci(n. -6 (l anali%ador natural * que al interior de los dispositivos de intervenci(n construidos irrumpe generando consigo un sa-er so-re los fundamentos mismos de la instituci(n. !a irrupci(n de lo inesperado* la manifestaci(n de todos aquellos elementos que se encontra-an ocultos y cuya invisi-ilidad sosten&a una forma de funcionamiento* se constituyen como anali0adores naturales. %s tos son los m)s virulentos* revelando todas aquellas alian0as y relaciones que mantienen una forma espec&fica de implicaci(n del grupo cliente y del staff anal&tico con la instituci(n. c6 (l anali%ador +istórico* situaciones de explosi(n social 9 revoluciones movimientos sociales m)s o menos generali0ados9 que tienden a un An)lisis "nstitucional generali0ado al conjunto de la sociedad 5+%Q* las :adres de la Pla0a de :ayo en Argentina* los movimientos del ?B* etcétera6. As& por ejemplo* los encuadres de cualquier tipo de din)mica de grupo en instituciones educativas son anali0adores construidos tendientes a poner de manifiesto las redes de comunicaci(n* las ansiedades predominantes en el grupo* los emergentes* los portavoces* las
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latencias* la estructura grupal* etcétera. Sin em-argo* el momento de la cali&icación se constituye como un anali0ador de aquello que el encuadre no contempla-a7 su inserci(n en la instituci(n* c(mo la calificaci(n signa-a ya* desde un principio* un sistema de competencia que se opona directamente a las relaciones de cooperaci(n instauradas desde el an)lisis de grupo. #o podemos confundir el concepto de anali0ador con el de emergente. !as referencias te(ricas y de proyecto son enormes. :ientras que el primero nos remite a la emergencia de las estructuras latentes de un grupo* el segundo nos remite a la transversalidad institucional del grupo. %l emergente tiene que ver con las estructuras imaginarias del grupo* y el anali0ador es fundamentalmente un concepto pol&tico* que devela las relaciones de poder al interior del mismo* o entre el grupo y su medio institucional. %sto no o-sta para que un emergente se pueda constituir en anali0ador* lo cual sucede en momentos l&mite* en los momentos agon&sticos del propio grupo7 por ejemplo* su disoluci(n. %n 1K1* !apassade2@ elucida-a la relaci(n entre el anali0ador y el analista. %sta relaci(n* que aparentemente se constituye como funci(n del an)lisis* no resulta tan simple. Partiendo de diferentes experiencias ist(ricas que constituyeron la -ase del dispositivo socioanal&tico* !apassade se da cuenta de que el analista* capa0 en un momento de proponer un anali0ador construido* o-tura* o-staculi0a la acci(n de los anali0adores que surgen en la situaci(n. %l analista* que en un momento dado puede funcionar como anali0ador* se opone a su misma acci(n. As&* se constituye una oposici(n7 anali0ador9analista. !os efectos y las significaciones de la acci(n de los anali0adores son m,ltiples y se efect,an en muy diversas dimensiones de lo real. Sin em-argo* es desde el sa-er del analista 5sa-er so-re el inconsciente* so-re el grupo* so-re las instituciones* so-re la sociedad6 donde estas m,ltiples EC
.apassade$ >"$ L’anal$seur et l’anal$ste, >authierHIillars$ ar2s$ 1,-1" 09iste traducci5n al español# *l anali+ador $ el analista$ >edisa"
Introducción al Análisis Institucional N° 1
Roberto Manero Brito
significaciones quedan reducidas al significado privilegiado desde el sa-er del analista. (l análisis de la implicación sociológica del analista se constitu#e$ as$ como condición necesaria para ,ue e-ista un )nálisis Institucional. Conceptos microsociológicos.
!os conceptos microsociol(gicos del An)lisis "nstitucional tienen su origen en diferentes pr)cticas institucionalistas* y fueron ela-orados en diferentes momentos de la istoria de este movimiento. %l movimiento institucionalista* con sus tres campos profesionales* acu/( conceptos y nociones a partir de sus pr)cticas espec&ficas. !as pr)cticas microsociol(gicas y sus formas singulares de conceptuali0aci(n permiten dividir los conceptos micro9sociol(gicos en aquellos que se refieren al grupo* y aquéllos que tienen una referencia m)s inmediata a una teor&a de los anali0adores. A %l pro-lema de la conceptuali0aci(n del grupo en el An)lisis "nstitucional a sido y contin,a siendo uno de sus paradigmas fundamentales. :)s arri-a 5ver Transversalidad6 emos expuesto* al menos en parte* esta pro-lem)tica. !a institucionali0aci(n del An)lisis "nstitucional en la universidad* a través de cursos o seminarios* a puesto dica pro-lem)tica en un plano muy importante para su +onceptuali0aci(n an sido -astantes y muy diversas las teor&as grupales desde las cuales el An)lisis "nstitucional se a apoyado para efectuar una pr)ctica grupal congruente con sus postulados te(ricos y su proyecto. Sin em-argo* desde los T. Croups* pasando por la -ioenerg&a asta las formulaciones -ionianas* es cierto que el pro-lema del grupo en el An)lisis "nstitucional contin,a sin una soluci(n satisfactoria.
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